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Dietoterapia,

nutrición clínica
y metabolismo
Tercera edición
Dietoterapia,
nutrición clínica
y metabolismo
Tercera edición

Editores
D. A. de Luis Román
D. Bellido Guerrero
P. P. García Luna
G. Olveira Fuster

H E A LT H C A R E
Tercera edición

© 2017, de los autores.


© 2017, Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición.
© 2017, Grupo Aula Médica, S. L., para esta edición.

Todos los derechos reservados

No puede reproducirse, almacenarse en un sistema de recuperación o transmitirse de forma alguna por medio de
cualquier procedimiento, sin previo permiso de los titulares del copyright.

Se ha realizado un gran esfuerzo al preparar este libro para proporcionar una información precisa y actualizada que
esté de acuerdo con la práctica y estándares en el momento de su publicación. Grupo Aula Médica y los editores
científicos no pueden asegurar que la información contenida esté totalmente libre de error, ya que los estándares
clínicos están en constante evolución tanto por la investigación como por la regulación. Grupo Aula Médica y los
editores científicos se excluyen de toda responsabilidad por los daños directos o indirectos resultantes del uso de la
información contenida en este libro. Se estimula encarecidamente a los lectores que presten especial atención a la
información proporcionada por los fabricantes de cualquier fármaco o equipo que piensen utilizar.

Los datos de esta publicación pueden hacer referencia a indicaciones, pautas posológicas o características farma-
cológicas no aprobadas en España. Antes de prescribir cualquier medicamento consulte la ficha técnica vigente.

Primera publicación, octubre 2017

Edita

C/ Río Jarama, 132 - Oficina 3.06


Polígono Industrial Santa María de Benquerencia
45007 Toledo
www.clubaulamedica.com
ISBN: 978-84-7885-621-3
Depósito Legal: M-28068-2017

Impreso en España
Introducción a la tercera edición
Daniel Antonio de Luis Román
Diego Bellido Guerrero
Pedro Pablo García Luna
Gabriel Olveira Fuster

Tras haber transcurrido diez años desde la primera rales del soporte nutricional avanzado (nutrición artifi-
edición y siete años desde la segunda, aceptamos el reto cial) y centrándonos, posteriormente, en el tratamiento
de mejorar e incorporar novedades en esta tercera edición. nutricional en diferentes patologías: digestivas, onco-
Sin duda, abordamos un área de conocimiento, la lógicas, neurológicas, intensivos, etc., así como un mó-
dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo, que se dulo sobre nutrición en la etapa pediátrica.
ha desarrollado notablemente en los últimos años de También se actualiza el empleo de diferentes aspectos
la mano de estudios de investigación, lo que está am- de la valoración nutricional y las herramientas utilizadas
pliando su cuerpo de doctrina y su aplicabilidad clínica. que pueden encontrarse en los anexos de este libro.
En un mundo interconectado con una generación de En el último módulo de la obra hemos revisado dife-
conocimiento que no nos permite «digerir» toda la in- rentes temas relacionados con la nutrición que con-
formación relevante que aparece, esta obra trata de vergen con la práctica clínica: evidencia en nutrición,
sintetizar de manera clara y práctica en un libro de tex- gestión sanitaria, investigación y desarrollo, implica-
to de referencia los conocimientos de esta área. ciones médico-legales de la nutrición, etc., todos ellos
En este libro no solo trataremos aspectos novedosos facilitarán al lector una visión integral de la asistencia
de la dietoterapia en situaciones clínicas tan prevalen- nutricional.
tes como la obesidad y la diabetes, sino que haremos Y por supuesto las nuevas tecnologías no podrían
hincapié en otras patologías del metabolismo menos faltar en este nuevo siglo, del que hemos ya bien entra-
frecuentes, pero no por ello menos importantes en la do en su segunda década; por ello, este Manual se
práctica clínica. La obra se divide de manera didáctica acompaña de una página web, donde la obra podrá
en módulos de energía, hidratos de carbono, proteí- ser consultada online desde cualquier dispositivo.
nas, lípidos, metabolismo mineral, así como alergias e Finalizamos esta introducción deseando que esta
intolerancias alimentarias. obra os sea útil en este apasionante mundo de la nutri-
El grueso de la obra revisa aspectos relacionados con ción clínica y dietética y podáis aplicar este conocimien-
la nutrición clínica, comenzando con conceptos gene- to para contribuir al bienestar de vuestros pacientes.

V
Índice de autores
Editores
Daniel Antonio de Luis Román
Diego Bellido Guerrero
Pedro Pablo García Luna
Gabriel Olveira Fuster

Coordinadores
Álvarez, Julia
Ballesteros Pomar, María Dolores
Bellido Guerrero, Diego
Botella Romero, Francisco
Bretón, Irene
Burgos Peláez, Rosa
De Luis, Daniel Antonio
Del Olmo, Dolores
García Luna, Pedro Pablo
García-Peris, Pilar
León Sanz, Miguel
Luengo Pérez, Luis Miguel
Martínez Faedo, Ceferino
Martínez Olmos, Miguel Ángel
Matía Martín, Pilar
Moreno Villares, José Manuel
Ocón Bretón, María Julia
Olveira Fuster, Gabriel
Pereira Cunill, José Luis
Sanz París, Alejandro
Vázquez, Clotilde
Virgili Casas, M.ª Nuria

Autores
Agudo Tabuenca, Ana Alcázar, Victoria
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí- Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
nico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza versitario Severo Ochoa. Leganés (Madrid)

Alberiche Ruano, María del Pino Alejo Ramos, Miriam


Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Sección de
versitario Insular de Gran Canaria. Las Palmas de Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial
Gran Canaria Universitario. León

VII
VIII Índice de autores

Alfaro Martínez, José Joaquín Bellido Castañeda, Virginia


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
Hospitalario Universitario. Albacete versitario Cruces. Baracaldo (Bilbao)

Álvarez Ballano, Diego Bellido Guerrero, Diego


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Servicio de Endocrinologia y Nutrición. Complejo
versitario Miguel Servet. Zaragoza Hospitalario Universitario de Ferrol. Ferrol. (A Coruña)

Álvarez Hernández, Julia Blay Cortés, Vicente


Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Ge-
versitario Príncipe de Asturias. Alcalá de Henares neral de la Defensa. Zaragoza
(Madrid)
Boj Carceller, Diana
Amengual Galbarte, Ángela Servicio de Endocrinología y Nutrición. Unidad de
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí- Nutrición y Dietética. Hospital Universitario Miguel
nico San Carlos. Madrid Servet. Zaragoza

Ares Blanco, Jessica Botella Romero, Francisco

Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo


versitario Central de Asturias. Oviedo (Asturias) Hospitalario Universitario. Albacete

Bretón, Irene
Arés Luque, Adrián
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Servicio de
Servicio de Neurología. Complejo Asistencial Univer-
Endocrinología y Nutrición. Hospital General Univer-
sitario. León
sitario Gregorio Marañón. Madrid

Arhip, Loredana
Burgos Peláez, Rosa
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Hospital Ge-
Unidad de Soporte Nutricional. Hospital Universita-
neral Universitario Gregorio Marañón. Madrid
rio Vall d’Hebron. Barcelona

Azcona Monreal, Isabel Calañas-Continente, Alfonso


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Unidad de Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nutri-
Nutrición y Dietética. Hospital Universitario Miguel ción. Hospital Universitario Reina Sofía. Córdoba
Servet. Zaragoza
Calleja Fernández, Alicia
Ballesteros Pomar, María Dolores
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Sección de
Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial
Asistencial. León Universitario. León

Barajas Galindo, David Emilio Cano Rodríguez, Isidoro


Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Sección de Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Sección de
Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial
Universitario. León Universitario. León

Barragán Angulo, Amaya Cánovas, Bárbara


Unidad de Endocrinología y Nutrición. Hospital San Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Vir-
Jorge. Huesca gen de la Salud. Toledo

Barrera Martín, Ana Cárdenas Lagranja, Guillermo


Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nutri- Unidad de Soporte Nutricional. Hospital Universita-
ción. Hospital Universitario Reina Sofía. Córdoba rio Vall d’Hebron. Barcelona
Índice de autores IX

Carrillo Lozano, Elena De Luis Román, Daniel Antonio


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Centro de Investigación de Endocrinología y Nutrición.
Hospitalario Universitario. Albacete Facultad de Medicina. Servicio de Endocrinología y
Nutrición. Hospital Clínico Universitario. Valladolid
Contreras Bolívar, Victoria
Del Olmo, Dolores
UGC de Endocrinología y Nutrición. Unidad de Nu-
trición Clínica y Dietética. Hospital Regional Univer- Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
sitario. Málaga versitario Severo Ochoa. Leganés (Madrid)

Durán Rodríguez-Hervada, Alejandra


Cordero Vaquero, Ana Alejandra
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí-
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
nico San Carlos. Madrid
versitario Río Hortega. Valladolid

Fernández García-Salazar, Rosario


Cornejo-Pareja, Isabel M.
Servicio de Endocrinología y Nutrición Clínica. Hospi-
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- tal Quirón-salud. Málaga
versitario Virgen de la Victoria. Málaga
Fernández Martínez, Paula
Crehuá Gaudiza, Elena
Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo
Sección de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica. Asistencial Universitario. León
Servicio de Pediatría. Hospital Clínico Universitario.
Valencia García Almeida, José Manuel
Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología
Crespo Soto, Cristina y Nutrición. Málaga. Hospital Universitario Virgen
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- de la Victoria. Málaga. Servicio de Endocrinología y
versitario Río Hortega. Valladolid. Centro de Investi- Nutrición Clínica. Hospital Quirón-salud. Málaga
gación de Endocrinología y Nutrición. Facultad de
Valladolid García Delgado, Yaiza
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
Cuéllar Olmedo, Luis Ángel versitario Insular de Gran Canaria. Las Palmas de
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Gran Canaria
versitario Río Hortega. Valladolid.
García Fernández, Elena
Centro de Investigación de Endocrinología y Nutri-
ción. Facultad de Valladolid Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
versitario 12 de Octubre. Madrid
Cuerda Compés, Mª Cristina
García Luna, Pedro Pablo
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Hospital Ge-
neral Universitario Gregorio Marañón. Madrid Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Hospital Uni-
versitario Virgen del Rocío. Sevilla.

Cuesta Hernández, Martín


García Pérez-Sevillano, Fernando
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí-
Endocrinología y Nutrición. Sevilla
nico San Carlos. Madrid
García Raimundo, Eva María
Cuesta Triana, Federico Miguel
Unidad de Nutrición y Dietética. Servicio de Endocrino-
Servicio de Geriatría. Hospital Clínico San Carlos. Ma- logía y Nutrición. Hospital Universitari de Bellvitge. Bar-
drid celona

De Grado Manchado, Teresa García-Manzanares Vázquez de Agredos, Álvaro


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Sección de Endocrinología y Nutrición. HG La Mancha
versitario Infanta Elena. Valdemoro (Madrid) Centro. Alcázar de San Juan (Ciudad Real)
X Índice de autores

García-Peris, Pilar Gracia Ruiz, María Luisa


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Ge- Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
neral Universitario Gregorio Marañón. Madrid versitario Miguel Servet. Zaragoza

Germán Díaz, Marta Guerrero Gual, Mireia


Servicio de Pediatría. Hospital Universitario 12 de Oc- Unidad de Soporte Nutricional. Hospital Universita-
tubre. Madrid rio Vall d’Hebron. Barcelona

Gil de Bernabé, Mónica Montserrat


Guindel Jiménez, Concepción
Unidad de Nutrición y Dietética. Servicio de Endocrino-
Farmacia Hospitalaria. Complejo Asistencial. León
logía y Nutrición. Hospital Universitari de Bellvitge. Bar-
celona
Hernández López, Antonio
Gil-Fournier Esquerra, Nuria Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Ge- Hospitalario Universitario. Albacete
neral de Villalba. Madrid
Hernández Moreno, Ana
Gimeno Orna, José Antonio Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí- Asistencial Universitario. León
nico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza
Herrera Martínez, Aura Dulcinea
Gómez Hoyos, Emilia
Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nutri-
Centro de Investigación de Endocrinología y Nutri- ción. Hospital Universitario Reina Sofía. Córdoba
ción. Facultad de Medicina. Servicio de Endocrinolo-
gía y Nutrición. Hospital Clínico Universitario. Valla-
Ilundain González, Ana Isabel
dolid
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí-
Gómez Pérez, Ana M. nico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza
Endocrinología y Nutrición Clínica. Hospital Quirón-
salud. Málaga Jiménez Jiménez, África
Responsable I+D. VEGENAT, S.A.
González Medina, Raúl Alberto
Unidad de Hospitalización de Medicina Interna. Hos- Jiménez Nacimiento, Pilar
pital Universitario Insular de Gran Canaria. Las Pal- Departamento de Ciencias Biomédicas. Facultad de
mas de Gran Canaria Medicina. Universidad de Extremadura. Badajoz

González-Antigüedad, Cynthia
Kyriakos, Georgios
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Servicio de
Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo
Endocrinología y Nutrición. Hospital General Univer-
Asistencial Universitario de León
sitario Gregorio Marañón. Madrid

González-Posada Gómez, Isabel Lardies Sánchez, Beatriz


Centro de Salud de Raíces. Salinas (Asturias) Servicio de Endocrinología y Nutrición. Unidad de
Nutrición y Dietética. Hospital Universitario Miguel
Gonzalo Marín, Montserrat Servet. Zaragoza
Unidad de Nutrición y Dietética. Unidad de Gestión
Clínica de Endocrinología y Nutrición. Hospital Re- León Sanz, Miguel
gional Universitario de Málaga Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
versitario 12 de Octubre. Madrid
Gonzalo Montesinos, Irene
Hospital Infanta Elena. Valdemoro (Madrid) Leyes i García, Pere
Hospital Universitario Infanta Elena y Fundación Ji- Servicio de Endocrinología y Nutrición. Unidad de Nu-
ménez Díaz. Madrid trición y Dietética Clínica. Hospital Clínic. Barcelona
Índice de autores XI

Llamazares, Ofelia Martínez de Icaya, Purificación


Servicio deEndocrinología y Nutrición. Hospital Vir- Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
gen de la Salud. Toledo versitario Severo Ochoa. Leganés (Madrid)

López Gómez, Juan José Martínez Faedo, Ceferino


Hospital Clínico Universitario de Valladolid. Centro Sección de Nutrición. Servicio de Endocrinología y
de Investigación de Endocrinología y Nutrición. Fa- Nutrición. Hospital Universitario Central de Asturias.
cultad de Medicina. Universidad de Valladolid Oviedo (Asturias)

López Plasencia, Yaiza Martínez Olmos, Miguel Ángel


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo
versitario Insular de Gran Canaria. Las Palmas de Hospitalario Universitario de Santiago. Santiago de
Gran Canaria. Compostela

López Urdiales, Rafael Martínez Zazo, Ana Belén


Unidad de Nutrición y Dietética. Servicio de Endocri- Servicio de Pediatría. Hospital La Moraleja. Madrid
nología y Nutrición. Hospital Universitari de Bellvit-
ge. Barcelona Matía Martín, Pilar
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí-
Lorite Cuenca, Raquel nico San Carlos. Madrid
Unidad de Gastroenterología, Soporte Nutricional, Universidad Complutense. Madrid
Hepatología y Trasplante hepático pediátrico. Hospi-
tal Universitario Vall d’Hebron. Barcelona Moreno Lopera, Carmen
Atención Primaria. Centro de Salud Lucero. Madrid
Luengo Pérez, Luis Miguel
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Hospital Uni- Moreno Villares, José Manuel
versitario Infanta Cristina. Departamento de Ciencias Unidad de Nutrición Clínica. Hospital Universitario
Biomédicas. Facultad de Medicina. Universidad de 12 de Octubre. Madrid
Extremadura. Badajoz
Motilla de la Cámara, Marta
Mañas Martínez, Ana Belén
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Servicio de
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí- Endocrinología y Nutrición. Hospital General Univer-
nico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza sitario Gregorio Marañón. Madrid

Marcuello Foncillas, Clara Muñoz-Garach, Araceli


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí- Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
nico San Carlos. Madrid versitario Virgen de la Victoria. Málaga

Márquez Armenteros, Ana M.ª Núñez Ramos, Raquel


Unidad de Gastroenterología Infantil. Diagnóstico y Unidad de Gastroenterología, Soporte Nutricional,
seguimiento de Metabolopatías. Hospital Materno- Hepatología y Trasplante hepático pediátrico. Hospi-
Infantil. Badajoz tal Universitario Vall d’Hebron. Barcelona

Marrero Arencibia, Dunia Ocón Bretón, María Julia


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí-
versitario Insular de Gran Canaria. Las Palmas de nico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza
Gran Canaria
Olveira Fuster, Casilda
Martínez Costa, Cecilia Especialista en Neumología, UGC de Neumología y
Sección de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica. Cirugía Torácica. Hospital Regional Universitario.
Hospital Clínico Universitario. Valencia Málaga. Universidad de Málaga
XII Índice de autores

Olveira Fuster, Gabriel Petrina Jáuregui, Estrella


Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nu- Sección de Nutrición Clínica y Dietética. Servicio de
trición. Hospital Regional Universitario de Málaga. Endocrinología y Nutrición. Complejo Hospitalario
Instituto de Investigación Biomédica de Málaga de Navarra. Pamplona

Ortolá Buiges, Ana Pintor de la Maza, Begoña


Centro de Investigación de Endocrinología y Nutrición. Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Sección de
Facultad de Medicina. Servicio de Endocrinología y Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial
Nutrición. Hospital Clínico Universitario. Valladolid Universitario. León

Palacio Abizanda, José Enrique Platero Rodrigo, Eduardo


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
versitario Ntra. Sra. de Candelaria. Tenerife versitario. Guadalajara

Palacios Gil de Antuñano, Nieves Pons Dolset, Jordi


Servicio de Medicina, Endocrinología y Nutrición del Servicio de Reumatología. Hospital Royo Villanova.
Centro de Medicina del Deporte. Agencia Española Zaragoza
de Protección de la Salud en el Deporte (AEPSAD)
CSD. Madrid Porca Fernández, Cristina
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo
Pedrón Giner, Consuelo Hospitalario Universitario de Ferrol. Ferrol. (A Coruña)
Unidad de Nutrición. Sección de Gastroenterología y
Nutrición. Servicio de Pediatría. Hospital Infantil Uni- Ramos Martínez, Tania
versitario Niño Jesús. Madrid Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo
Asistencial. León
Peláez Torres, Noelia
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Rebollo Román, Ángel
versitario Príncipe de Asturias. Alcalá de Henares Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nutri-
(Madrid) ción. Hospital Universitario Reina Sofía. Córdoba

Penso Espinoza, Rona


Redecillas Ferreiro, Susana
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí-
Unidad de Gastroenterología, Soporte Nutricional,
nico San Carlos. Madrid
Hepatología y Trasplante hepático pediátrico. Hospi-
tal Universitario Vall d’Hebron. Barcelona
Peña Cortés, Virginia
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Vir- Rodríguez Pérez, Carlos
gen de la Salud. Toledo
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
versitario Insular de Gran Canaria. Las Palmas de
Pereira Cunill, José Luis Gran Canaria.
Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nu-
trición. Hospital Virgen del Rocío. Sevilla Rodríguez Rodríguez, Juan Pedro
Servicio de Medicina Interna. Hospital de Poniente.
Pérez Ferre, Natalia El Ejido (Almería)
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí-
nico San Carlos. Madrid Rubio Cabezas, Óscar
Servicio de Endocrinología Pediátrica. Hospital Infantil
Pérez Rodríguez, Milagros Universitario Niño Jesús. Madrid
Directora I+D-Calidad. VEGENAT, S.A.
Rubio Herrera, Miguel A.
Pérez-Pelayo, Miriam Sección de Nutrición Clínica y Dietética. Servicio de
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico Universi-
versitario Severo Ochoa. Leganés (Madrid) tario San Carlos. Madrid
Índice de autores XIII

Ruiz Gracia, Teresa Trabal Vílchez, Joan


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clí- Servicio de Endocrinología y Nutrición. Unidad de Nu-
nico San Carlos. Madrid trición y Dietética Clínica. Hospital Clínic. Barcelona

Sánchez Hernández, Rosa María Urioste Fondo, Ana


Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo
versitario Insular de Gran Canaria. Las Palmas de Asistencial Universitario. León
Gran Canaria
Valero Zanuy, M.ª Ángeles
Sanz París, Alejandro Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni-
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Unidad de versitario 12 de Octubre. Madrid
Nutrición y Dietética. Hospital Universitario Miguel
Servet. Zaragoza Vázquez, Clotilde
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Fundación
Segurola Gurrutxaga, Hegoi Jiménez Díaz. Madrid
Unidad de Soporte Nutricional. Hospital Universita-
rio Vall d’Hebron. Barcelona Vázquez Gutiérrez, Mercedes
Servicio de Endocrinología. Hospital Torrecárdenas.
Sendra Fernández, Carmen Almería
Servicio de Aparato Digestivo. Hospital Universitario
Virgen del Rocío. Sevilla. Vidal Casariego, Alfonso
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Sección de
Serrano Aguayo, María del Pilar Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial
Universitario. León
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Hospital Uni-
versitario Virgen del Rocío. Sevilla
Villar Taibo, Rocío
Sousa Martín, José Manuel Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo
Asistencial Universitario. León
Servicio de Aparato Digestivo. Unidad de Trasplante
Hepático. Hospital Virgen del Rocío. Sevilla Servicio de Endocrinología. Complejo Hospitalario
Universitario de Santiago
Tejera Pérez, Cristina
Villazón González, Francisco
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo
Hospitalario Universitario de Ferrol (A Coruña) Sección de Nutrición. Servicio de Endocrinología y
Nutrición. Hospital Universitario Central de Asturias.
Oviedo (Asturias)
Terroba Larumbe, María Concepción
Centro de Endocrinología y Nutrición. Valladolid. Virgili Casas, M.ª Nuria
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Unidad de Nutrición y Dietética. Servicio de Endocri-
versitario Río Hortega. Valladolid nología y Nutrición. Hospital Universitari de Bellvit-
ge. Barcelona
Tinahones-Madueño, Francisco J.
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Uni- Zugasti Murillo, Ana
versitario Virgen de la Victoria. Málaga Sección Nutrición Clínica y Dietética. Servicio de En-
docrinología y Nutrición. Complejo Hospitalario de
Torres Torres, Beatriz Navarra
Centro de Investigación de Endocrinología y Nutrición. Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Servicio de
Facultad de Medicina. Servicio de Endocrinología y Endocrinología y Nutrición. Hospital General Univer-
Nutrición. Hospital Clínico Universitario. Valladolid sitario Gregorio Marañón. Madrid
Índice
Introducción a la tercera edición
Dres. Daniel Antonio de Luis Román, Diego Bellido Guerrero, Pedro Pablo García Luna
y Gabriel Olveira Fuster.................................................................................................................... V

Índice de autores............................................................................................................................ VII

BLOQUE: DIETOTERAPIA
COORDINADOR: Dr. Diego Bellido Guerrero..................................................................................... 1
Tema 1.  Bases científicas de la alimentación saludable.
Alfonso Calañas-Continente, Ana Barrera Martín, Aura Dulcinea Herrera Martínez y Ángel Rebollo Román............. 3
 1. Introducción............................................................................................................................. 3
  2. Características de la alimentación saludable................................................................................... 3
  3. Guías nutricionales para reducir el riesgo de enfermedades crónicas................................................... 4
  4. Grupos de alimentos y enfermedades crónicas................................................................................ 5
  5. Dieta mediterránea: un modelo de alimentación saludable................................................................ 17
 6. Resumen.................................................................................................................................. 20
 7. Bibliografía.............................................................................................................................. 21
Tema 2.  Requerimientos nutricionales.
Gabriel Olveira Fuster y Montserrat Gonzalo Marín...................................................................................... 35
 1. Introducción............................................................................................................................. 35
 2. Requerimientos energéticos ........................................................................................................ 38
  3.  Requerimientos de macronutrientes ............................................................................................. 40
  4.  Requerimientos de micronutrientes............................................................................................... 47
 5. Guías alimentarias..................................................................................................................... 48
 6. Bibliografía.............................................................................................................................. 49
Tema 3.  Etiquetado nutricional.
Virginia Bellido Castañeda, Cristina Porca Fernández y Diego Bellido Guerrero................................................. 53
 1. Introducción............................................................................................................................. 53
  2.  Normativa legal del etiquetado nutricional.................................................................................... 54
  3.  Información nutricional.............................................................................................................. 56
  4.  Declaraciones nutricionales y de propiedades saludables.................................................................. 59
  5.  Otros aspectos del etiquetado..................................................................................................... 59
  6.  Futuro de la información al consumidor, el envasado inteligente....................................................... 63
  7. Resumen.................................................................................................................................. 64
  8. Bibliografía.............................................................................................................................. 64
Tema 4.  Valoración nutricional.
Cristina Tejera Pérez, Rocío Villar Taibo, Miguel Ángel Martínez Olmos y Diego Bellido Guerrero........................... 67
 1. Introducción............................................................................................................................. 67
  2.  Métodos de cribado nutricional.................................................................................................... 69
 3. Valoración nutricional................................................................................................................ 72
  4.  Estrategia de valoración del estado nutricional .............................................................................. 77
  5.  Iniciativas en el ámbito de la detección de riesgo de desnutrición y valoración nutricional .................. 77

XV
XVI Índice

 6. Recursos digitales...................................................................................................................... 79
 7. Resumen.................................................................................................................................. 79
 8. Bibliografía.............................................................................................................................. 80

Tema 5.  Valoración de la ingesta. Encuestas nutricionales.


José Manuel García Almeida, M.ª Cristina Porca Fernández y Diego Bellido Guerrero......................................... 83
 1. Introducción............................................................................................................................. 83
  2.  Características de los métodos de valoración de la ingesta............................................................... 84
  3.  Criterios en la selección de un método de encuesta alimentaria........................................................ 85
  4.  Registro o diario dietético (RD)................................................................................................... 86
  5.  Recordatorio de 24 horas (R24)................................................................................................... 87
  6.  Cuestionario de frecuencia de consumo de alimentos (CFC)............................................................... 88
 7. Historia dietética...................................................................................................................... 90
  8.  Análisis nutricional: tablas, bases de datos, aplicaciones informáticas y apps...................................... 91
  9.  Tecnología y evaluación de la ingesta........................................................................................... 94
10.  Nuevos métodos de análisis de ingesta: Registro Dietético Fotográfico (RDF)...................................... 94
11. Resumen.................................................................................................................................. 94
12. Bibliografía.............................................................................................................................. 95

Tema 6.  Planificación de la dieta hospitalaria.


Ana Zugasti Murillo y Estrella Petrina Jáuregui.......................................................................................... 97
 1. Introducción............................................................................................................................. 97
  2.  Organización de la dieta hospitalaria............................................................................................ 97
  3.  Normativa en alimentación hospitalaria........................................................................................ 99
  4.  El código de dietas.................................................................................................................... 99
 5. Resumen.................................................................................................................................. 115
 6. Bibliografía.............................................................................................................................. 115

BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA


COORDINADORAS: Dra. Irene Bretón y Dra. Pilar García-Peris....................................................... 117
Tema 7.  Tratamiento dietético de la obesidad.
Alfonso Vidal Casariego, Alicia Calleja Fernández, Georgios Kyriakos y Rocío Villar Taibo.................................... 119
 1. Introducción............................................................................................................................. 119
  2.  Diagnóstico y valoración del paciente obeso.................................................................................. 120
  3.  Modificaciones en el contenido calórico de la dieta......................................................................... 122
  4.  Modificaciones en los macronutrientes de la dieta........................................................................... 123
  5.  Manejo dietético de la cirugía bariátrica........................................................................................ 128
  6.  Papel de nutrientes específicos en el control del peso..................................................................... 129
  7.  Modificaciones en la estructura de la dieta.................................................................................... 129
 8. Conclusiones............................................................................................................................. 130
 9. Bibliografía.............................................................................................................................. 130

Tema 8.  Tratamiento farmacológico de la obesidad.


Miguel A. Rubio Herrera y Carmen Moreno Lopera...................................................................................... 133
 1. Introducción............................................................................................................................. 133
  2.  Fármacos comercializados no disponibles en Europa........................................................................ 133
  3.  Fármacos comercializados en Europa............................................................................................. 135
Índice XVII

  4.  Futuro de los tratamientos para la obesidad................................................................................... 138


 5. Bibliografía.............................................................................................................................. 139

Tema 9.  Obesidad: Tratamiento quirúrgico.


Irene Bretón, Cynthia González-Antigüedad, Marta Motilla, Ana Zugasti y Pilar García-Peris............................... 143
  1.  Introducción y epidemiología...................................................................................................... 143
  2.  Cirugía bariátrica: Conceptos generales......................................................................................... 144
  3.  Cirugía bariátrica: Evaluación preoperatoria y selección de los pacientes............................................ 145
  4.  Cirugía bariátrica: Seguimiento postoperatorio............................................................................... 146
  5.  Complicaciones de la cirugía bariátrica.......................................................................................... 148
  6.  Gestación tras cirugía bariátrica................................................................................................... 151
  7.  Resumen y conclusiones............................................................................................................. 151
 8. Bibliografía.............................................................................................................................. 151

Tema 10.  Soporte nutricional en los trastornos de la conducta alimentaria.


M.ª Cristina Cuerda Compés, Marta Motilla de la Cámara, Loredana Arhip y Pilar García-Peris............................. 155
 1. Introducción............................................................................................................................. 155
  2.  Fisiopatología y diagnóstico........................................................................................................ 156
  3.  Objetivos nutricionales............................................................................................................... 160
  4.  Valoración nutricional................................................................................................................ 160
  5. Dietética.................................................................................................................................. 162
  6.  Soporte nutricional artificial....................................................................................................... 162
  7. Resumen.................................................................................................................................. 165
  8. Bibliografía.............................................................................................................................. 165

Tema 11.  Microbiota intestinal y obesidad.


Isabel M. Cornejo-Pareja, Araceli Muñoz-Garach y Francisco J. Tinahones-Madueño.......................................... 169
 1. Introducción............................................................................................................................. 169
 2. Nuestra microbiota.................................................................................................................... 169
  3.  Microbiota y enfermedades metabólicas........................................................................................ 174
 4. Resumen.................................................................................................................................. 180
  5. Bibliografía.............................................................................................................................. 181

BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO


COORDINADORAS: Dra. Clotilde Vázquez y Dra. Dolores del Olmo................................................. 187
Tema 12.  Diabetes mellitus. Recomendaciones internacionales. Dietas por raciones y por equivalencias.
Bárbara Cánovas, Virginia Peña, Ofelia Llamazares y Clotilde Vázquez........................................................... 189
 1. Introducción............................................................................................................................. 189
 2. Objetivos................................................................................................................................. 190
  3.  Tipos de dieta........................................................................................................................... 190
  4.  Estrategias en nutrición y diabetes mellitus tipo 1.......................................................................... 191
  5.  Estrategias en nutrición y diabetes mellitus tipo 2.......................................................................... 192
  6.  Aporte calórico recomendado...................................................................................................... 192
  7.  Reparto de macronutrientes........................................................................................................ 193
 8. Otros nutrientes........................................................................................................................ 195
 9. Conclusiones............................................................................................................................. 197
10. Bibliografía.............................................................................................................................. 197
XVIII Índice

Tema 13.  Importancia de la dieta en situaciones intercurrentes en diabetes mellitus.


Dolores del Olmo, Miriam Pérez-Pelayo, Victoria Alcázar y Purificación Martínez de Icaya.................................. 201
 1. Introducción............................................................................................................................. 201
  2.  Modificaciones dietéticas en situaciones fisiológicas....................................................................... 201
  3.  Modificaciones dietéticas en la actividad física............................................................................... 203
  4.  Modificaciones dietéticas en las complicaciones agudas................................................................... 205
  5.  Modificaciones dietéticas en enfermedades intercurrentes................................................................ 205
 6. Nutrición artificial..................................................................................................................... 206
 7. Resumen.................................................................................................................................. 207
 8. Bibliografía.............................................................................................................................. 208

Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento de los hidratos de carbono.
Dieta controlada en fructosa. Dieta controlada en sacarosa. Dieta restringida en galactosa.
Yaiza García Delgado, María del Pino Alberiche Ruano, Rosa María Sánchez Hernández y Raúl Alberto
González Medina................................................................................................................................. 211
  1.  Enfermedades por depósito de glucógeno...................................................................................... 211
  2.  Errores del metabolismo de la galactosa o hipergalactosemias.......................................................... 222
  3.  Errores del metabolismo de la fructosa.......................................................................................... 228
  4.  Alteraciones de la gluconeogénesis.............................................................................................. 233
  5.  Alteraciones en la digestión y absorción de hidratos de carbono....................................................... 235
 6. Resumen.................................................................................................................................. 247
 7. Bibliografía.............................................................................................................................. 248

BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS


COORDINADORES: Dr. Pedro Pablo García Luna y Dr. Luis Miguel Luengo Pérez........................... 253
Tema 15.  Soporte nutricional en la insuficiencia renal aguda y crónica. Síndrome nefrótico.
Mercedes Vázquez Gutiérrez y Juan Pedro Rodríguez Rodríguez..................................................................... 255
 1. Introducción............................................................................................................................. 255
  2.  Fisiopatología y diagnóstico de la malnutrición en la insuficiencia renal aguda, crónica y síndrome
  nefrótico.................................................................................................................................. 255
 3. Evaluación nutricional................................................................................................................ 258
 4. Requerimientos nutricionales ...................................................................................................... 259
  5.  Nutrición en la insuficiencia renal aguda....................................................................................... 261
  6.  Nutrición en la insuficiencia renal crónica...................................................................................... 262
  7.  Nutrición en el síndrome nefrótico............................................................................................... 266
  8.  Resumen y conclusiones............................................................................................................. 266
 9. Bibliografía.............................................................................................................................. 266

Tema 16.  Soporte nutricional en la hepatopatía crónica y trasplante hepático.


María del Pilar Serrano Aguayo, José Manuel Sousa Martín y Carmen Sendra Fernández.................................... 269
 1. Introducción............................................................................................................................. 269
  2.  Epidemiología de la enfermedad hepática crónica........................................................................... 270
  3.  Manifestaciones clínicas de la enfermedad hepática crónica............................................................. 270
  4.  Aproximación diagnóstica a la enfermedad hepática crónica. Evaluación del pronóstico ....................... 271
  5.  Aspectos nutricionales de la enfermedad hepática crónica................................................................ 271
  6.  Prevalencia de la malnutrición..................................................................................................... 272
  7. Mecanismos de malnutrición........................................................................................................ 272
  8.  Valoración del estado nutricional................................................................................................. 273
Índice XIX

  9.  Consecuencias de la malnutrición................................................................................................. 276


10.  Tratamiento nutricional.............................................................................................................. 276
11.  Opciones terapéuticas basadas en la fisiopatología......................................................................... 279
12.  Consideraciones nutricionales en el trasplante hepático................................................................... 279
13.  Resumen y conclusiones............................................................................................................. 281
14. Bibliografía.............................................................................................................................. 281

Tema 17.  Enfermedad celiaca. Dieta controlada en gluten.


José Manuel García Almeida, Ana M. Gómez Pérez y Rosario Fernández García-Salazar...................................... 289
 1. Introducción............................................................................................................................. 289
  2.  Manifestaciones clínicas de la enfermedad celiaca.......................................................................... 291
  3.  Manifestaciones nutricionales de la enfermedad celiaca................................................................... 293
  4.  Aproximación diagnóstica a la enfermedad celiaca.......................................................................... 294
v  5.  Aproximación diagnóstica a la situación nutricional de la enfermedad celiaca.................................... 294
 6. Tratamiento dietoterápico........................................................................................................... 295
  7.  Soporte nutricional artificial........................................................................................................ 302
  8.  Resumen y conclusiones............................................................................................................. 302
 9. Bibliografía.............................................................................................................................. 302

Tema 18.  Soporte nutricional en metabolopatías de los aminoácidos. Fenilcetonuria, homocistinuria,


enfermedad de orina de jarabe de arce y trastornos del ciclo de la urea. Glucogenosis.
Luis Miguel Luengo Pérez, Ana M.ª Márquez Armenteros y Pilar Jiménez Nacimiento........................................ 305
 1. Introducción............................................................................................................................. 305
 2. Fenilcetonuria........................................................................................................................... 306
  3.  Enfermedad de orina de jarabe de arce.......................................................................................... 310
 4. Homocistinuria.......................................................................................................................... 313
  5.  Errores innatos del ciclo de la urea............................................................................................... 314
 6. Glucogenosis............................................................................................................................ 317
 7. Resumen.................................................................................................................................. 320
 8. Bibliografía.............................................................................................................................. 320

BLOQUE: LÍPIDOS
COORDINADORAS: Dra. Rosa Burgos Peláez y Dra. M.ª Nuria Virgili Casas................................... 323
Tema 19.  Influencia de la dieta en el control de la hiperlipemia y el riesgo cardiovascular.
Miguel A. Rubio y Carmen Moreno........................................................................................................... 325
 1. Introducción............................................................................................................................. 325
  2. Influencia de los ácidos grasos sobre el riesgo cardiovascular........................................................... 325
  3. Efectos de los esteroles sobre el riesgo cardiovascular..................................................................... 332
  4. Recomendaciones para reducir el impacto de una dieta aterogénica .................................................. 333
  5. Recomendaciones nutricionales que pueden tener un impacto adicional sobre el riesgo cardiovascular.... 334
  6.  Nutrientes y salud cardiometabólica............................................................................................. 336
  7.  Guías de recomendaciones nutricionales........................................................................................ 339
 8. Bibliografía.............................................................................................................................. 339

Tema 20.  Trastornos congénitos del metabolismo de los lípidos: Adrenoleucodistrofia.


Dieta controlada en ácidos grasos.
Rosa Burgos Peláez, Mireia Guerrero Gual, Guillermo Cárdenas Lagranja y Hegoi Segurola Gurrutxaga..................... 345
 1. Adrenoleucodistrofia.................................................................................................................. 345
XX Índice

  2.  Dietas controladas en ácidos grasos.............................................................................................. 349


 3. Resumen.................................................................................................................................. 350
 4. Bibliografía.............................................................................................................................. 351

Tema 21.  Quilotórax y ascitis quilosa. Dietas modificadas en triglicéridos de cadena larga y cadena media.
M.ª Nuria Virgili Casas, Rafael López Urdiales, Eva María García Raimundo y Mónica Montserrat Gil de Bernabé..... 353
 1. Introducción............................................................................................................................. 353
 2. Manifestaciones clínicas............................................................................................................. 354
 3. Diagnóstico.............................................................................................................................. 355
  4.  Repercusión nutricional e inmunológica de las lesiones del sistema linfático....................................... 356
 5. Tratamiento.............................................................................................................................. 356
  6.  Resumen y conclusiones............................................................................................................. 361
 7. Bibliografía.............................................................................................................................. 362

Tema 22.  Epilepsia. Dietas cetogénicas.


Pere Leyes i García y Joan Trabal Vílchez......................................................................................................... 365
 1. Introducción............................................................................................................................. 365
 2. Dieta cetogénica....................................................................................................................... 365
  3.  Resumen y conclusiones............................................................................................................. 373
 4. Bibliografía.............................................................................................................................. 374

BLOQUE: METABOLISMO
COORDINADORES: Dr. Alejandro Sanz París y Dra. María Julia Ocón Bretón................................. 377
Tema 23.  Metabolismo hidrosalino. Dieta controlada en sodio. Dieta controlada en potasio.
Dieta hipertensión arterial.
Amaya Barragán Angulo, María Luisa Gracia Ruiz y Vicente Blay Cortés............................................................ 379
  1.  Dieta controlada en sodio........................................................................................................... 379
  2.  Dietas controladas en potasio...................................................................................................... 383
  3.  Dieta en la hipertensión arterial.................................................................................................. 386
 4. Resumen.................................................................................................................................. 390
 5. Bibliografía.............................................................................................................................. 390

Tema 24.  Metabolismo fosfocálcico y del magnesio. Osteoporosis. Dieta controlada en calcio, fósforo y magnesio.
Ana Isabel Ilundain González, María Julia Ocón Bretón, José Antonio Gimeno Orna y Jordi Pons Dolset .............. 395
 1. Introducción............................................................................................................................. 395
  2.  Metabolismo del calcio............................................................................................................... 396
  3.  Metabolismo del fósforo.............................................................................................................. 397
  4.  Metabolismo del magnesio.......................................................................................................... 398
 5. Osteoporosis............................................................................................................................. 399
 6. Tratamiento dietoterápico........................................................................................................... 400
 7. Resumen.................................................................................................................................. 406
 8. Bibliografía.............................................................................................................................. 407
Tema 25.  Anemia y hemocromatosis. Dieta controlada en hierro.
Diego Álvarez Ballano.......................................................................................................................... 409
 1. Anemia ferropénica.................................................................................................................... 409
 2. Hemocromatosis........................................................................................................................ 414
 3. Bibliografía.............................................................................................................................. 421
Índice XXI

Tema 26.  Enfermedad de Wilson. Dieta controlada en cobre.


Alejandro Sanz París, Diana Boj Carceller, Beatriz Lardies Sánchez e Isabel Azcona Monreal............................... 423
 1. Introducción............................................................................................................................. 423
 2. Funciones................................................................................................................................. 424
  3.  Metabolismo normal del cobre .................................................................................................... 425
  4.  Evaluación de la reserva de cobre en el organismo.......................................................................... 425
 5. Ingesta recomendada................................................................................................................. 425
 6. Fuentes alimenticias.................................................................................................................. 425
  7.  Mutación del gen ATP7A............................................................................................................ 426
  8.  Mutación del gen ATP7B: Enfermedad de Wilson............................................................................ 428
  9.  Resumen y conclusiones............................................................................................................. 433
10. Bibliografía.............................................................................................................................. 433

Tema 27.  Nefrolitiasis. Dietas controladas en purinas.


María Julia Ocón Bretón, Ana Isabel Ilundain González, Ana Belén Mañas Martínez y Ana Agudo Tabuenca.......... 437
 1. Introducción............................................................................................................................. 437
  2.  Metabolismo del ácido úrico........................................................................................................ 438
 3. Fisiopatología........................................................................................................................... 439
 4. Diagnóstico.............................................................................................................................. 442
 5. Tratamiento dietoterápico........................................................................................................... 443
  6. Tratamiento nutricional de la hiperuricemia. Dietas controladas en purinas......................................... 446
 7. Resumen.................................................................................................................................. 448
 8. Bibliografía.............................................................................................................................. 448

BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO


COORDINADORES: Dra. Julia Álvarez Hernández y Dr. Francisco Botella Romero......................... 451
Tema 28.  Diarrea y estreñimiento. Papel de probióticos y prebióticos.
Nuria Gil-Fournier Esquerra, Álvaro García-Manzanares Vázquez, Irene Gonzalo Montesinos
y Julia Álvarez Hernández..................................................................................................................... 453
 1. Introducción............................................................................................................................. 453
  2.  Probiótico. Prebiótico. Simbiótico. Fibra....................................................................................... 454
 3. Diarrea..................................................................................................................................... 456
 4. Estreñimiento........................................................................................................................... 462
 5. Conclusiones............................................................................................................................. 464
 6. Agradecimientos........................................................................................................................ 465
 7. Bibliografía.............................................................................................................................. 465

Tema 29.  Soporte nutricional en enfermedades pancreáticas.


Irene Gonzalo Montesinos, Virginia Peña Cortés, Julia Álvarez Hernández y Noelia Peláez Torres......................... 467
 1. Introducción............................................................................................................................. 467
  2.  Pancreatitis aguda..................................................................................................................... 467
  3.  Pancreatitis crónica................................................................................................................... 473
 4. Resumen.................................................................................................................................. 475
 5. Bibliografía.............................................................................................................................. 476
XXII Índice

Tema 30.  Soporte nutricional en la enfermedad inflamatoria intestinal.


Eduardo Platero Rodrigo, Álvaro García-Manzanares Vázquez de Agredos, Nuria Gil Fournier
y Julia Álvarez Hernández..................................................................................................................... 481
 1. Introducción............................................................................................................................. 481
  2.  Fisiopatología, clínica, diagnóstico y tratamiento........................................................................... 482
 3. Objetivos nutricionales............................................................................................................... 484
 4. Valoración nutricional................................................................................................................ 486
 5. Dietética.................................................................................................................................. 487
  6.  Soporte nutricional especializado................................................................................................. 489
 7. Resumen.................................................................................................................................. 493
 8. Bibliografía.............................................................................................................................. 493

Tema 31.  Soporte nutricional en pacientes con fallo intestinal.


José Joaquín Alfaro Martínez, Elena Carrillo Lozano, Antonio Hernández López y Francisco Botella Romero.......... 497
 1. Introducción............................................................................................................................. 497
  2. Fisiopatología........................................................................................................................... 499
 3. Diagnóstico.............................................................................................................................. 501
 4. Objetivos nutricionales............................................................................................................... 501
 5. Valoración nutricional................................................................................................................ 502
 6. Dietética.................................................................................................................................. 502
  7.  Soporte nutricional artificial........................................................................................................ 503
 8. Resumen.................................................................................................................................. 509
 9. Bibliografía.............................................................................................................................. 509

Tema 32.  El papel de la nutrición en la rehabilitación multimodal.


Antonio Hernández López, José Joaquín Alfaro Martínez y Francisco Botella Romero....................................... 511
 1. Introducción............................................................................................................................. 511
  2.  Rehabilitación multimodal.......................................................................................................... 511
  3.  Valoración del estado nutricional................................................................................................. 513
  4.  Optimización nutricional perioperatoria......................................................................................... 514
 5. Conclusión............................................................................................................................... 517
 6. Bibliografía.............................................................................................................................. 518

BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS


COORDINADORA: Dra. Pilar Matía Martín........................................................................................ 523
Tema 33.  Sarcopenia y fragilidad en el anciano.
Teresa Ruiz Gracia, Federico Miguel Cuesta Triana, Ángela Amengual Galbarte y Martín Cuesta Hernández............ 525
 1. Introducción............................................................................................................................. 525
  2.  Fisiopatología y diagnóstico........................................................................................................ 526
 3. Valoración nutricional................................................................................................................ 531
 4. Objetivos nutricionales............................................................................................................... 531
 5. Resumen.................................................................................................................................. 536
 6. Bibliografía.............................................................................................................................. 536

Tema 34.  Soporte nutricional en el paciente séptico y crítico.


Natalia Pérez Ferre, Teresa de Grado Manchado, Rona Penso Espinoza y Alejandra Durán Rodríguez-Hervada......... 541
 1. Introducción............................................................................................................................. 541
  2.  Fisiopatología y diagnóstico........................................................................................................ 541
Índice XXIII

 3. Objetivos nutricionales............................................................................................................... 542


 4. Valoración nutricional................................................................................................................ 542
  5. Soporte nutricional artificial........................................................................................................ 544
  6.  Nutrición en situaciones especiales en UCI.................................................................................... 550
 7. Resumen.................................................................................................................................. 550
 8. Bibliografía.............................................................................................................................. 551

Tema 35.  Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad pulmonar obstructiva
crónica, bronquiectasias y fibrosis quística.
Gabriel Olveira Fuster, Victoria Contreras Bolívar y Casilda Olveira Fuster........................................................ 553
  1.  Introducción y epidemiología ..................................................................................................... 553
  2.  Diagnóstico y manifestaciones clínicas ......................................................................................... 556
  3.  Desnutrición: prevalencia y fisiopatología...................................................................................... 557
  4.  Valoración nutricional en fibrosis quística, enfermedad pulmonar obstructiva crónica y bronquiectasias... 563
  5.  Objetivos del soporte nutricional en la fibrosis quística................................................................... 566
  6.  Soporte nutricional en la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y bronquiectasias.......................... 571
  7.  Nutrición parenteral en patologías respiratorias.............................................................................. 573
  8.  Otros tratamientos en el abordaje nutricional en la fibrosis quística.................................................. 573
  9.  Resumen y conclusiones............................................................................................................. 573
10. Bibliografía ............................................................................................................................. 574

Tema 36.  Nutrición en pacientes quemados y traumatológicos.


Clara Marcuello Foncillas, Ángela Amengual Galbarte y Pilar Matía Martín...................................................... 581
 1. Pacientes quemados................................................................................................................... 581
  2.  Pacientes con traumatismo grave................................................................................................. 588
 3. Resumen.................................................................................................................................. 589
 4. Bibliografía.............................................................................................................................. 590

Tema 37.  Soporte nutricional en pacientes con enfermedades neurológicas.


Paula Fernández Martínez, Tania Ramos Martínez, María Dolores Ballesteros Pomar y Adrián Arés Luque.............. 593
 1. Introducción............................................................................................................................. 593
  2.  Enfermedad vascular cerebral...................................................................................................... 593
  3.  Esclerosis lateral amiotrófica....................................................................................................... 597
  4.  Nutrición en la demencia............................................................................................................ 598
  5.  Nutrición en la enfermedad de Parkinson....................................................................................... 601
 6. Resumen.................................................................................................................................. 601
 7. Bibliografía.............................................................................................................................. 601

BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA


COORDINADOR: Dr. Miguel León Sanz............................................................................................. 605
Tema 38.  Nutrición en cirugía de tumores de cabeza y cuello.
Daniel Antonio de Luis Román, Emilia Gómez Hoyos, Juan José López Gómez y Beatriz Torres Torres................... 607
 1. Introducción............................................................................................................................. 607
  2.  Fisiopatología y manifestaciones clínicas...................................................................................... 608
 3. Diagnóstico.............................................................................................................................. 608
 4. Soporte nutricional.................................................................................................................... 609
 5. Resumen.................................................................................................................................. 614
 6. Bibliografía.............................................................................................................................. 614
XXIV Índice

Tema 39.  Soporte nutricional en el paciente con cirugía oncológica de estómago, esófago y páncreas.
Alfonso Calañas-Continente................................................................................................................... 617
  1.  Bases del tratamiento de la malnutrición relacionada con el cáncer................................................... 617
 2. Cáncer gástrico......................................................................................................................... 618
  3.  Cáncer de esófago...................................................................................................................... 621
  4.  Cáncer de páncreas.................................................................................................................... 625
 5. Resumen.................................................................................................................................. 628
 6. Bibliografía.............................................................................................................................. 628

Tema 40.  Valoración y soporte nutricional en el paciente oncológico.


Yaiza López Plasencia, Dunia Marrero Arencibia, Yaiza García Delgado y Carlos Rodríguez Pérez.......................... 635
 1. Introducción............................................................................................................................. 635
  2. Etiología, fisiopatología y diagnóstico.......................................................................................... 635
  3.  Objetivos del tratamiento nutricional............................................................................................ 638
 4. Valoración nutricional................................................................................................................ 639
 5. Recomendaciones dietéticas........................................................................................................ 642
 6. Soporte nutricional.................................................................................................................... 644
 7. Resumen.................................................................................................................................. 651
 8. Bibliografía.............................................................................................................................. 651

Tema 41.  Soporte nutricional en el paciente hematológico (trasplante de médula ósea y enfermedad
de injerto contra huésped).
Elena García Fernández, M.ª Ángeles Valero Zanuy y Miguel León Sanz.......................................................... 655
 1. Introducción............................................................................................................................. 655
  2.  Aspectos generales del trasplante de células hematológicas.............................................................. 655
 3. Objetivos nutricionales............................................................................................................... 658
 4. Valoración nutricional................................................................................................................ 658
  5.  Complicaciones que requieren de intervención nutricional................................................................ 659
  6.  Requerimientos nutricionales en el trasplante hematopoyético......................................................... 661
 7. Dietética.................................................................................................................................. 662
  8.  Soporte nutricional artificial........................................................................................................ 664
 9. Resumen.................................................................................................................................. 669
10. Bibliografía.............................................................................................................................. 670

BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES


COORDINADORES: Dr. Miguel Ángel Martínez Olmos y Dr. Ceferino Martínez Faedo................... 675
Tema 42.  Alergias e intolerancias alimentarias. Diagnóstico y tratamiento.
Jessica Ares Blanco, Ceferino Martínez Faedo y Isabel González-Posada Gómez............................................... 677
 1. Introducción............................................................................................................................. 677
 2. Epidemiología........................................................................................................................... 678
  3.  Factores de riesgo...................................................................................................................... 679
 4. Fisiopatología........................................................................................................................... 679
 5. Manifestaciones clínicas............................................................................................................. 682
 6. Diagnóstico.............................................................................................................................. 684
  7.  Historia natural de alergias e intolerancias alimentarias................................................................... 687
 8. Tratamiento.............................................................................................................................. 688
 9. Tratamiento nutricional.............................................................................................................. 689
Índice XXV

10. Prevención............................................................................................................................... 690
11. Resumen.................................................................................................................................. 691
12. Bibliografía.............................................................................................................................. 691

Tema 43.  Dieta y tests diagnósticos.


Ceferino Martínez Faedo, Francisco Villazón González y Jessica Ares Blanco.................................................... 695
 1. Introducción............................................................................................................................. 695
  2.  Pruebas analíticas que precisan modificaciones dietéticas................................................................ 695
 3. Ayuno previo............................................................................................................................ 701
 4. Resumen.................................................................................................................................. 702
 5. Bibliografía.............................................................................................................................. 702

Tema 44.  Interacción entre dieta y fármacos.


Tania Ramos Martínez, Concepción Guindel Jiménez y María Dolores Ballesteros Pomar..................................... 705
 1. Introducción............................................................................................................................. 705
  2.  Factores implicados en la aparición de interacciones entre fármacos y dieta........................................ 705
  3.  Tipos de interacciones entre fármacos y dieta................................................................................ 706
  4.  Interacciones medicamentos-nutrición enteral................................................................................ 711
  5.  Factores específicos que determinan interacciones medicamentos-nutrición enteral.............................. 712
  6.  Tipos de interacciones medicamentos-nutrición enteral................................................................... 712
  7.  Prevención de la interacción medicamentos-nutrición enteral: recomendaciones
  para la administración demedicamentos........................................................................................ 713
 8. Resumen.................................................................................................................................. 715
 9. Bibliografía.............................................................................................................................. 715

Tema 45.  Alimentación, nutrición, hidratación y ejercicio físico.


Nieves Palacios Gil de Antuñano y Fernando García Pérez-Sevillano............................................................... 717
 1. Introducción............................................................................................................................. 717
  2.  Sistemas energéticos durante el movimiento muscular..................................................................... 718
  3.  Requerimientos energéticos de las personas activas........................................................................ 718
  4.  Hidratos de carbono y ejercicio físico........................................................................................... 718
  5.  Lípidos y ejercicio físico............................................................................................................. 720
  6.  Proteínas y ejercicio físico.......................................................................................................... 721
  7.  Micronutrientes y ejercicio físico.................................................................................................. 722
  8.  Hidratación y ejercicio físico....................................................................................................... 723
  9.  Ayudas ergogénicas en el deporte................................................................................................ 726
10. Resumen.................................................................................................................................. 728
11. Bibliografía.............................................................................................................................. 729

BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO


COORDINADOR: Dr. Daniel Antonio de Luis Román........................................................................ 731
Tema 46.  Nutrición enteral: concepto, indicación, fórmulas, seguimiento y complicaciones.
Juan José López Gómez, Beatriz Torres Torres, Emilia Gómez Hoyos, Ana Ortolá Buigues
y Daniel Antonio de Luis Román............................................................................................................. 733
 1. Concepto.................................................................................................................................. 733
  2. Indicaciones y contraindicaciones de la nutrición enteral................................................................. 733
  3.  Fórmulas de nutrición enteral...................................................................................................... 736
  4.  Seguimiento de la nutrición enteral.............................................................................................. 738
XXVI Índice

  5.  Complicaciones de la nutrición enteral.......................................................................................... 742


 6. Conclusiones............................................................................................................................. 749
 7. Bibliografía.............................................................................................................................. 749

Tema 47.  Nutrición enteral: vías de acceso.


Luis Ángel Cuéllar Olmedo, Concepción Terrroba Larumbe, Ana Alejandra Cordero Vaquero
y Daniel Antonio de Luis Román............................................................................................................. 753
 1. Introducción............................................................................................................................. 753
  2.  Nutrición enteral. Vías de acceso................................................................................................. 754
 3. Resumen.................................................................................................................................. 761
 4. Bibliografía.............................................................................................................................. 761

Tema 48.  Nutrición parenteral.


Beatriz Torres Torres, Juan José López Gómez, Emilia Gómez Hoyos, Ana Ortolá Buiges
y Daniel Antonio de Luis Román............................................................................................................. 763
 1. Concepto.................................................................................................................................. 763
  2.  Indicación de la nutrición parenteral............................................................................................ 763
  3.  Clasificación de la nutrición parenteral......................................................................................... 764
  4.  Fórmulas de nutrición parenteral.................................................................................................. 765
  5.  Composición de la nutrición parenteral......................................................................................... 765
  6.  Monitorización de la nutrición parenteral...................................................................................... 768
  7.  Complicaciones de la nutrición parenteral...................................................................................... 770
  8. Resumen.................................................................................................................................. 774
  9. Bibliografía.............................................................................................................................. 775

Tema 49.  Nutrición parenteral: vías de acceso.


María Concepción Terroba Larumbe, Cristina Crespo Soto, Luis Cuéllar Olmedo y Daniel Antonio de Luis Román..... 779
 1. Introducción............................................................................................................................. 779
  2.  Indicaciones de la nutrición parenteral. Contraindicaciones del acceso venoso central.......................... 779
  3.  Nutrición parenteral: vías de acceso............................................................................................. 780
  4.  Complicaciones de los catéteres venosos centrales.......................................................................... 783
  5.  Cuidados del catéter y prevención de complicaciones...................................................................... 784
 6. Resumen.................................................................................................................................. 785
 7. Bibliografía.............................................................................................................................. 786

Tema 50.  Inmunonutrición en el soporte nutricional artificial.


Daniel Antonio de Luis Román, Emilia Gómez Hoyos, Juan José López Gómez, Ana Ortolá Buiges y Beatriz Torres Torres... 789
 1. Introducción............................................................................................................................. 789
  2. Fisiopatología........................................................................................................................... 790
  3.  Implicaciones clínicas de fórmulas inmunomoduladoras................................................................... 791
 4. Futuros inmunonutrientes........................................................................................................... 795
 5. Resumen.................................................................................................................................. 795
 6. Bibliografía.............................................................................................................................. 796

Tema 51.  Metabolismo hídrico en los pacientes con nutrición artificial: importancia y tratamiento
de la hiponatremia.
Emilia Gómez Hoyos, Ana Ortolá Buigues, Juan José López Gómez, Beatriz Torres Torres
y Daniel Antonio De Luis Román............................................................................................................ 799
 1. Introducción............................................................................................................................. 799
  2.  Fisiopatología de la hiponatremia................................................................................................ 800
Índice XXVII

  3.  Manifestaciones clínicas de la hiponatremia................................................................................... 802


  4.  Diagnóstico y etiología de la hiponatremia en pacientes con nutrición artificial.................................. 803
  5.  Tratamiento de la hiponatremia en nutrición artificial..................................................................... 806
 6. Resumen.................................................................................................................................. 812
 7. Bibliografía.............................................................................................................................. 814

BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA


COORDINADOR: Dr. José Manuel Moreno Villares............................................................................ 819
Tema 52.  Valoración nutricional y patrones de referencia en el paciente en edad pediátrica.
Cecilia Martínez Costa y Elena Crehuá Gaudiza.......................................................................................... 821
 1. 
Introducción............................................................................................................................. 821
 2. 
Anamnesis................................................................................................................................ 821
 3. 
Exploración clínica..................................................................................................................... 822
 4. 
Exploración antropométrica......................................................................................................... 823
 5. 
Exploraciones complementarias.................................................................................................... 826
  6. Resumen y conclusiones............................................................................................................. 827
 7. 
Bibliografía.............................................................................................................................. 828

Tema 53.  Recomendaciones dietéticas en el paciente en edad pediátrica.


Susana Redecillas Ferreiro, Raquel Núñez Ramos y Raquel Lorite Cuenca........................................................ 829
 1. Introducción............................................................................................................................. 829
  2.  Recomendaciones dietéticas en el niño sano............................................................................................ 829
  3.  Aspectos prácticos..................................................................................................................... 839
 4. Conclusiones............................................................................................................................. 845
 5. Bibliografía.............................................................................................................................. 845

Tema 54.  Nutrición enteral en el paciente en edad pediátrica: vías y fórmulas.


Ana Belén Martínez Zazo, Óscar Rubio Cabezas y Consuelo Pedrón Giner........................................................ 847
 1. Introducción............................................................................................................................. 847
  2.  Indicaciones y contraindicaciones de la nutrición enteral................................................................. 848
  3.  Selección de la vía de acceso....................................................................................................... 848
  4.  Material para la administración.................................................................................................... 849
  5.  Métodos y modos de infusión...................................................................................................... 850
  6.  Selección del tipo de fórmula ..................................................................................................... 851
  7.  Nutrición enteral del prematuro................................................................................................... 857
  8.  Inicio de la nutrición enteral y monitorización del soporte............................................................... 857
 9. Complicaciones......................................................................................................................... 858
10.  Nutrición enteral domiciliaria...................................................................................................... 859
11. Resumen.................................................................................................................................. 859
12. Bibliografía.............................................................................................................................. 859

Tema 55.  Nutrición parenteral en el paciente pediátrico: vías y fórmulas.


Marta Germán Díaz y José Manuel Moreno Villares..................................................................................... 861
 1. Introducción............................................................................................................................. 861
  2.  Indicaciones para el uso de nutrición parenteral en niños................................................................ 862
  3.  Solicitud de la nutrición parenteral y etiquetado............................................................................ 862
 4. Requerimientos nutricionales....................................................................................................... 862
  5.  Composición de las soluciones de nutrición parenteral..................................................................... 865
XXVIII Índice

 6. Accesos vasculares..................................................................................................................... 869


  7.  Material para la administración de nutrición parenteral.................................................................... 871
  8.  Métodos de infusión................................................................................................................... 871
 9. Monitorización.......................................................................................................................... 872
10. Complicaciones......................................................................................................................... 872
11.  Nutrición parenteral domiciliaria (NPD)......................................................................................... 876
12.  Resumen y conclusiones............................................................................................................. 876
13. Bibliografía.............................................................................................................................. 876

BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES


COORDINADORA: Dra. María Dolores Ballesteros Pomar................................................................. 881
Tema 56.  Aspectos éticos e implicaciones legales del soporte nutricional.
José Enrique Palacio Abizanda y Julia Álvarez Hernández........................................................................... 883
 1. Introducción............................................................................................................................. 883
  2.  Algunas consideraciones generales............................................................................................... 884
  3.  Implicaciones legales. Aproximación en situaciones clínicas concretas............................................... 887
 4. Resumen.................................................................................................................................. 894
 5. Bibliografía.............................................................................................................................. 894

Tema 57.  Gestión aplicada a la nutrición clínica.


Alfonso Vidal Casariego, David Emilio Barajas Galindo e Isidoro Cano Rodríguez.............................................. 897
 1. Introducción............................................................................................................................. 897
 2. Gestión sanitaria....................................................................................................................... 898
  3.  Herramientas de gestión ............................................................................................................ 899
  4.  Gestión de la calidad.................................................................................................................. 906
  5.  Resumen y conclusiones............................................................................................................. 910
 6. Bibliografía.............................................................................................................................. 910

Tema 58.  Metodología para el diseño y desarrollo de productos de nutrición clínica.


Milagros Pérez Rodríguez y África Jiménez Jiménez.................................................................................... 911
  1.  Introducción: objetivo de las actividades de diseño y desarrollo en la industria................................... 911
  2.  Proceso de innovación................................................................................................................ 912
  3.  Metodología para el diseño de productos de nutrición clínica........................................................... 913
  4.  Metodología para el desarrollo de productos de nutrición clínica....................................................... 916
  5.  Controles necesarios durante el desarrollo..................................................................................... 919
  6.  El proceso de escalado y su validación.......................................................................................... 920
  7.  Controles de producto y estudios de vida útil................................................................................. 920
  8.  Evaluación clínica de productos................................................................................................... 921
  9.  Preparación para la fase de comercialización y lanzamiento al mercado.............................................. 922
10. Resumen.................................................................................................................................. 923
11. Bibliografía.............................................................................................................................. 923

Tema 59.  Nutrición basada en la evidencia.


María Dolores Ballesteros Pomar, Ana Hernández Moreno y Adrián Arés Luque................................................. 925
  1.  Medicina basada en la evidencia.................................................................................................. 925
  2.  Limitaciones a la práctica clínica basada en la evidencia................................................................. 926
  3.  Pasos para la práctica de la medicina basada en la evidencia............................................................ 927
Índice XXIX

  4.  De la MBE a la NuBE.................................................................................................................. 929


  5.  Problemas específicos de la NuBE................................................................................................. 930
  6.  La MBE y las guías de práctica clínica: niveles de evidencia y grados de recomendación........................ 931
  7.  Análisis crítico de las guías de práctica clínica............................................................................... 931
  8.  Guías de práctica clínica en nutrición........................................................................................... 932
 9. Conclusiones............................................................................................................................. 933
10. Bibliografía............................................................................................................................... 933

Tema 60.  Nutrición artificial domiciliaria.


Rocío Villar Taibo, Ana Urioste Fondo y Paula Fernández Martínez................................................................ 937
 1. Introducción............................................................................................................................. 937
 2. Marco legal............................................................................................................................... 937
 3. Epidemiología........................................................................................................................... 941
 4. Requisitos................................................................................................................................ 943
  5.  Aspectos éticos sobre la nutrición e hidratación artificial................................................................. 944
 6. Impacto social.......................................................................................................................... 944
 7. Impacto económico................................................................................................................... 946
 8. Resumen.................................................................................................................................. 946
 9. Bibliografía.............................................................................................................................. 947

Tema 61.  Nutrición e investigación.


Alicia Calleja Fernández, Begoña Pintor de la Maza, Miriam Alejo Ramos y Alfonso Vidal Casariego..................... 951
 1. Introducción............................................................................................................................. 951
  2.  Tipos de estudio........................................................................................................................ 951
 3. Investigación traslacional........................................................................................................... 956
 4. Legislación............................................................................................................................... 957
  5.  Organización de los grupos de investigación en España................................................................... 958
 6. Financiación............................................................................................................................. 959
 7. Propiedad industrial................................................................................................................... 960
 8. Divulgación científica................................................................................................................. 962
 9. Resumen.................................................................................................................................. 963
10. Bibliografía.............................................................................................................................. 963

BLOQUE: ANEXOS
COORDINADORES: Dr. Gabriel Olveira Fuster y Dr. José Luis Pereira Cunill................................... 965
Anexo 1. DRI.................................................................................................................................... 967

Anexo 2.  Herramientas para el cribado de desnutrición y valoración nutricional........................................... 975

Anexo 3.  Soluciones nitrogenadas y lipídicas para nutrición parenteral....................................................... 987

Anexo 4.  Fórmulas enterales orales más empleadas en nuestro medio......................................................... 993

Anexo 5.  Fórmulas enterales para infusión por sonda más empleadas en nuestro medio................................ 1005

Anexo 6.  Suplementos de vitaminas, minerales y oligoelementos............................................................... 1015

Anexo 7.  Aplicaciones móviles para iPhone y Android de utilidad en nutrición............................................. 1025

Anexo 8.  Enlaces web de interés en nutrición......................................................................................... 1031


  1. Entidades públicas relacionadas con la nutrición............................................................................. 1031
XXX Índice

 2. Sociedades científicas................................................................................................................ 1032


  3. Direcciones web de las revistas de nutricion clínica, dietoterapia, alimentación oral y bromatología....... 1032

Anexo 9.  Fórmulas útiles en el seguimiento de pacientes con nutrición artificial y factores de conversión
de unidades....................................................................................................................................... 1035

Anexo 10.  Gráficas de crecimiento españolas (Estudios Españoles de Crecimiento 2010)............................... 1039

ÍNDICE ANALÍTICO................................................................................................................................ 1043


BLOQUE:
DIETOTERAPIA
(Dr. Diego Bellido Guerrero)
TEMA 1. Bases científicas de la alimentación saludable.
Dres. Alfonso Calañas-Continente, Ana Barrera Martín, Aura Dulcinea Herrera
Martínez y Ángel Rebollo Román

TEMA 2. Requerimientos nutricionales.


Dres. Gabriel Olveira Fuster y Montserrat Gonzalo Marín

TEMA 3. Etiquetado nutricional.


Dres. Virginia Bellido Castañeda, Cristina Porca Fernández y Diego
Bellido Guerrero

TEMA 4. Valoración nutricional.


Dres. Cristina Tejera Pérez, Rocío Villar Taibo, Miguel Ángel Martínez Olmos
y Diego Bellido Guerrero

TEMA 5. Valoración de la ingesta. Encuestas nutricionales.


Dres. José Manuel García Almeida, M.ª Cristina Porca Fernández y Diego
Bellido Guerrero

TEMA 6. Planificación de la dieta hospitalaria.


Dres. Ana Zugasti Murillo y Estrella Petrina Jáuregui
Tema 1.
Bases científicas de la alimentación saludable
Alfonso Calañas-Continente
Ana Barrera Martín
Aura Dulcinea Herrera Martínez
Ángel Rebollo Román
Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Reina Sofía.
Córdoba.

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 3-33.

1.  Introducción
2.  Características de la alimentación saludable
3.  Guías nutricionales para reducir el riesgo de enfermedades crónicas
4.  Grupos de alimentos y enfermedades crónicas
5.  Dieta mediterránea: un modelo de alimentación saludable
6.  Resumen
7.  Bibliografía

1. Introducción siguen las recomendaciones consensuadas en sus


países.
La alimentación, en todas sus variantes culturales
y en un sentido amplio, define la salud de las perso-
nas, su crecimiento y su desarrollo. La alimentación
2. Características de la alimentación
diaria debe contener una cantidad suficiente de los saludable
diferentes macro y micronutrientes para cubrir la La alimentación saludable debe reunir las cualidades
mayoría de las necesidades fisiológicas. Estas se ha- de variedad, equilibrio y adecuación, junto con las ca-
yan influenciadas por numerosos factores, como el racterísticas de un estilo de vida saludable:
sexo, la edad, el estado fisiológico (el embarazo, la
lactancia y el crecimiento), la composición corporal,
la actividad física y las características específicas de
2.1.  Ser variada
cada individuo. No existe ningún alimento que contenga todos los
La promoción de una dieta saludable se basa fre- nutrientes esenciales. De ahí la necesidad de un aporte
cuentemente en reducir la grasa saturada y la inges- diario y variado de todos los grupos de alimentos en las
ta calórica y aumentar la de frutas, verduras y fibra. proporciones adecuadas para cubrir las necesidades
En la mayoría de los países con economías de merca- fisiológicas de nuestro organismo. Algunos investiga-
do establecidas, los alimentos densamente energéti- dores sugieren que en una semana se necesitan al me-
cos, palatables, ricos en grasa, azúcar y sal están nos entre 20 y 30 tipos de alimentos diferentes, sobre
disponibles en cualquier lugar y época del año, todo de origen vegetal, para que la dieta sea saludable.
mientras que la fruta y la verdura, así como otros La diversidad de alimentos puede compensar la insufi-
alimentos ricos en fibra, pueden ser más difíciles de ciencia de un nutriente concreto por su aporte en otro
conseguir. Esto, junto con la tendencia a comer en de los alimentos de nuestra dieta. Asimismo, puede
función de la disponibilidad alimentaria y en mayor disminuir el impacto de componentes tóxicos que, de
cantidad cuando más se ofrece, produce un hiper- manera natural o artificial, estén presentes en un ali-
consumo de determinados alimentos y un consumo mento.
inferior al recomendado de otros. En niños1 y en adultos2 la diversidad se ha asociado
A pesar de la importancia de una alimentación con un mejor estado nutricional, con independencia
saludable, la gran mayoría de las poblaciones no del nivel socioeconómico, y es un buen índice de pro-

3
4 BLOQUE: DIETOTERAPIA

babilidad de alcanzar requerimientos nutricionales y de enfermedades cardiovasculares fueron la causa de


una calidad nutricional más alta. mortalidad de 17 millones de personas, seguidas por
las neoplasias (8,2 millones de muertes), las enferme-
2.2.  Ser equilibrada y adecuada dades respiratorias crónicas (4 millones de muertes) y
la diabetes (1,5 millones de muertes). Estos cuatro gru-
Las proporciones de los alimentos elegidos deben pos de enfermedades suponen el 82% de toda la mor-
modificarse para favorecer la variedad alimentaria, de talidad atribuible a enfermedades crónicas no transmi-
modo que la alimentación responda a las necesidades sibles3.
nutricionales de cada persona con sus características y Aunque la genética influye en el riesgo de cáncer, la
circunstancias particulares. mayoría de las variaciones del riesgo entre las poblacio-
nes y entre los individuos se debe a factores que no son
2.3.  Ser saludable hereditarios. Para la gran mayoría de las personas no
fumadoras, el control del peso, las elecciones alimenta-
La alimentación sana incluye los conceptos de varie- rias saludables y el ejercicio son los determinantes mo-
dad, equilibrio y adecuación, junto con las característi- dificables más importantes del riesgo de cáncer. La
cas de un estilo de vida saludable. Una alimentación evidencia sugiere que la contribución del estilo de vida
saludable es aquella que permite: a) el crecimiento y el y del tabaquismo en la etiología del cáncer es similar
desarrollo del niño; b) el mantenimiento de la salud, la (figura 1)4.
actividad y la creatividad del adulto, y c) la superviven- Al ser la alimentación habitual el principal factor de
cia y la comodidad en el anciano. Además, el término riesgo modificable, la identificación de estrategias pre-
saludable se relaciona con una alimentación que favo- ventivas y terapéuticas simples y coste efectivas es una
rece y posibilita el buen estado de salud y que disminu- cuestión prioritaria y de urgencia a nivel internacional.
ye el riesgo de enfermedades crónicas relacionadas con El adoptar estilos de vida saludables es altamente reco-
la alimentación. mendable para disminuir el riesgo de enfermedades
Unos hábitos alimentarios poco saludables aumen- crónicas, ya que puede reducir en un 83% la tasa de
tan el riesgo de exceso ponderal, hipercolesterolemia, coronariopatía, en un 91% la tasa de diabetes en mu-
hipertensión arterial, diabetes y síndrome metabólico, jeres y en un 71% el cáncer de colon en varones.
el de enfermedades cardio y cerebrovasculares y el de
ciertas neoplasias. Estas enfermedades crónicas no 3. Guías nutricionales para reducir el riesgo
transmisibles son las principales causas de muerte y
de enfermedades crónicas
discapacidad en todo el mundo. En 2012, causaron
38 millones de muertes (16 millones en personas con Las Sociedades Americanas de Cardiología5, Diabe-
edad inferior a 70 años) y se prevé que causen la muer- tes6 y de Oncología7 han planteado sus recomendacio-
te de 52 millones de personas en 2030. En 2012, las nes dietéticas y de estilo de vida con guías elaboradas

Alcohol
4-6% Otros
Obesidad 10-15%
10-20%

Ambientales Infecciones
90-95% 15-20%

Dieta
30-35%

Tabaco
25-30%
Genéticos
5-10%

Figura 1.  Factores relacionados con la etiología del cáncer.


Tema 1.  Bases científicas de la alimentación saludable 5

en este sentido (tabla 1). Todas estas sociedades cien- E y carotenoides), flavonoides y fibra, entre otros,
tíficas recomiendan una dieta rica en frutas y verduras mejoran diversos factores de riesgo cardiovascular
y promueven el consumo de cereales integrales frente como el estrés oxidativo, la dislipemia, la resisten-
al de refinados. Las Sociedades Americanas de Cardio- cia insulínica y la hipertensión arterial. Estos nu-
logía y Diabetes incluyen objetivos específicos para el trientes mejoran la circulación sanguínea y la fun-
consumo de grasa y de colesterol. ción endotelial13-17, modulando los barorreceptores,
Las recomendaciones actuales sobre estilo de vida lo que facilita la vasodilatación arterial y disminu-
propuestas para la prevención del cáncer se enumeran ye la tensión arterial.
en la tabla 27, 8. •  El consumo de frutas y verduras, tanto en combi-
nación como por separado, se ha asociado a una
4. Grupos de alimentos y enfermedades reducción de la mortalidad cardiovascular10,11, con
crónicas una disminución del 4% del riesgo de muerte car-
diovascular por cada ración adicional de fruta y
4.1.  Frutas y verduras verduras, del 5% por cada ración adicional de fru-
ta y del 4% por cada ración de verduras10. Parece
4.1.1.  Enfermedades cardiovasculares además existir una mayor reducción de riesgo con
Las dietas ricas en frutas y verduras deben formar la ingesta de verduras crudas11.
parte de una alimentación saludable por sus beneficios •  Existen numerosos estudios que investigan la
demostrados sobre las enfermedades crónicas, como relación entre el consumo de verduras crucífe-
las cardiovasculares9-12. La reducción del riesgo cardio- ras y la disminución del riesgo cardiovascular,
vascular se sustenta en los siguientes argumentos: con una reducción de la incidencia de enferme-
dad cardiovascular del 15% en individuos con
•  Ciertos nutrientes contenidos en estos alimentos alto consumo de crucíferas18. Estas verduras
como potasio, folato, antioxidantes (vitaminas C, tienen una elevada cantidad de ácido fólico,

Tabla 1.  Guías para reducir el riesgo de enfermedades crónicas.

Nutriente IOM AHA ADA ACS


Hidratos 45-65% (> 130 g/día) Alimentos ricos en 45-65% ≥ 5 raciones/día
de carbono fibra, frutas, verdura (> 130 g/día)1-2
Proteínas 10-35% (0,8 g/kg) Carnes magras, 10-35% (≥ 20% si Limitar carnes rojas
pescado azul 2 veces/ diabetes) y procesadas. Elegir
semana, retirar la piel legumbres, aves,
de carne de aves pescado
Grasa 20-35% 25-35%3 20-35%2 NR
Linoleico 5-10% NR NR NR
α-linolénico 0,6-1,2% NR NR NR
Grasas Tan bajo como sea < 7% < 10% (< 7% si NR
saturadas posible dislipemia)
Grasas trans Tan bajo como sea < 1% Tan bajo como sea Tan bajo como sea
posible posible posible
Colesterol Tan bajo como sea < 300 mg/día < 300 mg/día NR
posible
Fibra 25 g/día (mujer) Legumbres, cereales 14 g/100 kcal Legumbres, cereales
38 g/día (varón) integrales, frutas, integrales, frutas,
verduras verduras

ACS: Sociedad Americana de Oncología; ADA: Sociedad Americana de Diabetes; AHA: Sociedad Americana de Cardiología;
IOM: Instituto de Medicina; NR: no recomendación específica.
1
  Cereales integrales, frutas, verduras y leche descremada como fuentes principales.
2
  Hidratos y grasa monoinsaturada deben aportar el 60-70% de las calorías totales.
3
  Usar grasa vegetal líquida en lugar de sólida.
6 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Tabla 2.  Guías de nutrición y actividad física para la prevención del cáncer.

1. Conseguir y mantener un Mantener la grasa corporal baja, sin alcanzar el bajo peso
peso saludable a lo largo Evitar el excesivo aumento de peso a lo largo de la vida
de la vida Realizar actividad física y limitar el consumo de alimentos y bebidas de alta
densidad calórica
2. Adoptar un estilo de vida Adultos: al menos 150 minutos semanales de actividad moderada o 75 minutos de
físicamente activo actividad intensa, preferiblemente separado en varios días
Niños y adolescentes: al menos 60 minutos diarios de actividad moderada o intensa,
siendo al menos 3 veces por semana actividad intensa
Evitar el sedentarismo
3. Consumir una Seleccionar alimentos y bebidas que ayuden a conseguir y mantener un peso
alimentación saludable, saludable
con especial énfasis Limitar el consumo de carnes rojas y procesadas
sobre alimentos de Consumir al menos 5 raciones diarias de frutas y verduras
origen vegetal Elegir cereales integrales en vez de refinados
6. Si se ingiere alcohol, Mujer: No más de una bebida alcohólica al día
limitar su consumo Varón: No más de dos bebidas alcohólicas al día

antioxidantes (como la vitamina C, E y los beta- Enfermedad cerebrovascular


carotenos), fibra soluble, calcio y vitamina K,
todos ellos relacionados con la reducción del •  Por cada 200 g/día adicionales de fruta el riesgo
riesgo cardiovascular. También tienen mayor de ictus disminuye un 32%. Esta reducción es del
capacidad de captación de ácidos biliares, lo 11% por cada 200 g/día adicionales de verduras24.
que produce una disminución en la absorción No obstante, estas evidencias proceden de estu-
de grasas y, en última instancia, reduce el ries- dios que muestran asociaciones pero que no per-
go cardiovascular19. miten demostrar causalidad. Desde el punto de
•  Una mayor ingesta de frutas y verduras supone un vista biológico, la explicación es idéntica a la pro-
menor consumo de grasas saturadas y colesterol, puesta para la reducción de mortalidad cardio­
lo que produce una reducción indirecta del riesgo vascular.
cardiovascular. •  Existe evidencia que ha demostrado que determi-
nados micronutrientes contenidos en frutas y ver-
duras como el potasio25, 26 el ácido fólico27 antioxi-
Enfermedad coronaria
dantes como la vitamina C, E y carotenoides28, 29 y
Los mecanismos propuestos para la reducción de fibra30 se asocian con un menor riesgo de ictus.
riesgo de coronariopatía son la reducción en la forma- •  La tensión arterial es uno de los factores de riesgo
ción de placas arterioscleróticas, mejora del perfil lipí- más importantes en el ictus, de manera que la dis-
dico y disminución del estrés oxidativo20. minución de la tensión demostrada con frutas y
verduras es especialmente beneficiosa en esta pa-
•  El mayor consumo de fruta y/o verduras se ha tología.
asociado con una disminución de enfermedad
coronaria en estudios de cohortes retrospecti- 4.1.2. Cáncer
vos21-23. Por cada ración adicional de frutas y ver-
duras se reduce un 4% el riesgo de enfermedad El cáncer es una enfermedad caracterizada por cam-
coronaria. bios producidos a nivel cromosómico. Los principales
•  El consumo de fibra se ha asociado con un menor factores que han demostrado ser causantes de estos
riesgo de enfermedad cardiovascular por disminu- cambios son la edad, el consumo de tabaco, el alcohol,
ción de los niveles de colesterol, reducción en la la actividad física y el patrón alimentario.
absorción de glucosa, mejora de la sensibilidad a En los años 90, diferentes sociedades científicas es-
la insulina, descenso de la tensión arterial, inhibi- tablecieron la ingesta diaria de al menos 5 piezas de
ción de la peroxidación lipídica y propiedades fruta y verdura para disminuir la incidencia de enfer-
antiinflamatorias. Por cada 10 g/día de aumento medades crónicas. Estas recomendaciones son váli-
de fibra disminuye la mortalidad cardiovascular en das para la mejora de la salud, el balance energético
un 10%. y los requerimientos nutricionales, pero la evidencia
Tema 1.  Bases científicas de la alimentación saludable 7

disponible no es concluyente a la hora de establecer aumento de riesgo en poblaciones deficitarias en


esta recomendación para la reducción de riesgo de yodo36, mientras que otros no lo demuestran37 e inclu-
cáncer12, 31, 32. so algunos encuentran una reducción del riesgo38.
La mayoría de la evidencia científica, principalmente
de estudios de cohortes retrospectivos, muestra una
Cáncer de esófago
reducción de riesgo en personas con una gran diferen-
cia en el consumo de frutas y verduras y señala como En el carcinoma epidermoide, el elevado consumo de
probable la relación inversa entre el consumo de frutas frutas y verduras se asocia con reducciones importantes
y verduras y el riesgo de cáncer de cualquier localiza- del riesgo. Un mayor consumo de verduras reduce este
ción12. riesgo, si bien de forma no significativa39. Se ha encon-
La explicación biológica para la reducción del riesgo trado también una reducción del 28% de riesgo en pa-
de cáncer se basa en los siguientes argumentos: cientes que consumen verduras crucíferas frente a los
que no consumen nunca este tipo de verduras12.
•  Tanto frutas como verduras son ricos en fibra, ca- Por lo que respecta al adenocarcinoma, la evidencia
rotenoides, vitaminas C, E, selenio, fibra, glucosi- actual es limitada y sugiere que el consumo de frutas y
nolatos, flavonoides, fenoles, índoles e isotiocia- verduras, más concretamente de verduras de hoja ver-
natos, todos ellos sustancias potencialmente de comestible y de crucíferas, puede reducir el riesgo
anticarcinogénicas. Estos agentes presentan me- de esófago de Barrett, lesión precursora del adenocar-
canismos de acción superponibles entre los que se cinoma40.
encuentran la inducción de enzimas detoxifican-
tes, inhibición de la formación de nitrosaminas, Cáncer gástrico
aporte de sustratos para la producción de agentes
antineoplásicos, dilución y unión de sustancias El consumo de frutas, no el de verduras, parece estar
carcinogénicas en el tracto digestivo y efectos anti­ relacionado con una reducción del cáncer gástrico41.
oxidantes entre otros. Sin embargo, no se ha de- La reducción del riesgo es de hasta un 5% por cada
mostrado con exactitud qué compuestos son los 100 g/día de aumento en el consumo de fruta.
responsables últimos del efecto protector frente al
cáncer, aunque parece muy poco probable que Cáncer colorrectal
haya un único compuesto responsable de esta
asociación protectora. No existe consenso sobre el papel protector del ma-
•  De forma similar a lo señalado en la enfermedad yor consumo de frutas y verduras y el desarrollo de
cardiovascular, el grupo de las crucíferas ha sido cáncer colorrectal. La relación, aunque modesta, pare-
objeto de una amplia investigación, por sus po- ce más clara con el cáncer rectal y de colon distal42.
tenciales efectos protectores frente al cáncer. Se Existe una relación inversa, que no llega a ser signi-
ha demostrado que estos compuestos ejercen un ficativa, entre el consumo de fruta y verdura y el de-
efecto protector en el desarrollo de cánceres del sarrollo de adenomas colorrectales. La significación
tracto digestivo, hígado, pulmón y mama, tanto estadística se alcanzó solamente en aquellos indivi-
en vivo como en modelos animales33. duos con un elevado consumo de carnes procesadas,
•  Un mayor consumo de dieta rica en frutas y verdu- por lo que las frutas y verduras podrían proteger
ras hace que se mantenga un peso saludable. frente a los efectos prejudiciales del consumo de este
tipo de carne43.
Los pacientes que consumen verduras crucíferas de
Cáncer de cabeza y cuello
forma habitual tienen un 17% menos de riesgo de cán-
Las dietas ricas en frutas, verduras y fibras se aso- cer colorrectal que los que no incluyen en su dieta estas
cian de manera inversa con el riesgo de cáncer de verduras12.
orofaringe34.
Los pacientes con un consumo frecuente de crucífe- Cáncer hepático
ras tienen un 17% menos de riesgo33.
La evidencia publicada hasta el momento ha puesto
Cáncer de tiroides de manifiesto que por cada 100 g/día de aumento en
el consumo de verdura, disminuye un 8% el riesgo de
Parece que un mayor consumo de frutas y verduras hepatocarcinoma44.
puede reducir el riesgo de neoplasias tiroideas35.
En cuanto a las verduras crucíferas, la relación es
Cáncer de pulmón
controvertida. Estas verduras, contienen tiocianatos
que actúan como bociógenos. Hay estudios que rela- El mayor consumo de verduras y frutas, produce una
cionan un mayor consumo de estas verduras con un disminución del riesgo en la incidencia de esta neopla-
8 BLOQUE: DIETOTERAPIA

sia45. Esta asociación fue más consistente al estratificar alimentarios o actividad física no produce una dismi-
por sexo, siendo más protectora en mujeres con un nución de peso54.
elevado consumo de frutas46.
4.1.4.  Diabetes mellitus
Cáncer de mama
Uno de los principales factores de riesgo modifica-
El consumo elevado de frutas y verduras y el de fru- bles para el desarrollo de la diabetes es la obesidad. El
tas se asocia significativamente con un menor riesgo mayor consumo de frutas y verduras, asociado al cam-
de cáncer mama47. bio de patrón alimentario, provoca una pérdida de
El consumo habitual de crucíferas ocasiona un 17% peso. Esto va a producir también, de manera indirecta,
menos de riesgo de cáncer de mama frente a pacientes una menor incidencia de diabetes mellitus.
que no consumen estas verduras33. Los estudios que han investigado el efecto intrínseco
del consumo de frutas y verduras sobre la diabetes esta-
Cáncer ovárico blecen que un mayor consumo no produce menor inci-
dencia de esta patología. No obstante, sí que se ha cons-
El consumo de verduras crucíferas se asocia con una tatado que una mayor ingesta de verduras de hoja verde
disminución del riesgo en estudios de casos y contro- se asocia con menor riesgo de esta enfermedad55, 56.
les, pero no en estudios de cohortes, por lo que pare-
cen necesarios más estudios48.
4.2.  Consumo de carne
Cáncer vesical La carne es una fuente importante de proteínas, hie-
rro, vitaminas, zinc y otros micronutrientes. Sin embar-
El alto contenido antioxidante de las frutas y verdu-
go, un elevado consumo de este alimento, especial-
ras podría reducir o prevenir el daño oxidativo causado
mente de carne roja o procesada, puede tener efectos
en pacientes fumadores, pero la evidencia existente no
adversos sobre la salud, con mayor mortalidad global y
es consistente49, 50.
mayor incidencia de enfermedades crónicas como las
cardiovasculares, diabetes y diversas neoplasias.
Cáncer de próstata La carne roja (vaca, ternera, cerdo, cordero, caballo y
La mayor ingesta de verduras crucíferas parece ser ciervo) tiene mayor contenido en hierro que la carne
beneficiosa para la reducción del cáncer de próstata, y blanca (procedente de aves de corral). Un exceso de
el tomate y sus derivados pueden ser preventivos en las grupo hemo se considera potencialmente aterogénico,
fases iniciales del cáncer de próstata51. diabetogénico y promotor de diversos cánceres, como
el gastrointestinal. Otros productos presentes en ma-
yor cuantía en la carne roja se han asociado también a
Linfoma no Hodgkin estos problemas, como la fosfatidilcolina o la carnitina,
El mayor consumo de frutas y verduras en combi- que se degradan parcialmente por bacterias intestina-
nación y de verduras parece asociarse inversamente les en óxido de trimetilamina, que también presenta
y de manera probable con el riesgo de linfoma no potencial aterogénico.
Hodgkin52. Las recomendaciones actuales tienden a restringir el
consumo de carne roja o procesada (embutidos y trans-
4.1.3. Obesidad formados de la carne; carnes conservadas con sal, ahu-
madas o curadas). Esta limitación podría no ser aplicable
Un mayor consumo de frutas y verduras se asocia a a personas mayores, ya que en ellos es fundamental la
una disminución del peso o a menor ganancia ponderal, ingesta de alimentos ricos en proteínas, dado el mayor
pero este mayor consumo se encuadra dentro de un riesgo de desnutrición que presentan. Para este grupo
cambio en el patrón alimentario53. Así, al ingerir más fru­ poblacional la carne es un alimento fundamental57.
ta y verdura se reduce el consumo de otros alimentos de
mayor densidad calórica. Sin embargo, no parece que el
4.2.1.  Enfermedades cardiovasculares
aumento de frutas y verduras produzca una pérdida de
peso por sí sola si no se acompaña de otros cambios. Tanto en hombres como en mujeres se ha observado
En estudios de cohortes prospectivos se ha observa- un aumento significativo de la mortalidad cardiovascu-
do que un aumento de la ingesta diaria de frutas y lar en relación a un mayor consumo de carne: 18% de
verduras en personas que abandonan el hábito tabá- aumento de riesgo por cada ración adicional de carne
quico se asocia con una disminución del peso. roja (84 g/día) y 21% para el consumo de carne proce-
La evidencia científica también señala que recomen- sada. Además, cada ración diaria de carne procesada
dar únicamente una mayor ingesta de frutas y verdu- se asocia con un 42% más de riesgo de enfermedad
ras, sin proponer otras intervenciones sobre los hábitos coronaria58, 59.
Tema 1.  Bases científicas de la alimentación saludable 9

4.2.2. Cáncer go de cáncer de páncreas. La carne roja parece no te-


ner asociación, salvo en varones, donde sí incrementa
Cáncer esofágico el riesgo76.
El consumo de carne roja y procesada se asocia con el
aumento del riesgo de cáncer de esófago60-62. El consu- Cáncer de pulmón
mo elevado de carne roja se asocia con mayor riesgo de
El consumo elevado de carne roja incrementa el ries-
carcinoma epidermoide, mientras que el de procesada
go de este tipo de cáncer, mientras que la ingesta ele-
es posible que aumente el riesgo de adenocarcinoma63.
vada de carne de aves de corral lo disminuye. No se ha
observado relación entre la carne procesada y el cáncer
Cáncer gástrico de pulmón77.
El alto consumo de nitritos procedentes de la carne
roja o procesada se relaciona con el cáncer gástrico64-66. Cáncer de mama
Zhu et al.,67 han relacionado el consumo de carne pro- En general, en la mayoría de los metanálisis se obser-
cesada con el desarrollo de cáncer distal al cardias, va una relación positiva entre el mayor consumo de
mientras que el de carne roja se asocia con todos los carne roja y procesada78 y esta neoplasia. Sin embargo,
tipos de cánceres gástricos. Además, parece existir un otros metanálisis y revisiones no demuestran esta rela-
incremento del riesgo relativo en varones en relación al ción de forma significativa, debido a la heterogeneidad
consumo de carne procesada, lo que puede deberse a de estudios79.
que los varones habitualmente ingieren más este tipo
de carne que las mujeres.
Cáncer de ovario
Cáncer colorrectal No existe asociación entre el consumo de carne roja
o procesada y esta neoplasia80. Sin embargo, los nitri-
Varios metanálisis han relacionado el consumo tos presentes en la carne sí que parecen incrementar el
abundante de carne roja o carne procesada con mayor riesgo de cáncer de ovario65.
riesgo de cáncer y adenoma colorrectales68-70.
El consumo de carne de ternera se asoció con cáncer
colorrectal y de colon, pero no de recto aislado. El de Cáncer de vejiga
carne de cordero se relacionó con cáncer colorrectal Los nitritos de la carne65 y un mayor consumo de
total, mientras que el consumo de carne de cerdo o de carne roja y procesada81 se asocian con mayor riesgo
ave no presentó asociación de riesgo, incluso disminu- de cáncer vesical.
ye el riesgo de cáncer rectal aislado (aunque con hete-
rogeneidad de estudios). Una explicación de por qué la
Cáncer de próstata
carne de cerdo no mostró asociación con aumento del
riesgo de cáncer colorrectal puede ser su menor conte- Los estudios que han relacionado este tipo de cáncer
nido de hierro hemo frente a la carne de ternera71. Es- con el consumo de carne roja y procesada han sido
tos hallazgos pueden ser de gran importancia para la poco concluyentes. No se ha podido demostrar una
salud pública, ya que la tendencia actual es de reco- asociación positiva con el consumo de carne roja, aun-
mendar la limitación del consumo de carne de la dieta que sí una relación débilmente positiva con el consumo
para disminuir el riesgo del cáncer. Sin embargo, el de carnes procesadas82, 83. Otros estudios sugieren aso-
consumo de carne roja no parece ser un factor de ries- ciación entre consumo de nitritos y grupo hemo y ma-
go independiente para el cáncer colorrectal en otros yor riesgo de esta neoplasia65.
metanálisis72.
La carne procesada también parece incrementar el Linfoma no Hodgkin
riesgo de cáncer colorrectal, principalmente a nivel
distal73, 74. Se han publicado varios metanálisis que asocian el
consumo de carne roja y procesada con este linfoma84, 85.
Cáncer hepático Las asociaciones entre el consumo de carne y dife-
rentes tumores, según los metanálisis disponibles más
Un consumo elevado de carne blanca puede reducir recientes, se detallan en la tabla 365, 86, 87.
significativamente el riesgo de este tipo de cáncer75.
4.2.3.  Diabetes mellitus
Cáncer de páncreas
En múltiples estudios se ha relacionado la diabetes
Existe una asociación positiva estadísticamente signi- con el consumo de carne. Una posible causa podría ser
ficativa entre el consumo de carne procesada y el ries- el estado de hierro en el organismo en forma de ferriti-
10 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Tabla 3.  Asociaciones según metanálisis entre consumo de carne y riesgo de cáncer.

Carne roja y procesada Carne blanca


Aumento de riesgo Disminución de riesgo
SÍ DUDOSO NO
Colorrectal
Gástrico Próstata Glioma65, 86 Hepatocarcinoma
Esofágico
Páncreas (procesada) Mama Ovario Pulmón
Oro-faríngeo (procesada)87
Pulmón (roja) Vejiga Oro-faríngeo (roja/blanca)87 Recto
Linfoma no Hodgkin

na o la ingesta de hierro hemo, ya que este parámetro 4.3.2. Cáncer


muestra asociación con el riesgo de diabetes mellitus
tipo 288. El consumo de carne roja como el de procesa- Cáncer gástrico
da incrementan el riesgo de desarrollar diabetes en al-
Estudios en vivo sugieren que la fibra dietética puede
gunos estudios59, 89. Por lo tanto, desde un punto vista
prevenir el cáncer gástrico, al actuar como eliminadora
de salud pública, la reducción del consumo de carne
de nitritos potencialmente cancerígenos. El hecho de
roja, particularmente procesada, se debe considerar
que la ingesta de fibra se asocie inversamente con el
para disminuir el riesgo de diabetes tipo 289.
riesgo de esta neoplasia debe ser considerado con pre-
caución96.
4.2.4. Obesidad
Un metanálisis ha demostrado que el consumo de Cáncer colorrectal
carne roja y procesada está directamente asociado con
Se han propuesto varios mecanismos para explicar
mayor riesgo de obesidad, mayores índice de masa
cómo la fibra dietética reduce el riesgo de cáncer colo-
corporal y perímetro abdominal. Aunque se necesitan
rrectal: el aumento del volumen de heces, la dilución
más estudios, parece prudente limitar el consumo de
de carcinógenos en la luz del colon o un menor tiempo
estos tipos de carne para prevenir la obesidad90.
de tránsito y fermentación bacteriana.
Los cereales integrales son una fuente importante de
4.3.  Cereales integrales y alimentos ricos en vitaminas, minerales y fitoquímicos con propiedades
fibra anticancerígenas97, de tal manera que por cada 10 g/
día de ingesta de fibra dietética procedentes de cerea-
4.3.1.  Enfermedades cardiovasculares les se reduce un 10% el riesgo de cáncer colorrectal y
Los cereales integrales contienen fibra, vitaminas, un 20% por cada tres raciones (90 g/día) de cereales
minerales, compuestos fenólicos, fitoestrógenos, lig- integrales consumidas98.
nanos y otros componentes que pueden tener efectos Otro metanálisis ha demostrado una fuerte asocia-
favorables sobre la salud, mejorando el perfil lipídico ción inversa entre la ingesta de fibra dietética y el desa-
y la tensión arterial, sobre todo diastólica91. La ingesta rrollo posterior de cáncer colorrectal. Para las personas
de lignanos y fitoestrógenos se ha asociado con dismi- que consumieron de media 24 g/día (quintil más alto)
nución de la mortalidad cardiovascular, presumible- la probabilidad de desarrollar este tipo de cáncer fue
mente a través de sus efectos beneficiosos sobre el un 30% menor que las que consumieron un promedio
endotelio mediados por sustancias antioxidantes como de 10 g/día (quintil más bajo)99.
la vitamina E92. Además, el consumo de fibra dietética también se ha
Hay una asociación inversa significativa entre el con- asociado de forma inversa con la incidencia de adeno-
sumo de cereales integrales/fibra procedente de fruta y ma colorrectal, lesión precancerosa100.
la incidencia de coronariopatía91,93. Este efecto muestra
relación dosis-respuesta, sin diferencias para la fibra Cáncer de páncreas
soluble o insoluble94.
Los cereales integrales también mejoran el perfil lipí- La relación entre riesgo de cáncer pancreático y con-
dico, disminuyendo las cifras de LDL colesterol y trigli- sumo de fibra dietética y/o cereales integrales es incon-
céridos y aumentando los niveles de HDL colesterol92,95. sistente97, 101.
Tema 1.  Bases científicas de la alimentación saludable 11

Cáncer de mama Los frutos secos sin procesar son otro de los compo-
nentes de una alimentación saludable, aunque en can-
Existe la hipótesis de que la fibra dietética puede re- tidades limitadas por su alto valor calórico. Son alimen-
ducir el cáncer de mama disminuyendo los niveles de tos ricos en ácidos grasos insaturados, proteínas
estrógenos circulantes. Varios metanálisis apoyan esta vegetales, fibra dietética, vitaminas antioxidantes (por
relación inversa102, de forma que el riesgo disminuye ejemplo, vitamina E y tocoferoles), minerales (magne-
un 7% por cada incremento de 10 g/día de fibra103. sio y potasio) y fitoquímicos (como flavonoides)117.
El consumo regular de nueces, con bajo contenido
Cáncer de próstata en sodio, se ha asociado en algunos estudios a meno-
Estudios recientes sugieren que no existe relación res cifras de tensión arterial. De los frutos secos estu-
entre el consumo de fibra y este tipo de cáncer104. diados, los pistachos fueron los que más fuertemente
se asociaron con este efecto118. Su consumo también
tiende a disminuir la enfermedad coronaria, tanto fatal
Cáncer renal como no fatal117.
Huang et al., demostraron una reducción significativa
del riesgo con la ingesta de fibra vegetal y de leguminosas, 4.4.2. Cáncer
pero no con el consumo de fibra de fruta o de cereal105.
Las legumbres como guisantes, habas, lentejas, gar-
banzos y soja, no solo son ricas en proteínas, sino que
4.3.3.  Diabetes mellitus también son una importante fuente de fibra, almidón,
Los cereales integrales pueden constituir un elemen- folato, selenio, lectinas, fitatos e isoflavonas, sustan-
to protector contra la resistencia a la insulina y el desa- cias con potenciales efectos anticancerígenos.
rrollo de diabetes tipo 2, mejorando la función de la
célula beta92. Cáncer colorrectal
Un elevado consumo de cereales integrales se asocia
con una reducción del 32% del riesgo relativo para de- El consumo de legumbres está asociado con una dis-
sarrollar diabetes tipo 2106. Otros estudios demuestran minución de la incidencia de adenoma y carcinoma
que un consumo de 45 g/día frente a 7,5 g/día dismi- colorrectales119, 120.
nuye el riesgo de diabetes tipo 2 en un 20%107.
Algo similar ocurre con la fibra dietética, cuya inges- Cáncer de pulmón
ta se asocia inversamente con el desarrollo de diabetes Un metanálisis indica que el consumo de soja está
tipo 2107-111. asociado a menor riesgo de cáncer de pulmón, aunque
Además, la suplementación de fibra se asocia con mejor el número de estudios disponibles es limitado y el me-
control glucémico, tanto de la glucemia basal, como de canismo por el cual actúa no está del todo claro121.
hemoglobina glicosilada. Esto sugiere no solo un efecto
preventivo, sino también un posible efecto terapéutico112.
Cáncer de mama
4.3.4. Obesidad Las isoflavonas que contienen las legumbres, espe-
cialmente la soja, se asemejan estructuralmente al 17-
Algunos estudios han demostrado que una mayor in- beta estradiol y son capaces de unirse en vivo al recep-
gesta de fibra dietética se asocia con menor peso corporal tor de estrógenos, comportándose como moduladoras
y perímetro abdominal111. Esto puede ser debido a la re- naturales de este receptor. Datos observacionales su-
ducción del apetito y a la menor ingesta asociada secun- gieren que un mayor consumo de soja puede proteger
daria; a un mayor tiempo de masticación de los alimentos contra el desarrollo de cáncer de mama, disminuir su
ricos en fibra (lo que puede aumentar la saciedad senso- recurrencia y su mortalidad, aunque son necesarios
rial, reduciendo así la ingesta) y a una absorción intestinal más estudios para confirmar esta posible relación122, 123.
más gradual, debido al enlentecimiento del tránsito113.
Los niños, adolescentes y adultos que consumen re-
4.4.3.  Diabetes mellitus
gularmente cereales para desayunar tienen menor índi-
ce de masa corporal medio y menos posibilidades de Se ha demostrado una relación inversa entre el con-
desarrollar sobrepeso u obesidad114, 115. sumo de frutos secos y el riesgo de diabetes117.

4.4. Legumbres 4.5. Pescado
4.4.1.  Enfermedades cardiovasculares 4.5.1.  Enfermedades cardiovasculares
Las legumbres reducen el colesterol sérico total y la Los ácidos grasos omega-3, entre los que se encuen-
fracción LDL del mismo116. tran el ácido eicosapentaenoico (EPA), ácido docosa-
12 BLOQUE: DIETOTERAPIA

pentaenoico (DPA) y ácido docosahexaenoico (DHA), daria126. La suplementación de omega-3 en la preven-


son ácidos grasos esenciales necesarios para mantener ción primaria de fibrilación auricular en intervenidos de
el estado de salud y con multitud de efectos beneficio- corazón ha demostrado beneficios modestos no en
sos 124. Están en abundancia en pescados grasos y acei- todos los estudios126, 135, 136.
tes de pescado y protegen de las enfermedades cardio- La suplementación no parece tener ningún efecto en
vasculares125. No se ha podido demostrar con suficiente la incidencia de arritmias ventriculares o muerte súbita,
evidencia el beneficio de la toma de suplementos de si bien existe una tendencia beneficiosa, no significati-
ácidos grasos omega-3 en la prevención secundaria va, en pacientes con episodio coronario reciente137.
de eventos cardiovasculares en general126.
Perfil lipídico
Insuficiencia cardíaca La suplementación con DHA (obtenido a partir de
Se ha demostrado una asociación inversa entre el con- algas) puede reducir el nivel sérico de triglicéridos y
sumo de pescado (al menos la toma de una vez en se- aumentar los valores de LDL y HDL colesterol en perso-
mana) y la incidencia de insuficiencia cardíaca, que ade- nas sin enfermedad coronaria138.
más es dosis-dependiente127. Se obtienen resultados
similares cuando se evalúa el consumo de EPA y DHA128. Arteriopatía
Los ácidos grasos omega-3 pueden ejercer efectos
Enfermedad coronaria beneficiosos al disminuir la producción hepática de tri-
glicéridos o aumentar la incorporación de fosfolípidos
Los ácidos grasos EPA y DHA tienen un papel impor-
en las membranas celulares, reduciendo así la disponi-
tante en la estabilidad de la placa de ateroma y en la
bilidad de sustratos para la producción de moléculas
relajación vascular, ejerciendo efectos antiinflamatorios
proinflamatorias. Por el momento no hay suficientes
y antitrombóticos. Por ello, el consumo de pescado rico
pruebas sobre los beneficios de estos ácidos en la arte-
en estos ácidos puede ser beneficioso en la prevención
riopatía periférica, sin demostrar efectos en la inciden-
primaria de la enfermedad coronaria. Por cada porción
cia de amputación, necesidad de revascularización o
adicional de 100 g/semana de pescado se reduce el ries-
cambios en la calidad de vida139.
go de síndrome coronario agudo en un 5%, independien-
temente del sexo o edad129. En cuanto a la suplementa-
ción en prevención secundaria parece ser beneficiosa, ya 4.5.2. Cáncer
que esta produce una modesta reducción no significativa Los ácidos grasos omega-3 regulan la producción de
de la reestenosis y de la mortalidad130. prostaglandinas proinflamatorias a través de la vía de
Queda por determinar la dosis óptima de omega-3, la ciclooxigenasa y lipooxigenasa, las cuales juegan un
la proporción EPA/DHA o la duración de la suplemen- papel fundamental en la inflamación, proliferación ce-
tación, por lo que es fundamental la realización de más lular y angiogénesis, mecanismos muy importantes im-
estudios al respecto131. plicados en la progresión tumoral. Los omega-3 mari-
nos pueden ser metabolizados a resolvinas, que
Hipertensión arterial presentan potentes propiedades antiinflamatorias e
inmunorreguladoras, pudiendo desempeñar un papel
Los estudios en relación al consumo de pescado y
fundamental en el desarrollo del cáncer124.
ácidos grasos omega-3 sobre la incidencia de hiperten-
A pesar de todos estos mecanismos mencionados, la
sión son contradictorios. Hay algunos metanálisis que
suplementación con ácidos grasos omega-3 no tiene
demuestran que no existe asociación132 y otros en los
efectos significativos sobre la incidencia de cáncer en
que los suplementos de aceite de pescado en pobla-
general140.
ción hipertensa reducen de forma estadísticamente
significativa la tensión133. Descensos de solo 2 mmHg
de tensión sistólica reducen un 10% la mortalidad para Cáncer de tiroides
ictus y un 7% para cardiopatía isquémica, en personas En un metanálisis se ha sugerido la no asociación
de mediana edad125. entre la ingesta de pescado y el cáncer de tiroides. Sin
embargo, cuando los datos se analizaron según la dis-
Arritmias ponibilidad geográfica de yodo, se observó un leve
aumento del riesgo en los que consumían una canti-
En el caso de la fibrilación auricular, el aceite de pes- dad alta de pescado en áreas yodo suficientes141.
cado puede contribuir al mantenimiento del ritmo si-
nusal siempre que sean tomados al menos 4 semanas
Cáncer hepático
antes de la cardioversión134, aunque esto debe ser con-
firmado aún. Otros metanálisis, por el contrario, no En varios metanálisis se ha demostrado una asocia-
han podido demostrar beneficios en prevención secun- ción inversa significativa, entre el consumo de pesca-
Tema 1.  Bases científicas de la alimentación saludable 13

do124, 142 o el de ácidos grasos omega-3143 y el riesgo de Mieloma múltiple


cáncer hepático. Los mecanismos exactos no están
bien establecidos por el momento. Según un metanálisis, el consumo elevado de pesca-
do se asocia a una disminución del riesgo de mieloma
Cáncer de páncreas múltiple, aunque son necesarios más estudios152.

No hay relación entre el consumo de pescado gene- Cáncer de piel


ral o aceite de pescado y el riesgo de cáncer de pán-
creas. Sin embargo, sería muy interesante el análisis La ingesta en los seres humanos de ácidos grasos ome-
por subgrupos de los diferentes tipos de pescado, así ga-3 reduce la expresión de p53 cutánea. Además, ate-
como ajustar los resultados en función de componen- núa la respuesta inflamatoria de la quemadura solar rela-
tes insalubres del pescado, como el mercurio144. cionada con el cáncer de piel, debido a la disminución de
la expresión de prostaglandinas cutáneas. De la misma
Cáncer de pulmón manera, los omega-3 parecen reducir la supresión inmu-
ne cutánea inducida por los rayos ultravioletas.
El incremento del consumo de ácidos grasos ome- Sin embargo, aunque el consumo elevado de omega-3
ga-3 puede jugar un papel importante en la preven- se ha asociado de forma inversa con la incidencia de me-
ción del cáncer de pulmón en mujeres. En la población lanoma, ha sido de forma no significativa, por lo que ac-
general, una ingesta de más de 15 g/día parece dismi- tualmente no se puede apoyar la hipótesis de que estos
nuir el riesgo de este tipo de cáncer, aunque esto no ácidos grasos protejan de las neoplasias cutáneas153.
resultó estadísticamente significativo145. En la tabla 4 se muestra un resumen de las relacio-
nes entre el consumo de pescado y/o de ácidos grasos
Cáncer de mama omega-3 con el riesgo de cáncer, según los metanálisis
En un metanálisis se ha demostrado que por cada hasta ahora disponibles.
0,1 g/día de suplementación con ácidos grasos ome-
ga-3, disminuye el riesgo de esta neoplasia en un 5%. 4.5.3.  Diabetes mellitus
No ocurre lo mismo con el ácido alfa linolénico ni con
el consumo de pescado146. Los ácidos grasos omega-3 aumentan la sensibilidad
Otros estudios indican que podría ser interesante a la insulina mediante la secreción de adiponectina,
aumentar el consumo de alimentos marinos ricos en presentan acciones antiinflamatorias y mejoran la oxi-
omega-3 y disminuir aquellos ricos en omega-6, para dación de ácidos grasos, además de disminuir la lipo-
mejorar la relación omega-3/omega-6 y prevenir el génesis de novo. Todo ello contribuye a preservar la
cáncer de mama147. sensibilidad hepática a la insulina. Por ello, la interven-
ción temprana con ácidos grasos omega-3 podría con-
tribuir a mejorar el control glucémico164.
Cáncer de próstata
Ni el consumo de pescado, marisco o EPA y DHA
El elevado consumo de pescado no ha demostrado presenta asociaciones significativas con el riesgo de
disminuir la incidencia del cáncer de próstata, aunque diabetes, aunque el consumo de ácido alfa-linoléni-
sí su mortalidad148, 149. Los resultados de otros estudios, co se relacionó con una tendencia hacia menor ries-
sin embargo, no han sido concluyentes150. Tampoco se go165, 166. Los posibles beneficios en la reducción de
ha demostrado asociación con el consumo de ácidos coronariopatía en pacientes diabéticos siguen sien-
grasos omega-3151. do controvertidos167.

Tabla 4.  Asociaciones según metanálisis entre consumo de pescado/omega-3


y riesgo de cáncer.

Pescado/omega-3
Disminución de riesgo
Sí No Dudoso
Tiroides
Mama (omega-3) Gástrico154
Esófago124, 157
Páncreas144
Colorrectal124, 158-161
Hepático Renal155
Ovario162, 163
Vejiga156
Próstata
Mieloma múltiple152 Piel153
Pulmón
14 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Dada la heterogeneidad de los diferentes estudios, cada ración de bebida azucarada consumida180,182. El
para poder relacionar el consumo con el desarrollo de análisis de un programa de educación sobre alimenta-
diabetes, deberían analizarse los resultados según el ción saludable con exclusión de bebidas azucaradas en
tipo de pescado consumido, los diferentes métodos de niños de 7 a 11 años demostró un descenso del 0,2%
preparación y cocina, y los niveles de contaminación en la incidencia de sobrepeso u obesidad frente a un
con metales pesados168. aumento del 7,5% en los que no recibieron este pro-
grama183. Se ha sugerido que las personas que consu-
4.5.4. Obesidad men bebidas edulcoradas no con azúcar tienen menor
riesgo de obesidad184, si bien la evidencia disponible no
El aceite de pescado se asocia en modelos animales con es concluyente185. El consumo de zumo de frutas tam-
una reducción de la grasa y el peso corporal, sugiriendo bién se ha relacionado con un aumento en la inciden-
un efecto anti-obesidad. Algunos mecanismos implica- cia de sobrepeso en niños186 sin que la evidencia sea
dos propuestos son la estimulación a la apoptosis de adi- categórica en este sentido187.
pocitos o el aumento de la adiponectina en plasma.
Sigue siendo discutible si el consumo de pescado o
4.7. Grasas trans
su aceite puede combatir el exceso ponderal en los se-
res humanos. Sí puede reducir la relación cintura/cade- 4.7.1.  Enfermedades cardiovasculares
ra o el perímetro de la cintura (en 0,81 cm), especial-
El aumento de un 2% en el consumo de grasas trans
mente cuando se combina con modificación en el
(4 g/día o 40 kcal. de una dieta de 2000 kcal./día) se rela-
estilo de vida. Son necesarios más estudios para con-
ciona con un aumento del 23% en la incidencia de enfer-
cluir definitivamente169, 170.
medad cardiovascular188. Esta relación se observa con las
grasas trans más que con cualquier otro tipo de grasa. Las
4.6.  Refrescos y bebidas azucaradas grasas trans producen un aumento en los niveles de LDL
4.6.1.  Enfermedades cardiovasculares colesterol, reducción de HDL colesterol y tienen efectos en
los niveles de apolipoproteína B y de PCR189. La disfunción
En mujeres de 34 a 59 años se ha demostrado un endotelial, marcador de enfermedad aterosclerótica, se
incremento del riesgo de enfermedad coronaria con el ve afectada por el consumo de grasas trans190.
aumento progresivo del consumo mensual de estas be-
bidas independientemente del estilo de vida y la die- 4.7.2. Cáncer
ta171. También se ha relacionado este consumo con
mayor riesgo de ictus172. Estudios prospectivos han propuesto una relación
entre el consumo de grasas trans y el desarrollo de cán-
cer de mama, colon o próstata190-193.
4.6.2.  Síndrome metabólico
El consumo de bebidas azucaradas se ha relacionado 4.7.3.  Síndrome metabólico
con una mayor incidencia de diabetes tipo 2 debido a
la presencia de hidratos de carbono de absorción rápi- En diversos estudios se ha descrito una relación en­
da y al empeoramiento del control glucémico en pa- tre el consumo de grasas trans, aumento de la insulino-
cientes con diabetes, independientemente de la adipo- rresistencia y activación de diferentes vías implicadas
sidad 173. Asimismo, se ha investigado el efecto de en la etiopatogenia del síndrome metabólico189. El con-
bebidas edulcoradas artificialmente sobre los niveles sumo de grasas trans se ha asociado con un riesgo
de citocinas proinflamatorias, encontrando un incre- aumentado de diabetes tipo 2 en mujeres obesas y se-
mento en pacientes con sobrepeso 174 que se relaciona dentarias en algunos estudios194.
con mayor riego de diabetes tipo 2. Las personas Se ha demostrado que la ingesta de grasas trans pro-
con un alto consumo de bebidas azucaradas tienen duce incremento en el peso, la grasa visceral, el perí-
un riesgo un 20% mayor de desarrollar síndrome metro abdominal y el consumo de otros tipos de gra-
metabólico175. Las bebidas con alto contenido de fruc- sas195. Un aumento del 2% en el consumo de grasas
tosa producen aumento de triglicéridos, de LDL coles- trans se asocia con un aumento de 1,6 kg de peso cor-
terol, descenso de HDL colesterol, dislipemia aterogé- poral en mujeres, siendo este incremento mayor en
nica e insulinorresistencia176, así como aumento de la aquellas con antecedentes personales o familiares de
grasa visceral o depósitos ectópicos de grasa 177). exceso ponderal196.
Los resultados de estudios que asocian el consumo
de bebidas azucaradas con el aumento de masa grasa 4.8. Sal
o el índice de masa corporal en población infantil y ju-
venil son contradictorios178-181. Algunos estudios clíni-
4.8.1.  Enfermedades cardiovasculares
cos aleatorizados han demostrado asociación entre un La relación entre el consumo de sal y la incidencia de
incremento en el índice de masa corporal de 0,04 por enfermedad cardiovascular no es significativa si el con-
Tema 1.  Bases científicas de la alimentación saludable 15

sumo de esta es inferior a 2 g/día, siendo el riesgo bajos en grasa no demostró diferencias en el riesgo
menor en aquellos pacientes con consumo inferior a cardiovascular213. Así, en mujeres post-menopáusicas
1,2 g/día197. Existe una relación directa entre el consu- obesas, el consumo de leche desnatada no produjo
mo de sal, la mortalidad cardiovascular y la mortalidad efectos relevantes en el riesgo cardiometabólico214.
por otras causas198. También se ha demostrado una
asociación significativa entre el consumo de sal y el de- 4.9.2. Cáncer
sarrollo de ictus fatales o no. Estudios controlados su-
gieren que una dieta hiposódica reduce la masa ventri- La caseína (80% de la leche de vaca) tiene propie-
cular izquierda, la reactividad plaquetaria y la rigidez dades anticancerosas al inhibir ciertas enzimas produ-
aórtica, mejorando la distensibilidad arterial199. cidas por bacterias intestinales responsables de la
desconjugación de factores procarcinogénicos a car-
4.8.2. Cáncer cinogénicos. La lactoferrina, otro componente de la
leche, también inhibe la proliferación celular y tiene
Diferentes estudios han propuesto el incremento propiedades antioxidantes y antiinflamatorias215.
del consumo de sal como un posible factor de riesgo Existe una asociación inversa entre el cáncer digestivo
para el desarrollo de carcinoma gástrico y renal200, 201, y el consumo de calcio y de lácteos tanto en varones
con un efecto dosis dependiente en el caso del gástri- como en mujeres216, así como una disminución en la
co202. Puede que la sal produzca un daño directo en tasa de proliferación celular colorrectal con la ingesta
las células gástricas o que aumente la formación de de lácteos217. Se ha propuesto que el calcio proveniente
ácido nitroso203. Para reducir el consumo de sal, se de la dieta se une a ácidos grasos biliares, disminuyen-
recomienda ingerir alimentos sin sal añadida o que do su efecto proliferativo en el cáncer de colon218. El
contengan menos de 120 mg de sal/100 g de produc- consumo de productos lácteos bajos en grasa se rela-
to y un consumo total de 2300 mg de sodio (6 g de ciona con menor riesgo de cáncer de mama219. Este
sal)/día204. riesgo puede reducirse hasta en un 50% en mujeres
premenopáusicas que consuman 25 g/día de queso
4.8.3.  Síndrome metabólico blanco frente a aquellas con ingesta inferior a 6 g/día220.
También se ha descrito una disminución de la inci-
Se ha propuesto que los pacientes con síndrome me-
dencia de cáncer ovárico221, de próstata y colorrectal222.
tabólico presentan un aumento significativo en el con-
Sin embargo, otros estudios han sugerido un incre-
sumo de sal205 y existe una asociación entre este y una
mento en el riesgo de cáncer en pacientes con un exce-
mayor incidencia de hipertensión206. Una reducción en
sivo consumo de lácteos y derivados: cáncer de prósta-
el consumo de sodio en la dieta reduce la tensión arte-
ta (más de 3 raciones/día)223; cáncer de ovario o mama
rial sistólica en pacientes normo e hipertensos207. En
(más de 4 raciones/día)224.
pacientes con síndrome metabólico, la tensión arterial
Hasta la fecha, a pesar de la evidencia contradictoria,
es más sensible a modificaciones en el consumo de sal,
existen más artículos que respaldan los efectos benefi-
por lo que su reducción es un método eficaz para con-
ciosos de la ingesta de productos lácteos en la preven-
trolarla208.
ción del cáncer.

4.9.  Productos lácteos


4.9.3.  Síndrome metabólico
4.9.1.  Enfermedades cardiovasculares Las guías americanas de dietética del 2010 estable-
El consumo de lácteos, incluyendo leche, queso y yo- cen el beneficio del consumo de lácteos sobre la en-
gurt, se ha asociado con una mejor calidad en la dieta fermedad cardiovascular, la diabetes tipo 2 y la hiper-
y una reducción del riesgo cardiovascular. Un mayor tensión arterial en adultos con un nivel de evidencia
consumo de lácteos reduce el riesgo relativo de enfer- moderado. Sin embargo, la evidencia como factor de
medad cardiovascular en un 8% y la incidencia de ictus protección para el síndrome metabólico es inconsis-
en un 21%209. Un estudio prospectivo en mujeres japo- tente. En algunos estudios observacionales y de co-
nesas ha demostrado que por cada incremento de hortes, la mayor ingesta de productos lácteos reduce
100 g/día en la ingesta de leche disminuye un 14% la la incidencia de síndrome metabólico en un 17%225.
mortalidad cardiovascular210. Sin embargo, otros estu- Asimismo, se ha encontrado un efecto protector deri-
dios no han reproducido estos resultados211. No se ha vado de este consumo para enfermedades asociadas
observado incremento en el grosor de la capa ínti- con el síndrome metabólico como la obesidad y la
ma-media de la carótida en pacientes con diferente diabetes tipo 2226, 227.
ingesta de lácteos212. A pesar de que una recomenda- Una alta ingesta de calcio se ha asociado con menor
ción habitual para reducir el riesgo cardiovascular es incidencia de síndrome metabólico. El consumo de cal-
disminuir la ingesta de grasas saturadas, un metanálisis cio tiene efectos beneficiosos para la reducción de
comparando los efectos del consumo de lácteos ricos y la tensión arterial, glucemia basal, triglicéridos y el
16 BLOQUE: DIETOTERAPIA

aumento de HDL colesterol228. La riqueza de potasio y 4.10.3.  Síndrome metabólico


magnesio de los lácteos puede estar relacionada con
sus efectos beneficiosos225. El ácido trans-palmitoleico Estudios observacionales y prospectivos han descrito
se encuentra en la leche producida por rumiantes y sus una asociación inversa entre niveles séricos de 25-OH
niveles elevados se asocian con menor insulinorresis- vitamina D y diabetes tipo 2, síndrome metabólico, in-
tencia, dislipemia y diabetes tipo 2229. sulinorresistencia y función de la célula beta pancreáti-
Algunos metanálisis de estudios clínicos aleatoriza- ca, así como con el perímetro abdominal, los niveles de
triglicéridos, la glucemia basal y el índice HOMA238.
dos han demostrado reducciones en el peso, en la
Esta relación se mantiene independientemente de la
masa grasa y la circunferencia abdominal en pacientes
raza, la actividad física y la insulinorresistencia239.
con dietas ricas en lácteos hipocalóricas.
La vitamina D mejora la tolerancia a la glucemia y
mejora la secreción de la insulina. Sus niveles se aso-
4.10.  Vitamina D cian positivamente con insulinosensibilidad y de una
manera inversa con el riesgo de síndrome metabóli-
4.10.1.  Enfermedades cardiovasculares
co240, 241. Las bajas concentraciones pueden disminuir la
Estudios observacionales han asociado niveles séri- secreción de insulina. La suplementación con vitamina
cos elevados de 25-OH vitamina D con una disminu- D ha demostrado mejorar la sensibilidad a la insulina
ción del riesgo cardiovascular en pacientes de edad en pacientes no diabéticos pero no en pacientes diabé-
media y mayores230. Varios estudios prospectivos y ticos242.
metanálisis han sugerido que en pacientes deficientes La hipovitaminosis D es más frecuente en pacientes
en vitamina D hay una mayor predisposición a sufrir con exceso ponderal, con o sin síndrome metabólico,
hipertensión arterial, muerte súbita de origen cardía- existiendo una relación inversa entre los niveles séricos
co, insuficiencia cardíaca, así como mayor incidencia de 25-OH vitamina D y los de triglicéridos. Estudios de
de cardiopatía isquémica, de infarto de miocardio y intervención han comunicado una disminución de la
mortalidad precoz temprana231. Numerosos estudios masa grasa en obesas sanas que reciben suplementos
se han realizado con la finalidad de encontrar una de vitamina D243. Unos niveles óptimos de esta vitami-
explicación de esta asociación. En modelos murinos na se relacionan con niveles altos de HDL colesterol y
se ha observado una mayor incidencia de hipertrofia bajos de triglicéridos244.
de ventrículo izquierdo y de proteinuria, así como Los resultados de los estudios sobre relación entre
efectos sobre el remodelado cardíaco, la vasculariza- vitamina D e hipertensión arterial son contradictorios y
ción, la presencia de marcadores inflamatorios y el poco concluyentes230.
control glucémico232. A pesar de la evidencia existen-
te, no es suficiente como para recomendar la monito-
4.11. Selenio
rización de esta vitamina en pacientes con riesgo car-
diovascular ni su suplementación de rutina. 4.11.1. Enfermedades cardiovasculares y
síndrome metabólico
4.10.2. Cáncer
Estudios epidemiológicos plantean que el selenio es
Algunos estudios observacionales y ensayos clínicos un factor de protección frente a enfermedades cardio-
han propuesto que la deficiencia de vitamina D aumen­ vasculares dadas sus propiedades antiinflamatorias y
ta el riesgo de desarrollar diversos tipos de neopla- antioxidantes, además de reducir la agregación pla-
sias233. La vitamina D puede reducir el riesgo de cáncer quetaria y la oxidación grasa. Algunos estudios, han
colorrectal de forma independiente al consumo de lác- establecido una relación entre los niveles de selenio y la
teos 234, así como el de cáncer de mama y próstata233, 235. circunferencia abdominal, la glucosa plasmática y los
Diversos metanálisis han encontrado asociaciones in- triglicéridos245-248.
versas entre los niveles de 25-OH vitamina D y la inci-
dencia de cáncer por todas las causas y de la mortali- 4.11.2. Cáncer
dad relacionada236. Se ha propuesto que las concentra-
ciones más altas de vitamina D al momento del Numerosos estudios han sugerido que este mineral
diagnóstico de cualquier tipo de cáncer mejoran la su- posee propiedades protectoras frente al cáncer de pán-
pervivencia233. Existen numerosas hipótesis para expli- creas, colon y pulmonar, así como frente a la mortali-
car esta asociación. Estudios in vitro han demostrado dad relacionada. El selenio disminuye la producción
un efecto inhibitorio de la vitamina D en la prolifera- de citocinas proinflamatorias, favorece la formación de
ción de células cancerígenas 237. Existen numerosas vías células natural killer, potencia al sistema inmune y re-
de señalización mediadas por calcitriol y la vitamina D duce el crecimiento tumoral. Los niveles bajos de sele-
puede actuar como mediadora en las células precurso- nio son un factor de riesgo para la aparición de todo
ras hematopoyéticas233. tipo de cáncer en los hombres249-251.
Tema 1.  Bases científicas de la alimentación saludable 17

5.  Dieta mediterránea: un modelo de 5.1.  Enfermedades cardiovasculares


alimentación saludable Las enfermedades cardiovasculares constituyen la
La dieta mediterránea es una valiosa herencia cultu- principal causa de muerte y discapacidad en los países
ral. Su importancia en la salud no se limita al hecho de occidentales y su prevalencia global va en aumento,
que sea una dieta equilibrada, variada y con un aporte según las estimaciones actuales. Son responsables de
de macronutrientes adecuado. A los beneficios de su 1 de cada 3 muertes en Estados Unidos y de 1 de cada
bajo contenido en grasa saturada y alto en monoinsa- 4 en Europa252. En los países en vías de desarrollo supo-
turada, hidratos de carbono complejos y en fibra, hay nen la segunda causa de pérdida de años de vida. En
que añadir los derivados de su riqueza en antioxidan- 2013, 9 de los 25 factores de riesgo principales para
tes, polifenoles y otras sustancias beneficiosas de ori- esta pérdida potencial de años de vida se relacionaron
gen vegetal. con hábitos de alimentación inadecuados253.
Entre las muchas propiedades saludables de este pa- El desarrollo de la enfermedad cardiovascular está
trón alimentario destaca el tipo de grasa que lo caracte- relacionado con la presencia de varios factores de ries-
riza (aceite de oliva, pescado y frutos secos), las propor- go, como hipertensión arterial, dislipemia, diabetes
ciones en los nutrientes principales (cereales y vegetales tipo 2, tabaquismo y sedentarismo. Los tres primeros
como base de los platos y carnes o similares como están estrechamente relacionados con el tipo de dieta
«guarnición») y la riqueza en micronutrientes fruto de la y su aparición a menudo asociada con el exceso de
utilización de productos vegetales frescos, locales de peso. Por tanto, intervenciones nutricionales eficaces,
temporada, hierbas aromáticas y condimentos. la interrupción del consumo de tabaco y la práctica de
La dieta mediterránea fue inscrita como uno de los actividad física regular, son elementos cruciales para
elementos de la Lista Representativa del Patrimonio reducir la incidencia o recurrencia de eventos cardio-
Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en vasculares.
2010. La pirámide de la dieta mediterránea se repre- La evidencia epidemiológica de que la adherencia a
senta en la figura 2. la dieta mediterránea disminuye el riesgo cardiovascu-

Figura 2.  Pirámide de la dieta mediterránea.


18 BLOQUE: DIETOTERAPIA

lar es potente. Diferentes revisiones sistemáticas y me- cionales (marcadores de oxidación, inflamación y
tanálisis de estudios observacionales han demostrado disfunción endotelial y con los resultados de estudios
que el aumento de adherencia a esta dieta disminuye sobre efectos de la dieta mediterránea en condiciones
en un 10% la mortalidad y/o incidencia fatal o no fatal de alto riesgo cardiovascular como síndrome metabóli-
de enfermedades cardio y cerebrovasculares254-256, sien- co y diabetes.
do esta asociación inversa más evidente cuando se ex-
cluyen aquellos estudios que solo evalúan la incidencia 5.1.1. Por qué estos efectos cardiovasculares
de enfermedad cardiovascular fatal17.
beneficiosos
El estudio PREDIMED (PREvención con DIeta MEDite-
rránea)257 es un ensayo clínico multicéntrico, aleatori- Diferentes factores de riesgo, así como mecanismos
zado y controlado cuyo objetivo fue valorar los posibles fisiopatológicos (inflamación sistémica, activación neu-
efectos de dos intervenciones nutricionales con dieta rohormonal), pueden estar influenciados positivamen-
mediterránea tradicional sobre el riesgo de sufrir com- te por la dieta mediterránea262, 263.
plicaciones cardiovasculares mayores. Después de una Hay cada vez más pruebas que demuestran los efec-
mediana de seguimiento de 4,8 años se demostró que, tos beneficiosos de la dieta mediterránea sobre la insu-
comparada con una dieta baja en grasa, la dieta medi- ficiencia cardíaca, tanto en su progresión como en la
terránea sin restricción calórica, enriquecida con aceite mortalidad264, 265. Esta dieta mejora la función ventricu-
de oliva virgen extra o frutos secos, redujo en un 30% lar266, 267 y los biomarcadores séricos268 relacionados
la incidencia de complicaciones cardiovasculares mayo- con esta patología. También reduce la incidencia de
res en una cohorte de casi 7 500 participantes de edad muerte súbita269, 270, que es la principal causa de muer-
avanzada con alto riesgo cardiometabólico. te en los pacientes con insuficiencia cardíaca.
Los participantes fueron varones (de 55 a 80 años) y Posiblemente hay efectos sinérgicos entre los dife-
mujeres (de 60 a 80 años) con diabetes tipo 2 y/o 3 o rentes alimentos ricos en nutrientes incluidos en la
más de los siguientes factores de riesgo: tabaquismo, dieta mediterránea que favorecen cambios en rutas
hipertensión arterial, aumento de LDL colesterol, des- intermediarias que intervienen en el riesgo cardiome-
censo de HDL colesterol, exceso de peso o anteceden- tabólico, como metabolismo lipídico, sensibilidad a la
tes familiares de coronariopatía prematura. insulina, resistencia a la oxidación, inflamación y va-
Las curvas de Kaplan Meier para la variable principal sorreactividad.
(agregado que incluyó mortalidad cardiovascular, in- La dieta mediterránea incluye diversos compuestos
farto de miocardio no fatal e ictus no fatal) se separa- que modulan favorablemente la expresión relativa de
ron pronto tras el inicio del estudio, pero no hubo efec- ciertos genes271-274.
to sobre la mortalidad total. La reducción del riesgo fue En un subgrupo del Nurses’ Health Study275, la dieta
similar para todos los subgrupos analizados. mediterránea se asoció con una mayor longitud de te-
Este estudio supone el nivel más alto de evidencia cien- lómeros, las secuencias repetitivas al final de los cro-
tífica de prevención primaria de la enfermedad cardio­ mosomas que están ligadas a una mayor longevidad.
vascular con un patrón alimentario hasta el momento. En el estudio PREDIMED, solo se obtuvo este efecto en
Otros resultados derivados del estudio PREDIMED las mujeres276.
han sido: la reducción del riesgo de enfermedad arte-
rial periférica258 y de fibrilación auricular259, aunque el
5.2. Cáncer
efecto antiarrítmico solo se demostró con la dieta me-
diterránea enriquecida con aceite de oliva virgen extra. El aumento de 2 puntos en la adherencia a la dieta
En una subcohorte analizada 1 año tras la interven- mediterránea reduce de manera significativa un 6%
ción, la dieta mediterránea redujo la tensión arterial la mortalidad y/o la incidencia de enfermedad neo-
ambulatoria durante 24 horas260. Un estudio de 2 años plásica277.
de duración demostró que en los aleatorizados a dieta
mediterránea enriquecida con frutos secos hubo regre- 5.2.1.  Prevención primaria
sión de lesiones arterioscleróticas carotídeas y en los
aleatorizados a dieta mediterránea rica en aceite de En el estudio PREDIMED se demostró que los dos
oliva virgen extra se produjo menor progresión arte- grupos combinados de dieta mediterránea tenía me-
riosclerótica frente a un empeoramiento de la arterios- nor riesgo de cáncer de mama que el grupo control
clerosis en el grupo control261. (HR 0,43)278.
Los resultados del estudio PREDIMED son consisten- En una revisión sistemática y metanálisis de 28 estu-
tes con los de otros estudios observacionales sobre dios de cohortes (2.262.786 participantes) con segui-
efectos protectores de la dieta mediterránea, del aceite miento de 4 a 40 años se demostró que el grupo con
de oliva o de los frutos secos; con los de pequeños es- mayor adherencia a la dieta mediterránea tuvo un 14%
tudios que evaluaron los efectos de la dieta sobre fac- de reducción en la mortalidad total por cáncer. Los
tores de riesgo cardiovascular tradicionales y no tradi- análisis combinados demostraron una reducción del
Tema 1.  Bases científicas de la alimentación saludable 19

4% en la incidencia total de cáncer y del 9% en la inci- moglobina glicosilada de un 0,30 a un 0,47%290-293. En


dencia de cáncer de colon279. un estudio aleatorizado se demostró que la tasa de remi-
En dos estudios de cohortes (465 106 participantes) sión parcial o total de diabetes fue mayor con dieta medi-
se demostró una menor incidencia de cáncer de pul- terránea baja en aporte de hidratos de carbono que con
món en los participantes con mayor adherencia a la dieta baja en grasa, tanto al año (14,7% frente a 4,1%)
dieta mediterránea280, 281. como a los 6 años de seguimiento (5% frente a 0%)294.
Un reciente consenso de las Sociedades Americanas
5.2.2.  Prevención secundaria de Diabetes y de Cardiología ha establecido, con un
nivel de evidencia B, que la dieta mediterránea puede
Los estudios de cohortes que evalúan los resultados mejorar el control glucémico y diferentes factores de
en pacientes con cáncer de colon, de mama o de prós- riesgo cardiometabólico295.
tata demuestran similar incidencia de recurrencia de la
enfermedad y de mortalidad específica relacionada con
5.3.4.  Componentes del síndrome metabólico
el cáncer en aquellos en cuantiles más altos y más ba-
jos de adherencia a la dieta mediterránea279. Un metanálisis de 50 estudios con 534 906 partici-
pantes, incluyendo diabéticos tipo 2, demostró los be-
5.3.  Diabetes y síndrome metabólico neficios de la dieta mediterránea sobre diferentes com-
ponentes del síndrome metabólico: la circunferencia de
5.3.1.  Prevención primaria la cintura (– 0,42 cm), el HDL colesterol (+ 1,17 mg/dl),
los triglicéridos (–6,14 mg/dl), la tensión arterial sistólica
Una mayor adherencia a la dieta mediterránea dismi-
y diastólica (–2,35 y –1,58 mmHg, respectivamente)289.
nuye el riesgo de diabetes tipo 2 de un 19 a un 23%282-284.
Otros metanálisis demostraron que este patrón alimen-
En mujeres postmenopáusicas seguidas durante
tario reduce el peso corporal de 0,29 a 2,2 kg y los nive-
15 años, esta mayor adherencia redujo el riesgo de dia-
les de colesterol total de 5,4 a 8,9 mg/dl293, 296.
betes tipo 2 en un 15%285.
En diabéticos tipo 2 de reciente diagnóstico, la dieta
El estudio PREDIMED Diabetes demostró que la ad-
mediterránea produce una regresión del espesor ínti-
herencia prolongada a dieta mediterránea, sin restric-
ma-media carotídeo un 50% más alto y una progresión
ción calórica, rica en grasa monoinsaturada y en polife-
de dicho espesor un 50% más baja que la dieta pobre
noles bioactivos, redujo significativamente el riesgo de
en grasa297.
diabetes tipo 2 en personas mayores con alto riesgo
cardiometabólico286. En este estudio se incluyeron
3 541 participantes de 55 a 80 años. Después de una 5.3.5.  Inflamación y función endotelial
mediana de 4,1 años de seguimiento se produjo una
Los mecanismos por los que la dieta mediterránea
reducción significativa del riesgo de padecer diabetes
produce sus beneficios cardiometabólicos en la diabetes
del 40% en los participantes aleatorizados a una dieta
tipo 2 no están completamente aclarados. Sin embargo,
suplementada con aceite de oliva virgen extra y una
estos beneficios pueden ser considerados mayoritaria-
reducción no significativa del 18% en los aleatorizados
mente como antioxidantes y antiinflamatorios. La adhe-
a dieta suplementada con frutos secos, en compara-
rencia a la dieta mediterránea aumenta la ingesta de
ción con el grupo control.
nutrientes antiinflamatorios, como fibra, vitaminas, mi-
nerales, antioxidantes, polifenoles, y reduce la de nu-
5.3.2.  Remisión del síndrome metabólico trientes proinflamatorios (azúcares refinados, almido-
En dos estudios aleatorizados, controlados con se- nes, grasas trans y alimentos de alta densidad calórica).
guimiento de 2 a 5 años, los aleatorizados a dieta me- Una revisión sistemática y metanálisis con 2 300 par-
diterránea tuvieron de un 34 a un 74% más de proba- ticipantes demostró que la dieta mediterránea reduce
bilidad de remisión del este síndrome que aquellos los marcadores inflamatorios circulantes y mejora la
participantes con dieta control287-288. función endotelial298.
La adherencia a la dieta mediterránea se asoció con Esta mejoría inflamatoria se ha demostrado también
reducción de la prevalencia y progresión de síndrome en estudios de intervención con participantes obesos,
metabólico en un metanálisis de 50 estudios con más con síndrome metabólico o con diabetes tipo 2287,299,300.
de medio millón de participantes y presenta numero- En el estudio más largo publicado hasta el momento
sos efectos favorables sobre los diferentes componen- en pacientes diabéticos tipo 2 de reciente diagnóstico, la
tes de este síndrome289. adherencia a dieta mediterránea frente a dieta baja en
grasa, produjo una mejora sostenida de los marcadores
inflamatorios que se asoció con mejoría de la resistencia
5.3.3.  Control glucémico
a la insulina y del metabolismo glucídico301. Además, la
Diferentes metanálisis demuestran que en pacientes falta de adherencia a la dieta mediterránea se relacionó
con diabetes tipo 2 la dieta mediterránea reduce la he- con una actividad inflamatoria persistente302.
20 BLOQUE: DIETOTERAPIA

5.3.6. Obesidad sobre la incidencia de complicaciones cardiovasculares


mayores (infarto de miocardio no mortal, ictus no mor-
A pesar de su alto contenido en grasa, hay evidencia tal o muerte cardiovascular) y sobre la calidad de vida.
derivada de estudios de cohortes prospectivos y de en-
sayos clínicos que demuestra que la adherencia a la 5.4.  Función cognitiva y demencia
dieta mediterránea puede reducir el peso corporal.
La mayoría de los estudios prospectivos cuyo objeti- A pesar de la etiología plurifactorial de la demencia,
vo es analizar el efecto de la dieta mediterránea sobre hay un cuerpo creciente de evidencia que demuestra
la ganancia ponderal o el riesgo de desarrollar exceso que ciertos factores de riesgo modificables como la en-
de peso han comunicado efectos beneficiosos sobre fermedad cardiometabólica y el estilo de vida, juegan
las medidas de adiposidad296,303,304, con una reducción un papel principal en su etiopatogenia. Es por ello que
del peso corporal de 0,29 a 2,2 kg. la nutrición es un campo interesante de investigación.
Sin embargo, un metanálisis de estudios aleatoriza- En una revisión sistemática reciente se evaluaron los
dos y controlados de corta duración en los que se indi- posibles efectos beneficiosos de la dieta mediterránea
caron dietas ricas o bajas en grasa, demostró que no sobre la función y deterioro cognitivos, la enfermedad
hay efecto sobre el peso corporal salvo que se restrinja de Alzheimer y otros tipos de demencia309. La revisión
el aporte calórico305. incluyó 32 estudios, 5 de ellos aleatorizados y contro-
Una dieta mediterránea rica en grasa saludable, ba- lados y el resto observacionales. La dieta mediterránea
sada en alimentos de origen vegetal, con consumo ad se asoció con mejor función cognitiva, menor riesgo de
libitum no favorece el incremento de peso o la adiposi- deterioro cognitivo y con menor riesgo de demencia en
dad visceral a largo plazo306. Comparado con el grupo general o de enfermedad de Alzheimer, aunque sin po-
control, el grupo de dieta mediterránea enriquecida der establecer una relación causa-efecto, dada la natu-
con aceite de oliva virgen extra redujo significativa- raleza de la mayoría de los estudios incluidos en esta
mente el peso mientras que el de dieta enriquecida con revisión. Hubo una gran heterogeneidad y diferencias
frutos secos lo mantuvo. En el estudio PREDIMED, la de calidad entre los estudios analizados, por lo que son
circunferencia de la cintura aumentó ligeramente con precisos más estudios controlados para poder concluir
la edad en los tres grupos de intervención, como ocu- definitivamente.
rre en la población general, pero menos en los grupos
de dieta mediterránea, especialmente en el enriqueci- 6. Resumen
do con frutos secos. Los objetivos generales de una alimentación saluda-
Las respuestas fueron similares independientemente ble deben ser coherentes con el mantenimiento de la
del sexo, la edad y la presencia o no de diabetes. salud en la población. La combinación de actividad fí-
El estudio PREDIMED has sido el primer estudio clíni- sica y alimentación variada es lo que probablemente
co, aleatorizado y controlado que ha analizado estos mejora más la salud.
efectos. Y los resultados son los que cabría esperar, ya Las fuentes alimentarias varían en su contenido de
que este patrón alimentario incluye alimentos no aso- macro y micronutrientes y se necesita una proporción
ciados con efectos perjudiciales sobre adiposidad a lar- de cada uno de ellos. Una alimentación variada se con-
go plazo (frutos secos, verduras, frutas, cereales inte- sidera la mejor aproximación para lograr una ingesta
grales) y excluye alimentos y bebidas asociados con suficiente y adecuada.
una ganancia ponderal a largo plazo (como alimentos La ingesta de un individuo es una mezcla compleja
servicio, dulces y postres, mantequilla, carne roja y pro- de alimentos, cada uno de los cuales, a su vez, es una
cesada y refrescos azucarados). Además, el efecto sa- combinación complicada de nutrientes. Modificar un
ciante de los alimentos ricos en fibra que incluye esta componente de la alimentación produce cambios inin-
dieta, desplaza el consumo de otros alimentos y bebi- tencionados en otros, cada uno de los cuales puede
das de mayor densidad calórica. No debemos olvidar tener efectos positivos o negativos sobre varios facto-
que hay cambios inducidos por la dieta sobre la micro- res de riesgo y, posiblemente, sobre la salud. Ningún
biota intestinal que pueden modular favorablemente la alimento debe excluirse totalmente de una alimenta-
adiposidad307. ción habitual excepto cuando exista una intolerancia
El estudio PREDIMED PLUS308, actualmente en fase genética o de otro tipo hacia dicho alimento.
de desarrollo, nos ampliará nuestra visión del efecto de Los factores nutricionales juegan un papel funda-
la dieta mediterránea sobre la adiposidad. Es un nuevo mental en la promoción de la salud y en el enlenteci-
ensayo multicéntrico y aleatorizado con el objetivo miento del desarrollo de enfermedades crónicas rela-
principal de evaluar el efecto de una intervención in- cionadas con la alimentación.
tensiva sobre el estilo de vida basada en dieta medite- Las enfermedades cardiovasculares constituyen
rránea tradicional con restricción calórica, actividad fí- una de las amenazas más importantes para la salud
sica y tratamiento conductual sobre la pérdida de peso en el siglo xxi. Las modificaciones de la alimentación
y la reducción del perímetro de la cintura a largo plazo, y del estilo de vida tienen un enorme potencial para
Tema 1.  Bases científicas de la alimentación saludable 21

reducir el riesgo de enfermedad y mejorar la espe-   2. Foote JA, Murphy SP, Wilkens LR, Basiotis PP, Car-
ranza y calidad de vida de la población. Por tanto, lson A. Dietary variant increases the probability of
podemos concluir que la alimentación: a) desempe- nutrient adequacy among adults. J Nutr.
ña un papel importante en la prevención de la enfer- 2004;134:1779-85.
medad cardiovascular, b) es un factor crucial en la   3. World Health Organization (WHO). Noncommuni-
etiopatogenia del exceso de peso y de la diabetes cable diseases. In: WHO Mediacentre—Fact
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dan cuestiones por comprobar, en la etiopatogenia   4. Anand P, Kunnumakkara AB, Sundaram C, Hariku-
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Las principales características de una dieta medite- ventable disease that requires major lifestyle chan-
rránea incluyen la abundancia de alimentos de origen ges. Pharm Res. 2008;25:2097-116.
vegetal, el aceite de oliva virgen como principal fuente   5. Eckel RH, Jakicic JM, Ard JD, de Jesus JM, Houston
de grasa, un consumo de pescado y carne de ave en Miller N, Hubbard VS, et al. 2013 AHA/ACC guide-
cantidades bajas o moderadas, una ingesta relativa- line on lifestyle management to reduce cardiovas-
mente baja de carne roja y un consumo moderado de cular risk: a report of the American College of Car-
vino, normalmente con las comidas. diology/American Heart Association Task Force on
Una de las características más destacables de la dieta Practice Guidelines. Circulation. 2014;129(25 Su-
mediterránea es la capacidad para mejorar los factores ppl 2):S76-99.
de riesgo cardiometabólicos. Además, tiene un efecto   6. Bantle JP, Wylie-Rosett J, Albright AL, Apovian CM,
contra la inflamación crónica y sus complicaciones me- Clark NG, Franz MJ, et al. Nutrition recommenda-
tabólicas. Un patrón alimentario rico en nutrientes con tions and interventions for diabetes: a position
propiedades antiinflamatorias y pobre en nutrientes statement of the American Diabetes Association.
proinflamatorios podría proteger de enfermedades re- Diabetes Care. 2008;31 Suppl 1:S61-78.
lacionadas con la inflamación crónica como la obesi-   7. Kushi LH, Doyle C, McCullough M, Rock CL, De-
dad visceral, la diabetes tipo 2 y el síndrome metabóli- mark-Wahnefried W, Bandera EV, et al. American
co y de ciertas patologías autoinmunes. Cancer Society Guidelines on nutrition and physi-
La adherencia prolongada a un patrón de dieta me- cal activity for cancer prevention: reducing the risk
diterránea reduce la incidencia de enfermedades car- of cancer with healthy food choices and physical
diovasculares y de diabetes tipo 2 en población de activity. CA Cancer J Clin. 2012;62:30-67.
edad avanzada con alto riesgo cardiometabólico.   8. World Cancer Research Fund / American Institute
La alimentación mediterránea representa el patrón for Cancer Research. Food, Nutrition, Physical Ac-
tradicionalmente consumido entre las poblaciones tivity, and the Prevention of Cancer: a Global Pers-
próximas al mar Mediterráneo. Es un modelo de alimen- pective. Washington DC: AICR, 2007.
tación suficientemente demostrado, palatable, posible,
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Las estrategias de Salud Pública deberían estimular a
10. Wang X, Ouyang Y, Liu J, Zhu M, Zhao G, Bao W,
las poblaciones a adoptar patrones de alimentación sa-
et al. Fruit and vegetable consumption and morta-
ludables como la dieta mediterránea para conseguir
lity from all causes, cardiovascular disease, and
poblaciones sanas y proteger el medio ambiente. El
cancer: systematic review and dose-response me-
gran pasado histórico de la dieta mediterránea y la lar-
ta-analysis of prospective cohort studies. BMJ.
ga tradición sin evidencia de efectos adversos hacen
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que este modelo de alimentación sea muy prometedor
para la nutrición pública. 11. Leenders M, Sluijs I, Ros MM, Boshuizen HC, Sier-
sema PD, Ferrari P, et al. Fruit and Vegetable Con-
En el futuro, una intervención nutricional personali-
sumption and Mortality: European Prospective In-
zada y a medida puede ser de gran beneficio, teniendo
vestigation Into Cancer and Nutrition . Am J
en cuenta el riesgo genético individual, además de fac-
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Tema 2.
Requerimientos nutricionales
Gabriel Olveira Fuster
Montserrat Gonzalo Marín
Unidad de Nutrición y Dietética. Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nutrición.
Hospital Regional Universitario de Málaga

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 35-51.

1. Introducción
2.  Requerimientos energéticos
3.  Requerimientos de macronutrientes
4.  Requerimientos de micronutrientes
5.  Guías alimentarias
6. Bibliografía

1. Introducción tas dietéticas de referencia, del inglés, dietary refe-


rence intakes) que renovaba el viejo concepto único de
Los requerimientos nutricionales son un conjun- RDA vigente desde 1941 (véase Anexo 1)4-13. En Espa-
to de valores de referencia de ingesta de energía y de ña promovido por la Federación Española de Socie-
los diferentes nutrientes, considerados como óptimos dades de Nutrición, Alimentación y Dietética, se
para mantener un buen estado de salud y prevenir la han elaborado las ingestas dietéticas de referencia
aparición de enfermedades tanto por exceso como por (IDR) para España y publicadas en 201014. Dichas guías
defecto. En los niños este concepto incluye la ingesta asumen, en muchos nutrientes, las recomendaciones
que garantice un ritmo de crecimiento normal. de las guías americanas pero también tienen en cuenta
Para referirse a una población se utiliza el término de las aportaciones de otros países (europeos o no), de la
ingestas recomendadas, ingestas seguras o in- OMS y otros organismos internacionales (véase Anexo
gestas de referencia de nutrientes. Para su estable- de nutrición interactiva).
cimiento los distintos organismos que las proponen se El empleo de las DRI es una aproximación para aportar
apoyan en datos experimentales (y ocasionalmente en estimaciones cuantitativas de la ingesta de nutrientes
datos epidemiológicos) que analizan los efectos de las y se compone de cuatro conceptos15, 16 (figura 1):
deficiencias y excesos de cada nutriente en la salud de EAR (Estimated average requirement) o requeri-
los individuos. Las ingestas recomendadas pueden va- mientos medios estimados: nivel de ingesta diaria de
riar según el organismo que las diseña en función de un nutriente que se estima que cubre los requerimien-
los criterios utilizados para su elaboración1. Destacan tos de la mitad de los individuos sanos, según edad y
los informes de la OMS2 http://apps.who.int/iris/bits- sexo determinados. En la Unión Europea equivale al AR
tream/10665/42716/1/9241546123.pdf, de la Unión (average requeriment).
Europea3 http://www.efsa.europa.eu/sites/default/fi- RDA (Recommended dietary allowance) o aporte
les/assets/ndatolerableuil.pdf y, en especial, por su im- dietético recomendado: nivel de ingesta diaria de un
portancia y amplio uso a nivel internacional las reco- nutriente suficiente para cubrir sus necesidades del 97
mendaciones de la Food and Nutrition Board (National al 98% de los individuos sanos de un grupo de edad y
Academy of Sciences –NAS– de Estados Unidos sexo determinados. En la Unión Europea equivale a la
http://www.nap.edu) formuladas por primera vez en ingesta de referencia para la población (PRI). La FAO/
1941 (Recommended Dietary Allowance) y completa- OMS usa el término RNI (ingesta de nutrientes reco-
mente renovadas a partir del año 1997 . En este año el mendada) .
Instituto de Medicina (IOM) de EE UU, conjuntamente AI (Adequate intake) o ingesta adecuada: es el apor-
con científicos canadienses, publicaron el primer infor- te recomendado de un nutriente basado en aproxima-
me en el que se recogía el concepto de las DRI (inges- ciones o estimaciones observadas o determinadas ex-

35
36 BLOQUE: DIETOTERAPIA

perimentalmente, de la ingesta de un grupo de es el nivel más bajo a partir del cual se han obser-
población sana, que se asume es adecuada. Se utiliza vado ya efectos adversos, aunque estos no sean
cuando no se dispone de datos suficientes para esta- graves.
blecer una EAR. Se estima de los datos disponibles o se •  NOAEL (No observed adverse effects level) o nivel
extrapola de los datos de otros grupos de población. de no observación de efectos adversos: es el nivel
Suele ser mayor que la RDA, pero su precisión es me- más elevado para el que no se han constatado
nor. Para algunos nutrientes (vitamina D, biotina, ac. efectos adversos.
pantoténico, sodio, magnesio y manganeso) la Unión •  UF (Uncertainty factor) o factor de incertidumbre.
Europea establece unos intervalos aceptables de inges- Los UF se aplican sobre el LOAEL y preferentemen-
ta (ARI). te, si existe, sobre el NOAEL para compensar diver-
UL (Tolerable upper intake level) o nivel superior de sas incertidumbres: número reducido de indivi-
ingesta Tolerable es el nivel máximo de ingesta cotidia- duos analizados, período corto de observación,
na diaria de un nutriente que no presenta riesgo de variación interindividual, etc. Están comprendidos
presentar efectos adversos para la mayor parte de la entre 1 y 10. El factor 1 aplicado sobre el NOAEL
población sana a largo plazo. La Unión Europea incluye significa que no hay incertidumbre.
otros tres conceptos (figura 1 B).
En la tabla 1 se recogen, como ejemplo, los valores de
•  LOAEL (Lowest observed adverse effects level) o las RDA y AI publicados por el IOM para macronutrien-
nivel inferior de observación de efectos adversos: tes . Las tablas con las DRI para el resto de nutrientes

A.  Definiciones según el Instituto Americano de Medicina

1.0 EAR 1.0


RDA UL

Risk of Adverse Effects


Risk of Inadequacy

0.5 0.5

0.0 0.0
Observed Level of Intake

B.  Definiciones según la Unión Europea


UL NOAEL LOAEL
AR PRI=RLV UF 2
UF 1

Ingesta óptima

Ingesta
Insuficiente Ingesta excesiva
RIESGO
Ingesta segura

DÉFICIT EFECTOS
ADVERSOS
NIVEL DE INGESTA
El significado de las siglas aparece en el texto.
Modificado de http://www.nap.edu y European Federation Association of Health Products
Manufacturers, EHPM, and European Responsible Nutrition Alliance,ERNA.

Figura 1.  Ingestas dietéticas recomendadas.


Tema 2.  Requerimientos nutricionales 37

Tabla 1.  Ingestas dietéticas de referencia de macronutrientes.

Ác.
Grupo de edad Carbohidratos Fibra total Lípidos Ác. linoleico Proteínas
α-linolénico
población (g/día) (g/día) (g/día) (g/día) (g/día)
(g/día)
0-6 meses 60* ND 31* 4,4* 0,5* 9,1*
Lactantes
7-12 meses 95* ND 30* 4,6* 0,5* 13,5
1-3 años 130 19* ND 7* 0,7* 13
Niños/as
4-8 años 130 25* ND 10* 0,9* 19
9-13 años 130 31* ND 12* 1,2* 34
4-18 años 130 38* ND 16* 1,6* 52
19-30 años 130 38* ND 17* 1,6* 56
Hombres
31-50 años 130 38* ND 17* 1,6* 56
51-70 años 130 30* ND 14* 1,6* 56
> 70 años 130 30* ND 14* 1,6* 56
9-13 años 130 26* ND 10* 1,0* 34
14-18 años 130 26* ND 11* 1,1* 46
19-30 años 130 25* ND 12* 1,1* 46
Mujeres
31-50 años 130 25* ND 12* 1,1* 46
51-70 años 130 21* ND 11* 1,1* 46
> 70 años 130 21* ND 11* 1,1* 46
14-18 años 175 28* ND 13* 1,4* 71
Embarazo 9-30 años 175 28* ND 13* 1,4* 71
31-50 años 175 28* ND 13* 1,4* 71
14-18 años 210 29* ND 13* 1,3* 71
Lactancia 19-30 años 210 29* ND 13* 1,3* 71
31-50 años 210 29* ND 13* 1,3* 71

ND: no realizada la recomendación.


Esta tabla presenta las ingestas diarias recomendadas (RDA) en negrita y las ingestas adecuadas (AI) en estilo normal seguido
de un asterisco (*).
Fuente: Institute of Medicine. El texto completo se puede encontrar en: http://www.nap.edu.

se recogen en los anexos del libro y se pueden consul- lues-valores de referencia para el etiquetado)15. Las in-
tar también online en http://www.nap.edu. gestas recomendadas teóricamente deben servir tam-
Las DRI actuales incluyen una filosofía más preven- bién como base para el etiquetado de los alimentos
tivista, y de promoción de la salud, no solo describien- http://ec.europa.eu/food/fs/sc/scf/out171_en.pdf. En la
do las ingestas adecuadas para prevenir deficiencias (el UE está pendiente la implantación y armonización de la
abordaje por el que esencialmente nacieron en 1941 las legislación comunitaria para aplicar los nuevos RLV .
RDA). Así si existen datos suficientes, se recogen las in- Con las nuevas DRI, la variable que debe emplearse para
gestas que facilitan la reducción del riesgo de padecer valorar la ingesta de grupos de población es la EAR o,
enfermedades crónicas (por ejemplo la ingesta de fibra en su defecto la AI, nunca la RDA. Así, cuando se compa-
se basa en la reducción de enfermedad cardiovascular). ran las ingestas de dos grupos de población, se debe ex-
Otro término que no debe ser confundido con las presar en forma de prevalencia de consumo inadecuado,
DRI, es el concepto de RLV (reference labelling va- en vez de la comparación de las medias de consumo. La
38 BLOQUE: DIETOTERAPIA

razón es que, aunque la media de ingesta poblacional necesaria para mantener el balance energético en un
iguale la RDA, puede haber una parte sustancial de indivi- individuo adulto sano de una determinada edad, sexo,
duos del grupo cuya ingesta sea inferior a EAR5, 17. peso, talla y nivel de ejercicio físico asociado a buena
La utilización de las DRI para valorar si la ingesta de salud. Para niños y mujeres embarazadas y lactantes
un individuo concreto es adecuada resulta difícil, ya los REE incluyen las necesidades extra asociadas al ana-
que sería necesario conocer de forma precisa su inges- bolismo (deposición de tejidos) o la secreción de le-
ta real, incluyendo la variabilidad interdía; existen mé- che11.
todos estadísticos que permiten hacerlo. No obstante, Los componentes del gasto energético en personas
a efectos prácticos, si estimamos a partir de una en- sanas se resumen en:
cuesta dietética (con un suficiente número de días) la
ingesta de un nutriente, podremos valorar la adecua- GET = GEB + ETA + AF
ción en función de si los valores son17:
Donde GET: gasto energético total; GEB: gasto
•  Menores de la EAR: necesitan aumentarse, ya que
energético basal; ETA: efecto termogénico de los ali-
la probabilidad de su adecuación es menor o igual
mentos; AF: gasto energético por actividad física.
al 50%.
El gasto metabólico basal (GMB) se define como
•  Entre EAR y RDA: posiblemente necesitan aumen-
la cantidad de energía que se consume en estado de
tarse, ya que la probabilidad de adecuación es
reposo y en ayunas. El GMB se suele extrapolar a las 24
menor del 97 o 98%.
horas y se llama gasto energético basal (GEB) y su-
•  Mayores o iguales a las RDA (o a las AI, si solo se pone entre el 60 y 75% del GET. El término gasto
dispone de ellas) serían adecuadas si representan energético en reposo (GER) se refiere al gasto en 24
el consumo real del nutriente (se ha recogido la horas en estado de reposo pero incluyendo también el
ingesta un número suficiente de días). coste derivado de la ingesta de alimentos. No obstante,
•  Menores de AI: probablemente deben aumentar- en la práctica suelen utilizarse de forma casi equivalen-
se hasta alcanzar la AI, aunque la probabilidad de te. El principal determinante del GER es la cantidad de
la adecuación de la ingesta por debajo del AI no masa magra corporal, aunque también depende de
puede determinarse. otros factores como la edad, sexo, composición corpo-
•  Menores que el UL: no presentan riesgo de efec- ral, estado nutricional, condicionantes genéticos, esta-
tos adversos. do tiroideo, etc.
Basándose en los informes acerca de ingestas reco- El efecto termogénico de los alimentos (ETA) se
mendadas y, también, en la evidencia emanada de es- refiere a las calorías producidas en forma de calor du-
tudios epidemiológicos (observacionales y prospecti- rante la ingesta y metabolización de los alimentos. Su-
vos) y de ensayos clínicos aleatorizados y controlados pone aproximadamente el 10% de la energía total con-
(de tamaño muestral, duración y calidad adecuados) sumida con los alimentos, si se consume una dieta
numerosos organismos y sociedades científicas han mixta.
elaborado recomendaciones nutricionales para El gasto por actividad física es la variable que la
la población general (tabla 2) con el objetivo de al- persona puede controlar más fácilmente para modifi-
canzar una dieta que promueva la salud actual de la car el gasto energético total, ya que supone entre el 15
misma y la prevención de enfermedades crónicas18-23. y el 30% del GET.
Esta dieta saludable debe aportar una cantidad ade- Se ha acuñado el término niveles de actividad fí-
cuada y variada de alimentos, proporcionando los nu- sica (PAL, del inglés physical activity levels) para reco-
trientes cualitativa y cuantitativamente necesarios para mendar los objetivos deseables para la población gene-
el funcionamiento normal de nuestro organismo, en el ral. El PAL se define como el cociente entre el gasto
momento actual y en el futuro24. En los últimos años, energético total y el gasto energético basal. Por
se objetiva una tendencia en las sociedades científicas ejemplo, un PAL de 1,4 indicaría que el gasto energéti-
a no centrarse únicamente en las recomendaciones so- co total sería un 40% por encima del gasto energético
bre nutrientes concretos (cantidades o porcentajes res- basal o en reposo para mantener el peso corporal y por
pecto al valor calórico total), sino sobre patrones ali- encima de ese punto de corte el individuo pasaría de
mentarios, como por ejemplo, el patrón de dieta una actividad sedentaria a ligera. Si el PAL es mayor a
mediterránea, ya que es el conjunto del patrón, lo que 1,6 el sujeto se consideraría como «activo».
se asocia a un descenso de las complicaciones crónicas Un nivel de actividad física moderada de 30 minutos
(por ejemplo, cardiovasculares, diabetes, etc.)25. diarios puede ser suficiente para alcanzar beneficios
metabólicos evidentes y de salud cardiovascular. No
obstante, es probable que no se alcancen todos los
2.  Requerimientos energéticos
efectos favorables posibles asociados al ejercicio. Un
Los requerimientos energéticos estimados nivel ligeramente superior (equivalente a 60 minutos
(REE) se definen como la ingesta dietética de energía diarios de actividad moderada) parece más adecuado
Tabla 2.  Objetivos nutricionales para la población general adulta respecto a macronutrientes y ejercicio : evolución en los últimos años.
SENC EURODIET NAS AHA AHA/ACC OMS FAO 2010
Consenso español grasas y aceites 2015
2000-2016 2000 2002 2000-2006 * 2013 2003 Fats and fatty acids
Tomar frutas verduras,
Carbohidratos (% kcal) > 55-75% 45-65% 55-60% * – 55-75%
∆ legumbres y grano entero ∞
Carbohidratos g/día (RDA) – – 130 – – – –
Azúcares (% kcal) – < 10-12% < 25% Limitar ** Limitar ∞ – < 10%$
Alimentos azucarados
Ocasional < 4/día – Limitar ** Limitar ∞ – -
(frecuencia/día)
3 piezas
Frutas y verduras (g/día) de fruta y dos > 400 – Dieta rica en frutas y verduras ** Tomar ∞ – ³ 400
de verduras
Grasas totales (% kcal) ≤ 35% 20-35% 20-35% ≤ 25-35% ** ∞ No límite 15-30% 15-35%
Reducir alimentos como mantequilla,
AGS (% kcal) ≤ 10% 7-10% – < 7% ** 5-6% ∞ derivados cárnicos, bollería y fritos < 10% < 10%
comerciales
20% aceite de
AGM (% kcal) 10-15% – ≤ 15% * No límite (aprox 20-25%) 15-20%
oliva virgen
AGP (% kcal) 5% 7-8% – ≤ 10% * 6-10% 6-11% Ÿ
AG n-6 (% kcal) – < 7-8% 5-10% 5-10% 5-8% 2,5-9%
Pescado 2-3
AG n-3 (% kcal) - 0,6-1,2% 1-2% 0,5-2%
v semana
V
AG n-6 g/día – -
12 M ф
0,250 g/día de EPA
2 g linolénico + 200 mg 1,6 V
AG n-3 g/día – ≥ 2 raciones de pescado, mejor graso ** Tomar pescado ∞ ≥ 3 raciones de pescado (2 azul) o marisco + DHA máximo 2 g
de AGCML 1,1 M ф
diarios ÿ
AG «trans» – < 2% – < 1% ** Reducir ∞ < 1% < 1% < 1%
Colesterol mg/día < 350 < 300 – < 300 ** No recomendación < 300
Proteínas (% kcal) 13% Ω - 10-35% 15% * 10-15%
Proteínas g/día 56-59 V 56 V
- – – –
RDA 48-57 M 46 M
> 35 H
> 25 M
Tomar frutas 38 V † ≥ 25 **al menos la mitad de cereales Tomar frutas verduras,
Fibra g/día > 25 > 25 Ç
verduras, 25 M y derivados que sean integrales legumbres y grano entero ∞
legumbres y
grano entero
3-4 sesiones de actividad
PAL PAL PAL
Actividad física Al menos 30 min/día ** moderada a vigorosa semana > 1 h/día ¶
> 1,75 > 1,75 ≥ 1,6
de 40 min/día ∞
24-36 g/día ≤2V
Alcohol Opcional y No recomendado
12-24 g/día – ≤1M
(si se consume) moderado ‡‡
◊ ‡ **
AG: ácidos grasos; AGCML: ácidos grasos de cadena muy larga (por ejemplo, eicosapentanoico y Docohexanoico); AGM: ácidos grasos monoinsaturados; AGP: ácidos grasos poliinsaturados; AGS: ácidos grasos saturados; AHA: American Heart Association Nutrition Committee/ACC American College of Cardiology; M: mujeres;
NAS: National Academy of Sciences (USA); NIH: National Institutes of Health (USA); OMS: Organización Mundial de la Salud; PAL: cociente entre el gasto energético total dividido entre el gasto energético basal; RDA: aportes dietéticos recomendados; SENC: Sociedad Española de Nutrición Comunitaria; V: varones.
Ω: objetivos SENC 1994. * Las recomendaciones del 2006 no concretan rangos aceptables de distribución de nutrientes, salvo para las grasas, por lo que hemos mantenido conceptos recogidos en el documento del año 2000. ** Recomendaciones concretas del 2006. ◊: El proyecto EURODIET adopta dos intervalos de
ingesta en función de lo propuesto en diversos países europeos. Los valores más bajos son adoptados en países nórdicos en base a los posibles beneficios sociales y personales. En cada intervalo el valor más elevado es para los varones y el más bajo para las mujeres. : Diferencia entre la grasa total menos el resto de AG.
ф: «ingesta adecuada». †: fibra total es la suma de la fibra dietética y la fibra funcional. : la NAS recomienda unos ADR de carbohidratos totales basándose en su papel como fuente primaria de energía para el cerebro y de proteínas. ‡: se define una toma como el equivalente a 350 ml de cerveza, 145 ml de vino o 45 ml

de bebidas de alta graduación. Preferentemente con comidas. $: total de mono y disacáridos añadidos a los alimentos más los contenidos en los zumos de frutas, almíbares y miel. En las recomendaciones de 2015 sobre azúcares mantienen esta cifra (recomendación clara) pero comentan que condicionalmente debería
reducirse a menos del 5% (recomendación condicional). Guideline: Sugars intake for adults and children. Geneva: World Health Organization; 2015. Ç: la OMS considera que todavía no está clara la mejor definición de fibra dietética. Las ingestas recomendadas aportarían más de 20 gramos de polisacáridos no almidón y
hasta 25 gramos de fibra total. ¶: > 1 hora al día de actividad de moderada intensidad como caminar, casi todos los días. ‡‡: a pesar de que la OMS reconoce que un consumo moderado disminuye el riesgo de enfermedad coronaria, no recomienda el consumo de alcohol por sus efectos perjudiciales sobre otras
enfermedades. No obstante, en el caso de que se ingiera recomienda no sobrepasar la cantidad de 20 g/día (dos bebidas). : aunque reconoce la AHA que no existe un límite de fibra recomendado con la ingesta de frutas, verduras, legumbres y cereales que recomienda se pueden alcanzar más de 25 g al día. ∞ La AHA
(American Heart Association) y el ACC (American College of Cardiology) recomiendan, en sus guías de 2013, seguir patrones de ingesta que han demostrado reducir el riesgo cardiovascular por asociarse a descensos del colesterol LDL y aumento del HDL y reducción de la presión arterial. Se recomienda consumir un patrón
que enfatiza la ingesta de vegetales, frutas, grano entero, lácteos bajos en grasa, aves, pescado, legumbres, aceites (excluyendo los tropicales altos en grasas saturadas) y frutos secos, limitando el consumo de azúcares, bebidas azucaradas y carnes rojas. Se debe adaptar el patrón a los requerimientos energéticos y a las
Tema 2.  Requerimientos nutricionales

preferencias personales y culturales. Se recogen como posibles patrones la dieta DASH, los patrones de ingesta USDA o la dieta de la AHA 2006. También reconoce en el texto el patrón de dieta mediterránea, aunque en la recomendación final no lo añade. Ÿ el intervalo recomendable (AMDR) para los AGP es 6-11%.
Basándose en estudios epidemiológicos y ensayos controlados y aleatorios sobre accidentes cardiovasculares, los valores mínimos recomendados de ingesta de AGP para bajar las concentraciones del colesterol total y del colesterol de las LDL, aumentar las concentraciones del colesterol de las HDL y disminuir el riesgo de
accidentes cardiovasculares son el 6% VCT. Basándose en estudios experimentales, el riesgo de peroxidación lipídica puede incrementarse con un consumo alto de PUFA (> 11%E), particularmente cuando la ingesta de tocoferol es baja. ÿ El valor superior de AMDR (U-AMDR) para la ingesta de EPA + DHA se establece en 2 g
39

diarios debido a las evidencias experimentales que indican que los suplementos altos de AGCML n-3 pueden incrementar la peroxidación lipídica y reducir la producción de citoquinas. Sin embargo, la Comisión de Expertos reconoce que valores más altos de consumo, tales como 3 g diarios, reducen otros riesgos
cardiovasculares y no producen efectos adversos a corto plazo o plazo intermedio en ensayos aleatorios, y que algunos individuos en poblaciones con un gran consumo de animales marinos ingieren cantidades mayores sin evidencia aparente de efectos perjudiciales.
40 BLOQUE: DIETOTERAPIA

ya que existe un grado de evidencia suficiente para afir-


mar que, a estos niveles, se limita el riesgo de desarro-
llar obesidad, diabetes mellitus tipo 2, cáncer de colon
y patología cardiovascular. Asimismo, en poblaciones
maduras (edad mayor a 50 años) con alto riesgo de
fracturas, el ejercicio físico regular ha demostrado un
descenso en la incidencia de osteoporosis. Es posible
que niveles de actividad mayores, promuevan mayores
beneficios para la salud; no obstante, no se proponen
para la población general, ya que podrían superar la
capacidad y la motivación de gran parte de la misma.

2.1. Fórmulas para estimar la ingesta adecuada


de energía
Se han descrito numerosas ecuaciones para estimar Figura 2.  Ejemplo de cálculo de requerimientos
el GEB y el GER en individuos adultos sanos estimadas energéticos empleando la página web nutrición
a partir de la calorimetría indirecta, posteriormente interactiva http://www.seen.es/nutricion-interactiva/
se estima el GET, en función de la actividad física. Las estimacionreqeneramb.asp.
más conocidas son la de la OMS y Harris Benedict.
También se puede estimar el gasto de cada actividad dos de cadena larga aportan al organismo 9 kcal/g y
por unidad de tiempo (horas) y sumarlas todas (méto- los de cadena media 8,3 kcal/g), colaboran en la absor-
do Factorial) (tablas 3 y 4)26. ción de las vitaminas liposolubles y en el desarrollo ti-
La NAS ha publicado unas fórmulas para estimar di- sular al ser un componente esencial de la estructura li-
rectamente los requerimientos energéticos esti- pídica de las membranas celulares.
mados (REE) en función de la edad, sexo, peso, talla y Las recomendaciones nutricionales propuestas
actividad física. Estas fórmulas se basan en estudios para la población española (tabla 2) coinciden en reco-
con doble agua marcada en individuos que realiza- mendar una ingesta dietética moderada en cuanto al
ban sus actividades habituales (tabla 5). En este caso el porcentaje de grasas totales (aproximadamente ≤ 35%
peso que se aplica es el real. También se transcriben las del valor calórico de la dieta –VCD–, baja en ácidos
fórmulas para estimar la energía total estimada grasos saturados (AGS) y trans (≤ 7-10% VCD) y con
(TEE) en personas con sobrepeso y obesas, que per- proporciones variables de ácidos grasos monoinsatura-
mitiría mantener el peso actual. Es importante fijarse dos (–AGM– del 10 al 20% del VCD) y poliinsaturados
en que en estas personas (con sobrepeso y obesas) el (–AGP– entre el 5 y el 10% del VCD). Estos porcentajes
concepto de REE no puede aplicarse, ya que no tienen se basan esencialmente en la evidencia acerca del pa-
un peso saludable y sería conveniente que redujeran la pel de la dieta en el desarrollo de enfermedades cardio-
ingesta energética por debajo del TEE11. vasculares y, en menor medida, de diabetes mellitus o
La página web «Nutrición interactiva» elaborada de obesidad21, 23, 24.
por nuestro grupo bajo los auspicios del comité gestor La ingesta de grasas saturadas es el mayor deter-
del área de Nutrición de la Sociedad Española de Endo- minante dietético de los niveles de colesterol LDL. Si
crinología y Nutrición, permite realizar los cálculos de ingerimos alimentos con bajo contenido en AGS en el
forma sencilla online (figura 2) http://www.seen.es/ contexto de una dieta con un aporte de grasas total del
nutricion-interactiva/index.html 35% del VCD, el porcentaje de AGS sería de aproxima-
damente el 7% del VCD. Por tanto, ingestas grasas su-
3.  Requerimientos de macronutrientes periores al 35% del VCD muy probablemente aporten
Para los macronutrientes, se propone el concepto porcentajes de AGS que superen los objetivos pobla-
de los llamados «rangos aceptables de distribu- cionales recomendados (< 7-10%). Existe una eviden-
ción de nutrientes»11, que son las recomendaciones cia fuerte y convincente a partir de estudios controla-
de consumo de macronutrientes expresados en térmi- dos aleatorizados de alta calidad y estudios de cohorte
nos porcentuales, que se asocia a una reducción del prospectivos de que reducir la ingesta de AGS reempla-
riesgo de enfermedades crónicas y que, a la vez, aporta zándolos por AGP disminuye el riesgo de enfermedad
una ingesta adecuada de los nutrientes esenciales. cardiovascular. Sin embargo, la evidencia que apoya
que el riesgo cardiovascular se reduzca cuando los AGS
se sustituyen por AGM es más débil (no obstante, da-
3.1.  Requerimientos de grasas tos recientes del estudio Predimed sí confirmaría esta
Las grasas procedentes de la dieta constituyen la ma- asociación)25, 27. Tampoco hay clara asociación entre el
yor fuente de energía para el organismo (los triglicéri- consumo de las grasas saturadas y los resultados de
Tema 2.  Requerimientos nutricionales 41

Tabla 3.  Fórmulas para estimar el gasto energético total (GET) en individuos adultos
sanos aplicando un factor de corrección por actividad física.
A.  MÉTODO 1: GEB (gasto energético basal) según fórmula de Harris-Benedict:
Varón = 66,47 + (13,75 x peso en kg) + (5 x altura en cm) – (6,76 x edad)
Mujer = 665,1 + (9,6 x peso en kg) + (1,85 x altura en cm) – (4,68 x edad)
GER (Gasto energético en reposo) según fórmulas de la OMS:
EDAD Mujeres Varones
0-3 61 x p – 51 60,9 x p – 54
3-10 22,5 x p + 499 22,7 x p + 495
10-18 12,2 x p + 746 17,5 x p + 651
18-30 14,7 x p + 496 15,3 x p + 679
30-60 8,7 x p + 829 11,6 x p + 879
> 60 10,5 x p + 596 13,5 x p + 487
P = peso
· Al resultante se le aplica un factor de corrección según la actividad física dominante en 24 horas
Actividad Actividad Actividad Actividad Actividad
muy ligera ligera moderada intensa muy intensa
Sexo V M V M V M V M V M
Factor 1,3 1,3 1,6 1,5 1,7 1,6 2,1 1,9 2,4 2,2
B. MÉTODO 2: De forma sencilla también se puede extrapolar el GET en función únicamente
del peso y de la actividad física * global en 24 horas:
Actividad Actividad Actividad Actividad Actividad
muy ligera ligera moderada intensa muy intensa
Sexo V M V M V M V M V M
Kcal/kg/día: * 31 30 38 35 41 37 50 44 58 51
*Estimados a partir de las ecuaciones de la OMS para personas de 19 a 74 años con un peso en la
mediana poblacional.
Nota: en obesos se recomienda aplicar el peso ajustado:
Peso ajustado para obesos = ((peso real – peso ideal) x 0,25) + peso ideal
Para estimar el peso ideal (según la OMS) de forma rápida puede valer la siguiente fórmula
(o consultar las tablas de peso ideal para la población española):
Varones: 22 x talla2 (en metros)
Mujeres: 21 x talla2 (en metros)
C. MÉTODO 3: De forma más complicada se podría estimar el gasto por actividad y por unidad
de tiempo en relación con el GER:

Factor de corrección por unidad


Actividad de tiempo (por ejemplo, hora)
dedicada a la actividad&
REPOSO: sueño tendido inactivo GER x 1
MUY LIGERA: pintar, conducir, trabajo de GER x 1,5
laboratorio, escribir a ordenador, planchar,
cocinar, juegos de mesa, etc.
LIGERA: caminar sobre superficie plana, a GER x 2,5
4-5 km/h, trabajo de taller, instalaciones eléctricas,
camareros, limpieza doméstica, golf, etc.
MODERADA: caminar de 5,5 a 6,5 km/h, cavar, GER x 5
trasportar carga, bicicleta, esquí, baile, etc.
INTENSA: caminar con carga cuesta arriba, cortar GER x 7
árboles, cavar con fuerza, fútbol, escalada, etc.
& Estimado de forma aproximada para varones y mujeres de peso y talla medio. Expresa el gasto
energético durante cada actividad. No sirve como factor de corrección para promedio diario según
actividad dominante. Hay que sumar las 24 horas.
42 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Tabla 4.  Ejemplos de estimación del gasto energético total en diferentes grupos poblacionales en función de su
actividad física (método factorial).
Factor de actividad Nivel de actividad
Horas física (coste Tiempo física (NAF) total como
Principales actividades desarrolladas
al día energético respecto x coste múltiplo del gasto
al GEB) energético basal
Ejemplo de estilo de vida sedentaria
Dormir 8 1 8
Aseo personal (vestirse, ducharse) 1 2,3 2,3
Comer 1 1,5 1,5
Cocinar 1 2,1 2,1
Permanecer sentado (tareas de oficina,
8 1,5 12
ventas, atender una tienda)
Trabajo doméstico 1 2,8 2,8
Conducir 1 2 2
Caminar a diferentes ritmos sin llevar peso 1 3,2 3,2
Actividades lúdicas «ligeras» (ver TV, sesión
2 1,4 2,8
con el ordenador, etc.)
Total 24 36,7 36,7/24 = 1,53
Ejemplo de estilo de vida activo o moderado
Dormir 8 1 8
Aseo personal (vestirse, ducharse) 1 2,3 2,3
Comer 1 1,5 1,5
Permanecer de pie, transportar cargas ligeras
(ejemplos: ser camarero, reponedor de 8 2,2 17,6
mercancías)
Caminar desde o hacia el autobús 1 1,2 1,2
Caminar a diferentes ritmos sin llevar peso 1 3,2 3,2
Ejercicio aeróbico de baja intensidad 1 4,2 4,2
Actividades lúdicas «ligeras» (ver TV, sesión
3 1,4 4,2
con el ordenador, etc.)
Total 24 42,2 42,2/24 = 1,76
Ejemplo de estilo de vida muy intensa o vigorosa
Dormir 8 1 8
Aseo personal (vestirse, ducharse) 1 2,3 2,3
Comer 1 1,4 1,4
Cocinar 1 2,1 2,1
Agricultura no mecanizada (sembrar,
6 4,1 24,6
recolección)
Recoger agua o madera 1 4,4 4,4
Tareas domésticas no mecanizadas (por ejemplo,
1 2,3 2,3
barrer, lavar la ropa y la vajilla a mano)
Caminar a diferentes ritmos sin llevar peso 1 3,2 3,2
Actividades lúdicas 4 1,4 5,6
Total 24 53,9 53.9/24 = 2.25
GEB: gasto energético basal. Nota: Una descripción más exhaustiva del coste energético por diferentes actividades físicas se recoge en
la monografía Human Energy Requeriment de la OMS: ftp://ftp.fao.org/docrep/fao/007/y5686e/y5686e00.pdf.
Tema 2.  Requerimientos nutricionales 43

Tabla 5.  Fórmulas propuestas por el NAS para calcular los requerimientos energéticos estimados (REE) en
distintos grupos de edad.

Edad, composición corporal Fórmulas (REE o TEE = kcal/día)

Niños Niños REE = 88,5 – (61,9 * edad) + CA * (26,7 * peso + 903* talla) + 25
9-18 años Niñas REE = 135,3 – (30,8 * edad ) + CA * (10 * peso + 934* talla ) + 25
Niños Niños TEE = 114 – (50,9 * edad ) + CA * (19,5 * peso + 1.161,4 * talla )
3-18 años
IMC >25 Niñas TEE = 389 – (41,2 * edad ) + CA * (15 * peso + 701,6 * talla )

Adultos Hombre REE = 662 – (9,53 *edad ) +CA * (15,91 * peso + 539,6 * talla )
>19 años
IMC 18,5-25 Mujer REE = 354 – (6,91 * edad ) + CA * (9,36 * peso + 726 * talla )

Adultos Hombre TEE = 1.086 – (10,1 * edad ) + CA * (13,7 * peso + 416 * talla )
>19 años
IMC >25 Mujer TEE = 448 – (7,95 * edad ) + CA * (11,4 * peso + 619 * talla )

1er Trimestre REE = REE de adolescente o adulto


Embarazo 2º Trimestre REE = REE de adolescente o adulto + 340
3er Trimestre REE = REE de adolescente o adulto + 452
1er Semestre REE = REE de adolescente o adulto + 330
Lactancia
2º Semestre REE = adolescente/adulto REE +400
Coeficiente de actividad (CA):
Nivel de actividad física: Niños Niñas Niños Niñas Varones Mujeres Varones Mujeres
9-18 años 9-18 años 3-18 años 3-18 años > 19 años > 19 años > 19 años >19 años
IMC > 25 IMC > 25 IMC 18,5-25 IMC 18,5-25 IMC > 25 IMC >25
Sedentaria
1,00 1,00 1,00 1,00 1,00 1,00 1,00 1,00
PAL ≥ 1 < 1,4
Ligera
1,13 1,16 1,12 1,18 1,11 1,12 1,12 1,16
PAL ≥ 1,4 < 1,6
Activa
1,26 1,31 1,24 1,35 1,25 1,27 1,29 1,27
PAL ≥ 1,6 < 1,9
Muy activa
1,42 1,56 1,45 1,60 1,48 1,45 1,59 1,44
PAL ≥ 1,9 < 2,5

NAS: National Academy of Sciences (USA). Aplicar en la fórmula: Edad en años; peso en kg y talla en metros. PAL: nivel de actividad
física (physical activity levels); TEE: energía total estimada (solo aplicable a personas con obesidad o sobrepeso). Consultar significado
en el texto.
Fuente: Institute of Medicine. El texto completo se puede encontrar en: http://www.nap.edu.

salud (mortalidad total, mortalidad cardiovascular en- forma, los últimos metaanálisis sugieren que el consu-
fermedad cardiovascular y diabetes) en los estudios mo de AGS per se no sería nocivo para la salud cardio-
donde la grasa saturada es sustituida por carbohidra- vascular28.
tos refinados. Su sustitución por carbohidratos de bajo Los ácidos grasos trans (AGT) son isómeros de los
índice glucémico sí podría disminuir el riesgo. No obs- ácidos grasos insaturados «cis» en los que los dobles
tante, según metanálisis recientes, las evidencias de enlaces están en la posición «trans». Los AGT elevan los
grandes estudios prospectivos tampoco sugieren que niveles de LDL-c y disminuyen los niveles de HDL-c (gra-
los AGS (aisladamente sin tener en cuenta el resto de do de evidencia A). Los AGT se encuentran de forma
los macronutrientes) se relacionen con el riesgo de dia- natural en ciertos alimentos (carnes, productos lác-
betes. Esta información choca con un cuerpo abun- teos), aunque en escasa proporción (2 a 3%). No obs-
dante de evidencias previas de que los AGS son perju- tante, la mayor fuente de AGT aportados en una dieta
diciales y necesita ser contrastada antes de poder occidental procede de alimentos elaborados. Así, la
incorporarla a recomendaciones nutricionales. De igual hidrogenación de los aceites vegetales es la principal
44 BLOQUE: DIETOTERAPIA

fuente de AGT y se encuentra presente en productos de sus fuentes vegetales (semillas, aceites derivados y
de bollería industrial, en la preparación de muchos ali- margarinas). Finalmente, las dietas bajas en grasa (al-
mentos de «comida rápida» y snacks que emplean tas en hidratos de carbono, particularmente aquellas
aceites vegetales solidificados y en el recalentamiento con un alto índice glucémico) carecen de efecto pre-
repetido de aceites para freír. No obstante, según el ventivo cardiovascular, mientras que las altas en grasa
informe sobre el contenido de ácidos grasos trans en de origen vegetal, como la dieta mediterránea, son
los alimentos en España de 2015 publicado por la protectoras, razón por la que en España no parece ne-
Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria cesario establecer un dintel superior de ingesta de gra-
y Nutrición, la cantidad de estos ácidos grasos en es- sa23. El estudio Predimed está demostrando claramente
tos alimentos ha disminuido radicalmente. La gran las bondades del aceite de oliva virgen y de la grasa
mayoría de los grupos de alimentos presentan un por- procedente de los frutos secos, en el contexto de un
centaje de AGT inferior al 2% con respecto a la grasa patrón de dieta mediterráneo, en la prevención de
total. Los pocos alimentos que lo superan pertenecen eventos cardiovasculares, diabetes y otras enfermeda-
al grupo de los lácteos, que contienen AGT de forma des crónicas25.
natural29. Los ácidos grasos ω3 de origen marino son car-
Existe evidencia clara de que una ingesta elevada de dioprotectores y se recomienda consumir pescado graso
AGT (generalmente > del 2 % de la energía total), ≥ 2-3 veces/semana para cumplir con la recomendación
contribuye a aumentar el riesgo de mortalidad total, de al menos 250 mg/día. Sin embargo, la ingesta de
mortalidad por enfermedad cardiovascular, de enfer- metilmercurio principalmente a través del pescado y
medad cardiovascular y de diabetes tipo 2. marisco contaminado puede producir efectos adversos
Los AGT industriales contienen ácido elaídico en un en la salud, por lo que es útil seguir una serie de reco-
25% con 18 átomos de carbono y un doble enlace en mendaciones especialmente en el consumo de pescados
configuración trans en la posición 9 y solo un 10% de que se encuentran en el final de la cadena alimentaria31.
ácido vaccénico (VA), mientras que los AGT procedentes El grupo de estudio para la prevención de la exposición
de los rumiantes contiene un 45% de VA y un 5% de al metilmercurio (GEPREM-Hg), ha elaborado un docu-
elaídico . Aunque el VA suministrado aisladamente eleva mento de consenso donde se recogen las recomenda-
el colesterol LDL similarmente a los AGT industriales, el ciones de consumo para la población en función de la
consumo de grasa láctea no se ha asociado en estudios edad, peso, tipo de pescado y posibilidad de gestación
observacionales a un incremento de enfermedad cardio- http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/25561095
vascular. No obstante, aunque parece que los AGT de la (figura 3).
grasa láctea serían menos perjudiciales, la evidencia dis- Respecto al colesterol dietético, la American Heart
ponible es insuficiente para determinar si existe alguna Association y la guía «USDA» Dietary Guidelines for Ame-
diferencia entre los AGT de distintas fuentes (proceden- ricans (http://www.health.gov/dietaryguidelines/2015.
tes de rumiantes o de producción industrial) en relación asp), han indicado que la evidencia para restringir el co-
con el riesgo de enfermedad coronaria o cardiovascu- lesterol dietético para bajar el colesterol total y LDL es
lar30. Por todo ello la ingesta de ácidos grasos trans debe insuficiente e incluso lo consideran como un nutriente
ser lo más baja posible en el contexto de una dieta nu- que no causaría problemas en cuanto a su consumo. Por
tricionalmente adecuada y en todo caso menor a 1%. En otro lado, la ingesta de huevos (que aportan alto conte-
España en la actualidad la ingesta de estos AG suele ser nido en colesterol en la yema y es la principal fuente del
menor al 1% en general debido, en parte, a que la in- mismo en la dieta occidental) no parece influir ni en los
dustria alimentaria ha reducido notablemente su aporte factores de riesgo cardiovascular ni en sus efectos finales
en alimentos elaborados. (enfermedad cardiovascular), por lo que no está claro
Por estas razones el consenso español sobre las que se deba restringir su consumo en el contexto de un
grasas y aceites en la alimentación de la pobla- patrón de dieta saludable18.
ción española adulta promovido por la FESNAD,
no es partidario de establecer un umbral de ingesta de 3.2. Requerimientos de carbohidratos
AGS, debido a que su ingesta es nociva solo en función
y fibra dietética
del alimento que los contiene, desaconsejándose ali-
mentos que los contienen en exceso, como la mante- Los carbohidratos (HC) digeribles aportan a las célu-
quilla y algunos derivados cárnicos, bollería y fritos las del organismo energía, particularmente al cerebro
comerciales. Los AGM son beneficiosos o neutros para que es un órgano carbohidrato-dependiente. La OMS
el riesgo cardiovascular según su fuente dietética (acei- estimó la cantidad de HC imprescindible para que no
te de oliva virgen frente a otras grasas), y no se estable- se produzca cetosis la dosis de 50 g/día32. La NAS defi-
cen tampoco limitaciones de ingesta. Los AGP n-6 son nió las RDA para los HC en 130 gramos al día (véase la
cardioprotectores y el nivel recomendable de ingesta tabla 1) considerando que es el nivel de ingesta sufi-
(5-10% de la energía) no siempre se cumple en la po- ciente para cubrir los requerimientos del cerebro en
blación española, que debería aumentar el consumo más del 98% de los individuos de la población sana11.
Tema 2.  Requerimientos nutricionales 45

Tomado de González-Estecha M, Bodas-Pinedo A, Guillén-Pérez JJ, Rubio-Herrera MÁ, Martínez-


Álvarez JR, Herráiz-Martínez MÁ, et al. [Consensus document on the prevention of exposure to
methylmercury in Spain]. Nutr Hosp. 2014 Nov 21;31(1):16-31.

Figura 3.  Recomendaciones de consumo de pescado en función del contenido en


metilmercurio en España.

No obstante, la ingesta de carbohidratos, en la mayo- en personas obesas . Sin embargo, parece existir una
ría de las poblaciones mundiales, es muy superior a la asociación más clara entre la elevada ingesta de bebi-
descrita como RDA. das azucaradas y la promoción del incremento pon-
De media por cada gramo de HC se aporta al orga- deral y el riesgo de obesidad y diabetes tipo 2, por lo
nismo 4 kcal. Por cada gramo los monosacáridos apor- que se recomienda limitar o evitar su consumo. La fruc-
tan 3,75 kcal, los disacáridos 3,94 kcal, y los polisacári- tosa contenida en el jarabe de maíz alto en fructosa,
dos absorbibles 4,13 kcal. La fibra también tiene un que es la principal fuente de carbohidratos en estas
valor calórico (de entre 1 y 2,5 kcal por gramo) proce- bebidas, podría favorecer la lipogénesis hepática y el
dente de la fermentación en el colon. desarrollo de insulinorresistencia y en personas suscep-
La OMS recomienda un consumo restrictivo de tibles, diabetes tipo 2 y esteatosis hepática .
«azúcares libres» (menor del 10% del VCD o incluso Tal como recoge la OMS en un informe de 2015, va-
mejor menor al 5%) incluyendo a los mono y disacári- rios metanálisis de ensayos controlados aleatorizados en
dos añadidos en la elaboración o fabricación de ali- adultos sugieren una asociación entre la reducción de la
mentos, así como los azúcares que naturalmente se ingesta de azúcares libres y la reducción de peso corpo-
encuentran en la miel, zumos de frutas y almíbares . La ral. El aumento de la ingesta de azúcares libres se asoció
NAS sugiere que el límite máximo de «azúcares aña- con un aumento en el peso corporal. En general, la cali-
didos», durante la fabricación y procesamiento de los dad de la evidencia disponible para adultos se consideró
alimentos y de bebidas, no debe superar el 25% del moderada. En los niños los estudios en los que las inter-
total de la energía aportada diaria para evitar el riesgo venciones fomentaban reducir los alimentos y las bebi-
de presentar una ingesta insuficiente de otros nutrien- das azucaradas tuvieron, por lo general, bajo cumpli-
tes esenciales, especialmente de calcio, vitamina A, miento y no se objetivaron cambios en el peso corporal.
hierro y zinc. Un aumento en la ingesta de azúcares se Sin embargo, en los metanálisis de los estudios de co-
asocia a un incremento de la ingesta calórica. No obs- horte prospectivos, con períodos de seguimiento de un
tante, existen datos contradictorios en la literatura año o más, sí se objetivó que los niños con los consumos
acerca de la relación entre incremento de la ingesta de más altos de bebidas azucaradas tenían una mayor pro-
azúcares y la obesidad. La ausencia de asociación en babilidad de tener sobrepeso u obesidad que los niños
muchos estudios podría deberse a un infrarregistro de con los menores consumos. La calidad global de la evi-
su ingesta en las encuestas dietéticas, especialmente dencia disponible para una asociación entre la reduc-
46 BLOQUE: DIETOTERAPIA

ción de azúcares libres y disminución del peso corporal obstante, la evidencia epidemiológica todavía no es de-
en los niños se considera moderada, mientras que la finitiva, posiblemente por la dificultad de separar el efec-
calidad de la evidencia de una asociación entre un to del IG de otros posibles factores contribuyentes (pre-
aumento de la ingesta de azúcares libres y el aumento sencia de otros macronutrientes y micronutrientes, de
de peso corporal se considera baja33. fibra dietética, diferentes métodos de cocinado, y otros
Diferentes estudios de cohortes con un grado de evi- factores económicos y socioculturales).
dencia moderado, realizados en niños sugieren una aso- La ingesta de alimentos ricos en fibra (mixta), es-
ciación positiva entre la ingesta de azúcares libres y la pecialmente de fruta y verduras frescas, se asocia a un
caries dental. Las tasas más altas de caries dental se descenso probable del riesgo de cáncer de colon y rec-
producen cuando el nivel de la ingesta de azúcares libres to, esófago y estómago, de obesidad , de diabetes tipo
es mayor del 10% de la energía total ingerida. En otros 2. Asimismo, la ingesta de alimentos ricos en fibra total
estudios, los niveles más bajos de desarrollo de caries y, especialmente, insoluble (cereales integrales) se aso-
dental se observaron cuando la ingesta de azúcares per cia a un descenso del riesgo de enfermedad cardio­
cápita fue de menos de 10 kg/persona/año (aproximada- vascular. La ingesta de alimentos con elevado conteni-
mente el 5% del valor calórico total). Además, se objetivó do en fibra disminuye el riesgo de obesidad y de
una dosis respuesta entre ingesta de azúcares e inciden- diabetes tipo 2. Las frutas y verduras son alimentos de
cia de caries incluso con ingestas menores al 5% del VCT. baja densidad energética que aumentan la saciedad y
La ingesta de bebidas azucaradas, incluyendo los zumos son útiles en programas de pérdida o mantenimiento
de frutas, podría aumentar el riesgo de desarrollar ero- de peso. No obstante, todos estos efectos favorables
sión dental; sin embargo, el consumo de frutas comple- de los alimentos ricos en fibra no pueden ser separados
tas no presenta relación alguna con la caries33. de otros componentes dietéticos y patrones alimenta-
El índice glucémico (IG) se define como el área del rios que afectan al riesgo y a otros estilos de vida salu-
incremento bajo la curva de respuesta glucémica de una dables20.
porción de 50 g de carbohidratos de un alimento de
ensayo, expresado en porcentaje de respuesta a la mis- 3.3.  Requerimientos proteicos
ma cantidad de HC de un alimento estándar (general-
mente el pan blanco)34. La carga glucémica (CG) se Las proteínas constituyen el principal componente
calcula multiplicando el IG por los gramos de HC dispo- estructural de las células y tejidos del organismo y son
nibles en el alimento. Las dietas basadas en alimentos indispensables para un funcionamiento adecuado del
con menor índice glucémico y carga glucémica parecen mismo. Además aportan al organismo energía (4
tener ventajas en el mantenimiento de la salud, median- kcal/g) que puede ser utilizada en circunstancias fisio-
te un descenso en el riesgo de desarrollar diabetes melli- lógicas y patológicas.
tus y enfermedad cardiovascular (a través de sus efectos Una ingesta proteica adecuada debe contener un
favorables en el perfil lipídico, glucemia postprandial, aporte suficiente de aminoácidos (Aa) esenciales y,
respuesta insulinémica y otros) e incluso, disminuyendo a la vez, de nitrógeno para que el organismo pueda
el riesgo de desarrollar diferentes tipos de cáncer. No fabricar los Aa no esenciales (tabla 6). Los alimentos

Tabla 6.  Clasificación de los aminoácidos.

«Condicionalmente Precursores de los «condicionalmente


Esenciales No esenciales
esenciales» esenciales»
Histidina Alanina Arginina Glutamina/glutamato, aspartato
Isoleucina A. aspártico Cisteina Metionina, serina
Leucina Asparagina Glutamina A. glutámico/amoníaco
Lisina A. glutámico Glicina Serina, colina
Metionina Serina Prolina Glutamato
Fenilalanina Tirosina Fenilalanina
Treonina
Triptófano
Valina

Fuente: Institute of Medicine. El texto completo se puede encontrar en: http://www.nap.edu.


Tema 2.  Requerimientos nutricionales 47

que contienen todos los Aa esenciales en cantidad su- 4.1.  Ingesta de sal y potasio
ficiente y con una relación adecuada para mantener el
equilibrio del nitrógeno (mantenimiento de los tejidos) Debido al riesgo de hipertensión asociado al consu-
y permitir el crecimiento se conocen como «alimentos mo elevado de sal, las recomendaciones de consumo de
proteicos completos» (también se utiliza el término sodio para la Unión Europea proponen como objetivo
de alimentos con un alto valor biológico, VB). En una ingesta de sal menor a 6 g/día (aprox < 2,4 g de
general, los alimentos de mayor VB son los proceden- sodio), tanto para niños como para adultos. Esta reco-
tes de los productos animales (como carnes, pescados, mendación es similar a la cifra de máximo nivel tolerable
huevos o proteínas lácteas). (UL) propuesto por la NAS (2,3 g de sodio para adultos
sanos sin hipertensión), aunque ambas están muy aleja-
La definición de los requerimientos de proteínas
das del consumo habitual en las sociedades occidenta-
en personas sanas se basa en la dosis de proteínas in-
les. La OMS ha revisado en 2012 sus recomendaciones
gerida en la dieta que compensa las pérdidas orgánicas
reduciéndolo a <2 g/día de sodio (5 g/día de sal ) en
de nitrógeno (balance nitrogenado). Las RDA no hacen
adultos (con un grado de recomendación alto)36. Para
distinción para las personas con hábitos dietéticos ve-
asegurar una ingesta adecuada de potasio se recomien-
getarianos, ya que es posible alcanzar la misma calidad
da un consumo elevado de (5 raciones día) de ingesta
proteica que la procedente de fuentes animales con
de frutas y verduras. La OMS recomienda aumentar la
una combinación de los alimentos adecuada. Se pro-
ingesta de potasio para reducir la presión arterial y el
pone una RDA de 0,8 g/kg/día de proteínas. Esta ci-
riesgo cardiovascular al menos a 90 mmol diarios para
fra es claramente inferior a la que se ingiere habitual-
adultos (3.510 mg/día)37.
mente en los países occidentales11, 35.

4.2.  Ingesta de hierro


3.4.  Ingesta de alcohol
La prevalencia de ferropenia es muy alta en Europa,
Diversos estudios epidemiológicos han demostrado especialmente en adolecentes (por sus mayores reque-
una relación en «J» entre el consumo de alcohol y la rimientos), y también en mujeres con dietas predomi-
mortalidad total. Un consumo moderado se asocia a nantemente vegetarianas. La adición de vitamina C
menor mortalidad total y riesgo de diabetes y enfer- (75-100 mg/día) bloquea los efectos inhibitorios de
medad cardiovascular. Además, el consumo modera- ciertos nutrientes (como taninos del té y café, fitatos
do de alcohol en personas con diabetes podría aso- de cereales, legumbres y frutos secos; o la soja) favore-
ciarse a mejoras en el control metabólico. No ciendo la absorción de hierro «no hemo». Otros ácidos
obstante, por sus efectos perjudiciales sobre otras como el cítrico, málico, tartárico y láctico, presentes en
enfermedades, según la OMS el consumo de alcohol frutas y vegetales, podrían tener un efecto similar. Por
no debe ser recomendado de forma general a la po- ello, solo se recomienda su suplementación farmacoló-
blación20. Por el contrario, otros organismos naciona- gica en etapas de crecimiento muy rápido, pérdidas
les e internacionales sí lo incluyen en sus recomenda- excesivas, embarazo (si existe dieta insuficiente) y en
ciones (véase tabla 2), especialmente en el ámbito presencia de dietas muy restrictivas y macrobióticas6.
mediterráneo, ya que el vino formaría parte del pa-
trón alimentario que se ha asociado a la prevención
de enfermedades crónicas.
4.3.  Ingesta de ácido fólico
En cualquier caso, el consejo debe ser individualiza- El riesgo de defectos del tubo neural en la descen-
do, prudente, basado en las evidencias científicas y en dencia está ligado a la dieta de la madre antes del em-
las preferencias de los sujetos. En las personas (espe- barazo y en los primeros meses de gestación. Por ello
cialmente en mayores de 45 años) que consuman con se recomienda que cualquier mujer con posibilidad de
agrado cantidades moderadas de alcohol, preferente- quedar embarazada debe ingerir 400 µg/día de folato
mente con las comidas, pueden mantener el hábito. procedente de suplementos o alimentos enriquecidos,
además del folato procedente de una dieta variada. La
suplementación de fólico previa a gestaciones planifi-
4.  Requerimientos de micronutrientes
cadas, así como su mantenimiento durante el primer
La realización de una dieta en los rangos estableci- trimestre de gestación, es hoy una práctica generaliza-
dos de energía y macronutrientes permite a la pobla- da en nuestro país.
ción general cubrir todos los requerimientos de micro- Una ingesta alta en folatos podría reducir el riesgo
nutrientes sin presentar efectos adversos. En las líneas de enfermedad cardiovascular. Para conseguir un
posteriores nos referiremos únicamente a las recomen- aporte apropiado de folatos poblacional se propone la
daciones de aquellos micronutrientes que se relacio- fortificación de alimentos básicos (como los cereales) y
nan de forma más evidente con la prevención de los el aumento de consumo de fuentes naturales (verduras
problemas de salud pública más prevalentes en las so- de hoja oscura, fruta, pan, cereales, cacahuetes, avella-
ciedades occidentales. nas, hígado).
48 BLOQUE: DIETOTERAPIA

4.4.  Ingesta de vitamina B12 plo, entre 700 y 1.000 mg/día) . Por otro lado y pres-
cindiendo de la población deficiente en vitamina D
La vitamina B12 está producida en la naturaleza úni- (especialmente en adultos mayores de 50 a 60 años),
camente por microorganismos. Por ello las plantas no en la que sí son efectivos, no hay evidencia suficiente
la contienen. La carencia de vitamina B12 es, por tan- para recomendar tampoco suplementos de vitamina D
to, frecuente en personas que siguen dietas desequili- a personas sanas. En la literatura existe una fuerte dis-
bradas y en veganos. La deficiencia de vitamina B12 cusión sobre la prevalencia de déficit poblacional y los
también es frecuente en ancianos (se han descrito pre- valores para definir el déficit de vitamina D y cuándo
valencias del 16% en mayores de 75 años) general- deben tratarse41.
mente por atrofia gástrica, que disminuye su absor-
ción, junto con disminución de las fuentes que lo
contienen. Por tanto, debe suplementarse en ancianos 4.7.  Ingesta de antioxidantes
con déficit confirmado de vitamina B12, especialmente La ingesta de alimentos ricos en vitaminas antioxi-
si presentan anemia o alteraciones neurológicas o cog- dantes (vitamina E, beta carotenos, vitamina C y
nitivas. No obstante, una suplementación precoz en selenio) parece reducir la incidencia de enfermedad
ancianos con déficit moderado pero sin anemia ni sín- cardiovascular al margen de otros factores de riesgo.
tomas neurológicos o cognitivos no ha demostrado Sin embargo, el aporte de antioxidantes no proceden-
beneficios claros sobre estos síntomas38. tes de la dieta (sino como suplementos), tanto en pre-
vención primaria como secundaria, no han encontrado
4.5.  Ingesta de Yodo descensos en el riesgo de desarrollar enfermedad car-
En España, en los últimos años, ha mejorado nota- diovascular o cáncer e, incluso, se ha observado un
blemente la ingesta de yodo (tal como recogen la OMS aumento del riesgo42.
y Unicef y publicaciones españolas), con medianas po-
blacionales, en general, mayores de 100 µg/l39. Los fac- 4.8. Otros componentes fitoquímicos
tores que más han influido parecen ser el consumo de los alimentos
voluntario de sal yodada y la contribución de los lác-
teos a la ingesta yódica (con concentraciones próximas Los vegetales y frutas son portadores de una larga
a los 250 µg/l). No obstante, aunque la yoduria media lista de factores biológicamente activos: flavonoides,
de las mujeres embarazadas y lactantes ha mejorado cumarinas, fitatos, carotenos, fitosteroles, tocotrieno-
en los últimos años, suele estar por debajo de los nive- les, licopenos, saponinas, etc., que aun no siendo
les deseables. En España se recomienda un consumo esenciales para la vida y no pudiendo por tanto consi-
universal de sal yodada. En la mujer embarazada y derarse vitaminas, tienen efectos significativos sobre el
lactante las necesidades aumentan y no son garantiza- estado de salud. Sin embargo, todos estos efectos fa-
das suficientemente con el consumo de alimentos en- vorables no pueden ser separados de otros componen-
riquecidos con yodo, por lo que sería necesario utilizar tes dietéticos que afectan al riesgo de enfermedades
un suplemento extra de yodo en forma de yoduro po- crónicas y a otros estilos de vida saludables (como por
tásico hasta alcanzar los requerimientos. ejemplo, hacer ejercicio o no fumar).
Los patrones de dieta saludables (como el me-
diterráneo) con alto contenido en frutas, verduras,
4.6.  Ingesta de calcio y vitamina D
aceites vegetales (especialmente oliva virgen), vino, le-
Las ingestas recomendadas de calcio deben alcan- gumbres, cereales integrales, frutos secos, etc. contie-
zarse fundamentalmente mediante la ingesta de pro- nen una cantidad de estos componentes que favore-
ductos lácteos, ya que la biodisponibilidad del calcio es cen el descenso del riesgo cardiovascular y de otras
relativamente alta (porcentaje de absorción entre el 20 enfermedades crónicas más allá de la propia composi-
y el 45%) frente al contenido en alimentos vegetales, ción en macronutrientes.
que es menor, ya que contienen compuestos (oxalatos,
fitatos y fibra) que pueden interferir su absorción. Los
5.  Guías alimentarias
suplementos deben plantearse solo en personas que
no alcanzan la ingesta recomendada a partir de fuen- Para facilitar a la población el cumplimiento de las
tes naturales y, como tratamiento adyuvante de la os- recomendaciones dietéticas se han elaborado guías
teoporosis ya establecida40. En cualquier caso, existe alimentarias que hacen referencia a alimentos (no a
una discusión en la literatura sobre los beneficios (no nutrientes). Son recomendaciones generales que for-
se ha demostrado claramente descenso de riesgo de man parte de la política sanitaria de un país o región y
fracturas) y riesgos (estreñimiento, litiasis renal, even- su objetivo básico es la prevención de enfermedades
tos cardiovasculares, etc.) de la suplementación con crónicas o degenerativas y de deficiencias nutricionales
calcio para la población general «sana» adulta y sobre en la población. Las guías alimentarias suelen dividir
cuáles deben ser las ingestas de referencia (por ejem- los alimentos en grupos y los distribuyen de diferentes
Tema 2.  Requerimientos nutricionales 49

Rueda de los alimentos (Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación en http://


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Figura 4.  Ejemplos de diferentes representaciones gráficas de las Guías alimentarias.

formas y representaciones gráficas con el objetivo de 3. European Food Safety Authority 2006. Tolerable
hacerlo comprensible a la mayoría de la población. Las Upper Intake Levels for Vitamins and Minerals [In-
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50 BLOQUE: DIETOTERAPIA

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Tema 2.  Requerimientos nutricionales 51

31. González-Estecha M, Bodas-Pinedo A, Guillén-Pé- min B-12 supplementation to prevent cognitive


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Tema 3.
Etiquetado nutricional
Virginia Bellido Castañeda
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Cruces. Baracaldo (Bilbao)

Cristina Porca Fernández


Dietista, Nutricionista, Tecnóloga Alimentos. Servicio Endocrinología y Nutrición. Complejo
Hospitalario Universitario de Ferrol (A Coruña)

Diego Bellido Guerrero


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Hospitalario Universitario de Ferrol (A Coruña)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 53-65.

1. Introducción
2. Normativa legal del etiquetado nutricional
3. Información nutricional
4. Declaraciones nutricionales y de propiedades saludables
5. Otros aspectos del etiquetado
6.  Futuro de la información al consumidor, el envasado inteligente
7. Resumen
8. Bibliografía

1. Introducción mercado nuevos alimentos, diferentes a los tradiciona-


A lo largo de la historia, el ser humano ha estado pre- les, muchos de los cuales incorporan mensajes acerca de
ocupado por los alimentos que ingería, por su calidad, sus propiedades nutritivas y saludables3. Ante esta situa-
su origen y los posibles efectos que sobre la salud po- ción el consumidor necesita disponer de herramientas
drían producir. En la actualidad, dos vectores rigen adecuadas para realizar una compra informada, base
nuestro consumo alimentario: conseguir un mejor esta- indispensable para una alimentación saludable. Uno de
do de salud y disminuir el tiempo de elaboración de los los requisitos imprescindibles para ello es conocer la
alimentos en el domicilio. El primero de estos motivos composición nutricional a través de un etiquetado claro,
viene dado por el creciente aumento de enfermedades completo y estandarizado.
crónicas (diabetes, obesidad, enfermedades cardiovas- El etiquetado se define como: «las menciones, indica-
culares, ciertos tipos de cáncer) que están claramente ciones, marcas de fábrica o comerciales, dibujos o sig-
relacionadas con el estilo de vida y que ha despertado nos relacionados con un producto alimenticio y que fi-
un gran interés, por parte de los gobiernos y del consu- guren en cualquier envase, documento, rótulo, etiqueta,
midor, para mejorar la calidad de nuestra alimentación1, faja o collarín, que acompañen o se refieran a dicho
2
. Por otro lado, la progresiva incorporación de la mujer producto alimenticio»4. Puede ser cualquier documento,
al mercado laboral, con menor tiempo disponible para bien sea escrito, impreso o gráfico, que aparece en el
la adquisición de alimentos y su elaboración culinaria ha envase de un alimento, pudiéndose afirmar que la eti-
condicionado que, en los últimos 20-30 años, la pobla- queta es su tarjeta de identidad. Es el principal medio de
ción de los países industrializados haya pasado de con- comunicación entre los productores y el consumidor, y
sumir predominantemente alimentos frescos a incluir en nos permite conocer el alimento, su origen, su modo de
su alimentación una cantidad cada vez mayor de ali- conservación, los ingredientes que lo componen o los
mentos procesados, listos para su uso. Además, y, debi- nutrientes que aportan a nuestra dieta. Una gran parte
do a la globalización de los mercados y al desarrollo de de los compradores afirma leer la información del eti-
nuevas tecnologías alimentarias, cada día aparecen en el quetado de los productos alimentarios que adquiere.

53
54 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Por ello es muy importante que haya una regulación que cado el 18 de julio de 2008). Los aditivos se desig-
nos asegure comprender de forma sencilla y clara toda nan por el nombre del grupo al que pertenecen
la información relativa a los alimentos que consumimos. seguidos por su nombre especifico o del sistema
de numeración adoptado por la Unión Europea
2.  Normativa legal del etiquetado (UE), que consisten en la letra E seguida de una
nutricional cifra de 3 dígitos; si el aditivo no tiene número
asignado en la UE se utiliza la letra H seguida de
El etiquetado está regulado por normas legales: in- una cifra de 4 dígitos. La letra E nos indica por
ternacionales (códex alimentario), comunitarias y esta- tanto que el uso de ese aditivo está autorizado en
tales. Estas normas se van adaptando a las que la Co- la UE. Sobre la presencia en los alimentos de orga-
misión Europea elabora y revisa periódicamente y cuya nismos modificados genéticamente (OMG) es
normativa inicial se remonta a 1979. obligatoria su inclusión en la lista de ingredientes
El 25 de octubre de 2011, el Parlamento Europeo y el si su presencia es superior al 0,5% (cantidades in-
Consejo adoptaron el Reglamento (UE) nº 1169/2011 feriores se consideran accidente o contamina-
sobre la información alimentaria facilitada al consumi- ción). Todas las sustancias cuyo origen sea un
dor. Dicho reglamento modifica las disposiciones de eti- OMG deben mencionarlo en la lista de ingredien-
quetado de los alimentos antes vigentes en la Unión tes con las palabras «modificado genéticamente».
para permitir a los consumidores elegir con conocimien- •  Alérgenos: Se destacan todas las sustancias usa-
to de causa y utilizar los alimentos de forma segura, ga- das en la fabricación y presentes en los productos
rantizando al mismo tiempo la libre circulación de los causantes de alergias o intolerancias.
alimentos producidos y comercializados legalmente. •  Cantidad neta: La cantidad de producto se ex-
Entró en vigor el 12 de diciembre de 2011, siendo apli- presa en litros, centilitros, mililitros, kilogramos o
cable a partir del 13 de diciembre de 2014, con la excep- gramos, según el tipo de producto.
ción de las disposiciones relativas a la información nutri- •  Fechas duración/caducidad: La fecha de dura-
cional, aplicables a partir del 13 de diciembre de 20165. ción es la fecha hasta la que el alimento conserva
En este reglamento se regula la información obliga- sus propiedades: «consumir preferentemente antes
toria y facultativa en la etiqueta y cómo tiene que apa- del…» seguido del día/mes/año o «consumir prefe-
recer reflejada. rentemente antes del fin de...» seguido de mes/año
o solo año. La fecha de caducidad aparece en pro-
2.1.  Información obligatoria de los productos ductos muy perecederos, como el pescado fresco o
envasados la carne picada: «fecha de caducidad...» seguido
del día/mes y eventualmente el año.
Los alimentos envasados son aquellos que se enva- •  Conservación y utilización: Se indicarán pautas
san antes de su venta, de forma que no se pueda mo- cuando el alimento tenga unas condiciones espe-
dificar el contenido sin abrir el envase, por ejemplo: ciales de conservación y/o de utilización.
yogures, cajas de cereales, botellas o cartones de leche. •  Empresa: Se indica el nombre o la razón social y
La siguiente información se debe indicar en su eti- la dirección de la empresa alimentaria.
queta de forma clara, legible y en castellano6, 7: •  País de origen/lugar de procedencia: Obliga-
torio en algunas circunstancias.
•  Denominación: Indica qué es exactamente lo •  Modo de empleo: Debe indicarse de forma que
que se ofrece. Debe incluir la denominación legal permita un uso apropiado del alimento, en caso
del alimento, y si esta no existe, se utiliza la deno- de que fuese difícil sin esta información.
minación habitual o descriptiva, de forma que po- •  Alcohol: Se indica el volumen de alcohol «% vol»
damos saber en todo momento de qué se trata. en las bebidas que tengan más de un 1,2 %.
•  Ingredientes: La lista de ingredientes (de mayor •  Información nutricional: La información nutri-
a menor peso) incluye las sustancias o productos cional incluye el valor energético y las cantidades
que se utilizan en la fabricación del alimento y que de grasas, grasas saturadas, hidratos de carbono,
permanecen en el producto final. Es obligatoria azúcares, proteínas y sal.
excepto en algunos productos, como por ejemplo
los productos que proceden de un solo ingredien-
2.2. Las claves de las nuevas etiquetas
te; frutas, hortalizas y patatas sin manipular; vina-
gres de fermentación sin otros ingredientes añadi- El nuevo reglamento, además de armonizar cuestiones
dos; queso, mantequilla, leche y nata fermentada ya reguladas, introduce importantes novedades en mu-
sin ingredientes añadidos en el proceso. Deben chos ámbitos fundamentales, con el objetivo de conse-
enumerarse también todos los aditivos, y aromas guir un alto nivel de protección de la salud de los consu-
que contengan y de los cuales existe una lista es- midores y garantizar su derecho a la información para que
pecífica legislada (Real Decreto 1245/2008, publi- puedan tomar sus decisiones con conocimiento de causa.
Tema 3.  Etiquetado nutricional 55

Las principales novedades que introduce son8: ahora solo era obligatoria en el caso de que exis-
tieran declaraciones nutricionales o de propieda-
•  Etiquetas más legibles: Letra más grande y legi- des saludables, pasa a ser obligatoria a partir del
ble. El tamaño mínimo en envases grandes ha de 13 de diciembre de 2016. Los datos relativos a la
ser de 1,2 milímetros de altura y en los pequeños información nutricional y su contenido se explican
de 0,9 milímetros. con más detalle en el apartado correspondiente
•  Alérgenos: En los alimentos envasados la infor- del capítulo.
mación sobre los alérgenos deberá aparecer en la •  Todos los datos juntos: La información debe
lista de ingredientes, debiendo destacarse me- estar «en el mismo campo visual», entendiendo
diante una composición tipográfica que la dife- por campo visual cualquier superficie de un enva-
rencie claramente del resto de la lista de ingre- se legible desde un único punto de visión. Es de-
dientes (por ejemplo, mediante el tipo de letra, cir, los nutrientes, los avisos sobre alérgenos, el
estilo o color de fondo). origen, etc., deben estar juntos, de forma que de
En ausencia de una lista de ingredientes debe in- un vistazo el consumidor pueda acceder a toda la
cluirse la mención «contiene», seguida del nom- información. Hasta ahora se podía repartir por
bre de la sustancia o producto. todo el envase.
Los alérgenos también deberán ser indicados en los
alimentos que se suministran sin envasar al consu- En la figura 1 podemos ver un ejemplo de la eti-
midor final o se envasan en el punto de venta, por queta de un producto antes y después del Reglamen-
ejemplo en los establecimientos de restauración. to 1169/2011. Entre las diferencias entre ellas, pode-
•  Origen del producto: Se extiende la obligatorie- mos destacar en la figura 1B: toda la información
dad de indicar el país de origen a la carne fresca aparece en el mismo campo visual; en la información
de cerdo, ovino, caprino y aves de corral. Hasta nutricional cambia el orden de los nutrientes, adap-
ahora solo era obligatorio para carne fresca de va- tándose al nuevo reglamento, y se sustituye la pala-
cuno, frutas y verduras, miel, aceite de oliva, así bra sodio por sal; al expresar la información nutricio-
como aquellos casos en los que no hacerlo pudie- nal por galleta se hace referencia debajo del cuadro
se suponer un engaño al consumidor. al número de galletas que hay en el envase; y en el
•  Procedencia de los aceites o grasas vegeta- listado de ingredientes se especifica el tipo de aceite
les: Los aceites o grasas de origen vegetal se po- vegetal.
drán agrupar en la lista de ingredientes bajo la
designación «aceites vegetales» o «grasas vegeta- 2.3.  Información obligatoria de los productos
les», pero deberán ir acompañados de la indica-
no envasados
ción del origen vegetal específico.
•  Alimento auténtico o copia: Si un producto Los alimentos no envasados son aquellos que se pre-
no es exactamente lo que parece (palitos de pes- sentan sin envasar o se suministran por establecimien-
cado, salchichas, etc.) los alimentos de sustitu- tos que sirven comidas (bares, restaurantes, comedo-
ción irán etiquetados de manera destacada en el res, etc.), los que se suministran a otros establecimientos
envase y no solo en la lista de ingredientes. En (residencias de ancianos, hospitales, colegios, etc.), los
carnes y pescados, además, se informará de la alimentos que se venden al peso o a granel (legumbres,
presencia de agua añadida, aditivos, enzimas o hortalizas, etc.), los productos que se envasan a peti-
cualquier tipo de proteínas adicionadas de distin- ción del consumidor (fiambres, pescados, etc.) o que se
to origen animal. envasan por los titulares del comercio al por menor
•  Congelado o descongelado: Se deberá distin- para su venta inmediata en el establecimiento o esta-
guir entre «congelado en», obligatorio para la car- blecimientos de su propiedad.
ne, productos cárnicos y pesca no transformada, y La información obligatoria para cada tipo de pro-
«descongelado en» para productos congelados ducto puede presentarse a través de etiquetas, rótulos,
que se han descongelado antes de ponerlos a la carteles, o cualquier otro medio, incluidas las herra-
venta, así sabremos que este alimento no se podrá mientas tecnológicas modernas o la comunicación ver-
volver a congelar. bal (es decir, información oral verificable). Hay diferen-
•  Sal por sodio: Desaparece la palabra sodio y se tes modalidades de venta de alimentos no envasados y
debe sustituir por sal. en cada una de ellas existen unos requisitos de infor-
•  Tripa no comestible: Hay que indicar si el envol- mación mínima obligatoria6, 7:
torio es comestible o no.
•  Información nutricional: La información relati- •  Sustancias que causan alergias o intoleran-
va al valor energético y el contenido en determina- cias: Es obligatorio que todos los productos infor-
dos nutrientes (grasas, grasas saturadas, hidratos men claramente de la presencia de estos ingre-
de carbono, azúcares, proteínas y sal), que hasta dientes.
56 BLOQUE: DIETOTERAPIA

A B

Figura 1.  Diferencias en el etiquetado antes (A) y después (B) del Reglamento
1169/2011.

•  Sin envasar suministrados por colectivida- La información nutricional obligatoria debe incluir,
des: En restaurantes, comedores, hospitales, etc. por este orden: valor energético y cantidades de gra-
la información obligatoria es la relativa a los ingre- sas, grasas saturadas, hidratos de carbono, azúcares,
dientes susceptibles de causar alergias o intoleran- proteínas y sal (tabla 1)6, 7, 9.
cias alimentarias. La información nutricional obligatoria podrá com-
•  Sin envasar o envasados en punto de venta pletarse, de manera voluntaria, con los siguientes nu-
a petición del comprador: Los productos sin trientes: grasas monoinsaturadas, grasas poliinsatura-
envasar o envasados a petición del consumidor das, polialcoholes, almidón, fibra alimentaria, vitaminas
tienen que informar obligatoriamente de la deno- y minerales (presentes en cantidades significativas) (ta-
minación del alimento, cantidad de ingredientes y bla 2). En relación con los ácidos grasos trans, la Comi-
grado alcohólico en bebidas con graduación su- sión Europea se ha comprometido a elaborar un infor-
perior al 1,2%. En algunos casos pueden ser obli- me, en el plazo de 3 años, que podrá acompañarse de
gatorio facilitar otros datos. una propuesta legislativa.
•  Envasados por los titulares del comercio mino-
rista para venta inmediata: Los productos envasa-
dos en el establecimiento para su venta inmediata Tabla 1.  Información nutricional obligatoria.
deben llevar la misma información que los productos
envasados, excepto la información nutricional. Información nutricional
•  Envasados en bolsas: En el caso de las frutas, por 100 g/100 ml
hortalizas, tubérculos o frutos secos envasados en
bolsas o con envases que permitan apreciar clara- Valor energético
mente el alimento a simple vista, deberán infor-
mar únicamente de la denominación del alimen- Grasas
to, cantidad neta y empresa alimentaria. de las cuales:
  · Saturadas
3.  Información nutricional Hidratos de carbono
La información nutricional de un alimento se refiere de los cuales:
a su valor energético y cantidad de determinados nu-   · Azúcares
trientes. Es obligatoria a partir del 13 de diciembre de
Proteínas
2016, si bien muchos productos la han ido incorporan-
do antes de esa fecha de forma voluntaria de acuerdo Sal
con lo establecido en la nueva normativa.
Tema 3.  Etiquetado nutricional 57

Tabla 2.  Información nutricional opcional. Tabla 3.  Unidades e ingesta de referencia de
vitaminas y minerales.
Información nutricional
por 100 g/100 ml Ingesta de referencia de vitaminas y minerales
(adulto)
Valor energético
Vitamina A 800 µg
Grasas
de las cuales: Vitamina D 5 µg
  · Saturadas Vitamina E 12 mg
  · Monoinsaturadas Vitamina K 75 µg
  · Poliinsaturadas
Vitamina C 80 mg
Hidratos de carbono
Tiamina 1,1 mg
de los cuales:
  · Azúcares Riboflavina 1,4 mg
  · Polialcoholes Niacina 16 mg
  · Almidón
Vitamina B6 1,4 mg
Fibra alimentaria Ácido fólico 200 µg
Proteínas Vitamina B12 2,5 µg
Sal Biotina 50 µg

Vitaminas y minerales Ácido pantoténico 6 mg


Potasio 2 000 mg
Cloruro 800 mg
Calcio 800 mg
3.1.  Forma de expresión
Fósforo 700 mg
El valor energético se expresará en primer lugar en
kilojulios (kJ), seguido por el valor en kilocalorías (kcal), Magnesio 375 mg
y la cantidad de nutrientes en gramos (g). Las vitami- Hierro 14 mg
nas y minerales se expresarán en las unidades especifi- Zinc 10 mg
cadas en la tabla 3. El valor energético y la cantidad de
Cobre 1 mg
nutrientes se expresarán en valores absolutos por
100 g o 100 ml. Cuando se facilite la información so- Manganeso 2 mg
bre vitaminas y minerales, se expresarán además como Fluoruro 3,5 mg
porcentaje de las ingestas de referencia de la tabla por
Selenio 55 µg
100 g o 100 ml.
Además, pueden declararse: Cromo 40 µg
Molibdeno 50 µg
•  Por porción o unidad de consumo. En ese caso, la
Yodo 150 µg
porción o unidad de consumo debe ser fácilmente
reconocible por el consumidor, estar cuantificada
en la etiqueta al lado de la información nutricio-
nal, y el número de porciones o unidades conteni- Tabla 4.  Ingesta de referencia de un adulto medio.
das en el envase debe figurar en la etiqueta.
•  Como porcentaje de las ingestas de referencia por Valor energético
100 g o por 100 ml. De ser así, la información nutri- Ingesta de referencia
o nutriente
cional deberá incluir la siguiente indicación: «Ingesta
de referencia de un adulto medio (8 400 kJ/2 000 Valor energético 8400 KJ/2000 kcal
kcal)». Es necesario tener en cuenta que independien- Grasas totales   70 g
temente del producto del que se trate y del público al Ácidos grasos saturados   20 g
que vaya dirigido, los valores de referencia suelen
darse para una dieta estándar de 2000 kcal, que se Hidratos de carbono 260 g
correspondería con las ingestas de referencia de un Azúcares   90 g
adulto medio (tabla 4). Proteínas   50 g
•  Como porcentaje de las ingestas de referencia por
Sal   6 g
porción o unidad de consumo.
58 BLOQUE: DIETOTERAPIA

En la tabla 5 se resumen las distintas formas de expre- zar la compra, y que le permite identificar inmediata-
sión de la información nutricional obligatoria y voluntaria. mente un producto. En este caso, la información
nutricional que puede indicarse es:
3.2. Presentación
•  El valor energético (solo).
Toda la información nutricional deberá figurar en el •  O el valor energético y las grasas, ácidos grasos
mismo campo visual. Se presentará en un formato de saturados, azúcares y sal.
tabla claro con las cifras en columna y en el orden indi-
cado anteriormente. Si el espacio no lo permite, la in- No es posible proporcionar en el campo visual prin-
formación figurará en formato lineal. cipal la información nutricional de nutrientes no men-
En los casos en los que el valor energético o la canti- cionados en las dos opciones anteriores.
dad de nutrientes de un producto sea insignificante, la
información sobre dichos elementos podrá sustituirse 3.3.  Alimentos exentos de información
por una declaración del tipo: «contiene cantidades in-
nutricional
significantes de…», que aparecerá indicada al lado de
la información nutricional. Están exentos los productos sin transformar o cura-
El valor energético y la cantidad de nutrientes po- dos que incluyen un solo ingrediente, el agua, sal, es-
drán facilitarse, además, por medio de otras formas de pecias, té, vinagres, aditivos alimentarios, bebidas con
expresión y/o presentación mediante formas o símbo- grado alcohólico volumétrico superior a 1,2 %, los ali-
los gráficos además de mediante textos o números. mentos en envases cuya superficie mayor es inferior a
Están destinadas a facilitar la comprensión del consu- 25 cm2 (como mermeladas o mantequillas de hostele-
midor sobre la contribución o la importancia de un ali- ría), entre otros.
mento en relación con el aporte energético y de nu- Los alimentos no envasados también están exentos,
trientes de una dieta. pero puede darse de forma voluntaria limitándose al
La información nutricional puede repetirse en el valor energético, o bien al valor energético y cantidad
campo visual principal, que es aquel más visible a pri- de grasas, grasas saturadas, azúcares y sal, y expresarse
mera vista por el consumidor en el momento de reali- solo por porciones o por unidades de consumo.

Tabla 5.  Información nutricional obligatoria y voluntaria.

Por 100 g/Por 100 ml Por porción/Por unidad % Ingesta de referencia*

Valor energético kJ/kcal kJ/kcal %


Grasas g g %
De las cuales
Saturadas g g %
  · Monoinsaturadas g** g
  · Poliinsaturadas g** g
  ·  Hidratos de carbono g g %
De los cuales
  · Azúcares g g
  · Polialcoholes g** g
  · Almidón g** g
Fibra g** g
Proteínas g g %
Sal g g %
Vitaminas y minerales Unidades correspondientes Unidades correspondientes % VRN por 100 g (y/o por
porción)
Sombreado en gris claro las declaraciones obligatorias, y en gris oscuro las voluntarias.
*Ingesta de referencia de un adulto medio (8 400 kJ/2 000 kcal). **Esta información del nutriente por 100 g solo es obligatoria en el
caso de que se decida declarar estos nutrientes; VRN: valores de referencia de nutrientes.
Tema 3.  Etiquetado nutricional 59

4. Declaraciones nutricionales 5. Otros aspectos del etiquetado


y de propiedades saludables
5.1.  Gluten y etiquetado
El etiquetado y la publicidad de un número cada
La normativa general de etiquetado obliga a infor-
vez mayor de alimentos contienen declaraciones nutri­
mar si un alimento contiene cereales con gluten5. Ade-
cionales y de propiedades saludables. El Reglamento
más, existe una normativa específica que regula cómo
1924/2006 regula dichas alegaciones, estableciendo
informar sobre el contenido de gluten de los alimentos
varios tipos de declaraciones10.
(Reglamento nº 828/2014, vigente a partir de julio de
2016)13:
4.1.  Declaraciones nutricionales
•  Sin gluten: La declaración «sin gluten» solamen-
Afirman, sugieren o dan a entender que el alimen-
te podrá utilizarse cuando los alimentos, tal como
to posee propiedades beneficiosas específicas debi-
se venden al consumidor final, no contengan más
das a su composición, por ejemplo: «fuente de»,
de 20 mg/kg de gluten.
«sin», «con», «bajo en», etc. Las más frecuentes se
•  Muy bajo en gluten: La declaración «muy bajo
encuentran resumidas en la tabla 6.
en gluten» solamente podrá utilizarse cuando ali-
mentos que consistan en trigo, centeno, cebada,
4.2.  Declaraciones de propiedades saludables avena o sus variedades híbridas, o que contengan
Afirman o sugieren una relación entre el alimento y uno o más ingredientes hechos a partir de estos
la salud, por ejemplo: «El calcio puede contribuir a for- cereales, que se hayan procesado específicamente
talecer los huesos», «Ayuda a activar la flora intestinal», para reducir su contenido de gluten, no conten-
«Ayuda a regular tu nivel de colesterol», etc. gan más de 100 mg/kg de gluten en el alimento
tal como se vende al consumidor final.

4.3.  Declaraciones de reducción de riesgo Este último reglamento establece la posibilidad de


de enfermedad y relativas al desarrollo incluir las siguientes declaraciones:
y la salud de los niños
•  «Adecuado para las personas con intolerancia al
Afirman, sugieren o dan a entender que el consumo gluten» o «adecuado para celíacos».
de un alimento o alguno de sus constituyentes reduce •  O «elaborado específicamente para las personas
significativamente un factor de riesgo de aparición de con intolerancia al gluten» o «elaborado específi-
una enfermedad, por ejemplo: «Previene enfermeda- camente para celíacos». Estas dos últimas en el
des cardiovasculares», «Reduce la hipertensión», «Re- caso de que el alimento esté específicamente ela-
duce el colesterol y por tanto el riesgo de padecer en- borado, preparado y/o procesado para reducir
fermedades cardiovasculares», etc. el contenido de gluten de uno o varios ingredien-
Todas las declaraciones sobre la salud deben tener tes que contienen gluten, o sustituir los ingredientes
un fundamento científico y solamente serán válidas en que contienen gluten por otros ingredientes exen-
el contexto de una dieta completa; además, deberán tos de gluten de forma natural.
referirse a las cantidades de alimentos que se deben
consumir habitualmente para que se produzca la ac- Por otra parte, existen símbolos que se incluyen en el
ción fruto de la declaración. etiquetado y pueden ayudar al consumidor a identifi-
El Reglamento (CE) nº 1924/2006 del parlamento car los productos sin gluten14.
Europeo exige, por una parte, que se haya realizado una
evaluación científica rigurosa como paso previo a la de- •  La Marca de Garantía «Controlado por FACE»
claración de las propiedades de un determinado alimen- (Federación de Asociaciones de Celíacos de Espa-
to y, por otra, que el «consumidor medio» pueda enten- ña) (figura 2) tiene como objeto garantizar al
derla. No permite alegaciones terapéuticas ni curativas, consumidor celíaco que los productos que la por-
ni declaraciones en alimentos con inadecuado perfil tan tienen niveles de gluten inferiores a 10 ppm
nutricional, prohibiendo expresamente las declaraciones (mg/kg), que es el límite crítico actualmente esta-
de propiedades saludables en las bebidas alcohólicas blecido. La certificación se consigue mediante la
con una graduación superior al 1,2% excepto las que se verificación del sistema de calidad del fabricante,
refieran a una reducción de su contenido de alcohol o que debe incluir como punto crítico de control de
de energía. La Agencia Europea de Seguridad Alimenta- su sistema el gluten en toda la cadena productiva,
ria (EFSA) es la institución que evalúa las bases científicas desde la recepción de la materia prima hasta el
sobre las que se sustentan las declaraciones, existiendo envasado del producto terminado. La verificación
una lista comunitaria de declaraciones autorizadas, que se realiza a través de entidades de certificación
se actualiza periódicamente11, 12. acreditadas.
60 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Tabla 6.  Declaraciones nutricionales.

Declaraciones nutricionales
Bajo contenido Sin
≤ 40 kcal/100 g
Valor energético ≤ 4 kcal/100 ml
≤ 20 kcal/100 ml
≤ 3 g/100 g
≤ 0,5 g/100 g
Grasa ≤ 1,5 g/100 ml
≤ 0,5 g/100 ml
(≤ 1,5 g/100 ml leche semidesnatada)
≤ 1,5 g/100 g
Grasa saturada y trans ≤ 0,01 g/100 g
≤ 0,75 g/100 ml
(suma de ambos tipos) ≤ 0,01 g/100 ml
≤ 10% VE del alimento
≤ 0,5 g /100 g
≤ 0,5 g/100 ml
«Sin azúcares añadidos»: si no se ha añadido al producto
≤ 5 g/100 g ningún monosacárido ni disacárido, ni ningún alimento
Azúcares
≤ 2,5 g/100 ml utilizado por sus propiedades edulcorantes. Si los azúcares
están naturalmente presentes en los alimentos, en el
etiquetado deberá figurar asimismo la siguiente indicación:
«Contiene azúcares naturalmente presentes».
Bajo contenido Muy bajo contenido Sin
≤ 0,12 g/100 g ≤ 0,005 g/100 g
Sodio ≤ 0,04 g/100 g o /100 ml
o /100 ml o /100 ml
Fuente de Alto contenido
≥ 45% AG: grasas monoinsaturadas
Grasas monoinsaturadas —
> 20% VE del alimento
≥ 45% AG: grasas poliinsaturadas
Grasas poliinsaturadas —
> 20% VE del alimento
≥ 70% AG: grasas insaturadas
Grasas insaturadas —
> 20% VE del alimento
≥ 0,3 g ácido alfa linoleico/100 g y 100 kcal ≥0,6g ácido alfa linoleico/100 g y 100 kcal
Omega 3
≥ 40 mg EPA + DHA /100 g y 100 kcal ≥80 mg EPA + DHA /100 g y 100 kcal
≥ 3 g/100 g ≥ 6 g/100 g
Fibra
≥ 1,5 g/100 kcal ≥ 3 g/100 kcal
Proteínas ≥ 12% energía total alimento ≥ 20% energía total del alimento
Vitaminas (nombre)
≥ 15% CDR ≥ 30% CDR
Minerales (nombre)
Contiene Mayor contenido Contenido reducido
Dispuesto en reglamento
≥ 30% reducción con alimento similar
Nutrientes y otras artículo 5 ≥ 30% incremento en relación con
≥ 10% reducción en micronutrientes
sustancias Para vitaminas y minerales alimento similar
≥ 25% reducción en sodio
≥ 15% CDR
Light o ligero
Mismas características que «Contenido reducido». Reducción ≥ 30% en relación con alimento similar. Especificar las
Energía/Nutrientes
características que lo hacen LIGHT.
DHA: ácido decosahexanoico; EPA: ácido eicosapentanoico; VE: valor energético.
Tema 3.  Etiquetado nutricional 61

– OATS: el producto contiene avena pura.


– 100: el producto contiene hasta 100 mg/kg
(ppm) de gluten, y no contiene avena.
– 100/OATS: el producto contiene hasta 100 mg/
kg (ppm) de gluten y avena pura.

5.2.  Etiquetado ecológico


De acuerdo con la normativa europea sobre produc-
Figura 2.  Marca de garantía controlado por FACE. ción y etiquetado de los productos ecológicos, las prin-
cipales características de los productos ecológicos
son15, 16:
•  Espiga barrada. Es el símbolo internacional sin •  Procedente de la agricultura ecológica.
gluten. Se encuentra regulado por la AOECS (Aso- •  Producido sin el empleo de sustancias químicas de
ciación de Celíacos Europeos), quien delega en sus síntesis (pesticidas, fertilizantes, herbicidas).
asociaciones miembros la concesión del uso y su •  Obtenido respetando el ritmo de crecimiento.
control. En la actualidad, las industrias que de- •  
Elaborado sin adición de sustancias artificiales
seen utilizar este símbolo, deben certificarse en el (aditivos, colorantes, saborizantes, aromas).
«Sistema de Licencia Europeo» (ELS).
•  Producido sin organismos modificados genética-
La certificación europea (ELS), tiene la siguiente
mente (OMG) (transgénicos).
simbología que se muestra en la figura 3.
•  Certificado por un organismo de control (em-
El símbolo tiene que tener la espiga barrada y de-
presa privada) o autoridad de control (organis-
bajo un código de ocho dígitos:
mo público).
– ZZ: código de país. Por ejemplo, si la empresa Los productos ecológicos se clasifican en función de
y/o marca comercial está aquí en España el ELS su presentación y categoría:
lo debe conceder FACE, y el código será ES. Si
por el contrario si está en Italia será IT (debién- •  Presentación:
dose solicitar la licencia a la Asociación de Celía- – Producto agrario vivo o no transformado (por
cos Italiana). ejemplo, tomates ecológicos).
– X XX: este código corresponde a la empresa – Producto transformado destinado a la alimen-
y todos sus productos tendrán el mismo có- tación humana, en los que al menos el 95% de
digo. los ingredientes de origen agrario son ecológi-
– YYY: cada producto deberá tener su propio có- cos (por ejemplo, mermelada de manzana eco-
digo (sería como el código de barras o el DNI). lógica).

Para que este símbolo tenga validez, debe ir •  Categoría:


acompañado por el nº de registro concedido por – Ecológico.
la asociación y una de las siguientes expresiones: – Producto en conversión a la agricultura ecológi-
«OATS», «100» o «100/OATS». ca. Para que un producto pueda identificarse
como ecológico, la finca en la que se produce
– Si el símbolo no se acompaña de ninguna ex- debe pasar por un periodo de conversión, que
presión, quiere decir que el producto contiene es el tiempo que transcurre desde que un opera-
menos de 20 mg/kg (ppm) de gluten y no con- dor somete sus parcelas al control de un orga-
tiene avena. nismo de control hasta que el producto pueda
venderse con referencias al método de produc-
ción ecológico. Por tanto, un producto en con-
versión a la agricultura ecológica es aquel obte-
nido durante el período de conversión.
– Producto transformado con ingredientes ecoló-
gicos: hay dos tipos:

  · Aquellos en los que el ingrediente principal es


un producto de la caza o la pesca, y los ingre-
dientes de origen agrario son ecológicos en
su totalidad (por ejemplo, melva en aceite de
Figura 3.  Espiga barrada. oliva virgen extra ecológico).
62 BLOQUE: DIETOTERAPIA

  · 
Aquellos que contienen al menos un ingre-
diente de origen agrario ecológico, pero estos
son inferiores al 95%.

De forma general, el etiquetado de productos ecoló-


gicos:

•  Debe cumplir con las disposiciones reglamentarias Figura 4.  Logo europeo de etiquetado de productos
comunitarias, nacionales y autonómicas, sobre ecológicos.
etiquetado general de productos alimenticios.
•  No puede inducir a error al consumidor o usuario
sugiriendo que un producto o sus ingredientes – Es opcional para los productos no envasados y
cumplen los requisitos para ser considerados eco- los importados de terceros países.
lógicos. Ello incluye los términos utilizados en las – Está prohibido en los «productos en conversión
marcas registradas, el etiquetado y la publicidad. a la agricultura ecológica» y en «productos con
ingredientes ecológicos».
– 
En la composición de alimentos ecológicos
transformados no podrá haber simultánea­ •  El código del organismo de control o entidad
mente un ingrediente ecológico y el mismo in- que certifica el producto (ES-ECO-XXX-YY), y
grediente obtenido de forma no ecológica o pro- obligatorio en todos los productos comercializa-
cedente de una parcela en fase de conversión. dos con referencias al método de producción
ecológico.
Los térmicos ecológico, biológico, orgánico, y sus deri-
vados o abreviaturas, tales como «ECO», «BIO» y «ORG», –  ES: estado de la UE.
utilizados aisladamente o combinados con otros térmi- –  ECO: ECO, BIO, ORG, etc.
nos, tienen el mismo significado y pueden ser utilizados – XXX: número de la entidad certificadora. En Es-
en el etiquetado, material publicitario o documentos co- paña hay 27.
merciales, por un operador controlado por un organismo –  YY: comunidad autónoma.
de control autorizado en la producción ecológica, y cuyo
resultado de los controles haya sido favorable. •  Es obligatorio indicar el origen de las materias pri-
mas siempre que lleve el logo comunitario: Unión
De forma general, el etiquetado de productos ecoló- Europea (UE) o países terceros («Agricultura UE»,
gicos debe contener: «Agricultura no UE», «Agricultura UE/ no UE»). Se
puede sustituir por el nombre del país en cues-
•  El logo europeo (figura 4): tión. Debe figurar inmediatamente debajo del có-
digo del organismo de control. Puede ser omitida,
– Es obligatorio en los productos envasados fres- si la cantidad de ingredientes a la que se refiere es
cos, y transformados en los que al menos el inferior al 2%.
95% de los ingredientes de origen agrario son •  El logotipo del organismo o entidad de control es
ecológicos. optativo (figura 5).

Figura 5.  Etiquetado de productos ecológicos.


Tema 3.  Etiquetado nutricional 63

5.3.  Etiquetado de huevos caciones geográficas y de las denominaciones de ori-


gen de los productos agrícolas y alimenticios18. Dentro
Las normas de etiquetado establecen la obligatorie- de esta normativa europea, cada país tiene que esta-
dad de marcar los huevos con un código que exprese blecer controles oficiales y supervisiones que garanti-
el número distintivo del productor y que permita iden- cen el cumplimiento de todas las condiciones.
tificar la forma de cría16, 17. El número distintivo del pro-
ductor está integrado por el código de forma de cría, •  Denominación de Origen Protegida (DOP):
el código del Estado miembro donde se produce el con estas siglas se identifican productos alimenta-
huevo y el número de identificación del establecimien- rios originarios de un lugar determinado, una re-
to, con el siguiente formato: gión o excepcionalmente un país, cuya calidad o
características se deban fundamentalmente o ex-
O ES AB CDE FGHIJKL M clusivamente al medio geográfico particular, con
todos aquellos factores naturales y humanos inhe-
Siendo: rentes a él. Y además ese producto debe de ser
elaborado, en todas las fases de su producción, en
•  O: La identificación de la forma de cría, con los dicha zona geográfica definida. Un ejemplo pue-
siguientes códigos: de ser el aceite de oliva (en España existen más de
30 DOP de aceite de oliva) o el queso manchego.
–  0, para la producción ecológica •  Indicación Geográfica Protegida (IGP): identi-
–  1, para la campera fica un producto originario de un lugar determi-
–  2, para la realizada en suelo nado, una región o un país, que posea una cuali-
–  3, para la de jaulas dad determinada, una reputación u otra
característica que pueda esencialmente atribuirse
•  ES: Código del Estado miembro en el caso de Es- a su origen geográfico. A diferencia del DOP, es
paña. suficiente con que al menos una de sus fases de
•  ABCDEFGHIJK: número que identifica a cada esta- producción, transformación o elaboración tenga
blecimiento, otorgado por las autoridades com- lugar en la zona geográfica definida. Un ejemplo
petentes de las comunidades autónomas (dos dí- es el cordero manchego.
gitos correspondientes al código de la provincia, •  Especialidad Tradicional Garantizada (ETG):
tres dígitos para el código de municipio donde no hace referencia al origen, sino que tiene por
esté el establecimiento, y siete dígitos que los objeto proteger los métodos de producción y las
identifique de forma única dentro del municipio). recetas tradicionales. Identifica productos o ali-
mentos específicos que sean el resultado de un
5.4. Menciones de Calidad Diferenciada: método de producción, transformación o compo-
Denominación de Origen Protegida (DOP), sición que corresponda a una práctica tradicional,
Indicación Geográfica Protegida (IGP) y y producidos con materias primas o ingredientes
Especialidad Tradicional Garantizada (ETG) que sean los utilizados tradicionalmente. Ejem-
plos en España son: el jamón serrano, las tortas de
Estas son las tres diferentes menciones de calidad aceite, la leche de granja y los panellets.
diferenciada que existen a la hora de etiquetar los pro-
ductos agro-alimentarios para indicar que cumplen 6. Futuro de la información al consumidor,
unos estándares de calidad especiales y que los dife-
rencia del resto de productos del mercado (figura 6).
el envasado inteligente
Están reguladas por el Reglamento (CE) 510/2006, El envasado inteligente es una modalidad de envase
de 20 de marzo de 2006, sobre protección de las indi- alimentario que basa su acción en proporcionar al con-

Figura 6.  Menciones de calidad.


64 BLOQUE: DIETOTERAPIA

sumidor información sobre el producto que contiene 7. Resumen


en su interior. Se basa en la interacción que sucede
entre el propio alimento y el envase, la cual desencade- En los últimos años, y recientemente con la aplica-
na una modificación (normalmente visual) en el enva- ción de la nueva normativa, se ha avanzado y mejora-
se, indicando la calidad o el estado del producto. do en el etiquetado nutricional. El nuevo etiquetado es
Los sistemas de envase inteligentes ofrecen al usua- más legible y visible, unifica la manera de presentar la
rio información y no deben liberar en este sus elemen- información nutricional, ahora obligatoria, y aporta
tos constituyentes. Los sistemas inteligentes pueden más datos de los ingredientes y alérgenos. Además,
colocarse en la superficie externa del envase y separar- con la regulación de las declaraciones nutricionales, se
se del alimento mediante una barrera funcional situada intentan evitar declaraciones confusas que puedan in-
dentro de los materiales u objetos en contacto con los ducir a errores.
alimentos, que impide que migren a estos las sustan- El etiquetado nutricional, informando sobre la com-
cias que se encuentran tras ella. posición de los alimentos, es, por tanto, una valiosa
Entre los dispositivos utilizados en los envases inteli- herramienta para promover la educación alimentaria
gentes, destacaríamos los indicadores, que muestran del consumidor, y ayudarle a tomar decisiones para se-
un cambio en las condiciones del envase19: guir una dieta equilibrada. Y puede ayudar a los profe-
sionales sanitarios a dar información a la población
•  Indicadores de frescura: Controlan la calidad general sobre las características de una alimentación
del alimento envasado a través de su respuesta a saludable, que contribuiría a reducir la prevalencia de
alguno de los cambios que se producen en el ali- muchas enfermedades crónicas favorecidas por el ac-
mento como resultado del metabolismo o creci- tual estilo de vida, así como a patologías específicas
miento microbiano. Este sensor detecta el gas que que se beneficiarían de determinados cambios en su
se produce cuando la carne, el pollo, el pescado y alimentación.
el marisco dejan de estar frescos. Un simple cam-
bio de color proporciona una pista visual rápida 8. Bibliografía
de la caducidad y puede indicar que el producto
está en mal estado. 1. OMS. Estrategia mundial sobre régimen alimenta-
•  De tiempo y temperatura: Dan información vi- rio, actividad física y salud. 57ª Asamblea mundial
sual del efecto acumulativo del tiempo y tempera- de la salud 2004. Visitado en noviembre del 2016.
tura en el producto por la exposición a temperatu- Disponible en http://www.who.int/
ras/tiempos superiores a un nivel crítico. Cambian 2. Comisión de las Comunidades Europeas. Libro ver-
de color si la cadena de frío se ha roto, o si el ali- de.» Fomentar una alimentación sana y la actividad
mento lleva mucho tiempo esperando a ser con- física: una dimensión europea para la prevención
sumido. del exceso de peso, la obesidad y las enfermedades
•  De fugas: Este dispositivo lleva a cabo un segui- crónicas». Visitado en noviembre del 2016. Disponi-
miento de la ausencia/presencia de oxígeno. El ble en http://ec.europa.eu/health/
color cambia si entra oxígeno en el envase del pro- 3. Lucía Laborda, Pilar Gómez Enterría. Etiquetado nu-
ducto. tricional de los alimentos. En En Dietoterapia, Nutri-
•  De temperatura óptima: El indicador de frío ción Clinica y Metabolismo. Eds De Luis D, Bellido D,
muestra un área termocrómica que se convierte Garcia Luna PP. Diaz de Santos (Madrid) 2010.
en azul intenso cuando el producto está lo sufi- Pags. 61-68
cientemente frío, con lo que cambia el color de la 4. Silvia Bañares Vilella y Luis González Vaqué. 1169
etiqueta. preguntas y respuestas sobre el etiquetado de los
alimentos. Bebookness, 2015. Documento de
Es importante diferenciar los envases inteligentes Kindle.
de los envases activos. Los últimos son los destinados 5. Reglamento (UE) no 1169/2011 del Parlamento Eu-
a prolongar la vida útil o a mantener o mejorar el es- ropeo y del consejo de 25 de octubre de 2011 sobre
tado del alimento envasado. Están diseñados para la información alimentaria facilitada al consumidor.
incorporar componentes que liberan o absorben sus- DO L 304, 22.11.2011. Visitado en noviembre del
tancias en el alimento envasado o en su entorno, por 2016. Disponible en: http://eur-lex.europa.eu/
ejemplo, sistemas que permiten calentar o enfriar el 6. Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimen-
alimento. taria y Nutrición (AECOSAN). Seguridad alimenta-
La tendencia actual a un mayor consumo de alimen- ria: norma general de etiquetado. Visitado en no-
tos procesados listos para su consumo o cocinado, viembre del 2016. Disponible en http://www.
convierte a los envases inteligentes y activos en intere- aecosan.msssi.gob.es/
santes opciones que pueden servir de ayuda al consu- 7. Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimen-
midor. taria y Nutrición (AECOSAN). El etiquetado cuenta
Tema 3.  Etiquetado nutricional 65

mucho. Visitado en noviembre del 2016. Disponi- http://www.boe.es/doue/2014/228/L00005-


ble en http://eletiquetadocuentamucho.aecosan. 00008.pdf
msssi.gob.es/ 14. Federación de Asociaciones de Celiacos de España
  8. Dirección General de Salud Pública Comunidad de (FACE). Simbología de los productos. Visitado en no-
Madrid. Guía de etiquetado de productos alimenta- viembre de 2016. Disponible en http://www.celia-
rios destinado al consumidor. Visitado en noviem- cos.org/la-dieta-sin-gluten/simbologia-de-los-pro-
bre 2016. Disponible en http://www.madrid.org/cs/ ductos.html
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10. Reglamento (CE) no 1924/2006 del Parlamento 16. Manual de etiquetado de productos ecológicos.
Europeo y del Consejo, de 20 de diciembre de Consejería de Agricultura y Pesca Junta de Andalu-
2006, relativo a las declaraciones nutricionales y cía. Visitado en noviembre del 2016. Disponible en
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2016. Disponible en http://eur-lex.europa.eu/ 17. Organización Interprofesional del Huevo y sus Pro-
11.  Agencia Española de Consumo, Seguridad Ali- ductos (INPROVO). Guía de etiquetado del huevo
mentaria y Nutrición (AECOSAN). Seguridad ali- (versión 2009). Visitado en noviembre del 2015.
mentaria: registro comunitario. Visitado en no- Disponible en http://www.inprovo.com/images/
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12. European Food Safety Autority (EFSA). Nutrition 2006, sobre protección de las indicaciones geo-
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2016. Disponible en http://www.efsa.europa.eu/ productos agrícolas y alimenticios. DO L 93,
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13. Reglamento de ejecución (CE) no. 828/2014 de la ponible en https://www.boe.es/doue/2006/093/
Comisión, de 30 de julio de 2014, relativo a los re- L00012-00025.pdf
quisitos para la transmisión de información a los 19. Fundación Vasca para la Seguridad Agroalimenta-
consumidores sobre la ausencia o la presencia redu- ria (ELIKA). Envases inteligentes para alimentos.
cida de gluten en los alimentos. DO L228, 31.7.14. Visitado en noviembre del 2016. Disponible en
Visitado en noviembre del 2016. Disponible en http://www.elika.net
Tema 4.
Valoración nutricional
Cristina Tejera Pérez
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Hospitalario Universitario de Ferrol (A Coruña)
Rocío Villar Taibo
Servicio de Endocrinología. Complejo Hospitalario Universitario de Santiago. Santiago de Compostela
(A Coruña)
Miguel Ángel Martínez Olmos
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Hospitalario Universitario de Santiago. Santiago de
Compostela (A Coruña)
Diego Bellido Guerrero
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Hospitalario Universitario de Ferrol (A Coruña)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 67-81.

1.  Introducción
2.  Métodos de cribado nutricional
3.  Valoración nutricional
4.  Estrategia de valoración del estado nutricional
5. Iniciativas en el ámbito de la detección de riesgo de desnutrición y valoración nutricional
6.  Recursos digitales
7.  Resumen
8.  Bibliografía

1. Introducción la morbimortalidad que asocia y por sus implicaciones


socioeconómicas. Su prevalencia es especialmente alta
La desnutrición puede definirse como el estado en grupos poblacionales susceptibles, como los ancia-
nutricional en el que existe un déficit de energía, nos, los pacientes oncológicos o los enfermos hospita-
proteínas u otros nutrientes, que causa efectos ad-
lizados, con cifras que alcanzan de media valores del
versos en los tejidos, en la composición o función
15 % al 50 %, pero que pueden elevarse hasta el 80 %
corporal o en la evolución clínica1. Aunque los paí-
por ejemplo en estadios avanzados de la enfermedad
ses occidentales presentan gran interés por los pro-
oncológica.
blemas relacionados con la sociedad de la abundan-
cia (sobrepeso, obesidad, diabetes mellitus tipo 2, Además, la desnutrición conlleva serias consecuen-
síndrome metabólico, etc.), la desnutrición consti- cias clínicas, favoreciendo la aparición o el empeora-
tuye un reto a veces ignorado en la sociedad actual, miento de las comorbilidades del paciente, aumentan-
que no solo afecta a países en desarrollo en relación do el riesgo de complicaciones e incluso la mortalidad.
con la falta de recursos, sino también al mundo de- En población geriátrica el estado nutricional es un claro
sarrollado asociada a la enfermedad. De este modo, factor condicionante para la aparición de complicacio-
se establece una relación bidireccional entre desnu- nes graves, principalmente infecciosas3. La sarcopenia
trición y enfermedad, en la que ambas condiciones y la desnutrición proteica aumentan el riesgo de fragi-
se favorecen, dificultando en la práctica clínica la lidad, caídas y dependencia, limitando la autonomía de
diferenciación entre los efectos perjudiciales de la los pacientes4. Y más aún, existe una asociación clara
enfermedad propiamente y los de la desnutrición2. y conocida entre los niveles bajos de albúmina y el
(figuras 1 y 2). aumento de mortalidad5.
La desnutrición constituye, por tanto, un problema Por último, el coste económico de la desnutrición es
grave de salud pública, por su creciente frecuencia, por objeto de estudio en muchos países. En Reino Unido,

67
68 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Situación de enfermedad

Disminución Aumento de Aumento de Respuesta


de ingesta: necesidades catabolismo: inflamatoria
•  Anorexia calórico- •  Proteólisis
proteicas
•  Ayuno •  Gluconeogénesis
terapéutico o •  Lipólisis
diagnóstico
•  Alteraciones del
gusto
•  Náuseas, vómitos
•  Disfagia
•  Depresión Desnutrición
•  Alteraciones
sociales

Figura 1.  Fisiopatología de la desnutrición relacionada con la enfermedad.

se ha encontrado que la desnutrición aumenta tanto hospitalarios en malnutridos, así como un mayor coste
la frecuencia de ingresos y la estancia hospitalaria, de la atención del paciente malnutrido en la comunidad.
como la frecuencia de visitas al médico de Atención El incremento de los costes hospitalarios asociado a des-
Primaria o las consultas externas al hospital, lo que se nutrición se ha relacionado con una estancia hospitala-
relacionaría con una mayor carga económica. Algu- ria más prolongada y un mayor consumo de fármacos y
nos estudios en diversos países europeos y america- de soporte nutricional6. En España, disponemos de los
nos corroboran un aumento del 30-70 % de los costes datos del estudio PREDyCES®, un estudio multicéntrico,

Riesgo nutricional
Disminución de la ingesta
o pérdida de peso

¿Inflamación presente?

Sí Sí
No
(en grado medio o moderado) (inflamación marcada)

Desnutrición Desnutrición relacionada Desnutrición


relacionada con con la enfermedad crónica relacionada con la
ayuno o inanición (Ej. fallo orgánico, cáncer, enfermedad aguda
(Ej. anorexia artritis rematoide, obesidad (Ej. sepsis, quemaduras,
nerviosa) sarcopénica) traumatismos graves)

Figura 2.  Definición de desnutrición basada en la etiología.


Adaptado de Jensen GL, Bistrian B, Roubenoff R, Heimburger DC. Malnutrition syndromes: a conundrum
vs continuum. JPEN 2009;33:710-6.
Tema 4.  Valoración nutricional 69

observacional y transversal, realizado en condiciones de 2.2.  Clasificación


práctica clínica habitual que demostró un aumento tan-
to de la estancia como de los costes en los pacientes En función de sus características los métodos de cri-
desnutridos, respecto a los normonutridos. Este incre- bado pueden clasificarse como:
mento fue más marcado en aquellos pacientes que in-
gresaron con un estado nutricional normal y se desnu- •  Métodos clínicos: recogen datos subjetivos y ob-
trieron durante la hospitalización7. jetivos, como variables antropométricas (peso,
Dadas las importantes repercusiones de la desnutri- talla o índice de masa corporal, por ejemplo),
ción a nivel clínico, económico y epidemiológico, es cambios en la ingesta oral, comorbilidades aso-
indudable que deben instaurarse herramientas que ciadas, etc.
permitan su prevención y diagnóstico precoz. El propó- •  Métodos automatizados: se basan en parámetros
sito de los métodos de diagnóstico nutricional es pre- analíticos (albúmina, proteínas totales, colesterol
decir la influencia del estado nutricional en la evolución total, linfocitos), aunque también pueden incluir
del paciente y determinar si es preciso un soporte nu- otros parámetros útiles como la edad, el diagnós-
tricional para mejorar su situación física o mental, evi- tico, la duración y evolución del proceso, disponi-
tar complicaciones, favorecer su recuperación y optimi- bles en las bases de datos de los hospitales.
zar el uso de recursos sanitarios. •  Métodos mixtos: emplean tanto parámetros clíni-
Dentro del proceso de evaluación del estado nutri- cos como analíticos para su realización.
cional podemos definir varias etapas:
2.3.  Métodos más empleados en la práctica
Cribado: sería el primer paso a realizar, mediante
1.  clínica
métodos sencillos y rápidos, que puedan ser lle-
vados a cabo incluso por personal no especializa- Aunque existen actualmente más de 70 cuestiona-
do, con el objetivo de diferenciar si el paciente rios para el cribado nutricional en población adulta, los
está o no en riesgo de desnutrición. más habitualmente empleados se describen a conti-
nuación:
Valoración: permite diagnosticar, clasificar y
2. 
cuantificar la desnutrición. Requiere personal
experto y se realizará en pacientes en riesgo  alnutrition Universal Screening Tool (MUST):
M
nutricional o con resultados dudosos tras la http://www.bapen.org.uk/pdfs/must/must_full.pdf
realización del cribado. La valoración nutricio-
nal completa incluirá parámetros antropomé- • Ámbito: se trata de un método de cribado desa-
tricos, bioquímicos y funcionales, junto con rrollado por la British Association of Parenteral
datos de composición corporal, si estuviesen and Enteral Nutrition (BAPEN). Es sencillo de apli-
disponibles. car, tiene una alta reproducibilidad y actualmente
Monitorización y seguimiento: los pacientes de-
3.  es el recomendado por la European Society of Pa-
berán ser reevaluados periódicamente en función renteral and Enteral Nutrition (ESPEN) como mé-
de sus resultados en las etapas anteriores. todo de cribado poblacional8. Fue desarrollado
inicialmente para la comunidad, sin embargo,
también puede utilizarse en el paciente institucio-
El objetivo de este capítulo es desarrollar los principa-
nalizado o en el hospital.
les métodos de detección del riesgo nutricional o criba-
do, así como los métodos de valoración nutricional. • Descripción: valora tres datos fundamentales: el
índice de masa corporal (IMC), la pérdida de peso
involuntaria en los últimos 3-6 meses y el efecto
2.  Métodos de cribado nutricional de la enfermedad aguda (o la posibilidad de que
2.1.  Definición el paciente esté sin aporte nutricional durante más
de 5 días).
Los métodos de cribado nutricional permiten la de- • Interpretación: en función de la puntuación obte-
tección precoz de los enfermos desnutridos o en riesgo nida el paciente es clasificado en bajo riesgo de
de desarrollar desnutrición. Deben ser el primer paso desnutrición, riesgo medio o riesgo alto y se pro-
para seleccionar a los pacientes que requieran una va- pone una actuación acorde con el resultado. En
loración nutricional más completa y específica y, en los pacientes con riesgo bajo o medio, simple-
algunos casos, un plan de tratamiento nutricional. mente se debe establecer una observación y repe-
Los métodos de cribado deben ser válidos, fiables, tir el MUST periódicamente. Por el contrario, en
reproducibles, prácticos y conectados con protocolos los de riesgo alto habrá que hacer una interven-
específicos de actuación. Lo ideal es que sean rápidos y ción terapéutica y deberán ser remitidos a la Uni-
sencillos, para realizarlos de manera precoz, incluso dad de Nutrición. En la comunidad este índice
por personal no especializado. predice la frecuencia de admisión en el hospital y
70 BLOQUE: DIETOTERAPIA

las visitas al médico general y pone de manifiesto una valoración general (5 preguntas sobre el estilo
el beneficio de la intervención nutricional en la de vida, la medicación y la situación funcional) y la
evolución de los pacientes. En el hospital predice valoración subjetiva del propio paciente (autoper-
la estancia hospitalaria, la mortalidad corregida cepción de salud, de estado nutricional y valoración
por edad, el destino al alta en los pacientes orto- de su situación respecto a su grupo de edad).
pédicos y el gasto por malnutrición. • Interpretación: la puntuación final obtenida en el
test clasifica al paciente en desnutrido (< 17 pun-
 utritional Risk Screening 2002 (NRS-2002):
N tos), en riesgo de desnutrición (17-23,5 puntos) o
http://espen.info/documents/screening.pdf en estado nutricional normal (24-30 puntos). El
MNA es una herramienta predictora de mortali-
• Ámbito: fue desarrollado por el grupo danés de dad a 1 año (0 % en individuos con estado nutri-
ESPEN y es el método recomendado por esta so- cional normal, del 24 % en los pacientes en riesgo
ciedad para realizar en el paciente hospitalizado. y del 48 % en los desnutridos).
Sin embargo, requiere de cierto entrenamiento
para ser correctamente realizado. Mini Nutritional Assessment Short Form (MNA-SF):
• Descripción: este sistema consta de dos apartados; http://www.mna-elderly.com/forms/mna_guide_spa-
uno inicial con 4 preguntas dicotómicas (respuesta nish_sf.pdf
sí/no) que investigan si el IMC es < 20,5, si se ha
producido pérdida de peso, cambios recientes en la • Ámbito: en 2009 el MNA-SF fue validado como
ingesta o existe enfermedad grave. En caso de que una herramienta de cribado independiente, basa-
alguna de las respuestas sea afirmativa, se debe da en la versión larga del MNA. El MNA-SF reduce
completar la segunda parte o cribado final. Este se- el tiempo de realización a unos 3 minutos y puede
gundo apartado valora y gradúa el deterioro nutri- efectuarse a intervalos regulares en pacientes am-
cional (según el descenso de IMC, del peso o la in- bulatorios, en el hospital y en centros de larga
gesta) y la gravedad de la enfermedad (por su estancia (residencias geriátricas, centros sociosa­
repercusión nutricional o aumento de requerimien- nitarios). Se recomienda realizarlo anualmente en
tos), mediante una puntuación que debe sumarse. pacientes ambulatorios, y cada 3 meses en pa-
Finalmente, se añade un punto más si el paciente cientes hospitalizados o ingresados en centros de
tiene > 70 años, obteniendo así la puntuación final. larga estancia, y siempre que ocurran cambios en
• Interpretación: ante una puntuación ≥ 3 el pacien- la situación clínica del paciente. Tiene una sensibi-
te se considerará en riesgo nutricional y será nece- lidad del 85 %, una especificidad del 84 % y una
sario iniciar un plan de soporte. En los casos con muy buena correlación con la versión larga (0,90).
puntuación < 3, solo se requerirá la repetición •  Descripción: consta de 5 preguntas clínicas, acer-
semanal del cribado. ca de la existencia de deterioro en la ingesta, pér-
dida involuntaria de peso, grado de movilidad,
Mini Nutritional Assessment (MNA): presencia de estrés o enfermedad aguda y dete-
http://www.mna-elderly.com/forms/MNA_spanish.pdf rioro neuropsicológico, y añade un último aparta-
do de valoración del IMC, o de la circunferencia de
• Ámbito: es un cuestionario práctico y no invasivo, la pantorrilla, cuando el IMC no se puede medir.
validado en población anciana, esté o no institu- • Interpretación: al igual que la versión larga, clasifica
cionalizada. Es el método de cribado nutricional a los pacientes en desnutridos (0-7 puntos), en ries-
recomendado por la ESPEN en los ancianos, tanto go de desnutrición (8-11 puntos) o con estado nutri-
en los que residen en su domicilio, como los que cional normal (12-14 puntos). Sus resultados se aso-
están institucionalizados o en el hospital. Requiere cian con indicadores de morbimortalidad y función
de unos 10-15 minutos para su realización. social, así como con la frecuencia de visitas médicas.
• Descripción: consta de un cuestionario de 18 pre-
guntas distribuidas en dos apartados: uno inicial de  aloración Global Subjetiva (VGS):
V
cribado (6 preguntas) y uno posterior de valoración http://www.seom.org/seomcms/images/stories/recur-
(12 preguntas). Cuando el paciente obtiene una sos/infopublico/publicaciones/soporteNutricional/pdf/
puntuación ≤ 11 en las preguntas de cribado, debe- anexo_02.pdf
rá cumplimentarse la segunda parte de valoración.
Las preguntas se refieren a varias áreas: ingesta • Ámbito: la VSG clásica es un método diseñado por
dietética (8 preguntas que valoran el número de Baker en los años 80 para valorar el estado nutricio-
comidas realizadas, frecuencia de consumo de nal de pacientes que iban a someterse a cirugía gas-
alimentos y el grado de autonomía del individuo), trointestinal, posteriormente validado en la mayoría
antropometría (peso, talla, pérdida de peso, circun- de la población. Es un método no sólo de cribado
ferencia del brazo y perímetro de la pantorrilla), sino de diagnóstico del estado nutricional basado en
Tema 4.  Valoración nutricional 71

la historia clínica y datos de la exploración física. La daje terapéutico para el control de síntomas y
VSG clasifica como malnutridos a aquellos pacientes alteraciones analíticas, de 4-8 indicaría la necesidad
con riesgo de complicaciones médicas derivadas de de intervención nutricional por un especialista en nu-
su estado nutricional y que previsiblemente se bene- trición y su coordinación con el oncólogo para el
ficiarán del apoyo nutricional. Es el método reco- manejo farmacológico de los síntomas. Finalmente,
mendado por la Sociedad Americana de Nutrición si la puntuación es ≥ 9, el paciente será candidato a
Parenteral y Enteral (ASPEN)9. Aunque para muchos tratamiento nutricional agresivo, utilizando nutrición
es considerado el «gold standard» para la validación enteral y/o parente­ral cuando la vía oral no es posible.
de nuevos métodos de cribado o valoración, para
otros es más un índice global de enfermedad, que  hort Nutritional Assessment Questionnaire
S
de estado nutricional10. (SNAQ):
• Descripción: por una parte este cuestionario evalúa h ttp://www.fightmalnutrition.eu/wp-content/
datos de la historia clínica y dietética, como la pérdi- uploads/2017/05/Snaq_ESP.pdf
da de peso, cambios en la ingesta, presencia de sín- h ttp://www.fightmalnutrition.eu/wp-content/
tomas gastrointestinales y funcionalidad. Por otro uploads/2017/05/Snacq_65_Plus_ESP.pdf
lado, se examinan algunos datos de la exploración h ttp://www.fightmalnutrition.eu/wp-content/
física, como la presencia de edemas o la pérdida de uploads/2017/05/Snaq_RC_ESP_web.pdf
tejido celular subcutáneo o de masa muscular.
• Interpretación: cada aspecto no recibe una puntua- • Ámbito: herramienta desarrollada por el grupo ho-
ción numérica, sino que según el predominio de los landés responsable del proyecto Dutch Malnutri-
datos clínicos y físicos, es el evaluador el que clasifica tion Steering Group, con tres versiones validadas en
subjetivamente al paciente en uno de los 3 grupos sus correspondientes poblaciones; el SNAQ, para el
posibles: A, B o C; esto es, bien nutrido, con desnu- paciente hospitalizado, el SNAQRC, para pacientes
trición moderada o riesgo y con desnutrición grave, institucionalizados y el SNAQ65+, para pacientes
respectivamente. Por tanto, requerirá de personal ≥ 65 años en la comunidad. Son métodos sencillos,
entrenado para su correcta interpretación11. que se pueden realizar por personal no entrenado
en menos de 5 minutos. Está disponible en seis
 aloración Global Subjetiva Generada por el
V idiomas (inglés, francés, español, portugués, italia-
Paciente (VGS-GP): no y alemán) y la versión del paciente hospitalizado
http://www.seom.org/seomcms/images/stories/re- también se ha traducido al japonés. Sin embargo,
cursos/infopublico/publicaciones/soporteNutricio- no se ha realizado su validación en español.
nal/pdf/anexo_02.pdf • Descripción: el SNAQ consta de 3 preguntas senci-
llas, investigando la pérdida involuntaria de peso re-
• Ámbito: es una variación del método original, que ciente, la reducción de apetito o la ingesta de suple-
se utiliza en el paciente oncológico. Se puede efec- mentos o nutrición por sonda en el último mes. La
tuar en hospitalizados o en el ámbito ambulatorio versión para institucionalizados mantiene las pre-
y permite detectar a los pacientes con malnutrición guntas sobre la pérdida de peso o la disminución de
y valorar las intervenciones llevadas a cabo. En ella apetito pero añade una pregunta sobre la necesidad
se involucra al propio paciente en la evaluación, y de ayuda de otras personas para comer y también el
esto reduce el tiempo de realización12. cálculo del IMC. Por último, la versión para la comu-
• Descripción: el paciente deberá cumplimentar la pri- nidad evalúa la pérdida de peso, la circunferencia
mera parte del cuestionario, referida a la historia clí- braquial y el apetito y funcionalidad del paciente.
nica, mientras que el médico se encargará de relle- • Interpretación: en los tres cuestionarios los resul-
nar la parte de la exploración física. En la parte que tados, además de establecer la presencia o no de
completa el paciente se le pregunta acerca de: cam- malnutrición/riesgo, determinan la necesidad de
bios en el peso, cambios en la ingesta, presencia de llevar a cabo una intervención nutricional.
síntomas que interfieran con la alimentación y capa-
cidad funcional o actividad. La exploración física in- Otros métodos:
cluirá como en la VSG una valoración de la grasa, el
músculo y el estado de hidratación del paciente. •  Método de Cardona: método de cribado para pa-
• Interpretación: la puntuación obtenida en el aparta- cientes ingresados que valora a través de una es-
do del paciente se suma a la de la parte realizada por cala de puntuación aspectos relativos a cambios
el clínico y se obtiene un valor final que nos permitirá recientes en el peso corporal, albúmina sérica, re-
seleccionar la intervención que precisa el paciente. cuento linfocitario e ingesta dietética, teniendo en
Con una puntuación de 0-1 no se requeriría inter- cuenta también el motivo de ingreso. Puntuacio-
vención nutricional, entre 2-3 se precisaría un edu- nes ≥ 14 son sugestivas de riesgo nutricional y re-
cación nutricional del paciente y su familia y un abor- quieren consultar a Nutrición.
72 BLOQUE: DIETOTERAPIA

•  Método de Elmore: escala numérica de valoración necesarios para conocer las posibles carencias energé-
de riesgo nutricional, a partir de ecuaciones multi- ticas y de proteínas principalmente, pero también de
variantes, que aplica la fórmula: 238.664 x albúmi- cualquier otro nutriente. No existe un factor determi-
na (g/dl) + 0,07242 x linfocitos (por mm3) – 24.657 nante único dentro de la valoración nutricional14.
x  % pérdida de peso respecto al peso habitual.
Considera que existe riesgo nutricional cuando el Objetivos:
resultado de la fórmula es <747,2 puntos.
•  Método CONUT (Ulíbarri): método automatizado •  Identificar a pacientes con desnutrición o riesgo
desarrollado y validado en España, que recoge in- de ella.
formación clínica y analítica del paciente en el mo- •  Cuantificar el riesgo del paciente desnutrido para
mento del ingreso (edad, diagnóstico, albúmina, desarrollar complicaciones.
colesterol y linfocitos totales), creando una alerta •  Plantear terapia nutricional adecuada durante su
de desnutrición se transmite directamente al mé- proceso.
dico, permitiendo la detección precoz del riesgo.
Ha sido validado frente a otros métodos estableci- Debe incluir:
dos como la VGS13.
•  Historia clínica completa.
En conclusión, existen múltiples herramientas de cri- •  Historia dietética.
bado nutricional, cada una con limitaciones y fortalezas,
•  Exploración física.
así como un ámbito de aplicación específico. Por tanto,
•  Medidas antropométricas.
la selección adecuada de un método de cribado debe
•  Medidas de laboratorio.
tener en cuenta dos aspectos fundamentales: la pobla-
•  Otros.
ción a la que va a ir dirigido (paciente en la comunidad,
hospitalizados, ancianos, institucionalizados) y el resul-
tado que se desea evaluar (estado nutricional, predic- 3.2.  Marcadores de desnutrición
ción de la respuesta al tratamiento nutricional, pre­ Encontrar un buen marcador del estado nutricional
dicción de la evolución nutricional) (tabla 1). es una de las prioridades de las personas dedicadas a la
nutrición clínica. Para que un marcador nutricional sea
3.  Valoración nutricional útil debe cumplir los siguientes ítems:
3.1.  Definición y objetivos
•  Ser consistentemente anormal en pacientes
La valoración nutricional permite describir el estado desnutridos, esto es, que tenga una alta sensi-
nutricional tanto de individuos concretos como a nivel bilidad y pocos falsos negativos (valor predictivo
poblacional. Se trata de un conjunto de datos útiles y positivo).

Tabla 1.  Selección de las herramientas de cribado nutricional.

·  MUST (recomendado por ESPEN en la comunidad)


·  NRS-2002 (recomendado por ESPEN en hospitalizados)
Adultos
·  VGS (recomendado por ASPEN)
·  SNAQ (hospitalizados)
Población ·  MNA (recomendado por ESPEN)
de estudio Ancianos ·  MNA-SF
·  SNAQ65+
Oncológicos ·  VGS-GP
Institucionalizados ·  SNAQRC
Estado nutricional ·  MUST, NRS-2002, MNA, VGS, SNAQ
Predicción de la
Resultado respuesta al tratamiento ·  NRS-2002
a evaluar nutricional
Predicción de la
·  MUST, NRS-2002, MNA, VGS
evolución nutricional
Tema 4.  Valoración nutricional 73

•  Ser consistentemente normal en pacientes sin Tabla 2.  Clasificación de los métodos de valoración
desnutrición, es decir, que tenga alta especifici- nutricional.
dad y pocos falsos positivos (valor predictivo ne-
gativo). Clínicos
•  Que no se afecte fácilmente por factores no nutri- ·  Historia clínica
cionales. ·  Historia de pérdida ponderal
•  Que se normalice claramente con un adecuado – Síntomas digestivos
aporte nutritivo. –  Historia dietética
–  Capacidad funcional del paciente
No tenemos ningún marcador ideal ni único que – Repercusión de la enfermedad
cumpla todas las características anteriormente mencio- ·  Exploración clínica: valoración global subjetiva
nadas y es más, es posible, que nunca lo tengamos, ·  Valoración nutricional mínima para ancianos
dado que prácticamente todos los marcadores se afec-
tan por la enfermedad y a la agresión que supone la Anatómicos y antropométricos
misma a la homeostasis. ·  Peso, talla, índice de masa corporal (IMC)
Por tanto, si bien no tenemos ningún índice o deter- ·  Circunferencia del brazo (CB), perímetro de cintura
minación del estado nutricional aceptado de forma ·  Circunferencia muscular del brazo (CMB)
unánime, sí es cierto que varios indicadores han de- ·  Pliegues cutáneos. Pliegue triceps (PCT)
mostrado su utilidad para evaluar la presencia de des- ·  Análisis de composición corporal: DEXA, BIA
nutrición en determinados casos15, 16.
Tampoco hay uniformidad de criterios respecto a Bioquímicos e inmunológicos
qué parámetros son los más útiles para valorar a nivel · Balance nitrogenado
individual el estado nutricional de un paciente en con- · Índice creatinina/altura (ICA)
creto. Por ello, se aconseja emplear más de un marca- · Proteínas plasmáticas: albúmina, transferrina,
dor nutricional y elegirlos en función de la situación de prealbúmina, proteína ligada al retinol (RBP)
cada paciente en particular. · Colesterol
A la hora de realizar una valoración del estado nutri- · Recuento total de linfocitos
cional de un paciente tenemos que incluir datos de la · Test de inmunidad
historia clínica, así como datos de antropometría y bio- · Hipersensibilidad cutánea retardada
químicos que ofrezcan información para que podamos
establecer un diagnóstico nutricional. Además, hay Funcionales
que recordar que dicho diagnóstico nutricional no se · Dinamometría
basa en un único dato, sino en la síntesis racional de la · Espirometría
información obtenida a partir de las diferentes prue- · Calorimetría
bas. (tabla 2). · Estimulación repetitiva del pulgar
· Complejos enzimáticos mitocondriales
3.3.  Aspectos a incluir en la valoración · Índice de sodio y potasio intercambiable
nutricional
1.  Historia clínica.
2.  Exploración física. cirugía (especialmente cirugías área faringe/larin-
3.  Parámetros de laboratorio. ge y gastrointestinal) y fármacos anorexígenos y
4.  Métodos de valoración del estado nutricional. que puedan interferir en el metabolismo.
•  Encuesta dietética: identificar aspectos cuanti y
Historia clínica cualitativos de la ingesta como intolerancias ali-
mentarias, dietas terapéuticas restrictivas, apetito,
Hemos de tener presente que deben obtenerse datos anorexia, alteraciones del gusto y olfato, denti-
clínicos, de la historia dietética y datos sociales (econó- ción, alteraciones masticación/deglución, patrón
micos, laborales) que pueden resultar relevantes en de ingesta, grado de autonomía para adquirir,
nuestra valoración17: preparar e ingerir alimentos. La encuesta puede
hacerse por recuerdo de 24 horas, registro de ali-
•  Datos clínicos: pérdida de peso reciente, estado mentos o cuestionarios de frecuencia de consumo
mental (depresión, deterioro cognitivo, etc.), en- de alimentos.
fermedades sistémicas que interfieren con la ali- •  Historia social: nivel de ingresos, nivel de estudios,
mentación (cáncer, isquemia intestinal, insuficien- actividad física, actividad laboral, etnia, costum-
cias orgánicas: cardíaca, respiratoria, renal, bres, situaciones de soledad y dependencia fun-
hepática), consumo de tóxicos (alcohol, drogas), cional.
74 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Exploración física Tabla 3.  Valoración nutricional en función de la


pérdida de peso.
•  Exploración general
Tipo de desnutrición, según pérdida
Debe ser minuciosa y global. En un paciente con des- ponderal expresada en %
nutrición podemos encontrar los siguientes datos: Tiempo Leve Moderada Grave

– Cabello: caída, sequedad, pérdida de color, pérdi- 1 semana 1-2 2 >2


da del brillo. 1 mes <5 5 >5
– Cara: palidez, dermatitis seborreica, sequedad.
2 meses 5 5-10 > 10
– Ojos: palidez conjuntival, xerosis, máculas de Bitot.
–  Boca: rágades, queilosis, glositis, atrofia papilar, 3 meses < 10 10-15 > 15
edema e hipersensibilidad lingual, edema y san-
% pérdida de peso habitual = peso habitual – peso actual /
grado gingival. peso habitual x 100.
– Piel: xerosis, pigmentación, hiperqueratosis, pete-
quias, hematomas, ulceraciones, edemas, dificulta-
des de cicatrización, pérdida de grasa subcutánea. no dominante con el paciente sentado sin zapatos y
– Uñas: palidez, fragilidad, deformidades. con rodilla en ángulo recto. También podemos esti-
– Glándulas: bocio, hipertrofia parotídea. marla a partir de la longitud del cúbito, que consiste
– Sistema musculoesquelético: pérdida de masa en la medición de la longitud entre el codo y el pun-
muscular, osteomalacia, deformidades óseas, hi- to medio más prominente de la apófisis estiloides de
perextensión de las articulaciones. la muñeca, colocando el brazo no dominante cru-
– Neurológico: confusión, irritabilidad, alteraciones zando el pecho con los dedos apuntando al hombro
psicomotoras, hipoestesia. opuesto. Es la medida más fácil y rápida de obtener
– Otros: hepatomegalia, esplenomegalia, taquicardia. una estimación de la talla si se consulta en tablas de
referencia ajustadas para edad y sexo (tabla 4).
•  Antropometría – Índice de masa corporal: se obtiene de dividir el
peso expresado en kilogramos entre la talla al cua-
Se trata de una serie de mediciones no invasivas y de drado expresada en metros. Se considera como
fácil realización además de bajo de coste económico. normal un IMC de 18,5-25 kg/m2 19.
En contrapunto, existe variabilidad inter e intraobser- – Pliegue cutáneo tricipital (PCT): se mide en el pun-
vador. Entre los parámetros antropométricos que pue- to medio entre el acromion y el olécranon sobre el
den resultar de utilidad en la valoración del estado nu- músculo tríceps del brazo no dominante flexiona-
tricional encontramos:

– Peso corporal: debe medirse en báscula calibrada. Tabla 4.  Estimación de peso y talla a partir de otros
No hay que olvidar que los cambios en el estado parámetros antropométricos.
de hidratación pueden alterar el resultado. En el
caso de personas incapaces de mantener la bipe- Peso (kg) = (1,23 x CB) + (1,15 x altura talón/rodilla)
destación, habrá que recurrir a sillones-báscula o – (1,6 x sexo) – (1,32 x edad) + (0,58 x perímetro
bien a la estimación a partir de fórmulas que em- abdominal en decúbito) – 64,8 (varón = 1, mujer = 2)
pleen otros parámetros antropométricos como el Varones:
perímetro abdominal, la circunferencia del brazo T (cm) = (2,02 x altura rodilla) – (0,04 x edad en
o la altura talón-rodilla18. Realmente, más que el años) + 64,19
peso, nos interesa su evolución temporal, de Mujeres:
modo que una pérdida involuntaria de peso de un T (cm) = (1,83 x altura rodilla) – (0,24 x edad en
5 % o más en un mes o de más de un 10 % en años) + 84,88
6 meses puede indicar desnutrición (tabla 3).
– Talla: debe medirse en tallímetro. En el caso de pa- Talla (m) = (1,81 x altura rodilla) – (3,165 x sexo) –
cientes que no pueden mantenerse en bipedestación (0,01 x edad) + 84,32 (varón = 1, mujer = 2)
se puede recurrir a fórmulas que permitan estimar la
talla a partir de la altura talón-rodilla (se mide la dis- Tomado de: Alastrué A, Esquius M, Gelanch J, González F,
Ruzafa A, Pastor M. Población geriátrica y valoración
tancia entre el talón y la rodilla flexionados en un
nutricional. Normas y criterios antropométricos. Rev Esp Geriatr
ángulo de 90°). Se trata de la distancia entre el plano Gerontol 1993; 28: 243-256, y de Bellido D, Carreira J, Isidro L,
más superior de la rodilla en flexión de 90º y el plano Martínez Olmos M. Valoración del peso y la talla en pacientes
plantar, en una línea que una la apófisis peronea ex- encamados. X Congreso de la Sociedad de Nutrición y Dietética
presada en centímetros. Debe medirse en la pierna de Galicia. La Coruña. Mayo de 2000.
Tema 4.  Valoración nutricional 75

do en 90º, con un lipocalibre de presión constante tura y la medición de elementos traza, vitaminas y
tipo Holtain. Debe tomarse la media de tres deter- electrolitos. Las proteínas plasmáticas que más se em-
minaciones. Medir siempre en el brazo no domi- plean en la valoración nutricional son la albúmina, la
nante (figura 3). transtirretina o prealbúmina, transferrina y la proteína
–  Circunferencia del brazo (CB): se mide con una ligadora del retinol. A nivel global, estas determina-
cinta métrica flexible al mismo nivel que el pliegue ciones presentan la ventaja de su amplia disponibili-
cutáneo tricipital, en el brazo no dominante. dad, pero, aunque con diferencias según la prueba
– C ircunferencia muscular del brazo: se calcula concreta, son poco sensibles y específicas. La larga
mediante la fórmula CMB (cm) = CB (cm) – vida media de la albúmina (14-21 días) y la gran can-
(PCT (mm) x 0,314). tidad de situaciones en que puede verse afectada li-
mitan su valor como parámetro nutricional, aunque
Todos estos parámetros hay que compararlos con los presenta una buena correlación con el pronóstico de
estándares de la población de referencia según sexo y los pacientes. La vida media de la transferrina (8-9
edad. En España, las tablas más empleadas son las de días) y de la transtirretina o prealbúmina de 2-3 días,
Alastrué20 y las de Esquius21 (estas últimas incluyen de permite utilizar estos parámetros como marcadores
forma específica a población anciana). más rápidos del estado proteico visceral. La proteína
fijadora del retinol (RBP), con una vida media de 10
Parámetros de laboratorio22 horas, es también capaz de detectar cambios en el
estado nutricional (figura 4 y tabla 5).
•  Estudios bioquímicos
•  Estudios de inmunocompetencia
Incluyen la medición de proteínas plasmáticas,
cálculo del balance nitrogenado, índice creatinina-al- Incluyen el recuento linfocitario y las pruebas cutá-
neas de hipersensibilidad retardada. Al igual que otros
parámetros mencionados anteriormente, diferentes
enfermedades y tratamientos, pueden influir en el sis-
tema inmunológico. Por tanto, en pacientes grave-
mente enfermos, la determinación de la inmunocom-
petencia no es muy específica para valorar el estado
nutricional.

Otros estudios de composición corporal23, 24


En este epígrafe se incluyen diferentes métodos con
diferente sensibilidad y especificidad, todavía con dis-
ponibilidad limitada en la clínica, con costes elevados
y muy informativos pero prácticamente empleados
sólo en investigación. La composición corporal cada
vez más se está introduciendo en la práctica diaria y

Proteínas plasmáticas y valoración nutricional

Alimentación

Nivel
Síntesis Degradación
plasmático

Pérdidas Distribución
Variación entre distintos órganos
y compartimentos celulares.

Figura 3.  Medición de pliegues y circunferencias. Figura 4.  Niveles de proteínas plasmáticas.
76 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Tabla 5.  Valoración nutricional en función de las proteínas viscerales.

Desnutrición
Normalidad Leve Grave
moderada
Albúmina (g/dl) > 3,5 3-3,5 2,6-3 < 2,5
Prealbúmina (mg/dl) 18-28 15-18 10-15 < 10
Transferrina (mg/dl) 250-350 150-250 100-150 < 100
RBP (mg/dl) 2,6-7 2-2,6 1,5-2 < 1,5
RBP: proteína fijadora del retinol.

es importante que los profesionales implicados co- del nervio ulnar y biopsia muscular. Estas pruebas cada
nozcan sus fundamentos, aplicaciones e interpreta- vez se emplean más en clínica y han puesto de relieve
ción de resultados. La impedancia bioeléctrica25 es un la necesidad de mantener un buen tropismo muscular
método ya habitual en la práctica clínica diaria de la para tener un buen estado nutricional.
nutrición clínica. Otros métodos de valoración del es-
tado nutricional, menos empleados en práctica, son Métodos de valoración del estado nutricional
la absorciometría dual de rayos X (DEXA), las técnicas
de dilución isotópica (potasio corporal total, agua Por tanto, cada método tiene sus pros y sus con-
corporal), TC y RM. tras pero nos ayuda a perfilar la realidad del paciente
que estamos valorando. A modo de resumen, en la
(tabla 6) podemos ver los parámetros más emplea-
Pruebas funcionales
dos en la práctica clínica diaria así como sus puntos
Permiten valorar la repercusión de la pérdida de de corte, de acuerdo con los criterios SENPE-SEDOM
masa muscular, mediante dinamometría, estimulación de codificación de desnutrición hospitalaria26.

Tabla 6.  Valoración del estado nutricional según los criterios SENPE-SEDOM.

Desnutrición Desnutrición
Ítem Valor normal Desnutrición leve
moderada severa
IMC 18,5-25 17-18,4 16-16,9 < 16
Porcentaje de peso habitual > 95% 94,9-85% 84,9-75% < 75%
%pérdida de peso/tiempo
1 semana <1 1-2 2 >2
1 mes <2 <5 5 >5
2 meses <3 5 5-10 > 10
3 meses < 7,5 < 10 10-15 > 15
Medición de pliegues > P15 < P15 < P10 < P5
Albúmina (g/dl) 3,6-4,5 2,8-3,5 2,1-2,7 < 2,1
Prealbúmina (mg/dl) 18-28 15-18 10-15 < 10
Transferrina (mg/dl) 250-350 150-250 100-150 < 100
RBP (mg/dl) 2,6-7 2-2,6 1,5-2 < 1,5
Linfocitos (céls/mm3) > 2000 1200-2000 800-1200 < 800
Colesterol (mg/dl) ≥ 180 140-179 100-139 < 100
VGS A B C C
NRS 0 1-2 ≥3
MUST 0 1 ≥2
RBP: proteína fijadora del retinol.
Tema 4.  Valoración nutricional 77

4. Estrategia de valoración del estado de Chang o la VSG, con el objetivo de determinar la


nutricional presencia, grado y tipo de desnutrición, así como apli-
car el tratamiento y las medidas correspondientes.
En primer lugar, es de vital importancia, identificar a Este proceso de detección de malnutrición y diag-
todos los pacientes en riesgo de desnutrición. Los méto- nóstico de la misma se resume en la figura 5.
dos de cribado deben ser, por tanto, muy sensibles y
dependerán de la población que queramos evaluar, del 5. Iniciativas en el ámbito de la detección de
medio en el que desarrollemos nuestra actividad y de la
disponibilidad o no de profesionales formados en nutri-
riesgo de desnutrición y valoración
ción clínica. En población general, de acuerdo con las nutricional
recomendaciones de la ESPEN, se debe emplear el MUST. La presencia de desnutrición es un factor de riesgo
En ancianos, se emplea en población general el MNA. En de morbilidad y mortalidad. Por ello, no son pocos los
el caso de pacientes hospitalizados, se deben emplear esfuerzos dirigidos a su prevención, detección y trata-
métodos como el de Cardona o el NRS-2002 (método de miento tanto a nivel individual como colectivo. Se trata
preferencia según ESPEN). También en este colectivo de un problema importante desde los puntos de vista
pueden emplearse métodos automatizados como las cualitativo y cuantitativo a nivel hospitalario y a nivel de
fórmulas de riesgo o el método de Ulíbarri (CONUT). residencias/centros sociosanitarios.
Una vez que hayamos detectado a los pacientes en Se estima que la desnutrición hospitalaria afecta al
riesgo de desnutrición, debemos pasar un segundo 30-50 % de los pacientes ingresados. Y aparte de su ele-
test de diagnóstico del estado de nutricional, como el vada prevalencia tiene efectos negativos sobre la evolu-

Cribado del riesgo nutricional

Historia clínica Exploración Estudios complementarios

Antecedentes General y por


Laboratorio
clínicos aparatos

Antecedentes
Antropometría Funcionales
sociales

Antecedentes Composición
dietéticos corporal

*  Identificar personas que precisen apoyo nutricional para


conservar/restaurar su estado nutricional
*  Identificar mecanismos que llevaron a balance energético negativo

Programar apoyo
Verificar eficacia
nutricional adecuado

Figura 5.  Estrategia de diagnóstico de desnutrición.


78 BLOQUE: DIETOTERAPIA

ción de sus patologías. En 2003, el Consejo de Europa, A nivel europeo existen otras iniciativas como en Ho-
emitió una serie de recomendaciones sobre la desnutri- landa o el Nutrition Day, organizado por ESPEN.
ción hospitalaria que han sentado las bases de actuacio- Holanda ha puesto en marcha con éxito programas de
nes presentes y futuras en este aspecto27. El objetivo es lucha contra la desnutrición29. Este país puso en marcha
que se detecten pacientes en riesgo nutricional, se tra- en 2007 una estrategia de lucha para reducir gradual-
ten aquellos desnutridos y se reevalúe la eficacia del so- mente la prevalencia de la desnutrición en todos los nive-
porte nutricional. Para ello la valoración nutricional debe les asistenciales. El éxito de su programa no solo se ha
ser universal, simple, precoz y adaptable según las cir- debido a la implicaciones de los profesionales y Ministe-
cunstancias, haciendo de ella una herramienta impres- rio de Sanidad holandés, sino también al desarrollo de
cindible en la atención del paciente hospitalizado. una herramienta de cribado rápida y sencilla que no re-
Una misma filosofía comparte la Alianza másnutri- quiere formación, ni equipamiento o cálculo alguno
dos en España, que engloba a diferentes profesionales (SNAQ). Lleva menos de 5 minutos aplicarla y sus resulta-
relacionados con la nutrición clínica28. Alianza másnu- dos están conectados a un plan de tratamiento. Además,
tridos tiene por objetivo lograr el abordaje multidisci- el cribado nutricional es un indicador obligatorio de cali-
plinar de la desnutrición relacionada con la enferme- dad y se han hecho diferentes estudios de coste-efectivi-
dad y la implantación del cribado en los diferentes dad. Los pacientes desnutridos suponen un gasto diario
niveles asistenciales. Asimismo, pretende conseguir adicional de 76 euros de media. Sin embargo, los pacien-
iniciativas regionales que incluyan actuaciones contra tes que son cribados, evaluados y asistidos han visto re-
la desnutrición y contemplen el cribado. ducida su estancia hospitalaria en 3,5 días (el coste apro-
En el momento actual, está englobada por la Socie- ximado de un día de hospitalización es de 400 euros).
dad Española de Nutrición Enteral y Parenteral (SENPE), ESPEN también está apoyando diferentes proyectos
el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuti- relacionados con la desnutrición hospitalaria30. Aparte
cos, el Consejo General de Enfermería, la Alianza Gene- de la difusión de la importancia de la desnutrición hos-
ral de Pacientes, la Sociedad Española de Medicina de pitalaria y diferentes materiales, está concediendo be-
Familia y Comunitaria (semFYC), la Sociedad Española de cas a diferentes proyectos relacionados con la mejoría
Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), la Sociedad de la desnutrición hospitalaria. Otra de sus iniciativas
Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), la Socie- es el Nutrition Day31, en el que evalúa desde el punto
dad Española de Geriatría y Gerontología, la Sociedad de vista nutricional a los pacientes ingresados en los
Española de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición diferentes departamentos del hospital. Supone cono-
Pediátrica (SGHNP), la Sociedad Española de Oncología cer la prevalencia de desnutrición, así como tomar con-
Radioterápica (SEOR), Fundación Abbott y la Sociedad ciencia de la misma y permite su reevaluación poste-
Española de Directivos de Salud (SEDISA) (figura 6). riormente (figura 7).

Figura 6.  Objetivos de la Alianza másnutridos.


(Tomado de www.alianzamasnutridos.es).
Tema 4.  Valoración nutricional 79

Figura 7.  Proyecto Nutrition Day.


(Tomado de http:/www.nutritionday.org/en/about-nday/what-is-nutritionday/index.html).

6. Recursos digitales
6.1.  Enlaces de interés
Entre las páginas webs útiles donde encontrar recur-
sos para la evaluación nutricional de nuestros pacien-
tes podemos encontrar:

•  Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición,


Nutrición Interactiva32: http://www.seen.es/nutri-
cion-interactiva/index.html.
•  Sociedad Española de Nutrición Enteral y Parente-
ral33: http://www.senpe.com/.
•  European Society of Parenteral and Enteral Nutri-
tion34: http://www.espen.org/.
– Alianza másnutridos28: http://www.alianzamasnu-
tridos.es/.
– Iniciativa holandesa contra la desnutrición hospi-
talaria30: http://www.fightmalnutrition.eu/.
– British Association of Parenteral and Enteral Nutri-
tion35: http://www.bapen.org.uk/.
– Nutrition Day31: http://www.nutritionday.org/.

6.2.  Aplicaciones para realizar cribado/ Figura 8.  Aplicaciones útiles para la valoración
valoración nutricional nutricional.

El uso de móviles y tabletas se ha hecho muy popular


7. Resumen
en los últimos años y el uso de aplicaciones (apps) pro-
porciona ayuda en la práctica clínica diaria. El siguiente Un dato único y aislado no es suficiente para hacer
listado de apps son multiplataforma, el registro es gra- un diagnóstico nutricional, sino que deben tenerse en
tuito y permiten tener en la palma de la mano los dife- cuenta las diferentes pruebas y hacer una síntesis racio-
rentes test, así como analizar su puntuación y tener va- nal de ellas. Para hacer una buena valoración nutricio-
lores de referencia de diferentes parámetros (figura 8). nal hay que ponderar la historia clínica, datos de antro-
80 BLOQUE: DIETOTERAPIA

pometría y datos bioquímicos. En este capítulo se   9. ASPEN Board of directors. Guidelines for the use
comentan los diferentes métodos de cribado del esta- of parenteral, enteral nutrition in adult and pedia-
do nutricional, de diagnóstico del estado nutricional y tric care. JPEN 2002; 26: 9SA-12SA.
se propone una estrategia de valoración nutricional en 10. Barbosa-Silva MCG, Barros AJD. Indications and
los grupos en los que se detecte que tienen riesgo de limitations of the use of subjective global assess-
desnutrición. ment in clinical practice: an update. Curr Opin Clin
En conclusión, si bien no está universalmente acep- Nutr Metab Care. 2006 May;9(3):263–9.
tado, un método simple para definir con precisión el 11. Detsky AS, McLaughlin JR, Baker JP, Johnston N,
estado nutricional, existen diferentes maniobras que Whittaker S, Mendelson RA, et al. What is subjec-
nos permiten una orientación sobre el estado nutricio- tive global assessment of nutritional status? JPEN J
nal de un individuo, cada una de ellas con una serie de Parenter Enteral Nutr. 1987 Feb;11(1):8–13.
ventajas e inconvenientes. Como no existe consenso 12.  Gómez-Candela C, Luengo LM, Cos AI, Martí-
sobre cuál es el mejor método de valoración del estado nez-Roque V, Iglesias C, Zamora P, et al. [Subjecti-
nutricional una vez que se ha realizado un cribado de ve global assessment in neoplastic patients]. Nutr
aquellos pacientes en riesgo nutricional, se aconseja Hosp. 2003 Dec;18(6):353–7.
emplear más de un marcador de dicho estado, selec- 13. González-Madroño A, Mancha A, Rodríguez FJ,
cionar el método utilizado en función del individuo y Culebras J, de Ulibarri JI. Confirming the validity of
de los objetivos, así como conocer los diferentes méto- the CONUT system for early detection and monito-
dos existentes y disponibles para utilizar aquellos en ring of clinical undernutrition: comparison with
que el evaluador tenga más experiencia. two logistic regression models developed using
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Tema 4.  Valoración nutricional 81

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ted 2017 Feb 27]. Available from: https://rm.coe. from: http://www.bapen.org.uk/
Tema 5.
Valoración de la ingesta. Encuestas nutricionales
José Manuel García Almeida
FEA Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nutrición Málaga. Hospital Universitario Virgen de
la Victoria. Málaga. Jefe de Servicio de Endocrinología. Hospital Quirónsalud. Málaga
M.ª Cristina Porca Fernández
Dietista-Nutricionista. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Hospitalario Universitario de
Ferrol. Ferrol. (A Coruña)
Diego Bellido Guerrero
Jefe del Servicio de Endocrinologia y Nutrición. Complejo Hospitalario Universitario de Ferrol. Ferrol.
(A Coruña)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 83-96.

 1. Introducción
 2.  Características de los métodos de valoración de la ingesta
 3.  Criterios en la selección de un método de encuesta alimentaria
 4.  Registro o diario dietético (RD)
 5.  Recordatorio de 24 horas (R24)
 6.  Cuestionarios de frecuencia de consumo de alimentos (CFC)
 7.  Historia dietética
 8.  Análisis nutricional: tablas, bases de datos, aplicaciones informáticas y apps
 9.  Tecnología y evaluación de la ingesta
10.  Nuevos métodos de análisis de ingesta: Registro Dietético Fotográfico (RDF)
11. Resumen
12. Bibliografía

1. Introducción gesta es llevando a cabo encuestas alimentarias, bien


como tal o bien como parte de una investigación más
Es bien conocida la importancia que ejerce la alimen- amplia.
tación sobre la prevención, desarrollo y tratamiento de Las encuestas dietéticas son diferentes herramientas
diferentes enfermedades, teniendo especial interés en utilizadas para conocer la dieta actual y/o habitual de
el caso de enfermedades crónicas. Son numerosas las los individuos que permiten recopilar información so-
patologías en las que con una correcta modificación de bre los alimentos consumidos (tipo, calidad, cantidad,
la ingesta alimentaria se previenen y/o mejoran sus sín- forma de preparación, número de tomas) y conocer el
tomas y/o su desarrollo. Por ejemplo, el patrón de dieta patrón de consumo de alimentos. También posibilitan
mediterránea se asocia con descenso del riesgo cardio- la identificación de alteraciones en la dieta antes de
vascular (Estruch et al., 2013) y los cambios dietéticos que aparezcan signos clínicos por deficiencia o exceso
a favor de una alimentación saludable han demostrado de nutrientes y tener datos para poder decidir cómo
reducir la incidencia de cáncer a una tercera parte (Wi- modificar la alimentación actual, caso de ser necesario.
llett WC., 1995). Dentro de las llamadas encuestas dietéticas, pode-
La alimentación por tanto, ejerce una influencia mos hablar de cuestionario, documento escrito que
transcendental sobre la salud, y es esta influencia la se utiliza como instrumento de observación sobre una
que hace necesario investigar lo que ingieren los indivi- población bajo estudio y que contiene un conjunto de
duos. La manera de obtener información sobre la in- preguntas, preparadas cuidadosamente, sobre los he-

83
84 BLOQUE: DIETOTERAPIA

chos y aspectos que interesan caracterizar (alimentos/ su adecuación a los individuos o población en estudio.
nutrientes). Dependiendo de la forma en que aplique- En muchas patologías prevalentes como la diabetes,
mos el cuestionario sobre la población de estudio, po- obesidad, dislipemia, etc., estos datos ayudan a plani-
demos hablar de: ficar unos objetivos nutricionales mas individualizados
desde el punto de vista de la prevención, tratamiento o
•  Encuesta autoadministrada/autocumplimentada. rehabilitación de los pacientes. En todos estos méto-
•  Entrevista, administrada mediante la ayuda de dos existen algunos factores que asumimos como
un entrevistador/a. constantes, cuando realmente pueden suponer una
fuente de interferencia en la validez de las estimaciones
La valoración de la ingesta permite evaluar el modo (variabilidad de la ingesta día a día, composición esta-
de alimentación de un individuo o colectivo al conocer cional de los alimentos, cambios con la preparación
sus hábitos alimentarios y su ingesta de nutrientes. culinaria, etc.).
De aquí se deduce la importancia de realizar esta va-
loración, no solo a nivel individual, sino también a nivel 2. Características de los métodos
colectivo. Conocer la ingesta poblacional es útil para el de valoración de la ingesta
desarrollo de políticas de Salud Pública en materia ali-
mentaria y para formular recomendaciones nutriciona- Las intervenciones nutricionales basadas en la educa-
les (Elmadfa & Meyer, 2014). ción alimentaria se asocian con mejoras en la adheren-
El estudio de la ingesta de alimentos, sobre determi- cia al tratamiento, control de la ingesta y modifi­
nados colectivos o individualmente (Willett WC., 1998), caciones del patrón alimentario hacia un modelo de
es uno de los aspectos más interesantes en el conoci- alimentación más saludable.
miento de la situación nutricional de estos pero la Para que estas intervenciones tengan éxito es nece-
complejidad del mismo, variabilidad intra e interindivi- sario adaptar las encuestas en función del ámbito de
duo, limitaciones de los instrumentos de medidas, etc.; estudio, en función de esto podemos realizar una cla-
hace que sea un aspecto a veces relegado a un segun- sificación de los distintos métodos de valoración de
do plano en el estudio nutricional. ingesta (tabla 1).
En el enfoque terapéutico general de la mayoría de Los métodos colectivos (nivel nacional o familiar) es-
los trastornos nutricionales y enfermedades metabóli- timan el consumo de nutrientes en grupos a través de
cas, el análisis de la ingesta y los hábitos alimentarios herramientas específicas, como los métodos de re-
del paciente son fundamentales para evaluar y planifi- cuento o las hojas de balance alimentario. Dan una vi-
car las adaptaciones dietéticas que este precisa. Es ne- sión global pero carecen de datos para aplicar a nivel
cesario usar métodos para conocer de la forma más individual con nuestros pacientes.
precisa posible los hábitos nutricionales de los pacien- La ingesta alimentaria es «variable» por definición. La
tes (encuesta de frecuencia) e ingesta detallada de los naturaleza de esta variabilidad hace que cuando la es-
mismos (registros y recordatorios). El conjunto de mé- timamos con los instrumentos de encuesta debamos
todos disponibles para estimar la ingesta a nivel colec- elegir el método más adecuado en función de los datos
tivo o individual se denominan encuestas dietéticas. y el período que necesitamos valorar. El concepto de
Su uso es frecuente en estudios de investigación y su ingesta actual o habitual puede llegar a ser muy dife-
aplicación a la práctica clínica cotidiana muchas veces rente. El consumo actual se estima de forma sencilla y
resulta complicada. Por esto puede ser útil disponer de precisa con registros que pueden llegar a pesar todos
material práctico educativo (atlas visuales de porcio- los alimentos que ingiere el individuo. Pero esto no in-
nes, modelos de alimentos, fotografías) e informático forma sobre su consumo habitual, ya que esta depende
(páginas web de análisis nutricional online y tablas de
composición de alimentos) que hagan más accesibles
estos métodos de recogida de datos nutricionales. Ha- Tabla 1.  Clasificación de los métodos de valoración
bitualmente disponemos de un tiempo muy limitado de ingesta.
para desarrollar un análisis nutricional completo de la
dieta de los pacientes, de ahí la importancia de selec- Ámbito nacional Hojas de balance alimentario
cionar el paciente que se va a beneficiar de una valora- Ámbito familiar Encuestas familiares
ción nutricional más exhaustiva y por otro lado tratar
de utilizar encuestas nutricionales sencillas. El conoci- Recordatorio de 24 horas
miento de la ingesta de los pacientes a través de en-
Cuestionario de frecuencia de
cuestas dietéticas puede utilizarse para estimar la ener- Ámbito consumo de alimentos
gía, macro y micro nutrientes ingeridos, usualmente individual
mediante su transformación en tablas y bases de datos Historia dietética
de composición de alimentos y posterior comparación
Registro dietético
con las ingestas dietéticas recomendadas para evaluar
Tema 5.  Valoración de la ingesta. Encuestas nutricionales 85

de la variabilidad entre días o períodos estacionales o de alimentos de la población a estudiar. Diversas re-
entre diferentes situaciones que acontecen al indivi- visiones sobre el tema concluyen que no existe un
duo. Por otro lado, los instrumentos de medida, en- método realmente satisfactorio por sí mismo, y que
cuestas, encuestadores, tablas de análisis nutricional, la utilidad de cada método dependerá de la forma
programas informáticos, etc. pueden inducir sesgos en de utilización y de los objetivos que cada estudio
estas medidas. quiera alcanzar.
Los distintos tipos de encuestas nutricionales se La selección de un método u otro vendrá determina-
muestran en la tabla 2 junto con sus principales posi- da por los siguientes factores:
bles características.
Los métodos a nivel individual de valoración de la •  Objetivos del estudio.
ingesta tienen mayor utilidad clínica. Pero a nivel prác- Si queremos conocer el patrón de consumo ali-
tico, cuando hablamos de registros de ingesta o hábi- mentario en un individuo o grupo, el mejor méto-
tos, la principal limitación de estos datos es la validez y do es el cuestionario de frecuencia de consumo,
precisión de los mismos. pues permite clasificar la población en categorías
Esto puede hacernos pensar que esta no resulta de- tanto de frecuencia como de cantidades de ali-
masiado útil, sin embargo, conociendo las limitaciones mentos consumidos.
de las técnicas podemos mejorar su rendimiento. Los Si el objetivo del estudio es evaluar el consumo
cuatro modelos principales de valoración de la ingesta actual de alimentos o nutrientes de un individuo
son los registros dietéticos, recordatorios de 24 horas, en un período determinado, se recomienda utili-
las encuestas de frecuencia de consumo y la historia zar el registro o diario dietético por pesada duran-
dietética. te el período de tiempo estimado.
En la tabla 3 vemos sus principales problemas a la Sin embargo, si el objetivo del estudio es calcu-
hora de realizar registros de ingesta. lar la media de consumo de nutrientes de un
grupo, será suficiente con utilizar un recordato-
rio de 24 horas, o un registro dietético de un
3. Criterios en la selección de un método solo día.
de encuesta alimentaria
•  Perfil de la población bajo estudio.
Desde el enfoque de la epidemiología nutricional, la Dependerá de la edad, nivel de alfabetización,
selección del método también debe hacerse de acuer- cooperación, etc.
do con los objetivos del estudio diseñado. (Serra Ma-
jem Ll, et al., 2006).
Existe una gran controversia en cuanto a qué mé-
todo es el más adecuado para usar, y cuál es aquel Tabla 3. Principales problemas a la hora de analizar
que refleja mejor y de forma más realista el consumo registros de ingesta.

Problema Ítem de controversia

Tabla 2.  Características de los métodos de valoración · Coste-efectividad


de ingesta. · Estimación de la ingesta habitual
Validez · Método apropiado de acuerdo con
Métodos Características los objetivos
· Comparabilidad de los datos
Individuales: Período analizado:
·  Registro dietético · Prospectivo · Modelos/Réplicas de alimentos
Tamaño de
· Recordatorio · Retrospectivo · Modelos fotográficos
las porciones
de 24 horas · Nuevas tecnologías
Datos obtenidos:
· Cuestionario de Restos de · Sobreestimación/Subestimación de
· Cualitativos
frecuencia de consumo comida la ingesta
· Cuantitativos
·  Historia dietética
· Semi-cuantitativos · Bebidas
Métodos de obtención: Alimentos · Grasa y aceites
· Entrevista especiales · Bebidas
· Encuesta · Suplementos

Colectivos: · Grasas y aceites


Confecciones
·  Encuestas familiares · Salsas
culinarias
· Hojas de balance · Pérdidas
alimentario
Modificado de Aranceta J. NutrHosp 2015; 31 (Supl.3):15-21.
86 BLOQUE: DIETOTERAPIA

•  Tipo de estudio diseñado. 4.  Registro o diario dietético (RD)


Dependerá de si se trata de estudios experimenta-
les, de casos y controles, de correlación de varia- El Registro/Diario Dietético (RD) (figura 1) es un mé-
bles, etc. todo basado en el registro por parte de la persona en-
cuestada (o un representante de esta) mediante la uti-
•  Recursos disponibles. lización de un formulario predefinido de todos los
Punto clave a la hora de determinar el tipo de alimentos y bebidas consumidos a lo largo de un perío-
cuestionario a utilizar, ya que dependiendo de la do determinado (Ortega RM, et al. 2015). El registro
posibilidad de contar con entrevistadores y de puede llevarse a cabo sin cuantificar de forma precisa
la capacidad de estos para realizar, codificar y/o la ingesta de alimentos y bebidas (utilizando modelos,
valorar los cuestionarios se podrán escoger unos u fotografías o medidas caseras referencia). Sin embar-
otros. Los recursos económicos disponibles tam- go, en la mayoría de las ocasiones se busca una precisa
bién tendrán que ser tenidos en cuenta. cuantificación, por lo que el registro se apoya en la
pesada o doble pesada. Ello consiste en anotar el peso
Cualquier método de valoración de la ingesta puede real de cada uno de los alimentos antes de consumirlos
ser una herramienta útil siempre y cuando su utiliza- y los desperdicios tras el consumo, de manera que pue-
ción haya sido precedida de un diseño cuidadoso y una dan estimarse las cantidades reales consumidas. Este
oportuna planificación y estrategia para su aplicación. método ha sido considerado tradicionalmente como el
Además, los diferentes métodos empleados para gold standard para validar otros métodos, y se ha con-
analizar la ingesta tienen ventajas e inconvenientes, trastado en múltiples ocasiones con la historia dieté-
sesgos y limitaciones, que deberán tenerse en cuenta tica, el recordatorio de 24 horas o el cuestionario de
(Aranceta B, et al., 2015). frecuencia de consumo de alimentos.
En la tabla 4 se exponen las características más im- El método tiene una serie de limitaciones: necesidad
portantes de cada método. de que la persona (o representante de esta) que parti-

Tabla 4.  Métodos de evaluación de la ingesta de alimentos.

Recordatorio de Cuestionario de frecuencia


Registro/Diario dietético Historia dietética
24 horas de consumo
· Cuestionario · Cuestionario · Cuestionario · Cuestionario predefinido
abierto-cerrado abierto-cerrado abierto-cerrado · Autoadministrado/
Método
· Entrevistador · Autoadministrado · Entrevistador entrevistador
· Subjetivo · Subjetivo · Subjetivo · Subjetivo
Datos · Ingesta últimas · Ingesta actual · Ingesta habitual · Ingesta habitual
recogidos 24 horas
Tiempo · Corto · Variable · Largo · Variable
Análisis · Fácil · Complejo · Complejo · Fácil
Coste · Bajo · Alto · Alto · Bajo
Cooperación + +++ +++ +
· Aporta datos · Aporta datos detallados · No afecta a · Evaluación sencilla de la
detallados · No preciso entrevistador los hábitos de ingesta habitual
· Escasa influencia · Permite conocer las consumo · Rentable y rápida
Puntos
sobre los hábitos preferencias, horarios y · Adecuada para estudios
fuertes
alimentarios lugar donde se ingieren epidemiológicos
· Escasa influencia sobre los
hábitos alimentarios
· Posibilidad de · Necesidad de · Coste elevado · Específico para el estudio
sesgos participación activa del No apropiado de grupos
· Caro sujeto para estudios · Son cuestionarios cerrados
Limitaciones
· Se necesita · Costoso epidemiológicos · Necesitan de una
hacerlo de varios · Alteración de la ingesta evaluación precisa de los
días cuestionarios
Tema 5.  Valoración de la ingesta. Encuestas nutricionales 87

Lunes Martes Miércoles Jueves Viernes Sábado Domingo


Desayuno
· Hora
Media mañana
· Hora
Comida
· Hora
Merienda
· Hora
Cena
· Hora
Recena
· Hora
Otros

Figura 1.  Modelo de Diario Dietético.

cipa en el estudio sepa leer, escribir y contar/pesar con nutricional con posibilidad de analizar la composición
razonable rigor; requiere de tiempo y dedicación, espe- de la dieta, la comparación con valores recomendados
cialmente en el caso de llevar a cabo el registro por de algunos nutrientes ajustados a edad, sexo y pará-
pesada. La precisión disminuye al aumentar el número metros antropométricos y que desarrolla además la
de días consecutivos de recogida de información dieté- posibilidad de generar un informe en formato «pdf»,
tica. El coste de codificación y análisis de los datos re- «doc» y «xls» con los datos del menú y la composición
cogidos con este método son elevados. nutricional, lo cual facilita su uso como registro dieté-
Pero presenta también grandes limitaciones como tico, ya que estos pueden realizarse en el domicilio y
pueden ser: la tendencia del sujeto a declarar consu- conservarse para comentarlo con el médico durante la
mos de alimentos próximos a lo que él considera co- consulta de seguimiento (figura 2).
rrecto, las dificultades para describir los alimentos y las
porciones consumidas y los riesgos de olvido, cuando 5.  Recordatorio de 24 horas (R24)
el registro no se realiza en el momento de la ingesta.
Es importante recordar en este punto, que los datos El recordatorio de 24 horas (R24) (figura 3) es el
de registro de un solo día no deben tomarse como re- método de valoración de ingesta más empleado en
presentativo de la ingesta habitual. Para estimar la in- estudios de consumo alimentario (Hernández, 2010).
gesta habitual de un individuo se necesitan general- Es un método retrospectivo de entrevista que cuanti-
mente los registros de entre 3-10 días, pudiendo variar fica la ingesta en las 24 horas previas. Pueden com-
dependiendo del nutriente de interés (Willett WC., pletarse hasta tres recordatorios seriados de menos
2012). de 3 días.
En la práctica asistencial estos registros pueden tener Consiste en la realización de una entrevista en la que
utilidad en el seguimiento dietético de determinadas se invita al sujeto entrevistado a recordar todos los ali-
patologías metabólicas como obesidad, diabetes o mentos y bebidas ingeridos en las últimas 24 horas.
desnutrición. Si logramos la colaboración del paciente Generalmente, suele referirse al día anterior para facili-
y transformamos la información nutricional recibida en tar al encuestado recordar su consumo. Para determi-
un instrumento de educación nutricional para inducir nar las cantidades y conseguir así más precisión se em-
cambios en la dieta sobre datos concretos del consu- plean medidas caseras, modelos tridimensionales de
mo actual del individuo. los alimentos y fotografías (Gibson, 2005). La duración
La información recogida debe interpretarse median- aproximada para el R24 es de unos 20-30 minutos
te instrumentos que contengan los valores nutriciona- (Shim et al., 2014).
les (energía, agua, macro y micronutrientes) de los ali- Debe preguntarse acerca del alimento ingerido, can-
mentos registrados. tidad y forma de preparación. Debe incidirse en este
Hoy en día existen sitios web para realizar un registro último aspecto, ya que según se siga una u otra receta
dietético como es el caso de (http://www.ienva.org/ puede variar significativamente el aporte de energía y
CalcDieta/). Se trata de un programa online de análisis nutrientes. No obstante, debe tenerse en cuenta que
88 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Figura 2.  Web de registro dietético.

Se trata de un método con un coste medio-bajo y su


ejecución es fácil una vez que se lleva a cabo el entre-
namiento adecuado. Dado que se trata de una entre-
vista con preguntas abiertas puede recopilarse una
gran cantidad de información (Shim et al., 2014). Es
poco molesto para el entrevistado y bien administrado
no altera el patrón habitual de ingesta. Además, es rá-
pido y simple, siempre y cuando se cumplan unos cri-
terios mínimos de calidad.
Al limitarse a las 24 horas previas no es útil para re-
coger la variabilidad interindividual, que puede ser
bastante significativa de días laborables a días no
laborables o aquellos días de celebraciones especiales,
sobre todo en países desarrollados donde el acceso a la
comida es fácil y prácticamente durante las 24 horas
del día.
En las siguientes direcciones web, se encuentran Re-
cordatorios de 24 horas con aplicaciones web:

•  http://www.choosemyplate.gov/
•  http://www.seh-lelha.org/calena.aspx
•  http://www.ienva.org/CalcDieta/

6. Cuestionario de frecuencia de consumo


de alimentos (CFC)
El Cuestionario de frecuencia de consumo de ali-
Figura 3.  Modelo de Recordatorio de 24 horas.
mentos (CFC) (figura 4) es un método diseñado para
que a partir de una lista de alimentos o grupos de
algunas personas omiten de forma consciente alguna ellos se obtengan datos sobre su consumo en un pe-
de sus respuestas, con lo cual el método es menos in- ríodo de tiempo concreto (Hernández, 2010). Trata
formativo de lo que es en realidad (Margetts & Nelson, de responder dos preguntas, cuánto come y cuándo
1997). come un determinado alimento en un espacio de
Tema 5.  Valoración de la ingesta. Encuestas nutricionales 89

Figura 4. Modelo de cuestionario de frecuencia de consumo de alimentos.

tiempo (Margetts & Nelson, 1997). Por convenio, el entrevista es de 20 a 30 minutos. Puede ser adminis-
período de estudio abarca el año previo a la realiza- trada por una persona experta o bien autoadministra-
ción del cuestionario. Sin embargo, esta temporali- da tras haber recibido una formación básica (Shim
dad puede ser modificada a criterio de quienes em- et al., 2014).
pleen el método para adaptarlo a sus objetivos, El CFC no modifica los hábitos de la persona en-
nutriente a investigar y situación de salud o enferme- cuestada y es un método relativamente fácil de desa-
dad del sujeto de estudio. rrollar. Asimismo, su inversión no es costosa e inclu-
El cuestionario abarca de 100 a 150 alimentos, dis- so puede verse reducida si el método es
tribuidos en grupos generalmente según sus nutrien- autoadministrado. El hecho de que los alimentos se
tes, aunque en algunas ocasiones se agrupan por su dispongan de forma estructurada facilita la codifica-
forma de preparación. La duración aproximada de la ción de los datos y su evaluación a posteriori. Por
90 BLOQUE: DIETOTERAPIA

tanto, es un método bastante coste-efectivo y efi- encuesta de adherencia a la dieta mediterránea (tabla
ciente en cuanto al tiempo de administración y aná- 5) sea un ejemplo del posible uso clínico que tienen
lisis. estos cuestionarios. Otro ejemplo es la aplicación in-
Su principal utilidad radica en el estudio del patrón formática Ribefood (http://130.206.36.67/ribefood/
alimentario bien a nivel individual o bien a nivel colec- index.php?l=es).
tivo. Este hecho hace que este método sea básico para
los estudios epidemiológicos, ya que permite buscar 7.  Historia dietética
asociaciones entre dieta y enfermedades, establecer
clasificaciones según el patrón alimentario y evaluar La historia dietética es un método que incluye una
resultados de intervenciones nutricionales. extensa entrevista con el propósito de generar infor-
En cuanto a las encuestas de frecuencias, los re- mación sobre los hábitos alimentarios actuales y pasa-
cursos web interactivos son mucho más limitados, dos; incluye uno o más recordatorios de 24 horas y un
por las dificultades de diseño y aplicación en red que cuestionario de frecuencia de consumo.
presentan. Sus resultados son difíciles de aplicar so- La historia dietética originalmente consistía en obte-
bre un paciente en concreto, por lo que quizás la ner la información alimentaria mediante tres partes: un

Tabla 5.  Valoración individual del grado de adherencia a la dieta mediterránea según la siguiente encuesta de
14 puntos (PREDIMED).

Pregunta Respuesta
¿Usa usted el aceite de oliva como principal grasa para cocinar? Sí = 1 punto
¿Cuánto aceite de oliva consume en total al día (incluyendo el usado para
2 o más cucharadas = 1 punto
freír, comidas fuera de casa, ensaladas, etc.)? (en cucharadas)
¿Cuántas raciones de verdura u hortalizas consume al día? Una ración = 2 o más (al menos una de ellas en
200 g; las guarniciones o acompañamientos = ½ ración ensalada o crudas) = 1 punto
¿Cuántas piezas de fruta (incluye el zumo natural) consume al día? 3 o más al día = 1 punto
¿Cuántas raciones de carnes rojas, hamburguesas, salchichas o embutidos
Menos de 1 al día = 1 punto
consume al día? Una ración = 150 g
¿Cuántas raciones de mantequilla, margarina o nata consume al día? Porción
Menos de 1 al día = 1 punto
individual = 12 g
¿Cuántas bebidas carbonatadas y/o azucaradas (refrescos, colas, tónicas,
Menos de 1 al día = 1 punto
bitter) consume al día?
¿Bebe usted vino? ¿Cuánto consume a la semana? 3 o más vasos a la semana = 1 punto
¿Cuántas raciones de legumbres consume a la semana? un plato o ración = 150 g 3 o más a la semana = 1 punto
¿Cuántas raciones de pescados-mariscos consume a la semana? un plato
3 o más a la semana = 1 punto
pieza o ración 100-150 g de pescado o 4-5 piezas o 200 g de marisco
¿Cuántas veces consume repostería comercial (no casera) como galletas,
Menos de 3 a la semana = 1 punto
flanes, dulce o pasteles a la semana?
¿Cuántas veces consume frutos secos a la semana? Una ración = 30 g 1 o más a la semana = 1 punto
¿Consume usted preferentemente carne de pollo, pavo o conejo en vez de
ternera, cerdo, hamburguesa o salchichas? Carne de pollo = 1 pieza o ración Sí = 1 punto
de 100-150 g
¿Cuántas veces a la semana consume los vegetales cocinados, la pasta,
arroz u otros platos aderezados con salsa de tomate, ajo, cebolla o puerro 2 o más a la semana = 1 punto
elaborado a fuego lento con aceite de oliva (sofrito)?

Puntuación: Sumar todos los puntos obtenidos (columna derecha).


Fuente: Modificado de: Trichopoulou A, Costacou T, Bamia C, Trichopoulou D. Adherente to a mediterranean diet and survival in a
greek population. N Engl J Med 2003; 348:2.599-2.608.
Tema 5.  Valoración de la ingesta. Encuestas nutricionales 91

cuestionario abierto sobre los patrones de comida de Un recurso web interesante para conocer y modificar
un día típico, una lista detallada de alimentos que cla- los hábitos del paciente, es el Cuestionario de hábitos
rificara la primera parte de la información y, por últi- alimentarios para pacientes con sobrepeso y obesidad.
mo, la realización de un registro dietético de al menos (http://www.foroactua.com/cuestionario-de-habitos)
tres días. En la actualidad, el método rara vez se realiza (figura 5).
de esta forma, debido al tiempo disponible para las
consultas. 8. Análisis nutricional: tablas, bases de
En general, la historia dietética se lleva a cabo duran- datos, aplicaciones informáticas y apps
te una entrevista por una persona entrenada, que in-
tenta recoger toda la información posible sobre la die- La información dietética obtenida mediante los cues-
ta habitual y los hábitos dietéticos pasados. Se obtiene tionarios de alimentos puede ser de tipo cuantitativo,
información detallada de cada comida y se determinan si se obtienen datos de raciones o cantidades consumi-
los alimentos más utilizados y su frecuencia de consu- das, o de tipo cualitativo, si no se obtienen estos datos.
mo. También se recoge información sobre alergias ali- Cuando disponemos de datos cuantitativos, el análisis
mentarias, los alimentos más apetecidos y los nunca de estos nos dará una idea de la cantidad de alimento
consumidos, así como las variaciones estacionales de consumido en el período de estudio. Para realizar este
los hábitos alimentarios. análisis nutricional, es necesario convertir la cantidad de
La historia dietética ofrece una descripción completa alimento consumido en gramos/día en nutrientes.
y detallada de la ingesta alimentaria habitual respecto Esta conversión se puede realizar de diversos méto-
a los otros anteriormente descritos. Puede aplicarse en dos, que van desde las conocidas tablas de composi-
población analfabeta. En cuanto a las limitaciones, la ción de alimentos, a las modernas aplicaciones móviles
historia dietética requiere de tiempo y es bastante cos- «apps», pasando por las bases de datos y las aplicacio-
tosa. Requiere de un entrevistador/a entrenado, a ser nes informáticas.
posible un Dietista-Nutricionista. Requiere de tiempo y Las tablas de composición de alimentos y su versión
mucha cooperación por parte del entrevistado/a, ade- informática, las bases de datos de alimentos, son lista-
más de exigir un trabajo previo de codificación para dos formados por una recopilación de datos sobre la
poder obtener información útil. composición nutricional de los alimentos. Estas tablas

Figura 5.  Cuestionario de hábitos alimentarios para pacientes con sobrepeso y obesidad.
92 BLOQUE: DIETOTERAPIA

intentan ser representativas de los alimentos que se una de las tablas de composición de alimentos más
consumen en un determinado ámbito geográfico, ya completas y actualizada, última revisión realizada en
sea general, nacional o internacional. Cada país suele mayo de 2016, existen también tablas nacionales de ac-
tener las suyas. Actualmente existen más de 150 tablas ceso gratuito, por ejemplo a través de la página oficial
en todo el mundo. La tendencia actual es a crear una de la SEH-LELHA (http://www.seh-lelha.org/alimento.
gran base de datos informática que se pueda adaptar htm) o a través de la página del IENVA (http://www.
a cada tipo de usuario. ienva.org/CalcDieta/composicion.php). Estos recursos
Las tablas de composición y las bases de datos tienen pueden permitirnos consultar la información nutricional
unas características comunes, detalladas en la tabla 6. de forma más rápida por su mayor accesibilidad.
Disponemos de tablas de composición clásicas en el Asimismo, también disponemos de herramientas nu-
ámbito nacional (Mataix J, et al. «Tabla de composición tricionales más sofisticadas en formatos de programas
de alimentos españoles». Moreiras-Varela O, et al. «La de análisis nutricional como DIETOWIN® (Biológica Tec-
composición de los alimentos». Andújar MM, et al. «Ta- nología Médica, S.L.), DIETSOURCE® (Nestlé Consumer
blas de composición de alimentos». Instituto de Nutri- Health) o EASYDIET®, que pueden utilizarse tanto para
ción y Bromatología, CSIC.) e internacionales (USDA. analizar la ingesta obtenida de un registro o recordato-
Handbook of Agriculture. Human Nutrition Information rio como para confeccionar dietas individualizadas.
Service. FAO. «Tablas de composición de alimentos para Desde algunas sociedades científicas se ofrece la posi-
uso internacional». ; Mc Cance and Widdowson’s. «The bilidad de realizar cálculos de composición de la ingesta
composition of foods». The Royal Society of Chemistry). online, como desde la web de la Sociedad Española de
Estos datos de composición nutricional que tradicio- Hipertensión Arterial (SEH-LELHA) (http://www.seh-lel-
nalmente se habían recogido en tablas impresas se es- ha.org/calena.aspx). Esta mayor accesibilidad puede
tán sustituyendo y complementando con información usarse para que algunos pacientes registren su propia
en soporte informático (bases de datos de composi- ingesta como instrumento de ajuste de la dieta por par-
ción de alimentos). Gracias a los cuales disponemos de te del médico y del paciente. En ella el paciente puede
programas informáticos, páginas web y aplicaciones reconocer su ingesta real y realizar algunos cambios
móviles que emplean alguna base de datos de alimen- para adaptarla a la recomendación dietética prescrita.
tos con información nutricional. La tabla del United Existen diversas apps y apk disponibles para la realiza-
States Department of Agriculture of USA (USDA) ción de registros dietéticos y de actividad física que pue-
(https://ndb.nal.usda.gov/ndb/search) (figura 6) es den ayudarnos a aplicar estos conocimientos sobre los

Tabla 6.  Características de las tablas y bases de datos de composición de alimentos.

Número de alimentos contenidos


· Alimentos seleccionados (consumo por población, datos disponibles…)
Componentes
· Identificación de alimentos (Codex Alimentarius, Eurocode2, Langual, INFOODS…)
estructurales
Número de nutrientes por alimento (macronutrientes, vitaminas, oligoelementos, acido-aminograma…)
Método o procedencia de datos (análisis químico directo, recopilación bibliográfica, mixto…)
Formato de Porción comestible (%), Valor energético (kcal o Kj), Agua (l), macronutrientes (g), fibra (g),
datos alcohol, oligoelementos y minerales, vitaminas, otros (antioxidantes, etc…)
Tablas o bases de datos (libro, soporte electrónico, acceso online)
Presentación Grupos de alimentos (cereales, legumbres, frutas…)
de datos Datos nutricionales (porción comestible, energía, agua…)
Tipo de procesamiento (cocción, fritura…)
Análisis nutricional individual o de colectivos
Estudios epidemiológicos nutricionales
Usos Ajuste y cálculo de dietas
Industria de alimentación
Etiquetado de alimentos
No son completas
Variabilidad en la composición de nutrientes
Número de alimentos y diversidad de los mismos
Limitaciones
Definiciones poco precisas (fibra)
Faltan datos de determinados micronutrientes
Cálculo de ingesta, no de su incorporación al metabolismo
Tema 5.  Valoración de la ingesta. Encuestas nutricionales 93

Figura 6.  Tabla de composición de alimentos de USDA (National Nutrient Database for Standard Reference).

hábitos de nuestros pacientes. Gracias a la tecnología en base de datos para el posterior análisis de los mismos.
este campo, se facilita la valoración individual de la in- En este sentido, disponemos de algunos programas
gesta de un modo fácil, eficiente y seguro. que ofrecen esta posibilidad como DIETSTAT® (Hospital
En caso de estudios epidemiológicos donde necesi- Carlos Haya, Málaga) o NUTRISOL® (Departamento
tamos registrar datos nutricionales de un número im- Med. Preventiva, Universidad de Málaga).
portante de pacientes es necesario disponer de progra- En la tabla 7 se muestran algunos de los recursos
mas de análisis con posibilidad de salida en formato de web y app/apk de referencia.

Tabla 7. Recursos web y APP/APK.

· USDA, United States Department of Agriculture of USA (base de datos de alimentos,


(http://ndb.nal.usda.gov/ndb); también se puede descargar base de datos alimentos y
permite hacer encuestas dietéticas y de ejercicio físico) (http://www.choosemyplate.gov y
http://www.cnpp.usda.gov/supertracker)
· OMS (información sobre múltiples bases de datos de composición de alimentos)
(http://www.fao.org/infoods/infoods/herramientas-informaticas/es)
· SEH-LELHA (tabla de alimentos y calculadora de composición nutricional del programa de
Recursos web
nutrición DIAL, encuestas de un día). (http://www.seh-lelha.org/alimento.htm)
· IENVA (tabla de composición de alimentos y programa de análisis nutricional con informe
detallado) (http://www.ienva.org/CalcDieta/tu_menu.php)
· FORO ACTUA web 2.0 con interacción nutricional con análisis de recetas, encuesta de hábitos,
composición corporal, diabetes y riesgo cardiovascular (http://www.foroactua.com)
· Myfitnesspal, es una plataforma multiformato (web y apps) abierta con tabla de alimentos no
controlada y registro de ejercicio. (www.myfitnesspal.com)
· Myfitnesspal
· FatSecret, contador de calorías
· Control de dietas, registro de ingesta
Apps/apks · My Plate Calorie Traker, registro de ingesta
· MyNetDiary, contador de calorías
· Fooducate, muestra las características, ingredientes y valoraciones de los alimentos a consumir
· Diabetes menú, registro de ingesta y planificador de menús adaptado a personas con diabetes
94 BLOQUE: DIETOTERAPIA

9.  Tecnología y evaluación de la ingesta Acompañar la información aportada por los regis-
tros con imágenes mejora la objetividad de la valora-
Aunque muchas de estas técnicas aún están en fase ción y ha sido la base para el desarrollo de nuevos mé-
de desarrollo, se han hecho grandes avances. Las tec- todos apoyados en el uso de imagen (Arab et al., 2011)
nologías informáticas interactivas, que se introdujeron (Gemming et al., 2013)(Gregory et al., 2006) (Kikuna-
relativamente temprano en el desarrollo de métodos ga et al., 2007).
de evaluación dietética, tienen como objetivo ser un Los métodos de valoración de ingesta mediante imá-
sistema integral para la recopilación de datos, la codi- genes hacen referencia a todos aquellos que emplean
ficación, la entrada, y el cálculo de la ingesta. Ejemplos bien imágenes o bien vídeos de la comida ingerida
de estos nuevos recursos son: el Automated Múltiple para completar la información aportada por los méto-
Método Pass (Moshfegh et al., 2008) (AMPM) para ad- dos tradicionales o utilizan la imagen o vídeo como
ministrar el registro de 24 horas en Estados Unidos, principal fuente de información (Gemming et al.,
Encuesta Nacional de Salud y Nutrición y un programa 2015) (figura 7.)
registro de 24 horas estandarizado por menús (llama- Los registros «fotográficos» consisten en la realiza-
do EPIC-Soft). ción de un registro, fotografiando todos los alimentos
Otras tecnologías basadas en internet han sido dise- que se ingieren durante un período determinado (1-7
ñadas para la administración de entrevistas estandari- días), con la posibilidad de almacenamiento (pendrive),
zadas cara a cara, como el Sistema de Evaluación de la envío (mail) o incorporación en los dispositivos telefó-
dieta (DES) que se desarrolló en Corea del Sur. nicos móviles. (Martin et al., 2014).
Estos métodos, minimizan la carga de los sujetos En los últimos años el amplio acceso a técnicas de
que utilizan la observación objetiva; sin embargo, toda información y comunicación (TIC) ha generado
esta tecnología todavía está en la etapa de desarrollo múltiples posibilidades de interacción médico-pa-
para usar en investigaciones y en un futuro próximo en ciente. Utilizando las nuevas tecnologías, a la hora
aplicación clínica en formato app. En la tabla 8 se des- de realizar recordatorios de 24 horas y el registro
criben algunos proyectos en desarrollo dentro del gru- fotográfico de ingesta (RDF), aumentamos los pun-
po de evaluación tecnológica de las dietas del NIH. En tos fuertes de la valoración dietética, ya que estos
este ámbito podemos destacar además otros proyectos métodos recogen ingesta real en días específicos,
en desarrollo como la aplicación de Roche GoCARB siendo la carga de la memoria menor que la necesa-
Project http://www.gocarb.eu y el sistema de Registro ria para realizar el cuestionario de frecuencia de con-
Dietético Fotográfico (RDF). sumo, y el error de infraestimación de la ingesta se
disminuye. A estas ventajas hay que añadirle que
10. Nuevos métodos de análisis de ingesta: gracias a las nuevas tecnologías mejora la adheren-
Registro Dietético Fotográfico (RDF) cia del sujeto, la precisión y la validez de los datos.
(Porca et al., 2016).
Por la necesidad de mejora de los métodos de valo-
ración de ingesta y la adaptación a las nuevas tecno- 11. Resumen
logías aparecen los registros de ingesta basados en
imágenes, disminuyendo de esta forma el principal La valoración de la ingesta presenta múltiples ver-
sesgo que presentan los registros de ingesta conven- tientes. Podemos así referirnos a datos a nivel indivi-
cionales, la infradeclaración de ingesta, especial­ dual o colectivo; a estudios epidemiológicos o a la
mente en personas con sobrepeso y obesidad (Gem- práctica clínica habitual y con diversos métodos de
ming et al., 2015). aproximación (encuestas dietéticas), cada método

Tabla 8.  Proyectos de evaluación tecnológica de la dieta, patrocinados por el National Institutes of Health
(Estados Unidos).

FIRSST Food Intake Recording Software System


Improving Dietary Assessment methods Using the Cell Phone and Digital Imaging (Technology
TADA
Assisted Dietary Assessment)
DDRS Integrated sensor technology for real-time recording of food intake. (Dietary Data Record System)
ASA24 Automated Self-Assisted 24-h Dietary Recall
e-Button A Unified Sensor System for Ubiquitous Assessment of Diet and Physical Activity
FIVR Mobile Food Intake Visualization and Voice Recognizer (FIVR)
Tema 5.  Valoración de la ingesta. Encuestas nutricionales 95

Figura 7.  Registro Dietético Fotográfico.

con sus propias ventajas y limitaciones. La evaluación 12. Bibliografía


de la dieta y el estilo de vida viene de muchas fuentes
y tiene un largo recorrido, comenzando con métodos   1. Estruch R, Ros E, Salas-Salvadó J, Covas M-I, Core-
«caseros» para registrar la ingesta, en los que la eva- lla D, Arós F, et al. Primary prevention of cardio-
luación de la ingesta se hacía mediante cálculo ma- vascular disease with a Mediterranean diet. N Engl
nual, hasta llegar al registro y evaluación automática J Med. 2013;368(14):1279-90.
en la web, siendo uno de los sistemas utilizados hoy   2. Willett WC. Diet, nutrition, and avoidable cancer.
en día. Environ Health Perspect. 1995 Nov;103 Suppl
Gracias a la tecnología en este campo, se han añadi- 8:165-70.
do datos objetivos sobre los cuales la clínica pueda tra-   3. Elmadfa I, Meyer AL. Developing suitable methods of
bajar y el profesional sanitario pueda servirse de ellos a nutritional status assessment: a continuous chal-
la hora de realizar su práctica clínica habitual, con da- lenge. Adv Nutr. 2014 Sep; 5(5): 590S–598S. Pub-
tos objetivos y fiables. La aplicación de estos métodos lished online 2014 Sep. doi:  10.3945/an.113.005330
con apoyo de las nuevas tecnologías va a facilitar la  4.  Willett WC. Reproducibility and Validity of
valoración de la ingesta de un modo fácil, eficiente y Food-Frequency Questionnaries. En: Willett WC.
seguro. Nutritional Epidemiology. New York: Oxford Uni-
En este aspecto resulta imprescindible utilizar los re- versity Press; 1998. p.96-141.
cursos que aportan las nuevas tecnologías, ya que a   5. Rafecas M, Codony R, Boatella J. Valor nutritivo de los
través de estos puede adaptarse a las limitaciones de alimentos. En: Majem LS, Bartrina JA, Verdú FJM. Nu-
tiempo de la práctica clínica habitual. trición y salud pública: métodos, bases científicas y
Es importante destacar que la aproximación a los aplicaciones. 2nd ed. España: Masson; 2006. p. 31-6.
hábitos de la ingesta del paciente a través de en-   6. Aranceta Bartrina J, Pérez Rodrigo C, Alberdi Ares-
cuestas dietéticas adecuadas es una opción útil y ne- ti G, Varela Moreiras G, Serra-Majem L. Controver-
cesaria en el manejo de gran parte de nuestra pato- sies about population, clinical or basic research
logía metabólica y nutricional. Debemos hacer el studies related with food, nutrition, physical activ-
esfuerzo de incorporar a nuestra práctica clínica ha- ity and lifestyle. Nutr Hosp. 2015;31 Suppl 3:15-
bitual estas herramientas nutricionales, optimizando 21. PubMed PMID:25719766.
los recursos informáticos y didácticos disponibles.   7. Ortega RM, Pérez-Rodrigo C, López-Sobaler AM.
Modificar los hábitos alimentarios de un grupo en- Dietary assessment methods: dietary records. Nutr
traña gran dificultad. De ahí la importancia de que Hosp. 2015;31 Suppl 3:38-45.
los estudios del consumo alimentario y sus repercu-   8. Willett WC. Recall of Remote Diet. En: Willett WC.
siones en la salud se integren entre nuestras actua- Nutritional Epidemiology. New York: Oxford Uni-
ciones fundamentales. versity Press. 2012. p.142-149.
96 BLOQUE: DIETOTERAPIA

  9. Yago MD, Martinez E, Mañas M. Métodos para la 17. Arab L, Estrin D, Kim DH, Burke J, Goldman J. Fea-
evaluación de la ingesta de los alimentos. En: Her- sibility testing of an automated image-capture
nandez AG. Tratado de Nutrición: Composición y method to aid dietary recall. Eur J Clin Nutr.
Calidad Nutritiva de los Alimentos. 2nd ed. Médi- 2011;65:1156-62.
ca Panamericana; 2010. 18. Gemming L, Doherty A, Kelly P, Utter J, Ni Mhur-
10.  Gibson RS. Methods for measuring food con- chu C. Feasibility of a SenseCam-assisted 24-h re-
sumption of individuals. En: Gibson RS. Principles call to reduce under-reporting of energy intake.
of Nutritional Assessment. New York: Oxford Uni- Eur J Clin Nutr. 2013;67:1095-9.
versity Press. 2005. 19. Martin CK, Nicklas T, Gunturk B, Correa JB, Allen
11. Shim J-S, Oh K, Kim HC. Dietary assessment me- HR, Champagne C. Measuring food intake with
thods in epidemiologic studies. Epidemiol Health. digital photography. J Hum Nutr Diet. 2014;27
2014;36:e2014009. Published online: 2014 Jul. Suppl 1:72-81.
12. Margetts BM, Nelson M. Design Concepts in Nutri- 20. Porca C, Tejera C, Bellido V, García JM, Bellido D.
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13. Moshfegh AJ, Rhodes DG, Baer DJ, Murayi T, Cle- X(2):95-107.
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of Agriculture Automated Multiple-Pass Method Endocrinología y Nutrición Clínica. Citado 14 Sep
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Am J Clin Nutr 2008;88:324-32. Dieta/.
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dietary assessment: a systematic review of the evi- Agriculture. Citado 14 Sep 2016. Disponible en:
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sistant with camera and mobile phone card (Well- 25. Foroactúa. Bellido D, López de la Torre M. Citado
navi) to the general population in a dietary survey. 21 Sep 2016. Disponible en: http://www.foroac-
J Nutr Sci Vitaminol (Tokyo). 2007;53:109-16. tua.com/cuestionario-de-habitos.
Tema 6.
Planificación de la dieta hospitalaria
Ana Zugasti Murillo
FEA Endocrinología y Nutrición. Sección Nutrición Clínica y Dietética. Servicio de Endocrinología
y Nutrición. Complejo Hospitalario de Navarra. Pamplona

Estrella Petrina Jáuregui


Jefa de Sección de Nutrición Clínica y Dietética. Servicio de Endocrinología y Nutrición.
Complejo Hospitalario de Navarra. Pamplona

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 97-115.

1. Introducción
2.  Organización de la dieta hospitalaria
3.  Normativa en alimentación hospitalaria
4.  El código de dietas
5. Resumen
6. Bibliografía

1. Introducción • Cocina: tiene una gran repercusión si el centro


cuenta con una cocina propia, si se dispone de un
El mantenimiento de un adecuado estado nutricio- sistema de cocina en frío o en caliente o si es una
nal es fundamental para una buena evolución clínica cocina externa la que suministre los distintos pla-
del paciente. Las cifras de desnutrición hospitalaria tos. Asimismo, la dependencia funcional de la co-
continúan siendo alarmantes y tanto la adecuación de cina hospitalaria y de su personal influye a la hora
la dieta a la situación clínica del paciente como la valo- de planificar los menús. Los horarios laborales del
ración de la ingesta y del estado nutricional deben rea- personal de cocina van a influir en el horario de
lizarse de forma rutinaria en los pacientes ingresados. comidas de los pacientes que se pueda establecer
La dieta hospitalaria debe estar bien diseñada tanto en el centro. Así, en la mayoría de los hospitales el
en relación con la composición nutricional como en lo horario de comidas no se corresponde con el de la
referente a aspectos culinarios, variedad, presentación, mayoría de la población, siendo esto especialmen-
temperatura, seguridad alimentaria, etc. Las Unidades te perjudicial para el control glucémico.
de Nutrición serán las encargadas de elaborar y super-
visar la adecuada planificación de la dieta hospitalaria.
Por otro lado, es fundamental contar con el material
adecuado tanto para el almacenamiento y la conserva-
2.  Organización de la dieta hospitalaria ción de los alimentos como para la elaboración de los
Para una correcta planificación de la dieta hospitala- distintos platos y el trasporte seguro hasta el paciente.
ria hay que valorar varios aspectos: Asimismo, deben estar recogidas por escrito las recetas
detalladas de todos los platos incluidos en las distintas
• Características del hospital: en primer lugar, hay dietas (fichas técnicas). La información que debe apa-
que tener en cuenta el número de camas del hos- recer en la ficha técnica de un plato es: descripción
pital, la distribución física de las distintas plantas y detallada del plato, ingredientes (cualitativa y cuantita-
pabellones, las patologías más frecuentes, el tipo tivamente), valor nutricional, modo de preparación y
y complejidad de la cirugía que se lleva a cabo en advertencias generales y específicas sobre alérgenos,
el centro, la estancia media, la existencia o no de perfil dietético de los destinatarios y presentación.
maternidad y plantas pediátricas y todas aquellas
peculiaridades que puedan tener repercusión so- • Cocina línea fría: es sin lugar a dudas, el sistema
bre la alimentación que requieran los pacientes. de catering del siglo xxi. En el sistema de «línea

97
98 BLOQUE: DIETOTERAPIA

caliente», tras elaborarse los platos mediante pro- libración de las distintas dietas, así como progra-
cesos de cocción más o menos convencionales, mas de gestión que permiten centralizar las peti-
estos se mantienen calientes (a más de 67 °C) has- ciones de dietas realizadas desde las distintas
ta su consumo sin romper en ningún momento la plantas hospitalarias de manera que se pueda or-
cadena de calor. En la línea fría se añade al siste- ganizar el trabajo en cocina. En función de las die-
ma convencional un proceso de enfriamiento de tas solicitadas se generarán listas de trabajo que
los alimentos elaborados por abatimiento, la cubran todos los aspectos comprendidos desde la
adaptación de un sistema de conservación y la re- petición de víveres hasta la elaboración del plato.
generación o retermalización en el punto de con- • Técnico Superior en Dietética/Dietista-Nutricionis-
sumo del cliente. Estos rangos de temperaturas ta: profesional de la Unidad de Nutrición que se
garantizan la seguridad del alimento que ha sido encargará, bajo la supervisión del médico, de:
higienizado por el tratamiento térmico, ya que im-
piden la proliferación de microorganismos. Plena- – Planificar y calibrar los menús de las dietas,
mente desarrollado en diferentes países de la Co- manteniendo una actualización periódica tanto
munidad Europea, se está imponiendo en la de los distintos platos como del Código de die-
actualidad en la mayoría de los hospitales. tas del centro.
– Trabajar, de forma conjunta con la Sección de
– Elaboración: la elaboración de los alimentos se Alimentación, para asegurar la calidad nutricio-
realiza según el sistema tradicional de cocción a nal y gastronómica de los platos.
temperaturas superiores a 65 °C. Una vez finali- – Vigilar que se cumplan las normas de higiene en
zada la cocción se emplata en barquetas de for- el proceso de elaboración y distribución de los
ma inminente para pasar posteriormente al alimentos y comprobar el proceso del emplata-
proceso de abatimiento que consiste en bajar do para que cada dieta servida corresponda
de temperatura de cocción a una temperatura cuantitativa y cualitativamente con la prescrita.
inferior a 4 °C en menos de dos horas. – Seleccionar y recoger periódicamente las mues-
– Conservación: terminado el proceso de abati- tras de alimentos que serán enviadas para reali-
miento se pasa al sellado de la barqueta al vacío zar el análisis microbiológico.
con atmósfera protectora. Esta técnica permite – Participar en las comisiones hospitalarias rela-
el mantenimiento de los platos con la máxima cionadas con la alimentación y la dietética.
seguridad higiénico-alimentaria sin modificar – Elaborar el manual de dietas que será distribui-
las cualidades organolépticas de los alimentos do y explicado en todas las plantas del centro.
(sabor, aroma, textura). Una vez realizada la Asimismo, se encargará de la formación del
fase anterior se procede al etiquetado de las personal de enfermería en aspectos relaciona-
barquetas con su número de lote, fecha de fa- dos con el buen uso del Código de dietas y te-
bricación, fecha de caducidad y la descripción mas de dietética y nutrición.
del producto, pasando posteriormente a su al- – Tener comunicación directa con el personal de
macenamiento en cámaras frigoríficas a una enfermería para adecuar la dieta a la situación
temperatura no inferior a 1 °C ni superior a 5 °C. clínica del paciente.
– Retermalización: la retermalización en el punto – Valorar los pacientes con «dietas especiales o
de consumo del cliente consiste en calentar los dietas no codificadas» o aquellos que sean re-
alimentos hasta llegar a una temperatura de queridos por el personal de enfermería ante una
68 °C, para su consumo, mediante carros ter- ingesta deficiente o estados de desnutrición.
mocontacto o de inducción. Este sistema ga- – Trabajar en equipo para aplicar las actuaciones
rantiza una máxima seguridad higiénica, pues previstas para el despistaje de desnutrición hos-
la elaboración descrita elimina toda posibilidad pitalaria.
de contaminación de los alimentos, mantenien- – Preparar planes dietéticos individualizados de
do siempre la cadena de frío y respetando en cara al alta hospitalaria siempre que sea pre­ciso.
todo momento las fechas de caducidad. Otra – Toma de medidas antropométricas (peso, talla,
gran ventaja es la comodidad que presenta en IMC, perímetro braquial, pliegues cutáneos) y
el punto de consumo del cliente. Como incon- valoración nutricional.
venientes destaca la limitación para la elabora-
ción de ciertas preparaciones culinarias y la ne- • Personal de enfermería (DUE, Auxiliares de Enfer-
cesidad de solicitar los menús con más margen mería): son los encargados en muchas ocasiones
de tiempo que la línea caliente. de traducir la pauta dietética indicada por el mé-
dico, seleccionando una de las dietas disponibles
• Programas informáticos: cada centro dispone de en el código del centro. Es fundamental que co-
programas informáticos que permiten hacer la ca- nozcan el código de dietas y que vigilen no solo la
Tema 6.  Planificación de la dieta hospitalaria 99

tolerancia de la dieta, sino la cantidad ingerida y tienen poca relevancia clínica. Sin embargo, hay
soliciten la colaboración de la Unidad de Nutrición que tener en cuenta que pueden entrañar un ries-
siempre que consideren necesario. Recibirán for- go considerable en la población hospitalaria. El
mación periódica con respecto a las características objetivo fundamental del sistema APPCC (análisis
de las dietas hospitalarias por parte de los profe- de peligros y puntos de control crítico), estableci-
sionales de la Unidad de Nutrición. do en el R 2207/95, es «identificar y especificar los
• Médicos: es fundamental que conozcan el código requisitos fundamentales de higiene que deben
de dietas del hospital y realicen una valoración del aplicarse a una operación alimentaria determina-
estado nutricional de los pacientes, solicitando cola- da con el fin de garantizar la inocuidad y salubri-
boración por parte de la Unidad de Nutrición siem- dad de un alimento». Cada persona será respon-
pre que consideren necesario. Recibirán formación sable de su tarea y de comprobar que el paso
con respecto a temas de nutrición y dietética por anterior ha sido correctamente realizado. La pues-
parte de los profesionales de la Unidad de Nutrición. ta en marcha de un sistema APPCC precisa la ela-
boración de un documento (Guía de Prácticas Co-
rrectas de Higiene y Manipulación) que debe ser
3.  Normativa en alimentación hospitalaria1
conocido por todo el personal que trabaje en la
La resolución Res AP (2003) 3 del Consejo de Euro- cocina. Para minimizar la posibilidad de que un
pa, sobre alimentación y atención nutricional en hospi- manipulador contamine un alimento, estos debe-
tales establece una serie de consideraciones funda- rán recibir una formación adecuada a la función
mentales y recomendaciones para la mejora, y entre que desempeñan, recibiendo:
otras recoge que:
– Instrucción inicial en medidas de higiene en
– Se considerará de manera sistemática que el so- cada uno de los puestos de trabajo identifica-
porte nutricional forma parte del tratamiento de dos.
los pacientes. – Instrucción por sectores (producción, limpieza,
– Se tendrán en cuenta los efectos beneficiosos que mantenimiento, logística) para que cada traba-
un servicio de alimentación y una atención nutri- jador conozca perfectamente las tareas que
cional hospitalarios adecuados tienen en la recu- debe desempeñar y su importancia para la se-
peración de los pacientes y en su calidad de vida. guridad de los alimentos que manipulan.
– La desnutrición de los pacientes hospitalizados se Además, se deben realizar periódicamente aná-
asocia con estancias hospitalarias más largas, una lisis microbiológicos de los alimentos y platos
rehabilitación prolongada, una menor calidad de elaborados en el hospital, así como de las su-
vida y costes sanitarios innecesarios. perficies de trabajo.
– Se deberán desarrollar estándares para los siste-
mas de servicio de alimentación que se basen más • Norma ISO 22000:2005: tiene una estructura y un
en las necesidades de los pacientes que en las del enfoque similares a los de la norma ISO 9000 sobre
hospital, preparándose y aplicándose métodos gestión de calidad, pero asegura la inocuidad de
que evalúen la satisfacción de los pacientes. los alimentos basándose en el sistema APPCC, ela-
borado por la Comisión del Codex Alimentario. Esta
• Reglamento 1169/2011 de información alimenta- norma internacional fomenta la inocuidad alimen-
ria al consumidor: establece el marco legal en la taria, permitiendo estar a la vanguardia de las exi-
Unión Europea sobre la información relativa a los gencias del mercado internacional, y establece los
productos alimenticios destinados al consumidor requisitos aplicables a un Sistema de Gestión de
en comedores colectivos (incluidos hospitales). Las Inocuidad de los Alimentos (SGIA).
disposiciones generales se aplican desde diciem-
bre de 2014. Se establece una información nu­
4.  El código de dietas2-6
tricional obligatoria, aplicable a prácticamente
todos los alimentos, que debe figurar en el etique- Es el conjunto de dietas disponibles en un hospital. La
tado, tanto en lo que se refiere a composición de existencia de un código de dietas es fundamental para
grupos de nutrientes (grasas totales y saturadas, una correcta planificación de la dietética hospitalaria. Es
hidratos de carbono, azúcares, proteínas y sal) el instrumento mediante el cual se pone a disposición del
como también del valor energético por 100 g o centro la posibilidad de adecuar la dieta a la situación
por 100 ml. Se regula como obligatoria la infor- clínica del paciente con una planificación racional de los
mación sobre los alérgenos, que deberá aparecer recursos que permita un correcto abastecimiento de ma-
en la lista de ingredientes. terias primas y organización del trabajo en cocina. Será
• Seguridad alimentaria/APPCC: en nuestro medio, elaborado por los miembros de la Unidad de Nutrición y
la mayor parte de las toxiinfecciones alimentarias estará reflejado en un documento, Manual de Código de
100 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Dietas, disponible para todos los profesionales de los dis- dieta. La mayoría de las siglas utilizadas hacen referen-
tintos servicios hospitalarios. En este Manual debe que- cia a la dieta facilitando el correcto manejo. A conti-
dar reflejada la denominación de cada dieta, así como la nuación, se explican con más detalle las dietas princi-
composición, las indicaciones, las variantes dietoterapéu- pales que deben estar presentes en un código de dietas
ticas (sin sal, protección biliar, astringente, etc.) y las po- hospitalario (figuras 1 y 2).
sibles carencias nutricionales si las hubiere.
En la tabla 1 se expone un ejemplo de código alfa- 1.  DIETA BASAL / NORMAL / LIBRE: es la dieta más
numérico de tres cifras para la identificación de cada solicitada en los hospitales. Debe cubrir los reque-

Tabla 1.  Ejemplo de Código de dietas.

Clave Denominación Indicación Variedades


000 Opcional Dieta normal, sin restricciones
COM Comodín Dieta de ingreso
CNI Comodín niños Dieta de ingreso
1G-,1B-, 1D-, 1FR, 1A-
1-- Líquida Inicio tolerancia tras ayuno o cirugía
1-N, 1GN, 1BN, 1AN
2G-, 2B-, 2D-, 2FR, 2A-
2-- Semilíquida 2ª fase de progresión
2-N, 2GN, 2BN, 2AN
SG-, SB-, 15S, SFR, SA-
S-- Suave 3ª fase de progresión
S-N, SGN, SBN, SAN
FD- Fácil digestión 4ª fase de progresión FDB, FDD
3G-, 3B-, 3FR, 3A-
3-- Transición Antes de dieta completa
3-N, 3GN, 3BN, 3AN
ODN Odontológica/fácil masticación Problemas masticación/deglución leves 18M
TG-, TB-, 15T, TFR, TA-
T-- Triturada Problemas masticación/deglución mayores
T-N
HP- Hiperproteica Quemaduras, aumento de catabolismo, UPP
P40 40 gr proteínas Patología renal/hepática P4K, P4D
P60 60 gr proteínas Patología renal/hepática P6K, P6D
150 1500 kcal Control metabólico
180 1800 kcal Control metabólico 18G, 18B, 18A
200 2000 kcal Control metabólico
250 2500 kcal Control metabólico
DNP Diabética niños pequeños Niños con diabetes menores de 6 años
DNG Diabética niños grandes Niños con diabetes mayores de 6 años
RX- Preparación rayos Preparación pruebas radiológicas 1RX, 2RX
CEL Celíaca Intolerancia al gluten
COL Pobre en colesterol Dislipemias
LAX Laxante Estreñimiento
NC- No carne Intolerancia carne

A: astringente; B: protección biliar; D: diabetes; FR: fraccionada; G: protección gástrica; K: pobre en potasio; M: fácil masticación; N: niños.
Nota: todas las dietas se pueden pedir con o sin sal.
Tema 6.  Planificación de la dieta hospitalaria 101

ELECCIÓN DE DIETA EN PACIENTE HOSPITALIZADO

1.  Dieta basal = normal = libre

2.  Dietas terapéuticas Con/sin sal

3.  Dietas especiales = no codificadas

Figura 1.  Elección de dieta en paciente hospitalizado.

2.  DIETAS TERAPÉUTICAS

PROGRESIVAS Líquida/semilíquida/semiblanda/blanda/transición

MODIFICACIÓN TEXTURAS Ondontológica/triturada

Hiperproteica/40 gr proteína/60 gr proteína/


CONTROL PROTEICO Hemodiálisis/diálisis peritoneal

CONTROL METABÓLICO 1500/1800/2000/2500 calorías

CONTROL RESIDUO Laxante/pobre en residuo/sin residuo

CONTROL GRASA 100 gr grasa/pobre en grasa

Sin gluten/pobre en purinas/


OTRAS RESTRICCIONES Ovolactovegetariana/
Inmunodeprimidos

Figura 2.  Dietas terapéuticas.

rimientos de energía y nutrientes del paciente una etapa de recuperación de las funciones di-
hospitalizado, teniendo en cuenta su situación gestivas tras un período de ayuno, así como para
fisiológica y patológica. Generalmente permite la preparación de algunas pruebas diagnósticas
la elección entre dos opciones de cada plato, (tabla 3 y figura 3). En función del tipo de cirugía/
en comida y cena, con una rotación de 7 días y agresión, la zona afectada, el estado basal del pa-
variaciones de algunos platos en función de los ciente y la evolución clínica, el comienzo y la velo-
alimentos de temporada (tabla 2). Aporta aproxi- cidad de progresión del plan dietético debe ser
madamente 2200-2400 kcal, con una distribu- individualizado para cada paciente. Asimismo, en
ción de macronutrientes de 50-55% hidratos de algunos casos, no será imprescindible pasar por
carbono, 30-35% lípidos y 10-20% proteínas. A cada uno de los pasos. Las principales diferencias
partir de los alimentos utilizados para elaborar la en las distintas dietas que se explican a continua-
dieta basal se diseñarán los menús de las dietas ción son el tipo y textura de los alimentos, las tec-
terapéuticas. nologías culinarias empleadas, las cantidades y el
2.  DIETAS PROGRESIVAS O DE TRANSICIÓN: térmi- reparto de la ingesta a lo largo del día (tabla 4).
no que engloba el grupo de dietas indicado en En caso de mala tolerancia oral o de ingesta insu-
102 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Tabla 2.  Modelo de menú de dieta basal.


LUNES MARTES MIÉRCOLES JUEVES VIERNES SÁBADO DOMINGO
DESAYUNOS
LECHE DESNATADA LECHE DESNATADA CON LECHE CON LECHE DESNATADA CON LECHE DESNATADA CON LECHE DESNATADA CON LECHE DESNATADA CON
CON DESCAFEINADO CON DESCAFEINADO DESCAFEINADO CON DESCAFEINADO DESCAFEINADO CON DESCAFEINADO CON PAN DESCAFEINADO CON PAN
BOLLERÍA CON GALLETAS CON BOLLERÍA CON GALLETAS CON BOLLERÍA CON MANTEQUILLA Y CON ACEITE
MANTEQUILLA Y MANTEQUILLA Y MERMELADA
MERMELADA MERMELADA
COMIDA
PRIMEROS
LENTEJAS ESTOFADAS FIDEOS A LA CAZUELA POTAJE DE GARBANZOS ARROZ CON MEJILLONES BERZA CON PATATAS GUISANTES PRIMAVERA ESPAGUETIS BOLOÑESA
Y CALAMAR
ENSALADA DE LA TIERRA ALUBIA VERDES CON ENSALADA MIXTA CARDO A LA NAVARRA POCHAS CON VERDURAS PATATAS A LA RIOJANA BORRAJA CON PATATAS
PATATA
SEGUNDOS Y GUARNICIONES
GRANADERO CON POLLO A LA JARDINERA REDONDO EN SALSA CON LOMO BRASEADO CON HAMBURGUESA DE MERLUZA CON PATATAS BACALAO AJOARRIERO
ENSALADA ENSALADA PIMIENTOS TERNERA EN SALSA CON VAPOR CON PIMIENTOS
PURÉ DE PATATA
ESTOFADO DE TERNERA TRUCHA A LA NAVARRA BACALAO TIA TERE EMPERADOR A LA TILAPIA A LA BILBAÍNA POLLO AL CHILINDRÓN MAGRO A LA PLANCHA
CON ZANAHORIA CON JAMÓN PATATA PANADERA PLANCHA CON TOMATE CON JUDÍAS VERDES CON CHAMPIÑÓN CON ENSALADA
POSTRES
FRUTA FRUTA MANZANA ASADA FRUTA FRUTA EN ALMÍBAR FRUTA FRUTA
YOGUR NATILLAS ARROZ CON LECHE HELADO FLAN YOGUR CUAJADA
PAN
MERIENDAS
LECHE CON LECHE CON LECHE CON LECHE CON LECHE CON LECHE CON LECHE CON
DESCAFEINADO CON DESCAFEINADO CON DESCAFEINADO CON DESCAFEINADO CON DESCAFEINADO CON DESCAFEINADO CON DESCAFEINADO CON
GALLETAS GALLETAS GALLETAS GALLETAS GALLETAS GALLETAS GALLETAS
CENA
PRIMEROS
PURÉ DE PATATAS Y MENESTRA SALTEADA JUDÍAS VERDES CON
ENSALADA DE ARROZ CREMA DE ESPÁRRAGOS SOPA DE PESCADO ENSALADA CAMPERA
ZANAHORIA CON JAMÓN TOMATE
SOPA DE AVE CON ENSALADA VERDE ENSALADA DE TOMATE Y SOPA DE AJO DE
ENSALADA DEL CHEF ENSALADA DE PASTA ESPÁRRAGOS CON JAMÓN
SÉMOLA VARIADA QUESO FRESCO NAVARRA
SEGUNDOS Y GUARNICIONES
FOGONERO ANDALUZA ENPANADILLAS DE TORTILLA DE JAMÓN CON PLATIJA ROMANA CON ATÚN ENCEBOLLADO CON PECHUGA VILLAROY CON JAMÓN AL HORNO CON
CON MENESTRA BONITO CON ENSALADA ENSALADA ENSALADA ARROZ PILAF TOMATE ASADO BROCOLI Y ZANAHORIA
HUEVOS GRATÉN CON FILETE DE ABADEJO RAPE EN SALSA SALCHICHAS AL TORTILLA DE CALABACÍN LENGUADO A LA HUEVOS EN SALSA CON
ENSALADA A LA GALLEGA CON MARINERA CON VINO CON ALUBIAS CON ENSALADA MENIÈRE CON PATATAS PATATAS PANADERA
ZANAHORIA CALABACÍN SALTAEADAS VAPOR
POSTRES
FLAN CUAJADA YOGUR NATILLAS YOGUR QUESO FRESCO CON ARROZ CON LECHE
MEMBRILLO
FRUTA EN ALMIBAR FRUTA FRUTA FRUTA FRUTA FRUTA ASADA FRUTA
PAN

Desayuno: Leche entera, descafeinado, azúcar, pan, mantequilla, mermelada. Una fruta.
Merienda: Leche entera, descafeinado, azúcar, galletas, mermelada.

ficiente se debe valorar volver al modelo dietético das exploraciones radiológicas o algún tipo
previo o asociar nutrición artificial. de cirugía. Estará compuesta por líquidos de
fácil digestión y mínimo residuo (agua, infu-
2.1. Dieta líquida: indicada para iniciar la tole- siones, caldo desgrasado vegetal, de carne o
rancia oral tras una intervención quirúrgica o de arroz y zumos de frutas comerciales) que
un período de ayuno. También puede ser de se distribuyen en 5-6 tomas a lo largo del
elección como preparación para determina- día. La leche, los lácteos y los zumos natura-
Tema 6.  Planificación de la dieta hospitalaria 103

Tabla 3.  Indicaciones generales en dietas progresivas.

· Favorecer la recuperación funcional del paciente.


· Adaptar la alimentación a los cambios anatómico-funcionales ocasionados por la cirugía.
· Evitar períodos de ayuno prolongado.
· Evitar mantener durante varios días dietas insuficientes.
· Hacer la progresión dietética en función de la patología de base y el estado clínico
del paciente.
· Repartir la ingesta en 5-6 tomas al día, en tomas de pequeño volumen y con
horario regular.
· Recomendar masticación lenta.
· Evitar ácidos.
· Evitar alimentos grasos y utilizar técnicas culinarias sencillas.
· Evitar alimentos crudos.

DIETAS PROGRESIVAS

Dieta líquida

24‐72 horas Dieta semilíquida

24‐72 horas Dieta semiblanda


24‐72 horas

Buena tolerancia Mala tolerancia

Dieta blanda Dieta transición Dieta basal/* Tracto digestivo Tracto digestivo
funcionante no funcionante

Nutrición Nutrición
enteral parenteral

*Otras dietas terapéuticas en función de patología de base (diabetes mellitus, dislipemia, etc.)

Figura 3.  Dietas progresivas.

les precisan más trabajo digestivo, por lo que nasogástrica o por gastrostomía. En caso de
no suelen estar incluidos en esta fase. Se tra- presentar disfagia a líquidos se deberán aña-
ta de una dieta incompleta desde el punto dir espesantes o administrar gelatinas. En
de vista nutricional (400-500 kcal, 96% caso de cirugías que impidan o limiten la in-
en forma de azúcares refinados). El conteni- gesta de otro tipo de texturas (por ejemplo,
do de hidratos de carbono es aproximada­ cirugías maxilofaciales) se deberá comple-
mente 100 gr al día, cantidad inferior a los mentar esta dieta con productos de nutri-
requerimientos mínimos. Este modelo de die- ción enteral por la vía más adecuada.
ta no se debe mantener como aporte exclusi- 2.2. Dieta semilíquida: segundo paso en la pro-
vo por un período superior a 48-72 horas. gresión dietética compuesta por alimentos
En caso de presentar mala tolerancia oral en líquidos y pastosos. Supone un mayor estí-
este plazo, y en función de la causa y del mulo digestivo que la dieta líquida. Consta-
estado nutricional, se debe plantear otro rá, además de los alimentos de la dieta líqui-
tipo de soporte nutricional. No está indicado da, de leche y derivados lácteos desnatados,
administrar este tipo de dieta por una sonda cereales dextrinados, galletas maría, purés
104 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Tabla 4.  Ejemplo de menú de comidas en dietas de progresión.

DIETA PAN CALDO 1er PLATO 2º PLATO POSTRE


Líquida Caldo carne Zumo variado
Caldo y puré de Zumo y macedonia
Semilíquida
verdura con patata triturada
Puré de verdura con Pescado al horno Macedonia en
Semiblanda 2 biscotes
patata (100 g) almíbar
Pescado al horno Macedonia en
Blanda 50 gr Verdura con patata
(125 g) almíbar
Pescado Ménière
Transición 50 gr Verdura con patata Fruta cruda
(125 g)

de verduras y hortalizas y fruta (en almíbar calórico es de aproximadamente 2200 kcal


triturada, en compota, batida o asada). En (47% hidratos de carbono, 19% proteínas,
función del tipo de cirugía se puede valorar 34% grasas). Es posible mantener esta dieta
retrasar la introducción de lactosa. El aporte durante largos períodos de tiempo, pero
calórico es aproximadamente de 1200-1400 conviene tener en cuenta que, al no incluir
kcal (65% hidratos de carbono, 23% grasa, alimentos frescos, puede ser deficitaria en
12% proteínas) y tampoco se debe mante- algunos nutrientes.
ner como aporte exclusivo más de 48-72 2.5. Dieta de transición: último paso en la pro-
horas. gresión dietética hacia una dieta opcional o
Dieta semiblanda: siguiente paso en la pro-
2.3.  basal. En esta fase se incluyen todos los gru-
gresión en el que se introducen alimentos pos de alimentos y resulta una dieta variada
sólidos. El objetivo será probar la tolerancia tanto en texturas como en composición. Los
a la introducción de proteína y fomentar la platos están cocinados con técnicas culina-
masticación. En desayunos y meriendas se rias variadas, eliminando aquellos que preci-
añade café descafeinado, mermelada, mem- sen más grasa para su elaboración. A dife-
brillo y purés de frutas. En comidas y cenas rencia de las fases anteriores, los lácteos son
se mantiene un primer plato similar a la die- enteros y se incluyen ensaladas, fruta fresca
ta semilíquida y un segundo plato consisten- y legumbre sin triturar. Se trata de una dieta
te en carnes magras y pescados blancos completa que nos asegura, frente a una die-
preparados al horno, vapor y plancha. Asi- ta opcional seleccionada por el paciente en
mismo, se introduce el pan tostado. En el función de sus gustos culinarios, una distri-
postre se añade fruta en almíbar entera. Se bución de platos equilibrada a lo largo de
trata de una dieta más variada que las ante- toda la semana.
riores, pero sigue siendo nutricionalmente
incompleta, ya que carece de alimentos fres- 3.  DIETAS CON MODIFICACIÓN DE TEXTURA
cos y variedad en los grupos de alimentos 3.1. Dieta de fácil masticación/blanda mecánica/
(ausentes las frutas, las ensaladas, las le- odontológica: indicada para aquellos pa-
gumbres y el arroz). Se aconseja mantener cientes que presentan dificultad en la masti-
pocos días. cación o en la salivación. Debe ser una dieta
Dieta blanda/suave/fácil digestión: indicada
2.4.  variada, completa y equilibrada en la que
como progresión de la dieta semiblanda y en estén presenten alimentos de todos los gru-
aquellos casos que presenten alteración en pos, de textura sólida y de consistencia blan-
la digestión. Además de los alimentos de la da. Esta dieta admite un gran número de
fase anterior incluye las verduras enteras sin alimentos y formas variadas de elaborarlos.
triturar, arroz y pasta. Las legumbres se ser- Se evitarán aquellos difíciles de masticar por
virán en puré. Los segundos platos son a su consistencia o por la técnica culinaria uti-
base de carnes, pescados y tortillas cocina- lizada (filete a la plancha, verduras y hortali-
dos con técnicas culinarias sencillas. Los pos- zas crudas, frutas frescas inmaduras o con
tres son similares a la fase anterior. Se susti- hueso, pan seco o biscotes, quesos muy se-
tuye el pan tostado por el blanco. El aporte cos). Los alimentos pueden estar cocinados
Tema 6.  Planificación de la dieta hospitalaria 105

al vapor, hervidos o preparados al microon- para asegurar la ingesta, así como vigilar la
das, asados, estofados o guisados, acompa- composición nutricional. Algunos hospitales
ñados con salsa o con el jugo del alimento, disponen de productos de alimentación bá-
para ayudar a la formación del bolo alimen- sica adaptada que, frente a la alimentación
ticio en la boca. Asimismo, se deben evitar tradicional, aseguran un aporte nutricional
cocciones que puedan resecar los alimentos exacto y constante, con una textura suave y
o formar una capa dura o astillosa, como a homogénea, amplia variedad de sabores y
la brasa, la plancha o las frituras muy rese- una preparación sencilla y rápida que evita
cas. Aporta aproximadamente 2400 kcal, manipulaciones que limiten la seguridad mi-
con un reparto equilibrado de macronu- crobiológica.
trientes. En pacientes que no logren una ingesta ade-
Dieta triturada/batida: indicada para aque-
3.2.  cuada se deben enriquecer los purés para
llos pacientes que presentan dificultad para conseguir el máximo valor nutricional en pe-
la masticación y/o deglución de alimentos queños volúmenes (tabla 5). En estos casos
con textura sólida. Incluye prácticamente to- también es importante valorar la suplementa-
dos los grupos de alimentos que son suscep- ción. En aquellos pacientes que presenten
tibles de ser triturados, constituyendo una disfagia a líquidos se eliminarán estos de la
dieta variada, completa y equilibrada. Inclu- dieta (utilizando espesantes y/o gelatinas) así
ye líquidos (zumos, lácteos, caldos, sopas), como los alimentos con texturas peligrosas
purés de verduras, pasta, arroz y legumbres (tabla 6). Conviene valorar individualmente el
con carne o pescado, huevo y pan blanco. tipo de alimentos que se pueden incluir en la
Las frutas se prepararán en forma de batidos dieta en función de las preferencias y el nivel
o compotas. Para la elaboración de los pla- de tolerancia del paciente (tabla 7 y figura 4).
tos se utilizarán alimentos presentes en la
dieta basal. 4. DIETAS CON CONTROL PROTEICO
Generalmente, los pacientes que precisan (Tabla 8 y figura 5)
este tipo de dieta deben mantenerla durante 4.1.  Dieta hiperproteica-hipercalórica: el objetivo
períodos largos de tiempo, por lo que es de esta dieta será evitar la malnutrición en
fundamental cuidar las características orga- pacientes que presentan requerimientos ele-
nolépticas (sabor, olor, color, temperatura) vados de proteínas y/o energía en contexto

Tabla 5.  Formas de enriquecer las dietas de textura modificada.

· Añadir proteína en polvo a los purés, leche, etc.


· Utilizar leche como bebida habitual y en cocciones cuando sea posible.
· Enriquecer platos con leche en polvo (80 g leche en polvo = 20 g proteína), queso
rallado/fundido/en porciones, frutos secos molidos, huevo cocido triturado.
· Añadir fruta fresca o en almíbar a los lácteos.
· Añadir carnes y pescados picados en purés de verduras o legumbres y en salsas.
· Utilizar nata, crema de leche, mantequilla, mayonesa y otras salsas.
· Agregar pan frito (picatostes) a las sopas y purés.
· Añadir galletas, cereales dextrinados o pan troceado en la leche o el yogur,
principalmente en desayunos y meriendas.
· Añadir cacao en polvo a batidos, leche.

Tabla 6.  Alimentos peligrosos en pacientes que presentan disfagia.

· Comidas pegajosas: puré de patata, queso fresco, caramelos, huevo duro sin salsa
· Comidas que se fragmentan fácilmente: biscotes, galletas, cereales integrales, frutos
secos, patatas chips
· Comidas con dos o más consistencias: yogur con frutas, arroz con leche, sopa con
pasta, puré con picatostes, fruta en almíbar
· Comida con fibras duras: espárragos, puerros, apio
· Alimentos con grumos, huesos, espinas o pepitas: aceitunas, uvas, sandía
· Alimentos que desprenden líquidos al masticarlos: naranja, bombones rellenos
106 BLOQUE: DIETOTERAPIA

DIETAS CON MODIFICACIÓN DE TEXTURA

MASTICACIÓN

Conservada Alterada

Deglución Deglución

Conservada Alterada Alterada Conservada

Dieta basal/* Dieta triturada Dieta triturada Dieta odontológica

Ingesta escasa/ineficaz

Nutrición enteral

*Otras dietas terapéuticas en función de patología de base (diabetes mellitus,dislipemia, etc.)

Figura 4.  Dietas con modificación de textura.

Tabla 7.  Modelo de dietas con modificación de textura.

DIETA Desayuno Comida Merienda Cena


· 200 cc leche entera · Caldo carne · 200 cc leche entera · Caldo vegetal
con descafeinado y · Puré (verdura, patata, con descafeinado y · Puré (patata,
azúcar carne picada 100 g), azúcar zanahoria, pescado
Triturada · Galletas con 10 gr aceite oliva · Cereales dextrinados 100 g), 10 g aceite
mantequilla y · Pan (30 g) oliva
mermelada · Macedonia triturada · Pan (30 g)
· Yogur
· 200 cc leche entera · Alubias blancas · 200 cc leche entera · Puré de patata y
con descafeinado y · Pescado horno (150 g) con descafeinado y zanahoria
azúcar con mayonesa azúcar · Tortilla francesa
· Galletas con · Pan (30 g) · cereales dextrinados (2 huevos) con
Odontológica
mantequilla y · Macedonia champiñones y salsa
mermelada de tomate
· Pan (30 g)
· Yogur

de patologías con elevado estrés metabólico sarios más de 2 g/kg/día excepto en pacien-
para evitar los efectos del catabolismo tisular, tes con quemaduras de gran extensión. Por
en los casos que presenten quemaduras o úl- otro lado, los requerimientos energéticos se
ceras por decúbito para facilitar la regenera- pueden estimar con distintas fórmulas y ra-
ción tisular y para compensar las pérdidas en ramente serán mayores de 3000 kcal/día
pacientes con síndromes malabsortivos. En (35-45 kcal/kg/día en casos de estrés meta-
función del grado de estrés metabólico el re- bólico elevado). Se debe valorar en cada pa-
querimiento de proteínas puede oscilar entre ciente si el aporte y la ingesta son adecuados
0,8 y 2 g/kg/día. Excepcionalmente son nece- y en los casos necesarios valorar la suple-
Tema 6.  Planificación de la dieta hospitalaria 107

Tabla 8.  Modelo de dietas de control proteico.

DIETA Desayuno Almuerzo Comida Merienda Cena Recena


· 200 cc leche Bocadillo 50 g pan · Verdura · 200 cc leche · Puré de patata · 2 00 cc de leche
entera con con jamón cocido (200 g) con entera con y zanahoria entera con
descafeinado y (50 g) o queso patata (100 g) descafeinado y (250 g) azúcar, galletas
azúcar (25 g) o jamón · Albóndigas azúcar · Pescado al horno
Hiperproteica
· Pan (50 g) serrano (25 g) (200 g) con · Galletas (10) con (250 g) con
con mantequilla patatas fritas mantequilla y mayonesa
y mermelada · Cuajada mermelada · Fruta
· Fruta · P an (50 g) · Pan (50 g)
· Infusión con · V erdura (200 g) · Infusión con · Puré de patata
azúcar, galletas, con patata (50 g) azúcar, galletas, y zanahoria
2 mantequillas, · Albóndigas 2 mantequillas, (250 g)
40 g proteínas 2 mermeladas (75 g) 2 mermeladas · Pescado al horno
· Fruta (75 g)
· P an (30 g) · Fruta
· Pan (30 g)
· 100 cc leche · V erdura (200 g) · Infusión con · Puré de patata
entera, café, con patata (50 g) azúcar, galletas, y zanahoria
azúcar, 2 · Albóndigas 2 mantequillas, (250 g)
60 g proteínas mantequillas, (100 g) 2 mermeladas · Pescado al horno
2 mermeladas · Fruta (100 g)
· P an (30 g) · Fruta
· Pan (30 g)

DIETAS CONTROL PROTEICO

Quemados, UPP Insuficiencia renal Hepatopatía


catabólicos

Técnicas depuración
Hiperproteica extrarrenal
(> 1,2 g/kg/día)

Oncológicos SÍ NO
(25‐30 kcal/kg/día
1‐2 g/kg/día)
Dieta hemodiálisis/ Dieta 40 g/60 g proteínas
diálisis peritoneal (0,6‐0,8 g/kg/día)
(1,2‐1,5 g/kg/día)

Figura 5.  Dietas de control proteico.

mentación con nutrición artificial. Además, los grupos de alimentos y se emplearán


se pueden utilizar módulos de proteínas en técnicas culinarias variadas. Aporta aproxi-
polvo para enriquecer platos y alcanzar el madamente 2800-3000 kcal y 150 g de
aporte proteico deseado. proteínas.
Se trata de una dieta nutricionalmente 4.2. Dieta con 40 g de proteínas/dieta con 60 g
completa en la que están incluidos todos de proteínas: utilizada en pacientes con pa-
108 BLOQUE: DIETOTERAPIA

tología renal y hepática. Es fundamental co- Salvo en los casos ingresados con ese fin, se
nocer el peso del paciente para elegir la die- evitará pautar dietas hipocalóricas para con-
ta más adecuada y se debe ajustar el aporte/ seguir una pérdida de peso aprovechando
restricción de iones (sodio, potasio, fósforo, la estancia hospitalaria. Hay que tener en
calcio) y vitaminas. cuenta que el gasto energético está aumen-
La restricción proteica tiene como fin redu- tado en función de la patología de base y
cir las concentraciones de urea en sangre y que en muchos casos una dieta de 1500 ca-
disminuir el síndrome urémico. Las dietas lorías puede ser insuficiente para cubrir los
hipoproteicas y con bajas concentraciones requerimientos de macro y micronutrientes
en fósforo pueden retrasar el avance de la durante la enfermedad. Es habitual en los
enfermedad renal, aunque este tipo de die- hospitales que los horarios de la ingesta se
tas deben personalizarse según las necesi- centren en 10-11 horas durante el día, lo
dades de cada individuo. La pauta de la die- que puede dificultar, junto con la patología
ta puede ser diferente según la función de base y distintos tratamientos empleados,
renal, con un aporte de proteínas de 0,8 g/ el control glucémico.
kg/día (60 g/día para pacientes de 70 kg) si La dieta se distribuye en 6 tomas, con un re-
el volumen de filtración glomerular es ma- parto de macronutrientes de 55% hidratos
yor de 25 ml/min y de 0,6 g/kg/día (40 g/día de carbono, 30% grasas y 15% proteínas.
en pacientes de 70 kg) para aquellos con Siguiendo las recomendaciones de la SEA
volumen de filtración glomerular menor de (Sociedad Española de Arteriosclerosis), los
25 ml/min. Se debe tener en cuenta que las objetivos generales de la dieta serán reducir
dietas hipoproteicas pueden condicionar el consumo de grasa total a menos del 30%
negativamente el estado nutricional del pa- del valor calórico total (se acepta un 35% si
ciente y acelerar la entrada en diálisis. La los ácidos grasos son predominantemente
ingesta proteica en aquellos pacientes so- monoinsaturados), reducir el consumo de
metidos a técnicas de depuración extrarre- ácidos grasos saturados (< 10%) y reempla-
nal (diálisis peritoneal, hemodiálisis) debe zarlos por ácidos grasos monoinsaturados
estar comprendida entre 1,2-1,5 g/kg/día, (15-20%) y poliinsaturados (< 7%), limitar la
con el adecuado ajuste de iones. ingesta de colesterol (< 300 mg/día) y de áci­
Dado el papel que juega el amonio en la pa- dos grasos trans, aportar los hidratos de car-
togenia de la encefalopatía hepática, las mo- bono preferentemente en forma de hidratos
dificaciones de la calidad y la cantidad de la de carbono complejos limitando los azúca-
fuente nitrogenada de la dieta es uno de los res sencillos y asegurar un aporte de fibra de
pilares del tratamiento. Pero hay que tener 20-30 g/día (10-25 g de fibra soluble).
en cuenta que un gran porcentaje de pacien- 5.2.  Dietas para pacientes diabéticos con terapia
tes con hepatopatía crónica desarrollan mal- de insulina bolo-basal (TBB): tradicional-
nutrición y esta situación les hace más sus- mente, las dietas hospitalarias para diabéti-
ceptibles a desarrollar encefalopatía. Como cos estaban fraccionadas en 6 tomas. Se
en la mayoría de las situaciones clínicas, la detectó la necesidad de crear nuevas dietas
prescripción dietética en estos pacientes fraccionadas en 3 o 4 tomas para aquellos
debe individualizarse una vez evaluada la pacientes con TBB. Tomando como modelo
gravedad y la cronicidad de la encefalopatía, el menú de las dietas «estándar» para diabé-
la enfermedad de base y las posibles compli- ticos (6 tomas al día), se elaboraron cinco
caciones metabólicas y elegir la dieta más modelos de dietas adecuadas para aquellos
adecuada en función de la evolución. En los pacientes diabéticos con TBB (1800, 2000,
casos de encefalopatía grado III-IV y en 2250, 2500 y 3000 kcal). No era suficiente la
aquellos en los que la ingesta oral sea insufi- eliminación de la media mañana y merienda,
ciente o mal tolerada se debe valorar la ad- ya que se debía realizar una redistribución
ministración de fórmulas/suplementos de de los nutrientes, especialmente los hidratos
nutrición enteral por la vía más adecuada. de carbono, en el resto de tomas (tabla 10).
Estas dietas siguen las recomendaciones
5.  DIETAS PARA CONTROL METABÓLICO para las dietas de diabetes en general: po-
5.1. Dietas de 1500, 1800, 2000, 2500 kcal (ta- bres en azúcares simples, grasas saturadas y
bla 9): el plan dietético supone uno de los colesterol; ricas en fibra soluble, ácido olei-
pilares fundamentales en el tratamiento del co, ω-3 y antioxidantes. La ingesta diaria se
sobrepeso/obesidad, de la diabetes mellitus reparte en 3 tomas (desayuno, comida y
y por supuesto del síndrome metabólico. cena) + 2 colaciones (almuerzo y merienda)
Tema 6.  Planificación de la dieta hospitalaria 109

Tabla 9.  Modelo de dietas de control metabólico, en 6 tomas.

DIETA Desayuno Almuerzo Comida Merienda Cena Recena


· Leche · Bocadillo · Verdura · Leche · Ensalada · Leche
desnatada 30 g pan y (200 g) con desnatada variada desnatada
(200 cc), café, 15 g jamón patata (100 g) (200 cc), café, (200 g) 200 cc
sacarina cocido o · Pescado horno sacarina · Tortilla
1500
· 2 biscotes 1 quesito (150 g) · 2 biscotes 1 huevo con
· 1 fruta desnatado · 1 fruta champiñones
· Pan (30 g) · 1 fruta
· Pan (30 g)
· Leche · Bocadillo · Verdura · Leche · Ensalada · Leche
desnatada 50 g pan y (200 g) con desnatada variada desnatada
(200 cc), café, 30 g jamón patata (100 g) (200 cc), café, (200 g) 200 cc
sacarina cocido o · Pescado horno sacarina · Tortilla
1800
· 2 biscotes 2 quesitos (150 g) · Bocadillo 1 huevo con
· 1 fruta desnatados · 1 fruta 30 g pan y 15 champiñones
· Pan (30 g) g jamón cocido · 1 fruta
o 1 quesito · Pan (30 g)
· Leche · Bocadillo · Verdura · Leche · Ensalada · Leche
desnatada 50 g pan y (200 g) con desnatada variada desnatada
(200 cc), café, 30 g jamón patata (100 g) (200 cc), café, (200 g) 200 cc
sacarina cocido o · Pescado horno sacarina · Tortilla 2
· Pan (50 g) 2 quesitos (150 g) · Bocadillo huevo con
2000
· 10 g aceite desnatados · 1 fruta 30 g pan y 15 champiñones
oliva · Pan (30 g) g jamón cocido · 1 fruta
· 1 fruta o 1 quesito · Pan (30 g)
desnatado
· 1 fruta
· Leche · Bocadillo · Verdura · Leche · Ensalada · Leche
desnatada 50 g pan y (200 g) con desnatada variada desnatada
(200 cc), café, 30 g jamón patata (100 g) (200 cc), café, (200 g) 200 cc,
sacarina cocido o · Pescado horno sacarina · Tortilla 2 biscotes
· Pan (50 g) 2 quesitos (200 g) · Bocadillo 2 huevos con
2500 · 10 g aceite desnatados · 1 fruta 30 g pan y champiñones
oliva · Pan (50 g) 15 g jamón · 1 fruta
· 1 fruta cocido o · Pan (50 g)
1 quesito
desnatado
· 1 fruta

en las cuales solo se sirve un yogur o una 6.  DIETAS CONTROLADAS EN RESIDUO
taza de leche, con el objetivo de aportar me- 6.1.  Dieta laxante (tabla 11): en líneas genera-
nos de una ración de hidratos de carbono y les, una dieta de estas características debe
no precisar dosis extra de insulina (bolo). Los contener entre 30-40 gr de fibra al día, en
hidratos de carbono, fundamentalmente de forma preferentemente de distintos vege-
absorción lenta (50% de la energía total) es- tales que contengan tanto fibra soluble
tán repartidos en 3 tomas y calculados tam- como insoluble. Suele ser una dieta muy
bién por raciones (igual cantidad en comida utilizada en plantas de Geriatría y de Medi-
y cena, algo menos en desayuno, y máximo cina Interna, así como de Obstetricia. Ade-
una ración en almuerzo y en merienda), de más de la dieta es fundamental incidir en
manera estable a lo largo de las dos sema- una ingesta hídrica adecuada. Si este tipo
nas de menú, para facilitar la educación dia- de dieta no es suficiente para corregir el
betológica de los pacientes. estreñimiento se deberá valorar la asocia-
110 BLOQUE: DIETOTERAPIA

Tabla 10.  Contenido y distribución de hidratos de carbono en dieta 1800 TBB.

HIDRATOS DE CARBONO

1800
LUNES MARTES MIÉRCOLES JUEVES VIERNES SÁBADO DOMINGO
CALORIAS
GR. % GR. % GR. % GR. % GR. % GR. % GR. %

DESAYUNO 50,26 23,7 50,26 22,6 50,26 23,1 50,26 22,6 50,26 22,4 50,26 23,7 50,26 22,8

COLACIÓN 6,06 2,9 6,06 2,7 6,06 2,8 6,06 2,7 6,06 2,7 6,06 2,9 6,06 2,7

COMIDA 75,72 35,7 74,37 33,5 80,92 37,2 80,05 36,0 79,65 35,5 73,14 34,5 75,87 34,4

COLACIÓN 9,74 4,6 9,74 4,4 9,74 4,5 9,74 4,4 9,74 4,3 9,74 4,6 9,74 4,4

CENA 70,38 33,2 81,71 36,8 70,38 32,4 76,37 34,3 78,38 35,0 72,56 34,3 78,60 35,6

Tabla 11.  Dieta laxante.


LUNES MARTES MIERCOLES JUEVES VIERNES SÁBADO DOMINGO
Comidas
Lentejas Alubias Potaje de Cardo a la Pochas con Guisantes Menestra  
estofadas verdes con garbanzos navarra verduras primavera de verduras
patatas
Estofado Ensalada Pollo Calabacín Bacalao tía Ensalada Lomo Pimientos Estofado Ensalada Granadero Tomate Pollo al Ensalada
de ternera jardinera Tere braseado de pavo a la vasca natural chilindrón
FRUTA (NO PLÁTANO)
PAN INTEGRAL
Cenas
Acelga con Ensalada   Ensalada   Ensalada   Ensalada   Borraja   Judías  
patata verde de tomate del Chef campera con patata verdes con
variada y queso patata
fresco
Huevos al Tomate Abadejo a Guisantes Tortilla de Calabacín Platija a la Guisantes Tortilla de Menestra Jamón Pescadilla Ensalada
gratén asado la gallega jamón romana calabacín asado en a la
salsa marinera
FRUTA (NO PLÁTANO)
PAN INTEGRAL

Desayuno: Leche entera, descafeinado, azúcar, 50 g pan integral, mermelada ciruela, mantequilla, kiwi.
Merienda: Leche entera, descafeinado, azúcar, galletas, mermelada ciruela, kiwi.
*Asegurar ingesta de 1,5-2 litros líquidos/día.

ción de suplementos comerciales de fibra, mitir mantener un correcto estado de hidra-


laxantes o probióticos. tación aportando la suficiente cantidad de
6.2.  Dieta pobre en residuo (tabla 12): tiene líquidos para evitar alteraciones electrolíti-
como objetivo disminuir al máximo el volu- cas. Está indicada para la preparación de al-
men fecal para reducir el riesgo de presentar gunas pruebas radiológicas.
oclusión/suboclusión del tracto intestinal.
También estará indicada en casos de malab- 7.  DIETAS CONTROLADAS EN GRASAS
sorción (enteritis actínica, resecciones intes- 7.1. Dieta con 100 g de grasa (tabla 13): para
tinales, etc.) y para la preparación de algu- la determinación cuantitativa de la presencia
nas pruebas radiológicas. de grasa en heces (como medida indirec­ta
6.3.  Dieta sin residuos (tabla 12): el objetivo de de malabsorción, insuficiencia pancreática
la dieta es lograr la limpieza del intestino exocrina, etc.) debe administrarse una dieta,
mediante la exclusión de aquellos alimentos los 5 días previos a la prueba, que contenga
que forman bolo fecal y retrasan el vacia- un aporte de grasas conocido. Generalmente
miento gástrico. Además, la dieta debe per- se prescriben 100 g de grasa diaria y se
Tema 6.  Planificación de la dieta hospitalaria 111

considerará patológico si en estas condicio- metabolismo lipoproteico. En algunos casos


nes la excreción fecal de grasa es superior a la dieta también deberá ser pobre en resi-
7 g/día. duo. Este modelo de dieta se suplementa
En la actualidad, en muchos centros, este con triglicéridos de cadena media (TCM), lo
modelo de dieta está en desuso por la posibi- que permite asegurar un aporte adecuado
lidad de realizar el diagnóstico de insuficien- de energía, aumentar el índice de absorción
cia pancreática exocrina por test del aliento. de las vitaminas liposolubles y mejorar las
Dieta pobre en grasa/alipídica (tabla 14):
7.2.  características organolépticas sin afectar a
esta dieta estará indicada en pacientes que los procesos de base dadas sus característi-
presenten procesos que cursan con maldi- cas fisicoquímicas. Para una buena toleran-
gestión/malabsorción de grasas (insuficien- cia de los TCM se deben añadir en poca can-
cia pancreática, insuficiencia biliar, síndro- tidad y de forma progresiva. Si se mantiene
mes de malabsorción), trastornos del drenaje esta pauta durante varias semanas habrá
linfático (obstrucción del drenaje linfático, que añadir 10-15 gr de aceite de semillas
lesiones de conductos linfáticos o del con- para asegurar el aporte de ácidos grasos
ducto torácico, linforragia) y trastornos del esenciales.

Tabla 12.  Dieta pobre y sin residuo.

DIETA Desayuno Almuerzo Comida Merienda Cena


· Leche desnatada · Zumo colado · Consomé · Leche desnatada · Puré de patata
(200 cc), café, · Pescado horno (200 cc), café, y zanahoria
Pobre en azúcar · Biscotes azúcar · Tortilla francesa
residuo* · Galletas · Yogur · Galletas 1 huevo
· Biscotes
· Zumo colado
· Infusión, azúcar · Zumo colado · Consomé · Infusión, azúcar · Consomé
Sin · Galletas · Pescado horno · Zumo colado · Tortilla francesa
residuo · Zumo colado · Zumo colado 1 huevo
· Zumo colado

* Sin lácteos si hay sospecha de déficit de lactasa.

Tabla 13.  Modelo de dieta con 100 gr de grasa.

DIETA Desayuno Comida Merienda Cena


· 200 cc leche entera, · Verdura con patata · 200 cc leche entera, · Ensalada variada con
café y azúcar con 15 g de aceite café y azúcar 30 gr de aceite
· Pan (50 g) de oliva · Galletas maría (5) · Tortilla 2 huevos con
100 g grasa · 10 g aceite oliva · Pescado Ménière · 12 g mantequilla champiñones
(15 g aceite) · Pan (50 g)
· Pan (50 g) · Fruta
· Cuajada

Tabla 14.  Modelo de dieta pobre en grasa con triglicéridos de cadena media (MCT).

DIETA Desayuno Comida Merienda Cena


· 200 cc leche · Verdura con patata · 200 cc leche · Ensalada variada con
desnatada, café y con 10 g de TCM desnatada, café y 20 g TCM
azúcar · Pescado al horno azúcar · Tortilla 2 huevos con
Pobre en grasa
· Pan (50 g) · Pan (50 g) · Pan (50 g) champiñones
· 10 g TCM · Fruta · Mermelada · Pan (50 g)
· Fruta
112 BLOQUE: DIETOTERAPIA

 8. DIETA SIN GLUTEN (tabla 15): indicada para pa-  Hay que tener en cuenta que antes de iniciar el
cientes celíacos o con sensibilidad al gluten no tratamiento dietético el paciente con celiaquía
celíaca (SGNC). Se elabora con alimentos de to- puede tener deficiencias nutricionales como
dos los grupos alimentarios excluyendo aquellos consecuencia de la malabsorción y alteraciones
que contengan trigo, espelta, cebada, centeno y electrolíticas por la diarrea, que habrá que repo-
avena. Dentro del grupo de alimentos que han ner. Para corregir estas deficiencias pueden estar
sufrido algún tipo de manipulación industrial indicadas fórmulas de nutrición artificial y/o po-
solamente estarán permitidos aquellos autoriza- livitamínicos.
dos por la Asociación Española de Celíacos. Se
debe evitar cocinar los alimentos de esta dieta  9. DIETA POBRE EN PURINAS (tabla 16): la dieta po-
en el aceite o con los utensilios que se han em- bre en purinas produce reducciones modestas en
pleado para preparar alimentos que contienen las concentraciones plasmáticas de ácido úrico (no
gluten. >1 mg/dl), por lo que el tratamiento de la hiperu-
 Ante sospecha de enfermedad celíaca no se ricemia debe considerar, además del manejo die-
aconseja iniciar dieta sin gluten hasta haber rea- tético, la reducción moderada y progresiva de
lizado los estudios endoscópicos/toma de biop- peso y la eliminación del consumo de alcohol. Asi-
sias pertinentes. mismo, es fundamental evitar períodos de ayuno

Tabla 15.  Modelo de dieta sin gluten.


LUNES MARTES MIÉRCOLES JUEVES VIERNES SÁBADO DOMINGO
Comidas
Lentejas Alubias Potaje de Pasta con Pochas con Acelga con Arroz  
sin gluten verdes con garbanzos tomate sin verduras patata vegetal sin
patata gluten gluten
Estofado Pollo Bacalao tía Ensalada Lomo Pimientos Estofado Granadero Tomate Pollo al Calabacín
de ternera jardinera Tere braseado de pavo a la vasca natural chilindrón
POSTRE LÁCTEO SIN GLUTEN: 3/SEMANA. FRUTA NATURAL: 2 DÍAS/SEMANA. FRUTA EN ALMÍBAR, ASADA O COCIDA: 2 DÍAS/SEMANA
PAN SIN GLUTEN
Cenas
Ensalada   Crema de   Ensalada   Borraja   Ensalada   Puré de   Judías  
de arroz calabaza de tomate con patata campera borraja verdes
SIN jamón y queso con patata patata
fresco
Tortilla Tomate Abadejo a Guisantes Tortilla Arroz Platija al Guisantes Tortilla de Arroz pilaf Jamón Patata Pescadilla Tomate
francesa asado la gallega francesa horno calabacín asado en panadera salsa sin asado
salsa gluten
POSTRE LÁCTEO SIN GLUTEN: 4/SEMANA. FRUTA NATURAL: 1 DÍA/SEMANA. FRUTA EN ALMÍBAR, ASADA O COCIDA: 2 DÍAS/SEMANA
PAN SIN GLUTEN

Desayuno: Leche entera, descafeinado, azúcar, pan sin gluten, mantequilla, mermelada, fruta.
Merienda: Leche entera, descafeinado, azúcar, pan sin gluten, mantequilla, mermelada, fruta.
*Sin gluten.

Tabla 16.  Modelo de dieta pobre en purinas.

DIETA Desayuno Comida Merienda Cena


· 200 cc leche entera, · Verdura con patata · 200 cc leche entera, · Ensalada de lechuga
café y azúcar · Pescado horno café y azúcar · Tortilla 2 huevos y
· Pan (100 g) · Galletas patata
Pobre en purinas · Mermelada · Pan · Pan
· Cuajada · Fruta
· Agua mineral · Agua mineral alcalina
alcalina*

*Asegurar la ingesta de 1,5-2 litros al día.


Tema 6.  Planificación de la dieta hospitalaria 113

prolongados y beber abundantes líquidos. Duran- que, bien por su patología de base o por otros
te la crisis gotosa se pautará una dieta que elimine motivos (gustos o intolerancias personales,
la mayor parte de purinas de la dieta, mantenien- anorexia, etc.), no se les pueda asignar una die-
do una restricción moderada a largo plazo. ta codificada. Es conveniente que estos pacien-
tes sean valorados por profesionales de la Uni-
DIETA OVO-LACTO-VEGETARIANA (tabla 17): es
10.  dad de Nutrición para elaborar un plan dietético
la más amplia de las dietas vegetarianas y la que adecuado. Para su elaboración se requiere:
siguen la mayoría de los vegetarianos. La dieta
vegetariana estricta puede generar un compro- • Historia dietética, con estimación de la inges-
miso en la ingesta de algunos nutrientes que se ta habitual del paciente, antecedentes de aler-
encuentran principalmente en los alimentos de gias o intolerancias alimentarias, agrado o no
origen animal (proteínas, calcio, hierro, vitamina de determinados alimentos o preparaciones
B12, zinc), por lo que es aconsejable que los pa- culinarias, aporte de líquidos y funcionalidad
cientes que soliciten esta dieta sean supervisados del tracto gastrointestinal (capacidad de mas-
por profesionales de la Unidad de Nutrición. ticación, deglución, posibles patologías gás-
tricas o intestinales, etc.).
11.  DIETA PARA NEUTROPENIA: los pacientes someti- • Cálculo de las necesidades nutricionales a par-
dos a tratamientos quimioterápicos y a trasplantes tir de datos antropométricos básicos y situa-
de médula pueden presentar en su evolución neu- ción patológica.
tropenia, estado con mayor riesgo de infección y • Control de la eficacia de la dieta elaborada
sepsis. La restricción de alimentos «de alto riesgo mediante visita periódica a los pacientes con
contaminante» parece una medida plausible y ra- dietas personalizadas.
cional, aunque la evidencia científica disponible
en la actualidad sobre esta medida es pobre. A VARIEDADES TERAPÉUTICAS Y OTRAS DIETAS:
13. 
pesar de la ausencia de estudios bien diseñados y existen distintas variedades que se pueden apli-
concluyentes con este tipo de dieta restrictiva, son car a varios tipos de dietas siempre que no sean
numerosos los centros que mantienen una dieta contradictorias (por ejemplo, no tiene sentido
«pobre en bacterias» o «dieta para neutropenia» solicitar una dieta blanda rica en fibra, ya que la
en la que se evitan aquellos alimentos que puedan dieta blanda se caracteriza por ser pobre en re-
contener bacterias gramnegativas y levaduras y siduo para favorecer una fácil digestión).
aquellos probablemente contaminados por mi-
croorganismos (huevos, carne, pescado y marisco • Protección gástrica: dieta con mínimo estímu-
poco cocinados o crudos, las hortalizas crudas, el lo mecánico y químico. Por tanto, se reduce el
yogur y la leche no pasteurizada). Por tanto, en aporte de fibra y se eliminan ácidos y estimu-
este tipo de dieta no se incluyen ni frutas ni verdu- lantes del peristaltismo. Se puede asociar a
ras crudas ni carnes, pescados o huevos poco co- varios tipos de dieta (por ejemplo: líquida gás-
cidos. El aporte calórico y la distribución de ma- trica, de 1500 calorías gástrica, etc.).
cronutrientes deben ser similares a la dieta basal. • Protección biliar: se disminuye el aporte total
La tendencia más actual, para minimizar el ries- de grasas utilizando lácteos desnatados y coc-
go de infección en este tipo de paciente, se diri- ciones sencillas. Además, se limitan alimentos
ge más a medidas generales de higiene en la flatulentos o de difícil digestión.
manipulación y preparación de alimentos (On- •  Anti-dumping: indicada para cirugías del tracto
cology Safe-Handling Diet). digestivo superior (esófago, estómago). Se dis-
tribuye la ingesta en 5-6 tomas, en pequeños
DIETA ESPECIAL/NO CODIFICADA/PERSONALI-
12.  volúmenes, separando los líquidos de los sóli-
ZADA: indicada para aquellos pacientes a los dos, eliminando azúcares refinados, para evitar

Tabla 17.  Modelo de dieta ovolactovegetariana.

DIETA Desayuno Comida Merienda Cena


· 200 cc leche entera, · Verdura con patata · 200 cc leche entera, · Ensalada variada
café y azúcar · Alubias blancas café y azúcar · Tortilla 2 huevos y
Ovo-lacto-
· Pan · Pan · Galletas patata
vegetariana
· Mermelada · Cuajada · Pan
· Fruta
114 BLOQUE: DIETOTERAPIA

el síndrome de dumping tardío, y de grasas. En esta dieta se limita el aporte de frutas, verduras y
función del tipo de cirugía se adaptará el plan legumbres utilizando métodos de cocción que re-
dietético al alta. Lo más habitual es que se ducen el contenido final de potasio.
aconseje dieta triturada o de fácil masticación al • Restricción de fósforo: puede estar indicada en la
menos el primer mes tras la intervención; se va- insuficiencia renal crónica. La limitación de fósfo-
lorará la suplementación nutricional en función ro en la dieta puede generar déficits nutricionales
de la ingesta y la evolución ponderal. por la restricción de alimentos clave.
• Alimentos extra: que se puedan suministrar en
Recomendaciones generales para pacientes con die- distintos tipos de dieta (pan integral, pan de mol-
ta esofagogástrica: de, aguas gelificadas, sobres monodosis de sal,
bebida de soja, leche sin lactosa).
– Evitar el estrés durante las comidas, comer despa- • Dietas exploratorias: para minimizar la posibilidad
cio y masticar bien los alimentos. Las comidas de falsos positivos en el cribado bioquímico de
principales (almuerzo y cena) deben durar entre ciertos tumores (feocromocitoma, carcinoides) se
hora y hora y media. debe restringir la ingesta de ciertos alimentos.
– Tomas frecuentes a lo largo del día (5-6 veces) y Este tipo de dietas puede estar codificado en fun-
de pequeño volumen, evitando alimentos muy ción de la demanda o se realizarán las modifica-
fríos o muy calientes. ciones precisas en la dieta basal.
– Mantener una ingesta adecuada de líquidos (1- • Dieta tras cirugía bariátrica: en función del tipo de
1,5 litros/día en tomas de 100 ml), procurando no cirugía que se realice en cada centro y la casuística
beber durante las comidas (hacerlo media hora puede ser o no una dieta codificada como tal o
antes o media hora después). emplearse las variantes antidumping. Sea cual sea
– Aporte adecuado de proteínas, tomando antes los la técnica empleada, el paciente sometido a ciru-
alimentos proteicos. gía de la obesidad deberá adoptar una nueva ac-
– Consumo reducido de grasas, incluyendo carnes no titud en su alimentación y en su estilo de vida. En
grasas y pescados blancos, evitando fritos y salsas. la mayoría de los casos la estancia hospitalaria es
– Evitar hidratos de carbono simples (sobre todo be- corta (< 7 días), por lo que es fundamental entre-
bidas azucaradas). gar por escrito al alta las recomendaciones dieté-
– Consumo abundante de fibra. ticas que debe seguir en el domicilio.
– Evitar cítricos durante las primeras semanas y el
alcohol. El control nutricional del paciente sometido a cirugía
– Si existe intolerancia a la lactosa, sustituir por yo- bariátrica tiene los siguientes fines:
gur o leche sin lactosa.
• Astringente: se disminuye el aporte de fibra inso- • Reincorporar una ingesta adecuada, limitando el
luble, se elimina la leche manteniendo el yogur riesgo de complicaciones (dumping, esteatorrea,
como fuente de lácteos. etc.).
• Restricción de sodio: todas las dietas se pueden • Detectar y tratar posibles déficits nutricionales.
pedir con o sin sal. La dieta basal con sal aporta • Conseguir que el paciente mantenga unos hábitos
aproximadamente 3300 mg de sodio al día. Si a la dietéticos y estilo de vida que le permitan conse-
dieta sin sal (1535 mg de sodio al día) le añadimos guir y mantener un peso adecuado, una buena
dos gramos de sal común el aporte total de sodio calidad de vida y un estado general satisfactorio.
estaría dentro de los límites marcados por distin-
tas sociedades para la dieta hiposódica (2400 mg La reintroducción de la dieta se hace de forma pro-
de sodio al día). Para mantener una dieta sin sal gresiva, iniciándose una dieta líquida en múltiples to-
estricta hay que valorar, además de los alimentos, mas y finalizando con una dieta sólida en 6-12 sema-
el contenido de sal de ciertos medicamentos (la- nas, dependiendo de la tolerancia del paciente. En las
xantes, antitusígenos, antiácidos, antibióticos, técnicas restrictivas la progresión de líquidos a sólidos
sueroterapia, salicilato sódico, polivitamínicos y precisa más tiempo que con otras técnicas.
minerales) y la administración de agua embotella- En las primeras 24 horas tras la intervención, y tras la
da con una cantidad de sodio inferior a 50 mg/dl. realización de un tránsito para descartar complicacio-
• Restricción de potasio: aquellas que contienen una nes, se inicia dieta con líquidos en múltiples tomas y
cantidad de potasio inferior a lo normal (aproxima- pequeños volúmenes, que se hará progresivo en con-
damente 2000-2500 mg/día) y cuya aplicación más sistencia y cantidad (líquidos espesos). Tras esa fase, se
frecuente es la insuficiencia renal crónica. Aquellas pasará a una semilíquida, añadiéndose posteriormente
dietas con un aporte de potasio menor de 1600 de forma progresiva triturados de hidratos de carbono
mg/día pueden ser deficientes en calcio, hierro, vi- (patatas, verduras, legumbres sin piel, etc.), carnes
tamina C, ácido fólico y vitaminas del grupo B. En blancas, pescados o huevos, Hasta que la ingesta pro-
Tema 6.  Planificación de la dieta hospitalaria 115

teica no sea suficiente será necesario la toma de suple- estado de salud. Durante la estancia hospitalaria
mentos nutricionales o módulos de proteínas cada paciente debe recibir, como parte fundamental
del tratamiento, una dieta adaptada a sus necesida-
Dietas pediátricas: la dieta basal pediátrica será muy
•  des y limitaciones alimenticias (bien por enfermeda-
similar a la del adulto. Debe aportar la energía y los des crónicas subyacentes o derivadas del motivo del
nutrientes necesarios y, al mismo tiempo, debe ser- ingreso).
vir para adquirir unos buenos hábitos alimentarios. Para ello, en el momento del ingreso, se debe reali-
Se deben supervisar con especial interés aquellos zar una entrevista en la que se le pregunte al paciente
niños ingresados para recibir tratamiento oncológi- por la dieta que lleva en su domicilio, y por las enfer-
co o con afecciones que puedan alterar la digestión/ medades que influyan en los alimentos que pueda o no
absorción de los alimentos. Asimismo, es funda- tomar. De esta forma, es necesario saber si el paciente
mental aprovechar la estancia hospitalaria de los padece de hipertensión arterial, diabetes, hipercoleste-
niños con debut diabético para enseñar y orientar a rolemia, problemas cardíacos, alergias, intolerancias,
los pacientes y a la familia sobre las recomendacio- disfagia, etc. Asimismo, tendremos que considerar, en
nes dietéticas más aconsejables. algunos casos, restricciones dietéticas que vendrán im-
Dietas para metabolopatías: patologías relativa-
•  puestas por el motivo de ingreso (cirugías, patologías
mente raras en la población pero que requieren gastrointestinales, etc.).
un control estricto en distintos nutrientes y que, En los hospitales se dispone de los denominados
de no seguirse, tienen graves consecuencias sobre «Códigos de Dietas» que son unos protocolos dieté-
la salud de los pacientes. ticos donde figuran todas y cada una de las dietas ora-
Dietas con modificaciones por causa religiosa: se
•  les disponibles en el centro. Estas dietas no son solo el
puede valorar introducir un código de dieta espe- soporte nutricional de las personas ingresadas, sino en
cial en función de la población de referencia del muchos casos son dietas terapéuticas que van a facili-
centro, ya que ciertas culturas (musulmana, shijs, tar la recuperación de pacientes afectados por distintas
cristiana ortodoxa) tienen prescripciones dieté- patologías. Este material debe ser actualizado periódi-
ticas especiales. camente, supervisado por la Unidad de Nutrición, y
Dieta de ingreso: para aquellos pacientes que ingre-
•  difundido entre los distintos profesionales del centro
san sin pauta dietética específica. Es una dieta mo- para una correcta prescripción. El conocimiento del
nótona, baja en grasa y en residuos, sin sal y sin mismo y la vigilancia de la ingesta y del estado nutricio-
lácteos. Constará por tanto de infusiones, sopa de nal de los pacientes debe ser responsabilidad de todos
sémola o puré de patata, pescado al horno o jamón los profesionales sanitarios.
cocido, batido de fruta y pan tostado. No debe man-
tenerse más de una o dos tomas, hasta que se paute 6. Bibliografía
la dieta más ajustada a la patología que presente.
Alergias alimentarias: deben quedar claramente
•  1. Ángel Manuel Caracuel García. Normalización en
reflejadas en la historia clínica del paciente y en las alimentación hospitalaria y otros establecimientos
anotaciones de la dieta para que se puedan super- de restauración social. Editorial: Campofrío Food
visar las bandejas cuidadosamente en el emplata- Group, SA; 2014.
do. En estos casos, dado que el paciente descono- 2. Bellido Guerrero D, De Luis Romás D.A..Manual de
ce el método de elaboración de los distintos platos Nutrición y Metabolismo. Madrid: Díaz de Santos;
de la dieta opcional, es preferible que se le asigne 2006.
al paciente un menú seleccionado por la Unidad 3. Salas-Salvadó J, Bonada i Sanjaume A, Trallero Ca-
de Nutrición para disminuir el riesgo de anafilaxia. sañas R, Saló i Solà ME, Burgos Peláez R. Nutrición
En los casos de intolerancias alimentarias o restric- y Dietética Clínica. 2º ed. Barcelona: Masson; 2008.
ciones por distintos motivos (gustos personales, 4. Olveira Fuster G. Manual de Nutrición Clínica y Die-
religiosos, culturales, etc.), se adaptará la dieta tética. 2º ed. Madrid: Díaz de Santos; 2007.
eliminando los alimentos citados. 5. Cuervo Zapatel M, De las Heras de la Hera A. Ali-
mentación Hospitalaria, 2. Dietas Hospitalarias. Ma-
drid: Díaz de Santos; 2003.
5. Resumen
6. Vázquez C, De Cos AI, López-Nomdedeu C. Alimen-
El seguimiento de una dieta variada y equilibrada tación y Nutrición. Manual teórico práctico. 2ª ed.
es fundamental para la consecución de un óptimo Madrid: Díaz de Santos; 2005.
BLOQUE:
ALTERACIONES DE LA ENERGÍA
(Dra. Irene Bretón y Dra. Pilar
García-Peris)
TEMA 7. Tratamiento dietético de la obesidad.
Dres. Alfonso Vidal Casariego, Alicia Calleja Fernández, Georgios Kyriakos
y Rocío Villar Taibo

TEMA 8. Tratamiento farmacológico de la obesidad.


Dres. Miguel A. Rubio Herrera y Carmen Moreno Lopera

TEMA 9. Obesidad: Tratamiento quirúrgico.


Dres. Irene Bretón, Cynthia González-Antigüedad, Marta Motilla, Ana Zugasti
y Pilar García-Peris

TEMA 10. Soporte nutricional en los trastornos de la conducta alimentaria.


Dres. M.ª Cristina Cuerda Compés, Marta Motilla de la Cámara, Loredana Arhip
y Pilar García-Peris

TEMA 11. Microbiota intestinal y obesidad.


Dres. Isabel M. Cornejo-Pareja, Araceli Muñoz-Garach y Francisco
J. Tinahones-Madueño
Tema 7. 
Tratamiento dietético de la obesidad
Alfonso Vidal Casariego
Alicia Calleja Fernández
Georgios Kyriakos
Rocío Villar Taibo
Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial Universitario de León

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 119-131.

1. Introducción
2.  Diagnóstico y valoración del paciente obeso
3.  Modificaciones en el contenido calórico de la dieta
4.  Modificaciones en los macronutrientes de la dieta
5.  Manejo dietético de la cirugía bariátrica
6.  Papel de nutrientes específicos en el control del peso
7.  Modificaciones en la estructura de la dieta
8. Conclusiones
9. Bibliografía

1. Introducción población ha disminuido drásticamente por la realiza-


ción de trabajo sedentario y la generalización de los
La obesidad es una enfermedad metabólica produci- medios de transporte. A todo esto hay que sumar la
da por un acúmulo excesivo o anómalo de grasa en el regulación neurohormonal del metabolismo energéti-
organismo que supone un riesgo para la salud. Dicho co, cada vez mejor conocida, que desempeña un papel
acúmulo de grasa corporal, especialmente en el espa- permisivo en el desarrollo de la obesidad, pero que no
cio perivisceral, se asocia al desarrollo de resistencia de resulta suficiente por sí misma para el desarrollo de la
la insulina, diabetes, hipertensión, dislipemia, enferme- obesidad sin la existencia de un ambiente favorable.
dad cardiovascular y de algunos tumores, lo que con- La dieta, entendida como las modificaciones que in-
diciona una reducción significativa de la calidad y de la troducimos en la alimentación habitual de una persona
esperanza de vida. El Estudio Nutricional de la Pobla- para mantener un óptimo nivel de salud, constituye la
ción Española, publicado recientemente, muestra en la piedra angular de dicho tratamiento, al permitir variar
población adulta una prevalencia de sobrepeso del el ingreso de energía en el organismo y modificar otras
39,3% y de obesidad del 21,6%. Se ha estimado que el enfermedades frecuentemente asociadas a la obesidad
número de muertes que se producen en el mundo (hipertensión arterial, diabetes, dislipemia). General-
anualmente como consecuencia del exceso de peso su- mente, las dietas proporcionan una cantidad determi-
pera los 4 millones. nada de energía con un reparto específico de macro-
La obesidad es consecuencia de un balance energéti- nutrientes, que se modifican con un fin terapéutico.
co positivo. Las causas subyacentes a este balance posi- Frente a esto, en los últimos años ha ganado peso el
tivo son habitualmente modificables: una ingesta caló- concepto de patrón alimentario, entendido como la
rica elevada, una reducción en el consumo energético cantidad, proporción, frecuencia y combinación de ali-
del organismo por disminución de la actividad física o, mentos que se consumen. El tratamiento dietético
como es más frecuente, una combinación de ambas si- debe prescribirse siempre dentro de un manejo inte-
tuaciones. Los cambios socioeconómicos de las últimas gral de la enfermedad que incluya un incremento de la
décadas han favorecido una amplia disponibilidad de actividad física y terapias psicológicas (cognitivas y
alimentos y la producción de alimentos elaborados ri- conductuales) que permitan incrementar la pérdida
cos en energía; paralelamente, la actividad física de la ponderal.

119
120 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

El consenso FESNAD-SEEDO contempla que el ma- • IMC 30-34,9 kg/m2: obesidad grado I.
nejo dietético de la obesidad debe1: • IMC 35-39,9 kg/m2: obesidad grado II.
• IMC 40-49,9 kg/m2: obesidad grado III o mórbida.
• Disminuir la grasa corporal preservando al máxi- • IMC > 50 kg/m2: obesidad grado IV extrema.
mo la masa magra.
• Ser realizable por un espacio de tiempo prolongado. La American Association of Clinical Endocrinologist
• Ser eficaz a largo plazo, esto es, manteniendo el propone una clasificación alternativa, basada en el IMC
peso perdido. y en la presencia de comorbilidades (tabla 1)3.
• Prevenir futuras ganancias de peso. La obesidad puede diagnosticarse también mediante
• Conllevar una función de educación alimentaria técnicas de composición corporal (por ejemplo, bioim-
que destierre errores y hábitos de alimentación in- pedancia, DEXA) que permitan estimar el porcentaje
adecuados. de masa grasa. En varones se considera sobrepeso una
• Disminuir los factores de riesgo cardiovasculares masa grasa 20-29,9% y obesidad superior al 30%; en
asociados a la obesidad (hipertensión arterial, dis- mujeres el sobrepeso se considera con masa grasa 30-
lipemia, prediabetes o diabetes mellitus). 39,9% y obesidad > 40%.
• Mejorar otras comorbilidades vinculadas al exceso En ausencia de técnicas de composición corporal,
de peso (apnea del sueño, artrosis, riesgo neoplá- la valoración antropométrica debe completarse con la
sico, etc.). medición de la circunferencia de cintura. Se consideran
• Inducir una mejoría psicosomática con recupera- valores de riesgo más de 102 cm en varones, y más de
ción de la autoestima. 88 cm en mujeres.
• Aumentar la capacidad funcional y la calidad de vida.
2.2. Aspectos a valorar en el paciente obeso
2. Diagnóstico y valoración del Antes de iniciar el tratamiento dietético se deberá
paciente obeso proceder al estudio detallado del paciente. Se debe
descartar la existencia de otras enfermedades meta-
2.1. Formas de diagnóstico de la obesidad
bólicas (hipertensión, dislipemia, diabetes, hiperuri-
El diagnóstico de la obesidad es básicamente antro- cemia), la existencia de enfermedad cardiovascular,
pométrico, basado en el cálculo del índice de masa de patologías asociadas a la obesidad (apnea del
corporal [IMC = peso (kg)/talla (m)2]. El IMC se relacio- sueño, litiasis biliar) y otras circunstancias que pue-
na con la adiposidad corporal y permite clasificar el den tener relevancia de cara al manejo nutricional
peso de un individuo de la siguiente manera, según la del paciente (insuficiencia renal, enfermedades con-
Sociedad Española para el estudio de la Obesidad2: suntivas). Debemos recoger la evolución del peso,
así como intentos previos de adelgazamiento, con
• IMC 18,5-24,9 kg/m2: peso normal. los resultados obtenidos y las causas de fracaso; la
• IMC 25-26,9 kg/m2: sobrepeso grado I. actividad física diaria y las limitaciones y preferencias
• IMC 27-29,9 kg/m2: sobrepeso grado II o preobe- a este respecto; las circunstancias sociales y familia-
sidad. res y factores psicológicos (motivación, trastornos

Tabla 1.  Clasificación y tratamiento de la obesidad según la American Association of Clinical Endocrinologist y
el American College of Endocrinology.

Presencia de
Diagnóstico IMC (kg/m2) Dieta Ejercicio Fármacos Cirugía bariátrica
comorbilidades*
Normopeso < 25 No No No No No
Sobrepeso estadio 0 25-29,9 No Sí Sí No No
Obesidad estadio 0 ≥ 30 No Sí Sí Sí No
Obesidad estadio 1 ≥ 25 Leves-moderadas Sí Sí Sí No
Obesidad estadio 2 > 40 Graves Sí Sí Sí Sí

IMC: índice de masa corporal.


* Comorbilidades: Síndrome metabólico, prediabetes, diabetes tipo 2, dislipemia, hipertensión, enfermedad cardiovascular, esteatosis
hepática no alcohólica, síndrome de ovarios poliquísticos, infertilidad femenina, hipogonadismo masculino, apnea obstructiva del
sueño, asma, osteoartritis, incontinencia urinaria, depresión, reflujo gastroesofágico.
Tema 7.  Tratamiento dietético de la obesidad 121

de la conducta alimentaria, ingesta por ansiedad o • Ancianos con enfermedades crónicas, pero sin
aburrimiento) que pueden condicionar el desarrollo problemas psicológicos.
del tratamiento. Respecto a este último punto, se • Pacientes con peor salud4.
han establecido hasta seis grupos diferentes de obe-
sos, cuya identificación puede ayudar a optimizar el Los objetivos de pérdida ponderal serán individuali-
tratamiento: zados (tabla 2). En cada paciente debemos realizar un
balance energético individualizado, cuantificando tan-
• Mujeres jóvenes sanas. to la ingesta calórica como el gasto energético total.
• Varones bebedores severos de alcohol. Para lo primero podemos usar recordatorio de 24 ho-
• Personas de mediana edad con ansiedad. ras o registros dietéticos, o cuestionarios predefinidos
• Ancianos saludables con recursos. (por ejemplo, REAP, WAVE). Es importante reflejar el

Tabla 2.  Objetivos de pérdida de peso según las comorbilidades asociadas al exceso de peso.

DIAGNÓSTICO OBJETIVOS DE TRATAMIENTO


IMC Comorbilidades Pérdida de peso Clínicos
Síndrome metabólico 10% Prevención de DM2
Prediabetes 10% Prevención de DM2
Disminución de la HbA1c
Diabetes mellitus tipo 2 ≥ 5-15% Reducción del número y/o dosis de
tratamientos hipoglucemiantes
Disminución de triglicéridos
Dislipemia ≥ 5-15% Aumento de HDL
Disminución del colesterol no-HDL
Disminución de la tensión sistólica y
diastólica.
Hipertensión ≥ 5-15%
Reducción del número y/o dosis de
tratamientos antihipertensivos
Hígado Esteatosis ≥ 5% Reducción de los lípidos intrahepatocelulares
graso no
alcohólico Esteatohepatitis 10-40% Reducción de inflamación y fibrosis

Ovulación
> 25 kg/m 2 Regularización de menstruaciones
Síndrome de ovario poliquístico ≥ 5-15% Disminución de hirsutismo
Reducción de niveles de andrógenos
Mejoría de la sensibilidad insulínica
Infertilidad femenina ≥ 10% Ovulación y embarazo
Hipogonadismo masculino ≥ 5-10% Aumento de la testosterona
Mejoría de la sintomatología
Apnea obstructiva del sueño ≥ 7-11%
Disminución del índice apnea-hipopnea
Asma ≥ 7-8% Mejoría de la sintomatología
Mejoría de la sintomatología y aumento de
Osteoartritis ≥ 10%
la funcionalidad
Reducción de la frecuencia de los episodios
Incontinencia urinaria ≥ 5-10%
de incontinencia
Reducción de la frecuencia y severidad de
Reflujo gastroesofágico ≥ 10%
los síntomas
Mejoría de la sintomatología y de los scores
Depresión No claro
de depresión
DM2: diabetes mellitus tipo 2; HDL: lipoproteínas de alta densidad; IMC: índice de masa corporal.
122 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

patrón de ingesta: horarios, preferencias alimentarias, crecimiento paralelo en el número de casos de obesi-
picoteo y atracones. El cálculo del gasto energético en dad. Diferentes estudios observacionales y experimen-
el obeso es especialmente dificultoso, siendo la calori- tales muestran un mayor consumo de energía cuanto
metría indirecta el método más exacto; en aquellos ca- mayor es la ración de alimento ofrecida. Los consejos
sos en que no dispongamos de la tecnología necesaria para reducir el tamaño de las raciones pueden favore-
podemos recurrir a fórmulas matemáticas (Harris-Be- cer la pérdida de peso respecto al consejo dietético ha-
nedict, Ireton-Jones) modificándolas según la actividad bitual, aunque la recomendación tan habitual de co-
física del paciente. mer en plato pequeño o en plato de postre no tiene
eficacia sobre la reducción ponderal.
3. Modificaciones en el contenido calórico
de la dieta 3.2.  Dietas de muy bajo contenido calórico
Las dietas de muy bajo contenido calórico (very low
3.1.  Dietas moderadamente hipocalóricas calorie diet, VLCD) aportan menos de 12 kcal/kg de
Las dietas empleadas con más frecuencia en el trata- peso ideal/día (800-1200 kcal/día). Se realizan median-
miento de la obesidad producen un déficit calórico te el consumo de productos comerciales y pueden te-
moderado (500-1000 kcal). Su aporte energético varía ner varios formatos: polvo para reconstituir con agua
de un individuo a otro (12-20 kcal/kg de peso ideal/ hasta adquirir diferentes texturas, o bien en forma de
día). Si se calibran de forma correcta son dietas com- barritas, galletas o snacks. Las fórmulas comerciales, al
pletas (aportan todos los nutrientes en cantidad sufi- contrario de las dietas elaboradas a partir de alimentos
ciente) y equilibradas (aportan una proporción adecua- naturales, permiten administrar una cantidad suficien-
da de alimentos y nutrientes). Si el aporte se reduce a te de proteínas de alto valor biológico y cubrir las nece-
menos de 1200 kcal/día debe asociarse un complejo sidades diarias de micronutrientes. Suelen proporcio-
polivitamínico por no cubrir los requerimientos diarios nar un contenido proteico relativamente elevado para
de micronutrientes. Su eficacia ha sido demostrada en su aporte calórico, de entre 70 y 100 g/día (0,8-1,5 g/
numerosos estudios, logrando una pérdida del 8% del kg), con el fin de prevenir la pérdida de masa magra, y
peso en 3-12 meses, a un ritmo de 0,5-1 kg semanal, cierta cantidad de fibra para inducir saciedad y evitar el
que se asocia además a una reducción significativa del estreñimiento. Estos productos se encuentran regula-
perímetro abdominal. dos por la Directiva 98/6/CE, de 26 de febrero, de la
La reducción del consumo de energía puede realizar- Comisión Europea, que se incorporó al ordenamiento
se limitando el tamaño de las raciones y/o reduciendo jurídico español en el Real Decreto 1430/1997, de
la densidad energética de los alimentos. La densidad 15 de septiembre, y hace referencia a aspectos relati-
energética (DE) de los alimentos se define como la can- vos a su composición, etiquetado y duración de uso.
tidad de energía contenida en un alimento por unidad Las VLCD están indicadas en pacientes adultos obe-
de peso del alimento (kcal/g). Está condicionada fun- sos que hayan fracasado en intentos previos de pérdi-
damentalmente por el contenido en agua y grasa de da de peso con dietas moderadamente hipocalóricas
los alimentos por aportar estos el mínimo (0 kcal/g) y el (tabla 3). También podrían prescribirse cuando sea
máximo (9 kcal/g) contenido calórico, respectivamen- necesaria una pérdida de peso rápida por motivos de
te. La mayoría de los estudios han encontrado una re- salud, o en pacientes con sobrepeso grado II (IMC >
lación directa entre la densidad energética de la dieta y 27 kg/m2) u obesidad moderada que presenten comor-
el consumo de calorías y ganancia de peso. bilidades asociadas (apnea del sueño, diabetes tipo 2,
La relación entre DE y peso corporal es compleja. Por dislipemia, artrosis). Su empleo no se recomienda du-
un lado, tendemos a consumir un volumen constante rante períodos superiores a 16 semanas. Entre sus con-
de comida que genera saciedad por mecanismos me- traindicaciones se encuentran:
cánicos de distensión gástrica; la ingesta de un volu-
men similar de alimentos con mayor DE producirá un • Embarazo y lactancia.
aumento en la ingesta calórica. Por otro lado, los ali- • Enfermedades con compromiso del estado nutri-
mentos con elevada DE se relacionan con una mayor cional.
palatabilidad (por mayor contenido de grasa) y esta a • Enfermedades cardíacas como angina inestable,
más ingesta de comida. Además, con frecuencia los infarto de miocardio reciente, arritmias malignas,
alimentos energéticamente más densos son más bara- QT prolongado o antecedentes de síncope cardio-
tos. Los estudios de intervención en los que a los pa- génico.
cientes se les instruye para disminuir la DE muestran • Enfermedad cerebrovascular reciente o recurrente.
una reducción de peso significativa, mayor cuanto más • Insuficiencia renal.
se reduce la DE de la dieta. • Cirrosis hepática o hepatopatías graves.
Distintos estudios han resaltado el aumento del ta- • Enfermedades psiquiátricas como los trastornos de
maño de las raciones en los últimos años, resaltando el la conducta alimentaria, la dependencia de alcohol
Tema 7.  Tratamiento dietético de la obesidad 123

Tabla 3.  Indicaciones y contraindicaciones de las dietas de muy bajo contenido calórico.

Indicaciones Contraindicaciones
· Pacientes entre 18 y 65 años · Infarto de miocardio reciente
· Obesidad: Índice de masa corporal (IMC) superior a · Trastorno de conducción cardiaca
30 kg/m2 · Antecedentes de enfermedad cerebrovascular, renal, o
– Fracaso en intentos previos de pérdida de peso hepática
con dietas moderadamente hipocalóricas y alta · Diabetes mellitus tipo 1
motivación · Trastornos psiquiátricos mayores
– Riesgos para la salud derivados de la obesidad que · Colelitiasis
hacen imperativa la pérdida de peso · Alcoholismo
– Pacientes en que se precise una pérdida de peso · Cáncer
rápida por cirugía · Infección
· Sobrepeso grado II (IMC > 27) con comorbilidades · Abuso de sustancias
mayores (apnea del sueño, diabetes mellitus tipo 2, · Anorexia/Bulimia
dislipemia, artrosis)

o drogas, trastornos depresivos mayores o intentos La mayoría de los efectos adversos observados con el
de suicidio. uso de VLCD son de carácter leve y transitorio. Estos
comprenden molestias gastrointestinales (náuseas o
Deben emplearse con especial precaución en adoles- estreñimiento), o síntomas generales como astenia,
centes por el riesgo de comprometer su crecimiento; frío, sensación de mareo, hambre o aliento cetósico). El
en ancianos, dada la falta de información sobre sus uso en el pasado de dietas de ayuno modificado con
efectos en este grupo de edad y por ser más sensibles proteínas de bajo valor biológico provenientes de hi-
al desarrollo de malnutrición; en diabéticos tipo 1 por drolizados de colágeno se asoció a un aumento de la
riesgo de desarrollar cetosis e hipoglucemia, y en pa- mortalidad de origen cardiaco, probablemente por pa-
cientes con antecedentes de colelitiasis. tologías asociadas al alargamiento del intervalo QT6.
El modo más común de utilización de los productos
VLCD es la sustitución de una o más de las comidas
principales del día por este tipo de fórmulas, que apor-
4. Modificaciones en los macronutrientes
tan en torno a 200 kcal por toma. Empleadas de esta de la dieta
forma son más eficaces que las dietas moderadamente
4.1.  Dietas bajas en grasa (DBG)
calóricas a corto plazo (con una diferencia de peso de
2,5-3 kg), aunque no a largo plazo (con una diferencia La grasa es el nutriente que más energía aporta
de 2,4 kg)5. Usadas como dieta única se puede hablar (9 kcal/g) y el que más contribuye a la densidad ener-
propiamente de VLCD, ya que el aporte total calórico gética de los alimentos. Destaca además por su palata-
no suele superar las 800 kcal/día. Esta modalidad se bilidad, lo que hace a los alimentos ricos en grasa más
puede prolongar durante 8-16 semanas (un uso más aceptables; tiene el menor poder saciante y el menor
prolongado podría desembocar en el desarrollo de efecto térmico cuando se compara con los otros ma-
desnutrición), o se puede administrar de forma inter- cronutrientes. Todos estos datos han hecho que la res-
mitente alternando con dietas moderadamente hipo- tricción grasa sea la principal modificación en la dieta
calóricas. La mayoría de los estudios realizados con del paciente obeso. Los hidratos de carbono son, junto
VLCD muestran que en torno al 90% de los pacientes a los lípidos, los principales componentes energéticos
pierden al menos 10 kg de peso, mientras que con de la dieta, aportando en conjunto hasta el 80-85% de
dietas moderadamente hipocalóricas este porcentaje las calorías totales que ingerimos. Se considera una
apenas alcanza el 60%. El ritmo de pérdida de peso es DBG aquella que contiene menos de un 20% de grasa,
mayor que con dietas moderadamente hipocalóricas y serían muy bajas en grasa las que contienen menos
(1,5-2,5 kg/semana). La restricción energética por de- del 10%. Evidentemente, se acompañan de un incre-
bajo de las 800 kcal no parece añadir ninguna ventaja mento proporcional en hidratos de carbono que las
sobre la pérdida de peso, probablemente por la reduc- convierten en dietas muy ricas en este principio inme-
ción en el gasto energético corporal y en la dificultad diato, por lo que a menudo se denominan tanto DBG
para lograr una buena adherencia. Por otro lado, el como ricas en carbohidratos (HC). Este aumento de HC
porcentaje de abandonos suele ser mayor con las VLCD las hace también muy ricas en fibra. Ejemplos de este
que con dietas moderadamente restrictivas, pudiendo tipo dieta son la dieta de Ornish o la de Pritikin, que
alcanzar el 50%. inicialmente surgieron como un programa de modifi-
124 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

cación de estilos de vida para la prevención de la enfer- tipo de dieta no es muy diferente al que aporta una
medad cardiovascular. dieta hipocalórica convencional7. Además, al utilizar
La mayoría de los estudios epidemiológicos indican los depósitos grasos como fuente energética, se origi-
una relación directa entre el consumo de grasas y la ga- nan cuerpos cetónicos que disminuyen la sensación de
nancia de peso, y una relación inversa respecto al con- hambre8.
sumo de hidratos de carbono. Sin embargo, estudios Aunque no todos los estudios son concordantes res-
recientes han demostrado que en países que han reduci­ pecto a los efectos metabólicos, sí que en algunos de
do la ingesta de grasas el número de obesos ha aumen- ellos se ha descrito un mejoría del perfil lipídico (au-
tado significativamente, probablemente por el consu- mento de HDL y reducción de triglicéridos) con la
mo de alimentos con una densidad energética elevada DBHC, pero con un aumento de los niveles de LDL
debido a un alto contenido en azúcares (por ejemplo, (tabla 4)9. En pacientes con diabetes tipo 2 el empleo
refrescos). Los resultados de una revisión sistemática no de DBHC se asocia a una disminución más marcada de
encontraron diferencias en cuanto a pérdida de peso glucemia y HbA1c que la restricción grasa, aunque ac-
entre este tipo de dietas y la dieta hipocalórica conven- tualmente no está indicado su uso. Este efecto benefi-
cional a corto o medio plazo. La disminución de peso cioso parece estar relacionado no solo con la cantidad
que se observa con este tipo de dietas, aunque no se de hidratos de carbono, sino también con el tipo. Una
restrinja la cantidad calórica global, se ha relacionado dieta baja en carbohidratos puede implementarse de
con el efecto saciante que posee la gran cantidad de HC dos maneras, ya sea mediante la reducción de la canti-
que se tienen que ingerir, muchos de ellos acompaña- dad total de hidratos de carbono o por el consumo de
dos de fibra, junto con la menor palatabilidad que pre- alimentos con un índice glucémico o carga glucémica
sentan los alimentos pobres en grasa. No se han descri- baja (se comentan a continuación).
to efectos importantes con este tipo de dieta, Sus efectos secundarios más frecuentes son estreñi-
únicamente flatulencia, que puede ir disminuyendo. miento y cefalea, además de halitosis, calambres muscu­
lares, diarrea y debilidad. Se trata además de dietas
deficitarias en fibra, tiamina, folato, vitaminas A, E, B6,
4.2.  Dietas bajas en hidratos de carbono (DBHC)
calcio, magnesio, hierro y potasio, cuya seguridad y efi-
No existe uniformidad absoluta en la literatura sobre cacia a largo plazo está todavía por determinar. Un
lo que se entiende por una dieta baja en HC (DBHC), si aspecto a considerar en la seguridad a largo plazo de
bien el criterio más extendido es el de la American Aca- estas dietas es el tipo de grasa que se aporta. Se ha
demy of Family Physicians que define la DBHC como observado que la mortalidad total y por cáncer de los
aquella que disminuye el aporte de hidratos de carbo- que seguían una DBHC era mayor cuando el consumo
no a menos de 20 a 60 g/día (menos del 20% del apor- de grasas era de origen animal, mientras que el consu-
te calórico total) y con un incremento proporcional en mo de grasas de origen vegetal se asociaba a menor
el aporte de grasas o proteínas para compensar la dis- mortalidad, fundamentalmente cardiovascular.
minución de HC. La restricción de hidratos de carbono
a 20 g se considera propia de las dietas muy bajas en
4.3.  Dietas con bajo índice glucémico (DBIG)
hidratos de carbono o cetogénicas puras. Han alcanza-
do una gran popularidad, especialmente en los países El índice glucémico (IG) clasifica los hidratos de car-
anglosajones (por ejemplo, dieta Atkins, South Beach), bono según la relación entre el área bajo la curva de la
a pesar de las dudas sobre su eficacia y seguridad. glucemia producida por una comida estándar (50 gr
En las dietas DBHC el déficit de glucosa en el organis- de hidratos de carbono) respecto al área bajo la curva
mo es suplido mediante lipólisis, la formación de cuer- producida por una comida control (50 gr de pan blan-
pos cetónicos y gluconeogénesis (que emplea el glice- co o glucosa). La carga glucémica (CG) resulta de mul-
rol de los ácidos grasos y aminoácidos como sustratos). tiplicar el promedio de los IG de las comidas individua-
La necesidad de recurrir a los ácidos grasos como sus- les ingeridas por el porcentaje de hidratos de carbono
trato para formar glucosa puede explicar que la lipólisis de la dieta. Si el primero refleja el tipo de hidratos con-
se produzca incluso cuando la ingesta calórica es supe- sumidos, el segundo nos informa de su cantidad. Son
rior al gasto. Es necesario además un consumo elevado determinantes del IG de un alimento el tipo de carbo-
de proteínas para evitar un balance nitrogenado nega- hidrato que contiene, la cantidad de fibra, proteínas y
tivo y preservar la masa muscular. grasa, además de su forma física y modo de prepara-
La elevada pérdida de peso inicial con una dieta en la ción (tabla 4).
que, en teoría, se puede consumir libremente todo tipo Según la teoría glucostática de regulación del apeti-
de caloría grasa o proteica se podría justificar por el to, concentraciones bajas de glucosa o simplemente su
hecho de que la oferta culinaria cuando se limita el declinar tras un pico previo estimulan el apetito, mien-
aporte de HC es muy limitada y monótona, con lo que tras que concentraciones elevadas lo suprimen. Tras la
el paciente disminuye su ingesta, de manera que el ingesta de un alimento con un alto IG la glucemia se
contenido calórico real que el paciente ingiere con este eleva de forma rápida hasta concentraciones superio-
Tema 7.  Tratamiento dietético de la obesidad 125

Tabla 4.  Índice glucémico de diferentes alimentos.

Índice glucémico
Alimento
(respecto a pan blanco)
Bebidas:
· Coca-Cola© 90
· Zumo de manzana natural (sin azúcar) 55
· Chocolate soluble en leche 59
Pan:
· Baguette 136
· Pan de trigo 74
Cereales de desayuno:
· All-Bran© 43
· Chocapic© 120
· Crispix© 124
Lácteos:
· Helado italiano 114
· Leche entera 15
· Yogur 51
Fruta:
· Manzana 40
· Plátano 83
Pasta italiana:
· Espaguetis cocidos 5 minutos 54
· Espaguetis cocidos 10 minutos 83
Vegetales:
· Zanahoria cruda 23
· Zanahoria cocida 70
· Patata cocida 121
· Patata asada 144
· Puré de patatas 122

res a las obtenidas con alimentos de bajo IG; esto se al. encontró una mejoría de los niveles de triglicéridos
traduce en una potente estimulación de la liberación y la sensibilidad a la insulina asociados a las DBIG. Un
de insulina y en inhibición del glucagón. Entre 2-4 ho- reciente metanálisis demostró que las dietas con bajo
ras tras la ingesta, la absorción intestinal de nutrientes IG producen una mayor pérdida de peso con disminu-
disminuye, lo que sumado a los cambios hormonales ciones significativas del colesterol total y LDL11. Estos
descritos produce una rápida disminución de la gluce- resultados pueden estar en relación con una mayor
mia y de los ácidos grasos circulantes. La baja concen- adherencia a la dieta y con una menor sensación de
tración plasmática de sustratos energéticos induce una apetito.
respuesta hormonal contrarreguladora y estimulación La secreción basal de insulina puede predecir la pér-
del apetito. Por el contrario, el consumo de alimentos dida de peso con las DBIG, siendo mayor en individuos
con bajo IG no produce picos tan marcados de gluce- con concentraciones más altas de insulina basal. No se
mia y permite una absorción más sostenida de nutrien- han descrito datos de los efectos adversos, la mortali-
tes, evitando los ciclos de hipoglucemia-hiperfagia10. dad o la calidad de vida en ninguno de los ensayos.
Este es el fundamento que originó el desarrollo de las
DBIG, con importantes exponentes a nivel popular
4.4.  Dietas hiperproteicas (DHP)
como las dietas de Montignac o Sugar Busters.
Las recientes revisiones y consensos coinciden en la Dentro de las modificaciones en la proporción de
conclusión de que, a igualdad de contenido calórico macronutrientes de la dieta, ha tenido gran populari-
total, la modificación del IG o de la CG de una dieta dad la opción de cambiar los hidratos de carbono de la
no favorece la pérdida de peso a largo plazo. Los da- dieta por proteínas buscando un mayor efecto sobre
tos de los distintos trabajos sobre parámetros lipídi- la pérdida de peso. Esta propuesta se basa en una serie
cos o de riesgo cardiovascular arrojan resultados dis- de características atribuidas a las proteínas con poten-
cordantes en este aspecto. El metanálisis de Livesey et ciales efectos beneficiosos en el tratamiento de la obe-
126 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

sidad. Entre estas propiedades tradicionalmente se ha animal y bajas en HC pueden alterar la microbiota in-
invocado un posible efecto saciante, superior al de los testinal y reducir la producción de antioxidantes fenóli-
hidratos de carbono o al de las grasas, que favorecería cos derivados del consumo de fibra y aumentar, en
la limitación del consumo energético incluso en una consecuencia, el balance de componentes N-nitrosos
dieta sin restricción calórica, si bien esta característica que son potenciales agentes carcinogénicos del tubo
actualmente está en cuestión12. Pese a que se ha suge- digestivo.
rido que el mayor consumo de proteínas podría incre-
mentar la saciedad a corto plazo y, por lo tanto, dismi-
4.5.  Dieta mediterránea
nuir la ingesta energética, existen estudios que no
sustentan esta asociación. La dieta mediterránea se caracteriza por una alta in-
Teniendo en cuenta que las proporciones habitual- gesta de cereales integrales, frutas, verduras y legum-
mente recomendadas de ingesta proteica se sitúan en bres, un uso preferente de pescado y carne blanca en
torno al 15% del aporte calórico total, las DHP se en- detrimento de la carne roja y procesados cárnicos, la
cuadrarían en aquellas que suponen un aporte protei- utilización de aceite de oliva virgen tanto para cocinar
co de al menos el 20 o el 30% del contenido calórico como para aliñar, un consumo de vino de bajo a mo-
total de la dieta, habitualmente superiores al 25%. En- derado y un bajo consumo de leche, cremas, mante-
tre las dietas populares, la dieta Atkins, típicamente quilla y bebidas azucaradas. Esto comporta una baja
una dieta baja en hidratos de carbono, es proporcio- ingesta de ácidos grasos saturados, trans y azúcares
nalmente una dieta hiperproteica rica en grasa. Tam- añadidos y un alto consumo de fibra vegetal y ácidos
bién podemos considerar en este grupo la dieta de la grasos monoinsaturados. Los efectos de la dieta medi-
Zona, que propugna un proporción de nutrientes 40- terránea sobre la salud han sido estudiados extensa-
30-30 entre hidratos de carbono, proteínas y grasas, mente. Diversos estudios han puesto de manifiesto que
respectivamente. Hay que tener en cuenta, no obstan- esta pauta de alimentación confiere protección para el
te, que si bien la definición de DHP se basa en el por- desarrollo de enfermedad cardiovascular15. Las revisio-
centaje de las proteínas de la dieta en función del apor- nes sistemáticas y metanálisis han demostrado que la
te calórico total, la cantidad absoluta de proteínas adherencia a este patrón dietético se asocia con reduc-
(g/día o g/kg peso) puede ser muy variable. Este matiz ciones en la mortalidad total, mortalidad cardiovascu-
es especialmente importante cuando se trata de dietas lar, la incidencia de cáncer y la mortalidad y la inciden-
hipocalóricas, en las cuales la reducción del aporte cia de las enfermedades de Parkinson y Alzheimer. Los
energético a expensas de grasas e HC puede producir estudios también han encontrado que la dieta medite-
un aumento porcentual proporcional del aporte de rránea se asocia con menor riesgo de cáncer colorrec-
proteínas, si bien la cantidad total de las mismas no tal, de próstata, digestivo, orofaríngeo y cáncer de
difiere de la contenida en una dieta normocalórica mama. Los resultados del estudio PREDIMED, realizado
equilibrada. Si tenemos en cuenta que el aporte diario en nuestro país, aportan un mayor número de datos y
recomendado de proteínas para los adultos a partir de corroboran lo ya apuntado en estudios previos16. Este
los 19 años es de 0,83 g proteínas/kg peso corporal y estudio demostró una reducción de mortalidad total y
que dicho aporte habitualmente se excede en la ali- cardiovascular, posiblemente a través de su efecto, re-
mentación de los países occidentales, habría que con- duciendo la tensión arterial, el colesterol y los niveles
siderar un aporte mínimo global de 90 g/día de proteí- de glucosa. En este ensayo aleatorizado que incluyó
nas para realmente considerar una dieta hiperproteica más de 7000 adultos con alto riesgo de enfermedad
como tal. Este aspecto no siempre es suficientemente cardiovascular, los dos grupos asignados a la dieta me-
considerado en muchos trabajos que estudian los efec- diterránea suplementada con aceite extra virgen de
tos de las DHP. oliva o frutos secos tenían una menor tasa de eventos
La dieta hiperproteica puede inducir a corto plazo totales cardiovasculares (ictus, infarto de miocardio,
(menos de 6 meses) mayor pérdida de peso que una muerte cardiovascular) en comparación con el grupo
dieta convencional rica en hidratos de carbono, pero control (consejos sobre una dieta baja en grasas), des-
no a largo plazo (más de 12 meses). Sin embargo, no pués de cerca de 5 años de tratamiento. La reducción
hay suficientes datos en el momento actual que nos absoluta del riesgo fue de aproximadamente tres even-
permitan establecer la eficacia de las dietas hiperpro- tos cardiovasculares por 1000 personas-año. También
teicas en el manteamiento del peso perdido tras esa se ha demostrado un efecto como prevención del de-
fase inicial de pérdida de peso con otro tipo de die- sarrollo de la diabetes mellitus tipo 2.
ta13, 14. Aunque la dieta hiperproteica favorece la pre- Cuando se compara la eficacia de diferentes dietas
servación de la masa magra mejor que una dieta rica (mediterránea, baja en grasa y baja en hidratos de car-
en hidratos de carbono, podría incrementar a muy lar- bono), la pérdida de peso es mayor con la dieta medi-
go plazo el riesgo de mortalidad total y cardiovascular, terránea y la DBHC, pero solo la primera se asocia a
fundamentalmente cuando la proteína es de origen una disminución en la concentración de proteína C re-
animal. Además, las dietas ricas en proteínas de origen activa y en la insulín-resistencia y glucemia (tabla 5).
Tema 7.  Tratamiento dietético de la obesidad 127

Tabla 5.  Efectos metabólicos de las diferentes dietas.

Patrón dietético Efecto


· Mejoría de la composición corporal, del perfil lipídico y de la respuesta insulínica
Dietas hipocalóricas
postprandial
equilibradas
· No efecto incremental en la pérdida de peso
· Mejoría del perfil glucémico y lipídico
· Mejoría de otros factores de riesgo cardiometabólicos
Dietas bajas en hidratos
· Mejoría de la función renal
de carbono
· No efecto incremental en la pérdida de peso, aunque los estudios demuestran
resultados a corto plazo (menos de 1 año)
· Aumento de la función endotelial
· Disminución de la variabilidad glucémica
Dietas de bajo índice
· Presenta efectos en el gasto energético
glucemico
· Disminuye del diámetro de los adipocitos
· Sin efecto incremental en la pérdida de peso
· Efectos beneficiosos en el perfil lipídico
Dietas bajas en grasa · Mejora la función renal
· Sin efecto incremental en la pérdida de peso
· Beneficios más prolongados en la circunferencia de cintura y porcentaje de
pérdida de grasa
· Mejora los factores de riesgo cardiovascular
· Disminuye el diámetro de los adipocitos
Dietas hiperproteicas
· Las proteínas animales (pero no las vegetales) se asocian con aumento de
marcadores de inflamación
· Menor pérdida de masa magra
· Sin efecto incremental en la pérdida de peso
· Disminuye el riesgo de algunos tipos de cáncer
· La suplementación con aceite de oliva virgen extra no presenta efectos en la
pérdida de peso
· Disminuye los factores de riesgo cardiometabólico
Dieta mediterránea
· Disminuye los marcadores de inflamación
· Mejora la esteatosis hepática y la sensibilidad a la insulina
· Mejora la función renal
· Sin efecto incremental en la pérdida de peso

4.6.  Dietas milagro • Dietas excluyentes: dieta Dr. Prittikin, dieta del Dr.
Haas, dieta de Scardale, dieta de los astronautas,
Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria dieta de Hollywood, dieta de la proteína líquida,
y Nutrición (AESAN), las dietas milagro son aquellas dieta de Atkins, dieta Dukan, etc.
que cumplen la condición de prometer estas tres cosas:

• Pérdida de peso rápida: más de 5 kg por mes. La mayoría se basan en conceptos y teorías nutri-
• Se puede llevar a cabo sin esfuerzo. cionales sin evidencia científica. Suelen producir pér-
• Ser completamente seguras, sin riesgos para la salud. didas de peso muy llamativas en las primeras sema-
nas pero a largo plazo podemos decir que, en el
Estas dietas se suelen clasificar en tres grandes grupos: mejor de los casos, tienen una utilidad comparable a
una dieta hipocalórica convencional. No obstante,
• Dietas hipocalóricas desequilibradas: Clínica Mayo, hay que advertir que muchas de ellas pueden gene-
Dieta «toma la mitad», Dieta Gourmet, Dieta Cero, rar graves déficits nutricionales y desequilibrios
etc. alimentarios, además de favorecer el desarrollo de
• Dietas disociativas: dieta de Hay, régimen de Shel- conductas de trastorno del comportamiento alimen-
ton, dieta Hollywood, dieta de Montignac, anti- tario. Deben ser enérgicamente desaconsejadas
dieta, etc. (tabla 6)17.
128 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

5.  Manejo dietético de la cirugía bariátrica vesícula biliar, recomendándose un aporte del 25-30 %
de la energía total. El aporte de vitaminas liposolubles
Las guías de la American Association of Clinical En- se verá enormemente reducido por la reducción total
docrinologists sobre cirugía bariátrica recomiendan de la ingesta de grasa, lo que requerirá en algunos ca-
que se produzca pérdida de peso antes de la interven- sos de su suplementación, especialmente de vitamina
ción quirúrgica con el fin de reducir el tamaño del hí- D, junto con vitaminas hidrosolubles y minerales. Se
gado, y mejorar tanto la esteatosis hepática como recomienda la restricción en el consumo de alcohol en
otras comorbilidades asociadas a la obesidad. Una op- pacientes intervenidos de cirugía bariátrica.
ción para conseguir este objetivo es el uso de VLCD. La adaptación en consistencia de la dieta del paciente
Este tipo de dietas, si se administran las 2-8 semanas postcirugía bariátrica variará dependiendo del tipo de
antes la intervención de cirugía bariátrica, pueden re- cirugía realizada (restrictiva, malabsortiva o mixta), aun-
ducir la duración de la intervención quirúrgica, sus que en líneas generales se estructurará en tres fases:
complicaciones y la estancia hospitalaria.
Todos los pacientes que hayan sido subsidiarios de • Dieta líquida: Suele emplearse los primeros días y
una cirugía bariátrica van a requerir un riguroso pro- puede prolongarse hasta dos semanas. Pretende
grama de educación nutricional que garantice la ad- consolidar suturas y la adaptación del paciente a
quisición de unos hábitos alimentarios saludables y un la ingesta de pequeños volúmenes de líquido tras
buen estado nutricional. A partir de esta premisa, el la intervención. Se recomienda la ingesta frecuen-
paciente logrará una adecuada pérdida de peso inicial te (cada 30 minutos) de pequeños volúmenes (25-
y un mantenimiento de este a largo plazo. 50 ml). Los alimentos recomendados suelen ser
La dieta postcirugía bariátrica deberá cubrir las nece- infusiones y caldos en las primeras 48 horas de
sidades nutricionales del paciente obeso en todas las tolerancia, para continuar posteriormente con ali-
etapas, desde el postoperatorio más inmediato a años mentos líquidos ricos en proteínas, principalmen-
después. El aporte calórico en las primeras semanas no te a partir de productos lácteos desnatados (leche
sobrepasará las 800 kcal, pero a partir de los 6-12 me- y yogur líquido no azucarado). Si el aporte protei-
ses se irá estabilizando a medida que se incorporen los co no es suficiente, se recomienda emplear leche
nuevos hábitos alimentarios saludables, alcanzando las en polvo desnatada para disolver en la leche des-
1500-2000 kcal. La ingesta adecuada de proteínas ga- natada líquida, clara de huevo que se añadirá a
rantizará un cicatrización rápida de heridas y suturas y pequeños volúmenes de caldo desgrasado, o mó-
preservará la masa magra durante la pérdida de peso dulos de proteína a disolver en los líquidos que
inicial, recomendándose al menos 1-1,5 g/kg peso ingiera el paciente.
ideal/día o 60-120 g de proteínas diaria. El aporte de • Dieta semisólida o triturada: Se empleará, tras la
hidratos de carbono deberá suponer el 50% del aporte tolerancia de la dieta líquida, hasta la octava sema-
energético total, principalmente a partir de hidratos na tras la intervención. La viscosidad se adaptará a
de carbono complejos y garantizando un mínimo de la tolerancia del paciente. Se introducirán alimen-
130 g al día. Se deberá reducir el aporte de fibra inso- tos como la patata o la zanahoria como base de
luble por su mala tolerancia en las primeras etapas tras elaboración de los purés, y como fuente proteica se
la cirugía, especialmente en pacientes con reducción introducirán pescado, carnes magras y claras de
importante de la capacidad gástrica. La ingesta de 20 g huevo. A medida que se produzca la tolerancia de
de grasa al día garantizará el aporte mínimo de ácidos estos alimentos en los purés, se irán incluyendo
grasos esenciales y un correcto funcionamiento de la otras verduras, hortalizas y legumbres en estos.

Tabla 6.  Riesgos de un tratamiento dietético inadecuado para la obesidad.

· Originar situaciones de desnutrición o déficit de diferentes tipos de micronutrientes (vitaminas, oligoelementos,


etc.)
· Favorecer el desarrollo de trastornos de la conducta alimentaria, de enorme gravedad y peor pronóstico que la
propia obesidad
· Transmitir conceptos erróneos sobre la obesidad y su tratamiento
· Fomentar el sentimiento de frustración afectando negativamente al estado psicológico del obeso
· Inducir cambios en el metabolismo energético que produzcan estados de «resistencia» a la pérdida de peso con la
realización de sucesivas dietas
· Empeorar el riesgo cardiovascular de los pacientes
Tema 7.  Tratamiento dietético de la obesidad 129

Para garantizar el aporte proteico necesario para el reguladores del apetito (GLP-1). Los estudios epidemio-
paciente, se continuará con los lácteos desnatados lógicos sugieren una asociación entre una ingesta baja
enriquecidos con leche en polvo desnatada. de fibra y un mayor peso e IMC, y entre una alta ingesta
• Dieta de consistencia normal: Tras la tolerancia de con mayor saciedad y menor ingesta energética. Enri-
la dieta de la etapa anterior, se comenzará la tole- quecer la dieta con alimentos de origen vegetal ricos en
rancia de alimentos fácilmente digeribles y de fibra es un método eficaz para el control del peso, y
consistencia sólida como: queso fresco desnata- tiene efectos beneficiosos adicionales sobre el metabo-
do, huevo cocido o en tortilla, jamón cocido, pa- lismo de los lípidos y de la glucosa. Los suplementos
tata y zanahoria cocida, pescado blanco, etc. A farmacológicos de fibra (por ejemplo, glucomanano)
medida que se produzca la tolerancia de estos tienen un efecto discreto sobre la pérdida de peso21.
alimentos, se irá reduciendo la ingesta de purés a El etanol es una sustancia contenida en diferentes
favor de alimentos en consistencia normal (carne, bebidas alcohólicas. Tiene una densidad energética
pescado, verduras, hortalizas, legumbres, etc.). elevada (7 kcal/g), cercana a la de las grasas, y no se le
conoce ninguna función esencial en el organismo. Mu-
A medida que se produce la transición en la consis- chas veces su consumo se infraestima, pero en la po-
tencia de los alimentos, se irá reduciendo el número de blación española puede llegar a representar el 5% de
tomas, pasando de las 6-7 iniciales, a las 4-5 finales las calorías ingeridas diariamente. No existe una evi-
que se mantendrán en el período de meseta, a partir dencia firme de la relación entre consumo de alcohol y
del primer año postcirugía. ganancia de peso, pero algunos estudios muestran que
incrementa el apetito y/o reduce la saciedad. Cuando
6. Papel de nutrientes específicos se consume antes de la comida, el alcohol tiene un
«efecto aperitivo» que conduce a una mayor ingesta de
en el control del peso
alimentos, probablemente por la activación de áreas
Los triglicéridos de cadena media (MCT) tienen entre hipotalámicas relacionadas con la regulación de la con-
8 y 10 átomos de carbono en su estructura molecular, ducta alimentaria y los sistemas de recompensa22.
mientras que los triglicéridos de cadena larga (LCT) tie- Por último, no existe ninguna evidencia que vincule el
nen más de 12 carbonos. Los MCT aportan menos ca- consumo de agua con variaciones en el peso corporal.
lorías (8,3 kcal/gr) y tienen ciertas características meta-
bólicas que los diferencian de los LCT. Parecen promover 7.  Modificaciones en la estructura de la dieta
la saciedad, probablemente debido a que son transfor-
mados en cuerpos cetónicos y a que estimulan señales La alimentación es un tipo de conducta aprendida,
de la saciedad al promover la oxidación hepática de controlada en parte de forma voluntaria, que puede ser
ácidos grasos. Además, son capaces de aumentar el definida por su estructura: frecuencia y duración de las
gasto energético y disminuir la adiposidad. Sin embar- comidas, tamaño de las raciones, horarios, etc. La mani-
go, los efectos de reemplazar LCT por MCT sobre el pulación de estos factores, más allá de la modificación en
peso y la composición corporal son modestos18, 19. la composición de los alimentos, puede contribuir a re-
Los resultados de algunos estudios (NHANES III, gular la ingesta energética y por tanto el peso corporal.
CARDIA, HERITAGE Family Study, etc.) han encontrado La ingesta varía a lo largo del día: se consume más
cierta asociación entre el consumo de calcio con reduc- energía según avanza el día en relación con la prolon-
ciones de la masa grasa corporal. El mecanismo impli- gación de la duración de las comidas, el menor interva-
cado podría ser el incremento de la oxidación lipídica, lo de tiempo transcurrido entre ellas, la disminución
ya que no se han observado modificaciones en el gasto progresiva de la saciedad y la preferencia de alimentos
energético. Sin embargo, la suplementación con calcio calóricamente densos a última hora de la noche. La
o productos lácteos no ha demostrado ningún benefi- mayor ingesta por la mañana, especialmente de ali-
cio sobre la pérdida de peso20. Algo similar ocurre con mentos de baja densidad calórica, podría ayudar a re-
la vitamina D. Si bien con frecuencia se encuentra defi- ducir el consumo calórico a lo largo del día y podría
ciencia de vitamina D en la población con obesidad, la fomentar la realización de ejercicio físico. Sin embargo,
administración de esta vitamina no produce efectos las pruebas que vinculan omitir el desayuno con el de-
favorables sobre el peso. sarrollo de sobrepeso u obesidad son inconsistentes23.
La fibra dietética contribuye a reducir la densidad El patrón alimentario del paciente obeso frecuente-
energética de los alimentos. Además, ralentiza el vacia- mente es irregular, con frecuentes picoteos, atracones
miento gástrico y el tránsito intestinal cuando predomi- y omisión de comidas. Se suele recomendar la realiza-
na un componente viscoso, enlenteciendo la absorción ción de comidas regulares y muchos con el fin de pro-
de hidratos de carbono y grasas, factores que en con- mover la ingesta de menos calorías, aumentar el efecto
junto favorecen que este nutriente se asocie a mayor térmico de los alimentos y favorecer la sensibilidad
saciedad. Asimismo, podría favorecer la pérdida de calo- postprandial a la insulina24. Los efectos sobre el peso
rías a través de las heces y modular péptidos intestinales de esta medida son controvertidos.
130 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

8. Conclusiones 11. Thomas DE, Elliott EJ, Baur L. Low glycaemic index


or low glycaemic load diets for overweight and
La dieta es el componente fundamental del tratamiento
obesity. Cochrane Database Syst Rev 2007; 3:
de la obesidad, y debe formar parte de un programa inte-
CD005105.v.
gral que incluya terapia conductual y ejercicio físico que
12. Paddon-Jones D, Westman E, Mattes RD, Wolfe
tenga como fin, más allá de lograr reducir el peso corpo-
RR, Astrup A, Westerterp-Plantenga M. Protein,
ral, la modificación de los hábitos de vida. La evidencia
weight management, and satiety. Am J Clin Nutr
actual permite afirmar que es el contenido calórico de la
2008; 87: 1558S-61S.
dieta más que su composición cualitativa lo que permite la
13. Ballesteros-Pomar MD, Calleja-Fernández AR, Vi-
pérdida de peso. La dieta mediterránea es el patrón ali-
dal-Casariego A, Urioste-Fondo AM, Cano-Rodrí-
mentario que, más allá del reparto de macronutrientes,
guez I. Effectiveness of energy-restricted diets with
mejor perfil metabólico y cardiovascular presenta25.
different protein:carbohydrate ratios: the rela-
tionship to insulin sensitivity. Public Health Nutr.
9. Bibliografía 2010; 13:2119-26.
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Tema 7.  Tratamiento dietético de la obesidad 131

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Tema 8. 
Tratamiento farmacológico de la obesidad
Miguel A. Rubio Herrera
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico Universitario San Carlos. Madrid

Carmen Moreno Lopera


Atención Primaria. Centro de Salud Lucero. Madrid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 133-141.

1. Introducción
2.  Fármacos comercializados no disponibles en Europa
3.  Fármacos comercializados en Europa
4.  Futuro de los tratamientos para la obesidad
5. Bibliografía

1. Introducción del tratamiento farmacológico para la obesidad se esta-


blecen para los sujetos con un índice de masa corporal
Las guías de práctica clínica indican que una pérdida (IMC) ≥ 30 kg/m2 o ≥ 27 kg/m2 en presencia de comor-
del 5 al 10% del peso corporal que se alcanza con los bilidades mayores (diabetes, hipertensión, dislipemia,
cambios en el estilo de vida (alimentación hipocalórica apneas del sueño, etc.)5, siempre asociadas a medidas
y ejercicio) es suficiente para reducir el impacto de las dietéticas y cambios en el estilo de vida. De la misma
comorbilidades asociadas a la obesidad1. Ese objetivo manera, si tras 12-16 semanas de tratamiento activo el
parece asumible y fácilmente factible a corto plazo para paciente no pierde al menos un 5% del peso inicial y/o
la mayoría de los pacientes motivados. Sin embargo, aparecen efectos indeseables graves, se aconseja la reti-
mantener el peso perdido constituye uno de los princi- rada del tratamiento farmacológico.
pales desafíos en una situación biológica y ambiental
desfavorable, ya que la recuperación ponderal suele ser
la norma para la mayoría de las personas que han in- 2. Fármacos comercializados
tentado perder peso y mantenerlo a largo plazo2. no disponibles en Europa
En este escenario, disponer de un tratamiento far- La FDA (Food and Drug Administration) ha aprobado
macológico podría garantizar ese objetivo, si bien has- el empleo en Estados Unidos del tratamiento con lor-
ta ahora la aparición de efectos secundarios graves caserina y la combinación de fentermina y topiramato
asociados a la toma de fármacos para el control del para el tratamiento de la obesidad. Sin embargo, han
apetito y el peso corporal en el último siglo, ha motiva- sido rechazados por la Agencia Europa del Medica-
do la retirada comercial sucesiva en estos años3, 4 (tabla mento (EMA) porque se consideró que los riesgos su-
1). Por estos motivos, las agencias reguladoras se han peraban a los beneficios esperados.
mostrado muy cautas a la hora de aprobar nuevos fár-
macos para el tratamiento de la obesidad.
2.1.  Lorcaserina (Belviq®)
En la estrategia terapéutica para el tratamiento de la
obesidad se contempla que, para que un fármaco sea Lorcaserina es un agonista del receptor de serotoni-
considerado efectivo para tratar la obesidad, debe cum- na muy específico del subtipo 5HT2c implicado en la
plir los siguientes requisitos: a) que alcance una diferen- inhibición de la vía anorexígena a través de la estimula-
cia de peso significativa respecto a un placebo > 5% al ción que contienen neuronas con pro-opiomelanocor-
finalizar un año de tratamiento, y b) que el porcentaje tina (POMC). A diferencia de otros fármacos serotoni-
de sujetos que pierdan más de un 5% de peso supere al nérgicos (dexfenfluramina, fenfluramina) lorcaserina
35% de los casos tratados activamente respecto al pla- no tendría supuestos efectos a nivel valvular o de hiper-
cebo (aproximadamente el doble de pacientes que en el tensión pulmonar (ligado a subtipos de receptor 5A o
grupo placebo). De la misma manera, las indicaciones 5B), lo cual supone una gran ventaja teórica.

133
134 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

Tabla 1.  Fármacos empleados para el tratamiento de la obesidad y razones para su retirada commercial

Fármaco Año Razones para la retirada (año)


Dinitrofenol 1930 Riesgo de neuropatía y cataratas
Anfetaminas 1936 Dependencia y abuso. Efectos cardiovasculares potencialmente graves.

Aminorex 1965 Hipertensión pulmonar (1968)


Mazindol 1970 Suspendida 1993 (Australia)

Fenfluramina 1963 Europa Enfermedad valvular cardiaca Hipertensión pulmonar (1997)


1973 EEUU

Dexfenfluramina 1985 Europa Enfermedad valvular cardiaca Hipertensión pulmonar (1997)


1996 EEUU

Sibutramina 1997 EEUU Enfermedad cardiovascular (2010)


2001 Europa

Rimonabant 2006 Europa Alteraciones psiquiátricas graves (2009)

La tolerabilidad y eficacia de lorcaserina han sido FDA, pese a su eficacia modesta, debido a su bajo
evaluadas en tres ensayos clínicos aleatorizados doble perfil de riesgo. Sin embargo, la EMA no ha conside-
ciego frente a placebo. El Estudio BLOSSOM (Behavio- rado su comercialización debido a la falta de especifi-
ral Modification and Lorcaserin Second Study for Obe- cidad de los receptores de serotonina capaces de in-
sity Management)6 incluyó 4008 sujetos con obesidad crementar de alguna manera síntomas depresivos,
o sobrepeso a recibir lorcaserina 10 mg/día (n = 801), síndrome serotoninérgico e incluso afectación valvu-
10 mg/2 veces al día (n = 1602) o placebo (n = 1601) lar. Además, quedan sin aclarar los potenciales ries-
durante 52 semanas. La tasa de pérdidas de abando- gos de carcinogenicidad apreciados en animales de
nos fue del 45%. La pérdida de peso absoluta fue de experimentación (carcinoma de mama, astrocitoma y
5,8 kg, 4,7 kg y 2,9 kg, para cada uno de los grupos de schwannoma, entre otros).
intervención, respectivamente. Más pacientes asigna- Contraindicaciones y precauciones: gestación, lac-
dos al grupo de lorcaserina 10 mg/día (47,2%), lorca- tancia, síndrome serotoninérgico o síndrome neurolép-
serina 10 mg x 2 veces/día (40,2%) perdieron ≥ 5% del tico maligno10. Faltan datos de su posible empleo en
peso corporal al finalizar un año de tratamiento en pacientes con depresión. Tampoco se conocen las inte-
comparación con el placebo (25%). racciones con otros inhibidores selectivos de la recap-
El estudio BLOOM (Behavioral Modification and Lor- tación de serotonina, IMAO, hierba de San Juan. Evitar
caserin for Overweight and Obesity Management)7 en pacientes con hepatopatías o enfermedad renal cró-
evaluó a 3182 pacientes durante 2 años (50% de nica avanzada; precaución también en aquellos con
abandonos) con resultados similares (–5,8 kg para lor- valvulopatías, insuficiencia cardiaca, bradicardia o blo-
caserina frente a –2,2 kg del grupo placebo). El tercer queo cardiaco10.
estudio, más pequeño, BLOOM-DM (Behavioral Modi-
fication and Lorcaserin for Obesity and Overweight 2.2. Combinación de fentermina y topiramato
Management in Diabetes Mellitus)8, incluyó a 604 pa-
(Qsymia®)
cientes con diabetes (34% de abandonos). La pérdida
de peso fue más escasa (–4,7 kg o 3,2%), mientras que La combinación de fentermina y topiramato (FEN/
el 37,5% frente al 16,1% del grupo placebo consiguie- TPM) fue aprobada por la FDA en 2012. La fentermina
ron perder ≥ 5% del peso inicial. Aproximadamente la es un agente noradrenérgico que se comercializó en
mitad de los diabéticos alcanzaron concentraciones de 1956 como monoterapia (15-30 mg/día) para reduc-
HbA1c < 7%. Globalmente, en comparación con pla- ción del apetito en pacientes con obesidad por un
cebo, los estudios de metanálisis indican que lorcaseri- tiempo limitado (inferior a 12 semanas). El tratamiento
na presenta una odds ratio (OR) de 3,10 (IC 95%: 2,38- con topiramato (200-400 mg/día) se aprobó en 1996
4,05) de alcanzar una pérdida ≥ 5% del peso9. para las crisis comiciales parciales y en 2004 para la
Los efectos secundarios más importantes fueron profilaxis de las migrañas. TPM es capaz de reducir el
náuseas, cefaleas, mareos, astenia, estreñimiento y apetito al antagonizar los receptores del glutamato
boca seca. El fármaco fue aprobado en 2012 por la (agente orexígeno), inhibe también la anhidrasa carbó-
Tema 8.  Tratamiento farmacológico de la obesidad 135

nica y aumenta la actividad del ácido gamma-amino- hiperclorémica, alteraciones hepáticas o renales. Em-
butírico (GABA). peoramiento cognitivo si se emplea concomitante­
La idea de esta combinación es emplear dosis muy mente con alcohol o antidepresivos. Puede producir
inferiores a las habituales con la finalidad de potenciar pérdidas menstruales a lo largo del ciclo en pacientes
sus efectos y disminuir los potenciales efectos secunda- que toman anticonceptivos, por alteraciones en el me-
rios. Así, los ensayos con Qsymia® se han realizado con tabolismo de estrógenos y progestágenos10.
dosis bajas con 3,75 mg de fentermina y 23 mg de
topiramato (3,75/23 mg), una dosis media de 7,5/46 3.  Fármacos comercializados en Europa
mg y una dosis alta de 15/92 mg, indicada en aquellos
pacientes que no alcancen una meta de pérdida de 3.1.  Orlistat
peso con las dosis inferiores. Orlistat (Xenical®) está comercializado en Europa
Se han realizado tres estudios aleatorizados doble-­ desde 1998. Su mecanismo de acción se relaciona con
ciego con placebo, en fase III, con diferentes dosis de la inhibición de la absorción de las grasas de la dieta,
esta combinación: EQUIP (Controlled-Release Phenter- en una proporción del 30% de la ingesta, al inhibir par-
mine/Topiramate in Severely Obese Adults: A Rando- cialmente la acción de las lipasas gástrica y pancreáti-
mized Controlled Trial)11, The CONQUER (Effects of ca. Esta acción es causa directa de sus conocidos efec-
Low-Dose, Controlled-Release, Phentermine Plus Topi- tos secundarios (flatulencia, aumento de deposiciones,
ramate Combination on Weight and Associated Co- heces grasientas, manchas oleosas, etc.), presentes en
morbidities in Overweight and Obese Adults)12, y su el 15-20% de los pacientes, pero que no han sido mo-
extensión a dos años (estudio SEQUEL)13. Los cambios tivo habitual de abandono del tratamiento por parte
promedios de pérdida de peso oscilaron de –1,2 a de los pacientes. El tratamiento con orlistat, 120 mg
–2,5% para placebo; –7,8 a –9,3% para la dosis media 3 veces/día, contribuye a una pérdida de peso en un
de 7,5/46 mg y entre el 10,5 al 12,1% para la dosis alta 2,9% superior al placebo14, contribuyendo a disminuir
de 15/92 mg de esta combinación. El porcentaje de las comorbilidades metabólicas asociadas a la obesi-
sujetos que pierden ≥ 5% del peso corporal oscila entre dad, mientras que con la dosis de 60 mg/3 veces al día
el 17-21% para placebo, 62% para la dosis media y (Alli®) se pierde 2,5 kg más que con placebo. Entre el
entre el 67-70% para la dosis más alta de la asociación 35-73% de los sujetos perdieron ≥ 5% del peso inicial,
FEN/TPM. En los resultados de metanálisis, la tasa glo- según diferentes estudios, lo que supone una OR de
bal de pacientes que alcanzan una pérdida de peso 2,70 (IC95 2,34-3,09)9. En el estudio XENDOS (Xenical
≥ 5% respecto a placebo supone una OR de 9,22 in the prevention of diabetes in obese subjects), un es-
(IC 95% 6,63-12,85)9 tudio aleatorizado doble-ciego frente a placebo reali-
Los efectos secundarios son los mismos que pueden zado en 3305 pacientes con obesos no diabéticos, al
presentarse por separado: sequedad de boca, estreñi- finalizar los 4 años de seguimiento, con una diferencia
miento, parestesias, somnolencia, ansiedad, alteracio- de tan solo 2,7 kg frente a placebo, fue suficiente para
nes de la memoria, etc. que suelen disminuir con el reducir el desarrollo de diabetes tipo 2 en un 37,3% en
paso del tiempo. La tasa de abandonos es solo del 31% aquellos pacientes que tenían prediabetes15.
con las dosis más altas de FEN/TPX, una tasa alejada Contraindicaciones y precauciones: embarazo y lac-
del 45-50% de otros ensayos con fármacos de acción tancia, síndrome de malabsorción intestinal, colestasis
central (sibutramina, lorcaserina, naltrexona/bupro- y nefrolitiasis por oxalatos. Hay que prestar especial
pión, etc.). También se ha podido verificar que la fre- atención a la presencia de colelitiasis, hepatopatía, la
cuencia de síntomas depresivos y necesidad de nuevos posibilidad de malabsorción de vitaminas liposolubles
tratamientos no es diferente del grupo placebo. y la interferencia en la absorción de levotiroxina, warfa-
En febrero de 2013, la EMA rechazó por segunda rina, antiepilépticos y ciclosporina, debiendo tomarse
vez su comercialización en Europa aduciendo que la con un intervalo de al menos 4 horas con la toma de
fentermina se asociaba a aumento de la frecuencia car- orlistat10.
diaca y riesgo cardiovascular incierto a largo plazo,
mientras que el TPM se asociaba a alteraciones de la
atención, memoria y posible teratogenicidad (labio le-
3.2.  Combinación de bupropión-naltrexona
porino). Además, no se garantizaban los riesgos deri- Bupropión inhibe la recaptación de norepinefrina y
vados del mal empleo que podría hacerse del fármaco dopamina, estando aprobada su comercialización para
con la libre dispensación de esta combinación para la depresión y el cese del hábito tabáquico. Esos neuro-
pacientes con obesidad. transmisores están involucrados en la regulación del
Contraindicaciones y precauciones: gestación y lac- apetito y mecanismos de recompensa, por lo que se
tancia, glaucoma de ángulo estrecho, hipertiroidismo, realizaron unos primeros estudios en pacientes obesos
toma concomitante de IMAO. Precaución en pacientes a corto plazo en los que se obtuvieron pérdidas de
con taquiarritmias, ansiedad y ataques de pánico, an- peso entre el 7-10% en 24-48 semanas de tratamiento
tecedentes de crisis comiciales, nefrolitiasis, acidosis con 300-400 mg/día de bupropión16, pero con una
136 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

tasa de abandonos del 43%. Sin embargo, la idea de tos cardiovasculares mayores previstos (muerte
emplearlo en obesidad no progresó y se buscaron al- cardiovascular, ictus o infarto de miocardio no mortal),
ternativas como la combinación con otros fármacos. reveló que estos episodios se habían producido en el
La idea de combinar bupropión y naltrexona (Contra- 2,3% de pacientes tratados con placebo y en el 2% de
ve® en EEUU y Mysimba® en Europa) se debe a que el pacientes del grupo de tratamiento activo (HR 0,88;
bupropión es capaz de estimular las neuronas POMC ajustado al 99,7%; IC: 0,57-1,34)21. La FDA autoriza
que, a su vez, liberan la hormona estimulante de mela- análisis intermedio (al 25% de seguimiento) para verifi-
nocitos (α-MSH) para unirse a los receptores hipotalá- car que un fármaco no supera un riesgo inadmisible de
micos MC-4 (melanocortina-4), que tienen una potente 1,8 veces superior al placebo (con un 95% de nivel de
acción anorexígena. Las neuronas POMC simultánea- confianza). En el caso de BN se constató este supuesto,
mente liberan una β-endorfina que actúa sobre los re- pero se desvelaron los resultados antes de finalizar el
ceptores opiodes-µ. La β-endorfina reduce la liberación estudio previsto a 5 años. Así que no se obtendrán re-
de α-MSH desde las neuronas POMC, por un mecanis- sultados definitivos con un nuevo estudio de seguridad
mo de control retroalimentado. La naltrexona bloquea- cardiovascular hasta 2022.
ría esta acción de feedback de la endorfina, prolongan- Contraindicaciones: BN se absorbe mejor con comi-
do así la acción anorexígena de la α-MSH. das grasas, por lo que puede interferir con la acción de
La administración combinada de bupropiónSR (sustai- fármacos anticomiciales y precipitar crisis epilépticas.
ned release) (360 mg) y naltrexonaSR (32 mg) [BN], ha BN está contraindicado en embarazadas y lactantes, en
sido estudiado en tres ensayos clínicos de 56 semanas pacientes con HTA descontrolada, en trastornos del
de duración en más de 3000 pacientes con sobrepeso y comportamiento alimentario (anorexia nerviosa y buli-
obesidad con comorbilidades, incluyendo un grupo con mia), en la depresión grave, en pacientes en tratamien-
diabetes mellitus tipo 2 (estudios COR: Contrave Obesity to con IMAO, en los que están en fase de retirada brus-
Reasearch). Los promedios de pérdida de peso oscilaron ca de alcohol o en tratamiento con mórficos9.
entre 5-6,4% para BN versus 1,2 a 1,8% con place- Debe prestarse especial atención a la presencia de
bo17-19. Aproximadamente un 50% de los pacientes per- arritmia cardiaca, glaucoma de ángulo estrecho, mi-
dieron ≥ 5% del peso inicial frente a un 17% del grupo grañas persistentes, crisis de ansiedad generalizada,
placebo (OR 3,96; IC 95% 3,03-5,11)9. Un cuarto estu- trastorno bipolar, alteraciones hepáticas o renales. Bu-
dio se realizó en un grupo de pacientes con obesidad propión inhibe el CYP2D6 y puede aumentar las con-
que recibió tratamiento intensivo de cambios en el estilo centraciones de antidepresivos (ISSR y tricíclicos),
de vida (28 sesiones en un año) (estudio COR-BMOD)20, antipsicóticos (haloperidol, risperidona y tioridazina),
siendo la pérdida de peso mayor que en los estudios beta-bloqueantes (metoprolol) y antiarrítmicos tipo 1C
previos: 9,3% para BN frente a 5,1% del grupo placebo (propafenona, flecainida). Considerar la reducción de
(diferencia de un 4,2%, incluso algo inferior a los estu- dosis cuando se utilice BN.
dios COR). Con esta modalidad de terapia conductual Los inductores del CYP2B6 (por ejemplo, ritonavir, lo-
un 66,4 y 44,5% de los pacientes perdieron más de 5% pinavir, efavirenz, carbamazepina, fenobarbital y feni-
y del 10% del peso basal respectivamente. toína) pueden reducir la eficacia del fármaco, así que
Los efectos secundarios más destacables son: cefa- debe evitarse su uso concomitante. Por último, NB pue-
lea, insomnio, sequedad de boca, mareos, náuseas, de producir interferencias farmacológicas al proporcio-
vómitos y estreñimiento, que suelen minimizarse trans- nar resultados falsos-positivos en orina por anfetaminas.
curridos 4-6 semanas de tratamiento. Por este motivo,
se recomienda que el paciente realice un progresivo
3.3.  Liraglutida 3 mg
escalamiento de dosis a lo largo de 4 semanas: comen-
zando con 1 comp. por la mañana e incrementando Liraglutida es un análogo de la incretina GLP-1 (Gluca-
cada semana en 1 comp. hasta llegar a 4 comp./día, gon Like Peptide-1) que se libera en las células L intesti-
distribuidos en 2 tomas. La última dosis se recomienda nales tras la ingesta de alimentos. Liraglutida tiene una
que se tome por la tarde para evitar la aparición de homología estructural en un 97% con el GLP-1 nativo,
insomnio si se ingiere a la hora de cenar. pero le confiere una vida media mucho más prolongada,
BN reduce las cifras de presión arterial (–0,9 mm Hg ya que es resistente a la degradación enzimática de la
PAS; –1,2 mmHg PAD), pero en menor proporción que DPP-IV (dipeptidil peptidasa-IV)22. De esta manera, la ad-
en placebo (–2,8 y 2,6 mmHg, respectivamente). Tam- ministración de liraglutida alcanza concentraciones más
bién con placebo se disminuye la frecuencia cardiaca elevadas y sostenidas de este análogo hormonal. Sus ac-
(–2,3 lpm) que con esta asociación (–0,2 lpm). Por di- ciones son múltiples e interviene en varios órganos don-
cho motivo, la FDA recomendó que se iniciara un estu- de existen receptores de GLP-1; pero básicamente se
dio de seguridad cardiovascular (estudio LIGHT)21. conoce por su acción de incrementar la liberación de in-
8910 pacientes han participando en este estudio pros- sulina tras la ingestión de comida (de ahí el nombre
pectivo, aleatorizado de no inferioridad de la adminis- de «incretina») y de frenar la acción hiperglucemiante del
tración de BN. Un análisis intermedio al 50% de even- glucagón, dependiente de glucosa22. Gracias a esta ac-
Tema 8.  Tratamiento farmacológico de la obesidad 137

ción dual, liraglutida fue comercializada para el trata- 1,8-2,4-3 mg/día) frente a placebo y orlistat como
miento de la diabetes tipo 2 consiguiendo reducciones fármaco de referencia25. Al finalizar el primer año, los
de HbA1c en torno al 1,5% en función de las dosis admi- pacientes con liraglutida 3 mg perdieron un 9,2% del
nistradas (1,2 a 1,8 mg/día por vía subcutánea)23. peso inicial (3,1% placebo), lo que supuso que el 73%
Pero liraglutida ejerce otras acciones a nivel central, de los pacientes perdieran ≥ 5% del peso corporal. Por
interviniendo principalmente sobre los núcleos hipota- tanto, se eligió la dosis de 3 mg como la más eficaz
lámicos, estimulando directamente las neuronas de las para la reducción del peso.
vías anorexígenas POMC y CART (cocaine and amphe- Los siguientes cuatro estudios se denominaron SCA-
tamine-regulated transcript) e indirectamente inhibien- LE (Satiety and Clinical Adiposity — Liraglutide Eviden-
do los neurotransmisores en neuronas que expresan ce) y se realizaron en distintas situaciones con obesidad
neuropéptido-Y y de AGRP (agouti-related peptide), vía para conocer la eficacia y seguridad del fármaco en
GABA (ácido gamma-aminobutírico), en el núcleo ar- diferentes grupos de pacientes. En la figura 1 se resu-
cuato del hipotálamo. Al mismo tiempo, produce un men todos los ensayos clínicos realizados con liragluti-
enlentecimiento moderado del vaciamiento gástrico da 3,0 mg. En el estudio SCALE obesidad y prediabetes
que contribuye a implementar la sensación de plenitud se incluyeron 3731 pacientes (39% con obesidad sin
y saciedad tras la ingesta. Este efecto supone una pér- prediabetes y 61% con obesidad y prediabetes) se ob-
dida entre 2-3 kg de promedio en las personas con jetivó que la pérdida de peso de ambos grupos al cabo
diabetes que son tratadas con liraglutida a las dosis de 56 semanas fue del 8% (2,6% con placebo). Ade-
mencionadas24. Pero precisamente fue este efecto inhi- más, liraglutida 3 mg redujo en 8 veces la posibilidad
bidor del apetito lo que favoreció el desarrollo de lira- de que el paciente con prediabetes evolucionara a dia-
glutida 3 mg (Saxenda®). El desarrollo clínico de betes (OR 8,1; IC 95%: 2,6 a 25,3)26.
liraglutida 3 mg hasta su comercialización consta de En el estudio SCALE diabetes participaron 846 pa-
un estudio en fase II y cuatro estudios en fase III. cientes con diabetes tipo 2, con el mismo esquema de
El estudio de fase II tenía por finalidad conocer cuál tratamiento de liraglutida 3 mg frente a placebo, pero
era la dosis más efectiva para perder peso. Se incluye- incluyendo también la dosis habitual empleada para el
ron 564 pacientes con obesidad y sin diabetes que fue- control de la diabetes (1,8 mg/día). Tras un año de tra-
ron asignados a diferentes dosis de liraglutida (1,2- tamiento, se constató que el control glucémico es simi-

Obesidad (fase II) SCALE Prediabetes SCALE Diabetes SCALE Mantenimiento SCALE SAHS
0
–0,2
–1
–2 –1,6
–2
–3 –2,6
–3,1
–4
–5
%

–6 –5,7
–6 –6,2
–7
–8
–8
–9
–9,2 Placebo Liraglutida 3.0
–10

27,6 75,0 27,1 63,2 13,8 49,9 21,5 50,5 18,5 46,3

Sujetos que pierden > 5% peso Placebo Lira 3

Figura 1.  Resultados de los estudios SCALE (Satiety and Clinical Adiposity - Liraglutide Evidence).
138 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

lar para ambas dosis de liragutida, pero la pérdida de Contraindicaciones y precauciones: Liraglutida 3 mg
peso es mayor, alrededor del 6%, en el grupo de lira- está contraindicada en pacientes con neoplasia endocri-
glutida 3 mg frente al 2% de placebo27. na múltiple (MEN-2), antecedentes de carcinoma medu-
Los otros dos estudios SCALE se realizaron para ob- lar de tiroides, en enfermedad renal o hepática avanza-
servar las acciones del fármaco en otras situaciones. da, en embarazadas y lactantes, presencia de pancreatitis
Así, en el estudio SCALE-mantenimiento28, se confirma o colecistitis. Tampoco hay experiencia en adolescentes
que liraglutida 3 mg contribuye a que los pacientes (< 18 años) o mayores de 75 años. Se debe emplear con
que habían perdido un promedio de un 6% de peso precaución en casos con antecedentes de colelitiasis,
corporal con dieta, conseguían añadir otro 6% de pér- pancreatitis, gastroparesia o ideación suicida.
dida de peso adicional al ser tratados con el agonista De manera conjunta y atendiendo a los resultados
de GLP1. El último estudio a 32 semanas con liragluti- principales de los ensayos clínicos de cada fármaco de
da 3 mg se realizó en un grupo de pacientes con sín- los aquí comentados, podemos advertir que la asocia-
drome de apneas-hiponeas del sueño (SAHS) que no ción de FEN/TPM es la combinación más eficaz para
podían o no querían utilizar el CPAP (SCALE-apneas del perder peso, siendo orlistat el que menos efecto tiene
sueño)29. En este grupo, la pérdida de peso, similar a sobre el peso corporal (figura 2).
los estudios anteriores, supuso además una disminu-
ción paralela del número de apneas de estos sujetos29. 4. Futuro de los tratamientos para
En conjunto, liraglutida presenta una OR de 5,54 (IC la obesidad
95%, 4,16-7,78) de probabilidades de que los sujetos
en tratamiento pierdan ≥ 5% del peso corporal frente a Algunos fármacos se han ensayado con éxito para el
placebo. tratamiento de la obesidad, como cetilistat, un inhibi-
Efectos secundarios y seguridad de liraglutida: Los dor de las lipasas gástrica y pancreática, similar al orlis-
efectos secundarios más comunes fueron las náuseas tat, pero con menos efectos secundarios y, por tanto,
(15-30% sujetos) y en menor proporción los vómitos mejor tolerancia. Cetilistat solo está aprobado en Ja-
(2-10%) como consecuencia de las acciones del fárma- pón (Oblean®, Cetisum®)32.
co a nivel central, pero, seguramente también debidos Tesofensina es un inhibidor de la recaptación de no-
al enlentecimiento gástrico. Los efectos fueron meno- radrenalina, dopamina y serotonina, que se emplea
res después de 4 semanas y aún se pueden minimizar como fármaco en el tratamiento del Parkinson, aunque
si la escalada de dosis es mucho más paulatina. No hay a dosis elevadas. Un único ensayo en fase II publicado
otros efectos secundarios centrales a destacar, por lo en 2008, demostró que la dosis de 0,5 mg durante
que la tolerancia final es buena, siendo la tasa de se- 24 semanas produjo una disminución del 9% del peso
guimiento de los estudios muy elevada (un 72% de corporal, mayor que placebo, con escasa pérdida de
permanencia, como promedio). La administración del seguimiento de pacientes (21%); sin embargo, su de-
fármaco por vía subcutánea no representó ningún pro- sarrollo clínico se ha quedado estancado. Los efectos
blema de adherencia para los pacientes. secundarios más importantes son los derivados de su
Liraglutida mejora también las cifras de presión arte- acción central: sequedad de mucosas, estreñimiento,
rial y tiene acciones positivas sobre otros marcadores insomnio, intranquilidad33.
de riesgo cardiovascular. Aunque se ha descrito un in- Beloranif es un fármaco inhibidor de la metionina
cremento de 2-4 latidos/min, este efecto no parece aminopeptidasa-2 (MetAP2), que reduce la biosíntesis
que tenga repercusión clínica alguna y parece reflejar de grasa, favorece su oxidación y la lipólisis. El trata-
la acción del fármaco a nivel del receptor situado en el miento con este fármaco presenta el efecto dual de
nodo seno-auricular. De hecho, liraglutida (hasta una incrementar el metabolismo graso y reducir la sensa-
dosis de 1,8 mg) ha demostrado ser seguro desde el ción de apetito. En estudios clínicos en fase II, beloranif
punto de vista cardiovascular en las personas con dia- produjo una pérdida de peso entre 7-10% superior a
betes, tal y como se desprende de los recientes datos placebo34; pero, el fallecimiento inesperado de un pa-
obtenidos a largo plazo con el estudio LEADER30. ciente en un ensayo fase III, ha paralizado el desarrollo
Uno de los principales retos es identificar a los res- del fármaco.
pondedores al tratamiento farmacológico. En un suba- El tratamiento farmacológico de la obesidad en los
nálisis del estudio SCALE obesidad y prediabetes, se próximos años tendrá un mayor protagonismo en la
observó que aquellos que habían perdido ≥ 4% de combinación de moléculas con diferentes mecanismos
peso a las 16 semanas del inicio del tratamiento con de acción para potenciar sus efectos con los menores
liraglutida 3 mg, conseguían perder ≥ 5% del peso ini- efectos secundarios. Se están ensayando asociaciones
cial al cabo de un año. El 77,3% de los participantes de fármacos conocidos como bupropión-zonisamida o
tratados con el fármaco se encuentran en esta catego- de fentermina-lorcaserina. Pero, son los agonistas dua-
ría de respondedores tempranos; y la pérdida prome- les o triagonistas de hormonas gastrointestinales (GLP1
dio de peso a las 56 semanas fue de –10,8% (frente a junto a análogos de glucagón, oxintomodulina o GIP),
–3% de los no respondedores tempranos)31. los que están ocupando las primeras líneas de investi-
Tema 8.  Tratamiento farmacológico de la obesidad 139

g
92m
10 15/
8,9
9
mg
8 /45
7,5
ALE
/SC
7 6,6 F-II OD
5,9 I/BM
6 -I/I
DM COR OM
5 CAL
E- 4,7 B L OSS
S -
%

OM -DM is
-DM BLO OM nál
is
4
4,0 COR B L O Met
a
3,3 3,3 3,1
2,9
3
2
1
0
Fent/Topir LIRA 3 mg BN 360/32 mg Lorcaserina Orlistat

Figura 2.  Eficacia en la pérdida de peso a un año según diferentes fármacos comercializados: diferencia con
placebo (análisis por intención de tratar).

gación más sólidas35-38. Estos nuevos fármacos tendrán   6. Fidler MC, Sanchez M, Raether B, Weissman NJ,
que superar los efectos secundarios a nivel central y de Smith SR, Shanahan WR, Anderson CM; BLOSSOM
riesgo cardiovascular que han hecho fracasar en el pa- Clinical Trial Group. A one-year randomized trial of
sado a otros que les precedieron. lorcaserin for weight loss in obese and overweight
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Bakris G, et al. Effect of Naltrexone-Bupropion on of cetilistat in a randomized, placebo-controlled
Tema 8.  Tratamiento farmacológico de la obesidad 141

phase 2 trial in obese diabetics: comparison with 36. Bhat VK, Kerr BD, Flatt PR, Gault VA.A novel
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Opin Pharmacol. 2013; 13:989-95. betes in rodents. Nat Med. 2015; 21:27-36.
Tema 9. 
Obesidad: Tratamiento quirúrgico
Irene Bretón
Cynthia González-Antigüedad
Marta Motilla
Ana Zugasti
Pilar García-Peris
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital General
Universitario Gregorio Marañón. Madrid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 143-153.

1.  Introducción y epidemiología


2.  Cirugía bariátrica: Conceptos generales
3.  Cirugía bariátrica: Evaluación preoperatoria y selección de los pacientes
4.  Cirugía bariátrica: Seguimiento postoperatorio
5.  Complicaciones de la cirugía bariátrica
6.  Gestación tras cirugía bariátrica
7.  Resumen y conclusiones
8. Bibliografía

1.  Introducción y epidemiología La importancia de la obesidad está aumentando


de un modo alarmante. Incluso en los países en vías de
La obesidad es una de las enfermedades metabólicas
desarrollo constituye un problema emergente, como
más prevalentes, y se asocia a numerosas complicaciones
consecuencia de los cambios acelerados en el modo
médicas, psicosociales y a un evidente deterioro en la
de vida en algunos sectores de la población. Este
calidad de vida1. La obesidad condiciona un aumento de aumento de la prevalencia es mucho más evidente en
la mortalidad global y da lugar a numerosas enfermeda- las formas graves de obesidad, que ha llegado a in-
des, como son la diabetes mellitus (DM) tipo 2, el síndro- crementarse hasta en un 400 % en los últimos 20
me de apnea obstructiva del sueño, enfermedades arti- años. La obesidad origina unos costes económicos
culares, digestivas, endocrinológicas, neoplasias etc.2. muy elevados; se estima que en España supone el
La obesidad es una enfermedad altamente prevalen- 6,9 % del gasto sanitario6.
te. Los países con prevalencia más elevada de obesi- La obesidad se asocia a numerosas complicaciones
dad, superior al 30 %, son EE UU (aproximadamente el médicas y psicosociales. El tratamiento de la obesi-
34 %), Méjico y Arabia Saudí. En Europa, las tasas más dad es complejo y difícil y existe una enorme tenden-
elevadas corresponden a Reino Unido, Alemania, Bul- cia a recuperar el peso perdido. Los mecanismos fi-
garia y España. siológicos que regulan el balance energético intentan
En España, la prevalencia de obesidad ha aumenta- mantener el peso habitual del paciente y pueden fre-
do en los últimos años, especialmente las formas más nar una ulterior pérdida de peso y facilitar su recupe-
graves (IMC > 40 kg/m2). Los estudios más recientes ración, especialmente en personas susceptibles. La
(ENRICA3, Di@bet.es4 y ENPE5) muestran una prevalen- OMS y numerosas sociedades científicas relacionadas
cia de obesidad entre el 21,6-28,2 y de sobrepeso en- con la obesidad proponen una pérdida del 5-10 %
tre 39,3-51. La mayoría de estos estudios han encon- del peso previo. En los pacientes con formas graves
trado un incremento de la prevalencia de la obesidad de obesidad, la OMS recomienda una pérdida de
con la edad, con valor máximo en torno a los 60 años. peso entre el 20-30 % del peso previo, que permita
Es también mayor en el subgrupo poblacional con me- mejorar la situación clínica y la comorbilidad. Los tra-
nor nivel de instrucción. tamientos convencionales, con dieta, ejercicio o con

143
144 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

fármacos no consiguen, en general, alcanzar este


objetivo terapéutico.
El tratamiento quirúrgico de la obesidad permite,
mediante la reducción de la ingesta, asociada o no a
malabsorción, conseguir un balance energético negati-
vo que facilite la pérdida de peso, en la magnitud que
precisan los pacientes con obesidad mórbida. Numero-
sos estudios han mostrado que este tratamiento consi-
gue mejorar la comorbilidad e incluso la mortalidad en
estos pacientes e inducir una importante mejoría en la
calidad de vida.
Banda gástrica Gastrectomía vertical
El aumento de la prevalencia de la obesidad mórbi-
da, asociado a la extensión de la práctica de la cirugía
bariátrica (CB) en todo el mundo ha originado un cre-
cimiento exponencial en el número de pacientes que se
someten a este tratamiento. Solo en EE UU se realizan
más de 150.000 intervenciones al año. Estos pacientes
necesitan una valoración nutricional que permita con-
seguir una adecuada pérdida de peso y prevenir el de-
sarrollo de complicaciones nutricionales.
A lo largo de este capítulo se repasarán las indica-
ciones, técnicas y complicaciones de la cirugía bariá-
trica, haciendo especial hincapié en los aspectos nu-
tricionales.
Bypass gástrico Derivación biliopancreática
2.  Cirugía bariátrica: Conceptos generales
La cirugía como tratamiento de la obesidad mórbida Figura 1.  Técnicas Quirúrgicas de mayor utilización
comenzó a practicarse a partir de los años 70 del en la actualidad.
siglo XX. El término «bariátrica» proviene de la palabra
«baros», que significa peso, e «iatros», que significa
tratamiento. Se trata de técnicas encaminadas a que el sorción. Se trata de una técnica mixta que consigue
paciente consiga un balance energético negativo man- una pérdida importante de peso (entre el 60 y 70 % del
tenido en el tiempo, bien por una limitación de la in- exceso de peso) y una disminución de las comorbilida-
gesta y/o produciendo maldigestión y malabsorción. des, con una tasa de complicaciones aceptable. Los
Con esta finalidad, se han diseñado distintas técnicas, resultados en pacientes con IMC > 55-60 kg/m2 son
en las que se reduce la capacidad gástrica y, en algu- peores, por lo que estaría indicada una técnica con
nos casos, se asocia una derivación de las secreciones mayor componente malabsortivo.
biliodigestivas. La gastrectomía vertical laparoscópica, también
Las técnicas quirúrgicas más empleadas en la actua- llamada gastrectomía tubular o «en manga» (sleeve
lidad son el bypass gástrico y la gastrectomía vertical; gastrectomy), es una técnica que consiste en extirpar
le siguen la banda gástrica ajustable y la derivación bi- de manera vertical la porción izquierda del estómago y
liopancreática7 (figura 1). Todas estas técnicas se reali- el fundus, aproximadamente 4/5 partes del estómago.
zan por vía laparoscópica. Con este abordaje, reco- Se trata de una técnica en la que se mantiene la conti-
mendado en la actualidad, se disminuye el tiempo de nuidad normal del estómago con el intestino. Diseña-
hospitalización, mejora la recuperación y disminuye el da originariamente como tratamiento inicial de una
riesgo de complicaciones. técnica más compleja en pacientes con elevado riesgo
El bypass gástrico para el tratamiento de la obesidad quirúrgico, sus buenos resultados en cuanto a pérdida
grave fue propuesto por uno de los padres de la cirugía ponderal y mejoría de la comorbilidad han hecho que
bariátrica, el Dr. Masson, a finales de los años 60 del se utilice cada vez con más frecuencia. Sus resultados a
siglo pasado. Esta técnica sufrió modificaciones a lo largo plazo están todavía en evaluación8.
largo de las décadas siguientes, y es una de las más La banda gástrica ajustable laparoscópica con-
utilizadas a nivel mundial. En ella se crea un pequeño siste en la colocación de una especie de «cinturón» a
reservorio gástrico (15-30 ml), separado del resto del nivel del fundus gástrico, unido a un reservorio percu-
estómago, que limita la ingesta, asociado a una anas- táneo que permite ajustar la magnitud de la compre-
tomosis gastroyeyunal en Y de Roux con brazos de lon- sión, disminuyendo o aumentando la presión según la
gitud variable, que origina un cierto grado de malab- pérdida ponderal o la aparición de síntomas digestivos.
Tema 9.  Obesidad: Tratamiento quirúrgico 145

Este tipo de cirugía se emplea generalmente en pacien- En los últimos años se está aumentando el conoci-
tes con grados menores de obesidad o con pacientes miento sobre los mecanismos que condicionan la pér-
con elevado riesgo quirúrgico. La pérdida ponderal es dida de peso y la mejoría de las comorbilidades. Ade-
menor que la que se produce con otras técnicas de CB. más de la restricción y la malabsorción en grado
El porcentaje de reconversiones a otras técnicas es ele- variable secundarias a la cirugía, se han descrito modi-
vado, bien por pérdida insuficiente de peso o por com- ficaciones en hormonas que regulan el balance energé-
plicaciones técnicas. tico y el metabolismo intermediario, como la ghrelina,
El bypass biliopancreático o derivación bilio- GLP-1 o PYY, además de cambios en la microbiota o en
pancreática (DBP) es una técnica mixta en la que pre- el metabolismo de los ácidos biliares. Excede los objeti-
domina el componente malabsortivo9 Se realiza una vos de este capítulo la explicación de estos mecanis-
gastrectomía con anastomosis gastroyeyunal (que pro- mos, por lo que invitamos al lector a consultar revisio-
duce disminución de la ingesta) asociado a una deriva- nes recientes sobre este tema14.
ción biliopancreática que origina malabsorción, funda-
mentalmente de grasas. Diversos grupos en España 3. Cirugía bariátrica: Evaluación
realizan la modificación de la derivación biliopancreáti- preoperatoria y selección de los
ca introducida por Larrad10, en la que el canal alimen-
tario comprende casi todo el intestino delgado (> 300
pacientes
cm) y el biliopancreático es más corto (incluye el duo- La cirugía bariátrica es capaz de conseguir una im-
deno y los 50-60 cm de yeyuno proximal). El canal co- portante pérdida de peso y mejoría de la patología
mún se sitúa a 50-75 cm de la válvula ileocecal. En el asociada, pero puede no está exenta de riesgos y com-
cruce duodenal11 la gastrectomía es longitudinal, con plicaciones. Por este motivo, resulta fundamental se-
preservación pilórica. El canal común mide entre 50- leccionar adecuadamente a los candidatos a este tipo
100 cm. La creación de un asa alimentaria más larga de tratamiento. En general, la CB está indicada en pa-
puede disminuir el riesgo de complicaciones metabóli- cientes con formas graves de obesidad (IMC superior a
cas. En el bypass duodeno-ileal con gastrectomía 40 kg/m2 o superior a 35 con comorbilidad clínica­
vertical (SADI, single-anastomosis duodeno-ileal) mente importante), con un riesgo quirúrgico aceptable
se realiza una gastrectomía vertical con mantenimiento y en ausencia de factores que puedan afectar el cum-
del píloro y una anastomosis duodeno ileal12 de un pí- plimiento terapéutico15 (tabla 1). En los pacientes con
loro funcionante, que no necesita una diversión en Y DM mal controlada se puede considerar la CB con IMC
de Roux para evitar el reflujo alcalino. Estas técnicas entre 30-3516. En general, este tratamiento se indica
están especialmente indicadas en las formas más gra- para pacientes entre 18 y 60 años. Su utilización en
ves de obesidad, ya que la pérdida de peso es muy adolescentes requiere un protocolo específico. En las
importante, en torno al 70-80 % del exceso de peso. personas mayores de 60 años existe un mayor riesgo,
Las complicaciones más frecuentes son la flatulencia y condicionado en gran medida por la comorbilidad y no
diarrea, desnutrición y deficiencias de micronutrientes, tanto por la edad en sí, por lo que se puede considerar
más frecuentes que en otras técnicas. en base a criterios individuales.
No existe un acuerdo ni una recomendación concre- La evaluación del paciente previa a la CB deberá ser
ta para utilizar una técnica u otra. En general, las téc- lo más completa posible, con un protocolo establecido
nicas con componente malabsortivo se reservan para (tabla 2)17. Se debe realizar por un equipo multidisci-
pacientes con grados mayores de obesidad o comorbi- plinario que incluya endocrinólogos, cirujanos, psicólo-
lidad importante. En España, las técnicas que más se gos, psiquiatras, neumólogos, anestesistas, enferme-
realizan en la actualidad son el bypass gástrico laparos-
cópico y la gastrectomía vertical laparoscópica. Tabla 1.  Indicaciones de la cirugía bariátrica.
La CB ha demostrado ser un tratamiento eficaz en
el paciente con obesidad grave, consiguiendo una · IMC > 40 kg/m2
pérdida significativa de peso, mantenida en el tiem- · IMC > 35 asociado a patología importante
po, una resolución o mejoría de la mayor parte de las (DM, HTA, SAOS, artropatía, asma, etc.)
comorbilidades y una mejoría evidente de la calidad
· Ausencia de contraindicaciones
de vida de los pacientes. Estos resultados son espe-
– Enfermedad crónica no controlada, neoplasia
cialmente relevantes en el caso de la DM tipo 2. La
activa
tasa de remisión de la enfermedad oscila entre el 50-
– Enfermedad psiquiátrica no controlada,
90 % dependiendo de la técnica quirúrgica, con un
alcoholismo
descenso del riesgo de complicaciones macro y micro-
– Contraindicación o riesgo elevado para la CB
vasculares. La CB condiciona un descenso de la mor-
talidad, global, de la mortalidad secundaria a ECV y CB: cirugía bariátrica; DM: diabetes mellitus; HTA: hipertensión
cáncer, con respecto a los pacientes con obesidad no arterial; IMC: índice de masa corporal; SAOS: síndrome de apnea
intervenidos13. obstructiva del sueño.
146 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

ras, dietistas, fisioterapeutas, etc. La evaluación tiene cientes. Diversos estudios han observado que este trata-
como finalidad: miento es capaz de disminuir el tamaño hepático de
manera significativa y el contenido de grasa del híga-
•  Estudiar la etiología y los factores que condicio- do19. Esta disminución del tamaño hepático, evaluada
nan la obesidad. mediante TC y RM, llega a ser del 18,7 % (20-51,7)20. En
– Descartar obesidad secundaria: enfermedades el subgrupo de pacientes con mayor hepatomegalia (ta-
genéticas, patología endocrinológica, etc. maño hepático superior a 2,8 l), esta disminución fue
– Estudiar el patrón de ingesta, descartar trastor- muy superior (28,7 %). La pérdida de peso prequirúrgica
nos de la conducta alimentaria, consumo de disminuye la tasa de complicaciones, la estancia media
alcohol, etc. hospitalaria, el tiempo operatorio, la pérdida de sangre
– Otros factores: sedentarismo, efecto de los fár- durante la cirugía y el riesgo de conversión de la técnica
macos, etc. laparoscópica a cirugía abierta. Las guías clínicas reco-
– Evaluar la respuesta a otros tratamientos pre- miendan el tra­tamiento con dieta de muy bajo conteni-
vios para la obesidad y las causas del fracaso. do calórico previo a la CB, especialmente en los pacien-
•  Estudiar las consecuencias clínicas de la obesidad. tes con esteatosis hepática21.
•  Valorar las posibilidades y los riesgos de la cirugía.
Evaluación anestésica18. 4. Cirugía bariátrica: Seguimiento
postoperatorio
En esta fase de evaluación preoperatoria resulta fun-
El paciente con obesidad mórbida presenta en gene-
damental la evaluación y control de la comorbilidad del
ral un elevado riesgo de complicaciones perioperato-
paciente (diabetes, HTA; dislipemia, patología respira-
rias, a lo que se añade una especial dificultad para uti-
toria, etc.) y el abandono del hábito tabáquico, con la
lizar algunas pruebas diagnósticas, como la TC. Se
finalidad de mejorar la situación clínica previa a la ciru-
debe realizar siempre en un entorno apropiado, con
gía. Se debe asegurar una anticoncepción eficaz.
acceso a una unidad de cuidados intensivos y por un
La utilización una dieta de muy bajo contenido
equipo clínico experimentado y multidisciplinario.
calórico durante las semanas previas a la CB ejerce un
efecto beneficioso sobre la evolución clínica de los pa-
a. Postoperatorio inmediato

Tabla 2.  Protocolo de evaluación preoperatoria. En el postoperatorio inmediato se debe prestar espe-
cial atención a la prevención y tratamiento de posibles
· Historia clínica complicaciones (respiratorias, infecciosas, trombóti-
cas). Los pasos y recomendaciones de la estrategia fast-
· Exploración física
track para los pacientes quirúrgicos se deben aplicar
· Determinaciones bioquímicas: también en cirugía bariátrica. Incluyen la movilización
– Hemograma, coagulación precoz del paciente, el control de la fluidoterapia, anal-
– Bioquímica general que incluya glucosa, ácido gesia adecuada evitando opiáceos, prevención de náu-
úrico, pruebas de función hepática y renal, seas y vómitos, inicio precoz de la tolerancia oral, entre
estudio lipídico, hemoglobina glicosilada, otras medidas22.
proteínas viscerales, sobrecarga oral de glucosa Como la tolerancia oral se inicia a los pocos días de
– Estudio de minerales y micronutrientes: sodio, la cirugía, no resulta necesario utilizar soporte nutricio-
potasio, calcio, fósforo, magnesio, zinc, folato, nal. Debemos recordar que el paciente con obesidad,
vitamina B12, vitaminas liposolubles aunque tolera adecuadamente los períodos de ayuno,
– Estudio hormonal (insulina, PTH, función tiroidea presenta un elevado riesgo de desnutrición aguda en
y gonadal, etc.) relación con el estrés metabólico. Por este motivo, se
· Radiografía de tórax, ECG debe considerar el tratamiento con nutrición parente-
· Pruebas de función respiratoria, oximetría nocturna ral o enteral si se presenta alguna complicación que
o estudio polisomnográfico impide una adecuada ingesta por vía oral.
· Estudio radiológico gastroduodenal, ecografía
b. Seguimiento a largo plazo
abdominal
· Valoración psicológica El seguimiento clínico tras la cirugía bariátrica tiene
· Valoración anestésica los siguientes objetivos:
· Otros: densitometría ósea, ecocardiograma, estudio
genético, etc. •  Modificar las pautas dietéticas y de actividad física.
•  Evaluar la evolución del peso y los cambios en la
· Consentimiento informado
composición corporal.
Tema 9.  Obesidad: Tratamiento quirúrgico 147

•  Evaluar la evolución de la comorbilidad, modifi- La dieta a largo plazo tras la CB debe cumplir las
cando el tratamiento si es preciso. premisas clásicas del tratamiento de la obesidad: hipo-
•  Prevenir o diagnosticar de forma precoz las posi- calórica, equilibrada y adecuada para cada paciente. Es
bles complicaciones. importante asegurar una adecuada ingesta proteica,
en torno a 1-1,2 g/kg/día, que será mayor en las técni-
Este seguimiento exige un compromiso entre el pa- cas con mayor componente malabsortivo (BPG distal,
ciente y el equipo clínico y una colaboración lo más DBP). Se dará prioridad al consumo de pescado, hue-
cercana posible con los equipos de atención primaria. vos, carne magra, lácteos y legumbres. La dieta debe
aportar verduras y frutas, pero se limitará sin embargo
4.1. Recomendaciones dietéticas tras la cirugía el consumo de harinas refinadas, dulces, etc.
La intolerancia a algunos alimentos es frecuente tras
bariátrica
la CB. Los alimentos que peor se toleran son la carne,
Las recomendaciones dietéticas en el postoperatorio el pan, la pasta y el arroz y el agua. Con la finalidad de
de la CB dependen de la técnica quirúrgica empleada, asegurar una hidratación adecuada, se recomienda
que el paciente debe conocer y comprender23. Se trata sustituir el agua por otros líquidos, que se toleran me-
de un proceso largo de educación a la nueva situación, jor, como caldos, infusiones, agua con limón, etc., que
para que se favorezca la pérdida de peso y el manteni- se deben tomar preferentemente separados de las co-
miento y se disminuya el riesgo de complicaciones. Des- midas principales.
pués de la cirugía se comienza por una dieta líquida, que Se debe evitar la ingesta de bebidas alcohólicas de
va aumentando progresivamente en consistencia, utili- cualquier tipo. Además del aporte calórico, la ingesta
zando purés o similares24. Posteriormente se van incor- de etanol favorece la deficiencia de micronutrientes
porando alimentos en su estado natural. Las técnicas con (tiamina, riboflavina, piridoxina, folato, vitamina C, vi-
un mayor componente restrictivo exigen que la dieta se tamina A, magnesio, zinc)25. Por otro lado, el alcohol
fraccione en varias tomas de pequeño volumen. A medi- sufre un metabolismo de primer paso por la acción de
da que mejora la tolerancia, es necesario ajustar el núme- la enzima alcohol deshidrogenasa de la pared del estó-
ro de tomas para evitar un aporte calórico excesivo. mago. Los cambios anatómicos tras la CB pueden alte-
La tabla 3 describe las recomendaciones dietéticas rar este metabolismo, incrementar el efecto nocivo del
generales tras CB. alcohol o favorecer la adicción. La absorción de etanol
aumenta tras el BPG y se ha descrito un aumento de la
•  Dieta líquida o semilíquida: Se emplea durante
las primeras 2-4 semanas postcirugía, para prote-
ger las anastomosis y prevenir la dilatación del Tabla 3.  Recomendaciones dietéticas generales tras
residuo gástrico. Se debe asegurar una ingesta de la cirugía bariátrica.
líquidos superior a 1000-1500 ml al día. La inges-
ta de líquidos se realizará en pequeñas tomas a lo · Ingerir 1-1,5 litros de líquidos a lo largo del
largo de todo el día, para mejorar la tolerancia y día, preferentemente separados de la ingesta de
prevenir la deshidratación. En general, se toleran alimentos sólidos o semisólidos.
mejor las infusiones, caldos, etc. que el agua. Con · Comer lentamente, masticando bien y sin distracciones.
la finalidad de aumentar el aporte proteico, se · Dejar de comer si nota sensación importante de
pueden utilizar suplementos nutricionales orales plenitud.
hipocalóricos e hiperproteicos, o bien enriquecer
la dieta con proteína en polvo, clara de huevo, etc. · Evitar tumbarse inmediatamente después de comer.
Con este tipo de dieta, muy pobre en residuo, es · Evitar las bebidas con gas y los alimentos
muy frecuente el estreñimiento, especialmente si flatulentos.
el estado de hidratación no es adecuado. · Evitar bebidas azucaradas.
•  Dieta semisólida: Esta fase dura 2-6 semanas. · Evitar la ingesta de alcohol.
Poco a poco se irán introduciendo purés, sopas y
alimentos semisólidos, adaptando el volumen de · Evitar la ingesta de alimentos que puedan producir
las tomas al tamaño del remanente gástrico. Los obstrucción de la salida del estómago, como piel o
purés deben contener verduras y alimentos ricos huesos de frutas, etc.
en proteínas, como pollo, carne o pescado. · Asegurar la ingesta de alimentos ricos en proteínas.
•  Dieta con alimentos de consistencia normal: · Si es posible, tomar los medicamentos en forma
La dieta será progresivamente más variada, pres- líquida triturados. No todas las formulaciones se
tando especial atención a la educación alimenta- pueden triturar; consultar al respecto.
ria continuada para conseguir una adecuada pér-
· Si presenta vómitos persistentes, se pondrá en
dida de peso. Esta fase se iniciará con alimentos
contacto con el equipo clínico lo antes posible.
blandos, cocinados de manera sencilla.
148 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

adicción al alcohol, especialmente tras el BPG y des- Tabla 5.  Complicaciones de la cirugía bariátrica.
pués del segundo año tras la cirugía26.
El seguimiento clínico se debe mantener de manera in- · Complicaciones perioperatorias:
definida, con una coordinación protocolizada entre aten- – Infecciones, TEP, hemorragia, dehiscencia
ción primaria y atención especializada y una periodicidad anastomosis
que dependerá de la evolución del paciente y de la exis- · Complicaciones quirúrgicas:
tencia de complicaciones. La tabla 4 recoge una propues- – Colelitiasis
ta de protocolo que incluye evaluaciones complementa- – Hernia interna
rias. Las determinaciones analíticas necesarias dependen – Úlcera de boca anastomótica
del tipo de cirugía y de la evolución clínica del paciente.
· Complicaciones nutricionales:
– Desnutrición proteica
5. Complicaciones de la cirugía bariátrica – Déficit de micronutrientes
La cirugía bariátrica es una modalidad terapéutica · Hipoglucemia
que no está exenta de complicaciones (tabla 5). En · Descenso de masa ósea
este capítulo, describiremos con más detalle las com-
· Litiasis renal
plicaciones nutricionales.
Las complicaciones peroperatorias más frecuentes son
las infecciones, hemorragia, dehiscencia de la anastomosis
y complicaciones trombóticas. La mortalidad perioperato-
ria debe ser inferior al 1 %. La experiencia del equipo clíni- •  Desnutrición proteica
co es fundamental para prevenir complicaciones graves.
En general, se recomienda tratamiento con omepra- Es una de las complicaciones más graves y más temi-
zol u otros inhibidores de la bomba de protones du- das de la derivación biliopancreática, aunque también
rante 3-6 meses tras el BPG o DBPy tras tubulización puede ocurrir tras el bypass gástrico, especialmente el
gástrica para disminuir el reflujo gastroesofágico. distal o las técnicas restrictivas puras. En ocasiones
La pérdida excesiva de peso, la desnutrición proteica y conduce a la reconversión de la cirugía. Se caracteriza
la deficiencia de micronutrientes son las complicaciones clínicamente por la aparición de edemas, astenia, caída
nutricionales más frecuentes de la cirugía bariátrica. Son de cabello, ganancia de peso (en forma de edema) y
una consecuencia de los mismos mecanismos responsa- una mayor susceptibilidad a las infecciones. Esta com-
bles de la pérdida de peso (disminución de la ingesta y plicación es más frecuente durante el primer año tras la
malabsorción), a los que habitualmente se asocia un mal cirugía. Se deben evaluar periódicamente los niveles
cumplimiento con la suplementación prescrita. En otras plasmáticos de proteínas viscerales (albúmina, prealbú-
ocasiones, existe una etiología concreta relacionada con mina, transferrina).
la CB (fístulas, estenosis) que favorece el deterioro nutri- El riesgo de esta complicación depende de factores
cional. La coexistencia de otra patología intercurrente, relacionados con la técnica quirúrgica, como son la
como una infección, enfermedad neoplásica, cirugía, de- magnitud de la gastrectomía, la longitud del tracto ali-
presión, etc., es otro factor a tener en cuenta. mentario y la del tracto común. La coexistencia de de-
terminadas enfermedades en el paciente, como son la
•  Pérdida ponderal excesiva aparición de un cuadro depresivo, una enfermedad
neoplásica, cirugía mayor, infección grave, etc., pue-
Esta situación, poco frecuente, exige un estudio etio- den favorecer el desarrollo de desnutrición proteica.
lógico detallado: vómitos, restricción de la ingesta por El tratamiento dependerá de la causa que lo produce
trastorno de la conducta alimentaria, aparición de y de la gravedad de los síntomas. En los casos leves,
complicaciones, como estenosis, fístulas, etc. puede bastar con la modificación de la dieta oral, aña-

Tabla 4.  Protocolo de evaluación postoperatoria.

1m 3m 6m 12 m 18 m 24 m Anual
Evaluación clínica x x x x x x x
Hemograma bioquímica, Fe, Ca, P, Mg x x x x x x x
Vitaminas, oligoelementos x x x x
Densitometría ósea x
Ecografía abdominal x
Tema 9.  Obesidad: Tratamiento quirúrgico 149

diendo suplementos proteicos si es preciso y enzimas han descrito tras BPG32,33. Generalmente cursan
pancreáticas. Los casos graves precisan ingreso y so- de manera asintomática34.
porte nutricional con nutrición enteral o nutrición pa- Se recomienda que los suplementos de micronu-
renteral. Se debe prevenir el síndrome de realimenta- trientes aporten cobre, pero la evaluación y suple-
ción: administrar tiamina a dosis elevadas de manera mentación específica se reserva para los pacientes
preventiva, prevenir y tratar la hipopotasemia, hipo- con sintomatología sugestiva de deficiencia. Se
magnesemia e hipofosfatemia y vigilar los signos de debe tener en cuenta que la suplementación con
sobrecarga hídrica27. zinc disminuye la absorción de cobre.
Se ha descrito deficiencia de selenio tras CB35; la
•  Deficiencia de micronutientes evaluación y suplementación específica se reserva
también para los casos con síntomas sugestivos
Las deficiencias de micronutrientes son frecuentes en de deficiencia.
los pacientes sometidos a cirugía bariátrica, pero pue-
den prevenirse o tratarse de forma precoz si el pacien- –  Ácido fólico
tes realiza un seguimiento adecuado. La prevalencia de deficiencia de ácido fólico tras
CB es muy variable. Una revisión sistemática publi-
–  Hierro cada recientemente no observa un mayor riesgo
El déficit de hierro y la anemia ferropénica son de deficiencia tras CB36. Teniendo en cuenta que
muy frecuentes tras la CB (35-50 % y 20-30 %, res- la absorción se realiza a lo largo del intestino, es
pectivamente), especialmente en mujeres en edad probable que dependa más de una ingesta insufi-
fértil28, 29. Los factores principales predisponentes ciente. Se recomienda realizar una suplementa-
son la disminución de la ingesta de alimentos ri- ción con folato como parte del suplemento multi-
cos en hierro, la modificación del pH gástrico, la vitamínico. El alcohol predispone a la deficiencia
exclusión de los lugares de absorción preferente de esta vitamina.
(duodeno y yeyuno proximal) y el aumento de las
pérdidas (por ejemplo, pérdidas menstruales). –  Vitamina B12
Teniendo en cuenta la elevada prevalencia de fe- La vitamina B12 presenta una absorción compleja
rropenia, se recomienda realizar una suplementa- y su deficiencia es frecuente tras la CB (26-70 %)37,
ción preventiva tras la CB, con una dosis que de- especialmente tras el BPG38. La dosis que aporta el
penderá de las características clínicas del paciente; preparado multivitamínico no es suficiente para
en general, se recomiendan 45-60 mg/día. prevenir esta deficiencia.
A pesar de que el 1-5 % de la vitamina B12 por vía
–  Calcio oral se puede absorber por difusión pasiva, inde-
pendientemente del factor intrínseco, y algunos
La resección gástrica, la exclusión de los primeros
estudios han observado que una dosis superior a
tramos del intestino delgado y la esteatorrea dismi-
350 µg/día puede ser suficiente39, la evidencia de la
nuyen la absorción de calcio tras la CB, incluso con
eficacia a largo plazo del tratamiento oral con vita-
niveles normales de vitamina D30. Además, la inges-
mina B12 tras el BPG es limitada7. Se puede utilizar
ta dietética no alcanza en general las recomenda-
también la vía sublingual e intranasal. La adminis-
ciones. El déficit de calcio condiciona hiperparati-
tración intramuscular, a dosis de 1 000 µg/1-3 me-
roidismo secundario, aumento de la resorción ósea
ses, es la pauta más recomendada.
y eventualmente hipocalcemia.
Se recomienda una ingesta de calcio de 1200-
–  Tiamina
1500 mg/día tras la CB, en forma de alimentos o
suplementos, especialmente en técnicas que ex- Los depósitos corporales de tiamina son muy redu-
cluyen el duodeno y yeyuno proximal. Los prepa- cidos, lo cual facilita el desarrollo de deficiencia si
rados con citrato se absorben mejor. existe disminución de la ingesta o vómitos.
Han sido publicados numerosos casos de encefa-
–  Magnesio lopatía de Wernicke y otras manifestaciones neu-
rológicas tras CB, fundamentalmente asociados a
La deficiencia de magnesio es poco frecuente,
técnicas restrictivas. La mayor parte de los casos
aunque se puede producir en pacientes que ten-
ocurrieron en los primeros meses tras la cirugía y
gan una diarrea importante.
se manifestaron clínicamente por diplopía, nistag-
mo, dismetría y signos de neuropatía periférica.
–  Zinc, cobre y selenio Casi todos los pacientes presentaban vómitos. El
La deficiencia de zinc y cobre es frecuente tras la tratamiento de la deficiencia de tiamina se debe
derivación biliopancreática31, aunque también se iniciar de forma inmediata, ya que retrasos en el
150 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

inicio del mismo pueden condicionar que la recu- 5.1.  Síndrome de dumping precoz y tardío.
peración no sea completa. Se recomienda utilizar Hipoglucemia
dosis elevadas por vía parenteral (100-200 mg/día),
seguido de una dosis de mantenimiento oral du- Se denomina síndrome de dumping al cuadro clíni-
rante varios meses. La deficiencia de tiamina for- co que pueden presentar los pacientes sometidos a
ma parte del síndrome de realimentación. cirugía bariátrica con derivación gastroentérica que
ocurre tras la ingesta. El síndrome de dumping precoz
–  Vitamina D ocurre pocos minutos después de las comidas y se
Es la vitamina liposoluble que se afecta con mayor manifiesta por mareo, hipotensión, taquicardia o bra-
frecuencia40. En general, la dosis necesaria para dicardia. Se piensa que se produce como consecuen-
mantener unos niveles plasmáticos superiores a cia de los cambios hemodinámicos que ocurren tras la
30 ng/ml es mayor que la que aportan los multivi- ingesta, con la llegada rápida al yeyuno de un líquido
tamínicos o los preparados de calcio y vitamina D. de alta osmolaridad. Se puede prevenir haciendo in-
En general, se recomienda 2 000-3 000 UI/día41. gestas de cantidad reducida, limitando los líquidos
durante las comidas, especialmente si tienen elevada
–  Vitaminas A, E y K osmolaridad (zumos, caldos comerciales) y haciendo
reposo después de comer.
La deficiencia de vitamina A se observa general-
Los pacientes sometidos a cirugía bariátrica, espe-
mente tras técnicas malabsortivas, como DBP o
cialmente con técnicas que excluyen el duodeno,
cruce duodenal, pudiendo alcanzar una inciden-
pueden presentar también cuadros de hipoglucemia,
cia del 60 % y puede tener consecuencias clínicas.
de diferente gravedad, que corresponden con el tam-
Se recomienda evaluar el estado nutricional y rea-
bién denominado síndrome de dumping tardío. Los
lizar una suplementación específica en los pacien-
síntomas se producen a los 60-90 minutos tras la in-
tes sometidos a estas técnicas. También se han
descrito deficiencias de vitamina E y de vitamina K42, gesta, siendo los más frecuentes sudoración, taqui-
habitualmente asintomáticas. cardia y debilidad. En algunos casos pueden aparecer
Es necesario interpretar correctamente los valores síntomas de neuroglucopenia (dificultad en la con-
de los niveles plasmáticos43 (por ejemplo, ajustar centración, alteración del nivel de conciencia, etc.). El
la vitamina A proteina ligada al retinol –RBP– a aumento de secreción de hormonas con efecto incre-
RBP o la vitamina E al colesterol). tina (como GLP-1) puede ser una de las causas de
esta complicación. Se han descrito incluso casos de
Es importante prevenir el desarrollo de estas defi- nesidioblastosis, o proliferación de los islotes pan-
ciencias mediante la suplementación rutinaria con creáticos.
micronutientes, y vigilar periódicamente los niveles La monitorización de la glucemia en sangre capilar
plasmáticos para diagnosticar y tratar una eventual de- durante los episodios puede ayudar a establecer el
ficiencia de forma precoz44. No existen suficientes estu- diagnóstico. La sobrecarga oral de glucosa tiene muy
dios sobre la suplementación profiláctica con micronu- poca especificidad, ya que la mayor parte de los pa-
trientes que permitan hacer una recomendación sólida. cientes tras BPG pueden presentar una hipoglucemia al
En general, se recomienda administrar un multivitamí- final de la prueba. Otras herramientas, como la res-
nico que incluya las recomendaciones de micronutrien- puesta glucémica ante una comida mixta, no están su-
tes en todos los pacientes, aumentando la dosis si la ficientemente estandarizadas45.
técnica tiene un componente malabsortivo clínicamen- El tratamiento consiste en medidas dietéticas, como
te significativo. En estas técnicas, se recomienda ade- evitar la ingesta de carbohidratos de absorción rápida
más suplementación preventiva con hierro, vitamina y fraccionar su ingesta a lo largo del día. Los inhibido-
B12 y vitamina D (tabla 6). res de la alfaglucosidasa (como la acarbosa) pueden

Tabla 6.  Propuesta de suplementación preventiva.

Calcio/ Vitamina D dosis Vitaminas


Multivitamínico Fe Zn (Cu)
vitamina D B12 elevadas A/E/K
Banda gástrica x
Gastrectomía vertical x Valorar Valorar Valorar Valorar
BPG x-2x x x x x Valorar Valorar
DBP 2x x x x x Valorar Valorar
Tema 9.  Obesidad: Tratamiento quirúrgico 151

mejorar los síntomas. En algunos casos es necesario situación de riesgo nutricional que obliga a una super-
utilizar análogos de la somatostatina, que retrasan el visión y un seguimiento a largo plazo y requiere una
vaciamiento gástrico e inhiben la liberación de insulina, suplementación específica.
diazóxido, o incluso reversión de la cirugía bariátrica o Un seguimiento clínico protocolizado y un adecuado
pancreatectomía. cumplimiento terapéutico favorecen la pérdida de
peso y el mantenimiento del peso perdido tras la ciru-
5.2.  Cirugía bariátrica. Efecto sobre el hueso gía bariátrica y minimizan el riesgo de complicaciones

Diversos estudios han observado que la densidad mi-


neral ósea disminuye tras la cirugía bariátrica, de ma-
8. Bibliografía
nera más evidente en el cuello femoral46. Este hecho   1. Yanovski SZ, Yanovski JA. Obesity. N Engl J Med
puede ser consecuencia de los cambios adaptativos del 2002; 346:591-602.
hueso a la pérdida de peso, a la deficiencia de calcio,   2. Calle EE, Rodríguez C, Walter-Thumbond K, Thun
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sobrestimar el descenso de masa ósea. Se ha observa-   3. Gutiérrez-Fisac JL1, Guallar-Castillón P, León-Mu-
do un aumento del riesgo de fracturas tras CB, espe- ñoz LM, Graciani A, Banegas JR, Rodríguez-Artale-
cialmente tras procedimientos malabsortivos47. Es im- jo F. Prevalence of general and abdominal obesity
portante, en todo caso, asegurar un adecuado aporte in the adult population of Spain, 2008-2010: the
de calcio, unos niveles apropiados de vitamina D (supe- ENRICA study Obes Rev. 2012 Apr;13(4):388-92.
riores a 30 ng/ml), una ingesta proteica suficiente y   4. Soriguer F, Goday A, Bosch-Comas A, Bordiú E, Ca-
favorecer el ejercicio físico, además de evitar el tabaco lle-Pascual A, Carmena R, et al. Prevalence of diabetes
y la ingesta de alcohol. mellitus and impaired glucose regulation in Spain:
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La obesidad aumenta el riesgo de complicaciones en obesidad general y obesidad abdominal en la po-
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del embarazo y preeclampsia, macrosomía y proble-   6. García Luna PP. Costes económicos de la obesidad.
mas en el parto. Además, en la obesidad existe con Revista Española de Obesidad. 2005; 3:11-12.
frecuencia infertilidad. En la gestación tras CB existe un   7. Arterburn DE, Courcoulas AP. Bariatric surgery for
menor riesgo de diabetes gestacional, estados hiper- obesity and metabolic conditions in adults.BMJ.
tensivos del embarazo y macrosomía. Sin embargo, 2014 ;349:g3961.
hay un mayor riesgo de prematuridad y de recién naci-   8. Juodeikis Ž, Brimas G. Long-term results after slee-
do de bajo peso para la edad gestacional48,49. También ve gastrectomy: A systematic review. Surg Obes
puede existir un mayor riesgo de vómitos, anemia y Relat Dis. 2016 Oct 17. pii: S1550-7289(16)30745-
déficit de micronutrientes y problemas mecánicos con 6. doi: 10.1016/j.soard.2016.10.006.
la banda gástrica.   9. Scopinaro N, Adami GF, Marinari GM, Gianetta E,
Se recomienda evitar la gestación durante el período Traverso E, Friedman D, Camerini G, Baschieri G,
de mayor pérdida de peso (esperar hasta pasados 12- Simonelli A. Biliopancreatic diversion World J Surg
18 meses tras la cirugía). Es necesario vigilar la ganan- 22:936-46, 1998.
cia de peso, el crecimiento fetal y el estado nutricional 10. Larrad-Jiménez A1, Díaz-Guerra CS, de Cuadros
y de micronutrientes de la mujer gestante49. Borrajo P, Lesmes IB, Esteban BM. Short-, mid-
and long-term results of Larrad biliopancreatic di-
7.  Resumen y conclusiones version. Obes Surg. 2007;17:202-10.
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La cirugía bariátrica es un tratamiento capaz de con- mórbida. Cruce duodenal. Cirugía Española, 05 
seguir una pérdida de peso en los pacientes con obesi- 2004 ; 75: 259-265.
dad grave que permite mejorar significativamente su 12.  Sánchez-Pernaute A, Herrera MA, Pérez-Aguirre
situación clínica y la patología asociada. ME, Talavera P, Cabrerizo L, Matía P, Díez-Vallada-
Este tratamiento requiere que el paciente modifique res L, Barabash A, Martín-Antona E, García-Botella
su pauta de alimentación de manera mantenida en el A, Garcia-Almenta EM, Torres A Single anastomo-
tiempo, que debe ser controlada de manera adecuada. sis duodeno-ileal bypass with sleeve gastrectomy
La disminución de la ingesta y la malabsorción que (SADI-S). One to three-year follow-up.Obes Surg.
asocian algunas técnicas suponen para el paciente una 2010;20:1720-6. D.
152 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

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Tema 10.
Soporte nutricional en los trastornos
de la conducta alimentaria
M.ª Cristina Cuerda Compés
Médico Adjunto de la Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Hospital General Universitario Gregorio
Marañón. Madrid
Marta Motilla de la Cámara
Médico Adjunto de la Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Hospital General Universitario Gregorio
Marañón. Madrid
Loredana Arhip
Dietista-Nutricionista de la Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Hospital General Universitario
Gregorio Marañón. Madrid
Pilar García-Peris
Jefe de la Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Hospital General Universitario Gregorio Marañón. Madrid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 155-167.

1. Introducción
2.  Fisiopatología y diagnóstico
3.  Objetivos nutricionales
4.  Valoración nutricional
5.  Dietética
6.  Soporte nutricional artificial
7.  Resumen
8.  Bibliografía

1. Introducción gen corporal. El trastorno por atracón se caracteriza


por la presencia de atracones que no van seguidos de
Los trastornos del comportamiento alimentario conductas de tipo purgativo (vómitos, ejercicio, etc.).
(TCA) son un grupo de enfermedades psiquiátricas que Es frecuente que los pacientes con TCA evolucionen de
eran casi desconocidas hace apenas 40 años. Se carac- una categoría diagnóstica a otra a lo largo de su vida2.
terizan por tener una alteración definida del patrón de En las mujeres adolescentes de los países occidenta-
ingesta o de la conducta sobre el control de peso, que les se estima una prevalencia del 1 % para la AN y del
produce un deterioro físico y psicosocial. Además, esta 2-4 % para la BN3. Aunque los datos referidos a varo-
alteración de la conducta no debe ser secundaria a nin- nes son más limitados, se estima una relación de pre-
guna otra enfermedad médica o psiquiátrica. La clasifi- valencia entre mujeres y varones de 9:1. Los varones
cación de los TCA ha sido recientemente modificada en homosexuales parecen tener un mayor riesgo. La edad
la última edición del DSM-5, siendo los más relevantes de comienzo de la AN suele ser la adolescencia o juven-
la anorexia nerviosa (AN), la bulimia nerviosa (BN) y el tud, aunque algunos casos aparecen después de los
trastorno por atracón1. 40 años o en la infancia. La BN suele tener un comienzo
La AN se caracteriza por el rechazo a mantener el más tardío, alrededor de los 18-20 años. Estas enferme-
peso en los valores mínimos normales, miedo intenso a dades afectan predominantemente a las sociedades oc-
ganar peso y alteración de la imagen corporal. La BN cidentales, preferentemente a la raza blanca. En los pri-
consiste en la aparición de episodios recurrentes de in- meros trabajos publicados, la AN ocurría de forma
gesta compulsiva seguidos de conductas compensato- preferente en estratos socioculturales medio-altos y al-
rias (vómitos, ejercicio, uso de laxantes, diuréticos), tos, si bien en estudios más recientes aparece en todas
acompañándose también de una alteración de la ima- las clases sociales. La BN tiene una distribución social

155
156 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

más homogénea. Además, algunos grupos profesiona- gen del transportador de serotonina SERT, gen del
les como modelos, bailarinas, atletas, gimnastas, etc., transportador de noradrenalina NET, entre otros)7.
parecen más afectados. En la mayoría de los estudios las Además, suelen existir problemas psicológicos y de
pacientes con AN presentan un muy buen rendimiento la dinámica familiar. Los pacientes con AN se describen
escolar, lo que suele ir ligado a actitudes de autoexigen- como ansiosos, depresivos, perfeccionistas y con baja
cia, perfeccionismo y deseo de agradar a los demás. autoestima. Entre los pacientes con BN predominan los
El trastorno por atracón es el más frecuente de los problemas de control de impulsos. También son im-
TCA y su frecuencia oscila entre el 3,5 % en mujeres y el portantes las influencias culturales con el énfasis en la
2 % en varones4, similar en diferentes razas. Son más delgadez existente en nuestra sociedad, exacerbado
frecuentes en pacientes con baja autoestima, con ante- por los medios de comunicación. Todos estos factores
cedentes de obesidad infantil y con excesiva preocupa- pueden concluir en la aparición de un TCA en un ado-
ción por la forma corporal, y afecta hasta al 30 % de los lescente vulnerable.
pacientes obesos. El tratamiento de los TCA requiere de un equipo
La evolución de estas enfermedades es tórpida, con multidisciplinario en el que participen profesionales
gran tendencia a la cronicidad, pudiendo originar la familiarizados con estos trastornos (médicos especia-
muerte. Asimismo, estas enfermedades son capaces de listas en nutrición, enfermeras, dietistas), psiquiatras
producir complicaciones médicas graves e interfieren y psicólogos, entre otros. Este tratamiento incluye el
con el desarrollo psíquico y social del individuo. La AN tratamiento nutricional y de las complicaciones de la
es una enfermedad grave con una mortalidad del enfermedad, la psicoterapia y los psicofármacos. Es
5-10 % (debido a suicidio, alteraciones hidroelectrolíti- importante recordar que el tratamiento de estos tras-
cas y arritmias), que la coloca a la cabeza de las enfer- tornos suele ser largo y puede variar entre 1 y 5 años
medades psiquiátricas5. La muerte es más frecuente en dependiendo de la gravedad8.
los pacientes con conductas purgativas o abuso de sus-
tancias y en los que presentan fluctuaciones en su 2.  Fisiopatología y diagnóstico
peso, que en los que mantienen un peso estable, aun-
que este sea muy bajo (IMC < 12). Aproximadamente El diagnóstico de los TCA es fundamentalmente clíni-
el 44 % de los pacientes se curan, el 28 % mejoran y el co. Puesto que se incluyen dentro de las enfermedades
24 % se cronifican. El principal factor de buen pronós- mentales, la mayor parte de los autores están de acuerdo
tico es el inicio en adolescentes jóvenes, mientras que en utilizar los criterios diagnósticos propuestos por la
entre los factores de mal pronóstico se encuentran los Asociación Americana de Psiquiatría que han sido recien-
vómitos, conductas purgativas, pérdida de peso impor- temente actualizados (DSM-5, Diagnostic and Statistical
tante, un mayor tiempo de evolución y la personalidad Manual of Mental Disorders, 5ª edición) (tabla 1)1.
obsesivo-compulsiva. La BN suele tener una evolución Para la codificación de la AN el CIE-10-MC establece
más benigna, con curación en el 50 % de los casos, dos subtipos: el restrictivo y el tipo con atracones/pur-
mejoría en el 30 % y persistencia en el 20 %. Entre los gas. La gravedad de la enfermedad se establece según
factores de buen pronóstico se sitúan el inicio en eda- el índice de masa corporal (IMC): en los adultos, será
des tempranas, duración corta de la enfermedad, per- leve si el IMC > 17 kg/m2, moderado con IMC 16-
tenecer a una clase social alta o tener historia familiar 16,99, grave con IMC 15-15,99 y extremo cuando el
de alcoholismo. Entre los factores de mal pronóstico IMC < 15 kg/m2; en los niños se utilizan los percentiles
destacan la existencia de obesidad en la infancia, baja de IMC correspondientes.
autoestima y las alteraciones de la personalidad. La evaluación médica incluirá un diagnóstico dife-
La etiología de estas enfermedades es multifactorial e rencial con otras patologías que puedan también pro-
incluye factores biológicos, psicológicos y culturales. La ducir un deterioro del estado nutricional, así como es-
influencia genética parece muy importante en estos tudiar las posibles secuelas de la enfermedad en el
trastornos, especialmente en la AN (que explicaría hasta paciente. Esta valoración permitirá además enfocar el
un 56 % del riesgo). Los estudios familiares y de gemelos tratamiento y decidir si el paciente precisa o no ser hos-
también sugieren un fuerte componente genético en la pitalizado. En la tabla 2 se muestran los estudios de
AN y BN. Dentro de los factores biológicos se encuen- laboratorio y las pruebas que es aconsejable realizar en
tran las alteraciones neuroquímicas6. La más conocida estos pacientes.
de ellas es la disregulación de la serotonina, que tam- El cuadro clínico típico de la AN es el de una adoles-
bién explicaría la alta incidencia de comorbilidades psi- cente que presenta pérdida de peso y amenorrea sin
quiátricas en estos pacientes como depresión, ansiedad causa aparente, lo cual llama la atención de los padres
y trastornos obsesivo-compulsivos, los cuales se asocian y familiares, que suelen consultar con un médico. En el
a alteraciones en el sistema serotoninérgico. Se han en- caso de la BN, el cuadro puede pasar inadvertido para
contrado alteraciones en estos pacientes en algunos ge- las personas que conviven con la paciente durante mu-
nes ligados a diferentes neurotransmisores (gen del re- cho tiempo, ya que no suele existir un deterioro del
ceptor 5HT2A, gen de la monoaminooxidasa A MAOA, estado nutricional.
Tema 10.  Soporte nutricional en los trastornos de la conducta alimentaria 157

Tabla 1.  Criterios diagnósticos de los trastornos de la conducta alimentaria.

Anorexia nerviosa:
· Restricción de la ingesta energética en relación con las necesidades, que conduce a un peso corporal significativamente
bajo con relación a la edad, el sexo, el curso de desarrollo y la salud física. Peso significativamente bajo se define como
un peso que es inferior al mínimo normal o, en niños y adolescentes, inferior al mínimo esperado.
· Miedo intenso a ganar peso o engordar, o comportamiento persistente que interfiere en el aumento de peso,
incluso con un peso significativamente bajo.
· Alteración en la forma en que uno mismo percibe su propio peso o constitución, influencia impropia del peso
o la constitución corporal en la autoevaluación, o falta persistente de reconocimiento de la gravedad del peso
corporal bajo actual.
Bulimia nerviosa:
· Episodios recurrentes de atracones.
· Comportamientos compensatorios inapropiados recurrentes para evitar el aumento de peso, como el vómito
autoprovocado, el uso incorrecto de laxantes, diuréticos u otros medicamentos, el ayuno o el ejercicio excesivo.
· Los atracones y los comportamientos compensatorios inapropiados se producen, de promedio, al menos una vez a
la semana durante tres meses.
· La autoevaluación se ve indebidamente influida por la constitución y el peso corporal.
· La alteración no se produce exclusivamente durante los episodios de anorexia nerviosa.
Trastorno por atracón:
· Episodios recurrentes de atracones.
· Los episodios de atracones se asocian a tres (o más) de los hechos siguientes:
–  Comer mucho más rápidamente de lo normal.
–  Comer hasta sentirse desagradablemente lleno.
–  Comer grandes cantidades de alimentos cuando no se siente hambre físicamente.
–  Comer solo debido a la vergüenza que se siente por la cantidad que se ingiere.
–  Sentirse luego a disgusto con uno mismo, deprimido o muy avergonzado.
· Malestar intenso respecto a los atracones.
· Los atracones se producen, de promedio, al menos una vez a la semana durante tres meses.
· El atracón no se asocia a la presencia recurrente de un comportamiento compensatorio inapropiado como en la
bulimia nerviosa y o se produce exclusivamente en el curso de la bulimia.

Tabla 2.  Pruebas recomendadas en el estudio de Las manifestaciones clínicas de estas enfermedades
pacientes con trastornos de la conducta alimentaria. (sobre todo la AN) son multisistémicas debido a que se
afectan casi todas las partes del organismo como con-
Valoración inicial: secuencia de la desnutrición, pudiendo producir en
· Hemograma (considerar VSG) ocasiones daños irreversibles9.
· Glucemia, proteínas viscerales, estudio lipídico
Dentro de las manifestaciones cardiovasculares,
· Gasometría venosa y electrolitos incluyendo calcio,
los pacientes con AN suelen presentar bradicardia e
fósforo y magnesio
hipotensión debido a alteraciones en el sistema nervio-
· Tests de función renal, incluyendo urea/BUN,
so autónomo. Son frecuentes las alteraciones electro-
creatinina, ácido úrico
cardiográficas que incluyen arritmias auriculares,
· Tests de función hepática
· Hormonas tiroideas ventriculares y alteraciones en el espacio QTc. La pro-
· Análisis elemental de orina longación del espacio QTc es una causa infrecuente de
· Electrocardiograma y radiografía de tórax muerte súbita en estos pacientes, y puede agravarse
por la existencia de alteraciones hidroelectrolíticas (hi-
Pruebas a considerar en una valoración posterior: poK, hipoMg) o por la toma de medicaciones concomi-
· Hierro sérico, ferritina, zinc, cobre, niveles de vitaminas tantes (antieméticos y antipsicóticos). Además, se han
· Hormonas: estradiol, LH, FSH, testosterona, prolactina descrito alteraciones miocárdicas con disminución de
· Amilasa sérica la masa cardiaca, así como prolapso de la válvula mitral
· Estudios del tracto gastrointestinal, tránsito y derrame pericárdico.
gastrointestinal, endoscopia
Las manifestaciones digestivas son también muy
· Densitometría ósea
frecuentes. La AN puede originar un descenso de la
· TC craneal o RM
motilidad gastrointestinal, siendo frecuente la presen-
· Ecocardiograma
cia de retraso del vaciamiento gástrico y estreñimiento.
158 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

La gastroparesia suele aparecer cuando se pierde un heces. Además, se han descrito otras alteraciones elec-
15-20 % del peso ideal y mejora con la renutrición, la trolíticas en estos pacientes que incluyen hiponatre-
adaptación de la dieta y los antieméticos. El estreñi- mia, hipocalcemia, hipomagnesemia e hipofosfatemia,
miento es muy frecuente en la AN debido a la restric- algunas de las cuales pueden agravarse durante la
ción calórica y/o al enlentecimiento del tránsito en el realimentación10. En el diagnóstico diferencial de la hi-
colon. Para su tratamiento será necesario mejorar el ponatremia habrá que descartar la presencia de secre-
estado de hidratación y en ocasiones se añadirán la- ción inapropiada de ADH, la potomanía y la toma de
xantes, preferiblemente osmóticos. diuréticos.
Las alteraciones de las pruebas de función hepáticas La mayoría de los pacientes con AN presentan pér-
ocurren en el 50 % de los pacientes con AN. La pérdida dida de masa ósea y al menos el 50 % presentan
de peso y el ayuno pueden producir alteraciones leves osteoporosis. Por el contrario, la mayoría de los pa-
de las transaminasas (2-3 veces por encima de su valor cientes con BN presentan una masa ósea normal11. La
normal) debido probablemente a fenómenos de auto- osteoporosis aumenta el riesgo de fracturas en estos
fagia e hipoperfusión hepática; si bien también puede pacientes12. Debido a la importancia de la segunda y
aparecer en el curso de la realimentación por el exceso tercera décadas de la vida en la fisiología del hueso,
de calorías administradas produciendo esteatosis, sien- los adolescentes con AN muchas veces no alcanzan el
do útil la realización de una ecografía hepática para el pico de masa ósea. La etiopatogenia de la osteoporo-
diagnóstico diferencial. En ocasiones, la elevación de sis en estos pacientes no es bien conocida, si bien se
las transaminasas es mayor (4-30 veces su valor nor- han descrito muchos factores implicados como son la
mal) como consecuencia de una hepatitis isquémica o desnutrición, escasa ingesta de calcio, déficit estrogé-
fallo multiorgánico. nico, hipercortisolismo y otras alteraciones hormona-
En la BN, debido a la cronicidad de los vómitos, es les como la disminución de los niveles de IGF-1, pro-
frecuente la hipertrofia parotídea que puede originar hi- gesterona, etc.12. Como consecuencia se produce una
peramilasemia, la pérdida del esmalte dental, el reflujo disminución de la formación de hueso y aumento de
gastroesofágico, esofagitis, pudiendo aparecer compli- la resorción ósea, afectándose de forma preferente el
caciones esofágicas por ulceraciones pépticas, desgarros hueso trabecular. En estos pacientes, la densidad mi-
esofágicos, síndrome de Mallory-Weiss hasta la rotura neral ósea se correlaciona con el IMC y con la dura-
esofágica con mediastinitis. El abuso de laxantes favore- ción de la amenorrea. Es importante señalar que a
ce la aparición de cuadros de colon irritable y de estreñi- pesar de la recuperación ponderal, la pérdida de masa
miento crónico refractario al tratamiento. Se recomien- ósea persistirá en muchas ocasiones. Por ello se reco-
da que los pacientes que presenten vómitos realicen mienda realizar una densitometría ósea en los pacien-
revisiones dentales periódicamente. tes con AN que hayan presentado amenorrea durante
Las consecuencias neurológicas de la AN deri- más de 6 meses. En cuanto al tratamiento, resulta
van de la presencia de desnutrición grave. En estos fundamental la rehabilitación nutricional, con la recu-
pacientes se han descrito alteraciones en la TC (tomo- peración del peso y de la menstruación en las muje-
grafía computarizada) y RM (resonancia magnética) res. También se recomienda la suplementación con
consistentes en atrofia cortical y dilatación ventricu- calcio y vitamina D y la instauración de hábitos de
lar. Estas alteraciones son probablemente reversibles vida saludables, incluyendo dejar de fumar. Si bien los
tras la corrección de la desnutrición, aunque en estu- suplementos de calcio y vitamina D son necesarios
dios con RM los pacientes con AN que habían recupe- para el crecimiento y desarrollo del hueso, no han de-
rado peso seguían teniendo mayor volumen de líqui- mostrado ser efectivos para prevenir ni tratar la pérdi-
do cefalorraquídeo y menor volumen de materia gris da de hueso en esta enfermedad12, 13.
y blanca cerebral tras un año de tratamiento. Tam- Los anticonceptivos orales no han demostrado un
bién se describen alteraciones en los tests psicológi- beneficio clínico, probablemente por el efecto supresor
cos y cognitivos con problemas de atención, concen- de la síntesis de IGF-1 a nivel hepático. Sin embargo, la
tración y aprendizaje. utilización transdérmica de 17-beta estradiol a dosis
Las alteraciones hidroelectrolíticas son frecuen- fisiológicas, que no suprime la síntesis hepática de IGF-
tes entre aquellos pacientes que presentan conductas 1, junto a la administración de progesterona cíclica, sí
purgativas. Los vómitos van a producir hipopotasemia aumentó la masa ósea en adolescentes en un estudio
y alcalosis metabólica hipoclorémica. Además, como aleatorizado de 18 meses de duración, si bien no se
consecuencia de la pérdida de líquidos se activa el sis- produjo una normalización de la masa ósea14. También
tema renina-angiotensina-aldosterona, que empeora en un estudio aleatorizado en 60 mujeres con AN, los
la hipopotasemia y la alcalosis y puede facilitar la apa- anticonceptivos orales junto al IGF-1 recombinante
rición de edemas como consecuencia de la retención mejoraron la masa ósea de forma significativa15. La ad-
de sodio en el túbulo renal. Los pacientes con abuso de ministración de DHEAS junto a anticonceptivos orales
laxantes pueden presentar acidosis metabólica como ha mostrado resultados controvertidos en los estudios
consecuencias de las pérdidas de bicarbonato por las realizados. Asimismo, la administración transdérmica
Tema 10.  Soporte nutricional en los trastornos de la conducta alimentaria 159

de testosterona no ha sido efectiva en mujeres adultas quiere de un estudio más amplio. Los pacientes con AN
con AN16. En la actualidad se está estudiando si la uti- presentan niveles muy bajos de leptina que guardan
lización conjunta de estrógenos transdérmicos con correlación con el peso corporal22. En un estudio, estos
IGF-1 en adolescentes puede normalizar la masa ósea cambios se normalizaron con la recuperación nutricio-
en estos pacientes. nal, mientras que en otro no se modificaron con la re-
Los bisfosfonatos pueden estar indicados en algunos nutrición a corto plazo. Tres estudios han correlaciona-
casos, si bien debido a su posible teratogenicidad su do la amenorrea de las pacientes con AN con las
uso en mujeres en edad fértil es más controvertido. En alteraciones de la leptina. También se han descrito al-
un estudio aleatorizado en 32 adolescentes con alen- teraciones en la leptina en pacientes con BN.
dronato durante un año no hubo una mejoría signifi- Los pacientes con AN presentan niveles elevados de
cativa de la masa ósea17. Sin embargo, en un estudio ghrelina en comparación con sujetos de peso normal,
aleatorizado con mujeres adultas con risedronato du- reflejando el estado de balance energético negativo23.
rante un año sí se produjo una mejoría significativa de Las alteraciones del eje tiroideo en la AN son conse-
la masa ósea18. A la vista de la evidencia actual, el uso cuencia de la malnutrición. Se caracterizan por unos
de bisfosfonatos se debería restringir a las mujeres con niveles en el rango bajo-normal de T4 y TSH, con nive-
osteoporosis que tengan fracturas. les bajos de T3 y aumento de la rT3. Ello se debe al
Otros tratamientos como la calcitonina y el raloxife- aumento de la conversión periférica de T4 en rT3 y a la
no no han mostrado efectos beneficiosos en estos pa- disminución de la unión de la T4 a la globulina trans-
cientes, y el denosumab se ha utilizado solo en algunos portadora de tiroxina. Además, existe una disminución
casos aislados19. En un reciente estudio aleatorizado el de la respuesta de la TSH a la TRH. Dado que estos
teriparatide mostró una mejoría importante de la masa cambios son adaptativos a la malnutrición y el ayuno,
ósea con tan solo 6 meses de tratamiento en mujeres no está indicado el tratamiento con hormonas tiroi-
con AN, si bien este fármaco puede incrementar el ries- deas. Las consecuencias clínicas incluyen pérdida de
go de osteosarcoma en estudios en animales20. pelo, piel seca, hipotermia, bradicardia, hipometabolis-
Como conclusión, el tratamiento farmacológico mo, etc., que son reversibles tras la renutrición.
debe considerarse en mujeres con AN con baja masa Otra de las complicaciones de la desnutrición en pa-
ósea y con historia de fracturas si las estrategias de re- cientes con AN es la alteración en la regulación de la glu-
cuperación ponderal no son efectivas a pesar de nues- cosa. Estos pacientes pueden presentar hipoglucemia
tros mejores esfuerzos. Además, la utilización de trata- debido a la pérdida de las reservas de glucógeno hepático
miento hormonal sustitutivo con 17-beta estradiol y al agotamiento de la gluconeogénesis como conse-
transdérmico (100 µg/día) y progesterona cíclica (100- cuencia de la progresiva pérdida de masa magra. Los ni-
200 µg/día durante 12 días al mes) puede considerarse veles de insulina son apropiadamente bajos y la sensibili-
en adolescentes con AN con baja masa ósea (a pesar dad a la misma es normal. Como consecuencia de estas
de un adecuado tratamiento nutricional) con el intento hipoglucemias pueden presentar crisis convulsivas y
de mejorar la masa ósea en esta edad. coma. Algunos autores han descrito una mayor prevalen-
Las manifestaciones endocrinológicas son conse- cia de los TCA entre los pacientes con diabetes tipo 1.
cuencia de una disfunción hipotalámica como respuesta Los pacientes con AN presentan frecuentemente re-
adaptativa del organismo a la desnutrición y el ayuno21. traso del crecimiento y del desarrollo como consecuen-
Los pacientes con AN presentan un hipometabolismo cia de la malnutrición. Estas alteraciones pueden ser
con disminución del gasto energético en reposo (GER). reversibles en muchos casos, aunque en ocasiones con-
Además existen cambios en la composición corporal ducirán a una talla baja si la recuperación nutricional se
que consisten en una disminución de la masa grasa y produce tras el cierre de los cartílagos de crecimiento.
masa magra y un aumento del agua extracelular. Las manifestaciones hormonales consisten en eleva-
Los pacientes con AN presentan hipercortisolismo ción de los niveles de GH circulante con disminución de
sin los estigmas del síndrome de Cushing. Ello se debe los niveles de IGF-1 debido a la resistencia a la GH.
a una hipersecreción hipotalámica de hormona libera- Además, disminuyen los niveles de la proteína trans-
dora de corticotropina (CRH) como consecuencia de la portadora de GH y se modifican los niveles de las pro-
malnutrición, con disminución de la respuesta a la ad- teínas transportadoras de IGF-1 (con aumento de la
ministración de CRH exógeno. La ausencia de signos IGF-1BP1 e IGF-1BP2 y disminución de la IGF-1BP3)32.
cushingoides podría deberse a una resistencia al corti- Estas alteraciones son reversibles con la renutrición.
sol o bien, como indican estudios más recientes, ser Pero la manifestación endocrinológica más significa-
secundario a la malnutrición y a la ausencia de sustra- tiva de la AN es la amenorrea. Puede ser primaria o
tos metabólicos. Sin embargo, los niveles elevados de secundaria, dependiendo de si la paciente había tenido
cortisol pueden ser importantes en el desarrollo de os- previamente la menarquia. Tradicionalmente se pensa-
teopenia en estos pacientes. ba que la amenorrea era debida a la pérdida de peso y
También se han descrito alteraciones en la leptina, si de masa grasa, con la consiguiente disminución en la
bien el papel exacto de esta hormona en los TCA re- producción de estrógenos como consecuencia de la
160 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

transformación periférica de andrógenos en estróge- imposibilidad de mantener un peso corporal normal en


nos en el tejido adiposo. Sin embargo, hoy sabemos relación con la edad, sexo y estado de desarrollo del
que en más del 50 % de las pacientes la amenorrea se paciente es uno de los criterios diagnósticos de la AN.
produce antes de que la paciente haya perdido peso de Además, se deberían valorar otros factores como la ra-
forma significativa, por lo cual este es solo uno de los pidez de la pérdida de peso, el retraso del crecimiento
factores etiológicos implicados. El origen de la ameno- o la maduración sexual en niños y adolescentes, para
rrea es una disregulación hipotalámica, que conduce a establecer la gravedad de la enfermedad8.
un hipogonadismo hipogonadotrópico, con un patrón Esta pérdida de peso se produce a expensas tanto del
prepuberal y niveles circulantes muy bajos de estróge- compartimiento graso como del no graso o magro. El
nos. Estas alteraciones hipotalámicas en la secreción de porcentaje de grasa corporal es inferior al 20 % en la ma-
hormona liberadora de gonadotropinas (GnRH) se pro- yoría de los casos y en ocasiones es casi inexistente. Esto
ducen por las alteraciones de neurotransmisores (sero- se refleja en la medición de los pliegues cutáneos y tam-
tonina, noradrenalina, dopamina y opioides endóge- bién mediante la realización de la bioimpedancia en la
nos). La recuperación de la menstruación constituye un práctica clínica. En un estudio reciente realizado en muje-
indicador muy importante de la curación de estas pa- res adultas que habían recuperado peso, la tasa de recaí-
cientes. El porcentaje del peso ideal necesario para la das fue mayor entre las que presentaron un menor por-
recuperación de las reglas en estas pacientes varía en- centaje de grasa corporal25. Por el contrario, el
tre el 75 y el 115 %, así como el porcentaje de grasa compartimiento proteico visceral se mantiene hasta que
alrededor del 20 %29. El 86 % de las pacientes recupe- la enfermedad está muy evolucionada, por lo que estos
ran las reglas en los 6 meses siguientes a alcanzar su pacientes suelen presentar niveles normales de proteínas
peso ideal y en ocasiones pueden tardar un año. circulantes (albúmina, transferrina, prealbúmina, proteína
Finalmente, los pacientes con AN pueden presentar ligadora del retinol) salvo en las fases terminales de la en-
alteraciones hematológicas que consisten en una fermedad o en presencia de enfermedad aguda concomi-
hipoplasia de la médula ósea con transformación gela- tante (infección, cirugía, etc.). Debido a ello no es frecuen-
tinosa, presentando grados variables de anemia, leuco- te la existencia de edemas en el momento del diagnóstico,
penia y trombocitopenia24. La anemia suele ser normo- aunque puedan aparecer durante la realimentación. To-
cítica como respuesta a la menor demanda metabólica das estas características son las clásicas de la desnutrición
y puede agravarse si existen deficiencias de ciertos calórica (marasmo) típica de estos pacientes.
micronutrientes (hierro, ácido fólico, cobre, etc.). En Además, pueden aparecer cuadros clínicos como con-
general, todas estas alteraciones mejoran con la renu- secuencia de la deficiencia de micronutrientes que tam-
trición y no requieren tratamientos específicos. bién en ocasiones pueden agravarse durante la realimen-
tación (déficit de tiamina, etc.). La dieta de los pacientes
3.  Objetivos nutricionales con anorexia suele ser deficitaria en hierro, magnesio y
zinc. El déficit de zinc es relativamente frecuente, espe-
La rehabilitación nutricional es probablemente la cialmente en aquellas mujeres que realizan una dieta ve-
parte más importante del tratamiento de los pacientes getariana o si presentan diarrea por fármacos o vómi-
con AN. Por el contrario, los pacientes con BN o tras- tos26. La hipozinquemia produce anorexia, disgeusia,
torno por atracón requerirán un abordaje de trata- retraso del crecimiento, hipogonadismo, alteraciones cu-
miento diferente centrado en la psicoterapia y en el táneas, etc. Además, la hipozinquemia puede ser un fac-
uso de psicofármacos. tor que perpetúe la enfermedad. En algunos estudios
Centrándonos en el tratamiento de la AN, los objeti- controlados se ha observado una mejor recuperación de
vos del tratamiento nutricional serán8: peso al asociar suplementos de zinc al tratamiento. En
cuanto a las vitaminas, su deficiencia es rara, debido a la
•  Restaurar el peso corporal. selección de alimentos que realizan estos pacientes. En
•  Corregir las complicaciones físicas de la desnutrición. ocasiones se han encontrado ingestas marginales de tia-
•  Mejorar la motivación del paciente para que nor- mina, piridoxina y riboflavina. Se han descrito deficiencias
malice sus hábitos dietéticos y colabore en el tra- de vitaminas A, E, D y riboflavina en estos pacientes27-30.
tamiento. Todos los pacientes con TCA deben ser sometidos a
•  Educar al paciente sobre una nutrición saludable y un cribado nutricional, ya que son pacientes en riesgo
patrones de alimentación adecuados. nutricional. El cribado nutricional trata de seleccionar
•  Corregir pensamientos, actitudes y sentimientos aquellos pacientes en riesgo nutricional para que se les
erróneos sobre su trastorno. realice una valoración nutricional más completa.
En la valoración nutricional utilizaremos métodos más
sofisticados. Es importante realizar una encuesta nutri-
4.  Valoración nutricional
cional en todos los pacientes, recogiendo la existencia de
Los pacientes con TCA, especialmente aquellos con atracones y su frecuencia, así como de conductas purga-
AN, presentan alteraciones del estado nutricional. La tivas (vómitos, laxantes, diuréticos, ejercicio intenso, etc.).
Tema 10.  Soporte nutricional en los trastornos de la conducta alimentaria 161

Además de una exploración física general detallada el ICA es menor del 80 % y que esta depleción es severa
(incluyendo constantes vitales), realizaremos una valora- si es menor del 60 %. La excreción de 3-metilhistidina,
ción antropométrica. La medición del peso y la talla nos un metabolito de origen muscular, también sirve para
permitirá calcular el índice de masa corporal (IMC, P/T2), explorar la proteína muscular.
el porcentaje del peso ideal y el porcentaje de pérdida de El compartimiento proteico visceral no se afecta hasta
peso. Se considera indicativa de desnutrición una pérdi- estadios muy avanzados de la enfermedad, como ya diji-
da de peso superior al 10 % en 6 meses o al 5 % en un mos con anterioridad. La producción diaria de albúmina
mes. Se considera un IMC normal entre 18,5 y 25 kg/m2. disminuye, así como su degradación, lo que mantiene los
La medida de los pliegues cutáneos (tricipital, subes- niveles plasmáticos dentro de la normalidad. El incremen-
capular, bicipital, suprailíaco) y circunferencias (circun- to del volumen plasmático que se produce tras la reali-
ferencia media del brazo, circunferencia media muscu- mentación puede ocasionar un descenso de los niveles de
lar del brazo) permiten aproximarnos al estado de los albúmina. También se pueden valorar proteínas de vida
compartimientos corporales graso y proteico muscular media más corta, como la transferrina (8-10 días), preal-
respectivamente, muy afectados en estos pacientes. La búmina (2-3 días), proteína ligadora del retinol (10 ho-
impedancia bioeléctrica es una técnica sencilla de com- ras). Los niveles de IGF-1 se encuentran descendidos y
posición corporal que mide la resistencia del cuerpo al aumentan precozmente tras la realimentación.
paso de una corriente eléctrica. Con ella se calcula el Las pruebas de función inmune suelen ser normales
agua corporal total y permite diferenciar bien entre el en estos pacientes.
compartimiento graso y no graso (magro). Debido a La calorimetría indirecta resulta muy útil para estable-
que en los pacientes desnutridos existe un aumento del cer el gasto energético en reposo en estos pacientes
agua extracelular, se deberían utilizar en ellos técnicas (GER) de cara a realizar un tratamiento nutricional ade-
de bioimpedancia multifrecuencia que permitan medir cuado. Como consecuencia de la adaptación al ayuno se
el agua intracelular. Es una técnica de fácil utilización ha señalado que estos pacientes presentan un estado
que puede usarse a la cabecera del enfermo. También hipometabólico. Es bien conocido en la literatura, y no-
puede utilizarse la DEXA (absorciometría doble energía sotros lo hemos podido comprobar en un estudio con 21
rayo X) para la composición corporal. pacientes con AN, que las fórmulas habituales que mi-
La excreción de creatinina en orina de 24 horas es den el gasto energético basal (Harris-Benedict, FAO, etc.)
indicativa de la masa muscular del individuo. El índice sobreestiman el gasto energético en estos casos, con el
creatinina/altura (ICA) se obtiene dividiendo la excre- riesgo de inducir un síndrome de realimentación si se les
ción real de creatinina del sujeto entre la que le corres- administran excesivas calorías31 (figura 1). Por otro lado,
pondería según la talla (existen tablas). Se considera diferentes autores han señalado que aunque los requeri-
que el compartimiento muscular está deplecionado si mientos energéticos son bajos al ingreso, aumentan mu-

1 500
**
1 400
**
** **
1 300
REE (Kcal/24 h)

1 200

1 100

1 000 **

900

800

700
CI Fleish HB FAO SHW Schebendach
*  p < 0,05   **  p < 0,01 Test Wilconxon

Figura 1.  Comparación del GER medido por CI con el estimado con distintas
ecuaciones predictivas.
162 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

cho durante la hospitalización debido a un incremento pancreáticas, atrofia de las vellosidades y estreñimien-
del gasto energético en reposo y post­prandial32. Por ello, to. En estos casos se puede disminuir la ingesta de ali-
la calorimetría indirecta es una herramienta muy útil en mentos ricos en grasa y fibra y promover la ingesta de
la evaluación de estos pacientes, si bien no suele estar líquidos.
disponible en la mayoría de los hospitales dado su coste En el caso de la bulimia nerviosa, la planificación del
elevado y el tiempo necesario para su realización. menú y los horarios de comidas podría ser útil para
romper los patrones caóticos de ingesta como la res-
5. Dietética tricción, saltarse las comidas y los atracones. También
se pueden identificar aquellos alimentos que desenca-
Uno de los objetivos del tratamiento dietético de los denan los episodios de atracón, determinando después
pacientes con TCA es la educación nutricional33. La edu- su incorporación o no en las comidas. Puesto que el
cación nutricional tiene que ir más allá de la instrucción, paciente con bulimia presenta una menor saciedad,
persiguiendo cambios en el comportamiento hacia la con una capacidad gástrica aumentada y diarrea rela-
comida y de creencias erróneas sobre los alimentos «sa- cionada con el uso de laxantes, se pueden utilizar
ludables» y los «no saludables» provenientes de fuentes aquellos alimentos ricos en grasas saludables como
no fiables, llevando a la instauración de unos hábitos pescados grasos y aceites de oliva. En caso de vacia-
alimentarios saludables y una dieta variada. miento gástrico rápido, se recomienda una ingesta len-
Algunos pacientes con una larga historia de enfer- ta de alimentos sólidos, eliminación de azúcares sim-
medad frecuentemente reportan que no saben comer ples, hacer varias comidas poco abundantes y
de una forma normal y requieren información sobre frecuentes y no tomar líquido en la comida.
cómo comer fuera de casa, normas culinarias y de die-
ta. La planificación de un menú presentado de una for-
6.  Soporte nutricional artificial
ma cualitativa puede beneficiar estos pacientes. El
menú no debe contener detalles sobre cantidades, ca- En el manejo terapéutico de los TCA, especialmente
lorías o macronutrientes. Un recurso alternativo es el en la AN, es fundamental el tratamiento nutricional
uso de las dietas preestablecidas con distinto aporte para obtener una recuperación ponderal, ello aumen-
calórico o los menús cerrados, pero que a menudo tará la eficacia de otros tratamientos como la psicote-
pueden limitar al paciente, conduciendo a pensamien- rapia o los psicofármacos34.
tos y síntomas obsesivos, por lo que se deben utilizar el La primera pregunta que deberemos realizarnos es si
mínimo tiempo posible. el paciente puede ser tratado ambulatoriamente o ne-
Para los pacientes con AN, el contenido calórico de cesita hospitalización. Las razones que obligan a la
los alimentos es muy importante, por lo que se podrían hospitalización pueden ser médicas o psiquiátricas (Ta-
ofrecer opciones de alimentos considerados menos bla 3) y el lugar de ingreso dependerá del motivo del
energéticos. Habitualmente existe el concepto de que ingreso, de las características del paciente y de la dis-
el pescado contiene menos calorías que la carne, sin ponibilidad de cada hospital.
embargo en algunos casos esto no corresponde exac- La rehabilitación nutricional es un objetivo primor-
tamente con la realidad. Por ejemplo, 100 g de atún dial en todo paciente desnutrido. Muchas de las altera-
aporta 225 kcal, mientras que 100 g de solomillo de ciones cognitivas y conductuales de estos pacientes
ternera aporta 90 kcal. (preocupación por la comida, alteraciones del gusto,
Con el fin de promover una mayor variedad dietética atracones, depresión, obsesiones, apatía, irritabilidad)
con una gran densidad de nutrientes, la dieta de estos son comunes con sujetos desnutridos o en situación de
pacientes podría empezar generalmente reforzando la semiayuno y mejoran o desaparecen al recuperar el
ingesta de aquellos alimentos que ya forman parte de peso perdido. Una vez que el paciente ha comenzado
la dieta diaria, tales como frutas, verduras y productos a recuperar peso, el tratamiento psicoterápico puede
lácteos. resultar útil.
La verdadera dificultad es la introducción en la La restauración del peso corporal se hará hasta que el
dieta de los alimentos ricos en hidratos de carbono, paciente alcance un peso saludable en el que las mujeres
al ser los alimentos que mayoritariamente se elimi- recuperen la menstruación y la ovulación, los varones
nan al comienzo de la enfermedad. Lo mismo ocurre normalicen su deseo sexual y los niveles hormonales y
con la grasa visible, puesto que estos pacientes sue- los niños y adolescentes normalicen su crecimiento y de-
len elegir aquellas preparaciones culinarias que no sarrollo sexual. Esto requerirá de tratamientos largos, a
requieren su uso (cocción, hervido o a la plancha, sin veces con hospitalización inicial y luego con continuidad
aliño). asistencial en diferentes dispositivos (hospitales de día,
Hay que tener en cuenta que los pacientes desnutri- consultas externas, etc.).
dos tienen el tracto gastrointestinal afectado y pueden Estos programas se harán de acuerdo con el pacien-
presentar malabsorción junto con gastroparesia, dismi- te de forma escalonada pactando las ganancias de
nución de la producción de secreciones gástricas y peso en el tiempo y el peso al alta. Generalmente, se
Tema 10.  Soporte nutricional en los trastornos de la conducta alimentaria 163

Tabla 3.  Criterios de hospitalización en los trastornos establece una ganancia de peso de 1-1,5 kg/semana
de la conducta alimentaria. en pacientes ingresados y de 250-500 g/semana en pa-
cientes ambulatorios, para evitar la aparición del sín-
Indicaciones médicas: drome de realimentación8, 34.
Adultos: En la tabla 4 se resumen las recomendaciones de
· Bradicardia < 40 lpm o taquicardia > 110 lpm diferentes guías clínicas para realizar la realimentación
· Presión arterial < 90/60 mmHg de estos pacientes, que están basadas principalmente
· Hipoglucemia sintomática en la experiencia clínica, pues son pocos los estudios
· Hipopotasemia < 3 mmol/l científicos disponibles35. Estas guías difieren en la can-
· Hipotermia < 36,1 ºC tidad de calorías administradas al inicio de la realimen-
tación (desde las más conservadoras, que recomiendan
· Deshidratación
10-15 kcal/kg al ingreso hospitalario, hasta las más
· Vómitos o conductas purgativas no controladas
permisivas que comienzan con 30-40 kcal/kg). El apor-
· Peso < 75 % del peso ideal
te calórico irá incrementándose de forma progresiva
· Pérdida rápida de peso (varios kg en una semana) para permitir una ganancia de peso adecuada, siendo
· Falta de mejoría o empeoramiento con el necesario a veces alcanzar 70-100 kcal/kg. Los pacien-
tratamiento ambulatorio tes que tengan requerimientos calóricos superiores
Niños y adolescentes: suelen presentar conductas inadecuadas (tirar o escon-
· Bradicardia < 50 lpm der la comida, vómitos, ejercicio intenso, etc.). Hay que
· Hipotensión ortostática (aumento > 20 lpm en la recordar que cuanto mayor sea el peso logrado por el
frecuencia cardiaca o caída de la presión arterial > paciente al alta hospitalaria, menor será la probabili-
10-20 mmHg con el ortostatismo) dad de recaída, por ello los ingresos suelen ser prolon-
· Presión arterial < 80/50 mmHg gados.
· Hipopotasemia o hipofosfatemia A modo de ejemplo, las guías de ESPEN reco-
· Pérdida rápida de peso incluso si el peso es > 75 % miendan35:
del peso ideal
•  Los primeros días comenzar con 10-15 kcal/kg
· Hipoglucemia sintomática
(600-1000 kcal/d) con suplementación profilácti-
· Falta de mejoría o empeoramiento con el
ca de electrolitos (P, K, Mg), tiamina (200-300
tratamiento ambulatorio
mg/día, vitaminas (200 % RDI), minerales y ele-
Indicaciones psiquiátricas: mentos traza (100 % RDI). Además, restringir el
· Ideación suicida aporte de fluidos para un balance cero y restringir
· Enfermedad psiquiátrica concomitante grave la sal (< 1 mmol/kg). Se deberá monitorizar ade-
· Imposibilidad para comer independientemente o cuadamente los niveles de glucosa y electrolitos y
necesidad de nutrición enteral por sonda la aparición de edemas, ya que el mayor riesgo de
síndrome de realimentación ocurre en estos pri-
· Ambiente familiar poco favorable
meros días.
· Falta de cooperación con el tratamiento
•  A partir del 4º-10º día se irá incrementando el
ambulatorio
aporte de calorías para permitir la ganancia pon-

Tabla 4.  Guías para la realimentación de pacientes desnutridos con anorexia nerviosa.

Guía Edad Kcal/kg


Australia y Nueva Zelanda Adultos 15-20 (600-800 kcal/día)
Europa Adultos 10-15
Reino Unido: Royal College of Psychiatrists Adultos 10-20
Reino Unido: NICE Adultos 5-20
Reino Unido: MARSIPAN Adultos 5-20
American Psychiatric Association/American Dietetic Association Adultos 30-40
Reino Unido: Junior MARSIPAN < 18 años 15-20

NICE: Natitonal Institute for Health and Clinical Excellence; MARSIPAN: Management of Really Sick Patients with Anorexia Nervosa.
164 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

deral, continuando con la suplementación de Tabla 5.  Identificación de pacientes con alto riesgo
electrolitos, vitaminas y minerales y una monitori- de síndrome de realimentación (guías NICE).
zación ya menos estrecha.
Paciente con 1 o más de los siguientes
De esta forma, la ganancia ponderal será progresiva supuestos:
y evitaremos la aparición de un síndrome de reali- · IMC < 16 kg/m2
mentación (especialmente grave en pacientes con · Pérdida de peso no intencionada > 15 % en los
peso inferior al 70 % de su peso ideal). En la tabla 5 se 3-6 meses previos
resumen los factores de riesgo para desarrollar un sín- · Ingesta mínima o nula durante > 10 días
drome de realimentación. Durante la realimentación se
· Bajos niveles de K, P o Mg antes de la
produce un cambio de un estado catabólico a un esta-
realimentación
do anabólico, debido a la secreción de insulina. La in-
sulina favorece la retención de sodio en el túbulo renal, O, paciente con 2 o más de los siguientes
facilitando la aparición de sobrecarga de volumen supuestos:
(edemas, insuficiencia cardiaca, etc.), facilita la entrada
de la glucosa dentro de la célula adiposa y muscular · IMC < 18,5 kg/m2
con el arrastre de diferentes electrolitos y minerales (K, · Pérdida de peso no intencionada > 10 % en los
P, Mg). Dado que los pacientes con AN suelen presen- 3-6 meses previos
tar una disminución de los niveles corporales totales de · Ingesta mínima o nula durante > 5 días
K, P y Mg a pesar de presentar niveles plasmáticos nor- · Historia de abuso de alcohol, drogas, tratamiento
males, durante la realimentación pueden producirse con insulina, quimioterapia, antiácidos o
cuadros severos de hipopotasemia, hipofosfatemia e diuréticos
hipomagnesemia que pueden facilitar la aparición de
arritmias, crisis convulsivas, coma y producir la muer-
te36. También durante la realimentación pueden poner-
se de manifiesto deficiencias de ciertas vitaminas, es muy importante hacerle entender que con la nutri-
como la tiamina, que es un cofactor necesario en el ción enteral solo se busca una mejoría de su estado
metabolismo aerobio de la glucosa. El síndrome de nutricional y que se suspenderá en cuanto la ingesta
realimentación se ha descrito tanto con dieta oral oral sea suficiente. En un estudio aleatorizado con nu-
como con nutrición enteral y parenteral. trición enteral frente a dieta oral en AN, los resultados
En la mayoría de los pacientes el soporte nutricional en cuanto a ganancia de peso y tiempo de reingreso
se realizará con dieta oral, a la que añadiremos suple- fueron mejores en las pacientes con nutrición enteral,
mentos de nutrición enteral oral a medida que el pa- y no se mostró un rechazo al tratamiento38. Son fre-
ciente lo requiera. Suelen utilizarse dietas completas cuentes las manipulaciones de la dieta y de la sonda,
poliméricas, generalmente con densidad calórica de por lo que los pacientes deberían estar supervisados.
1,5 kcal/ml. Suelen utilizarse dietas poliméricas, sin lactosa y con
La nutrición enteral por sonda estará indicada en fibra, ya que servirán para mejorar el estreñimiento. Se
aquellos pacientes con desnutrición grave que presen- iniciará a un ritmo lento para optimizar su tolerancia.
ten una negativa a ingerir alimentos por boca37. En La administración con bomba de infusión permite un
nuestra experiencia, esto no suele ser frecuente en este mejor control y dificulta la manipulación de la dieta. En
grupo de pacientes, pues aunque en ocasiones la in- una revisión sistemática, que incluyó 7 estudios obser-
gesta era muy baja en su domicilio antes del ingreso, la vacionales con un total de 403 pacientes (niños y ado-
presión de la hospitalización facilita la colaboración del lescentes), el rango de calorías prescritas varió entre
paciente permitiendo una alimentación progresiva por 1 000-1 900 kcal/día con incremento progresivo duran-
vía oral. No obstante, algunos grupos utilizan de forma te la hospitalización. El uso de nutrición enteral por
habitual nutrición enteral durante el ingreso hospitala- sonda incrementó las calorías administradas y el peso
rio con buenos resultados. De forma que parece que lo al alta, pero se asoció a mayores efectos adversos39.
más importante es tener un protocolo de actuación en La nutrición parenteral consiste en la administración
cada hospital. de nutrientes por vía venosa, generalmente a través de
La nutrición enteral se asocia a ciertas complicacio- catéteres insertados en venas centrales de alto flujo.
nes (mecánicas, infecciosas, gastrointestinales, meta- Este tipo de soporte nutricional se utilizará únicamente
bólicas). Además, los pacientes con AN tienden a re- en aquellos pacientes con desnutrición grave en los
chazar este tipo de tratamiento, considerándolo como que esté contraindicada la vía digestiva (hemorragia
una agresión e incrementa su sensación de falta de digestiva, obstrucción intestinal, perforación intestinal,
control sobre la alimentación. La relación médico-en- íleo paralítico, etc.)40. La nutrición parenteral puede
fermo suele deteriorarse inicialmente y el paciente sue- presentar complicaciones que se clasifican en mecáni-
le disminuir su ingesta oral drásticamente, por lo que cas (neumotórax, etc.), infecciosas y metabólicas, que
Tema 10.  Soporte nutricional en los trastornos de la conducta alimentaria 165

suelen ser más graves que las de la nutrición enteral.  2.  Fairburn CG, Harrison PJ. Eating disorders. The
Especialmente con este tipo de soporte nutricional ha- Lancet 2003; 361: 407-16.
brá que prevenir la aparición de un síndrome de reali-   3. ADA. Position of the American Dietetic Associa-
mentación, por lo que utilizaremos fórmulas con poco tion: Nutrition Intervention in the Treatment of
volumen, con las calorías ajustadas a su peso actual Anorexia Nervosa, Bulimia Nervosa, and other
(comenzar por 18-20 kcal/kg/día) con reparto entre Eating Disorders. J Am Diet Assoc 2006; 106:
carbohidratos y grasas (50-60:50-40), con aporte de 2073-82.
1,5 g/kg/día de proteínas, vigilando estrechamente los   4. Aranceta J, Pérez C. Antecedentes históricos y epi-
niveles plasmáticos de K, P y Mg y con suplementos de demiología nutricional de los trastornos alimenta-
vitaminas y oligoelementos. rios. En: Miján de la Torre A ed. Nutrición y Meta-
La mayoría de los estudios realizados en pacientes bolismo en trastornos de la conducta alimentaria,
con AN son retrospectivos, muy pocos son prospecti- Barcelona, Editorial Glosa, 2004: 39-55.
vos y solo dos son aleatorizados y controlados38, 41. En   5. Seinhausen HC. The outcome of anorexia nervosa
general, los resultados de estos estudios muestran que in the 20th century. Am J Psychiatry 2002; 159:
la realimentación es segura y eficaz en estos pacientes 1284-93.
si la supervisión es adecuada y existe una protocoliza-   6. Fava M, Copeland PM, Schweiger U, Herzog DB.
ción del tratamiento42-45. Neurochemical abnormalities of anorexia nervosa
En una revisión sistemática de 17 publicaciones se and bulimia nervosa. Am J Psychiatry 1989; 146:
reportó una incidencia de hipofosfatemia del 14 % 963-71.
(0-38 %), siendo el grado de desnutrición al ingreso el  7. Fuentes JA, Hurtado A, González MI, Escartí A,
principal factor de riesgo, sin encontrar correlación con García-Camba E. Mensajeros centrales de la inges-
la rapidez de la renutrición (kcal/día)46, 47. ta y polimorfismos de genes candidatos en los
Esto hace pensar que probablemente el ritmo de trastornos de la conducta alimentaria. En: Gar-
realimentación se deba adaptar al grado de desnutri- cía-Camba E ed. Avances en trastornos de la con-
ción, siendo más cuidadosos en los sujetos con peso < ducta alimentaria. Anorexia nerviosa, bulimia ner-
70 %, peso ideal al ingreso y pudiendo ir más rápidos viosa, obesidad, Barcelona, Editorial Masson SA,
en sujetos con mejor estado nutricional, como reco- 2001: 61-75.
mienda la Sociedad de Medicina de Salud de Adoles-   8. Yager J, Devlin MJ, Halmi KA, Herzog DB, Mitchell
centes recientemente48. Ello conducirá a una disminu- JE, Powers P, et al. Practice guideline for the treat-
ción de los días de ingreso hospitalario en muchos ment of patients with eating disorders. Third edi-
casos49, 50. También parece que la utilización de dietas tion. Washington, DC: American Psychiatric Asso-
con menor carga de hidratos de carbono (< 40 % ca- ciation; 2006.
lorías totales), en administración continua y con una  9. Mehler PS, Krantz MJ, Sachs KV. Treatments of
adecuada suplementación de P y K, podría disminuir el medical complications of anorexia nervosa and
riesgo de síndrome de realimentación51, 52. bulimis nervosa. J Eating Disorders 2015; 3: 15.
10. Temprano JL, Bretón I, Cuerda C, Camblor M, Gar-
7. Resumen cía Peris P. Síndrome de realimentación. Rev Clin
Esp 2005; 205: 79-86.
Los TCA son una patología frecuente en nuestros 11. Zipfel S, Seibel MJ, Löwe B, Beumont PJ, Kasperk
días, principalmente entre los adolescentes y jóvenes. C, Herzog W. Osteoporosis in eating disorders: a
Es importante el diagnóstico y tratamiento precoz de follow-up study of patients with anorexia and bu-
estos pacientes, ya que con frecuencia se cronifican y limia nervosa. J Clin Endocrinol Metab 2001; 86:
ocasionan secuelas físicas irreversibles (osteoporosis, 5227-33.
etc.). El tratamiento nutricional resulta fundamental 12. Misra M, Klibanski A. Anorexia nervosa and bone.
en el manejo de la AN, ya que estos pacientes suelen J Endocrinol 2014; 221: r163-176.
presentar frecuentemente desnutrición, siendo nece- 13. Mehler PS, Mackenzie TD. Treatment of osteope-
sario prevenir la aparición de síndrome de realimenta- nia and osteoporosis in anorexia nervosa: a syste-
ción. Por el contrario, en los pacientes con BN los tra- matic review of the literature. Int J Eat Disord
tamientos más eficaces son la psicoterapia y los 2009; 42: 195-201.
psicofármacos. 14. Misra M, Katzman D, Miller KK, Mendes N, Snel-
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Tema 11.
Microbiota intestinal y obesidad
Isabel M. Cornejo-Pareja
Araceli Muñoz-Garach
Francisco J. Tinahones-Madueño
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Virgen de la Victoria. Málaga

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 169-185.

1. Introducción
2. Nuestra microbiota
3. Microbiota y enfermedades metabólicas
4. Resumen
5. Bibliografía

1. Introducción trientes esenciales, síntesis de vitaminas (K, B12, biotina,


ácido fólico y pantoténico), y favoreciendo la absorción
El término microbiota intestinal hace referencia a la co- de diversos minerales como calcio, fósforo, magnesio y
munidad de microorganismos vivos reunidos en un nicho hierro7. Otra función importante que también desempe-
ecológico determinado. El ecosistema microbiano del in- ña es inmunomoduladora, al interactuar con el sistema
testino incluye especies nativas que colonizan permanen- inmunológico, favoreciendo la maduración de las célu-
temente el tracto gastrointestinal y una serie variable de las inmunitarias8, y contribuyendo de forma importante
microorganismos vivos que transitan temporalmente por a la destrucción de toxinas, carcinógenos y evitando que
el tubo digestivo1. La microbiota intestinal es heterogénea, nuestro intestino se colonice por bacterias patógenas.
y está compuesta mayoritariamente por bacterias, con una Así, la microbiota intestinal puede ser considerada como
minoría de virus, hongos y células eucariotas2. El número un órgano virtual exteriorizado, metabólicamente adap-
de células microbianas en el lumen es 10 veces mayor que table, flexible y rápidamente renovable, que contribuye
las células eucariotas del organismo, lo que representaría al metabolismo y tiene un papel importante en la obten-
alrededor de 1 kg y medio del peso corporal. Además, el ción de energía y nutrientes a partir de la dieta9.
microbioma intestinal –conjunto de genes microbianos–
es 100 veces mayor que el genoma humano; así, la adqui-
sición de microbiota intestinal en el momento del naci- 2. Nuestra microbiota
miento a partir de la microbiota de la madre puede 2.1. Composición de la microbiota intestinal
considerarse como la herencia de un genoma paralelo3, 4.
humana
La microbiota intestinal juega un papel importante
tanto a nivel local como global, aportando numerosos Los microbios colonizan todas las superficies del
beneficios al ser humano, por eso se dice que entre mi- cuerpo humano que están expuestas al ambiente, la
crobiota y huésped se establece una relación simbióti- mayoría de los cuales residen en el tracto intestinal,
ca5. En condiciones normales, la microbiota intestinal aunque existen también en la boca, en la vagina y en la
afecta a la estructura anatómica y fisiológica del intesti- piel. Las comunidades bacterianas en un sitio determi-
no aumentando la superficie de absorción, promovien- nado del cuerpo presentan mayor analogía entre suje-
do la renovación de las células de las vellosidades, incre- tos diferentes que en el mismo individuo pero en dife-
mentando el contenido intraluminal y acelerando el rentes sitios del cuerpo, es decir, existe más similitud
tránsito intestinal6. Además, estos microorganismos entre las comunidades bacterianas orales de distintos
constituyen un enorme potencial enzimático en el intes- individuos que entre las comunidades bacterianas de la
tino, desempeñando una amplia variedad de funciones piel y de la boca de un solo individuo10; sin embargo,
metabólicas; participando en la digestión y obtención también existe una considerable variabilidad interindi-
de energía mediante la hidrólisis de los componentes de vidual10-11. Asimismo, la composición de la microbiota
la dieta (glúcidos, proteínas, lípidos), extracción de nu- varía a lo largo del tracto gastrointestinal en sus dife-

169
170 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

rentes porciones y también dentro de cada una de es- dad funcional. Estos estudios han demostrado una
tas, como se resume en la tabla 1; aumentando en gran variabilidad en la composición de la microbiota en
cantidad y complejidad a medida que avanzamos por individuos sanos, encontrándose incluso que los geme-
el tracto gastrointestinal12. los comparten menos del 50 % de sus taxones bacteria-
El mayor número de bacterias en el tracto gastroin- nos a nivel de especie19. Sin embargo, este hecho no
testinal humano reside en el intestino grueso. Los fac- quiere decir que la genética no desempeñe un papel en
tores que facilitan el desarrollo bacteriano son la eleva- el establecimiento y conformación de la microbiota in-
ción del pH próximo a la neutralidad, la disminución de testinal, ya que se ha demostrado que la composición
la concentración de sales biliares y de restos de secre- de la comunidad bacteriana está influenciada por locus
ción pancreática. Además, en el colon el tiempo de genómicos específicos del huésped20-21. Los estudios
tránsito es lento, lo que brinda a los microorganismos metagenómicos han establecido que a pesar de la ex-
la oportunidad de proliferar fermentando los sustratos tensa variabilidad interpersonal hay unos grupos de
disponibles derivados de la dieta o de las secreciones bacterias que comparten funcionalidades18, 22. Las prin-
endógenas13, 14. cipales bacterias corresponden a tres grandes filos: Fir-
El componente bacteriano de la microbiota ha sido micutes (grampositivos), Bacteroidetes (gramnegativos)
un tema de estudio intensivo en los últimos años, con- y Actinobacterias (grampositivos). Firmicutes son el filo
ducido por proyectos a gran escala como el Proyecto que se encuentra en mayor proporción (60 %), incluye
del Microbioma Humano5-16 y el MetaHIT17. Gran parte alrededor de 200 géneros, y los más importantes son
de la información sobre la diversidad del ecosistema in- los Mycoplasma, Bacillus y Clostridium, y a la vez en
testinal se han obtenido durante la última década con cada género pueden existir diferentes especies, los Bac-
la introducción de la secuenciación del ARN ribosómico teroidetes y Actinobacterias suponen el 10 % cada una
16S y de genomas completos (WGS, Whole-genome de la microbiota intestinal. El resto de los microorganis-
shotgun)18, proporcionando una visión general de las mos que componen la microbiota intestinal pertenecen
comunidades microbianas comensales y de su capaci- a más de 10 familias minoritarias.

Tabla.1.  Microorganismos predominantes en el tracto gastrointestinal humano.

Helicobacter pylori (Filo: Proteobacteria)


104 UFC/g de
Estómago Lactobacillus (Filo: Firmicutes)
contenido intestinal
Streptococcus (Filo: Firmicutes)
Bacteroides (Filo: Bacteroidetes)
103-104 UFC/g de Lactobacillus (Filo: Firmicutes)
Duodeno
contenido intestinal Streptococcus (Filo: Firmicutes)
Staphylococcus (Filo: Firmicutes)
Bacteroides (Filo: Bacteroidetes)
105-107 UFC/g de Lactobacillus (Filo: Firmicutes)
Yeyuno
contenido intestinal Streptococcus (Filo: Firmicutes)
Bacillus (Filo: Firmicutes)
Bacteroides (Filo: Bacteroidetes)
Clostridium (Filo: Firmicutes)
107-108 UFC/g de Enterobacteriaceae (Filo:Proteobacteria)
Íleon
contenido intestinal Enterococcus (Filo: Firmicutes)
Lactobacillus (Filo: Firmicutes)
Veillonella (Filo: Firmicutes)
Bacteroides (Filo: Bacteroidetes)
Bacillus (Filo: Firmicutes)
Bifidobacterium (Filo: Actinobacteria)
Clostridium (Filo: Firmicutes)
1010-1011 UFC/g de Enterococcus (Filo: Firmicutes)
Colon
contenido intestinal Eubacterium (Filo: Firmicutes)
Fusobacterium (Filo: Fusobacteria)
Peptostreptococcus (Filo: Firmicutes)
Ruminococcus (Filo: Firmicutes)
Streptococcus (Filo: Firmicutes)
Tema 11.  Microbiota intestinal y obesidad 171

2.2. Establecimiento de la microbiota terística diferente a la de los adultos jóvenes, particu-


larmente en las proporciones de los grupos Bacteroides
El establecimiento de las poblaciones microbianas spp. y Clostridium33.
que colonizan el intestino acompaña al desarrollo del
mismo, ocurriendo los cambios más drásticos en la
composición microbiana intestinal durante la primera
2.3. Factores modificadores: patrones dietéticos
infancia. Aunque tradicionalmente se ha defendido y microbiota intestinal
que la adquisición de la microbiota intestinal comienza Los cambios dietéticos, en particular, han mostrado
en el momento del nacimiento23 y se va consolidando tener importantes efectos en la microbiota. Se han des-
a lo largo de la vida del individuo, algunas evidencias crito grandes diferencias en la composición de la mi-
demuestran que el tracto gastrointestinal del feto po- crobiota del tracto gastrointestinal en función del pa-
dría estar habitado por algunos microorganismos24. trón de dieta y de los nutrientes aportados por la
Durante el nacimiento, el tracto gastrointestinal del misma entre grupos con hábitos dietéticos diferentes.
recién nacido está expuesto a una gran cantidad de Estos cambios en la composición de la microbiota en
microorganismos, y la madre representa probablemen- respuesta a la ingesta dietética podrían relacionarse
te el factor externo más influyente para el desarrollo con que las diferentes especies bacterianas estén mejor
del microbioma del bebé, debido a los contactos ínti- equipadas genéticamente para utilizar los diferentes
mos durante el parto, alimentación temprana, etc.25-28. sustratos. Muchos estudios han demostrado que un
Por tanto, la constitución de la microbiota intestinal se aumento en la ingesta de grasas produce un aumento
ve afectada por multitud de variables como son: tipo en el índice de bacterias gramnegativas/grampositivas
de parto (natural o cesárea), tipo de alimentación (le- en la microbiota intestinal, aunque la asociación entre
che materna o artificial), factores medioambientales, el tipo de dieta y los distintos grupos microbianos aún
culturales y geográficos, entorno familiar, etc.25-29. Los no está clara34. La microbiota de comunidades occi-
bebés que nacen por vía vaginal tienen comunidades dentales –caracterizada por una ingesta alta en grasa y
parecidas a las encontradas en la microbiota vaginal de proteínas de origen animal y un bajo contenido en fi-
sus madres. En contraste, aquellos nacidos por cesárea bra– parece contener reducción de Bacteroidetes y un
poseen una microbiota característica de la piel y predo- aumento de Firmicutes (especialmente Mollicutes), en
minada por taxones como Staphylococcus y Propioni- comparación con la de comunidades orientales35. Con-
bacterium spp.27. Algunos resultados permiten plan- cretamente, se ha documentado en los sujetos que si-
tear la hipótesis de que el tipo de parto inlfuye en las guen una dieta alta en grasas, una disminución en el
funciones inmunitarias durante el primer año de vida a género Lactobacillus y un incremento en las poblacio-
través del desarrollo de la microbiota intestinal, ya que nes microbianas que secretan productos pro-inflama-
encontramos bebés nacidos por cesárea que tienen un torios con alteración de la barrera intestinal, lo que fa-
bajo recuento de células bacterianas en muestras feca- vorece un incremento de la endotoxemia sistémica e
les y un alto número de células secretoras de anticuer- inflamación, y mejora la obtención de energía, aso-
pos30. Además, la lactancia natural es uno de los facto- ciándose a balances energéticos positivos, resistencia
res clave en el desarrollo de la microbiota intestinal del a la insulina y obesidad36. Curiosamente, De Filippo
neonato, ya que garantiza un aporte continuo de bac- et al 34 encontraron diferencias importantes en la com-
terias durante todo el período de lactancia28-29, 31. posición de la microbiota intestinal de los niños afri-
Los siguientes grandes cambios en la composición canos rurales respecto a los niños europeos. Estas di-
de la microbiota intestinal se producen tras la introduc- ferencias se produjeron tanto en la proporción de
ción de la alimentación sólida y el destete, cuando se Firmicutes/Bacteroidetes como en la proporción de
comienza a desarrollar una microbiota de mayor rique- bacterias gramnegativas/grampositivas y fueron atri-
za y diversidad. Al mismo tiempo, el sistema inmunita- buidas a la baja ingesta de fibra dietética en los euro-
rio «aprende» a diferenciar entre las bacterias comen- peos. Los niños africanos presentaron mayor riqueza
sales y las patógenas. La composición bacteriana microbiana, así como una mayor proporción de Bacte-
comienza a converger hacia un perfil de microbiota roidetes en su intestino, por tanto parecería que el es-
adulta al final del primer año de vida25 y se asemeja por tilo de vida occidental es favorecedor del incremento
completo a la microbiota adulta a los dos 2 años y de Firmicutes (figura 1).
medio de edad32. A partir de esta etapa predominan Se han desarrollado otros estudios al respecto, Wu
Firmicutes y Bacteroidetes, mientras que en los prime- et al.37 objetivó cómo los enterotipos Bacteroides y
ros días tras el nacimiento predominan las Proteobac- Prevotella se asociaron fuertemente con los hábitos
terias y las Actinobacterias. Una vez que la microbiota dietéticos a largo plazo; en particular las dietas ricas en
ha alcanzado la madurez, esta permanece en su mayor proteínas animales y grasas estaban altamente relacio-
parte estable hasta la vejez, cuando se reduce esta es- nadas con el enterotipo Bacteroides y las dietas ricas en
tabilidad. El consorcio ELDERMET estudió la microbiota fibra vegetal con el enterotipo Prevotella (figura 2). Am-
de los ancianos, encontrando una composición carac- bos autores34, 37, postularon que la microbiota intestinal
172 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

En las gráficas 1.A y 1.B se representan los filos y géneros bacterianos más prevalentes.

Figura 1.  Diferencias en la microbiota intestinal entre niños europeos y africanos.

CAMBIOS EN LA ABUNDANCIA BACTERIANA

DIETAS RICAS EN PROTEÍNAS ANIMALES Y GRASAS DIETAS RICAS EN FIBRA VEGETAL

Polisacáridos Carnes
vegetales y grasas

Carnes Polisacáridos
y grasas vegetales

La abundancia de Bacteroides ↑ y de Prevotella ↓ La abundancia de Prevotella ↑ y de Bacteroides ↓

Figura 2.  Intervenciones dietéticas-microbiota intestinal.


Tema 11.  Microbiota intestinal y obesidad 173

evoluciona con la dieta vegetal, lo que le permite maxi- pecies con descenso del resto, aunque el hallazgo más
mizar la extracción de energía a partir de fibra dietética sorprendente es la pérdida de diversidad microbiana
y al mismo tiempo los protege de la inflamación. Se ha observada en los países desarrollados. Dentro de los
visto que ciertas dietas están ligadas a la predisposición factores que han influido en este cambio de nuestra
de adquirir enfermedades y esta relación entre dieta y microbiota se encuentran: saneamiento del agua, in-
enfermedad podría estar mediada por la microbiota38, 39. cremento de cesáreas, aumento del uso de antibióticos
El microbioma intestinal adulto se caracteriza por un en pre-término, reducción de la lactancia, familias pe-
estado de equilibrio que requiere de una perturbación queñas, aumento del uso de antibióticos y aumento de
importante para ser alterada. Las intervenciones dieté- aseo y uso de jabones antibacterianos.
ticas a corto plazo pueden alterar transitoriamente la Uno de los factores más importantes implicados en
estructura de la comunidad microbiana intestinal, pero este hecho es el aumento del uso de antibióticos, obje-
cambios en la dieta a largo plazo pueden cambiar a un tivándose alteraciones importantes en la microbiota
estado estacionario nuevo. intestinal tras su uso: disminución de la diversidad filo-
Las intervenciones dietéticas y estrategias de modu- genética y cambios en las proporciones de las diferen-
lación nutricional sugieren modificaciones de la micro- tes familias, lo que puede alterar el desarrollo del siste-
biota intestinal que mejoran la integridad de la barrera ma inmune y predisponer al anfitrión a desarrollar
intestinal, induciendo una disminución de la endotoxe- infecciones bacterianas o virales, alergias, etc.42. Los
mia metabólica y marcadores inflamatorios, lo que se antibióticos tienen un profundo efecto sobre la micro-
ha relacionado con mejoría en la resistencia a la insuli- biota, y su uso excesivo está unido a un aumento de
na, control de la inflamación sistémica inducida y el patógenos resistentes a los antibióticos. Ahora hay
desarrollo de la masa grasa, aspectos clave en el desa- pruebas convincentes de que existen modificaciones
rrollo de enfermedades como la obesidad o la diabe- importantes en la microbiota después de un tratamien-
tes. Las modificaciones en las poblaciones microbianas to con antibióticos43-45. Aunque el particular taxón
encontradas tras intervención dietética fueron: mayor afectado varía entre individuos, algunos taxones no se
abundancia de bacterias protectoras de la barrera recuperan incluso después de meses de tratamiento, y
intestinal tales como Lactobacillus y Bifidobacterium, en general, hay una disminución a largo plazo en la
y reducción marcada de patógenos oportunistas de biodiversidad de las bacterias tras su uso.
las familias Enterobacteraceae, Desulfovibrionaceae y Muchos estudios han sido publicados al respecto;
Streptococcaceae40. así, Neyrinck y Dekzenne46, observaron tras la adminis-
La especie Akkermansia muciniphila también se ha tración de un antibiótico de amplio espectro en roedo-
asociado a mejores perfiles metabólicos. Además, se ha res obesos una mejora en las alteraciones metabólicas
demostrado que su administración oral diaria o su incre- y cambios en filos como Firmicutes, Bacteroidetes y
mento tras intervención nutricional mediante el uso de Proteobacteria. Además, varios experimentos47 han de-
prebióticos invierten trastornos metabólicos inducidos mostrado que el uso de tratamientos antibióticos de
por una dieta alta en grasas, de ahí su posible implica- amplio espectro como la vancomicina puede incre-
ción en la prevención y/o tratamiento de la obesidad y mentar la abundancia de Akkermansia muciniphila en
sus complicaciones41. Los mecanismos propuestos por roedores, reduciendo la incidencia de diabetes. Asimis-
los que el uso de prebióticos mejora la salud intestinal y mo, Cani et al, apoyan que la antibioterapia de amplio
reduce las complicaciones metabólicas de la obesidad espectro reduce significativamente los niveles plasmáti-
incluyen: 1) aumento de la población de Bifidobacte- cos de lipopolisacáridos (LPS) en modelos animales48.
rium, que como ya hemos comentado, se correlaciona En sus estudios, Membrez et al 49, objetivaron cómo
positivamente con la salud intestinal y negativamente roedores genéticamente obesos que presentaban resis-
con la obesidad y la diabetes. 2) Reducción de endo- tencia a la insulina y que estaban sometidos a una die-
toxemia metabólica a través de una mayor función de ta alta en grasas mejoraron la tolerancia a la glucosa y
barrera del intestino. 3) Aumento de las señales de sa- el peso al someterse a tratamiento antibiótico. El uso
ciedad del intestino, tales como la producción del de antibioterapia redujo el grado de inflamación del
péptido YY o la reducción de ghrelina. 4) Mejoría en tejido adiposo, así como el estrés oxidativo y la infiltra-
la acción de la insulina mediante el aumento de secre- ción de macrófagos del mismo.
ción de GLP-1. 5) Reducción de la adipogénesis median- De otro lado, algunos estudios han asociado la expo-
te síntesis de ácidos grasos de cadena corta (SCFA)36. sición a antibióticos con aumentos de la masa corporal
en diferentes circunstancias, como son los primeros
2.4. Pérdida de biodiversidad de nuestra meses de la vida, durante la infancia, en sujetos desnu-
tridos, animales, infectados por H. pylori, enfermos
microbiota intestinal
con fibrosis quística, etc. sin poder discernir si este
La evidencia existente apunta hacia un cambio im- aumento de peso es debido a los efectos beneficiosos
portante de la microbiota intestinal en las últimas dé- del tratamiento antibiótico en la prevención o trata-
cadas, aumentando la presencia de determinadas es- miento de infecciones bacterianas o a través de sus
174 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

efectos sobre la microbiota, siendo plausible que estén crito anteriormente, se han producido en las últimas
presentes una mezcla de estos dos mecanismos en mu- décadas.
chos de los escenarios descritos50-54. Se entiende que el origen de la obesidad es un reto
Estudios epidemiológicos han apoyado el aumento complicado debido a la gran diversidad genética y las
del riesgo de sobrepeso en la infancia tardía con la ex- diferencias sociales entre los seres humanos. Por lo tan-
posición a terapia antibiótica en la primera infancia55. to, las muchas historias naturales que existen son obstá-
Incluso han relacionado el progresivo aumento de obe- culos que ralentizan la investigación para identificar las
sidad poblacional con el uso creciente de antibióti- diversas causas de la actual epidemia de la obesidad.
cos56, 57. Durante décadas, dosis subterapéuticas de Durante más de medio siglo, y desde que se han llevado
antibióticos se han utilizado para promover el creci- a cabo avances en biología molecular, la comunidad
miento de animales de granja, con incremento de científica ha estado investigando sobre el origen genéti-
masa grasa, relacionándose incluso el uso creciente de co de las enfermedades metabólicas. A pesar de los tre-
antibióticos con el aumento de la obesidad58, 59. En mendos esfuerzos y la identificación de algunas muta-
contraste con estas observaciones, la exposición a anti- ciones puntuales en el genoma, no se ha elaborado una
bióticos en los primeros años de vida en niños de ma- visión global de los mecanismos moleculares exactos
dres con sobrepeso se ha asociado con un menor ries- involucrados en el desarrollo de la diabetes y la obesi-
go de sobrepeso en la infancia60. En conjunto, estos dad. Ciertamente, el descubrimiento de genes candida-
estudios pueden sugerir que la exposición a antibióti- tos en los estudios de asociación pangenómicos (GWAS,
cos en etapas tempranas de la vida puede perturbar la Genome Wide Association Studies) han arrojado luz y
microbiota intestinal sana, pero, por otro lado, tam- han ayudado a identificar nuevos genes para la sensibi-
bién tiene el potencial de modificar una microbiota lidad/resistencia a la diabetes y fenotipos metabólicos
perturbada hacia un estado más saludable61. extremos63. Sin embargo, estos pasos hacia adelante no
pueden explicar aún la diversidad global de historias na-
3.  Microbiota y enfermedades metabólicas turales de las enfermedades metabólicas demostradas
esencialmente por gemelos monocigóticos, que son dis-
3.1. Los factores genéticos y ambientales no cordantes para la diabetes tipo 2 y la obesidad64, 65.
son suficientes para explicar la creciente Un segundo paso hacia la comprensión del origen
aparición de enfermedades metabólicas de las enfermedades metabólicas ha sido considerar
factores epigenéticos y ambientales. Un cambio drásti-
En las últimas décadas estamos viviendo un incre- co en los hábitos alimentarios, a través del cual la fibra
mento espectacular de la prevalencia de enfermedades dietética ha sido reemplazada por una dieta alta en
metabólicas en los países desarrollados o en vías de grasas, ciertamente contribuye al origen de las enfer-
desarrollo y el vertiginoso incremento de la obesidad medades metabólicas. Sin embargo, este concepto
está a la cabeza. Un análisis reciente publicado sobre simplista no puede explicar por qué algunas personas
tendencias del IMC en 200 países62 estima que la pre- son sensibles y otras resistentes al desarrollo de enfer-
valencia mundial de obesidad ha pasado de 105 millo- medades metabólicas. Existe la necesidad de encontrar
nes de personas a 641 millones en solo cuatro déca- un nuevo paradigma que debiera tener en cuenta la
das, y de mantenerse esta tendencia, para el año 2025 diversidad genética, el impacto de los factores ambien-
la quinta parte de la población del planeta será obesa, tales, el rápido desarrollo de las enfermedades meta-
alcanzando el 18 % en los varones y superando el 21 % bólicas, y el comportamiento individual de cara al de-
en las mujeres. En España tenemos datos que demues- sarrollo de diabetes y obesidad.
tran que en los últimos 20 años se ha duplicado la tasa
de sujetos obesos, pasando de cifras cercanas al 12 % 3.2. El incremento de la prevalencia de obesidad
en la década de los años 1990 a cifras que superan con
podría estar escondido en nuestro cuerpo
creces el 20 % en el momento actual. Factores ambien-
tales como el incremento de la ingesta calórica y el des- Durante el curso de la década pasada, numerosos
censo de la actividad física han sido considerados las trabajos publicados sugieren que la microbiota intesti-
causas de este espectacular aumento de prevalencia de nal, y más concretamente sus variaciones en la compo-
obesidad y enfermedades metabólicas. Sin embargo, sición y diversidad, desempeñan un papel importante
no parece que desde el año 1990 a la actualidad se en el desarrollo de trastornos metabólicos, especial-
haya seguido incrementando la ingesta calórica y el mente diabetes y obesidad. Existen muchos estudios
descenso de actividad física en nuestro entorno y sin que evidencian profundos cambios en la composición
embargo el crecimiento de la prevalencia de obesidad y función metabólica de la microbiota en los sujetos
sigue siendo exponencial, por tanto se está pensando con obesidad66-68. Así, la microbiota intestinal está
en otros factores ambientales que puedan explicar este siendo cada vez más reconocida como una pieza clave
incremento, y entre estas causas se encuentran los po- que conecta genes, medio ambiente, y el sistema in-
sibles cambios en la microbiota que, como hemos des- munológico; viéndose implicada en la regulación de la
Tema 11.  Microbiota intestinal y obesidad 175

función metabólica, el desarrollo de inflamación de mento en la permeabilidad intestinal y el estableci-


bajo grado y la regulación del balance energético. miento de un estado de inflamación crónico, bien do-
cumentado en el desarrollo de la obesidad, tanto en
3.2.1. Mecanismos fisiopatológicos propuestos: estudios animales como en humanos69 (figura 3).
Un rasgo común, tanto de la obesidad como de la
influencia de la microbiota sobre la
diabetes, es la presencia de un componente inflamato-
homeostasis energética rio de bajo grado que se ha descrito con precisión en
Varios mecanismos se han propuesto como enlace tejidos directamente involucrados en la regulación del
entre la microbiota intestinal y la obesidad, entre los metabolismo, como son el hígado, el tejido adiposo y el
que se incluyen: músculo71. Esta inflamación metabólica está caracteriza-
da por un exceso moderado en la producción de cito-
quinas: IL-6, IL-1, o TNF-α. Experimentos animales han
1. La generación de metabolitos activos como demostrado que cambios en la microbiota son capaces
ácidos grasos de cadena corta (SCFA) o ácidos de modificar el grado de inflamación del tejido adiposo.
biliares implicados en efectos Algunos estudios han demostrado una relación entre
antiinflamatorios y de regulación del la ingesta de fibra dietética o prebióticos –sustrato para
metabolismo hidrocarbonado-lipídico35, 69, 70 la producción de SCFA por la microbiota– y la liberación
de hormonas gastrointestinales, como GLP-1, péptido
El butirato es un SCFA que, junto con el propionato intestinal YY, ghrelina y otras hormonas peptídicas tanto
y el acetato, son producidos por las bacterias intestina- en humanos72-74 como en roedores75, aumentando la
les al digerir la fibra dietética. Estos SCFA son absorbi- saciedad después de una comida y disminuyendo la in-
dos en el intestino, donde sobre todo el butirato pro- gesta de alimentos; aunque los mecanismos subyacen-
porciona energía a las células epiteliales del colon y tes son poco conocidos.
contribuye de forma muy importante a disminuir la También se han vinculado los SCFA con la expresión
permeabilidad intestinal. de leptina a través del receptor GPR41 en modelos mu-
Los lipopolisacáridos (LPS) son un componente pro- rinos76. Asimismo, los adipocitos detectan el aumento
inflamatorio de la pared celular de las bacterias gram- de los niveles de SCFA producidos por la fermentación
negativas. La endotoxemia metabólica o el aumento en microbiana intestinal y responden mediante la induc-
los niveles sistémicos de LPS se relaciona con un au- ción de la producción de leptina, implicada en la regula-

ENDOTOXEMIA CD14-LPS

NFKB
Roseburia
Bifidobacterias TLR4
AUMENTO DEL ESTADO
Gramnegativas CD14 INFLAMATORIO

LPS MACRÓFAGO

LPS CD14-LPS Inflamación


TLR4
NFKB
Resistencia a la insulina
CD14
AUMENTO DEL ESTADO
LPS INFLAMATORIO

Dieta alta
en grasas

El incremento en LPS inducido por cambios en la microbiota intestinal, dietas altas en grasas, característico en pacientes
con enfermedades metabólicas como obesidad, rompe la integridad de la barrera intestinal aumentando su permeabilidad y
disminuyendo la degradación de LPS, lo que conduce a la activación de macrófagos en los diferentes tejidos, generando un
estado inflamatorio de bajo grado.

Figura 3.  Endotoxemia metabólica.


176 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

ción del balance energético del hospedador. Los datos De otro lado, un 5 % de los ácidos biliares primarios
obtenidos recientemente con modelos experimentales escapa de la circulación enterohepática alcanzando el
en obesidad46, 77 sobre la suplementación dietética con intestino grueso y transformándose en ácidos biliares
carbohidratos no digeribles ponen de manifiesto efectos secundarios –ácidos desoxicólico y litocólico– por ac-
beneficiosos para el anfitrión, con reducción de la adi- ción de la microbiota intestinal, estando implicado el
posidad al contrarrestar la expresión de receptores uni- filo Firmicutes principalmente. En sujetos con sobrepe-
dos a proteínas G 43 (GPR43) en el tejido adiposo indu- so y diabetes se observó menor número de ácidos bilia-
ciendo una disminución de los procesos activados por el res secundarios en comparación con los sujetos sanos.
receptor PPAR-gamma. Los ácidos biliares secundarios parecen tener un papel
Asimismo, los niveles de ghrelina han mostrado co- insulinosensibilizador, actuando como moléculas me-
rrelaciones negativas con la cantidad de Bifidobacte- diadoras de señalización –en el tejido adiposo pardo y
rium, Lactobacillus, Blautia coccoides y Eubacterium en el músculo– y aumentando la actividad mitocon-
rectale y positivas con el número de Bacteroides y Pre- drial. Además, parece mejorar el metabolismo hidro-
votella, lo que sugiere el papel de la microbiota intesti- carbonado al estimular la producción de péptidos
nal en el control de la saciedad y su asociación con las como GLP-1 por las células intestinales L61, 80.
hormonas reguladoras de la ingesta, leptina y ghrelina.
Curiosamente, también se ha relacionado la produc- 2. Incremento del sistema endocannabinoide con
ción de butirato con los niveles de serotonina en mo- su importante papel en la homeostasis
delos animales. Actualmente es conocido que la sero- energética mediante la regulación del apetito
tonina puede regular la permeabilidad intestinal, y la motilidad intestinal69
además de ser un importante neurotransmisor en el
intestino y el cerebro, involucrado en la regulación del El sistema endocannabinoide es un mediador
peso corporal y control de la saciedad78, 79. involucrado en la comunicación entre la micro-

1. Lipopolisacáridos 2. SCFA 3. Ácidos biliares

FIBRA VEGETAL Ácido biliar


LPS Butirato primario Ácido biliar
Acetato secundario
Propionato

LPS

TLR4
↑Lipogénesis GPR41 Fuente de energía TGRS
↑Gluconeogénesis GPR43

Inflamación

Inflamación

↑Gasto de energía
↑GLP-1 y PYY ↑GLP-1

1: Los LPS se originan a partir de la membrana externa de bacterias gramnegativas y se unen al receptor Toll-like 4 (TLR4)
activando vías proinflamatorias que generan un estado inflamatorio de bajo grado. 2: Los ácidos grasos de cadena corta (SCFA)
son los productos de fermentación de la fibra vegetal ingerida (butirato, acetato, propionato). Son utilizados como sustratos en
la gluconeogénesis y lipogénesis hepática, y para la obtención de energía en el colon. Los SCFA se unen a los receptores GPR41 y
GPR43, con diferentes efectos: disminución de la inflamación, aumento de la producción de GLP-1 y PYY. 3: Los ácidos biliares
primarios son producidos en el hígado y recirculan al intestino. Los ácidos grasos primarios desconjugados son metabolizados por
las bacterias intestinales en ácidos biliares secundarios que se unen a los receptores TGR5, incrementando el gasto energético en
el músculo y la secreción de GLP-1 en las células L.

Figura 4.  Lipopolisacáridos y metabolitos activos.


Tema 11.  Microbiota intestinal y obesidad 177

biota intestinal y el tejido adiposo, desempeñan- La ingestión de fructo-olisacáridos en la dieta a largo


do un papel importante en la homeostasis ener- plazo influye en la densidad de células L que expresan
gética a través de la regulación del apetito y el receptores GPR43 y GPR4191. Se han descrito incre-
metabolismo. En modelos animales se ha de- mentos en la producción de GLP-1 y péptido intestinal
YY en relación con el aumento de Bifidobacterium ge-
mostrado cómo el sistema endocannabinoide
nerado por el uso de algunos prebióticos. El aumento
controla la función de barrera intestinal y la adi- de Bifidobacterium modula la inflamación en ratones
pogénesis81. obesos aumentando la producción de incretinas y re-
duciendo la permeabilidad intestinal38, 89.
3. La disminución de la expresión génica
intestinal del factor adiposo inducido por el 3.2.2. Evidencias en la literatura: nexo entre
ayuno (FIAF-fat-induced adipocyte factor) microbiota intestinal y obesidad
encargado de inhibir la actividad de la La relación de la microbiota intestinal con diferentes
lipoproteína lipasa en relación con el fenotipos metabólicos es un paradigma de reciente
almacenamiento hepático y adiposo de construcción. Las primeras evidencias sobre la relación
grasas70, 82 de la microbiota intestinal en la regulación de la ho-
meostasis energética y adiposidad vienen de manos de
Se mostró que la microbiota intestinal podía dismi- Gordon et al 90 y Bäckhed et al 83, quienes objetivaron
nuir la producción de FIAF llevada a cabo por las célu- cómo tras la colonización microbiana de ratones libres
las intestinales, las cuales inhiben la actividad de la li- de gérmenes (ratones axénicos) se producía un incre-
poproteín lipasa, enzima que favorecen la liberación de mento del peso y grasa corporal. Gordon et al 90, obje-
ácidos grasos no esterificados hacia tejidos como el tivaron que los ratones axénicos tenían un 40 % de
hígado y las células adiposas83. grasa corporal total menos que los ratones criados
convencionalmente, a pesar de que el consumo de ca-
4. La modulación intestinal derivada de la lorías de los primeros animales fue un 29 % superior.
secreción de péptidos (GLP-1, GLP-2, péptido Pero tras la colonización intestinal microbiana de los
intestinal YY, etc.)84 ratones libres de gérmenes, estos incrementaron su
grasa corporal total en un 57 % en 2 semanas.
Yadav et al 85, demostraron que la modulación de la Muchas son las publicaciones al respecto que se han
composición de la microbiota intestinal mediante el sucedido en los últimos años, así como los descubri-
uso de probióticos estimula la producción de butirato, mientos que han permitido considerar a la microbiota
lo que favorece la secreción de GLP-1 en las células L, como un factor importante en la génesis de las enfer-
mejorando el estado inflamatorio y la resistencia a la medades metabólicas. En modelos animales, se ha evi-
insulina. La mayoría de las vías subyacentes a los efec- denciado que ratones con mutación del gen leptina, y
tos de los SCFA siguen siendo desconocidas. Sin em- por lo tanto genéticamente obesos, tenían una micro-
bargo, varios estudios han sugerido que los efectos de biota diferente a aquellos ratones que no tenían esa
los SCFA son mediados por miembros de una familia mutación91. En estos modelos animales de obesidad, la
de receptores acoplados a proteínas G recientemente interacción entre los filos intestinales dominantes
identificados, siendo estos los receptores 43 y 41 aco- –Bacteroidetes y Firmicutes– se modifica con una re-
plados a proteína G (GPR43 y GPR41, respectivamen- ducción significante del primero y un correspondiente
te)86. La unión de los SCFA a los receptores GPR43 y aumento del segundo91. La misma tendencia se obser-
GPR41 aumentan los niveles plasmáticos de GLP-1 y vó en humanos, Ley et al 92, informaron de una compo-
péptido YY, lo que conduce a mejoras en la homeosta- sición alterada en la microbiota de obesos humanos
sis de la glucosa y reduce el apetito87, 88. con una marcada disminución de la diversidad bacte-
Los receptores GPR41 y GPR43 también se encuen- riana, y de similares características a la encontrada en
tran en las células enteroendocrinas L del colon huma- ratones obesos, con mayor proporción de Firmicutes y
no. Se sugiere que el modo de acción de la liberación relativamente menos de Bacteroidetes. Otros muchos
de GLP-1 y péptido YY en el colon es diferente al modo autores18, 93-96, han confirmado esta perturbación de
de acción en el intestino delgado. Los SCFA del lumen la microbiota, en relación a sus dos filos principales,
colónico podrían estar involucrados en la regulación de encontrando en la mayoría de los estudios publicados
la homeostasis energética a largo plazo, mediante la hasta el momento un incremento de la ratio Firmicu-
inducción de la secreción de GLP-1 a través de su ac- tes/Bacteroidetes en el microbioma de sujetos obesos,
ción sobre los receptores GPR41 y GPR43, mientras lo que se ha asociado con el aumento del estado infla-
que en el intestino delgado estaría implicado en el con- matorio de bajo grado y el incremento en la capacidad
trol del apetito, ingesta y homeostasis energética a cor- para capturar la energía procedente de los alimentos
to plazo87. por parte del filo Firmicutes frente a los Bacteroidetes;
178 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

aunque dentro del filo Bacteroidetes, Bacteroides the- Sin embargo, no en todos los estudios se describe
taiotaomicron97 ha demostrado mejorar la absorción y este hallazgo en la interacción entre los filos intestina-
el procesamiento de los nutrientes del huésped. Asi- les dominantes –Bacteroidetes y Firmicutes–37, 100-102.
mismo, todos estos estudios coinciden en la existencia Un trabajo reciente concluye que la obesidad proba-
de variaciones en la microbiota intestinal con una di- blemente esté relacionada con un aumento en los filos
versidad microbiana reducida, lo que se ha asociado Firmicutes y Actinobacteria, con reducción de los filos
con mayor adiposidad, resistencia a la insulina y un Bacteroidetes, Verrucomicrobia y la especie Faecalibac-
fenotipo inflamatorio más pronunciado. terium prausnitzii 103. A este respecto, autores como
Concretamente, el incremento de Firmicutes obser- Turnbaugh et al y Furet et al18, 104, enuncian patrones
vado en animales y sujetos obesos se podría asociar variables en la composición microbiana en individuos
con un aumento en la capacidad para digerir algunos obesos con una representación menor de Bacteroide-
polisacáridos indigeribles, produciéndose tras su ac- tes y mayor de Actinobacteria105, sin diferencias apa-
tuación monosacáridos y SCFA capaces de ser absorbi- rentes en Firmicutes respecto a individuos con normo-
dos por el huésped obteniendo finalmente energía de peso. También se ha relacionado la obesidad con
sustancias que se eliminarían por las heces sin ser ab- disminución en las cantidades de Bifidobacterium y
sorbidas. Por lo tanto, existe una microbiota específica Ruminococcus69, 106.
que es capaz de obtener más energía de la misma in- Un estudio reciente98 describe cómo el 75 % de los
gesta calórica diaria98. Zhang et al sugieren que una genes microbianos asociados con la obesidad perte-
mayor cosecha de energía en individuos obesos está necían a Actinobacteria y el 25 % a Firmicutes, mien-
relacionada con la transferencia de hidrógeno entre tras que el 42 % de los genes asociados con la delga-
taxones, ya que observaron un incremento simultáneo dez pertenecían a Bacteroidetes107. No obstante, la
en Prevotella que produce hidrógeno y en Archaea me- absorción de nutrientes en relación con los diferentes
tanogénica que utiliza hidrógeno99 (figura 5). Estos patrones de representación microbiana varía en fun-
hallazgos están de acuerdo con la observación de que ción de la población de estudio, siendo diferente la
los ratones libres de gérmenes que se alimentaron de forma de responder una misma población microbiana
una dieta rica en grasas ganaron menos peso que sus a determinas dietas en individuos con normopeso
homólogos convencionales90. frente a obesos100.

Determinados polisacáridos serían indigeribles sin la actuación de la microbiota que los convierte
en monosacáridos y ácidos grasos de cadena corta (SCFA). La digestión del almidón, por ejemplo,
produce H2, cuyo incremento inhibiría la digestión de sustancias, y en este paso intervienen otros
grupos de bacterias que convierten el H2 en metano.

Figura 5.  Polisacáridos indigeribles.


Tema 11.  Microbiota intestinal y obesidad 179

Otro descubrimiento que pone de manifiesto la im- y obesidad, fue el realizado por Turnbaugh PJ et al. en
plicación de la microbiota en el desarrollo de la obesi- 2006113, donde demostraron que el trasplante de la
dad son, como hemos comentado con anterioridad, las microbiota de ratones genéticamente obesos a ratones
modificaciones que esta sufre por el efecto de la dieta. libres de gérmenes le provocaba un incremento de
Se ha verificado que la dieta modifica la composición peso muy significativo comparado con los ratones li-
de la microbiota, y también la expresión del metageno- bres de gérmenes a los que se les trasplantaba la mi-
ma independientemente del genoma del huésped, crobiota de ratones delgados, lo que refuerza la exis-
como se ha evidenciado en los gemelos homocigóticos tencia de una relación causal entre microbiota y
discordantes para la obesidad18 o en ratones genética- obesidad (figura 6). Por tanto, sorprendentemente el
mente idénticos y alimentados con una dieta alta en fenotipo que cosecha energía es transmisible simple-
grasas108, 109. De otro lado, cambios de peso significati- mente por la transferencia de «microbiota obesa» a
vos se han asociado con mayor inestabilidad microbia- individuos sanos y flacos113, 114.
na. Estudios recientes han demostrado modificaciones Dentro de un determinado filo, no todos los géne-
en las comunidades que conforman la microbiota in- ros y especies tienen el mismo papel, de manera que
testinal de individuos que consiguen pérdida de peso las distintas especies bacterianas existentes presentan
con incremento en determinadas especies de los géne- características diferenciales, que pueden relacionarse
ros Bacteroides (Bacteroides fragilis), Prevotella y Lacto- con rasgos beneficiosos o perjudiciales. Por ejemplo,
bacillus, frente a disminución en especies de los géneros la representación de Lactobacillus es mayor en indivi-
Clostridium (C. coccoides, C. histolyticum), Bifidobacte- duos obesos en comparación con individuos delga-
rium (B. longum), Eubacterium (E. rectale) y Akkerman- dos. Sin embargo, paradójicamente, la pérdida de
sia110, 111. Además, la proporción relativa de Bacteroide- peso debida a la restricción de calorías y actividad fí-
tes y Firmicutes aumentó en sujetos obesos tras la sica de los adolescentes con sobrepeso también
pérdida de peso, lo que indica que la modulación de la aumentó el número de Lactobacillus. De este modo,
microbiota puede ser un medio eficaz para el control el enfoque probiótico con cepas concretas de Lacto-
del peso. La restricción calórica en personas con obesi- bacillus no aumenta, sino que reduce las alteraciones
dad o sobrepeso también ha demostrado modificacio- metabólicas que ocurren en la obesidad, incluso ha
nes en el microbioma fetal, con incremento en la rique- demostrado tener un impacto positivo sobre la sensi-
za microbiana, lo que se correlaciona con parámetros bilidad a la insulina. La administración de cepas pro-
metabólicos mejorados112. bióticas específicas como Lactobacillus rhamnosus y
Sin embargo, probablemente el experimento que Lactobacillus gasseri han mostrado tener efectos be-
más solidez le ha dado a la causalidad entre microbiota neficiosos sobre la obesidad, con disminución del IMC

Muestra experimentos donde a ratones libres de gérmenes se les trasplantó la microbiota de


ratones genéticamente obesos (ob/ob) y ratones normales (Control).

Figura 6.  Experimentos: Trasplante de microbiota.


180 BLOQUE: ALTERACIONES DE LA ENERGÍA

y de la masa grasa visceral y subcutánea en sujetos minución proporcional en Firmicutes. Un estudio fran-
obesos115. Además, otras especies de Lactobacillus cés más reciente121 apoya estos hallazgos y además
como Lactobacillus plantarum y L. paracasei se han describe un incremento en la riqueza microbiana tras la
asociado con la delgadez, frente a especies como Lac- cirugía. En modelos animales122 se ha demostrado el
tobacillus reuteri, que se ha asociado a obesidad. papel que desempeña la microbiota en la pérdida de
Todo ello sugiere que los efectos fisiológicos de los peso inducida por el bypass gástrico en Y de Roux, ob-
probióticos son altamente dependientes de la cepa56, jetivándose cómo ratones libres de gérmenes a los que
116
. A nivel de género, la presencia de Acinetobacter, se transfería microbiota de ratones sometidos a un
Aliivibrio, Marinomonas, Pseudoalteromonas, Shewa- bypass gástrico en Y de Roux tenían una pérdida de
nella, Lachnospira, Citrobacter y Shigella, así como las peso y disminución de masa grasa más significativa en
especies Parabacteroides distasonis y E. coli se han comparación con ratones libres de gérmenes que reci-
asociado positivamente con la obesidad. Sin embar- bieron microbiota de ratones sometidos a una opera-
go, la presencia de Bacteroides, Prevotella, Sutterella ción simulada.
y Methanobrevibacter se asociaron negativamente
con la misma50. Además, se ha vinculado niveles redu- 4. Resumen
cidos de Akkermansia muciniphila, bacteria que de-
grada mucina, con la obesidad y la diabetes, correla- La rapidez con la que la obesidad está aumentando
cionándose la normalización de sus niveles, mediante su incidencia en las últimas décadas, hacen que las teo-
el uso de prebióticos y tipo de alimentación, con un rías tradicionales de la ganancia ponderal como un
perfil metabólico mejorado en roedores117, 118. Nuevos desequilibrio entre el gasto y el consumo de energía
hallazgos indican que una mayor abundancia de sea demasiado simplista, por lo que otros elementos
Akkermansia municiphila en sujetos con obesidad o son objeto de estudio como posibles factores etiopato-
sobrepeso expuestos a una restricción calórica, se génicos implicados, como es el caso de la microbiota.
asocia con un estado metabólico más saludable que Los microbios que residen dentro y sobre el cuerpo
incluye mejoría en el metabolismo lipídico, hidrocar- humano constituyen nuestra microbiota, y sus genes
bonado y en la distribución de la grasa corporal, con son conocidos como microbioma. La obesidad está
disminución de la circunferencia de la cintura57. Los asociada con profundos cambios en la composición y
datos actuales necesitan investigarse más a fondo en la función metabólica de la microbiota intestinal,
para determinar la posible aplicabilidad terapéutica permitiendo que la «microbiota obesa» obtenga de
de Akkermansia municiphila. Esto indica la importan- forma más eficiente la energía de la dieta mediante
cia que pueden tener determinados géneros o espe- una mayor absorción y depósito de nutrientes, debi-
cies que se encuentran en pequeñas proporciones do a su capacidad para descomponer los polisacári-
para la patogénesis de la obesidad. dos que no pueden ser digeridos por el anfitrión, con
Además, la alteración de la microbiota parece que el consiguiente aumento en la producción de mono-
precede a la alteración en el peso, objetivándose en el sacáridos y ácidos grasos de cadena corta (SCFA).
estudio realizado por Kalliomäki et al 119 una mayor Además, se han relacionado determinados filos bac-
proporción de Bifidobacterium y menor número de terianos con un mayor aprovechamiento energético
Staphylococcus aureus en niños con normopeso fren- de la alimentación. No obstante, este aumento de la
te a aquellos que desarrollaron sobrepeso con los masa grasa no es únicamente debido a una cosecha
años, proponiendo que Staphylococcus aureus puede más eficiente de energía, sino que la microbiota par-
actuar como un disparador de la inflamación de bajo ticipa en cambios del medio hormonal, expresión de
grado. genes reguladores de la lipogénesis, resistencia a la
La cirugía bariátrica es el tratamiento más efectivo en insulina, etc.
la actualidad para los pacientes con obesidad mórbida. Así, las perturbaciones de microbiota intestinal con-
Sin embargo, los efectos beneficiosos de la cirugía ba- tribuyen al desarrollo de trastornos metabólicos. En
riátrica sobre la homeostasis hidrocarbonada, el gasto particular, estos cambios en la comunidad microbiana
energético y el aumento de la saciedad, no están com- intestinal parecen preceder a la ganancia de peso y las
pletamente explicados por la restricción de la ingesta y consecuencias metabólicas de la obesidad. La compo-
malabsorción generada; existiendo cambios en los ni- sición de la microbiota de los sujetos obesos es diferen-
veles hormonales y perfil microbiano intestinal. Se ha tes a controles delgados. Los mecanismos por los que
demostrado que determinadas intervenciones quirúr- la microbiota puede influir en la patogénesis de la obe-
gicas, como el bypass gástrico en Y de Roux generan sidad incluyen modificaciones en la expresión de FIAF,
alteraciones en la microbiota intestinal, lo que podría incremento del sistema endocannabinoide, cambios en
contribuir a algunos de los efectos favorables de estas la secreción de incretinas y de metabolitos activos
operaciones. Zhang et al120, publicaron cambios en la como SCFA y ácidos biliares secundarios. Los trasplan-
microbiota de sujetos tras bypass gástrico en Y de Roux tes de microbiota han sido capaces de cambiar el peso
con gran incremento en Gammaproteobacteria y dis- en modelos animales.
Tema 11.  Microbiota intestinal y obesidad 181

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BLOQUE:
HIDRATOS DE CARBONO
(Dra. Clotilde Vázquez y Dra. Dolores
del Olmo)
TEMA 12. Diabetes mellitus. Recomendaciones internacionales.
Dietas por raciones y por equivalencias.
Dres. Bárbara Cánovas, Virginia Peña, Ofelia Llamazares
y Clotilde Vázquez

TEMA 13. Importancia de la dieta en situaciones intercurrentes en diabetes mellitus.


Dres. Dolores del Olmo, Miriam Pérez-Pelayo, Victoria Alcázar
y Purificación Martínez de Icaya

TEMA 14. Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento


de los hidratos de carbono. Dieta controlada en fructosa. Dieta controlada
en sacarosa. Dieta restringida en galactosa.
Dres. Yaiza García Delgado, María del Pino Alberiche Ruano,
Rosa María Sánchez Hernández y Raúl Alberto González Medina
Tema 12. 
Diabetes mellitus. Recomendaciones internacionales.
Dietas por raciones y por equivalencias
Bárbara Cánovas
Virginia Peña
Ofelia Llamazares
Endocrinología y Nutrición. Hospital Virgen de la Salud. Toledo

Clotilde Vázquez
Jefe de Servicio de Endocrinología y Nutrición. Fundación Jiménez Díaz. Madrid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 189-199.

 1. Introducción
 2. Objetivos
 3.  Tipos de dieta
 4.  Estrategias en nutrición y diabetes mellitus tipo 1
 5.  Estrategias en nutrición y diabetes mellitus tipo 2
 6.  Aporte calórico recomendado
 7.  Reparto de macronutrientes
 8.  Otros nutrientes
 9. Conclusiones
10. Bibliografía

1. Introducción Como vamos a ver a lo largo de este capítulo, las


recomendaciones dietéticas para el paciente diabético
La terapia nutricional constituye un elemento no difieren demasiado de la dieta equilibrada reco-
esencial en el tratamiento de la diabetes mellitus mendada para la población general, salvo en la nece-
(DM), siendo importante tanto para la prevención de sidad de repartir la toma de hidratos de carbono (HC)
su desarrollo, como para el manejo de la enferme- a lo largo del día y en un número determinado de to-
dad, así como para evitar o retrasar sus complicacio- mas, lo que puede conseguir descensos de entre un
nes. El cumplimiento de un plan nutricional es siem- 1-2% de la HbA1c.
pre difícil de conseguir por los cambios de estilo de Al hablar de dieta, y sobre todo en personas con
vida que implica1 y por ello no debe existir un plan DM, hay que tender a individualizar2-4 tanto en los ob-
de alimentación específico para personas con diabe- jetivos que se deben exigir al paciente, como en sus
tes. Para ser eficaz, el plan debe ser individualizado, preferencias, teniendo siempre en cuenta el nivel de
explicado y consensuado con el paciente y conocido compromiso y la capacidad del paciente.
por todo equipo de salud para lograr una buena ad- Un tratamiento nutricional adecuado además del
herencia2. beneficio en la salud, supone un ahorro de sumas
Además de lograr un buen control glucémico, las enormes de dinero en costes hospitalarios5.
medidas dietéticas van encaminadas al control de los A pesar de los conocimientos actuales sobre la ali-
diferentes factores de riesgo cardiovascular que pue- mentación adecuada de las personas con DM, siguen
den coexistir, tales como la hipertensión arterial (HTA), publicándose estudios que demuestran que una parte
la dislipemia y la obesidad, intentando conseguir con de la población realiza dietas inadecuadas, basadas en
ello una disminución de las complicaciones de la diabe- creencias ancestrales sobre lo perjudicial de la ingesta
tes a largo plazo. de hidratos de carbono. Por ese motivo y por las venta-

189
190 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

jas que aporta una alimentación adecuada en nuestros 3.2.  Dieta estricta
pacientes, debemos realizar prescripciones dietéticas
de utilidad contrastada, sencillas y de fácil seguimiento Son menús fijos que se basan en la planificación de
que vayan consiguiendo desterrar los errores concep- calorías y reparto de macronutrientes prefijado.
tuales que todavía hoy podemos encontrar en nuestras
consultas. • Ventajas: más operativa en personas con poca ca-
pacidad de comprensión y cuando el prescriptor
no dispone de tiempo o soporte educativo. Es
2. Objetivos práctica en períodos específicos.
Los objetivos del tratamiento dietético en la diabetes • Inconvenientes: monótona, no garantiza adapta-
podrían resumirse en los siguientes: ción a gustos o estilo de vida y no aprovecha las
posibilidades de variación de los alimentos.
1. Promover y realizar soporte en la necesidad de
una alimentación saludable, variada y en cantida- 3.3. Dieta por equivalencias o dieta por
des suficientes para: intercambios (tablas 1 y 2)
a. Control glucémico. Consiste en listas que agrupan alimentos de conteni-
b. Conseguir y mantener un peso objetivo (con- do nutricional similar, según el principio inmediato que
servando masa magra) ayudando a retrasar el predomine (HC, proteínas o grasas), indicando las por-
desarrollo de diabetes en prediabéticos y la ciones de cada uno que pueden sustituirse para facili-
necesidad de fármacos antidiabéticos6, 7. tar la variedad. Se acompañan de un patrón de distri-
c. Conseguir y mantener la presión arterial y el bución que indica el número de porciones diarias
perfil lipídico según los objetivos individualiza- equivalentes de cada grupo. Consiguen un sistema
dos fijados. unificado de referencia. Pueden ser:
d. Retrasar el desarrollo de complicaciones.
e. Cubrir las necesidades nutricionales (teniendo •  Dietas por equivalencias: expresadas en gramos.
en cuenta situaciones especiales como las eda- Se agrupan los alimentos en: 1) lácteos, 2) cerea-
des de crecimiento, la gestación y la lactancia). les, legumbres, tubérculos, 3) frutas, 4) grasas, 5)
proteínas y 6) verduras y hortalizas.
2. Individualizar la nutrición teniendo en cuenta las •  Dietas por unidades de intercambio o raciones.
preferencias culturales y personales, el acceso a Adjuntan algo más de información sobre la posi-
alimentos saludables y las capacidades y/o dificul- ble sustitución de alimentos de cada grupo, per-
tades para realizar cambios de los hábitos. mitiendo una mayor flexibilidad de elección y pla-
3. Mantener el placer de la comida. nificación.
4. Dotar al paciente con diabetes de herramientas
prácticas para adaptar su alimentación de forma • Ventajas: variación de menú, adaptación del
saludable más que focalizar la educación en re- plan de alimentación al menú familiar, laboral,
parto de macronutrientes, micronutrientes o ali- etc., permite el mantenimiento de la dieta duran-
mentos. te toda la vida, control de las equivalencias, faci-
5. Mejorar la calidad de vida y la capacidad funcio- lita el ajuste calórico, precisión para ajustar la
nal del paciente combinando dieta y ejercicio. insulina a la ingesta de alimento y permite incor-
porar otros conceptos nutricionales (elección de
alimentos sanos, alimentos bajos en sodio, ricos
3.  Tipos de dieta en fibra, etc.)
Existen diferentes estrategias de planificación dieté- • Inconvenientes: necesidad de educación y entre-
tica en pacientes diabéticos que varían fundamental- namiento, dificultad de comprensión para algu-
mente en cuanto al grado de libertad y complejidad: nos pacientes, precisa dedicación del educador,
listados de equivalencias cortos y requiere pesar
los alimentos.
3.1.  Recomendaciones generales
Indican cualitativamente qué alimentos debe restrin- 3.4.  Dieta por raciones de carbohidratos
gir y cuáles debe tomar preferentemente.
(tabla 3)
Ventajas: fácil comprensión y enfocada a alimentos
sanos. Dieta que planifica solo las unidades de intercambio
Inconvenientes: no coordina la cantidad de alimen- hidrocarbonadas. Indicada en pacientes sin obesidad,
tos y la acción de la insulina, lo que puede llevar a una insuficiencia renal ni dislipemia importante, es posible
dieta muy restrictiva en HC. planificar solo las unidades de intercambio diarias de
Tema 12.  Diabetes mellitus. Recomendaciones internacionales. Dietas por raciones y por equivalencias 191

Tabla 1.  Dietas por raciones en 6 tomas5.

Grupos alimentos 1000 kcal 1200 kcal 1500 kcal 1800 kcal 2000 kcal 2500 kcal
Desayuno
 Lácteos 1 1 1 1 1 1
 Féculas 1 1 2 3
Media mañana
 Fécula 2 3 4 4 5
 Fruta 2
 Proteínas 0,5 0,5 0,5 0,5 1
 Grasas * * * * *
Comida
 Fécula 1,5 3 4 5 5 6
 Verdura 1 1 1 1 1 1
 Fruta 1,5 1,5 1,5 1,5 2 2
 Proteínas 2 2 2 2 2 3
 Grasas * * * * * *
Merienda
 Lácteos 0,5 0,5 0,5 0,5 0,5 0,5
Cena
 Fécula 1,5 2,5 3,5 5 4,5 6,5
 Verdura 1 1 1 1 1 1
 Fruta 1,5 1,5 1,5 1,5 2 2
 Proteínas 1 2 2 3
 Grasas * * * * * *
Recena
 Lácteos 1 1
1 1 1 1
 Féculas 1 1

* Para cada equivalente de proteína ingerida (10 g), se consume media (5 g), una (10 g) o una y media (15 g) de grasa según se
elijan productos magros, grasos o muy grasos, que deberán descontarse del total de equivalentes de grasas permitidos en cada
dieta. Si se utiliza leche semidesnatada o entera también deberán descontarse media o una unidad de grasa respectivamente por
cada vaso de 200 ml. El número total de equivalentes de grasa permitida para cada una de las dietas de 1000, 1200, 1500, 1800,
2000 y 2500 kcal son 3, 5, 4, 5, 6, 7 y 8, respectivamente. Para la elaboración de estas dietas se utilizaría una tabla de
equivalencias.

HC, si se han adquirido suficientes conocimientos so- En pacientes con pautas de insulina fijas, que no se
bre alimentación equilibrada. ajusten antes de cada comida, la cantidad de ingesta en
HC debe ser prácticamente constante en cada comida,
• Ventajas: máxima libertad en la alimentación, no además de mantener un horario estricto de la ingesta.
precisa de tanta tabla. En cambio, la terapia bolo-basal o con bomba conti-
• Inconvenientes: requiere adiestramiento y puede nua, da al paciente una mayor flexibilidad en la hora de
introducir desequilibrios entre los macronutrientes. la ingesta y del tipo de alimento, aunque la constancia
y la puntualidad facilitarán el mejor control de la gluce-
4. Estrategias en nutrición y diabetes mia. El contenido total de HC de las comidas constituye
el mayor determinante de la dosis de insulina prepan-
mellitus tipo 1
dial y de los niveles de glucemia postprandiales.
Los principios de alimentación saludable son igual- Hay que tener en cuenta que a menudo un buen
mente aplicables a las personas con DM tipo 1, con la control glucémico se asocia a cierta ganancia de peso,
diferencia de que tienen que integrar la pauta de insu- la cual puede tener efectos adversos sobre otros facto-
lina en su estilo de vida. Independientemente de las res de riesgo cardiovascular como la tensión arterial o
pautas de insulinización que se utilicen, lo importante la dislipemia. Por ello también debemos contemplar no
es que estén adaptadas a los hábitos, horarios y activi- solo el contenido de HC de los alimentos, sino también
dad habitual de cada paciente en particular. el de grasas y proteínas.
192 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

Tabla 2.  Ejemplo de una dieta de 1200 kcal según el patrón de la tabla 1.

Desayuno Media mañana Comida Merienda Cena Recena


· Un vaso de · Pan (40 g) con · Garbanzos · Un yogur · Ensalada de · Un vaso de
leche desnatada tomate (50 g) (60 g crudos o desnatado pasta (30 g) leche desnatada
(200 ml) · Aceite de oliva 120 g hervidos) natural · Maíz en lata (200 ml)
(5 g) · Pollo a la (80 g)
· Atún sin aceite plancha (100 g) · Tomate (100 g)
(30 g) · Champiñones · Lechuga
salteados · Zanahoria
(125 g) (75 g)
· Pimiento asado · Aceite de oliva
(125 g) (10 g)
· Aceite de oliva · Manzana
(10 g) (160 g)
· Melón (225 g)

Tabla 3.  Cálculo del gasto energético según diferentes fórmulas.

Ecuaciones

Harris Benedict. GER* Varones 66 + 13,7 x peso (kg) + 5 x talla (cm) – 6,8 x edad (años)
(kcal/día) Mujeres 66 + 9,6 x peso (kg) + 1,8 x talla (cm) – 4,7 x edad (años)

Mifflin- St Jeor. GER* Varones 10 x peso (kg) + 6,25 x talla (cm) -5 x edad (años) +5
(kcal/día) Mujeres 10 x peso (kg) + 6,25 x talla (cm) -5 x edad (años) – 161

*  GER: gasto energético en reposo.

Respecto al ejercicio, hay que prevenir las hipogluce- 6.  Aporte calórico recomendado
mias asociadas a él de manera que se disminuya la do-
sis de insulina previa al deporte o se aumenten la in- El aporte calórico se debe adaptar a cada paciente,
gesta de HC. teniendo en cuenta su edad, sexo, etnia, actividad físi-
Se debe educar al paciente en el ajuste de dosis de ca y situaciones especiales como embarazo y lactancia.
insulina antes de los alimentos de modo que compen- No se precisan recomendaciones especiales de inges-
sen las transgresiones de la dieta8. ta calórica en pacientes diabéticos con índice de masa
corporal (IMC) entre 19 y 25 kg/m2; sin embargo, existe
5. Estrategias en nutrición y diabetes una reducción de la esperanza de vida en pacientes
con diabetes y sobrepeso que mejora con la pérdida de
mellitus tipo 2
peso y se normaliza al lograr un IMC < 25 kg /m2, 15.
La modificación del estilo de vida en la DM tipo 2 En pacientes que presentan sobrepeso u obesidad se
constituye uno de los pilares básicos del tratamiento, suele reducir el aporte calórico entre 500 y 1000 kcal
encaminado a obtener niveles de glucemia, lipemia e respecto a las necesidades estimadas según las diferen-
HTA en un rango que disminuya el riesgo cardiovascu- tes fórmulas (tabla 2), intentando siempre evitar dietas
lar. Para ello es fundamental cambiar hábitos alimenta- de menos de 1200-1500 kcal/día en mujeres, o inferio-
rios y mantener unas pautas de ejercicio físico diario9. res a 1500-1800 kcal/día en varones15. Las dietas muy
La mayoría de los pacientes con DM 2 tienen sobre- hipocalóricas (< 800 kcal/día) producen pérdidas de
peso u obesidad, por lo que disminuyendo el aporte peso muy importantes y rápidas mejorías de la gluce-
calórico en la dieta (250 a 500 kcal menos que la in- mia y lipemia en la DM 2, pero cuando se interrumpen,
gesta diaria) y perdiendo entre un 5 y 10% del peso la reganancia ponderal es frecuente, con lo que su uti-
inicial, mejora el control de la DM, incluso aunque no lidad es temporal y limitada y siempre deben llevar un
se alcance el peso corporal deseable10-13. seguimiento médico muy estrecho15.
Un 20-25% de pacientes con DM 2 se controlan ini- Podríamos decir con un nivel de evidencia A (Ameri-
cialmente con dieta, tras 5-10 años de enfermedad can Diabetes Association [ADA], 2016) que en indivi-
esta cifra desciende a 10-15% y después de 15 años duos insulinorresistentes, la reducción de la ingesta de
menos de un 5%14. energía y una pérdida de peso entre el 5 y 10% mejora
Tema 12.  Diabetes mellitus. Recomendaciones internacionales. Dietas por raciones y por equivalencias 193

la sensibilidad a la insulina, la glucemia a corto plazo, No existe suficiente evidencia para recomendar una
la dislipemia y los niveles de tensión arterial15. La evi- cantidad de proteínas ideal para mejorar el control glu-
dencia ha demostrado que este porcentaje de pérdida cémico o los factores de riesgo cardiovascular, por lo
de peso se puede mantener en el tiempo con una ade- cual los objetivos deben ser individualizados.
cuada planificación del cambio del estilo de vida, com- En pacientes con enfermedad renal diabética se
binando programa dietético con la realización de una mantiene la clásica controversia sobre si las dietas hi-
actividad física regular. poproteicas mejoran el control glucémico, ni los facto-
En los pacientes en los que no exista exceso de peso res de riesgo cardiovascular o la velocidad de la progre-
la dieta debe ser isocalórica, pero insistiendo en los sión de la nefropatía por lo que, en general, no se
conceptos de dieta saludable para la adquisición de recomiendan21, 22, aunque sí debe evitarse una aporte
buenos hábitos y prevención de posibles aumentos de superior a las recomendaciones generales ya referidas.
peso posteriores. En la DM tipo 2 el aporte proteico puede mejorar la
respuesta insulínica tras la ingesta de hidratos de car-
7.  Reparto de macronutrientes (Tabla 4) bono, por lo que no se recomienda utilizar fuentes de
hidratos de carbono ricas en proteínas para el trata-
A lo largo de la historia el reparto de macronutrien- miento o prevención de las hipoglucemias23 (nivel de
tes en las recomendaciones dietéticas de los pacientes evidencia B).
diabéticos ha ido cambiando. Hoy en día se reconoce
que no existe un reparto ideal de macronutrientes en 7.2. Grasas
las personas con diabetes, sino que debe ser individua-
lizado dependiendo de los objetivos energéticos y me- Si bien se necesitan más estudios para poder estable-
tabólicos (nivel de evidencia E, ADA 2016)16, 17. cer la cantidad y el tipo de lípidos ideales para las per-
En general, se suele respetar un rango flexible de sonas con diabetes, parece razonable suponer que el
proporciones de los diferentes macronutrientes que va- tipo y proporción de grasas recomendable para un dia-
ría entre: 15-20% de proteínas, 20-35% de lípidos y un bético será similar al de un paciente no diabético que
45-60% de hidratos de carbono. ha tenido un evento cardiovascular, pues podemos
Existen otras modificaciones en el reparto de nu- considerar que tienen el mismo riesgo.
trientes que producen pérdidas de peso más rápidas Actualmente se aconseja una aporte de lípidos no
que las convencionales, pero igualándose con estas al superior al 20-35% del aporte energético total evitan-
año y presentando mayores riesgos y en algunos casos do los ácidos grasos trans, y siguiendo las recomenda-
menor adherencia. ciones en la población general y según el modelo de
dieta mediterránea (estudio Predimed) con mayor
7.1. Proteínas aporte de ácidos grasos monoinsaturados (AGMI) y re-
ducido de grasas saturadas (< 7-10%) y colesterol
Las recomendaciones de proteína necesarias en suje- (< 200-300 mg/día)24-48 (nivel de evidencia B, ADA 2016).
tos con DM no complicada son similares a las reco- Los ácidos grasos saturados (AGS) y los AGMI con
mendadas en población sana: de 0,8-1 g/ kg/día, com- configuración trans son los principales responsables de
prendiendo entre un 15-20% del total de calorías los niveles de LDL colesterol. En estudios realizados en
consumidas19. pacientes no diabéticos y posteriormente diabéticos o
Aunque las proteínas estimulan la secreción de insu- con intolerancia hidrocarbonada, la reducción de su
lina no parecen influir en la glucemia en la DM bien ingesta, disminuía los niveles de LDL colesterol18.
controlada, como indica la ADA con un grado de evi- Se pueden obtener efectos beneficiosos si los AGMI cis
dencia B. Solo si el control glucémico no es adecuado, sustituyen a los HC con elevado índice glucémico. En es-
los requerimientos de proteínas podrían ser mayores tudios metabólicos en los que el aporte calórico ingerido
que las RDA (recommended dietary allowance), pero y el peso se mantuvieron constantes, las dietas bajas en
no mayores que la ingesta habitual20. AGS y altas en HC o bien altas en AGMI cis, el colesterol

Tabla 4.  Ejemplos de diferentes raciones de hidratos de carbono.

Una ración Dos raciones Tres raciones


Vaso de leche Bola de helado 120 g de pizza
Yogur desnatado de sabores Vaso de cacao Vaso de yogur líquido
2 galletas María 2 galletas Príncipe Panecillo de pan
20 g de pan Magdalena 2 mazapanes
194 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

Tabla 5.  Perspectiva histórica de las recomendaciones nutricionales en la diabetes mellitus13.

Distribución de calorías (%)


Año Carbohidratos Proteínas Grasas
Antes de 1921 Inanición
1921 20 10 70
1950 40 20 40
1971 45 20 35
1986 < 60 12-20 < 30*+
1994 * 10-20

*  Según la evaluación nutricional y los objetivos terapéuticos.


+  Menos de un 10% de aporte calórico en forma de grasas saturadas.

LDL se redujo de forma similar. Sin embargo, la rica en (IG) son una excelente estrategia para lograr un ade-
HC (teniendo en cuenta que aportaban fundamental- cuado control glucémico35, 36.
mente almidones de alto índice glucémico) incrementó El IG consiste en la elevación de la glucemia post­
la glucemia postprandial, la insulinemia, los triglicéridos prandial que producen raciones equivalentes de ali-
y en algunos estudios disminuyó el colesterol HDL frente mentos que aportan HC, comparada con un alimento
a la dieta rica en AGMI cis. No obstante, esta última no de referencia como la glucosa o el pan, que se valoran
ha demostrado mejorar la glucemia basal o los niveles de como la unidad. Dos metanálisis publicados en 200337
HbA1C29, 30. Los efectos indeseables de la dieta rica en HC y 200438 recogen los ensayos randomizados compa-
podrían evitarse si se utilizan alimentos ricos en fibra y rando dietas que utilizan HC con bajo IG con respecto
con bajo índice glucémico. Hay que tener en cuenta que a dietas que utilizan HC con elevado IG. En el primer
las dietas ricas en AGMI cis pueden llevar al aumento de caso se obtuvieron mejorías significativas, aunque dis-
peso si no se controlan, por lo que dependiendo de la cretas, en el control glucémico, observándose un des-
situación de cada paciente, los AGMI podrían aportar censo de la HbA1C medio de 0,43 y 0,27%. Parece que
entre un 10-20% de la energía, con una ingesta de grasa el consumo de HC con bajo IG podría reducir el coles-
total que no excediera del 35% según recomienda la terol total y el LDL y facilitar la pérdida de peso.
EASD (European Association for Study of Diabetes). La disminución de la glucemia postprandial es mayor
Con respecto a los ácidos grasos poliinsaturados cuando partimos de la utilización de una dieta con ele-
(AGPI) omega 3, los alimentos ricos en ellos tales como vado IG, por este motivo la EASD, así como la Sociedad
los pescados azules y las nueces están indicados en la Canadiense de Diabetes, considera evidencia de grado
prevención y el tratamiento de la enfermedad cardio­ A la recomendación de alimentos de bajo IG cuando la
vascular (nivel de evidencia B) sin embargo, no existe dieta tiene un contenido de HC en el rango alto de lo
evidencia científica de que el aporte de suplementos de recomendado. Por todo ello, los alimentos que contie-
omega tres mejoren el control glucémico ni sean efecti- nen HC procedentes de cereales integrales, fruta, vege-
vos en prevención primaria o secundaria de la enferme- tales y lácteos desnatados deben incluirse en una dieta
dad (nivel de evidencia A, ADA 2016)20, 31-33. Parece que del paciente diabético.
con la ingesta de dos o tres veces en semana de pescado Hay que destacar que no solo la cantidad y la natu-
azul sería suficiente para obtener estos beneficios34. raleza de los HC que componen los alimentos influyen
en los niveles de glucemia postprandial, sino también
7.3.  Hidratos de carbono el procesado o cocinado y otros componentes digeri-
dos como grasas, lectinas, fitatos y taninos que enlen-
No existe evidencia sobre la proporción óptima de tecen la absorción.
calorías que deben darse en forma de HC; sin embar- En los pacientes diabéticos no precisa restringirse la
go, sí la hay sobre muchos puntos relacionados con sacarosa o los alimentos que la contienen, siempre que
estos nutrientes. En general, se recomienda que los HC se considere la cantidad de HC que aporta para sustituir
y los AGMI aporten entre un 50-70% de la ingesta de a otras fuentes de hidratos o ser cubierta con el ajuste
energía (evitando siempre aportes menores de 130 g apropiado de insulina o de antidiabéticos orales. Su res-
de carbohidratos al día). tricción de la sacarosa se basa en la suposición de que se
La monitorización de los HC mediante su cuantifica- digiere y absorbe con mayor rapidez que los almidones,
ción, intercambio y considerando su índice glucémico agravando la hiperglucemia; sin embargo, las pruebas
Tema 12.  Diabetes mellitus. Recomendaciones internacionales. Dietas por raciones y por equivalencias 195

OBJETIVOS
• Conservación de glucemias lo más cercanas a la normalidad.
• Suministro de calorías adecuado.
• Prevención y tratamiento de complicaciones a corto y largo plazo de la diabetes.
• Mejoría de la salud global por nutrición óptima.

APORTE CALÓRICO

Niños, jóvenes y adultos Ancianos

IMC ≤ 25 IMC > 25 Bajo peso Peso no > 20% Peso > 20%
del deseable del deseable

No recomendaciones Reducción de Aumento de No restricción Dieta


especiales. 500 kcal la ingesta aporte calórico calórica hipocalórica
diaria promedio

Figura 1.  Aporte calórico recomendado en la diabetes mellitus11.

científicas no justifican su restricción39-41. Al parecer, no cantidades (el doble de la ingesta usual) tiene un efecto
existe una ventaja neta al utilizar otros edulcorantes42. La negativo en los niveles de colesterol sanguíneo y sobre-
sacarosa debe sustituir a otros HC y no ser simplemente todo LDL- colesterol44. No se recomienda como edulco-
añadida. Su uso no es recomendable en obesos ni pa- rante añadido ante la posibilidad de que pueda afectar
cientes con hipertrigliceridemia, y se aconseja cautela en al perfil lipídico, sin embargo, no existe justificación para
el consumo de alimentos con sacarosa por su frecuente recomendar que los diabéticos no consuman la fructosa
contenido de cantidades importantes de grasa. que está naturalmente en frutas y verduras45.
En cuanto a la fibra, aunque se recomienda el mismo
consumo que el de la población general (20-35 g/día) 8.1.2.  Edulcorantes calóricos
por su efecto sobre la glucemia, la tensión arterial y los
lípidos, no así sobre el peso. Parece que el aumento de Los concentrados de jugos de frutas, la miel y el jara-
esta proporción (40 g/día) podría ser beneficioso sobre be de maíz son edulcorantes naturales sin ventajas ni
todo en forma de fibra soluble. desventajas notables con respecto a la sacarosa o la
Se ha observado que el aumento del consumo de fructosa, en relación con el aporte calórico, contenido
fibra sobre los niveles aconsejados reducen la glucemia en hidratos de carbono, y control metabólico.
en la DM tipo 1 y además de esta, la tensión arterial y El sorbitol, el manitol y el xilitol son alcoholes-azúca-
la lipemia en la DM 243. res comunes que tienen una menor respuesta glucémi-
Por último, se debe tener en cuenta en todos aque- ca que la sacarosa y otros carbohidratos. Son insolu-
llos pacientes con terapia insulínica intensiva que la bles en agua y por ello, a menudo se mezclan con
dosis de insulina debe ser ajustada preingesta al conte- grasas, la razón por la cual los alimentos endulzados
nido de HC de la toma. Aquellos pacientes con dosis con los alcoholes-azúcares pueden tener calorías seme-
fijas de insulina deben tener una ingesta constante de jantes a las que se busca reemplazar. Algunas personas
HC a lo largo del día. señalan molestias gástricas después de su consumo y la
ingestión de grandes cantidades de ellos puede causar
diarrea.
8.  Otros nutrientes
8.1.  Edulcorantes 8.1.3.  Edulcorantes no calóricos (tabla 6)
Existen cada vez mayor cantidad de edulcorantes ba-
8.1.1. Fructosa
jos en calorías generalmente artificiales, salvo dos na-
Produce menor glucemia postprandial cuando susti- turales que son el estevia y la taumatina. Generalmente
tuye a la sacarosa o a los almidones, pero en grandes son acalóricos, a excepción del aspartamo, que aporta
196 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

Tabla 6.  Ingesta aceptable de edulcorantes según la European Food Safety Authority (EFSA).

Edulcorante (nº UE) Ingesta diaria aceptable (mg/kg/d)


Acesulfamo de potasio (E950) 9
Aspartamo (E951) 40
Ciclamato (E952) 7
Sacarina (E954) 5
Sucralosa (E955) 15
Taumatina(E957) 0,9
Estevia (E960) 4
Neotame (E950) 2

4 kcal/g, no aumentan la glucemia, contribuyen al no ceridemia grave, neuropatía avanzada, disfunción


aumento de peso y se utilizan en mínimas cantidades eréctil, obesidad y durante la gestación (nivel C).
dado su alto poder edulcorante, siendo su margen de
seguridad muy amplio.
8.3. Sodio
A pesar de la existencia de estudios en experimenta-
ción animal que relacionaban el consumos de estos Se recomienda con un nivel de evidencia A reducir su
edulcorantes con el desarrollo de intolerancia a la glu- aporte, puesto que aunque la presión arterial sea nor-
cosa, esto no ha podido ser demostrado en humanos mal se demuestra una disminución de sus valores al
considerando su consumo en diabéticos seguro, incluso restringir la ingesta de sodio2, 49.
en el embarazo, aportando beneficios en las personas Los aportes máximos no deben superar los 2,3 g/día,
con obesidad por la reducción del aporte calórico46. debiendo ser más bajos, de hasta 1,5 g/día, en pacien-
tes que presenten también hipertensión o nefropatía
diabética (nivel de evidencia A, ADA 2016).
8.2.  Bebidas alcohólicas
El consumo de alcohol en el paciente diabético pre-
senta dos problemas: su efecto sobre el control meta- 8.4.  Vitaminas y minerales
bólico y en segundo lugar sobre el peso corporal dado No existe evidencia de que la suplementación con
su aporte calórico. Sin embargo, en adultos con diabe- complejos vitamínicos, antioxidantes y minerales en la
tes una pequeña ingesta (5-15 g/día) se ha asociado población con diabetes sea beneficiosa, al igual que en
con un descenso del riesgo cardiovascular, que podría la población general, excepto si existen deficiencias
estar en relación con un aumento del HDL colesterol47.
El alcohol produce variaciones en la glucemia que
dependen de la cantidad ingerida, frecuencia del con- Tabla 7.  Valoración de consumo alcohólico en unidad
sumo y su administración junto con alimentos. Si la de bebida estándar (UBE).
diabetes está bien controlada, un consumo moderado
de alcohol no producirá variaciones acusadas en la glu- Bebida Volumen UBE
cemia48. En caso de consumo de dichas bebidas se re- Vino Vaso (100 cc) 1
comienda no superar la cantidad recomendada en la
población general. Las recomendaciones son no supe- Cerveza Caña (200 cc) 1
rar las dos unidades de bebida estándar (UBE) diarias y Carajillo (25 cc) 1
una para la mujer (la ADA considera que una bebida
corresponde a 15 g de alcohol y la EASD a 10 g) (nivel Licor Copa (50 cc) 2
de evidencia C, ADA 2016)) (tabla 7). Combinado (50 cc) 2
Para evitar la hipoglucemia inducida por alcohol es
recomendable su ingesta con comida y educar en la Copa (50 cc) 1
Generosos
prevención, reconocimiento y tratamiento de la misma Vermut (100 cc) 2
(nivel de evidencia B), fundamentalmente en los pa-
cientes tratados con insulina o secretagogos. UBE = 10 g de alcohol.
No se recomienda el consumo de alcohol en pacien- Gramos de alcohol = ml de bebida ingerida x grados de la
tes con antecedentes de abuso, pancreatitis, hipetrigli- misma x 0,8/100.
Tema 12.  Diabetes mellitus. Recomendaciones internacionales. Dietas por raciones y por equivalencias 197

(nivel de evidencia C)19. En determinadas situaciones 10. Bibliografía


como el embarazo, lactancia, vegetarianos estrictos,
dietas de bajo contenido calórico o en ancianos con in-   1. Lockwood D, Frey ML, Glandish NA, Hiss RG. The
gestas erráticas podría ser necesaria su administración2. biggest problem in diabetes. Diabetes Educator.
Es aconsejable monitorizar en los pacientes diabéti- 1986; 12:30-32.
cos los niveles de micronutrientes cada dos o tres años,  2.  American Diabetes Association: Foundations of
hacer encuestas acerca de la dieta para detectar los care and comprehensive medical evaluation. Dia-
posibles déficits y dar consejos para prevenirlos. betes Care. 2016; 39 (Suppl 1): S23-S35.
A pesar de que la DM condiciona un aumento del   3. Inzucchi SE, Bergenstal RM, Buse JB, Diamant M, Fer-
estrés oxidativo, no se han realizado suficientes estu- rannini E, Nauck M, et al. Management of hypergly-
dios que demuestren que la suplementación con an- cemia in type 2 diabetes, 2015: a patient –centered
tioxidantes como la vitamina A, E y carotenos sea be- approach. Update to a position statement of the
neficiosa para estos pacientes, pero sí se recomienda ADA and EASD. Diabetes Care. 2015; 38:140-149.
tomar alimentos que los contengan de forma natural,   4. Dworatzek PD. Nutrition therapy. Canadian Diabetes
como la fruta y la verdura, al igual que en la población Association 2013. Can J Diabetes 2013; 37:S45-S55.
general (nivel de evidencia A)19.   5. Santiago J. Lessons from the diabetes control and
La DM es una de las enfermedades crónicas más fre- complications trial. Diabetes. 1993; 42 (11):1549-
cuentemente asociada al déficit de magnesio50. Esto 1554.
puede relacionarse con el defecto tubular renal que  6. Toumilheto J, Lindströn J, Eriksson JC, Valle TT,
puede aparecer en la DM y a la diuresis osmótica51. La Hämäläinen H, Illane-Parikka P, et al. Finnish dia-
hipomagnesemia ocurre en un 25-38% de los pacien- betes Prevention study group. Prevention of type 2
tes con DM, habiéndose sugerido una asociación entre by changes in life style among subjects with im-
pérdida de magnesio, resistencia insulínica y disminu- paired glucose tolerance. N Engl J Med. 2001;
ción de su secreción. La suplementación con dosis de 344:1343-1350.
45 mmol/día de magnesio parecen eficaces y seguras   7. Knowler WC, Barrett-Connor E, Fowler SE, Hamman
pero sólo si se ha comprobado previamente su déficit. RF,Lachin JM, Walker EA, et al. Diabetes Prevention
Los pacientes con DM suelen tener alterado también Program Research Group. Reduction in the inci-
el manejo del zinc con baja cinquemia e incremento de dence of type 2 diabetes with lifestyle intervention
la excreción urinaria del mismo50, pero sólo se deben or metformina. N Engl J Med. 2002; 346: 393-403.
suplementar en caso de déficit52.   8. Pérez Pérez A, Caixàs Pedragós A. Dieta en la dia-
Por otro lado aunque hay estudios que demuestran betes. En: Jordi Salas-Salvadó, Anna Bonada, Ro-
que la administración de suplementos de cromo pue- ser Trallero y M. Engràcia Saló. Nutrición y Dieté-
den disminuir la resistencia insulínica en los pacientes tica Clínica. Ed Doyma; 2000. 215-233.
con DM 253, 54, la FDA concluye que no existe suficiente   9. Franz MJ, Horton ES, Banttle JP, Beebe CA, Brunzell
evidencia para demostrarlo. JD, Coulston AM, et al : Nutrition principles for the
management of diabetes and related complications
(Technical review). Diabetes Care. 1994, 17:490-518.
9. Conclusiones 10. UK Prospective Diabetes Study 7: response of fas-
La terapia nutricional constituye el tratamiento más ting plasma glucose to diet therapy in newly pre-
importante en la población diabética. Es uno de los senting type II diabetic patients, UKPDS Group.
factores relevantes para alcanzar los objetivos del con- Metabolism. 1990;39:905-912
trol glucémico y reducir en este sentido las complica- 11. Goldstein DJ. Benefical Health effects of modest
ciones derivadas de esta enfermedad. weight loss. Int J Obes Relat Metab Disord. 1992;
Las recomendaciones nutricionales deben ajustarse a 16:397-415.
las necesidades de cada paciente, teniendo en cuenta 12. Jonhston BC, Kanters S, Bandayirel K, Wu P, Naji F,
sus necesidades calóricas, el perfil metabólico, sus gus- Siemienuk RA, et al. Comparison of weight loss
tos alimentarios, los objetivos del tratamiento, y los among named diet programs in overweight and obe-
resultados deseados. La monitorización de los paráme- se adult: a meta- analysis. JAMA. 2014; 312:923-933.
tros metabólicos, incluyendo glucosa, HbA1c, lípidos, 13. Cánovas B, Koning A, Muñoz C y Vázquez C. Nu-
presión arterial, peso corporal, función renal, y calidad trición equilibrada en el paciente diabético. Nutri-
de vida son esenciales para realizar los cambios necesa- ción Hospitalaria. 2001; 16: 31-40.
rios. Los pacientes con diabetes deben ser educados en 14. Lean MEJ, Powrie JK, Anderson AS and Garthwait
el manejo de su enfermedad y tratamiento, consi- PH (1990) : Obesity, weight loss and prognosis in
guiendo en la medida de lo posible que logren y man- type 2 diabetes. Diabetic Med. 1990; 7:228-233.
tengan la motivación necesaria para que poder desa- 15. The American Diabetes Association. Standards of
rrollar unas pautas adecuadas a lo largo de toda la medical care in diabetes. Diabetes Care. 2005; 28:
enfermedad que les acompaña. S69-71.
198 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

16. De Souza RJ, Bray GA, Carey VJ, Hall KD, LeBoff enriched in monounsaturated fatty acids and con-
MS, Loria CM, et al. Effects of 4 weight-loss diets ventional diet on weight on weight loss and met-
with differing in fat, protein, and carbohydrate on abolic parameters in obese non- diabetic and type
fat mass, lean mass, visceral adipose tissue, and 2 diabetic patients. Diabet Med. 2007; 24: 533-
hepatic fat; results from the POUND lost trial. Am 540.
J Clin Nutr. 2012; 95: 614-625 29. Garg A. High monounsaturated fat diets for pa-
17. Johnston BC, Kanters S, Bandayrel K, Wu P, Naji F, tients with diabetes mellitus: a meta-analysis. Am
Siemienuk RA, et al. Comparison of eight loss J Clin Nutr. 1998; 67(Suppl):S577-S582.
among named diet programs in overweight and 30. Rodríguez-Villar C, Manzanares JM, Casals E,
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Tema 13. 
Importancia de la dieta en situaciones intercurrentes
en diabetes mellitus
Dolores del Olmo
Miriam Pérez-Pelayo
Victoria Alcázar
Purificación Martínez de Icaya
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Severo Ochoa. Leganés (Madrid)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 201-209.

1. Introducción
2.  Modificaciones dietéticas en situaciones fisiológicas
3.  Modificaciones dietéticas en la actividad física
4.  Modificaciones dietéticas en las complicaciones agudas
5.  Modificaciones dietéticas en las enfermedades intercurrentes
6.  Nutrición artificial
7. Resumen
8. Bibliografía

1. Introducción un desarrollo físico e intelectual adecuado evitando


las hipoglucemias. La American Diabetes Association
En la actualidad se acepta que no existe un único (ADA) recomienda individualizar los planes de comidas
patrón o modelo dietético para las personas con diabe-
y los regímenes intensivos de tratamiento con insulina
tes mellitus (DM). Al igual que ocurre con el tratamien-
para acomodarse a sus horarios, actividad y variaciones
to farmacológico, la dieta debe individualizarse para
de apetito1.
cada persona con DM, según sus preferencias, gustos,
En los adolescentes con DM tipo 2, el tratamiento
objetivos de control, hábitos culturales, etc.1. A lo largo
tiene como objetivo llevar un estilo de vida saludable
de este capítulo vamos a estudiar algunas de las modi-
para evitar una ganancia excesiva de peso, asegurando
ficaciones dietéticas y nutricionales que deben tenerse
un crecimiento normal, así como una glucemia, perfil
en consideración ante determinados eventos fisiopato-
lipídico y tensión arterial dentro de límites adecuados.
lógicos. Es importante recordar que las situaciones re-
Deben instaurarse pautas para modificar el comporta-
visadas a continuación, y que implican cambios en la
miento alimentario de toda la familia.
dieta del diabético, deben acompañarse, en la mayoría
de los casos, de modificaciones en su tratamiento far-
macológico que, dadas las limitaciones de espacio y el 2.2.  Embarazo y lactancia
objetivo fundamental de este libro, no serán tratadas
Los requerimientos de nutrientes son similares a los
en profundidad.
de las gestantes sin DM. El tratamiento médico nutri-
cional persigue como objetivo principal una ganancia
2. Modificaciones dietéticas en situaciones ponderal adecuada y un crecimiento fetal normal,
fisiológicas manteniendo la glucemia en rango, siempre evitando
la cetonemia y las hipoglucemias3, 4.
2.1.  Adolescencia
Al igual que con las otras medidas terapéuticas, en el
Las necesidades de nutrientes de los adolescentes caso de DM gestacional o de la DM previa (tipo 1 o 2)
con DM son las mismas que las de los adolescentes sin debe hacerse un plan de comidas individualizado5. Nin-
DM. En los pacientes con DM tipo 1 se busca conseguir guno de los metanálisis ni revisiones de la literatura ha

201
202 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

sido capaz de determinar si existe una composición de se recomienda un aporte de entre 25 y 35 kcal diarias,
macronutrientes óptima que mejore el pronóstico fe- excepto en pacientes obesos, en los que deben instau-
tal6. La distribución de la ingesta de calorías e hidratos rarse dietas algo más hipocalóricas, siempre aseguran-
de carbono se basará en los hábitos de la paciente y sus do una ingesta proteica adecuada. En la medida de lo
autocontroles. Los hidratos de carbono se distribuirán a posible deben evitarse las restricciones dietéticas que
lo largo del día en 3 comidas y entre 2 y 4 suplementos dificultan la realización de una dieta equilibrada y faci-
para evitar la hipoglucemia motivada por el crecimiento litan el desarrollo de malnutrición y sarcopenia en el
fetal y el consumo de glucosa por la madre. Normal- anciano. En aquellos con escasa ingesta calórica podría
mente se necesita un suplemento al acostarse para evi- estar indicado un suplemento nutricional. Las proteí-
tar la hipoglucemia nocturna y la cetosis de ayuno. Los nas deben ser de alto valor biológico y suponer al me-
carbohidratos generalmente son peor tolerados en el nos un 15-20% del valor calórico total de la dieta. Es
desayuno. Si se necesita añadir insulina, la constancia frecuente que los pacientes ancianos requieran suple-
en el número y distribución de las raciones de carbohi- mentos de vitamina B12, calcio y/o vitamina D10.
dratos facilita el ajuste de las dosis.
En algunas mujeres con DM gestacional que asocian
2.4.  Dietas vegetarianas
sobrepeso u obesidad puede ser apropiada una restric-
ción moderada de calorías. Las dietas restrictivas mo- Las dietas vegetarianas bien planificadas y en cual-
deradas (25 kcal/kg de peso ideal) en gestantes obesas quiera de sus variedades pueden considerarse perfec-
y en diabéticas gestacionales mejoran el control meta- tamente adecuadas para las personas con DM que de-
bólico y disminuyen las complicaciones fetales. Las die- seen hacerlas. De hecho, algunas de las características
tas con carbohidratos de bajo índice glucémico tam- propias de las dietas vegetarianas, tales como el menor
bién pueden ayudar a controlar la glucemia7. Una dieta aporte de grasa saturada y colesterol, mayor cantidad
equilibrada normalmente aporta suficientes vitaminas de vegetales y frutas, fibra, etc., pueden considerarse
y minerales, sin que exista evidencia que apoye su su- factores positivos para la prevención y el tratamiento
plementación, exceptuando al ácido fólico. de las personas con DM1, 12.
La lactancia es muy recomendable para las mujeres Por otro lado, las dietas vegetarianas parecen aso-
con DM, ya que disminuye la glucemia (a menudo in- ciarse a un menor riesgo de desarrollar obesidad, dia-
cluso se requiere un suplemento de carbohidratos an- betes, enfermedad cardiovascular, y ciertos tipos de
tes o durante las tomas). cáncer.
Aunque la mayoría de las mujeres con DM gestacio- A pesar de que existe un gran consenso sobre la se-
nal normalizan su glucemia tras el parto, tienen un ma- guridad de las dietas vegetarianas, es necesario tener
yor riesgo de presentar DM en las sucesivas gestaciones en cuenta una serie de consideraciones, independien-
y DM tipo 2 en edades más avanzadas, por lo que se temente de si la persona vegetariana tiene o no DM12:
deben hacer modificaciones del estilo de vida para evi-
tar el aumento de peso progresivo8. • La biodisponibilidad de las proteínas vegetales es
menor, por lo que la cantidad diaria de proteínas
probablemente es algo superior a la recomendada
2.3.  Ancianos
en dietas no vegetarianas. El consumo de una
La prevalencia de DM en la población anciana es muy mezcla de proteínas vegetales de distintas fuen-
elevada. La edad en sí misma es un factor de riesgo para tes, sobre todo legumbres y cereales, a lo largo del
desarrollar DM, ya que con los años disminuye la sensi- día, consigue el aporte de todos los aminoácidos
bilidad a la insulina. Pero, además, la esperanza de vida esenciales y no esenciales, por lo que no es nece-
de las personas con DM es cada vez mayor. sario suplementarlas.
Al igual que en cualquier otra etapa de la vida, la • El aporte de ácidos grasos omega-3 en una dieta
dieta y el ejercicio físico son los pilares fundamentales vegetariana estricta puede resultar insuficiente,
de tratamiento de los ancianos con DM. Sin embargo, pero basta consumir ciertas microalgas y/o pro-
sus necesidades nutricionales han sido poco estudia- ductos enriquecidos.
das y se tiende a extrapolarlas de la población general. • La cantidad de hierro ingerida puede ser insuficiente
Es fundamental reconocer la gran heterogeneidad y también su biodisponibilidad, por lo que se reco-
dentro de este grupo de pacientes con DM en los que, mienda un aporte 1,8 veces el normal. Sin embar-
tanto los controles de glucemia como el tratamiento, go, la prevalencia de anemia ferropénica es similar a
deben ajustarse a las expectativas de vida, comorbilida- la de la población no vegetariana. El consumo de
des y coexistencia de síndromes geriátricos9, 10. Debe vitamina C o de otros ácidos orgánicos, junto a una
considerarse igualmente prioritario evitar las hipoglu- serie de modificaciones en las técnicas culinarias,
cemias y la hiperglucemia sintomática. Las recomenda- permiten incrementar la absorción del hierro de los
ciones dietéticas, como ocurre con los tratamientos vegetales. El caso del zinc y el calcio es similar al del
farmacológicos, deben individualizarse11. En general, hierro, sobre todo en vegetarianos estrictos.
Tema 13.  Importancia de la dieta en situaciones intercurrentes en diabetes mellitus 203

• se recomienda consumir productos enriquecidos aparición de hiper o hipoglucemias no esperadas y el


en vitamina B12 y vitamina D. agravamiento de las complicaciones micro y macro-
vasculares.
2.5. Modificaciones dietéticas según creencias
religiosas 3.1.  Alimentación del deportista
En circunstancias normales, ninguna de las modifica- En el año 2009, el Colegio Americano de Medicina
ciones dietéticas necesarias para las diferentes creen- del Deporte y las Asociaciones Americana y Canadiense
cias religiosas (exención de cerdo, marisco, ingesta de de Dietética publicaron un posicionamiento oficial
alimentos halal) tiene por qué influir en el control glu- conjunto en el que se defiende que la alimentación
cémico, y de hecho, es la dieta la que debe adaptarse a diaria del deportista no tiene por qué variar de la reco-
las circunstancias personales de cada persona con mendada para la población general17. Del mismo
DM2. Un período complicado para la persona musul- modo, tampoco la dieta de un paciente con DM que
mana con DM suele ser el Ramadán, un mes en el que realice actividad física de manera habitual debe dife-
no deben consumirse comida ni bebida alguna desde renciarse de la de cualquier otra persona sin esta enfer-
el amanecer hasta el anochecer. El ayuno suele acabar medad18.
con dátiles o ciruelas y con agua o zumo. El Iftari es Un punto importante en la alimentación diaria del
una gran comida al anochecer rica en dulces pero ha- deportista son los suplementos nutricionales, cos-
bitualmente equilibrada. Antes del amanecer suelen tumbre muy extendida como intento de mejorar el ren-
tomar el Sehri, que consiste en una comida ligera. El dimiento físico, prevenir enfermedades y compensar
principal reto para el manejo de la diabetes durante posibles déficits de su alimentación:
este período es evitar las hipo e hiperglucemias, para lo
que se requiere un estricto ajuste de la medicación13. • Suplementos vitamínicos: no se ha podido
Respecto a la dieta, algunos consejos prácticos publi- demostrar que un suplemento vitamínico, en un
cados en la literatura incluyen no omitir el sehri al ama- sujeto sin déficits nutricionales, pueda mejorar
necer y tener especial cuidado si el paciente está siendo su rendimiento físico. Aunque la práctica habi-
a la vez tratado por un curandero árabe o hakim ya tual de ejercicio físico aumenta los requerimien-
que a veces les dan karela, que es una mezcla de ver- tos de algunas vitaminas y minerales, quedan
duras y ajo que parece tener algún efecto hipogluce- cubiertos si se consume una dieta variada y equi-
miante14. librada17.
• Suplementos de aminoácidos y proteínas: el
3. Modificaciones dietéticas en la Comité Olímpico Internacional, en una declara-
actividad física ción de consenso publicada en el año 2004 no
encuentra razones para recomendar ingestas su-
Numerosos estudios han puesto de manifiesto los periores a 2 gramos de proteínas por kg peso/día,
beneficios de la actividad física en los pacientes con y dado que la mayoría de los deportistas consi-
DM. En el caso de la DM tipo 2, el ejercicio se conside- guen entre 1,2 y 1,7 g proteínas/kg peso/día en su
ra un pilar fundamental del tratamiento para conseguir alimentación habitual, este tipo de suplementos
un buen control glucémico. En la DM tipo 1, sin ser un resultan innecesarios19.
objetivo terapéutico imprescindible, ayuda a disminuir •  Alimentos ergogénicos: son sustancias sin
la dosis de insulina necesaria para mantener una gluce- efecto tóxico sobre el organismo que teóricamen-
mia adecuada y puede tener un efecto beneficioso so- te tienen capacidad para mejorar el rendimiento
bre los factores de riesgo cardiovascular15. El efecto físico, sin que ello esté claramente demostrado
favorable que el ejercicio aporta al control glucémico (por ejemplo, germen de trigo, lecitina, polen de
reside en el aumento de la sensibilidad a la insulina por abeja, miel, ginseng, etc.). Aunque pueden usar-
parte de los tejidos. Sabemos que las dietas con bajo se, el deportista con diabetes debe tener en cuen-
índice glucémico combinadas con ejercicio físico mejo- ta su composición, ya que su ingesta puede deter-
ran la glucemia basal, disminuyen la insulinorresisten- minar un aporte de raciones extra de hidratos de
cia, mejoran la resistencia muscular y favorecen el con- carbono. Una peculiaridad de la cafeína es que su
sumo de grasas16. consumo antes del ejercicio (5 mg/kg) parece dis-
A pesar de los múltiples beneficios que se obtienen minuir la incidencia de hipoglucemia durante y
con la práctica habitual de deporte, tales como la después del mismo18.
sensación de bienestar, el mantenimiento de un peso
corporal adecuado o la mejoría de los factores de
3.2.  Composición de la dieta
riesgo cardiovascular, no podemos olvidar que debe
practicarse en condiciones óptimas, ya que si no es No existe una composición concreta, sino que la distri-
así puede tener consecuencias negativas, como la bución de calorías en los distintos macronutrientes debe
204 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

individualizarse según preferencias y objetivos del depor- Parece que la sobrecarga de hidratos de carbono (de
tista. Las recomendaciones generales actuales son18, 20: 8 a 12 g/kg peso/día) los 3 días previos a la práctica
1) Hidratos de carbono: su cantidad depende de deportiva en eventos superiores a 90 minutos permiten
la intensidad y duración del entrenamiento: retrasar la depleción de glucogéno en pacientes con
diabetes mellitus tipo 118, aunque no se ha podido de-
a. Ejercicios de baja intensidad y 30-45 min/día: mostrar lo mismo en el caso de diabetes tipo 2.
3-5 g/kg/día.
b. Ejercicios de moderada intensidad y 1 hora/ 3.3.2.  Nutrición durante el ejercicio
día: 5-7 g/kg/día.
El objetivo primordial durante la realización del ejer-
c. Ejercicios de moderada-alta intensidad y 1-3
cicio físico será mantener una adecuada hidratación,
horas/día: 7-10 g/kg/día.
preferiblemente con agua, y proporcionar hidratos de
d. Ejercicios de mayor duración: 10-12 g/kg/día.
carbono para mantener el nivel de glucemia18, 20:
Proteínas: la recomendación general se establece
2) 
1) Ejercicios de menos de 1 hora: no se precisa
entre 1,2 y 1,4 g/kg/día, excepto para deportes de
suplemento de hidratos, salvo que se trate de
fuerza en los que se eleva hasta 1,7 g/kg/día.
ejercicios de alta intensidad.
Grasas: del 20 al 35% del total del consumo
3) 
2) Ejercicios entre 1 y 2,5 horas: se tomará de 30
energético diario. Menos de un 20% no ha de-
a 60 g de glucosa por hora de ejercicio, según la
mostrado beneficios en el rendimiento.
intensidad del ejercicio.
3) Ejercicios superiores a 2,5 horas: se tomarán
3.3.  Actuación ante el ejercicio físico de 30 a 60 g de glucosa, pero utilizando en este
caso hidratos de absorción lenta combinados con
El abordaje de cada paciente debe hacerse de manera
los de absorción rápida.
individual, considerando el tipo de diabetes, la actividad
física a realizar, el tratamiento y el adiestramiento del
propio individuo para llevar a cabo las modificaciones 3.3.3.  Nutrición tras la finalización del ejercicio
necesarias en su alimentación y tratamiento18, 20. Al finalizar la práctica deportiva es imprescindible la
realización de una nueva glucemia y en caso de que
3.3.1.  Preparación antes del ejercicio fuera inferior a 120 mg/dl, se recomienda la ingesta de
15 a 20 g de hidratos de bajo índice glucémico20.
Una vez planificada la actividad física y descartada la
En el caso de deportes explosivos habrá que estar
existencia de complicaciones que puedan impedir su
pendientes por la posibilidad de aparición de hiperglu-
realización, el siguiente paso sería la realización de una
cemia, habitual en los primeros 60 minutos tras la fi-
glucemia capilar previa al inicio del ejercicio:
nalización, que podría llegar a requerir una dosis extra
de insulina si la hiperglucemia persistiera más allá de
• Si es mayor de 250 mg/dl, habrá que valorar la exis- ese tiempo, pero evitando la posible hipoglucemia
tencia de cetonuria-cetonemia21. Si es negativa, lo posterior mediante la ingesta de una ración extra de
más probable es que se deba a ingesta previa y el hidratos18, 20.
ejercicio puede realizarse con precaución. Si la ce-
tonuria o cetonemia son positivas, hay que inyec-
tarse una dosis extra de insulina regular y esperar a 3.4. Consideraciones según la planificación
su desaparición antes de realizar la actividad. Con- del ejercicio
viene recordar que la liberación de las hormonas Con el fin de disminuir la aparición de hipogluce-
contrarreguladoras tras el ejercicio puede incre- mias, que se presentan sobre todo en los pacientes
mentar los niveles de glucemia y cuerpos cetónicos tratados con insulina y secretagogos, deben llevarse a
e incluso precipitar una cetosis o cetoacidosis. cabo una serie de medidas, que dependerán de que el
• Entre 70 y 100 mg/dl, se tomarán 1 o 2 raciones ejercicio estuviera o no previamente planificado.
de carbohidratos de absorción lenta antes del
ejercicio21 en pacientes tratados con insulina o se-
3.4.1.  Ejercicio planificado
cretagogos (no para otros tratamientos con bajo
riesgo de hipoglucemia) y si el ejercicio va a ser La opción preferida es la disminución de la dosis de
prolongado, habrá que consumir una ración de insulina de un 20 a un 50% dependiendo de la intensi-
hidratos por cada media o una hora de actividad dad y duración del ejercicio20, 21. Además, conviene no
realizada20. realizar el ejercicio en el momento de máxima acción de
• Si es inferior a 70 mg/dl es preferible retrasar la la insulina inyectada previamente. Se recomienda esperar
actividad física hasta tener una glucemia superior al menos 60 minutos tras la inyección de insulina regular
a 100 mg/dl. o 30 minutos tras lispro, aspart o glulisina. Se procurará
Tema 13.  Importancia de la dieta en situaciones intercurrentes en diabetes mellitus 205

que la inyección se realice en regiones que no vayan a mienda tratar la hipoglucemia con alimentos ricos en
tener una mayor actividad muscular (por ejemplo, en los grasas (bollería, chocolate...) porque retrasan la ab-
brazos si se hace ciclismo, en el abdomen si se juega al sorción de los hidratos de carbono22, 23, 26.
tenis, etc.). La hipoglucemia inadvertida o la presencia de uno o
más episodios de hipoglucemia grave obligan a reeva-
luar el tratamiento farmacológico y dietético, con el
3.4.2.  Ejercicio no planificado
objetivo de elevar las cifras de glucemia en las próximas
Será necesario consumir suplementos de hidratos de semanas, para evitar las hipoglucemias y restaurar el
carbono. Para un ejercicio de intensidad moderada reconocimiento de las mismas. En la prevención de la
(nadar o pasear en bicicleta), se requerirán entre 10 y hipoglucemia nocturna tiene un papel importante la
15 gramos de carbohidratos (una ración), mientras toma de un suplemento de 20-30 g de carbohidratos
que para ejercicios de mayor intensidad (correr, jugar de absorción lenta al acostarse24, 26.
al fútbol, etc.), entre 20-30 gramos. Estos suplementos
se tomarán cada media o una hora, en función de la 4.2. Cetoacidosis diabética y estado
intensidad y la duración del ejercicio. hiperglucémico hiperosmolar no cetósico
No hay que olvidar que, dado que la actividad física
aumenta la sensibilidad a la insulina, durante las 24 La cetoacidosis diabética (CAD) y el estado hiperglu-
horas posteriores a la realización de la misma pueden cémico hiperosmolar no cetósico (EHH) son las compli-
presentarse hipoglucemias, por lo que resulta impres- caciones metabólicas agudas más graves de la diabe-
cindible la monitorización glucémica, especialmente tes, incluso aun habiendo instaurado un tratamiento
durante la noche18, 21. Si el ejercicio físico ha sido inten- apropiado. En centros experimentados la mortalidad
so y prolongado, para evitar la hipoglucemia nocturna, para la CAD es inferior al 5%, mientras que para el EHH
deben consumirse hidratos de carbono de absorción es todavía del 15%. El pronóstico empeora en pacien-
lenta (una o dos raciones extra) y disminuir la dosis de tes con edades extremas y en presencia de coma e hi-
insulina lenta posterior al ejercicio20. potensión25.
El tratamiento en ambas situaciones incluye corregir
la deshidratación, la hiperglucemia, las alteraciones
4. Modificaciones dietéticas en las electrolíticas y la acidosis metabólica; identificar las
complicaciones agudas causas desencadenantes; y sobre todo, monitorizar
frecuentemente al paciente. En la fase de recupera-
4.1.  Hipoglucemia
ción, tras corregir la CAD y una vez recuperada la alerta
La hipoglucemia en la diabetes (glucemia plasmáti- neurológica en el paciente con EHH, y siempre que no
ca menor de 70 mg/dl, cifra umbral para la secreción exista contraindicación, se puede iniciar tolerancia oral
hormonal contrarreguladora) puede aparecer en per- con líquidos y progresar hasta una dieta basal25. Inicial-
sonas tratadas con sulfonilureas, secretagogos y/o mente se recomiendan tomas pequeñas y frecuentes
insulina, cuando se realizan cambios en la ingesta, en de líquidos y alimentos ricos en hidratos de carbono de
la actividad física, y/o en el tratamiento, así como en fácil asimilación, como bebidas isotónicas, zumos, cal-
otras situaciones fisiológicas y patológicas22, 23. El tra- dos o purés. En los pacientes ancianos con EHH se
tamiento de elección es la administración de 15 g de debe evaluar el estado nutricional y reponer con multi-
glucosa pura, aunque pueden indicarse otros carbo- vitamínicos y fosfato cuando esté indicado, para evitar
hidratos que contenga glucosa en esta cantidad, el síndrome de realimentación27.
como por ejemplo un vaso de leche, de zumo o de
refresco; dos sobres de azúcar; una cucharada de 5. Modificaciones dietéticas en enfermedades
miel; una pieza de fruta o 3 galletas (15 g de glucosa
intercurrentes
oral pueden elevar la glucemia en torno a 40 mg/dl).
Durante la hipoglucemia, el vaciamiento gástrico se En situaciones de estrés y de enfermedad (traumatis-
retrasa hasta 2 veces, y es similar para alimentos líqui- mo, cirugía, enfermedad aguda, etc.) el control glucé-
dos y sólidos22. Si persiste la hipoglucemia el trata- mico de las personas con diabetes empeora por la hi-
miento debe repetirse a los 15 minutos. Por otra par- perproducción de hormonas de estrés. La hiperglucemia
te, una vez superada la hipoglucemia «aguda», la es un puede considerarse como un factor pronóstico y
glucemia puede volver a descender, por lo que habrá marcador de gravedad. Es preciso monitorizar la gluce-
que aportar entre 20 y 30 g de hidratos de carbono mia y en ocasiones la cetonemia, tratar con insulina, y
de absorción lenta para prevenir la recaída23, 26. Tomar asegurar una ingesta adecuada de líquidos e hidratos
un alimento mixto con proteínas y carbohidratos para de carbono cuando el paciente mantiene la ingesta
tratar la hipoglucemia no afecta a la respuesta glucé- oral. Debe abandonarse la práctica de restringir el
mica, aunque es importante recordar que no previene aporte de carbohidratos, incluso de mantener a los pa-
la hipoglucemia posterior. Sin embargo, no se reco- cientes con DM en ayunas, para ayudar a reducir la
206 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

hiperglucemia. El objetivo consiste en conseguir una con DM son similares a las de otros pacientes no dia-
glucemia media inferior a 180 mg/dl y evitar la cetogé- béticos, si bien destacan algunas peculiaridades. En
nesis22, 26. ocasiones, por ejemplo, es necesario modificar la vía
En caso de fiebre, asociada o no a hiporexia, hay que de acceso (enteral en lugar de gástrica) en pacientes
asegurar una ingesta suficiente de líquidos y de carbo- candidatos a nutrición enteral (NE) en los que coe-
hidratos en forma de purés, zumos y compotas, de fá- xiste una gastroparesia diabética, o modificar la
cil digestión, según las preferencias del paciente. Los pauta de administración de la nutrición (infusión
alimentos proteicos y grasos pueden reducirse, e inclu- continua, intermitente o bolos) para, junto con el
so eliminarse de forma temporal. Para los adultos suele tratamiento farmacológico, mejorar el control meta-
ser suficiente la ingesta de 150 g de hidratos de carbo- bólico31, 32.
no al día (20-30 g, cada 2-4 h), ajustando la medica- Pero, la principal peculiaridad del soporte nutricional
ción, preferentemente insulina (de forma transitoria en del paciente con DM radica en la teórica necesidad de
pacientes con medicación oral), para controlar adecua- modificar la composición de las fórmulas, tanto de NE
damente la glucemia y evitar la cetosis30. como de nutrición parenteral (NP), con el objetivo de
Si hay vómitos, la alimentación tendrá consistencia ayudar a mejorar el control metabólico y la hipergluce-
líquida o pastosa, a base de papillas, purés, caldos, zu- mia de estrés.
mos naturales, etc. Al principio, las tomas serán fre-
cuentes y en pequeñas cantidades. En caso de intole- 6.1.  Nutrición enteral
rancia oral, se debe consultar de inmediato con el
médico para descartar una complicación aguda e ini- Las fórmulas de NE diseñadas específicamente para
ciar tratamiento intravenoso con líquidos, electrolitos, el paciente con DM incorporan cambios cuali y cuanti-
glucosa e insulina30. tativos en su composición. Cualitativamente, el cam-
Ante la existencia de diarrea, se recomienda rehi- bio más importante radica en la utilización de hidratos
dratar con soluciones isotónicas compuestas por glu- de carbono de menor índice glucémico. Cuantitativa-
cosa y electrolitos, y continuar con una dieta astringen- mente, en algunas de las fórmulas, se aumenta la can-
te tradicional, asegurando un aporte mínimo de HC en tidad de grasa por encima del 40% de las calorías to-
forma de sopa de arroz, tapioca, sémolas, patatas her- tales. La fuente lipídica es vegetal, a expensas sobre
vidas y/o pan tostado. Se aconseja tomar yogur (en todo de ácidos grasos monoinsaturados (MUFA). El
lugar de leche), y cocinar las carnes magras y pescados contenido de MUFA de las fórmulas es muy variable,
de forma sencilla (plancha, hervidos o cocidos)30. entre el 24 y el 73% del total. A este grupo de fórmu-
En caso de enfermedad catabólica los requeri- las específicas para DM e hiperglucemia se les llama
mientos nutricionales de los pacientes con DM son si- «ricas en grasa».
milares a los de otros pacientes con el mismo grado de Cualquiera de estos cambios en la composición de
estrés. La dieta oral se debe prescribir según la situa- las fórmulas de NE persigue mejorar el control metabó-
ción y preferencias del paciente, siendo necesario utili- lico de los pacientes y ayudar al tratamiento hipogluce-
zar nutrición artificial si no se cubren los requerimien- miante.
tos energéticos. La hiperglucemia se corregirá con
insulina, con el objetivo de conseguir glucemias infe- 6.1.1.  Fórmulas ricas en grasa
riores a 180 mg/dl, incluso en pacientes críticos28. El
estudio NICE-SUGAR en más de 6000 pacientes críti- Las fórmulas ricas en grasa se han comparado con
cos, mostró un aumento significativo de la mortalidad fórmulas de NE estándar en un número importante de
en aquellos con control intensivo de la glucemia (81- estudios, llevados a cabo en pacientes con DM tipo 1,
108 mg/dl) frente a los que mantenían un objetivo de tipo 2 o en pacientes con hiperglucemia de estrés33-35.
control convencional (< 180mg/dl)29. En aquellos ensayos en los que se administraban canti-
Los pacientes que reciban una alimentación exclu- dades isocalóricas de una fórmula con reparto están-
sivamente líquida necesitarán aproximadamente dar frente a una fórmula rica en grasa, la glucemia
150-200 g de carbohidratos al día, repartidos en varias postprandial y la insulinemia fueron menores tras la
tomas. La manera más segura de cubrir los requeri- fórmula rica en grasa. En los estudios llevados a cabo
mientos nutricionales en estos pacientes es aportando en personas con DM que reciben NE domiciliaria-am-
suplementos de nutrición enteral. La insulina o las me- bulatoria las dietas ricas en grasa mejoraron el control
dicaciones para la diabetes se ajustarán para conseguir metabólico (glucemias basal, postprandial, HbA1c),
los objetivos planteados de control glucémico30. disminuyendo en la mayoría de los estudios las concen-
traciones de colesterol total, VLDL y triglicéridos.
En pacientes críticos con hiperglucemia y en diabéti-
6.  Nutrición artificial
cos sometidos a estrés, las glucemias y las necesidades
Las indicaciones, vías de acceso, complicaciones y de insulina fueron menores utilizando la fórmula rica
seguimiento de la nutrición artificial en el paciente en grasa. En algunos estudios, pero no en todos, se
Tema 13.  Importancia de la dieta en situaciones intercurrentes en diabetes mellitus 207

encontró mejoría en la estancia media y las complica- cuantitativa, es decir, a la fuente o al reparto de macro-
ciones infecciosas. nutrientes.

6.1.2. Fórmulas que modifican la fuente de 6.2.1. Modificaciones en la cantidad de hidratos


hidratos de carbono de carbono y grasa
Las conclusiones de los estudios que evalúan la Basándose en los mismos principios que en NE, el
glucemia postprandial con este grupo de fórmulas aporte de un 50% a 60% de las calorías no proteicas
específicas son heterogéneas33, 35. En la mayoría de en forma de grasa, ayudaría a controlar la glucemia,
ellos la glucemia postprandial tras ingerir una canti- disminuyendo las necesidades de insulina. Si como
dad determinada de una fórmula específica que con- veíamos antes en NE, el número de trabajos comparan-
tenía fibra y fructosa era menor que tras cantidades do las fórmulas estándar con las específicas nos parece
isocalóricas de una fórmula estándar sin fibra. Sin escaso, todavía es menor si buscamos referencias en
embargo, cuando se comparan las formulas de re- NPT. No existe, por tanto, evidencia alguna de que el
parto estándar con fórmulas ricas en grasa parece aumento de las calorías provenientes de la grasa se
claro que el mayor determinante de la glucemia post­ asocie con una mejoría clínica del paciente con NP,
prandial es la cantidad de hidratos de carbono, más aunque hay que reconocer que sí facilita el control glu-
que su fuente. cémico.

6.1.3. Recomendaciones 6.2.2. Modificaciones en la fuente de hidratos


de carbono y grasa
No existe suficiente evidencia que justifique el uso
sistemático de las fórmulas específicas para todas las Hasta hace unos años disponíamos en el mercado de
personas con DM o hiperglucemia. No parece apro- otras fuentes de carbohidratos como las mezclas de
piado asumir que todos los pacientes con DM van a hidratos de carbono con glucosa, fructosa y xilitol
necesitar utilizar fórmulas específicas. Las Guías de las (FGX) o glicerol. Actualmente solo el glicerol se utiliza
sociedades de nutrición36-38 tampoco establecen con- como fuente de carbohidratos en algunas mezclas pre-
clusiones firmes sobre la mejor composición de las fór- diseñadas de NP para vía periférica, ya que confiere
mulas de NE, recomendando evitar un aporte excesivo una menor osmolalidad que la glucosa.
de calorías. El conocimiento profundo de la composi- Los pacientes con DM tienen frecuentemente tras-
ción de las fórmulas junto con el establecimiento de tornos del metabolismo lipídico, y la rapidez de aclara-
unos objetivos claros de control nutricional y glucémi- miento y utilización de las mezclas con triglicéridos de
co39, son los dos puntos clave a tener en cuenta para cadena media puede resultar de utilidad. Sin embargo,
seleccionar el mejor tipo de fórmula. Probablemente hasta la fecha no existe ningún EPA que evalúe la fuen-
entre las indicaciones de las fórmulas específicas ricas te de grasa en los pacientes con DM candidatos a NP.
en grasa podríamos encontrar:
6.2.3. Recomendaciones
• Pacientes con DM de difícil control, ingresados En ausencia de evidencia científica, tanto las Socie-
por alguna complicación o proceso intercurrente. dades de Diabetes como las de Nutrición1, 36, 38 reco-
• En pacientes con hiperglucemia de estrés. miendan evitar un aporte excesivo de calorías, sin cam-
• Pacientes con DM estable en los que se requiere la biar de forma sistemática la fuente ni el reparto de
administración de suplementos. En este caso, los grasa o hidratos de carbono. Parece prudente concluir
ricos en grasa, que suelen tomarse entre horas, que, además de modificar las fórmulas de NP, los espe-
podría evitar la necesidad de modificar el trata- cialistas en nutrición manejemos pautas de monitoriza-
miento farmacológico, al aumentar en menor me- ción de la glucemia e infusión de insulina de forma in-
dida la glucemia tras su ingesta. dividualizada con el objetivo de mantener las glucemias
por debajo de 180 mg/dl28, 40.
Además de cuál debería ser el reparto de los macro-
nutrientes, faltaría por determinar la cantidad adecua- 7. Resumen
da de MUFA, así como los posibles efectos del exceso
de grasa y su influencia sobre el vaciamiento gástrico, A lo largo de este capítulo consideramos una serie
sobre todo en pacientes con gastroparesia. de situaciones (fisiológicas y patológicas) que vemos
con frecuencia en la vida de las personas con DM. Es
importante resaltar que, en la mayoría de los casos, las
6.2.  Nutrición parenteral
modificaciones alimentarias o dietéticas que se han
Al igual que en NE, las modificaciones de las fórmu- propuesto, dependen de la situación coexistente, y no
las de NP pueden afectar a su composición cuali o del hecho de que la persona sea o no diabética. Así,
208 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

por ejemplo, las necesidades nutricionales en el caso a systematic review and meta-analysis of randomi-
del adolescente, el deportista, o la gestante con DM, zed clinical trials on maternal and newborn outco-
son las mismas que en los mismos grupos sin DM. Los mes. Diabetes Care. 2014; 37(12):3345-55.
vómitos, la diarrea o la enfermedad grave deben tratar-   8. Schoenaker DA, Mishra GD, Callaway LK, Soeda-
se de forma similar en los pacientes con y sin DM, re- mah-Muthu SS. The Role of Energy, Nutrients,
cordando la exigencia (aun mayor si cabe en los diabé- Foods, and Dietary Patterns in the Development of
ticos) de un aporte adecuado y mantenido de los Gestational Diabetes Mellitus: A Systematic Review
hidratos de carbono. of Observational Studies. Diabetes Care. 2016;
Cualquier modificación alimentaria o cambio en los 39(1):16-23.
requerimientos metabólicos deben ir acompañados de   9. Pratley RE, Heller SR, Miller MA. Treatment of type
las modificaciones pertinentes en el tratamiento (insu- 2 diabetes mellitus in the older adult: a review.
lina o antidiabéticos orales). Aunque el análisis de las Endocr Pract. 2014; 20(7):722-36.
pautas de manejo farmacológico en cada una de las 10. Gómez Huelgas R, Díez Espino J, Formiga F, Lafita
situaciones intercurrentes aquí revisadas, excede los Tejedor J, Rodríguez Mañas L, González Sarmiento
objetivos de este capítulo, conviene recordar los resul- E, et al. Conferencia de Consenso: Tratamiento de
tados de las publicaciones más recientes que apuntan la diabetes tipo 2 en el paciente anciano. Med Clin
hacia la necesidad de un control de la glucemias en (Barc). 2012. Disponible en: http://dx.doi.or-
pacientes con alguna situación intercurrente en torno g/10.1016/j.medcli.2012.10.003
a 140-180 mg/dl. 11. Farrer O, Yaxley A, Walton K, Healy E, Miller M.
Respecto a la nutrición artificial en los pacientes con Systematic review of the evidence for a liberalized
DM, consideramos que no es necesaria la utilización diet in the management of diabetes mellitus in ol-
sistemática de fórmulas específicas para DM. Sin em- der adults residing in aged care facilities. Diabetes
bargo, conviene resaltar que su utilización en determi- Res Clin Pract. 2015; 108(1):7-14.
nadas situaciones, como en pacientes críticos, pacien- 12. Craig WJ, Mangels AR, American Dietetic Association.
tes con necesidades elevadas de insulina o aquellos Position of the American Dietetic Association: vegeta-
mal controlados, puede resultar de utilidad, ya que, rian diets. J Am Diet Assoc. 2009; 109(7):1266-82.
sobre todo las fórmulas ricas en grasa se asocian a una 13. Lee SW, Lee JY, Tan CS, Wong CP. Strategies to Make
menor respuesta glucémica. Ramadan Fasting Safer in Type 2 Diabetics: A Syste-
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Tema 14. 
Soporte nutricional en patologías con alteración
en el procesamiento de los hidratos de carbono.
Dieta controlada en fructosa. Dieta controlada
en sacarosa. Dieta restringida en galactosa
Yaiza García Delgado
María del Pino Alberiche Ruano
Rosa María Sánchez Hernández
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Insular de Gran Canaria. Las Palmas de
Gran Canaria

Raúl Alberto González Medina


Unidad de Hospitalización de Medicina Interna. Hospital Universitario Insular de Gran Canaria.
Las Palmas de Gran Canaria

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 211-251.

1.  Enfermedades por depósito de glucógeno


2.  Errores del metabolismo de la galactosa o hipergalactosemias
3.  Errores del metabolismo de la fructosa
4.  Alteraciones de la gluconeogénesis
5.  Alteraciones en la digestión y absorción de hidratos de carbono
6. Resumen
7. Bibliografía

1.  Enfermedades por depósito de glucógeno El glucógeno es el polisacárido de reserva energética


en los animales, y se almacena en el hígado (hasta
1.1. Introducción 70 mg/g de hígado, 10% de la masa hepática) y el
El glucógeno es un polímero de glucosa ramificado músculo (hasta 15 mg/g de músculo, 1% de la masa
que constituye la forma de almacenamiento de los hi- muscular); además pueden encontrarse pequeñas can-
dratos de carbono (HC) en los animales. Tiene una es- tidades en ciertas células gliales del cerebro. El conteni-
tructura arbórea en la que los residuos de glucosa se do tisular de glucógeno fluctúa de forma notable
encuentran unidos mediante enlaces α-1,4 interrumpi- como consecuencia de la alimentación y de sus reque-
dos cada 4-10 moléculas por ramificaciones con enlace rimientos: se sintetiza tras los períodos de ingesta de
α-1,6, los cuales representan el 7-10% de los enlaces HC y se degrada cuando disminuyen los niveles plas-
totales. La ventaja de que el glucógeno sea una molé- máticos de glucosa, bien por aumento de su demanda
cula tan ramificada radica en que esta estructura: a) o por disminución del aporte.
mejora su solubilidad, b) aumenta el número de pun- El principal papel del glucógeno hepático es mante-
tos de unión a las enzimas, lo que incrementa la velo- ner los niveles de glucemia liberándola al torrente san-
cidad de síntesis y degradación, y c) permite acumular guíneo para que esté disponible en los tejidos que no
miles de residuos de glucosa sin aumentar la presión la pueden sintetizar. Los pacientes con trastornos del
oncótica que ocasiona la glucosa libre. Se almacena en metabolismo hepático del glucógeno tendrán por lo
el citosol de las células, en donde forma dispersiones tanto hipoglucemia, con o sin hepatomegalia, y sus
coloidales. síntomas mejorarán con la ingesta o tras la administra-

211
212 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

ción de glucosa. Por otra parte, el glucógeno muscular la UDP-glucosa pirofosforilasa, y son estos resi-
es utilizado como fuente de energía (ATP) para la con- duos de glucosa los que se van añadiendo al polí-
tracción muscular, por lo que los pacientes que presen- mero de glucógeno mediante enlaces α-1,4 por
ten una alteración del metabolismo muscular del glu- acción de la glucógeno sintasa. La enzima ramifi-
cógeno presentarán mialgias, calambres, intolerancia cante α-1,4-glucano-6-glicosiltransferasa transfie-
al ejercicio, fatigabilidad fácil, debilidad muscular y re grupos de seis o siete residuos de glucosa ter-
mioglobinuria. minal unidos mediante enlaces α-1,4 a posición
A continuación se explica de forma resumida el pro- α-1,6 (puntos de ramificación).
ceso de glucogenogénesis y glucogenólisis (figura 1): • Glucogenólisis: es el proceso de destrucción de
glucógeno para obtener glucosa. Se precisan dos
• Glucogenogénesis: es el proceso de síntesis de sistemas enzimáticos: la glucógeno fosforilasa,
glucógeno. Tras la internalización de la glucosa en que escinde los enlaces α-1,4 liberando Glu-1-P, y
la célula, esta es fosforilada en posición 6 (gluco- la enzima desramificante que hidroliza los puntos
sa-6-fosfato, Glu-6-P) por una hexokinasa (gluco- de ramificación. Por su parte, la enzima desramifi-
kinasa en el hígado, hexokinasa en el músculo), lo cante es una proteína bifuncional que actúa en
que la mantiene dentro de los tejidos e impide dos pasos: en primer lugar transfiere tres de los
que vuelva a salir a la circulación; posteriormente últimos cuatro residuos de glucosa de una cadena
es transformada a glucosa-1-fosfato (Glu-1-P) lateral α-1,6 en degradación al extremo de una
mediante la fosfoglucomutasa. La Glu-1-P es con- central mediante enlace α-1,4 (actividad 4-α-glu-
vertida en uridin-difosfato-glucosa (UDP-Glu) por cano transferasa o α-1,4-glicosiltransferasa). En

Figura 1.  Metabolismo del glucógeno.


Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 213

segundo término, el único residuo de glucosa uni- tes del complejo enzimático glucosa-6-fosfatasa (Glu-
do a dicha cadena central por un enlace α-1,6 es 6Pasa), y que se caracterizan por la acumulación de
hidrolizado liberándose glucosa (actividad α-ami- glucógeno e infiltración grasa en hígado y riñones, que
lo-1,6-glucosidasa). La hidrólisis del glucógeno se deriva en hepatomegalia, nefromegalia e hipogluce-
traduce de esta manera en un 90% en Glu-1-P y mia. Aunque clásicamente se describían cuatro subti-
en un 10% en glucosa libre. La Glu-1-P es tranfor- pos (Ia, Ib, Ic y Id), actualmente se diferencian solo dos:
mada en Glu-6-P por la fosfoglucomutasa tanto
en el hígado como en el músculo. En el músculo, • Ia: Déficit de glucosa-6-fosfato hidrolasa o
la Glu-6-P entra en la vía de la glucólisis para ob- actividad catalítica (G6Pasa), clásicamente en-
tener ATP, mientras que en el hígado la Glu-6-P es fermedad de Von Gierke (gen G6PC, 17q21).
defosfatada por la glucosa-6-fosfatasa para que la Es una de las GSD más frecuentes, con una inci-
glucosa libre pase al plasma. dencia de 1: 100.000 recién nacidos vivos, y re-
presenta el 80% de las GSDI. La G6Pasa se localiza
Las enzimas clave o reguladoras de estos procesos en la membrana del retículo endoplásmico de los
son la glucógeno fosforilasa (glucogenólisis) y la glucó- hepatocitos, en las células de los túbulos renales y
geno sintasa (glucogenogénesis); ambas se encuentran enterocitos, y cataliza la hidrólisis de la Glu-6-P en
en forma inactiva (forma b) y deben ser activadas (for- glucosa libre y fósforo inorgánico, por lo que su
ma a) para iniciar su acción. En el caso de la glucógeno déficit impide la liberación de la glucosa desde es-
fosforilasa, ésta es fosforilada por otra enzima, la fos- tos tejidos al torrente circulatorio.
forilasa-b-kinasa. • Ib: Déficit de glucosa-6-fosfato translocasa
Las enfermedades por depósito de glucógeno (Gly- (G6PT) (gen SLC37A4, 11q23). Representa el
cogen Storage Disease, GSD) o glucogenosis constitu- 20% de las GSDI. La función de la G6PT es trans-
yen un grupo de patologías que representan un claro portar la Glu-6-P desde el citoplasma al interior
ejemplo de heterogeneidad genética. Incluyen todas de la luz del retículo endoplásmico para su poste-
aquellas alteraciones de las enzimas que intervienen en rior hidrólisis y devolver al citoplasma las molécu-
la síntesis, degradación o regulación del glucógeno. las de fósforo inorgánico. SLC37A4 se expresa
Desde que en 1952 los Cori descubrieron el déficit de fundamentalmente en la membrana del retículo
actividad glucosa-6-fosfatasa como causante de gluco- endoplásmico de hepatocitos, precursores hema-
genosis, se han ido identificando otros déficits enzimá- topoyéticos y células renales, y en menor medida
ticos que han sido clasificados de forma numérica por de colon, intestino delgado, músculo esquelético
orden cronológico. En todos ellos el glucógeno presen- y músculo cardíaco. Los subtipos definidos pre-
ta una concentración tisular y/ o estructura anormales. viamente como Ic y Id quedan englobados en
Las manifestaciones clínicas y la edad de aparición de- este subgrupo, ya que se ha demostrado que
penderán de la enzima afectada, su importancia fisio- también están producidos por mutaciones de SL-
lógica, los productos acumulados tóxicos y el déficit de C37A4.
sustrato energético resultante. Ya que el glucógeno se
almacena fundamentalmente en hígado y músculo, es- El fenotipo clínico es similar en la GSDIa y Ib. La ma-
tos son los órganos afectados principalmente en estas yoría de las veces los síntomas comienzan a partir de
patologías. Es por ello que las GSD también pueden los 4-6 meses de edad, aunque en ocasiones la enfer-
clasificarse en hepáticas y musculares, aunque en ge- medad se manifiesta desde el período neonatal con
neral se designan por el déficit enzimático que las ori- hipoglucemias. La clínica se deriva de la disminución
gina. En la actualidad están descritas numerosas muta- de los niveles de glucemia por la interrupción de la li-
ciones de cada una de las enzimas involucradas. Su beración de glucosa libre desde el hígado, y la deriva-
prevalencia general es de 1: 20.000-25.000 y se here- ción de sustratos intermedios a partir del exceso de
dan con carácter autosómico recesivo, excepto el défi- Glu-6-P hacia otras rutas metabólicas alternativas,
cit de fosforilasa-b-kinasa con herencia ligada al X. como la síntesis de lípidos, de purinas o la del ácido
En este capítulo abordaremos solamente las gluco- láctico. La forma de presentación típica suele consistir
genosis que se benefician de un tratamiento nutricio- en hepatomegalia, hipoglucemias, acidosis láctica, hiper­
nal específico. lipemia e hiperuricemia. No obstante esta enfermedad
tiene un amplio espectro de manifestaciones que se
describen a continuación:
1.2. Déficit de glucosa-6-fosfatasa
o glucogenosis tipo I (GSDI) • Hepatomegalia masiva sin esplenomegalia, por
acumulación de glucógeno e infiltración grasa.
1.2.1.  Fisiopatología y diagnóstico
Los niveles de transaminasas están solo levemen-
La GSDI constituye un grupo de enfermedades pro- te elevados sin otros parámetros de disfunción
ducidas por la afectación de alguno de los componen- hepática.
214 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

• Hipoglucemia de ayuno severa sin cetosis, debida • Deterioro cognitivo en caso de hipoglucemias se-
a la disminución de la liberación de glucosa hepá- veras frecuentes en edad infantil.
tica. Aparece tras 2-4 horas sin ingerir alimentos y • Alteración de la función de los neutrófilos y mo-
puede provocar crisis convulsivas, sobre todo en nocitos a partir de los primeros años de vida. Es
neonatos. Los niveles de glucemia se mantienen a específico de la GSDIb. Produce una neutropenia
expensas de la ingesta. constante o cíclica, con infecciones bacterianas
• Acidosis láctica, debida a la desviación del exceso recurrentes y aftas bucales, así como úlceras de la
de sustratos (Glu-6-P pasa a piruvato mediante la mucosa intestinal, de gravedad variable y que
glucólisis) hacia la ruta de la lactato deshidroge- pueden llegar a comprometer la vida del paciente.
nasa.
• Hiperuricemia marcada, sobre todo a partir de la En el pasado, la mayoría de los individuos que no
adolescencia. En algunos casos puede producir eran tratados o lo hacían de forma tardía fallecían a
gota. Es debida a varios mecanismos: a) Inhibición edad temprana. Sin embargo, la instauración de un
de la secreción tubular renal por la hiperlactacide- tratamiento nutricional correcto precoz ha mejorado el
mia; b) aumento del metabolismo de las purinas pronóstico de estos pacientes, que pueden conseguir
(síntesis de nucleótidos derivado del exceso de un crecimiento y desarrollo adecuados y evitar muchas
Glu-6-P y ADP), y c) insuficiencia renal, si existe. de las complicaciones a largo plazo.
• Dislipemia mixta, por derivación de sustratos in- El diagnóstico de confirmación se realiza directamen-
termedios (gliceraldehído-3-fosfato y piruvato te mediante el estudio genético de las mutaciones en
procedentes del exceso de Glu-6-P) hacia la sínte- G6PC o SLC37A4 si la sospecha diagnóstica es elevada,
sis de lípidos. Las cifras de triglicéridos pueden evitándose así técnicas cruentas y que además presen-
llegar hasta 4000-6000 mg/dl y las de colesterol tan mayor dificultad en su realización. En caso de que
total hasta 400-600 mg/dl. Es posible la aparición éste no sea concluyente por no detectarse mutación
de xantomas eruptivos, cambios retinianos típicos patológica se puede realizar biopsia hepática para estu-
y el desarrollo de pancreatitis secundaria. El riesgo dio histológico, que demuestra la presencia de agrega-
cardiovascular relacionado con la hiperlipemia en dos de glucógeno, esteatosis y mínima fibrosis, y para
estos pacientes no está establecido. cuantificación de la actividad enzimática G6Pasa o
• Retraso del crecimiento y desarrollo, que puede G6PT, que se encuentran disminuidas por debajo del
ser muy importante, con talla baja y retraso pu- 10% de lo normal en la mayoría de los pacientes.
beral. Puede realizarse el diagnóstico prenatal en familias
• Fenotipo peculiar con cara redondeada «de mu- afectadas mediante estudio genético de la mutación
ñeca», extremidades relativamente delgadas, talla conocida del caso índice en células fetales extraídas
baja y abdomen protuberante (debido a la hepa- mediante amniocentesis o biopsia coriónica. Actual-
tomegalia masiva). mente no es posible el diagnóstico bioquímico me-
• Nefromegalia, debida al acúmulo de glucógeno diante determinación de los niveles de actividad enzi-
e infiltración grasa. Además, puede producirse mática debido a la poca precisión y al riesgo asociado
glomeruloesclerosis, fibrosis intersticial progresi- a la biopsia hepática fetal.
va, proteinuria, hipocitraturia, hipercalciuria, ne-
frolitiasis y nefrocalcinosis, e incluso insuficiencia
1.2.2.  Objetivos nutricionales
renal crónica con necesidad de hemodiálisis o
trasplante renal. También es posible la aparición El objetivo del tratamiento consiste en mantener
de hipertensión arterial secundaria a la afecta- unos niveles de glucemia normales y proporcionar una
ción renal. nutrición adecuada para conseguir un crecimiento y
• Osteopenia u osteoporosis incluso en pacientes desarrollo adecuados. Muchas de las otras manifesta-
prepuberales, debido a la acidosis crónica y a la ciones clínicas y parámetros bioquímicos como la aci-
insuficiencia renal (si existe). dosis láctica y la hipertrigliceridemia mejoran de forma
• Desarrollo de adenomas hepáticos en la mayoría paralela a la normalización de las glucemias.
de los pacientes a partir de la 2ª-3ª década de Para ello los pacientes deben evitar los períodos de
vida, aunque también son posibles en niños. Pue- ayuno mediante pequeñas ingestas frecuentes (cada
den aumentar en número y tamaño, y con fre- 2-4 horas) durante el día de alimentos ricos en HC
cuencia ocurre hemorragia intrahepática. En algu- complejos y además almidón crudo de maíz entre co-
nos casos se malignizan. midas, así como soporte nocturno también con carbo-
• Alteración de la función plaquetaria que facilita el hidratos mediante perfusión enteral continua o tomas
sangrado, como por ejemplo las epistaxis frecuen- de almidón crudo de maíz. En un reciente metaanálisis
tes y la menorragia. que comparaba la nutrición enteral nocturna continua
• Hipertensión pulmonar. con el almidón crudo de maíz, se concluyó que los pa-
• Síndrome de ovario poliquístico. cientes tratados con almidón de maíz mantenían glu-
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 215

cemias más elevadas, sin embargo los niveles de lacta- to al valor calórico total sería: HC = 60-70%, proteínas
to y colesterol eran mayores y no existieron diferencias = 10-15%, lípidos = 10-15%.
en los niveles de triglicéridos.
Durante la infancia el tratamiento debe ser intensivo, • Hidratos de carbono. Deben ser mayoritaria-
ya que las hipoglucemias son más graves y frecuentes. mente HC complejos en forma de almidón, prefe-
A medida que pasan los años, los requerimientos de rentemente de arroz, maíz, patata y pan integral
glucosa son menores y se puede flexibilizar el aporte de para niños y adolescentes, y almidón de arroz
HC al finalizar el crecimiento y desarrollo. Llegados a para lactantes. En el proceso de gluconeogénesis
este punto, muchos pacientes mantienen los niveles de se precisa en última instancia de la actividad Glu-
glucemia solo con la toma de almidón de maíz antes 6Pasa, por lo que cualquier alimento que conten-
de dormir. La monitorización de la glucemia capilar ga HC simples diferentes a la glucosa o que no se
puede ayudar a ajustar el aporte de HC a las necesida- hidrolicen exclusivamente en este monosacárido
des de cada individuo, evitando así las hipoglucemias y no serán eficaces para mantener los niveles de
el sobretratamiento y sobrepeso. glucemia. Además, el exceso de fructosa puede
En la tabla 1 se detallan los objetivos de tratamiento desviarse a través del ciclo de Krebs hacia la ruta
según las guías publicadas por la Collaborative Euro- del ácido láctico empeorando aún más la acidosis.
pean Study on Glycogen Storage Disease I. Por este motivo debe evitarse, al menos en la in-
En los pacientes en los que no se consigan unos nive- fancia, el azúcar (sacarosa), las frutas y zumos
les adecuados de glucemia mediante tratamiento nutri- (fructosa), el sorbitol o el jarabe de maíz rico en
cional puede emplearse diazóxido a dosis bajas (3-5 mg/ fructosa. De igual modo, la ingesta de lactosa y
kg/día), que inhibe la producción endógena de insulina. galactosa debe limitarse en niños mayores a un
vaso de leche desnatada, un yogur o unos 40 g de
1.2.3.  Recomendaciones dietéticas queso al día.
Es especialmente útil el almidón crudo de maíz
Tradicionalmente se consideraba que estos pacientes (maicena), polímero de glucosa que no cocinado
tenían unos requerimientos energéticos un 20-25% por se libera y absorbe más lentamente que el almi-
encima del estimado para edad, peso y talla, basándose dón de otros cereales y permite mantener los ni-
en estudios previos que calculaban la producción endó- veles de glucemia durante un tiempo prolongado
gena de glucosa en individuos sanos. Sin embargo, tra- de 6-8 horas. Cada gramo de almidón crudo de
bajos recientes demuestran que esta producción endóge- maíz aporta ~3 mg glucosa/ minuto. Las reco-
na en personas sanas es un 20-25% menor de lo mendaciones siempre han ido en consonancia
calculado, y además se ha constatado que los pacientes con un consumo equivalente a la tasa estimada
con GSDI tienen cierta actividad residual Glu6Pasa que de producción endógena de glucosa durante el
contribuye a dicha producción. Por lo tanto existe un cla- ayuno (1,5-2,5 g/ kg) (tabla 2), con una frecuen-
ro riesgo de sobretratamiento y obesidad, así que el ma- cia que, aunque depende de cada paciente, suele
nejo dietético debe tener un equilibrio que evite dicho ser cada 4-6 horas. No obstante, como se ha co-
exceso y también las manifestaciones clínicas de la enfer- mentado antes, parece que una reposición ligera-
medad, especialmente en los lactantes y niños pequeños. mente menor puede ser suficiente y así evitar el
Se recomienda un mayor aporte proporcional de HC, sobretratamiento. Puede utilizarse con facilidad
de tal forma que el reparto de macronutrientes respec- como aporte de glucosa frecuente durante el día

Tabla 1.  Objetivos de tratamiento en la GSDI según el Collaborative European Study


on Glycogen Storage Disease I.

Glucemia preprandial > 63-72 mg/ dl (>3,5-4 mmol/l)


Ratio lactato urinario/ creatinina urinaria < 0,06 mmol/mmol
Ácido úrico sérico en el límite alto del rango de normalidad para edad
Exceso de base venoso > –5 mmol/l y bicarbonato venoso > 20 mmol/l (20 mEq/l)
Triglicéridos séricos < 531 mg/dl (< 6 mmol/l)

α-1-antitripsina fecal normal en la GSDIb


Índice de masa corporal entre 0 y +2 desviaciones estándar para edad y sexo
216 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

Tabla 2.  Producción endógena de glucosa en período de ayuno y recomendaciones dietéticas en la GSDI según el
Collaborative European Study on Glycogen Storage Disease Type I (2002).

Producción endógena de
Edad Aporte durante el día Aporte nocturno
glucosa (mg/ Kg/ min)
Lactancia materna/ fórmula artificial Nutrición enteral nocturna, si es posible
(fórmula sin lactosa + maltodextrina) durante 12 h (empezar por el 50% de
0-12 meses c/ 2-3 h requerimientos e ir disminuyendo al 35%) o 7-9
*A partir de los 6 meses sustituir la ingestas frecuentes.
maltodextrina por arroz o maíz.
3 comidas principales con almidón de maíz Nutrición enteral nocturna durante 12 h
precocinado + 2 snacks (preferiblemente (35% de requerimientos) o almidón crudo
1-3 años 6-8
almidón de maíz precocinado) + almidón de maíz c/ 4 h (1-1,5 g/kg)
crudo de maíz c/ 4 h (1-1,5 g/kg)
3 comidas principales con almidón de maíz Nutrición enteral nocturna durante 12 h
precocinado + 2 snacks (preferiblemente (35% de requerimientos) o almidón crudo
3-6 años 6-7
almidón de maíz precocinado) + almidón de maíz c/ 4-6 h (1,5-2 g/kg)
crudo de maíz c/ 4-6 h (1,5-2 g/kg)
3 comidas principales con almidón de maíz Nutrición enteral nocturna durante 10 h
precocinado + 2 snacks (preferiblemente (30% de requerimientos) o almidón crudo
6-12 años 5-6
almidón de maíz precocinado) + almidón de maíz c/ 6 h (1,5-2 g/kg)
crudo de maíz c/ 6 h (1,5-2 g/kg)
3 comidas principales con almidón de maíz Nutrición enteral nocturna durante 10 h
precocinado + 2 snacks (preferiblemente (30% de requerimientos) o almidón crudo
Adolescencia 5
almidón de maíz precocinado) + almidón de maíz c/ 6 h (1,5-2 g/kg)
crudo de maíz c/ 6 h (1,5-2 g/kg)
3 comidas principales con almidón de maíz Nutrición enteral nocturna durante 8-10 h
precocinado + 2 snacks (preferiblemente (25-30% de requerimientos) o almidón crudo
Adultos almidón de maíz precocinado) + almidón de maíz c/ 6-8 h (2 g/kg). 3-4
crudo de maíz c/ 6 h (1,5-2 g/kg) Ambas opciones intercambiables (fines
de semana/vacaciones)

y también por la noche. La toma de almidón an- de glucemia durante más tiempo que el almidón
tes de acostarse debe mantenerse durante toda la crudo de maíz original.
vida adulta. Los posibles efectos secundarios son Se debe tener en cuenta que la incorporación de
diarrea transitoria, meteorismo y distensión ab- una pequeña cantidad de proteínas y lípidos en
dominal (ver apartado de «Alteraciones de la di- cada comida ayuda a ralentizar la absorción de
gestión y absorción de los hidratos de carbono»); glucosa.
no obstante, son de intensidad leve y ceden de Los lactantes pueden ser alimentados mediante
forma espontánea. Para evitarlos se recomienda lactancia materna o con una fórmula comercial a
que se prepare en una suspensión de agua a tem- base de soja o arroz sin lactosa y con maltodextri-
peratura ambiente con una relación de peso: vo- na añadida, repartida en tomas cada 2-3 horas.
lumen de 1: 2. Puede utilizarse con seguridad por Tras los 6 meses de edad la maltodextrina se pue-
encima de los 2 años de edad; en los lactantes es de sustituir por cereales de arroz o almidón crudo
posible que produzca intolerancia digestiva, ya de maíz si éste es bien tolerado. Generalmente
que poseen menores niveles de amilasa pancreá- suelen necesitar alimentación continua nocturna
tica, y aunque no existe unanimidad respecto a la para evitar hipoglucemias.
edad de inicio, puede probarse su tolerancia en- Los niños mayores de un año deben tomar al menos
tre los 6 y 12 meses de edad. En estos casos tam- tres comidas al día con almidón de maíz y frecuen-
bién cabe la opción de utilizar enzimas pancreáti- tes snacks entre medias. Además, habitualmente
cas para su digestión. requieren alguna dosis de almidón de maíz durante
Se están realizando estudios con almidón de maíz la noche para mantener los niveles de glucemias.
modificado con mayor cantidad de puntos de ra- En caso de anorexia o vómitos se debe garantizar
mificación, que parece que mantiene los niveles el aporte de glucosa, si es por vía oral, con solu-
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 217

ciones de dextrinomaltosa, que se hidroliza exclu- MCT, y no hay seguimiento a largo plazo, por lo
sivamente en glucosa. que se requieren más estudios para confirmar los
• Proteínas. En estos pacientes no es útil una dieta beneficios.
hiperproteica para mantener los niveles de gluce- • Micronutrientes: Se recomienda la suplementa-
mia, ya que, como se ha dicho, también la gluco- ción de calcio, vitamina D y hierro.
neogénesis precisa de la acción de la Glu6Pasa en
su último paso para la transformación de Gluc-6-P – Calcio y vitamina D, ya que estos pacientes tie-
en glucosa. nen mayor riesgo de osteoporosis. Se debe su-
Las proteínas aportadas deben ser de alto valor plementar con calcio y vitamina D3 para cubrir
biológico, y se recomienda evitar aquellos ali- las RDA en función de la ingesta estimada con
mentos con alto contenido graso asociado. La las fórmulas lácteas (tabla 3).
«leche» y las fórmulas lácteas a base de soja, li- – Hierro. Se debe suplementar con el 100% de las
bres de lactosa y galactosa, pueden utilizarse RDA ya que el almidón de maíz interfiere en su
desde la lactancia a la edad adulta para aportar absorción (tabla 3).
los HC y proteínas. En los niños mayores puede
introducirse leche de vaca (con lactosa) y sus de- • Otros. Deben tratarse la dislipemia y la hiperuri-
rivados, aunque la cantidad máxima permitida cemia con las restricciones y consejos habituales
sería la equivalente, como hemos dicho, a un de estas patologías. No obstante, la hiperlipemia
vaso de leche desnatada, un yogur o 40 g de responde solo parcialmente a las modificaciones
queso. dietéticas y el tratamiento farmacológico.
• Lípidos. Debe realizarse una dieta con un perfil Para evitar la nefrolitiasis y nefrocalcinosis se pue-
cardiosaludable, pobre en ácidos grasos satura- de alcalinizar la orina con suplementos de citrato
dos y rica en monoinsaturados, como se reco- potásico, aunque también es posible la utilización
mienda a la población general. Se han realizado de bicarbonato. Estos suplementos de citrato o
estudios con suplementación de triglicéridos de bicarbonato también son útiles en caso de acido-
cadena media (MCT) que mejoran la acidosis lác- sis láctica refractaria. En niños pequeños se reco-
tica y la hipertrigliceridemia al incrementar la oxi- mienda una dosis de 1 mg/kg/día dividida en
dación de ácidos grasos y disminuir la glucólisis. 3 dosis, y monitorizar en función de la excreción
No obstante se incluyen grupos heterogéneos urinaria de citrato. En niños mayores y adultos
de pacientes, diferentes indicaciones y tipos de se iniciará con 10 mEq tres veces al día. Se debe

Tabla 3.  Ingesta dietética recomendada (RDA) de calcio, vitamina D y hierro por edad y sexo.

Calcio (mg/día) Vitamina D (UI/día) Hierro (mg/día)


Mujeres Varones Mujeres Varones Mujeres Varones
0-6 meses 200* 200* 400 400 0,27* 0,27*
7-12 meses 260* 260* 400 400 11 11
1-3 años 700 700 600 600 7 7
4-8 años 1000 1000 600 600 10 10
9-13 años 1300 1300 600 600 8 8
14-18 años 1300 1300 600 600 15 11
19-50 años 1000 1000 600 600 18 8
51-70 años 1200 1000 600 600 8 8
> 70 años 1200 1200 800 800 8 8
Gestación 1000** – 600 – 27 –
Lactancia 1000** – 600 – 9*** –

* AI (adequate intake) por falta de evidencia científica para calcular las RDA.
** Salvo adolescentes, en las que la RDA es 1300 mg/día.
*** Salvo adolescentes, en las que la RDA es 10 mg/día.
218 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

tener precaución en pacientes con insuficiencia El bloqueo de la desramificación tiene las siguientes
renal por el riesgo de hiperkaliemia e hipertensión. consecuencias:
El tratamiento farmacológico del resto de mani-
festaciones clínicas exceden el objetivo de este ca- • Se acumulan en el hígado polisacáridos ramifica-
pítulo, aunque en general es específico de cada dos (dextrina límite) que producen hepatomegalia
una de ellas y precisan seguimiento de por vida. y posteriormente esplenomegalia secundaria.
• La interrupción de la glucogenólisis condiciona
1.2.4. Soporte nutricional artificial una disminución de la liberación de glucosa al to-
rrente circulatorio con la consecuente hipogluce-
Se administrará nutrición enteral nocturna en niños mia, que es la manifestación principal en estos
pequeños tras la finalización de la lactancia y todos pacientes. Sin embargo, estas hipoglucemias son
aquellos pacientes que no mantengan niveles de gluce- menos graves que en la GSDI, ya que la insuficien-
mia con una dosis de almidón de maíz antes de acos- te glucogenólisis es compensada con el aumento
tarse. Se puede utilizar una infusión de glucosa o de de la gluconeogénesis, que sí es efectiva (a dife-
polímeros de glucosa, o una fórmula enteral polimérica rencia de la GSDI, los residuos de glucosa pueden
comercial sin lactosa ni fructosa. No debe comenzarse ser liberados al plasma, pues la actividad G6Pasa
después de 1 hora tras la última ingesta ni suspenderse está conservada). Al afectarse la glucogenólisis
más de 15-30 minutos antes del desayuno. Así mismo también aparece cetosis; sin embargo, no se pro-
se debe estar atento a las desconexiones o interrupcio- duce hiperlactacidemia, ya que no se sintetiza su-
nes accidentales de la perfusión durante la noche ya ficiente Glu-6-P, sustrato que en exceso se deriva
que se puede producir una hipoglucemia severa. Dada hacia esta vía, como sucede en la GSDI.
la necesidad prolongada de aporte nocturno de gluco-
sa, se aconseja realizar un acceso enteral permanente Las manifestaciones clínicas son variables tanto en
en forma de gastrostomía o yeyunostomía. los órganos afectados, en función del subtipo que pre-
Para calcular las necesidades de glucosa se tendrá en sente el paciente, como en la gravedad, que puede ir
cuenta la tasa de producción endógena estimada se- desde leve a severa. Los síntomas hepático-metabóli-
gún la edad (tabla 2). En lactantes se recomienda ini- cos son, en general, similares a la GSDI pero más leves,
ciar con un aporte de 7 mg/kg/min y posteriormente se toleran períodos de ayuno más prolongados (sobre
ajustar a la baja si es posible según glucemias. todo a medida que avanza la edad) y el pronóstico es
En niños mayores, tras el cálculo inicial también se más favorable. Al igual que en la GSDI, los primeros
intentará ir disminuyendo (4-6 mg/kg/min) para man- síntomas aparecen en el primer año de vida (es raro en
tener glucemias entre 70-95 mg/dl. En adolescentes el período neonatal), con hepatomegalia (98%), hipo-
suele ser suficiente con 2 mg/kg/min de glucosa si es glucemia cetósica (53%), fallo de medro (49%) y disli-
que aún precisan soporte enteral nocturno. pemia, sobre todo hipertrigliceridemia (>80% de pa-
cientes, pero menos grave que en la GSDI), lo que hace
1.3. Déficit de amilo-1,6-glucosidasa, de entrada indistinguibles ambas patologías. Con el
paso de los años esta clínica mejora y habitualmente se
glucogenosis tipo III o enfermedad
normaliza tras la pubertad, debido a la disminución de
de Cori (GSDIII) los requerimientos de glucosa y a la fibrosis hepática,
1.3.1.  Fisiopatología y diagnóstico aunque es muy raro que ésta progrese a cirrosis. La
aparición de adenomas hepáticos o hepatocarcinoma
La GSDIII constituye un grupo de patologías produ- ocurre en menos del 10% de los pacientes, y también
cidas por la afectación de alguna de las isoformas de la son infrecuentes la hiperuricemia y la afectación renal.
enzima desramificadora del glucógeno amilo-1,6-glu- Las complicaciones a largo plazo incluyen osteopenia/
cosidasa (gen AGL, 1p21.2). Su incidencia estimada es osteoporosis y síndrome de ovario poliquístico.
de 1:100.000. Existen dos isoformas de la enzima, he- Además, los pacientes con GSDIIIa sufren también
pática y muscular, y se diferencian cuatro subtipos de afectación muscular cardíaca (casi el 60% de pacien-
la enfermedad: tes) y esquelética (aproximadamente el 50%), que se
manifiesta como hipotonía, debilidad, atrofia muscu-
• IIIa: Déficit de las isoformas hepática y muscular lar, incremento de la creatinkinasa (CK) y miocardiopa-
(85%). tía hipertrófica. Esta última suele aparecer en niños
• IIIb: Déficit exclusivo de la isoforma hepática mayores antes de los 10 años, y la afectación esquelé-
(15%). tica en la 3ª-4ª décadas de vida. Aunque la gravedad es
• IIIc: Déficit de la actividad glucosidasa de la enzi- muy variable, en general todas las manifestaciones
ma desramificadora (extremadamente rara). musculares empeoran de forma progresiva con la
• IIId: Déficit de la actividad transferasa de la enzi- edad. En los adultos esta afectación muscular es la sin-
ma desramificadora (extremadamente rara). tomatología predominante (la hepático-metabólica
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 219

mejora), e incluso algunos pacientes son diagnostica- Además, estas dietas hiperproteicas y bajas en HC no
dos a raíz de las manifestaciones a este nivel. empeoran las hipoglucemias y sus complicaciones, ya
El diagnóstico se fundamenta en las características que las proteínas de la dieta y el glicerol se utilizan
clínicas y bioquímicas (hipoglucemia cetósica, eleva- como sustrato gluconeogénico, lo que también evitaría
ción de transaminasas y/ o CK, hipertrigliceridemia), los la utilización de las proteínas de la musculatura es-
hallazgos ecocardiográficos y electromiográficos y se quelética y cardíaca para ello. En la mayoría de los ca-
confirma mediante estudio genético. En los casos en sos publicados se ha seguido el siguiente reparto caló-
donde no se halle mutación responsable se cuantifica- rico: Proteínas = 20-25% (3 g/kg/día), HC = 15-20%
rá la actividad enzimática en leucocitos. Solo en caso (~4 g/kg/día), lípidos = 60-65% (~6 g/kg/día), con
de duda se realizará biopsia hepática, muscular o de reducción progresiva de los suplementos de almidón
fibroblastos para estudio histológico, en donde se crudo de maíz. Existe incluso algún trabajo en el que se
aprecia la acumulación de glucógeno anómalo ramifi- utilizó una dieta Atkins modificada que permitía una
cado, y en caso de tejido hepático también importante ingesta máxima de 10 g/ d de HC (0.4-0.5 g/kg/día)
fibrosis sin esteatosis. para inducir la cetosis, con un aporte de proteínas de
Se puede realizar diagnóstico prenatal mediante es- 3-5 g/kg/día y de lípidos de 6-8 g/kg/día. En caso de
tudio genético de la mutación conocida del caso índice suplementación con hidroxibutirato la dosis empleada
de la familia. ha sido inicialmente 400 mg/kg/día repartidos cada
3 horas, y aumento progresivo hasta 800 mg/kg/día. Al
menos lo que sí está claro es que en estos pacientes el
1.3.2.  Objetivos nutricionales
aporte del HC no debe suponer más de un 50% del
Al igual que en la GSDI, el objetivo es mantener unos valor calórico total, ya que una dosis excesiva se ha re-
niveles de glucemia normales, evitar complicaciones lacionado con un peor pronóstico de la miocardiopatía.
tanto metabólicas como musculares, y mantener un Además, a diferencia de la GSDI, están permitidos no
crecimiento y desarrollo adecuados. Las hipoglucemias solo la glucosa y sus polímeros, sino otros HC como la
suelen ser menos severas, por lo que la demanda de fructosa y la galactosa (y por tanto la lactosa y la saca-
aporte de HC es menor, y la mayoría de los pacientes rosa), puesto que la gluconeogénesis a partir de los
desde el final del primer año de vida mantienen niveles mismos sí es eficaz.
de glucemia normales con un snack nocturno. Se reco- También se han observado beneficios con suplemen-
mienda realizar monitorización de glucemias y cetone- tación de MCT en cuanto a mejoría de la hipertriglice-
mias, sobre todo nocturnas y en ayunas, para controlar ridemia, niveles de transaminasas y CK, pero al igual
la eficacia del tratamiento y evitar sobredosificación y que en la GSDI se precisan más estudios para confirmar
sobrepeso. los resultados.
Los lactantes pueden seguir la lactancia materna
normal y, en caso de lactancia artificial no se precisan
1.3.3.  Recomendaciones dietéticas
fórmulas especiales.
Los pacientes deben mantener ingestas cada 3-4 ho-
ras. Tradicionalmente se han dado los mismos consejos
que en la GSDI, con comidas frecuentes ricas en HC y
1.4. Déficit de glucógeno sintasa hepática
suplementación con almidón crudo de maíz y/ o nutri- o glucogenosis tipo 0 (GSD0)
ción enteral nocturna, aunque de forma algo más flexi- 1.4.1.  Fisiopatología y diagnóstico
ble dada la menor severidad de las hipoglucemias y las
complicaciones metabólicas. No obstante, la dieta rica La GSD0 constituye un grupo de patologías produci-
en HC y la suplementación con almidón de maíz está en das por la afectación de la isoforma hepática de la glu-
discusión en los últimos años, ya que parece que su cógeno sintasa (gen GYS2, 12p12.2), enzima limitante
exceso puede empeorar la afectación muscular. Por un de la glucogenogénesis en este órgano.
lado, aumenta el acúmulo de glucógeno y dextrina lí- Debido a la disminución de la síntesis de glucógeno,
mite en el músculo, y por otro lado el hiperinsulinismo los pacientes presentan en períodos de ayuno hipoglu-
resultante podría disminuir los sustratos energéticos en cemias, cetosis e hipoalaninemia por aumento de la
este tejido al inhibir la lipólisis, cetogénesis y gluconeo- gluconeogénesis. En los períodos postprandiales el ex-
génesis. Además, la cetosis activa la succinato deshi- ceso de glucosa y sustratos intermedios que no pueden
drogenasa mitocondrial en el músculo cardiaco, lo que ser acumulados se desvían hacia la ruta del ácido lácti-
mejora el balance energético. Se han publicado casos co apareciendo acidosis láctica, y en algunos pacientes
de mejoría de la miocardiopatía hipertrófica con dietas también puede producirse hiperglucemia. La hipoglu-
cetogénicas bajas en HC, hiperproteicas y ricas en lípi- cemia y la cetosis son más leves que en la GSDI y mejor
dos, alguna de ellas suplementada con hidroxibutirato, toleradas a medida que pasan los años; incluso hay
por lo que en la actualidad muchos autores recomien- individuos asintomáticos que son diagnosticados a raíz
dan este tipo de dietas en los pacientes con GSDIII. de la identificación de otro caso en su familia. También
220 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

puede existir dislipemia e hipertransaminasemia leves, embargo, en la mayoría de los pacientes no se afecta la
y a largo plazo talla baja y osteopenia. esperanza de vida, presentan síntomas leves o modera-
El diagnóstico se confirma mediante estudio genéti- dos y adaptan sus actividades diarias a su capacidad,
co. En caso de que este no sea concluyente se puede por lo que llevan una vida relativamente normal. Hay
realizar biopsia hepática para estudio histológico, que que tener en cuenta que no se producen hipoglucemias
muestra disminución del contenido de glucógeno, y ni otras alteraciones metabólicas, ya que la actividad de
para cuantificación de la actividad enzimática. La acti- la fosforilasa hepática está conservada.
vidad de la glucógeno sintasa es normal en fibroblas- El diagnóstico de sospecha se establece mediante la
tos porque expresan otra isoforma de la enzima, por lo clínica y la prueba de ejercicio del antebrazo no isqué-
que no es útil para el diagnóstico. mico (forearm non-isquemic test) para la medición de
los niveles de lactato y amonio venosos antes y des-
1.4.2. Objetivos nutricionales y pués de la realización de ejercicio. En la GSDV esta
prueba muestra una curva plana de lactato y un pico
recomendaciones dietéticas
aumentado de amonio, a diferencia de los individuos
Al igual que en las patologías anteriores, el objetivo sanos. La prueba de ejercicio del antebrazo isquémico
es evitar las hipoglucemias. Ante la ausencia de gluco- ha caído en desuso por los calambres, mialgias y el
genólisis por imposibilidad de síntesis previa, el mante- riesgo de rabdomiólisis. También se puede constatar el
nimiento de los niveles se conseguirá evitando perío- fenómeno de second wind mediante un cicloergóme-
dos de ayuno mediante la ingesta frecuente de HC y tro para medir la frecuencia cardíaca, que en los pa-
proteínas (gluconeogénesis) durante el día y la toma cientes con GSDV disminuye, al igual que los síntomas,
de almidón crudo de maíz antes de dormir a dosis de en la segunda tanda de actividad. La confirmación
1-1,5 mg/kg. En la mayoría de los pacientes no se pre- diagnóstica se establece mediante el estudio genético.
cisa de nutrición enteral nocturna ni de suplementos En caso de que este no sea concluyente se puede rea-
de almidón de maíz durante el día. lizar biopsia muscular para estudio histológico, que
muestra acúmulos focales de glucógeno normal, y
1.5. Déficit de fosforilasa muscular, cuantificación de la actividad enzimática. La actividad
fosforilasa está conservada en otras muestras tisulares
glucogenosis tipo V o enfermedad como eritrocitos o fibroblastos, ya que expresan otras
de McArdle (GSDV) isoformas de la enzima, por lo que no son útiles para
llegar al diagnóstico.
1.5.1.  Fisiopatología y diagnóstico
La GSDV es una miopatía metabólica producida por 1.5.2.  Objetivos nutricionales
la mutación de la isoforma muscular de la glucógeno
fosforilasa (gen PYGM, 11q13.1), que cataliza la esci- El objetivo del tratamiento nutricional es disminuir la
sión de los enlaces α-1,4 del glucógeno, liberando Glu- intensidad de los síntomas. Para ello se intentará con-
1-P. Como consecuencia no se libera glucosa para la seguir la mayor llegada posible de glucosa al músculo
actividad muscular y solo puede ser utilizada la que desde el torrente sanguíneo. En estos pacientes se re-
llega al músculo desde el torrente sanguíneo, que re- comienda un entrenamiento aeróbico ligero-modera-
sulta suficiente únicamente para realizar ejercicios sua- do para mejorar la forma física y aumentar la capaci-
ves. Su prevalencia en España es de 1:170.000, y la dad oxidativa muscular, por lo que también habrá que
reportada en otros países de 1:100.000. realizar las recomendaciones nutricionales oportunas
Las manifestaciones clínicas comienzan habitualmen- previas a la actividad.
te en la primera década o adolescencia (85% antes de
los 15 años) y son similares a otras miopatías: intoleran- 1.5.3.  Recomendaciones dietéticas
cia al ejercicio con calambres, mialgias, debilidad, mio-
globinuria, aumento de la CK en reposo (típicamente Se debe proporcionar un aporte elevado de HC com-
>1000 U/l) y atrofia muscular. Los síntomas son induci- plejos para reponer el glucógeno hepático que será
dos por el ejercicio y desaparecen con el reposo, des- movilizado posteriormente durante el ejercicio. El re-
pués del cual, si se vuelve a reiniciar la actividad física parto de macronutrientes indicado sería: HC = 65%,
aparecen con menor intensidad, lo que es conocido lípidos = 20%, proteínas = 15-20%.
como fenómeno second wind. Este se explica por el au- Además, se recomienda la toma de HC de absorción
mento del flujo sanguíneo, del aporte de ácidos grasos rápida (sacarosa, glucosa o fructosa) antes de la reali-
libres y la activación de su metabolismo en el músculo zación de ejercicio físico aeróbico o dinámico, ya que
como sustrato energético. La gravedad de los síntomas en diversos estudios se ha observado una ligera mejo-
es variable, y en algunos casos se ha descrito el inicio en ría de la tolerancia al mismo y una disminución del ries-
las primeras semanas o meses de vida, con hipotonía, go de rabdomiólisis inducida. No se ha observado be-
debilidad generalizada e insuficiencia respiratoria. Sin neficio con esta suplementación ante la actividad física
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 221

isométrica. La dosis recomendada es 20 g en niños sible en eritrocitos, leucocitos o tejido hepático, pero
pequeños, y 30-40 g en adolescentes y adultos o inclu- suele tener falsos negativos y tampoco la distingue de
so dosis de 20-30 g pero repetidas por cada hora de la GSDIX, ya que el déficit de fosforilasa kinasa dismi-
ejercicio. Existen estudios con mayor dosis de sacarosa nuye la activación de la glucógeno fosforilasa.
(75 g en adultos), pero el efecto beneficioso parece ser Se puede realizar diagnóstico prenatal mediante es-
de la misma magnitud que con dosis menores. Ade- tudio genético de la mutación del caso índice familiar
más hay que tener en cuenta que la toma de azúcares mediante amniocentesis o biopsia corial.
antes de iniciar el ejercicio puede disminuir la moviliza-
ción de lípidos que se produce de forma normal cuan-
1.6.2. Objetivos nutricionales y
do éste se realiza de forma prolongada, y de hecho con
la suplementación de HC de absorción rápida el fenó- recomendaciones dietéticas
meno second wind se minimiza o no se produce en Habitualmente los pacientes no precisan tratamiento
muchos casos. A pesar de ello, como se ha comentado, para mantener los niveles de glucemia, ya que la enfer-
la tolerancia al ejercicio es mayor. medad tiene un curso benigno. En caso de presentar
También se han realizado estudios con suplementos hipoglucemias, más frecuente en los primeros años, se
de creatina con resultados contradictorios. En un ensayo realizará una dieta rica en HC y ligeramente hiperpro-
se observó mejoría de la capacidad ante ejercicio isomé- teica (15-25% del valor calórico total) con ingestas fre-
trico isquémico pero no frente a ejercicio no isquémico cuentes y suplementación con almidón crudo de maíz
con dosis bajas (60 mg/kg/d). En otro ensayo clínico con (1,5-2 g/kg administrados de una a tres veces al día)
suplementos de creatina a dosis altas (150 mg/kg/d) em- (Ver GSDI). No obstante, parece que el aumento del
peoró la tolerancia al ejercicio, por lo que parece que el aporte de los HC tiene beneficios más allá. Se ha obser-
efecto pudiera ser dosis-dependiente. Se han intentado vado que en los niños mejora el crecimiento, aumenta
otras estrategias como la suplementación con vitamina la densidad mineral ósea y disminuye la hepatomega-
B6 o aminoácidos ramificados sin resultados satisfacto- lia. Por otra parte, los niños mayores y adultos, aunque
rios que justifiquen su uso. no tengan hipoglucemias, presentan una mejoría de la
energía y calidad de vida con una dosis de almidón de
1.6. Déficit de fosforilasa hepática, glucogenosis maíz (1,5-2 g/kg) antes de dormir. La monitorización
de la glucemia y cetonemia capilar puede ayudar a
tipo VI o enfermedad de Hers (GSDVI) ajustar el aporte de HC a las necesidades de cada indi-
1.6.1.  Fisiopatología y diagnóstico viduo y evitar el sobretratamiento.

La GSDVI se produce por la mutación de la isoforma


hepática de la glucógeno fosforilasa (gen PYGL,
1.7. Déficit de fosforilasa-b-kinasa o
14q22.1), enzima limitante de la glucogenólisis, que glucogenosis tipo IX
cataliza la escisión de los enlaces α-1,4 del glucógeno
1.7.1.  Fisiopatología y diagnóstico
liberando Glu-1-P. A diferencia de la GSDI la gluconeo-
génesis es eficaz, por lo que los niveles de glucemia se La GSDIX es la glucogenosis más frecuente (25% de
mantienen gracias a esta ruta metabólica. todas las GSD), con una prevalencia estimada de
Se trata de una enfermedad rara, y de curso benigno 1:100.000, aunque puede ser mayor, ya que muchos
que se manifiesta a edad temprana, generalmente duran- casos pueden no estar diagnosticados dada su clínica
te la lactancia o infancia. La clínica consiste en hepatome- leve. Está producida por la mutación de alguno de los
galia con elevación leve de transaminasas, hipoglucemia genes que codifican la fosforilasa-b-kinasa, enzima
leve tras ayuno en caso de enfermedad, hipoglucemia que por un lado activa la glucógeno fosforilasa permi-
cetósica tras ayuno durante toda la noche, hiperlipemia tiendo el inicio de la glucogenólisis, y por otro inactiva
leve y retraso del crecimiento. A largo plazo puede apare- la glucógeno sintasa inhibiendo así la glucogenogéne-
cer osteoporosis en pacientes no tratados. Los síntomas sis. Esta proteína está constituida por cuatro subunida-
mejoran con la edad y en la mayoría de los casos la hepa- des, cada una de ellas codificada por un gen diferente:
tomegalia desaparece y los individuos alcanzan su talla α (con dos isoformas, muscular y hepática, ambas co-
diana. No se produce hiperlactacidemia, hiperuricemia, ni dificadas en el cromosoma X), β, γ y δ (las tres codifica-
afectación muscular o cardiaca. das en autosomas). Se distinguen varios subtipos de
El diagnóstico se confirma mediante estudio genéti- esta glucogenosis:
co, y en los casos en que éste no sea concluyente se
realizará biopsia hepática para estudio histológico, en • IXa. Déficit hepático por afectación de la isoforma
donde se muestra aumento del glucógeno hepático hepática de la subunidad α (gen PHKA2, Xp22).
con aspecto deshilachado menos compacto que en Es la glucogenosis más frecuente, y junto al subti-
otros tipos de GSD. La cuantificación de la actividad po IXd, las únicas con herencia ligada al cromoso-
enzimática de la glucógeno fosforilasa también es po- ma X. La clínica es similar a la GSDVI, ya que la
222 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

alteración de la fosforilasa kinasa produce una cesario también podría realizarse mediante biopsia he-
disminución de la actividad PYGL. Suele tener pática, que permite el estudio histológico. En los subti-
también un curso leve, aunque se han descrito al- pos musculares puede cuantificarse la actividad
gunos casos con sintomatología grave. mediante biopsia muscular.
• IXb (antigua GSDVIII). Déficit hepático y muscular,
por afectación de la subunidad β (gen PHKB, 16q12) 1.7.2. Objetivos nutricionales y
que es común en los dos tejidos. Se hereda de forma
autosómica recesiva y la clínica es similar al subtipo
recomendaciones dietéticas
IXa junto con leve clínica muscular como hipotonía y El tratamiento de las GSDIX con afectación hepática
retraso motor, que no siempre es evidente. es similar a la GSDVI. En caso de presentar hipogluce-
• IXc. Déficit hepático con herencia autosómica re- mias, se realizará una dieta rica en HC y ligeramente
cesiva, por afectación de la isoforma hepática de hiperproteica (15-25% del valor calórico total) con in-
la subunidad γ (gen PHKG2, 16p12). La afecta- gestas frecuentes y suplementación con almidón crudo
ción hepática es más grave que en el subtipo IXa; de maíz (0,6-2,5 g/kg) de una a cuatro veces al día se-
los pacientes presentan hipoglucemias y puede gún necesidades. Al igual que en otras GSD, es de uti-
terminar en cirrosis. lidad la monitorización de glucemia y cetonemia capi-
• IXd. Déficit muscular, por afectación de la isofor- lar para ajustar el tratamiento. La GSDIXd no se
ma muscular de la subunidad α (gen PHKA1, beneficia de ninguna modificación dietética concreta.
Xq13), con herencia ligada al X. Los pacientes pre-
sentan miopatía leve con intolerancia al ejercicio,
mialgias, calambres debilidad o hemoglobinuria
2. Errores del metabolismo de la galactosa
en grado variable. El forearm exercise test es nor- o hipergalactosemias
mal, a diferencia de la GSDV.
2.1. Introducción
El diagnóstico de todos los subtipos se confirma me- La galactosa es un monosacárido fundamental en la
diante estudio genético, y en los casos no concluyentes dieta de los mamíferos desde el nacimiento, ya que se
puede cuantificarse la actividad enzimática. En los sub- encuentra en la leche y sus derivados formando parte del
tipos con afectación hepática puede determinarse de disacárido lactosa. También está presente de forma libre
forma no cruenta en eritrocitos, ya que estas isoformas o ligada mediante enlaces en algunas frutas, verduras,
de las subunidades enzimáticas también se expresan legumbres, cereales y vísceras (tabla 4). No obstante, la
en células sanguíneas. No obstante, en caso de ser ne- cantidad de galactosa que contienen es relativamente

Tabla 4.  Contenido de galactosa en frutas, verduras y legumbres.

Contenido de galactosa
Alimento
(mg/100 g alimento)
· Aceituna, aguacate, albaricoque, cacahuete, cereza, fresa, limón, mango, melón,
naranja, pomelo, uva verde
<5 · Alcachofa, apio, berenjena, calabacín, cardo, col rizada, coliflor, lechuga, champiñón,
espárrago, espinaca, judía verde, maíz dulce, nabo, patata, pepino, perejil, rábano,
remolacha, repollo
· Ciruela, frambuesa, manzana, melocotón, pera, plátano
5-10
· Brócoli, calabaza, cebolla, col de Bruselas, zanahoria
· Dátil, kiwi, piña, sandía
10-20
· Batata, pimienta de cayena, pimiento, puerro
· Arándano, papaya
20-30
· Tomate
· Caqui
30-50
· Judía pinta, soja
100-400 · Guisante, lenteja, judía blanca, judía negra, judía riñón
· Avellana, higo seco, uva pasa
> 400
· Garbanzos
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 223

pequeña y su disponibilidad limitada. Las legumbres y lactosa deshidrogenasa; éste puede utilizarse como sus-
algunos cereales contienen los galactósidos rafinosa y es- trato en la vía de las pentosas fosfato por lo que no tiene
taquiosa (oligosacáridos que contienen galactosa) y gran trascendencia patogénica, y c) la vía de la pirofos-
galactopinitoles, y las vísceras contienen gangliósidos forilasa, en la que se obtiene Glu-1-P y en la que intervie-
y cerebrósidos, moléculas todas ellas con residuos de ga- ne también la enzima GALE. Además también existe una
lactosa enlazados mediante uniones α. Aunque en el in- producción endógena de galactosa (0.53-1.05 mg/ Kg/
testino delgado no existen α-galactosidasas de forma h ó 1.0-2.0 g/ d), variable entre diferentes individuos, y
natural, las bacterias colónicas, que sí poseen esta enzi- que se realiza mediante una fosfatasa, cuyo sustrato
ma, pueden colonizar el delgado en diversas situaciones, puede ser originado valiéndose de la vía de la pirofosfo-
como por ejemplo tras una diarrea, y aumentar la diges- rilasa. En la Figura 2 se muestran las etapas del metabo-
tión de estas moléculas aumentando así la absorción de lismo de la galactosa y las enzimas implicadas.
galactosa. Algunas frutas, verduras y legumbres también
aportan galactosa por ser ricas en arabinogalactanos, ga-
2.2. Déficit de galactosa-1-fosfato uridil
lactanos y galactolípidos, componentes de la pared celu-
lar que contienen residuos de galactosa enlazados me- transferasa o galactosemia
diante uniones β. En el intestino delgado sí que existen 2.2.1.  Fisiopatología y diagnóstico
β-galactosidasas que pueden liberar este monosacárido,
así como en algunos alimentos entre los que se encuen- La galactosa-1-fosfato uridil transferasa (GALT) con-
tran el tomate, la manzana, los guisantes o la pimienta. vierte la galactosa-1-fosfato (Gal-1-P) y la uridin-difos-
Como se ha dicho, la fuente principal de galactosa es fato-glucosa (UDP-Glu) en uridin-difosfato-galactosa
la lactosa de la leche, que es hidrolizada por la lactasa (UDP-Gal) y Glu-1-P. Es expresada por el gen GALT
(β-galactosidasa) del borde en cepillo intestinal en glu- (9p13) y su déficit se hereda de forma autosómica re-
cosa y galactosa. La galactosa una vez absorbida es ma- cesiva. El bloqueo de este paso enzimático hace que se
yoritariamente utilizada como fuente de energía (funda- acumulen los metabolitos previos, la galactosa y la Gal-
mentalmente en el hígado, aunque también en los 1-P, en diversos tejidos y que aparezcan niveles detec-
eritrocitos y el cerebro) o convertida en glucosa (vía Le- tables de estos en sangre y orina; además el exceso de
loir), y una pequeña parte se destina a la formación de galactosa se deriva hacia las vías alternativas del galac-
glucoproteínas y glucolípidos. En caso de que la glucosa titol y galactonato que producen toxicidad, sobre todo
no sea metabolizada a través de la vía Leloir puede des- el primero de ellos. Se diferencian tres fenotipos carac-
viarse por tres rutas alternativas: a) la de los polioles, en terísticos en función de la actividad residual de la enzi-
la que se produce galactitol mediante la aldosa reducta- ma GALT y los niveles de galactosa y sus metabolitos
sa; b) la del galactonato mediante oxidación por la ga- (Gal-1-P eritrocitaria y galactitol urinario) (Tabla 5).

Tabla 5.  Niveles de galactosa y sus metabolitos en las hipergalactosemias.

Déficit GALT
Déficit GALT Déficit GALT Déficit GALE Déficit GALE Déficit GALE
variante Déficit GALK
clásico variante clínica periférico generalizado intermedio
bioquímica
Gal-1-Pe sin tratamiento *
Muy elevada Elevada Elevada Normal Elevada Muy elevada Elevada
(mg/dl)
Galtu: Cru sin tratamiento **
Elevado Elevado Elevado Elevado Normal Elevado Elevado
(μmol/mmol)
Galp sin tratamiento***
Muy elevada Muy elevada Elevada Elevada Elevada Elevada Elevada
(mg/dl)
Gal-1-Pe con tratamiento Ligeramente Ligeramente
Elevada Normal Normal Normal No procede
(mg/dl) elevada elevada
Normal o
Galtu: Cru con tratamiento Ligeramente Ligeramente
Elevado ligeramente Normal Elevado No procede
(μmol/ mmol) elevado elevado
elevado

Gal-1-Pe: Gal-1-P eritrocitaria; Galp: galactosa libre plasmática; Galtu: Cru: ratio galactitol urinario: creatinina urinaria.
* Valor normal de Gal-1-P eritrocitaria < 1 mg/dl.
** Valor normal del ratio galactitol urinario: creatinina urinaria < 94 μmol/mmol en menores de 1 año, < 45 μmol/mmol de 1 a 6
años, < 18 μmol/mmol en mayores de 6 años.
*** Valor normal de galactosa plasmática < 5 mg/dl.
224 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

Figura 2.  Metabolismo de la galactosa.

• Galactosemia clásica, causada por un déficit p.Lys285Asn típica del sur de Alemania, Austria y
grave de la actividad enzimática (actividad indetec- Croacia, que tanto en su forma homocigota como
table en hígado y eritrocitos). Es la forma más fre- heterocigota compuesta con mutación p.Gl-
cuente y grave, y tiene una incidencia de 1: 50.000 n188Arg son causantes de galactosemia clásica.
recién nacidos vivos, con variabilidad racial Las manifestaciones clínicas comienzan tras el na-
(caucásicos europeos 1:30000-40000, irlandeses cimiento, a los pocos días de iniciar la lactancia
1:16000, japoneses 1:1000000). Está producida (materna o artificial con fórmulas habituales con
en la mayoría de los casos por mutación homoci- lactosa) con rechazo del alimento, vómitos, dificul-
gótica clásica (G/ G) p.Gln188Arg del gen GALT, tad para la succión, letargia, hipotonía, fallo de
típica del norte de Europa. También existen otras medro, hipoglucemia, diarrea, hepatomegalia,
mutaciones relativamente frecuentes, como la ictericia, hiperamonemia, diátesis hemorrágica,
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 225

sepsis, convulsiones y muerte. Los pocos pacientes es la variante Duarte, en la que los individuos son
que sobreviven al período neonatal y continúan heterocigotos compuestos con una mutación clási-
ingiriendo galactosa sufren en pocas semanas alte- ca y una mutación Duarte (D2) (mutación
raciones neurológicas, retraso mental y cataratas c.[940A>G; c.-119_116delGTCA]) (G/ D) que
por efecto osmótico del galactitol depositado en el mantiene una actividad GALT en los eritrocitos en-
cristalino. Los niveles de galactosa libre plasmática tre el 15 y el 25%. Habitualmente se encuentran
son superiores a 10 mg/dl y pueden alcanzar hasta asintomáticos y sin complicaciones a largo plazo
los 300 mg/dl (valor normal < 5 mg/dl); los de Gal- aunque no realicen ningún tipo de modificación
1-P eritrocitaria también se encuentran muy eleva- dietética; solo exhiben alteraciones bioquímicas de
dos, por encima de 10 y hasta 120 mg/dl (valor los niveles de galactosa y sus metabolitos, mucho
normal < 1 mg/dl), y a pesar de cumplir la dieta más leves que en la forma clásica y las variantes
libre de forma correcta los niveles siguen estando clínicas. Por este motivo algunos autores no la con-
por encima de 1 mg/dl; lo mismo sucede con la sideran una enfermedad como tal. Sin embargo,
ratio galactitol urinario:creatinina urinaria que per- hay descritos casos de individuos con complicacio-
siste entre 100-400 μmol/mmol (valor normal en nes agudas que se resuelven tras restricción dieté-
menores de 1 año < 94 μmol/mmol, 1-6 años tica, y también estudios de pequeños grupos de
< 45 μmol/mmol y mayores de 6 años < 18 μmol/ pacientes con alteraciones crónicas del desarrollo
mmol). Es fundamental el diagnóstico y tratamien- neurológico, sobre todo del lenguaje. Por todo ello
to precoz, ya que la eliminación de la galactosa en se necesitan estudios a largo plazo que determinen
la dieta desde los primeros días de vida hace que si estos sujetos tienen riesgo o no de complicacio-
desaparezcan los síntomas y se eviten muchas nes en caso de que no sigan una dieta sin lactosa.
complicaciones. Sin embargo, a pesar de la instau-
ración precoz de las modificaciones dietéticas de Los homocigotos para alelos duarte (D/D) tienen una
forma correcta los pacientes suelen sufrir algún actividad GALT eritrocitaria del 50%, pero no existen
tipo de secuelas, como dificultades en el lenguaje, suficientes datos publicados como para asegurar que
menor desarrollo intelectual del esperado, sínto- están libres de manifestaciones. Los portadores de un
mas extrapiramidales (ataxia, alteraciones de la alelo Duarte y uno sano tienen una actividad > 75% y
coordinación, temblor fino), trastornos de apren- son considerados portadores sanos.
dizaje, cataratas, retraso del crecimiento y fallo La galactosemia puede diagnosticarse de forma pre-
ovárico precoz. No obstante, estas complicaciones coz tras el nacimiento, y en algunos lugares está inclui-
y su gravedad tienen gran variabilidad entre dife- da en los programas de screening neonatal. Estos pro-
rentes individuos. gramas detectan los niveles elevados de galactosa total
• Variante clínica de galactosemia, causada por (Galactosa + Gal-1-P eritrocitaria) y la actividad enzi-
un déficit grave de la actividad enzimática (activi- mática GALT en sangre de talón. Habitualmente se rea-
dad residual 1-10% en eritrocitos y/o hígado). La liza primero la determinación de galactosa total; se
forma más frecuente es típica de los afroamerica- considera un test positivo si el nivel de galactosa es
nos y los africanos nativos de Sudáfrica, con la > 14,5 mg/dl. En estos casos se recomienda repetirlo,
mutación característica p.Ser135Leu en forma ho- y si fuera positivo por segunda vez se deberá confirmar
mocigota. Las manifestaciones clínicas son simila- el diagnóstico mediante la determinación de la activi-
res a la galactosemia clásica, y al igual que en ella dad enzimática. Si en el test inicial el nivel es > 5 mg/dl
desaparecen con el tratamiento dietético precoz. se cuantificará directamente la actividad enzimática.
Sin embargo, no suelen tener complicaciones a Hay que tener en cuenta que el test de screening para
largo plazo. Otros heterocigotos compuestos, galactosemia puede ser positivo en cualquiera de los
como aquellos p.Ser135Leu/p.Gln188Arg tienen déficits enzimáticos del metabolismo de la galactosa,
también menos complicaciones que los pacientes sin diferenciar entre ellos, por lo que siempre requerirá
con galactosemia clásica. Los niveles de galactosa determinar la actividad enzimática y confirmación me-
se encuentran elevados en similar medida que en diante estudio genético.
la forma clásica. La Gal-1-P eritrocitaria está eleva- De igual forma, en los pacientes en los que se sospe-
da pero habitualmente en niveles no tan altos che una galactosemia fuera del período neonatal, se
como en la forma clásica (> 10 mg/dl), y cuando determinarán los niveles bioquímicos de los metaboli-
se sigue la dieta libre de galactosa de forma co- tos y la actividad enzimática y posteriormente se reali-
rrecta se normaliza. zará estudio genético.
• Variante bioquímica de Galactosemia, con ac- Ante un neonato en el que se sospeche una galacto-
tividad GALT parcial residual >15% en eritrocitos. semia, con un primer screening positivo o con antece-
Los niveles de Gal-1-P en eritrocitos son mayores dentes familiares se debe comenzar tratamiento dieté-
de1 mg/dl sin tratamiento dietético, y normales si tico adecuado en espera de los resultados para evitar
se cumple la dieta sin galactosa. La más frecuente secuelas.
226 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

En caso de que existan antecedentes familiares de durante la gestación no produce ningún beneficio
galactosemia, puede realizarse el diagnóstico prenatal en la prevención de las complicaciones a largo pla-
mediante amniocentesis o biopsia corial para cuantifi- zo en el niño.
cación de la actividad enzimática GALT o estudio de la Actualmente se están realizando estudios para ha-
mutación conocida de la familia. llar un mecanismo que consiga disminuir la sínte-
sis endógena de galactosa y así teóricamente po-
2.2.2.  Objetivos nutricionales der reducir las posibles complicaciones a largo
plazo, ya que, como se ha dicho, el tratamiento
Se debe iniciar tratamiento dietético inmediatamen- dietético no evita su aparición.
te en todos los neonatos de los que se reciba un scree- • Variante bioquímica. Hasta este momento no exis-
ning neonatal positivo en espera de confirmación, y en te suficiente evidencia científica para permitir a los
general en todos los individuos con actividad GALT pacientes con variante Duarte (D/ G) una ingesta
≤ 10% y niveles de Gal-1-P > 10 mg/dl. En los recién normal, puesto que los datos publicados son con-
nacidos de riesgo (esto es, con familiares con galacto- tradictorios. Sí parece que pueden tolerar ciertas
semia) se iniciará el tratamiento desde el nacimiento cantidades de galactosa, ya que aunque la activi-
hasta recibir el resultado del screening neonatal. dad GALT se encuentra disminuida no está ausen-
te. Para evitar posibles secuelas se recomienda la
• Galactosemia clásica y variante clínica de galacto- restricción de galactosa hasta el año de edad y
semia. El objetivo del tratamiento consiste en evi- entonces realizar un test de tolerancia mediante la
tar la ingesta de galactosa (y por lo tanto también determinación de los niveles de Gal-1-P en eritro-
de lactosa) lo más precozmente posible desde que citos tras dos semanas de incluir en la dieta los
exista la sospecha diagnóstica y durante toda la alimentos con galactosa, tanto lácteos como no
vida. Una dieta estricta contiene unos 40 mg de lácteos. Si los niveles son normales (< 1 mg/dl), el
galactosa al día. Se desconoce, sin embargo, qué paciente ya no precisaría ninguna restricción; en
cantidad exacta de galactosa puede ingerirse sin cambio, si los niveles están aumentados se deben
efectos tóxicos, por lo que se debe tomar la me- reinstaurar nuevamente las modificaciones dieté-
nor posible. Es objeto de debate lo restrictiva que ticas y reevaluar la tolerancia periódicamente cada
debe ser la dieta tras la lactancia, ya que al dejar 4-6 meses.
de ser los productos lácteos la principal fuente ali- Dada la ausencia de información a largo plazo
menticia, la producción endógena de galactosa es para los homocigotos D/ D, el manejo se realizará
mayor que la ingerida en la dieta; además, la apa- de forma similar a la variante Duarte (D/G).
rición de complicaciones tardías no se modifican
con el tratamiento dietético y el período de riesgo
2.2.3.  Recomendaciones dietéticas
de complicaciones agudas ya ha pasado. Por el
momento, hasta que exista mayor evidencia cien- En los pacientes con galactosemia los requerimien-
tífica, se recomienda de forma unánime evitar los tos calóricos, proteicos y de vitaminas y otros micronu-
productos lácteos de por vida. Con respecto a los trientes son similares a los de la población general, se-
alimentos no lácteos que contienen galactosa no gún edad y sexo.
existe consenso, pero probablemente lo prudente La principal fuente de galactosa es la leche, por lo
en niños mayores y adultos sea evitar su abuso, sin que debe evitarse en todas sus formas, así como los
excluirlos por completo. derivados lácteos.
Se pueden monitorizar los niveles de Gal-1-P eri- En los lactantes hay que suspender la lactancia ma-
trocitaria y el cociente galactitol urinario/creatini- terna ante la primera sospecha clínica y evitar cualquier
na urinaria periódicamente para detectar trans- fórmula que contenga lactosa. Se recomiendan las fór-
gresiones dietéticas. Se considera como buen mulas a base de soja, y deben evitarse las fórmulas de-
cumplimiento terapéutico los valores de Gluc-1-P nominadas «sin lactosa» con hidrolizados de proteínas
< 5 mg/dl y de Galactitol urinario < 78 mmol/ de leche de vaca, ya que pueden contener lactosa jun-
mol. Hay que tener en cuenta que la Gal-1-P sólo to a la caseína y seroalbúmina utilizadas. Aunque no se
refleja la ingesta de galactosa en las últimas ha demostrado que sean perjudiciales por falta de en-
24 horas y en cambio el galactitol aumenta por sayos clínicos randomizados, es preferible no utilizarlos
transgresiones mantenidas y no detecta las agu- por el riesgo potencial que conllevan.
das. También existe variabilidad intraindividual y Además de los derivados lácteos existen otros ali-
además pueden producirse elevaciones debido a mentos no lácteos que también contienen galactosa,
la producción endógena de galactosa en pacien- como las legumbres, cereales, vísceras y algunas frutas
tes que cumplen bien la dieta. y verduras (tabla 4). Sin embargo, como hemos dicho,
En aquellos casos en que se realiza un diagnóstico la cantidad de galactosa que contienen estos alimentos
prenatal, la restricción de galactosa en la madre y su disponibilidad es muy pequeña, mucho menor
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 227

que la producción endógena de galactosa, por lo que (5-20 mg/100 g), y prohibidos por ser muy ricos en
está en discusión si deben ser restringidos o no. En galactosa (>20 mg/100 g).
cualquier caso, lo que sí está claro es que no deben Por otra parte, es preferible consumir carnes magras
consumirse en grandes cantidades, y no ingerir los que frescas, ya que la descomposición microbiana también
sean fácilmente sustituibles en la dieta por otros de si- puede liberar galactosa. También son una posible
milar riqueza nutricional, ya que aunque probable- fuente de galactosa o lactosa los productos manufac-
mente no sean perjudiciales, no vale la pena correr el turados y medicamentos, por lo que es fundamental
riesgo. En la tabla 6 se resumen los alimentos prohibi- leer el etiquetado de los mismos.
dos y permitidos en la galactosemia. Las guías los han Durante el período de lactancia el aporte de calcio y
dividido en tres grupos: libre utilización por no conte- vitamina D está garantizado con las fórmulas de soja
ner prácticamente galactosa (< 5 mg/100 g), a consu- siempre que se administre un volumen suficiente,
mir con prudencia y realizando controles analíticos como ocurre en los primeros 6 meses de vida. Sin em-

Tabla 6.  Alimentos permitidos y prohibidos en la galactosemia.

· Fórmulas de soja, «leche» y sus derivados de soja sin harina de soja. Fórmulas hidrolizadas
de arroz.
· Huevos.
· Frutas y verduras según tabla 4. Zumos y mermeladas de las frutas permitidas, sin lactosa.
· Trigo, arroz, cebada, avena, centeno, maíz, pastas manufacturadas sin leche, palomitas de
maíz sin mantequilla.
· Cacahuetes, nueces, pipas de girasol, aceitunas.
· Carnes, pescados y mariscos naturales en general (excepto vísceras), embutidos sin leche.
Alimentos · Azúcar de caña o remolacha, jarabe de maíz, ,miel, edulcorantes artificiales, jarabe de
permitidos (libres) arce.
(< 5 mg/100 g) · Grasas no procedentes de la leche: aceites vegetales, margarina sin leche, tocino, beicon,
manteca de cerdo, mantequilla de coco.
· Repostería casera o manufacturada sin leche, gelatina, cabello de ángel, helados de agua y
frutas sin lactosa.
· Agua, café, refrescos, té, vino, cerveza.
· Especias, sal.
· Aditivos: ácido láctico (E270), lactato sódico y potásico (E325), lactato cálcico (E27),
lactitol (E966), lactoalbúmina, lactoglobulina, licasina, glutamato monosódico (E621),
agar-agar (E407), carragenano (E410), goma garrofín (E410).

· Fórmulas de soja y derivados con harina de soja no fermentados (tofu, «carne» de soja).
Alimentos a · Frutas y verduras según tabla 4. Zumos y mermeladas de las frutas a controlar, sin lactosa.
controlar · Harina de soja, harina de girasol.
(5-20 mg/ 100 g) · Cacao.
· Levadura.

· Leche y derivados, mantequilla, margarina con leche, nata, quesos, productos con caseína,
suero lácteo o lactosa. Leche materna o fórmulas infantiles con lactosa.
· Frutas y verduras según Tabla 4. Zumos y mermeladas de las frutas prohibidas o con
lactosa. Avellanas (en discusión).
· Garbanzos, lentejas, guisantes, judías (en discusión). Productos derivados de la soja
fermentados (miso, tempeh, natto, sufu).
Alimentos
· Cereales o pastas manufacturados con leche.
prohibidos
· Vísceras (en discusión).
(> 20 mg/100 g)
· Embutidos, productos cárnicos (salchichas, picadillo, etc.) y conservas con leche.
· Edulcorantes con lactosa.
· Repostería casera o manufacturada con leche, helados con leche, chocolate, caramelos
toffee, flanes, cremas.
· Bebidas con leche, lactosa o caseína.
· Aditivos: lactosa, galactosa, caseinatos (H4511 y H4512).
228 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

bargo, a medida que el niño crece el aporte lácteo se b. Déficit generalizado: La actividad GALE es defi-
reduce al introducir otros alimentos, por lo que deberá ciente en todos los tejidos y se asemeja clínica-
suplementarse con calcio y vitamina D para cubrir las mente a la galactosemia clásica. El pronóstico a
RDA (tabla 3). largo plazo no está claro dados los pocos casos
publicados, pero parece que se producen compli-
2.3.  Déficit de galactokinasa caciones similares. Se postula que el déficit de
galactoproteínas y galactolípidos puede estar im-
2.3.1.  Fisiopatología y diagnóstico plicado en la fisiopatología de la enfermedad.
c. Déficit intermedio: La actividad GALE es deficien-
El gen de la galactokinasa (GALK1, 17q25.1) se ex-
te en eritrocitos y leucocitos y menor del 50% en
presa en el hígado, eritrocitos y leucocitos, y convierte
el resto de los tejidos. Los individuos están libres
la galactosa en Gal-1-P. El déficit de GALK se hereda de
de las manifestaciones agudas clásicas durante el
forma autosómica recesiva y tiene una prevalencia esti-
período neonatal, pero no está claro si a largo
mada de 1:100.000. La galactosa no metabolizada se
plazo se producen secuelas.
deriva hacia la síntesis de galactonato y galactitol. El
galactonato puede ser utilizado para la producción de
energía (ruta de las pentosas fosfato) y no interviene en Los pacientes con cualquiera de estos tres fenotipos
la patogenia de la enfermedad, pero el galactitol se dan positivo en el screening neonatal de galactosemia
acumula en el cristalino y provoca cataratas sublenticu- cuando se cuantifica la galactosa plasmática total o la
lares en las primeras semanas de vida por efecto osmó- Gal-1-P eritrocitaria, pero se diferencian de la galacto-
tico, como en la galactosemia clásica. En cambio, no se semia clásica en que la actividad GALT es normal. El
producen complicaciones en otros órganos, y las cata- diagnóstico se realiza mediante la cuantificación de la
ratas desaparecen con tratamiento dietético adecua- actividad GALE, que está disminuida en eritrocitos en
do. Los pacientes presentan niveles elevados de galac- los tres fenotipos descritos, y también en fibroblastos y
tosa en plasma y de galactitol urinario, y dan positivo hepatocitos en el déficit generalizado e intermedio. La
en el screening neonatal para galactosemia. El diag- confirmación viene dada por el estudio genético.
nóstico diferencial se realiza mediante la determina-
ción de la actividad GALK en eritrocitos y se confirma 2.4.2. Objetivos nutricionales y
mediante estudio genético. recomendaciones dietéticas
Los individuos que presentan la forma periférica no
2.3.2. Objetivos nutricionales y precisan tratamiento. Los pacientes con la forma gene-
recomendaciones dietéticas ralizada deben seguir una dieta limitada en galactosa,
Debe seguirse una dieta sin lácteos de por vida para aunque no requieren que ésta sea tan estricta como en
evitar la formación de cataratas. Sin embargo, parece la galactosemia clásica, ya que la síntesis endógena de
que los pacientes toleran sin riesgo los alimentos no este monosacárido está bloqueada. Esto significa evitar
lácteos que contienen galactosa (legumbres, verduras, los productos lácteos y sus derivados, pero está permi-
frutas, vísceras). tido el consumo de los alimentos no lácteos que con-
tienen galactosa (cuya absorción además está cuestio-
nada, como vimos en la galactosemia clásica). Los
2.4. Déficit de uridin difosfato
pacientes con la forma intermedia también deben lle-
galactosa-4-epimerasa var una dieta limitada en galactosa al menos durante la
2.4.1.  Fisiopatología y diagnóstico lactancia, y dado que no queda claro el pronóstico a
largo plazo, en general se suele mantener la restricción
La uridin difosfato galactosa-4-epimerasa (GALE) ca- durante años. No obstante, puede realizarse una prue-
taliza el paso de UDP-Gal y Glu-1-P en Gal-1-P y UDP- ba de liberalización de la dieta durante 2 semanas y
Glu, así como la reacción inversa para la síntesis endó- determinar los niveles de Gal-1-P y galactitol urinario
gena de galactosa y de galactoproteínas y galactolípidos para decidir si es preciso mantenerla.
(como los cerebrósidos). Es expresada por el gen GALE
(1p36) y su déficit se hereda de forma autosómica re-
3. Errores del metabolismo de la fructosa
cesiva. Se han descrito tres formas clínicas:
La fructosa es un monosacárido que se encuentra
a. Déficit periférico: Limitado a los eritrocitos y leu- ampliamente distribuido de forma natural en las frutas
cocitos circulantes. Los individuos son asintomáti- y también en la miel y algunas verduras. En las últimas
cos, tienen un desarrollo normal y no precisan décadas se ha ido incluyendo cada vez con mayor fre-
tratamiento nutricional específico. Presentan ele- cuencia en productos manufacturados por ser el azú-
vación de Gal-1-P eritrocitaria y niveles normales car más dulce, sobre todo en forma de jarabe de maíz
de galactosa plasmática y galactitol urinario. rico en fructosa, high fructose corn syrupe (HFCS).
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 229

Además, también son fuente de este monosacárido los 3.1. Déficit de fructosa-1-fosfato aldolasa
alimentos que contienen sacarosa, pues de su hidrólisis o intolerancia hereditaria a la fructosa
se obtiene fructosa, o aquellos con sorbitol, ya que es
transformado en fructosa en el hígado (figura 4). 3.1.1.  Fisiopatología y diagnóstico
La vía de utilización de la fructosa es diferente en el
tejido hepático y muscular, aunque en ambos su desti- Es una enfermedad autosómica recesiva producida
no fundamental es la obtención de energía mediante por el déficit de la isoforma B (hepática) de la fructo-
su transformación en sustratos que se incorporan a la sa-1,6-fosfato aldolasa (gen ALDOB, 9q22.3), enzima
glucólisis. En caso de ser necesario es posible la pro- que hidroliza la fructosa-1-fosfato (F-1-P) en dihidroxia-
ducción de glucosa (con la acción de las enzimas de las cetona-fosfato y gliceraldehído-3-fosfato (figura 3). Se
últimas etapas de la gluconeogénesis) y por lo tanto expresa en hígado, riñón e intestino delgado, y su déficit
también de glucógeno. Al igual que sucede con la glu- tiene varias consecuencias:
cosa, los sustratos intermedios pueden derivarse ade-
más hacia la síntesis de triglicéridos si se saturan las a. Disminución de la producción de sustratos ener-
otras rutas metabólicas. géticos para la glucólisis.

Figura 3.  Metabolismo de la fructosa.


230 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

• Manifestaciones crónicas: Retraso ponderoestatu-


ral, anorexia, hepatopatía crónica, cataratas, vómi-
tos recurrentes y alteraciones de la dentición, aci-
dosis tubular proximal e insuficiencia renal crónica.

El diagnóstico se realiza mediante el hallazgo de


niveles elevados de fructosa en sangre y orina, y se
confirma mediante estudio genético. En los pacientes
en los que no se encuentra mutación responsable se
puede cuantificar la actividad enzimática en biopsia
hepática.
El pronóstico es excelente si se cumple la dieta de
forma adecuada. Como curiosidad se ha observado
que estos pacientes suelen tener aversión a los dulces y
a la fruta, por lo que algunos individuos llegan a la
edad adulta sin grandes complicaciones al haber modi-
ficado la dieta de forma espontánea.
Se puede realizar diagnóstico prenatal mediante es-
tudio genético de la mutación del caso índice familiar
por amniocentesis o biopsia corial, pero dada la ausen-
cia de complicaciones sobre el feto durante el embara-
zo y que el niño no va a ingerir fructosa hasta el inicio
de la alimentación complementaria, se recomienda
realizar tras el nacimiento.
Figura 4.  Metabolismo del sorbitol o vía de los polioles.
3.1.2.  Objetivos nutricionales
b. Acúmulo de F-1-P en los tejidos afectados. El objetivo del tratamiento consiste en eliminar de
c. Atrapamiento de numerosos grupos fosfato en las la alimentación de por vida toda fuente de fructosa,
moléculas de F-1-P, lo que disminuye su disponibi- es decir, fructosa, sacarosa y sorbitol. Esta restricción
lidad para formar ATP y repercute en otras reaccio- debe ser estricta, ya que la correcta adherencia previe-
nes metabólicas en donde son necesarios, como la ne, minimiza e incluso revierte las manifestaciones clí-
glucogenólisis y la gluconeogénesis (tanto para la nicas de la enfermedad. Se ha demostrado que inges-
activación de enzimas como la glucógeno fosforila- tas de 130-160 mg fructosa/kg/día producen retraso
sa hepática, como para la donación de grupos fos- ponderoestatural e hiperuricemia.
fato). Como resultado hay una disminución de la
producción de glucosa, y por tanto hipoglucemia. 3.1.3.  Recomendaciones dietéticas
Su prevalencia general estimada es de 1:35.000, En la tabla 7 se detallan los alimentos permitidos y
aunque con diferencias étnicas que van desde 1: los que deben ser evitados. Para más recomendacio-
18.000 en Reino Unido a 1: 200.000 en afroamerica- nes sobre la dieta, véanse el apartado de «Malabsor-
nos. Los síntomas aparecen típicamente en los lactan- ción de sacarosa-isomaltosa» y de «Malabsorción de
tes al iniciar la alimentación complementaria, cuando fructosa y sorbitol» y la tabla 8. Con respecto a las
introducen la fruta, fórmulas lácteas o papillas que verduras, durante el proceso de cocción se pierde par-
contienen fructosa o sacarosa. También es posible que te del contenido en fructosa, por lo que son preferi-
aparezcan desde el período neonatal si se utilizan fór- bles así que su consumo crudo, eso sí, desechando el
mulas comerciales o medicamentos que contengan agua de cocción. Para endulzar los alimentos se puede
fructosa o sacarosa. utilizar glucosa pura, maltodextrina o almidón. Es fun-
Las manifestaciones pueden ser agudas o crónicas si damental leer con detenimiento el etiquetado de los
no se inicia tratamiento: alimentos y fármacos. Se debe tener especial cuidado
con los alimentos «sin azúcar» o «sin azúcar añadido»
Manifestaciones agudas: Hipoglucemia postpran-
•  sin especificación, ya que pueden estar edulcorados
dial, dolor abdominal, vómitos, ictericia, hepatome- con fructosa, sorbitol u otros productos no tolerados.
galia, acidosis láctica sin cetosis, hiperalaninemia, Se recomienda aportar suplementos vitamínicos sobre
aminoaciduria, hipermagnesemia, hipofosfatemia, todo de vitamina C, folato, complejo B y fibra, ya que
hiperuricemia, sudoración, temblor, irritabilidad, los alimentos prohibidos son las fuentes principales de
somnolencia y hasta convulsiones y coma. estos nutrientes.
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 231

Tabla 7.  Alimentos permitidos y prohibidos en el déficit de fructosa-1-fosfato aldolasa o intolerancia


hereditaria a la fructosa.

GRUPOS DE
ALIMENTOS PERMITIDOS ALIMENTOS NO PERMITIDOS
ALIMENTOS
Leche condensada, batidos de leche, helados
Leche, queso, yogur natural, mantequilla y industriales, yogur con frutas, vainilla y
Lácteos
leches en polvo que no contienen sacarosa saborizados. Bebidas de soja líquidas y en
polvo
Embutidos, salchichas, patés.
Carnes y pescados naturales, jamón serrano,
Carnes y pescados Comprobar todas las carnes, pescados y
beicon y panceta
embutidos preparados industrialmente
Huevos Todos los tipos Ninguno
Aderezos de ensaladas industriales y
Grasas Mantequilla, margarina, aceites y mantecas
mantequilla de cacahuete
Grupo 1 (Fructosa < 0,5 g/100 g):
Apio, alcachofas, brécol, champiñones, berros,
acelgas, patata vieja, espinaca, escarola, Remolacha, coles de Bruselas, zanahoria,
endibia y lentejas cebolla, cebolleta, batata, tomate, maíz
Vegetales y
dulce, chirivía, judías verdes, guisantes, soja,
legumbres* Grupo 2 (Fructosa 0,5-1 g/100 g) berenjena, pimientos, verduras procesadas
Pepino, espárragos, col, coliflor, calabacín, enlatadas con azúcares prohibidos
puerro, patata nueva, calabaza, rábanos, nabos,
garbanzos, judías blancas, rojas y negras
Todas las demás frutas naturales o en
Frutas Zumo de lima o limón y aguacate
compotas
Trigo, centeno, cebada, maíz, arroz y tapioca.
Pan integral, salvado, germen de trigo, harina
Todos los productos elaborados a partir de
de soja y muesli.
Cereales los elementos anteriores, harinas, pastas y
Todos los cereales elaborados con adición de
sémolas.
miel o azúcar
Pan blanco (sin sacarosa añadida a la masa)
Helados, chocolate, galletas, bollería y postres
con fructosa, sacarosa y/o sorbitol.
Helados, galletas y postres elaborados con
Postres y galletas Comprobar todos los preparados comerciales,
glucosa, sin fructosa, sacarosa ni sorbitol
especialmente aquellos calificados como «sin
azúcar», «dietéticos» o «para diabéticos»
Glucosa, jarabe de maíz, edulcorantes Azúcar de mesa ( blanco o moreno), miel,
Edulcorantes artificiales sin fructosa, sacarosa o sorbitol, melaza, jarabe de arce, fructosa, jarabe de
sacarina, aspartamo y ciclamato maíz rico en fructosa, y sorbitol
Sopas o caldos caseros con alimentos
Sopas y caldos Sopas comerciales y extractos de carne
permitidos
Batidos de leche, frutas o cacao, refrescos,
granizados, bebidas azucaradas, zumos de
Bebidas Agua, té, leche, café, cacao y limonada casera
fruta, licores de fruta, té instantáneo y
bebidas alcohólicas
Especias, hierbas aromáticas, esencias,
Condimentos vinagre, colorantes, sal, pimienta, mostaza y Salsas, aderezos y mayonesas comerciales
curry

* Ingesta máxima 2 g/ día en niños mayores y adultos. Desechar el agua de cocción.


232 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

Tabla 8.  Contenido en fructosa, glucosa, sacarosa y sorbitol de algunos alimentos.

ALIMENTO FRUCTOSA (g/100 g) GLUCOSA (g/100 g) SACAROSA (g/100 g) SORBITOL (g/100 g)


Manzana 6-7 1,7-2,4 2-5 0,3-1
Pera 6,2-8,9 2,5-2,8 0,8 4,5
Plátano 3-6 4-6 6-14 0
Naranja 2 2 3,6 0
Mandarina 2,8 2 4,3 0
Pomelo 1,5-2 1,5-2 1,5-2 0
Limón 0,6 0,8 0,4 0
Lima 0,5 0,5 0,2 0
Uva 8,1-10,5 7,2-9,3 0,2 0
Ciruela 4 5,5 1-5 0,3-2,8
Melocotón 1,5 1,5-2 4,8 1,3
Albaricoque 0,9 2,4 5,9 0,4
Ciruela 2 2 2,6 0,
Melón 2-4 1-2 1-5 0
Sandía 3 1,6 3 0
Kiwi 4-5 4-6 1-2 0
Maracuyá 1,9 2,3 1,5 0
Granada 5,7 7,8 0 0
Cereza 5-7 5-7 0,2 1,4-2,1
Fresa 2,5 2,6 1-2 0
Mora 2-3 2-3 0,2-0,5 0
Frambuesa 1-3 1-3 0-2 0
Arándano 5,5 5,3 0 0
Mango 2-4 0,5-1,5 7-8 0
Papaya 2-3 2-3 1-3 0
Piña tropical 2-3 2-4 3-5 0
Coco 1-3 1-3 0-1 0
Higo 3-4 4 0 0
Dátil 31 24,9 0 0
Uva pasa 29 27 2 15
Higo seco 27 25 0 0
Ciruela pasa 23 30 1 0,5
Zumo de manzana 6-8 1-4 4 0,3-1,0
Zumo de pera 5–9 1-2 1-2 1,1-2,6
Zumo de naranja 2-6 2-6 2-4 0
Zumo de uva 4 4 0,2 0

(Continúa)
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 233

(Continuación)

ALIMENTO FRUCTOSA (g/100 g) GLUCOSA (g/100 g) SACAROSA (g/100 g) SORBITOL (g/100 g)


Melocotón en almíbar 5-7 6-8 3-5 0,3
Piña en almíbar 6-8 6-8 2-3 0
Zanahoria 0,6-1,1 0,6-1,4 2,5-3,6 0
Calabaza 1,3 1,5 0,1 0
Calabacín 0,8 0,7 0 0
Maíz dulce 0,5 0,5 2,1 0
Tomate 1,2 1,1 0 0
Pimiento rojo 2,3 1,9 0 0
Cebolla 1,4-2 1,5-2,3 0,7-1,2 0
Berenjena 1 1,3 0,1 0
Remolacha 0 0 7,7 0
Patata 0,7 1,0 2,5 0
Miel 35-458 29-45 1-2 0
Dulce de membrillo 21 1,2 27
Refresco 1-6 1-6 5-8 0
Mermelada «sin azúcar» 1-4,5 0,5-4 0-1 1-25
Chocolate negro 0,1 0,1 51 0
Chocolate con leche 0 0 38 0
Chocolate blanco 0 0 44 0
Chocolate «sin azúcar» 20-60 0 0-1 0
Turrón «sin azúcar» 15-30 0 2-5 0
Galletas «sin azúcar» 0 0-1 0-1 17-33
Chicle «sin azúcar»
0 0 0 1,3–2,2
(unidad)
Jarabe de maíz rico en
55-90 45-10 0 0
fructosa

En caso de síntomas agudos los pacientes deberán que de ellos se obtiene, además de acetil-CoA, tam-
ser ingresados para administración de glucosa intrave- bién propionil-CoA que es susceptible de ser converti-
nosa y tratamiento de soporte del resto de las manifes- do en succinil-CoA; este último es un producto inter-
taciones. medio del ciclo de Krebs pero su consumo para la
síntesis de glucosa solo es significativo en rumiantes.
4. Alteraciones de la gluconeogénesis La gluconeogénesis tiene lugar en el hígado casi de
forma exclusiva, y solo en una pequeña proporción en
La gluconeogénesis es una ruta anabólica mediante los riñones e intestino. Existen tejidos que dependen
la cual se sintetiza glucosa a partir de precursores no exclusivamente de la glucosa como fuente de energía,
glucídicos, como pueden ser aminoácidos, lactato, gli- como el cerebro, los eritrocitos, la médula renal y la
cerol (obtenido durante la degradación de los lípidos córnea. La gluconeogénesis se pone en marcha una
en el tejido adiposo), piruvato y cualquier sustrato in- vez se agotan las reservas de glucógeno hepático y no
termedio del ciclo de Krebs. Los ácidos grasos de cade- se puede suministrar más glucosa mediante la gluco-
na par no proporcionan ningún producto que pueda genólisis, lo que sucede en situaciones de ayuno o ejer-
ser utilizado para ello, pero sí los de cadena impar, ya cicio prolongados o enfermedad. Esta ruta no es exac-
234 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

tamente la reversión de la glucólisis; aunque ambas En la vía gluconeogénica es el caso de la glucosa-6-fos-


comparten algunas enzimas con acción reversible, fatasa, la fructosa-1,6-bifosfatasa y el rodeo metabóli-
cada proceso posee tres reacciones irreversibles pro- co de piruvato a fosfoenolpiruvato en el que intervie-
pias (figura 5). En el caso de la glucólisis se trata de la nen la piruvato carboxilasa, la fosfoenolpiruvato
glucokinasa, la fosfofructokinasa y la piruvato kinasa. carboxikinasa y la lanzadera de malato-oxalato.

Figura 5.  Glucólisis y gluconeogénesis.


Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 235

En este capítulo trataremos el único defecto enzimá- el aporte de glucosa y administrar insulina conjunta-
tico de la gluconeogénesis que se beneficia de modifi- mente (0,02-0,1 UI/kg/h), puesto que mejora la síntesis
caciones nutricionales. proteica y de ácidos grasos a partir del piruvato. Las
recomendaciones sobre la nutrición enteral nocturna
4.1. Déficit de fructosa-1,6-bifosfatasa son similares a la GSDI.
En situaciones de enfermedad, en las que se produce
Es una enfermedad autosómica recesiva, producida un incremento del catabolismo, aumenta el riesgo de
por el déficit de fructosa-1,6-bifosfatasa, enzima clave acidosis láctica grave, cetoacidosis e hipoglucemia, por
de la gluconeogénesis que cataliza el paso de fructo- lo que se requiere ingreso hospitalario para administra-
sa-1,6-bifosfato a fructosa-6-fosfato. Como está afec- ción intravenosa de glucosa.
tada la gluconeogénesis pero no la glucogenólisis, solo
se producirá hipoglucemia en las situaciones de ayuno
prolongado. 5. Alteraciones en la digestión y absorción
Las manifestaciones clínicas son similares a la GSDI, de hidratos de carbono
aunque sin acumulación de glucógeno en el hígado, ya
que la glucogenólisis es normal. El comienzo de la sin- 5.1. Introducción
tomatología es variable; en aproximadamente la mitad El almidón es el principal polisacárido de reserva de
de los casos se presenta precozmente a las pocas horas las plantas. En realidad es una macromolécula formada
del nacimiento con hipoglucemia, cetosis, acidosis lác- por dos polisacáridos, la amilosa (cadena lineal de 250-
tica, hiperlipidemia, hiperuricemia, somnolencia, hiper- 2000 residuos de glucosa unidos mediante enlaces
ventilación, taquicardia, y hasta convulsiones y coma, α-1,4) y la amilopectina (polisacárido de cadenas linea-
pero se han descrito presentaciones a muy diversas eda- les similares a la amilosa con puntos de ramificación de
des desencadenadas fundamentalmente por episodios enlace α-1,6, como ocurre con el glucógeno).
infecciosos. Se produce acumulación de ácidos grasos La digestión de los HC comienza con la α-amilasa
en el hígado, con esteatosis hepática y fibrosis, que se salivar y pancreática, que hidroliza la amilosa y la ami-
manifiesta como una hepatomegalia leve (no hepato- lopectina dando lugar a los disacáridos maltosa (gluco-
megalia masiva de GSD) y posible hiperbilirrubinemia. sa-α-1,4-glucosa) e isomaltosa (glucosa-α-1,6-glucosa)
Debe sospecharse ante la clínica de hipoglucemia y otros oligosacáridos mayores. Los disacáridos y oligo-
acompañada de incremento de piruvato, sustratos sacáridos del almidón, junto con el resto de disacáridos
neoglucogénicos (lactato, alanina y glicerol) y cuerpos de los alimentos (sacarosa, lactosa) llegan al duodeno.
cetónicos (existen algunos casos sin cetosis), y acidosis La hidrólisis final se produce en el borde en cepillo de
metabólica (por desviación hacia la síntesis de láctico y los enterocitos, en donde existe una serie de enzimas
el incremento de la cetonemia). El diagnóstico se con- (maltasa, lactasa, sacarasa-isomaltasa y trehalasa) que
firma mediante estudio genético, o en caso negativo degradan los oligo y disacáridos convirtiéndolos en los
pero con alta sospecha, cuantificación de la actividad monosacáridos glucosa, galactosa y fructosa.
enzimática en biopsia hepática. La glucosa y la galactosa se absorben mediante trans-
porte activo sodio-dependiente a través del cotranspor-
4.1.1. Objetivos nutricionales y tador glucosa-galactosa/Na+ (SGLT1, Sodium-Glucose
recomendaciones dietéticas Linked Transporter tipo 1).
El objetivo del tratamiento es evitar la puesta en mar- La fructosa tiene una absorción más lenta cuyo me-
cha de la gluconeogénesis para prevenir la aparición de canismo no está perfectamente aclarado. Por un lado,
hipoglucemias, acidosis láctica y resto de manifestacio- existe una difusión facilitada independiente de glucosa
nes, así como permitir un desarrollo adecuado. Esto se (proteína transportadora GLUT 5) con una capacidad
consigue evitando períodos largos de ayuno mediante de absorción de fructosa muy limitada (< 5 g), y por
una dieta con frecuentes tomas y un aporte alto de HC otra parte parece que existe un transporte estimulado
complejos. Al igual que en la GSDI, en los recién naci- por la presencia de glucosa en la luz intestinal me­
dos se requiere una infusión enteral continua nocturna diante el que se absorben ambos monosacáridos y
de glucosa o una fórmula polimérica, y a medida que que pudiera corresponder a la proteína transportadora
pasan los años y mejora la tolerancia al ayuno los pa- GLUT2. En cualquier caso, este último mecanismo es el
cientes pueden mantenerse con la ingesta de almidón más importante, por lo que hay que destacar que la
crudo de maíz antes de dormir (véase GSDI). absorción de fructosa es mucho mayor cuando es
acompañada de glucosa en cantidades equimolares
(como en la sacarosa) que cuando llega a la luz intesti-
4.1.2.  Soporte nutricional artificial
nal en cantidades superiores a la glucosa o en ausencia
En recién nacidos se recomienda utilizar una perfu- de ésta. No obstante deben existir otros mecanismos
sión continua de glucosa y tratar la acidosis con bicar- implicados en la absorción desconocidos hasta el mo-
bonato sódico. Si ésta no se corrige, se debe aumentar mento, ya que un estudio reciente no observó diferen-
236 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

cias significativas en la expresión de GLUT5 y GLUT2 en Los fructanos son, como el almidón, carbohidratos
los individuos con malabsorción de fructosa y sujetos de reserva de las plantas, aunque también pueden ser
sanos. Se postula que estén involucrados otros trans- sintetizados por algunos hongos y bacterias. Estructu-
portadores, como el GLUT8 (observado en ratones), ralmente son oligo y polisacáridos de fructosa lineales
aunque estos datos preliminares deben ser demostra- o ramificados con una molécula terminal de glucosa
dos en humanos. Tras atravesar la mucosa intestinal, que pueden contener desde 2 unidades hasta más de
los monosacáridos pasan al torrente sanguíneo y lle- 200 en las plantas y hasta más de 100.000 en bacte-
gan al hígado a través de la vena porta para su poste- rias. Aquellos con cadena de menos de 10 unidades se
rior metabolización (figura 6). conocen como oligofructosa o fructooligosacáridos

Figura 6.  Digestión y absorción de polisacáridos, oligosacáridos y disacáridos.


Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 237

(FOS). Se diferencian tres tipos de fructanos según los san al colon son fermentados por la flora bacteriana
enlaces que unan sus moléculas: formándose ácidos grasos de cadena corta (AGCC)
(butirato, propionato, acetato y lactato) y gases (hidró-
• Inulinas: Fructanos de cadena lineal con enlaces geno, dióxido de carbono y metano). Los AGCC favore-
fundamentalmente β-2,1. cen la reabsorción de agua y sodio en el colon. Si la
• Levanos: Fructanos de cadena lineal con enlaces absorción de estos últimos está disminuida, como ocu-
fundamentalmente β-2,6. rre en las enfermedades inflamatorias colónicas, dismi-
• Mixtos o tipo graminan: Fructanos con cadenas nuye el pH luminal, lo que empeora aún más la reab-
ramificadas y enlaces β-2,1 y β-2,6. sorción de agua y sodio. Si la velocidad de llegada del
azúcar al colon supera la capacidad de fermentación
El intestino tiene una capacidad muy limitada para bacteriana o si ésta está disminuida (como ocurre tras
digerir los enlaces de la cadena de fructosa por falta de la utilización de antibióticos) se provocará una sobre-
β-hidrolasas específicas, por lo que solo se absorben en carga osmótica que no podrá ser compensada, produ-
un 5-15% y el resto es fermentado en el colon; están ciéndose igualmente distensión y diarrea. Con respecto
considerados así como un tipo de fibra soluble. Se en- al hidrógeno, una pequeña parte difunde al torrente
cuentran sobre todo en cereales y algunas verduras. En sanguíneo (15%) y es exhalado a través de los pulmo-
los últimos años ha aumentado el consumo de FOS, nes, pero el resto (85%) se excreta por las heces. En
puesto que la industria alimentaria añade con frecuen- caso de alteraciones de la digestión o absorción de
cia estos HC por sus efectos prebióticos. azúcares, las heces serán ácidas, espumosas e irritan-
Los galactooligosacáridos (GOS) son polímeros de tes, y pueden producir lesiones características en ano y
galactosa de cadena corta con una molécula de gluco- nalgas (figura 7).
sa terminal. Tampoco son hidrolizados en el intestino Es importante remarcar que es posible malabsorber
debido a la falta de α-galactosidasas, por lo que tam- una pequeña cantidad de azúcares sin que se produz-
bién llegan intactos al colon en donde son fermenta- can síntomas de ningún tipo al compensarse en el co-
dos. Aquí están incluidos la rafinosa y la estaquiosa, lon. De hecho, la ingesta y malabsorción «fisiológica»
que se encuentran en legumbres y algunos cereales. de fructanos y GOS no produce sintomatología en la
Los polioles incluyen el sorbitol, manitol, maltitol y mayoría de los individuos, y con respecto a la fructosa
xilitol, y son absorbidos de forma pasiva en el intestino. y el sorbitol tienen que ingerirse cantidades elevadas
La velocidad de absorción varía entre unos y otros, ya para que aparezca clínica.
que depende del tamaño de la molécula y su solubili- El diagnóstico habitualmente se realiza mediante
dad. Así, por ejemplo, el manitol es mejor absorbido una historia dietética minuciosa seguida de la exclusión
que el sorbitol. de los alimentos sospechosos, lo que produce la reso-
Aunque su verdadera prevalencia se desconoce, los lución de la clínica, y posteriormente la reintroducción
problemas de intolerancia, maldigestión y malabsor- gradual hasta ver si reaparece. Hay que destacar que
ción de HC son frecuentes en la clínica diaria. Sin em- habitualmente se toleran pequeñas cantidades, por lo
bargo, suelen ser poco reconocidos e infradiagnostica- que no es necesario una exclusión completa para ob-
dos, ya que producen síntomas inespecíficos que servar mejoría.
además no pueden ser filiados mediante las técnicas El hidrógeno y el metano espirados son la base del
más utilizadas, como las de imagen, endoscopia o es- diagnóstico de confirmación de la mayoría de estas pa-
tudio de heces, por lo que habitualmente se atribuyen tologías. El hidrógeno es un gas que no es producido
a patología funcional. en el organismo, por lo que toda cantidad exhalada se
considera originada por fermentación colónica. Clási-
camente es el gas medido en los test del aliento diag-
5.2.  Fisiopatología y diagnóstico
nósticos de intolerancias alimentarias; sin embargo,
Se han incluido en el mismo apartado las alteracio- sus niveles también dependen de la microbiota intesti-
nes de la digestión y las de la absorción de HC, ya que nal. De tal forma, algunos individuos producen poca
aunque el origen es diferente entre ellos, los mecanis- cantidad de este gas y tienen aumentada la de metano
mos fisiopatológicos que producen los síntomas son a partir del hidrógeno, por lo que en los últimos años
similares en ambos grupos. los trabajos se llevan a cabo con la determinación de
La ausencia o alteración de la función de alguna de ambos gases. Los test del aliento se realizan mediante
las enzimas o proteínas transportadoras comentadas la administración oral del HC sospechoso para poste-
previamente provoca la acumulación intraluminal del riormente determinar cada 15-30 minutos durante 3-5
azúcar no hidrolizado o absorbido. Por un lado, esto horas los niveles de hidrógeno y metano exhalados. Se
produce un aumento de osmolaridad y la consiguiente considera un test positivo cuando se produce una ele-
transferencia de líquidos desde el torrente sanguíneo vación mayor de 10-20 partes por millón (ppm) sobre
hacia la luz intestinal produciéndose distensión y dia- el nivel basal de hidrógeno y/ o de metano en dos de-
rrea. Por otra parte, cuando los HC no absorbidos pa- terminaciones seriadas. Hay que tener en cuenta que
238 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

Figura 7.  Fisiopatología de la malabsorción de hidratos de carbono.

estos test deben hacerse en condiciones en las que no pués del destete su concentración va disminuyendo de
se afecte la microbiota ni la fermentación, como son forma variable hasta la edad adulta. La intolerancia a la
ayuno durante toda la noche, dieta baja en HC fermen- lactosa es el síndrome clínico producido por la maldi-
tables 48 horas antes y evitar tratamiento con antibió- gestión de este disacárido. Se diferencian cuatro tipos
ticos, laxantes, preparaciones para colonoscopia o pro- distintos.
bióticos desde al menos 2 semanas previas.
5.3.1. Hipolactasia del adulto
5.3. I ntolerancia a la lactosa o déficit de lactasa
Es la causa más frecuente de intolerancia a los HC,
La enzima lactasa (gen LCT, 2q21.3) es una β-galac- típica de niños mayores y adultos. Se debe a una acti-
tosidasa (disacaridasa) que se expresa únicamente en vidad reducida del promotor del gen de la lactasa tras
el borde en cepillo de los enterocitos y que hidroliza la la infancia. Como se comentó previamente, la concen-
lactosa en glucosa y galactosa (figura 6). Su actividad tración de lactasa va disminuyendo en mayor o menor
es vital para los mamíferos, puesto que es imprescindi- medida a partir del período neonatal, siendo su expre-
ble para la obtención de energía a partir de los HC de sión polimórfica en los adultos humanos con grandes
la leche, único alimento al nacimiento. Su expresión es diferencias entre distintas poblaciones. Existen indivi-
baja en el feto, aumenta en el período perinatal, y des- duos con fenotipo «persistente», en los que la expre-
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 239

sión de lactasa se mantiene de forma suficiente para taciones sin sentido, que dan como resultado una pro-
no producir síntomas en la vida adulta. Esta persisten- teína truncada con ausencia completa de actividad. Se
cia de lactasa es el fenotipo más frecuente en poblacio- trata de una enfermedad autosómica recesiva (dado
nes del norte y oeste de Europa y en tribus nómadas que la persistencia de lactasa es dominante) con una
árabes, donde la prevalencia de intolerancia a la lacto- prevalencia muy baja (menos de 40 pacientes descri-
sa es menor del 10%. El resto de la población mundial tos, la mayoría de ellos en población finlandesa).
(⅔ del total) presenta hipolactasia; es por este motivo Los síntomas aparecen al iniciar la ingesta de leche, y
que el término «déficit de lactasa del adulto» se consi- consisten en diarrea acuosa, dolor abdominal, meteo-
dera inapropiado, ya que más que una patología, real- rismo (figura 7), irritabilidad y retraso ponderoestatu-
mente es una característica presente en la mayoría de ral, que se resuelven al eliminar la lactosa de la dieta. La
la población. Los países con mayor prevalencia de into- actividad del resto de disacaridasas está conservada y
lerancia a la lactosa son los mediterráneos (40%), afri- el aspecto histológico de la mucosa es normal. Debe
canos (65-75%) y, sobre todo asiáticos (> 90%) y los diferenciarse del déficit de lactasa en el niño prematuro
nativos indios americanos (90-95%). Se estima que en y de la malabsorción congénita de glucosa-galactosa,
España la prevalencia es de un 35-50%. en la que aparece sintomatología con la ingesta de los
La capacidad para mantener una concentración monosacáridos glucosa o galactosa por separado, pero
adecuada de lactasa en la mucosa intestinal tiene una que son bien tolerados en la intolerancia a la lactosa.
herencia monogénica autosómica dominante. Aun-
que las poblaciones más «persistentes» tienen una 5.3.3. Intolerancia a la lactosa secundaria
historia extendida de pastoreo y consumo de leche,
esta persistencia no depende de la cantidad de lác- Se trata de la disminución de la actividad lactasa tras
teos ingerida durante la vida. Se ha demostrado que enfermedades del intestino delgado:
la persistencia de lactasa está asociada a varios poli-
morfismos de nucleótido único (SNP) próximos al gen • Infecciones: virus (VIH, rotavirus), bacterias (Clos-
LCT y que parecen regular la transcripción de su pro- tridium difficile, toxina del Staphylococcus aureus,
motor. De esta forma, existen varios haplotipos carac- etc.), parásitos (Giardia, etc.).
terísticos de las diferentes poblaciones mundiales. Por • Lesiones intestinales: enfermedad celíaca, enfer-
ejemplo, la persistencia de actividad lactasa en el nor- medad inflamatoria intestinal, etc.
te de Europa se asocia a los polimorfismos C/T_13910 • Funcional: aparece en pacientes con un vacia-
y G/A_22018. La variante T_13910 tiene gran afinidad por miento gástrico rápido postquirúrgico. En estos
el factor de transcripción Oct-1, que estimula la ex- casos, aunque la actividad lactasa está conserva-
presión de LCT. Así, los homocigotos CC y GG mues- da, no existe una digestión completa de la lactosa
tran niveles de lactasa no detectables, los homocigo- por disminución del tiempo de contacto con la
tos TT o AA niveles persistentes, y los heterocigotos mucosa intestinal.
niveles de lactasa intermedios. En cambio, en diferen- • Malnutrición grave, sobre todo en lactantes y ni-
tes poblaciones del norte, este y oeste de África se ños pequeños con kwashiorkor.
han hallado otros polimorfismos cercanos también a
LCT responsables de su expresión, como T/G_13915,
5.3.4.  Déficit de lactasa en prematuros
G/C_14010, C/G_13907 y T/C_3712.
La intensidad de los síntomas se correlaciona con la En los recién nacidos pretérmino es relativamente
cantidad de lactosa ingerida. En general, los individuos frecuente encontrarnos con disminución de la activi-
intolerantes presentan una actividad lactasa del 10-30% dad lactasa, sobre todo en aquellos de menor edad
y solo manifiestan síntomas cuando ingieren grandes gestacional. En los neonatos de más de 35-36 semanas
cantidades de lactosa. El diagnóstico diferencial debe es raro que se produzca. En caso de manifestar sínto-
realizarse fundamentalmente con el síndrome de intesti- mas de intolerancia a la lactosa, estos son transitorios
no irritable (SII) y la intolerancia a otros HC mediante y mejoran en las primeras semanas posnatales.
una minuciosa historia dietética. En varias revisiones se Para el diagnóstico de la intolerancia a la lactosa, en
ha detectado que muchas personas autodiagnosticadas cualquiera de sus formas, se utilizan diferentes méto-
de «intolerantes» realmente no lo eran (57%), y perso- dos. El más sencillo consiste en ensayar la eliminación
nas que aparentemente no manifestaban síntomas de de la lactosa de la dieta y evaluar si desaparece la clíni-
intolerancia con su ingesta habitual de lácteos sí entra- ca en 5-7 días, para posteriormente volver a aparecer
ban en la categoría de intolerantes (32%). tras reintroducirla. La persistencia de síntomas en ausen­
cia completa de lactosa de la dieta obliga a descartar
otras patologías como SII, enfermedad celíaca o sobre-
5.3.2. Déficit de lactasa congénito
crecimiento bacteriano. Existen otros métodos diag-
Es debido a la mutación del gen LCT que determina nósticos para confirmar la intolerancia a la lactosa, que
una ausencia de actividad lactasa. La mayoría son mu- se describen a continuación:
240 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

a. Test de tolerancia a la lactosa: Se administran mas y mantener una nutrición adecuada. No hace falta
50 g de lactosa (2 g/kg peso en niños) vía oral y se eliminar por completo la lactosa, ya que se pueden ma-
valora la aparición de síntomas (dolor, meteoris- labsorber pequeñas cantidades sin que aparezca clínica.
mo, diarrea) a los 20-30 minutos, así como el in- Por ello, a la hora de planificar un tratamiento nutricio-
cremento de glucosa plasmática a los 30, 60, 90 nal adecuado debemos tener en cuenta varios puntos:
y 120 minutos. En caso de intolerancia a la lacto- 1) un correcto diagnóstico, 2) mantener un aporte caló-
sa se produce un incremento de glucemia menor rico y proteico adecuados, 3) valorar la necesidad de
de 20 mg/dl en las distintas muestras junto con la suplementos de calcio y vitamina D, ya que existen va-
aparición de síntomas. Tiene una sensibilidad del rios estudios que demuestran disminución de la densi-
76-94% y una especificidad del 77-96%. dad mineral ósea y aumento del número de fracturas en
b. Test del hidrógeno espirado: Se administran 2 g/ los pacientes con intolerancia a la lactosa, y 4) la utiliza-
kg de lactosa (máximo 25 g) vía oral y se cuantifi- ción de preparados para mejorar la tolerancia.
ca el hidrógeno en el aire espirado basal y cada En casos de malabsorción de lactosa secundaria, tras
30 minutos durante un período de 3 horas. Se la resolución de la patología causante pueden pasar
considera normal un incremento < 10 ppm res- meses hasta la recuperación de una actividad lactasa
pecto al basal, indeterminado entre 10-20 ppm normal.
(salvo que se acompañe de síntomas, en cuyo
caso se considera positivo) y compatible con into-
Recomendaciones dietéticas
lerancia a la lactosa > 20 ppm. Esta prueba es
barata, no invasiva y tiene pocas complicaciones. En los lactantes prematuros o con déficit de lactasa
En una revisión basada en la evidencia se la consi- congénito se deben utilizar fórmulas de sustitución sin
dera el mejor test para el diagnóstico; tiene una lactosa, de las que hay múltiples preparados comercia-
sensibilidad del 69-100% y una especificidad del lizados.
89-100%. Se precisa un período previo de 7-10 En niños y adultos se puede comenzar por una dieta
días realizando dieta exenta de lactosa. estricta sin lactosa e ir introduciendo pequeñas cantida-
c. Biopsia yeyunal con cuantificación de la actividad des de este disacárido para probar la tolerancia, incre-
enzimática: Aunque es el gold standard para el mentándola progresivamente hasta que los síntomas
diagnóstico presenta varios problemas: 1) No di- reaparezcan. Aunque no existe unanimidad sobre la
ferencia si el origen es primario o secundario, y 2) cantidad de lactosa ingerida que produce clínica en las
pueden resultar falsos negativos si la afectación personas intolerantes, y además probablemente varíe
secundaria es parcheada y se recoge biopsia de entre unos individuos y otros, se considera que la mayo-
una zona sana. Una determinación de actividad ría pueden ingerir hasta 7 g de lactosa por ración sin
de lactasa < 8 U/g o <0,7 U/g de peso húmedo presentar síntomas, y hasta 12 g (250 ml de leche) con
se asocia con intolerancia a la lactosa. mínima afectación. Sin embargo, la ingesta de 50 g de
d. Estudio genético del polimorfismo C/T_13910. En lactosa (1 litro de leche) produce síntomas en la mayoría
población europea el genotipo C/C tiene una sen- de la población con hipolactasia. Hay que tener en cuen-
sibilidad y especificidad del 93 y 100% para la ta que si los lácteos se toman junto a cacao u otros ali-
hipolactasia del adulto, comparable con el test de mentos se absorben mejor. Partiendo de esta base,
tolerancia a la lactosa y el test de hidrógeno espi- podemos decir que la mayoría de los pacientes intole-
rado. Sin embargo, es un test caro, por lo que en rantes son capaces de llevar una dieta que proporcione
la actualidad no se realiza en la práctica clínica las RDA de calcio diario si los lácteos se distribuyen
sino en trabajos de investigación. entre las diferentes comidas del día en forma de leche
e. Estudio genético de la mutación del gen LCT, en (100-150 ml), yogur o queso. Cuando un paciente es in-
caso de sospecha de déficit congénito de lactasa. capaz de tomar incluso pequeñas cantidades de lactosa
debemos descartar otra patología subyacente antes de
En la actualidad se recomienda establecer el diag- indicar una dieta exenta por completo de este disacárido.
nóstico en función de las características clínicas y bio- La lactosa se encuentra en todos los tipos de leche de
químicas (tests de tolerancia o de hidrógeno espirado), mamíferos, así como sus derivados (yogur, natillas, flan,
y solo si fuera necesario, la biopsia intestinal. Una vez helados, queso, cuajada, requesón, cremas, leche en
confirmado debe descartarse alguna de las posibles polvo, mantequillas, margarinas con leche) (tabla 9).
patologías intestinales que producen intolerancia de Además, es frecuente hallar como fuente de lactosa
forma secundaria. muchos productos alimenticios preparados (chocolate,
cereales de desayuno, pan industrial o de molde, bizco-
chos, dulces y pasteles, mayonesa, sopas, salsas,
Objetivos nutricionales
embutidos, algunos caramelos, productos enlatados,
El objetivo del tratamiento consiste en reducir la in- etc.). Es importante leer el etiquetado de los alimentos
gesta de lactosa hasta un nivel que no produzca sínto- también para descubrir fuentes de lactosa «encubier-
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 241

Tabla 9.  Contenido de lactosa en leche y derivados.

ALIMENTO LACTOSA (g)


LECHE
Leche de vaca (entera, semidesnatada o desnatada) (100 ml) 3-5
Leche de oveja (100 ml) 4-5
Leche de cabra (100 ml) 4-5
Leche en polvo (100 g) 24-50
Leche condensada (100 g) 9-14
YOGUR (100 g) 3-5
QUESO (100 g)
Quesos curados 0-1
Quesos tiernos 2-5
Quesos procesados 6
MANTEQUILLA (100 g) 0,6-1
NATA (100 g) 2-4
HELADO (100 g) 3-8
CHOCOLATE (100 g)
Negro 0-0,5
Con leche 4-11
Blanco 10
SUERO LÁCTEO en polvo (100 g) 50-72

tas», como el suero lácteo, los fermentos lácticos, pro- depende en gran medida de los procesos de calenta-
teínas lácteas, caseína, etc. miento a los que es sometido y del tiempo de supervi-
En los últimos años han proliferado multitud de be- vencia de los lactobacilos tras la ingestión.
bidas sustitutas no lácteas, que se suman a los deriva- Muchos productos farmacéuticos contienen lactosa,
dos lácteos «sin lactosa» o a las clásicas «leches» de pero como las cantidades son mínimas (mg) no suelen
soja o almendras (que realmente son un zumo), como producir síntomas.
las de arroz, coco, avena o avellanas, que pueden con- Desde que finaliza el período de lactancia, aquellos
sumirse sin problema. pacientes que requieren una dieta muy estricta en lac-
Con respecto al queso debemos decir que en el pro- tosa deben ingerir alimentos ricos en calcio y vitamina
ceso de fabricación se elimina la mayoría de la lactosa D o tomar suplementos farmacéuticos que cubran las
al separar el suero. Durante el envejecimiento y fer- necesidades diarias (tabla 3).
mentación el resto de lactosa es parcialmente hidroli- Existen diversos preparados comerciales con lactasas
zada por las β-galactosidasas bacterianas en monosa- que pueden añadirse a los alimentos para aumentar su
cáridos que se absorben sin dificultad. Por este motivo tolerancia. Sin embargo, no son capaces de hidrolizar
se recomiendan los quesos curados y fermentados en la lactosa de forma completa, por lo que su beneficio
lugar de los quesos frescos no fermentados. Sin em- varía en función del paciente.
bargo, debemos ser cautelosos por su alto contenido
en grasas saturadas y sodio. 5.4. Déficit de sacarasa-isomaltasa
El yogur es un producto en el que se también se hi-
o intolerancia a los disacáridos
droliza parcialmente la lactosa durante el proceso de
fermentación, pero suelen añadirse sólidos lácteos en La enzima sacarasa-isomaltasa es una disacaridasa
la posterior elaboración de los productos manufactura- de membrana apical bifuncional que se encuentra ex-
dos, por lo que al final el contenido en lactosa es simi- clusivamente en los enterocitos del intestino adulto y
lar a la leche. Sin embargo, los yogures con bacterias es responsable de catalizar la hidrólisis de la sacarosa y
vivas son mejor tolerados debido a su actividad lactasa de productos de la digestión del almidón como la iso-
y a la existencia de proteínas transportadoras en la pa- maltosa y otras dextrinas actuando sobre sus enlaces
red de las mismas (permeasas) que introducen parte de α-1,6 (figura 6). En caso de producirse disminución de
la lactosa en su interior. Hay que señalar que no todos la actividad de esta enzima los síntomas aparecerán
los yogures tienen la misma actividad, puesto que ésta con la ingesta de sacarosa, al no ser digerida. La iso-
242 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

maltosa tiene un bajo poder osmótico por lo que su los niños mayores de 2 años y los adultos toleran el
malabsorción casi no produce síntomas. almidón y los polímeros de glucosa, por lo que solo
El déficit de sacarasa-isomaltasa puede ser primario deberá evitarse en caso de que no desaparezca la clíni-
o secundario: ca realizando correctamente la dieta sin sacarosa. A
partir de la adolescencia se puede probar la reintroduc-
• Déficit congénito. Es una enfermedad hereditaria ción de la sacarosa en pequeñas cantidades con el ob-
autosómica recesiva de muy baja prevalencia jetivo de ver si reaparecen los síntomas, y en caso de
(< 0,2% en EEUU), salvo en esquimales de Groen- que no se produzcan, ir aumentando progresivamente.
landia y Canadá, en donde afecta al 5-10% de la Existen algunos trabajos en los que se ha utilizado
población. Está producida por la mutación del gen suplementación con una sacarosidasa obtenida de la
SI (3q26.1), que codifica la sacarasa-isomaltasa. levadura en niños con déficit congénito, pero se trata
Los síntomas aparecen al introducir en la dieta del de pequeños grupos de pacientes y la sacarosidasa no
niño la sacarosa (lo que suele ocurrir cuando se in- mejora la digestión de los derivados del almidón, solo
cluyen las frutas en la alimentación), aunque puede de la sacarosa.
manifestarse tras el nacimiento si se utilizan fórmu-
las lácteas que contengan este azúcar. El paciente 5.4.2.  Recomendaciones dietéticas
estará asintomático mientras solo se le dé lactancia
materna o fórmulas lácteas sin sacarosa. La clínica Deben excluirse de la alimentación todos los produc-
consiste en diarrea acuosa, deshidratación, dolor tos que contengan sacarosa, tanto en forma natural
abdominal, meteorismo, retraso ponderoestatural como en preparados comerciales (tabla 8). Se puede
y rechazo a las tomas o los alimentos azucarados. utilizar la fructosa o la glucosa como edulcorante.
Algunos estudios muestran que a medida que el La tabla 10 muestra los alimentos permitidos y los
paciente crece mejora la tolerancia, sobre todo al que deben ser evitados. Con respecto a las frutas, se
almidón, y si se produce adaptación colónica mejo- especifican cuáles pueden ser consumidas libremente,
rará la diarrea secundaria a la ingesta de sacarosa. cuáles se deben restringir según la edad (máximo una
Existen formas de comienzo tardío, que se mani- pieza los niños pequeños y tres los niños mayores), y
fiestan en la edad adulta como si se tratara de un cuáles pueden ser consumidas solo por los mayores.
SII con diarrea crónica, flatulencia y pérdida de Como muchas de las fuentes de vitamina C están li-
peso; sin embargo, en estos casos si se realiza una mitadas en estos pacientes, debe suplementarse con
exhaustiva historia a los padres suelen encontrarse esta vitamina a una dosis de 30 mg/día.
algunos síntomas desde la infancia.
• Déficit secundario. Debido a cualquier patolo-
5.5.  Malabsorción de glucosa-galactosa
gía intestinal que produzca una reducción de la
actividad de las disacaridasas del borde en cepillo, Es una enfermedad hereditaria autosómica recesiva
de forma similar al déficit secundario de lactasa. muy infrecuente (unos 300 casos descritos en la litera-
La actividad enzimática suele recuperarse cuando tura) en la que existe una mutación del transportador
se soluciona la enfermedad intestinal, aunque en intestinal de monosacáridos SGLT1 debido a mutacio-
algunas ocasiones se demora semanas o meses. nes en el gen SLC5A1 (22q12.3) que lo codifica. La
absorción de fructosa y sorbitol está conservada, ya
El diagnóstico del déficit de sacarasa-isomaltasa se que utilizan otro mecanismo de transporte.
realiza mediante el test del hidrógeno espirado tras la Los síntomas aparecen en las primeras semanas de
administración de 2 g/kg (máximo 20 g) de sacarosa vida al introducir la lactosa, y consisten en diarrea cró-
oral en solución al 20%, y se confirma cuantificando la nica grave con heces ácidas acompañada de deshidra-
actividad enzimática en biopsia yeyunal. El estudio his- tación hiperosmolar y acidosis metabólica, indistingui-
tológico de la mucosa es normal en el déficit primario, ble clínicamente de la intolerancia a los disacáridos. Si
y si está alterada se descarta el diagnóstico. no se trata produce malnutrición y fallo de medro, y a
largo plazo puede asociar nefrolitiasis. Después de los
tres meses de vida y a medida que el niño crece se
5.4.1.  Objetivos nutricionales
consigue una cierta tolerancia, ya que aunque se man-
El objetivo consiste en restringir los alimentos que tiene la malabsorción de estos azúcares aumenta la
contengan sacarosa, y en menor medida polímeros de capacidad de fermentación, con el consiguiente incre-
glucosa (almidón) para evitar la aparición de síntomas. mento en la producción de AGCC y absorción colónica
En el déficit primario, como los niños toleran meno- de agua y electrolitos. El diagnóstico se establece me-
res cantidades de sacarosa (máximo 5 g/ día) y de polí- diante el test de hidrógeno espirado tras la administra-
meros de glucosa que los adultos, debemos ser más ción de 0,1 g/kg de glucosa o galactosa, o de forma
estrictos con ellos. Se recomienda evitar la sacarosa y el empírica mediante la eliminación de azúcares de la
almidón durante el primer año de vida. Generalmente dieta con la consiguiente mejoría de los síntomas. La
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 243

Tabla 10.  Alimentos permitidos y prohibidos en la dieta controlada en sacarosa.

ALIMENTOS NO PERMITIDOS ALIMENTOS PERMITIDOS


· Carnes, pescados y embutidos que contengan sacarosa · Carnes y pescados naturales, embutidos sin sacarosa
· Leche en polvo, leche condensada, batidos, yogures · Leche, queso, yogur natural, mantequilla
saborizados con sacarosa
· Cereales comerciales, muesli, pan con harina de soja · Trigo, avena, centeno, arroz, tapioca, pasta, sémola,
pan de harina de estos cereales
· Plátano, piña, mandarina, dátil, fruta enlatada o en · Libres: Uvas, pasas, limón, cerezas, zarzamoras, higos
compota con azúcar secos, arándanos
· Mermeladas · Restringir según edad: Manzana, naranja, pera,
albaricoque, melocotón, pomelo
· Solo niños mayores: Ciruelas, fresas, frambuesas, higos
frescos
· Guisantes, lentejas, garbanzos, judías, soja · Zanahoria (1 pequeña), patatas fritas caseras o
· Nabos, maíz dulce, pepinillo comerciales
– · Huevos
– · Aceites
· Azúcar (refinada o morena), miel, melaza · Glucosa, jarabe de maíz, edulcorantes sin sacarosa
· Bollería, galletas, chocolate, helados comerciales, · Bollería, galletas y helados caseros cocinados con
caramelos, chicles glucosa en lugar de sacarosa
· Bebidas azucaradas, batidos y zumos con sacarosa · Bebidas no azucaradas
· Salsas comerciales (con sacarosa) · Especias, sal, mostaza natural, colorantes

mucosa intestinal y las oligosacaridasas son normales, fructosa o fórmulas sin HC a las que se le añade por
por lo que la imagen histológica está conservada, y la separado este monosacárido.
alteración de las vellosidades descarta este diagnósti- Los alimentos que pueden consumirse después del
co. La confirmación se realiza mediante estudio gené- destete son muy escasos, por lo que se debe suplemen-
tico, y se puede hacer diagnóstico prenatal en caso de tar con módulos nutricionales de macro y micronu-
conocer la mutación del caso índice de la familia. trientes, y evaluar periódicamente los posibles déficits
nutricionales.
5.5.1.  Objetivos nutricionales En caso de deshidratación se rehidratará por vía in-
travenosa y en caso de realizarse por vía oral se utiliza-
El objetivo del tratamiento es conseguir un adecua- rán fórmulas exentas de glucosa.
do aporte de macro y micronutrientes, así como evitar Es fundamental leer estrictamente la composición de
las complicaciones a corto y largo plazo. Para ello se los medicamentos, así como los preparados de rehidra-
debe suprimir la ingesta de glucosa y galactosa, y por tación oral y los productos manufacturados.
tanto también de sacarosa, lactosa y polímeros de glu-
cosa. Estos azúcares deben ser reemplazados por fruc-
5.6.  Malabsorción de fructosa y sorbitol
tosa, aunque hay que tener en cuenta que su exceso
puede producir malabsorción (véase el apartado de 5.6.1.  Malabsorción de fructosa
«Malabsorción de fructosa y sorbitol») y por tratarse de
una molécula pequeña los preparados con este azúcar El mecanismo patogénico por el que se produce la
tienen una elevada osmolaridad y deben introducirse malabsorción de fructosa sigue sin estar del todo claro
de forma muy gradual para evitar diarreas. a día de hoy. Hasta hace poco se creía que era produci-
da por una menor expresión de los transportadores
GLUT5 y GLUT2, pero un estudio reciente descartó que
5.5.2.  Recomendaciones dietéticas
ésta fuera la base. La principal causa a día de hoy son
Durante la lactancia se suspenderá la leche materna los cambios que se han producido en las costumbres
y se utilizarán fórmulas comerciales especiales con dietéticas de la población en los últimos años, que ha
244 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

aumentado drásticamente el consumo de «fructosa li- para endulzar aportando pocas calorías (productos li-
bre» (exceso de fructosa respecto a glucosa, o sin ir ght, «para diabéticos», «sin azúcar») y con otras finali-
acompañada de glucosa). La aparición de síntomas de- dades como el control de la humedad o viscosidad, o
rivados de la malabsorción de fructosa era muy infre- estabilizante en alimentos y medicamentos.
cuente en el pasado, ya que clásicamente se ingería en La absorción intestinal de este azúcar es limitada,
forma de sacarosa o en alimentos como algunas frutas, por lo que suele producirse malabsorción con el consu-
verduras y miel, en los que se encuentra poca cantidad mo de pequeñas cantidades. La ingesta de tan solo 5 g
de «fructosa libre». Sin embargo, es el azúcar más dul- de sorbitol da lugar a síntomas de intolerancia en indi-
ce, por lo que se ha desarrollado industrialmente un viduos sanos, y estos síntomas son mayores si se
procedimiento barato para transformar la glucosa en aumenta la concentración (10% de individuos al tomar
fructosa que ha dado lugar a la aparición de multitud 5 g al 2% y 43% de individuos con 5 g al 16%) o can-
de productos edulcorados con HFCS (refrescos, carame- tidad (30-90% de individuos con 10 g y casi el 100%
los, bollería, etc.). Estos productos con HFCS junto con con 20 g). Esta malabsorción empeora cuando se
los denominados «sin azúcar añadido» que contienen acompaña de fructosa, interacción que se especula
fructosa son la principal fuente alimentaria de la misma puede ser debida a la competencia por el mismo trans-
en la actualidad, que han hecho que aparezcan sínto- portador (GLUT5) y/o un efecto osmótico sinérgico.
mas de intolerancia cada vez con mayor frecuencia. Así, un 40-75% de los individuos sanos tienen sínto-
Las manifestaciones son similares al resto de las alte- mas de intolerancia con mezclas de 25 g de fructosa y
raciones de la digestión o absorción de carbohidratos 5 g de sorbitol, y el porcentaje puede alcanzar el 100%
(flatulencia, diarrea y dolor abdominal), y su aparición en pacientes con SII. Este problema no es infrecuente,
depende de la dosis y la concentración, aunque existe ya que habitualmente se consumen juntos en forma de
variabilidad interindividual. En estudios recientes se ha zumos de frutas y otros productos industriales.
observado que los efectos son dosis-dependientes, El diagnóstico se realiza mediante el test del aliento
apareciendo la clínica en un 10% de individuos sanos administrando 5 g del sorbitol al 10% para cuantificar
cuando ingieren 25 g de fructosa y la cifra llega hasta el hidrógeno espirado y valorar la aparición de sínto-
el 60-80% con 50 g de este monosacárido; sin embar- mas clínicos de forma simultánea.
go, prácticamente la totalidad toleran una ingesta de
10-15 g de fructosa. En pediatría se ha sugerido que la
Objetivos nutricionales
dosis máxima tolerada es de 0,5-1 g/kg, hasta un límite
de 10-15 g. También se ha visto que los síntomas son El objetivo consiste en disminuir la ingesta de fructo-
más frecuentes en pacientes con SII que en los sujetos sa o sorbitol respectivamente, así como de los alimen-
sanos, y se ha constatado que entre el 30 y 60% de tos que contengan mezclas de los mismos hasta un
ellos tienen malabsorción de fructosa. nivel que no produzca síntomas. De forma práctica se
El diagnóstico se realiza mediante una historia dieté- debe restringir el consumo, tanto en individuos sanos
tica minuciosa y el test del aliento utilizando una dosis como en pacientes con enfermedad intestinal, de can-
de 25 g de fructosa al 10% o de 1 g/kg en niños y tidades elevadas de alimentos que contengan niveles
cuantificando el hidrógeno y metano espirados cada altos de «fructosa libre» o con exceso de fructosa y sor-
30 minutos durante 3 horas. Se considera que el test es bitol, sin acompañar de otros alimentos. Un abordaje
positivo si se produce un incremento respecto a los va- sensato puede ser comenzar con una restricción severa
lores basales ≥ 20 ppm de hidrógeno o ≥ 10 ppm de durante unas semanas para posteriormente ir aumen-
metano o ≥ 15 ppm de hidrógeno y metano, o un tando progresivamente el aporte hasta ver cuál es la
aumento de 5 ppm en tres mediciones consecutivas. La dosis máxima tolerada. No obstante, hay que decir que
aparición de síntomas durante la prueba es variable en habitualmente no se precisa una restricción tan estricta
función de la velocidad de tránsito, de paso de líquido como en los pacientes con intolerancia hereditaria a la
hacia la luz intestinal y de fermentación. Algunos pa- fructosa.
cientes presentan síntomas desde el inicio de la prue-
ba, otros al final y algunos con test positivo se mantie- Recomendaciones dietéticas
nen asintomáticos. También se puede ensayar la
eliminación de la fructosa de la dieta y evaluar la mejo- Aunque existen algunos alimentos con mayor conte-
ría clínica, para posteriormente reintroducirla de forma nido en fructosa y sorbitol, su mayor abuso proviene
progresiva hasta ver la dosis máxima tolerada. de productos comerciales como caramelos, bollería,
«para diabéticos», «sin azúcar» o light. En la tabla 8 se
desglosa el contenido de glucosa, fructosa y sorbitol de
5.6.2. Malabsorción de sorbitol
diferentes alimentos. El contenido de fructosa en las
El sorbitol o glucitol es un poliol que se encuentra de frutas tiene relación con el grado de madurez. Aque-
forma natural en distintas frutas, y también se utiliza llos zumos o frutas con cantidades superiores y/o simi-
en la industria como edulcorante por su alta capacidad lares de glucosa son bien tolerados, como los plátanos,
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 245

fresas, melocotones o albaricoques. Los alimentos con rante un par de semanas, para posteriormente ir rein-
mayor contenido en fructosa con respecto a glucosa troduciéndolos progresivamente hasta ver la dosis
son la miel, dátiles, pasas y otras frutas deshidratadas, máxima tolerada.
naranjas, manzanas, peras, papaya, y sandía.
Se recomienda ingerir los alimentos con fructosa en 5.7.2.  Recomendaciones dietéticas
pequeñas cantidades repartidas a lo largo del día, y
también la cocción de las verduras para que pierdan Los alimentos ricos en fructanos son fundamental-
parte del contenido de este monosacárido. mente el trigo y algunas verduras (tabla 11). Por otra
Estos pacientes pueden tomar sacarosa sin presentar parte, parece que los alimentos con fructanos con ca-
síntomas, ya que la glucosa se encuentra en cantidades denas de mayor longitud, como los que se hallan en el
equimolares a la fructosa, por lo que será bien absorbida. centeno, son mejor tolerados.
Al igual que en las patologías anteriores, es funda-
mental leer el etiquetado de los alimentos procesados. 5.8. Intolerancia a hidratos de carbono de
cadena corta fermentables (FODMAP)
5.7.  Intolerancia a los fructanos
Los FODMAP (fermentable oligosaccharides, disac-
Los fructanos se encuentran de forma natural como charides, monosaccharides and polyols) son un grupo
HC de reserva en cereales y verduras, y además son de HC de cadena corta poco absorbidos en el intestino
añadidos a ciertos alimentos por sus efectos prebióti- delgado y que fermentan en el colon. Incluye a la ma-
cos. Los mayores contenidos los hallamos en vegetales yoría de HC vistos en los apartados anteriores (lactosa,
como el ajo, la cebolla, la alcachofa o el puerro. Sin fructosa, sorbitol y otros polioles, fructanos) y también
embargo, el alimento que aporta más fructanos en la los GOS. La fibra dietética y el almidón resistente, a
dieta de los países occidentales es el trigo, ya que aun- pesar de no ser absorbidos en el intestino, son fermen-
que contiene < 3% por peso, es consumido en canti- tados más lentamente y tienen menor capacidad os-
dades relativamente grandes. Como hemos dicho, los mótica, por lo que no suelen producir síntomas.
fructanos son maldigeridos de forma natural en el in- La intolerancia a HC de cadena corta es un problema
testino por ausencia de β-hidrolasas, por lo que se ab- frecuente e infradiagnosticado. Estos pacientes presen-
sorben solo en pequeñas cantidades y la mayor parte tas síntomas inespecíficos como distensión abdominal,
es fermentada en el colon. flatulencia, dolor o diarrea, típicos de los trastornos de
En las últimas décadas ha aumentado el consumo de maldigestión-malabsorción, pero tras descartar otras
alimentos ricos en fructanos derivados del trigo, como patologías más graves con las técnicas diagnósticas ha-
los cereales de desayuno, el pan y la pasta, y de forma bituales son encasillados en el cajón de sastre de «pa-
paralela se ha observado un incremento en la aparición tología funcional» y SII.
de síntomas de intolerancia a estos carbohidratos. Aunque su prevalencia no está establecida, diversos
También se ha visto en algunos estudios que hasta la trabajos apuntan a que el 60-80% de los pacientes con
cuarta parte de los pacientes con SII tienen intolerancia SII relacionan sus síntomas con la dieta, y la mayoría de
a los fructanos y que los síntomas mejoran tras la elimi- ellos en concreto con la ingesta de HC. Aunque algu-
nación de los mismos de la dieta sin restricción de nos individuos presentan una intolerancia clara a un
otros HC. El motivo de que algunos individuos presen- grupo restringido de FODMAP (ver apartados anterio-
tan clínica derivada de la malabsorción natural de fruc- res), muchos presentan intolerancia a varios grupos de
tanos es algo aún no aclarado, aunque parece que ellos o a todos. También se ha observado que en pa-
presentan mayor sensibilidad visceral y paso de líqui- cientes con nutrición enteral, los FODMAP condicionan
dos por efecto osmótico a la luz intestinal ante las mis- la aparición de diarrea en un subgrupo en los que se
mas cantidades de carbohidratos que las personas sa- han descartado otras causas (sobrecrecimiento bacte-
nas que no tienen síntomas. riano, toxinas o medicación). Asimismo, existen traba-
El diagnóstico se basa fundamentalmente en ensa- jos sobre su aplicación en la enfermedad de Crohn.
yar la eliminación de alimentos con alto contenido en En la actualidad, la dieta baja en FODMAP se utiliza
fructanos y evaluar la mejoría. El test de hidrógeno y fundamentalmente en aquellas personas con síntomas
metano espirados es posible, pero aún no está perfec- digestivos inespecíficos en los que no se ha filiado la
tamente estandarizado. etiología, como el SII. Aunque lleva usándose desde
hace 15 años no existía evidencia científica suficiente;
sin embargo, en los últimos años han ido apareciendo
5.7.1.  Objetivos nutricionales
varios ensayos clínicos randomizados en pacientes
El objetivo consiste en reducir la ingesta de fructanos con SII que, aunque están realizados con pacientes de
hasta un nivel que no produzca síntomas. Para ello se características diferentes e intervenciones distintas,
recomienda, al igual que en otro tipo de intolerancias, empiezan a justificar este tipo de dieta. En estos estu-
comenzar por una fase de eliminación completa du- dios se ha demostrado disminuir los síntomas en un
246 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

Tabla 11.  Alimentos con mayor contenido en fructanos.

Contenido en fructanos Grado de


Alimento
(g/100 g alimento) polimerización medio
Ajo 17,4-19,1 32
Raíz de achicoria 16,2 5-17
Alcachofa 6,8-15,1 6-42
Cebolla 1,1-10,1 4-5
Puerro 6,6-7,1 > 10
Centeno
 Grano 4,1-4,8
  Harina integral 3,3-6,6 > 10
  Harina refinada 3,0
 Salvado 7,0
Cebollino 6,5 > 10
Espárrago 1,5-4,1 6-40
Trigo
 Grano 0,7-2,2
  Harina refinada 1,2-1,5 > 10-19
  Harina integral 1,8
 Salvado 3,7
Cebada
 Grano 0,9-4,2 5-15
  Harina refinada 1,6-2,1
Plátano 1,4 > 10
Avena
5-12
  Grano 0,4

60-80% de pacientes con SII. Por otra parte, la posibi- significado clínico de estos hallazgos, y se necesitan
lidad de aplicación en los pacientes con enfermedad de estudios que evalúen la seguridad a largo plazo de este
Crohn y en aquellos con nutrición enteral abre nuevas tipo de dieta.
posibilidades a la dieta baja en FODMAP.
Sin embargo, los FODMAP son en gran parte malab- 5.8.1.  Objetivos nutricionales
sorbidos en los individuos sanos sin producir síntomas,
y además proporcionan efectos beneficiosos, como la El objetivo consiste en reducir la ingesta de FODMAP
prevención del estreñimiento por su efecto osmótico, hasta un nivel que no produzca síntomas. Como en
un efecto prebiótico contribuyendo al crecimiento de otras intolerancias, se recomienda comenzar por una
la microbiota intestinal, un aumento de la absorción de fase de eliminación completa durante un par de sema-
calcio, un efecto modulador del sistema inmune aso- nas, para posteriormente ir reintroduciéndolos progre-
ciado a mucosas, e incluso la posibilidad de prevención sivamente y de grupo en grupo hasta ver la dosis máxi-
del cáncer de colon. Con respecto al efecto prebiótico, ma tolerada y, si es posible, identificar aquel o aquellos
las dietas ricas en FOS, GOS e inulina aumentan la po- que sean causantes de la sintomatología. Esto es im-
blación de bifidobacterias y disminuyen la de Escheri- portante para evitar excluir todos los alimentos ricos en
chia coli, Bacteroides spp y Clostridium spp, por lo que FODMAP y que la dieta sea nutricionalmente inadecua-
son importantes para la salud del intestino. En algunos da, así como los posibles efectos adversos sobre la mi-
trabajos se ha observado el efecto de las dietas bajas crobiota intestinal y la falta de otros beneficios poten-
en FODMAP sobre la microbiota intestinal, detectán- ciales, sin mencionar la disminución de la calidad de
dose una disminución de las bifidobacterias tras 4 se- vida por la restricción de las actividades sociales deriva-
manas de cumplimiento. Sin embargo, se desconoce el da de las pocas opciones dietéticas. Por todo ello, y
Tema 14.  Soporte nutricional en patologías con alteración en el procesamiento… 247

dada su complejidad, es recomendable que sea super- tectar cuál es tolerado y así evitar restricciones innecesa-
visada por un nutricionista experto. rias. Si es posible se realizará test del aliento tras la
introducción de la lactosa y la fructosa; estos FODMAP
5.8.2.  Recomendaciones dietéticas son los únicos que no son malabsorbidos en individuos
sanos (el resto sí) y los que tienen el test estandarizado.
Para evitar excluir de la dieta todos los productos de
un grupo de alimentos se debe instruir al paciente en
6. Resumen
aumentar la ingesta alternativa de aquellos que sean
ricos en fibra y otros nutrientes (tabla 12). Además, Este capítulo trata un grupo heterogéneo de patolo-
deben evitarse aquellos con un alto grado de fermen- gías en las que es fundamental instaurar precozmente
tación, como el salvado de trigo. un tratamiento nutricional y cumplir las restricciones
Como hemos comentado, tras la fase de exclusión ini- adecuadas de determinados alimentos, específicos en
cial, se irán reintroduciendo progresivamente los alimen- cada una de ellas, para evitar el desarrollo de compli-
tos que contienen solo un FODMAP, como por ejemplo la caciones agudas y secuelas a largo plazo. A ello contri-
miel (fructosa), albaricoques (sorbitol), leche (lactosa), buye el diagnóstico prenatal, que actualmente está
champiñones (manitol), legumbres (GOS), cada uno du- disponible en muchas de estas enfermedades gracias a
rante varios días antes de introducir el siguiente para de- los progresos que se han conseguido en los últimos

Tabla 12.  Alimentos ricos en FODMAP y alternativas.

Grupos de Alimentos con alto Alimentos con bajo


FODMAP presente
alimentos contenido en FODMAP contenido en FODMAP
Leche, crema de leche, leche en polvo, nata, Leche sin lactosa, quesos curados, quesos
Lácteos Lactosa
helados de crema, queso fresco y yogur sin lactosa
Albaricoque, aguacate, caqui, cereza, ciruela, Arándano, frambuesa, fresa, granada,
Exceso de fructosa,
chirimoya, lichi, melocotón, frutas enlatadas en guayaba, kiwi, lima, limón, mandarina,
Frutas oligosacáridos y
jugo natural, granada, higo, mango, manzana, maracuyá, melón, naranja, papaya, piña,
polialcoholes
melocotón, mora, nectarina, pera y sandía plátano, pomelo y uva
Frutos secos, Almendra, anacardo, castaña de cajú, ciruela Exceso de fructosa, Avellana, cacahuete, nuez, plátano
frutas desecadas deshidratada, dátil, higo, nuez, orejón, pipa de oligosacáridoss y deshidratado, semilla de girasol y calabaza,
y semillas girasol, pistacho y uva pasa polialcoholes chia y sésamo
Acelga, alfalfa, batata, berenjena, brote de
soja, calabacín, cardo, cebollino, endivia,
Ajo, alcachofa, apio, algarroba, brócoli, cebolla,
Oligosacáridos y chaucha, espinaca, hinojo, judía verde,
Vegetales choclo, col, coliflor, esparrago, mandioca, puerro,
polialcoholes lechuga, limón, lima, morrón, nabo, patata,
remolacha, repollo verde y setas
pepinillo, pepino, pimiento, rábano,
tomate y zanahoria
Libres de gluten y derivados: almidón de
Trigo, centeno, cebada y amaranto (incluyendo
Cereales Oligosacáridos maíz, avena, arroz, maíz, mijo, polenta,
sus derivados)
quinoa y sorgo
Legumbres Garbanzo, lenteja, alubias, guisante y soja Oligosacáridos Tofu y tempeh
Carnes y Lactosa y
Procesados, charcutería y salchichas Todos los naturales
pescados oligosacáridos
Sorbitol, xilitol, manitol (E968, E953, E966, E965, Azúcar, edulcorantes no aloholes ( E950,
Exceso de fructosa y
Dulces E421, E420, E967), JMAF (jarabe de maíz de alta E951, E952, E960, E959, E961, E954, E962,
polialcoholes
fructosa) y miel E955, E957) y glucosa
Agua, bebidas de arroz, de avellana, de
Bebidas de soja, zumos industrializados, ron y Exceso de fructosa,
Bebidas avena, café, ginebra, cerveza, vino seco,
vino dulce oligosacáridos
vodka, whisky y té
Aceite de canola, oliva, girasol, maíz,
Grasas y aceites Ninguno –
manteca, margarina y mantequilla
Exceso de fructosa,
Cereales de desayuno, chocolate blanco o con
Otros oligosacáridos y Chocolate negro (> 75% cacao)
leche, flan, natillas, galletas, pasteles y bollería
polialcoholes
248 BLOQUE: HIDRATOS DE CARBONO

años en la definición de los mecanismos moleculares y 12. Choi YK, Johlin FC Jr, Summers RW, Jackson M, Rao
genéticos. SS. Fructose intolerance: an under-recognized prob-
El diagnóstico de confirmación de la mayoría de ellas lem. Am J Gastroenterol. 2003; 98(6):1348-53.
se realiza mediante estudio genético para detección de 13. Rao SS, Attaluri A, Anderson L, Stumbo P. Ability
la mutación, y en caso de que no haya resultados con- of the normal human intestine to absorb fructose:
cluyentes la cuantificación de la actividad enzimática evaluation by breath test. Cln Gatroenterol Hepa-
en biopsia del tejido afectado. tol. 2007; 5:959-63.
En cambio, en las alteraciones de la digestión o ab- 14. Skoog SM, Bharucha AE. Dietary fructose and gas-
sorción de HC el diagnóstico puede establecerse de trointestinal symptoms: a review. Am J Gastroen-
forma fiable mediante la conjunción de la clínica y el terol. 2004; 99(10):2046-50.
test de hidrógeno espirado. Se debe realizar un correc- 15. Clayton B, Green A, MacDonald A . Dietetic treat-
to diagnóstico diferencial entre ellas mediante una ment of inherited metabolic disease. Garrow JS,
minuciosa historia dietética, ya que los síntomas son James WPT, Ralph A. Human Nutrition and Diete-
similares. tics. 10th Edition. Churchill Livingston. London
Es de vital importancia leer el etiquetado de los ali- 2000; 799-805.
mentos y concienciar a la población en la demanda de 16. Ruiz Pons M, Santana Vega C, Trujillo Armas R,
una mayor y mejor información del contenido y tipo de Sánchez-Valverde F. Aproximación al tratamiento
macro y micronutrientes de los productos procesados. nutricional de los errores innatos del metabolismo.
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7. Bibliografía 17. Wolfsdorf JI, Crigler JF. Cornstarch regimens for
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BLOQUE:
PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS
(Dr. Pedro Pablo García Luna
y Dr. Luis Miguel Luengo)
TEMA 15. Soporte nutricional en la insuficiencia renal aguda y crónica.
Síndrome nefrótico.
Dres. Mercedes Vázquez Gutiérrez y Juan Pedro Rodríguez Rodríguez

TEMA 16. Soporte nutricional en la hepatopatía crónica y trasplante hepático.


Dres. María del Pilar Serrano Aguayo, José Manuel Sousa Martín y Carmen
Sendra Fernández

TEMA 17. Enfermedad celiaca. Dieta controlada en gluten.


Dres. José Manuel García Almeida, Ana M. Gómez Pérez y Rosario Fernández
García-Salazar

TEMA 18. Soporte nutricional en metabolopatías de los aminoácidos.


Fenilcetonuria, homocistinuria, enfermedad de orina de jarabe
de arce y trastornos del ciclo de la urea. Glucogenosis.
Dres. Luis Miguel Luengo Pérez, Ana M.ª Márquez Armenteros y Pilar
Jiménez Nacimiento
Tema 15.
Soporte nutricional en la insuficiencia renal aguda
y crónica. Síndrome nefrótico
Mercedes Vázquez Gutiérrez
FEA Endocrinología. Hospital Torrecárdenas. Almería

Juan Pedro Rodríguez Rodríguez


MIR de Medicina Interna. Hospital de Poniente. El Ejido (Almería)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 255-267.

1. Introducción
2. Fisiopatología y diagnóstico de la malnutrición en la insuficiencia renal aguda, crónica y síndrome
nefrótico
3.  Evaluación nutricional
4.  Requerimientos nutricionales
5.  Nutrición en la insuficiencia renal aguda
6.  Nutrición en la insuficiencia renal crónica
7.  Nutrición en el síndrome nefrótico
8.  Resumen y conclusiones
9. Bibliografía

1. Introducción reconoce que la situación nutricional es un importante


factor pronóstico independiente de morbimortalidad,
El riñón juega un papel fundamental tanto metabóli- relacionado fundamentalmente con la menor supervi-
co como endocrino. Su integridad es esencial en el vencia del paciente de hemodiálisis.3 La prevalencia de
mantenimiento del equilibrio ácido-base y el balance malnutrición se relaciona con las características de la
hidroeléctrico. La unidad funcional del riñón es la nefro- población y el estadio de la enfermedad renal. En los
na, encargada de realizar el filtrado del flujo sanguíneo, pacientes en prediálisis (PD) afecta a un 15-75%, en el
reabsorbiendo los solutos útiles y regulando el volumen grupo de pacientes en diálisis peritoneal en torno a un
de agua necesario para mantener la homeostasis hídri- 18-50% y pacientes en hemodiálisis oscila entre 23-
ca y eliminando las sustancias tóxicas o sobrantes. Nor- 76%4 siendo esta la responsable de una tasa de morta-
malmente, la membrana glomerular de la nefrona filtra lidad de aproximadamente un 20-30% anual5. En los
solo pequeñas moléculas, tanto beneficiosas –amino­ pacientes en insuficiencia renal aguda de unidades de
ácidos o péptidos–, como perjudiciales –urea o ácido cuidados intensivos se ha registrado algún grado de
úrico–, por lo que las primeras deberán ser reabsorbi- malnutrición en un 42% de los pacientes ingresados y
das posteriormente. Es por ello que la afectación tanto la mortalidad alcanza el 40-60%. Asimismo, cada vez
aguda como crónica de la misma repercute intensa- más estudios recogen la relación del estado nutricional
mente en el estado nutricional de los pacientes. Los pa- del paciente con la calidad de vida6.
cientes que padecen insuficiencia renal componen un
grupo muy heterogéneo en el que los requerimientos 2. Fisiopatología y diagnóstico de la
nutricionales varían considerablemente1. malnutrición en la insuficiencia renal
El deterioro del estado nutricional es una consecuen-
aguda, crónica y síndrome nefrótico
cia bien documentada de la insuficiencia renal crónica
que ya se detecta en fases precoces, por lo que es fun- Existen numerosas causas de malnutrición en los pa-
damental actuar en estadios iniciales2. De hecho, se cientes con insuficiencia renal y cada una de ellas par-

255
256 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

ticipa en mayor o menor medida en función del estadio de estos pacientes. Sin embargo, se trata de medidas
de la enfermedad: hipercatabolismo, anorexia, altera- agresivas con gran repercusión en el metabolismo y
ciones hormonales, pérdida de nutrientes, etc. sistema inmunitario, por lo que es fundamental que
La insuficiencia renal aguda desencadena un estado el paciente se encuentre en la mejor situación nutri-
hipercatabólico que genera un aumento del consumo cional posible para minimizar los efectos secundarios
de proteínas, y con ello de los requerimientos nutri- y optimizar el beneficio de estas técnicas de depura-
cionales para mantener la inmunocompetencia7. En ción renal.
caso de mantenerse la agresión en el tiempo, a medi- Estos estudios sobre malnutrición e insuficiencia re-
da que el volumen de nefronas se reduce, las restan- nal nos muestran la importancia de conocer las necesi-
tes logran compensar su actividad temporalmente, dades nutricionales de los pacientes en las distintas
manteniendo la función renal, hasta que la hiperfil- etapas de su enfermedad, tanto en la insuficiencia re-
tración a la que este grupo de nefronas están someti- nal aguda como en la crónica, así como de establecer
das finalmente determina su muerte. La función renal la vía de aporte nutricional óptima para cada situación.
queda mermada y comienza la progresión hacia la Además, es fundamental manejar los parámetros más
insuficiencia renal crónica terminal1, 8, 9. Las conse- adecuados para evaluar el estado nutricional de estos
cuencias de la pérdida de la capacidad funcional son pacientes, de manera que podamos adecuar las medi-
previsibles si analizamos la fisiopatología de la insufi- das disponibles a cada paciente.
ciencia renal crónica (tabla 1)1 Dado el papel fundamental que juega el hipercata-
A pesar de los avances en la comprensión del esta- bolismo proteico, tanto en la insuficiencia renal aguda
do urémico y la mejora en los conocimientos y técni- como en la crónica en la progresión de la enfermedad
cas de tratamiento, el pronóstico de los pacientes con renal, el cuidado dietético debe fundamentarse en evi-
enfermedad renal terminal continúa siendo pobre. tar el balance proteico negativo y adecuar el aporte de
Los pacientes con insuficiencia renal crónica presen- calorías y micronutrientes que permita mantener el es-
tan con frecuencia datos de malnutrición calóri- tado nutricional.
co-proteica, lo que aumenta la mortalidad y el riesgo El síndrome nefrótico es una entidad particular, de-
de hospitalización2, 3. Diferentes estudios han demos- finida por una proteinuria mayor de 3,5 g/1,73 m2/24 h
trado la relación entre el mantenimiento de un buen (40 mg/h/m2 en niños), que determina una serie de
estado nutricional con una menor morbilidad en es- manifestaciones clínicas características. Se produce
tos pacientes8, y desde hace décadas se han utilizado un daño en la membrana glomerular, cuyo origen
dietas restrictivas en proteínas para aliviar los sínto- puede ser un amplio espectro de enfermedades (en
mas urémicos, que además han probado su capaci- niños enfermedad por cambios mínimos y en adultos
dad de mantener la función renal 9-11. El desarrollo de nefropatía glomerular secundaria diabética, funda-
estrategias terapéuticas como la hemodiálisis y la diá- mentalmente) que aumenta la permeabilidad de la
lisis peritoneal ha supuesto un aumento en la supervi- misma provocando un filtrado anómalo de proteínas
vencia y una mejora considerable en la calidad de vida plasmáticas.

Tabla 1.  Fisiopatología de la insuficiencia renal crónica.

Función renal Manifestación


· Aumento de natriuresis
Regulación sodio y potasio
· Tendencia a la hiperpotasemia
Balance hídrico Poliuria → < densidad orina → oliguria
Acidosis:
Equilibrio ácido-base · Pérdida de capacidad para eliminar ácidos
· Incapacidad de reabsorber bicarbonatos.
· Hiperfosfatemia
· Déficit de vitamina D
Metabolismo fosfocálcico
· Hiperparatiroidismo secundario
· Osteodistrofia renal
Elevación plasmática por incapacidad para la degradación de
Endocrina
hormonas peptídicas
Hematológica Anemia por déficit de eritropoyetina
Tema 15.  Soporte nutricional en la insuficiencia renal aguda y crónica. Síndrome nefrótico 257

2.1.  Insuficiencia renal aguda (IRA) crónica desencadena un estado de malnutrición calóri-
co-proteica1, 2 por distintos factores, independiente-
Sea cual sea la etiología del fallo renal agudo, se tra- mente de la base etiológica específica, que se traducen
ta de una pérdida brusca de la función renal, reversible en una degradación proteica desproporcionada en re-
o no, que supone una situación de estrés para el orga- lación a la síntesis. En 2006, se establece un primer
nismo traducida en un desequilibrio metabólico. Se consenso de la Sociedad Internacional de Nutrición y
desencadena un estado hipercatabólico que conlleva Metabolismo Renal (ISRNM) para denominar como
una alteración en el pool de aminoácidos intra y extra- PEW14 (protein-energy wasting) que se ha traducido li-
celulares; aminoácidos no esenciales (tirosina) se vuel- teralmente como «desgaste proteico-energético», al
ven esenciales; aumentan el consumo de glucosa y la conjunto de manifestaciones que son causa, y a su vez
resistencia insulínica, y se elevan los niveles de triglicé- consecuencia, del síndrome caquéctico de los nefrópa-
ridos por una inhibición de la lipólisis. Además, dismi- tas crónicos. Se caracteriza por una pérdida de masa
nuyen la concentración de vitaminas liposolubles y el proteica corporal, incluyendo la reserva muscular y el
nivel de antioxidantes, favoreciendo un estado proin- pool de proteínas viscerales, así como de las reservas
flamatorio y deteriorando la inmunocompetencia7, 9. energéticas, y se distingue de la malnutrición «simple»
Una vez agotados los depósitos de glucógeno, las pro- por escasa ingesta, por ejemplo, en que existe un au-
teínas viscerales y del músculo esquelético se convier- mento del gasto calórico en lugar de una reducción
ten en la fuente de energía, es decir, comienza una adaptativa del mismo y se utiliza de forma inadecuada
fase de neoglucogénesis con consecuencias metabóli- la masa muscular con una relativa infrautilización de la
cas nefastas. Se desencadena una cadena metabólica grasa, además de no resolverse simplemente con una
en la que la lisis proteica provoca el acúmulo en sangre adecuación de la ingesta calórica. Su diagnostico impli-
de productos nitrogenados y de electrolitos intracelula- ca la presencia de:
res, así como un estado de acidosis que potencia aún
más la proteólisis8. Como consecuencia, el paciente • Bajos niveles de albúmina, prealbúmina y/o coles-
nota anorexia y náuseas, perpetuándose la situación al terol.
no permitir una ingesta adecuada, dando lugar a una • Pérdida de peso con disminución de la ingesta.
pérdida cada vez mayor de masa muscular y al empeo- • Disminución de la masa muscular medida como
ramiento del estado nutricional. circunferencia muscular del brazo. Distintos me-
La diálisis aplicada en el fallo renal agudo contribuye canismos están implicados en este fenómeno15:
al disbalance hidroelectrolítico, causando una pérdida
significativa de sustancias solubles de bajo peso mo­ 1. Cada vez más estudios apuntan a la influencia de-
lecular que incluye diversos nutrientes como vitaminas. terminante del estado inflamatorio crónico que
Se pierde en torno a 0,2 g de aminoácidos, que se une está presente en la insuficiencia renal crónica14. Es
a una pérdida proteica de entre 5-10 g al día11. frecuente observar concentraciones elevadas de
Por tanto, es fundamental lograr un equilibrio ener- citoquinas proinflamatorias y reactantes de fase
gético positivo, para mantener un balance nitrogena- aguda en todas las fases de la insuficiencia renal.
do neutro, y así evitar complicaciones y acelerar la Esto se ha documentado en diferentes estudios
recuperación de la función renal11, 12. No existe, sin como el de Ikizier et al 15. El origen de este estado
embargo, suficiente evidencia acerca del momento de inflamatorio es múltiple, incluyendo la propia
iniciar el soporte nutricional en estos pacientes, aun- progresión del deterioro renal, las comorbilidades
que de forma general se recomienda hacerlo en las existentes (diabetes, arterioesclerosis, infecciones,
primeras 24 horas (grado de evidencia C)1. Lo que etc.), el estado de respuesta inflamatoria sistémi-
está claramente establecido es que si no se logra mi- ca que supone la enfermedad renal, resistencia
nimizar la pérdida de nitrógeno aumenta la morbi- insulínica, etc. Si bien no está totalmente estable-
mortalidad. cido cómo se produce, parece que interviene de
un lado la acumulación plasmática de marcado-
2.2.  Insuficiencia renal crónica (IRC) res inflamatorios, y de otro la formación de pro-
ductos avanzados de glicosilación (AGE). Todo
La nefropatía crónica es la consecuencia del mante- ello colabora en una mayor proteólisis, acentúa la
nimiento en el tiempo de la agresión renal. A pesar de anorexia del paciente y dificulta su actividad dia-
la compensación funcional inicial que logran las nefro- ria con la consiguiente pérdida de masa muscular
nas sanas, llega un momento en que la hiperfiltración y mayor desnutrición.
a la que se ven sometidas las nefronas restantes termi- 2. Factores endocrinológicos como la resistencia in-
na por determinar su fallo. Los mecanismos exactos sulínica, el hiperparatiroidismo, la elevación de
que llevan a la pérdida de energía y proteica en la en- leptina plasmática (inducida por las citoquinas
fermedad renal avanzada no están del todo elucida- circulantes) o factores gastrointestinales (altera-
dos. Se sabe que el desarrollo de una insuficiencia renal ción de la absorción, gastroparesia) colaboran en
258 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

la anorexia, hipercatabolismo y, en definitiva, el gesta por el malestar generado y el tiempo


desarrollo de caquexia. empleado en el transporte. La diálisis perito-
3. Las estrategias terapéuticas tienen también reper- neal, por su parte, genera distensión abdo-
cusión en el estado nutricional16: minal y conlleva una absorción de glucosa
3.1. En aquellos pacientes en tratamiento con- que induce saciedad18.
servador clásicamente se ha considerado 4. La propia diálisis desencadena una cascada infla-
que la restricción proteica en la dieta reduce matoria por sí misma que colabora al deterioro
la progresión de la nefropatía17. Las modifi- nutricional.
caciones dietéticas (limitación en sal y pota-
sio, en la ingesta de líquidos, etc.) puede 2.3.  Síndrome nefrótico
inducir en los pacientes urémicos una dismi-
nución de su ingesta calórica, que es el des- Se trata de una entidad clínica cuyo origen puede ser
encadenante principal de la malnutrición. múltiple pero cuya característica común es una protei-
3.2. Alteraciones digestivas: Dispepsia en rela- nuria de mas de 3,5 g/1,73 m2 en 24 horas en adultos.
ción con el tratamiento farmacológico, gas- La pérdida excesiva de proteínas en la orina provoca
troparesia en los diabéticos, alteración en el un descenso en la presión oncótica plasmática que da
sabor por la uremia, esteatorrea por insufi- lugar a la característica aparición de edemas y a una
ciencia pancreática, hipoclorhidria, etc. tendencia a retener agua y sodio por una situación
3.3. Los pacientes tratados con diálisis tienen de hiperaldosteronismo hiperreninémico secundario.
aumentados los requerimientos proteicos, Además, se estimula la síntesis proteica a nivel hepáti-
mayor en hemodiálisis que en la diálisis peri- co aumentando los factores de coagulación y lipopro-
toneal (10-13 g por sesión versus 5-24 g) y teínas, filtrándose las de alta densidad (HDL-col), con
además existe en ellos un riesgo de déficit lo que se establece un estado protrombótico.
de vitaminas hidrosolubles y de hierro. Sin Las medidas nutricionales en este grupo de pacientes
embargo, las sesiones de hemodiálisis impli- se centran en:
can muchas veces una reducción en la in-
1. Mantener un balance nitrogenado adecuado me-
diante un aporte energético equilibrado que ase-
Tabla 2.  Factores que contribuyen a la malnutrición
gure unas 35 kcal/kg/día.
en la insuficiencia renal16.
2. Limitar el aporte de sal a 2-4 g diarios.
3. Se recomienda controlar el aporte proteico para
lograr un balance nitrogenado neutro, ajustando
· Toxinas urémicas (leptina?) el aporte en función de la función renal y etiolo-
· Náuseas, vómitos, disgeusia gía del síndrome. Es frecuente recurrir a suple-
· Distensión abdominal y mentos orales, ya que lograr una ingesta adecua-
absorción de glucosa en da es difícil debido a la anorexia que padece el
diálisis peritoneal paciente y a la palatabilidad de los alimentos por
· Malestar posthemodiálisis la restricción sódica.
Anorexia e ingesta
· Restricciones dietéticas
escasa
· Depresión
· Múltiples medicamentos
3.  Evaluación nutricional
· Diálisis inadecuada Mantener al paciente bien nutrido ha demostrado
· Anemia minimizar las complicaciones en la evolución de la en-
· Estatus socioeconómico del fermedad renal, así como ser capaz de retardar la pro-
paciente gresión de la insuficiencia renal. Una correcta evalua-
· Acidosis metabólica ción del estado nutricional y de los hábitos dietéticos
· Alteraciones hormonales de los pacientes es clave para lograrlo17, 19. Además, se
(resistencia insulínica y a ha demostrado que la mayoría de los pacientes con
Enfermedades nefropatía crónica tienden a reducir la ingesta de nu-
la GH)
intercurrentes trientes espontáneamente, alcanzando una ingesta de
· Hiperparatiroidismo
· Membranas de hemodiálisis proteínas diaria incluso por debajo de lo recomendable
bioincompatibles para pacientes urémicos. Diferentes variables relacio-
nadas con el estado nutricional han mostrado tener
Hipercatabolismo impacto en el pronóstico. Se han evaluado distintos
parámetros nutricionales y la influencia de los cambios
Pérdidas de
en los indicadores nutricionales en la supervivencia en
nutrientes en diálisis
diferentes estudios realizados en los últimos años en
Tema 15.  Soporte nutricional en la insuficiencia renal aguda y crónica. Síndrome nefrótico 259

Europa y América19, pero en la práctica clínica no está aumento interdialítico del nitrógeno ureico en
definida de forma universal ninguna que responda a sangre (NUS) y en diálisis peritoneal al ser este
ambos objetivos. Se considera por ello preferible apli- constante se estima a partir de las pérdidas de
car un conjunto de parámetros sencillos. NUS en dializado y orina. La nPCR está normaliza-
Es imprescindible contar con dietistas especializados da para el peso corporal y se considera necesario
para realizar la correcta evaluación y seguimiento del un mínimo de 1 g/kg/día18.
estado nutricional y hábitos dietéticos del paciente20. • Proteínas viscerales:
Con ello, además de lograr una mejor adhesión a la – Albúmina: Clásicamente se ha considerado un
dieta gracias a los diferentes consejos nutricionales con parámetro útil para evaluar la situación calóri-
los que apoyan y adiestran a los enfermos, se consigue co-proteica de los pacientes en diálisis18, 21. En el
un mejor registro de la ingesta real y hábitos del pa- DOPPS21 se confirma este dato como valor pro-
ciente. nóstico. Así, se observó en la cohorte completa
La evaluación nutricional de los pacientes nefrópatas del estudio (población Europea y de EEUU) que
incluye, entre otros, los siguientes parámetros: el riesgo de mortalidad ajustado por edad, raza,
años de evolución de la enfermedad renal y las
• Anamnesis: Debemos recoger la ingesta habitual demás comorbilidades valoradas, aumenta un
del paciente para detectar los déficits y hábitos 1,38% en aquellos pacientes con niveles inferio-
inadecuados, los cambios en el peso, así como la res a 3,5 mg/dl. También se asoció el descenso
medicación habitual que pueda interferir en la durante el período de seis meses de seguimien-
normalidad de la función digestiva. to de los niveles de albúmina a un mayor riesgo
• Valoración global subjetiva: Se trata de un méto- de mortalidad. Todo ello teniendo en cuenta
do sencillo para evaluar y seguir la situación nutri- siempre la influencia de los procesos inflamato-
cional de los pacientes. Mediante preguntas sim- rios crónicos y agudos en los niveles séricos de
ples y la valoración física valora cuatro parámetros albúmina.
(pérdida de peso, anorexia, grasa subcutánea y – Prealbúmina: Su valor de referencia es más alto
masa muscular) en una escala de Likert de siete en pacientes en diálisis por su eliminación renal,
puntos. Distintos estudios17, 19 han demostrado su por lo que se considera que un valor inferior a
eficacia a la hora de determinar el estado nutricio- 30 mg/dl es indicador de una situación de mal-
nal de pacientes renales y es recomendado por nutrición calórico-proteica y es un factor predic-
NFK-DOQI. tivo de mortalidad en pacientes al inicio del
• Parámetros antropométricos: Peso seco, peso ideal. tratamiento con diálisis.
Pliegue cutáneo, circunferencia muscular del brazo. – Creatinina sérica: En los pacientes con insufi-
Se considera que las medidas de estos últimos ma- ciencia renal terminal tratados con diálisis, con
yores del 95% representan una nutrición adecua- un valor estabilizado de creatinina previa a la
da, 70-95% identifica pacientes en riesgo y < 70% sesión, el nivel sérico de la misma es proporcio-
refleja malnutrición. nal a la masa muscular y a la ingesta de proteí-
• Índice de masa corporal (IMC). Existen datos con- nas, aportando datos fiables de la situación
tradictorios acerca de la relación del índice de nutricional y de los cambios dietéticos del pa-
masa corporal y la mortalidad en pacientes con ciente.
insuficiencia renal. Los resultados del estudio rea- – Transferrina: Podemos encontrar valores bajos
lizado por Leavey et al 20 con una cohorte de más debido a la depleción de depósitos de hierro,
de 9700 pacientes en EEUU y Europa muestran frecuente en pacientes en diálisis que se admi-
que tras ajustar los datos por distintas variables nistran EPO recombinante.
demográficas y relacionadas con comorbilidades,
la mortalidad descendía significativamente en los
4.  Requerimientos nutricionales
pacientes de mayor IMC. Además, en el DOPPS
(Dialysis Outcomes and Practice Patterns Study)21 Los requerimientos energéticos de los pacientes pue-
se observa que un descenso en el IMC mayor de den calcularse mediante diferentes métodos. Entre
3,5% se asocia a mayor mortalidad. ellos, el más usado en la práctica clínica, la ecuación de
• Ingesta de proteínas: Dada la dificultad en la prác- Harris-Benedict, es válido tanto en el caso de insufi-
tica de valorarla mediante una encuesta dietética ciencia renal aguda como crónica, aplicando en cada
de 3 días se utiliza para estimarla la tasa de cata- caso el factor de corrección adecuado. Asimismo, ha-
bolismo proteico (PCR), que mide el catabolismo brá que tener en cuenta a la hora de calcular los reque-
proteico (g/día) a partir de las pérdidas de nitróge- rimientos energéticos la necesidad de calcular el peso
no en orina y dializado, que en condiciones de corregido del paciente cuando exista exceso de peso o
equilibrio metabólico son iguales a la ingesta de detectemos una situación de desnutrición severa. De
proteínas. En hemodiálisis, se calcula a partir del forma orientativa y para facilitar la práctica diaria, dis-
260 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

tintos autores han propuesto valores aproximados de Como norma general, siempre habrá que ajustar el
necesidades de kilocalorías por kilogramo y día, que aporte de fluidos, calculando el balance hídrico, y con-
oscilan alrededor de los 20-30 kcal/kg/día en fallo re- siderar la situación del paciente (crónico, agudo, rea-
nal agudo y 35-40 en la nefropatía crónica, en pacien- gudización) y su tratamiento (conservador: diálisis
tes cuyo peso se sitúe en el rango de su peso ideal peritoneal, hemodiálisis). Por lo que, en general, las
±10%22, 23. Sin embargo, hay casos en los que es nece- fórmulas enterales estándar son adecuadas para la ma-
sario individualizar los cálculos para evitar un aporte yoría de los pacientes con fallo renal agudo (grado de
nutricional inadecuado. Por ejemplo, el tratamiento recomendación C). Si existen trastornos electrolíticos
que recibe el paciente debe ser tenido en cuenta. La severos, usaremos fórmulas específicas para nefrópa-
modalidad de diálisis peritoneal supone un aporte ex- tas, y si se precisa restricción de volumen, las preferidas
tra de entre 500 y 1000 kcal al día a expensas de la son las hipercalóricas. En la elaboración de una nutri-
glucosa del líquido de diálisis, que de no ser conside- ción parenteral va a ser el aporte de aminoácidos el
radas en el cómputo global pueden dar lugar a au- principal determinante del volumen.
mento de peso o desarrollo de diabetes. En una sesión En cuanto a las necesidades de minerales y electroli-
de hemodiálisis se administran aproximadamente 30 g tos, también dependerá de la etapa de la enfermedad,
de glucosa, que hay que contabilizar a la hora de ajus- y de la situación nutricional del paciente8. Pacientes en
tar el aporte nutricional. oligoanuria (diuresis < 500 ml/día) tienen una excre-
En la insuficiencia renal aguda, la Guía de Nutrición ción escasa o nula de sodio, potasio, magnesio o fosfa-
Enteral de la Sociedad Española de Nutricion Enteral y to, que ha de considerarse a la hora de diseñar la dieta.
Parenteral (ESPEN)22 propone una distribución calórica Tenemos la opción de determinar la eliminación de
de 3-5 g/kg/día de hidratos de carbono, 0,8-1,2 g/kg/ iones y minerales en orina y el aclaramiento de creati-
día de lípidos, y de proteínas, en función del tratamien- nina para ajustar con más exactitud los aportes, sobre
to, respectivamente 0,6-0,8 si es conservador, 1-1,5 si todo en pacientes con diuresis conservada, en los que
se realiza terapia extracorpórea y < 1,7 g/kg/día en existe gran variabilidad en sus requerimientos. Los pa-
caso de diálisis peritoneal. Es importante, de igual for- cientes en diálisis pueden requerir suplementos de po-
ma, vigilar los niveles de vitamina A por el riesgo de tasio y sodio, dado el aclaramiento eficaz de los mis-
toxicidad con la suplementación nutricional, y evitar mos tanto de la diálisis peritoneal como de la
que la ingesta de vitamina C supere los 30-50 mg al día hemodiálisis, tal y como veremos más adelante. Debi-
(excepto en caso de pacientes críticos, cuyos requeri- do al déficit de vitamina D, estos pacientes requieren
mientos pueden ser superiores). además aportes orales de calcio. Por otra parte, el ca-
En pacientes con IRC que siguen tratamiento con- tabolismo aumentado y la proteólisis favorecen la aci-
servador se considera que la restricción proteica dismi- dosis6, que a su vez tiene efectos perjudiciales y perpe-
nuye la progresión de la insuficiencia renal. No obs- túa la alteración metabólica, por lo que se recomienda
tante, existe un alto riesgo de desnutrición en estos la administración de bicarbonato para mantener pH >
pacientes por la dificultad de que tengan un segui- 7,2 o un bicarbonato sérico > 17 mEq/l.
miento dietético adecuado. Además, la poliquistosis Las necesidades de vitaminas varían también en fun-
renal y otras patologías no responden a la dieta pobre ción del tratamiento. Aquellos tratados con restricción
en proteínas. Por ello, actualmente se recomiendan dietética deben recibir suplementos de vitaminas hidro-
dietas hipoproteicas moderadas 0,8-1 g/kg/día suple- solubles y vitamina D en forma de 1,25 dihidroxivitami-
mentadas en el caso de existir proteinuria con 1 g de na, a no ser que reciban nutrición enteral o parenteral
proteínas de alto valor biológico por cada gramo de correctamente suplementada. En aquellos que reciben
proteína perdida en la orina24, 25. La necesidad de res- sesiones de diálisis, ya sea peritoneal o hemodiálisis, se
tringir el aporte de proteínas a menos de 0,6 g/kg/día recomienda suplementar con vitamina D y B12, ya que
(grado de evidencia A) queda limitado a pacientes con al ir unidas a proteínas se pierden. Además, existen ni-
insuficiencia renal terminal que no son candidatos o veles disminuidos de vitaminas hidrosolubles, vitamina
rechazan entrar en el programa de diálisis. En caso de C, ácido fólico y tiamina, aunque solo se ha evidenciado
recurrir a dietas cuyo contenido proteico sea próximo la necesidad de reponer las dos primeras24, 25.
a 0,6 g/kg/día, el 60% de las mismas debe ser de alto Por último, es fundamental controlar los niveles séri-
valor biológico y acompañarse de un aporte calórico cos de hierro, ya que existen múltiples factores que fa-
suficiente (40 kcal/kg/día). En algunos casos, se puede vorecen su déficit (pérdidas, inflamación crónica, in-
recurrir a dietas de < 0,3 g/kg/día de proteínas suple- gesta escasa). El mantenimiento de valores normales
mentadas con aminoácidos esenciales o cetoanálogos asegura la eficacia de la eritropoyetina y, ayuda a evitar
esenciales que pueden colaborar en reducir la uremia o compensar la anemia, por lo que ante valores de fe-
en unos 10-20 g/día Por el contrario, los pacientes en rritina menores de 100 ng/dl debe aportarse vía oral o
diálisis necesitan 1-1,2 g/kg en el caso de la hemodiá- intravenosa si fuera preciso.
lisis y de 1-1,5g/Kg aquellos en tratamiento con diálisis El síndrome nefrótico tiene su origen en la excesiva
peritoneal. pérdida proteica. Las recomendaciones, siempre adap-
Tema 15.  Soporte nutricional en la insuficiencia renal aguda y crónica. Síndrome nefrótico 261

tadas posteriormente a la situación individual del pa- fallo renal agudo en los que no se han evidenciado
ciente y teniendo en cuenta la etiología, son lograr un complicaciones severas intestinales, metabólicas o me-
aporte de aproximadamente 35 kcal/kg/día equilibran- cánicas. Si bien es cierto que difícilmente se logra al-
do el aporte proteico a la pérdida por orina para inten- canzar el aporte recomendado únicamente mediante
tar lograr mantener un balance nitrogenado neutro. soporte enteral en algunos pacientes.
Además, el 30% de la energía se obtendrá de las grasas Las dosis diarias recomendadas dependen de la si-
en forma de monoinsaturadas y poliinsaturadas, te- tuación nutricional de la que partimos, de la capacidad
niendo en cuenta que el perfil lipídico se irá normali- del paciente para tolerar la ingesta oral, de la comorbi-
zando al corregir la proteinuria. Es fundamental igual- lidad y del grado de catabolismo. Los requerimientos
mente la restricción de sal a 2-4 g diarios. calóricos implican aplicar un factor de estrés de 1,3 en
situación basal, y aumentarlo a 1,5-1,7 en casos con
5.  Nutrición en la insuficiencia renal aguda alto grado de catabolismo que requieran hemodiálisis.
En cuanto al aporte proteico, se calcula una dosis de
El concepto de insuficiencia renal aguda incluye un 0,6 g/kg/día en el primer caso, y de hasta 1-1,5 g/kg/
amplio espectro de alteraciones en el metabolismo, día en pacientes graves o en hemodiálisis, tal y como se
cuyo extremo supone una situación de hipercatabolis- ha explicado anteriormente.
mo severa, asociada a una reducción drástica de la fun- Desde el punto de vista de la nutrición enteral, esta
ción renal. Habitualmente, se trata de pacientes en los será la forma de elección siempre que el tracto intesti-
que existe un fallo multiórganico, sobre todo aquellos nal esté funcionante y, si es posible, se iniciará en
ingresados en unidades de cuidados intensivos (UCI). El las primeras 24 horas si es necesaria. Las fórmulas es-
programa nutricional tendrá por tanto que contemplar tándar son adecuadas para la gran mayoría de los pa­
no solo las alteraciones metabólicas propias del fallo cientes, si bien hay que analizar cada caso de forma
renal, sino de la enfermedad subyacente y de sus com- individual. Los preparados diseñados para patologías
plicaciones, así como del tratamiento aplicado. Cuando específicas no siempre se ajustan adecuadamente a los
el soporte nutricional de estos pacientes es inadecuado pacientes con insuficiencia renal, ya que suponen un
aumenta el riesgo de complicaciones y muerte, tal y amplio espectro de pacientes con connotaciones muy
como demuestran distintos estudios26. Ante un fallo re- particulares en función de la etiología de base, factores
nal agudo, el papel nutricional se centra tanto en tratar precipitantes, comorbilidad, etc.
el posible grado de desnutrición que existiese, como en
asegurar el aporte calórico adecuado si el paciente no • Las fórmulas normoproteicas aptas para pacientes
fuese capaz de lograrlo con la alimentación oral, para no urémicos tienen el inconveniente de la canti-
así preservar la masa magra, acelerar la recuperación de dad y la clase de proteínas que contienen y su alto
la función y evitar la malnutrición. Habrá además que contenido en electrolitos (potasio y/o fósforo).
ajustar estrechamente el aporte calórico, proteico y • No existe evidencia de si las fórmulas inmunomo-
electrolítico en función de la evolución de la enferme- duladoras (enriquecidas con sustratos específicos
dad de base y de la propia insuficiencia renal. como glutamina, arginina, ácidos grasos omega 3,
Aunque existe poca evidencia, tanto sobre el mo- etc.) aportan beneficios añadidos.
mento de iniciar la suplementación nutricional como • Actualmente, las fórmulas diseñadas para pa-
en la indicación del tipo de soporte nutricional, de for- cientes con insuficiencia renal crónica estable
ma general se recomienda que sea en las primeras (bajas en proteínas y en electrolitos) y para pa-
24 horas (evidencia grado C) y es preferible siempre cientes en diálisis, hiperproteicas y bajas en elec-
que se pueda utilizar la nutrición enteral (suplementos, trolíticos, son las más recomendables para pa-
dieta completa oral o mediante sonda o enterostomía) cientes con fallo renal agudo que requieren
por sus efectos tróficos y por su menor coste9, 11, 26. La cuidados intensivos28.
técnica más utilizada en el fallo renal agudo es el acce-
so mediante sonda de alimentación, que ha demostra- La diálisis no implica tanto un aumento del gasto
do en distintos estudios sus efectos beneficiosos24, energético como una pérdida de sustratos nutriciona-
mientras que los suplementos orales suelen ser más les plasmáticos que varían en función del tipo de trata-
útiles en situaciones crónicas. Se debe iniciar la admi- miento (ultrafiltración o hemodiálisis). En este grupo
nistración de la nutrición mediante sonda de alimenta- de pacientes, se deberá suplementar el aporte nutricio-
ción de forma progresiva, comenzando con el 25-50% nal con aminoácidos por vía parenteral27 y se reco-
de los requerimientos totales e ir incrementando el rit- mienda el aporte de soluciones de aminoácidos están-
mo hasta alcanzar su totalidad. Se desconoce clara- dar para mantener un balance neutro. Se ha visto que
mente el riesgo de síndrome de realimentación, no aminoácidos no considerados esenciales28 juegan un
obstante es importante monitorizar estrictamente papel fundamental en determinadas situaciones de es-
los niveles de electrolitos. Los estudios demuestran trés en los pacientes en fallo renal agudo. Solo en
la seguridad de la nutrición enteral en pacientes con aquellos casos en los que se pretenda evitar la diálisis
262 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

estaría indicado el uso de soluciones a base de ami­ aquellos normonutridos que no logren una ingesta
noácidos esenciales como única fuente, a dosis de adecuada de nutrientes22. Se recomienda la nutrición
0,3-0,5 g/kg, y siempre con una duración inferior a tres oral para intentar optimizar la ingesta si no se logra a
semanas para evitar desequilibrios en el balance sérico pesar de los consejos de los dietistas. La nutrición ente-
de aminoácidos que puedan amenazar la salud del pa- ral mediante sonda se reservará para aquellos pacien-
ciente. En cualquier caso, estas soluciones se adminis- tes que se encuentren en una situación de reagudiza-
tran en una fórmula equilibrada de nutrientes que in- ción que les impida alimentarse oralmente. También se
cluya calorías no proteicas y micronutrientes. Desde puede recomendar una toma nocturna enteral para
el punto de vista de los micronutrientes, hay que vigilar completar el aporte nutricional de los pacientes cuya
los niveles de vitamina A y de vitamina C para evitar ingesta oral no sea adecuada.
sobredosificación. No se ha visto que se requieran En los pacientes en tratamiento conservador, con
aportes de zinc y sí hay fuerte evidencia acerca de la restricción proteica moderada-severa, el aporte de su-
necesidad de aumentar la ingesta de selenio y tiamina plementos dietéticos para asegurar la ingesta proteica
al menos al doble de lo establecido durante períodos necesaria ha mostrado mejorar la evolución de la en-
de diálisis prolongados. fermedad24, 25. Igualmente, estudios como el de Caglar
et al 24, han demostrado cómo la toma de suplementos
6.  Nutrición en la insuficiencia renal crónica nutricionales intradiálisis mejoraba los marcadores nu-
tricionales de pacientes malnutridos. Debemos distin-
Los objetivos del tratamiento nutricional en los pa- guir tres situaciones a la hora de enfocar la nutrición en
cientes nefrópatas incluyen el mantenimiento de un el paciente con insuficiencia renal crónica: nutrición en
adecuado estado nutricional, mejorar la calidad de prediálisis, nutrición en hemodiálisis y nutrición en diá-
vida al controlar la azoemia y sus efectos, y reducir la lisis peritoneal.
progresión de la insuficiencia renal. En el fallo renal
crónico, en cualquiera de sus estadios, la nutrición va a
influir en la recuperación del paciente, la morbilidad, la 6.1.  Nutrición en prediálisis
mortalidad y en su calidad de vida. Es de sobra conoci-
El objetivo es lograr el normopeso. Se recomienda
do que una dieta adecuada per se puede retrasar el
un aporte de 35 kcal/kg al día, que se ajustará según el
momento de entrar en programa de diálisis. Existen
estado nutricional del paciente (grado de recomenda-
datos de la mejoría del pronóstico de los pacientes con
ción A)1, 23.
insuficiencia renal normonutridos. La revisión realizada
por Zarazaga et al 23 recomienda con un grado de evi-
dencia A las dietas con restricción en proteínas y fósfo- Proteínas
ro, ya que en la mayoría de los estudios retardan la
caída del filtrado glomerular y la progresión a nefropa- El aporte de proteínas variará en función de la fase
tía terminal en los pacientes en general, y en diabéticos de nefropatía (Recomendaciones de la Kidney Funda-
tipo 1, de forma independiente al control glucémico. tion)12, de acuerdo con los siguientes principios:
Asimismo, se han realizado estudios que analizan y de-
muestran la mejora en la calidad de vida de los pacien- a. Con función renal superior a 50% (creatinina
tes en los que se garantiza una nutrición adecuada5 plasmática inferior a 2 mg/dl o filtrado glomerular
mediante el aporte correcto de proteínas, antioxidan- > 70 ml/min), se aconseja un apor­te de 0,8-1 g/
tes y micronutrientes implicados en el metabolismo kg/día de proteínas de alto valor bio­lógico y 1 g
proteico. más por gramo de proteinuria.
El uso de la nutrición enteral en la insuficiencia renal b. Con función renal entre 20 y 50% (creatinina
crónica en los niños forma parte del tratamiento estan- plasmática de 2 a 5 mg/dl o filtrado glomerular
darizado, ya que, si no, no es posible alcanzar un ade- 25-70 ml/min) la ingesta de proteínas se reducirá
cuado estado nutricional; sin embargo, su uso en adul- a 0,6 g/kg/día, cifra que se considera la mínima
tos con nefropatía crónica ha sido menos habitual, por para un adulto sano (la ESPEN recomienda 0,55-
lo que existen pocos estudios sistemáticos y casi todas 0,60). El 60% de la proteína debe ser de alto valor
las recomendaciones se basan en opiniones de exper- biológico.
tos. Lógicamente, las causas que llevan a la malnutri- c. Con función renal inferior al 20% (creatinina plas-
ción son múltiples, como se ha analizado en epígrafes mática superior a 8 mg/dl o filtrado glomerular
anteriores (acidosis, insulinorresistencia, hiperparatiroi- < 25 ml/min) la restricción protei­ca alcanzará los
dismo, inflamación, etc.), por lo que la terapia nutri­ 0,30 g/kg/día (0,55-0,6 con 2/3 de proteína de
cional tiene que estar integrada en el tratamiento de alto valor biológico según la ESPEN).
todas estas alteraciones metabólicas. El soporte nutri- d. Con función renal inferior (filtrado glomerular
cional oral o enteral estará indicado en aquellos pa- < 10 ml/min) ya se puede ser tributario de depu-
cientes malnutridos para revertir dicho estado, o en ración extrarrenal; solo si esta no fuera posible se
Tema 15.  Soporte nutricional en la insuficiencia renal aguda y crónica. Síndrome nefrótico 263

llegaría a una dieta con un aporte < 0,28 g/kg/día, Vitaminas


que se suplementaría con aminoácidos esenciales
o sus cetoanálogos. Debe suplementarse las siguientes vitaminas:

El mecanismo de acción de las dietas hipoprotei­cas • Vitamina B6: 5 mg/día


no se conoce bien. Parece que dismi­nuyen la produc- • Vitamina D (1,25 dihidroxivitamina D): 0,25 µg/
ción de glucagón y prostaglandinas, evitando así la día.
vasodilatación y por tanto la hiper­filtración glomerular • Vitamina C: 30-50 mg/día.
y el deterioro de función, al tiempo que harían dismi-
nuir la demanda de oxí­geno y, por ende, la producción Con objeto de asegurar una ingesta adecuada, diver-
de radicales libres. Además, también disminuyen la sos estudios29, 30 analizan los efectos de la combinación
producción de diversos mediadores de la inflama­ción de una dieta baja en proteínas con suplementos nutri-
que dañan el riñón, como renina, citoquinas y lí­pidos cionales que permitan asegurar un aporte proteico
bioactivos. ajustado a los requerimientos. La revisión de todos
ellos permite concluir que dicha combinación mejora el
estado nutricional del paciente, frena la evolución de la
Hidratos de carbono
nefropatía y mejora el perfil lipídico, además de ser
Deben suponer la principal fuente de energía, en tor- bien tolerado por el paciente, alcanzando un grado de
no al 60% a expensas de hidratos de carbono comple- recomendación B.
jos; dada la restricción de proteínas, se recomiendan las La vía de administración preferible es la oral siempre
pastas y patatas, y menos las legumbres y verduras por que se tolere, pudiendo recurrir a nutrición enteral
contener potasio y proteínas de poco valor biológico. completa o parcial cuando la ingesta sea insuficiente.
Hay que tener en cuenta que la situación metabólica
Lípidos de los pacientes favorece los trastornos gastrointesti-
nales, sobre todo en caso de los diabéticos en los que
Frecuentemente, estos pacientes tienen hiperlipo- la gastroparesia es frecuente. El uso de procinéticos
proteinemia con aumento de las lipoproteínas de baja puede facilitar la tolerancia.
densidad (LDL y VLDL) y de triglicéridos. La distribu- El tipo de fórmula a emplear varía según las cir-
ción del aporte de grasas, que supone el 30% de las cunstancias del paciente. En aquellos malnutridos
kilocalorías, se ajustará a este hecho. Orientativamen- que van a recibir nutrición enteral poco tiempo se re-
te, se reparte en menos del 10% de grasas saturadas comiendan las fórmulas estándar (grado C), pero si se
y por encima del 10% de monoinsaturadas. La canti- prevé una duración de más de 5 días se debe optar
dad de colesterol diaria recomendada es de menos de por fórmulas específicas con contenido reducido en
300 mg/día. electrolitos (grado C)12.
En el caso de precisar soporte nutricional parenteral
Electrolitos debemos adaptar esta a las recomendaciones nutricio-
nales referidas anteriormente. En caso de encontrarse
Aproximadamente, se debe limitar la ingesta de so-
el paciente sin diálisis y en una situación no hipercata-
dio a 1000 mg/día y de potasio a 40-60 mEq/día. Para
bólica se puede recurrir a soluciones de aminoácidos
ello, se deben enseñar a los pacientes técnicas de coc-
parenterales específicas. Aportan únicamente amino­
ción adecuadas (hervir varias veces la verdura des-
ácidos esenciales e histidina y aportan unos 55 g/l con
echando el agua), restringir las frutas y vigilar el uso de
una relación de aminoácidos esenciales/totales aproxi-
fármacos.
madamente de 1. No obstante, lo habitual será que se
dé un estado hipercatabólico y se recurrirá a ultrafiltra-
Minerales y oligoelementos ción o diálisis que implicará que se precise una nutri-
Los pacientes presentan un déficit en la absorción de ción parenteral completa.
calcio intestinal por déficit de vitamina D3, por lo que
deben suplementarse el calcio de 1500-2000 mg/día y 6.2. Nutrición en hemodiálisis y dialisis
la vitamina D para mantener niveles plasmáticos de
peritoneal
25-OH-Vitamina D > 30 g/dl. Por el contrario, para
restringir el consumo de fósforo a 5-10 mg/kg/día, li- En el caso de los pacientes que se someten a diálisis,
mitar el consumo de lácteos, huevos, carne y algunas los requerimientos calóricos recomendables serían en-
verduras, puesto que el aumento de fósforo contribuye tre 35-40 kcal/kg/día incluyendo el aporte absorbido
al hiperparatiroidismo y al deterioro de la función re- del líquido de diálisis. El objetivo proteico es alcanzar
nal. Suele ser preciso utilizar quelantes por vía oral. El un aporte de 1,2-1,4 g/kg/día de proteínas (2/3 de
hierro debe ser aportado en aquellos que reciben trata- alto valor biológico). En situaciones de reagudización
miento con eritropoyetina. se aplicarán los criterios establecidos para la insufi-
264 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

ciencia renal aguda. La necesidad de agua depende de Minerales


la diuresis residual, a lo que se puede añadir 500-800
ml al día. • Hierro: aportar si se recibe eritropoyetina.
Las soluciones habituales de hemodiálisis aportan • Calcio: 1-1,5 g/día.
200 mg/dl de glucosa, lo que puede suponer hasta • Fósforo: los requerimientos son de aproximada-
400 kcal en una sesión. mente 17 mg/kg/día.
• Zinc y selenio: no se precisan de rutina, pero en
algunos casos se recomienda aporte de 15 mg/día
Vitaminas y 50-70 µg/día, respectivamente.
• Vitamina C: <150 mg/día. Respecto al paciente en tratamiento con diálisis peri-
• Vitamina B6:10-20 mg/día. toneal, precisa un aporte de proteínas mayor, aproxi-
• Acido fólico: 1-5 mg/día (para compensar hiper- madamente de 1,5 g/kg/día. A la hora de calcular los
homocisteinemia). requerimientos calóricos, debemos tener en cuenta
• Vitamina D: en función de la calcemia, fosforemia que absorben entre 500-800 kcal del líquido de diali-
y niveles de PTH. Recomendable mantener 25OH- zado en forma de glucosa. En estos pacientes, al diali-
vitamina D > 30 ng/dl. zarse a diario, las restricciones dietéticas en general
son menores. La ingesta de potasio se puede aumentar
Electrolitos a 2000-3000 mg/día.

El aporte de sodio debe limitarse a 750-1000 mg al Vitaminas


día, debiendo reducirse al mínimo el aporte de agua y
sodio en pacientes anúricos en hemodiálisis durante • Ácido fólico 1-5 mg/día (para compensar la hiper-
los fines de semana para limitar la ganancia interdialí- homocisteinemia).
tica de peso y prevenir la sobrecarga de volumen; • Vitamina B1: 30 mg/día.
respecto al potasio, en aquellos pacientes sin diuresis, • Vitamina B6: 20 mg/día.
con acidosis en tratamiento con IECA no debe superar • Vitamina C: < 150 mg/día.
1 mEq/kg/día. • Vitamina D: mantener 25OH-D > 30 ng/dl.

Tabla 3.  Requerimientos nutricionales en la insuficiencia renal26.

Prediálisis Hemodiálisis Diálisis peritoneal


Energía kcal/día 30-35 35-40 35-40
Balance hídrico +
Fluidos (ml) Balance hídrico Balance hídrico
500 ml
Proteínas > 0,6
1-1,2 1,5
(g/kg/dia) según FG*
Electrolitos
Na (mg/día) 1000** 750-1000 1000-3000
K (mg/día) 1500-3000** 1500-2000 2000-3000
Minerales (mg/día)
Ca 1,5 1,5 1,5
P (quelantes) 400-700 500-1200 500-1200
Mg 200-300 200-300 200-300
Hierro 10-18 Si EPO 10-18 10-18
Elementos traza RDA RDA RDA
Vitaminas (mg/día)
Piridoxina 5 20 20
Ácido fólico 1 1-5 1-5
Vitamina E 15 Ul/día
Tiamina 1,5 mg/día 30 30
Vitamina B12 3 µg/día 3 µg/día 3 µg/día

  * Filtrado glomerular. Véase el texto.


** Depende de la diuresis.
Tema 15.  Soporte nutricional en la insuficiencia renal aguda y crónica. Síndrome nefrótico 265

Minerales y oligoelementos aquellos pacientes de hemodiálisis con malnutrición


grave e hipoalbuminemia. La composición recomenda-
En caso de recibir tratamiento con eritopoyetina, como da por el Consenso de la Sociedad Española de Nutri-
en los demás casos, aportar suplementos de hierro. ción Enteral y Parenteral se recoge en la tabla 4.
El estudio FINE33, el más amplio y riguroso del que
Si no se logran cubrir las necesidades calórico-protei- disponemos, asignó durante un año de forma aleatori-
cas con la dieta normal puede recurrirse a suplementos zada a 186 pacientes en hemodiálisis a recibir nutrición
con preparados enterales, e incluso en casos extremos, parenteral intradiálisis y suplementación oral o solo a
recurrir a la nutrición parenteral durante la hemodiáli- suplementación oral que permitiera lograr una ingesta
sis, si bien no se ha demostrado que los efectos anabó- que cubriera los requerimientos nutricionales y protei-
licos perduren a medio plazo y sí aumenta el riesgo de cos recomendados. De los resultados se extrae que la
complicaciones y el coste. vía de suplementación es indiferente siempre que ga-
Ante un paciente en riesgo o con evidencia de desnu- rantice el aporte nutricional adecuado, que con la in-
trición es fundamental un adecuado consejo dietético tervención se logra una mejoría en los parámetros nu-
para intentar corregir la reducción de la ingesta motiva- tricionales y que esto puede asociarse a una mejoría en
da por las restricciones dietéticas. De ser necesario, recu- la supervivencia. Las alteraciones hormonales induci-
rriremos a la suplementación oral. Las fórmulas diseña- das por la nutrición parenteral intradiálisis (elevación
das específicamente son hipercalóricas normoproteicas de insulina, glucemia y supresión de ghrelina) son otro
y con restricción en el aporte de sodio, potasio y fósforo, factor a tener en cuenta para priorizar siempre que sea
exentas de aluminio, enriquecidas con vitamina D y áci- posible la suplementación oral.
do fólico. También se pueden utilizar fórmulas estándar La nutrición parenteral total será necesaria en situa-
hiposódicas restringiendo el volumen y vigilando los ni- ciones de hipercatabolismo. Debemos tener en cuen-
veles plasmáticos de potasio. Numerosos estudios re- ta el aporte de volumen que implica que puede obli-
frendan la eficacia de la suplementación oral y en base a gar a aumentar las sesiones de ultrafiltración o diálisis.
ello la guía de la ESPEN establece que la nutrición oral es Asimismo, habrá que vigilar los niveles de electrolitos
la vía preferente de realimentación para los pacientes en para suplementarlos adecuadamente, ya que el diali-
hemodiálisis, que mejora la albúmina y otros paráme- zado tiende a generar un balance negativo de pota-
tros nutricionales, siendo la adherencia al tratamiento la sio, fósforo y magnesio. En los pacientes desnutridos,
principal limitación. un aporte excesivo y/o rápido puede dar lugar a un
El mismo tipo de fórmulas se utilizará si es posible síndrome de renutrición con descenso brusco de po-
para la nutrición enteral. Se puede administrar por tasio y fósforo y deterioro del estado general del pa-
SNG en 24 horas o bien por gastrostomía (más habi- ciente34.
tual en niños).
Para intentar mejorar el cumplimiento terapéutico se
ha propuesto la suplementación oral o enteral durante Tabla 4.  Composición de la nutrición parenteral
las sesiones de diálisis; de esta manera, además de ase- intradiálisis.
gurar la adherencia al mismo, se administran en el mo-
mento de mayor catabolismo31, 32. Proteínas: 50 g (se puede incluir 20-30 g de
La nutrición parenteral intradiálisis consiste en admi- dipéptido de alanil-glutamina, Dipeptiven®)
nistrar una nutrición parenteral, durante el tiempo de Calorías no-proteicas (1000-1200 kcal):
la diálisis, aprovechando el alto flujo de la fístula de la · Hidratos de carbono: 150-175 g
diálisis, lo que permite administrar una solución hipe- · Lípidos: 50 g
rosmolar, permitiendo minimizar la sobrecarga de vo- · Relación kcalnp: gN2 de 100-160:1
lumen por la propia hemodiálisis. No obstante, presen-
ta una serie de inconvenientes: se administra una gran Densidad calórica: 1-1,2 kcal/ml
cantidad de nutrientes en muy poco tiempo, produ- Soluciones de polivitaminas (hidrosolubles y
ciendo hiperglucemia e hiperlipidemia y supone el liposolubles)
aporte de nutrientes solo durante las sesiones de he-
modiálisis, de forma que debe ser considerado más Carnitina (1 g)
como un método de suplementación nutricional, que No aporte de electrolitos
como un soporte nutricional total. Existen estudios con Aporte de fósforo individualizado
resultados contradictorios respecto a su eficacia, si
bien está demostrado que mejora parámetros nutricio- Insulina (1 Ul por cada 4-10 g de glucosa)
nales como la prealbúmina o la albúmina, y el peso; los Velocidad de infusión: 250 ml/h
datos sobre supervivencia no están claramente estable-
cidos. Al tratarse de un tratamiento con alto coste y * Tomado de Riobó Pilar y Ortiz Alberto. Nutrición en la
duración debe ser cuidadosamente seleccionado en insuficiencia renal.
266 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

7.  Nutrición en el síndrome nefrótico algunos casos, habrá asimismo que recurrir a la nu-
trición parenteral intradiálisis para alcanzar un equili-
El síndrome nefrótico se caracteriza por proteinuria brio nutricional correcto.
masiva en orina (> 3,5 g/24 h), edemas por hipoalbu-
minemia e hiperlipidemia. Esta pérdida proteica se
9. Bibliografía
debe a un aumento de la permeabilidad glomerular a
las proteínas. Hasta hace poco tiempo, se recomenda-   1. Vázquez M, García-Luna PP Proteínas en nutrición
ba al paciente con síndrome nefrótico el uso de dietas artificial. Insuficiencia renal. Publicación SENPE .Ed
ricas en proteínas, pues se creía que podría minimizar EDIKAMED: B.-2005
la pérdida proteica, y conseguir balances nitrogenados   2. Raffaitin C et al. Nutritional status in patients with
positivos. Estudios realizados tanto en animales como diabetes and chronic kidney disease: a prospective
en humanos, demuestran que con este tipo de dietas study. Am J Clin Nutr. 2007 Jan;85(1):96-101
se consigue solamente aumentar la proteinuria, sin   3. Herselman M, Moosa MR, Kotze TJ, et al. Protein–
mejorar la hipoalbuminemia y el pool proteico renal. energy malnutrition as a risk factor for increased
Diferentes estudios han demostrado tras una restric- morbidity in long term hemodialysis patients. J
ción dietética de proteínas, la reducción de la proteinu- Ren Nutr 2000; 10: 7–15.
ria, con un aumento de las concentraciones plasmáti-   4. Kinney R. Centers for Medicare and Medicaid Ser-
cas de albúmina, y una reducción de las cifras de vices: 2005 Annual Report: ESRD Clinical Perfor-
colesterol y triglicéridos. Por ello, se recomienda que el mance Measures Project. Am J Kidney Dis 2006;
aporte proteico35 sea superior a 0,6 g/kg/día, suple- 48(2): S1–-106.
mentado con una cantidad equivalente de proteínas a  5.  Collins AJ, Foley RN, Herzog Ch et al. Excerpts
las pérdidas por la orina. From the US Renal Data System 2009 Annual Data
Report. Am J Kidney Dis 2010; 55 (1): A6-A7.
  6. Raimundo P, Ravasco P, Camilo M. Does nutrition
8.  Resumen y conclusiones
play a role in the quality of life of patients under
La situación clínica de fracaso de la función renal es chronic haemodialysis? Nutr Hosp. 2006;21
una de las patologías que más grado de malnutrición (2):139-44.
calórico-proteica produce, con numerosos estudios   7. Thurau K. Patophysiology of the acute failing kid-
que demuestran cómo el mantenimiento del estado ney. Clin Exp Dial Apheresis.1983;7:9-24.
nutricional se relaciona con una menor morbilidad y   8. Bristrian B. Role of the systemic inflammatory res-
menor evolución del fracaso renal. ponse syndrome in the development of protein
Los pacientes con fallo renal agudo no complicado calorie malnutrition inESRD. Am J Kidney Dis.
precisarán nutrición enteral solo en aquellos casos en 1998;32: S113-S117.
que no se logre una ingesta adecuada. En los casos   9. Martínez-Castelao A, Górriz JL, Segura-de la More-
más severos, se debe proporcionar soporte nutricional na J, et al. Consensus document for the detection
enteral siempre que se tolere, y preferentemente en las and management of chronic kidney disease. Ne-
primeras 24 horas. Solo en aquellos casos en que el frologia. 2014;34:243-262.
tracto gastrointestinal no sea funcionante se recurrirá a 10. Star R. Treatment of acute renal failure. Kidney Int.
la nutrición parenteral para cubrir los requerimientos 1998;54;1817-1831.
nutricionales. 11. Brown RO, Compher C; American Society for Pa-
El cumplimiento de las recomendaciones dietéticas renteral and Enteral Nutrition Board of Directors.
prescritas a los pacientes con insuficiencia renal cró- A.S.P.E.N. clinical guidelines: nutrition support in
nica es difícil de alcanzar por la anorexia y alteracio- adult acute and chronic renal failure. JPEN J Paren-
nes digestivas que presentan. Esto se une a la com- ter Enteral Nutr. 2010;34:366-77.
plejidad que conllevan las mismas en función de las 12.  Steffee W. Nutritional support in renal failure.
alteraciones fisiopatológicas y comorbilidades aso- Surg Clin N Am. 1981;61:661-670.
ciadas: restricción de líquidos, restricción proteica, 13. Fouque D, Kalantar-Zadeh K, Kopple J, et al. A pro-
restricción de fósforo, hiperlipemia, hipertensión, posed nomenclature and diagnostic criteria for
diabetes, etc., que asocian al mismo tiempo modi­ protein–energy wasting in acute and chronic kid-
ficaciones en las recomendaciones de hidratos de ney disease Kidney Int 2008; 73: 391-398.
carbono, lípidos y sodio. Para ayudar a lograrlo, es 14. Mak,R, Cheung W. Curr Opin Nephrol Hypertens
fundamental la participación de un equipo multidis- 2007 Nov;16(6)542-546.
ciplinar que colabore con los pacientes en el diseño 15. Ikizier T Nutrition, inflammation and chronic kid-
de su dieta. Además, disponemos de suplementos ney disease. Curr Opin Nephrol Hypertens 2008
nutricionales orales específicos para pacientes nefró- Mar;17(2):162-7.
patas, en fase de prediálisis o diálisis que facilitan el 16. Riobó P. Ortiz A, Sánchez Villar O, Caparrós T. Nu-
mantenimiento de un buen estado nutricional En trición en la Insuficiencia Renal Crónica. En el Li-
Tema 15.  Soporte nutricional en la insuficiencia renal aguda y crónica. Síndrome nefrótico 267

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Valoración y soporte nutricional en la Enfermedad diet. Am J Kidney Dis. 1996;28:354-364.
Tema 16.
Soporte nutricional en la hepatopatía crónica
y trasplante hepático
María del Pilar Serrano Aguayo
Facultativo especialista en Endocrinología y Nutrición. Unidad de Nutrición Clínica y Dietética.
Hospital Universitario Virgen del Rocío. Sevilla

José Manuel Sousa Martín


Facultativo especialista en Aparato Digestivo. Servicio de Aparato Digestivo.
Unidad de Trasplante Hepático. Hospital Universitario Virgen del Rocío. Sevilla

Carmen Sendra Fernández


Médico Residente en Aparato Digestivo. Servicio de Aparato Digestivo. Hospital Universitario Virgen
del Rocío. Sevilla

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 269-287.

 1. Introducción
 2.  Epidemiología de la enfermedad hepática crónica
 3.  Manifestaciones clínicas de la enfermedad hepática crónica
 4. Aproximación diagnóstica a la enfermedad hepática crónica. Evaluación del pronóstico
 5. Aspectos nutricionales de la enfermedad hepática crónica
 6. Prevalencia de la malnutrición
 7. Mecanismos de malnutrición
 8. Valoración del estado nutricional
 9. Consecuencias de la malnutrición
10. Tratamiento nutricional
11. Opciones terapéuticas basadas en la fisiopatología
12. Consideraciones nutricionales en el trasplante hepático
13. Resumen y conclusiones
14. Bibliografía

1. Introducción manifestaciones clínicas. Cuando estas se producen,


generalmente se encuentran asociadas al desarrollo de
El hígado es un órgano con un papel principal en la hipertensión portal. El mejor representante de enfer-
síntesis y metabolismo de nutrientes, que resumida- medad hepática crónica es la cirrosis hepática.
mente se ofrecen en la tabla 1. La cirrosis hepática es una enfermedad crónica, difusa
Dadas las múltiples funciones sintéticas, reguladoras y habitualmente irreversible. A nivel histológico, se pro-
y detoxificadoras del hígado, no sorprende que el fallo duce una desestructuración generalizada del parénqui-
hepático se asocie con trastornos metabólicos y nutri- ma hepático, con desarrollo progresivo de fibrosis y for-
cionales amplios. mación de nódulos de regeneración que condicionan
La enfermedad hepática crónica (EHC) habitual­ una severa alteración de la estructura vascular y, como
mente presenta un curso clínico silente con escasas consecuencia de esta la aparición de hipertensión portal.

269
270 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

Tabla 1.  Funciones principales del hígado. tituyen la hepatitis autoinmune, enfermedades colestá-
sicas (cirrosis biliar primaria y colangitis esclerosante
•  Metabolismo hidrocarbonado: primaria), enfermedades por depósito (enfermedad de
– Metabolización y almacenamiento de la glucosa Wilson y hemocromatosis) y en un 5-10% la causa es
(glucogénesis, gluconeogénesis, glucogenólisis) desconocida, siendo etiquetada como cirrosis cripto-
•  Metabolismo proteico: génica.
– Procesamiento de aminoácidos En la actualidad se realizan en España en torno a
– Síntesis de las principales proteínas plasmáticas 1100 trasplantes al año, siendo la tasa de trasplante
(albúmina, globulinas, fibrinógeno, etc.) hepático de aproximadamente 24,9 pacientes por mi-
– Degradación de proteínas y liberación de llón de habitantes y año. Entre las indicaciones de tras-
aminoácidos a la circulación para la síntesis proteica plante hepático destaca la cirrosis hepática y en mucha
•  Metabolismo lipídico: menor proporción el fallo hepático fulminante. La
– Síntesis de apolipoproteínas, fosfolípidos, edad media de los pacientes sometidos a trasplante
colesterol, triglicéridos, degradación y hepático está en torno a los 53 años, siendo un 75%
desaturación de ácidos grasos de ellos varones (en relación con la mayor prevalencia
– Cetogénesis de hepatopatía crónica etílica)2.
– Detoxificación del amoníaco producido por la
desaminación mediante la síntesis de urea y 3. Manifestaciones clínicas de la enfermedad
formación de glutamina hepática crónica
•  Procesamiento de vitaminas y minerales.
La mayoría de las manifestaciones clínicas que se
– Absorción de vitaminas liposolubles, mediante
presentan en las hepatopatías crónicas van ligadas al
síntesis y secreción de sales biliares
desarrollo de hipertensión portal.
– Hidroxilación de la vitamina D
El paciente con cirrosis hepática puede presentar,
– Captación y almacenamiento de varias vitaminas
desde el punto de vista clínico, las siguientes complica-
y minerales
ciones:
– Metabolismo del hierro y el cobre
1. Descompensación hidrópica: Se manifiesta en
forma de ascitis, derrame pleural (habitualmente
A pesar de los recientes avances en el tratamiento de derecho) y edemas periféricos. Constituye la com-
las hepatopatías crónicas, para algunos pacientes la plicación más frecuente de la cirrosis hepática.
única alternativa terapéutica es el trasplante hepático. Asociada al desarrollo de ascitis y/o tratamiento
Actualmente se estima que la supervivencia tras el mis- diurético se pueden producir alteraciones hidro­
mo es del 90% al año y del 70% a los 5 años. Entre los electrolíticas, entre las que destacan la hiponatre-
factores que determinan la morbimortalidad en el pre mia y la insuficiencia renal.
y postrasplante hepático se encuentra la malnutrición, 2. Peritonitis bacteriana espontánea (PBE): Se define
que se ha asociado con mayor riesgo de infecciones, como la infección del líquido ascítico que aparece
hospitalización prolongada y aumento de la mortali- en ausencia de foco infeccioso intraabdominal,
dad postoperatoria1. siendo un fenómeno casi exclusivo de la ascitis
cirrótica. El cuadro clínico es muy variable y osci-
2. Epidemiología de la enfermedad hepática lante, desde sintomatología típica (fiebre, dolor
abdominal) hasta un curso asintomático, en el
crónica
20% de los casos. La PBE debe descartarse ante la
No se conoce exactamente la prevalencia de cirrosis aparición, en un paciente con cirrosis hepática,
hepática en la población general. En nuestro medio, de encefalopatía hepática, insuficiencia renal,
las causas más frecuentes de cirrosis hepática la consti- leucocitosis, fiebre o acidosis. El diagnóstico se
tuyen el alcohol y los virus de la hepatitis B (VHB) y C realiza mediante paracentesis (polimorfonuclea-
(VHC). Tan solo un 15% de las personas con alcoholis- res en líquido ascítico > 250/mm3).
mo crónico desarrollan enfermedad hepática avanza- 3. Encefalopatía hepática: Síndrome neuropsiquiá-
da. La infección por VHC afecta al 1-2% de la pobla- trico de carácter funcional y generalmente reversi-
ción general, evolucionando a cirrosis hepática el 30% ble, consecuencia de un grado avanzado de insu-
de los pacientes, habitualmente tras un período pro- ficiencia hepatocelular y existencia de anastomosis
longado de tiempo de más de 20-30 años tras la ad- portosistémicas, con lo que numerosas sustancias
quisición del virus. Recientemente está tomando cada nitrogenadas de origen intestinal escapan del fil-
vez más protagonismo, especialmente en Estados Uni- tro hepático llegando a la circulación general y
dos, la cirrosis hepática secundaria a esteatohepatitis generando trastorno funcional en el sistema ner-
no alcohólica (EHNA). Otras causas de cirrosis la cons- vioso central. Aunque su patogenia no es del todo
Tema 16.  Soporte nutricional en la hepatopatía crónica y trasplante hepático 271

conocida, se otorga un papel central al amonio en En candidatos a trasplante hepático se ha introduci-


sangre, producto del metabolismo de bacterias do el sistema MELD de la Clínica Mayo para establecer
intestinales sobre proteínas y otros compuestos la gravedad del paciente con vistas al trasplante y, por
nitrogenados, que actúa como tóxico para los as- lo tanto, priorizar a los pacientes con peor pronóstico.
trocitos. La encefalopatía es más frecuente en pa- Este sistema elimina las variables clínicas (ascitis y ence-
cientes sarcopénicos que no sarcopénicos, posi- falopatía hepática) que presentan componente de sub-
blemente por disminución de la captación de jetividad y se basa exclusivamente en variables analíti-
amonio por una masa muscular deplecionada3. cas (tiempo de protrombina expresado en INR,
4. Hemorragia digestiva: En relación con la hiper- creatinina y bilirrubina) estableciendo un valor cuanti-
tensión portal puede aparecer hemorragia diges- tativo, según una fórmula matemática, que se correla-
tiva secundaria a varices gastroesofágicas y/o gas- ciona con la probabilidad de supervivencia a los tres
tropatía de la hipertensión portal. meses. Este índice no incluye valoración nutricional,
5.  Sarcopenia: Se considera una complicación de la que sin embargo es un factor predictivo independien-
cirrosis; de hecho, una de las más frecuentes4, 5. te. La medida de sarcopenia, añadida a la puntuación
Es un importante factor pronóstico en sí misma, y MELD, mejora la predicción de mortalidad8, y se ha
aumenta la tasa de otras complicaciones y la propuesto su uso para para priorizar pacientes en lista
mortalidad de las mismas. Añade valor pronósti- de espera a recibir trasplante hepático9.
co a la puntuación MELD (Model for End-Stage
Liver Diseases)1, 6, 7.
5. Aspectos nutricionales de la enfermedad
6. Otras: En la enfermedad hepática avanzada se
pueden producir manifestaciones clínicas que hepática crónica
afectan prácticamente a todos los órganos, entre La cirrosis se asocia con malnutrición, una de sus
las que destacan: respiratorias (síndrome hepato- complicaciones más frecuentes, que empeora con la
pulmonar, hipertensión portopulmonar), cardia- progresión de la enfermedad, y tiene un impacto ad-
cas (miocardiopatía cirrótica), renal (síndrome verso en el desenlace de la misma. Nuestra compren-
hepatorrenal), adrenal (síndrome hepatoadre­ sión de los procesos metabólicos que acontecen en la
nal), hematológicas (alteraciones de coagulación, cirrosis es limitada, aunque está aumentando en los
leuco-plaquetopenia) e infecciosas. últimos años, quedando aún cuestiones clave sin con-
testar, como la definición de malnutrición, su preva-
4. Aproximación diagnóstica a la enfermedad lencia, las opciones terapéuticas y el resultado de las
hepática crónica. Evaluación del pronóstico mismas. La falta de precisión al hablar de malnutrición
en general, añade confusión a la hora de analizar sus
El diagnóstico de certeza de la cirrosis hepática se
causas, prevalencia y consecuencias. Puede decirse
realiza mediante biopsia hepática, pero, en la práctica
que la malnutrición en pacientes cirróticos incluye la
clínica habitual, en muchas ocasiones el conjunto de
reducción de la masa y fuerza muscular (sarcopenia),
datos clínicos (presencia de ascitis, encefalopatía
así como la pérdida de la grasa subcutánea y visceral
hepática), analíticos (leucopenia, plaquetopenia, alte-
(adipopenia). La combinación de ambas constituye la
raciones de la coagulación), técnicas de imagen
caquexia. El aumento de prevalencia de cirrosis rela-
(ecografía abdominal, TC, RM) que muestren hetero-
cionada con esteatohepatitis está aumentando el nú-
geneidad en el parénquima hepático y/o signos de
mero de pacientes con obesidad sarcopénica10, en la
hipertensión portal, y la endoscopia oral (presencia de
varices esofágicas, datos de gastropatía de la hiper- que, junto con la pérdida de masa muscular, existe
tensión portal), permiten prácticamente asegurar el una preservación o aumento de la masa adiposa. Tam-
diagnóstico en una alta proporción de pacientes sin bién los déficits de micronutrientes forman parte del
necesidad de confirmación histológica, salvo en aque- concepto de malnutrición en la cirrosis. En los estudios
llos que presenten dudas de su estadio evolutivo o más recientes, el eje central de la malnutrición es la
sobre la etiología. sarcopenia11.
El pronóstico de la hepatopatía se realiza mediante La malnutrición es un importante factor pronóstico
la clasificación Child-Pugh que combina datos clínicos en la cirrosis hepática12, 13. Es un predictor indepen-
(ascitis y encefalopatía hepática) con datos analíticos diente de complicaciones14.
(bilirrubina, albúmina y tiempo de protrombina), clasi- Las deficiencias nutricionales son muy frecuentes en
ficando a los pacientes en estadio A (5-6 puntos), B la cirrosis avanzada, debido a una amplia variedad de
(7-9 puntos) y C (10-15 puntos). En la clasificación ori- alteraciones metabólicas asociadas con la enfermedad.
ginal de Child-Turcotte, el estado nutricional estaba La malnutrición tiene un impacto negativo sobre el
incluido como criterio de clasificación. Pese a ser un desenlace de estos pacientes, que es particularmente
factor pronóstico importante, no se incluyó posterior- relevante para aquellos que son candidatos a trasplan-
mente en la modificación de Child-Pugh. te de hígado.
272 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

6.  Prevalencia de la malnutrición La leptina es una hormona producida por los adipo-
citos. Sus niveles circulantes se correlacionan estrecha-
Es difícil estimar la prevalencia de malnutrición en mente con la masa grasa corporal. Disminuye el apeti-
pacientes con EHC, ya que no se dispone de patrón to, la ingesta y aumenta el gasto metabólico. Parece
para su evaluación y cuantificación. En pacientes con estar relacionada con la anorexia que presentan estos
enfermedad hepática avanzada y caquexia, el diagnós- pacientes34. Sus niveles están aumentados en pacientes
tico de malnutrición es obvio. Sin embargo, en esta- con etilismo activo, independientemente de la presen-
dios iniciales y pacientes bien compensados puede ser cia o no de cirrosis y de la masa grasa35. Sus niveles
más difícil decidir si un paciente está malnutrido y en tienden a aumentar a medida que empeora la función
qué grado. Se describe entre un 13% y un 100% de los hepática en pacientes con hepatitis viral y cirrosis post­
pacientes15-17. La prevalencia descrita depende de la hepatitis36, aunque este dato no ha sido confirmado
etiología, severidad y tipo de enfermedad hepática, así por otros estudios37, 38. La fracción unida a proteínas
como del método de valoración nutricional utilizado. puede ser un marcador de gasto metabólico alterado
Estimada por antropometría, se describe entre el 20% en pacientes cirróticos 39.
y el 75%18-20. Si en la estimación se incluyen proteínas Durante los episodios de hospitalización por compli-
viscerales y parámetros inmunológicos la prevalencia es caciones de la enfermedad hepática, es frecuente que
mayor21. En comparación con pacientes ingresados los pacientes estén en situación de ayuno, bien por la
con otras patologías, los cirróticos ingresados tienen propia complicación, bien para realizar algunas prue-
una prevalencia de malnutrición cuatro veces mayor22. bas diagnósticas.
Es más prevalente en pacientes hospitalizados con en- Los pacientes con etilismo frecuentemente hacen
fermedad de origen alcohólico23. Cuanto más avanza- una ingesta deficiente, por el estilo de vida asociado a
da está la enfermedad hepática, mayor es la prevalen- la adicción.
cia de malnutrición24. En candidatos a trasplante
hepático, la prevalencia de malnutrición llega a alcan-
zar el 100%25-27.
7.2.  Malabsorción o maldigestión de nutrientes
En pacientes con enfermedad hepática con colesta-
7. Mecanismos de malnutrición sis, tales como colangitis esclerosante, cirrosis biliar
primaria o colangiopatía autoinmune, es frecuente la
Nuestra comprensión de los procesos metabólicos maladigestión y malabsorción40, con déficit asociado
que acontecen en la cirrosis es limitada, aunque está de vitaminas liposolubles. La insuficiencia pancreática
aumentando en los últimos años. exocrina puede contribuir a esta malabsorción en pa-
La etiología de la malnutrición en pacientes con en- cientes alcohólicos con pancreatitis crónica. Además,
fermedad hepática crónica es múltiple. Desde un pun- la hipertensión portal puede ser causa de malabsor-
to de vista fisiopatológico se pueden considerar tres ción, y el control de la misma podría mejorar el estado
categorías de factores: nutricional de los pacientes41.

7.1. Disminución de la ingesta de nutrientes 7.3.  Alteraciones metabólicas


El descenso de ingesta es una de las principales cau- Se han descrito alteraciones en el metabolismo de
sas que contribuyen a la malnutrición28. Puede estar todos los principios inmediatos. En la tabla 2 se ofrece
motivada por anorexia por alteraciones de leptina, dé- un resumen de las mismas.
ficit de zinc, ascitis refractaria, citoquinas y dietas
poco palatables. La recomendación de restringir sal
7.3.1.  Metabolismo de la glucosa
y/o proteínas puede hacer que la dieta resulte menos
apetecible. Se han documentado alteraciones en la La insulin-resistencia es causa de intolerancia a la glu-
percepción de los sabores29 y en las preferencias de cosa, con hiperglucagonemia e hiperinsulinemia. La into-
alimentos30. lerancia a la glucosa puede estar presente en un 70% de
La saciedad precoz, por una mermada capacidad los pacientes con cirrosis, y hasta un 37% de los pacien-
gástrica, por la presencia de ascitis, es causa de dismi- tes con enfermedad hepática crónica avanzada (EHCA)
nución de ingesta31. Los pacientes pueden presentar pueden desarrollar diabetes mellitus franca42, que repre-
también dolor abdominal, náuseas y alteraciones de la senta un riesgo para la supervivencia a largo plazo43.
motilidad gástrica, síntomas que se relacionan con pér- Existe una depleción de glucógeno hepático y muscu­
dida de peso y con la severidad de la enfermedad hepá- lar en pacientes con EHCA44 que condiciona una menor
tica17. Las citoquinas proinflamatorias (factor de necro- disponibilidad de glucosa como sustrato energético.
sis tumoral, interleuquina 1 y 6), pueden estar elevadas Durante el ayuno nocturno los pacientes ya exhiben
en pacientes con enfermedad hepática crónica avanza- neoglucogénesis, con catabolismo proteico y oxidación
da (EHCA)32. Tienen efectos anorexígenos y favorecen el de lípidos45. Podría asemejarse a un estado de «ayuno
catabolismo proteico y otras alteraciones metabólicas33. acelerado», similar al que desarrollan personas sanas
Tema 16.  Soporte nutricional en la hepatopatía crónica y trasplante hepático 273

Tabla 2.  Cambios metabólicos en pacientes con ticas por varices esofágicas o gástricas, ulceraciones
enfermedad hepática crónica. intestinales o enteropatia12. No obstante, los pacientes
cirróticos estables pueden retener nitrógeno y sinteti-
1.  Cambios en el gasto energético zar masa magra con una nutrición adecuada53 .
– La mayoría normometabólicos La hiperamoniemia está ganando atención como
– Hipermetabolismo en un tercio de los pacientes posible mediador del eje hígado-músculo. El aumento
2. Alteraciones del metabolismo de la glucosa de amonio muscular activa un programa de alteracio-
– Disminución de los depósitos de glucógeno nes moleculares y metabólicas en el músculo, con alte-
– Hiperinsulinemia ración del intercambio de leucina por glutamina, daño
– Disminución de la oxidación de glucosa en la señal por leucina, aumento de expresión de mios-
– Intolerancia a la glucosa tatina, disfunción mitocondrial, aumento de las espe-
– Diabetes mellitus cies reactivas de oxígeno, disminución de la síntesis
3. Alteraciones en el metabolismo de las proteica y aumento de proteólisis mediada por autofa-
proteínas gia54. Todo ello contribuye a la sarcopenia, a la resis-
– Aumento del catabolismo proteico tencia anabólica y la inadecuada respuesta a la suple-
– Gluconeogénesis acelerada a partir de mentación nutricional en pacientes cirróticos. Otros
aminoácidos mediadores propuestos en el eje hígado-músculo son
la endotoxemia, y la disminución de testosterona y
4.  Alteraciones del metabolismo lipídico
hormona de crecimiento.
– Aumento de la oxidación lipídica
– Deficiencias de ácidos grasos esenciales
7.4.  Alteraciones del gasto energético
La mayor parte de los pacientes con EHCA tienen un
tras 2 o 3 días de ayuno46. Evitando los períodos de gasto metabólico normal. Sin embargo, se ha docu-
ayuno mediante tomas frecuentes de alimento a lo lar- mentado la elevación del mismo hasta en un 33% de
go del día, incluyendo una toma a la hora de acostarse, los pacientes55, 56. Este hipermetabolismo se asocia con
se puede disminuir este catabolismo acelerado47. pérdida de masa muscular, masa celular corporal y
masa extracelular y con una menor supervivencia tras
7.3.2.  Metabolismo lipídico trasplante hepático57. Puede persistir más de un año
Está aumentada la lipólisis y la oxidación de lípidos48, después del trasplante58. Puesto que la presencia de hi-
que son utilizados como fuente de energía ante la dis- permetabolismo no es predecible en base a factores
minución de disponibilidad de la glucosa, con el resul- clínicos, severidad o características de la enfermedad
tado de pérdida de masa grasa corporal. Esta moviliza- hepática, es recomendable realizar calorimetría indirec-
ción de lípidos ocurre a pesar de los altos niveles de ta para conocer el gasto metabólico59. Se ha descrito
insulina. Incluso en situación postprandial la oxidación también hipermetabolismo durante las complicaciones
de lípidos sigue aumentada49. Este fenómeno es más de la cirrosis, tales como ascitis o hepatocarcinoma60, 61.
notable durante el ayuno, cuando los lípidos aportan el La termogénesis inducida por los alimentos y el gas-
75% de la energía requerida, el doble que en sujetos to energético asociado a actividad física permanecen
sanos en las mismas condiciones. dentro de la normalidad en pacientes cirróticos62.
Se ha descrito un descenso de ácidos grasos esencia-
les y otros poliinsaturados, en correlación con el grado 8.  Valoración del estado nutricional
de malnutrición y la severidad de la insuficiencia de la
función hepática50, 51. A pesar del cuerpo de conocimiento generado por la
investigación en metabolismo y nutrición clínica, no
hay acuerdo ni estandarización para el diagnóstico y la
7.3.3.  Metabolismo proteico
clasificación de la malnutrición en pacientes con EHC.
Está profundamente alterado en la EHCA. El catabo- La valoración nutricional del paciente con enfermedad
lismo proteico está ya acelerado desde los estadios ini- hepática puede ser difícil, y muchos de los parámetros
ciales de la enfermedad, y empeora a medida que esta de valoración nutricional, útiles en otras situaciones,
progresa52. Las proteínas son utilizadas para neogluco- pueden resultar poco fiables debido a alteraciones de la
génesis. Pueden existir alteraciones en el metabolismo homeostasis de fluidos y del metabolismo proteico. La
de los aminoácidos. La tirosina y la cisteína pueden ha- utilización de varios de ellos conjuntamente aumenta la
cerse esenciales en la EHC. Como consecuencia de este fiabilidad de la valoración nutricional. En algunos pa-
catabolismo proteico ocurre una depleción de masa cientes en estadios avanzados de la EHC el diagnóstico
muscular, la sarcopenia. de malnutrición puede ser obvio; en otras situaciones,
A la pérdida de proteínas contribuyen, entre otros decidir si un paciente está o no malnutrido y en qué
factores, las parecentesis evacuadoras, pérdidas hemá- grado, puede resultar complicado. En cualquier caso, la
274 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

valoración nutricional es crucial en la evaluación com- masa muscular y de panículo adiposo en pacientes con
pleta del paciente cirrótico, así como reconocer la posi- retención de líquidos. La pérdida de peso reciente es
ble necesidad de intervención nutricional. poco específica en presencia de retención de líquidos,
El primer paso para valorar el estado nutricional, tratamiento diurético, y paracentesis evacuadoras. Aun
como en cualquier otra circunstancia, es la historia clí- así, debe ser convenientemente valorada en conjunto
nica completa y la exploración física. En ellas se recoge- con otros parámetros.
rán datos de la naturaleza y evolución de la enferme- El índice de masa corporal, que incluye el peso cor-
dad hepática, así como la presencia de síntomas que poral en su cálculo, tiene igualmente una baja sensibi-
interfieran con la alimentación, tales como anorexia, lidad en pacientes con cirrosis y ascitis severa64.
náuseas, vómitos, diarrea, plenitud postprandial, alte- En obesidad sarcopénica, frecuente entre pacientes
raciones en la percepción del sabor y del olor. Se inves- con cirrosis relacionada con hígado graso y postras-
tigarán las restricciones dietéticas que se hayan reco- plantados, peso e IMC no son buenos estimadores del
mendado al paciente. También el medio familiar, estado nutricional, dado que no diferencian entre
económico y de apoyo social, así como si existe algún masa muscular y masa grasa.
tipo de adicción tóxica.
En la encuesta dietética se investigará la ingesta real 8.2.  Pliegues y circunferencias
de alimentos que hace el paciente. Suele ser útil que
una persona que conviva con él aporte información Pueden proporcionar idea de la masa muscular y el
complementaria a la proporcionada por el propio pa- panículo adiposo. Se pueden afectar por la presencia
ciente, ya que no es infrecuente que él refiera que está de edemas y ascitis, aunque estos no suelen alcanzar
«comiendo bien», cuando su ingesta real es deficiente. las extremidades superiores. Además, el pliegue cutá-
En la exploración física podemos constatar los signos neo varía con la deshidratación e infusión de líquidos
de la propia enfermedad hepática, la presencia de deple- intravenosos. Tienen gran variabilidad entre observa-
ción muscular y de panículo adiposo, edemas, ascitis, etc. dores, por lo que resulta preferible que sea un único
Merecen especial atención los signos de déficits de observador entrenado quien haga las medidas65.
vitaminas y micronutrientes, tales como alteraciones Pese a ello, la antropometría es una herramienta ra-
de faneras, glositis, queilitis angular, hiperqueratosis zonable para valorar el estado nutricional en pacientes
folicular, xeroftalmia, etc. Estos signos suelen ser suti- cirróticos52. La medición de cuatro pliegues se conside-
les o ausentes aun en presencia de déficits de micronu- ra un método adecuado para estimar la masa grasa en
trientes, cuyo diagnóstico habrá que hacer por méto- estos pacientes66-68. La circunferencia muscular del bra-
dos más sensibles. Una mención especial merece el zo es un predictor de masa celular corporal69.
déficit de zinc. Se relaciona con cambios en la percep-
ción del sabor, olor, con el catabolismo proteico y con 8.3.  Valoración subjetiva global (VSG)
la encefalopatía63.
Este método, basado en la historia y el examen clíni-
La medición de requerimientos debería realizarse me-
cos, descrito por Baker y Detsky70, ha demostrado ser
diante calorimetría indirecta, especialmente en pacien-
un método sensible y específico para la valoración del
tes con cirrosis descompensada. En su defecto, puede
estado nutricional en diversas situaciones. Ha sido mo-
hacerse una estimación a partir de la ecuación de Ha-
dificado para su uso en pacientes con EHCA, con una
rris-Benedict. La utilización del peso actual en pacientes
especificidad del 96%71. Sin embargo, tiene baja sensi-
con descompensación hidrópica, o del «peso seco» esti-
bilidad para evaluar los cambios en el estado nutricio-
mado, para el cálculo de la fórmula conlleva un error. Se
nal. No tiene medidas objetivas, y su valor predictivo
ha sugerido la utilización del peso ideal.
no es preciso72.
A continuación, se repasará el valor y las limitaciones
de algunos de los métodos de valoración nutricional.
8.4.  Proteínas plasmáticas
8.1. Peso corporal, peso respecto a la talla, La síntesis de albúmina está en relación con la fun-
índice de masa corporal (IMC) ción hepática y con el estadio clínico de la cirrosis, más
y pérdida de peso que con la presencia y grado de malnutrición73-75.
Los niveles de muchas proteínas circulantes (albúmina,
El peso corporal es una aproximación fácil y simple al prealbúmina, proteína ligada al retinol) se afectan enor-
estado nutricional. La pérdida involuntaria de peso re- memente por la propia enfermedad hepática, así como
fleja déficit en la disponibilidad de nutrientes. Condi- por el consumo de alcohol y el estado de inflamación76.
ción indispensable para ello es la ausencia de alteracio-
nes en el estado de hidratación. La presencia de ascitis
8.5.  Pruebas inmunológicas
o edemas hace de esta medida un parámetro no fiable
en la valoración del estado nutricional. El manteni- Los parámetros inmunológicos son herramientas
miento de peso puede acompañarse de una pérdida de poco fiables para valorar el estado nutricional en pa-
Tema 16.  Soporte nutricional en la hepatopatía crónica y trasplante hepático 275

cientes con EHC, ya que la propia enfermedad hepáti- Los métodos fáciles de usar, tales como la VSG, las
ca, independientemente del estado nutricional, puede circunferencias y pliegues, y la dinamometría de pren-
producir linfopenia, anomalías en los tests cutáneos de sión, se consideran adecuados para la identificación de
hipersensibilidad retardada y disminución de los nive- pacientes cirróticos con malnutrición72 y la ESPEN
les de complemento77. (Euro­pean Society for Clinical Nutrition and Metabo-
lism) recomienda su uso en pacientes con enfermedad
8.6. Excreción de creatinina en orina hepática90.
de 24 horas La combinación de varios parámetros puede aumen-
tar la fiabilidad de la valoración nutricional. Así, el
Puede ser útil en pacientes con EHC, para valorar la criterio combinado de dinamometría de prensión me-
masa muscular78. No es fiable en pacientes con daño nor de 30 kp, junto con circunferencia muscular del
renal, que es frecuente en pacientes cirróticos79. brazo menor de 23 cm tiene una sensibilidad del 94%
y un valor predictivo negativo del 97% en la identifi-
8.7.  Estimación de la composición corporal cación de pacientes con depleción de masa celular
corporal69.
• Potasio total corporal
Permite la estimación de la masa celular corporal. 8.9. Royal Free Hospital Nutritional Prioritizing
Se ha demostrado su precisión en pacientes con
retención de líquidos. Sin embargo, no ha sido
Tool (RFH-NPT) (figura 1)
validado en la EHC. Es un esquema global para determinar el riesgo nu-
• Impedancia bioeléctrica (BIA) tricional en pacientes con cirrosis, que incorpora medi-
Este método simple permite estimar la masa ma- das subjetivas y objetivas. El riesgo se evalúa mediante
gra y grasa a partir de la conductividad eléctrica y la suma de puntuaciones. Es un predictor independien-
la impedancia corporal, mediante ecuaciones te de progresión de enfermedad y de supervivencia li-
predictivas. Una de sus principales limitaciones es bre de trasplante91.
la presencia de retención de líquidos, que altera
la medida de estos parámetros. La fiabilidad en 8.10. Micronutrientes
pacientes con EHC está discutida7, 80-83. En pacien-
tes sin ascitis la estimación de la masa magra me- El hígado regula las rutas metabólicas y el trasporte
diante BIA muestra una buena correlación con la de elementos traza y vitaminas, y es responsable de la
medición de potasio corporal total, pero no así en excreción de algunos de ellos, a través de la formación
pacientes con ascitis84. Uno de los parámetros de bilis (manganeso y cobre). Participa por tanto en su
que se pueden medir con BIA es el ángulo de biodisponibilidad, distribución y posible toxicidad.
fase, propuesto como marcador de estado nutri- Investigaciones sobre la concentración de minerales
cional, con valor pronóstico en una amplia serie y vitaminas en pacientes con enfermedad hepática
de condiciones clínicas85, entre ellas la cirrosis he- crónica han encontrado niveles disminuidos de zinc,
pática86. selenio y magnesio, y variables de manganeso y co-
• DEXA (Dual-Energy X-Ray Absorptiometry) bre, más alterados a mayor severidad de la enferme-
Podría resultar útil para medir masa ósea, masa dad92-94. Estos descensos pueden estar relacionados
grasa y masa magra. Muestra correlación con pa- con baja ingesta, restricción dietética de proteínas,
rámetros antropométricos en pacientes con cirro- alteraciones de absorción intestinal, hipertensión por-
sis y sin retención de fluidos67. Esta técnica no está tal, hipoalbuminemia, pérdidas por diarrea y trata-
validada en pacientes con retención de fluidos. miento diurético. Sin embargo, las causas específicas
• TC. El área de músculo psoas en una sección a la y las implicaciones de estas anomalías no están bien
altura de L3-L4 ha sido validada como medida fia- aclaradas.
ble de la masa muscular en pacientes con cirro- Los déficits de vitaminas hidrosolubles, incluyendo
sis87, 88. La cuantificación de masa muscular es un vitamina C y complejo B, son particularmente frecuen-
parámetro extra que se puede extraer de una TC tes en cirróticos con alcoholismo activo, aunque tam-
realizada por otro motivo, a menudo de rutina, a bién pueden encontrarse en ECH no alcohólica95.
pacientes cirróticos. Los niveles plasmáticos bajos de vitaminas liposolu-
bles pueden estar presentes en pacientes con cirrosis
de cualquier etiología, aunque son más prevalentes en
8.8.  Dinamometría de prensión
pacientes con colestasis96. El más frecuente es el de vi-
La función muscular evaluada mediante prensión de tamina D, descrito en un 90% de pacientes con cirrosis,
la mano es un factor pronóstico independiente en pa- 29% de ellos con deficiencia severa97. Podría ser un fac-
cientes con cirrosis72, 89. Requiere la colaboración del tor independiente de riesgo de mortalidad en pacien-
paciente. tes con EHNA98.
276 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

Paso 1
¿Tiene el paciente una hepatitis aguda alcohólica o está recibiendo
nutrición enteral por sonda?
No (puntuación 0) Sí (puntuación 6)

Paso 2
¿Tiene el paciente una sobrecarga hídrica (p. ej., edema periférico/ascitis)?
No (puntuación 0) Sí (puntuación 1)

IMC kg/m2 ¿Interfiere la sobrecarga hídrica en


Puntuación la capacidad de comer del paciente?

> 20 =0 Puntuación

18,5-20 =1 No =0

< 18,5 =2 A veces =1


Sí =2

Pérdida involuntaria de peso en los ¿Se ha reducido la ingesta diaria


últimos 3-6 meses del paciente el 50% o más en los
Puntuación últimos 5 días?

< 5% =0 Puntuación

5-10% =1 Sí =0

> 10% =2 No =2

Si el paciente presenta una patología ¿Ha perdido peso en los últimos


aguda y ha permanecido o va a 3-6 meses?
permanecer en ayudas durante > Puntuación
5 días
No =0
Puntuación
Difícil evaluar (diuréticos) = 1
=2
Sí =2

Paso 3
Suma todas las puntuaciones para calcular el riesgo
global de malnutrición
Guías de manejo
Puntuación 0 Puntuación 1 Puntuación 2-7
Bajo riesgo Riesgo de manejo Alto riesgo
– Cuidados habituales. – Cuidados habituales. – Valorar derivar a Nutrición.
– Repetir screening semanalmente. – Vigilar recuento de ingesta. – Vigilar recuento de ingesta.
– Animar a comer y ofrecer snacks. – Animar a comer y ofrecer snacks.
–R epetir el screening – Repetir el screening
semanalmente. semanalmente.

Figura 1.  Royal Free Hospital Nutritional Prioritizing Tool (RFH-NPT).

9.  Consecuencias de la malnutrición ratoria en pacientes cirróticos se relaciona con una


mayor morbimortalidad postoperatoria109, 110. Es un
La malnutrición en pacientes con EHC, especialmen- mejor predictor del resultado del trasplante hepático
te la sarcopenia, se asocia con menor supervivencia y que el tradicional estadio Child-Pugh111, 112. Es un fac-
mayor riesgo de complicaciones, tales como sepsis, tor de riesgo independiente para desarrollo de hepa-
ascitis refractaria, encefalopatía hepática, peritonitis tocarcinoma113.
bacteriana espontánea, síndrome hepatorrenal, com-
plicaciones infecciosas peritrasplante y riesgo de san- 10.  Tratamiento nutricional
grado por varices5, 14, 17, 27, 99-107. Cada una de estas
complicaciones agrava el estado catabólico reducien- Puesto que la malnutrición se asocia a una mayor
do más la masa muscular108. La malnutrición preope- tasa de complicaciones y a una mayor mortalidad en
Tema 16.  Soporte nutricional en la hepatopatía crónica y trasplante hepático 277

pacientes con ECH, la identificación, prevención y trata- 10.1.1.  Pacientes obesos y con sobrepeso
miento de la misma se convierte en un objetivo priorita-
rio. Sin embargo, no está aclarado qué tipo de interven- La proporción de pacientes cirróticos con sobrepeso
ción es eficaz para revertir o mejorar la sarcopenia, u obesidad está creciendo en los últimos años, y se
aspecto central de la malnutrición y factor pronóstico describe prevalencia de hasta el 20% de pacientes en
principal en pacientes con EHC, como señalan las inves- espera de trasplante. No hay información específica so-
tigaciones más recientes. Existe una resistencia anabóli- bre requerimientos nutricionales para estos pacientes,
ca y una respuesta inadecuada a la suplementación de modo que son de aplicación las recomendaciones
nutricional en pacientes cirróticos114, 115. Ante la creen- generales. Sin embargo, hay que tener en cuenta que
cia de que la reducción de ingesta era la causa más la excesiva restricción de ingesta para intentar reducir
importante de malnutrición y sarcopenia en estos pa- el exceso de peso puede conllevar pérdida de masa
cientes, la suplementación nutricional ha venido siendo muscular. En especial durante los episodios de des-
el foco terapéutico más importante para prevenir y tra- compensación, los intentos por reducir peso deben ser
tar la malnutrición. Dado lo inconsistente que ha resul- cuidadosos, con reducción de carbohidratos y grasa y
tado este abordaje, se hace necesaria la búsqueda de manteniendo un alto aporte proteico. Basándose en
nuevas estrategias de intervención sobre la sarcopenia y consensos, se ha sugerido aporte energético de 25-35
su impacto. kcal/kg para pacientes obesos, y 20-25 kcal/kg para
A pesar de lo dicho, no es adecuado no realizar un obesos mórbidos118.
soporte nutricional cuando se identifica indicación ge- Requerimientos proteicos. Hay suficiente eviden-
neral del mismo. De modo que a continuación se des- cia para recomendar 1,2 a 1,5 g/kg de peso, en pacien-
cribe cómo realizarlo. Más adelante se ofrece una bre- tes cirróticos estables o en situación aguda, incluyendo
ve descripción de las opciones terapéuticas basadas en la encefalopatía90, 118.
la fisiopatología, muchas de ellas aún en proceso de El efecto anabólico en la masa muscular aún no se
evaluación. ha establecido.
Los pacientes con ingesta deficiente deben recibir Nutrición oral. En general, los pacientes con enfer-
evaluación y asesoramiento nutricional. medad hepática toleran una dieta normal. La mayoría
de ellos no requieren restricciones dietéticas, y éstas
10.1.  Suplementación nutricional pueden llegar a ser perjudiciales, dificultando que el
paciente cubra todos sus requerimientos. Por tanto, las
Puesto que la ingesta calórica y proteica está fre- restricciones deben hacerse individualizadamente valo-
cuentemente descendida en pacientes cirróticos, las rando cuidadosamente si son necesarias realmente.
Guías y Consensos han recomendado proporcionar Se debe recomendar una ingesta adecuada a los
cantidades adecuadas de calorías y proteínas mediante requerimientos del paciente, y el uso de suplementos
dieta o suplementación oral, y nutrición enteral o pa- nutricionales cuando la ingesta sola sea insuficiente
renteral cuando esté indicado. para cubrir los mismos. Los períodos de ayuno deben
Los requerimientos energéticos dependen del es- reducirse al mínimo, mediante tomas frecuentes de
tado clínico del paciente. Pacientes cirróticos compensa- alimentos, así como una toma a última hora de la
dos y estables tienen unos requerimientos energéticos noche y un desayuno temprano, medidas que pueden
similares a los de controles sanos46. Durante períodos de invertir algunas de las alteraciones metabólicas, ate-
estrés (cirugía, sangrado, infección) estos requerimien- nuando el fenómeno de «ayuno acelerado»120-125. Esta
tos aumentan. En pacientes cirróticos estables se pue- minimización del tiempo de ayuno parece ser la inter-
den calcular los requerimientos energéticos a partir de la vención aislada más eficaz para reducir la sarcope-
ecuación de Harris-Benedict más un 30%116. General- nia126, 127.
mente un aporte calórico de 30-35 kcal/kg es suficiente
en pacientes cirróticos estables con actividad modera- 10.2.  Restricción de sodio y fluidos
da28, 117. En individuos con aumento de actividad física y
malnutridos se pueden requerir más de 40 kcal/kg118. Se La restricción de sodio se suele recomendar a pacien-
debe evitar el exceso de calorías, ya que promueve la tes con retención de líquidos, ascitis y edemas, que no
disfunción hepática y un exceso de producción de dióxi- responden a tratamiento diurético. La eficacia de esta
do de carbono119. Además, no parece eficaz en recupe- medida a largo plazo tiene una evidencia pobre y de-
ración de sarcopenia, y podría favorecer el aumento de batida128. Algunos estudios sugieren que no hay bene-
masa grasa. Para el cálculo de requerimientos se puede ficio, incluso puede ser perjudicial129. Se ha iniciado un
estimar el peso euvolémico, es decir descontando lo es- protocolo de revisión sistemática para analizar esta
timado por ascitis y edemas, que puede alcanzar 15 kg cuestión130. Restringir a menos de 60 mEq al día, suele
en ascitis severa. Otros autores recomiendan el uso de hacer la dieta poco apetecible, y suele ser causa de in-
peso ideal, puesto que la estimación del peso seco pue- gesta energética y proteica insuficiente131. Excepcional-
de tener un margen de error amplio118 mente suele ser necesario llegar a reducir la ingesta de
278 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

sodio severamente (menos de 22 mEq/día). Restriccio- de los pacientes97. Los niveles séricos de vitamina A
nes menores, junto con tratamiento diurético, suelen pueden no correlacionar con los niveles hepáticos de la
ser suficientes. Hacer restricción de sodio en pacientes misma140. Puesto que los niveles hepáticos elevados de
que ingieren menos del 50% de la dieta hospitalaria es vitamina A pueden empeorar la función hepática, se
redundante. Más importante es la educación nutricio- debe tener cuidado con el aporte de vitamina A basán-
nal sobre contenido en sodio de los alimentos. La res- dose tan solo en los niveles séricos de la misma141.
tricción de agua se reserva para pacientes con natremia La depleción de vitaminas hidrosolubles es frecuen-
menor de 120 mmol/l. te, especialmente en pacientes con enfermedad hepá-
tica etílica142.
10.3. Restricción de proteínas y uso de El déficit de zinc y de selenio se ha observado en
pacientes con cirrosis, tanto de origen alcohólico como
aminoácidos de cadena ramificada (AACR)
no143, 144. El déficit de zinc es frecuente en pacientes
La restricción de proteínas debe evitarse de modo ge- con ECHA145, y su suplementación, cuando existe défi-
neral, ya que puede empeorar el estado nutricional sin cit, puede ser beneficiosa, con mejoría del metabolis-
mejorar la encefalopatía hepática. Es una práctica erró- mo de aminoácidos y del grado de encefalopatía146, 147.
nea común prescribir restricción proteica a pacientes El manganeso puede acumularse en pacientes cirró-
con encefalopatía hepática, en la creencia de que las ticos y parece prudente no dar suplementos que lo
proteínas contribuyen al mantenimiento de la encefalo- contengan118.
patía132, 133. Es perjudicial y contribuye a un aumento del En pacientes con etilismo son frecuentes las deficien-
catabolismo proteico134. Pacientes con cirrosis hepática cias de ácido fólico, magnesio, zinc y tiamina. En pa-
y encefalopatía episódica toleran dieta sin restricción de cientes con descompensación cirrótica o en riesgo de
proteínas135 desde el momento en que se inicia el trata- malnutrición, está justificado el tratamiento con un
miento de la misma. De hecho, una adecuada nutri- preparado polivitamínico durante dos semanas118.
ción, por sí misma, puede contrarrestar la encefalopatía
hepática. Se desaconseja encarecidamente restringir a Nutrición enteral. Si la ingesta oral continúa sien-
menos de 1 g/kg día de proteína. En el caso de pacien- do insuficiente, se considerará la nutrición enteral a
tes que parecen no tolerar más de esa cantidad, a me- través de una sonda flexible de pequeño calibre90.
nudo los síntomas se acaban resolviendo al descubrir Este tipo de sondas no aumentan el riesgo de san-
un desencadenante oculto de encefalopatía (sangrado, grado por varices esofágicas148. El sangrado digestivo
no cumplimiento terapéutico, abuso de sustancias, lento o intermitente no es una contraindicación para la
etc.). La suplementación con AACR puede contribuir a nutrición enteral.
la mejoría de la encefalopatía 136, aunque no han sido Una opción aceptable es proveer la nutrición enteral
comparados frente a otras medidas antiencefalopatía. durante la noche, permitiendo la ingesta oral durante
Sustituir las proteínas de origen animal por las de ori- el día. No se recomienda la colocación de gastrosto-
gen vegetal, más ricas en AACR y acompañadas de fibra mías o yeyunostomías en pacientes con ascitis, por el
prebiótica, podría tener utilidad118. riesgo de complicaciones tales como peritonitis o fístu-
Los aminoácidos ramificados podrían constituir una la de líquido ascítico149.
opción terapéutica basada en la fisiopatología. Isoleu- Se deben evitar períodos prolongados sin soporte
cina y valina son sustratos anapleuróticos, que pueden nutricional, dada la dificultad en mantener y reponer el
retirar amonio, mediador de la sarcopenia, y por tanto estado nutricional.
revertir la misma137. En pacientes sarcopénicos, la su- En pacientes con retención de líquidos la fórmula en-
plementación con AACR 12 g al día, mejora la supervi- teral será preferiblemente energética (1,5 kcal/ml)150.
vencia106. Es importante descartar la presencia de malabsor-
ción, sobre todo en pacientes con colestasis y etilismo
10.4.  Suplementos vitamínicos y minerales con posible insuficiencia pancreática. De ser así, habrá
que considerar el uso de fórmulas oligoméricas, aceite
Los pacientes con ECHA tienen riesgo de múltiples MCT y suplementación con enzimas pancreáticas.
deficiencias de micronutrientes, como se ha menciona- Hay estudios con resultados contradictorios sobre el
do anteriormente. papel de la nutrición enteral en pacientes cirróticos, y
La deficiencia de vitaminas liposolubles puede pre- se requiere mayor investigación115.
sentarse en pacientes con esteatorrea por colestasis o Si el paciente no es capaz de ingerir alimentos por
deficiencia de sales biliares y en pacientes con etilis- boca por un bajo nivel de conciencia, como puede
mo138, aunque pueden estar presentes también en pa- ocurrir durante los episodios de encefalopatía, se debe
cientes sin colestasis139. Se recomienda monitorizar ni- iniciar nutrición enteral a través de sonda nasogástrica.
veles de vitaminas liposolubles, y suplementar las Incluso pacientes con encefalopatía episódica no ob-
deficiencias. El más frecuente es el de vitamina D, como tienen beneficio de la restricción proteica transitoria, y
se ha referido anteriormente, presente hasta en un 90% pueden recibir aporte proteico de 1,2 a 1,5 g/kg135.
Tema 16.  Soporte nutricional en la hepatopatía crónica y trasplante hepático 279

La mayoría de las fórmulas estándar ya contienen mificados, comercializadas como tratamiento de la


una proporción considerable de AACR, hasta un 25%. encefalopatía hepática, no son equilibradas en su con-
Las fórmulas enriquecidas en AACR llegan al 35 y 41%. tenido en nutrientes, y no se recomiendan para ser
No hay evidencia suficiente de que estas fórmulas re- usadas solas ni como única fuente de nitrógeno en una
sulten superiores a las estándar en cuanto a balance solución de nutrición parenteral. Se recomienda el uso
nitrogenado, síntesis de proteínas y encefalopatía, de soluciones de aminoácidos estándar para la mayoría
aunque hay estudios que documentan una disminu- de pacientes con EHCA.
ción de eventos (muerte, frecuencia de hospitalización La glucosa y los lípidos deberían aportarse en una
y duración de la misma)151. Su coste es mayor y su pa- proporción de 65-35 a 50-50% de las calorías no pro-
latabilidad es pobre. En niños podrían resultar útiles152. teicas.
Se requieren más estudios para valorar su beneficio. Aunque el soporte nutricional es útil para minimizar el
déficit nutricional acumulado que frecuentemente pre-
Nutrición parenteral. Las indicaciones de nutrición sentan pacientes cirróticos, especialmente hospitalizados,
parenteral en pacientes con EHCA son las mismas que en y aunque la desnutrición se asocia con un peor resultado
cualquier otra situación; debe reservarse solo para pa- en pacientes con EHCA, hasta ahora no se ha podido evi-
cientes con intolerancia a la nutrición enteral, o para denciar que el soporte nutricional en cualquiera de sus
pacientes con tubo digestivo no accesible o no funcio- formas, logre mejores resultados en estos pacientes153.
nante (por ejemplo, obstrucción, íleo). Se recomienda
iniciarla cuanto antes, en pacientes moderada o severa- 11. Opciones terapéuticas basadas
mente malnutridos, que no pueden ser alimentados por
vía oral o enteral. En caso de que un paciente deba estar
en la fisiopatología
sin nutrirse más de 12 horas se debe aportar glucosa Las estrategias para prevenir o revertir la sarcopenia,
intravenosa (2-3 g/kg/día), y si el ayuno se prolonga más basadas en la fisiopatología de la misma, algunas de
de 72 horas, continuar con nutrición parenteral. En caso ellas aún bajo evaluación, podrían resultar eficaces. Se
de enfermedad de origen alcohólico, antes de adminis- ofrece un resumen de las mismas en la tabla 3.
trar glucosa intravenosa se debe aportar tiamina para
prevenir la encefalopatía de Wernicke116. 12. Consideraciones nutricionales en el
Hay que tener en cuenta el riesgo particularmente ele-
trasplante hepático
vado de sepsis de catéter y de complicaciones mecánicas
(pneumotórax) en pacientes malnutridos severamente. El trasplante hepático es actualmente el tratamiento
Con respecto al aporte de nitrógeno y calorías, son definitivo para curar la EHCA. La sarcopenia es un im-
útiles las mismas guías que para nutrición oral y ente- portante factor que contribuye a resultados adversos
ral. Las soluciones que solo contienen aminoácidos ra- en pacientes que se someten a trasplante hepático, ta-

Tabla 3.  Opciones terapéuticas basadas en la fisiopatología.

Mecanismo Tratamiento RESPUESTA


Hiperamoniemia Lactulosa, rifaximina No evaluado
Aumento amonio muscular Esteres de alfa cetoglutarato No evaluado
Deficiencia muscular de AACR Reponer AACR Respuesta parcial137
Aumento de gluconeogénesis, ayuno Suplemento a última hora de la
Parcialmente efectivo
acelerado noche
IGF bajo IGF-1, GH No efectivo
Testosterona baja Testosterona Parcialmente efectivo
Aumento de miostatina Antagonistas de miostatina No estudiado
Daño en señal mTORC1 L-citrulina No estudiado
No efectivo. Riesgo de sangrado por
Disminucion de actividad física Ejercicio aeróbico y de resistencia
varices
Hipertension portal TIPS Aumento de la masa muscular154, 155

Abreviaturas: AACR: aminoácidos de cadena ramificada; GH: hormona de crecimiento; IGF-1: factor de crecimiento insulínico-1;
TIPS: shunt porto-sistémico transyugular intrahepático.
280 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

les como mayor estancia en UCI y hospitalaria, mayor La utilización de glucosa por el hígado trasplantado
tasa de sepsis y menor supervivencia1, 156, 157, 109. está típicamente reducida en las primeras horas, sien-
No hay estudios bien diseñados que permitan identi- do los ácidos grasos el sustrato preferentemente utili-
ficar intervenciones nutricionales realmente útiles en el zado. Algunos autores recomiendan administrar la glu-
postoperatorio de trasplante hepático158. cosa en pequeñas cantidades, sin insulina para no
La Sociedad Europea de Nutricion Enteral y Parente- impedir la movilización de grasa periférica161. En la
ral (ESPEN), en sus guías de nutrición enteral recomien- práctica, la utilización de sustratos puede monitorizar-
da iniciar nutrición enteral o alimentos orales dentro de se midiendo los niveles sanguíneos de glucosa, lactato
las primeras 12-24 horas de postoperatorio150. y triglicéridos.
Se recomiendan fórmulas poliméricas hiperproteicas El hipercatabolismo proteico propio de la cirrosis se
e hipercalóricas, sobre todo en pacientes con ascitis exacerba en el período postrasplante. El aporte de
para mantener un adecuado equilibrio hídrico; ricas en 1,2 g/kg de proteínas resulta en balance nitrogenado
AACR en pacientes que desarrollen encefalopatía he- negativo en la mayoría de los pacientes trasplantados,
pática durante la nutrición enteral y peptídicas en caso durante al menos 1 mes141.
de sospecha de malabsorción. Los niveles séricos de fósforo, potasio y magnesio
Con la excepción de unos mayores requerimientos tienden a deplecionarse con rapidez en el período pos-
de nitrógeno, los pacientes trasplantados no difieren trasplante debido al tratamiento diurético y al síndro-
de otros pacientes con cirugía mayor en cuanto a re- me de renutrición, cuya aparición debe vigilarse.
querimientos de macronutrientes. Los micronutrientes Se desconoce si la resistencia anabólica de la cirrosis,
y electrolitos deben monitorizarse para detectar y co- y la sarcopenia revierten tras trasplante hepático. Se ha
rregir posibles estados de deficiencia. observado con frecuencia un empeoramiento de la sar-
Los requerimientos energéticos tras el trasplante son copenia tras el trasplante162, a veces enmascarada por
similares a los previos al mismo159. En aquellos pacientes obesidad163. Se desconoce si se relaciona con conse-
que ya eran hipermetabólicos previamente al trasplante, cuencias metabólicas del trasplante, medicación em-
el hipermetabolismo suele continuar tras el mismo160. pleada, o complicaciones postrasplante.

Tabla 4.  Guías generales para el soporte nutricional en pacientes con EHCA.

Los profesionales que asisten a pacientes con EHCA deben tener en mente la malnutrición como complicación muy
frecuente de la enfermedad hepática y como causa de otras complicaciones.
Realizar evaluación nutricional frecuente en pacientes con EHCA.
Excluir malabsorción y maladigestión en pacientes con colestasis.
Evaluar masa ósea especialmente en pacientes que van a someterse a trasplante.
Restringir sodio solo si la retención de líquidos no puede manejarse con fármacos.
No restringir fluidos salvo hiponatremia menor 120 mmol/l.
Descartar déficit de vitaminas liposolubles y zinc.
Evitar períodos largos de tiempo sin alimento. Recomendar 6 a 7 tomas de alimentos al día incluyendo una a la hora
de acostarse.
Considerar glucosa 5% IV en períodos de dieta absoluta. Evitar más de 3 días sin soporte nutricional.
La encefalopatía debe tratarse evitando la restricción de proteínas.
Los aminoácidos ramificados se reservan para pacientes con encefalopatía refractaria. Podrían tener un papel en la
prevención de sarcopenia.
El uso de suplementos enterales y de nutrición enteral por sonda debe usarse en pacientes que no cubren sus
requerimientos con dieta oral optimizada.
La nutrición parenteral debe usarse solo en pacientes en los que no es posible la nutrición enteral. Debe contener
todos los principios inmediatos.
Después del trasplante se debe evitar el exceso de aporte nutricional.
Se debe realizar seguimiento postrasplante para detectar, prevenir y tratar el desarrollo de obesidad, sarcopenia,
hiperlipemia, hipertensión y osteoporosis.
Tema 16.  Soporte nutricional en la hepatopatía crónica y trasplante hepático 281

Los mecanismos subyacentes a este hecho no están tic encephalopathy: results of a prospective study.
aclarados. Los inhibidores directos de mTORC1 blo- Metab Brain Dis 2013;28:281-284.
quean la síntesis proteica y son de uso generalizado en   4. Dasarathy S. Consilience in sarcopenia of cirrhosis.
postrasplante. La hipertrofia muscular está mediada J Cachexia Sarcopenia Muscle 2012;3:225-237.
por calcineurina y los inhibidores de la misma también   5. Montano-Loza AJ, Meza-Junco J, Baracos VE, et
se usan ampliamente en postrasplante hepático. La al. Severe muscle depletion predicts postoperative
contribución de estos fármacos a la obesidad y sarco- length of stay but is not associated with survival
penia, ha de ser aún evaluada. Es posible que cambios after liver transplantation. Liver Transpl. 2014
epigenéticos en moléculas reguladoras tengan como Jun;20(6):640-8.
consecuencia sarcopenia persistente después del tras-   6. Tandon P, Ney M, Irwin I, Ma MM, Gramlich L,
plante y de descenso de amoniemia. Son aspectos que Bain VG, et al. Severe muscle depletion in patients
requieren estudio. on the liver transplant wait list: its prevalence and
Las consecuencias de desarrollo a largo plazo de sar- independent prognostic value. Liver Transpl
copenia y obesidad sarcopénica son también mal co- 2012;18:1209-1216.
nocidas. Parece asociarse a síndrome metabólico, insu-   7. Hara N, Iwasa M, Sugimoto R, Mifuji-Moroka R,
lino-resistencia y eventos cardiovasculares. Un 38% de Yoshikawa K, Terasaka E, et al. Sarcopenia and
los pacientes desarrollan síndrome metabólico 5 años sarcopenic obesity are prognostic factors for ove-
después del trasplante164. Deberían promoverse hábi- rall survival in patients with cirrhosis. Intern Med
tos de vida saludable, incluyendo dieta saludable evi- 2016;55:863-870.
tando el exceso de energía, grasa y sal165.   8. Montano-Loza AJ, Duarte-Rojo A, Meza-Junco J.
Inclusion of Sarcopenia Within MELD (MELD-Sar-
copenia) and the Prediction of Mortality in Patients
13. Resumen y conclusiones With Cirrhosis. Clin Transl Gastroenterol. 2015;
La malnutrición es un importante factor pronóstico 6(7): e102.
que puede influenciar el curso clínico de pacientes con  9.  Montano-Loza AJ Muscle wasting: a nutritional
criterion to prioritize patients for liver transplanta-
EHCA. Su presencia debería alertar a los clínicos tanto
tion. Curr Opin Clin Nutr Metab Care. 2014
como la ascitis y la encefalopatía. Los mecanismos fi-
May;17(3):219-25.
siopatológicos que llevan a la situación de malnutrición
10. Carias S, Castellanos AL, Vilchez V et al. Nonalco-
en pacientes con cirrosis hepática son múltiples e inte-
holic steatohepatitis is strongly associated with
ractúan entre sí. Entre ellos podemos mencionar la in-
sarcopenic obesity in patients with cirrhosis under-
gesta inadecuada de nutrientes, alteraciones metabóli-
going liver transplant evaluation. J Gastroenterol
cas hepáticas y musculares y alteración de la absorción
Hepatol. 2016 Mar;31(3):628-33.
de nutrientes. Es conveniente disponer de herramien-
11. Periyalwar P, Dasarathy S. Malnutrition in cirrhosis:
tas sencillas para identificar el estado de malnutrición
contribution and consequences of sarcopenia on
en estos pacientes, con el fin de proporcionar soporte
metabolic and clinical responses. Clin Liver Dis.
nutricional adecuado. La ingesta de 4 a 6 tomas de
2012;16:95-131.
alimentos al día, evitando los períodos de ayuno pro-
12. Kondrup J. Nutrition in end stage liver disease.
longado, es una de las recomendaciones importantes.
Best Pract. Res. Clin. Gastroenterol. 2006; 20:
También se recomienda el uso de suplementos entera-
547-60.
les y nutrición enteral por sonda, cuando la ingesta no
13. Campillo B, Richardet JF, Bories PN. Validation of
sea suficiente. En la tabla 4 se ofrece un resumen de
body mass index for the diagnosis of malnutrition
recomendaciones.
in patients with liver cirrhosis. Gastroenterol. Clin.
Biol. 2006; 30: 1137-43.
14. Bibliografía 14. Huisman EJ, Trip EJ, Siersema PD, van Hoek B, van
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Tema 17.
Enfermedad celiaca. Dieta controlada en gluten
José Manuel García Almeida
Especialista en Endocrinología y Nutrición Clínica. Hospital Virgen de la Victoria. Jefe del Servicio de
Endocrinología y Nutrición Clínica. Hospital Quirón-salud. Málaga

Ana M. Gómez Pérez


Especialista en Endocrinología y Nutrición Clínica. Hospital Quirón-salud. Málaga

Rosario Fernández García-Salazar


Especialista en Endocrinología y Nutrición Clínica. Hospital Quirón-salud. Málaga

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 289-303.

1. Introducción
2. Manifestaciones clínicas de la enfermedad celiaca
3. Manifestaciones nutricionales de la enfermedad celiaca
4. Aproximación diagnóstica a la enfermedad celiaca
5. Aproximación diagnóstica a la situación nutricional de la enfermedad celiaca
6. Tratamiento dietoterápico
7. Soporte nutricional artificial
8. Resumen y conclusiones
9. Bibliografía

1. Introducción capaz de provocar una lesión severa de la mucosa del


intestino, cuyas manifestaciones clínicas pueden ser va-
1.1. Introducción y epidemiología riadas. Esto solo ocurre cuando sujetos genéticamente
de la enfermedad celiaca predispuestos son expuestos al gluten de la dieta. La
supresión del gluten mejora la sintomatología y nor-
La enfermedad celiaca (EC), también conocida como maliza la alteración intestinal, para volver a reaparecer
«enteropatía sensible al gluten» o «esprúe no tropical», cuando se reintroduce. Existe un amplio rango de ma-
se define como una inflamación crónica de la mucosa nifestaciones clínicas, desde astenia en formas oligo­-
del intestino delgado mediada inmunológicamente, en sintomáticas a síntomas intestinales floridos que in­
sujetos genéticamente predispuestos, que da lugar a un cluyen diarrea severa, distensión y dolor abdominal.
cuadro de malabsorción debido a la atrofia de las vello- También cuando el trastorno persiste un largo período
sidades intestinales y en la que la clínica mejora al hacer sin tratamiento se pueden producir cuadros carenciales
una dieta exenta de gluten y reaparece al reintroducir el secundarios a la malabsorción de vitaminas o minera-
gluten. La prevalencia en Europa es de 1:85-1:5401, les y otras manifestaciones extraintestinales.
afectando principalmente a personas de raza blanca y El patrón de lesión intestinal se caracteriza por una
en una relación 2:1 a favor del sexo femenino. La biopsia inflamación de la mucosa, hiperplasia de las criptas y
de intestino delgado es esencial para confirmar el diag- una marcada atrofia vellositaria (disminución en ratio
nóstico. El tratamiento implica el asesoramiento dieté- altura vellosidad/profundidad de criptas) e infiltración
tico para suprimir las fuentes de gluten de la dieta y el linfocitaria del epitelio y la lámina propia2.
seguimiento a largo plazo es importante por vigilar la La frecuencia y la edad con que aparece la enferme-
aparición de complicaciones futuras dad también es variable en función de la sintomatología
La EC es una intolerancia permanente al gluten, pro- y las técnicas diagnósticas empleadas. Aunque clásica-
teína que forma parte de algunos cereales de la dieta, mente la EC se considera una enfermedad pediátrica, en

289
290 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

el momento actual es frecuente su detección en pacien- alimenticios fundamentalmente ricos en carbohidra-


tes de mayor edad, entre 20-40 años, con formas más tos, pero también contienen lípidos, proteínas, vi­
atípicas de presentación. taminas del grupo B y minerales (figura 1), y existen 10
La primera descripción de la enfermedad se atribuye a espe­cies distintas con diferentes frecuencias de consu-
Aretaeus de Capadocia en la segunda mitad del siglo II mo por el hombre (trigo, cebada, centeno, avena,
A.C. El capítulo «Diátesis celíaca» describe la diarrea cró- maíz, arroz, sorgo, millo, etc.).
nica y recidivante en forma de esteatorrea junto a otras El gluten es una mezcla de dos proteínas: gluteninas
manifestaciones como la pérdida de peso. La palabra y prolaminas (gliadinas en el caso de harina de trigo). Aun-
griega «koliakos», de la cual se deriva la palabra «celia- que no se conoce con certeza la estructura exacta de la
cos», significa: «Aquellos que sufren del intestino». Pero parte de la gliadina responsable del daño en la EC, se ha
no fue hasta 21 siglos después, en 1888, cuando Samuel demostrado efectos tóxicos de los fragmentos 3-24, 25-
Gee daba a conocer un informe clínico más actual de la 55, 31-55 y 1-30 de la alfa-gliadina7. La glutamina re-
celiaquía insistiendo en que la regulación de la dieta es presenta el 35 % de los aminoácidos de la gliadina y su
una parte fundamental del tratamiento. Después de la desaminación completa anula el efecto tóxico de esta.
Segunda Guerra Mundial, Gluten Dicke realizó un des- También se sospecha la relación con el adenovirus hu-
cubrimiento fundamental, que produjo el mayor avance mano 12, con el que comparte una secuencia de ami-
en el tratamiento de la enfermedad: la asociación entre noácidos comunes, aunque no se ha demostrado su
el consumo de pan, cereales y la diarrea. Así, cuando se relación en la patogenia del cuadro.
excluía de la dieta de estos pacientes el trigo, el centeno Durante la última década ha habido un aumento impre-
y la avena, la diarrea desaparecía3. Las lesiones que apa- sionante en la popularidad de la dieta libre de gluten, sien-
recen en el intestino delgado en la enfermedad celiaca do ahora el hábito alimentario más de moda en multitud
fueron descritas por primera vez en 19544. de países. Según recientes encuestas, hasta 100 millones
Las amplias diferencias en términos de prevalencia de estadounidenses consumen productos sin gluten.
conocidas se deben a las diferencias en los métodos Algunos individuos experimentan una serie de síntomas
utilizados para el diagnóstico, desde datos clínicos has- en respuesta a la ingestión de trigo y cereales relaciona-
ta pruebas inmunológicas más precisas. Esto hace dos, pero carecen de los marcadores serológicos, histoló-
plantear la teoría del «iceberg celiaco» (Maki y Collin, gicos o genéticos característicos de la enfermedad celiaca.
1997) en la cual las formas silentes de la enfermedad Los términos sensibilidad al gluten no celiaca y sensibili-
podrían ser mayoritarias y solo un pequeño porcentaje dad al trigo no celiaco generalmente se utilizan para refe-
expresarían la forma clásica de la EC. rirse a esta condición, que actualmente se entiende como
En la etiopatogenia de la enfermedad, aunque no el conjunto de síntomas no específicos en respuesta a la
totalmente conocida, se implican factores genéticos ingestión de cereales que contienen gluten, y la resolución
(HLA que condicionan una mayor predisposición a la de estos síntomas con la eliminación de esos alimentos de
respuesta inmunológica), y ambientales, de exposición la dieta en los individuos. La afección está asociada con
al determinante de la reacción inmune (el gluten) y de síntomas gastrointestinales, que suelen incluir hinchazón,
sensibilización a este (infecciones víricas). dolor abdominal y diarrea, así como ciertos síntomas ex-
Se ha demostrado una clara asociación con HLA de traintestinales, entre los que destacan fatiga, dolor de ca-
clase II, alelos DQ2 (DQA1*0501 y DQB1*0201) y/o beza, ansiedad y dificultades cognitivas. No se dispone de
DQ85. Sujetos homocigóticos para HLA DQ2 se han cifras para la prevalencia, aunque se citan a menudo esti-
asociado a un mayor riesgo de enfermedad celiaca re- maciones que ponen el número igual o mayor que para la
fractaria y a linfomas6. Otros factores genéticos inde- enfermedad celiaca (1%). A pesar de la terminología co-
pendientes del HLA también muestran asociación, múnmente usada para la condición, la identidad del com-
como el cromosoma 15q26 que contiene un locus de ponente del trigo y/o cereales relacionados, responsables
susceptibilidad a diabetes tipo 1. Recientes evidencias de desencadenar los síntomas asociados sigue siendo in-
sugieren que determinados linfocitos T en el intestino cierto. Mientras que los ensayos controlados recientes
delgado reconocen epítopos de péptidos derivados del han indicado un papel prominente para el gluten, las pro-
gluten cuando estos son presentados en asociación teínas sin gluten y los carbohidratos de cadena corta fer-
con DQ2. Esa activación de la respuesta linfocitaria es mentables también podrían inducir respuestas inmunes
la responsable del daño histológico asociado a la EC, aberrantes o asociarse con síntomas.
donde puede confirmarse la existencia de anticuerpos Aunque hay claramente un componente de moda
anti­gliadina (AGA), antirreticulina (ARA) y antiendomi- para la popularidad de la dieta sin gluten, también hay
sio (EMA) evidenciando daño autoinmune. evidencia indiscutible y creciente a favor del síndrome de
El factor determinante ambiental fundamental es la sensibilidad al gluten no celiaco. Sin embargo, se requie-
presencia en el intestino del gluten, una proteína, solu- re un mayor conocimiento sobre su presentación clínica,
ble en alcohol, que junto con el almidón y otros com- así como su patogénesis, epidemiología, manejo y papel
puestos forma parte de la hari­na de los cereales. Los en condiciones tales como síndrome del intestino irrita-
cereales engloban un conjunto de semillas o granos ble, fatiga crónica y autoinmunidad. Puesto que este
Tema 17.  Enfermedad celiaca. Dieta controlada en gluten 291

Figura 1.  Caracterización de los péptidos tóxicos de los cereales en la enfermedad celiaca.

capítulo está limitado a la enfermedad celiaca, no se re- sin restricción de gluten. Esta situación se presenta en
visará este aspecto en mayor profundidad8. casos de celiacos en la infancia que recuperan casi to-
talmente su capacidad de ingerir gluten o en pacientes
2. Manifestaciones clínicas de la enfermedad que aún no han desarrollado la enfermedad pero po-
drían hacerlo en el futuro, como familiares de pacien-
celiaca
tes celiacos con factores genéticos favorables que fue-
2.1.  Manifestaciones digestivas ron estudiados en el pasado descartándose la presencia
de la lesión intestinal pero que posteriormente la desa-
Clásicamente se dividen en tres formas clínicas9 rrollaron.
(tabla 1).
2.1.3.  Enfermedad celiaca potencial
2.1.1.  Enfermedad celiaca clásica
Pacientes con riesgo de desarrollar la enfermedad
Caracterizada por la tríada diarrea, pérdida de peso (genética e inmunidad) pero que nunca han tenido clí-
y dolor abdominal junto con anemia ferropénica y dé- nica o lesión histológica sugestiva de esprúe.
ficits vitamínicos asociados y la recuperación de los sín-
tomas y atrofia intestinal al retirar el gluten de la dieta
2.1.4.  Enfermedad celiaca subclínica o silente
en un período de semanas a meses.
La presentación clínica clásica en la infancia se caracte- Formas clínicas con síntomas escasos e inespecíficos,
riza por el retraso en el desarrollo estaturo-ponderal aso- como anemia o cansancio, o incluso completamente
ciado a vómitos y diarrea, decaimiento general, hipoal- asintomáticos; detectados por la mayor difusión de
buminemia franca con ascitis y cambios generales como test inmunológicos de diagnóstico. Es muy importante
apatía e irritabilidad. En el adulto usualmente manifiesta su detección y corrección precoz para reducir el riesgo
diarrea, pérdida de peso y anemia. La intensidad de la de complicaciones relacionadas como la aparición de
lesión histológica de la mucosa intestinal no se relaciona neoplasias, pequeños déficits nutricionales, abortos,
necesariamente con la severidad de los datos clínicos. La desarrollo de enfermedades autoinmunes, etc. A veces
ausencia de respuesta a la eliminación del gluten suele son las enfermedades asociadas las que ponen en la
deberse mayoritariamente a la falta de adherencia a la pista de una posible EC, como la diabetes mellitus 1
dieta, aunque también se asocia con la presencia de es- (6-8 %), patología autoinmune tipo enfermedad de
prúe colágeno o linfoma asociado a esprúe. Sjögren, patología tiroidea, cuadro de malnutrición
proteica y déficit de ácido fólico y vitamina B12 sin cau-
sa conocida, osteoporosis-osteomalacia, infertilidad o
2.1.2.  Enfermedad celiaca latente
abortos de repetición.
Pacientes que presentan una biopsia intestinal nor- Es en este apartado donde es necesario hace un es-
mal y escasos o nulos síntomas consumiendo una dieta fuerzo importante de diagnóstico para separar de los
292 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

Tabla 1.  Formas clínicas de enfermedad celiaca.

Latente Sensibilidad al
Enfermedad celiaca Clásica Potencial Subclínica
Previa Actual gluten no celiaca

Clínica Sí No Sí/No No No/Sí Sí


Genética Sí Sí Sí Sí Sí No
Lesión histológica No/Sí en No/Sí en
Sí No Sí No
actual pasado futuro
Autoinmunidad Sí No Sí Sí Sí No

cuadros de sensibilidad a gluten no celiaca que no ca HLA-dependiente es común a la celiaquía y, como


comparten esta estructura diagnóstica pero sí múlti- esta, mejora al eliminar el gluten de la dieta. Práctica-
ples síntomas gastrointestinales. mente la totalidad de los pacientes diagnosticados de
dermatitis herpetiforme tienen lesiones parcheadas en
2.2.  Manifestaciones extraintestinales10 la mucosa yeyunal, aunque asintomáticas en su mayor
parte.
2.2.1.  Trastornos neuropsiquiátricos
La EC frecuentemente asocia cuadros de ataxia, cefa- 2.3.2.  Diabetes mellitus tipo 1 (DM1)
leas, epilepsia o trastornos ansioso-depresivos que se Existe una prevalencia del 2,6-7,8 % de anticuerpos
han querido relacionar con una posible hipoperfusión antigliadina y antiendomisio en pacientes con DM1
cerebral evidenciada en estos pacientes. adultos, y en muchos de estos se pueden demostrar
lesiones en el intestino, aunque no presentan síntomas
2.2.2. Artritis de la enfermedad. En niños diabéticos se ha reportado
Puede aparecer en el 26 % de las formas de presen- al menos un 3 % de prevalencia de celiaquía. No está
tación en adultos y se sospecha su relación con la EC, suficientemente aclarado la influencia de la EC sobre la
ya que la eliminación del gluten de la dieta produce DM1, ya que algunas evidencias de experimentación
una clara disminución en su riesgo de aparición. animal han referido un descenso en tasa de aparición y
un retardo en la misma en animales predispuestos ge-
néticamente a DM1 cuando se realiza dieta exenta en
2.2.3. Hipoesplenismo gluten. Esto no se ha podido demostrar en humanos.
Se han descrito casos asociados a EC, con infecciones Sí parece claro que la regulación dietética del trata-
neumocócicas severas, por lo que se ha sugerido la nece- miento de la celiaquía produce una mejoría en el con-
sidad de la vacunación profiláctica antineumocócica11. La trol metabólico de la diabetes y en otros factores aso-
etiopatogenia no se conoce. ciados13.

2.2.4.  Riesgo de aparición de neoplasias 2.3.3.  Déficit selectivo de IgA


Aunque no está suficientemente aclarado si existe un Este aparece en el 1-2 % de los pacientes celiacos.
mayor riesgo de aparición de neoplasias de forma glo-
bal12, sí parece estar aumentado el riesgo de aparición 2.3.4.  Síndrome de Down
de ciertos tumores como linfoma intestinal no-Hodg-
kin y otros tumores gastroentéricos (esófago, intestino Existe un riesgo 100 veces mayor de aparición de
y colon). Por otro lado, también se ha referido un des- celiaquía que en la población general, siendo la preva-
censo en el riesgo de otras neoplasias, como de mama lencia de la biopsia intestinal positiva para celiaquía
y probablemente pulmón. mayor del 16 %.

2.3.  Enfermedades asociadas 2.3.5.  Enfermedad hepática


Existe frecuentemente, desde elevaciones crónicas e
2.3.1.  Dermatitis herpetiforme
inespecíficas de las enzimas hepáticas, hasta cuadros
Enfermedad cutánea vesículo-papulosa y pruriginosa agudos de hepatitis autoinmune. Parece existir alguna
de predominio en tronco y extremidades frecuente- relación también con la cirrosis biliar primaria, auque
mente asociada a EC (24 %). Su predisposición genéti- esta no ha sido confirmada en todos los estudios14.
Tema 17.  Enfermedad celiaca. Dieta controlada en gluten 293

2.3.6.  Enfermedad tiroidea (piel, pelo y uñas), cuadros neurológicos (déficit de vi-
taminas del complejo B), raquitismo y alteraciones en
Existe un aumento de la incidencia de trastornos ti- la dentición (déficit de calcio y vitamina D), etc.
roideos autoinmunes (6-8 %) en los pacientes con En el adulto, el inicio suele coincidir con un proceso
celiaquía, siendo más frecuente la presencia de hipoti- agudo, cirugía gastrointestinal, estrés, embarazo o una
roidismo. in­fección viral, que pone de manifiesto un cuadro larva-
do previo con déficits nutricionales crónicos poco sinto-
2.3.7.  Trastornos ginecológico-obstétricos máticos.
Las pacientes celiacas sin tratamiento pueden tener Si se elimina el gluten de la dieta, los pacientes
retraso de menarquia, alteraciones menstruales y me- pasan a estar asintomáticos, con una regeneración de
nopausia precoz. Esto asocia un cierto grado de infer- la mucosa del intestino delgado en un período de varios
tilidad y mayor riesgo de gestaciones con retraso de meses. Si la enfermedad se asocia a exacerbaciones,
crecimiento intrauterino. El tratamiento nutricional pa- hay que sospechar la ingesta inadvertida de alimentos
rece prevenir todos estos trastornos que probablemen- que contengan gluten.
te se asocien a la malnutrición y los déficits vitamínicos
asociados. 3.2.  Déficits nutricionales específicos
3.2.1. Anemia
2.3.8.  Miocarditis y miocardiopatía dilatada
El estudio de la serie roja evidencia frecuentemente
No es muy frecuente la asociación, aunque en algu- una anemia leve de características microcíticas (déficit
nos estudios se ha encontrado EC hasta en un 5 % de de hierro), megaloblástica (déficit de fólico) o mezcla
forma asintomática; en estos casos, la función cardiaca de ambas. Uno de los factores determinantes funda-
mejora al someterlo a dieta libre de gluten. mentales de la presencia de anemia en estos pacientes
es la marcada ferropenia que asocia otros datos clíni-
3.  Manifestaciones nutricionales cos como la queilitis angular, coiloniquia (uñas en cu-
de la enfermedad celiaca chara) o la caída de pelo. En el estudio de anemias fe-
rropénicas han llegado a identificarse hasta un 12 % de
Desde el punto de vista nutricional, su comporta- lesiones intestinales compatibles con EC15. La deficien-
miento es similar al de otros cuadros malabsortivos in- cia de fólico condiciona un componente de macrocito-
testinales y su expresividad clínica depende de la edad sis que solo se evidencia tras recuperar la ferropenia
de aparición, intensidad y extensión del cuadro infla- de base que presentan los pacientes. Otros componen-
matorio en el intestino delgado. Así, sus manifestacio- tes menos importantes del síndrome anémico son la
nes pueden ser claramente identificables en cuadros de deficiencia de vitamina B12 (14 %) que raramente pre-
malnutrición generalizados o necesitaremos un mayor cisa tratamiento específico y los cambios secundarios a
grado de sospecha clínica en casos de déficits nutricio- hipoesplenismo.
nales aislados específicos como anemias carenciales
(hierro, ácido fólico y vitamina B12) o enfermedad me- 3.2.2.  Enfermedad metabólica ósea
tabólica ósea.
Los pacientes celiacos tienen un riesgo aumentado de
3.1.  Malnutrición calórico-proteica desarrollar raquitismo u osteomalacia, posiblemente en
relación con la malabsorción de calcio y vitamina D. Pue-
En la infancia su comienzo característico es al intro- den aparecer cuadros agudos de parestesias y tetania
ducir alimentos farináceos2. La EC, una de las enferme- asociadas a episodios de hipocalcemia e hipomagnese-
dades in­testinales crónicas más comunes que provoca mia por malabsorción de estos. En el perfil analítico
malabsor­ ción en la infancia, se caracteriza por una acompañante destacan el hiperparatiroidismo secunda-
atrofia de las ve­llosidades de la mucosa del intestino rio y la elevación de fosfatasa alcalina. El diagnóstico de
delgado, especial­mente del duodeno y yeyuno proxi- osteoporosis, al menos a nivel lumbar, está muy aumen-
mal produciendo por tanto malabsorción de pro­teínas, tado con respecto a la población general (26 % versus
grasa y vitaminas liposolubles, ácido fólico, hierro, cal- 5 %), de ahí que se recomiende el estudio sistemático
cio y otros nutrientes que se absorben en estos tramos de este problema en pacientes celiacos y se recomien-
digestivos. Los cuadros severos referidos en la literatura de una suplementación de 1,5 g de calcio al día.
ya raramente se ven en el momento actual por la inter- En niños, la dieta libre de gluten puede normalizar
vención nutricional precoz, evitando así que evolucio- por completo este trastorno, mientras en adultos las
nen a cuadros de malnutrición severa con talla baja, pérdidas de densidad mineral ósea periférica parecen
hipoalbuminemia y edemas. También son evidentes los persistir a pesar de una buena adherencia a la dieta,
cuadros carenciales asociados: anemia (déficit de hie- por lo que en estos casos se recomiendan tratamientos
rro, fólico y vitamina B12) y alteraciones en las faneras adyuvantes con calcio y bisfosfonatos16.
294 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

3.2.3.  Diátesis hemorrágica •  Anticuerpos IgA antigliadina (AGA IgA): sensibili-


dad 80-90 %, especificidad 85-95 %.
Ocasionalmente pueden producirse cuadros hemo-
•  Anticuerpos IgG antigliadina (AGA IgG): sensibili-
rrágicos con equímosis y epistaxis asociados a déficit
dad 75-85 %, especificidad 75-90 %.
de vitamina K.
Ante un resultado serológico negativo con sospecha
3.2.4.  Intolerancia a lactosa de enfermedad, debemos plantearnos la posibilidad de
En la mayoría de los pacientes celiacos activos se de- un déficit de IgA asociada, un falso negativo o la posi-
muestra un déficit de lactasa secundario a la atrofia del bilidad de un cuadro malabsortivo intestinal de otro
borde en cepillo de la mucosa intestinal, pero esto rara origen.
vez plantea algún problema clínico severo. La incapaci- Además de los anticuerpos, el diagnóstico requiere
dad para desdoblar el disacárido ocasiona una malab- usualmente la confirmación histológica de la lesión in-
sorción de este que condiciona una diarrea espumosa de testinal, que se realiza con extracción de múltiples
características ácidas. En adultos este problema se une a muestras mediante endoscopia digestiva alta.
la pérdida de actividad lactasa que se produce con la Finalmente, en cuanto a la confirmación del diag-
edad de forma fisiológica. La decisión de eliminar la lac- nóstico tras eliminar el gluten de la dieta existe cierta
tosa temporalmente de la dieta del celiaco ha de tomar- controversia, aunque algunos autores recomiendan
se de forma individual, evaluando el beneficio clínico. repetir la biopsia, para otros la mejoría y el control de
los síntomas podría ser suficiente19.
4. Aproximación diagnóstica a la enfermedad El algoritmo diagnóstico final se muestra en la figura 2.
celiaca17
No existe un único test que pueda establecer el 5. Aproximación diagnóstica a la situación
diagnóstico de certeza en todos los pacientes. El nivel nutricional de la enfermedad celiaca
de decisión inicial se basa en la existencia o no de datos El estudio del estado nutricional en la EC es muy im-
clínicos sugestivos de EC. Aunque es una enfermedad portante para valorar las posibles repercusiones de la
prevalente en Europa (1:85-1:540) no parece estar jus- enfermedad.
tificado el cribado sistemático de toda la población. Desde el punto de vista clínico pueden destacar los
Debemos considerar el estudio de la EC en los siguien- datos de desnutrición calórica como la falta de creci-
tes grupos de pacientes18: miento adecuado en niños o la pérdida de peso en
adultos que puede ser muy importante (>10 % en
•  Pacientes con síntomas gastrointestinales como
6 meses). Los parámetros antropométricos disminui-
diarrea crónica, pérdida de peso, malabsorción o
dos son frecuentemente un dato tardío que indican
distensión abdominal.
que el cuadro es crónico o de larga evolución. Una en-
•  Individuos con elevación permanente de enzimas
cuesta dietética bien orientada puede ponernos rápi-
hepáticas, talla corta, retraso puberal, anemia fe-
damente sobre la pista, relacionando los síntomas di-
rropénica, abortos de repetición o infertilidad sin
gestivos más severos con el consumo de cereales que
causa conocida.
contengan gluten. En lactantes es característico el ini-
•  Individuos de alto riesgo como DM1 o enfermedades
cio de la clínica al iniciar el consumo de cereales con
endocrinas autoinmunes asociadas, familiares de 1º y
gluten.
2º grado, síndrome de Down, Turner o Williams.
En cuanto a los datos analíticos, los primeros en apa-
Existen otras situaciones clínicas en las que se puede recer son los déficits de hierro, folato y calcio, por la
plantear el estudio como: síndrome de intestino irrita- afectación del intestino proximal. A medida que el pro-
ble, estomatitis aftosa persistente, enfermedades auto­ ceso inflamatorio afecta a más tramo intestinal pode-
inmunes, neuropatía periférica, ataxia o hipoplasia del mos encontrar malabsorción de carbohidratos, grasas
esmalte dental. y vitaminas liposolubles A, D, E y K. Es frecuente encon-
Como norma general, debemos tener en cuenta que trar intolerancia a la lactosa secundaria al daño causa-
cualquier estudio diagnóstico debe realizarse mante- do en las vellosidades intestinales. También es posible
niendo al paciente con dieta normal. encontrar la presencia de hipoalbuminemia marcada
Generalmente se inicia el estudio con las determinacio- con descenso de prealbúmina y otros marcadores de
nes de anticuerpos séricos, que solo son útiles por encima desnutrición proteica en las formas clásicas20.
de los cinco años de edad. Los más destacados son: El estudio del cuadro malabsortivo puede orientar-
se con la determinación de grasas en heces y test de
•  Anticuerpos IgA antiendomisio (EMA): sensibili- D-xilosa. Estos tests no son específicos para el diag-
dad 85-98 %, especificidad 97-100 %. nóstico de celiaquía pero orientan hacia el grado de
•  Anticuerpos IgA antitransglutaminasa (tTG): sen- disfunción en la mucosa intestinal. Las pruebas de
sibilidad 90-98 %, especificidad 95-97 %. absorción de grasas valoran el incremento en la excre-
Tema 17.  Enfermedad celiaca. Dieta controlada en gluten 295

AC: anticuerpos; BI: biopsia Intestinal; EMA: anticuerpos endomisio; tTG: anticuerpos antitransglutaminasa.

Figura 2.  Algoritmo diagnóstico de la enfermedad celiaca.

ción de grasa en heces (esteatorrea), y se considera la mg/dl en suero a los 60 minutos. Permite diferenciar
primera prueba a realizar en el estudio de una malab- entre la maldigestión (epitelio intestinal íntegro,
sorción-maldigestión. La cuantificación de la grasa prueba de la D-xilosa normal) y la malabsorción (epi-
fecal se realiza mediante el test de Van de Kamer, que telio intestinal alterado, prueba de la D-xilosa anor-
mide el contenido fecal de ácidos grasos. En condicio- mal).
nes normales, ingiriendo una dieta con un contenido
en grasas de 60-100 g/24 h durante 3-5 días, la ex- 6. Tratamiento dietoterápico
creción fecal de grasa es de 3-5 g/24 h. Cuando no se
dispone de esta prueba se puede sospechar este diag- Actualmente, el único tratamiento que ha demostra-
nóstico por el aumento notable del peso de las heces do ser eficaz para la celiaquía es la adherencia a una
diarias (>300 g/24 h) y determinadas características dieta exenta de gluten para toda la vida. Así, el aspecto
macroscópicas como la flotabilidad. La valoración de terapéutico fundamental en el manejo de la EC es el
la integridad de la mucosa intestinal se realiza con la consejo dietético-nutricional21. La dieta «sin gluten»
prueba de la D-xilosa. Esta técnica mide la integridad exige importantes cambios en el estilo de vida asociado
del epitelio intestinal, dado que la D-xilosa es un mo- a la dieta occidental, ya que consumimos una gran va-
nosacárido que se absorbe por difusión pasiva en el riedad de alimentos de uso diario como el pan, pastas
intestino proximal, sin digestión previa. Tiene alta y harinas que contienen o pueden contener gluten. Por
sensibilidad y especificidad (>90 %). Administrando otro lado, la cada vez más frecuente cocina industrial
25 g de D-xilosa diluidos, se mide la xilosemia a la con platos precocinados y conservas, puede contener
hora de la ingesta y la xilosuria durante las 5 horas gluten como conservante y esto hace necesario atraer
posteriores a la ingesta. Los valores normales corres- a nuestros pacientes hacia una dieta basada en consu-
ponden a 4-8 g de xilosa en la orina de 5 horas y >20 mo de alimentos frescos y cocina propia.
296 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

Es necesario excluir de la dieta cualquier derivado •  «Lifelong adherence to a gluten-free diet» (La
que contenga proteínas de los siguientes cereales: tri- reintroducción, voluntaria o no, del gluten en
go, cebada y centeno. Existen dudas en la literatura dieta condiciona de nuevo la reaparición de clí-
respecto a la toxicidad de la avena. Otros cereales po- nica o al menos de las lesiones morfológicas en
tencialmente tóxicos, aunque de menor uso en nuestra el intestino).
alimentación habitual, son: espelta, kamut y triticale •  «Identification and treatment of nutritional de-
(híbrido de trigo y centeno). Estos se pueden sustituir ficiencies» (Realizar valoración de las posibles
por otros cereales que no contienen gluten y son por deficiencias de macro y micronutrientes para
tanto seguros para el celiaco como: arroz, maíz, ama- administrar así los tratamientos adecuados).
ranto, quinoa (muy usado en productos específicos • «Access to an advocacy group» (Facilitar el con-
«para celiacos») y sorgo. El gluten puede formar parte tacto y relación con organizaciones de pacien-
de los alimentos en origen o bien contaminarlos du- tes afectos de EC para establecer una vía de
rante su manufactura. Se usa ampliamente en la indus- comunicación y ayuda entre pacientes y con las
tria alimentaria por ser económico y por sus grandes instituciones).
propiedades como: aglutinante y espesante, vehículo o •  «Continuous long-term follow up by a multi-
excipiente de aditivos, barrera frente a la grasa o aro- disciplinary team» (Implicar al paciente en su
mas externos, evitar la difusión del color o la oxidación necesidad de seguimiento de por vida para su-
y preservar de la humedad. pervisar la efectividad del tratamiento y detec-
Por tanto, en la práctica no parece que la dieta sin tar de forma precoz la aparición de complica-
gluten sea fácil de cumplimentar, y más si nos plantea- ciones o trastornos asociados).
mos que esta debe mantenerse de por vida y que ade-
más necesariamente implica eliminar por completo el 6.1. Planificación de la dieta en la
gluten de la misma, teniendo en cuenta que incluso enfermedad celiaca
hay que evitar la contaminación (por ejemplo, empleo
de aceite de fritura en que previamente se hayan frito La dieta sin gluten debe ser nutricionalmente com-
alimentos que contienen gluten o la elaboración de re- pleta y ayudar a corregir los déficits nutricionales oca-
postería con harina « sin gluten» que se haya contami- sionados por la lesión de intestino delgado producida
nado con levaduras con gluten). Aunque no exista cer- por el gluten. Pero además deberá respetar al máximo
teza absoluta, disponemos de múltiples argumentos a los hábitos del paciente, produciendo solo los cam-
favor de dieta estricta sin gluten. Se ha detectado la bios necesarios para la eliminación del gluten apor-
existencia de déficit de vitaminas y/o minerales en pa- tando otros alimentos sustitutos de los cereales elimi-
cientes sin síntomas claros de enfermedad que mejo- nados de la dieta. Por tanto, deberemos mantener, y
ran al retirar el gluten de la dieta. De igual forma, el aumentar si es posible, las cualidades positivas de sus
aumento de morbimortalidad asociado al paciente hábitos nutricionales previos para así lograr una ma-
celiaco, probablemente relacionado con el aumento de yor adherencia al tratamiento. Una dieta variada es la
incidencia de neoplasias gastrointestinales, se reduce mejor garantía de una dieta nutricionalmente com-
cuando se realiza una dieta estricta sin gluten19. pleta.
También se ha asociado la duración de la exposición Las principales características de la dieta son:
al gluten con el aumento de riesgo de otras enferme-
dades autoinmunes como DM1, tiroiditis de Hashimo- 1. Aporte calórico-proteico adaptado a las necesida-
to o Graves-Basedow. Estos son argumentos útiles des individuales según el grado de desnutrición
para sensibilizar con el cumplimiento de la dieta, sobre previa, edad, sexo, ejercicio y enfermedades aso-
todo en pacientes asintomáticos con diagnósticos en ciadas.
situación silente. El cálculo de requerimientos calóricos nos
Los seis «puntos clave» en el manejo de la EC orientará sobre las necesidades teóricas de
han sido resaltados en la Conferencia de Consenso del cada caso. En niños y adolescentes, en fase de
NIH (US National Institutes of Health) en forma de las crecimiento, es importante no infraestimar es-
iniciales CELIAC18: tos requerimientos, ya que podríamos inducir
dietas muy restrictivas que afectasen a su desa-
•  «Consultation with a skilled dietitian» (Resalta rrollo. En nuestra dieta, muchos de los alimen-
la necesidad de planificar correctamente la die- tos farináceos que contienen gluten son una
ta con recomendaciones por escrito adaptadas fuente energética importante, representando
a las necesidades y capacidades de cada pa- un porcentaje muy significativo de los aportes
ciente). de carbohidratos. Los cereales, aunque no son
•  «Education about the disease» (Programa edu- despreciables como fuente proteica, son fácil-
cacional dirigido a pacientes y familia para in- mente sustituibles por asociaciones de otros
formar de los riesgos potenciales de la EC). cereales permitidos con legumbres, como por
Tema 17.  Enfermedad celiaca. Dieta controlada en gluten 297

ejemplo: arroz con lentejas, de cuya asociación almidón de patata más 1/2 taza de harina de soja.
resulta una mezcla de aminoácidos bastante Para espesar podemos usar también una cucharada
completa nutricionalmente. sopera de harina de ma­íz, harina de patata o harina
2. El reparto de principios inmediatos en la dieta es de arroz.
similar a las recomendaciones de «dieta saluda- Los tubérculos, patatas, batatas, boniatos y chufas,
ble» admitidas para la población general. Los son un grupo de alimentos ricos en hidratos de carbo-
carbohidratos aportarán entre un 50-60 % del no adecuados pa­ra celiacos. Tienen menor cantidad de
contenido calórico total de la dieta, las proteínas almidón que los ce­ reales, contienen gran cantidad
un 10-15 % y las grasas 30-35 %. La tolerancia de vitamina C y aportan algo de fibra.
inicial a grasas, al igual que a determinados disa- Las legumbres, garbanzos, lentejas, habas, alu-
cáridos como la lactosa, ha de adaptarse indivi- bias, guisantes y soja son alimentos que tienen mu-
dualmente, ya que una restricción sistemática de cho almi­dón. Tienen mayor cantidad de proteínas
estos componentes conlleva frecuentemente una que los cereales, aunque se trata también de una
reducción de los aportes calóricos de la dieta y proteína incompleta desde el punto de vista de com-
esto podría retrasar la recuperación nutricional posición de aminoácidos. Son fuentes importantes
de los pacientes más desnutridos. En el caso de de hierro, calcio, vitami­nas y fibra. La soja se diferen-
coexistencia con enfermedades asociadas como cia del resto en ser más rica en proteínas y en lípidos
DM1, las características nutricionales de la dieta (aceite de soja).
se adaptarán a los criterios y recomendaciones
de esta. 6.3.  Fuentes de información nutricional
3. Los déficits nutricionales específicos como hie-
rro, ácido fólico, vitamina B12, calcio y vitamina Existe una gran variedad de recursos de informa-
D, deberán corregirse aumentando sus aportes ción nutricional disponible para los pacientes con
en la dieta o mediante suplementación farmaco- EC, como listados de alimentos prohibidos, dietas
lógica. Aunque no existe consenso, probable- variadas, libros de cocina para celiacos, comidas
mente resulte necesario realizar cribado de os- preparadas para celiacos, direcciones de Internet
teoporosis en estos pacientes22. Es frecuente (ver tabla 2), etc.
que se produzca un descenso importante en el
1. Recomendaciones generales.
aporte de fibra con la eliminación de los cerea-
les, frecuentemente integrales, que contienen Información general que señala en grandes aparta-
gluten, por lo que necesitamos incrementar los dos los consejos fundamentales en este tipo de dieta
aportes de fibra de otras fuentes como verduras como:
y frutas y/o utilizar cereales permitidos como el
arroz en forma integral. •  Evitar alimentos que contienen trigo, cebada y
4. El reparto del número de comidas al día depen- centeno.
derá de los hábitos previos y horarios en el cole- •  Sustituir por arroz, maíz, patata, harina de tapioca
gio o el trabajo, pero intentaremos que se reali- o soja.
cen entre 3 y 5 tomas al día. •  Atender a la información nutricional en alimen-
tos ya preparados, para aclarar si pudieran con-
6.2. Características de los grupos alimentarios tener gluten como conservante o para otros
de mayor interés usos.
•  Valorar la tolerancia a lácteos en las fases iniciales
Los cereales son fuente importante de energía en de la recuperación nutricional.
nuestra dieta gracias a su alto aporte en carbohidra- •  No existe certeza acerca de la prohibición siste-
tos. El contenido proteico de estos no parece esencial mática del consumo de avena en la EC, por lo
en el balance nutricional final, ya que el consumo de que este consejo ha de valorarse de forma indi-
alimentos proteicos en nuestra cultura occidental es vidual.
muy elevado. Los déficits de vitaminas, minerales y
fibra que ocasionaría su eliminación en la dieta deben 2.  Listados de alimentos.
sustituirse por otras fuentes de aportes como frutas y
verduras. Se publican y actualizan frecuentemente por la Fede-
Debemos ofrecer sustitutos de la harina de trigo ración de Asociaciones de Celiacos de España (FACE).
como al­ternativas en la elaboración de recetas. Como Aportan una información muy completa sobre los ali-
por ejemplo, para cocinar, una taza de harina de trigo mentos que no contienen gluten. Muchas veces es
puede ser re­emplazada por una taza de harina de muy complicado conocer con total seguridad que un
maíz, 10 cucharadas soperas de harina de patatas, 14 alimento no contiene gluten, ya que la información nu-
cucharadas soperas de harina de arroz o 1/2 taza de tricional del etiquetado suele ser incompleta o con tér-
298 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

Tabla 2.  Fuentes de información destacadas sobre enfermedad celiaca en la red.

Fuentes nacionales
http://www.celiacos.org Federación de asociaciones de celiacos de España.
https://www.msssi.gob.es/profesionales/
prestacionesSanitarias/publicaciones/Celiaquia/ Ministerio de Sanidad de España
enfermedadCeliaca.pdf
Fuentes internaciones
http://www.csaceliacs.org Celiac Sprue Association/United States of America, Inc. (CSA)
Celiac Disease and Gluten-free Diet Support Center. Scott Adams
http://www.celiac.com
association.
http://www.aoecs.org Association of European Coeliac Societies
http://www.celiac.org Celiac Disease Foundation
http://www.gluten.org Gluten Intolerance Group
http://www.digestive.niddk.nih.gov/ddiseases/ National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney
pubs/celiac/index.htm Diseases, National Institutes of Health

minos ambiguos como «proteína vegetal» que pueden En estas dietas podemos individualizar tanto el re-
hacernos sospechar de la existencia de gluten. Tam- parto en el número de tomas (3, 4, 5 o 6 al día)
bién puede ocurrir la contaminación del producto en la como la distribución de grupos de nutrientes (fariná-
cadena alimentaria, la presencia de gluten «oculto» en ceos, frutas, verduras, lácteos, alimentos proteicos,
forma de conservantes o aditivos o errores en la codifi- grasas y misceláneos).
cación como «sin gluten» en determinados alimentos Así, en un paciente con necesidades energéticas
específicos, que según FACE y el Ministerio de Sanidad calculadas de unas 2000 kcal/día con un 50 % de
no deberían contener más de 20 ppm (partes por mi- carbohidratos, 15 % de proteínas, 35 % de grasas y
llón) de gluten. reparto en 6 tomas, dispondremos de 25 raciones de
Los medicamentos pueden utilizar fuentes contene- carbohidratos, 8 de proteínas y 7 de grasas. Un re-
doras de gluten como: harinas, almidones u otros deri- parto posible que podríamos plantear sería: desayu-
vados para la preparación de sus excipientes. Con fe- no (lácteos-1, farináceos-2, grasas-1) ; media maña-
cha 12 de julio de 1989, de la Dirección General de na (lácteos-1/2, farináceos-2, frutas-1), almuerzo
Farmacia y Productos Sanitarios (BOE núm. 179) existe (verduras-2, proteicos-2, farináceos-5, frutas-2),
una Resolución por la que se dan normas para la decla- merienda (lácteos-1), cena (verduras-2, proteicos-2,
ración obligatoria de gluten presente como excipiente, farináceos-4, frutas-1), recena (lácteos-1). Una die-
en el material de acondicionamiento de las especialida- ta-día podría ser por ejemplo: desayuno: 1 tazón le-
des farmacéuticas. che y cereales de maíz inflado (30 g) con aceite de
En la tabla 3 se detallan algunos de estos alimentos oliva (una cucharadita), media mañana: 1 yogur con
más destacados y sus posibles alternativas libres de 7-8 galletas «sin gluten» y medio vaso de zumo
gluten. (100 ml)., comida: 1º plato: arroz (75 g, 2-3 cucha-
rones) con verduras (menestra 300 g)., 2º plato: file-
3. Tablas de equivalencias. te de ternera (100 g), postre: una naranja (200 g),
merienda: un vaso de leche, cena: 1º plato: crema
En los casos en que es necesario realizar un con- de zanahoria con patata (plato), 2º plato: pescado
trol mas ajustado de la dieta en cuanto a mayor pre- (150 g), postre: fruta (ciruela 100 g), recena: un
cisión en el aporte energético o distribución de prin- vaso de leche.
cipios inmediatos en esta, se puede trasladar el De todos los grupos de alimentos, los que se impli-
modelo de dieta por raciones que se utiliza en otras can más directamente en las modificaciones de la dieta
patologías como la diabetes o la obesidad, basada sin gluten son los cereales, pero también hay que con-
en el intercambio de alimentos pertenecientes a gru- siderar que los productos cocinados a partir de verdu-
pos más o menos homogéneos en composición y ras o alimentos proteicos pueden contener gluten. En
reparto de principios inmediatos. Cada ración de ali- la tabla 4 se muestran algunos alimentos de uso habi-
mento se basa en su contenido en 10 gramos del tual que contienen gluten y sus alternativas sin este,
principio inmediato más común en su composición. agrupados por raciones.
Tema 17.  Enfermedad celiaca. Dieta controlada en gluten 299

Tabla 3.  Clasificación de alimentos según su contenido en gluten.

Alimentos que con seguridad contienen gluten


· Pan y harinas de trigo, cebada, centeno, avena o triticale
· Bollos, pasteles, tartas y demás productos de pastelería
· Galletas, bizcochos y productos de repostería
· Pastas italianas (fideos, macarrones, tallarines, etc.) y sémola de trigo
· Leches y bebidas malteadas
· Bebidas destiladas o fermentadas a partir de cereales: cerveza, whisky, agua de cebada, algunos licores, etc.
· Productos manufacturados en los que entre en su composición cualquiera de las harinas citadas y en cualquiera de
sus formas: almidones, almidones modificados, féculas, harinas y proteínas
Alimentos que pueden contener gluten
Solamente permitidos previo informe del fabricante de que no contienen gluten.
· Embutidos: chóped, mortadela, chorizo, morcilla, etc.
· Quesos fundidos de sabores
· Patés diversos
· Conservas de carnes
· Conservas de pescados con distintas salsas
· Caramelos y gominolas
· Sucedáneos de café y otras bebidas de máquina
· Frutos secos tostados con sal
· Helados
· Sucedáneos de chocolate
· Colorante alimentario
Alimentos que no contienen gluten
· Leche y derivados: quesos, requesón, nata, yogures naturales y de sabores y cuajada
· Todo tipo de carnes y vísceras frescas, congeladas y en conserva al natural, cecina, jamón serrano y cocido de
calidad extra
· Pescados frescos y congelados sin rebozar, mariscos frescos y pescados y mariscos en conserva al natural o en aceite
· Huevos
· Verduras, hortalizas y tubérculos
· Frutas
· Arroz, maíz y tapioca, así como sus derivados
· Todo tipo de legumbres
· Azúcar y miel
· Aceites, mantequillas
· Café en grano o molido, infusiones y refrescos
· Toda clase de vinos y bebidas espumosas
· Frutos secos naturales y fritos (con o sin sal)
· Sal, vinagre de vino, especias en rama y grano y todas las naturales

Nota: información de FACE (Federación de Asociaciones de Celiacos de España).

4.  El problema del etiquetado. federal que establezca de forma precisa la definición
de un alimento «sin gluten».
Hoy en día no existe un consenso internacional sobre Debido a esta falta de consenso, en agosto de 2005
las normas de etiquetado de los productos en lo refe- se fundó la Organización para la Certificación Sin Glu-
rente al contenido en gluten. En España, como en la ten (Gluten-Free Certification Organization), que reali-
mayoría de los países europeos, se siguen las recomen- za un análisis exhaustivo de los alimentos denomina-
daciones de Naciones Unidas recogidas en el Codex dos «sin gluten» en busca de contaminaciones. Los
Alimentarius; para denominar a un alimento como «sin criterios de esta organización para dar su certificación
gluten», es necesario que contenga menos de 20 ppm son muy estrictos, considerando libre de gluten aque-
(partes por millon) que equivalen a 6 mg de gluten. En llos alimentos que presentan menos de 10 ppm (3 mg
Estados Unidos no existe sin embargo una regulación de gluten)23.
300 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

Tabla 4.  Contenido en gluten de grupos de alimentos usuales agrupados por raciones.

Grupo de alimentos
Alimentos a evitar Alimentos recomendados
Raciones Consejos
(Pueden contener gluten) (No contienen gluten)
Farináceos (Pan, cereales, arroz y pastas) (6-11 porciones cada día)
Harinas de trigo, avena, cebada, centeno Harinas, almidones, féculas y Una rebanada Usar harinas
y productos derivados (almidones, sémolas procedentes de todo tipo de pan (20 g). de patata,
salvado de trigo, etc.). Gofio obtenido de de legumbres, tubérculos y cereales Una cuchara arroz, etc. en
harinas de trigo permitidos. Harinas sin gluten sopera de las recetas
especiales para celíacos. Gofio de harina (15 g) habituales
maíz
Cereales de trigo, avena, cebada, Cereales de arroz, maíz, mijo, Dos cucharas Intentar
centeno y todos sus productos derivados sorgo, amaranto, yuca, alforfón o soperas (15 g) productos «sin
trigo sarraceno gluten»
Pastas alimenticias elaboradas a partir Pastas alimenticias sin gluten: Una cuchara Productos «sin
cereales con gluten macarrones, espaguetis y fideos sopera (15 g) gluten»
Productos de confitería: pasteles, Productos de panadería y pastelería Tres galletas. Estas harinas
galletas, elaborados con harinas que elaborados de forma casera con ½ bollo dulce necesitan 25 %
contengan gluten. Levadura deshidratada harinas e ingredientes sin gluten. más de agua
y los extractos Levadura fresca prensada
Tubérculos y derivados (Sustituye porciones de cereales)
Patatas fritas de bares y restaurantes Patatas y boniatos frescos. Patatas ½ patata Tortilla de
Aperitivos de patata. Patatas rellenas de fritas caseras. Copos de patata y (65 g) patatas sin
ketchup y/o mostaza puré de patata instantáneo levaduras
Legumbres (Sustituye porciones de cereales)
Cocinadas en conserva (cocidos, fabadas, Naturales o precocinadas de forma Secas: dos Cocidos y
etc.) casera cucharas guisos sin
soperas embutidos
(20 g)
Hortalizas, verduras y derivados (3-5 porciones cada día)
Congelados, con cremas o bechamel Resto libres Plato hondo Sin picatostes,
(250 g) rehogadas con
ajo
Frutas y derivados (2-4 porciones cada día)
Mermeladas, jaleas, confituras, cremas de Todas las frutas frescas, glaseadas y Variables. Vigilar en
frutas o dulce de membrillo comerciales en almíbar. Mermeladas o confituras Manzana ½ preparados
caseras sin gluten pieza mediana comerciales
(85 g)
Lácteos y derivados (2-3 porciones cada día)
Preparados lácteos. Leche fermentada. Todo tipo de leche fresca Un vaso Postres
Quesos de untar. Mousses de queso. Petit esterilizada, evaporada, (200 ml). caseros:
suisse de chocolate, natural y sabores. condensada o en polvo. Cuajada, Dos yogures natillas, flan
Yogures con cereales y/o fibra o con cuajo y requesón. Nata líquida. (250 ml) de huevo, arroz
trozos de frutas. Quesos y yogures naturales con leche

(Continúa)
Tema 17.  Enfermedad celiaca. Dieta controlada en gluten 301

(Continuación)
Grupo de alimentos
Alimentos a evitar Alimentos recomendados
Raciones Consejos
(Pueden contener gluten) (No contienen gluten)
Carnes, pescados, mariscos y huevos (2-3 porciones cada día)
Carnes en conserva, rebozadas y Todo tipo de carne y vísceras 2 lonchas de Cuando cene
empanadas. Adobados: beicon, panceta. frescas y congeladas (sin cocinar). jamón cocido fuera de
Embutidos y fiambres en general. Patés, Beicon fresco, jamón curado y (50 g) casa elegir
jamón asado puede llevar almidones. cecina. Jamón cocido (extra). preparados sin
Lomo de cerdo embuchado Embutidos preparados en casa salsas y sin
empanar
Derivados comerciales con base de huevo Huevos frescos, en polvo, yema o Un huevo
clara deshidratada (60 g)
Pescados rebozados. Sucedáneos de Todos los pescados y mariscos Pescado Pescados
marisco: surimi, gulas, nakulas, delicias frescos, salados y desecados, (50 g). Almejas congelados:
del mar, barritas de cangrejo, etc. cocidos y congelados sin rebozar. 5 unidades se recomienda
Conservas de pescado y/o marisco: en Conservas de pescado y/o marisco: (65 g con quitar la piel y
salsa, con tomate, etc. al natural o en aceite concha) lavar antes de
cocinarlos
Grasas, aperitivos, dulces, condimentos y bebidas
Aceite que se ha empleado para freír Grasas animales: tocino, Una cucharada No reutilizar
un producto que contenga gluten. mantequilla, manteca de cerdo. sopera de aceite usado
Margarinas y otras grasas para untar Aceite de oliva, de semillas, palma aceite (10 g) con alimentos
y coco con gluten
Sopas, extractos y pastillas de caldo. Helados de agua o sin galleta. Una cucharada Conservar en
Cafés molidos. Azúcar glasé. Golosinas Regaliz de palo. Chocolates, sopera de frigorífico,
y helados a granel y con barquillo. bombones y cacaos puros. Polvo de azúcar (10 g) ya que los
Chocolates con cereales. Bombones cacao puro azucarado alimentos
rellenos y turrones. Cerveza sin gluten
no tienen
conservantes

6.4.  Dieta en circunstancias especiales centro, frecuentemente se toman caramelos y golosinas


que pueden contener gluten. Es importante entregar al
En algunas ocasiones, como el colegio, hospital, viaje,
profesor algunas galletas, golosinas u otros productos
etc.., las posibilidades del paciente celiaco de supervisar
sin gluten, para que pueda dárselas si se celebra alguna
directamente la elección y elaboración de los alimentos
fiesta. Cuando las comidas se realizan fuera de casa, por
son escasas y a veces comer fuera de casa plantea un
serio problema. El grado de conocimiento en la sociedad ejemplo en un restaurante, es necesario tener en cuenta
general del problema de gluten es escaso, por lo que ciertos detalles a la hora de seleccionar el menú, evitan-
deberemos advertir siempre a los encargados de la ela- do «platos de riesgo» como fritos en freidoras, tortillas
boración de la dieta en qué consiste la dieta sin gluten. de patata que pueden llevar levaduras, salsas, etc. En el
En el colegio, se deberá tener en cuenta determinados hospital, se debe advertir al personal sanitario de su die-
aspectos esenciales tanto como si se cocina en el colegio ta sin gluten, posibilidad que debe estar contemplada
como si se sirven comidas ya preparadas por una empre- en la planificación del código de dietas del mismo. En
sa ajena. En las guarderías esto es más fácil por el redu- viajes largos, como por ejemplo en el extranjero, puede
cido número de alumnos y las características de la dieta ser conveniente contactar con antelación con la Asocia-
a esas edades. Las asociaciones de celiacos pueden pro- ción de Celiacos de la zona donde se viaja para solicitar
porcionar información escrita para entregar en el cole- información sobre el contenido en gluten de los alimen-
gio. A pesar de que el niño no realice las comidas en el tos típicos del lugar.
302 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

6.5. Monitorización de la respuesta a la dieta cesidades específicas de cada paciente (sin gluten y sin
sin gluten lactosa) (Isosource Standard®, Nutrison estándar®, fre-
subin®, Edanec®, etc.). En situaciones de malnutrición
La respuesta clínica a la eliminación del gluten de la severa con atrofia intestinal muy importante se puede
dieta suele ser rápida, así el 70 % de los pacientes apro- ver comprometida inicialmente la absorción con ali-
ximadamente encuentra mejoría en dos semanas. En mentos naturales por vía oral; en estos casos, podrá
general, la clínica remite antes que las lesiones histoló- recurrirse a fórmulas de nutrición enteral ele­mentales
gicas, sobre todo el tramo intestinal proximal que pue- que incluyan triglicéridos de cadena media, oli­
de tardar varios meses en recuperarse. Existe contro- gopéptidos y aminoácidos. Por último, en casos de
versia sobre la necesidad de tomar nuevas biopsias extre­ma desnutrición excepcionalmente debe instau-
intestinales para certificar la recuperación, ya que mu- rarse nutrición parenteral hasta que se recupere, al
chas veces tenemos claros datos clínicos de mejoría y menos parcialmente.
descenso de anticuerpos que indican buena adheren- Es necesario conocer la composición de los produc-
cia a la dieta. Sin embargo, otros autores recomiendan tos de nutrición artificial, al igual que cualquier otro
la biopsia entre 4-6 meses basándose en que existe un medicamento que utilicen estos pacientes para tener la
porcentaje elevado de casos asintomáticos con persis- certeza de que no contiene gluten.
tencia de lesiones mucosas24.
La reintroducción del gluten en la dieta, que se con-
8. Resumen y conclusiones
sideraba clásicamente en el esquema diagnóstico de la
EC, no parece que juegue ningún papel en la actualidad La enfermedad celiaca es un trastorno de base inmu-
según las recomendaciones actuales de la sociedad eu- nitaria que afecta al intestino delgado produciendo
ropea de gastroenterología y nutrición infantil (ESP- atrofia de su epitelio absortivo. Es un problema nutricio-
GAN)2, salvo excepcionalmente en casos dudosos con nal frecuente (1:85-1:540) que comprende riesgos para
coexistencia de diarrea infecciosa en niños o intoleran- la salud a corto y largo plazo. Del consejo nutricional
cia a proteína de leche de vaca, que pueden hacer difícil adecuado depende la mayor parte del éxito terapéutico.
el diagnóstico de certeza de EC. En estos casos, se ad- La dieta sin gluten, que inicialmente puede parecer sim-
ministran unos 10 gramos de gluten (4 rebanadas de ple, implica múltiples ajustes en la dieta de forma indivi-
pan) durante 4-6 semanas y se evalúan los síntomas. dualizada y la alerta constante ante la posibilidad de in-
Existe un 30 % de pacientes que no responden a la gesta inadvertida de gluten en la dieta. La información
dieta. En este grupo lo más común es la falta de adhe- nutricional al respecto es amplia y bien actualizada, a
rencia al tratamiento. Si una historia dietética precisa través de las asociaciones de enfermos afectos.
descarta esta posibilidad deberemos investigar la posi- Las líneas de investigación futuras se dirigen hacia la
bilidad de otros cuadros que causen atrofia vellositaria completa identificación de los epítopos exactos que
(como intolerancia a proteínas de leche de vaca, enfer- causan la sensibilización al gluten, para así establecer
medad de Chron, gastroenteritis eosinofílica, giardia- terapias más precisas o desarrollar cereales modifica-
sis, etc.) o también cuadros con clínica gastrointestinal dos que no causen sensibilización.
parecida como síndrome de intestino irritable, intole-
rancia a lactosa o sobrecrecimiento bacteriano25. 9. Bibliografía
Otra posibilidad es la presencia de «esprúe refracta-
rio» con progresión del cuadro malabsortivo y riesgo 1. Barton SH, Kelly DG, Murray JA. Nutritional defi-
vital importante. Su tratamiento se centra en el uso de ciencies in celiac disease. Gastroenterol Clin North
esteroides e inmunosupresores. Finalmente, en casos Am. 2007 Mar;36(1):93-108.
resistentes a esteroides, hay que descartar la presencia 2. American Gastroenterological Association medical
de yeyunitis ulcerativa asociada a linfoma26. position statement: Celiac Sprue. Gastroenterology
2001; 120: 1522-5.
3. Ciclitira PJ, King AL, Fraser JS. AGA technical review
7.  Soporte nutricional artificial
on Celiac Sprue. American Gastroenterological As-
Los pacientes celiacos pueden presentar una intole- sociation. Gastroenterology 2001; 120: 1526-40.
rancia secundaria a la lactosa, principalmente al diag- 4. Booth,CC. history of celiac disease. BMJ 1989; 298-
nóstico de la enfermedad, que suele desaparecer a 527.
medida que la mucosa intestinal se recupera. Por tan- 5. Pallav K, Kabbani T, Tariq S, Vanga R, Kelly CP, Le-
to, inicialmente es necesario realizar una restricción ffler DA. Clinical utility of celiac disease-associated
temporal de la lactosa de la dieta. También suele ser HLA testing. Dig Dis Sci. 2014 Sep;59(9):2199-206.
necesario al inicio restringir la grasa y suplementar cier- 6. Woodward J. Improving outcomes of refractory
tos micronutrientes (Fe, Ca, ácido fólico y las vitaminas celiac disease - current and emerging treatment
liposolubles). Con este fin, pueden utilizarse temporal- strategies Clin Exp Gastroenterol. 2016 Aug
mente suplementos nutricionales adaptados a las ne- 3;9:225-36.
Tema 17.  Enfermedad celiaca. Dieta controlada en gluten 303

  7. Shan, L, Molberg, O, Parrot, I, et al. Structural ba- 17. Kagnoff, MF.AGA Institute Medical Position State-
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Tema 18.
Soporte nutricional en metabolopatías de los
aminoácidos. Fenilcetonuria, homocistinuria,
enfermedad de orina de jarabe de arce y trastornos
del ciclo de la urea. Glucogenosis
Luis Miguel Luengo Pérez
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Hospital Universitario Infanta Cristina. Departamento de
Ciencias Biomédicas, Facultad de Medicina, Universidad de Extremadura. Badajoz

Ana Mª Márquez Armenteros


Unidad de Gastroenterología Infantil. Diagnóstico y seguimiento de Metabolopatías. Hospital Materno
Infantil. Badajoz

Pilar Jiménez Nacimiento


Departamento de Ciencias Biomédicas, Facultad de Medicina, Universidad de Extremadura. Badajoz

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 305-321.

1. Introducción
2.  Fenilcetonuria
3.  Enfermedad de orina de jarabe de arce
4.  Homocistinuria
5.  Errores innatos del ciclo de la urea
6.  Glucogenosis
7. Resumen
8.  Bibliografía

1. Introducción senciales se convierten en esenciales (por ejemplo,


en la fenilcetonuria y en la homocistinuria).
•  Los 20 aminoácidos (aa) que se requieren para la •  Las enfermedades del metabolismo de las proteí-
síntesis proteica incluyen algunos cuyas cadenas nas, en general, se producen por defectos en su
carbonadas no se pueden sintetizar en el cuerpo catabolismo y dan lugar al acúmulo de sustancias
(denominados aa esenciales), y otros, cuyos es- tóxicas que afectan a distintos órganos.
queletos carbonados pueden ser sintetizados en el •  Las características clínicas de un defecto enzimáti-
organismo a partir de intermediarios comunes del co derivan de la toxicidad de los metabolitos acu-
metabolismo (aa no esenciales). mulados, de la deficiencia del producto final y de
Los aa esenciales para los humanos incluyen: leuci- la severidad del déficit enzimático.
na, isoleucina, valina, lisina, treonina, triptófano, fe-
•  El tratamiento dietético de los errores congénitos
nilalanina, metionina e histidina. La tirosina y cisteí-
del metabolismo de las proteínas tendrá como
na se denominan aa semiesenciales porque solo
objetivo:
pueden ser sintetizados a partir de aa precurso­
res esenciales (fenilalanina y metionina, respectiva­ 1. Limitar la ingesta de aquel o aquellos aa cuya
mente). En determinadas situaciones estos aa semi- vía metabólica esté afectada, hasta un requeri-

305
306 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

miento mínimo que asegure un adecuado cre- El diagnóstico bioquímico se establece mediante la
cimiento y desarrollo. determinación de niveles plasmáticos de Phe mediante
2. Suplementar la dieta con aquel o aquellos aa espectrometría de masas en tándem (MS/MS) superio-
que no se sintetizan. res a 120-150 µmol/l y se confirma mediante el estudio
3. Aumentar la ingesta calórica para conseguir un mutacional.
ahorro proteico máximo y evitar que las proteí-
nas se empleen como fuente energética. Por 2.2.  Clasificación y fenotipo clínico
ello, es muy importante evitar los ayunos pro-
Debido al gran número de mutaciones, el espectro
longados. Estas necesidades energéticas se cu-
clínico es muy amplio y, en la actualidad, la clasifica-
brirán con alimentos naturales con bajo o nulo
ción más aceptada es la que tiene en cuenta las con-
contenido proteico, alimentos manufacturados
centraciones plasmáticas de Phe y la tolerancia de Phe.
de bajo contenido proteico (pasta, pan, galletas
En este sentido, podemos clasificar las hiperfenilala-
especiales) y con suplementos energéticos a
ninemias/PKU:
base de polímeros de glucosa y/ó grasas (PFD®
de Laboratorios Mead-Jhonson; Maxivit® y Ener-
a. Fenilcetonuria clásica: las concentraciones plas-
gyvit® de Laboratorios SHS, Kcalip® de Laborato-
máticas de Phe al diagnóstico son superiores a
rios Casen Recordati , Prozero® de Vitaflo).
1 200 µmol/l; la tolerancia de Phe es inferior a
4. Aumentar en lo posible la proporción de pro-
350 mg/día. Suelen ser formas muy severas que
teínas naturales de alto valor biológico (PNA-
cursan con retraso mental y motor graves si no
VB): legumbres, leche y derivados, carne y pes-
están tratadas.
cado, huevo.
Fenilcetonuria moderada: las concentraciones
5. Vigilar los posibles efectos secundarios de una
plasmáticas de Phe al diagnóstico suelen ser 600-
ingesta proteica limitada (vitaminas, minerales,
1200 µmol/l; la tolerancia de Phe es inferior a
oligoelementos). Puede ser necesario suple-
350-400 mg/día.
mentarlos.
Fenilcetonuria leve: las concentraciones plasmáti-
6. En ocasiones es necesario complementar el
cas de Phe al diagnóstico suelen ser 360- 600
aporte proteico con preparados especiales
µmol/l; la tolerancia de Phe suele ser de 400-600
para cada enfermedad, que contienen todos
mg/día.
los aa excepto el o los que están afectados. Es-
Hiperfenilalaninemia benigna (HPA): las concen-
tos preparados no deben ser utilizados como
traciones plasmáticas de Phe al diagnóstico sue-
única fuente proteica en situaciones de des-
len ser 120-360 µmol/l. Es una forma benigna,
compensación, ya que se convierten en una
leve y no requiere tratamiento dietético.
fuente nitrogenada tóxica.
b. Hiperfenilalaninemia maligna: son las que afectan
al sistema de la coenzima tetrahidrobipterina
2. Fenilcetonuria (BH4) y su enzima, la DHPR. Estos pacientes mani-
fiestan síntomas de afectación neurológica debi-
2.1.  Consideraciones generales do al déficit de neurotransmisores y no suelen
responder al tratamiento dietético.
La hiperfenilalaninemia es un término genérico que
se otorga a un fenotipo bioquímico en el que existe un
aumento persistente de la concentración plasmática de 2.3.  Tratamiento dietético general
fenilalanina (Phe) causado por trastornos de la hidroxi- El tratamiento de la PKU es para toda la vida y se
lación hepática1. Dichos trastornos pueden implicar basa en la restricción de alimentos con contenido en
tanto a la enzima fenilalanin-hidroxilasa (PAH), a su fenilalanina.
cofactor, la coenzima tetrahidrobiopterina (BH4) como Hay que destacar la importancia del buen control
a la dihidropteridinareductasa (DHPR). dietético en el pronóstico de la enfermedad4.
La principal causa de hiperfenilalninemia es el defec- Actualmente existen nuevas opciones terapéuticas
to de actividad de PAH. (véase en el apartado 2.6).
La herencia de esta entidad es autosómica recesiva y Las bases del tratamiento dietético son las si-
su incidencia global es de 1:4000/21195 recién naci- guientes:
dos dependiendo de la zona geográfica2.
El gen PAH está localizado en el cromosoma 12 a. Limitar la ingesta de fenilalanina en la dieta, con
(12q22-24), habiéndose descrito hasta el momento el objetivo de conseguir unos niveles de fenilalani-
más de 400 mutaciones, algunas de ellas mutaciones na en sangre inferiores a 6 mg/dl (360 µmol/l).
de novo3. Como en muchas ocasiones no se dispone de la
La mutación más frecuente en el sur de Europa es la cantidad de Phe que contiene un determinado
IVS10. alimento, se estima la cantidad de Phe mediante
Tema 18.   Soporte nutricional en metabolopatías de los aminoácidos… 307

el contenido en proteínas naturales de alto valor día, en función de la edad, mínimo 5 tomas/día
biológico (PNAVB)14 (tablas 2 y 3). (tabla 1).
El manejo de la Phe en la dieta PKU se suele hacer En los últimos años ha aumentado la variedad de
mediante un sistema de porciones o intercam- estos preparados; estos presentan distintas carac-
bios, lo más común suelen ser porciones de terísticas, lo cual permite una mayor adaptación a
50 mg, cantidad equivalente a 1 g de PNAVB y las necesidades del paciente.
facilita mucho la confección de la dieta. Pero en Las fórmulas especiales utilizadas en la actualidad
aquellos casos en los que la tolerancia es menor para dietas de bajo contenido en Phe en España
puede interesar usar porciones de 10 mg. incluyen varias casas comerciales: Casen Recorda-
Lo recomendable es que el aporte de Phe en la ti, Mead-Jhonson, Milupa SA, Nutricia SA, Scien-
dieta se haga de la manera más homogénea posi- tific Hospital Supplies (SHS) y Vitaflo España.
ble a fin de evitar posibles descompensaciones en Disponen de distintos productos para las diferen-
los niveles de Phe en sangre. tes edades13.
b. Aportar el resto de aminoácidos en forma de pre- La elección de una fórmula u otra va a depender
parados comerciales exentos de Phe: 1,5-3 g/kg de distintos factores, aparte de los factores más

Tabla 1.  Listado de preparados comerciales para fenilcetonuria.

Presentación
Casen Fleet PKU1
Lactantes

Casen Fleet PKU Gel (> 6 meses)


Polvo Mead-Johnson Phenyl-free 1
PKU Anamix Infant (0-12 meses)
PKU Anamix Junior (1-10 años)
Con alta
Sin lípidos Con lípidos concentración
de proteínas
Mead-Johnson Phenyl-free 2
Casen Fleet PKU Gel
Polvo Casen Fleet PKU Star
Vitaflo PKU Gel
Casen Fleet PKU Star monodosis
Infantiles

Vitaflo PKU Cooler 10 (> 3 años)


Líquido Vitaflo PKU Cooler 15 (> 3 años) PKU Anamix Junior LQ (3-10 años)
Vitaflo PKU Cooler 20 (> 3 años)
SHS Phlexy-10 barras (> 3 años)
Otros SHS Phlexy-10 cápsulas (> 3 años)
SHS Phlexy-10 tabletas (> 3 años)
Mead-Johnson Phenyl-free 2
Casen Fleet PKU Gel
Mead-Johnson Phenyl-free 2 HP
FleetPKU-Avant Mead-Johnson
Polvo
FleetPKU-Avant Monodosis Phenyl-free 2 HP
FleetPKU-Plus
Vitaflo PKU Express
FleetPKU-Plus Monodosis
Vitaflo PKU Cooler 10
Vitaflo PKU Cooler 15
Adultos

Vitaflo PKU Cooler 20


PKU Lophlex LQ 10 (a partir de
Líquido 4 años y adultos, incluido mujeres
embarazadas)
PKU Lophlex LQ 20 (a partir de
4 años y adultos, incluido mujeres
embarazadas)
SHS Phlexy-10 barras
Otros SHS Phlexy-10 cápsulas
SHS Phlexy-10 tabletas
308 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

lógicos a tener en cuenta, como la edad, toleran-


Fenilalanina Tirosina cia a proteína de origen natural o necesidades
PAH
energéticas, hay que tener en cuenta otra serie de
Biopterina BH4 BH2 factores relacionados con el día a día, como el
DHPR grado de seguimiento de la dieta, el grado de ac-
tividad física o las preferencias del paciente.
Neopterina Proteínas naturales de bajo valor biológico (pata-
ta, frutas, hortalizas y verduras): libres siempre
que no se tomen en cantidades excesivamente
GTP elevadas.
c. En algunos casos y situaciones concretas puede
Figura 1.  Metabolismo de la fenilalanina. ser necesario suplementar la dieta. Existen prepa-
BH2: dihidrobiopterina; BH4: tetrahidrobiopterina; rados hipercalóricos exentos de proteínas (véase
DHPR: dihidrobiopterin-reductasa; PAH: fenilalanina punto 3 del apartado 1)
hidroxilasa. d. También puede ser necesario suplementar L-tiro-
sina en algunos casos.

Tabla 2.  Listado de alimentos para la fenilcetonuria.

Alimentos restringidos
Alimentos libres
(se usan mediante un sistema de porciones)
Alimentos con alto contenido en Alimentos con contenido Alimentos con poca fenilalanina
fenilalanina moderado en fenilalanina
Muy restringidos, el contenido en Phe Restringidos pero su Libres
es tan alto que en muchos casos su contenido en Phe permite su
uso en la dieta es poco práctico uso en la dieta
Carne: pollo, ternera, cordero, Lácteos: leche, leche Frutas: naranja, manzana, pera,
cerdo, carnes de caza, carne de ave y condensada, nata, batidos, melocotón, albaricoque, fresa, frambuesa,
productos cárnicos de cualquier tipo helados ciruela, kiwi, piña, cereza, melón, sandia,
(salchichas, charcutería, patés, etc.) plátano, etc. (ya sean crudas, en lata o en
Cereales sin gluten: maíz
almíbar)
Pescado: todo tipo de pescados y y arroz
mariscos Verduras: berenjena, calabacín, calabaza,
Legumbres: garbanzos,
acelga, puerro, cebolla, tomates,
Huevos lentejas, judías blancas,
espárragos, lechuga, col, coliflor,
habas, guisantes, etc.
Quesos: de todo tipo, a mayor grado zanahoria, pimiento, pepino, ajo, perejil,
de curación mayor cantidad de PAVB endibias, judías verdes, espinacas,
brécol, etc.
Frutos secos: cacahuetes, nueces,
avellanas, pistachos, anacardos, etc. Féculas: maizena, tapioca, preparados
para natillas, patata (sin piel)
Pan, harinas, galletas y bizcochos.
Grasas: aceites y grasas vegetales, sebos
Soja: así como todos sus productos
margarinas y mantequillas (estas últimas
derivados
siempre que no contengan leche)
Aspartamo (E951): edulcorante
Bebidas: agua, refrescos, zumos de
artificial de uso muy común en la
fruta, café, te. Evitar los refrescos y
industria alimentaria cuya fórmula es
bebidas light (por su posible contenido
un análogo de la fenilalanina
en aspartamo) y refrescos preparados con
derivados lácteos
Varios: azúcar, mermeladas, miel, siropes,
melazas, sal, vinagre, especias, levadura
en polvo, caramelos de azúcar, algodón de
azúcar, colorantes y esencias
Tema 18.   Soporte nutricional en metabolopatías de los aminoácidos… 309

Tabla 3.  Contenido de fenilalanina en los alimentos /100 gramos de producto comestible.

De 300 De 500 De 750 De 1.000


< 300 mg > 1500 mg
a 500 mg a 750 mg a 1000 mg a 1500 mg
Arroz integral cocido, 127 Avellanas, 453 Arenque crudo, 701 Atún crudo, 910 Almendras, 1146 Bacalao seco, 2451
Arroz blanco cocido, 100 Bacon en crudo, 393 Bacalao fresco crudo, Bonito en aceite, 1000 Anchoa en aceite, 1130 Cacahuetes, 1539
Avena cocida, 141 Cake, 392 651 Cangrejo de lata, 835 Atún en aceite, 1136 Leche de vaca
Castañas, 192 Corn-flakes (maíz), Butifarra, 655 Conejo, 793 Cacahuetes tostados, 1492 descremada en polvo,
418 Caballa, 721 1746
Coliflor cocida, 71 Corazón de buey, 874 Costillas de cordero, 1165
Dónut, 310 Calamar, 557 Queso parmesano,
Corn-flakes muy Hígado de cerdo crudo, Chorizo, 1148 2240
azucarados, 271 Francfort, 359 Foie-gras, 589 993 Chuleta de ternera, 1386 Queso gruyere, 1764
Espárragos en lata, 59 Galletas saladas, 483 Gambas crudas, 696 Jamón york, 789 Chuleta de cerdo, 1157 Redondo de ternera,
Espinacas cocidas, 129 Leche de vaca Garbanzos cocidos, 502 Lengua de cerdo, 887 Filete de ternera, 1447 1634
Galletas tipo maría, 271 evaporada, 325 Huevo entero, 686 Nueces, 766 Filete de buey, 1045
Helado de vainilla, 174 Leche condensada Huevo frito, 658 Pato, 752
de vaca, 348 Hamburguesas, 1239
Leche de vaca, 167 Judías secas cocidas, Requesón, 931 Hígado de cerdo frito,
Lentejas secas 526
Leche descremada, 159 cocidas, 445 Riñón de ternera, 911 1200
Leche semidesnatada, 160 Lengua de ternera Salchichón, 940 Hígado de cordero, 1268
Magdalenas, 420 cocida, 661
Leche de oveja, 284 Mortadela con Salmón crudo, 832 Hígado de pollo, 1212
Lenguado crudo, 553
Leche de cabra, 154 aceitunas, 425 Sardina en aceite, 962 Hígado de ternera, 1133
Lubina, 699
Maíz cocido, 185 Pan de centeno, 440 Trucha, 796 Leche de vaca en polvo,
Mortadela, 600 1271
Nata y crema de leche, Pan blanco de
140 molde, 466 Pan integral, 512 Mollejas, 1129
Pasta de sopa cocida, 260 Pan blanco, 496 Pulpo crudo, 534 Pavo al horno, 1100
Patatas fritas, 184 Yogur desnatado, Queso blanco Pierna de cordero, 1143
312 desnatado, 668
Patatas cocidas, 84 Pipas de girasol, 1231
Salchichas frescas, 655
Tomate crudo, 31 Pollo al horno, 1061
Salmón ahumado, 714
Yogur natural, 189 Queso roquefort, 1103
Sardina cruda, 710
Yogur desnatado de Queso mozzarella, 1103
frutas, 217 Seso de ternera crudo,
506 Queso camembert, 1117
Zanahoria cruda, 38 Solomillo de ternera, 1487
Tortilla francesa, 519
Solomillo de buey, 1202

2.4. Tratamiento dietético en situaciones d. Ofrecer abundantes líquidos y no forzar la ali-


especiales mentación.

En situaciones en las que se reduce la ingesta o exis-


2.5.  Fenilcetonuria en la embarazada
te un aumento de los requerimientos energéticos (en-
fermedad aguda, intervención quirúrgica, etc.) se pue- Es necesario un control estricto de las cifras de Phe
de producir un aumento de los niveles de Phe tanto en el período preconcepcional como durante
procedente del catabolismo endógeno. todo el embarazo, con el fin de evitar o prevenir la
Durante estos períodos es necesario una dieta rica en embriopatía por PKU materna (retraso del crecimiento,
energía y baja en Phe, por lo que habrá que: microcefalia, cardiopatía congénita). Por ello:

a. Disminuir la ingesta de PNAVB (a la mitad si el pro- a. Debe iniciarse la dieta en las 10 semanas antes del
ceso intercurrente es leve o por completo si es grave) embarazo.
b. Mantener el suplemento libre de proteínas para b. Inicialmente se puede calcular una ingesta de
promover la síntesis proteica. 6 mg/kg/día de PNAVB, la cual se deberá aumen-
c. Aumentar la ingesta de energía añadiendo polí- tar según la tolerancia individual en el segundo y
meros de glucosa a los líquidos, incluyendo la fór- tercer trimestre del embarazo (está comprobado
mula libre de Phe (tabla 6). que a partir de ese momento existe un aumento
310 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

por parte del hígado fetal de la capacidad para 2.6.3.  Aminoácidos neutros (LNAA)
metabolizar la Phe de la madre).
Los LNAA son arginina, histidina, isoleucina, leucina,
c. Se debe procurar mantener las cifras de Phe por
lisina, metionina, treonina, triptófano, tirosina y valina.
debajo de 4 mg/dl (240 µmol/l).
Estos compiten con la Phe por los transportadores es-
d. Debe valorarse la suplementación con tirosina
pecíficos para atravesar la barrera hematoencefálica y
(100 mg/kg/día) durante el segundo-tercer tri-
la mucosa intestinal, utilizando mecanismo de inhibi-
mestre, así como valorar posible déficit de carniti-
ción competitiva. Si aumentamos el aporte de LNAA,
na, L-PUFA o micronutrientes5.
disminuye el paso de Phe al cerebro.
Esta opción terapéutica es más eficaz en aquellos pa-
2.6.  Nuevas terapias cientes con mala adherencia a la dieta10, 12.
Las limitaciones del tratamiento actual (dieta de por Es necesario investigar sobre la composición óptima
vida muy restringida, efectos secundarios de una dieta de LNAA, efectos secundarios a largo plazo y beneficio
de restricción proteica prolongada, posible afectación a largo plazo en PKU.
ósea a pesar de la dieta y el desacoplamiento a la dieta La dosis en adultos es de 18 g/día. Útil en adultos y
que puede generar ciertos trastornos neurológicos e ancianos con PKU8.
incluso enfermedades neurodegenerativas en el adul-
to) han hecho que en la actualidad se barajen otras 2.6.4.  Terapia génica
posibilidades terapéuticas en el manejo de la PKU.
Son numerosas las investigaciones que, durante los
últimos años, se vienen realizando acerca de la terapia
2.6.1.  Coenzima tetrahidrobipterina génica en la PKU.
La BH4 es cofactor de PAH y se ha comprobado que Dicha terapia está basada en la introducción de un gen
aumenta la tolerancia a la Phe, lo que permite liberali- PAH funcional en células del paciente y en la expresión de
zar la dieta, haciendo en algunos casos innecesaria la la enzima hepática en tejido heterólogo como el músculo.
fórmula especial. Recientemente se ha demostrado una corrección
efectiva duradera en ratones, mediante la inyección in-
Existen estudios que permiten correlacionar la muta-
tramuscular de un sistema completo de hidroxilación
ción genética con la respuesta a BH46, 7. En la actuali-
de Phe, que incluye el gen PAH y dos genes esenciales
dad, la selección de pacientes con respuesta a BH4 se
para la síntesis de BH49.
realiza mediante la realización de prueba de sobrecar-
ga de BH4 (20 mg/kg), considerándose como buena
respuesta si los valores de Phe en plasma disminuyen 3.  Enfermedad de orina de jarabe de arce
igual o más del 30% del valor basal de Phe.
3.1.  Consideraciones generales
Existen diferentes modalidades de prueba de sobre-
carga de BH4 (24 horas, 48 horas, 1 mes, etc.). La enfermedad de orina de jarabe de arce (EOJA;
En la actualidad existe un preparado comercial, Sa- Maple syrup urine disease, MSUD) es una aminoacido-
propterina (comprimidos 100 mg de administración patía del metabolismo de los aa de cadena ramificada
vía oral) y se han descrito pocos efectos secundarios (leucina, valina e isoleucina; branched chain aminoa-
(cefalea, rinorrea, molestias abdominales). cids, BCAA) como consecuencia de un déficit enzimáti-
co del complejo deshidrogenasa (figura 2).
2.6.2.  Glucomacropéptido (GMP) Es una enfermedad autosómica recesiva con una in-
cidencia de 1/250000 recién nacidos vivos. Se distin-
Es un péptido grande obtenido en la industria láctea guen cinco fenotipos clínicos y bioquímicos diferentes
a partir de la caseína que contiene cantidades muy pe- (clásica, intermedia, intermitente, sensible a tiamina y
queñas de fenilalanina (2 mg/g). El preparado comer- deficiencia del componente E3 del complejo multienzi-
cial se obtiene a partir del queso, mejora el sabor y la mático deshidrogenasa), pero de forma práctica en la
variedad de la dieta para PKU y está suplementado con clínica podemos distinguir la forma neonatal (se ma-
arginina, histidina, leucina, tirosina y triptófano para nifiesta como un cuadro tóxico en el neonato), la for-
complementar el aporte proteico11, 12. Los productos ma intermedia (se presenta con fallo de medro y re-
más destacados son: harina, chocolate, puding, bebi- traso psicomotor, ataxia y convulsiones) y la forma del
das deportivas, snacks. adulto (sin clínica característica y que suele presentar-
Los GMP poseen otras propiedades como que presen- se como crisis de ataxia, convulsiones y cetoacidosis
tan una buena termoestabilidad y una adecuada solubi- coincidiendo con procesos intercurrentes).
lidad en ácidos. Otras de las propiedades de los GMP El diagnóstico se realiza mediante determinación de aa
son que podrían descender tanto la fenilalanina plasmá- en sangre (presencia patognomónica y característica de
tica como la cerebral y que disminuyen la sensación de aloisoleucina) y se confirma con la determinación del dé-
hambre a través de un descenso de la GHrelina8. ficit enzimático en biopsia de piel y/o el estudio mutacional.
Tema 18.   Soporte nutricional en metabolopatías de los aminoácidos… 311

Leucina Isoleucina Valina

Ác. α-isocaproico Ác. α-ceto-β-metilvalérico Ác. α-cetoisovalérico


Complejo multienzimático Complejo multienzimático
deshidrogenasa (MSUD) deshidrogenasa (MSUD)
Isovaleril-CoA α-metilbutiril-CoA Isobutiril-CoA

Isovaleril-CoA Deshidrogenasa
(Acidemia isovalérica)

Acetoacetato Acetil-CoA Propionil-CoA


Propionil-CoA carboxilasa
(Acidemia propiónica)
Metilmalonil-CoA mutasa
(Acidemia metilmalónica)

Succinil-CoA

Figura 2.  Vías metabólicas de los aminoácidos ramificados y metabolopatías asociadas.

3.2.  Tratamiento dietético en la fase aguda Si la concentración plasmática de los BCAA descien-
de por debajo de valores normales, sería necesario ini-
Tiene como objetivo inducir el anabolismo y evitar el ciar un suplemento (100-200 mg/día y 50-100 mg/día
catabolismo proteico para conseguir disminuir las ci- para valina e isoleucina, y leucina respectivamente).
fras de los tres BCAA, en especial de la leucina, que es
el más neurotóxico. Para ello, disponemos de varias
3.3. Tratamiento dietético en la fase
posibilidades:
de mantenimiento
a. Instaurar nutrición parenteral con una mezcla de El objetivo es mantener las siguientes concentracio-
aa exento de BCAA (no disponible en España) y nes de BCAA: leucina 100-300 µmol/l, isoleucina: 200-
un alto contenido energético con glucosa e insu- 400 µmol/l y valina 200-400 µmol/l. Los aportes deben
lina si fuera necesario. ser ajustados individualmente y basarse en las concen-
b. Instaurar nutrición enteral continua con una fór- traciones plasmáticas (tabla 4).
mula exenta de BCAA. En algunos casos debemos suplementar con isoleu-
c. Nutrición enteral continua con una fórmula dilui- cina y valina si en el control bioquímico se detecta un
da y suplementada con polímeros de glucosa. descenso importante.

Tabla 4.  Requerimientos proteicos y energéticos en la MSUD según Wappner y Gibson16.

Proteínas Leucina Isoleucina


Valina (mg/kg) Kcal/kg
(g/kg) (mg/kg) (mg/kg)
Recién nacidos 2,5-3 50-90 20-50 30-60 120-145
Lactantes 2-3 40-80 20-50 30-60 115-145
Escolares 1,5-2 20-40 5-15 10-30 60-80
Adolescentes y adultos 1-1,2 5-15 5-15 10-30 40-60
312 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

Para conseguir un mejor pronóstico intelectual lo Lophelx LQ 20, MSUD Maxamaid y MSUD Maxamum
óptimo es mantener concentraciones de leucina por (SHS); Vitaflo MSUD gel, Vitaflo MSUD Express, Vitaflo
debajo de 200 µmol/l (2,6 mg/dl)17. MSUD Express Cooler (esta última en formato líquido)
En la dieta de los pacientes con MSUD se excluyen de laboratorios Vitaflo.
los alimentos con PNAVB (carnes, pescado, huevos, le- Se recomienda dar un suplemento de tiamina de
che y derivados) debido a su alto contenido en leucina. 5 mg/kg/día para todas las formas de enfermedad, ya
Esta será suministrada por alimentos con proteínas de que está demostrado que puede beneficiar a estos pa-
bajo valor biológico como patatas, verduras, hortalizas cientes. Las formas tiamino-dependientes requieren
y frutas (tabla 5). entre 10-10000 mg/día.
La oferta de alimentos se ve limitada debido a los
escasos datos de contenido de leucina de los alimen- 3.4. Tratamiento dietético en las
tos, principalmente de los manufacturados. Tampoco
es posible utilizar el contenido proteico del alimento
descompensaciones metabólicas
como un indicador del contenido de leucina, pues es Suelen ocurrir durante procesos intercurrentes (en-
muy variable y poco fiable18. fermedad aguda, inmunizaciones, etc.) y debemos es-
Esta restricción de proteínas naturales de la dieta tar atentos a la posible aparición de síntomas con el
obliga al empleo de suplementos proteicos libres de objetivo de instaurar un tratamiento precoz.
BCAA. La cantidad a administrar dependerá de la edad; Este tratamiento consiste en la supresión de alimen-
la mayoría de los estudios muestran aportes durante tos proteicos y la administración de polímeros de glu-
los primeros meses de 2,5-3 g/kg, de los cuales, entre cosa para evitar el catabolismo (tabla 6).
un tercio y la mitad, son en forma de proteína natural Estos preparados deben administrarse a bajo volu-
y el resto en forma de fórmula especial exenta de men y alta frecuencia, preferentemente por vía oral o
BCAA. La mayoría de estos preparados contienen vita- sonda nasogástrica en caso de intolerancia oral17.
minas y minerales que cubren las necesidades del pa-
ciente según la edad17.
3.5. Tratamiento dietético en situaciones
Actualmente los preparados comerciales son los si-
guientes: BCD 1 y 2 (Mead-Johnson); MSUD Anamix especiales
Infant, MSUD Anamix Junior, MSUD Junior LQ, MSUD En caso de intervención quirúrgica programada es
aconsejable, en los 2-3 días previos a la intervención,
establecer medidas dietéticas como suspender por
Tabla 5.  Contenido de BCAA por gramo de proteína17. completo el aporte de proteína natural de alto valor
biológico, aumentar la fórmula exenta de BCAA y to-
Alimento Leucina Isoleucina Valina mar suplementos hipercalóricos exentos de proteína
Carnes 9-10% 6-7% 7-8% (PFD, Energyvit, Kcalip, etc.).
Se debe administrar glucosa por vía venosa y, si fue-
Leche de vaca 10% 6-7% 7% ra necesario, insulina.
Verduras 4-5% 3-4% 4% Es aconsejable en el postoperatorio mantener 24-48
horas más estas medidas y reintroducir aporte proteico
Patata 7% 5% 6% pasadas estas horas.
Pastas, pan 8% 4% 5%
Mantequilla 8% 6% 7%
3.6.  Nuevas terapias

Frutas 4-5% 3% 3-4% El trasplante hepático es una opción terapéutica para


los pacientes con MSUD clásica que tienen una insigni-

Tabla 6.  Polímeros de glucosa.

Edad (años) Concentración Calorías /100 ml Volumen/día


0-1 10% 40 150-200 ml/kg
1-2 15% 60 95 ml/kg
2-6 20% 80 1200-1500 ml/día
6-10 20% 80 1500-2000 ml/día
>10 25% 100 2000 ml/día
Tema 18.   Soporte nutricional en metabolopatías de los aminoácidos… 313

ficante actividad residual enzimática. Cabe destacar, sin 4. Homocistinuria


embargo, que no el 100% de la actividad enzimática se
expresa en el hígado, por lo que el trasplante hepático 4.1.  Consideraciones generales
corrige parcialmente el defecto metabólico. La homocistinuria es una enfermedad autosómica
A pesar de las complicaciones que esta opción lleva recesiva del metabolismo de la metionina (Met), pre-
consigo (cirugía muy compleja, inmunosupresión, re- sente en uno de cada 200.000-335.000 nacidos vivos
chazo), en las últimas décadas se han desarrollado (más frecuente en Irlanda), producida en su forma
nuevas técnicas quirúrgicas y nuevos regímenes inmu- clásica por una deficiencia de cistationina β sintetasa
nosupresores. Con todo ello, se han conseguido mejo- aunque, en casos raros, la origina una deficiencia de
res resultados tanto a nivel metabólico como de cali- 5-metiltetrahidrofolato-homocisteína metiltransferasa,
dad de vida en estos pacientes. metionina sintetasa, su cofactor metilcobalamina o de
Los datos de la literatura apoyan los beneficios a lar- 5,10-metilentetrahidrofolato reductasa, siendo esta úl-
go plazo del trasplante19. tima la causa más frecuente de hiperhomocistinemia
Recientemente se está postulando el empleo de fe- moderada (figura 3)21; también puede estar ocasiona-
nilbutirato como opción terapéutica en la MSUD, ya da de forma muy infrecuente por una alteración en el
que es capaz de inhibir enzimas quinasas y regular el transporte intracelular de cobalamina, manifestándose
complejo deshidrogenasa BCAA, consiguiendo dismi- solo con homocistinuria, con aciduria metilmalónica o
nuir los niveles séricos de los mismos. ambas. El resultado de cualquiera de las posibles cau-
No obstante, hacen falta más estudios para confir- sas es un acúmulo de homocisteína, homocistina y me-
mar el beneficio de dicho fármaco en la MSUD a largo tionina y una disminución de cisteína y taurina en el
plazo20. organismo.

Met
THF DimetilGly
Adenosina S-adenosil metil
transferasa

S-adenosilMet
R-H
HomoCys metil Metil
transferasa transferasa
R-CH3
Cobalamina
S-adenosilhomoCys
H2O
Adenosil
homocisteinasa
Adenosina
5-metilTHF HomoCys Betaína
Serina
Cistationina
β-sintetasa
Piridoxina

Cistationina
α-cetobutirato
Cistationinasa
Homoserina

Glutatión Cys Cistina

Taurina

Figura 3.  Metabolismo de la metionina. Cys: cisteína; Gly: glicina; Met: metionina;
R: radical; THF: tetrahidrofolato. En azul, enzimas; en negrita, coenzimas.
314 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

4.2.  Manifestaciones clínicas neonatos, 300-500 en niños y 500-1200 en adul-


tos, siempre se reparte en tres dosis. Es preciso
La severidad de la enfermedad está relacionada con recordar que dosis superiores 1000 mg/día pue-
los niveles de homocisteína y otros derivados disulfuro, den provocar neuropatía sensitiva y daño hepáti-
así como con la precocidad del diagnóstico y comienzo co. La respuesta, adecuada en los pacientes afec-
del tratamiento. Las manifestaciones son en parte simi- tos de la mitad de las mutaciones conocidas, se
lares al síndrome de Marfan e incluyen: osteoporosis, valora unas semanas más tarde de comenzar el
aracnodactilia, pectum excavatum o carinatum, pies tratamiento o modificar las dosis.
cavos, genu valgum, escoliosis, luxación del cristalino, Empleo de vías metabólicas alternativas en no
trombosis intravascular y tromboembolismo e, incluso, respondedores a piridoxina o si no se hace bien la
retraso mental22, 23. dieta o como tratamiento adicional a esta. Pode-
mos disminuir la homocisteína, transformándola
4.3.  Diagnóstico y control en Met mediante la betaína-homocisteína metil-
Los niveles plasmáticos de Met pueden ser normales transferasa, administrando para ello betaína (tri-
(5-40 µmol/l, 0,1-0,6 mg/dl) en el neonato afecto, por metiglicina) anhidra a dosis de 6-9 g/día (Farma-
lo que muchas veces solo se diagnostica tras el inicio de cia Hospitalaria: Cystadane®) repartida en
los síntomas o mediante una concentración de homo- 2-3 dosis o citrato de betaína (Farmacia Hospita-
cisteína total en plasma o suero superior a 15 µmol/l. El laria) a dosis de 12-18 g/día. La betaína no afecta
control evolutivo se realiza mediante los niveles plasmá- al peso, composición corporal ni gasto energético
de los pacientes24.
ticos de Met y homocisteína (deseable: total < 50 µmol/l
y libre <10 µmol/l)23.
También se puede utilizar la vía de la 5-metiltetrahi-
drofolato-homocisteína metiltransferasa, administran-
4.4.  Tratamiento dietético-nutricional do vitamina B12 y folato (5 mg/día); el folato también
Es preciso limitar el aporte de PNAVB a 1,5-1,8 g/kg/día es necesario administrarlo cuando empleamos piridoxi-
en los niños, disminuyendo el aporte de alimentos ricos na, por aumentar su demanda. Met puede aumentar
en proteínas, pudiéndose dar algo más de legumbres y hasta 1000 µmol/l, sin que se hayan encontrado efec-
gelatina al contener menos Met. Se emplea un sistema de tos adversos, pero se suele disminuir el tratamiento si
intercambio similar al de la fenilcetonuria (como tabla 2, se superan estos niveles.
aunque sin restricción de aspartamo), considerando que En caso de que la homocistinuria esté ocasionada por
1 g de proteína natural equivale a 20-25 mg de Met, to- una alteración en el transporte intracelular de cobalami-
lerándose una cantidad diaria muy variable entre 150 y na, puede administrarse vitamina B12 a dosis altas, se-
900 mg, pero muy constante en el mismo paciente. Pue- gún respuesta, para mejorar el control metabólico.
de ser necesario emplear suplementos con aa esenciales,
enriquecido en cisteína (Cys) y micronutrientes y sin Met, 5.  Errores innatos del ciclo de la urea
repartido entre las comidas. Con este fin se emplean:
HCU gel®, HCU express®, HCU cooler 15®, XMET Ana-
5.1.  Consideraciones generales
log®, XMET Maxamaid®, XMET Maxamum®, XMET Ho- Estos errores innatos del metabolismo se diagnosti-
midon® (95% aa sin Met), HOM 1® y HOM 2®. can en uno de cada 20000-30000 nacidos vivos (se
Es imprescindible aportar la energía suficiente para cree que afectan a 1/8500) y están causados por la
evitar el catabolismo proteico y conseguir el adecuado deficiencia de actividad de cualquiera de las seis enzi-
crecimiento y desarrollo, para lo que se emplean suple- mas implicadas (figura 4, tabla 7) en la conversión de
mentos bajos en proteínas junto con los alimentos. amonio en urea (dos amonios por cada urea), que se
produce en diversos órganos, pero de forma completa
4.5. Otros tratamientos22, 23 únicamente en el hígado. La herencia es autosómica
recesiva en todos los casos, salvo la deficiencia de orni-
a. Aporte de los productos deficitarios de la reac- tín-transcarbamilasa (OTC, el más frecuente), que es
ción afectada. Es preciso incrementar Cys, que se dominante ligada al X, por lo que se afectan todos los
ha convertido en esencial, y para ello se aportan varones pero las mujeres heterocigotas en grado varia-
100 mg/kg/día de L-cistina, que logra mantener la ble según la afectación hepática25-27.
síntesis de cistationina y taurina, que son necesa-
rias para el metabolismo cerebral.
5.2.  Manifestaciones clínicas
b. Estimulación de la actividad enzimática. Se admi-
nistra piridoxina (B6), que es cofactor de la cista- Los síntomas se producen por acumulación de amo-
tionina β sintetasa, a las dosis justas para mante- nio, tóxico para el cerebro, y glutamina (Gln), alanina y
ner los niveles plasmáticos de homocisteína y Met glicina (Gly) que pueden producir edema cerebral. La
más bajos; las dosis suelen ser de 150 mg/día en forma clásica de presentación neonatal da lugar a un
Tema 18.   Soporte nutricional en metabolopatías de los aminoácidos… 315

OAA α-KG
Glu Asp
Asp aminotransferasa
Citrulina Argsucc
ASS

Glu ASL
NAGS Fumarato
Citrulina
Arg
N-AcetilGlu OTC
HCO3 – +
CPS ASA
CarbamilP
NH4+ UREA

Ornitina Ornitina
aa
Mitocondria Citoplasma

CarbamilP Orotato
Figura 4.  Ciclo de la urea. aa: aminoácidos; Arg: arginina; Argsucc: argininosuccinato;
Asp: aspartato; a-KG: a-cetoglutarato; carbamilP: carbamilfosfato; Glu: glutamato;
OAA: oxalacetato. En azul, enzimas; ASA: arginasa; ASL: arginosuccínico liasa;
ASS: arginosuccínico sintetasa; CPS: carbamilfosfato sintetasa; NAGS:
N-acetilglutamato sintetasa; OTS: ornitín transcarbamilasa.

Tabla 7.  Aspectos diferenciales entre las distintas deficiencias causantes del errores
innatos del ciclo de la urea.

Deficiencia Sangre Orina Tratamiento


NAGS ↑ Gly Dar N-carbamilglutamato
CPS ↑ Gly Dar citrulina
OTS ↑ Gly ↑↑ Orótico Dar citrulina
ASS ↑↑ Citrulina ↑ Orótico ↑↑ aporte de Arg
↑ Citrulina, ↑ Orótico,
ASL ↑↑ aporte de Arg
↑ Argsucc ↑↑ Argsucc
↑↑ Arg, Restricción y no aporte de Arg
ASA ↑ Arg
Gln normal Dar ornitina

Arg: arginina; Argsucc: arginosuccínico; ASA: arginasa; ASL: arginosuccínico liasa; ASS: arginosuccínico
sintetasa; CPS: carbamilfosfato sintetasa; Gln: glutamina; Gly: glicina; NAGS: N-acetilglutamato
sintetasa; OTS: ornitín transcarbamilasa.

cuadro de encefalopatía tras uno o dos días de co- cipal factor predictor de la función neurológica
mienzo de la alimentación; cuando la amoniemia es residual. La forma crónica-tardía, al igual que las crisis,
superior a 100 µmol/l aparecen rechazo a alimentos se manifiesta tras elevada ingesta, anestesia o aumen-
proteicos, vómitos, letargia, confusión, evoluciona a to del catabolismo proteico (cirugía, infecciones) con
hemorragias y convulsiones y, cuando el amonio so- anorexia, vómitos, hipertransaminasemia, encefalopa-
brepasa 200-250, provocan coma y muerte. Más de la tía progresiva e incluso coma; los síntomas mejoran
mitad de los pacientes con deficiencia de OTC que so- con el ayuno. En niños mayores y en adelante hay for-
breviven presentan un daño neurológico severo, sien- mas más larvadas, que pueden dar cefalea, disartria,
do los niveles de amonio plasmático al ingreso el prin- ataxia y alucinaciones25-28.
316 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

5.3.  Diagnóstico y control es activador indirecto de la CPS y genera orniti-


na, en deficiencia de ASS y ASL, debiendo apor-
Los errores innatos del ciclo de la urea presentan tarse en mayores dosis (400-700 mg/kg/día) en
hiperamoniemia (>150 µmol/l en neonatos y > 80 en estas dos deficiencias, por la importante pérdi-
mayores; grave si > 200), con glucemia y lactacidemia da urinaria de ornitina incorporada a la citruli-
normales y cetonuria negativa, y otras alteraciones bio- na y al arginosuccinato, respectivamente. Es
químicas, según la enzima afectada (tabla 7), que sir- preciso vigilar la tendencia a la acidosis hiper-
ven para diferenciar entre los seis posibles. El diagnós- clorémica.
tico definitivo se realiza determinando la actividad En la deficiencia de CPS y OTC puede administrar-
enzimática de cualquiera de ellos en hígado, de carba- se citrulina (170 mg/kg/día) en lugar de Arg, ya
milfosfatosintetasa (CPS) y OTC en enterocitos, argino- que da lugar a esta y consigue la eliminación de
succinatosintetasa (ASS, citrulinemia) y liasa (ASL, argi- otro amonio del aspartato. La ornitina se adminis-
nosuccinicoaciduria) en fibroblastos y arginasa (ASA, tra a dosis de 4 a 6 g/día en la argininemia.
argininemia) en eritrocitos26, 27.
b. Empleo de vías alternativas para la eliminación de
El control evolutivo se realiza determinando amonie- amonio de los aa como compuestos diferentes
mia, que debe mantenerse debajo de 40-60 µmol/l o de urea. El benzoato sódico se emplea a dosis de
del límite superior de la normalidad indicado por el la- 250 mg/kg/día repartido en tres a cuatro veces
boratorio, asegurando un crecimiento y desarrollo in- pues se conjuga con Gly, dando hipurato, que eli-
telectual normales y ausencia de signos y síntomas de mina amonio por la orina; se debe administrar
enfermedad o déficit proteico. También se miden los folato, que se consume en la producción de Gly a
niveles plasmáticos de Gln (alta > 800 µmol/l), argini- partir de serina. El benzoato produce un incre-
na (Arg, mantener en 50-200 µmol/l), citrulina (alta mento de la eliminación de potasio por la orina,
> 100 µmol/l, muy alta > 250) y proteínas viscerales y que puede originar hipocaliemia y alcalosis meta-
niveles urinarios de orotato tras sobrecarga con alopu- bólica, así como náuseas, vómitos e irritabilidad;
rinol (alto >3 µmol/mol de creatinina), indicando estos la sobredosificación puede desencadenar una cri-
últimos un aporte deficiente de Arg o un control insu- sis hiperamoniémica.
ficiente si se encuentran 5-10 veces mayores que el lí-
Se puede administrar fenilbutirato, a dosis de
mite superior de la normalidad.
250-500 mg/kg día, según sea combinado con
benzoato o no, que se transforma en fenilaceta-
5.4.  Tratamiento dietético-nutricional to, el cual se conjuga con Gln dando fenilacetil-
El aporte calórico de los pacientes afectados debe ser Gln; se elimina el doble de amonio por cada fenil-
un 25-50% superior al calculado en sanos para evitar el butirato; también es posible emplear fenilacetato
catabolismo proteico y favorecer la formación de ce- directamente. Los efectos adversos son similares a
toácidos, pero evitando sobrepeso. Debe realizarse una los de benzoato. El N-carbamilglutamato se da
restricción proteica variable según el tipo y grado de en la deficiencia de N-acetilglutamatosintetasa
afectación y la edad (mayores necesidades en los pri- (NAGS) pues activa la CPS, derivándose a esta en-
meros seis meses de vida), asegurando la ingesta de trada al ciclo los restos procedentes de glutama-
PNAVB; limitar el aporte de Arg en argininemia. En las to; las dosis empleadas son de 100-200 mg/kg/
formas más graves (sobre todo déficit de CPS y OTC) y día en las formas agudas neonatales y 20-30 mg/
cuando hay anorexia importante, administrar un kg/día en las tardías.
25-50% como mezcla de aa esenciales hasta 0,7 g/kg c. Trasplante hepático. En casos graves de deficien-
día, repartido en dos a tres tomas; para ello se em- cia de OTC y CPS y si hay episodios recurrentes de
plean: Vitaflo EAA®, UCD 1®, UCD 2®, Dialamine® y hiperamoniemia a pesar de tratamiento adecua-
Essential Amino AcidMix®. En caso de empeoramiento do o si no es posible seguir tratamiento dieté-
metabólico por ayuno prolongado o aumento del cata- tico-nutricional, incluir en programa de trasplante
bolismo proteico, es preciso reducir la ingesta proteica de forma precoz. Al contrario, conforme crecen
a la mitad o suspenderla, ingresando al paciente si no los pacientes con deficiencias de ASS o ASL, me-
presenta tolerancia oral. Es necesario emplear suple- jora su tolerancia a proteínas. Tras el trasplante, el
mentos de vitaminas y minerales por el posible déficit control metabólico es precoz y hace innecesarias
tras la restricción proteica, con una fórmula del tipo restricciones o medicación, salvo en algunos ca-
Energivit®. sos, la suplementación de Arg.

5.5.  Otros tratamientos26, 27 5.6. Tratamiento de las crisis


hiperamoniémicas26, 27
a. Aporte de productos deficitarios. Se debe apor-
tar arginina a dosis de 100-170 mg/kg día en En primer lugar, como en todas las situaciones de
todos los casos salvo en la argininemia, ya que emergencia, es preciso asegurar la vía aérea, incluso
Tema 18.   Soporte nutricional en metabolopatías de los aminoácidos… 317

con ventilación mecánica; controlar también la presión 6.2.  Manifestaciones clínicas


intracraneal. Se debe aportar suero glucosado al 10%
a un ritmo de 5-6 ml/kg/h y añadir lípidos intravenos- El prototipo de glucogenosis hepática es la gluco-
sos hasta conseguir un aporte de 80 kcal/kg/día, sin genosis tipo I, que se manifiesta principalmente por
administrar proteínas las primeras 48 horas; si se tole- hipoglucemias y hepatomegalia. Las hipoglucemias
ra, administrar los nutrientes vía enteral. Reintroducir (sin hiperinsulinismo) pueden ser graves y su control
las proteínas desde 0,25-0,5 g/kg/día cuando la amo- es el principal objetivo del tratamiento nutricional.
niemia < 100 µmol/l. Se realizará diálisis o hemofiltra- La hepatopatía se caracteriza por el acúmulo del
cion (NO exsanguinotransfusión) para eliminar el amo- glucógeno y esteatosis, pero no evoluciona a cirro-
nio si este supera los 350 µmol/l. sis hepática aunque sí cursa con hipertransaminase-
Se puede administrar benzoato y fenilacetato, am- mia; durante la segunda y tercera décadas de la vida
bos a dosis de 250 mg/kg/día en niños y 5,5 g/m2 en aparecen adenomas hepáticos que pueden maligni-
mayores, diluidos en sueros glucosados, al que se zarse a hepatocarcinomas29. Las hipoglucemias son
debe añadir potasio, por las pérdidas, pero no sodio, comunes a todas las formas hepáticas de glucoge-
pues ya lo aportan estos fármacos; una vez estabili- nosis, si bien la gravedad de las mismas, la mejoría
zados, con amonio 100-200 µmol/l, e ingesta reanu- con la edad y las horas de tolerancia al ayuno varían
dada, se pueden dar por vía oral. Arg se administra de un tipo a otro, siendo más grave en general el
por vía parenteral a dosis de 400-600 mg/kg/día en tipo I.
deficiencia de ASS o ASL o si no se sabe tipo de Otros síntomas que pueden acompañar a la gluco-
deficiencia y 200 mg/kg/día en deficiencia de OTC o genosis de tipo I, y al resto de las hepáticas de forma
CPS. Está indicado el aporte de citrulina enteral variable, son: retraso del crecimiento, retraso puberal,
(150-200 mg/kg/día) en neonatos con deficiencia de cara de muñeca, nefromegalia que puede ir asociada a
OTC o CPS (NO en deficiencia de ASS o ASL). No proteinuria e insuficiencia renal, hiperlipemia, hiperlac-
emplear valproico ni fenobarbital para las convulsio- tacidemia y acidosis metabólica29.
nes, pues disminuye la actividad del ciclo de la urea. Otros tipos de glucogenosis pueden llevar asocia-
La carnitina se aporta a dosis de 100-200 mg/kg/día da miopatía y cardiopatía (III), neutropenia, aftas e
durante las crisis hiperamoniémicas, por incremento infecciones (Ib) o neuropatía (IV). La clínica que
de su consumo y por mejorar la situación metabólica acompaña a cada tipo de glucogenosis se resume en
y la tolerancia al benzoato. la tabla 8.

6. Glucogenosis 6.3.  Diagnóstico y control


Debe sospecharse una glucogenosis hepática ante
6.1.  Consideraciones generales
un niño con hipoglucemia de ayuno sin hiperinsulinis-
Las glucogenosis o enfermedades del depósito de mo, pudiendo existir acidosis láctica. Si se realiza un
glucógeno son un conjunto de enfermedades ocasio- test de glucagón, la respuesta de la glucemia es escasa
nadas por una alteración en la síntesis (glucogénesis) o o nula y puede aumentar la acidosis láctica en el caso
en la degradación (glucogenólisis) del glucógeno o en de la glucogenosis de tipo I, pudiendo diferir en otras.
la glucólisis, que tienen como consecuencia un acúmu- La administración de galactosa o fructosa no mejora la
lo tisular de glucógeno de características normales hipoglucemia y puede empeorar la acidosis.
pero en cantidad excesiva, un glucógeno anómalo o Para asegurar el diagnóstico de la glucogenosis de
bien una ausencia en su producción. tipo I, en primer lugar se estudiará el gen de transloca-
Las glucogenosis se clasifican en tres grupos según sa de la glucosa-6-fosfato (Ib); en el caso de que fuese
predomine la afectación hepática, muscular o sistémi- normal, se pasará a estudiar el gen de la subunidad
ca (tabla 8). Las glucogenosis hepáticas son las que catalítica de la glucosa-6-fosfatasa (Ia) y si se dieran
tienen más interés desde el punto de vista nutricional mutaciones de interés se obtendría el diagnóstico;
debido a que el soporte nutricional adecuado mejora pero, si no las hubiera, se pasaría a estudiar la actividad
su evolución. enzimática de la glucosa-6-fosfatasa en una biopsia de
Los distintos tipos de glucogenosis se designan con tejido hepático29-33.
números según el momento de su descripción, la enzi- Si el paciente no tiene estudios genéticos realizados,
ma afectada y el nombre de su descubridor (tabla 8). el diagnóstico definitivo de la enfermedad de Von Gier-
Así, la glucogenosis de tipo I fue la primera descrita, en ke lo marca la actividad de la glucosa-6-fosfatasa y la
1929, por von Gierke. existencia de glucógeno almacenado en el hígado en-
Las glucogenosis son enfermedades con herencia contrado por análisis bioquímico y microscópico de la
autosómica recesiva, exceptuando IXa, déficit de fosfo- biopsia de hígado34.
glicerato quinasa (PGK) y IIb (enfermedad de Danon), Además del control metabólico, se precisan revisio-
que tienen herencia ligada al cromosoma X. nes por Digestivo por la hepatopatía asociada. Otros
318 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

Tabla 8.  Glucogenosis: tipos y enzimas afectadas.

Defecto enzimático o Tejido principal


Tipo Principales síntomas clínicos
transportador implicado

GLUCOGENOSIS HEPÁTICAS
Ia Glucosa-6-fosfatasa Hígado, riñón Hepatomegalia, baja estatura,
Von Gierke hipoglucemia, hiperlactacidemia,
hiperlipemia
Ib Glucosa-6-fosfato Hígado, riñón, Igual que Ia y neutropenia e infecciones
translocasa leucocitos
III Enzima desramificante y Hígado, músculo Hepatomegalia, cardiopatía y miopatía,
Cori, Forbes subtipos baja estatura, hipoglucemia
IV Enzima ramificante Hígado Hepatoesplenomegalia, cirrosis
Andersen hepática, formas neuromusculares raras
VI Fosforilasa hepática Hígado Hepatomegalia, baja estatura e
Hers hipoglucemia
IX Fosforilasa cinasa y Hígado y/o músculo Hepatomegalia, baja estatura (miopatía)
subtipos e hipoglucemia
0 Glucógeno sintasa Hígado Hipoglucemia
GLUCOGENOSIS MUSCULARES
V Miofosforilasa Músculo Mialgia, intolerancia al ejercicio y
Mc Ardle debilidad
VII Fosfofructocinasa y Músculo, eritrocitos Miopatía, anemia hemolítica, afectación
Tarui variantes multisistémica (convulsiones,
cardiopatía)
- Fosfoglicerato cinasa Músculo, eritrocitos, Intolerancia al ejercicio, anemia
sistema nervioso hemolítica y convulsiones
central
X Fosfoglicerato mutasa Músculo Intolerancia al ejercicio y espasmos
musculares
XI Lactato deshidrogenasa Músculo Intolerancia al ejercicio y espasmos
musculares, lesiones cutáneas
XII Aldolasa A Músculo Intolerancia al ejercicio y espasmos
musculares
XIII β-enolasa Músculo Intolerancia al ejercicio y espasmos
musculares
GLUCOGENOSIS GENERALIZADAS
II α-glucosidasa lisosomal Generalizado en Hipotonía, cardiomiopatía (infantil,
Pompe lisosomas juvenil y formas adultas)
IIb LAMP-2 (glicoproteína de Corazón, músculo Cardiomiopatía
Pseudo-Pompe membrana lisosomal 2)
Danon
Defecto enzimático no Cuerpos poliglucosanos Epilepsia mioclónica, demencia,
Lafora
conocido, déficit de laforina en todos los órganos convulsiones
Tema 18.   Soporte nutricional en metabolopatías de los aminoácidos… 319

controles en otros tipos de glucogenosis hepáticas de- res, adolescentes o adultos30, 35. Partiendo de nive-
penden del riesgo de alteraciones hematológicas, ne- les normales de glucemia, se ha comprobado que
fropatía, miopatía, neuropatía o cardiopatía. la ingesta de 1,75-2,5 g de almidón de maíz por
kilogramo de peso cada 6 horas proporciona 5,3-
6.4.  Tratamiento dietético-nutricional 7,6 miligramos de glucosa por kilogramo de peso
cada minuto y conserva la glucemia de forma
El tratamiento principal es dietético, tomando carbo- constante. Por inmadurez de la función pancreáti-
hidratos de absorción lenta, y limitar el consumo de ca exocrina, se produce de forma frecuente, al ini-
leche a medio litro al día. En el caso de tener vómitos o cio del tratamiento con almidón de maíz, diarrea,
pérdida de peso importante, se pauta dextrinomaltosa. distensión abdominal y meteorismo, que desapa-
Tomar almidón crudo de maíz (como la Maicena) a recen de forma espontánea paulatinamente.
partir de los doce meses para toda la vida, con ello se El almidón de maíz a largo plazo ha demostrado ser
mantendrá la glucemia de 4 a 6 horas (es más eficaz tan eficaz como la nutrición enteral nocturna, en
que la perfusión de glucosa). Y el almidón con gran relación a mantener el nivel de glucemia en valores
contenido de amilopectina (Glycosade®) es más eficaz normales y en mejorar el desarrollo del individuo
durante más horas a dosis parecidas30, 34. Estas estrate- afectado.
gias en forma de dieta permiten a los pacientes alcan- Existe un almidón modificado (Glycosade®) que
zar un crecimiento y desarrollo puberal normales y, ha demostrado36 que, ingerido antes de que el
disminuyen las alteraciones metabólicas y las complica- paciente vaya a dormir, aumenta las horas de
ciones30, 31. ayuno nocturno sin que el paciente presente hi-
Dentro de esta terapia dietética, cabe señalar30, 34: poglucemias, disminuye la respuesta insulínica y
mejora el apetito durante el día36-38.
a. Alimentación por vía oral, proporcionando 65%
de kilocalorías por hidratos de carbono, 30% por 6.5.  Otros tratamientos
lípidos y 15% por proteínas. Es muy importante
seguir una ingesta metódica y frecuente, serían El calcio y la vitamina D a dosis individualizadas se-
unas 5 o 6 comidas al día, y cada 2 o 3 horas, el rían suplementos vitamínicos y minerales útiles en el
paciente debe tomar alimentos ricos en almidón. tratamiento de pacientes con glucogenosis hepáti-
Se debe evitar todo alimento que contenga lacto- cas30. Se aconseja tratamiento con IECA si hay micro-
sa, sacarosa o fructosa (lácteos, frutas, azúcar), albuminuria y fibratos y/o inhibidores de la hidroxime-
por transformarse en lactato muy rápido y no tilglutaril coenzima A reductasa (estatinas) para la
conseguir la alimentación constante y en los nive- dislipemia.
les que se precisa de glucosa. El trasplante hepático está indicado en algunas for-
b. Nutrición enteral nocturna por sonda nasogástri- mas graves que no responden bien al tratamiento nu-
ca. En los lactantes o niños sanos la velocidad de tricional y tienden a derivar a una cirrosis, así como en
producción de glucosa es de 5 a 8 mg por kilogra- el caso de que el paciente tuviese adenomas múltiples
mo de peso cada minuto; por ello, los que pade- o riesgo de hepatocarcinoma (I, III o IV)30, 34.
cen glucogenosis tipo I deben igualar o superar El trasplante renal en pacientes con subtipo Ia e insu-
esta cifra a una velocidad de 8 a 9 mg por kilogra- ficiencia renal terminal normaliza la función del riñón,
mo de peso por minuto; es distinto según el pa- pero no corrige la metabolopatía, por lo que puede
ciente y debe controlarse cada 3 o 6 meses, de- estar indicado un trasplante combinado de hígado y
biendo ser cuidadosos y evitando el exceso de riñón; en pacientes Ib el trasplante hepático corrige las
aporte, ya que podrían desarrollar anorexia diur- alteraciones metabólicas, pero no la neutropenia34, 35.
na, con incapacidad de tener un consumo apro- En la glucogenosis Ib específicamente se busca pre-
piado de hidratos de carbono y/o con una ingesta venir las infecciones y sus recidivas, y para ello se tratan
inadecuada de proteínas. Hay que evitar que se con factor recombinante humano estimulante de la
detenga bruscamente la perfusión de la nutrición colonia de granulocitos macrófagos (GM-CSF) a dosis
enteral y, si así fuese, deben ingerirse hidratos de de 7 mg/kg/día y factor estimulante de la colonia de
carbono media hora después de que finalice la granulocitos (G-CSF) a dosis de 3 mg/kg/día por vía
nutrición enteral. subcutánea.
c. Almidón de maíz. Introducido en la dieta paulati- Algunos expertos defienden la profilaxis con antibió-
namente a lo largo del segundo año de vida o final ticos (normalmente cotrimoxazol). La vitamina E puede
del primer año, ha demostrado eficacia en la glu- mejorar las aftas.
cogenosis tipo I, aunque esta es variable. Se usará Las terapias dietéticas y el factor estimulante de colo-
una dilución a temperatura ambiente de Maizena nias combinados alivian de forma significativa las altera-
o almidón de maíz no cocido (siglas en inglés ciones metabólicas y mieloides de pacientes Ib y mejo-
UCCS, UnCooked Corn Starch) en niños más mayo- ran su pronóstico. Pero, cabe señalar que tras la terapia
320 BLOQUE: PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS

con factor estimulante de colonias un número conside-   5. Maillot F, Lilburn M, Baudin J, Morley DW, Lee PJ.
rable de adultos desarrolla esplenomegalia30, 34, 35, 39. Factors influencing outcomes in the offspring of
mothers with Phenylketonuria during pregnancy:
7. Resumen the importance of variation in maternal blood
Los errores innatos del metabolismo de los amino­ phenylalanine. Am J Clin Nutr 2008; 88:700-5
ácidos son un conjunto de enfermedades caracteriza-   6. Zurfluh MR, Zschocke J, Lindner M, Feillet F, Chery
das por defectos en alguna de las enzimas implicadas C, Burlina A, et al. Molecular genetics of tetrahy-
en estas rutas metabólicas que dan lugar a acúmulo de drobiopterin-responsive phenylalanine hydroxyla-
los sustratos anteriores al paso afectado y este acúmu- se deficiency. Hum Mutat 2008; 29: 167-75.
lo resulta tóxico y las consecuencias pueden ser graves   7. Dobrowolski SF, Pey AL, Koch R, Levy H, Ellingson
fundamentalmente desde el punto de vista neurológi- CC, Naylor EW, et al. Biochemical characterization
co. Se tratan mediante un control estricto de la ingesta of mutant phenylalanine hydroxylase enzymes and
de alimentos proteicos que contengan los aminoácidos correlation with clinical presentation in hyper-
cuyo catabolismo está afectado y suplementando con phenylalaninaemic patients. J Inherit Metab Dis
productos proteicos que no contengan dichos amino­ 2009; 32: 10-21.
ácidos.   8. Sanjurjo P. Actualización en Enfermedades Raras
El error innato del metabolismo de los aminoácidos Metabólicas. XI Reunión Asociación de Neurocien-
más común es la fenilcetonuria, que puede suponer cias del Desarrollo, Cádiz, mayo 2013.
hasta dos tercios de los casos en una consulta de erro-   9. Ding Z, Harding CO, Rebuffat A, Elzaouk L, Wolff
res innatos del metabolismo en adultos. JA, Thony B. Correction of murine PKU following
Las glucogenosis son un conjunto de enfermedades AAV-mediated intramuscular expression of a com-
producidas por defectos en las enzimas implicadas en plete phenylalanine hydroxylating system. Mol
la glucogénesis, la glucogenólisis o la glucólisis y se ca- Ther 2008; 16 (4): 673-81
racterizan por un depósito de gran cantidad de glucó- 10. McLeod E, Ney D. Tratamiento nutricional de la
geno normal o glucógeno estructuralmente anómalo o fenilcetonuria. Ann Nestlé (Esp). 2010; 68: 60-71
bien incapacidad para producir glucógeno. 11. Ney DM, Blank RD, Hansen KE. Advances in the
Según la principal afectación, se clasifican en gluco- nutritional and pharmacological management of
genosis hepáticas, musculares o sistémicas, siendo las Phenylketonuria.Curr Opin Clin Nutr Metab Care.
primeras las de mayor interés en nutrición clínica al be- 2014; 17: 61-68
neficiarse de tratamiento nutricional, consistente en 12. Al Hafid NA, Christodoulou J. Phenylketonuria: a
aporte de hidratos de carbono de absorción lenta con review of current and future treatments. Transl Pe-
la frecuencia necesaria para evitar las hipoglucemias y diatr 2015; 4(4): 304-17.
esto consigue mejorar el control metabólico y evitar las 13. Martinez-Pardo M, Bélanguer-Quintana A, García
complicaciones. La glucogenosis hepática más fre- Muñoz M, Desviat L, Pérez B, Ugarte M. Protocolo
cuente y característica es la tipo Ia de Von Gierke. La de diagnóstico, tratamiento y seguimiento de las
afectación hepática puede asociarse a nefropatía, mio- hiperfenilalaninemias. 2016; 71-108.
patía y cardiopatía, según los tipos de glucogenosis. 14. Moreiras O. Tabla composición alimentos. 16ª ed.
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BLOQUE:
LÍPIDOS
(Dra. Rosa Burgos Peláez y
Dra. M.ª Nuria Virgili Casas)
TEMA 19. Influencia de la dieta en el control de la hiperlipemia
y el riesgo cardiovascular.
Dres. Miguel Á. Rubio y Carmen Moreno

TEMA 20. Trastornos congénitos del metabolismo de los lípidos:


Adrenoleucodistrofia. Dieta controlada en ácidos grasos.
Dres. Rosa Burgos Peláez, Mireia Guerrero Gual, Guillermo Cárdenas Lagranja
y Hegoi Segurola Gurrutxaga

TEMA 21. Quilotórax y ascitis quilosa. Dietas modificadas en triglicéridos


de cadena larga y cadena media.
Dres. M.ª Nuria Virgili Casas, Rafael López Urdiales, Eva María García Raimundo
y Mónica Montserrat Gil de Bernabé

TEMA 22. Epilepsia. Dietas cetogénicas.


Dres. Pere Leyes i García y Joan Trabal Vílchez
Tema 19.
Influencia de la dieta en el control de la hiperlipemia
y el riesgo cardiovascular
Miguel A. Rubio
Sección de Nutrición Clínica y Dietética, Servicio de Endocrinología y Nutrición, Hospital Clínico
Universitario San Carlos. Madrid

Carmen Moreno
Atención Primaria. Centro de Salud Lucero (Madrid)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 325-343.

1. Introducción
2.  Influencia de los ácidos grasos sobre el riesgo cardiovascular
3.  Efectos de los esteroles sobre el riesgo cardiovascular
4.  Recomendaciones para reducir el impacto de una dieta aterogénica
5.  Recomendaciones nutricionales que pueden tener un impacto adicional sobre el riesgo cardiovascular
6.  Nutrientes y salud cardiometabólica
7.  Guías de recomendaciones nutricionales
8. Bibliografía

1. Introducción medad cardiovascular (ECV)1. La ingestión de diferen-


tes cantidades de ácidos grasos y colesterol sigue
Los hábitos alimentarios de los países occidentales siendo la referencia de las pautas nutricionales indica-
están íntimamente ligados al desarrollo de enfermeda- das en la prevención y tratamiento de las dislipemias.
des crónicas prevalentes como son las enfermedades Pero conviene resaltar que disponemos de otros ele-
cardiovasculares o ciertos tipos de cáncer. En el caso mentos de la dieta (vitaminas, minerales, fitoquímicos,
concreto de las hiperlipemias, la alimentación es res- etc.) que también son determinantes en esta relación
ponsable del 90-95% de los niveles de lípidos plasmá- dieta y riesgo cardiovascular, de tal manera que, hoy
ticos, ocupando la genética un lugar menos relevante en día, existen mecanismos dependientes de ciertos
como responsable directo de la aparición de una hiper- nutrientes de la dieta que van más allá de la simple
lipemia y su asociación con la arteriosclerosis. teoría lípidica de la arteriosclerosis (tabla 1). En esta
Aunque existen factores genéticos que predisponen revisión vamos a resaltar aquellos aspectos más rele-
a la aparición precoz de una arteriosclerosis en cual- vantes que debemos tener presentes a la hora de pre-
quiera de sus manifestaciones clínicas (enfermedad venir el riesgo cardiovascular o la aproximación dieto-
coronaria, accidente cerebrovascular o enfermedad ar- terápica ante una dislipemia.
terial periférica), pueden estar presentes otra serie de
factores de riesgo cardiovasculares, ampliamente reco- 2. Influencia de los ácidos grasos sobre
nocidos, que pueden acelerar el desarrollo de las pla-
cas de ateroma y, por consiguiente, expresarse con
el riesgo cardiovascular
mayor precocidad. Nos referimos a la presencia de dia- Diversos estudios epidemiológicos desarrollados a
betes, hipertensión arterial, obesidad, tabaquismo, se- partir de la década de los sesenta, entre los que figura
dentarismo, etc., que contribuyen de manera combi- como más representativo el estudio de siete países2, de-
nada a una rápida progresión de la arteriosclerosis. jaron constancia de la estrecha relación entre el consu-
El tipo de dieta de cada población es el principal de- mo de grasa y de ciertos tipos de ácidos grasos con la
terminante de las manifestaciones clínicas de la enfer- ECV. Se implicó por vez primera a las grasas saturadas y

325
326 BLOQUE: LÍPIDOS

Tabla 1.  Nutrientes de la dieta y su influencia sobre los factores de riesgo


cardiovascular.

Nutrientes Influencia sobre


Nutrientes desfavorables Concentraciones de lípidos
Presión arterial
Ácidos grasos saturados de cadena larga
Tendencia trombótica
Ácidos grasos con configuración trans
Ritmo cardiaco
Colesterol dietético
Función endotelial
Algunos minerales (metales pesados)
Inflamación sistémica
Nutrientes favorables Sensibilidad a la insulina
Estrés oxidativo
Ácidos grasos monoinsaturados
Microbiota intestinal
Ácidos grasos poliinsaturados
Fitoesteroles
Fibra soluble
Flavonoides
Vitaminas antioxidantes
Alcohol

al colesterol como los elementos nutricionales directa- ga: mirístico (C14:0) > palmítico (C16:0) > láurico
mente más relacionados en el desarrollo de la ECV, (C12:0) > esteárico (C18:0)4, 5. En este contexto, pode-
mientras que las grasas insaturadas ejercían un efecto mos decir que son los ácidos grasos saturados de cade-
opuesto. Estas aportaciones epidemiológicas, basadas na larga los principales implicados en la etiopatogenia
en estudios de observación y otros estudios de carácter de la arteriosclerosis, no viéndose afectada por los áci-
experimental, han sido los que han servido para esta- dos grasos de cadena corta (C2:0-C6:0) o de cadena
blecer las recomendaciones nutricionales de prevención media (C8:0-C10:0). Así, por ejemplo, el aceite de coco
y tratamiento nutricional de las enfermedades cardio- y las grasas lácteas contienen proporciones de AGS de
vasculares hasta la actualidad. Como veremos más ade- cadena media, mientras que las grasas derivadas de las
lante, la revisión de otros estudios de intervención nu- carnes y el aceite de palma contienen mayor proporción
tricionales, así como de metanálisis, ha suscitado una de AGS de cadena larga.
gran controversia científica sobre las mejores indicacio- Numerosos estudios han mostrado una asociación
nes a realizar en la población general. Hasta que no entre la ingesta de AGS y el aumento de las concentra-
exista un consenso unánime de sociedades científicas, ciones de colesterol total, cLDL, cHDL, y del cociente
las guías de prevención y tratamiento nutricional siguen colesterol total: cHDL, considerado como un buen indi-
descansando sobre los pilares epidemiológicos clásicos. cador de riesgo de enfermedad cardiaca coronaria
(ECC)6. La cuestión clave desde el punto de vista de las
2.1.  Grasa saturada recomendaciones nutricionales, consiste en saber
cómo debemos sustituir los AGS. En este sentido, y a la
La grasa saturada (GSAT) se encuentra formando vista de numerosos estudios epidemiológicos, se pue-
parte de todos los alimentos de origen animal (terres- de concluir que: la sustitución de AGS de la dieta por
tres o marinos) y de los aceites tropicales (coco, palma, ácidos grasos poliinsaturados (AGPI) o monoinsatura-
palmiste, nuez de karité) y es el principal elemento de la dos (AGM) disminuye las concentraciones de colesterol
dieta que se correlaciona íntimamente con las concen- total, del cLDL y ligeramente las de cHDL y en conse-
traciones de colesterol ligado a las lipoproteínas de baja cuencia el riesgo de ECV (nivel de evidencia I, grado de
densidad (cLDL) y por extensión con la mortalidad por recomendación A)7.
ECV3. Las cantidades de grasa saturada dependen lógi- No obstante, la asociación entre consumo de GSAT y
camente de la procedencia del alimento que se consu- enfermedad coronaria se encuentra actualmente en
me (tabla 2). En Europa, el 70-80% de la GSAT procede discusión, tras la aparición de varios artículos de revi-
del consumo de carnes y derivados cárnicos y de los sión sistemática y metanálisis que no han encontrado
lácteos (leche, queso, nata, mantequilla). Sin embargo, una asociación positiva entre el consumo de GSAT y la
hoy sabemos que no todos los ácidos grasos saturados enfermedad cardiovascular8-10 (tabla 4). Es posible que
(AGS) son igualmente de aterogénicos y trombogénicos la manera de medir la ingesta de GSAT contribuya a un
(tabla 3), de tal manera que, desde una concepción posible sesgo. Así, los resultados obtenidos de encues-
teórica, podemos establecer una graduación de mayor tas nutricionales no reflejan un adecuado consumo de
a menor potencial para los ácidos grasos de cadena lar- GSAT (porque se infradeclaran, al considerarse noci-
Tema 19.  Influencia de la dieta en el control de la hiperlipemia y el riesgo cardiovascular 327

Tabla 2.  Contenido porcentual en ácidos grasos y colesterol (mg/100 g)


de diferentes grasas.

Grasa AGSAT AGMI AGPI Colesterol


Aceite girasol rico en oleico 6,2 74,6 14,3 0
Aceite colza 6,6 57,2 31,5 0
Aceite canola 7,1 58,9 29,6 0
Aceite maíz 12,7 24,2 58,7 0
Aceite girasol 13,1 31,8 50 0
Aceite oliva 13,5 73,7 8,4 0
Aceite soja 14,4 23,3 57,9 0
Aceite cacahuete 16,9 46,2 32 0
Margarina 18 48 29 0
Aceite salmón 19,8 29 40,3 485
Aceite hígado bacalao 22,6 46,7 22,5 570
Grasa pavo 29,4 42,9 23,1 98
Grasa pollo 29,8 44,7 20,9 99
Tocino 39,2 45,1 11,2 93
Grasa cordero 47,3 40,6 7,8 100
Grasa vacuno 49,8 41,8 4,2 94
Aceite palma 49,3 37 9,3 0
Mantequilla 50,5 23,4 3,1 250
Manteca cacao 59,7 32,9 3 0
Aceite palmiste 81,5 11,4 1,6 0
Aceite coco 86,5 5,8 1,8 0

AGMI: ácidos grasos monoinsaturados; AGPI: ácidos grasos poliinsaturados; AGSAT: ácidos grasos
saturados.

Tabla 3.  Efectos de diferentes ácidos grasos sobre la aterogénesis y trombogénesis.

Ácido graso Aterogénesis Trombogénesis


Ácidos grasos de cadena corta 0 0
Triglicéridos de cadena media 0/+ 0
Ácido láurico + +
Ácido mirístico +++ +++
Ácido palmítico ++ ++
Ácido esteárico 0/+ +
Ácidos grasos trans +++ +++

vos) frente a la medición directa de ácidos grasos en comparación con ingestas más bajas. Estos datos se
plasma, en eritrocitos o tejido adiposo. También se ha corroboran en el seguimiento del estudio de cohortes
observado que la inclusión o no de la ingesta de AGS europeo EPIC-NL (European Prospective Investigation
de cadena impar, como el C15:0 (ácido pentadecanoi- into Cancer and Nutrition-Netherlands, n: 35.597 suje-
co) y C17:0 (ácido heptadecanoico), presentes en la tos), en el que se aprecia una asociación inversa entre
leche y otros productos de rumiantes, puede alterar los el consumo de GSAT y el riesgo incidente de enferme-
resultados de los metanálisis porque estos AGS redu- dad coronaria (HR por cada 5% de la energía: 0,83;
cen el impacto sobre el riesgo cardiovascular9, 11-13. Un 95% IC: 0,74-0,93), en particular cuando procede de la
metanálisis de 26 estudios epidemiológicos ha evalua- leche, queso, mantequilla y otros productos lácteos15.
do la relación entre la ingesta de AGS a partir de dife- Este paradigma parece radicar en la participación de
rentes alimentos y la mortalidad por cualquier causa, otros nutrientes presentes en los lácteos (calcio, mag-
cáncer o enfermedad cardiovascular14. Las estimacio- nesio, potasio, vitamina D, péptidos vasoactivos, etc.)
nes de riesgo demostraron que un alto consumo de que contribuiría a reducir el riesgo cardiovascular.
leche, queso, yogur y mantequilla no se asociaba con Otro alimento conflictivo son las carnes rojas, típica-
un riesgo significativamente mayor de mortalidad en mente asociadas a incremento del riesgo cardiovascu-
328 BLOQUE: LÍPIDOS

Tabla 4.  Riesgo relativo (RR) de Enfermedad cardiovascular en relación con los nutrientes, según diferentes metanálisis.

Nutriente Medidas Eventos RR (IC 95%)


EC 1,07 (1,01, 1,14)
Hidratos carbono 5% energía por GSAT
Ictus 1,12 (0,93, 1,35)
EC 1,23 (1,06, 1,42)
Carga glucémica Alto versus bajo consumo
Ictus 1,19 (1,05, 1,36)
Fibra total Alto versus bajo consumo EC 0,93 (0,91, 0,96)
EC 0,99 (0,88, 1,09)
Grasa total Alto versus bajo consumo
Ictus 1,01 (0,90, 1,13)
EC 1,03 (0,98, 1,07)
Grasa saturada Alto versus bajo consumo
Ictus 0,81 (0,62, 1,05)
Grasa trans Alto versus bajo consumo EC 1,32 (1,10, 1,54)
Grasa poliinsaturada (ω6) 5% energía por HC EC 0,90 (0,85, 0,94)
EC 0,87 (0,78, 0,97)
Grasa poliinsaturada (ω3)-pescados Alto versus bajo consumo
Ictus 0,90 (0,81, 1,01)
EC 1,06 (0,97, 1,17)
Grasa monoinsaturada Alto versus bajo consumo
Ictus 0,83 (0,71, 0,97)
Muerte ECV 1,12 (1,06, 1,19)
Sodio dieta Alto versus bajo consumo
Ictus 1,34 (1,19, 1,51)
Cada 1,38 g/día EC 0,92 (0,81, 1,04)
Potasio dieta
Cada 1,64 g/día Ictus 0,79 (0,68, 0,90)

EC: enfermedad coronaria; GSAT: grasa saturada; HC: hidratos de carbono; IC: intervalo de confianza;
Tabla modificada de Mozaffarian D101.

lar. Esto queda más claro para los derivados cárnicos cluido España) consigue alcanzar. Las recomendacio-
que incluyen salazones, ahumados y otros procesados nes de la American Heart Association aconsejan una
que aportan un mayor contenido de sal y de nitritos, ingesta de GSAT < 7% para prevenir el riesgo cardio-
contribuyendo a incrementar el riesgo de ECV, mien- vascular19. Y las más recientes de la Sociedad Europea
tras que el consumo de carnes rojas sin procesar es de Cardiología20 las sitúan incluso más bajas, entre el
probable que carezca de efecto nocivo9, 14, 16. 5-6%, pese a las evidencias anteriormente comentadas
Sin perder la visión global acerca del impacto de los de que la asociación entre GSAT y riesgo cardiovascular
AGS sobre el riesgo cardiovascular, si se analizan los es objeto de controversia y no hay datos concluyentes.
estudios epidemiológicos basados en biomarcadores Aunque puedan existir algunas discrepancias no re-
de ingesta de GSAT, excluyendo aquellos que tienen un sueltas sobre el verdadero efecto de las grasas satura-
efecto cardioprotector como los lácteos, observamos das sobre el riesgo cardiovascular, parece oportuno
que la GSAT sigue asociándose positivamente con el restringir el consumo de grasa saturada procedente de
riesgo de enfermedad coronaria (RR 1,21, IC 95% carnes grasas y derivados cárnicos. También se reco-
1,04-1,40)17. Estos resultados parecen estar en línea mienda moderar el consumo de lácteos con elevado
con datos publicados por una revisión sistemática de la contenido graso, porque, aunque su impacto sea me-
Cochrane18, en la que la sustitución de GSAT por grasa nos dañino que otras grasas saturadas, en cualquier
poliinsaturada conlleva una reducción del riesgo car- caso, son mucho menos beneficiosas que si se sustitu-
diovascular de un 17% (RR 0,83, IC95%: 0,72-0,96; yen por grasas insaturadas de origen vegetal.
datos basados en 13 estudios; n: 21.791).
2.2.  Ácidos grasos trans
2.1.1.  Ingesta deseable de GSAT
Los ácidos grasos trans (AGT) son isómeros derivados
La mayoría de las recomendaciones internacionales fundamentalmente de los ácidos grasos monoinsatura-
aconsejan un consumo de GSAT inferior al 10%, un dos. Se encuentran de manera natural en los rumiantes
porcentaje que ninguno de los países occidentales (in- (carne, leche y derivados), en forma de ácido linoleico
Tema 19.  Influencia de la dieta en el control de la hiperlipemia y el riesgo cardiovascular 329

conjugado (CLA) [(ej: ácido trans vaccénico (C18:1 que el aceite de oliva contiene ácido oleico, como el
n11)] sin apenas efecto sobre el riesgo cardiovascular, si principal ácido graso monoinsaturado (AGM) con
se ingieren en cantidades moderadas. Sin embargo, la configuración espacial cis, no debemos olvidar que
mayor parte de los isómeros trans se producen durante otros alimentos también contienen ácido oleico en
la elaboración de las margarinas como resultado del una mayor o menor proporción: aceitunas, frutos se-
proceso químico de la hidrogenación. El principal repre- cos, aguacate, aceite de girasol rico en oleico, aceite
sentante de este tipo de ácido graso es el ácido elaídico de colza o canola y también presentes en las carnes o
(n-9 trans C18:1) que se podía encontrar en todos los productos lácteos.
productos elaborados con aceites o grasas parcial o to- Desde el punto de vista de las concentraciones de
talmente hidrogenadas: pan de molde, pan tostado, los lípidos, el ácido oleico no ejerce, en sentido estric-
panecillos para salchichas o hamburguesas, «medias to, ningún efecto sobre los lípidos plasmáticos3-5, sal-
noches», galletas, pastelería industrial, cremas de untar, vo, claro está, que sustituya a una dieta rica en grasa
aperitivos, cereales de desayuno y multitud de alimen- saturada; en este caso, se pueden apreciar reduccio-
tos precocinados o prefritos congelados12. Sin embar- nes del cLDL en una proporción del 10-14%31. Un
go, debido a la mejora de los procesos tecnológicos, el metanálisis y revisión sistemática de los AGM en rela-
contenido en AGT ha ido disminuyendo su presencia en ción con el riesgo cardiovascular32 concluye que la
una buena proporción de los alimentos mencionados. mayoría de los estudios describen un incremento del
El mejor ejemplo son las margarinas, que prácticamen- cHDL, una disminución de los triglicéridos y resulta-
te carecen de AGT. De hecho, datos de ingesta de este dos inconsistentes del cLDL. Existen otros estudios
tipo de grasas señalan que España tiene un consumo que no encuentran relación entre el consumo de
inferior al inferior al 1% de las kcal totales7. AGM y el riesgo cardiovascular9; posiblemente se
La importancia del consumo de los AGT es que ele- deba a que no es lo mismo incorporar aceite de oliva
van las concentraciones de cLDL en una proporción si- como AGM principal u otras fuentes alimentarias en
milar a como lo hacen las GSAT, pero también dismi- dichos trabajos.
nuyen las concentraciones de cHDL. De igual modo, La inclusión del aceite de oliva en una dieta como la
existe evidencia de que los AGT incrementan las con- mediterránea (que contribuye a aportar entre el 20-
centraciones de triglicéridos (3 mg/dl por cada 2% de 25% de la energía en forma de AGM) conlleva benefi-
las calorías) y las concentraciones de lipoproteína a cios indudables para la salud33-36. Además, los resulta-
(Lpa) (0,5 mg/dl por cada 2% de las calorías en forma dos principales del estudio clínico controlado PREDIMED
de trans)21-23. En otros estudios se ha observado que la (PREvención con DIeta MEDiterránea) indican que, en
ingesta excesiva de trans se asocia con un incremento comparación con la recomendación de seguir una dieta
de marcadores inflamatorios, como la proteína C reac- baja en grasas, una dieta mediterránea enriquecida con
tiva, interleucina-6 o receptores solubles del factor de aceite de oliva virgen o frutos secos reduce en un 30%
necrosis tumoral, lo que le confiere un efecto adicional la incidencia de eventos cardiovasculares mayores tras
de incremento de riesgo cardiovascular24. Estas altera- unos 5 años de intervención en personas de alto riesgo
ciones en su conjunto suponen, en última instancia, un cardiovascular, lo cual apoya fuertemente el beneficio
incremento del riesgo de ECV25-29. Y en sentido contra- para la salud del aceite de oliva como fuente principal
rio, la sustitución del 2% de la ingesta energética a de AGM en la dieta mediterránea37. Publicaciones más
partir de AGT por ácidos grasos con configuración cis, recientes del PREDIMED han demostrado el efecto be-
comporta una disminución del 53% del riesgo de en- neficioso de la dieta mediterránea enriquecida en aceite
fermedad coronaria28. de oliva virgen extra sobre la incidencia de fibrilación
También se ha publicado que este tipo de ácidos auricular38, de diabetes39 y sobre la presión arterial40,
grasos puede incrementar en casi un 40% el riesgo de aparte de la asociación entre consumo de aceite de oli-
padecer diabetes mellitus tipo 2 entre aquellos sujetos va total al inicio del estudio y menor incidencia de en-
más proclives a presentar resistencia a la insulina30. fermedades cardiovasculares y mortalidad por estas
En resumen, podemos concluir que a partir de una causas durante el seguimiento41.
ingesta del 2% de la energía, los AGT se relacionan con Sin embargo, tal y como se reconoce en el estudio
diversos factores de riesgo cardiovascular y contribu- PREDIMED, los AGM son el componente mayoritario
yen a aumentar el riesgo de ECV (nivel de evidencia 1+). del aceite de oliva, pero la variedad virgen extra usada
Recomendación: La ingesta de AGT debe ser lo más en el estudio también aporta compuestos minorita-
baja posible, no superando el 1% de la energía total. rios bioactivos, como polifenoles, que también guar-
(grado de recomendación B)7. dan una relación inversa con el riesgo cardiovascu-
lar42. Debido a que el patrón de dieta mediterránea
además incluye un consumo importante de verduras,
2.3.  Ácidos grasos monoinsaturados
frutas, legumbres, frutos secos, pescados, lácteos
Aceite de oliva y ácido oleico, a nivel alimentario, desnatados y el consumo moderado de vino tinto, los
con frecuencia se identifican como sinónimos. Aun- beneficios observados sobre los factores de riesgo y
330 BLOQUE: LÍPIDOS

las enfermedades cardiovasculares no se puede atri- enzimáticos (Δ5 y Δ6 desaturasas) con una mayor
buir únicamente a su alto contenido en AGM. De he- competición a nivel del AA y del EPA. Sus propiedades
cho, el consumo de frutos secos, el otro alimento su- biológicas son diferentes, por ejemplo, las derivadas
plementado en la dieta mediterránea del estudio del EPA y DHA presentan acciones antitrombóticas,
PREDIMED, tiene un efecto beneficioso demostrado vasodilatadoras, antiquimiotáctica y antiinflamatoria,
en numerosos estudios clínicos en la reducción del prácticamente todo lo contrario de lo que sucede con
colesterol total, cLDL e hiperglucemia postprandial, los metabolitos derivados del AA.
aparte de proteger de la ECC de modo consistente en
estudios prospectivos43, 44. 2.4.1.  Ácidos grasos linoleico y linolénico
En resumen, las evidencias son inconsistentes sobre
el efecto protector cardiovascular de la ingesta de Numerosos estudios clínicos que han comparado los
AGM, seguramente debido a la fuente empleada del efectos lipídicos de distintos ácidos grasos han consta-
tipo de alimento en los diferentes estudios. También tado una eficacia hipocolesteromiante similar de los
porque el aceite de oliva u otros alimentos ricos en AGM y los AGP ω-6, aunque ligeramente superior para
AGM se emplean en el contexto de una dieta patrón los AGP ω-6, cuando se sustituyen de modo isoenergé-
tipo mediterránea, donde existen otros muchos ali- tico por AGS o hidratos de carbono (HC)4, 6. Desde el
mentos con propiedades nutricionales interesantes punto de vista de asociación con ECV, diferentes meta-
desde el punto de vista cardiovascular. Aunque el gra- nálisis han evidenciado que la sustitución de un 5% de
do de evidencia de asociación entre AGM y RCV es alto la energía en forma de AGP (ácido linoleico) por AGS o
(1+), el grado de recomendación para los AGM como HC reduce aproximadamente un 10% el riesgo de en-
fuente principal de grasa de la dieta es algo más con- fermedad coronaria43-45.
servador (grado de recomendación B)7. Se ha objetivado que la alta ingesta de ALA se corre-
En cuanto a las recomendaciones de consumo de laciona con tasas más bajas de enfermedad coronaria,
AGM, no hay un consenso establecido, pero debería como sucede en las poblaciones de Creta y Japón. En la
ser superior a la suma de AGS y ácidos grasos poliinsa- ruta metabólica del ALA, una pequeña proporción
turados (AGP); es decir, entre el 16-19% de la energía. (5-10%) se transforma en EPA y DHA, por lo que algu-
Considerando los resultados del estudio PREDIMED, nos autores han indicado que posee acciones similares
parece razonable recomendar que entre el 20-25% de a estos ácidos grasos presentes en el pescado46.
la energía total sea consumida en forma de AGM, con Algunos estudios de intervención con ALA en suje-
preferencia procedente del aceite de oliva virgen7. tos con enfermedad coronaria (como el Lyon Heart
Study) han demostrado una reducción de la mortali-
dad a 5 a años del 60% en el grupo experimental,
2.4.  Ácidos grasos poliinsaturados
posiblemente debido a propiedades antiarrítmicas
Los dos tipos principales de AGP son los de la serie atribuidas a la ingestión de ALA47, 48. En una revisión
ω-6 y ω-3. El ácido graso predominante de la serie sistemática de 2006, que incluye 42 estudios epide-
ω-6 es el ácido linoleico (C18:2) que proviene princi- miológicos y 14 ensayos clínicos controlados, no se
palmente de los aceites de semillas (girasol, maíz, describió ninguna asociación entre la ingesta de ALA y
cártamo, sésamo, pepita de uva), margarinas deriva- la incidencia de eventos cardiovasculares49. Sin embar-
das de estas semillas, frutos secos (pipas de girasol, go, un metanálisis más reciente que engloba estudios
pecanas, piñones, nueces), aunque también las gra- epidemiológicos con determinación de ingesta median­
sas animales contienen pequeñas cantidades de lino- te cuestionarios de frecuencia de consumo y mediante
leico. El ácido graso procedente del reino vegetal y biomarcadores concluye que el aumento de 1 g/día de
representativo de la serie ω-3 es el ácido linolénico la ingesta de ALA se traduce en una reducción de
(C18:3). Los aceites de soja, borraja, colza y linaza, aproximadamente el 10% del riesgo de mortalidad
las nueces y la verdolaga son fuentes importantes de por enfermedad coronaria50.
ácido linolénico (ALA). Ambos tipos de AGP se consi- Evidencia: Cuando sustituyen a dietas ricas en AGS
deran ácidos grasos esenciales porque no se sinteti- o HC, las dietas ricas en AGP ω-6 tienen efecto hipo-
zan en el organismo y deben ingerirse con los ali- colesterolemiante (evidencia 1++). Recomendación
mentos. Los principales ácidos grasos ω-3 nivel A: Sustituir AGS o HC por AGP ω-6 para reducir
procedentes de la grasa de pescado son el ácido ei- el colesterol7.
cosapentanoico (C20:5) (EPA) y el ácido docosahexa- Recomendaciones de consumo de AGP: Los datos
noico (C22:6) (DHA). disponibles en España indican que el consumo de
Los AGP son precursores de eicosanoides, como los AGP se encuentra entre el 4-6% de la energía to-
tromboxanos, leucotrienos y las prostaglandinas. El tal51. Sin embargo, no hay consenso sobre la canti-
ácido linoleico es precursor del ácido araquidónico dad que deba recomendarse, pero parece oportuno
(AA), mientras que el ALA lo es del EPA. Los ácidos aconsejar un consumo entre el 5-10% de la energía
grasos ω-6 y ω-3 compiten por los mismos sistemas diaria52.
Tema 19.  Influencia de la dieta en el control de la hiperlipemia y el riesgo cardiovascular 331

2.4.2.  Ácidos grasos ω-3 EPA Y DHA te a placebo. Tras una media de 5 años de segui-
miento, no se observaron diferencias en cuanto a
Los ácidos grasos EPA y DHA proceden del fitoplanc- incidencia de morbimortalidad cardiovascular. El
ton, base de la cadena alimentaria de océanos, lagos y hecho de que el 75% de la población consumiera
ríos, los cuales se incorporan subsiguientemente a los pescado ≥ 1 vez/semana, y de que el 40% estuvie-
peces, crustáceos y mamíferos marinos. Dentro del or- ra tratado con estatinas podría haber dificultado
ganismo humano, los ácidos grasos ω-3 son compo- la detección del efecto59.
nentes estructurales de los fosfolípidos de membrana • En el estudio PREDIMED, basado en la observa-
de tejidos, en especial de la retina, cerebro y esperma- ción de aquellos que consumen > 500 mg de
tozoides53. EPA-DHA, solo se objetivó beneficio para el infarto
Los estudios de intervención con AGP-ω3 sobre el mortal (RR: 0,537; IC96%: 0,29- 0,98), pero no
riesgo cardiovascular no han sido homogéneos, debi- para el infarto no mortal o la muerte súbita60.
do a la heterogeneidad de las poblaciones de estudio,
del modelo de intervención y de las variables principa- Los abundantes metanálisis sobre este tema no lle-
les de evaluación. Podemos destacar los siguientes en- gan a resultados concluyentes con respecto a ECV en
sayos clínicos7: general, si bien se detecta una protección consistente
frente a mortalidad cardiaca61-65. Los resultados nulos
• GISSI-Prevenzione Trial (1999). 11.324 pacientes pueden deberse a varios factores, entre los que destaca:
varones con infarto de miocardio reciente se alea- la mejora de las guías de actuación en la prevención
torizadon a recibir 882 mg/día de EPA+DHA fren- secundaria, con una mejor adherencia a la dieta, el tra-
te a tratamiento habitual. Tras una media de 3,5 tamiento con estatinas o con antigregantes plaqueta-
años de seguimiento, se observó una reducción rios o bien porque en poblaciones que hayan incremen-
significativa de muerte por enfermedad coronaria tado el consumo de pescados o de cápsulas de ω-3, la
y muerte súbita cardiaca54. adición de un mayor consumo de AGP-ω3 no va a tener
• Estudio JELIS (2007). Cerca de 19.000 pacientes un efecto aditivo sobre el riesgo cardiovascular.
dislipémicos fueron aleatorizados a recibir estatinas De manera general podemos decir que, en preven-
frente a una combinación de estatinas + 1,8 g/día ción primaria, el mayor consumo de AGP-ω3 tiene un
de EPA. A los 5 años de seguimiento, los pacientes escaso efecto protector (10-15%) sobre la enfermedad
en prevención primaria tratados con EPA presen- coronaria66-68. En prevención secundaria, el consumo
taron una reducción significativa del 19% de de AGP-ω3, procedentes del pescado, puede conferir
eventos isquémicos y del 23% en prevención se- un efecto protector mayor, en relación a sufrir un epi-
cundaria55. sodio de muerte súbita o de reinfarto mortal69, 70.
• OMEGA (2010). En este estudio, 3.851 pacientes Las acciones de los ácidos grasos ω-3 procedentes
con un infarto de miocardio previo fueron aleato- del pescado se establece a diferentes niveles: en el me-
rizados a una dosis de 840 mg/día de EPA y DHA tabolismo de las lipoproteínas, en la formación de eico­
frente a placebo. No se observó efecto sobre la sanoides y en los mecanismos de regulación de la
muerte súbita cardiaca ni nuevos eventos cardio- trombogénesis y la función endotelial71. Varios estu-
vasculares tras un año de seguimiento56. dios han demostrado que la ingestión de ácidos grasos
• ALPHA-OMEGA (2010). Aproximadamente 4.800 ω-3 reduce las concentraciones de triglicéridos de una
pacientes con historia de infarto de miocardio manera dosis dependiente, básicamente disminuyendo
fueron aleatorizados a 376 mg/día de EPA+DHA la síntesis de las lipoproteínas de muy baja densidad
frente a ALA (1,9 g/día) o grupos combinados. (VLDL)72, lo que le hace tener un papel destacado en el
Tras 3,3 años de seguimiento, no se observó nin- tratamiento de las hipertrigliceridemias o en las dislipe-
gún efecto de las intervenciones sobre eventos mias mixtas asociadas a estatinas.
cardiovasculares o mortalidad por enfermedad El papel que se le atribuye a los AGP-ω3 como anti­
coronaria57. arrítmico guarda relación con la estabilidad de la acti-
• Estudio SU.FOL.OM3 (2010). Unos 2.500 pacien- vidad eléctrica del miocito cardiaco, mediante la mo-
tes con historia reciente de isquemia coronaria o dulación de los canales del calcio, sodio y potasio73.
cerebral fueron aleatorizados a 600 mg/día de Este efecto antiarrítmico (fundamentalmente ventricu-
EPA+DHA frente a vitamina B o grupos combina- lar) se ha observado que también se asocia con el ries-
dos. Tras 4,2 años de seguimiento, no se observó go de padecer fibrilación auricular74, aunque no todos
efecto de la intervención con AGP n-3 sobre los los estudios han demostrado esta acción en ensayos de
eventos cardiovasculares58. intervención con ω-3. A las propiedades antiarrítmicas
• The Risk and Prevention Study Collaborative responsables de estas acciones, se suma la propiedad
Group (2013). En este estudio 12.513 pacientes de los ω-3 de estabilizar la placa de ateroma, prote-
con múltiples factores de riesgo cardiovascular giéndola frente a la ruptura y el síndrome coronario
fueron aleatorizados a 1 g/día de EPA+DHA fren- agudo75. Las acciones de la ingestión de ácidos grasos
332 BLOQUE: LÍPIDOS

ω-3 sobre la pared vascular y la regulación de la he- de consumo): para AGS, un HR 1,08 (95% IC, 1,03-
mostasia son muy extensas. Se ha descrito que los áci- 1,14), para AGP 0,81 (95% IC, 0,78-0,84), para AGM
dos grasos ω-3 actúan como antiagregantes plaqueta- 0,89 (95% IC, 0,84-0,94) y un HR de 1,13 (95% IC,
rios, modulan el metabolismo de los eicosanoides, 1,07-1,18) para los AGT. El reemplazo del 5% de la
disminuyen la expresión de móleculas de adhesión energía de AGS por su equivalente energético de AGP
vascular y regulan diferentes factores de crecimiento y AGM se asoció a reducciones en la mortalidad del
endoteliales o plaquetarios76, 77. 27% (HR, 0,73; 95% IC, 0,70-0,77) y del 13% (HR,
A la vista de las experiencias anteriormente referidas, 0,87; 95% IC, 0,82-0,93), respectivamente. El HR
en 2003 se propusieron una serie de recomendaciones de mortalidad total para la ingesta de AGP-ω-6 fue de
acerca del consumo de ácidos grasos ω-3 en la pobla- 0,85 (95% IC 0,81-0,89; p < ,001), mientras que la
ción78: ingesta de AGP ω-3 de origen marino estuvo asociada
con una reducción modesta de la mortalidad total: HR
a. Población en prevención primaria: consumo de 0,96; 95% IC, 0,93-1,00; p = 0,002), confirmando
pescado dos veces a la semana, complementando otros metaanálisis previos. En este estudio, y como afir-
el aporte de ácidos ω-3 de otras fuentes: soja, man los autores, el menor efecto de los AGM respecto
frutos secos (especialmente nueces), verdolaga, a los AGP se debe a que la fuente principal de grasa
borraja, semillas de lino, etc. monoinsaturada no es el aceite de oliva, por lo que su
b. Población en prevención secundaria: ingestión de efecto es menor que en el estudio PREDIMED. Al fin y
1 g de EPA y DHA, procedentes del consumo al cabo, un porcentaje de la fuente de grasa monoinsa-
de pescados (predominantemente grasos) o de turada procede de las carnes que también comparten
cápsulas de ω-3. grasa saturada y ácidos grasos trans.
c. Pacientes con hipertrigliceridemia: de 2-4 g de
EPA+DHA en forma de cápsulas de ω-3, bajo vi- 3. Efectos de los esteroles sobre
gilancia médica. el riesgo cardiovascular
d. Debe evitarse el consumo de pescados grandes
(pez espada, atún rojo, cazón o tiburón) en em- Bajo este epígrafe se analiza la influencia que ejerce
barazadas, lactantes y niños pequeños < 3 años sobre los lípidos plasmáticos y el riesgo cardiovascular,
(entre 3-10 años, reducir su consumo a 50 g/se- del colesterol dietético procedente del consumo de ali-
mana), debido a la posible ingestión de metil- mentos animales y de los esteroles vegetales (β-sitoste-
mercurio y sus repercusiones sobre el desarrollo rol, campesterol y estigmasterol) y sus derivados satu-
cerebral79. rados los estanoles (sitostanol y campestanol).

Quedan algunas cuestiones pendientes de resolver 3.1.  Colesterol dietético


como es conocer la dosis realmente efectiva de ω-3, las El equilibrio del contenido de colesterol en el orga-
diferencias entre consumo de pescado o ingesta de nismo se mantiene gracias al balance entre los ingresos
cápsulas de ω-3, los efectos sobre otros procesos car- (absorción intestinal del colesterol procedente de la
diovasculares y en especial la implicación de los posi- dieta y de la síntesis endógena del colesterol) y las sali-
bles contaminantes ambientales, como el metil-mercu- das (excreción de ácidos biliares y colesterol). El coles-
rio y otros metales pesados80, 81 o por sustancias terol disponible en el intestino procede de la dieta
organocloradas82 sobre los efectos positivos de los áci- (200-500 mg/día) o de la bilis (600-1.000 mg/día). Del
dos grasos ω-3 o en la salud en general. colesterol intestinal solo se absorbe un promedio del
50% y la cantidad restante se elimina por las heces en
2.5. Visión global del impacto de los ácidos forma de esteroides neutros. En esta capacidad limi-
grasos sobre el riesgo cardiovascular. tante en la absorción intestinal del colesterol intervie-
Experiencia de los estudios de nen multitud de factores genéticos, fisiológicos y tam-
cohortes americanas bién de la interacción con otros nutrientes de la dieta
(fibra, fitoesteroles, esteroles marinos, cantidad de gra-
El seguimiento de 32 años de la cohorte epidemioló- sa de la dieta, etc.)84. En conjunto, podemos decir que
gica nutricional del Nurses’ Health Study y la de 26 la absorción del colesterol libre es mucho menor que la
años del Health Professionals Follow-up Study, recien- absorción intestinal de triglicéridos. Por ello, diferentes
temente publicadas83, nos han proporcionado infor- estudios metabólicos han demostrado que la ingesta
mación valiosa en estas décadas sobre la asociación del de colesterol produce un incremento moderado en la
consumo de grupos de alimentos y enfermedades. En colesterolemia en comparación con la que produce la
relación al consumo de ácidos grasos y la mortalidad de ácidos grasos saturados o de ácidos grasos trans.
total, han establecido las siguientes razones de riesgo Del análisis de varios estudios se desprende que aproxi-
[hazard ratio (HR)] (comparando extremos de quintiles madamente por cada 100 mg de colesterol que se
Tema 19.  Influencia de la dieta en el control de la hiperlipemia y el riesgo cardiovascular 333

incluye o se extrae de una dieta, el colesterol total se tilo de vida para reducir el riesgo cardiovascular»94, en
incrementa de 2 a 6 mg/dl y el cociente colesterol total alineamiento con las Guías dietéticas 2015-2020 para
/c-HDL aumenta en 0,02 unidades, lo que se traduce americanos adultos95. El planteamiento base es conse-
en un incremento del riesgo de enfermedad coronaria guir alcanzar unas metas previstas para 2020 con la
aproximadamente de un 1%85, 86. Tampoco se ha con- finalidad de promocionar un adecuado estilo de vida
seguido demostrar una relación clara y definitiva entre cardiosaludable y reducir el impacto de las enfermeda-
el colesterol de la dieta y el riesgo cardiovascular87, 88. des cardiovasculares. Hay varias formas de alcanzar
Los estudios que analizan la relación directa del coles- este propósito a través de diferentes patrones alimen-
terol de la dieta y el RCV emplean el huevo como ali- tarios que hagan énfasis en el consumo de frutas, ver-
mento principal de evaluación. Así, en el amplio estu- duras, productos integrales; que incluyan lácteos bajos
dio epidemiológico de los médicos americanos, el en grasas, aves, pescados, legumbres, aceites vegetales
consumo de > 7 huevos a la semana se acompañó de no tropicales (coco, palma, palmiste) y frutos secos.
un incremento del RR de mortalidad cardiovascular de Que se limite la ingesta de azúcares, bebidas azucara-
1,23 (IC 95%: 1,11-1,36), pero se duplicaba si el sujeto das, alimentos salados o altamente procesados, carnes
presentaba diabetes (RR 2,01; IC 95%: 1,26-3,20)89. grasas o procesadas (seleccionando solo las carnes ma-
Sin embargo, un metanálisis que analiza la influencia gras). De esta manera se ayudaría a alcanzar los objeti-
del consumo de huevos (> 1 huevo/día) frente a esca- vos previstos de la AHA/ACC para reducir la ingesta de
so consumo (< 1 huevo/semana), no encontró asocia- grasa saturada, sodio dietético y azúcares mediante la
ción positiva entre el consumo de huevos y la presencia selección de los alimentos recomendados.
de enfermedad coronaria, ictus o mortalidad global, Estas medidas suponen en la práctica reducir el con-
aunque sí para el desarrollo de diabetes tipo 2 (RR sumo de GSAT a < 7% de la energía total diaria (< 6%
1,42; IC 95%: 1,09, 1,86)90. en pacientes con riesgo cardiovascular), evitar las gra-
sas trans y una disminución del consumo de sodio
3.2.  Esteroles y estanoles vegetales (< 2.300 mg/día o incluso < 1.500 mg/día si se preci-
sa controlar la presión arterial). Estas recomendaciones
Los fitoesteroles de la dieta (200-400 mg/día) proce- han sido etiquetadas como de nivel de evidencia A.
den del consumo de maíz, legumbres, frutos secos, Para conseguir estos propósitos nutricionales se han
frutas y verduras, aceites, etc., pero su absorción intes- propuesto tres modelos de dietas:
tinal es muy baja, en torno al 5-10%. Debido a su se-
mejanza estructural con el colesterol, desplazan a éste • Dieta DASH (Dietary Approaches to Stop Hyperten-
de las micelas intestinales, produciendo una disminu- sion), diseñada para el control de la presión arterial
ción de la absorción del colesterol procedente de la (PA). Se basa en el consumo de frutas, verduras,
dieta. Como consecuencia de esta acción disminuyen cereales integrales, frutos secos, lácteos bajos en
las concentraciones de cLDL. Asumiendo que la absor- grasa, aves, pescados y bebidas sin azúcares añadi-
ción intestinal eficiente de colesterol se encuentra alre- dos. Este patrón dietético es muy efectivo para con-
dedor del 50%, la administración de esteroles o estano- trolar a los pacientes con HTA. El estudio Omni-
les reduce la absorción del colesterol entre un 26-36%91. Heart (Optimal Macronutriente Intake Trial for
En un metanálisis de todos los estudios aleatorizados, Heart Health) introdujo tres variantes: una dieta
doble ciego, se concluye que una ingestión diaria de 2 alta en hidratos de carbono complejos, otra alta en
g de fitoesteroles, ingeridos habitualmente en forma proteínas (la mitad de origen vegetal) y la última,
de margarinas, contribuye a reducir las concentracio- alta en grasa insaturada (predominio de AGM).
nes de cLDL entre el 9-14%92. Debido a su escasa ab- Cada una de esas dietas produjo disminuciones de
sorción, los fitoesteroles se pueden administrar tanto a la PA similares a la dieta DASH original, aunque las
adultos como a niños con hipercolesterolemia, bien sea ricas en proteínas o AGM redujeron más aún la PA
incorporados en un alimento graso (margarina o pre- y consiguieron beneficios adicionales al disminuir
parado lácteo) o en forma de fitoesteroles libres (en las concentraciones de cLDL y triglicéridos96.
cápsulas). Debe tenerse la precaución de monitorizar • Dieta mediterránea (DietMED) que, a diferencia de
las concentraciones de vitaminas liposolubles si el suje- la dieta DASH, no cuenta con un patrón alimenta-
to no ingiere suficientes alimentos que las aporten, por rio claramente definido, ya que refleja una varie-
la posibilidad de deficiencia a largo plazo93. dad de hábitos alimentarios tradicionales de los
países ribereños del Mediterráneo. Comparte con
4. Recomendaciones para reducir la dieta DASH la abundancia de frutas, verduras,
el impacto de una dieta aterogénica lácteos bajos en grasas y carnes magras. Se aña-
den fuentes diversas de AGM (aceites de oliva, de
La American Heart Association (AHA) en colabora- colza, frutos secos y algunas margarinas para un-
ción con la American College of Cardiology (ACC) han tar) junto al consumo moderado de vino y pesca-
emitido un documento de posicionamiento sobre «es- dos. El patrón de dieta mediterráneo supone un
334 BLOQUE: LÍPIDOS

aporte de grasas totales del 32 a > 35% de la dios de observación de grandes cohortes epidemiológi-
energía total, con un 9-10% de GSAT, siendo el cas. Los alimentos ricos en fitoquímicos (bayas, nueces),
resto grasas insaturadas, con énfasis en los ácidos son particularmente potentes en esta relación (tabla 5).
ω-3. El consumo de frutas, verduras y productos Féculas. Representado por las patatas. Aunque con-
integrales contribuye a una elevada ingesta de fi- tienen fibra, potasio, vitaminas C y B6, y otros elemen-
bra > 30 g/día. Existen modelos de puntuación tos traza, lo que predomina es el almidón, que se digie-
para conocer la adherencia a la dieta mediterrá- re y se absorbe rápidamente. Su alto índice glucémico
nea, como la proporcionada por el estudio PREDI- es similar al generado por el pan blanco o el arroz, que
MED. Aunque las guías de la AHA/ACC consideran se ha relacionado con mayor incidencia de obesidad y
que la DietMED presenta una baja evidencia con el diabetes, hipertrigliceridemia y disminución de cHDL.
riesgo cardiovascular, se hace eco de la baja preva- Por tanto, este grupo de alimentos suele limitarse de las
lencia de enfermedad cardiovascular en los países recomendaciones de prevención cardiometabólica.
mediterráneos, y sobre todo del impacto en vida Alimentos y bebidas ricos en hidratos de car-
real que han tenido los resultados de intervención bono. Este grupo de alimentos puede representar has-
con dieta mediterránea en España (PREDIMED) en ta el 50% de la energía en la mayoría de las dietas oc-
la enfermedad cardiovascular, la diabetes o la HTA. cidentales. Su rápida digestión favorece el incremento
Datos recientes sustentan que una reducción del de las concentraciones de glucemia e insulina, estimula
10% de riesgo de ECV por cada 2 puntos de incre- áreas de recompensa y picoteos a nivel cerebral, activa
mento en la puntuación de adherencia a DietMED. la formación de grasa en el hígado, aumenta la pro-
No obstante, hay acuerdo unánime en que se ne- ducción de ácido úrico y promueve la obesidad visce-
cesitan más estudios para demostrar que la Diet- ral. El resultado final es aumento de peso, diabetes
MED tiene un perfil cardiovascular favorable97. mellitus, dislipemia aterogénica y mayor riesgo cardio-
• 
Dieta vegetariana: Incluye una variedad de ali- metabólico. Los postres y aperitivos dulces y las bebi-
mentos basados en frutas y verduras, sin (vega- das azucaradas representan el 15% de la energía en
nos) o con productos lácteos y huevos (ovo-lacto EEUU. Las recomendaciones de las guías americanas
vegetarianos) o pescados (pesco-vegetarianos). para adultos aconsejan limitar la cantidad de azúcares
Esos patrones incluyen abundantes verduras, fru- añadidos a un máximo del 10% del total de calorías
tas, cereales integrales, legumbres, semillas y fru- (una cucharadita de café con leche aportan 16 kcal y
tos secos. Los estudios observaciones y de inter- una botella de 500 mL de cola equivale aproximada-
vención han demostrado de manera consistente mente a 55 g de azúcar = 220 kcal). La AHA recomien-
reducciones en las concentraciones de cLDL, del da limitar los azúcares añadidos a no más de 100 kcal
peso y de la PA98-100. Si la dieta vegetariana consi- o 6 cucharaditas/día para las mujeres y 150 kcal o 9
gue los mismos resultados (con/sin lácteos) que la cucharaditas para los hombres. Esto supone restringir
dieta DASH es desconocida. O si la dieta vegana no solo los refrescos, sino también las bebidas energé-
es más cardioprotectora que la ovolacto-vegeta- ticas-deportivas, las infusiones (café, té) con azúcar
riana tampoco está demostrado. añadido, zumos de frutas. También incluye caramelos,
dulces, tartas, coberturas, galletas, bollería, barritas
5. Recomendaciones nutricionales energéticas y helados.
que pueden tener un impacto adicional Los zumos 100% naturales de frutas no se asocian
con obesidad ni diabetes; es posible que su contenido
sobre el riesgo cardiovascular
en fitoquímicos, vitaminas y fibra pueda contrarrestar
Los alimentos individuales representan una matriz los efectos negativos de los azúcares sobre el riesgo
compleja que contiene hidratos de carbono, proteínas, cardiovascular.
ácidos grasos, micronutrientes, fitoquímicos, etc., que Sodio. Las recomendaciones de la AHA limitan la
son sometidos a procesos de preparación y cocinados ingesta de sodio a < 2.300 mg/día, lo que incluye pa-
muy diversos y que, en conjunto, pueden modificar el nes, carnes curadas (jamón y embutidos), pizza, sopas,
riesgo cardiovascular. Por tanto, atribuir propiedades sándwiches, etc. Alrededor del 80% del sodio procede
beneficiosas o perjudiciales de un grupo de alimentos de productos procesados y no tanto de la sal añadida
es complejo y pueden resultar confusas sus implicacio- a la comida. En pacientes con HTA, se debe mantener
nes para la salud. A continuación, vamos a describir el el consumo de alimentos ricos en potasio (90 mmol al
impacto de grupos de alimentos y de nutrientes sobre día), calcio y magnesio.
el riesgo cardiovascular para comprender mejor las Alcohol. Restringid0 a una bebida/día para mujeres
pautas alimentarias que deben prevalecer para realizar y dos para los hombres. Una bebida equivale aproxi-
un patrón alimentario cardiosaludable94, 101. madamente a una lata (330 ml) de cerveza, 150 ml de
Frutas, verduras, legumbres y frutos secos/ vino o una copa (45 ml) de destilados (40% alcohol).
semillas. Este grupo de alimentos se ha relacionado Carnes. Históricamente, las guías sobre el consumo
con mejores resultados cardiometabólicos, según estu- de carnes se han basado en sus componentes de grasa
Tema 19.  Influencia de la dieta en el control de la hiperlipemia y el riesgo cardiovascular 335

Tabla 5.  Riesgo relativo (RR) de enfermedad cardiovascular en relación con los grupos de alimentos, según
diferentes metanálisis.

Nutriente Medidas Eventos RR (IC 95%)

EC 0,94 (0,91, 0,98)


Frutas Ración 100 g/día
Ictus 0,82 (0,75, 0,91)

EC 0,95 (0,92, 0,98)


Verduras Ración 100 g/día
Ictus 0,94 (0,90, 0,99)

EC 0,86 (0,78, 0,94)


Legumbres Ración 400 g/semana
Ictus 0,98 (0,84, 1,14)

Alto versus bajo consumo EC 0,78 (0,71, 0,86)


Cereales integrales
2,5 versus 0,2 raciones/día Ictus 0,83 (0,68, 1,14)

4 raciones (113 g)/sem EC mortal 0,76 (0,69, 0,84)


Frutos secos 4 raciones (113 g)/sem EC no mortal 0,78 (0,67, 0,92)
> 3 raciones/sem versus 0 raciones (Predimed) EC mortal 0,45 (0,25, 0,81)

2-4 veces/sem versus < 3/mes EC mortal 0,79 (0,67, 0,92)


Pescado
>5 veces/sem versus 1/sem Ictus 0,88 (0,81, 0,96)

EC mortal 0,537 (0,29, 0,98)


Pescado (PREDIMED) >500 mg ω3/día Muerte súbita 0,485 (0,22, 1,06)
Ictus mortal 0,779 (0,29, 2,04)

Alto versus bajo consumo EC mortal 1,12 (0,95, 1,33)


Carnes rojas magras
Cada ración (100 g/día) Ictus 1,13 (1,03, 1,23)

Cada ración (50 g/día) EC mortal 1,24 (1,09, 1,40)


Carnes rojas procesadas
Cada ración (50 g/día) Ictus 1,11 (1,02, 1,20)

Carnes blancas (aves, conejo) Cada ración (100 g/día) EC mortal 1,00 (0,87, 1,15)

EC 0,94 (0,82, 1,07)


Total lácteos Alto versus bajo consumo
Ictus 0,88 (0,82, 0,94)

Cada ración (200 ml/día) EC 1,00 (0,96, 1,04)


Leche
Alto versus bajo consumo Ictus 0,91 (0,82, 1,01)

Yogur Alto versus bajo consumo EC 1,06 (0,90, 1,34)

EC 0,84 (0,71, 1,00)


Queso Alto versus bajo consumo
Ictus 0,94 (0,89, 0,995)

EC 1,02 (0,88, 1,20)


Mantequilla Alto versus bajo consumo
Ictus 0,95 (0,85, 1,07)

EC 0,99 (0,85, 1,15)


Huevos Cada 1 huevo/día
Ictus 0,91 (0,81, 1,02)

Bebidas azucaradas Cada ración (225 ml) EC 1,17 (1,10, 1,24)

Café con/sin cafeína 3 versus 0 tazas/día ECV 0,89 (0,85, 0,93)

Té Cada ración 1 taza/día EC 0,90 (0,81, 0,996)

Aceite oliva virgen extra Cada 10 g/día Mortalidad ECV 0,90 (0,85, 0,95)
(PREDIMED) Alto versus bajo consumo Mortalidad ECV 0,61 (0,44, 0,85)

EC: enfermedad coronaria; ECV: enfermedad cardiovascular; IC: intervalo de confianza.


Tabla modificada de Mozaffarian D101.
336 BLOQUE: LÍPIDOS

saturada y colesterol. No obstante, las evidencias ac- cionar aceites vegetales en lugar de cereales refinados,
tuales apoyan cierto efecto neutro cardiovascular de almidones, azúcares, carnes, mantequilla y tocino. Los
las carnes magras9, no así de los derivados cárnicos que beneficios del aceite de soja, de canola y de oliva están
se han asociado claramente con un mayor riesgo car- bien contrastados.
diovascular (tabla 5). Parece prudente consumir pe- Café y té. Su relación con el riesgo cardiovascular
queñas cantidades de carne roja a la semana (1-2 ra- no es lineal. El menor riesgo se aprecia con 3-4 tazas/
ciones) para proveer al organismo de hierro y cinc, día, pero a su vez un mayor consumo parece incremen-
mientras que se deben evitar las carnes procesadas tar el riesgo.
(bacon, salchichas, embutidos). Carne roja incluye ter- La experiencia nos indica que las personas se adhie-
nera, buey o añojo, cordero, cerdo, caballo, oveja, ca- ren mejor a una planificación dietética cuanto más sen-
bra, etc. cilla es. Teniendo en cuenta que se trata de modificar
Aves y huevos. Hay pocos estudios realizados con los hábitos alimentarios previsiblemente para toda la
aves sobre el riesgo cardiometabólico o diabetes, pero vida, es mejor proporcionar un listado de alimentos re-
parece que no se asocia significativamente, siendo pa- comendados (tabla 6) que no proporcionar una dieta
recida a la asociación observada para pescados, le- cuantificada que tendrá una aplicación más limitada.
gumbres y frutos secos. Tampoco el consumo de hue-
vos tiene interacción con el riesgo cardiovascular en la 6.  Nutrientes y salud cardiometabólica
población general, aunque sí podría interactuar para el
desarrollo de diabetes mellitus tipo 2 (+7 huevos/ Ya hemos visto el impacto de los macronutrientes en
sem)90. En suma, un consumo regular y no excesivo de el riesgo cardiovascular y que hemos resumido en la
aves y huevos se comporta de manera neutra con el tabla 4. Sin embargo, hay otros componentes de la
riesgo cardiometabólico. dieta que pueden influir positivamente en reducir aún
Pescados. Durante décadas se ha estudiado el im- más el impacto cardiovascular.
pacto del consumo de pescado sobre el riesgo cardio- Flavonoides. Son pigmentos hidrosolubles de las
vascular. El consumo de al menos 2 raciones/semana, plantas caracterizados por presentar una estructura
que proporcionen unos 250 mg de AGP-ω3/día, se con un anillo aromático con uno o más grupos hidroxi-
asocia con menor riesgo de enfermedad cardiovascular los. Pertenecen al gran grupo de polifenoles de las
(tabla 5). Cantidades mayores no parecen reducir con- plantas que pueden dividirse en más de 10 subclases,
sideramente el riesgo. Es posible que sus efectos sean como por ejemplo los flavonoles (quercetina, miriceti-
más visibles en pacientes con bajo consumo de pesca- na, kaempferol, contenida en cebollas, brócoli o man-
dos. Atención a los contaminantes orgánicos (dioxinas, zanas); flavonas (luteolina, apigenina) del perejil o el
bifenilos policlorinados) y metil-mercurio, que pueden apio; flavanonas (hesperetina, naringenina) de naran-
reducir los beneficios cardiometabólicos del consumo jas, limones y pomelos; flavan-3-oles (catequina, epica-
de pescado. No hay datos comparativos entre peces tequina, teaflavina) de manzanas, vino tinto, té verde,
criados en libertad y los de piscifactorías. cacao; antocianidinas, de las moras, arándanos, fram-
Lácteos. Los efectos de la leche, queso y yogur so- buesas y vino tinto; proantocianidinas, del cacao, vino
bre el riesgo cardiovascular aparecen como neutros. tinto, uvas negras; Isoflavonas (diazzeína, genisteína,
Sea por la producción de vitamina K2 de los fermenta- glicentina) de la proteína de soja y derivados. Su con-
dos lácticos (que mejoran la sensibilidad a la insulina), tribución a la capacidad antioxidante de la dieta es mu-
de los AG de cadena corta y media o por otros deter- cho mayor que la que proporcionan las vitaminas. Más
minantes nutricionales (calcio, magnesio), no parece de 6.000 diferentes plantas comestibles aportan una
que el consumo de productos lácteos suponga un pro- ingestión promedio de 1 g/día de flavonoides, mien-
blema de incremento del riesgo cardiovascular. La tras que las vitaminas antioxidantes en su conjunto no
mantequilla no parece asociarse con la enfermedad sobrepasan los 100 mg/día. Diferentes estudios epide-
coronaria incidente, ictus o mortalidad total. Por tanto, miológicos y de intervención han demostrado que la
su consumo no parece ser diferente para el conjunto ingestión de distintos tipos de alimentos que aportan
de las grasas saturadas, excepto por su contribución flavonoides suele asociarse con disminución de muerte
calórica en el control del peso corporal. por enfermedad cardiovascular, aunque la mayoría
Aceites vegetales. Se han estudiado en función de suelen centrarse en el consumo de té verde, chocolate
su composición en ácidos grasos, si bien recientemente y proteína de soja como los más destacados antioxi-
se ha sugerido que sus efectos sobre la salud residen dantes. En general, lo que se debe promover es el con-
en otros constituyentes del aceite, en particular com- sumo de frutas y verduras, en particular cebollas, ajos,
ponentes flavonoides (fenólicos) del aceite de oliva vir- manzanas, frutos rojos, uvas, especias, hierbas aromá-
gen extra. Poco se conoce del impacto del consumo de ticas, y pequeñas cantidades de vino tinto, chocolate,
aceites tropicales sobre el riesgo cardiovascular, ya que té o proteína de soja102-104.
además de AGS de cadena larga también contienen Potasio, calcio, magnesio. Frutas, verduras, ce-
AGS de cadena media (aceite de coco). Es mejor selec- reales integrales, legumbres, frutos secos, lácteos son
Tema 19.  Influencia de la dieta en el control de la hiperlipemia y el riesgo cardiovascular 337

Tabla 6.  Recomendaciones alimentarias generales para la prevención de la arteriosclerosis en adultos.


RECOMENDADOS CON MODERACIÓN LIMITADOS
(Diario) (2-3/semana) (Excepcional)
LÁCTEOS Leche desnatada Leche entera Nata, crema de leche
HUEVOS Leche semidesnatada Yogur entero, cuajada Quesos curados o semicurados,
Yogures desnatados Yogur batido quesos de untar
Petit suisse desnatados Flan/natillas Tartas de queso
Quesos desnatados Quesos frescos (Burgos) Helados
Clara huevo Requesón, petit suisse entero
Yema de huevo
CEREALES Preferentemente de grano entero o Pan de molde, biscotes Bollería industrial, galletas dulces o
integrales Churros o porras saladas
Pan, pasta, arroz, maíz, harinas, Bollos o magdalenas caseras
sémola, tapioca, cus-cus, polenta, confeccionados con aceite
quinoa
Cereales de desayuno sin azúcar
FRUTAS Fruta fresca Aceitunas Patatas chips
VERDURAS Todas las verduras y ensaladas Aguacates Patatas congeladas precocinadas
LEGUMBRES Todas las legumbres Patatas
Dátiles, higos secos, ciruelas secas,
pasas
FRUTOS SECOS Castañas, almendras, nueces, Cacahuetes Coco
avellanas, piñones, pistachos, Mantequilla de cacahuete
pepitas girasol, sésamo
PESCADOS Y Pescado blanco Sardinas lata Caviar, huevas de pescado, mojama
MARISCOS Pescado azul, fresco o en lata Bacalao salado, anguila Precocinados con aceites
Moluscos Gambas, langostinos, crustáceos hidrogenados
Marisco concha
CARNES Pollo, pavo, conejo Vaca, buey Cerdo, cordero, gallina
Hamburguesas magras de vacuno Salchichas, bacon, patés
Carne de cerdo y ternera magras Carne picada grasa
Jamón serrano magro Embutidos en general
Jamón cocido bajo en grasa Vísceras y despojos
Embutidos de pavo Pato, ganso
ACEITES Y GRASAS Aceites de oliva (mejor virgen), Margarinas vegetales sin ácidos Margarinas animales, mantequilla,
girasol, maíz, soja grasos trans manteca, sebo, tocino
Aceite de cacahuete Aceites de palma, coco, palmiste
Aceites hidrogenados
Grasas vegetales, sin especificar
origen
POSTRES Mermeladas sin azúcar, jaleas, miel Caramelos, turrón, mazapán Chocolates y sucedáneos
REPOSTERÍA Azúcar Cremas untar de cacao
Frutas en almíbar Aperitivos (ganchitos, cortezas,
Sorbetes, gelatinas palomitas maíz)
Postres que contienen yema de huevo
y/o mantequilla
Tartas comerciales, hojaldre
Mantecados, polvorones
ESPECIAS Sofritos, todas las hierbas y especias, Mayonesa Cremas y sopas de sobre o lata
SALSAS limón, vinagre, mostaza Besamel Salsas confeccionadas con nata,
Caldos y sopas desgrasadas crema, leche o grasas animales
Mayonesa ligera
BEBIDAS Agua, gaseosa o soda sin azúcar, Bebidas alcohólicas destiladas Refrescos azucarados
infusiones Cacao soluble
Zumos de fruta naturales o tomate
Malta
Vino, cerveza con moderación
Mosto
338 BLOQUE: LÍPIDOS

las principiales fuentes de minerales. Las dietas ricas en tes vegetales y frutos secos; carotenos (incluido el lico-
potasio ayudan a controlar la presión arterial y se han peno) de los tomates, zanahorias, pimientos rojos, cala-
asociado a bajo riesgo cardiovascular (en particular, baza, boniatos, mango, albaricoques, verduras de hoja
ictus). En estudios a corto plazo, los suplementos de (espinacas, acelgas, brócoli, etc.) o vitamina C (frutas y
magnesio y calcio también contribuyen a regular la verduras frescas)105, 106. El consumo de suplementos con
presión arterial, aunque de manera desigual. Sin em- carotenos o de altas dosis de vitamina E o C, no ha de-
bargo, los suplementos de calcio o de magnesio no mostrado ninguna evidencia de que proteja frente a las
deben ser recomendados para la prevención cardio­ enfermedades cardiovasculares, sino incluso se ha ob-
vascular porque no se han mostrado seguros , ya que servado un efecto opuesto a dosis altas107-110.
en algunos estudios se han asociado a un incremento Quedarían por describir algunas propiedades inhe-
del riesgo cardiovascular. rentes, por ejemplo, al consumo de proteína de soja,
Vitaminas antioxidantes. Siempre procedentes de del ajo, que tiene características antiagregantes, ade-
los alimentos que los contienen. Vitamina E de los acei- más de su influencia sobre el metabolismo lipídico. De

Tabla 7.  Recomendaciones nutricionales y cambios en el estilo de vida según el consenso ATP-III-2001 y las
guías ESC-2016.

Nutrientes (ATP-III) Ingesta recomendada


Grasa saturada < 7% del total de calorías
Grasa poliinsaturada Hasta 10% del total de calorías
Grasa monoinsaturada Hasta 20% del total de calorías
Ácidos grasos trans < 2% del total de calorías
Grasa total 25-35% del total de calorías
Hidratos de carbono 50-60% del total de calorías
Fibra 20-30 g/día
Proteínas Aproximadamente 15% calorías
Colesterol < 200 mg/día
Esteroles y estanoles vegetales Hasta 2 g/día
Ingesta energética en equilibrio con el gasto calórico para mantener un peso
Total calorías (energía)
deseable o prevenir la ganancia de peso
Nutrientes (ESC-2016) Ingesta recomendada
Grasa saturada <10% de la energía total, siendo reemplazada por grasa polinsaturada
Tan poco como sea posible. Preferentemente ninguno de alimentos procesados
Ácidos grasos trans
y < 1% de la energía de fuentes naturales
Sal <5 g de sal al día
Fibra 30-45 g al día, procedentes de productos integrales
Frutas ≥200 g de fruta al día (2-3 piezas)
Verduras ≥200 g de verduras al día (2-3 raciones)
Pescados 1-2 veces a la semana (uno de ellos pescado graso)
Frutos secos 30 g de frutos secos crudos sin sal al día
Limitado a 2 bebidas al día (20 g/día alcohol) en hombres y 1 bebida al día
Bebidas alcohólicas
(10 g/día alcohol) para las mujeres
Bebidas Se desaconseja el consumo de bebidas azucaradas y bebidas alcohólicas

ATP-III: Adult Treatment Panel III guidelines112; ESC: Guías de la European Society of Cardiology20.
Tema 19.  Influencia de la dieta en el control de la hiperlipemia y el riesgo cardiovascular 339

la combinación de algunos alimentos es como se pue-  3.  Grundy SM, Denke MA. Dietary influences on
de potenciar por diferentes vías todos los mecanismos serum lipids and lipoproteins. J Lipid Res 1990;
de protección cardiovascular; los mejores ejemplos los 31:1149-72.
tenemos con la elaboración de los sofritos, gazpacho,  4.  Mensink RP, Katan MB. Effects of dietary fatty
pisto, macedonias de frutas con yogur y frutos secos, acids on serum lipids and lipoproteins: a me-
etc. Así, por ejemplo, se ha observado que el consumo ta-analysis of 27 trials. Arterioescler Thromb 1991;
de gazpacho en el estudio Predimed se ha asociado a 12:911-9.
mejoría del control de la presión arterial111. Sin duda,  5.  Kris-Etherton PM, Yu S. Individual fatty acids
esta y otras aportaciones futuras de este estudio de effects on plasma lipids and lipoproteins: human
intervención nos darán la oportunidad de conocer me- studies. Am J Clin Nutr 1997; 65 (suppl):
jor nuestra saludable dieta mediterránea. 1628S-44S.
  6. Mensink RP, Zock PL, Kester ADM, et al. Effects of
dietary fatty acids and carbohydrates on the ratio
7.  Guías de recomendaciones nutricionales
of serum total to HDL cholesterol and on serum
A pesar del mejor conocimiento de los efectos de los lipids and apolipoproteins: a meta-analysis of 60
alimentos y nutrientes, así como de los patrones ali- controlled trials. Am J Clin Nutr 2003; 77: 1146-
mentarios sobre el impacto de la salud cardiovascular, 55.
las guías actuales de la Sociedad Europea de Cardiolo-   7. Ros E, López-Miranda J, Picó C, Rubio MÁ, Babio
gía o las de la AHA/ACC distan mucho de las especifi- N, Sala-Vila A, et al. Consenso sobre las grasas y
caciones que se realizaron en 2001 por la ATP-III (Adult aceites en la alimentación de la población españo-
Treatment Panel III guidelines)112. No solo se realizaron la adulta; postura de la Federación Española de
recomendaciones sobre el consumo de ácidos grasos, Sociedades de Alimentación, Nutrición y Dietética
sino que se sugería el consumo elevado de fibra solu- (FESNAD). Nutr Hosp. 2015; 32: 435-77.
ble y de fitoesteroles vegetales (hasta 2 g/día). El con-  8.  Siri-Tarino PW, Sun Q, Hu FB, Krauss RM. Me-
sumo de fibra soluble, en una proporción de 10 a 25 g ta-analysis of prospective cohort studies evalua-
día procedente de alimentos como las legumbres, sal- ting the association of saturated fat with cardio-
vado de avena, frutas con elevado contenido en pecti- vascular disease. Am J Clin Nutr 2010; 91: 535-46.
na (manzanas, agrios), calabaza, zanahorias, etc., pue-   9. Chowdhury R, Warnakula S, Kunutsor S, et al. As-
de contribuir a disminuir las concentraciones de sociation of dietary, circulating, and supplement
colesterol. El aporte de fibra insoluble tipo cereal, apor- fatty acids with coronary risk: a systematic review
ta además minerales y ciertos fitoquímicos que pueden and meta-analysis. Ann Intern Med. 2014; 160:
ser beneficiosos en mecanimos de inflamación y anti­ 398-406.
oxidación del proceso arteriosclerótico en general. En 10. de Souza RJ, Mente A, Maroleanu A, Cozma AI,
la tabla 7 se realiza una comparación entre las reco- Ha V, Kishibe T, et al. Intake of saturated and trans
mendaciones de ambas guías, considerando que no unsaturated fatty acids and risk of all cause morta-
hay recomendaciones diferentes para la prevención del lity, cardiovascular disease, and type 2 diabetes:
riesgo cardiovascular en la población general o si el pa- systematic review and meta-analysis of observatio-
ciente presenta una hiperlipemia susceptible de modi- nal studies. BMJ 2015;351:h3978.
caciones dietéticas. Y es que en esencia las ventajas de 11. German JB, Gibson RA, Krauss RM, et al. A rea-
los diferentes alimentos y los nutrientes que lo integran ppraisal of the impact of dairy foods and milk fat
son igualmente beneficiosos en ambas circunstancias. on cardiovascular disease risk. Eur J Nutr. 2009;
Aunque los cambios en las guías puedan obeceder a 48: 191-203.
una visión centrada en objetivos lipídicos y a la combi- 12.  Soedamah-Muthu SS, Ding EL, Al-Delaimy WK,
nación de distintas pautas de tratamiento farmacológi- et al. Milk and dairy consumption and incidence of
co más óptimas para alcanzar dichas metas, no cabe cardiovascular diseases and all-cause mortality:
duda de que la modulación de micronutrientes y otros dose-response meta-analysis of prospective cohort
compuestos minoritarios de ciertos alimentos propios studies. Am J Clin Nutr. 2011; 93: 158-71.
del área mediterránea (que es nuestro entorno) es lo 13. Aune D, Norat T, Romundstad P, et al. Dairy pro-
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187-225. Cholesterol Education Program (NCEP) Expert
102. Manach C, Mazur A, Scalbert A. Polyphenols and Panel on Detection, Evaluation, and Treatment of
prevention of cardiovascular diseases. Curr Opin High Blood Cholesterol in Adults (Adult Treat-
Lipidol 2005; 16: 77-84. ment Panel III). JAMA 2001; 285:2486-97.
Tema 20.
Trastornos congénitos del metabolismo de los lípidos:
Adrenoleucodistrofia. Dieta controlada en ácidos grasos
Rosa Burgos Peláez
Mireia Guerrero Gual
Guillermo Cárdenas Lagranja
Hegoi Segurola Gurrutxaga
Unidad de Soporte Nutricional. Hospital Universitario Vall d’Hebron. Barcelona

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 345-352.

1. Adrenoleucodistrofia
2.  Dietas controladas en ácidos grasos
3. Resumen
4. Bibliografía

1.  Adrenoleucodistrofia 1.2.  Manifestaciones clínicas


La adrenoleucodistrofia ligada al cromosoma X Se han descrito al menos seis fenotipos de la X-ALD,
(X-ALD) es un trastorno hereditario del metabolis- siendo los más frecuentes la forma cerebral infantil rá-
mo peroxisomal con una expresión fenotípica muy pidamente progresiva (48 %) y la adrenomieloneuro-
variable, caracterizada por una incapacidad para patía del adulto2 (25 %) (tabla 1).
degradar los ácidos grasos de cadena muy larga Los niños afectos de la forma cerebral infantil ini-
(AGCML). cian la clínica entre los 3 y los 10 años, siendo la hiper­
actividad y el pobre rendimiento escolar los primeros
síntomas. La enfermedad progresa rápidamente, apa-
1.1.  Introducción y epidemiología
reciendo alteraciones del comportamiento, signos de
La incidencia estimada es de 1:20.000 - 1:50.000 demencia, epilepsia o alteraciones visuales, auditivas
nacimientos, sin ninguna preferencia racial, y el pa- y motoras en forma de tetraplejia espástica. En un
trón hereditario es recesivo ligado al cromosoma X. El período de 2-3 años del inicio de los síntomas puede
defecto genético tiene como consecuencia una alte- evolucionar a un estado aparentemente vegetativo y a
ración de la capacidad peroxisomal para oxidar los la muerte5-6.
AGCML, por lo que se produce un acúmulo notable La adrenomieloneuropatía se presenta habitual­
de estos ácidos grasos en los ésteres de colesterol y en mente en el adulto joven (3ª-4ª década), en forma de
las fracciones gangliosídicas de la sustancia blanca paraparesia espástica progresiva y alteraciones esfinte-
cerebral y la corteza adrenal. La proteína alterada en rianas como resultado de la afectación de los tractos
la mayoría de los pacientes con X-ALD es una proteína largos de la médula espinal.
de transporte perteneciente a la familia de las Aproximadamente un 10 % de los pacientes pueden
ATP-binding casette, la ALDP, condicionando un acú- presentarse como un síndrome de Addison aislado,
mulo excesivo de AGCML. La ALDP es una proteína de con insuficiencia adrenocortical sin aparente afecta-
la membrana peroxisomal, que podría estar implicada ción neurológica, aunque algunos pacientes desarro-
en el proceso de translocación de la sintetasa o en la llan una adrenomieloneuropatía en la tercera década.
aproximación de los AGCML a la sintetasa. El gen res- La mayoría de los pacientes afectos de adrenoleuco-
ponsable de la X-ALD se ha localizado en el brazo distrofia presentan diversos grados de insuficiencia su-
largo del cromosoma X (Xq28), del que se han descri- prarrenal que debe ser estudiada y tratada. Las mujeres
to diversas mutaciones sin relación evidente entre la heterocigotas para la enfermedad pueden presentar
mutación y el fenotipo clínico1-4. alteraciones neurológicas que semejan la adrenomielo-

345
346 BLOQUE: LÍPIDOS

Tabla 1.  Fenotipos descritos de la adrenoleucodistrofia ligada al cromosoma X.

Fenotipos de la adrenoleucodistrofia ligada a X (X-ALD)


Forma cerebral infantil Aparición antes de los 10 años
(Junto con la forma adolescente cerebral, Desmielinización de tipo inflamatorio
incluyen el 31-57 % de todos los casos de Alteración del comportamiento
ADL) Pérdida de la capacidad intelectual
Progresión rápida
Insuficiencia adrenal primaria (en la mayoría de los casos subclínica)
Fallecimiento entre 2 y 4 años desde el inicio de los síntomas
Adolescente cerebral Inicio en la segunda década
Progresión idéntica a la forma infantil
Cerebral adulto Inicio en la tercera década
Frecuencia 1-3 % Progresión idéntica a la forma infantil
Adrenomieloneuropatía Aparición en la tercera década
Frecuencia 25-46 % Polineuropatía
Afectación medular de vías largas (cordones laterales y posteriores)
Reacción inmune inexistente o leve
Encéfalo afectado en un 45 %
Progresión muy lenta (décadas)
Insuficiencia adrenal frecuente
Addison Insuficiencia adrenal primaria
Frecuencia 8-14 % No alteraciones neurológicas
Presintomáticos
Alteraciones bioquímicas sin anomalías neurológicas ni endocrinas
Frecuencia 4-10 %

Tomado de Girós et al2.

neuropatía, pero solo un 1 % presenta insuficiencia ciones de la membrana jugasen un papel en la patoge-
suprarrenal. nia de la axonopatía y de la degeneración de tractos
Morfológicamente, en el cerebro se aprecian gran- nerviosos asociados con las formas lentamente progre-
des zonas bilaterales y simétricas de desmielinización e sivas de la ALD como la adrenoleucomielopatía10.
infiltrados difusos perivasculares de células mononu-
cleares, fundamentalmente linfocitos7,8. En la médula 1.3.  Diagnóstico de la adrenoleucodistrofia
espinal, el hallazgo fundamental es la pérdida de fibras
compatible con una axonopatía distal. En la corteza El diagnóstico de ALD se basa en la valoración clínica
adrenal, las células aparecen balonizadas con acúmulo y en la demostración de niveles elevados de AGCML
de lípidos en las zonas fasciculada y reticular, y, confor- saturados en plasma o en las membranas celulares de
me avanza la enfermedad, aparece una profunda atro- hematíes, leucocitos, fibroblastos en cultivo o amnioci-
fia cortical. tos. En plasma, se pueden determinar los niveles de
La principal anomalía bioquímica en la adrenoleuco- ácido hexacosanoico (C26:0), o la ratio ácido tetraco-
distrofia consiste en el acúmulo de ácidos grasos satu- sanoico: ácido docosanoico (C24:0:C22:0), o la ratio
rados muy largos, fundamentalmente ácido hexacosa- ácido hexacosanoico: ácido docosanoico (C26:0:C22:0).
noico (C26:0) y tetracosanoico (C24:0), en menor Estas determinaciones se realizan mediante cromato-
cantidad pentacosanoico (C25:0) o ácidos grasos más grafía de gases. En los fibroblastos en cultivo se puede
largos de 30 átomos de carbono9. Los acúmulos más determinar la tasa de oxidación de los AGCML o reali-
importantes se producen en la corteza adrenal, en los zar el estudio inmunohistoquímico de la ALDP2.
ésteres de colesterol de la sustancia blanca cerebral y El estudio de las mutaciones del gen de la ALD es útil
en las fracciones gangliosídicas cerebrales2. para completar el diagnóstico, pero no es imprescindi-
La microviscosidad de las membranas celulares de ble para el mismo, dado que no se ha detectado una
los hematíes está incrementada en los pacientes con mutación prevalente en la enfermedad, y no hay corre-
ALD. En modelos de membrana se ha demostrado que lación entre el genotipo y el fenotipo5.
el exceso de C26:0 tiene un efecto disruptivo sobre la Hoy en día es posible realizar el estudio prenatal, que
estructura de la membrana, y podría ser que las altera- puede consistir en valorar los AGCML o la ALDP en ve-
Tema 20.  Trastornos congénitos del metabolismo de los lípidos: Adrenoleucodistrofia… 347

llosidades coriales o células amnióticas cultivadas, o poliinsaturados de cadena muy larga), con la restric-
estudiar el ADN de las vellosidades en el caso de que se ción dietética de AGCML saturados16, 17. Los pacientes
conozca la mutación del caso índice familiar2. recibieron aproximadamente un 25 % del valor calóri-
Una vez diagnosticada la enfermedad, el estudio de co total (VCT) de la dieta en forma de GTO (45-90 ml/
la función suprarrenal es esencial para plantear el tra- día). La dieta era realizable por la mayoría de los pa-
tamiento esteroideo adecuado. La función suprarrenal cientes, y como efectos secundarios más frecuentes se
debe reevaluarse cada 4 meses. encontraron estreñimiento y náuseas tras tomar el
aceite, que se solucionaron incrementando el consumo
1.4. Tratamiento de fibra y utilizando el aceite en forma de emulsión.
Esta dieta consiguió disminuir un 50 % los niveles plas-
1.4.1.  Bases del tratamiento dietético en la X-ALD máticos de C26:0 a los 4 meses, y en mujeres heteroci-
gotas consiguió su normalización. No obstante, en es-
Los AGCML saturados que se acumulan en la adre-
tudios prospectivos a un año de seguimiento no se ha
noleucodistrofia derivan tanto de la dieta como de la
podido demostrar una modificación del estado neuro-
síntesis endógena por el sistema de elongación de los
lógico y funcional, aunque los estudios neurofisiológi-
ácidos grasos que se encuentran en la mitocondria y en
cos sí que demuestran una discreta mejoría de la fun-
los microsomas. Los estudios que demostraron la
ción nerviosa periférica. Los pacientes con la forma
contribución de los lípidos de la dieta en el acúmulo
cerebral rápidamente progresiva sufren la enfermedad
anómalo de AGCML llevaron al diseño de dietas muy
de forma inalterable.
restringidas en AGCML saturados11-12. No obstante, es-
tudios subsiguientes pudieron demostrar que la gran El ácido erúcico (ácido cis-13-docosanoico) se halla
mayoría del ácido hexacosanoico (C26:0) que se acu- presente en aceites vegetales derivados de la colza y
mula en la ALD deriva de la síntesis endógena, ya que la mostaza. Los pacientes con ALD no pueden meta-
el tejido nervioso posee el sistema de elongación de los bolizar este ácido graso, y por este motivo se propu-
ácidos grasos, y este sistema es más activo en el tejido so como base del tratamiento con un preparado en
nervioso de los pacientes con ALD que en los controles forma de aceite que contiene gliceril trioleato y glice-
sanos13. De hecho, en la ALD, la restricción severa de ril trierucato (GTE, que contiene un 95 % de ácido
AGCML saturados (menos de 3 mg/día de C26:0, en erúcico), en una proporción de 4:1 de GTO y GTE,
comparación con 12-40 mg/día que contiene una die- llamado aceite de Lorenzo18. Este aceite tiene un po-
ta normal americana) no consiguió reducir los niveles deroso efecto sobre los niveles de AGCML saturados
plasmáticos de estos ácidos grasos ni alterar el curso en plasma, normalizando los niveles de C26:0 en 4
clínico de la enfermedad14. semanas de tratamiento, y con muy pocos efectos
En 1986, Rizzo et al15 demostraron que añadiendo secundarios.
ácido oleico al medio de cultivo de fibroblastos de la El régimen dietético que incluye el aceite de Lorenzo
piel de pacientes con ALD conseguía reducir de forma representa una modificación de la dieta GTO (tabla 2).
notable los niveles de C26:0. Estos autores concluyeron En el caso de que los requerimientos energéticos no
que los ácidos grasos monoinsaturados compiten con queden cubiertos con la dieta restringida en grasas y el
los saturados por el sistema de elongación de los áci- aceite de Lorenzo, se puede incluir glucosa o polímeros
dos grasos. Este hallazgo llevó al diseño de una nueva de glucosa.
dieta, que combina la administración de glicerol trio- La mayoría de los pacientes que siguen la dieta del
leato (GTO), que contiene un 90 % de ácidos grasos en aceite de Lorenzo consiguen normalizar los niveles de
forma de ácido oleico y s0lo trazas de ácidos grasos C26:0 en plasma y en los hematíes19. La microviscosi-

Tabla 2.  Dieta inicialmente descrita que incluye el aceite de Lorenzo como base fundamental del
aporte lipídico de la dieta.
Dieta aceite de Lorenzo
· Muy bajo contenido en AGCML saturados
· 10 % del VCT en forma de grasa
· Aceite de Lorenzo proporciona un 20 % del VCT (2-3 ml/kg/día)
· Aceite de girasol para garantizar un aporte de ácido linoleico (5% VCT)
· Cápsulas de aceite de pescado para proporcionar 240 mg de docosahexaenoico (C22:6) y 360 mg
de eicosapentanoico (C22:5)
· Polivitamínico y suplemento de minerales dependiendo de la edad
AGCML: grasos de cadena muy larga; VCT: valor calórico total.
348 BLOQUE: LÍPIDOS

dad de las membranas celulares de los hematíes tam- 1.4.2.  Otros tratamientos
bién se normaliza. En contraste, los niveles cerebrales
de C26:0 de pacientes con ALD fallecidos que habían Trasplante de médula ósea
seguido la dieta entre 3 y 16 meses no fueron diferen- Se ha realizado en algunos casos trasplante de mé-
tes que los pacientes no tratados. Sin embargo, se de- dula ósea, basado en la capacidad que las células nor-
tectan niveles elevados de ácido erúcico en el hígado y males de la médula ósea tienen para degradar los
el tejido adiposo, pero no en el tejido cerebral, indican- AGCML y en la presencia de infiltrados de linfocitos y
do que este ácido graso no penetra la barrera hema- macrófagos en las lesiones cerebrales23. Parecía proba-
toencefálica. Este hallazgo podría explicar la ineficacia ble que el trasplante de médula ósea podría transferir
del tratamiento con ácido erúcico para detener la pro- el producto génico deficitario en la ALD, al igual que
gresión de la enfermedad neurológica ya establecida20. ocurre con otras enfermedades como las lisosomales.
Por este motivo, los futuros estudios deberían tener en Sin embargo, el mecanismo por el cual el trasplante es
consideración que la normalización plasmática de los eficaz no queda claro, ya que la ALDP no es una proteí-
AGCML no puede ser utilizada como un marcador váli- na soluble. Probablemente se trate de una modifica-
do de eficacia terapéutica. ción de las células de la microglía por parte de las célu-
El efecto secundario más frecuente del aceite de Lo- las procedentes de la médula ósea del donante. Los
renzo es la plaquetopenia, que ocurre en un 40 % de datos clínicos sugieren que el trasplante sería inapro-
los pacientes21. El contenido de plaquetas en sangre es piado para pacientes con estados avanzados de la en-
proporcional a los niveles de ácido erúcico en los lípi- fermedad, en los que el deterioro neurológico no me-
dos plaquetarios, y es reversible al suspender el aceite jora e incluso podría empeorar. Sin embargo, se están
de Lorenzo. No se han descrito sangrados. Este efecto obteniendo resultados prometedores en pacientes con
secundario, relacionado con la ingesta de GTE, obliga afectación neurológica moderada (sin síntomas neuro­
a monitorizar los niveles de plaquetas de forma bimen- psicológicos) y con lesiones cerebrales incipientes (las
sual. En caso de presentarse la trombocitopenia, debe- lesiones en la resonancia magnética preceden a los dé-
ría suspenderse el tratamiento con GTE, pudiendo con- ficits neurológicos). En estos casos, la mejoría neuroló-
tinuar con GTO. Otro efecto secundario del aceite de gica puede ser evidente a los 6 meses del trasplante, y
Lorenzo es la disminución de los niveles de ácidos gra- su duración de años, a pesar del mantenimiento de
sos esenciales poliinsaturados como el C22:6 o el ácido niveles plasmáticos elevados de AGCML. Por ello, hoy
araquidónico (C20:4), que tienen un papel importante en día se reserva esta opción terapéutica para casos
en el desarrollo de la retina y del cerebro. Por este mo- con afectación neurológica moderada y que dispongan
tivo, no se aconseja iniciar el aceite de Lorenzo antes de un donante adecuado24, 25. Se aconseja tratamiento
de los 2 años, a pesar de que este efecto secundario se dietético con GTE antes, durante y después del tras-
puede reducir añadiendo suplementos de aceite de gi- plante.
rasol y de pescado.
En pacientes con disfunción adrenal o neurológica
Tratamientos farmacológicos
preexistente, el tratamiento con aceite de Lorenzo
en general no detiene la progresión de la enferme- Se han ensayado diversos agentes inmunosupresores
dad en las formas cerebrales rápidamente progresi- (beta-interferón, ciclofosfamida, ciclosporina, mitoxan-
vas ni en la adrenomieloneuropatía, aunque algunos trone, inmunoglobulinas) para reducir la respuesta in-
datos preliminares apuntasen a discretas mejorías flamatoria que se observa en las lesiones cerebrales de
funcionales. la ALD. En general, no se ha podido demostrar una
En pacientes asintomáticos, el tratamiento parece mejoría clínica significativa, ni utilizándolos como mo-
reducir la frecuencia y la severidad del deterioro neuro- noterapia o incluso combinándolos con aceite de Lo-
lógico posterior19, aunque los estudios adolecen de la renzo26. También se ha ensayado tratamiento con na-
falta de grupo control tratado con placebo debido a talizumab, basándose en los resultados prometedores
los problemas éticos de diseño de este tipo de estu- en la esclerosis múltiple, sin éxito.
dios. La ausencia de alternativas terapéuticas, la senci- El valproato ha demostrado tener una capacidad
llez de su administración, y la posibilidad de detectar neuroprotectora en la adrenomieloneuropatía en mo-
los efectos secundarios con una cuidadosa monitoriza- delos animales, y en un grupo muy pequeño de pa-
ción hacen que el tratamiento con aceite de Lorenzo se cientes ha demostrado tener efectos antioxidantes y
siga utilizando a pesar de la falta de evidencia científica potencialmente beneficiosos para estos pacientes.
de su eficacia22. De forma científica, hoy en día solo se La lovastatina, un fármaco inhibidor de la 3-hi-
debería recomendar para aquellos pacientes que están droxi-3-metilglutaril coenzima A, puede reducir los ni-
asintomáticos o solo padecen la enfermedad de Addi- veles de AGCML en un pequeño grupo de pacientes
son. En los casos de adrenoleucomielopatía, se aconse- con ALD, adrenoleucomielopatía, y en pacientes hete-
ja proseguir el tratamiento únicamente si el paciente ya rocigotos27. El mecanismo de acción parece ser media-
ha iniciado la dieta y esta es bien tolerada. do por la inhibición de la sintasa del óxido nítrico y las
Tema 20.  Trastornos congénitos del metabolismo de los lípidos: Adrenoleucodistrofia… 349

citoquinas proinflamatorias involucradas en la respues- Se caracterizan por su diagnóstico más tardío


ta inflamatoria cerebral. Se requieren estudios adicio- (> 2 años), y pueden debutar en forma de coma
nales con mayor número de pacientes y con una mayor hipoglucémico, hepatopatía, enfermedad neuro-
duración del tratamiento. lógica, aunque puede haber formas más tardías y
No debe olvidarse el tratamiento farmacológico de monosintomáticas.
las complicaciones de la enfermedad, como el trata-
miento de la espasticidad (baclofeno, vigabatrina), el 2.2. Dieta en los trastornos de la β-oxidación
tratamiento de las crisis comiciales (carbamacepina,
de los ácidos grasos de cadena larga
fenobarbital, benzodiacepinas, etc. Y, por supuesto, el
estudio de la función suprarrenal es esencial para plan- y muy larga
tear el tratamiento esteroideo adecuado. La función La base del tratamiento dietético de estos trastornos
suprarrenal debe reevaluarse cada 4 meses. consiste en31, 32:

Terapia génica 1.  Evitar los períodos de ayuno:


La terapia génica se halla en fase de investigación, y Se recomiendan comidas frecuentes durante el
hay diversas líneas en marcha. Se ha intentado incre- día (dependiendo de la edad y de los requeri-
mentar la expresión de un gen funcionalmente relacio- mientos energéticos), y evitar al máximo un pe-
nado con el gen X-ALD28, transferencia génica media- ríodo de ayuno prolongado durante la noche
da por retrovirus, etc. (nunca más de 8 horas) Para ello, se aconseja un
«resopón» a media noche que contenga almidón
2.  Dietas controladas en ácidos grasos crudo de maiz (maicena), otros hidratos de car-
bono de absorción lenta, o en los casos graves
2.1.  Introducción. Indicaciones de la dieta con afectación neurológica, nutrición enteral
nocturna.
Las dietas controladas en ácidos grasos están indica-
das en todos los trastornos metabólicos que afectan a 2. Restricción del aporte graso e incremento del
la β-oxidación lipídica que tiene lugar en la mitocon- aporte de carbohidratos, con especial atención
dria (AG de 20 o menos átomos de carbono), o en el en mantener los requerimientos de ácidos grasos
caso de los AGCML, en los peroxisomas. La β-oxidación esenciales.
lipídica es un proceso fundamental que aporta energía En los defectos de cadena larga se debe restringir
en los períodos de ayuno (una vez el glucógeno hepá- la cantidad de grasa total a menos del 30% del
tico ya se ha deplecionado) y de estrés. El corazón, el valor calórico total de la dieta, y además menos
hígado y el músculo esquelético son especialmente de- del 10% de la energía debe ser en forma de trigli-
pendientes de esta vía metabólica. céridos de cadena larga (TCL) Una restricción ma-
Los trastornos de la β-oxidación de los ácidos gra- yor comportaría riesgos de déficit de ácidos gra-
sos son metabolopatías que se heredan de forma auto­ sos esenciales. Los AGCL y AGCML pueden ser
sómica recesiva, y que en su mayor parte se caracteri- sustituidos por triglicéridos de cadena media
zan por hipoglucemia no cetósica, con mala tolerancia (TCM), que no requieren del sistema de la carni-
a los períodos de ayuno. Otros síntomas que pueden tina para entrar en la mitocondria y son oxidados
acompañar a estos trastornos metabólicos son mio- eficazmente, a la vez que suprimen la oxidación
patía, hepatopatía, y en ocasiones neuropatía y arrit- de los AGCL. La cantidad de TCM a administrar
mias cardiacas29,30. El espectro clínico y la gravedad es de aproximadamente un 10-20 % del total de
difieren según el déficit enzimático y la edad de de- las calorías de la dieta. Debe introducirse lenta-
but. mente para evitar intolerancias, y puede sustituir
A muy grandes rasgos, podríamos diferenciar dos a otros aceites en la preparación culinaria de los
grupos de trastornos de la β-oxidación de los ácidos alimentos, siempre intentando evitar el sobreca-
grasos: lentamiento, pues puede producir un sabor
amargo y un olor desagradable. Se puede recu-
1.  Alteraciones de la β-oxidación de los ácidos rrir al aceite de soja como fuente de ácidos gra-
grasos de cadena larga (AGCL) y muy larga sos esenciales. En algún caso puede haber déficit
(AGCML): de DHA, y debe suplementarse. Existen prepara-
Se caracterizan por su debut en la lactancia, aun- dos comerciales bajos en grasa total, con un pre-
que puede haber formas más tardías. La clínica dominio de TCM a base de aceite de coco y de
suele ser: hipoglucemia de ayuno, afectación nuez.
muscular y cardiaca y síndrome Reye-like. En muchos casos, deberá suplementarse con
2.  Alteraciones de la β-oxidación de los ácidos gra- L-carnitina, creatina y algunas vitaminas liposo-
sos de cadena media (AGCM): lubles.
350 BLOQUE: LÍPIDOS

3. Prevención de las situaciones de riesgo de hipoglu- 3. Resumen


cemia (procesos con mala tolerancia oral, como
La adrenoleucodistrofia ligada al cromosoma X es
infecciones o fiebre) o períodos de ejercicio físico
un trastorno hereditario del metabolismo peroxisomal
prolongado. En estos casos se aconseja ingesta fre-
caracterizado por un acúmulo anómalo de ácidos gra-
cuente durante el día, y por la noche utilizar bebi-
sos de cadena muy larga, sobre todo en la mielina y en
das ricas en azúcar o polímeros de glucosa.
la corteza adrenal. Se han descrito al menos seis feno­
tipos de la enfermedad. La presentación clínica varía
2.3. Dieta en los trastornos de la β-oxidación de
desde la forma severa cerebral infantil, con un deterio-
los ácidos grasos de cadena media ro neurológico severo y una evolución fatal, hasta por-
En estos trastornos, se debe evitar el ayuno de for- tadores asintomáticos. El gen responsable de la en­
ma similar a los de cadena larga. Por otro lado, en este fermedad ha sido identificado, y codifica para una
grupo de alteraciones metabólicas, existe controversia proteína de transporte de la membrana peroxisomal,
sobre el grado de restricción cuantitativa, e incluso en de función desconocida, homóloga de la familia de
algunas formas moderadas no se aconseja la restric- transportadores ATP-binding cassete. Diversas muta-
ción. En cuanto a la restricción cualitativa, debe consi- ciones del gen alteran la capacidad de la β-oxidación
derarse que está contraindicado el uso de TCM, que de los ácidos grasos de cadena muy larga, aunque no
deberían restringirse de la dieta. De la misma manera, se ha descrito relación entre el genotipo y el fenotipo
en este trastorno deben evitarse los alimentos ricos en de la enfermedad.
TCM como el coco, y, sobre todo, el aceite de coco, así El diagnóstico se basa en la presencia de síntomas
como algunas fórmulas nutricionales ricas en TCM. sugestivos y en la determinación plasmática de ácidos
En la tabla 3 se muestra un resumen del tratamien- grasos saturados de cadena muy larga (ácido hexaco-
to nutricional en las alteraciones de la β-oxidación de sanoico, C26:0) o la ratio ácido tetracosanoico:ácido
los ácidos grasos31. docosanoico (C24:0:C22:0), o la ratio hexacosanoico:

Tabla 3.  Resumen del tratamiento nutricional de las alteraciones de la β-oxidación de los ácidos grasos (tomado de
Ruiz-Pons M31)
Lípidos /
Medidas generales Lípidos / aportes Medidas especiales
restricciones
Trastornos de la Evitar ayuno TCL 10 % energía TCM: 2-3 g/kg/día en DHA: 65 mg/día (en
β-oxidación de Nutrición enteral total menores de 1 año menores de 20 kg) y
cadena larga y nocturna en casos TCM: 1-1,25 g/kg/día 130 mg/día (mayores de
muy larga graves, almidón de en mayores de 1 año 20 kg) o aceite de nuez
maíz, carbohidratos En debilidad muscular
de absorción lenta o rabdomiólisis:
Aceite de soja carbohidratos y/o TCM a
(precursor ácidos la dosis de 0,25-0,5 g/kg
grasos esenciales) 20 minutos antes del
ejercicio
Distribución
calórica: TCM + TCL Montorizar ácidos grasos
20-30 % máximo esenciales y vitaminas
liposolubles
Trastornos de la Evitar ayuno TCM contraindicado Módulos de lípidos Ingesta de azúcares
β-oxidación de Nutrición enteral sin TCM, mezcla libre complejos antes del
cadena media nocturna en casos de grasa ayuno, esfuerzo o
graves, almidón de Lípidos: 30 % del estrés por el riesgo de
maíz, carbohidratos valor calórico total rabdomiólisis
de absorción lenta No limitar la actividad
en los primeros física
meses de vida No se aconsejan medidas
Cuando la edad lo dietéticas restrictivas en
permita, azúcares el niño mayor y adulto,
complejos salvo en crisis agudas
TCL: triglicéridos de cadena larga; TCM: triglicéridos de cadena media.
Tema 20.  Trastornos congénitos del metabolismo de los lípidos: Adrenoleucodistrofia… 351

ácido docosanoico (C26:0:C22:0). Además, el hallazgo   2. Girós M, Gutiérrez-Solana L, Pedrón C, Coll J, Pine-
de lesiones en la resonancia magnética cerebral y la da M, Campistol J et al. Protocolo de diagnóstico,
presencia de insuficiencia suprarrenal confirman el tratamiento y seguimiento de Adrenoleucodistro-
diagnóstico. En la actualidad se puede realizar el análi- fia ligada al cromosoma X. Asociación Española
sis genético de mutaciones del gen de la ALD, y es po- para el Estudio de los Errores Congénitos del Me-
sible el diagnóstico prenatal. tabolismo. En: http://ae3com.eu/protocolos/pro-
El tratamiento de la ALD incluye: tratamiento sinto- tocolo6.pdf
mático, tratamiento esteroideo sustitutivo, y una serie   3. Moser HW. Dietary management of X-linked adre-
de tratamientos que incluyen el abordaje dietético. noleukodystrophy. Annu Rev Nutr 1995; 15: 379-
El tratamiento dietético consiste en la restricción de 397.
la ingesta de ácidos grasos de cadena muy larga, com-   4. Migeon BR, Moser HW, Moser AB, Axelman J, Si-
binado con la suplementación oral de aceite de Loren- llence D, Norum RA. Adrenoleukodystrophy: evi-
zo (mezcla de gliceril trioleato y gloceriltrierucato en dence for X-linkage, inactivation and selection fa-
proporción 4:1), que consigue normalizar las concen- vouring the mutant allele in heterozygous cells.
traciones plasmáticas de ácidos grasos de cadena muy Proc Natl Acad Sci USA 1981; 78: 5066-5070.
larga. Los resultados clínicos no apoyan el uso de acei-   5. Gartner J, Braun A, Holzinger A, Roerig P, Lenard
te de Lorenzo en pacientes con síntomas neurológicos HG, Roscher AA. Clinical and genetic aspects of
preexistentes. No obstante, algunos estudios sugieren X-linked adrenoleukodystrophy. Neuropediatrics
que la combinación GTO-GTE puede enlentecer el de- 1998; 29: 3-13.
terioro neurológico de pacientes asintomáticos.  6.  Moser HW. Clinical and therapeutic aspects of
Los intentos de modificar la respuesta inflamatoria adrenoleukodystrophy and adrenomyeloneuropa-
cerebral utilizando agentes antiinflamatorios o inmu- thy. J Neuropathol Exp Neurol 1995; 54 (5): 740-
nosupresores no han demostrado eficacia. Se ha utili- 745.
zado el trasplante de médula ósea en pacientes con   7. Powers JM. Adrenoleukodystrophy. Clin Neuropa-
afectación neurológica moderada y donante compati- thol 1985; 4: 181-199.
ble, con resultados reservados debido al alto riesgo del   8. Powers JM, Liu Y, Moser A, Moser H. The inflam-
trasplante. matory myelinopathy of adrenoleukodystrophy:
Los trastornos de la β-oxidación de los ácidos grasos cells, effector molecules and pathogenic implica-
son metabolopatías que se heredan de forma autosómi- tion. J Neuropathol Exp Neurol 1992; 51: 630-
ca recesiva, y que en su mayor parte se caracterizan por 643.
hipoglucemia no cetósica, con mala tolerancia a los pe-   9. Igarashi M, Shaumburg HH, Powers J, Kishimoto
ríodos de ayuno. Otros síntomas que pueden acompa- Y, Kolodny E, Suzuki K. Fatty acid abnormality in
ñar a estos trastornos metabólicos son miopatía, hepa- adrenoleukodystrophy. J Neurochem 1976; 26:
topatía, y en ocasiones neuropatía y arritmias cardíacas. 851-860.
El tratamiento dietético juega un papel muy importante 10.  Knazek RA, Rizzo WB, Schulman JD, Dave JR.
en estos trastornos, y está dirigido a evitar los períodos Membrane microviscosity is increased in the eritro-
de ayuno y asegurar el aporte de hidratos de carbono de cytes of patients with adrenoleukodystrophy and
absorción lenta, a la vez que se restringe cuantitativa y adrenomyeloneuropathy. J Clin Invest 1983; 72:
cualitativamente las grasas de la dieta. 245-248.
Hay dos tipos fundamentales de trastornos de la 11. Kishimoto Y, Moser HW, Kawamura N, Platt M,
β-oxidación de los ácidos grasos: los que afectan a los Pallante B, Fenselau C. Evidence that abnormal
ácidos grasos de cadena larga y muy larga, y los que very long chain fatty acids of brain cholesterol es-
afectan a ácidos grasos de cadena media. En el primer ters are of exogenous origin. Biochem Byophys Res
caso, debe garantizarse el aporte de ácidos grasos Commun 1980; 96: 69-76.
esenciales, y debe suplementarse la dieta con ácidos 12. Van Duyn MA, Moser AM, Brown FR, Sacktor N,
grasos de cadena media. En el déficit de β-oxidación Liu A, Moser HW. The design of a diet restricted in
de los ácidos grasos de cadena media, la restricción saturated very long chain fatty acids: therapeutical
cualitativa y cuantitativa de las grasas es más contro- application in adrenoleukodystrophy. Am J Clin
vertida, y está contraindicado el uso de triglicéridos de Nutr 1984; 40: 277-284.
cadena media. 13. Moser HW, Pallante SL, Moser AE, Rizzo WB, Shul-
man J, Fenselau C. Adrenoleukodystrophy: origin
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352 BLOQUE: LÍPIDOS

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system disease in globoid cell leukodystrophy,meta- lona 2014.
Tema 21.
Quilotórax y ascitis quilosa. Dietas modificadas
en triglicéridos de cadena larga y cadena media
M.ª Nuria Virgili Casas
Rafael López Urdiales
Eva María García Raimundo
Mónica Montserrat Gil de Bernabé
Unidad de Nutrición y Dietética. Servicio de Endocrinología y Nutrición.
Hospital Universitari de Bellvitge. Hospitalet de Llobregat. Barcelona

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 353-363.

1. Introducción
2.  Manifestaciones clínicas
3. Diagnóstico
4.  Repercusión nutricional e inmunológica de las lesiones del sistema linfático
5. Tratamiento
6.  Resumen y conclusiones
7. Bibliografía

1. Introducción
Vena yugular
El quilo es un líquido que contiene en suspensión los
Conducto interna
productos de la digestión y absorción de la grasa con-
torácico
tenida en los alimentos y especialmente los triglicéridos
derecho
de cadena larga (TCL). Es transportado por los conduc-
tos linfáticos a la circulación a través del conducto to- T1 Conducto
rácico. Aproximadamente entre el 70-90% de la grasa torácico
ingerida circula a través de este sistema.
Vena cava Vena
Los conductos linfáticos actúan como mecanismo
superior subclavia
de drenaje facilitando el retorno de fluidos, lípidos y
proteínas desde los tejidos al sistema vascular a través T5 Aorta
de la cisterna quilosa y el conducto torácico. La cister- Conducto
Vena ácigos
na quilosa está formada por tres troncos linfáticos: torácico
dos troncos lumbares de cada una de las extremidades
inferiores y un tronco intestinal (fig. 1). De la cisterna
quilosa deriva el conducto torácico que entra en el tó-
rax a través del hiato aórtico ascendiendo por el me-
diastino posterior en el hemitórax derecho hasta la Vena cava
cuarta o quinta vértebra torácica, en que pasa al hemi- inferior Esófago
tórax izquierdo, anterior a la arteria subclavia y desem- T12
Cisterna
boca en el sistema venoso en la confluencia de la vena quilosa
subclavia y la vena yugular interna izquierdas. Varian-
tes anatómicas son frecuentes, por lo que en el 40-
60% de los individuos pueden tener colaterales Figura 1.  Anatomía del sistema linfático y el
anómalas del conducto torácico. Esta puede ser una conducto torácico.

353
354 BLOQUE: LÍPIDOS

razón por la que puede lesionarse el conducto toráci- enfermedad de Gorham o el síndrome de las uñas
co a pesar de una intervención cuidadosa por parte amarillas10,11.
del cirujano.
La función del sistema linfático es el transporte de la 2.2.  Ascitis quilosa
linfa de todo el organismo al sistema circulatorio. De
este flujo linfático, el 50-90% deriva del intestino e hí- La ascitis quilosa es la acumulación de quilo en la cavi-
gado y contiene la grasa absorbida en forma de quilo- dad peritoneal debido a ruptura u obstrucción de los
micrones en una concentración aproximada de 0,4-6 conductos linfáticos abdominales. Clínicamente se mani-
g/dl, por tanto el flujo varía dependiendo de la ingesta fiesta por aumento del perímetro abdominal. Típica­
de grasa. El flujo de linfa en el estado de ayuno puede mente se presenta alrededor del 5º día del postoperato-
ser tan bajo como 0,38 ml/ min y puede incrementarse rio cuando el paciente ha iniciado dieta oral. El inicio de
a 3,9 ml/min en el estado postprandial. El quilo contie- la dieta, especialmente si contiene grasa, induce un in-
ne elevadas cantidades de triglicéridos, quilomicrones cremento del flujo linfático y como consecuencia ascitis.
y vitaminas liposolubles. A su vez, también contiene La ascitis quilosa, aunque es poco frecuente, puede
colesterol, inmunoglobulinas, enzimas y linfocitos. El ser consecuencia de múltiples situaciones patológicas.
contenido proteico del quilo está entre 2-6 g/dl, apro- En los adultos la causa principal es la obstrucción por
ximadamente la mitad del plasma, igual que el conte- neoplasias abdominales y en niños las anomalías linfá-
nido de albúmina 1,2-4,2 g/dl, por lo que las pérdidas ticas congénitas. Las neoplasias que se manifiestan con
proteicas y de albúmina en una situación de quilotórax ascitis quilosa son los linfomas y la carcinomatosis pe-
o linforragia pueden ser importantes1-5. ritoneal de neoplasias ováricas, gástricas o colon. La
ascitis quilosa postquirúrgica, como consecuencia de
una lesión intraoperatoria del conducto torácico, de la
2.  Manifestaciones clínicas cisterna quilosa o de sus ramas por cirugía sobre
El quilotórax, la linforragia y la ascitis quilosa son las la aorta abdominal (aneurisma aorta, derivación aor-
manifestaciones más frecuentes de las alteraciones de to-femoral), shunt mesocava o resecciones de la vena
los conductos linfáticos. cava inferior, es mucho menos frecuente (tabla 2).
También la cirrosis hepática, la sarcoidosis, la peritoni-
tis bacteriana espontánea o procesos infecciosos como
2.1. Quilotórax la tuberculosis y la filariasis, pueden dar lugar a ascitis
Es una entidad caracterizada por el acúmulo de quilo quilosa3, 12-16.
en la cavidad pleural. Clínicamente se manifiesta como
un derrame pleural del cual derivan los síntomas. Tabla 1.  Clasificación etiológica de los quilotórax.
Según la etiología, los quilotórax se clasifican en dos
categorías: espontáneos y traumáticos (tabla 1). Espontáneo
La causa más frecuente de quilotórax en el adulto es · Quilotórax congénito
el quilotórax secundario a cirugía y/o traumatismo1-8. · Neoplasias
Las causas postoperatorias se observan después de - Hematológicas (linfoma)
esofagectomía, cirugía de cabeza y cuello u otra que - Metástasis ganglionar mediastínica
involucre el hilio pulmonar derecho. La pérdida de qui- · Sarcoidosis
lo puede ser resultado de la lesión directa del conducto · Amiloidosis
torácico o de fallo de la ligadura de sus ramas colatera- · Tuberculosis y otros procesos infecciosos
les. Generalmente estos casos se presentan en los pri- · Linfagioleiomatosis
meros días del postoperatorio con salida de un mate- · Trombosis vena subclavia izquierda
rial blanquecino lechoso por el tubo de drenaje o más · Bocio endotorácico
raramente manifestarse de forma tardía como un de- · Obstrucción vena cava superior
rrame pleural. · Insuficiencia cardíaca
También el quilotórax puede originarse de forma es-
pontánea por una alteración u obstrucción del sistema Postraumático
linfático. Entre los procesos obstructivos hay que des-
· Quirúrgico
tacar la patología neoplásica, en primer lugar los linfo-
- Postcirugía de cabeza y cuello
mas, que pueden representar el 20-30% de las neopla-
- Postcirugía esofágica
sias, las metástasis ganglionares mediastínicas y el
- Postcirugía pulmonar
sarcoma de Kaposi9. Las causas más frecuentes de qui-
- Postcirugía cardíaca
lotórax espontáneo por alteración primaria de los con-
· Traumatismos cerrados
ductos linfáticos son los linfangiomas, las linfangioleio-
- Traumatismo torácico
miomatosis y las linfangiectasias aisladamente o
- Postresucitación cardiopulmonar
formando parte de síndromes poco frecuentes como la
Tema 21.  Quilotórax y ascitis quilosa. Dietas modificadas en triglicéridos… 355

Tabla 2.  Causas más frecuentes de ascitis quilosa. está desnutrido y existen antecedentes o circunstan-
cias que hacen sospechar o se asocian con frecuencia
Congénitas a quilotórax17-19.
· Ascitis congénita idiopática La práctica de toracocentesis o paracentesis con la
· Linfangiectasia intestinal obtención de un líquido cremoso, inodoro, estéril, al-
· Hipoplasia linfática primaria calino con alto contenido en triglicéridos y proteínas,
· Linfangiomatosis bajo en colesterol y con un predominio de linfocitos es
altamente sugestiva del diagnóstico (tabla 3). Diversos
Adquiridas autores18,19 describen que solo el 44% de los quilotórax
son líquidos lechosos y el resto son serohemáticos
· Neoplasias
(26%), serosos (26%) o sanguinolentos (3%). Para po-
- Linfoma
der confirmar el diagnóstico, deberá analizarse en el
- Sarcoma de Kaposi
laboratorio el líquido, solicitando la determinación de
- Carcinomatosis peritoneal (ovario, gástrico, colon)
triglicéridos, contaje diferencial de células, proteínas y
· Postoperatorias
colesterol. Será confirmatorio si el contenido de trigli-
- Cirugía aorta abdominal
céridos es superior a 110 mg/dl (1,24 mmol/l) o pre-
- Linfadenectomía retroperitoneal
sencia de quilomicrones. Aunque estos valores son
- Nefrectomía radical
ampliamente aceptados, hay que considerar el estado
- Duodenopancreatectomía
nutricional del paciente. La electroforesis de lipoproteí-
- Trasplante hepático
nas deberá realizarse sólo si el contenido de triglicéri-
· Inflamatorias
dos es inferior a 110 mg/dl y existe alta sospecha de
- Radioterapia
fístula linfática. Los niveles de colesterol en el líquido
- Tuberculosis
pleural habitualmente se sitúan inferior a 200 mg/dl
- Pancreatitis
(5,18 mmol/l). También puede ser útil determinar el
- Diálisis peritoneal
cociente de triglicéridos o colesterol entre líquido pleu-
· Traumáticas
ral y suero. Si el cociente de triglicéridos es superior a 1
· Obstructivas
y el cociente de colesterol es inferior a 1 es indicativo
· Hemodinámicas
de quilotórax o fístula linfática8, 18, 19.
- Cirrosis
Contrariamente, hay que descartar la posibilidad de
- Síndrome nefrótico
pseudoquilotórax ante la presencia de un líquido le-
choso pero con contenido de triglicéridos inferior a
110 mg/dl y colesterol superior a 200 mg/dl (cociente
2.3. Linforragia colesterol:triglicéridos superior a 1). En determinados
casos será necesario un análisis microbiológico para
La linforragia puede presentarse por la lesión de los
descartar la existencia de un proceso infeccioso4, 8, 17-19.
vasos linfáticos derivada de linfadenectomía de la ciru-
gía de cáncer de tiroides, especialmente en las reinter-
venciones por recidivas, por linfadenectomías extensas 3.2.  Técnicas de imagen
por neoplasias ginecológicas o urológicas o posterior-
mente a la cirugía vascular aorto-ilíaca. Generalmente, el diagnóstico es clínico y de labora-
torio con el antecedente de cirugía, traumatismo pre-
vio o neoplasia. Las técnicas de imagen permiten el
3. Diagnóstico diagnóstico, extensión y localización de la lesión linfá-
3.1.  Diagnóstico clínico tica en situaciones de quilotórax recurrente o ante la
sospecha de anomalías anatómicas. Entre las técnicas
El diagnóstico se basará en la aparición de un líqui- disponibles, la linfografía o técnicas de estudio con
do lechoso o drenaje de gran volumen de líquido por isótopos serán las más utilizadas. Permiten localizar la
el tubo de drenaje torácico, abdominal, cuello u otra fístula, valorar la permeabilidad del conducto torácico
localización. Debe sospecharse ante la aparición de
disnea, tos, semiología de derrame pleural en el caso
del quilotórax y raramente se acompaña de dolor Tabla 3.  Características del quilo.
pleurítico y fiebre. En el caso de la ascitis quilosa, las
Lípidos totales 0,4-4 g/dl
manifestaciones serán distensión abdominal y ascitis.
Triglicéridos > 110 mg/dl (1,24 mmol/l)
Generalmente, la aparición de estos síntomas será
Colesterol <200 mg/dl (<5,18 mmol/l)
posterior al inicio de la dieta oral. Sin embargo, este
Linfocitos 400-700 x 103/dl (4.000-7.000 x 106 /l)
diagnóstico debe considerarse en pacientes con derra-
Proteínas totales >3 g/dl
me pleural aunque el líquido no sea lechoso, especial-
pH Alcalino
mente si el paciente está en situación de ayuno o bien
356 BLOQUE: LÍPIDOS

y diferenciar lesiones parciales o completas del mismo. equipo médico. De forma general hay tres aproxima-
En algunos casos la linfografía puede ser diagnóstica y ciones al tratamiento: a) tratamiento conservador, b)
terapéutica. Se ha descrito la resolución del 70% de tratamiento quirúrgico y c) tratamiento con radiología
fístulas linfáticas con linfografía cuando el drenaje es intervencionista4, 5, 20-24.
inferior a 500 ml/día. La tomografía axial computariza- Generalmente, el tratamiento de primera elección
da generalmente permitirá identificar la localización y será el tratamiento conservador, habitualmente por un
las causas secundarias4, 20. tiempo limitado antes de iniciar medidas más invasivas.

4. Repercusión nutricional e inmunológica 5.1.  Tratamiento conservador


de las lesiones del sistema linfático
El tratamiento conservador del quilotórax y la ascitis
Los efectos sobre el estado nutricional dependen de quilosa se dirige a reducir el flujo linfático basado en el
la cantidad del flujo linfático, de la magnitud y dura- drenaje adecuado, reposición de líquidos, dieta hiper-
ción de la lesión y del manejo nutricional del paciente4, proteica, baja en grasa y suplementada con triglicéri-
5, 21, 22
. En muchas ocasiones, los pacientes con alta sos- dos de cadena media (TCM) o fórmulas sin grasa, nu-
pecha de presentar lesiones traumáticas o postquirúr- trición enteral con preparados con alto contenido en
gicas del sistema linfático permanecen en dieta absolu- TCM o nutrición parenteral y tratamiento farmacológi-
ta, lo cual retrasa la aparición del quilotórax o la ascitis co con somatostatina u octreotida. Según diferentes
quilosa. estudios retrospectivos4, 5, 20-26, el tratamiento conserva-
El flujo linfático en condiciones normales puede os- dor puede resolver entre el 70-80% de los quilotórax y
cilar entre 2 a 4 litros al día (10-100 ml/kg/d), por lo ascitis quilosa. La respuesta al tratamiento dependerá
que una lesión importante del sistema linfático puede de la causa subyacente. En la enteropatía perdedora de
suponer unas pérdidas de 2-2,5 litros al día con mani- proteínas por linfangiectasia intestinal primaria el tra-
festaciones de hipovolemia, alteraciones electrolíticas, tamiento dietético puede beneficiar al 67% de los pa-
las más frecuentes hiponatremia e hipocalcemia, aci- cientes27. En otras situaciones, como las neoplasias, el
dosis metabólica e inestabilidad hemodinámica. Si es- beneficio del tratamiento dietético es mínimo por la
tas son prolongadas van a conducir a una carencia de mala tolerancia y difícil adherencia al mismo.
proteínas, de las reservas de grasa y vitaminas, espe-
cialmente las vitaminas liposolubles, A, D, E y K. 5.1.1.  Tratamiento dietético
La hipoproteinemia es debida a la pérdida de albú-
mina, fibrinógeno e inmunoglobulinas. Esta depleción 5.1.1.1. Dieta modificada en ácidos grasos
puede dar lugar a trasvase de líquido al espacio inters- de cadena larga y ácidos grasos de
ticial con la aparición de edemas y dificultad para man-
cadena media
tener el volumen intravascular.
A toda esta situación hay que sumar un aumento de La grasa contenida en los alimentos (grasa dietética)
las necesidades energéticas y proteicas a consecuencia es una importante fuente de energía, que representa el
del traumatismo, cirugía o enfermedad subyacente. 30-40% del consumo energético diario. Más del 95% de
La repercusión sobre el sistema inmunológico deriva la grasa dietética está compuesta por TCL, es decir trigli-
de la pérdida de linfocitos, los cuales representan el céridos compuestos por ácidos grasos de 14 o más car-
95% del contenido celular del quilo. El 90% de estos bonos. La absorción intestinal de estos TCL comporta
linfocitos son linfocitos T, mediadores de la inmunidad una serie de fases: emulsificación, hidrólisis por las lipa-
celular, la cual quedará afectada, al igual que la inmu- sas, solubilización e incorporación en micelas, absorción
nidad humoral mediada por linfocitos B. Por otra par- de los quilomicrones por el enterocito y paso a la linfa.
te, el complemento y la función de los macrófagos Contrariamente a estos, los TCM tienen una longitud
permanecen normales. Los pacientes tienden a presen- de cadena de 6 a 12 átomos de carbono. Las caracterís-
tar anergia, linfopenia, hipoalbuminemia y descenso ticas físico-químicas de los TCM, les confieren una serie
de los niveles séricos de gammaglobulinas, que los si- de propiedades metabólicas que los diferencian de los
túa en una situación de riesgo para las infecciones bac- TCL y los hacen especialmente indicados en el tratamien-
terianas y virales y un aumento de la morbimortalidad. to de determinados trastornos en los que debe restringir-
En el caso de quilotórax asociado a tumor, el pronós- se el consumo de TCL. Estas características físico-quími-
tico estará determinado por la enfermedad subyacente. cas se basan en una hidrólisis intraluminal por parte de la
lipasa pancreática más completa y rápida que la de los
TCL y en ausencia de lipasa, debido a su bajo peso mole-
5. Tratamiento
cular, también pueden ser absorbidos en forma de tria-
El tratamiento del quilotórax y de las fístulas quilosas cilgliceroles (fig. 2). A diferencia de los TCL, no precisan
debe ser cuidadoso y apropiado según la causa desen- sales biliares para su absorción y no penetran al sistema
cadenante, la situación clínica y de la experiencia del linfático, sino que son transportados a través del sistema
Tema 21.  Quilotórax y ascitis quilosa. Dietas modificadas en triglicéridos… 357

VENA PORTA
AGCM
LUZ HÍGADO
TCM LP AGCM
INTESTINAL
LP MG
TCL ÁCIDOS
AGCL
GRASOS
MUCOSA
INTESTINAL
AGCL TCL QM

Tejidos
SISTEMA periféricos
LINFÁTICO QM AGCL

CO2 Lípidos

Figura 2.  Esquema del metabolismo de las grasas. AGCL: ácidos grasos de cadena
larga; AGCM: ácidos grasos de cadena media; LP: lipasa pancreática; TCL: triglicéridos
de cadena larga; TCM: triglicéridos de cadena media; QM: quilomicrones.

venoso portal como ácidos grasos libres unidos a la albú- limitados a una cantidad entre 25 y 50 g en función de
mina. Al no incorporarse a los quilomicrones, su oxida- la situación y la tolerancia individual, ya que dicha res-
ción no requiere la lipoproteinlipasa. tricción puede limitar la adherencia a la dieta. A con-
La mayoría de los TCM son retenidos en el hígado, secuencia de la restricción lipídica, los hidratos de car-
donde atraviesan a gran velocidad la doble membrana bono constituirán la principal fuente de energía de la
mitocondrial sin requerir la presencia de carnitina. Una dieta. Según la cantidad de quilo secretado y las carac-
vez en la mitocondria se oxidan rápidamente, por lo que terísticas individuales, las necesidades proteicas pue-
tienen poca tendencia a depositarse en forma de grasa den estar aumentadas. Cuando así se requiera, una
corporal. Esta oxidación produce gran cantidad de ace- forma de incrementar el aporte proteico puede ser
til-CoA, parte del cual deriva a la producción de cuerpos mediante la incorporación de lácteos desnatados, cla-
cetónicos. Mientras la grasa dietética habitual provee ra de huevo, legumbres y cereales integrales.
una media de 9 kcal/g, los TCM aportan 8,3 kcal/g28. La dieta modificada en TCL y suplementada con TCM
En una dieta controlada en TCL se reduce notable- sola o en combinación con tratamiento farmacológico
mente la cantidad de grasa, por tanto los TCM, cuya puede ser efectiva en los casos leves o moderados depen-
densidad energética también es elevada, suponen un diendo del drenaje (poco probable si es > 1.000 ml/d),
suplemento dietético adecuado para la mayoría de las pudiendo resolver alrededor del 50% de los casos20-26.
situaciones patológicas que requieren una reducción
de la grasa dietética. 5.1.2.  Suplementación nutricional
Características de la dieta modificada en ácidos 5.1.2.1. Suplementación con triglicéridos de
grasos de cadena larga y media cadena media
La dieta baja en grasa y enriquecida en TCM es una Los TCM se introdujeron en 1950 para el trata-
dieta en la que debe limitarse la ingestión de grasa miento de las alteraciones de la absorción, metabo-
dietética para reducir el aporte de TCL. Así, se des- lismo y transporte de lípidos como fuente de energía
aconsejará el consumo de carnes grasas, lácteos ente- en las situaciones que requerían una importante re-
ros y sus derivados, grasas de adición y todas las pre- ducción lipídica. La suplementación con TCM permi-
paraciones y recetas ricas en grasa22, 25-30 (tabla 4). te asegurar un aporte adecuado de energía y mejorar
Frecuentemente, los lípidos totales representarán un las características organolépticas de las dietas bajas
máximo del 20% de la energía consumida, viéndose en grasa.
358 BLOQUE: LÍPIDOS

Tabla 4.  Consejos para la selección de alimentos en una dieta modificada en triglicéridos de cadena larga
y de cadena media.

Grupos de alimentos Permitidos Desaconsejados


Batidos de caco, batidos con
Agua, zumos de frutas y verduras; infusiones, café, té,
Bebidas leche en general, horchata, caldo
refrescos; caldo vegetal
de ave o carne*
Bollería en general, croisants,
Pan, arroz, pasta italiana sin huevo, sémola, harina, ensaimadas, magdalenas, donuts,
Pan y cereales
cereales, galletas integrales sin grasa galletas en general, sopas
preparadas
Lehe entera, nata, crema, flanes,
Leche y yogures desnatados, queso 0% MG, quesos
Leche y derivados quesos secos, semisecos, duros y
bajos en grasa*
cremosos, leche de almendras
Frutas, verduras y Aceitunas, coco, aguacate, frutos
Todas excepto las listadas como desaconsejadas
legumbres secos oleaginosos
Mantequilla, margarina, manteca
Aceite*, margarina*, aliños libres de grasa, mayonesa
Grasas de cerdo, aceites vegetales,
(sin huevo)**
mayonesa (sin huevo), besamel
Carnes grasas o cocinadas con
Carnes y derivados Carnes magras*, pollo o pavo sin piel*, conejo* grasas, pato, ganso, embutidos,
vísceras
Pescado blanco* (hervido, al horno, a la plancha, Pescado azul, pescado o marisco
Pescado y marisco
ahumado), moluscos y crustáceos* enlatado en aceite, mojama
Huevos Clara de huevo, huevo entero*, yema de huevo* Yema de huevo, huevo entero
Azúcar, miel, mermelada, confitura, dulce de Chocolates, pastelería en
membrillo, gelatinas, merengues, cualquier postre general, repostería casera o
Dulces y postres elaborado a partir de recetas con TCM, sorbetes, comercial que contenga entre
helados de agua, pastelería casera a base de alimentos sus ingredientes algún alimento
aconsejados desaconsejado

*  Estos alimentos podrán consumirse sólo si el especialista así lo indica, y siempre en la cantidad prescrita.
**  Preparada con aceite TCM.

Los TCM comercializados se obtienen principalmente tinto al habitual de los aceites vegetales, lo cual puede
del aceite de coco, y están formados por ácidos grasos limitar la adherencia al tratamiento. Se pueden dar su-
de una longitud entre 8 y 10 carbonos (tabla 5). gerencias de uso como añadirlos a zumos de fruta y
Se puede disponer de TCM en forma líquida, polvo o verduras, usarlos con saborizantes, como aliño o en
sólida, aislado o en combinación con otras sustancias o elaboración de salsas.
nutrientes (azúcares, ácidos grasos esenciales, proteí- El uso de una dieta con restricción de TCL y suple-
nas, vitaminas, minerales). Esto permite aportar la can- mentada con TCM a largo plazo puede suponer un
tidad precisa de TCM a todos los grupos de edad tanto riesgo de déficit de ácidos grasos esenciales (AGE) y
en alimentación oral como enteral5, 21, 25, 26, 29, 30. vitaminas liposolubles, pero en general es poco fre-
Dosis repartidas en distintas tomas de entre 15-20 ml cuente, pues el tratamiento conservador en el quilotó-
suelen ser bien toleradas. No es habitual observar into- rax o la ascitis quilosa no suele prolongarse más de
lerancias con un aporte diario de 50 g e incluso de 2 semanas.
hasta 100 g. Sin embargo, es aconsejable una intro-
ducción lenta y progresiva hasta alcanzar el aporte de-
seado para evitar la intolerancia gastrointestinal con
Limitaciones de uso de los triglicéridos
náuseas, vómitos, diarreas o distensión abdominal. de cadena media
El principal problema relacionado con el cumpli- Por sus propiedades cetogénicas, existen dos situa-
miento de esta dieta es el sabor de los TCM, muy dis- ciones en las que el empleo de los TCM puede estar li-
Tema 21.  Quilotórax y ascitis quilosa. Dietas modificadas en triglicéridos… 359

mitado o contraindicado: en individuos con riesgo de pero en los pacientes que no son capaces de alcanzar
padecer cetoacidosis (diabetes mellitus descompensa- un aporte nutricional por vía oral estaría recomendada,
da, pacientes en cetosis o acidosis) y en la cirrosis he- además de suponer menores riesgos y costes que la
pática con o sin shunt portocava en la que los niveles nutrición parenteral (NP). Basándose en los mecanis-
de TCM en sangre pueden incrementarse debido a una mos fisiopatológicos, las fórmulas recomendadas para
reducción del aclaramiento hepático. NE, serían fórmulas sin grasa o fórmulas elementales o
El mantenimiento de una dieta sin grasas exclusiva- peptídicas en las que el contenido lipídico sea mayori-
mente con TCM a largo plazo puede requerir la suple- tariamente a expensas de TCM o con bajo aporte de
mentación de AGE y vitaminas liposolubles. lípidos y que al menos el 50% del mismo sea a expen-
sas de TCM5, 22, 25, 26, 29, 30 (tabla 7). La ventaja de la uti-
5.1.2.2. Suplementación nutricional lización de estas fórmulas con bajo contenido en grasa
con fórmulas definidas a pesar de incorporar TCL es que asegurarían el aporte
Además de la dieta basada en productos naturales, de AGE (son necesarios un 2-4% del aporte calórico).
se dispone de una serie de preparados exentos de lípi- Existen pocos datos que comparen el uso de NE y NP.
dos que pueden contribuir a alcanzar los objetivos En este sentido, un estudio31 comparando NE versus NP
nutricionales propuestos25, 26, 30. Por su forma de pre- concluyó que el cierre espontáneo de las fístulas era más
sentación y sabor los hace muy adecuados para la su- precoz y los pacientes mantenían un mejor estado nutri-
plementación nutricional en las situaciones en que está cional en el grupo tratado con NP, por lo que los autores
indicada una dieta con bajo contenido en grasa apoyaron el uso de NP como primera opción terapéutica.
(tabla 6). Debido a la ausencia absoluta de lípidos en A pesar de estas consideraciones, la NE puede ser
estos preparados, no deberían utilizarse cómo único efectiva en fístulas con un débito <1.000ml/día con un
aporte nutricional, ya que su uso exclusivo de forma menor coste y riesgo de complicaciones que la NP.
prolongada podría ocasionar un déficit de AGE.
5.1.3.2.  Nutrición parenteral
5.1.3.  Nutrición artificial El uso de NP habitualmente no se recomienda como
medida terapéutica inicial. La NP estaría indicada en los
5.1.3.1. Nutrición enteral niños, en aquellos pacientes con mala tolerancia a la
La nutrición enteral (NE) como tratamiento de las fís- dieta restringida en grasas, en los casos que el trata-
tulas del conducto torácico ha sido poco utilizada, miento dietético no consigue reducir el flujo para con-

Tabla 5.  Preparados de triglicéridos de cadena media (aceite TCM).

Nombre %TCM Sabor Kcal/100 ml Presentación


Aceite MCT® (SHS) > 95 Neutro 860 500 ml
Liquigen® (SHS) 50 Neutro 450 250/1.000 ml
MCT Duocal® (SHS) 75 Neutro 497/100 g 400 gramos
MCT MÁS ESENCIALES® (Clinical Nutrition) 67 Neutro 569 1000 ml
MCT NM® (NM) 100 Neutro 830 20 ml
MCT PROCAL® (Vitaflo) 99% Neutro 657/100 g 16 g

Tabla 6.  Suplementos nutricionales exentos de lípidos.

Proteínas Hidratos de
Kcal/ml Fuente Lípidos (%) Presentación
(%) carbono (%)
Fortimel Jucy® Proteínas séricas
1,5 11 89 0 200 ml
(Nutricia) hidrolizadas
Ensure Juce®
1,5 12,8 Lactosuero 87,2 0 240 ml
(Abbott)
Proteínas
Providextra Drink®
1,5 11 guisantes 87 0 200 ml
(Fresenius)
hidrolizadas
360 BLOQUE: LÍPIDOS

Tabla 7.  Fórmulas nutricionales completas con alto contenido en TCM (≥50%).

Densidad calórica
%P %CHO %L %TCM
(kcal/ml)
Monogen®*
11 64 25 80 0,74
(SHS-Nutricia )
Novasource Peptide Junior®*
12 48 39 64 1,5
(Nestlé)
Emsogen*
12 53 35 83 0,8
(SHS-Nutricia)
Dietgrif hiperproteico®
22 49 29 50 1,06
(Grifols)
Dietgrif MCT®
20 55 25 50 1
(Grifols)
Nutrison MCT®
20 50 30 60 1
(Nutricia)
Fresubin HP Energy®
20 45 35 63,8 1,5
(Fresenius Kabi)
Dietgrif energético®
16 54 30 52 1,5
(Grifols)
Novasource Peptide®
16 51 33 82 1
(Nestlé)
Nutrison Advanced
Peptisorb® 16 69 15 50 1
(Nutricia)
Survimed OPD®
18 57 25 51 1
(Fresenius)
Vital Péptido 1.5®
18 49 33 70 1,5
(Abbott)
Alitraq®
21 65 14 53 1
(Abbott)
CHO: carbohidratos; L: lípidos; P: proteínas; TCM: triglicéridos de cadena media.
* Fórmulas de uso pediátrico.

seguir el cierre de la fístula quilosa, o que la patología TCM (50% de TCM y 50% de TCL) o emulsiones con dis-
subyacente requiera una intervención nutricional más tintos porcentajes de TCM y TCL (lípidos estructurados).
agresiva. Su indicación también se ha recomendado en Cuando se inicia la NP, esta debería mantenerse por un
pacientes con importantes pérdidas que han sido tra- período mínimo de 2-3 semanas para conseguir una me-
tados con cirugía abdominal. joría clínica. La tasa de resolución de ascitis quilosa posto-
El fundamento de la indicación de la NP es que per- peratoria o quilotórax puede oscilar del 60 al 100% con
mitiría el reposo digestivo, la reducción del flujo es- NP. Los pacientes con NP pueden mantener la ingestión
plácnico y secundariamente del flujo quiloso. Al mismo de líquidos sin grasa, con alimentos naturales o fórmulas
tiempo permitiría una rápida corrección de los des- nutricionales sin grasa por vía oral sin que esto suponga
equilibrios electrolíticos. un incremento del flujo linfático, al mismo tiempo que
La NP se debe ajustar a las necesidades energéticas y permitiría mantener el trofismo intestinal20-26, 32, 33.
proteicas según la situación clínica del paciente. En su
formulación puede incorporar lípidos a base de TCL y 5.1.4.  Tratamiento farmacológico
TCM, puesto que la infusión se realiza a través de una
vena central o periférica sin influir en el flujo linfático. Ac- La somatostatina y su análogo la octreotida, en com-
tualmente se dispone de diferentes tipos de emulsiones binación con NP o con la dieta baja en grasa y suple-
para la administración parenteral, las mezclas físicas de mentada con TCM, reducen de forma importante el
Tema 21.  Quilotórax y ascitis quilosa. Dietas modificadas en triglicéridos… 361

flujo linfático y ejercen un efecto beneficioso en la reso- caso de quilotórax, o el shunt peritoneovenoso en la
lución del quilotórax y las fístulas linfáticas20, 23, 24, 33-39. ascitis quilosa. En última instancia, el cateterismo ex-
El mecanismo por el cual la somatostatina y la octreoti- terno para drenaje intermitente puede ser una alterna-
da disminuyen el flujo linfático y la producción de quilo tiva terapéutica a considerar en los casos refractarios.
podría atribuirse a la reducción de las secreciones gastroin- A pesar del tratamiento agresivo de las fístulas quilo-
testinales, del flujo esplácnico y de la absorción intestinal sas, las reintervenciones para su corrección pueden in-
de grasas junto a un aumento de la excreción de grasas. crementar notablemente la morbimortalidad.
Aunque hay series de casos con este tratamiento, su
uso es controvertido. No hay indicación para el quilo- 5.3.  Tratamiento con radiología intervencionista
tórax, ni la dosis ni la duración del tratamiento ha sido
estandarizada por ensayos clínicos. De todas formas, si Actualmente existen diversos tratamientos radiológi-
un drenaje que se mantenía estable se reduce a la mi- cos intervencionistas que pueden ser aplicados en los
tad en las 48h del inicio de la administración de octreo- casos de quilotórax o fístulas linfáticas traumáticas y
tida o somatostatina, sugiere que hay una buena res- no traumáticas, aunque no están disponibles en todos
puesta y debería mantenerse el tratamiento. los centros.
Otro tratamiento farmacológico es la etilnefrina20, 39, El shunt portosistémico transyugular intrahepático
fármaco simpaticomimético que reduce el flujo linfáti- (TIPS)40 es de utilidad en el quilotórax secundario a
co en el conducto torácico por contracción de la mus- hipertensión portal que puede resolverlo espontánea-
culatura lisa de su pared. Debe utilizarse con mucha mente. La linfografia también puede ser útil en los qui-
precaución e incluso está contraindicada en pacientes lotórax no traumáticos con resolución entre el 6 y el
con vasculopatía por sus efectos adversos. 50% de los casos, aunque esta técnica no es conside-
En líneas generales, el porcentaje de resolución con rada propiamente como una terapia41, 42.
tratamiento conservador puede alcanzar hasta más del La embolización percutánea del conducto torácico o
75%, para pérdidas inferiores a 1.000 ml. Cuando las de la fístula linfática43, 44 puede realizarse en adultos y
pérdidas son superiores a 1.000 ml las posibilidades de en niños y se plantea como una buena alternativa a la
éxito con tratamiento conservador son bajas. La dura- ligadura quirúrgica del conducto torácico. Sus resulta-
ción del tratamiento conservador habitualmente debe dos pueden alcanzar una resolución del proceso en el
mantenerse de 7 a 14 días20, 23, 24. 90 -100% de los casos traumáticos. Esta técnica puede
resolver una fístula no solucionada con tratamiento
5.2.  Tratamiento quirúrgico quirúrgico. En los casos que la causa es no traumática,
los resultados son inferiores pero pueden alcanzar el
El tratamiento quirúrgico se recomienda en los casos 52% de los casos. Cuando no es posible la emboliza-
refractarios al tratamiento conservador, especialmente ción del conducto torácico por variantes anatómicas,
en las fístulas de alto débito. No existe consenso ni estu- se puede realizar una disrupción percutánea de los va-
dios controlados respecto a cuándo es el momento indi- sos linfáticos para reducir el flujo de linfa. Los resulta-
cado para realizarlo, pero se ha sugerido que este debe- dos son inferiores a la embolización, aproximadamente
ría realizarse en las siguientes condiciones4, 5, 20, 21, 23: se resuelven un tercio de los pacientes45.
La embolización tiene una baja tasa de complicaciones,
• Si las pérdidas del drenaje linfático son > 1-1,5 l/ alrededor del 3% y ninguna fatal, por lo que se le puede
día. considerar una técnica intervencionista bastante segura.
• Persistencia de pérdidas > 1 l/día después de
5 días de tratamiento conservador.
6.  Resumen y conclusiones
• Fístula persistente > 2 semanas.
• Pérdidas por drenaje sin cambios durante 1-2 se- El quilotórax y la ascitis quilosa son entidades poco
manas. frecuentes caracterizadas por el acúmulo de linfa en la
• Deterioro clínico del paciente: desnutrición, com- cavidad pleural o peritoneal. Pueden producirse por le-
plicaciones metabólicas. siones primarias o congénitas del sistema linfático o
adquiridas secundariamente a traumatismos postqui-
El tratamiento quirúrgico primario irá dirigido a re- rúrgicos, neoplasias primarias del sistema linfático o
parar la lesión del conducto linfático lesionado me- metastásicas en el mediastino o en el peritoneo.
diante ligadura. Se recomienda el tratamiento quirúr- El quilotórax, la ascitis quilosa o la linforragia suponen
gico precoz en pacientes jóvenes, en aquellos con una pérdida importante de proteínas, grasas y linfocitos
fístulas de alto débito y en niños con peso inferior a que pueden conducir a una situación de desnutrición. El
4 kg. La tasa de resultados positivos se sitúa en el 90-95% tratamiento de estas entidades será inicialmente conser-
cuando el conducto torácico puede ser identificado. vador basado en una dieta modificada en TCL, con res-
Otros tratamientos quirúrgicos con carácter paliativo tricción de la grasa hasta un 20% del contenido energé-
son el talcaje pleural o el shunt pleuroperitoneal en el tico de la dieta y suplementada con TCM. Además de la
362 BLOQUE: LÍPIDOS

suplementación con TCM, se puede incrementar el 15. Manolitsas T. P, Abdessalam S, Fowler J M. Chy-


aporte energético con fórmulas nutricionales exentas de lous ascites following treatment for gynecologic
grasa. Este tratamiento puede mantenerse durante 1-2 malignancies. Gynecol Oncol 2002; 86:370-374.
semanas y, en caso de no resolución, se optará por la 16. Yol S, Bostanci E B, Ozoguil Y, Ulas M, Akoglu M.
NP. La somatostatina y la octreotida administradas en A rare complication of D3 dissection for gastric
infusión continua o por vía subcutánea en combinación carcinoma: chyloperitoneum. Gastric Cancer
con dieta modificada con TCM o con NP forman parte 2005; 8:35-38.
del tratamiento conservador y pueden contribuir a la re- 17. Skouras V, Kalomenidis I. Chylothorax: diagnosis
solución de los casos, especialmente en aquellos casos approach. Curr Opin Pulm Med 2010; 16: 387-93.
con pérdidas inferiores a 1.000 ml/día. 18. Maldonado F, Hawkins FJ, Daniels CE, Doerr CH,
El tratamiento quirúrgico o con radiología interven- Decker PA, Ryu JH. Pleural liquid charactyeristics of
cionista se reservará para los casos refractarios al trata- chylothorax. Mayo Clinic Proc 2009; 84: 1243-45.
miento conservador, especialmente en los casos de 19. Agrawal V, Doleken P,Shan SA. Pleural liquid anal-
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Tema 22.
Epilepsia. Dietas cetogénicas
Pere Leyes i García
Especialista en Endocrinología y Nutrición. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Unidad de Nutrición
y Dietética Clínica. Hospital Clínic. Barcelona

Joan Trabal Vílchez


Dietista-Nutricionista. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Unidad de Nutrición y Dietética Clínica.
Hospital Clínic. Barcelona

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 365-376.

1. Introducción
2.  Dieta cetogénica
3.  Resumen y conclusiones
4. Bibliografía

1. Introducción durante un largo período el grueso de la evidencia


científica se ha basado en grandes estudios observa-
El control de la dieta es una de las formas de trata- cionales. No obstante, en los últimos años han sido
miento más antiguas y más comunes que existen. A lo publicados ensayos clínicos aleatorizados que han
largo de los siglos se han empleado extensamente dis- contrastado su eficacia.
tintas dietas en un intento de controlar las crisis epilép-
ticas, algunas de ellas basadas en el ayuno. Ya en tiem-
pos de Hipócrates se detalla el tratamiento de la
2.  Dieta cetogénica
epilepsia mediante el ayuno, considerando la epilepsia La dieta cetogénica (DC) es una dieta restrictiva con
como una contaminación del cuerpo que debía ser pu- elevado contenido en grasas, relativamente bajo con-
rificada. tenido proteico y muy bajo contenido en glúcidos. Las
Sin embargo, la primera evaluación científica del uso comidas deben ser cuidadosamente seleccionadas y las
de la manipulación dietética fue comunicada por Guel- raciones pesadas, lo que puede hacer que comer fuera
pa en 1911, con una dieta desintoxicante basada en de casa, en la escuela o restaurantes, sea una tarea di-
una dieta vegetariana de bajo contenido calórico1. A fícil. En algunos niños, pequeñas transgresiones, inclu-
continuación Geyelin, en 1921, describió el cese de las so inadvertidas como el azúcar contenido en jarabes,
crisis con el ayuno absoluto. Ese mismo año, Wilder pueden restar eficacia a la dieta. No todos los centros
describió el uso de una dieta con elevado contenido en ofrecen este tipo de tratamiento, dado que es una die-
grasas y bajo en glúcidos, con efectos similares al ayu- ta de difícil realización, engorrosa y requiere un equipo
no, y atribuyó las propiedades anticonvulsivantes a la de soporte entrenado para su implementación. Actual-
producción de cuerpos cetónicos2. mente existen recursos on-line que facilitan el cálculo
Hasta 1938, la dieta cetogénica fue una de las po- de la DC4.
cas alternativas terapéuticas para el tratamiento de la
epilepsia, pero el advenimiento de la medicación an- 2.1.  Indicaciones de la dieta cetogénica
tiepiléptica (MAE) relevó al tratamiento dietético a un
segundo plano, pasando a ser un recurso para aque- Actualmente la DC se aplica a pacientes con epilep-
llos pacientes refractarios a la MAE. A mediados de sia intratable o con mala respuesta a la MAE3, 5-8,
los 90, a raíz del impacto mediático de un caso resis- habiéndose aplicado a una gran variedad de cuadros
tente a múltiples fármacos, incluso a cirugía, que res- epilépticos, tanto generalizados como focales9, 10,
pondió a la dieta quedando libre de crisis, el trata- entre los que se destacan: crisis de ausencia, crisis
miento dietético volvió a ganar popularidad3. A pesar atónicas, espasmos infantiles, epilepsia mioclónica se-
del tiempo que lleva utilizándose esta terapéutica, vera de la infancia, esclerosis tuberosa, síndrome de

365
366 BLOQUE: LÍPIDOS

Lennox-Gastaut, crisis parciales y crisis tónico-clónicas Tabla 1.  Indicaciones y contraindicaciones de la dieta
generalizadas. Sin embargo, no hay estudios que dife- cetogénica.
rencien claramente qué formas responden mejor a la
dieta, por lo que no pueden establecerse indicaciones Indicaciones
en función del tipo de crisis. De hecho, puede ser tribu- Epilepsia refractaria a tratamiento, habiéndose
taria de tratamiento con DC toda crisis de cualquier constatado:
tipo y origen que no haya respondido a una variedad · Buen cumplimiento de la medicación
de regímenes medicamentosos (tabla 1). Según un · Se han probado al menos 2 o 3 anticonvulsivantes
documento de consenso, se recomienda considerar la a las dosis máximas toleradas
DC cuando han fracasado de 2 a 3 MAE, principal­ · Mal control de las crisis
mente en casos de epilepsias generalizadas11.
Alteraciones metabólicas:
La DC en forma de nutrición enteral ha sido utilizada
· Déficit de GLUT1
con éxito en status epilepticus (SE) en series muy redu-
· Déficit de la piruvato deshidrogenasa
cidas de casos, reportándose supresión total de las cri-
sis en algunos pacientes y reducción del número de Contraindicaciones
crisis en el resto, en un período entre las 48 h y los
· Déficit de carnitina (primario)
8 días desde el inicio de la dieta12, 13. En un estudio re-
· Déficit de carnitín palmitoiltransferasa o de
trospectivo de 10 casos de nutrición enteral con fór-
carnitín translocasa
mula cetogénica en adultos ingresados en cuidados
· Déficit de la piruvato carboxilasa
intensivos con SE refractario, se observó resolución del
· Trastornos de la β-oxidación de ácidos grasos
SE en todos los pacientes que alcanzaron cetosis (el
· Porfiria
90% de ellos), en una mediana de 3 días14. Esta dieta
también se ha probado en la deficiencia de la piruvato
deshidrogenasa (PDH) y constituye el tratamiento de
elección en defectos del transportador de glucosa 1 ca junto con la incapacidad del hígado para generar
(GLUT1)15, 16. El síndrome de la deficiencia de GLUT1 es cuerpos cetónicos. El cuadro clínico consiste en la apa-
un defecto de transporte de glucosa al cerebro a través rición en la infancia de hipoglucemia hipocetósica, he-
de la barrera hematoencefálica y da lugar a hipogluco- patopatía, hiperamoniemia y edema cerebral, usual-
rraquia, causando epilepsia, retraso en el desarrollo y mente después de un período de estrés. El tratamiento
un trastorno motor complejo en la primera infancia. En se basa en evitar el ayuno y en comidas ricas en glúci-
este síndrome, la DC restaura el metabolismo energéti- dos22. En todos los niños en edad infantil que presen-
co cerebral, aunque no influencia la función de GLUT1, ten acidosis láctica, debe descartarse el déficit de piru-
por lo que la hipoglucorraquia continúa siendo un vato carboxilasa antes de iniciar una DC (tabla 1).
dato característico de estos pacientes en tratamiento Está también contraindicado el uso simultáneo de
con DC17, 18. En una revisión de 6 casos con déficit acetazolamida y la DC, por el riesgo de acidosis meta-
de GLUT1, 5 de los 6 pacientes quedaron sin crisis al bólica grave. Por ello, el tratamiento con acetazolami-
empezar la cetosis, y los fármacos anticonvulsivantes da debe suspenderse siempre antes de iniciar la dieta23
pudieron ser retirados19. Por otra parte, en el déficit de (tabla 2).
PDH, la DC proporciona un sustrato energético alterna-
tivo que sortea la vía metabólica bloqueada, permitien- 2.3.  Eficacia de la dieta cetogénica
do la entrada de los cuerpos cetónicos en el ciclo de
Krebs. En un estudio con pacientes afectos de trastor- La mayoría de los estudios sobre los efectos de la DC
nos congénitos de la PDH, aquellos que iniciaron la DC son observacionales, pero muestran datos a favor de
más tempranamente en la vida o aquellos que fueron un efecto beneficioso10, 24, 25. El nivel de cetosis, produ-
sometidos a mayor restricción de glúcidos presentaron cido por la oxidación incompleta de grasas cuando se
mayor longevidad y mejor desarrollo mental20. reduce el aporte de glúcidos, parece jugar un papel
clave en la efectividad de esta dieta. En las series más
2.2.  Contraindicaciones de la dieta cetogénica recientes, alrededor de un 30% de pacientes las reduce
en más de un 90% o queda libre de ellas. El porcentaje
Patologías como la deficiencia de piruvato carboxila- de los pacientes que reducen más de un 50% el núme-
sa, el déficit de carnitina u otros trastornos del trans- ro de crisis oscila entre un 40% y un 50%6, 7, 9, 26. En un
porte o la oxidación de ácidos grasos son contraindica- metanálisis que incluía también estudios de cohortes,
ciones al uso de la DC, y la administración de una DC los pacientes con adherencia a la DC tenían 2,2 veces
en estos casos puede incluso llegar a ser fatal21. La prin- mayor probabilidad de conseguir más de un 50% de
cipal consecuencia de los trastornos de la oxidación de reducción de las crisis que los que abandonaron la die-
ácidos grasos es la incapacidad de los tejidos extrahe- ta27. En la última revisión Cochrane se identificaron un
páticos de utilizar ácidos grasos como fuente energéti- total de siete ensayos clínicos aleatorizados, reclutando
Tema 22.  Epilepsia. Dietas cetogénicas 367

Tabla 2.  Interacciones farmacológicas y dieta cetogénica.

Fármaco Acción Efecto


Fenobarbital Mayor penetrancia en el sistema nervioso Somnolencia
Eliminación retardada
Acetazolamida Inhibición de la anhidrasa carbónica Riesgo de acidosis
grave
Inhibición β-oxidación
Ácido valproico Déficit de carnitina
Conjugación con la carnitin acil-transferasa

un total de 427 niños y adolescentes, pero no adultos. nica clásica fue superior a la de la dieta Atkins modifica-
No fue posible realizar ningún metanálisis debido a la da (52% versus 34%, p = 0,036), mientras que el grado
heterogenicidad de los estudios. En la DC con ratio 4:1 de cumplimiento fue del 38% para la DC y 56% para la
las tasas comunicadas de pacientes que redujeron las dieta Atkins modificada, respectivamente32.
crisis ascendían hasta un 85% y las de aquellos que Los efectos beneficiosos de la dieta persisten en un
quedaron libres de crisis hasta un 55%2. En el mayor número significativo de pacientes a pesar de haberse
estudio aleatorizado con 145 niños participantes, parado la dieta, a la vez que la DC permite a menudo
comparando DC con un grupo control, se observó una disminuir o parar el uso de MAE en un 64-70% de pa-
disminución significativa del número de crisis en los cientes25, 33. De los pacientes que quedan totalmente
pacientes con DC respecto a los controles. El porcenta- libres de crisis, un 80% permanece libre de crisis tras la
je de niños que conseguía una reducción de más del suspensión de la dieta34. En una serie con seguimiento
50% en el número de crisis era también significativa- a 3-6 años, un 27% de los niños inicialmente tratados
mente mayor en el grupo con DC (28). Sin embargo, con DC tenía un control de las crisis superior al 90%,
en este estudio los datos de eficacia a los 3 meses arro- habiendo parado la dieta la mayoría de ellos. Por otra
jaban cifras mucho menores: 38% conseguían una re- parte, 30 (36%) de los 83 niños que siguieron la dieta
ducción de más del 50% de las crisis y un 7% una durante un año estaban sin medicación y 28 (34%) to-
reducción de más del 90%28. maban un solo fármaco. De los pacientes que habían
Aunque la mayoría de los expertos recomienda man- conseguido una reducción de las crisis superior al 90%,
tener la dieta al menos 3 meses, antes de considerar su el 41% estaban sin medicación y otro 29% tomaba
retirada por falta de eficacia11, datos recientes apuntan solo un fármaco33. Teniendo en cuenta que estas dietas
a que los efectos aparecen rápidamente cuando la die- se aplican a menudo cuando los pacientes no han res-
ta es efectiva, habiendo respondido el 75% de los ni- pondido a tres o más MAE, su perfil de eficacia es con-
ños en los primeros 15 días29. Por ello, períodos más siderable.
cortos pueden ser suficientes para valorar la eficacia de Conviene también señalar que el cumplimiento es-
la DC. En un estudio prospectivo que incluyó 87 niños tricto de esta dieta es difícil. El número de pacientes
que iniciaron DC, la mayoría de las respuestas se pro- que consiguen mantenerse con la dieta y completar el
dujeron al primer mes. A partir de los 3 meses, el nú- tratamiento es bastante bajo: entre 30-40%6, 9. En un
mero de pacientes respondedores a la dieta (supresión estudio prospectivo de 150 niños, el porcentaje de pa-
de más del 50% de las crisis), no mejoraba al alargar el cientes que seguían con la dieta fue de 83%, 71% y
tratamiento hasta los 6 meses. A juzgar por estos da- 55%, a los 3, 6 y 12 meses, respectivamente. La mayo-
tos, no merece la pena prolongar la DC más allá de los ría de abandonos fueron por eficacia insuficiente o por
3 meses si el paciente no ha respondido a ella30. mala tolerancia a una dieta tan restrictiva26.
Aunque la mayoría de los estudios están hechos en Por otra parte, la dieta no tiene un efecto sedante y
edad infantil, diversas publicaciones han demostrado los pacientes están más alerta21. En un estudio retros-
que, fuera de este margen de edad, también los adoles- pectivo de 58 casos tratados con DC, el 36% de los
centes7 y los adultos pueden beneficiarse de esta dieta. pacientes estaba más alerta y un 26% había mejorado
En adultos con epilepsia refractaria se han probado va- su comportamiento25. La reducción de la MAE y el con-
riantes menos restrictivas de la dieta (dieta Atkins modi- trol de las crisis en los pacientes que responden a la DC
ficada), con niveles de eficacia comparables (47% de pueden contribuir a este efecto. Sin embargo, convie-
pacientes con reducciones de más del 50% en el núme- ne tener en cuenta que la acidosis metabólica facilita el
ro de crisis). La pérdida de eficacia con el tiempo en este paso de fenobarbital a través de la barrera hematoen-
grupo de edad parece guardar relación con un bajo cefálica, a la vez que hace su eliminación renal más
cumplimiento de la dieta31. En un metanálisis de estu- lenta, por lo que se recomienda un ajuste de dosis al
dios realizados en adultos, la eficacia de la dieta cetogé- iniciar la DC35 (tabla 2).
368 BLOQUE: LÍPIDOS

2.4.  Características de la dieta cetogénica 2.4.1. Relación grasas a glúcidos más


proteínas
La dieta en su forma clásica consiste en un aporte
aproximado del 85-90% de las calorías en forma de gra- La relación grasas a glúcidos más proteínas (relación
sas, un 5-10% en forma de proteínas y un 3-5% en for- cetogénica) también se ha modificado en diferentes
ma de glúcidos. En algunos protocolos, el aporte calóri- versiones de dietas, describiéndose relaciones de 2:1
co acostumbra a estar por debajo de las recomendaciones hasta 4:1. Las relaciones más altas serían las más res-
para este grupo de edad (entre 80-90% de las calorías trictivas y, probablemente, las más efectivas. El porcen-
recomendadas); sin embargo, nunca se ha demostrado taje de grasas y la relación cetogénica puede aumen-
que ello sea beneficioso para los pacientes. La dieta tarse en caso de disminución de la cetosis y menor
debe aportar las proteínas necesarias para el crecimiento control de las crisis, a la vez que puede disminuirse en
(1 g de proteína/kg/día) (fig. 1). Se pueden utilizar pro- caso de intolerancia, dislipemia severa, déficit de creci-
ductos edulcorados con sacarina, pero hay que excluir miento o excesiva cetosis11.
aquellos edulcorantes que contengan alguna cantidad En un estudio aleatorizado se comparó la eficacia a
de glúcidos o polialcoholes en su composición. los 3 meses de dos relaciones cetogénicas. La relación
La ingesta de líquidos suele limitarse aproximada- 4:1 resultó ser más eficaz que la 3:1, aunque la tole-
mente a un mililitro por caloría (60-70 ml/kg/día), en rancia a la 3:1 fue mejor. En una fase abierta del estu-
niños, pero no existe ninguna explicación científica que dio, aquellos niños que quedaron libres de crisis con la
demuestre el efecto antiepiléptico de la deshidrata- 4:1, la eficacia se mantenía al cambiar a la 3:1; mien-
ción. Si bien el consumo de líquidos puede diluir la tras que los niños con la 3:1 que continuaban con cri-
orina, no por ello disminuye la cantidad de cuerpos sis, mejoraban al cambiar a la 4:136. En otro estudio
cetónicos en la sangre. De hecho, varios autores no li- aleatorizado en abierto comparando dos relaciones
mitan su aporte, ya que no ha sido demostrado un cetogénicas distintas (4:1 versus 2,5:1) no se encontra-
mayor efecto sobre el control de las crisis y aumentan ron diferencias en la eficacia sobre el control de las cri-
los efectos colaterales de la DC35. Los expertos reco- sis. Sin embargo, la ausencia de diferencias podría ser
miendan liberar su consumo en situaciones de riesgo debida al pequeño tamaño de los grupos, dado que en
aumentado de deshidratación (actividad elevada, cua- el estudio no se calculó el tamaño muestral. A pesar de
dro febril, exposición a calor, edad infantil) y conside- estas limitaciones, la búsqueda de dietas con mejor to-
ran una densidad urinaria inferior a 1.015 como índice lerabilidad y un espectro de eficacia similar es una área
de un buen estado de hidratación11. de interés37.

Dieta cetogénica con una razón G/HC+P de 4:1


Grasas HC+P
1 unidad dieta 4 g 1g
Calorías 36 kcal 4 kcal = 40 kcal totales
% calórico 90 % 10 %

Cálculo para un niño de 18 kg:


18 kg x 75 kcal/kg/día = 1.350 kcal/día
90 % G = 1.215 kcal → 1.215 kcal/9 kcal/g = 135 g Grasas

}
1.350 kcal
10 % HC+P = 135 kcal
135 – 72 = 63 kcal
P: 1 g/kg/día x 18 kg = 18 g Proteínas
→ 18 g x 4 kcal/g = 72 kcal
   63 kcal/4 kcal/g = 15 g Glúcidos

Reparto en 3 comidas:
Grasas Proteínas Glúcidos
Desayuno 45 6 5
Comida 45 6 5
Cena 45 6 5

Figura 1.  Cálculo para una dieta cetogénica.


Tema 22.  Epilepsia. Dietas cetogénicas 369

2.4.2.  Composición lipídica mina, calcio, fósforo, función renal, perfil hepático,
ionograma, equilibrio ácido-básico venoso y beta-
El tipo de grasas aportadas es un factor que genera
hidroxibutirato. Deben controlarse los niveles de carni-
lógico interés, dado su potencial para alterar el perfil
tina cada 6 meses, sobre todo si no se suplementa re-
lipídico. En un estudio aleatorizado hecho con sujetos
gularmente, y conviene hacer un control electrocardio-
sanos, se compararon dos tipos de dietas cetogénicas
gráfico una vez al año. Es también aconsejable
(70% de grasa): una dieta rica en grasas poliinsatura-
determinar niveles de selenio en sangre si la dieta se
das con otra rica en saturadas. A los 5 días, la dieta rica
mantiene en el tiempo.
en poliinsaturadas indujo mayor nivel de cetosis que la
En la práctica clínica se ha observado que una trans-
dieta rica en saturadas, mientras esta última produjo
gresión con glúcidos induce un aumento de crisis, por
aumentos significativos en los niveles de colesterol to-
lo que es importante el control habitual de cetonurias
tal y LDL, que no se observaron en la primera. Sin em-
(varias veces por semana), aunque no son tan fiables
bargo, la dieta rica en grasas poliinsaturadas dio lugar
como la medición de cuerpos cetónicos en sangre para
a una mayor incidencia de náuseas38.
valorar el nivel de cetonemia conseguido con la dieta.
El objetivo principal es mantener unas cetonurias
2.4.3. Suplementación máximas (160 mg/dl) y una concentración plasmática
La dieta, al limitar el aporte de frutas, vegetales y ali- de beta-hidroxibutirato entre 2-4 mmol/l35.
mentos ricos en calcio, es deficitaria en vitaminas (prin- Es importante también valorar los excipientes de los
cipalmente del grupo B) y en algunos minerales (calcio y medicamentos que toma el paciente, ya que muchos
fósforo). Para evitar carencias, se aconseja suplementar de ellos llevan almidón o lactosa. Estos ingredientes
la dieta con un preparado multivitamínico con minerales inactivos no siempre están bien identificados y pueden
y elementos traza, y un preparado de calcio con vitami- influir en la efectividad de la dieta, por lo que su con-
na D. Debido a que el fósforo no se incluye en la mayoría tenido debe ser verificado35. Especial atención debe
de los preparados, debería considerarse su suplementa- prestarse a los medicamentos genéricos, en los que los
ción por separado para optimizar la mineralización cambios de excipiente son frecuentes. Cualquier medi-
ósea39. Algunos autores recomiendan suplementos adi- cación recetada debe estar exenta de azúcares y deriva-
cionales (ácido fólico, selenio, zinc, hierro, magnesio), dos como glucosa, sacarosa, lactosa, galactosa, malto-
pero no hay evidencia de que aporten un beneficio extra sa, fructosa, almidones y dextrinas y también sorbitol o
al multivitamínico estándar3, 6, 11. Algunos protocolos in- manitol. Si el aporte total de azúcares o derivados ex-
corporan de forma rutinaria la suplementación con car- cede el 10% de los glúcidos aportados por la dieta en
nitina (50-100 mg/kg/día)6, sin que haya una evidencia un día, la cantidad en exceso debería descontarse del
clara para su uso empírico. La mayoría de los expertos cómputo total de glúcidos de la dieta41. El uso de la
recomienda iniciar suplementación con carnitina solo MAE concomitante también puede variar la eficacia de
cuando los niveles son bajos o aparecen síntomas suges- la DC. En un estudio retrospectivo en 71 niños con epi-
tivos de déficit, a pesar de que estos últimos (fatiga, de- lepsia refractaria que iniciaron DC, se observó que la
bilidad muscular) son altamente inespecíficos11. eficacia de esta era significativamente menor en aque-
llos niños tratados con lamotrigina42.
2.4.4. Controles
2.4.5. Duración del tratamiento con una dieta
Los objetivos de la DC son conseguir un adecuado
cetogénica
nivel de cetosis para el control de las crisis, a la vez que
procurar un buen desarrollo pondoestatural y evitar La dieta se mantiene mientras es beneficiosa. De forma
complicaciones, siendo necesario un estricto control típica, se prolonga 1 o 2 años si resulta exitosa. Se inter-
ambulatorio durante su realización. Se recomienda el rumpe antes si es inefectiva después de 3 meses de pru-
ingreso hospitalario en los primeros días de instaura- eba, o si resulta demasiado restrictiva para el paciente.
ción de la DC. La retirada de la dieta también es paulatina, proce-
Durante los primeros días de ayuno son más fre- diéndose a un ajuste durante meses, siguiendo un pa-
cuentes las hipoglucemias, por lo que es necesario rea- trón similar a la retirada de la MAE. De forma gradual
lizar control de glucemia cada 4 a 6 horas para detec- se reduce la relación cetogénica de 4:1 a 3:1 y a 2:1, a
tarlas. Conviene destacar que el nivel de glucemia no la vez que se van relajando medidas restrictivas de pe-
parece guardar ninguna relación con la eficacia de la sada de los alimentos y control de las raciones. Si los
dieta40. También es importante valorar diariamente el síntomas empeoran, la DC puede volver a la forma pre-
peso, el estado de hidratación y la tolerancia, estable- viamente efectiva11. Una vez las cetonurias son negati-
ciendo los ajustes necesarios en función de estos. vas, pueden reintroducirse alimentos ricos en glúcidos.
En el seguimiento al alta se controla mensualmente Conviene tener en cuenta que en un 20% de los pa-
el peso y la talla. Cada tres meses se hace control ana- cientes que quedaron totalmente libres de crisis, estas
lítico con hemograma, perfil lipídico, proteínas, albú- recurren al suspender la dieta, respondiendo la mayo-
370 BLOQUE: LÍPIDOS

ría a DC o MAE34. En un análisis retrospectivo compa- Tabla 3.  Variantes de dietas cetogénicas.
rando la velocidad de interrupción de la dieta (inme-
diata, rápida o lenta), no se encontraron diferencias Tipos de dietas cetogénicas
entre las diversas modalidades. Sin embargo, la asigna- · Clásica
ción a cada uno de los grupos se había hecho a criterio · Dieta TCM
médico, por lo que los grupos no eran comparables en · Dieta Atkins modificada
términos de duración y eficacia de la dieta43. · Preparados comerciales
· Otros: dieta de bajo índice glucémico
2.5.  Tipos y variantes de la dieta cetogénica Variaciones introducidas en la dieta
La forma clásica de la DC ha sido el referente en el
tratamiento dietético de la epilepsia refractaria durante · Relación cetogénica
mucho tiempo, sin embargo, a lo largo de los años han · Tipo de grasas
ido apareciendo diversas variantes orientadas a mejo- · Con o sin ayuno previo
rar la tolerabilidad a la dieta (tabla 3). · Inicio gradual (progresión calórica)

2.5.1.  Forma clásica


En su forma clásica, la dieta cetogénica tiene un re- Tabla 4.  Protocolo de dieta cetogénica gradual con
parto calórico muy enriquecido en lípidos, con una re- ayuno.
lación de 4 a 1 entre grasas y glúcidos más proteínas.
El aporte proteico se sitúa alrededor de 1 g/kg/día y el · Bajo consumo de glúcidos por
Día previo
de glúcidos entre 5 a 10 g/día. El protocolo clásico 24 horas
al ingreso
descrito por el Johns Hopkins Hospital requiere un in- · Se inicia el ayuno por la noche
greso de 5 días e incluye un período de 24 a 48 horas
· Continúa el ayuno
de ayuno seguido por una introducción paulatina de Día 1
· Restricción de fluidos a 60-75 ml/kg
alimentos con alto contenido en grasa3 (tabla 4).
Aunque de forma más anecdótica, hay comunicados · Cena: una tercera parte de la dieta
en la literatura casos de DC administrada mediante nu- Día 2 calculada en forma de yema de huevo
trición parenteral, como alternativa a la nutrición ente- batida
ral cuando hay intolerancia digestiva44, 45. · Desayuno y comida: una tercera parte
de la dieta
2.5.2.  Modificación del aporte calórico inicial Día 3
· Cena: aumenta a 2/3 partes (aún
Hay evidencias de que el ayuno inicial no es necesa- yema de huevo)
rio para la eficacia de la dieta a largo plazo. En un es- · Desayuno y comida: dos terceras
tudio se comparó una dieta cetogénica sin ayuno Día 4 partes del aporte correspondiente
(DCSA) con controles históricos utilizando el protocolo · Cena: aporte completo
con ayuno previo. La DCSA se implementó dando 1/3
de las calorías estimadas el primer día, 2/3 el segundo Día 5 · Dieta cetogénica completa
día y el total de las calorías requeridas al tercer día. No
Modificado de Kossoff EH. More fat and fewer seizures: dietary
se encontraron diferencias en el tiempo en conseguir therapies for epilepsy. The Lancet Neurology 2004; 3: 415-20.
cetonurias ni en la incidencia de hipoglucemias entre
los dos grupos. El perfil de eficacia fue similar: 34,1%
de los pacientes con DCSA estuvieron sin crisis al me- El aporte calórico total al inicio de una DC también ha
nos 3 meses, comparado con el 34,9% de los controles sido estudiado. Un estudio retrospectivo comparó el cam-
históricos. Sin embargo, la incidencia de deshidrata- bio de un protocolo de DGSA a uno con una dieta al ini-
ción moderada fue significativamente menor en el gru- cio según el objetivo calórico establecido, sin observarse
po DCSA (12,2%) respecto al grupo tratado con ayuno diferencias respecto a la eficacia entre protocolos47.
(62,7%). Por otra parte, la estancia hospitalaria del
grupo tratado con DCSA fue menor5. 2.5.3. Dieta cetogénica a base de triglicéridos de
En un estudio aleatorizado se comparó una dieta cadena media
gradual sin ayuno (DGSA) que progresaba día a día la
relación cetogénica de 1:1 a 2:1, 3:1 y finalmente a La mayoría de las dietas cetogénicas están basadas
4:1, con una DC 4:1 con ayuno previo (DCA). Aunque en un elevado aporte de grasas saturadas en forma de
la DCA parecía aportar una mejoría más rápida de las triglicéridos de cadena larga. Como fuente alternativa
crisis, ambas dietas mostraron un nivel comparable de de grasas, los triglicéridos de cadena media (TCM) tie-
eficacia a los 3 meses46. nen un mayor potencial cetogénico al no depender de
Tema 22.  Epilepsia. Dietas cetogénicas 371

la carnitina para su oxidación. La DC a base de TCM, 10 g de glúcidos fue más eficaz que el grupo con 20 g,
inicialmente descrita por Huttenlocher48 en 1971, fue no encontrándose diferencias al final del estudio (des-
ideada en un intento de proporcionar mayor flexibili- pués del período cruzado)53. Otro estudio aleatorizado
dad respecto a los glúcidos y mejorar la palatabilidad, comparó el tratamiento con DAM conjuntamente con
con un perfil de eficacia similar. Este mismo autor de- antiepilépticos versus únicamente antiepilépticos. Des-
mostró que la efectividad de la dieta dependía del nivel pués de 3 meses de intervención, el grupo con DAM
de cetosis conseguido49. disminuyó la frecuencia de crisis epilépticas de manera
En el único ensayo clínico aleatorizado hasta la fe- significativa, respecto al control54. El más recien­te de
cha, se comparó la eficacia de una DC clásica versus los estudios aleatorizados realizados comparó la DC
una versión de la DC a base de TCM. Después de 3, 6 y clásica con la DAM. Aunque el grupo con DC presenta-
12 meses de tratamiento no hubo diferencias en el nú- ba una frecuencia menor de crisis epilépticas a los 3 y
mero de crisis epilépticas entre ambos grupos50. 6 meses de tratamiento respecto a la frecuencia basal,
En la forma clásica, los TCM aportan el 60% de la las diferencias entre grupos no fueron significativas.
energía. A pesar de ser una dieta de mejor sabor, el Por contra, en los menores de 2 años la frecuencia de
perfil de tolerancia digestiva es peor, siendo la diarrea crisis en el grupo con DC sí que fue significativamente
y la hinchazón abdominal quejas frecuentes. En la for- menor comparado con la DAM55.
ma modificada de la dieta, los TCM aportan un 30% de
la energía23. En la práctica, empezar la dieta con un 2.5.5.  Preparados comerciales
aporte de TCM intermedio (40-50% de la energía) pue-
Está descrito el uso de leche cetogénica líquida como
de representar un punto de equilibrio entre una buena
complemento a la dieta o bien de forma exclusiva9.
tolerancia digestiva y un nivel aceptable de cetosis.
También existen en el mercado fórmulas comerciales
Posteriormente, el aporte de TCM puede ajustarse al
con diferentes razones cetogénicas (3:1 y 4:1). Las fór-
alza o a la baja en función de la tolerancia y la eficacia
mulas líquidas se recomiendan para niños en edad in-
cetogénica11.
fantil que aún no han hecho la transición a comidas
El uso de dietas a base de TCM, al contrario de la DC
sólidas o en pacientes con secuelas neurológicas que
clásica, se ha relacionado con cambios favorables en el
reciben nutrición enteral56, aunque también se pueden
perfil lipídico. En un estudio no aleatorizado compa-
utilizar como módulos en pacientes adultos en trata­
rando la forma clásica de la dieta con la dieta TCM, se
miento con DC.
observó un aumento del colesterol total y LDL a los
Hasta la fecha, un único estudio aleatorizado ha va-
4 meses en los pacientes tratados con la dieta clásica,
lorado la eficacia de un preparado comercial conjunta-
mientras que aquellos tratados con la dieta TCM mos-
mente a una dieta Atkins modificada versus la misma
traron un aumento del colesterol HDL y disminución
dieta únicamente. En este estudio, el grupo suplemen-
del colesterol LDL y de la relación colesterol total a co-
tado presentó mejoras significativas en la disminución
lesterol HDL51.
de la frecuencia de crisis epilépticas, aunque no se en-
contraron diferencias en la severidad de las mismas57.
2.5.4.  La dieta Atkins modificada
Para un número importante de pacientes, la DC re- 2.5.6.  Dieta de bajo índice glucémico
sulta demasiado restrictiva y de difícil cumplimiento. Se Una alternativa menos restrictiva a la DC o la DAM
ha sugerido el uso de la dieta Atkins modificada (DAM) es la propuesta por una dieta basada en alimentos
como alternativa para aquellos que no toleran una die- de bajo índice glucémico. En este caso, solo se per-
ta cetogénica convencional52. La dieta Atkins es una mite el consumo de alimentos con un índice glucé-
dieta restrictiva en glúcidos creada originalmente para mico inferior a 50 y entre 40-60 g/día de glúcidos.
el tratamiento del sobrepeso y la obesidad. La relación Se ha comunicado mejoría en la frecuencia de
cetogénica de la DAM empleada habitualmente es 1:1 crisis en una serie limitada de casos. Sin embargo,
o 2:1 y las calorías quedan repartidas en un 60% de el aumento de dosis de MAE en algunos pacientes
grasas, 30% de proteínas y 10% de glúcidos. Así, la durante el período de estudio hace estos resultados
ingesta de glúcidos está limitada a 10 g/día en edades difícilmente interpretables58.
comprendidas entre 2 y 12 años, a 15 g/día en adoles-
centes y 20 g/día en adultos. No restringe las calorías ni
las proteínas, por lo que tiene mejor tolerabilidad.
2.6. Complicaciones
En los últimos años, diversos estudios aleatorizados Aunque la mayoría de las complicaciones mejoran
han comparado la eficacia de la DAM. El primero de con tratamiento conservador y no requieren el cese de
estos estudios, con un diseño aleatorizado y cruzado, la dieta, la aparición de complicaciones o intolerancia
utilizó una dieta Atkins modificada en el que se com- han sido causa de suspensión de la dieta durante los
pararon dos aportes diferentes de glúcidos. Después primeros 6 meses de instauración para un 29-38 % de
de 3 meses de intervención se observó que el inicio con pacientes según las series6-9.
372 BLOQUE: LÍPIDOS

2.6.1.  Complicaciones metabólicas 1 g/kg/día, no se observaron diferencias significativas


en las cifras de proteínas y albúmina a los 6 meses de
La deshidratación, descrita como una pérdida de la dieta, encontrándose estas dentro de los rangos de
peso superior al 5%, disminución de la turgencia cutá- normalidad60. Sin embargo, está descrita la aparición
nea, sequedad de mucosas y aumento en la densidad de hipoproteinemia en un 5,4% de niños durante las
urinaria (superior a 1.020), es la complicación aguda primeras semanas de seguimiento, mejorando el cua-
más frecuente, sobre todo en los protocolos que usan dro al aumentar el aporte proteico a 1,5 g/kg/día6.
ayuno inicial, a pesar de recibir sueroterapia de mante-
La incidencia de déficit secundario de carnitina fue
nimiento. Está descrita una incidencia del 46,5%, de los
baja (1,6%), aunque los datos provienen de una serie
cuales el 86% había seguido el protocolo con ayuno
en que la mayoría de los niños había recibido suple-
inicial6. Como se ha señalado anteriormente, omitiendo
mentación con carnitina (66 mg/kg/día) de forma ruti-
el periodo de ayuno inicial se puede prevenir la deshi-
naria6. En un estudio prospectivo, el 19% de los pa-
dratación en la mayoría de los pacientes sin diferencias
cientes tuvo que ser suplementado por niveles bajos de
en el tiempo de cetosis ni la eficacia de la dieta5.
carnitina, aunque ninguno de ellos presentó signos
La hipoglucemia transitoria es a menudo una com- clínicos de déficit. Los niveles de carnitina al inicio de la
plicación de la DC, tanto si hay ayuno inicial como no. dieta se correlacionaron negativamente con el número
La mayoría no son sintomáticas y se recuperan espon- de fármacos anticonvulsivantes que recibía el pacien-
táneamente. Las sintomáticas (7%) se recuperan con te61. Especial atención debe prestarse a la carnitina si el
éxito administrando un poco de zumo de fruta paciente recibe tratamiento con ácido valproico, dado
(30 ml)6. Una hipoglucemia grave y prolongada pue- que se ha descrito deficiencia de carnitina asociada a
de ser una complicación de enfermedades metabóli- este fármaco41 (tabla 2).
cas que conviene descartar antes de iniciar una DC21. Probablemente debido a que el uso de preparados
La hiperuricemia aparece con frecuencia (26,4%). multivitamínicos es universal, no hay descripciones de
También se han descrito hipomagnesemia (4,7%) e deficiencias de vitaminas con el uso de DC. Sin embar-
hiponatremia (4,7%). go, los suplementos vitamínicos habituales pueden
Los trastornos en los lípidos plasmáticos son fre- contener cantidades insuficientes de selenio y otros
cuentes. Hay descrita la aparición de hipercolestero- elementos traza. En un estudio, realizado a partir de
lemia e hipertrigliceridemia en un 32% y 36%, res- un caso de miocardiopatía por déficit de selenio, se
pectivamente. De estos, aproximadamente un 70% describe una incidencia de niveles bajos de selenio en
mejoraba espontáneamente6. En un estudio prospecti- un 20% de los pacientes en tratamiento con DC, aun-
vo, la incidencia de dislipemia fue mucho mayor: 61% que ninguno de ellos presentó signos clínicos ni eco-
presentaron hipercolesterolemia, 53% los niveles de cardiográficos de cardiopatía62. Sin embargo, en la lite-
colesterol-LDL elevados (siendo estrictamente norma- ratura reciente hay reportados dos casos de muerte
les solo en un 28%), niveles de colesterol-HDL bajo o súbita en pacientes con déficit de selenio63.
límite bajo en un 16% y 33%, respectivamente, e hi-
pertrigliceridemia en un 65% de niños en edad infantil
2.6.3.  Efectos sobre el desarrollo
y en un 27% de niños mayores. Los valores medios de
colesterol total, colesterol-LDL y triglicéridos superaban La pérdida de peso aparece de forma frecuente du-
el percentil 95 a los 6 meses del inicio de la dieta. A los rante el seguimiento de una DC51. Se ha descrito que
12-24 meses los niveles de lípidos plasmáticos habían el 64,4% de los pacientes está en un percentil bajo de
mejorado, aunque continuaban siendo superiores a las peso. La posibilidad de retraso del crecimiento con el
cifras basales8. uso prolongado de la dieta en niños genera lógica
Un estudio prospectivo posterior investigó el efecto preocupación, por lo que debe vigilarse de cerca la
de la DC sobre la función vascular y los parámetros bio- evolución pondoestatural de todos los niños tratados
químicos después de 12 y 24 meses de tratamiento con con DC. En un estudio a 6 meses, los pacientes se
DC. Tras 12 meses de tratamiento se observó una dismi- mantuvieron en su percentil de peso y talla60. Otros
nución gradual en la distensibilidad de la carótida, ade- estudios con seguimientos a 12 y 24 meses han mos-
más de un incremento en los valores de colesterol-LDL y trado disminuciones de las puntuaciones Z para peso
apoB. Estas alteraciones iniciales de la función arterial y y talla durante el tratamiento64, 65. En uno de los estu-
los lípidos plasmáticos retornaron gradualmente hacia dios se observó que al año de abandonar la DC, las
valores basales, no observándose diferencias después puntuaciones Z para la altura y el peso se recuperaron
de 24 meses de tratamiento con DC59. de manera significativa65.
En un estudio valorando la evolución del gasto ener-
2.6.2.  Complicaciones nutricionales gético en reposo y el crecimiento en niños con DC en
comparación con niños sanos, se observó tras 15 me-
En un estudio retrospectivo en 26 niños tratados ses de tratamiento una disminución en el crecimiento
con DC con una relación 4:1 y un aporte proteico de lineal en aquellos tratados con DC, aunque no se ob-
Tema 22.  Epilepsia. Dietas cetogénicas 373

servaron cambios en el peso ni el gasto energético en municados en la literatura dos casos de muerte súbita
reposo66. en pacientes que realizaban DC. Ambos casos presen-
Aun así, según un estudio retrospectivo el retraso en taban prolongación del intervalo QT y déficit de sele-
el crecimiento podría guardar relación con el aporte nio, uno de ellos con miocardiopatía asociada63. La
proteico. En este estudio, que incluía niños tratados suplementación con calcio y selenio se estudió en 27
con DC durante al menos 6 meses, una proporción niños tratados con DC y, durante al menos 6 meses, no
proteína:energía inferior o igual a 1,4 g proteína/100 se observaron cambios significativos en el QT corregi-
kcal, incluso cuando la ingesta calórica y proteica era do. Además, ninguno de los individuos desarrolló pro-
adecuada, se asoció a un crecimiento lineal deficiente. longación del intervalo QT, ni cambios en el segmento
Así pues, los autores recomiendan una proporción pro- ST o arritmias70.
teína:energía de 1,5 g proteína/100 kcal como preven-
ción del retraso en el crecimiento67. 2.6.7.  Otras complicaciones
Dado que los pacientes tratados con DC están en un
2.6.4.  Complicaciones digestivas
estado crónico de acidosis, hay riesgo de desminerali-
Las alteraciones gastrointestinales son también fre- zación ósea. Por este motivo se aconseja la suplemen-
cuentes. La diarrea es la más común (32,6%). Las náu- tación rutinaria con calcio y vitamina D. La osteopenia
seas y vómitos (27,9%) se han relacionado con un ini- aparece a más largo plazo en un 14,7% de los pacien-
cio brusco de la dieta y el grado de cetosis. En un tes. También se ha descrito litiasis renal entre 3,1-6,7%
estudio con 35 pacientes en el que se practicó fibro- de los pacientes, por lo que se recomienda aumentar
gastroscopia antes del inicio de la DC, se observó una de forma preventiva la ingesta de líquidos, dado que
alta incidencia (57%) de hallazgos patológicos (gastri- no disminuye la eficacia de la dieta6. En un estudio res-
tis, duodenitis y esofagitis, por orden de frecuencia). trospectivo, el uso de citrato potásico se asoció a una
Estas lesiones se asociaban significativamente al uso de prevalencia de litiasis renal 3 veces menor71. Aunque el
esteroides y polifarmacia68. En mucha menor frecuen- uso empírico de citratos es razonable, su eficacia en la
cia también se ha descrito la constipación (2,3%), atri- prevención de litiasis renal no ha sido contrastada en
buible a una escasa ingesta de fibra dietética. A desta- ensayos controlados.
car que a partir de las 4 semanas un 27,9% de los
pacientes sigue con molestias gastrointestinales. 3.  Resumen y conclusiones
La hepatitis en las primeras semanas de tratamiento
es una complicación poco frecuente (2,3%). Aunque A pesar del volumen de experiencia acumulado con
muy infrecuentemente, hay descritos casos aislados de el uso de la DC, solo en los últimos años han aparecido
pancreatitis6. ensayos clínicos aleatorizados que demostraran su efi-
cacia. De hecho, su eficacia es potencialmente mayor
que los anticonvulsivantes convencionales en niños
2.6.5.  Complicaciones infecciosas con epilepsia intratable y constituyen una buena alter-
De entre las complicaciones infecciosas, cabe desta- nativa terapéutica en estos casos.
car, por su gravedad, la neumonía lipoidea por aspira- Se recomienda un período de prueba de unos 3 me-
ción. Conviene recordar que una dieta rica en grasas ses antes de valorar su eficacia, aunque la mayoría de
enlentece el vaciado gástrico y, de producirse una crisis los casos acostumbran a experimentar mejoría en las
comicial, existe un elevado riesgo de broncoaspira- primeras 2 semanas. De ser eficaz, la DC se prolonga
ción6. habitualmente durante 1 a 2 años, procediéndose des-
pués a la retirada paulatina de la dieta. Por otra parte,
en un porcentaje importante de casos, el uso de la DC
2.6.6.  Complicaciones cardíacas
ha permitido la reducción o la supresión de la medica-
Aunque es una complicación rara, en la literatura ción anticonvulsivante. Conviene recordar que la bue-
hay descritos casos de miocardiopatía en relación con na adherencia a la dieta determina en gran parte su
el déficit de selenio62, normalizándose al suplementar efectividad.
con selenio y parar la dieta. En un estudio realizado en La restricción calórica y el control del consumo de lí-
una población de 20 niños con DC, se observaron tras- quidos no parecen aportar ventajas en la DC. Igual-
tornos del ritmo en forma de prolongación del interva- mente, la fase de ayuno inicial en la DC no es un deter-
lo QT en 3 de ellos (15%), con una duración media de minante para la eficacia de la dieta y, en cambio,
la dieta de 13 ± 8 meses. Uno de los pacientes presen- aumenta la frecuencia de efectos secundarios relacio-
tó además un cuadro de miocardiopatía dilatada con nados con la deshidratación. Para las variantes de la
niveles de selenio normales. Tanto la prolongación del dieta, aquellas que al inicio son más restrictivas en el
intervalo QT como la miocardiopatía se resolvieron al aporte de glúcidos, parecen dar lugar a mejorías más
pararse la dieta69. Como ya se ha mencionado, hay co- rápidas, sin encontrarse diferencias a largo plazo. El
374 BLOQUE: LÍPIDOS

tipo de lípidos aportados en la dieta puede modificar et al. Optimal clinical management of children re-
sustancialmente los efectos sobre el perfil lipídico, aun- ceiving the ketogenic diet: recommendations of
que también puede afectar su palatabilidad y acepta- the International Ketogenic Diet Study Group. Epi-
ción. lepsia. 2009 Feb;50(2):304-17.
Durante la instauración de la dieta es muy importan- 12. Nam SH, Lee BL, Lee CG, Yu HJ, Joo EY, Lee J, et al.
te una estrecha vigilancia de la glucemia y del estado The role of ketogenic diet in the treatment of re-
de hidratación. Durante el seguimiento debe controlar- fractory status epilepticus. Epilepsia. 2011 No-
se la evolución pondoestatural y vigilar la aparición de v;52(11):e181-4.
complicaciones. Es importante además la suplementa- 13. O’Connor SE, Ream MA, Richardson C, Mikati MA,
ción con vitaminas y minerales para cubrir sus requeri- Trescher WH, Byler DL, et al. The ketogenic diet for
mientos. Aunque muy raramente se ha descrito mio- the treatment of pediatric status epilepticus. Pe-
cardiopatía por déficit de selenio, esta puede ser una diatr Neurol. 2014 Jan;50(1):101-3.
complicación potencialmente fatal, por lo que debe 14. Thakur KT, Probasco JC, Hocker SE, Roehl K, Henry
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intractable epilepsy. Neurology. 2005 Dec Jun;30(6):416-9.
13;65(11):1810-2. 69. Best TH, Franz DN, Gilbert DL, Nelson DP, Epstein
59. Kapetanakis M, Liuba P, Odermarsky M, Lund- MR. Cardiac complications in pediatric patients on
gren J, Hallböök T. Effects of ketogenic diet on the ketogenic diet. Neurology. 2000 Jun
vascular function. Eur J Paediatr Neurol. 2014 27;54(12):2328-30.
Jul;18(4):489-94. 70. Sharma S, Gulati S. The ketogenic diet and the QT
60. Couch SC, Schwarzman F, Carroll J, Koenigsberger interval. J Clin Neurosci. 2012 Jan;19(1):181–2.
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ketogenic diet. J Am Diet Assoc. 1999 factors and prevention. J Child Neurol. 2007
Dec;99(12):1573-5. Apr;22(4):375-8.
BLOQUE:
METABOLISMO
(Dr. Alejandro Sanz París
y Dra. María Julia Ocón Bretón)
TEMA 23. Metabolismo hidrosalino. Dieta controlada en sodio. Dieta controlada
en potasio. Dieta hipertensión arterial.
Dres. Amaya Barragán Angulo, María Luisa Gracia Ruiz y Vicente Blay Cortés

TEMA 24. Metabolismo fosfocálcico y del magnesio. Osteoporosis. Dieta controlada


en calcio, fósforo y magnesio.
Dres. Ana Isabel Ilundain González, María Julia Ocón Bretón, José Antonio
Gimeno Orna y Jordi Pons Dolset

TEMA 25. Anemia y hemocromatosis. Dieta controlada en hierro.


Dr. Diego Álvarez Ballano

TEMA 26. Enfermedad de Wilson. Dieta controlada en cobre.


Dres. Alejandro Sanz París, Diana Boj Carceller, Beatriz Lardies Sánchez e Isabel
Azcona Monreal

TEMA 27. Nefrolitiasis. Dietas controladas en purinas.


Dres. María Julia Ocón Bretón, Ana Isabel Ilundain González, Ana Belén
Mañas Martínez y Ana Agudo Tabuenca
Tema 23.
Metabolismo hidrosalino. Dieta controlada en sodio.
Dieta controlada en potasio. Dieta hipertensión arterial
Amaya Barragán Angulo
Médico Adjunto de Endocrinología y Nutrición. Unidad de Endocrinología y Nutrición.
Hospital San Jorge. Huesca

María Luisa Gracia Ruiz


Médico Adjunto de Endocrinología y Nutrición. Servicio de Endocrinología y Nutrición.
Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza

Vicente Blay Cortés


Jefe de Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital General de la Defensa. Zaragoza

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 379-393.

1.  Dieta controlada en sodio


2.  Dietas controladas en potasio
3.  Dieta en la hipertensión arterial
4. Resumen
5. Bibliografía

1.  Dieta controlada en sodio •  Dieta hiposódica amplia es la que contiene 40-
90 mEq/día.
1.1. Introducción •  Dieta hiposódica moderada cuando contiene
El sodio es un mineral que se encuentra en los ali- 22-40 mEq/día.
mentos o bien en el cloruro sódico (sal común) que •  Dieta hiposódica estricta es la que no sobrepa-
añadimos a los alimentos durante su preparación o sa los 22 mEq/día.
bien en la mesa.
Las recomendaciones en cuanto al consumo de so- 1.2. Indicaciones
dio y sal diarios son muy variables según las culturas y
los países; por ejemplo, la Organización Mundial de la 1.2.1.  Insuficiencia cardiaca congestiva (ICC)
Salud recomienda un consumo de sodio < 2 g/día y de
sal < 5 g/día, las guías americanas y canadienses reco- Una de las manifestaciones clínicas de esta enferme-
miendan 1,5 g/día de sodio y 3,8 g/día de sal1, y son dad son los edemas. La diuresis disminuye y contiene
mucho mayores las recomendaciones de países asiáti- bajas concentraciones de sodio. Con la restricción dieté-
cos como Corea2 (2 g/día de sodio y 5 g/día de sal) y tica de sodio se reduce el espacio extracelular y se mejo-
Japón3 (6 g/día de sal). ran la función cardiaca y la excreción renal de agua. La
El contenido de sodio de una dieta europea se estima restricción de sodio a aplicar en la dieta dependerá de:
alrededor de los 200 mEq/día (4,6 g/día) y el consumo la gravedad, la velocidad de instauración (aguda o cró-
diario de sal de los adultos americanos es un tercio ma- nica) y la respuesta al tratamiento farmacológico.
yor a lo recomendado en las guías americanas4. Aunque no hay evidencias estrictas sobre qué canti-
Se puede realizar una clasificación de la dieta según dad de sodio recomendar en pacientes con ICC5, si la
su contenido en sodio: ICC es leve se pueden mejorar los síntomas simplemen-
te reduciendo la ingesta de sodio a unos 2-3 g/día6, 7.
•  La dieta a la cual no añadimos sal contiene alrede- En los casos más graves, la restricción debe ser más
dor de 90-150 mEq/día. estricta, hasta 22 mEq/día (506 mg/día). Restricciones

379
380 BLOQUE: METABOLISMO

de 1,5 g/día de sodio se han asociado a descenso de 1.2.5.  Edema cíclico idiopático
marcadores pronósticos como el BNP, y gran mejoría Este síndrome, que se produce de forma casi exclusiva
en la calidad de vida de pacientes con ICC y tratamien- en mujeres, se caracteriza por episodios periódicos de
to farmacológico óptimo8. edema (sin relación con el ciclo menstrual) que con fre-
En fases avanzadas, los pacientes que son incapaces cuencia se acompaña de distensión abdominal. Se produ-
de excretar una sobrecarga hídrica pueden desarrollar cen alteraciones diurnas del peso, con retención ortostá-
una hiponatremia por dilución (a veces provocada por tica de sodio y agua, de forma que puede que el paciente
un exceso de hormona antidiurética). En estos casos, pese varios kilos más tras haber permanecido de pie
además de sodio, hay que reducir la ingestión de agua. durante unas pocas horas. Tales cambios sugieren un
aumento en la permeabilidad capilar que parece fluctuar
1.2.2.  Cirrosis hepática en intensidad y se agrava en ambientes calurosos.
La ascitis representa una situación de exceso corpo- Su tratamiento comprende la reducción de la inges-
ral total de sodio y agua. Se produce una retención tión de sal, entre otros factores (reposo, medias elásti-
inadecuada de líquido dentro del lecho vascular esplác- cas, etc.). La utilización de diuréticos debe realizarse
nico debido a la hipertensión portal. El riñón detecta con precaución, ya que su interrupción puede dar lu-
la aparente disminución del volumen intravascular y gar, de forma paradójica, al empeoramiento de los ede-
responde (reteniendo sal y agua). Existen otros factores mas, y su uso continuado no parece mejorar el cuadro.
que colaboran a la acumulación de líquidos en la cavi-
1.3. Características de la dieta controlada
dad abdominal:
en sodio
•  Aumento del estímulo simpático central. El sodio es aportado en la dieta por tres fuentes: la sal
•  Hipoalbuminemia y disminución de la presión on- añadida al cocinar o aliñar, el sodio contenido en los ali-
cótica del plasma. mentos y el agua que consumimos. La principal fuente de
•  Factores renales: aumento de la reabsorción renal sodio de la dieta europea es la sal de mesa. Sin embar-
de sodio por aumento de la actividad de renina go, las necesidades de sal son muy reducidas. Una canti-
plasmática y el consiguiente hiperaldosteronismo dad de sodio razonable en la dieta es de 2 g diarios, lo
secundario9. que equivale a la cantidad de sodio de una cucharilla de
té. Pero lo que habitualmente se consume en una dieta
El aspecto más importante del tratamiento de la asci- normal son unos 9 g de sal, y en algunas zonas el consu-
tis es la restricción de sal10,11. Una dieta con 800 mg/día mo supera incluso los 20 g de sal al día.
(2 g de cloruro sódico), suele ser adecuada para inducir Además, el sodio se utiliza en infinidad de alimentos
un balance negativo de sodio y facilitar la diuresis12. como conservante por ejemplo, los alimentos enlatados,
Solo en casos excepcionales se llegará a una restricción embutidos y precocinados llevan sodio para su conser-
menor de 22 mEq/día (506 mg de sodio). vación.
Desde hace años existe una controversia acerca de los
1.2.3.  Enfermedad renal beneficios de una reducción de sodio en la dieta. Uno de
los estudios más influyentes fue el estudio INTERSALT17.
La mayoría de los pacientes con alteración de la fun- Los resultados demuestran que disminuir el consumo de
ción renal, sin importar la etiología de esta alteración, sodio a 6 g, que en España es reducir el consumo de sal
mantienen un volumen de agua y sodio total del orga- a la mitad, reduciría la presión sistólica en unos 2 mmHg.
nismo aumentado. Los edemas producidos en estas en- Respecto a los sustitutos de la sal, existen tres cla-
fermedades están muy asociados a la hipertensión arte- ses diferentes:
rial (HTA). La restricción dietética de sodio parece 1. Sales dietéticas: cloruros y fosfatos de otras sales
esencial en el control de la HTA13, lo que secundariamen- como amonio, magnesio, etc. Contraindicados
te reduce la proteinuria14. Si avanza el fallo renal, ade- en afecciones renales y hepáticas.
más se evitarán los alimentos ricos en fosfato y potasio. 2. Sales modificadas: combinan la tercera parte de
sodio con dos terceras de potasio. Su uso es efi-
1.2.4.  Hipertensión arterial esencial caz si se consume con moderación.
Este tema será más ampliamente tratado al final de 3. Pseudosales dietéticas: son las sales de apio, ajo,
este capítulo. cebolla, hierbas, No recomendadas por contener
Está aceptado que la alta ingesta de sodio en la dieta sodio del vegetal más cloruro de sodio agregado.
se asocia con mayores niveles de tensión arterial (PA) y Es importante leer el etiquetado de los alimentos, ya
un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, como que pueden contener sodio en forma de: bicarbonato,
muestran las distintas revisiones sistemáticas15,16, las fosfato de disodio, glutamato de monosodio, alginato
recomendaciones, por tanto, son las de reducir la in- de sodio, hidróxido de sodio, propinato de sodio, sulfi-
gesta de este elemento. to de sodio, etc.
Tema 23.  Metabolismo hidrosalino. Dieta controlada en sodio. Dieta controlada en potasio… 381

Actualmente existen en el mercado infinidad de pro- Al final del capítulo mostramos unas tablas con los
ductos con bajo contenido en sal, por ello es necesario grupos de alimentos clasificados en aconsejados o
educar al paciente que precisa seguir una dieta estricta desaconsejados para su consumo en pacientes que
en sodio a leer el etiquetado de los productos. precisan una dieta controlada en sodio (tablas 1 y 2),
así como ejemplos de dietas hiposódicas moderada
•  Sin sal/sin sodio: menos de 5 mg por ración. (tabla 3) y estricta (tabla 4).
•  Muy bajo en sodio: 35 mg o menos de sodio por Para conseguir una estimación rápida del conte-
ración. nido de sodio nos basaremos en estos valores (para
•  Bajo en sodio: 140 mg o menos de sodio por ración. comidas que se preparan sin sal y/o productos ba-
•  Reducido en sodio: 25% menos de sodio que la jos en sodio o cuyo contenido en sodio ha sido re-
versión del alimento con sal. ducido):
•  «Light en sodio»: 50% menos que la versión del
alimento con sal. •  Leche/productos lácteos: 80 mg sodio por
•  Sin sal añadida: no se ha añadido sal durante el taza.
procesamiento del alimento. •  Panes y cereales: 80 mg sodio por ½ taza.
•  Carne (limpia): 25 mg sodio por onza (1 onza =
Respecto al contenido de sodio de los propios ali- 28 g).
mentos, los más ricos son los de origen animal (carne, •  Verduras: 15 mg sodio por ½ taza.
huevos y lácteos), y los alimentos precocinados. Las bebi- •  Frutas: pequeñas cantidades de sodio.
das gaseosas contienen sodio como conservante, las cla-
sificadas como dietéticas contienen sacarina sódica y/o El agua que bebemos también puede contener
ciclamato sódico, por ello debe limitarse su consumo. cantidades importantes de sodio. El 10% del sodio

Tabla 1.  Alimentos desaconsejados ante una dieta hiposódica amplia.

· Carnes saladas o ahumadas como beicon, tocino, salchichas,


butifarra, patés, sobrasada, morcilla
Carnes · Charcutería en general
· Precocinados: croquetas, canelones, pizza, lasaña, empanadas.
· Extractos de carne y pollo
· Salados o ahumados: salmón y bacalao
· Conservas: atún, sardinas, anchoas
Pescados · Precocinados y congelados: palitos de pescado, empanadas y
rebozados
· Extractos de pescado
Lácteos · Quesos curados de toda clase, mantequilla salada
· Pan y biscotes con sal, levadura, polvo para flanes, ganchitos
· Cereales integrales, copos de maíz tostados
Cereales
· Patatas fritas, snacks
Pastelería tubérculos
· Precocinados y congelados a base de cereales: pizza
· Pastelería industrial o panadería, galletas, repostería
· Conservas, zumos de verduras y hortalizas envasados
Verduras
· Precocinados o congeladas listas para freír
Hortalizas
· Extractos de verduras
· Aceitunas
Frutas · Frutos secos salados: almendras, avellanas, cacahuetes,
Frutos secos semillas de girasol, maíz frito, etc.
· Mantequilla de cacahuete
· Agua mineral con gas
· Salsas preparadas, sopas de sobre, alimentos cocinados
enlatados
Varios
· Bicarbonato de sodio, alimentos que contienen glutamato
monosódico
· Salsas comerciales, mayonesa, kétchup
382 BLOQUE: METABOLISMO

Tabla 2.  Alimentos permitidos en una dieta hiposódica amplia.

· Todo tipo de carnes magras, frescas o congeladas


Carnes · Pollo, pavo y pato
· Vísceras, huevos
Pescados · Pescados frescos o congelados
· Leche
· Quesos frescos naturales, quesos desnatados
Lácteos
· Derivados lácteos
· Nata, postres de chocolate y nata, mousse, natillas, flan y helados, cuajada, requesón, arroz con leche.
· Pan y biscotes sin sal
Cereales · Harinas, sémolas, pastas alimenticias, cereales
· Repostería casera sin adición de sal durante su preparación
Verduras · Frescas o congeladas
Frutas · Todas, incluidas las frutas en conserva
· Almendra tostada, castaña, avellana, pistachos, piñones sin cáscara
Frutos
· Ciruelas secas, higos secos con azúcar
secos
· Uva, pasa, coco desecado, dátil seco, melocotón seco
· Agua poco mineralizada
Varios · Zumos naturales, leche de almendras
· Encurtidos como aperitivo

Tabla 3.  Ejemplo de dieta hiposódica moderada para Tabla 4.  Ejemplo de una dieta hiposódica estricta
una persona de 70 años y 70 kg. para un aduto de 70 kg de peso.

· 1 vaso de leche semidesnatada con · 200 cc de leche


azúcar (2 c/p) · 25 g de pan sin sal
Desayuno
Desayuno · 300 ml de zumo de naranja · 20 g de mantequilla
· 40 g de pan sin sal · 20 g de azúcar
· 30 g de queso fresco · Sopa de arroz (80 g cocido con 10 g
Media aceite)
· 1 yogur de sabores Comida · 100 g de pollo asado
mañana
· 200 g de ensalada con 10 g de aceite
· Puré de verduras (200 g de verduras · 1 manzana asada
con 100 g de patata y 50 g de leche)
· 100 cc de café con 20 g de azúcar
· 150 g de albóndigas con 100 g de
Merienda · 25 g de pan de molde sin sal con 30 g
Comida guisantes
de mermelada
· 1 manzana
· 40 g de pan sin sal · 200 g de judías verdes cocidas
· 20 g de aceite · Croquetas de pescado (50 g de pescado,
Cena
50 g de harina, 100 cc de leche)
· 1 vaso de leche semidesnatada o · 50 g de requesón
yogur
Merienda
· 40 g de pan sin sal con mermelada
(3 c/p)
· Sopa con 30 g de pasta ingerido proviene del agua consumida. Existen
· 200 g verduras + tortilla de 1 huevo aguas hiposódicas con un contenido en sodio de
· 20 g de membrillo con 30 g de queso menos de 20 mg/l. Los pacientes con dieta hiposódi-
Cena ca estricta deben consumir agua con una cantidad
fresco
· 20 g de pan sin sal de sodio inferior a 50 mg/l.
· 1 c/s de aceite Es importante conocer que algunos medicamen-
tos contienen importantes cantidades de sodio.
Tema 23.  Metabolismo hidrosalino. Dieta controlada en sodio. Dieta controlada en potasio… 383

1.4. Recomendaciones para seguir una dieta reabsorción del litio, con los peligros de intoxica-
hiposódica ción que esto puede conllevar.
4.  Trastornos del sueño: La dieta hiposódica produce
Para hacer más sabrosa la cocina «sin sal» es reco- aumento de los niveles plasmáticos de noradrena-
mendable potenciar el sabor con preparaciones como: lina19, y esto ocasiona alteraciones del sueño.

•  Cociendo los alimentos al vapor, la cocción con Las contraindicaciones del establecimiento de una
agua diluye el sabor de los alimentos. dieta hiposódica son:
•  También en «papillote» (envuelto el alimento
en papel de horno), estofados y guisados a la a. Pacientes con insuficiencia renal sin edemas e HTA.
plancha. b. Tratamiento de los edemas del embarazo o de la
•  Utilizando potenciadores del sabor como: ácidos preeclampsia.
(vinagre y limón), especias y hierbas aromáticas, c. Pacientes con enfermedad de Addison tras adre-
ajo, cebolla, puerros, etc. nalectomía.
•  Utilizando aceite con sabor como el de oliva. El d. Pacientes con enfermedad de Addison que están
vinagre y el aceite pueden ser aromatizados con sufriendo estrés por enfermedad y precisan apor-
finas hierbas, estragón, ajo, etc. tes extras de sodio.
•  Existen en el mercado sal de régimen y productos
dietéticos que pueden utilizarse sin abusar. Si la 2.  Dietas controladas en potasio
dieta ha de ser restringida en potasio, se ha de
evitar el uso de estos productos, ya que suelen El potasio tiene un papel importante en la excitabili-
contener potasio en su composición. dad del nervio y del músculo, en el metabolismo celular
•  Se pueden consumir bebidas alcohólicas con mo- y en otros procesos fisiológicos20.
deración, en caso de no prohibición facultativa. Su concentración plasmática normal es de 3,5-5 mmol/l,
•  Evitar alimentos ricos en sodio. mientras que en el interior de las células es de unos
•  Evitar añadir sal a los alimentos durante su prepa- 150 mmol/l. La relación entre la concentración de pota-
ración o consumo. sio en el líquido intracelular y el extracelular es normal-
mente de 38:1. Su concentración en el plasma es deter-
minante y pequeños cambios pueden tener efectos
1.5.  Efectos adversos y contraindicaciones
adversos significativos, particularmente en el potencial
Existe mucha controversia sobre el beneficio de las de membrana del miocardio y musculoesquelético.
dietas bajas en sodio, de hecho, hay estudios que La entrada de potasio, al igual que la entrada de so-
proponen una horquilla saludable de consumo entre dio, depende completamente del contenido de potasio
2,6-4,9 g/día, por los efectos prejudiciales tanto de de los alimentos y del agua de la ingesta21. La dieta
consumo muy bajo como excesivo18. promedio de los norteamericanos adultos contiene
Como posibles efectos adversos del seguimiento de entre 50 y 100 mmol de potasio por día, pero en las
una dieta hiposódica tenemos: hiponatremia, aumen- personas cuyas dietas contengan grandes cantida-
to de la excreción renal de calcio, toxicidad al trata- des de frutos ricos en potasio y de vegetales ricos en él,
miento con litio y trastornos del sueño. la entrada del ion puede aumentar por encima de
500 mmol/día. En el otro extremo, la entrada de pota-
1. Hiponatremia: Los pacientes con alteración de la sio puede estar limitada por el ayuno o la enfermedad
función renal o en tratamiento con diuréticos son a menos de 10 mmol/día.
los que corren mayor riesgo de presentar esta El 90% del potasio de la dieta se absorbe en el apa-
complicación, ya que carecen de los mecanismos rato digestivo. El transporte se realiza por un mecanis-
homeostáticos renales de compensación. mo de difusión gracias al gradiente que se establece
2. Aumento de la calciuria: La disminución del con- entre el potasio de la luz intestinal y el sanguíneo. Por
sumo de sodio puede asociarse a un aumento de ello, en situaciones de grandes pérdidas de líquidos
la excreción renal de calcio, y con ello aumenta el por cuadros diarreicos de origen ileocólico, existe peli-
riesgo de nefrolitiasis. gro de hipopotasemia22.
3. Toxicidad al tratamiento con litio: El litio se excre- La salida del potasio puede seguir tres rutas:
ta en un 95% por el riñón. El 70% de este fárma-
co se reabsorbe en el túbulo proximal junto con el •  Sudor: Excepto en condiciones extremas, la canti-
sodio; por lo tanto, cambios en el balance del dad de potasio que se pierde en el sudor es des-
sodio afectan a la reabsorción del litio. Con un preciable.
balance negativo de sodio se produce un aumen- •  Heces: La pérdida fecal es de 5 a 10 mmol/día so-
to compensatorio de su reabsorción en el túbulo lamente, pero en casos de diarrea puede exceder
proximal, que se acompaña de un aumento de la los 100 mmol/día.
384 BLOQUE: METABOLISMO

•  Orina: Es la vía principal de regulación fisiológica dieta pobre en proteínas, les deberemos desaconsejar el
del potasio. El promedio es cercano a 45-90 consumo frecuente de verduras, frutas, leche y derivados
mmol/día (el 90% de lo consumido en un día23). lácteos por su alto contenido en ­potasio.
Los pacientes que son tratados con hemodiálisis tie-
El potasio se ha definido como uno de los cuatro nen un riesgo muy alto de hiperpotasemia en los perío-
nutrientes deficitarios en la dieta americana24. Las reco- dos entre las sesiones de diálisis, y por eso se recomien-
mendaciones más aceptadas son la americana, con dan que sigan una dieta con una importante restricción
una ingesta de 4,7 g/día25, y la de la OMS, con 3,15 g/ de potasio (1 mEq/kg de peso ideal al día)29.
día26, pero la ingesta de potasio en la dieta es muy va- Los pacientes en diálisis peritoneal continua tienen
riable según de qué país hablemos; por ejemplo, en un riesgo bajo de hiperpotasemia debido a que si-
España es de 4,87 g/día y en China de 1,8 g/día27, 28. guen una terapia constante. En ellos también se reco-
mienda una ingesta controlada con una cantidad de
2.1.  Dietas restringidas en potasio potasio diaria entre 70 y 80 mEq/día. La dieta con alto
contenido en potasio está relacionada con un aumen-
Las dietas controladas en potasio son aquellas que to de mortalidad en los pacientes renales30.
contienen una cantidad de potasio inferior a la normal.
La diferencia en la ingesta de potasio de las distintas 2.2. Asistencia nutricional en la insuficiencia
poblaciones se explica por el distinto consumo de fru- renal aguda (IRA)
tas y verduras.
Este tipo de dietas con restricción en el contenido de La IRA se caracteriza por una reducción súbita en la
potasio se usan para corregir la hiperpotasemia, que es tasa de filtración glomerular (glomerular filtration rate,
la situación en la que el potasio en plasma es superior a GFR), y una alteración en la capacidad del riñón para
5,5 mEq/ml. excretar la producción de residuos metabólicos.
Las aplicaciones principales de este tipo de dietas La asistencia nutricional a la IRA es muy importante en
restrictivas en potasio son: virtud de que el afectado no solo tiene uremia, acidosis
metabólica y desequilibrio hidroelectrolítico, sino tam-
•  Insuficiencia renal aguda o crónica o alteración de bién suele sufrir estrés fisiológico que aumenta la nece-
los túbulos renales. sidad de proteína. En la tabla 5 presentamos un resu-
•  Salida masiva del potasio intracelular: acidosis men de las recomendaciones nutricionales en la IRA.
metabólica, daño tisular. El medio primario de la eliminación de potasio durante
•  Ingesta excesiva de potasio en la dieta. la IRA es la diálisis. El control de los niveles de potasio en
suero entre las sesiones de diálisis se basa principalmente
En la insuficiencia renal crónica (IRC) existe una en infusiones intravenosas de glucosa, insulina y bicarbo-
limitación a la excreción renal de potasio, que habitual- nato, todos los cuales sirven para impulsar el potasio ha-
mente no se hace patente hasta las últimas fases de la cia las células. Se pueden utilizar resinas que intercam-
enfermedad. A veces la elevación del potasio se ve in- bian potasio por sodio en el tubo digestivo, para tratar la
crementada por el uso de diuréticos ahorradores de hipercaliemia, pero no son del todo ideales.
potasio.
Siempre es necesario hacer una encuesta dietética para
2.3. Asistencia nutricional en la insuficiencia
descartar la ingesta excesiva de potasio en la dieta como renal crónica
causa de la hiperpotasemia, ya que muchos de estos pa- El tipo de dieta en la insuficiencia renal crónica es
cientes sustituyen la sal por compuestos de cloruro potá- muy importante, tanto en las fases previas a la diálisis
sico. A estos pacientes que habitualmente siguen una como una vez iniciada, y en todos los casos debe ga-

Tabla 5.  Resumen de recomendaciones nutricionales en la insuficiencia renal aguda.

Nutrientes Cantidades
Proteínas 0,8-1 g/kg de peso ideal, que aumenta al normalizarse el filtrado glomerular
Energía 30-40 kcal/kg de peso corporal
Potasio 30-50 mEq/día en fase oligúrica, reemplazar las pérdidas en fase diurética
Sodio 20-40 mEq/día en fase oligúrica, reponer pérdidas en fase diurética
Líquido Reponer gasto diario más 500 ml.
Fósforo Limitar según se requiera
Tema 23.  Metabolismo hidrosalino. Dieta controlada en sodio. Dieta controlada en potasio… 385

rantizar un estado nutricional adecuado. La ingesta Recomendaciones básicas en pacientes en diálisis31:


excesiva aumentará la toxicidad urémica y favorecerá la
hiperfosforemia, empeorando la enfermedad ósea re- •  Proteínas: 1,2-1,4 g/kg/día.
nal y los picores. Por el contrario, una ingesta insufi- •  Fósforo: < 800 mg/día.
ciente conlleva pérdida de masa muscular, hipoprotei- •  Potasio: < 3 g/día.
nemia (sobre todo a expensas de la albúmina), que se •  Sal: < 2,5 g/día.
asocia a una mayor morbimortalidad, y trastornos del
sistema inmunitario, que favorecen el desarrollo de 2.5.  Cómo confeccionar un menú (tabla 6)
procesos infecciosos y/o tumorales.
El control del potasio debe procurarse incluso antes •  E vitar el consumo de alimentos integrales debido
de que la hipercaliemia se instaure en el fallo renal ter- a su elevado contenido en potasio y fósforo.
minal. La ingesta normal en la dieta habitual, que osci- •  E n caso de hipercaliemia se excluyen de la dieta
la alrededor de 80 mg/día, debe reducirse y sobre todo las verduras, frutas frescas y legumbres con mayor
cuando los niveles séricos alcanzan el límite superior de contenido en potasio.
normalidad (5 mmol/l). En este momento la ingesta •  L os alimentos congelados tienen menos potasio.
dietética debe quedar en 50 mg/día. Cuando el fallo •  M ucho cuidado con las sales de régimen, ya que
renal es prácticamente terminal, la restricción debe re- generalmente son cloruro potásico.
ducirse aún más, pudiendo quedar en 30-40 mg/día. •  E l sodio es soluble en agua, por eso los alimentos
sometidos a remojo, además de perder potasio,
2.4.  Asistencia nutricional en la diálisis también pierden sodio.
•  E l fósforo se encuentra sobre todo en alimentos
Los pacientes en diálisis tienen alterado el metabolis- proteicos, pero los quelantes de este elemento
mo energético celular y, con frecuencia, presentan un permiten no tener que realizar una restricción
balance negativo. Por tanto, si realizan trabajos inten- muy estricta.
sos, están por debajo de su peso ideal o en situaciones •  E l consumo proteico deberá ser disminuido a fa-
de mayor estrés catabólico requerirán un aporte supe- vor del hidrocarbonado complejo.
rior, llegando a alcanzar las 40-45 kcal/kg/día. Las calo- •  R estringir el consumo de líquidos si existe reten-
rías se obtienen de los hidratos de carbono y grasas. ción o edemas.

Tabla 6.  Ejemplo de dieta restringida en potasio (1900 mg potasio).

· 125 g leche entera con calcio


· 30 g de galletas María
Desayuno
· 12 g mantequilla
· 25 g de mermelada
Media mañana · 150 g de pera
· 50 g de lechuga
Ensalada mixta · 75 g de tomate
· 25 g de cebolla
Comida · 50 g de lentejas
Lentejas con arroz · 20 g de arroz blanco
· 15 g de cebolla
Postre · 125 g de yogur bío natural
· 30 g de pan blanco sin sal
Merienda · 30 g de dulce de membrillo
· 30 g de queso de Burgos sin sal
Sopa de fideos · 20 g de fideos
· 60 g de huevos
Cena Revuelto de ajetes
· 25 g ajos frescos
Postre · 150 g piña en almíbar
Recena Opcional
386 BLOQUE: METABOLISMO

2.6.  Dietas con alto contenido de potasio Es conocido que la modificación de los hábitos de
vida puede ayudar a controlar o prevenir la HTA y otros
Se denomina dieta rica en potasio a la que aporta al
factores de riesgo CV. Los que han demostrado reducir
menos 100-175 mEq de potasio al día (3900-6825 mg).
la presión arterial son:
Este tipo de dietas solamente se utilizan para manejo y
prevención de la hipopotasemia (< 3,5 mEq/l). Las si- •  Disminución de peso.
tuaciones que cursan con riesgo de altas pérdidas de •  Reducción del consumo de alcohol.
potasio son: uso de diuréticos, tratamiento con corti- •  Reducción de la ingesta de sodio a menos de 6 g
coides, uso de laxantes, vómitos y diarreas, desnutri- al día.
ción y ayuno, hiperaldosteronismo primario o enferme- •  Ejercicio aeróbico y e isotónico, moderado en in-
dad de Cushing. Al aumentar el contenido de potasio tensidad y frecuente.
en la dieta se consigue aumentar la natriuresis, por •  Dieta en hipertensión: DASH (dietary approaches
tanto, mejor control de la HTA32, 33. to stop hypertension).
Una forma de enriquecer la dieta con potasio es la uti-
lización de sustitutos de la sal como el cloruro potásico, La supresión del tabaco es además una medida co-
que aportan aproximadamente 10-13 mEq de potasio/g. adyuvante esencial para disminuir el riesgo CV, ya que
Las sales potásicas alcalinas previenen la excreción urina- fumar cigarrillos tiene un efecto vasopresor agudo que
ria de calcio34 y la resorción ósea secundaria a una alta puede aumentar la PA diurna44.
ingesta de cloruro sódico en la dieta35. Además, los ali- Si la incidencia de HTA se puede reducir con estos
mentos más ricos en potasio son frutas y verduras frescas. cambios del estilo de vida, también la morbimortalidad
Actualmente se considera que una alta ingesta de asociada de enfermedad coronaria, renal y cerebro­
potasio juega un papel protector en enfermedades vascular puede prevenirse con dichas modificaciones45.
como la HTA, infarto de miocardio y otras disfunciones Entre todos, por su especial relevancia, se estudia a
cardiacas, hipercalciuria, cálculos renales y osteoporo- continuación la influencia de los nutrientes más impor-
sis36-38. De hecho, no solo se aconseja una dieta con tantes de la dieta sobre el desarrollo de HTA.
contenido en potasio óptimo en los casos anterior-
mente citados, sino también para un adecuado meta- 3.1.  Cambio del estilo de vida
bolismo hidrosalino, metabolismo de los hidratos de
carbono y balance energético. 3.1.1.  Peso corporal
El riesgo de desarrollar HTA es entre dos y seis veces
3.  Dieta en la hipertensión arterial más alto en individuos con sobrepeso que en personas
con peso normal46. En el estudio Framingham, se ob-
La HTA se define como una PAS ≥ a 140 mmHg o una
servó que la prevalencia de HTA en obesos es el doble
PAD ≥ a 90 mmHg, y este criterio no se ha modificado
que en normopeso, y un aumento en el peso relativo
desde las guías previas de 2003, 2007 o 201339. Se
del 10% predijo un incremento de la PA de 7 mmHg.
utiliza la misma clasificación para jóvenes, adultos de
Se recomienda el mantenimiento de un peso corporal
mediana edad y ancianos, mientras que se adoptan
saludable (IMC alrededor de 25) y una adecuada circun-
otros criterios basados en percentiles, para niños y
ferencia de cintura (< 102 cm los varones y < 88 cm las
adolescentes, ya que no se dispone de datos de estu-
mujeres) a los sujetos no hipertensos para prevenir la
dios de intervención en estos grupos de edad40.
HTA y a los pacientes hipertensos para reducir la PA.
En el 90% de los casos la HTA es primaria (HTA esen-
Pero hay que señalar que, según dos grandes metanáli-
cial), y en menos de un 10% es secundaria a patologías
sis de estudios observacionales prospectivos de población,
renales, cardiovasculares (CV) o del sistema endocrino.
no se puede establecer con claridad el IMC óptimo. En la
En términos generales, la prevalencia de la HTA se sitúa
Prospective Studies Collaboration se llegó a la conclusión
alrededor de un 30-45% de la población general, con un
de que la mortalidad fue inferior con un IMC 22,5-2547.
marcado aumento en edades más avanzadas. Uno de
Incluso con reducciones limitadas de peso se consi-
cada 4 americanos sufre HTA, especialmente frecuente en
gue un beneficio evidente en las cifras de PA, lo que
afroamericanos, quienes la desarrollan en una forma más
puede llevar a reducir e incluso prescindir del trata-
temprana y más frecuente que los caucásicos41, 42.
miento farmacológico de la PA48, 49.
Durante mucho tiempo, las guías de HTA se centra-
ban en los valores de PA como única variable. Pero ya
en 1994, las sociedades europeas de Cardiología, HTA 3.1.2. Alcohol
y Ateroesclerosis (ESC, ESH y EAS) desarrollaron una El 5-7% de la HTA se debe al consumo de alcohol50.
serie de recomendaciones sobre prevención de la en- Se debe aconsejar a los hipertensos que reduzcan el
fermedad coronaria, poniendo especial énfasis en el consumo de alcohol a un máximo diario de 20-30 g de
cálculo del riesgo CV total. Este enfoque se ha acepta- etanol los varones y 10-20 g las mujeres. El consumo
do generalmente en las ediciones de 2003, 2007 y semanal total de alcohol no debe exceder los 140 g los
2013. Entre otros métodos está el sistema SCORE43. varones y 80 g las mujeres.
Tema 23.  Metabolismo hidrosalino. Dieta controlada en sodio. Dieta controlada en potasio… 387

El estudio PATHS (Prevention and Treatment of 3.2.  Plan de alimentación. ¿DASH?


Hypertension Study) investigó los efectos de la reduc-
ción del consumo de alcohol en la PA. El grupo de Según el National High Blood Pressure Education
intervención obtuvo una reducción de la PA 1,2/0,7 Program58, la modificación de cuatro factores optimiza
mmHg mayor que el grupo de control al cabo de la eficacia de la prevención primaria y el control de la
6 meses51. HTA: sobrepeso, consumo de sal, consumo de alcohol
y sedentarismo.
Los Trial of Hypertension Prevention59 y los estudios
3.1.3. Sedentarismo
DASH60 demostraron que las intervenciones nutriciona-
Se aconsejará a los pacientes hipertensos que prac- les evitaban la HTA o reducían la PA en individuos con
tiquen al menos 30 minutos de ejercicio físico aeróbi- presiones normales altas.
co dinámico de intensidad moderada (caminar, co- Recientemente dos estudios han demostrado que se
rrer, montar en bicicleta o nadar) 5-7 días a la pueden disminuir las cifras de presión arterial siguien-
semana52. Un ejercicio físico moderado en intensidad do un determinado plan de alimentación y disminu-
y regular es una medida esencial para la prevención yendo la cantidad de sodio consumido. Esta dieta se
primaria de la HTA53, 54. denomina DASH-plan de alimentación, del inglés die-
El ejercicio aeróbico a intervalos también reduce la tary approaches to stop hypertension.
PA55. El impacto en la PA de otras formas de ejercicio, Los científicos del Instituto Nacional de Corazón, Pul-
como la resistencia isométrica (desarrollo de fuerza món y Sangre de EEUU (National Heart, Lung and
muscular sin movimiento) y la resistencia dinámica Blood Institute, NHLBI) llevaron a cabo dos estudios.
(desarrollo de fuerza muscular con movimiento) se ha El primero fue el llamado ESTUDIO «DASH», que
revisado recientemente56, 57. El ejercicio dinámico de demostró que los niveles de PA disminuían con una
resistencia se siguió de una significativa reducción de dieta baja en grasas saturadas, colesterol y contenido
la PA, así como de mejoras en los parámetros meta- total de grasa, y que enfatizaba la ingesta de frutas,
bólicos; se puede recomendar la práctica de ejercicios verduras y lácteos con bajo contenido en grasas (des-
de resistencia 2-3 días a la semana. No se recomien- natados o semidesnatados). Es una dieta especialmen-
dan los ejercicios isométricos debido a que solo se te rica en magnesio, calcio y potasio, así como en pro-
dispone de datos de unos pocos estudios. teinas y fibra (tabla 7).

Tabla 7.  La dieta DASH (Appel LJ, et al. A clinical trial of the effects of dietary patterns on blood pressure.
N Engl J Med 336;1117, 1997).

Grupo de Porciones
Equivalencias Ejemplos Importancia
alimentos diarias
· 1 rebanada pan
Pan de trigo entero, cereales, Fuentes de energía
Cereales 7-8 · ½ taza cereal seco
sémola, harina de avena y fibra
· ½ taza arroz, pasta o cereal
· 1 taza verdura cruda Tomates, papas, zanahorias,
Potasio, magnesio
Verduras 4-5 · ½ taza verdura cocida col, calabaza, espinaca,
y fibra
· 180 ml caldo alcachofa
· 180 ml zumo
· 1 fruta mediana Plátanos, naranjas, dátiles,
Potasio, fibra y
Frutas 4-5 · ¼ taza fruta seca melones, uva, mangos,
magnesio
· ¼ taza fruta fresca, congelada duraznos, piña, fresas
o enlatada
· 240 ml leche
Leche descremada, yogur sin
Lácteos 2-3 · 1 yogur Calcio y proteínas
grasa, queso sin grasa
· 42 g queso
Carnes, Carnes magras, eliminar grasa
· 84 g carne cocida Proteínas y
aves y ≤2 visible, asar, hornear o hervir,
· Aves de corral o pescado magnesio
pescados retirar la piel del pollo
Legumbres · 42 g o 1/3 taza o 2 cucharadas Almendras, avellanas, nueces, Fuentes de energía,
y frutos 1-2 · Semillas cacahuetes, semillas de magnesio, potasio,
secos · ½ taza legumbres cocidas girasol, habas, lentejas proteína y fibra
388 BLOQUE: METABOLISMO

En el estudio DASH se incluyeron a 459 adultos (27% En 1988 se publicó el estudio INTERSALT63, en el cual
diagnosticados de HTA), y se compararon tres tipos de se observó una correlación clara entre ingesta de sodio
dieta distintos, que contenían unos 3 000 mg de sodio y PA sistólica y diastólica. Se concluyó que un consumo
al día: diario de sodio de 6 g (100 mmol), conseguiría una
reducción en la PAS de 2,2 mmHg y de 1 mmHg en la
•  Dieta similar a la americana. PAD. Aparentemente parece un resultado escaso, pero
•  Dieta similar a la americana, pero más ricas en fru- supone una reducción de la mortalidad coronaria del
tas y verduras. 4% y de la mortalidad por ictus del 6%.
•  Plan de alimentación «DASH». En diversos estudios de intervención se investigó el
efecto de la restricción de la sal en la dieta, tanto en pa-
Los resultados fueron espectaculares, la dieta cientes normotensos como en hipertensos. Los resultados
«DASH» y la rica en frutas y verduras consiguieron dis- obtenidos fueron similares a los del estudio Intersalt, y
minuir los niveles de PA. Pero fue el plan de alimenta- aunque la intervención en la dieta consiguió solo efectos
ción «DASH» el que consiguió los mejores resultados, modestos, fueron mayores en hipertensos que en normo-
especialmente en los sujetos hipertensos. Otro hallaz- tensos. Estudios recientes han demostrado cómo aumen-
go reseñable fue que los resultados comenzaron a tos o descensos de la ingesta de sodio producen cambios
hacerse patentes tras solo 2 semanas del inicio de la en los niveles de sodio en plasma, lo que a su vez produce
dieta. cambios en el volumen extracelular y este en la presión
La dieta DASH no está diseñada para la pérdida de arterial. Cambios del sodio plasmático producen de for-
peso, a pesar de ser una dieta baja en calorías, rica en ma directa cambios en la presión arterial.
frutas y verduras. Pero se pueden disminuir las calorías Actualmente se conoce el papel del ion cloruro en la
sustituyendo alimentos calóricos por más frutas y ver- elevación de la PA, lo que explica que no es única la
duras. influencia del sodio en la HTA, sino la presencia con-
El segundo estudio fue el ESTUDIO «DASH-so- junta del cloruro en el cloruro sódico o sal común.
dio»61, que se basó en reducir el sodio de consumo No toda persona reacciona al consumo de sal con
diario en las tres dietas anteriores, y observar el efecto un aumento en la PA (HTA resistente a la sal). Las
que producía en los niveles de PA. Incluyó a 412 suje- personas sensibles a la sal sufren una reducción de
tos (41% hipertensos), que se asignaron de forma alea- 10 mmHg en la PA cuando siguen una dieta baja en
torizada a cada plan de dieta y posteriormente siguie- sal. Aproximadamente el 30-50% de los pacientes hi-
ron durante un mes cada uno de los niveles de sodio pertensos y del 15 al 25% de los normotensos son
que se establecieron: sensibles a la sal.
Se recomienda controlar el consumo de sal en la die-
•  3300 mg/día (el consumo de la mayoría de la po- ta y que este no sea superior a 6 g al día, y así conse-
blación americana). guir una reducción importante de la morbilidad y mor-
•  2400 mg/día. talidad cardiovascular.
•  1500 mg/día.
3.3.2. Potasio
Los resultados demostraron que la reducción de so-
A diferencia del sodio, la ingesta de potasio ha dis-
dio en la dieta disminuye la PA en cualquier dieta. En
minuido en los países industrializados. La dieta tradi-
cualquier nivel de sodio la mayor reducción se consi-
cional aporta 150-290 mmol/día. Sin embargo, en la
guió con la dieta DASH, y por supuesto el mejor resul-
actualidad la población ingiere 30-70 mmol/día. Existe
tado total se consiguió con el plan de alimentación
evidencia científica de estudios poblacionales y de in-
DASH y la ingesta de solo 1500 mg de sodio al día.
tervención que sugieren una asociación inversa entre la
ingesta de potasio en la dieta y las cifras de PA.
3.3. Nutrientes esenciales e hipertensión El efecto hipotensor del potasio depende de la canti-
arterial dad de sodio ingerido. Concretamente, el electrolito es
más efectivo en disminuir la PA en individuos con in-
3.3.1. Sodio gestas elevadas de sodio, en pacientes hipertensos y en
Stamler en 1992 publicó que la prevalencia de HTA individuos de raza afroamericana. Además, el efecto
en las sociedades primitivas era llamativamente baja, y hipotensor de reducir la ingesta de sal es más potente
además no existía aumento de la PA con la edad, lo cuando la dieta es rica en potasio64.
que sin embargo sí es común en las sociedades indus- Los mecanismos por los que el potasio disminuye la
trializadas62. En las sociedades primitivas el consumo PA son:
de sodio era de unos 70 mEq/día. Por lo tanto, estudios
epidemiológicos apoyan la función etiológica de la sal •  Reducción en la resistencia vascular periférica por
en el desarrollo de HTA. dilatación arteriolar directa.
Tema 23.  Metabolismo hidrosalino. Dieta controlada en sodio. Dieta controlada en potasio… 389

•  Aumento en la pérdida de agua y sodio corporal. carecemos de datos para recomendar de forma siste-
•  Supresión de la secreción de renina y angiotensi- mática suplementos de magnesio en la prevención de
na. la HTA.
•  Disminución del tono adrenérgico.
•  Estimulación de la bomba de sodio y potasio. 3.3.5 Lípidos
Los estudios que analizan el consumo de grasa y los
El Joint National Committee65 recomienda un consu-
niveles de presión arterial, han sido discrepantes. La
mo de potasio de cerca de 90 mEq/día, sobre todo pro-
reducción del consumo de grasa saturada se asocia a
veniente de frutas y verduras.
niveles más bajos de tensión, mientras que el mayor
consumo de ácidos grasos poliinsaturados se ha rela-
3.3.3. Calcio cionado con menores cifras tensionales. Sin embargo,
También parece existir una asociación inversa entre en dos estudios de cohorte amplios en profesionales
la ingesta de calcio y la PA. Es a partir de los estudios de la salud del sexo masculino y en enfermeras, ni la
de McCarron et al66, en los años 80, cuando se estable- grasa total ni los ácidos grasos específicos se relaciona-
ció la relación entre el calcio y la HTA. Estos autores ron con la PA38.
señalaron que los pacientes hipertensos tenían niveles En varios estudios publicados existe una relación po-
de PTH más altos y una excreción de calcio en orina sitiva con la grasa saturada e inversa con la poliinsatu-
aumentada. Importantes son los resultados obtenidos rada71. Estos resultados son congruentes con la dieta
del estudio DASH, ya anteriormente mencionado, que vegetariana, ya que tiende a ser más rica en ácidos gra-
sugieren que el efecto beneficioso de los productos sos poliinsaturados y más baja en grasas totales, ácidos
lácteos está determinado por el mayor aporte de calcio grasos saturados y colesterol. En la población vegeta-
en dicha dieta. riana se asocian niveles de tensión arterial más bajos.
El efecto del calcio es más intenso en los casos de Dosis altas de aceites de pescado (rica en ácidos grasos
HTA sensible a la sal, debido al efecto natriurético del ω-3) han reducido la presión arterial en varones con
calcio. Los suplementos de calcio pueden reducir la HTA leve, pero no se consiguieron efectos significativos
PA en casos de HTA con renina baja, pero la pueden con dosis menores. El problema es su escasa utilidad
aumentar en HTA con renina alta. Existen además práctica, ya que cantidades eficaces de ácidos ω-3 no
otros estudios cuyos resultados no apoyan esta rela- son fáciles de ingerir en forma de pescados, y su admi-
ción inversa entre la ingesta de calcio, y la reducción de nistración en cápsulas tiene mala tolerancia.
la presión arterial. Estudios clínicos demostraron efec- Respecto al consumo de grasa monoinsaturada, no
tos hipotensores mínimos de los altos consumos de existen muchos datos. Parece que una dieta rica en áci-
calcio a partir de alimentos o suplementos. El incre- dos grasos monoinsaturados se correlacionó con nive-
mento en el consumo de productos lácteos (para un les más bajos de presión arterial. Además, se sugiere
consumo total de calcio de 1500 mg/día) no ejerció que la prevalencia de HTA es menor en los países del
ningún efecto sobre la presión arterial en hiperten- norte de Europa donde el consumo de estos ácidos
sos67. Por lo tanto, en estos momentos no es del todo grasos monoinsaturados es alto. En nuestro país, el
correcto recomendar como beneficiosa un alta ingesta consumo de estos ácidos se debe al aceite de oliva.
de calcio, y es preferible seguir aconsejando las canti-
dades clásicas (1200 mg/día), en las que se tiene espe- 3.4. Recomendaciones nutricionales para la
cial atención a las necesidades de calcificación y de la prevención y tratamiento de la HTA72, 73
prevención de osteoporosis68. (tabla 8)
•  Mantener un peso adecuado al sexo y la edad,
3.3.4. Magnesio
(20-30% de la HTA se asocia a sobrepeso).
El magnesio es un potente vasodilatador, pero a pe- •  Consumo de sal < 6 g/día.
sar de esto los estudios muestran resultados discrepan- •  Abstención de alcohol, o como admisible dos be-
tes a cerca de su efecto sobre la presión arterial. En al- bidas al día.
gunos estudios, estudios epidemiológicos como el •  Actualmente no parece necesaria la suplementa-
Atheroesclerosis Risk Communities Study (ARIC) y el ción con magnesio, calcio o potasio.
Nurses’ Health Study69, 70 la ingesta de magnesio se •  La ingesta de grasa debe ser el 30-35% de la ener-
acompañó de descensos en los niveles de PA, pero sin gía total, con un 50% en forma de grasa monoin-
embargo en otros la suplementación de magnesio no saturada y un 25% de grasa saturada y la misma
demostró eficacia hipotensora. cantidad de insaturada.
Es poca la información que tenemos acerca del con- •  Evitar el consumo excesivo de café, té y bebidas de
tenido de magnesio en los alimentos, y esto dificulta la cola.
realización de estudios. Por lo tanto, en la actualidad •  Modificar el estilo de vida: ejercicio físico.
390 BLOQUE: METABOLISMO

Tabla 8.  Modificaciones del estilo de vida para el manejo de la hipertensión arterial.

Modificaciones Recomendaciones Reducción de TAS


Reducción de peso Mantener un IMC normal (18-25) 5-20 mmHg/ 10 kg de pérdida
Dieta rica en frutas, verduras, y bajo consumo de
Seguir dieta DASH 8-14 mmHg
grasas saturadas
Reducción de sodio < 100 mEq/l (2,4 g sodio o 6 g de cloruro) 2-8 mmHg
Ejercicio físico Actividad aeróbica regular (30 min/día) 4-9 mmHg
No más de 2 tomas al día o 1 en mujeres o varones
Alcohol 2-4 mmHg
de bajo peso

4. Resumen   2. The Korean Nutrition Society. Dietary reference in-


takes for Koreans. Seoul: The Korean Nutrition So-
El sodio es aportado en la dieta por tres fuentes: ciety; 2010.
la sal añadida al cocinar o aliñar, el sodio contenido
  3. Ando K, Kawarazaki H, Miura K, Matsuura H, Wa-
en los alimentos y el agua que consumimos. Ade-
tanabe Y, Yoshita K, Kawamura M, Kusaka M, Kai
más, es importante leer el etiquetado de los ali­
H, Tsuchihashi T, Kawano Y. [Scientific statement]
mentos, ya que pueden contener sodio en forma de:
Report of the Salt Reduction Committee of the Ja-
bicarbonato, fosfato de disodio, glutamato de mo-
panese Society of Hypertension(1) Role of salt in
nosodio, alginato de sodio, hidróxido de sodio, pro-
hypertension and cardiovascular diseases. Hyper-
pinato de sodio, sulfito de sodio, etc. Mostramos
tens Res 2013;36:1009–1019.
unas tablas con los grupos de alimentos clasificados
  4. Kumanyika SK, Hebert PR, Cutler JA, Lasser VI,
en aconsejados o desaconsejados para su consumo
Sugars CP, Steffen-Batey L, et al.. Feasibility and
en pacientes que precisan una dieta controlada en
efficacy of sodium reduction in the trials of
sodio, así como ejemplos de dietas hiposódicas mo-
hypertension prevention, phase I. Hypertension
derada y estricta.
1993;22:502-12.
Las aplicaciones principales de las dietas restrictivas
 5.  Gupta D, Georgiopoulou V, Kalogeropoulos A,
en potasio son: insuficiencia renal aguda o crónica,
et al. Dietary sodium intake in heart failure. Circu-
acidosis metabólica, daño tisular e ingesta excesiva de
lation 2012;126:479-85.
potasio de la dieta. Se aconseja: evitar el consumo de
alimentos integrales, así como verduras, frutas frescas   6. Malcon J, Arnol O, Howlett JG, Ducharme A,
y legumbres, los alimentos congelados, las sales de ré- Ezekowitz JA, Gardener MJ, et al. Canadian Car-
gimen y someter los alimentos a remojo. diovascular Society Consensus Conference gui-
delines of heart failure- 2008 update: best prac-
tices for the transition of care of heart failure
•  Respecto a la dieta en la hipertensión arterial,
patients, and the recognition, investigation and
se revisan las dietas DASH y se recogen las reco-
treatment of cardiomyopathies. Can J Cardiol
mendaciones nutricionales para su prevención y
2008;24:21-40.
tratamiento: mantener un peso adecuado al sexo
y la edad, < 6 g/día de consumo de sal, absten-  7. Lindenfel J, Albert NM, Boehmer JP, Collins SP,
ción de alcohol, reducir la ingesta de grasa al 30- Ezekovitz JA, Givertz MM, et al. HFSA 2010 Com-
35% de la energía total, evitar el consumo excesi- prehensive Heart Failure Practice Guideline. J Card
vo de café, té y bebidas de cola y modificar el Fail 2010;16:1-194.
estilo de vida con más ejercicio físico.   8. Colin-Ramirez E, McAlister FA, Zheng Y, Sharma S,
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Tema 24.
Metabolismo fosfocálcico y del magnesio.
Osteoporosis. Dieta controlada en calcio, fósforo
y magnesio
Ana Isabel Ilundain González
María Julia Ocón Bretón
José Antonio Gimeno Orna
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza

Jordi Pons Dolset


Servicio de Reumatología. Hospital Royo Villanova. Zaragoza

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 395-408.

1. Introducción
2.  Metabolismo del calcio
3.  Metabolismo del fósforo
4.  Metabolismo del magnesio
5. Osteoporosis
6.  Tratamiento dietoterápico
7. Resumen
8. Bibliografía

1. Introducción tes con función renal normal predomina el efecto uri-


nario, por lo que la PTH tiende a disminuir la concen-
El calcio, el fósforo y el magnesio son elementos tración de fósforo plasmático.
esenciales en muchos procesos biológicos, por lo que La vitamina D2 o ergocalciferol se encuentra en plan-
el mantenimiento de su homeostasis es esencial para la tas y levaduras y también se obtiene de forma sintética
supervivencia. La homeostasis del calcio y fósforo está para enriquecer diferentes alimentos y complementos
regulada por la acción de tres hormonas, llamadas hor- vitamínicos. La vitamina D3 o colecalciferol es una
monas calciotropas, que ejercen su acción en el intesti- prohormona producida en la epidermis a partir de la
no, el riñón y el hueso: hormona paratiroidea, vitamina conversión del 7-deshidrocolesterol, mediante reaccio-
D y calcitonina. nes que requieren la absorción de radiación ultraviole-
La hormona paratiroidea (PTH) es una hormona po- ta y una isomerización desencadenada por la tempera-
lipeptídica que se secreta por las glándulas paratiroides tura. En el hígado, la vitamina D se metaboliza por una
en respuesta a varios estímulos, siendo el principal citocromo P450 hidroxilasa para formar 25-hidroxivita-
el descenso del calcio sérico. La PTH se encarga de mina D (calcidiol), posteriormente esta se somete a
aumentar los niveles de calcio sérico a través de esti- una segunda hidroxilación en el riñón para convertirse
mular la resorción ósea elevando la concentración plas- en 1,25-dihidroxivitamina D (calcitriol), que es la forma
mática de calcio y fosfato, favorecer la reabsorción tu- hormonalmente activa de vitamina D, o en 24,25-dihi-
bular renal de calcio a la vez que inhibe la de fosfato y droxivitamina D.
estimular la enzima 1a- hidroxilasa renal responsable La principal acción del calcitriol esta centrada en me-
de la síntesis de 1,25-dihidroxicolecalciferol, principal jorar la disponibilidad de calcio y fósforo para nueva
metabolito activo de la vitamina D, que incrementa la formación ósea y para la prevención de hipocalcemia e
absorción intestinal de calcio y fósforo. En los pacien- hipofosfatemia. La vitamina D actúa a nivel intestinal,

395
396 BLOQUE: METABOLISMO

donde estimula la absorción de calcio y fósforo; a nivel 600 y 800 mg/día de calcio, del cual se absorbe menos
renal aumentando la reabsorción tubular de calcio y del 50% y el resto es eliminado por las heces. La absor-
fósforo; en el hueso, donde favorece la resorción ósea, ción de calcio aumenta en los períodos de crecimiento
aumentando las concentraciones plasmáticas de calcio rápido de los niños, durante el embarazo y la lactancia,
y fósforo, y en las glándulas paratiroideas, donde dis- y disminuye en la edad avanzada. Posiblemente, no to-
minuye la síntesis de PTH. das las formas de calcio dietético se absorban igual,
La calcitonina es un péptido de 32 aminoácidos pro- siendo el calcio en forma de cloruro el que probable-
ducido fundamentalmente por las células C parafolicu- mente lo hace mejor.
lares de la glándula tiroides. Inhibe la reabsorción ósea En los adultos normales que ingieren calcio en la
mediada por osteoclastos y aumenta la excreción uri- cuantía habitual, su excreción urinaria es de 100 a
naria de calcio y fósforo al inhibir su reabsorción tubu- 400 mg/día (2,5 a 10 mmol/día), pero aunque la inges-
lar. Sin embargo, en el ser humano no se observan ta de calcio varíe mucho, la calciuria se modifica poco.
cambios en los niveles séricos de calcio y fósforo aun- De ahí, que si la dieta es pobre en calcio, la incapacidad
que varíen mucho los niveles de calcitonina, como pue- relativa para conservar el calcio produce un balance ne-
de darse tras una tiroidectomía total o un carcinoma gativo del mismo, salvo que su absorción se eleve al
medular de tiroides. máximo. Diariamente se filtran en el glomérulo unos
A parte de estos factores endocrinos clásicos, se es- 6-10 g de calcio, los cuales son reabsorbidos en gran
tán identificando nuevos factores que regulan el meta- parte. El 60% se reabsorbe en el túbulo proximal (ab-
bolismo fosfocálcico, como el factor de crecimiento fi- sorción dependiente de niveles séricos de calcio), un
broblástico 23 (FGF23) que regula la eliminación 20% en el asa de Henle, un 10% en el túbulo contor-
urinaria de fósforo, respondiendo a la carga de fósfo- neado distal (la PTH aumenta la absorción a este nivel)
ro. En el riñón disminuye la reabsorción de fósforo y la y un 3-10% se reabsorbe en el túbulo colector, aumen-
síntesis de calcitriol y en las paratiroides disminuye tándose la reabsorción a este nivel por la acción de la
la producción de PTH. PTH, calcitriol, calcitonina y estados de depleción de
volumen extracelular1, 2.
2.  Metabolismo del calcio
2.1.  Hipocalcemia
El organismo adulto tiene entre 1 y 2 kg de calcio y
el 99% del mismo reside en el hueso, del cual el 99% La hipocalcemia se define como el descenso del cal-
se mantiene cristalizado en la fase mineral y el 1% cio sérico total por debajo de 8,5 mg/dl (2,12 mmol/l)
puede intercambiarse rápidamente con el calcio extra- o calcio iónico inferior a 4,7 mg/dl (1,17 mmol/l). Es
celular. El 1% restante se reparte equitativamente en- frecuente en el paciente hospitalizado y menos común
tre los líquidos intra y extracelular. El calcio extracelu- a nivel ambulatorio. Resulta imprescindible distinguir la
lar es el principal sustrato para la mineralización del falsa hipocalcemia, en la cual el calcio plasmático total
cartílago y el hueso, pero también sirve como cofactor está descendido, pero el calcio ionizado es normal;
para una gran cantidad de enzimas extracelulares, esta situación ocurre cuando existe una hipoalbumine-
principalmente las de la cascada de la coagulación, e mia. También puede ocurrir que el calcio ionizado sea
interviene en una gran diversidad de procesos celula- bajo sin que el calcio total esté descendido, como en
res, como la automaticidad del nervio y el músculo, la las alcalosis respiratoria y metabólica, en las cuales
contracción del músculo cardiaco, esquelético y liso, la aumenta la fijación del calcio a la albúmina. Las causas
neurotransmisión y varias formas de secreción endo- más frecuentes de hipocalcemia verdadera son la se-
crina y exocrina. La concentración de calcio plasmático creción reducida o falta de acción de la PTH (hipopara-
oscila entre 8,8 y 10,4 mg/dl (2,2 a 2,6 mmol/l). Se tiroidismo postquirúrgico, infiltración de las glándulas
encuentra distribuido en tres formas: cerca del 50% paratiroideas, resistencia a la acción de la PTH), con
está unido a proteínas, principalmente a la albúmina y menos frecuencia el déficit de vitamina D (por aporte
a globulinas, el resto en forma de iones libres ( 4,6-5,1 insuficiente o malabsorción o falta de activación), aun-
mg/dl), que es la fracción biológicamente activa y que que también existen otras causas como el empleo de
está controlada por mecanismos hormonales, y en algunos fármacos, la hiperfosfatemia, la hipomagnese-
menor cuantía, formando complejos difusibles. Cuan- mia y los diferentes síndromes malabsortivos.
do la concentración del calcio sérico total es anormal
por hipoproteinemia, hay que aplicar un factor de co-
2.2.  Hipercalcemia
rrección que consiste en añadir 0,8 mg/dl al valor de
calcio sérico por cada g/dl de seroalbúmina que des- La hipercalcemia es el trastorno hidroelectrolítico ca-
ciende por debajo de 4 g/dl. racterizado por la elevación de calcio sérico por encima
El calcio se absorbe en el duodeno y yeyuno por dos de 10,5 mg/día. La hipercalcemia ocurre en el 0,05-
mecanismos distintos, uno pasivo y otro activo, depen- 0,6% de la población general y en el 0,6-3,6% de los
diente del calcitriol. Una dieta normal contiene entre pacientes hospitalizados. La principal causa de hiper-
Tema 24.  Metabolismo fosfocálcico y del magnesio. Osteoporosis. Dieta controlada en calcio… 397

calcemia es el hiperparatiroidismo primario. Otras etio- mia disminuye la actividad del cotransportador mien-
logías menos frecuentes son las neoplasias malignas tras la hipofosfatemia la aumenta. En los últimos años
(tumores sólidos con metástasis óseas, linfomas), la se están conociendo mejor las acciones del FGF-23 que
hipervitaminosis D, el consumo de fármacos como las van encaminadas a disminuir el fosfato sérico al inducir
tiazidas y el litio, la intoxicación por aluminio, algunas fosfaturia y disminuir la absorción intestinal de fósforo
enfermedades granulomatosas y endocrinopatías como mediante la inhibición de la producción de calcitriol. El
el hipertiroidismo. El tratamiento de la hipercalcemia ha hueso mantiene un intercambio permanente con el
de ser etiológico y su objetivo está centrado en dismi- medio que lo rodea1, 2.
nuir la concentración sérica de calcio mediante hidrata-
ción y fármacos que favorezcan la excreción urinaria o
3.1.  Hipofosfatemia
disminuyan la absorción intestinal. No se recomienda el
empleo de dietas bajas en calcio, sino que se debe con- La hipofosfatemia se define como una concentración
sumir una dieta con un aporte normal de calcio. de fósforo sérico por debajo de 2,5 mg /dl (0,83 mmol/l).
En pacientes hospitalizados, la incidencia de hipofosfate-
mia alcanza el 5%, aumentando en grupos de riesgo
3.  Metabolismo del fósforo como los pacientes alcohólicos, desnutridos o sépticos,
El fósforo es uno de los minerales más importantes en que puede aumentar la incidencia por encima del 30%.
nuestro organismo. Es un nutriente esencial, por lo que Habitualmente la hipofosfatemia suele ser asintomática
tenemos que incorporarlo a nuestro cuerpo a través de o subclínica, salvo cuando el fósforo sérico se encuentra
los alimentos, aunque en poca cantidad. Normalmente por debajo de 1 mg/dl, que se considera hipofosfatemia
nuestro organismo posee unos 700 g de fósforo, lo que severa. Su presencia se ha asociado con un aumento de
representa un 1% del peso corporal. De estos 700 g el la mortalidad tanto en pacientes hospitalizados como en
85% está en el esqueleto y en los dientes, el 14% en los pacientes en tratamiento con diálisis renal.
tejidos blandos y menos del 1% está circulante en una La sintomatología clínica de los pacientes con hipo-
proporción 4:1 de HPO42- y H2PO4- a un pH de 7,4. Esta fosfatemia severa estaría asociada con la afectación:
mezcla de aniones es lo que se conoce como fosfato del sistema nervioso central (irritabilidad, debilidad,
sérico (Pi), cuya concentración normal en plasma es de 3 parestesias, convulsiones), hematológica (anemia he-
a 4,5 mg/dl (0,75-1,45 mmol/l). molítica, trombocitopenia), musculo-esquelética (de-
Existen varios factores que pueden modificar los ni- bilidad, fallo respiratorio), cardíaca (miocardiopatía,
veles de fósforo: edad (es más alto en niños que en insuficiencia cardiaca) y gastrointestinal (anorexia,
adultos), momento del día (valores inferiores cerca de disfagia).
mediodía y pequeña elevación pasada la medianoche),
estación del año, hormonas (aumento en postmeno- 3.2.  Hiperfosfatemia. Enfermedad renal crónica
pausia) y otras condiciones físicas, como la elevación
del pH, la ingesta de carbohidratos o el aporte de solu- La enfermedad renal crónica (ERC) se define como la
ciones con glucosa en sujetos en ayunas o en estado de presencia durante al menos tres meses de al menos
desnutrición, pueden disminuir la fosfatemia al inducir una de las siguentes situaciones: filtrado glomerular
la entrada de fósforo en la célula. (FG) inferior a 60 ml/min/1,73 m2 o lesión renal, defini-
Una dieta promedio aporta unos 1000 mg de fósfo- da por la presencia de anormalidades estructurales
ro al día. Aproximadamente un 65% es absorbido en el o función del riñón que puedan provocar potencial­
intestino delgado, principalmente en el yeyuno a través mente un descenso del FG.
de transporte pasivo, pero también hay un transporte En función del FG, existen cinco estadios de ERC:
activo estimulado por el calcitriol que puede elevar esta
absorción hasta el 85-90%. La eficacia de la absorción • Estadios 1 y 2: cuando el FG es superior a 60 ml/min.
de fósforo, así como su presencia en muchos alimen- • Estadio 3: corresponde con un FG entre 30-59 ml/
tos, hace que sean más raras las deficiencias de fósforo min.
por una ingesta inadecuada. • Estadio 4: aparece con un FG entre 15-29 ml/min.
La regulación renal del fósforo se lleva a cabo a tra- • Estadio 5: cuando el FG es inferior a 15 ml/min.
vés de los mecanismos de filtrado glomerular y reab-
sorción tubular, siendo excretado el 5-20% del fósforo En España se ha estimado que aproximadamente el
filtrado. El túbulo proximal es el área donde se regula 10% de la población adulta presenta algún grado de
la reabsorción mediante cambios en la expresión apical ERC, siendo del 6,8% para los estadios 3-5, aunque
de cotransportadores Na/Pi. La actividad del fósforo existían diferencias por edad (3,3% entre 40-64 años y
está influenciada por la PTH que disminuye su reabsor- 21,4 % para mayores de 64 años)3. Se recomienda rea-
ción tubular, por el FGF-23 que, producido por los os- lizar una detección precoz de la ERC en aquellos suje-
teocitos, también tiene un efecto fosfatúrico potente, y tos que presentan algunos de los siguientes factores
por la propia fosfatemia, de modo que la hiperfosfate- de riesgo: edad superior a 60 años, historia familiar de
398 BLOQUE: METABOLISMO

ERC, bajo peso al nacer, hipertensión arterial, diabetes total, el 60% está localizado en el hueso, el 20% en el
mellitus, tabaquismo, antecedentes de enfermedad músculo y el otro 20% en otros tejidos. La translocación
cardiovascular, enfermedades obstructivas del tracto de magnesio del compartimiento intracelular al extrace-
urinario y enfermedades crónicas (autoinmunes, infec- lular se realiza de forma lenta durante varias semanas.
ciosas y neoplasias). Solo el 1% del magnesio corporal total está ubicado en
Una de las principales complicaciones que sufren los el compartimiento extracelular. De este total, el 60% se
pacientes con ERC desde las primeras fases de la enfer- encuentra en forma libre o ionizada, el 10% está ligado
medad hasta la fase de tratamiento renal sustitutivo es a sales de citrato, fosfato, oxalato y otros aniones for-
la hiperfosfatemia, debido a que los riñones han perdi- mando complejos y un 30% está ligado a proteínas. La
do su capacidad para eliminar el exceso de este mineral. concentración de magnesio en el plasma varía entre 1,7
El mantenimiento prolongado de unos niveles eleva- y 2,2 mg/dl (0,75-0,95 mmol/l o 1,5-1,9 mEq/l). La ho-
dos de fósforo en sangre favorece el desarrollo de deter- meostasis del magnesio depende del equilibrio entre su
minadas complicaciones como el hiperparatiroidismo, la absorción intestinal y su excreción renal.
osteodistrofia renal y las calcificaciones de tejidos blan- En una dieta equilibrada, la ingesta de magnesio es
dos. Todo ello está asociado con un incremento de la de unos 300-400 mg al día. Se absorbe el 40% del
mortalidad por causa cardiovascular, en los pacientes en magnesio ingerido, principalmente en el yeyuno y el
hemodiálisis periódica, constituyendo un factor de ries- íleon. Entre las causas que disminuyen la absorción del
go independiente en dichos pacientes. Trabajos realiza- magnesio se encuentran el alcohol, los fosfatos, los ali-
dos en población de los estudios Framingham y CARE mentos ricos en proteínas y agua y posiblemente la al-
sugieren que la excesiva ingesta de fósforo aumenta el dosterona o la calcitonina. Por el contrario, el calcitriol,
riesgo cardiovascular y estudios en niños, adolescentes y la hormona de crecimiento o la vitamina B6 pueden
mujeres premenopáusicas relacionan sus niveles con hi- aumentar su absorción.
pocalcemia, hiperparatiroidismo y aumento de fracturas En condiciones normales, la eliminación del magnesio
oseas. Por este motivo, algunos autores sugieren que se es fundamentalmente renal, siendo mínimas las pérdi-
denomine con el término «nuevo colesterol». Por otra das digestivas o por el sudor. La regulación renal del
parte, el control del metabolismo mineral está asociado magnesio está mediada por el filtrado glomerular y la
con disminución del riesgo de mortalidad en pacientes reabsorción tubular. Se filtran diariamente unos 2-2,4 g
en diálisis4, 5 Las Guías NKF-K/DOQI en base a estos estu- de magnesio, siendo excretado solo el 5 % de lo filtrado.
dios han recomendado unos niveles más estrictos para Un 25% se reabsorbe en el túbulo proximal, un 65% por
el metabolismo óseo e insuficiencia renal crónica (IRC) el asa de Henle y un 5% en el túbulo distal. La reabsor-
en el estadio 56: P 3,5-5,5 mg/dl, Ca 8,4-9,5 mg/dl, Ca x ción tubular del magnesio se encuentra disminuida en
P < 55 mg/dl, PTH intacta 150-300 pg/dl. condiciones de hipercalcemia e hipermagnesemia, con
Las medidas actualmente disponibles para controlar la expansión de volumen o con el empleo de diuréticos
la hiperfosfatemia son reducidas: su eliminación me- de asa, las tiazidas o la aldosterona. El principal regula-
diante diálisis es pobre, el uso de quelantes que contie- dor es el nivel plasmático de magnesio2.
nen calcio o aluminio es limitado por los efectos adver-
sos de hipercalcemia o toxicidad por aluminio y los
4.1.  Hipomagnesemia
quelantes utilizados actualmente, como el sevelamer o
el carbonato de lantano, presentan problemas de efi- La hipomagnesemia se define como una concentra-
cacia, tolerancia y adherencia por parte del paciente. ción plasmática de magnesio inferior a 1,5 mEq/l
(< 0,75 mmol/l). Existe una alta incidencia de hipo-
magnesemia en pacientes ingresados que oscila entre
4.  Metabolismo del magnesio
el 11% en enfermos estables hasta el 60% en pacientes
El magnesio es el cuarto catión más abundante en de unidades de cuidados intensivos. En este último
el organismo y el segundo catión más abundante en el grupo, la hipomagnesemia se ha asociado con un ma-
compartimiento intracelular. Está implicado en la ma- yor riesgo de mortalidad. 
yoría de los procesos metabólicos (función mitocon- Entre las causas de hipomagnesemia se incluye tanto
drial, procesos inflamatorios e inmunológicos y activi- la falta de aporte como un aumento de las pérdidas
dad neuronal, neuromuscular y vasomotora) formando intestinales, renales o cutáneas. Mucho más raro es que
parte del ADN y la síntesis proteica. Este mineral resulta exista un secuestro en el compartimento óseo. También
esencial para la función de muchas enzimas, teniendo puede deberse a movimiento del magnesio sérico extra-
un papel fundamental en la estabilización de las mem- celular al interior de la célula, como ocurre en el hipo-
branas, conducción nerviosa, transporte de iones y ac- paratiroidismo severo tras paratiroidectomía y en el
tividad de los canales del calcio. síndrome de realimentación en un paciente desnutrido.
Se estima que el magnesio corporal total constituye La hipomagnesemia por falta de aporte ocurre funda-
unos 20-25 g. El 99% del magnesio corporal total está mentalmente en los casos de alcoholismo o malnutri-
localizado en el compartimiento intracelular. De dicho ción severa y con menos frecuencia en dietas hipocalóri-
Tema 24.  Metabolismo fosfocálcico y del magnesio. Osteoporosis. Dieta controlada en calcio… 399

cas porque los mecanismos renales de conservación son • Osteoporosis: T-score ≤ –2,5 DE.
muy eficientes. Como causas de malabsorción intestinal • Osteoporosis establecida: igual que la anterior
de magnesio, aparecen la enfermedad celíaca, la enfer- pero se añade la presencia de una o más fracturas
medad de Whipple, la enfermedad inflamatoria o tras por fragilidad.
resecciones intestinales (fundamentalmente cuando se
reseca el íleon o en las yeyunostomías terminales) y tam- Es la enfermedad metabólica más frecuente. El ries-
bién el uso de fármacos como los inhibidores de la bom- go de padecerla es mucho mayor en mujeres que en
ba de protones. La esteatorrea tiene un papel muy im- varones. Debido a que la DMO disminuye con la edad,
portante, ya que la severidad de la hipomagnesemia se la incidencia de fracturas aumenta exponencialmente
correlaciona con la magnitud de la grasa fecal. En pérdi- en ambos sexos, siendo un problema alarmante en la
das cutáneas, destacarían los quemados severos y de- población senil, un sector demográfico con clara ten-
portistas tras un ejercicio extenuante con fases anabóli- dencia ascendente. Entre los factores de riesgo impli-
cas. Existen numerosas alteraciones hormonales que cados en la disminución de la masa ósea y el aumento
producen hipermagnesiuria como son el hipoparatiroi- de la fragilidad se encuentran:
dismo, la diabetes (diuresis osmótica), el hipertiroidis-
mo, el aumento de la hormona antidiurética y los mine- • Fracaso en obtener un pico óptimo de masa ósea
ralocorticoides (por la hipervolemia y por el déficit de (en el individuo sano se alcanza a los 30-35 años).
potasio). También existen tubulopatías que cursan con • Elevación de la resorción y disminución de la for-
hipermagnesiuria como los síndromes de Welt, Bartter o mación ósea (con la edad, predomina la resorción
Gitelman. En cuanto a las nefropatías funcionales que frente a la formación).
causan hipermagnesiuria, en la mayoría de los casos • Cambios hormonales (disminución de estrógenos y
están ocasionadas por factores nutricionales como el andrógenos, aumento de PTH y disminución de vi-
ayuno, deficiencias de fósforo, potasio, vitamina B6, vi- tamina D, disminución de GH e IGF-1 con la edad).
tamina E, así como el exceso de proteína en la dieta.
Numerosos fármacos pueden favorecer la hipermagne- Existen otros factores que pueden favorecer la apari-
siuria como los diuréticos de asa, tiazidas o manitol, el ción de osteoporosis, los más frecuentes serían:
cisplatino o la anfotericina B. Destacan también fárma-
cos relativamente nuevos como los anticuerpos mono- • Estilo de vida: Baja ingesta de calcio y niveles bajos
clonales bloqueantes del receptor del factor de creci- de vitamina D. Sedentarismo, tabaquismo, consu-
miento epidérmico (cetuximab y panitumumab)2, 7. mo de alcohol, bajo índice de masa muscular, die-
Clínicamente, la hipomagnesemia se manifiesta por tas desequilibradas.
anorexia, espasmo muscular, temblor, astenia, convul- • Fármacos: Glucocorticoides, antiandrógenos, ex-
sión, irritabilidad muscular, agitación, confusión, alte- ceso de dosis de tiroxina, anticonvulsivantes.
raciones digestivas, disminución de las reservas de • Endocrinopatías: Hipertiroidismo, diabetes mellitus,
glucógeno hepático y muscular y alteraciones en el enfermedad de Cushing, hipogonadismos, hiperpa-
metabolismos del calcio aumentando su depósito en ratiroidismo.
tejidos blandos como el miocardio, el riñón o las pare- • Enfermedades malabsortivas, enfermedades rena-
des vasculares.7 les, hematológicas e inflamatorias crónicas.

La osteoporosis es una enfermedad asintomática


5.  Osteoporosis
que se manifiesta con la aparición de fracturas espon-
La osteoporosis ha sido definida como una enfer­ táneas o ante traumatismos mínimos. Estas fracturas
medad caracterizada por una masa ósea disminuida pueden recuperarse completamente o dejar secuelas a
acompañada de un deterioro de la microarquitectura largo plazo que pueden manifestarse como dolor cró-
del tejido óseo, lo que conduce a un aumento de su nico o con deformidades que pueden tener como con-
fragilidad y por consiguiente, a un incremento del ries- secuencia insuficiencia respiratoria restrictiva, encama-
go de fractura. En 1994 la Organización Mundial de la miento o incluso la muerte; esta última relacionada
Salud (OMS) recomendó una definición clínica basada sobre todo con la fractura de cadera.
en mediciones de la densidad mineral ósea (DMO) ex- La prueba o patrón oro para el diagnóstico de la os-
presada en unidades de desviación estándar (DE) lla- teoporosis es la densitometría ósea medida mediante
madas T-score que indican la diferencia entre la DMO absorción dual de rayos X (DXA o DEXA). Se han deter-
del paciente y el pico medio de masa ósea conseguido minado las indicaciones para la realización de la densito-
por adultos jóvenes. Aplicándose estos criterios se esta- metría ósea a aquellos pacientes con riesgo de osteopo-
blecen las categorías diagnósticas siguientes: rosis. Existe también una herramienta informática para la
valoración del riesgo de fractura (Fracture Risk Asses-
• Normal: T-score ≥ –1 DE. ment Tool: FRAX®), que permite calcular la probabilidad
• Osteopenia: T-score entre –1 y –2,5 DE. a los diez años de sufrir una fractura de cadera o fractu-
400 BLOQUE: METABOLISMO

ra mayor osteoporótica (columna, muñeca, cadera, exocrina, enfermedad celíaca, diarrea crónica, en-
hombro) para varones y mujeres no tratados teniendo fermedad de Crohn.
en cuenta una serie de factores de riesgo, con o sin infor- • Hipocalcemia neonatal.
mación de la DMO. El algoritmo FRAX® permite detectar •  Raquitismo.
esos pacientes en los que no habría clara indicación de •  Osteomalacia y osteoporosis.
realizar DMO pero que, al calcular el algoritmo aparece • Hipocalcemia cronica: enfermedad renal crónica,
una probabilidad elevada de fractura a los diez años. En hipoparatiroidismo.
estos pacientes estaría indicada la realización de la DMO
e incluso el iniciar tratamiento farmacológico antes de la Se considera una dieta rica en calcio cuando la ingesta
aparición de osteoporosis medida por DMO. La preven- oral de calcio dietético se encuentra entre 1000-1500
ción de la aparición de la osteoporosis está ligada a una mg/día. La absorción intestinal del calcio de la dieta pue-
adecuada alimentación, así como a la práctica regular de de variar entre el 25-75% y depende de la edad del indi-
ejercicio físico. Hay que garantizar un elevado aporte de viduo, de la presencia de diversos factores dietéticos que
calcio y vitamina D, bien con la dieta o con suplementos la facilitan (lactosa, determinados aminoácidos) o que la
orales. La vitamina K es necesaria para la mineralización dificultan (oxalatos y fitatos) y de las concentraciones
de la matriz orgánica del colágeno del hueso8. La vitami- plasmáticas de vitamina D. La realización de ejercicio fí-
na A interviene en el crecimiento y desarrollo del esque- sico de forma regular estimula la absorción intestinal y el
leto mediante su efecto sobre la síntesis de proteínas y la depósito de calcio en el hueso13-15.
diferenciación celular ósea. La vitamina C es un nutriente Las principales fuentes dietéticas de calcio son la le-
esencial involucrado en la formación de colágeno. En re- che y los productos lácteos que constituyen la fuente
lación con el hueso, la deficiencia de vitamina C provoca por excelencia de este mineral, seguidos de los pesca-
una disminución en la producción de colágeno y matriz dos enlatados o de espina comestible como las sardi-
ósea, con el consiguiente retraso del crecimiento y cura- nas o los boquerones, las harinas integrales, los frutos
ción de las fracturas9. El papel de ciertos oligoelementos secos, los vegetales de hoja verde y las legumbres (ta-
como flúor, magnesio, hierro, zinc, cobre, manganeso, bla 1). La biodisponibilidad del calcio varía mucho de
boro o molibdeno está todavía por establecer; se sabe unos alimentos a otros. Existen algunas sustancias con-
que son necesarios para la formación de la matriz protei- tenidas en los vegetales, como los oxalatos y fitatos,
ca pero no están determinadas las cantidades recomen- que reducen la absorción de calcio, al igual que la fibra
dadas para la formación ósea, ni se han establecido bien insoluble. Por el contrario, existen otros nutrientes con-
los papeles que juegan en la prevención de su pérdida. tenidos en los alimentos que favorecen la absorción de
El tabaco es un factor de riesgo independiente de calcio como son las vitaminas A, D y C, la lactosa y las
fractura, ya que acelera la pérdida de masa ósea, espe- proteínas de la dieta. Los alimentos fundamentales
cialmente en mujeres10, 11. La cafeína incrementa la eli- para mantener una adecuada salud ósea son la leche y
minación urinaria de calcio entre 1 y 3 horas siguientes los productos lácteos, ya que garantizan un elevado
a su toma, pero esto en condiciones normales no pare- aporte de calcio y una adecuada relación calcio/fósfo-
ce afectar al balance neto del calcio. No obstante, en el ro. Además, contienen lactosa, determinados amino­
caso de personas ancianas con baja ingesta de calcio o ácidos, vitaminas A, D y ácido ascórbico, que ayudan
en mujeres postmenopáusicas, su efecto podría ser sig- en la absorción del calcio y su fijación al hueso.
nificativo12. En principio, habría que evitar una ingesta Los lácteos deberían aportar alrededor del 80% del
de más de 2-3 tazas de café al día. En cuanto al consu- calcio de la dieta. Estudios realizados en pacientes con
mo de alcohol, en el alcoholismo crónico hay una dis- intolerancia a la lactosa que han suprimido los lácteos
minución de la DMO y el consumo moderado se acom- de su alimentación, han demostrado un mayor riesgo
paña, generalmente, de una mayor DMO. de sufrir osteoporosis. Como consecuencia de estos
resultados, en dependencia del grado de intolerancia
a la lactosa se recomienda introducir en la dieta lác-
6.  Tratamiento dietoterápico
teos fermentados como los yogures o leches fermen-
6.1.  Dieta enriquecida en calcio. Tratamiento tadas, en los cuales se ha transformado parte de la
nutricional de la osteoporosis lactosa en ácido láctico, mejorando así la tolerancia.
En la actualidad existe una tendencia a eliminar los
Las dietas con alto contenido en calcio están indica- lácteos de nuestra alimentación y sustituirlos por otro
das en diferentes situaciones como: tipo de bebidas vegetales a base de soja, arroz, almen-
dra o otros cereales como la avena. Conviene tener en
• Aumento de los requerimientos en diferentes eta- cuenta que el calcio procedente de productos vegeta-
pas de la vida: adolescencia, embarazo, meno- les tiene una menor absorción que el procedente de
pausia, ancianos. productos animales. Estos productos vegetales suelen
• Estados malabsortivos: cirugía bariátrica, síndro- contener otros nutrientes en su composición, como
me de intestino corto, insuficiencia pancreática son los fitatos.
Tema 24.  Metabolismo fosfocálcico y del magnesio. Osteoporosis. Dieta controlada en calcio… 401

Tabla 1.  Contenido en calcio (mg/100 g) de algunos alimentos

ALIMENTO CALCIO
Queso manchego curado 1200
Queso manchego semicurado, de bola, Cabrales, gallego 560-850
Queso manchego fresco 470
Sardinas en aceite 400
Almendras, avellanas 192-254
Pizzas 240
Cigalas, langostinos, gambas y camarones 220
Soja 201
Queso de Burgos 186
Yogur 127-180
Garbanzos 145
Leche de vaca: entera, semidesnatada, desnatada 118-130
Judías blancas, pintas 115-128
Galletas 115
Acelgas, cardo, espinacas, puerro 87-114
Queso en porciones 98
Mejillones, calamares y similares 78-80
Nueces, dátiles, pasas 68-77
Arenques, sardinas y otros ricos en grasa (conservas, salados o
64
ahumados)
Requesón y cuajada 60
Nabos, apio 55-59
Lentejas 56
Huevo de gallina 51
Bacalao y otros pobres en grasa (en conserva, salados o ahumados) 51
Perdiz y codorniz 46
Alcachofas, coles, repollo, judías verdes, lechuga y escarola, zanahoria 40-45

A día de hoy, la dieta en los países occidentales Las principales recomendaciones dietéticas para los
aporta entre 400-1200 mg de calcio, por lo que parte pacientes con osteoporosis están basadas en16-20:
de la población presenta riesgo de desarrollar os-
teoporosis en el futuro. Debido a esta situación, la in- • Dieta normocalórica o hipocalórica en caso de
dustria alimentaria ha desarrollado alimentos fortifica- obesidad o sobrepeso.
dos en este mineral, fundamentalmente la leche, los • Moderado contenido proteico (0,8-1 g/kg peso).
zumos, los cereales y otras bebidas sustitutivas de la El exceso de proteínas en la dieta se relaciona con
leche como son las bebidas a base de soja, avena, una disminución de la absorción de calcio.
arroz o almendra. Los lácteos bajos en grasa fortifica- • Contenido de calcio entre 1000-1500 mg/día.
dos en calcio contienen incluso más calcio que sus ho- • Distribuir la ingesta de los alimentos ricos en cal-
mólogos enteros. cio entre 4-5 ingestas/día debido a la limitación
402 BLOQUE: METABOLISMO

del intestino en la absorción del calcio. Una ración 6.2.  Dietas controladas en fósforo. Tratamiento
de calcio equivale a 1 vaso de leche, 2 yogures, nutricional de la enfermedad renal crónica
40 g de queso curado o 80 g de queso fresco.
• Ingesta mínima de vitamina D de 800 UI/día sin La restricción dietética del fósforo es una de las prin-
sobrepasar las 2000 UI correspondiente con el lí- cipales medidas para el control de la enfermedad renal
mite de seguridad aceptado para su consumo. crónica. Conseguir una reducción significativa en su
Esta vitamina se encuentra en su mayor parte en aporte es complicado, puesto que se necesita de un
la materia grasa de ciertos alimentos como son los conocimiento importante de la dieta por parte del pa-
lácteos (leche entera, semidesnatada o desnatada ciente y de su colaboración para llevarla a cabo. Ade-
enriquecida en vitamina D, quesos, mantequilla y más, puede crear un conflicto con los altos requeri-
nata), pescados azules y huevo. mientos de proteínas de los pacientes en hemodiálisis,
• Combinar la ingesta de alimentos ricos en calcio con debido a que los alimentos que más fósforo contienen
alimentos con alto contenido en vitamina A y C que son los alimentos proteicos. Como consecuencia de
colaboran en la absorción intestinal del calcio, ade- ello, el nivel de fósforo de la dieta debe de ser el más
más de mantener el pH alcalino de la orina limitando bajo posible asegurando una ingesta proteica adecua-
la eliminación del calcio por la misma. Para cubrir las da6. Las guías k-Doqi recomiendan un aporte de fósfo-
necesidades de estas dos vitaminas se recomienda ro dietético entre 10-12 mg de fósforo por gramo de
una ingesta diaria de 2-3 piezas de fruta, al menos proteína o bien una cantidad promedio de 12-16 mg
una de ellas debe de ser con alto contenido en vita- fósforo/g proteína21. Para poder conseguir estos niveles
mina C (cítricos, kiwi, fresas, fresones). de fósforo en la dieta sin comprometer la ingesta pro-
• Asegurar un consumo de dos raciones de verdura teica, se recomienda seleccionar aquellos alimentos
u hortaliza al día, al menos una de ellas debe ser con alto contenido proteico y con la menor cantidad
consumida en crudo. La cocción de la verdura en de fósforo posible.
agua facilita la eliminación de parte de la vitamina Podemos distinguir dos grandes fuentes de fósforo
C, por lo que se recomiendan las cocciones al va- en la dieta que corresponden al fósforo orgánico y al
por o en olla a presión con poca agua. Las verdu- fósforo inorgánico. El fósforo orgánico es hidrolizado
ras con mayor contenido en calcio son las de hoja a nivel intestinal absorbiéndose como fósforo inorgáni-
verde como las espinacas o las acelgas. co22. Generalmente, solo se absorbe alrededor del
• Ingesta diaria de dos raciones de proteínas (carne, 30-60% del fósforo orgánico. La absorción del fósforo
pescado, huevos), dando prioridad a las carnes depende de la digestibilidad de los nutrientes, de su
blancas (pollo, pavo o conejo) y pescados blancos biodisponibilidad, del grado de activación de los recep-
o azules. Consumir un máximo de 3-4 yemas de tores de calcitriol a nivel gastrointestinal y de la presen-
huevo a la semana. cia o ausencia de componentes que puedan interferir
• Moderado contenido en sal: evitar el consumo de en la absorción del fósforo, como el aluminio o el ácido
sal de mesa, embutidos, salazones, ahumados, nicotínico22. El fósforo orgánico derivado de los ali-
conservas, cubitos de carne o pescado, salsas co- mentos de origen animal se encuentra en el comparti-
merciales y alimentos precocinados. miento intracelular, siendo fácilmente hidrolizado y
• Fuente moderada de flúor: aguas fluoradas. absorbido. Las principales fuentes dietéticas de este
• Evitar un consumo elevado de fitatos o ácido fí- tipo de fósforo son carnes, pescados, aves, huevos y
tico (presente en el salvado de los cereales), ya lácteos. El fósforo orgánico derivado de los alimentos
que se forman sales insolubles con el calcio, lo vegetales se almacena como ácido fítico o fitato. El ser
que genera una disminución de su absorción. El humano no expresa la enzima fitasa para su metaboli-
ácido fítico constituye la principal reserva de fós- zación, por lo que la biodisponibilidad de este tipo de
foro de las semillas oleaginosas y de los granos fósforo es inferior a la del fósforo orgánico proveniente
de cereales. de los alimentos animales, encontrándose en niveles
• Evitar una ingesta excesiva de fósforo, ya que pro- inferiores al 50%22-24. Las principales fuentes alimenta-
voca una disminución de la absorción de calcio. rias de este tipo de fósforo son las semillas, los frutos
Evitar todo tipo de alimentos precocinados o pro- secos y las legumbres.
cesados, por su posible contenido en fósforo inor- El fósforo inorgánico es el componente principal de
gánico a través de los aditivos alimentarios. Limi- varios aditivos alimentarios que utiliza la industria ali-
tar los refrescos de cola por su alto contenido en mentaria como reguladores del pH, agentes quelantes
ácido fosfórico que puede favorecer la descalcifi- o secuestradores de cationes (antioxidantes), estabili-
cación ósea. zantes de proteínas, potenciadores del sabor, sales
• Realizar ejercicio físico de manera regular adaptado fundentes, mejorantes del color y mejorantes de masas
a las circunstancias del enfermo y pasear en horario o levaduras químicas25, 26. El principal problema de este
de sol para facilitar la síntesis de vitamina D. tipo de fósforo es que su absorción es mucho más ele-
• Evitar el consumo de tabaco y el exceso de alcohol. vada, alrededor de un 100%. Esto, unido a que este
Tema 24.  Metabolismo fosfocálcico y del magnesio. Osteoporosis. Dieta controlada en calcio… 403

tipo de aditivos está muy extendido en múltiples ali- • La ratio es elevada para alimentos con una alta
mentos procesados, presentes cada día más en nuestra cantidad de fósforo a través de los aditivos, pero
compra habitual, hace muy difícil estimar de forma con igual cantidad de proteína.
precisa el fósforo ingerido a través de este tipo de ali- • Permite la ingesta de alimentos con una ratio ade-
mentos. La cantidad de dicho fósforo no está definido cuada, los cuales, si se considerara solo el valor
claramente en las tablas de composición de alimentos absoluto de fósforo, se eliminarían de la dieta del
ni en el etiquetado del alimento, debido a que la legis- enfermo renal crónico.
lación actual solo está obligada a nombrar en el listado • Pone atención sobre alimentos con excesiva canti-
de ingrediente el aditivo utilizado, pero no la cantidad dad de fósforo y con baja cantidad de proteína.
del mismo, aunque siempre sin sobrepasar el máximo
estipulado por ley. Estudios americanos sugieren que el Se ha demostrado un mayor riesgo de mortalidad en
fósforo procedente de los aditivos alimentarios puede aquellos pacientes en hemodiálisis que presentan una
suponer hasta un tercio de la ingesta total de fósforo relación fósforo/proteína por encima de 16 mg/g33. De-
de la población general27. Otro problema añadido es bido a estos resultados, se ha establecido este punto
que en la industria alimentaria existen varios aditivos de corte de 16 mg/g para aconsejar o desaconsejar la
para cumplir una misma función de las anteriormente introducción en la dieta de un alimento. El grupo de
mencionadas, y todos ellos no tienen por qué tener Barril G. publicó en el año 2013 las tablas de ratio fós-
sales inorgánicas de fósforo en su composición. Por foro/proteína para la población española. En ella apa-
esto se puede encontrar en el mercado un mismo ali- recen los alimentos más habituales de la dieta medite-
mento de distinta marca comercial con y sin aditivos rránea y con mayor frecuencia de consumo en nuestro
con contenido en fósforo. país. En dichas tablas están reflejados la cantidad
Diferentes autores28, 29 han encontrado una diferen- de proteína (g), fósforo (mg), ratio fósforo/proteína
cia significativamente mayor entre el fósforo que se (mg/g), potasio (mg) y sodio (mg) aportados por 100 g
obtiene a través del análisis químico que indican las de cada alimento representado34.
tablas de composición de los alimentos de los mismos
alimentos tratados con aditivos. Estos investigadores
6.2.1. Lácteos
también encontraron diferencias significativas al anali-
zar un alimento con presencia de aditivos con fósforo Debido a su elevada ratio, los lácteos son uno de los
y el mismo alimento sin aditivo con fósforo. Los auto- principales grupos de alimentos que deben ser contro-
res concluyeron que las tablas de composición de los lados en pacientes con hiperfosfatemia e ERC. La leche
alimentos no reflejan el contenido real de fósforo y que semidesnatada y desnatada tienen una ratio muy simi-
se puede encontrar en el mercado un mismo producto lar, alrededor de 26,5 mg/g, llegando hasta 30 mg/g en
con diferencias significativas en el aporte de fósforo el caso de la leche entera. Los yogures tienen menor
según la marca comercial. En lo que respecta al fósforo ratio que la leche, quedándose en cifras de 25 mg/g,
inorgánico, podemos concluir que, en general, cuanto pero todavía están en cifras superiores a las recomenda-
más manipulado y procesado esté el alimento, mayor das. En el caso de los quesos, hay un margen muy va-
probabilidad existe de que lleve aditivos con fósforo. riable dependiendo de su contenido en fósforo orgáni-
Existe evidencia científica de que la educación dietética co e inorgánico, yendo de ratios de 13,70 mg/g en el
sobre los aditivos presentes en los alimentos procesa- caso de queso de Burgos, hasta 48,24 g/mg en los que-
dos produce una reducción significativa de la fosfate- sos untables. Los quesos más aconsejados son los que-
mia en pacientes en hemodiálisis30. sos frescos, blancos desnatados y requesón, desaconse-
La ingesta proteica es un pilar fundamental en el tra- jando los quesos untables y los quesos más curados.
tamiento de los pacientes con ERC y los alimentos ricos Actualmente existen en el mercado varias alternati-
en proteína son fuente de fósforo orgánico. Como vas a la leche de vaca, como es el caso de la leche de
consecuencia de ello, para una medición adecuada del soja, que posee una ratio inferior; pero en este caso
fósforo de la dieta en los últimos años se está usando hay que asegurarse de que este tipo de productos no
«la ratio fósforo/proteína del alimento», que es una incluyan aditivos con contenido en fósforo que puedan
forma de aportar la cantidad necesaria de proteína con incrementar el contenido total de fósforo del produc-
la menor cantidad posible de fósforo23, 24, 31, 32. Las to. También existe la leche de almendra, con ratios in-
guías k-Doqi recomiendan esta relación por las siguien- feriores a la leche de vaca, pero en este caso se des-
tes ventajas23, 24, 31: aconsejaría su consumo en el paciente renal por su
elevado aporte de potasio.
• Es independiente del tamaño de la ración del ali-
mento.
6.2.2. Huevos
• Se centra en el fósforo y proteína, nutrientes im-
prescindibles para el manejo nutricional del pa- El huevo entero posee una ratio en el límite estableci-
ciente renal. do de 16 mg/g por lo que se recomienda un máximo de
404 BLOQUE: METABOLISMO

3-4 huevos enteros a la semana. La clara de huevo ais- porar la cantidad de fósforo y el tipo de sal de fósforo
lada posee una ratio muy baja (1,42 mg/g.), proteínas utilizada en el procesado22. A día de hoy, ya se pueden
de alto valor biológico y ausencia de colesterol, por lo encontrar en el mercado alimentos en cuyo etiquetado
que se considera un alimento ideal para el paciente en se resalta «sin fosfatos añadidos», como es el caso del
diálisis; siendo recomendando su uso para el enriqueci- jamón cocido, cuya ratio es inferior a la del jamón co-
miento de dietas en estos pacientes. En contra-partida, cido habitual.
debemos limitar el consumo de la yema por su elevada
ratio, superior a 30 mg/g limitando su consumo a los 6.2.4.  Pescados, mariscos y crustáceos
3-4 huevos enteros anteriormente indicados.
Tradicionalmente se ha recomendado el consumo de
6.2.3. Carne pescado blanco y desaconsejado la ingesta de pescado
azul por su mayor aporte de fósforo. Sin embargo, si se
La carne fresca posee una ratio inferior a 16 mg/g, mide la ratio fósforo/proteína, vemos que hay un abani-
exceptuando las vísceras. Principalmente se recomien- co muy amplio que va de 7,53 a 23 mg/g de proteína,
dan la carne blanca (pollo, pavo y conejo), seguida de estando mezclados tanto pescados blancos como azu-
los cortes magros de la carne de vacuno y cerdo y final- les; por esto las recomendaciones actuales son incluir
mente la carne de cordero. en la dieta pescados con una ratio < 16 mg/g de pro-
Los embutidos estarían desaconsejados por el por- teína, independientemente de que sean blancos o azu-
centaje de materia grasa que poseen en su composi- les. Cabe destacar el alto contenido en ácidos grasos
ción, aunque presentan una ratio adecuada. Dentro de omega-3 del pescado azul, que resultan beneficiosos
este grupo de alimentos, los más aconsejados serían el para el enfermo renal por su efecto cardioprotector. Es
grupo de los jamones, que posee menor cantidad de el caso del salmón, que siempre ha estado desaconseja-
grasa y una ratio aceptable entre valores de 3,64 y do por su alto contenido en fósforo ab­soluto pero que,
12,57 mg/g, pero como ya hemos mencionado ante- sin embargo, posee una ratio 13.58 mg/g, menor que
riormente en las tablas de composición de los alimen- algunos pescados blancos como el lenguado.
tos, no contemplan el fósforo de los aditivos alimenta-
rios que pueden usarse en los fiambres, por lo que si se
6.2.5. Cereales
usa este tipo de aditivos la ratio aumentaría.
Todas las carnes procesadas o semielaboradas están Dentro del grupo de cereales está desaconsejado
desaconsejadas por la elevada probabilidad de uso de cualquier tipo de alimento integral, ya que poseen ra-
sales de fosfato para mejorar el color de la carne, rete- tios superiores a 20 g/mg, llegando hasta 40 mg/g en
ner la humedad y reducir la rancidez, de cara a aumen- el caso del arroz integral. Los cereales aconsejados son
tar la vida útil de la carne. El uso de este tipo de sales sémola de trigo, pasta alimenticia cruda, arroz blanco
hace imposible cuantificar de manera exacta el aporte y harina de trigo, así como los panes, exceptuando el
de fósforo de estos productos, ya que, actualmente en pan integral. Cabe destacar que algunas marcas co-
el etiquetado nutricional, no hay obligación de incor- merciales de pan de molde o pan de hamburguesa es-

Tabla 2.  Propuesta de ingesta dietética de referencia (IDR) para la población


española. FESNAD 2010: calcio (mg/día).

EDAD VARONES MUJERES


0-6 meses 250-500 250-500
7-12 meses 300-600 300-600
1-3 años 500-800 500-800
4-9 años 800 800
10-19 años 1000-1300 1000-1300
20-49 años 800-1000 800-1200
50-69 años 800-1200 800-1200
> 70 años 800-1300 800-1300
Embarazo – 1400 (en 2ª mitad del embarazo)
Lactancia – 1500
Tema 24.  Metabolismo fosfocálcico y del magnesio. Osteoporosis. Dieta controlada en calcio… 405

tán usando aditivos con contenido en fósforo, lo que que no es posible cuantificar de manera real al no figu-
los hace desaconsejados para el enfermo renal por su rar en el etiquetado de los alimentos. Por este motivo,
elevado aporte de fósforo de alta biodisponibilidad. este grupo de alimentos está desaconsejado para el
enfermo renal, además de por la elevada cantidad de
6.2.6. Legumbres azucares simples y grasas saturadas que contribuyen a
aumentar el riesgo cardiovascular en estos pacientes.
Las legumbres tienen una ratio fósforo/proteína en el El chocolate es un alimento con una ratio fósforo/
límite de lo recomendado, incluso superior al aconsejado proteína muy elevado que lo hace desaconsejado en el
exceptuando las lentejas y los guisantes, que están por enfermo renal, así como por su elevado contenido en
debajo de 16 mg/g. Pero hay que tener en cuenta que el potasio.
fósforo de las legumbres, al igual que el resto de alimen- Otro caso a destacar son las bebidas a base de cola a
tos vegetales, está en forma de ácido fítico, por lo que se las que se les adiciona una cantidad elevada de fósforo
asocia a una menor absorción intestinal. Los alimentos inorgánico a través de la adición de sales de fósforo
de este grupo están limitados en la dieta del enfermo para mejorar el sabor22.
renal por la alta cantidad de potasio que poseen. A continuación se exponen las raciones recomenda-
das de cada uno de los grupos de alimentos para con-
6.2.7.  Frutos secos trolar los niveles de fósforo dietético de los pacientes
Los frutos secos, al igual que las legumbres, poseen con enfermedad renal crónica en diálisis. Es importante
una ratio fósforo/proteína que los hace desaconsejados tener en cuenta que dicha distribución de raciones está
para el paciente renal, pero, al tratarse de un alimento elaborada de manera general según las recomendacio-
vegetal, se encuentra en forma de ácido fítico con me- nes nutricionales de las guías K-Doqi; sin embargo,
nor absorción a nivel intestinal. Además de por el eleva- para realizar una adecuada intervención dietética hay
do contenido en fósforo, este grupo de alimentos está que tener en cuenta muchos otros factores que afec-
desaconsejado por su alto contenido en potasio. tan a cada paciente de manera individual, como pue-
den ser el tipo de técnica de diálisis, los niveles de fós-
foro en sangre, otras patologías concomitantes o el
6.2.8.  Bollería y repostería
estado nutricional, entre otros.
La bollería y repostería poseen un aporte de proteína Para la elaboración de la distribución de raciones
y fósforo bajo; en contrapartida, tienen alto contenido también se han tenido en cuenta otros nutrientes que
en azúcares simples y grasas saturadas. Además, tie- hay que controlar en estos pacientes como son las pro-
nen alta probabilidad de contener aditivos con fósforo teínas, el potasio y el sodio (tabla 3).

Tabla 3.  Distribución de raciones en dieta controlada en fósforo.

Grupos alimentos Distribución raciones Observaciones


Lácteos 1 ración/día Preferentemente semidesnatados
Cereales 4-6 raciones/día Evitar los integrales
Verduras y Manejo adecuado de las técnicas de cocinado indicadas para la
1-2 raciones/día
hortalizas eliminación de potasio
Manejo adecuado de las técnicas de cocinado indicadas para la
Legumbres 1-2 raciones/semana
eliminación de potasio
Frutas 2 raciones/día Seleccionar aquellas con menor contenido en potasio
Elegir aquellas con ratio fósforo/proteína < 16 mg/g
1-2 raciones/día (según
Carnes o pescado Elegir los cortes magros de la carne
técnica de diálisis)
Consumir pescado azul 1-2 veces por semana
Máximo 3-4 yemas a la La ingesta de claras puede ser superior según los requerimientos
Huevos
semana proteicos del paciente
Azúcares simples Ocasionalmente Individualizar según la técnica de diálisis
Bollería y
Desaconsejado Fundamentalmente la elaborada de forma industrial
repostería
Chocolates Desaconsejado Alto contenido en fósforo y potasio
Frutos secos Desaconsejado Alto contenido en fósforo y potasio
406 BLOQUE: METABOLISMO

Otras recomendaciones dietéticas generales: Tabla 4.  Contenido en magnesio de algunos


alimentos (mg/100 g de alimento)36.
• Formar a los pacientes en la revisión e interpreta-
ción del etiquetado de los alimentos para que se- Alimento (100 g) Magnesio (mg)
pan identificar aquellos alimentos que posean Cereales con fibra 220
contenido en fósforo. Para ello se debería entre-
Harina integral 120
gar a los pacientes una tarjeta donde queden re-
flejados los aditivos que tienen contenido en fós- Pasta integral 91
foro. Arroz integral 131,5
• Cuanto más procesado sea un alimento, mayor
probabilidad hay de que posea aditivos alimenta- Pan integral 91
rios con contenido en fósforo; el enfermo renal ha Alubia/garbanzo/judía blanca 160
de reducir su ingesta al mínimo. Guisantes 240
• Interpretar los datos que nos muestran las tablas
de composición de alimentos como orientativos y Lentejas 78
no como indicador categórico de la composición Frutos secos 150/592
de los alimentos, sobre todo en aquellos produc-
Acelgas 71
tos donde la cantidad de determinados nutrientes
pueda verse aumentada por la presencia de aditi- Espinacas 54
vos, como es el caso del fósforo. Chocolate 150
• Los días que se come pasta, arroz o legumbre rea-
lizar platos únicos añadiendo ½ ración de carnes Pez espada 57
o pescado con una ratio <16 mg/g o un huevo. Sardinas en aceite 52
• Evitar los refrescos azucarados, sobre todo los de
sabor a cola.
• Educar a los pacientes en la importancia de la Los alimentos de origen animal con más contenido
toma de los quelantes del fósforo (en caso de que en magnesio son los lácteos como la leche, yogur o
los tuvieran prescritos) durante las comidas; fun- quesos, los pescados y los huevos. La biodisponibilidad
damentalmente en aquellas que posean una car- del magnesio aportado por alimentos animales es ma-
ga alta de fósforo, ya sea una comida principal o yor que la aportada por los vegetales. Las dietas ricas
una colación, como puede ser la media mañana o en proteínas aumentan la biodisponibilidad del mag-
la merienda. nesio y su absorción es mayor en presencia de ácidos.
Podemos resumir diciendo que el contenido en mag-
6.3.  Dietas controladas en magnesio nesio de los alimentos de origen vegetal es mayor, pero
tiene una biodisponibilidad más baja por la presencia
El magnesio se encuentra muy distribuido en gran de otros nutrientes como los fitatos u oxalatos, que
parte de los alimentos, estando más presente en pro- dificultan su absorción. Por el contrario, los alimentos
ducto de origen vegetal como los vegetales de hoja ver- de origen animal, a pesar de tener menor contenido de
de (acelgas o espinacas); este mineral forma parte de la magnesio, presentan una biodisponibilidad es mayor
molécula de clorofila, en la que desempeña un papel que en los alimentos vegetales35 (tabla 5).
biológico esencial, comparable al que tiene el hierro en
la hemoglobina. Otras fuentes alimentarias de magne-
7. Resumen
sio son hortalizas como la lechuga, la escarola, las endi-
vias; las legumbres como las judías blancas o los garban- La osteoporosis es una enfermedad muy prevalente y
zos; frutos secos como nueces, anacardos, almendras, se ha convertido en un importante problema de Salud
cereales integrales (si eliminamos el salvado del cereal Pública en los países occidentales, debido a la disminu-
eliminaríamos gran parte del contenido en magnesio de ción de la calidad de vida y los elevados costes sanitarios
estos alimentos) y el chocolate.(tabla 4). Muchos de es- que ocasionan las fracturas. Aunque la masa ósea de
tos alimentos también tienen un alto contenido en cada individuo está determinada, fundamentalmente,
oxalatos y fitatos contenidos en la fibra, que disminuyen por factores genéticos (raza, sexo y herencia), la nutri-
la biodisponibilidad del magnesio. Existen otros factores ción constituye el factor modificable más importante
que pueden disminuir la absorción de magnesio o au- para el crecimiento y mantenimiento de la misma. Las
mentar su pérdida renal. La dieta rica en fósforo hace recomendaciones dietéticas para la prevención y trata-
que este se una al magnesio y disminuya su absorción. miento de la osteoporosis serían, resumidamente: Dieta
Un excesivo aporte de calcio y sodio en la dieta aumen- normocalórica o hipocalórica en caso de sobrepeso
taría la excreción renal de magnesio al disminuir su reab- u obesidad, moderado consumo proteico (0,8-1g/kg
sorción en el túbulo proximal. de peso), consumo de 1000-1500 mg/día de calcio,
Tema 24.  Metabolismo fosfocálcico y del magnesio. Osteoporosis. Dieta controlada en calcio… 407

Tabla 5.  Distribución de raciones magnesio

Grupos alimentos Distribución raciones Observaciones


Lácteos 2-3 ración/día · Preferentemente semidesnatados o desnatados
Cereales 4-6 raciones/día · Preferiblemente integrales
· Una de ellas en crudo
Verduras y hortalizas 2 raciones/día
· Recomendable cocción al vapor o a presión con poca agua.
Legumbres 2 raciones/semana · Combinarlo con arroz o patata
Frutas 3 raciones/día · Consumir la fruta entera
· Consumir carne blanca y pescado blanco o azul
Carnes, pescado o huevo 2 raciones/día · Carne roja máximo 2 veces/semana
· Máximo 3-4 yemas a la semana
Frutos secos 7 raciones/semana · Preferiblemente crudos
Grasas y Aceites · Priorizar aceite de oliva
Bollería y repostería Desaconsejada · Preferiblemente casera

Tabla 6.  Propuesta de ingesta dietética de referencia gando a alcanzar hasta un tercio del fósforo total
(IDR) para poblacion española. FESNAD 2010: ingerido. El mantenimiento de niveles elevados de fósfo-
magnesio (mg/día). ro en sangre de manera prolongada favorece el
desarrollo de determinadas complicaciones como el hi-
EDAD VARONES MUJERES perparatiroidismo, la osteodistrofia renal y las calcifica-
0-6 meses 30-60 30-60 ciones de tejidos blandos. Todo ello está asociado con
un incremento de la mortalidad de causa cardiovascular
7-12 meses 60-85 60-85 en los pacientes en hemodiálisis periódica, constituyen-
1-3 años 80-125 80-125 do un factor de riesgo independiente en dichos pacien-
tes. La alimentación del paciente con ERC, de cara a
4-5 años 130-200 130-200 restringir el fósforo, ha de ir orientada a limitar los ali-
6-9 años 180-250 180-250 mentos con aditivos con fósforo ( procesados, congela-
dos, etc.) en lugar de limitar los alimentos proteicos. La
10-13 años 250-400 240-330 prescripción dietética de estos pacientes debería tener
14-19 años 400 330-375 en consideración no solo el valor absoluto de fósforo de
un alimento en cuestión, sino también la ratio fósforo/
20-39 años 300-400 330-350 proteína de cada alimento y el total de la dieta.
40-49 años 350-420 330-350 8. Bibliografía
> 50 años 350-420 300-350 1. Bringhurst FR, Demay MB, Kronenberg HM, Hormo-
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so de alcohol (> 30 g/día) y de cafeína (> 2 tazas/día). nic renal disease in Spain: results of the EPIRCE
El fósforo ingerido en la dieta procede de fuentes or- study. Nefrología 2010; 30(1):78-86.
gánicas en forma de derivados esterificados (carnes, 4. Association between proposed NKF-K/DOQI bone me-
pescados, lácteos, vegetales) y de fuentes inorgánicas en tabolism and disease guidelines and mortality risk in
forma de sales fosfóricas (aditivos añadidos en los ali- hemodialysis patients. Block G, Klassen P, Danese M,
mentos procesados). El uso de aditivos fosfóricos ha au- Ofsthum N, LaBrecque J, Kim J, Lazarus JM. J Am Soc
mentado de forma exponencial en los últimos años, lle- Nephrol 14: 474 A; 2003 (Abstract y póster).
408 BLOQUE: METABOLISMO

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Tema 25. 
Anemia y hemocromatosis. Dieta controlada en hierro
Diego Álvarez Ballano
Médico Adjunto de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 409-422.

1.  Anemia ferropénica


2. Hemocromatosis
3. Bibliografía

1.  Anemia ferropénica y en las adolescentes y mujeres en edad fértil oscila en-
tre el 1 y el 5% de ferropenia y el 1,6% de anemia ferro-
1.1. Introducción pénica4, 5. Valores similares a otros países industrializa-
La anemia es una enfermedad que se caracteriza por dos e inferiores a los observados en EE.UU.6.
un descenso en los niveles de hemoglobina (Hb) que
contienen los eritrocitos, con alteraciones o no de su 1.2. Etiología
tamaño, forma o número, disminuyendo el intercambio
de oxígeno y dióxido de carbono entre estos y las célu- El déficit de hierro obedece a un balance negativo
las del organismo. Se clasifica en función del tamaño por disminución de la ingesta o la absorción o por
eritrocitario en macrocítica, microcítica y normocítica, y aumento de las necesidades o las pérdidas. En la tabla
de su contenido en hemoglobina en hipocrómica y nor- 1 se enumeran las principales causas de anemia ferro-
mocrómica1. Las anemias debidas a una ingesta inade- pénica en nuestro medio.
cuada de hierro(Fe), proteínas, oligoelementos o vita-
minas se denominan anemias nutricionales. El hierro es a)  Disminución del aporte o de la absorción:
un elemento esencial para la síntesis de hemoglobina, Es la causa más frecuente de carencia en el mundo,
el transporte de electrones del metabolismo celular, la y afecta principalmente a países subdesarrollados don-
síntesis de DNA y otras reacciones enzimáticas vitales1. de la dieta es deficitaria2. En los países desarrollados
La anemia ferropénica se caracteriza por una dismi- socioeconómicamente, el aporte insuficiente se produ-
nución en la producción de eritrocitos debido a un dé- ce por hábitos nutricionales inadecuados tales como
ficit de hierro en el organismo. Es el trastorno nutricio- dietas de adelgazamiento mal diseñadas y sin control
nal más común en todo el mundo y es responsable de médico, o en dietas veganas estrictas. En este apartado
aproximadamente la mitad de todos los casos de ane- también se incluyen síndromes de malabsorción como
mia2, 3. Las causas de esta deficiencia en las reservas de la aclorhidria, celiaquía, gastritis atrófica y por Helico-
hierro son: una disminución de la absorción, un au- bacter pylori, gastrectomía, resecciones intestinales
mento de la demanda o un aumento de las pérdidas1. que incluyan duodeno y yeyuno o dietas ricas en fibra,
La identificación de la causa subyacente y el tratamien- café y té.
to apropiado de esta son fundamentales para el co-
rrecto manejo del proceso. b)  Pérdidas de sangre
Se estima que más de 2000 millones de personas en Es la causa más frecuente de anemia ferropénica en
el mundo presentan algún grado de deficiencia de hie- adultos de países occidentales. En varones y en muje-
rro, y que más de la mitad padecen anemia ferropénica; res postmenopáusicas de estos países, el déficit de hie-
la prevalencia de anemia de origen nutricional en los rro es fundamentalmente debido a una hemorragia
países en vías de desarrollo oscila entre el 25 y el 50% y gastrointestinal: esofagitis, hernia de hiato, ulcus gas-
entre el 2 y el 28% en los países desarrollados2. En Es- troduodenal, gastroduodenitis, varices esofágicas,
paña, la prevalencia estimada en lactantes y preescola- neoplasia gastrointestinal5, presencia de Helicobacter
res es del 15% para la ferropenia y del 6% para la ane- pylori, hemorroides, enteritis, angiodisplasias, diver­
mia ferropénica; en varones adultos y adolescentes es tículo de Meckel, linfoma intestinal, enfermedad infla-
del 1,7% para la ferropenia y del 0,9% para la anemia, matoria intestinal, poliposis, diverticulosis, parasitosis,

409
410 BLOQUE: METABOLISMO

Tabla 1.  Principales causas de anemia ferropénica. da a sobrecarga del hierro orgánico total y hemoside-
rosis de órganos como hígado, páncreas, miocardio,
Etiología Prevalencia % etc. (órganos que pueden captar hierro plasmático por
Sangrado uterino 20-30 vías alternativas).
Uso crónico de ácido acetilsalicílico u
10-15 1.3. Fisiopatología
otros antiinflamatorios no esteroideos
Carcinoma de colon 5-10 El hierro se encuentra bajo dos formas moleculares:
ferrosa (Fe2+) y férrica (Fe3+). La cantidad de hierro pre-
Angiodisplasia 5
sente en nuestro organismo oscila entre 35-45 mg/kg,
Enfermedad celíaca 5 de los que el 60-70% forma parte de la hemoglobina,
Carcinoma gástrico 5 el 10% de otras hemoproteínas (mioglobina, citocro-
mos, etc.) y el 20-30% formando la ferritina. Única-
Ulcus péptico 5 mente el 0,1% (3 mg) se encuentra unido a la transfe-
Gastrectomía <5 rrina, aunque su función es imprescindible. El hierro
transportado por la transferrina se une a un receptor
Infección por Helicobacter pylori <5 celular específico y una vez dentro de la célula se libera
Esofagitis 2-4 para unirse a las proteínas, que lo usan, o bien a la
apoferritina para almacenarse como ferritina. La pérdi-
Carcinoma de esófago 1-2
da diaria de hierro es de 1 a 2 mg al día y se produce
Ectasia vascular antral gástrica 1-2 por descamación cutánea e intestinal, cabello, sudor,
orina y heces, teniendo que ser compensada con la in-
Hematuria 1
gesta1. El hierro de los alimentos se absorbe a nivel del
Otros: ampuloma, sobrecrecimiento duodeno y el yeyuno proximal por dos vías diferentes:
bacteriano, epistaxis, resección <1 hierro hemo y hierro no hemo. La absorción está regu-
intestinal lada por la cantidad de hierro del organismo, la activi-
dad eritropoyética y la hipoxia1, suponiendo aproxima-
Fuente: Referencias 18 y 19.
damente un 10-30% del total ingerido en la dieta. El
hierro hemo es liberado de las proteínas que lo poseen
en especial el anquilostoma que afecta a cerca de mil (hemoglobina, mioglobina, enzimas, etc.) permane-
millones de personas en el tercer mundo, representan- ciendo soluble y así facilitando su absorción, mientras
do la primera causa de hemorragia digestiva global- que el hierro no hemo se absorbe mejor en forma de
mente2. Otras causas de pérdidas al margen de las Fe2+, pero siempre en menor proporción que el hemo1.
gastrointestinales son la menstruación (primera causa Como hemos visto, el hierro forma parte de la he-
de anemia en mujeres de edad fértil en países desarro- moglobina necesaria para el trasporte de O2, pero tam-
llados), miomas, donantes habituales de sangre, aná- bién es esencial en la formación de ATP, de mioglobina
lisis frecuentes durante la hospitalización, flebotomías y otras enzimas relacionadas con la neurotransmisión
terapéuticas, epistaxis de repetición, síndrome de Ren- cerebral (serotoninérgica y dopaminérgica), la síntesis
du-Osler, hemosiderosis pulmonar idiopática (Good­ de hormonas sexuales y la función detoxificante hepá-
pasture), hemoglobinuria paroxística nocturna, dis- tica. Todo ello nos ayudará a comprender las manifes-
función de válvulas mecánicas y la mayoría de taciones clínicas de la enfermedad1.
neoplasias malignas7.
1.4. Clínica
c)  Aumento de las necesidades
En niños generalmente entre 6 y 24 meses, recién El cuadro clínico de la anemia ferropénica incluye el
nacidos prematuros y/o con bajo peso, adolescentes, síndrome anémico: fatiga, palidez, palpitaciones, dis-
mujeres embarazadas y lactancia, pacientes con insufi- nea, cefalea, astenia e hiporexia, y en casos graves o
ciencia renal tratados con EPO, los requerimientos de cuando se asocia cardiopatía, puede conducir a insufi-
hierro están considerablemente aumentados. Por ejem- ciencia cardiaca congestiva. Su gravedad está directa-
plo, un embarazo consume entre 0,5 y 1 g de hierro en mente relacionada con la intensidad de la anemia y en
total. Las necesidades de hierro de los diferentes grupos especial con la rapidez de instauración de la misma.
de población, según edades, se detallan en la tabla 2. Habitualmente ocurre en un período relativamente lar-
go, lo que implica que muchos pacientes, incluso con
d)  Alteración del transporte del hierro concentraciones de hemoglobina muy bajas, puedan
Ciertos trastornos genéticos del metabolismo del compensarla y muestren síntomas y signos leves. Las
hierro como la aceruloplasminemia y la atransferrine- manifestaciones de deprivación de hierro en otros teji-
mia congénita, cursan con anemia ferropénica asocia- dos se expresa por alteraciones de las mucosas y tegu-
Tema 25.  Anemia y hemocromatosis. Dieta controlada en hierro 411

Tabla 2.  Ingesta diaria recomendada (IDR) de hierro.

Edad Varones Mujeres Embarazo Lactancia


0-6 meses 0,27 mg* 0,27 mg*
7-12 meses 11 mg 11 mg
1-3 años 7 mg 7 mg
4-8 años 10 mg 10 mg
9-13 años 8 mg 8 mg
14-18 años 11 mg 15 mg 27 mg 10 mg
19-50 años 8 mg 18 mg 27 mg 9 mg
51+ años 8 mg 8 mg

* Ingesta adecuada.
Institute of Medicine. Food and Nutrition Board. Dietary Reference Intakes for Vitamin A, Vitamin K,
Arsenic, Boron, Chromium, Copper, Iodine, Iron, Manganese, Molybdenum, Nickel, Silicon, Vanadium,
and Zinc: a Report of the Panel on Micronutrients external link disclaimer. Washington, DC: National
Academy Press; 2001.

mentos. Es frecuente la fragilidad de uñas y cabello, y mia de enfermedades crónicas. En el estudio del meta-
característica la coiloniquia o aspecto cóncavo de las bolismo del hierro se aprecia sideremia baja, capacidad
uñas (uñas en cuchara). En la mucosa oral, puede apa- total de fijación del hierro alta y, por tanto, índice de
recer glositis atrófica y queilitis angular, y en el estóma- saturación de transferrina bajo y, especialmente, ferriti-
go, gastritis con aclorhidria que agrava la malabsor- na sérica baja1, 15. El aumento en plasma del receptor
ción de hierro. Un síntoma cardinal por su especificidad soluble de la transferrina (TfR) y el índice TfR/log (ferriti-
es la pica, que consiste en la necesidad compulsiva de na)16 traduce la situación de ferropenia y es útil en el
comer sustancias que en condiciones normales no se diagnóstico diferencial con la anemia de las enfermeda-
ingieren, como tierra, hielo, yeso, papel, etc.8. También des crónicas, donde estos parámetros son normales. La
se desarrollan alteraciones inmunitarias, con disminu- hemoglobina glicosilada puede aumentar en la anemia
ción de la respuesta celular mediada por linfocitos T. ferropénica e inducir a error en el seguimiento de pa-
La anemia durante las fases tempranas de la gesta- cientes diabéticos. Puede haber trombocitosis de grado
ción provoca un aumento de los embarazos pretérmi- moderado, sobre todo en caso de hemorragia activa.
nos, abortos espontáneos, bajo peso del recién nacido Debe insistirse en la importancia de detectar la causa
y aumento de la mortalidad perinatal8. Además, la ane- que ocasiona la pérdida de hierro. Esta valoración debe
mia severa (hemoglobina inferior a 7 g/dl) aumenta el llevarse a cabo antes de iniciar el tratamiento para no
riesgo de mortalidad materna9, 10. En niños, la anemia distorsionar el resultado de la misma. El estudio del tubo
ferropénica se ha asociado a trastornos psicomotores y digestivo, salvo contraindicaciones, se hará mediante fi-
de la función cognitiva11, 12. brogastroscopia y/o fibrocolonoscopia. La fibrogastros-
En casos muy avanzados de carencia de hierro puede copia debe incluir biopsia gástrica, detección de H. pylo-
haber alteraciones graves del epitelio esofágico con ri y biopsia de la segunda porción del duodeno (para el
la producción de membranas que obstruyen parcial- despistaje de la enfermedad celíaca). Para el intestino
mente la luz del esófago (síndrome de Plummer-Vin- delgado se puede emplear la cápsula endoscópica.
son)13. Es un signo muy raro en nuestro medio. La ane- Cuando no se pueda realizar endoscopia se puede recu-
mia por deficiencia de hierro también se puede asociar rrir, según el tramo, a la colonoscopia virtual realizada
a trombosis venosa cerebral14. mediante tomografía computarizada, al enema opaco o
al tránsito esofagogastroduodenal e intestinal17, 18.
1.5. Diagnóstico
1.6.  Tratamiento y prevención
El grado de anemia suele ser muy variable. El patrón
característico del hemograma consiste en hemoglobi- El tratamiento consiste en conocer y tratar la causa
na baja para sexo y edad con microcitosis, hipocromía desencadenante y aportar la cantidad de hierro nece-
y aumento de la amplitud de distribución eritrocitaria saria para corregir la anemia y rellenar los depósitos3, 19.
(ADE) que indica anisocitosis y la diferencia de otras El hierro puede ser administrado por vía oral o paren-
anemias microcíticas como la talasemia minor o la ane- teral. En casos de anemia ferropénica severa, el aporte
412 BLOQUE: METABOLISMO

de hierro produce un aumento intenso de la eritropo- 1. Intolerancia real al hierro oral.


yesis, originando un consumo importante de ácido fó- 2. Necesidades elevadas de hierro donde el trata-
lico que puede llegar a limitar la recuperación de la miento oral no es suficiente, como en algunos
anemia. Por este motivo se recomienda profilaxis con pacientes con sangrado continuo e incoercible
unos 5 mg al día de ácido fólico. (enfermedad de Rendu-Osler, etc.) o con anemia
asociada a isquemia o insuficiencia cardiaca seve-
Vía oral: Dosis de 80-105 mg/día de hierro elemen- ra (en alguno de estos casos será preciso incluso
to, en una o dos tomas diarias en función del grado de la transfusión de hematíes).
anemia. De elección el sulfato ferroso (hierro no hemo 3. En pacientes con malabsorción de hierro verda-
Fe2+), que debe administrarse preferentemente 1 hora dera, situación poco frecuente, ya que incluso los
antes o 3 después de las comidas, ya que su absorción pacientes con aclorhidria o enteropatías suelen
se puede reducir hasta un 50% con la ingesta de ciertas absorber cantidades suficientes de hierro oral. Un
sustancias como calcio, fosfatos, fitatos, fenoles, etc. ejemplo son las resecciones intestinales realizadas
También se aconseja ingerir el suplemento acompaña- en el tratamiento de ciertos tumores o en técnicas
do de cítricos para aumentar su absorción, al favorecer malabsortivas de cirugía bariátrica.
la conservación del hierro no hemo en su forma reduci-
da (Fe2+). Una vez alcanzados los valores normales de La dosis total acumulada de hierro, equivalente al
hemoglobina y hematocrito, debe proseguirse el trata- déficit total de hierro en miligramos, queda determina-
miento durante 3 meses hasta conseguir reponer los da por la concentración de hemoglobina (Hb) y por el
depósitos (ferritina). Los controles analíticos deben rea- peso del paciente, y es la cantidad necesaria para la
lizarse cada 7 días si la hemoglobina es menor de 7 g/dl, restauración de la hemoglobina y la reposición de los
y cada 30 días si es mayor. Ha de plantearse un trata- depósitos. Se puede calcular de manera individual,
miento de mantenimiento si la causa persiste. Las cau- aplicando la fórmula de Ganzoni:
sas de un fracaso en el tratamiento oral son: error diag- Dosis de Fe (mg) = [Peso corporal (kg) x (Hb
nóstico, incumplimiento terapéutico, falta de resolución objetivo – Hb real) (g/dl) x 2,4] + Depósito de
de la causa primaria, malabsorción, dosis o tipo de hie- hierro (mg).
rro inadecuados e intolerancia al hierro oral, que es la
causa más frecuente de fracaso terapéutico, principal- El depósito de hierro se calcula:
mente por alteraciones gastrointestinales, que pueden • Hierro almacenado para un peso corporal inferior
mejorar con la toma de hierro en las comidas pero a a 35 kg = 15 mg/kg de peso corporal.
costa de una menor absorción. El cribado de la enfer- • Hierro almacenado para un peso corporal igual y
medad celíaca y la infección por H. pylori es obligado mayor a 35 kg = 500 mg
cuando la respuesta es inadecuada.
La suplementación de hierro semanal en mujeres en Poblaciones especiales
edad fértil durante un período largo es más eficaz y a. Niños lactantes (< 1 año) y preescolares (1 a 5 años):
mejor tolerada que la suplementación diaria durante Los niños pretérmino y de bajo peso al nacer de-
un período breve. ben recibir suplementos farmacológicos desde el
Los suplementos de hierro pueden interferir en la ab- primer o segundo mes hasta el primer o segundo
sorción de levotiroxina y levodopa. año. En el resto de niños, fomentar la lactancia
Los inhibidores de la bomba de protones como lan- materna durante los 6 primeros meses de vida y
soprazol y omeprazol disminuyen el ácido gástrico, re- en caso de no recibirla, recomendar fórmulas in-
duciendo el hierro no hemo absorbido, y los suplemen- fantiles fortificadas con al menos 12 mg/l de hie-
tos de calcio interfieren principalmente con la absorción rro21. Después de los 6 meses añadir fuentes adi-
del hierro hemo. Este problema puede evitarse toman- cionales de hierro (alrededor de 1 mg/kg/día),
do los diferentes fármacos y el hierro separados en dis- preferiblemente mediante alimentación comple-
tintos momentos del día. mentaria (por ejemplo, cereales infantiles enri-
quecidos con hierro) y en caso de no recibir estos
Vía parenteral20: El tratamiento parenteral con hierro aportes necesarios se debe valorar el uso de suple-
es eficaz pero más caro y con más riesgo de efectos ad- mentos farmacológicos. Pasados los 6 meses in-
versos. Actualmente se dispone de diversos preparados troducir carnes y pescados en forma de puré.
de administración endovenosa, entre ellos el hierro saca-
rosa, que gracias a su seguridad, supuso un incremento b. Mujeres en edad fértil no embarazadas:
en su utilización. También tenemos disponibles nuevos Fomentar el consumo de alimentos ricos en hierro
compuestos que permiten la administración de altas do- o fortificados y alimentos que favorezcan su ab-
sis en una sola sesión, como el hierro carboximaltosa sorción. En dietas hipocalóricas severas y veganas
(aprobado por EMEA y disponible en España). El hierro estrictas puede ser necesaria la suplementación
parenteral está indicado en las siguientes situaciones: farmacológica.
Tema 25.  Anemia y hemocromatosis. Dieta controlada en hierro 413

c. Mujeres embarazadas: aumentar la cantidad de hierro en alimentos básicos


Las principales guías europeas definen la anemia como los cereales, la harina, la sal, el azúcar, alimentos
durante la gestación en nuestra población como infantiles, etc., que, sin modificar sus cualidades orga-
una hemoglobina < 11 g/dl en el 1er trimestre y nolépticas, aumenten su aporte dentro del patrón ali-
hemoglobina < 10,5 g/dl en el segundo y tercer mentario normal. La estrategia de la fortificación es dife-
trimestres22, y recomiendan la realización de hemo- rente según el país, tanto en los alimentos seleccionados
grama al inicio del embarazo y en la semana 28. Se para la suplementación, como en el tipo de hierro em-
aconseja informar detenidamente de los alimentos pleado para tal efecto23. En España, los cereales del de-
ricos en hierro, así como de los factores que pue- sayuno y fórmulas específicas de leche infantiles son los
den mejorar o inhibir su absorción22. No existe con- grupos de alimentos con mayor grado de fortificación.
senso acerca de la suplementación rutinaria de
Medidas dietéticas: (se desarrollarán en el siguien-
hierro en todas las gestantes. Mientras que las
te apartado 1.8).
guías de los países desarrollados no lo recomien-
dan por la ausencia de datos concluyentes en sus
poblaciones9, 22, la Organización Mundial de la Sa- 1.8. Dietoterapia
lud (OMS) sí que lo hace, en base a que la adminis-
Se estima que deben absorberse diariamente entre
tración de suplementos de hierro en prevención
1-2 mg de hierro elemento para satisfacer las necesida-
primaria disminuye significativamente la prevalen-
des del 85% de los varones y mujeres en edad adulta.
cia de anemia materna durante el parto y puede
Existen dos fuentes de hierro, como ya se ha comenta-
ser beneficiosa para el recién nacido22.
do, el hemo, presente en alimentos de origen animal:
En lo que sí hay consenso es en la necesidad de
carnes, pescados y aves. Su biodisponibilidad es muy
tratamiento con hierro a todas las gestantes con
superior a la del no hemo, entre un 20 y 30% de absor-
anemia ferropénica (100-200 mg de hierro ele-
ción y su único inhibidor es el calcio. Y el no hemo, que
mento/día), manteniéndolo durante 3 meses o
se encuentra en alimentos de origen vegetal, frutas,
hasta 6 semanas postparto22. En casos de ferrope-
huevos, en los productos enriquecidos con hierro (forti-
nia sin anemia se podría contemplar el tratamiento
ficación) y en los suplementos farmacológicos, con un
con dosis de 65 mg de hierro elemento al día y
porcentaje de absorción mucho menor (alrededor del
nuevo control analítico en 8 semanas22. El hierro
5-10%). La absorción del hierro no hemo se inhibe con
intravenoso únicamente se plantearía a partir del
los fitatos (presentes en granos y legumbres), los oxala-
segundo trimestre en caso de intolerancia o ausen-
tos, el magnesio, compuestos fenólicos, principalmente
cia de respuesta al hierro oral. La anemia severa
tanatos, presentes en el café, té, cacao y determinados
(hemoglobina por debajo de 7 g/dl) es más común
vegetales, y aumenta con la ingesta de ácido ascórbico,
en las mujeres de los países en desarrollo y se aso-
citrato y la proteína tisular de carnes, pescados y aves.
cia con una reducción de líquido amniótico, vaso-
En términos generales, las personas con déficit de
dilatación cerebral fetal, anomalías en la frecuencia
hierro absorben un mayor porcentaje de hierro total de
cardiaca fetal, aumento de prematuridad, abortos,
la dieta (incluido hemo y no hemo), en comparación
bajo peso al nacer y muerte fetal9, 12. También au-
con las que no tienen tal deficiencia.
menta el riesgo de mortalidad materna9 y debe por
Por todo ello, las recomendaciones dietéticas24 son:
lo tanto manejarse en un hospital obstétrico de re-
ferencia. Es prudente tratar la anemia grave severa • Aumentar los alimentos ricos en hierro hemo: car-
mediante transfusión de hematíes, especialmente ne roja, pescado y aves, evitando su combinación
si hay signos sugestivos de hipoxemia fetal. con suplementos o sustancias ricas en calcio, que
disminuyen su absorción.
• Aumentar la biodisponibilidad del hierro no hemo
1.7.  Objetivos nutricionales
que se encuentra en alimentos de origen vegetal,
La dieta y la fortificación de alimentos son funda- frutas y alimentos fortificados, con una dieta rica
mentales en la prevención de la anemia a nivel mun- en ácido ascórbico (cítricos, fresas, kiwis, papayas,
dial, pero resultan insuficientes cuando existe un déficit guayabas, grosellas negras, baya del acerola,
establecido moderado o severo. El hierro es uno de los kakadu, brócoli, col de Bruselas, pimientos) com-
micronutrientes principales que desde hace años, y binada con carnes, pescados y aves.
también en la actualidad, es objeto de programas pú- • Moderar el consumo de alimentos que disminu-
blicos de salud a nivel internacional. Se utilizan diversas yen la absorción del hierro no hemo: lácteos, café,
medidas nutricionales para solucionar el problema: té, salvado y fibra, y separarlos, en al menos 2 ho-
ras, de las comidas ricas en este tipo de hierro,
Fortificación de alimentos: Se considera una me- para no interferir en su absorción.
dida importante para la prevención de la anemia ferro- • Evitar el abuso de fármacos que inhiben la absor-
pénica ante la magnitud del problema, y consiste en ción de hierro: antiácidos (ranitidina, omeprazol,
414 BLOQUE: METABOLISMO

bicarbonato) y antibióticos (cloranfenicol y tetra- por una cisteína en la posición 282 (C282Y) en los dos
ciclinas). alelos. El 5% de los pa­cientes con HH tipo 1 son homo-
• La congelación y los tratamientos térmicos agresivos cigotos compuestos (C282Y en un alelo y en el otro
disminuyen la absorción de hierro de carnes y pesca- alelo la mutación H63D). En casos aislados, se han de-
dos al transformar el hierro hemo en no hemo. tectado otras mutaciones como la S65C, relacionada
con sobrecarga férrica cuando se asocia a la mutación
En la tabla 3 de detalla la cantidad de hierro en los C282Y en el otro alelo25, 28 .
principales grupos alimentarios
2.2. Fisiopatología
1.9. Resumen
La ingestión ordinaria de hierro en la dieta occidental
La deficiencia de hierro representa la alteración nutri- es de unos 10-20 mg diarios, absorbiéndose aproxima-
cional más frecuente a nivel mundial y constituye más damente entre 1-2 mg en las personas sanas, mientras
de la mitad de los casos de anemia. Los mecanismos fi- que los pacientes con HH pueden absorber de 3 a 6 mg
siopatológicos son bien conocidos y ayudan a entender de hierro por día29. El hierro en la HH se acumula en el
las importantes consecuencias clínicas de la enferme- organismo a un ritmo aproximado de 0,5-1 gr/año, lle-
dad. El diagnóstico viene determinado por unos niveles gando a alcanzar una sobrecarga de 5 e incluso 30 gr.
bajos de hemoglobina asociados a microcitosis e hipo- de hierro en los casos más graves.
cromia, entre otros, y es fundamental investigar la causa La característica principal de la HH es un incremento en
primaria. El tratamiento inicial consiste en suplementos la absorción intestinal de hierro30. La homeostasis del hie-
de hierro oral en los casos donde está claro el diagnósti- rro depende estrechamente de las necesidades fisiológi-
co etiológico, seguido de una adecuada evaluación si no cas del organis­mo, que son aproximadamente de 1-2 mg
existe respuesta a este. En varones y mujeres postme- al día. La absorción de la forma iónica del hierro a través
nopáusicas es aconsejable descartar hemorragia digesti- del enterocito ocurre me­diante dos pasos: en primer lu-
va mediante endoscopia. El hierro intravenoso se reserva gar, se produce la captación del hierro dietético a través
para los casos severos de intolerancia o problemas de de la membrana apical y a continua­ción es transferido al
absorción con el hierro oral. La fortificación de alimen- plasma a través de la membrana baso­lateral. Antes de la
tos y las recomendaciones dietéticas son fundamentales captación, el hierro iónico requiere reducir­se de la forma
para la prevención de la enfermedad, pero no son sufi- férrica a la ferrosa, mediante las reductasas férricas que
cientes en caso de anemia establecida, donde será pre- se expresan en la superficie luminal de los ente­rocitos
ciso añadir suplementos farmacológicos de hierro. duodenales. El hierro ferroso cruza la membrana apical
usando el transportador DMT1. El hierro captado por el
2. Hemocromatosis ente­rocito se almacena en su interior como ferritina y se
excreta con las heces o bien se transfiere a través de la
2.1. Introducción
membrana basolateral al plasma mediante el transporta-
La hemocromatosis se define como el trastorno pro- dor denomina­do ferroportina, una vez que el hierro vuel-
ducido por la acumulación patológica de hierro en el ve a ser oxidado a su forma férrica por la ferroxidasa he-
organismo. En la práctica clínica, este término se reser- faestina. A continuación, el hierro pasa a la circulación,
va para aquellas situaciones en las que la acu­mulación uniéndose a la transferrina. Esta última interacciona con
de hierro es de causa genética (hemocromatosis here- su receptor en los hepatocitos, el receptor de la transfe-
ditaria [HH]). La acu­mulación de hierro, por otra parte, rrina (TfR), para depositar el hierro que transporta en
puede ser debida a otras causas, en cuyo caso se deno- sangre. En los pacientes con HH tipo 1, se ha detectado
mina sobrecarga férrica secun­daria25, 26. un incremento de la tasa de hierro que se absorbe de la
La HH incluye diferentes fenotipos que corresponden dieta, un incremento de la ferroportina y un aumento en
a distintas alteraciones genéticas; todas ellas compar- la expresión del DMT1. Por otro lado, la hepcidina es un
ten una absorción intestinal de hierro anormalmente pequeño polipéptido que actúa como reactante de pro-
elevada y, adi­cionalmente, los tipos 1, 2A, 2B y 3 cesos inflamatorios impidiendo la absorción intestinal de
de herencia recesiva comparten unos niveles bajos de hierro y bloqueando su liberación por parte de los ma-
hepcidina urinaria y plasmática25, 26. En la tabla 4 se crófagos, lo que explica el mecanismo de la anemia en
detallan las diferentes formas clínicas de la HH. procesos inflamatorios y neoplásicos. En la HH tipos 1,
La HH tipo 1 es la más frecuente, representando más 2A, 2B y 3 se ha demostrado su práctica desaparición
del 90% del total de las HH27. Está causada por una permitiendo, junto con el HFE mutado, un aumento de
mutación del gen HFE, localizado en el brazo corto del absorción intestinal de hierro y una mayor liberación de
cromosoma 6. Se transmite con una herencia autosó- este por los macrófagos31, 32.
mica recesiva. El 90-95% de los pacientes con HH tipo Todo ello induce un depósito de hierro en las células
1 tienen una mutación homocigota del gen HFE, por la parenquimatosas de diversos órganos tales como el híga-
que la proteína resultante tiene sustituida una tirosina do, páncreas, corazón, articulaciones, hipófisis, piel, gó-
Tema 25.  Anemia y hemocromatosis. Dieta controlada en hierro 415

Tabla 3.  Presencia de hierro en los principales grupos alimentarios (mg de hierro por cada 100 g).
Grupo alimentario Hierro (mg) Grupo alimentario Hierro (mg)
Cereales, pasta y arroz¶ Carnes*
Cereales enriquecidos 8-24 Morcilla 18
Pan integral 3,7 Hígado, cerdo 13
Pan blanco 1,6 Hígado, cordero 10
Pasta integral hervida 1,5 Cecina 9,8
Arroz blanco hervido 0,6 Hígado, pollo 7,4
Pasta hervida 0,4 Hígado, vaca/buey 7,2
Jamón ibérico 4,3
Vaca/buey plancha 3
Verduras y hortalizas¶ Pato asado 2,7
Acelga hervida 2,6 Cordero asado 2,2
Espinaca hervida 2 Jamón cocido 2,1
Cardo 1,5 Pavo pechuga plancha 1,4
Coles de Bruselas 1,1 Cerdo, lomo plancha 1,1
Alcachofa 1 Pollo pechuga plancha 1
Judía verde hervida 0,9
Patata cruda/frita 0,7-0,9 Huevos y lácteos¶
Tomate 0,5 Queso manchego 0,64
Zanahoria 0,3 Queso fresco de Burgos 0,5
Leche de vaca 0,05-0,1
Legumbres¶ Yogurt 0,05-0,1
Soja seca cruda 9,7
Lenteja hervida 8,2 Pescados y mariscos+
Judia pinta/blanca 8,2 Almeja/berberechos/chirla 24
Garbanzo hervido 7,2 Zamburiñas 14
Haba seca 5,5 Mejillón hervido 7,3
Guisante congelado hervido 1,6 Ostra cruda 6
Anchoas en aceite 4,6
Frutas¶ Bacalao salado crudo 3,6
Coco desecado 3,3 Gamba-langostino 3,3
Uva, pasa 2,3 Calamar-sepia 2,4
Higos secos 3 Pulpo hervido 1,5
Aceituna 1,7 Atún crudo/plancha 1,3
Kiwi 0,4 Sardina 1,1
Plátano 0,6 Dorada/lubina 0,9
Piña 0,5 Salmón, ahumado 0,6
Manzana 0,4 Lenguado plancha 0,6
Melocotón 0,4
Naranja 0,3 Especias¶¥
Sandía/Melón 0,3 Tomillo 123
Comino 63
Frutos secos¶ Eneldo/orégano 48
Pistachos 7,2 Laurel 43
Almendra cruda/frita 4,2 Albahaca 42
Avellana 3,8 Canela 38
Anacardo 2,8 Romero 29
Nuez 2,3 Pimentón 23
Fuente: Base de datos BEDCA.
* Absorción de hierro alta (±30%) Representa la principal fuente de hierro por cantidad, absorción y porción comestible; + Absorción
de hierro media (±20%). ¶ Absorción de hierro baja (±10%); ¥ A pesar de tener una proporción de hierro elevada por 100 g, la porción
comestible es mínima.
416 BLOQUE: METABOLISMO

Tabla 4.  Etiología de la sobrecarga férrica.

Hemocromatosis hereditaria (HH)


Hemocromatosis hereditaria asociada al gen HFE o HH tipo 1*+
Homocigotos C282Y
Heterocigotos C282Y/H63D
Otras mutaciones del gen HFE
Hemocromatosis hereditaria no asociada al gen HFE
HH tipo II o HH juvenil
Mutación hemojuvelina (HJV). HH tipo 2a*§
Mutación hepcidina. HH tipo 2b*§
HH tipo 3, mutación del receptor de la transferrina (TfR2)*+
HH tipo 4, mutación de la ferroportina (SLC40A1)¶+
HH tipo 5, mutación de la H ferritina
Sobrecarga de hierro del África subsahariana
Sobrecarga adquirida de hierro
Sobrecarga dietética de hierro
Sobrecarga parenteral de hierro
Transfusiones de glóbulos rojos
Inyecciones de hierro intravenoso
Hemodiálisis a largo plazo
Hepatopatías crónicas
Hepatitis C y B
Esteatohepatitis no alcohólica
Hepatopatía alcohólica
Porfiria cutánea tarda
Shunt porto-cava
Anemia con sobrecarga férrica
Talasemia mayor
Anemia sideroblástica
Anemia hemolítica crónica
Anemia aplásica
Déficit de piruvato kinasa
Miscelánea
Aceruloplasminemia
Atrasferrinemia congénita
Sobrecarga neonatal de hierro
* herencia autosómica recesiva; ¶ herencia autosómica dominante; + curso clínico leve
con predominio de afectación hepática (inicio 4ª-5ªdecada); § curso clínico grave con
predominio de afectación endocrinológica (inicio 2ª-3ª década)

nadas, tiroides, etc., que induce daño tisular con fibrosis tes mellitus e hiperpigmentación cutánea (la llamada
e insuficiencia funcional y que puede evolucionar a cirro- “diabetes bronceada”). En estas series, la enfermedad
sis y hepatocarcinoma, diabetes mellitus, miocardiopatía, era más frecuente en los varones y se manifestaba
artropatía, hipogonadismo, hiperpigmentación cutánea e 10 años antes que en las mujeres, ya que las pérdidas
hipotiroidismo32. La enfermedad afecta a una entre 200- menstruales frenan la acumulación de hierro. En la ac-
400 personas del norte de Europa y aproximadamente tualidad, la mayoría de los pacientes están asintomáti-
entre la mitad y un tercio en el sur europeo (raza blanca: cos, y son diagnosticados por el hallazgo de resultados
0,44%; nativos americanos: 0,11%; hispanos: 0,027%; anormales del metabolismo férrico en análisis rutina-
raza negra: 0,014; asiáticos: 0,00004%)33. rios o mediante un cribado familiar. Cuando los pa-
cientes se identifican en estudios de cribado, la edad
de diagnóstico para varones y mujeres es similar.
2.3. Clínica
La enfermedad sintomática se caracteriza por una o
Las manifestaciones clásicas de la HH, descritas en varias de las siguientes manifestaciones: astenia, debi-
los estudios más antiguos, son cirrosis hepática, diabe- lidad, dolor en el cuadrante superior derecho abdomi-
Tema 25.  Anemia y hemocromatosis. Dieta controlada en hierro 417

nal, artralgias, condrocalcinosis, impotencia, disminu- una posterior confirmación mediante pruebas genéti-
ción de la libido y síntomas de insuficiencia cardiaca o cas y/o biopsia hepática, y debería realizarse antes del
diabetes mellitus34, 26. comienzo de la clínica típica para evitar lesiones tisula-
Entre los hallazgos de la exploración física destacan res irreversibles y potencialmente graves a pesar de un
hepatomegalia, hiperpigmentación cutánea, artritis tratamiento adecuado26.
(especialmente de la segunda y tercera articulación
metacarpofalángica), hipogonadismo con atrofia tes­ Diagnóstico bioquímico: Las dos pruebas básicas
ticular y alteraciones cardiacas26. son el índice de saturación de transferrina (IST) y la
El hígado es el órgano que primero y más constante- ferritina. La elevación (IST) es la alteración inicial de la
mente se afecta. Cursa con escasas alteraciones analíti- HH y la mejor técnica para un diagnóstico temprano,
cas, manteniéndose la función hasta fases muy avan- y es más sensible que la ferritina. Un IST superior al
zadas, pero suele terminar desarrollando cirrosis que 45% en los varones y al 40% en las mujeres identifica
no mejora tras el tratamiento, con alto riesgo de hepa- a todos los homocigotos, obligando a descartar una
tocarcinoma35 (en el 30%). Existe una mayor prevalen- HH. La ferritina sérica varía según la edad y el sexo, es
cia de aumento de transaminasas, hepatomegalia e un marcador de los depósitos de hierro y es sensible,
infecciones por los virus de hepatitis B y C. pero no específica. No se eleva hasta transcurridas las
La hiperpigmentación cutánea se detecta en el 70% primeras décadas de la vida, cuando existe un aumen-
en fases avanzadas y mejora con las flebotomías. to importante de los depósitos de hierro. Valores su-
La diabetes mellitus (DM) está presente en aproxi- periores a 300 ng/ml en varones y a 200 ng/ml en
madamente el 50% de los pacientes con HH que pre- mujeres pueden sugerir el diagnóstico de HH. La ferri-
sentan los síntomas. Esta complicación se debe a la tina sérica tiene una tasa elevada de resultados falsos
progresiva acumulación de hierro en el páncreas. El positivos debido a que se eleva en pacientes con otras
defecto parece ser relativamente selectivo para la célu- enfermedades crónicas inflamatorias o neoplásicas y
la beta. La secreción de péptido-C e insulina está redu- en hepatopatías con actividad necroinflamatoria,
cida, pero la función de las células alfa permanece in- como la enfermedad hepática alcohólica, la hepatopa-
tacta, como lo demuestra el aumento de los niveles de tía crónica por virus C, la hepatopatía crónica por virus
glucagón en suero similares a los observados en la B, el hígado graso no alcohólico, la porfiria cutánea
diabetes tipo 1. Los pacientes con DM y HH que re- tarda o el hipertiroidismo. De hecho, en general, la
quieren insulina pueden observar una disminución de sobrecarga de hierro no es la causa más común de un
requerimientos de ésta después de la eliminación de nivel de ferritina elevada.
hierro 37. Asimismo, la ferritina es un factor predictor de fibro-
La disfunción anterohipofisaria por acumulación de sis hepática y cirrosis en pacientes con HH, de forma
hierro ocasiona una disminución de hormona luteini- que niveles de ferritina sérica superiores a 1.000 μg/l
zante (LH) y hormona foliculoestimulante (FSH), con apoyan la existencia de cirrosis41. Unos niveles de ferri-
descenso de testosterona (hipogonadismo esencial- tina en suero superiores a 1.000 μg/l y/o una elevación
mente hipogonadotrófico)38, lo que origina alteracio- de transaminasas predicen la presencia de cirrosis en
nes menstruales, impotencia e infertilidad. También el 80% de los pacientes homocigotos C282Y, reco-
pueden verse afectadas el resto de las hormonas hipo- mendándose en este caso realizar biopsia hepática.
fisarias determinando un hipopituitarismo que, al igual En las cirrosis establecidas tanto la ferritina como el
que el hipogonadismo aislado, es irreversible. IST pierden especificidad.
La artropatía se manifiesta en el 25-50% de los pa-
cientes en fase avanzada por depósito de cristales de Estudio genético: Confirma el diagnóstico en un
pirofosfato cálcico, siendo su efecto irreversible. En paciente con sospecha de HH que presenta sobrecarga
ocasiones se presenta con dolores musculoesqueléticos férrica evidenciada por IST o ferritina elevadas, o con
que pueden mejorar con las flebotomías39. concentraciones de hierro elevadas en las biopsias he-
La cardiopatía aparece en el 30% de los casos en páticas. Solo la mutación C282Y con carácter homoci-
fases avanzadas, y se debe al hierro depositado en el goto y la H63D en estado heterocigoto combinada con
miocardio, produciendo alteraciones mitocondriales y la C282Y (genotipo C282Y/H63D) deberían considerar-
de la función celular. Cursa con insuficiencia cardiaca o se indicativos de HH. Supera las limitaciones que pue-
con arritmias ventriculares o supraventriculares. Mejo- den presentar el IST o los otros parámetros del hierro
ra tras el tratamiento. La ecocardiografía es el método influidos por el estado nutricional, pérdidas de sangre
más útil para la detección y el seguimiento40. u otros factores ambientales o genéticos26.

Biopsia hepática: Se debe realizar actualmente en


2.4. Diagnóstico
dos situaciones. Una con valor diagnóstico cuando exis-
El diagnóstico de sospecha de HH se basa en demos- te sospecha clínica o bioquímica y el estudio genético
trar la existencia de sobrecarga férrica en sangre para no es compatible con HH. Y otra con valor pronóstico
418 BLOQUE: METABOLISMO

IST
Ferritina

IST > 45%


IST < 45% y/o
Ferritina normal Ferritina elevada

Familiares de 1er
No precisa más Estudio genético grado de
evaluación del HFE pacientes con
HH

- C282Y/C282Y
- C282Y/H63D
- Heterocigoto C282Y
- HH no relacionada
con el gen HFE

HH tipo 1 HH tipo 1
Ferritina < 1000 ng/ml Ferritina > 1000 ng/ml
y ALT/AST normales o↑ ALT y/o AST
Excluir otras causas
hepáticas o hematológicas
de sobrecarga férrica
Flebotomías sin Biopsia hepática +/- Biopsia hepática
necesidad de para estudio diagnóstica (IHH) y con
biopsia hepática histopatológico e valor pronóstico
IHH

Flebotomías

IHH > 1,9 IHH < 1,9


IHH: índice hepático μmol/g/años* μmol/g/años*
de hierro


 mol de Fe/g de tejido
hepático seco/edad del Compatible con Otras causas
paciente en años HH diferente de de sobrecarga
la tipo 1 o férrica
mutaciones raras diferentes
del HFE de HH
Fuente: Bacon et al. Hepatology. 2011; 54:328-43.

Figura 1.  Algoritmo diagnóstico y terapéutico de la hemocromatosis hereditaria (HH).


Tema 25.  Anemia y hemocromatosis. Dieta controlada en hierro 419

cuando tenemos confirmación diagnostica genética y la fibrosis de diferentes hepatopatías. También ha de-
alta probabilidad de lesión hepática (fibrosis o cirrosis) mostrado su utilidad en la HH.
determinada por hepatomegalia, aumento de transami-
nasas o ferritina mayor de 1000 ng/ml. La biopsia hepá-
2.5. Tratamiento
tica se puede evitar en los homocigotos C282Y cuando
la ferritina es < 1.000 ng/ml y no existe elevación de El objetivo del tratamiento de la HH es reducir la so-
transaminasas, dado que en estos casos se puede prede- brecarga de hierro mediante flebotomías44, que son la
cir la ausencia de cirrosis26. terapia de elección y se deben instaurar de forma pre-
La fibrosis hepática suele ocurrir cuando hay entre coz, ya que reducen significativamente la morbilidad y
5-10 g de hierro acumulado, sobre todo si hay otros la mortalidad cuando se inician antes del desarrollo de
factores añadidos como alcoholismo o hepatitis vírica la cirrosis hepática y/o de la diabetes mellitus. Están
asociados. indicadas en pacientes con HH tipo 1 tanto asintomá-
ticos con marcadores bioquímicos de sobrecarga de
Estudio familiar y poblacional33, 26: Una vez que hierro, como sintomáticos (ya que el tratamiento va a
un paciente con HH se ha identificado (caso índice), se reducir la progresión del daño orgánico), y también en
recomienda realizar a padres y hermanos el estudio pacientes con criterios clínico-histológicos de HH no
tanto del genotipo (mutación HFE) como del fenotipo relacionados con el gen HFE. El resto de medidas,
(ferritina e IST). También se recomienda realizar el estu- como las dietéticas, son secundarias pero pueden ayu-
dio genético al cónyuge de dicho caso índice, y si este dar a controlar la enfermedad y reducir el número de
es portador sano, proceder al análisis genético de to- flebotomías. Se suele efectuar una sangría de 500 ml
dos los hijos, ya que tienen un 50% de riesgo de here- semanalmente (equivalente a unos 250 mg de hierro)
dar la mutación en homocigosis. Ante un paciente ho- hasta que la ferritina se mantenga entre 50-100 ng/
mocigoto C282TY/C282Y y un cónyuge no portador se ml26, y el IST menor del 45%. Para ello, en el varón
puede deducir que todos los hijos son portadores hete- suele ser necesario extraer unos 5 g de hierro y en la
rocigotos (C282Y/normal­) no enfermos. Si el cónyuge mujer 3 g, aunque puede haber pacientes donde el
es portador sano en heterocigosis (C282Y/normal­) el acúmulo de hierro es mayor de 30 g La hemoglobina
50% de los hijos serán homocigotos C282TY/C282Y, debe determinarse semanalmente, el IST y la ferritina
teniendo un riesgo muy elevado de desarrollar la enfer- cada 2 o 3 meses. No todos los pacientes con HH rea-
medad (según penetrancia 70%) y por lo tanto será cumulan hierro de igual modo, por lo que la frecuencia
necesario determinar el IST y la ferritina sérica anual- de las flebotomías de mantenimiento varía en cada pa-
mente. El otro 50% serán portadores sanos heteroci- ciente. En algunos casos se consigue con 2 o 3 anuales
gotos (C282Y/normal­). en el varón y 1 o 2 en la mujer, y en otros es necesario
Para el cribado poblacional tiene menos valor el es- realizarlas mensualmente.
tudio genético, dado que la penetrancia es incompleta Si el paciente no tolera el ritmo de las flebotomías,
(70%), hay casos de HH hereditarias sin mutaciones estas se deben espaciar o disminuir a 250-300 ml, y si
detectables y además sería muy costoso. Por ello, en presenta anemia asociada se puede valorar el uso de
principio se realizaría el IST y ferritina en varones a par- eritropoyetina recombinante humana. En los niños se
tir de los 30 años y en mujeres a los 40, identificando debe esperar hasta la edad adulta para realizar fleboto-
candidatos, en su mayoría asintomáticos, para poste- mías, excepto si la ferritina es mayor de 300 ng/ml. Y
riormente valorar la realización de estudio genético. en el embarazo, si la ferritina está elevada, las fleboto-
mías deberían retrasarse hasta después de la gestación
Estudios de imagen: Resonancia magnética. Es el a menos que exista daño hepático o cardiaco significa-
mejor método diagnóstico no invasivo debido a las tivo, en cuyo caso se deberá valorar el riesgo/beneficio
propiedades paramagnéticas del hierro que permiten por parte de un especialista experimentado25.
cuantificar la concentración de hierro hepático. Puede La realización de flebotomías es seguida de una me-
confirmar el diagnóstico, es capaz de distinguir entre la joría del dolor abdominal, de la astenia, de los requeri-
HH primaria y las formas secundarias de sobrecarga mientos de insulina, de la hiperpigmentación de la piel,
férrica, puede determinar la gravedad de la lesión y de la cardiopatía, de la supervivencia y de la fibrosis
monitorizar el efecto del tratamiento, con la ventaja hepática, que en algunos casos puede llegar a desapa-
añadida de poder detectar lesiones neoplásicas peque- recer. Otras manifestaciones no mejoran, como la atro-
ñas hepáticas42. Además, aporta información sobre el fia testicular, la artropatía y la cirrosis avanzada. La rea-
grado de fibrosis, pero únicamente tiene utilidad en lización de flebotomías antes del desarrollo de fibrosis
este aspecto cuando la biopsia hepática está contrain- avanzada es una estrategia importante para prevenir el
dicada43. carcinoma hepatocelular, ya que si el paciente ha desa-
rrollado cirrosis hepática tiene un riesgo aumentado de
Elastografía: Se ha introducido en los últi­mos años presentar dicha neoplasia, y debe someterse a progra-
como un método no invasivo eficaz en la valora­ción de mas de vigilancia45. El carcinoma hepatocelular repre-
420 BLOQUE: METABOLISMO

senta aproximadamente el 30% de las muertes relacio- de otros alimentos. Sin embargo, no se debe abu-
nadas con HH, mientras que las complicaciones de la sar de aquellas frutas y verduras ricas en vitamina
cirrosis hepática determinan el 20%, por lo que en am- C46, como cítricos, fresas, kiwis, papayas, guaya-
bas situaciones existe indicación de trasplante hepático. bas, grosellas negras, baya del acerola, kakadu,
El tratamiento con quelantes del hierro como la de- brócoli, col de Bruselas o pimientos.
feroxamina se recomienda cuando la flebotomía no se • Alimentos ricos en fitatos (presentes en granos y
tolera o está contraindicada, por ejemplo, en pacientes legumbres), oxalatos, magnesio y compuestos fe-
con insuficiencia cardiaca severa o anemia. También la nólicos, principalmente taninos, presentes en el
deferoxamina y el deferasirox están indicados en deter- café y el té pueden ayudar a disminuir la absorción
minadas formas de sobrecarga férrica como talasemia intestinal del hierro no hemo. La ingesta de té ne-
mayor dependiente de transfusiones, porfirias o ane- gro en las comidas reduce el número de fleboto-
mia hemolítica crónica. mías50. Por otra parte, el extracto de té verde tam-
Debemos tratar también las complicaciones propias bién es un potente quelante del hierro. En
de la enfermedad como la diabetes, la insuficiencia car- individuos con daño hepático no se recomienda el
diaca, la artritis, el hipogonadismo o el hipopituitarismo. consumo excesivo de taninos.
• Una dieta rica en fibra disminuye la absorción in-
2.6.  Objetivos nutricionales testinal de hierro no hemo. Se recomienda un
aporte aproximado de 40 g al día, coincidiendo
Como ya se ha remarcado, el tratamiento básico de
con la ingesta de alimentos que contengan hierro.
la hemocromatosis hereditaria son las flebotomías. Las
• Vitamina E. Agente antioxidante cuyos niveles es-
recomendaciones dietéticas pueden ayudar a evitar
tán disminuidos en pacientes con hemocromato-
complicaciones graves e incluso potencialmente mor-
sis hereditaria y en la sobrecarga férrica adquirida.
tales de la enfermedad, como se detallará a continua-
El exceso de hierro aumenta la formación de radi-
ción, y a reducir el número de flebotomías46, pero de
cales libres aumentando el riesgo de neoplasias y
ninguna forma las sustituirán.
enfermedades cardiacas. La suplementación con
vitamina E (200 mg/día) puede reducir la actividad
2.7. Dietética de los radicales libres en un 50%51. La vitamina C
• Evitar la toma de suplementos con hierro: farmaco- es un potente antioxidante, pero su consumo está
lógicos o complejos vitamínicos que lo contengan. restringido, como se ha descrito anteriormente.
• Disminuir el consumo de alimentos ricos en hie- • Dieta hiperproteica para compensar las pérdidas
rro, especialmente los que contienen la forma que se producen en las flebotomías y siempre que
hemo (carnes rojas, órganos, vísceras) y alimentos no exista insuficiencia hepática avanzada. Se reco-
fortificados (por ejemplo, cereales enriquecidos mienda tomar leche, queso y clara de huevo, que
con hierro) (véase la tabla 3). son ricos en proteínas y calcio, y pobres en hierro.
• La concentración de vitamina C no debe superar • Evitar el marisco crudo, ya que puede contener la
los 200 mg/día y es aconsejable separar su ingesta bacteria Vibrio vulnificus, que puede resultar mor-
de las principales comidas47. tal en personas con altos niveles de hierro52. Tam-
• Prohibir la ingesta de alcohol. Para disminuir la bién hay que tener precaución de no caminar des-
absorción de hierro y no empeorar las lesiones he- calzo por playas por riesgo de heridas con conchas
páticas48. que pudieran contener la bacteria47.
• Reducir significativamente el consumo de alimentos • En fases de insuficiencia hepática es necesario em-
ricos en grasas animales, dado que en combinación plear un soporte nutricional específico (véase el
con un exceso de hierro pueden generarse radicales bloque de proteínas y aminoácidos).
libres con destrucción celular y daño del ADN47. • Aparte de las recomendaciones dietéticas, se
• Evitar bebidas y comidas azucaradas que aumen- aconseja evitar cocinar con utensilios fabricados
tan la absorción de hierro47. con hierro (ollas, sartenes, etc.), ya que pueden
• Utilizar calcio para disminuir la absorción de hie- desprender cierta cantidad de residuo férrico a los
rro hemo. Una ingesta de 300 mg de calcio con alimentos.
las comidas puede disminuir la absorción de hie-
rro hasta en un 40%49. Dosis mayores a 300 mg
2.8. Pronóstico
no han demostrado una reducción adicional.
• Consumir frutas y verduras, ya que suelen conte- Los pacientes no tratados y con complicaciones en
ner poca cantidad de hierro no hemo, de baja órganos vitales tienen una supervivencia a los 5 y 10
absorción y son ricas en fibra y antioxidantes, años tras el diagnóstico de solo el 18% y el 6%, respec-
los cuales inhiben la producción de radicales li- tivamente. Si el tratamiento con flebotomías comienza
bres. Las espinacas, por ejemplo, contienen oxala- antes de la aparición de daño en órganos vitales, la su-
tos que dificultan la absorción del hierro propio y pervivencia es casi similar a la de la población general.
Tema 25.  Anemia y hemocromatosis. Dieta controlada en hierro 421

El 15-30% de los pacientes fallecen por hepatocarcino-   8. Reynolds, RD, Binder, HJ, Miller, MB, et al. Pago-
ma secundario a cirrosis hepática. Por ello se recomien- phagia and iron deficiency anemia. Ann Intern
da determinar la alfa-fetoproteína y realizar una eco- Med 1968; 69:435.
grafía hepática una vez al año. El alcohol y la infección   9. American College of Obstetricians and Gynecolo-
por el virus de las hepatitis B y C aumentan el riesgo. gists. ACOG practice bulletin no. 95: anemia in
pregnancy. Obstet Gynecol. 2008; 112(1): 201-
207.
2.9. Resumen
10. Brabin, BJ, Hakimi, M, Pelletier, D. An analysis of
La HH engloba varios trastornos caracterizados por un anemia and pregnancy-related maternal mortality.
aumento de la absorción intestinal de hierro, y una acu- J Nutr 2001; 131:604S.
mulación posterior en los tejidos. La mayoría de los pa- 11. Halterman, JS, Kaczorowski, JM, Aligne, CA, et al.
cientes (aproximadamente el 90%) con HH tienen muta- Iron deficiency and cognitive achievement among
ciones en el gen HFE. Aproximadamente el 95% de las school-aged children and adolescents in the uni-
personas con HH con mutación HFE son homocigotos ted states. Pediatrics 2001; 107:1381.
para la mutación C282Y. Estudios poblacionales indican 12. Baker RD, Greer FR; Committee on Nutrition, Ame-
que la mutación C282Y tiene una penetrancia incompleta. rican Academy of Pediatrics. Diagnosis and pre-
Las mutaciones en los genes relacionados con el hierro vention of iron deficiency and iron-defi­ciency ane-
que codifican la hemojuvelina, hepcidina, ferroportina, re- mia in infants and young children (0-3 years of
ceptor de transferrina 2 y la ferritina constituyen las HH no age). Pediat­rics. 2010; 126(5):1040-1050.
relacionadas con el gen HFE. En HH-HFE el exceso de hie- 13. Howell, JT, Monto, RW. Syndrome of anemia, dys-
rro se deposita preferentemente en el citoplasma de las phagia and glossitis (Plummer Vinson syndrome).
células de los múltiples órganos, incluyendo el hígado, N Engl J Med 1953; 249:1009.
páncreas, corazón, glándulas endocrinas, piel y articula- 14. Maguire, JL, deVeber, G, Parkin, PC. Association
ciones. Los síntomas están relacionados con el daño de between iron-deficiency anemia and stroke in
estos órganos. El diagnóstico incluye estudios del metabo- young children. Pediatrics 2007; 120:1053.
lismo del hierro, pruebas genéticas y biopsia hepática para 15. Van Vranken M. Evaluation of microcytosis. Am
evaluar la concentración de hierro hepático y el grado de Fam Physician. 2010; 82(9):1117-1122.
lesión. Las flebotomías previenen y revierten la acumula- 16. Skikne BS, Punnonen K, Caldron PH, et al. Impro-
ción del exceso de hierro, siendo el tratamiento de elec- ved differential diagno­sis of anemia of chronic di-
ción. Las recomendaciones dietéticas pueden ayudar a re- sease and iron deficiency anemia: a prospec­tive
ducir el número de estas y a evitar complicaciones graves multicenter evaluation of soluble transferrin recep-
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Tema 26. 
Enfermedad de Wilson. Dieta controlada en cobre
Alejandro Sanz París
Jefe de Sección de Endocrinología y Nutrición, Servicio de Endocrinología y Nutrición. Unidad de
Nutrición y Dietética. Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza

Diana Boj Carceller


Médico especialista en Endocrinología y Nutrición, Servicio de Endocrinología y Nutrición. Unidad de
Nutrición y Dietética. Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza

Beatriz Lardies Sánchez


Médico especialista en Endocrinología y Nutrición, Servicio de Endocrinología y Nutrición. Unidad de
Nutrición y Dietética. Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza

Isabel Azcona Monreal


Médico Interno Residente en Endocrinología y Nutrición, Servicio de Endocrinología y Nutrición.
Unidad de Nutrición y Dietética. Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 423-435.

 1. Introducción
 2. Funciones
 3. Metabolismo normal del cobre
 4.  Evaluación de la reserva de cobre en el organismo
 5.  Ingesta recomendada
 6.  Fuentes alimenticias
 7.  Mutación del gen ATP7A
 8. Mutación del gen ATP7B: Enfermedad de Wilson
 9.  Resumen y conclusiones
10. Bibliografía

1. Introducción cobre, pero hasta 1962 no se describió por primera


vez la enfermedad de Menkes.
El cobre es un metal rojizo que se encuentra de
Ambas enfermedades son defectos genéticos del
forma natural en el suelo, rocas, agua, sedimentos y,
metabolismo del cobre que afectan a un grupo muy
en niveles bajos, incluso en el aire. Su uso terapéutico
reducido de la población. Pero existen otras situa-
se conoce ya desde la época de Hipócrates, que pres-
cribía compuestos de cobre para enfermedades pul- ciones en las que podemos encontrar riesgo de toxi­
monares. En el siglo xix llega su utilización a su máxi- cidad. En bajas concentraciones en la dieta es un
mo esplendor cuando se asoció su déficit con la elemento esencial para todos los organismos, inclu-
aparición de anemia resistente al hierro en ratas con yendo a los seres humanos. A niveles mucho más
dieta exclusiva de leche. Posteriormente, en 1912 altos puede producir efectos tóxicos. El cobre puede
se describió por primera vez una enfermedad huma- entrar al organismo con la ingestión de agua o la
na relacionada con el metabolismo del cobre: la en- inhalación de polvo en un ambiente contaminado
fermedad de Wilson (EW). Pronto se observó una re- por una industria cercana, alimentos contaminados,
lación entre la anemia en humanos y el déficit de plaguicidas, etc. Otra situación de riesgo la consti-

423
424 BLOQUE: METABOLISMO

tuyen los procesos que cursan con limitada excre- de cobre se asocia con depósitos de hierro en la luz
ción biliar, con su consiguiente acumulación en el intestinal y el hígado4.
hígado.
Por el contrario, existen situaciones en las que existe 2.3.  Sistema nervioso central
riesgo de déficit de cobre como son la nutrición paren-
teral total de larga duración o pacientes con pérdidas Se requiere para la formación y mantenimiento de la
elevadas de cobre por diarreas o fístulas asociadas a mielina por su riqueza en fosfolípidos. La síntesis de es-
malabsorción intestinal. La toma prolongada de anti­ tos fosfolípidos requiere de la actividad de la citocromo
ácidos o de dosis altas de zinc también puede asociarse c oxidasa, que es una enzima que contiene cobre. Esta
a niveles plasmáticos bajos de cobre1. enzima, presente en la mitocondria, participa en la ca-
dena de transporte de electrones, de forma que reduce
el oxígeno para formar agua y así permite la formación
2. Funciones
de adenosina trifosfato (ATP). Su actividad es alta en el
El cobre es un oligoelemento esencial en la dieta del corazón, cerebro, hígado y riñón. Se considera una de
hombre y se encuentra presente en el organismo en las enzimas más importantes del organismo porque es
100 a 150 mg, y el 90 % de esta cantidad se encuentra un paso limitante del transporte de electrones. Este me-
en músculos, huesos e hígado. canismo puede explicar la causa por la que en el déficit
Como el hierro, participa en la síntesis de la he- de cobre se produce una pobre mielinización, necrosis
moglobina y es fundamental para el desarrollo y de los tejidos neurales y ataxia neonatal5.
mantenimiento de huesos y tejido elástico como Además, existen otras enzimas que contienen cobre,
tendones, tejido conectivo así como del sistema que intervienen en el metabolismo de los neurotrans-
vascular2. misores del sistema nervioso central. La dopamina
La mayoría de sus funciones las deducimos de las beta-hidroxilasa es una enzima que cataliza la con-
reacciones que catalizan las enzimas que contienen co- versión de dopamina en norepinefrina en el cerebro
bre (cuproenzimas) y otras de los síntomas observados (fundamentalmente en la sustancia gris) y en epinefri-
en los casos publicados del déficit de cobre3. na en la glándula adrenal. La monoaminooxidasa se
relaciona con la inactivación de catecolaminas median-
2.1.  Formación del tejido conectivo te la degradación de serotonina, norepinefrina, tirami-
na y dopamina. Esta enzima se inhibe por los fármacos
El cobre forma parte de varias enzimas del sistema antidepresivos tricíclicos.
aminooxidasa, cuya actividad se incrementa cuando
existe un aumento de la síntesis y deposición del tejido
conectivo, como en la fibrosis hepática, insuficiencia 2.4.  Formación de melanina
cardiaca congestiva, hipertiroidismo, crecimiento y se- El papel del cobre en la pigmentación de la piel, pelo
nectud. La lisiloxidasa en una amino oxidasa que deter- y ojos se relaciona con la actividad de otra cuproenzi-
mina la formación de lisina para la síntesis de elastina y ma: la tirosinasa, fundamental para la síntesis de me-
colágeno de tejido conectivo como hueso, dientes, va- lanina. Esta enzima cataliza la conversión de tirosina a
sos sanguíneos, piel o pulmón. Asimismo, juega un dopamina y la oxidación de dopamina a dopaquinona,
papel fundamental en la mineralización en la integri- pasos todos ellos necesarios para la síntesis de melani-
dad del tejido conectivo del corazón y de todo el siste- na. Su déficit produce albinismo y explica la despig-
ma vascular. Su concentración es mayor durante el mentación de piel y pelo que se observa en el déficit de
desarrollo y crecimiento. Su actividad se incrementa cobre.
con el tratamiento crónico de estrógenos y disminuye
en las neoplasias. 2.5.  Protección contra el daño oxidativo
2.2.  Metabolismo del hierro La enzima superóxido dismutasa es otra cuproen-
zima que se caracteriza por su función protectora con-
Se han propuesto varios mecanismos para explicar tra el daño oxidativo mediante su actividad al convertir
el papel del cobre en la eritropoyesis y el metabolismo los iones superóxidos en peróxido de hidrógeno.
del hierro. La ceruloplasmina, también llamada fe-
rroxidasa I, es una glicoproteína que contiene siete
2.6.  Otras funciones
átomos de cobre por molécula. La mayor parte del
cobre plasmático está unido a la ceruloplasmina. Esta Existen varias cuproenzimas diaminooxidasa en dife-
enzima cataliza la oxidación del hierro ferroso y juega rentes células del organismo. La diaminooxidasa inacti-
un papel en el transporte del hierro desde la luz del va la histamina, tanto en el intestino delgado, con la
tubo digestivo y sus depósitos a la médula ósea, don- consiguiente disminución de la secreción ácida, como
de tiene lugar la síntesis de hemoglobina. Esto explica en todo el organismo relacionado con las reacciones
por qué la anemia que se desarrolla durante el déficit alérgicas.
Tema 26.  Enfermedad de Wilson. Dieta controlada en cobre 425

3.  Metabolismo normal del cobre de cobre y ceruloplasmina se reducen claramente por
debajo de los límites normales en las situaciones de dé-
La absorción del cobre tiene lugar principalmente en ficit y responden rápidamente a su suplementación. Los
el duodeno, aunque también puede producirse en el niveles plasmáticos de ceruloplasmina se han considera-
estómago y en regiones distales del intestino delgado. do de manera clásica como los mejores indicadores de
En total, se absorbe entre el 25 % y el 60 % del cobre los depósitos de cobre, pero también es un reactante de
aportado. Esta amplia variabilidad depende de varios fase aguda, por lo que nos podemos encontrar niveles
factores como el contenido en fibra de la dieta, los fi- plasmáticos altos tanto de cobre como de ceruloplasmi-
tatos, así como las altas ingestas de hierro, molibdeno na en una serie de situaciones patológicas, que pueden
y zinc. Además, la riqueza de cobre de una dieta tam- enmascarar un déficit real de cobre. En la tabla 1 pre-
bién influye en su capacidad de absorción. Cuando el sentamos los diferentes test analíticos con los niveles
cobre dietético aumenta, la fracción absorbida des- diagnósticos, así como las situaciones en las que au-
ciende, aunque la cantidad total que se ingiera sea alta mentan y disminuyen10.
y viceversa. Por ejemplo, la absorción con una dieta Durante el embarazo aumentan las concentraciones
con 0,8 mg de cobre al día es del 56 % y disminuye al plasmáticas de ceruloplasmina, así como con el uso de
12 % si la cantidad de cobre dietético asciende a anticonceptivos orales. También se observan concen-
7,5 mg/día, aunque la cantidad total de cobre que se traciones de cobre elevadas en los pacientes con infla-
absorbe asciende de 0,44 a 0,93 mg6. mación, postoperatorio, infecciones agudas o cróni-
El cobre entra en el enterocito a través del transporta- cas, enfermedades hepáticas, hematológicas, renales o
dor CTR1, facilitado por reductasas de la membrana api- neoplásicas y la pelagra. Además, cualquier enferme-
cal del enterocito. En el citoplasma del enterocito el co- dad que interfiera con la eliminación biliar puede oca-
bre se une a pequeñas proteínas, chaperonas que lo sionar un aumento de las concentraciones hemáticas
transportan hasta su unión a distintas enzimas. La cha- de cobre.
perona ATOX1 cede el cobre a la ATP7A, para su incor-
poración al aparato de Golgi y participación en la síntesis
de proteínas. Al aumentar los niveles de cobre en la célu- 5.  Ingesta recomendada
la, la ATP7A cambia su localización a la membrana baso- El Consejo de Nutrición y Alimentos del Instituto
lateral del enterocito, para facilitar la secreción al sistema de Medicina recomienda una ingesta diaria (RDI) de
venoso portal. Las mutaciones en el gen ATP7A (Xq21.1) 340 µg/día de cobre para niños de 1 a 3 años de edad,
que la codifica, causan la pérdida de la función ATPasa, y 440 µg/día para niños de 4 a 8 años de edad, 700 µg/
son responsables de la enfermedad de Menkes7, 8. día para niños de 9 a 13 años de edad, 890 µg/día para
El cobre circula por la vena porta unido en un 95 % a la niños de 14 a 18 años de edad y 900 µg/día para adultos.
ceruloplasmina y el resto a albúmina y a histidina hasta En embarazadas se eleva a 1.000 µg/día y a 1.300 µg/día
alcanzar el hígado, donde se capta por el transportador durante la lactancia. El consumo promedio de los adultos
de membrana CTR1. En el interior del hepatocito, el cobre en los EE UU está entre 2,5 y 5 mg.
se puede almacenar unido a metalotioneinas o bien in- El nivel máximo tolerable (UL) para el cobre no está
corporarse a enzimas como la superóxido dismutasa o al determinado en lactantes y es de 1.000 µg/día de co-
citocromo C oxidasa gracias a las chaperonas. La chape- bre para niños de 1 a 3 años, 3.000 µg/día para niños
rona ATOX1 cede el cobre al ATP7B, que la introduce en de 4 a 8 años de edad, 5.000 µg/día para niños de 9 a
el aparato de Golgi a los lisosomas, que excretarán el co- 13 años de edad, 8.000 µg/día para niños de 14 a 18
bre sobrante por exocitosis a la bilis. Las mutaciones del años de edad y 10.000 µg/día para adultos, así como
gen ATP7B (13q14.3) producen un defecto de la elimina- embarazadas y mujeres durante la lactancia11.
ción de cobre por la vía biliar conduciendo a su anormal
acumulación en los tejidos, dando lugar a la EW9.
6.  Fuentes alimenticias
La cantidad de cobre ingerido y absorbido diariamente
excede a las necesidades del organismo. El balance se El cobre se encuentra ampliamente distribuido en los
mantiene por la secreción biliar, que es el mecanismo alimentos, en especial en los productos de origen ani-
fundamental de eliminación de cobre del organismo. En mal excepto la leche, de manera que es fácil cubrir las
condiciones fisiológicas la cantidad de cobre eliminada necesidades diarias de 340 a 1.000 µg/día. El agua de
por la orina es despreciable. bebida contiene generalmente 0,1 mg/l. Si se acepta
esta concentración como típica en el agua potable,
4. Evaluación de la reserva de cobre esta podría contribuir a la nutrición entre un 6 y un
10 % de las necesidades diarias de cobre. No obstante,
en el organismo
algunas aguas contienen niveles más elevados e inclu-
Los niveles de cobre en plasma se determinan me- so se han encontrado contribuciones del 40 %12.
diante absorción atómica, siendo sus valores normales Los alimentos más ricos en cobre son las ostras, las
para adultos de 80 a 155 µg/dl. Los niveles plasmáticos vísceras animales (hígado, riñones, etc.), el chocolate,
426 BLOQUE: METABOLISMO

Tabla 1.  Resumen de test diagnósticos de enfermedad de Wilson (EW).

Test Diagnóstico Falso negativo Falso positivo


Ceruloplasmina Disminución 50 % Nivel normal en pacientes con Niveles bajos en:
plasmática del valor normal inflamación hepática severa · Malabsorción
bajo Niveles elevados en: inflamatoria, · Aceruloplasminemia familiar
anemia aplásica, carcinomas, · Heterocigotos de EW
tratamiento con estrógenos, · Síndrome nefrótico
linfoma Hodgkin, embarazo · Trastornos neuropsiquiátricos
· Cirrosis
· Hipoproteinemias severas
Cupruria 24 h > 1,6 µmol/24 h Normal en: Niveles elevados:
> 0,64 µmol/24 h · Recoleccion de orina incorrecta · Necrosis hepatocelular
en niños · Niños sin enfermedad hepática · Colestasis
· Contaminación de la muestra
Cobre libre > 1,6 µmol/l Normal si ceruloplasmina
serico sobreestimada por RIA
Cobre < 5 µmol/dl Niveles bajos: Niveles elevados:
plasmático · EW · Ictericia obstructiva
· Síndrome nefrótico (por carencia · Hemocromatosis
de ceruloplasmina · Hipertiroidismo
· Hipotiroidismo · Hemopatías malignas: linfomas,
· Quemaduras extensas leucosis, Hodgkin
· Kwashiorkor · Enfermedades del colágeno: lupus,
· Esprúe fiebre reumática, artritis reumatoide
· Enfermedad celíaca · Infecciones graves
· Hipersideremia · Intoxicaciones
· Espondiloartritis anquilopoyética · Anemias hipocrómicas
· Asma bronquial
Cobre hepático > 4 µmol/g de peso Debido a variaciones regionales: Síndromes colestáticos
seco · En pacientes con enfermedad
hepática
· En pacientes con nódulos
regenerativos
Anillo Kayser- Presente Ausencia: Cirrosis biliar primaria
Fleischer · En > 50 % de los pacientes con
EW hepática
· En la mayoría de los hermanos
asintomáticos

los frutos secos y la carne. En la tabla 2 presentamos la aparece hipotonía y convulsiones. Además, presentan
composición en cobre de los diferentes grupos de ali- cambios característicos del cabello (corto, escaso,
mentos13. grueso, torcido y a menudo ligeramente pigmentado).
En España, los alimentos dietéticos para usos médi- La muerte ocurre generalmente a la edad de tres años.
cos especiales deben aportar un mínimo de 60 µg y un Los niveles de cobre y ceruloplasmina plasmáticos es-
máximo de 500 µg por cada 100 kcal. tán muy bajos. El tratamiento consiste en administrar
cobre subcutáneo desde el nacimiento, aunque con
7.  Mutación del gen ATP7A14 resultados discordantes15.

7.1.  Enfermedad de Menkes 7.2.  Síndrome del cuerno occipital


Los bebés al nacer parecen saludables hasta la edad Se caracteriza por «cuernos occipitales», calcifica­
de dos a tres meses, en que se frena su desarrollo y ciones distintivas en forma de cuña en la unión del
Tabla 2.  Contenido en cobre de algunos grupos de alimentos.

Carne Pescado Frutos


Cereal Cu Lácteos Cu Pastelería Cu Verdura Cu Cu Cu Frutas Cu Bebidas Cu Cu
Huevo Marisco secos

Arroz 30 Cuajada 63 Bizcocho 40 Acelgas 250 Bacón 60 Almeja, 343 Melón 60 Café 7 Almendra 1 107
blanco chirla

Pan de 270 Queso 75 Cacao en 1 100 Setas 111 Buey, 130 Anchoas 210 Melocotón 67 Cerveza 8 Avellanas 1 530
trigo molde fresco polvo bistec, rubia
integral graso

Pan de 150 Queso 1 170 Chocolate, 400 Alcachofas 60 Butifarra, 140 Salmón 76 Manzana 31 Ginebra 4 Cacahuete 670
trigo molde emmental con leche salchicha
blanco fresca

Cereal 320 Helado 0 Donut, 120 Tomate 77 Cerdo, 160 Trucha 110 Cerezas 95 Ron 50 Castañas 450
chocolate lácteo croisant lomo

Pan de 320 Leche de 17 Galleta 120 Berenjena 112 Foie-gras 390 Atún 130 Ciruelas 40 Té 10 Nueces, 2250
trigo vaca entera «María» piñones
integral

Pan de 170 Leche de 10 Madalena 290 Espinacas 128 Jamón york 100 Atún en 70 Peras 113 Vino de 30 Pipas de 164
trigo vaca semi lata, mesa girasol
blanco

Tapioca 60 Leche 40 Galleta 160 Espárragos 100 Pollo 70 Bacalao 28 Fresas 48 Whisky 20
condensada salada fresco

Frostis 210 Yogurt 9 Mermeladas 100 Lechuga 30 Huevo, 66 Bacalao 176 Higos 70 Aceite 0
natural entero seco oliva

Macarrones 150 Leche 2 Suizo 200 Puré de 137 Salchichón 50 Sardina 187 Higos 312 Aceite 0
de vaca patata en lata secos girasol
descremada

Sémola 189 Flan 15 Churro 140 Cardo N Ternera, 2 822 Mejillón 94 Melocotón 51
Tema 26.  Enfermedad de Wilson. Dieta controlada en cobre

hígado en almíbar
427

Se expresan en microgramos de cobre por 100 gramos de porción comestible de alimento y en crudo.
428 BLOQUE: METABOLISMO

músculo trapecio y el esternocleidomastoideo con el presentar en cualquier grupo étnico. Este trastorno
hueso occipital. Los cuernos occipitales pueden ser clí- aparece más comúnmente en personas menores de
nicamente palpables u observarse en radiografías cra- 40 años y, en los niños, los síntomas comienzan a ma-
neales. También tienen laxitud de la piel y articulacio- nifestarse alrededor de los 4 años de edad y consisten
nes, divertículos de la vejiga, hernias inguinales y en síntomas hepáticos, neurológicos o psiquiátricos,
tortuosidad vascular. El intelecto es normal o ligera- con trastornos de la conducta18.
mente reducido. Los niveles de cobre y ceruloplasmina En la tabla 3 se resumen las recomendaciones basa-
plasmáticos están bajos, por lo que el tratamiento po- das en la evidencia de la Asociación Americana para el
dría ser administrar cobre subcutáneo desde el naci- Estudio del Hígado (AASLD)19 y de la Asociación Euro-
miento, pero sin evidencia16. pea para el Estudio del Hígado (EASL).10

7.3.  Neuropatía distal relacionada con ATP7A 8.2. Diagnóstico


Es un trastorno de aparición en adultos parecido a la La EW en sus principios es asintomática. Sus prime-
enfermedad de Charcot-Marie-Tooth, con neuropatía ros síntomas son fatiga, ausencia de menstruación en
motora distal progresiva con síntomas sensoriales mí- mujeres premenopáusicas o abortos espontáneos re-
nimos y atrofia en los pies y las manos con ocasionales petidos e inexplicables. En etapas más avanzadas pue-
deformidades de pie cavus. Los niveles de cobre y ceru- den presentarse dolores de cabeza, temblores, falta de
loplasmina plasmáticos están normales. El tratamiento coordinación en los movimientos de las extremidades,
es solo sintomático17. marcha vacilante, disfagia y dolor en las articulaciones.
También pueden presentarse patrones de pensamiento
8. Mutación del gen ATP7B: Enfermedad y comportamientos extraños.
de Wilson Según el curso clínico presenta cuatro estadios:20

También llamada degeneración hepatolenticular, la •  Estadio 1: El cobre se acumula en el citosol y los


enfermedad de Wilson (EW) es un trastorno heredita- liposomas de los hepatocitos. Paciente asintomá-
rio que cursa con una disminución de la excreción biliar tico.
de cobre y origina una acumulación progresiva de este •  Estadio 2: Al saturarse los hepatocitos el cobre es
metal en prácticamente todos los tejidos del organis- liberado a la circulación, redistribuyéndose en
mo, especialmente en el hígado, el cerebro, la córnea y todo el organismo. El curso clínico continúa sien-
los riñones. do silente.
Se debe a una mutación del gen ATP7B en el cromo- •  Estadio 3: La acumulación de cobre en todos los
soma 13, que codifica el transportador del cobre P-tipo tejidos producen cirrosis y disfunción neurológi-
ATP, que se encuentra en el aparato de Golgi del hepa- ca, oftalmológica y renal. Si se realiza el trata-
tocito. El ATP7B es el responsable del transporte del miento correcto en este estadio y se normalizan
cobre desde las proteínas chaperonas intracelulares a los niveles de cobre, se pueden resolver los sín-
la vía secretora tanto para la excreción biliar como para tomas.
su incorporación a la apoceruloplasmina para la sínte- •  Estadio 4: El daño tisular es irreversible.
sis de la ceruloplasmina funcional.

8.1.  Causas, incidencia y factores de riesgo 8.3.  Síntomas y signos


Las manifestaciones clínicas se relacionan con el de-
La padece únicamente la población homozigota, y
pósito gradual y progresivo del cobre en los tejidos22.
afecta a ambos sexos. En caso de que ambos padres
porten un gen anormal para la EW, hay un 25 % de
posibilidades de que cada uno de los hijos desarrolle el Típicos síntomas neurológicos:
trastorno.
La EW es un trastorno hereditario poco común, •  Expresión anormal de la cara, babeo, disfagia, di-
que está incluido en el listado de enfermedades ra- sartria y movilidad ocular alterada.
ras. Su prevalencia como enfermedad es de 1/ •  Temblores y otros movimientos involuntarios.
40.000, es decir 25 casos por millón de habitantes. •  Distonía, rigidez, postura o marcha anómalas.
La afectación para los portadores sanos heterocigo- •  Pérdida de la coordinación de movimientos, difi-
tos es mucho más frecuente y puede llegar a 1 de cultad con movimientos rápidos y alternativos.
cada 90-100. •  Micro o macrografía.
Dicha enfermedad presenta una distribución univer- •  Bradicinesia.
sal, aunque es más común en los países de Europa •  Otros síntomas que se pueden presentar ocasio-
oriental, Sicilia y la parte sur de Italia, aunque se puede nalmente: dolores de cabeza o convulsiones.
Tema 26.  Enfermedad de Wilson. Dieta controlada en cobre 429

Tabla 3. Recomendaciones basadas en la evidencia de la AASLD y EASL


Recomendación AASLD 2008 EASL 2012
Se debería considerar la EW en toda persona entre 3 y 55 años con anomalías hepáticas de causa no filiada. Mayor edad no debería Clase I, Nivel B Clase I, Nivel B
ser razón para descartarla.
Se debe descartar la EW en todo paciente con hepatopatía no filiada asociada a afectación neurológica o neuropsiquíatrica. Clase I, Nivel B Clase I, Nivel B
En los pacientes que se sospecha EW se debería descartar anillo de Kayser-Fleischer, pero su ausencia no excluye el diagnóstico, Clase I, Nivel B Clase I, Nivel B
incluso en pacientes con enfermedad neurológica predominante.
Se deben considerar la evaluación neurológica e imágenes radiológicas del cerebro, preferiblemente resonancia, antes de iniciar Clase I, Nivel C Clase I, Nivel C
tratamiento en todos los pacientes con EW neurológica y deberían ser parte de la evaluación de cualquier paciente con síntomas
neurológicos coincidentes con EW.
Unos niveles muy bajos de ceruloplasmina sérica (< 50 mg/l) deberían considerarse como un indicio claro de diagnóstico. Niveles Clase I, Nivel B Clase I, Nivel B
en el límite inferior sugieren más estudio. Los niveles dentro de la normalidad no excluyen el diagnóstico.
Deben determinarse los niveles de cobre en orina de 24 horas en todo paciente que se sospeche EW. Los niveles diagnósticos Clase I, Nivel B —
son > 100 µg o 1,6 µmol/24 h. Pero niveles de > 40 µg o 0,6 µmol o 600 nmol/24h pueden también indicar EW y requieren
más estudios.
Niveles basales de cupruria >1,6 µmol/24 h es típico en pacientes sintomáticos. En niños con afectación hepática leve, cupruria — Clase I, Nivel C
puede estar levemente elevada o normal. Niveles > 0,64 µmol/24 h pueden ser útiles para asintomáticos pero será menos sensible
y se solapará con otras hepatopatías.
Test de estimulación de la cupruria con penicilamina se puede realizar en niños sintomáticos pero con cupruria basal < 100 µg/24 h. Clase I, Nivel B —
Niveles > 1600 µg o 25 µmol/24 h con la administración de 500 mg al inicio y a las 12 h durante las 24 h de recogida de la orina
son sospechosos de EW. El valor predictivo de este test en adultos no se conoce.
El contenido en cobre del parénquima hepático > 250 µg/g de peso seco es diagnóstico y se debería determinar en casos que no Clase I, Nivel B —
se ha podido llegar al diagnóstico por métodos no invasivos. En pacientes no tratados el contenido normal es < 40 µg/g de peso
seco y casi excluye el diagnóstico de EW. En niveles intermedios (70-250 µg/g de peso seco) especialmente si existe enfermedad
hepática activa u otros síntomas de EW.
El contenido de cobre en parénquima hepático > 4 µmol/g de peso seco da el diagnostico. Se debe reservar en diagnósticos — Clase I, Nivel B
complejos y en jóvenes. Los niveles normales son < 0,64-0,8 µmol/g de peso seco y casi siempre excluyen el diagnóstico de EW.
El análisis de mutaciones es posible y se debería realizar en pacientes con diagnóstico difícil mediante test clínicos y bioquímicos. El Clase I, Nivel C Clase I, Nivel B
análisis haplotipo o test específicos de mutaciones conocidas se puede utilizar como screening en familiares de primer grado con EW.
Los pacientes en edad pediátrica con clínica de hepatitis autoinmune son sospechosos. Clase I, Nivel B —
Los adultos con hepatitis autoinmune atípica o que responde poco al tratamiento estándar con corticoides deberían tambien Clase I, Nivel B —
ser valorados.
La EW debería considerarse en el diagnóstico diferencial del paciente con enfermedad hepática esteatósica no acoholica. Clase I, Nivel C —
La EW debería sospecharse en cualquier paciente con insuficiencia hepática aguda con hemólisis intravascular coombs negativa, Clase IIb, ——
elevación leve de la aminotransferasa sérica o niveles bajos de fosfatasa alcalina o cociente fosfatasa alcalina/bilirrubina < 2. Nivel C
Los familiares de primer grado de cualquier paciente recién diagnosticado de EW deben ser valorados. Clase I, Nivel B
El tratamiento inicial del paciente sintomático debería incluir a agente quelante (D-penicilamina o trientina). La trientina puede Clase I, Nivel A Clase I, Nivel B
ser mejor tolerada.
Los pacientes deben evitar los alimentos y agua con altas concentraciones de cobre, especialmente durante el primer año de Clase I, Nivel B Clase I, Nivel C
tratamiento.
El tratamiento de los pacientes presintomáticos o en tratamiento de mantenimiento pueden ser realizados con un agente quelante Clase I, Nivel C —
o con zinc. La trientina puede ser mejor tolerada.
El tratamiento de los pacientes presintomáticos o con enfermedad neurológica en tratamiento de mantenimiento pueden — Clase I, Nivel B
ser realizados con un agente quelante o con zinc
Los pacientes con insuficiencia hepática aguda por EW son candidatos a trasplante inmediatamente. Clase I, Nivel B —
Los pacientes con insuficiencia hepática aguda por EW son candidatos a trasplante cuando su puntuación Kings ≥ 11. — Clase I, Nivel B
Los pacientes con cirrosis descompensada que no responde a quelantes deben ser evaluados para trasplante. Clase I, Nivel B Clase I, Nivel B
El tratamiento de la EW debe continuarse durante el embarazo, pero se recomienda reducir la dosis de D-penicilamina y trientina. Clase I, Nivel C Clase I, Nivel C
El tratamiento es de por vida y no se debe interrumpir hasta que se ha realizado trasplante. Clase I, Nivel C Clase I, Nivel B
La monitorización rutinaria consiste en determinar los niveles plasmáticos de cobre y ceruloplasmina, bioquímica hepática, Clase I, Nivel B Clase I, Nivel C
recuento completo y análisis de orina cada seis meses.
Se debe determinar los niveles de cobre en orina de 24 h en los pacientes en tratamiento anualmente o con mayor frecuencia si Clase I, Nivel C Clase I, Nivel C
duda de cumplimiento o para ajustar dosis. Los niveles séricos estimados de cobre no unido a ceruloplasmina se pueden elevar en
incumplimientos y reducir en sobre tratamiento.
El zinc puede tener un papel de primera línea en pacientes neurológicos. — Clase II, Nivel C
Si se usa el zinc, monitorizar transaminasas y sustituirlo por quelantes si suben. — Clase I, Nivel B
Clase I: evidente y/o acuerdo general de que es util. Clase II: evidencia conflictiva y/u opiniones divergentes. Clase III: evidencia o acuerdo general de
que no es útil. Nivel A: metaanálisis o múltiples ensayos. Nivel B: un solo ensayo o varios no aleatorizados. Nivel C: solo consenso de expertos.
430 BLOQUE: METABOLISMO

Síntomas conductuales: el 90 % de los pacientes con compromiso neuroló-


gico, pero puede estar ausente en pacientes con
•  Respuestas emocionales exageradas sin provoca- compromiso hepático. Su ausencia no excluye el
ción (llanto y risa). diagnóstico.
•  Pérdida de las funciones cognoscitivas e intelec- •  Posible restricción en el movimiento ocular.
tuales, pérdida de la memoria, confusión (delirio o
demencia). La exploración cardiaca puede mostrar signos de
insuficiencia cardiaca congestiva y arritmias.
Síntomas abdominales: La exploración abdominal puede mostrar:

•  Dolor abdominal. •  Distensión abdominal.


•  Hematemesis. •  Hepatoesplenomegalia.

En la piel podemos encontrar: 8.4.  Exámenes de laboratorio (tabla 1)4, 10, 20


•  Hiperpigmentación (figura 1). 8.4.1.  Ceruloplasmina plasmática baja
•  Lúnula azulada en las uñas.
Es el principal transportador de cobre en plasma.
•  Acantosis nigricans.
Puede presentarse con seis átomos de cobre (holoce-
•  Ginecomastia.
ruloplasmina) o sin ninguno (apoceruloplasmina). Se
puede determinar por métodos enzimáticos o inmu-
Un examen de los ojos puede mostrar:
nológicos. Estos últimos pueden sobreestimar sus ni-
veles porque no discriminan entre apoceruloplasmina
•  Anillos de Kayser-Fleischer (KF) (figura 2). Se de-
y holoceruloplasmina. En EW sus niveles suelen ser
tecta con lámpara de hendidura como anillos de
< 0,1 g/l, pero también pueden estar normales en la
color café o rojizo alrededor del iris. Lo presentan
mitad de los pacientes con EW hepática.
Puede aparecer disminuida en situaciones de des­
nutrición severa o aumentada como reactante de fase
aguda con actividad ferroxidasa y también puede
aumentar en inflamación y en hiperestrogenismo (em-
barazo o anticonceptivos). Por lo que su determinación
aislada no es suficiente para el diagnóstico de EW.

8.4.2.  Cobre sérico total bajo y libre alto


Ante niveles < 5 µg/dl, el paciente probablemente
tenga la enfermedad de Wilson y entre 10 y 20 µg/dl
puede ser paciente o portador. Recordar las situacio-
nes descritas en la tabla 1, en las que puede aparecer
Figura 1. Hiperpigmentación. elevado o disminuido. Se recomienda estudiar todos
los pacientes con cupremias inferiores a 60 µg/dl.
Aunque es una enfermedad por exceso de cobre, el
cobre sérico total (libre y unido a ceruloplasmina) está
disminuido en proporción a los niveles bajos de ceru-
loplasmina.
En insuficiencia hepática severa puede estar normal
y en la aguda pueden estar elevados por liberación ti-
sular. Niveles de cobre elevados o normales con cerulo-
plasmina baja (cobre sérico libre) por encima de
200 µg/l son típicos de EW. El problema es que su de-
terminación no es fiable y se realiza por cálculos, por lo
que tiene más valor en la monitorización del tratamien-
to que en el diagnóstico.

8.4.3.  Cobre urinario bajo


La eliminación urinaria del cobre en condiciones
Figura 2.  Anillo de Kayser Fleischer. normales es insignificante (entre 0,2 y 0,5 µmol/24
Tema 26.  Enfermedad de Wilson. Dieta controlada en cobre 431

h). Niveles normales de cupruria prácticamente des- 8.7. Complicaciones


cartan la existencia de EW. Los portadores sanos sue-
len eliminar entre 0,65 y 1 µmol/24 h y los pacientes •  Hepáticas: enfermedad hepática aguda y crónica.
que sufren la enfermedad suelen presentar valores Lo más común es el curso crónico, caracterizado
superiores a > 1,6 µmol/24 h (100 µg/24 h). En las por cirrosis postnecrótica, que conduce a la insu-
enfermedades hepáticas podemos encontrar niveles ficiencia hepática progresiva. También se puede
de cupruria en el límite superior de la normalidad sin manifestar como hepatitis crónica activa, y en me-
padecer EW. nor número como fallo hepático fulminante31.
La cupruria en 24 h con administración de 500 mg
de D-penicilamina/12 h se ha utilizado como test diag- Tabla 4. Diagnóstico de EW por puntuación según
nóstico en pediatría, pero no en adultos. 8th International Meeting in Leipzig.
Sintoma o sígnos Puntuación
8.5.  Pruebas de imagen23
Anillo de Kayser-Fleischer
•  Tanto la resonancia magnética nuclear como el
escáner cerebral pueden ser anormales, especial-  Presente 2
mente en los ganglios basales, pero este dato no
 Ausente 0
es específico.
•  Las pruebas de imagen abdominal como ecogra- Sintomas neurológicos
fía o escáner pueden mostrar hepatoesplenome-
 Grave 2
galia.
•  Podemos encontrar osteomalacia, raquitismo, os-  Moderada 1
teoporosis, osteoartritis, poliartritis, desminerali-
 Ausente 0
zación ósea, fracturas espontáneas, osteocondri-
tis, calcificaciones articulares, y condromalacia Ceruloplasmina plasmática
patelar
  Normal (> 0,2 g/l) 0

8.6.  Biopsia hepática24   0,1-0,2 g/l 1

Como en la biopsia de riñón, encontraremos depósi-   < 0,1 g/l 2


tos de cobre. En la EW aparecen valores de cobre supe- Anemia hemolítica Coombs negativo
riores a 4 µmol/g (200 µg/g) de tejido hepático seco.
Para los portadores sanos heterocigotos no suelen ser  Presente 1
superiores a los 125 µg/g. No es necesaria la biopsia  Ausente 0
hepática para el diagnóstico si el paciente presenta sín-
tomas neurológicos característicos además del anillo Cobre hepático (sin colestasis)
de KF y elevada cupruria (mayor de 100 µg en orina de   > 4 µmol/g 2
24 h). El problema es que la distribución de cobre por
el tejido hepático en la EW no es homogénea, por lo   0,8-4 µmol/g 1
que puede dar falsos negativos (tabla 1).   Normal (< 0,8 µmol/g) –1
  Gránulos de rhodanine 1
8.6.1.  Diagnóstico global
Cupruria (sin hepatitis aguda)
La asociación de anillo de KF y niveles séricos bajos
de ceruloplasmina (< 0,1 g/l)25 suelen ser suficientes  Normal 0
para establecer el diagnóstico. El problema se plantea   1-2 veces normal 1
cuando no está presente el anillo de KF y solo muestra
hepatopatía. En estas circunstancias, podemos encon-   > 2 veces normal 2
trar niveles bajos de ceruloplasmina en hepatitis  Normal pero > 5 veces normal tras
autoinmune, insuficiencia hepática severa, enferme- 2
D-penicilamina
dad celiaca o aceruloplasminemia familiar o en porta-
dores heterocigotos de la mutación ATP7B26. Análisis mutación
No existe un test único para su diagnóstico, exis-   Detectado en ambos cromosomas 4
tiendo falsos negativos y positivos (tabla 1), por lo
que la reunión internacional de Leipzig indicó un mé-   Detectado solo en 1 cromosoma 1
todo de cuantificación numérica que presentamos en
  No se detecta mutación 0
tabla 427.
432 BLOQUE: METABOLISMO

•  Hematológicas: anemia, susceptibilidad a infec- cobre del organismo mediante dieta y fármacos
ciones. quelantes de cobre además de aumentar su elimina-
•  Musculoarticulares: lesiones por caídas, incremen- ción urinaria.
to de la incidencia de fracturas óseas, atrofia mus- Además, los síntomas se deben tratar en forma ade-
cular, contracturas articulares u otras deformida- cuada con ejercicios o fisioterapia y medidas de protec-
des. ción para las personas que están confundidas o que
•  Pérdida de la capacidad para interactuar con otras son incapaces de cuidar de sí mismas. Se monitoriza
personas, o de desempeñar las labores en el hogar mediante la determinación de cobre urinario y cobre
y en el trabajo. plasmático libre.
•  Efectos secundarios de la penicilamina o de
otros medicamentos utilizados para tratar la en- 8.10.1.  Tratamiento dietético
fermedad.
Se recomienda una dieta baja en cobre evitando el
consumo de alimentos ricos en cobre como vísceras (es-
8.8. Pronóstico
pecialmente hígado), champiñones, chocolate, frutos
El pronóstico se basa en el King’s score, desarrollado secos, hígado y mariscos. En la tabla 2 aparece el conte-
por Nazer et al.28 y modificado posteriormente por nido en cobre de algunos grupos de alimentos32, 33.
Dhawan et al.29 (tabla 5). Se basa en la determinación La mayor parte de los alimentos contienen al me-
de bilirrubina y transaminasas. Aunque los niveles plas- nos un poco de cobre, así que no es posible evitarlo
máticos pueden variar de un laboratorio a otro, es in- por completo. Los alimentos ricos en cobre, como
teresante ver los parámetros considerados. las vísceras de animales y las ostras, deben eliminar-
se de la dieta. Algunos alimentos son relativamente
8.9.  Estudio genético y cribado familiar altos en cobre, pero muy nutritivos (como las nueces
y las leguminosas), y los pacientes con esta enferme-
El diagnóstico genético directo es difícil porque exis- dad deben consumirlos con moderación. Los cerea-
ten más de 500 posibles mutaciones y la mayoría de los les contienen cantidades significativas de cobre,
pacientes son heterocigotos a dos mutaciones. El aná- pero son componentes importantes de una dieta
lisis molecular del gen ATP7B tiene utilidad para confir- saludable y restringirlos en la dieta pudiera no ser
mar el diagnóstico y facilitar el cribado familiar. Este ni saludable ni necesario, en particular si se toma un
cribado es importante porque la probabilidad de que suplemento de zinc.
un hermano sea un homocigoto (y por lo tanto desa- Los fungicidas para el jardín que contienen cobre,
rrolle la enfermedad clínica) es del 25 % y entre los hi- que se utilizan para controlar algunas enfermedades
jos es del 0,5 %30, 31. de las plantas, también son una fuente potencial de
exposición a través del contacto con la piel o si se ingie-
8.10. Tratamiento ren accidentalmente34.
Todos los pacientes, tanto los asintomáticos como
los sintomáticos, requieren tratamiento de por vida. 8.10.2.  Tratamiento farmacológico
Los objetivos del tratamiento son reducir la cantidad
D-penicilamina
de cobre en los tejidos y manejar los síntomas de la
enfermedad. Es el fármaco de primera elección en el tratamien-
El origen del cobre que se acumula en la EW es la to de la EW por su rápida acción y alta efectividad.
dieta. El balance del cobre en el organismo se reali- Reduce las concentraciones de cobre de varias for-
za a través de un equilibrio entre absorción y excre- mas: su principal acción es el aumento de cobre uri-
ción. El tratamiento se basa en reducir la entrada de nario y además por la quelación del cobre circulante,

Tabla 5. Indice pronostico del King’s College para la enfermedad de Wilson.

1 punto 2 puntos 3 puntos 4 puntos


Bilirrubina sérica (µmol/l) 100-150 151-200 201-300 > 300
AST (Ul/l) 100-150 151-300 301-400 > 400
INR 1,3-1,6 1,7-1,9 2,0-2,4 > 2,4
Leucocitos (109/l) 6,8-8,3 8,4-10,3 10,4-15,3 > 15,3
Albúmina (g/l) 34-44 25-33 21-24 < 21
Tema 26.  Enfermedad de Wilson. Dieta controlada en cobre 433

la reducción de la afinidad del cobre por las proteí- es eficaz y presenta una baja toxicidad, por lo que se
nas, y la inducción de la síntesis hepática de metalo- usa como tratamiento crónico de mantenimiento y en
tioneína. los estadios asintomáticos. Se pueden determinar los
Su nombre comercial en España es Cupripén® (Labo- niveles de zinc en orina como indicadores de su correc-
ratorios Rubio, en 30 cápsulas de 250 mg para adultos ta cumplimentación, que deben ser iguales o superio-
o 30 comprimidos de 50 mg para niños). La dosis ini- res a 2 mg/24 h o cupruria < 1.6 µmol/24 h.
cial es de 1-2 g al día en varias tomas (fuera de las co- Presenta escasos efectos secundarios, siendo el más
midas) y se monitoriza su eficacia con la cupruria común la irritación gástrica. Su única desventaja es su
(> 16 µmol/24 h) y cupremia. La dosis de manteni- acción lenta y que ocasionalmente puede provocar pe-
miento es de 0,75 a 1 g al día, la infantil de hasta queñas molestias gástricas, sobre todo al inicio del tra-
20 mg/kg/día y en ancianos de 20 mg/día. tamiento, aunque se ha relacionado con la aparición
Presenta como inconvenientes que en algunos casos de pancreatitis. Además, puede presentar interaccio-
los enfermos con afectación neurológica pueden pre- nes con hierro, quinolonas y tetraciclinas36.
sentar un agravamiento de la sintomatología. Sus efec-
tos adversos son comunes y son: hipersensibilidad, Tetratiomolidato de amonio
granulocitopenia, trombocitopenia, anemia aplásica,
síndrome nefrótico, síndrome Goodpasture-like, lupus Es un tratamiento experimental no comercializado.
inducido por drogas, disgeusia, miastenia gravis, de- Produce complejos intestinales con el cobre y así redu-
presión de IgA sérica, y polimiositis. Debe administrar- ce su absorción. A dosis bajas extrae el cobre de las
se conjuntamente con piridoxina (25 mg/día) para evi- metalotioneinas, pero a dosis altas forma complejos
tar su déficit. Sus efectos adversos pueden ser un insolubles de cobre que se depositan en el hígado37.
problema para su uso crónico, por lo que habitual-
mente se prefiere el zinc por su baja toxicidad35. 8.11.  Grupos de apoyo
Asociación Española de Familiares y Enfermos de
Trientina Wilson: http://enfermedaddewilson.org/.
Su nombre comercial es Syprine® (medicamento ex-
tranjero nominal comercializado por laboratorios Merck 9.  Resumen y conclusiones
en cápsulas de 250). Se enlaza o quela al cobre y conlle- El cobre es un oligoelemento esencial en la dieta del
va a un aumento de la excreción urinaria de cobre, aun- hombre. Al igual que el hierro, participa en la síntesis
que es menos potente y efectivo que la penicilamina, de la hemoglobina y es fundamental para el desarrollo
por lo que es un quelante alternativo, se utiliza en pa- y mantenimiento de huesos y tejido elástico como ten-
cientes intolerantes a la penicilamina. La dosis es de dones y tejido conectivo, así como del sistema vascular.
900-2 700 mg al día repartido en varias dosis hasta la La enfermedad de Wilson es una enfermedad heredita-
dosis de mantenimiento que es de 900-1 500 mg/día. ria autosómico recesiva que hace que el cuerpo absor-
Como efectos secundarios destacan dermatitis de ba y retenga cantidades excesivas de cobre, lo cual
contacto, distonía, miastenia gravis, anemia ferropéni- provoca insuficiencia hepática, daño del sistema ner-
ca o lupus eritematoso sistémico. Además, también vioso central y afectación sistémica en general. Se diag-
quela el hierro y el zinc. Requiere suplementación oral nostica por niveles de cobre elevados en orina y dismi-
de hierro pero alejado de trientina, porque sus comple- nuidos en sangre, con ceruloplasmina sérica baja y
jos de hierro son tóxicos. Debe administrarse 2 horas afectación hepática con anemia hemolítica. El trata-
antes o después de las comidas o de otro fármaco para miento dietético se basa en la reducción de los alimen-
evitar interacciones35. tos ricos en cobre como vísceras, chocolate, frutos
secos y mariscos, aunque solo es coadyuvante al trata-
Acetato de zinc miento farmacológico con D-penicilamina, trientina
y/o acetato de zinc.
Se pueden usar diferentes sales de zinc (sulfato, ace-
tato o gluconato), con resultados similares. La dosis en
adultos es de 50 mg de zinc elemental una hora antes
10. Bibliografía
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Tema 27. 
Nefrolitiasis. Dietas controladas en purinas
María Julia Ocón Bretón
Ana Isabel Ilundain González
Ana Belén Mañas Martínez
Ana Agudo Tabuenca
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 437-450.

1. Introducción
2.  Metabolismo del ácido úrico
3. Fisiopatología
4. Diagnóstico
5.  Tratamiento dietoterápico
6.  Tratamiento nutricional de la hiperuricemia. Dietas controladas en purinas
7. Resumen
8. Bibliografía

1. Introducción en la incidencia y prevalencia de la litiasis renal en am-


bos sexos. Según los datos recogidos en el National
La nefrolitiasis es una enfermedad caracterizada por Health and Nutrition Examination Survey (NHANES) la
la formación de cálculos renales en el aparato urinario prevalencia de la litiasis renal ha aumentado de forma
superior que incluye al parénquima renal, cálices, pelvis lineal en las últimas cuatro décadas pasando del 3,2%
y uréter. El desarrollo del cálculo renal ocurre cuando la durante los años 1976-80 hasta el 8,8% en los años
concentración de los componentes de la orina alcanza 2007-20104, 5.
un nivel de sobresaturación en el que es imposible su La nefrolitiasis es más frecuente en el sexo masculino,
solubilización. El cólico nefrítico es la forma de presen- con una prevalencia estimada según el NHANES del
tación clínica más común y aparece cuando el cálculo 10,6% frente a la de la mujer, que se encuentra en el
se desprende o se rompe, depositándose en el sistema 7,1% (ratio varón/mujer: 1,49/1), excepto en el caso de las
colector del riñón, lo cual aumenta la presión intralu- litiasis infecciosas, donde predomina el sexo femenino4.
minal provocando dolor1. Aproximadamente el 80% de la totalidad de los
La litiasis renal representa la tercera patología uroló- cálculos renales están compuestos por sales cálcicas,
gica más frecuente después de la infección urinaria y predominantemente de oxalato cálcico y en menor
de la enfermedad prostática benigna. Constituye una porcentaje de fosfato cálcico6. Los cálculos de fosfato
causa importante de morbilidad debida al dolor, la he- amónico magnésico representan el 10%, los de ácido
maturia o la infección que puede originar la elimina- úrico el 10% y los de cistina el 1-2%7.
ción del cálculo, lo que condiciona un elevado gasto Hoy en día, la nefrolitiasis está considerada una pa-
sanitario. En EEUU, el coste que supone el diagnóstico, tología sistémica y crónica frecuentemente relacionada
tratamiento y prevención de la litiasis renal ha sido es- con un grupo de trastornos cardiometabólicos como la
timado en 5 billones de dólares al año2. diabetes, la hipertensión, la obesidad, el síndrome me-
Esta enfermedad afecta al 5-15% de la población tabólico y la enfermedad cardiovascular. Aunque la
mundial, con una alta tasa de recurrencia cifrada en el relación causa-efecto entre estas entidades no ha sido
50% a los 5 años tras el primer episodio3. Se presenta claramente establecida, la prevención de una de estas
fundamentalmente en la cuarta década de la vida, con patologías puede evitar el desarrollo de las otras8.
un máximo de incidencia entre los 15 y los 44 años de El manejo dietético en la litiasis renal tiene un carácter
edad. Recientemente, se ha observado un incremento profiláctico cuyo objetivo principal está centrado en evi-

437
438 BLOQUE: METABOLISMO

tar las recurrencias. El tratamiento nutricional está basa- rresponde a 7,40, el 98% del ácido úrico esta ionizado
do en aumentar la ingesta de líquidos y disminuir la ex- como urato, fundamentalmente urato monosódico. La
creción renal de la sal o sales que componen el cálculo orina se acidifica a lo largo del túbulo renal y al bajar el
mediante modificaciones dietéticas individualizadas. pH, el urato urinario se convierten ácido úrico de baja
Alrededor del 20-25% de los pacientes con hiperuri- solubilidad. Por tanto, en los tejidos encontraremos cris-
cemia y gota presentan litiasis renal. La hiperuricemia tales de urato monosódico, mientras que en la orina se
no solo está vinculada con la formación de cálculos de pueden encontrar cálculos de ácido úrico9.
ácido úrico sino también con el desarrollo de litiasis El urato se produce principalmente en el hígado y
cálcica. En la práctica clínica, el 90% de los casos de en menor grado en el intestino delgado. La produc-
hiperuricemia son debidos a una disminución en la ex- ción de urato depende del equilibrio entre la ingestión
creción renal de ácido úrico. La hiperuricemia se aso- de purinas, la síntesis de novo de purinas en las célu-
cia con patologías que aumentan el riesgo cardio­ las, el reciclado de purinas y su degradación por la
vascular como la enfermedad renal crónica, la obesidad, xantina oxidasa10. Dos tercios del urato provienen de
el síndrome metabólico y la diabetes, enfermedades la degradación de las purinas endógenas y el resto
todas ellas susceptibles de mejorar con medidas dieté- de las purinas de la dieta11. La mayoría (70%) del ácido
ticas y cambios de estilo de vida. Por lo tanto, los con- úrico producido diariamente se excreta por vía renal y
sejos dietéticos en pacientes con hiperuricemia no el resto se elimina en el tracto gastrointestinal9. La ex-
solo irán dirigidos a disminuir la uricemia, sino tam- creción renal del urato es compleja, ya que después de
bién a mejorar el riesgo cardiovascular y la salud gene- una filtración glomerular este compuesto se reabsorbe
ral del paciente9. casi en su totalidad a nivel del túbulo proximal, poste-
riormente hay una secreción activa en dicho túbulo y
finalmente hay una nueva reabsorción (reabsorción
2.  Metabolismo del ácido úrico
postsecretora).
En el ser humano el ácido úrico es el producto final La uricemia depende del balance entre producción y
del metabolismo de las purinas. El ácido úrico es un áci- excreción de ácido úrico. El 90% de las hiperuricemias
do débil con un pKa de 5,75. La precipitación del ácido son consecuencia de una menor excreción urinaria de
úrico en los tejidos depende entre otras cosas de su for- ácido úrico, mientras que la sobreproducción de ácido
ma química. La forma no ionizada del ácido úrico es úrico representa menos del 10% de las hiperuricemias12.
bastante más insoluble que la forma ionizada de urato. Las purinas son moléculas heterocíclicas aromáticas
A pH fisiológico del compartimento extracelular que co- que forman parte de los ácidos nucleicos. El punto de

AMP IMP XMP GMP

Adenosina Inosina HGPRT Xantosina Guanosina HGPRT

Hipoxatina Xatina Guanina


Xatina
oxidasa
Xatina
oxidasa
Febuxostat,
alopurinol Ácido úrico
O H
H N N
O
O N N
H H

Uricasa

Alantoína

Figura 1.  Metabolismo del ácido úrico.


Tema 27.  Nefrolitiasis. Dietas controladas en purinas 439

partida del catabolismo de las purinas son los ácidos El ácido úrico posee actividad antioxidante pero
nucleicos que son hidrolizados por endo y exonucleasas también prooxidante, que le confiere propiedades
para dar lugar a los mononucleótidos AMP y GMP, que proinflamatorias, que varían en función del microam-
a su vez son degradados por la enzima fosfomonoeste- biente químico y podrían contribuir al desarrollo de
rasa en los nucleósidos guanosina y adenosina. La ade- otras enfermedades metabólicas, vasculares y renales.
nosina debe ser desaminada para formar inosina y sobre El ácido úrico puede disminuir los niveles de óxido
esta actúa la enzima nucleósido fosforilasa conduciendo nítrico (NO), tanto disminuyendo su producción al
a la formación de la base hipoxantina. Esta misma enzi- aumentar la actividad de la arginasa como reaccio-
ma convierte directamente la guanosina en guanina. nando directamente con el NO para generar ácido
Posteriormente, la hipoxantina y la guanina son degra- úrico nitrosado. En adipocitos activa la nicotinamida
dadas a xantina, la cual se convierte finalmente en ácido dinucleótido fosfato oxidasa, aumentando la produc-
úrico. Estos dos últimos pasos son catalizados por la ción de radicales libres de oxígeno y en células muscu-
xantina oxidasa (figura 1). En los mamíferos el ácido lares lisas vasculares activa el factor de transcripción
úrico es transformado en alantoína por medio de la en- proinflamatorio NF-kB y la señalización por quinasas
zima uricasa. A diferencia de los mamíferos, el hombre activadas por mitógenos18.
y otros primates no poseen uricasa13. La gota es un síndrome clínico causado por una res-
La dieta humana contiene poco ácido úrico, pero con- puesta inflamatoria al depósito de cristales de urato
tribuye a la formación de este por el aporte dietético de monosódico en las articulaciones, tejidos blandos y
sus precursores las purinas. Está comprobado que la in- tracto urinario que ocurre en sujetos con concentracio-
gesta de carnes rojas y marisco, pero no de vegetales y nes plasmáticas elevadas de ácido úrico. Este término
legumbres ricos en purinas, favorece la hiperuricemia. incluye a la artritis gotosa aguda, la artropatía gotosa
Los productos lácteos descremados y la vitamina C son crónica, la nefropatía por urato y la litiasis úrica13.
considerados factores protectores para la hiperurice- La hiperuricemia, además de contribuir al desarrollo
mia9. Una causa de sobreproducción de ácido úrico es la de gota, ha adquirido últimamente una gran relevan-
aceleración de la degradación de ATP a AMP. Tanto el cia debido a su estrecha relación con la enfermedad
consumo en exceso de alcohol como de fructosa favore- cardiovascular. Estudios clínicos y epidemiológicos su-
cen la transformación de ATP a AMP13, 14. gieren un papel independiente de la hiperuricemia en
Algunas enfermedades y fármacos pueden dar lugar el desarrollo de hipertensión arterial19. La presencia de
a una excesiva producción de ácido úrico, entre los que niveles plasmáticos elevados de ácido úrico se ha des-
cabe destacar a las enfermedades hematológicas con crito como característica asociada al síndrome metabó-
un alto recambio celular (anemia hemolítica, trastor- lico (SM) y además el ácido úrico sérico aumenta con-
nos mieloproliferativos y linfoproliferativos), la soriasis, forme aumenta el número de componentes del SM20, 21.
el déficit de vitamina B12, la obesidad, el ácido nicotí- Aunque en la mayoría de los estudios todos los com-
nico y algunos citotóxicos13. El ejercicio físico intenso ponentes del SM se relacionan con la uricemia, la co-
aumenta la producción de ácido úrico como conse- rrelación más fuerte descrita ha sido con el perímetro
cuencia del aumento del catabolismo del ATP. de la cintura. Según la población analizada, la relación
La dieta también puede influir sobre la excreción renal entre ácido úrico y enfermedad cardiovascular es dife-
de ácido úrico, pero en cambio no influye sobre su ex- rente. Se apoya la idea de que la hiperuricemia asinto-
creción digestiva. El alcohol interfiere con la excreción mática en población general y en pacientes con bajo
urinaria de ácido úrico ya que la metabolización hepáti- riesgo cardiovascular es una condición benigna proba-
ca del etanol origina una gran cantidad de NADH+H+ blemente debida a una disminución del aclaramiento
que convierte el piruvato a lactato. El aumento de los renal de ácido úrico. En contraste, en pacientes con
niveles de ácido láctico en la sangre inhibe la excreción elevado riesgo cardiovascular (diabetes mellitus tipo 2,
urinaria de ácido úrico15. La fructosa también puede al- enfermedad vascular manifiesta) la hiperuricemia po-
terar la uricosuria, ya que interactúa con el transporta- dría ser causa o ser consecuencia de la aparición de
dor GLUT9 (implicado en la reabsorción tubular proxi- efectos perjudiciales sobre el corazón y los vasos como
mal)16. Las dietas con bajo aporte de hidratos de carbono la inflamación, la isquemia y el estrés oxidativo 22. En
o el ayuno actúan negativamente sobre la excreción re- este grupo de pacientes, todos los estudios examina-
nal de ácido úrico. En estos casos se producen abundan- dos muestran una asociación independiente entre los
tes cuerpos cetónicos, que son asimismo aniones orgá- niveles de ácido úrico y la enfermedad cardiovascular23.
nicos y pueden competir con el urato en su unión al
transportador tubular para su secreción urinaria17.
3. Fisiopatología
La obesidad, la cetoacidosis diabética y algunos fár-
macos de uso común como los diuréticos tiazídicos y Para la formación del cálculo renal se requiere nece-
los salicilatos a dosis bajas disminuyen la eliminación sariamente que la concentración de la sal formadora
renal de ácido úrico y aumentan la prevalencia de hiper­ exceda su solubilidad en la orina, es decir, se encuentre
uricemia. en estado de sobresaturación. La patogenia de la litia-
440 BLOQUE: METABOLISMO

sis renal es compleja y multifactorial e involucra a cier- Entre los principales factores de riesgo que pre­
tas alteraciones en los mecanismos fisicoquímicos y disponen al desarrollo de la litiasis renal cabe destacar
biológicos que regulan la solubilidad de la orina. lo que se muestra en la tabla 1.
La saturación de la orina está condicionada por una
serie de factores de riesgo locales, entre los que se des- 3.1.  Hipercalciuria
taca la concentración y el estado iónico de los solutos
factibles de cristalizar y el pH urinario. El aumento de la La hipercalciuria es la alteración metabólica más co-
concentración de solutos puede estar originado por mún en los pacientes con primer episodio de litiasis
una reducción de la diuresis y/o por un aumento de la renal cuya prevalencia se encuentra entre el 30-60%24.
excreción de dichos solutos. En la litogénesis renal El aumento de la concentración de calcio en la orina
también puede estar implicada la existencia de un dé- aumenta la saturación urinaria para las sales cálcicas
ficit de los inhibidores de la cristalización urinaria. Fi- formadoras de cálculos (oxalato y fosfato). La hipercal-
nalmente, factores secundarios como anomalías ana- ciuria también disminuye la actividad inhibitoria contra
tómicas, infecciones urinarias y ciertos fármacos poco la cristalización de la orina al unirse a los inhibidores
solubles pueden conducir al desarrollo de un cálculo8. naturales e inactivarlos25.
Desde el punto de vista etiológico, la litiasis renal pue- El 90% de los pacientes con hipercalciuria presentan
de clasificarse en: normocalcemia, siendo su principal etiología la hiper-
calciuria idiopática y en menor frecuencia la acidosis
• Litiasis no infecciosas: cálculos de oxalato cálcico, tubular renal, el hipercortisolismo y la acromegalia.
fosfato cálcico y ácido úrico. Aproximadamente un 10% de los casos de hipercalciu-
• Litiasis infecciosas: cálculos de fosfato amónico ria están asociados a hipercalcemia y en estos enfer-
magnésico, urato amónico y carbonato de apatita. mos la causa más común es el hiperparatiroidismo pri-
• Litiasis genéticas: cálculos de cistina y xantina. mario, aunque también hay que tener presentes otras
• Litiasis farmacológicas: fármacos que alteran la causas más raras como tumores, sarcoidosis, intoxica-
composición urinaria (acetazolamida, topiramato) ción por vitamina D e hipertiroidismo. Es importante
o cuyos componentes cristalizan en la orina (triam- señalar que la hipercalciuria idiopática se asocia con
terene, sulfonamidas, indinavir, quinolonas). una disminución significativa de la masa ósea25.

Tabla 1.  Factores de riesgo implicados en el desarrollo de cada tipo de litiasis renal.

Tipo de cálculo
pH urinario > 6 (núcleo de fosfato)
Oxalato cálcico monohidrato pH urinario < 6 (núcleo de ácido úrico)
(whewellita) Hiperuricosuria
Déficit de inhibidores de la cristalización
Oxalato cálcico dihidrato pH urinario > 6
Litiasis (weddellita) Hipercalciuria y/o hiperoxaluria
no infecciosas
Fosfato cálcico pH urinario entre 6,5-6,8
(brushita) Hipercalciuria y/o hiperfosfaturia
pH urinario < 5,5
Ácido úrico Hiper o mormouricosuria
Déficit de inhibidores de la cristalización
pH urinario > 7
Fosfato amónico magnésico
Infección urinaria
(estruvita)
Hipercalciuria
Litiasis pH urinario entre > 6,8
Fosfato cálcico
infecciosas Infección urinaria
(carbonato de apatita)
Déficit de inhibidores de la cristalización
pH > 6,5
Urato amónico
Infección urinaria
Litiasis Cistinuria
Cistina
genéticas pH < 6
Tema 27.  Nefrolitiasis. Dietas controladas en purinas 441

3.2. Hiperoxaluria retrasando la nucleación y crecimiento de los crista-


les26. Las causas más frecuentes de hipocitraturia son
Entre el 2-8% de los pacientes con litiasis renal cálci- la deficiencia congénita de las enzimas que regulan
ca presentan hiperoxaluria. En condiciones normales, el metabolismo renal del citrato, la malabsorción in-
el oxalato de la dieta se absorbe escasamente, ya que testinal, la insuficiencia renal, la acidosis tubular re-
se une al calcio dietético formando complejos insolu- nal distal, la hipopotasemia, el tratamiento con tiazi-
bles de oxalato cálcico en el intestino25. La causa más das y topiramato y las infecciones urinarias (por
importante de hiperoxaluria son las enfermedades gas- consumo del citrato por parte de los gérmenes)26. Las
trointestinales que cursan con malabsorción. Cualquier dietas ricas en proteínas animales y bajas en potasio
situación clínica que condicione malabsorción de las y magnesio pueden causar una menor excreción de
grasas facilita la unión del calcio de la dieta a los ácidos citrato25.
grasos y, de este modo, el oxalato queda libre para ser
absorbido en el colon. El aporte excesivo de vitamina C
(más de 3 gr/día) también puede causar hiperoxaluria, 3.5.  Hipomagnesuria
ya que el ácido ascórbico es metabolizado a oxalato8. El magnesio está considerado otro inhibidor de la
La hiperoxaluria primaria es un trastorno muy poco fre- cristalización urinaria. Ejerce un papel protector en la
cuente y se manifiesta clínicamente por litiasis, nefro- patogenia de la litogénesis al unirse al oxalato y formar
calcinosis e insuficiencia renal. complejos con este, con la consiguiente disminución
La concentración urinaria de oxalato también puede del oxalato libre susceptible de unirse al calcio. La ma-
verse afectada por la colonización intestinal de una labsorción intestinal es la principal causa de hipomag-
bacteria gramnegativa anaerobia que forma parte de nesuria25.
la flora intestinal denominada Oxalobacter formigenes,
la cual está encargada de degradar el oxalato en el in- 3.6.  Cistinuria
testino. La ausencia de esta bacteria puede dar lugar a
una reducción en la degradación intestinal del oxalato La cistinuria es una tubulopatía hereditaria donde
con el consiguiente aumento de su absorción intesti- está afectado el transporte de cistina y de aminoácidos
nal. Se ha documentado una asociación inversa entre básicos. La cistina es un aminoácido muy poco soluble
la colonización por esta bacteria y el riesgo de recu- en agua para valores de pH ácido. La presencia de cis-
rrencia de litiasis de oxalato cálcico. tina en la orina es siempre patológica. Su principal ma-
nifestación clínica es la litiasis renal, que suele ser múl-
3.3.  Hiperuricosuria tiple y recurrente. Los cálculos de cistina presentan un
característico aspecto céreo y sus cristales son hexago-
Se define como una excreción urinaria de ácido úrico nales27.
mayor de 600 mg al día. Se ha demostrado que la pre-
sencia de hiperuricemia se correlaciona con la hiperuri-
3.7.  Alteraciones del pH urinario
cosuria, pero no con el riesgo litogénico asociado a
concentraciones urinarias elevadas de ácido úrico. La La solubilidad de los cristales está influenciada por el
hiperuricosuria es un factor de riesgo conocido para el pH urinario. Así, una orina acida (pH < 6), que puede
desarrollo no solo de litiasis úrica, sino también de ocurrir en situaciones de deshidratación, cetosis o pér-
oxalato cálcico9. didas de bicarbonato extrarrenales, aumenta el riesgo
Cuando se produce una infección urinaria en pacien- de desarrollar cálculos de acido urico, de cistina y
tes con hiperuricosuria y el pH urinario no sobrepasa el cálculos mixtos de oxalato cálcico/acido urico28. Por el
valor de 7, el urato amónico puede alcanzar valores de contrario, una orina alcalina (pH > 6) que puede ob-
sobresaturación y precipitar antes que el fosfato amó- servarse en las infecciones urinarias por gérmenes
nico magnésico, generando así cálculos de urato amó- ureasa positivos y en la acidosis tubular renal distal, se
nico. Las principales causas de hiperuricosuria son la relaciona con un incremento del riesgo de desarrollar
elevada ingesta de alimentos ricos en purinas, los sín- cálculos de fosfato cálcico, oxalato cálcico, fosfato
dromes linfomieloproliferativos, la lisis celular aumen- amónico magnésico y urato amónico28.
tada, la gota y el uso de fármacos uricosúricos como el
probenecid, la sulfinpirazona, la benzbromarona o el 3.8.  Volumen urinario reducido
losartán25.
El bajo volumen urinario se asocia con una mayor
concentración y saturación de los solutos de la orina.
3.4.  Hipocitraturia
Esta situación ha sido demostrada principalmente para
El citrato es el principal inhibidor de la cristaliza- las litiasis cálcicas. Se ha documentado que el volumen
ción urinaria, fundamentalmente de la formación de urinario de los pacientes que presentan su primer epi-
cristales de oxalato cálcico. El citrato actúa uniéndo- sodio de litiasis es de 250-350 ml menos que el de los
se al calcio urinario formando complejos con este o pacientes sin litiasis29.
442 BLOQUE: METABOLISMO

3.9.  Fisiopatología de la litiasis de ácido úrico mer episodio de cálculo único o de una recurrencia;
esta última situación incluye a los pacientes que han
Los principales factores de riesgo implicados en la sufrido un primer episodio de cálculos múltiples y a
formación de los cálculos de ácido úrico están relacio- aquellos pacientes con más de tres episodios de litiasis
nados con el descenso del pH urinario por debajo de renal en los últimos 5 años32. Se consideran factores de
5,5, el aumento de la excreción urinaria de ácido úrico, riesgo de recurrencia: la historia familiar de litiasis renal
el déficit de inhibidores de la cristalización, el volumen y la presencia de ciertas enfermedades endocrinometa-
urinario reducido y la presencia de cavidades de baja bólicas y de otras patologías médicas32.
eficacia urodinámica29. Si se trata de un paciente que presenta un primer
La cristalización úrica de la orina, aparte de implicar la episodio de litiasis única se recomienda realizar un
formación de cálculos de ácido úrico, puede inducir el screening básico. Esta valoración inicial es un procedi-
desarrollo de cristales de oxalato cálcico. Los cristales de miento sencillo y de bajo coste que nos ayudará a de-
urato monosódico proveen un núcleo que facilita la cris- tectar a los pacientes con riesgo de recurrencia. En los
talización de oxalato cálcico y la agregación de estos pacientes con litiasis renal múltiple y en aquellos con
últimos cristales a través de mecanismos de nucleación factores de riesgo de recurrencia es recomendable am-
heterogénea forman cálculos mixtos de oxalato cálcico/ pliar el screening básico inicial a lo que se denomina
ácido úrico y también de cálculos de oxalato cálcico apa- evaluación metabólica de la litiasis renal.
rentemente puros pero que con técnica de alta resolu-
ción se puede detectar el ácido úrico en el núcleo del 4.1.  Screening básico inicial8, 32
cálculo29. Los cálculos de urato amónico representan
< 1% de la totalidad de los cálculos renales y están aso- 4.1.1.  Historia médica y dietética
ciados con las infecciones urinarias, la malabsorción, la
• Historia familiar de nefrolitiasis.
hipopotasemia, la desnutrición y el pH urinario > 6,528.
• Historia litiásica: inicio, número de episodios,
La nefrolitiasis úrica puede ocurrir con mayor fre-
composición y número de cálculos.
cuencia en pacientes con gota y/o hiperuricosuria, aun-
• Patologías médicas asociadas: diabetes, obesidad,
que una parte importante de pacientes con este tipo
síndrome metabólico, hipertensión, gota, enfer-
de litiasis no presentan hiperuricemia y su excreción
medad cardiovascular.
urinaria de ácido úrico es normal. El pH urinario ácido
• Patologías que aumentan el riesgo de litiasis: hi-
es sin duda el factor más importante relacionado con
pertiroidismo, hiperparatiroidismo primario, sar-
el desarrollo de la litiasis renal de ácido úrico. En pa-
coidosis, acidosis tubular renal distal, enfermeda-
cientes normouricosúricos con nefrolitiasis úrica, una
des gastrointestinales malabsortivas (síndrome
de las principales causas del descenso del pH urinario
de intestino corto, cirugía bariátrica, enfermedad
es la reducción de la excreción renal de amonio30.
inflamatoria intestinal, insuficiencia pancreática,
Se ha establecido una relación entre diabetes tipo 2 y
enfermedad celiaca) y enfermedades genéticas
síndrome metabólico con el aumento del riesgo de litia-
(hiperoxaluria primaria, cistinuria, síndrome de
sis úrica. La insulinorresistencia a nivel del túbulo renal
Lesch-Nyhan, xantinuria, fibrosis quística).
se asocia con una disminución de la amoniagénesis
• Fármacos: abuso de suplementos de vitaminas C,
renal, lo que condiciona una reducción de la excreción
D y calcio, antiácidos quelantes del fósforo, diuré-
urinaria de amonio. En esta situación, al existir menos
ticos (acetazolamina, triamterene), agentes urico-
amoniaco en la orina disponible para aceptar protones,
súricos (probenecid), inhibidores de las proteasas
aumenta el hidrógeno libre en la luz tubular provocando
(indinavir) y topiramato.
que el pH urinario sea excesivamente ácido. Algunos
• Alteraciones anatómicas renales: riñón en herradu-
autores han demostrado una asociación significativa en-
ra, obstrucción de la unión ureteropélvica, espongio-
tre los niveles descendidos de pH urinario y el incremento
sis medular renal, ureterocele, reflujo vesico­ureterial.
de los valores de glucosa plasmática basal, hemoglobina
• Historia dietética: obtener información sobre el
glicosilada, triglicéridos y circunferencia de la cintura31.
tipo y cantidad de líquidos ingeridos y el consumo
Debido a estas observaciones, el tratamiento de la
habitual de sal, proteínas animales, potasio, calcio
fase aguda de la litiasis úrica debe estar basado en la
y alimentos con alto contenido de oxalato.
alcalinización de la orina, mientras que el tratamiento
• Factores ambientales, ocupacionales y estilo de
de fondo debe estar enfocado en la pérdida de peso, el
vida: pueden contribuir a una pérdida de fluidos o
ejercicio físico y en los fármacos destinados a mejorar
a una ingesta de líquidos inadecuada.
la sensibilidad a la insulina.
4.1.2.  Analítica de sangre y orina
4. Diagnóstico
La evaluación basal de laboratorio que recomiendan
En la evaluación diagnóstica de un paciente con litia- las guías internacionales debe incluir una bioquímica
sis renal se debe tener en cuenta si se trata de un pri- plasmática que contenga ácido úrico, glucosa, urea,
Tema 27.  Nefrolitiasis. Dietas controladas en purinas 443

creatinina, sodio, potasio, cloro, calcio, fósforo, bicar- te integral y fundamental del tratamiento y prevención
bonato y perfil lipídico33. de los pacientes con nefrolitiasis (tabla 2).
En la analítica urinaria debe determinarse el pH, la
presencia de cristales y la existencia de bacteriuria o 5.1.  Ingesta hídrica
piuria. También resulta recomendable la solicitud de
Una de las recomendaciones universales en la pre-
un cultivo de orina.
vención de la litiasis renal está basada en mantener
una alta ingesta de líquidos. La hidratación del pacien-
4.1.3.  Estudios de imagen te tiene como objetivo diluir la orina y evitar la cristali-
Nos ayuda a identificar anomalías anatómicas o a zación de los minerales formadores de cálculos.
valorar actividad metabólica (litiasis múltiple, nefrocal- En pacientes con litiasis recurrente de oxalato cálcico
cinosis) que frecuentemente se asocian con litiasis re- se ha demostrado que alcanzar un volumen urinario de
currente. Dependiendo de la disponibilidad del centro al menos dos litros al día reduce la tasa de recurrencia
se realizará desde una radiografía renal simple hasta un 50% y además puede prolongar el período de recu-
una pielo-TC sin contraste. Los cálculos de oxalato cál- rrencia34. No todas las bebidas confieren el mismo efec-
cico y fosfato cálcico son radiopacos, mientras que los to beneficioso en la formación de los cálculos renales.
de ácido úrico y xantina son radiotransparentes y solo En algunos estudios de cohortes se ha observado que la
pueden ser identificados por TC o ecografía. ingesta de café, té, cerveza, vino y zumo de naranja se
asocia con una reducción del riesgo de formación de
4.1.4.  Análisis de la composición del cálculo cálculos. Por el contrario, el consumo de refrescos azu-
carados y ponche puede aumentar el riesgo de nefroli-
Los métodos actualmente más recomendados para tiasis35. Tradicionalmente se ha tenido la idea de que los
analizar la composición del cálculo renal son la espec- zumos de frutas cítricas conferían un efecto protector
troscopia infrarroja y la difracción de rayos X28. frente al desarrollo de litiasis renal debido a su alto con-
tenido en citrato, aunque este beneficio no ha sido de-
4.2.  Evaluación metabólica8, 28 mostrado de forma concluyente en recientes estudios
• Analítica sanguínea: magnesio, fosfatasa alcalina, metabólicos8. La ingesta de bebidas deportivas que con-
PTH, 25 OH-vitamina D, 1,25 OH-vitamina D. tienen electrolitos e hidratos de carbono no modifica la
• Recogida de orina de 24 horas: determinación del excreción urinaria de calcio ni de otras sales36.
volumen, pH, calcio, oxalato, fósforo, magnesio, Se recomienda el consumo de 2,5-3 litros de líquido
ácido úrico, citrato, sodio, potasio, cloro, sulfato, al día28. La administración de líquidos debe estar basa-
amonio y creatinina. da fundamentalmente en la ingesta de agua y se repar-
• Densitometría ósea: en caso de litiasis cálcica o tirá a lo largo del día, tomando 2 vasos en cada comida
hipercalciuria idiopática. y uno cada 2-3 horas sin descuidar la ingesta nocturna,
cuando fisiológicamente se concentra más la orina28.
Especial atención deben prestar algunos grupos con
5.  Tratamiento dietoterápico
mayor riesgo de deshidratación, entre los que cabe des­
Una variedad de factores dietéticos pueden afectar a tacar a aquellas personas que viven en climas cálidos,
la formación o a la prevención de la aparición de litiasis desarrollan trabajos con alta exposición solar o calor
renal, por lo que se debe considerar la dieta como par- ambiental, abusan de laxantes y realizan una actividad

Tabla 2.  Recomendaciones generales para la prevención de la nefrolitiasis.


· Ingesta hídrica de 2,5-3 litros/día
· Evitar el consumo de refrescos azucarados.
· Incrementar la cantidad de líquidos ingeridos en pacientes con
Líquidos
riesgo de deshidratación.
· Incrementar la cantidad de liquidos ingeridos en pacientes con
riesgo de deshidratacion
· Aumentar el consumo de verduras y frutas
· Ingesta adecuada de calcio de 1-1,2 g/día
· Restringir los alimentos con alto contenido en oxalato en
Dieta pacientes con hiperoxaluria
· Limitar la ingesta de proteínas animales (excepto lácteos) a
0,8 g/día
· Reducir el consumo de sodio por debajo de 3,5 g/día
Estilo de vida · Disminución de peso en pacientes con sobrepeso u obesidad
444 BLOQUE: METABOLISMO

física intensa25. En estos sujetos es necesario un mayor No existen ensayos clínicos aleatorizados que eva-
incremento de la cantidad de líquidos ingeridos. lúen el efecto de una dieta baja en oxalato sobre el
riesgo de desarrollar cálculos de oxalato cálcico. A pe-
sar de ello, en pacientes con litiasis recurrente de oxala-
5.2. Calcio
to cálcico y que presentan hiperoxaluria, las guías reco-
La relación entre la ingesta de calcio y el riesgo de miendan una disminución de la ingesta de alimentos
litiasis cálcica es compleja. Aunque tradicionalmente se con alto contenido en oxalato33. Entre los principales
ha recomendado una dieta baja en calcio, hoy en día alimentos ricos en oxalato cabe destacar: espinaca, re-
algunos ensayos clínicos han demostrado que una baja molacha, acelga, cacao, pimiento, apio, frutos secos,
ingesta de calcio dietético se asocia con una mayor té, frambuesas, fresas, arándanos, cúrcuma y bebidas
tasa de recurrencia de litiasis debido fundamentalmen- a base de cola.
te a un aumento en la excreción urinaria de oxalato8. En pacientes con malabsorción intestinal sin resec-
Por el contrario, tres amplios estudios de cohortes han ción de colon, las medidas dietéticas aconsejadas para
documentado que una ingesta elevada de calcio se reducir la excreción urinaria de oxalato incluyen la re-
asocia con una reducción del riesgo de litiasis renal, ducción de la ingesta dietética de grasa y de alimentos
sobre todo en varones menores de 60 años de edad38. ricos en oxalato y aumentar el consumo de productos
Estos resultados han sido observados tanto con el con- lácteos descremados8.
sumo de productos lácteos como con otras fuentes
dietéticas de calcio39.
5.4. Proteínas
Este efecto protector ha sido atribuido a que el calcio
dietético se une al oxalato en la luz intestinal formando Se ha demostrado que el consumo elevado de pro-
complejos insolubles, lo que favorece la excreción del teínas de origen animal puede aumentar el riesgo de
oxalato por las heces. Cuando la ingesta de calcio es litiasis renal debido a su efecto negativo sobre el pH
baja, disminuye la formación de estos complejos inso- urinario y sobre la excreción urinaria de calcio, oxalato
lubles, aumentando la absorción intestinal de oxalato y y ácido úrico.
su posterior excreción urinaria8. Las proteínas animales originan un estado de acido-
Se ha especulado que la administración de suple- sis inducido por la alta cantidad de sulfuro contenido
mentos de calcio podría aumentar el riesgo de litiasis en los aminoácidos, lo que condiciona una disminu-
renal, sobre todo si estos se ingieren fuera de las comi- ción del pH urinario y una hipocitraturia debido a que
das o en ayunas. Esto parece ser debido a que cuando la acidosis aumenta la reabsorción de citrato en el tú-
los suplementos de calcio son administrados con las bulo renal. Por otro lado, la acidosis puede causar hi-
comidas se produce una disminución de la absorción percalciuria como consecuencia de un aumento de la
intestinal y de la excreción urinaria de oxalato, lo que reabsorción ósea o de una disminución de la reabsor-
contrarrestaría la hipercalciuria. Cuando los suplemen- ción del calcio en el túbulo renal, o de ambas. Además,
tos de calcio son ingeridos fuera de las comidas se pier- el ácido úrico es el producto final del metabolismo de
de este efecto protector en la reducción de la excreción las purinas y las proteínas animales son una importante
urinaria de oxalato, predominando la hipercalciuria lo fuente de purinas. La hiperuricosuria reduce la efectivi-
que conduce a un incremento en la saturación urinaria dad de los inhibidores naturales de la cristalización uri-
de oxalato cálcico8. naria de oxalato cálcico8.
Para prevenir la recurrencia de la litiasis cálcica, la Se ha documentado que la ingesta de 0,8 g/kg/día
guía de la Sociedad Europea de Urología recomienda de proteínas junto con una ingesta normal de calcio
una ingesta diaria de 1000-1200 mg de calcio preferi- reduce la calciuria y puede preservar la masa ósea en
blemente derivado de la dieta28, 33. En el caso de que la pacientes con hipercalciuria y litiasis renal debido pro-
suplementación con calcio sea necesaria, la guía acon- bablemente a la disminución de la carga ácida40. Existe
seja ingerir los suplementos durante las comidas. evidencia que demuestra que una restricción modera-
da de la ingesta proteica reduce la excreción urinaria
de ácido úrico y oxalato en sujetos con nefrolitiasis e
5.3. Oxalato
hipercalciuria idiopática. Una dieta restringida en pro-
Los niveles de oxalato urinario están determinados por teínas animales y sodio pero con un contenido normal
la ingesta dietética de calcio y oxalato, por la integridad de calcio reduce el riesgo de recurrencia en varones
del tracto gastrointestinal y por la presencia de bacterias con hipercalciuria y litiasis de oxalato cálcico41.
intestinales que degradan el oxalato8. Dependiendo del Debido a estos resultados, las principales sociedades
aporte de calcio, hasta un 50% del oxalato urinario pro- científicas internacionales recomiendan realizar una
cede de la ingesta dietética de oxalato y otro 50% de restricción de las proteínas de origen animal proceden-
fuentes endógenas, fundamentalmente del metabolis- tes de alimentos no lácteos en aquellos pacientes con
mo de la glicocola y ácido ascórbico. Una dieta rica en litiasis de oxalato cálcico y de ácido úrico con hiperuri-
oxalato y baja en calcio favorece la hiperoxaluria32. cosuria28, 33.
Tema 27.  Nefrolitiasis. Dietas controladas en purinas 445

5.5. Citrato 5.7. Fibra
El citrato urinario inhibe el desarrollo de los cálculos El salvado, presente en cereales de grano entero, po-
de calcio debido a la formación de complejos con el see ácido fítico que se une con el calcio dietético en el
calcio urinario o a su capacidad para inhibir la agrega- intestino formando fitato cálcico que se excreta por las
ción y crecimiento de cristales de fosfato y oxalato cál- heces, disminuyendo así la excreción renal de calcio. Sin
cico. La excreción del citrato urinario está modulada embargo, se debe al mismo tiempo restringir la ingesta
por el balance ácido-base. La acidosis aumenta la ab- dietética de oxalato para prevenir la hiperoxaluria.
sorción del citrato en el túbulo proximal renal con la Algunos estudios de baja evidencia científica han de-
consiguiente reducción de su excreción urinaria, mien- mostrado que la administración de fibra puede reducir
tras que la alcalosis favorece la hipercitraturia8. la calciuria en pacientes hipercalciúricos con litiasis re-
La principal fuente dietética de álcalis son las bases nal. En un ensayo clínico aleatorizado, la administración
conjugadas de las sales de potasio presentes en las ver- de 30 g de fibra dietética a una dieta baja en calcio y
duras y frutas. Una elevada ingesta de verduras y hor- oxalato se asoció con una reducción del 25% de la cal-
talizas (con exclusión de aquellas que poseen un alto ciuria y de un 4% en la oxaluria44. A pesar de estos re-
contenido en oxalato) incrementan la excreción urina- sultados, el beneficio de la fibra en la reducción del
ria de citrato y consecuentemente disminuyen la satu- riesgo de litiasis renal es incierto y poco consistente28, 32.
ración del fosfato y oxalato cálcico. En estudios epide-
miológicos se ha observado que adoptar una dieta
DASH (Dietary Approaches to Stop Hypertension) basa- 5.8. Otros
da en un alto consumo de frutas y verduras reduce la • Se ha observado que el consumo de ácidos grasos
incidencia de litiasis renal probablemente como conse- poliinsaturados omega-3 puede disminuir la cal-
cuencia del aumento del pH y del potasio urinario. ciuria en pacientes hipercalciúricos, aunque su
Además, una dieta rica en potasio puede reducir la efecto sobre la reducción del riesgo de nefrolitiasis
excreción urinaria de calcio42. es poco concluyente32.
En estudios metabólicos, se ha demostrado que los • La vitamina B6 es un cofactor que interviene en el
zumos cítricos, principalmente el zumo de naranja, metabolismo del oxalato y su déficit puede incre-
pueden aumentar la citraturia debido a su elevado mentar la producción de oxalato y la oxaluria. La
contenido en citrato potásico. Referente al zumo de administración de piridoxina oral a dosis de 250-
limón y pomelo, los resultados publicados son contra- 500 mg/día disminuye la excreción de oxalato uri-
dictorios, mientras que el zumo de lima puede aumen- nario en pacientes normo o hiperoxalúricos con
tar los niveles urinarios de citrato, potasio y pH32. litiasis renal cálcica32.
• La suplementación con vitamina C ha sido relacio-
5.6. Sodio nada con un aumento en la excreción urinaria de
La implicación del sodio en la etiopatogenia de la li- oxalato debido a que el ácido ascórbico es meta-
tiasis renal está relacionada con el incremento de la bolizado a oxalato. Se ha demostrado que la in-
excreción urinaria de calcio y con la disminución de gesta de suplementos de vitamina C a dosis de
la excreción urinaria de citrato. Un consumo elevado 1000 mg incrementa el riesgo de desarrollo de
de sodio reduce la reabsorción del sodio en el túbulo cálculos renales. En pacientes con NPT, un aumen­
proximal renal, lo que origina una disminución de la to de la infusión de ácido ascórbico de 100 mg a
reabsorción del calcio a dicho nivel8. En pacientes hiper­ 200 mg induce un incremento en la oxaluria. Por
calciúricos con nefrolitiasis se ha demostrado que una tanto, parece conveniente restringir el consumo
dieta restringida en sodio (<3,5 g/día) reduce la excre- de esta vitamina a 500 mg/día en pacientes con
ción de calcio urinario e incluso puede corregir la hiper- riesgo de urolitiasis28.
calciuria en más de la mitad de los casos43. • La ingesta de magnesio reduce la absorción del
La restricción de sodio también juega un papel pre- oxalato de la dieta e inhibe la formación de cristales
ventivo importante en pacientes con cistinuria. En es- de oxalato cálcico. Estudios epidemiológicos han
tudios metabólicos se ha observado que el consumo demostrado que la excreción urinaria de oxalato se
reducido de sodio en la dieta se asocia con una dismi- correlaciona inversamente con la ingesta dietética
nución en la excreción urinaria de cistina8. de magnesio. La dieta DASH, una importante fuen-
Se recomienda no sobrepasar los 3,5 g al día de so- te dietética de magnesio, ha demostrado reducir la
dio, para lo cual se evitarán alimentos como los embu- saturación de oxalato cálcico debido al incremento
tidos, conservas, alimentos precocinados, productos en la excreción urinaria de magnesio45.
sazonados y ahumados, extractos de carnes, pollo y • Un alto consumo de hidratos de carbono simples
pescado, quesos curados, pastelería industrial, galle- puede aumentar la absorción de calcio a nivel in-
tas, repostería, aceitunas, frutos secos salados, salsas testinal y promover un incremento en la excreción
comerciales y alimentos fast food28. renal de calcio y oxalato33.
446 BLOQUE: METABOLISMO

6. Tratamiento nutricional de la Tabla 3.  Cantidad de ácido úrico (mg) que generan
hiperuricemia. Dietas controladas 100 g de alimento.
en purinas ALIMENTO
Aunque la dieta solo representa un tercio de la carga Vísceras
diaria de purinas y la mayoría de las hiperuricemias son  Mollejas 990
debidas a un defecto en la excreción renal de ácido  Riñones 290
úrico, algunos alimentos favorecen el incremento de la  Hígado 280
uricemia por el propio aporte exógeno de purinas,  Sesos 195
otros aumentando la síntesis endógena de purinas y  Callos 160
otros alterando la excreción renal de ácido úrico9.  Charcutería 145
Una dieta usual contiene 600 a 1000 mg/día de pu-
rinas. La restricción de las purinas en la dieta ha cons- Caza 115
tituido el tratamiento dietético clásico de la hiperurice- Aves
mia y la litiasis úrica. Una dieta muy pobre en purinas  Paloma 175
puede reducir la uricemia 1-2 mg/dl. La guía de uroli-  Pato 110
tiasis de la Asociación Europea de Urología recomienda
restringir la ingesta de alimentos ricos en purinas por Carnes
debajo de 500 mg/día en pacientes hiperuricosúricos   Carnes grasas 135
con litiasis de oxalato cálcico y ácido úrico28. Sin em-   Extractos de carne 185
bargo, hoy en día, muchos autores consideran que es-  Pollo 110
tas dietas muy bajas en purinas no son el elemento  Pavo 120
fundamental en el tratamiento de estas patologías, ya Pescados
que son difíciles de seguir a largo plazo y además algu-  Anchoas 465
nos alimentos con alto contenido en purinas como las  Sardinas 360
legumbres y verduras no se han relacionado con el de-  Atún 250
sarrollo de hiperuricemia46.  Arenque 200
 Salmón 170
6.1.  Alimentos ricos en purinas   Bacalao fresco 115

Las purinas son sustancias derivadas de las nucleo- Moluscos y crustáceos 120
proteínas que se encuentran en alta cantidad en ali- Quesos muy fermentados 120
mentos animales como las carnes (incluyendo vísceras
y extractos cárnicos) y todos los pescados (incluyendo Verduras
mariscos) y algunas fuentes vegetales, como las legum-  Espárragos 50-100
bres, espinacas, espárragos, acelgas, coliflor, setas y  Champiñones 50-100
extractos de levadura. Por el contrario, son bajos en  Espinacas 50-150
purinas los productos lácteos (leche, queso fresco, yo- Legumbres 50-150
gur, helados), huevos, frutas, cereales y farináceos
(pan, pasta, arroz, galletas, cereales del desayuno), ver- Leche 0-50
duras (salvo las referidas previamente), nueces, azúcar, Huevos 0-50
miel, mermelada, aceites y mantequilla47. En la tabla 3
se recoge el contenido en purinas de los principales Cereales
grupos de alimentos.  Integrales 50-100
Está demostrado que el mayor consumo de carne y   Germen y salvado de trigo 50-100
pescado se asocia con niveles más elevados de ácido  Avena 50-100
úrico y mayor riesgo de gota. Esta asociación no ha   Resto cereales 0-50
sido observada con la ingesta de aves de corral. Algu- Frutas 0-50
nas verduras crudas, como las espinacas, tienen mayor
concentración de purinas que un filete de carne cruda,
sin embargo, se ha observado que el consumo de ver- diferente biodisponibilidad para la transformación de
duras y legumbres ricas en purinas no aumentan el purinas a ácido úrico9. Además, los glicósidos flavonoi-
riesgo de gota48. Estas diferencias en el riesgo de pade- des presentes en las legumbres tienen efecto inhibidor
cer hiperuricemia entre los diferentes alimentos ricos de la xantino oxidasa.
en purinas podrían ser explicadas por diversos factores, La causa de la elevación del ácido úrico en relación
como la variación en las cantidades ingeridas, el tipo con el consumo de carnes y pescados es una sobrecar-
de purinas, el hecho de que estén cocinadas o no y la ga de purinas exógenas de origen animal y además, las
Tema 27.  Nefrolitiasis. Dietas controladas en purinas 447

carnes rojas son una importante fuente de grasas satu- han confirmado estos resultados46. La leche con-
radas que provocan una reducción de la excreción re- tiene factores uricosúricos, como el ácido orótico.
nal de urato. El transportador renal URAT1, además de trans-
portar urato, también transporta orotato, lo que
6.2.  Fructosa y bebidas edulcoradas sugiere que la competencia entre ellos por el
URAT1 puede originar uricosuria. Además, tanto
El consumo de refrescos edulcorados, incluyendo los la lactosa como la galactosa activan el hUAT, otro
refrescos de cola y otras bebidas gaseosas edulcoradas, transportador renal de urato.
conlleva incrementos significativos en las tasas de inci- • Hay evidencias en sujetos sanos de que el consu-
dencia de hiperuricemia14. mo de verduras se asocia con menores niveles sé-
Aunque las bebidas edulcoradas contienen bajos ni- ricos de ácido úrico y menor riesgo de urolitiasis9.
veles de purinas, tienen grandes cantidades de fructosa. Las dietas ricas en verduras podrían actuar favore-
La fructosa ha demostrado ejercer un efecto directo so- ciendo la eliminación renal de ácido úrico.
bre el metabolismo del ácido úrico. La fosforilación de la • Una mayor ingesta de fibra se ha relacionado con
fructosa consume ATP, con depleción del ATP hepático niveles significativamente más bajos de ácido úrico
y liberación de adenina, que finalmente se transforma y reducción del riesgo de hiperuricemia9. Este efec-
en ácido úrico. Además, la fructosa podría reducir la ex- to podría deberse a que la fibra dietética inhibe la
creción renal de ácido úrico por un mecanismo donde se absorción de la adenina en el aparato digestivo.
encuentra implicada la insulinorresistencia16. • El consumo de vitamina C podría ejercer benefi-
La ingesta de otras fuentes de fructosa, como los cios en la reducción del riesgo de hiperuricemia.
zumos de frutas o las frutas ricas en fructosa, también Su mecanismo de acción parece estar relacionado
se ha asociado significativamente con un mayor riesgo con un efecto uricosúrico46.
de hiperuricemia14.

6.3. Alcohol 6.5.  Obesidad y estilo de vida


Diversos estudios han demostrado que el consumo La hiperuricemia se asocia con diversas entidades
de alcohol se asocia con niveles más altos de uricemia. metabólicas y vasculares, incluyendo obesidad, hiper-
Así, el riesgo de desarrollar gota es 2,5 veces mayor tensión arterial, diabetes mellitus, litiasis renal, insufi-
entre los varones que consumen 50 g o más de alco- ciencia renal y enfermedad cardiovascular22, 23. Los pa-
hol al día, comparados con los que no beben alco- cientes con obesidad y/o sobrepeso tienen una mayor
hol49. La magnitud de la asociación aumenta con el probabilidad de tener hiperuricemia que aquellos con
incremento en la ingesta de alcohol y varía según el un índice de masa corporal normal20, 21. Se ha observa-
tipo de bebida alcohólica. Dos o más cervezas al día do que el sobrepeso multiplica entre 3 y 9 veces la pro-
confieren un mayor riesgo de hiperuricemia que dos o babilidad de hiperuricemia, siendo el riesgo más acusa-
más copas de licor al día. El consumo moderado de do en mujeres50.
vino (dos copas al día) no parece aumentar el riesgo La pérdida de peso mediante una dieta hipocalórica
de hiperuricemia49. Por tanto, el riesgo de desarrollar reduce los niveles séricos de ácido úrico, existiendo una
gota depende del tipo y cantidad de la bebida alcohó- relación gradual entre la pérdida de peso y la consecu-
lica consumida, atribuyéndose a la cerveza el riesgo ción de la normouricemia. Este efecto hipouricemiante
más alto. Además, el riesgo es mayor en las mujeres de la pérdida de peso depende de la cantidad de kilo-
que en los varones. gramos perdidos y de la uricemia inicial9. La reducción
El alcohol ocasiona hiperuricemia por varios meca- del peso corporal debe hacerse lentamente, ya que la
nismos. Durante el consumo excesivo y agudo de alco- producción de cuerpos cetónicos asociados con el ayu-
hol, este es convertido en ácido láctico, el cual reduce no estricto se relaciona con hiperuricemia.
la excreción renal de ácido úrico15. El consumo crónico Los mecanismos de acción implicados en el desa-
de alcohol incrementa la producción de purinas y de rrollo de la hiperuricemia en pacientes con obesidad
ácido úrico al acelerar la degradación de ATP a AMP13. están relacionados con el incremento del aporte exó-
Los mayores efectos hiperuricémicos de la cerveza, en geno de purinas, con el aumento de la producción
comparación con otras bebidas alcohólicas, se atribu- endógena de purinas y, sobre todo, con una disminu-
yen a su gran contenido en purinas, predominante- ción de la excreción renal de ácido úrico9. La hiperin-
mente guanosina. sulinemia asociada con la obesidad probablemente
sea la causa principal de la hiperuricemia, ya que los
niveles elevados de insulina reducen la excreción renal
6.4.  Alimentos y nutrientes beneficiosos
de urato. Además, el aumento de lactato en la obesi-
• El consumo de lácteos, en especial lácteos desna- dad acelera la reabsorción renal de urato y, por otra
tados, puede asociarse con un descenso de los parte, la síntesis de ácidos grasos acelera la purinosín-
niveles de uricemia9, aunque algunos autores no tesis de novo.
448 BLOQUE: METABOLISMO

Como se ha mencionado previamente, la nefrolitiasis tidad de calcio (1-1,2 g/día), limitando la ingesta de
úrica también se ha relacionado con el síndrome meta- proteínas animales (0,8 g/día), de sodio (< 3,5 g/día) y
bólico y la insulinorresistencia, por lo que la recomen- de oxalato y donde la ingesta hídrica sea superior a los
dación de pérdida de peso también es extensible a los 2,5 litros de líquidos al día.
sujetos obesos con litiasis úrica. El ácido úrico es el producto final del metabolismo
Las principales recomendaciones nutricionales y de de las purinas, donde el 75% del ácido úrico provie­
estilo de vida en pacientes con hiperuricemia y/o nefro- ne de la degradación de las purinas endógenas y el
litiasis úrica quedan reflejadas en la tabla 4. resto de las purinas de la dieta. Tan solo el 10% de las
hiperuricemias son causadas por un aumento de la
7. Resumen producción de ácido úrico. Alrededor del 20-25% de
los pacientes con hiperuricemia y gota presentan litia-
La litiasis renal representa la tercera patología urológica sis renal. La hiperuricemia no solo está vinculada con la
más frecuente, afectando al 5-15% de la población que formación de cálculos de ácido úrico, sino también con
condiciona una importante morbilidad y elevados costes el desarrollo de litiasis cálcica. La cristalización del áci-
sanitarios. Hoy en día, la nefrolitiasis está considerada una do úrico ocurre fundamentalmente como consecuen-
patología sistémica y crónica frecuentemente relacionada cia de una disminución del pH urinario.
con enfermedades como la diabetes, la obesidad, el sín-
Algunos factores de riesgo dietéticos y de estilo de vida
drome metabólico y la enfermedad cardiovascular.
implicados en el desarrollo de la hiperuricemia son las
Para la formación del cálculo renal se requiere nece-
carnes rojas, los pescados, el abuso de alcohol, en espe-
sariamente que la concentración de la sal formadora
cial cerveza y licores, las bebidas edulcoradas, los alimen-
exceda su solubilidad en la orina, es decir se encuentre
tos con alto contenido en fructosa y la obesidad. Hoy
en estado de sobresaturación. Diversos factores dieté-
en día se considera que las dietas muy bajas en purinas no
ticos y metabólicos juegan un papel fundamental en la
son el elemento fundamental en el tratamiento de la
etiopatogenia de esta enfermedad, probablemente al
hiper­uricemia y la litiasis úrica, ya que son difíciles de se-
modular la composición urinaria. Las alteraciones me-
guir a largo plazo y además algunos alimentos con alto
tabólicas más frecuentemente asociadas a la nefrolitia-
contenido en purinas como las legumbres y verduras no
sis renal son la hipercalciuria, la hiperoxaluria, la hipo-
se han relacionado con la aparición de hiperuricemia.
citraturia y las alteraciones del pH urinario. En todos los
pacientes que han presentado un primer episodio de 8. Bibliografía
litiasis renal única se recomienda realizar un cribado
básico inicial para conocer la etiología y características 1. Boix GC, López-Torres HJ, Álvarez DL, Vázquez CM,
del cálculo y en aquellos sujetos con alto riesgo de re- Romero HE, Jiménez LM, et al. Litiasis Renal. Rev
currencia, este cribado debe ser ampliado a una valo- Clín Med Fam. 2007; 2: 32-38.
ración metabólica más completa. 2. Saigal CS, Joyce G, Timilsina AR; Urologic Diseases
El tratamiento dietético de la nefrolitiasis tiene un in America Project. Direct and indirect costs of
carácter profiláctico cuyo objetivo está basado en la nephrolithiasis in an employed population: oppor-
reducción de los factores de riesgo litogénicos y en tunity for disease management? Kidney Int 2005;
la prevención de las recurrencias. Las principales modi- 68:1808-14.
ficaciones dietéticas están centradas en la adopción de 3. Romero V, Akpinar H, Assimos DG. Kidney stones: a
una dieta equilibrada basada en un alto consumo global picture of prevalence, incidence, and associ-
de verduras y frutas, que contenga una adecuada can- ated risk factors. Rev Urol. 2010; 12:86-96.

Tabla 4.  Resumen de las recomendaciones nutricionales en la hiperuricemia y/o


litiasis úrica.
· Disminución de peso, si existe sobrepeso u obesidad
· Suprimir el consumo de bebidas alcohólicas como la cerveza y los licores
· Evitar la ingesta de refrescos y otras bebidas edulcoradas con contenido elevado de
fructosa
· Reducir al máximo el consumo de carnes rojas y vísceras
· Permitir la ingesta de pescados blancos
· Aumentar la ingesta de leche descremada y otros productos lácteos descremados
· Aumentar el consumo de proteínas vegetales, verduras, legumbres y frutas (evitar
zumos)
· Evitar las transgresiones dietéticas agudas
· Aumentar la ingesta hídrica por encima de 2,5 litros/día
· Alcalinización de la orina
Tema 27.  Nefrolitiasis. Dietas controladas en purinas 449

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41. Borghi L, Schianchi T, Meschi T, et al. Comparison tened beverages and dairy with plasma urate, in a
of two diets for the prevention of recurrent stones cross-sectional study. PLoS One 2012; 7: e38123.
in idiopathic hypercalciuria. N Engl J Med. 2002; 49. Choi HK, Curhan G. Beer, liquor, and wine con-
346:77-84. sumption and serum uric acid level: the Third Na-
42. Taylor EN, Stampfer MJ, Mount DB, et al. DASH- tional Health and Nutrition Examination Survey.
style diet and 24-hour urine composition. Clin J Arthritis Rheum 2004; 51: 1023-9.
Am Soc Nephrol 2010; 5:2315-22. 50. Rathmann W, Funkhouser E, Dyer AR, Roseman
43. Nouvenne A, Meschi T, Prati B, et al. Effects of a JM. Relations of hyperuricemia with the various
low-salt diet on idiopathic hypercalciuria in cal- components of the insulin resistance syndrome in
cium-oxalate stone formers: a 3-mo randomized young black and white adults: the CARDIA study.
controlled trial. Am J Clin Nutr. 2010; 91:565-70. Coronary Artery Risk Development in Young
44. Gleeson MJ, Thompson AS, Mehta S, Griffith DP. Adults. Ann Epidemiol 1998; 8: 250-61.
Effect of unprocessed wheat bran on calciuria and
BLOQUE:
NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA
DEL TUBO DIGESTIVO
(Dra. Julia Álvarez Hernández
y Dr. Francisco Botella Romero)
TEMA 28. Diarrea y estreñimiento. Papel de probióticos y prebióticos.
Dres. Nuria Gil-Fournier Esquerra, Álvaro García-Manzanares Vázquez,
Irene Gonzalo Montesinos y Julia Álvarez Hernández

TEMA 29. Soporte nutricional en enfermedades pancreáticas.


Dres. Irene Gonzalo Montesinos, Virginia Peña Cortés, Julia Álvarez Hernández
y Noelia Peláez Torres

TEMA 30. Soporte nutricional en la enfermedad inflamatoria intestinal.


Dres. Eduardo Platero Rodrigo, Álvaro García-Manzanares Vázquez de Agredos,
Nuria Gil Fournier y Julia Álvarez Hernández

TEMA 31. Soporte nutricional en pacientes con fallo intestinal.


Dres. José Joaquín Alfaro Martínez, Elena Carrillo Lozano, Antonio Hernández
López y Francisco Botella Romero

TEMA 32. El papel de la nutrición en la rehabilitación multimodal.


Dres. Antonio Hernández López, José Joaquín Alfaro Martínez y Francisco
Botella Romero
Tema 28.
Diarrea y estreñimiento. Papel de probióticos
y prebióticos
Nuria Gil-Fournier Esquerra
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital General de Villalba. Madrid
Álvaro García-Manzanares Vázquez
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital General La Mancha Centro. Alcázar de San Juan
(Ciudad Real)
Irene Gonzalo Montesinos
Hospital Infanta Elena. Valdemoro. (Madrid)
Julia Álvarez Hernández
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Príncipe de Asturias. Alcalá de Henares.
(Madrid)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 453-466.

1. Introducción
2.  Probiótico. Prebiótico. Simbiótico. Fibra
3.  Diarrea
4.  Estreñimiento
5. Conclusiones
6. Agradecimientos
7.  Bibliografía

1. Introducción bien no ponen en riesgo inmediato la vida de una per-


sona, sí conllevan un detrimento en su calidad de vida,
La diarrea y el estreñimiento son síntomas que po- siendo por lo tanto un motivo de consulta repetido en
nen de manifiesto una alteración gastrointestinal sub- los servicios de salud, lo que predispone a realizar deri-
yacente, ya sea estructural o funcional, cuyo espectro vaciones a los especialistas y un mayor número de
etiológico incluye diversas situaciones clínicas; de ellas, pruebas diagnósticas más o menos complejas, costo-
no todas podrían ser consideradas enfermedad como sas y, en ocasiones, invasivas.
tal. Dependiendo del origen de la diarrea o del estreñi- Ambos síntomas, diarrea y estreñimiento, podrían
miento y del entorno donde estemos, el impacto de definirse como una alteración, por exceso o por defec-
los mismos puede llegar a ser muy distinto tanto en el to, del ritmo intestinal considerado como normal en un
individuo como en el entorno poblacional donde se individuo. Clásicamente se habla de dos estudios epi-
dé. Así, por ejemplo, la diarrea aguda de origen infec- demiológicos llevados a cabo en EEUU y en Reino Uni-
cioso en un país de renta baja tiene una repercusión, do que han ayudado a definir ambos términos; en ellos
tanto individual como de salud pública, de mucho consideran que un ritmo intestinal es el normal cuando
mayor calado que en un país socio-económicamente existe una frecuencia de deposición entre tres veces a
más avanzado, donde los medios y los recursos sanita- la semana y tres veces al día1, 2. Esta definición, sin po-
rios disponibles minimizan sus efectos perjudiciales. der ser aplicable universalmente, supone una ayuda
Sin embargo, los cuadros de diarrea o de estreñimiento para poder entendernos.
crónico suponen a día de hoy un reto socio sanitario y El intestino humano es un órgano con una importante
económico importante en los países industrializados, variabilidad entre individuos, tanto anatómica como fun-
pues son situaciones clínicas de difícil manejo, que si cional. Su longitud puede variar entre 3 y 8 metros, y su

453
454 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

mucosa podría alcanzar una superficie aproximada de pero su mayor desarrollo tiene lugar durante el parto y
entre 300 y 400 m2, convirtiéndose en el área de mayor durante los primeros tres años de vida del mismo. El
intercambio y comunicación entre el medio externo y el modo en que se desarrollen los acontecimientos en
medio interno. Es entonces el intestino el espacio de con- este período será determinante para toda la vida y sa-
vivencia de dos tipos de entornos celulares distintos, uno lud de la persona. Y es que, tras el nacimiento, el siste-
constituido por las células eucariotas localizadas en él y ma inmune ha de ser capaz tanto de activarse frente a
que son propias del cuerpo humano (caliciformes, ente- patógenos externos, como de alcanzar una tolerancia
rocito, colonocito, células del sistema inmune y del siste- adecuada a los agentes también externos pero benefi-
ma neuroendocrino, entre otras), y otro donde habitan ciosos para él, como son el alimento y la flora residen-
células procariotas propias de las microbacterias que ha- te. Este proceso de adaptación es fundamental para
bitan en su exterior, ambos cohabitan en una relación de crear un óptimo equilibrio bacteriano e inmunológico
simbiosis. En el caso de una persona adulta, la microbio- que le permita sobrevivir adecuadamente. Tanto la co-
ta intestinal se dice que contiene 1014 células procariotas, lonización inicial de bacterias a través del útero, del
lo que supone 10 veces el número de células eucariotas canal del parto y la primaria infancia, como el equili-
de todo el cuerpo humano3. Esto confiere al intestino brio alcanzado posteriormente son propios de cada
una compleja funcionalidad que lo diferencia de otros individuo y diferentes al resto. El artículo de Houghte-
órganos y que es muy dependiente de las relaciones ling y Walker «From Birth to “inmunohealth,” Allergies
creadas entre ambas comunidades celulares. Las dos and Enterocolitis» publicado en 20156 es un buen lu-
funciones fisiológicas en las que el intestino interviene de gar de partida para empezar a entender mejor estos
forma más activa a través de esta relación de equilibrio mecanismos inmunológicos y la fisiopatología de en-
con la flora bacteriana hospedada en él son, además de fermedades cuyo origen se relaciona con un desequili-
la absorción de nutrientes, el metabolismo y el desarrollo brio del mismo. Bien con un fallo en el proceso de al-
y mantenimiento del sistema inmune. canzar ese equilibrio entre la flora bacteriana y el
La función metabólica del intestino se desarrolla sistema inmune, o bien, en el mantenimiento del mis-
fundamentalmente en el colon, lugar donde habita un mo. En el caso de los niños, se relaciona con enferme-
mayor número de bacterias intestinales. Ahí la flora in- dades como la alergia, la atopia o la enterocolitis del
testinal se encarga de metabolizar los residuos dieté- recién nacido; y en adultos, con enfermedades tanto
ticos no digeribles, el moco endógeno y los detritus propiamente intestinales, como inmunológicas y meta-
celulares. Por ejemplo, la fermentación de los hidratos bólicas como son la obesidad, la diabetes, la esteato-
de carbono, en el ciego y en el colon derecho, consti- hepatitis o incluso algunas alteraciones de conducta o
tuye una fuente importante de energía para el indivi- la aparición de determinados tumores.
duo. Se producen a través de ella, además de muchos El intestino es, por lo tanto, un complejo e interesan-
otros metabolitos y gases, ácidos grasos de cadena te órgano donde probablemente se sitúen más claves
corta (AGCC) como el ácido acético, propiónico y butí- de las que pensamos de la fisiopatología humana, has-
rico que colaboran en la acidificación del pH intralumi- ta hace pocos años desconocidas, siendo en la actuali-
nal, estimulación de la reabsorción de agua y sodio, dad uno de los puntos de mira más atractivos para la
aumentan también indirectamente la absorción de mi- investigación tanto básica, como clínica del ser huma-
nerales, disminuyen la solubilidad de los ácidos biliares no, pero también en animales y en el terreno de la ali-
y la absorción de amonio. A nivel sistémico, el ácido mentación.
acético es el sustrato primario para la síntesis de coles-
terol, su mayor parte se metaboliza en el músculo, el 2.  Probiótico. Prebiótico. Simbiótico. Fibra
propionato a su vez se metaboliza en el hígado y dis-
minuye la síntesis de colesterol además de generar A pesar de los avances en investigación, la informa-
energía, y el butirato es el que tiene mayor efecto tró- ción disponible sobre la composición microbiana del
fico sobre el colonocito, siendo su principal fuente de ecosistema intestinal sigue siendo limitada. La mayoría
energía y sobre el cual también interviene en la regula- de las bacterias que componen la flora intestinal no
ción de su crecimiento y diferenciación4. En segmentos pueden crecer en medios de cultivo y esto ha supuesto
más distales del colon también se produce el metabo- una limitación en este aspecto. A día de hoy, se han
lismo anaeróbico de péptidos y proteínas, conocido ido incorporando técnicas modernas como la metage-
como putrefacción, que es también fuente de AGCC, nómica, lo que en los últimos años nos ha permitido
pero que además generan sustancias tóxicas. Por últi- dar un paso importante a la hora de poder caracterizar
mo, las bacterias intestinales y su relación con el intes- cada vez mejor la flora bacteriana humana por medio
tino facilitan la absorción de iones divalentes como el de su genotipado, en lugar de atender a su perfil feno-
Ca, Mg o Fe y producen vitaminas, como la vitamina K, típico a través de los cultivos. Por eso, en la actualidad,
B12, biotina, ácido fólico o pantoténico5. estamos en proceso de conocer mejor y más rápida-
La función inmunológica del intestino se pone en mente la composición del denominado microbioma
marcha ya durante el período intraútero del individuo, humano. Se dice que la flora bacteriana considerada
Tema 28.  Diarrea y estreñimiento. Papel de probióticos y prebióticos 455

como normal podría definirse en función de la acepta- bien el por qué, entre ellos el yogur. Los primeros pasos
da por el Human Microbiome Project (HMP)7, proyecto que se dieron en este campo de investigación y que
que se puso en marcha en 2008 y que utiliza estas empezaron a esclarecer los mecanismos por los cuales
nuevas técnicas genéticas para poder caracterizar todo determinados alimentos aportaban beneficios a la sa-
el microbioma humano, de tal forma que además de lud, se comenzaron a dar hace ya un siglo cuando un
genotipar, crea un nuevo recurso con el que poder científico ruso premio Nobel y profesor del Instituto
analizar más fácilmente su papel en la salud y en la Pasteur, Elie Metchnikoff, postuló que las bacterias áci-
enfermedad humana8. do lácticas (BAL) conferían beneficios a la salud, siendo
Independientemente de estos avances de los últimos capaces de promover la longevidad. Años después, en
años, tradicionalmente se ha dicho que el intestino 1917, el profesor alemán Alfred Nissle aisló una cepa
contiene unos 100 trillones de células bacterianas, las no patógena de E. coli a partir de heces de un soldado
cuales contienen unos 600.000 genes y que compren- de la primera guerra mundial que no había desarrollado
de cientos de especies bacterianas9, entre los cuales los enterocolitis ante un brote severo de shigelosis9. De este
géneros predominantes son Bacteroides, Bifidobacte- modo se comenzaba lo que actualmente podría ser el
rium, Eubacterium, Clostridium, Lactobacillus y Fuso- prólogo del libro de los probióticos, pues en los últimos
bacterium. La flora intestinal existente en cada indivi- años se ha dado un avance tal en este campo, que la
duo, es propia de cada uno y diferente del resto de materia científica producida excede la capacidad de sin-
individuos y varía tanto en número como en la natura- tetizarla en capítulos como el que nos ocupa.
leza de las bacterias que se hospedan en los distintos El término probiótico deriva del griego «para la
tramos del tubo digestivo, existiendo un mayor núme- vida»10 y fue introducido por primera vez en 1965 por
ro de ellas en el extremo ileal y en el colon. Lilly y Stillwell refiriéndose a factores de origen micro-
El desequilibrio en la flora bacteriana intestinal con- biano que estimulaban la proliferación de otros mi-
siderada como normal, o bien por un fallo en el proce- croorganismos. Más adelante se especificaba que, para
so de su desarrollo o en su mantenimiento, es lo que considerarse probiótico como tal, el microorganismo
llamamos disbiosis. Este desequilibrio que afecta a la debía estar presente en estado viable y se introdujo la
microbiota y, por lo tanto, también al sistema inmune, idea de que debía aportar un efecto beneficioso sobre
se relaciona con múltiples enfermedades tanto en ni- el huésped9. Por eso actualmente el término probiótico
ños como en adultos. ¿Qué mecanismos patogénicos se refiere a aquellos microorganismos vivos que, al ser
se han relacionado con la aparición de disbiosis? Fun- ingeridos en las cantidades adecuadas, aportan un be-
damentalmente se relaciona con determinadas formas neficio al estado de salud del huésped.
de exposición al ambiente microbiano exterior a través Aun así, para evitar un mal uso o comercialización
de la barrera intestinal, como son algunos métodos de de los mismos, la utilización del término probiótico de-
higiene y limpieza excesiva, la alteración del ambiente bería restringirse solo para nombrar aquellos microor-
bacteriano en el canal del parto por ejemplo mediante ganismos en los que tras haberse realizado estudios
la cesárea, factores genéticos predisponentes propios controlados en humanos han demostrado conferir be-
de cada persona, dietéticos, medioambientales o inclu- neficios a la salud. Y esta definición es a la que nos re-
so socioeconómicos. La restauración de ese equilibrio feriremos cuando utilicemos el término de probióticos
bacteriano intestinal es a donde se pretende llegar a en estas páginas. La Organización Mundial de Gas-
través de sustancias como los probióticos7. troenterología recoge además unos criterios mínimos
que debería cumplir un probiótico con el fin de unificar
2.1.  Probióticos el concepto en los trabajos que se desarrollan en este
campo y aportar más garantías a la hora de utilizar
Desde hace miles de años los humanos hemos utiliza- estos productos9 (tabla 1).
do ciertos alimentos que eran popularmente conocidos Además, esta organización recoge otras considera-
por sus efectos beneficiosos para la salud, en particular ciones especiales a tener en cuenta a la hora de valorar
para la salud gastrointestinal, sin llegar a conocerse los trabajos con probióticos:

Tabla 1.  Criterios mínimos que deben cumplir los productos probióticos según la Organización Mundial de
Gastroenterología9.

· Especificarse por género y cepa. La investigación sobre determinadas cepas específicas de probióticos no se puede
aplicar a cualquier producto comercializado como probiótico.
· Estar vivos en el producto.
· Administrarse en dosis adecuadas hasta el final de la vida útil, con variabilidad mínima de un lote a otro.
· Haber demostrado ser eficaces en estudios controlados en humanos.
· Ser inocuos para el uso para el que estarían destinados.
456 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

• La documentación de los efectos sobre la salud 2.2.  Prebióticos


debe realizarse considerando la cepa específica
que se vende en el producto. La mayor parte de los di- y oligosacáridos se digieren
• No se pueden utilizar resultados y artículos de en el intestino delgado, pero algunos llegan al colon
revisión de estudios conducidos sobre cepas es- sin digerir, donde son fermentados por la microbibota,
pecíficas, como evidencia que avale los efectos obteniendo un efecto bifidogénico. Actualmente, se
sobre la salud de cepas que no hayan sido estu- definen los prebióticos como ingredientes que resisten
diadas. la acidez gástrica, la hidrólisis enzimática y la absorción
• Los estudios que documentan la eficacia de las ce- gastrointestinal, llegando al intestino grueso, donde
pas específicas a una dosificación determinada, son fermentados selectivamente por la microbiota in-
no son evidencia suficiente como para avalar los testinal, de modo que estimulan el crecimiento y/o ac-
efectos en salud a una dosificación más baja. tividad de aquellas bacterias que contribuyen a la salud
y el bienestar3. Bajo estos criterios podemos hablar a
Las especies que más frecuentemente se utilizan día de hoy de los galactoligosacáraidos (GOS), la lactu-
como probióticos son las BAL (Lactobacillus y Bifido- losa, la inulina y los fructoligosacáridos (FOS). Los car-
bacterium), pero por ejemplo algunas levaduras bohidratos no digeribles que pueden ser considerados
como el Sccharomyces cerevisiae y algunas especies como prebióticos pueden estar presentes en alimentos
de E. coli y Bacillus también son utilizadas como pro- como la leche y la miel, así como en hortalizas, verdu-
bióticos9. ras, frutas, legumbres, cereales y frutos secos.
La identificación de las cepas probióticas se hará La mayoría de los estudios con prebióticos se han
siempre por su género, especie y una designación alfa- desarrollado en animales, y los existentes en humanos
numérica, por ejemplo, Lactobaccilus casei DN-114 tienen números pequeños de pacientes, por lo que no
001 o Lactobacillus rhamnosus GG9. hay suficientes datos con los que poder sacar conclu-
Según lo referido con anterioridad, en cuanto a la siones para la práctica clínica habitual10.
aplicación práctica de los probióticos, cabe destacar
su potencial papel objeto actual de estudio en enfer- 2.3.  Simbióticos
medades propiamente intestinales como son el sín­ Son combinaciones apropiadas de probióticos y pre-
drome de intestino irritable (SII), la enfermedad infla- bióticos que ejercen ambos efectos. El objetivo con los
matoria intestinal (EII), pouchitis, diarreas infecciosas, simbióticos es tratar de incrementar la supervivencia y
diarrea asociada a antibióticos, infección por Clostri- la actividad de los probióticos ya probados en vivo, así
dium difficile, enteritis postradioterapia, intolerancia a como estimular las bifidobacterias y lactobacilos endó-
la lactosa, la celiaquía, etc., pero también otras como genos. De nuevo, también para los simbióticos, no te-
son las alergias, la atopia, la encefalopatía hepática, la nemos en la actualidad datos suficientes para reco-
esteatohepatitis, la diabetes, la obesidad, algunas alte- mendar su uso9, 10.
raciones del comportamiento o algunos tumores. Aun-
que en la actualidad existen abiertos numerosos puntos
de investigación básica y clínica en este campo, a día 2.4.  Fibras
de hoy los probióticos que han logrado tener ya un Este es un término más amplio que los prebióticos y
cierto papel práctico son aquellos que sí han podido hace referencia a diversos hidratos de carbono y a la
demostrar con éxito algún beneficio en humanos, lignina que resisten la hidrólisis por las enzimas diges-
como por ejemplo en la diarrea aguda de origen viral, tivas humanas, pero que pueden ser fermentados por
en la infección por Clostridium difficile, y posiblemente la microflora colónica y/o excretadas parcialmente por
en la pouchitis y en el SII. Faltando aún mucho trabajo las heces4. Por lo tanto, algunos de estos ingredientes
por hacer para incorporar su utilización eficaz y segura sí cumplen estrictamente las condiciones para ser con-
en muchas de estas patologías enumeradas, cuyo ori- siderados prebiótico, como la inulina por ejemplo,
gen parece estar en parte relacionado con el fenómeno pero otros resultan más difíciles de clasificar. Al igual
de disbiosis. que sucede con los prebióticos y simbióticos, es difícil
En este capítulo, donde el ámbito clínico y de apli- a día de hoy dar recomendaciones prácticas al respecto
cabilidad práctica es el que nos concierne y, en con- por no haber suficientes datos.
creto, el relacionado con la patología intestinal del
adulto, no entraremos en el papel de los probióticos
3.  Diarrea
en niños ni en las enfermedades no intestinales, como
puedan ser la obesidad, la diabetes, la esteatosis he- La diarrea, a nivel global, es una de las cinco principa-
pática, etc., aunque probablemente, sea en la actua- les causas de muerte11. Según datos de la OMS y de
lidad uno de los campos de mayor expansión y donde UNICEF, anualmente se dan 2 billones de casos de dia-
exista un mayor y atractivo desarrollo futuro y poten- rrea en el mundo, de los cuales 1,9 millones se dan en
cial innovador. niños menores de 5 años, la mayoría de ellos en países en
Tema 28.  Diarrea y estreñimiento. Papel de probióticos y prebióticos 457

vías de desarrollo, lo cual supone un 18% de todas las transitorios sin mayor repercusión y cuya causa más ha-
muertes en esa franja de edad, principalmente en países bitual son los virus. Las bacterias son, en general, las
africanos y del sudeste asiático12. Sin embargo, en los causantes de diarreas de mayor gravedad, por ejemplo,
países industrializados la diarrea aguda no suele suponer Salmonella, Campylobacter, Shigella, Escherichia coli,
un riesgo vital, pero es la diarrea crónica la que tiene un Clostridium difficile, etc. Pero en el contexto de países
gran impacto socio sanitario por su prevalencia, la limita- industrializados, ante una diarrea grave hay que tener
ción en la calidad de vida del paciente que ha de convivir en cuenta el posible origen isquémico o inflamatorio de
con ella y los recursos que se destinan a su manejo. la misma, así como la posibilidad de estar ante un brote
Así, la aproximación clínica y diagnóstica al paciente de EII. Los parásitos, en cambio, suelen dar una diarrea
con diarrea será distinta en función de la región del más persistente en el tiempo y, en estos casos, es im-
mundo en la que trabajemos, de su propia epidemiolo- portante conocer el entorno habitual del paciente y la
gía, prevalencia, recursos económicos del país, edad y historia personal de viajes, entre los parásitos la Giardia,
comorbilidad del paciente. En cualquier caso, el capítu- el Cryptosporidium o la Entamoeba histolytica son los
lo que nos ocupa en este libro se centra exclusivamente más comunes. A medida que un cuadro de diarrea se
en el paciente adulto y, mayoritariamente, en el con- prolonga en el tiempo o el tratamiento empírico no es
texto de países industrializados. efectivo, hay que pensar en una causa no infecciosa.
La diarrea, en términos generales, se define como la
realización de tres o más deposiciones de consistencia 3.1.2.  Aproximación clínica y diagnóstica
líquida en 24 horas. En función de su temporalidad
podríamos clasificarla en11: Para enfocar adecuadamente un cuadro de diarrea
aguda es fundamental llevar a cabo una historia clínica
• Diarrea aguda: si su duración no se prolonga más detallada del paciente y revisar la cronología de la en-
de 14 días. fermedad. Con una buena evaluación clínica debería-
• Diarrea persistente: en caso de que la duración mos ser capaces de valorar la gravedad del cuadro y
sea entre 15 y 30 días. enfocar hacia las causas más probables de la misma.
• Diarrea crónica: en aquellos casos que se prolon- En la anamnesis no deberían faltar datos sobre:
gue más de 30 días.
• Consumo de comidas o alimentos previos y el
Es importante tener en cuenta que ante una diarrea tiempo de exposición a la potencial fuente de ori-
que se prolonga en el tiempo, disminuye la probabili- gen.
dad de una etiología infecciosa de la misma11, por eso, • Exposición a fármacos: inmunosupresores, anti-
esta clasificación nos ayudará a filiar la etiología de la bióticos o consumo habitual de IBP.
misma y a plantear el estudio diagnóstico más oportu- • Contacto con animales.
no en cada caso. • El Entorno laboral (con niños, con ancianos insti-
Pero también podemos clasificarla en función del tucionalizados, etc.).
tipo de presentación de la misma, en: • Viajes recientes o el lugar de procedencia del pa-
ciente.
• Diarrea acuosa: en la mayoría de diarreas de ori- • Características y forma de presentación de la dia-
gen viral, bacteriano, SII o funcionales. rrea.
• Diarrea invasiva o disentería: donde existe moco o • Síntomas acompañantes como dolor abdominal,
sangre visible en heces, como ocurre en los casos fiebre, náuseas o vómitos.
de infección por Eschirichia coli enterohemorrági- • Existencia de comorbilidades asociadas, especial-
ca, Entamoeba h. o en la EII o en la colitis isqué- mente las cardiovasculares.
mica. • Sospecha de inmunosupresión secundaria a fár-
macos o VIH.
Esta otra clasificación nos ayudará también al diag-
nóstico y a valorar la gravedad clínica del cuadro, sien- En la exploración física del paciente prestaremos es-
do a priori de mayor gravedad la diarrea invasiva, ex- pecial atención a los signos de deshidratación o hipo-
cepto por ejemplo en los casos de diarrea por Vibrio volemia, como la tensión arterial, la frecuencia cardia-
cholerae que produce una gran diarrea acuosa con una ca, los pliegues cutáneos, los ojos hundidos o la
alta morbimortalidad. sequedad de mucosas, etc., y la exploración abdomi-
nal. Todo ello, nos hará valorar la situación de grave-
3.1.  Diarrea aguda dad inicial del paciente y actuar en consecuencia.
Las pruebas complementarias no siempre serán
3.1.1. Etiología necesarias en la diarrea aguda y su utilización también
A nivel global, la causa más frecuente de diarrea agu- dependerá de los recursos sanitarios donde estemos
da es la infecciosa y suele cursar como cuadros leves y trabajando. De las que llegan a un centro sanitario, mu-
458 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

chas de ellas no precisan mayores estudios por su reso- mitos en los que se valorará utilizar la vía intravenosa,
lución espontánea con o sin tratamiento sintomático en siempre con precaución en ancianos o pacientes con
un período relativamente corto de tiempo. En ciertos patología cardiovascular. En determinadas situaciones,
casos, de gravedad clínica, una analítica de sangre pue- también puede considerarse la utilización de sonda na-
de ser útil para valorar si hay afectación sistémica, datos sogástrica (SNG) para la rehidratación. La SRO más ade-
de deshidratación, o desequilibrios electrolíticos secun- cuada y preferible es la que se distribuye ya preparada
darios a pérdidas digestivas, anemia, leucocitosis, etc. siguiendo las recomendaciones de la OMS, pero en de-
Realizar un coprocultivo no siempre es necesario, en terminados casos en los que no se encuentre accesible,
ocasiones con una buena historia clínica y exploración otra opción sería su preparación en casa (tabla 2). La
es suficiente, pero en otras situaciones se deberá solici- concentración de electrolitos de bebidas comerciales
tar, de forma dirigida, por el médico peticionario para «isotónicas» no es equivalente a la solución oral, pero
evitar potenciales complicaciones futuras y para tomar también pueden resultar suficientes en el paciente sano
decisiones terapéuticas. Por lo tanto, estará indicado con diarrea leve no deshidratante9. Actualmente, en
realizar un cultivo de heces cuando exista: población infantil, tanto la OMS como UNICEF reco-
miendan la suplementación rutinaria con zinc (20 mg al
• Fiebre de más de 38,5 °C. día durante 10 días) en población infantil con diarrea
• Diarrea sanguinolenta. aguda, especialmente en países en vías en desarrollo12.
• Signos de hipovolemia. Tratamiento sintomático. En algunos casos de
• Edad mayor de 70 años. gravedad leve o moderada, y siempre que no existan
• Comorbilidad: cardiopatía, enfermedad renal cró- datos sugestivos de diarrea invasiva, pueden utilizarse
nica. fármacos que enlentezcan el tránsito intestinal, siendo
• Gestantes. el más comúnmente utilizado la loperamida, que se
• Diarreas de más de una semana de evolución. administrará tras cada deposición hasta un máximo de
• Inmunodepresión. 16 mg al día. También se ha utilizado eficazmente en
• Más de 8 deposiciones al día. la diarrea aguda, y en algunos casos de diarrea crónica,
• Determinadas profesiones como manipuladores el racecadotrilo, fármaco que pertenece a la nueva fa-
de alimentos. milia de los inhibidores de las encefalocinasas, y que
actúa disminuyendo la secreción intestinal, al no atra-
Las pruebas de imagen aportan en general poca in- vesar la barrera hematoencefálica no presenta los efec-
formación en los casos de diarrea, salvo por ejemplo en tos secundarios centrales de la loperamida. La dosis en
casos de sospecha de colitis de origen isquémico. adultos es de 100 mg/8 h antes de cada comida hasta
lograr dos deposiciones normales o durante un máxi-
3.1.3. Manejo terapéutico, dietético mo de 7 días. En caso de que existan signos de severi-
dad en un episodio de diarrea aguda estará indicado el
y nutricional
ingreso hospitalario, entre ellos:
Hidratación y reposición hidroelectrolítica. En la
diarrea aguda, la intervención más importante y que • Signos de deshidratación o hipovolemia.
logra reducir la mortalidad es la correcta hidratación • Fiebre persistente mayor de 38,5 °C.
mediante la administración de soluciones de rehidrata- • Diarrea sanguinolenta.
ción oral (SRO) adecuadas, siendo considerado un mé- • Historia de EII.
todo coste-efectivo en el manejo de la diarrea aguda y • Existencia de comorbilidades como cardiopatías o
reduciendo los ingresos tanto en países desarrollados enfermedad renal crónica.
como a los que no lo están tanto12. Siempre que sea • Sospecha de inmunosupresión (VIH, trasplanta-
posible será por vía oral y de forma ambulatoria. La so- dos, tras quimioterapia, etc.).
lución clásica de rehidratación oral se utilizará en todo
paciente con independencia de la edad o del tipo de Tratamiento etiológico. En general, en la mayoría
diarrea, salvo cuando existan datos de deshidratación de los casos no es necesario un tratamiento con anti-
severa, compromiso de la función renal, náuseas o vó- bióticos en la diarrea aguda. Pero en determinados ca-

Tabla 2.  Sales de rehidratación oral.

·  3,5 gramos de cloruro sódico


·  1/2 cucharada de café de sal
·  2,9 gramos de bicarbonato sódico
·  1/2 cucharada de café de bicarbonato
·  1,5 gramos de cloruro potásico
·  4 cucharadas soperas de azúcar
·  20 gramos de glucosa
·  1 litro de agua potable
·  1 litro de agua potable
Tema 28.  Diarrea y estreñimiento. Papel de probióticos y prebióticos 459

sos de gravedad se realizará un cultivo de heces y se adición de fibra fermentable, como goma guar, a las
podrá iniciar tratamiento antibiótico empírico con qui- soluciones rehidratantes redujo la duración de la dia-
nolonas por vía oral (por ejemplo, ciprofloxacino 500 rrea y el peso de las heces en niños con diarrea no
mg uno cada 12 horas o levofloxacino 500 mg cada producida por el cólera14. La adición de almidón resis-
24 horas). Como alternativa o en caso de sospecha de tente a una solución de hidratación clásica, administra-
resistencias, macrólidos (azitromicina o eritromicina). da a pacientes con diarrea por cólera, consiguió dismi-
Las situaciones donde estaría indicado el inicio de un nuir las pérdidas de líquidos a través de las deposiciones
tratamiento antibiótico empírico se pueden resumir en: y acortar el tiempo de las diarreas15. Esta experiencia
podría no ser extrapolable a otras causas de diarrea,
• Fiebre mayor de 38,5 °C. donde las medidas habituales basadas en arroz dieron
• Síntomas de deshidratación o hipovolemia. resultados poco satisfactorios16.
• Diarrea sanguinolenta. Recomendaciones dietéticas. En el caso de las
• Más de 6 deposiciones al día. diarreas agudas, por la brevedad del cuadro no suele
• Diarreas de más de una semana de evolución. ser necesario realizar ninguna intervención específica
• Edad mayor de 70 años. de soporte nutricional, aunque sí conviene tener en
• Comorbilidad: cardiopatía, enfermedad renal cró- cuenta las recomendaciones nutricionales habituales
nica. hasta la mejoría de los síntomas. En pacientes con dia-
• Inmunodeprimidos. rrea acuosa se recomienda el consumo de almidón co-
• Ciertas profesiones: manipuladores de alimentos. cido y cereales (patata, arroz, trigo, avena, etc.) con
sal, así como plátanos, yogur, sopa y vegetales coci-
Debe evitarse el uso de antibióticos si se sospecha dos11. También es común el desarrollo de intolerancia
Escherichia coli enterohemorrágica, ya que no hay evi- a la lactosa secundario a la enteritis infecciosa, que
dencia de beneficio y podría aumentar el riesgo de sín- puede durar de días a meses, para ello se recomienda
drome hemolítico-urémico y se debe sospechar en la el abandono temporal de productos lácteos (excepto
diarrea sanguinolenta con dolor abdominal, con o sin yogur o leche sin lactosa) e ir reintroduciéndolos de
fiebre. También se debe valorar siempre la posibilidad forma progresiva según tolerancia.
de infección por Clostridium difficile, en cuyo caso es- Soporte nutricional artificial. Generalmente en
taría indicado suspender el resto de antibióticos e ini- las diarreas agudas, por su duración, no es necesario
ciar metronidazol o vancomicina como tratamiento recurrir a un soporte nutricional artificial para optimi-
empírico, siempre y cuando la sospecha clínica sea alta. zar la resolución del cuadro y evitar la desnutrición aso-
Probióticos. En la diarrea aguda de origen sobre ciada. En caso de población infantil en países de renta
todo viral es donde existen mayores evidencias sobre el baja, sí están indicadas las fórmulas especiales de tra-
efecto de los probióticos para acortar la duración de la tamiento nutricional en los casos de desnutrición agu-
misma. Esto se ha probado con L. casei GG, L. reuteri da grave asociada a diarrea, conocidas como F75 y
ATCC 55730, Lactobacillus rhamnosus GG o Saccha- F100, vía oral o mediante SNG.
romyces boulardii. También parece que pudieran tener
un papel no solo en el manejo, sino en la prevención
3.2.  Diarrea crónica
de diarrea aguda de origen viral: L. GG, L. casei DN114
y Saccharomyces boulardii10,12 En cualquier caso, los Nos referiremos a diarrea crónica cuando un episo-
probióticos considerados a día de hoy como más efec- dio de diarrea se prolonga más de 4 semanas. La dia-
tivos en la diarrea aguda son el Lactobacillus rhamno- rrea crónica es una enfermedad que tiene una mayor
sus GG y Saccharomyces boulardii7. prevalencia en los países industrializados17.
En el caso de las diarreas asociadas a antibióti-
cos, existe una fuerte evidencia de la eficacia de S.
3.2.1. Etiología
boulardii y Lactobacillus rhamsosus GG. En el caso de
diarrea por Clostridium difficile se han utilizado Sac- Hay que tener en cuenta que las causas predomi-
charomyces boulardii y existen estudios que indican la nantes de la diarrea crónica varían considerablemente
eficacia para evitar este tipo de diarrea mediante L. ca- en función de la situación socioeconómica de la po-
sei DN-114 019, 13. Actualmente, se está investigando blación a la que nos estemos refiriendo. Así, por ejem­
en la posibilidad de trasplante de microbiota fecal plo, la diarrea crónica en el mundo occidentalizado
(TMF) para el tratamiento de diarreas graves y recu- frecuentemente estará en relación con el síndrome
rrentes por Clostridium difficile, con resultados prome- del intestino irritable, enfermedades autoinmunes,
tedores3, 7. enfermedades inflamatorias, síndromes malabsorti-
Prebióticos y fibras. Dada la alta capacidad que vos o intolerancias alimentarias (tabla 3), pero en paí-
tiene el colon de absorber sodio y agua, se ha propues- ses en vías de desarrollo nos encontraremos con que
to que la administración de carbohidratos fermenta- las causas más frecuentes son las infecciosas (bacte-
bles podría ser útil en algunos tipos de diarreas. La rianas, parasitarias, etc.). La disminución de calidad
460 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

de vida del individuo que lo padece, el número de vi- • Reciente aparición, en los últimos 3 meses.
sitas al médico, las pruebas complementarias que • Deposiciones nocturnas.
desencadenan y la dificultad de lograr un manejo óp- • Diarrea continua más que intermitente.
timo y resolutivo de estos cuadros son un reto en la • Diarrea de comienzo rápido.
práctica clínica actual17, 18. • Pérdida de más de 5 kg de peso.
• Peso diario de heces mayor de 400 g.
3.2.2.  Aproximación diagnóstica • Elevación de la VSG, disminución de la hemoglo-
bina o de parámetros como la albúmina.
De nuevo, sigue siendo crucial realizar una minu-
ciosa historia clínica17 en la que se debe reconocer Hay que tener en cuenta que la patología gastroin-
qué entiende el paciente por diarrea, no deberán fal- testinal más frecuente en las consultas de atención pri-
tar datos sobre las características de las heces (volu- maria y especializada es el SII y la patología puramente
men, consistencia, presencia de productos patológi- funcional, pero no por eso debemos olvidar otras cau-
cos), horario en las deposiciones, duración de la sas posibles de mayor repercusión clínica. También es
diarrea, historia de viajes recientes, antecedentes fa- importante preguntar sobre la situacional de estrés
miliares de EII, tratamientos médicos como la metfor- emocional o factores psicológicos que pueda presentar
mina, o alimentos con los que se encuentre cierta re- el paciente.
lación, datos que sugieran una posible situación de
inmunosupresión o una afectación sistémica, pérdida En el caso del SII, los criterios diagnósticos más acep-
de peso o coexistencia de un síndrome constitucional, tados son los de Manning y los de Roma II definidos
punto en el que debemos ser especialmente cautelo- como dolor abdominal durante un mínimo de 12 se-
sos y valorar la existencia o no de otros datos de alar- manas, no necesariamente consecutivas, en los últimos
ma como: 12 meses, que se acompaña de al menos dos de los
siguientes síntomas:
Tabla 3.  Algunas de las etiologías más comunes de la
diarrea crónica en países industrializados. • Alivio del dolor tras la defecación.
• Inicio del dolor abdominal asociado a un cambio
Enfermedades sistémicas del ritmo intestinal.
· Diabetes mellitus mal controlada • Inicio del dolor abdominal coincidiendo con un
· Hipertiroidismo cambio en la composición de las heces.
· Vasculitis
· Tumores neuroendocrinos En la exploración física del paciente con diarrea cró-
nica, además de la exploración habitual, se valorará
Enfermedades intestinales especialmente el grado de deshidratación, aunque en
· Funcionales estos casos probablemente sea de menor intensidad
· Síndrome de intestino irritable que en un episodio de diarrea aguda. Se realizará una
· Inmunológicas: celiaquía, intolerancias valoración nutricional completa incluyendo la existen-
· Inflamatorias: enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa cia o no de signos relacionados con déficits nutriciona-
· Postquirúrgicas: fístulas, SIC, resecciones ileales les como queilitis, aftas o lesiones cutáneas. Medidas
· Postradioterapia antropométricas como el peso, talla e IMC del paciente
· Neoplasias: adenoma velloso son importantes tanto al inicio del cuadro como a la
· Infecciosas: bacterianas o parasitarias hora de realizar el abordaje clínico y nutricional del pa-
ciente o valorar la respuesta al tratamiento.
Enfermedades digestivas no intestinales En los casos de diarrea crónica sí está indicada la
· Déficit pancreático exocrino realización de una analítica que nos permita valorar la
posible afectación sistémica del paciente, puede ayu-
Fármacos darnos a enfocar el diagnóstico y valorar la presencia
· Metformina de déficits nutricionales si los hubiera. Además, al ini-
· Colchicina cio de los síntomas, se podrá solicitar un análisis de las
· Antibióticos heces que podrá aportar información sobre la existen-
· Quimioterápicos cia de sangre oculta en heces, esteatorrea, o, en caso
· Laxantes necesario, realizar estudios microbiológicos. Si a pesar
de esta primera aproximación no tenemos suficientes
Consumo excesivo de determinados ingredientes datos, según la severidad del cuadro o las posibilidades
diagnósticas, se podrían solicitar otras pruebas más es-
· Fibras no fermentables: goma arábica o fibra de soja
pecíficas como endoscopias, pruebas de imagen, sero-
· Manitol o sorbitol
logías o determinación de anticuerpos.
Tema 28.  Diarrea y estreñimiento. Papel de probióticos y prebióticos 461

3.2.3. Manejo terapéutico, dietético y nutricional que presentan. Por lo que ante síntomas de diarrea
crónica no filiada, en casos de SII o síndromes funcio-
Hidratación y reposición hidroelectrolítica. En nales es importante valorar la necesidad real, y sobre
los cuadros de diarrea crónica no suele ser tan común todo definitiva, de eliminar ciertos alimentos. Además,
la afectación de la situación hidro electrolítica como en tendremos que explicar bien al paciente la transitorie-
los episodios agudos, suelen ser pacientes que se pue- dad del cambio de alimentación en la mayoría de los
den valorar de forma ambulatoria y a los que sí que casos. Si la causa origen del cuadro diarreico no es cu-
habrá que aportar un manejo que alivie el cuadro. En rable, habrá que dar orientaciones al paciente de tal
estos casos son importantes las recomendaciones de forma que pueda mantener el consumo de fibra y no
alimentación y de hidratación hasta la resolución de eliminarlo o disminuirlo drásticamente de por vida por
la causa subyacente siempre que sea posible. Dada la lo perjudicial que puede llegar a ser una dieta exenta
prolongación del cuadro y la mayor probabilidad de de fibra (esteatosis hepática, diabetes, obesidad, etc.).
desnutrición durante el mismo, es más importante que Siempre que se reintroduzca de nuevo un alimento, o
en las diarreas agudas, adecuar un plan de seguimien- también en el caso de la fibra, la mejor manera de ha-
to y soporte nutricional al paciente. cerlo es que sea de forma progresiva empezando con
Tratamiento sintomático. Al igual que en la dia- muy pequeñas cantidades y siempre introduciendo los
rrea aguda, las situaciones en las que no se llega a nuevos alimentos de uno en uno.
descubrir la etiología o existe poca respuesta terapéu- Soporte nutricional. En algunos casos de diarrea
tica optaremos por un tratamiento sintomático, siem- persistente asociada a una disminución de peso o da-
pre que no esté contraindicado, para el cual dispone- tos de desnutrición o malabsorción, tanto ambulato-
mos de fármacos como la loperamida, agentes rios como hospitalizados, puede ser necesario, además
anticolinérgicos o adsorbentes intraluminales (fibras, de una adaptación de la dieta, iniciar un soporte nutri-
carbón activado, bismuto, resinas fijadoras de ácidos cional artificial para no comprometer o mejorar la si-
bilares, etc.). tuación nutricional. A veces es suficiente con la utiliza-
Tratamiento etiológico. Siempre que seamos ca- ción de suplementos orales nutricionales (SON) y en
paces de llegar al diagnóstico de la causa originaria otras ocasiones puede llegar a ser necesario un manejo
habrá que valorar la posibilidad de resolverla con el mediante nutrición enteral con una fórmula específica
tratamiento médico o quirúrgico correspondiente. mediante SNG a caída libre o en perfusión continua
Recomendaciones dietéticas. En general, depen- para mejorar la absorción de la misma. O, incluso, lle-
derá de la causa que produzca la diarrea, pero ante un gado el caso iniciar un soporte nutricional mediante
cuadro persistente o crónico de diarrea se deben evitar nutrición parenteral total (NPT), por ejemplo en pa-
aquellos alimentos o bebidas que aceleren el ritmo in- cientes oncológicos con mucositis graves o brotes gra-
testinal o favorezcan la malabsorción (café, té, alimen- ves de EII, al menos hasta la mejoría del cuadro y de la
tos crudos ricos en fibra, etc.) o produzcan flatulencia función nutricional del intestino.
(judías, cebollas, zanahorias, uvas pasas, apio, ciruela Probióticos. En los casos de diarrea crónica por SII
pasa, repollo, coliflor, coles de Bruselas, etc.) hasta la y otros síndromes funcionales intestinales sí parece
resolución o mejora de la sintomatología. También pa- apropiado decir que existe disbiosis y que los probióti-
rece razonable evitar comidas ricas en hidratos de car- cos podrían tener algún papel en su manejo, pero en la
bono refinados, grasas o condimentos picantes por la actualidad los estudios disponibles son pocos y limita-
posibilidad de que empeoren el cuadro. Si existe into- dos. En la colitis ulcerosa (CU) parece que según al-
lerancia confirmada hacia algún alimento específico, se gunos estudios el uso de algunos probióticos podría
puede valorar su retirada de la dieta, pero siempre de ayudar a su tratamiento, por ejemplo con Escherichia
forma cautelosa y siempre que se pueda, de modo coli Nissle 1917 y con VSL#3, pero la mayoría siguen
transitorio. Es importante recordar que en pocas oca- siendo estudios que precisan de un mejor diseño y no
siones es imprescindible la eliminación definitiva de puede establecerse como recomendación general. En
alimentos, excepto en casos de alergias o intolerancias la enfermedad de Crohn, los resultados sobre el uso
convenientemente confirmadas; especial cuidado hay de probióticos continúan siendo contradictorios a día
que tener al dar recomendaciones, sobre todo en de hoy, por lo que se necesita realizar más estudios y
cuanto a alimentos básicos de la alimentación huma- mejor diseñados que los existentes. En los casos de
na, pues pueden tener repercusiones nada desdeña- pouchitis o reservoritis, inflamación de la bolsa o
bles a medio y largo plazo en la salud del individuo si reservorio construida en las anastomosis íleo-anales
se eliminan de forma definitiva. Es común hoy en día derivadas de cirugías de la CU crónicas, poliposis ade-
que lleguen pacientes a las consultas en los que se han nomatosa familiar o en las proctocolectomías, podría
ido retirando progresivamente alimentos de la dieta, valorarse la utilización de probióticos, en concreto con
muchos de ellos básicos, por decisión propia o muchas la mezcla llamada VSL#3, pero actualmente no hay
veces aconsejados por profesionales sanitarios, sin te- pruebas que indiquen que pueda ser más efectivo que
ner certeza de que sean la causa de la sintomatología placebo tanto para la prevención como para el trata-
462 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

miento de la reservoritis; no obstante, se precisan estu- mula enteral (en bolos, a caída libre o en perfusión),
dios de mayor calidad7, 20-26. tratando de reducir la velocidad de perfusión teniendo
Diarrea asociada a nutrición enteral (DANE). siempre presente el volumen de nutrición que «sacrifi-
Más que una complicación «secundaria» a la nutrición camos» a expensas de un mejor control de la diarrea.
enteral (NE), parece más correcto hablar de una com- Confirmar que la NE no se administra recién sacada del
plicación «asociada» a la misma, pues no siempre existe frigorífico es otro punto que interesa revisar. Final­
una relación de causa-efecto. El origen puede estar en mente, se valorará la modificación de la fórmula nutri-
la propia patología del paciente, en causas relaciona- cional en función de la gravedad del cuadro tratando
das con la propia fórmula enteral, en alguno de los de evitar fórmulas con osmolaridades elevadas (< 300
fármacos prescritos o, en no pocas ocasiones, una exis- mOsm/l), con un alto contenido en sodio (40 mEq/l) y
tencia simultánea de varias de ellas. Ante un cuadro de con una mezcla de fibras solubles e insolubles al 50%
diarrea en un paciente que recibe NE conviene revisar (1-2,5 g/200 ml). Es igualmente importante revisar los
todos los factores predisponentes. Por un lado, los in- fármacos prescritos y retirar, o al menos racionalizar,
herentes a la propia NE, como la forma de administra- siempre que sea posible, aquellos que estén favorecien-
ción, la temperatura, el tipo de fibra o la osmolaridad do la diarrea27. En la actualidad, al igual que en los ca-
de la fórmula. Por otro lado, los relacionados con el sos de diarrea aguda de otra etiología, los probióticos
propio paciente, como son los posibles antecedentes sí juegan un papel en la prevención de diarrea asociada
de resección intestinal o la existencia de factores de a antibióticos y como prevención y tratamiento de la
riesgo cardiovascular que favorezcan un posible origen infección por Clostridium difficile27. En cuanto al papel
isquémico de la diarrea, o por ejemplo tener en cuenta de la fibra en el manejo de la DANE ya comentado,
la posibilidad de que pudiera existir un fecaloma. Tam- Zimmaro28 fue uno de los primeros en sugerir que la
bién los fármacos administrados (tabla 4), los antibió- fibra podría prevenir la aparición de diarrea mediante
ticos pueden ser causa de diarrea hasta dos semanas un estudio en 13 pacientes sanos alimentados con nu-
después de su suspensión, y se solicitará la determina- trición enteral: observó que aquellos que ingerían una
ción de toxina de Clostridium difficile. Solo se suspen- dieta sin fibra tenían mayor frecuencia de deposiciones
derá la NE en caso de sospecha de abdomen agudo líquidas y que al introducir pectina estas desaparecían.
(isquemia mesentérica, apendicitis, megacolon, etc.). Diversos estudios han demostrado posteriormente que
Para reducir las deposiciones y favorecer una consisten- la adición de fibra fermentable a las fórmulas de nutri-
cia menos líquida de las mismas trataremos de modifi- ción enteral reduce la incidencia de diarrea, algo que se
car aquellos factores que más probablemente estén presenta de forma más relevante en aquellos pacientes
influyendo. Nos aseguraremos de optimizar la hidrata- con un alto riesgo de presentar diarrea29.
ción y la perfusión del paciente. Seremos especialmen-
te cuidadosos en la higiene de la boca del paciente y en
4.  Estreñimiento
la manipulación de los sistemas de infusión. Se revisará
con la enfermería la forma de administración de la fór- El estreñimiento es uno de los motivos de consulta
más habituales en la práctica clínica. Faltan datos sobre
su prevalencia, pero se estima que ronde entre el
Tabla 4.  Fármacos que más comúnmente pueden 2-28%30. El estreñimiento como sintomatología cróni-
producir diarrea asociada a la nutrición enteral27. ca repercute tanto en la calidad de vida como en los
costes económicos derivados del estudio y manejo del
· Antibióticos: ampicilina, clindamicina,
mismo31. Al igual que ocurre con la definición de dia-
eritromicina, cefalosporinas, quinolonas
rrea, también es complejo encontrar una definición de
· Laxantes: lactulosa, magnesio
estreñimiento, pero si nos guiamos por los estudios
· Procinéticos: eritromicina, metoclopramida,
epidemiológicos anteriormente mencionados realiza-
colchicina, cisaprida, domperidona
dos en Estados Unidos y Reino Unido, podría definirse
· Inhibidores de la bomba de protones
como una frecuencia de deposición menor de 3 veces
· AINES
a la semana1, 2. La prevalencia del estreñimiento cróni-
· IECA
co varía según los estudios, se podría decir que ronda
· Digoxina
el 15%. Según los estudios en EEUU y Reino Unido, el
· Antidiabéticos: metformina, acarbosa
estreñimiento es más prevalente en mujeres, razas no
· Antineoplásicos: 5-fluorouracilo, irinotecán,
blancas y en mayores de 60 años. Se ha visto relación
capecitabina, cisplatino, adriamicina, docataxel,
con la baja actividad física y menor nivel socio-econó-
erlotinib, gefitinib, sorafenib
mico y educativo31.
· Inmunosupresores: micofenolato, tacrolimus,
Para el diagnóstico de estreñimiento de tipo funcio-
esteroides, ciclosporina, sirolimus
nal se recomienda utilizar los criterios de Rome IV, su
· Antirretrovirales: amprenavir, saquinavir,
presencia durante al menos 3 meses, no necesariamen-
nelfinavir, lopinavir
te consecutivos, es diagnóstico31.
Tema 28.  Diarrea y estreñimiento. Papel de probióticos y prebióticos 463

1.  Debe incluir dos o más de los siguientes puntos: en la anamnesis el tiempo de evolución de los sínto-
mas, posible asociación temporal con inicio de alguna
• Dificultad en la defecación, requiriendo esfuer- medicación, los antecedentes personales de diabetes
zo en al menos el 25% de las ocasiones. mellitus u otras enfermedades neurológicas o sistémi-
• Sensación de evacuación incompleta después cas, etc. La existencia de pérdida de peso concomitan-
del 25% de las deposiciones. te, dolor abdominal, la presencia de hematoquecia, un
• Sensación de obstrucción/bloqueo anorrectal inicio agudo del cuadro o una historia familiar de cán-
en el 25% de las ocasiones. cer de colon o EII, son datos de alarma. El examen físi-
• Maniobras manuales para facilitar la defeca- co incluirá un tacto rectal, que podrá informar sobre la
ción en al menos el 25% de las deposiciones. presencia de fisuras, hemorroides, tumoraciones o al-
• Heces duras, secas o caprinas (Bristol Sool Sca- guna asimetría del canal anal que sugieran alteraciones
le 1-2) en el 25% de las ocasiones. neurológicas. Es recomendable realizar una determina-
• Menos de 3 deposiciones a la semana. ción de sangre oculta en heces y una analítica básica
para descartar anemia u otra afectación sistémica. En
2. Es infrecuente la aparición de heces sueltas sin la caso de no objetivarse datos de alarma, no se conside-
utilización de laxantes. ra ampliar los estudios y sí iniciar un manejo educativo
3. No existen criterios suficientes para el diagnóstico con el paciente y poner en marcha cambios dietéticos
de SII. y de actividad física. Cuando el cuadro es sugerente de
una posible etiología obstructiva, sí se deberá realizar
4.1. Etiología alguna prueba de imagen o endoscopia.
El estreñimiento se debe en su mayoría a una altera-
ción de la motilidad intestinal principalmente en la par- 4.3. Manejo terapéutico, dietético y nutricional
te más distal del intestino (colon y región anorrectal).
En los casos de estreñimiento cuya causa es conoci-
Las causas pueden ser muy variadas. Una de las más
da, siempre que sea posible se valorará un tratamiento
frecuentes es la relacionada con la utilización de deter-
etiológico, como puede ser la suspensión de determi-
minados fármacos, también puede ser secundario a
nados fármacos, el tratamiento de un tumor o el apro-
patologías neurológicas, metabólicas o a lesiones obs-
piado manejo de la enfermedad neurológica o endocri-
tructivas. Fuera de estas, el estreñimiento funcional es
na que predispone al estreñimiento.
un proceso muy común a tener en cuenta. El SII es una
Pero en los casos del estreñimiento crónico idiopáti-
entidad que cursa con períodos alternantes de diarrea
co o funcional, cada vez más habitual en nuestro me-
y estreñimiento, por lo que también puede ser causa
dio, el manejo es más complejo porque se basa en la
del mismo (tabla 5).
educación del paciente, en un cambio en los hábitos
alimentarios y de ejercicio, y el uso moderado de laxan-
4.2.  Aproximación diagnóstica tes y enemas. El tratamiento quirúrgico se destina solo
Para el diagnóstico, la evaluación inicial deberá co- a aquellos pacientes seleccionados con estreñimiento
menzar con una detallada historia clínica que incluya muy severo y limitante, que no responden a las medi-
das conservadoras.
Educación al paciente. Es fundamental para po-
Tabla 5.  Etiología del estreñimiento. der obtener una mejora de la calidad de vida del pa-
ciente, un bienestar en su situación y disminuir la de-
· Neurológico: enfermedad de Hirschsprung,
pendencia del uso de laxantes. Son medidas educativas
neuropatía autonómica, enfermedad de Chagas,
útiles a la hora de abordar a estos pacientes el explicar
pseudobstrucción, esclerosis múltiple, daño
qué se entiende por ritmo intestinal normal y en qué
medular, enfermedad de Parkinson
situaciones ha de preocuparse más, explicar por qué el
· Endocrino-metabólico: hipercalcemia, diabetes
aumento en el consumo habitual de agua y de fibra
mellitus, hipotiroidismo, panhipopituitarismo,
regulariza su tránsito o tratar de habituar al paciente a
anorexia nerviosa, hipopotasemia
defecar tras las comidas porque es el momento donde
· Farmacológico: antihistamínicos, antidepresivos,
los movimientos intestinales son mayores, especial-
antiparkinsonianos, antiespasmódicos, opiáceos,
mente en la mañana.
suplementos de calcio, de hierro, bloqueadores de
Recomendaciones dietéticas. Aunque ningún es-
calcio, diuréticos, simpaticomiméticos.
tudio ha sido capaz de demostrar que el aumento de
· Síndrome de intestino irritable.
fibra dietética mejore el estreñimiento, se sigue reco-
· Idiopático: con tránsito normal, con tránsito
mendando como primera medida higiénico-dietética,
enlentecido, defecación disinérgica
siendo la ingesta diaria recomendada de fibra de
· Otros: gestación, distrofia miotónica, esclerosis
20-40 g/día. La fibra más adecuada es la no fermenta-
sistémica
ble, como la que contiene el salvado de trigo, algunos
464 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

cítricos o las legumbres, pues esta atrapa una mayor la defecación como son el misoprostol (análogo de las
cantidad de agua e incrementa la masa fecal, disminu- prostaglandinas), la colchicina, el lubiprostone (activa-
yendo el tiempo de tránsito, aunque también puede dor local de los canales cloruro) o la toxina botulínica34.
aumentar la flatulencia. La fibra fermentable, como las Tratamiento quirúrgico. Solo en situaciones límite
semillas de plantago, también pueden ayudar a aumen- y en pacientes muy seleccionados, en ocasiones se ha
tar el volumen fecal, ya que al ser fermentada en el co- optado por un tratamiento quirúrgico mediante una
lon aumenta la masa bacteriana de las heces (el 40-55% colectomía subtotal.
de las heces son masa bacteriana), pero su efectividad Estreñimiento asociado a nutrición enteral. Se-
es menor que la fibra no fermentable. Un metanálisis gún un estudio multicéntrico y prospectivo del grupo
que recoge 36 estudios aleatorios con un total de 1815 NADYA (Nutrición Artificial Domiciliaria Y Ambulatoria)
pacientes, compara distintos abordajes terapéuticos sobre complicaciones de la nutrición enteral domicilia-
como son la utilización de laxantes, fibra o placebo. Se- ria, aproximadamente el 50% presentan complicacio-
gún este estudio, los laxantes aumentaban el bolo fecal, nes gastrointestinales, siendo el estreñimiento la más
disminuían el dolor abdominal y mejoraban la consis- frecuente (25%). El mantenimiento de un ritmo intesti-
tencia de las heces con respecto al placebo y no se ob- nal regular es uno de los objetivos para añadir fibra a
servaron efectos secundarios severos con ninguno de la nutrición enteral, sobre todo en aquellos pacientes
los tratamientos. El estudio concluye que no hay sufi- que la requieren durante largo tiempo. La nutrición en-
ciente evidencia para recomendar un tratamiento u teral con fibra disminuye el uso de laxantes y aumenta
otro32. La fibra puede agravar los síntomas de pacientes el peso y la frecuencia de las deposiciones. Su utilidad
con estreñimiento cuando el tránsito es extremadamen- está demostrada en cuadros de estreñimiento de dura-
te lento o en aquellos con afectación de la médula espi- ción mayor a 2 semanas y utilizando tanto polisacári-
nal, por ello se recomienda en general abordar el estre- dos de soja como distintas combinaciones de fibras35.
ñimiento comenzando con dosis bajas de fibra e ir
incrementando según tolerancia y, solo en el caso de no 5. Conclusiones
mejorar, comenzar con laxantes. Existe un pequeño es-
tudio en el cual se compara el efecto de las ciruelas pa- El intestino es el mayor órgano de intercambio y co-
sas con el plantago; en dicho estudio. los pacientes refi- municación entre el medio externo y el medio interno,
rieron un número mayor de movimientos espontáneos esto le confiere un papel único en la fisiología humana,
con las pasas que con el plantago, igualmente también pues la obtención de un equilibrio saludable entre in-
reportaron una mejora en la consistencia de las heces; testino y la flora bacteriana en relación de simbiosis es
ambos tratamientos fueron bien tolerados33. de crucial importancia en la salud del individuo. El pro-
Laxantes. Disponemos en la actualidad de distintos ceso hasta adquirir este equilibrio y un desarrollo ópti-
tipos de laxantes dependiendo de su composición y mo del sistema inmune se inicia ya en la vida intraúte-
mecanismo de acción. Así, los más utilizados son: ro, posteriormente será a través del canal del parto y en
la primera infancia cuando se alcanza el mayor nivel de
• Laxantes osmóticos o salinos (sulfato de magne- desarrollo de este complejo proceso biológico de con-
sio, sulfato de sodio): preparados hipertónicos vivencia. Esta relación es la que determinará el óptimo
que aumentan la presión osmótica en la luz intes- funcionamiento intestinal no solo en la absorción de
tinal, aumentando la excreción de agua. nutrientes, sino en su papel metabólico e inmune.
• Laxantes estimulantes (bisacodilo, sen, aceite de La flora bacteriana existente en el intestino es propia
ricino): alteran la absorción de agua y electrolitos, de cada individuo. El estudio de la misma ha estado
aumentando el contenido de los mismos en la luz muy limitado debido a que la mayoría de las bacterias
intestinal y en el bolo fecal. Además, estimulan el intestinales no pueden ser aisladas en medios de culti-
peristaltismo por acción sobre las terminaciones vos habituales. A día de hoy, las nuevas técnicas de
nerviosas del intestino. determinación genética hacen posible conocer mejor y
• Laxantes emolientes (docusato sódico, parafina): más rápidamente el microbioma intestinal humano.
permiten la mezcla de micropartículas de agua Este avance supone un importante paso en el desarro-
con lípidos del bolo fecal ablandando su consis- llo científico de este campo de investigación.
tencia. El fallo en la adquisición inicial de este equilibrio o la
• Laxantes que aumentan el bolo intestinal (metilce- alteración del mismo una vez está ya constituido se co-
lulosa, plantago ovata, salvado de trigo): son co- noce con el término de disbiosis; esta aparece en fun-
loides hidrófilos que aumentan su volumen absor- ción de factores externos combinados con cierta predis-
biendo agua. posición genética. A día de hoy, la disbiosis se relaciona
con múltiples enfermedades prevalentes en nuestra so-
Otros fármacos. Se han utilizado algunos fármacos ciedad, tanto en niños como en adultos, y no solo intes-
en aquellos pacientes en los que, más que un enlente- tinales sino también metabólicas, como la obesidad o la
cimiento del tránsito, existe una alteración funcional de diabetes, o incluso enfermedades de perfil neuropsi-
Tema 28.  Diarrea y estreñimiento. Papel de probióticos y prebióticos 465

quiátrico. Este conjunto abre una nueva vía de estudio, seguir estimulando el desarrollo profesional a pesar de
aumentando las opciones de manejo de enfermedades las limitaciones y de las circunstancias que en muchos
altamente prevalentes, complejas por su origen en parte casos se presentan en los centros de trabajo de la Me-
aún desconocido y con un perfil crónico en el tiempo. dicina de hoy, donde lograr las herramientas y los me-
Tanto la diarrea como el estreñimiento son síntomas dios para un crecimiento profesional que pudiera hacer
muy prevalentes y que afectan de forma importante de la labor asistencial diaria una tarea más eficiente y
tanto a la salud individual como a la salud pública por completa es una ardua, y muchas veces, infructuosa
una u otra razón dependiendo del medio donde traba- labor. Y gracias, sin duda, al apoyo diario de los com-
jemos. La diarrea aguda es un síntoma con una impor- pañeros de trabajo sin los cuales se haría muy difícil
tante repercusión en morbimortalidad, especialmente continuar colaborando con iniciativas como esta y per-
en población menor de 5 años en países de renta baja, sistir con energía en la labor que como médicos asumi-
lo que supone una limitación añadida a su desarrollo y mos en su día. Agradecer a día de hoy con un cariño
un problema prioritario de salud pública. Esta situación especial el apoyo del equipo formado por D. Leopoldo
cambia radicalmente en países más desarrollados debi- García-Valdecasas, Dña. Gloria Gómez-Porteiro, Isabel
do a los recursos socioeconómicos de que estos dispo- Higuera Pulgar y Ana Prieto en la elaboración de este
nen; en cambio, serán los cuadros cronificados de dia- capítulo y en el abordaje de otros muchos retos diarios.
rrea y de estreñimiento idiopático los que, no porque
pongan en riesgo inmediato la vida de los individuos,
sino por la limitación en la calidad de vida de los pa-
7. Bibliografía
cientes que la padecen y por los costes socio-sanitarios   1. Connell AM, Hilton C, Irvine G, et al. Variation of
asociados. Los probióticos probablemente tengan un bowel habit in two population samples. Br Med J
papel mayor en el manejo de la diarrea y el estreñi- 1965; 5470:1095-99.
miento dependiendo de su origen, pero por el momen-   2. Everhart JE, Go VL, Johannes RS, et al. A longitudi-
to la aplicación práctica queda reducida fundamental- nal survey of self-reported bowel habits in the Uni-
mente al manejo de la diarrea aguda. Es necesario ted States. Dig Dis Sci 1989; 34:1153-62.
mejorar la calidad de los estudios para recomendar la   3. Álvarez G, Marcos A, Margolles A. Sociedad Espa-
aplicación de estos productos en otras entidades como ñola de Probióticos y Prebióticos. Probióticos, pre-
la pouchitis, o en casos de EII, SII, etc. El trasplante de bióticos y salud: Evidencia científica. 2016; Madrid.
microbiota fecal está en pleno desarrollo y se sugiere
  4. Olveira Fuster G, González-Molero I. Actualización
que podría tener un papel importante en la infección
de probióticos, prebióticos y simbióticos en nutri-
por Clostridium difficile recidivante. Todo ello precisa,
ción clínica. Endocrinol Nutr 2016; 63(9):482-494.
como hemos dicho, de mayores y mejores estudios que
  5. Wong JMW; Rusell de Souza, RD. Colonic Health:
actualmente se encuentran en pleno desarrollo, esti-
Fermentation and Short Chain Fatty Acids. J Clin
mulado tanto por la comunidad científica como por la
Gastroenterol 2006. Vol. 40:230-43.
industria farmacéutica y de alimentación.
Lo que subjetivamente parece que sí debemos tener   6. Houghteling P.D., Walker W.A. From Birth to «In-
en cuenta en nuestro día a día como profesionales sani- munohealth», Allergies and Enterocolitis. J Clin
tarios es que la alimentación que caracteriza al siglo XXI Gastrenterol 2015; Vol. 49. Sup. 1:7-12
a nivel global, con las consideraciones particulares de   7. Floch M.H., Walker W.A., Recommendations for
cada entorno geográfico y cultural, se caracteriza por ser Probiotic Use - 2015 Update. Proceedings and
deficitaria en fibra, vitaminas y minerales, y por un con- Consensus Opinion. J Clin Gastroenterol 2015;
sumo exagerado de hidratos de carbono, en su mayoría Vol.49.Sup.1.
refinados, y grasas que probablemente tengan mucho   8. Human Microbiome Project. [Consultado 12 Nov
que ver, junto con el sedentarismo, con los cambios en el 2016] Disponible en: http://hmpdacc.org/
perfil de enfermedades relacionadas de forma más o me-   9. Guarner F et al. Guía Práctica de la Organización
nos directa con nuestro metabolismo y donde la flora Mundial de Gastroenterología: Probióticos y pre-
bacteriana tenga mucho que decir y de qué «quejarse» bióticos. Guías Mundiales de la WGO Probióticos y
ante esta situación. Quizás de común acuerdo con ella prebióticos. 2011;1-29. Disponible en: http://
podamos paliar mejor la situación de salud y enfermedad www.worldgastroenterology.org/UserFiles/file/
propia de este siglo promoviendo a diario la vuelta a una guidelines/probiotics-spanish-2011.pdf
alimentación más equilibrada y saludable. 10. Eamonn M. Quigley, MD. Prebiotics and Probio-
tics: Their Role in the Management of Gastrointes-
tinal Disorders in Adults. Nutr Clin Pract 2011;
6. Agradecimientos 27:195-200.
A la Dra. Julia Álvarez, por confiar y contar de nuevo 11. Wanke CA; Approach to the adult with acute dia-
con nosotros, relativamente jóvenes endocrinos, en es- rrhea in resource-rich settings. [Consultado 11 Oct
tas iniciativas. Por ser de las personas que apuestan por 2016] Uptodate. 2016.
466 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

12. Farthing, MD Salam M, Lindberg G, Acute Diarr- 24. Gionchetti P, Rizello F, Helwig U, et al. Prophylaxis
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Tema 29.
Soporte nutricional en enfermedades pancreáticas
Irene Gonzalo Montesinos
Hospital Universitario Infanta Elena y Fundación Jiménez Díaz. Madrid

Virginia Peña Cortés


Endocrinología y Nutrición. Hospital Virgen de la Salud. Toledo

Julia Álvarez Hernández


Noelia Peláez Torres
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Príncipe de Asturias. Alcalá de Henares (Madrid)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 467-479.

1.  Introducción
2.  Pancreatitis aguda
3.  Pancreatitis crónica
4. Resumen
5. Bibliografía

1.  Introducción ción normalmente sin incidentes, o la forma grave (ne-


crohemorrágica) asociada a fallo multiorgánico y/o
El páncreas es un órgano secretor exocrino y endo- complicaciones locales como necrosis, pseudoquistes o
crino situado en el compartimento abdominal supe- abscesos2. Por otro lado, dentro de la pancreatitis cró-
rior, en posición retroperitoneal. Resulta indispensable nica (PC) se debe considerar una forma de comporta-
para la adecuada absorción y metabolismo de los nu- miento especial la pancreatitis obstructiva, que se ca-
trientes de nuestra alimentación, por lo que cualquier
racteriza por la posibilidad de mejoría de la función
proceso que interfiera en su correcto funcionamiento
exocrina una vez conseguida la descompresión del
va a condicionar una alteración en el estado nutricio-
conducto de Wirsung obstruido.
nal. La severidad dependerá, fundamentalmente, del
Desde el punto de vista clínico, todas las formas pue-
grado de afectación glandular, del tiempo de evolu-
den presentarse como un brote único o con episodios
ción y de la situación nutricional previa del paciente.
recidivantes, lo cual dificulta la diferenciación, en el
Algo más de dos terceras partes de tejido pancreáti-
momento inicial, entre una forma y otra, debiendo es-
co está dedicado a la secreción exocrina, que tiene lu-
perar a la evaluación funcional y la realización de un
gar en la célula acinar, donde se sintetizan enzimas
estudio morfológico más exhaustivo de la glándula. En
glucolíticas, lipolíticas y proteolíticas. El tejido endocri-
aquellos pacientes en los que no se evidencia una clara
no se agrupa en los islotes de Langerhans, que ocupan
etiología de la pancreatitis, se debe excluir cáncer pan-
menos del 5 % de la glándula y, cuyas células producen
creático, enfermedades autoinmunes o tumor de papi-
fundamentalmente insulina y glucagón, indispensables
la duodenal3.
en la regulación del metabolismo hidrocarbonado. El
resto del órgano es tejido conectivo de sostén y estruc-
turas excretoras, vasculares, linfáticas y nerviosas1. 2.  Pancreatitis aguda
La glándula pancreática sufre, con una frecuencia
2.1. Introducción
variable, un proceso inflamatorio de carácter agudo o
crónico. La diferenciación entre los dos tipos de proce- La inflamación del páncreas se considera uno de los
sos ha motivado diversas reuniones científicas (la últi- motivos más frecuentes de consulta en los servicios de
ma en Atlanta 1992), donde se clasifica la pancreatitis urgencia, constituyendo su presentación aguda del 0,1
aguda (PA) en una forma leve (edematosa o intersti- al 1,5 % de los diagnósticos en los grandes hospitales.
cial) con mínima alteración del órgano y una recupera- La causa más frecuente de la PA en diversos países de

467
468 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

Europa, Suramérica y poblaciones suburbanas de los célula acinar, llegando a provocar una suelta de cito-
Estados Unidos es la litiasis biliar, aproximadamente el quinas y mediadores inflamatorios, así como al recluta-
35 % de los episodios de PA están originados por miento de células inflamatorias6 y la aparición de un
cálculos biliares, aunque los pacientes que tienen litia- síndrome de respuesta inflamatoria sistémica que pro-
sis biliar presentan un riesgo de desarrollar PA entre el duce hipermetabolismo y balance nitrogenado negati-
3 y el 7 %. En cambio, con más frecuencia en los países vo7. Entre un 5-10 % de las PA desarrollan un proceso
escandinavos, algunas zonas de Brasil y población ur- necrotizante moderado o grave que puede dar lugar a
bana de Estado Unidos la causa es la ingesta de alco- complicaciones locales y sistémicas, necesitando en al-
hol4. Llegando a describir hasta un 75 % de PA de etio- gunos casos soporte médico intensivo y/o intervencio-
logía en este último. Un 10 % se producen por otras nes quirúrgicas. La pancreatitis severa necrotizante
patologías incluyendo páncreas divisum, traumatis- tiene una mortalidad del 5-20 %8. Uno de los criterios
mos, hipoparatiroidismo, hipercalcemia, hiperlipemias, más usados para evaluar la severidad y el pronóstico de
fármacos, postcolangiopancreatografía retrógrada en- la PA fueron los establecidos en 1974 por el Dr. John
doscópica o discinesia biliar5. En España, la causa más Ranson, que a través de una serie de parámetros iden-
frecuente, con predominio en mujeres de edad media, tifica los pacientes con alto riesgo de desarrollar com-
es la litiasis biliar, siendo difícil de diagnosticar cuando plicaciones (tabla 1). Posteriormente a los criterios de
existen únicamente microlitiasis o barro biliar, y en se- Ranson se utilizaron los sistemas generales de cuantifi-
gundo lugar está el consumo de etanol, con predomi- cación de gravedad usados en enfermos críticos, tales
nio en el sexo masculino4. como el Acute Physiology and Chronic Health Evalua-
tion II (APACHE II) que se debe corregir con el índice de
2.2.  Fisiopatología y diagnóstico masa corporal (IMC)1.
La PA consiste en una respuesta sistémica de natura- En la PA el síntoma más frecuente es el dolor, que
leza inmunoinflamatoria debida a un proceso de auto- suele localizarse en el epigastrio e irradiarse en forma
digestión de la glándula pancreática5. Este proceso de cinturón hacia hipocondrios y espalda o, de forma
tiene lugar como resultado de una agresión, en mu- menos habitual, a la región torácica. Acompañando al
chos casos, poco definida, que conlleva una activación dolor pueden aparecer vómitos, distensión abdominal
prematura de las enzimas proteolíticas. Se inicia con la por íleo intestinal o fiebre (puede indicar proceso infec-
activación y liberación de tripsina en el citoplasma de la cioso subyacente). El shock es poco frecuente, obser-

Tabla 1.  Criterios pronósticos de Ranson (se considera pancreatitis grave a aquella
que reúne 3 o más factores dentro de las primeras 24-48 horas de evolución).

Pancreatitis alcohólica
Admisión 48 horas
Edad > 55 años Descenso del hematocrito > 10 %
Leucocitos > 16000/μl Aumento del nitrógeno ureico > 5 mg/dl
Glucosa > 200 mg/dl Déficit de base > –4 mEq/l
LDH sérica > 350 UI/l Secuestro de líquidos > 6 l
Calcemia < 8 mg/dl
AST sérica > 250 UI/l
PO2 < mmHg
Pancreatitis biliar
Admisión 48 horas
Edad > 70 años Descenso del hematocrito > 10 %
Leucocitos > 18000/μl Aumento del nitrógeno ureico > 2 mg/dl
Glucosa > 220 mg/dl Déficit de base > –5 mEq/l
LDH sérica > 400 UI/l Secuestro de líquidos > 5 l
Calcemia < 8 mg/dl
AST sérica > 250 UI/l
PO2 < mmHg
Tema 29.  Soporte nutricional en enfermedades pancreáticas 469

vándose en las pancreatitis necrohemorrágicas o cuan- La revisión hecha en 2013 de los criterios de Atlanta
do la reposición de líquidos ha sido escasa1. La analítica es la que abogan los expertos para ser usada en la es-
de laboratorio suele mostrar leucocitosis, hipocalce- tratificación de la severidad de la enfermedad. Para ello
mia, e hiperglucemia, con radiografías anormales de se usan los criterios de Marshall modificados.
abdomen y de tórax. El diagnóstico se confirma al en- Se considera que una PA es leve cuando no existen ni
contrar una elevación de los niveles de amilasa sérica, complicaciones locales ni fallo orgánico si existen com-
de tal forma que los valores tres o más veces por enci- plicaciones locales y/o fallo orgánico que no supera las
ma de la normalidad, aseguran el diagnóstico, si pre- 48 horas, se considera una PA moderada y es grave
viamente se ha excluido enfermedad manifiesta de las cuando el fallo orgánico se prolonga más allá de las 48
glándulas salivares y la perforación o infarto intestinal. horas.
Los valores de la amilasa sérica tienden a normalizarse Se considera fallo orgánico cuando existen dos o
tras 24-48 horas, mientras que la lipasa y la isoamilasa más de los siguientes hallazgos clínicos: shock (pre-
pueden permanecer elevados de 7 a 14 días, por lo sión sistólica < 90 mmHg), insuficiencia pulmonar
que podrían ayudar a esclarecer el diagnóstico en fases (PaO2 < 60 mmHg), fallo renal (creatinina > 2 mg/dl
más tardías9. después de haber hidratado al paciente), y/o sangrado
Entre las técnicas de imagen, las radiografías de tó- abdominal (>500 ml de pérdida de sangre/24 horas)10.
rax y abdomen sirven para descartar otros procesos,
mientras que la ecografía abdominal detecta altera- 2.3.  Objetivos nutricionales
ciones en la vesícula y vía biliar, determinando si la PA
es de este origen y está recomendada en todos los Se debe tener en cuenta que la PA representa un
pacientes10. La tomografía computarizada (TC) abdo- estado hipermetabólico e hiperdinámico en el que no
minal, preferentemente con contraste, o la RM abdo- solo la enfermedad sino también otros factores influ-
minal es la exploración de elección para el diagnósti- yen en el deterioro del estado nutricional. La ingesta
co de confirmación, además de servir para establecer oral se ve reducida a causa del dolor abdominal, aver-
datos acerca de la gravedad y pronóstico apoyados en sión a la comida, náuseas, vómitos, atonía gástrica con
la extensión de la necrosis y la existencia de coleccio- íleo paralítico, obstrucción parcial del duodeno a causa
nes líquidas (escala de Balthazar, tabla 2). Esta técni- de inflamación de la glándula o el hecho de seguir con-
ca debe realizarse cuando se cumplen tres o más cri- sumiendo alcohol. Además, influye la maldigestión por
terios de Ranson o cuando existe una mala evolución la reducida cantidad de enzimas, malabsorción luminal
clínica. Cuando hay una importante necrosis y la evo- o el exceso de pérdida proteica provocada por la dia-
lución no es buena, la TC permite guiar la punción de rrea, las fístulas pancreáticas o la inflamación del peri-
las áreas afectadas para obtener una muestra micro- toneo y retroperitoneo5.
biológica4, 5. Los candidatos a soporte nutricional especializado
en PA deber ser valorados por los métodos objetivos
para determinar la severidad de la enfermedad, y con-
Tabla 2.  Clasificación de Balthazar. forme a ellos idear una estrategia. Si el paciente pre-
senta criterios de severidad, la administración de nutri-
Puntuación ción enteral (NE) va a determinar un impacto en la
resolución de la enfermedad, por lo que se debe colo-
Aspecto del páncreas
car una acceso enteral e iniciar la NE a las 48 horas del
Páncreas normal 0 ingreso11. En aquellos que no cumplen los anteriores
Aumento difuso o focal del páncreas 1
Cambios inflamatorios peripancreáticos Tabla 3.  Criterios de Atlanta 2013.
2
leves
Pancreatitis aguda leve
Una colección líquida 3
Ausencia de fallo orgánico
≤ 2 colecciones líquidas o gas dentro
y/o adyancente al páncreas 4 Ausencia de complicaciones locales
Área de necrosis Pancreatitis aguda moderada
Sin necrosis 0 Complicaciones locales y/o
≤ 30 % del páncreas 2 Fallo orgánico inferior a 48 horas
31-50 % de necrosis 4 Pancreatitis aguda grave
> 50 % 6 Fallo orgánico con duración superior a las 48 horas
470 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

criterios, se debe comenzar tratamiento con dieta oral 2.4. Valoración nutricional específica
específica, hidratación intravenosa y analgesia12. de la patología
Los beneficios de la administración de NE son debi-
dos a la ayuda que esto supone en el mantenimiento Los pacientes con PA presentan un estado hiperdi-
de la integridad de la barrera intestinal, previniendo el námico y catabólico que se puede considerar similar a
aumento de permeabilidad y manteniendo las células los enfermos con cirugía mayor o sepsis4. Las necesi-
epiteliales unidas13-15. La alimentación estimula la circu- dades calóricas varían y están determinadas por la
lación intestinal, previniendo la isquemia y los daños severidad de la enfermedad, la presencia de infección,
provocados por el bajo gasto, además de estimular la la edad, altura, peso y la temperatura del paciente28.
secreción de IgA y sales biliares que no permiten la El balance nitrogenado es negativo y puede llegar a
translocación bacteriana; asimismo, mantiene el tejido ser 40 g/día29, representando de esta manera un efec-
linfoide asociado al intestino (GALT)13. La NE tiene un to perjudicial tanto en el estado nutricional como en
importante papel en la regulación de la flora bacteria- la progresión de la enfermedad30. Varios estudios han
na comensal, evitando la colonización de la mucosa concluido que el gasto calórico total en pacientes con
intestinal por bacterias patógenas, disminuyendo la PA se infraestima con la ecuación de Harris-Benedict,
activación de neutrófilos y la liberación de citoquinas sugiriendo que la única forma fiable para estimarlo
inflamatorias13, 16. En comparación con la nutrición pa- correctamente sería la calorimetría indirecta1, 30, 31.
renteral (NP), los pacientes con PA grave que reciben Una razón importante para estimar exactamente el
NE presentan un aumento en la capacidad antioxidan- gasto energético total es evitar la administración de
te, descenso más rápido de los niveles de proteína C calorías en exceso, ya que es imprescindible evitar la
reactiva, así como una resolución más temprana del sobrealimentación en enfermos críticos. En la PA se
síndrome de respuesta inflamatoria sistémica17. De la producen importantes cambios en el metabolismo de
misma forma, el tiempo de resolución de la enferme- los distintos principios inmediatos:
dad, desaparición del dolor abdominal, normalización
de los niveles de amilasa y un avance exitoso de la die- •  En el metabolismo de proteínas y aminoácidos (AA)
ta oral se ve reducido a la mitad en el caso de la NE existe una depleción de los AA ramificados y un
comparada con la NP18. En un estudio reciente hecho aumento de los aromáticos, así como un incremen-
en población china con 60 pacientes con PA grave to de la ureogénesis y de la excreción de nitrógeno.
aleatorizados a recibir NE precoz en las primeras 48 Esto es debido a la proteólisis acelerada del músculo
horas del ingreso versus recibirla a partir del 8º día de esquelético. El pool de AA total libre disminuye un
ingreso, se evidencia que el porcentaje de linfocitos T 40 % y la glutamina intracelular del músculo des-
CD4+, la ratio CD4+/CD8+. Los niveles de proteína C ciende un 15 %. Esto refleja la gran pérdida de masa
reactiva la incidencia de fallo multiorgánico, de síndro- muscular que puede aparecer si esta situación se
me de distrés respiratorio del adulto y de infección cronifica28. Esto sugiere que la administración de
pancreática fueron menores, no existiendo diferencia soluciones ricas en AA ramificados y dipéptidos de
en la cifra de mortalidad en los pacientes19. glutamina puede ser clínicamente beneficiosa para
La perspectiva clínica sobre el descanso del páncreas los pacientes con PA severa32.
ha cambiado en los últimos 15 años, pasando de ser la •  Con respecto al metabolismo hidrocarbonado,
única estrategia en su tratamiento (con succión naso- existe un aumento del cortisol plasmático, de ca-
gástrica, somatostatina, agentes antiácidos, etc.) a de- tecolaminas y del cociente glucagón/insulina que,
mostrar que no es efectiva y que no aporta nada al junto a cierta resistencia de esta última y la dismi-
pronóstico del paciente5, 20. Parece que no es necesario nución del aclaramiento de la glucosa, dan lugar
disminuir los niveles de secreción pancreática a los que a hiperglucemia en el 90 % de los casos de PA se-
se tienen sin estímulo de la glándula, sino que es sufi- vera. Para evitar el desarrollo de una esteatosis
ciente con reducirlos a niveles subclínicos. Los concep- hepática, no se debe administrar más de 5 mg/kg/
tos de descanso pancreático y de utilización del intesti- min de glucosa intravenosa1.
no no son incompatibles y se pueden llevar a cabo en •  El metabolismo lipídico se ve también alterado. El
el mismo paciente. Afortunadamente para el clínico, el uso de emulsiones lipídicas es controvertido, debi-
manejo puede ser guiado por los síntomas que presen- do a su asociación etiológica entre hiperlipemia y
te el paciente, evitando de esta forma medir la secre- pancreatitis, por ello se deben monitorizar los ni-
ción del páncreas al duodeno de una forma directa. veles de triglicéridos (TG) y suspender la adminis-
Los estudios hechos recientemente confirman el bene- tración de estas si se superan los 400 mg/dl33. Si
ficio del uso temprano del intestino en la PA, demos- los niveles séricos de TG son normales, se debería
trando mejorar la incidencia de disfunción orgánica administrar una dosis test de 100 ml de solución
múltiple, infección pancreática y síndrome de respues- lipídica al 20 %: si es bien tolerada, se pueden ad-
ta inflamatoria sistémica, sin modificar las cifras de ministrar hasta el 30 % de las calorías no proteicas
mortalidad19-27. en forma de grasas, evaluando semanalmente los
Tema 29.  Soporte nutricional en enfermedades pancreáticas 471

niveles de TG. Existen varias razones fisiológicas nutricional, así como el riesgo de desnutrición que
para recomendar su uso, la administración solo de puede llegar a presentar2. Los pacientes con desnutri-
glucosa aumenta el riesgo de hiperglucemia y es- ción previa deberían recibir soporte desde el inicio,
teatosis hepática; además, la administración de aunque hay siempre que valorar cada paciente de for-
lípidos intravenosos a la solución glucosada mejo- ma individual.
ra el balance nitrogenado en pacientes con NPT, En la PA severa el soporte nutricional es imprescindi-
incluyendo los pacientes con PA4. ble, puesto que la situación del paciente en estos casos
•  La hipocalcemia se presenta en el 40-60 % de los va a prolongar su período de ayuno durante un tiempo
pacientes con PA y depende de la severidad de la indefinido y el estado hiperdinámico al que está some-
enfermedad, siendo los niveles más bajos los ob- tido puede llevarle rápidamente a un deterioro franco
servados en los primeros 3 días. Se debe a la sa- de su estado nutricional. Diversos estudios han compa-
ponificación del calcio con los ácidos grasos li- rado la NE con la NPT analizando sus ventajas e incon-
bres, la hipoalbuminemia y la hipomagnesemia, venientes.
así como al incremento de la liberación de calci- La NPT ha sido el soporte nutricional fundamental
tonina y la reducción de la secreción de la para- para tratar al paciente con PA severa, sin embargo,
thormona34, 35. diversos estudios han demostrado las desventajas
•  Inicialmente, la deficiencia de micronutrientes como que presenta respecto a la NE, por lo que se puede
la tiamina, al ácido fólico y el zinc contribuyen a los decir que ha quedado relegada a un segundo plano
trastornos metabólicos de los pacientes con PA, es- frente a esta19, 20, 24, 26, 27, 36, 37. Marik et al 22 realizaron
pecialmente en los alcohólicos34, 35. un metanálisis con seis estudios donde comparaban
ambos soportes nutricionales con un total de 263
pacientes. Demostraron una menor incidencia de
2.5. Dietética
infección (sepsis por catéter), así como una menor
En la mayoría de los pacientes con PA (85-90 %) la necesidad de intervenciones quirúrgicas secundarias
enfermedad es de evolución limitada y cede espontá- a la PA y una menor estancia hospitalaria en los pa-
neamente en general de 3 a 7 días después de instau- cientes que reciben NE frente a los que reciben NPT,
rado el tratamiento, por lo que en estos casos se sue- sin encontrarse diferencias significativas en la mor-
le dejar en dieta absoluta para evitar el estímulo talidad.
secretor de la glándula y se inicia dieta oral tras los En otros muchos ensayos se han encontrado re-
primeros 5 a 7 días, si no hay complicaciones intercu- sultados parecidos, como el de Kalfarentzos et al 36,
rrentes. Siguiendo las recomendaciones de la Socie- Olah et al38 y Abou-Assi et al39. Estos resultados se
dad Europea de Nutrición Clínica y Metabolismo (ES- pueden explicar en parte por el importante papel
PEN) publicadas en el 200629 en los casos de PA leves que ejerce el intestino como órgano inmunomodu-
y moderadas solo se deben aplicar las medidas gene- lador. Existen evidencias de que la NE reduce la in-
rales anteriormente comentadas, planteando un so- cidencia de infecciones al preservar la barrera intes-
porte nutricional únicamente en aquellos casos en los tinal, como ya se ha explicado en el apartado de
que la reintroducción de la dieta oral se tenga que objetivos nutricionales. A estos beneficios se le
retrasar más allá de 7 días, pues se ha demostrado debe añadir que la NE supone un menor coste que
que el soporte nutricional en estos casos no aporta la NP.
ningún beneficio33. Sabemos que el tipo de nutriente empleado y el lu-
En las PA leves se aconseja introducir dieta oral cuan- gar del tubo digestivo donde se infunden son dos fac-
do el dolor haya cedido durante, al menos, 48 horas, tores determinantes del grado de estimulación de la
se normalicen los niveles de amilasa y/o lipasa plasmá- secreción del páncreas, con respecto a enfermos con
ticos y no existan complicaciones, comprobando pre- pancreatitis aguda, hay diversos estudios que demues-
viamente que existe motilidad intestinal. En principio, tran que la infusión de nutrición enteral elemental
se deberán dar pequeñas tomas a lo largo del día, con comparada con la polimérica40 o la infusión a través de
aporte fundamentalmente de hidratos de carbono y sonda nasoyeyunal o nasogástrica41 tienen en los pa-
pocas proteínas. Las grasas se introducirán de forma cientes una eficacia similar. Con lo que, en estos mo-
tardía (a partir del tercer o cuarto día). En una quinta mentos, la dificultad que supone colocar una sonda
parte de los casos el dolor reaparece de nuevo con la nasoyeyunal distalmente al ángulo de Treitz, para evi-
ingesta oral, pero no suele ser necesario en estos casos tar el estímulo pancreático, que en ocasiones requiere
suspenderla4. la ayuda de un endoscopista experimentado, puede no
ser precisada.
2.5.1.  Soporte nutricional artificial Aunque debemos tener en cuenta que la vía de acce-
so vascular es más sencilla y el aporte calórico necesa-
Para conocer si un paciente va a necesitar un soporte rio se alcanza más fácilmente y rápido a través de ella
nutricional artificial se debe valorar al ingreso su estado que con la NE42.
472 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

Figura 1.  Algoritmo del manejo nutricional de la pancreatitis aguda. Adaptado y traducido de
Core Curriculum de la ASPEN 2012.

El grupo de expertos de la ASPEN (Asociación Ameri- cuando la ingesta no vaya a poder realizarse tras
cana de Nutrición Parenteral y Enteral) estableció estas los primeros 5 o 7 días de dieta absoluta (B)4.
recomendaciones, con el siguiente nivel de evidencia33: •  Se recomienda un soporte nutricional en todos
los casos de PA severa, siendo la vía de elección
•  Los pacientes con pancreatitis presentan un alto la enteral a través de sonda nasoyeyunal (A),
riesgo de desnutrición y deben recibir un scree- dejando la NP para aquellos casos en los que no
ning nutricional para ser identificados y tener un sea posible el acceso enteral o exista reagudiza-
soporte nutricional adecuado (B)4. ción de la patología tras iniciar la NE o intole-
•  El soporte nutricional artificial no debe ser utiliza- rancia de la misma (B)4. Existen estudios de me-
do en las PA leves o moderadas, a no ser que el tanálisis publicados recientes en los que se
paciente presente desnutrición desde el ingreso, o compara el soporte nutricional con sonda nas-
Tema 29.  Soporte nutricional en enfermedades pancreáticas 473

oyeyunal y sonda gastroenteral, teniendo los viables que habían sido congeladas en seco. Se com-
mismos resultados41. probó que de los del grupo que recibían la mezcla,
•  La emulsión de lípidos será adecuada siempre que un 8 % desarrolló isquemia intestinal, mientras que
los niveles de TG sean inferiores a 400 mg/dl (B)4. en el grupo control no se detectó ningún caso afec-
tado de esta patología. Los autores especulan con la
Los requerimientos energéticos suelen oscilar entre idea de que los probióticos podrían incrementar la
25-35 kcal/kg/día, siendo más elevados en los pacientes demanda de oxígeno y agravar la inflamación local.
sépticos y con un aporte proteico entre 1,2 y 1,5 g/kg/día, La mortalidad total de los grupos fue en el placebo
que debe disminuirse en el caso de fracaso multiorgáni- 8 % y en los que recibieron la mezcla probiótica
co con insuficiencia renal y/o hepática4. 16 %, con un riesgo relativo de 2,5350. En el momen-
Cuando es posible iniciar la NE, las fórmulas lipídicas to actual, se precisan un completo conocimiento de
empleadas deben ser pobres en grasas, con escaso la fisiopatología de la PA y estudios concluyentes
aporte fundamentalmente de triglicéridos de cadena para afirmar que los probioticos puedan tener un
larga (LCT), utilizando los de cadena media (MCT), que papel en el tratamiento de la misma51.
son mejor tolerados, ya que no necesitan práctica­ Con respecto a la NPT en la PA, si el abordaje nutri-
mente de la lipasa ni de las sales biliares para ser absor- cional se hace mediante mezclas utilizadas que combi-
bidos en el epitelio intestinal1. nan MCT y LCT son una buena opción, ya que aportan
Con respecto al metabolismo hidrocarbonado, debe ventajas sobre las fórmulas que utilizan solo LCT al te-
realizarse inicialmente un control horario de la gluce- ner menos afectos adversos sobre la función hepática,
mia, administrando insulina ad hoc e intentando no realizando un balance nitrogenado más bajo y presen-
sobrepasar los 3-6 g/kg/día de glucosa. Se aconsejan tando un menor impacto sobre el sistema reticuloen-
dietas elementales o peptídicas con proteínas en forma dotelial. Además, el aporte de ácidos grasos omega-3
de hidrolizados, aunque hay algunas evidencias que a estas fórmulas podría resultar beneficioso, como han
demuestran también la eficacia de dietas poliméricas40. demostrado algunos estudios realizados, al actuar so-
La perfusión puede iniciarse a un flujo de 10-20 ml/hora, bre la respuesta inmune, disminuyendo los mediadores
mediante bomba de infusión, incrementando el ritmo, inflamatorios (fundamentalmente el estímulo monoci-
según lo vaya tolerando el paciente, hasta alcanzar los tario) y aumentando la respuesta de citoquinas como
requerimientos nutricionales estimados43. En aquellos la interleucina 10 (IL-10), que participa en la inhibición
pacientes en los que sea dificultoso cubrir sus requeri- de otras citoquinas pro-inflamatorias53, 54.
mientos solo con NE se benefician del uso del soporte
nutricional mixto (NE y NP)44.
3.  Pancreatitis crónica
Con respecto a la utilización de sustratos específicos,
parece que la suplementación con glutamina en los pa- 3.1. Introducción
cientes con PA severa, según un estudio realizado por
Gang Zhao et al 45, mejora el estado nutricional, la res- Es una enfermedad inflamatoria crónica del pán-
puesta de la fase aguda y la permeabilidad de la muco- creas, caracterizada por cambios en su estructura irre-
sa intestinal. Otros autores como Teich et al 46 observa- versibles, que condicionan una alteración de su fun-
ron también ventajas al respecto, como una disminución ción exocrina y, a la larga, también endocrina. La causa
de los días de soporte nutricional, así como en la estan- más frecuente en el adulto es el alcoholismo crónico
cia media del grupo que recibió este suplemento, sin (70-80 %). El riesgo parece claramente relacionado con
ninguna diferencia en el coste económico de ambas el tiempo de consumo y la cantidad (más de 100-150
formulaciones. mg/día durante más de 10 años), más que con el tipo
En la actualidad, los estudios relacionados con el uso de alcohol ingerido. Sin embargo, solo un 5-10 % de
de pre y probióticos y de fórmulas que contengan áci- los alcohólicos crónicos desarrollan esta patología, por
dos omega-3 son los que despiertan mayor interés, lo debe haber determinados factores genéticos y/o am-
aun sin ser concluyentes, por los beneficios iniciales bientales que predispongan a su desarrollo55. En los
observados con mejoría de las variables clínicas y de niños, la causa más frecuente es la fibrosis quística.
reducción de la estancia hospitalaria47-49. Otras causas son la pancreatitis hereditaria, la obstruc-
Aunque en estudios previos con poco número de ción o malformación de los conductos pancreáticos, la
pacientes se sugería que los probióticos podrían te- pancreatitis tropical, autoinmune, la asociada a altera-
ner un papel importante en la prevención del desa- ciones metabólicas con hipercalcemia e hipertrigliceri-
rrollo de complicaciones en la PA severa38, un recien- demia, consumo de tóxicos, enfermedades sistémicas
te estudio multicéntrico, aleatorizado y doble ciego o idiopáticas56. La incidencia parece estar aumentando
llamado PROPATRIA, que incluyó a 296 pacientes en los países desarrollados, debido al mayor consumo
con criterios de PA severa por métodos objetivos, de alcohol, así como la existencia de métodos diagnós-
parece que ha desbancado la teoría. La mezcla pro- ticos más sensibles. Se estima aproximadamente en
biótica consistía en 6 cepas diferentes de bacterias 5-14/100000 habitantes4.
474 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

3.2.  Fisiopatología y diagnóstico no controlable, son la obstrucción biliar o duodenal,


la hipertensión portal segmentaria, la presencia de un
Es una inflamación crónica y permanente de la glán- pseudoquiste, la ascitis pancreática y la sospecha de
dula pancreática que da como resultado una progresi- un carcinoma de páncreas.
va fibrosis y destrucción del tejido exocrino y endocrino Las pruebas de función pancreáticas se utilizan como
de la misma. La evidencia de existencia de daño perma- adyuvantes, si existe duda diagnóstica. La más sensible
nente en la anatomía y función de la glándula, es lo y específica es la secretina CCK, que detecta a través de
que le diferencia de la PA. El daño puede ser documen- un tubo guiado fluoroscópicamente a la segunda por-
tado por la existencia de calcio en las pruebas de ima- ción del duodeno la reserva pancreática exocrina tras
gen5. La triada clásica que se presenta en un 33 % de estimulación hormonal. Otras pruebas son la de la
los casos consiste en calcificación pancreática, esteato- bentiromida de pancreolaurilo, tripsina fecal o la de-
rrea y diabetes mellitus (DM). tección de tripsinógeno sérico4.
Los pacientes pueden tener síntomas idénticos a la El diagnóstico de certeza lo daría un estudio histoló-
PA pero el dolor a veces es continuo, intermitente o gico de la glándula, pero debido a su alto índice de
nulo. Es típico el dolor en el epigastrio, que no respon- complicaciones no se suele realizar.
de a antiácidos y aumenta con la ingesta de alcohol y
alimentos ricos en grasas, por lo que el paciente puede
ir reduciendo la ingesta, dando lugar a un adelgaza- 3.3.  Objetivos nutricionales
miento progresivo56. El deterioro de la glándula da lu- Los objetivos nutricionales son disminuir el dolor y
gar a un déficit funcional que cuando afecta al 90 % de controlar las insuficiencias pancreáticas, intentando
la glándula, da lugar a esteatorrea por malabsorción solucionar las alteraciones nutricionales derivadas de
de grasas, produciendo en los casos más severos diver- estas.
sas deficiencias nutricionales que acompañan a la pér-
dida ponderal; sin embargo, los déficits de vitaminas
liposolubles que se manifiestan clínicamente son extre-
3.4. Valoración nutricional específica
madamente raros1. de la patología
La aparición de DM indica un estadio avanzado de la La PC es una causa importante de deterioro del es-
enfermedad y ocurre en el 28-90 % de los casos, aun- tado nutricional, debido a múltiples factores. No solo
que las complicaciones, tanto agudas como crónicas, al hecho de disminuir su ingesta debido al dolor que
de la misma suelen ser muy poco frecuentes4. La neu- experimentan al comer, sino también muchos pacien-
ropatía o retinopatía suelen ser consecuencia del abu- tes presentan esteatorrea y/o alcoholismo crónico que
so de alcohol y la desnutrición. va a asociado tanto a desnutrición energético-proteica
En las determinaciones analíticas no suele existir como a carencia de micronutrientes como vitaminas
aumento de la amilasa ni de la lipasa en suero. del grupo B, C, magnesio y zinc, junto con otros mine-
El diagnóstico se basa en dos pilares, la identifica- rales33, 59. La malabsorción de cobalamina aparece en
ción de alteraciones morfológicas del órgano y por el 40 % de los pacientes con PC alcohólica y práctica-
otro lado determinar las consecuencias de dichas alte- mente en todos aquellos que tienen fibrosis quística.
raciones sobre el estado funcional de la glándula. La Ello puede deberse a una excesiva captación de la co-
visualización de calcificaciones es diagnóstica, pero balamina por las proteínas de la unión a dicha vitami-
rara vez se consigue ver con radiografía simple, por lo na que no son el factor intrínseco y que en condicio-
que debemos recurrir a ecografía abdominal o TC ab- nes normales son destruidas por las proteasas
dominal. La CPRE es la prueba de referencia para el pancreáticas1.
diagnóstico, ya que identifica las alteraciones en los Los pacientes con PC que están desnutridos, según
conductos, siendo la colangiorresonancia la alternativa diversos estudios realizados, presentan un gasto meta-
a esta. Hay que destacar que normalmente no existe bólico aumentado frente a los pacientes que no lo es-
correlación entre los hallazgos morfológicos y los sín- tán1. Además, se debe considerar el impacto negativo
tomas57. Los enfermos con ataques intermitentes de que el desarrollo de diabetes mellitus provoca en estos
dolor reciben el mismo tratamiento que los pacientes pacientes.
con PA. Los que presentan dolor intenso y persistente
deben abstenerse del alcohol, así como evitar las comi-
3.5. Dietética
das ricas en grasas. Dado que el dolor suele ser lo sufi-
cientemente intenso como para requerir el uso de nar- Además de la abstinencia alcohólica, se recomienda
cóticos (con el consiguiente riesgo de adicción), se han al paciente fraccionar la dieta en varias tomas a lo
ideado distintos métodos quirúrgicos58. Las técnicas se largo del día disminuyendo la cantidad de grasas in-
realizan de manera individual y en base a las alteracio- geridas, así como las proteínas, para reducir el estí-
nes morfológicas encontradas. Las principales indica- mulo pancreático. Los alimentos semisólidos o líqui-
ciones para el tratamiento quirúrgico, además de dolor dos parecen atenuar la secreción pancreática, por lo
Tema 29.  Soporte nutricional en enfermedades pancreáticas 475

que los pacientes deberán masticar bien los alimentos dantes en todos los pacientes, aunque sí parece que
y comer despacio3. El aporte energético dependerá pueden ejercer efectos beneficiosos con respecto al
del estado nutricional del paciente, teniendo en cuen- dolor postprandial67.
ta que aquellos que presenten desnutrición previa
presentan un estado hipermetabólico, por lo que ne- 4. Resumen
cesitan un mayor aporte energético. El aporte protei-
co no difiere del indicado para individuos sanos, pero El páncreas es un órgano indispensable para una
deberá incrementarse en caso de enfermedades inter- adecuada absorción y metabolismo de los principios
currentes60. Los pacientes que presenten esteatorrea inmediatos de nuestra dieta, tanto por su función exo-
deberían disminuir el contenido graso de la dieta, de crina como endocrina. La inflamación aguda o crónica
tal forma que no sobrepasamos de grasas ingeridas al de esta glándula provoca una alteración en el estado
día. Si con esto no fuera suficiente, presentando más de nutrición del ser humano que requiere una trata-
de 10-15 g de grasa al día en las heces, sería necesa- miento enérgico por parte de especialistas en nutri-
rio añadir suplementos enzimáticos61, 62. ción, no solo para una adecuada resolución del proce-
so, sino para prevenir complicaciones a corto y largo
3.6.  Soporte nutricional artificial plazo.
En la PA el manejo va a ser muy distinto, dependien-
Los episodios de PC suelen responder pronto al tra- do de la gravedad establecida. En la mayoría de las
tamiento conservador, pero los efectos acumulativos ocasiones, el proceso es leve y solo será necesario un
de los repetidos ataques de pancreatitis, en ocasiones soporte nutricional cuando el paciente esté previamen-
provocan un estado de malnutrición aguda o crónica te desnutrido o cuando por distintos motivos se vaya a
que requiere soporte nutricional artificial3. prolongar el ayuno en más de 5 o 7 días. En las formas
Los suplementos enzimáticos se administran en cada severas se produce un estado de estrés catabólico que
comida principal ajustando las dosis individualmente origina una respuesta inflamatoria sistémica, requirién-
hasta controlar el número de deposiciones y esteatorrea. dose un soporte nutricional adecuado y precoz. La NPT
Son productos microencapsulados que van recubiertos ha sido una práctica estándar para el aporte de nu-
para impedir que se inactiven con el pH ácido del estó- trientes exógenos en los pacientes, pero diversos estu-
mago, por lo que se mezclan con los alimentos ingeri- dios han demostrado que la NE a través de sonda naso­
dos y las enzimas se liberan al llegar al intestino delgado, yeyunal o nasogástrica, presenta importantes ventajas
donde ejercen su acción. La dosis habitual suele ser respecto a esta, por lo que se considera hoy en día el
aproximadamente 100000 UI repartidas a lo largo del soporte de elección, siempre que no exista contraindi-
día (30000 UI en cada comida principal y 10000 en to- cación para su uso. Las líneas actuales de investigación,
mas intermedias)63. Con estos preparados es recomen- estudian los beneficios clínicos reales del uso de nu-
dable no usar antiácidos. Existen otros suplementos en- trientes específicos como la glutamina, los ácidos gra-
zimáticos ricos en proteasas utilizados para disminuir el sos omega-3 y los simbióticos en la NE de pacientes
dolor cuando no es controlado con el tratamiento dieté- con pancreatitis grave.
tico y analgésico convencional64; estos, a diferencias de En la PC el paciente suele presentar un deterioro del
los anteriores, no van recubiertos para que su liberación estado nutricional previo, debido a la asociación con el
sea en el duodeno y se suelen usar con antiácidos. Es alcoholismo crónico, que es su etiología principal. Es
conveniente que la parte de fibra sea moderada, ya que necesario indicar abstinencia absoluta enólica, que me-
cantidades importantes pueden alterar la acción de los jora claramente el dolor, así como las complicaciones a
preparados enzimáticos en la luz intestinal65. largo plazo, que suelen ser las responsables del falleci-
Los triglicéridos de cadena media (MCT) pueden miento del paciente. En casos avanzados aparece es-
ofrecer un aporte calórico extra a los pacientes con es- teatorrea por malabsorción, por lo que se establecerá
casa respuesta al tratamiento dietético y enzimático, una dieta pobre en grasas, pudiendo introducir suple-
con pérdida progresiva de peso. No precisan para ser mentos enzimáticos que ayuden a disminuir el conteni-
absorbidos lipasas ni sales biliares según un estudio do de grasas en heces, así como el dolor. En casos re-
publicado por Shea et al 66, y parecen disminuir el dolor sistentes a estas medidas, se pueden introducir en la
postprandial, debido al escaso estímulo que producen dieta MCT, que aumentan el aporte calórico y ayudan
en la excreción pancreática. al mantenimiento del peso. Por último, se requerirán
La aparición de DM secundaria a PC debe ser trata- modificaciones dietéticas e insulinoterapia para el con-
das como en las debidas etiologías, con la diferencia de trol glucémico, ante la aparición de DM secundaria. En
que necesita menos dosis de insulina debido al déficit los casos más resistentes al tratamiento del dolor, se
de glucagón, por lo que puede existir un mayor índice realizará cirugía, cuyas técnicas varían en base a las al-
de hipoglucemias1. teraciones morfológicas presentes en el páncreas.
En la actualidad no existen datos suficientes que jus- En general, si el paciente a través de un soporte mé-
tifiquen el uso sistemático de micronutrientes antioxi- dico-social adecuado consigue una abstención enólica
476 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

Figura 2.  Algoritmo de manejo nutricional de la pancreatitis crónica. Adaptado y traducido de Core Curriculum
de la ASPEN 2012.

y se emplea un tratamiento sustitutivo energético para 2. Bradley EL. A clinically based classification system for
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Tema 29.  Soporte nutricional en enfermedades pancreáticas 479

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Tema 30. 
Soporte nutricional en la enfermedad inflamatoria
intestinal
Eduardo Platero Rodrigo
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario. Guadalajara

Álvaro García-Manzanares Vázquez de Agredos


Sección de Endocrinología y Nutrición. HG La Mancha Centro. Alcázar de San Juan (Ciudad Real)

Nuria Gil Fournier


Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital General de Villalba. Madrid

Julia Álvarez Hernández


Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Príncipe de Asturias.
Alcalá de Henares (Madrid)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 481-495.

1. Introducción
2.  Fisiopatología, clínica, diagnóstico y tratamiento
3.  Objetivos nutricionales
4.  Valoración nutricional
5. Dietética
6.  Soporte nutricional especializado
7. Resumen
8. Bibliografía

1. Introducción tonces el nombre de colitis indeterminada o inclasifica-


ble (CI). Cuando los cambios histológicos de una pieza
Enfermedad inflamatoria intestinal (EII) incluye un gru- de resección no pueden dis­criminar si se trata de una u
po heterogéneo de enfermedades inflamatorias crónicas otra entidad, pues aparecen características de ambas,
de etiología desconocida, patogenia poco conocida y estamos ante una colitis indeterminada. Y si existen ca-
carácter sistémico; se distinguen clásicamente la colitis racterísticas clínicas, radiológicas, endoscópicas o
ulcerosa (CU) y la enfermedad de Crohn (EC) y formas de anatomopa­tológicas (biopsias) que no permiten distin-
solapamiento entre ambas o colitis indeterminada. guir entre CU y EC, hablamos de colitis inclasificable1, 2.
La CU afecta al recto invariablemente y se extiende Pueden afectar a cualquier edad, situándose el pico
de forma proximal y continua, afectando a la mucosa, de incidencia entre los 15 y los 35 años. Un 30% de los
y submucosa en casos graves, respetando el resto de pacientes con EC y un 20 % de los pacientes con CU
capas epiteliales. La EC se caracteriza por la afectación debutan antes de los 20 años, existiendo un segundo
de cualquier segmento del tubo digestivo (preferente- pico entre los 50 y 80 años3. La incidencia de la EC ha
mente íleon terminal y colon) de manera discontinua, ido en aumento, mientras que la de la CU parece man-
con afectación de todas las capas de la pared intestinal tenerse estable. Existe un ligero predominio femenino
(afectación transmural). en la incidencia de EC y masculino en la CU.
Aunque ambas entidades son diferentes, en un 10- Se cree que esta entidad se asocia con la industriali-
15% de los casos no es posible distinguir entre EC y CU zación progresiva de las naciones, con altas tasas de
solo con datos clínicos o histológicos, recibiendo en- incidencia y prevalencia en el norte de América y Euro-

481
482 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

pa4-6. En un estudio retrospectivo recientemente publi- incidencia de la EC y descenso de la CU. En el primer


cado se ha detectado que en el sur de España la tasa caso, probablemente por el potencial efecto favorecedor
de incidencia acumulada de EII es de 14,7 ca- de la nicotina en el flujo sanguíneo rectal y mucosa coló-
sos/100000 habitantes y año (7,6 ca­sos/100000 habi- nica, así como la disminución de citoquinas y eicosanoi-
tantes y año para la CU y para la EC de 7,1 casos/100000 des. En el segundo caso por el hallazgo intraoperatorio
habitantes y año). La incidencia se ha duplicado en las de una EC subyacente ante la sospecha de apendicitis.
últimas dos décadas7. No se ha demostrado que los contraceptivos orales
se relacionen con la aparición de EII, aunque se reco-
2. Fisiopatología, clínica, diagnóstico mienda limitar su uso por su efecto protrombótico y
y tratamiento sus interacciones con la medicación3. En cuanto a los
factores dietéticos, muchos han sido asociados, sin de-
2.1. Patogenia mostrar que ninguno sea un claro agente causal.
Dado que no se conoce la etiología, solo existen teo- Hay una mayor incidencia de EII en relación con in-
rías para explicar la patogenia: fecciones perinatales en el niño o la madre, como el
sarampión. Tanto una historia de infecciones frecuentes
en la infancia como la ausencia de infecciones se han
2.1.1.  Factores genéticos
considerado como factor predisponente. La «teoría de
Una de la hipótesis más aceptada es la predisposi- la higiene excesiva», que intenta explicar el aumento de
ción genética para una disregulación del sistema inmu- EII y otras enfermedades de base inmunitaria por la ex-
ne intestinal. La concordancia de EC en un 50-60% en posición a un medio con menos patógenos, que tendría
gemelos monocigóticos ilustra la importancia de este como consecuencia un sistema inmune menos prepara-
factor, aunque la ausencia de una concordancia com- do para el control de la inflamación.
pleta suscita nuevas hipótesis. La lactancia materna frente a la artificial se piensa
Hasta un 25% de los pacientes tiene otro familiar que puede constituir un factor protector12.
afectado y se ha descrito el fenómeno de la anticipa- Por último, el Mycobacterium avium subespecie pa-
ción genética. Los estudios genéticos muestran una ratuberculosis se descubrió en el cultivo de pared intes-
potencial asociación entre alelos de clase II del CMH, tinal de EC en 1980, aunque dos décadas después no
factor de necrosis tumoral alfa (TNF) y molécula de ad- se ha podido dilucidar una clara relación. Otros gérme-
hesión intracelular (ICAM-1), así como mutaciones en nes relacionados en la literatura han sido Escherichia
el gen NOD-2/CARD15 en el cromosoma 16 de los ma- coli, Helicobacter hepaticus7 y Bacteroides vulgatus8.
crófagos implicado en la aparición de la EC7, 8.
2.2. Clínica
2.1.2.  Sistema inmunitario (SI)
Al ser una enfermedad que afecta fundamentalmente
Hallazgos tanto in vitro como ex vivo han demostra- al tubo digestivo, sus principales manifestaciones clíni-
do inequívocamente la participación del SI en la pato- cas van a ser digestivas. Sin embargo, por tratarse de
genia de la EII, generando un nuevo campo en su tra- una enfermedad de origen autoinmune, puede presen-
tamiento7. En el 60% de los casos de CU presentan en tar manifestaciones a nivel de otros órganos.
suero anticuerpos anticitoplasma de neutrófilos con
patrón perinuclear (p-ANCA), en la EC existe una aso- 2.2.1.  Colitis ulcerosa
ciación con los anticuerpos anti-Saccharomyces cerevi-
siae (ASCA) en un 50-80%9. Las manifestaciones dependen de la extensión, loca-
lización y magnitud de las lesiones. Los síntomas cardi-
2.1.3.  Factores ambientales nales son: rectorragia y presencia de moco-pus en he-
ces por la fragilidad de la mucosa, acompañado de
Ciertos estilos de vida y factores socioeconómicos se dolor abdominal cólico y diarrea con síndrome rectal
han asociado a la aparición de la CU. Es más frecuente en (tenesmo, urgencia deposicional). Cuando aumenta la
los países industrializados que en los subdesarrollados, y severidad de la inflamación es más probable la apari-
se da más entre la población urbana que en la rural10, 11. ción de síntomas sistémicos (fiebre, anorexia, pérdida
Los estudios de inmigrantes que se desplazan a regiones de peso, náuseas y vómitos), como complicaciones:
geográficas de riesgo alto han demostrado en ellos una megacolon tóxico y aumento de riesgo de adenocarci-
mayor incidencia de CU que en los mismos grupos étni- noma colorrectal, entre otras9.
cos que viven en sus países de origen. Una mayor expo-
sición de algunos factores descritos en la literatura son: el
2.2.2.  Enfermedad de Crohn
tabaco, la apendicectomía, los contraceptivos orales, la
dieta, factores perinatales o infecciones. Su localización variable y la afectación transmural
Tanto el consumo de tabaco como el haber sufrido condicionan la aparición de estenosis y trayectos fistu-
una apendicectomía se asocian con un aumento de la losos. Los datos clínicos más frecuentes son dolor ab-
Tema 30.  Soporte nutricional en la enfermedad inflamatoria intestinal 483

dominal (de características diferentes según la localiza- proteína C reactiva (PCR), beta 2 microglobulina). Exis-
ción, que precede a la diarrea y se alivia con la ten otros índices de actividad tipo endoscópico, histoló-
defecación) y diarrea multifactorial, asociado con pér- gico y de calidad de vida.
dida de peso por diarrea o por malabsorción; es mas
frecuente en la EC que en la CU, la presencia de masas 2.4.  Tratamiento médico
o plastrones inflamatorios propios de esta entidad9. En
la EC comparada con la CU, el dolor abdominal y la
2.4.1. Sulfasalacina y aminosalicilatos
pérdida de peso son más frecuentes y persistentes13. (mesalamina, sulfasalazina, olsalazina y
balsalacida)
2.2.3.  Manifestaciones extraintestinales Constituyen la primera línea de tratamiento en la CU,
1) Osteoarticulares: osteoporosis y osteomalacia, ar- tanto en la inducción como en el manteni­miento de la
tritis periférica asimétrica (15-20%), espondilitis remisión16. Se pueden aplicar en forma de enemas o
anquilosante (10%) y sacroileítis. supositorios para formas distales. Poseen acción antiin-
2) Cutáneo-mucosas: eritema nodoso, pioderma flamatoria disminuyendo los radicales libres, el factor
gangrenoso y estomatitis aftosa. kappa-b-NFKB y la interleucina-1 (IL-1), inhibiendo los
3) Hepáticas: colangitis esclerosante primaria, co- neutrófilos y estimulando la síntesis de prostranglandi-
langiocarcinoma, esteatosis por desnutrición, he- nas antiinflamatorias17.
patitis autoinmune y colelitiasis.
4) Oculares: uveítis, escleritis y episcleritis. 2.4.2.  Corticoides (prednisona, budesonida)
5) Renales: nefrolitiasis, insuficiencia renal por ami- Los corticoides han constituido un pilar clave en el tra-
loidosis secundaria y uropatía obstructiva. tamiento de los pacientes con EII. Habitual­mente produ-
6) Hematológicas: anemia secundaria a pérdidas cen una supresión importante de la inflamación y un
crónicas, malabsorción y déficit de micronutrien- rápido alivio de los síntomas y están indicados en los
tes. Trombosis venosa profunda. brotes agudos de la enfermedad. Se utilizan para
los brotes, según la gravedad (orales en brotes leves-mo-
2.3. Aproximación diagnóstica de la enfermedad derado o vía IV en los severos), existiendo preparaciones
inflamatoria intestinal tópicas que disminuyen los efectos secundarios. Una vez
conseguida la remisión, su empleo no garantiza evitar
2.3.1.  Sospecha clínica las recaídas o un mejor pronóstico, por lo que no deben
Debe ponernos en alerta una historia clínica compatible. usarse como tratamiento de mantenimiento.
Aunque en muchas ocasiones, como en niños, la clínica es
larvada, manifestándose únicamente como retraso en el 2.4.3. Antibióticos (ciprofloxacino,
crecimiento hasta en un 46%14 de los casos. Junto con claritromicina, metronidazol)
signos endoscópicos propios de la enfermedad y datos Se usan en formas severas (para mejorar el pronóstico
histológicos compatibles se establece el diagnóstico, así en caso de perforación), o en caso de afectación perianal.
como el posible uso novedoso de cápsula endoscópica15.
2.4.4. Inmunomoduladores (6-mercaptopurina,
2.3.2.  Exclusión de otras enfermedades
azatioprina, metotrexato, ciclosporina,
Principalmente de infecciones intestinales con gran tacrolimus, factor estimulador de
componente inflamatorio e invasión de la pared intes- granulocitos e infliximab y otros
tinal por microorganismos como Salmonella, Shigella,
Yersinia, Campylobacter, Aeromonas, C. difficile, E.
anti-TNF y anti-IFN gamma)
coli 0157: H7, Entamoeba histolytica y bacilo de Koch. Están indicados como tratamiento de mantenimiento,
pero suelen tener inicios de acción relativamente lentos.
2.3.3.  Diferenciación entre enfermedad de Crohn Por ello, no están indicados en la fase aguda de la enfer-
y colitis ulcerosa medad y se utilizan para reducir o eliminar la corticode-
pendencia, mantenimiento de la remi­sión en EC y CU
En ocasiones, cuando la EC afecta únicamente al co- cuando fracasan los aminosalicilatos, en el tratamiento
lon puede ser difícil diferenciarla de la CU, denominán- primario de las fístulas y en el tratamiento alternativo
dose colitis indeterminada. En la actualidad aún no para las recidivas por EC después de la corticoterapia.
existe un patrón oro para el diagnóstico.
2.4.5. Cirugía
2.3.4.  Grado de actividad
En la CU la colectomía total es curativa. En la EC la
Mediante la medición plasmática de reactantes de cirugía debe circunscribirse a la resolución de esteno-
fase aguda: velocidad de sedimentación globular (VSG), sis, siendo lo más conservador posible18.
484 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

2.4.6.  Terapias biológicas que se agudizan en hospitalizaciones y en brotes seve-


ros. Sin embargo, en la CU se suele preservar el estado
Anticuerpos monoclonales contra determinadas mo- nutricional surgiendo grandes déficits en los momen-
léculas que jue­gan un papel importante en el proceso tos de actividad de la enfermedad.
inflamatorio. Agentes antifactor de necrosis tumoral En la EII existe DEP y déficit de micronutrientes en una
(anti-TNF) infliximab, adalimumab, golimumab,certoli- proporción variable de pacientes, dependiendo del mé-
zumab y vedolizumab. Estos fármacos han venido a todo y criterio para determinarla, dado el distinto curso
revolucionar el tratamiento de la EII y han supuesto un clínico de la CU y la EC (generalmente brotes agudos en
avance muy importante en los úl­timos años19 (ICAM-1, la primera y más crónicos e insidiosos en la segunda), los
factor nuclear kappa-B, interleucina-10 (IL-10), inter- pacientes con CU suelen presentar formas agudas de
leucina-11 (IL-11), anticuerpos antileucocitarios, tali- DEP, mientras que en la EC predominan las formas ma-
domida, monofetil micofenolato, hormona del creci- rasmáticas o mixtas de malnutrición. La pérdida de peso
miento, tratamiento antituberculoso, leflunomida). se ha estimado en un 65-78% en la EC y en un 18-62%
en la CU20. La hipoalbuminemia en hospitalizados se ci-
2.4.7. Otros fra en un 25-80% de pacientes con EC y un 25-50% en
enfermos con CU21, y se debe a déficit de aminoácidos,
En pacientes sometidos a gran estrés que tienen difi-
pérdidas intestinales de proteínas, disminución de sínte-
cultades para su control pueden usarse ansiolíticos e
sis hepática, aumento de catabolismo y anorexia.
incluso antidepresivos. Los antidiarreicos como lopera-
La manifestación clínica más habitual es la pérdida
mida pueden usarse para aliviar los síntomas cuando
de peso, asociándose un descenso de proteínas plas-
no hay complicaciones.
máticas; es más evidente en hospitalizados y con enfer-
medad activa, aunque el 20% de los pacientes sin en-
3.  Objetivos nutricionales fermedad activa tienen más del 10% de pérdida de
peso22. El déficit de micronutrientes no suele tener ma-
3.1.  Manifestaciones nutricionales
nifestación clínica en la mayoría de los casos (excepto
Se relaciona una importante pérdida de peso y mal- el hierro y el ácido fólico), unido esto a su difícil deter-
nutrición de causa multifactorial (tabla 1). De modo minación por métodos de laboratorio hace que se des-
general, la severidad de la malnutrición depende de la conozca la verdadera prevalencia del mismo.
duración, actividad y extensión de la enfermedad. Es
evidente que por su afectación a nivel del tubo digesti- 3.2.  Causas de desnutrición
vo la EII, tanto la CU como la EC, puede inducir desnu-
trición energético-proteica (DEP) así como déficit de
3.2.1.  Desnutrición energético-proteica
micronutrientes con repercusión clínica. En la EC la Entre las causas de ingestión insuficiente en la EII
desnutrición es lenta con grandes deficiencias crónicas cabe citar las náuseas y los vómitos de los pacientes, el

Tabla 1.  Factores asociados a la desnutrición en la enfermedad inflamatoria intestinal.

1.  Disminución de la ingesta oral:


· Por la enfermedad (dolor, diarrea, saciedad precoz, náuseas y y vómitos)
· Alteración del gusto (déficit de zinc, TNF-alfa, fármacos)
· Iatrogénica (dietas restrictivas)
2. Malabsorción:
· Disminución de la superficie absortiva (resección, deficiencia en sales biliares,
bypass, inflamación extensa de la mucosa, daño del enterocito)
· Sobrecrecimiento bacteriano
· Síndrome de asa ciega
3.  Pérdidas gastrointestinales (sangre, electrolitos, enteropatía pierde-proteínas)
4.  Aumento de los requerimientos:
· Complicaciones infecciosas (fiebre, sepsis, inflamación aguda)
· Metabolismo basal aumentado (incremento de la oxidación lipídica)
5.  Interacciones farmaconutrientes:
· Corticoides con absorción de calcio y metabolismo proteico
· Salazopirina y absorción de folatos
· Colestiramina y absorción de vitaminas liposolubles
· Antibióticos y alteración de la flora intestinal y absorción de vitamina K
Tema 30.  Soporte nutricional en la enfermedad inflamatoria intestinal 485

dolor abdominal, la afectación del aparato digestivo 3.2.2.  Déficit de micronutrientes


superior por EC, los episodios de obstrucción intestinal,
etc. Pero la causa más importante es la anorexia rela- Tiene un origen multifactorial, en primer lugar por la
cionada con la propia inflamación. A tener en cuenta, disminución de su absorción, en segundo lugar por
por lo evitable, es la pérdida de peso generada por la una disminución de su ingesta y en tercer lugar por las
utilización de dietas restrictivas o el «ayuno terapéuti- pérdidas digestivas (fístulas y diarreas profusas) asocia-
co». Asimismo, la malabsorción puede contribuir a la das al incremento de su consumo por el estado cata-
desnutrición en pacientes con resecciones intestinales bólico de la enfermedad. Por otro lado, no se debe ol-
extensas. vidar que el tratamiento farmacológico y quirúrgico
El gasto energético en reposo (GER) puede estar puede interferir con la digestión y absorción de nu-
aumentado (sobre todo el aumento de los requeri- trientes debido a las interacciones fárma­co-nutrientes,
mientos durante las fases de actividad), ser normal, o a la reducción del área de absorción y a un aumento de
incluso estar disminuido en la EII. Sin embargo, cuan- las pérdidas (tabla 2).
do el GER se ajusta para la cantidad de masa magra, Los pacientes con EII presentan una amplia variedad
puede demostrarse que aumenta en relación con la de déficits de micronutrientes, que suelen ser más evi-
actividad inflamatoria de la enfermedad, produciéndo- dentes e intensos para aquellos con actividad antioxi-
se un incremento de las necesidades. Los pacientes con dante (carotenos, vitamina E, vitamina C, vitamina A,
EII presentan un patrón de consumo de sustratos ener- zinc y selenio). Estos déficits, que pueden ocurrir en la
géticos similar al que se produce durante el ayuno pro- enfermedad tanto activa como en remisión, no suelen
longado; es decir, disminución de la oxidación de hi- provocar manifestaciones clínicas específicas pero, sin
dratos de carbono y aumento de la lipólisis, con la duda, disminuyen la defensa antioxidante en una en-
consiguiente reducción de la reserva grasa. Este fenó- fermedad en la que el estrés oxidativo está aumentado.
meno ocurre no solo en la enfermedad activa, sino Existe un déficit de vitamina B12 y ácido fólico (AF),
probablemente también en los pacientes en remisión. este último debido en algunas ocasiones al tratamien-

Tabla 2.  Prevalencia de déficit nutricional en la la enfermedad inflamatoria intestinal20.

DÉFICIT ENFERMEDAD DE CROHN COLITIS ULCEROSA


Pérdida de peso 65-75% 18-62%
Hipoalbuminemia 25-80% 25-50%
Pérdida de proteínas intestinales 75% NE
Balance N negativo 69% NE
Anemia 25-85% 66%
Déficit de Fe 39% 81%
Déficit de vitamina B12 48% 5%
Déficit de ácido fólico 67% 30-40%
Déficit de Ca 13% NE
Déficit de Mg 14-33% NE
Déficit de K 5-20% NE
Déficit de vitamina A 11% NE
Déficit de vitamina C ND 35%
Déficit de vitamina D 75% NE
Déficit de vitamina K NE NE
Déficit de Zn 75% NE
Déficit de Cu NE NE

NE: no evaluado.
Adaptado de Clinical Parenteral Nutrition. Rombeau-Caldwell. 2ª ed. 1993. Cap. 22:427-41.
486 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

to con sulfasalacina (que impide su absorción) o con En los adultos se manifiesta como osteomalacia u
metotrexato (que inhibe la folatorreductasa) que con- osteoporosis, que se desarrolla de manera silente y
tribuyen a la anemia, junto con la disminución de hie- crónica y de causa multifactorial: la inactividad, el dé-
rro y cobre; el primero existe a pesar de los niveles altos ficit de calcio, vitamina D, magnesio y ciertos oligo­
de ferritina, que aumentan como reactante de fase elementos (cobre, manganeso y zinc) que actúan
aguda, y el segundo es un elemento esencial para la como cofactores, tratamiento corticoideo prolonga-
absorción de hierro. Diversos autores sugieren que el do y ciertos determinantes genéticos que comienzan
déficit subclínico de vitamina B12 podría contribuir a la a conocerse14. En estudios de cultivos celulares se
hiperhomocisteinemia de los pacientes con EC y, de ha observado una arquitectura anormal del hueso,
este modo, contribuir al aumento del riesgo trombóti- así como alteraciones en los osteoblastos, probable-
co, bien conocido de estos pacientes. Hay una dismi- mente debido al aumento de acción de TNF-alfa e
nución de absorción de vitamina K y una menor pro- interleucina-614. Se ha demostrado un 40% más de
ducción por parte de las bacterias entéricas. Se han riesgo de fractura en enfermos con EII, respecto a
descrito casos de pelagra en EC que al producir diarrea controles de la misma edad21.
puede confundirse con un brote de la enfermedad. Además, la desnutrición puede alterar el curso de la
Aproximadamente el 13% de los pacientes con EC tie- enfermedad: retrasando la cicatrización y cierre de fís-
nen mala absorción de calcio23, probablemente por la tulas, provocando atrofia vellositaria y mayor morbili-
falta de absorción de grasas en el tubo intestinal junto dad postoperatoria (debida fundamentalmente a un
con el déficit de vitamina D y el uso de corticoides, el riesgo aumentado de infecciones), así como el retraso
descenso de fósforo sérico sirve de marcador del hiper- en alcanzar la remisión clínica25.
paratiroidismo subyacente. Otras consecuencias a tener en cuenta son anemia,
Hay un descenso de proteínas, por pérdidas intesti- caída del cabello, alteraciones cutáneas, fatiga, edema,
nales, disminución de la ingesta e incremento del cata- calambres musculares y alteraciones en el gusto.
bolismo que se ha relacionado con una peor evolución Por último, se asocia a estrés psicosocial, con ansie-
postoperatoria. La pérdida proteica a través de la mu- dad y depresión en adultos y descenso del rendimiento
cosa intestinal inflamada y ulcerada es un fenómeno escolar en niños.
lógico pero escasamente evaluado. En algunos estu-
dios parece confirmarse la existencia de enteropatía 4.  Valoración nutricional
pierde proteínas (evaluada mediante aclaramiento fe-
cal de α1-antitripsina) en los pacientes con EC tanto 4.1. Aproximación diagnóstica de la
activa como inactiva24. Además, existe un descenso de situación nutricional
lipoproteínas, encargadas de transportar las grasas y
Se debería hacer un cribado nutricional en todos los
vitaminas liposolubles, asociado a la actividad de la en-
pacientes con EII, con el fin de realizar una valoración
fermedad.
nutricional formal en aquellos con riesgo de desnutri-
Otros micronutrientes que se han demostrado defici- ción. Para ello nos valemos de:
tarios en estas enfermedades y de significación clínica
en ocasiones no descrita son: cromo, manganeso, mo-
libdeno, selenio (asociado a miocardiopatía reversible y 4.1.1.  Historia dietética
encefalitis irreversible)23, zinc (los niveles séricos bajos Se debe realizar una detallada historia clínica y die-
no se relacionan con el nivel total de zinc corporal), tética, examen físico completo y antropometría, regis-
magnesio (por la afectación extensa del intestino del- trando todas las medicaciones que toma y los cambios
gado y la magnesiuria por corticoides, junto a la ma- en el apetito, ingesta y peso, un recordatorio de las
labsorción grasa). comidas realizadas durante las últimas 24 horas,
recuento de la última semana y cuestionario de fre­
3.3.  Consecuencias de la desnutrición cuencia de grupos de alimentos. El número de calorías
requeridas se aproxima al 100-150% de las recomen-
Las consecuencias de la DEP en la EII son numero- dadas para su peso y talla, aunque hay casos en que
sas y pueden empeorar el pronóstico de la enferme- las necesidades son menores que en personas sanas26.
dad. La pérdida de peso se asocia al aumento de la Un brote de EII en pacientes hospitalizados supone un
mortalidad general. Los niños son los más afectados factor de estrés en la fórmula de Harris-Benedict de
por la carencia de nutrientes, pudiendo presentar re- 1,05-1,121.
traso en el crecimiento en un 75 % de los niños afec-
tados de EC y en el 10% de los niños afectados de
4.1.2.  Estudios de laboratorio
CU, asociándose a unos niveles disminuidos de IGF-
123. El retraso de la maduración sexual y puberal se Hemograma completo para descubrir anemización
observa en al 36% de los niños con EC, y en el 20% y/o linfopenia que surge del déficit proteico. Además
de los enfermos con CU23. de la medición de electrolitos en suero, proteínas, al-
Tema 30.  Soporte nutricional en la enfermedad inflamatoria intestinal 487

búmina, prealbúmina, transferrina, proteína transpor- existen pruebas de que algún alimento en particular
tadora del retinol, vitamina B12 y AF. favorezca la recidiva de la enfermedad, determina que
Deben medirse los niveles de calcio (corregido con se deba aconsejar a estos pacientes una dieta libre, sin
albúmina o proteínas totales). En pacientes con os- restricciones, o con las menos posibles27, por lo cual los
teoporosis o fractura se deben descartar otras posi- pacientes deben mantener una dieta adecuada evitan-
bles causas, estudiando: creatinina, 25-(OH) vitami- do únicamente aquellos alimentos que causen sínto-
na D, electroforesis de proteínas y testosterona (en mas. Por tanto, las modificaciones dietéticas deben
varones). hacerse en base a la tolerancia individual, dado lo he-
El incremento de los niveles de N-telopéptido de co- terogéneo de la enfermedad (tolerancia alimentaria,
lágeno tipo I en orina y los niveles elevados de sialopro- extensión y localización, cirugía previa), siendo el mejor
teína ósea son marcadores de resorción en enfermos consejo posible seguir una dieta equilibrada, para que
con EII. Otros marcadores utilizados son: fosfatasa al- se cubran todas las necesidades del organismo. Exis-
calina ósea, osteocalcina, péptidos de extensión del ten, no obstante, algunas recomendaciones generales:
procolágeno I, hidroxiprolina y excreción urinaria de
calcio tras ayuno. 5.1.  Incrementar la ingesta

4.1.3.  Estudios de composición corporal En caso de desnutrición se debe incrementar la in-


gesta, en principio oralmente, pudiendo añadir suple-
Se debe documentar rutinariamente el estado nutri- mentos líquidos orales y considerando el riesgo-benefi-
cional, registrando el peso y en niños asociando la ta- cio de comenzar con nutrición enteral o parenteral.
lla, velocidad de crecimiento y maduración sexual. El
pliegue tricipital sirve para valorar la masa grasa (por
5.2.  Intolerancia a la lactosa
estar libre de edema), cuyos valores normales son para
el varón de 54 +/– 11 y para la mujer de 30 +/– 7. Los pacientes con EC en brote, y sobre todo cuando
Otras técnicas de composición corporal son: la impe- está afectado el intestino delgado, presentan una ma-
dancia bioeléctrica, la densitometría ósea (DEXA) y los yor incidencia de malabsorción de lactosa, provocado
métodos isotópicos. La impedancia bioeléctrica, que por el aumento en la velocidad del tránsito intestinal o
mide la resistencia del cuerpo al paso de una corriente por sobrecrecimiento bacteriano28. En estos casos, sí
eléctrica, calcula el agua corporal total y de ahí se ob- estaría indicado restringir la ingesta de lactosa, recor-
tiene la masa grasa y masa libre de grasa. En las EII se dándole al paciente que la lactosa no solo es un azúcar
ha demostrado una sobreestimación mediante impe- de la leche, sino que actualmente se utiliza como con-
dancia bioeléctrica del agua corporal23. Se recomienda servante en muchos alimentos envasados. Existen di-
realizar DEXA (dual X-ray absorptiometry) tras estudiar versas razones para no restringir a priori la ingesta de
minuciosamente los factores de riesgo asociados y con productos lácteos en los pacientes con EII. En varios
una periodicidad no inferior a 2 años, entendiéndose estudios, la disminución del consumo de lácteos se
como factores de riesgo: mujeres con menopausia an- asoció a una menor ingesta de calcio29. Esta es una
tes de los 45 años, amenorrea durante más de un año, consecuencia altamente indeseable, puesto que la dis-
tratamiento esteroideo prolongado o con dosis acu- minución de la densidad mineral ósea, y eventualmen-
mulada mayor a 10 g y en diagnosticados con menos te el desarrollo de osteoporosis, es frecuente en los
de 18 años. pacientes con EII. Tanto la propia actividad inflamato-
La fuerza muscular medida por dinamometría y el ria como el uso de corticoesteroides se han involucrado
balance nitrogenado nos sirven para valorar el compo- en el desarrollo de osteopenia en estos pacientes29. La
nente proteico. razón tradicional para limitar el consumo de lácteos en
los pacientes con EII ha sido la posibilidad de que se
5. Dietética ponga de manifiesto una incapacidad para digerir la
lactosa, que habría permanecido asintomática hasta la
Se utiliza para el mantenimiento del estado nutricio- aparición de la EII, de manera que la ingestión de lác-
nal o su corrección, remisión de la actividad de la en- teos agravaría los síntomas, sobre todo la diarrea30.
fermedad, y por último disminución de las indicaciones Tanto en la CU como en la EC, la prevalencia de malab-
y/o complicaciones de la cirugía. sorción de lactosa evaluada mediante test de hidróge-
Debemos desmitificar la idea de que el brote de la EII no espirado, no es superior a la de la población sana31.
precisa «reposo digestivo» para su resolución, ya que Todos aquellos pacientes con síntomas sugestivos de-
esta actitud empeora el estado nutricional de los pa- berían someterse a una prueba de aliento de hidróge-
cientes. no para confirmarlo, y en aquellos en los que se confir-
El objetivo primario del manejo nutricional de los pa- me debería suplementarse la dieta con lactasa32 o con
cientes con EII inactiva sigue siendo corregir y prevenir calcio, para reducir el riesgo de osteoporosis. Algunos
el déficit nutricional. Ello, unido al hecho de que no autores consideran que no depende de la actividad de
488 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

la lactosa duodenal, y podría ser el resultado de la alte- cumplimiento, debe ser tomado con cautela y
ración de la flora intestinal y del incremento de tránsito monitorizar los niveles periódicamente36.
intestinal21. • Ácido fólico. Estudios retrospectivos sugieren que
Los intolerantes a la leche toleran y no malabsorben el la suplementación con ácido fólico (15 mg/día)
yogur, ya que las bacterias del yogur contienen beta-­ induce un efecto protector contra la displasia y el
galactosidasa, y al llegar al duodeno los microorganis- cáncer colorrectal en pacientes con CU21. Otros
mos colaboran activamente en la digestión de la lactosa. autores recomiendan 1 mg/día34, 37. Si se mantiene
Por lo que el yogur en ningún caso debe retirarse al ser tratamiento con metotrexato se debe suplemen-
una excelente fuente de calcio, vitamina D y proteínas, y tar como ácido folínico al estar inhibida la folato-
aumentar el tiempo de tránsito orocecal33. Otra forma reductasa.
de suplementar sería con bebidas a base de soja, que ha • Hierro. Aunque el beneficio de la suplementación
demostrado su beneficio en algunos estudios21. con hierro no se ha documentado en estudios clí-
Se debe suplementar el calcio a todos aquellos con nicos, se asume el beneficio del mismo; en intole-
osteoporosis o en aquellos que reciban tratamiento es- rantes a su ingesta oral, este puede suplementarse
teroideo crónico. Los varones jóvenes y las mujeres pre- IV o IM con supervisión médica ante el riesgo de
menopáusicas requieren 1000 mg/día de Ca elemental; anafilaxis. Hay mayor déficit en la CU que en la EC
en mayores de 50 años las dosis necesarias son de y constituye uno de los problemas fundamentales
1500-2000 mg/día. Se debe asociar vitamina D, ya que en niños. Se puede comenzar con una dosis de
los suplementos de calcio aislados no han demostrado 100 mg/día de sulfato o gluconato ferroso, para ir
beneficio clínico significativo14. Se puede suplementar aumentando hasta 3 dosis, no exceder una dosis
como calcitriol 0,25-0,5 µg/día, o con colecalciferol a diaria de 5 mg de hierro/kg de peso corporal34.
dosis de 50000 UI cada 2-4 semanas, aunque debido • Zinc. En aquellos casos que cursen con diarrea
al riesgo de hipercalcemia14, se prefiere el empleo de profusa, fístulas o enteropatía pierde-proteínas se
vitamina D2 o D3, en dosis de 800 UI/día. debe suplementar la dieta con 20-40 mg/día de
Pueden utilizarse bifosfonatos (aprobados por la gluconato de zinc34.
Food and Drug Administration, FDA) para evitar la os- • Magnesio. Unos niveles bajos, en casos de diarrea
teoporosis valorándose los riesgos secundarios. Fárma- muy prolongada, disminuyen la respuesta del hue-
cos y dosis diarias son: pamidronato 30 mg, clodrona- so a la acción de la paratohormona, las necesida-
to 600 mgr, risedronato 5 mg y alendronato 10 mg, des de magnesio oscilan entre 5 y 20 mmol/día34.
teniendo en cuenta que los dos últimos tienen dificul-
tada su absorción en resecciones intestinales34. 5.3.1. Proteínas
La calcitonina nasal o SC puede usarse en los casos
La ingesta de proteínas debe ser de entre 1,5 a
en que los agentes antirresortivos están contraindica-
1,7 g/kg de peso por día34.
dos o son mal tolerados14.
Se debe recomendar el incremento de ejercicio físico Fibra
con el fin de aumentar la masa ósea y muscular e insis-
tir en lo conveniente de abandonar el consumo de ta- Otra cuestión relevante es si se debe limitar el consu-
baco y el exceso de ingesta de alcohol, con el fin de mo de fibra alimentaria en los pacientes con EII. No
minimizar otros factores de riesgo de osteoporosis. existen pruebas científicas que aboguen por la supre-
sión de la fibra en estos pacientes, sobre todo en los
5.3. Micronutrientes períodos de remisión, pero parece razonable evitar la
fibra no soluble (lignina, salvado y celulosa) en los en-
Se debería establecer una suplementación diaria con fermos con estenosis intestinales por EC para reducir el
un multivitamínico en todos aquellos pacientes con al- riesgo de obstrucción intestinal, o en brotes de colitis
tas restricciones dietéticas. Algunas dosis recomenda- ulcerosa grave o extensa. Este tipo de fibra produce un
das son: residuo fecal abundante que puede facilitar la obstruc-
ción intestinal cuando hay estenosis, o dañar la muco-
• Vitaminas. La suplementación con vitamina E sa frágil y ulcerada del colon en un brote grave de co-
(800 UI) y C (1000 mg) durante 4 semanas en ca- litis. La fibra soluble incrementa el tiempo de tránsito y
sos de brotes medios-moderados pueden reducir permite una mayor absorción en los brotes. No parece
el estrés oxidativo, aunque la significación clínica justificado suprimir la fibra soluble fermentable e inclu-
no está definida35. so existen indicios de que determinado tipo de fibra
• En grados leves de afectación y con deficiencias fermentable (semillas de Plantago ovata, fibra guar, e
moderadas de B12 se puede pautar tratamiento inulina) podría ser tan eficaz como el tratamiento far-
oral con megadosis de esta vitamina (entre 1000 macológico en la prevención de la recidiva en la CU
y 2000 mg/día), evitando o distanciando un trata- causando mejoría en los índices de actividad y reduc-
miento intramuscular que a menudo dificulta el ción de la inflamación25. En los casos con gran dolor
Tema 30.  Soporte nutricional en la enfermedad inflamatoria intestinal 489

abdominal y diarrea abundante deben restringirse fru- diarios de suplementación todos aquellos pacientes
ta y verdura fresca, cafeína y productos con sorbitol, con altas dosis de esteroides o durante largo tiempo,
que pueden exacerbar la diarrea. riesgo elevado de osteoporosis, o como tratamiento
alternativo en refractarios, intolerantes o dependien-
Grasa des de esteroides. Su uso en general se prefiere al de la
NPT, al tener igual efectividad y menos efectos secun-
En pacientes con esteatorrea se recomienda suple- darios, ya que el reposo intestinal no ha demostrado
mentar con triglicéridos de cadena media (MCT) y una tener beneficio e influye negativamente sobre el trofis-
dieta baja en grasa (60-70 gramos/día). Olestra, un mo de la mucosa intestinal. La distribución de calorías
sustitutivo del aceite aprobado por la FDA, parece no desde hidratos de carbono, proteínas y grasas deb ser
afectar a la actividad de la EII23. Asimismo, valorar la en principio similar al del resto de la población41.
suspensión del tratamiento con colesteramina, que va- En pacientes con EC, en los que la afectación es a
cía los depósitos de sales biliares, provocando esteato- menudo más extensa y las consecuencias más dramáti-
rrea. En cuanto a la cantidad, en diversas revisiones no cas, se hace necesario un adecuado soporte nutricio-
se han encontrado diferencias entre dietas bajas o altas nal, prevalenciendo el uso de nutrición enteral, salvo
en grasa y, por otra parte, no hay beneficio en la utili- para los casos en los que esta esté contraindicada,
zación de dietas ricas en grasa monoinsaturadas frente como en fístulas medioyeyunales de alto débito, obs-
a las dietas ricas en ácido linoleico25. trucción intestinal completa, íleo paralítico, sepsis in-
traabdominal, hemorragia gastrointestinal grave o per-
6.  Soporte nutricional especializado foración intestinal42.
El inicio del soporte nutricional especializado debe La NE como tratamiento primario de la enfermedad
valorarse38 en todos aquellos pacientes con malnutri- de Crohn se ha considerado en algunas poblaciones de
ción severa, que no consigan unos adecuados aportes pacientes, especialmente en pediatría, con un doble
por la dieta oral, y en aquellos en grave riesgo de des- objetivo: evitar la desnutrición y el retraso del creci-
nutrición a corto plazo. Sus objetivos principales son miento y del desarrollo sexual en niños y adolescentes
disminuir la resección quirúrgica, fomentar el creci- que la sufren, e inducir la remisión de la enfermedad.
miento en los niños, revertir la desnutrición y facilitar la Entre los mecanismos sugeridos para explicar el efecto
curación de fístulas enterocutáneas. terapéutico de la NE en la EC se incluyen los siguientes:
El soporte nutricional está indicado en los brotes Disminuir la carga antigénica en la luz intestinal (dietas
graves, en el brote moderado si no existe una ingesta elementales), modular la respuesta inflamatoria y me-
adecuada y en pacientes en los que, independiente- jorar los mecanismos de reparación, así como modifi-
mente de la gravedad del brote, se prevé que se origine car la población bacteriana intestinal43.
una desnutrición a corto plazo, en pacientes con ayuno Se ha demostrado, en paciente con EC suplementa-
que vaya a prolongarse más de 5-7 días, el tracto gas- dos con NE, una ganancia de peso que llega a ser de
trointestinal debe estar funcionante, al menos en par- 3,1 kg20, con aumento de los parámetros antropomé-
te, y accesible39. tricos y de la ingesta energética total de un 35%. En los
suplementos con efecto inmunodulador hay una re-
ducción del índice de actividad de la EC, demostrándo-
6.1.  Nutrición enteral (NE)
se un descenso de IL-623.
Aunque se ha demostrado su beneficio en la inducción La NE en la colitis ulcerosa se debe intentar en los
a la remisión en la EC, superior al placebo (60% versus pacientes con brote grave, sobre todo si existe la posi-
25% en la mayoría de los estudios), no se considera su bilidad de necesitar tratamiento quirúrgico a corto pla-
uso como tratamiento para los brotes de EC de manera zo, y estén en trata­miento adyuvante con los corticoi-
unitaria, sino siempre unido al de corticoides, cuyo efec- des intravenosos en espera de valorar la resolución del
to se ha demostrado superior (80%). Se benefician de su cuadro agudo44. En un ensayo clínico español45 se de-
uso como terapia primaria principalmente todos aque- mostraba que no había diferencias en las tasas de co-
llos pacientes en que el uso de corticoides está limitado, lectomía en el grupo tratado con NE frente al grupo
como en niños, para evitar el retraso del crecimiento y de tratado con NP cuando se asociaban al tratamiento
la maduración sexual, o en adultos dependientes, refrac- corticoideo, si bien las tasas de complicaciones eran
tarios o intolerantes a los corticoides. Sin embargo, en la superiores en el grupo de la NP que en el de la NE.
CU no se ha demostrado ningún beneficio como induc- La elección de una opción, entre los diversos prepa-
tor de la remisión, aunque los pacientes se benefician del rados comerciales, depende principalmente del sabor,
restablecimiento del nivel nutricional. tolerancia del paciente, osmolaridad, calorías requeri-
Se han realizado varios estudios con las diferentes das y coste. No habiéndose demostrado beneficio en-
dietas, elementales y poliméricas, y todos ellos llevan a tre el uso de las diferentes NE, ya sea elemental, oli-
la conclusión de una importante mejoría, superior a gomérica o polimérica46. En general, se recomienda el
placebo e inferior a los corticoesteroides40. Son subsi- uso de dietas enterales poliméricas (con proteína ente-
490 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

Anorexia
restricción dietética inapropiada

Menor ingesta

Aumento de requerimientos: Malabsorción:


fiebre, sepsis, crecimiento inflamación, cirugía,
sobrecrecimiento bacteriano,
fístulas, ostomías

Aumento de pérdidas: Interacción fármaco-nutriente:


enteropatía pierde proteínas, corticoides-Ca-metab.
sangrado, micronutrientes, proteínas salazopirina-folato
fístulas colestiramina-vit. liposolubles

MALNUTRICIÓN

ENFERMEDAD INFLAMATORIA INTESTINAL


Tratamiento nutricional

Evaluación de la gravedad
Grado de actividad

LEVE GRAVE

TRATAMIENTO CONSERVADOR SOPORTE


NUTRICIONAL

Evolución favorable Evolución desfavorable ¿Está contraindicada la NE?

ALTA
NO SÍ

NE NPT
Intolerancia
complicaciones

Dieta oral

Figura 1.  Algoritmo de soporte nutricional de la enfermedad inflamatoria intestinal. C. de la Cuerda et al., Soporte
Nutricional basado en la evidencia de la enfermedad inflamatoria intestinal Endocrinol Nutr, 2005 (supl2):0-7714.
Tema 30.  Soporte nutricional en la enfermedad inflamatoria intestinal 491

ra), ya que se toleran por la mayoría de pacientes y enfermedad, en el número de fracasos a corticoides ni
presentan una palatabilidad más favorable para su uso en mayor frecuencia de precisar cirugía. Por otra parte
oral y un precio sensiblemente inferior. Las dietas oli- el número de infecciones del postoperatorio fue supe-
goméricas son hiperosmolares y deben reservarse para rior en los tratados con NP45. Las indicaciones principa-
los casos en los que exista una afectación muy extensa les de NP en la EII son:
de la enfermedad, con función intestinal muy compro-
metida y siempre que se haya comprobado una mala 6.2.1.  Fístulas enterocutáneas de alto débito
tolerancia a las poliméricas47.
Cuando se analiza cuidadosamente la composición Las originadas por EC tienen mejor pronóstico que
de las dietas enterales en los estudios más amplios que las originadas por una cirugía previa21. La NPT favorece
las comparan con el tratamiento con glucocorticoides, el cierre de las mismas siempre que no haya un obs­
se comprueba que las dietas terapéuticamente más táculo distal, exista continuidad anatómica del tubo
efectivas (inducen la remisión de la enfermedad) son digestivo y se drenen las colecciones purulentas. Se cie-
aquellas con muy bajo contenido lipídico (incluyendo rran el 44% de fístulas simples con NPT21.
las elementales) o las que tienen un contenido lipídico
normal o alto pero en las que predominan los ácidos 6.2.2.  Síndrome de intestino corto
grasos monoinsaturados; se comparó el efecto terapéu-
En una fase inicial se puede asociar a NE (deben exis-
tico de una dieta enteral polimérica rica en aceite de
tir al menos 100 cm), hasta lograr la readaptación del
oliva con el tratamiento estándar (prednisona, 1 mg/kg/
tubo digestivo. Se debe mantener si persiste un núme-
día) en pacientes con EC activa, y el resultado mostró el
ro elevado de deposiciones o de volumen. Son la prin-
mismo grado de efectividad de ambos tratamientos48.
cipal causa de NPT domiciliaria, y se debería comenzar
La suplementación nocturna por sonda nasogástrica
antes de la cirugía para prevenir las pérdidas proteicas
(SNG) con infusión continua y bomba peristáltica, es
asociadas a la cirugía21.
una opción válida, por ejemplo, en niños con retraso del
crecimiento32. Si se espera que no se pueda administrar
una alimentación oral durante más de 4 semanas se 6.2.3.  Síndrome suboclusivo
debe considerar el utilizar accesos enterales permanen- La NPT y la aspiración digestiva pueden resolver el
tes como gastrostomía endoscópica o radiológica per- cuadro evitando la cirugía.
cutánea. Las complicaciones asociadas a su técnica son: cate-
Algunos pacientes con EII inactiva pueden ser tributa- terización de vena central, sepsis, trombosis venosa,
rios de tratamiento con nutrición enteral a largo plazo: neumotórax y daño del conducto linfático. Las compli-
a) los enfermos con EC en los que la remisión se ha in- caciones asociadas a su uso incluyen: intoxicación por
ducido con nutrición enteral; b) algunos pacientes selec- manganeso, déficit de cobre, encefalopatía de Wernic-
cionados (generalmente con EC extensa de intestino ke, beri-beri. Precisan un control estrecho de electroli-
delgado) que no toleran la dieta oral convencional (en tos, vitaminas y otros elementos, unas condiciones hi-
estos casos es útil la inserción de una gastrostomía por giénicas apropiadas, una educación y un personal a su
vía endoscópica); y c) sobre todo en el tratamiento del cargo entrenado.
retraso de crecimiento de niños y adolescentes con EC49. En la EC es efectiva como tratamiento primario en
Las contraindicaciones absolutas del uso de NE son enfermedad refractaria o con alta recurrencia y en la
la presencia de fístulas yeyunales de alto flujo, obstruc- CU no se considera como tratamiento primario, aun-
ción intestinal completa, síndrome de intestino corto que se ha demostrado una remisión del 30%50.
severo con elevado número de deposiciones o con una El tratamiento en pacientes desnutridos que necesi-
longitud inferior a 100 cm, hemorragia gastrointestinal tan cirugía a corto plazo disminuye las complicaciones
grave o masiva, perforación intestinal, sepsis intrabdo- postoperatorias y el área resecada, aunque en ningún
minal o megacolon tóxico. caso se ha demorar una intervención urgente para me-
jorar el estado nutricional del paciente.
6.2.  Nutrición parenteral total (NPT)
Sus riesgos y su coste no justifican la utilización de 6.3. Probióticos. Prebióticos y nutrientes
forma general, por lo que su indicación es para aque- específicos
llas situaciones en que la nutrición enteral está contra-
6.3.1. Probióticos
indicada o no se tolera, ya que el reposo intestinal no
mejora el curso de la enfermedad. Son microorganismos vivos que sobreviven al paso
Existe un único estudio que compara NE frente a NP por el tracto gastrointestinal y tienen efectos beneficio-
en pacientes con CU (se encuentran en tratamiento sos en el huesped, incluyen: Lactobacilli, Bifidobacte-
con dosis plenas de corticoesteroides) en sus resulta- rium, cocos gram positivos, enterococos, levaduras (Sa-
dos no se observaron diferencias en la evolución de la ccharomyces boulardii) y hongos (Aspergillus orizae).
492 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

Recientemente se ha cuestionado la viabilidad de es- marlo en estudios llevados a cabo con un mayor
tos microorganismos en el tubo digestivo, aunque en número de pacientes, o aplicando estrategias que con-
numerosos estudios se ha demostrado el cambio en el sigan modifi­car de manera más eficaz la composición
perfil microbiano y actividad metabólica de las heces, de la flora intestinal.
así como su resistencia a la acidez gástrica y su activi-
dad intestinal33. Para conseguir resultados no es nece- 6.3.2. Prebióticos
saria la colonización, deben ser ingeridos continua-
mente, ya que no se adhieren ni multiplican. Otro Son sustancias que estimulan el crecimiento y meta-
beneficio asociado es el que se desprende del descenso bolismo de las bacterias comensales entéricas disminu-
de actividad bacteriana de beta-glucoronidasa y be- yendo el número de bacterias adheridas a la mucosa,
ta-glucosidasa, implicadas en la circulación entero­ algunas fibras funcionales (almidón resistente, fructoli-
hepática de sustancias tóxicas y carcinogénicas33. gosacáridos, galactoligosacáridos, disacáridos) tienen
El mecanismo de acción (tabla 3) pasa principalmen- un efecto prebiótico. Suponen un potencial tratamien-
te por la búsqueda del equilibrio entre microbiota co- to en enfermos con EII, al contar con un beneficio teó-
mensal y patogénica. De todas las bacterias estudia­das, rico que ha de demostrarse en estudios clínicos, com-
únicamente Escherichia coli Nissle 1917, Saccha­romyces parando sus diferentes tipos y beneficios asociados,
boulardii y VSL-3 (una mezcla de 8 bacterias: Lacidoph- aún no están indicados en ningún proceso. Los agen-
ilus, L. delbrueckii, L. plantarum, L. casei, B. infantis, B. tes simbióticos, sustancias que suman los beneficios de
loncum, B. breve, S. salivarius), han demostrado ser pro y prebióticos, pueden, si se demuestra el beneficio
efectivas. de estos de estos últimos, aumentar la adherencia al
Su uso a día de hoy, ha demostrado efectividad en la tratamiento.
prevención de recaídas en CU (igual efectividad que
la mesalazina)25 y en infecciones del reservorio ileal, ne- 6.3.3. Glutamina
cesitando estudios más completos con el fin de deter- Es un aminoácido semiesencial que se sintetiza fun-
minar dosis, duración, utilidad de otras cepas y su uso damentalmente en el músculo estriado y constituye la
en brotes de CU y postoperatoriamente en EC. Sin em- principal fuente de energía, superior a la glucosa, para
bargo, existen evidencias para evitar su toma en situa- fibroblastos, linfocitos, células neoplásicas y células del
ción clínica de brote agudo51. Múltiples estudios del epitelio intestinal. En modelos experimentales se ha vis-
sistema inmunitario de pacientes con EII han demostra- to que puede disminuir la endotoxemia e incrementar
do la existencia de un trastorno en la inmunidad de la la función de barrera de la mucosa previniendo del
mucosa, probablemente de­terminado genéticamente, daño que se produce en situaciones catabólicas, aun-
que origina una inmunorreactividad exagerada contra que en humanos no se ha demostrado que sea eficaz
elementos de la flora comensal. La modificación de la para inducir remisiones50. No está claro su papel en la
flora intestinal mediante probióticos ofrece la oportuni- disminución de la permeabilidad intestinal, aumentada
dad no solo de actuar desde el punto de vista microbio- en estos enfermos52.
lógico, sino también desde el punto de vista inmunoló-
gico. La utilización de probióticos en la EII es, desde el
6.3.4.  Ácidos grasos de cadena corta
punto de vista fisiopatológico, una buena alterna­tiva
terapéutica. Sin embargo, por el momento, los estudios Son ácidos grasos que poseen de uno a seis carbonos
con probióticos solo han presentado resultados clínicos y que derivan fundamentalmente de la degradación
positivos en situaciones muy concretas. Los datos se- bacteriana de carbohidratos, el 90% son: acetato, pro-
cundarios fisiopatológicos de los estudios clínicos su- pionato y butirato. Suponen el 70% de la fuente de
gieren un efecto beneficioso, aunque habrá que confir- energía del colonocito50. Se ha demostrado el papel del

Tabla 3.  Factores que contribuyen al fallo del tratamiento con nutrición enteral en la
enfermedad inflamatoria intestinal21.
Gusto
Dependientes del alimento Osmolaridad
Efectos transitorios: cefalea, náuseas, vértigo, diarrea
Nivel de motivación
Dependientes del paciente Inconvenientes sociales
Enfermedad severa que requiere cirugía
Falta de recursos humanos
Dependientes del médico Carencia de soporte y protocolos
Escepticismo
Tema 30.  Soporte nutricional en la enfermedad inflamatoria intestinal 493

Tabla 4.  Efectos del uso de probióticos en la las enfermedades que de un modo más acentuado
enfermedad inflamatoria intestinal (modificado de pueden producir desnutrición y déficits de toda una
Sartor et al.8). serie de micronutrientes, provocando un gran número
de enfermedades carenciales y un peor curso y pronós-
Inhibición de bacterias patogénicas
tico postoperatorio de las propias enfermedades.
· Descenso del pH luminal Se debe realizar un cribado nutricional y si es necesa-
· Secrección de proteínas bactericidas rio una valoración nutricional formal a todos los afec-
· Resistencia a la colonización de bacterias tados, aunque la enfermedad no esté activa en ese
patogénicas momento, con el fin de evitar y tratar todas las conse-
· Inhibición de la invasión epitelial cuencias nutricionales que se derivarían de una malnu-
· Bloqueo de los ligandos epiteliales trición o déficit de oligoelementos asintomática en un
Función de barrera mucosa y mejora epitelial primer momento.
La mayoría de los mecanismos patogénicos de la
· Producción de ácidos de cadena corta (butirato) malnutrición energético proteica en la EII están relacio-
· Mejora de la producción de moco nados con la inflamación. Muchos déficits de micronu-
· Incremento de la integridad de barrera trientes (por ejemplo, antioxidantes) presentes en la EII
· Producción de nutrientes y antioxidantes parecen estar favorecidos por el proceso inflamatorio,
Inmunorregulación y viceversa.
· Inducción de IL-10 Siempre que la vía digestiva se pueda utilizar se ha
· Estimulación de la secrección de IgA de utilizar, en principio suplementando la dieta oral, ya
· Inhibición de producción IgE que no hay alimentos que generen brotes; en los últi-
· Descenso de la expresión de factor de necrosis tumoral mos años y con las nuevas evidencias hemos pasado de
· Estímulo de la función de los macrófagos una dieta basada en la restricción, a fomentar una die-
· Modula la respuesta Th1/Th2 ta lo más libre y variada posible. La evidencia nos
· Activa el MALT muestra que un alto número de pacientes, del orden
de dos tercios, manifiestan no tolerar algún alimento,
entre los más descritos: lácteos, frutas y verduras, car-
ne y pan. Aunque no es menos cierto que un amplio
butirato en la apoptosis de células inflamatorias35. Los
porcentaje los tolera en un segundo o tercer intento de
niveles de butirato y su suplementación en los enfermos,
reintroducción o incluso a ciegas53, 54.
son contradictorios en los diversos estudios, necesitando
La mayoría de los pacientes con EII activa toleran una
más estudios para dilucidar su rol en el tratamiento.
dieta libre, sin restricciones. La exclusión de productos
lácteos no está indicada a menos que se demuestre de
6.3.5.  Ácidos grasos omega-3 forma objetiva su malabsorción o intolerancia. Las
Constituidos por ácido eicosapentanoico (EPA) y do- «dietas de exclusión» solo están indicadas en pacientes
cosahexanoico (DHA), son ácidos grasos poliinsaturados muy seleccionados, puesto que su eficacia no se ha
procedentes de aceite del pescado. Diversos estudios demostrado de forma inequívoca.
observacionales, clínicos y experimentales han demos- En los casos de actividad, la nutrición artificial supo-
trado en enfermos la disminución de síntomas y necesi- ne una ayuda importante para evitar la desnutrición, y
dad de corticoides, promoviendo el crecimiento del teji- así la nutrición enteral es beneficiosa y se recomienda
do colónico, aunque hay estudios controvertidos. Su en los pacientes con brote moderado-grave, especial-
explicación fisiopatológica se basa en la disminución de mente en los pacien­tes con EC en edad infantil con
las series 3 de prostanoides y 5 de leucotrienos (proinfla- retraso de crecimiento y adolescentes y en los casos
matorias), con un aumento de las series 2 y 4 respecti- graves de CU acompañando al tratamiento corticoi-
vas50. Existe una baja tolerancia por la halitosis, pirosis, deo. La nutrición parenteral, por sus posibles y graves
flatulencia y diarrea que producen, debiéndose ingerir complicaciones, queda limitada para aquellas situacio-
en forma de cápsulas entéricas. Aunque su uso tenga nes en que constituye la única posibilidad.
efectos antiinflamatorios, su efecto depende de las do-
sis, del tiempo, índice n3/n6 y asociación de otros mo- 8. Bibliografía
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Tema 31.
Soporte nutricional en pacientes con fallo intestinal
José Joaquín Alfaro Martínez
Elena Carrillo Lozano
Antonio Hernández López
Francisco Botella Romero
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Hospitalario Universitario. Albacete

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 497-510.

1.  Introducción
2. Fisiopatología
3.  Diagnóstico
4.  Objetivos nutricionales
5.  Valoración nutricional
6.  Dietética
7.  Soporte nutricional artificial
8.  Resumen
9.  Bibliografía

1.  Introducción Según la ESPEN, el término insuficiencia intestinal


puede ser considerado en las siguientes situaciones1:
El fallo intestinal fue descrito por primera vez en 1981
por Fleming y Remington como la «reducción de la
•  Ingesta reducida de comida con función intestinal
masa intestinal que da como resultado una pérdida de
normal.
capacidad de digestión y absorción de nutrientes»1. Esta
•  Función intestinal alterada pero absorción conser-
definición fue cambiando a lo largo del tiempo1 y se
vada.
completó incluyendo la necesidad de suplementación
nutricional para mantener la salud y/o el crecimiento2. •  Enfermedad inflamatoria intestinal tratada con
nutrición enteral.
La European Society for Clinical Nutrition and Meta-
bolism (ESPEN) ha sido la primera sociedad científica •  Pacientes tratados con NP porque rechazan nutri-
que ha propuesto una definición formal de fallo intesti- ción enteral, la cual podría ser efectiva.
nal1: se define fallo intestinal como la reducción de la •  Pacientes con función intestinal reducida, con
función intestinal por debajo del mínimo necesario para alteración de la absorción, pero en los cuales la
la absorción de macronutrientes y/o agua y electrolitos, salud y el crecimiento se mantienen mediante
de forma que es necesaria la suplementación intraveno- la suplementación oral, nutrición enteral, ente-
sa para mantener la salud y el crecimiento3. Es decir, en roclisis de alimentación o aquellos que solo ne-
la definición de la ESPEN se incluye la necesidad de nu- cesitan suplementos de vitaminas y elementos
trición parenteral (NP), o al menos hidratación parente- traza.
ral, para diagnosticar fallo intestinal, dejando el término
de insuficiencia intestinal reservado a aquellas situacio- La definición de fallo intestinal de la ESPEN incluye
nes en que es posible mantener la salud y el crecimiento una clasificación funcional y otra fisiopatológica tanto
solo con soporte nutricional oral o enteral. para el fallo intestinal agudo como crónico, y además

497
498 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

una clasificación clínica para el fallo intestinal crónico 1.1.  Síndrome de intestino corto
(tabla 1). Desde el punto de vista funcional, se clasifica
el fallo intestinal como3: El SIC se define como el resultado de la pérdida de
intestino o masa de enterocitos causado por una resec-
•  Tipo I: agudo, de corta duración y con frecuencia ción quirúrgica, defectos congénitos o enfermedad
autolimitado. médica5. Aunque la función absortiva residual no siem-
•  Tipo II: supone la prolongación de una situación pre se correlaciona con la longitud del intestino rema-
aguda, a menudo en un paciente metabólica­ nente, el SIC se ha definido desde un punto de vista
mente inestable que requiere suplementación intra­ anatómico como aquella situación en la que la longi-
venosa durante semanas o meses. tud intestinal es menor del 30 % de lo normal, lo que
•  Tipo III: trastorno crónico, en pacientes metabóli- supondría 75 cm en niños y 200 cm en adultos6.
camente estables, que requiere suplementación Es difícil estimar con exactitud la verdadera incidencia
intravenosa durante meses o años, y que puede de SIC. Se ha publicado que en EEUU podría afectar a
ser reversible o irreversible. 3 personas por millón de habitantes, con una prevalencia
similar en Europa, donde habría entre 10 y 15000 perso-
El fallo intestinal de tipo I y II puede considerarse nas con SIC recibiendo NP durante más de 90 días, y un
una situación aguda, en la que es esperable que el número similar en EEUU. Concretamente en España, un
paciente logre la autonomía intestinal. Esta situación estudio referido a 2008, encontró una prevalencia de
suele encontrarse en las plantas quirúrgicas, como re- NPD en adultos de 5,06 pacientes por millón de habitan-
sultado de intervenciones urgentes o de complicacio- tes7. Respecto a la morbimortalidad, se ha recogido una
nes de la cirugía. Concretamente, el fallo intestinal supervivencia a 2 y 5 años del 86 y 75 %, respectivamen-
tipo II suele ocurrir tras catástrofes abdominales, te, en pacientes con SIC sin enfermedad maligna. Un
como isquemia intestinal, vólvulos o traumatismos estudio más reciente, en población italiana, registró su-
que requieren resecciones intestinales extensas o bien pervivencias de 88  % y 78 % a 3 y 5 años, respectivamen-
tras complicaciones de la cirugía tales como dehiscen- te, similares a las encontradas en Reino Unido5.
cia de suturas o daños inadvertidos en el intestino, Los factores que han demostrado relación con la su-
que condicionan la aparición de una fístula o la nece- pervivencia en el SIC son: edad (mortalidad tres veces
sidad de resecar un segmento extenso de intestino. Se mayor en mayores de 55 años); patología subyacente
ha estimado una incidencia anual de este tipo de fallo (mortalidad 23 veces mayor para enfermedad neoplá-
intestinal de 9 casos por millón de habitantes en In- sica y 6 veces mayor para esclerosis sistémica); presen-
glaterra4. cia de enteritis rádica (mortalidad cuatro veces mayor)
El fallo intestinal crónico de causa no maligna fue y longitud de intestino remanente menor de 50 cm. Sin
incluido en la lista Orphanet de enfermedades raras en embargo, no se ha demostrado relación entre mortali-
20133. dad y factores como el desarrollo de sepsis por catéter,
Desde un punto de vista fisiopatológico, el fallo in- trombosis del mismo o colestasis1.
testinal puede clasificarse en cinco grandes entidades: Los estudios de calidad de vida sugieren que esta se
síndrome de intestino corto (SIC), fístula intestinal, dis- ve deteriorada en los pacientes con SIC, siendo peor
motilidad intestinal, obstrucción mecánica o enferme- que la de la población general y también que la de los
dad extensa de la mucosa3. pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal5.

Tabla 1.  Clasificación clínica del fallo intestinal crónico3.

Aporte de energía Aporte de fluidos con la NP (ml/día)


con NP (kcal/kg) ≤ 1000 [1] 1001-2000 [2] 2001-3000 [3] > 3000 [4]
0 (A) A1 A2 A3 A4
1-10 (B) B1 B2 B3 B4
11-20 (C) C1 C2 C3 C4
> 20 (D) D1 D2 D3 D4

Se establecen 16 categorías, desde A1 a D4 en función del aporte de energía y fluidos con la nutrición parenteral (NP).
Tanto la energía como el volumen de NP se calculan según la media diaria de las bolsas de NP a la semana.
Por ejemplo, un paciente de 65 kg que reciba 4 bolsas semanales de NP, cada una de ellas con 1 500 kcal y 2 000 ml
estaría en la categoría C2: 1 500 kcal x 4 días / 7 / 65 kg = 13, categoría C; 2 000 ml x 4 días / 7 = 1 143, categoría 2.
Tema 31.  Soporte nutricional en pacientes con fallo intestinal 499

1.2.  Fístula intestinal 20-50 % de los adultos con POIC necesitarán nutrición
parenteral domiciliaria (NPD) y el registro francés de
Una fístula es una conexión anómala entre dos es- NPD muestra que un 10 % de sus pacientes presentan
tructuras epiteliales o cavidades, mientras que una fís- POIC, con una incidencia de 0,3 pacientes por millón
tula entero-cutánea (FEC) se define como aquella que de habitantes y año. La supervivencia a largo plazo en
comunica el tracto gastrointestinal intraabdominal con la POIC se ha estimado en 94, 78 y 75 % a 1, 5 y 10
el exterior del cuerpo. Las principales causas de FEC son años respectivamente, siendo las complicaciones más
traumatismos, iatrogenia, presencia de cuerpos extra- frecuentes de estos pacientes aquellas relacionadas
ños, infecciones, radiación, enfermedad inflamatoria con la NPD y con la enfermedad subyacente, así como
intestinal, enfermedades granulomatosas como la tu- trastornos específicos de la POIC como la deshidrata-
berculosis o cáncer. ción, alteraciones electrolíticas, traslocación bacteria-
Las FEC se han clasificado atendiendo a su etiología, na, enfermedad por reflujo gastroesofágico con o sin
localización anatómica y volumen de drenaje. Se habla esófago de Barret y neumonía por aspiración9, 10.
de fístulas de bajo débito cuando este es menor de Otros capítulos de este manual se refieren a las pato-
500 ml/día y de alto débito cuando es mayor de esta logías que afectan a la mucosa intestinal y su manejo
cantidad. Esta clasificación es importante porque un nutricional, por lo que no se tratarán este capítulo.
mayor débito por la fístula se asocia a una mayor mor-
talidad. También la localización anatómica influye en la
2. Fisiopatología
mortalidad y en la posibilidad de cierre espontáneo, de
forma que las fístulas gástricas o colónicas tienen ma- Para comprender las consecuencias y el manejo del
yor probabilidad de cierre espontáneo que las de intes- SIC, es útil conocer la anatomía y funciones de cada
tino delgado8. segmento intestinal. La longitud del intestino delgado
normal se ha estimado entre 300 y 850 cm5, siendo
1.3.  Pseudoobstrucción intestinal unos 40 cm mayor en el varón que en la mujer1. Cada
segmento de intestino tiene funciones diferentes1.
La pseudoobstrucción intestinal crónica (POIC) es un
trastorno, raro pero grave e incapacitante, caracteriza- •  El intestino delgado proximal es responsable de la
do por síntomas crónicos y/o recurrentes que sugieren absorción de varios micronutrientes, entre ellos el
obstrucción intestinal, incluyendo la objetivación ra- hierro, el calcio, el manganeso, el fósforo y el áci-
diológica de dilatación intestinal y niveles hidroaéreos, do fólico.
en ausencia de una lesión anatómica fija que condicio- •  En el yeyuno proximal tiene lugar la absorción de
ne obstrucción. Los principales síntomas incluyen dolor macronutrientes (lípidos, carbohidratos y proteí-
abdominal, gorgorismos, vómitos, estreñimiento y dia- nas), así como de vitaminas hidrosolubles y agua.
rrea9. Se debe a que las contracciones intestinales son •  En el íleon tiene lugar la absorción de cloro y sodio
inefectivas10. mediante transporte activo y también de vitamina
La POIC puede ser idiopática o secundaria. Las for- B12 y sales biliares, además de participar en el
mas secundarias suponen el 60 % de las POIC en adul- feed-back de la colecistoquinina, péptido YY y
tos y son raras en niños. Las causas más frecuentes son GLP-1. Cuando se pierde la función reguladora de
metabólicas, como la diabetes, neuropatías, medica- estas hormonas, o la capacidad de absorber las
mentosas (por ejemplo, por vincristina o fármacos an- sales biliares por una resección del íleon terminal,
ticolinérgicos), paraneoplásicas, postinfeciosas y se- se produce un tránsito intestinal acelerado y un
cundarias a amiloidosis. Recientemente se ha implicado contenido intestinal hipertónico con aumento de
a virus neurotropos como herpesvirus y virus JC. En los la secreción de agua a la luz intestinal y, en conse-
casos secundarios, el trastorno afecta a muchos órga- cuencia, un aumento del débito fecal.
nos, siendo los más frecuentes el sistema nervioso y la
musculatura ocular. La POIC idiopática ha sido relacio- La absorción de macronutrientes tiene lugar princi-
nada con pérdida de células intersticiales de Cajal a palmente en los primeros 100 cm de intestino delga-
nivel intestinal, que constituyen un marcapasos de los do, aunque también influye el tiempo de tránsito di-
movimientos intestinales9. gestivo, de manera que si este es más lento, habrá más
Las formas pediátricas de POIC suelen aparecer al na- tiempo de contacto de los nutrientes con la mucosa
cimiento o en la primera infancia, mientras que en condicionando una mayor absorción. El macronutrien-
adulto es más frecuente su aparición en individuos jó- te cuya absorción se ve menos afectada en el SIC son
venes (20-40 años) y la relación varón:mujer es 2:310. las proteínas, debido a que su proceso de absorción se
La heterogeneidad clínica y etiológica de la POIC inicia a nivel ligeramente más proximal que el de car-
hace que su epidemiología sea incierta. La enferme- bohidratos y grasas. La digestión de proteínas empieza
dad de Hirschsprung afecta aproximadamente a uno en el estómago y duodeno con la pepsina y las protea-
de cada 6 000 nacidos. Un 60-80 % de los niños y un sas pancreáticas, las cuales digieren las proteínas a tri-
500 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

péptidos, dipéptidos y también aminoácidos. Estos fi- absorción de energía. Habitualmente reabsorbe 1 o 2
nalmente son absorbidos en el enterocito a través de litros de fluidos al día, pero puede llegar a absorber
transportadores específicos de aminoácidos y de pépti- hasta 6 litros. La fermentación en el colon de carbohi-
dos (PepT1)5. dratos no digeridos a ácidos grasos de cadena corta
La absorción intestinal de lípidos ocurre por un pro- puede proporcionar hasta 1000 kcal al día. Por ello, la
ceso de emulsión mediante la bilis y de digestión por la preservación del colon durante la cirugía es un factor
lipasa y colipasa pancreática, con discreta participación muy importante para lograr la autonomía nutricional1.
gástrica y lingual. Los mono y diglicéridos son absorbi- Se estima que, en general, la pérdida de intestino
dos mediante difusión de micelas en el enterocito, tan- con un remanente funcional menor de 200 cm supone
to a nivel yeyunal como ileal, entran a formar parte de la aparición de SIC5. No obstante, la severidad de la
los quilomicrones y llegan a la circulación sistémica a deficiencia nutricional y de electrolitos y la probabili-
través del sistema linfático. La pérdida del íleon con sus dad de lograr la autonomía nutricional depende del
transportadores de ácidos biliares, y consecuentemen- segmento anatómico afecto (duodeno, yeyuno, íleon o
te la interrupción de su circulación enterohepática, colon), la longitud de intestino resecado y la salud del
contribuye a la diarrea en pacientes con SIC. Esta pue- intestino remanente. Si esta autonomía no se logra se
de ser resultado de esteatorrea por malabsorción grasa produce el fallo intestinal. Los pacientes con alto riesgo
y/o diarrea secretora por la acción irritante de las sales de desarrollar fallo intestinal serán aquellos con menos
biliares sobre la mucosa colónica en pacientes que con- de 35 cm de intestino delgado con una anastomosis
servan colon. Los triglicéridos de cadena media se yeyuno-ileal y colon intacto, menos de 60 cm de intes-
­absorben directamente a la circulación portal en el in- tino delgado con anastomosis yeyuno-cólica o menos
testino delgado, pero también en estómago y colon, lo de 115 con yeyunostomía terminal1.
que puede ser útil en el manejo del SIC en pacientes Desde un punto de vista clínico, junto con la desnu-
que conserven colon5. trición en sí, la diarrea es la manifestación más impor-
Los carbohidratos son fácilmente absorbidos a lo lar- tante del SIC. Todos los mecanismos de diarrea pueden
go de todo el intestino delgado, pero principalmente en verse implicados en la fisiopatología del fallo intestinal
los primeros 100 cm en personas sanas. Una vez hidro- secundario a SIC: diarrea osmótica, diarrea secretoria,
lizados a monosacáridos son transportados a través de malabsorción de sales biliares, esteatorrea y diarrea por
la membrana del borde en cepillo intestinal por trans- leak-flux, esto es, por pérdida de fluidos a través de las
portadores específicos de cada monosacárido, llamados uniones intercelulares intestinales. Lo más frecuente es
GLUT y también mediante cotransportador activo so- una combinación de varios de esos mecanismos11.
dio-glucosa (SGLT-1) capaz de transportar glucosa y so- La tabla 2 muestra el contenido en electrolitos de las
dio contra gradiente. Los polisacáridos y oligosacáridos diferentes secreciones digestivas, que habrá que tener
no digeridos por la amilasa llegan al colon, donde son en cuenta a la hora de formular la NP o suplementar
metabolizados por la flora en condiciones anaeróbicas electrolitos por vía oral, enteral o parenteral.
dando lugar a ácidos grasos de cadena corta, los cuales
pueden ser absorbidos por el colon5.
2.1.  Adaptación intestinal
La válvula ileocecal tiene un importante papel regu-
lando el paso de contenido al colon y sirve como barre- La adaptación es un proceso altamente individual y
ra que reduce el paso de materiales y bacterias desde el es considerada como la respuesta biológica del intesti-
colon al intestino delgado. La resección de la válvula no remanente para asumir la función del intestino per-
ileocecal es un predictor independiente de la pérdida dido, pero en un sentido más amplio también puede
de autonomía nutricional1. incluir los cambios de comportamiento del paciente y
La principal función del colon es la reabsorción de el conjunto de medidas adoptadas para compensar el
agua y electrolitos, aunque puede jugar un papel en la estado de maldigestión/malabsorción11.

Tabla 2.  Contenido en electrolitos de los fluidos del intestino delgado8 (los valores expresan mEq/l).

Sodio Potasio H+ Cloro Bicarbonato


Estómago 40-65 10 90 100-140 –
Jugo pancreático 135-155  5 – 55-75 70-90
Bilis 135-155  5 – 80-110 35-55
Intestino delgado 120-130 10 – 50-60 50-70
Colon 20-50 35-60 – 20-40 30-45
Tema 31.  Soporte nutricional en pacientes con fallo intestinal 501

El fenómeno de adaptación intestinal que ocurre Como marcador bioquímico en la evaluación del SIC,
tras resecciones extensas de intestino delgado da podemos valernos de la determinación de los niveles
como resultado un aumento de la superficie absorti- de citrulina. La citrulina es un aminoácido no esencial
va. Aunque este proceso acontece fundamentalmen- que no forma parte de las proteínas, y que participa
te en los primeros 6 meses, puede continuar incluso como metabolito en el ciclo de la urea. En individuos
durante 4 años5 y responde a estímulos tanto de nu- sanos, los niveles en plasma están entre 20 y 60 mmol/l,
trientes como de no nutrientes6. La adaptación intes- con una media de 40 mmol/l14. Se sintetiza de forma
tinal conlleva cambios a nivel estructural y funcional. casi exclusiva en los enterocitos y por ello es un buen
Las microvellosidades se hacen más largas y las crip- indicador de masa intestinal residual funcionante14.
tas más profundas11, produciéndose un incremento Unos niveles de citrulina plasmática o sérica menores
de ADN, ARN y contenido proteico, proceso que re- de 20 mmol/l tienen una alta sensibilidad y especifici-
quiere poliaminas, putrescina, espermidina y esper- dad de la necesidad de NP a largo plazo8, 14. A la hora
mina6. En neonatos y niños pequeños el intestino de interpretar los niveles de citrulina hay que tener en
tiene capacidad de alargarse, y tanto en niños como cuenta la función renal, pues incluso una insuficiencia
en adultos, pero más en aquellos, se produce una di- renal moderada puede elevar los niveles plasmáticos de
latación intestinal. También se produce una sobreex- citrulina14.
presión de los transportadores implicados en la ab- El diagnóstico de POIC puede ser un desafío, pues se
sorción e incluso en los pacientes con SIC las trata de una enfermedad poco frecuente, con síntomas
necesidades de energía disminuyen como parte del inespecíficos, y sin pruebas diagnósticas específicas de
proceso de adaptación11. laboratorio o de imagen. La media de tiempo entre el
inicio de los síntomas y el diagnóstico es de 6 a 8 años,
3. Diagnóstico y este se basa en un alto índice de sospecha y en la ex-
clusión de la obstrucción mecánica. Los datos de labora-
En el diagnóstico del fallo intestinal la radiología torio pueden ser útiles para diagnosticar POIC secunda-
proporciona al clínico información sobre la cantidad y rias (autoanticuerpos en síndromes paraneoplásicos,
calidad del intestino remanente, lo que resulta útil para ácido láctico en las enfermedades mitocondriales, diag-
planificar el soporte nutricional. El empleo de las distin- nóstico genético). La manometría de intestino delgado
tas técnicas de imagen permite conocer la anatomía es una prueba importante en el diagnóstico de POIC
intestinal, incluyendo la presencia de fístulas intestina- porque permite diferenciarla de la obstrucción mecánica
les, evaluar la posibilidad del uso de nutrición enteral, y proporciona información sobre el mecanismo subya-
establecer las posibilidades de reconstrucción quirúrgi- cente, neural o muscular, pero es una técnica compleja y
ca y establecer la existencia de complicaciones como poco accesible. La manometría esofágica, mucho más
abscesos abdominales. sencilla, puede ayudar en el diagnóstico, pues la mayoría
En el caso del SIC, el primer dato a conocer es la lon- de los pacientes con POIC la tienen alterada. La cine-RM
gitud del intestino remanente, para lo que puede ser es una técnica emergente para diagnosticar esta patolo-
muy útil la realización de un tránsito intestinal con con- gía. Finalmente, en algunos casos, cuando se realiza ci-
traste, que proporciona información muy fiable, sobre rugía, la toma de biopsia puede orientar a la etiología,
todo cuando el intestino remanente es menor de patogénesis y pronóstico de algunos trastornos neuro-
150 cm. Puede ser necesario administrar el contraste, musculares del tracto digestivo9.
además de por vía oral, por las distintas ostomías resul-
tantes del tratamiento quirúrgico cuando no hay conti- 4.  Objetivos nutricionales
nuidad de los distintos segmentos intestinales12. Los
estudios con contraste oral también permiten valorar el El objetivo nutricional en el tratamiento del fallo in-
grado de adaptación ileal, al mostrar el engrosamiento testinal es mantener la salud tanto en adultos como en
y aumento del número de los pliegues de la mucosa, así niños y, además, un óptimo crecimientos en estos,
como un incremento del diámetro intestinal13. La tomo- proporcionando al paciente un aporte adecuado de
grafía computarizada (TC) es muy útil en el estudio de macro y micronutrientes y contribuyendo a un correcto
la patología del mesenterio y en el diagnóstico de colec- balance de fluidos. En la fase aguda, el tratamiento
ciones intraabdominales, que en el paciente crónico nutricional puede contribuir a mejorar la situación in-
pueden manifestarse de forma atípica. La TC con con- flamatoria y catabólica del paciente, y en el caso de las
traste intravenoso también es útil a la hora de poner de FEC al cierre de las mismas. En el caso de la POIC, otro
manifiesto trayectos fistulosos en tres dimensiones12. objetivo sería mejorar la propulsión intestinal10.
Otras técnicas que permiten evaluar las FEC son la ente- En un sentido más amplio, los objetivos del trata-
ro-resonancia magnética nuclear y la fistulografía. miento del fallo intestinal serían, en primer lugar, sal-
En el paciente con fallo intestinal agudo es necesa- var la vida del paciente, en segundo lugar permitir una
rio, además, investigar causas subyacentes, como alte- rehabilitación social y profesional del mismo y, final-
raciones electrolíticas, pancreatitis o sepsis4. mente, mejorar su calidad de vida.
502 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

5.  Valoración nutricional mienda a los pacientes con colon en continuidad una
dieta rica en carbohidratos complejos11, a partir de ali-
La valoración nutricional inicial de los pacientes con mentos completos y siempre bajo la guía de un dietis-
fallo/insuficiencia intestinal no difiere significativamen- ta-nutricionista experto3. En los pacientes con colon se
te de la valoración nutricional en pacientes hospitaliza- recomienda una dieta pobre en grasa, mientras que la
dos en general, y postquirúrgicos en particular, que se relación carbohidratos:grasa es menos importante en
tratan extensamente en otros capítulos de este ma- pacientes sin colon3. Aunque se ha recomendado aña-
nual. dir fibra soluble a la dieta en los pacientes que conser-
Como en otras enfermedades, en la insuficiencia in- van colon3, las últimas guías de la ESPEN no hacen esta
testinal la evaluación del peso y de sus cambios es de recomendación, y sin embargo proponen que la dieta
fundamental importancia en la valoración nutricional. sea rica en triglicéridos de cadena media en pacientes
En los pacientes con SIC y FEC debe ser cuidadosa la con colon en continuidad3.
valoración de pérdidas de fluidos gastrointestinales por En general, debe indicarse la ingesta de agua en pe-
aspiración, fístulas y estomas. queñas cantidades, con incremento de frecuencia, y
En fase aguda, los niveles de prealbúmina, albúmina fuera de las comidas. Sin embargo, ciertos pacientes,
y proteína C reactiva permiten valorar el grado de es- generalmente aquellos con remanentes de intestino
trés metabólico o inflamación. De hecho, la albúmina muy pequeños, se comportan como secretores netos y
plasmática ha demostrado correlacionarse con morbi- no pueden compensar oralmente las pérdidas intesti-
mortalidad quirúrgica. En pacientes con FEC, y una vez nales de agua y sodio11.
que el estado de estrés metabólico se ha normalizado, La solución de rehidratación de la OMS es un trata-
niveles de transferrina mayores de 200 mg/dl se han miento efectivo a la hora de mantener hidratados a
correlacionado con una mayor tasa de cierre espontá- pacientes con SIC, y debe emplearse en aquellos con
neo de la fístula y una menor mortalidad8. insuficiencia intestinal y en los casos de fallo intestinal
En los pacientes con fallo intestinal crónico en trata- por síndrome de intestino corto borderline que po-
miento con NPD es necesario realizar regularmente drían lograr la autonomía intestinal3. Por el contrario,
análisis de laboratorio para ir ajustando la composición el aporte de líquidos hipertónicos, y también de líqui-
de la NP. En este sentido es importante controlar regu- dos hipotónicos, libres de sodio o con un bajo conteni-
larmente el estado ácido-base. Además, se recomienda do del mismo, pueden aumentar las pérdidas digesti-
contar con una determinación inicial de vitaminas y vas netas, produciendo secreción de agua y sodio al
elementos traza, y posteriormente ir controlándolo al interior de la luz intestinal en un intento de mantener
menos anualmente3. el contenido de la misma isotónico con el plasma. La
solución de rehidratación no es solo efectiva en pacien-
6. Dietética tes sin colon, sino también en los que lo conservan5. Lo
que no debe emplearse en ningún caso son las mal
El aspecto más importante del manejo dietético del llamadas «bebidas isotónicas» comerciales, dirigidas a
SIC es lograr una hiperfagia compensadora de forma deportistas, pues en realidad son hipotónicas, dado
que la ingesta oral sea un 50 o 100 % superior a la que su contenido en sodio es mucho más bajo que en
previa al desarrollo del SIC. La ingesta de comida y lí- la solución de rehidratación de la OMS (tabla 3). En la
quidos debe realizarse a lo largo de todo el día y no práctica, la recomendación de no beber líquidos hipo-
solo en 3-4 tomas. En pacientes con yeyunostomías tónicos es muy difícil de seguir para los pacientes. Para
proximales, con alto débito, puede ser necesario res- no hacer una restricción completa de los mismos, pue-
tringir la ingesta, especialmente de líquidos hipotóni- de indicarse la ingesta de una cápsula con 1 g de clo-
cos, ya que en este caso a mayor ingesta, mayor pérdi- ruro sódico con cada 200 ml de líquido isotónico, sin
da neta de fluidos, pues estos pacientes pueden sobrepasar los 400-500 ml al día.
comportarse como secretores netos5. En todo caso, El manejo nutricional y dietético de la POIC es fun-
debe recomendarse que la ingesta de líquidos se haga damental y descansa sobre la educación dietética,
fuera de las comidas. que puede ser suficiente para pacientes con formas
La adaptación intestinal requiere estimulación intes- leves o moderadas10. No hay una recomendación de
tinal. En ausencia de nutrientes intraluminales se pro- dieta específica en la POIC, sino que se debe reco-
duce atrofia de vellosidades, mientras que la presencia mendar comer de acuerdo a la tolerancia individual3.
de sustratos induce la expresión de sus correspondien- En general, en pacientes con gastroparesia, las dietas
tes transportadores. Los nutrientes complejos estimu- líquidas o trituradas son mejor toleradas que las sóli-
lan más la adaptación intestinal que los simples. Los das y la ingesta debería ser fraccionada en 5-6 tomas
ácidos grasos de cadena corta estimulan la absorción diarias. También se ha recomendado una dieta baja
de agua y sal en el colon, reduciendo la diarrea, y como en lactosa, en fibra y en grasa para optimizar la moti-
hemos indicado, suponen una fuente de energía capaz lidad intestinal y disminuir el riesgo de sobrecreci-
de proporcionar 750-1 000 kcal/día. Por eso se reco- miento bacteriano9, 10.
Tema 31.  Soporte nutricional en pacientes con fallo intestinal 503

Tabla 3.  Contenido en sodio de distintas soluciones de rehidratación oral o parenteral.

NaCl Citrato sódico Contenido en sodio


Sueroral 3,5 g/l - 60 mEq/l 2,9 g/l - 30 mEq/l de sodio 2 g/l - 90 mEq/l
Sueroral hiposódico 1,2 g/l - 20 mEq/l 2,9 g/l - 30 mEq/l de sodio 1,15 g/l - 50 mEq/l
Aquarius® 0,5 g/l - 8,6 mEq/l – 0,20 g/l - 9 mEq/l
Gatorade® – 0,50 g/l - 22,5 mEq/l
Entre 42 y 54 mEq/l en el 50 %
Limonada alcalina26 –
de los casos
Solución salina 0,9 % 9 g/l - 150 mEq/l – 3,5 g/l - 150 mEq/l

7.  Soporte nutricional artificial plementa con fosfato, magnesio, potasio y tiamina y se
es conservador con el aporte de fluidos16.
Como en otras enfermedades que necesitan nutri-
ción artificial, en el caso de la insuficiencia intestinal
puede emplearse la nutrición enteral, la parenteral o 7.1  Síndrome de intestino corto
ambas. En el caso del fallo intestinal, el paciente por
7.1.1.  Nutrición enteral
definición necesita NP, aunque dependiendo de los ca-
sos puede emplearse simultáneamente la dieta oral y/o En los pacientes con fallo intestinal por SIC el objeti-
la nutrición enteral. vo de la nutrición enteral, cuando se emplea, es dismi-
Los pacientes con fallo intestinal agudo necesitan nuir las necesidades de NP y, eventualmente, poder
apoyo nutricional, ya que son incapaces de absorber prescindir de esta. Dada la reducción en la capacidad
suficientes nutrientes por vía oral para cubrir sus nece- de absorción que tienen estos pacientes, ya se ha seña-
sidades, ya sea debido a la existencia de íleo, FEC, esto- lado la necesidad de una dieta hiperfágica, pero pues-
mas o a la existencia de un SIC. Además, estos pacien- to que esta no siempre es tolerada, la nutrición enteral
tes se encuentran en una situación catabólica con puede ser útil para ayudar al paciente a cubrir sus ne-
aumento de las demandas metabólicas. Aunque por cesidades nutricionales por vía digestiva. En general, la
definición un paciente con fallo intestinal necesita so- fórmula a emplear será polimérica y debe incluir fibra
porte parenteral, en la medida de lo posible debe in- soluble como fuente extra de energía en pacientes con
tentarse la nutrición enteral, si no de forma exclusiva, colon preservado. En pacientes con yeyunostomía ter-
de forma complementaria a la primera4. minal puede añadirse sal a la fórmula de nutrición en-
En los pacientes con insuficiencia intestinal crónica teral para mejorar la absorción de agua y sodio15.
en los que se opta por administrar nutrición enteral a Aunque podría pensarse que una dieta elemental per-
largo plazo, parece prudente probar la tolerancia a la mitiría un absorción más rápida y fácil de nutrientes, no
misma inicialmente mediante sonda nasogástrica o na- se han encontrado ventajas de la utilización de estas fór-
soyeyunal y una vez asegurada la tolerancia realizar mulas, e incluso podrían favorecer la hipoplasia intesti-
una gastrostomía o yeyunostomía15. nal al tener un menor efecto trófico sobre la mucosa6.
No todos los pacientes con insuficiencia o fallo intes- En el SIC, cuando se emplea la nutrición enteral, es pre-
tinal son candidatos a recibir nutrición enteral. En pa- ferible su administración en estómago porque la regula-
cientes con SIC severo, fístulas enterocutáneas de alto ción del flujo a través del píloro puede ayudar a mejorar la
débito, obstrucción mecánica o POIC severa la única diarrea, prefiriéndose generalmente la administración en
forma de nutrición artificial será la NP15. perfusión continua frente a la administración en tomas.
En todo paciente con insuficiencia o fallo intestinal, Por el contrario, en aquellos procesos en los que está alte-
ya sea agudo o crónico, que presente desnutrición pre- rado el vaciamiento gástrico la nutrición enteral tendrá
via, hay que ser muy cauto al introducir el soporte nu- que ser administrada directamente en yeyuno15. Una des-
tricional, debido al riesgo de síndrome de realimenta- ventaja potencial de la nutrición enteral frente a la dieta
ción, el cual se manifiesta con el paso del medio oral es que la ausencia de fase cefálica de la digestión
extracelular al intracelular de potasio, fosfato y magne- podría disminuir la secreción de factor de crecimiento epi-
sio, retención hidrosalina y posibilidad de déficit agu- dérmico, que participa en la adaptación intestinal15.
dos de micronutrientes en pacientes adaptados al ayu-
no, en situación catabólica, al aportar macronutrientes 7.1.2.  Nutrición parenteral domiciliaria
de forma brusca por cualquier vía. Este riesgo se dismi-
nuye si en los primeros días se proporciona al paciente Los pacientes con fallo intestinal crónico precisan,
una cantidad de energía inferior a la estimada, se su- por definición, de soporte parenteral pero no por ello
504 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

precisan estar hospitalizados, sino que pueden ser da- características del paciente3, pudiendo incluirse dentro
dos de alta a su domicilio cuando estén metabólica- de la NP, administrarse oralmente o de forma intra-
mente estables y con una adecuada preparación física muscular o subcutánea en algunos casos.
y emocional, siempre que el domicilio reúna las carac- Las vitaminas hidrosolubles se absorben en el intestino
terísticas adecuadas para recibir este tratamiento3. Pre- proximal y en el SIC son raras sus deficiencias. Hay que
viamente debe proporcionarse la educación oportuna administrar vitamina B12 (300 µg/mes) a todos los pa-
sobre la técnica de administración de NPD. cientes a los que se haya resecado más de 60 cm de íleon,
La composición de la NP se establecerá de forma in- mientras que es raro el déficit si la resección ha sido me-
dividual en función de las características del paciente nor de 20 cm. No es frecuente el déficit de ácido fólico,
(capacidad absortiva y necesidades estimadas, presen- niacina, piridoxina, vitamina C y biotina, aunque en pa-
cia de enfermedad intercurrente, etc.) y se irá ajustan- cientes que no reciben NP habría que hacer seguimiento
do periódicamente en función de los parámetros an- del posible déficit mediante pruebas de laboratorio.
tropométricos, clínicos y bioquímicos. En pacientes El déficit de vitaminas liposolubles es más prevalen-
totalmente dependientes de NPD, se recomienda pro- te, habiéndose descrito casos de deficiencia de vitami-
porcionar un mínimo de 1 g/kg/semana de emulsión na A con ceguera nocturna, de vitamina E y D (la cual
lipídica para satisfacer las necesidades de ácidos grasos puede contribuir a la enfermedad metabólica ósea).
esenciales y no aportar más de 1 g/kg/día de emulsión Puede ser necesario suplementar oralmente la vitamina
lipídica a base de soja3. A y E en pacientes que no reciben NP (10000-15000 UI
No todos los pacientes con fallo intestinal crónico de vitamina A y 30 UI día de E), y vitamina D indepen-
necesitan NPD todos los días de la semana. En función dientemente de que reciban o no NP (al menos 1 600
de la capacidad intestinal residual de absorción de nu- UI al día, aunque algunos pacientes pueden necesitar
trientes y fluidos, y de las pérdidas digestivas, pueden hasta 50000-100000 UI/día); siendo también de utili-
no recibir NPD uno o más días de la semana, pero dad la exposición solar (el equivalente a 10 minutos de
siempre atendiendo al balance de fluidos los días que exposición solar en manos y cara sin crema protecto-
no reciben NPD y asegurando una diuresis mínima ade- ra5). Hay que señalar que la deficiencia de vitamina A
cuada esos días. puede inhibir la adaptación intestinal11.
En general, la NP en pacientes con insuficiencia/fallo El déficit de zinc es prevalente en estos pacientes de-
intestinal se administra por vía central. La elección de un bido a las pérdidas con la diarrea, que se han estimado
tipo u otro de catéter debe ser realizada por un equipo en unos 180 mmol/l11, y requieren aportes extra en pa-
multidisciplinar, teniendo en cuenta le experiencia del cientes con diarrea severa, u ostomías o fístulas de alto
centro y las preferencias del paciente. En todo caso, se débito5, 8. No hay una medida adecuada de déficit de
recomienda que el acceso a la vena cava superior se zinc, pero los niveles plasmáticos pueden orientar el
haga a través de yugular interna o subclavia, preferente- tratamiento5.
mente en el lado derecho, con la punta del catéter en la La deficiencia de selenio es rara pero puede ocurrir
unión de la vena cava superior con la aurícula derecha y en pacientes con diarrea importante si no se añade a la
la salida del catéter situada de forma que sea fácilmente NP. Lo mismo puede ocurrir con el déficit de cobre,
visible y accesible para el paciente. En el caso de NPD a aunque también debemos considerar el riesgo de toxi-
largo plazo se recomienda un catéter tunelizado o un cidad, sobre todo en caso de obstrucción biliar o hepa-
dispositivo implantable, mientras que se recomienda topatía. No suele ser necesario suplementar cromo y
evitar catéteres centrales de inserción periférica por te- manganeso. Actualmente hay más temor a la toxicidad
ner más riesgo de trombosis3. por metales, sobre todo cobre y manganeso, que a su
deficiencia5.
7.1.3.  Minerales y vitaminas
7.1.4.  Tratamiento farmacológico
La absorción de magnesio tiene lugar fundamental-
mente en el intestino delgado distal mediante trans- Respecto al tratamiento farmacológico del SIC, re-
porte pasivo entre los enterocitos. Las pérdidas de cientes avances han dado como resultado una mejora
magnesio son frecuentes en pacientes con SIC, incluso significativa en el manejo nutricional de estos pacien-
en aquellos con pequeñas deficiencias nutricionales o tes, con la posibilidad de reducir (e incluso eliminar) los
déficits de absorción. La suplementación oral de mag- requerimientos de NP5.
nesio es problemática por su efecto laxante5, por lo La diarrea es el síntoma principal del SIC y el que más
que la vía subcutánea de aporte de magnesio puede afecta a la calidad de vida de los pacientes. El manejo
ser una buena opción17. Hay que tener en cuenta que de la hipergastrinemia, resultado de la pérdida de con-
el tratamiento con inhibidores de la bomba de proto- trol sobre la secreción gástrica por parte de las hormo-
nes puede contribuir a la hipomagnesemia5. nas intestinales, mediante inhibidores de la bomba de
La vía de suplementación de vitaminas y elementos protones (IBP) y anti-H2 es importante en los pacientes
traza en pacientes con fallo intestinal dependerá de las con síndrome de intestino corto, sobre todo en los pri-
Tema 31.  Soporte nutricional en pacientes con fallo intestinal 505

meros 6 meses, pero tiene efectos modestos sobre la Teduglutida es un fármaco bien tolerado y cuyos
diarrea. Se recomienda la administración de anti-H2 o efectos secundarios más frecuentes son náuseas, vómi-
IBP para disminuir las pérdidas fecales de grasa y sodio, tos y dolor abdominal transitorio. En estudios animales
especialmente durante los primeros 6 meses en aque- se encontró un aumento del número y tamaño de los
llos pacientes con débito fecal mayor de 2 l/día. Algu- adenomas de colon, por lo que en pacientes que lo
nos pacientes se beneficiarán de mantener estos fár- conservan es preciso realizar una colonoscopia previa-
macos a largo plazo. mente al inicio del tratamiento con teduglutida y luego
El opiáceo más recomendado para el control de la de forma periódica5.
diarrea es la loperamida, a dosis de 4-16 mg/día o in-
cluso el doble. La pérdida de la recirculación enterohe- 7.1.6.  Tratamiento quirúrgico
pática de este fármaco es causa de resistencia al mismo
y de la necesidad de usar altas dosis en algunos pacien- En pacientes con SIC la cirugía puede jugar un im-
tes. No se recomiendan otros opiáceos por el efecto portante papel en prevenir, mitigar y, en algunos ca-
sedante de estos y su riesgo de crear adicción. sos, revertir el fallo intestinal. Durante la resección in-
testinal se debe conservar tanto intestino como sea
A corto plazo, en pacientes con yeyunostomía termi-
posible, para evitar la dependencia de NP. Una vez que
nal con alto débito se recomienda el empleo de octreó-
el paciente ha sido estabilizado, la retirada de ostomías
tido, aunque a largo plazo pueden pesar más los efec-
y la reconstrucción del tránsito intestinal, poniendo en
tos adversos, especialmente su potencial interferencia
continuidad segmentos distales excluidos en la cirugía
en el proceso de adaptación intestinal3, 5.
inicial, debe realizarse tan pronto como sea posible3.
Una vez establecido el fallo intestinal, existen varias
7.1.5.  Análogos del glucagon-like peptide tipo 2 opciones quirúrgicas, dependiendo de las característi-
(GLP-2) cas clínicas y anatómicas de cada paciente. Se han pro-
puesto cuatro principales grupos de intervenciones
El GLP-2 fue aislado, clonado y caracterizado en quirúrgicas en el manejo del SIC: intervenciones para
1997 por Daniel Drucker. Es una hormona peptídica corregir el tránsito lento, intervenciones para mejorar
que cuando se sobre expresa en ratones transgénicos la motilidad intestinal en casos con dilatación intesti-
produce hipertrofia del epitelio del intestino delgado, y nal, intervenciones para enlentecer el tránsito intestinal
cuando se administra a ratas las protege de la atrofia en ausencia de dilatación intestinal e intervenciones
intestinal inducida. Una modificación farmacológica para incrementar la superficie de la mucosa intestinal.
del GLP-2 en un residuo alanina lo hace relativamente De estas últimas la experiencia es muy limitada3.
resistente a DPP-4 y prolonga su duración de acción Un tránsito intestinal lento es poco frecuente en el
permitiendo su uso farmacológico. Este análogo de SIC, y cuando aparezca debe sospecharse la existencia
GLP-2, llamado teduglutida, ha mostrado aumentar la de estenosis, suboclusiones, asas ciegas o fístulas ente-
altura de las vellosidades y la profundidad de las criptas roentéricas. A menudo se asocia a secuelas del trastor-
un 50 % en pacientes con SIC, e incrementar la absor- no subyacente, como la enfermedad de Crohn o ente-
ción de líquidos y macronutrientes, hasta el punto de ritis rádica que requieren tratamiento específico19.
permitir reducir la necesidad de NP en pacientes con
fallo intestinal y, en algunos casos, la independencia
7.1.7.  Trasplante intestinal
de la misma. La FDA aprobó la teduglutida a dosis de
0,05 mg/kg/día en pacientes con fallo intestinal en di- El trasplante intestinal ha pasado de ser un trata-
ciembre de 20125 y el mismo año fue aprobado en miento experimental a una opción de tratamiento es-
Europa por la EMEA. tablecida para pacientes con fallo intestinal crónico. La
Teduglutida está indicado para el tratamiento del mejoría de resultados en los últimos años ha venido de
SIC en pacientes de 1 año de edad o mayores. El tra- una estandarización de las técnicas quirúrgicas y de
tamiento no se debe iniciar hasta que sea razonable avances en la inmunosupresión. Existen dos formas
suponer que el paciente está estable tras el período principales de trasplante intestinal: trasplante de intes-
de adaptación intestinal. Antes del comienzo del tra- tino aislado y trasplante multivisceral, en el que se in-
tamiento se deben optimizar y estabilizar el fluido in- cluye el hígado y también puede incluirse páncreas21.
travenoso y el aporte nutricional. Los beneficios del Se recomienda valorar la posibilidad de realizar tras-
tratamiento se deben evaluar después de 6 meses y plante intestinal en los pacientes con fallo intestinal cróni-
suspenderlo si no se ha producido una mejoría signi- co que tengan cualquiera de las siguientes indicaciones3:
ficativa en el SIC que haya permitido reducir la NPD
administrada. Se recomienda mantener teduglutida •  Fracaso de la NPD, ya sea por enfermedad hepá-
en los pacientes que con dicho tratamiento han lo- tica severa, trombosis relacionada con el catéter
grado la autonomía intestinal y abandonado la nutri- en dos o más venas centrales, episodios frecuen-
ción parenteral18. tes de sepsis asociada al catéter o episodios fre-
506 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

cuentes de deshidratación severa a pesar de la Cuando la EHAFI ya está presente, en primer lugar
administración de fluidos intravenosos además será necesario asegurarse que las medidas profilácti-
de la NPD. cas de la misma se están aplicando y reevaluar el tipo
•  Alto riesgo de muerte asociada a la enfermedad y cantidad de lípidos que se están administrando, tra-
subyacente, incluyendo el síndrome de intestino tando de reducir la ratio n-6/n-33. Parece que la utili-
ultracorto. zación de emulsiones de ácidos grasos poliinsatura-
•  Fallo intestinal con alta mortalidad y baja acepta- dos de la serie n-3 provenientes de aceite de pescado
ción de la NPD. puede ser útil en evitar y/o corregir la EHAFI, aunque
debemos tener en cuenta que el aceite de pescado no
Los pacientes con enfermedad hepática severa o tu- aporta ácidos grasos esenciales y su utilización exclu-
mores desmoides invasivos intraabdominales, así como siva podría favorecer la aparición de deficiencia de los
algunos casos de trombosis venosa central relacionada mismos5.
con el catéter, deben ser incluidos en lista de espera de La enfermedad metabólica ósea es prevalente en pa-
trasplante intestinal con la máxima prioridad3. cientes con SIC. Se manifiesta como osteomalacia u
osteoporosis y llega a ocurrir en el 84 % de los pacien-
7.1.8. Complicaciones del síndrome de intestino tes con fallo intestinal por SIC. Se ha publicado que
tanto la GH como GLP-2 pueden aumentar la densidad
corto
mineral ósea en pacientes con SIC5. En todo caso, es
El SIC, sobre todo cuando precisa NPD, está asociado necesario optimizar el aporte de vitamina D.
a diversas complicaciones. Las principales son la enfer- La nefrolitiasis por oxalato cálcico es una complica-
medad hepática, la enfermedad metabólica ósea, la ción frecuente en pacientes con SIC que conservan el
afectación renal y las derivadas de la necesidad de colon. Se debe a que el calcio se saponifica con grasa
mantener un acceso venoso central permanente: sepsis no digerida y de esta forma el oxalato, que en condi-
asociada a catéter y trombosis venosa. ciones normales hubiera formado oxalato cálcico a ni-
La depleción de sales biliares y la formación de barro vel intestinal, queda libre y es absorbido en el colon y
biliar y cálculos biliares es frecuente en pacientes con posteriormente eliminado por orina, pudiendo combi-
SIC. Aunque hay autores que defienden la colecistecto- narse con el calcio y precipitar en forma de oxalato
mía profiláctica, el tratamiento quirúrgico solo en caso cálcico. Una dieta pobre en grasas y en oxalato y rica
de que la colelitiasis sea sintomática puede ser una op- en citrato, así como añadir calcio oral, puede ser efec-
ción más adecuada5. tivo para evitar esta nefrolitiasis. Ocasionalmente pue-
Se ha encontrado elevación de transaminasas sin ic- de aparecer nefrolitiasis por cálculos de ácido úrico,
tericia hasta en el 39 % de los pacientes con NP. La sobre todo en caso de estomas con alto débito en los
enfermedad hepática asociada a fallo intestinal (EHAFI) que la reducción de la diuresis y del pH urinario favore-
puede manifestarse como colestasis o como esteatosis cen la precipitación del ácido úrico5.
hepática; la primera es más frecuente en niños y la se- La acidosis D-láctica es una complicación importante
gunda en adultos, pudiendo ambas evolucionar a ci- del SIC en pacientes que conservan colon en continui-
rrosis5. No hay una definición estandarizada de EHAFl y dad con el intestino delgado. Se debe a la presencia de
el diagnóstico y el seguimiento de la misma deben ba- Lactobacillus capaces de fermentar carbohidratos no
sarse en datos clínicos, bioquímicos, de imagen y, en digeridos a ácido D-láctico, que es absorbido en el co-
algunos casos, histológicos. Otras causas de enferme- lon. Da clínica de letargia, confusión y acidosis meta-
dad hepática tales como coledocolitiasis, hepatitis y bólica inexplicada, ya que los niveles de lactato medi-
sepsis deben ser excluidas. La EHAFI es una entidad de dos por el laboratorio son normales (pues miden ácido
origen multifactorial, en la que influyen causas como la L-láctico). El tratamiento consiste en limitar la ingesta
sepsis, la anatomía intestinal, la nutrición oral o ente- de carbohidratos, administrar antibióticos, usualmente
ral, la forma de administrar la NP y el déficit o exceso metronidazol, y manejo de la acidosis5.
de nutrientes3. Las infecciones relacionadas con el catéter venoso
Para prevenir la aparición de EHAFI se recomienda central no son infrecuentes y pueden tener importante
evitar la sepsis y, cuando aparezca, tratarla adecuada- mortalidad. Se recomienda que el diagnóstico y el tra-
mente, preservar el máximo tramo de intestino delga- tamiento de las mismas se haga de acuerdo a las guías
do posible y mantener continuidad con el colon, man- clínicas de manejo de catéteres intravasculares perma-
tener estimulación de la mucosa intestinal a través de nentes. En infecciones simples puede seguirse un trata-
la dieta oral y/o la nutrición enteral, administrar la NP miento conservador, con sellado antibiótico y tra­
de forma cíclica (administración del volumen total en tamiento sistémico, mientras que la retirada del catéter
12 horas y no durante las 24 horas del día), evitar la será la primera opción a considerar en el caso de infec-
sobrealimentación, tanto el excesivo aporte de dextro- ciones del túnel, o cultivos positivos a bacterias virulen-
sa como el de lípidos, limitando el aporte de lípidos tas, y será obligada en el caso de abscesos, infecciones
basados en aceite de soja a menos de 1 g/kg/día3. complicadas o inestabilidad hemodinámica, así como
Tema 31.  Soporte nutricional en pacientes con fallo intestinal 507

en casos de fungemia confirmada en hemocultivo3. La mediante tratamiento de la sepsis con antibióticos y,


actividad de daptomicina en el biofilm que se produce en su caso, actuación sobre el origen de la infección.
en los catéteres venosos la hace una opción interesante Tan pronto como sea posible se iniciará NP, pues la FEC
frente a otros antibióticos22. Se han descrito prepara- es una entidad altamente catabólica8.
ciones de daptomicina que permiten su elaboración en En los pacientes con FEC las necesidades calóricas y
la farmacia hospitalaria y su dispensación a pacientes proteicas están notablemente incrementadas debido a
ambulatorios para el sellado antibiótico de catéteres la situación catabólica, frecuente infección o sepsis con-
venosos centrales permanentes23. comitante y pérdida de proteínas por los drenajes8. Se
La prevención de las infecciones relacionadas con el ha sugerido que una FEC profunda en el seno de un
catéter se basa fundamentalmente en una adecuada abdomen abierto es el equivalente catabólico a un gran
educación de los cuidadores, en la que el lavado de quemado25. Diversos autores han propuesto ecuacio-
manos es primordial. No se recomienda el sellado del nes o factores multiplicadores del gasto energético
catéter con soluciones de heparina ni con etanol, basal. Inicialmente puede aportarse 20-30 kcal/kg/día y
mientras que el sellado con taurolidina puede ser una 1,5-2,5 g/kg/día de proteínas. En el caso de fístulas de
profilaxis eficaz. Algunos pacientes podrían beneficiar- alto débito pueden necesitar un aporte un 50-100 %
se de la utilización de una fístula arteriovenosa para la superior al habitual debido a las pérdidas. De hecho, se
administración de NPD3. ha sugerido una corrección de 2 g de nitrógeno por
La trombosis venosa relacionada con el catéter es litro de fluidos abdominales perdidos, ya que diaria-
una complicación severa responsable de la pérdida de mente se pueden llegar a perder hasta 75 g de proteí-
acceso venoso y que puede llevar a indicar un trasplan- nas por las FEC. Posteriormente será la cuidadosa eva-
te intestinal. El tratamiento de esta trombosis venosa luación clínica y analítica la que dicte las modificaciones
se realiza con anticoagulantes, durante un tiempo que a hacer en el soporte nutricional8.
varía en función del paciente. La decisión de mantener Una vez estabilizado el paciente es necesario com-
el catéter o retirarlo depende también de factores indi- pletar el diagnóstico, identificando el origen de las dis-
viduales. Se recomienda el lavado del catéter con solu- tintas FEC que presente, realizar un control de drenajes
ción salina como medida profiláctica de la obstrucción y continuar la valoración nutricional. En esta fase es
del mismo, y en el caso de que ya se haya producido la fundamental determinar cuánto intestino funcionante
obstrucción, la irrigación con dicha solución puede ser hay en continuidad y accesible a la nutrición enteral, y
capaz de desobstruirlo. Si fracasa la solución salina se hasta qué punto es factible y mantenible esta forma de
pueden usar fármacos fibrinolíticos para intentar des- soporte nutricional. Para plantear nutrición enteral son
obstruir el catéter3. necesarios un mínimo de 75 cm de intestino delgado
en continuidad8.
7.2.  Fístula entero-cutánea Con el paciente estabilizado y una vez que las técni-
cas de imagen han permitido conocer la anatomía de
En el año 450 a. de C. Susruta, padre de la medici- las distintas fístulas se debe iniciar nutrición por vía di-
na india, describió en su obra Susrutasamhit el trata- gestiva, ya sea en forma de dieta oral, suplementos
miento de las FEC mediante resección y cierre usando nutricionales orales o nutrición enteral por sonda8. Las
cabezas de hormiga cortadas. Hoy disponemos de contraindicaciones para el uso de nutrición enteral se-
otras técnicas, entre las cuales el manejo nutricional rían discontinuidad intestinal con un tramo intestinal
tiene enorme importancia, teniendo en cuenta que, de una longitud insuficiente, intolerancia a la nutrición
además de por la sepsis, estos pacientes mueren de enteral o la existencia de un incremento muy importan-
alteraciones electrolíticas y desnutrición. Antes de la te del débito por la fístula con el inicio de la nutrición
introducción de los catéteres intravenosos se intenta- enteral. La mayoría de los centros usan combinación
ron varias formas de administración de fluidos, como de nutrición enteral o parenteral.
la vía subcutánea o enemas con dextrosa; pero fue la Aunque no se tolere una nutrición enteral que
introducción de la NP la que redujo drásticamente la aporte el 100 % de las necesidades nutricionales del
morbimortalidad en pacientes con FEC, de forma que paciente, la integridad mucosa, y la función inmuno-
hoy día el soporte nutricional es fundamental en el lógica y hormonal del intestino, así como la adecuada
manejo de esta patología8. Las alteraciones nutricio- síntesis proteica a nivel hepático puede ser preservada
nales están presentes en un 50-90 % de los pacientes con una nutrición enteral que aporte el 20 % de los
con FEC y contribuyen notablemente a su morbimor- requerimientos calóricos del paciente, alcanzando el
talidad. De hecho, antes del desarrollo de la NP se resto con NP8. No hay suficiente evidencia que apoye
encontró una significativa reducción de la mortalidad el uso de exclusivo de la NP frente a enteral para lo-
en aquellos pacientes que lograban comer más de grar el cierre espontáneo de las FEC, por lo que la NP
3 000 kcal/día24. (una vez pasada la fase de estabilización del paciente
El primer paso en el manejo del paciente con FEC y de definición de la anatomía intestinal y de las fístu-
consiste en el diagnóstico y la estabilización del mismo las) debería reservarse a pacientes que no toleren la
508 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

nutrición enteral, que tengan contraindicación para la 7.3.  Pseudoobstrucción intestinal crónica
misma o íleo, o cuando la nutrición enteral por sí mis-
ma no pueda asegurar una adecuada nutrición del Hasta dos tercios de los pacientes con POIC desarro-
paciente24. llan problemas nutricionales o deficiencias de nutrien-
Cuando el débito por la FEC es menor de 1,5 l/día se tes específicos. Si la dieta oral es inadecuada, será ne-
recomienda iniciar una dieta pobre en residuos, junto cesario iniciar soporte nutricional con nutrición enteral
con suplementos energéticos y proteicos. Si el débito o parenteral. La nutrición enteral debe ser preferida
es mayor de 1,5 l/día lo recomendado es restringir la sobre la parenteral cuando sea posible, aunque siem-
ingesta de líquidos hipotónicos e indicar solución de pre administrándola con precaución, con fórmulas en-
rehidratación oral isotónica, así como considerar trata- terales isoosmolares administradas lentamente en per-
miento farmacológico de la FEC. En ambas situaciones fusión continua. Inicialmente se puede probar su
se irá tratando de reducir el volumen de la NP hasta administración con sonda nasogástrica o nasoentérica,
suspenderla, lo que no será posible si el débito no baja y una vez demostrada su buena tolerancia realizar una
de 1,5 l/día8. gastrostomía o yeyunostomía. En el caso de gastropa-
Cuando no es posible suspender la NP y existe un resia severa puede ser necesario utilizar una PEG-Y para
intestino distal a la FEC de al menos 75 cm se debe administrar la nutrición enteral en yeyuno mientras
considerar la nutrición enteral, bien mediante sonda que se drena contenido gástrico.
naso-yeyunal o mediante una yeyunostomía de alimen- La NP será necesaria cuando fracasen otras formas de
tación distal a la fístula, dependiendo de la situación nutrición. Siempre hay que combinarla con nutrición oral
de la misma. También la fistuloclisis es una forma se- para reducir las complicaciones asociadas al uso exclusi-
gura y efectiva de mantener un adecuado estado nutri- vo de NP. En la POIC la NP requiere volúmenes altos para
cional en pacientes con FEC8, consiste en el uso del prevenir deshidratación, sobre todo en el caso de que
orificio fistuloso como vía de entrada para introducir existan pérdidas digestivas importantes, aunque este
una sonda para alimentar distalmente. volumen, así como el aporte de electrolitos, especial-
Una fórmula polimérica estándar puede ser apropia- mente sodio, potasio y magnesio, habrá de ser adaptado
da en la mayoría de los pacientes con FEC, aunque al- con frecuencia en función de la evolución de la enferme­
guno podría beneficiarse de fórmulas elementales u dad9, 10. Algunos pacientes con POIC con dilatación intes-
oligoméricas cuando no se toleren las poliméricas. tinal difusa precisan efectuar drenaje mediante varias
También podrían ser útiles las fórmulas inmunomodu- ostomías en estómago, intestino delgado y/o colon15.
ladoras, que han demostrado su eficacia en pacientes Comparados con los pacientes con SIC, los pacientes
quirúrgicos8. En el paciente con varias fístulas, en el con POIC suelen requerir recibir más bolsas de NPD a la
que la fístula proximal tiene un alto débito, puede in- semana10.
fundirse el efluente de la fístula proximal en la distal8, Los pacientes con POIC requieren suplementos de
con lo que se evita la pérdida de nutrientes, agua y hierro, ácido fólico, calcio y vitaminas D, K y B12 para
electrolitos, aunque desde el punto de vista técnico prevenir la aparición de deficiencias, y en algunos ca-
puede ser complejo. sos suplementos específicos, como en las enfermeda-
Pacientes con FEC pueden requerir suplementos muy des mitocondriales que pueden requerir suplementa-
importantes de vitamina C (hasta 5-10 veces las reco- ción de coenzima Q10 o ubiquinona9, 10.
mendaciones estándar) y con frecuencia también de El manejo médico del POIC se basa en los procinéti-
cobre, ácido fólico y vitamina B128. cos (metoclopramida, eritromicina, octreótido o neos-
Para el tratamiento médico de la FEC se emplean tigmina), analgésicos como el paracetamol, opiáceos
cuatro grupos de fármacos: antimotilidad (loperamida, en los casos más graves o antidepresivos tricíclicos, y
codeína, incluso tintura de opio), antisecretores (inhi- en el manejo agresivo del sobrecrecimiento bacteriano,
bidores de la bomba de protones, anti-H2, sucralfato u siendo muy efectivo el tratamiento antibiótico secuen-
octreótido), fibra, ya sea soluble o insoluble, y suple- cial para reducir la malabsorción9. La cirugía tiene esca-
mentos digestivos, ya sean de sales biliares o enzimas so papel en el manejo de la POIC y debería ser evitada
pancreáticas. En el caso de los inhibidores de la bomba por el riesgo de empeoramiento postquirúrgico; no
de protones o anti-H2 se debe titular la dosis para lo- obstante, muchos pacientes se someten a cirugía, sien-
grar un pH mayor de 6 en el efluente gástrico. Respec- do lo más frecuente la realización de ostomías de des-
to al octreótido, se puede probar a dosis de 100-250 µg carga. En algunos casos de pacientes muy sintomáticos
subcutáneos cada 8 horas en casos de fistulas biliares, y dependientes de NP se han propuesto enterectomías
pancreáticas o intestinales proximales, o en caso de dé- subtotales como un tratamiento paliativo9.
bitos muy importantes, aunque esta recomendación En última instancia, en la POIC, como en el SIC, el
no es aceptada universalmente8. En todo caso, los pa- trasplante intestinal está indicado en el caso de pacien-
cientes con FEC necesitan, tanto desde el punto de vis- tes con complicaciones de la NP que amenacen la vida
ta quirúrgico como nutricional y farmacológico, un del paciente, ausencia de acceso venoso, alto riesgo de
manejo individual8. mortalidad del fallo intestinal y en caso de que la enfer-
Tema 31.  Soporte nutricional en pacientes con fallo intestinal 509

medad primaria produzca una muy pobre calidad de tida ha supuesto una mejoría muy significativa en el
vida a pesar de una NP optimizada9. En el caso concre- manejo de los pacientes con SIC.
to de la POIC, el resultado del trasplante intestinal es En última instancia, algunos pacientes con fallo in-
tan bueno como en el de otras indicaciones9. testinal pueden beneficiarse del trasplante intestinal.

8. Resumen 9.  Bibliografía


Se define fallo intestinal como la reducción de la fun-   1. Kappus M, Diamond S, Hurt RT, Martindale R. In-
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absorción de macronutrientes y/o agua y electrolitos, cations. Curr Gastroenterol Rep. 2016 sep;18:48.
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dica, y desde un punto de vista anatómico como aquella Bowel Syndrome: an Updated Review. Curr Gas-
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30 % de lo normal, lo que supondría 75 cm en los niños   6. Weale AR, Edwards AG, Bailey M, Lear PA. Intesti-
y 200 cm en adultos. La gravedad del SIC depende de la nal adaptation after massive intestinal resection.
longitud del intestino remanente, tramo afectado, pre- Postgrad Med J. 2005 mar;81:178–84.
sencia o ausencia de válvula ileocecal, conservación o no   7. Juana-Roa J, Lozano CWB, Sanz-Valero J. La reali-
del colon y salud del intestino remanente. dad de la nutrición parenteral domiciliaria en Es-
Una FEC se define como una fístula desde el tracto paña. Nutr Hosp. 2011;26:364–368.
gastrointestinal intraabdominal al exterior del cuerpo.   8. Polk TM, Schwab CW. Metabolic and nutritional
En función del débito por la misma se habla de fístulas support of the enterocutaneous fistula patient: A
de bajo débito cuando este es menor de 500 ml/día y three-phase approach. World J Surg. 2012;36:524–
de alto débito cuando es mayor de esta cantidad. 533.
La POIC se define como un trastorno, raro pero seve-   9. Billiauws L, Corcos O, Joly F. Dysmotility disorders:
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fija que condicione obstrucción. and how? Gastroenterol Clin North Am. 2011
El manejo nutricional es vital tanto en la insuficiencia dec;40:845–51.
como en el fallo intestinal. Desde un punto de vista die- 11. Lamprecht G, Bodammer P. Nutritional strategies
tético, en el SIC debe recomendarse una hiperfagia com- to enhance adaptation in intestinal failure. Cur-
pensadora. Los pacientes con diarrea o débitos altos por rent opinion in organ transplantation. 2016
ostomías terminales, especialmente yeyunostomía, de- apr;21:140–6.
ben evitar la ingesta de líquidos hipo o hipertónicos, e 12. Davidson J, Plumb A, Burnett H. Adult intestinal
ingerir soluciones isotónicas que contengan sodio y glu- failure. Clin Radiol. 2010 may;65:395–402.
cosa, como la solución de rehidratación oral de la OMS. 13. Lappas JC. Imaging of the postsurgical small bow-
En cuanto al soporte nutricional artificial, por defini- el. Radiol Clin North Am. 2003 mar;41:305–26.
ción los pacientes con fallo intestinal precisan NP, pero 14. Crenn P, Messing B, Cynober L. Citrulline as a bio-
en la medida de lo posible esta debe ser complementa- marker of intestinal failure due to enterocyte mass
da con dieta oral y/o nutrición enteral, en general con reduction. Clin Nutr. 2008 jun;27:328–39.
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Desde el punto de vista farmacológico se emplean 16. Alfaro JJ, Huguet I, Botella F, Hernández A. ICU, Eti-
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510 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

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Tema 32.
El papel de la nutrición en la rehabilitación
multimodal
Antonio Hernández López
José Joaquín Alfaro Martínez
Francisco Botella Romero
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Hospitalario Universitario. Albacete

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 511-521.

1.  Introducción
2.  Rehabilitación multimodal
3.  Valoración del estado nutricional
4.  Optimización nutricional perioperatoria
5.  Conclusión
6.  Bibliografía

1.  Introducción ción multimodal (también conocidos como Enhanced


Recovery After Surgery o ERAS). Desde sus inicios, uno
El acto quirúrgico implica una agresión al cuerpo hu- de los componentes clave ha sido el soporte nutricional
mano que es compensada por el beneficio obtenido en tanto preoperatorio como postoperatorio.
la salud del paciente. Esta agresión se traduce en una
respuesta del metabolismo hacia una situación catabó-
lica. La recuperación tras la cirugía conlleva el paso de
2.  Rehabilitación multimodal
este estado catabólico hacia uno anabólico, constitu- El manejo perioperatorio de los pacientes interveni-
yendo el soporte nutricional una parte esencial del tra- dos de cirugía mayor gastrointestinal electiva está en
tamiento perioperatorio. proceso de cambio. Hasta hace pocos años se basaba
Si bien hasta un 50 % de los pacientes que van a ser en hábitos y experiencia adquiridos a lo largo del tiem-
sometidos a cirugía mayor gastrointestinal presenta po en la práctica médica, como el ayuno preoperatorio
desnutrición1 y es conocida la asociación entre malnu- y postoperatorio y el reposo postquirúrgico. Se funda-
trición y aumento de la morbimortalidad postoperato- mentaba en esperar la recuperación espontánea de las
ria2, en la cirugía gastrointestinal el manejo tradicional funciones fisiológicas modificadas por la agresión qui-
incluye tanto el ayuno preoperatorio como postopera- rúrgica y farmacológica, en base a la reserva orgánica y
torio, práctica que se transmite entre los cirujanos de con una mínima intervención clínica en todo el proceso
generación en generación. perioperatorio.
La recuperación intensificada o incentivada, también En las dos últimas décadas se han obtenido eviden-
conocida como cirugía fast-track, asocia a la adopción cias científicas sobre varias estrategias de actuación
de diversas estrategias anestésicas, el control del dolor, sobre los cuidados perioperatorios que pueden influir
la limitación del ayuno preoperatorio, la nutrición oral en el tiempo de recuperación tras la cirugía electiva,
precoz, una menor utilización de sondas y el manejo entre las que destaca la importancia de la información
restrictivo de fluidos para reducir la respuesta al estrés, proporcionada al paciente y su participación activa
disminuyendo de forma significativa el tiempo requeri- como parte integral de la recuperación postoperatoria.
do para una recuperación completa del paciente. En 1997, Kehlet3 propone por primera vez nuevas y
Cuando estos procedimientos se integran en progra- diferentes estrategias para mejorar el manejo y modifi-
mas o protocolos con la finalidad de reducir la morbili- car la evolución en el perioperatorio, disminuyendo el
dad perioperatoria y disminuir la estancia hospitalaria, estrés quirúrgico aprovechando los avances de las téc-
nos referimos a ellos como protocolos de rehabilita- nicas anestésicas, la cirugía mínimamente invasiva y los

511
512 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

cuidados perioperatorios. La hipótesis de partida es intervenidos de cirugía electiva4. Este programa o pro-
que «la intervención multimodal puede conseguir una tocolo incluye una combinación de estrategias unimo-
importante reducción de las secuelas de la agresión dales preoperatorias, intraoperatorias y postoperato-
quirúrgica con una recuperación acelerada, reducción rias basadas en el concepto de mejorar la recuperación
de la morbilidad postoperatoria y reducción global de y funcionalidad de los pacientes tras el acto quirúrgico.
los costes». De esta manera, surgieron los programas La filosofía principal del protocolo ERAS es reducir el
de rehabilitación multimodal, también conocidos estrés metabólico causado por el trauma quirúrgico y
como cirugía fast-track. En base a estos principios, co- al mismo tiempo favorecer la recuperación temprana
mienzan a abandonarse medidas tradicionales en la del paciente, siendo su objetivo final reducir la estancia
práctica anestésica/quirúrgica, como el ayuno preope- hospitalaria postquirúrgica y por tanto, los costes de
ratorio prolongado, la preparación mecánica del colon hospitalización.
y el uso de sonda nasogástrica para descompresión. De El primer protocolo multimodal denominado ERAS
igual modo se demuestra que prácticas como la anal- en cirugía electiva de colon fue publicado en 20055,
gesia intravenosa para control del dolor, en especial actualizado en 20096 y 20137, siendo posteriormente
con opioides, el retraso en el inicio de la alimentación publicados protocolos para el cuidado perioperatorio
hasta la aparición del peristaltismo evaluado de mane- en cirugía de recto y pelvis8, duodenopacreatectomía9,
ra subjetiva y el reposo en cama son factores de riesgo gastrectomía10 y cirugía bariátrica7. El uso rutinario de
que favorecen el incremento en los días de estancia los protocolos ERAS es seguro, pero su implantación es
hospitalaria y de los costes hospitalarios. lenta, siendo una de las dificultades la integración multi­
En resumen, los conocidos como programas de re- disciplinar de cirujanos, anestesistas, enfermeras, nutri-
habilitación multimodal consisten en la combinación cionistas y otros profesionales de la salud involucrados.
de diferentes intervenciones perioperatorias basadas Los 20 elementos de un protocolo ERAS11 aparecen en
en la evidencia para la creación de «paquetes» asisten- la tabla 1. Incluso el cumplimiento parcial de alguno
ciales multimodales que permitan conseguir un efecto de estos elementos es capaz de reducir la duración de
sinérgico o aditivo y mejorar la recuperación del pa- la estancia y la tasa de complicaciones.
ciente. El papel del soporte nutricional en estos protocolos
En el año 2001, se constituyó el grupo ERAS, acróni- incluye el cribado nutricional para la detección de la
mo de Enhanced Recovery After Surgery, integrado por malnutrición, el soporte nutricional preoperatorio si es
diferentes unidades de cirugía procedentes de cinco preciso, la limitación del ayuno preoperatorio con car-
países del norte de Europa (Escocia, Suecia, Dinamar- ga de carbohidratos previa a la cirugía, la reintroduc-
ca, Noruega y Holanda), para la implementación de un ción precoz de la dieta oral y el soporte nutricional
programa de rehabilitación multimodal para pacientes postoperatorio.

Tabla 1.  Elementos de un protocolo ERAS.

  1.  Información y consejos preadmisión tanto verbales como por escrito.


  2.  Evitar preparación intestinal preoperatoria.
  3.  Evitar ayunos prolongados y realizar carga de carbohidratos preoperatoria.
  4.  Evitar medicación preanestésica, tanto analgésicos como ansiolíticos.
  5.  Usar profilaxis antitrombótica.
 6. Profilaxis antimicrobiana.
  7.  Protocolos anestésicos con analgesia epidural y anestésicos de acción corta.
  8.  Prevención y tratamiento de náuseas y vómitos.
  9.  Cirugía laparoscópica si la técnica está validada y experiencia del cirujano.
10.  Incisiones quirúrgicas adecuadas.
11.  Evitar el uso rutinario de sondas nasogástricas.
12.  Prevenir la hipotermia intraoperatoria.
13.  Evitar la sobrecarga hídrica.
14.  Evitar el uso de drenajes.
15.  Limitar el uso de sondajes vesicales, excepto en cirugía pélvica.
16.  Prevención del íleo postoperatorio.
17.  Analgesia postoperatoria epidural en combinación con opiáceos, paracetamol y AINEs.
18.  Soporte nutricional postoperatorio con dieta oral precoz.
19.  Movilización precoz.
20.  Auditoría sistemática.
Tema 32.  El papel de la nutrición en la rehabilitación multimodal 513

3.  Valoración del estado nutricional consideraciones previas y el hecho de que la hipo­
albuminemia, si bien es un predictor válido del riesgo
La malnutrición o desnutrición relacionada con la enfer- preoperatorio y se correlaciona de manera significativa
medad (DRE) influye en el pronóstico de los pacientes que con la estancia hospitalaria, las infecciones y la mortali-
son sometidos a cirugía intestinal12-17. Se conoce la rela- dad, es un reactante de fase aguda cuyos valores se afec-
ción entre estado nutricional preoperatorio, riesgo de tan por el estrés, la agresión y el fallo renal o hepático y
desnutrición y resultados postoperatorios18 y que la des- es útil en el seguimiento durante la hospitalización, el
nutrición relacionada con la enfermedad está asociada a uso de NRI se desaconseja en algunas guías clínicas.
mayor morbimortalidad, estancias hospitalarias más pro- La VSG en población quirúrgica ha mostrado, en la
longadas y mayores tasas de reingreso17, 19. Como el estado mayoría de los estudios, una buena capacidad para de-
nutricional preoperatorio se puede mejorar con un adecua- tectar la malnutrición y predecir el riesgo de complicacio-
do soporte y, por tanto, se pueden disminuir las compli- nes postoperatorias y es considerada, por ASPEN (Ameri-
caciones postoperatorias20, 21, una valoración del riesgo can Society for Parenteral and Enteral Nutrition), como el
nutricional puede identificar los pacientes que tienen un gold standard para el cribado nutricional. ESPEN (Euro-
mayor riesgo de desarrollar tales complicaciones y poten- pean Society for Clinical Nutrition and Metabolism) reco-
cialmente se pueden beneficiar del soporte nutricional. mienda en sus guías de 2002 utilizar MUST para pacien-
Esta valoración del estado nutricional o cribado nu- te en la comunidad, MNA en ancianos y NRS-2002 para
tricional identificará tanto los pacientes con malnutri- pacientes hospitalizados. En cambio, la mayoría de las
ción como los pacientes en riesgo de desarrollarla22 y otras herramientas no habían sido validadas con respec-
debería realizarse de forma preoperatoria a todos los to a su valor predictivo de complicaciones quirúrgicas.
pacientes que van a ser sometidos a cirugía mayor pro- En los últimos años se han comparado varias herra-
gramada. Existen varias herramientas de cribado nutri- mientas que evalúan el riesgo nutricional. El primer estu-
cional, herramientas que deben ser fiables, reproduci- dio que comparó distintos métodos (VSG, NRI, medidas
bles, sencillas de administrar y ligadas a protocolos de antropométricas, y datos de laboratorio)30 en pacientes
actuación23. Algunas de las que cumplen con estos re- sometidos a cirugía por cáncer gástrico, concluyó que
quisitos son el Nutrition Risk Screening (NRS-2002)24, tanto los parámetros subjetivos como objetivos tienen
Malnutrition Universal Screening Tool (MUST)25, Mini limitaciones y sugirió que un método que aunase ambos
Nutritional Assessment (MNA)26, Malnutrition Scree- parámetros podría ser mejor. En este sentido, el NRS-
ning Tool (MST), Short Nutrition Assessment Question- 2002 es una herramienta que incluye tanto parámetros
naire (SNAQ)27, Nutrition Risk Index (NRI) y la Valora- de desnutrición, como de severidad de la enfermedad y
ción Subjetiva Global (VSG)28. puede ser un método de screening nutricional más fia-
Un buen marcador de valoración nutricional debe ble en el preoperatorio. En un estudio comparativo con
ser útil para su uso en cualquier individuo, siendo ca- otras herramientas como MUST, MNA o NRI, NRS-2002
paz de reproducir datos y predecir con fiabilidad los ha mostrado tener una alta sensibilidad y especificidad
resultados de otros métodos más complejos, tener alta para predecir complicaciones quirúrgicas31. En los últi-
sensibilidad y especificidad, no verse afectado por fac- mos años se ha aplicado frecuentemente a pacientes
tores no nutricionales, normalizarse con rapidez tras la sometidos a cirugía abdominal, y buscando la correla-
intervención nutricional y, una vez corregido el marca- ción con la evolución postoperatoria. Los datos no siem-
dor, asociarse con una mejoría pronóstica. Sin embar- pre han sido concluyentes, pero un reciente metanálisis
go, no está claramente establecido qué herramienta de ha mostrado que el riesgo nutricional preoperatorio en
cribado nutricional predice mejor el riesgo de desarro- pacientes sometidos a cirugía abdominal medido me-
llar complicaciones tras la cirugía relacionadas con la diante NRS-2002 se asocia con un aumento de las com-
malnutrición29. Las herramientas basadas en paráme- plicaciones postquirúrgicas, estancia hospitalaria y mor-
tros antropométricos o funcionales aislados, como el talidad32. Más aún, en una reciente revisión sistemática,
porcentaje de pérdida de peso, los niveles de paráme- se sugiere la superioridad de métodos de screening
tros nutricionales como la albúmina o la valoración de como NRS-2002 o la combinación de parámetros obje-
la fuerza muscular, son de escaso valor en el cribado tivos añadido a VSG para mejorar la capacidad predicti-
nutricional previo a la cirugía. Se recomienda utilizar va de complicaciones33.
herramientas de cribado nutricional que incluyan el ín- ESPEN34 define el riesgo nutricional severo cuando se
dice de masa corporal, la pérdida de peso reciente no cumple al menos uno de los siguientes criterios:
intencionada, el conocimiento de la alimentación re-
ciente, valores de proteínas viscerales, y en el caso de •  Pérdida de peso superior al 10-15 % en los 6 me-
pacientes hospitalizados, la gravedad de la enferme- ses previos.
dad de base y el grado de estrés por el aumento de los •  Índice de masa corporal (IMC) inferior a 18,5 kg/m2.
requerimientos de energía y nutrientes. •  VSG grado C.
El Nutritional Risk Index (NRI) se ha relacionado con la •  Albúmina inferior a 3 g/dl sin alteración hepática
mortalidad perioperatoria, pero teniendo en cuenta las o renal que lo justifique.
514 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

La ASPEN35, en la revisión de sus guías sobre cribado da proinflamatoria. Debemos reservar esta nutrición en
nutricional, no hace ninguna recomendación específi- pacientes que no pueden recibir nutrición enteral, cuan-
ca para pacientes quirúrgicos. No obstante, el docu- do la vía enteral no es suficiente para alcanzar los reque-
mento de consenso del panel de expertos de ASPEN rimientos nutricionales, cuando el tubo digestivo no
sobre nutrición en cirugía36 considera al NRS 2002 puede abordarse adecuadamente o cuando los pacien-
como el mejor predictor de las complicaciones quirúr- tes presenta intolerancia a la nutrición enteral.
gicas con un nivel de recomendación alto. En este do-
cumento se define el riesgo nutricional si: 4.1.  Soporte nutricional preoperatorio
•  Albúmina sérica < 3 g/dl. El objetivo del soporte nutricional preoperatorio (SNP)
•  PCR como marcador de la inflamación. es mantener o mejorar el estado nutricional del paciente
•  IMC < 18,5 o > 40 kg/m2. antes de la agresión quirúrgica, no solo reponer los défi-
•  Porcentaje de peso ideal < 90 %. cits nutricionales. Aunque se sabe que la desnutrición no
•  Pérdida de peso > 5 % en un mes, > 7,5 % en 3 se corrige en corto tiempo y que posponer una cirugía
meses y > 10 % en 6 meses. solo permite una discreta mejoría del estado nutricional,
la evidencia científica recopilada acerca del soporte nutri-
cional preoperatorio, sobre todo en pacientes moderada
4.  Optimización nutricional perioperatoria
o severamente desnutridos, ha derivado en una serie de
El aporte de nutrientes al aparato digestivo debe ser recomendaciones sobre cuándo estaría indicado realizar
la primera opción de apoyo nutricional de un paciente, este soporte (tabla 2) y cómo debería realizarse.
ya que contribuye a mantener las propiedades fisioló- El soporte nutricional preoperatorio se ajustará a la
gicas e inmunológicas gastrointestinales, regula la res- situación clínica, y siempre que sea posible, el plan de
puesta inflamatoria sistémica, mantiene la secreción soporte ha de ser individualizado, a poder ser de forma
gástrica ácida, el peristaltismo y la síntesis de IgA secre- ambulatoria y utilizando la vía oral o enteral:
tora, hormonas, mucina etc. La nutrición puede ser
realizada por distintas vías, tanto oral como mediante •  En el caso de pacientes con ingesta oral posible
la utilización de sondas nasogástricas o nasoyeyunales pero insuficiente (60-75 % de sus requerimientos
instauradas por diferentes técnicas quirúrgicas, radio- calórico-proteicos estimados), es necesario opti-
lógicas o endoscópicas. mizar la dieta oral mediante las adaptaciones pre-
La nutrición parenteral, como el ayuno, inhibe la esti- cisas para la patología de base y/o la prescripción
mulación gastrointestinal, la secreción hormonal y la de fórmulas de nutrición enteral en forma de su-
perfusión intestinal regional. Induce atrofia y desorgani- plementos por vía oral si es preciso.
zación de la mucosa intestinal disminuyendo la superfi- •  Si la ingesta oral es posible pero menor del 60 %
cie de absorción, lo que puede favorecer la colonización de los requerimientos (anorexia intensa, disfagia),
de la mucosa por microorganismos oportunistas que estaría indicado la nutrición enteral completa por
alteran la membrana intestinal. Todo ello favorece una vía oral si es posible, o bien a través de un acceso
respuesta inmunitaria anormal y activación de la casca- digestivo, sea a través de sondas nasogástricas o

Tabla 2.  Recomendaciones de ASPEN y ESPEN sobre soporte nutricional preoperatorio.

Recomendaciones de ASPEN 2002 sobre soporte nutricional preoperatorio38


· Se debe administrar soporte nutricional especializado durante 7-10 días a todos los pacientes con desnutrición
moderada o severa que vayan a ser sometidos a cirugía mayor en los que esta pueda posponerse (A).
Recomendaciones de ESPEN 2006 sobre soporte nutricional preoperatorio34
· En pacientes de alto riesgo nutricional (según los criterios descritos anteriormente) está indicado realizar SNP
durante 10-14 días previos a la cirugía, retrasando la intervención quirúrgica si fuera preciso (A).
· En pacientes sin malnutrición en los que se anticipa que no van a ingerir alimentos durante 7 días
perioperatoriamente, o que no alcanzarán una ingesta oral para cubrir el 60 % de sus requerimientos por vía
oral durante más de 10 días (C).
Panel de expertos en nutrición en cirugía ASPEN36
· Pacientes malnutridos que van a ser sometidos a cualquier procedimiento quirúrgico o pacientes bien nutridos que
van a ser sometidos a procedimientos quirúrgicos de alto riesgo.

ASPEN: American Society for Parenteral and Enteral Nutrition.


ESPEN:  European Society for Clinical Nutrition and Metabolism.
Tema 32.  El papel de la nutrición en la rehabilitación multimodal 515

nasoyeyunales, o de ostomias según la duración ral40, popularizó a partir de 1960 la práctica de suprimir
prevista del soporte nutricional. la ingesta previa a la cirugía, nulla per os (NPO, nada por
•  En caso de anorexia tan intensa que no permite boca) o ayuno completo a partir de la medianoche. El
tomar en cantidades suficientes una dieta o la nu- objetivo era asegurar que el estómago estuviera vacío en
trición enteral oral, o bien existen alteraciones me- el momento de la inducción de la anestesia disminuyen-
cánicas que alteran la deglución (disfagia alta o do así el riesgo de broncoaspiración.
disfagia para sólidos o líquidos grave), será precisa Desde finales del siglo XX se cuestionan estás prácti-
la nutrición enteral completa a través de un acce- cas porque sólidos y líquidos pasan de estómago a duo-
so digestivo, como en el apartado anterior. deno por diferentes mecanismos en distinto tiempo. Los
•  En ambos casos, la nutrición enteral debe iniciarse líquidos se vacían por diferencia de presión en 2 horas,
en el domicilio del paciente y continuarla hasta la mientras que los sólidos deben ser fraccionados en pe-
cirugía. queñas partículas de 2 mm en un proceso que dura
•  La nutrición parenteral estaría indicada en aque- 6 horas. La ingesta de 150 ml de agua 2,5 horas antes
llos casos con malnutrición severa en los que la de la cirugía puede incluso disminuir el contenido gástri-
nutrición enteral está contraindicada2, o no es su- co previo a la cirugía41. De la misma forma, la ingesta de
ficiente para cubrir las necesidades del paciente 150 ml de café o zumo de naranja no incrementa el
(< 60 %). En este último caso, debe considerarse volumen residual gástrico (se excluyen mujeres embara-
el aporte parenteral complementario a la nutri- zadas y urgencias quirúrgicas), disminuyendo además
ción enteral que el paciente tolere. La cirugía debe de forma significativa la sensación de hambre y sed42. En
ser retrasada, si es factible, durante 5-7 días para conclusión, si bien el ayuno prequirúrgico es una reco-
administrar nutrición parenteral. Especial atención mendación generalizada en la práctica clínica, los pa-
debe prestarse a evitar el uso de emulsiones lípidi- cientes que toman líquidos hasta 2-3 horas antes de la
cas de soja con capacidad proinflamatoria, para cirugía no tienen más riesgo de aspiración que los que
reducir las complicaciones postoperatorias36. realizan un ayuno de 8-12 horas (tabla 3). Si los líquidos
son además bebidas con hidratos de carbono, disminu-
4.2.  Ayuno preoperatorio ye la sensación de hambre, la sed y la ansiedad43.

Las recomendaciones sobre el ayuno prequirúrgico


4.3.  Carga preoperatoria de carbohidratos
han cambiado a lo largo del tiempo. A finales del si-
glo XIX se utilizaban diferentes períodos de ayuno para Tras la ingesta de nutrientes, se libera insulina para
sólidos y líquidos y, si bien los sólidos se evitaban, los lí- favorecer el almacenamiento de los mismos. La gluco-
quidos se permitían hasta 2 horas antes de la cirugía39. neogénesis se detiene, se activa la captación muscular
No obstante, la observación de mayores tasas de bron- de glucosa y tanto la lipólisis como la proteólisis se in-
coaspiración en partos realizados bajo anestesia gene- terrumpen (tabla 4). Este período postprandial dura

Tabla 3.  Recomendaciones sobre el ayuno prequirúrgico.

Recomendaciones de ESPEN sobre el ayuno prequirúrgico34


· Los pacientes con cirugía programada que no presentan riesgo específico de
aspiración pueden beber líquidos hasta 2 horas antes de la anestesia y tomar sólidos
hasta 6 horas antes de la anestesia (A).
· Usar una carga preoperatoria de carbohidratos (la noche antes y 2 horas antes de la
cirugía) en la mayoría de los pacientes programados para cirugía mayor (B).

ESPEN:  European Society for Clinical Nutrition and Metabolism.

Tabla 4.  Metabolismo de los carbohidratos: ayuno versus estado postprandial.

Sustrato metabólico Estado de ayuno Estado postprandial


Glucosa Normal Elevado
Insulina Normal Elevado
Captación muscular de glucosa Reducido Incrementado
Catabolismo de proteínas Incrementado Detenido
Glucógeno Liberado Almacenado
Metabolismo Catabolismo Anabolismo
516 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

aproximadamente 4 horas. Con la liberación de insuli- men de 300-400 ml y con una osmolalidad entre
na y la preservación del glucógeno, se alcanza un esta- 250-300 mOsm/kg).
do anabólico, la situación deseada para un paciente Se ha sugerido que el uso de estas bebidas con hi-
sometido a cirugía. Sin embargo, la cirugía por sí mis- dratos de carbono favorece el bienestar de los pacien-
ma produce insulinorresistencia e hiperglucemia pro- tes, con disminución de la sed, hambre, malestar, fati-
porcional a la intensidad de la agresión o traumatismo ga y ansiedad, en comparación con los pacientes a los
sobre los tejidos y el ayuno preoperatorio contribuye a que se prescribe ayuno50. Actualmente los protocolos
la insulinorresistencia, disfunción mitocondrial y estrés de rehabilitación multimodal incluyen las recomenda-
metabólico47. Esta respuesta al estrés dura 2-3 sema- ciones de la ingesta de bebidas con hidratos de carbo-
nas, siendo la hiperglucemia mayor en el primer día no previas a la cirugía 5-10, 337, 800 ml de una bebi-
postoperatorio. da rica en carbohidratos (12,6  %) antes de la
Aunque es debatido, el control de la hipergluce- medianoche y 400 ml 2-3 horas antes de la cirugía.
mia puede ser un instrumento para reducir la mor-
bilidad y mortalidad postoperatoria. La optimiza- 4.4.  Soporte nutricional postoperatorio
ción del control glucémico mediante insulinoterapia
intravenosa intensiva conlleva una reducción del El aporte de nutrientes al intestino mantiene la inte-
40 % de la morbimortalidad por todas las causas en gridad tanto estructural como funcional de la barrera
pacientes intervenidos de cirugía torácica y abdomi- mucosa, reduciendo el riesgo de complicaciones mecá-
nal durante su estancia en cuidados intensivos45. El nicas e infecciosas. No obstante, es frecuente someter
principal riesgo de este tratamiento está en la hipo- a los pacientes a un período de ayuno de varios días
glucemia y en la inducción de variabilidad glucémi- tras un procedimiento quirúrgico gastrointestinal que
ca, que se ha asociado con una mayor mortalidad incluya una anastomosis. Se trata de una práctica muy
de los pacientes ingresados en unidades de cuida- extendida que se transmite de cirujanos a cirujanos:
dos intensivos cuando se usa un protocolo muy es- comenzar con líquidos desde que aparecen ruidos in-
tricto para alcanzar un objetivo de glucemia entre testinales, incrementando progresivamente la ingesta
81-100 mg/dl46. tanto en cantidad como en consistencia. Ello condicio-
Dado que un buen control glucémico puede ser be- na períodos de ayuno innecesariamente prolongados,
neficioso, pueden utilizarse estrategias para disminuir que favorecen el sobrecrecimiento bacteriano y la pér-
la insulinorresistencia y la hiperglucemia postoperato- dida del trofismo de la mucosa intestinal. Se produce
ria, tales como la ingesta de bebidas ricas en hidratos una disminución de la secreción intestinal de inmuno-
de carbono, hasta 2-3 horas antes de la cirugía. Se tra- globulina A51 y atrofia del tejido linfoide intestinal, fa-
ta de un método sencillo que induce una liberación de voreciendo una traslocación bacteriana y el paso de
insulina similar a la que se produce tras una comida toxinas desde el lumen intestinal a la circulación san-
mixta, reproduciendo el estado postprandial anabólico guínea.
(tabla 4), con una reducción de la insulinorresistencia Los protocolos de rehabilitación multimodal inclu-
asociada al estrés quirúrgico que puede ser un 50 % yen la realimentación postoperatoria precoz5-10, 37
menor respecto a la no administración de la bebida como uno de los elementos para conseguir una recu-
hidrocarbonada durante el preoperatorio47, 50. Los posi- peración precoz del paciente sometido a cirugía gas-
bles mecanismos por los que estas bebidas pueden dis- trointestinal con disminución de la estancia hospitala-
minuir la insulinorresistencia asociada a cirugía inclu- ria. Estos protocolos incluyen elementos para disminuir
yen el contribuir a la repleción de los depósitos de la aparición de íleo postoperatorio patológico. El íleo
glucógeno hepático previos a la cirugía48 y favorecer la postoperatorio fisiológico es un fenómeno transitorio
oxidación de los hidratos de carbono, reducida en si- secundario a la inhibición de la motilidad intestinal
tuaciones de insulinorresistencia, al estimular la trans- por la actividad simpática refleja secundaria a la agre-
formación de piruvato en acetil coenzima-A a través de sión quirúrgica sobre la cavidad abdominal, a la res-
la disminución de los niveles de piruvato deshidroge- puesta inflamatoria y la liberación de péptidos como el
nasa tipo 4 muscular49. polipéptido intestinal vasoactivo y probablemente la
Estas bebidas contienen suficientes hidratos de sustancia P52. El peristaltismo del intestino delgado se
carbono complejos como para simular una comida recupera en las primeras 24 horas tras la cirugía, el del
2-3 horas previas a la cirugía y el consiguiente esta- estómago a las 24-48 horas, y el del colon a las 48-72
do anabólico. Los líquidos claros o las bebidas de- horas53.
portivas no tienen suficientes hidratos de carbono. Cuando no es posible el inicio de la ingesta por vía
Los preparados comerciales contienen habitualmen- oral de forma precoz, estaría indicada la nutrición en-
te un 12 % de carbohidratos en forma de maltodex- teral, por lo que es importante que en el acto quirúrgi-
trinas para limitar su osmolalidad y prevenir el retra- co se incluya la colocación de un acceso disponible
so del vaciamiento gástrico, con volumen en torno a para el soporte nutricional enteral postopetatorio
los 400 ml (40-50 g de maltodextrinas con un volu- (figura 1). Se ha sugerido que el inicio precoz de la
Tema 32.  El papel de la nutrición en la rehabilitación multimodal 517

NUTRICIÓN ENTERAL

Previsión a corto plazo Previsión a largo plazo


< 4 semanas > 4 semanas

Riesgo de aspiración Riesgo de aspiración

Sí No Sí No

Postpilórica Gástrica Postpilórica Gástrica

Sonda nasoenteral Sonda nasogástrica Posibilidad endoscopia Posibilidad endoscopia

Sí No Sí No

PEY Yeyunonostomía PEG Gastrostomía


quirúrgica quirúrgica

PEG: gastrostomía endoscópica percutánea; PEY: yeyunostomía endoscópica percutánea.

Figura 1.  Elección de la via de acceso para nutrición enteral.

nutrición enteral en el que postoperatorio de la cirugía postoperatorio complicado. Las recomendaciones


gastrointestinal, frente al reposo intestinal, se acompa- para el soporte nutricional postoperatorio quedan re-
ña de una reducción de las complicaciones infecciosas, flejadas en la tabla 5.
de la estancia media hospitalaria y de la mortalidad54,
55, 59
. Frente a la nutrición parenteral, se asocia a menor 5. Conclusión
número de complicaciones postoperatorias, dehiscen-
cias de suturas, incidencia de abcesos abdominales y La rehabilitación multimodal (también conocida
estancia hospitalaria56-58. como cirugía fast-track o protocolos ERAS, enhanced
La nutrición parenteral estaría indicada cuando la recovery after surgery) es el conjunto de actuaciones
nutrición enteral no es posible o es insuficiente para postoperatorias dirigidas a acelerar la recuperación de
alcanzar los requerimientos nutricionales, como en los pacientes sometidos a cirugía con disminución de la
casos de intestino corto, brote de enfermedad infla- morbilidad postoperatoria para reducir la estancia hos-
matoria intestinal, enteritis rádica; o está contraindi- pitalaria. Entre ellas, se encuentra el soporte nutricio-
cada, por la aparición de dehiscencia de suturas o íleo nal, con la identificación de pacientes en riesgo de mal-
postoperatorio prolongado. Su inicio no debe ser pre- nutrición previo a la cirugía e intervención con soporte
coz (< 48 horas), dado que se asocia con un mayor nutricional preoperatorio si está indicado, disminuir el
número de complicaciones y una recuperación menos tiempo de ayuno preoperatorio y carga de bebidas ri-
rápida60 y siempre que su duración estimada sea su- cas en carbohidratos previos a la cirugía para disminuir
perior a 7 días. Una intervención más precoz podría la insulinorresistencia, así como realimentación oral
estar justificada en pacientes severamente desnutri- precoz y en su caso soporte nutricional artificial, siendo
dos previa a la cirugía o aquellos que presentan un de elección la vía enteral.
518 BLOQUE: NUTRICIÓN EN PATOLOGÍA DEL TUBO DIGESTIVO

Tabla 5.  Recomendaciones de ASPEN y ESPEN sobre soporte nutricional postoperatorio.

Recomendaciones de ASPEN (2002) sobre soporte nutricional postoperatorio38


· Se debe administrar soporte nutricional postoperatorio tras la cirugía en aquellos pacientes en los que se
prevean tiempos de ayuno de al menos 7-10 días (B).
· No se debe administrar nutrición parenteral de forma rutinaria en el postoperatorio de los pacientes con
cirugía mayor gastrointestinal (A).
Recomendaciones de ESPEN (2006 y 2009) sobre soporte nutricional postoperatorio2, 34
· En general, la interrupción de la dieta oral tras la cirugía no es necesaria en la mayoría de los pacientes.
· La dieta oral puede introducirse a las pocas horas tras la cirugía en la mayoría de los pacientes intervenidos
por cirugía colónica (sobre todo bajo un programa ERAS) sin diferencias entre la cirugía abierta y la cirugía
laparoscópica.
· La ingesta oral tras la intervención quirúrgica debe adaptarse a la tolerancia individual del paciente y al tipo
de cirugía.
· Iniciar soporte nutricional postoperatorio con nutrición enteral precoz en pacientes que no pueden reiniciar la
dieta temprana tras la cirugía, especialmente en:
  – Cirugía de cabeza y cuello, tumores del aparato digestivo superior o trauma severo, desnutrición severa
detectada en el momento de la cirugía (A).
  –  Ingesta oral que se prevee < 60% durante más de 10 días (C).
  –  La NE precoz por acceso digestivo debe iniciarse en las primeras 24 horas tras la cirugía (A).
· NPT postoperatoria es beneficiosa en pacientes desnutridos en los que la NE no es factible o no bien tolerada,
o con complicaciones postoperatorias que afectan la función gastrointestinal, y que no pueden recibir o
absorber cantidades adecuadas de nutrientes durante al menos 7 días (A).
· La combinación de NPT y NE puede ser útil en pacientes con indicación de SN en los que no se alcanza el 60 %
de los requerimientos con la NE (por ejemplo, fistulas de alto débito, obstrucción digestiva parcial): nutrición
parenteral complementaria (C).
Recomendaciones Nutrición y Cirugía ASPEN (2013) sobre soporte nutricional postoperatorio36
· En pacientes sometidos a cirugía urgente en los que la NE no es factible, el inicio de la NPT debe ser retrasado 5-7 días.
· La NPT debe iniciarse en el postoperatorio solo si la duración estimada de la terapia va a ser > 7 días.

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BLOQUE:
PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS
(Dra. Pilar Matía Martín)
TEMA 33. Sarcopenia y fragilidad en el anciano.
Dres. Teresa Ruiz Gracia, Federico Miguel Cuesta Triana, Ángela Amengual
Galbarte y Martín Cuesta Hernández

TEMA 34. Soporte nutricional en el paciente séptico y crítico.


Dres. Natalia Pérez Ferre, Teresa de Grado Manchado, Rona Penso Espinoza
y Alejandra Durán Rodríguez-Hervada

TEMA 35. Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad


pulmonar obstructiva crónica, bronquiectasias y fibrosis quística.
Dres. Gabriel Olveira Fuster, Victoria Contreras Bolívar y Casilda Olveira Fuster

TEMA 36. Nutrición en pacientes quemados y traumatológicos.


Dres. Clara Marcuello Foncillas, Ángela Amengual Galbarte y Pilar Matía Martín

TEMA 37. Soporte nutricional en pacientes con enfermedades neurológicas.


Dres. Paula Fernández Martínez, Tania Ramos Martínez, María Dolores
Ballesteros Pomar y Adrián Arés Luque
Tema 33. 
Sarcopenia y fragilidad en el anciano
Teresa Ruiz Gracia
Médico adjunto. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico San Carlos. Madrid

Federico Miguel Cuesta Triana


Médico Adjunto. Servicio de Geriatría. Hospital Clínico San Carlos. Madrid

Ángela Amengual Galbarte


Residente de Cuarto año en el Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico San Carlos.
Madrid

Martín Cuesta Hernández


Médico adjunto. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico San Carlos. Madrid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 525-539.

1. Introducción
2.  Fisiopatología y diagnóstico
3.  Valoración nutricional
4.  Objetivos nutricionales
5. Resumen
6. Bibliografía

1. Introducción el consenso de expertos. La definición de sarcopenia en


el Consenso Europeo (EWGSOP, European Working
A partir de la segunda mitad del siglo xx, se ha hecho Group on Sarcopenia in Older People) necesita siempre
evidente que el envejecimiento es un proceso universal, de la medida de una masa muscular esquelética baja,
y que este ocurre de manera diferente en cada indivi- acompañada, bien de una fuerza muscular disminuida,
duo. Un aspecto importante a tener en cuenta es el pro- o de una función física alterada. Además, el EWGSOP
gresivo aumento de la población mayor, y sobre todo el establece una estadificación de la sarcopenia: a) Presar-
grupo etario de personas mayores de 80 años, el cual copenia: solo se detecta una disminución de la masa
está experimentando una tasa de crecimiento mayor muscular esquelética (MME); b) sarcopenia: MME redu-
que cualquier otro segmento de la población. Debido al cida, junto con alteración de la fuerza o de la función, y
envejecimiento continuo de la pirámide poblacional, se c) sarcopenia severa: si acontecen las tres circunstan-
estima que en el año 2050 la población española mayor cias3. La sarcopenia es una entidad cada vez más fre-
de 65 años representará más del 30% del total1. El enve- cuente e importante a medida que las poblaciones enve-
jecimiento engloba una serie de cambios morfológicos, jecen, y se asocia con la consiguiente discapacidad y
funcionales y psicológicos que desencadenan una pérdi- morbilidad. Uno de los aspectos más relevantes de la
da progresiva de las capacidades físicas y cognoscitivas. sarcopenia proviene de la evidencia que relaciona la po-
bre función muscular con el aumento de las tasas de
1.1.  Definición de sarcopenia mortalidad por todas las causas en las personas de me-
En 1989, Irwin Rosenberg propuso el término sarco- diana edad y en las personas mayores4.
penia para describir el descenso de la masa muscular
relacionado con la edad2. Teniendo en cuenta una pers- 1.2.  Definición de fragilidad
pectiva clínica, la sarcopenia se concibe como un síndro-
me geriátrico complejo. Desde el año 2010 se han La fragilidad es un síndrome geriátrico caracterizado
publicado varias definiciones de sarcopenia basadas en por un deterioro multisistémico asociado con una ma-

525
526 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

yor vulnerabilidad, debilidad y disminución de la reser- 2.  Fisiopatología y diagnóstico


va fisiológica a factores estresantes5, lo que condiciona
un incremento en resultados adversos de salud como: 2.1.  Fisiopatología de la sarcopenia
caídas, hospitalización, institucionalización y mortali- La baja MME puede deberse al propio envejecimien-
dad6. De forma genérica, las diversas definiciones de to, a la enfermedad crónica o a la obesidad. Por ello,
fragilidad incluyen, al menos, la inactividad física y la en el Consenso Europeo se describen dos tipos de sar-
desnutrición con pérdida ponderal. La definición más copenia: primaria (debida al envejecimiento; cuando
aceptada por la comunidad científica es la propuesta no existe otra causa desencadenante) y secundaria (in-
por Fried et al. en 20017, que elaboró una definición de movilidad, enfermedad crónica o desnutrición)3. Se
fenotipo de fragilidad. Esta consistía en la presencia han propuesto diversos mecanismos que podrían inter-
de 3 de 5 elementos a evaluar: 1) pérdida de peso no venir en el inicio y en la progresión de la sarcopenia
intencionada de ≥ 5 kg o 5% del peso corporal total en (figura 1). Estos tienen que ver, entre otros, con la
el año precedente, 2) cansancio o baja resistencia a síntesis proteica y la proteólisis, la integridad neuro­
pequeños esfuerzos, 3) debilidad muscular (medida muscular y el depósito de lípidos en el tejido muscular.
por la fuerza prensora de la mano), 4) lentitud de la Esquemáticamente podrían resumirse en14:
marcha y 5) nivel bajo de actividad física.
El concepto general de fragilidad va más allá de los • Factores del sistema nervioso central: Conforme se
factores físicos, de modo que también abarca dimen- cumplen años se van perdiendo unidades motoras
siones psicológicas y sociales, como estado cognitivo, alfa de la médula espinal que predisponen al de-
apoyo social y otros factores ambientales. sarrollo de atrofia muscular.
La fragilidad y la sarcopenia se superponen; la mayo- • Factores musculares: Con la edad se produce una
ría de las personas de edad avanzada frágiles presen- pérdida de la fuerza muscular, de las fibras mus-
tan sarcopenia y algunas personas de edad avanzada culares (calidad muscular) y del número de células
con sarcopenia también son frágiles. musculares (masa muscular).
• Factores humorales: En el anciano se ha descrito
1.3.  Epidemiología de sarcopenia y fragilidad una mayor resistencia a la insulina que, junto
con el aumento de grasa con distribución típica
La prevalencia de sarcopenia en la literatura varía del anciano, también colabora en este proceso.
ampliamente, y ello puede estar en relación con los Además, con el envejecimiento descienden los
diferentes métodos utilizados para determinar la MME, niveles de hormonas anabolizantes, como la
la fuerza muscular y el rendimiento físico. Patel et al. hormona de crecimiento (GH), la testosterona
evaluaron la prevalencia de la sarcopenia utilizando la y los estrógenos, lo que provoca una disminu-
definición de EWGSOP en el estudio de cohortes de ción de su efecto trófico y desarrollo de atrofia
Hertfordshire: con una edad media de 67 años, se en- muscular. Por otro lado, asociado a la edad exis-
contró que el 4,6% de los varones y el 7,9% de las te un estado proinflamatorio que hace que au-
mujeres tenían sarcopenia8. En un reciente estudio menten los niveles de interleucina 1 (IL-1) beta,
multicéntrico español –estudio ELLI– sobre 298 ancia- del factor de necrosis tumoral (FNT) y de la inter-
nos no institucionalizados de más de 69 años, la preva- leucina 6 (IL-6), que provocan un desequilibrio
lencia de sarcopenia se situó en el 19,1% (12,7% en entre la síntesis proteica y la proteólisis, a favor
varones; 22,9% en mujeres)9. Utilizando también los de esta última.
criterios descritos en EWGSOP, la prevalencia de sarco- • Factores de estilo de vida: La sarcopenia empeora
penia en adultos de más de 49 años se ha situado en- con la inactividad, y por ello una vida sedentaria
tre el 1 y el 29% en sujetos no institucionalizados (sien- produce una mayor y más rápida pérdida de
do del orden del 30% en mujeres), entre el 14 y el 33% músculo que una vida activa.
en los ingresados en unidades de larga estancia y en el
10% de los atendidos en unidades de agudos10.
2.2.  Diagnóstico de sarcopenia
Asimismo también es posible encontrar resultados
muy dispares en cuanto a prevalencia de fragilidad en Los criterios diagnósticos para la sarcopenia no han
función de los criterios empleados, afectando a un 4-60% sido firmemente establecidos hasta la fecha. Las prime-
de pacientes no institucionalizados. Gale et al. describie- ras definiciones operacionales se basaron únicamente
ron la prevalencia de fragilidad en el Estudio Longitudinal en la baja masa muscular15. Investigaciones en las últi-
Inglés sobre envejecimiento: el 6,5% de las personas de mas décadas han puesto de manifiesto la cantidad y la
entre 60-69 años presentaban esta condición11. Datos del calidad muscular como factores predictores de capaci-
estudio español FRADEA, mostraron una prevalencia de dad funcional. Por ello, la definición de sarcopenia en
fragilidad del 16,9%12. En una revisión sistemática se ob- el Consenso Europeo necesita siempre de la medida
jetivó que la prevalencia de fragilidad aumenta con la de una MME baja, acompañada bien de una fuerza
edad y que es más frecuente en mujeres13. muscular disminuida, o de una función física alterada.
Tema 33.  Sarcopenia y fragilidad en el anciano 527

FNT: factor de necrosis tumoral; GH: Hormona del crecimiento. IGF-1: factor de crecimiento.
dependiente de insulina tipo 1. IL-1: Interleucina 1. IL-6: Interleucina 6.

Figura 1.  Fisiopatología de la sarcopenia.

Por tanto, se establece el diagnóstico de sarcopenia puntos de corte empleados en la literatura, en


cuando se cumplen los siguientes criterios3: función de la técnica de composición corporal uti-
lizada, según quedan recogidos en el EWGSOP3,
1. Baja MME: Para la medición de la masa muscular, en el consenso publicado por el International Wor-
la absorciometría de rayos X de energía dual king Group on Sarcopenia (IWG)16, el auspiciado
(dual-energy x-ray absorptiometry [DEXA]) es consi­ por ESPEN (European Society for Clinical Nutrition
derada el estándar de oro. Otros métodos incluyen: and Metabolism; Special Interest Groups)17 y el pu-
impedancia bioeléctrica (BIA), tomografía compu­ blicado bajo el ámbito del Sarcopenia, Cachexia
tarizada (TC), resonancia magnética, ecografía, and Wasting Disorders Trialist Workshop18.
potasio corporal total o parcial, excreción urinaria En España, Masanes et al., utilizando población de
de creatinina, valoraciones antropométricas y referencia catalana, han establecido los siguien­ tes
medición de activación de neutrones. Las dos pri- puntos de corte mediante BIA: varones < 8,31 kg/m2
meras son las que más se han utilizado en la prác- y mujeres < 6,68 kg/m2 (MME – kg-/talla2 – m2)19.
tica clínica; las últimas, aun siendo más exactas, 2. Función física reducida: Valorada, en la mayor
generalmente se utilizan en investigación. La nor- parte de las definiciones, mediante el test de ve-
malidad de la MME se establece en base a los da- locidad de la marcha. Los puntos de corte pro-
tos obtenidos de estudios poblacionales en perso- puestos varían en función de los consensos publi-
nas jóvenes de entre 18 y 39 años. Para realizar el cados (tabla 1).
diagnóstico de sarcopenia es necesario que la 3. Fuerza muscular disminuida: Puede ser medida por
MME del individuo se encuentre 2 desviaciones es- la fuerza de prensión de la mano (dinamómetro).
tándar por debajo de la media de la población de Los criterios diagnósticos sugeridos son valores cru-
referencia. En la tabla 1 se especifican algunos dos, o ajustados según el IMC del paciente (tabla 1).
528 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

Tabla 1.  Criterios diagnósticos de sarcopenia según diferentes consensos

Parámetro estudiado Técnica empleada Puntos de corte

IMME (MME/talla2-m-)
MME · BIA* Varones: < 8,87 / 10,76 kg/m2
Mujeres: < 6,42 / 6,76 kg/m2

Varones:< 7,23/ 7,26 kg/m2


IMMa (MMa/talla2-m-) · DEXA*
Mujeres: < 5,50 / 5,67 kg/m2

Residuos de regresión lineal de Varones: -2,29


· DEXA*
IMMa ajustados por MG y por altura Mujeres: -1,73

· TC
· RM

· P otasio corporal total (por
tejidos blandos libres de grasa)

Varones: < 30 kg
Mujeres: < 20 kg
Varones:
IMC ≤ 24 kg/m2: ≤ 29 kg
EWGSOP, 20103
IMC 24,1-26 kg/m2: ≤ 30 kg
· P rensión de la mano IMC 26,1-28 kg/m2: ≤ 30 kg
(Dinamómetro) IMC > 28 kg/m2: ≤ 32 kg
Fuerza muscular Mujeres:
IMC ≤ 23 kg/m2: ≤ 17 kg
IMC 23,1-26 kg/m2: ≤ 17,3 kg
IMC 26,1-29 kg/m2: ≤ 18 kg
IMC > 29 kg/m2: ≤ 21 kg

· Flexo-extensión de rodilla
(Dinamómetro) –
· Flujo espiratorio

· Short Physical Performance Battery


≤8
(SPPB)
Función
· Velocidad de la marcha (6 min) < 1 m/s**

· Get-up-and-go test –

Hombres: ≤ 7,23 kg/m2


IMMa (MMa/talla2-m-) DEXA
IWG, 2011 16 Mujeres: ≤ 5,67 kg/m2

Función Velocidad de la marcha (4 min) < 1 m/s

– 2 Desviaciones estándar (DE) de


Special Interest Group on cachexia- MME No especificado la media de población joven de
anorexia in chronic wasting referencia
diseases (ESPEN), 201017
Función Velocidad de la marcha (4 min)*** < 0,8 m/s

– 2 DE de la media de población joven


IMMa (MMa/talla2-m-)
SCWD, 2011 de referencia (20-30 años)
«Sarcopenia con movilidad
Velocidad de la marcha < 1 m/s
limitada»****18 Función
Caminata de 6 minutos < 400 m

DEXA: Absorciometría dual de doble energía; EWGSOP: European Working Group on Sarcopenia in Older People; IWG: International
Working Group on Sarcopenia; IMMa: índice de masa muscular apendicular; IMME: índice de masa muscular esquelética; MMa: masa
muscular apendicular (suma de tejidos blandos –lean body mass– de miembros –DEXA–); MME: masa muscular esquelética; MG: masa
grasa; RM: resonancia magnética; SCWD: Sarcopenia; Cachexia and Wasting Disorders; TC: tomografía axial computarizada.
*Técnicas recomendadas en la práctica clínica. **Otros puntos de corte resultan menos operativos. ***Puede reemplazarse por otros
test de función utilizados en la valoración integral geriátrica.****La limitación de la movilidad no debe ser la consecuencia de otra
miopatía, enfermedad vascular periférica con claudicación intermitente, trastorno del sistema nervioso o caquexia. Se define como
síndrome, no como enfermedad.
Tema 33.  Sarcopenia y fragilidad en el anciano 529

No obstante, es necesario estandarizar mejor los pitalización o en aquellos con enfermedades crónicas
criterios operativos para facilitar la comparación en- como diabetes mellitus, insuficiencia cardiaca, enfer-
tre estudios y para poder tomar decisiones uniformes medad pulmonar obstructiva crónica, insuficiencia re-
sobre el tratamiento. Además, puesto que los con- nal crónica, artritis reumatoide o cáncer. En pacientes
sensos publicados se basan más en acuerdos de ex- con capacidad para deambular, debería valorarse la
pertos que en evidencias pronósticas, debería investi- velocidad de la marcha (en 4 min), y si esta es inferior
garse si realmente el diagnóstico de sarcopenia con a 1 m/s ha de continuarse con la medida de la masa
estos métodos es capaz de predecir discapacidad y muscular apendicular (MMa) mediante DEXA16. La So-
evolución clínica20. ciety on Sarcopenia, Cachexia and Wasting Disorders
aconseja la búsqueda de sarcopenia en mayores de
2.3.  Cribado de sarcopenia 60 años con caídas, cuya velocidad de la marcha ha
disminuido, que han sufrido una hospitalización recien-
La pérdida de MME y la debilidad se asocian a disca- te o que han estado encamados durante un periodo
pacidad (dificultades para el correcto desempeño de prolongado, que tienen problemas para levantarse de
las tareas instrumentales y básicas de la vida diaria), una silla o que necesitan ayudas técnicas para cami-
caídas, osteoporosis, incremento de la estancia media nar18. Es crucial la detección precoz23, porque la pérdida
hospitalaria, reingresos y mortalidad21, 22. de MME acontece rápidamente, pero la restauración de
El Consenso Europeo sugiere la valoración de la sar- una función perdida puede llevar varios meses24.
copenia en los sujetos de más de 65 años, comenzan-
do con la medida de la velocidad de la marcha, según
2.4.  Fisiopatología de la fragilidad
se muestra en la figura 23. Asimismo, el IWG reco-
mienda evaluar la posibilidad de sarcopenia en aque- La etiología de la fragilidad es multifactorial y su fi-
llas personas con disminución de la función, de la fuer- siopatología está influida por la interacción y superpo-
za o del estado de salud, con dificultad referida para la sición de numerosos factores. Morley propone cuatro
movilidad, con caídas recurrentes, con pérdida ponde- mecanismos principales responsables del origen de la
ral no intencionada (> 5% del peso inicial), tras la hos- fragilidad: la ateros­clerosis, el deterioro cognitivo, la

> 65 años de edad

Medida de velocidad
de la marcha

> 0,8 m/s ≤ 0,8 m/s

Medida de la fuerza Medida de la masa


prensora de la mano muscular

Normal Baja Baja Normal

No sarcopenia Sarcopenia No sarcopenia

Fuente: Cruz-Jentoft AJ, et al; European Working Group on Sarcopenia in Older People.
Sarcopenia: European consensus on definition and diagnosis: report of the European Working
Group on Sarcopenia in Older People. Age Ageing. 2010;39:412-423.

Figura 2.  Aproximación al cribado y al diagnóstico de sarcopenia según el Consenso


Europeo.
530 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

desnutrición y la sarcopenia, con sus alteraciones me- asociados a la MME y a la fuerza, por lo que su
tabólicas asociadas25. Los más implicados en la fisiopa- disminución tiene un papel importante en el desa-
tología de la fragilidad son los sistemas inmunológico, rrollo de la fragilidad28. La disminución de la tes-
neuroendocrino y musculoesquelético (figura 3). tosterona ha sido el principal factor asociado con
la pérdida de la masa y fuerza muscular debido al
• Sistema inmune: Se ha encontrado una asociación envejecimiento29. Esta disminución se asocia a dis-
entre fragilidad, un estado proinflamatorio y la capacidad y a la pérdida de la fuerza de los miem-
activación de la cascada de la coagulación26, 27. bros inferiores.
Destacan, entre otras, la IL-6, la IL-1 y el FNT-α.
También se han involucrado sus receptores, como Tanto la fragilidad como la sarcopenia son la vía co-
el antagonista del receptor de la IL-1 y los recep- mún final de muchos procesos patológicos (figura 4).
tores solubles del FNT. Los niveles elevados de IL-6 Además, la fragilidad también comparte con la sarco-
provocan catabolismo acelerado de proteínas, penia la disminución del músculo esquelético como
además de inducir la síntesis de otras, como la característica clave. Por lo tanto, ambas condiciones
proteína C reactiva, las haptoglobinas, el fibrinó- comparten la baja capacidad física como un atributo
geno, el factor VIII y el dímero D; e influye de for- común30, y casi todas las definiciones de sarcopenia y
ma negativa en la síntesis de algunas, como la al- fragilidad incluyen baja función física como compo-
búmina. nente principal.
• Sistema neuroendocrino: Con el envejecimiento
ocurren múltiples cambios hormonales cuya diana
2.5.  Diagnóstico de fragilidad
es el sistema musculoesquelético, que se han rela-
cionado con la aparición de fragilidad. Destacan Existen múltiples herramientas para el diagnóstico
niveles bajos del factor de crecimiento insulínico de la fragilidad, y de hecho, en los estudios publicados
tipo 1 (IGF-I), de dehidroepiandrosterona sulfato en la literatura, es difícil encontrar una definición es-
(DHEA-S) y de vitamina D28, 29. Durante el envejeci- tándar31. Sin duda, los criterios diagnósticos más utili-
miento se produce disminución de hormonas zados han sido los de Fried7, apropiados para la defini-
anabólicas, que se relaciona con la fragilidad y la ción de un fenotipo clínico. Otra estrategia diagnóstica
pérdida involuntaria de músculo esquelético. Los forma parte del denominado modelo acumulativo uti-
andrógenos y la hormona del crecimiento están lizado por Rockwood, posteriormente resumido en sie-

DHEA-S: dehidroepiandrosterona sulfato; FNT: factor de necrosis tumoral; IGF-1: factor de crecimiento
dependiente de insulina tipo 1; IL-1: interleucina 1; IL-6: interleucina 6; PCR: proteína C reactiva.

Figura 3.  Fisiopatología de la fragilidad.


Tema 33.  Sarcopenia y fragilidad en el anciano 531

MME: masa muscular esquelética.


Modificado de: Cesari M, Landi F, Vellas B, Bernabei R, Marzetti E. Sarcopenia and physical.
frailty: two sides of the same coin. Front Aging Neurosci. 2014;6:192.

Figura 4.  Relación entre sarcopenia y fragilidad.

te ítems, que cuantifica la adición progresiva de déficits, probable que el MNA identifique riesgo de desnutri-
es decir, considera a la fragilidad como una entidad di- ción o desnutrición en estadio precoz, ya que aborda
námica32. La herramienta «Frail» constituye también una varios aspectos de interés especial en el anciano, como
forma sencilla de definir la fragilidad en la práctica clíni- la presencia de alteraciones cognitivas y físicas, por su
ca33. En la tabla 2 se muestran estas herramientas. importancia en este colectivo35.
Según el último consenso, la población que se benefi-
ciaría de intervención precoz es aquella mayor de 70 años,
4.  Objetivos nutricionales
sin evidencia de deterioro funcional, con pérdida de peso
reciente (> 5% en 1 año) en relación con patología médi- Una vez realizada esta valoración nutricional inte-
ca25. Los estudios tratan de identificar a los sujetos en un gral, la primera medida terapéutica consistiría en in-
estado prefrágil, es decir, antes de que se establezca defi- tentar corregir las posibles conductas inadecuadas o
nitivamente la fragilidad. El interés radica en plantear in- los factores que dificultan la ingesta, como la escasa
tervenciones multidisciplinares donde el papel que des- higiene bucal o la falta de dientes, y los hábitos con
empeña la intervención nutricional es fundamental34. horarios de comidas desorganizados. Los consejos die-
téticos representarían el siguiente paso, a los que hay
que asociar recomendaciones sobre estilos de vida sa-
3.  Valoración nutricional
ludable, como la realización de ejercicio físico regular.
La valoración completa del estado nutricional permi- Los objetivos de la intervención nutricional en la fra-
te el diagnóstico adecuado de los problemas nutricio- gilidad-sarcopenia son:
nales. Además de clasificar al individuo en función de
su situación nutricional, permite estimar los requeri- 1) Mejorar el estado nutricional.
mientos del paciente y es la base de la intervención. La 2) Recuperar la fuerza y la MME.
estrategia de valoración no difiere de la que debe rea- 3) Acelerar la recuperación funcional.
lizarse en otras patologías, haciendo especial hincapié 4) Mitigar o prevenir las complicaciones asociadas.
en composición corporal, fuerza y función muscular.
En pacientes ancianos, la herramienta Mini Nutritional De manera directa, el grado de cumplimiento de es-
Assessment (MNA) puede valorar la situación nutricio- tos objetivos ha demostrado reducción en el número
nal si se integra dentro de la valoración geriátrica gene- de hospitalizaciones, mejoría en la calidad de vida y en
ral. El propósito del MNA es detectar la presencia de la mortalidad temprana24.
desnutrición o de riesgo, especialmente en los ancia- Las intervenciones en fragilidad-sarcopenia deben
nos en programas de cuidados en domicilio, institucio- ser de tipo interdisciplinar y se basan en dos pilares:
nes y hospitales. Si además existe fragilidad, es más intervención nutricional y ejercicio físico36.
532 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

Tabla 2.  Criterios diagnósticos de fragilidad

· Pérdida ponderal involuntaria (≥ 4,5 kg durante el pasado año)


· Agotamiento expresado por el paciente (respuesta positiva a cualquiera de estas
preguntas en la Escala de Depresión del Center for Epidemiologic Studies (CES-D): «Siento
que cada cosa que hago me supone un esfuerzo» y «No podría continuar», al menos 3-4
días a la semana).
Fried7
· Debilidad: Disminución de la fuerza muscular estimada por dinamómetro. Puede utlizarse
la siguiente aproximación:
Prefragilidad:
Fuerza de prensión de la mano dominante < 20%, ajustada por sexo e IMC:
1-2 criterios
– ≤ 17 kg para IMC ≤ 23 kg/m2
Fragilidad:
– ≤ 17,3 kg para IMC 23,1-26 kg/m2
3 o más criterios
– ≤ 18 kg para IMC 26,1-29 kg/m2
– ≤ 21 kg para IMC > 29 kg/m2
· Baja velocidad de la marcha (ajustada por sexo y por altura).
· Actividad física escasa (autorreferida por el paciente o medida por métodos objetivos).
Puede utilizarse para la definición el quintil más bajo para cada sexo.
· Muy buena capacidad física: robusto, activo, con energía, motivado y en forma.
· Buena capacidad física: sin enfermedad activa, pero con menor forma física que los
incluidos en la categoría anterior.
· Buena capacidad física con enfermedad crónica tratada: síntomas debidos a la
enfermedad, pero que están bien controlados cuando se compara con los sujetos de la
categoría siguiente.
· Aparentemente vulnerable: aunque no francamente dependientes, estas personas
Rockwood32
generalmente se quejan de estar más «enlentecidos» o tener síntomas atribuibles a la
enfermedad.
· Fragilidad leve: con dependencia para realizar actividades instrumentales de la vida diaria.
· Fragilidad moderada: se necesita ayuda para realizar tanto actividades instrumentales
como no instrumentales de la vida diaria.
· Fragilidad grave: completamente dependiente para actividades de la vida diaria o estado
terminal.
Frail33 - ¿Está usted cansado?
Prefragilidad: - ¿Es incapaz de subir un piso de escaleras?
1-2 criterios - ¿Es incapaz de caminar una manzana?
Fragilidad: - ¿Tiene más de cinco enfermedades?
3 o más criterios - ¿Ha perdido más del 5% de su peso en los últimos 6 meses?

IMC: índice de masa corporal.

4.1.  Intervención Nutricional con la existencia o la prevención de sarcopenia y/o fra-


gilidad.
Como se ha descrito previamente, el concepto feno-
típico de fragilidad incluye definiciones muy relaciona-
Proteínas: Se sabe que con el envejecimiento se re-
das con aspectos nutricionales como la pérdida ponde-
quieren más proteínas para mantener un buen estado
ral involuntaria mayor de 4 kg (o mayor del 5%) en el
de salud y alcanzar la reserva suficiente para recuperar-
último año, que a su vez es una de las quejas habituales
se de enfermedades y mantener la situación funcional.
del anciano que acude a las consultas. La intervención
Varios aspectos fisiopatológicos, entre los que destacan
nutricional es considerada uno de los pilares funda-
la presencia de una respuesta anabólica disminuida
mentales en sarcopenia y fragilidad, pero gran parte de
frente al estímulo proteico y un estado de inflamación
la evidencia se basa en estudios a corto plazo, y no se
crónico, explican este hecho. Las recomendaciones pro-
dispone aún de grandes ensayos clínicos de referencia.
teicas previas no consideran estas características, ya
que se basan en estudios de balance nitrogenado y no
4.1.1. Dieta
tienen en cuenta una serie de peculiaridades como el
Tanto nutrientes específicos, como patrones dieté- riesgo de presentar mayor deterioro funcional ante mí-
ticos determinados han sido estudiados en su relación nimos estímulos, con la consiguiente mayor incidencia
Tema 33.  Sarcopenia y fragilidad en el anciano 533

de caídas, fracturas, discapacidad, pérdida de indepen- • Un estilo de vida sedentario reduce la eficiencia de
dencia e incluso muerte. Los requerimientos proteicos los aminoácidos. La calidad de la dieta y la activi-
teóricos son de 1 g/kg/día, pero suelen aumentarse has- dad física son los factores limitantes para mante-
ta 1,2-1,5 g/kg/día en muchos ancianos que viven en ner un adecuado recambio proteico que permita
residencias y se hallan en situaciones de estrés. Ingestas la regeneración muscular.
proteicas elevadas se asocian a una disminución de la • La síntesis proteica muscular requiere al menos
incidencia de fragilidad y ayudan a prevenir el desarro- 30 g de proteínas totales o 15 g de aminoácidos
llo de la misma37. Investigadores del Women’s Health esenciales. La leucina sería un aminoácido básico.
Initiative Observational Study (WHI-OS) han evidencia-
do un efecto protector del aumento en la ingesta pro- Actualmente se han consensuado los requerimientos
teica sobre la incidencia de fragilidad. Un incremento de proteínas para ancianos sanos (PROT-AGE Study
del 20% en la ingesta proteica (con independencia de Group41 y Grupo de Expertos de ESPEN42):
que la fuente sea animal o vegetal y de la calidad de la
proteína) se asocia, en un período de 3 años, con una • Cualitativamente, la lista de aminoácidos indis-
reducción del 32% de incidencia de fragilidad38. Se ha pensables es idéntica para adulos jóvenes y perso-
sugerido un consumo de 25-30 g de proteínas de alto nas de edad avanzada.
valor biológico en cada comida principal para aumen- • No existen datos sobre que las capacidades de ab-
tar la síntesis proteica muscular. Desde este punto de sorción y digestión de proteínas cambien de for-
vista, también se ha defendido la ingesta de 6 g de ma significativa con la edad.
aminoácidos esenciales por comida. La fuente de pro- • Para mantener y recuperar músculo, los ancianos
teína también es importante, pues el aumento de ami- necesitan más proteínas que los jóvenes. Se sugie-
noácidos esenciales, y particularmente de leucina, es re consumir 1-1,2 g de proteínas/kg de peso/día.
clave en el período postprandial para el estímulo de la • El umbral anabólico de la ingesta de proteínas/
síntesis proteica muscular. Sin embargo, el impacto de- aminoácidos es más alto en mayores (25-40 g de
finitivo de la leucina sobre el metabolismo muscular proteínas/comida, con un contenido en leucina de
durante la inactividad aún tiene que ser definido, así 2,5-2,8 g).
como el papel del β-hidroxi- β-metilbutirato (HMB; me- • En ancianos con enfermedad aguda o crónica la
tabolito de la leucina), que puede atenuar la pérdida cantidad de proteínas añadidas a la dieta depende
muscular y aumentar la masa muscular y la fuerza en de la enfermedad, de su severidad y del estado
ancianos39. También se ha investigado sobre el papel de nutricional previo a la enfermedad, así como del
las proteínas del suero láctico («proteínas rápidas»), impacto de la enfermedad sobre el estado nutri-
que tardan menos tiempo en estar disponibles tras su cional del paciente. La mayor parte de los ancia-
ingesta, con respecto a otras proteínas como las deriva- nos con una enfermedad aguda o crónica necesita
das de la caseína láctea posiblemente por su alto con- más proteínas dietéticas: 1,2-1,5 g/kg de peso/
tenido en aminoácidos ramificados. Pero faltan estu- día. Aquellos con enfermedad o lesión severas, o
dios definitivos en este sentido. con malnutrición marcada, pueden necesitar has-
Se sabe que el ejercicio mejora la síntesis proteica ta 2 g/kg de peso/día. Los ancianos con enferme-
reduciendo el componente de resistencia insulínica. dad renal crónica avanzada (filtrado glomerular
Este efecto alcanza su máxima intensidad en las prime- estimado < 30 ml/min) sin diálisis, son una excep-
ras 3 horas tras el ejercicio, aunque puede prolongarse ción; estos necesitan limitar su ingesta proteica.
hasta 24 horas después. • El enriquecimiento alimenticio con leucina o una
En una revisión reciente sobre sarcopenia se especifi- mezcla de aminoácidos de cadena ramificada po-
ca que40: dría contribuir a incrementar la MME y su función,
pero se requieren más estudios para avalar estas
• La mayoría de los adultos se benefician de inges- recomendaciones43.
tas proteicas superiores a las establecidas por las • La fuente de proteínas, el momento de la ingesta
Ingestas Dietéticas de Referencia. y la suplementación con aminoácidos deben te-
• Este aporte aumentado es beneficioso, no solo nerse en cuenta al hacer recomendaciones.
para mantener la MME, sino para el manejo de • Ha de considerarse la suplementación con amino­
otras entidades como la obesidad, la osteoporo- ácidos o proteínas en proximidad con el ejercicio fí-
sis, la diabetes mellitus y el síndrome metabólico. sico. Algunas evidencias apoyan su empleo tras di-
• Los requerimientos de proteínas son proporciona- cha sesión, especialmente en ancianos frágiles,
les al peso corporal, no a la ingesta de energía, ya desnutridos e institucionalizados44, aunque también
que esta se reduce con el envejecimiento. se ha estudiado en frágiles no institucionalizados45.
• Las necesidades de proteínas aumentan en 1%
por cada descenso de 100 kcal en la ingesta ener- Vitamina D: Se trata de un micronutriente esencial
gética por debajo de las 2000 kcal diarias. para preservar la función ósea. La administración oral
534 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

de 800 UI de vitamina D diarias ha demostrado ser efi- nan la pérdida ponderal con mayor mortalidad, una
caz en la mejoría de la fuerza muscular y de la función reducción moderada de peso podría mejorar la situa-
en ancianos, así como en la prevención de caídas y de ción funcional en obesos, siempre y cuando se consiga
fracturas. En el metaanálisis de Bischoff-Ferrari46, la su- mantener la masa muscular. La intervención combina-
plementación con vitamina D con dosis por encima de da con dieta y ejercicio permitiría mejorar fuerza y cali-
700 UI, alcanzando niveles de al menos 60 nmol/l en dad muscular en obesos. Se recomienda para ello una
plasma, reduce las caídas en un 19%, no obstante di- dieta con restricción calórica moderada (200-700 kcal)
cha asociación suscita a día de hoy gran controversia. pero con un aporte mayor de proteínas de alto valor
Calcio: La suplementación de vitamina D debe ir aso- biológico (hasta 1,5 g/kg diarios). En este caso la pres-
ciada a la de calcio elemento. En España la dosis diaria cripción combinada de ejercicio físico sería útil para
recomendada es de 1200-1500 mg, salvo que exista reducir la pérdida de masa libre de grasa51.
malabsorción, en cuyo caso se recomiendan hasta 4 g
diarios. En los ancianos, y especialmente en aquellos
4.1.2.  Nutrición artificial
que estén en tratamiento con inhibidores de la bomba
de protones o inhibidores H2, es preferible la presenta- Como se ha comentado, los requerimientos de pro-
ción en forma de citrato cálcico, que no depende del teínas en personas mayores se establecen en puntos
pH gástrico para la liberación del calcio elemento. algo más elevados que en jóvenes, así que pueden ser
Ácidos grasos poliinsaturados (AGPI): AGPI tipo ome- difíciles de alcanzar basándose en la ingesta oral tradi-
ga 3 reducen significativamente los procesos inflamato- cional. Es por ello que el empleo de suplementación
rios, previenen la trombosis, las arrtimias, permiten la oral, puede ser fundamental para lograr unos objetivos
vasodilatación y disminuyen la concentración de trigli- realistas.
céridos en sangre. El objetivo es que la relación ome- En una revisión sistemática reciente que valoró los
ga-6: omega-3 sea baja (entre 2:1 y 10:1)47. El empleo estudios de intervención con tratamiento nutricional
de ácidos grasos omega-3 derivados del pescado mejo- (preparados de proteínas, aminoácidos esenciales,
ra la respuesta anabólica muscular mediante una ampli- creatina, HMB, vitamina D y múltiples nutrientes) y/o
ficación de las vías de síntesis proteica (mTOR –diana de ejercicio físico, sobre la sarcopenia como objetivo pri-
rapamicina en células de mamífero–). En un estudio de mario, se observó que la masa muscular aumentó con
intervención, el consumo de aceite de pescado durante el ejercicio, pero solo pudo observarse en ocho ensayos
6 meses se asoció a una mejoría de la velocidad de la clínicos un efecto adicional de la suplementación oral
marcha en mujeres postmenopáusicas48. sobre la MME. Lo mismo ocurrió para la fuerza muscu-
lar y la función física. No obstante, se observó una gran
Fibra dietética: Las alteraciones digestivas que se pro- heterogeneidad en los protocolos empleados y que la
ducen con la edad, como la disminución de nutrientes mayor parte de los ancianos incluidos estaban bien nu-
o alteraciones de la microflora intestinal saprófita, pue- tridos, lo que pudo haber contribuido a los resultados
den afectar a la salud general y al estado nutricional del expuestos52. En un ensayo clínico sobre ancianos des-
individuo. La principal diferencia entre la salud intesti- nutridos con sarcopenia, la adición de su suplemento
nal en adultos y ancianos es la proporción de especies oral consumido 2 veces al día (330 kcal; 14 frente a
de bacterias «beneficiosas» y «patógenas». La fibra pre- 20 g de proteínas en cada uno de los grupos) mejora-
biótica en la dieta favorece la proliferación de especies ron la fuerza muscular y la velocidad de la marcha. En
beneficiosas. La administración de 6-8 g de fibra pre- pacientes con sarcopenia no severa la mejoría de la
biótica en forma de fructooligosacáridos en ancianos fuerza muscular fue mayor en los suplementados con
frágiles favorece la proliferación de bifidobacterias49. HMB que en los que no recibieron este metabolito53.
En relación con la fragilidad, los estudios de inter-
En una revisión reciente que valora la asociación de vención han sido más escasos. El empleo de suplemen-
factores dietéticos con la fragilidad, se ha descrito una tación oral (300-600 kcal diarias; 25-40 g de proteínas)
relación inversa con niveles plasmáticos de vitamina D, en ancianos frágiles se ha asociado a mejoría en la mo-
ingesta de calorías, proteínas, vitaminas D, E, C, ácido vilidad, en la función y en la potencia muscular. En uno
fólico y carotenoides, dieta con alto contenido en anti­ de los estudios, este efecto solo pudo observarse tras
oxidantes, y consumo de lácteos con poca cantidad de combinar el tratamiento con ejercicios de fuerza, y en
grasa. La adherencia a la dieta mediterránea también se otro, con un seguimiento más prolongado en el tiem-
ha relacionado con prevalencia e incidencia de fragili- po, los efectos desaparecieron más allá de 9 meses50.
dad más bajas, pero no todos los autores han podido
demostrar esta asociación. De momento no hay ningún
4.2.  Intervención farmacológica
ensayo clínico aleatorizado que valore la eficacia de un
patrón dietético en la prevención de la fragilidad50. Testosterona: En varones con hipogonadismo, la sus-
Merece la pena reseñar la existencia de fragilidad titución con testosterona disminuye la masa grasa, y
asociada a obesidad. Si bien muchos estudios relacio- aumenta la MME y la fuerza. Sin embargo, en varones
Tema 33.  Sarcopenia y fragilidad en el anciano 535

sanos con sarcopenia, dicho tratamiento no siempre ha grelina sintética– (dicha hormona favorece la liberación
conducido a aumento de la capacidad física. No obs- pulsátil de GH y estimula el apetito a través de vías hi-
tante, debe tenerse en cuenta que el riesgo cardio­ potalámicas) con resultados contradictorios, y con se-
vascular puede verse aumentado. La recomendación cretagogos de GH como la capromorelina o la tesamo-
actual sobre el tratamiento con testosterona propone relina57.
que aquellos varones con síntomas y signos claros de
deficencia androgénica, incluyendo fuerza y MME dis- Otros fármacos que han demostrado resultados pro-
minuidas, y cifras de testosterona plasmática inequívo- metedores, pero aún no concluyentes, son: inhibidores
camente bajas, deberían tratarse, aunque una ausencia de la enzima convertidora de angiotensina (ensayos
de mejoría en los 4-6 meses siguientes, debería hacer clínicos con perindopril y fosinopril han ofrecido datos
considerar la retirada. Es bien conocido el hecho de que contradictorios con respecto a la capacidad funcional y
los varones obesos tienen niveles más bajos de testoste- a la fuerza muscular), bloqueantes de la miostatina –
rona, pero no hay ensayos clínicos que evalúen el trata- regulador negativo de la masa muscular, sintetizado
miento hormonal sustitutivo si se asocia sarcopenia. en tejidos adiposo y muscular– (folistatina, trichostati-
Otros fármacos ensayados en este sentido han sido los na A, anticuerpos recombinantes anti-miostatina),
moduladores sintéticos de andrógenos (nortestostero- factores de crecimiento IGF-1 y factor de crecimiento
na) o los moduladores selectivos de los receptores de mecánico, factor neutrofílico ciliar, agentes antiinfla-
andrógenos (ostarina), que tiene efectos probados so- matorios (ácidos grasos omega-3, inhibidores de la ci-
bre el músculo –en modelos animales-, pero carecen de clooxigenasa), creatina, bicarbonato, Ginkgo biloba,
los efectos negativos de los andrógenos54. coenzima Q y agonistas de receptores β.

Dehidroepiandrosterona: Los estudios muestran 4.3.  Intervención sobre el ejercicio físico


resultados contradictorios. Así, la administración de
50 mg/día durante 12 semanas en mujeres postme- Los beneficios del ejercicio físico en el envejecimien-
nopáusicas, combinado con ejercicios contra resisten- to, y específicamente en la fragilidad, han sido objeto
cia, no muestra beneficios adicionales a corto plazo. de investigación científica reciente. Las intervenciones
Tampoco a largo plazo en varones y mujeres con nive- de ejercicio parecen desempeñar un papel sobre la
les normales o bajos, mientras que dosis más elevadas fuerza muscular y la mejora del rendimiento físico,
de 100 mg/día durante 6 meses podrían aumentar la aunque no parecen aumentar consistentemente la
MME en varones, pero no en mujeres55. MME en las personas ancianas frágiles y sedentarias
que viven en la comunidad10. También se ha compro-
Estrógenos: La mayoría de los estudios realizados en bado cómo un nivel de actividad física alto en el ancia-
mujeres postmenopáusicas apuntan a que la sustitu- no, se ha asociado con una disminución del riesgo de
ción estrogénica no aumenta la fuerza muscular a cor- mortalidad, enfermedades crónicas, institucionaliza-
to (resultados discordantes en fuerza muscular, masa ción y deterioro cognitivo y funcional. De manera más
magra y en masa grasa) ni largo plazo. La tibolona, un concreta, el tipo de ejercicio más beneficioso en el an-
compuesto de perfil hormonal estrogénico, progestá- ciano frágil es el denominado entrenamiento multi-
geno y androgénico, ha mostrado a medio plazo, a componente. Este tipo de programas combinan entre-
dosis de 2,5 mg/día, un aumento en la fuerza de pren- namiento de fuerza, resistencia, equilibrio y marcha, y
sión, de la masa magra, y posiblemente también re- se han mostrado eficaces en la mejoría de la capacidad
ducción de la masa grasa. No obstante, si se elige de funcional, que es un elemento fundamental para el
forma apropiada la población diana, el tratamiento mantenimiento de la independencia en las actividades
hormonal sustitutivo podría prevenir o revertir la pérdi- básicas de la vida diaria de los ancianos58. Incluyen:
da de MME y el descenso de la función física56.
Ejercicio de fuerza muscular (o contra resistencia):
Hormona de crecimiento (GH): En ensayos clínicos, Consiste en la realización de contracciones dinámicas o
el tratamiento con hormona de crecimiento, tanto en estáticas contra una resistencia: con pesas, con máqui-
sujetos con deficiencia como sin ella, ha demostrado nas de resistencia o con cintas elásticas. Ha sido la in-
aumento de la MME, pero los datos sobre la fuerza no tervención más eficaz para revertir la sarcopenia en los
han sido consistentes en todos los casos. Quizás, los mayores, tanto en sanos como en frágiles. Aun tratán-
resultados más llamativos se han conseguido tras el dose de evidencia de no muy alta calidad, este tipo de
tratamiento combinado con testosterona (aumento de ejercicio mejora la función física en todos los estudios
la masa libre de grasa, disminución de la masa grasa, y con esta medida y aumenta la MME y la fuerza muscu-
aumento de la fuerza muscular –este último evento lar en una gran proporción de los ensayos aleatoriza-
solo en algunos ensayos clínicos–); pero los efectos ad- dos publicados10. El metanálisis realizado por Cochrane
versos no han sido banales. También se están realizan- Database59 sobre ejercicio físico de fuerza demostró
do ensayos clínicos con miméticos de la grelina o con que la realización de una rutina, 2 o 3 veces a la sema-
536 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

na, daba como resultado un incremento pequeño, suplemento nutricional y ejercicio físico60. Asimismo, el
pero significativo, de la capacidad física, la velocidad grupo PROT-AGE Study Group recomienda una ingesta
de la marcha, la capacidad para ponerse de pie de una proteica elevada (20 g de proteínas) próxima al final de
silla sin ayuda y la fuerza muscular. Además, la realiza- las sesiones de ejercicio físico41.
ción de ejercicios de fuerza durante un año, en ancianos
frágiles intervenidos de fractura de cadera, ha demostra-
5. Resumen
do disminuir la incidencia de reingresos hospitalarios e
institucionalización. Debe comenzarse lentamente, con La fragilidad es un síndrome geriátrico caracterizado
un aumento progresivo de la intensidad para evitar le- por pérdida de peso, astenia, debilidad, marcha lenta
siones. Las recomendaciones específicas consisten en y disminución de la actividad física, que supone un
realizar estos ejercicios con pesas 2-3 días por semana, aumento de vulnerabilidad frente a agresiones. Es más
en 1-3 series de 8-12 repeticiones cada una, incluyendo común en mujeres, en obesos y en pacientes con enfer-
los 8-10 grupos musculares mayores, con una intensi- medades crónicas como la diabetes mellitus. La sarco-
dad del 70-80% de la potencia máxima que puede rea- penia, o pérdida de la MME con fuerza y función
lizarse con ese grupo muscular, y con un descanso de un muscu­lares reducidas, es característica de la fragilidad,
minuto entre las series. pero no todos los pacientes con sarcopenia presentan
dicha condición. Ambas comparten vías fisiopatológi-
Ejercicio aeróbico: Se recomienda caminar o ir en bi- cas comunes como la inflamación. La prevalencia des-
cicleta a un 60% de la frecuencia cardiaca máxima. Es- crita de cada una de ellas es muy variable en función de
tas actividades han de realizarse entre 3-7 días a la se- la población estudiada y de la estrategia diagnóstica
mana, durante 20-60 minutos por sesión. empleada. Aunque no existe una definición de cada
una de las entidades totalmente establecida, se dispo-
Ejercicios de equilibrio: Son ejemplos de este tipo de ne de diversas herramientas y de consensos que permi-
ejercicio el taichí, la marcha en tándem, mantenerse ten una aproximación objetiva a su diagnóstico. El tra-
de pie sobre un solo pie, subir y bajar escaleras lenta­ tamiento está encaminado a incrementar la masa y la
mente, caminar sobre puntas y talones, etc. Debería fuerza musculares y a mejorar la función física, y se
practicarse entre 1-7 días a la semana, en 1-2 series de basa en dos abordajes fundamentales: nutrición y ejer-
4-10 ejercicios diferentes, aumentando la dificultad de cicio. El planteamiento dietético se fundamenta en
forma progresiva. aportar la cantidad necesaria de energía para mante-
ner un peso saludable y proteínas en cuantía suficiente
Ejercicios de flexibilidad: Son los ejercicios encamina- para permitir la síntesis proteica muscular. Además,
dos a aumentar la amplitud de los movimientos en los otros nutrientes pueden ser relevantes en el tratamien-
grupos musculares mayores. Recomendados 1-7 días en to de estas condiciones (ácidos grasos omega-3, vita-
semana. La distensión del músculo debe mantenerse mina D, fibra dietética). El patrón de dieta mediterrá-
20 minutos, con intensidad progresivamente más elevada. neo se ha asociado en varios estudios prospectivos a
disminución de la incidencia de fragilidad, pero no se
La mayor parte de los estudios sugieren sesiones de dispone de ensayos clínicos aleatorizados en este sen-
90 minutos semanales, distribuyendo 15 para el equili- tido. Los estudios sobre suplementación oral resultan
brio, 15 para la flexibilidad, 30 para el ejercicio aeróbi- discrepantes por su heterogeneidad, pero son más los
co y 30 para los ejercicios de fuerza. De nuevo, la ma- trabajos que hallan un efecto sinérgico de dicha suple-
yor parte de los ensayos clínicos realizados con pautas mentación, sobre MME y función, con el ejercicio físi-
mixtas de ejercicio, han demostrado mejoría de la fuer- co. Los tratamientos farmacológicos para sarcopenia
za y de la capacidad funcional, mientras que el aumen- aún se encuentran en una fase preliminar de desarrollo
to de la MME solo ha sido descrito en algunos de y todavía no pueden recomendarse en la práctica clíni-
ellos10. El grupo de expertos del PROT-AGE Study ca habitual, fuera de patologías por déficit que requie-
Group y la ESPEN recomiendan ejercicio de fuerza ran de sustitución. Un ejercicio físico que combine tra-
30 minutos al día, a un nivel individualizado seguro y bajo aeróbico, fuerza, flexibilidad y equilibrio parece
bien tolerado, si es posible, 2 o 3 veces por semana ser el más adecuado para mejorar función en los ancia-
durante 10-15 minutos por sesión41, 42. nos con función muscular deteriorada o en riesgo.
Los efectos anabólicos de la insulina y los aminoáci-
dos sobre la síntesis de proteínas se potencian a través 6. Bibliografía
de la actividad física y de algunos nutrientes, y se ven
afectados por un estilo de vida sedentario y/o inmovili- 1. United Nations. World Population Ageing: 1950-
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Tema 33.  Sarcopenia y fragilidad en el anciano 537

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Tema 33.  Sarcopenia y fragilidad en el anciano 539

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71: 197-205. 2013; 14: 10-7.
Tema 34. 
Soporte nutricional en el paciente séptico y crítico
Natalia Pérez Ferre
Médico adjunto. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico San Carlos. Madrid

Teresa de Grado Manchado


Médico adjunto. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Infanta Elena.
Valdemoro (Madrid)

Rona Penso Espinoza


Residente de Cuarto año en el Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico San Carlos. Madrid

Alejandra Durán Rodríguez-Hervada


Médico adjunto. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico San Carlos. Madrid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 541-552.

1. Introducción
2.  Fisiopatología y diagnóstico
3.  Objetivos nutricionales
4.  Valoración nutricional
5.  Soporte nutricional artificial
6.  Nutrición en situaciones especiales en UCI
7. Resumen
8. Bibliografía

1. Introducción del paciente durante la respuesta al estrés. Reciente-


mente, esta estrategia ha evolucionado hasta el con-
En los últimos años ha sido objeto de debate y centro cepto de terapia nutricional, cuyo objetivo es ayudar a
de numerosos estudios el soporte nutricional en pacien- atenuar la respuesta metabólica al estrés, prevenir el
tes críticos, considerados como tales los que presentan daño celular oxidativo y modular favorablemente la res-
fallo de al menos un órgano y desarrollan una respuesta puesta inmune.
inflamatoria sistémica, sin incluir aquellos que perma- Un elevado porcentaje de pacientes críticos (80-
necen en las unidades de cuidados intensivos (UCI) para 90%) requieren soporte nutricional mediante fórmulas
monitorización durante menos de tres días. de nutrición enteral (NE) y/o suplementos orales (SON);
La desnutrición calórico-proteica, antes y durante la sin embargo, en un 10-15% la NE está contraindicada
hospitalización, se asocia a un incremento de la morbi- y es precisa la nutrición parenteral (NP).
mortalidad. Es necesario un adecuado aporte nutricio- Un abordaje nutricional precoz, preferiblemente por
nal para el funcionamiento celular y la reparación de la vía enteral, es capaz de mejorar el curso clínico del
tejidos1, 2. La desnutrición se asocia con debilidad muscu­ paciente crítico, reduciendo las complicaciones y los
lar, incremento de las infecciones hospitalarias y días de estancia en la UCI, y disminuyendo la elevada
aumento de la estancia en cuidados intensivos. tasa de morbimortalidad presente en este ámbito.
La prevalencia de desnutrición calórico-proteica se
estima entre un 20-40% en UCI3. Tradicionalmente el
2.  Fisiopatología y diagnóstico
soporte nutricional en el paciente crítico se consideraba
como un tratamiento complementario destinado a pre- La fisiopatología de la desnutrición en los pacientes
servar la masa magra y mantener el estado nutricional críticos es multifactorial. En las últimas tres décadas se

541
542 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

han realizado importantes avances en la comprensión La valoración nutricional completa debe incluir una
de los efectos moleculares y biológicos de los nutrien- evaluación de las comorbilidades o de la presencia de
tes sobre el mantenimiento de la homeostasis en el enfermedades que interfieran en el estado nutricional
paciente crítico. En ellos existe un estado catabólico e como neoplasia, insuficiencia hepática o renal, isque-
incremento de la respuesta inflamatoria con: mia intestinal, etc. Asimismo, resulta fundamental eva-
luar el funcionamiento del tracto gastrointestinal y el
• Aumento de hormonas contrarreguladoras (corti- riesgo de aspiración.
sol, catecolaminas, glucagón) y de citoquinas No se recomienda utilizar marcadores bioquímicos
proinflamatorias: interleucina 1(IL-1), interleucina tradicionales debido a que no están validados para el
6 (IL-6), interleucina 8 (IL-8) y factor de necrosis paciente crítico. Los valores de proteínas plasmáticas
tumoral α (FNT α). –albúmina, prealbúmina, transferrina, proteína trans-
• Cambios hormonales que producen un aumento portadora de retinol– están disminuidos en este contex-
de la glucogenólisis, de la gluconeogénesis y de la to por la inflamación y/o la infección (incremento de la
lipólisis, elevando la glucosa, los ácidos grasos y permeabilidad vascular, alteración de la síntesis hepática
los aminoácidos en el torrente sanguíneo que, sin de proteínas) y no son marcadores útiles de desnutrición
embargo, son escasamente utilizados por diversos proteica. Otros marcadores como los niveles de calcito-
factores como la insulín-resistencia, la inhibición nina, proteína C reactiva, IL-1, FNT α, IL-6 y citrulina, han
de la lipoproteín-lipasa y los niveles disminuidos sido utilizados en estudios clínicos, pero aún no deben
de glutamina (Gln)2, 4. aplicarse en la práctica clínica hasta ser validados.
La medición de la masa muscular y sus cambios apor-
Esta respuesta se acompaña de aumento de morbili- ta una información de gran valor, aunque aún no está
dad por infecciones, disfunción multiorgánica, incremen- establecida en la práctica como parte de la valoración
to del tiempo de hospitalización y mayor mortalidad. nutricional del paciente crítico, a la espera de los resul-
Las infecciones, la cirugía y otras situaciones de es- tados de los estudios clínicos. Podría medirse mediante
trés en el paciente crítico aumentan los requerimientos ecografía a pie de cama, ya que es un método asequi-
energéticos, proteicos y de micronutrientes5, 6. ble y poco costoso8. La tomografía computarizada (TC)
puede proporcionar un estudio completo de composi-
ción corporal, sin embargo, es un procedimiento difícil
3.  Objetivos nutricionales
de obtener en la práctica diaria9.
El soporte nutricional en los pacientes críticos esta- La evaluación de la función muscular aportaría tam-
blece como objetivos principales: bién una valiosa información, pero los métodos de me-
dición, su reproducibilidad y la aplicación en el pacien-
• Disminuir la respuesta metabólica al estrés. te crítico están aún en estudio.
• Preservar la masa magra del individuo. Deben calcularse los requerimientos calóricos para
• Prevenir el daño oxidativo celular. establecer los objetivos del tratamiento nutricional. El
• Favorecer y modular la respuesta inmune. gasto energético es difícil de valorar en los pacientes
críticos. La calorimetría indirecta continúa siendo el
patrón de oro para calcular el gasto energético basal,
4.  Valoración nutricional
pero no está disponible en la mayoría de las Unidades
Según las últimas guías de la ASPEN (American Socie- de Cuidados Intensivos por su elevado coste.
ty of Parenteral and Enteral Nutrition)7, se recomienda la Las ecuaciones comunes de cálculo calórico como
determinación del riesgo nutricional mediante herra- Harris-Benedict son poco precisas en pacientes con pe-
mientas como el Nutritional Risk Screening (NRS 2002) sos extremos y con patologías críticas sometidas a un
o el NUTRIC score (calculadora on-line: http://www. alto estrés. Los fármacos, otros tratamientos y la tem-
rccc.eu/calculadoras/NUTRIC-score.html) en todos los peratura corporal pueden afectar al gasto calórico.
pacientes que ingresan en la UCI, en los que se prevé Para calcular el gasto energético total (GET), además
que la ingesta oral pueda ser insuficiente. Estos dos test del gasto energético basal (GEB), hay que tener en
de cribado son los más indicados frente a otros como: cuenta un factor de corrección atribuido a la enferme-
Mini Nutritional Assessment (MNA), Malnutrition Uni- dad (FE), que en el caso de los pacientes críticos es alto,
versal Sreening Tool (MUST), Short Nutritional Assess- estimándose en 1,3-GET= GEB x FE-.
ment Questionnaire (SNAQ), Malnutrition Screening Para los cálculos se debe emplear el peso real en pa-
Tool (MST) y la Valoración Global Subjetiva (VGS), por- cientes desnutridos y normonutridos y el peso estima-
que pueden valorar tanto el estado nutricional como la do en seco en pacientes edematosos o en anasarca.
severidad de la enfermedad. Se define al paciente en Según las últimas recomendaciones de la ASPEN, los
riesgo con un NRS 2002 ≥ 3 o con un NUTRIC Score ≥ 5 requerimientos calóricos se pueden calcular mediante
si la IL-6 no es incluida en la valoración (si es incluida la una fórmula simple basada en el peso: 25-30 kcal/kg
definición de riesgo se haría con un score ≥ 6) (Tabla 1). de peso/día7.
Tema 34.  Soporte nutricional en el paciente séptico y crítico 543

Tabla 1.  NUTRIC score para la valoración nutricional del paciente crítico.

Variable Rango Puntuación


< 50 0
Edad 50-74 1
≥ 75 2
< 15 0
Apache II (Acute Physiology and 15-19 1
Chronic Health Evaluation II) 20-27 2
≥ 28 3

SOFA (Sequential Organ Failure


<6 0
6-9 1
Assessment)
≥ 10 2
0-1 0
Número de comorbilidades
≥2 1
Días de estancia en el hospital 0 -< 1 0
hasta el ingreso en UCI ≥1 1
0 -< 400 0
IL-6
≥ 400 1
Puntuación
6-10 Asociado con peores resultados clínicos (mortalidad, ventilación)
Pacientes que más se van a beneficiar de un soporte nutricional agresivo
0-5 Bajo riesgo nutricional
Puntuación sin incluir el valor de IL-6
5-9 Asociado con peores resultados clínicos (mortalidad, ventilación)
Pacientes que más se van a beneficiar de un soporte nutricional agresivo
0-4 Bajo riesgo nutricional

* Es aceptable no incluir IL-6 si no estuviera disponible, ya que ha mostrado poca contribución
a la capacidad predictiva del NUTRIC score (en ese caso la puntuación se divide en 0-4 y 5-9).
Tomado de: Heyland DK, Dhaliwal R, Jiang X, Day AG. Identifying critically ill patients who benefit
the most from nutrition therapy: the development and initial validation of a novel risk assessment
tool. Critical Care. 2011;15:R26849.

Las últimas guías canadienses (Canadian Society for cierto grado de hiponutrición permisiva. La evidencia
Clinical Nutrition, CSCN)10 concluyen que existen datos actual sugiere que la nutrición hipocalórica e hiperpro-
insuficientes para emitir recomendaciones sobre el uso teica puede disminuir la tasa de complicaciones infec-
de la calorimetría indirecta versus fórmulas predictivas ciosas y mejorar el control glucémico, optimizando así
para el cálculo de los requerimientos calóricos en el los resultados.
paciente crítico. Las guías españolas (SEMICYUC, Sociedad Española
El paciente obeso crítico tiene igual riesgo de desnu- de Medicina Intensiva y Unidades Coronarias) reco-
trición y degradación de masa muscular como respues- miendan, para todos los grados de obesidad con IMC
ta al estrés metabólico que el paciente no obeso, por lo superior a 30, no superar el 60-70% del objetivo caló-
que se debe realizar una adecuada evaluación del gasto rico (11-14 kcal/kg de peso actual/día o 22-25 kcal/kg
energético. La aplicación de fórmulas habituales para el de peso ideal/día). En obesidad mórbida se recomienda
cálculo de las necesidades calóricas puede sobreesti- aportar entre el 50-60 % del gasto calórico medido o
marlas si se utiliza el peso real, por lo que sería más 18-20 kcal/kg de peso ideal. En obesidad no mórbida
adecuado utilizar el peso ajustado o el peso ideal. Existe es posible utilizar la nutrición hipocalórica, al igual que
controversia entre aplicar un criterio estricto de soporte en la obesidad mórbida, o estimar entre 20-25 kcal/kg
nutricional ajustado a los requerimientos, o aplicar un de peso ajustado/día11.
544 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

En este aspecto, la ASPEN recomienda la utilización de 5.1.1. Indicaciones


fórmulas predictivas para el cálculo de requerimientos
calóricos en el paciente obeso si no se dispone de calori- El soporte nutricional en forma de NE debe iniciarse
metría indirecta (tabla 2). Además, sugiere la aproxima- en el paciente crítico que no es capaz de mantener la
ción a un aporte de < 14 kcal/kg de peso actual/día12. ingesta voluntaria7.
El gasto calórico debe ser reevaluado más de una vez En un metanálisis sobre cirugía electiva gastrointesti-
a la semana, ya sea medido por calorimetría indirecta o nal y enfermos críticos quirúrgicos, se observó que los
mediante ecuaciones predictivas, para optimizar las es- pacientes que recibieron NE precoz presentaron una
trategias que permitan cubrir estos requerimientos con reducción de las infecciones, de la estancia hospitalaria
el tratamiento nutricional. y de la dehiscencia de las suturas cuando se compara-
En los pacientes críticos, la proteína resulta ser el ma- ron con los que no la recibieron13.
cronutriente más importante para la resolución de he- Las guías americanas –ASPEN–7 y las canadienses
ridas, para favorecer la respuesta inmune y mantener la –CSCN–10 coinciden en recomendar la NE sobre la NP
masa magra, por lo que es prioritario el cálculo de los como soporte nutricional en el paciente crítico siempre
requerimientos proteicos y su cumplimiento mediante que sea posible. Los beneficios de la vía enteral sobre la
el tratamiento nutricional. Para el cálculo de los reque- parenteral han sido documentados en numerosos en-
rimientos proteicos y su monitorización se recomienda sayos clínicos prospectivos y aleatorizados con pacien-
utilizar la fórmula basada en el peso: 1,2-2 g/kg/día7. tes críticos, incluyendo politraumatizados, quemados,
En el paciente obeso se recomienda un aporte entre cirugía mayor y pancreatitis aguda14-16.
1,8-2,5 g de proteína por kg de peso ideal y día11. La Pocos estudios encuentran diferencias en cuanto a
ASPEN plantea administrar, en obesos, 1,2 g/kg de mortalidad. La consecuencia más reseñable de la NE es
peso actual/día, o bien 2-2,5 g/kg de peso ideal/día12. la reducción de la morbilidad infecciosa (principalmen-
te neumonía, infección de la vía central y absceso ab-
dominal)15, de la estancia hospitalaria y de los costes
5. Soporte nutricional artificial asociados, y la mejoría de la función cognitiva en pa-
5.1. Nutrición enteral cientes con traumatismo craneal17, 18.

La NE favorece el mantenimiento de la integridad in-


5.1.2.  Momento de inicio
testinal, preserva la unión entre las células epiteliales y la
altura de las vellosidades, ayuda a modular la respuesta La NE debe iniciarse de manera precoz, una vez que
inmune –disminuyendo el riesgo de translocación bacte- el paciente esté estable hemodinámicamente. Varios
riana y de infección sistémica–, estimula el flujo sanguí- estudios han explorado el beneficio de la NE temprana,
neo e induce la liberación de hormonas gastrointestinales comparada con la tardía19-21. La guías europeas (ESPEN,
como la colecistoquinina y la gastrina. Las fórmulas ente- European Society for Clinical Nutrition and Metabo-
rales son efectivas como profilaxis de úlceras de estrés. lism) lo recomiendan en las primeras 24 horas, las ca-

Tabla 2.  Cálculo de requerimientos en el paciente crítico con obesidad.


Obeso crítico:
Fórmula Penn State University 2010:
Recomendación fuerte. Evidencia alta.
· Pacientes jóvenes:
RMR (kcal/día) = (MSJ × 0,96) + (Tª máx × 167) + (VE × 31) – 6212
· Pacientes mayores de 60 años:
RMR (kcal/día) = (MSJ × 0,71) + (Tª máx × 85) + (VE × 64) – 3085
* Donde: MSJ: fórmula de Mifflin-St Jeor; VE: ventilación por minuto –L/min–;
Tªmáx: temperatura máxima en las 24 horas previas (en grados centígrados).
Obeso no crítico:
Fórmula de Mifflin-St Jeor utilizando peso corporal real.
Recomendación débil. Evidencia moderada.
· Mujeres: BEE = (10 × peso –kg–) + (6,25 × talla –cm–) – (5 × edad) – 161
· Varones: BEE = (10 × peso –kg–) + (6,25 × talla –cm–) – (5 × edad) + 5
Tomado de: Choban P, Dickerson R, Malone A, Worthington P and the American Society for parenteral
and enteral nutrition. ASPEN Clinical Guidelines: Nutrition Support of hospitalized adult patient with
obesity. JPEN 2013;37:714-44.12
BEE: Basal Energy Expenditure; RMR: Resting Metabolic Rate.
Tema 34.  Soporte nutricional en el paciente séptico y crítico 545

nadienses (CSCN)10 tras 24-48 horas del ingreso y las 5.1.5.  Dosis de Nutrición Enteral
americanas (ASPEN)7 entre las 24-48 horas de la entra-
da en la UCI. Los pacientes que requieren alcanzar sus requeri-
No se requiere la evidencia de contractilidad (presen- mientos calóricos calculados en la primera semana de
cia de ruidos hidroaéreos, ventoseo) para comenzar hospitalización son aquellos con elevado riesgo nutri-
con la NE, aunque es recomendable realizar una explo- cional (por ejemplo, NRS 2002 ≥ 5, NUTRIC Score ≥
ración previa y reevaluar durante la administración de 5-6) o aquellos gravemente desnutridos7. Deben alcan-
la NE7. zar el objetivo tan rápido como sea posible en las pri-
Aunque existe disfunción gastrointestinal en el 30- meras 24-48 horas, monitorizando la posible aparición
70 % de los pacientes críticos en relación con la disrup- de signos o síntomas del síndrome de realimentación.
ción de la barrera mucosa, alteración de la motilidad y Se debería alcanzar más del 80 % de los requerimientos
atrofia de la mucosa22, cuando se siguen los protocolos calórico-proteicos calculados en las primeras 48-72 ho-
de NE, se consigue buena tolerancia gastrointestinal en ras para obtener beneficios clínicos por la NE en la pri-
el 70-80 % de los casos23. mera semana de ingreso.
Solo los pacientes que presentan un riesgo nutricio- En pacientes de riesgo bajo o moderado, la adminis-
nal bajo, con un estado nutricional basal normal y tración de una NE trófica (definida como 10-20 ml/h o
una enfermedad de baja gravedad (por ejemplo, NSR 10-20 kcal/h o hasta 500 kcal/día) puede ser suficiente
2002 < 3, NUTRIC Score < 6 o < 5 –si no se tiene en para prevenir la atrofia de la mucosa gástrica y para
cuenta el valor de la IL-6–), y que no puedan mante- mantener la integridad del intestino. Las evidencias su-
ner la vía oral, no requerirían terapia nutricional espe- gieren que puede requerirse más del 50-65 % del obje-
cífica durante la primera semana de hospitalización tivo calórico para prevenir el aumento de la permeabi-
en la UCI7. lidad intestinal y la infección sistémica en pacientes
quemados y trasplantados de médula ósea, con el fin
de recuperar más rápidamente la función cognitiva en
5.1.3.  Vías de acceso traumatismos craneales y para reducir la mortalidad
Existe un amplio debate sobre las ventajas y desven- en pacientes hospitalizados de elevado riesgo.
tajas de la colocación de sonda pre- o postpilórica en Se recomienda con un elevado grado de evidencia la
los pacientes de UCI24. NE trófica o completa, durante la primera semana de
Según las últimas recomendaciones de la ASPEN, la hospitalización, en los pacientes con síndrome de dis-
NE, se puede realizar por vía gástrica en la mayoría de trés respiratorio del adulto o insuficiencia respiratoria
los pacientes críticos, lo que resulta técnicamente más aguda, y en aquellos que previsiblemente requerirán
sencillo y reduce el tiempo de demora en instaurar la ventilación mecánica durante más de 72 horas.
NE. Se recomienda la infusión de la NE distalmente al En cuanto al aporte proteico en la NE, se recomienda
estómago en caso de alto riesgo de aspiración o into- que sea suficiente, en dosis más elevada de lo que se
lerancia gástrica7. Aunque la infusión de la nutrición a consideraba previamente, estimando unos requeri-
intestino reduce el riesgo de neumonía aspirativa, no mientos entre 1,2-2 g de proteína/kg de peso actual y
se han encontrado diferencias en cuanto a mortalidad día, aunque pueden ser mayores en pacientes quema-
o días de estancia en la UCI con respecto a la infusión dos o politraumatizados7 (véase el TEMA 35).
a cavidad gástrica25.
5.1.6. Monitorización de la tolerancia a la
5.1.4. Contraindicaciones Nutrición Enteral
En presencia de compromiso hemodinámico, ya que Debe monitorizarse diariamente la tolerancia a la NE
aumenta el riesgo de isquemia intestinal. Muchos pa- mediante la anamnesis del paciente sobre síntomas
cientes críticos padecen daño de la microcirculación como dolor o distensión abdominal, y la exploración
intestinal. La isquemia intestinal es una complicación física. En general, no se recomienda de forma rutinaria
rara de la NE, pero muchos de los casos descritos se han la medición del residuo gástrico para evaluar la tole-
producido en pacientes con sonda nasoyeyunal. La NE rancia a la NE, dado que no se ha correlacionado con
a intestino delgado se debe evitar en pacientes hipoten- la incidencia de neumonía, regurgitación o aspiración26
sos, con presión arterial sistólica inferior a 60 mmHg y (tabla 3).
con fármacos vasopresores. Debe prescribirse con pre- Se recomienda evaluar el riesgo de aspiración en los
caución en pacientes con dosis estables de fármacos pacientes que van a iniciar NE. Algunos factores de
vasopresores, vigilando la aparición de signos de isque- riesgo son: imposibilidad de proteger la vía aérea, pre-
mia (distensión abdominal, cantidad de residuo gástri- sencia de un dispositivo de acceso nasoentérico, venti-
co, presencia de acidosis metabólica), en cuyo caso lación mecánica, edad superior a 70 años, bajo nivel de
debe suspenderse la administración de NE hasta que se consciencia, cuidado oral precario, posición supina,
estabilicen los síntomas. déficits neurológicos, reflujo gastroesofágico, traslado
546 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

Tabla 3.  Monitorización de la nutrición enteral 5.1.7.  Selección de la fórmula enteral


en la unidad de críticos.
• En la mayoría de los pacientes críticos deben utili-
1. ANAMNESIS: dolor, plenitud precoz, ritmo zarse fórmulas poliméricas estándar, isocalóricas o
deposicional, etc. moderadamente hipercalóricas (1 a 1,5 kcal/ml),
ya que suelen ser bien toleradas y no existen sufi-
2. EXPLORACIÓN FÍSICA: ruidos hidroaéreos, cientes evidencias para apoyar el uso de fórmulas
distensión abdominal, etc. específicas.
3. EVALUACIÓN DE FACTORES DE RIESGO DE • En muchos de los pacientes críticos los requeri-
ASPIRACIÓN: imposibilidad de proteger la mientos proteicos son mayores que los calóricos,
vía aérea, presencia de dispositivo de acceso por lo que en ocasiones sería recomendable suple-
nasoentérico, ventilación mecánica, edad > 70 mentar las fórmulas estándar con módulos de pro-
años, bajo nivel de consciencia, cuidado oral teínas. Los requerimientos de proteínas son difíci-
precario, posición supina, déficits neurológicos, les de valorar en los pacientes críticos, y pueden
reflujo gastroesofágico, traslado fuera de la UCI, estimarse a partir del balance nitrogenado o apli-
uso de bolos intermitentes. cando la fórmula de 1,2-2 g/kg/día o la ratio kcal
no proteicas/g de N: 70:1-100:1 en pacientes con
4. EVALUACIÓN DE LA ETIOLOGÍA EN CASO IMC < 30 kg/m2.
DE DIARREA: tipo de fórmula, modo de • Las fórmulas enterales inmunomoduladoras
administración, contaminación de la NE, fármacos, (suplementadas con arginina –Arg–, Gln, ácido
etiología infecciosa incluyendo Clostridium difficile. eicosapentanoico –EPA–, ácido docosahexanoico
–DHA–, ácidos grasos omega-3 y antioxidantes
como selenio, vitamina C y vitamina E) no deben
utilizarse de forma rutinaria en la UCI médica,
fuera de la UCI para procedimientos y uso de bolos
pero deben ser consideradas en pacientes perio-
intermitentes26. La neumonía y la colonización bacte-
peratorios y en pacientes con traumatismo cere-
riana del árbol respiratorio superior se han asociado
bral en UCI quirúrgica. Se deben valorar especial-
con mayor evidencia con la aspiración de secreciones
mente en pacientes seleccionados28:
orofaríngeas contaminadas que con la regurgitación y
la aspiración de contenido gástrico. –  Cirugía mayor gastrointestinal.
En los pacientes con elevado riesgo de aspiración se –  Traumatismos abdominales.
recomienda la NE postpilórica (grado de recomendación – Quemados.
moderado o alto) y el uso de agentes procinéticos como –  Cáncer de cabeza y cuello.
metoclopramida o eritromicina cuando sea posible7. –  Pacientes críticos con ventilación mecánica.
En todos los pacientes intubados en UCI que reciben
NE se recomienda elevar el cabecero de la cama a 30-45º Múltiples metanálisis29-31 muestran una reducción
y lavar la cavidad oral con clorhexidina dos veces al día. del tiempo con ventilación mecánica, de morbilidad
En caso de aparición de diarrea debe estudiarse la infecciosa y de la estancia hospitalaria comparada con
etiología y tratarse, evitando la suspensión precoz de la las fórmulas de nutrición estándar, sin demostrar dis-
NE. Los factores que pueden contribuir a la aparición minución en la mortalidad.
de la diarrea son: tipo y cantidad de fibra en la fórmula En el resto de pacientes de UCI existen pocas eviden-
de NE, osmolaridad de la misma, modo de administra- cias de que estas fórmulas aporten mejoría respecto a
ción, contaminación de la NE, fármacos (antibióticos, las fórmulas estándar, aumentando los costes, por lo
inhibidores de la bomba de protones, procinéticos, hipo­ que su uso no se justifica.
glucemiantes, antiinflamatorios no esteroideos, inhibi- El beneficio de las fórmulas inmunomoduladoras es
dores selectivos de la recaptación de serotonina, laxan- dosis dependiente, así que es precisa la administración
tes, preparados que contengan sorbitol), y la etiología de al menos un 50-60% de los requerimientos energé-
infecciosa incluyendo el Clostridium difficile. ticos con estos preparados.
La evaluación de la diarrea debería incluir: explora- En pacientes con sepsis severa las fórmulas que con-
ción abdominal, cuantificación del número de deposi- tienen Arg pueden incrementar el riesgo. En diversos
ciones, coprocultivo, control analítico de electrolitos y estudios32,33 se observó que la mortalidad era mayor
revisión de los fármacos que están siendo administra- que en los pacientes que recibieron fórmulas estándar.
dos. Se debe intentar diferenciar entre diarrea infeccio- El mecanismo propuesto para explicar el aumento de
sa y osmótica27. mortalidad es que, en situaciones de sepsis severa, la
Se debe reducir la frecuencia de interrupción de la Arg es convertida en óxido nítrico que contribuye a la
NE antes y después de las pruebas diagnósticas y de los inestabilidad hemodinámica.
procedimientos, para minimizar que el íleo se prolon- Las guías canadienses no recomiendan la suplementa-
gue y para prevenir un aporte nutricional inadecuado. ción de la NE ni con Arg ni con Gln en el paciente crítico10.
Tema 34.  Soporte nutricional en el paciente séptico y crítico 547

• Fórmulas enriquecidas con fibra: Las guías ca- la frecuencia, la duración y la forma de adminis-
nadienses no recomiendan el uso rutinario de fi- tración, y debe tenerse en cuenta la función renal.
bra (soluble o insoluble) en las fórmulas de NE en •  Glutamina: No se recomienda la adición de Gln
el paciente crítico10. en la fórmula de NE en pacientes críticos, dado
En caso de diarrea persistente, si se excluye causa que no ha demostrado beneficios en la mortali-
infecciosa o medicación hiperosmolar, debe con- dad, la incidencia de infecciones o en la estancia
siderarse el uso de fórmulas comerciales que con- hospitalaria.
tengan una mezcla de fibras. La fibra soluble e
insoluble debe evitarse en pacientes con riesgo de 5.1.8.  Forma de administración
isquemia intestinal o con dismotilidad severa de-
bido a casos documentados de obstrucción intes- • En caída libre: forma habitual en 3 o 6 tomas al
tinal en pacientes quirúrgicos. día, según requerimientos y tolerancia.
En pacientes con diarrea persistente, en los que se • Infusión continua: siempre que se utilice el acceso
sospeche malabsorción o con escasa respuesta a intestinal y en los pacientes que presenten elevado
la fibra, pueden considerarse las fórmulas peptídi- riesgo de aspiración o mala tolerancia a la nutri-
cas u oligomonoméricas. ción por caída libre. Se comienza a un ritmo de
• Uso de prebióticos: Otra alternativa en caso de 10-20 ml/h y se aumenta según requerimientos y
diarrea es la adición de fibra soluble fermentable tolerancia.
(fructooligosacáridos, inulina) a la fórmula están-
dar de NE. Las fibras prebióticas tienen efectos Se debe alcanzar más del 50-60 % de las calorías cal-
sobre la absorción de nutrientes, el metabolismo culadas en la primera semana de hospitalización para
de los esteroles, de los carbohidratos y de las gra- obtener beneficio clínico7. Los beneficios de una NE
sas, la motilidad intestinal y las características de precoz parecen ser dosis dependientes.
las heces. Además, actúan sobre la microbiota y la Si no es posible alcanzar el 100 % de las calorías calcu-
función de barrera intestinal. Estimulan el creci- ladas en los primeros 7-10 días se debe considerar su-
miento de Bifidobacterias y Lactobacillus. Se reco- plementar por vía parenteral para proporcionar las calo-
miendan en caso de diarrea en pacientes hemodi- rías y proteínas suficientes para prevenir el deterioro del
námicamente estables en UCI médica o quirúrgica, estado nutricional. Suplementar con NP antes de este
en dosis de 10-20 g de fibra fermentable soluble, momento no parece mejorar la situación del paciente, y
dividida en varias dosis durante 24 horas. se pueden asociar consecuencias perjudiciales7, 38.
• Administración de probióticos: No está indica-
da en la mayoría de los pacientes de UCI debido a 5.2.  Nutrición parenteral
la falta de datos consistentes que indiquen sus
beneficios. Tampoco se recomienda en pacientes 5.2.1. Indicaciones
con pancreatitis aguda necrotizante, debido a los Pacientes que requieren de nutrición artificial en los
datos discordantes encontrados en la literatura. que la vía enteral no es tolerada, está contraindicada o
La administración de probióticos se recomienda7 es insuficiente.
en pacientes trasplantados, o con cirugía mayor
abdominal y traumatológica donde en diversos
5.2.2.  Momento de inicio
estudios34, 35 se ha demostrado disminución de la
morbilidad infecciosa. No hay estudios suficientes que evalúen el momento
En un metanálisis reciente (30 ensayos clínicos; más adecuado para comenzar con NP en pacientes críti-
2.972 pacientes) el empleo de probióticos en la cos. Las guías clínicas europeas (ESPEN)39 y las canadien-
UCI se asoció a una disminución del 20 % en el ses (CSCN)10 recomiendan comenzar con NP en todo
riesgo de infecciones y de un 26 % cuando el even- paciente en el que no se espera completar la ingesta oral
to valorado fue la neumonía asociada a ventilación en 3 días, tras ser evaluado a las 24-48 horas después de
mecánica. Sin embargo, los autores siguen plan- la admisión en la UCI, y si la NE está contraindicada o no
teando que se necesitan más ensayos de calidad es bien tolerada. Se ha demostrado que no aumenta la
para realizar una recomendación fuerte36. mortalidad si se compara con la vía enteral, y sin embar-
• Antioxidantes y elementos traza: La adminis- go la infraalimentación sí se relaciona con peores conse-
tración de vitaminas antioxidantes (E, C) y elemen- cuencias.
tos traza (selenio, zinc, cobre) puede mejorar el Según las guías de la ASPEN7, en pacientes previa-
pronóstico de algunos pacientes críticos como los mente sanos, sin signos de desnutrición proteica, el
quemados y los pacientes que requieren ventila- uso de NP debe comenzarse tras los primeros 7 días
ción mecánica, asociándose en algunos estudios del ingreso en la UCI cuando no es posible el uso de
con una reducción en la mortalidad global37. Sin la vía oral ni la enteral. Si, por el contrario, hay eviden-
embargo, aún no están estandarizadas las dosis, cia de riesgo elevado de desnutrición –NRS 2002 ≥ 5
548 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

o NUTRIC score ≥ 5-6– o desnutrición severa, y la NE 5.2.6.  Fórmula parenteral


no es posible, se recomienda comenzar cuanto antes.
En los pacientes con bajo o alto riesgo de desnutri- Glucosa
ción, se recomienda considerar la NP complementaria Se recomiendan al menos 2 g de glucosa/kg de peso
tras 7-10 días de ingreso en la UCI cuando no se alcan- al día39.
zan más del 60 % de los requerimientos calóricos o No es un nutriente esencial, ya que se puede obte-
proteicos con la NE7. ner por diversas vías metabólicas, como la gluconeo-
Las guías canadienses10 advierten de la importancia génesis, principalmente a partir de los aminoácidos li-
de evaluar cuidadosamente la indicación de NP precoz berados por el músculo. Sin embargo, constituye una
en el paciente crítico. No debe iniciarse en pacientes de fuente segura de energía y ayuda a prevenir la proteó-
bajo riesgo nutricional, con estancias cortas en la uni- lisis muscular.
dad de críticos. Se debe evaluar de forma individual el La tasa de oxidación de glucosa en pacientes críticos se
beneficio-riesgo de iniciar la NP en pacientes que no estima de manera teórica en 4-7 mg/kg/min, pero no
hayan tolerado la NE. se recomienda superar un ritmo de infusión de glucosa
de 4-5 mg/kg/min para no incrementar la incidencia de
5.2.3. Contraindicaciones complicaciones metabólicas39.
En las situaciones de estrés existe insulinorresistencia
Vía enteral útil. de tejidos periféricos con la finalidad de ahorrar gluco-
sa para los tejidos dependientes de ella y para la repa-
5.2.4.  Vías de acceso ración de los tejidos dañados. El aporte parenteral de
glucosa puede inducir hiperglucemia, con efectos per-
• Vía central: el catéter venoso central (CVC) con- judiciales, que se pueden controlar añadiendo insulina
vencional es la vía principalmente recomendada, al tratamiento.
ya que se puede administrar nutrición para cubrir Trabajos realizados por el grupo de Van den Berghe
los requerimientos energéticos y proteicos en un a principios de este siglo demostraron que un control
volumen ajustado a las necesidades, sin presentar glucémico estricto medio, entre 80-110 mg/dl, se aso-
problemas por la elevada osmolaridad de las fór- ció con reducción de sepsis, estancia en UCI y mortali-
mulas. dad hospitalaria, comparado con terapia convencional
Los accesos más utilizados son la vena yugular in- de insulina cuyo objetivo era mantener la glucemia por
terna y la subclavia. Pero para largas estancias en debajo de 200 mg/dl. El efecto fue más pronunciado
UCI se puede utilizar un catéter tunelizado como en enfermos quirúrgicos que médicos41, 42. Sin embar-
alternativa. go, en un estudio multicéntrico posterior –The NICE
En una revisión reciente sobre estudios que com- SUGAR study– se observó un aumento de mortalidad
paraban el uso de catéteres centrales de inserción en el grupo de control intensivo y la presencia de hipo-
periférica (PICC) y CVC, no se observaron diferen- glucemia severa fue significativamente mayor en el
cias en cuanto a complicaciones infecciosas, pero mismo grupo43. Estos resultados han generado contro-
fueron más frecuentes los episodios de trombosis versia con respecto a los objetivos glucémicos.
y flebitis con PICC40. La ASPEN recomienda mantener la glucemia en ci-
• Vía periférica: se utiliza cuando es preciso comple- fras moderadas de 140 mg/dl, o en un rango de 150-
mentar la NE, o la vía central está contraindicada o 180 mg/dl para la mayoría de los pacientes de UCI,
no se puede utilizar. Se precisan fórmulas de baja aunque este objetivo podría hacerse más estricto en
osmolaridad (<850 mOsml/l). Los accesos más co- determinadas patologías como en post-cirugía cardio-
múnmente utilizados son las venas braquiales. vascular y traumatismo craneal7.
Las guías canadienses recomiendan evitar niveles de
5.2.5.  Forma de administración hiperglucemia (> 180 mg/dl –10mmol/l–) en todo pa-
ciente crítico, con un objetivo de glucemia de 144 mg/
En los pacientes críticos se aconseja comenzar apor- dl –8 mmol/l– (intervalo entre 126-162 mg/dl –7-9
tando el 80 % de los requerimientos energéticos para mmol/l–), preferible a un objetivo más estricto (79-108
evitar la insulinorresistencia, la morbimortalidad infec- mg/dl –4,4-6 mmol/l–). Respecto a la recomendación
ciosa, la prolongación de la ventilación mecánica y de sobre el uso de insulina intravenosa o subcutánea, con-
la estancia hospitalaria asociadas a excesivo aporte de cluyen que no existen datos suficientes10.
energía7. Ha de aumentarse el aporte hasta alcanzar el
objetivo en los 2-3 días siguientes.
Lípidos
En pacientes con NP se debe intentar iniciar la NE lo
antes posible. No se debe suspender la NP hasta alcan- Los lípidos deben formar parte de la NP como fuente
zar el 60 % de los requerimientos energéticos por vía de energía y de ácidos grasos esenciales en pacientes
enteral. con estancias prolongadas en la UCI39.
Tema 34.  Soporte nutricional en el paciente séptico y crítico 549

Las emulsiones de lípidos (triglicéridos con ácidos gra- cientes que permanecen en estado crítico con NP, con
sos de cadena larga –LCT–/ triglicéridos con ácidos el fin de detectar y tratar deficiencias importantes.
grasos de cadena media –MCT–/ y LCT) se pueden admi- Los pacientes críticos presentan generalmente un es-
nistrar de manera segura con una ratio de 0,7-1,5 g/kg tado hipermetabólico, con aumento de los requeri-
en 12-24 h. Aportan los ácidos grasos esenciales ácido mientos de estas sustancias.
linoleico y ácido linolénico, cuyos requerimientos se esti- Se debe suplementar con tiamina intravenosa 100-
man en 9-12 g/día y 1-3 g/día, respectivamente. 300 mg/día durante los 3 primeros días de la NP en
La tolerancia a mezclas LCT/MCT para uso habitual pacientes con riesgo de déficit de tiamina –alcohólicos
está suficientemente documentada. Muchos estudios y pacientes malnutridos–, para prevenir alteraciones
han demostrado ventajas sobre el uso aislado de LCT neurológicas.
(mejoría del estado nutricional, de la concentración de Los electrolitos deben administrarse según las nece-
prealbúmina y del balance nitrogenado, menos efectos sidades y la patología de base, y según monitorización
inmunosupresores y disminución de la incidencia de diaria.
infecciones), pero aún se requiere confirmación con
estudios prospectivos44. Estas evidencias clínicas debe-
5.2.7.  Nutrientes específicos
rían reevaluarse tras la introducción de emulsiones lipí-
dicas formuladas con una carga mayoritaria de ácidos •  Glutamina: En pacientes críticos con NP no se
grasos derivados del aceite de oliva y no solo de soja. recomienda el empleo de Gln a dosis supra fisioló-
La NP basada en el aceite de oliva es segura y bien gicas combinando enteral (30 g/día) y parenteral
tolerada en los pacientes críticos39. (0,35 g/kg/día); especialmente en pacientes con
Las guías canadienses recomiendan reducir la carga fracaso renal, hepático o fallo multiorgánico don-
de ácidos grasos omega-6 (emulsiones basadas en de aumenta la mortalidad (pruebas de alta cali-
aceite de soja), aunque no existen suficientes datos dad, recomendación –para no usarla– fuerte).
para recomendar el tipo de lípidos a utilizar en su sus- • En pacientes críticos con NP el uso de Gln a dosis
titución10. moderadas (0,3-0,5 g/kg/día) podría asociarse a
En pacientes críticos con NP se recomienda evitar el menor morbilidad infecciosa, días de estancia y
uso de formulaciones lipídicas basadas únicamente en ventilación mecánica (pruebas de calidad baja, re-
soja y utilizar preferentemente otras fuentes que dismi- comendación débil)46.
nuyan el aporte de soja/omega 6 por su perfil de segu- •  Ácidos grasos omega 3: La adición de EPA y
ridad (pruebas de calidad moderada, recomendación DHA procedente del aceite de pescado a las emul-
fuerte)45. siones lipídicas ha demostrado efectos beneficiosos
En pacientes con NP las fórmulas enriquecidas en disminuyendo la respuesta inflamatoria. Aumenta
omega-3 procedente de aceite de pescado, podrían la proporción de EPA y DHA en las membranas ce-
disminuir las complicaciones infecciosas, días de estan- lulares y disminuye la proporción de ácido araqui-
cia y de ventilación mecánica (pruebas de calidad baja, dónico; así se reduce la síntesis de eicosanoides y
recomendación débil)45. citoquinas proinflamatorios47.

Aminoácidos 5.2.8.  Cuidados específicos


El principal objetivo de la administración de amino­ Debe realizarse una monitorización estricta diaria de
ácidos es aportar precursores para la síntesis proteica en los niveles de glucemia para asegurar un adecuado
tejidos con alto recambio, frenar la proteólisis y aportar control metabólico, de electrolitos (sodio, potasio,
aminoácidos esenciales. Una solución equilibrada debe magnesio, fósforo) y de la función renal. La función
contener 1,3-1,5 g aminoácidos/kg de peso real. hepática y los niveles de triglicéridos plasmáticos han
No existen suficientes datos para recomendar la su- de valorarse una o dos veces por semana, y los micro-
plementación con altas cantidades de aminoácidos de nutrientes de manera periódica.
cadena ramificada en el paciente crítico10.
5.2.9. Complicaciones
Micronutrientes La NP por vía central se asocia a:
Toda NP debe incluir diariamente elementos traza.
Los micronutrientes poseen importantes propiedades • Neumotórax, sangrado o trombosis de la vía.
antioxidantes. • Infecciones relacionadas o no con el catéter.
Las consecuencias de las deficiencias agudas de mi- • Síndrome de realimentación: La administración de
cronutrientes no son fácilmente detectadas, y el cua- un exceso de hidratos de carbono, lípidos o calo-
dro clínico completo tarda semanas en desarrollarse. rías en pacientes previamente malnutridos puede
Se recomienda la monitorización periódica en los pa- inducir su aparición3.
550 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

6.  Nutrición en situaciones especiales en UCI precoz (en las primeras 24-48 horas tras el diagnósti-
co) no ha demostrado en pancreatitis aguda grave ser
Las guías de la ASPEN7 establecen una serie de reco- mejor (en cuanto a complicaciones o mortalidad) que
mendaciones en situaciones especiales: la colocación a demanda a partir de las 72 horas (en
pacientes que no toleran la vía oral48.
6.1.  Insuficiencia respiratoria Varios estudios han demostrado las ventajas de la NE
sobre la NP: reducción de la morbilidad infecciosa, de
Estos pacientes asocian de manera habitual mal ma-
la estancia hospitalaria, de la necesidad de cirugía por
nejo de líquidos, por lo que deben ser consideradas las
complicaciones, de fallo multiorgánico y de la mortali-
formulaciones enterales con restricción hídrica (1,5-2
dad14, 15. Los pacientes con pancreatitis aguda leve o
kcal/ml).
moderada no requieren soporte nutricional, a menos
Los niveles de fósforo han de ser monitorizados y
que se compliquen, estén desnutridos o que no avan-
reemplazados apropiadamente. El fósforo es esencial
cen en la dieta oral en 7 días.
para la formación de ATP y 2,3-DPG (difosfoglicerato),
Se puede emplear tanto la vía gástrica como la yeyu-
ambos importantes para asegurar la contractilidad dia-
nal, dado que no existen diferencias en cuanto a la
fragmática y asegurar la función respiratoria.
tolerancia o los resultados clínicos.
Es controvertido el uso de fórmulas con alto conteni-
Se recomienda inicialmente una fórmula polimérica
do en lípidos y bajo en carbohidratos, diseñadas para
estándar. Aún no hay datos definitivos sobre el uso de
reducir la producción de CO2. De forma general, no se
fórmulas con inmunonutrientes, aunque los resultados
recomiendan en la insuficiencia respiratoria aguda.
son prometedores.
Algunos métodos se han mostrado útiles para mejo-
6.2.  Insuficiencia renal rar la tolerancia digestiva en pacientes con pancreatitis
En pacientes críticos con insuficiencia renal aguda se aguda grave:
deben emplear las mismas fórmulas estándar de NE,
con los mismos requerimientos calóricos y proteicos, • Inicio precoz de la nutrición disminuyendo el pe-
usándose fórmulas específicas cuando se desarrollen ríodo de íleo.
alteraciones de los electrolitos. • Infusión de la NE en yeyuno, 40 cm posterior al liga-
Los pacientes en hemodiálisis o terapia de reempla- miento de Treitz –se asocia a disminución del estí-
zo renal continua precisan de mayor cantidad de pro- mulo del páncreas exocrino y a mejor tolerancia–.
teínas, al menos 1,5-2 g/kg/día, hasta un máximo de • Cambio en el contenido de la fórmula de NE –de
2,5 g/kg/día. No debe restringirse el aporte proteico proteínas intactas a pequeños péptidos, y de LCT
para retrasar el inicio de la diálisis. a MCT, o a fórmulas libres de grasas–.
• Administración continua con bomba.
6.3.  Insuficiencia hepática El uso de probióticos podría ser considerado en pa-
La NE se asocia con menos infecciones y complica- cientes con pancreatitis aguda grave que reciben NE pre-
ciones metabólicas que la NP. coz, aunque no hay datos concluyentes aún sobre dosis
Para el cálculo de los requerimientos calórico-protei- específicas y tipo de microorganismo a administrar.
cos debe utilizarse el peso seco o el peso habitual del En pacientes con pancreatitis aguda, donde la NE no
paciente dada la existencia de ascitis, depleción del vo- es posible, se debe comenzar con NP después del 5º día.
lumen intravascular, edema, hipertensión portal e hipo­
albuminemia. 7. Resumen
No se deben restringir las proteínas como estrategia
para reducir riesgos de desarrollar encefalopatía. La valoración y el soporte nutricional en el paciente
Las formulaciones específicas con aminoácidos rami- crítico constituyen aspectos fundamentales en el con-
ficados no han demostrado beneficios en pacientes con junto de sus cuidados, de forma que pueden contribuir
encefalopatía hepática que ya reciben tratamiento de forma importante a reducir la elevada morbimorta-
con antibióticos intraluminales y lactulosa. lidad de estos pacientes y a mejorar su pronóstico. Los
objetivos van más allá de mantener el estado nutricio-
nal y la masa magra durante la respuesta al estrés;
6.4.  Pancreatitis aguda grave
también van dirigidos a prevenir el daño oxidativo ce-
Los pacientes con pancreatitis aguda grave deben lular y a favorecer y modular la respuesta inmune. El
empezar con NE por sonda nasoentérica cuando estén inicio del soporte nutricional debe ser precoz en los
estables hemodinámicamente, entre las 24-48 prime- pacientes con elevado riesgo de desnutrición, sin de-
ras horas. Se recomienda comenzar con un ritmo trófi- morarlo más de 48 horas desde el ingreso en la UCI, y
co y avanzar hacia los objetivos calculados transcurri- una vez el paciente se encuentre estable hemodinámi-
das 24-48 horas. No obstante, la nutrición enteral camente. La vía enteral será siempre la de elección en
Tema 34.  Soporte nutricional en el paciente séptico y crítico 551

el caso de ser utilizable, reservando la NP para los casos 14. Windsor AC, Kanwar S, Li AG, Barnes E, Guthrie
en los que la primera esté contraindicada o no cubra JA, Spark JI, Welsh F, Guillou PJ, Reynolds JV. Com-
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552 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

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Tema 35.
Soporte nutricional en el paciente con patología
pulmonar, enfermedad pulmonar obstructiva crónica,
bronquiectasias y fibrosis quística
Gabriel Olveira Fuster
Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nutrición. Hospital Regional Universitario de Málaga.
Instituto de Investigación Biomédica de Málaga
Victoria Contreras Bolívar
Especialista en Endocrinología y Nutrición, UGC de Endocrinología y Nutrición, Unidad de Nutrición
Clínica y Dietética, Hospital Regional Universitario. Málaga
Casilda Olveira Fuster
Especialista en Neumología, UGC de Neumología y Cirugía Torácica. Hospital Regional Universitario.
Málaga. Universidad de Málaga
Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 553-579.

 1. Introducción y epidemiología
 2. Diagnóstico y manifestaciones clínicas
 3. Desnutrición: prevalencia y fisiopatología
 4. Valoración nutricional en fibrosis quística, enfermedad pulmonar obstructiva crónica
y bronquiectasias
 5. Objetivos del soporte nutricional en la fibrosis quística
 6. Soporte nutricional en la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y bronquiectasias
 7. Nutrición parenteral en patologías respiratorias
 8. Otros tratamientos en el abordaje nutricional en la fibrosis quística
 9. Resumen y conclusiones
10.  Bibliografía

1. Introducción y epidemiología 20101. La creación de la Unidades de FQ, ha demostra-


do ser un gran avance en las mejoras del control y se-
1.1.  Fibrosis quística guimiento de los pacientes con FQ, pues esta enferme-
dad multisistémica precisa de la existencia de un
La fibrosis quística (FQ) es una enfermedad causada equipo de profesionales expertos2.
por la alteración de un único gen localizado en el brazo La incidencia se estima en 1 afectado por cada
largo del cromosoma 7 (gen RTFQ, regulador de la 2.500-6.000 nacimientos, dependiendo de la pobla-
conductancia transmembrana de la fibrosis quística).
ción. La frecuencia de las distintas mutaciones es muy
Es la enfermedad potencialmente letal, de herencia
diferente en función del área geográfica analizada,
mendeliana recesiva, más frecuente en la población
siendo la población española una de las más heterogé-
caucásica. En los últimos 20 años, los avances en el
estudio de la FQ han contribuido favorablemente a la neas en cuanto a la frecuencia de aparición de las dis-
supervivencia de estos pacientes, permitiéndoles alcan- tintas mutaciones, con claras diferencias entre sur, nor-
zar en la actualidad medianas de supervivencia cerca- te y área mediterránea. Los datos en Europa se basan
nas a los 40 años, según países, pasando a integrarse en los estudios epidemiológicos y/o en la detección
en su asistencia los médicos y especialistas de adultos. precoz de la enfermedad mediante técnicas de criba-
Las previsiones son que la mediana de supervivencia do. En España se asumía una incidencia de 1/2.500
alcance los 50 años en los niños nacidos a partir de recién nacidos, aunque esta cifra es menor si tenemos

553
554 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

en cuenta los datos procedentes de los programas de Tabla 1.  Prevalencia de las mutaciones del gen RTFQ
cribado neonatal implantados progresivamente en Es- más frecuentes en España.
paña desde 1999; por ejemplo, en Cataluña se comu-
nicaban incidencias de 1/5.352 en el año 2001, de Exón/
Mutación No. Cr (%)
1/6.059 en las Baleares y de 1/6.400 en Andalucía en Intrón
20143. Estas cifras son similares a las estimaciones rea- p.F508del E.10 1009 (51,74)
lizadas en países vecinos como Francia (1/4.000) e Ita-
lia (1/2.730) . La prevalencia media en Estados Unidos p.G542X E.11 159 (7,69)
y Europa es de 0,74 y 0,80 casos cada 10.000 habitan- p.N1303K E.21 57 (2,92)
tes, respectivamente4.
El gen RTFQ se identificó en 1989. La mutación más c.1811+1,6kbA>G I.11 36 (1,84)
frecuente se debe a la pérdida del aminoácido fenilala- p.R334W E.7 35 (1,79)
nina en el codón 508 (F508del). Esta mutación repre-
senta alrededor del 70% de los cromosomas FQ en las p.L206W E.6a 32 (1,64)
poblaciones de origen europeo. En España, la muta- c.711+1G>T I.5 31 (1,58)
ción F508del se encuentra en aproximadamente el
50% de los cromosomas FQ, sin embargo se ha obser- p.Q890X E.15 28 (1,43)
vado una frecuencia mucho mayor en el norte de la p.R1162X E.19 25 (1,28)
península (País Vasco, Asturias). Se han descrito cerca
de 1.000 mutaciones en el gen RTFQ, algunas específi- c.2789+5G>A I.14b 24 (1,23)
cas de una población, otras identificadas en un único
p.R1066C E.17b 23 (1,18)
paciente. En España se han identificado un centenar de
mutaciones, de las cuales solo 10 presentan una fre- p.I507del E.10 21 (1,07)
cuencia superior al 1% (tabla 1)5. La proteína que co-
c.1609delCA E.10 18 (0,92)
difica el gen RTFQ se comporta como un canal de cloro
y las mutaciones de este gen dan lugar a un defecto en c.712-1G>T I.5 18 (0,92)
el transporte de este ion en las células epiteliales del
c.3272-26A>G I.17b 18 (0,92)
aparato respiratorio, hepatobiliar, gastrointestinal, re-
productor, páncreas y glándulas sudoríparas. La dis- c.2183AA>G E.13 16 (0,82)
función de la proteína RTFQ se produce por distintos
p.G85E E.3 15 (0,77)
mecanismos moleculares en base a los cuales las muta-
ciones se agrupan en cinco categorías o clases, aunque c.2869insG E.15 15 (0,77)
algunos autores incluyen una clase VI, con descenso de
la estabilidad de la proteína y, por tanto, alteración p.W1282X E.20 15 (0,77)
de la función transportadora (figura 1)6. Sin embargo, p.V232D E.6a 14 (0,71)
esta clasificación no debe considerarse de forma res-
trictiva, pues algunas mutaciones podrían incluirse en p.A1006E E.17a 12 (0,61)
dos grupos distintos. Las mutaciones clase I y II suelen c.2184insA E.13 11 (0,56)
asociarse con insuficiencia pancreática, mientras que
las otras tres clases de mutaciones (III, IV y V) presentan p.K710X E.13 11 (0,56)
una gran variabilidad en su expresión clínica. TOTAL (n = 23) 1,634 (83,72)

1.2.  Enfermedad pulmonar obstructiva crónica Gen RTFQ: regulador de la conductancia transmembrana de la
fibrosis quística.
(EPOC) y bronquiectasias (BQ)
Modificada de Alonso M et al.5.
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)
se caracteriza por la presencia de un trastorno ventila-
torio obstructivo (disminución del FEV1 –máximo volu- las alteraciones anatomopatológicas propias de la
men espirado en el primer segundo de una espiración EPOC. Además, un 20% de los pacientes con EPOC no
forzada– y de la relación FEV1/FVC% –relación entre el han sido fumadores7, 8.
máximo volumen espirado en el primer segundo y la El estudio IBERPOC identificó una prevalencia de
capacidad vital forzada–) crónico y poco reversible. La EPOC en España del 9,1% de la población adulta, que
limitación del flujo aéreo es, por lo general, progresiva afecta al 14,3% de los varones y al 3,9% de las muje-
y se asocia con una respuesta inflamatoria pulmonar res. Según el hábito tabáquico, la prevalencia fue del
anormal a partículas o gases nocivos. El tabaquismo es 15% en fumadores, 12,8% en exfumadores y 4,1% en
la causa más frecuente de la enfermedad, aunque sólo no fumadores; de ellos, sólo un 22% había sido diag-
una parte de los fumadores evoluciona hasta presentar nosticado previamente. Esta tasa elevada de infradiag-
Tema 35.  Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad pulmonar… 555

Tomado de Quintana-Gallego104.

Figura 1.  Clasificación de mutaciones en la fibrosis quística.

nóstico es indicativa del carácter crónico de la enferme- población mundial, muestra una tendencia a la dismi-
dad, en la que el paciente se adapta a su progresiva nución durante la última década, tanto en varones
limitación al ejercicio y atribuye sus síntomas al taba- como en mujeres8. Las agudizaciones constituyen la
co9. En el estudio EPI-SCAN se obtuvo una prevalencia principal causa de muerte de los enfermos con EPOC
global de la EPOC del 10,2% (IC 95%: 9,2-11,1%), que en estudios prospectivos. Los factores pronósticos en la
fue más elevada en varones (15,1%) que en mujeres EPOC se resumen en la tabla 2. El estado nutricional
(5,6%). La prevalencia de enfermedad moderada-muy forma parte de estos factores y se desarrollará con de-
grave (estadios II-IV de la clasificación GOLD) fue del talle más adelante.
4,4% (IC 95%: 3,8-5,1%). La edad, el consumo de ci- Las bronquiectasias (BQ) ocurren por la alteración
garrillos y un bajo nivel educativo fueron identificados del epitelio ciliar e inflamación crónica de la pared
como principales factores de riesgo10. bronquial, provocando dilataciones anómalas e irrever-
La EPOC es un trastorno que causa gran morbilidad
y mortalidad. En España origina, aproximadamente, un
10-12% de las consultas de Medicina Primaria y un 35- Tabla 2.  Factores pronósticos en la EPOC.
40% de las de Neumología, y ocasiona un 35% de las
incapacidades laborales definitivas. Además, es res- Edad
ponsable de un 7% de los ingresos hospitalarios. FEV1
Las enfermedades crónicas de las vías respiratorias Mantenimiento del hábito tabáquico
inferiores representan la quinta causa de defunción en Índice de masa corporal
la población general española (cuarta entre los varones Actividad física habitual
y decimoprimera entre las mujeres). La tasa de mortali-
Disnea
dad por EPOC por 100.000 habitantes, ajustada por
población mundial, en el año 2006, fue de 450,03 en Deterioro de la función pulmonar
varones y 238,47 en mujeres. El rango de estas tasas se Atrapamiento aéreo
sitúa entre el 402,09 en Madrid y el 522,66 en Ceuta Alteraciones gasométricas
para los varones y entre el 205,36 en Navarra y el Hipertensión pulmonar
310,53 en Ceuta, en las mujeres. Las tasas de mortali- Exacerbaciones
dad aumentan de manera significativa, sobre todo en Ingresos hospitalarios
varones, a partir de los 55 años. La mortalidad por
Comorbilidades
EPOC en España, comparando las tasas ajustadas por
556 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

sibles de los bronquios cartilaginosos, que se acompa- frecuente de presentación. La padecen más del 95% de
ñan de destrucción de los componentes muscular y elás- los pacientes, aunque los grados de afectación son va-
tico de la pared bronquial. Las lesiones estructurales de la riables18.
pared bronquial predisponen a una alteración de la se- Afectación pancreática y digestiva: La insufi-
creción –supuración– bronquial crónica y a un grado va- ciencia pancreática exocrina (IPE) está presente en
riable de alteración ventilatoria de predominio obstructi- aproximadamente el 85-90% de los pacientes con FQ
vo. Las BQ no son una enfermedad en sí mismas, sino el en las poblaciones de raza blanca . No obstante, esta
resultado final de enfermedades diferentes que tienen afectación puede descender hasta el 14%, aproxima-
puntos de manejo en común. Suelen dividirse en BQ de- damente, en los sujetos diagnosticados en la edad
bidas a FQ, representando un pequeño porcentaje que adulta (mayores de 16 años). Por ello en series de
se controla en unidades especializadas, y BQ no FQ (en adultos, donde entre el 20 y el 30% de los mismos
adelante BQ), que afectan a una población heterogénea, han sido diagnosticados en edad adulta, la prevalen-
presentando diferentes etiologías, y en un elevado por- cia de IPE es menor que la descrita previamente y se
centaje, se controlan en consultas no especializadas11. encuentra alrededor del 70%2. La prevalencia de dia-
Su prevalencia aumenta con la edad. Así, ante la cre- betes relacionada con la FQ aumenta con la edad19, 20.
ciente longevidad de la población, la mayor cronicidad En nuestro grupo, la prevalencia de alteraciones del
de las enfermedades y el avance espectacular de las téc- metabolismo hidrocarbonado (con una edad media
nicas de imagen, se ha incrementado de forma significa- de 29 años) ha sido de un 42%, con un 36% de dia-
tiva el número de diagnósticos de BQ en los últimos betes relacionada con la FQ. Estas alteraciones se aso-
años. Estudios recientes muestran una alta prevalencia, y cian a un deterioro de la función pulmonar y a un
elevada y creciente tasa de mortalidad, sobre todo en aumento en la morbimortalidad en la FQ, más eviden-
personas de edad avanzada, y un aumento de la morbi- te en mujeres, y suponen un marcador más de pro-
lidad y del número de ingresos por BQ, con un impor- gresión de la enfermedad.
tante coste e impacto sanitario12–14. Como ejemplo se A diferencia de la patología respiratoria, la afecta-
puede citar que más del 50% de los sujetos con EPOC ción hepática clínica es mucho menos prevalente. La
moderada-grave tienen BQ asociadas, presentando un incidencia de insuficiencia hepática grave se incremen-
fenotipo específico de esta enfermedad con más agudi- ta en la niñez tardía hasta la adolescencia, siendo rara
zaciones y más graves, así como mayor inflamación la aparición después de los 18 años de edad. La afecta-
bronquial y sistémica15. En España se ha descrito una ción patológica típica es la cirrosis biliar focal que, si
prevalencia de 36,2 casos por 10.000 habitantes y una progresa, puede desarrollar cirrosis biliar multilobular e
incidencia of 4,81 casos por 10.000 habitantes.  hipertensión portal con sus complicaciones subsecuen-
tes en aproximadamente el 5 al 10% de los sujetos. La
esteatosis también se ha descrito en hasta el 67% de los
2.  Diagnóstico y manifestaciones clínicas
pacientes con FQ, generalmente asociada a desnutrición
2.1.  Diagnóstico de la fibrosis quística severa o a déficits nutricionales específicos (de ácidos
grasos esenciales, carnitina o colina) (tabla 3)17, 21.
Los criterios diagnósticos de la FQ son: Otras alteraciones digestivas condicionan desnutrición.
Aproximadamente el 5% de los pacientes nacen con
1. Presencia de uno o más criterios clínicos: Caracte- íleo meconial, que es una obstrucción intestinal se-
rísticas fenotípicas: enfermedad respiratoria o di- cundaria al espesamiento del meconio en el íleo termi-
gestiva compatible o ausencia bilateral de con- nal. Ocurre en el 20-25% de los pacientes con fenotipo
ductos deferentes; historia familiar de fibrosis clásico y es un signo de enfermedad y genotipos gra-
quística (hermano o primo); o cribado neonatal ves. Su tratamiento puede condicionar resecciones in-
positivo (elevación tripsinemia inmunorreactiva). testinales que agravan el riesgo de desnutrición a largo
2. Una o más pruebas que evidencien disfunción de plazo, incluyendo el déficit de vitamina B12. También,
la proteína reguladora de la conductancia trans- los pacientes con FQ tienen una prevalencia aumenta-
membrana: Concentración de cloro en el sudor da de reflujo gastroesofágico (RGE) y hasta el 80%
> 60 mmol/l en dos ocasiones; detección de dos puede tener pirosis y el 56% dispepsia22, 23. El síndro-
mutaciones de fibrosis quística y /o alteración de me de obstrucción intestinal distal (SOID) es una
la diferencia del potencial nasal16, 17. forma de obstrucción parcial crónica y recurrente del
intestino que ocurre frecuentemente en pacientes con
Entre las características fenotípicas al diagnóstico, FQ y casi exclusivamente con IPE. Se produce por la
que además condicionan desnutrición, destacan: obstrucción parcial (rara vez total) de la luz por conte-
La afectación respiratoria: En la FQ se pueden nido intestinal mucofecaloideo viscoso en el íleon ter-
afectar todos los niveles de las vías respiratorias. Es la minal y/o colon proximal. La incidencia de obstrucción
responsable de la mayor proporción de morbimortali- total en niños es de 5 a 12 episodios por 1.000 pacien-
dad en la FQ y, junto con la malabsorción, el modo más tes y año. La incidencia de obstrucción parcial en adul-
Tema 35.  Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad pulmonar… 557

Tabla 3.  Complicaciones hepatobiliares en fibrosis FVC) tras broncodilatación es menor de 0,7 (o debajo
quística. del límite inferior de la normalidad en personas mayo-
res de 60 años).
Complicaciones Prevalencia (%) Para completar el estudio pueden ser útiles otras
Esteatosis hepática 20-60 pruebas adicionales como la pulsioximetría, gasome-
tría arterial, análisis de sangre y orina, electrocardio-
Cirrosis biliar focal 20-30 grama, o la determinación de alfa-1 antitripsina séri-
Cirrosis multilobular  5-10 ca. Por último, existen otras pruebas opcionales, en
función de la clínica, como el test de difusión, la ple-
Hipertensión portal 2-5 tismografía, la determinación de la distensibilidad
Microvesícula  5-20 pulmonar, el test de la marcha de 6 o 12 minutos, la
ergometría respiratoria, la oximetría nocturna, la poli-
Distensión vesicular  3-20 somnografía, la tomografía computarizada torácica,
el ecocardiograma o incluso la hemodinámica pulmo-
Micro litiasis y barro biliar 30
nar (figura 2).
Colelitiasis 15 En la EPOC avanzada, la espiración alargada y las si-
bilancias son signos inespecíficos, aunque indican la
Esteatosis hepática (de origen
25-60 existencia de una obstrucción al flujo aéreo. En la EPOC
yatrógeno generalmente)
grave aparecen signos más llamativos y persistentes.
Modificada de Debray D17. Los más característicos son roncus, insuflación del tó-
rax, cianosis central, acropaquias, hepatomegalia, ede-
mas o pérdida de peso.
tos se ha estimado en 35,5/1.000 pacientes y año. La La historia clínica es la primera aproximación fren-
prevalencia es cercana al 20% de adultos24. La colopa- te a un paciente con sospecha de BQ. La confirma-
tía fibrosante es una complicación diferente al SOID, ción diagnóstica se realizará siempre con una tomo-
que afecta al colon, generalmente en niños y adoles- grafía computarizada de alta resolución (TCAR), gold
centes, y que parece asociarse a la ingesta de dosis ele- estándar, con una sensibilidad del 96% y una espe-
vadas de enzimas pancreáticas. Todavía hoy en día está cificidad del 93%, tanto en la detección de BQ como
en discusión cuál es el motivo último de su apari- en la valoración de los cambios evolutivos de las
ción25,26. Las alteraciones en la mineralización del hue- lesiones estructurales28. Las BQ son consecuencia
so, tales como la osteopenia y la osteoporosis, son de una amplia variedad de procesos patológicos (ta-
hallazgos muy frecuentes (de hasta el 66%) en los pa- bla 4). La frecuencia de las distintas causas, así como
cientes adultos con FQ27. el porcentaje de BQ consideradas idiopáticas, varía
considerablemente en las series publicadas depen-
2.2. Diagnóstico de la EPOC y de las diendo de la edad y procedencia geográfica de los
sujetos estudiados y del protocolo diagnóstico em-
bronquiectasias
pleado. La causa más frecuente (supone hasta un
La bronquitis crónica se define por la presencia de 42%) es la post-infecciosa (bacterias, virus, tosferina
tos y expectoración durante más de 3 meses al año a lo o tuberculosis). En los países desarrollados, las BQ
largo de 2 o más años consecutivos. Se considera que secundarias a infecciones son cada vez menos fre-
un paciente está afecto de bronquitis crónica sim- cuentes y es mayor el porcentaje de pacientes con
ple si su función pulmonar es normal, y de bronquitis una enfermedad subyacente que los predispone a
crónica asociada a EPOC cuando presenta el trastor- inflamación persistente en el árbol bronquial y a in-
no ventilatorio obstructivo característico de la enfer- fecciones crónicas o recurrentes.
medad. En el enfisema pulmonar, que coexiste fre-
cuentemente con la EPOC, existe un agrandamiento
permanente de los espacios aéreos distales a los bron-
3. Desnutrición: prevalencia y fisiopatología
quiolos terminales con destrucción de la pared alveo- 3.1. Desnutrición en la fibrosis quística:
lar, sin fibrosis manifiesta. La disnea es progresiva y,
prevalencia y fisiopatología
cuando aparece, existe ya una obstrucción moderada o
grave al flujo aéreo. Hasta hace pocos años se consideraba que «la FQ se
Para establecer el diagnóstico, son necesarias inicial- asocia a desnutrición» debido a que prácticamente siem-
mente la espirometría forzada, la prueba broncodilata- pre estaba presente en el momento del diagnóstico y a
dora y la radiografía de tórax. que la gran mayoría de los pacientes sufría un deterioro
La obstrucción al flujo aéreo se define por la espiro- de su estado nutricional en el curso de la enfermedad y
metría cuando el cociente volumen espiratorio forzado fallecían muy desnutridos. Actualmente, la prevalencia de
en el primer segundo/capacidad vital forzada (FEV1/ desnutrición en la FQ ha disminuido notablemente, aun-
558 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

α-1-AT: alfa-1-antitiripsina.
Modificada de Guía clínica SEPAR-ALAT de diagnóstico y tratamiento de la EPOC107.

Figura 2.  Diagnóstico de EPOC.

que siguen comunicándose cifras cercanas al 25-30% de condicionar malabsorción de macro y/o micro-
los sujetos, tanto en niños como en adultos. nutrientes (por ejemplo, de la B12 tras cirugía
La génesis de la desnutrición está motivada por del íleon terminal o déficits de vitamina K tras
un desequilibrio entre el consumo energético y el gasto resecciones de colon).
calórico, determinado por tres factores, el aumento 2. Ingesta de energía: Los pacientes con FQ son
de los requerimientos, el descenso en la ingesta y el especialmente propensos a complicaciones que
aumento de las pérdidas2 (figura 3). limitan el consumo oral. La esofagitis por reflujo,
el síndrome de obstrucción intestinal distal, la co-
1. Pérdidas energéticas: La pérdida de nutrien- lopatía fibrosante, las alteraciones de la vía biliar
tes en heces debida a la maldigestión/malab- extrahepática o la enfermedad hepática avanza-
sorción, principalmente por la afectación exo- da, están relacionados también con el bajo con-
crina del páncreas y de otros órganos digestivos, sumo calórico. Además, las reagudizaciones res-
es una causa conocida de disbalance energéti- piratorias normalmente producen restricción
co. A pesar de la mejoría en la potencia de las dietética por la anorexia, causando pérdida de
enzimas pancreáticas que se administran en la peso aguda y, en estadios finales de la enferme-
actualidad, muchos pacientes persisten con es- dad pulmonar, la anorexia crónica es una carac-
teatorrea, incluso aunque reciban las cantida- terística constante. Por último, los pacientes con
des que se consideran adecuadas de suplemen- enfermedad crónica severa presentan con más
tos enzimáticos. Alteraciones en el pH intestinal, frecuencia trastornos psiquiátricos como depre-
en la secreción de sales biliares (por afectación sión clínica, que en adolescentes y adultos pue-
hepatobiliar en al menos un tercio de los pa- den producir anorexia severa29.
cientes), cumplimentación inadecuada o inclu- 3. Gasto energético y metabolismo: El gasto
so interferencias con el moco intestinal, pueden energético basal (GEB) de los pacientes con FQ
favorecer la malabsorción. Además, la diabetes está aumentado. Existe mucha controversia sobre
relacionada con la FQ, si no se controla adecua- las causas de este aumento. Diversos estudios ex-
damente, puede aumentar las pérdidas calóri- perimentales y algunos clínicos han sugerido que
cas por la glucosuria acompañante. Las resec- el genotipo influiría directamente aumentando el
ciones intestinales previas también pueden GEB, mayor en homocigotos DF508. Sin embargo,
Tema 35.  Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad pulmonar… 559

Tabla 4.  Etiología de las bronquiectasias en España. El empeoramiento del estado nutricional guarda una
relación directa con el descenso de los parámetros de
n: 2047 función pulmonar y se ha propuesto como un factor
Etiología
(100%) predictor de morbilidad, e incluso de mortalidad, en
Postinfecciosas: 613 (30) personas con FQ . La interacción entre estos dos facto-
  TBC 380 (18,6) res, nutrición y función pulmonar, posee gran relevan-
  No TBC 233 (11,4) cia, porque al descender de forma paralela influirían
Idiopática 496 (24,2) sobre la calidad de vida y el pronóstico de superviven-
cia del paciente31, 32.
Fibrosis quística 255 (12,5)
Inmunodeficiencias primarias 192 (9,4) 3.2. Desnutrición en la EPOC y las
EPOC 160 (7,8) bronquiectasias: prevalencia y fisiopatología
Asma 110 (5,4)
La prevalencia de desnutrición en la EPOC es muy va-
Discinesia ciliar 60 (2,9) riable en función del criterio empleado y de la población
Enfermedades sistémicas o del tejido estudiada. Soler et al. obtuvieron en personas ambulato-
29 (1,4)
conectivo rias con EPOC unas prevalencias de bajo peso corporal,
Aspiración 20 (0,9) desnutrición proteica, muscular o visceral y depleción de
grasa del 19,1, 47,2, 17,4 y 19,1%, respectivamente, y
RGE 13 (0,6)
objetivaron que hasta un 62,9% de los pacientes con
Inhalación de gases 6 (0,3) peso normal presentaba pérdida de masa muscular33. En
Inhalación de drogas 4 (0,2) pacientes hospitalizados por reagudizaciones, la desnu-
ABPA 18 (0,9) trición, definida por un índice de masa corporal (IMC)
menor de 20 kg/m2 o índice de masa magra < 16 kg/m2,
Malformaciones congénitas: 14 (0,7)
fue del 38%; si la definición era la pérdida de peso, alcan-
  Patología traqueobronquial 11 (0,5)
zaba el 40%, y empleando niveles < 3 g/dl de albúmina
  Síndrome Swyer-James 3 (0,1)
la prevalencia de desnutrición fue del 18%34. Si el criterio
Inmunodeficiencias secundarias: 11 (0,5) diagnóstico contemplaba un IMC inferior a 21 kg/m2 la
  VIH 4 (0,2) desnutrición afectaba al 22% de los pacientes ingresados
  Postrasplante 4 (0,2) por exacerbaciones35.
  Neoplasias 3 (0,1) En otros trabajos, empleando el criterio de la deple-
Déficit alfa-1-antitripsina 10 (0,5) ción magra (medida por diferentes métodos), la preva-
Obstrucción bronquial 6 (0,3) lencia oscila entre el 20% en pacientes con afectación
moderada o severa (pero estables y ambulatorios), el
Enfermedad inflamatoria intestinal 5 (0,2)
35% de los que se envían a un programa de rehabilita-
Infarto pulmonar por TEP 5 (0,2) ción, o hasta el 70% de pacientes ingresados por rea-
Síndrome de Young 5 (0,2) gudización respiratoria. En pacientes hospitalizados
Síndrome de uñas amarillas 4 (0,2) con insuficiencia respiratoria crónica, solo el 16% de
los EPOC tuvieron IMC inferior a 20, pero hasta el 35%
Rinosinusitis purulenta 4(0,2)
presentó depleción de masa magra36.
Panbronquiolitis 2 (0,1) La European Respiratory Society propone definir la
Quiste hidatídico 2 (0,1) sarcopenia si existe un índice de masa magra apen­
Otros 2 (0,1) dicular (de extremidades) por debajo de dos desviacio-
nes estándar de la población joven de referencia. Esta
ABPA: aspergilosis broncopulmonar alérgica; definición es difícilmente aplicable en la práctica diaria
EPOC: enfermedad pulmonar obstructiva crónica; ya que requiere de la realización de pruebas de bioim-
RGE: reflujo gastroesofágico; TBC: tuberculosis; pedancia segmentaria o absorciometría de rayos X de
TEP: tromboembolismo pulmonar.
energía dual –DEXA– (como mínimo) y disponer de
Tomado de Olveira C et al.106. valores de normalidad en la población. Por ello parece
mucho más útil valorar al menos la masa magra corpo-
ral total y estimar el índice de masa magra total. Se
otros autores no encuentran esta relación cuan- define la caquexia con la presencia de índices de masa
do se corrige por el grado de función pulmonar30. magra bajos (<17 kg/m2 en varones y < 15 kg/m2 en
La enfermedad pulmonar junto con las reagudi- mujeres) junto con pérdida de peso involuntaria (superior
zaciones (la inflamación crónica asociada a libe- a 5% en 6 meses) y la precaquexia solamente con la
ración de citoquinas) y el aumento del trabajo pérdida de peso37. La definición de obesidad sarcopé-
respiratorio, aumentan el GEB. nica combina la sarcopenia con un IMC > 30 kg/m2.
560 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

RGE: Reflujo gastroesofágico.


Modificada de Olveira G et al.2.

Figura 3.  Patogénesis de la desnutrición en la fibrosis quística.

Hasta hace poco solo se diferenciaban dos tipos de magra. Actualmente existirían tres fenotipos teniendo
fenotipos en relación con la desnutrición: los EPOC en- en cuenta no solo la masa magra y grasa, sino también
fisematosos (fenotipo clásico de «soplador rosado») y su distribución corporal, la fuerza muscular y el tipo de
los bronquíticos crónicos obesos (fenotipo de «obeso miofibrillas que predominan, la masa ósea y el riesgo
azulado») (figura 4) objetivando una diferencia en la cardiovascular asociado (figura 5).
cantidad de masa grasa, si bien era muy frecuente en- El peso bajo y la pérdida de peso involuntaria en
contrar en ambos fenotipos una depleción de la masa pacientes con EPOC se ha asociado a mayor morbi-

Figura 4.a.  «Obeso azulado».

Figura 4.b.  «Soplador rosado».


Figura 4.  Fenotipos «clásicos» en pacientes con EPOC.
Tema 35.  Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad pulmonar… 561

A) B)
1 4 1

2 5 2
5

3 6 3 6

C) D)
4 1 4

2
1 1

3
6 6

Fenotipos metabólicos anormales y riesgo nutricional relacionado en la enfermedad pulmonar obstructiva crónica. A) Persona
sana con: 1) tomografía computarizada normal de alta resolución del tejido pulmonar; 2) representación gráfica de resonancia
magnética (RM) con músculo cuádriceps y tejido adiposo; 3) cuádriceps normal (área de sección transversal del músculo y
distribución del tipo de fibra; 4) vaso sanguíneo sano; 5) tejido óseo normal; y 6) representación gráfica de la imagen de
resonancia magnética del abdomen que muestra tejido adiposo subcutáneo. B) Caquexia, a menudo relacionada con: 1) enfisema
e hiperinflación; 2) pérdida de masa muscular esquelética; 3) atrofia de fibras musculares y un cambio de tipo I a II que conduce
a disminución de la función del músculo esquelético; 5) osteoporosis; y 6) pérdida de masa grasa. C) Obesidad relacionada con:
1) bronquitis crónica; 6) aumento del tejido adiposo subcutáneo y visceral; y 4) rigidez arterial y aumento del riesgo
cardiovascular. D) Obesidad sarcopénica, no claramente relacionada con un fenotipo pulmonar específico, caracterizada por:
2) pérdida de músculo esquelético; 3) atrofia de fibras musculares y cambio de tipo I a II, que conduce a la disminución de la
función muscular y a la preservación de la masa de grasa pero con redistribución del tejido adiposo: 6) tejido adiposo visceral;
4) rigidez arterial y aumento de riesgo cardiovascular.
Modificado de Schols et al.37.

Figura 5.  Fenotipos metabólicos y nutricionales en pacientes con EPOC.

mortalidad, independientemente del grado de dis- una valoración nutricional añadida a las determina-
función pulmonar37, 38. Los pacientes con un IMC me- ciones funcionales (tabla 5).
nor de 21 kg/m2, claramente presentan mayor riesgo El índice de masa magra está descendido en el 25%
de mortalidad de forma independiente35. Partiendo de los pacientes con un estadio GOLD 2 y 3 y hasta en
de la base de que los pacientes con EPOC tienen ma- el 35% de los sujetos en estadio 440. En otros trabajos,
nifestaciones sistémicas que no puede valorar el el punto de corte a partir del cual se incrementa no­
FEV1, Celli et al.39 postularon un índice multidimen- tablemente la mortalidad se ha considerado en
sional de valoración de la gravedad, en el que que- 25 kg/m2  37. Es lo que se llamaría la «paradoja de la
dan recogidos el IMC, el grado de obstrucción de la obesidad», que podría estar relacionada con el efecto
vía aérea, el grado de disnea y la capacidad de ejerci- directo del tejido adiposo sobre la mecánica pulmo-
cio medida por el test de la marcha de 6 minutos nar, aunque también podría estar condicionado por
(índice BODE). Este índice es mejor que el FEV1 para una preservación de masa grasa y de masa magra. En
predecir la mortalidad; en él el IMC, incluido como cualquier caso, es la pérdida de masa magra la que
variable principal, adquiere valor pronóstico inde- parece condicionar más la mortalidad de forma inde-
pendiente en la EPOC, lo que recalca la necesidad de pendiente del IMC38 y, por otro lado, hay que tener en
562 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

Tabla 5.  Puntuación BODE.

5a.  Sistema de puntuación BODE


0 1 2 3
FEV1, % del predicho >/= 65 50-64 35-49 </= 35
Disnea: MRC 0–1 2 3 4
TM 6M, metros >/= 350 250-349 150-249 </= 149
IMC (kg/m2) > 21 </= 21

FEV1: volumen espiratorio forzado en 1 segundo; IMC: índice de masa corporal; MRC: grado de disnea
según Medical Research Council; TM 6M: prueba de la marcha de 6 minutos.
Cálculo del índice BODE: Los puntos de cada variable se agregan en función del valor de umbral
medido para cada uno. El valor oscila entre 0 y un máximo de 10. Supervivencia a los 52 meses en
función del índice BODE: 1-2: 82%; 3-4: 69%; 5-6: 60%; 7-10: 25%.
Modificado de Celli 39.

5b.  Escala de disnea MRC modificada


0 Falta de aire solo con el ejercicio vigoroso.
1 Falta de aire al correr en el suelo a nivel o subiendo una pequeña pendiente.
Más lento que la mayoría de la gente de la misma edad en el suelo a nivel
2 debido a la falta de aire o tiene que parar para respirar cuando camina al ritmo
habitual en el suelo a nivel.
Parar para respirar después de caminar unos 100 metros o después de unos
3
minutos al ritmo habitual en el suelo a nivel.
4 Sin aire para salir de la casa o falta de aire al vestirse.

cuenta la distribución de la masa grasa (la visceral las bronquiectasias (BQ frente a FQ). Asimismo, se ob-
aumenta el riesgo cardiovascular). Por último, los pa- servaron correlaciones entre citocinas inflamatorias (es-
cientes con EPOC desnutridos o con baja masa magra pecialmente la interleucina 6 -IL-6-) y el número de exa-
tienen más tendencia a la osteopenia u osteoporosis cerbaciones, el volumen de la broncorrea, parámetros
que los que tienen sobrepeso41. espirométricos (FEV1) y la puntuación Bhalla. Los pa-
En pacientes con EPOC medidas de la masa magra cientes con mayor gravedad desde el punto de vista
simples, como es la circunferencia muscular del brazo, respiratorio, malnutridos y con diabetes presentaban
predicen mejor la mortalidad que el IMC, debido a que niveles significativamente más elevados de IL-6 y mayor
muchos pacientes pueden tener sobrepeso u obesi- estrés oxidativo46, 47.
dad42. De igual forma, el descenso de fuerza de múscu- En EPOC y BQ los pacientes suelen presentar un incre-
los respiratorios y periféricos en pacientes con EPOC mento en el gasto energético basal motivado por un
hospitalizados se asocia a mayor número de readmisio- aumento del trabajo respiratorio (que es más ineficien-
nes y exacerbaciones43. te), por el propio tratamiento (por ejemplo, uso de be-
La prevalencia de la desnutrición en pacientes con ta-agonistas) y, secundariamente, por la inflamación
BQ no ha sido bien estudiada. Al igual que en la EPOC, sistémica provocada por la liberación crónica de citoqui-
el IMC es un factor predictivo independiente de super- nas proinflamatorias y catabólicas (por ejemplo el TNF e
vivencia, aumentando la mortalidad por debajo de IL-6). Además, se ha objetivado que existe un incremen-
20 kg/m2 44. El presentar un IMC inferior a 23 kg/m2 es to en el gasto por actividad física, debido a una posible
un factor predictor independiente de colonización por ineficiencia mecánica y metabólica de los músculos es-
micobacterias atípicas –no tuberculosas–45. triados y un incremento en el catabolismo proteico aso-
En un trabajo sobre 93 pacientes con BQ estables (43 ciado a la enfermedad, agravado por el tratamiento con
con FQ) nuestro grupo objetivó que la prevalencia de corticoides que reciben un alto porcentaje de pacientes.
desnutrición de masa magra fue del 31%, sin encontrar Se ha descrito también que la EPOC puede inducir insu-
diferencias significativas en función de la etiología de linresistencia, alteraciones del metabolismo de los hidra-
Tema 35.  Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad pulmonar… 563

tos de carbono y ser un factor de riesgo para desarrollar pulmonar y morbilidad, permitirán en el futuro realizar
diabetes tipo 2 y otros componentes del síndrome me- recomendaciones basadas en pruebas.
tabólico y de la enfermedad cardiovascular. La hipoxe- En los pacientes con FQ está indicado realizar una
mia crónica, la atrofia muscular por inactividad física y la valoración detallada de la dieta habitual (encuesta
alta prevalencia de hipogonadismo podrían contribuir dietética de, al menos, 3 días) al diagnóstico de la en-
también a la fisiopatología de la enfermedad. Por últi- fermedad, de forma anual en el paciente estable y
mo, se ha descrito una ingesta inadecuada calórica y/o siempre que se produzca pérdida de peso, fracaso del
proteica en relación con los requerimientos, especial- crecimiento o empeoramiento clínico52,53. El consenso
mente en un subgrupo de pacientes hipermetabólicos y europeo recomienda una valoración de la adherencia a
en las reagudizaciones respiratorias37, 48, 49. las recomendaciones dietéticas cada 3 meses en niños
La vitamina D desempeña un papel clave en la regu- y cada 6 meses en adultos52.
lación de la homeostasis del calcio y del hueso, así En personas con EPOC y BQ estables es recomenda-
como el aumento de las citoquinas proinflamatorias y ble también conocer al menos los patrones de inges-
otros factores. Se han demostrado asociaciones entre ta (por ejemplo, mediterránea)54; en caso de ingreso se
niveles bajos de vitamina D y la densidad mineral ósea debe valorar la ingesta por cuartiles y, si se detecta des-
en diferentes poblaciones, incluyendo pacientes con nutrición o pérdida de peso involuntaria en pacientes
EPOC50, 51. Los niveles bajos de 25-OHD también se aso- ambulatorios, realizar también una valoración detalla-
cian con debilidad muscular y mayor riesgo de caídas. da de la dieta habitual.

4. Valoración nutricional en fibrosis quística, 4.2.  Composición corporal y función muscular


enfermedad pulmonar obstructiva crónica Como se comentó previamente, tanto en la FQ como
y bronquiectasias en la EPOC y en las BQ, uno de los factores que más
Al igual que en todas las enfermedades crónicas que condicionan la morbimortalidad en relación con la des-
cursan con desnutrición, la detección de la misma, en nutrición es el descenso de masa magra. Por ello es útil
los pacientes con FQ y EPOC, debe realizarse mediante realizar medidas de la composición corporal, mediante
la combinación de diferentes métodos (en función diferentes técnicas, para estimar la masa magra, sien-
también de la disponibilidad de los mismos). do especialmente útil el cálculo del índice de masa ma-
gra (masa magra en kg/talla2, considerándose desnutri-
ción si se obtienen valores menores de 17 kg/m2 en
4.1.  Peso, talla, índice de masa corporal e ingesta varones y de 15 en mujeres)37.
Cada revisión debe recoger, tanto en adultos como Esto puede realizarse por diferentes técnicas.
en niños, el peso, la talla, el IMC y la pérdida de peso Las más simples y baratas serían la medición de plie-
en el tiempo52. gues y circunferencias (como mínimo el pliegue tri-
En adultos con FQ se considera criterio absoluto de cipital y la circunferencia braquial) y la impedancio-
desnutrición la existencia de valores de IMC menores metría bioeléctrica; ambas técnicas han sido
de 18,5 kg/m2. El objetivo sería alcanzar como mínimo validadas en FQ, BQ, y EPOC, aunque podrían sobresti-
valores de IMC de 22 kg/m2 en mujeres y de 23 kg/m2 mar la masa magra clasificando como normales a pa-
en varones, ya que dichos valores se asocian a una cientes desnutridos37, 55–57.
función pulmonar con afectación solo moderada (FEV1 La medida del perímetro de cintura o del cocien-
mayor del 60%). En niños con FQ se recomienda clas- te cintura/cadera permite valorar el riesgo cardio­
ificar la desnutrición en función de los percentiles (pc) vascular, siendo imprescindible incluirlo en las personas
del IMC (menor al pc 10) para niños de entre 2 y 19 con EPOC37 y BQ, aunque también es deseable en FQ.
años. Sin embargo, no existen puntos de corte tan El método quizás más útil para medir los comparti-
claros como en adultos que puedan predecir valores de mentos corporales (pero menos empleado por su ma-
FEV1 en la espirometría, variando en relación con la yor complejidad y coste) es la DEXA, que podría consi-
edad. Por ello, a efectos prácticos, se recomienda in- derarse el patrón modelo al alcance de los clínicos
tentar alcanzar y mantener pesos que correspondan a (también validado en las tres patologías respiratorias
valores de percentiles de IMC iguales o superiores al crónicas), ya que, además, permite conocer el estado
50, que se asociarían a menor grado de afectación pul- de la masa ósea37, 58. También se pueden realizar, gene-
monar. En niños menores de 2 años se deben evaluar ralmente en estudios de investigación, otras técnicas
los percentiles de peso y la talla para su edad. más complejas, como la pletismografía de desplaza-
Existe controversia en la literatura sobre qué tablas miento aéreo, la tomografía computarizada, la reso-
de crecimiento se deben emplear; así, algunos autores nancia magnética , la técnica de doble agua marcada y
piensan que con el uso de las de la OMS podría infraes- otras37.
timarse la desnutrición. Estudios de seguimiento a lar- La fuerza muscular también puede medirse de di-
go plazo, en los que se evalúe la relación con la función ferentes formas: la fuerza de los músculos ventilatorios
564 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

se mide mediante la presión inspiratoria máxima (PIM) monitorizarán los niveles de vitaminas hidrosolubles,
y la presión espiratoria máxima (PEM). En los pacientes como la B12, si se han producido resecciones intesti-
con desnutrición crónica pueden encontrarse disminui- nales (especialmente del íleon terminal).
das y mejorar tras la intervención nutricional o la reha- La ingesta crónica de antibióticos, así como otros
bilitación. El test de la marcha de 6 o 12 minutos, así factores en FQ (malabsorción, hepatopatía, etc.)
como las sentadillas, son también métodos muy sim- pueden condicionar el déficit de vitamina K, no
ples para medir el funcionalismo muscular, y han sido obstante no es bien conocida la prevalencia real en
validados en EPOC y FQ; como métodos más complejos estas enfermedades. Así, tanto en FQ como en el
se emplean los test de esfuerzo cardiopulmonar en ta- resto de enfermedades (BQ y EPOC) la medición del
piz rodante o en bicicleta59–61. También se han emplea- tiempo de protrombina es un marcador muy tardío
do pruebas de fuerza muscular de grupos musculares de déficit de vitamina K. No obstante, los métodos
–como el cuádriceps– o estimulación de músculos más sensibles como la proteína inducida por el défi-
concretos por ejemplo, el abductor del pulgar o la cit de vitamina K (PIDVK) o bien la osteocalcina infra-
fuerza diafragmática. carboxilada no suelen estar disponibles de rutina por
No obstante, por su simplicidad y bajo coste, reco- su alto coste64.
mendamos emplear la dinamometría de mano, que Como se comentó, en el caso de la EPOC, y posi-
es un marcador funcional de fuerza muscular que co- blemente también en el de BQ, la prevalencia de dé-
rrelaciona bien con otros parámetros que estiman ficit de vitamina D es muy elevada, por lo que se re-
masa magra y es un buen marcador de renutrición62. comienda también su medición sistemática a final
del invierno37.
4.3. Analítica En pacientes con FQ, es importante obtener una evi-
dencia objetiva de la malabsorción intestinal y de la IPE
En pacientes con FQ y EPOC o BQ se recomienda en todos los pacientes, para identificar a aquellos que
monitorización analítica una vez al año en el paciente requieren tratamiento enzimático y para monitorizar
estable y siempre que la situación clínica lo indique, los efectos de dicho tratamiento. Para diagnosticar la
especialmente en los ingresos hospitalarios o reagudi- IPE, lo más útil es la determinación de grasas y nitró-
zaciones graves52. El hemograma es un parámetro geno en heces (de 3 días) junto con la estimación
útil, ya que la hemoglobina puede ser un buen predic- concomitante de la ingesta. Un coeficiente de absor-
tor de supervivencia en FQ. En adultos con EPOC con ción < 93% se puede utilizar para definir esteatorrea.
hipoxemia crónica es frecuente encontrar poliglobulia. Otras técnicas que estudian de forma indirecta la fun-
En la desnutrición proteica y proteicocalórica el siste- ción pancreática son las determinaciones en heces de
ma inmunitario se afecta especialmente por la reduc- enzimas pancreáticas no biodegradables. La elas-
ción en el número de células T y del total de linfocitos tasa 1 tiene alta sensibilidad y especificidad para el
circulantes, así como por una disminución en la res- diagnóstico, especialmente si se emplea la técnica de
puesta de hipersensibilidad retardada. La albúmina es ELISA (enzyme-linked immunosobent assays) que utili-
un buen predictor de morbimortalidad en los pacientes za anticuerpos monoclonales (ya que no presenta reac-
aunque es poco sensible a modificaciones recientes del ciones cruzadas con la elastasa de origen porcino y,
estado nutricional. La prealbúmina es mejor marca- por tanto, solo mide la producción endógena). Un ni-
dor de cambios nutricionales agudos y ha sido emplea- vel menor de 100 µg/ g de grasa se ha propuesto como
da en pacientes con enfermedades respiratorias crónicas. punto de corte para definir la IPE. En pacientes sin IPE
Se han descrito niveles bajos de diversos oligoelementos debe medirse, al menos, anualmente. Recientemente
(zinc, selenio y cobre). No obstante, solo está indicada se han empleado también test del aliento con triglicé-
la determinación del zinc, especialmente en pacientes ridos marcados para diagnóstico y seguimiento de los
con malabsorción clara, siendo mejor marcador el zinc pacientes.
contenido en los hematíes. En la FQ es frecuente encontrar niveles anormales
Se debe evaluar el estado férrico mediante la medida de ácidos grasos esenciales en suero, plasma y en
del hierro sérico, la ferritina, la capacidad total las membranas de células sanguíneas y en biopsias
de fijación del hierro o el porcentaje de satura- de tejidos, por lo que puede ser útil su medición, si
ción de transferrina con objeto de diferenciar si exis- está disponible en los centros. Los hallazgos más fre-
te anemia de trastornos crónicos o ferropénica. En pa- cuentes (respecto a las personas sanas) son el des-
cientes con EPOC es frecuente también encontrar censo en los niveles de ácido linoleico y de doco-
ferropenia de etiología multifactorial63. sahexaenoico (DHA). Estas alteraciones podrían estar
En la FQ se deben medir los niveles plasmáticos de implicadas en la fisiopatología de la enfermedad, ya
vitaminas liposolubles al menos una vez al año y que son más pronunciadas en los pacientes con fe-
siempre que se produzcan cambios en el tratamiento notipos más graves65, 66.
de suplementación vitamínica o en el de la malabsor- Tanto la EPOC como las BQ o la FQ son enfermeda-
ción, especialmente en pacientes con IPE (tabla 6). Se des con un trasfondo de inflamación crónica sistémi-
Tema 35.  Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad pulmonar… 565

Tabla 6.  Suplementación de vitaminas en fibrosis quística.

Vitamina Pacientes candidatos Dosis inicial Control


Retinol 4000-10000 UI/día
Carotenos 1 mg/kg/día (máximo
A IPE Niveles séricos (retinol)
50 mg/día) 12 semanas y luego
mantener con máximo de 10 mg/día
400-1000 UI/día < 1 año
IPE y en baja exposición
D 800-2000 UI/día Niños 1-10 años Niveles séricos (25-OH-D)
solar
800-4000 UI/día >10 años
Niveles séricos (alfa-tocoferol)
Todos los pacientes 50 UI/día < 1 año
E corregidos por colesterol
(alfa tocoferol) 100-400 UI /día resto
> 5,4 mg/g
IPE no controlada, Clínica**,
0,3 a 1,0 mg/día < 1 año
hepatopatía, resección tiempo de protrombina**,
K 1 mg día a 10 mg/día resto (mejor
colónica, antibioterapia PIVKA-II***,
diariamente).
prolongada. osteocalcina infracarboxilada***.
B12 Resección ileal. 100 μg IM/mes Niveles séricos.
Otras Según ingesta*.

Factores de conversión: UI a mg:


  Vitamina A: UI x 0,3 = μg;
  Vitamina D: UI / 40 = μg;
  Vitamina E: acetato de all-rac-alfa-tocoferol: UI = mg;
  Vitamina E: RRR-alfa-tocoferol: UI / 1,49 = mg.
IPE: pacientes con insuficiencia pancreática exocrina.
* El resto de vitaminas no son necesarias si la ingesta del paciente es normal.
** Marcadores muy poco sensibles en cuanto al déficit.
*** «Proteína inducida por la ausencia de vitamina K» o la «osteocalcina infra-carboxilada», son marcadores mucho más sensibles
pero más caros.
Modificada de Turck D et al.52.

ca, por lo que se propone medir además la proteína C varones mayores de 50 años se debe emplear el T-Sco-
reactiva67. Otros autores han empleado otros marca- re (se considera osteoporosis si < de –2,5 SDS). En su-
dores de inflamación como el TNF-alfa, la IL-6, de oxi- jetos menores de 20 años en los que la talla sea menor
dación37, 46, 47; no obstante, para la práctica clínica su de una desviación estándar respecto a los de sujetos
utilidad es limitada. sanos de similar edad y sexo, se recomienda que el
Z-Score se ajuste por la talla (o edad para la talla) para
4.4.  Evaluación del estado óseo evitar sobreestimación de déficits en la densidad mine-
ral ósea27, 52, 68.
Los consensos recomiendan realizar DEXA a todos En pacientes con EPOC, la prevalencia de osteoporosis
los pacientes con FQ a partir de los 8-10 años de edad, y de fracturas es muy elevada. Los datos de prevalencia
y repetirlo de forma individualizada (con una frecuen- varían de 5 a 60%, dependiendo de los métodos diag-
cia entre 1 y 5 años) en función de la edad, el valor nósticos utilizados, el contexto poblacional, la gravedad
previo de la densitometría, si se ha instaurado trata- de la enfermedad y de otros factores moduladores (en-
miento y de los factores de riesgo para desarrollar os- vejecimiento, tabaquismo, desnutrición, sarcopenia, li-
teoporosis. En menores de 20 años se recomienda rea- mitación física o funcional, inflamación sistémica, uso
lizar densidad mineral ósea total en columna lumbar y, de corticoides y alta prevalencia de deficiencia de vitami-
en mayores de esta edad, columna lumbar y cadera. Se na D en personas con EPOC avanzada)37, 51.
debe valorar el Z-Score en niños, mujeres premenopáu- En personas con BQ no está suficientemente estu-
sicas y varones menores de 50 años (se considera «baja diado; no obstante, existen series que apuntan que la
densidad mineral ósea relacionada con la FQ» por de- prevalencia es muy elevada (osteoporosis 27% y os-
bajo de –2 SDS). En mujeres postmenopáusicas y en teopenia 59%)69.
566 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

5. Objetivos del soporte nutricional Para prevenir la osteoporosis y la osteopenia el


en la fibrosis quística consenso europeo recomienda mantener niveles séri-
cos de 25-OH-vitamina D (medidos preferentemente
5.1. Tratamiento dietoterápico en la fibrosis quística al finalizar el invierno) por encima de 20 ng/ml,
Debido a que las personas con FQ tienen un riesgo mientras que la Cystic Fibrosis Foundation recomien-
importante de desarrollar desnutrición como conse- da por encima de 3071; esto suele conseguirse con
cuencia de balances energéticos negativos, se reco- dosis entre 800 y 4.000 UI de vitamina D diarias sin
mienda que su ingesta habitual aporte entre el 120 y el provocar efectos secundarios. En algunos estudios se
200% de las calorías recomendadas para las personas han objetivado deficiencias de vitamina D de hasta
sanas de su misma edad, con el objetivo de alcanzar un casi el 90% en niños y adultos jóvenes (dependiendo
crecimiento y peso y composición corporal adecua- del punto de corte), por lo que algunos autores de-
dos52 (tabla 7). fienden suministrar dosis mayores que las que propo-
La distribución de macronutrientes respecto al valor nen los consensos72.
calórico total es aproximadamente el 20% en forma de Respecto a la vitamina A, si se suplementa con
proteínas; entre el 40 y el 45% como carbohidratos y retinol, se recomienda subir lentamente las dosis
entre el 35 y el 40% grasas. Respecto a la calidad de lí- con el objetivo de alcanzar niveles normales73. En
pidos, el objetivo inicial debe ser educar en lo que es una caso de enfermedad hepática grave se deben redu-
dieta saludable (con menos del 10% de grasas satura- cir las dosis, especialmente si coexisten niveles bajos
das, menos del 1% de ácidos grasos (AG) trans, menos de la proteína ligadora del retinol. El empleo de be-
del 10% en forma de AG poliinsaturados y el resto a tacarotenos como fuente de vitamina A podría ser
base de AG monoinsaturados). Esta distribución es, po- más seguro. En mujeres en edad fértil deben medir-
tencialmente, fácil de conseguir en nuestro medio incre- se los niveles de vitamina A preconcepcionalmente
mentando el consumo de aceite de oliva (crudo y/o co- o en el primer trimestre, y se deben valorar los ries-
cinado) y de frutos secos. La ingesta de fibra debería ser gos y beneficios de suplementar si los niveles están
la recomendada para la población general. bajos, sin sobrepasar las 10.000 UI por su posible
En el tratamiento de la FQ, el consejo dietético efecto tóxico.
junto con la fortificación de la dieta habitual, utili- Existe controversia acerca de si se debe suplementar
zando alimentos altamente energéticos (por ejem- con vitamina K (se recomienda con fitomenadiona) a
plo, en forma de batidos, chucherías, frutos secos, todos los pacientes, especialmente porque su déficit,
snacks, cremas, fritos, aceite añadido a las comidas incluso subclínico, podría desempeñar un papel en el
elaboradas, etc.) son eficaces para incrementar las desarrollo de osteoporosis. En cualquier caso, es obli-
calorías totales ingeridas. La efectividad de los cam- gado suplementarla en pacientes con IPE no controla-
bios conductuales ha sido demostrada en la FQ, es- da, hemoptisis, antibioterapia prolongada, hepatopa-
pecialmente en niños. tía severa o con resecciones colónicas amplias. Aunque
Cuando coexiste la FQ con la diabetes mellitus, el no está claro, podría ser preferible la suplementación
objetivo esencial debe ser mantener un buen estado diaria que la semanal52, 64, 74.
nutricional. Por tanto, no se recomiendan restricciones
dietéticas de carbohidratos si son necesarios para man- 5.1.1.  Minerales y oligoelementos
tener el estado nutricional. En estos casos habrá que
adecuar la medicación hipoglucemiante (generalmente En muchos pacientes es necesario suplementar con
insulina retardada o análogos lentos junto con ultrarrá- sal (cloruro sódico) en situaciones de ejercicio inten-
pidos) a la ingesta de los hidratos de carbono20. Aun- so, fiebre, hipersudoración y/o con altas temperatu-
que hasta ahora no es una alternativa real en la mayo- ras (tabla 8). Puede ser necesaria la adición de prepa-
ría de los centros, el trasplante pulmonar es posible rados de magnesio en pacientes tratados con
simultanearlo con el de páncreas aislado con drenaje aminoglucósidos durante largos períodos. Se reco-
entérico. mienda alcanzar las recomendaciones dietéticas re-
Todos los pacientes con IPE deben recibir suple- comendadas de calcio con alimentos naturales, aun-
mentación con vitaminas liposolubles A, D y E que puede suplementarse en caso de que la dieta sea
(tabla 6)52. El aporte farmacológico se ajustará en deficitaria o en presencia de osteopenia/osteoporo-
base a la medición de los niveles plasmáticos, que sis. El hierro se debe prescribir solo si existe ferrope-
debe realizarse al menos una vez al año, y siempre nia. El zinc también debe suplementarse si los niveles
que se produzcan cambios en el tratamiento de su- se encuentran bajos (en niños mayores de 2 años
plementación o en el de la malabsorción. Algunos 15 mg/día y en adultos 25 mg/día); no obstante, los
autores proponen para todos los pacientes (con y sin niveles séricos normales no siempre descartan un dé-
IPE) la suplementación con vitamina E debido a su ficit, por lo que se recomienda su uso en todos los
efecto protector sobre la oxidación de las lipoproteí- pacientes con IPE no controlada y si existe déficit de
nas y sobre la peroxidación lipídica70. vitamina A asociado52.
Tema 35.  Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad pulmonar… 567

Tabla 7.  Fórmulas para estimar los requerimientos calóricos en pacientes con fibrosis quística.

Método 1: a partir de la fórmula de Harris-Benedict y datos de actividad física y gravedad de la enfermedad


(adultos)
GET (requerimientos en FQ) = Gasto energético basal (GEB) x Factor de actividad física
x Factor de enfermedad
· GEB según fórmula de Harris-Benedict: Kcal diarias es igual a:
   V = 66,47 + (13,75 x peso en kg) + (5 x altura en cm) – (6,76 x edad).
   M = 665,1 + (9,6 x peso en kg) + (1,85 x altura en cm) – (4,68 x edad).
·  Factor de corrección según actividad física (AF)
Actividad Actividad Actividad muy
Reposo cama Actividad ligera
moderada intensa intensa
Sexo V M V M V M V M V M
Factor AF 1,3 1,3 1,6 1,5 1,7 1,6 2,1 1,9 2,4 2,2
· Factor de enfermedad: según severidad (valorar de forma subjetiva): desde 1,2 (casos leves) hasta 1,5 (casos
graves)
Método 2: Estimar directamente las calorías totales por kg de peso según actividad física y el dato resultante
multiplicarlo por el factor de enfermedad (adultos)
Actividad Actividad Actividad muy
Reposo cama Actividad ligera
moderada intensa intensa
Sexo V M V M V M V M V M
Kcal/Kg/día 31 30 38 35 41 37 50 44 58 51
Método 3: Fórmula de la Cystic Fibrosis Foundation* (adultos y niños)
GET = GER (Gasto energético en reposo) x (Coeficiente de actividad + Coeficiente de enfermedad)
x Coeficiente de absorción de grasa
Gasto energético en reposo (fórmulas de la OMS):
Edad Mujeres Varones
0-3 61 x peso – 51 60,9 x peso – 54
 3-10 22,5 x peso + 499 22,7 x peso + 495
10-18 12,2 x peso + 746 17,5 x peso + 651
18-30 14,7 x peso + 496 15,3 x peso + 679
30-60 8,7 x peso + 829 11,6 x peso + 879
·  Nivel de actividad: En cama = 1,3. Sedentario = 1,5. Activo = 1,7.
· Coeficiente de enfermedad: Función pulmonar normal (FEV 1 ≥ 80%) = 0. Disfunción moderada (FEV 1 40-80%) = 0,2.
Disfunción severa (FEV 1 ≤ 40%) = 0,3-0,5.
· Coeficiente de absorción de grasa: En pacientes sin IPE o con absorción normal (es decir > 93%) no aplicar
coeficiente de corrección. En pacientes con porcentaje de absorción menor del 93% aplicar el siguiente coeficiente:
0,93/% de grasa absorbida (expresado en decimal). Por ejemplo: absorción del 80% poner 0,80; es decir:
0,93/0,80 = 1,1625 (en caso de no disponer del dato aplicar 0,85).

GET: gasto energético total; H: varones; IPE: insuficiencia pancreática exocrina; M: mujeres.
*  Modificado de Olveira G2.
568 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

Tabla 8.  Suplementación con sal en la fibrosis quística.

Edad Suplementación de sodio Comentarios


Si riesgo de déficit de sodio, dar sal en pequeñas
0-6 meses 1-2 mmol/kg/día cantidades repartidas a lo largo del día en agua o
zumos
Aumentar aporte en niños que viven en ambientes muy
Niños con requerimientos
Hasta 4 mmol/kg/día calurosos o si se incrementan las pérdidas debido a
especiales
vómitos, fiebre, ostomías, etc.
Suplementar en situaciones de estrés en las que se
Alimentos salados o sal en
Niños mayores y adultos prevé hipersudoración (fiebre, ejercicio, ambiente muy
cápsulas o viales
caluroso, etc.)

Para convertir mmol a mg de sodio, cloro o sal (cloruro sódico) multiplicar por 23, 35 o 58, respectivamente.
Modificada de: Turk D et al.52.

5.1.2.  Ácidos grasos esenciales Deberán administrarse con las comidas que conten-
gan grasa (prácticamente todas, salvo las que solo
Se ha propuesto la suplementación dietética con di-
necesitan las enzimas del borde en cepillo de la mu-
versos ácidos grasos, especialmente DHA (aunque
cosa intestinal para su digestión como frutas, zumos
también se han probado combinaciones con eicosa-
de frutas, ciertas verduras, etc.). La dosis será indivi-
pentaenoico (EPA) y/o gammalinolénico) como una
dualizada y flexible en relación con la ingesta y, en
forma de modular la respuesta proinflamatoria en la
todo caso, se intentará alcanzar la mínima dosifica-
FQ. Los estudios en humanos han demostrado que es
ción que sea eficaz. En niños y adultos se suelen apor-
posible mejorar el perfil de ácidos grasos en la FQ, dis-
tar entre 500 y 4.000 UI de lipasa por gramo de gra-
minuir parámetros inflamatorios y, en algunos casos,
sa. Es, por tanto, muy importante adiestrar a los
mejorar parámetros clínicos relacionados con el pronós-
pacientes y familiares en el contenido de grasa de los
tico de los pacientes como las reagudizaciones65, 66, 75.
alimentos. Se puede comenzar por la mínima dosis
No obstante, la revisión Cochrane recoge que son nece-
recomendada (500 UI de lipasa/g de grasa) e ir su-
sarios más estudios para poder realizar recomendacio-
biendo progresivamente. No se debe sobrepasar la
nes clínicas basadas en la evidencia75.
dosis de 10.000 UI de lipasa/kg de peso/día o las
2.500 unidades de lipasa/kg/ dosis76.
5.1.3.  Enzimas pancreáticas Las dosis de enzimas deben ajustarse según la clíni-
Los pacientes con IPE, toleran perfectamente una ca (dolor cólico, peso, crecimiento), la frecuencia y las
dieta normal o alta en grasa si son tratados con enzi- características organolépticas de las heces (textura,
mas pancreáticas a las dosis adecuadas. Así, en la ma- color, olor). No obstante, ni la clínica ni la frecuencia
yoría, es posible alcanzar unos porcentajes de absor- de las deposiciones correlaciona bien con la dosis de
ción de grasa entre el 85 y el 95% de la ingesta con enzimas ni con el grado de malabsorción, por lo que
las formulaciones del mercado. Las enzimas están re- la determinación de grasa en heces (mejor de 3 días),
cubiertas por una cubierta entérica que se disuelve en junto con la encuesta dietética, permite calcular con
medio básico. Por tanto, no se pueden mezclar con mayor precisión el porcentaje de absorción de grasa
productos alimenticios con pH básico (lácteos o anti­ de la dieta. Si la absorción de grasa es inadecuada y
ácidos) y tampoco masticar o machacar. No existe un no se detectan problemas en relación con la distribu-
consenso claro sobre cuál es el mejor momento de ción, administración o almacenamiento de las enzi-
administración. En general, se recomienda tomar an- mas o en la adherencia al tratamiento, se puede in-
tes de las comidas y, en el caso de ser muchas, antes tentar mejorar disminuyendo el pH gastrointestinal
y durante las mismas. No obstante, se ha publicado, mediante la administración de inhibidores de la bom-
en pacientes con pancreatitis crónica, que la absor- ba de protones o anti-H2. Las preparaciones disponi-
ción podría ser mejor si se toman justo después de las bles en España se detallan en la tabla 9. Están en in-
comidas o bien repartidas antes (1/4), durante (1/2) y vestigación nuevas formulaciones que mejoren su
después (1/4). En cualquier caso, si no se alcanzan los eficacia y cumplimiento. Así, se están probado lipasas
objetivos de absorción, debe probarse modificar el de origen diferente al porcino (como la liprotamasa) o
momento de administración. Las enzimas realizan su se han incluido moléculas de bicarbonato en la for-
máximo efecto hasta los 30 minutos de ser ingeridas. mulación77.
Tema 35.  Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad pulmonar… 569

Tabla 9.  Preparados de enzimas pancreáticas (microencapsuladas) existentes en España y recomendaciones de


uso en la fibrosis quística.

Enzimas Kreon 10000® Kreon 25000® Kreon 5000 granulado®


50000 U/g
Lipasa 10000 U 25000 U
Una cucharada = 5.000 U
36000 U/g
Amilasa (alfa) 8000 U 18000 U
Una cucharada = 3.600 U
2000 U/g
Proteasa 600 U 1000 U
Una cucharada = 200 U
Presentación Envases de 100 y 250 cápsulas Envases de 50 y 100 cápsulas Solución para suspensión 20 g
Recomendaciones de empleo en FQ:
· No mezclar con productos alimenticios con pH básico (lácteos) o antiácidos.
· No masticar o machacar.
· Suelen administrarse antes de las comidas y, en el caso de ser muchas, antes (2/3) y durante las mismas (1/3
restante). También es adecuado tomarlo justo después de las comidas o repartidos antes (1/4) durante (1/2) y
tras las mismas (1/4).
· En lactantes o niños pequeños abrir las cápsulas y mezclarlas con agua o bebidas ligeramente ácidas (zumos o
pulpa de fruta) en una cucharadita.
· Las enzimas deberán administrarse con las comidas que contengan grasa.
· La dosis será individualizada entre 500 y 4.000 UI de lipasa por gramo de grasa comenzando por la mínima dosis
recomendada e ir subiendo progresivamente.
· Nunca sobrepasar la dosis de 10000 UI de lipasa/kg de peso/día o las 2500 unidades de lipasa/kg/dosis para
evitar la colopatía fibrosante.
· En niños hasta 12 meses 2000-4000 UI de lipasa/120 ml de fórmula y aprox. 2000 UI/g de grasa.
· Ajustar las dosis según la clínica y la determinación de grasa en heces junto con la encuesta dietética.
· Si la absorción de grasa es inadecuada y no se detectan problemas en relación con la distribución, administración
o almacenamiento de las enzimas o en la adherencia al tratamiento, se puede intentar mejorar disminuyendo el
pH gastrointestinal mediante la administración de inhibidores de la bomba de protones o anti-H2.

No se incluye el Pancreoflat®, ya que no aporta las enzimas pancreáticas microencapsuladas. Expresado en Unidades de Farmacopea
Europea. FQ: fibrosis quística.
Modificada de: Olveira G2.

5.2. Soporte nutricional artificial enteral En cualquier caso, tanto en niños como en adultos
en la fibrosis quística con FQ, la suplementación nutricional oral incremen-
ta la energía total consumida sin reducir la ingesta
5.2.1. Suplementación oral calórica de alimentos naturales de forma significativa.
Si los pacientes no consiguen alcanzar o mantener No obstante, los suplementos orales no confieren be-
los objetivos nutricionales previstos, con las modifica- neficios adicionales en el manejo nutricional de los
ciones de la dieta y optimizando el tratamiento con sujetos con desnutrición moderada respecto al conse-
enzimas pancreáticas y de posibles comorbilidades, se jo dietético simple y monitorización a medio y largo
pueden adicionar suplementos nutricionales artificiales plazo. Por ello, se debe reevaluar periódicamente si
vía oral. Desde la perspectiva de la medicina basada en los pacientes deben continuar con ellos. A corto plazo
las pruebas podemos realizar sugerencias apoyadas en podrían ser más eficaces, mejorando parámetros an-
evidencias de baja calidad79. Esto se debe a que son tropométricos (tanto en niños como en adultos) o
muy escasos los trabajos prospectivos, aleatorizados y ciertos aspectos funcionales como parámetros espiro-
controlados. Por otro lado, no se han realizado (ya que métricos, el patrón de ácidos grasos o el nivel de acti-
no sería ético) estudios en los que el grupo control no vidad física. La aceptación de la suplementación y su
recibiera intervención nutricional (en pacientes que lo cumplimiento adecuado son claramente mejores
necesiten) ni tampoco se ha comparado de forma ade­ cuando se elige conjuntamente con el paciente o sus
cuada el empleo de terapia conductual (cambios de cuidadores el tipo (consistencia, sabor, enriquecedo-
hábitos dietéticos) frente a la suplementación oral78. res de alimentos naturales, etc.) y el momento más
570 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

idóneo de su administración. Los puntos de corte a ministración. En el caso de levantarse por la noche
partir de los que hay que intensificar el tratamiento se sería conveniente infundir una dosis extra de enzimas a
recogen en la tabla 10. través de los sistemas de nutrición enteral (NE). Si se
administra por bolos, suelen ser necesarias mayores
5.2.2. Nutrición enteral por sonda en la fibrosis dosis al incrementar el flujo de aporte de grasa en el
tiempo. Se debe controlar la glucemia y tratar la hiper-
quistica
glucemia si fuera necesario con insulina. En caso de
Los datos publicados que evalúan la terapia nutricio- ingreso hospitalario y administración continua, lo ideal
nal mediante sonda, en pacientes con FQ, se basan en es la administración de las enzimas cada 3-4 horas. No
estudios no aleatorizados que no comparan este trata- se deben mezclar las enzimas con las fórmulas de NE.
miento con el manejo clínico habitual ni con otras op- Dado que el soporte nutricional por sonda se debe
ciones invasivas. En cualquier caso, de la revisión siste- mantener durante largos períodos (meses o años) se
mática de los estudios disponibles, se puede concluir suele emplear la gastrostomía (generalmente colocada
que el soporte nutricional por sonda (nasogástrica o percutáneamente por endoscopia o radioscopia), ya que
gastrostomía) en adultos con FQ podría tener los si- son bien toleradas, conllevan escasas complicaciones y
guientes efectos79, 80, 81: suelen ser mejor aceptadas que la sonda nasogástrica,
permitiendo una relación social más satisfactoria. Aun-
1. Mejora el aporte calórico. que la administración suele ser nocturna (para permitir
2. Mejora el peso en adultos y el crecimiento en ni- una alimentación normal durante el día) se deben indi-
ños, con ganancia de masa magra y grasa. vidualizar las pautas de infusión de nutrición enteral
3. Mejora, en algunos trabajos, parámetros como la adaptándolas a las preferencias de los pacientes.
función pulmonar (o, al menos, enlentece su des-
censo), la fuerza muscular o el balance nitrogena- 5.2.3. Tipos de preparados para la
do y algunos aspectos de la calidad de vida como suplementación oral y nutrición enteral
la sensación de bienestar o la actividad.
en la fibrosis quística
Se suele aportar el 40-50% de las calorías totales es- Los preparados más empleados son los que aportan
timadas para todo el día. En general, las enzimas pan- una alta densidad energética (en fórmulas líquidas de
creáticas deben administrarse antes y al final de la ad- 1,5 a 2 kcal/ml). Son de elección las dietas poliméricas

Tabla 10.  Recomendaciones de empleo de dieta, suplementos y nutrición enteral en la fibrosis quistica en
función del estado nutricional.

Puntos de corte para intensificar el soporte nutricional


Estado nutricional
Niños < 2 años Niños 2-18 años Adultos > 18 años
Estado nutricional IMC 18,5 a 22 kg/m2 en mujeres
normal: objetivo a Peso y talla ≥ 50 pc IMC pc ≥ 50 y 18,5 a 23 kg/m2 en varones
alcanzar No pérdida de peso
Solo recomendaciones dietéticas preventivas

Falta de medro: IMC pc entre 10 y 50


Estado nutricional IMC < 18,5 kg/m2 o
peso y talla entre Pérdida de peso en 2-4 meses
alterado Pérdida > 5% en 2 meses
10 y 50 pc No ganancia de peso en 2 meses
Modificación de la dieta y/o suplementos nutricionales orales
IMC persistentemente bajo IMC < 18,5 kg/m2 mantenido en
Falta de medro
Desnutrición (< 10 pc) el tiempo
persistente y talla
persistente Pérdida de peso de dos puntos en Pérdida de peso continuada
< 10 pc
pc y detención del crecimiento (> 5%) y fallo de crecimiento
Nutrición enteral por sonda

Pc: Percentil.
Modificada de Turk D et al.52.
Tema 35.  Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad pulmonar… 571

(aportan proteínas enteras) e hiperproteicas (especial- estado de desnutrición que requiera el empleo de suple-
mente si existe estrés metabólico elevado). Los prepa- mentos orales. Entre ellas destacan incrementar el núme-
rados pediátricos se pueden emplear hasta los 5 años y ro de tomas diarias, aumentando la ingesta de alimentos
a partir de esa edad son adecuados los preparados con mayor densidad energética, limitar la bebida de lí-
para adultos. Si coexiste la FQ con diabetes mellitus, quidos con las comidas, realizar reposo tras las comidas
nuestro grupo recomienda emplear fórmulas «específi- y comer lentamente. En caso de cor pulmonale se debe
cas para diabetes» que aporten un contenido en lípi- restringir también la sal de la dieta para evitar edemas.
dos alto (entre el 38 y el 50% del VCT) y, en general, El hecho de incrementar alimentos hipercalóricos im-
hipercalóricas e hiperproteicas. No obstante, se debe plica, en la práctica, aumentar el contenido graso (en
individualizar la fórmula que se va a emplear depen- ocasiones se eleva a más del 40% del contenido calóri-
diendo de la coexistencia de otras comorbilidades y co total de la dieta), por lo que es muy importante
características individuales de los pacientes2. elegir fuentes saludables (aceite de oliva virgen, frutos
Existen también fórmulas «para personas con FQ» secos crudos, pescados grasos, etc.) en el contexto de
que incorporan como fuente de AG, además de AG una patrón de dieta mediterránea, evitando un alto
esenciales, AG de la serie ω-3. Son fórmulas hiperpro- contenido en grasas saturadas y trans (bollería indus-
teicas e hipercalóricas, adicionan triglicéridos con AG trial, platos precocinados, etc.). En caso de fenotipos
de cadena media y ciertos micronutrientes a dosis más reagudizadores, se recomienda que la dieta sea hiper-
altas que las habituales. No obstante, son necesarios proteica (aproximadamente 20% del contenido total),
estudios aleatorizados y controlados que los comparen por lo que de nuevo es importante elegir fuentes bajas
con otras fórmulas para poder realizar recomendacio- en grasas saturadas (evitar carnes rojas, embutidos y
nes basadas en pruebas. sustituir por pescado, legumbres, carnes blancas, hue-
Cuando las dietas poliméricas no son bien toleradas vos, etc.). Las fuentes de hidratos de carbono deben
o existe malabsorción severa, a pesar de un correcto ser de bajo índice glucémico e incluir frutas y verduras
tratamiento enzimático, se pueden emplear dietas oli- para aportar también vitaminas, minerales y antioxi-
goméricas (aportan proteínas como oligopéptidos) dantes. No obstante, no existen estudios bien diseña-
que suelen estar enriquecidas con triglicéridos con AG dos sobre los efectos que provocan los cambios dieté-
de cadena media por su facilidad de absorción, sin ne- ticos en pacientes ambulatorios con EPOC y BQ86.
cesidad de lipasa o sales biliares. En cualquier caso, se Además, dentro de las medidas higiénicas se de-
debe evaluar la necesidad de infusión de enzimas pan- ben incluir actividades que permitan mantener un
creáticas. nivel moderado de actividad física aeróbica (mejor
dentro de un programa estructurado de rehabilita-
6. Soporte nutricional en la enfermedad ción pulmonar), ya que se ha demostrado, con un
pulmonar obstructiva crónica y alto grado de evidencia, su efectividad para mejorar
la capacidad funcional, y un estilo de vida activo en
bronquiectasias estos pacientes87.
6.1. Tratamiento dietoterápico en la EPOC
y en las bronquiectasias 6.2. Soporte nutricional artificial enteral
en la EPOC y en las bronquiectasias
Aunque la evidencia no es elevada, existen trabajos
epidemiológicos sobre la posible asociación entre el Ferreira et al. han publicado una revisión Cochrane
consumo de una dieta rica en frutas y verduras, fi- en la que evaluaron 17 ensayos clínicos en los que se
bra y pescado y el descenso del riesgo de desarrollar empleaban suplementos nutricionales (durante más
EPOC37, 82, 83. Una ingesta elevada en cereales refinados, de 2 semanas) en personas con EPOC. Basándose en
dulces, carnes (rojas y embutidos) podría incrementar pruebas de calidad moderada, concluyeron que la
el riesgo de EPOC e incluso podría asociarse a un ma- suplementación nutricional en personas con EPOC
yor riesgo de readmisión hospitalaria84. incrementa el peso, especialmente si están desnutri-
En este sentido, la promoción en todos los pacientes dos. Además, en pacientes desnutridos mejoraron
con EPOC , BQ o riesgo de padecerlas, de los principios otras medidas antropométricas (masa libre de grasa,
de una dieta basada en el patrón mediterráneo parece circunferencia muscular del brazo, pliegue tricipital),
adecuado como punto de partida inicial por sus posi- el test de la marcha de 6 minutos, la fuerza muscular
bles efectos sobre la función pulmonar y sus beneficios respiratoria y la calidad de vida (medida por el cues-
probados sobre el riesgo metabólico, cardiovascular y tionario respiratorio St George). El incremento en el
psicológico37,54,85. test de la marcha de 6 minutos alcanzó la mínima
En pacientes con EPOC y BQ desnutridos, se suelen diferencia clínicamente significativa para pacientes
recomendar una serie de modificaciones en la dieta, con con EPOC graves, lo que avala aún más los resulta-
el objetivo de mantener o mejorar la ingesta calórica y dos88. Otro metanálisis, que no incluyó los mismos
prevenir la pérdida de peso antes de llegar a un claro trabajos, llegó a las mismas conclusiones que Ferreira
572 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

y, además, los autores también observaron mejoras distribución de macronutrientes, incluso con alta pro-
en la ingesta energética total, y de la fuerza medida porción de hidratos de carbono98.
por dinamometría de mano y del cuádriceps89. Las recomendaciones relacionadas con el empleo de
Recientemente se ha publicado un ensayo clínico suplementos orales en EPOC y en BQ, serían:
con número importante de sujetos en el que se sumi-
nistraba un suplemento hiperproteico enriquecido en •  Añadir suplementos orales en personas con IMC
beta-hidroxi-beta-metilbutirato (HMB) en pacientes < 20 kg/m2 (otros autores prefieren poner puntos
desnutridos que ingresaban por insuficiencia cardiaca, de corte en 21 kg/m2), o bien > 20 kg/m2 con
infarto, neumonía o EPOC, siendo el número más im- pérdida ponderal aguda (especialmente en agudi-
portante el de pacientes los ingresados por enferme- zaciones e ingresos).
dad respiratoria. El grupo control recibía placebo. En •  Se recomiendan fórmulas poliméricas e hiperca-
los pacientes suplementados, mejoró la valoración lóricas, sobre todo si se requiere restricción de
subjetiva global, los niveles de vitamina D y, lo más líquidos.
importante, se redujo la mortalidad en un 50% a 90 •  En situaciones de alto estrés metabólico (albúmi-
días tras el ingreso, siendo especialmente llamativo en na < 3,5 g/dl, PCR elevada o agudizaciones mo-
las personas hospitalizadas por EPOC. No obstante, no deradas/graves) se recomienda, además, que sean
mejoraron los reingresos. hiperproteicas.
Pocos estudios han investigado la eficacia de la •  El empleo de fórmulas altas en grasas no debe ser
intervención combinada: suplementación nutricio- la norma. En pacientes con EPOC estables no exis-
nal junto con un programa de ejercicios (rehabilita- ten ventajas adicionales con el empleo de fórmu-
ción pulmonar) en pacientes con EPOC. Parece que las con alto contenido en hidratos de carbono o
esta combinación podría ser más beneficiosa que la de grasa en comparación con fórmulas estándar
aislada en la mejora del peso corporal y de la masa hiperproteicas o hipercalóricas.
libre de grasa, especialmente en los pacientes des- •  En caso de diabetes o hiperglucemia concomitan-
nutridos90-94. te, las fórmulas específicas con moderado o alto
El empleo de nutrientes específicos en combina- contenido en AG monoinsaturados han demos-
ción con la rehabilitación pulmonar, como proteínas trado mejorar el control metabólico, por lo que
del suero láctico, AG ω-3, creatina, anabolizantes, podrían estar indicadas (aunque no existen traba-
etc., podría mejorar algunos aspectos nutricionales, jos específicos).
biomarcadores de inflamación o la capacidad de es- •  Se recomienda la ingesta frecuente de pequeñas
fuerzo de los pacientes, aunque la calidad de la evi- cantidades de suplementos orales (frente al volu-
dencia es muy baja, por lo que son necesarios más men habitual) para evitar la disnea postprandial y
trabajos para recomendar su uso en la práctica clí­ la saciedad, y para facilitar el cumplimiento tera-
nica37, 92, 95. péutico.
En varios estudios retrospectivos y prospectivos, la •  La efectividad de los tratamientos es mayor si se
rehabilitación respiratoria en pacientes con BQ se ha combina con un programa de ejercicio.
asociado a una mejora a corto plazo en la capacidad
de ejercicio y la calidad de vida96, 97. Recientemente La mayoría de los pacientes con fallo respiratorio
nuestro grupo ha publicado un ensayo en el que se agudo que requieren soporte nutricional artificial, no
aleatorizaban pacientes con BQ a recibir rehabilitación oral, lo reciben mediante sonda, debido a que su trac-
respiratoria frente a rehabilitación respiratoria combi- to gastrointestinal está normalmente accesible y fun-
nada con un suplemento nutricional hiperproteico con cionante. En NE por sonda, parece más importante
HMB en personas normonutridas (en función del IMC). estimar los requerimientos calóricos de forma ajusta-
La adición del suplemento pudo contribuir a mejorar da para evitar una producción excesiva de dióxido de
la composición corporal, la densidad mineral ósea, la carbono, que el tipo de fórmula a emplear. La Socie-
fuerza de prensión (dinamometría de mano) y la cali- dad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unida-
dad de vida en estos pacientes62. des Coronarias (SEMICYUC) y la Sociedad Española de
El cociente entre el CO2 producido y el O2 consumido Nutrición Parenteral y Enteral (SENPE) realizan estas
(cociente respiratorio –RQ–) es 1 para los carbohidra- recomendaciones para el paciente grave con insufi-
tos, 0,8 para las proteínas y 0,7 para las grasas. El RQ ciencia respiratoria: en la insuficiencia respiratoria
más bajo de las grasas ha motivado el diseño de dietas crónica se recomienda un aporte calórico total del
y suplementos enterales con alto contenido en grasas gasto energético basal multiplicado por un factor en-
para estos pacientes (aproximadamente el 50% del tre 0,9 y 1,1; el aporte proteico recomendado en el
contenido calórico total) donde una producción excesi- paciente grave con insuficiencia respiratoria crónica
va de CO2 agravaría su estado clínico. No obstante, no estaría comprendido entre 1 y 1,8 g de proteínas/kg/
está demostrado que estas formulaciones produzcan día; debe prestarse especial atención al aporte de po-
mayores beneficios clínicos que las que presentan otra tasio, fósforo, magnesio y antioxidantes en los pa-
Tema 35.  Soporte nutricional en el paciente con patología pulmonar, enfermedad pulmonar… 573

cientes con insuficiencia respiratoria crónica; no están tentan, no es posible realizar recomendaciones para
indicadas las fórmulas enterales específicas con bajo su uso 102.
contenido hidrocarbonado y elevado contenido en El empleo de probióticos (bacterias vivas que con-
grasas en la insuficiencia respiratoria crónica; en la fieren beneficios en la salud del huésped suministrados
insuficiencia respiratoria aguda, el aporte calórico y a dosis adecuadas, por ejemplo la cepa Lactobacillus
proteico debe ser similar al de otros enfermos graves GG) podrían reducir los marcadores de inflamación y
con un nivel de estrés elevado. No existen datos espe- las reagudizaciones. No obstante, los datos son muy
cíficos para personas con BQ. preliminares y es necesario confirmarlos con pruebas
Un tema que merece unas líneas aparte es el síndro- de mejor calidad103.
me de distrés respiratorio del adulto (SDRA). En este En los últimos años se han comercializado fármacos
grupo de pacientes, el soporte nutricional enteral pre- cuyo objetivo es la restauración de la función de la
coz con una dieta enteral administrada por sonda, con proteína RTFQ104. Dentro del desarrollo de los fárma-
alto contenido en grasa, hipercalórica y suplementada cos reparadores de la proteína RTFQ, se han iden-
con AG ω-3 y ganmalinolénico favoreció un descenso tificado tres grupos principales. En primer lugar, los
de los días de ventilación mecánica, de estancia en la supresores del codón de parada prematuro (mutación
UCI y de la incidencia de afectación de otros órganos de clase 1). Estos fármacos consiguen que no se iden-
99,100
. Sin embargo, la interpretación de los estudios tifique este codón de parada prematuro, por lo que la
está limitada por su heterogeneidad y metodología, proteína puede seguir su síntesis al completo. En se-
por lo que el uso rutinario de estas fórmulas no puede gundo lugar, los denominados fármacos correctores
recomendarse de forma sistemática; se necesitan más del RTFQ. Estos fármacos están diseñados para corre-
ensayos clínicos con un número de pacientes suficien- gir el tráfico de la proteína con defectos en el plega-
temente homogéneos, de alta calidad, para aclarar la miento (mutaciones de clase 2) hasta la membrana
eficacia de los AG poliinsaturados ω-3 101. celular, donde podría hacer su función casi con nor-
malidad. En tercer lugar, los denominados potencia-
7. Nutrición parenteral en patologías dores del RTFQ. Estos fármacos tienen por diana la
respiratorias proteína RTFQ que está en la superficie celular, con
objeto de mejorar su función. Los fármacos potencia-
La nutrición parenteral (NP) solo está indicada en las dores pueden actuar por tanto sobre las mutaciones
escasas situaciones en las que el tracto gastrointestinal de clases III a VI. Actualmente están en investigación
no está funcionante o es imposible acceder a él y es numerosas moléculas con uno u otro mecanismo, lle-
necesario el soporte nutricional artificial. En casos ex- gando ya a comercializarse una de ellas. En la actuali-
cepcionales de pacientes muy desnutridos, en espera dad ya se dispone en España del primer fármaco (iva-
de trasplante, en los que no es posible alcanzar los re- caftor) capaz de corregir el defecto de las mutaciones
querimientos vía enteral, puede utilizarse la NP como Gly551ASP y otras similares, estando prevista la co-
fuente complementaria. mercialización a corto plazo de nuevos fármacos (o
Respecto a la composición de macronutrientes de la combinaciones de varios, como por ejemplo, ivacaf-
NP, parece más importante el cálculo estricto de los tor-lumacaftor) modificadores de la proteína. Ade-
requerimientos que el tipo de sustrato empleado. No más, están en marcha numerosos ensayos clínicos
obstante, las NP basadas únicamente en glucosa pue- con moléculas que pretenden restaurar la función. En
den incrementar la producción de CO2, por lo que se pacientes > 2 años con la mutación Gly551Asp (de
recomienda que la composición de la parenteral debe clase III) ivacaftor ha demostrado, además de aumen-
contener lípidos (al menos en un 35% de las calorías tar significativa y clínicamente la función pulmonar,
no proteicas y como máximo hasta un 65  %) . En NP mejorar el estado nutricional, incrementando el peso
son también aplicables las recomendaciones anterior- tanto en sujetos mayores como menores de 20 años
mente detalladas de la SEMICYUC y SENPE. (aproximadamente entre 3 y 5 kg, respectivamente).
Además, parece que podría mejorar la secreción de
8. Otros tratamientos en el abordaje insulina e incluso la absorción de la grasa. Por tanto,
nutricional en la fibrosis quística se han abierto campos de investigación muy sugeren-
tes que pueden aportar sus frutos en los próximos
Como tratamiento coadyuvante en la desnutrición años a nivel multisistémico105.
se han empleado orexígenos con el objetivo de me-
jorar la ingesta calórica, así como el peso y la calidad 9. Resumen y conclusiones
de vida. Tanto el acetato de megestrol como la cipro-
heptadina han sido evaluados a corto plazo (6 me- La prevalencia de desnutrición en FQ, EPOC y BQ es
ses), objetivándose mejoras en el peso y en el apetito. elevada, aunque muy variable según los estudios. La
No obstante, dados sus posibles efectos secundarios y detección de la misma debe realizarse mediante
la calidad baja a moderada de las pruebas que lo sus- la combinación de diferentes métodos, en función de
574 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

la disponibilidad de los mismos (historia clínica, encuesta   4. Farrell PM. The prevalence of cystic fibrosis in the
dietética, IMC, antropometría, dinamometría de mano, European Union. J Cyst Fibros 2008; 7:450–3.
impedanciometría, DEXA, test de la marcha, determi- Available from: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/
nación de proteínas viscerales, etc.), siendo recomenda- pubmed/18442953.
ble la estimación de la masa magra y/o su funcionalidad.   5. Alonso MJ, Heine-Suñer D, Calvo M, Rossel J, Gi-
El empeoramiento del estado nutricional guarda una menez J, Ramos MD, et al. Spectrum of mutations
relación directa con el descenso de los parámetros de in the CFTR gene in cystic fibrosis patients os Spa-
función pulmonar, y se ha propuesto como un factor nish ancestry. Ann Hum Genet 2007; 71:194–201.
predictor de morbilidad e incluso de mortalidad en   6. Elborn JS. Cystic fibrosis. Lancet (London, England)
personas con FQ, BQ y EPOC, independientemente del 2016; Available from: http://www.ncbi.nlm.nih.
grado de disfunción pulmonar. gov/pubmed/27140670.
En los pacientes con FQ se recomienda que la inges-   7. Miravitlles M, Soler-Cataluña JJ, Calle M, Molina J,
ta habitual aporte entre el 120 y 150% de las calorías Almagro P, Quintano JA, et al. Guía Española de la
recomendadas y que contenga alto contenido en gra- EPOC (GesEPOC). Tratamiento farmacológico de la
sas. Si no consiguen alcanzar o mantener los objetivos EPOC estable. Arch Bronconeumol 2012; 48:247–
nutricionales previstos con las modificaciones de la di- 57. Available from: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/
eta, se pueden adicionar suplementos artificiales. Los pubmed/22561012.
preparados más empleados suelen ser poliméricos e   8. Guía de práctica clínica 2010. Atención integral al
hipercalóricos. En pacientes con EPOC y BQ desnutri- paciente con enfermedad pulmonar obstructiva
dos, se suelen recomendar una serie de modificaciones crónica desde la Atención primaria a la especializa-
en la dieta con el objetivo de mantener o mejorar la da. Semfyc ediciones. 2010.
ingesta calórica; si no es posible con estas medidas, los  9.  Peña VS, Miravitlles M, Gabriel R, Jiménez-Ruiz
suplementos orales han demostrado mejorar el estado CA, Villasante C, Masa JF, et al. Geographic varia-
nutricional, la composición corporal, la funcionalidad y tions in prevalence and underdiagnosis of COPD:
la calidad de vida. En caso de requerir soporte nutri- results of the IBERPOC multicentre epidemiologi-
cional artificial parece más importante estimar los re- cal study. Chest 2000; 118:981–9. Available from:
querimientos calóricos de forma ajustada (para evitar http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/11035667.
una producción excesiva de dióxido de carbono), que 10. Miravitlles M, Soriano JB, Garcia-Rio F, Munoz L,
el tipo de fórmula a emplear (con alto contenido en Duran-Tauleria E, Sanchez G, et al. Prevalence of
hidratos de carbono o grasas). En ambos grupos de COPD in Spain: impact of undiagnosed COPD on
pacientes las indicaciones de soporte nutricional enter- quality of life and daily life activities. Thorax 2009;
al por sonda o parenteral son similares a las empleadas 64:863–8. Available from: http://www.ncbi.nlm.
en otras patologías. nih.gov/pubmed/19553233.
El control dietético y nutricional debe incluirse en un 11. Vendrell M, de Gracia J, Olveira C, Ángel Martínez
programa multidisciplinar de rehabilitación respiratoria M, Girón R, Máiz L, et al. Diagnóstico y tratamien-
que permita mejorar la capacidad funcional, la calidad to de las bronquiectasias. Arch Bronconeumol
de vida y reducir, al menos teóricamente, la morbimor- 2008; 44:629–40.
talidad asociada a la desnutrición en estos pacientes. 12. Martínez-García M-A, de la Rosa Carrillo D, So-
ler-Cataluña J-J, Donat-Sanz Y, Serra PC, Lerma
MA, et al. Prognostic value of bronchiectasis in
10. Bibliografía
patients with moderate-to-severe chronic obstruc-
1. MacKenzie T, Gifford AH, Sabadosa KA, Quinton tive pulmonary disease. Am J Respir Crit Care Med
HB, Knapp EA, Goss CH, et al. Longevity of Patients 2013; 187:823–31.
With Cystic Fibrosis in 2000 to 2010 and Beyond: 13. Martínez-García MÁ, de Gracia J, Vendrell Relat
Survival Analysis of the Cystic Fibrosis Foundation M, Girón R-M, Máiz Carro L, de la Rosa Carrillo D,
Patient Registry. Ann Intern Med 2014; 161:233. et al. Multidimensional approach to non-cystic fi-
Available from: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pub- brosis bronchiectasis: the FACED score. Eur Respir
med/25133359. J 2014; 43:1357–67. Available from: http://www.
2. Olveira G, Olveira C. [Nutrition, cystic fibrosis and ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/24232697.
the digestive tract]. Nutr Hosp 2008; 23 Suppl 14. de la Rosa D, Martinez-Garcia M-A, Olveira C, Gi-
2:71–86. ron R, Maiz L, Prados C. Annual direct medical
3. Bauça JM, Morell-Garcia D, Vila M, Pérez G, Hei- costs of bronchiectasis treatment: Impact of se-
ne-Suñer D, Figuerola J. Assessing the improve- verity, exacerbations, chronic bronchial coloniza-
ments in the newborn screening strategy for cystic tion and chronic obstructive pulmonary disease
fibrosis in the Balearic Islands. Clin Biochem 2015; coexistence. Chron Respir Dis 2016; 13:361–71.
48:419–24. Available from: http://www.ncbi.nlm. Available from: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/
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Tema 36. 
Nutrición en pacientes quemados y traumatológicos
Clara Marcuello Foncillas
Médico Adjunto. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico San Carlos. Madrid

Ángela Amengual Galbarte


Médico Residente. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico San Carlos. Madrid

Pilar Matía Martín


Médico Adjunto. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico San Carlos. Madrid
Profesor Asociado de la Universidad Complutense. Madrid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 581-592.

1.  Pacientes quemados


2.  Pacientes con traumatismo grave
3. Resumen
4. Bibliografía

1.  Pacientes quemados diferenciadoras del resto de pacientes críticos, princi-


palmente, la importante pérdida cutánea de líquidos
1.1. Introducción con proteínas, minerales y diversos micronutrientes.
Las quemaduras pueden originarse a partir de fuego, Además, la estancia en la UCI es prolongada, lo que
de líquidos calientes (escaldaduras) o de sólidos con configura una de las patologías más hipercatabólicas
temperatura elevada (quemaduras por contacto). Pue- que existen2.
den ser químicas (tras exposición a ácidos o a sustan- La causa de este hipermetabolismo no está del todo
cias alcalinas), eléctricas (de alto o de bajo voltaje) o aclarada. La hipovolemia, junto con la estimulación
surgir como resultado de una breve exposición a una simpática poco después de la agresión, produce una
radiación intensa. elevación brusca de hormonas de estrés (catecolami-
La gravedad de las quemaduras es variable y solo un nas, cortisol y glucagón) para conservar el calor corpo-
pequeño porcentaje de afectados requiere ingreso en ral a través de una vasoconstricción intensa, así como
la UCI. En las últimas décadas ha mejorado mucho la una liberación de varios mediadores como endotoxi-
atención a este grupo de pacientes, logrando una dis- nas y citoquinas proinflamatorias. La liberación de es-
minución de la morbimortalidad. tos mediadores parece ser favorecida por una combi-
Hoy en día, la nutrición en el paciente quemado se nación de secreción de hormonas de estrés, alteración
considera no solo un tratamiento de soporte y de pre- de la barrera mucosa gastrointestinal, traslocación
vención de desnutrición, sino un método esencial de bacteriana, infección y pérdida de calor a través de la
modular el transcurso de la enfermedad y de disminuir lesión3.
el desarrollo de complicaciones. En este contexto, el metabolismo de los principios
Son factores de mal pronóstico vital: edad avanzada inmediatos se altera en varios sentidos:
(más de 60 años), superficie corporal quemada superior
al 40% y la existencia de quemaduras por inhalación1. • Se estimula la neoglucogénesis.
• Aumenta la oxidación de la glucosa, y por lo tanto
su aclaramiento plasmático, aunque solo una par-
1.2.  Fisiopatología y diagnóstico te de ella llega a convertirse en dióxido de carbo-
El paciente quemado grave desarrolla una respuesta no; el resto se transforma en lactato.
inflamatoria muy intensa, presentando una situación • Se instaura una situación de resistencia insulínica.
de hipercatabolismo que puede prolongarse incluso • Se favorece la lipólisis y se dificulta la oxidación de
meses tras la agresión. Presenta varias características las grasas. Así se generan ciclos fútiles de recicla-

581
582 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

do de ácidos grasos libres y triglicéridos. Un exce- corporal puede deberse a la expansión del agua extrace-
so de aporte de grasas solo exacerba el reciclado lular, las proteínas viscerales resultan mejores factores
de sustratos, pero no es efectivo para la preserva- pronósticos que nutricionales, y el balance nitrogenado
ción de masa magra corporal. puede ser erróneamente interpretado si se sobreestiman
• Se estimula la proteólisis, la oxidación de amino­ los aportes, se infraestiman las pérdidas y no se tiene en
ácidos y la producción de urea. cuenta que gran parte del nitrógeno excretado –como
• Se produce depleción intracelular de aminoácidos sucede en otros enfermos críticos– lo hace en forma de
como arginina (Arg) y glutamina (Gln), ya que amonio y no de urea. Además, la pérdida de nitrógeno
contribuyen al flujo entre tejidos como sustrato es mayor a través del exudado de la herida.
para ciclos orgánicos y neoglucogénesis. Sin embargo, si los parámetros se combinan en la
• El aporte exógeno de proteínas aumenta su sínte- valoración global, y de forma prospectiva, la informa-
sis, pero difícilmente se frena su catabolismo. ción resulta útil, aunque es conveniente monitorizarlos
en relación con marcadores inflamatorios como es la
Además, los tejidos quemados generan una gran proteína C reactiva (PCR)5.
cantidad de radicales libres, de forma que la defensa Asimismo, se ha validado el NUTRIC score (NUTri-
antioxidante se consume rápidamente4. tion Risk in Critically ill)6 diseñado con el fin de cuanti-
En quemaduras extensas (aquellas que afectan a ficar el riesgo de pacientes críticos para desarrollar
más del 20% de la superficie corporal) se origina una eventos adversos y permitir identificar a aquellos que
gran destrucción de musculatura esquelética, que sitúa se beneficiarían más de un soporte nutricional optimi-
al paciente en grave riesgo de desnutrición. La desnu- zado. Incluye variables asociadas al grado de severidad
trición energético-proteica se traduce en alteración de de la enfermedad, en lugar de variables tradicionales
la cicatrización de las heridas e inmunodepresión, que como la pérdida de peso, la ingesta oral o la explora-
puede derivar en un incremento de infecciones y de la ción física (tabla 1). Para una revisión más detallada se
morbimortalidad. remite al lector al tema 33 (Soporte nutricional en el
paciente séptico y crítico).
1.3.  Objetivos nutricionales
1.5.  Cálculo de requerimientos de energía
Teniendo en cuenta tanto las características genera-
les del paciente crítico, como las peculiaridades del su- La tasa metabólica basal (TMB) permanece aumenta-
jeto quemado, los objetivos nutricionales pueden resu- da en los quemados por un período prolongado de
mirse en: tiempo, aunque va variando según sea la evolución del
paciente. A este hecho contribuyen la respuesta infla-
• Preservar la masa celular corporal. matoria, la evaporación de calor a través de la herida, el
• Evitar la pérdida ponderal o recuperar el peso per- tamaño de esta y la pérdida de agua transcutánea en
dido en fases avanzadas desde que ocurre la que- las cicatrices recientes. En este sentido, cubrir adecua-
madura. damente la lesión parece relevante para minimizar
• Favorecer la cicatrización de la lesión. dichos efectos. Otras consecuencias tienen que ver con
• Proveer de suficientes aminoácidos en calidad el manejo clínico global, como la situación ambiental
y cantidad para evitar su salida desde el tejido –debe ir dirigida a disminuir la pérdida de calor–, el
muscular esquelético y para optimizar la síntesis control del dolor, la sedación y la ventilación mecánica
proteica dirigida a la reparación de la herida y a la del paciente. La fiebre, los fármacos vasoactivos, los
función inmunológica. Debe tenerse en cuenta corticoides y la terapia rehabilitadora aumentan los
que la progresiva destrucción de la musculatura requerimientos; los reducen el ambiente cálido y los
esquelética supera a la que se produce durante el bloqueantes neuromusculares. Los ancianos y los des-
traumatismo-sepsis. nutridos también tienen una TMB inferior.
• Mantener la función inmunitaria y modular su res- Dada la enorme variabilidad individual en los reque-
puesta. rimientos de energía, se considera el gold standard la
• Evitar las complicaciones metabólicas. calorimetría indirecta, si bien la disponibilidad de este
• Atenuar la respuesta metabólica al estrés. método no siempre es posible.
El cálculo de las necesidades basado en el peso, que
recomienda un aporte de 25-30 kcal/kg, también suele
1.4.  Valoración nutricional
ser inexacto, pues suele infraestimar los requerimientos.
La valoración nutricional en el paciente quemado debe Por otro lado, muchas de las fórmulas descritas en la
ser un proceso dinámico. Para valorar la adecuación de la literatura para calcular el gasto energético basal de es-
pauta nutricional prescrita, debe tenerse en cuenta que, tos pacientes tienden a sobreestimarlo7-9.
en la fase de respuesta aguda, muchos de los parámetros En las recomendaciones de la European Society for
utilizados resultan invalidados. Así, el cambio en el peso Clinical Nutrition and Metabolism –ESPEN– 2013, para
Tema 36.  Nutrición en pacientes quemados y traumatológicos 583

Tabla 1.  NUTRIC score para valoración nutricional del paciente crítico

Variable Rango Puntuación


< 50 0
Edad 50-74 1
≥ 75 2
< 15 0
Apache II (Acute Physiology and 15-19 1
Chronic Health Evaluation II) 20-27 2
≥ 28 3
<6 0
SOFA (Sequential Organ Failure
6-9 1
Assessment)
≥ 10 2
0-1 0
Número de comorbilidades
≥2 1
Días de estancia en el hospital hasta 0 -< 1 0
el ingreso en UCI ≥1 1
0 -< 400 0
IL-6
≥ 400 1
PUNTUACIÓN
6-10 Asociado con peores resultados clínicos (mortalidad, ventilación)
Pacientes que más se van a beneficiar de un soporte nutricional agresivo
0-5 Bajo riesgo nutricional
PUNTUACIÓN SIN INCLUIR EL VALOR DE IL-6
5-9 Asociado con peores resultados clínicos (mortalidad, ventilación)
Pacientes que más se van a beneficiar de un soporte nutricional agresivo
0-4 Bajo riesgo nutricional

IL-6: interleucina 6.
*Es aceptable no incluir IL-6 si no estuviera disponible, ya que ha mostrado poca contribución a la
capacidad predictiva del NUTRIC score (en ese caso, la puntuación se divide en 0-4 y 5-9).

el paciente quemado, se sugiere que el cálculo de re- 1.6.  Soporte nutricional artificial
querimientos en adultos podría realizarse mediante la
ecuación de Toronto, ya que dicha fórmula está basa- Los enfermos con quemaduras extensas, los que su-
da en análisis de regresión a partir de estudios de calo- fren quemaduras por inhalación y los que requieren
rimetría indirecta, y por tanto podría ser una alternati- ventilación mecánica no pueden cubrir sus necesidades
va válida en ausencia de esta técnica10. En la tabla 2 se de agua, energía y nutrientes por vía oral. En estos ca-
muestra dicha ecuación11. sos debe instaurarse nutrición artificial.
Expertos españoles proponen un cálculo de reque- El plan nutricional debe tener en cuenta la extensión
rimientos totales de energía en función de la superfi- y la profundidad de la lesión, la necesidad de procedi-
cie quemada, partiendo de la fórmula de Harris-Bene- mientos quirúrgicos repetidos, la posibilidad de utilizar
dict, multiplicando por un factor de estrés, que oscila la ruta enteral o parenteral y la situación previa del pa-
entre 1,2 y 2 en función de la extensión de superficie ciente. Es muy importante que este se inicie lo más
cutánea quemada2, lo que equivale habitualmente a precozmente posible, en las 12-24 horas siguientes al
35-40 kcal/kg/día. Se aconseja no sobrepasar el 200% accidente2.
de la TMB.
Es conveniente la realización periódica del cálculo de 1.6.1. Fluidoterapia
requerimientos energéticos para ajustar el soporte nu- La hidratación supone la piedra angular del trata-
tricional según la evolución del paciente. miento de los grandes quemados. Esta ha de comen-
584 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

Tabla 2.  Aproximación al cálculo de requerimientos totales de energía y proteínas en


el paciente quemado crítico. Ecuación de Toronto.

- 4343 + (10,5 x % ATSQ) + (0,23 x aporte calórico)


ECUACIÓN DE TORONTO + (0,84 x GER según Harris-Benedict «crudo») +
(114 x Tª) - (4,5 x días tras el accidente)

ATSQ: área total de superficie quemada; GER: gasto energético en reposo; Tª: temperatura corporal.

zar, si es posible, en el lugar del accidente, tan pronto guías de sociedades internacionales, basándose en re-
se detecte un sujeto con más del 15% de su superficie sultados positivos de pequeños estudios aleatorizados
corporal quemada. Su fin es mantener la perfusión de monocéntricos. Metaanálisis realizados a partir de es-
los órganos vitales y del tejido que rodea la quemadu- tos ensayos han demostrado una reducción en la mor-
ra2. Debido a fuga masiva por los capilares se produce talidad, en la incidencia de infeccciones y en la estancia
shock hipovolémico. hospitalaria con el uso de Gln intravenosa.
Para el cálculo inicial del volumen a infundir en las Sin embargo, datos más recientes parecen indicar
primeras 24 horas, puede utilizarse la fórmula de Par- que su utilización indiscriminada no está exenta de
kland (3-4 ml x kg x % de superficie quemada). La mi- riesgos. Dos estudios multicéntricos de mayor tamaño
tad de lo calculado debe administrarse en las primeras (REDOXS y MetaPlus) mostraron una tendencia hacia
8 horas. Suelen ser necesarias grandes cantidades de un incremento en la mortalidad13, 14.
aporte de fluidos en las primeras 24-48 horas para En base a estos estudios y a la calidad tan solo mo-
mantener la tensión arterial. derada de la evidencia de la que se dispone, las últimas
En una reciente revisión de la colaboración Cochrane guías de la American Society for Parenteral and Enteral
no se encontraron evidencias sobre la superioridad de Nutrition (ASPEN), y las canadienses, recomiendan que
las fórmulas coloides en la reducción de la mortalidad la Gln oral o intravenosa no se use en el paciente crítico
con respecto a las cristaloides12. de forma indiscriminada15, 16.
En relación con la gran cantidad de líquidos que se No obstante, conviene aclarar que en el estudio
aportan, se producen de forma habitual edemas gene- REDOXS se administraba Gln por vía enteral y parente-
ralizados, incluido en el intestino, lo que contribuye al ral a la vez, con una dosis que duplicaba la recomenda-
desarrollo de íleo paralítico. Por eso es muy importante da en las guías clínicas o en estudios clínicos anteriores
comenzar el tratamiento con nutrición enteral (NE) lo y, además, incluía pacientes con elevada gravedad, que
antes posible para evitar su aparición y disminuir ade- habitualmente se habían excluido en estudios previos.
más la permeabilidad intestinal, que se encuentra muy Por tanto, lo que el estudio REDOXS desaconseja no es
aumentada. el uso de Gln en el paciente crítico, sino el empleo pre-
coz en las primeras 24 horas, de forma conjunta por
1.6.2. Nutrientes de especial interés en pacientes las vías enteral y parenteral, y con dosis elevadas de Gln
en pacientes de marcada gravedad.
quemados
Hasta ahora, parecía que dentro del grupo del pacien-
Glutamina te crítico, la subpoblación de los quemados sería una de
las que más se beneficiaría de la suplementación con Gln
Este aminoácido con dos grupos amino, funciona enteral, ya que diversos estudios mostraban una mejora
como una «lanzadera» de nitrógeno para la síntesis de en la permeabilidad del intestino, una disminución de la
purinas y pirimidinas. Además, sirve como sustrato oxi- endotoxemia y un descenso significativo en la incidencia
dativo en células de división rápida como el enterocito de bacteriemia por gramnegativos17-19 e incluso de la
y el linfocito, así que puede actuar como modulador de mortalidad20. En este sentido, la ESPEN establece que
la respuesta inmunitaria, y es precursor de glutatión, debe considerarse la suplementación con Gln (o con or-
un potente antioxidante que participa en la reducción nitin-alfa-cetoglutarato) en estos pacientes10.
del daño por radicales libres. También es regulador de Por tanto, la justificación y la seguridad de la suple-
la producción de amonio y del equilibrio ácido-base. mentación con Gln a largo plazo ha de ser establecida
Es el aminoácido más abundante en el cuerpo hu- todavía.
mano, sin embargo, llega a ser condicionalmente esen-
cial en situaciones de estrés metabólico o en enferme-
Arginina
dad crítica. La depleción plasmática de este aminoácido
contribuye a la pérdida de masa muscular, a la pérdida También resulta un aminoácido condicionalmente
ponderal y a la infección. esencial en los quemados. En estos pacientes se ha obser-
La suplementación con Gln en todo paciente crítico vado una captación extrahepática aumentada que hace
ha sido recomendada hasta hace poco por todas las más patentes sus pérdidas. Este hecho puede tener reper-
Tema 36.  Nutrición en pacientes quemados y traumatológicos 585

cusión en el papel que este aminoácido desempeña en la nuye la respuesta hipercatabólica, la secreción de cateco-
cicatrización de las heridas y en la producción de óxido laminas y de glucagón, la pérdida de peso, y mejora la
nítrico (ON). Sin embargo, se han observado efectos no- ingesta de calorías, la retención de proteínas, se estimula
civos al suplementar la NE de algunos pacientes críticos la secreción de insulina y disminuye la estancia media27, 28
con sepsis severa, ya que podría favorecer una produc- Es aconsejable retrasar la NE si se produce inestabili-
ción no deseada de ON ocasionando una vasodilatación dad hemodinámica o si se requieren fármacos vasopre-
exagerada, hipotensión y muerte21. La ESPEN desestima el sores (dopamina, epinefrina) para evitar el riesgo de
empleo de Arg en estos pacientes10. La seguridad en el isquemia intestinal.
quemado crítico, por tanto, debe ser establecida. En cuanto al tipo de fórmula que es preferible utili-
zar, parece adecuado el uso de una fórmula poliméri-
Elementos traza (cobre, selenio y zinc) ca, hipercalórica e hiperproteica. No hay datos sufi-
cientes para recomendar el uso rutinario de fibra
y vitaminas
(soluble o insoluble) en NE en pacientes críticos, aun-
El paciente quemado necesita de mayor aporte de que en el consenso europeo se sugiere que podría ser
micronutrientes debido a la enorme respuesta hiper- útil debido al riesgo de estreñimiento y al elevado uso
metabólica que presenta y a las pérdidas que se produ- de opioides en estos pacientes10.
cen por la piel. Los micronutrientes que se han implica- En cuanto a la distribución más conveniente de los
do con mayor consistencia en la modulación de la macronutrientes, no existe un consenso uniforme. Pue-
inmunidad y en la curación de las heridas son el cobre, den aplicarse los mismos criterios de control glucémico
el selenio y el zinc, pues contribuyen a la síntesis de que para pacientes críticos. Con respecto al aporte de
sustancias antioxidantes22. En diversos estudios realiza- proteínas, la guía europea recomienda administrar en-
dos, el beneficio clínico se objetivaba cuando se reali- tre 1,5-2 g de proteínas/kg/día para el paciente que-
zaba aporte por vía parenteral, que asegura una buena mado10 (20-25% del aporte calórico total). No parece
biodisponibilidad y evita una posible competitividad en que aportes proteicos superiores mejoren la preserva-
la absorción intestinal, como ocurre por ejemplo entre ción de masa muscular.
el cobre y el zinc, que comparten el mismo transporta- Por último, un aporte adecuado de lípidos es impor-
dor intestinal23, 24. tante para evitar deficiencias. No está claro cuál es el
En grandes quemados, con una superficie > 30% mejor tipo de lípidos que se debería aportar, si bien es
afectada, pueden ser necesarios aportes extra de mi- importante no excederse en su dosis. Existe algún estu-
cronutrientes, incluso durante más de 30 días. dio que parece indicar que los pacientes quemados
En cuanto a los aportes de vitaminas, la ESPEN reco- muestran mayor sensibilidad al aporte de lípidos. Uno
mienda asociar vitaminas B1, C, D y E10. Parece que la de ellos comparaba un aporte de más del 35% con
administración de vitamina C y E a dosis mayores de las otro del 15%; en el primer caso, los pacientes presen-
recomendadas, hasta 1,5-3 veces por encima de las reco- taban mayor riesgo de infección29. Se debe tener en
mendaciones habituales, se asocia con un menor estrés cuenta la dosis de propofol, que puede suponer hasta
oxidativo y con una curación de las heridas más rápida25. 15-30 g de lípidos diarios. No obstante, dada la esca-
sez de trabajos al respecto, no se pueden hacer reco-
1.6.3.  Nutrición enteral mendaciones basadas en la evidencia en cuanto al con-
tenido en lípidos de la fórmula.
Clínicamente la NE presenta un riesgo menor de
complicaciones infecciosas, es más fisiológica y gene-
1.6.4.  Nutrición parenteral
ralmente más coste-efectiva que la nutrición parenteral
(NP)26. Por otra parte, resulta bien tolerada por la ma- Cuando no puede utilizarse NE, y el paciente requie-
yor parte de los pacientes quemados5, tanto infundida re soporte nutricional artificial, ha de pautarse nutri-
en estómago como en yeyuno. Se puede intentar en ción parenteral (NP).
primer lugar el acceso gástrico y, en caso de intoleran- Para evitar la sobrenutrición, algunos expertos propo-
cia, probar la infusión postpilórica, o incluso realizar nen una prescripción basada en la tasa de utilización de
una gastrostomía percutánea en pacientes más graves. sustratos, más que en el objetivo de calorías finales. Así,
La NE actualmente se propone no solo como un modo se aconseja que la composición de la fórmula recoja:
de mantener la integridad del tracto digestivo (menor gas- 1,5 ml/kg/h para sujetos de más de 20 kg, 5-7 mg de
troparesia y menor permeabilidad intestinal), sino también glucosa/kg/min –aunque parece prudente no sobrepasar
como una forma de minimizar la liberación de mediadores los 5 mg/kg/min–, 2 g de proteínas/kg/día– y 0,5-1,5 g
intestinales que puedan activar la cascada inflamatoria, la de lípidos/kg/día (ha de tenerse en cuenta la administra-
lesión por radicales libres y el fallo multiorgánico y, por ción simultánea de propofol, puesto que contiene lípidos
tanto, se debe iniciar lo más precozmente posible. en una concentración del 10% y aporta 1 kcal/ml)5.
Se ha observado que, en pacientes en los que se inicia De igual forma que para la NE, antes se recomenda-
la NE dentro de las primeras 12 horas del ingreso, dismi- ba la suplementación con Gln en forma de dipéptidos
586 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

(0,2-0,4 g/kg/día de L-Gln), pero debido a la inconsis- veras para aumentar la formación de masa magra, re-
tencia de los estudios publicados hasta el momento se cuperar el peso perdido y acelerar la cicatrización de
necesitan más datos para recomendarla de forma ge- heridas. En ensayos clínicos, con 10 mg dos veces al
neralizada. día, por vía oral, se han conseguido dichos objetivos.
No existe un consenso uniforme con respecto a las Además, durante el período de rehabilitación, este tra-
emulsiones lipídicas más favorables, puesto que la tamiento, junto con pautas adecuadas de nutrición y
evidencia clínica aún es escasa. En un ensayo clínico y ejercicio, mejoró la masa magra, aumentó la fuerza
en una revisión sistemática se destaca que las emul- muscular y restauró el peso corporal32.
siones con ácido oleico son seguras en estos pacien- En otros estudios se ha objetivado una menor estan-
tes y que, aunque no han demostrado un efecto so- cia media, e incluso una menor mortalidad33.
bre las proteínas de fase aguda, han sido eficaces en
la protección de la función hepática cuando se han
comparado con fórmulas mixtas con triglicéridos de Betabloqueantes
cadena media y con triglicéridos de cadena larga El propranolol y el metoprolol se están utilizando en
(MCT/LCT)30, 31. pacientes quemados con un fin anticatabólico por su
acción inhibitoria sobre las catecolaminas. Entre los
1.6.5. Fármacos empleados en el control efectos descritos se encuentran3:
nutrimetabólico de los pacientes
• Descenso de la demanda de oxígeno y de la TMB.
quemados
• Atenuación del catabolismo muscular y de la lipó-
Insulina lisis mediados por catecolaminas.
• Mejoría de la respuesta inmunitaria al modificar el
Como se ha comentado, una de las alteraciones
defecto en la activación linfocitaria tras el estímulo
metabólicas que acontecen durante la fase aguda tras
catecolaminérgico de la fase aguda.
una quemadura grave es la hiperglucemia. Este he-
cho, aunque inicialmente resulta ser un mecanismo
protector para proveer de sustrato a las células que Son necesarios más ensayos clínicos para sentar una
utilizan glucosa independientemente de la insulina evidencia consistente, pero algunos estudios han ob-
–fibroblastos en la zona de la cicatriz, células endote- servado una reducción en el tiempo de cicatrización,
liales, etc.–, se ha relacionado con aumento de la in- en la incidencia de infección de la herida, en el tiempo
cidencia de infecciones, pobre reparación tisular, ma- de hospitalización y en la mortalidad34, 35.
yor proteólisis y aumento de la mortalidad. Aunque Un momento adecuado para iniciar el tratamiento
actualmente existe la controversia sobre hasta qué con betabloqueantes podría ser tras la fase de resucita-
nivel es prudente corregir la hiperglucemia, los proto- ción, durante la primera semana y, un poco más tarde,
colos aconsejan utilizar insulina para no sobrepasar instaurar el tratamiento con oxandrolona.
los 150-180 mg/dl. Sin embargo, los beneficios aso-
ciados a la infusión de este fármaco van más allá, y Hormona del crecimiento (GH)
pueden resumirse en3:
El tratamiento con GH se ha utilizado tanto en adul-
• Aumento neto de la síntesis de proteínas a través tos como en niños quemados. Su administración du-
de la inducción de la traslación de mRNA. rante la fase aguda se ha relacionado con descenso en
• Estímulo de la entrada de glucosa dentro del el tiempo de cicatrización del injerto, de la estancia
músculo esquelético, de la glucogenogénesis en el media y de los costes asociados. Los efectos sobre la
hígado y del acúmulo graso en los adipocitos. cicatrización parecen extenderse dos años más allá de
• Efecto trófico sobre mucosas y barreras cutáneas la agresión. Si bien, hoy en día, en adultos, no existe
que protegen contra la invasión y la traslocación una clara recomendación para su utilización debido al
bacteriana. empeoramiento de la hiperglucemia.
• Acción inmunomoduladora: reduce las citocinas pro- Otras medidas no nutricionales para atenuar el hi-
inflamatorias y las proteínas hepáticas de fase aguda, permetabolismo son mantener el ambiente a 28-30 °C,
aumenta las citocinas antiinflamatorias como la in- escindir las heridas precozmente y realizar una cober-
terleucina 10 y el factor estimulante de colonias de tura precoz de las mismas.
granulocitos (G-CSF), entre otros efectos. En la tabla 3, se resumen las recomendaciones reco-
gidas por la ESPEN10 y por el Grupo de Metabolismo y
Nutrición de la Sociedad Española de Medicina Intensi-
Oxandrolona
va Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC) en el pa-
La oxandrolona, un derivado sintético de la testoste- ciente quemado crítico2 (estas últimas aún no actuali-
rona, ha sido utilizada en adultos con quemaduras se- zadas a 31 de enero de 2017).
Tema 36.  Nutrición en pacientes quemados y traumatológicos 587

Tabla 3.  Recomendaciones ESPEN –2013– y SEMICYUC –2011– en el paciente quemado crítico.
*Grado de recomendación/
acuerdo ESPEN,
Tópico Recomendación
**Grado de evidencia
SEMICYUC
El tratamiento nutricional debe iniciarse, precozmente, en las
Indicación B/fuerte
primeras 12 horas tras la lesión.
Debe darse prioridad a la NE. La NP debe emplearse de forma
Vía C/fuerte
excepcional.
Requerimientos de La CI es el patrón oro para el cálculo de los requerimientos de
energía y fórmulas energía. Si no es posible, debe emplearse la fórmula de Toronto D/débil
predictivas para adultos y la fórmula de Schoffield para niños.
1,5-2 g/kg/día en adultos.
Proteínas D/fuerte
1,5-3 g/kg/día en niños.
Nutrientes Considerar suplementación con Gln (u ornitin alfa-
C/débil
específicos cetoglutarato¥), pero no Arg.
Deben aportar un 60% de las kcal diarias (tener en cuenta las
ESPEN 2013 Carbohidratos diluciones de fármacos), sin exceder un ritmo de 5 mg/kg/min en D/fuerte
adultos y niños.
Ha de mantenerse entre 80-144 mg/dl (con infusión continua de
Control glucémico D/fuerte
insulina).
Lípidos Deben suponer < 35% de las kcal diarias. C/débil
En adultos y en niños, asegurar sustitución con Zn, Cu, Se y
Micronutrientes C/fuerte
vitaminas B1, C, D y E.
Deben instaurarse medidas no nutricionales para atenuar
hipercatabolismo e hipermetabolismo: temperatura ambiental
B/fuerte
Modulación cálida, desbridamiento precoz de las heridas, betabloqueantes no
metabólica selectivos y oxandrolona.
Solo en niños, emplear GH recombinante si la superficie quemada
B/débil
supera el 60%.
Es de elección la NE (catéter gástrico o enteral, ostomía). No
Vía obstante, puede emplearse NP complementaria o exclusiva si el A
acceso intestinal no es factible o efectivo.
En ausencia de CI el aporte calórico debe situarse en 25 kcal/kg/
Requerimientos de
día + 30-40 kcal x % de superficie corporal quemada, o según la
energía y fórmulas B
fórmula de Carson:
predictivas
GER = (GMB × [0,89142 + 10,01335 × ATSQ]) × m2 × FA.
SEMICYUC 2011
Proteínas 1,8-2,5 g/kg/día.
Lípidos <30% de las kcal diarias totales. B
Carbohidratos Pueden admitirse aportes > 4 g/kg/día.
Nutrientes (L-Gln > 0,37 g/kg/día, dipéptidos de Gln
A
específicos > 0,5 g/kg/día).
Micronutrientes Se recomienda suplementación diaria con Zn, Cu y Se. B

Arg: arginina; ATSQ: área total de superficie quemada; CI: calorimetría indirecta; ESPEN: The European Society for Clinical Nutrition
and Metabolism; FA: factor de actividad = 1,25; GER: gasto energético en reposo; GH: hormona de crecimiento; Gln: glutamina;
GMB: gasto metabólico basal; m2: superficie corporal total en m2; NE: nutrición enteral; NP: nutrición parenteral; SEMICYUC: Sociedad
Española de Medicina Intensiva Crítica y Unidades Coronarias.
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la evidencia y la potencia de las recomendaciones siguiendo la propuesta del Grupo GRADE (Grading of Recommendations Assessment,
Development and Evaluation Working Group).
¥: No disponible en España.
588 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

2.  Pacientes con traumatismo grave la TMB, calculada mediante Harris-Benedict, no debe
superar el 40%. Sin embargo, han de tenerse en cuenta
2.1. Introducción situaciones que pueden modificar estos requerimien-
El traumatismo grave puede tener lugar en diferentes tos. Así, los traumatismos medulares y el tratamiento
situaciones: traumatismo craneoencefálico (TCE), solo o con sedantes, relajantes musculares y barbitúricos ha-
acompañando a otras lesiones traumáticas, politrauma- cen descender la TMB, mientras que las convulsiones, la
tismo grave sin TCE y lesión medular. Existen pocas publi- actividad muscular patológica, la fiebre, el dolor y los
caciones que aborden de forma específica el traumatismo cuidados sobre el paciente la aumentan38, 39.
en sí, y de hecho, las recomendaciones generales pueden En pacientes sedados se aconseja suministrar un
deducirse de las guías dedicadas al paciente crítico (véase 100% de la TMB calculada o medida; en pacientes sin
el tema correspondiente). No obstante, el TCE ha recibido sedación debe suministrarse un 140% de la TMB. To-
mayor atención como entidad clínica, cuyo curso puede davía existe controversia acerca de la distribución ópti-
ser modificado a partir del tratamiento nutricional. ma de macronutrientes en los pacientes con traumatis-
El TCE es una de las primeras causas de muerte y mo. De forma general es recomendable un aporte
discapacidad en todo el mundo. Cada año, al menos hiperproteico con limitación relativa en el aporte de
10 millones de personas sufren una lesión cerebral glucosa. Al menos un 15% de la energía total debe
traumática de suficiente entidad como para requerir administrarse en forma de proteínas, por vía enteral o
hospitalización. Puesto que casi la mitad de los pacien- parenteral. Los niveles de glucemia habrán de vigilarse
tes experimentan discapacidad a largo plazo, la carga para evitar mayor deterioro en el caso del TCE40. Los
médica, social y económica resulta evidente. objetivos de aporte calórico deberían estar en un rango
entre 20 y 35 kcal/kg/día, variable según la fase del
traumatismo. En la fase inicial se sugiere un aporte más
2.2.  Fisiopatología y diagnóstico
controlado con una mayor liberalización de calorías en
Como sucede en los pacientes quemados, se produ- la fase de recuperación. Los requerimientos proteicos
ce una situación de hipermetabolismo (aumento del son similares a los de otros pacientes críticos, entre
gasto energético en reposo), hipercatabolismo (con li- 1,2-2 g/kg/día15.
beración de aminoácidos desde el músculo esquelético
y ácidos grasos libres desde el tejido adiposo) y resis- 2.6. Dietética
tencia insulínica36, 37.
En el TCE es preciso valorar la existencia de disfagia.
2.3.  Objetivos nutricionales Si esta se desarrolla habrá que iniciar medidas culina-
rias de modificación de consistencia; y si no se cubren
Como ocurre con los enfermos críticos en su conjun- los requerimientos, será preciso plantear soporte nutri-
to, el tratamiento nutricional va más allá del mero so- cional artificial, generalmente NE. Si la disfagia se pro-
porte vital. Sus objetivos pueden concretarse en: longa, y el paciente es subsidiario de realizar rehabilita-
ción de la deglución, el soporte nutricional habrá de
• Prevención de la desnutrición proteica aguda al acompañarlo en todo momento para evitar desnutri-
disminuir la liberación de sustratos endógenos. ción y fracaso de la actividad rehabilitadora.
• Modulación de la respuesta a la agresión.
• Protección de las funciones del aparato digestivo. 2.7.  Soporte nutricional artificial
2.4. Valoración nutricional específica En las guías de la Asociación Americana de Neuroci-
rugía, se establece con un grado de evidencia II que los
de la patología pacientes con TCE deben ser alimentados para conse-
Puede subrayarse aquí lo que se ha comentado con res- guir cubrir completamente requerimientos en los 7
pecto al paciente quemado crítico. Debe tenerse en cuen- días siguientes al traumatismo39. Varios trabajos apo-
ta que la valoración nutricional ha de replantearse durante yan además el inicio del soporte lo más precozmente
todo el proceso agudo, y que los parámetros de depleción posible, de forma óptima en las primeras 24-48 horas,
proteica visceral (albúmina, prealbúmina, etc.) tienen dado que esta medida parece contribuir a menor mor-
poco valor como marcadores nutricionales en este contex- talidad y menor discapacidad posterior40-42.
to, ya que son más indicadoras de inflamación aguda.
Puede aplicarse también el NUTRIC score para valorar la 2.7.1.  Nutrición enteral
necesidad de un abordaje nutricional más agresivo6.
Siempre que la vía digestiva sea útil, se debe utilizar
la NE como forma de soporte nutricional artificial. Las
2.5.  Cálculo de requerimientos
guías de la ASPEN15 recomiendan un inicio lo más pre-
En los pacientes con traumatismo grave actualmente coz posible de la NE, una vez que el paciente esté he-
se acepta que el aumento del gasto calórico total sobre modinámicamente estable.
Tema 36.  Nutrición en pacientes quemados y traumatológicos 589

No existe consenso acerca de las características de la Los lípidos que se administren deben incluir ácidos
fórmula que debe administrarse, ni tampoco acerca de grasos omega-3 derivados del pescado debido a que
si es mejor la NE continua o intermitente en bolos, poseen actividad antiinflamatoria. Debe evitarse la ad-
aunque es recomendable la utilización de procinéticos ministración exclusiva de omega-6 dado que producen
para mejorar la tolerancia. La ASPEN sugiere que la ad- una mayor inflamación.
ministración de una fórmula polimérica e hiperproteica Las recomendaciones acerca de la NP complementa-
podría ser adecuada para estos pacientes. No obstan- ria difieren entre las guías americanas, que no la reco-
te, se sigue recomendando el uso de fórmulas inmuno- miendan hasta pasados 7-10 días por un posible incre-
moduladoras (con Arg, ácidos grasos omega-3 y nu- mento de las complicaciones infecciosas51, y las guías
cleótidos) en pacientes con traumatismo severo, a europeas, que recomiendan un inicio más precoz de la
pesar de que existe controversia acerca de su beneficio NP complementaria: en el segundo o tercer día en caso
y de que la calidad de la evidencia es todavía baja15, 38. de no alcanzarse el aporte calórico necesario por vía
Un estudio en 40 pacientes objetivó una disminu- enteral.
ción en el número de infecciones en pacientes con
TCE que fueron tratados con fórmulas inmunomodu-
3. Resumen
ladoras, al compararlos con los que recibieron fórmu-
las estándar43. Otro estudio mostró que la administra- Los pacientes quemados críticos y con traumatismo
ción de ácidos eicosapentaenoico y docosahexaenoico grave tienen un alto riesgo de desnutrición, dado que
(EPA y DHA) aceleraba la recuperación en pacientes la agresión, en ambos casos, genera una situación hi-
con TCE44. permetabólica, hipercatabólica e inflamatoria que re-
Se plantea la misma controversia acerca de la utiliza- dunda en una desnutrición proteico-calórica aguda.
ción de Gln, que ya se ha comentado previamente. Al- Los objetivos nutricionales hoy en día se centran, no
gunos estudios han mostrado beneficio con su suple- solo en compensar las pérdidas sufridas en esta situa-
mentación, objetivándose una disminución en la tasa ción, sino también en modular la respuesta inmune y
de infecciones, bacteriemias y sepsis y mejora de la to- en evitar los daños derivados del mal funcionamiento
lerancia a la NE45-47 y, en cambio, en otros estudios no digestivo. La valoración nutricional ha de ser dinámica
se ha podido demostrar este beneficio48. y prolongada en el tiempo, y ha de tenerse en cuenta
En cuanto a la utilización de probióticos, las guías de que algunos de los parámetros comúnmente utilizados
la ASPEN no recomiendan emplearlos de forma gene- no son válidos en el momento agudo. El cálculo de
ralizada en el paciente crítico, si bien sugieren que po- requerimientos debe establecerse preferentemente se-
drían ser de utilidad en algún grupo de pacientes como gún calorimetría indirecta, pero en ausencia de ella,
aquellos con traumatismo severo (grado de recomen- pueden aplicarse fórmulas sencillas basadas en la situa-
dación C), puesto que se han relacionado con una dis- ción clínica del paciente. Los requerimientos más eleva-
minución en el número de infecciones nosocomiales, dos de energía y de proteínas se han descrito en el
en las neumonías asociadas a la ventilación mecánica y quemado. El TCE también conlleva un elevado consu-
del tiempo de estancia en la UCI49. mo de calorías y proteínas, pero en este caso, la situa-
ción clínica del paciente (sedación, convulsiones, etc.)
modifica en gran medida estas necesidades. Siempre
2.7.2.  Nutrición parenteral
que haya que prescribir soporte nutricional artificial ha
La NP debe utilizarse cuando no se puede alcanzar de preferirse la vía enteral sobre la parenteral. El mo-
un abordaje enteral, éste no cubra los requerimientos mento óptimo de inicio sigue siendo tema de contro-
nutricionales o la NE esté contraindicada. No obstante, versia, pero en general parece prudente instaurar la NE
este tipo de soporte no parece beneficiar a pacientes precozmente. La NP complementaria también parece
que puedan ser capaces de tolerar la NE 4 o 5 días ser una opción cada vez más validada en pacientes crí-
después del inicio del proceso. En todo caso, deben ticos cuando los requerimientos no se cubren con NE.
realizarse cuantos intentos sean necesarios para ins- La suplementación con Gln en todo paciente crítico ha
taurar la NE. sido recomendada por guías de sociedades internacio-
En un ensayo clínico sobre 41 pacientes en estado nales, aunque los datos más recientes parecen indicar
vegetativo postraumático o mínimamente consciente, que su utilización indiscriminada no está exenta de
la suplementación durante 15 días con aminoácidos riesgos, por lo que a la espera de nuevos estudios con
ramificados por vía intravenosa se relacionó con mayor evidencia, no se puede recomendar su uso ge-
una mejoría en la puntuación de discapacidad con neralizado. Con los trabajos disponibles, parece que el
respecto al grupo asignado a placebo50. Son necesa- grupo de pacientes quemados podría ser uno de los
rios más estudios para generalizar esta práctica. Para más beneficiados por su uso, sobre todo por vía paren-
evitar complicaciones asociadas a la hiperglucemia, la teral. La utilización de fórmulas con inmunonutrientes
tasa de administración de glucosa no debería exceder podría ser útil en pacientes quemados y con traumatis-
3,5 g/kg/día. mo grave, aunque todavía no se pueden establecer
590 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

conclusiones definitivas. Algunos micronutrientes 13. Heyland D, Muscedere J, Wischmeyer PE, Cook D,


como el selenio, el zinc y el cobre, aportados por vía Jones G, Albert M, et al. A randomized trial of glu-
intravenosa, parecen ser recomendables en el cuidado tamine and antioxidants in critically ill patients. N
de los pacientes quemados, así como algunos fárma- Engl J Med. 2013; 368:1489-1497.
cos como la insulina, la oxandrolona, los betablo- 14. Van Zanten AR, Sztark F, Kaisers UX, Zielmann S,
queantes y la hormona de crecimiento. El control glu- Felbinger TW, Sablotzki AR et al. High-protein en-
cémico ha de ser moderado, según se contempla en las teral nutrition enriched with immune-modulating
guías de práctica clínica a la espera de resultados más nutrients vs standard high-protein enteral nutri-
definitivos sobre el nivel óptimo a conseguir. tion and nosocomial infections in the ICU: a ran-
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Tema 36.  Nutrición en pacientes quemados y traumatológicos 591

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Tema 37. 
Soporte nutricional en pacientes con enfermedades
neurológicas
Paula Fernández Martínez
Tania Ramos Martínez
María Dolores Ballesteros Pomar
Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial Universitario. León

Adrián Arés Luque


Sección de Neurología. Complejo Asistencial Universitario. León

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 593-603.

1. Introducción
2.  Enfermedad vascular cerebral
3.  Esclerosis lateral amiotrófica
4.  Nutrición en la demencia
5.  Nutrición en la enfermedad de Parkinson
6. Resumen
7. Bibliografía

1. Introducción cas crónicas (tabla 1) y favorece el desarrollo de infec-


ciones por aspiración; la aparición de infecciones a su
Las enfermedades neurológicas se han convertido, vez favorece el desarrollo de desnutrición, cerrando así
por su prevalencia, relevancia clínica y repercusión indi- un círculo vicioso (figura 1)3. Aproximadamente la mi-
vidual, familiar y social, en uno de los principales pro- tad de las infecciones por broncoaspiración son neu-
blemas de salud en los países desarrollados. Conllevan, monías, cuya tasa de mortalidad asciende al 50 %.
a menudo, alteraciones en el nivel de consciencia o en
los mecanismos de la deglución que hacen necesario,
2.  Enfermedad vascular cerebral
con frecuencia creciente, un soporte nutricional artifi-
cial, tanto a nivel hospitalario como domiciliario1. Los En el año 2009, el Instituto Nacional de Estadística
datos sobre nutrición enteral domiciliaria (NED) recogi- concluyó que el ictus era la segunda causa más frecuen-
dos por el grupo de trabajo NADYA indican que el te de muerte en la población española, y la primera en
61 % de los casi 3.300 pacientes registrados que reci- el caso de las mujeres. En España, la incidencia acumu-
bieron este soporte nutricional en España en el año lada por 100000 habitantes se ha estimado en 218 (IC
2013 sufrían una enfermedad neurológica2. 95 %, 214-221) en varones y 127 (IC 95 %, 125-128) en
Los factores que condicionan el desarrollo de desnu- mujeres4. En el momento del ictus, hasta el 20 % de los
trición en este grupo de pacientes son variados y se pacientes ya están desnutridos, probablemente debido
recogen en la tabla 1. Por todo esto, las guías de la a su edad avanzada y a la existencia de alguna discapa-
American Society for Parenteral and Enteral Nutrition cidad previa, lo que se asocia a peor pronóstico5. Des-
(ASPEN) recomiendan, con un grado de evidencia B, pués del ictus, el estado nutricional se deteriora, gene-
realizar un cribado de desnutrición a los pacientes con ralmente por disfagia y déficits neurológicos que
enfermedades neurológicas. Mención aparte merece el dificultan la alimentación autónoma. Un paciente con
desarrollo de disfagia, que se define como la dificultad ictus puede sufrir un déficit calórico cercano a las 500
para progresar el bolo alimenticio de forma eficaz y kcal/día y cubre con dificultad sus requerimientos de
segura. Es muy prevalente en las patologías neurológi- proteínas. La presencia de desnutrición en estos pacien-

593
594 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

Tabla 1.  Factores asociados a la desnutrición en La disfagia es un problema frecuente después de un


enfermedades neurológicas. ictus. Condiciona el estado nutricional y favorece la
broncoaspiración, lo que causa la muerte del 20 % de
1.  Menor ingesta: los pacientes en el año siguiente al ictus. Sin embargo,
· Depresión (hasta 40 %) conviene destacar que la disfagia es una patología tra-
· Deterioro cognitivo table y que la rehabilitación de la función deglutoria
· Dificultades en manipulación o masticación permite mejorar el estado nutricional de los pacientes.
· Disfagia: Existen algunos factores independientes de riesgo que
   – 84 % Alzheimer deben hacer pensar en la presencia de disfagia tras
   – 50-82 % Parkinson un ictus, como son: género masculino, edad mayor de
   – 60 % esclerosis lateral amiotrófica 70, ictus severo, ausencia de respuesta faríngea, vacia-
   – 30-50 % enfermedad vascular cerebral miento incompleto de la cavidad oral o debilidad/ asi-
   – 44 % esclerosis múltiple metría del paladar8.
2.  Disfunción gastrointestinal:
· Náuseas y vómitos (hipertensión 2.1. Evaluación de la disfagia en el paciente
intracraneal –HTIC–, fármacos)
con ictus
· Gastroparesia (HTIC, lesiones cuarto ventrículo,
disfunción autonómica, fármacos) Los equipos médicos y de enfermería deber estar
· Estreñimiento (disminución motilidad intestinal, sensibilizados ante este problema, tanto para su diag-
disminución aporte fibra y fluidos, disfunción nóstico, como para instaurar medidas de intervención
autonómica, fármacos, debilidad musculatura nutricional. Desde una primera etapa se debe valorar
abdominal) durante el ingreso la posible disfagia del paciente, con
3.  Alteraciones en el gasto energético: pruebas relativamente sencillas de realizar como son la
· Disminuido en desnutridos detección del reflejo nauseoso, la evaluación de la sen-
· Variable en la enfermedad de Parkinson sibilidad faríngea y la observación de los movimientos
· Aumentado en corea de Huntington deglutorios y la aparición de síntomas y signos de atra-
· Variable en esclerosis lateral amiotrofica gantamiento o aspiración después de la deglución9. La
EAT-10 es una escala de autoevaluación analógica ver-
4. Efectos secundarios con repercusión nutricional
bal, unidimensional y de puntuación directa para eva-
de los fármacos neurológicos
luar síntomas específicos de disfagia. La validez y fiabi-
lidad de la versión original han sido previamente
tes condiciona de forma desfavorable su pronóstico al demostradas y publicadas. Se trata de un cuestionario
incrementar la morbilidad (infecciones, úlceras cutá- de 10 preguntas diseñado por un grupo multidiscipli-
neas), complicaciones y secuelas, y puede impedir la nar de expertos. El paciente debe responder a cada
recuperación y prolongar la duración de la estancia hos- pregunta de forma subjetiva en una escala de cinco
pitalaria6, 7. puntos (0-4 puntos), en la que cero (0) indica la ausen-

Enfermedad neurológica

Disfagia Desnutrición

Pérdida de Mala
Broncoaspiración masa Inmunodepresión
cicatrización
muscular

INFECCIÓN

Figura 1.  Relación entre enfermedad neurológica, desnutrición e infecciones.


Tema 37.  Soporte nutricional en pacientes con enfermedades neurológicas 595

cia del problema y cuatro (4) indica que considera que La videofluoroscopia se considera a menudo la prue-
se trata de un problema serio10, 11. ba de elección para la evaluación de la disfagia15, pero
En los servicios de Neurología, la prueba más utilizada no está disponible en todos los centros. Consiste en la
es el test del agua de DePippo12, que consiste en admi- administración de bebidas o comidas de diferente con-
nistrar unos 10 ml de líquido al paciente y observar la sistencia, impregnadas con bario, mientras el paciente
aparición de tos o alteraciones de la voz tras el intento está sentado o incorporado, y en la observación de
de deglución. Su sensibilidad es del 76 % y su especifici- su paso por la orofaringe mediante fluoroscopia. Per-
dad del 59 % respecto a la seguridad de la deglución. Es mite distinguir si hay penetración (paso a la vía respira-
un test elemental, ya que solo discrimina si hay riesgo de toria por encima de las cuerdas vocales) o aspiración
aspiración o no. Otro método propuesto es la observa- (paso por debajo de las cuerdas vocales). Por último, la
ción de las variaciones en la saturación de oxígeno du- fibroscopia da información acerca de la movilidad y
rante la deglución mediante un pulsioxímetro. Una dis- sensibilidad faríngea y permite visualizar de forma di-
minución significativa (≥ 2  %) de la saturación de recta la deglución (aunque no la aspiración). Es una
oxígeno con la deglución indicaría aspiración. La prueba prueba invasiva, aunque bien tolerada, pero precisa de
puede hacerse más específica con la administración de material y personal específico para su realización.
volúmenes y texturas diferentes (test de Clavé). La sensi-
bilidad (73-87 %) y la especificidad (39-87 %) del test de
Clavé son muy variables, pero tiene la ventaja respecto al
2.2. Soporte nutricional en la enfermedad
test de DePippo de que, además de detectar el riesgo de vascular cerebral
aspiración, permite determinar cuál es la textura y el vo-
2.2.1.  Dieta oral y suplementos
lumen más seguro para la deglución (tabla 2)13.
Existen numerosos test y pruebas disponibles para Los pacientes con enfermedad vascular cerebral
evaluar inicialmente la presencia de disfagia. Un recien- (EVC) no tienen unos requerimientos de calorías y nu-
te estudio de la Universidad de Seúl revisó 31 métodos trientes diferentes de los de personas de su misma
de cribado (1992-2011) para elegir el óptimo, basán- edad y sexo, salvo que coexista alguna condición o en-
dose en: la calidad de la metodología de los estudios, fermedad (por ejemplo, úlceras de presión, infeccio-
propiedades de la medición de las herramientas utiliza- nes) que los modifiquen. Buena parte de los pacientes
das para la detección de disfagia y la aplicabilidad por van a poder recibir una alimentación oral normal. De-
enfermería. Concluyeron que los test GUSS (gugging terminadas medidas posturales pueden ser de utilidad
swallowing screen) y SSA (standardized bedside swa- para ayudar a una deglución segura y eficaz. En caso
llowing assessment) son los que ofrecen mayor rigor de presentar alguna dificultad para la ingesta normal,
científico y resultan aplicables en la práctica clínica dia- y siempre que el riesgo de aspiración sea mínimo de
ria, sobre todo por enfermería14. acuerdo con las pruebas antes descritas, estará indica-

Tabla 2.  Prueba de disfagia (Protocolo de Clavé).

Viscosidad Néctar Líquido Pudin


Volumen 5 ml 10 ml 20 ml 5 ml 10 ml 20 ml 5 ml 10 ml 20 ml
Signos de seguridad
Tos
Voz húmeda
Disfonía
Desaturación
de oxígeno
Signos de eficacia
Sello labial
Residuos orales
Carraspeo
Deglución
fraccionada
596 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

do realizar modificaciones en la textura de la dieta alimentación por SNG. El estudio FOOD 216 no demostró
para facilitar la alimentación. La disfagia para sólidos una diferencia estadísticamente significativa entre el ini-
hará necesario realizar una dieta triturada («túrmix») cio precoz (antes de 72 horas) o diferido de la NE sobre
de consistencia más o menos fina. Con mucha fre- la mortalidad o las complicaciones. Sin embargo, el in-
cuencia, la disfagia es para líquidos y habrá que espe- tervalo de confianza (IC 95 % 0,8 a 12,5 %) de la reduc-
sar estos con productos farmacéuticos (módulos de ción absoluta del riesgo de muerte del 5,8 % observada
espesante) o con medidas caseras (gelatina, féculas, en dicho estudio, a favor de la NE precoz, se considera
papillas de cereales, puré de patata en polvo). Existen, lo suficientemente preciso como para que sea muy im-
además, preparados de agua gelificada, de sabor neu- probable que se asocie a un incremento relevante del
tro o de frutas, que pueden ayudar a mantener una riesgo, por lo que algunas guías de práctica clínica18 re-
correcta hidratación. En los últimos años se ha desa- comiendan iniciar NE en las primeras 24 horas en todo
rrollado el concepto de Alimentación Básica Adaptada paciente con ictus que no tolere la vía oral. La vía de
(ABA), consistente en alimentos de textura modificada administración de elección sería la SNG, ya que tampoco
para pacientes con disfagia, generalmente de alta la colocación temprana (en el primer mes después del
densidad calórica e hiperproteicos, listos para su con- ictus) de gastrostomías ha demostrado ventajas (estudio
sumo. Tienen como ventajas que no precisan de ela- FOOD 3)16. Dado que los requerimientos nutricionales
boración, su seguridad microbiológica y que garanti- de estos pacientes no difieren de los de la población de
zan el aporte de macro y micronutrientes. Sin su misma edad y sexo, la fórmula de elección será una
embargo, no están incluidos entre las prestaciones polimérica, normoproteica, normocalórica y con fibra,
complementarias financiadas, aunque su uso es cada salvo que alguna otra situación haga recomendable otro
vez más frecuente en centros hospitalarios y residen- tipo diferente. En todo caso, hay que cuidar el balance
cias geriátricas. La administración sistemática de su- hidroelectrolítico de estos enfermos. La NE domiciliaria
plementos orales a pacientes que han sufrido un ictus ha demostrado ser coste-efectiva en este grupo de pa-
no aporta beneficio alguno (estudio FOOD 1,)16, 17, así cientes19.
que deben reservarse para aquellos pacientes desnu- Si el paciente está clínicamente estable, suficiente-
tridos al ingreso o para aquellos cuyo estado nutricio- mente alerta y ha recuperado la capacidad deglutoria
nal se deteriora durante el mismo. segura, puede iniciarse la transición hacia la alimenta-
ción oral. El primer paso será administrar la NE en for-
2.2.2.  Nutrición enteral (NE) ma de bolos para comprobar su tolerancia y favorecer
la sensación de apetito. Seguidamente, se administra-
De forma habitual, este tipo de soporte nutricional se rán pequeñas cantidades de puré antes de los bolos de
considera indicado cuando el paciente no puede recibir NE, en los horarios de las comidas normales. Progresi-
alimentación oral por un período de al menos 7 días (5 vamente, se aumentará la cantidad de dieta oral y se
si presenta desnutrición). Si la NE se mantiene durante disminuirá la de NE, de modo que si el paciente es ca-
menos de un mes, se administrará mediante sonda na- paz de cubrir el 75 % de sus requerimientos mediante
sogástrica (SNG), y si se prolongase más tiempo estaría dieta oral durante al menos 3 días podría retirarse la
indicada la colocación de una gastrostomía por vía en- sonda20, 21. En la tabla 3 se recogen las recomendacio-
doscópica o radiológica. Una revisión sistemática de la nes de las guías de la European Society for Clinical Nu-
Biblioteca Cochrane concluyó que la gastrostomía en- trition and Metabolism (ESPEN) de NE22, publicadas en
doscópica percutánea (PEG) se asoció a menor mortali- 2006 (a 31 de enero de 2017 todavía no se han publi-
dad y menos fracasos del tratamiento nutricional que la cado las recomendaciones actualizadas).

Tabla 3.  Recomendaciones de la European Society for Clinical Nutrition and Metabolism –ESPEN– (2006)
en enfermedad cerebrovascular.

Grado de
Recomendación
evidencia
Si disfagia postictus, NE para asegurar aporte nutricional y mantener/mejorar estatus
nutricional.
A
En la disfagia neurológica es preferible la PEG a la SNG para el soporte nutricional a largo
plazo, ya que se asocia a menos fracasos del tratamiento y a un mejor estado nutricional.
La NE debe acompañarse de rehabilitación intensa de la deglución hasta que sea posible una
C
ingesta oral suficiente y segura.

NE: nutrición enteral; PEG: gastrostomía endoscópica percutánea; SNG: sonda nasogástrica.
Tema 37.  Soporte nutricional en pacientes con enfermedades neurológicas 597

3.  Esclerosis lateral amiotrófica corroboran que los pacientes que fueron manejados
por una unidad multidisciplinar tenían una mediana de
3.1.  Fisiopatología y diagnóstico supervivencia de 1246 días (IC 95 % 1109-1382); 104
días más que la media de 1148 días de aquellos que
La esclerosis lateral amiotrófica (ELA) es una enferme-
solo habían asistido al seguimiento del neurólogo (IC
dad neurodegenerativa de curso progresivo que se pro-
95 % 0,998-1,297). Esta diferencia fue estadísticamen-
duce por una alteración de las neuronas de la vía pira-
te significativa (log-rank 10,8, p = 0,008)27.
midal. Se distinguen dos formas de ELA en función de
los grupos musculares inicialmente afectados: una ELA
de inicio espinal, que comienza con trastornos motores 3.2.  Objetivos nutricionales
a nivel de las extremidades, y una ELA de inicio bulbar, Los objetivos de la intervención nutricional son, en
con trastornos motores a nivel de los pares craneales primer lugar, asegurar las necesidades de energía, lí-
bajos, y que tiene una repercusión nutricional más evi- quidos, vitaminas y minerales para disminuir el deterio-
dente y precoz23. La supervivencia media en pacientes ro nutricional y contribuir al enlentecimiento del pro-
con ELA es de 2 a 5 años, siendo la desnutrición un greso de la enfermedad, y, en segundo lugar, prevenir
factor pronóstico independiente de supervivencia. El las complicaciones de la disfagia, como la aspiración
30 % de los pacientes con ELA tienen una supervivencia (figura 3)28.
de 5 años tras el diagnóstico, y entre un 10-30 % supe-
ran los 10 años. Los factores relacionados con una es-
3.3.  Valoración nutricional específica
peranza de vida mayor son: diagnóstico en edad joven,
género masculino y la forma de inicio espinal. La ELA La valoración del estado nutricional del paciente con
esporádica tiene una incidencia en países occidentales ELA se basa en:
de entre 1,5-2,7 casos nuevos por 100000 personas/
año (en España 1 caso nuevo por 100000 personas/ • Anamnesis: Se debe interrogar sobre si existe o no
año) con una prevalencia de entre 2,7-7,4 por 100000 pérdida de peso y cuándo se inició. Se debe reali-
personas (en España 3,5 casos por 100000 habitan- zar una encuesta dietética en la que habrá que
tes)24. Se caracteriza por una pérdida de peso que incidir en el número y en la cantidad de comidas
se relaciona, por un lado, con la disminución de la in- que realiza, así como en el tipo de alimentos que
gesta, y, por otro, con un aumento de los requerimien- consume y aquellos que no tolera.
tos energéticos por un hipercatabolismo paradójico • Exploración física: Peso, talla e IMC como principa-
(figura 2)25. Este déficit nutricional incrementa la pérdi- les datos. Además, conviene obtener otras medidas
da de masa magra y grasa, acelerando la atrofia muscu- antropométricas como perímetro braquial y plie-
lar, especialmente de la musculatura respiratoria; por gues (bicipital, tricipital, suprailíaco y subescapular).
otra parte, ocasiona una disfunción del sistema inmu- • Composición corporal: En este tipo de pacientes es
ne, incrementando el riesgo de infecciones. Ambos he- adecuado conocer la masa grasa, la masa magra y
chos hacen que el riesgo de muerte sea 7,7 veces mayor el agua corporal, para lo que se usa la impedancio-
que en el paciente bien nutrido26. Es necesario un abor- metría y otras técnicas como la densitometría o la
daje multidisciplinar para tratar a los pacientes con ELA; resonancia magnética. Lo más adecuado es la rea-
de hecho, estudios como el del Hospital «Bellvitge», lización de una combinación de pruebas29.

Figura 2.  Hipercatabolismo en la ELA. Figura 3.  Consecuencias de la disfagia en la ELA.


598 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

• Parámetros nutricionales: Es conveniente solicitar diante el uso de dietas especiales diseñadas especí-
analítica con albúmina, prealbúmina, proteína ficamente con alimentos altamente calóricos. Se
transportadora de retinol (RBP), colesterol total y puede plantear el uso de suplementos nutricionales
creatinina. No obstante, en algún estudio se habla artificiales si la ingesta sigue sin ser adecuada25.
de que las concentraciones de albúmina no fue- • Disminuir la disfagia: Se busca aumentar la consis-
ron un factor pronóstico, pero se observó mayor tencia de la comida mediante técnicas culinarias o
supervivencia si las concentraciones de albúmina espesantes artificiales, evitando alimentos de dife-
aumentaban durante el soporte nutricional30. rentes texturas o con temperaturas extremas. Ade-
más, se le enseñan al paciente una serie de técnicas
Se diagnosticará desnutrición con un índice de masa de fisioterapia de la deglución y entrenamiento
corporal < 18,5 kg/m2 y/o una disminución del peso postural para mejorar la ingesta mientras el grado
> 10 % respecto al que el paciente tenía al diagnóstico de disfagia lo permita30.
de la enfermedad. Se debería realizar la derivación al
especialista en Nutrición al diagnóstico o en estadios 3.4.2.  Soporte nutricional artificial
iniciales de la enfermedad para evitar los efectos
del hipercatabolismo y, sobre todo, antes de la apari- En el caso de que el paciente sufra una desnutrición
ción de la disfagia. A partir de la instauración de esta, severa o la disfagia impida el aporte nutricional oral,
el deterioro del paciente es más acentuado, sobre todo puede requerirse un soporte nutricional artificial. No
desde el punto de vista nutricional31. Es primordial existe ningún ensayo aleatorio controlado que demues-
un diagnóstico temprano de este síntoma mediante: tre que la gastrostomía mejore la supervivencia, pero sí
se ha observado una ventaja de la misma en los porta-
a. Una anamnesis exhaustiva preguntando sobre el dores en estudios de cohortes prospectivos33. También
tipo de alimentos a los que se asocia, en el caso se ha demostrado que ayuda a alcanzar una ingesta nu-
de que el paciente tenga conciencia de ella, o in- tricional adecuada y a la estabilización del peso34. Para
terrogando sobre síntomas indirectos de disfagia realizarse se recomienda en estadíos no muy avanzados
como la tos. con una capacidad vital mayor del 50 % y un estado nu-
b. Un test de disfagia (test de Clavé), ya comentado tricional aceptable. La gastrostomía radiológica se
anteriormente13. ha mostrado más segura que la PEG en aquellos pacien-
c. Manometría esofágica que ayuda a detectar la hi- tes con capacidad vital < 50 %, con beneficios en la su-
pertonía de esfínter esofágico superior existente pervivencia.
en algunos casos. La SNG sería la vía de elección en pacientes con mal
d. Videofluoroscopia mediante la ingesta de un con- estado general, que no soportarían una intervención
traste, considerada el gold standard para el diag- más agresiva. Por último, se ha de señalar que la nutri-
nóstico de la disfagia32. ción parenteral (NP), en el paciente en estado termi-
nal, es una técnica segura que estabiliza el peso y los
3.4. Soporte nutricional en la esclerosis lateral parámetros nutricionales35, pero que no ha demostra-
do aumento en la supervivencia ni en la calidad de vida
amiotrófica (planteando, por tanto, el dilema ético del encarniza-
Varios estudios han demostrado un aumento nota- miento terapéutico) y que requiere una infraestructura
ble de la probabilidad de supervivencia en los pacientes costosa y un personal entrenado. Debido al carácter
que reciben soporte nutricional. También se ha estu- progresivo de la enfermedad, es necesario plantear
diado el momento de implantación del protocolo nu- una implantación temprana de la PEG cuando el pa-
tricional, valorando la utilidad de la instauración pre- ciente aún mantiene la tolerancia oral. Así se asegura-
coz en el mismo, teniendo en cuenta la mediana de ría en todo momento el aporte nutricional y se preven-
supervivencia en cada uno de los grupos. Se obtuvo drían las complicaciones de la PEG relacionadas con la
una ventaja de la supervivencia en aquellos pacientes implantación tardía de la misma. A pesar de su utilidad
que entraron antes, pero sin significación estadística teórica, no hay evidencia suficiente de que esta medida
en los estudios revisados. sea efectiva, debido a que en la mayoría de los casos la
PEG se indica en estadios tardíos de la enfermedad.
3.4.1. Dietoterapia
Las modificaciones dietéticas son especialmente im-
4.  Nutrición en la demencia
portantes en esta enfermedad en estadios tempranos y 4.1. Factores nutricionales implicados
hasta el inicio de la disfagia. Las principales medidas
en la demencia
higiénico-dietéticas van encaminadas a:
Los nutrientes juegan un papel fundamental en el de-
• Optimizar la ingesta ante el hipercatabolismo exis- sarrollo y funcionamiento del sistema nervioso humano
tente: Se persigue un incremento de la ingesta me- (tabla 4), lo que explica la importancia de la nutrición en
Tema 37.  Soporte nutricional en pacientes con enfermedades neurológicas 599

Tabla 4.  Efectos fisiológicos de los micronutrientes en el cerebro52.

MICRONUTRIENTE EFECTOS FISIOLÓGICOS


· Plasticidad de las sinapsis en el hipocampo
· Regulador génico
Vitamina A
· Protección de membranas
· Antioxidante
Tiamina (B1) · Metabolismo de la glucosa
Piridoxina (B6) · Síntesis de reguladores bioquímicos
Ácido fólico (B9) · Desarrollo fetal del sistema nervioso central
Cobalamina (B12) · Mielinización
· Antioxidante
Vitamina C
· Conversión de dopamina en noradrenalina
· Antioxidante
Vitamina D
· Regulación del neurotrofismo
· Protección de la membrana lipídica
Vitamina E
· Antioxidante
· Regulación del desarrollo cerebral
Hierro
· Metabolismo energético
· Desarrollo cognitivo
Zinc
· Sentidos del gusto y del olfato

el desarrollo de diferentes enfermedades neurológicas. cialmente de calorías de origen graso, como se ha obser-
La enfermedad de Alzheimer es la forma más frecuente vado en algunos países asiáticos) podría desempeñar un
de demencia y es el resultado de una fisiopatología com- papel protector, disminuyendo el daño molecular por
pleja y todavía no completamente conocida (figura 4). oxidación, aunque la evidencia disponible dista de ser
La edad es el principal factor de riesgo para desarrollar concluyente. Por otro lado, la dieta mediterránea podría
esta enfermedad36. Entre los factores dietéticos que po- tener un carácter protector respecto al deterioro cogniti-
drían favorecer la aparición de esta enfermedad se ha vo por diversos mecanismos: la ingesta de ácidos grasos
postulado que cierto grado de restricción calórica (espe- monoinsaturados ayudaría a la conservación de la mem-
brana celular, la mejoría del patrón metabólico conlleva-
ría un menor deterioro vascular y la ingesta de antioxi-
Depósito de Formación de dantes ayudaría a disminuir el estrés oxidativo; algunos
amiloide ovillos estudios prospectivos parecen confirmar este efecto pro-
neurofibrilares tector37. El estudio aleatorizado PREDIMED38 sugiere que
la adherencia a la dieta mediterránea disminuye los even-
tos cardiovasculares incluido el ictus, lo que directa e in-
directamente influye en el desarrollo de demencia, y
también sugiere una mejoría en síntomas cognitivos39.
En los últimos años se ha estudiado el papel de los ácidos
Estrés grasos omega-3 en el desarrollo del deterioro cognitivo y
oxidativo se han postulado diferentes mecanismos por los que po-
drían disminuir el riesgo de demencia. Bang describió a
Formación de principios de los años 70 del pasado siglo que la pobla-
productos ción esquimal tenía una baja incidencia de coronariopa-
finales de tías a pesar del consumo de una dieta rica en grasa,
glicosilación fenómeno que atribuyó a la ingesta de cantidades im-
avanzada Inflamación portantes de ácidos grasos polinsaturados omega-3 de
origen marino. Estos ejercen su carácter protector me-
Figura 4.  Fisiopatología de la enfermedad de diante sus efectos antitrombóticos, vasodilatadores, an-
Alzheimer. tiinflamatorios, antiarrítmicos y sobre el metabolismo li-
600 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

pídico. Dado que se ha descrito una relación directa colinesterasa. Algunos estudios observacionales han
entre la enfermedad cardiovascular y la aparición de de- descrito una relación directa entre las concentraciones
mencia, tanto de tipo Alzheimer como vascular, la reduc- de vitamina D y la función cognitiva, aunque no hay
ción del riesgo cardiovascular podría disminuir el riesgo una evidencia concluyente al respecto47.
de demencia. Estos ácidos grasos, junto a los fosfolípi-
dos, forman parte de las membranas celulares y podrían 4.2. Soporte nutricional del paciente
contribuir a mantener su integridad en las neuronas,
con demencia
además de facilitar la acción de enzimas como la ATPasa
(fundamental para la obtención de energía) e influir en la La prevalencia de desnutrición en el paciente con de-
expresión de la proteína β-amiloide40. Sin embargo, no mencia alcanza el 70 %. Dado que un inadecuado esta-
hay evidencia de la eficacia de estas grasas poliinsatura- do nutricional se relaciona con un aumento de la mor-
das en el tratamiento de la demencia. El metanálisis de la talidad, se debería realizar un cribado de desnutrición
Biblioteca Cochrane publicado en 2006, que solo incluyó (por ejemplo, Mini Nutritional Assessment –MNA–) pe-
dos estudios, no encontró ningún efecto beneficioso en riódicamente en los pacientes con deterioro cognitivo.
la administración de omega-3. Basándose en estudios Las causas de desnutrición en la demencia son diversas.
epidemiológicos que sugieren un efecto protector de los Las más prevalentes son la anorexia, la disfagia y la pér-
omega-3 de origen marino y un incremento del riesgo dida de autonomía para alimentarse. Esta última puede
con el consumo de grasas saturadas y trans, los autores medirse a través de la Eating Behavior Scale48 (tabla 5).
consideran razonable recomendar el consumo de pesca- Los requerimientos energéticos y nutricionales son los
do para prevenir la demencia41. Estudios publicados pos- mismos que en las personas de sus mismas característi-
teriormente no señalan un efecto beneficioso sobre la cas (sexo, edad, peso y talla), aunque pueden verse au-
función cognitiva42, pero sí una reducción de los paráme- mentados en presencia de agitación psicomotriz.
tros inflamatorios43 y un aumento del apetito y del peso Respecto a la dieta, esta debe realizarse de forma
de estos pacientes44. El estudio de Framinghan45 indica fraccionada (5-6 tomas), en pequeñas cantidades, pero
que individuos con niveles altos de omega-3 (ácido doco- con un alto contenido calórico y un aporte suficiente de
sahexaenoico –DHA–) en sangre tienen menor incidencia todos los nutrientes. La presentación de los platos y la
de demencia tras 9 años de seguimiento. Otro estudio variedad de sabores es un aspecto que no puede des-
prospectivo asocia niveles de omega-3 (ácido eicosapen- cuidarse en la alimentación del paciente con demencia.
taenoico –EPA–), pero no el DHA, a menores índices de La textura se adaptará a la capacidad deglutoria (desde
atrofia de hipocampo tras 4 años de seguimiento46. una dieta sólida a una dieta triturada). Además, deben
Los datos epidemiológicos señalan una relación in- realizarse las comidas en un horario fijo, en un ambien-
versa de las concentraciones de ácido fólico y vitamina te tranquilo y sin distracciones. En el caso de que el
B12 y una relación directa de la concentración de ho- paciente no pueda utilizar los cubiertos para comer,
mocisteína, con el desarrollo de deterioro cognitivo. deben elaborarse menús que puedan ser ingeridos con
Ambas vitaminas juegan un papel importante en el de- las manos o que solo precisen un cubierto.
sarrollo del sistema nervioso, y la homocisteína podría La prescripción de suplementos orales en pacientes
ser una sustancia neurotóxica además de un factor de con demencia y malnutridos puede aumentar el peso
riesgo cardiovascular. Si bien la administración de estas corporal a expensas de masa magra, pero no se dispo-
vitaminas ha demostrado disminuir las concentraciones ne de una evidencia firme sobre la reducción de la mor-
de homocisteína, no se han observado efectos benefi- bimortalidad de estos pacientes. Sucede lo mismo con
ciosos sobre la función cognitiva, aunque el ácido fólico el uso de NE, tanto por SNG como por PEG. En la re-
podría incrementar la eficacia de los inhibidores de la ciente revisión de la Biblioteca Cochrane sobre el em-

Tabla 5.  Eating Behavior Scale.

Independiente Necesita órdenes Necesita ayuda Dependiente

Capacidad para empezar a comer 3 2 1 0


Capacidad de atención 3 2 1 0
Capacidad para localizar la comida 3 2 1 0
Capacidad para manejar cubiertos 3 2 1 0
Masticación y deglución 3 2 1 0
Capacidad para acabar la comida 3 2 1 0
Puntos totales
Tema 37.  Soporte nutricional en pacientes con enfermedades neurológicas 601

pleo de NE con sonda en pacientes con demencia, que demencia, la nutrición adquiere un papel paliativo cuya
no halló ningún estudio aleatorizado controlado, no se importancia no puede infravalorarse. Por último, en
observaron efectos beneficiosos sobre la esperanza de algunas entidades, como la enfermedad de Parkinson
vida o la prevención de úlceras de decúbito, y en nin- avanzada o en la epilepsia farmacorresistente, el so-
guno de los estudios revisados se valoró la calidad de porte nutricional adquiere carta de naturaleza como
vida49. Difícilmente se realizarán estudios de la máxima una parte más del arsenal terapéutico disponible. Es
calidad, ya que se plantearían evidentes objeciones éti- esperable, como parecen indicar los estudios, que
cas. Las guías ESPEN recomiendan una indicación indi- poco a poco van apareciendo en la literatura, que un
vidualizada y restrictiva de la PEG en estos enfermos50. buen tratamiento nutricional contribuya, de manera
clara, a mejorar la calidad de vida de estos pacientes.
5.  Nutrición en la enfermedad de Parkinson
7. Bibliografía
El contenido proteico de la dieta interfiere con el tra-
tamiento con L-dopa. La absorción de este fármaco se   1. Ballesteros Pomar MD, Ares Luque A. Nutrición ba-
realiza en el intestino delgado a través de la proteína sada en la evidencia en las enfermedades neuroló-
transportadora de aminoácidos de cadena larga; este gicas. Endocrinol Nutr 2005; 52 (Supl 2): 97-101.
tipo de aminoácidos interfiere no solo con su absor-   2. Wanden-Berghe C, Álvarez Hernández J, Burgos
ción intestinal, sino también con el paso a través de la Peláez R, Cuerda Compes C, Matía Martín P, Luen-
barrera hematoencefálica, que se realiza por idéntica go Pérez LM,, et al. Grupo NADYA-SENPE. A home
vía. Puesto que la restricción proteica de la dieta puede enteral nutrition (HEN); spanish registry of NAD-
tener efectos negativos en el estado nutricional del pa- YA-SENPE group; for the year 2013. Nutr Hosp.
ciente, se recomienda administrar la medicación una 2015; 31:2518-22.
hora antes de la ingesta de alimentos que aporten una   3. Vidal Casariego A, Álvarez San Martin R, Urioste
cantidad significativa de proteína. Si a pesar de esta Fondo A. Soporte nutricional en las enfermedades
medida, el enfermo presentase fluctuaciones en su es- neurológicas. En: Ballesteros Pomar MD, Corcoy
tado motor atribuibles, al menos en parte, a problemas Plá R, Riobó Serván P, Salvador Rodríguez J, Cano
en la absorción del fármaco, puede pautarse una dieta Rodríguez I, eds. Manual del Residente de Endocri-
con un aporte proteico diurno restringido y un elevado nología y Nutrición. SEEN; 2009. p 1229-43.
contenido en proteínas (hasta alcanzar requerimien-   4. Marrugat J, Arboix A, Garcia-Eroles LL, Salas T, Vila
tos) en la cena. No existe ninguna dieta que influya en J, Castell C, et al. Estimación de la incidencia po-
la evolución de la enfermedad de Parkinson, aunque sí blacional y letalidad de la vascular establecida is-
hay ciertas recomendaciones51: quémica y hemorrágica en 2002. Rev Esp Cardiol.
2007;60:573-80. 
• Una dieta rica en fibra y una adecuada hidratación   5. Martineau J, Bauer JD, Isenring E, Cohen S. Malnu-
ayudan al manejo del estreñimiento. trition determined by the patient-generated sub-
• Las comidas abundantes y ricas en grasas que ra- jective global assessment is associated with poor
lentizan el vaciado gástrico deben evitarse porque outcomes in acute stroke patients. Clinical Nutri-
interfieren en la absorción de la medicación. tion 2005; 24: 1073–1077.
• La restricción proteica no es necesaria, excepto en   6. Gariballa SE, Parker SG, Taub N, Castleden M. Nu-
pacientes con enfermedad avanzada o con fluc- tritional status of hospitalized acute stroke pa-
tuaciones motoras en los que existiría una compe- tients. Br J Nutr 1998; 79:481-7.
tición con otros aminoácidos que interfieren la   7. FOOD Trial Collaboration. Poor nutritional status
absorción de L-dopa. on admission predicts poor outcomes after stroke:
• No existe evidencia de que abundantes dosis de observational data from the FOOD trial. Stroke
vitamina E u otros antioxidantes sean útiles en 2003; 34: 1450-6.
esta enfermedad.   8. Mann, Giselle, and Graeme J. Hankey. Initial clinical
and demographic predictors of swallowing impair-
ment following acute stroke. Dysphagia 2001; 16:
6. Resumen
208-215.
Las enfermedades neurológicas constituyen una de   9. Bath PM, Bath FJ, Smithard DG. Interventions for
las principales indicaciones de soporte nutricional. En dysphagia in acute stroke. Cochrane Database of
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602 BLOQUE: PATOLOGÍAS ESPECÍFICAS

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Tema 37.  Soporte nutricional en pacientes con enfermedades neurológicas 603

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Robins SJ, Au R, et al. Plasma phosphatidylcholine 377-85.
BLOQUE:
NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA
(Dr. Miguel León Sanz)
TEMA 38. Nutrición en cirugía de tumores de cabeza y cuello.
Dres. Daniel Antonio de Luis Román, Emilia Gómez Hoyos, Juan José López
Gómez y Beatriz Torres Torres

TEMA 39. Soporte nutricional en el paciente con cirugía oncológica


de estómago, esófago y páncreas.
Dr. Alfonso Calañas-Continente

TEMA 40. Valoración y soporte nutricional en el paciente oncológico.


Dres. Yaiza López Plasencia, Dunia Marrero Arencibia, Yaiza García Delgado
y Carlos Rodríguez Pérez

TEMA 41. Soporte nutricional en el paciente hematológico


(trasplante de medula ósea y enfermedad de injerto contra huésped).
Dres. Elena García Fernández, M.ª Ángeles Valero Zanuy y Miguel León Sanz
Tema 38. 
Nutrición en cirugía de tumores de cabeza y cuello
Daniel Antonio de Luis Román
Emilia Gómez Hoyos
Juan José López Gómez
Beatriz Torres Torres
Centro de Investigación de Endocrinología y Nutrición. Facultad de Medicina. Servicio de
Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico Universitario. Valladolid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 607-616.

1. Introducción
2.  Fisiopatología y manifestaciones clínicas
3. Diagnóstico
4.  Soporte nutricional
5. Resumen
6. Bibliografía

1. Introducción de alcohol, los problemas que produce la disfagia aso-


ciada a la masa tumoral. Situándose este tipo de tumo-
Los tumores de vía aérea y digestiva alta (boca, fa- res en uno de los primeros lugares de las patologías que
ringe y laringe) representan aproximadamente un originan disfagia y por tanto malnutrición (tabla 1).
15% de los cánceres. El abordaje de estos tumores En este contexto, la valoración y el soporte nutricional
pasa por un tratamiento multidisciplinar, con cirugía se convierten en un punto esencial en el tratamiento de
y radioterapia asociadas y en algunos casos con qui- estas patologías, siendo esencial adaptar el aporte nutri-
mioterapia1. cional para mejorar la calidad de vida4, reducir el núme-
Los principales factores de riesgo o predisposición a ro de complicaciones y evitar la interrupción de los tra-
estos tumores son el consumo excesivo de alcohol y de tamientos médico-quirúrgicos5 (figura 1). Siempre
tabaco2. Estos hábitos tóxicos habitualmente se encuen- deberemos tener unos objetivos nutricionales claros en
tran asociados a déficits nutricionales; por otra parte, el estos pacientes independientemente de la vía utilizada
propio tratamiento oncológico (cirugía, radioterapia y para alcanzar las necesidades; existe un consenso sobre
quimioterapia) empeora el estado nutricional de estos los objetivos energético-proteicos en este tipo de pato-
pacientes, generando un empeoramiento del pronósti- logía6, oscilando entre 1600-2400 kcal/día con un apor-
co del enfermo3. En estos pacientes es importante ade- te hiperproteico (1,25-1,85 g proteína/kg/día).
más de las alteraciones nutricionales en relación con A continuación analizaremos las diferentes etapas nu-
hábitos nutricionales incorrectos asociados al consumo tricionales que es necesario seguir en el abordaje nutri-

Tabla 1.  Patologías y alteración de la deglución.

FASE DE LA DEGLUCIÓN DISFAGIA


Fase esofágica Tumores de cabeza y cuello, traumatismos en extremidades superiores y raíz del cuello
Accidentes cerebrovasculares, esclerosis múltiple, hipoxia cerebral, esclerosis lateral
Fase faríngea
amiotrófica
Patología neuromuscular que afecta la sensibilidad o motilidad de los musculares
Fase oral
relacionados con la deglución

607
608 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

DISFAGIA

DESNUTRICIÓN

INMUNODEPRESIÓN
ALTERACIONES DESCENSO MASA
CICATRIZACIÓN MAGRA

INCREMENTO DE DESCENSO DEL DESCENSO DE LA HABILIDAD


INFECCIONES ESTATUS FUNCIONAL DE DEGLUTIR-DISFAGIA

Figura 1.  Círculo vicioso disfagia y malnutrición en pacientes con tumores de cabeza y cuello.

cional de estos pacientes. El desarrollo de estas etapas es 3. Diagnóstico


fruto de la experiencia de nuestro grupo en el trabajo
multidisciplinar que se realiza en nuestro Servicio, pu- La primera aproximación diagnóstica se debería rea-
diendo presentar claras variaciones en función del tipo lizar con una correcta anamnesis, que nos va a permitir
de cirugía realizada, de la localización y estadiaje del tu- descubrir los problemas nutricionales actuales y los po-
mor, así como de los tratamientos coadyuvantes7. sibles problemas que encontraremos a lo largo del tra-
tamiento. Junto a esta anamnesis, es necesario recoger
una serie de datos como el peso actual y el porcentaje
2.  Fisiopatología y manifestaciones clínicas del peso perdido, así como el tiempo durante el que se
Como primera aproximación a estos pacientes debe- ha producido esta pérdida. Estos parámetros permiten
mos tener en cuenta que son pacientes con un cáncer, realizar una aproximación más objetiva del problema
por ello ya son de inicio pacientes en riesgo nutricional. teniendo clara la situación de partida desde el punto
Pero también es necesario recordar que la localización de vista nutricional (tabla 3). El porcentaje de peso
física de estos tumores tiene implicaciones realmente perdido se ha mostrado como un dato de mal pronós-
importantes, producen alteraciones en el gusto, con tico en pacientes tumorales, sobre todo cuando se de-
una clara preferencia por los alimentos dulces ricos en tecta una pérdida del 10% del peso en los últimos
hidratos de carbono y pobres en proteínas, presentan 6 meses8.
problemas en la deglución, tanto en la fase oral como Junto a estos datos antropométricos, disponemos
faríngea (tabla 2). Por otra parte, un alto porcentaje de para la valoración nutricional de una serie de paráme-
estos pacientes presentan hábito enólico, el consumo tros bioquímicos. Uno de estos parámetros es la albú-
regular de alcohol suele sustituir la toma de alimentos mina, que se ha mostrado como un factor de riesgo de
sólidos generando una desnutrición severa y múltiples complicaciones y mortalidad9. Los valores considera-
déficits de micronutrientes. dos como indicadores de riesgo varían según los dife-
Además de todas estas situaciones inherentes a las rentes autores (< 3 o 3,5 g/dl).
condiciones del paciente, los tratamientos como la También existen escalas que integran tanto paráme-
quimioterapia y la radioterapia pueden producir náu- tros nutricionales objetivos como subjetivos de amplia
seas, mucositis, disgeusia, xerostomía y empeorar la utilización en pacientes tumorales; un ejemplo es el
disfagia que influyen claramente en la situación nutri- índice de Detsky o subjetive global assessment (SGA),
cional del paciente. que en la actualidad presenta una versión auto-admi-
Tema 38.  Nutrición en cirugía de tumores de cabeza y cuello 609

Tabla 2.  Síntomas clínicos directos e indirectos de disfagia.

FASE DE LA DEGLUCIÓN SÍNTOMAS INDIRECTOS


Fase esofágica Vómitos, regurgitación, reflujo
Congestión, tos al ingerir líquidos o sólidos, múltiples esfuerzos deglucionales para
Fase faríngea tragar un bolo alimenticio, dolor al tragar, movimientos deglucionales audibles,
aspiración de alimentos o saliva
Estasis en la cavidad oral, almacenamiento de alimentos en los carrillos, exceso de
Fase oral
tiempo en la masticación
Fase oral Reducción en el control de la lengua, reducción en el cerrado de los labios, debilidad de
preparatoria la musculatura facial, fallo en beber por una copa
SÍNTOMAS DIRECTOS
Rehusar a comer, aversión a los alimentos, episodios neumónicos de repetición, pérdida
de peso, anorexia, malnutrición, deshidratación

Tabla 3.  Parámetros nutricionales utilizados en 1. NRI < 83,5 puntos, severamente desnutrido.
pacientes con tumores de cabeza y cuello. 2. NRI 83,5-97,5 puntos, moderadamente desnu-
trido.
PARÁMETROS ANTROPOMÉTRICOS 3. NRI >97,5 puntos, sin desnutrición.
· Peso
· Peso habitual En la actualidad se está utilizando también el índice
· Índice de masa corporal Nutricional de Pinato (PNI) que se calcula: (albúmina
· Pliegue tricipital sérica (g/l) + 5 ×Linfocitos totales count/l. Este índice
· Circunferencia del brazo clasifica a los pacientes en tres grupos con un 70% de
· Circunferencia muscular del brazo sensibilidad y especificidad12.
Los pacientes con tumores de cabeza y cuello a lo
PARÁMETROS BIOQUÍMICOS largo de su evolución pueden presentar disfagia, pu-
· Albúmina diendo ser necesario realizar una valoración en este
· Prealbúmina sentido. También son útiles las técnicas de cribaje de
· Transferrina la disfagia, siendo una de las más utilizadas el test
· Proteína transportadora del retinol EAT-10 (Eating assessment tool)13. La técnica más ob-
jetiva para realizar un diagnóstico de la alteración de
la deglución es la videofluoroscopia con bario14. Este
procedimiento utiliza pequeños volúmenes de bario
nistrada por el paciente10. En esta escala se valora el de alta densidad mezclados con alimentos de diferen-
grado de desnutrición según la intensidad de la pérdi- tes consistencias para permitir visualizar radiológica-
da de peso, la severidad de los signos digestivos o clí- mente la fase de deglución oral y faríngea. Esta técni-
nicos de desnutrición, las alteraciones funcionales y la ca no es solo útil para constatar el diagnóstico de
presencia de estrés metabólico. De este modo se clasi- alteración de la deglución, sino además para planifi-
fica a los pacientes en tres grados: car las estrategias terapéuticas en estos pacientes. Si
en la aproximación diagnóstica del paciente quere-
A.  No desnutrido. mos evaluar la función de las cuerdas vocales, la téc-
B.  Moderadamente desnutrido. nica de elección es la endoscopia alta con fibra ópti-
C.  Severamente desnutrido. ca15; esta técnica permite una excelente evaluación de
la dinámica y parálisis del seno piriforme y las vallécu-
También existen escalas que tratan de integrar los di- las, así como la presencia de un retraso del inicio de la
ferentes parámetros nutricionales objetivos obtenidos; fase faríngea.
uno de ellos es el índice de Buzby (nutrition risk index o
NRI)11, de aplicación en el preoperatorio de pacientes.
4.  Soporte nutricional
Este índice se calcula con la fórmula (NRI = 1,519 x (al-
búmina g/l) + 0,417 x (peso actual/peso habitual) x Uno de nuestros objetivos como especialistas en nu-
100). Esta escala permite dividir a los pacientes según su trición es prevenir complicaciones en el perioperatorio
estado nutricional: de estos pacientes. Por ello deberíamos realizar una
610 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

aproximación nutricional previa al abordaje quirúrgico, moral. En estos pacientes es necesario dar consejos y
situándonos en un paciente oncológico complejo con ayuda para disminuir o abandonar el consumo de alco-
problemas de deglución, precisando por ello un abor- hol y tabaco, dos hábitos que empeoran la situación
daje multidisciplinar (figura 2). nutricional del paciente.
Teniendo en cuenta la aproximación más sencilla, a En el grupo de pacientes con desnutrición es necesa-
través del índice de masa corporal, podemos clasificar rio abordar una serie de problemas como son la dismi-
a los pacientes con tumores de cabeza y cuello en pa- nución de la ingesta, la disfagia y la malabsorción. Si la
cientes con sobrepeso, pacientes con peso estable y vía oral no puede ser utilizada, deberemos utilizar la vía
pacientes desnutridos. enteral, con sonda nasogástrica, gastrostomía o yeyu-
En los pacientes con sobrepeso, es conveniente de- nostomía16 (figura 3). Es necesario complementar este
tectar y corregir los errores nutricionales, para revertir tratamiento nutricional con terapias antiálgicas o inclu-
el exceso ponderal que puede complicar el postopera- so anestésicas.
torio. Una vez que el paciente ha sido intervenido quirúr-
En los pacientes con un peso estable, se deben faci- gicamente, el objetivo es mantener un aporte calóri-
litar una serie de consejos nutricionales para mantener co-proteico adecuado para mejorar la cicatrización y
una alimentación equilibrada y adaptada en cantidad, disminuir el catabolismo postquirúrgico. Si el tubo
calidad y textura a las características del paciente tu- digestivo es funcionante, la vía de administración

CASO SOSPECHOSO

DIAGNÓSTICO DE DISFAGIA

DIETISTA: LOGOPEDA:
1. Evaluación nutricional 1. Evaluación del problema
2. Inicio alimentos funcional
modificados de textura 2. Evaluación de aspiración

1. PRUEBAS
ESPECIALISTA EN NUTRICIÓN, DIAGNÓSTICAS
plan de acción 2. EVALUACIÓN VÍA DE
ACCESO NUTRICIONAL

ENFERMERA: DIETISTA: LOGOPEDA:


1. Manejo postural 1. Iniciar terapia
1. Controlar estado
2. Aspiración de vía foniátrica
nutricional
aérea si precisa 2. Coordinación con
Asistente social

ALTA
CONTROL
CONSULTA
EXTERNA

Figura 2.  Manejo multidisciplinar del paciente con disfagia.


Tema 38.  Nutrición en cirugía de tumores de cabeza y cuello 611

TOLERANCIA ORAL

SÍ NO

¿APORTES CALÓRICO PROTEICOS


NUTRICIÓN ARTIFICIAL
CORRECTOS?

SÍ NO
TUBO DIGESTIVO
ÚTIL

Potenciar dieta oral, Corregir errores


y corregir errores nutricionales y añadir
nutricionales suplementos
hipercalóricos- SÍ: NO:
hiperproteicos NUTRICIÓN NUTRICIÓN
ENTERAL PARENTERAL

Figura 3.  Esquema de actuación en el aporte nutricional del paciente con tumores de vía aérea digestiva alta.

electiva es la vía enteral. Esta alimentación debe ser fraccionar las tomas y evitar mezclar líquidos y
evaluada periódicamente para valorar la tolerancia a sólidos en la misma toma.
la sonda nasogástrica o gastrostomía y la tolerancia a 5.  Faringolaringectomía total con resección esofági-
la fórmula nutricional (número de deposiciones, sen- ca: se inicia nutrición enteral con sonda nasogás-
sación de plenitud, etc.). Por último, el tipo de cirugía trica o yeyunostomía. Antes de iniciar la nutrición
realizada va a marcar la progresión y evolución de la oral, con modificación de la textura, es necesario
nutrición pautada. un control radiológico con contraste para descar-
tar fístulas en la anastomosis.
A continuación, analizamos las diferentes peculia- 6.  Glosectomía total: se debe plantear una gastros-
ridades nutricionales en función del tipo de cirugía tomía, ya que la tolerancia oral es muy compleja y
(tabla 4): poco probable. Habitualmente el paciente requie-
re una nutrición mixta con alimentos de consis-
1. Dilatación esofágica: alimentación oral temprana tencia fluida y nutrición enteral por la gastrosto-
con leve modificación de la textura, si es preciso. mía para alcanzar los requerimientos necesarios.
2. Prótesis esofágica: verificar radiológicamente la 7. Glosectomía parcial: en función del tamaño de la
posición de la prótesis e iniciar una dieta líquida. resección y del edema residual en la lengua, la
Posteriormente, administrar una dieta de textura tolerancia suele ser rápida con alimentos de tex-
mixta. tura modificada.
3. Amigdalectomía: empezar con bebidas frías y rá- 8.  Laringectomía subtotal, laringectomía parcial, la-
pida transición a una dieta líquida. ringectomía total: se inicia nutrición enteral con
4. Esofagogastroplastia: el abordaje inicial puede sonda nasogástrica. La progresión a nutrición
llevarse a cabo con nutrición parenteral o nutri- oral depende de la extensión de la cirugía. Se
ción enteral mediante yeyunostomía. Al iniciar la debe iniciar la deglución con alimentos cremosos
nutrición oral es necesario tener en cuenta el pro- o agua gelificada, y mantener nutrición enteral
bable fenómeno de dumping, siendo necesario nocturna en una cantidad aproximada de un
612 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

Tabla 4.  Pautas nutricionales en función del tipo de cirugía realizada.

1.  CIRUGÍA MENOS RADICAL

1.1.  Dilatación esofágica


1.2.  Prótesis esofágica Alimentación oral con
1.3. Amigdalectomía modificación de la textura
1.4.  Glosectomía parcial

2.  CIRUGÍA MÁS RADICAL

2.1. Esofagogastroplastia
Inicialmente nutrición
2.2. Faringolaringectomía
artificial con transición
2.3.  Glosectomía total
a nutrición oral
2.4. Laringectomía

50% al administrado previamente, hasta toleran- bebidas pero sin permitir el agua; en la tercera fase se
cia oral completa. incluyen los purés anteriores, por ejemplo, huevos en
cualquiera de los estilos, pescados cocidos y vegeta-
Es necesario tener en cuenta una serie de factores en les; la cuarta fase permite la ingesta de cualquier lí-
el tratamiento nutricional postquirúrgico de estos pa- quido y alimentos sólidos exceptuando aquellos que
cientes, como son: extensión de la cirugía, órganos de la son granulados (maíz, arroz, etc.), y en la quinta fase
deglución afectados, disminución de la percepción sen- se intenta administrar una dieta normal. La modifica-
sitiva en la zona intervenida y déficits de la propulsión ción de la textura de una manera correcta y la utiliza-
ocasionados. Es muy importante alcanzar una deglución ción de suplementos nutricionales modificados de
satisfactoria y una tos eficaz antes de iniciar la tolerancia textura ha demostrado mejorar la calidad de vida de
oral. En algunos centros se ensaya la radioscopia de la estos pacientes e incluso los requerimientos de sopor-
deglución17; esta técnica es un método muy sencillo que te nutricional por sonda25.
aporta gran cantidad de información, permite detectar No obstante, aunque el paciente esté tolerando
los problemas de disfunción y las falsas vías. una dieta oral puede que reciba otros tratamientos
En los últimos años han aparecido diferentes nutrien- coadyuvantes que pueden condicionar su ingesta.
tes que han demostrado su utilidad en pacientes tumo- Durante la quimioterapia, las repercusiones sobre la
rales, entre ellos podemos citar la arginina, que es un función digestiva son diferentes en función de los
aminoácido semiesencial con un papel destacado en protocolos de quimioterapia y de los efectos secun-
situaciones de hipermetabolismo; favorece la recupera- darios presentes, como pueden ser vómitos, mucosi-
ción de la inmunidad celular, reduce las pérdidas de tis, náuseas y estreñimiento. Merece la pena recordar
nitrógeno, estimula la síntesis de poliaminas y es un do- la utilidad de la glutamina (tabla 7), que administra-
nador de nitrógeno para la síntesis de óxido nítrico. da por vía oral en posologías que oscilan de 5 a 15
Nuestro grupo ha demostrado una disminución de la gramos cada 8 horas, puede proteger de la mucositis
tasa de complicaciones locales de la herida quirúrgica al asociada a tratamientos coadyuvantes como la radio-
utilizar fórmulas enterales enriquecidas en arginina en terapia, habiendo mostrado su eficacia en ensayos
pacientes sometidos a cirugía por tumores de cabeza y clínicos aleatorizados26. Además, debemos tener en
cuello18-23 (tablas 5 y 6). Los efectos beneficiosos no cuenta los tratamientos asociados como sedantes y
solo podemos obtenerlos en los primeros momentos mórficos, que también pueden influir en la función
tras el acto quirúrgico mediante nutrición enteral por digestiva.
sonda nasogástrica, sino también en los primeros me- En situaciones de náuseas o vómitos, es necesario
ses postoperatorios mediante suplementos enriqueci- utilizar fármacos antieméticos de diferente potencia y
dos con omega 3 y/o arginina24. realizar ciertas modificaciones alimentarias en función
Tras el acto quirúrgico los pacientes tienen que ini- de la pérdida de apetito. En esta situación se recomien-
ciar una dieta oral por fases sucesivas modificando la dan tomas fraccionadas a lo largo del día (6-7 tomas),
textura de los alimentos. Los pacientes con disfagia elegir los alimentos preferidos del paciente, mantener
deben recibir dietas con modificación de la textura de una presentación atractiva en los diferentes platos y
una manera gradual, comenzando con una primera potenciar los alimentos hipercalóricos.
fase donde se administran purés espesos, no se per- En los casos de estreñimiento, es necesario potenciar
miten líquidos, incluida el agua; una segunda fase la toma de fruta fresca y legumbres. Además, se debe
donde se permiten los purés más claros con algunas estimular la actividad física y la cantidad de líquido in-
Tema 38.  Nutrición en cirugía de tumores de cabeza y cuello 613

Tabla 5.  Composición de las fórmulas enterales con arginina.

n-3
Proteínas Grasas Carbohidratos Osmolaridad Arginina Glutamina
Nombre Kcal/cc (g/100cc)
(g/100 cc) (g/100 cc) (g/100 cc) (mOs/l) (g/100 cc) (g/100 cc)
ratio n-6/n-3
5,3 1,5 0,15
Alitraq 1 16,4 480 0,45 1,42
42%péptido 53%MCT 4,23
Impact 2,8 0,34
1 5,6 13,4) 477-519 1,25 -
enteral 27%MCT 0,7
3,9 0,67
Impact oral 1 7,6 18,9 690 1,8 -
28,2% 0,91
3,7 0,16
Perative 1,3 6,7 17,7 308 0,85 -
40%MCT 4,8
1,41
Cubison 1 5,5 3,3 12,5 315 0,625 -
5
Clinutren 1,07
1,25 9,3 2,8 15,6 580 0,47
Repair 7,2

Tabla 6.  Módulos de arginina.

ARGININA RESOURCE ARGININA®


ARGININA NM®
100 g VEGENAT MED® ARGINAID® Nutricia bote
vial 5 g/20 ml
Sobres 7 g sobres 7 g 100 g
KCaL 286 238 400 359
Prot g 71,4 71 99 100
L Arginina g 71,4 71 99 100
HC g 0 3,6 0 0
Lípidos 0 0 0 0

Tabla 7.  Módulos de glutamina.

Glutamina
RESOURCE GLUTAMINA GLUTAMINA Kabi
Vegenat Glutamine®
100 g GLUTAMINA® NM® sobre NM® vial Glutamina®
Med® sobre 10 g
sobres 5 g 10 g 5 g/40 ml sobre 20 g
sobre 5 g
KCal 400 400 399,5 399,5 375 370
Prot g 100 100 99,7 99,7 50 120
L glutamina g 100 100 99,7 99,7 100 100
HC g 0 0 0,1 0 40 0
Lípidos 0 0 0,09 0 0 0

gerida (volumen superior a dos litros cada 24 horas). sas, es necesario iniciar un tratamiento antiálgico y, si
En las situaciones que cursan con diarrea, es importan- es imposible mantener la nutrición oral, se inicia nutri-
te evitar la deshidratación y debe suplementarse la die- ción artificial. Cuando las lesiones mejoran, se inicia
ta con bebidas enriquecidas en fibra soluble sin lacto- una dieta oral líquida o pastosa con alimentos fríos,
sa. En los casos de mucositis, en los que podemos evitando los alimentos irritantes y ácidos. Sin olvidar
encontrar, incluso úlceras sobreinfectadas muy doloro- que muchos de los episodios de mucositis podrían ha-
614 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

ber sido evitados con un tratamiento preventivo vía terapia33. Sin olvidarnos de aspectos que condicio-
oral con glutamina. nan la situación nutricional como la disgeusia y la
Ante todos los problemas nutricionales citados de- xerostomía34.
beríamos tener una actitud de prevención antes de que
el problema aparezca. Por ejemplo, suprimir los ali-
6. Bibliografía
mentos con alto riesgo bacteriológico en períodos de
aplasia, fraccionar la alimentación y potenciar la toma 1. Cohen EE, LaMonte SJ, Erb NL, Beckman KL, Sade-
de alimentos hiperenergéticos. ghi N, Hutcheson KA, Stubblefield MD, Abbott DM,
En estos momentos se abren nuevas expectativas en Fisher PS, Stein KD, Lyman GH, Pratt-Chapman ML.
el soporte nutricional, pudiendo influir en la respuesta American cancer society head and neck cancer sur-
no solo variables clásicas como el tipo de tumor, el es- vivorship care guideline. CA Cancer J Clin. 2016 Mar
tadio, la localización y el tratamiento recibido, sino 22. doi: 10.3322/caac.21343.
también el genotipo del paciente provocando diferen- 2. Dixon PR, Au M, Hosni A, Perez-Ordonez B, Wein-
tes respuestas al soporte nutricional en función del ge- reb I, Xu W, Song Y, Huang SH, O’Sullivan B, Golds-
notipo27. En estos pacientes tenemos que seleccionar tein DP, de Almeida JR. Impact of p16 expression,
fórmulas con inmunonutrientes (arginina) que pueden nodal status, and smoking on oncologic outcomes
mejorar incluso la estancia media hospitalaria de estos of patients with head and neck unknown primary
pacientes en 3,5 días5. squamous cell carcinoma. Head Neck. 2016 Mar
De este modo, las guías ASPEN28 en sus recomenda- 22. doi: 10.1002/hed.24441
ciones en relación con las fórmulas inmunomodulado- 3. Capozzi LC, McNeely ML, Lau HY, Reimer RA, Gie-
ras, indican que se debe utilizar en «pacientes con ciru- se-Davis J, Fung TS, Culos-Reed SN. Patient-repor-
gía en tumores de cabeza y cuello» y las guías ESPEN29 ted outcomes, body composition, and nutrition
en «pacientes sometidos a cirugía de cáncer de cuello status in patients with head and neck cancer: Re-
grado A». sults from an exploratory randomized controlled
exercise trial. Cancer. 2016 Feb 1. doi: 10.1002/
cncr.29863. [Epub ahead of print].
5. Resumen
4. Malá E, Vejražková E, Bielmeierová J, Jindra M, Voš-
En los pacientes con tumores de cabeza y cuello debe- mik M, Novosad J, Sobotka L [Long Term Monito-
mos analizar el estado nutricional antes de la interven- ring of Nutritional, Clinical Status and Quality of Life
ción terapéutica (cirugía, radioterapia o quimioterapia), in Head and Neck Cancer Patients]. Klin Onkol.
durante el propio tratamiento y tras el tratamiento, para 2015; 28(3):200-14. Czech.
aplicar correctamente los conocimientos actuales en 5. Stableforth WD1, Thomas S, Lewis SJ. A systematic
materia de nutrición en pacientes tumorales y mantener review of the role of immunonutrition in patients
un adecuado abordaje de cada patología, utilizando di- undergoing surgery for head and neck cancer Int J
ferentes vías de acceso y fórmulas nutricionales. Sin olvi- Oral Maxillofac Surg. 2009 Feb; 38(2):103-10. doi:
darnos de una correcta transición a la dieta oral por fa- 10.1016/j.ijom.2008.12.008. Epub 2009 Jan 13.
ses, que en algunas ocasiones puede ser completa a una 6. Epstein JB, Huhmann MB. Dietary and nutritional
dieta normal o permanecer el paciente con unas reco- needs of patients undergoing therapy for head and
mendaciones específicas para su disfagia. neck cancer. J Am Dent Assoc. 2011 Oct; 142(10):
Debemos ser capaces de tener herramientas de va- 1163-7.
loración nutricional precoz para detectar a los pa- 7. DA de luis, R Aller, O Izaola. Nutritional status in
cientes desnutridos con este tipo de tumores, y no head and neck cancer patients. Europ Review for Me-
olvidarnos que con un grado de recomendación A, dical and Pharmacological Sciences 2007:11:239-
debemos utilizar en el soporte nutricional la vía ente- 243.
ral con sustratos inmunomoduladores (arginina) en 8. Grossberg AJ, Chamchod S, Fuller CD, Mohamed
el perioperatorio independientemente del riesgo nu- AS, Heukelom J, Eichelberger H, Kantor ME, Hut-
tricional del paciente en un paciente con cáncer de cheson KA, Gunn GB, Garden AS, Frank S, Phan J,
cabeza y cuello que va a ser sometido a laringecto- Beadle B, Skinner HD, Morrison WH, Rosenthal DI.
mía o faringectomía30. En estos momentos existen Association of Body Composition With Survival and
interrogantes abiertos, como puede ser la dosis Locoregional Control of Radiotherapy-Treated Head
máxima de arginina a administrar por nutrición ente- and Neck Squamous Cell Carcinoma. JAMA Oncol.
ral, demostrando nuestro grupo la superioridad de 2016 Feb 18. doi: 10.1001/jamaoncol.2015.6339.
19 gramos al día frente a cantidades inferiores31, el [Epub ahead of print].
efecto sobre la supervivencia de estas fórmulas32 y las 9. Danan D, Shonka DC Jr, Selman Y, Chow Z, Smolkin
ventajas de un adecuado soporte nutricional en estos ME, Jameson MJ. Prognostic value of albumin in
pacientes no solo en el perioperatorio, sino también patients with head and neck cancer. Laryngoscope.
en los tratamientos coadyuvantes con quimiorradio- 2016 Feb 10. doi: 10.1002/lary.25877.
Tema 38.  Nutrición en cirugía de tumores de cabeza y cuello 615

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616 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

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Tema 39. 
Soporte nutricional en el paciente con cirugía
oncológica de estómago, esófago y páncreas
Alfonso Calañas-Continente
Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Reina Sofía. Córdoba

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 617-634.

1.  Bases del tratamiento de la malnutrición relacionada con el cáncer


2.  Cáncer gástrico
3.  Cáncer de esófago
4.  Cáncer de páncreas
5.  Resumen
6.  Bibliografía

Las neoplasias gastrointestinales son la causa más Se recomienda la intervención nutricional para
importante de mortalidad por cáncer en todo el mun- aumentar la ingesta oral en pacientes con cáncer capa-
do. La cirugía resectiva continúa siendo la principal te- ces de comer pero que están malnutridos o en riesgo de
rapia curativa en estos pacientes. Los pacientes someti- malnutrición. Esta incluye el consejo nutricional, el trata-
dos a cirugía electiva tienen un alto riesgo de desarrollar miento de síntomas y alteraciones metabólicas que difi-
eventos adversos postoperatorios por diferentes facto- cultan la ingesta alimentaria y la prescripción de suple-
res como son el estado de malnutrición, el ayuno, la mentos nutricionales (grado de recomendación: fuerte;
inmunodepresión inducida por el tumor y la respuesta nivel de evidencia: moderado)2.
a la agresión quirúrgica1.
1.1.  Cribado y evaluación nutricional
1. Bases del tratamiento de la malnutrición
Se recomienda realizar regularmente una evaluación de
relacionada con el cáncer
la ingesta nutricional, de los cambios ponderales y del Índi-
Según las guías de la Sociedad Europea de Nutrición ce de Masa Corporal (IMC), con el objetivo de detectar al-
Clínica y Metabolismo (ESPEN) publicadas en 2017, los teraciones nutricionales en un estadio temprano. Se debe
objetivos de las intervenciones nutricionales y metabóli- hacer en el momento del diagnóstico y periódicamente en
cas son mantener o mejorar la ingesta alimentaria y re- función de la estabilidad de la situación clínica (grado de
ducir las alteraciones metabólicas asociadas, preservar la recomendación: fuerte; nivel de evidencia: muy bajo)2.
masa muscular, mantener la actividad física, reducir el En pacientes en los que el cribado está alterado, se
riesgo de infecciones, evitar la interrupción de las tera- recomienda una evaluación objetiva y cuantitativa de la
pias antitumorales precisas y mejorar la calidad de vida2. ingesta, de los síntomas que comprometen el estado
El consejo nutricional impartido por profesionales nutricional, de la masa muscular, de la funcionalidad y
especializados constituye la primera opción terapéuti- del grado de inflamación sistémica (grado de recomen-
ca. Se trata de un proceso de comunicación profesio- dación: fuerte; nivel de evidencia: muy bajo)2.
nal con el objeto de proporcionar a los pacientes un
minucioso entendimiento de los tópicos nutricionales 1.2. Gasto calórico. Necesidades proteicas
que pueden haber ocasionado cambios duraderos en
y de micronutrientes
sus hábitos de alimentación.
La alimentación natural constituye la mejor forma Si el gasto calórico total del paciente con cáncer no
para mantener o aumentar las ingestas calórica y pro- puede ser individualizado, se recomienda asumir que
teica. Sin embargo, a veces es complicado y, además es similar al de pacientes sanos, es decir, entre 25 y 30
del consejo nutricional especializado, se precisa la utili- kcal/kg/día (grado de recomendación: fuerte; nivel de
zación de suplementos nutricionales orales. evidencia: bajo)2.

617
618 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

La cantidad de proteína capaz de producir un balan- y fuerza musculares (grado de recomendación: débil;
ce nitrogenado positivo en los pacientes con cáncer nivel de evidencia: bajo)2.
está próxima a 2 g/kg/día. En sujetos con función renal El grupo ERAS (Enhanced Recovery After Surgery) re-
normal, una ingesta proteica superior o igual a 2 g/kg/ comienda a los pacientes con tumores digestivos la
día es segura. En pacientes con insuficiencia renal agu- toma de 800 ml de una bebida que aporte un 12,5%
da o crónica, no debería superar 1 g/kg/día o 1,2 g/kg/ de carbohidratos la noche anterior a la cirugía y de 400 ml
día, respectivamente3. 2 horas antes de la inducción de la anestesia. Los obje-
La ingesta proteica debe ser superior a 1 g/kg/día, y tivos de estas recomendaciones son reducir la resisten-
si es posible, por encima de 1,5 g/kg/día (grado de re- cia a la insulina y la glicosilación tisular causadas por la
comendación: fuerte; nivel de evidencia: moderado)2. cirugía, mejorar el control glucémico postoperatorio y
Se recomienda que el aporte de micronutrientes sea mantener una función intestinal normal4.
aproximadamente igual al de las Recommended Die- En todos los pacientes con cáncer que precisan ciru-
tary Allowances (RDA) y se desaconseja el uso de altas gía, sea curativa o paliativa, se recomienda su abordaje
dosis de vitaminas y minerales en ausencia de deficien- con un programa de rehabilitación multimodal (Enhan-
cias específicas (grado de recomendación: fuerte; nivel ced Recovery After Surgery). En este programa, se debe
de evidencia: bajo)2. realizar un cribado nutricional al paciente. Si existe ries-
go, iniciar tratamiento (grado de recomendación: fuer-
1.3.  Tratamiento nutricional te; nivel de evidencia: alto)2.
La ESPEN recomienda el tratamiento nutricional preope-
La nutrición artificial está indicada si los pacientes son ratorio durante 10 o 14 días en pacientes con riesgo nu-
incapaces de comer adecuadamente (no ingesta durante tricional grave, incluso si para ello es preciso retrasar la
más de una semana o ingesta inferior al 60 % durante cirugía. El riesgo nutricional grave se define como la pre-
más de 1 o 2 semanas). La nutrición artificial puede ser sencia de al menos uno de los siguientes criterios: pérdi-
completa o parcial y por vía oral, enteral o parenteral, de- da ponderal superior al 10 o 15 % en los 6 últimos me-
pendiendo del grado de funcionalidad del tubo digestivo. ses, IMC inferior a 18,5 kg/m2, valoración subjetiva global
En pacientes con tumores que impiden la ingesta grado C o albuminemia inferior a 3 g/dl5.
oral o el transporte de alimentos hacia el tubo digesti- La ESPEN recomienda comenzar con alimentación
vo, el estado nutricional se estabiliza mediante nutri- normal, en las primeras 24 horas tras la cirugía mayor
ción enteral. En los pacientes con insuficiencia intesti- gastrointestinal. También recomienda el uso de la nu-
nal grave debido a enteritis rádica, obstrucción crónica trición enteral simultánea distal a las anastomosis en
del intestino delgado, síndrome de intestino corto y pacientes que no son capaces de alcanzar más del
carcinomatosis peritoneal, el estado nutricional debe 60 % de sus necesidades nutricionales en 10 días y/o
estabilizarse mediante nutrición parenteral. con desnutrición en el momento de la cirugía5.
Se recomienda la nutrición enteral si la ingesta oral La Sociedad Americana de Nutrición Parenteral y Enteral
es inadecuada, a pesar de consejo y suplementos nutri- (ASPEN) y la ESPEN establecen que en pacientes malnutri-
cionales, y nutrición parenteral cuando la nutrición en- dos en los que la nutrición enteral no es posible o no bien
teral no es suficiente o posible (grado de recomenda- tolerada a los 7 o 10 días del procedimiento, la nutrición
ción: fuerte; nivel de evidencia: moderado)2. parenteral postcirugía está indicada y es beneficiosa6, 7.
La actividad física incluye la realización de actividades
de la vida diaria, entrenamiento de resistencia y aeróbi-
2.  Cáncer gástrico
co junto con diferentes técnicas para aumentar la masa
y/o la fuerza musculares. El sedentarismo produce sar- El cáncer gástrico supone la quinta causa más frecuen-
copenia, potencia las señales catabólicas y desensibiliza te de cáncer en el mundo y la tercera de mortalidad por
al músculo frente a las señales anabólicas. Por tanto, el cáncer en ambos sexos. A menudo es asintomático o cau-
objetivo será aumentar la actividad física para favorecer sa síntomas muy inespecíficos en sus estadios más preco-
el anabolismo y la utilización de nutrientes. ces, motivo por el que el diagnóstico se suele hacer de
Se desconoce el impacto que tiene la actividad física manera tardía, confiriéndole su relativo mal pronóstico.
realizada antes, durante y después de las terapias antitu- La malnutrición se produce en el 80 % de los cánceres
morales sobre el pronóstico clínico ni el efecto de com- gástricos en estadio avanzado y el 15 % de los pacientes
binar un programa de ejercicio con tratamiento nutricio- con cánceres gastroesofágicos han sufrido una pérdida
nal durante los tratamientos curativo o paliativo. ponderal superior al 10 % en los seis meses antes de su
Se recomienda aumentar la actividad física en los pa- diagnóstico.
cientes con cáncer para mantener la masa muscular, la
funcionalidad y el patrón metabólico (grado de reco-
2.1. Evaluación del estado nutricional
mendación: fuerte; nivel de evidencia: alto).
Se recomienda realizar ejercicio de resistencia indivi- En el cáncer gástrico es crucial identificar y tratar la
dualizado asociado a aeróbico para mantener la masa malnutrición de forma temprana para mejorar el pronós-
Tema 39.  Soporte nutricional en el paciente con cirugía oncológica de estómago, esófago y páncreas 619

tico. Esta evaluación debe realizarse de manera regular y estancia hospitalaria y el gasto sanitario, así como mejo-
frecuente (cada 4 u 8 semanas) para detectar lo antes rar el pronóstico en ciertos enfermos14-17.
posible cualquier empeoramiento del estado nutricional.
Varios estudios se han publicado relacionando dife- 2.2.1.  Nutrición preoperatoria
rentes métodos de cribado con la morbimortalidad en
pacientes con carcinoma gástrico. Nutrición enteral
Las puntuaciones elevadas obtenidas en el NRS 2002
La nutrición enteral preoperatoria, frente a la enteral
(Nutritional Risk Screening 2002) se han asociado con
precoz postoperatoria, mejora el estado nutricional posto-
mayor tasa de complicaciones postoperatorias e incre-
peratorio, la función inmune, atenúa la respuesta inflama-
mento de la estancia hospitalaria8.
toria y favorece la recuperación de pacientes con cáncer
En un estudio que evaluó la eficacia de la herramienta gástrico que se van a someter a una gastrectomía18.
SNAQ (Short Nutritional Assessment Questionnaire) se
demostró que una puntuación igual o superior a 1 se
asoció con un aumento de la mortalidad postcirugía9. Inmunonutrición oral o enteral comparada con
En un estudio retrospectivo de 775 pacientes someti- nutrición estándar
dos a gastrectomía por cáncer, el IMC como medida ais- La inmunonutrición oral preoperatoria durante 5 días
lada no tuvo ningún impacto sobre la morbilidad posto- redujo la incidencia de infecciones postoperatorias y la
peratoria ni sobre la supervivencia global o libre de estancia hospitalaria en un estudio aleatorizado y con-
enfermedad10. Sin embargo, la hipoalbuminemia preope- trolado en el que participaron 305 pacientes con cán-
ratoria y un IMC inferior a 18,5 kg/m2 se relacionaron con cer gastrointestinal19.
una menor supervivencia global tras la gastrectomía. En otro estudio, la inmunonutrición oral preoperato-
En un meta-análisis, el índice pronóstico nutricional ria durante 7 días redujo la duración de la respuesta
por debajo de 45 se asoció con la agresividad biológica inflamatoria sistémica y las complicaciones infecciosas
del cáncer gástrico (profundidad de invasión y metás- (abdominales, respiratorias, de la herida y las relacio-
tasis linfáticas)11, siendo un factor predictor indepen- nadas con el catéter)20.
diente de supervivencia global y específica de enferme- Sin embargo, otros autores no obtuvieron diferen-
dad en estos pacientes. cias significativas postoperatorias en pacientes normo-
En un análisis multivariante se demostró que un índi- nutridos con cáncer gástrico que recibieron inmunonu-
ce pronóstico nutricional bajo se asocia independiente- trición oral preoperatoria durante 5 días21 (tabla 1).
mente con un pronóstico desfavorable. Las superviven-
cias global y específica a los 5 años para los pacientes
2.2.2.  Nutrición postoperatoria
con cáncer gástrico en estadios 1 y 2 fueron significati-
vamente peores en el grupo con índice pronóstico nu- La prevalencia de malnutrición grave en pacientes
tricional bajo12. con cáncer gástrico aumenta significativamente tras la
cirugía (de un 2,3 % a un 26,3 %)22. La edad avanzada,
2.2.  Tratamiento nutricional la pérdida ponderal preoperatoria y la cirugía abierta
son factores de riesgo para esta malnutrición. Tras la
El tratamiento nutricional de los pacientes con cáncer cirugía, el apetito y la ingesta disminuyen y el estado
gástrico es cada vez más importante debido a las relativa- nutricional puede tardar en recuperarse hasta un año23.
mente bajas tasas de supervivencia y al peor pronóstico
de estos enfermos en relación con su mal estado nutricio-
Nutrición oral
nal. Un abordaje nutricional precoz puede ser beneficioso
para reducir la morbimortalidad13 y la alternativa más im- La nutrición oral precoz tras la cirugía por cáncer
portante para disminuir la incidencia de complicaciones gástrico es segura y no aumenta la incidencia de com-
postoperatorias infecciosas y no infecciosas, aumentar plicaciones postoperatorias cuando se compara con la
potencialmente la inmunidad del paciente, disminuir la nutrición enteral por sonda24.

Tabla 1.  Ventajas de la inmunonutrición en el cáncer gástrico.

Preoperatoria Postoperatoria Perioperatoria


↓  Complicaciones infecciosas ↓  Complicaciones infecciosas ↓  Complicaciones infecciosas
↓  Estancia hospitalaria ↓  Estancia hospitalaria ↓  Estancia hospitalaria
↓  Duración respuesta inflamatoria ↓  Duración respuesta inflamatoria ↓  Complicaciones totales
↓ Complicaciones no infecciosas
atenúa pérdida ponderal
620 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

Los pacientes con nutrición oral precoz tuvieron menor función hepática, complicaciones y estancia entre pa-
duración de la estancia hospitalaria24-28 y del íleo24, 26, 27, cientes gastrectomizados por cáncer tratados con en-
menor tasa de reingresos hospitalarios27 y de complica- teral precoz o parenteral al séptimo día de su cirugía42.
ciones quirúrgicas y menor incidencia de colecciones La nutrición enteral oral precoz postoperatoria cuan-
­intraabdominales, de neumonía e insuficiencia respirato- do se compara con el tratamiento perioperatorio tradi-
ria29 que los alimentados tardíamente. La nutrición oral cional (sondaje y fluidoterapia intravenosa) reduce la
postoperatoria es una forma eficaz de nutrir a los pacien- duración del íleo, de la fiebre y de la estancia hospita-
tes y posiblemente de prevenir la atrofia de la mucosa laria; mejora la función inmune (niveles de CD3, CD4,
intestinal. Además, comparada con la nutrición parente- células natural killer y la relación CD4/CD8) y puede fa-
ral, reduce el coste y la estancia hospitalaria28. vorecer una recuperación temprana de la función in-
testinal en pacientes con cáncer gástrico43.
Inmunonutrición precoz
Nutrición parenteral comparada
La funcionalidad del intestino delgado se recupera con fluidoterapia
de 6 a 12 horas tras la cirugía, por lo que la nutrición
enteral se puede comenzar de manera segura y precoz- Los gastrectomizados tratados con nutrición paren-
mente en ese período de tiempo30. teral pierden significativamente menos peso44 y tienen
La inmunonutrición enteral precoz en pacientes inter- menos complicaciones infecciosas totales45 que los tra-
venidos por cáncer gástrico reduce la estancia hospitala- tados con fluidoterapia y aceite de soja.
ria y las complicaciones postcirugía como la dehiscencia
de sutura, alteraciones de la cicatrización, infecciones
2.2.3.  Nutrición perioperatoria
(de la herida, respiratorias, sepsis) y complicaciones glo-
bales31. Además, este tratamiento nutricional, reduce la La nutrición enteral perioperatoria reduce eficaz-
duración del síndrome de respuesta inflamatoria sisté- mente la incidencia de complicaciones postoperatorias
mica32-37, sin diferencias sobre la mortalidad. en pacientes malnutridos con cáncer gástrico.
En un metaanálisis que incluyó 6 estudios aleatoriza- En un estudio aleatorizado, controlado en el que
dos y controlados (308 pacientes con inmunonutrición participaron 468 pacientes con cáncer gástrico o colo-
precoz postoperatoria y 298 con nutrición enteral es- rrectal y malnutrición moderada o grave, se demostró
tándar), se ha demostrado que las complicaciones, la que la nutrición artificial (enteral o parenteral) periope-
pérdida ponderal y la estancia hospitalaria posquirúrgi- ratoria (7 días antes y después de la cirugía) redujo las
cas fueron significativamente menores en los tratados complicaciones postoperatorias y la mortalidad en dos
con inmunonutrición38 (tabla 1). veces y tres veces, respectivamente. El descenso más
llamativo fue en la incidencia de complicaciones sépti-
cas, como neumonía o infección de la herida quirúrgi-
Nutrición enteral y/o parenteral
ca. La estancia hospitalaria total y postoperatoria del
En un estudio aleatorizado y controlado de 105 pa- grupo control fueron significativamente mayores46.
cientes sometidos a cirugía por cáncer gastrointestinal, el De acuerdo con las Guías de la ESPEN5, 47, las guías
tratamiento nutricional precoz combinado (enteral y pa- alemanas para el cáncer gástrico48 y la Conferencia
renteral) redujo las complicaciones postoperatorias, me- Americana de Nutrición para Cirugía49, se recomienda
joró la inmunidad y disminuyó la estancia hospitalaria39. la inmunonutrición oral/enteral en pacientes con cán-
En una revisión sistemática y metaanálisis de 18 estu- cer gastrointestinal de 5 a 7 días antes de la cirugía y
dios aleatorizados sobre nutrición postoperatoria en pa- durante el postoperatorio.
cientes con cirugía oncológica digestiva (gastrectomía En un metaanálisis de 21 estudios aleatorizados y
total, duodenopancreatectomía, colectomía) se compa- controlados se demostró que en 2730 pacientes que
ró la nutrición enteral con la parenteral en 2540 pacien- precisaron cirugía mayor gastrointestinal electiva, la
tes (1268 enteral; 1272 parenteral). Los aleatorizados a inmunonutrición enteral perioperatoria fue capaz de
nutrición enteral tuvieron menores estancias hospitala- reducir las complicaciones totales y la estancia hospita-
rias, menor íleo y mayores incrementos de albúmina40. laria, pero no la mortalidad50.
Los pacientes gastrectomizados por cáncer gástrico En un estudio aleatorizado y controlado en el que
que recibieron nutrición enteral precoz postoperatoria participaron 305 pacientes malnutridos con neoplasias
tuvieron menor estancia hospitalaria y menor íleo que digestivas, la inmunonutrición oral perioperatoria dis-
los nutridos por vía parenteral. Además, el coste de la minuyó la incidencia de complicaciones infecciosas y la
nutrición enteral postoperatoria fue menor que el de la estancia hospitalaria19.
parenteral (71,5 ± 3,8 frente a 86,3 ± 3,5 dólares/día; En un metaanálisis que incluyó 27 estudios aleatoriza-
p < 0,001)41. dos y controlados de pacientes que precisaban cirugía
Sin embargo, Kim et al., no encontraron diferencias digestiva oncológica, la inmunonutrición perioperatoria
significativas en cuanto a parámetros nutricionales, fue mejor en términos de reducción de complicaciones
Tema 39.  Soporte nutricional en el paciente con cirugía oncológica de estómago, esófago y páncreas 621

infecciosas y de estancia postcirugía, mientras que la in- y la capacidad funcional, independientemente del tipo
munonutrición postoperatoria resultó más eficaz para de tumor53. Los mayores beneficios se ven a los 2 o 3
disminuir la incidencia de complicaciones no infeccio- meses de tratamiento, aunque pacientes que solo la
sas1 (tabla 1). reciben durante 1 o 2 meses también mejoran signifi-
En pacientes con neoplasias del tracto digestivo su- cativamente.
perior que precisan cirugía, en el contexto del cuidado
perioperatorio tradicional, se recomienda la inmuno-
nutrición oral/enteral (grado de recomendación: fuer- 3.  Cáncer de esófago
te; nivel de evidencia: alto)2.
3.1. Malnutrición en el paciente con cáncer
de esófago
2.3.  Actividad física
La incidencia de pérdida de peso en pacientes con
La prevalencia de sarcopenia en pacientes mayores cáncer esofágico varía desde un 57,3 % al diagnóstico
de 65 años con cáncer gástrico que van a someterse a hasta un 79 %.
una gastrectomía es del 21,2 %51 y constituye un factor Los pacientes con cáncer de esófago son similares a
de riesgo independiente para el desarrollo de complica- los de cáncer de cabeza y cuello, estómago o páncreas,
ciones postoperatorias graves. En estos pacientes, un con mayor probabilidad de sufrir pérdida de peso y
programa de actividad física (caminar y entrenamientos malnutrición que otros pacientes neoplásicos. En pa-
de fuerza y resistencia) combinado con nutrición oral cientes ambulatorios con varios tipos de neoplasias, el
durante 16 días es capaz de reducir la sarcopenia, incre- cáncer de esófago se asocia con la incidencia más alta
mentar la ingesta calórico proteica, mejorar la fuerza y de malnutrición54.
el pronóstico postcirugía52. Se ha demostrado que una pérdida de peso superior
al 10 % 3 meses antes del diagnóstico aumenta la mor-
2.4. Nutrición en el paciente con cáncer talidad a los 5 años55.
gástrico avanzado Aunque muchos pacientes con adenocarcinoma de
esófago presentan exceso ponderal en el momento del
Cuando el tratamiento nutricional está indicado, la vía diagnóstico, conocido factor de riesgo de esta enfer-
oral y el acceso enteral son de elección frente a la nutri- medad56, pierden peso a medida que la neoplasia pro-
ción parenteral. Si existe estenosis cardial o pilórica, la gresa. En un estudio en el que participaron 205 pa-
colocación de un stent puede permitir la nutrición oral, cientes con cáncer de esófago, a pesar del que más de
mejorando la calidad de vida de estos pacientes. la mitad tenía exceso ponderal, el 74 % disminuyó peso
La nutrición parenteral domiciliaria complementaria progresivamente (un 34 % con pérdida ponderal gra-
durante un corto período de tiempo es segura y eficaz ve). El 24 % perdió un 10 % o más de su peso 6 meses
en pacientes con pérdida de peso a pesar de una inges- antes de ser diagnosticado57.
ta oral adecuada y suplementación oral (por ejemplo, El efecto de los cambios de IMC sobre la superviven-
en la caquexia), con intolerancia a la nutrición enteral cia de pacientes con cáncer de esófago es controverti-
por sintomatología digestiva o por toxicidad gastroin- do58, 59. En un metaanálisis publicado en 2013, un IMC
testinal secundaria al tratamiento quimioterápico (náu- superior o igual a 23 kg/m2 fue un factor independien-
seas, vómitos, dolor abdominal, diarrea, etc.). Este tipo te y favorable para la supervivencia global en pacientes
de nutrición se recomienda para la estabilización del que van a someterse a una esofagectomía60. Sin em-
peso y continuación del tratamiento antitumoral espe- bargo, en obesos sarcopénicos, esta relación parece ser
cífico. inversa y debe ser explorada ampliamente.
En pacientes con carcinomatosis peritoneal y compro-
miso grave de la funcionalidad digestiva (por ejemplo, 3.2.  Caquexia en el paciente con cáncer
síndrome de intestino corto secundario a resecciones
de esófago
intestinales) se recomienda utilizar nutrición parenteral
total. En general, la pérdida involuntaria de peso en pa-
En ciertos pacientes con cáncer gástrico avanzado, la cientes con cáncer se atribuye principalmente a un
nutrición parenteral no ha demostrado reducir la toxi- ­aumento del gasto energético basal no compensado
cidad de la quimioterapia ni mejorar la tasa de respues- con la ingesta calórica, lo que se conoce como ca-
ta al tratamiento. Incluso los riesgos de la nutrición quexia tumoral. Esta produce una disminución de la
parenteral pueden ser superiores a los beneficios en funcionalidad física, distrés psicológico con aumento
aquellos pacientes sin malnutrición o sin hipofagia a de la mortalidad. Según un consenso internacional pu-
los que se indica este tratamiento. Sin embargo, cuan- blicado en 201161, se define la caquexia tumoral como
do coexisten cáncer avanzado y malnutrición modera- un síndrome multifactorial caracterizado por pérdida
da/grave, la nutrición parenteral domiciliaria comple- progresiva de músculo esquelético (con o sin pérdida
mentaria mejora la calidad de vida, el estado nutricional de masa grasa) no reversible completamente mediante
622 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

tratamiento nutricional convencional y que produce 3.2.3. Hipercatabolismo


alteración funcional. La pérdida de músculo, rasgo
marcador de la caquexia, se asocia con menor calidad La inflamación sistémica aumenta la movilización del
de vida relacionada con la salud, reducción de la tole- tejido adiposo y muscular produciendo una pérdida no
rancia al tratamiento y de la supervivencia. compensada de proteínas y depósitos de grasa, que
conduce al estado de caquexia. En el cáncer de esófa-
En los pacientes con cáncer de esófago, factores me-
go, el síntoma cardinal (disfagia) no aparece muy
cánicos o digestivos producen anorexia y reducción de
precozmente, haciendo que a menudo el diagnóstico
la ingesta. Diferentes mecanismos relacionados con el
se haga en estadios avanzados. En estos estadios, el
huésped y el tumor contribuyen a la inflamación sisté-
aumento del tamaño tumoral genera mayor consumo
mica y al consiguiente hipermetabolismo. La pérdida
energético69.
de músculo y/o grasa produce disminución del peso y
de la fuerza y alteraciones en la funcionalidad física,
social y psicológica. La interrelación entre estos com- 3.2.4. Hipermetabolismo
ponentes varía considerablemente en términos de me- En pacientes con cáncer esofágico comparados con
canismos y pronóstico, dependiendo del tipo y estadio sujetos sanos con peso estable y sin cáncer, una pérdi-
tumoral. da de peso superior al 5 % en 3 meses o al 10 % en 6
meses, se asoció con aumento del gasto basal medido
por calorimetría indirecta, aumento de PCR y de inter-
3.2.1.  Cambios mecánicos
leucina 6, y con niveles bajos de albúmina y de preal-
La obstrucción esofágica tumoral produce disfagia búmina70.
y odinofagia, con dificultades para la ingesta. Entre
5044 pacientes con cáncer de esófago los síntomas 3.2.5. Anorexia
más frecuentes al diagnóstico fueron disfagia (74 %),
pérdida de peso (57,3  %), reflujo gastroesofágico Los resultados de un estudio muestran que los nive-
(20,5 %) y odinofagia (16,6 %)62. Estos problemas me- les circulantes de leptina disminuyen en pacientes ca-
cánicos son la causa más importante de pérdida de quécticos con cáncer de esófago, con una tendencia a
depósitos corporales. La disfagia y odinofagia son los mayor hipoleptinemia en los estadios más avanzados71.
principales factores contribuyentes a la pérdida ponde- La pérdida de peso superior al 5 % se asoció con bajos
ral causada por cambios mecánicos, incluso en el mo- niveles de leptina, pero no la presencia de cáncer.
mento del diagnóstico de este cáncer.
Debido a estos síntomas y a las dificultades progresi- 3.3.  Terapia neoadyuvante y estado nutricional
vas para deglutir sólidos y/o líquidos, los pacientes cam- Aunque la esofagectomía continúa siendo la mejor
bian sus hábitos alimentarios. En un estudio realizado opción terapéutica para los tumores esofágicos que in-
en 110 pacientes con cáncer de esófago el 27,5 % fue filtran la submucosa, la combinación con quimio y/o
capaz de comer una dieta normal (disfagia grado 1), un radioterapia adyuvante, neoadyuvante y radical añaden
12,8 % algunos sólidos (disfagia grado 2), el 49,5 % complejidad a todo el tratamiento.
algunos semisólidos (disfagia grado 3), un 7,3 % solo La terapia neoadyuvante seguida de la esofagecto-
líquidos (disfagia grado 4) y el 2,8 % presentó disfagia mía es la opción terapéutica curativa predominante del
completa (disfagia grado 5)63. cáncer de esófago. Este tipo de aproximación terapéu-
tica comporta un riesgo sustancial de complicaciones
3.2.2.  Inflamación sistémica postoperatorias.
Es necesario añadir medidas de soporte activas para
La pérdida de peso es resultado de algo más que una hacer estas opciones viables cuando estén indicadas.
ingesta deficitaria. Hay cada vez más estudios que de- En este contexto, el tratamiento nutricional merece es-
muestran la asociación entre niveles elevados de PCR y pecial atención dada la elevada complejidad y altas ta-
pérdida de peso. En un estudio realizado con pacientes sas de morbimortalidad de este tumor y su impacto
con cáncer gástrico o esofágico se comprobó que los sobre la calidad de vida de los pacientes.
predictores independientes de la pérdida ponderal fue- Los beneficios de la terapia neoadyuvante asociada a
ron la ingesta dietética alterada en el 38 %, la inflama- la cirugía frente a la cirugía del cáncer de esófago están
ción sistémica en el 34 % y el estadio de la enfermedad bien establecidos. Pero la quimio o la quimiorradiote-
en el 28 %64. Resultados de diversos estudios en pa- rapia neoadyuvante tienen efectos perjudiciales sobre
cientes con cáncer esofágico han puesto de manifiesto el estado nutricional de los pacientes que influyen so-
los efectos negativos de la inflamación sistémica sobre bre la caquexia. Existen diferentes estudios que de-
diferentes variables como el estado nutricional65, la muestran que durante la terapia neoadyuvante se pro-
morbilidad perioperatoria66, los resultados clínico-pa- duce con frecuencia una pérdida de peso relevante y
tológicos67 y la supervivencia68. que esta se asocia con un peor pronóstico. La anorexia,
Tema 39.  Soporte nutricional en el paciente con cirugía oncológica de estómago, esófago y páncreas 623

la depresión y la esofagitis constituyen factores de ries- la ingesta en raciones más pequeñas, más numerosas
go para esta pérdida ponderal durante el tratamiento (de 5 a 6 comidas/día), modificar la consistencia alimen-
neoadyuvante72. taria o consumir volúmenes más pequeños, asegurando
En un estudio, el 68 % de los pacientes presentó una una correcta posición sentado durante la ingesta. Los
pérdida de peso importante a las 3 o 4 semanas de pacientes anoréxicos y disfágicos pueden beneficiarse
completar el tratamiento neoadyuvante. La mitad de también de una ingesta dietética más calórica emplean-
ellos había perdido más del 10 % de su peso63. Tanto la do alimentos o bebidas de mayor densidad nutricional,
pérdida ponderal superior al 10 % durante el trata- consumidos en volúmenes más pequeños.
miento como la disfagia tras el mismo fueron predicto-
res significativos de una menor supervivencia global. 3.4.2. Necesidades calóricas y proteicas
Dependiendo del tipo de terapia neoadyuvante que
reciben los pacientes con cáncer esofágico, los efectos De 30 a 35 kcal/kg de peso actual y día en aquellos
específicos sobre el estado nutricional pueden variar. pacientes con deambulación conservada y de 20 a 25
kcal/kg peso actual y día para pacientes encamados no
3.3.1.  Quimioterapia neoadyuvante obesos. Las necesidades son menores en pacientes con
obesidad grave. Las necesidades proteicas óptimas
La quimioterapia neoadyuvante produce una rápida para los pacientes con cáncer no están bien estableci-
disminución de la disfagia con aumento del peso y de das y varían entre 1 y 2 g/kg peso actual y día47.
la calidad de vida73. Sin embargo, la sarcopenia em-
peora marcadamente en estos pacientes tras la qui-
mioterapia neoadyuvante, aumentando de 57 a 79 %74
3.4.3. Nutrición artificial
y de 26 a 43 %75. Una masa muscular más baja es un Se debe indicar en pacientes malnutridos o en aque-
indicador de menor capacidad física, aumentando el llos en los que no se prevea una tolerancia oral en 7 días
riesgo de infecciones adquiridas y comorbilidades, que o más47. La nutrición enteral debe indicarse cuando la
pueden causar peor tolerancia y mayor toxicidad a los ingesta es inferior al 60 % de lo estimado durante más
tratamientos específicos. de 7 o 10 días. En pacientes sometidos a esofagecto-
Por otro lado, una menor capacidad física basal se mía, la integridad intestinal está conservada81, por lo
asocia con menor supervivencia al año en pacientes con que el acceso enteral es posible a través del yeyuno y
cáncer gástrico o esofágico que han completado qui- permite alcanzar las necesidades calórico-proteicas del
mioterapia neoadyuvante y cirugía pero no en aquellos paciente manteniendo la integridad funcional del inte-
que no pudieron completar la quimioterapia. Así, es tino81. La nutrición parenteral se indica en pacientes
posible que en algunos pacientes, los riesgos de la qui- malnutridos graves con tubo digestivo no funcionante
mioterapia neoadyuvante superen los beneficios76. y/o contraindicación para nutrición enteral.
También se ha demostrado una asociación estadísti-
camente significativa entre cambios en la composición
corporal tras la quimioterapia neoadyuvante y compli-
3.4.4. Durante el tratamiento neoadyuvante
caciones postoperatorias tras esofagectomía77. Se ha demostrado que el consejo dietético y la suple-
mentación oral en pacientes que reciben tratamiento
3.3.2.  Quimiorradioterapia neoadyuvante son beneficiosos47.
En pacientes tratados con quimioterapia neoadyu-
En los últimos ciclos de quimiorradioterapia, la grave- vante el consejo dietético individualizado, dirigido por
dad de la disfagia empeora73. Al finalizar el tratamiento objetivos, reduce la gravedad de la disfagia, mantiene
con quimiorradioterapia o radioterapia, el 51,5 % de los el estado nutricional y mejora la calidad de vida, dismi-
pacientes presentaron algún grado de disfagia y en el nuyendo la necesidad de nutrición enteral o de stents
20,2 % esta había empeorado63. Por tanto, el uso de esofágicos82.
tratamiento neoadyuvante, sobre todo radioterapia,
En un estudio aleatorizado y controlado, el uso de
puede empeorar la disfagia y la mucositis78, 79.
nutrición mediante gastrostomía con fórmulas enri-
quecidas en ácidos grasos omega-3 mejoró significati-
3.4.  Tratamiento nutricional vamente los resultados de la valoración subjetiva glo-
bal y las puntuaciones de diferentes cuestionarios de
3.4.1.  Consejo dietético
riesgo nutricional en pacientes con cáncer inoperable
Cuando los pacientes con cáncer de esófago consi- de cabeza y cuello o esófagico (7 % de la cohorte total)
guen al menos el 75 % de sus necesidades nutricionales que iban a recibir quimiorradioterapia neoadyuvante,
por vía oral y no están en tratamiento neoadyuvante, el sin cambios significativos en el IMC o en la composi-
consejo dietético para síntomas típicos como disfagia, ción corporal83.
odinofagia y anorexia se considera la primera línea del En pacientes con cáncer de esófago nutridos me-
tratamiento nutricional80. Este debería incluir fraccionar diante yeyunostomía se produjo una mejora del peso
624 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

preoperatorio y reducción de las complicaciones posto- En un estudio de 208 pacientes esofagectomizados


peratorias en pacientes con tratamiento neoadyuvante que recibieron nutrición enteral en las primeras 48 ho-
frente a un grupo control que solo recibió tratamiento ras, 48 a 72 horas o más de 72 horas tras la cirugía, se
nutricional intensivo tras la cirugía84. Otros estudios no demostró que los que recibieron la nutrición más pre-
han podido demostrar beneficios de la nutrición ente- cozmente tuvieron menor débito de drenaje torácico,
ral durante la neoadyuvancia85. menor incidencia de infección pulmonar, menor dura-
ción del íleo, una estancia hospitalaria más baja y me-
3.4.5.  Período perioperatorio nor gasto sanitario. También se comprobó que en los
pacientes nutridos antes de las 72 horas de la cirugía
La cirugía mayor puede disminuir la función del sis- las variaciones pre-postcirugía de los parámetros nutri-
tema inmune y la inmunonutrición perioperatoria es cionales (peso, albúmina, proteínas totales) fueron sig-
altamente recomendable (grado de recomendación A) nificativamente más favorables86 (tabla 2).
en pacientes con cirugía mayor abdominal, indepen- Algunos estudios han demostrado que la nutrición
dientemente del estado nutricional47. La inmunonutri- enteral precoz se relaciona con aumento de la inciden-
ción generalmente produce mejor función inmune que cia de neumonía aspirativa y fuga anastomótica, pro-
una dieta estándar isocalórica en el perioperatorio80. duciendo mediastinitis con alta tasa de mortalidad87.

3.4.6.  Período postoperatorio Nutrición enteral comparada con nutrición


En pacientes con cáncer de esófago, la desnutrición parenteral o fluidoterapia
preoperatoria puede aumentar el riesgo de complicacio- En un metaanálisis de 10 estudios aleatorizados y
nes postquirúrgicas63. La cirugía sigue siendo la principal controlados que comparó la nutrición enteral precoz
terapia para todos los carcinomas esofágicos curables, postoperatoria frente a la nutrición parenteral en eso-
siendo la esofagectomía uno de los procedimientos gas- fagectomizados por cáncer de esófago se demostró
trointestinales quirúrgicos más invasivos y que induce que la nutrición enteral redujo significativamente la
una de las respuestas al estrés más intensa. Tras la ciru- morbilidad (complicaciones pulmonares, dehiscencia
gía, el estado nutricional de los pacientes puede deterio- anastomótica). El grupo con nutrición enteral precoz
rarse aún más y el tratamiento nutricional postoperato- tuvo una mejora más rápida en el estado nutricional
rio es crucial. sin mayor incidencia de complicaciones digestivas88.
El intestino delgado recupera su capacidad para ab- En otro estudio, se demostró que la nutrición enteral
sorber nutrientes casi inmediatamente. Hay evidencias precoz postoperatoria disminuyó la estancia en UCI y la
de que la nutrición enteral precoz preserva la integridad estancia hospitalaria total, aunque la mortalidad no se
de la mucosa intestinal y ayuda a mantener su función modificó30.
inmunológica. Tras la esofagectomía, factores como la En un estudio prospectivo aleatorizado, multicéntri-
isquemia intestinal, el íleo, la falta de estímulo intestinal co y controlado, la nutrición enteral precoz en 121 pa-
debido a la ausencia de nutrición oral/enteral pueden cientes sometidos a cirugía mayor gastrointestinal (54
aumentar la atrofia y dañar la permeabilidad de la mu- de ellos esofágica) produjo menor incidencia de infec-
cosa intestinal. Como resultado, hay mayor riesgo de ciones de la herida o pulmonares y de fugas anastomó-
traslocación de bacterias intestinales y endotoxinas ha- ticas que la fluidoterapia (32,8 % frente a 50,9 %) 89.
cia el torrente circulatorio. (tabla 2).
La indicación de gastrostomía endoscópica en estos
Nutrición enteral precoz pacientes se ha debatido dados los riesgos de fuga
Estudios previos han demostrado que la nutrición postoperatoria, de complicaciones gástricas y de disemi-
enteral precoz postoperatoria podría favorecer la recu- nación tumoral, a pesar de sus probados beneficios para
peración de la funcionalidad intestinal, mejorar la se- la nutrición enteral de pacientes con disfagia79, si bien
guridad del paciente y acortar la duración del ingreso en 117 esofagectomizados, no se detectaron complica-
hospitalario, reduciendo costes sanitarios. ciones relacionadas con este acceso90.

Tabla 2.  Ventajas de la nutrición enteral postoperatoria en el cáncer esofágico.

Nutrición enteral precoz Nutrición enteral vs parenteral


↓ Complicaciones infecciosas ↓ Complicaciones infecciosas
↓ Estancia hospitalaria: ↓ Estancia hospitalaria/UCI
  Mejora funcionalidad intestinal ↓ Complicaciones no infecciosas
  Favorece recuperación nutricional Favorece recuperación nutricional
↓ Coste sanitario
Tema 39.  Soporte nutricional en el paciente con cirugía oncológica de estómago, esófago y páncreas 625

La colocación de un catéter de yeyunostomía o son- meros meses y peor en los que parten de un IMC
da nasoyeyunal está recomendada en los pacientes so- preoperatorio más elevado (superior o igual 25 kg/m2).
metidos a esofagectomía que son candidatos a nutri- Estos hallazgos son consistentes con un estudio rea-
ción enteral (grado de recomendación A)5. lizado en 205 pacientes con cáncer de esófago, en el
Las complicaciones relacionadas con la yeyunosto- que una pérdida de peso superior o igual al 10 % se
mía son frecuentes en pacientes con cáncer gastroeso- produjo en el 54 y 55 % de los pacientes a los 6 meses
fágico y ocurren más tras la gastrectomía que tras la y al año de la cirugía, respectivamente96. Esta pérdida
esofagogastrectomía. La mayoría de estas complicacio- de peso fue un factor pronóstico independiente de re-
nes se pueden resolver de manera sencilla, pero en un currencia del tumor.
3,4 % precisaron recirugía por obstrucción del intestino Existe una evidencia consistente de que los niveles de
delgado y hemorragia91. La indicación de yeyunosto- ghrelina disminuyen inmediatamente tras la cirugía
mía debe ser considerada cuidadosamente para equili- esofágica97, 98. Este descenso que produciría anorexia,
brar los beneficios nutricionales con los riesgos de su podría explicar parcialmente la pérdida ponderal tan
colocación y utilización. grave que ocurre en los primeros 6 meses tras la ciru-
gía. Estos cambios en los niveles de ghrelina se correla-
cionan con la pérdida de peso a los 3 años de la esofa-
3.5.  Actividad física
gectomía99, aunque no en todos los estudios97.
El ejercicio de resistencia es la mejor forma de
a­ umentar la masa muscular en pacientes con cáncer en 3.7. Nutrición durante el tratamiento paliativo
estadios avanzados. Este ejercicio favorece la síntesis
muscular y tiene el potencial de mitigar la atrofia muscu- El objetivo es aportar tratamiento nutricional duran-
lar en pacientes con caquexia92. El uso progresivo de te la quimio y radioterapia paliativas mediante nutri-
ejercicio de resistencia en supervivientes de varios tipos ción enteral. Se debe incrementar al máximo el confort
de cáncer produce mejoras moderadas de la masa del paciente y su calidad de vida. Con estos objetivos,
muscular93, ya que atenúa la pérdida muscular en pri- la implantación de un stent metálico puede aliviar la
mer lugar y, posteriormente, mejora la fuerza, lo que disfagia. El acceso enteral, mediante gastrostomía,
se traduce en mejor calidad de vida. puede ser el preferido para pacientes con ingesta no
posible por mucositis inducida por la radioterapia79.
3.6. Nutrición en supervivientes a largo plazo
4.  Cáncer de páncreas
La pérdida de peso progresiva y continuada sigue
siendo una complicación tanto en supervivientes del El cáncer de páncreas es la segunda causa más fre-
cáncer esofágico tratados con intención curativa, como cuente de neoplasia digestiva en Estados Unidos y la
en pacientes que están en remisión y no van a recibir cuarta de muerte por cáncer.
ningún tratamiento. Esta pérdida de peso, especialmen-
te frecuente en aquellos pacientes con un IMC preope- 4.1. Malnutrición en el paciente con cáncer
ratorio alto94, 95, puede contribuir al deterioro de la cali-
de páncreas
dad de vida.
La esofagectomía produce cambios anatómicos per- La malnutrición constituye un problema común y
manentes que, a menudo, se asocian con efectos se- grave en estos enfermos100-102. Los pacientes con cán-
cundarios digestivos adversos que se manifiestan cer pancreático resecable son candidatos a cirugía ma-
como dificultades para la alimentación. Estos causan yor. Muchos de ellos padecen malnutrición antes de la
pérdida ponderal persistente a largo plazo con impli- cirugía103, 104 y una alta frecuencia de signos y síntomas
caciones importantes en la calidad de vida, en la in- relacionados con la desnutrición en el momento del
munidad y supervivencia de los pacientes. diagnóstico, como pérdida de peso (80-85 %), anorexia
La pérdida de peso postesofagectomía es un síntoma (83 %), dolor abdominal (79 %), epigastralgia (71 %),
clínico muy importante con potenciales efectos adver- náuseas (51 %), diarrea (44 %), vómitos (33 %) y estea-
sos sobre el pronóstico, calidad de vida, recurrencia tu- torrea (25 %)105, 106.
moral y supervivencia76. Los pacientes con pérdidas Un riesgo moderado grave de malnutrición se iden-
ponderales superiores al 15 % tienen mayores riesgos tificó en el 52 al 88 % de los pacientes que se iban a
de dificultades alimentarias, dolor, astenia, náuseas, vó- someter a una resección pancreática por cáncer13. Ade-
mitos, anorexia y diarrea 5 años o más tras la cirugía 94. más, la malnutrición tiene repercusiones negativas so-
Algunos estudios poblacionales han evaluado la pre- bre la calidad de vida, el estado general y el tratamien-
valencia de pérdida de peso en supervivientes de cán- to antitumoral102, 107-109.
cer de esófago a los 6 meses, 3 y 5 años de la cirugía94, El campo operatorio para la pancreatectomía está en
95
, demostrando que la pérdida de peso ocurre 5 años una encrucijada del sistema digestivo. El flujo de alimen-
tras la cirugía, aunque es más grave durante los 6 pri- tos, la estimulación enterohormonal, la liberación de en-
626 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

zimas y la vascularización digestiva se afectan por la loca- En un estudio aleatorizado y controlado se analizó el
lización de la neoplasia y la reconstrucción quirúrgica. efecto de la inmunonutrición oral suplementaria 7 días
La cirugía curativa de estos pacientes comporta una antes de la cirugía (con el objetivo de alcanzar 1,5 g de
elevada tasa de complicaciones110. La duodenopan- proteínas/kg/día) en pacientes con cáncer pancreático.
createctomía cefálica es el procedimiento quirúrgico Los investigadores no obtuvieron diferencias significa-
estándar para el tratamiento de los tumores de la cabe- tivas en relación con complicaciones postcirugía y es-
za del páncreas, del conducto biliar proximal, duodeno tancia hospitalaria, posiblemente por la dosis baja de
y ampolla de Vater. Esta cirugía compleja ha sufrido inmunonutrición empleada y/o porque solo el 40 % de
varias modificaciones técnicas, pero clásicamente su- los participantes presentaban riesgo nutricional119.
pone la resección de la cabeza del páncreas junto con Muchos pacientes con cáncer de páncreas localmente
el conducto biliar distal, vesícula biliar, duodeno, pri- avanzado, habitualmente no subsidiarios de cirugía, pre-
meros centímetros del yeyuno, el estómago distal (en cisan quimio o quimiorradioterapia de inducción 5 o 6
torno al 50 %) y el píloro. Las complicaciones nutricio- meses antes de su intervención y llegan al momento de
nales derivadas de este procedimiento incluyen: retraso la cirugía definitiva malnutridos, inmunocomprometidos
del vaciamiento gástrico (gastroparesia), dumping, y con alto riesgo de desarrollar complicaciones postope-
pérdida de peso, malnutrición, diabetes mellitus, defi- ratorias. La mejoría del estado nutricional preoperatorio
ciencias nutricionales y malabsorción/mala digestión puede favorecer la recuperación postcirugía. Un curso
debido a insuficiencia pancreática exocrina. corto (5 días) de inmunonutrición preoperatoria en este
tipo de enfermos redujo significativamente las complica-
4.2.  Abordaje nutricional ciones postoperatorias y la estancia media, y favoreció
una menor disminución del índice de riesgo nutricional y
Un revisión retrospectiva evaluó la prevalencia y con- de albúmina120.
secuencias de la malnutrición sobre la morbilidad posto- Otros estudios han comparado la inmunonutrición
peratoria en pacientes con cáncer de páncreas107. enteral oral preoperatoria con una intervención nutri-
La pérdida de peso superior o igual al 5 % de 3 a 6 cional estándar en pacientes con cáncer de páncreas
meses antes del ingreso se relacionó con un aumento con resultados positivos en los aleatorizados a inmuno-
de infección de tejidos profundos y de la estancia hos- nutrición121, 122.
pitalaria. Aportar nutrición preoperatoria es vital pero puede
Las herramientas de cribado MUST (Malnutrition ser un reto. La saciedad precoz dificulta la acomodación
Universal Screening Tool) e IRN (Índice de Riesgo Nutri- gástrica y altera la capacidad de expansión del estóma-
cional) mostraron una concordancia excelente en rela- go. La colestasis modifica la homeostasis hepatobiliar e
ción con la morbilidad global, mientras que MUST y intestinal, así como la digestión. La disminución de la
valoración subjetiva global la tuvieron en relación con concentración de sales biliares en la luz altera la absor-
la incidencia de infecciones profundas. ción de la grasa dietética y de vitaminas liposolubles123.
La hipoalbuminemia preoperatoria por debajo de
4 g/dl, se asoció con un aumento significativo de 4.2.2.  Inmunonutrición perioperatoria
complicaciones postoperatorias en pacientes con
cáncer pancreático111. Los pacientes con cáncer de páncreas suelen tener
Existe un gran debate de cuál es la mejor forma de niveles elevados de marcadores inflamatorios debido al
nutrir a los pacientes antes y después de la cirugía pan- incremento de citocinas proinflamatorias124 y esto se
creática. No parece que existan beneficios de la nutri- relaciona con la caquexia tumoral125.
ción artificial preoperatoria en pacientes bien nutridos. Aunque la nutrición artificial puede ser muy útil en
Las recomendaciones ERAS (Enhanced Recovery After pacientes en los que predomina una reducción de la
Surgery) así lo confirman112. ingesta, cuando se asocian alteraciones del metabolis-
mo relacionadas con el cáncer, el tratamiento es más
complejo126. Sería ideal una terapia nutricional con pro-
4.2.1.  Inmunonutrición preoperatoria
piedades antiinflamatorias que favorezcan una resolu-
La nutrición enteral precoz tiene como objetivos redu- ción natural de la reacción de fase aguda, con propie-
cir la respuesta hipermetabólica a la cirugía mayor, man- dades inmunoestimuladoras y efectos tróficos.
tener el estado nutricional para aumentar la respuesta Un total de 37 pacientes fueron aleatorizados a reci-
inmuno-inflamatoria, reducir el riesgo de traslocación bir inmunonutrición enteral o nutrición estándar du-
bacteriana y acortar el tiempo de recuperación113, 114. rante 14 días en el preoperatorio y 7 días en el posto-
La inmunonutrición enteral se ha usado durante mu- peratorio. El uso de inmunonutrición preoperatoria se
chos años con efectos positivos en la mayoría de los asoció con reducciones significativas del factor de ne-
estudios individuales y en diferentes revisiones sistemá- crosis tumoral alfa y del complemento. Además, estos
ticas realizadas con pacientes sometidos a cirugía di- pacientes tuvieron un recuento de linfocitos totales
gestiva y digestiva oncológica50, 115-118. significativamente más alto al tercer día postoperatorio
Tema 39.  Soporte nutricional en el paciente con cirugía oncológica de estómago, esófago y páncreas 627

y una mayor elevación de la ratio CD4/CD8 desde el día to gástrico y de fístula pancreática en el grupo de dieta
3 al día 7 postoperatorios frente a los nutridos con fór- oral fue del 14,1 y del 7,7, respectivamente.
mula estándar, sin detectar cambios significativos en Otros autores no detectaron diferencias en la media
los parámetros antropométricos o proteínas viscerales de pérdida de peso durante el ingreso cuando se com-
tras la intervención nutricional127. para la alimentación oral con la nutrición enteral en
Resultados similares se obtuvieron en 305 pacientes pacientes sometidos a una resección tipo Whipple133.
que se iban a someter a cirugía por cáncer pancreático En un estudio prospectivo, aleatorizado, controlado y
o gástrico, a los que tras 14 días de parenteral preope- multicéntrico se aleatorizaron a los pacientes a alimenta-
ratoria se aleatorizaron a inmunonutrición enteral o ción oral a demanda o a nutrición enteral mediante yeyu-
nutrición estándar en el postoperatorio128 y en un me- nostomía tras cirugía digestiva (gastrectomía, cirugía
taanálisis de 13 estudios aleatorizados y controlados pancreática –18,4 % resección tipo Whipple–, hepatec-
(1269 pacientes)14. tomía, cirugía biliar, esofagectomía)134. No se demostra-
En otro estudio aleatorizado con 30 pacientes, la inmu- ron diferencias significativas en la tasa de reintervención,
nonutrición enteral perioperatoria se asoció con mayor mortalidad a los 30 días o total durante el estudio entre
proliferación linfocitaria estimulada y menores complica- los dos grupos. Ajustando el modelo por la presencia o
ciones infecciosas tras la cirugía que la inmunonutrición no de anastomosis gastrointestinal proximal, no se pro-
enteral postoperatoria o que la nutrición parenteral129. No dujeron diferencias significativas en relación con dehis-
obstante, las diferencias en este estudio pueden ser atri- cencia anastomótica, complicaciones infecciosas mayores
buidas a la falta de intervención nutricional preoperatoria o porcentaje de pacientes con complicaciones mayores.
en dos de los tres, así como que los tres regímenes nutri- La duración del íleo fue más corta en el grupo oral.
cionales fueron aproximadamente isocalóricos. Diferentes estudios se han publicado acerca de los
Un mayor recuento linfocitario total en el grupo de beneficios de diferentes vías de acceso nutricional en
inmunonutrición enteral puede tener un papel protec- pacientes sometidos a duodenopancreatectomía. Zhu
tor frente a la morbilidad séptica. Por otro lado, está et al135, demostraron la superioridad del acceso nas-
documentada la asociación entre reducción de este oyeyunal frente a la yeyunostomía con respecto a com-
recuento linfocitario y mayor morbimortalidad130. plicaciones y estancia hospitalaria. Gerritsen et al136,
tras una análisis sistemático de su propia experiencia
con pacientes con acceso nasoyeyunal (44 pacientes),
4.2.3. Nutrición oral/enteral postoperatoria
yeyunostomía (48 pacientes) y parenteral (37 pacien-
El uso rutinario de nutrición enteral por sonda no tes), no demostraron diferencias en el tiempo transcu-
está indicado en el postoperatorio. Los pacientes de- rrido hasta conseguir la tolerancia oral. Abu Hilal et
ben comenzar con una dieta oral normal, con incre- al137, comprobaron que la tolerancia oral a dieta nor-
mentos graduales cada 3 o 4 días. mal tras cirugía pancreática fue más rápida con un ac-
Un estudio enmarcado en la estrategia ERAS (Enhan- ceso nasoyeyunal que con una gastroyeyunostomía o
ced Recovery After Surgery) con 115 pacientes someti- yeyunostomía. Gerritsen et al132, observaron que el
dos a duodenopancreatectomía estableció comenzar tiempo hasta tolerar una dieta normal fue superior
con líquidos el día 1 tras la cirugía y con sólidos el día cuando los accesos eran gastroyeyunostomía y yeyu-
2 frente a hacerlo los días 3 y 4, respectivamente. Los nostomía y más corto en el grupo de dieta oral, sin di-
objetivos se lograron en el 55 % de los pacientes para ferencias en relación con la estancia hospitalaria.
la dieta líquida y en el 53 % para la sólida. La baja ad- Se ha intentado identificar establece factores predicto-
herencia a las recomendaciones ERAS (Enhanced Reco- res preoperatorios de la necesidad de nutrición enteral
very After Surgery) se relacionaron con la frecuencia y por sonda en esta población138. La dependencia funcio-
gravedad de las complicaciones131. nal, EPOC, edad avanzada, sexo masculino, aumento de
Las estrategias de alimentación oral continúan sien- creatinina, leucocitosis, uso de esteroides, hemorragia,
do la modalidad nutricional de elección tras la pan- hipoalbuminemia y aumento del IMC resultaron relevan-
createctomía. En el metaanálisis de Gerritsen et al,132 la tes. No obstante, el predictor significativamente más im-
media de estancia hospitalaria fue más corta en el gru- portante en términos de necesidad de nutrición enteral
po de dieta oral y gastroyeyunostomía (15 días) que en por sonda fue la edad superior o igual a 80 años. De las
los grupos con yeyunostomía (19 días), nutrición pa- 56 sondas colocadas intraoperatoriamente, el 16,1 %
renteral (20 días) y sonda nasoyeyunal (25 días). El precisó sustitución por obstrucción, retirada inadvertida
tiempo transcurrido hasta ingerir una dieta normal fue o retirada prematura. También fue coste-eficiente dejar
más corto en el grupo oral (6 días) que en los grupos colocada la sonda en el acto operatorio, dependiendo de
con sonda nasoyeyunal, nutrición parenteral, yeyunos- la presencia o no de estos factores de riesgo.
tomía y gastroyeyunostomía (14 días). Un 49,4 % de En general, las estrategias de nutrición enteral son
los pacientes tuvieron una complicación en el grupo superiores a la nutrición parenteral, pero sólo deben
oral que solo fue más alta que en el grupo de yeyunos- ser indicadas selectivamente y las sondas no deben ser
tomía (43,8 %). La incidencia de retraso del vaciamien- colocadas de manera rutinaria.
628 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

4.2.4. Nutrición parenteral. Fístula pancreática No existe ninguna enfermedad que mejore con el
ayuno. Se recomienda la nutrición enteral si la ingesta
La nutrición oral ha demostrado de manera consisten- oral es inadecuada, a pesar de consejo y suplementos
te ser más segura y eficaz que la nutrición parenteral en nutricionales, y por vía parenteral cuando la nutrición
relación con la incidencia de complicaciones postopera- enteral no es suficiente o posible.
torias (incluyendo infección, fístula pancreática y retraso En pacientes con neoplasias del tracto digestivo su-
del vaciamiento gástrico) y la estancia hospitalaria. perior que precisan cirugía, la inmunonutrición oral /
En casos de disfunción gastrointestinal prolongada enteral es una opción terapéutica recomendable dados
cuando las estrategias enterales no son posibles, la nu- sus beneficios sobre la incidencia de complicaciones
trición parenteral es una opción indicada. infecciosas y no infecciosas, la duración del ingreso y la
La complicación más importante de la cirugía pan- recuperación del estado nutricional. El uso de este tipo
creática es la fístula pancreática, que puede ocurrir de fórmulas en grupos específicos de enfermos es
hasta en el 20 % de los pacientes139-142. Las complica- ­coste-efectivo para el sistema sanitario.
ciones de estas fístulas incluyen la infección de tejidos La cirugía continúa siendo la principal opción tera-
profundos y la sepsis, asociadas con una mortalidad de péutica curativa en estos pacientes con alto riesgo de
hasta el 40 %143. En una serie de 132 pacientes pen- desarrollar complicaciones postoperatorias por el es-
dientes de cirugía pancreática se demostró una asocia- tado de malnutrición, la inmunodepresión inducida
ción entre malnutrición y fístula pancreática144. En el por el tumor y la respuesta a la agresión quirúrgica. La
análisis multivariable, el único factor predictor signifi- combinación de quimio y/o radioterapia adyuvante,
cativo para el desarrollo de dichas fístulas fue un Índice neoadyuvante y radical seguidas o no de cirugía aña-
de Riesgo Nutricional inferior o igual a 100. den una enorme complejidad al tratamiento de los
La nutrición parenteral también puede tener un pa- pacientes con tumores digestivos y un mayor riesgo
pel en el manejo conservador de la fístula pancreática, de complicaciones. En este contexto, el tratamiento
aunque otras modalidades nutricionales son eficaces. nutricional merece una especial atención dado su im-
En un estudio aleatorizado prospectivo controlado 78 pacto sobre la morbilidad y calidad de vida de los pa-
pacientes con fístula pancreática se aleatorizaron a nu- cientes.
trición enteral o parenteral145. A los 30 días, el cierre de La sarcopenia en el paciente digestivo oncológico
la fístula fue del 60 % en el grupo aleatorizado a nutri- es un indicador de menor capacidad física y aumenta
ción enteral frente al 37 % en el grupo con nutrición el riesgo de infecciones adquiridas y comorbilidades,
parenteral (p = 0,04). La mediana de tiempo hasta el que pueden condicionar una peor tolerancia y una
cierre fue menor en el grupo de enteral. Los dos únicos mayor toxicidad a los tratamientos específicos. En
factores asociados con el cierre de la fístula pancreática este sentido, se recomienda aumentar la actividad
fueron la nutrición enteral y un débito inicial de la fís- física en estos pacientes para mantener la masa y
tula inferior o igual a 200 cc/día. fuerza musculares, la funcionalidad y el patrón meta-
El retraso del vaciamiento gástrico también puede bólico.
ser tratado mediante nutrición enteral. Ya que las deficiencias nutricionales pueden pre-
sentarse hasta varios años después del diagnóstico y
5. Resumen tratamiento de la enfermedad tumoral, es importante
seguir a estos enfermos y vigilar su estado nutricional
Las neoplasias gastrointestinales son la causa más im- a largo plazo. Esto repercutirá en una mejor calidad
portante de mortalidad por cáncer en todo el mundo. de vida en la mayoría de estos supervivientes.
Se recomienda realizar una evaluación nutricional de
estos pacientes lo antes posible con el objetivo de de-
tectar alteraciones nutricionales en un estadio tempra-
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Steenhagen E, van Hillegersberg R, et al. Efficacy rology. 2011; 141:157-63.
Tema 40. 
Valoración y soporte nutricional en el paciente
oncológico
Yaiza López Plasencia
Dunia Marrero Arencibia
Yaiza García Delgado
Carlos Rodríguez Pérez
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Insular de Gran Canaria . Las Palmas
de Gran Canaria

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 635-653.

1. Introducción
2.  Etiología, fisiopatología y diagnóstico
3.  Objetivos del tratamiento nutricional
4.  Valoración nutricional
5.  Recomendaciones dietéticas
6.  Soporte nutricional
7. Resumen
8. Bibliografía

1. Introducción Por ello, el estado nutricional y la dieta tienen un


papel fundamental en la patología oncológica desde
El cáncer está entre las principales causas de morbili- su prevención hasta la fase final de la enfermedad, in-
dad y mortalidad en el mundo, y se espera que aumen- fluyendo en su evolución, pronóstico y respuesta a los
te de forma significativa en las próximas décadas. Al tratamientos oncológicos específicos y condicionando
mismo tiempo, el pronóstico del paciente oncológico la calidad de vida de los pacientes con cáncer.
ha mejorado considerablemente debido a la existencia
de tratamientos más precisos y eficaces, en muchos ca-
sos dirigidos a las características específicas de los dis- 2. Etiología, fisiopatología y diagnóstico
tintos tipos de cáncer, que consiguen retrasar la pro-
2.1.  Causas de malnutrición en el cáncer
gresión de la enfermedad y aumentar la supervivencia.
Todos estos tratamientos se ven dificultados por el La malnutrición en el enfermo oncológico tiene una
desarrollo frecuente de desnutrición y trastornos meta- etiología múltiple y compleja en la que influyen diver-
bólicos en pacientes con cáncer, inducidos por el pro- sos factores. El tipo de tumor, su localización, estadio,
pio tumor o por su tratamiento. el tratamiento aplicado y las complicaciones clínicas
Actualmente, la desnutrición es el diagnóstico se- que se produzcan, van a condicionar el estado nutri-
cundario más común en el paciente con cáncer, con cional del paciente. También influyen factores depen-
una incidencia que oscila entre el 15% y el 40% en el dientes del paciente como su edad, sexo y la existencia
momento del diagnóstico y hasta el 80% en los casos de comorbilidades como la diabetes o enfermedades
de enfermedad avanzada1, y una de las principales digestivas previas. Es frecuente que coexistan varios de
causas de morbi/mortalidad y deterioro de la calidad estos factores, actuando a través de diferentes meca-
de vida. En el paciente oncológico, la malnutrición se nismos patogénicos, con un efecto aditivo sobre el de-
asocia a hospitalización más prolongada, mayor coste, terioro funcional del paciente.
mayor morbi/mortalidad y menor eficacia terapéutica, Existe una amplia variabilidad de frecuencia en función
con la consiguiente prolongación del tratamiento. del tipo de neoplasia; por ejemplo el cáncer gástrico y de

635
636 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

páncreas asocian cifras de malnutrición superiores al Por razones prácticas, se considera ingesta inade-
80%, mientras que los linfomas y leucemias agudas pre- cuada si el paciente no come durante más de una
sentan una frecuencia inferior al 30%, y la principal varia- semana o si la ingesta energética estimada es
ble que influye sobre el desarrollo de malnutrición de < 60% de los requerimientos durante más de 1-2
forma independiente a la histología tumoral es el estadio semanas.
de la neoplasia, siendo más frecuente en aquellos con Las causas de una ingesta inadecuada son com-
enfermedades diseminadas. El estudio NUPAC sobre eva- plejas y multifactoriales. Una reducción de la in-
luación del estado nutricional en pacientes con cáncer gesta está causada por anorexia primaria (por
localmente avanzado o metastásico, realizado en nues- ejemplo, a través de la secreción de sustancias
tro país, estudió 781 pacientes hospitalizados o en régi- producidas en la agresión tumoral que actúan
men domiciliario/ambulatorio, durante los años 2001- sobre receptores periféricos o sobre el hipotálamo)
2002 utilizando como principal test el VSG-PG (Valoración y puede acompañarse de otras alteraciones secun-
Subjetiva Global Generada por el Paciente) y los resulta- darias a la ingesta oral, algunas de las cuales son
dos mostraron que el 42,45% de los pacientes tenían reversibles y mejoran con manejo farmacológico,
anorexia, el 52% presentaba malnutrición severa o riesgo como ulceración oral, xerostomía, dentición inade-
de padecerla y lo que tal vez sea más importante, en el cuada, obstrucción intestinal, malabsorción, estre-
83,6% de los pacientes con cáncer avanzado se requiere ñimiento, diarrea, náuseas, vómitos, motilidad
algún tipo de intervención nutricional. intestinal reducida, dolor no controlado y efectos
Entre las causas de la desnutrición en el paciente secundarios de los tratamientos. La incapacidad
neoplásico deben tratarse los mecanismos básicos de total para comer debido a factores como fallo in-
desnutrición y la caquexia y las causas de desnutrición testinal u obstrucción completa requieren de la
relacionadas con el tumor, con el paciente o con los implementación adecuada de nutrición artificial
tratamientos, y en muchas ocasiones casi todas pue- (a menos que existan contraindicaciones específi-
den estar presentes en un mismo paciente. cas) para evitar la desnutrición. La reducción par-
cial de la ingesta también resulta con el tiempo
2.2.  Mecanismos básicos de la malnutrición en déficits calóricos severos, y en este caso debe-
ría considerarse el porcentaje de déficit diario
Entre los mecanismos básicos de la malnutrición rela-
(por ejemplo, > 25%, > 50% o > 75% de los
cionados tanto con el tumor como con el paciente, el
requerimientos energéticos), la duración espera-
aspecto más destacado, a diferencia de la desnutrición
da, así como el grado de depleción de las reser-
simple, es que el balance energético negativo y la pérdida
vas corporales. Un reciente análisis de un estudio
de músculo esquelético observada en pacientes con cán-
internacional de más de 11 000 pacientes con
cer son impulsados por una reducción de la ingesta y una
estadios avanzados de cáncer proporciona un
serie de trastornos metabólicos (por ejemplo, tasa meta-
marco para la evaluación del agotamiento de las
bólica en reposo elevada, resistencia a la insulina, lipólisis
reservas corporales4, de manera que tanto un
y proteólisis que agravan la pérdida de peso y están pro-
IMC bajo como el porcentaje de pérdida de peso
vocados por una inflamación sistémica y factores catabó-
de forma independiente predicen supervivencia
licos) que pueden ser derivados del huésped o del tumor2.
global. Cuando el IMC y la pérdida de peso fue-
Debido a la presencia de estos cambios metabólicos, la
ron valorados en el análisis multivariable contro-
malnutrición asociada al cáncer solo puede ser revertida
lado por edad, sexo, localización del tumor, esta-
parcialmente por el soporte nutricional convencional.
dio y estado funcional, se pudo desarrollar un
Hay una amplia variación en la terminología sobre el
sistema de grados con las combinaciones de IMC
concepto central de malnutrición asociada al cáncer o
y pérdida de peso con distintas supervivencias
caquexia, pero independientemente de estos términos
medias (grado 0 mayor, grado 4 menor supervi-
diferentes, la presencia de reducción de la ingesta y
vencia) (figura 1).
alteraciones metabólicas son consistentemente conoci-
2. La disminución de proteína muscular es la piedra
das3 y vamos a tratar separadamente los componentes
angular de la caquexia cancerosa, que afecta de
clínicos y patofisiológicos de la malnutrición incluyen-
forma severa a la calidad de vida y tiene un im-
do inflamación sistémica, anorexia, ingesta energética
pacto negativo en la función física y la tolerancia
reducida, depleción de músculo/masa grasa y reduc-
al tratamiento.
ción de actividad física.
Estudios sobre la composición corporal de los pa-
cientes con cáncer revelan que es específica­mente
2.2.1. Alteraciones catabólicas en pacientes
la pérdida de músculo esquelético –con o sin pér-
con cáncer dida de grasa– el principal aspecto de la malnutri-
1. La ingesta nutricional inadecuada se observa con ción asociada al cáncer y la que predice el riesgo
frecuencia en los pacientes con cáncer y se asocia de alteración de la capacidad física, complicacio-
con pérdida de peso que puede llegar a ser severa. nes postoperatorias, toxicidad de la quimioterapia
Tema 40.  Valoración y soporte nutricional en el paciente oncológico 637

IMC (Kg/m2)
28 25 22 20

Pérdida de peso (%) 0 0 1 1 3


2,5 6 11 15
1 2 2 2 3

2 3 3 3 4

3 3 3 4 4

3 4 4 4 4
Adaptado de Martin L, Birdsell L, Macdonald N, Reiman T, Clandinin MT, McCargar LJ, et al. Cancer
cachexia in the age of obesity: skeletal muscle depletion is a powerful prognostic factor, independent
of body mass index. J Clin Oncol 2013; 31:1539-47.
Figura 1.  Esquema grados (grado 0-4) para predecir la supervivencia en pacientes
con cáncer avanzado. Tanto el IMC como la pérdida ponderal condicionan el
pronóstico de forma independiente, (0: mejor, 4: peor pronóstico). (p < 0,001;
ajustado por edad, sexo, localización de la enfermedad, estadío y estado funcional).

y mortalidad3. Un valor generalmente aceptado • Metabolismo de carbohidratos: la inflamación


para pérdida grave de masa muscular es un valor sistémica se asocia con frecuencia con resisten-
absoluto de masa muscular por debajo del percen- cia a la insulina y alteración de la tolerancia a la
til 5. Esto puede ser evaluado según lo siguiente: glucosa.
área muscular media-superior del brazo por antro- • Metabolismo lipídico: la capacidad para oxida-
pometría (varones < 32 cm2, mujeres < 18 cm2), ción de lípidos se mantiene o está aumentada
índice de músculo esquelético apendicular deter- en pacientes con cáncer y especialmente en
minado por absorciometría dual de rayos X (va- presencia de pérdida de peso.
rones < 7,26 kg/m2, mujeres < 5,45 kg/m2),
índice músculo esquelético lumbar determinado Estas alteraciones en conjunto suelen mejorar con el
por CT oncológico (varones < 55 cm2/m2, mujeres tratamiento nutricional, el manejo médico del dolor y
< 39 cm2/m2), índice de masa libre de grasa los síntomas, los agentes farmacológicos y la actividad
corporal sin hueso determinado por bioimpe- física. La eficacia del tratamiento nutricional puede op-
danciometría (varones < 14,6 kg/m2, mujeres timizarse sinérgicamente con actividad física y/o fárma-
< 11,4 kg/m2). La masa muscular por debajo de cos (por ejemplo, para promover el anabolismo muscu-
estos valores está fuertemente asociada con mor- lar o control de la inflamación o resistencia a la
talidad en pacientes con cáncer, así como compli- insulina).
caciones de la cirugía del cáncer y toxicidad dosis
limitante durante el tratamiento oncológico sisté- 2.2.2. Causas de desnutrición relacionadas
mico. Los objetivos del tratamiento metabólico y
con los tratamientos oncológicos
nutricional por tanto, deberían enfatizar de forma
consi­derable el mantenimiento o la ganancia de Cirugía. La cirugía realizada en la mayor parte de estos
masa ­muscular. Dado que la capacidad física y el enfermos contribuye de forma importante al deterioro
estado funcional están alterados en muchos pa- del estado nutricional de los mismos, y la capacidad
cientes con cáncer y esto a menudo se acompaña para que esta pueda ser causa de desnutrición está en
de una mayor pérdida de masa muscular, se reco- función de la localización del tumor, el grado de agre-
mienda la combinación de tratamiento nutricional sión de la cirugía, el período de ayuno postoperatorio,
y actividad física. las complicaciones y las secuelas a largo plazo. La cirugía
3. El síndrome de inflamación sistémica es frecuente dificulta la alimentación durante el período postopera-
en los pacientes con cáncer. Esto puede variar en torio que, junto al incremento de las necesidades nutri-
importancia pero afecta a todas las vías metabó- cionales por el estrés metabólico que produce y al
licas relevantes incluyendo: ­aumento de las demandas que conlleva la cicatrización
• Metabolismo proteico: la inflamación sistémica de los tejidos, favorecen la desnutrición en este tipo de
se asocia con alteración del turnover proteico, pacientes, que en muchas ocasiones ya se encuentra
pérdida de grasa y masa muscular y aumento previamente deteriorado. El grado de estrés depende del
en la producción de proteínas de fase aguda. grado de agresión que, a su vez, en la cirugía del cáncer
638 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

está en función de la intención curativa o paliativa del La inflamación sistémica se asocia con el desarrollo
tratamiento. La cirugía de cabeza y cuello, esófago, es- de fatiga, disminución de la actividad física, anorexia y
tómago y páncreas son las que se consideran de más pérdida de peso. Este síndrome inflamatorio puede
alto riesgo para desencadenar desnutrición. también alterar o prevenir la recuperación de la masa
Quimioterapia. Es un tratamiento agresivo cuyos efec- muscular esquelética, aún si la ingesta energética se
tos secundarios dependerán de múltiples factores, como normaliza con el soporte nutricional convencional.
fármacos utilizados, dosis y esquema empleados (mono o Tanto la pérdida de peso1 como la alteración del es-
poliquimioterapia), duración del tratamiento, respuesta tado funcional y la inflamación sistémica en pacientes
individual, terapias concomitantes y estado general del con cáncer se asocian de forma independiente con un
paciente. Las náuseas y vómitos son los efectos que con pronóstico desfavorable, aumento de la toxicidad de
más frecuencia deterioran la capacidad de alimentación los tratamientos oncológicos dando lugar a interrup-
normal. La mucositis es también uno de los efectos se- ción o reducción del esquema de tratamiento y reduc-
cundarios de la quimioterapia, originada por la toxicidad ción de la calidad de vida. Estos tres factores interac-
de la misma sobre el área del tracto digestivo alto. Produ- túan entre ellos y resulta en un continuo deterioro de
ce también alteración del gusto y olfato, disminuyendo la salud global y el bienestar del paciente.
todo ello la motivación para comer e influyendo negativa-
mente sobre el apetito. Estas alteraciones son más inten-
3.  Objetivos del tratamiento nutricional
sas en el tratamiento concomitante con radioterapia, y
disminuyen progresivamente al finalizar el mismo. El objetivo de la intervención nutricional es mantener
Radioterapia. La radioterapia (RT) puede estar aso- o mejorar la ingesta energética y mitigar las alteracio-
ciada a complicaciones agudas y crónicas con implica- nes metabólicas, manteniendo la masa de músculo es-
ciones nutricionales muy importantes. La presentación quelético y la actividad física, disminuyendo el riesgo
de estos efectos secundarios dependerá de la localiza- de reducción o interrupción del esquema de tratamien-
ción tumoral, y por tanto de la zona y el volumen que to oncológico y mejorando la calidad de vida.
deban ser tratados, la dosis total administrada, el tipo Dada la alta incidencia de déficits nutricionales y al-
de fraccionamiento empleado para su administración y teraciones metabólicas entre los pacientes con cáncer,
la duración total del tratamiento. parece razonable la monitorización de parámetros re-
En general, los efectos secundarios agudos ocurren levantes de forma regular en todos los pacientes onco-
durante el tratamiento y pueden durar hasta 2 o 3 se- lógicos e iniciar intervenciones de forma precoz para
manas tras la finalización del mismo. Las complicaciones evitar déficits excesivos.
crónicas continúan o aparecen cuando ya ha finalizado El tratamiento de la malnutrición asociado al cáncer
la administración del tratamiento, pudiendo presentarse incluye lo siguiente.
meses, e incluso años, después de terminada la RT. Consejo nutricional: debe considerarse como primera
Inmunoterapia. Se asocia al desarrollo de cansancio, línea del tratamiento nutricional un asesoramiento nu-
náuseas, vómitos y anorexia, probablemente secunda- tricional por un profesional que, a diferencia del aseso-
ria a un efecto central. En muchas ocasiones estos fár- ramiento nutricional breve y casual, es un proceso de
macos están incluidos en esquemas de quimioterapia comunicación dedicado y repetido que tiene como ob-
para situaciones clínicas muy avanzadas y es práctica- jetivo proporcionar a los pacientes una comprensión
mente imposible determinar el peso de cada una de las completa de los consejos nutricionales que pueden con-
variables en la situación nutricional del paciente. ducir a cambios duraderos en los hábitos alimentarios.
Claramente, la mejor forma es mantener una ingesta
proteica y energética con la alimentación natural, sin
2.3.  Manifestaciones clínicas
embargo, esto es difícil y generalmente se requieren su-
La malnutrición en el paciente neoplásico produce plementos nutricionales.
una disminución de masa muscular que conlleva una Los suplementos nutricionales orales son mezclas
pérdida de fuerza que tiene importantes consecuencias completas homogéneas de nutrientes disponibles co-
sobre el estado funcional del individuo, con deterioro mercialmente para consumo oral y a menudo recomen-
de la calidad de vida. Como consecuencia de la progre- dadas para complementar el consumo de alimentos. Si
siva pérdida de peso aparece astenia e inactividad con- la ingesta de nutrientes sigue siendo inadecuada, una
tribuyendo aún más a disminuir la capacidad funcional. nutrición completa o suplementaria por vía oral (nutri-
Por otra parte, la malnutrición energético-proteica en ción artificial) o enteral puede estar indicada, depen-
estos pacientes también afecta a su inmunocompeten- diendo del nivel de función del tracto gastrointestinal.
cia, afectando principalmente a la inmunidad celular y La nutrición parenteral puede estar indicada en ca-
aumentando el riesgo de complicaciones infecciosas, sos de obstrucción o fallo intestinal completo.
así como los mecanismos de cicatrización y riesgo de
complicaciones quirúrgicas, importante fuente de mor- • Promoción de actividad física: incluye actividad fí-
bilidad en estos pacientes3. sica diaria, entrenamiento de ejercicios aeróbicos
Tema 40.  Valoración y soporte nutricional en el paciente oncológico 639

y de resistencia y técnicas para aumentar la masa cos específicos. En la historia clínica del paciente debe
y/o fuerza muscular. En este contexto, el tratamien- quedar siempre registrado: las medidas antropométri-
to físico es recomendado para promover el anabo- cas, el porcentaje de pérdida de peso, la historia dieté-
lismo y por tanto la retención y utilización de nu- tica, la actividad física y la estimación del gasto calórico
trientes. La inactividad causa pérdida muscular y del paciente.
desensibilización del músculo a factores anabólicos.
• El tratamiento médico. En pacientes malnutridos 4.1.  Screening
con enfermedad avanzada, los agentes farmaco-
lógicos son los principales tratamientos usados: El objetivo del screening nutricional es sensibilizar a
a) para estimular el apetito y/o motilidad intesti- los sanitarios y permitir un diagnóstico e intervención
nal, b) para disminuir la inflamación sistémica nutricional precoces. Para ser efectivos, los métodos
y/o hipercatabolismo o c) para aumentar la masa empleados deben ser sencillos, rápidos, con alta sensi-
muscular y/o mejorar el anabolismo. La nutrición, bilidad y una buena especificidad. Hay que registrar
y especialmente la nutrición artificial, se asocian con siempre: el IMC, la pérdida ponderal y una estimación
riesgos y costes que necesitan ser sopesados con los de la ingesta, ya sea directamente o a través de herra-
beneficios esperados, con el conocimiento y con- mientas validadas como: Nutrition Risk Screening 2002
sentimiento del paciente. En el cáncer avanzado, los (NRS-2002), Malnutrition Universal Screening Tool
beneficios esperados del tratamiento nutricional (MUST), Malnutrition Screening Tool (MST), Mini Nu-
(relacionado con el alivio de los síntomas, masa tritional Assessment Short Form Revised5. Los pacientes
muscular y función y tolerancia al tratamiento del con un screening patológico necesitan una valoración
cáncer) disminuyen durante las últimas semanas o en mayor profundidad, para determinar las causas y la
días de vida. En este contexto, la carga y riesgos de gravedad de la malnutrición y las alteraciones metabó-
la nutrición artificial, tales como complicaciones licas. Esta valoración permite detectar qué pacientes se
asociadas con los dispositivos para alimentación, beneficiarían del soporte nutricional.
gastrostomía o catéter venoso central, deberían ser
cuidadosamente considerados. 4.2.  Diagnóstico de desnutrición
Debido al gran impacto médico y económico de la
4.  Valoración nutricional malnutrición, en algunos países se ha establecido la
obligación de hacer un screening en este tipo de pacien-
La detección del riesgo de desnutrición en el cáncer
tes6 y claramente los resultados de este dependen de las
posee una gran importancia, ya que nos permite la pre-
acciones que se lleven a cabo cuando los resultados son
vención o el inicio del tratamiento nutricional cuando la
anormales y de que las estrategias de tratamiento que se
malnutrición aún no es grave. Un correcto estado nutri-
inicien sean efectivas. No hay consenso sobre cómo rea-
cional permite mantener una adecuada composición
lizar el screening y en qué puntos de corte debe iniciarse
corporal y las funciones celulares del organismo. La mal-
la evaluación. Aunque estudios prospectivos de cohorte
nutrición conlleva alteraciones no solo anatómicas, sino
sugieren algunos beneficios, no hay evidencia de ensa-
también funcionales. Las primeras son las más evidentes
yos clínicos aleatorizados de que un screening general
y suponen una pérdida de grasa corporal y de masa libre
en poblaciones heterogéneas de pacientes con cáncer
de grasa. Se caracterizan por pérdida de peso y disminu-
produzcan una mejoría clínica o reducción de la morbi/
ción de las medidas antropométricas en caso de déficit
mortalidad. Estos hallazgos, sin embargo, son insufi-
calórico o por depleción de proteínas plasmáticas aso-
cientes para descartar por completo el screening y solo
ciado o no a edemas, pero con normalidad de las medi-
sirven para cuestionar el contenido de las estrategias
das antropométricas en situación de aporte inadecuado
actuales de screening/evaluación/tratamiento.
de proteínas. Las alteraciones funcionales son las más
Para valorar correctamente el estado nutricional de
importantes, ya que condicionan la aparición de compli-
los pacientes oncológicos, deberemos tener en cuenta
caciones asociadas a la malnutrición (disminución de la
los parámetros antropométricos, los datos recogidos
defensa contra la infección, dificultad para la cicatriza-
en la historia clínica que incluyan historia dietética, pa-
ción de heridas, etc.).
rámetros analíticos y la valoración de la capacidad fun-
La intervención nutricional debe realizarse siempre en
cional del paciente.
base a una correcta valoración nutricional. Esta debe
realizarse al diagnóstico y repetirse de forma regular
para valorar la necesidad de intervención nutricional o 4.2.1. Antropometría
valorar su eficacia. Se deberían establecer protocolos
Peso corporal
tanto en pacientes ambulatorios como hospitalizados.
En la valoración nutricional se deben utilizar herramien- El peso y la talla son las medidas antropométricas
tas de screening, y en aquellos en que se detecta riesgo más sencillas de obtener, además de ser fácilmente re-
de desnutrición, se deben emplear métodos diagnósti- producibles, si bien de forma aislada son insuficientes
640 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

para determinar la desnutrición en el paciente con cán- Womersley, con las que se obtienen valores de densi-
cer. Es muy útil hacer referencia al cambio de peso que dad corporal (DC) (Durnin y Womersley, 1974) y, pos-
se ha producido con respecto al habitual y su evolución teriormente, se calcula el porcentaje de grasa con la
en el tiempo (tabla 1). El riesgo de complicaciones ecuación de Siri.
­aumenta con la cuantía de la pérdida y la velocidad de
instauración de la misma. Una pérdida de peso signifi- 4.2.2.  Historia dietética
cativa se asocia con alteraciones funcionales de los ór-
ganos y con un aumento significativo de la morbi/mor- La disminución en la ingesta se debe intentar detec-
talidad. Sin embargo, la presencia de edemas, ascitis o tar lo más precozmente posible para dar pautas al pa-
un gran crecimiento tumoral limitan la utilidad del ciente. La ingesta se puede valorar cualitativamente y si
peso como parámetro de valoración nutricional, por lo es posible cuantitativamente usando registros dieté-
que se deben tener en cuenta. ticos, recordatorios de ingesta o escalas visuales o ver-
bales7 (figura 2).
La reducción de la ingesta puede ser debida a múlti-
Pliegues cutáneos y circunferencias
ples causas, por lo que hay que realizar una evaluación
La medida de los pliegues cutáneos y la circunfe- clínica que permita descartar causas tratables que pue-
rencia muscular del brazo son también un método den repercutir sobre la ingesta, como xerostomía, náu-
aceptable para valorar la grasa corporal y el comparti- seas o vómitos, mucositis, diarrea, infecciones, dolor o
mento muscular. La medición más habitual es la del alteraciones psicológicas).
pliegue tricipital y el perímetro del brazo, en el punto
medio del brazo no dominante entre el acromion y el 4.2.3.  Parámetros analíticos
olecranon. Se deben comparar los resultados obteni-
dos con las tablas de referencia según la edad y sexo Proteínas plasmáticas
del paciente, lo cual nos indicará en qué percentil (p) se Las concentraciones plasmáticas de albúmina, preal-
sitúa nuestro paciente. Valores inferiores al p5 son in- búmina, transferrina y proteína ligadora del retinol (RBP)
dicativos de una pérdida grave y del p5-p10 pérdida reflejan el estado del compartimento proteico visceral
grave-moderada. La medición de pliegues y circunfe- (tabla 2). Se trata de proteínas de síntesis hepática, que
rencias nos permite también valorar la evolución de pueden circular unidas a otras sustancias, son reactantes
aquellos pacientes que no sea posible pesar. de fase aguda negativos y por tanto disminuyen en si-
tuaciones de estrés, lo que va a determinar sus niveles
Composicion corporal plasmáticos. Además, también otros factores, en este
caso nutricionales, pueden limitar su utilidad:
Se debe tener en cuenta la posibilidad de sobrecarga
hídrica (derrame pleural, edemas, ascitis) a la hora de
considerar el peso del paciente. Se puede realizar la 1. 
Albúmina: Sus niveles séricos se correlacionan
medición de las reservas de grasa y músculo mediante bien con el estado de nutrición y tiene utilidad
métodos específicos: impedancia bioeléctrica, DEXA, especialmente como marcador pronóstico. Es
tomografía axial o RM. La impedanciometría se en- una proteína de vida media larga (aproximada-
cuentra disponible en muchas consultas, pero los otros mente 18 días), lo que condiciona que sea poco
métodos por su coste y complejidad no se utilizan de sensible a modificaciones recientes del estado
forma rutinaria. Sin embargo, si no podemos disponer nutricional, y, por tanto, puede mantenerse nor-
de estas técnicas, también podemos recurrir a fórmulas mal durante bastante tiempo a pesar de un défi-
para la estimación de los distintos compartimentos cit nutricional importante. De igual forma, es
corporales. Se utilizarán las ecuaciones de Durnin y posible encontrar un descenso plasmático de al-
búmina sin que exista un déficit nutricional aso-
ciado. Esta situación se observa en caso de enfer-
Tabla 1.  Desnutrición grave según pérdida de medad hepática o renal con síndrome nefrótico
peso/tiempo. o en enteropatías pierde proteínas. En situacio-
nes de expansión de volumen puede observarse
Tiempo Pérdida de peso (%) una hipoalbuminemia por dilución; esto puede
aparecer en pacientes críticos (sepsis, traumatis-
1 semana ≥ 2% mo, cirugía) y en síndromes de realimentación
1 mes ≥ 5% (en este caso, es signo de mal pronóstico). La al-
buminemia (junto con la PCR o VSG) es un buen
3 meses ≥ 7,5% índice de laboratorio para valorar la respuesta
6 meses ≥ 10% inflamatoria sistémica que desarrollan los pa-
cientes y tiene un alto valor predictivo positivo
Modificada de Ottery, FD (1994). para prever comorbilidades. Cifras inferiores a
Tema 40.  Valoración y soporte nutricional en el paciente oncológico 641

Nombre: Cama:
Nº historia: Código de dieta: Fecha:
Basado en que los requerimientos habituales de los pacientes oscilan entre
1800-2200 kcal y 80-120 g de proteínas.
1 punto equivale a 200 ≈ kcal y 10 g de proteínas

Desayuno

2 1,5 1 0,5 0

Comida

4 3 2 1 0

Cena

4 3 2 1 0

Extras

1 0,75 0,5 0,25 0

Rodee con un círculo en cada comida la opción que se adapte mejor a la ingesta del paciente
(todo el menú, mitad, un cuarto, nada).

Valoración de la ingesta por puntos: TOTAL................. puntos

8 puntos o más Ingesta adecuada


5 puntos o más Ingesta moderada
4 puntos o menos Ingesta pobre

Plan de acción en el hospital:


Si ingesta pobre durante 2 o más días Valoración por personal cualificado
Si ingesta moderada durante 4 o más días Valoración por personal cualificado

Figura 2.  Valoración de la ingesta del paciente hospitalizado.

2,5 g/dl sugieren un elevado riesgo de complica- concentración se correlacionan positivamente


ciones8, 9. con el balance nitrogenado10, 11.
2. Transferrina: Se trata de una proteína de vida me- 3. Prealbúmina: Es más sensible que las dos anteriores
dia más corta que la albúmina (8 días), por lo que en detectar cambios en el estado nutricional7, ya
es más sensible para detectar cambios recientes que tiene una vida media más corta (2 días). Se ele-
en el estado nutricional. Es necesario saber que, va rápidamente en respuesta al tratamiento nutri-
en estados de depleción o exceso de hierro, la cional, y tiene una buena correlación con el balance
transferrina se encuentra elevada o disminuida, nitrogenado. Un descenso en los niveles de prealbú-
respectivamente. Es más más útil en el segui- mina se acompaña de complicaciones hasta en un
miento de los pacientes que en la valoración nu- 40% de los casos12. Sin embargo, se trata también
tricional inicial, ya que las modificaciones en su de un reactante negativo de fase aguda y, por tan-
642 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

Tabla 2.  Determinación de proteínas plasmáticas

Albúmina Transferrina Prealbúmina RBP


Valor normal 3,5-4,5 g/dl 250-350 mg/dl 18-28 mg/dl 2,6-7 mg/dl
Depleción leve 2,8-3,5 g/dl 150-250 mg/dl 15-18 mg/dl 2-2,6 mg/dl
Depleción moderada 2,1-2,7 g/dl 100-150 mg/dl 10-15 mg/dl 1,5-2 mg/dl
Depleción grave < 2,1 g/dl < 100 mg/dl < 10 mg/dl < 1,5 mg/dl

to, disminuye en caso de infección, traumatismo, utilizar herramientas más específicas para monitorizar
cirugía, etc. En situaciones de insuficiencia renal la capacidad funcional, como la estimación de la fuer-
puede verse aumentada su concentración plasmáti- za muscular mediante el empleo del dinamómetro o la
ca, ya que tiene una excreción principalmente renal. realización de tests como el de caminata.
4. Proteína ligadora del retinol (RBP): Esta proteína
es la de vida media más corta (12 horas). Su aumen- 5.  Recomendaciones dietéticas
to tiene una sensibilidad moderada (65%) para
detectar un balance nitrogenado positivo, pero 5.1.  Consejo nutricional
muy baja especificidad. Se encuentra disminuida
En el paciente oncológico es primordial preservar un
en caso de deficiencia de vitamina A y aumentada
óptimo estado nutricional, ya sea en la fase de trata-
en la insuficiencia renal, ya que se excreta funda-
miento activo de la enfermedad, en el período tras el
mentalmente a través del riñón.
tratamiento o en la remisión para mejorar el estado fí-
sico y la capacidad funcional del paciente.
Otros parámetros Los objetivos del tratamiento nutricional son:
El nivel de colesterol, el recuento de linfocitos o la
creatinina también se han empleado como indicadores • Evitar o revertir las carencias de nutrientes.
del estado nutricional del paciente. • Conservar la masa magra.
Diversos estudios demuestran que la disminución de • Ayudar a tolerar mejor los tratamientos.
los niveles séricos de colesterol total se asocia a un in- • Proteger la función inmune.
cremento del riesgo de mortalidad en ancianos. Se • Reducir la astenia.
consideraría como normalidad los valores de colesterol • Mejorar la calidad de vida.
sérico total 130-160 mg/dl y como desnutrición si son
< 130 mg/dl7. La intervención nutricional ha demostrado una mejoría
Se conocen desde hace tiempo las relaciones entre la en los resultados clínicos de algunos tipos de cáncer (ca-
inmunidad y el estado nutricional. La desnutrición es beza y cuello) y con algunos tratamientos (quimioterapia)
capaz de alterar los mecanismos de defensa del hués- donde hay una alta prevalencia de reducción de la ingesta
ped; por ello, se ha empleado el recuento total de lin- sin que existan alteraciones metabólicas importantes16, 17.
focitos como marcador del estado nutricional. El pro- En otros pacientes con anorexia muy acentuada y alte-
blema, es que el sistema inmunitario también es raciones metabólicas el soporte nutricional adecuado
sensible en otras múltiples vías no relacionadas con la puede mitigar las alteraciones pero no revertirlas total-
nutrición. Hay que dudar de sus valores ante trata- mente18, 19. Los pacientes con screening anormal, por tan-
mientos quimioterápicos, con corticoides, después de to, necesitan seguimiento para una evaluación más espe-
la cirugía, en la edad avanzada, etc. De hecho, no se ha cífica del origen y severidad de los trastornos nutricionales
observado correlación entre el número total de linfoci- y metabólicos para detectar qué pacientes podrían bene-
tos y otros parámetros nutricionales, incluidas las me- ficiarse de intervenciones apropiadas. Se precisa de mayor
didas antropométricas, los marcadores bioquímicos y investigación para mejorar la identificación precoz de este
el Mini Nutritional Assessment (MNA), por lo que no se tipo de pacientes (por ejemplo, uso de análisis de la com-
considera que este marcador sea útil para evaluar el posición corporal para detectar la pérdida de masa mus-
estado de nutrición de la población adulta o anciana13. cular o biomarcadores de inflamación) y mejorar la efica-
cia de la intervención3.
En principio, se deben seguir las recomendaciones die-
4.2.4.  Actividad fisica
téticas para la población general, intentando que la dieta
La actividad física puede ser medida usando la escala sea variada y contenga al menos cinco raciones diarias de
de la OMS/ECOG (0 actividad física normal; 4 encama- frutas y verduras. El principal problema al que nos en-
do)14 o la escala de Karnofsky15. También se pueden frentamos en pacientes oncológicos es que la ingesta
Tema 40.  Valoración y soporte nutricional en el paciente oncológico 643

se ve limitada tanto por la anorexia inducida por el tu- tratamiento es de 6 semanas o más. El acetato de
mor como por los efectos secundarios de los trata- megestrol está considerado como un fármaco re-
mientos a los que son sometidos, que producen nume- lativamente no tóxico, con baja incidencia de
rosos efectos adversos gastrointestinales. Por ello, efectos adversos. La dosis más habitual es de
debemos proporcionar al paciente consejos dietéticos 320-480 mg/día. En dosis > 800 mg/día podría
para escoger los alimentos que mejor van a tolerar. Las existir un aumento del riesgo de trombosis venosa,
principales normas para la alimentación durante el tra- por lo que hay que tener precaución en pacientes
tamiento antitumoral se recogen en la tabla 3. con factores predisponentes. Tras tratamientos
Se recomienda, para garantizar un correcto aporte prolongados se puede producir insuficiencia supra-
calórico, intentar repartir la ingesta en cinco tomas al rrenal22.
día, con comidas pequeñas y frecuentes e intentando • Ciproheptadina: es un potente antagonista de la
que el desayuno contenga un 30% de las necesidades histamina y la serotonina. Se ha encontrado que
calóricas diarias. aumenta el apetito en pacientes con cáncer avan-
zado, aunque sin resultado positivo sobre el peso,
5.2. Tratamiento farmacológico para la anorexia salvo en aquellos con síndrome carcinoide. Un
y la caquexia efecto adverso de su uso es la sedación, lo que li-
mita su utilización en pacientes con cáncer avan-
Otro problema muy frecuente en pacientes oncoló- zado por el riesgo de empeoramiento cognitivo.
gicos es la anorexia, que puede hacer fracasar el so- Actualmente no se recomienda su uso generaliza-
porte nutricional oral, porque el paciente es incapaz do como estimulante del apetito.
de cubrir sus necesidades energéticas. Para combatir- • Mirtazapina: es un antidepresivo tetracíclico que
la, disponemos de distintos tratamientos farmacoló- aumenta la liberación de noradrenalina y seroto-
gicos20, 21: nina y también es antagonista de los receptores
serotoninérgicos. A dosis de 15 a 30 mg/día, ha
• El acetato de megestrol (AM) en dosis de 160 a demostrado mejoría del apetito y de la calidad de
1600 mg/día, mejora el apetito y logra aumento vida en pacientes con cáncer. Pese a que puede
de peso en pacientes con cáncer, aunque no ha ser eficaz en la caquexia relacionada con el cáncer,
demostrado un aumento de la masa magra, ni de se necesitan estudios antes de poder recomendar
la supervivencia. La duración recomendada del su uso en las guías de práctica clínica.

Tabla 3.  Consejos dietéticos durante el tratamiento antineoplásico.

Problemas Dieta Alimentos a evitar


Náuseas y Líquidos claros, no grasos y no ácidos Lácteos, sopas de cremas, fritos, postres
vómitos dulces
Hipogeusia Dieta habitual con alimentos muy Alimentos blandos, carnes simples,
condimentados alimentos sin sal
Disgeusia Dieta habitual con muchos alimentos fríos, Carnes rojas, chocolate, café, té
productos lácteos. Animarlos a probar nuevos
alimentos
Xerostomía Alimentos que estimulan la salivación, ácidos Alimentos secos como pan, galletas,
o muy dulces. Alimentos húmedos (salsas, plátanos. Alimentos muy calientes.
sopas, cereales con leche, etc.) Alimentos grasos
Esofagitis Dieta líquida y blanda Cítricos, alimentos crujientes o crudos,
alimentos muy fríos o muy calientes
Saciedad precoz Comidas pequeñas y frecuentes, introduciendo Comidas muy grasas
alimentos de alta densidad calórica
Estreñimiento Dieta habitual con fibra añadida –
Aumentar la ingesta hídrica
Neutropenia Dieta con alimentos bien cocinados Alimentos crudos, quesos o miel sin
pasteurizar, condimentos secos añadidos
tras la cocción, suplementos de herbolario
644 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

• Corticoides: los más empleados son dexametaso- 5.3.  Vitaminas y oligoelementos


na, prednisolona y metil-prednisolona. Han de-
mostrado mejorar el apetito, disminuir las náuseas En todos los pacientes malnutridos hay un riesgo de
y mejorar la calidad de vida, aunque no mejorar el deficiencia de micronutrientes, especialmente de vita-
peso. Su mecanismo de acción está probablemen- minas hidrosolubles. En relación con los requerimien-
te relacionado con sus propiedades antiinflamato- tos de elementos traza y vitaminas hidrosolubles en los
rias y euforizantes. El efecto antianorético de los pacientes oncológicos, la American Cancer Society ha
corticosteroides es transitorio y desaparece tras establecido que, debido al pobre patrón alimentario
unas semanas, cuando la miopatía y la inmunosu- que presentan muchos pacientes, el empleo de un
presión se hacen evidentes. Además, también pro- multi-vitamínico en dosis fisiológicas es una medida
ducen insulinorresistencia a corto plazo y osteope- segura y útil, también durante la quimio y la radiotera-
nia a largo plazo22. Debido a sus efectos adversos pia. Sin embargo, muchos pacientes consumen suple-
se recomienda únicamente para ciclos cortos de mentos vitamínicos en dosis muy superiores a las reco-
tratamiento, o en pacientes con una corta espe- mendadas. La utilización de megadosis de vitaminas,
ranza de vida especialmente si tienen otros sínto- no ha demostrado efectos beneficiosos11, y la utiliza-
mas, como dolor o náuseas que puedan mejorar ción de determinados suplementos a dosis altas, podría
con este tratamiento. En ciclos más prolongados incluso resultar perjudicial. Durante la quimioterapia
de tratamiento, es preferible el acetato de meges- con metotrexato u otros antimetabolitos que actúan por
trol. un mecanismo antifolatos, existen dudas sobre la segu-
• Anabolizantes: debido a que en el cáncer existe un ridad del uso de suplementos de ácido fólico, ya que
descenso de la masa muscular, los derivados de la podrían disminuir la eficacia de dichos tratamientos. En
testosterona se han considerado como una posi- general, no se recomienda el uso de vitaminas en canti-
ble opción terapéutica. Aunque han demostrado dades superiores a las RDA. Las principales recomenda-
efectos positivos en algunos ensayos clínicos, son ciones de la toma de vitaminas elaboradas por el Institu-
menos efectivos que el acetato de megestrol y los to Americano del Cáncer se recogen en la tabla 423, 24.
corticoides. Su uso tiene efectos anabólicos al in- El déficit de vitamina D es altamente prevalente en los
crementar la síntesis proteica, especialmente en pacientes oncológicos, debido a la menor exposición so-
células musculares, pero también virilizantes y lar y a la disminución de la ingesta. Existen estudios que
afectan al comportamiento. Los moduladores se- correlacionan el déficit de vitamina D con la incidencia y
lectivos del receptor de andrógenos actúan selec- el pronóstico de determinados tipos de cáncer, aun-
tivamente sobre el músculo. Se encuentra en estu- que se necesitarían estudios prospectivos para probar
dio en fase II el primer agente de esta clase: estas observaciones. En cualquier caso, debido a los
enobosarm, que ha demostrado incrementar la conocidos efectos beneficiosos de la vitamina D sobre
masa magra, la fuerza y la velocidad. el sistema muscular y esquelético, se recomienda de-
• Dronabinol, comercializado en EEUU, es una forma terminar las niveles de vitamina D en el paciente onco-
sintética de terahidrocannabinoide (el componente lógico y suplementar para alcanzar la cifra recomenda-
activo de la marihuana), y también se ha empleado da (>30 ng/dl), igual que en población general.
como estimulante del apetito y como antiemético. En general, el uso de dosis altas de micronutrientes
Los cannabinoides se unen a los receptores del sis- debe evitarse. Pese a esto, se estima que aproximada-
tema endocannabinoide, que regulan el apetito, el mente el 50% de los pacientes oncológicos, utiliza pro-
dolor y funciones de la memoria. Han demostrado ductos o medicinas alternativas con dosis altas de vita-
propiedades psicoactivas, produciendo efectos se- minas y antioxidantes. Un metanálisis con 68 estudios
cundarios como vértigo, psicosis y alteraciones car- no halla ningún efecto beneficioso de la toma de an-
diovasculares. Los efectos sobre el apetito son va- tioxidantes, sino una mortalidad ligeramente superior
riables, con escasos resultados sobre el peso. en aquellos pacientes que consumían betacaroteno,
Ensayos cínicos que han comparado su eficacia con vitamina A o vitamina E25.
el acetato de megestrol, han demostrado la supe-
rioridad de este último. 6.  Soporte nutricional
Otros estimuladores del apetito: la grelina ha de-
mostrado aumentar el apetito en sujetos sanos y La vía preferida para lograr una nutrición adecuada es
con cáncer. Sin embargo, su uso clínico se ve limi- la oral, intentando primero una modificación en la dieta
tado por la corta vida media y la necesidad de ad- tradicional. Cuando pese a estas modificaciones el pa-
ministración parenteral, por lo que no está actual- ciente presente carencias nutricionales, nos planteare-
mente comercializado. La anamorelina, un análogo mos avanzar el soporte nutricional, con la prescripción
de la grelina, ha demostrado que mejora el apetito, de suplementos. Se recomienda la prescripción de nutri-
el peso corporal y la masa magra, en estudios en ción enteral, en pacientes malnutridos o si la ingesta oral
fase III, aunque todavía no está disponible. se estima que va a ser inadecuada incluso si están bien
Tema 40.  Valoración y soporte nutricional en el paciente oncológico 645

Tabla 4.  Suplementos dietéticos durante el tratamiento antineoplásico.

· La suplementación con antioxidantes aislados o de forma combinada por encima de


las RDA no puede recomendarse como una práctica segura o efectiva.
· El empleo de altos niveles de antioxidantes (vitaminas A, E y C, selenio, flavonoides)
no es aconsejable, pues podría tener consecuencias perjudiciales sobre las células
normales vía efecto prooxidante o conferir ventaja a las células tumorales.
· No existe evidencia para recomendar el uso rutinario de vitamina E en pacientes que
reciben quimio o radioterapia.
· Los pacientes oncológicos deben recibir una dieta que proporcione vitamina C en
cantidades RDA y que no supere el doble de estas recomendaciones.
· Los pacientes con cáncer no deberían tomar dosis altas de beta-carotenos.
· No hay evidencia suficiente para realizar recomendaciones sobre el aporte de selenio.
· La falta de información sobre las interacciones de sustancias antioxidantes aconseja
precaución sobre el uso indiscriminado de antioxidantes.
· No se pueden hacer recomendaciones en el momento actual sobre derivados de
soja. Los suplementos que contienen isoflavonas no se aconsejan porque contienen
cantidades muy superiores a las de la dieta.
· No se pueden hacer recomendaciones en el momento actual sobre el aporte de
vitamina D.
· Un complejo multivitamínico que contenga las RDA, puede ser utilizado con
tranquilidad como parte de un programa de alimentación que contenga 5-10 raciones
diarias de fruta y verduras.

nutridos (dieta absoluta durante al menos 1 semana, o sujetos sanos. Respecto a los distintos tipos de cáncer,
< 60% del gasto energético estimado durante 1-2 se- algunos autores han publicado que el gasto energético
manas). La nutrición parenteral la reservaremos como en reposo es normal en pacientes con cáncer gástrico
última opción terapéutica cuando no se pueda o deban o colorrectal y aumentado en pacientes con tumores
emplear las anteriores opciones. pancreáticos o pulmonares26.
Evidencia del soporte nutricional: la terapia nutricional
en el paciente oncológico desnutrido o en riesgo de des- 6.1.2.  Gasto energético total
nutrición ha demostrado mejorar el peso corporal, la in-
gesta energética y la calidad de vida, sin haber demostra- Respecto al gasto energético total, este valor parece
do cambios sobre la supervivencia. Los mejores resultados ser inferior al esperado en pacientes oncológicos respec-
se obtienen cuando además de prescribir suplementos to a sujetos sanos, debido principalmente a una reduc-
nutricionales en aquellos pacientes que fuera necesario, se ción en la actividad física. Sin embargo, hay que tener
realiza un consejo nutricional adecuado para el paciente20. en cuenta que pequeñas diferencias entre la ingesta y el
gasto van a causar pérdida ponderal. Por tanto, lo ade-
cuado es iniciar el soporte nutricional asumiendo que el
6.1.  Cálculo del gasto calórico
gasto energético total es similar a los sujetos control. Se
Para poder realizar el soporte nutricional inicialmen- puede predecir el gasto energético total utilizando la
te debemos estimar las calorías y macronutrientes que fórmula estándar para el cálculo del gasto energético en
necesita nuestro paciente. reposo teniendo en cuenta los valores de corrección se-
gún actividad física y estrés (en torno a 25-35 kcal/kg)
6.1.1.  Gasto energético en reposo (tabla 5). Se pueden hacer determinaciones más preci-
sas mediante el empleo de la calorimetría indirecta y
Existe evidencia de que el gasto energético en reposo monitores portátiles de actividad física, pero no están
está elevado en algunos pacientes oncológicos, princi- disponibles en la mayoría de los centros para su uso ru-
palmente en aquellos con tumores activos o tras la ciru- tinario. De cualquier forma, durante el seguimiento del
gía. Tras la quimioterapia, si esta es efectiva se reduce el paciente se debe modificar el soporte nutricional según
gasto energético en reposo, debido a la disminución de la evolución del peso y la masa muscular.
los mediadores inflamatorios.
La determinación del gasto energético en reposo
6.2.  Necesidades proteicas
mediante calorimetría indirecta (el gold standard), ha
demostrado que este puede estar aumentado, dismi- El aporte proteico óptimo para el paciente oncológi-
nuido o sin cambios en pacientes oncológicos frente a co no se ha establecido y las recomendaciones de los
646 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

Tabla 5.  Estimación de las necesidades calóricas en pacientes oncológicos.

SITUACIÓN DEL PACIENTE NECESIDADES ENERGÉTICAS


Replección calórica, ganancia ponderal 30-35 kcal/kg/día
Paciente no estresado, inactivo 25-30 kcal/kg/día
Paciente estresado, hipermetabólico 35 kcal/kg/día
Trasplante hematopoyético 30-35 kcal/kg/día
Sepsis 25-30 kcal/kg/día

Leser M et al. Oncology Nutrition for Clinical Practice. 2013.

expertos varían entre un aporte mínimo de 1 g/kg/día 6.3.  Síndrome de realimentación


hasta 1,2-2 g/kg/día27, especialmente si existe inactivi-
dad e inflamación sistémica. El síndrome de realimentación, se debe tener en cuen-
Los pacientes ancianos, con limitación de la actividad ta a la hora de iniciar el soporte nutricional en pacientes
física y aquellos con respuesta inflamatoria sistémica oncológicos gravemente desnutridos. Se define como la
presentan resistencia anabólica, es decir, una menor res- alteración en fluidos y electrolitos que puede ocurrir en
puesta a la síntesis proteica. Las recomendaciones basa- pacientes desnutridos que reciben soporte nutricional.
das en la evidencia para enfermos crónicos ancianos Estos cambios resultan de alteraciones metabólicas y hor-
proponen un aporte de proteínas de 1,2 a 1,5 g/kg/día. monales que se producen al introducir la alimentación de
En una revisión de la literatura reciente28 se observó forma no progresiva en un paciente gravemente desnu-
que la dosis de proteínas necesaria para lograr un ba- trido y puede causar complicaciones clínicas graves.
lance positivo en pacientes oncológicos es cercana a En pacientes con limitación de la ingesta durante al
2 g/kg/día, ya que la hiperaminoacidemia consigue menos 5 días se recomienda no administrar más del
restablecer la respuesta proteica anabólica normal. 50% de las necesidades energéticas calculadas los dos
En sujetos con función renal normal, es seguro a ad- primeros días de soporte nutricional. En aquellos con
ministrar hasta 2 g/kg/día, pero en aquellos con insufi- una desnutrición grave no se debe administrar más de
ciencia renal aguda o crónica no se debe exceder la 5-10 kcal/kg/día inicialmente, y luego ir aumentando
dosis de 1 o 1,2 g/kg/día, respectivamente. lentamente el aporte hasta llegar a cubrir las necesida-
La síntesis muscular proteica en pacientes con cán- des energéticas. Se debe monitorizar el balance hídrico,
cer puede activarse en respuesta a la suplementación la frecuencia cardiaca, vigilar la aparición de edemas y
dietética con aminoácidos, aunque los requerimien- el estado clínico del paciente. Se recomienda adminis-
tos son superiores a la población general. Para lograr trar antes y durante el inicio del soporte nutricional, vi-
restablecer la síntesis proteica se deben administrar tamina B1 en dosis de 200-300 mg/día. Además, se
kcal no proteicas en cantidad suficiente para lograr deben monitorizar los niveles de potasio magnesio y
que el nitrógeno pueda emplearse en la síntesis pro- fosfato para suplementarlos si fuera necesario20.
teica; en pacientes oncológicos este cociente es apro-
ximadamente 100 kcal no proteicas/g nitrógeno20. Es 6.4.  Inicio del soporte nutricional
decir, aunque proporcionemos una cantidad elevada
de proteínas, no se logrará una síntesis proteica ade- Actualmente no existen datos para definir el momen-
cuada sin kilocalorías no proteicas, por lo que es más to óptimo de inicio de soporte nutricional. Sin embar-
razonable realizar los cálculos de 1-1,5 g/kg/día, te- go, la desnutrición se asocia con peor pronóstico y la
niendo en cuenta el grado de estrés y la situación clí- desnutrición grave, una vez establecida, es difícil de re-
nica del paciente. vertir en pacientes oncológicos, por lo tanto el soporte
nutricional se debe iniciar precozmente, siempre que
los objetivos del tratamiento incluya, mantener o mejo-
6.2.1.  Tipos de aminoácidos rar el estado nutricional. Se debe ofrecer soporte nutri-
Existe un consenso general de que la mayoría de los cional a pacientes con riesgo de desarrollar anorexia o
pacientes oncológicos que precisan soporte nutricional efectos secundarios gastrointestinales derivados del tra-
durante un período corto de tiempo no precisan mez- tamiento antineoplásico. En pacientes gravemente des-
cla de aminoácidos especiales, sino proteínas de buena nutridos en tratamiento activo, se debe ofrecer soporte
calidad de origen animal, pescado, lácteos y vegetales nutricional inmediatamente.
y, como hemos visto, en cantidades superiores a la po- Además de mejorar la salud, una ingesta adecuada
blación general. tiene un papel importante en la estabilización psicoló-
Tema 40.  Valoración y soporte nutricional en el paciente oncológico 647

gica y en las interacciones sociales influyendo, por tan- general. Optando por accesos permanentes (gastrosto-
to, en la calidad de vida. El consejo nutricional debe mía, yeyunostomía), cuando tengamos que prolongar
estar dirigido a mantener y mejorar estos aspectos te- el soporte nutricional más allá de las 4-6 semanas. Pero
niendo en cuenta los hábitos y preferencias del pacien- existen situaciones clínicas presentes en estos pacientes
te. Se deben poseer estrategias de comunicación ade- que pueden requerir la realización temprana de un ac-
cuada para asegurar el cumplimiento de las pautas ceso enteral (disfagia mecánica, mucositis), en ocasio-
individualizadas dadas al paciente20, 29. nes sin haber utilizado previamente SNG o colocar ac-
cesos permanentes profilácticos, por ejemplo, en un
6.5.  Tipo de soporte nutricional paciente que pueda presentar mucositis o que tenga
un tumor no operable cuyo crecimiento impida la utili-
Generalmente, el primer tipo de soporte nutricional zación del tracto digestivo superior.
debe ser en forma de consejos nutricionales para tratar Aunque existe debate sobre las indicaciones para co-
de aliviar los síntomas y fomentar el consumo de ali- menzar el soporte nutricional en los pacientes oncológi-
mentos de alto contenido calórico y de aquellos líqui- cos, en general, la práctica clínica, las contraindicacio-
dos que pudieran ser mejor tolerados. Una dieta de nes, las complicaciones y la monitorización del soporte
alto valor calórico, con una ingesta adecuada de pro- nutricional no difieren de los pacientes con patología
teínas, debe ser el primer escalón para mejorar o man- benigna. Sí hay que tener en cuenta los aspectos éticos
tener el estado nutricional. Se debe individualizar el de prolongar el soporte nutricional hasta el final de la
consejo dietético teniendo en cuenta no solo las prefe- vida. Pero debemos sopesar las posibles complicaciones
rencias del paciente, sino también los efectos secunda- y la falta de eficacia del tratamiento frente a las ventajas
rios derivados del tratamiento y su impacto sobre la fisiológicas o psicológicas que pueda aportar a un deter-
alimentación (hiperemesis, mucositis, xerostomía, alte- minado paciente o a su familia31.
raciones del vaciado gástrico, de la digestión, etc.). Se
debe plantear el uso de tratamientos encaminados a
mejorar estos síntomas, como antieméticos, procinéti- 6.5.1.  Suplementos orales
cos, enzimas pancreáticas, en aquellos pacientes que Indicados en pacientes que cubren al menos el 60%
pudieran precisarlo, como parte del plan de tratamiento de sus necesidades con la alimentación tradicional.
nutricional. Se deben dar consejos en cuanto a prepara- No existen datos que apoyen el uso de suplementos
ción de alimentos, modificación de texturas, distribu- específicos para pacientes oncológicos, por lo que, en
ción de las tomas, que deben ser pequeñas y frecuentes, general, se pueden prescribir las fórmulas estándar. La
y cómo enriquecer los platos para lograr un mayor excepción son aquellos pacientes que vayan a ser some-
aporte calórico y proteico. Cuando no se logran los ob- tidos a tratamiento quirúrgico. En estos, las fórmulas
jetivos con la dieta tradicional enriquecida planteare- enriquecidas con arginina y otros inmunonutrientes,
mos la prescripción de suplementos orales. La existen- han demostrado beneficios adicionales32, aunque los es-
cia de algoritmos de diagnóstico y soporte nutricional tudios se han realizado con soporte enteral, por lo que
permiten una mayor eficiencia y logran que se benefi- la fórmula constituiría la principal fuente alimentaria.
cie un mayor número de pacientes21, 30 (figura 3). Para aquellos pacientes con hiporexia o sensación de
Los pacientes oncológicos que no logran un adecua- saciedad precoz, los suplementos más adecuados se-
do estado nutricional son candidatos a soporte nutri- rían los de elevada densidad calórica (≥ 1,5 kcal/ml) e
cional especial, con indicaciones idénticas al resto de hiperproteicos. Estos deben administrarse de forma
pacientes. Sin embargo, hay que tener en cuenta que que no disminuyan el apetito del paciente en las comi-
en pacientes terminales el objetivo primordial va a ser das principales, por lo que resulta útil tomarlos entre
la mejora de la calidad de vida, ya que no se ha demos- ellas y antes de acostarse.
trado una mejoría en la supervivencia y, por tanto, no
debemos someter al paciente a intervenciones agresi-
vas que supongan una merma en su bienestar. 6.5.2.  Nutrición enteral
La vía preferida para el soporte nutricional será la diges- No existe evidencia que apoye la utilización de NE
tiva, aunque en casos de insuficiencia intestinal severa en pacientes normonutridos que vayan a ser someti-
debido, por ejemplo, a enteritis por radiación, carcinoma- dos a quimioterapia, radioterapia o trasplante de mé-
tosis peritoneal o resecciones intestinales, se deberá utili- dula ósea32. Sin embargo, existe debate con la actitud
zar la vía parenteral. En general, los riesgos de la nutrición a seguir en los pacientes oncológicos que se vayan a
parenteral superan su beneficio en pacientes con un pro- someter a cirugía abdominal mayor:
nóstico vital inferior a 2 meses, por lo que se debe sopesar
cuidadosamente su indicación en pacientes terminales. • La Asociación Europea de Nutrición Enteral y Paren-
La vía de nutrición enteral dependerá de la situación teral (ESPEN) recomienda la administración de NE
clínica y la patología de base del paciente. De modo preoperatoria durante 5-7 días, preferiblemente
rutinario, se siguen los algoritmos para la población con inmunonutrientes (arginina, ácidos grasos ω-3
648 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

¿Posibilidad Paciente oncológico adulto


de terapia SÍ
oncológica? Valoración nutricional
NO
Algoritmo Malnutrición Malnutrición grave
de paliativos Normonutrido (A) moderada o riesgo de (C), independientemente
malnutrición (B) del tipo de tratamiento

Terapia de
bajo riesgo Terapia de Terapia de Terapia de Terapia de Terapia de
riesgo moderado alto riesgo bajo riesgo riesgo moderado alto riesgo

· Recomendaciones
· Educación dietéticas específicas · R ecomendaciones dietéticas específicas
nutricional básica · Control de síntomas · C ontrol de síntomas
· Recomendaciones ·D  ieta hiperproteica
· S uplementos nutricionales ·N  utrición enteral
dietéticas generales
o
· Control de síntomas
· R ecomendaciones dietéticas específicas · Nutrición parenteral
· C ontrol de síntomas
·D  ieta hiperproteica

Reevaluación a los 15 días Reevaluación a los 15 días Reevaluación a los 15 días

Estable
Con deterioro Si mejora Con deterioro Si mejora Estable
Estable
Control periódico Control periódico · Nutrición enteral ·N utrición enteral
o Suplementos o
Suplementos nutricionales Suplementos nutricionales · Nutrición parenteral nutricionales orales · Nutrición parenteral
orales y control periódico orales y control periódico y control periódico

Adaptado de Candela CG, Pérez LL, Auñón PZ, Suárez LR, Pére SC, Monzón, et al. Algoritmos de evaluación y tratamiento
nutricional en el paciente adulto con cáncer. Soporte nutricional en el paciente oncológico. 2004; 265-84.
Figura 1.  Algoritmo de soporte nutricional.

y nucleótidos) independientemente del estado nu- Selección de la fórmula


tricional (grado de evidencia A)20, 29.
En general, se emplearán fórmulas poliméricas es-
• La Asociación Americana de Nutrición Enteral y Pa-
tándar. Existen estudios que han evaluado la utiliza-
renteral (ASPEN), no indica el soporte enteral ruti-
ción de fórmulas con inmunonutrientes34, que han
nario en todos los pacientes quirúrgicos. Solo en
demostrado beneficios cuando se administran de for-
aquellos moderada o severamente desnutridos, y si
ma pre y postoperatoria, a pacientes que van a ser
se va a mantener al menos durante 7 días33.
sometidos a cirugía35. Se ha observado una reducción
Para el resto de los pacientes no quirúrgicos, la NE de marcadores inflamatorios y una mejoría en los pa-
está indicada en aquellos pacientes desnutridos o en rámetros de respuesta inmune, con disminución de
riesgo de desnutrición que no puedan, no quieran, o las complicaciones postoperatorias y reducción de la
no deban, comer por vía oral, siempre que se pueda estancia hospitalaria, aunque sin mejorar la supervi-
lograr un acceso enteral seguro. Dado que la NE no se vencia36.
considera una medida extraordinaria, las únicas con- La inmunonutrición se refiere a la utilización de nu-
traindicaciones generales son aquellas derivadas de trientes específicos para lograr un beneficio clínico. Las
patología gastrointestinal severa, en las que sea nece- fórmulas más empleadas contienen una combinación
sario el reposo del tracto digestivo. de arginina, ácidos grasos ω-3 y nucleótidos. Tras la
La nutrición enteral se deberá considerar cuando la in- publicación de las guías clínicas de la ASPEN en 2009,
gesta del paciente cubre < 60% de sus necesidades ener- que recomendadan el uso de fórmulas inmunomodu-
géticas. El empleo de NE ha demostrado menor número ladoras, varios metanálisis han confirmado el beneficio
de complicaciones y menor coste que el uso de NPT en de su utilización de forma perioperatoria, ya que pare-
pacientes con cáncer, por lo que debería ser la ruta prefe- cen disminuir la incidencia de complicaciones y la es-
rida de soporte nutricional siempre que sea posible. tancia hospitalaria. Sin embargo, limitan su empleo a
Tema 40.  Valoración y soporte nutricional en el paciente oncológico 649

pacientes malnutridos o que no vayan a poder alimen- demuestren que añadidos a la dieta tengan efectos
tarse de forma oral >7 días32. beneficiosos, pero en experimentos animales sí han de-
mostrado una mejoría de la respuesta inmune, por lo
que son componente habitual de las fórmulas inmuno-
Inmunonutrientes
moduladoras32.
Omega 3: se ha postulado que por sus propiedades Otros componentes especiales sin acción inmuno-
antiinflamatorias y de reducción de los niveles de cito- moduladora: leucina o HMB.
cinas, podría tener un papel en la caquexia cancerosa, La sarcopenia es la característica principal de la ca-
reduciendo la pérdida de peso y promoviendo la recu- quexia oncológica, debido a la presencia de resistencia
peración ponderal. Se han realizado numerosos estu- anabólica, se dificulta la incorporación de aminoácidos al
dios con resultados contradictorios, por lo que la bi- músculo. El ß-hidroxi-ß-metil butirato (HMB) es un meta-
blioteca Cochrane realizó una revisión sistemática bolito de la leucina que se emplea como suplemento
publicada en 200737. En dicha revisión se concluye que ­dietético para aumentar la fuerza y la masa m­ uscular en
no parece haber una mejoría significativa en el trata- el entrenamiento de resistencia, minimizando la pérdida
miento de síntomas con los suplementos enriquecidos muscular por sus efectos anticatabólicos. Con estas pre-
con omega-3, con respecto a aquella obtenida de los misas se ha incorporado a SNO para mejorar la sarcope-
pacientes que reciben un suplemento nutricional con nia. Sus efectos sí se han documentado en pacientes sa-
altos contenidos de calorías y proteínas. Incluso parece nos, pero en pacientes ancianos y enfermos no existen
que si se asocia con acetato de megestrol, se podría datos que permitan hacer recomendaciones para su uso21.
reducir la eficacia de este. Sin embargo, varios ensayos
clínicos, han documentado efectos beneficiosos sobre
6.5.3.  Nutrición parenteral
todo en los pacientes en quimioterapia, logrando una
mejoría en composición corporal, apetito, morbilidad y Su uso estaría indicado en aquellos pacientes malnu-
calidad de vida. La evidencia actual no permite hacer tridos, candidatos a tratamiento antitumoral que no son
recomendaciones, pero en caso de emplearlo, los be- candidatos a recibir NE, por tracto digestivo no funcio-
neficios se han obtenido con dosis de al menos 2 g/día. nante o estando normonutridos que no pueden utilizar
Arginina: es un aminoácido condicionalmente esen- el tracto digestivo durante un periodo prolongado.
cial, con efectos inmunomoduladores, como estimular La NP puede administrarse por vía periférica si se to-
la actividad de los linfocitos T o las células natural killer lera un aporte hídrico elevado o si se emplea como re-
y disminuir los niveles de citocinas proinflamatorias. El fuerzo de otro tipo de nutrición. Para soportes nutri-
hecho de que la L-arginina sea precursor del óxido ní- cionales que se prolonguen más de una semana, es
trico ha llevado a investigar su papel en diferentes pa- preferible la utilización de accesos centrales.
tologías, entre ellas el cáncer. En pacientes oncológicos Aunque existen fórmulas comerciales, se debe formu-
quirúrgicos ha demostrado una reducción de las infec- lar la composición de forma individualizada, para adap-
ciones y el tiempo de ingreso, por lo que las principales tarnos a las necesidades del paciente. Debido a que la
sociedades de nutrición apoyan el empleo de fórmulas glucosa es la fuente energética principal para las células
enriquecidas con arginina en estas situaciones38. neoplásicas, algunos autores han postulado que podría
Glutamina: aminoácido también condicionalmente favorecer el crecimiento tumoral y que, por tanto, se
esencial. Sus niveles descienden en caso de enfermedad podría considerar un aumento del aporte lipídico y una
grave, aunque no se ha probado que esto se deba a un disminución del aporte de glucosa en la fórmula paren-
agotamiento de las reservas. Su suplementación perio- teral. Sin embargo, los estudios que se han hecho no
peratoria, ha demostrado una disminución de infeccio- son concluyentes, por lo que en el momento actual no
nes y complicaciones postoperatorias de pacientes so- existe evidencia para apoyar una formulación específica
metidos a cirugía abdominal, con una reducción de la para pacientes con cáncer40.
estancia media39. Sus principales efectos beneficiosos se En pacientes quirúrgicos con indicaciones de sopor-
han demostrado cuando se administra en NPT. Se ha te parenteral, la adición de glutamina a la nutrición,
especulado sobre el papel que puede desempeñar en la ha demostrado una mejoría en la tasa de complicacio-
estabilización de la membrana celular de las células tu- nes postoperatorias, por lo que se puede considerar su
morales, protegiéndolas contra la acidificación, ya que adición en aquellos pacientes que precisan soporte
estas incorporan y metabolizan la glutamina rápida- parenteral. También en pacientes que van a someterse
mente. Además, la glutamina participa en otros muchos a trasplante de médula ósea y que precisen parenteral,
procesos metabólicos y hasta que queden claramente ha demostrado una disminución en la tasa de infeccio-
esclarecidos sus efectos parece prudente no recomendar nes, aunque no del tiempo de ingreso. En ninguno de
la suplementación con glutamina a largo plazo. los dos grupos de pacientes ha demostrado efectos
Nucleótidos: en la leche materna existen abundantes positivos sobre la supervivencia.
nucleótidos y probablemente sean inmunomodulado- Estudios realizados en pacientes con adenocarcinomas
res en lactantes. En humanos, no existen estudios que intraabdominales avanzados (en los años 80) indicaban
650 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

que en pacientes que precisen nutrición parenteral, las posible optar por cirugías mínimamente invasivas. El
fórmulas enriquecidas con aminoácidos ramificados componente nutricional del protocolo ERAS se basa
podrían suponer una ventaja frente a las estándar para en evitar el ayuno, emplear cargas de carbohidratos
la síntesis de albúmina y el nivel de proteínas41. Ningu- preoperatorias y reinstaurar la dieta oral el primer día
na de las guías clínicas actuales recomienda aminoáci- del postoperatorio.
dos especiales en la nutrición parenteral de pacientes A continuación recogemos algunos de los aspectos
oncológicos, aunque se precisan estudios para esclare- más relevantes de este protocolo:
cer si existirían necesidades especiales.
Pre-operatorio
6.5.4.  Nutrición artificial domiciliaria
Se permite la ingesta de sólidos hasta 6 horas antes
El tratamiento nutricional debe interferir lo menos de la inducción anestésica y de líquidos claros hasta
posible en la actividad habitual del paciente y para ello 2 horas antes en pacientes sin riesgo de aspiración
es muy importante que no suponga un alejamiento de (grado de recomendación A).
su medio. Se debe realizar una sobrecarga de carbohidratos la
Ante la posibilidad de realizar un soporte nutricio- noche anterior y 2 horas antes de la cirugía en la ma-
nal, debemos tener en cuenta los siguientes aspectos: yoría de los pacientes que van a someterse a cirugía
mayor (grado de recomendación B).
• La adecuada tolerancia al soporte nutricional, que Los pacientes que no logran cubrir sus necesidades
debe contribuir a mejorar la calidad de vida. energéticas deben recibir suplementos orales en el pe-
• La situación clínica del paciente, que sea estable para ríodo preoperatorio (grado de recomendación C).
poder permanecer fuera del medio hospitalario.
• Colaboración en el medio familiar, para la admi- Post-operatorio
nistración del tratamiento, la detección de compli-
caciones y tener los conocimientos para resolver- Se debe iniciar la ingesta oral o enteral de forma pre-
las o para derivar al paciente a su equipo de coz tras la cirugía intestinal (grado de recomendación A).
nutrición cuando no sea posible solventar los pro- La ingesta oral de líquidos claros se puede iniciar a
blemas en el domicilio. las pocas horas en pacientes sometidos a resecciones
colónicas (grado de recomendación A).
Las guías de práctica clínica para el uso de nutrición Se debe iniciar el soporte nutricional enteral a las
parenteral domiciliaria (NPD) en pacientes con cáncer 24 horas de la cirugía en aquellos pacientes en los que
en estadios terminales, recomiendan instituir NPD en esté indicado, especialmente:
aquellos pacientes en los que el pronóstico de supervi-
vencia es al menos de meses y que se espera manten- • Desnutrición evidente en el momento de la cirugía
gan NP al menos 6 semanas, siempre que la vía enteral (grado de recomendación A).
no sea posible, que exista un beneficio potencial con la • Cirugía mayor de cabeza y cuello o gastrointesti-
administración de NPD y que el paciente tenga una nal (grado de recomendación A).
buena calidad de vida y soporte familiar27, 42. • En los que se prevé una ingesta oral inadecuada
(< 60%) durante al menos 10 días (grado de re-
6.6. Soporte nutricional en situaciones comendación A).
especiales • Con traumatismo severo (grado de recomenda-
ción A).
6.6.1. Cirugía: Enhanced recovery after surgery
La nutrición enteral debe comenzar a un ritmo bajo
(ERAS)43
(10-máx. 20 ml/h) e incrementar el ritmo según la tole-
La ESPEN recomienda aplicar el protocolo ERAS en rancia para lograr cubrir las necesidades en 5-7 días
todos los pacientes oncológicos que vayan a ser some- (grado de recomendación C). Los pacientes que no lo-
tidos a tratamiento quirúrgico, ya sea con intención gran cubrir sus necesidades energéticas deben recibir
curativa o paliativa. De acuerdo con este protocolo, suplementos orales en el período postoperatorio (grado
todos los pacientes deben ser valorados para evaluar de recomendación C).
el estado nutricional y en aquellos en riesgo se debe
ofertar el soporte nutricional adecuado. El protocolo
6.6.2. Radioterapia
ERAS persigue minimizar el estrés quirúrgico, mante-
ner el estado nutricional, reducir las complicaciones y La radioterapia craneal o cervical produce mucositis,
acortar los tiempos de recuperación. Para esto propo- causando una reducción de la ingesta y pérdida pon-
ne, minimizar el uso de opiáceos, la movilización pre- deral hasta en el 80% de los pacientes. También la ra-
coz, mantener el tracto digestivo funcionante y si es diación pélvica produce síntomas gastrointestinales en
Tema 40.  Valoración y soporte nutricional en el paciente oncológico 651

un porcentaje similar de pacientes. El soporte nutricio- Además, hay que garantizar la seguridad de utilizar los
nal puede disminuir los efectos adversos de la radiote- probióticos en pacientes inmunocomprometidos antes
rapia sobre el estado nutricional del paciente. El conse- de poder realizar recomendaciones.
jo nutricional y la prescripción de suplementos en
aquellos pacientes que lo precisen ha demostrado 7. Resumen
­aumentar la ingesta energética, proteica y la calidad de
vida durante el tratamiento14, 44, con la que se consigue En el paciente oncológico, la desnutrición tiene una
evitar interrupciones en la radioterapia y se pueden elevada prevalencia, lo que hace importante conocer
completar los ciclos planificados. En un estudio de se- las herramientas de la valoración nutricional para po-
guimiento a 6,5 años también se encontró un aumen- der realizar un tratamiento adecuado y precoz en
to de la supervivencia en aquellos pacientes que reci- aquellos pacientes en riesgo. Esta valoración debe,
bieron soporte nutricional durante la radioterapia. Los además, realizarse a intervalos regulares y programa-
objetivos del soporte nutricional deben ser garantizar dos a lo largo de la enfermedad, tanto para detectar
el aporte de energía y proteínas para mantener un ade- cambios en el estado nutricional del paciente como
cuado estado nutricional. No existen recomendaciones para monitorizar la evolución en aquellos pacientes
respecto a nutrientes o suplementos específicos como con soporte nutricional.
los antioxidantes20. La mejoría del estado nutricional contribuye a una
A todos los pacientes que se van a someter a radiote- mejora de la calidad de vida y mayor tolerancia a los
rapia se les debe realizar una valoración nutricional ini- agresivos tratamientos a los que son sometidos, evitan-
cial y a intervalos programados durante el tratamiento. do interrupciones de los mismos.
El soporte nutricional se realizará de forma precoz en Hay que individualizar el tipo de soporte nutricional
aquellos pacientes que lo precisen, debiendo monitori- en función de la situación clínica del paciente y el tipo
zar su eficacia a intervalos regulares. de neoplasia, sin olvidarnos de la voluntad del paciente
Los pacientes con cáncer de cabeza y cuello o esofá- en la toma de decisiones.
gico que presentan un disfagia mecánica o aquellos en En el momento actual, solo en pacientes quirúrgicos,
los que se estima que puedan desarrollar una mucositis se ha demostrado mejores resultados con el uso de fór-
grave existe un alto riesgo de pérdida ponderal, deshi- mulas inmunomoduladoras.
dratación y peor tolerancia a tratamiento. La nutrición
enteral se debe considerar en estos casos. Por razones 8. Bibliografía
éticas no existen ensayos clínicos aleatorizados. Pero,
tanto los estudios observacionales prospectivos como   1. DeWys WD, Begg C, Lanvin PT et al. Prognostic
los retrospectivos han demostrado que en estos casos effect of weight loss prior to chemotherapy in can-
la nutrición enteral logra una menor reducción de cer patients. AM J Med 1980; 69: 491-497
peso, disminuye la frecuencia y la duración de las inte-   2. Fearon K, Strasser F, Anker SD, Bosaeius I, Bruera
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nor y la calidad de vida mejor en los pacientes con gas-   4. Martin L, Birdsell L, Macdonald N, Reiman T, Clan-
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En situaciones de alto riesgo que se prevé que van a powerful prognostic factor, independent of body
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rrollo de la disfagia. En el momento actual no existe appropriate for older cancer patients at risk for
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cas en los pacientes que reciben radioterapia.   6. Meijers JM, Tan F, Schols JM, Halfens RJ. Nutritio-
Diarrea por radioterapia y probióticos: se han publi- nal care; do process and structure indicators in-
cado algunos ensayos clínicos que han demostrado fluence malnutrition prevalence over time? Clin
una reducción en la incidencia de diarrea con el uso de Nutr 2014; 33:459-465.
probióticos45, mientras que otros no han reportado  7. www.alianzamasnutridos.es/cuadernos.
efectos beneficiosos, aunque sí una mejoría en la con-  8. Santarpia L, Contaldo F, Pasanisi F. Nutritional
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652 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

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Tema 41. 
Soporte nutricional en el paciente hematológico
(trasplante de médula ósea y enfermedad de injerto
contra huésped)
Elena García Fernández
M.ª Ángeles Valero Zanuy
Miguel León Sanz
Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario 12 de Octubre. Madrid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 655-674.

  1.  Introducción
 2. Aspectos generales del trasplante de células hematológicas
 3. Objetivos nutricionales
 4. Valoracion nutricional
 5. Complicaciones que requieren de intervención nutricional
 6. Requerimientos nutricionales en el trasplante hematopoyético
 7. Dietética
 8. Soporte nutricional artificial
 9. Resumen
10.  Bibliografía

1. Introducción plante de células hematológicas se sometan a una valo-


ración del estado nutricional antes y durante las diferen-
El trasplante de células hematológicas se considera en tes etapas del tratamiento. Si el paciente no es capaz de
la actualidad un tratamiento potencialmente curativo de alcanzar sus necesidades nutricionales por vía oral, será
diferentes enfermedades hematológicas y de algunos necesario iniciar soporte nutricional: nutrición enteral
tumores sólidos. Su pronóstico ha mejorado en los últi- (NE) versus nutrición parenteral (NP).
mos años, especialmente debido a los progresos realiza-
dos en el manejo de las complicaciones infecciosas y en
la inmunosupresión. Sin embargo, no es una terapia 2. Aspectos generales del trasplante
exenta de riesgos. A los efectos adversos de la irradia- de células hematológicas
ción corporal total y de los diferentes fármacos utiliza-
dos, como citostáticos, antibióticos y corticoides, así El trasplante de células hematológicas consiste en la
como las complicaciones propias del trasplante, como la administración de altas dosis de quimioterapia, con o
enfermedad de injerto contra huésped (EICH) y la enfer- sin irradiación corporal, seguida de la infusión intra­
medad venoclusiva, hay que sumar el daño sobre las venosa de células hematopoyéticas. Se realiza con un
células de replicación rápida. A este grupo pertenecen doble objetivo. Por un lado, está indicado en el trata-
las células del sistema inmunológico y del tracto gas- miento de diferentes enfermedades hematológicas. En
trointestinal. Por un lado, se induce aplasia con el riesgo este caso se pretende sustituir la hematopoyesis del
de infección. Por otro lado, se altera la integridad diges- paciente, si esta es total o parcialmente defectuosa,
tiva con disminución de la capacidad de ingesta oral y insuficiente o neoplásica. Por otro lado, está indicado
de absorción de nutrientes. Ambos factores pueden en el tratamiento de diferentes tumores sólidos, los
comprometer el estado nutricional del paciente. Por cuales necesitan para su erradicación dosis muy eleva-
ello, es obligado que los pacientes candidatos a tras- das de citostáticos. En este caso se pretende adminis-

655
656 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

trar un tratamiento antineoplásico en dosis muy eleva- te. En el trasplante alogénico, el injerto se obtiene de
da, que origina mieloablación prolongada o definitiva. un individuo de la misma especie distinto a un gemelo
El trasplante de células hematopoyéticas está indi- univitelino, emparentado (habitualmente un hermano
cado para el tratamiento de enfermedades tanto con- HLA-idéntico) o no con el receptor. Por último, en el
génitas como adquiridas. En la tabla 1 se detallan las trasplante xenogénico, el donante es un individuo de
enfermedades potencialmente tratables, según el tipo distinta especie.
de trasplante utilizado. En la práctica clínica los trasplantes hematopoyéticos
El trasplante hematológico puede clasificarse de más frecuentemente realizados en la actualidad son el
acuerdo con el tipo de donante y la procedencia hema- alogénico y el autólogo. La mayor ventaja del alogéni-
topoyética. Según el tipo de donante, el trasplante co frente al autólogo radica en la posibilidad de tratar
puede ser autogénico, sinérgico, alogénico y xenogéni- tanto enfermedades malignas como no malignas. Pero
co. El autogénico, también denominado autólogo o presenta dos desventajas importantes. En primer lugar,
autotrasplante, consiste en utilizar las células hemato- la dificultad de encontrar un donante HLA histocompa-
lógicas derivadas del propio paciente, para restablecer tible, frente a la facilidad de obtener las células hema-
la función hematopoyética. Se requiere obtener las tológicas propias en el autólogo. En segundo lugar, la
células propias con anterioridad al tratamiento citostá- posible aparición de EICH en el alógenico, y no en el
tico. El trasplante sinérgico o isogénico es similar, pero autólogo, lo que supone mayor morbilidad, mortali-
las células derivan de un gemelo univitelino. Los mejo- dad y coste. La mayor desventaja del autólogo consiste
res resultados se obtienen con este tipo de trasplante, en el potencial de contaminación del injerto con las
aunque muy pocos candidatos cuentan con el donan- células tumorales que se quieren erradicar. Esto supo-

Tabla 1.  Indicaciones de trasplante de células hematopoyéticas.

Alogénico Autólogo
Enfermedades congénitas
· Inmunodeficiencia congénita combinada · Ninguna
· Aplasia medular de Fanconi
· Talasemia mayor
· Drepanocitosis
· Eritroblastopenia de Blackfan-Diamond
· Neutropenia de Kostmann
· Síndrome de Wiskott-Aldrich
· Osteopetrosis juvenil
· Tesaurismosis
· Enfermedad granulomatosa crónica
Enfermedades adquiridas
Tumorales
· Leucemia aguda · Leucemia aguda
· Leucemia mieloide crónica · Leucemia mieloide crónica
· Leucemia linfática crónica · Leucemia linfática crónica
· Linfoma no-Hodgkin · Linfoma no-Hodgkin
· Linfoma de Hodgkin · Linfoma de Hodgkin
· Mieloma múltiple · Mieloma múltiple
· Histiocitosis · Histiocitosis
· Amiloidosis · Amiloidosis
· Síndromes mielodisplásicos · Síndromes mielodisplásicos
· Tumores sólidos como testículo y mama
No tumorales
· Aplasia medular grave · Enfermedades autoinmunes
· Hemoglobinuria paroxística nocturna

Modificada de Goldman JM et al23.


Tema 41.  Soporte nutricional en el paciente hematológico (trasplante de médula ósea y enfermedad)… 657

ne un alto riesgo de recidiva y la pérdida del efecto de las células neoplásicas y los linfocitos T del donante, y
la reacción del injerto frente a la neoplasia1. concentrar los productos mediante selección positiva o
Por otro lado, dependiendo de la procedencia de aumentar su cantidad con técnicas de expansión. Ade-
las células hematológicas, el trasplante hematopoyé- más, en el alotrasplante con incompatibilidad mayor
tico se clasifica en trasplante de médula ósea, de sangre del grupo ABO es necesario eliminar los hematíes por
periférica, de cordón umbilical y de hígado fetal. En el centrifugación o realizar plasmaféresis.
trasplante de médula ósea, las células se obtienen de
este órgano mediante punción de la cresta ilíaca y, oca- 2.3. Fase de acondicionamiento
sionalmente, del esternón o la meseta tibial. En el caso
Consiste en la administración de dosis altas de qui-
de sangre periférica, las células se recogen de la sangre
mioterapia, radioterapia o ambas al candidato de tras-
mediante aféresis. En el trasplante de cordón umbilical,
plante. Tiene varios objetivos. En primer lugar, eliminar
las células se obtienen de la vena umbilical y de la pla-
las células hematopóyeticas y tumorales, si existen, del
centa, inmediatamente después del parto. Por último,
receptor. En segundo lugar, crear espacio medular
para obtener células hematopoyéticas del hígado fetal,
para las células nuevas procedentes del injerto. Por úl-
se disgrega el hígado de fetos procedentes de abortos.
timo, se persigue evitar el rechazo con la inmunosupre-
En nuestros días la mayoría de los trasplantes se reali-
sión en el trasplante alogénico y en el xenogénico.
za con células procedentes de sangre periférica. Este
método presenta varias ventajas, al menos frente a la
obtención de células de médula ósea. No requiere de
2.4. Fase de administración de los productos
múltiples punciones en la cresta ilíaca, el esternón o la hematopoyéticos
tibia, no precisa anestesia, es más rápida la regeneración Supone el denominado día 0 del trasplante. Consiste
celular, particularmente la de las plaquetas, y presenta en la administración de los productos hematopoyéti-
menos posibilidad de contaminación tumoral. El tras- cos al receptor, a través de un catéter endovenoso, in-
plante de células obtenidas de sangre de cordón se uti- fundiéndolos a sangre periférica.
liza sobre todo en niños para tratar leucemias y otro tipo
de enfermedades hematológicas. Presenta la ventaja de 2.5. Fase aplásica
que el riesgo y la severidad de la EICH parecen ser meno-
res. Además, las células obtenidas de cordón tienen un Es la fase en la que el paciente, después de adminis-
fenotipo diferente, son más inmaduras funcionalmente trados los productos hematopoyéticos, permanece en
y presentan un mayor potencial proliferativo. aplasia medular. En este momento lo más importante
Independientemente de la procedencia de las células son las medidas de soporte. Se adoptan medidas para
hematológicas, estas se trasplantan mediante inyec- evitar la infección, entre ellas se mantiene al paciente
ción al torrente circulatorio del receptor. Previamente, en régimen de aislamiento ambiental y se administran
el candidato a trasplante se somete a un régimen de antibióticos. Además, se efectúa soporte con transfu-
acondicionamiento mieloablativo, para vaciar su mé- siones de hematíes y plaquetas. En esta etapa la vigi-
dula de células hematológicas propias, que son poten- lancia nutricional es importante, requiriendo en algu-
cialmente causantes de rechazo. Las células inyectadas nos casos soporte nutricional.
se establecen a nivel de la médula ósea. Después de
una fase de aplasia medular, se inicia la recuperación 2.6. Fase de recuperación hematológica
de las series hematológicas. A partir del día 10-14 desde la administración del
Desde un punto de vista académico, el trasplante se injerto, pueden aparecer células hematopoyéticas en la
puede dividir en varias etapas. El conocimiento de es- médula ósea del receptor. Esto se manifiesta como ele-
tas fases tiene interés porque el riesgo de desnutrición vación de las cifras de reticulocitos, leucocitos y final-
y el abordaje nutricional es diferente. mente plaquetas en sangre periférica. La recuperación
hematológica es más precoz si el trasplante es de san-
2.1. Fase de obtención de productos gre periférica frente al de médula ósea.
hematopoyéticos Desde el punto de vista nutricional, esta etapa es im-
portante, porque, una vez iniciada la aparición de leu-
Los productos hematopoyéticos necesarios para el cocitos, pueden comenzar los primeros síntomas y sig-
trasplante se obtienen con anterioridad al acondicio- nos de EICH en el trasplante alogénico.
namiento. Una vez obtenidos, se conservan general-
mente en frío, hasta ser posteriormente utilizados. 2.7. Fase de reconstitución inmune
En esta etapa se van adquiriendo las defensas del
2.2. Fase de manipulación ex vivo del injerto
receptor. Así, la IgE aumenta en el primer mes postras-
Una vez que el trasplante se va a realizar, los produc- plante, pero la producción de IgG e IgA no se recupera
tos hematopoyéticos se deben manipular para eliminar hasta los 6-18 meses.
658 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

Durante los primeros 6 meses después del trasplan- 4. Valoración nutricional


te, se observa un número disminuido de células CD4+,
con células NK y CD8+ normales o aumentadas, y res- La valoración nutricional de los pacientes candidatos
puesta deficiente de los linfocitos T a la fitohemagluti- a trasplante de células hematológicas se debe realizar
nina. con dos objetivos. Por un lado, para conocer los enfer-
mos que están previamente desnutridos o con riesgo
de desnutrición. Por otro lado, para establecer qué pa-
3. Objetivos nutricionales cientes necesitan soporte nutricional, el tipo de sopor-
Como se ha señalado anteriormente, el trasplante de te nutricional más idóneo y para valorar si la interven-
células hematopoyéticas se utiliza para el tratamiento, ción nutricional es eficaz.
tanto de enfermedades congénitas como adquiridas, y Como en cualquier enfermo, hay que distinguir dos
dentro de estas últimas para patologías tumorales o no etapas en relación con la valoración nutricional: criba-
tumorales. En general, el estado nutricional de los can- do o screening nutricional y valoración propiamente
didatos a este tipo de trasplante es bueno, incluso en dicha. Para el cribado nutricional se puede utilizar
los pacientes con tumores de origen hematológico. Sin métodos no especialmente diseñados para este tipo
embargo, los enfermos con tumores sólidos suelen es- de pacientes como el Malnutrition Universal Scree-
tar previamente desnutridos2. El empeoramiento del ning Tool (MUST), Subjective Global Assessment (Va-
estado de nutrición antes del trasplante es un factor de loración subjetiva global, VSG), Nutritional Risk Scree-
mal pronóstico3. ning 2002 (NRS-2002), Nutrition Risk Index (NRI) o
El riesgo de desnutrición de los pacientes sometidos Mini Nutritional Assesment (MNA), entre otros. Si el
a trasplante de células hematopoyéticas dependerá en enfermo tiene un tumor sólido o una enfermedad he-
gran medida del tipo de trasplante. Existen diferencias matológica neoplásica se pueden utilizar herramientas
en los efectos digestivos producidos por el trasplante más específicamente diseñadas para pacientes oncoló-
alogénico y por el autólogo. En general, la gravedad de gicos como el Oncology Screening Tool (OST) o el Pa-
los efectos es menor en el trasplante autólogo. Aunque tient Generated Subjective Global Assessment (PG-SGA).
los candidatos a este tipo de trasplante reciben altas Todos ellos son métodos de cribado nutricional, sim-
dosis de quimioterapia, el tiempo de aplasia medular y ples, rápidos y fáciles de realizar. Se pueden llevar a
de mucositis puede reducirse a menos de 7 días, en cabo en la consulta externa previa al trasplante o en
especial si las células hematológicas se han obtenido el hospital antes de la etapa de acondicionamiento y
de sangre periférica. Además, este tipo de trasplante siempre que la situación clínica del paciente se prevea
no origina EICH. En la mayoría de los casos, la ingesta que va a cambiar.
de alimentos naturales se mantiene y el paciente es ca- Una vez identificado el paciente desnutrido o con
paz de cubrir sus necesidades nutricionales con ali- riesgo de desnutrición, se debe consultar con perso-
mentos naturales. La indicación de nutrición artificial nal sanitario con conocimientos en Nutrición para
queda relegada en estos casos a la aparición de com- valorar con más detalle el estado nutricional del en-
plicaciones. fermo. En esta etapa se estudia el estado de nutri-
Por el contrario, en el trasplante alogénico los pa- ción actual, se analizan las necesidades nutriciona-
cientes reciben un régimen de acondicionamiento, les, se identifica si se requiere consejos en la dieta o
que combina altas dosis de quimioterapia con irra- soporte nutricional artificial y se valora si los conse-
diación corporal total, lo que genera una inmunosu- jos dietéticos y/o la nutrición artificial recomendada
presión profunda. La irradiación es extremadamente son eficaces.
tóxica para las células del aparato digestivo, por lo En la práctica clínica, el estado de nutrición se estu-
cual la mucositis es más severa y prolongada. A este dia mediante la historia clínica, la exploración física, los
efecto lesivo del tracto digestivo, hay que añadir el datos antropométricos y los parámetros bioquímicos.
potencial desarrollo de EICH con afectación intesti- En los pacientes sometidos a trasplante de células he-
nal y hepática en algunos enfermos. Además, la ad- matológicas, los datos nutricionales analizados son si-
ministración de altas dosis de esteroides para tratar milares a los evaluados en otras patologías. Sin embar-
la EICH y el uso de fármacos antivirales para prevenir go, en estos enfermos hay que tener en cuenta que
las complicaciones infecciosas, pueden poner al pa- pueden presentar edemas o deshidratación secunda-
ciente sometido a trasplante alogénico en riesgo de rios a cambios en el contenido de agua corporal. Esto
desnutrición. puede alterar las medidas antropométricas y los pará-
Los objetivos nutricionales en pacientes sometidos a metros bioquímicos. Además, la albúmina sérica refleja
trasplante de células hematopoyéticas son prevenir la más el efecto de la enfermedad y el tratamiento que el
desnutrición proteico-calórica, mejorar la tolerancia y la estado nutricional. Por último, algunos tumores hema-
respuesta a la terapia, reducir las complicaciones del tológicos pueden alterar el número total de linfocitos y
trasplante, disminuir la estancia hospitalaria y mejorar la respuesta de las pruebas de sensibilidad cutáneas a
la calidad de vida. diferentes antígenos.
Tema 41.  Soporte nutricional en el paciente hematológico (trasplante de médula ósea y enfermedad)… 659

5. Complicaciones que requieren La presencia de mucositis oral constituye una de las


de intervención nutricional principales indicaciones de nutrición artificial en los pa-
cientes sometidos a trasplante de células hematopoyé-
Durante las fases del trasplante descritas anterior- ticas. Inicialmente, la mucositis puede ser leve y com-
mente, los pacientes pueden sufrir diferentes compli- prometer únicamente la ingesta de determinados
caciones, con consecuencias importantes para su esta- alimentos de consistencia dura, como el pan, las galle-
do de nutrición. A continuación se describe cada una tas y la carne. En los momentos más precoces, se debe
de ellas por separado. evitar el consumo de estos alimentos y ofrecer al pa-
ciente suplementos orales para cubrir sus requerimien-
5.1. Anorexia, náuseas y vómitos tos nutricionales. Con el tiempo, las lesiones pueden
Estos síntomas se deben a efectos adversos de los ser más severas e impedir incluso la ingesta de alimen-
fármacos quimioterápicos utilizados en la etapa de tos de consistencia líquida. Si el paciente no dispone
acondicionamiento. Aparecen en los primeros días de una sonda u ostomía de alimentación, como ocurre
después del acondicionamiento. Algunos citostáti- en la mayoría de los casos, la única opción nutricional
cos como cisplatino, ciclofosfamida y melfalán pue- es la NP.
den inducir náuseas y vómitos en algunos pacientes.
Además, los corticoides a altas dosis, utilizados en 5.3.  Enfermedad de injerto contra huésped
el tratamiento de la EICH, pueden potenciar estos (EICH)
efectos.
Es la complicación más temida del trasplante de cé-
lulas hematopoyéticas. Es la responsable de la mayor
5.2. Mucositis morbimortalidad de este procedimiento. La complica-
La inflamación de la mucosa del tracto digestivo se ción se debe al reconocimiento como extraños de antí-
produce por la alta dosis de quimioterapia y por la genos del receptor por parte de los linfocitos T del do-
irradiación corporal que recibe el paciente durante el nante. Para que ocurra se necesita la presencia de tres
régimen de acondicionamiento. Por lo tanto, la mu- condiciones. En primer lugar, el injerto debe contener
cositis puede aparecer en cualquier tipo de trasplante células inmunocompetentes. En segundo lugar, el re-
de células hematológicas, aunque es más frecuente ceptor debe tener aloantígenos que difieren de los del
en el trasplante alogénico. Suele aparecer en los donante o reconocer autoantígenos de forma inade-
7-10 primeros días después de iniciar el régimen de cuada. En tercer lugar, el receptor debe ser incapaz de
acondicionamiento4. producir respuesta inmune frente al injerto.
La severidad y la duración de la mucositis varían de En la práctica clínica, en el trasplante de células he-
un paciente a otro. La forma más frecuente de mani- matopoyéticas, esta complicación solo aparece en el
festarse consiste en la aparición de lesiones de la mu- trasplante alogénico. En este tipo de trasplante se ha
cosa oral y/o esofágica, que causan dolor y dificultan descrito una incidencia del 30-40%, aunque el grado
la ingesta oral. En algunos pacientes puede alterarse de afectación es muy variable.
también la mucosa intestinal, lo que origina diarrea se- La EICH se ha clasificado en aguda y crónica (tabla 2).
cretora y disminución de la absorción de nutrientes, La EICH aguda aparece en los primeros días postras-
con pérdida especialmente de proteínas y electrolitos plante, generalmente entre el día 5 y 47, después del
por las heces. acondicionamiento. Afecta a piel, hígado e intestino.
No se dispone de un tratamiento establecido para A nivel cutáneo se manifiesta como un eritema macu-
la prevención o el tratamiento de la mucositis. Para la lopapular generalizado. A nivel hepático, se origina
prevención se ha ensayado la citoprotección con pros- por degeneración y necrosis de los conductos biliares
taglandina (PG) E2, los antioxidantes y los factores de intrahepáticos. Se manifiesta como elevación de bili-
crecimiento del queratinocito. Una vez iniciada la mu- rrubina y fosfatasa alcalina. Por último, a nivel intesti-
cositis se puede utilizar como tratamiento sucralfato, nal, puede afectar tanto al intestino delgado como al
antisépticos y antibióticos, con la idea de acelerar la colon. Se observa desde una alteración del epitelio de
restauración epitelial. Para prevenir o tratar la mucosi- la mucosa, hasta ulceración focal de la pared intestinal
tis, también se ha estudiado la administración de glu- con riesgo de perforación. Se manifiesta clínicamente
tamina por sus efectos (tabla 3). Como se analizará por anorexia, náuseas, vómitos, intolerancia alimenta-
posteriormente, esta sustancia no afecta a la incidencia ria, dolor abdominal, diarrea intensa, incluso rectorra-
ni severidad de esta complicación cuando se adminis- gia. Una vez establecida la EICH aguda, el tratamiento
tra por vía intravenosa. Sin embargo, algunos autores de elección consiste en la administración de corticoi-
han observado que disminuye el dolor, la dificultad des a altas dosis, fármacos inmunosupresores, octreó-
para comer y los requerimientos de morfina derivados tido, analgesia y nutrición artificial. Desde el punto de
de la presencia de mucositis, si la glutamina se admi- vista nutricional, siempre que no se alcancen los re-
nistra por vía oral. querimientos nutricionales se deben pautar suplemen-
660 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

Tabla 2.  Tipos de enfermedad injerto contra huésped (EICH).

· Aguda
Alogénico
· Crónica
· Secundaria a la administración de transfusiones no
irradiadas en pacientes inmunodeprimidos
· Aparición a los 4-30 días de la transfusión
Transfusional
· Curso hiperagudo
· Mortalidad del 90%
· Irradiación de los productos hemáticos para su profilaxis
· Incidencia espontánea del 7-10%
· Requiere timo funcionante y acondicionamiento
Autogénico o singénico
· Normalmente solo afectación cutánea mínima
· Mortalidad nula

tos orales. Si el paciente presenta, además, diarrea se no se consigue mantener un buen estado de nutri-
debe recomendar una dieta pobre en grasa y residuos ción, se deben añadir suplementos orales. En caso de
y exenta de lactosa. Si la diarrea es intensa se debe diarrea importante se debe mantener al paciente en
mantener al enfermo en dieta absoluta e iniciar nutri- dieta absoluta e iniciar NP5.
ción parenteral. La EICH crónica aparece después del
día 100 del trasplante, aunque en algunos casos se 5.4. Enfermedad venoclusiva hepática
observan características clínicas de la EICH aguda des-
pués de esta fecha y viceversa. Se manifiesta clínica- Constituye un conjunto de síntomas y signos hepá-
mente por infecciones de repetición, enfermedades ticos. A pesar de que la enfermedad venoclusiva es
inmunes asociadas y afectación cutaneomucosa, ocular, solo una de las causas de la afectación de este órga-
hepática, gastrointestinal, pulmonar y neuro­muscular. no, en la práctica este término se suele emplear para
A nivel hepático se presenta como colestasis, que pue- designar la afectación hepática postrasplante en su
de evolucionar a cirrosis. A nivel intestinal, origina dia- conjunto. Aparece tanto en el trasplante alogénico
rrea crónica con malabsorción intestinal. El tratamien- como en el autólogo, en aproximadamente un 20%
to depende del órgano afectado, pero en general de los pacientes.
incluye la administración de corticoides, inmunosu- Se debe a una lesión tóxica sobre el endotelio si-
presores, profilaxis antinfecciosa y medidas de sopor- nusoidal, el endotelio de las venas centrolobulillares y
te. Como en el caso de la EICH aguda, desde el punto el propio hepatocito, originada por los citostáticos y la
de vista nutricional, en la enfermedad crónica se debe irradiación. Desde el punto de vista histológico, se ob-
recomendar el seguimiento de una dieta pobre en gra- serva oclusión de las venas centrolobulillares, fibrosis
sa y residuos y exenta de lactosa. Si con esta medida sinusoidal y necrosis hepatocitaria. Como consecuen-

Tabla 3.  Efectos beneficiosos de glutamina en pacientes sometidos a trasplante de células hematopoyéticas.

Efecto Consecuencia clínica


· Disminuye el catabolismo proteico · Balance nitrogenado equilibrado
· Aumenta la retención de nitrógeno
· Aumenta la resistencia a la colonización de microorganismos · Menor riesgo de infección
en el huésped
· Aumenta la respuesta inmunológica
· Potencia la barrera intestinal en la defensa inmunológica
· Disminuye el efecto tóxico de la quimio y radioterapia sobre · Disminución de la mucositis
la mucosa digestiva
· Disminuye el estado oxidativo · Menor incidencia de enfermedad venoclusiva
Tema 41.  Soporte nutricional en el paciente hematológico (trasplante de médula ósea y enfermedad)… 661

cia de todo ello se produce obstrucción al flujo hepá­ tar deficiencia de vitaminas, tanto hidrosolubles como
tico e hipertensión portal postsinusoidal. Suele comen- liposolubles. Se ha descrito déficit de vitaminas hidro-
zar en las 2-4 semanas después del régimen de solubles, especialmente tiamina, vitamina B6, vitamina
acondicionamiento, más frecuentemente durante la B12 y de vitaminas liposolubles, especialmente alfa to-
fase de pancitopenia. Se manifiesta clínicamente por coferol y betacaroteno. La deficiencia de estas sustan-
ictericia, dolor en el hipocondrio derecho, hepatome- cias se debe sobre todo a la malabsorción secundaria a
galia, edemas y ascitis, e incluso encefalopatía. la afectación intestinal, aunque el uso de ciclofosfami-
No existe un tratamiento verdaderamente eficaz. da y la irradiación puede aumentar también las necesi-
Desde el punto de vista nutricional se debe restringir la dades de vitaminas antioxidantes, especialmente el al-
ingesta de agua y sal6. Si el paciente presenta encefalo- fatocoferol y el betacaroteno12. De igual forma, la
patía hepática, se deben disminuir, además, los apor- ingesta deficitaria de alimentos y la malabsorción pue-
tes de proteínas. Como ocurre en otras enfermedades den originar deficiencia de minerales, especialmente
hepáticas, si el paciente tolera mal los aportes de pro- de zinc y cobre13.
teínas, se pueden utilizar aminoácidos ramificados.
En los últimos años se ha especulado que la lesión, al 6. Requerimientos nutricionales
menos en parte, puede estar inducida por la presencia en el trasplante hematopoyético
de radicales libres y la depleción de antioxidante. En
este sentido, dado que la glutamina es un factor limi- Los requerimientos nutricionales de los pacientes so-
tante en la síntesis de glutatión hepático e intestinal metidos a trasplante de células hematopoyéticas están
durante el estrés metabólico, algunos autores han re- aumentados. Varios factores contribuyen al aumento
comendado el uso de glutamina en nutrición artificial, de las necesidades nutricionales. Por un lado, los fár-
con la idea de mejorar los síntomas y signos de la en- macos citostáticos, utilizados en la etapa de acondicio-
fermedad venoclusiva7. Por el momento, no existe una namientos pueden inducir un efecto catabólico. Por
clara indicación del uso de este aminoácido para la otro lado, las complicaciones del trasplante, descritas
profilaxis o el tratamiento de esta complicación. anteriormente, en especial la EICH y la presencia de
sepsis, pueden contribuir a este incremento de los re-
5.5. Alteraciones metabólicas querimientos.

En los estudios de composición corporal, los pacien-


6.1. Requerimientos energéticos
tes sometidos a trasplante de células hematopoyéticas
presentan un aumento del líquido extracelular, sin Las necesidades energéticas de los pacientes someti-
cambios en la grasa corporal8. dos a trasplante de células hematológicas varían de-
El trasplante afecta especialmente al metabolismo pendiendo del tipo de trasplante. Se ha descrito que
energético, proteico y de micronutrientes del recep- los requerimientos calóricos son mayores en el tras-
tor9. El gasto energético de estos pacientes está plante alogénico que en el autólogo14. En general, las
­aumentado, en algunos casos por la propia enferme- necesidades calóricas están entre un 130-150% del
dad y en otros por las posibles complicaciones, por gasto energético basal. Esto supone aproximadamente
ejemplo la presencia de infección y de EICH. Además, unas 30-35 kcal/kg de peso/día15.
el balance nitrogenado puede ser negativo, como con-
secuencia de las pérdidas intestinales de nitrógeno en 6.2. Requerimientos proteicos
presencia de diarrea.
El metabolismo de los carbohidratos puede estar Las necesidades proteicas de los pacientes sometidos
afectado por la administración de corticoides y ciclos- a trasplante de células hematopoyéticas también son
porina y por la resistencia periférica a la insulina, se- elevadas. Se recomienda administrar 1,4-1,5 g de pro-
cundaria a las complicaciones infecciosas10. teínas/kg de peso/día20, aproximadamente un 15% del
Las alteraciones del metabolismo lipídico son menos valor calórico total.
frecuentes. En algunos casos los pacientes sometidos a En los últimos años se ha demostrado que el aporte
tratamientos prolongados con ciclosporina para tratar de un aminoácido, la glutamina, tiene efectos benefi-
la EICH pueden presentar niveles elevados de colesterol ciosos en los pacientes sometidos a este tipo de tras-
y triglicéridos plasmáticos11. plante (tabla 3). Sin embargo, su uso no está exento
Además, los pacientes sometidos a trasplante de cé- de riesgos. Por sus acciones fisiológicas teóricamente
lulas hematopoyéticas pueden presentar riesgo de de- podría actuar como un factor de crecimiento o al me-
sarrollar alteraciones de electrolitos. En caso de diarrea nos como fuente de energía para las células tumorales.
secretora, independientemente de su causa, pueden Además, puede interaccionar con el metabolismo de
observarse pérdidas importantes de potasio, bicarbo- los citostáticos. Sin embargo, hasta la fecha y con los
nato y magnesio. Además, los pacientes sometidos a datos que disponemos, la administración de glutamina
trasplante de células hematopoyéticas pueden presen- no parece originar efectos adversos en la evolución de
662 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

los pacientes sometidos a trasplante hematológico. Por La administración de soluciones lipídicas de LCT y
el contrario, disponemos de algunos estudios en los mezclas físicas de MCT/LCT vía intravenosa son bien
que se demuestran efectos beneficiosos de la glutami- toleradas por los pacientes sometidos a trasplante he-
na (véase más adelante). matológico. Hasta la fecha no se ha demostrado que
las nuevas soluciones lipídicas enriquecidas con ácido
6.3. Requerimientos de hidratos de carbono oleico, aceites de pescado o mezclas químicas de
MCT/LCT presenten ventajas clínicas frente a la utiliza-
En relación con los requerimientos de hidratos de ción de las soluciones lipídicas clásicas en este tipo de
carbono, no existen recomendaciones especiales para pacientes.
los pacientes sometidos a trasplante de células hema-
topoyéticas. En general, se debe aportar un mínimo 2 6.5. Requerimientos de agua y micronutrientes
g/kg de glucosa para proveer la cantidad necesaria de
este sustrato energético al cerebro y otros tejidos de- No existe evidencia en la literatura de que las necesi-
pendientes metabólicamente de la glucosa16. Se reco- dades de agua, electrolitos, minerales y vitaminas de
mienda administrar un 50-60% del valor calórico total los pacientes sometidos a trasplante de células hema-
en forma de hidratos de carbono. topoyéticas sea diferente. En general, se debe aportar
La administración excesiva de glucosa por vía paren- las cantidades habitualmente recomendadas.
teral puede originar hiperglucemia, esteatosis y disfun- Es importante señalar que en este tipo de pacien-
ción hepática por aumento de la lipogénesis, aumento tes es necesario monitorizar el balance hídrico y elec-
del cociente respiratorio y de la producción de CO2 y trolítico de forma estricta, ajustando el volumen de
aumento de la secreción de insulina con el consiguien- fluidos aportados. Esto es especialmente importante
te efecto antinatriurético con retención de agua y sal17. si aparecen complicaciones secundarias al trasplante.
Además, hay que tener en cuenta que el paciente Así, en presencia de EICH se deben reponer las pérdi-
sometido al trasplante puede ser previamente diabéti- das inducidas por la diarrea. En la enfermedad veno-
co o presentar hiperglucemia secundaria al tratamien- clusiva hepática se debe restringir el aporte de agua
to con esteroides o a la presencia de infección. El apor- y sal.
te excesivo de carbohidratos, no solo presenta mayor
riesgo de sobrealimentación, sino que además dificulta 7. Dietética
el control metabólico, con el consiguiente aumento del
riesgo de infección18 y de mortalidad19. En los pacien-
7.1.  Dieta oral
tes con hiperglucemia se puede disminuir el aporte de La comida que ingerimos no es estéril. Contiene una
hidratos de carbono, y, si es necesario, añadir insulina proporción pequeña de microorganismos, que aunque
al tratamiento. insignificante, podría ser potencialmente dañina en pa-
cientes inmunosuprimidos, como son los pacientes so-
6.4. Requerimientos de lípidos metidos a trasplante de células hematológicas. Para
evitar el riesgo de infección, se debería minimizar el
Las recomendaciones de lípidos para el paciente some- contenido de gérmenes que se aportan con los alimen-
tido a trasplante hematológico son similares a las esta- tos. Sin embargo, esterilizar completamente todos los
blecidas para cualquier individuo con estrés metabólico. alimentos no es fácil. En la práctica se puede optar o
Se recomienda no exceder el aporte de 1-1,5 g/kg/día. bien por «alimentos comercialmente estériles» o bien
Esto supone aproximadamente un 30-40% de las calo- por «alimentos muy limpios». No existen estudios que
rías en forma de grasa. indiquen que este tipo de alimentos son realmente im-
La administración de soluciones lipídicas a pacientes prescindibles para los pacientes inmunodeprimidos. En
sometidos a trasplante de células hematológicas es be- una revisión reciente de la Cochrane21 que incluye siete
neficioso. Los ácidos grasos esenciales pueden modifi- estudios, tres de ellos aleatorizados y controlados con
car la respuesta inmunológica, por alterar la síntesis de limitaciones metodológicas, los autores concluyen que
prostaglandinas y leucotrienos. Muscaritoli et al20 han no hay evidencia que sustente el uso de dietas de bajo
demostrado que el aporte de lípidos en NP disminuye contenido microbiológico para la prevención de infec-
la incidencia de EICH en el trasplante alogénico. El me- ción y para mejorar la evolución de estos enfermos. No
canismo no se conoce del todo bien. Los autores espe- existen datos sobre el uso de este tipo de dietas en
culan que la administración de ácidos grasos omega-6, pacientes con EICH. Las guías de los Centers for Disea-
aumenta la disponibilidad de ácido araquidónico y su se Control (CDC) de EEUU recomiendan que la dieta
metabolito la PG E2. Esto disminuiría la producción de para pacientes sometidos a trasplante de células hema-
IL1 y de TNF por el macrófago, la expresión del comple- topoyéticas no sea especial22.
jo mayor de histocompatibilidad y la producción de IL2 A pesar de la falta de evidencia señalada de la efica-
de los linfocitos periféricos, y aumentaría la actividad T cia de las dietas estériles o bajas en bacterias para pa-
supresora. cientes neutropénicos, en algunos centros se siguen
Tema 41.  Soporte nutricional en el paciente hematológico (trasplante de médula ósea y enfermedad)… 663

utilizando. A continuación se explican las característi- ganismos es mayor que en el caso anterior, pero in-
cas fundamentales que se deben tomar para llevar a ferior al resto de las dietas del hospital. Los alimen-
cabo estas dietas: tos son almacenados y preparados en la propia
cocina del hospital. Las condiciones de almacena-
7.1.1. «Alimentos comercialmente estériles» miento son las mismas que para el resto de los ali-
mentos de la cocina. Aunque para su elaboración se
En este caso, el contenido de microorganismos es utilizan los métodos tradicionales de cocción, la pre-
extremadamente bajo, aunque los alimentos no son paración y cocinado se realizan con mascarilla y
totalmente estériles, ya que si se consigue una esteri- guantes. Se recomienda utilizar la cocción mediante
lidad total los alimentos tienen escasa palatabilidad. energía eléctrica o gas, mejor que microondas. Se ha
El nivel de esterilidad se consigue preparando los ali- observado que el incremento rápido de temperatura
mentos en cámaras de flujo laminar. Una vez prepa- que se consigue con el microondas mata menos mi-
rados en la cámara, los alimentos se almacenan en croorganismos que la cocción más lenta eléctrica o
contenedores herméticos, antes de ser distribuidos a de gas23.
los pacientes.
Independientemente del método de cocción utili­
Entre los alimentos incluidos en este grupo se po-
zado, se deben seguir una serie de precauciones para
drían citar los envases de tetrabrik individuales de leche
garantizar que el contenido de gérmenes que llegue
y zumos, los postres lácteos, las bebidas envasadas
al enfermo en los alimentos sea el menor posible
como agua mineral y los refrescos, embutidos envasa-
(tabla 4). Para asegurar la temperatura idónea del ali-
dos al vacío, conservas y cualquier otro alimento enva-
mento, siempre mayor de 65 ºC, se medirá con un termó-
sado en porciones individuales. Estos productos deben
metro el centro del producto. La porción de alimento
abrirse inmediatamente antes de ser consumidos en la
utilizado para conocer la temperatura se debe des-
propia habitación del paciente.
echar, nunca debe ser consumido por el paciente. Una
vez que el alimento es cocinado, se debe guardar en
7.1.2. «Alimentos muy limpios» contenedores cerrados.
En este caso, los alimentos tampoco son estériles. El proceso de distribución de «los alimentos muy lim-
Son alimentos frescos, cuyo contenido en microor- pios» hasta llegar al enfermo debe durar el menor

Tabla 4.  Precauciones para asegurar un bajo contenido de gérmenes en la dieta.

· Registrar fecha de caducidad


Almacenamiento
· No utilizar alimentos más allá de la fecha de caducidad
· Utilizar preferentemente electricidad o gas. Evitar uso de microondas
Cocción · Alcanzar los 65 °C en el centro del producto
· Guardar los alimentos ya cocinados en recipientes cerrados
· Abrir los «alimentos comercialmente estériles» en la Unidad
Distribución · Distribuir los «alimentos muy limpios» en menos de 1 hora, a temperatura de 65 °C en el
centro del producto e ingerirlos inmediatamente después de su llegada a la Unidad
· Utilizar agua embotellada, zumos y refrescos comerciales
· Lavar la fruta exhaustivamente. Pelar por el paciente antes de su consumo
· Evitar consumo de ensalada o verdura cruda
· Evitar consumo de carne o pescado crudo, embutido sin tratamiento térmico, queso
curado como Camembert, Roquefort, etc.
Otros
· Utilizar lácteos esterilizados o sometidos a UHT en envases individuales
· No consumir huevos crudos, pasados por agua o poco fritos
· Utilizar porciones individuales de mantequilla, café, infusiones, pan, cereales del
desayuno, repostería, mermeladas, conservas, etc.
· Evitar el consumo de helados

Más información en:


http://www.acor.org/leukemia/neutro.html
www.foodsafety.gov
www.fsis.usda.gov
www.cdc.gov
664 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

tiempo posible. En general, este tiempo debe ser infe- bióticos son microorganismos vivos y, por lo tanto,
rior a una hora. Una vez en la Unidad de Trasplante, la ­potencialmente causantes de infección en pacientes
dieta incluida en la bandeja debe ser inmediatamente inmunodeprimidos. De hecho, en enfermos inmunosu-
consumida por el paciente. Ajustarse estrictamente a primidos se han descrito varios casos de bacteriemia
estos tiempos evita el descenso de la temperatura de secundaria a Saccharomyces bulardii, Acharomyces y a
los productos por debajo del margen de seguridad, y diferentes cepas de Lactobacillus después del consumo
por lo tanto, el riesgo de contaminación. de probióticos.
En la actualidad no existen ensayos clínicos que exa-
7.2. Tratamiento de los utensilios de cocina minen la seguridad y eficacia del uso de probióticos en
pacientes sometidos a trasplante de células hematopo-
La bandeja, la vajilla y los cubiertos utilizados por el yéticas. Hasta que no se disponga de mayor evidencia
enfermo para comer son portadores de microorganis- científica, por el riesgo potencial de complicaciones
mos. Aunque no existen estudios que objetiven que infecciosas, se recomienda evitar el uso de estas sus-
estos utensilios deban contener la menor cantidad tancias en este tipo de pacientes25.
posible de gérmenes en pacientes sometidos a tras-
plante de células hematológicas, el sentido común
nos indica que se deben seguir medidas de higiene 8.  Soporte nutricional artificial
especiales. Para disminuir la llegada de microorganis- Cuando el paciente no puede recibir los requeri-
mos con los utensilios de cocina se puede optar por mientos nutricionales con alimentación oral, es pre-
dos soluciones. En primer lugar, la bandeja, la vajilla y ciso plantearse el tratamiento con nutrición artificial.
los cubiertos se pueden lavar en el tren de lavado de Se ha comprobado un deterioro del estatus nutricio-
la cocina a temperatura elevada con el resto de los nal durante el tratamiento antineoplásico en varios
utensilios, y posteriormente sumergirlos en agua y le- estudios prospectivos en los que los pacientes fue-
jía hasta su utilización. Una vez que se van a utilizar, ron randomizados para recibir NP26 o NE27, versus
se secan con paños estériles. A continuación se em- ausencia de soporte nutricional. En ambos estudios
plata, inmediatamente se coloca la tapa de la bande- se puso de manifiesto una pérdida de peso significa-
ja, y se envía a la Unidad de Trasplante lo más rápida- tiva en los grupos controles no tratados nutricional-
mente posible. Una segunda opción consiste en mente.
esterilizar los utensilios de cocina en el Servicio de Es- La Sociedad Americana de Nutrición Parenteral y En-
terilización del hospital, a continuación se precintan teral (ASPEN) y la Sociedad Europea de Nutrición Pa-
en plástico y luego se distribuyen a la Unidad de Tras- renteral y Enteral (ESPEN) han establecido guías clínicas
plante para ser utilizados por el paciente. Una vez en en relación con el soporte nutricional de los pacientes
la habitación del enfermo, se pueden utilizar para ser- sometidos a trasplante de células hematopoyéticas.
vir los «alimentos comercialmente estériles». Esta Sus recomendaciones se resumen en las tablas 5 y 6.
­opción es potencialmente válida para el desayuno, La elección de NE o NP en pacientes sometidos a tras-
merienda y extras, que pueden incluir únicamente plante de células hematopoyéticas se basa más en la
«alimentos comercialmente estériles». Sin embargo, experiencia de cada centro, que en resultados objetivos
no sería necesaria cuando se sirven los «alimentos derivados de estudios científicos.
muy limpios» que deben ser preparados y cocinados
en la cocina del hospital, ya que contienen mayor
contenido microbiológico. 8.1.  Nutrición enteral
Cualquiera de las dos opciones descritas anterior- La nutrición por vía enteral es más fisiológica que por
mente disminuye los gérmenes en los utensilios de co- vía parenteral y además ejerce un efecto trófico sobre
cina que utiliza el enfermo sometido a trasplante de la mucosa intestinal contribuyendo a su integridad. Se
células hematológicas. Optar por una u otra depende- han descrito menos complicaciones, especialmente in-
rá de las características del Servicio de Cocina y la Uni- fecciosas, con NE que con NP en pacientes sometidos a
dad de Trasplante de cada hospital. trasplante de células hematopoyéticas28, 29. Si bien exis-
te más tendencia a hemorragia e infección local con
7.3. Probióticos NE. Sin embargo, los estudios realizados sobre NE en
estos enfermos presentan varios problemas. En primer
La administración de probióticos, ya sea en forma de lugar, han sido realizados predominantemente en po-
cápsula, polvo o alimentos enriquecidos tipo yogur, ha blación pediátrica, siendo los trabajos en población
demostrado efectos beneficiosos en el tratamiento de adulta escasos. Por otro lado, dado que en la mayoría
la diarrea24 . El paciente sometido a trasplante de célu- de los estudios realizados la NE se combina con NP y se
las hematopoyéticas puede presentar diarrea multifac- emplean varios métodos de acceso enteral, los resulta-
torial, especialmente secundaria al uso de antibióticos dos acerca de su superioridad sobre la NP son inciertos.
y/o a toxicidad gastrointestinal. Sin embargo, los pro- No se han encontrado diferencias estadísticamente sig-
Tema 41.  Soporte nutricional en el paciente hematológico (trasplante de médula ósea y enfermedad)… 665

Tabla 5. Guías prácticas sobre el soporte nutricional de los pacientes sometidos a trasplante de células
hematológicas según ASPEN (American Society of Parenteral and Enteral Nutrition) (2002).

· La nutrición parenteral deberá ser discontinuada tan pronto como sea posible en estos pacientes.
A · No se utilizarán rutinariamente dosis farmacológicas de glutamina en pacientes sometidos a trasplante
hematológico
· Los pacientes sometidos a trasplante de células hematopoyéticas están en riesgo de malnutrición.
Todos deben ser sometidos a un cribado nutricional para identificar aquellos que requieren una
valoración nutricional y un plan nutricional
B · Cuando la función gastrointestinal se recupera después del trasplante, se utilizará nutrición enteral en
aquellos pacientes cuya ingesta oral es inadecuada, para alcanzar sus requerimientos nutricionales
· Los pacientes recibirán consejo dietético en relación con la manipulación e ingesta de alimentos para
evitar el riesgo de infección durante la etapa de inmunosupresión
· El soporte nutricional artificial es apropiado en pacientes sometidos a trasplante de células
C hematopoyéticas que desarrollen la enfermedad de injerto contra huésped moderada-severa con
ingesta oral insuficiente

Tabla 6.  Guías prácticas sobre el soporte nutricional de los pacientes sometidos a trasplante de células
hematológicas según la ESPEN (European Society of Parenteral and Enteral Nutrition) (2006).

A –
B –
· El uso rutinario de nutrición enteral no está indicado
· Si la ingesta oral está disminuida, la nutrición parenteral es preferible a la nutrición enteral por sonda
C en presencia de infección o hemorragia en pacientes inmunodeprimidos o con trombopenia
· La administración enteral de glutamina o EPA no se recomienda, debido a que no existen datos
concluyentes de su beneficio

nificativas con respecto a la NP en cuanto a la recupe- das ejercen cierto efecto protector sobre las secuelas
ración de los parámetros hematológicos y la supervi- de la radioterapia abdominal37. La enteritis postradia-
vencia30-32. En contraste, la NE se asocia a menor ción parece mejorar con dietas libres de proteínas de
frecuencia de colestasis33, menor incidencia de hemo- leche de vaca y con bajo contenido en residuos, grasas,
cultivos positivos, menor tasa de muerte por infección gluten y lactosa38.
precoz en los primeros 100 días después del tras- Tras el trasplante se puede desarrollar cierta deple-
plante34, menor incidencia de EICH34, menor duración ción de minerales y oligoelementos, cuyas causas e
de la diarrea30 y de la estancia hospitalaria35, 36 y menor implicaciones no están claras. De hecho, es posible
coste nutricional medio por paciente32, 33. En cuanto al que la ganancia de peso de los pacientes que están
mantenimiento del peso corporal con NE, los resulta- recibiendo NE se vea limitada por la deficiencia de mi-
dos varían según la vía de administración de esta. No cronutrientes. Así, por ejemplo, es frecuente el desa-
se han detectado diferencias en cuanto al manteni- rrollo de hipomagnesemia tras los regímenes quimio-
miento del peso corporal y del balance nitrogenado en terápicos que incluyen cisplatino tanto de forma
pacientes tratados con NE por sonda nasogástrica, si aislada39 como asociado a 5-fluorouracilo40. En pa-
bien los resultados podrían estar artefactados por la ad- cientes con trasplante se ha objetivado una disminu-
ministración concomitante de NP periférica junto a la ción de los niveles séricos de zinc antes del trasplante
NE, como hemos indicado anteriormente30. Cuando pero no después13. Los regímenes de NE estándar no
la NE se administra a través de una sonda nasoenteral se previenen el desarrollo de estas deficiencias, por lo
ha observado una pérdida de peso corporal al alta del que estos pacientes deben ser estrechamente monito-
4,5%31 o una menor ganancia de peso a los 28 días rizados y tratados, si precisan.
postrasplante comparado con la NP32. La NE puede tener complicaciones, relacionadas tan-
No está claro el tipo de fórmula de NE que se debe to con la forma de administración como con la toleran-
emplear en la fase postrasplante. Las dietas hidroliza- cia a la propia NE. En cuanto a la administración a tra-
666 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

vés de sonda nasogástrica41, cabe destacar la dificultad con irradiación previa y donante HLA compatible y en el
de su colocación en pacientes con mucositis y pancito- 92% de los trasplantes alogénicos con irradiación previa
penia, el desplazamiento de la sonda por los vómitos y y donante HLA no compatible42.
el riesgo de aspiración secundaria al reflujo gastroeso- La composición de las bolsas de NP debe reflejar las
fágico ocasionado por el inadecuado cierre del esfínter recomendaciones nutricionales para estos enfermos
esofágico. Aunque las sondas nasoyeyunales permiten que se han señalado anteriormente. En cualquier
minimizar alguno de estos problemas, el mantenimien- caso, la NP será prescrita de forma individualizada48 y
to de una sonda nasal durante el tiempo necesario siempre por personal sanitario experimentado para
­hasta retomar la alimentación vía oral puede ser com- evitar efectos adversos y obtener los mejores resulta-
plicado. Por otra parte, pueden surgir dificultades rela- dos clínicos49.
cionadas con la tolerancia a la NE (diarrea, dolor abdo- Existe controversia sobre el momento más adecuado
minal, etc.)42, cuya frecuencia es difícil de establecer para iniciar la NP. Algunos equipos la inician en el día 1
dada la similitud de estos síntomas con los ocasiona- postrasplante y la mantienen hasta el día 15-20 y otros
dos por la terapia citorreductora. la inician cuando el paciente presenta alguna compli-
cación digestiva. Cuando el paciente presente una me-
8.2.  Nutrición parenteral joría de su capacidad digestiva, se debe ir disminuyen-
do progresivamente la cantidad de NP prescrita e ir
Si durante el transcurso del trasplante de células he- aumentando los aportes por vía oral/enteral. Cuando el
matopoyéticas no son factibles la alimentación oral o la paciente cubra el 50% de sus requerimientos vía oral/
NE, será preciso instaurar NP. Además, existen varias ra- enteral se suspenderá la NP42.
zones que apoyan el uso de NP frente a la NE. En primer En cuanto a la forma de administración de la NP, si
lugar, la mayoría de estos pacientes son portadores de bien en la mayor parte de las ocasiones se administra
un acceso venoso central, por lo que la administración en infusión continua a lo largo de 24 horas, parece que
de la nutrición por vía parenteral se incluye en el manejo su administración cíclica facilita el tratamiento farma-
general de los líquidos y los electrolitos. En segundo lu- cológico, es segura y permite alcanzar un adecuado
gar, es una terapia nutricional eficaz, ya que en los tra- estado nutricional al finalizar la terapia50.
bajos43, 44 en los que se compara con hidratación intrave- Por último, hay que recordar que los pacientes so-
nosa se demuestra una mayor ganancia de peso, una metidos a NP pueden presentar complicaciones secun-
mayor elevación de las cifras de albúmina sérica y una darias a este tipo de soporte nutricional. Entre ellas
mayor supervivencia 2 años después del trasplante en el destaca el riesgo de infección, que es especialmente
grupo de la NP. Finalmente, los primeros estudios reali- alto en el trasplante de células hematopoyéticas, sobre
zados demostraron que la NP promovía un mejor anida- todo durante la fase aplásica. Para evitarlo algunos
miento del injerto45 y mejoraba la supervivencia de estos ­autores han recomendado usar tipos específicos de ca-
enfermos46. A pesar de que estos hallazgos eran intere- téteres (permanentes, impregnados con plata o im-
santes, reflejaban las prácticas del trasplante de princi- pregnados con antibióticos) y extremar las medidas de
pios de los 80 y presentaban varios errores de diseño asepsia en la colocación y manipulación del catéter. El
que limitaban su interpretación. Por ejemplo, incluían factor que ha demostrado ser más importante en la
tanto niños como adultos, el grupo control no era ade- prevención de la sepsis por catéter es la motivación del
cuado y muchos enfermos cambiaban de brazo en el personal de enfermería para llevar a cabo un correcto
ensayo. En estudios posteriores se ha comprobado que cuidado de la vía venosa central. Otra complicación de
la NP es una terapia nutricional segura, pero no exenta la NP es la mayor tendencia a desarrollar hipergluce-
de complicaciones47. mia47. En algunos estudios se ha objetivado que en de-
La necesidad de NP varía en función del tipo de tras- terminados grupos de enfermos, en especial pacientes
plante. Pocos casos requieren NP después del trasplante críticos ingresados en Unidad de Cuidados Intensivos
autólogo. Los nuevos regímenes de trasplante en los quirúrgica51, 52 el mantenimiento de la normoglucemia
que se emplean factores de crecimiento y la realización disminuye la morbimortalidad. En otros estudios53, 54
de trasplante de sangre periférica han disminuido de esto no se ha confirmado, y en cambio el control estric-
forma significativa el tiempo necesario para el anida- to se asociaba a mayor riesgo de hipoglucemia. En un
miento del injerto y, paralelamente, el tiempo de ingesta estudio retrospectivo se observó un aumento continuo
oral insuficiente. En la actualidad, se requiere NP más del riesgo de infección con cifras elevadas de glucemia
frecuentemente en el trasplante alogénico, debido a la anteriores al trasplante, especialmente en pacientes
mayor toxicidad gastrointestinal por mucositis y diarrea que recibieron glucocorticoides mientras estaban neu-
y por el riesgo de EICH. Cuando se aplican los criterios de tropénicos55. Para minimizar la hiperglucemia es preci-
malnutrición severa la NP estaría indicada en el 37% de so realizar un correcto cálculo de las necesidades ener-
los trasplantes autólogos sin irradiación corporal total géticas antes del inicio de la terapia nutricional y
previa, en el 50% de los trasplantes autólogos con irra- administrar una dosis adecuada de hidratos de carbo-
diación previa, en el 58% de los trasplantes alogénicos no e insulina.
Tema 41.  Soporte nutricional en el paciente hematológico (trasplante de médula ósea y enfermedad)… 667

8.3. Glutamina cos66, 67. La glutamina oral no ha demostrado ningún


efecto sobre la mortalidad, las infecciones o el tiempo
La glutamina es el aminoácido más abundante en el de recuperación de la cifra de neutrófilos62. Sí se ha
organismo, sobre todo en plasma y músculo esqueléti- objetivado una reducción de la mucositis (disminución
co. Es un aminoácido no esencial, que es considerado de su duración, severidad y del tiempo que se precisa
como «condicionalmente» esencial en ciertos estados tratamiento con opiáceos) y de la EICH (posiblemente
catabólicos, ya que disminuye en enfermedades agu- debido a que la mucositis en un factor de riesgo para
das y graves (sepsis, traumatismos, quemaduras) y sus la EICH68, 69). Este efecto es más potente si se adminis-
concentraciones plasmáticas bajas se correlacionan in- tra antes del día 0, lo cual sugiere que su función pri-
versamente con el pronóstico56. Es un sustrato funda- mordial consistiría en reducir el daño que la quimiote-
mental en muchos procesos metabólicos, como son la rapia ejerce sobre la mucosa intestinal, actuando a
transferencia interórganos de nitrógeno, el transporte través de la vía del glutatión62. Existe también una ten-
de carbono, la síntesis de ácidos nucleicos y proteínas, dencia hacia una disminución de duración de la estan-
la gluconeogénesis y la homeostasis del equilibrio áci- cia media hospitalaria y de la duración del soporte nu-
do-base. Asimismo, constituye una importante fuente tricional con NP.
de energía para las células de la mucosa intestinal, y
otras células con una alta tasa de replicación como son
las células del sistema inmune57. Estudios en ratas de-
8.3.2.  Glutamina en nutrición parenteral
muestran que la suplementación con glutamina en es- La glutamina intravenosa produce menor atrofia de
tados catabólicos resulta beneficiosa58, 59. Sin embargo, la mucosa intestinal y mejoría de su función, lo cual
Alpers60 refiere que estos resultados pueden no ser ex- sugiere que, a pesar de administrarse por vía intrave-
trapolables a los humanos. Durante la enfermedad crí- nosa, este aminoácido ejercería efectos locales sobre
tica la administración intravenosa de aminoácidos (glu- el intestino70. No se ha demostrado efecto, sin embar-
tamina para prevenir su pérdida desde el músculo, go, en los siguientes puntos registrados en el día
alanina para disminuir la transaminación del glutamato +100: mortalidad, mucositis, EICH y recuperación de
y valina para aportar nitrógeno que favorezca la pro- la cifra de plaquetas. Sí parece disminuir el número de
ducción de glutamina desde el α-ketoglutarato) au- infecciones clínicas (riesgo relativo 0,75) y de cultivos
menta los niveles plasmáticos de glutamina pero no sus microbiológicos positivos, al igual que ocurre en los
niveles musculares. pacientes críticos71. Basándose en un estudio62 reali-
La glutamina tiene interacciones farmacocinéticas zado en pacientes sometidos a trasplantes autólogos,
con agentes citotóxicos como el metotrexato. Puede la glutamina intravenosa parece aumentar la mortali-
disminuir el aclaramiento renal de este fármaco, expo- dad a largo plazo, fundamentalmente por relacionar-
niendo al huésped a dosis superiores a las inicialmente se con un aumento del tiempo de recuperación de la
pautadas. Además, aumenta las concentraciones intra- cifra de neutrófilos. Se han propuesto varios motivos
tumorales del metotrexato, lo cual potenciaría sus para explicar este efecto sobre la recuperación de los
efectos tumoricidas frente a la administración del fár- neutrófilos: el efecto conocido como «alimentar al tu-
maco de forma aislada. mor»72; la disminución del efecto que los radicales li-
La evidencia existente en relación con su uso en pa- bres ejercerían contra las células tumorales durante la
cientes con trasplante de células hematológicas es con- quimio y radioterapia como consecuencia de la ac-
trovertida61. Se ha empleado en dos modalidades: oral ción antioxidante de la glutamina; y el efecto de
y parenteral. En la última revisión sistémica y metanáli- up-regulation sobre los linfocitos T-helper73, que con-
sis realizado en adultos62 se objetivaron resultados dis- tribuiría a que el tumor escapase del control del siste-
pares entre su administración oral y su administración ma inmunológico74.
intravenosa. Este metanálisis incluyó 17 estudios alea- En conclusión, no existe una clara evidencia de los
torizados con alto grado de heterogeneidad entre ellos efectos beneficiosos de la glutamina en pacientes so-
en términos demográficos y del esquema terapéutico metidos a trasplante de células hematológicas. Sin em-
de glutamina empleado (tabla 7). bargo, se requieren estudios de mayor tamaño y bien
diseñados para confirmar si se producen estos efectos
8.3.1.  Glutamina por vía oral beneficiosos y detectar los adversos62, 75, 76.

En los distintos estudios la glutamina se ha adminis- 8.4.  Otros nutrientes específicos


trado disuelta en agua o en otros líquidos, mantenién-
dola inicialmente en la boca a modo de enjuague.63 La Se han realizado muy pocos estudios con suplemen-
administración oral de glutamina en pacientes con y tos orales de ácido eicosapentanoico (EPA) en los pa-
sin mucositis causa un aumento en los niveles plasmá- cientes sometidos a trasplante hematopoyético. Exis-
ticos de glutamina64, 65, lo cual sugiere que la absorción ten dos trabajos76, 77 en los que se administra EPA por
es adecuada y que pueden producirse efectos sistémi- vía oral a estos enfermos. En el primero de ellos se
Tabla 7.  Estudios sobre la administración de glutamina en pacientes sometidos a trasplante de células hematológicas.
668

Método de Tipo de Edad de los


Estudio Enfermedad Comienzo Finalización Dosis de glutamina
administración trasplante pacientes
Adultos y Tumores hematológicos Comienzo del
Anderson63,64 Oral Auto y Alo D + 28 1 g/m2 4 x día
niños y sólidos acondicionamiento
Tumores hematológicos
Aquino65 Oral Auto y Alo Niños y sólidos y procesos Ingreso D + 28 o alta 2 g/m2 2 x por día
«no malignos»
Recuperación de
Blijlevens79 i.v. Alo Adultos Tumores hematológicos D-6 0,285 g/kg por día
los neutrófilos
Comienzo del
Brown80 i.v. Auto y Alo Adultos Tumores hematológicos Alta 50 g por día
BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

acondicionamiento
Recuperación de
Canovas81 Oral Auto No claro No claro No claro 20 g por día
los neutrófilos
Coghlin Comienzo del
Oral Auto y Alo Adultos Tumores hematológicos D + 28 o alta 10 g 3 x por día
Dickson82 acondicionamiento
Da Gama 0,15–0,2 g/kg
i.v. Alo Adultos Tumores hematológicos D+0 D+6
Torres83 por día
Gómez- Tumores hematológicos Hasta ingesta oral
i.v. Auto y Alo Adultos D-1 0,2 g/kg por día
Candela84, 85 y sólidos suficiente
Hasta resolución
Jebb86 Oral Auto No claro Tumores hematológicos D+1 de la mucositis 4 g 4 x por día
o alta
Masszi87 i.v. No claro Adultos No claro No claro No claro 2 ml/kg por día
3 días antes del
Picardi88 Oral Alo No claro No claro D+0 20 g por día
acondicionamiento
Tumores hematológicos
Piccirillo89, 90 i.v. Auto Adultos D+1 No claro 10 o 15 g diarios
y sólidos
Tumores hematológicos
Pytlik91- 93 i.v. Auto Adultos y sólidos y esclerosis D+1 D + 14 o alta 20 g por día
múltiple

(Continúa)
Tema 41.  Soporte nutricional en el paciente hematológico (trasplante de médula ósea y enfermedad)… 669

Dosis de glutamina administran 600 mg/3 veces/día de EPA desde el día


21 pretrasplante hasta el día 180 postrasplante, de-

0,285 g/kg por día


0,97 g/kg por día
tectándose una disminución significativa del TNF-α,

0,5 g/kg por día


10 g 3 x por día
INF-α, leucotrieno B4, IL-10, tromboxano A2 y PGI2
en el grupo tratado con EPA. En ambos trabajos se
objetivó una disminución tanto de la incidencia76
como de la severidad77 de la EICH. El EPA puede dis-
minuir la EICH, suprimiendo los dos principales meca-
nismos implicados en la respuesta inflamatoria sisté-
mica (RIS): aumento de las citokinas inflamatorias y
Finalización

requerimientos

requerimientos
disfunción progresiva del endotelio vascular78. A pe-
o ingesta oral
> 1,0 x 109/l
de > 50% de

de > 50% de
Ingesta oral

Ingesta oral
sar del resultado de estos estudios, siguen existiendo
Leucocitos

suficiente consideraciones teóricas sobre la seguridad de modi-


No claro

ficar el sistema inmunológico en pacientes con riesgo


de desarrollar EICH75. Por este motivo se precisan en-
sayos clínicos adecuadamente diseñados en los que
se estudie este punto antes de poder recomendar nu-
acondicionamiento

trientes inmunomoduladores.
Comienzo

Comienzo del

9. Resumen
No claro

No claro

D+1

El trasplante de células hematopoyéticas consiste en


la administración de altas dosis de quimioterapia, con
o sin irradiación corporal, seguida de infusión intrave-
nosa de células hematopoyéticas. Se emplea en el tra-
Tumores hematológicos

Tumores hematológicos

Tumores hematológicos

Tumores hematológicos

tamiento de diversas patologías, tanto congénitas


Enfermedad

como adquiridas, y dentro de estas, tumorales y no


tumorales.
En general, el estado nutricional de los candidatos es
bueno, incluso en los tumores de origen hematológi-
y sólidos

y sólidos

co. Una excepción la constituyen los enfermos con


neoplasias sólidas que suelen estar previamente desnu-
tridos. En el período postrasplante el riesgo de desnu-
trición aumenta como consecuencia de complicaciones
Edad de los
pacientes

como la anorexia, las náuseas y los vómitos secunda-


Adultos

Adultos

Adultos

Adultos

rios a los efectos adversos de los fármacos quimioterá-


picos y de los corticoides; la mucositis secundaria a las
altas dosis de quimioterapia y a la irradiación corporal
total; la EICH tanto aguda como crónica; la enferme-
trasplante

Auto y Alo

Auto y Alo

dad venoclusiva hepática y diversas alteraciones meta-


Tipo de

bólicas. La necesidad de soporte nutricional artificial es


Auto

mayor en el trasplante alogénico que en el trasplante


Alo

autólogo, debido a los mayores requerimientos calóri-


co-proteicos, a la mayor incidencia de EICH y a la ma-
administración

yor severidad de la mucositis.


Método de

La dieta oral debe ser la opción inicial. Hay que te-


ner en cuenta que la bandeja, la vajilla, los cubiertos
utilizados y los alimentos son portadores de microor-
Oral
i.v.

i.v.

i.v.

ganismos. Aunque hasta la fecha no se ha demostra-


do que deban ser estériles, en la práctica clínica se
debe procurar disminuir al mínimo posible el porcen-
taje de microorganismos que presentan. Cuando el
Estudio
(Continuación)

paciente no puede cubrir sus requerimientos nutricio-


Ziegler59, 97-100
96
Schloerb94

Schloerb95

nales mediante alimentación oral, es preciso plantear-


Sykorova

se el tratamiento con nutrición artificial. La NE es más


fisiológica y generalmente más barata que la NP. Ade-
más, se asocia a menor frecuencia de colestasis, me-
670 BLOQUE: NUTRICIÓN EN ONCOLOGÍA

nor duración de la diarrea y menor incidencia de he- 12. Clemens MR, Landner C, Ehninger G et al. Plasma
mocultivos positivos que la NP. A pesar de esto, tiene vitamin E and beta carotene concentrations du-
una serie de complicaciones relacionadas tanto con la ring radiochemotherapy preceding bone marrow
forma de administración como con la tolerancia a la transplantation. Am J Clin Nutr 1990; 51:216-
fórmula enteral. Si no es factible la nutrición por vía 219.
enteral, sería preciso recurrir a la NP. Esta última es 13. Antila HM, Salo MS, Kirvela O, Nanto V, Rajamaki
una terapia nutricional segura pero no exenta de A, Toivanen A. Serum trace element concentra-
complicaciones, siendo las más frecuentes en este tions and iron metabolism in allogenic bone ma-
tipo de enfermos la infección de la vía venosa central rrow transplant recipients. Ann Med 1992;
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En el momento actual no se recomienda el uso de 14. Hutchinson ML, Clemans GW, Springmeyer SC,
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BLOQUE:
DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES
(Dr. Miguel Ángel Martínez Olmos
y Dr. Ceferino Martínez Faedo)
TEMA 42. Alergias e intolerancias alimentarias. Diagnóstico y tratamiento.
Dres. Jessica Ares Blanco, Ceferino Martínez Faedo e Isabel González-Posada
Gómez

TEMA 43. Dieta y tests diagnósticos.


Dres. Ceferino Martínez Faedo, Francisco Villazón González y Jessica Ares Blanco

TEMA 44. Interacción entre dieta y fármacos.


Dres. Tania Ramos Martínez, Concepción Guindel Jiménez y María
Dolores Ballesteros Pomar

TEMA 45. Alimentación, nutrición, hidratación y ejercicio físico.


Dres. Nieves Palacios Gil de Antuñano y Fernando García Pérez-Sevillano
Tema 42. 
Alergias e intolerancias alimentarias.
Diagnóstico y tratamiento
Jessica Ares Blanco
Especialista en Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Central de Asturias. Oviedo (Asturias)

Ceferino Martínez Faedo


Especialista en Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Central de Asturias. Oviedo (Asturias)

Isabel González-Posada Gómez


Especialista en Pediatría y Puericultura. Centro de Salud de Raíces. Salinas (Asturias)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 677-693.

1. Introducción
2. Epidemiología
3.  Factores de riesgo
4. Fisiopatología
5.  Manifestaciones clínicas
6. Diagnóstico
7.  Historia natural de alergias e intolerancias alimentarias
8. Tratamiento
9.  Tratamiento nutricional
10. Prevención
11. Resumen
12. Bibliografía

1. Introducción patológica en una respuesta de hipersensibilidad tipo 4


(mediada por células T) al gluten, no se clasifica como
Las alergias alimentarias comprenden una serie de alergia alimentaria, y no la trataremos en este capítulo.
reacciones adversas provocadas por el consumo de de-
terminados alimentos y que tienen en su origen una
1.1.  Alergia alimentaria: ¿Qué es?
disfunción del sistema inmunológico. Se distinguen de
las reacciones tóxicas mediadas por agentes infeccio- Una alergia alimentaria es una respuesta inmunome-
sos o toxinas y de las intolerancias alimentarias (que diada que ocurre de forma reproducible tras la ingesta
incluyen todos aquellos efectos adversos ocasionados de un determinado alimento y que no ocurre en ausen-
por los alimentos por cualquier otro motivo; por ejem- cia de la misma. El diagnóstico de alergia alimentaria
plo, la intolerancia a la lactosa)1. requiere la evidencia de sensibilización y síntomas espe-
Las reacciones adversas provocadas por el consumo cíficos tras la exposición a un alimento concreto. La res-
de alimentos pueden dividirse en aquellas que tienen su puesta inmunológica se puede clasificar en inmunoglo-
origen en una disfunción del sistema inmunológico bulina E-mediada (IgE), no IgE mediada o una mezcla de
(alergias alimentarias o enfermedad celíaca) y en las que las anteriores (fig. 1). La respuesta mediada por IgE re-
no tienen base inmunológica (intolerancias alimenta- quiere sensibilización inicial al alimento (con el desarro-
rias). Aunque la enfermedad celíaca tiene su base fisio- llo de inmunoglobulina E sérica específica), y posterior-

677
678 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

Reacciones adversas
alimentarias

Intolerancias
Alergias alimentarias Enfermedad celíaca
alimentarias

Reacciones alimentarias
IgE mediadas No IgE mediadas IgE y No IgE mediadas Farmacológicas Deficiencias enzimáticas Toxinas
no intestino específicas

Síndrome de intestino
Enterocolitis inducida Alergia a la proteína de Malabsorción
Urticaria Cafeína irritable y otros Toxinas bacterianas
por proteínas de la dieta vaca fructosa/lactosa
trastornos funcionales

Enteropatías inducidas
Angioedema Esofagitis eosinofílica Tiramina Aflatoxinas
por proteínas

Proctocolitis inducida Gastroenteritis


Broncoespasmo Escombroidosis
por proteínas eosinofílica

Rinitis

Anafilaxia alérgica oral

Figura 1.  Clasificación de reacciones adversas a los alimentos52.

mente la aparición de síntomas y signos tras la ingesta La prevalencia real de alergias alimentarias inmuno-
de dicho alimento. En las alergias alimentarias no me- mediadas es difícil de medir. Existen múltiples variacio-
diadas por IgE, predominan las reacciones mediadas por nes en la metodología de los estudios realizados al
células T, pudiendo haber evidencia histológica de un respecto, desde aquellos que se basan en cuestionarios
proceso autoinmune subyacente como, por ejemplo, en completados individualmente que tienden a sobredi-
la inflamación eosinofílica del tracto gastrointestinal. mensionar su verdadera prevalencia, a otros estudios
más rigurosos que usan tests de provocación placebo-­
1.2.  Intolerancia alimentaria: ¿Qué es? doble ciego pero que incluyen un menor número de
pacientes.
Se define como una reacción no deseada tras la in- De los estudios epidemiológicos en los que se de-
gesta de un alimento, en la que no interviene el sistema muestra una respuesta IgE específica al alimento y se
inmunológico. Algunas de estas intolerancias alimenta- confirma la reactividad a este mediante pruebas de
rias implican otro proceso fisiopatológico subyacente; provocación oral, se puede estimar que la alergia a los
por ejemplo, la intolerancia a la lactosa ocurre como alimentos afecta del 1 al 3% de la población mundial,
consecuencia de una deficiencia de la enzima que hi- y que es más común en los niños menores de 3 años,
droliza la lactosa. Sin embargo, algunas de estas intole- en los que puede llegar hasta el 8%.
rancias alimentarias no pueden explicarse fácilmente Lo que está claro es que las alergias alimentarias
por procesos fisiopatológicos concretos; por ejemplo, son más frecuentes en niños que en adultos, y pare-
muchas de las intolerancias alimentarias descritas en ce que su prevalencia está aumentando en muchos
pacientes con síndrome de intestino irritable. países2-5.
En España no disponemos aún de datos actuales de
2. Epidemiología prevalencia en la población general, pero sabemos que
2.1. Prevalencia de alergias alimentarias y otras está creciendo, ya que se ha duplicado el número de
diagnósticos en poco más de una década, pasando
reacciones adversas a alimentos de una prevalencia de 3,6% en 1992 al 7,4% en 2005,
En la población general, es común la percepción de acuerdo con los resultados de los estudios epide-
subjetiva de la existencia de reacciones adversas tras la miológicos Alergológica realizados por la Sociedad Es-
ingesta de determinados alimentos. pañola de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC)6.
Tema 42.  Alergias e intolerancias alimentarias. Diagnóstico y tratamiento 679

Respecto a las intolerancias a los alimentos, la intole- Tabla 1.  Principales alérgenos en niños y adultos.
rancia a la lactosa afecta, aproximadamente, al 10% de
la población y la intolerancia al gluten de los cereales al Niños Adultos
1% de la población general. Leche Marisco
Huevos Cacahuete
3.  Factores de riesgo Cacahuete Nueces
El entorno está claramente implicado en la aparición Soja Pescado
de enfermedades alérgicas. Estudios epidemiológicos Trigo
han identificado diferentes factores de riesgo, como la Pescado
disminución de la biodiversidad de la microbiota intes- Nueces
tinal7, incremento del sedentarismo, bajos niveles de
vitamina D8, abandono de patrones de dieta saludables
como la dieta mediterránea9, incremento del consumo Las reacciones mediadas por IgE son las más estudia-
de alimentos procesados y cambios en los hábitos ali- das y mejor conocidas. Cuando un individuo predis-
menticios infantiles10, entre otros. puesto ingiere un alimento concreto, se induce la se-
Otros factores asociados con atopia, como la dura- creción de IgE específica contra el mismo y se sitúan en
ción de la lactancia materna11, parto vaginal o cesárea12, la superficie de basófilos y mastocitos, dando lugar a la
infecciones virales al comienzo de la vida13 y exposición sensibilización del sujeto; si posteriormente existe un
a antibiótico14, podrían tener también influencia en el nuevo contacto con el alérgeno alimentario, se produ-
desarrollo de alergias alimentarias. A pesar de esto, ce la liberación de mediadores de estas células (hista-
solo un pequeño porcentaje de niños llegan a desarro- mina, prostaglandinas, leucotrienos, entre otros) que
llar alergia alimentaria clínicamente, sugiriendo que desencadenan el cuadro clínico.
hay individuos que están genéticamente más predis- Una teoría reciente trata de explicar el fenómeno de
puestos que otros, pero solo en ciertos medios. Así, la la sensibilización y de la tolerancia en función de la vía
compleja interacción entre predisposición genética y por donde penetra el alérgeno. Así, si el contacto ini-
exposición ambiental durante el desarrollo del sistema cial se produce a través de la barrera cutánea el alerge-
inmune es primordial en la patogenia de la enferme- no es captado por las células de Langerhans y se indu-
dad. Estas interacciones gen-medioambiente nos dan ce una respuesta mediada por linfocitos TH2 y
una explicación de cómo individuos con diferentes ge- producción de IgE por las células B. Por el contrario, si
notipos responden a variaciones ambientales de dife- el alergeno se ingiere por vía oral en cantidades sufi-
rentes modos. Por ejemplo, la deficiencia de vitamina cientes en edades tempranas, se induce la tolerancia
D en la infancia es un factor de riesgo para el desarrollo mediante activación de linfocitos TH1 en el tejido lin-
de alergias alimentarias, pero individuos portadores foide asociado al intestino18.
del polimorfismo rs7041T de la proteína fijadora de Se desconoce la cantidad necesaria para producir el
vitamina D están protegidos15. De forma similar, porta- proceso de sensibilización, pero una vez que se ha de-
dores de mutaciones con pérdida de función de la sarrollado la alergia mediada por IgE puede existir una
filagrina (proteína estructural fundamental para el de- respuesta adversa a cantidades extremadamente bajas
sarrollo y mantenimiento de la barrera cutánea) son del alimento causante.
más susceptibles a desarrollar alergia alimentaria tras
la exposición a proteína de cacahuete16. Los modelos 4.1.1.  Alergia alimentaria mediada por IgE
tradicionales de interacciones gen-ambiente están La alergia alimentaria supone una respuesta anormal
siendo expandidos en la actulidad incluyendo mecanis- del sistema inmune de la mucosa a antígenos liberados
mos epigenéticos de regulación génica como compo- en el tubo digestivo. La barrera mucosa intestinal pue-
nentes adicionales de la enfermedad. Los procesos epi- de estar alterada, como ocurre en los primeros meses
genéticos regulan toda la actividad génica en las de vida o en otras circunstancias patológicas, favore-
células y son sensibles a variaciones tanto genéticas ciendo el paso de antígenos a su través. Incluso en un
como ambientales. Así, los mecanismos epigenéticos tubo digestivo maduro íntegro se ha visto que aproxi-
sirven para integrar tanto señales ambientales como madamente un 2% de los antígenos ingeridos con los
genéticas de forma que se module el resultado funcio- alimentos son absorbidos y transportados intactos en
nal del genoma17. el torrente circulatorio19.
A pesar de que estas moléculas penetran de forma
4. Fisiopatología habitual en el tubo intestinal, raramente producen
problemas debido a que se produce el llamado fenó-
4.1.  Alergias alimentarias
meno de la tolerancia. Este fenómeno estaría mediado
En la tabla 1 se recogen los principales alimentos por las células intestinales —el enterocito y otras célu-
implicados en la aparición de alergias. las dendríticas— que funcionan como presentadoras
680 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

de antígenos a las células T. Se ha sugerido que las de alergias alimentarias, atribuyéndose entonces sobre
células T situadas en el entorno de la mucosa intestinal todo a cambios en exposiciones ambientales24.
favorecen la tolerancia, mientras que las células T de
los nódulos linfáticos mesentéricos, estimuladas por 4.2.  Intolerancias alimentarias
los antígenos, se diferencian y emigran a la mucosa
donde inducen respuestas inmunológicas locales. 4.2.1.  Intolerancia a la lactosa
La flora bacteriana saprófita puede modular la res-
La lactosa de la dieta es hidrolizada por lactasa de la
puesta inmunológica, como se ha visto en animales
mucosa intestinal a glucosa y galactosa antes de su
criados en medios libres de gérmenes, que tienden a
absorción. La alactasia hereditaria es una enfermedad
presentar errores en el fenómeno de la tolerancia. La
rara en la que la lactasa está completamente ausente
flora bacteriana tiende a estabilizarse en las primeras
desde el nacimiento. Sin embargo, muchos adultos
24 horas de vida y permanece relativamente estable
que malabsorben lactosa tienen niveles de lactasa nor-
durante toda la vida20. Estudios recientes han demos-
males al nacimiento, pero estos caen tras el destete,
trado el efecto beneficioso del Lactobacillus GG en la
llevando a una deficiencia en niños mayores y adultos.
prevención de la dermatitis atópica, sin que se haya
Aproximadamente el 20% de los europeos del norte
demostrado por el momento su utilidad en la preven-
y americanos, y la mayoría de la población mundial ma-
ción o tratamiento de las alergias alimentarias.
labsorben lactosa, pero la mayoría son asintomáticos.
Además, recientemente se ha descrito que las modifi- La malabsorción de la lactosa es raramente un pro-
caciones epigenéticas del genoma son mediadores clave blema en adultos, dado que los malabsorbedores nor-
en las interacciones entre el medio ambiente, actuando malmente reconocen qué productos del consumo dia-
también como potenciales biomarcadores de enferme- rio les producen malestar abdominal, modificando así
dad modificables. Debido a su posición entre el genoma su dieta sin consulta médica previa. Es más, cuando los
y el medio ambiente, traducen la interacción entre la pre- malabsorbedores ingieren lactosa de forma crónica, se
disposición genética y la exposición ambiental. Recientes produce adaptación de la flora cólica, con incremento
estudios han mostrado que las variantes epigenéticas, de la tolerancia a la lactosa25.
sobre todo en el patrón de metilación de ADN, están
asociadas con alergias alimentarias y otras alergias. «Sig-
nos» de metilación aberrante se han identificado como 4.2.2.  Intolerancia a la fructosa
marcadores específicos de procesos relacionados con la La fructosa es uno de los dos monosacáridos simples
enfermedad, incluyendo fenotipos inmunocelulares, en- con sucrosa. Se encuentra en las frutas y, a veces, es
vejecimiento natural y exposiciones ambientales, modifi- añadido a algunos alimentos por su sabor dulce. La
cables por el genotipo del huésped. Los signos de meti- fructosa se absorbe sin participación enzimática. Se
lación podrían tener utilidad clínica para discriminar transporta mediante difusión facilitada mediante el
fenotipos de alergias alimentarias subrayando los recien- transportador GLUT5. Un cotransportador dependien-
tes avances en la aplicación de biomarcadores epigenéti- te de fructosa, el GLUT2, incrementa su absorción me-
cos para predecir fenotipos complejos. diante transporte osmótico y difusión pasiva.

4.1.2. Genes, medio ambiente y etiología de la 4.2.3.  Sensibilidad al gluten


alergia mediada por IgE
A diferencia de la enfermedad celíaca, que es una
La mayoría de la población que sufre alergias alimen- reacción inmunomediada al gluten en individuos gené-
tarias son niños menores de 4 años, lo que nos confir- ticamente predispuestos, y de la alergia al trigo, que es
ma que el sistema inmune en desarrollo es particular- una respuesta alérgica mediada por IgE en respuesta a
mente vulnerable21. Al igual que en otras enfermedades la gliadina, se ha distinguido el concepto de «sensibili-
complejas, se implican en su patogenia tanto factores dad al gluten»26.
genéticos como ambientales. Existe escepticismo en cuanto al concepto de sensi-
Estudios en el ámbito de la genómica indican que las bilidad al gluten, y preocupa que tanto la industria ali-
alergias alimentarias son desórdenes poligénicos que mentaria como los profesionales de la salud estén po-
implican potencialmente cientos de genes, con una he- niendo demasiado interés en eliminar el gluten en
redabilidad que oscila entre el 15-30% para alergias pacientes sin enfermedad celíaca. A pesar de la escasez
alimentarias IgE específicas11 y 80% para alergia al ca- de ensayos clínicos controlados que demuestren y apo-
cahuete22. Esta mayor predisposición se relaciona con yen el estado de sensibilidad al gluten, un ensayo con-
polimorfismos funcionales en las regiones HLA (antíge- trolado doble ciego mostró que algunos pacientes con
no leucocitario humano) DQ y HLA DR del gen23. síndrome de colon irritable sin celiaquía mejoraban su
De forma general, las alteraciones genéticas confie- sintomatología con dieta libre de gluten27. Solo con
ren un nivel bajo-moderado de predisposición, dismi- más ensayos clínicos controlados se verificará y se cla-
nuyendo así su protagonismo en la elevada prevalencia rificará el concepto de la sensibilidad al gluten no celía-
Tema 42.  Alergias e intolerancias alimentarias. Diagnóstico y tratamiento 681

ca y su solapamiento con el SCI (síndrome de colon una reacción tóxica (en forma de brotes que afectan a
irritable) se alcanzará. todos o la mayoría de los consumidores de un determi-
Al carecer de criterios diagnósticos consensuados, nado alimento con contenidos excesivos de histamina)
únicamente se puede diagnosticar mediante exclusión o una intolerancia que deriva de un inadecuado fun-
de otras entidades y mejoría/empeoramiento tras reti- cionamiento de los sistemas de eliminación de la hista-
rada/reintroducción del gluten (síntomas dependientes mina de origen genético, patológico (en relación con
del gluten). Su agente causal es desconocido y existen enfermedades intestinales) o por inhibición farmacoló-
dudas acerca de si es realmente el gluten o algún otro gica de las enzimas implicadas en la metabolización
componente del trigo, especialmente los hidratos de (monoaminooxidasa [MAO] y diaminooxidasa [DAO],
carbono (FODMAP, en inglés, fermentable oligosac- principalmente).
charides, disaccharides, monosaccharides and polyols),
el desencadenante de los síntomas.
4.2.6. Intolerancias a otro tipo de alimentos
Es necesario realizar ensayos clínicos de alta calidad,
con pacientes bien seleccionados y en diferentes luga- • Conservantes: destacan los cloruros, nitratos y ni-
res del mundo para poder concluir definitivamente si tritos, que están en los embutidos y pueden pro-
existe o no la SGNC (sensibilidad al gluten no celíaca) ducir metahemoglobinemia, cefalea, rubor, vérti-
como una entidad propia y, en caso de confirmarse, go, etc.
evaluar cuál es el mejor tratamiento dietético. • Sulfitos (E 220, E 221, E 222, E 223, E 224, E 226,
E 227, E 228): son sales inorgánicas utilizadas con
4.2.4. Intolerancias alimentarias en el frecuencia por la industria alimentaria como aditi-
vos por sus propiedades antioxidantes y antisépti-
síndrome de colon irritable cas, así como por su capacidad para modificar la
El contenido calórico de una comida, la cantidad de textura y blanquear los alimentos. Está permitido
fibra y la proporción de grasa frente a carbohidratos el empleo de sulfitos como aditivo en la fruta de-
pueden influenciar la aparición de contracciones coló- secada, las bebidas (zumos y vino), sucedáneos de
nicas de la respuesta gastrocólica. carne, pescado y crustáceos a base de proteínas y
Típicamente los pacientes con SIC, refieren ingestas hortalizas, salchichas, patatas procesadas, gam-
elevadas de alimentos ricos en carbohidratos, así como bas y camarones. Los individuos asmáticos sensi-
grasas, café, alcohol y picante, que son frecuentes cau- bles a los sulfitos deberán evitar estos alimentos.
santes de los síntomas. Los pacientes suelen restringir • Benzoatos: se encuentran como aditivos con las
su dieta de acuerdo a las intolerancias percibidas. Los denominaciones E 210, E 211, E 212 y E 213. Los
efectos de alimentos específicos han sido poco estu- benzoatos no son sólo aditivos, sino que están de
diados. Sin embargo, un estudio manométrico mostró forma natural en algunos alimentos, como los
que beber café precipita las contracciones rectosigmoi- arándanos y las ciruelas y en especias como la ca-
deas y urgencia defecatoria en minutos tras la ingesta nela y el clavo. También se encuentran en otros
en algunos individuos28. alimentos, aunque en menor cantidad, como
No existe evidencia para el aumento de alergias IgE café, té y vino tinto. El ácido benzoico (E 210)
mediadas en pacientes con SCI aunque los estudios puede estar en determinados productos fermen-
son limitados29. A pesar de que la presencia de anti- tados. Su uso está permitido en numerosos ali-
cuerpos IgG específicos denota meramente exposición mentos y no produce efectos nocivos cuando se
a la comida, un ensayo mostró mejoría de la sintoma- utiliza en pequeñas cantidades. Las personas sen-
tología cuando los pacientes con SCI seguían una dieta sibles al ácido acetilsalicílico y/o la tartracina pue-
restringida en alimentos frente a los que habían desa- den manifestar sensibilidad a los benzoatos, dada
rrollado anticuerpos específicos IgG en los tests realiza- la similitud estructural.
dos. • Antioxidantes y sinérgicos: están los ácidos láctico
y cítrico, butilhidroxianisol (E 320), butilhidroxito-
4.2.5. Intolerancia alimentaria de causa lueno (E 321), usados en margarinas, aceites de
semillas, conservas vegetales, y pueden provocar
farmacológica
asma, rinitis y urticaria.
Este tipo de intolerancias son debidas a reacciones • Colorantes: se ha relacionado la tartracina (E 102)
anómalas a sustancias presentes en ciertos alimentos con cuadros de asma y urticaria crónica.
(quesos fermentados, vino, chocolate, crustáceos, es- • Glutamato monosódico (E 621), neurotransmisor
pinacas, etc.). Son dependientes de la dosis y necesitan cuya acción produce un incremento de la acetilcoli-
distintos cofactores, por lo que no aparecen con cada na en la sinapsis, también conocido con las siglas
exposición a este tipo de alimentos. anglosajonas MSG. Es un potenciador del sabor, re-
La acumulación de histamina puede ser consecuen- conocido ampliamente como el «quinto sabor». En
cia directa de una reacción alérgica (mediada por IgE), grandes dosis posee un sabor dulce-salado que los
682 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

japoneses denominan umami. Se puede encontrar nan de forma cruzada con alergenos aéreos (póle-
en sopas, mariscos, aceitunas, mostaza, salsas, pata- nes). Como estas proteínas son sensibles a la de-
tas chips, maíz tostado, condimentos preparados y gradación por el ácido de los jugos gástricos y el
conservas vegetales. Se sospecha que su inclusión en calor, la mayoría de los pacientes sólo desarrollan
los alimentos de tipo aperitivo induce hiperfagia. Se síntomas en la mucosa oral y faríngea cuando in-
emplea mucho en la cocina oriental, y causa el sín- gieren estos alimentos en forma cruda (frutas y
drome del restaurante chino, que sólo afecta al verduras) cursando con dolor e inflamación local.
1-2% de la población adulta. Los síntomas suelen • La anafilaxia gastrointestinal es un proceso tam-
ocurrir después de una ingesta de más de 3 g, sobre bién relacionado con el contacto directo del ali-
todo cuando no se toma junto a otros alimentos y mento con la mucosa gástrica y de las primeras
cuando se ingiere en un alimento líquido. A los 5 o porciones del intestino delgado. Se presenta de
10 minutos de su ingestión aparece un eritema ge- forma habitual con náuseas repentinas, dolor ab-
neralizado, cefalea, parestesias, sudoración, prurito dominal tipo cólico y vómitos y generalmente se
generalizado, mareo, taquicardia y sensación de acompaña de síntomas alérgicos en otras locali-
quemazón en el tórax, que se extiende al cuello y el zaciones.
abdomen, así como opresión torácica30. • La esofagitis eosinofílica alérgica suele aparecer en
la infancia o adolescencia y debe sospecharse
5.  Manifestaciones clínicas cuando existe escasa respuesta al tratamiento con-
vencional del reflujo gastroesofágico. Puede estar
5.1.  Alergias alimentarias mediada por IgE, por inmunidad celular o por am-
A efectos prácticos dividiremos los cuadros clínicos bas de forma simultánea. El diagnóstico se basa en
ocasionados por las alergias alimentarias en dos gran- la detección de infiltrado eosinofílico en las pare-
des grupos. Por un lado, las reacciones causadas por des esofágicas; también se suele apreciar eosinofi-
IgE y, por otro, las que se asocian a alteraciones en la lia periférica en más de un 50% de los casos.
inmunidad celular, existiendo cuadros mixtos en los • La gastroenteritis eosinofílica alérgica puede ocu-
que pueden intervenir ambos tipos de alteraciones rrir en cualquier edad. En los lactantes puede cur-
(tabla 2). Por último, diferenciaremos las distintas ma- sar simulando una estenosis pilórica y en etapas
nifestaciones clínicas que pueden aparecer en función posteriores de la infancia acompañarse de un re-
de los principales órganos afectados. En la mayoría de traso en el crecimiento y el desarrollo. La clínica
los casos las reacciones mediadas por IgE suelen ser de depende de la extensión y localización de las lesio-
comienzo inmediato tras la ingesta del alimento cau- nes inflamatorias; los pacientes pueden presentar
sante, mientras que en las que interviene la inmunidad dolor abdominal, vómitos, diarrea, pérdidas san-
celular los síntomas pueden aparecer incluso varios guíneas en heces y anemia ferropénica. El diag-
días después del contacto con el alergeno. nóstico también está basado en la detección de
infiltrados eosinofílicos en la biopsia gástrica o
5.1.1. Enfermedades gastrointestinales intestinal.
• La colitis inducida por la proteína de los alimentos
relacionadas con alergia alimentaria
es una reacción mediada por la inmunidad celular
• Síndrome de alergia oral: está producido por una que afecta a lactantes en los primeros meses de
serie de proteínas de origen vegetal que reaccio- vida en relación con las proteínas que recibe a tra-

Tabla 2.  Enfermedades originadas por alergia alimentaria.

Tipo Mediadas por IgE IgE e inmunidad celular Inmunidad celular


Enterocolitis, proctocolitis,
Esofagitis eosinofílica
Síndrome de alergia oral enteropatías inducidas por
Gastrointestinales Gastroenteritis
Anafilaxia gastrointestinal proteína
eosinofílica
Celíaca
Urticaria
Dermatitis herpetiforme
Cutáneas Angioedema Dermatitis atópica
Dermatitis por contacto
Rash morbiliformes
Rinoconjuntivitis Hemosiderosis pulmonar
Respiratorias Asma
Broncoespasmo inducida por alimentos
Generalizadas Shock anafiláctico
Tema 42.  Alergias e intolerancias alimentarias. Diagnóstico y tratamiento 683

vés de la leche materna o que forman parte de las que manejan de forma habitual pescado, marisco,
fórmulas adaptadas cuando la lactancia es artifi- carne o huevos crudos.
cial. No suele repercutir en el crecimiento y se iden- • La dermatitis herpetiforme se asocia a la enferme-
tifica por la aparición de heces teñidas de sangre. dad celíaca y se caracteriza por afectar de forma
• La enterocolitis inducida por la proteína de los ali- simétrica la superficie extensora de las extremida-
mentos también está mediada por la inmunidad des y la región glútea en forma de erupción papu-
celular y aparece en lactantes en los primeros me- lovesicular que suele ser muy pruriginosa.
ses de vida, estando generalmente causada por
las proteínas de la leche de vaca o de soja de las 5.1.3. Enfermedades respiratorias relacionadas
fórmulas adaptadas, aunque también puede estar
ocasionada por otros alimentos en niños mayores.
con alergia alimentaria
No suele existir sintomatología mientras reciben • Rinoconjuntivitis: raramente se produce de forma
lactancia materna, pero puede producirse la sensi- aislada como única forma de expresión de una
bilización a partir de las proteínas que pasan a alergia alimentaria, pero puede ocurrir asociada a
través de la leche materna. Los pacientes típica- otros síntomas atópicos.
mente presentan vómitos mantenidos tras haber • Asma: se produce por un mecanismo mixto (IgE e
ingerido el alergeno. inmunidad celular) y constituye una manifestación
• La enteropatía inducida por la proteína de los ali- poco habitual de las alergias alimentarias. Sin em-
mentos se suele presentar en los primeros meses bargo, no es raro que se observen reacciones de
de vida cursando con diarrea, esteatorrea y escasa broncoespasmo agudas junto con otros síntomas
ganancia ponderal. La biopsia muestra atrofia ve- inducidos por la comida. Existen datos que sugie-
llositaria parcheada. ren que los pacientes asmáticos con alergia ali-
• La enfermedad celíaca también es considerada una mentaria son los que tienen un riesgo mayor de
alergia alimentaria y es una enteropatía más exten- sufrir brotes respiratorios más severos. Se debe
sa que se asocia a cuadros de malabsorción, retraso sospechar que el asma está inducida por alerge-
en el crecimiento, malnutrición energético-proteica nos de la comida cuando es refractaria al trata-
y carencias de micronutrientes. Guarda relación miento convencional o existe una historia que
con la ingesta de gliadina que se encuentra en ce- pueda sugerir alergia alimentaria (reflujo, derma-
reales como el trigo, cebada, centeno y avena. titis atópica).
• El síndrome de Heiner es una rara enfermedad que
En ocasiones, la alergia a los alimentos mediada por cursa con hemosiderosis pulmonar típicamente
IgE en niños puede producir estreñimiento, sin que ocasionada por las proteínas de la leche de vaca.
existan prácticamente síntomas acompañantes. Tam-
bién se ha especulado con la posibilidad de que los
5.1.4. Anafilaxia
cólicos del primer trimestre y el síndrome del colon irri-
table tengan un origen alérgico, sin que se haya podi- Se puede definir la anafilaxia como una reacción de
do demostrar nada a este respecto. hipersensibilidad sistémica o generalizada severa que
puede comprometer la vida. La alergia alimentaria es la
5.1.2. Enfermedades cutáneas relacionadas primera causa de anafilaxia en las series recogidas de
los departamentos de urgencias. Además de una varia-
con alergia alimentaria
ble representación de los síntomas cutáneos, respirato-
La urticaria aguda está mediada por IgE y cursa con rios y digestivos que hemos desglosado previamente,
habones de aspecto inflamatorio muy pruriginosos. los pacientes pueden tener afectación cardiovascular
Suele estar en relación con la ingesta del alergeno, con hipotensión, arritmias cardíacas y colapso vascular.
pero también se puede producir por contacto a través Los alimentos que más frecuentemente se han visto
de la piel. La urticaria crónica rara vez guarda relación implicados en este tipo de reacciones son los cacahue-
con alergias alimentarias. tes, las nueces y el marisco.
Los pacientes susceptibles a este tipo de reacciones
• La dermatitis atópica se debe tanto a inmunidad deben disponer en su domicilio de dispositivos para
celular como a reacción mediada por IgE. Se trata poder administrarse adrenalina y deben ser entrena-
de una forma de eccema que comienza general- dos para su uso ante la existencia de los primeros
mente en la infancia y se caracteriza por una dis- síntomas.
tribución típica en zonas flexoras acompañado de Existe una forma de anafilaxia que se reproduce úni-
prurito intenso y que suele cursar con remisiones camente cuando el paciente ha realizado ejercicio físi-
y exacerbaciones. co en el plazo de 2-4 horas después de ingerir el ali-
• La dermatitis de contacto inducida por alimentos mento (probablemente se produce de alguna manera
se puede ver ocasionalmente en manipuladores una mayor permeabilidad intestinal). El alergeno cau-
684 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

sante del proceso en la mayoría de los casos es la glia- que condicionan sintomatología adversa de tipo gas-
dina ω-5 que se encuentra en el trigo. trointestinal, con demasiada frecuencia serán diagnos-
ticados como SCI u otros trastornos funcionales sin nin-
5.2.  Intolerancias alimentarias gún intento de investigar el problema.

5.2.1.  Intolerancia a la lactosa 5.2.5.  Intolerancia al sorbitol


Los malabsorbedores de lactosa adquieren síntomas El sorbitol es un polialcohol, utilizado como edulco-
propios de intolerancia a la lactosa (dolor abdominal rante artificial en muchos productos «sin azúcar» que
tipo cólico, flatulencia, distensión abdominal, diarrea hay en el mercado. La capacidad de absorción intesti-
osmótica), si ingieren cantidades excesivas de lactosa. nal de sorbitol es limitada y la ingesta de grandes can-
Los síntomas gastrointestinales tienen semejanza con tidades (20-50 g) puede causar una diarrea osmótica.
los del SCI. Sin embargo, la prevalencia de intolerancia En algunos sujetos sanos la ingesta de 5 g conlleva hipo­
a la lactosa en pacientes con SCI es la misma que en la absorción y aparición de síntomas de diarrea y dolor
población general32. abdominal cólico. Además, el sorbitol interfiere en la
absorción de fructosa; al ingerirlos juntos la hipoabsor-
5.2.2.  Intolerancia a la fructosa ción de estos azúcares es mayor que cuando se admi-
nistran por separado.
La absorción de fructosa se estimula mediante la
coingestión de glucosa de forma dosis-dependiente.
5.2.6. Intolerancia alimentaria de causa
Este proceso absortivo no se realiza de forma completa
en algunos individuos, y puede saturarse si hay exceso farmacológica o química
de fructosa intestinal luminal, particularmente si hay Las sustancias principales involucradas en este tipo
mínima cantidad de glucosa. La fructosa no absorbida de reacciones son las aminas vasoactivas (histamina,
correctamente alcanzará el colon, donde en el proceso tiramina, noradrenalina, feniletilamina, triptamina, se-
de fermentación se producirán gas y síntomas similares rotonina, dopamina) y las metilxantinas (cafeína, teofi-
a los propios de la malabsorción de lactosa y SCI. lina, teobramina), capsaicina y el alcohol.
En la intolerancia a la histamina, la aparición de los
5.2.3.  Sensibilidad al gluten síntomas no está ligada al consumo de un producto en
concreto, sino que puede asociarse a una amplia gama
La sensibilidad al gluten en ausencia de enfermedad
de alimentos con contenido variable de histamina. Los
celíaca o alergia al trigo es un diagnóstico controverti-
fármacos principales con efecto inhibidor de estas enzi-
do en el que la exclusión alimentaria del gluten puede
mas son: moclobemida, selegilina, isoniazida, acetilcis-
mejorar multitud de síntomas, incluyendo dolores de
teína, ambroxol, amitriptilina, cloroquina, ácido clavulá-
cabeza, abdominales y musculoesqueléticos, e incluso
nico, metamizol, propafenona, verapamilo, cimetidina y
irritabilidad emocional.
prometazina. Asimismo, el alcohol inhibe la actividad de
estas enzimas, lo que explicaría los síntomas de la into-
5.2.4. Intolerancias alimentarias en síndrome lerancia a la histamina causados por el vino.
de colon irritable
El desarrollo de dolor abdominal tipo cólico y urgen- 6. Diagnóstico
cia defecatoria de tipo postprandial puede ser simple-
6.1.  Alergias alimentarias
mente parte de una repuesta gastrocólica exagerada.
Los síntomas que se producen en el SCI aún no están Es necesaria una anamnesis completa para determi-
bien determinados. Anormalidades en la motilidad gas- nar si los síntomas de un paciente representan una reac-
trointestinal, inflamación, microflora, hipersensibilidad ción adversa (tabla 3), si la reacción adversa al alimento
visceral, sensibilización central, factores psicológicos y es una reacción de intolerancia o de alergia a los alimen-
dietéticos pueden ser relevantes. Los síntomas frecuen- tos y si esta última es una respuesta mediada por IgE o
temente empeoran en el período postprandial, y mu- por células. Deben establecerse los siguientes hechos:
chos de los pacientes con SCI piensan que tienen algún
tipo de reacción adversa alimentaria31. Los pacientes en 1) El alimento sospechoso de provocar la reacción y
los que los síntomas gastrointestinales se producen sólo la cantidad ingerida.
tras la ingesta de un determinado alimento pueden in- 2) El intervalo transcurrido entre la ingestión y la
terpretar que tienen algún tipo de alergia o intolerancia aparición de los síntomas.
alimentaria, descartándose la misma realizando los 3) El tipo de síntomas desencadenados por la inges-
tests específicos y diagnosticándose finalmente como tión.
síndrome de intestino irritable. En cambio, muchos 4) Si ingerir el alimento sospechoso produjo sínto-
adultos con reacciones postprandiales no deseadas, mas similares en otras ocasiones.
Tema 42.  Alergias e intolerancias alimentarias. Diagnóstico y tratamiento 685

Tabla 3.  Factores que sugieren alergia alimentaria mediada por IgE.

Se pueden identificar alimentos específicos


Los síntomas aparecen pronto tras la ingesta del supuesto alergeno
Los síntomas son típicos y afectan a más de un órgano (dolor o inflamación oral, náuseas, vómito, dolor abdominal,
diarrea, asma, rinitis, urticaria, angioedema, anafilaxia)
El paciente tiene historia familiar o personal de otras enfermedades atópicas

5) Si son necesarios otros factores incitadores, como sultado en unidades arbitrarias en vez de porcentajes o
el ejercicio. clases, y un determinado punto de corte predice el de-
6) El intervalo transcurrido desde la última reacción sarrollo de una reacción si se ingiere el alimento con
al alimento. una fiabilidad del 95%32.
Las concentraciones séricas de IgE específica
Las pruebas cutáneas intraepidérmicas (prick test) y frente a alimentos ≥15 kU A /l para la leche (≥5 kU A /l
las de laboratorio son útiles para demostrar la sensibi- en niños ≤1 año), ≥7 kU A /l para el huevo (≥2 kU A /l en
lización IgE, definida como la presencia de anticuerpos niños <2 años) y ≥14 kU A /l para el cacahuete se aso-
IgE específicos frente a los alimentos. Los prick test cian a una probabilidad >95% de reactividad clínica
consisten en la aplicación en la epidermis de un extrac- frente a estos alimentos en los niños con sospecha. Sin
to comercial que incluye cantidades definidas del aler- una anamnesis clara de reactividad a un alimento y
geno en cuestión. Una vez se pone en contacto con las pruebas anticuerpos IgE específicos frente a este, deben
IgE específicas que existen en la superficie de los mas- realizarse estudios definitivos antes de recomendar que
tocitos en esa localización, se produce la liberación de se evite el alimento o que se sigan dietas muy restricti-
los mediadores que causan una reacción inflamatoria vas, ya que estas pueden provocar deficiencias nutricio-
local. El tamaño de la induración que se produce unos nales, ser impracticables, tener un coste elevado, rom-
15 minutos después debe medir, al menos, 3 mm más per la dinámica familiar y ser fuente de futuros trastornos
de diámetro que el testigo que se realiza con suero relacionados con la alimentación. Las reacciones alérgi-
salino. Esta prueba permite llegar al diagnóstico cas a alimentos mediadas por la IgE en general son muy
con una sensibilidad del 75-90% y especificidad del específicas del alimento, de forma que no se aconsejan
30-60%. Muchas frutas y verduras requieren prick test las dietas de exclusión amplias, como la evitación de to-
con el producto fresco, porque las proteínas lábiles se das las legumbres, cereales o derivados animales.
destruyen durante la preparación comercial. Un resul- No existen estudios de laboratorio que ayuden a
tado negativo de la prueba cutánea prácticamente ex- identificar los alimentos responsables de las reacciones
cluye una forma mediada por IgE de alergia alimenta- mediadas por células. En consecuencia, la única forma
ria. Por el contrario, la mayoría de los niños con de establecer el diagnóstico son las dietas de elimina-
respuestas positivas en las pruebas cutáneas frente a ción seguidas de la provocación con el alimento. Los
un alimento no reaccionará cuando ingieran el alimen- alergólogos con experiencia en el tratamiento de las
to, de forma que a menudo son necesarias pruebas reacciones alérgicas a alimentos y capaces de tratar la
más definitivas, como las concentraciones de IgE o la anafilaxia deben ser los encargados de realizar las pro-
eliminación y provocación con el alérgeno, para esta- vocaciones con alimentos. Antes de iniciar una provo-
blecer el diagnóstico de alergia alimentaria. cación se deben eliminar los alimentos sospechosos de
En segundo lugar, se dispone de pruebas in vitro la dieta durante 10-14 días en la alergia alimentaria
para determinar la existencia de IgE específicas me- mediada por IgE y hasta 8 semanas en algunos trastor-
diante radioinmunoensayo (RAST). Se trata de fijar en nos mediados por células, como la esofagitis eosinofí-
una matriz sólida un alergeno para, a continuación, lica. Algunos niños con reacciones mediadas por célu-
ponerlo en contacto con el suero del paciente: si en el las a la leche de vaca no toleran fórmulas parcialmente
suero existe IgE específica quedará fijada a la matriz. hidrolizadas y deben recibir otras con la proteína en
Posteriormente se puede detectar la existencia de esos forma de aminoácidos. Si los síntomas continúan sin
anticuerpos añadiendo anticuerpos marcados específi- cambiar a pesar de las dietas de eliminación adecuadas
cos para IgE. Un título elevado de anticuerpos puede es improbable que la alergia alimentaria sea responsa-
predecir una mayor posibilidad de presentar reacciones ble del trastorno del niño.
alérgicas, sobre todo si se realiza mediante un método Cuando el mecanismo causante más probable es la
particular (sistema CAP, mejora los resultados del inmunidad celular (de manera exclusiva o asociada a
RAST, se basa en un soporte que es una cápsula flexible IgE), el diagnóstico se puede apoyar en otras pruebas
de un material derivado de la celulosa) que mide el re- diagnósticas como la endoscopia con biopsia para las
686 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

gastroenteropatías eosinofílicas, anticuerpos específi- lo contiene. La mejoría o desaparición de la sintomato-


cos para la enfermedad celíaca, etc.33. En estos casos logía en un plazo de 1 a 6 semanas servirá para confir-
puede ser muy dificultoso llegar a determinar el ali- mar el diagnóstico etiológico; no obstante, puede exis-
mento causante de las reacciones al no guardar una tir un efecto placebo, por lo que en determinadas
relación temporal tan clara con la ingesta previa. circunstancias puede ser necesario llevar a cabo una
Una vez confirmado el diagnóstico e identificado el prueba de reintroducción oral.
alergeno causante de la reacción, el siguiente paso Las pruebas de provocación oral se realizan intro-
consiste en la eliminación de la dieta del alimento que duciendo cantidades progresivamente mayores del ali-

Historia clínica

Sugestiva No sugestiva

Estudio alimentario Ausencia de AA

Orientación de las pruebas


Error dietético
cutáneas y de laboratorio

Pruebas cutáneas Ausencia de AA

Positivas o dudosas Negativas Ausencia de AA

IgE específicas
Negativas Ausencia de AA
(CAP System)

Positivas

Leche, huevo, pescado,


Otros alimentos
cacahuete

Concentración de
Exclusión 17 días
IgE > valores
a 4 semanas
umbral establecidos

AA PPO

Positivas Negativas

AA Ausencia de AA

Figura 2.  Esquema general para el diagnóstico de la alergia alimentaria53. Árbol de decisiones. Diagnóstico de
alergia alimentaria (AA). PPO: prueba de provocación por vía oral.
Tema 42.  Alergias e intolerancias alimentarias. Diagnóstico y tratamiento 687

mento bajo vigilancia médica estrecha. Idealmente millón (ppm) mayores que el valor basal34. La sen-
debe realizarse controlado con placebo, por un siste- sibilidad de la prueba aumenta un 40-60% si la
ma «doble ciego» que ayude a evitar errores de apre- medición se realiza a las 6 horas de haber tomado
ciación tanto por parte del paciente como del observa- la lactosa35. Un 20% de los pacientes con intole-
dor. Se utiliza habitualmente en reacciones mediadas rancia a la lactosa tienen falsos negativos; incluso
por IgE cuando las pruebas cutáneas y el RAST son algunos individuos tienen test positivo sin clínica
positivos a distintos alergenos y tras la eliminación de concomitante, en probable relación con restric-
la dieta se han resuelto los síntomas. Cuando se trata ción dietética de lactosa.
de reacciones no mediadas por IgE puede ser el único • Test de tolerancia a la lactosa: se basa en la medi-
medio de llegar a un diagnóstico etiológico. ción de la respuesta glucémica tras una sobrecarga
La prueba idealmente se realizará en el medio hospi- de lactosa (50 g), cada 30 minutos después de
talario bajo supervisión médica por personal experto, 2 horas de la ingesta. En una situación normal, la
disponiendo siempre de medicación para neutralizar glucemia aumenta en 20 mg/dl sobre la cifra basal
posibles reacciones severas (adrenalina). Se considera en sangre, por lo que la falta de este incremento
el test ideal con sólo un 3% de falsos negativos. En glucémico, junto con el desarrollo de síntomas
caso de reacción anafiláctica reciente tras la ingesta de gastrointestinales, indica una deficiencia de lacta-
un alergeno aislado bien definido, se considera contra- sa. Es una prueba bastante inespecífica, ya que
indicado la realización de una prueba oral ya que la ciertas enfermedades (diabetes mellitus, síndrome
clínica aporta un diagnóstico concluyente y los riesgos de hipoabsorción, gastroparesia, sobrecrecimiento
de llevar a cabo el test superan a los beneficios. bacteriano, etc.) pueden invalidar el resultado y,
por lo tanto, debe ser interpretado con cautela.
• Biopsia de intestino delgado: puede confirmar la
6.2.  Intolerancias alimentarias
intolerancia a la lactosa tras un test de hidrógeno
Desde hace unos años, han aparecido unos tests espirado positivo. No es un procedimiento muy
analíticos de precio elevado que pretenden detectar las utilizado, ya que se trata de un método invasivo y,
intolerancias alimentarias, prometiendo incluso ser úti- además, la actividad de lactasa determinada en
les para tratar trastornos gastrointestinales, problemas las muestras no tiene por qué reflejar exactamente
dermatológicos u otras molestias. Todas las sociedades la actividad intestinal general.
científicas de Alergología, y también las de Nutrición, • Reacción en cadena de la polimerasa (PCR) del
rechazan la utilización de estos llamados tests de into- gen de la lactasa (polimorfismo 13910 C/T): es útil
lerancias alimentarias. Publicitados a gran escala, inclu- para diferenciar a los pacientes con hipolactasia
so en informativos de medios públicos, son absoluta- primaria de aquellos que la presentan de forma
mente innecesarios y poco fiables. Mueven importantes secundaria. No está disponible de forma habitual
cantidades de dinero e involucran a personal, la mayo- en la práctica clínica.
ría de las veces, poco especializado.
7. Historia natural de alergias e
6.2.1.  Intolerancia a la lactosa intolerancias alimentarias
El diagnóstico habitual se basa en la mejoría clínica Como ya se ha referido al inicio de este capítulo, la
tras la eliminación de lactosa en la dieta. Fundamental- mayoría de las verdaderas alergias alimentarias se ad-
mente, hay tres métodos para diagnosticar la intole- quieren en los primeros 2 años de vida (sensibiliza-
rancia a la lactosa: ción), siendo excepcional la aparición en la edad adul-
ta, mientras que el fenómeno de la tolerancia es mucho
• Test de hidrógeno espirado: en los sujetos que tie- más variable en función del paciente en cuestión, y
nen una deficiencia de lactasa, la lactosa que el sobre todo del alergeno implicado. Así, sabemos que
organismo es incapaz de absorber es fermentada la mayoría de las alergias ocasionadas por el huevo y la
por las bacterias presentes en el colon, que produ- leche desaparecen con el tiempo, mientras que las cau-
cen gran cantidad de hidrógeno libre. Una eleva- sadas por el consumo de nueces, cacahuetes y marisco
ción del hidrógeno espirado indica hipoabsorción suelen perdurar durante toda la vida. Los niños que
intestinal del hidrato de carbono administrado o padecen una alergia alimentaria tienen un riesgo eleva-
sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delga- do de sufrir reacciones a otros alimentos, así como a
do. Esta prueba también se utiliza para estudiar la productos inhalados.
tolerancia de otros azúcares, como la fructosa o el La alergia a las proteínas de la leche de vaca es
sorbitol. Se administran 50 g de lactosa por vía la que se ha estudiado más a fondo. Es el alergeno más
oral (cantidad equivalente a la que contiene 1 l de frecuente en niños, con una prevalencia que oscila en-
leche) y se considera positivo si los valores deter- tre el 2-5% de la población infantil y entre los factores
minados a las 3-6 horas son más de 20 partes por de riesgo que pueden contribuir a su aparición figuran
688 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

la existencia de antecedentes de atopia en la familia y estudios para optimizar terapias que se han aplicado
la administración de pequeñas cantidades de proteínas desde hace más de 100 años, ya que han demostrado,
de leche de vaca durante la lactancia materna. La edad con disímil eficiencia, que resultan correctivas del de-
de aparición en el lactante depende del momento en fecto inmunológico.
que se introduzcan las fórmulas adaptadas y los sínto- Estos procedimientos terapéuticos denominados in-
mas más habituales suelen ser los cutáneos, seguidos munoterapias (IT) desensibilizantes consisten en la ad-
de los digestivos. En algunas situaciones se pueden ministración controlada y escalonada de cantidades cre-
producir reacciones anafilácticas severas con la ingesta cientes del alérgeno nocivo hasta dosis que permiten
de cantidades mínimas de leche. tolerar la exposición natural al alérgeno. Actualmente es
Por norma general, este tipo de alteraciones tienen sabido que estos procedimientos que operan sobre los
un buen pronóstico y a los 3 años de vida se observa sistemas inmunes de mucosas (SIM) inducen algunos de
que se ha producido la tolerancia en el 80% de los pa- los mecanismos que median la tolerancia inmunológica.
cientes con alergias mediadas por IgE. En el caso de que De esta manera, la IT basada en la administración oral
no se haya producido la tolerancia a esa edad, existe del alérgeno, denominada IT oral, permite instaurar me-
una probabilidad elevada de persistencia a lo largo de canismos de tolerancia a nivel intestinal; la IT nasal per-
la vida. Las reacciones que no están mediadas por IgE mite instaurar mecanismos de tolerancia a nivel bron-
tienen mejor pronóstico y hay estudios que muestran quial, capaces de controlar el SIM intestinal. Sin
hasta un 100% de tolerancia en el seguimiento36. embargo, no se conocen completamente los mecanis-
mos que gobiernan estos tratamientos, y esto ha gene-
rado en los últimos años un marcado interés en su estu-
8. Tratamiento
dio en todo el mundo, principalmente en asma y alergia
8.1.  Alergias alimentarias alimentaria. A pesar de los avances logrados en los últi-
mos tiempos en el desarrollo de las IT, los principales
Hasta el momento, el único tratamiento efectivo para obstáculos de las mismas, y especialmente en pacientes
tratar las alergias alimentarias consiste en la restricción con alergia alimentaria, continúan siendo las reacciones
alimentaria y la consiguiente eliminación del estímulo adversas que se producen al exponer el es paciente sen-
inmunológico. Si bien parece un procedimiento simple sibilizado al alergeno nocivo. En todos los ensayos clíni-
de implementar, en muchas situaciones es complicado cos realizados se observa la aparición de al menos un
asegurar su efectividad. Aproximadamente el 50% de 10% de pacientes que deben abandonar el tratamiento
los pacientes con alergia alimentaria sufre reacciones por la aparición de reacciones adversas. Este escollo ha
accidentales cada 3-5 años por el contacto con produc- determinado que, para las alergias alimentarias, no exis-
tos alimenticios y no alimenticios que contienen el ta hasta el momento un protocolo estandarizado y
componente alergénico. Esto puede ser originado por aprobado para aplicar en pacientes con alergia IgE-me-
distintas causas: contaminación del alimento con alér- diada. El desarrollo más reciente ha sido la IT sublingual,
genos (utensilios en restaurantes, durante la manufac- que permitió reducir las reacciones tóxicas por la menor
tura o procesamiento, etc.), desconocimiento de la pre- dosis de alergeno que se emplea en la administración
sencia de un alérgeno en la composición del alimento sublingual, en comparación con el tratamiento oral. En
(por ejemplo, caseinatos indicando proteínas de la le- este último, el transporte del alergeno por el estómago
che, ovomucoide para proteínas de huevo, emulsifican- y el intestino significan su degradación parcial hasta al-
tes para proteínas de soja, etc.), errores u omisiones en canzar la mucosa del intestino delgado, duodeno princi-
el etiquetado, etiquetado poco claro (emulsificante, palmente, donde es absorbido37, 38. En cambio, en la IT
espesante, saborizante, etc.), o por reactividades cruza- sublingual el alergeno es absorbido en la mucosa bucal
das con otros alérgenos que determinan que el sistema en su forma nativa, y como tal es captado por las células
inmune reconozca a dos sustancias distintas como si dendríticas subyacentes para luego activar los LT especí-
fueran iguales o similares. Muchas de estas reacciones ficos. Sin embargo, a pesar de disminuir los signos clíni-
accidentales suelen ser graves y de no tratarse adecua- cos postadministración del alergeno, distintos trabajos
damente (autoaplicación de adrenalina) ponen en ries- han demostrado que los protocolos actuales muestran
go la vida de los pacientes. una eficiencia menor en la inducción de T-reguladores
Estos inconvenientes se deben básicamente a que la (Treg) con respecto a la IT oral39. Es decir, que actual-
dieta restrictiva no es un tratamiento correctivo. Por otro mente se están estudiando distintos procedimientos te-
lado, existen los tratamientos farmacológicos sintomáti- rapéuticos correctivos para las alergias alimentarias, los
cos (antihistamínicos, corticoides, antileucotrienos, etc.) que han logrado inducir dos tipos de mecanismos para
que tampoco corrigen el defecto inmunológico, ni ase- controlar las reacciones alérgicas mediadas por IgE: de­
guran una remisión a largo plazo; sólo revierten el pro- sensibilización y tolerancia.
ceso inflamatorio, actuando a distintos niveles. Se hace necesario disponer de información que pueda
En conjunto, todos estos factores han determinado permitir conocer el umbral del alergeno que desata la
que en la última década se haya profundizado en los aparición de la reacción alérgica para que, a continua-
Tema 42.  Alergias e intolerancias alimentarias. Diagnóstico y tratamiento 689

ción, mediante unas rigurosas normas en el etiquetado, gias múltiples, se puede llevar a cabo una dieta variada
los usuarios puedan disponer de información segura a la y equilibrada que únicamente excluya la ingesta del
hora de adquirir los alimentos. El actual etiquetado se alergeno41.
rige por el Reglamento (UE) N.º 1169/2011 del Parla- En el caso de la alergia a las proteínas de la leche de
mento Europeo y del Consejo del 25 de octubre de 2011 vaca en el niño lactante, el alergeno forma parte del
sobre información alimentaria facilitada al consumidor, alimento básico y esencial para llevar a cabo una nutri-
que se aplica desde el 13 de diciembre de 2014, excepto ción adecuada, lo que puede repercutir negativamente
las indicaciones relativas a la información nutricional, que en su crecimiento y desarrollo cuando la lactancia ma-
son aplicables a partir del 13 de diciembre de 2016. A terna no es posible. Existen varias posibilidades de tra-
pesar de que los consumidores pueden presentar sensibi- tamiento:
lidad a otros productos, la normativa solo exige destacar
14 alérgenos en la lista de ingredientes de la etiqueta. Por 1. Lactancia materna garantizando una exclusión
primera vez se hace extensible la obligación de la infor- rigurosa de la leche y proteínas vacunas de la die-
mación sobre alérgenos en los alimentos no envasados ta materna, a la que se deben asociar también
(comercio minorista y restauración). Algunos de los prin- suplementos de calcio y vitaminas.
cipales cambios producidos en el etiquetado son: 2. Fórmulas adaptadas que lleven proteínas vegeta-
les. La soja no suele tener reactividad cruzada con
• La información obligatoria se indicará en un lugar las proteínas de la leche de vaca pero, dado que
destacado. es relativamente frecuente la coexistencia de
• Mejora la legibilidad: tamaño de letra de al menos otras alergias a alimentos, también puede haber
1,2 mm. sensibilización frente a estas proteínas.
• Las sustancias que causan alergias se destacan en 3. Fórmulas hidrolizadas que contienen péptidos de
la lista de ingredientes con un tamaño mínimo de bajo peso molecular, se dividen en fórmulas semi­
letra que las diferencie del resto de ingredientes. elementales y en hidrolizados de alto grado.
• Los alimentos sin envasar también deben infor- 4. Fórmulas elementales a base de aminoácidos sin-
mar. téticos, cuyo uso está relegado a aquellas situa-
ciones en las que no se obtiene respuesta con
Mientras no se disponga de información suficiente- fórmulas hidrolizadas.
mente fiable en el etiquetado de los alimentos, los pa-
dres y pacientes deben recabar la información necesa- Debido a que la mayoría de los pacientes presentan
ria para poder garantizar una alimentación variada y tolerancia a corto o a medio plazo, deben ser revisados
equilibrada sin el riesgo de presentar reacciones seve- con frecuencia para cambiar a una fórmula habitual
ras. Además de la información suministrada en la con- cuando sea posible.
sulta por parte del clínico, las asociaciones de pacientes
colaboran actualizando listados de alimentos o aditi-
9.2.  Intolerancias alimentarias
vos que pueden contener un alergeno determinado y
sirviendo de foro para intercambiar información y ex- En cuanto a la intolerancia a la lactosa, incluso los
periencias (páginas web de interés: www.aepnaa.org y malabsorbedores que se consideran muy intolerantes
www.alergiainfantillafe.org). pueden de hecho tolerar moderadamente grandes
Los pacientes predispuestos a reacciones severas de- cantidades de lactosa (12-24 g) (1-2 vasos de leche) sin
ben ser entrenados para reconocer precozmente los síntomas42.
síntomas de una reacción alérgica a un alimento y dis- La intolerancia a la lactosa usualmente no es una
poner de dispositivos para administrarse adrenalina en condición de todo o nada: la reducción en la produc-
caso de su ingesta accidental40. ción de lactasa y, por lo tanto, la cantidad de lactosa
que puede ser tolerada, varían de persona a persona.
8.2.  Intolerancias alimentarias Dado que la intolerancia a la lactosa no plantea una
amenaza adicional para la salud, el tratamiento consis-
En cuanto al tratamiento de las intolerancias alimen- tirá en minimizar la incidencia y la intensidad de los
tarias, este es únicamente nutricional, pero no siempre síntomas. El control dietético de la intolerancia a la lac-
se necesita la supresión de la dieta del alimento en tosa depende de que los afectados aprendan mediante
cuestión. ensayo y error cuánta lactosa pueden tolerar43.
Tras un período inicial de eliminación de lactosa, se
9.  Tratamiento nutricional aconseja reintroducirla en la dieta en pequeñas canti-
dades para comprobar la tolerancia. En función de la
9.1. Alergias alimentarias
ingesta de productos lácteos se debe valorar la necesi-
La alergia alimentaria no suele suponer un factor de dad de tomar suplementos farmacológicos de calcio.
riesgo de malnutrición, ya que, salvo en el caso de aler- La lactosa está presente en dos grandes categorías de
690 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

alimentos: los productos lácteos convencionales y que la distensión abdominal es producida por el incre-
como aditivo en ciertos alimentos. mento de la osmolaridad y la fermentación bacteriana
cólica de comidas que son pobremente absorbidas en
• Productos lácteos: la lactosa es una molécula hi- el intestino delgado, y se ha propuesto como mecanis-
drosoluble, por lo tanto el porcentaje de grasa mo causante del SIC. Aunque la fibra soluble ayuda a
tiene impacto en los alimentos que pueden tole- paliar los síntomas de pacientes con SIC, la fibra inso-
rarse. Los productos lácteos semidesnatados o luble lentamente fermentada en forma de salvado de
desnatados generalmente tienen un porcentaje trigo es poco útil47, y puede tener efectos perjudiciales
ligeramente alto de lactosa. La leche humana tie- en el empeoramiento de los síntomas.
ne el porcentaje más alto de lactosa (9%). Se tole- Últimamente se han realizado ensayos controlados
ra mejor la leche entera que las desnatadas, ya que han mostrado que los síntomas producidos por
que la grasa retrasa el vaciamiento gástrico con el SIC se pueden paliar siguiendo una dieta baja en FOD-
consecuente aumento del tiempo de exposición MAP48, 49. Los FODMAP incluyen fructanos (algunas ver-
en el intestino de la lactosa y la enzima44. Asimis- duras, trigo, cebada, centeno), galactanos (habas/le-
mo, la ingesta de productos lácteos junto con gumbres), polioles (se encuentran en muchas frutas),
otros alimentos (galletas, pan, etc.) mejora la tole- lactosa, fructosa y algunos edulcorantes artificiales. Sin
rancia45. A pesar de que la lactasa no es una enzi- embargo, esta dieta es restrictiva y se necesita supervi-
ma inducible, se ha comprobado que el consumo sión médica durante la realización de la misma.
continuo de pequeñas dosis de lactosa conlleva
un cierto proceso de adaptación, con lo que dis-
10. Prevención
minuye la cantidad de hidrógeno espirado y la
gravedad de los síntomas gastrointestinales. En la Se considera que un niño tiene un riesgo elevado de
elaboración de la mantequilla se separan los com- presentar alergia alimentaria si al menos uno de sus
ponentes acuosos de los componentes grasos. Al padres o un hermano presenta atopia. La lactancia ma-
ser la lactosa una molécula hidrosoluble, no estará terna es la mejor herramienta para prevenir la aparición
en la mantequilla. Las bacterias presentes en el yo- de alergias, por lo que la OMS aconseja mantenerla al
gur (Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus ther- menos hasta la edad de 6 meses en niños predispues-
mophilus) fermentan la lactosa, disminuyen su tos. No hay datos concluyentes que indiquen que la
contenido en un 25-50% y mejoran su toleran- eliminación en la dieta materna durante la gestación o
cia46. Asimismo, la fermentación y el alto conteni- lactancia de los principales alergenos ayude a evitar la
do en grasa de los quesos contribuyen a disminuir aparición de alergias alimentarias en el niño.
el contenido de lactosa. La Academia Americana de Pediatría (AAP) aconseja-
• Productos no lácteos: la lactosa (también presente ba retrasar la introducción de alimentos sólidos en ni-
cuando en la etiqueta aparece lactosuero, suero, ños de alto riesgo para alergia hasta los 6 meses, no
sólidos de leche, ingredientes modificadores de asociar leche de vaca hasta la edad de un año, el huevo
leche, etc.) es un aditivo utilizado por su textura, a los 2 años y el marisco y los frutos secos hasta los 3
sabor y cualidades adhesivas, y se puede encon- para evitar que se produzca sensibilización a estos
trar en alimentos como carnes procesadas (salchi- principales alergenos. Además, recomendaba evitar el
chas, patés), margarinas, cereales de desayuno, consumo de nueces y cacahuetes en las madres duran-
frutas secas, alimentos procesados, medicamen- te el período de lactancia. La AAP ha cambiado su po-
tos, comidas precocinadas, sustitutos de comidas sición reconociendo la falta de evidencia que sustenta
(barritas, sobres), suplementos de proteínas, etc. estas recomendaciones, que han sido retiradas50.
La Sociedad Europea de Gastroenterología, Hepato-
Las dietas bajas en histamina están indicadas en el logía y Nutrición Pediátricas (ESPGHAN, por sus siglas
tratamiento de urticaria y cefaleas crónicas, en pacien- en inglés) ha actualizado sus recomendaciones relacio-
tes tratados con inhibidores de la monoaminooxidasa nadas con el momento en el que se debe introducir el
(MAO) o la diaminooxidasa (DAO) y como terapia coad- gluten en la dieta infantil. En 2008 la recomendación
yuvante en el tratamiento de las alergias alimentarias, era evitar la introducción tanto temprana (antes de los
ya que es frecuente que estas personas presenten una 4 meses) como tardía (después de los 7 meses) del
insuficiente actividad de DAO. Para iniciar el tratamien- gluten a la dieta y hacerlo mientras el bebé aún recibía
to dietético se aconseja, en primer lugar, administrar un lactancia materna. Sin embargo, nuevas evidencias
antihistamínico H1 durante 14 días y seguir la dieta li- obligaron a la ESPGHAN a revisar estas recomendacio-
bre de histamina durante al menos 4 semanas. Asimis- nes51. Aunque debe promoverse la lactancia materna
mo, se aconseja pautar un suplemento de vitamina B6, por sus beneficios de salud bien establecidos, ni el
ya que es un cofactor crítico para la actividad de DAO. amamantar o no hacerlo cuando se introduce el glu-
En cuanto a los pacientes con intolerancias ali- ten a la dieta ha mostrado reducir el riesgo de enfer-
mentarias en el contexto de SCI, se ha propuesto medad celíaca. Por lo tanto, concluyen que se puede
Tema 42.  Alergias e intolerancias alimentarias. Diagnóstico y tratamiento 691

introducir el gluten en la dieta en cualquier momento   7. Ling Z, Li Z, Liu X, Cheng Y, Luo Y, Tong X, Yuan L,
entre los 4 y los 12 meses de edad. Sin embargo, no se Wang Y, Sun J, Li L et al.: Altered fecal microbiota
han establecido cuáles serían las cantidades adecua- composition associated with food allergy in infants.
das de gluten. Appl Environ Microbiol 2014, 80:2546-2554.
  8. Allen KJ, Koplin JJ, Ponsonby A-L, Gurrin LC, Wake
M, Vuillermin P, Martin P, Matheson M, Lowe A,
11. Resumen
Robinson M et al.: Vitamin D insufficiency is asso-
Las alergias alimentarias son un conjunto heterogé- ciated with challenge-proven food allergy in in-
neo de enfermedades que tienen en común un meca- fants. J Allergy Clin Immunol 2013, 131:1109-
nismo inmunológico en su etiología. Aparecen durante 1116 1116.e1-6.
la infancia, siendo habitual que desaparezcan antes de  9. Roduit C, Frei R, Depner M, Schaub B, Loss G,
llegar a la vida adulta. El diagnóstico está basado sobre Genuneit J, Pfefferle P, Hyva¨ rinen A, Karvonen
todo en la sospecha clínica. Para poder llegar a conocer AM, Riedler J et al.: Increased food diversity in the
el agente causante se precisa de modo habitual un re- first year of life is inversely associated with allergic
gistro dietético detallado seguido de unas pruebas diseases. J Allergy Clin Immunol 2014, 133:1056-
diagnósticas cuidadosamente seleccionadas. La confir- 1064.
mación llega con la desaparición de la clínica al retirar 10. Koplin JJ, Dharmage SC, Ponsonby AL, Tang MLK,
el alimento de la dieta y suele ser necesaria la reintro- Lowe AJ, Gurrin LC, Osborne NJ, Martin PE, Robin-
ducción controlada del alergeno para asegurar el diag- son MN, Wake M et al.: Environmental and demo-
nóstico. El único tratamiento eficaz disponible en este graphic risk factors for egg allergy in a popula-
momento es la retirada de la dieta del alimento. Debido tion-based study of infants. Allergy 2012 http://
a que cantidades muy pequeñas de la proteína implica- dx.doi.org/10.1111/all.12015. 19. Prescott SL:
da pueden desencadenar reacciones severas, la exclu- Early origins of allergic disease: a review of proces-
sión de la dieta debe ser exhaustiva, lo que implica en ses and influences during early immune develop-
muchas ocasiones un proceso de obtención de datos ment. Curr Opin Allergy Clin Immunol 2003,
muy laborioso por parte del paciente y sus cuidadores. 3:125-132.
Las intolerancias alimentarias son un grupo de reac- 11. Brew BK, Kull I, Garden F, Almqvist C, Bergstro¨m
ciones adversas a los alimentos en las que no está invo- A, Lind T, Webb K, Wickman M, Marks GB: Breas-
lucrado el sistema inmunitario. La causa principal es el tfeeding, asthma, and allergy: a tale of two cities.
déficit parcial o total de alguna enzima que impide Pediatr Allergy Immunol 2012, 23:75-82.
metabolizar correctamente algunas de las sustancias 12. Zhang Y, Collier F, Naselli G, Saffery R, Tang ML,
presentes en los alimentos, la más frecuente es el défi- Allen KJ, Ponsonby A-L, Harrison LC, Vuillermin P:
cit de lactosa. La clínica concomitante es fundamental- BIS Investigator Group: cord blood monocyte-deri-
mente digestiva y varía en función de la cantidad inge- ved inflammatory cytokines suppress IL-2 and in-
rida e incluso a lo largo del tiempo. El tratamiento duce nonclassic ‘‘TH2-type’’ immunity associated
consistirá en suprimir o limitar la ingesta del alimento with development of food allergy. Sci Transl Med
en cuestión y mantener una dieta equilibrada que ase- 2016, 8 321ra8-321ra8.
gure el aporte suficiente de todos los nutrientes 13. Holt PG, Sly PD: Viral infections and atopy in asth-
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Tema 43. 
Dieta y tests diagnósticos
Ceferino Martínez Faedo
Facultativo Especialista de Área. Sección de Nutrición. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital
Universitario Central de Asturias. Oviedo (Asturias)
Francisco Villazón González
Facultativo Especialista de Área. Sección de Nutrición. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital
Universitario Central de Asturias. Oviedo (Asturias)
Jessica Ares Blanco
Facultativo Especialista de Área. Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Central
de Asturias. Oviedo (Asturias)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 695-703.

1. Introducción
2. Pruebas analíticas que precisan modificaciones dietéticas
3.  Ayuno previo
4.  Resumen
5.  Bibliografía

1. Introducción mentarias en las que es preciso realizar una dieta espe-


cial, así como las características de esta y durante
El diagnóstico de múltiples enfermedades va ligado a cuánto tiempo debe mantenerse para garantizar la
la realización de una serie de pruebas complementarias validez de la prueba. Por otro lado, intentaremos ac-
que, en muchas ocasiones, implican cambios en la ali- tualizar cuáles son los estudios complementarios que
mentación habitual de los pacientes. En algunos casos realmente deben realizarse después de un periodo de
se deben excluir determinados alimentos con objeto de ayuno y la duración que este debe tener, incluyendo
evitar interferencias con el método analítico utilizado y además una revisión específica de las ventajas e incon-
que pueden dar lugar a falsos negativos o falsos positi- venientes del ayuno en el preoperatorio.
vos. En otras ocasiones, principalmente cuando se trata
de la realización de técnicas de imagen del tracto gas-
trointestinal, es necesario que el aporte de residuos de la 2. Pruebas analíticas que precisan
dieta sea mínimo para eliminar la presencia de restos modificaciones dietéticas
alimentarios a lo largo del tubo digestivo, que pueden
2.1.  Test de tolerancia oral a la glucosa (TTOG)
confundir a la hora de interpretar los resultados de la
prueba. Por último, suele ser habitual recomendar el Su finalidad es detectar alteraciones del metabolis-
ayuno de varias horas de duración cuando se van a prac- mo hidrocarbonado y consiste en la administración de
ticar pruebas complementarias, que en sí mismas no una bebida saborizada que contenga 75 g de glucosa
precisan modificaciones dietéticas, o cuando se van a (en los niños, 1,75 g/kg de peso) disuelta en 250-300
realizar intervenciones quirúrgicas. ml de agua, determinando los niveles de glucemia
Puesto que en muchas ocasiones la aplicación de es- plasmática en ayunas y a las 2 horas de haber tomado
tas medidas implica una restricción de la ingesta y, por la solución glucosada1.
tanto, un riesgo de alterar el estado nutricional de los Para que la respuesta insulínica sea la adecuada es
pacientes, es importante indicar la prescripción dieté- fundamental que el paciente realice los 3 días anteriores
tica más correcta en cada situación, evitando además a la prueba una dieta que contenga un mínimo de 200
de esta manera la repetición innecesaria de pruebas g de carbohidratos y que proporcione el aporte apropia-
debido a una mala preparación. En este capítulo revi- do de energía y de proteínas. Una dieta con un menor
saremos, por un lado, cuáles son las pruebas comple- aporte de carbohidratos puede alterar el resultado.

695
696 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

Glucemia al azar Sospecha clínica Grupos de riesgo

> 200 mg/dl Glucemia plasmática en ayunas

> 126 mg/dl 110-126 mg/dl < 110 mg/dl

TTOG. Glucemia a los 120’

> 200 mg/dl 140-200 mg/dl < 140 mg/dl

Diabetes ITG GBA Normal

Figura 1.  Algoritmo diagnóstico de diabetes mellitus en función de la glucemia (OMS). GBA: glucemia basal
alterada; ITG: intolerancia a la glucosa; TTOG: test de tolerancia oral a la glucosa.
* La ADA considera que el rango de glucemia basal alterada se sitúa entre 100 y 126 mg/dl.

Se debe respetar un ayuno de 10-12 horas previo, la paciente en ayunas determinando los niveles
permitiéndose únicamente la ingesta de cantidades de glucemia plasmática basales, a la hora y a las
moderadas de agua. Durante el periodo que dure la 2 horas de la administración. Las condiciones
prueba el paciente procurará no realizar ejercicio, no para realizar esta prueba son las mismas que se
fumar y estar relajado, ya que la actividad física y la recogían anteriormente (tabla 1).
nicotina pueden alterar a la baja los niveles de glucosa, 2) Estrategia de dos pasos. En este caso existe un
mientras que las situaciones de estrés pueden elevar primer cribado mediante el test de O’Sullivan,
los niveles glucémicos al incrementar la secreción de para el cual no es necesario realizar modificacio-
hormonas contrainsulares. nes dietéticas previas y que consiste en la admi-
Es importante conocer la medicación que está reci- nistración de una solución que contiene 50 g de
biendo, ya que algunos fármacos pueden producir in- glucosa. Si la cifra de glucemia a los 60 minutos
tolerancia hidrocarbonada, como es el caso de beta- es igual o superior a 140 mg/dl se debe realizar
bloqueantes, esteroides o diuréticos, entre otros. una sobrecarga completa, que consiste en la in-
En el caso de mujeres embarazadas está recomendado gesta de 100 g de glucosa, con determinaciones
el cribado universal para descartar la existencia de diabe- de glucemia cada hora durante 3 horas, en unas
tes gestacional. El despistaje se realizará habitualmente condiciones idénticas a las descritas para el TTOG
entre la 24-28 semana de gestación, pero en caso de pre- convencional (tabla 1).
sentar factores de riesgo para la aparición de diabetes
conviene adelantar el cribado a la primera visita. En los pacientes que hayan sido sometidos a gastrec-
Actualmente los criterios diagnósticos de la diabe- tomías o cirugía de la obesidad que no sea exclusiva-
tes gestacional están en revisión y existen posibles mente restrictiva (bypass gástrico, derivación biliopan-
abordajes: creática) está contraindicada la realización del TTOG.
Esto se debe, por un lado, a que los resultados no son
1) Estrategia de un solo paso. Consiste en realizar interpretables porque las modificaciones anatómicas
una sobrecarga oral de con 75 g de glucosa con del tubo digestivo alteran la absorción y el metabolis-
Tema 43.  Dieta y tests diagnósticos 697

Tabla 1.  Diagnóstico de diabetes gestacional. la absorción (lesión de la mucosa intestinal) de la gra-
sa de la dieta. La presencia de cantidades más eleva-
Estrategia de 1 paso das de grasa en las heces (esteatorrea, si >7 g/día)
·  TTOG con (75 g) solo informa, por tanto, de un trastorno en el aprove-
·  Determinaciones (mg/dl): chamiento de la grasa exógena, sin orientar hacia la
  –  Basal: 92 etiología, que puede ser muy variada.
  –  60 min: 180 Sea cual sea el método de laboratorio que se utili-
  –  120 min: 153 ce (análisis gravimétrico, análisis químico, por es-
pectroscopia de infrarrojos), para el diagnóstico de
Diagnóstico si al menos un valor está elevado2 esteatorrea es necesario estimar la cantidad total de
Estrategia de 2 pasos grasa eliminada en las heces de 24 horas. El método
de referencia más utilizado para la determinación
·  Test de O’Sullivan (50 g glucosa) cuantitativa de la grasa fecal es el análisis químico
·  Glucemia a la hora < 140 descarta diabetes de Van de Kamer, que tiene el inconveniente de re-
·  Glucemia a la hora ≥ 140 precisa 2º paso querir manipulaciones desagradables y el empleo de
·  TTOG (100 g) reactivos que deben manejarse con cuidado por su
·  Determinaciones (mg/dl): posible toxicidad. Durante 5 días se debe realizar
una dieta con elevado contenido en grasa (unos
NDDG3 Carpenter/Coustan4 100 g día) y recoger las heces emitidas durante las
últimas 72 horas (tabla 2). En aquellos casos en
 Basal 105  95
los que exista dificultad para ingerir una cantidad
  1h 190 180
tan elevada de grasa, se puede disminuir el aporte
  2h 165 155
a 60-80 g/día, aplicando luego una ecuación para
  3h 145 140
calcular la cantidad media esperada de grasa en heces
Diagnóstico si dos o más valores están elevados a la para ese nivel de ingesta: gramos de grasa fecal esti-
hora ≥ 140. mada en 24 horas = (0,021 x gramos de grasa inge-
rida en 24 horas) + 2,93). Posteriormente se compara
NDDG: National Diabetes Data Group; TTOG: test de tolerancia
esa cantidad estimada con la que se determina en la
oral a la glucosa.
muestra de heces del paciente5.

mo de la glucosa (paso directo desde el estómago al 2.3.  Hemorragias ocultas


yeyuno sin mediar el control del esfínter pilórico) y, por Algunas lesiones del tracto gastrointestinal (inflama-
otro lado, pueden aparecer efectos secundarios (sín- torias, úlceras, divertículos, tumores benignos o malig-
drome de dumping), llegando a producir incluso hipo- nos) pueden dar lugar a sangrados en cantidades tan
glucemias reactivas.
Para diagnosticar a este subgrupo de pacientes
aconsejamos utilizar exclusivamente los valores de la
Tabla 2.  Dieta para cuantificación de grasa en heces.
glucemia en ayunas. En el caso de mujeres gestantes
con este antecedente planteamos intervenir en todos Leche o yogur
los casos mediante consejo dietético con un adecuado Equivalente a 500 ml
enteros
reparto de los carbohidratos de la dieta y, en el tercer
trimestre, indicar la realización de autoanálisis sanguí- Queso 60 g de queso fresco o 40 g curado
neo domiciliario con un glucómetro incluyendo valores Carne y 150 g, de preferencia cordero, cerdo,
tanto basales como postprandiales. Los objetivos de derivados aves con piel, jamón
control glucémico serían, en todo caso, los mismos
que se plantean en las mujeres diagnosticadas de dia- 150 g, de preferencia graso o en
Pescado
betes gestacional. conserva en aceite
2 unidades. Sustituye a la carne o
2.2. Determinación de grasa en heces Huevos
pescado
En situaciones normales, las heces contienen pe- Aceite 50 g, para cocinar y aliños
queñas cantidades de grasa (< 4 g/día) procedentes
de la descamación de las células intestinales y del Alimentos de consumo libre
metabolismo de la flora intestinal. Esta cantidad se
· Frutas, verduras, cereales y derivados, legumbres,
incrementa considerablemente cuando existe una al­
tubérculos
te­
ración tanto en la digestión (déficit de enzimas
· Bebidas
pancreáticos, disminución de sales biliares) como en
698 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

pequeñas que no pueden descubrirse con el simple Tabla 3.  Dieta para detectar sangre en heces.
examen visual de las heces, pero que pueden detectar-
se utilizando distintos métodos analíticos. Esta prueba Alimentos que deben suprimirse
es de gran utilidad para la detección precoz del cáncer ·  Carnes rojas y derivados (embutidos)
de colon, recomendándose su realización en los indivi- · Pescados
duos con alto riesgo de padecer este proceso, aunque ·  Fruta fresca o en zumos (naturales o comerciales)
no presenten sintomatología de ningún tipo. · Verduras
Dependiendo de la técnica utilizada, será necesario ·  Todo producto que lleve aditivos antioxidantes
realizar modificaciones dietéticas con objeto de evitar
la aparición de falsos negativos o falsos positivos. Si se Fármacos que pueden alterar la prueba
utiliza el método de interacción antígeno-anticuerpo, ·  Todos los que contengan vitamina C o E
que es específico para detectar exclusivamente sangre · Ácido acetilsalicílico, antiinflamatorios, colchicina
humana, no es preciso realizar ninguna restricción die- ·  Cualquier tipo de preparado con hierro
tética previa. Tiene en cambio el inconveniente de que
solo sirve para localizar lesiones del tracto intestinal Estas medidas deben iniciarse 3 días antes de la recogida de
bajo (colon), ya que solo identifica sangre no digerida, heces y mantenerse el día de la prueba.
por tanto no es válido cuando se sospechan lesiones de Sólo es preciso si se utiliza el método de oxidación de cuerpos
tramos superiores. fenólicos.
Si se utiliza el método de oxidación de cuerpos fe-
nólicos, se detecta no solo la hemoglobina humana
sino también la procedente de los alimentos, funda- Entre las sustancias que segregan los tumores car-
mentalmente carne y derivados, así como pescados. cinoides se encuentra la serotonina, con propieda-
Por tanto, hay que eliminar de la dieta este tipo de des vasoconstrictoras y que en el hígado se meta­
alimentos, para evitar la detección de falsos positi- boliza dando lugar al ácido 5-hidroxiindolacético
vos. Por otro lado, las sustancias antioxidantes o re- (5-HIA), eliminándose finalmente este por la orina.
ductoras pueden interferir con el método, produ- Los tumores más frecuentes (70% de los casos) y que
ciendo en este caso falsos negativos, por lo que se además presentan mayor producción de serotonina
deben retirar también de la dieta otro tipo de sus- son los localizados en los tejidos que derivan de la
tancias, como el ácido ascórbico, tocoferol, sulfitos, porción media del tubo digestivo, íleon terminal y
nitritos y polifenoles, algunas de las cuales suelen apéndice.
utilizarse como aditivos de los alimentos. La dieta se Dado que la secreción de serotonina suele ser inter-
debe instaurar los 3 días anteriores a la prueba y mitente, la determinación de su metabolito urinario, el
mantenerse el día de la recogida de las heces. Es im- 5-HIA, no debe hacerse en una muestra aislada de ori-
portante asegurar que, una vez eliminados los ali- na, siendo necesario recoger toda la orina emitida du-
mentos que pueden interferir con la técnica analíti- rante 24 horas y realizar previamente una dieta espe-
ca, el paciente realiza una dieta completa y cial (tabla 4), ya que existe una serie de alimentos que,
equilibrada en lo referente a aporte energético-pro- al tener en su composición cantidades importantes de
teico. Existen además ciertos fármacos que pueden 5-indoles (serotonina, ácido 5 HIA, 5-hidroxitriptófa-
interferir con la técnica produciendo tanto falsos no), pueden dar lugar a resultados falsos positivos.
negativos como falsos positivos (tabla 3)6. Esta dieta debe instaurarse durante un periodo que
incluya los 3 días anteriores a la realización de la prue-
2.4. Ácido 5-hidroxi-indol-acético (5-HIA) ba y mantenerse hasta que termine la recogida de la
orina de 24 horas.
Es una prueba utilizada para diagnosticar tumores Se debe también revisar la medicación que estén to-
carcinoides, que derivan de las células enterocroma- mando, ya que determinados fármacos pueden aumen-
fines procedentes embriológicamente del intestino tar la excreción urinaria de 5-HIA (fenacetina, reserpina,
primitivo. Junto con otras células endocrinas secre- paracetamol) y otros, en cambio, disminuirla (clorpro-
toras de polipéptidos localizadas en otras glándulas macina, levo y metildopa, ácido acetilsalicílico)7.
del organismo (hipófisis, tiroides, suprarrenales),
forman parte del sistema APUD (amine precursor up-
2.5. Ácido panilmandélico (VAMA)
take decarboxylation) y comparten con ellas la capa-
cidad para captar y decarboxilar aminoácidos pre- Prueba utilizada para diagnosticar tumores deriva-
cursores de aminas biogénicas, como la serotonina y dos de las células cromafines, que se encuentran situa-
las catecolaminas. La localización habitual de estos das preferentemente en la médula suprarrenal (feocro-
tumores es en el tubo digestivo, aunque pueden mocitomas) y, más raramente, en otras lozalizaciones
aparecer en otros órganos, como el pulmón o el (paragangliomas de los ganglios simpáticos paraverte-
páncreas. brales, neuroblastomas). Estas células cromafines son
Tema 43.  Dieta y tests diagnósticos 699

secretoras de catecolaminas (adrenalina, noradrenali- aprecia que, en muchas ocasiones, las metástasis de
na, dopamina). Tras su metabolización, una pequeña estos tumores concentran yodo de una forma similar al
parte de estas catecolaminas se eliminan por la orina tejido tiroideo sano.
en forma intacta o como aminas metiladas (metanefri- Para explorar la morfología y funcionalidad del tiroi-
nas), pero la mayor parte en forma de ácidos homova- des y en el seguimiento del cáncer diferenciado tiroi-
nílico y vanilmandélico. deo, existe la posibilidad de realizar estudios gam-
El diagnóstico de estos tumores se basa en gran me- magráficos tras la administración de yodo marcado
dida en la determinación en orina de 24 horas tanto de (generalmente los isótopos 131 y 123), pudiéndose
los niveles de catecolaminas como de sus metabolitos, también indicar el radioyodo como parte del trata-
siendo necesario acidificar la orina con ácido clohídrico miento del cáncer de tiroides y del hipertiroidismo.
y conservarla a 4 °C hasta que se procese, para evitar Una dieta rica en yodo puede impedir un correcto
que la muestra se altere. estudio diagnóstico o limitar la eficacia del trata-
Como en el caso del 5-HIA, los pacientes deben rea- miento con el radioyodo al competir con el isótopo
lizar una dieta especial los días previos a la recogida en la bomba de yoduros. Por otro lado, una dieta
de la orina de 24 horas, eliminando aquellos alimen- con bajo contenido en yodo produce una depleción
tos que, por tener en su composición catecolaminas, de los depósitos de este elemento y el tejido tiroi-
ácidos fenólicos o vainillina, pueden interferir en la deo muestra una mayor avidez por el radiotrazador.
determinación urinaria de VAMA, dando resultados Por todo ello es aconsejable, sobre todo en aquellas
falsos positivos (tabla 5). Aunque en la actualidad los poblaciones que tienen una ingesta habitual de
métodos diagnósticos son más específicos, con me- yodo elevada, restringir la ingesta de ciertos alimen-
nor riesgo de interferencias, sigue siendo aconsejable tos, medicamentos y otros productos que contienen
aplicar estas medidas dietéticas para mejorar la renta- yodo al menos durante los 15 días previos a la rea­
bilidad diagnóstica, sobre todo teniendo en cuenta lización de un estudio diagnóstico o tratamiento
que los cambios en la dieta son sencillos y de corta (tabla 6)9-11.
duración8.
2.7.  Dieta con mínimo residuo para
2.6.  Dieta pobre en yodo para exploraciones exploraciones del tubo digestivo
de tiroides
Se define como residuo todo aquel material que,
El yodo es un elemento traza necesario para la sínte- como consecuencia de la ingesta de alimentos, pasa a
sis de hormona tiroidea. La glándula tiroidea capta el formar parte de las heces. Incluye, por un lado, aquellos
yodo circulante de forma activa en contra del gradiente elementos que procedentes de la dieta no sufren un
osmótico gracias a que dispone de un me­canismo de proceso de digestión completo en la luz intestinal (fi-
transporte conocido con el nombre de bomba de yo- bra dietética en su sentido más amplio) y, por otro, los
duros. En condiciones fisiológicas, otros órganos y teji- productos derivados del metabolismo, como son bac-
dos (glándulas salivares, mucosa gástrica, glándulas terias y células, que no son absorbidos en el tubo di-
mamarias) son también capaces de captar yodo, pero gestivo. Por tanto, una dieta sin residuos debe eliminar
de modo mucho menos significativo. Sin embargo, en no solo los alimentos ricos en fibra dietética, sino tam-
el seguimiento del cáncer diferenciado de tiroides se bién aquellos que incrementan la masa fecal (tabla 7).

Tabla 4.  Alimentos que se deben evitar para la Tabla 5.  VAMA en orina de 24 horas. Alimentos que
determinación urinaria de 5-HIA. se deben evitar.

· Tomate · Plátanos
· Berenjena ·  Café, té, incluidos descafeinados
·  Coliflor, brécol ·  Bebidas refrescantes que contengan cafeína
· Espinacas · Chocolate
· Aguacate · Alimentos que contengan vainilla o vainillina como
· Ciruelas aromatizantes: helados, flanes, natillas, galletas,
· Piña productos de repostería, pastelería, jaleas, mermeladas
· Plátano ·  Cereales integrales y sus derivados
· Kiwi · Legumbres
·  Nueces. Frutos secos en general · Nueces

No ingerir estos alimentos los 3 días anteriores a la prueba ni el No ingerir estos alimentos los 3 días anteriores a la prueba ni el
día de la recogida de la orina de 24 horas. día de la recogida de la orina de 24 horas.
700 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

Tabla 6.  Productos con elevado contenido en yodo.

Alimentos Fármacos Otros


·  Sal yodada o marina · Amiodarona · Antisépticos yodados
·  Leche y derivados · Contrastes yodados · Esmalte de uñas
·  Yema de huevo · Complejos de micronutrientes · Tintes para el pelo
· Margarina · Ciertos antitusígenos · Autobronceadores
· Pescados, mariscos, algas
· Embutidos
· Alimentos en salazón
· Pastelería, panadería
· Industrial
· Verduras enlatadas
· Productos de soja
· E127 (eritrosina)

Está indicada siempre que se necesite visualizar el En el caso de la colonoscopia, existen pocos estu-
tracto digestivo inferior, bien mediante técnicas ra- dios comparando la eficacia de una dieta líquida
diológicas (enema baritado) o por métodos endos- frente a una dieta baja en residuos (bien sea en for-
cópicos (recto/colonoscopia) con objeto de descar- ma de preparado comercial o con alimentación na-
tar patología inflamatoria o neoplásica a ese nivel, tural). En los dos estudios aleatorizados curiosa­
en las que la limpieza del área intestinal es funda- mente la preparación del colon fue igual o mejor
mental a la hora de interpretar los hallazgos, ya que cuando se administró la dieta baja en residuos frente
reduce al mínimo el volumen fecal. Con la adminis- a la dieta líquida14.
tración de nuevas soluciones limpiadoras puede que En uno de estos estudios se atribuyó a que los pa-
este tipo de dietas haya perdido gran parte de su cientes con dieta baja en residuos tenían menor sensa-
importancia. ción nauseosa que les permitió tomar una mayor can-
Como en la mayoría de las pruebas descritas en los tidad de solución laxante (polietilenglicol)15. En el
apartados anteriores, las medidas dietéticas deben ins- segundo estudio se observó un grado de satisfacción
taurarse 24-72 horas antes de la realización de la prue- mayor en el grupo de pacientes que recibieron la dieta
ba, no debiendo prolongarse más tiempo por el riesgo baja en residuos y un porcentaje de cancelaciones me-
de carencias de micronutrientes que puede producirse nor frente a los que recibieron dieta líquida16.
debido a la restricción importante, entre otros alimen-
tos, de frutas, verduras y legumbres. Si por cualquier 2.8. Modificaciones dietéticas para la realización
motivo esta dieta debe indicarse por periodos más lar- de PET/TC
gos, se debe plantear la conveniencia de suplementarla
con soluciones de nutrientes por vía oral que aseguren La tomografía por emisión de positrones (PET) es
el equilibrio nutricional apropiado12, 13. una técnica no invasiva de diagnóstico por imagen que

Tabla 7.  Características de una dieta con mínimo residuo.

Alimentos que se deben retirar Alimentos permitidos


· Cereales integrales y sus derivados · Cereales refinados y sus derivados
· Legumbres, frutos secos · Patatas peladas, cocidas
· Carne fibrosa · Carne tierna
· Frutas y verduras frescas · Pescado
· Frutas desecadas · Huevos
· Zumo de ciruelas · Zumos de frutas y verduras colados
· Limitar lácteos y derivados al equivalente de 2 vasos al día
· Cocinar con poca grasa
· Técnicas culinarias sencillas
· Beber abundantes líquidos
Tema 43.  Dieta y tests diagnósticos 701

se basa en la administración endovenosa de un radio- de alimentos, tanto sólidos como líquidos, desde la
fármaco de vida media ultracorta que se distribuye por noche anterior a la realización de la prueba correspon-
el organismo acumulándose preferentemente en de- diente. Esto implica periodos de ayuno reiterados, con
terminados tejidos. Posteriormente se obtiene una omisión de una o más de las tomas diarias de la dieta,
imagen tridimensional que permite detectar los focos sobre todo en pacientes que necesitan realizar múlti-
donde se acumula el trazador. ples estudios diagnósticos durante su ingreso. Tenien-
Existen varios radiofármacos emisores de positrones do en cuenta la alta prevalencia de desnutrición en los
de utilidad médica, el más importante de ellos es la pacientes hospitalizados, este tipo de práctica repercu-
17
fluorodesoxiglucosa (FDG), un análogo de la glucosa te, negativamente en un elevado porcentaje de enfer-
marcado con fluor-18, que es el isótopo radiactivo mos, agravando dicha desnutrición. Por ello es impor-
emisor de positrones. tante indicar el ayuno previo únicamente en aquellas
La FDG es incorporada principalmente por aquellas circunstancias estrictamente necesarias.
células con elevadas tasas de consumo de glucosa (sis-
tema nervioso central, células renales) y por las células 3.1.  Pruebas diagnósticas
cancerígenas. Una vez en el interior de la célula, la FDG
no podrá entrar en la vía glicolítica hasta que decaiga Cuando se trata de determinaciones analíticas, el pro-
la radiactividad de la molécula, permitiendo en ese in- blema no suele revestir importancia, ya que las extrac-
tervalo realizar el estudio de imagen. ciones suelen realizarse a primera hora de la mañana,
En la práctica clínica la PET/TC se utiliza en el diag- sin afectar la toma del desayuno. La ingesta de alimen-
nóstico y seguimiento de diversos tipos de tumores, así tos antes de la extracción puede alterar directamente el
como en la evaluación del metabolismo de la glucosa resultado de la prueba (glucosa, triglicéridos, lipo y apo-
en diferentes tejidos (cardíaco, pulmonar, sistema ner- proteínas, péptido C, gastrina, glucagón) o, debido a la
vioso central). lipemia postprandial, interferir con la técnica analítica.
Para realizar una PET/TC con 18FDG es fundamental el En todo caso, se pueden tomar líquidos inertes, como
ayuno previo de 6 horas, así como la retirada de cual- agua o infusiones sin azúcar, que al disminuir la sensa-
quier solución glucosada que se administre al paciente ción de sed proporcionan mayor sensación de bienestar.
(nutrición enteral o parenteral, sueros glucosados). El problema suele presentarse cuando se trata de
También se recomienda forzar la hidratación oral antes pruebas complementarias cuya realización tiene lugar
y durante la realización de la prueba, siendo el agua no a lo largo de la mañana o incluso de la tarde, lo que
saborizada el único líquido permitido durante este pe- condiciona en muchos casos un ayuno prolongado
riodo. que muchas veces se repite en días sucesivos. La tabla 8
Algunos centros recomiendan realizar una dieta du- recoge las pruebas más habituales que necesitan un
rante las 24 horas previas muy baja en hidratos de car- periodo de ayuno de mayor o menor duración. Tanto
bono y rica en proteínas para minimizar la inhibición en estos casos como en las restantes pruebas que no
competitiva de la glucosa aportada en la dieta con la figuran en ella, es aconsejable confirmar con el servicio
captación del radiotrazador. correspondiente que las vaya a realizar, las condiciones
También es fundamental evitar el consumo de alco- en las cuales tiene que hallarse el paciente. Los ayunos
hol y tabaco 12 horas antes de la prueba17. de corta duración permiten la ingesta de una pequeña
Como dato añadido, tampoco se aconseja realizar colación unas horas antes, disminuyendo por tanto el
ejercicio físico intenso en las 24 horas previas. riesgo de un aporte energético proteico insuficiente 13, 19.
Para el caso de los pacientes con diabetes, conviene
elaborar protocolos específicos de manejo de la gluce- 3.2.  Ayuno preoperatorio
mia tratando de conseguir cifras de glucemia inferiores
a 200 mg/dl en el momento de la exploración, ya que Hasta hace escasos años, todo paciente que iba a ser
existe una competición con el 18FDG en los receptores sometido a un procedimiento quirúrgico bajo aneste-
específicos y las enzimas implicadas en el metabolismo sia general debía permanecer en ayunas desde la me-
de la glucosa. dianoche del día anterior. El ayuno incluía no solo la
El tratamiento con metformina debe ser retirado ingesta de alimentos, sino también la de líquidos, con
2 días antes del estudio si se sospechan tumores gas- objeto de evitar regurgitaciones gástricas, con el consi-
trointestinales, ya que favorece la captación por parte guiente riesgo de broncoaspiraciones y aumento de la
del tejido intestinal. morbimortalidad postquirúrgica.
Sin embargo, desde mediados de 1980 han apare-
cido múltiples estudios que cuestionan esta práctica
3.  Ayuno previo
rutinaria, demostrando que la administración de lí-
De modo rutinario, cuando se van a realizar pruebas quidos tamizados y sin grasa hasta 2-3 horas antes
analíticas, estudios de imagen o intervenciones quirúr- de la intervención no incrementa el riesgo de bron-
gicas regladas, se suele indicar la abstención de ingesta coaspiración y, en cambio disminuye la sensación de
702 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

Tabla 8.  Pruebas diagnósticas que precisan ayuno.

Desde la medianoche anterior 2 a 8 horas previas*


· Estudios con contraste: · Arteriografía
  –  Tránsito esofágico · Artrocentesis
  –  Estudio gastrointestinal · Broncoscopia
  –  Enema opaco · Cateterismo cardíaco
  –  Pielografía retrógrada · Ecocardiografía
· Endoscopias: · Ecografía biliar
  –  Artroscopia · Gammagrafía biliar
  –  Cistoscopia · Gammagrafía cardíaca
  – Digestiva (incluida colangio retrógrada y · Pericardiocentesis
exploración con cápsula endoscópica) · PET
· Manometría esofágica · Test de esfuerzo
· Biopsias: · Tomografía computarizada
  –  Hepática
  –  Pulmonar
  –  Renal
* Confirmar con el servicio responsable.

hambre, sed y ansiedad en el periodo preoperatorio. unas modificaciones específicas en la alimentación


Por estos motivos, son ya varias las sociedades nacio- para que no existan interferencias en los resultados.
nales de distintas especialidades que recomiendan en Generalmente se trata de cambios sencillos de realizar
sus guías seguir la llamada regla 2-4-6 y que consis- y de corta duración, por lo que no entrañan riesgo al-
te en la administración de agua, té, café y zumos cla- guno para la salud del paciente.
ros hasta 2 horas antes de la intervención, de leche También es importante conocer qué tipo de pruebas
materna hasta 4 horas antes y de sólidos y leche has- diagnósticas precisan ayuno y qué duración debe tener
ta 6 horas antes de la cirugía, en la mayoría de los este para evitar mayor riesgo de malnutrición, sobre
pacientes, siempre y cuando no presenten obstruc- todo en pacientes ingresados sometidos a múltiples
ciones del tracto digestivo alto o vaciamiento gástri- exploraciones, incluso en la actualidad está en revisión
co enlentecido20-22. el planteamiento tradicional de mantener a los pacien-
Incluso en pacientes sometidos a cirugía colorrectal y tes en dieta absoluta en el preoperatorio.
prótesis de cadera se ha visto que una sobrecarga de
carbohidratos nocturna y luego 2 horas antes de la ci- 5. Bibliografía
rugía contribuye a preservar la masa muscular, dismi-
nuyendo la insulinorresistencia y el riesgo de hiperglu- 1. American Diabetes Association. Classification and
cemia. diagnosis of Diabetes. Diabetes Care Jan 2017; 40
La ingesta de líquidos en el preoperatorio inmedia- (S1): S11-S24.
to parece además presentar otras importantes venta- 2. Metzger BE, Gabbe SG, Persson B et al., Internatio-
jas metabólicas en la evolución del paciente quirúrgi- nal Association of Diabetes and Pregnancy Study
co, según se deduce de los trabajos publicados por el Groups Consensus Panel. International Association
equipo de Ljungqvist y Søreide. La administración of Diabetes and Pregnancy Study Groups recom-
oral, 2 horas antes de la intervención, de 400 ml de mendations on the diagnosis and classification of
una bebida rica en carbohidratos (al 12,5%) disminu- hyperglycemia in pregnancy. Diabetes Care 2010;
ye significativamente la resistencia a la insulina en el 33: 676-682.
postoperatorio, acorta la estancia hospitalaria y re- 3. National Diabetes Data Group. Classification and diag-
duce la aparición de náuseas y vómitos tras la ciru- nosis of diabetes mellitus and other categories of glu-
gía22-24. cose intolerance. Diabetes 1979; 28:1039-1057.
4. Carpenter MW, Coustan DR. Criteria for screening
4. Resumen tests for gestational diabetes. Am J Obstet Gynecol
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La mayoría de las pruebas diagnósticas que se reali- 5. Bulló i Bonet M. Cuantificación de grasas en heces.
zan rutinariamente no precisan manipulaciones dieté- En: Salas-Salvadó J, Bonada A, Trallero R, Saló ME Y
ticas en los días previos, no obstante existe un reducido Burgos R. Nutrición y dietética clínica. Barcelona.
grupo de estudios complementarios que requieren Ediciones Elsevier. 2008: 551-553.
Tema 43.  Dieta y tests diagnósticos 703

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Barcelona. Ediciones Doyma. 2000: 505-6. ged, low residual test meals with 4L polyethylene
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Lippincott-Raven 1996: 352-376. 2012. 31: 817-830. Disponible en:
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mized single-blind trial of a standard diet versus nausea and vomiting after laparoscopic cholecys-
fiber-free diet with plyethilene glycol electrolyte tectomy. Br J Surg 2005; 92: 415-421.
Tema 44. 
Interacción entre dieta y fármacos
Tania Ramos Martínez
Médico interno residente. Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial. León

Concepción Guindel Jiménez


Farmacéutico especialista en Farmacia Hospitalaria. Complejo Asistencial. León

María Dolores Ballesteros Pomar


Médico especialista en Endocrinología y Nutrición. Sección de Endocrinología y Nutrición.
Complejo Asistencial. León

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 705-715.

1. Introducción
2.  Factores implicados en la aparición de interacciones entre fármacos y dieta
3.  Tipos de interacciones entre fármacos y dieta
4.  Interacciones medicamentos-nutrición enteral
5.  Factores específicos que determinan interacciones medicamentos-nutrición enteral
6.  Tipos de interacciones medicamentos-nutrición enteral
7. Prevención de la interacción medicamentos-nutrición enteral: recomendaciones para la administración
de medicamentos
8. Resumen
9. Bibliografía

1. Introducción 1963, en las que se describen crisis hipertensivas graves


secundarias a la interacción entre fármacos inhibidores
La posible interacción entre fármacos y alimentos es de la monoaminooxidasa y aminas biógenas (tiramina e
de una extraordinaria importancia en la práctica clínica. histamina, principalmente) contenidas en distintos ali-
Sin embargo, con frecuencia no se considera suficiente- mentos y bebidas sometidos a procesos de fermenta-
mente al planificar un tratamiento médico, tanto en pa- ción, maduración o deterioro2.
cientes con una dieta oral, como en pacientes con so-
porte nutricional artificial. En EEUU, la administración 2. Factores implicados en la aparición
sanitaria reconoce desde hace años la relevancia de este
de interacciones entre fármacos y dieta
tema, de modo que, ya desde 1985, la Joint Commis-
sion on Accreditation of Healthcare Organizations (JCA- Las consecuencias de las interacciones dependen de
HO) incluye, entre sus estándares de calidad y criterios las características del fármaco y de factores del indivi-
de acreditación docente, la presencia, en las institucio- duo. Respecto a los fármacos, están más frecuente-
nes sanitarias, de programas específicos de detección de mente implicados aquellos con un margen terapéutico
interacciones1 . La primera referencia a las interacciones estrecho (warfarina, fenitoína, hipotensores, hipogluce-
fármaco-nutriente se remonta a 1927, cuando Burrows miantes orales, digoxina, contraceptivos orales, sales de
y Farr evidencian que los aceites minerales reducen la litio), aquellos que tienen una curva dosis-efecto de
absorción de vitaminas liposolubles2. La disminución de gran pendiente, de forma que pequeños cambios en la
la absorción oral de la tetraciclina por acción de los ali- dosis producen grandes cambios en el efecto, o que
mentos, debida a la quelación, fue publicada ya en requieren una concentración plasmática sostenida para
1950. El impulso definitivo a este tema lo constituyen, ser eficaces (antibióticos)3. También la formulación del
sin embargo, las publicaciones de Blackwell et al en medicamento puede tener una influencia clínicamente

705
706 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

relevante, como ocurre en formulaciones de liberación consecuencia más significativa es que la cantidad de
modificada que pueden tener un perfil de interacción fármaco que se absorbe es menor de la esperada. Las
distinto a las de liberación normal con el mismo princi- interacciones físico-químicas pueden deberse a:
pio activo4. En lo referente al individuo, algunas po-
blaciones son especialmente sensibles, como los ancia- 1) Adsorción: es un proceso físico en el que el fár-
nos y los niños, y son situaciones de especial riesgo el maco se une a un componente externo, frecuen-
embarazo, la lactancia o la desnutrición. En los ancia- temente la fibra de la dieta, que puede disminuir
nos, las interacciones se ven facilitadas por varias cir- su biodisponibilidad, como ocurre con fármacos
cunstancias: a) un mayor consumo de fármacos, poli- como amoxicilina, paracetamol, digoxina o lovas-
medicación y tratamientos más crónicos; b) la capacidad tatina. La recomendación es separar la toma del
de absorber, metabolizar o excretar fármacos puede fármaco y la ingesta al menos 2 horas6.
estar alterada; c) su estado nutricional es a menudo 2) Formación de precipitados insolubles (que-
anormal. Los niños son también un colectivo expuesto latos): Algunos minerales de la dieta (zinc, hie-
y sensible debido a la posibilidad de que no hayan de- rro, calcio, magnesio) forman complejos insolu-
sarrollado por completo sus sistemas de detoxificación5. bles con tetraciclinas, quinolonas y antiácidos9.
Con respecto a la enfermedad, cuanto más grave sea, Como ejemplos más comunes: la interacción en-
mayor relevancia tendrá la interacción que afecte la ac- tre las tetraciclinas y la leche y sus derivados que
ción del fármaco. suponen una infradosificación de un 50-60 % de
la concentración sérica de tetraciclinas y oxacicli-
na (no ocurre de manera tan significativa con la
3. Tipos de interacciones entre fármacos
doxiciclina) y la quelación de levodopa por hierro
y dieta puede causar mal control en la enfermedad de
La interacción fármaco-nutriente puede ser defi- Parkinson. En estos casos es aconsejable tomar
nida como una modificación de los efectos de un fár- los fármacos en ayunas, al menos 1 hora antes de
maco por la administración previa o concurrente de cada comida.
nutrientes, o bien como una modificación de los efec- 3) Modificaciones en pH: Algunos fármacos (como
tos de un nutriente por la administración previa o con- la eritomicina base) son lábiles en un medio ácido,
currente de un fármaco6. La relación entre fármacos y por lo que a su paso por el estómago sufren una
dieta, por tanto, es bidireccional7. Basados en esta defi- degradación que tiene como consecuencia una
nición, la cinética (absorción, metabolismo, distribución menor absorción de fármaco activo. La presencia
o eliminación) y/o el efecto dinámico (clínico/fisiológi- de alimentos en el estómago ocasiona un retraso
co) de un fármaco o un elemento nutricional pueden en su vaciado y aumento de la degradación. Para
ser alterados como resultado de la interacción. De este evitarlo, el medicamento debe administrarse en
modo, nos referiremos a tres posibilidades de interac- forma de preparación con cubierta gastrorresis-
ción3: a) la influencia de los alimentos y la dieta sobre tente. También se aconseja evitar tomarlos con
los fármacos: interacción alimento-medicamento, bebidas que tengan pH ácido (zumos, bebidas re-
probablemente la más conocida o clásica; b) la influen- frescantes). Además, se han formulado diferentes
cia de los fármacos sobre la utilización de los nutrientes sales que son más estables en medio ácido. El es-
y sobre el estado nutricional: la interacción medica- tearato de eritromicina se inactiva más lentamente
mento-nutriente; c) la implicación del estado nu- en el estómago y se disocia en el duodeno, desde
tricional en la acción de los fármacos. donde es absorbida la forma activa (base). El etil-
succinato y el estolato son menos susceptibles al
pH ácido que el estearato, por lo que su absorción
3.1.  Interacciones alimento-medicamento
es mucho más completa y se ve menos influencia-
Las interacciones alimento-medicamento pueden en­ da por la presencia de alimentos10.
globarse en tres grupos8: a.1) físico-químicas; a.2) sobre 4) Aumento de la disolución de un fármaco en
la farmacocinética (cambios en la absorción, distribu- algún componente de la dieta, como las gra-
ción, metabolismo o excreción del fármaco); a.3) sobre la sas: Algunas secreciones intestinales como las
farmacodinamia (alteración de la acción del fármaco). sales biliares facilitan la disolución de medica-
mentos liposolubles y su absorción posterior (gri-
3.1.1.  Interacciones físico-químicas o de carácter seofulvina y halofantrina).
5) Interacciones por mecanismos de reduc-
farmacéutico
ción: La interacción más conocida es la de la vita-
También llamadas interacciones in vitro porque res- mina C y el hierro, ya que este sólo se absorbe en
ponden a un mecanismo exclusivamente físico-quími- estado ferroso (Fe2+). El acido ascórbico tiene
co y, por tanto, se producen sin necesidad de que in- carácter reductor, por lo que trasforma el Fe3+
tervengan procesos fisiológicos del organismo. Su en Fe2+ favoreciendo su absorción.
Tema 44.  Interacción entre dieta y fármacos 707

3.1.2.  Interacciones farmacocinéticas mo oxidativo de los fármacos sustratos de esta enzima


(felodipino, midazolan, ciclosporina, carbamazepina,
Este tipo de interacciones son las más frecuentes y simvastatina, etc.) pudiéndose ver incrementada su bio-
también las más difíciles de prever y controlar7. Pueden disponibilidad hasta alcanzar niveles tóxicos. Ciertos
alterar la farmacocinética normal del fármaco, es decir, componentes de la dieta, generalmente no nutritivos,
las características de su liberación, absorción, distribu- pueden actuar como inductores o inhibidores de los sis-
ción, metabolismo y excreción. Por tanto, la acción del temas enzimáticos hepáticos y modificar la biodisponi-
medicamento puede sufrir modificaciones, incremen- bilidad de medicamentos (tabla 1)5. Por último, los ali-
tándose, disminuyéndose o retrasándose5. En cuanto a mentos influyen en la excreción de los fármacos. La vía
la liberación, la velocidad de disgregación de un fár- de excreción mayoritaria de fármacos y de sus metabo-
maco se ve modificada por situaciones fisiológicas de litos es la renal, siendo su principal modulador el pH de
motilidad, secreciones grastrointestinales, pH, las cuales la orina. La influencia de la alimentación depende de la
pueden alterarse en función de los alimentos. La inte- capacidad de los alimentos para acidificar (carne, pes-
racción farmacocinética más frecuente es la que se pro- cado, huevos o queso) o alcalinizar (leche o vegetales)
duce por alteración del proceso de absorción del fár- la orina. Una dieta rica en proteínas produce una orina
maco. El yeyuno es el lugar de absorción de la mayoría ácida, aumentando la velocidad de excreción de fárma-
de los medicamentos, por un mecanismo de difusión cos catiónicos (amitriptilina), también una dieta rica en
pasiva o mediante el empleo de proteínas transportado- proteínas aumenta el flujo plasmático renal y la tasa de
ras. Esta absorción puede verse modificada en función filtración glomerular. Además, pueden ocurrir mecanis-
de los cambios físico-químicos y fisiológicos que se pro- mos de inhibición competitiva a nivel del túbulo renal
ducen en el tracto gastrointestinal dependiendo de la entre un fármaco y un nutriente, como ocurre en el
presencia o no de alimentos en él (tabla 1). Los cambios caso de las sales de litio y el sodio de la dieta5. Un con-
en la cantidad de fármaco absorbido, consecuencia de sumo importante de sal facilita la eliminación de litio
su administración con alimentos, pueden tener impor- por la orina al competir el sodio con el litio en su reab-
tancia clínica, especialmente en aquellos que presentan sorción, mientras que una ingesta pobre en sodio favo-
un margen terapéutico estrecho. Por ejemplo, la absor- rece esa reabsorción tubular de litio, pudiendo dar lu-
ción de levodopa se altera con la administración simul- gar a intoxicaciones. Por ello, durante el tratamiento
tánea de alimentos, especialmente de alto contenido con litio deben evitarse oscilaciones bruscas en el con-
proteico, ya que se realiza mediante un transportador sumo de sal11.
de aminoácidos en la pared del enterocito.
En cuanto a la distribución, los mecanismos de ac- 1.2.3.  Interacciones farmacodinámicas
ción por los que se puede alterar la dosis de fármaco
son dos: unión a proteínas plasmáticas de un nutrien- Las interacciones farmacodinámicas (tabla 2) pue-
te, desplazando así la unión con el fármaco, y una ali- den tener como resultado una potenciación excesiva o
mentación inadecuada que provoque un déficit de un antagonismo del efecto del fármaco. Los mecanis-
proteínas plasmáticas. En ambos casos habrá un mos implicados en este tipo de interacciones son de
aumento de la actividad del fármaco, por existir una dos tipos6.
mayor cantidad de fármaco libre para ejercer su efecto.
Los alimentos también pueden afectar al metabolis- 1) Antagonismo: dietas ricas en vitamina K pueden
mo de fármacos. El sistema microsomal hepático es el contrarrestar el efecto anticoagulante de la warfa-
responsable de la metabolización de muchos fármacos, rina y de los anticoagulantes orales en general9, 12.
fundamentalmente a través de las distintas familias en- 2) Alteración en los sistemas de transporte celular:
zimáticas del citocromo P450 (especialmente CYP3A4, alimentos ricos en tiramina y histamina pueden
CYP2D6 y CYP2C19), mediante reacciones de fase l (oxi- provocar crisis hipertensivas en pacientes en trata-
dación, reducción e hidrólisis) y reacciones de fase ll miento con fármacos inhibidores de la monoamino-
(glucuronoconjugación, sulfonación o acetilación), eli- oxidasa3. También ocurre con la isoniazida que, al
minándose posteriormente los productos conjugados ingerir alimentos con histamina, aparece enrojeci-
por la orina o por las heces. Estas interacciones pueden miento facial y cefalea intensa. Otra interacción
explicarse por: a) los alimentos aportan los sustratos ne- aparece con el orlistat, cuya actividad inhibitoria
cesarios para las reacciones de conjugación, b) los ali- de la lipasa intestinal puede interferir en la absor-
mentos pueden por sí mismos provocar inhibición e ción de vitaminas liposolubles. Las interacciones
inducción de los sistemas enzimáticos, c) los alimentos farmacodinámicas son relativamente infrecuentes
producen cambios en el flujo espleno-hepático. Com- pero, entre ellas, se deben destacar aquellas rela-
puestos como las furanocumarinas y los flavonoides cionadas con el alcohol, que también puede oca-
presentes en el zumo de pomelo son un ejemplo clásico sionar interacciones farmacocinéticas (tabla 3).
de inhibidores selectivos del CYP3A4 a nivel intestinal Entre las múltiples interacciones fármaco-alcohol
que conduce a una inhibición reversible del metabolis- descritas, la interacción antabús o disulfirán-alco-
708 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

Tabla 1.  Interacciones alimento-medicamentos: Interacciones farmacocinéticas.

Tipo de interacción Efectos en los fármacos


1. Efectos de los alimentos en la absorción de fármacos
Fármacos de carácter ácido pueden ver disminuida
Cambios en pH de líquidos gastrointestinales: aumenta
su absorción: ácido acetilsalicílico, isoniazida
el pH gástrico por presencia de alimentos en el
Fármacos básicos pueden ver aumentada su absorción:
estómago
meprobamato, ciprofloxacino, omeprazol
Reducen hasta el 50 % la absorción de antirretrovirales
Alimentos ricos en grasa
como zidovudina, indinavir, didanosina
Ajo en cantidades altas: reduce la absorción y aumenta Saquinavir y probablemente otros inhibidores
el metabolismo de algunos fármacos de la proteasa
Reduce la absorción y los efectos de fluorquinolonas
Leche, preparados de hierro
y bifosfonatos
Al permanecer más tiempo en el estómago, ciertos
Variaciones en la motilidad gastrointestinal: medicamentos como los dicumarínicos, presentan
enlentecimiento del vaciamiento gástrico y aumento una mayor disolución gástrica, favoreciéndose su
del peristaltismo intestinal por presencia de alimentos absorción cuando pasan al yeyuno; en cambio, otros,
en el estómago como la digoxina o la furosemida, disminuyen su
biodisponibilidad
2. Efectos de los alimentos en el metabolismo de los fármacos: inductores o inhibidores de sistemas
enzimáticos hepáticos
Aminas heterocíclicas en las carnes a la brasa: potentes Aumentan la oxidación de la teofilina, antipirina
inductores enzimáticos y warfarina
Verduras del género Brassica, como coles, coliflor,
repollos, etc. (vegetales ricos en índoles): inductores Disminuye la eficacia de los anticoagulantes orales
enzimáticos
Disminuye la eficacia de los anticoagulantes orales
Aguacate Además, disminuye su absorción por su alto contenido
en grasa (20 %)
Alimentos ricos en flavonoides (té, cebollas, soja Aumenta los niveles de algunos antipsicóticos,
o vino): potentes inhibidores de varias enzimas anticoagulantes, AINE, fenitoína, etc.
del grupo del citocromo P450
Aumenta los niveles de antagonistas del calcio,
Zumo de pomelo (flavonoides): disminuyen la ciclosporina, tacrolimus, terfenadina, astemizol,
metabolización (por inhibición de la isoenzima cisaprida, saquinavir, benzodiazepinas, carbamazepina,
CYP3A4 del citocromo P450 de la pared intestinal) quinidina, estatinas, macrólidos e incluso algunos
antineoplásicos, etc.
3. Efectos de los alimentos en la excreción de fármacos
Capacidad de los alimentos para modificar el pH
Aumenta la eliminación de medicamentos básicos:
urinario: Acidificantes: alimentos de origen animal
anfetaminas, antiácidos, quinina, etc.
(menos la leche y derivados) y los cereales
Alcalinizantes: productos vegetales (salvo los cereales) Aumenta la eliminación de fármacos ácidos:
y la leche y derivados barbitúricos, AAS, nitrofurantoína, etc.
Mecanismos de inhibición competitiva a nivel
Sales de litio y sodio de la dieta
del túbulo renal entre un fármaco y un nutriente
Tema 44.  Interacción entre dieta y fármacos 709

Tabla 2.  Interacciones farmacodinámicas.

Interacción Consecuencia
Potenciación por actividad fibrinolítica de las cebollas, siendo
Cebollas y anticoagulantes
mayor con una comida rica en grasas
Efecto antagonista con antihipertensivos y riesgo de toxicidad
Regaliz con antihipertensivos y digitálicos
con digitálicos, debido a retención de sodio e hipopotasemia
Vitaminas liposolubles (suplementos) Efectos antagonistas con la vitamina K
con anticoagulantes cumarínicos Efecto agonista con las vitaminas A, D y E
Fitoestrógenos (soja) Antagonizan la acción antiestrogénica del tamoxifeno

Modificado de Tuneu et al.7

Tabla 3.  Interacciones relacionadas con el alcohol.

1.  El medicamento modifica la metabolización del alcohol


La ingesta de bebidas alcohólicas y de fármacos como metronidazol, algunas cefalosporinas, isoniazida
y sulfonilureas (clorpropamida, tolbutamida), relacionados con la inhibición de la aldehido deshidrogenasa,
enzima clave en la metabolización del alcohol, producen un acúmulo de acetaldehído: efecto antabús
2.  El alcohol modifica el efecto del fármaco
Interacciones farmacocinéticas
· Un consumo agudo de alcohol reduce la actividad de las enzimas del citocromo P450, disminuyendo
la metabolización de medicamentos como la fenitoína
· En consumidores crónicos de alcohol, existe una inducción del sistema microsomal hepático, por lo que
la metabolización de algunos fármacos puede estar aumentada
Interacciones farmacodinámicas:
· Antidepresivos tricíclicos, hipnóticos, benzodiazepinas, neurolépticos: potenciación del efecto depresor sobre el
sistema nervioso central
· Insulina, sulfonilureas: potenciación del efecto hipoglucemiante
· Cloranfenicol, paracetamol: potenciación de efectos hepatotóxicos
· ß-bloqueantes, antianginosos (nitratos): potenciación del efecto hipotensor
· Anfetaminas, cafeína: disminución del efecto estimulante sobre el sistema nervioso central

Modificado de Gómez Enterría5.

hol es de las más conocidas por su uso como tra- den modificar la farmacodinámica de un determinado
tamiento para la deshabituación del alcoholismo, fármaco, también el fármaco puede modificar el proceso
el fármaco bloquea la enzima aldehído-deshidro- natural de la nutrición y el propio estado nutricional.
genasa encargada del metabolismo del alcohol,
potenciando los efectos tóxicos del mismo (náu- 3.2.1.  Efecto sobre la ingesta de nutrientes
seas, vómitos, cefalea, sudoración, rubor en cuello
y cara). Un gran número de fármacos son capaces de alterar la
ingesta, fundamentalmente por su capacidad para pro-
Para minimizar la posibilidad de interacciones, la ta- vocar cambios en el apetito, cambios en la percepción
bla 4 ofrece algunas recomendaciones sobre adminis- gustativa u olfativa o como consecuencia de algún efec-
tración de fármacos en relación con alimentos. to adverso gastrointestinal. La alteración de sistemas de
neurotransmisores y neuromoduladores puede conllevar
tanto aumento (psicotropos, antidepresivos, antihistamí-
3.2.  Interacciones medicamento-nutriente
nicos, antiserotoninérgicos, etc.) como disminución del
Los fármacos pueden afectar al estado nutricional del apetito (anfetaminas, fluoxetina, topiramato, interferón
individuo (interacciones medicamento-nutriente) a tra- alfa, etc.). Otros fármacos pueden provocar sensaciones
vés de su influencia en los procesos de ingesta, absor- gustativas anormales (hipogeusia o disgeusia), como pe-
ción, metabolismo, excreción y utilización de nutrientes3. nicilamina, griseofulvina, carbonato de litio, entre otros2.
De igual forma que la dieta y/o el estado nutricional pue- Otros efectos secundarios de algunos fármacos se rela-
710 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

Tabla 4.  Guía de administración de fármacos.

Medicamentos que deben tomarse


Medicamentos que deben tomarse en ayunas
con las comidas
Para disminuir
Para aumentar la absorción las molestias 20 minutos antes 1 hora después
gastrointestinales
Acetazolamida Bezafibrato Ácido acetilsalicílico Cisaprida Almagato
Aminofilina Carbamazepina Aciclovir Metoclopramida Malgadrato
Atenolol Carbocisteína Alopurinol Domperidona Magnesio
Captopril Cefuroxima Amiodarona Sucralfato Hidróxido de
Cefaclor Ciproterona Amitriptilina aluminio

Ciprofloxacino Clindamicina Amoxicilina


Cloxacilina Colestiramina Azatioprina
Cotrimoxazol Diazepam Bromocriptina
Dipiridamol Diltiazem Calcio
Eritromicina Doxiciclina Ciclofosfamida
Fluconazol Enalapril Codeína
Fólico Espirolactona Dexametasona
Furosemida Fenitoína Diclofenaco
Hierro Flutamida Difenhidramina
Isoniazida Ganciclovir Etambutol
Mononitrato de Glibenclamida Fenoxibenzamina
isosorbida Hidroclorotiazida Fludrocortisona
Lactulosa Ketoconazol Haloperidol
Levodopa + Labetalol Hidralazina
carbidopa
Litio Hidrocortisona
Levotiroxina
Metformina Indometacina
Megestrol
Metoprolol Lisurida
Mercaptopurina
Morfina Metamizol
Metotrexato
Nifedipino retard Metildopa
Metronidazol
Nitrofurantoína Metilprednisolona
Nimodipino
Propranolol Naproxeno
Norfloxacino
Ranitidina Nifedipino
Paracetamol
Retinol Ác. pipemídico
Pirizinamida
Tocoferol Piroxicam
Rifampicina
Triamtereno Potasio
Sulpirida
Verapamilo retard Prednisona
Tamoxifeno
Probenecid
Teofilina
Ác. valproico
Tetraciclina
Verapamilo
Zidovudina

Modificado de Tuneu7.
Tema 44.  Interacción entre dieta y fármacos 711

cionan con retraso del vaciamiento gástrico o «efecto 3.3. Implicación del estado nutricional
masa» que induce saciedad, estomatitis u otros efectos en la acción de los fármacos
secundarios gastrointestinales (náuseas, vómitos).
El estado nutricional del individuo puede afectar a la
actividad de los fármacos. Como ejemplo, podemos se-
3.2.2.  Efecto sobre la absorción de nutrientes ñalar que la hipoalbuminemia supone una menor
Los medicamentos pueden también disminuir la ab- cantidad del fármaco unido a albúmina y, por tanto, un
sorción de los nutrientes; bien por un efecto directo en mayor porcentaje de medicamento libre en el plasma,
la luz intestinal o efectos sobre la mucosa. En el primer con lo que pueden aparecer signos de toxicidad a dosis
caso, el fármaco puede causar formación de precipitados terapéuticas, como ocurre con la difenilhidantoína o los
insolubles, reducción en el tiempo de tránsito intestinal cumarínicos. También en la desnutrición se producen
(por ejemplo, los laxantes pueden ocasionar esteatorrea cambios en el aclaramiento hepático y renal, pu-
y pérdidas de calcio y potasio13) o modificación del pH diendo causar cambios específicos en la acción del fár-
gástrico (antiácidos, anti-H2, inhibidores de la bomba de maco o toxicidad. Por otro lado, un exceso de grasa
protones) que disminuyen la absorción de la vitamina corporal puede aumentar el volumen de distribución de
B12, tiamina y del hierro6. En el segundo, puede actuar las drogas lipofílicas. También la composición de la
impidiendo la normal función absortiva de la mucosa dieta puede cambiar la cinética o la actividad terapéu-
gastrointestinal (por ejemplo, por un efecto tóxico direc- tica de algunos fármacos. Una dieta rica en proteínas
to de colchicina o neomicina sobre la mucosa intestinal. podría inducir la producción de enzimas del citocromo
La malabsorción producida por el efecto de un fármaco P450, lo que produciría una metabolización más rápida
también puede ser secundaria: el fármaco modifica la de la teofilina. Una dieta rica en grasas puede desplazar
absorción, disponibilidad o metabolismo de un nutriente los fármacos unidos a proteínas plasmáticas por un me-
lo que, a su vez, provoca malabsorción y deficiencia de canismo competitivo por parte de los ácidos grasos. Un
otro nutriente. Es lo que ocurre, por ejemplo, cuando un exceso de vitaminas provoca una inducción de la meta-
tratamiento con fenitoína estimula el catabolismo de la bolización de fármacos, con disminución de su acción
vitamina D, produciendo una deficiencia funcional, que terapéutica. Las dietas hipocalóricas aumentan el cata-
a su vez dificultará la absorción de calcio. bolismo proteico, con disminución en la cantidad y ac-
tividad de enzimas para la metabolización de fármacos
y la consiguiente potenciación de sus efectos5.
3.2.3.  Efecto sobre el metabolismo de los nutrientes
Los fármacos pueden alterar el metabolismo de los 4. Interacciones medicamentos-nutrición
nutrientes –especialmente vitaminas– mediante la in-
enteral
ducción de los sistemas enzimáticos responsables de su
degradación. Las vitaminas D, B6 y B12 y el ácido fólico La administración de fármacos por vía digestiva en los
pueden sufrir procesos de este tipo. La isoniazida, la le- pacientes que reciben nutrición enteral (NE) puede plan-
vodopa y los anticonceptivos orales presentan interac- tear problemas e interacciones similares a las descritas,
ciones complejas que afectan al metabolismo de la vita- pero también otros diferentes a los que presenta el pa-
mina B6. Otros fármacos se conocen como antivitaminas ciente que recibe alimentación oral convencional. La
por su competencia con las vitaminas. Por ejemplo, me- Sociedad Española de Nutrición Enteral y Parenteral
totrexato se une a la dihidrofolato reductasa provocan- (SENPE) ha publicado un monográfico en el que se estu-
do un déficit de folatos y los anticoagulantes actúan dian aspectos relacionados con la administración, absor-
como factores antivitamina K13. La soja interacciona con ción y eficacia terapéutica de los medicamentos adminis-
fármacos como el tamoxifeno o el toremifeno, por con- trados por sonda entérica. Contiene cuatro tablas y
tener fitoestrógenos, principalmente ipriflavona que ac- cuatro anexos en los que se recogen: 1. Propiedades ga-
túa como inhibidor de enzimas CYP1A2 y CYP2C9. lénicas y físico-químicas (pH, pKa, solubilidad, estabili-
dad, osmolalidad, etc.) de principios activos y especiali-
3.2.4.  Efecto sobre la excreción de nutrientes dades farmacéuticas. 2. Composición de las diferentes
especialidades farmacéuticas seleccionadas para la ela-
Los fármacos pueden modificar la excreción de nu- boración de mezclas para la administración por sonda
trientes, aumentando o disminuyendo sus niveles, es- enteral (SE), en las que se incluyen excipientes y coloran-
pecialmente de los minerales. Como ejemplo, los diu- tes susceptibles de provocar reacciones de hipersensibili-
réticos de asa provocan la pérdida de sodio, potasio, dad. 3. Elaboración, características físico-químicas y
magnesio, calcio y tiamina2, mientras que las tiazidas composición de diferentes formulaciones extemporá-
retienen calcio. Este aumento en la excreción puede neas que pueden ser utilizadas para la administración
deberse en otros casos a que el fármaco ocasione un por SE. 4. Recomendaciones generales de administración
desplazamiento del nutriente en su unión a proteínas de medicamentos y citostáticos por SE14. Además, exis-
plasmáticas. ten algunas apps que pueden ayudarnos con este tema.
712 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

5. Factores específicos que determinan ción enteral también conlleva el riesgo de precipi-
interacciones medicamentos-nutrición tación y la consiguiente obstrucción de la sonda. El
enteral riesgo es mayor para fórmulas enterales con pro-
teínas completas que con las de proteínas hidroli-
Además de los factores generales, ya señalados, rela- zadas o aminoácidos. Las alternativas para admi-
tivos al individuo y al fármaco, debemos tener en cuen- nistrar estos fármacos serían: emplear otras
ta, en el caso de la nutrición enteral, los siguientes6: fórmulas, vías de administración o fármaco alter-
nativo; o administrar el fármaco 1 hora antes o 2
Localización de la sonda: La biodisponibilidad
a)  horas después de la nutrición enteral.
de los fármacos cuya absorción sea pH depen-
diente dependerá de si el extremo distal de la son- b)  Incompatibilidad farmacéutica: se produce
da está en el estómago o en el intestino15. De cuando la manipulación de la forma farmacéuti-
igual forma, el extremo de la sonda puede estar ca, para su administración a través de la sonda,
colocado posterior al lugar de máxima absorción tiene como consecuencia una modificación de la
del fármaco, como ocurre con el ciprofloxacino, eficacia y/o de la tolerancia del fármaco13. Este
que se absorbe principalmente en la parte supe- tipo de incompatibilidad es especialmente rele-
rior del tracto digestivo16 y cuando se administra vante en el caso de formas farmacéuticas espe-
a través de una yeyunostomía podría verse com- ciales, tales como formas de liberación sostenida,
prometida su absorción, no alcanzando concen- cubiertas entéricas, etc.
traciones terapéuticas adecuadas17. c)  Incompatibilidad fisiológica: en este tipo de
b) Características de la fórmula: los distintos sus- interacción, y como consecuencia de un efecto
tratos de la fórmula pueden interactuar entre sí no farmacológico del principio activo o alguno de
y/o con algunos fármacos. La oclusión de la sonda sus componentes, se produce un descenso en la
puede ser en ocasiones resultado de una interac- tolerancia al soporte nutricional12, 13. Se trata, en
ción entre el contenido proteico de la fórmula y general, de alteraciones gastrointestinales (dia-
fármacos en forma de jarabe con pH ácido12. rrea, distensión abdominal, etc.). Este tipo de in-
La forma farmacéutica no siempre permite
c)  teracción con frecuencia no se diagnostica, de
modificación para ser administrada a través de modo que se atribuyen los síntomas a intoleran-
sonda fina y puede presentar características (pH, cia a la nutrición enteral, gastroenteritis infeccio-
osmolaridad, etc.) que favorezcan la interacción sa, etc., y conduce frecuentemente a la suspen-
con la NE. sión del soporte nutricional. Las causas más
frecuentes son la osmolalidad elevada y el alto
6. Tipos de interacciones contenido en sorbitol. La osmolalidad es una de
las características físicas que más determinan la
medicamentos-nutrición enteral
tolerancia del individuo a una disolución. Valores
a)  Incompatibilidad físico-química: ocurre cuan- de osmolalidad próximos al de las secreciones in-
do la combinación del medicamento con el prepa- testinales (100-400 mOsm/kg H2O) son mejor to-
rado nutricional ocasiona una alteración de las lerados. Hay formas farmacéuticas con valores de
características físico-químicas (cambios en la visco- osmolalidad muy superiores (hasta 6.000 mOsm/
sidad o textura, formación de precipitados, etc.) kg H2O), que administrados sin diluir pueden pro-
del preparado o de la forma farmacéutica. El resul- vocar intolerancia, especialmente si se adminis-
tado puede ser la oclusión de la sonda, alteracio- tran a gran velocidad o si la sonda se localiza en
nes en la biodisponibilidad del fármaco y/o nu- el duodeno o el yeyuno2. El sorbitol es un exci-
trientes, o bien inactivación de los mismos. Como piente habitual en formulaciones líquidas, que
ejemplo de este tipo de interacciones, se han des- actúa como saborizante y estabilizante. Cantida-
crito casos de obstrucción de la sonda de alimen- des elevadas del mismo (>10 g/día) pueden pro-
tación y producción de bezoares esofágicos en vocar aerofagia y distensión abdominal, e incluso
pacientes que recibían nutrición enteral asociado a si la cantidad es superior a 20 g/día, espasmos
sucralfato o a antiácidos. Se piensa que ocurre abdominales y diarrea.
como consecuencia de una precipitación de las d)  Incompatibilidad farmacológica: aparece una
proteínas de la nutrición con las sales de alumi- interacción de este tipo cuando, como consecuen-
nio18, que se vería favorecida en medio ácido. Por cia de un efecto farmacológico del medicamento,
ello, se debe evitar la administración conjunta y se produce alguna alteración a nivel gastrointesti-
lavar la sonda con 30 ml de agua antes y después nal (pH, motilidad o secreciones gastrointestina-
de la administración. La administración de disolu- les, náuseas o vómitos, diarrea, etc.) que puede
ciones de fármacos con valores de pH extremos alterar la tolerancia o absorción de la nutrición
(inferiores a 4 o superiores a 10) junto con la nutri- enteral (tabla 5).
Tema 44.  Interacción entre dieta y fármacos 713

Tabla 5.  Intolerancia a la nutrición enteral por ción en la absorción de warfarina debido a la
problemas gastrointestinales: Papel de los fármacos. unión con las proteínas de la nutrición2.

1. Fármacos que retrasan el vaciamiento gástrico


o disminuyen la motilidad gastrointestinal 7. Prevención de la interacción
· Fármacos con efecto anticolinérgico: relajan medicamentos-nutrición enteral:
el músculo liso e inhiben recomendaciones para la administración
la motilidad gástrica: antihistamínicos, de medicamentos
antidepresivos tricíclicos, fenotiacinas,
antiparkinsonianos En aquellos pacientes que reciben nutrición enteral,
· Antiácidos que contengan aluminio deberían extremarse las precauciones para minimizar
· Opiáceos en lo posible la aparición de interacciones (tabla 6).
2. Agentes procinéticos: favorecen el vaciamiento Cuando sea posible que el paciente reciba los medica-
gástrico y estimulan la motilidad intestinal: mentos por vía oral (por ejemplo, cuando la indicación
· Metoclopramida, cisaprida, domperidona, etc. de la nutrición enteral es la anorexia o la malabsor-
ción), esta vía será preferente, puesto que permite con-
3. Fármacos que originan cambios en la flora servar la forma farmacéutica original. En los casos en
intestinal: antibióticos. que es necesario administrar los medicamentos a tra-
4. Otros (inhiben las secreciones pancreáticas, vés de sonda u ostomía, es preferible el empleo de for-
modifican el pH gástrico, etc.). mas farmacéuticas líquidas, preferiblemente diluidas
antes de su administración, especialmente si presentan
Modificado de Montoro2. elevada osmolalidad. Sin embargo, con frecuencia no
se dispone de estas formulaciones y se debe recurrir a
e) Interacción farmacocinética: se habla de inter­ triturar formas farmacéuticas sólidas. Debemos recor-
acciones farmacocinéticas cuando, a consecuen- dar que algunas formas farmacéuticas sólidas no de-
cia de la administración conjunta de fármacos y ben triturarse:
nutrición enteral, se produce alguna alteración
en los procesos de absorción, distribución, meta- • Formas farmacéuticas de cubierta entérica,
bolismo o excreción del fármaco o del preparado diseñadas para que el principio activo pueda pasar
nutricional12. Los niveles plasmáticos de fenitoí- intacto a través del estómago y liberarse en el in-
na, por ejemplo, se reducen en 70-80 % cuando testino, bien para evitar la degradación del princi-
se administra con nutrición enteral, aunque se pio activo en el medio ácido del estómago, preve-
elevan cuando la administración de la nutrición nir la irritación gástrica o bien retrasar el inicio de
se interrumpe 2 horas antes y hasta 2 horas des- la acción del fármaco.
pués de la administración del fármaco19. • Formas farmacéuticas de liberación retarda-
f) Interacción farmacodinámica: tiene lugar da, ya que se destruye también el mecanismo de
cuando se producen alteraciones en la acción far- liberación retardada, con lo cual puede aparecer
macológica del medicamento o bien en las pro- toxicidad farmacológica en el pico de absorción.
piedades nutritivas del preparado, sin una modifi- • Formas farmacéuticas de absorción sublin-
cación en la farmacocinética del primero o en la gual, que contienen habitualmente una dosis me-
biodisponibilidad del segundo. En este tipo de nor que cuando se administran por vía digestiva, ya
interacciones influyen principalmente dos meca- que se absorben directamente a la circulación ge-
nismos: el antagonismo farmacológico o la alte- neral y no al sistema porta. Su administración vía
ración de sistemas de transporte celular. Uno de tracto gastrointestinal puede disminuir la eficacia.
los ejemplos de este tipo de interacción es el an- • Comprimidos efervescentes.
tagonismo que el contenido en vitamina K de la • Cápsulas que contienen gránulos con recu-
nutrición enteral puede originar sobre la acción brimiento entérico, que preservan la integridad
terapéutica de los anticoagulantes orales. En un de la medicación hasta que llega al pH alcalino del
principio se creía que el contenido de las nutricio- duodeno, como el omeprazol. No se deben triturar
nes en vitamina K era el responsable de dicho y disolver en agua, ya que se inactivaría en el estó-
efecto y se recomendaba que se utilizaran dietas mago. Por otro lado, los gránulos pueden obstruir
enterales con un contenido en vitamina K inferior la sonda. Las cápsulas pueden abrirse, mezclar los
a 75-80 mg/1.000 kcal y que se vigilase el tiempo gránulos sin triturar con 20 ml de zumo ácido de
de protrombina12. Sin embargo, se ha visto que el frutas y administrar por la sonda20.
antagonismo sigue existiendo en preparados sin • Cápsulas gelatinosas que contienen líqui-
apenas contenido en vitamina K, por lo que el dos. Si las características del fármaco lo permiten,
mecanismo postulado actualmente es una altera- se debe extraer el contenido de la cápsula con una
714 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

Tabla 6.  Recomendaciones para la administración de medicamentos por sonda enteral.

· Averiguar la localización del extremo distal de la sonda (gástrica o duodenal).


· Consultar la tabla de especialidades farmacéuticas. Utilizar preferentemente
las formas farmacéuticas líquidas (soluciones o suspensiones), siguiendo las
recomendaciones especificadas. Será necesario diluirlas previamente con al menos
60-90 ml de agua si hay elevada osmolaridad, viscosidad o alto contenido en sorbitol.
En ocasiones será necesario valorar la elaboración de formulaciones extemporáneas
o sustituir el principio activo por otro.
· Evitar el uso de medicamentos (jarabes, soluciones, suspensiones) con pH extremos
(<4 y >10).
· Seguir las recomendaciones en cuanto a modo de administración respecto a la NE
para evitar interacciones fármaco-nutrición. Con algunos medicamentos es necesario
interrumpir la dieta antes y después de la administración del medicamento.
· Lavar la sonda con 15-30 ml de agua antes y después de la administración de cada
fármaco, para evitar incompatibilidades, prevenir la obstrucción de la sonda
y asegurar que todo el fármaco es administrado.
· Cuando hay que administrar más de un fármaco al mismo paciente, administrar
cada medicación de forma separada. En el caso de formas farmacéuticas líquidas se
recomienda administrar primero las formulaciones de menor viscosidad
y a continuación las de mayor viscosidad.
· No añadir medicación a la bolsa de nutrición enteral.
· Lavar la sonda cada 4 horas con 15-30 ml agua.
· Registrar la cantidad de agua empleada en el proceso, especialmente si el paciente
es polimedicado o si requiere restricción de fluidos.
· Si la NE es administrada de forma continua y es necesario interrumpir 1-2 horas la
infusión para administrar algún medicamento, se debe recalcular el ritmo de infusión
o valorar el empleo de formulaciones con mayor densidad calórica para
que el aporte nutricional alcanzado sea el óptimo para el paciente.

Modificado de Thomson14.

aguja fina. Hay que tener en cuenta que con fre- mezclarse y es necesario lavar la sonda con al menos
cuencia resulta difícil extraer todo el líquido, por 10 ml después de cada administración12.
lo que la dosis administrada puede ser menor. Si Las propiedades físico-químicas del preparado (pH,
es posible, es preferible buscar otra alternativa te- viscosidad, osmolalidad, presencia de determinados
rapéutica. componentes, como el sorbitol) deben ser cuidadosa-
mente valoradas cuando se va a administrar a través de
Como norma, no se deben añadir nunca medica- la sonda. Las formas farmacéuticas cuya osmolaridad
mentos a los preparados de nutrición enteral y se sea superior a 1.000 mOsm/l pueden producir alteracio-
debe evitar la administración conjunta de ambos. Si la nes gastrointestinales, por lo que se deberá diluir el pre-
nutrición se administra en perfusión continua, se pue- parado en mayor volumen de agua (100-150 ml). Los
de hacer coincidir la administración de los fármacos medicamentos que presentan un pH extremo pueden
con el cambio de frasco, o bien interrumpir el aporte interaccionar con la nutrición enteral. Se debe tener en
de nutrientes (aproximadamente 30 minutos) y lavar cuenta que el pH en el yeyuno es entre neutro y alcalino,
la sonda antes y después de administrar el fármaco. por lo que la administración de formas farmacéuticas
En caso de que la nutrición se administre en bolos, el de pH ácido por sonda nasoenteral o yeyunostomía está
medicamento se deberá administrar 1 hora antes o en principio contraindicada, por el riesgo de precipita-
2 horas después de cada toma. En el caso de algunos ción por la diferencia de pH. La viscosidad del prepara-
medicamentos, como la fenitoína, dicumarínicos, su- do puede dificultar su paso dependiendo de cuál sea el
cralfato y otros fármacos con estrecho margen tera- diámetro de la sonda. Como norma, si existe la posibili-
péutico, las precauciones deben ser mayores. Se reco- dad de obstrucción, se deberán extremar los lavados
mienda monitorizar frecuentemente el efecto tras la administración. Por último, recordar que varias
terapéutico o los niveles plasmáticos del fármaco y formulaciones líquidas contienen sorbitol como exci-
suspender la infusión de la dieta enteral entre 1-2 ho- piente; esta sustancia, en dosis superiores a 10 g diarios,
ras. Si se administra más de un fármaco, no deben puede producir alteraciones gastrointestinales.
Tema 44.  Interacción entre dieta y fármacos 715

8. Resumen 11. MC Vidal Carou, A Mariné Font, T Hernández Jo-


ver. Nutrición y tratamientos farmacológicos. Inte-
Las interacciones entre fármacos y nutrientes, por su racciones entre alimentos y medicamentos. En
frecuencia y relevancia clínica, han de ser tenidas en Tratado de Nutrición. M Hernández Rodriguez, A
cuenta en la terapéutica nutricional de los pacientes. El Sastre Gallego, directores. Ediciones Diaz de San-
farmacéutico hospitalario y/o el farmacólogo pueden tos SA. Madrid 1999: 543-556.
ayudarnos a buscar alternativas terapéuticas disponi-
12. Thomson C A, Rollins C J, Nutrient-drug interac-
bles en caso de interacción, especialmente en el caso
tions. En: Rombeau J L, Rolandelli R H (eds) Enteral
de pacientes que reciben nutrición enteral. Además,
and tube feeding. 3rd ed. Philadelphia: WB Saun-
existen publicaciones14, 21 y aplicaciones que facilitarán
ders Company, 1997: 523-539.
la elección de la formulación terapéutica más apropia-
13. Haken V. Interactions between drugs and nutrients.
da en cada caso.
En: Mahan LK, Escott-Stump S, ed. Krause´s food,
nutrition, and diet therapy. 10th ed. Philadelphia:
9. Bibliografía WB Saunders company, 2000, pg 399-414.
14. Grupo de trabajo de farmacéuticos de la SEN-
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10. Florez J, Farmacología humana. 4ª. Ed. Barcelona: Bermejo T. Guia de administracion de farmacos por
Masson, SA, 2004: 1151. sonda nasogastrica. Farm Hosp 1995; 19: 251-258.
Tema 45. 
Alimentación, nutrición, hidratación y ejercicio físico
Nieves Palacios Gil de Antuñano
Jefa del Servicio de Medicina, Endocrinología y Nutrición del Centro de Medicina del Deporte. Agencia
Española de Protección de la Salud en el Deporte (AEPSAD) CSD. Madrid

Fernando García Pérez-Sevillano


Especialista en Endocrinología y Nutrición. Sevilla

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 717-730.

 1. Introducción
 2.  Sistemas energéticos durante el movimiento muscular
 3.  Requerimientos energéticos de las personas activas
 4.  Hidratos de carbono y ejercicio físico
 5.  Lípidos y ejercicio físico
 6.  Proteínas y ejercicio físico
 7.  Micronutrientes y ejercicio físico
 8.  Hidratación y ejercicio físico
 9.  Ayudas ergogénicas en el deporte
10. Resumen
11. Bibliografía

1. Introducción habitual contribuyen a mejorar la calidad de vida, tan-


to en la salud (prevención) como en la enfermedad
Hoy en día se vuelve a valorar la importancia que (tratamiento).
representan para la salud tanto la realización de una En cuanto a rendimiento deportivo, la dieta juega un
alimentación sana como el mantenimiento de una for- papel crucial. Es obvio que un buen plan nutricional no
ma física adecuada a través del ejercicio físico. La preo- es el único determinante del éxito deportivo. Existe un
cupación por este binomio: dieta sana-actividad física gran conjunto de factores que influyen: talento, moti-
data de muy antiguo. Ya el gran Hipócrates definía la vación, aspectos psicológicos, técnico-tácticos, estado
medicina como «una dietética y una gimnástica» y, se- físico, ausencia de lesiones, etc. Sin embargo, una in-
gún sus palabras «La salud positiva exige el conoci- adecuada práctica nutricional puede poner en peligro
miento de la constitución primaria del hombre y de los el rendimiento y la salud de un deportista bien entre-
poderes de varios alimentos, tanto los naturales como nado.
los que resultan de la habilidad humana. Pero comer Los beneficios que aporta seguir una estrategia de
bien no basta para tener salud. Además hay que hacer alimentación adecuada son numerosos:
ejercicio, cuyos efectos también deben conocerse. La
combinación de ambas cosas constituye un régimen, • Satisfacer los requerimientos de energía necesa-
cuando se presta la debida atención a la estación del rios para sostener el programa de competición y
año, a los cambios de los vientos, a la edad de la per- rendir a alto nivel.
sona y a la situación de la casa. Si hay alguna deficien- • Retrasar la fatiga.
cia en la alimentación o en el ejercicio, el cuerpo enfer- • Reducir el riesgo de lesiones y enfermedades.
mará». • Mejorar la recuperación y adaptación muscular.
La alimentación equilibrada en cantidad, calidad y • Obtener una composición corporal y un peso óp-
regularidad y la realización de ejercicio físico de forma timo para la competición.

717
718 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

A pesar de estas ventajas, es frecuente que los de- te, intensidad, duración, etc.) y las condiciones am-
portistas no cubran estos objetivos nutricionales. bientales en las que tiene lugar el entrenamiento o
La alimentación del deportista debe ser planificada competición. Cada deportista deberá ajustar el aporte
de forma individual en base a las características del de- energético a sus necesidades, hasta conseguir la auto-
portista: edad, sexo, composición corporal, disciplina rregulación. Esta debe ser una de las primeras priorida-
deportiva, intensidad y duración del ejercicio, momen- des, ya que un balance energético apropiado es esen-
to de la temporada, estado físico, etc. cial para mantener la masa muscular correcta, una
función inmune apropiada y un óptimo rendimiento
2. Sistemas energéticos durante el (entre otras cosas).
movimiento muscular Un consumo energético inadecuado puede producir
pérdida muscular, con la consiguiente disminución
El músculo esquelético cubre sus demandas energé- tanto de la fuerza como de la resistencia.
ticas durante el ejercicio a través de los sustratos que La ingesta calórica diaria más correcta para la perso-
provienen de la ingesta de nutrientes o de las reservas na que hace deporte es aquella que mantiene su peso
del organismo. Por actividad física se entiende cual- corporal adecuado para un óptimo rendimiento y
quier movimiento corporal producido por los músculos aumenta al máximo los efectos del entrenamiento. Se
esqueléticos que supone un consumo de energía. Las sabe que muchos de los problemas de salud y de ren-
actividades cotidianas (vestirse, ir al trabajo, lavar, etc.) dimiento físico que experimentan a menudo los de-
conllevan un gasto energético. portistas, están relacionados con una baja disponibili-
El ejercicio físico es toda actividad realizada por el dad de energía; entre ellos se incluyen trastornos
organismo de forma libre y voluntaria, planificada, es- menstruales en mujeres deportistas, reducción de la
tructurada y repetitiva, cuya finalidad es lograr una tasa metabólica basal, riesgos inmunológicos, disfun-
mejor función del organismo. Se gastará más o menos ciones hormonales y pérdida de densidad de la masa
energía según las características del ejercicio realiza- ósea3.
do1. El deporte es la realización de ejercicio físico de Existen diferentes métodos de cuantificación de las
forma ordenada y reglada. El entrenamiento deportivo necesidades energéticas (monitorización de variables
es la práctica sistemática, regular y progresiva del ejer- fisiológicas como la frecuencia cardíaca máxima y el
cicio físico. volumen de oxígeno utilizado, o por diferentes fórmu-
En función de la actividad o ejercicio físico desarro- las) pero, en general, son poco prácticas. Aunque la
llado se utilizarán vías diferentes para la obtención de cantidad de energía requerida debe ser individualiza-
energía2: da, en términos generales se recomienda una ingesta
aproximada de 45-50 kcal/kg de peso corporal/día
• En actividades de potencia (pocos segundos de para la persona que entrena alrededor de una hora y
duración y elevada intensidad) el músculo utiliza media al día (lo que puede suponer unas 1.200-2.000
el sistema de los fosfágenos (ATP y fosfocreatina). kcal/día más que una persona sedentaria). Se debe in-
• Para actividades de hasta 2 minutos de duración a tentar mantener una cierta constancia en el peso y la
una gran intensidad se utilizará la vía glucolítica no composición corporal4.
oxidativa (metabolismo anaeróbico láctico).
• En actividades más prolongadas el sistema utiliza-
4.  Hidratos de carbono y ejercicio físico
do es el aeróbico u oxidativo (hidratos de carbo-
no, grasas y proteínas). Desde 1930 se sabe que los hidratos de carbono
(HC) mejoran el rendimiento deportivo. La glucosa es el
Es muy difícil la participación en solitario de uno de combustible primario del músculo, y las personas ali-
los sistemas energéticos, por lo que realmente se ten- mentadas con dietas ricas en HC presentan una mayor
dría que hablar del predominio de uno de ellos sobre resistencia a la fatiga.
los demás en una actividad física determinada y en Los HC que se consumen con la dieta se almacenan
cada momento. en el organismo en forma de glucógeno, en músculos
e hígado. En el músculo podemos encontrar hasta
3. Requerimientos energéticos de las 150 g de glucógeno, cifra que puede elevarse más de
5 veces, si se efectúan una serie de maniobras dieté-
personas activas
ticas (sobrecarga de HC). En cambio, el hígado es un
Para aportar una adecuada ingesta energética diaria almacén de glucógeno más limitado.
y mantener un óptimo rendimiento, hay que tener en La provisión de energía durante el esfuerzo muscular
cuenta el gasto calórico de cada deportista de forma depende de la cantidad disponible de glucógeno en el
individual, ya que la cantidad de energía que se debe músculo y de la glucosa sanguínea.
consumir difiere según las características propias de Los depósitos de glucógeno muscular a su vez van a
cada sujeto, la actividad física realizada (tipo de depor- depender de:
Tema 45.  Alimentación, nutrición, hidratación y ejercicio físico 719

•  Nivel individual de entrenamiento: el entrena- del total de calorías de la dieta), constituyendo este un
miento aumenta en sí la capacidad de los múscu­ objetivo que debiera ser prioritario para todos los de-
los para almacenar glucógeno. portistas, casi sin excepción5 (tabla 1).
•  Contenido de HC de la dieta: al consumir una Los deportistas que compiten en pruebas que duran
mayor cantidad de HC se produce un mayor alma- más de 90 minutos pueden beneficiarse de la «carga
cenamiento de glucógeno. de hidratos de carbono» durante unos cuantos días an-
tes de la competición. Esta estrategia implica cubrir los
4.1. Puntos clave en la utilización de los objetivos más altos de ingesta de HC (9 a 12 g/kg/día)
depósitos de glucógeno durante el ejercicio durante 24 a 48 horas a la vez que se reduce el ejerci-
cio, lo que permite sobre-compensar las reservas de
• Cuando comienza el esfuerzo se utiliza el glucóge- glucógeno de los músculos por encima de los niveles
no almacenado en la célula muscular (glucogenó- normales. Como resultado, el deportista dispondrá de
lisis muscular). energía para realizar ejercicio durante más tiempo al
• Los depósitos de glucógeno muscular disminuyen rendimiento óptimo antes de enfrentarse a una dismi-
progresivamente al aumentar la duración del ejer- nución del mismo3.
cicio. No obstante, aunque las recomendaciones de in-
• La proporción de utilización del glucógeno de- gesta de HC están ampliamente aceptadas, en los
pende de la intensidad del ejercicio. últimos años se han publicado numerosos estudios
que muestran la idea de que reducir la ingesta de HC
La capacidad para mantener por más tiempo una y entrenar con niveles bajos de glucógeno, durante
determinada intensidad de trabajo (resistencia) es ma- determinados períodos de la temporada, ponen en
yor cuanto mayor es el almacén de glucógeno muscu- marcha una serie de adaptaciones a través de la mo-
lar. Por ello, el contenido de glucógeno es un factor dulación de la expresión génica que podrían mejorar
determinante del rendimiento físico. El cansancio que el rendimiento. Algunos de estos estudios observan
se produce durante el entrenamiento o competición, un aumento de la actividad enzimática mitocondrial
es inversamente proporcional a la cantidad inicial de y de la oxidación de ácidos grasos cuando se realiza
glucógeno en el organismo. un entrenamiento aeróbico durante un periodo pe-
El glucógeno muscular no puede por sí solo apor- queño de tiempo (por ejemplo, 3-10 semanas) con
tar toda la energía necesaria durante el transcurso de disminución de la disponibilidad endógena y/o exó-
un ejercicio físico prolongado. Se ha demostrado que gena de HC.
la glucosa sanguínea contribuye a suministrar ener- Sin embargo, este modelo train-low, compete-high
gía en los ejercicios de larga duración: durante el es- (entrenar con bajos niveles de glucógeno y competir
fuerzo físico el glucógeno hepático se convierte en con altos), conlleva una serie de posibles riesgos (alte-
glucosa (glucogenólisis) que es transportada por la raciones en el sistema inmune, disminución de la inten-
sangre a los músculos en movimiento. Mientras dura sidad de entrenamiento, aumento de la oxidación de
la actividad existe un balance entre la liberación he- proteínas musculares, etc.), sin olvidar que el entrena-
pática de la glucosa y su captura por la célula muscu- miento con niveles altos de glucógeno permite realizar
lar en actividad, siendo las modificaciones de la glu- sesiones de mayor intensidad y duración, obteniendo
cemia variables, según las características de la mejores resultados.
persona y del ejercicio realizado (intensidad, dura- Close et al (2015) proponen de modo práctico
ción, tipo, etc.). «aprovisionarse del suficiente combustible» para poder
En conclusión: La dieta del deportista debe llevar completar las cargas de entrenamiento con niveles de
asociada una elevación de la ingesta de HC (60-70% glucógeno muscular reducidos y sin aporte exógeno

Tabla 1. Requerimientos de hidratos de carbono diarios en función de la carga de entrenamiento6.

Carga de Objetivos de la
Duración e intensidad del entrenamiento
entrenamiento ingesta de HC
Ligera Baja intensidad o actividades de destreza 3-5 g/kg de peso/día
Moderada Ejercicios de moderada intensidad (p. ej., ~ 1 h/día) 5-7 g/kg de peso/día
Programas de resistencia (p. ej., de 1 a 3 h/día de ejercicios de
Alta 6-10 g/kg de peso/día
moderada-alta intensidad)
Dedicación extrema (p. ej., >4-5 h/día de ejercicios de moderada-
Muy alta 8-12 g/kg de peso/día
alta intensidad)
720 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

de HC. Alternativamente, cuando el objetivo de la se- Se estima que una sola fuente de HC tiene una tasa
sión sea realizar el entrenamiento a la mayor intensi- de oxidación máxima aproximada de 1 g/min debido a
dad posible, proporcionar el contenido adecuado de la saturación de los transportadores. Por tanto, ingerir
HC en las 24 h previas y durante la sesión, para llevarlo más de 60 g por hora de glucosa no ocasionaría un
a cabo7. aumento adicional en su tasa de oxidación. Por ello, se
aconseja que en los ejercicios de ultrarresistencia (prue-
4.2. Ingesta de hidratos de carbono antes, bas de más de 2,5-3 horas de duración), cuyas reco-
durante y después del ejercicio mendaciones de ingesta de HC se elevan hasta 90 g/h,
ingerir diferentes fuentes de HC como sacarosa, gluco-
Antes de comenzar la actividad deportiva es muy sa, fructosa y maltodextrinas. De esta forma, se conse-
importante realizar una ingesta con un alto contenido guiría elevar la tasa de oxidación de HC hasta 1,8 g/
en HC. Esto hará aumentar el almacén de glucógeno min8. La glucosa sería absorbida mediante los canales
muscular y hepático, retrasando la aparición de fatiga. transportadores de glucosa sodio-dependiente SGLT1,
La dieta preentrenamiento se realizará las 3-4 ho- mientras que la fructosa lo haría a través de unos trans-
ras previas al inicio del ejercicio. Deberá ser pobre en portadores diferentes llamados GLUT-59.
grasas, proteínas y fibra para favorecer una fácil diges- Después de un entrenamiento largo es fundamen-
tión. Se aconseja evitar las comidas muy condimenta- tal la ingesta de carbohidratos para reponer el glucó-
das, copiosas y que produzcan gases. Es importante geno muscular y hepático gastado. Una dieta rica en
una óptima hidratación. carbohidratos contribuye a acelerar la síntesis del glu-
Durante los ejercicios de larga duración, el suminis- cógeno muscular consumido tras la realización del
tro de HC mejora claramente el rendimiento físico al ejercicio físico, proceso que puede durar unas 24 horas
retrasar la aparición de fatiga, motivada por el agota- en actividades de intensidad moderada, y algo más en
miento de los almacenes de glucógeno (se ha descrito las de mayor duración10.
una duración aproximada, con ejercicio intenso, de Se ha comprobado que la síntesis se optimiza si se
2,5 h en agotarse) o la aparición de hipoglucemia. ingieren, inmediatamente después del ejercicio, HC de
También se ha informado de beneficios discretos, moderado-alto índice glucémico (especialmente den-
aunque sorprendentes, en ejercicios de alta intensidad tro de las 2 primeras horas posteriores a su finaliza-
y menor duración (<60 minutos) mediante la ingesta ción, al ser el período de máxima actividad de la glucó-
de pequeñas cantidades de HC, e incluso con enjua- geno-sintetasa). Las recomendaciones de ingesta de
gues de boca con bebidas carbohidratadas (períodos HC postejercicio para competiciones de varios días es
de 10 segundos cada 5-10 minutos). Esta mejoría des- de 1,2 g/kg (entre 75-90 g de HC) por hora, durante las
crita no parece explicarse por un efecto metabólico, 4-6 horas posteriores a su finalización. Cuando la in-
sino que parece residir en un mecanismo de activación gesta de HC es subóptima para el reabastecimiento de
neurológica central a través de receptores situados en los almacenes de glucógeno, la combinación con pro-
la cavidad bucal7. teínas puede mejorar la resíntesis de glucógeno, facili-
El deportista debería practicar el plan de «recarga de tando además la reparación muscular tras el esfuerzo9.
energía» que se adapte mejor a sus objetivos individua-
les, lo que incluye una hidratación adecuada, con la
5.  Lípidos y ejercicio físico
bebida óptima, y en cantidad y ritmo apropiados para
evitar molestias digestivas. Para ellos existen una amplia Durante la actividad física prolongada las grasas son,
gama de productos para deportistas que proporcionan junto a los HC, el principal combustible utilizado du-
HC de fácil consumo en formato líquido (por ejemplo, rante la contracción muscular, pero al contrario que
bebidas para deportistas), sólidos (como barritas ener- estos, sus reservas corporales son muy amplias. Su im-
géticas) o semi-sólidos (geles)6. (tabla 2). portancia en la producción de energía es a través del

Tabla 2.  Estrategias de consumo de hidratos de carbono durante el ejercicio3.

Ejercicio Duración Objetivos de ingesta de HC


Durante ejercicio breve <45 min No necesario
Durante ejercicio sostenido de alta Pequeñas cantidades,
45-75 min
intensidad incluyendo enjuague de boca
Durante ejercicio de resistencia o
1-2,5 h 30-60 g/h
deportes con paradas
Durante ejercicio de ultra-resistencia >2,5-3 h Hasta 90 g/h
Tema 45.  Alimentación, nutrición, hidratación y ejercicio físico 721

sistema energético aeróbico (que es aquel que se desa- enzimas mitocondriales, mejor capilarización muscu-
rrolla cuando la intensidad del ejercicio no supera la lar, etc.) que evitarán el acumulo excesivo de panículo
capacidad del organismo de asimilar el oxígeno inspi- adiposo12 y que, sin embargo, permiten preservar los
rado por los pulmones). depósitos intramusculares de triglicéridos. De esta for-
Las grasas se almacenan en el tejido adiposo y en el ma, durante la práctica de ejercicio a intensidad sub-
tejido muscular en forma de triglicéridos, siendo la máxima, se podrá obtener una mayor cantidad de
fuente de energía más concentrada de nuestro cuerpo, energía de la oxidación de los ácidos grasos, retrasán-
pero no la más rápida, ya que su contribución como dose así la utilización del glucógeno muscular y la apa-
combustible energético necesita tiempo, incrementán- rición de la fatiga.
dose su utilización a medida que aumenta la duración Por otro lado, hay algunos estudios que comparan
y disminuye la intensidad del ejercicio (por debajo del los efectos de la administración crónica de dietas ricas
umbral anaeróbico). en HC o grasas, demostrándose que el rendimiento de-
La movilización de los depósitos grasos del cuerpo, portivo es menor en el segundo caso13, 14.
su posterior transporte hasta el músculo y su oxidación En conclusión, una dieta adecuada para el depor-
en él, resulta un proceso muy lento que requiere unos tista debe contemplar unas proporciones de grasas en
15-20 minutos para alcanzar su máximo rendimiento. ella no superiores al 30%, siendo deseable una contri-
Esto quiere decir que los lípidos no son una buena bución en torno al 20-25%, quedando así perfecta-
fuente de energía inmediata (especialmente en las per- mente cubiertas las recomendaciones de vitaminas
sonas poco entrenadas), ya que el músculo necesita liposolubles, ácidos grasos esenciales y energía. Tam-
tiempo para disponer de las grasas durante el ejercicio. poco es aconsejable disminuir la proporción de lípidos
El entrenamiento de resistencia aumenta la eficacia por debajo del 15-20%, pues se corre el riesgo de pro-
de utilización de los lípidos por parte del músculo para vocar carencias de algunos de estos nutrientes.
producir energía. Esta situación conduce a un ahorro
de glucógeno y glucosa, lo cual contribuye a mejorar el
6.  Proteínas y ejercicio físico
rendimiento, ya que permite aumentar la intensidad y
duración de la actividad que se desarrolla. En condiciones normales, las proteínas de la dieta
Aunque las grasas son una fuente de energía muy son utilizadas para la formación de tejido magro. Los
importante, se hace necesario controlar su consumo deportistas, especialmente en las disciplinas de fuerza,
en la dieta, de forma que podamos ingerir una canti- suelen consumir una gran cantidad de proteínas con la
dad adecuada de HC, más interesantes para el depor- idea de que esta práctica hace aumentar su fuerza y
tista. Por otro lado, las reservas de lípidos en el organis- tamaño muscular. En contraste, muchos científicos
mo son muy amplias, incluso en personas con bajo creen que las necesidades proteicas en las personas
porcentaje graso, pudiendo disponer de ellas como que practican deporte no son apreciablemente supe-
fuente energética durante períodos muy prolongados riores a las de la población general.
sin agotarse. Se ha confirmado que la contribución de las proteí-
Una dieta rica en grasas (igual o superior al 35% del nas como combustible en el ejercicio no supera el
total de la energía requerida) puede significar que sea 5-10%, al menos en los deportes de resistencia. Cuan-
escasa en hidratos de carbono, lo que supone un impe- to mayor es el depósito de HC y grasa en el organismo,
dimento para conseguir un nivel adecuado de almace- menor es la contribución proteica al metabolismo
namiento de glucógeno. Si a esto se añade la predispo- energético.
sición al aumento de peso derivada de este tipo de Existe una reserva de aminoácidos, en forma libre,
dietas, se puede llegar a comprometer por partida do- que el organismo puede utilizar tanto para la síntesis
ble el rendimiento deportivo. Sin embargo, son varios proteica (creación de músculo) como para su reconver-
los trabajos sobre el metabolismo lipídico durante el sión a glucosa y producir energía, según las necesidades
ejercicio publicados en los últimos años que se oponen del momento. Si se ingieren en exceso y no existe una
a esta teoría, y que muestran la importancia de mante- demanda real, y puesto que las proteínas no se almace-
ner un mayor aporte de lípidos en la dieta (en torno al nan como tales, se van a degradar a urea (eliminándose
35% o incluso hasta el 40% de las kcal consumidas) por orina) o incluso se pueden transformar en grasa.
con el fin de mejorar el rendimiento físico en deportis- Uno de los órganos claves en el proceso de regula-
tas de resistencia11, 12. En todos los estudios se sigue ción del metabolismo proteico es el hígado, que actúa
insistiendo en que también es necesario un elevado como centro de distribución de los aminoácidos a los
aporte de HC para conservar unos depósitos de glucó- tejidos.
geno intramuscular óptimos. Según los autores, esto
no debe significar un aumento ni del peso corporal ni
6.1.  Requerimientos de proteínas en el deportista
del porcentaje de masa grasa de los deportistas, ya que
se desarrollan mecanismos de adaptación que permi- En las personas que realizan actividad física de forma
ten una mejor oxidación de los lípidos (aumento de las habitual las necesidades de proteínas son mayores que
722 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

en las personas sedentarias. Esto se debe tanto a un priori no ofrecen ningún beneficio en cuanto a compo-
aumento de la degradación de las proteínas durante el sición corporal ni rendimiento19.
ejercicio, como a un incremento de la biosíntesis pro-
teica en la fase de recuperación14, 15. 6.2.  En resumen
Hay una serie de factores independientes que produ-
cen variación individual en las necesidades proteicas, 6.2.1.  Ejercicios de resistencia
como son: el tipo de ejercicio, la intensidad y duración
• El ejercicio de resistencia practicado de forma re-
del mismo, el grado de entrenamiento, la disponibili-
gular incrementa los requerimientos proteicos de
dad de glucógeno y la ingesta energética.
una forma constante.
Según el Comité Olímpico Internacional (COI), los
• Las necesidades de proteínas dietéticas son mayo-
objetivos de ingesta de proteínas para deportistas tan-
res durante el período inicial de entrenamiento.
to de fuerza como de resistencia se han establecido en
Cuanto mayor es el grado de entrenamiento, me-
torno a 1,2 a 1,6 g/kg de peso corporal al día. Los es-
nores son las necesidades proteicas.
tudios dietéticos demuestran que la mayoría de los de-
• La disponibilidad de glucógeno influye en los re-
portistas cumplen fácilmente estos objetivos.
querimientos proteicos: si la dieta es inadecuada
La dosis óptima de ingesta proteica, en una sola
en HC, los requerimientos proteicos son mayores.
toma, que parece estimular al máximo la síntesis de
• El ejercicio puede aumentar las necesidades de al-
proteínas musculares (SPM) se encuentra entre 20-25 g
gún aminoácido específico (leucina).
de proteínas de alto valor biológico (~8,5-10 g de
aminoácidos esenciales)3.
El ejercicio de fuerza ejerce un efecto anabólico so- 6.2.2.  Entrenamiento de fuerza
bre el músculo, que se mantiene incluso 48 horas des- • El incremento de la ingesta de proteínas puede
pués de su realización. Debido a esta consecuencia, conducir a un aumento del desarrollo muscular
Stuart M. Phillips sugiere como dosis óptima 0,25-0,3 siempre que se asocie a un entrenamiento de
g/kg de proteínas de alto valor biológico por toma, fuerza adecuado. Consumos por encima de 2,5 g
tanto después del ejercicio como en cada ingesta de de proteínas/kg peso día no producen ningún be-
alimentos que se haga durante el día, con el fin de neficio.
promover una óptima SPM e hipertrofia muscular. En • En general, se admite que la ingesta óptima de
este sentido, la leucina juega un papel clave, ya que proteínas relacionada con un máximo desarrollo
se piensa que actúa por sí misma como señal para muscular se sitúa entre 1,6-1,8 g/kg de peso/día,
estimular la síntesis de proteína muscular, siendo no siendo ni necesarias ni beneficiosas cantidades
también necesario para ello incorporar el resto de mayores a 2-2,5 g/kg/día4.
aminoácidos esenciales16.
El momento de la ingestión es muy importante. La
primera ingesta de proteínas se debe realizar dentro de 7.  Micronutrientes y ejercicio físico
las 2 primeras horas tras finalizar el ejercicio (ventana Las vitaminas y los minerales juegan un papel básico
metabólica). Los estudios muestran una mayor SPM en el estado de salud del organismo y su importancia
cuando la ingesta se realiza inmediamente después17. aumenta cuando se realiza actividad física, puesto que,
En cuanto a la calidad de la fuente proteica, el con- como reguladores metabólicos, intervienen en todos
tenido de leucina es el principal determinante para in- los procesos de adaptación a la misma (tanto entrena-
ducir la SPM e hipetrofia muscular, seguido del grado mientos como periodos de recuperación).
de digestibilidad. Algunos estudios sugieren que las Dado que los micronutrientes participan en procesos
proteínas procedentes del suero de la leche son supe- bioquímicos primordiales para la vida (reproducción
riores en cuanto a calidad debido a un mayor conteni- del ADN, respiración celular, destrucción de radicales
do en leucina y velocidad de digestión18. libres, etc.) es fundamental prestar especial atención
Con respecto a la ingesta de proteínas durante la tanto a una posible deficiencia como a la utilización de
pérdida de peso en deportistas, estos macronutrientes suplementos de forma incorrecta.
juegan un papel primordial debido a su capacidad para
conservar la masa magra. Además, se caracterizan por
7.1. Vitaminas
poseer un efecto saciante y por su mayor efecto termo-
génico con respecto a otros macronutrientes. La evi- Las vitaminas del complejo B tienen dos funciones
dencia sobre qué cantidad de proteínas es recomenda- primordiales relacionadas con el ejercicio: las vitaminas
ble ingerir en los deportistas que hacen dietas para B1 (tiamina), B2 (riboflavina), B3 (niacina), B6 (piridoxi-
pérdida de peso es deficiente, variando desde estima- na), ácido pantoténico y biotina están implicadas en la
ciones entre 1,3-1,8 g/kg/día a cantidades mucho más obtención de energía durante la actividad física, mien-
altas. La evidencia para recomendar ingestas muy altas tras que el ácido fólico y la vitamina B12 (cianocobala-
de proteínas (>2,5 g/kg/día) son escasas, ya que a mina) se utilizan para la producción de células rojas, la
Tema 45.  Alimentación, nutrición, hidratación y ejercicio físico 723

síntesis proteica y en la reparación y mantenimiento de fibra alimentaria (dietas vegetarianas, por ejemplo), si-
los tejidos (funciones fundamentales para el organis- tuación bastante frecuente dentro de los deportistas,
mo activo). sobre todo de algunas disciplinas determinadas25. De-
Durante la práctica de ejercicio físico se incrementan bido a la alta prevalencia de ferropenia entre los depor-
las necesidades de algunas vitaminas implicadas en el tistas (sobre todo en las mujeres), hay que asegurar un
metabolismo energético. Hay estudios donde se de- aporte adecuado de hierro en su dieta, recomendán-
muestra que en actividades de larga duración es con- dose tomar carne y/o pescado todos los días, e incluir
veniente incluir alimentos ricos en vitaminas B1 y B2, alimentos que contengan sustancias facilitadoras de su
en ejercicios explosivos, como son los deportes anaeró- absorción, como los cítricos, y las frutas en general. Los
bicos (carrera de 100 m) se recomienda la ingesta de alimentos que contengan sustancias inhibidoras y sean
alimentos con vitamina E (antioxidante), y en los de- fundamentales en la alimentación (por ejemplo, la le-
portes en los que la fuerza es fundamental (lucha, hal- che), deberán ser tomados a diferentes horas del día.
terofilia, etc.) se debe seguir una dieta rica en alimen-
tos con vitamina B65, 20, 21. 7.3.  Calcio, ejercicio y salud ósea
Las vitaminas A, E y C, por su poder antioxidante,
juegan un papel importante en la protección de las El consumo correcto de calcio, el ejercicio físico y
membranas celulares frente al daño oxidativo produci- unos niveles hormonales adecuados son fundamenta-
do por los radicales libres, por lo que su ingesta de una les para maximizar y mantener la masa ósea durante
manera continua y correcta puede evitar el estrés oxi- los años en los que un deportista es joven. Existe una
dativo inducido por el ejercicio físico extenuante22, 23. interacción muy positiva entre el ejercicio y el consumo
Hay deportistas con mayor probabilidad para presentar de calcio, que potencia el aumento en la densidad mi-
una ingesta pobre en sustancias antioxidantes; sin em- neral del hueso, tan importante para prevenir el riesgo
bargo, es necesario recordar que las necesidades dia- de osteoporosis en el futuro15.
rias pueden quedar perfectamente cubiertas si se sigue La mayor parte del esqueleto adulto se constituye en
de forma regular una dieta equilibrada y adaptada a la infancia y la adolescencia. Durante este periodo es
las exigencias de cada deportista en cada momento. Se necesario realizar una ingesta suficiente de calcio, ya
deberá valorar la prescripción de un complejo vitamíni- que una dieta baja en este elemento puede impedir al-
co cuando se demuestre un déficit demostrado por la- canzar un adecuado pico de masa ósea. Es precisa­
boratorio o en aquellos deportistas que realicen dietas mente en la adolescencia cuando muchas deportistas
muy bajas en grasas, frutas y verduras o con un aporte restringen su dieta, intentando disminuir la grasa cor-
energético limitado. poral que comienza a acumularse debido a la pubertad.
Hasta ahora no se ha podido demostrar que un con- La tríada de la mujer deportista es un síndrome
sumo muy superior a los requerimientos produzca be- que comprende la existencia de desórdenes de la ali-
neficios claros sobre el rendimiento, exceptuando en mentación, amenorrea y osteoporosis26. Los compo-
aquellos deportistas con deficiencias o en algunas si- nentes de la tríada están relacionados entre sí en su
tuaciones especiales4. etiología, patogénesis y consecuencias. Generalmente,
Con respecto a la vitamina C, la suplementación con esta tríada comienza con una alteración en la conducta
200-500 mg/día puede mejorar el sistema inmune cuan- alimentaria27. La nutrición inadecuada combinada con
do se realiza ejercicio intenso, disminuyendo la inciden- el ejercicio físico intenso resulta en un déficit de ener-
cia de infecciones de las vías respiratorias altas. En cuan- gía. Con el tiempo, esta deficiencia energética causa
do al rendimiento, no ha demostrado que lo mejore24. una disminución de la producción de estrógenos por el
ovario, y esto a su vez da lugar a amenorrea. Final­
mente, la ausencia de estrógenos y la alimentación insu-
7.2.  Hierro y ejercicio físico ficiente (con déficit de vitaminas y minerales) se puede
El hierro se encuentra formando parte de la hemoglo- traducir en una pérdida de la densidad mineral ósea28.
bina, de la mioglobina y de diversas enzimas cuya fun- En el momento actual se están empezando a evaluar
ción principal es el transporte de oxígeno a los tejidos y las serias consecuencias de la tríada, ya que se asocia
la participación en el metabolismo oxidativo (produc- con una morbilidad importante y algunas de sus mani-
ción de energía). Por ello, es de gran importancia en los festaciones pueden no ser completamente reversibles.
deportistas: las personas que tienen una anemia ferro-
pénica presentan un deterioro del rendimiento físico. 8.  Hidratación y ejercicio físico
La deficiencia de hierro tiene un origen multifactorial:
8.1.  Agua y ejercicio
ingestas bajas en la dieta, disminución de su absorción
intestinal y aumento de sus pérdidas por el sudor, orina Durante la realización de ejercicio físico, el agua está
y heces, y en algunas mujeres por la menstruación. implicada de forma directa en las siguientes funciones:
Un factor de riesgo de presentar disminución en la refrigeración, aporte de nutrientes a las células muscu-
absorción del hierro de la dieta es la ingesta elevada de lares, eliminación de sustancias de desecho y lubrica-
724 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

ción de articulaciones. Si además tenemos en cuenta inestabilidad y afectación progresiva del nivel de cons-
su papel en el mantenimiento de la concentración de ciencia30. Esto último es importante a la hora de retirar
los electrolitos, de ella también dependerán cometidos a un corredor con problemas, que puede no compren-
como la transmisión nerviosa, la contracción muscular der la situación en la que se encuentra, y negarse a
y la regulación de los niveles de pH. salir de una carrera.
Otra patología, consecuencia de una mala estrategia
8.2. Termorregulación de hidratación, es la intoxicación acuosa desencade-
nando un estado de hiponatremia. Se ha descrito en
Durante el ejercicio, el organismo pone en marcha competiciones de larga duración (>4 horas) en las que
una serie de procedimientos destinados a disipar el calor los participantes ingieren exceso de líquidos sin sufi-
acumulado. Por un lado, hay una redistribución del flujo ciente aporte de sodio. No obstante, entre los que prac-
sanguíneo hacia los tejidos periféricos (piel y mucosa tican ejercicio físico de larga duración es más frecuente
respiratoria), gracias a la cual se produce una pérdida de la deshidratación con aumento del sodio en plasma.
calor por conducción y convección. Por otro lado está la La deshidratación también puede producirse en cli-
formación de sudor (por cada litro de agua que se eva- mas fríos. En este caso, los factores desencadenantes
pora, se eliminan unas 600 kcal). Estos sistemas requie- son: un aumento de sudoración producida por exceso
ren un mantenimiento adecuado del volumen plasmáti- de ropa de abrigo, un incremento de la diuresis esti-
co, del gasto cardíaco y un funcionamiento correcto de mulada por la hipoxia (altitud) y una temperatura fría
las glándulas sudoríparas. Para conservar los mecanis- que no estimula la ingestión de líquidos.
mos de refrigeración durante el ejercicio (aumento del
flujo sanguíneo periférico y sudoración) es fundamental 8.4. Consejos generales para prevenir
una adecuada hidratación y que el sudor producido sea
capaz de evaporarse. Un deportista bien entrenado en
la deshidratación
un entorno cálido y húmedo puede perder hasta 3 litros/ Es importante controlar la temperatura y humedad
hora de líquido a través del sudor y de la eliminación de ambiental, moderar la actividad en situaciones desfa-
vapor de agua por los pulmones. vorables, entrenar a las horas menos calurosas del día,
El sudor es hipotónico con respecto al plasma (tiene utilizar prendas blancas (reflejan la radiación solar), li-
una menor concentración de electrolitos que este). Se geras, sueltas y porosas, desprenderse de ropas moja-
compone fundamentalmente de agua, aunque también das, utilizar gorra para la cabeza como escudo contra
contiene unos 50 mEq/l de sodio y pequeñas cantidades el calor del sol y protegerse de la radiación solar con
de otras sustancias como potasio, hierro y calcio. Con la cremas (hay que saber que las resistentes al agua pue-
deshidratación gradual se produce una hipertonía del den dificultar la evaporación del sudor).
plasma que dificulta la producción de sudor, por lo que Conviene tener en cuenta los siguientes puntos:
la temperatura del organismo comenzará a incremen-
tarse de forma paulatina. La deshidratación lentamente • Es esencial la ingesta de suficiente líquido durante
progresiva durante el ejercicio es frecuente, puesto que todo el día, para conseguir un buen estado de hi-
muchas personas no beben suficiente líquido para repo- dratación previo a la realización del ejercicio físico.
ner las pérdidas de agua por el sudor. • Es fundamental conocer la importancia que tiene
beber antes, durante y después de la realización
8.3. Efectos de la deshidratación: salud y de actividad física.
• Las bebidas frescas (aprox.10-15 °C) y de sabor
rendimiento deportivo
agradable estimulan la ingesta hídrica. No obstan-
La deshidratación no sólo va a producir una dismi- te, los líquidos, sea cual sea su temperatura, siem-
nución del rendimiento del deportista (disminución de pre tienen efectos positivos.
la resistencia física, aumento de lesiones, etc.), sino • Hay que estar alerta ante los primeros síntomas de
que, además, va a poner en juego su salud (calambres, deshidratación, como son los calambres, el vérti-
mareos, desorientación, etc.) e incluso su vida. Por este go, la fatiga, etc.
motivo es muy importante elaborar una estrategia ca- • Hay que tener especial cuidado con las personas
paz de mantener un nivel de agua corporal óptimo de más edad, que tengan obesidad, o que estén
mientras se hace ejercicio (tanto en los entrenamientos en tratamiento con diferentes fármacos que pue-
como en la competición) sobre todo si se tiene en dan alterar la termorregulación.
cuenta que el mecanismo de la sed se inicia con cierto
retraso, cuando el organismo ha perdido ya un 1-2% 8.5. Estrategias para una correcta hidratación
del peso corporal29.
con la práctica de ejercicio físico
Los síntomas iniciales de lesión térmica que deben
alertar al deportista y a quienes le rodean son: suda- Las soluciones líquidas que se utilizan durante la rea-
ción desproporcionada, cefalea, náuseas, sensación de lización de ejercicio físico reciben el nombre general
Tema 45.  Alimentación, nutrición, hidratación y ejercicio físico 725

de bebidas especialmente diseñadas para deportistas o mayor volumen, mayor vaciado gástrico (pero un
bebidas deportivas. exceso puede producir problemas intestinales).
Sus principales objetivos son: Por todo esto se recomienda el consumo de can-
tidad suficiente de líquido 1-2 horas antes de que
a. Aportar una cierta cantidad de HC que mantenga se inicie el entrenamiento. Después es convenien-
una concentración adecuada de glucosa en la te realizar ingestas frecuentes (ya que a medida
sangre. que se vacía el líquido del estómago, habrá que
Los HC permiten una absorción intestinal del agua reponerlo). Los líquidos fríos mejoran el vacia-
más rápida, además de disminuir el gasto de glucó- miento gástrico. Las pautas de hidratación antes,
geno muscular, con lo que retrasan la aparición de durante y después del ejercicio se expresan en la
fatiga. El tipo y la cantidad de los HC de la bebida tabla 3.
son factores importantes: la utilización exclusiva de
fructosa puede provocar alteraciones intestinales y El Comité Científico en Alimentación Humana
retardar la absorción; las maltodextrinas tienen un (CCAH) de la Unión Europea, en su informe sobre la
sabor menos dulce que la sacarosa y estimulan me- composición de los alimentos y las bebidas destina­
nos el acto de beber; una cantidad demasiado alta das a cubrir el gasto energético en un gran esfuerzo
de HC puede producir trastornos digestivos y un muscular, especialmente en los deportistas (2001),
contenido bajo puede ser insuficiente. hace unas recomendaciones muy precisas sobre la
b. La reposición de electrolitos, sobre todo del sodio. composición de las bebidas deportivas e indica que es-
Su incorporación al líquido mejora la palatabili- tas bebidas deben suministrar hidratos de carbono
dad (sensación agradable con la ingesta) y favore- como fuente fundamental de energía y deben ser efi-
ce la retención hídrica. caces en mantener una óptima hidratación o rehidra-
c. Evitar la deshidratación. El potasio se incluye a menu- tar. En este documento32 se recomiendan los siguientes
do en bebidas de reposición en pequeñas cantidades. márgenes en la composición de las bebidas para tomar
Estas bebidas saben mejor, lo que las hace más durante la práctica deportiva:
apetecibles y son consumidas en mayor cantidad.
En la elección de una bebida adecuada para la • Calorías: suministrarán no menos de 80 kcal por
reposición hídrica hay dos factores importantes a litro y no más de 350 kcal por litro.
tener en cuenta: el ritmo del vaciado gástrico • Al menos el 75% de las calorías provendrán de
y la absorción intestinal31. La composición de hidratos de carbono con un alto índice glucémico
la bebida interviene en la velocidad de estos pro- (glucosa, sacarosa, maltrodextrinas).
cesos. Las soluciones con excesivo contenido en • Hidratos de carbono: suministrarán no más de un
HC (más del 9%) afectan negativamente el vacia- 9% de hidratos de carbono (90 gramos por litro).
do gástrico. Los azúcares sencillos (monosacári- •  Sodio: suministrarán no menos de 460 mg de so-
dos) permiten un mejor vaciado que los más com- dio por litro (46 mg por 100 ml/20 mmol/l) y no
plejos. El volumen de líquido también influye: a más de 1.150 mg de sodio por litro (50 mmol/l).

Tabla 3.  Pautas de hidratación antes, durante y después del ejercicio.

Antes del ejercicio


Se recomienda la ingesta de unos 400-600 ml de una bebida especialmente diseñada para el deportista,
unas 2 horas antes de la práctica del ejercicio.
Durante el ejercicio
Debe ingerirse líquido con la frecuencia y cuantía necesarias en cada caso. El aporte de HC permite un menor
consumo de los depósitos de glucógeno. Se aconseja beber 90-180 ml cada 10-15 minutos (o 150-250 ml cada
20 minutos). Ingestas mayores pueden suponer una sobrecarga del aparato digestivo y hacen que el deportista se
encuentre incómodo.
Después del ejercicio
La rehidratación debe iniciarse tan pronto como finalice el ejercicio. Es necesaria una adecuada reposición,
sobre todo si se va a entrenar de nuevo al día siguiente. Debe calcularse el agua perdida y aportar el 150% para
compensar las pérdidas urinarias. Tras ejercicios de larga duración se aconseja una bebida rica en sodio (40 mmol/l)
y/o añadir algún alimento salado para aumentar la retención de líquido. También deben administrarse hidratos de
carbono para reponer los depósitos de glucógeno.
726 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

Osmolalidad: debe estar entre 200-330 mOsm/kg


•  cha sustancia les proporcione un mayor rendimiento
de agua. deportivo. Este incremento se puede conseguir por
varias vías diferentes, en general relacionadas unas con
El CCAH aboga porque el término isotónico se reserve otras:
a las bebidas cuya osmolalidad esté comprendida entre
270-330 mOsm/kg de agua. Las bebidas ligeramente a. A través de la mejora de la producción y utiliza-
hipotónicas, de osmolalidad 200-270 mOsm/kg, son ción de energía y el retraso de la aparición de la
también recomendadas por el CCAH. Tanto la adecuada fatiga.
osmolalidad de la bebida como la correcta concentra- Este efecto se intenta alcanzar mediante el consu-
ción en hidratos de carbono son factores claves para un mo de hidratos de carbono (en forma sólida o lí-
vaciado gástrico rápido y una absorción óptima. quida, antes y durante el ejercicio), creatina, cafeí-
El documento de consenso del grupo de trabajo so- na, taurina, piruvato, aminoácidos ramificados,
bre nutrición de la Federación Española de Medicina ginseng, inosina, té verde o agentes alcalinizantes
del Deporte en el año 200833 ha refrendado estas ca- (p. ej.: bicarbonato y otros tampones).
racterísticas para la composición de dichas bebidas y b. A través de la mejora de la fuerza y potencia mus-
aconseja utilizar mezclas de hidratos de carbono. Ade- culares y promoviendo crecimiento y regenera-
más, en el caso de las bebidas de rehidratación des- ción tisular.
pués del esfuerzo recomienda ir a los niveles altos, tan- Con tal fin suelen utilizarse suplementos protei-
to de energía (300-350 kcal/l) como de sodio (40-50 cos, aminoácidos ramificados (leucina, isoleucina
mmol/l) y que contengan algo de potasio (2-6 mmol/l). y valina), arginina o beta-hidroxi-beta-metilbuti-
rato (HMB).
c. A través de la mejora de la recuperación tras el
9. Ayudas ergogénicas en el deporte
ejercicio.
La palabra «ergogenia» proviene del griego «ergos» Los compuestos con acción antioxidante se utili-
que significa trabajo, y «genan» que es generar. Se zan para tratar de optimizar la recuperación
considera como «ayuda ergogénica» cualquier manio- postejercicio. Entre ellos, los más utilizados son:
bra o método (nutricional, físico, mecánico, psicológi- vitaminas C y E, provitamina A, minerales (selenio,
co o farmacológico) realizado con el fin de aumentar: zinc, magnesio, cobre), N- acetil L-cisteína, biofla-
vonoides, coenzima Q10, inmunomoduladores
• El rendimiento físico y/o mental. (glutamina, equinacea), espirulina, aspartato y
• La producción y utilización de energía. ácidos grasos ω-3.
• El potencial de generar trabajo físico. d. A través de la optimización del peso y la compo-
sición corporal.
A lo largo de la historia se ha ido incrementando el Con este fin se recurre con frecuencia a compues-
nivel de exigencia de los deportistas: las marcas mejoran tos como L-carnitina o ácido linoleico conjugado
en un corto espacio de tiempo y tienen que seguir me- (CLA, del inglés conjugated linoleic acid).
jorando. Los entrenamientos se individualizan según las e. A través del mantenimiento de un correcto equili-
características del deportista, con lo que su técnica se brio hidroelectrolítico.
optimiza. La atención y el cuidado de todos los detalles, Se suelen utilizar las bebidas especialmente dise-
por pequeños que sean, puede representar una diferen- ñadas para deportistas.
cia fundamental para conseguir el objetivo prioritario: f. A través del aumento de la resistencia a las lesiones.
mejorar la marca, ampliar la ventaja con el contrincante Tanto la prevención como la recuperación rápida y
y ganar. En este contexto, además de una buena ali- completa de las lesiones asociadas con el ejercicio,
mentación, que resulta primordial para adaptarse a los son aspectos clave en la optimización del rendi-
entrenamientos y rendir más en ellos, los alimentos die- miento deportivo, para lo cual se utilizan com-
téticos (ayudas ergogénicas nutricionales) destinados a puestos como el cartílago de tiburón, mucopolisa-
los deportistas están cobrando cada vez más protago- cáridos o árnica.
nismo. Son muchos los que hay en el mercado, y ade-
más su número crece de forma vertiginosa. Algunos de
9.1.  Cafeína
ellos se presentan como alimentos sólidos, otros como
bebidas y otros en forma concentrada y dosificada (de La cafeína (1,3,7, trimetilxantina) es un alcaloide de
manera similar a los complementos alimenticios). El mo- la familia de las xantinas metiladas antagonista del re-
mento y la finalidad de su uso varían ampliamente se- ceptor de la adenosina. Se encuentra disponible en
gún sean las características específicas de cada deporte una gran variedad de formatos diferentes (infusiones,
y la situación concreta de la persona que lo realiza34. refrescos, bebidas energéticas, preparados farmacoló-
La mayoría de los deportistas persiguen un fin cuan- gicos, etc.). Su eficacia como sustancia ergogénica se
do utilizan una ayuda ergogénica nutricional: que di- debe a diferentes mecanismos de acción:
Tema 45.  Alimentación, nutrición, hidratación y ejercicio físico 727

• Disminución de la percepción de fatiga central. • Dosis de mantenimiento: una dosis diaria de 3 g


• Mejoría del tiempo de reacción y estado de alerta. permitirá mantener niveles satisfactorios de fosfo-
• Mejoría de la función neuromuscular y de la con- creatina24.
tracción muscular esquelética.
• Mejoría de la capacidad aeróbica (aumentando la Recientemente, la European Food Safety Authority
oxidación de ácidos grasos y retrasando la deple- (EFSA) tras valorar la evidencia científica acerca de la
ción de glucógeno). creatina, expone que la ingesta de al menos 3 g diario
• La cafeína alcanza concentraciones máximas en en combinación con entrenamiento de fuerza realiza-
plasma a los 60 minutos, con una vida media do de forma regular (tres veces por semana durante
aproximada entre 3-7 horas. varias semanas) y de intensidad moderada, mejora la
fuerza muscular en los adultos mayores de 55 años.
La cafeína ha demostrado que es efectiva en la mejo- Por el contrario, no observaron ningún efecto cuando
ra del rendimiento de diversos tipos de actividad depor- se administraban dosis similares de creatina sólo en los
tiva: resistencia, actividades de alta intensidad en de- días de entrenamiento (tres veces por semana)35.
portes de equipo y fuerza-potencia. Según la EFSA, la La administración asociada con unos 50-100 g de
administración una hora antes del ejercicio de 3 mg de hidratos de carbono de bajo índice glucémico potencia
cafeína por kg de peso corporal incrementa la capaci- el efecto anabólico de la creatina, ya que se elevan los
dad de resistencia, mientras que si se administran niveles de insulina, lo que consigue un aumento de la
4 mg/kg se reduce la percepción del esfuerzo realizado. permeabilidad de la membrana muscular a la creatina.
A dosis menores, 2 mg/kg, también se obtienen mejo- Mediante este proceso aumenta significativamente la
ras en el estado de alerta y el tiempo de reacción. creatina intramuscular total, especialmente en aquellos
En general, se admite que las dosis con las que se individuos que consumen una dieta baja en carne.
alcanzan mejoras en el rendimiento deportivo se en- Es imprescindible reseñar que el músculo tiene un
cuentran entre los 200-300 mg (3-6 mg/kg). Se ha límite máximo de almacenamiento de creatina (en tor-
descrito mayor efecto ergogénico en forma de cafeína no a 150-160 mmol/kg), por encima del cual, el exceso
pura que en forma de infusiones como café. Dosis su- de creatina carece de beneficio y se excreta por vía re-
periores a los 9 mg/kg se aproximan al valor tóxico y nal, sobrecargando esta función.
pueden provocar efectos secundarios como problemas La suplementación a corto plazo con creatina y pe-
gastrointestinales, insomnio, irritabilidad o arritmias y ríodos de suplementación crónicos de hasta 8 semanas
alucinaciones24. no se han asociado con daños en la salud del deportis-
ta; no obstante, las consecuencias a mayor plazo son
desconocidas24.
9.2.  Creatina
La creatina es un metabolito derivado de aminoáci-
9.3.  Bicarbonato
dos que se localiza sobre todo en el músculo esqueléti-
co. Se encuentra de forma natural, en la carne de vacu- El bicarbonato es una sustancia alcalinizante que ac-
no (3-6 g/kg) y el pescado. Su suplementación túa a modo de tampón en medio ácido, útil en situa-
aumenta la creatina total del músculo. ciones metabólicas anaeróbico lácticas, donde neutra-
El monohidrato de creatina es la ayuda ergogénica lizan el ácido láctico producido y retrasan la aparición
más eficaz disponible en la actualidad, en términos de fatiga en esfuerzos de corta duración e intermiten-
de incremento de la capacidad anaeróbica y de masa tes, con breves periodos de descanso.
magra durante un programa de entrenamiento. Aumen­ Se ha evidenciado su efecto positivo con una toma en-
ta el rendimiento deportivo en acciones de elevada in- tre 0,3-0,5 g/kg entre 1 y 2 horas antes del esfuerzo en
tensidad y de corta duración que dependen funda- ejercicios de alta intensidad y duración (de 1 a 7 minutos),
mentalmente del sistema ATP-fosfocreatina de pero también deportes que implican sprints repetidos (por
obtención de energía, esto es, en donde el metabolis- ejemplo, deportes de equipo) o esfuerzos más largos (30-
mo anaeróbico aláctico es prioritario. 60 minutos) justo por debajo del «umbral de lactato»7, 24.
Actualmente se aceptan de forma general dos proto- El efecto secundario más habitual son las molestias
colos de administración: gastrointestinales como diarreas o vómitos, hecho que
puede limitar en gran medida su utilización. La dilu-
• Protocolo de carga rápida: se realiza en 5 días con ción en agua puede atenuar estos efectos adversos.
una dosis de 20-30 g (0,3 g/kg) repartida en 4
tomas diarias.
9.4.  β-alanina
• Protocolo de carga lenta: resultados similares al
protocolo de carga rápida. Se lleva a cabo a lo La suplementación crónica de β-alanina es una estra-
largo de 4 semanas administrando 3 g diarios en tegia nutricional cada vez más popular, ya que puede
monodosis. elevar el contenido de carnosina muscular y, de este
728 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

modo, mejorar el rendimiento en ejercicios de alta in- crónicos del HMB, es consumir 3 g diarios, divididos en
tensidad. Parece presentar además un efecto aditivo tres dosis (siendo uno de ellas 1 hora antes del ejerci-
cuando se combina con la administración de suple- cio) durante un mínimo de 2 semanas previas a una
mentos de bicarbonato. competición. Su consumo crónico se ha mostrado se-
El protocolo de carga óptima y dosis de manteni- guro tanto en mayores como en jóvenes36.
miento se desconoce. La ingesta de 3-6 g/d durante
4-12 semanas aumenta este tampón intracelular en un
10. Resumen
50-85%, mientras que dosis diarias de ~ 1,2 g parece
mantener las elevaciones de la carnosina muscular. La Debido a la naturaleza distinta de los deportes y a las
suplementación con dosis mayores de 800 mg de diferencias individuales entre las personas que realizan
β-alanina purificada se asocian con síntomas de pares- actividad física (edad, sexo, talla, peso, etc.) es muy
tesias; sin embargo, este efecto secundario se puede difícil hacer una guía general que englobe todas las
atenuar con el uso de comprimidos de liberación lenta. necesidades y recomendaciones nutricionales para esta
Se necesitan sin embargo aún más trabajos para definir población, pero en general hay que prestar atención
las aplicaciones específicas para su uso7. especial a los siguientes puntos:

• Consumir suficiente energía.


9.5.  Vitamina D
• Procurar mantener un peso adecuado.
En los últimos años se han conocido nuevas funcio- • Aumentar la ingesta de hidratos de carbono
nales de la vitamina D, aparte de su acción a nivel óseo, (como mínimo un 60% de la energía total).
sobre diferentes dianas (sistema inmune, cardiovascu- • Conseguir un consumo correcto de micronutrien-
lar, función muscular, etc.). Además, se ha descrito tes, sobre todo de hierro y calcio.
una importante prevalencia de déficit de vitamina D en • Beber suficientes líquidos tanto antes, como du-
deportistas (generalmente establecido como niveles in- rante y después de realizar la actividad física.
feriores a 20 ng/ml), motivado por una escasa exposi- • Incluir en la dieta habitual alimentos variados.
ción solar (incluso en países soleados) y un ingesta in- • Tener una atención particular con las pequeñas
suficiente de alimentos ricos en vitamina D. Esto hace ingestas de alimentos entre horas (aperitivo y me-
que la vitamina D sea actualmente uno de los suple- rienda).
mentos más utilizados en nutrición deportiva, a pesar • Prestar especial cuidado en realizar una alimenta-
de que la evidencia científica sobre su papel potencia- ción adecuada durante los viajes o cuando se entre-
dor del rendimiento no sea clara. na en circunstancias especiales (en altitud, o en
Existen estudios que indican efectos perjudiciales ambientes calurosos y húmedos, etc.).
sobre la función muscular cuando las concentracio-
nes son inferiores a 12 ng/ml. Sin embargo, no se de- Para la persona que hace ejercicio moderado de for-
mostraba mejoría cuando se suplementaba a depor- ma habitual, el entrenamiento, una dieta adecuada y
tistas con unos niveles iniciales alrededor de 20 ng/ una buena hidratación durante todo el día, y de forma
ml. Por tanto, se requieren nuevas investigaciones específica mientras dura la actividad física, son las ma-
sobre la relación de vitamina D y rendimiento depor- neras más eficaces y correctas de aumentar el rendi-
tivo. Sí parece ser aconsejable suplementar aquellos miento.
deportistas que presenten un déficit de vitamina D Los deportistas de elite y/o de alta competición tienen
comprobado por laboratorio, ya que la suplementa- un nivel de actividad mayor y más intensa, su organis-
ción a dosis altas en personas con niveles normales mo está sometido a un sobreesfuerzo, y sus metas son
podría ser negativa7. distintas, por lo que pueden presentar unas necesida-
des diferentes que han de ser individualizadas en cada
momento, buscando tanto mantener y/o mejorar el es-
9.6.  Beta-hidroxi-metil-butirato
tado de salud (alimentación deportiva básica), como
El beta-hidroxi-metil-butirato (HMB) es un compues- aumentar el rendimiento físico (alimentación deportiva
to derivado de la leucina, aminoacido que parece ser intensiva), favorecer una buena recuperación tras el
clave por su papel anabólico en la SPM. ejercicio (alimentación deportiva regeneradora) y preve-
Los estudios indican que la suplementación con HMB nir ciertas patologías específicas37.
reduce el catabolismo muscular inducido por el ejercicio, En febrero de 2001, la Dirección General de Salud y
promoviendo el aumento de masa magra, fuerza y po- Protección del Consumidor de la Comisión Europea, a
tencia tanto en sujetos entrenados como no entrenados. través del Comité Científico de Alimentación Humana
En la actualidad, existen dos presentaciones diferen- (CCAH), redactó un informe sobre la composición de
tes de HMB: una unida a calcio HMB (HMB-Ca) y otra los alimentos y las bebidas destinadas a cubrir el gasto
en forma de ácido libre de HMB (HMB-FA). La posolo- energético en un gran esfuerzo muscular, especial-
gía recomendada con el fin de optimizar los efectos mente en los deportistas32.
Tema 45.  Alimentación, nutrición, hidratación y ejercicio físico 729

En este documento se indica que los alimentos y lí- 12. Horvath PJ, Eagen CK, Fisher NM, Leddy JJ. The effects
quidos especialmente adaptados ayudan a solucionar of varying dietary fat on performance and metabolism
problemas específicos para que se pueda alcanzar un in trained male and female runners. Journal of the
balance nutricional óptimo. Estos efectos beneficiosos American College of Nutrition. 2000; 19(1):52-60.
no están limitados sólo a deportistas que realizan un 13. Burke LM, Kiens B, Ivy JL. Carbohydrates and fat
ejercicio muscular regular e intenso, sino también a for training and recovery. J Sports Sci. 2004 Jan;
aquellas personas que por sus trabajos hacen esfuerzos 22(1):15-30.
importantes o en condiciones adversas. 14. Position of ACSM, American Dietetic Association y
El 15 de junio de 2016, la Comisión Europea presen- Dietitians of Canada Nutrition and athletic perfor-
tó al Parlamento Europeo y al Consejo un informe sobre mance. Med & Sci in sports & Exerc 2000 Dic;
alimentos destinados a los deportistas. En este informe 32(12):2130-45. 2000.
se concluye que no hay necesidad de disposiciones es- 15. Palacios N. Nutrición y ejercicio físico. Nutr. Hosp
pecíficas en los alimentos para deportistas. A partir del 2000; XV (Sup): 31-40.
20 de julio de 2016 estos productos deben cumplir las 16. Phillips SM. A Brief Review of Critical Processes in
normas horizontales pertinentes de la legislación ali- Exercise-Induced Muscular Hypertrophy. Sports
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730 BLOQUE: DIETAS EN SITUACIONES ESPECIALES

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BLOQUE:
SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO
(Dr. Daniel Antonio de Luis Román)
TEMA 46. Nutrición enteral: concepto, indicación, fórmulas, seguimiento
y complicaciones.
Dres. Juan José López Gómez, Beatriz Torres Torres, Emilia Gómez Hoyos,
Ana Ortolá Buigues y Daniel Antonio de Luis Román

TEMA 47. Nutrición enteral: vías de acceso.


Dres. Luis Ángel Cuéllar Olmedo, Concepción Terrroba Larumbe, Ana Alejandra
Cordero Vaquero y Daniel Antonio de Luis Román

TEMA 48. Nutrición parenteral.


Dres. Beatriz Torres Torres, Juan José López Gómez, Emilia Gómez Hoyos,
Ana Ortolá Buiges y Daniel Antonio de Luis Román

TEMA 49. Nutrición parenteral: vías de acceso.


Dres. María Concepción Terroba Larumbe, Cristina Crespo Soto, Luis Cuellar
Olmedo y Daniel Antonio de Luis Román

TEMA 50. Inmunonutrición en el soporte nutricional artificial.


Dres. Daniel Antonio de Luis Román, Emilia Gómez Hoyos, Juan José López
Gómez, Ana Ortola y Beatriz Torres Torres

TEMA 51. Metabolismo hídrico en los pacientes con nutrición artificial:


importancia y tratamiento de la hiponatremia.
Dres. Emilia Gómez Hoyos, Ana Ortolá Buigues, Juan José López Gómez, Beatriz
Torres Torres y Daniel Antonio de Luis Román
Tema 46. 
Nutrición enteral: concepto, indicación, fórmulas,
seguimiento y complicaciones
Juan José López Gómez
Beatriz Torres Torres
Emilia Gómez Hoyos
Ana Ortolá Buigues
Daniel Antonio de Luis Román
Hospital Clínico Universitario. Valladolid
Centro de Investigación Endocrinología y Nutrición. Facultad de Medicina. Universidad de Valladolid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 733-751.

1. Concepto
2.  Indicaciones y contraindicaciones de la nutrición enteral
3.  Fórmulas de nutrición enteral
4.  Seguimiento de la nutrición enteral
5.  Complicaciones de la nutrición enteral
6. Conclusiones
7. Bibliografía

1. Concepto 2. Indicaciones y contraindicaciones


de la nutrición enteral
La nutrición enteral se define, según la directiva europea
1999/21/EC de 25 de marzo de 1999, como todas aque- La indicación de nutrición enteral viene dada por la
llas formas de soporte nutricional que implican «el uso de incapacidad de asegurar los requerimientos energéticos
alimentos dietéticos artificiales para propósitos médicos por vía oral, pero con una adecuada función del tracto
específicos». Esta definición incluiría los suplementos nu- gastrointestinal. Por tanto, se supone una capacidad su-
tricionales orales y la alimentación enteral a través sondas ficiente para: 1) recibir los nutrientes; 2) hacerlos progre-
nasoentéricas (nasogástrica, nasoduodenal y nasoyeyu- sar mediante peristaltismo, y 3) digerirlos y absorberlos.
nal) u ostomías (gastrostomías o yeyunostomías)1. Cuando se dan las condiciones para comenzar con
Sin embargo, esta definición es bastante incompleta un tratamiento con nutrición enteral hay que tener en
dado que solo hace referencia al tipo de producto uti- cuenta los riesgos y beneficios de esta técnica en rela-
lizado. Por tanto, es mejor referirse a la nutrición ente- ción con el diagnóstico del paciente, el estado clínico y
ral como la técnica de soporte nutricional indicada en el pronóstico del mismo. Y, dadas las características de
aquellos pacientes que no pueden satisfacer sus nece- este tipo de soporte nutricional, también hay que tener
sidades nutricionales con la ingesta oral habitual y pre- en cuenta los deseos del paciente y/o su familia2.
sentan una función conservada y suficiente del tracto
gastrointestinal.
2.1. Indicaciones
A pesar de las definiciones «oficiales», clásicamente
se utiliza el término nutrición enteral para hablar de • Alteración de la capacidad de ingesta: Es preciso la
aquel tipo de soporte nutricional a través de vías enté- utilización de la vía enteral cuando el paciente no
ricas artificiales (sonda, catéter o estoma) diferentes a puede asegurar la llegada del alimento al tracto
la vía oral. En el desarrollo de este capítulo nos referire- digestivo. Esto se puede producir por una altera-
mos a este último concepto, aunque algunos de los ción funcional de la deglución (disfagia motora),
términos pueden ser superponibles a la suplementa- por una dificultad al paso parcial que no permita
ción oral nutricional. una cantidad adecuada de nutrientes (disfagia

733
734 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

obstructiva), por una discontinuidad del tracto di- la vía intestinal es imposible; y relativas, en las que se
gestivo alto o por negativa a la ingesta. podría probar la vía enteral de manera total o parcial
• Aumento de las necesidades nutricionales: Se utili- concomitante a la nutrición parenteral. Para determinar
zaría la vía enteral en pacientes que aun teniendo el perfil de la contraindicación es necesaria una evalua-
un tracto digestivo estructural y funcionalmente ción sistemática y objetiva de la función gastrointestinal
completo tienen un aumento de los requerimien- para identificar cualquier obstáculo existente para el
tos que no pueden alcanzarse mediante la alimenta­ inicio de la nutrición enteral.
ción oral habitual. Esta situación se suele producir
en patologías que ocasionan un estrés metabólico • Absolutas3:
elevado y/o limitan la ingesta. – Obstrucción completa del intestino delgado o
• Alteraciones de la absorción de nutrientes: Se uti- grueso.
lizaría en pacientes con el intestino estructural- – Perforación gastrointestinal con peritonitis difusa.
mente conservado pero con una alteración en la – Síndrome de intestino corto grave (conservan-
funcionalidad que impide el consumo de alimento do menos de 100 cm de intestino delgado).
en su forma y ritmo normal (síndrome de intestino – Hemorragia digestiva aguda grave activa.
corto, atrofia intestinal, pancreatitis, etc.). Nor- – Isquemia gastrointestinal no quirúrgica y en
malmente precisan de fórmulas exentas de algún fase de shock.
nutriente u oligoméricas. – Fístulas entéricas de alto débito.
• Necesidad relativa de reposo intestinal: En algunas – Imposibilidad de acceder al tubo digestivo.
patologías con una alteración estructural o de la – Cuando no se aprueba o no se desea una inter-
motilidad intestinal la alimentación enteral puede vención agresiva.
suponer una manera para mantener la nutrición • Relativas: En algunos casos si se realiza una ade-
por vía intestinal, asegurando un reposo intestinal cuada elección del dispositivo de acceso y una
hasta el inicio de tolerancia con alimento normal. buena selección de la fórmula, se podría utilizar la
nutrición enteral en situaciones que, a priori, pare-
Las indicaciones más frecuentes de nutrición enteral cerían contraindicarla.
se pueden observar en la tabla 1. – Íleo paralítico: En el íleo paralítico parece afec-
tarse predominantemente la función gástrica y
colónica. Por tanto, una alimentación a bajo flu-
2.2. Contraindicaciones
jo directamente en el intestino puede generar
Las contraindicaciones de la nutrición enteral se pue- una estimulación de la peristalsis además de
den clasificar en absolutas, que son aquellas en las que mantener el trofismo intestinal4.

Tabla 1.  Indicaciones de la nutrición enteral.

Alteraciones de la capacidad · Alteraciones mecánicas de la deglución


de ingesta · Alteraciones neuromotoras de la deglución

· Quemados
· Sepsis
· Politraumatizados
Aumento de las necesidades · Anorexia/caquexia y SIDA
nutricionales · Encefalopatía hepática
· Insuficiencia renal
· Preparación para la cirugía
· Ventilación mecánica

· Resecciones parciales de intestino


Alteraciones en la absorción
· Síndrome de intestino corto
de nutrientes
· Fístulas de intestino delgado

· Postcirugía digestiva alta


· Pancreatitis aguda grave
Necesidad relativa de reposo
· Enfermedad inflamatoria intestinal grave
intestinal
· Quimioterapia
· Enteritis rádica
Tema 46.  Nutrición enteral: concepto, indicación, fórmulas, seguimiento y complicaciones 735

– Fístulas: Las fístulas en general suelen contra- permite la administración de determinados nu-
indicar la nutrición enteral pero en el caso de trientes que no están disponibles para su uso en la
fístulas muy proximales (duodeno) o distales parenteral como la fibra, proteínas y péptidos in-
(colónicas) y con débito entre bajo y moderado tactos, que además de su función sistémica tienen
podrían beneficiarse de la nutrición enteral si se un importante efecto a nivel local.
modifica la vía de acceso y/o el tipo de fórmula. • Prevención de la traslocación bacteriana: La
– Enteritis aguda grave por radiación o por preservación de la función intestinal previene el
infección: El ensayo de alimentación exclusiva cambio de la flora saprófita intestinal por bacterias
con nutrición enteral en este tipo de pacientes patógenas que pueden liberar endotoxinas que ac-
puede mejorar la situación intestinal y facilitar tivan vías inflamatorias y contribuyen a empeorar
la recuperación. la situación aguda del paciente. Por otra parte, la
– Enfermedad inflamatoria intestinal grave nutrición enteral mantiene la integridad anatómi-
activa: En algunos estudios, sobre todo en en- ca y funcional del aparato digestivo controlando el
fermedad de Crohn pediátrica, se ha observado paso de las bacterias de la luz intestinal a la circu-
que la nutrición enteral exclusiva en fase inflama- lación general mediante el mantenimiento del teji-
toria puede actuar sobre la actividad y el pronós- do linfoide asociado a mucosas (MALT).
tico de la enfermedad5. • Disminución de complicaciones infecciosas
– Pancreatitis aguda grave necrosante: Siem- severas: La nutrición parenteral se puede relacio-
pre que sea posible sería recomendable realizar nar con un aumento de las complicaciones infec-
nutrición enteral postpilórica o gástrica. En caso ciosas en relación con la vía de acceso utilizada (vía
de que la nutrición no pudiese completar los re- venosa central desde distintos puntos) y con la di-
querimientos energéticos podría asociarse a nu- ficultad del mantenimiento de la integridad estruc-
trición parenteral6. tural intestinal. En distintos metanálisis en patolo-
– Diarrea cuantiosa persistente: Con una ade- gías en las que se puede optar por ambas vías
cuada valoración de la causa y el tipo de la dia- (pancreatitis aguda severa, cirugía gastrointestinal,
rrea, en algunas circunstancias un adecuado etc.) se ha observado que la nutrición enteral se
tratamiento con nutrición enteral podría mejo- relaciona con menor incidencia de complicaciones
rar el curso de la enfermedad. infecciosas8, 9.
– Vómitos incoercibles: En pacientes con vómi- • Mejor control metabólico a largo plazo: A di-
tos si utilizan vías nasoduodenales o nasoyeyu- ferencia de la nutrición parenteral la nutrición ente-
nales con descompresión gástrica y alimenta- ral se metaboliza en el hígado, lo que permite un
ción distal combinada con procinéticos podría uso más eficaz de los nutrientes. Asimismo, la pre-
conseguirse una nutrición adecuada. sencia de nutrientes en el intestino delgado estimu-
la la liberación de colecistocinina, que mantiene la
2.3. Nutrición enteral frente a nutrición función de la vesícula biliar y reduce, a su vez, el
riesgo de colecistitis y esteatosis asociadas a la nu-
parenteral
trición parenteral10. Por otra parte, el paciente con
A la hora de elegir soporte nutricional artificial el uso nutrición enteral tiene un riesgo disminuido de pa-
de la nutrición parenteral puede parecer más sencillo decer hiperglucemia y aumento de los requerimien-
desde el punto de vista logístico. Sin embargo, la vía tos insulínicos en aquellos que la padecen11.
enteral, además de ser la más fisiológica, es una vía más • Coste-efectividad: Es necesario tener también
segura, sencilla de mantener y menos costosa por lo que en cuenta que a la hora de seleccionar una nutri-
hay que intentar priorizarla dentro de lo posible7. ción parenteral, los dispositivos utilizados (prepa-
Las principales razones por las que deberíamos inten- rado nutricional, equipo de administración, bom-
tar, dentro de lo posible, la alimentación enteral siempre ba de administración y vía de acceso) y los cuidados
que haya tracto gastrointestinal funcionante son: requeridos tienen un coste más elevado que en el
caso de la nutrición enteral. Además, el hecho de
• Mantenimiento del trofismo intestinal: Du- iniciar nutrición parenteral no resulta en una mejo-
rante la enfermedad el reposo intestinal puede ría en la mortalidad o estancia media de estos pa-
dar lugar a daño en la integridad de la mucosa cientes respecto a la nutrición enteral12.
gastrointestinal, lo que produce alteraciones loca-
les (malabsorción, isquemia intestinal, etc.) y sisté- A pesar de los claros beneficios de la nutrición ente-
micas (incremento de la inflamación, incremento ral frente a la nutrición parenteral hay que seleccionar
de infecciones, etc.). La alimentación enteral per- adecuadamente la indicación y el tipo de paciente en la
mite la preservación estructural de la mucosa in- que se utiliza. De hecho, en algunos casos la utilización
testinal, la masa y la actividad enzimática del apa- combinada de nutrición enteral y parenteral puede su-
rato digestivo. Por otra parte, la nutrición enteral poner una buena alternativa.
736 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

3.  Fórmulas de nutrición enteral dos. Estas fórmulas se pueden utilizar entre todos
aquellos pacientes que tengan una función intestinal
Existe un gran número de fórmulas de nutrición en- adecuada.
teral en el mercado. La elección de una u otra fórmula
Los carbohidratos se obtienen a través de maltodex-
dependerá de la patología, la situación gastrointestinal
trinas y siropes de maíz. Las fuentes lipídicas son acei-
y las comorbilidades del paciente. En líneas generales,
tes de cánola, soja y/o cártamo ricos en ácidos grasos
las fórmulas de nutrición enteral se pueden clasificar
insaturados, aunque en la actualidad también existen
como1:
fórmulas que aportan ácido oleico. La proteína suele
provenir de la leche (caseinato sódico y cálcico) y de la
• Completas nutricionalmente: Se denomina así a
soja. Normalmente estas fórmulas están exentas de
aquellas fórmulas que aportan la cantidad sufi-
lactosa y de gluten.
ciente de macro y micronutrientes si se adminis-
Dependiendo de la fórmula, un volumen de entre
tran en la cantidad calórica adecuada. Se pueden
1-1,5 litros tiene un contenido en micronutrientes y
utilizar como fuente única nutricional o como su-
minerales ajustados a la ingesta diaria recomendada
plemento.
(IDR).
• Incompletas nutricionalmente: Son aquellas que
La densidad calórica suele moverse en el rango en-
aportan los macro y micronutrientes de forma
tre 1 y 2 kilocalorías (kcal) por mililitro (ml). Lo habi-
parcial con algún fin. Solo se pueden usar como
tual es utilizar fórmulas denominadas estándar, que
suplemento nutricional.
fluctúan entre 1 y 1,2 kcal/ml para aportar la cantidad
de nutrientes y de líquido adecuada a la situación fi-
Aunque de cara a una elección más individualizada
siológica del paciente. En caso de que se requieran
de la fórmula se utiliza una clasificación más exhaustiva
restricciones hídricas (insuficiencia cardiaca, secreción
en función de varias características: la complejidad y
inadecuada de hormona antidiurética, etc. o que el
tipo de los macronutrientes, carga proteica, densidad
paciente tenga unos requerimientos calóricos eleva-
calórica y presencia o no de fibra (tabla 2).
dos se pueden usar fórmulas de mayor densidad caló-
rica (1,5-2 kcal/ml).
3.1.  Fórmulas poliméricas Las fórmulas poliméricas también difieren en función
Los preparados de nutrición enteral poliméricos son de la concentración proteica, mostrada como el por-
aquellos que contienen los macronutrientes como centaje de proteínas respecto al valor calórico total. La
proteínas, grasas e hidratos de carbono no hidroliza- utilización de fórmulas hiperproteicas (más del 18 %
del valor calórico total) se reserva a aquellos pacientes
cuyos requerimientos proteicos se encuentran aumen-
tados en situaciones de estrés metabólico elevado13.
Tabla 2.  Clasificación de las fórmulas de nutrición Otra característica a tener en cuenta en estos prepa-
enteral. rados es el contenido en fibra. Las fórmulas con fibra
CRITERIO PRINCIPAL se suelen elegir para promover la salud gastrointes­
Complejidad macronutrientes tinal, mantener la motilidad y regular los ritmos intesti-
nales. Estos preparados pueden contener fibra soluble,
Poliméricas Oligoméricas insoluble o la mezcla de ambas en distinta proporción.
(Macronutrientes complejos) (Macronutrientes) Estas fórmulas pueden contener fibras con efecto pre-
biótico (fructooligosacáridos, oligofructosa e inulina)
CRITERIO SECUNDARIO
que tienen beneficios sobre la inmunidad (MALT) y fa-
Concentración proteínas (% valor calórico total)
cilitan la absorción14. El fin de la utilización de estos
Normoproteicas Hiperproteicas preparados es la prevención del estreñimiento15 o la
(< 18 % VCT) (> 18 % VCT) regularización de las diarreas, en el caso de preparados
con un 100 % de fibra soluble16.
CRITERIO ACCESORIO
Densidad calórica 3.2.  Fórmulas oligoméricas
Hipocalóricas: < 0,8 kcal/ml/día
Normocalóricas: 0,8-1,2 kcal/ml/día Las fórmulas oligoméricas son aquellas que contie-
Hipercalóricas: > 1,2 kcal/ml/día nen los macronutrientes hidrolizados. Los nutrientes
que se utilizan son hidrolizados de almidón de maíz,
Contenido en fibra maltodextrina o fructosa en el caso de los carbohidra-
Con fibra tos; las proteínas se encuentran como aminoácidos y
Sin fibra dipéptidos o tripéptidos (caseína hidrolizada o aislado
de proteína de soja); y las grasas ésteres de ácidos gra-
FÓRMULAS ESPECÍFICAS
sos o ácidos grasos de cadena media.
Tema 46.  Nutrición enteral: concepto, indicación, fórmulas, seguimiento y complicaciones 737

El objetivo de estos productos es optimizar al máxi- tes es diferente. En el paciente en hemodiálisis se


mo la asimilación de los nutrientes para aquellos pa- busca un contenido proteico y potasio más eleva-
cientes que tienen alteraciones graves de la absorción. do que en el paciente prediálisis, mientras que el
No existe mucha evidencia sobre la utilización de es- contenido de fósforo debe ser restringido en am-
tas fórmulas en comparación con las poliméricas. En bos casos. Estas fórmulas han mostrado que pue-
general, se observa tolerancia similar entre ambos ti- den conseguir mejoría en parámetros nutriciona-
pos de fórmulas17, 18 y la ESPEN no recomienda su uso les como la albúmina y el consumo de nutrientes
rutinario en la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa total, además de disminuir las complicaciones en
o el síndrome de intestino corto19. Por tanto, es nece- estos pacientes21. Aunque al comparar con fórmu-
sario seleccionar estas fórmulas con cautela, porque a las estándar no se observaron diferencias signifi-
pesar de presentar nutrientes ya «digeridos», la elevada cativas entre ambas e incluso se observó menor
osmolaridad de las mismas puede acelerar el tránsito y tasa de hipofosfatemias en el uso de las fórmulas
empeorar la tolerancia. estándar22.
• Fórmulas para el paciente con patología hepática:
3.3.  Fórmulas específicas Estas fórmulas tienen dos características principa-
les: por una parte son hipercalóricas, por lo que
Las fórmulas específicas son aquellas con cambios ofrecen una restricción de volumen para el paciente
en la proporción de macronutrientes y/o con cambios en hepatópata con descompensación hidrópica; y, por
los tipos de macronutrientes principales, que están diri- otra, la proteína aportada tiene un mayor aporte de
gidas a influir sobre la evolución y pronóstico en algunos aminoácidos ramificados que aromáticos. Esta últi-
de los aspectos de la enfermedad en la que se utilizan. ma característica, en teoría, podría prevenir el desa-
Las principales fórmulas específicas para enfermedad rrollo de encefalopatía hepática al no permitir la
son: formación de «falsos neurotransmisores» pero en la
práctica clínica no muestran superioridad sobre las
• Fórmulas para diabéticos o intolerantes a la gluco- fórmulas estándar23. Por lo tanto, estas fórmulas
sa: Su principal efecto es controlar el ascenso de quedan relegadas a aquellos pacientes con encefa-
la glucosa postprandial utilizando nutrientes con lopatía hepática activa o en aquella recidivante que
un bajo índice glucémico. Esta situación debería es resistente al tratamiento convencional24.
asociarse a un mejor control glucémico. Aunque • Fórmulas inmunomoduladoras: Los preparados in-
existen multitud de fórmulas para diabéticos en el munomoduladores, o inmunonutrición, son aque-
mercado, la mayor parte de ellas tienen unas ca- llos que contienen una serie de nutrientes denomi-
racterísticas comunes: utilizan hidratos de carbo- nados «inmunonutrientes» cuyo principal objetivo
no naturales o sintéticos con bajo índice glucémi- no es únicamente alimentar al paciente sino influir
co; existe un descenso de la proporción de en la propia enfermedad a través del control del
hidratos de carbono y un aumento del porcentaje estrés metabólico y la inflamación. Estos inmuno-
de proteínas y grasas; y se añade fibra dietética nutrientes pueden ser de diferente tipo, los más
que enlentece el vaciado gástrico y estabiliza la utilizados son los aminoácidos como la glutamina y
variabilidad glucémica. Por otra parte, estos pro- la arginina, lípidos como los ácidos grasos ome-
ductos suelen tener un incremento de ácidos gra- ga-3 (ω-3) sobre todo el ácido eicosapentaenoico
sos monoinsaturados y antioxidantes que podrían (EPA) y el docosahexaenoico (DHA); nucleótidos y
mejorar el metabolismo oxidativo e influir sobre micronutrientes como el selenio y distintos antioxi-
las complicaciones de la diabetes. dantes.
No existe todavía un posicionamiento claro al res- Este tipo de fórmulas se han utilizado en múltiples
pecto de este tipo de fórmulas dada la carencia de patologías con un importante componente inflama-
evidencia consistente20. torio como pacientes quirúrgicos y críticos, aunque
• Fórmulas para el paciente con patología renal: Es- también existen estudios en patología oncológica,
tos preparados enterales tienen como principal respiratoria o inflamatoria intestinal, con distinto ni-
característica la restricción hídrica, por tanto, son vel de recomendación y evidencia13.
hipercalóricas. Asimismo tienen una restricción en En el caso del paciente quirúrgico es donde este
iones, especialmente potasio y fósforo, además de tipo de nutrición ha demostrado mayor potencia
una modificación de la concentración de proteí- disminuyendo la estancia media y la tasa de com-
nas. Estas fórmulas se utilizan típicamente en la plicaciones en algunas cirugías como la abdominal
enfermedad renal crónica en fases avanzadas. Las y la otorrinolaringológica25. La ESPEN recomienda
diferencias principales en la concentración de ma- este tipo de fórmulas con un grado de recomenda-
cro y micronutrientes viene dada en función de si ción A en pacientes a los que se le realiza cirugía
el paciente se encuentra en prediálisis, diálisis pe- ORL, digestiva mayor y traumatismo severo26. En el
ritoneal o hemodiálisis, ya que la carga de nutrien- paciente crítico la ESPEN señala que estas fórmulas
738 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

son superiores a las estándar en los pacientes rese- en las primeras 24-48 horas obtienen un beneficio clí-
ñados previamente, además de la sepsis leve y en nico mayor predominantemente en tasa de complica-
el síndrome de distrés respiratorio agudo del adul- ciones y estancia media. Esta circunstancia no está tan
to (SDRA) con un grado de recomendación B27. clara en pacientes no críticos dada la heterogeneidad
• Fórmulas para el paciente con patología respirato- de los estudios realizados30.
ria: Los preparados específicos de patología pul- Según esto, la sociedad Americana de Nutrición En-
monar se basan en que el descenso de la cantidad teral y Parenteral (ASPEN) recomienda el inicio del apo-
de hidratos de carbono disminuye la metaboliza- yo nutricional especializado en aquellos pacientes con
ción de los mismos y la producción de dióxido de una ingesta oral inadecuada durante 7 a 14 días o en
carbono (CO2), mejorando la evolución y pronósti- aquellos pacientes en los que se estime que la ingesta
co de la enfermedad. Estas fórmulas se caracteri- oral sea insuficiente durante ese período de tiempo31.
zan, por tanto, por tener una alto contenido en En cualquiera de los casos es muy importante una
grasa (> 50 % VCT), un bajo contenido en hidratos valoración nutricional exhaustiva médica, quirúrgica y
de carbono (< 30 % VCT) y un contenido similar social, además de conocer la historia dietética, medi-
de proteínas que otras fórmulas (16-18 % VCT). das antropométricas y datos de laboratorio. Esta valo-
Suelen ser fórmulas hipercalóricas y exentas de fi- ración nos ayudará a caracterizar factores de riesgo de
bra para evitar la distensión abdominal que dificul- malnutrición, y déficit nutricionales específicos que nos
taría la respiración y poder cubrir los requerimien- ayudarán a establecer las necesidades nutricionales in-
tos calóricos aumentados en este tipo de pacientes. dividualizadas e identificar factores que puedan influir
Por otra parte, estas fórmulas pueden estar com- en el aporte de nutrientes óptimo32.
plementadas con inmunonutrientes como los áci-
dos grasos ω-3 y ácido gamma-linolénico que in- 4.2.  Selección de la fórmula
fluyen en la enfermedad disminuyendo el estado
inflamatorio. En el mercado existen multitud de preparados nutri-
En teoría, estas fórmulas se encuentran princi- cionales en alimentación enteral. La elección de una
palmente indicadas en pacientes con obstruc- fórmula u otra vendrá determinada principalmente por
ción crónica al flujo aéreo (OCFA) y en pacientes las características individuales del paciente y de la pato-
con SDRA. Los resultados obtenidos de estas fór- logía de base.
mulas suelen ser contradictorios, aunque en el En primer lugar, deberemos plantearnos la carga
paciente crítico parecen tener un efecto benefi- energética que precisa el paciente. Tras esto es nece-
cioso sobre la estancia media, el tiempo con ven- sario conocer las necesidades proteicas del paciente
tilación mecánica y el desarrollo de fallo multior- en el momento en el que se inicia el soporte nutricio-
gánico28. En el caso del paciente con SDRA estas nal. Por último, valoraremos algún condicionante dife-
fórmulas se encuentran recomendadas en las rente que le haga precisar de algún tipo de fórmula
guías ESPEN27. En el caso del paciente crónico específica. En cualquiera de los casos habrá que tener
con OCFA, a pesar del efecto que pueden tener en cuenta las necesidades hídricas especiales de cada
sobre la inflamación y la disminución del cocien- paciente a la hora de elegir la fórmula y/o añadir agua
te respiratorio, en muchos casos estas fórmulas externa a la misma.
no han mostrado superioridad respecto a las fór-
mulas estándar13. • Requerimientos energéticos: Las necesidades ener-
géticas del paciente normalmente vienen determi-
4.  Seguimiento de la nutrición enteral nadas por la edad, sexo, IMC, composición corpo-
ral y situación clínica. Aunque el gold standard
para calcular el gasto energético es la calorimetría
4.1.  Inicio de la nutrición enteral
indirecta, no siempre se puede utilizar este méto-
Se desconoce cuánto tiempo puede permanecer una do y se suelen usar ecuaciones estimativas ajusta-
persona en ayuno sin desarrollar consecuencias graves das por un factor de estrés. La mayor parte de los
para la salud. Aun así, se sabe que la ingesta insuficien- adultos requieren entre 20 y 35 kcal por kilogramo
te puede producir un empeoramiento de los indicado- dependiendo de la patología de base33.
res de evolución clínica (complicaciones y estancia me- La manera de modular las necesidades energéti-
dia de los pacientes) en aquellos pacientes hospitalizados cas mediante la selección de la fórmula se realiza
que no comen durante períodos superiores a 10-14 teniendo en cuenta la densidad calórica de la mis-
días tras el ingreso o una intervención quirúrgica29. ma. De esta manera podemos aplicar cargas ener-
En el caso del paciente crítico no se ha establecido géticas mayores o menores en función de la tole-
el momento preciso en el que sería adecuado comen- rancia del tubo digestivo a la misma32.
zar la alimentación artificial, pero se ha observado que • Requerimientos proteicos: Al igual que las necesi-
en los pacientes en los que se inicia la nutrición enteral dades energéticas, las necesidades proteicas se
Tema 46.  Nutrición enteral: concepto, indicación, fórmulas, seguimiento y complicaciones 739

ven moduladas por la edad, sexo, estado nutricio- de la fórmula», sino de las características básicas
nal y la situación de estrés. La ingesta diaria reco- (energía, carga proteica, fibra, etc.), su adapta-
mendada para la población normal se encuentra ción al individuo y el posible valor añadido que
entre 0,8 y 1,2 g/kg34, pero el paciente con algún aportarán las características especiales de estas
estrés metabólico puede aumentar estas necesi- fórmulas. Un algoritmo sencillo para la selección
dades hasta 1,2-2 g/kg de proteína35. de la fórmula se muestra en la figura 1.
Los preparados de nutrición enteral estándar tie-
nen un ajuste proporcional de la carga proteica al 4.3.  Regímenes de administración
valor calórico, pero en pacientes como el obeso, el
crítico, el anciano, insuficiencia renal crónica, etc. El régimen de administración de la nutrición enteral
no se cumple esta proporcionalidad, por lo que se vendrá determinado por una serie de circunstancias re-
requieren fórmulas con un mayor o menor conte- lacionadas con el tipo de fórmula y la cantidad determi-
nido proteíco (hiper, normo o hipoproteicas) res- nada, la vía de acceso utilizada y las características clíni-
pecto al calórico32. cas del paciente. Según esto, la nutrición puede ser36:
• Requerimientos hídricos: Además de conseguir un
adecuado soporte nutricional, la hidratación es • Nutrición continua: El volumen total diario que
indispensable en el paciente con nutrición enteral debe infundirse se administra sin interrupción a lo
para mantener una adecuada perfusión y balance largo de un número determinado de horas, nor-
electrolítico. En situación normal, un individuo malmente con un equipo de infusión o bomba.
sano requiere entre 30 y 40 ml de agua por kilo- Esta administración se realiza a lo largo de 18-24
gramo al día; esta circunstancia puede cambiar en horas (dependiendo de si se aplica descanso noc-
función de las pérdidas hídricas (diarreas, incre- turno o no). Suele producir menos residuo gástri-
mento de la diuresis, etc.), de la temperatura del co, menor distensión abdominal y menor reflujo
paciente y de la situación de estrés metabólico. gastrointestinal. Por lo tanto, mejora la tolerancia
A la hora de calcular el volumen de líquido admi- y disminuye el riesgo de broncoaspiración. Como
nistrado al paciente hay que tener en cuenta dos principales limitaciones tiene la mayor tasa de
factores: a) el agua administrada junto con la nu- obstrucciones y la limitación de movilidad del pa-
trición enteral, que es en torno al 85 % en las fór- ciente en el caso de estar consciente.
mulas de menor osmolaridad (hipo o isocalóricas); Es el tipo de administración recomendada de ini-
mientras que aquellas con una mayor osmolari- cio en los pacientes, sobre todo si llevan mucho
dad pueden llegar a contener un 70 % de agua tiempo sin ingerir ningún tipo de alimento. Es
(hipercalóricas)32; b) el agua no contenida en el obligatoria en el caso de administración de dieta a
preparado nutricional que puede realizarse me- nivel intestinal36.
diante agua libre administrada a través de la vía • Nutrición intermitente: Se realiza alternando pe-
de acceso digestivo y/o aquel líquido que se infun- ríodos de infusión con otros de reposo digestivo.
de a través de una vía venosa mediante suerotera- Este tipo de administración es el más parecido a la
pia. Es imprescindible tener en cuenta todas las alimentación habitual y es el preferido en aquellos
fuentes de líquido y ajustarlas adecuadamente a pacientes conscientes y con deambulación. Es
la situación del paciente para evitar situaciones de más fisiológica, de fácil administración, flexibili-
infra o sobrehidratación. dad de horarios y más barata. Como inconvenien-
• Tipo de fórmula: Al analizar las características bá- te, presenta una mayor facilidad para elevados
sicas descritas del soporte nutricional y teniendo residuos gástricos y una mayor intolerancia diges-
en cuenta la patología de base, elegiremos un tiva debido a la carga de volumen en menos tiem-
tipo u otro de fórmula de nutrición enteral prefor- po. Por esta razón se desaconseja en alimentación
mada. intestinal directa.
A la hora de elegir la fórmula nos plantearemos si La nutrición intermitente se puede realizar de dos
el paciente tiene alguna alteración en la absorción maneras: a) Nutrición con jeringa: consiste en la
intestinal; tras esto, en función de los requeri- administración mediante una jeringa especial (nor-
mientos energéticos y proteícos valoraremos la malmente de 50-60 ml) la alimentación en distin-
densidad calórica y la carga proteica de la fórmu- tas tomas. Normalmente se administran entre 200-
la. En función de la tolerancia y el riesgo de com- 300 ml por toma repartidas a lo largo del día. La
plicaciones decidiremos la presencia o no de fibra presión sobre el émbolo debe ser continua y lenta;
alimentaria. Por último, y en función de la patolo- por ello su mayor inconveniente es la velocidad de
gía del paciente, podríamos plantearnos una fór- administración, dado que si se realiza una infusión
mula específica adaptada a la patología; aunque demasiado rápida aumenta el riesgo de diarrea, vó-
la decisión sobre el uso de este tipo de fórmulas mitos y regurgitación gástrica. b) Nutrición por gra-
no deberá solo tomarse en función del «nombre vedad: permite una infusión intermitente pero más
740 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

NUTRICIÓN ENTERAL

SÍ FALLO ORGÁNICO NO

FÓRMULA FÓRMULA
ESPECIAL ESTÁNDAR

¿FALLO ¿ESTRÉS
NO SÍ NO SÍ
INTESTINAL? SEVERO?

FÓRMULA
FÓRMULA FÓRMULA FÓRMULA
ADAPTADA A
OLIGOMÉRICA NORMOPROTEICA HIPERPROTEICA
PATOLOGÍA

REQUERIMIENTOS
NO SÍ
VOLUMEN

FÓRMULA FÓRMULA
NORMOCALÓRICA HIPERCALÓRICA

Figura 1.  Algoritmo para la selección de la fórmula de nutrición enteral.

lenta e independiente de la persona que lo admi- • Volumen por toma (número de tomas) y/o volu-
nistra regulando la velocidad a través de una rueda men total diario.
presente en el equipo de infusión. Habitualmente • Tasa de infusión inicial, tasa de infusión final y ve-
se administra entre 4-6 veces al día con un ritmo locidad de aumento de la misma.
entre 30 y 120 minutos por toma. Puede producir • Horario y cantidad de administración de agua.
obstrucciones si la infusión es muy lenta, o intole-
rancia si es muy rápida36. Un ejemplo de prescripción en función del régimen
de administración viene descrito en la tabla 3.
4.4.  Prescripción de la fórmula enteral
Al tratarse de un tratamiento médico, la nutrición
4.5.  Monitorización de la nutrición enteral
enteral debe ser prescrita. La prescripción debe reali- La vigilancia de la nutrición enteral durante su utili-
zarse de una manera normalizada y lo más exacta po- zación se basa en dos pilares fundamentales: el estudio
sible para facilitar la dispensación de la misma y reducir de la situación clínica y metabólica del paciente, y la
errores. En resumen, según las circunstancias comen- valoración de la tolerancia del paciente al preparado.
tadas previamente la prescripción de la nutrición ente-
ral deberá tener las siguientes pautas37: • Evaluación del estado nutricional y metabólico: Los
parámetros que se valorarán en el paciente son
• Nombre de la fórmula de nutrición enteral y pro- aquellos asociados a su situación clínica, índices
ductos modulares que se han añadido (si es que bioquímicos (albúmina, prealbúmina, hemograma,
los precisa). iones, micronutrientes), cambios antropométricos
• Dispositivo o vía de acceso de nutrición enteral para (perímetros de brazo y pantorrilla; y peso si es posi-
administración (véase el tema 46). ble) y riesgo de malnutrición37.
• Método específico de alimentación (continua, gra- • Evaluación de la tolerancia: La valoración de la tole-
vedad intermitente o bolos). rancia a la nutrición es muy importante, dado que
Tema 46.  Nutrición enteral: concepto, indicación, fórmulas, seguimiento y complicaciones 741

Tabla 3.  Diferencia de prescripción entre nutrición enteral continua y en bolos.

Varón de 75 años ingresado por ictus isquémico


Antropometría: Peso 70 kg; Talla 1,67 m; IMC 25,1 kg/m2
Gasto energético total: 1628 kcal/día
Requerimientos proteicos: 70 g/día
Requerimientos hídricos: 2100-2800 ml/día
Tipo de nutrición: Nutrición estándar (1 kcal/ml) (Prot: 16 % VCT)
Volumen objetivo: 1750 ml
CONTINUA Duración de la terapia: 24 horas
Tasa de infusión (ml/h): 73 ml/h
Pauta de agua (mínimo): 600 ml/día (lavados 100 ml cada 4 h)
Tipo de nutrición: Nutrición estándar (1 kcal/ml) (Prot: 16 % VCT)
Volumen objetivo: 1750 ml
INTERMITENTE Número de bolos: 6 bolos
(Bolos o gravedad
libre) Volumen por bolo: 300 x 5 + 250 x 1
Duración del bolo: 20-30 min
Pauta de agua: 50 ml antes del bolo y 50 ml después

IMC: índice de masa corporal; Prot: proteínas; VCT: valor calórico total.

hasta un 32 % de los pacientes con nutrición enteral – En el caso de pacientes institucionalizados no hos-
desarrollan algún tipo de intolerancia abdominal39. pitalizados, la revisión de los parámetros descritos
Esta evaluación se realiza a través de diferentes pa- debería ser al menos mensual, aunque puede va-
rámetros dependientes del paciente. En primer lu- riar en función de la situación clínica del paciente.
gar, si es posible, se evaluarán los síntomas del pa- – En el caso del paciente ambulatorio, la evalua-
ciente como dolor abdominal, pesadez estomacal y ción debería ser trimestral, insistiendo en los
sensación de náuseas. A continuación se valorarán parámetros previamente descritos y en el esta-
signos o parámetros relacionados con la explora- do de la vía de acceso para valorar la necesidad
ción física gastrointestinal (vómitos, diarrea, estreñi- de recambio de la misma.
miento, distensión abdominal) y general (edemas,
auscultación cardiopulmonar patológica)38. Por últi-
4.6.  Transición a la vía oral
mo, en pacientes de riesgo o en progresión de nu-
trición se realizará un control del residuo gástrico En el paciente con nutrición enteral que recupera la
(figura 2), cuyo acúmulo se previene con una serie capacidad de alimentarse por vía oral, uno de los pun-
de medidas descritas en la tabla 432, 39. tos críticos es el de la transición a dicha vía. Este proce-
En cuanto a la tolerancia, es importante vigilar la so debe realizarse de manera gradual, dado que una
evolución de la capacidad de ser alimentado a tra- mala progresión puede ser una fuente de complicacio-
vés de la vía oral de una manera segura y eficaz. nes y de un retraso en dicha transición.
La reevaluación del paciente dependerá de la si- Los pasos a seguir en este cambio de vía de acceso
tuación clínica del mismo y del medio en el que se nutricional son37:
encuentre:
– En el caso del paciente hospitalizado, la frecuen- • El primer paso debería ser la transición de una nu-
cia de revisión será diaria para variables como la trición enteral continua a una nutrición intermi-
diuresis, deposición y glucemia capilar. En el tente para asimilar el tipo de nutrición a lo más
caso de variables antropométricas (peso, perí- parecido a la alimentación oral39.
metros braquial y de pantorrilla) y variables ana- • Identificar que la utilización de la vía oral es segura
líticas como función renal, iones y parámetros mediante una valoración multidisciplinar que com-
nutricionales (albúmina, prealbúmina, hemo- prenda logopedas, enfermeras y dietistas que pue-
grama, etc.) la evaluación deberá ser semanal. dan evaluar la deglución y el riesgo de aspiración
742 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

MEDICIÓN RESIDUO GÁSTRICO (RG):


Nutrición continua → Cada 4 horas
ó
Nutrición intermitente → Entre tomas

SÍ RG > 250 ml NO

Parar nutrición 1 hora


y reevaluar RG

¿OTROS SIGNOS DE
RG > 250 ml NO INTOLERANCIA?

SÍ NO SÍ

1) Descartar residuos 1) Nutrición continua 1) Parar nutrición o disminuir


2) Reiniciar alimentación a mitad 2) Usar estrategias para reducir la tasa de administración
de tasa de infusión el riesgo de aspiración 2) Usar estrategias para reducir
3) Usar estrategias para disminuir el riesgo de aspiración
el riesgo de aspiración 3) Reiniciar/progresar alimentación
enteral cuando se resuelva

Figura 2.  Detección y manejo del residuo gástrico elevado.

mediante el test volumen-viscosidad para individua- las comidas. Otra manera de estimular el apetito se-
lizar la alimentación con las modificaciones adecua- ría utilizar nutrición enteral continua nocturna41.
das en la textura y consistencia de los alimentos en • Generar una rutina estable de ingestas. Se debería
los estadios iniciales de la tolerancia oral40. documentar el porcentaje de consumo de cada
• Coordinar las tomas orales con tomas de nutrición una de las ingestas (tipo, frecuencia y cantidad de
enteral para estimular el apetito. Se pueden conside- comidas).
rar preparados enterales orales administrados entre • Involucrar al paciente y/o a los miembros de la fa-
milia en las preferencias de consumo de comidas
y suplementos nutricionales orales para optimizar
Tabla 4.  Estrategias para reducir el riesgo la ingesta dietética42.
de aspiración en nutrición enteral.
• Monitorizar la situación de la deglución, y el esta-
ESTRATEGIAS PARA REDUCIR EL RIESGO do nutricional, metabólico y de hidratación43.
DE ASPIRACIÓN Y MEJORAR LA TOLERANCIA • Valorar una prueba de retirada de la nutrición en-
A LA NUTRICIÓN ENTERAL teral cuando el paciente alcance el suficiente
aporte energético por vía oral. Para optimizar el
Elevar la cabecera de la cama a 30º. aporte es importante monitorizar el peso para co-
Adecuada higiene de la cavidad oral. nocer la cantidad nutricional con la que se consiga
una ganancia en el mismo41.
Vigilancia regular de la localización de la sonda.
Control glucémico adecuado para prevenir gastroparesia. 5.  Complicaciones de la nutrición enteral
Minimizar el uso de narcóticos y sedantes. 5.1. Gastrointestinales
Promover movimientos intestinales frecuentes
(prevenir estreñimiento).
5.1.1.  Náuseas, vómitos y regurgitación
Se consideran vómitos y/o regurgitación la presencia
Colocar si es posible dispositivos de alimentación
de alimento en la cavidad oral o nasal con o sin la ex-
postpilóricos.
teriorización de la misma. Son bastante frecuentes en
Tema 46.  Nutrición enteral: concepto, indicación, fórmulas, seguimiento y complicaciones 743

el paciente con nutrición enteral, habiendo sido infor- nérgicos, simpaticomiméticos, etc.)36. La prevención
madas hasta en un 26 % de los pacientes que reciben del aumento del residuo gástrico se realiza según se
este tipo de alimentación44. describe en la tabla 4 y la actitud que se debe tener
La factores relacionados con esta complicación sue- frente a su aumento se describe en la figura 2.
len deberse a problemas relacionados con el paciente
(agitación o estrés emocional); con la patología de base
5.1.3. Diarrea
(maldigestión, retraso en el vaciado gástrico); a la técni-
ca de administración y vía de acceso (posición supradia- La diarrea es la complicación más importante en el
fragmática de la sonda, alimentación en bolos, postura paciente con soporte nutricional enteral debido a su
del paciente); o al tipo de dieta administrada (alta os- prevalencia y a las consecuencias de la misma. Según
molaridad, alto contenido en grasa, rica en fibra)45. distintos estudios, se ha observado que la diarrea se da
La prevención de este tipo de patología vendrá dado entre 11,3-66,1 % de los pacientes con nutrición ente-
por caracterizar bien la situación del paciente y elegir ral en función de la definición usada47. La importancia
cuidadosamente la vía de acceso y la técnica de admi- de esta patología viene dada por la alteración hidro­
nistración de la nutrición. En caso de desarrollar la electrolítica asociada, la malabsorción de nutrientes, la
complicación, la actitud a seguir sería la siguiente46: debilidad cutánea de la zona perineal asociada a la in-
continencia fecal y el aporte nutricional disminuido
• Proporcionar una terapia farmacológica antieméti- para intentar frenar el proceso.
ca y/o procinética para facilitar el vaciado gástrico. Se define diarrea por una frecuencia aumentada de
• Reducir, reemplazar o retirar las medicaciones que las deposiciones junto con un aumento del volumen to-
retrasan el vaciado gástrico. tal de las mismas con una alteración en su consistencia.
• Considerar un cambio de fórmula, si es posible, El diagnóstico diferencial de la diarrea en nutrición
hacia una baja en grasa, isotónica o de más den- enteral es extremadamente importante para poder di-
sidad calórica para reducir el volumen. rigir adecuadamente el tratamiento y minimizar las al-
• Asegurarse de que la administración del agua y la teraciones asociadas. Las principales causas de diarrea
nutrición sean a temperatura ambiente. en estos pacientes son:
• Plantear una pauta continua de alimentación o redu-
cir la tasa de infusión en el caso de que ya la tenga. • Farmacológica: La administración de la medica-
ción puede condicionar diarrea a través de distintos
mecanismos. En primer lugar, en relación con la
5.1.2.  Aumento del residuo gástrico
forma farmacéutica, como el caso de los prepara-
El aumento del residuo gástrico es una de las compli- dos en forma de solución, que suelen tener edulco-
caciones más frecuentes en el paciente ingresado con rantes (como sorbitol) y estabilizadores que incre-
nutrición enteral, observándose entre el 20 y el 50 % de mentan la osmolaridad de la medicación y pueden
pacientes en los que se administra nutrición por vía gás- producir diarrea. Por otra parte, el propio fármaco
trica. La importancia de esta circunstancia típica del pa- puede tener como efecto colateral la producción
ciente con nutrición enteral es muy importante debido de diarrea, como sucede con los antihipertensivos,
al incremento del riesgo de regurgitación y vómito, y, colinérgicos, antiácidos con magnesio, antidiabéti-
sobre todo, de aumentar el riesgo de broncoaspiración. cos orales, inhibidores de la recaptación de la sero-
Se define como la presencia de un volumen residual tonina y fármacos quimioterápicos. Es necesario
gástrico superior a 200 ml, obtenido en cada valora- mencionar el efecto de los antibióticos, que pue-
ción del contenido gástrico. Debe realizarse mediante den producir diarrea al disminuir la flora intestinal
aspiración y/o conexión de la vía de acceso a bolsa saprófita, condicionando una malabsorción y ade-
cada 6 horas los primeros días de la nutrición enteral y más la posibilidad de un crecimiento de flora pató-
cada 12-24 horas desde entonces, período que se pue- gena y generar infecciones que pueden causarla32.
de prolongar conforme el paciente se estabilice. No es • Infecciosa: Siempre deben estar en mente, sobre
un fiel reflejo de la motilidad gástrica pero es suficiente todo en aquellos pacientes ingresados con múlti-
para recomendar su uso frecuente y protocolizado36. ple terapia farmacológica, en especial antibiótica.
Su principal causa es la gastroparesia. Presenta una La causa más frecuente suele ser la infección por
elevada incidencia que se debe a la gran cantidad de Clostridium difficile, y, en algunos casos por Can-
factores que pueden influir sobre el vaciado gástrico: dida albicans. Es muy importante en estos pacien-
relacionados con la alimentación (posición del pacien- tes la manipulación de los productos y equipos de
te, ritmo de infusión), relacionados con la dieta, neu- nutrición enteral de la manera más aséptica posi-
roendocrinos (gastrina, secretina, colecistocinina, glu- ble. La duración de este tipo de diarrea se relacio-
cagón, etc.), relacionados con la patología de base nará con la terapia utilizada para la misma, pero
(gastropatías, lesión peritoneal, etc.), factores farma- también influirán factores relacionados con la pa-
cológicos (ventilación mecánica, anestésicos, anticoli- tología de base48.
744 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

• Situación del paciente: El paciente en situación • Si no se consigue un aporte energético adecuado,
más aguda o crítica tiene un riesgo elevado de valorar el inicio de nutrición parenteral mantenien-
desarrollo de diarrea, en la que influye sobre todo do el máximo aporte posible de nutrición enteral.
la severidad de la enfermedad de base, la situa-
ción inflamatoria, la alteración de la inmunidad, el 5.1.4. Estreñimiento
control glucémico y la saturación periférica de oxí-
geno49. El estreñimiento es una entidad también muy fre-
•  Sobrecrecimiento bacteriano: La situación de cuente en el paciente con nutrición enteral que se de-
reposo intestinal prolongado, bien sea por ayuno, fine como la defecación infrecuente y dificultosa. La
bien por uso de nutrición parenteral, puede con- incidencia del mismo suele darse entre el 15 y el 83 %
dicionar un aumento de las bacterias intestinales y dependiendo del estudio valorado53.
una atrofia de vellosidades que pueden dar lugar El perfil del paciente con más propensión al estreñi-
a diarrea si iniciamos la nutrición, sobre todo si se miento es el del paciente anciano encamado y las princi-
hace de una manera muy rápida. pales causas asociadas a esta entidad patológica son la
• Efectos asociados a la nutrición enteral: La dia- medicación (benzodiacepinas y opiáceos, sobre todo), la
rrea asociada a nutrición enteral se puede relacionar mala hidratación del paciente, la ingesta insuficiente de
con distintos factores: 1) El método de administra- fibra y la inactividad física32.
ción es la principal causa de diarrea asociada a nu- El manejo del estreñimiento en el paciente con nutri-
trición, velocidades de infusión demasiado rápidas ción enteral depende del manejo de la fibra (incremen-
o administración de bolos en poco tiempo pueden tando la cantidad y añadiendo fibra insoluble)50, el líquido
producir diarrea. 2) El tipo de producto utilizado (mejorando la hidratación con agua o con fórmulas me-
puede influir sobre todo en preparados muy osmo- nos concentradas)54 y las medicaciones del paciente (in-
lares (dietas hipercalóricas, peptídicas, etc.), con un tentando reducir, cambiar o retirar aquellas que produz-
contenido aumentado en fibra insoluble, o bien, can estreñimiento) para mejorar el tránsito intestinal55.
administrado a temperaturas muy extremas (sobre
todo muy fría). De la misma manera, una contami- 5.2. Mecánicas
nación del producto puede producir diarreas refrac-
tarias. 3) La elección de la vía de acceso y el no uso 5.2.1.  Sondaje nasoenteral
apropiado de la misma también puede condicionar Las complicaciones relacionadas con la sonda se
una diarrea asociada a la nutrición, sobre todo en el pueden resumir en tres tipos:
caso de vías de acceso intestinal (duodenal o yeyu-
nal) que normalmente requieren alimentación con- • Lesiones por presión: Este tipo de lesiones se
tinua con fórmulas de baja osmolaridad. suelen producir en la zona nasal, faríngea y esofá-
gica. Sobre todo, se dan en zonas de presión y
Ante una diarrea clínicamente significativa en el pa- roce; en un principio se producen úlceras que
ciente tratado con nutrición enteral habrá que tener en pueden sobreinfectarse más adelante.
cuenta las siguientes actitudes para su manejo: En el caso de la nariz pueden producir perforacio-
nes del tabique y epistaxis. En el caso del esófago
• Mantener una adecuada hidratación y aporte de un uso prolongado de la sonda puede dar lugar a
iones para conservar el equilibrio hidroelectrolítico. esofagitis y una erosión progresiva de la mucosa,
• Valoración médica del paciente para realizar un hematemesis y estenosis esofágica residual.
diagnóstico diferencial adecuado en función de Una situación grave en estas circunstancias es la
las causas descritas previamente. No se debe asu- fístula esofagotraqueal que se suele dar en pa-
mir que la diarrea es causada por la nutrición en- cientes que están con sonda nasogástrica y tubo
teral aunque realicemos cambios en la misma endotraqueal durante un período prolongado36.
para optimizar el manejo del paciente. • Obstrucción: Es una complicación frecuente que
• Añadir fibra soluble y/o cambiar a una fórmula se da en el 30-40 % de los pacientes con sonda
con fibra soluble añadida50. nasogástrica. Normalmente la obstrucción se rela-
• Cambiar la pauta de nutrición enteral: ciona con el pequeño calibre de la sonda; la ma-
– Reducir el ritmo de infusión de la nutrición. yor densidad de la fórmula y el contenido de fibra
– Disminuir la concentración del producto51. de esta; la velocidad de infusión lenta; la adminis-
– En caso de diarreas malabsortivas, valorar la uti- tración de determinadas medicaciones y la menor
lización de dietas peptídicas con ácidos grasos cantidad de lavados. Es necesario tener en cuenta
de cadena media para optimizar la absorción52. estas circunstancias para evitar las obstrucciones,
• Una vez descartada la causa infecciosa y si persiste dado que tienen consecuencias sobre el aporte
la diarrea, utilizar agentes antidiarreicos (lopera- nutritivo, el tiempo de dedicación de enfermería y
mida, difenoxilato, octreótido). la mayor utilización de recursos36.
Tema 46.  Nutrición enteral: concepto, indicación, fórmulas, seguimiento y complicaciones 745

• Colocación incorrecta, extracción o deterio- El tratamiento de esta complicación es la retirada


ro: La colocación incorrecta de la sonda es una por tracción externa, endoscópica o quirúrgica. Si
complicación poco común, dada la experiencia en es preciso mantener la alimentación se recomien-
la implantación de las mismas. Aun así, es impres- da la implantación de una GEP nueva57.
cindible la comprobación del posicionamiento ini- • Fístulas gastrocolocutáneas: Esta complica-
cial de la sonda y vigilancia frecuente del mismo ción se produce cuando la GEP se implanta a tra-
dado que es muy frecuente (hasta el 30 % de los vés del intestino grueso hasta el estómago por
individuos con sonda) la migración de la sonda o error. Normalmente es asintomática, pero en oca-
la extracción de la misma. La complicación más siones se puede producir un íleo postoperatorio,
importante relacionada es el paso de contenido neumoperitoneo o salida de heces a través de la
alimentario a la vía aérea (aspiración) que suele piel.
conllevar infecciones respiratorias severas36. El diagnóstico se realiza mediante un estudio con
gastrografín. Esta complicación puede reducirse
5.2.2. Ostomías realizándose una correcta transiluminación y una
adecuada técnica con aspiración durante el paso
Las complicaciones relacionadas con las ostomías se
de la aguja durante la inserción de la PEG.
relacionan con las distintas partes en el proceso de im-
En caso de presencia de fístula gastrocolocutánea
plantación y manejo de la misma:
es necesario retirar inmediatamente la PEG y ce-
rrará espontáneamente. Si no es así, el tratamien-
Complicaciones mayores:
to deberá ser quirúrgico57.
• Infección necrotizante del tejido blando: • Retirada prematura del tubo de alimenta-
También se denomina fascitis necrotizante y es el ción: En algunos casos, el tubo de PEG puede
resultado de una infección microbiana que produ- salirse en relación con una holgura aumentada del
ce una necrosis de la fascia. Es la complicación más orificio.
severa aunque la incidencia es muy baja, dándose En la fase inicial de la implantación (< 4 semanas)
en menos del 2 % de los casos de implantación de el tracto puede no estar maduro y existe un riesgo
gastrostomía endoscópica percutánea (GEP)56. Sue- aumentado de peritonitis, por lo que habrá que
le darse en pacientes con algún grado de disfun- vigilar si comienza clínica de la misma, habiendo
ción inmune e incisiones demasiado pequeñas. La de iniciar tratamiento antibiótico y derivar a ciru-
clínica de esta infección suele ser un enrojecimiento gía si es preciso. En este caso no se recomienda la
de la piel alrededor del estoma con una necrosis nueva implantación de la GEP en el mismo orificio
posterior asociada a dolor y fiebre elevada. La pre- y se recomienda buscar otra vía de alimentación
vención es la realización de incisiones un poco más alternativa.
amplias que el tubo de alimentación, realizar un En la fase en que el tracto esté maduro (> 4 se-
cuidado adecuado del estoma y no realizar una manas) habría que sustituir el tubo por otro del
presión demasiado alta sobre el mismo57. mismo calibre, si no está disponible se podría uti-
• Síndrome buried bumper: Se trata de una lizar otro tipo de tubo con el mismo calibre como
complicación asociada a la implantación de la GEP una sonda Foley para asegurar la alimentación e
y consiste en la erosión por parte del freno interno hidratación del paciente57.
de la gastrostomía dentro o a través de la pared
gástrica. Suele darse en un 2 % de los pacientes,
Complicaciones menores:
aunque es más frecuente en los niños, observán-
dose hasta en un 32 % de aquellos niños con GEP • Sangrado: Puede darse en hasta el 2,8 % de los
con extensión yeyunal58. pacientes portadores de GEP debido a un daño en
Se suele asociar con una falta de cuidado adecua- la vasculatura del orificio de implantación57. Este
do de la GEP con aumento de la tensión de la riesgo se encuentra aumentado en pacientes con
misma durante la implantación. medicación anticoagulante o antiagregante. Por
Esta complicación debe sospecharse en aquellos esta razón se recomienda la suspensión de los anti­
pacientes que no se pueden alimentar de manera agregantes 7-10 días antes de la implantación de
adecuada o tienen una fuga mantenida de la nu- GEP59; y el cambio de anticoagulantes orales a he-
trición. Para diagnosticarla es necesario explorar el parina de bajo peso molecular los 3-5 días previos
tubo con manipulaciones simples (rotar el tubo, a la GEP59.
intentar introducirlo levemente), y confirmar me- • Infección de la herida: La realización de una in-
diante un estudio con contraste la malposición tervención, y, en especial, una ostomía, conlleva un
intraluminal del tubo y la continuidad con el estó- riesgo de infección asociado. El riesgo de infección
mago. Aunque la confirmación se realiza median- se encuentra aumentado en pacientes ancianos,
te endoscopia digestiva. malnutridos, inmunocomprometidos y pacientes
746 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

con diabetes mellitus tipo 260. Se recomienda el uso respiratorias y orales en muchos de los pacientes. Otro
de antibioterapia antes de la implantación de GEP de los métodos utilizados es la cuantificación del resi-
debido a la disminución del riesgo de infección del duo gástrico, aunque no ha mostrado tener una rela-
orificio, sobre todo en aquellos pacientes de mayor ción directa con el riesgo de aspiración pero puede ser
riesgo57. Es muy importante prevenirla y detectarla un indicador fácil de medir y protocolizable62.
precozmente, dado el riesgo de evolución hacia pe- El método más adecuado para evitar la aspiración es
ritonitis. la estandarización de una serie de medidas preventivas
• Formación de granuloma: El tejido de hiper- que han demostrado la reducción de la misma como:
granulación es una complicación común en la a) identificación de pacientes de alto riesgo; b) mante-
GEP. Suele darse en pacientes con traumatismo ner la cabecera de la cama elevada entre 30 y 45º; c)
continuado, fricción, mal ajuste del tubo y mace- asegurar una manipulación adecuada con un correcto
ración57. Es necesario detectar el tejido y la posi- lavado y desinfección de manos; d) tomar medidas de
bilidad de infección para iniciar el tratamiento en control del aumento del residuo gástrico; e) evitar el
primer lugar para esta última. Para reducir el te- uso innecesario de antibióticos37.
jido de granulación pueden usarse pomadas tó-
picas de triamcinolona al 0,5 %, espuma de po-
liuretano o incluso en algunos casos se podría 5.3.2.  Sinusitis y otitis media
usar nitrato de plata o criocirugía61. Son complicaciones raras que suelen darse de mane-
• Otras complicaciones: El atasco del tubo ali- ra más frecuente en pacientes graves, ancianos o con
mentario tiene causas similares a las de otras vías alteración del nivel de conciencia. Es necesario sospe-
de acceso como la medicación y los flujos dema- charla en pacientes con rinorrea persistente o fiebre de
siado lentos de alimentación; es necesaria adecua- origen no aclarado en el paciente portador de sonda
da prevención y recambio de la vía en el caso de nasoentérica durante más de una semana36.
imposibilidad de solucionarlo.
Otra complicación que se puede dar en el 1-2 % de
los pacientes con GEP es la fuga de contenido ali- 5.3.3.  Otras complicaciones infecciosas
mentario, lo que incrementa el riesgo de infección,
Otras complicaciones infeccciosas existentes en el
granuloma o daño del estoma por el jugo gástrico.
paciente con nutrición enteral son la diarrea infecciosa
En estos casos es muy importante la selección de
y la infección del estoma descritas previamente.
un tubo adaptado al orificio del estoma y recam-
biarlo en caso de existir demasiada holgura.
5.4. Metabólicas
5.3. Infecciosas
5.4.1.  Síndrome de realimentación
5.3.1. Broncoaspiración Se denomina síndrome de realimentación a las alte-
La neumonía y la contaminación bacteriana del trac- raciones hidroelectrolíticas asociadas a la reposición
to respiratorio en el paciente con soporte nutricional nutricional en pacientes severamente desnutridos. Esta
enteral se suele deber a aspiración de secreciones oro- patología puede manifestarse hasta los 5 días del inicio
faríngeas de estos pacientes o a situaciones de reflujo de la alimentación63.
gástrico y/o vómitos. La incidencia de broncoaspiración Se suele deber a una reintroducción muy rápida de
aumenta conforme disminuye el nivel de conciencia los hidratos de carbono que ocasiona una brusca des-
(pacientes encamados largo tiempo) y aumenta el gra- carga de insulina. Esta situación suele dar lugar predo-
do de estrés (pacientes en unidad de críticos). Otros minantemente a una hipofosfatemia, asociada a una
factores que influyen son la edad, el estado inmunita- hipopotasemia, hipomagnesemia, déficit de tiamina y
rio y la comorbilidad existente. retención hidrosalina que, en pacientes con un sistema
Los síntomas clínicos asociados a la aspiración son dis- cardiopulmonar débil, ocasiona una sobrecarga de vo-
nea, taquipnea, sibilancias, esputo espumoso, roncus y lumen.
estertores, taquicardia, fiebre, cianosis y agitación; aun- Es muy importante detectar a los pacientes en riesgo
que en ocasiones puede ser asintomática y comenzar de de sufrir este síndrome, entre los que destacan aque-
manera brusca. llos pacientes en ayuno o con una mínima ingesta du-
No existe un método fiable para detectar la aspira- rante más de 7 días con estrés metabólico significativo
ción previa al desarrollo de clínica respiratoria. y/o pérdida de peso marcada; malnutrición resultante
La manera más utilizada es la exploración orofarin- de una enfermedad crónica; pacientes con anorexia
gea para detectar contenido de nutrición, aunque este nerviosa; pacientes con náuseas, vómitos o diarrea per-
tiene que ser muy grosero para caracterizar el riesgo y, sistentes; situaciones de malabsorción; o historia de
en ocasiones, puede confundirse con las secreciones ingesta alta de alcohol64.
Tema 46.  Nutrición enteral: concepto, indicación, fórmulas, seguimiento y complicaciones 747

Tabla 5.  Complicaciones de la nutrición enteral.

Náuseas, vómitos y regurgitación


Aumento del residuo gástrico
GASTROINTESTINALES
Diarrea
Estreñimiento
Sondaje nasoenteral:
· Lesiones por presión
· Obstrucción
· Colocación incorrecta, extracción o deterioro
Ostomías:
MECÁNICAS · Infección necrotizante del tejido blando
· Síndrome buried bumper
· Fístulas gastrocolocutáneas
· Retirada prematura del tubo de alimentación
· Sangrado
· Formación de granuloma
· Otras complicaciones
Broncoaspiración
Sinusitis y otitis media
INFECCIOSAS
Diarrea infecciosa
Infección del estoma
Síndrome de realimentación
Desequilibrio hidrosalino
METABÓLICAS Alteraciones electrolíticas
Alteraciones de oligoelementos
Alteración del metabolismo de hidratos de carbono
Alteración de la imagen corporal
PSICOLÓGICAS Trastorno depresivo
Agitación psicomotriz

Para prevenir el desarrollo y/o tratar esta patología es 5.4.2.  Desequilibrio hidrosalino
conveniente31:
Como se ha comentado previamente, la hidratación
• Corregir las anormalidades electrolíticas antes del es básica en el paciente con nutrición enteral, por tan-
inicio de la nutrición y durante la nutrición si es to es necesario ajustarla con detenimiento. Estas alte-
que se presentan. raciones pueden producirse tanto por exceso como por
• Empezar e incrementar el aporte calórico de una defecto de agua, en al menos un 5 % de los pacientes.
manera conservadora durante 5-7 días hasta lle- En el caso de existir un balance negativo de agua por
gar a los requerimientos energéticos del paciente. un aporte insuficiente de la misma suele darse una si-
• Comenzar con el aporte de líquido y sodio mínimo tuación de deshidratación con clínica de sequedad de
necesario. piel y mucosas, normalmente asociada a una elevación
• En el caso de presentarse el síndrome, realizar un del sodio plasmático.
suplemento de 50-100 mg/día de tiamina intrave- Si existe un balance hídrico positivo habrá que valorar
nosa durante 5-7 días. la causa (disminución de la eliminación o aumento de
748 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

los aportes, o ambas alteraciones combinadas), pues se El desarrollo de hiperglucemia puede relacionarse
suele producir un estado de hiperhidratación con un con la presencia de alteraciones del metabolismo
aumento de los edemas en miembros y un posible ede- hidrocarbonado previos; el aumento de la resisten-
ma pulmonar. cia a la insulina relacionada con el estrés metabóli-
En estos casos es muy importante la valoración de la co del paciente; o la utilización de determinadas
cantidad de agua administrada con la propia nutrición medicaciones asociadas a la enfermedad aguda
y con los aportes externos (agua y sueroterapia), y rea- (corticoterapia)36.
lizar un adecuado ajuste de la misma en función de la Es recomendable por tanto realizar un control de
situación del paciente y la patología de base62. hemoglobina glicosilada al inicio de la nutrición y
un control de glucemia capilar frecuente durante
5.4.3.  Alteraciones electrolíticas el transcurso de la nutrición enteral para poder
adelantarse al posible desarrollo de hiperglucemia
La alteración electrolítica más frecuente en el pacien- o la presencia previa de diabetes no conocida.
te con soporte nutricional enteral es la hipopotasemia, En caso de aparecer la hiperglucemia, o bien en el
que aparece en un 30 % de los pacientes. Esta altera- caso de existencia previa de diabetes, se reco-
ción suele relacionarse con la alteración entre espacio mienda el control con insulina subcutánea y el
extra e intravascular, farmacoterapia asociada, déficit control de posibles factores potenciadores del mal
de aporte o síndrome de realimentación. La hiperpota- control glucémico. En algunos casos podemos
semia suele ser más rara y se relaciona con disbalance plantearnos la utilización de fórmulas específicas
entre los aportes (nutrición enteral, terapia intraveno- para diabéticos, si la patología de base del pacien-
sa) y la eliminación (insuficiencia renal). te lo permite62.
La hiponatremia puede darse en estos pacientes, so- • Hipoglucemia: La hipoglucemia es una complica-
bre todo en pacientes quirúrgicos o politraumatizados ción menos frecuente en el paciente con nutrición
en relación con el síndrome de secreción inadecuada enteral y normalmente se asocia con un deterioro
de hormona antidiurética (SIADH). del estado general del paciente, un aporte nutricio-
Las alteraciones electrolíticas más relacionadas con el nal disminuido, o bien, un exceso en el tratamiento
soporte nutricional suelen ser las del fósforo. La hipo­ antidiabético para las necesidades basales del pa-
fosfatemia puede darse por defecto del aporte nutri- ciente.
cional o por el síndrome de realimentación. La hiper-
fosfatemia se puede producir por exceso en el aporte,
o bien, por patología de base relacionada, como la in- 5.5. Psicológicas
suficiencia renal36. En el paciente con nutrición enteral, en especial en el
paciente consciente, es muy importante tener en cuen-
5.4.4.  Alteraciones de oligoelementos ta las implicaciones psicológicas de alimentación por
El déficit de oligoelementos se suele dar en casos de vías de acceso diferentes a la oral. Las alteraciones psi-
reducción de la ingesta o en alteraciones en la absorción cológicas más frecuentes en el paciente con nutrición
de nutrientes. En la actualidad, y debido al adecuado enteral son:
aporte realizado por las distintas fórmulas comerciales,
no se suelen observar alteraciones por déficit de aporte • Alteración de la imagen corporal: Se da en el
en el paciente con el tracto gastrointestinal normal. paciente consciente al observarse con una vía de
Los déficits descritos más frecuentemente son los de acceso enteral, en especial, con la sonda nasogás-
cobre, zinc, manganeso, cromo y selenio. La mayor trica. Puede alterar la capacidad de relación del
parte de las alteraciones suelen observarse en pacien- paciente con el entorno y consigo mismo.
tes con patología malabsortiva y se requiere una suple- • Trastorno depresivo: Puede darse al no poder
mentación aumentada de dichos micronutrientes en el utilizar la vía oral para consumir alimentos y rela-
caso de aparecer36. cionado con la situación anterior.
• Agitación psicomotriz: En pacientes con dismi-
5.4.5. Alteración del metabolismo de los hidratos nución del nivel de conciencia, el hecho de tener
una sonda nasoenteral u ostomía puede producir
de carbono cierto grado de agitación e intento de retirada de
• Hiperglucemia: La hiperglucemia es una compli- la misma.
cación que puede aparecer en el paciente con nu-
trición enteral; hasta un 34 % de los pacientes que En el caso de que sea posible es muy importante ha-
reciben nutrición enteral pueden experimentar al- blar con el paciente acerca de su actitud hacia la nutri-
gún grado de hiperglucemia65. Esta situación pue- ción enteral y sus perspectivas respecto a ella. En caso
de relacionarse con una mayor tasa de complica- de alteraciones a este nivel sería adecuada la valoración
ciones y una estancia media aumentada. por un especialista en psiquiatría.
Tema 46.  Nutrición enteral: concepto, indicación, fórmulas, seguimiento y complicaciones 749

6. Conclusiones review and meta-analysis of randomized contro-


lled trials in the English literature. J Gastrointest
La alimentación es básica para mantener las funcio- Surg. 2008; 12: 739-55.
nes corporales. En el caso de no poder asegurar un   9. Yi F, Ge L, Zhao J, Lei Y, Zhou F, Chem Z, Zhu Y et
adecuado aporte energético por vía oral hay que plan- al. Enteral Nutrition in predicted severe acute pan-
tearse un soporte nutricional artificial. En el caso de la creatitis. Intern Med. 2012; 51: 523-30.
nutrición enteral es importante recordar: 10. Peter JV, Moran JL, Phillips-Hughes J. A metaanaly-
sis of treatment outcomes of early enteral versys
• La nutrición enteral es más fisiológica y con me- early parenteral Nutrition in hospitalized patients.
nos complicaciones que la nutrición parenteral, y Crit Care Med. 2005; 33: 213-20.
debe priorizarse siempre que sea posible. 11. Petrov MS, Zagainov VE. Influence of enteral ver-
• Para un adecuado tratamiento es necesario elegir sus parenteral Nutrition on blood glucose control
cuidadosa e individualizadamente la fórmula de in acute pancreatitis: a systematic review. Clin
nutrición enteral, la vía de acceso y el método de Nutr. 2007; 26: 514-23.
administración. 12. Harvey SE, Parrott F, Harrison DA, Sadique MZ,
• La fórmula de nutrición enteral debe seleccionarse Grieve RD, Canter RR et al. A multicentre, rando-
en primer lugar en función de los requerimientos mised controlled trial comparing the clinical effec-
y, en segundo lugar, puede modularse según la tiveness and cost-effectiveness of early nutritional
patología de base del paciente. support via the parenteral versus the enteral route
• A pesar de su seguridad, la nutrición enteral es in critically ill patients (CALORIES). Health Technol
una técnica invasiva, no exenta de complicacio- Assess. 2016; 20: 1-144.
nes. Estas complicaciones deben ser prevenidas y, 13. Brown B, Roehl K, Betz M. Enteral nutrition formu-
en el caso de producirse, deben ser detectadas y la selection: Current evidence and implications for
tratadas de una manera precoz. practice. Nutr Clin Pract. 2015; 30: 72-85.
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750 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

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Tema 47. 
Nutrición enteral: vías de acceso
Luis Ángel Cuéllar Olmedo
Concepción Terrroba Larumbe
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Río Hortega. Valladolid.
Centro de Endocrinología y Nutrición. Valladolid

Ana Alejandra Cordero Vaquero


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Río Hortega. Valladolid

Daniel Antonio de Luis Román


Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico Universitario. Valladolid.
Director Ejecutivo Instituto de Endocrinología y Nutrición. Valladolid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 753-762.

1. Introducción
2.  Nutrición enteral. Vías de acceso
3. Resumen
4. Bibliografía

1. Introducción haya un tracto gastrointestinal funcionante. En com-


paración con la nutrición parenteral (NP), la NE es más
La nutrición enteral (NE) en los últimos años ha pre- fisiológica, implica técnicas más sencillas, presenta
sentado un gran desarrollo, anteponiéndose a la nutri- complicaciones menos graves, es más barata, se asocia
ción parenteral (NP) como primera elección. con menos morbilidad y, fundamentalmente, preserva
La NP es una alternativa a la nutrición oral o enteral la integridad del tracto digestivo. Diferentes estudios
cuando estas no son factibles porque el tubo digesti- prospectivos y aleatorizados que han comparado el co-
vo necesite reposo durante un período mayor de ciente riesgo/beneficio de la NP frente a la enteral de-
5 días o presente limitaciones anatómicas o funcio- muestran que la ausencia de nutrientes infundidos en
nales. la luz intestinal provoca atrofia de las vellosidades in-
La primera referencia del uso de alimentación por vía testinales, con la consiguiente alteración del efecto ba-
enteral es la introducción de nutrientes en el esófago rrera3 del sistema inmunitario intestinal (tabla 1).
por un tubo hueco en 15891, la técnica se debe a Hun-
ter durante el siglo XVIII, experimentando un gran de-
sarrollo en las últimas décadas asociado a la aparición Tabla 1.  Ventajas de la nutrición enteral sobre la
y mejora de los sistemas de administración y diversidad nutrición parenteral total.
de fórmulas, junto a un mejor conocimiento de la fisio-
· Más fisiológica.
logía digestiva, lo que conlleva un aumento de las indi-
· Más fácil de preparar y de administrar.
caciones y una reducción de las complicaciones2. Es
· Más fácil de controlar.
una técnica sencilla y eficaz.
· Menor número de complicaciones y de menor
La NE está indicada siempre que se mantenga la ca-
gravedad.
pacidad funcional y absortiva del tubo digestivo y no se
· Efecto trófico sobre la mucosa intestinal.
cubran las necesidades nutricionales por vía oral du-
· Favorece la adaptación del intestino a la
rante 7 días o más. Presenta ventajas sobre la NP como
alimentación oral.
el mantenimiento del trofismo intestinal y menos com-
· Menos traumática y mejor aceptada por los
plicaciones.
pacientes.
Desde la pasada década se considera a la NE el so-
· Más económica.
porte nutricional de elección siempre que sea posible y

753
754 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

2.  Nutrición enteral. Vías de acceso Tabla 2.  Situaciones clínicas con riesgo de
broncoaspiración.
La NE es el método de alimentación de elección en
pacientes que no son capaces de cubrir las necesidades · Pacientes ancianos (especialmente si hay demencia
nutricionales por vía oral y el tubo digestivo es anató- o marcada caquexia).
mica y funcionalmente viable. · Pauta de alimentación nocturna.
El aporte de nutrientes puede realizarse a través de la · Pacientes en posición persistente de decúbito.
vía oral, o por sondas. · Retraso del vaciamiento gástrico:
La elección de la vía de acceso a los distintos tramos - Laparotomía y postoperatorio inmediato.
del tubo digestivo depende de la enfermedad de base, - Traumatismo craneoencefálico.
del estado nutricional del paciente, de la duración esti- - Hipercalcemia.
mada del soporte nutricional (corto o largo plazo), del - Mixedema.
riesgo de broncoaspiración (figura 1) y de las necesida- - Diabetes mellitus.
des del paciente y/o la familia. - Tratamiento farmacológico: opiáceos,
La vía preferida para la administración de la NE es la anticolinérgicos, anticomiciales.
oral, siendo la más fisiológica y menos invasiva3. Cuan- - Ventilación mecánica.
do la ingesta o deglución están alteradas se recurre a
una vía de acceso artificial (sonda u ostomía).
En la tabla 2 se resumen las situaciones clínicas con en pacientes estables, con reflejos de deglución con-
riesgo evidente de broncoaspiración. servados, y que cooperen con todas las indicaciones
que puedan recibir. En general, está indicada la suple-
mentación cuando el paciente es capaz de cubrir al
2.1.  Vía oral
menos 2/3 de sus requerimientos con la ingesta libre
La vía preferida para la administración de la NE es la de alimentos; en caso contrario puede considerarse la
vía oral, siendo la más fisiológica y menos invasiva. Se nutrición enteral completa por vía oral.
considera que cuando el aporte de NE por vía oral supo- Será necesario utilizar preparados de olor y sabor
ne el 75% del total de las calorías que recibe el paciente agradables (no considerar estos aspectos provocará su
se puede designar según la ASPEN como NE oral. rechazo en pacientes que, por otra parte, suelen sufrir
La administración del soporte nutricional por boca anorexia o síntomas digestivos asociados a su enferme-
requiere la colaboración del paciente. Puede utilizarse dad de base).

Necesidad de NE > 4-6 semanas

SÍ NO

Enterostomía Sonda nasoentérica

¿Riesgo de broncoaspiración?

SÍ NO SÍ NO

Yeyunostomía GEP/GQ/GR SNY SNG


GEP-yeyunostomía

Figura 1.  Algoritmo para la elección de acceso en nutrición enteral (NE). Adaptado
de Pereira JL et al., Endocrinol Nutr 2004: 51-149-57. GEP: gastrostomía endoscópica
percutánea; GQ: gastrostomía quirúrgica; GR: gastrostomía radiológica; SNG: sonda
nasogástrica. SNY: sonda nasoyeyunal;
Tema 47.  Nutrición enteral: vías de acceso 755

2.2. Acceso artificial para nutrición enteral F. ORIFICIOS DISTALES. Para evitar la obstrucción es
no invasivo aconsejable que sean laterales.
G. CONECTORES. El deterioro del orificio de entrada
Se decide la colocación de la sonda en estómago o de la sonda por el uso es muy frecuente, siendo
intestino considerando, principalmente, la enferme- muy útil el cambio aislado. Existen diferentes sis-
dad del paciente. Las sondas nasogástricas y nasoen- temas de conexión (único o doble en Y).
téricas están indicadas en períodos de soporte nutri-
cional de corta duración, esto es, inferior a las 4-6
Sonda nasogástrica (SNG)
semanas. Para períodos más prolongados, serán de
elección las ostomías. El acceso a través de una SNG es el método más uti-
lizado para el aporte de NE a corto y medio plazo, al
ser más fisiológica. El extremo distal de la sonda está
2.2.1.  Sondas enterales colocado en el estómago. Permite el uso de dietas hi-
Una vez se ha decidido utilizar una sonda para nutri- perosmolares, mayores flujos de infusión y la adminis-
ción, hay que tener en cuenta sus características, entre tración de forma continua o intermitente (evidencia A).
las que destacan el material de fabricación, la longitud Su colocación resulta indicada en pacientes con fun-
y el calibre. También deben considerarse las conexio- cionalidad y anatomía gástrica conservada, reflejo del
nes, la existencia o no de fiador y el lastre. vómito intacto y adecuado nivel de consciencia.
La colocación de la SNG está contraindicada en pa-
A. MATERIAL. No debe alterarse por las secreciones cientes con riesgo de broncoaspiración por reflujo
digestivas, ni irritar la mucosa, y será blando y ató- gastroesofágico (tabla 2), retraso en el vaciamiento
xico. El poliuretano y la sil icona son los materiales gástrico, íleo intestinal y hemorragia digestiva alta por
que tienen estas características. No se deben usar varices esofágicas durante las primeras 72 horas tras el
sondas de polivinilo PVC que se endurece por la sangrado (posteriormente sí puede utilizarse, grado
acción de los jugos digestivos irritando la mucosa. de evidencia C).
Para valorar radiológicamente la colocación de las Se utilizan sondas de poliuretano (evitar PVC) de 75-
sondas, la mayoría son radiopacas. 90 cm con fiador interno y un calibre de 8-12 Fr (1
B. LONGITUD. Decidida la colocación de la sonda French = 0,33 mm) (figura 2).
para NE se debe definir el punto del tubo digesti- En el proceso de colocación de la sonda, la colabora-
vo donde se quiere colocar. ción del paciente es de gran ayuda, por lo que, en la
Según el lugar de colocación de la sonda, la talla, medida que sea posible, deberá siempre explicarse el
y la edad del paciente se elige la longitud de la procedimiento antes de proceder a su colocación. La
sonda. En adultos las sondas nasogástricas (SNG) longitud a introducir para alcanzar el estómago se es-
miden entre 70 y 95 cm. Las nasoentéricas (na- tima midiendo la distancia entre la punta de la nariz, el
soduodenales o nasoyeyunales), indicadas en pa- pabellón auricular y la apófisis xifoides, sumándole
cientes con alto riesgo de aspiración pulmonar o unos 5 cm de más. El cuello del paciente debe estar
dificultad en el vaciamiento gástrico, miden entre levemente flexionado en posición de semisentado o
105 y 120 cm. La longitud de la sonda para niños con la cabecera de la cama discretamente elevada.
oscila entre 38 y 56 cm. Una vez lubricada la punta de la sonda, se introduce
C. CALIBRE. El calibre se expresa en French (Fr), que por la fosa nasal hasta alcanzar la parte posterior de la
equivale a 0,33 mm. Las más utilizadas tienen en- faringe, pidiendo la colaboración del paciente median-
tre 8 y 12 Fr en adultos y de 5 a 8 Fr en niños.
Cuanto menor sea el calibre conlleva menos com-
plicaciones (irritación nasofaríngea, incompeten-
cia del esfínter esofágico inferior), pero es más
frecuente la obstrucción, que ocurre hasta en el
9% de los casos4.
D. FIADOR. Facilita la colocación de la sonda dotán-
dola de más rigidez.
El fiador no debe de ser excesivamente rígido, de
punta roma y menor longitud que la sonda para
evitar la perforación, la cual también puede ocu-
rrir si se reintroduce después de retirarlo.
E. LASTRE. Es un pequeño peso situado por debajo
de los orificios de salida de la sonda para facilitar
el paso al intestino delgado, si se precisa, y evitar
la salida de la sonda por la tos o los vómitos. Figura 2.  Sonda nasogástrica.
756 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

te movimientos deglutorios, avanzando sin forzar la La nutrición debe administrarse de forma continua,
sonda hasta la cavidad gástrica. ya que el intestino delgado tolera muy mal la sobrecar-
Una vez introducida, se debe comprobar la posición ga que supone la nutrición en bolos.
correcta de la sonda. La aspiración de secreciones, la Las sondas postpilóricas son también de poliuretano,
insuflación de aire con auscultación de epigastrio o la de un calibre de 8-12 Fr y de mayor longitud que las
medida del pH en líquido aspirado5 no son totalmente SNG para alcanzar el ángulo de Treitz (110-140 cm).
fiables. El método más seguro será la comprobación La sonda nasogastro-yeyunal es una sonda de doble
radiológica (radiografía toracoabdominal) (nivel de evi- luz (figura 4); una de ellas termina en el estómago y la
dencia B) (figura 3). Ocasionalmente, la sonda pasa a otra en el yeyuno. Permite simultanear la aspiración y
la tráquea provocando tos, o queda emplazada en el descompresión gástrica con la nutrición a nivel intesti-
espacio pleural o incluso el cráneo6, 7. Es importante nal. En el postoperatorio inmediato de cirugía abdomi-
fijar la sonda para evitar la extubación posterior, debe nal la función gástrica está alterada, existe un íleo gás-
hacerse de forma que la sonda no se desplace, pero sin trico que puede durar 1 o 2 días y un íleo en el colon
dañar las estructuras sobre las que queda fijada. En los que dura de 3 a 5 días. En cambio, el intestino delgado
días sucesivos se debe mantener una adecuada higiene se mantiene funcionalmente dentro de la normalidad,
bucal y de las fosas nasales, e irrigaciones de agua por por lo que esta sonda permite alimentar al paciente en
la sonda tras la medicación/nutrición para evitar obs- el postoperatorio inmediato.
trucciones. Para retirarla, se hace de forma suave y con Si el paciente va a someterse a laparotomía, el ciruja-
movimientos rotatorios, evitando así posibles despren- no podrá dejarla colocada durante el acto quirúrgico;
dimientos de escaras de decúbito, sobre todo del esó- en caso contrario habrá que considerar el paso ma-
fago. nual, o bien la colocación endoscópica o radiológica.
Se sigue la misma técnica que para la SNG hasta al-
Sondas nasoenterales: nasoduodenal (SND) canzar el estómago, precisando el peristaltismo para el
y nasoyeyunal (SNY) paso espontáneo a duodeno o yeyuno (figura 5), el
cual se puede favorecer colocando al paciente en decú-
Las sondas nasoenterales están indicadas para ali- bito lateral izquierdo o recurriendo a maniobras farma-
mentación enteral a corto plazo, cuando necesitamos cológicas (metoclopramida8, eritromicina9) o mecáni-
infundir la nutrición pasado el píloro, por ejemplo, en cas (lastre10, endoscopio).
pacientes con vaciamiento gástrico retardado (posto- Se debe confirmar su correcta colocación tras 8-12
peratorio inmediato) y/o con alto riesgo de broncoaspi- horas mediante radiografía (evidencia A).
ración, pacientes con náuseas y vómitos, fístulas gas-
troesofágicas y pancreatitis. Esta colocación disminuye Complicaciones del uso de sondas enterales
el riesgo de reflujo y también se minimiza la incidencia
de desintubaciones involuntarias o voluntarias, por Las complicaciones que pueden aparecer durante la
ejemplo con las náuseas, los vómitos o con la tos. utilización de sondas nasoenterales tienen una fre-
cuencia variable, aunque habitualmente son poco ha-
bituales y con escasa repercusión clínica (tabla 3).
La colocación incorrecta ocurre entre el 1% y el 19%
de los casos, pudiendo situarse el extremo distal de la

Fiador Luz yeyunal

Luz gástrica 18 Fr

Figura 3.  Comprobación radiológica de la colocación


de una sonda nasogástrica (SNG). Figura 4.  Sonda nasogastroyeyunal.
Tema 47.  Nutrición enteral: vías de acceso 757

sonda en faringe, esófago, tráquea, bronquios y crá- En pacientes con tos, vómitos o agitados puede des-
neo. Para evitar esta complicación se debe de realizar plazarse la sonda (1,6-4,6%).
una comprobación radiológica de la sonda antes de Una complicación relativamente frecuente (5%-
iniciar la NE. 38%) es la obstrucción de la sonda debido a factores
propios de la sonda (calibre, orificios de salida) o pro-
pios de la dieta (presencia de fibra, infusión lenta). Para
prevenir la obstrucción se debe de lavar la sonda cada
4 a 6 horas si la infusión es continua o después de cada
toma si es intermitente. Las alternativas para desobs-
truirla son la infusión en bolo de 30 ml de agua tem-
plada, bebidas tipo cola o infusión de enzimas pan-
creáticas11.
La complicación más grave es la neumonía aspirati-
va, cuya frecuencia varía de 0% al 95%12, 13, por la en-
trada de contenido digestivo en las vías respiratorias
inferiores por reflujo gastroesofágico14 en pacientes
con náuseas, vómitos, alteración del nivel de conscien-
cia, ventilación mecánica15 o patología del tubo diges-
Figura 5.  Sonda nasoyeyunal y forma de progresión. tivo (hernia hiatal, obstrucción gástrica).

Tabla 3.  Complicaciones de las sondas nasoenterales.


Complicación Prevención/actuación
· Lesión o dolor nasal o faríngeo · Utilizar sondas de poliuretano de calibre ≤ 12 Fr
· Taponamiento nasal · Diariamente cambiar el punto de fijación y movilizar la sonda
· Cambiar de fosa nasal al recambiar la sonda
· Lubricar fosas nasales y piel con vaselina o similar
· Otalgia · Utilizar sondas de poliuretano de calibre ≤ 12 Fr
· Dolor en senos paranasales · Descartar sinusitis/otitis
· Fiebre
· Ronquera · Utilizar sondas de calibre ≤ 12 Fr
· Retirar sonda y realizar gastrostomía
· Dolor en epigastrio o retroesternal · Cambiar la sonda a poliuretano/retirar sonda
· Hematemesis o melenas · Realizar endoscopia diagnóstica
· Tos durante la toma · Valorar vómitos o regurgitación previos
· Infección respiratoria de repetición · Revisar antecedentes de intubación endotraqueal
· Investigar fístula traqueoesofágica
· Cambiar de vía de acceso (gastrostomía, yeyunostomía)
· Extracción completa · Colocar nueva sonda
· Fijación adecuada
· Movilización cuidadosa
· Extracción reiterada · Control de náuseas y vómitos
· Valorar inmovilización/sedación temporal
· Valorar gastrostomía
· Extracción parcial · Reintroducir y comprobar ubicación
· Comprobar ubicación tras aspirar secreciones respiratorias
· Observar síntomas de infección respiratoria
· Valorar gastrostomía
· Obstrucción · Lavados antes y después de la medicación y las tomas, o cada 4-6 horas
· Medicación en forma líquida o triturada con agua
· Adaptar el calibre de la sonda a la medicación y el lugar de infusión
· Movilización de la sonda para resolver acodamientos
· Desobstrucción con agua templada en bolos
· Sustitución de la sonda
758 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

Su frecuencia puede reducirse con un meticuloso cui-


dado en la administración de la NE: incorporar al enfer-
mo más de 30º durante la administración de la NE y una
hora después16, comprobar el contenido gástrico cada
4-6 horas en infusiones continuas o antes de cada toma
si es intermitente. Se debe de colocar la sonda postpiló-
rica en pacientes con riesgo de aspiración (tabla 2).
Complicaciones infecciosas locales como otitis y sinu-
sitis pueden aparecer con el uso de sondas enterales.
Las complicaciones mecánicas (lesiones por decúbi-
to, infecciones locales), han disminuido por el uso de
sondas de pequeño calibre, flexibles y por los cuidados
de la sonda.

2.3.  Acceso invasivo al tubo digestivo


Las indicaciones para enterostomías son los procesos Figura 6.  Sonda de gastrostomía.
funcionales u orgánicos del tubo digestivo superior
que causan disfagia (estenosis orofaríngeas, esofágicas trostomía puede retirarse cuando la alimentación por
o gástricas, enfermedades neurológicas degenerativas) esta vía no esté indicada, cerrando el trayecto fistuloso
o se prevea un tiempo de administración de la NE su- en 24 horas
perior a 4-6 semanas17. La colocación de una sonda de gastrostomía se rea-
Las contraindicaciones de las ostomías son las alte- liza en la sala de endoscopias en un breve período de
raciones de la coagulación, procesos infecciosos gra- tiempo (10-20 minutos de duración). El paciente debe
ves, insuficiencia cardiaca y/o pulmonar descompen- permanecer en ayunas de 8 horas. Existen tres técnicas
sada. Las contraindicaciones locales son la ascitis, de colocación, siendo la técnica de Ponsky-Gauderer o
hipertensión portal, peritonitis o infecciones abdomi- por tracción la más utilizada.
nal activas, procesos inflamatorios o tumorales en el
trayecto fistuloso. A. Técnica de Ponsky-Gauderer o por tracción21. Con
Las enterostomías más utilizadas son la gastrostomía anestesia tópica de faringe y sedación endoveno-
y la yeyunostomía. sa se pasa el endoscopio al estómago, insuflando
aire para distenderlo y acercarlo a la pared abdo-
2.3.1.  Ostomías endoscópicas minal observándose desde el exterior por transilu-
En los últimos años las técnicas endoscópicas predo- minación. Tras infiltrar la piel y fascia con un
minan sobre las quirúrgicas por la menor morbi-­ anestésico local se introduce un trocar al estóma-
mortalidad, recuperación temprana, disminución de go a través del cual se pasa un hilo de seda que
las hernias incisionales y de las infecciones de la herida. con el endoscopio se extrae por la boca anudán-
dole el extremo de la sonda. Por tracción desde el
extremo abdominal se coloca la sonda en el esto-
Gastrostomía endoscópica
ma de la pared abdominal. Permite el aporte nu-
Practicada inicialmente por Ponsky y Gauderez en el tricional 12-24 horas después.
año 197918, actualmente es la vía de elección para B. Técnica de Sacks-Vine, por pulsión22. Se inserta en
mantener el aporte nutricional si la necesidad de NE se el estómago, bajo visión endoscópica, la aguja
prolonga. La técnica es sencilla y de bajo coste, despla- introductora a través de la cual se pasa la guía
zando a la gastrostomía quirúrgica por una menor que se saca con el endoscopio hasta la boca. La
morbimortalidad, ya que se realiza con anestesia local unidad cánula-catéter junto a la guía alcanza el
lo que conlleva menor frecuencia de íleo y no existe estómago a través del tubo digestivo donde por
dehiscencia de suturas19, 20. último atraviesa la pared fijando el catéter.
Las sondas de gastrostomía son de poliuretano y el cali- C. Técnica de Russell23. Se introduce percutáneamente
bre oscila entre los 12 y 24 Fr (figura 6). Se distinguen tres una guía en el interior del estómago sobre la que se
zonas, un extremo proximal con uno o dos orificios de pasa un trocar y a través del mismo una sonda ba-
entrada, un tope externo para ajustarlo a la pared abdo- lón tipo Foley. Se hincha el balón con control en-
minal, y un tope interno, que puede ser rígido o flexible. doscópico traccionando del tubo para hacer tope
Cuando la duración de la NE se prevé duradera, pue- con la pared, tras lo cual se retira el trocar.
de sustituirse la sonda inicial por una de bajo perfil o Con esta técnica la sonda no puede superar los
botón de alimentación, mejor aceptada en los pacien- 15 Fr (con las otras dos técnicas se colocan son-
tes con una vida social/laboral activa. La sonda de gas- das de hasta 28 Fr).
Tema 47.  Nutrición enteral: vías de acceso 759

Respecto a las técnicas anteriores, en esta última no Yeyunostomía endoscópica


existe contaminación de la sonda por la flora orofarín-
gea y evita el trauma del paso de la sonda por faringe El yeyuno, frente a otros tramos digestivos, tiene la
y el esófago; además, puede ser insertada cuando exis- ventaja de mantener su motilidad y su función absor-
te obstrucción del tubo digestivo superior. tiva desde el postoperatorio precoz. Su principal indi-
Las complicaciones son leves, la más frecuente, se cación son pacientes con riesgo de aspiración por re-
aproxima al 13%, es la infección del lugar de la gurgitación gástrica26. Las sondas utilizadas son de
punción por gérmenes de la orofaringe. Las compli- poliuretano de 8 a 12 Fr y de 13 a 120 cm de longi-
caciones graves de la gastrostomía endoscópica se tud. Endoscópicamente se ilumina el lugar de la pun-
aproximan al 3% e incluyen la fascitis necrotizante24 ción en el yeyuno, perforando la pared con una aguja
y la peritonitis aguda25. La mortalidad se aproxima por la que se pasa una guía que se saca por la boca
al 1% (tabla 4). con el endoscopio, siendo la técnica similar a la de

Tabla 4.  Complicaciones de las sondas de gastrostomía.

Complicación Prevención/actuación
· Dolor/sangrado por ostomía · Evitar una excesiva presión del tope externo
· Hematemesis/melenas · Movilizar y rotar diariamente la sonda
· Descartar decúbitos, esofagitis, ulcus gástrico
· Descartar penetración en la pared gástrica
· Retirar la sonda si es preciso y valorar una vía alternativa
· Granuloma · Aplicar nitrato de plata o cauterizar
· Infección · Profilaxis antibiótica en la realización de gastrostomía
· Medidas higiénicas y cuidados de la ostomía
· Realizar cultivo de exudado
· Limpieza y antiséptico local cada 8-12 horas
· Antibióticos sistémicos si persiste
· Retirar la sonda en caso de celulitis de la pared
· Migración de balón al trayecto · Comprobar periódicamente el volumen del balón
fistuloso · Prevenir la tracción de la sonda
· Cambiar la sonda y aumentar el volumen del balón
·M
 igración al intestino delgado · Usar sondas específicas para gastrostomía (evitar Foley)
(vómitos, dolor, distensión · Fijación correcta de la sonda
abdominal, salida de bilis al aspirar) · Comprobar la ubicación (marcas, longitud) diariamente
· Valorar las complicaciones intestinales
· Desinflar el balón y retirar la sonda
· Desplazamiento a la cavidad peritoneal · Recambio por personal experto
· Obstrucción · Lavados antes y después de la medicación y las tomas,
o cada 4-6 horas
· Medicación en forma líquida o triturada con agua
· Desobstruir con agua templada en bolos/enzimas pancreáticas
· Pérdida de jugo digestivo · Ajustar el calibre de la sonda a la ostomía
· Comprobar el sellado de la ostomía,
· Mantener limpia y seca la piel alrededor del estoma
· Aplicar crema de sulfadiazina argéntica
· Dilatación de la ostomía · Reducir progresivamente el calibre de la sonda y controlar obesidad
· Retirada de la gastrostomía y realización de otra cuando se consiga el
cierre.
· Fístula persistente · Mantener limpia y seca la piel alrededor del estoma
· Aplicar crema de sulfadiazina argéntica
· Sellar con fibrina o cierre quirúrgico
760 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

tracción descrita previamente27. A veces a través de la impidan la realización de la técnica endoscópica. Las
sonda de gastrostomía se introduce otra más fina contraindicaciones son las alteraciones del vaciamiento
hasta el yeyuno. gástrico (orgánicas o funcionales) y el reflujo gastro­
Las complicaciones principales de las sondas de esofágico. Se realiza una laparotomía superior o trans-
yeyunostomía se describen en la tabla 5. versa en el hipocondrio izquierdo. Las técnicas más re-
presentativas son las de Stamm (la más sencilla, para
2.3.2.  Ostomías quirúrgicas casos de riesgo quirúrgico elevado o gastrostomía que
se presupone temporal, la sonda en forma de seta,
Consisten en la colocación quirúrgica en faringe, sonda de Foley o tubo de Petzeer se coloca en el inte-
esófago cervical, estómago y yeyuno de una sonda de rior del estómago fijándola con suturas en bolsa de
alimentación. Desde la aparición de las ostomías en- tabaco seromuscular), Witzell (se inserta la sonda en el
doscópicas se ha reducido progresivamente su prácti- estómago realizando a su alrededor un túnel sero­
ca, reservándose para cuando no es posible técnica- muscular para disminuir el riesgo de fuga) y Janeway
mente la ostomía endoscópica o cuando se practica (se coloca una sonda de Foley dentro de un túnel gás-
cirugía por otra indicación. trico, de elección para gastrostomía permanente).

Faringostomía quirúrgica 2.3.2.3.  Yeyunostomía quirúrgica


Se coloca a través del seno piriforme una sonda para Se realiza como complemento de la cirugía del trac-
alimentación con acceso en la cara lateral del cuello28. to gastrointestinal superior o cuando se prevé un gran
Puede realizarse con anestesia local. Sus indicaciones retraso en la alimentación oral, evitando los riesgos de
principales son los traumatismos, malformaciones y ci- la nutrición parenteral29. Las contraindicaciones puede
rugía de la zona maxilofacial. ser sistémicas (ascitis, coagulopatía) o locales (enfer-
medad inflamatoria o enteritis por radiación). Funda-
mentalmente existen dos técnicas:
Gastrostomía quirúrgica
Tiene teóricamente mayor morbilidad y complicacio- • Yeyunostomía con catéter fino: Se realiza con un
nes que la endoscópica, más los riesgos asociados a trocar un túnel submucoso de unos 5 cm de lon-
una anestesia general. Se coloca en el estómago un gitud en el asa yeyunal, por el que se inserta un
tubo para alimentación en pacientes con obstrucción catéter de 3 mm de diámetro. La técnica es senci-
esofágica, traumatismos orofaríngeos o neoplasias que lla y fue descrita por Delany30.

Tabla 5.  Complicaciones de las sondas de yeyunostomía.

Complicación Prevención/actuación
· Obstrucción · Prevención: lavados de sonda cada 4-6 horas y después de la medicación
· Desobstruir: agua templada en bolos (20-30 ml) o solución alcalina de
enzimas pancreáticas
· E xtracción accidental · Prevención: fijación adecuada y manipulación cuidadosa
· Valorar sonda nasoyeyunal o gastroyeyunal
· Valorar reposición quirúrgica
· P érdida de jugo intestinal · Prevención: manipulación cuidadosa y prevención de la infección
· Suspensión cautelar de la nutrición
· Valoración por el cirujano
· S ignos de infección · Tomar muestra del exudado
· Limpiar y aplicar antiséptico local
· Valoración por el cirujano
· Observar evolución y signos de infección de la pared abdominal
· Diarrea · Evitar fórmulas (o sueros) hiperosmolares
· Dolor · Evitar la administración en bolos y los aumentos rápidos del ritmo de infusión
·D  istensión abdominal · Evitar la colocación de la sonda en el yeyuno distal
· Disminuir el ritmo de infusión o suspender, según la gravedad de los síntomas
· Valoración por el cirujano
Tema 47.  Nutrición enteral: vías de acceso 761

• Yeyunostomía tipo Witzel: A unos 20 cm del án- tima década un gran desarrollo en relación con un co-
gulo de Treitz, en el borde antimesentérico se nocimiento más profundo de la fisiología digestiva,
hace una incisión por la que se introduce el caté- mejora de los sistemas de administración y aumento de
ter, realizando un túnel seromuscular sacando el la diversidad de las fórmulas nutricionales.
extremo a través de la pared abdominal, fijando a Para decidir la vía de acceso del soporte nutricional
la pared anterior del yeyuno31. enteral se debe tener en cuenta el estado nutricional del
paciente, enfermedad de base, necesidades nutritivas y
2.3.3.  Ostomías radiológicas la duración posible. La vía preferida para administrar la
NE es la oral, pero en la mayoría de las ocasiones no es
Gastrostomía radiológica percutánea (GRP)32 posible, recurriendo a un acceso artificial (sonda u osto-
Es una gastrostomía percutánea que no requiere mía). El acceso por sonda enteral es el más utilizado a
anestesia ni endoscopia. Descrita en 1983 por Tao-Wills, través de sondas finas de poliuretano o silicona localiza-
se extendió, con la técnica de Seldinger (por control das frecuentemente en el estómago, si no existen con-
fluoroscópico, a través de guía). El paciente, en ayunas traindicaciones, o a nivel entérico en pacientes con ries-
de 12 horas, recibe una ligera sedación analgesia, y pre- go de broncoaspiración, náuseas, vómitos, retraso en el
medicación con glucagón y atropina subcutánea; me- vaciado gástrico y pancreatitis aguda. La vía nasoentéri-
diante una SNG fina se insufla aire al estómago (o agua ca es menos fisiológica, requiriendo el aporte alimenta-
en caso de control ecográfico), y ya localizado el estó- rio continuo al intestino. La complicación más grave del
mago se punciona de forma percutánea con un trocar, uso de sondas enterales es la neumonía aspirativa, sien-
colocando una guía a través de la cual se introducen do este riesgo mayor en pacientes con disminución del
dilatadores sucesivos y finalmente el catéter de gastros- nivel de consciencia y patología del tubo digestivo su-
tomía. En 1990 se describió la combinación de la técnica perior, debiéndose, en estos casos, colocar la sonda
descrita con gastroparexia (fijación de la pared gástrica a postpilórica. Otras complicaciones como otitis, sinusitis,
la pared abdominal); está técnica facilita la reintroduc- o complicaciones mecánicas, han disminuido por el uso
ción del catéter en caso de salida accidental, y parece de sondas de pequeño calibre. Cuando la necesidad de
haberse asociado también con menor mortalidad. soporte nutricional por sonda se prevea mayor de 4 a 6
Las indicaciones de la GRP son las mismas que para semanas se recurre al acceso invasivo del tubo digestivo
la endoscópica, tiene una ligera superioridad sobre la a través de la gastrostomía o yeyunostomía. La más uti-
técnica endoscópica en cuanto a porcentaje de éxito lizada es la gastrostomía endoscópica, técnica sencilla y
en la colocación. Como desventaja respecto a la endos- de bajo coste.
cópica, podemos citar que no permite explorar esófa-
go y estómago, que la sonda se obstruye con más fre- 4. Bibliografía
cuencia (tiene menor calibre), y que requiere la presen-
cia de radiólogos intervencionistas familiarizados con 1. His W. Zur Geschichte der Magenpumpe. Med Klin
la técnica. Está contraindicada en hernia hiatal, vólvulo 1925; 21: 391-393.
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Yeyunostomía radiológica percutánea Reviews 1991; 49: 129-140.
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Se usa el abordaje gástrico para acceder con una and its influence by nutrition. Am J Surg 2001;
guía larga al yeyuno, y tras dilataciones sucesivas del 183:390-398.
orificio de entrada se introduce un catéter de 12 Fr con
4. ASPEN Board of Directors. Definition of termsd
dos salidas, una de 12-14 Fr que queda en el estómago
used in ASPEN Guidelines and standards. JPEN
(para aspiración) y otra de 8-10 Fr en el yeyuno para
1995; 19: 1-2.
alimentación. La yeyunostomía radiológica directa es
una técnica difícil, que se reservaría en todo caso para 5. Metheny NA, Stewart BJ, Smith L, Yan H, Diebold
imposibilidad de acceso a través del estómago por gas- M, Clouse RE. PH and concentration of bilirrubin in
trectomía total o invasión tumoral. feeding tube aspirates as predictors of tube pla-
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ternativa para pacientes que no cubren las necesidades 892-894.
nutricionales por vía oral. 7. Cisneros C, Cantalapiedra JA, Montejo JC, Castillo
La NE es el soporte nutricional artificial de elección A. Penetración de sonda nasogástrica en cavidad
siempre que el tubo digestivo sea viable anatómica y craneal. A propósito de un caso. Med Intensiva
funcionalmente. La técnica ha experimentado en la úl- 1987; 11: 27-29.
762 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

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Tema 48. 
Nutrición parenteral
Beatriz Torres Torres
Juan José López Gómez
Emilia Gómez Hoyos
Ana Ortolá Buiges
Daniel Antonio de Luis Román
Hospital Clínico Universitario de Valladolid. Instituto de Investigación de Endocrinología y Nutrición.
Facultad de Medicina. Universidad de Valladolid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 763-778.

1.  Concepto
2.  Indicación de la nutrición parenteral
3.  Clasificación de la nutrición parenteral
4.  Fórmulas en la nutrición parenteral
5.  Composición de la nutrición parenteral
6.  Monitorización de la nutrición parenteral
7. Complicaciones de la nutrición parenteral
8. Resumen
9.  Bibliografía

1. Concepto sas de morbimortalidad4 y de estancia hospitalaria5.


La mayoría de los pacientes podrán recibir un ade-
La nutrición parenteral (NP) consiste en la adminis- cuado soporte nutricional por vía oral y/o enteral.
tración de los nutrientes por vía endovenosa en Solo en los pacientes en los que no fuera posible
aquellos pacientes incapaces de mantener un estado completar sus requerimientos nutricionales por vía
nutricional adecuado, con la administración de nu- digestiva, la NP será el tipo de soporte nutricional
trientes a través del tracto gastrointestinal. Los adecuado6.
­nutrientes administrados son hidratos de carbono,
lípidos, aminoácidos, electrolitos, oligoelementos, vi-
taminas y agua1. 2.1. Indicación de la nutrición parenteral:
Fue descrita por primera vez en 1968 por Dudrick Condiciones fisiopatológicas
et al, que realizaron las primeras infusiones de nutrien- El término «insuficiencia intestinal» se define como
tes hipertónicos en los EEUU, para proporcionar sopor- «la reducción de la masa intestinal funcional por deba-
te nutricional a pacientes desnutridos con un tracto jo de la cantidad mínima necesaria para la adecuada
gastrointestinal inviable2. Desde entonces, la NP ha ido digestión y absorción de nutrientes y fluidos», y englo-
evolucionando y perfeccionando los distintos tipos de ba a las cinco condiciones fisiopatológicas que afectan
soluciones, las técnicas y dispositivos de administra- a los pacientes candidatos de la NP7:
ción. Con el paso del tiempo se han ido conociendo las
complicaciones asociadas a la NP, así como su manejo •  Síndrome de intestino corto: Disminución
y prevención3. de la superficie de absorción intestinal en
­pacientes con isquemia mesentérica, enteritis
rádica, enfermedad de Crohn, traumatismos,
2.  Indicación de la nutrición parenteral
enterocolitis necrotizante y malformaciones
Diversos estudios han demostrado cómo un so- congénitas.
porte nutricional adecuado en pacientes desnutri- •  Fístula intestinal: Fístulas intestinales general-
dos o con riesgo de desnutrición, disminuye las ta- mente de intestino proximal, secundarias a: enfer-

763
764 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

medad de Crohn, cáncer, postquirúrgicas, enteri- 3. Clasificación de la nutrición parenteral


tis rádica.
•  Alteraciones de la motilidad intestinal: Pseudo­ Podemos clasificar la NP en función de:
obstrucción intestinal (íleo paralítico) prolonga- •  Aporte nutricional:
da, miopatía visceral, neuropatía visceral, agan-
– Nutrición parenteral suplementaria: Cuando la
gliosis intestinal total y otras enfermedades de
NP es complementaria a un soporte enteral.
la cadena respiratoria mitocondrial que afectan
Suele utilizarse para complementar ingestas en
al intestino.
pacientes que por vía enteral no pueden cubrir
•  Obstrucción mecánica intestinal: Neoplasias,
sus requerimientos nutricionales.
síndromes adherenciales.
– Nutrición parenteral total: Cuando a través de
•  Afectación extensa de la mucosa intestinal
la NP se aporta el 100% de los requerimientos
que produzca malabsorción: Enfermedad de
nutricionales.
Crohn, enteritis rádica, amiloidosis, enfermedades
por inclusión de las microvellosidades, enteritis •  Vía de acceso:
autoinmunes.
– Nutrición parenteral central: La vía de acceso es
una vía venosa central de gran calibre.
2.2.  Indicación de la nutrición parenteral: Inicio – Nutrición parenteral periférica: La vía de admi-
No todos los pacientes con insuficiencia intestinal nistración es una vía periférica.
serán candidatos a NP, porque, en muchos de los ca- •  Lugar de administración de la NP:
sos, esta disfunción será transitoria, y podrán reiniciar
la tolerancia oral tras 6-7 días de ayuno. Sabemos que – Nutrición parenteral hospitalaria: En el ámbito
pacientes normonutridos sin aporte oral o enteral du- hospitalario.
rante menos de 7 días no se beneficiarán de la NP du- – Nutrición parenteral domiciliaria: En el ámbito
rante tan corto período de tiempo, pudiendo presen- doméstico.
tar, sin embargo, las complicaciones asociadas a este •  Tipo de infusión:
tipo de soporte nutricional.
– Nutrición parenteral continua: Infusión conti-
Las indicaciones de NP6, 8 son las siguientes:
nua durante las 24 Horas.
•  La NP está indicada cuando se prevea una situa- – Nutrición parenteral cíclica: Infusión durante
ción sin aporte enteral superior a 7-10 días en pa- unas horas al día.
cientes normonutridos y a 5-7 días en pacientes
desnutridos o con importante estrés metabólico. 3.1.  Nutrición parenteral periférica (NPP)
•  La NP preoperatoria está indicada en pacientes se-
veramente malnutridos que no pueden ser ali- La administración de la NP se realiza a través de una
mentados de manera adecuada por vía oral o en- vía periférica. Su mayor complicación es la aparición de
teral. La NP debe administrarse, durante al menos, tromboflebitis condicionada por: la osmolaridad, y el
7 días antes de la cirugía. ritmo de infusión de la NP. Se recomienda una osmola-
•  La combinación de nutrición enteral y NP debe ser ridad inferior a 900 mOsm/l10, 11.
considerada en pacientes postquirúrgicos, en los La osmolaridad viene determinada por la cantidad
que no se puede aportar más del 60% de los re- de aminoácidos, glucosa y por el volumen a adminis-
querimientos por vía enteral. trar. En general, son fórmulas con escaso aporte de
macronutrientes y gran volumen, por lo que los pa-
cientes con altos requerimientos energéticos y protei-
2.3. Contraindicaciones de la nutrición
cos no serían los adecuados para este tipo de NP,
parenteral7, 9 fundamentalmente los pacientes que no toleran volú-
•  Pacientes con inestabilidad hemodinámica. menes elevados.
•  Enfermos terminales con expectativa de vida me- Se ha postulado que el aporte de glucosa y aminoá-
nor de 2-3 meses. cidos con la NPP puede disminuir el catabolismo pro-
•  Siempre que el tracto intestinal sea funcionante y teico en pacientes sin estrés metabólico severo12, aun-
podamos utilizar la vía enteral de manera eficaz y que la necesidad de NPP es controvertida, ya que es
segura para cumplir los requerimientos nutricio- una NP de corta duración no completa para pa-
nales del paciente. cientes que no están severamente desnutridos y sin
•  Pacientes en los que se prevea cubrir necesidades altos requerimientos de macronutrientes11.
por vía oral o enteral en menos de: 7-10 días en Algunos estudios han demostrado que las emulsio-
pacientes normonutridos y con un grado de estrés nes lipídicas añadidas a la NPP, suponen un importante
bajo, o 3-5 días en pacientes desnutridos y con sustrato energético sin incrementar la osmolaridad, y
importante estrés metabólico. mejorando la tolerancia NPP13.
Tema 48.  Nutrición parenteral 765

3.1.1. Indicación de NPP10, 11 tales o tricompartimentales que permiten largos perío-


dos de conservación y estabilidad de la solución, al
Duración de la NP 7-15 días. mezclar el contenido de los diferentes compartimentos
Cuando sea imposible canalizar una vía central. en el momento de la administración.
Como NP suplementaria o de transición. Este tipo de NP está indicada en pacientes con enfer-
medad estable, sin restricción o necesidades incremen-
3.1.2. Contraindicaciones de la NPP11 tadas de volumen, macro o micronutrientes. Son criti-
Desnutrición importante. cadas por su alto contenido en glucosa. Como ventajas,
Estrés metabólico severo. se han observado menos errores y mayor simplificación
Requerimientos de electrolitos muy elevados. en la prescripción, sin restar calidad. No están indica-
Necesidad de NP prolongada (> 15 días). das en pacientes críticos10.

3.2. Nutrición parenteral suplementaria (NPS) 4.1.2.  Nutrición parenteral individualizada


Realizadas normalmente en Servicios de Farmacia
Indicada en pacientes postquirúrgicos con un aporte
Hospitalaria. Se individualiza la dieta en función de los
enteral menor del 60% de los requerimientos6, 8. Ade-
requerimientos de cada paciente y de la enfermedad
más, se ha observado mejoría de los parámetros nutri-
de base. Es la indicada en pacientes críticos. Se han
cionales en pacientes críticos14. Aunque en algunos
observado mayores errores en la prescripción y admi-
estudios15, 16 se asocia con un aumento de las compli-
nistración10, 20, que con las NP estandarizadas.
caciones, probablemente relacionadas con un excesivo
aporte de macronutrientes17.
4.2. Fórmulas de nutrición parenteral:
3.3. Nutrición parenteral domiciliaria (NPD) Composición
Se estudiará en profundidad en el tema 59. 4.2.1. Formulación 2 en 1
En los últimos años el soporte nutricional domicilia- Mezclas binarias de glucosa y aminoácidos, con la
rio ha ido aumentando con el fin de proporcionar al administración de la emulsión lipídica de manera in-
enfermo crónico, que precisa soporte nutricional de dependiente. Como ventajas: ausencia de interaccio-
manera permanente o prolongada, una mejor calidad nes de fármacos y cationes con la emulsión lipídica y
de vida, fuera del ámbito hospitalario18. la posibilidad de usar filtros con poros menores que
La NPD consiste en la infusión de nutrientes por una en las formulaciones 3 en 1, con menor paso de con-
vía de acceso central, llevada a cabo en el domicilio de taminantes e incluso de algunas bacterias10.
pacientes estables que necesitan soporte nutricional
con NP durante períodos de tiempo superiores a un 4.2.2. Formulación 3 en 1
mes12. La NPD puede ser total o suplementaria a algún
tipo de soporte enteral. En una misma bolsa de NP, aminoácidos, glucosa y
Para poder realizar con éxito la NPD es fundamental lípidos (mezclas ternarias). Reduce el riesgo de conta-
un buen soporte multidisciplinar en el que se revisen y se minación, ya que existe una menor manipulación. Por
realicen profilaxis de las posibles complicaciones de la tanto, menor uso de material fungible al administrar
NPD de manera periódica, así como un adecuado mane- de manera conjunta aminoácidos, glucosa y lípidos21.
jo por parte del paciente18, 19. No se recomienda en pa- Las mezclas ternarias se habían relacionado con una
cientes con esperanza de vida menor de 2-3 meses6. menor duración del catéter22, aunque en estudios más
recientes con el uso de emulsiones lipídicas con un me-
4.  Fórmulas de nutrición parenteral nor aporte de triglicéridos de cadena larga (TCL), no se
observaron diferencias entre la duración del catéter y el
La realización de fórmulas de NP es un proceso com- tipo de formulación23.
plejo en el que la elaboración, estabilidad y compatibi- No se han observado diferencias, en cuanto a com-
lidad de los diferentes componentes y su conservación plicaciones infecciosas, entre formulaciones binarias y
van a ser determinantes en la aparición de complica- ternarias10.
ciones secundarias.
5.  Composición de la nutrición parenteral
4.1. Fórmulas de nutrición parenteral: Elaboración
5.1. Macronutrientes
4.1.1. Nutrición parenteral estandarizada
5.1.1. Proteínas
Son dietas producidas por la industria con o sin elec-
trolitos. Uno de los métodos utilizados para su mejor Su correcta administración juega un papel deter-
conservación es el desarrollo de bolsas bicompartimen- minante en la síntesis proteica. El objetivo es conse-
766 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

guir un balance nitrogenado neutro en los pacientes AA esencial30, 31. Las guías clínicas actuales, no reco-
sanos, y un balance positivo en los pacientes desnutri- miendan el uso de glutamina de manera rutinaria en
dos o en situación de estrés metabólico. pacientes críticos, ya que existen diversos estudios en
Son soluciones de aminoácidos (AA) cristalinos en los que no se observa un beneficio clínico en estos
forma levógira (metabólicamente activos) de los pacientes31-35. La evidencia actual, refleja una mejoría
que son esenciales el 38-57%, en las soluciones de de la evolución clínica con el aporte de glutamina en
AA estándar24. Las proteínas se oxidan aportando la NP, en una única subpoblación de enfermos críticos
4 kcal/g. La recomendación es que el aporte de pro- (grandes quemados)36 y aquellos con afectación is-
teínas suponga el 20-25% del aporte total de ener- quémica intestinal27.
gía (1-1,5 g/kg), ajustándolo a las necesidades del
paciente en función del estrés proteico y de la situa- 5.1.2. Hidratos de carbono
ción clínica25. El aporte de proteínas se puede expre-
sar en gramos de nitrógeno, usado clásicamente Constituyen la principal fuente de energía. La dextro-
para el cálculo del balance nitrogenado (1 g de ni- sa (D-glucosa) es el hidrato de carbono de elección.
trógeno = 6,25 g de AA)1. Existen soluciones de glucosa en concentraciones del
Existen una serie de AA que se pueden considerar 5%, 10%, 20%, 30%, 50% y 70%. Cada gramo de glu-
esenciales en situaciones clínicas con estrés metabóli- cosa aporta 4 kcal, si nos referimos a la forma anhidra
co: taurina, cistina, arginina, glutamina, AA ramifica- y, 3,4 kcal si es glucosa monohidratada.
dos. No hay evidencia de beneficio clínico, en adultos, Es un componente fundamental en la NP, ya que en
de la suplementación con taurina, cistina o arginina en ausencia de glucosa se pone en marcha la neogluco-
la NP24. génesis. El aporte de glucosa en la NP37:
Arginina: Está presente en las soluciones estándar de •  Determina la osmolaridad de la solución adminis-
AA. Se ha observado depleción de arginina en pacien- trada.
tes con traumatismos severos y sepsis. Aunque, en la •  Supone un ahorro de nitrógeno, estimula la se-
actualidad, no hay datos que apoyen su suplementa- creción de insulina y, por tanto, disminuye la li-
ción en NP, en pacientes adultos24, 26, 27. pólisis.
AA ramificados (AARR): Este tipo de soluciones con •  Es necesario un aporte de glucosa > 2 g/kg/día
mayor aporte de AARR han sido utilizadas en los pa- para inhibir la neoglucogénesis.
cientes con encefalopatía hepática e hipercatabolismo •  No debe superar el límite de oxidación de la glu-
(pacientes críticos, postquirúrgicos o con traumatis- cosa (hasta 6 g/kg/día o 4-5 mg/kg/min), ya que
mos severos). aparecen efectos perjudiciales (hiperglucemia, li-
Las soluciones enriquecidas en AARR en pacientes pogénesis y esteatosis hepática).
con encefalopatía hepática, podrían disminuir la rela- •  Además, debemos tener en cuenta que en situa-
ción AA aromáticos (AAA) frente a AAR, que está ción de estrés el límite de oxidación de la glucosa
aumentada en estos pacientes. El aumento de AAA está disminuido.
en el cerebro puede ser responsable de la producción
de neurotransmisores y de la alteración mental de es-
5.1.3. Lípidos
tos pacientes1. No están recomendados de manera
generalizada en pacientes con insuficiencia hepática, Su administración es fundamental en la NP, siendo su
aunque la administración de estas soluciones de AA acción determinante para un correcto soporte nutricio-
está indicada en los pacientes con encefalopatía he- nal del paciente1:
pática28.
•  Administrados con glucosa potencian el ahorro
La utilización de estas soluciones enriquecidas en
proteico.
AARR podría mejorar el balance nitrogenado y dismi-
•  Evitan el déficit de ácidos grasos esenciales (AGE).
nuir la tasa de mortalidad, en pacientes postquirúrgi-
•  Integran la pared celular.
co29, aunque son necesarios ensayos clínicos aleatori-
•  Disminuyen los efectos secundarios del uso exclu-
zados para valorar la potencial utilidad de estas
sivo de glucosa como sustrato energético (hiper-
soluciones en pacientes con estrés catabólico.
glucemia, esteatosis hepática).
Glutamina: Las soluciones estándar de AA de NP no
contienen glutamina, ya que es un AA muy inestable El aporte de lípidos se realiza en forma de emulsio-
a temperatura ambiente, pero se puede administrar nes lipídicas, y debe representar el 30-50% de las ca-
en forma de dipéptidos1. Se asocia a beneficios clíni- lorías no proteicas, lo que supone entre 1-1,5 g/kg/
cos en pacientes con estrés metabólico, (grandes que- día. Es fundamental no superar este límite para evitar
mados, postquirúrgicos, traumatismos severos) en los complicaciones hepatobiliares asociadas a su admi-
que existe un aumento de consumo, que supera a la nistración.
producción endógena de glutamina, sugiriendo que Las emulsiones lipídicas (EL) utilizadas habitual-
en estas situaciones la glutamina actuaría como un mente están compuestas por una emulsión de aceite
Tema 48.  Nutrición parenteral 767

de soja, coco, palma o pescado, a la que se añaden (AGW9) presentan una mayor resistencia a la
fosfolípidos como agente emulsionante y glicerol peroxidación lipídica, menor generación de
para isotonizar, resultando una fase interna oleosa y mediadores proinflamatorios e inmunitaria-
una fase externa acuosa. mente son neutras. Tienen un alto efecto anti­
Las emulsiones lipídicas existen en concentraciones oxidante por un alto contendido en vitamina E
del 10%, 20%, 30% en función de la relación fosfolípi- (alfa-tocoferol)42.
do/triglicéridos. No se recomiendan concentraciones
•  Cuarta generación: Incorporación de ácidos gra-
del 10% por el excesivo aporte de fosfolípidos, ya que
sos W3 (AGW3) y disminución del aporte AGW6.
se asocia a un aclaramiento lipídico más lento (mayo-
Estudios recientes han asociado el uso de estas EL
res tasas de hipertrigliceridemia)38.
a un efecto antiinflamatorio e inmunomodulador
Las EL son productos de alto valor calórico (9 kcal/g)
y a un probable efecto protector hepático39, 43, 44.
y baja osmolaridad (200-380 mOsm/l).
Las características de las EL y sus objetivos nutricio- Las EL de cuarta generación disponibles son:
nales, han ido evolucionado a lo largo del tiempo39, 40:
– Emulsiones con 10% de aceite de pescado,
•  Primera generación: Emulsiones de triglicéri- 40% de aceite de soja y 50% de aceite de
dos de cadena larga (TCL) Intralipid®. Deriva- palma, Lipoplus®. Incorporación de AGW3 a
das del aceite de soja. Inicialmente el objetivo de las EM de segunda generación.
las emulsiones lipídicas era proporcionar AGE, – Emulsiones con 30% de aceite de soja,
fundamentalmente ácido linoleico (acidos grasos 30% de aceite de coco, 25% de aceite de
W6, AGW6). La alta proporción de AGW6 de es- oliva, 15% de aceite de pescado. SMOFli-
tas emulsiones incrementa la síntesis de prosta- pid®. Se considera una EL con una composición
glandinas de la serie 2 y, por lo tanto, la respuesta balanceada y más fisiológica que el resto39.
inflamatoria. Además, son más inestables y se pe-
roxidan con mayor facilidad, por tanto tienen un 5.2. Volumen
efecto proinflamatorio.
Los requerimientos hídricos variarán en función de la
•  Segunda generación: En los años 80, se introduje- situación clínica del paciente durante su evolución. Es
ron los triglicéridos de cadena media (TCM), pro- fundamental realizar un correcto balance hídrico tenien-
cedentes del aceite de coco, para disminuir el do en cuenta todos los aportes y pérdidas de fluidos.
aporte de AGW6. Debemos añadir, a las pérdidas hídricas, 500-800 ml al
Los TCM se caracterizan por41: día de pérdidas insensibles en sujetos euvolémicos y sin
alteración de la función renal. Habitualmente, se reco-
– Rapidez de oxidación. No necesitan carnitina. mienda un aporte total de fluidos de 30-35 ml/kg/día.
– Resistentes a la peroxidación lipídica con menor El cálculo del aporte de volumen de la NP se realiza
producción de radicales libres. usando soluciones de macronutrientes en mayor o me-
– No son almacenados como triglicéridos, menor nor concentración. Existen soluciones con concentra-
esteatosis hepática. ciones de glucosa del 5-70%, de lípidos 10-30% y de
– No participan en la síntesis de eicosanoides, por AA del 10-15%. Las vitaminas, electrolitos y oligoele-
tanto son inmunológicamente e inflamatoria- mentos aportarán únicamente 25-80 ml del volumen
mente neutros. total de la bolsa de NP25.
– Sin embargo, son más cetogénicos (por su rápi-
da oxidación) y no aportan AGE. 5.3. Electrolitos y minerales
Existen dos tipos de EL de segunda generación: El aporte de los electrolitos y minerales, vendrá de-
terminado por los requerimientos del paciente
– Mezcla física de TCL con TCM al 50%, lipofundi-
(tabla 1)19, y de su situación clínica. Es fundamental
na® (50% aceite de soja/50% aceite de palma).
valorar el incremento de necesidades, como ocurre en
– Emulsiones de lípidos estructurados, Struc-
los pacientes con pérdidas digestivas de electrolitos
tolipid® (64% aceite de soja/37% aceite de pal-
(tabla 2).
ma): Lípidos sintéticos a través de la hidrólisis de
El sodio y potasio se añaden a la NP como sales de
aceite de coco y de soja. Menores alteraciones
acetato, fosfato o cloro.
hepáticas que las emulsiones de mezcla física.
El uso de acetato o cloro se adaptará a la situación
•  Tercera generación: Se introdujeron en los años 90. de los pacientes25:
– Emulsiones enriquecidas en aceite de oli- •  En acidosis metabólica: se usarán sales de acetato
va, Clinoleic® (80% aceite de oliva/20% acei- (como precursor de bicarbonato).
te de soja). Enriquecidos en ácido oleico •  En alcalosis metabólica, sales de cloro.
768 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

Tabla 1.  Requerimientos diarios de electrolitos y lidad de vitaminas liposolubles es necesaria debido a
minerales19. un aumento de los requerimientos por la malnutrición,
la depleción de las reservas y los cambios metabólicos
Electrolito/mineral Requerimientos secundarios a la enfermedad aguda y crónica47.
La administración de vitaminas hidrosolubles IV, es de
Sodio 1-2 mEq/kg/día 2-5,5 veces superior que la oral. Como en las vitaminas
liposolubles, existe un aumento de los requerimientos,
Potasio 1-2 mEq/kg/día
pero, además, hay un incremento de la excreción urina-
Calcio 10-15 mEq /día ria de estas vitaminas al ser administradas IV48.
Los preparados multivitamínicos para NP aportan
Magnesio 8-24 mEg/día vitaminas liposolubles (vitaminas A, D, E, K) e hidro-
Fósforo 20-40 mmol/día solubles (B1, B2, B6, niacina, C, ácido fólico, ácido
pantoténico y biotina). Existen preparados sin vita-
mina K.
Debemos tener en cuenta que los pacientes en
Tabla 2.  Composición de electrolitos en las riesgo de síndrome de realimentación necesitan un
secreciones gastrointestinales48 (valores expresados aporte específico de vitaminas, fundamentalmente
en mEq/l). tiamina (vitamina B1)49.

Secreción Na Cl K HCO3 5.4.2. Oligoelementos


Gástrica  40-100 100-140  5-10  0 Desde que se inició el uso de las soluciones de oli-
I. delgado 100-140 100  5-20 30 goelementos en la NP a finales de los años 60, estas se
han ido modificando. A lo largo de los años, se ha ido
Bilis 140 100  5-10 35 disminuyendo el aporte de cobre, manganeso y cromo,
e incluyendo selenio en todos los productos a medida
Páncreas 140 55-75  5-10 80-120
que se conocía el efecto de estos oligoelementos en los
Colon  25-140 20-85 35-60 30-60 pacientes con NP.
En las últimas guías clínicas48, se ajustó la composi-
Cl: cloro; HCO3: bicarbonato; I. delgado: intestino delgado; ción de estas soluciones, aumentando el aporte de sele-
K: potasio; Na: sodio. nio (requerimientos aumentados en situaciones críticas
y enfermedades crónicas50) y reduciendo el aporte de
cobre, manganeso y cromo (contaminantes de la NP,
pudiendo ser tóxicos en regímenes de NP prolongados).
Para un cálculo de los requerimientos de fósforo en
El hierro es incompatible con la emulsión lipídica,
la NP, debemos cuantificar el aportado con las emul-
por lo que hay que vigilar las reservas y valorar su
siones lipídicas (14-15 mmol de fósforo/l).
adición independiente a la NP, fundamentalmente
Se recomienda añadir calcio y fósforo desde el inicio
en pacientes con regímenes de NP prolongados51.
y ajustar en función de las necesidades25. Las cantida-
des de calcio y fósforo están limitadas por su solubili-
dad en la NP, que va a depender del pH de la NP (un 6.  Monitorización de la nutrición parenteral
pH alcalino favorece la precipitación), del tipo de sal de
Un correcto seguimiento clínico y analítico es funda-
calcio usada (recomendado el gluconato cálcico) y una
mental en estos pacientes, ya que las complicaciones
ratio calcio/fósforo adecuada (Ca/P: 1/2)45, 46.
de la NP, son potencialmente, más graves que con
otros tipos de soporte nutricional10.
5.4. Oligoelementos y vitaminas Para una correcta prescripción de la NP y evitar o
paliar sus complicaciones, es fundamental realizar una
5.4.1. Vitaminas
precisa valoración nutricional previa, así como un ade-
Las vitaminas son compuestos esenciales, ya que el cuado seguimiento de la evolución clínica y analítica
organismo humano es incapaz de sintetizarlas. Sirven del paciente.
de cofactores enzimáticos de una gran variedad de
procesos químicos. Los datos sobre los requerimientos 6.1. Parámetros clínicos (tabla 3)52
de vitaminas intravenosos (IV) son limitados, y van a
depender de la situación clínica del paciente. Las reco- •  Talla.
mendaciones diarias IV de vitaminas liposolubles son •  Peso al inicio y posteriormente una vez a la semana.
las mismas que las orales, aunque por vía endovenosa •  Glucemia capilar cada 6-8 horas, hasta estabiliza-
presentan mayor disponibilidad. Esta mayor disponibi- ción (<140 mg/dl); después, según la evolución.
Tema 48.  Nutrición parenteral 769

Tabla 3.  Monitorización de los parámetros clínicos52.

Parámetros clínicos Basal Inicio Paciente crítico Paciente estable


Peso Sí Sí Diario Semanal
Talla Sí
Cada 6-8 h hasta Cada 6-8 h hasta
Glucemia capilar Sí Cada 6-8 h glucemia < 140 e glucemia < 140 e
individualización individualización
Exploración física Sí Sí Diario Diario
Presión arterial, frecuencia
Sí Sí Cada 8 h Diario
cardiaca
Balance hidroelectrolítico Sí Sí Diario Diario

•  Balance hídrico estricto diario: •  Triglicéridos, al inicio, tras 24-48 horas de iniciar nu-
trición parenteral y si está estabilizado cada semana.
– Entradas: NP, otros aportes endovenosos, ente-
•  Al inicio y semanalmente: coagulación, hemogra-
rales u orales.
ma, PCR, función renal y hepática, colesterol, áci-
– Salidas: diuresis, heces, sudoración, drenajes,
do úrico, osmolaridad, albúmina, transferrina y
fístulas, aspiración por SNG.
prealbúmina.
•  Exploración física diaria: signos de deshidratación •  Zinc y cobre semanalmente, y tras la estabiliza-
o de sobrecarga hídrica. ción, cada 7-15 días.
•  Temperatura, frecuencia cardiaca (Fc) y tensión •  En función de la duración de la NP y la patología
arterial (TA) por turno, fundamentalmente en pa- subyacente se realizarán otras determinaciones de
cientes críticos. manera individualizada.
– Ácido fólico y vitamina B12 cada 2-4 semanas.
6.2. Parámetros analíticos (tabla 4)52 – Densitometría ósea basal y anual.
•  Electrolitos, función renal, calcio y fósforo al inicio – 25 OH-vitamina D y vitaminas liposolubles ba-
y cada 24-48 horas inicialmente, y tras estabiliza- sales y cada 6 meses.
ción clínica, una vez a la semana. – Hierro y ferritina basal cada 3-6 meses.

Tabla 4.  Monitorización parámetros analíticos52.

Parámetros analíticos Basal Inicio Paciente crítico Paciente estable


Magnesio y fósforo Sí Sí Diario Semanal
Sodio, potasio, urea,
Sí Sí Diario 1-2 a la semana
creatinina y glucosa
Triglicéridos Sí Sí Semanal Semanal
PFH (AST, ALT, GGT, FA, BR) Sí Sí 2-3 a la semana Semanal
Prealbúmina, albúmina Sí Semanal Semanal
Zinc y cobre Sí Semanal Cada 1-2 semanas
PCR Sí Sí Semanal
Hemograma y coagulación Sí Semanal Semanal

ALT: alanina aminotransferasa; AST: aspartato aminotransferasa; BR: bilirrubina; GGT: gamma glutamil transferasa; PCR: proteína
C reactiva; PFH: pruebas de función hepática.
770 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

7.  Complicaciones de la nutrición parenteral Tabla 5.  Complicaciones de la nutricion parenteral.


(tabla 5)
Complicaciones metabólicas:
7.1. Complicaciones metabólicas   ·  Síndrome de realimentación
  · Hiperglucemia
7.1.1. Síndrome de realimentación   · Hipoglucemia
Este término, ya explicado en un capítulo previo,   · Hipertrigliceridemia
se refiere a los signos y síntomas secundarios a un Déficit o exceso de micronutrientes
inicio rápido de la administración de nutrientes en
Alteraciones hepatobiliares
pacientes desnutridos. Por lo tanto, es fundamen-
tal identificar a los pacientes en riesgo de sufrir Enfermedad metabólica ósea
síndrome de realimentación (SR), para prevenir o Complicaciones por catéter
minimizar sus complicaciones. Muchos de los pa-
cientes que requieren NP, presentan una situación
de ayuno prolongada o con muy bajo aporte caló-
rico previo1. 48 horas hasta valorar tolerancia y progresar hasta
El SR se ha descrito en el 4%49 de los pacientes con requerimientos totales en 3-4 días. Administrando,
NP, probablemente esté infraestimado si tenemos desde el inicio, el 100% de los requerimientos de vi-
en cuenta que hasta el 42% de los pacientes presen- taminas y electrolitos52.
tan un descenso del fosfato en las primeras horas
tras el inicio de la NP53. 7.1.2. Hiperglucemia
La etiopatogenia del SR comienza con una dismi-
nución de secreción de insulina en pacientes desnu- Es la complicación más frecuente, descrita hasta en
tridos con muy escaso o nulo aporte de hidratos de el 50% de los pacientes que inician la NP55, 56.
carbono, que utilizan como sustrato energético los En un paciente con NP hay una serie de factores de-
aminoácidos y ácidos grasos. Tras el aporte de hidra- terminantes en la aparición de hiperglucemia como
tos de carbono, se produce una secreción aumenta- son: sobrealimentación, infección, inadecuada dosis
da de insulina, con el paso al interior de la célula de de insulina, medicación (fundamentalmente glucocor-
potasio, fósforo y magnesio, y un aumento del con- ticoides) 25. Los pacientes críticos, además, presentan
sumo de vitaminas (fundamentalmente tiamina) y un déficit de la oxidación periférica de la glucosa que,
coenzimas. asociado al incremento de hormonas contrainsulares,
Este aumento de insulina provoca54: promueven la aparición de hiperglucemia.
Los objetivos de glucemia en pacientes con nutrición
•  Una disminución de la natriuresis, con retención artificial se han establecido entre 140-180 mg/dl55, 57, 58
hidrosalina secundaria. para minimizar el riesgo de hipoglucemias y evitar los
•  Disminución de los niveles de potasio, fosfato y efectos nocivos de la hiperglucemia.
magnesio, secundario a la entrada de estos en la Cuando los niveles de glucosa son superiores a 180
célula y a las reservas deplecionadas por la malnu- mg/dl, se altera la función inmune, aumenta el riesgo
trición. de complicaciones infecciosas y la mortalidad en pa-
•  Déficit de vitaminas secundario a depleción de las cientes con NP58-60.
reservas y al aumento de su consumo en su papel
bioquímico, como sucede con la tiamina, que •  Manejo de la hiperglucemia:
debe ser suministrada antes de comenzar la infu-
Se recomiendan controles de glucemia capilar
sión de glucosa en los pacientes en riesgo.
cada 6-8 horas, y valorar la necesidad de administra-
La aparición de edemas y la hipofosfatemia serán ción de insulina para conseguir objetivos glucémicos
los signos y síntomas más comúnmente encontrados (140-180 mg/dl)61.
en la práctica clínica, pero existen otros signos ana- La administración recomendada de insulina, puede
líticos habituales como hipopotasemia, hipomagne- ser subcutánea (insulina basal), endovenosa (inde-
semia o déficit de vitamina B1, y síntomas como In- pendiente a la NP) o dentro de la bolsa de NP. No
suficiencia cardiaca congestiva, encefalopatía de existen estudios aleatorizados que comparen las dife-
Wernicke, convulsiones o arritmias ventriculares en rentes formas de administración de la insulina, pero
pacientes con NP. con todos ellos se pueden lograr niveles de glucemia
Para prevenirlo, es fundamental identificar a los adecuados.
pacientes desnutridos con riesgo de SR, e iniciar en La utilización de insulina regular añadida a la bolsa
estos pacientes, la NP con el 50% de los requeri- de nutrición parenteral es habitual en la práctica clínica
mientos hídricos y de macronutrientes durante 24- y permite un correcto control metabólico. Además,
Tema 48.  Nutrición parenteral 771

con el uso de insulina regular dentro de la bolsa de NP, sión. Si las concentraciones plasmáticas exceden di-
el riesgo de hipoglucemia es escaso cuando se suspen- chos valores, se debe considerar la reducción en la can-
de la NP, ya que simultáneamente se suspende el apor- tidad de lípidos administrados, e incluso modificar el
te de insulina56, 62. La administración de insulina regular tipo de emulsión lipídico hacia aquellas con más rápido
dentro de la bolsa de NP se puede iniciar según diver- aclaramiento (TCM).
sos protocolos, como son:
•  Manejo de la hipertrigliceridemia38:
– Administrando en la bolsa de NP el 50-66% de – Determinación de triglicéridos al inicio y tras 24
lo necesitado como insulina subcutánea el día horas del inicio de la NP.
previo, con ajuste posterior en función de las – Disminuir el aporte de lípidos (no superar 1 g/kg/
glucemias capilares62. día) e incluso suspenderla si persistieran los tri-
– Con la administración de 0,05-0,1 UI de insuli- glicéridos elevados.
na regular /g de glucosa en la bolsa de NP en – Evitar emulsiones lipídicas con aporte exclusivo
pacientes con hiperglucemia de estrés62 o con de TCL.
0,15-0,25 UI de insulina regular/g de glucosa
en pacientes con diabetes previa o tratamiento
7.2. Alteraciones de electrolitos y minerales
con glucocorticoides61.
Su déficit se debe a un aporte escaso en la NPT, en
7.1.3. Hipoglucemia relación con los requerimientos del paciente de cada mo-
mento. Cuando se pauta una NP se deben cuantificar, no
La hipoglucemia en el paciente hospitalizado, se re- solo los requerimientos de electrolitos, sino también las
fiere a niveles de glucemia menores de 70 mg/dl55. La pérdidas de los mismos (tabla 2) o el aumento de reque-
prevalencia descrita de hipoglucemia en los pacientes rimientos (síndrome de realimentación).
con NP es del 4-40%; esta variabilidad depende del Para su adecuada administración, deben ser con-
tipo de paciente estudiado y del valor que determina la trolados sus niveles a diario y ajustarlos en función
hipoglucemia. En un estudio multicéntrico reciente, de los requerimientos65.
la prevalencia observada en pacientes no críticos fue
del 6,8%63. •  Hiponatremia: Su etiología dependerá del volu-
Algunos estudios retrospectivos han demostrado men total infundido, de la cantidad total de sodio
cómo la presencia de hipoglucemias severas (< 40 mg/ aportado y de la enfermedad de base del pacien-
dl), en pacientes críticos, tienen un incremento signifi- te. Es fundamental una exhaustiva exploración fí-
cativo de la morbimortalidad55. Otros estudios más re- sica y un adecuado balance hídrico, para poder
cientes también relacionan la presencia de hipogluce- establecer un correcto diagnóstico etiológico y un
mias leves o moderadas (40-70 mg/dl) en pacientes adecuado manejo. Véase el tema 50.
críticos, con un incremento de la mortalidad64. Ade- •  Hipernatremia: Como en la hiponatremia, un co-
más, en estos pacientes, los síntomas de hipoglucemia rrecto balance hídrico y una revisión del aporte
leve-moderada pueden no ser evidentes por bajo nivel total de sodio son determinantes para su manejo,
de conciencia o sedación55. Véase el tema 50.
•  Hipopotasemia: Secundaria a pérdidas intesti-
•  Manejo de la hipoglucemia:
nales, urinarias o a un aumento de los requeri-
Se recomienda reducir la dosis de insulina en un mientos.
50%, si las glucemias capilares son menores de 70 mg/ •  Hiperpotasemia: Imprescindible descartar afecta-
dl. Aunque es muy poco frecuente, se han descrito hi- ción renal (disminución de excreción), acidosis
poglucemias de rebote después de retirar la NP funda- metabólica (salida del potasio intracelular) y trata-
mentalmente en pacientes que reciben dosis altas de miento con fármacos ahorradores de potasio.
insulina. Para evitarlo, se recomienda reducir el ritmo •  Hipofosforemia: Aumento de requerimientos en
de infusión de la NP al 50% en las 2 horas previas a su pacientes críticos, grandes quemados con función
interrupción. renal conservada.
•  Hiperfosforemia: Excesivo aporte o pacientes con
7.1.4. Hipertrigliceridemia insuficiencia renal
•  Hipomagnesemia: Por pérdidas renales e intesti-
La administración de lípidos no debería exceder su
nales, fundamentalmente. Su déficit contribuye a
capacidad de aclaramiento plasmático, siendo la con-
la aparición de hipocalcemia.
centración de triglicéridos en plasma el método para
valorarla. Si la determinación se realiza más de 6 horas Como se ha comentado previamente, la administra-
después de terminada la infusión lipídica, se conside- ción de calcio y fósforo en la NP debe realizarse con
ran aceptables valores hasta de 200 mg/dl y hasta de precaución (véase el apartado 5.3), para evitar precipi-
400 mg/dl si la extracción se realiza durante la infu- tados de fosfato cálcico en la NP, que pueden provocar
772 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

efectos adversos severos, entre los que se incluyen ca- bles e hidrosolubles, aunque se ha observado que el
sos mortales de embolia microvascular pulmonar por aporte de vitamina D (200 UI), puede ser insuficiente
precipitados de calcio y fósforo66. en los pacientes con regímenes de NP prolongados48, 67.

7.3. Alteraciones del equilibrio ácido-base25 7.5. Complicaciones hepatobiliares (CHB)


Se encuentran con frecuencia en pacientes que re- La esteatosis hepática es común 1-4 semanas tras
ciben soporte nutricional, pero en la mayoría de los el comienzo de la NP, aunque inicialmente es rever-
casos las anomalías no son debidas al régimen de nu- sible y fundamentalmente periportal. La esteatosis
trición aplicado, sino a la enfermedad subyacente, podría progresar a esteatohepatitis y cirrosis. La co-
aunque debemos tener en cuenta que: lestasis está también asociada a la NP, pero típica-
mente ocurre después de la esteatosis. Si la afecta-
•  Las soluciones de aminoácidos disponibles para
ción hepática progresa, podría evolucionar a una
uso intravenoso contienen grandes cantidades
cirrosis y terminar en un trasplante hepático-intestinal.
de acetato, que tiende a ser alcalinizante.
La CHB en pacientes con NP es muy prevalente, ob-
•  Cuando los requerimientos de sodio o potasio
servándose una elevación transitoria de las enzimas
son muy elevados, no se deben utilizar de for-
hepáticas en las primeras semanas de la NP en el 40-
ma exclusiva sales de cloro, sino administrarlo
70% de los pacientes, que suele ser reversible. En pa-
en parte como sales de acetato, para no inducir
cientes con regímenes de NP prolongados, se han ob-
acidosis metabólica.
servado casos de hepatopatía avanzada en el 15-40%
•  Se puede ajustar a la situación del paciente,
de los pacientes68.
aportando sales de acetato (en acidosis) o de cloro
La etiología de la CHB de los pacientes con NP es
(en alcalosis).
multifactorial (figura 1).

7.4. Déficits nutricionales específicos •  Causas independientes de la NP:


– Drogas hepatotóxicas.
Para evitar el déficit de algunos oligoelementos, en
2012 la ASPEN publicó una modificación de las formu- – Enfermedad hepática subyacente: hasta el 24%
laciones comerciales de oligoelementos. Los déficits o de las CHB en pacientes con NP se podrían ex-
la toxicidad de los oligoelementos se detectan habi- plicar por una enfermedad hepatobiliar de
tualmente en regímenes de NP prolongadas. En la base69.
tabla 6, se resume el manejo de los oligoelementos en – Enfermedad de base:
situaciones clínicas especiales48.   - Existen estudios que demuestran que la en-
Con las soluciones de multivitamínicos de NP, se cu- fermedad hepática asociada a NP está relacio-
bren los requerimientos diarios de vitaminas liposolu- nada con la longitud del intestino delgado

Tabla 6.  Manejo de oligoelementos en situaciones especiales48.

Enfermedad
Oligoelemento CRD Consideraciones clínicas
carencial
· No es necesario añadir a la NP, ya presente como
Cromo 0 Muy raro
contaminante
· Se excreta por bilis
Cobre 0,3-0,05 mg Sí · No administrar en insuficiencia hepática severa o colestasis.
· Incrementar aporte en DPCC
· Control metabolismo férrico en NP larga evolución
Hierro 0 Sí
· Incompatible con emulsiones lipídicas
Manganeso 55 µg No · No administrar en insuficiencia hepática severa o colestasis
· Añadir si el preparado de oligoelementos no lo incluye
Selenio 60-100 µg Sí
· Incrementar aporte en DPCC
· Aumento de requerimientos en quemados y pérdidas
Zinc 3-4 mg Sí
intestinales

CRD: cantidad diaria recomendada; DPCC: diálisis peritoneal continua cíclica.


Tema 48.  Nutrición parenteral 773

Etiología de la CHB en
el paciente con NP

Independientes del Dependientes del


soporte nutricional soporte nutricional

Enfermedad de base: Exceso de lípidos


 · Sepsis Exceso de glucosa
 · Colelitiasis Tipo de emulsión lipídica
 · Hepatopatía Ausencia de estímulo enteral
Medicación. Defecto de nutrientes
Anatomía intestinal: Infusión continua de NP
 · S. bacteriano
 · SIC

S. bacteriano: sobrecrecimiento bacteriano; SIC: síndrome de intestino corto.

Figura 1.  Etiología de las Complicaciones Hepatobiliares (CHB).

(mayor probabilidad de colestasis con intesti- – Tipo de emulsión lipídica: Las emulsiones lipídi-
no delgado remanente menor de 100 cm70); cas clásicas, basadas en el aceite de soja con un
además, se ha observado una mejoría de la aporte elevado de ácidos grasos W6, pueden
función hepática después de trasplante aisla- predisponer a un aumento de la producción de
do de intestino delgado71. metabolitos proinflamatorios derivados de los
  - La sepsis puede ser la causa de la elevación de ácidos grasos e inducir un menor aclaramiento
enzimas hepáticas hasta en el 50% de los pa- hepático (esteatosis hepática) de los lípidos in-
cientes con NP. La sepsis causa una respuesta fundidos. Los esteroles vegetales (fitosteroles)
inflamatoria en el hígado por la liberación de presentes en las EL, se han relacionado con al-
citoquinas proinflamatorias activada por las teraciones de la función hepática39.
endotoxinas. La liberación de citoquinas pue- – Reposo digestivo (ausencia de estímulo ente-
de alterar la función de la membrana del ca- ral): La deprivación de nutrientes en la luz dis-
nalículo biliar y reducir el flujo biliar69. minuye la circulación enterohepática de ácidos
biliares y disminuye la producción de hormonas
Sobrecrecimiento bacteriano: El sobrecreci-
– 
GI que se estimulan habitualmente con la in-
miento bacteriano es relativamente frecuente
gesta oral (colecistoquinina, secretina, gastrina,
en pacientes con fallo intestinal por hipomotili-
motilina, polipéptido pancreático y glucagón)74:
dad intestinal con liberación de endotoxinas a
la circulación portal, las cuales pueden afectar a   - Estas hormonas son estimulantes del flujo bi-
los hepatocitos72. liar, por tanto, ante una ausencia de estímulo
•  Causas dependientes del tipo de soporte nu- enteral existe una disminución de la motilidad
tricional: intestinal y de la contracción intestinal.
  - Las asas intestinales, muchas veces dilatadas y
– La administración de exceso de calorías es uno atónicas, son más susceptibles de ser coloni-
de los principales factores que contribuyen a zadas por bacterias y producirse el fenómeno
esteatosis y colestasis. Un exceso de carbohi- del sobrecrecimiento bacteriano.
dratos produce hiperinsulinemia, estimula la
lipogénesis e inhibe la beta-oxidación de los – Déficits nutricionales: El déficit de ácidos grasos
ácidos grasos. Además, se ha establecido una esenciales y el de proteínas se han relacionado
correlación entre el aporte de >1 g/kg/día de con esteatosis.
TCL y el desarrollo de colestasis y afectación – Infusión continua de la NP: El aporte continuo
hepática73. de la NP puede predisponer a un estado de hiper­
774 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

insulinismo que favorece el acúmulo graso en el presenta una alta mortalidad (menor si solo es
hígado. La perfusión cíclica comparada con la trasplante intestinal aislado sin hepatopatía no
infusión continua durante las 24 horas ha de- evolucionada). Las unidades de trasplante del
mostrado que contribuye a disminuir las con- Reino Unido sugieren considerar la posibilidad
centraciones séricas de las enzimas hepáticas y de trasplante solo si hay hipertensión portal, ci-
de bilirrubina conjugada75. rrosis hepática o fibrosis82.
•  Manejo de la enfermedad hepática asociada
a la nutrición parenteral: 7.6. Enfermedad metabólica ósea
La monitorización cuidadosa de los test funciona- La enfermedad metabólica ósea (EMO) se ha obser-
les hepáticos ayuda a identificar el problema de vado en regímenes de nutrición parenteral muy pro-
modo precoz, con el fin de aplicar lo antes posible longados. En un estudio transversal se observó os-
las estrategias recomendadas: teoporosis en el 42% de los pacientes y osteopenia en
el 84% de los pacientes con NPD83. En otro trabajo es-
– Aporte de nutrientes vía enteral: Va a permitir pañol se detectó afectación ósea en el 52% al inicio de
reducir el aporte calórico de la NP y puede ayu- la NP y en un 81% de los pacientes después de 6 años
dar a disminuir el desarrollo de las CHB. El apor- con NP84.
te enteral disminuye la atrofia intestinal y la pér- No está claro el papel que juega la NPD en la pérdida
dida de inmunidad de la mucosa intestinal, de masa ósea, y cada vez existe más consenso en reco-
evitando el disbalance de la microbiota que pro- nocer que la EMO tiene un origen multifactorial de-
mueve la endotoxemia y el daño hepático76. El pendiendo, en gran medida, de la enfermedad subya-
uso del tracto intestinal, requiere que este sea cente que origina la insuficiencia intestinal.
útil. En pacientes con regímenes de NP prolon- Además de los factores de riesgo tradicionales para
gados se puede valorar el uso de técnicas de la aparición de osteoporosis (sexo femenino, meno-
alargamiento intestinal (como la fistuloclisis) pausia, edad avanzada, bajo peso, consumo de taba-
que han demostrado disminuir e incluso evitar la co y alcohol, inactividad física y ciertos fármacos), se
utilización de NP en pacientes seleccionados77, pueden añadir otros relacionados con la NPD como la
así como el uso de fármacos, como los análogos toxicidad del aluminio de la NP, disminución de los
de GLP-2 (teduglutide), que han demostrado un niveles de PTH (por un incremento de la sensibilidad
aumento de la superficie intestinal absortiva, de la vitamina D), aporte deficitario de vitamina D, y
asociado a una menor dependencia de la NP en la hipercalciuria inducida por la infusión endovenosa
pacientes con insuficiencia intestinal78. de nutrientes83, 85.
– Ajustes de la nutrición parenteral: Es importan-
te ajustar el aporte de nutrientes de la NP, para •  Manejo de la EMO:
evitar la sobrealimentación, reduciendo la can- – Densitometría mineral ósea al inicio, y anual-
tidad de glucosa (< 5 g/kg/día) y de TCL en la EL mente, durante el período con NP85.
(< 1 g/kg/día). En los pacientes con regímenes – Adecuado aporte de calcio (15 mEq/día) con
de NP prolongados, se debe valorar el aporte de una ratio calcio/fosfato correcta66.
EL enriquecidas en AGW3, ya que los estudios – Suplementación con vitamina D en los pacien-
en ese tipo de paciente reflejan una eficacia en tes con niveles de PTH elevados83.
la prevención y reversión de la enfermedad he- – El uso de bifosfonatos en pacientes con os-
pática asociada a la NP79-81. teopenia, podría suponer una disminución de
– Tratamiento del sobrecrecimiento bacteria- los marcadores de resorción ósea86.
no: Tratamiento empírico con metronidazol,
dirigido a las bacterias anaerobias de la flora
colónica.
7.7. Complicaciones relacionadas con el catéter
– Tratamiento con ácido ursodesoxicólico en pa- (se analizan en el tema 48)
cientes con hepatopatía en pacientes con NP, •  Complicaciones mecánicas.
pueden disminuir la ictericia y la hepatoesple- •  Complicaciones infecciosas.
nomegalia, por un aumento del pool de ácidos
biliares hidrofílicos no hepatotóxicos, aunque
son muy escasos los estudios en pacientes con
8. Resumen
NP74. La NP es vital en muchos pacientes con insuficiencia
–  Prevención y tratamiento de procesos infec- intestinal. Seleccionar adecuadamente a los pacientes
ciosos. candidatos de NP es imprescindible para evitar compli-
– Trasplante de intestino delgado y/o hígado: Se caciones en pacientes subsidiarios de soporte nutricio-
debe indicar en pacientes muy seleccionados, nal enteral, menos agresivo y más fisiológico.
Tema 48.  Nutrición parenteral 775

La NP central permite un aporte de macronutrientes,   8. American Society for Parenteral and Enteral Nutri-
micronutrientes y volumen ajustado a los requerimien- tion Board of Directors. Clinical guidelines for the
tos del paciente; esto no es posible en la NP con acceso use of parenteral and enteral nutrition in adult and
periférico, en los que la composición de la NP va a estar pediatric patients, 2009. JPEN J Parenter Enteral
condicionada por la osmolaridad de la solución. Nutr. 2009; 33(3): 255-259.
Los procesos de indicación, elaboración y adminis-   9. Ordoñez J, Indicaciones de la NPD. Criterios de in-
tración de la NP deben realizarse cuidadosamente para clusión de pacientes. Contraindicaciones Nutr
conseguir el mayor beneficio clínico y evitar las compli- Hosp Suplementos. 2009; 2(1): 6-7.
caciones relacionadas con la NP. 10. Boullata JI, Gilbert K, Sacks G, et al. ASPEN clinical
En los últimos años, el desarrollo de nuevas emulsio- guidelines: parenteral nutrition ordering, order re-
nes lipídicas, ha permitido minimizar las efectos noci- view, compounding, labeling, and dispensing. JPEN
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Aunque se necesita una mayor evidencia científica, 11.  Pittiruti M, Hamilton H, Biffi R, MacFie J, Pert-
la utilización de soluciones de AA específicas en pa- kiewicz M; ESPEN guidelines on parenteral nutri-
cientes con importante estrés catabólico, podrían tion: central venous catheters(access, care, diag-
aportar grandes beneficios en pacientes seleccionados. nosis and therapy of complications). Clin
Una correcta monitorización de los pacientes con NP Nutr.2009; 28(4): 365-377.
es fundamental para prevenir o detectar de manera 12. Anderson DG, Palmer D, and MacFie J Peripheral
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Tema 49. 
Nutrición parenteral: vías de acceso
María Concepción Terroba Larumbe
Cristina Crespo Soto
Luis Cuéllar Olmedo
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Río Hortega. Valladolid
Daniel Antonio de Luis Román
Hospital Clinico Universitario de Valladolid. Instituto de Investigacion de Endocrinologia y Nutricion.
Facultad de Medicina. Universidad de Valladolid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 779-787.

1. Introducción
2.  Indicaciones de la nutrición parenteral. Contraindicaciones del acceso venoso central
3.  Nutrición parenteral: vías de acceso
4.  Complicaciones de los catéteres venosos centrales
5.  Cuidados del catéter y prevención de complicaciones
6. Resumen
7. Bibliografía

1. Introducción resulta irritante para las venas periféricas, por lo que


suele ser necesario sustituir con frecuencia el acceso
La nutrición parenteral (NP) consiste en la adminis-
intravenoso. Teniendo en cuenta lo anteriormente ex-
tración de nutrientes de forma directa en la circulación
puesto y que el acceso a una vía central es posible en el
venosa, ya sea periférica o central. Según los requeri-
entorno hospitalario, la NP periférica se utiliza mucho
mientos energéticos aportados se habla de nutrición
menos que la NP central.
parenteral total (NPT) o nutrición parenteral parcial
(NPP). Es una alternativa a la vía enteral cuando el tubo
digestivo necesita reposo o carece de capacidad fun- 2. Indicaciones de la nutrición
cional. Su programación inicial depende también de la parenteral. Contraindicaciones
duración prevista del soporte nutricional, porque no se del acceso venoso central
ha podido demostrar el beneficio clínico de la NP a
corto plazo (menos de 6 días). Aunque no hay eviden- La NP es una terapia agresiva indicada para prevenir
cias que sustenten esta práctica, las guías sugieren que los efectos adversos de la malnutrición en pacientes
la NPT debe ser retirada cuando el aporte enteral supo- que son incapaces de consumir nutrientes adecuados
ne más del 60% de las necesidades del paciente1. por vía oral o enteral4. El tiempo que debe esperarse
La administración puede realizarse a través de venas para iniciar la NP permanece como un tema complejo
centrales (cava superior), lo que conlleva complicacio- y no resuelto. Se consideran indicaciones absolutas de
nes principalmente mecánicas (NP central) o de venas NPT el síndrome de intestino corto severo, con menos
de pequeño calibre (NP periférica). Cuando es necesa- de 100 cm de intestino delgado, la enteritis severa in-
rio aportar el 100-130% de los requerimientos totales ducida por radiación incluyendo estenosis no quirúrgi-
como NP, las soluciones empleadas tienen una elevada cas5, las fístulas gastrointestinales con alto débito que
osmolaridad (> 900 mOsm/l), que no toleran las venas no permiten hacer bypass con nutrición enteral porque
periféricas2, 3, y es imprescindible disponer de un caté- son demasiado distales, el íleo postoperatorio persis-
ter venoso central. Para poder utilizar una vena perifé- tente, la pseudoobstrucción intestinal con mala res-
rica la solución tiene que estar mucho más diluida y puesta a la nutrición enteral, y la obstrucción intestinal
esto condiciona pautar un volumen elevado, para no mecánica no quirúrgica.
limitar tanto el aporte de nutrientes. Este volumen Como sucede con los catéteres sin fines nutricionales,
puede ser inadecuado en muchas situaciones clínicas. las contraindicaciones en cuanto a la colocación de un
Por otro lado, a pesar de su menor osmolaridad, la NP catéter venoso central son relativas y dependen de la

779
780 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

urgencia y de las alternativas de acceso venoso. En ge- Las soluciones nutritivas con una osmolaridad mayor
neral, se evita en zonas con distorsión anatómica o de 900 mOsm/l, que proporcionan el 100-130% de los
cuando hay otro dispositivo intravascular, por ejemplo, requerimientos totales como NP, precisan un acceso
un marcapasos. La lesión proximal al lugar de inserción venoso central. La NP total a corto plazo (días) general-
y la coagulopatía de grado moderada a severo también mente se administra a través de un catéter central in-
representan otra contraindicación relativa. La tromboci- sertado de forma periférica (CCIP) o un catéter venoso
topenia plantea mayor riesgo que un tiempo de coagu- central colocado en subclavia, yugular interna o femo-
lación prolongado6, 7. En general, los catéteres no tuneli- ral. La NP a largo plazo (durante semanas, permanen-
zados se colocan en lugares donde es fácil monitorizar te), requiere un catéter venoso central tunelizado, por
el sangrado. En pacientes con coagulopatía severa se ejemplo, Hickman, Groshong o un reservorio subcutá-
intenta evitar el acceso en la subclavia por la imposibili- neo, asociados con menor incidencia de infección si se
dad de vigilar o comprimir la zona de punción. En ellos, comparan con los catéteres no tunelizados.
la canulación requiere experiencia y, si es posible, guía
ecográfica8. No se considera un procedimiento de rutina 3.1. Acceso venoso central: catéteres centrales
la administración de derivados de plasma para reducir el no tunelizados
riesgo de complicaciones hemorrágicas.
Los catéteres centrales no tunelizados se colocan
percutáneamente con el catéter emergiendo en la
3.  Nutrición parenteral: vías de acceso
piel en la vecindad del lugar de canulación venosa. Se
La elección del acceso vascular depende sobre todo usan, en general, para acceder de forma temporal a
de la osmolaridad y la duración estimada de la NP pero la circulación central. Tienen distintas longitudes (de
también de la anatomía (por ejemplo, oclusión venosa 15 a 30 cm), están fabricados de diferentes materia-
previa, linfedema) y otros factores relacionados con el les (poliuretano o silicona) y pueden tener de 1 a 5
paciente (como coagulopatía o enfermedad pulmo- luces (figura 1). La incidencia de trombosis venosa se
nar). Si se trata de un acceso central es importante la incrementa a medida que aumenta el número de lu-
experiencia de la persona que coloca el dispositivo, en ces y el diámetro del catéter. Los catéteres venosos
clara relación con la menor incidencia de complicacio- centrales de una sola luz deben dedicarse exclusiva-
nes mecánicas9, 10. mente a la infusión de NP, mientras que los de luces

1 2

3 4

1. Vía central de acceso periférico 2. Vía central de alto flujo de 5 luces


3. Vía central de 2 luces 4. Vía central de 3 luces

Figura 1.  Catéteres de acceso central.


Tema 49.  Nutrición parenteral: vías de acceso 781

múltiples tendrán un puerto exclusivo para la infu- el hemitórax ipsilateral (yugular interna, subclavia)
sión de la NP. También deben minimizarse las mani- para minimizar la descompensación respiratoria si hay
pulaciones del catéter. Estas intervenciones pueden un neumotórax en relación con el procedimiento. La
disminuir las complicaciones infecciosas asociadas anatomía de la subclavia derecha tiene la ventaja teó-
con la NP. La zona de inserción de la aguja debe ele- rica de un riesgo de neumotórax más bajo, pero este
girse en un área que no esté o tenga riesgo de conta- acceso se asocia con una mayor incidencia de malpo-
minarse (como piel infectada o quemada, adyacente sición de catéter y trauma vascular.
a traqueotomía o a herida quirúrgica abierta). La in-
serción debe realizarse en el quirófano o en la unidad 3.1.1. Acceso en subclavia versus
de cuidados intensivos, en condiciones asépticas, con
yugular interna
un utillaje estéril y buena iluminación. La técnica de
inserción es la de Seldinger. El paciente debe firmar Las revisiones sistemáticas muestran pocas diferen-
un consentimiento informado. cias en cuanto a las principales complicaciones mecá-
El catéter venoso central se puede colocar en dife- nicas entre estos dos accesos, equivalentes en cuanto
rentes lugares anatómicos y cada uno tiene sus pro- a incidencia de hemotórax y neumotórax11, 12. Aunque
pias ventajas e inconvenientes (tabla 1). Los accesos en un metaanálisis previo se sugería que el acceso no
más utilizados son la vena subclavia, la vena yugular tunelizado en la subclavia se asociaba con menor ries-
interna (figura 2) y la femoral. Los lugares de acceso go de infección relacionada con el catéter comparan-
con alteraciones en la anatomía local (por ejemplo, do con lugares alternativos, otros estudios no han
fractura de clavícula), cicatrices múltiples por catéter demostrado diferencias significativas. Sin embargo,
previo y la presencia de otro catéter o dispositivo en un gran estudio multicéntrico enfocado a compli-
venoso central (como marcapasos o desfibrilador caciones intravasculares de los catéteres centrales no
interno), se asocian con una incidencia mayor de tunelizados en pacientes de cuidados intensivos, en-
complicaciones (fallo en la colocación, malposición, contraron que el acceso en la subclavia estaba asocia-
arritmia), por lo que deben evitarse si hay zonas alter- do con un riesgo más bajo de infección y trombosis
nativas disponibles. Si el paciente tiene una enferme- venosa profunda comparando con el acceso en la
dad pulmonar unilateral significativa, debe canularse vena yugular interna13.

Tabla 1. Ventajas e inconvenientes de los diferentes accesos venosos centrales.

Acceso Ventajas Inconvenientes


· Vena superficial visible, sobre todo en · No es el ideal para acceso prolongado
ancianos · Malos puntos de referencia en obesos
Yugular externa
· No contraindicada si hay coagulopatía · El catéter puede ser difícil de enroscar
· Mínimo riesgo de neumotórax
· Mínimo riesgo de neumotórax, sobre · No es el ideal para acceso prolongado
todo si se usa guía ecográfica · Riesgo de punción de la arteria carótida
· Posibilidad de controlar sangrado con · Poco confortable
presión directa · Apósitos y catéter difíciles de mantener
Yugular interna · Menor riesgo de fallo con inexpertos · Riesgo de lesión en el conducto torácico en el
· Excelente si se dispone de ecografía lado izquierdo
· Malos puntos de referencia en obesos
· Plantea problemas si hay también traqueotomía
· Riesgo de colapso venoso con hipovolemia
· Apósitos más fáciles de mantener · Aumento del riesgo de neumotórax
· Más confortable para el paciente · Menor posibilidad de controlar sangrado con
· Mejores puntos de referencia en obesos presión directa
Subclavia
· Accesible cuando el control de la vía · Más riesgo de fallo con inexpertos
aérea está siendo establecido · Más frecuente la malposición del catéter, sobre
todo en la vena subclavia derecha
· Acceso rápido con alto grado de éxito · Impide la movilidad del paciente
· No interfiere con RCP ni con intubación · Dificulta mantener estéril la zona
Femoral
· Sin riesgo de neumotórax · Aumento del riesgo de trombosis iliofemoral
· No precisa posición de Trendelenburg
782 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

colocados por personal de enfermería. Se usan habitual-


mente para accesos temporales, con un tiempo espera-
do de infusión mayor de 15 días y no superior a 30 días18.
Con un catéter largo (50-71 cm), blando y flexible,
fabricado con silicona o poliuretano, se puede acceder
a la vena cava superior a través de las venas basílica o
cefálica del brazo. Es una alternativa a los catéteres
centrales si están contraindicados (traqueotomía, lesio-
nes cervicales) o se tiene poca experiencia en su coloca-
ción. La longitud inicial del catéter se basa en conside-
raciones anatómicas y su colocación se puede facilitar
con la ayuda de un ecógrafo. Su posición se confirma
con una radiografía.
Sus principales complicaciones son la dificultad de
canalización (en un 25% de los casos no se consigue
llegar a la vena cava superior) y la aparición de trombo-
sis. Como sucede con los catéteres de inserción central,
la incidencia de trombosis venosa se incrementa a me-
dida que aumenta el número de luces y el diámetro del
catéter. Este tipo de catéteres deben evitarse o usarlos
Figura 2.  Paciente portadora de vía central en la vena con mucha precaución en pacientes con enfermedad
yugular. renal crónica o en estadio final debido a la incidencia
de estenosis/trombosis central y periférica que compli-
ca futuros accesos para la hemodiálisis18. No hay evi-
3.1.2. Acceso femoral versus otros lugares
dencias en la literatura, sobre todo en pacientes hospi-
de acceso talizados19, 20 que sustenten la menor incidencia de
En general, se recomienda un acceso no femoral sepsis asociada con CCIP en comparación con los caté-
para facilitar el cuidado del catéter y permitir la deam- teres centrales.
bulación, siempre que las circunstancias clínicas del
paciente no lo impongan y se disponga de personal 3.3.  Catéteres centrales de duración prolongada
experimentado en la colocación del catéter en otras
Su uso está indicado para NP de larga duración (hos-
zonas14.
pitalaria o domiciliaria). Los catéteres implantados son
La inserción femoral se ha relacionado con un riesgo semipermanentes y se retiran solo si hay complicacio-
más alto de complicaciones infecciosas y trombóti­ nes o si ya no se necesitan. Se dispone de dos tipos de
cas9, 12, 15. Sin embargo, los ensayos más recientes catéteres venosos centrales implantados: los catéteres
muestran una menor incidencia de infección, compa- tunelizados y los reservorios subcutáneos. La implanta-
rable al del acceso yugular13, 16 en paralelo a la reduc- ción debe realizarse en el quirófano con las mismas
ción global en las infecciones por catéter como resulta- medidas exhaustivas de asepsia que en el caso de los
do de la mejor adherencia a las técnicas asépticas y al catéteres venosos centrales no tunelizados: prepara-
manejo adecuado del catéter. En este estudio17, el índi- ción de la piel que incluya el uso de una solución anti-
ce de masa corporal más elevado, sí se asociaba con séptica, mascarilla y gorro, lavado de manos, bata,
mayor incidencia de infección cuando el acceso era guantes y campo estéril.
femoral. En un gran ensayo, de Parienti et al.,13 el obje-
tivo compuesto de infección y trombosis de vena pro-
Catéteres tunelizados
funda era significativamente mayor en el acceso femo-
ral comparado con subclavia, pero similar al de la vena Los catéteres venosos centrales tunelizados atravie-
yugular interna. El acceso femoral se asociaba con me- san un túnel subcutáneo entre la vena cateterizada y la
nos complicaciones mecánicas. zona de salida de la piel. Producen una reacción fibrosa
que inmoviliza el catéter, impidiendo su desplazamien-
3.2.  Catéteres centrales con inserción periférica to, y suponen una barrera frente a la migración de gér-
menes de la piel, disminuyendo el riesgo de infección.
Los catéteres centrales insertados de forma periférica Están hechos de silicona, pueden ser redondos o pla-
(CCIP) han ganado popularidad debido a que su inser- nos y su tamaño puede oscilar de 2,7 a 12,5 Fr (por
ción es relativamente fácil, con menos riesgo para algu- ejemplo, Hickman, Broviac). Presentan mayor riesgo de
nas complicaciones (por ejemplo, hemotórax o neumo- infección que los reservorios pero son fáciles de retirar
tórax) y más tolerables para el paciente. Pueden ser y, en general, su uso da lugar a menos infecciones que
Tema 49.  Nutrición parenteral: vías de acceso 783

en el caso de los catéteres venosos centrales no tuneli- produciendo hemotórax, hemomediastino y hemato-
zados. ma disecante. El neumotórax se produce por punción
de la pleura en la inserción de un catéter en la vena
Reservorios subcutáneos implantables subclavia, siendo más frecuente en pacientes delgados
o con ventilación mecánica. La embolia gaseosa, pro-
Los dispositivos venosos totalmente implantables
ducida por la entrada del aire con la punción en el sis-
tipo port-a-cath, constan de dos piezas independien-
tema vascular, puede prevenirse realizando la manio-
tes: una cápsula de acero inoxidable, titanio o plástico
bra de Valsalva o colocando al paciente en posición de
cubierto de una membrana de silicona y un catéter uni-
Trendelenburg durante la inserción del catéter. Rara-
do a la cápsula. A través de la membrana de la cápsula
mente se puede lesionar el conducto torácico, lo que
se accede al reservorio con agujas sin bisel para que no
ocurre principalmente en la punción de la vena yugular
dañen la membrana21.
izquierda. Durante la inserción del catéter también
Los reservorios se implantan habitualmente sobre la
puede lesionarse el plexo braquial.
parrilla costal en la parte superior del tórax. La cápsula
Durante el período de mantenimiento del catéter
se coloca en la fascia del músculo pectoral alcanzando
pueden producirse trombosis venosas o tromboflebitis,
una vía central por el catéter subcutáneo. Las compli-
siendo menos frecuente con el uso de catéteres de po-
caciones más frecuentes de estos catéteres son la infec-
liuretano o silicona. Se aconseja con un nivel de evi-
ción y la trombosis venosa, que se intenta prevenir con
dencia B el uso de anticoagulante en dosis bajas en
un fibrinolítico.
aquellos pacientes que requieran mantener un catéter
4.  Complicaciones de los catéteres a largo plazo.
Infecciones: Son la complicación más frecuente y
venosos centrales causan una importante morbilidad23. La infección del
Los pacientes que reciben NP tienen riesgo de infec- catéter da lugar a infecciones locales o sistémicas. La
ción, efectos adversos metabólicos y complicaciones sepsis relacionada con catéter es una complicación fre-
relacionadas con el acceso venoso. El riesgo de infec- cuente (5-8/1000 días-paciente)24, puede ser muy gra-
ción hemática bacteriana y fúngica es mayor que en los ve y una de las principales causas de suspensión de la
pacientes que tienen catéteres venosos centrales pero NP. Muchas de las infecciones por catéter tienen su
no reciben NP. Entre los factores que están asociados origen en la colonización del catéter y la piel que rodea
de forma independiente con la infección se incluyen la el lugar de la inserción por gérmenes de la piel, pero
deficiente higiene del paciente, la inserción del catéter también pueden estar relacionadas con la preparación
venoso central en situaciones de emergencia y, en me- y administración de las soluciones (cambio de línea,
nor medida, la gravedad de la enfermedad de base y el conexiones, etc.). En otras ocasiones, la infección tiene
tiempo que se mantenga el catéter. Los catéteres de su origen en otro foco (urinario, respiratorio), alcan-
acceso central están sujetos también a otras complica- zando los gérmenes el catéter por difusión hemática.
ciones22 que incluyen sangrado, lesión vascular, neu- La presencia de gérmenes en el catéter no implica
motórax, trombosis venosa, arritmia y embolismo ga- necesariamente la existencia de sepsis por catéter. Se
seoso (tabla 2). considera su existencia cuando hay clínica de infección
Complicaciones relacionadas con la colocación del y el catéter es el único foco posible. Confirman este
catéter o mecánicas: Afectan al 6-9% de las insercio- diagnóstico la mejoría de los síntomas al retirarlo y la
nes y disminuyen si las realiza personal experimentado. presencia de microorganismos en los hemocultivos
La malposición del catéter puede dar lugar a hemotó- idénticos a los encontrados en el cultivo de la punta del
rax, hemomediastino, taponamiento cardiaco, dolor catéter una vez retirado. El manejo de la infección aso-
en el cuello u oído y extrasístoles. Ocasionalmente pue- ciada al catéter conlleva, además del tratamiento anti-
de puncionarse la arteria o romper la pared arterial biótico adecuado, la retirada del catéter en la mayoría

Tabla 2.  Complicaciones de la cateterización venosa central.

Inmediatas Durante su mantenimiento


· Sangrado · Infección
· Punción arterial · Trombosis venosa y embolismo
· Arritmia pulmonar
· Embolismo gaseoso · Migración del catéter
· Lesión del conducto torácico (accesos izquierdos) · Embolización del catéter
· Malposición del catéter · Perforación del miocardio
· Neumotórax o hemotórax
784 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

de los casos. Para no retirar de forma indebida un ca- En caso de infección relacionada con un catéter ve-
téter es necesario distinguir entre catéter colonizado, noso central tunelizado o un dispositivo implantado,
catéter contaminado, infección del orificio de salida, debe retirarse el catéter si existen complicaciones o se
infección del túnel, infección del bolsillo del reservorio, trata de una candidiasis. En caso contrario se adminis-
bacteriemia y sepsis por catéter25. Las sepsis nosoco- trarán antibióticos por vía sistémica y según la técnica
miales se asocian principalmente con catéteres venosos antibiotic lock. Consiste en llenar la luz del catéter con
centrales no tunelizados. Si se produce septicemia es concentraciones farmacológicas de antibióticos y de-
imprescindible disponer de una nueva vía. jarlas allí durante horas o días.
La mayoría de las sepsis relacionadas con catéter son Otras posibles complicaciones son la obstrucción, la
causadas por estafilococos, sobre todo E. coagulasa extracción accidental o la desconexión del catéter.
negativo y Staphylococcus aureus, contaminantes ha-
bituales de la piel. También pueden originarlas bacilos 5. Cuidados del catéter y prevención
gramnegativos, como algunas especies de enterobac- de complicaciones
ter, pseudomona, klebsiella y acinetobacter, Serratia
marcescens, Escherichia coli y Proteus mirabilis. La infu- Tienen como fin evitar la aparición de complicacio-
sión de un producto de NP contaminado puede ser nes, como infección, obstrucción, rotura o retirada,
una importante fuente de bacteriemia por bacilos alargando la vida del catéter con independencia del
gramnegativos, porque es un medio que les permite tipo de catéter utilizado. Algunas estrategias26, 27 pre-
proliferar una vez introducidos en él. Los pacientes gra- vienen la infección por catéter durante la NP. El riesgo
ves inmunodeprimidos y los que reciben antibióticos de sepsis disminuye con un personal entrenado que
de amplio espectro tienen un mayor riesgo de sepsis aplique técnicas de asepsia rigurosa y que manipule lo
por Candida albicans. No hay ningún método que apli- menos posible todo el material. El riesgo de bacterie-
cado de forma rutinaria permita detectar el desarrollo mia aumenta cuando los catéteres se usan para terapia
de la sepsis antes de que aparezca el cuadro. Para diag- múltiple y propósitos diagnósticos y cuando el pacien-
nosticarla de forma precoz debe realizarse un control te se ducha y humedece el lugar de inserción. De
clínico y analítico muy cuidadoso en cuanto a fiebre, acuerdo con una reciente revisión de la Cochrane28, no
síntomas constitucionales, hiperglucemia y complica- hay evidencias de calidad que apoyen el uso de solu-
ciones técnicas con el dispositivo de acceso vascular. ciones antisépticas que contengan clorhexidina frente
La terapia antibiótica suele empezarse de forma em- a las que contienen povidona yodada para reducir la
pírica y la elección inicial depende de la severidad del colonización microbiana y las infecciones relacionadas
cuadro clínico, los factores de riesgo para infección y con los catéteres venosos centrales. Sin embargo, man-
los probables patógenos asociados con el dispositivo tienen la recomendación vigente que favorece el uso
intravascular específico. Se recomienda aplicar vanco- de las que contienen clorhexidina. No resulta efectiva
micina cuando hay una incidencia alta de estafiloco- la profilaxis con antibióticos durante la inserción del
cos resistentes a la meticilina porque tiene actividad catéter ni el uso tópico de antibióticos en el lugar de la
frente a estafilococos coagulasa negativos y S. aureus. inserción, que favorece el desarrollo de flora resistente.
En ausencia de S. aureus resistente a la meticilina de- El uso de catéteres impregnados con antimicrobianos
ben usarse nafcilina u oxacilina. En pacientes críticos o se asocia con menor incidencia de sepsis que en el caso
inmunodeprimidos se añade una cefalosporina de ter- de los no tratados pero, por su alto costo, deben reser-
cera o cuarta generación como cobertura empírica de varse para pacientes de alto riesgo tratados en unida-
los bacilos gramnegativos y Pseudomonas aeruginosa. des u hospitales que tengan una incidencia de infec-
Si se sospecha una infección micótica se administrará ción especialmente alta24. La tabla 3 incluye una serie
anfotericina B o, dependiendo del paciente, flucona- de recomendaciones generales para prevenir la infec-
zol intravenoso. El tratamiento antimicrobiano inicial ción asociada a catéter intravascular.
debe administrarse por vía intravenosa pero, una vez En cuanto a la prevención de las trombosis relacio-
que la situación clínica está estabilizada y se dispone nadas con el catéter, las guías ESPEN del 2016 no reco-
del antibiograma, puede prescribirse una quinolona miendan realizar tromboprofilaxis primaria de rutina29.
oral, como ciprofloxacino o trimetoprim-sulfametoxa- En la práctica, estas son algunas de las normas en
zol. cuanto a cuidados y prevención de complicaciones que
Si se trata de un catéter venoso central se aconseja recogen todos los protocolos:
retirar el catéter y administrar antibioterapia intraveno-
sa durante un período de tiempo que dependerá de la • Antes de administrar la NP debe comprobarse la
existencia o no de complicaciones y del microorganis- colocación del catéter con una radiografía, para
mo responsable. Si la causa de la sepsis es un bacilo evitar la malposición, sobre todo en las insercio-
gramnegativo se aconseja retirar el catéter en un plazo nes yugulares o a través de las extremidades supe-
máximo de 72 horas a partir del comienzo de la infec- riores (nivel de evidencia B)30. Una vez colocado el
ción para evitar recidivas. catéter debe fijarse para evitar su desplazamiento.
Tema 49.  Nutrición parenteral: vías de acceso 785

Tabla 3. Recomendaciones generales para prevenir la infección asociada a catéter intravascular.

Formación del · En cuanto a indicaciones, técnica de inserción y mantenimiento, medidas para la
personal sanitario prevención y control de infecciones.
· Lavado con jabones que contengan antiséptico convencional o geles basados en
Higiene de las manos
alcohol, aunque se usen guantes.
Técnica aséptica · Mantener asepsia durante la inserción y cuidados, con la máxima precaución si se trata
durante la inserción y de un catéter venoso central.
cuidados del catéter
· Desinfectar la piel con antiséptico antes de la inserción y de los cambios de apósitos,
mejor con clorhexidina al 2%.
Cuidados en la zona
· Usar gasa estéril o apósito estéril semipermeable transparente para cubrir la zona del
del catéter
catéter.
· No usar cremas o pomadas con antibióticos en el lugar de inserción.
Sustitución de · Retirar cualquier catéter que no sea esencial.
catéteres IV
· Completar la inclusión de soluciones que contengan lípidos como máximo en 24 horas.
· Completar la infusión de emulsiones que contengan solo lípidos como máximo
Fluidos parenterales
en 12 horas.
· Completar la infusión de sangre o derivados como máximo en 4 horas.

• Manejo del catéter, conexiones de la cánula y ven- fórmulas nutricionales no deben tener una osmolaridad
dajes cumpliendo rigurosa asepsia. mayor de 900 mOsm/l, ya que las soluciones hiper­
• El cuidado del punto de inserción es básico tanto tónicas pueden provocar tromboflebitis en 24-48 ho-
antes como después de la colocación del catéter, ras si se usa un catéter corto. Si se administra un volu-
y la zona de inserción debe inspeccionarse para men alto de líquidos (alrededor de 3000 ml/día) e
detectar posibles complicaciones infecciosas. An- incluyendo lípidos, de más baja osmolaridad, puede
tes de la inserción, realizar lavado de manos, usar resolverse parcialmente este problema. Las osmolarida-
guantes y limpiar el punto de inserción con povi- des oscilan entre 800 y 1000 mOsm/l, sin que suelan
dona yodada o solución acuosa o alcohólica de presentarse problemas cuando la NP se mantiene un
clorhexidina. Tras la colocación del catéter, prote- tiempo máximo de 10 a 14 días. El uso de catéteres
ger el punto de inserción con un apósito estéril intermedios (de 15 a 20 cm) disminuye el riesgo de
transparente o gasas. Los primeros permiten ver el tromboflebitis e infección y prolonga su duración.
punto de inserción pero aumentan la humedad de La NP a través de una vena periférica puede cubrir de
la zona, favoreciendo el crecimiento bacteriano. Si forma parcial las necesidades energético-proteicas, dis-
el paciente está sudoroso deben usarse gasas sin minuir el balance nitrogenado negativo (NP periférica
impregnar en ningún antiséptico, pero no existen hipocalórica), cubriendo las necesidades de líquidos,
diferencias entre ambos en cuanto a la aparición electrolitos, oligoelementos y aminoácidos, pero con
de infecciones. El apósito se debe cambiar sema- déficit calórico. En pacientes con un catabolismo pro-
nalmente o si está sucio o húmedo, limpiando el teico acelerado esta NP puede revertir un balance ni-
punto de inserción con los antisépticos ya referi- trogenado negativo. A pesar de sus limitaciones, la NP
dos, sin usar antibióticos tópicos. periférica puede resultar útil para tratar a los pacientes
• Si es posible, utilizar la vía exclusivamente para la durante períodos cortos de tiempo, que no superen las
nutrición. Usar conexiones luer-lock protegiéndo- 2 semanas, y en la medida que los requerimientos que-
las con gasa estéril con antiséptico. den cubiertos y no existiera previamente desnutrición.
• Los accesos venosos en pacientes que reciben NP
deben ser cuidados por enfermeras especializadas 6. Resumen
(evidencia B)30.
Aunque en la práctica, la NP se sigue administrando
a muchos pacientes con posibilidad de ser nutridos por
5.1.  Acceso venoso periférico
vía enteral, solo debe usarse cuando el tracto gastroin-
El acceso periférico es más fácil, menos agresivo y testinal no sea funcional o no puedan cubrirse las ne-
con menos complicaciones que el acceso central. Las cesidades calórico-proteicas por una vía alternativa,
786 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

oral o enteral. De acuerdo con los requerimientos que   9. Merrer J, De Jonghe B, Golliot F, et al. Complica-
debe cubrir la NP, las previsiones de duración, la enfer- tions of femoral and subclavian venous catheteri-
medad subyacente y el estado de la coagulación se ele- zation in critically ill patients: a randomized con-
girá una NP central, por medio de un catéter no tuneli- trolled trial. JAMA 2001; 286-700.
zado o un catéter implantado, o bien una NP periférica. 10. Eisen LA, Narasimhan M, Berger JS, et al. Mecha-
Dado que el catéter venoso central se puede colocar en nical complications of central venous catheters. J
diferentes lugares anatómicos y cada uno tiene sus Intensive Care Med 2006; 21:40.
propias ventajas e inconvenientes, siempre hay que in- 11. Ruesch S, Walder B, Tramer MR. Complications of
dividualizar la elección del acceso y tener en cuenta los central venous catheters internal jugular versus
recursos técnicos disponibles. subclavian access--a systematic review. Critic Care
La NP requiere una monitorización clínica y analítica Med 2002; 30:454.
todavía más rigurosa que la nutrición enteral ya que, 12. Lorente L, Henry C, Martin MM, et al. Central ve-
en su caso, las complicaciones tanto metabólicas como nous catheter-related infection in a prospective
infecciosas suelen tener mayor incidencia y gravedad. and observational study of 2.595 catheters. Crit
La sepsis por catéter es una complicación frecuente, es Care 2005; 9:R631.
muy grave y una de las principales causas de suspen- 13. Parienti JJ, Mongardon N, Megarbane B, et al. In-
sión de la NP. La mayoría de las sepsis nosocomiales se travascular Complications of Central Venous Ca-
asocian con catéteres venosos centrales no tuneliza- theterization by Insertion Site. N Engl J Med 2015;
dos. Dentro de las medidas de prevención de las com- 373:1220.
plicaciones sigue considerándose fundamental la asep- 14. Rupp SM, Apfelbaum JL, et al. Practice guidelines
sia rigurosa, reducir al máximo la manipulación de for central venous access: a report by the Ameri-
todo el material y evitar el uso de catéteres para terapia can Society of Anesthesiologists Task Force on
múltiple y con propósitos diagnósticos. Central Venous Access. Anesthesiology 2012;
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Tema 50. 
Inmunonutrición en el soporte nutricional artificial
Daniel Antonio de Luis Román
Emilia Gómez Hoyos
Juan José López Gómez
Ana Ortolá Buiges
Beatriz Torres Torres
Centro de Investigación de Endocrinología y Nutrición. Facultad de Medicina.
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico Universitario. Valladolid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 789-798.

1. Introducción
2. Fisiopatología
3. Implicaciones clínicas de fórmulas inmunomoduladoras
4. Futuros inmunonutrientes
5. Resumen
6. Bibliografía

1. Introducción quinas antinflamatorias, factores de crecimiento, oxi-


do nítrico, eicosanoides y radicales libres, influyendo
Nuestro estado nutricional y nuestro estado inmu- todos ellos en la respuesta ante la agresión.
nológico están relacionados, por ello en un paciente
No debemos olvidar que la síntesis de mediadores
desnutrido la respuesta inmunológica está disminui-
de la inflamación-agresión presenta un curso tem-
da, y ante un cuadro de inflamación aguda y/o cróni-
poral corto y que va a producir la activación de de-
ca el gasto energético y la situación nutricional se al-
terminados genes que aumentan en el tiempo la
teran1.
respuesta. De este modo se activa el factor nuclear
Si analizamos las diferentes barreras defensivas
kappa beta (NFkB) y la proteína activadora –1, por
que tenemos ante la agresión externa, observaremos
ejemplo la activación del NFkB se ha relacionado en
cómo la desnutrición puede incidir en todas ellas. De
pacientes con sepsis con mayor mortalidad. En este
este modo, nuestras mucosas y piel pueden afectarse
con atrofias y úlceras ante un estado de malnutri- punto es donde aparece alguno de los efectos de los
ción. También se deterioran la inmunidad humoral y nutrientes con actividad inmunomoduladora, así los
celular. La inmunidad humoral se ve afectada en pa- antioxidantes y los ácidos grasos omega-3 son capa-
cientes malnutridos al afectarse los linfocitos T coo- ces de disminuir la activación de NFKB. En la tabla 1
peradores. La inmunidad celular se afecta en la des- se resume el mecanismo de acción de diferentes in-
nutrición con disminución del tamaño del timo y munonutrientes que podemos encontrar en las fór-
alteración del cociente CD8/CD42. La respuesta del mulas nutricionales.
organismo ante la agresión es muy compleja y por Por tanto, la situación nutricional de un paciente in-
tanto incidirá en la situación nutricional, fundamen- cide sobre su situación inmunológica. Pero cabría pre-
talmente el sistema inmune responde con dos com- guntarnos si el soporte nutricional de un paciente pue-
ponentes. Se activan los linfocitos T y B y se inicia una de incidir sobre su situación inmunológica y por tanto
respuesta inflamatoria mediante citoquinas, interleu- sobre la morbimortalidad asociada a su patología de
cina 1 (IL-1), interleucina-6 (IL-6) y factor de necrosis base. Por ello, revisaremos los aspectos más relevantes
tumoral alfa (TNF-alfa). Estas citoquinas aumentan el de la «inmunonutrición» y dentro de los diferentes in-
catabolismo de las proteínas y las grasas para enviar munonutrientes existentes (tabla 1), analizaremos los
nutrientes al sistema inmune3. Sin embargo, se pro- tres más importantes (los ácidos grasos omega-3, glu-
duce una gran diversidad de mediadores como cito- tamina y arginina).

789
790 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

Tabla 1.  Inmunonutrientes y su mecanismo de acción.

Precursor del óxido nítrico, aumenta el número de linfocitos T y su función, aumenta la


Arginina
producción de GH, se relaciona con el metabolismo de la prolina.
Nucleótidos Precursores de ARN y ADN, mejora la función de los linfocitos T.
Mejora la barrera intestinal, actúa como precursor del glutatión y es el nutriente ideal de las
Glutamina
células inmunológicas.
Aminoácidos Aumentan la síntesis de glutatión vía grupos sulfidrilos sulfurados (metionina, cisterna).
Efecto antiinflamatorio al disminuir las citoquinas proinflamatorias y actuar a nivel nuclear
Ácidos omega-3
en NFkB.

2. Fisiopatología producidos a partir de la degradación de las membra-


nas celulares. En tercer lugar, dependería de la capaci-
2.1.  Ácidos grasos omega-3 dad de algunos ácidos grasos de alterar la regulación
La importancia de los ácidos grasos omega-3 en in- genética, por ejemplo el ácido omega 3 eicosopentae-
munonutrición se basa en el papel de los ácidos doco- noico actúa como un agonista de los receptores PPAR,
sahexanoico (DHA) y eicosapentanoico (EPA) mejorando los cuales poseen un efecto antiinflamatorio. Además,
el sistema inmune compitiendo con el ácido araquidóni- los ácidos omega 3 estabilizan el complejo NFkB/IkB, el
co (omega-6), en la cascada enzimática de elongación y cual suprime la activación de los genes relacionados
desaturación. En la actualidad permanece todavía por con la inflamación.
aclarar cuál es la ratio correcta en la dieta oral de ω6/
ω3. En los países occidentales esta ratio oscila entre 2.2. Glutamina
10/1 y 20/1, no obstante en la actualidad están apare-
ciendo suplementos nutricionales con relaciones inverti- La glutamina es un aminoácido no esencial, que
das (por ejemplo, 0.9) que podrían aportar ventajas adi- puede llegar a ser esencial en determinadas situaciones
cionales disminuyendo la situación inflamatoria de base de estrés5. La glutamina está relacionada con el sistema
del paciente tumoral y mejorando, por ejemplo, su masa inmunológico: funciona como fuente energética de los
magra4. enterocitos (disminuyendo la atrofia intestinal en situa-
Los ácidos grasos poliinsaturados, como el oleico ciones de estrés) y células de división rápida y como
(omega-9), alfa linoleico (omega-6) o alfa linolénico donante de nitrógeno para la síntesis de pirimidinas y
(omega-3) pueden ser desaturados y elongados para purinas, la formación de nicotinamida, arginina y ami-
dar lugar a ácido araquidónico a partir de precursores noazúcares.
omega-6, o EPA y DHA a partir de precursores ome- La glutamina incorporada al organismo con la dieta
ga-3. Teniendo en cuenta que el ácido linoleico puede oral es utilizada directamente por los enterocitos. No
desaturarse y elongarse por la misma enzima que el li- obstante, cuando este sustrato es requerido en una si-
nolénico, existe competencia enzimática entre ellos y el tuación de estrés, la fuente principal de glutamina pro-
consumo durante largo tiempo de ácido linolénico viene del músculo. En situaciones de estrés, existe
(omega-3) incrementa los niveles de EPA y disminuye un aumento de la liberación de glutamina desde el
los de ácido araquidónico, produciendo por tanto un músculo, de forma que el pool de reserva muscular dis-
menor «ambiente inflamatorio». minuye de forma importante. Esta depleción muscular
Podríamos explicar los efectos de los ácidos grasos se debe al incremento de las necesidades de glutamina
polinsaturados mediante diferentes mecanismos. El junto con un decremento de los aminoácidos de cade-
primero se relacionaría con las variaciones en la estruc- na ramificada, aspartato y glutamato. Los niveles de
tura de las membranas celulares, que actuarían en los glutamina plasmática disminuyen, de este modo tras la
receptores de superficie para antígenos e interleucinas. ingesta, el músculo y el pulmón son donantes de glu-
En segundo lugar, dependería de la cantidad y tipo de tamina y el intestino es el receptor principal, en una
los eicosanoides producidos, así las fosfolipasas, las situación de estrés se optimiza el aporte de glutamina
cuales se activan durante las respuesta al trauma o a la hacia las células inmunes y el hígado, por otra parte el
infección o las prostaglandinas, sintetizan diferentes riñón se convierte en donante y aumenta todavía más
leucotrienos y otros mediadores derivados de los lípi- la liberación desde el músculo.
dos (resolvinas, maresminas, etc.), de este modo la ad- Una de las funciones dominantes de la glutamina es
ministración de diferentes ácidos grasos daría lugar a el incremento de la síntesis de glutation. Existen tres
diferentes perfiles de prostaglandinas y leucotrienos aminoácidos que intervienen en la síntesis del gluta-
Tema 50.  Inmunonutrición en el soporte nutricional artificial 791

tión; glicina, cisteína y ácido glutámico. La glutamina ponemos en la tabla 2. En la actualidad también
es el precursor del ácido glutámico, siendo dominante disponemos de módulos de glutamina (tabla 3) y
su papel en la síntesis de glutatión. La cisteína y la me- arginina (tabla 4). A continuación revisaremos dife-
teonina no son captados con tanta facilidad por las rentes estudios en situaciones clínicas específicas
células, sí que lo son por ejemplo precursores de la cis- con el objetivo de resumir la evidencia existente en la
teína como la N-acetil-cisteína. literatura.

2.3. Arginina 3.1.  Pacientes quemados


La arginina es un aminoácido bibásico, siendo el Uno de los primeros estudios realizados fue el de
transportador de nitrógeno más ubicuo en nuestro or- Gottschlich et al8, con 50 pacientes y un 40% de super-
ganismo. Se sintetiza fundamentalmente en el riñón a ficie corporal quemada. Este autor divide a los pacien-
partir de la citrulina procedente del intestino y de un tes en tres grupos: un grupo con dieta inmunomodu-
donante de nitrógeno (ácido aspártico). La síntesis en- ladora: 17 pacientes con una fórmula con un 9% de
dógena de arginina supone aproximadamente un 20- arginina y un 50% de grasas de pescado; y dos grupos
30% del consumo diario. con fórmula estándar. En este trabajo se detectó una
La arginina es el sustrato de dos enzimas diferentes disminución significativa de infecciones de la herida
encargadas de su metabolismo: la óxido nítrico sinteta- (inmunonutrición 11% frente a 57% y 42% de las dos
sa y la arginasa. La arginasa da lugar a urea y ornitina, fórmulas estándar). Como resultados secundarios,
mientras que la óxido nítrico sintetasa genera óxido ­observa menor incidencia de diarrea y mejor control
nítrico. Las funciones de la arginina pueden ser agru- glucémico, con menor estancia hospitalaria por por-
padas en tres bloques. Es un aminoácido secretagogo centaje de quemadura en el grupo de fórmula modular
que estimula la secreción de una gran variedad de hor- inmunomoduladora. Posteriormente, Saffle et al.9
monas, especialmente de la hormona del crecimiento, compararon una fórmula inmunomoduladora frente a
la insulina y el glucagón. La arginina está implicada en una enriquecida pero sin arginina. En este trabajo no
un gran número de vías metabólicas, que están relacio- se encontraron diferencias significativas en ninguna de
nadas con su capacidad para actuar como precursor de las variables analizadas. Otro ensayo aleatorizado10 en
la síntesis de ornitina, que es el sustrato de la síntesis pacientes quemados ha mostrado cómo la suplemen-
de prolina, glutamato y poliaminas. Por otra parte, in- tación diaria con 40,4 umol de cobre, 2,9 umol de se-
crementa la cicatrización de heridas, con efectos antica­ lenio y 406 umol de zinc durante 30 días reducía el
tabólicos y actuando en el ciclo de la urea eliminando numero de bronconeumonías y la estancia hospitala-
del organismo compuestos no esenciales que contie- ria. En otro ensayo clínico aleatorizado11, se evaluaron
nen nitrógeno6. 36 pacientes (16 con traumatismos y 20 quemados).
Es importante tener en cuenta el papel de la arginina La estancia en la UCI fue inferior con la fórmula inmu-
como único precursor del óxido nítrico. El óxido nítrico nomoduladora (3,41 frente a 7,83 días), así como la
es un vasodilatador endógeno que regula la tensión necesidad de días con soporte respiratorio (2,71 y 7,39
arterial, la perfusión de los órganos y la interacción del días). Por último, en una reciente revisión Cochrane12,
endotelio vascular con las células sanguíneas. Uno de se evaluaron 16 estudios con 678 pacientes, mostran-
los puntos críticos de la administración de este ami- do cómo el uso de glutamina comparado con una for-
noácido es su papel como precursor del óxido nítrico, ma isonitrogenada reduce la estancia hospitalaria
pudiendo estar relacionado con la mortalidad en pa- (–5,65 días, 95% [CI] –8,09 a –3,22) y la mortalidad
cientes hemodinámicamente inestables como los que ([RR] 0,25, 95% CI 0,08 to 0,78).
presentan un shock séptico7.
3.2.  Pacientes críticos de origen
3. Implicaciones clínicas de fórmulas traumatológico
inmunomoduladoras
El primer trabajo fue realizado por Brown et al.13, en
Uno de los grandes problemas metodológicos de este estudio se encuentran diferencias a favor de la fór-
los estudios de investigación realizados en el área de mula inmunomoduladora (16% frente a 56%) en la
la inmunonutrición es la utilización de fórmulas con tasa de infecciones, con una alta incidencia de neumo-
múltiples inmunonutrientes, siendo imposible com- nía en ambos grupos (53% frente a 83%). Otro trabajo
parar el efecto aislado de cada uno de ellos, encon- en este grupo de pacientes es el realizado por Kudsk et
trando por tanto el efecto de un «cocktail» de inmu- al.14 con 70 pacientes en total. Este trabajo presenta
nonutrientes sobre variables clínicas y bioquímicas. una menor tasa de infecciones en general (31% frente
Las fórmulas enterales y suplementos comerciali­ a 65%), a expensas de la disminución de abscesos in-
zados que podemos considerar como inmunomo­ traabdominales (6% frente a 35%), por lo que obser-
duladoras son múltiples, a modo de resumen las ex- van menor consumo de antibióticos, menor estancia
792 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

Tabla 2.  Composición de las fórmulas enterales con inmunonutrientes.

ω-3
Proteínas Grasas Carbohidratos Osmolaridad (g/100 cc) Arginina Glutamina
Nombre Kcal/cc
(g/100 cc) (g/100 cc) (g/100 cc) (mOs/l) ratio (g/100 cc) (g/100 cc)
ω-6/ω-3
5,3 1,5 0,15
Alitraq 1 16,4 480 0,45 1,42
42% péptido 53% MCT 4,23
Impact 2,8 0,34
1 5,6 13,4 477-519 1,25 –
enteral 27% MCT 0,7
Impact 3,9 0,67
1 7,6 18,9 690 1,8 –
oral 28,2% 0,91
9,4 0,94
Oxepa 1,5 6,3 10,6 384 – –
25% MCT 1,85
3,7 0,16
Perative 1,3 6,7 17,7 308 0,85 –
40% MCT 4,8
2,7 1,75
Prosure 1,23 5,4 14,9 474 – –
16,2% MCT 0,27
2,7
Forticare 1,6 9 5,3 19,1 730 – –
1,2
1,41
Cubison 1 5,5 3,3 12,5 315 0,625 –
5
Resource 5,3 1,05
1,55 9 17,9 564 – –
support    9,4% 1,1
Clinutren 1,07
1,25 9,3 2,8 15,6 580 0,47
Repair 7,2
Suportan 0,71
1,5 10 6,7 12,4 435 – –
drink –
0,77
Atempero 1,51 8,3 5 17,3 366 – –
0,9

Tabla 3.  Módulos de glutamina.

Glutamina Resource Kabi


Glutamina NM Glutamina NM Glutamine
100 g Vegenat Med® Glutamina Glutamina
sobre 10 g vial 5 g/40 ml sobre 10 g
sobre 5 g sobre 5 g sobre 20 g
Kcal 400 400 399,5 399,5 375 370
Proteínas g 100 100  99,7  99,7  50 120
L glutamina g 100 100  99,7  99,7 100 100
HC g   0   0   0,1  0  40   0
Lípidos   0   0    0,09  0   0   0
HC: hidratos de carbono.

en la UCI y también en la hospitalización en planta, po con inmunonutrición no hay pacientes con distrés
generando por tanto un importante ahorro económi- respiratorio, frente al 11% en el grupo control, ni tam-
co. Otro trabajo realizado con la misma fórmula inmu- poco existen pacientes con absceso intraabdominal.
nomoduladora anterior fue el de Moore et al.15. En este Posteriormente apareció el trabajo de Mendez16, con
trabajo multicéntrico se detectaron menos complica- unos resultados negativos en el grupo de inmunonu­
ciones sépticas globales (22% frente a 43%). En el gru- trición, con mayor incidencia de neumonía (72% frente
Tema 50.  Inmunonutrición en el soporte nutricional artificial 793

Tabla 4.  Módulos de arginina.

Arginina Vegenat Med Resource Arginaid Arginina NM vial Arginina Nutricia


100 g
sobre 7 g sobre 7 g 5 g/20 ml bote 100 g
Kcal 286 238 400 359
Prot g      71,4  71  99 100
L arginina g      71,4  71  99 100
HC g   0       3,6   0   0
Lípidos   0   0   0   0

a 52%); sin embargo, los grupos no son totalmente bió mayor cantidad de nutrición enteral, sin detectar
equiparables en un inicio (mayor proporción de distrés otras diferencias significativas.
respiratorio en el grupo de inmunonutrición). Estos re- Estos datos fueron parcialmente reproducidos por
sultados fueron parcialmente repetidos por Weimann Rodrigo Casanova et al 21, encontrando menor inciden-
et al.17, detectando una mayor incidencia de neumonía cia de neumonías (12% frente a 21%) y mayor tasa de
en el grupo con inmunonutrición (63% frente a 46%), mortalidad (12,5% frente a 7,1%). El grupo de Gal-
sin alcanzar la significación estadística. En un trabajo ban22 detectó una menor mortalidad con la fórmula
realizado en niños con traumatismo craneal18, el grupo inmunomoduladora (19,1% frente a 32,2%). No exis-
con fórmula inmunomoduladora no presentó ventajas ten diferencias signi­ficativas en el número de infeccio-
clínicas (estancia hospitalaria, infección nosocomial o nes, por lo que la d­ isminución de la mortalidad no se
supervivencia), solo se detectó una mejoría en los nive- debe a menor desarrollo de infecciones nosocomiales,
les de interleucina-8. aunque sí que encuentran menor tasa de bacteriemia
Por tanto, al revisar los trabajos podemos sugerir (8% frente a 22%).
que las fórmulas inmunomoduladoras en este grupo No obstante, también han aparecido trabajos en la
de pacientes pueden disminuir la tasa de infecciones, literatura que han generado una corriente crítica en la
aunque son necesarios más trabajos con un mayor ta- utilización de estos preparados en pacientes críticos. Un
maño muestral. Grupo Italiano colaborativo23 comparó nutrición paren-
teral frente a una fórmula inmunomoduladora en pa-
3.3.  Pacientes críticos cientes de cuidados intensivos, clasificados según su
grado de estrés. Seleccionan un total de 1 500 pacien-
Una de las críticas metodológicas a los trabajos que tes, reclutan un total de 750 y estudian 237, que agru-
evalúan la inmunonutrición en pacientes críticos es la pan en 36 pacientes con sepsis severa (19 con nutrición
gran heterogeneidad de los pacientes incluidos, al po- parenteral y 17 con fórmula inmunomodula­dora) y 201
der incluir en los pacientes evaluados, sépticos, trau- pacientes con sepsis no severa (101 con ­nutrición pa-
matizados (con afectación craneal o no), postquirúrgi- renteral y 100 con fórmula inmunomoduladora). La
cos estables y postquirúrgicos inestables. A pesar de mortalidad en el grupo de inmunonutrición fue de 13
esta crítica metodológica, este grupo de trabajos apor- pacientes, sumando estancia en UCI más primer mes y
ta el segundo mayor volumen de pacientes estudiados en el grupo con parenteral fue de 3 pacientes. El otro
con fórmulas inmunomoduladoras. trabajo ha sido realizado en Estados Unidos24. La mor-
El primer trabajo realizado es el de Bower19, trabajo talidad fue superior en el grupo de inmunonutrición
multicéntrico, con 326 pacientes seleccionados, que (23% frente a 9,6%), sin embargo este trabajo tiene un
estudia a 279, de los cuales tan solo 200 reciben nutri- grave problema en la asignación de los dos grupos, con
ción y en concreto solo 85 pacientes recibieron como mayor tasa de neumonía inicial en el grupo de inmuno-
mínimo 5 litros de nutrición enteral en total, obtenién- nutrición. Sin embargo, esta área de investigación es
dose en este subgrupo claros beneficios. Los resultados muy dinámica, y en otro estudio raleatorizado doble
a favor de la fórmula inmunomoduladora mostraron ciego25 se ha demostrado que en pacientes sépticos con
menos días de hospitalización, pero este dato solo fue una fórmula enteral enriquecida con glutamina, vitami-
significativo en el subgrupo que tolera la nutrición en- na C, vitamina E, beta-caroteno, selenio y zinc produjo
teral; también observaron menor número de infeccio- una recuperación del fallo orgánico más rápida.
nes tardías en el subgrupo séptico, con una mayor En resumen, estos trabajos presentan un grupo de
mortalidad (15,6% frente a 7,6%). Con las mismas fór- pacientes demasiado heterogéneo en su grado de es-
mulas nutricionales, el grupo de Atkinson20 demostró trés, así como falta de cumplimiento del soporte pres-
menos días de hospitalización en el subgrupo que reci- crito como para poder concluir datos clínicos claros. En
794 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

una de las últimas revisiones sistemáticas de la literatu- caciones postoperatorias (28,3 frente a 39,2 %) y de la
ra26 realizada se concluye que las fórmulas inmunomo- estancia hospitalaria (17,1 frente a 13,1 días), al admi-
duladoras enriquecidas con aceite de pescado mejoran nistrar una fórmula inmunomoduladora.
variables clínicas en los pacientes médicos críticos con
sepsis o distrés respiratorio, sin embargo estas fórmu- 3.4.2.  Nutrición enteral postoperatoria
las enriquecidas con glutamina y/o arginina no parecen
producir mejores resultados clínicos que las fórmulas El primer trabajo publicado en este grupo de pa-
enterales estándar en estos pacientes. cientes fue realizado por Daly31 et al., demostrándose
una menor incidencia de infecciones y de estancia
hospitalaria, sin diferencias en la mortalidad. El pro-
3.4.  Pacientes quirúrgicos
blema de este trabajo es la utilización de dos fórmulas
Este es el grupo de estudios con mayor volumen de con diferente aporte de nitrógeno. Posteriormente, el
pacientes evaluados, presentando como principal pro- mismo grupo32 diseña un estudio con fórmulas isoni-
blema metodológico la heterogeneidad de la patología trogenadas, detectando una menor tasa de infeccio-
que motivó la cirugía, así como el grado de desnutri- nes y complicaciones de la herida en el grupo con in-
ción previo al abordaje quirúrgico. Para una mejor munonutrición.
comprensión del tema podemos dividir los trabajos en Otro trabajo ha evaluado estas fórmulas utilizando
aquellos que emplean un soporte nutricional preopera- tres ramas de intervención, permitiendo además de
torio/postoperatorio y los que solo presentan un so- comparar una fórmula inmunomoduladora frente a
porte postoperatorio. una enteral estándar, la utilización de una fórmula pa-
renteral33. Este trabajo ha sido realizado en 60 pacien-
tes intervenidos de neoplasia de estómago o páncreas,
3.4.1.  Nutrición enteral pre y post operatoria
detectándose menos infecciones si se compara la fór-
En la mayor parte de los trabajos se utiliza la misma mula inmunomoduladora frente a nutrición parente-
fórmula inmunomoduladora enriquecida en arginina, ral, pero no encuentra diferencias significativas entre
ácidos omega-3 y ácidos ribonucleicos comparándola las dos fórmulas enterales. El mismo diseño repetido
con una dieta estándar, con pauta pre- y postoperato- por Schilling et al 34 en 41 pacientes intervenidos de
ria. Uno de los grupos más activos ha sido el de Senkal neoplasia de colon, detectó menos complicaciones in-
et al 27. Este grupo diseñó un estudio administrando fecciosas, sin alcanzar la significación estadística.
nutrición enteral 5 días antes y 5 días después de la Senkal et al 35 comparó la fórmula inmunomodulado-
intervención quirúrgica, con un mínimo de 1 000 cc3 al ra con una dieta estándar isocalórica e isonitrogenada.
día de fórmula inmunomoduladora. Los resultados No encontró diferencias significativas en la incidencia
mostraron menor incidencia de complicaciones infec- de complicaciones totales (22% frente a 32%), sin em-
ciosas y de la herida quirúrgica (13% frente a 24%), bargo sí que existieron diferencias significativas en las
siendo lo más sorprendente que los hallazgos fueron complicaciones infecciosas y de la herida quirúrgica
también mejores incluso en pacientes bien nutridos. (6% frente a 17%), con una disminución de la estancia
Otro de los primeros trabajos en este área, se realizó hospitalaria en 3 días.
con una pauta preoperatoria más prolongada (7 días)28 Nuestro grupo36 ha demostrado en pacientes con
demostrando una menor incidencia de infecciones en tumores de cabeza y cuello, comparando una fórmula
el grupo de los pacientes bien nutridos (9% frente a enriquecida en arginina frente a una fórmula hiperpro-
20%) y también en los malnutridos (14% frente a teica, una disminución del porcentaje de las fístulas de
40%). Los trabajos han continuado a lo largo de estos la herida quirúrgica (22%). Estos resultados han sido
años con diferentes diseños y en diferentes patologías repetidos utilizando la misma fórmula pero alcanzan-
quirúrgicas. Por ejemplo, en pacientes con hepatecto- do aportes de hasta 19 gramos al día de arginina con
mías29, en un ensayo multicéntrico con 400 pacientes una buena tolerancia37-39.
con dos ramas de intervención durante 7 días, una En general, podemos concluir que el efecto benefi-
rama recibiendo una fórmula inmunomoduladora cioso sobre la inmunidad se puede observar tanto en
frente a otra rama con una fórmula control, antes de la los pacientes bien nutridos como malnutridos, pero en
resección de un cáncer de hígado. La mortalidad tras la estos últimos en los que aparecen con más frecuencia
resección hepática fue inferior en el grupo con fórmula las infecciones, la utilización de fórmulas inmunomo-
inmunomoduladora (22% frente a 42%). Las complica- duladoras sería más rentable económicamente. Un
ciones infecciosas también fueron inferiores (12% a metanálisis publicado objetiva cómo la suplementa-
23%), existiendo un aumento de la estancia hospitala- ción perioperatoria con fórmulas inmunomodulado-
ria y coste en el grupo sin fórmula inmunomoduladora. ras40 en cirugía digestiva muestra beneficios en la tasa
Por último, en uno de los mayores estudios diseñados de infecciones, en la estancia hospitalaria y en diferen-
con 969 pacientes30 se demostró que en los pacientes tes marcadores inmunológicos. Estos datos se han vis-
malnutridos se producía una reducción de las compli- to corroborados por un reciente metanálisis41. En otro
Tema 50.  Inmunonutrición en el soporte nutricional artificial 795

metanálisis42, de nuevo se han corroborado los efectos disminución de la tasa de infecciones y aumento de la
beneficiosos del uso de fórmulas inmunomoduladoras supervivencia45.
en el postoperatorio sobre las complicaciones infeccio- Los ponifenoles también están bajo evaluación y se
sas (OR 0,49, 95% CI 0,30 a 0,83) y la estancia hospi- ha demostrado que pueden prevenir el crecimiento tu-
talaria (2,22 días, 95% CI: 2,99 a 1,45). moral, presentando efectos antiinflamatorios, al inhibir
En resumen, la nutrición enteral inmunomoduladora la producción del factor de necrosis tumoral alfa y blo-
en los pacientes quirúrgicos por neoplasia produce una quear la activación del factor nuclear kappa beta,
menor tasa de infecciones tardías y disminuye la estan- como los ácidos grasos omega-346.
cia hospitalaria, aunque no parece tener efectos sobre
la mortalidad. Se debería recomendar la inmunonutri- 5. Resumen
ción enteral, en el pre- y postoperatorio, en los que ya
presentan malnutrición preoperatoria. Como hemos revisado durante el tema, existen diver-
sos metanálisis y revisiones sistemáticas de la literatura
en este área de conocimiento41, 42, 47, 48. Los posiciona-
4.  Futuros inmunonutrientes mientos de las sociedades científicas son ya antiguas
En este área de conocimiento todavía quedan algu- ASPEN 200249, Guías Canadienses50 y revisión Cochra-
nos interrogantes por resolver, como es la influencia de ne51, centrándose fundamentalmente en pacientes tu-
la vía de administración de las fórmulas inmunomodu- morales. Podemos concluir que, como así indican las
ladoras (vía oral, sonda nasogástrica, gastrostomías, guías ASPEN y la evidencia existente desde su publica-
vía parenteral), la duración de la administración de la ción, las fórmulas inmunomoduladoras se deben utili-
fórmula inmunomoduladora, así como la dosis indivi- zar en los siguientes casos:
dualizada mínima eficaz de cada inmunonutriente. En
cuanto a la vía de administración, si podemos utilizar la •  Pacientes sometidos a cirugía electiva de tubo di-
vía enteral esta es la de elección. En cuanto al tiempo gestivo, moderada o severamente desnutridos (al-
necesario de administración, se recomienda un míni- búmina < 3,5 g/dl) (esófago, estómago, páncreas
mo de 5 días y un máximo de 10 días con un volumen y árbol biliar).
de 1 200-1 500 cc3 diario, aunque estas recomendacio- •  Pacientes severamente desnutridos (albúmina <
nes pueden variar en función de la patología que ha 2,8 g/dl) sometidos a cirugía de tubo digestivo bajo.
indicado el soporte nutricional, así como de la evolu- •  Pacientes con traumatismos penetrantes con Índi-
ción clínica del paciente. Por último, la mínima dosis ce de severidad mayor de 18, con lesiones en más
eficaz de cada inmunonutriente es complicada de esta- de dos sistemas (abdomen, tórax, cabeza, extre-
blecer, y salvo la arginina39 en el contexto de la cirugía midades, columna).
de los pacientes con cáncer de cabeza y cuello, en el •  Pacientes con traumatismo abdominal con índice
resto de inmunonutrientes no se han realizado estu- mayor de 20, es decir, lesiones severas en colon,
dios de titulación de dosis de manera individualizada. páncreas y duodeno, hígado y estómago.
Por otra parte, existen otros inmunonutrientes que •  Cirugía en tumores de cabeza y cuello.
están siendo investigados para evaluar sus efectos. Por
ejemplo, un ensayo clínico ha evaluado el efecto de la No existen suficientes datos en los siguientes pa-
ornitina alfa-cetoglutarato enteral en pacientes que- cientes:
mados (20-50% de la superficie corporal afectada),
mostrando una mejoría del balance nitrogenado43. La •  Pacientes con reconstrucción aórtica con EPOC y
administración de fibra con las fórmulas de nutrición probable ventilación mecánica prolongada.
enteral puede reducir la adherencia a la mucosa de las •  Lesión craneal con Glasgow < 8.
bacterias y mejorar la digestión de las grasas. También •  Quemaduras de tercer grado en > 30%.
se está revisando el papel de los probióticos en las fór- •  Necesidad de ventilador mecánico, pacientes mé-
mulas de nutrición enteral, compitiendo con las bacte- dicos no sépticos o quirúrgicos con riesgo de in-
rias patógenas44. fección.
Además, podemos incluir en esta lista de potenciales
inmunonutrientes a oligoelementos como el zinc. Este Estando totalmente contraindicadas:
mineral es un componente crítico de las enzimas impli-
cadas en la replicación y transcripción del ADN, como •  Pacientes que recuperan la nutrición oral en < 5
por ejemplo la ADN polimerasa. Además, juega un pa- días.
pel fundamental en la unión de los factores de trans- •  Pacientes en la UCI para monitorización.
cripción con las moléculas de ADN, este mecanismo de •  Obstrucción intestinal inferior a la zona de acceso.
acción lo hemos mencionado con algunos de los inmu- •  Hipoperfusión esplácnica.
nonutrientes previamente citados. Por ejemplo, la su- •  Hemorragia digestiva con vaso visible en la en-
plementación de zinc en ancianos ha demostrado una doscopia.
796 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

Con respecto a las guías ESPEN52, recomiendan la   4. DA de luis, R Aller, Oizaola, L Cuellar, MC Terroba.
utilización de fórmulas inmunomoduladoras en las si- Enteral immunonutrition (w3 enhanced formula
guientes situaciones: vs arginine enhanced formula) in head and neck
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pacientes quemados y con traumatismos. Grado A.   7. Feihl F, Waeber B. Is nitric oxide overproduction
•  Se deben utilizar fórmulas inmunomoduladoras the target of choice for the management of septic
en pacientes sometidos a cirugía de cáncer de shock? Pharmcaol Ther 2001; 91:179-213.
cuello. Grado A.   8. Gottschlich MM, Jenkins M, Warden GD, Baumer
•  Se deben utilizar fórmulas inmunomoduladoras T, Havens P, Snook JT, Alexander JW. Differential
en pacientes sometidos a cirugía de cáncer de ab- effects of three enteral dietary regimens on selec-
domen. Grado A. ted outcome variables in burn patients. JPEN
•  No se pueden hacer recomendaciones directas 1990; 14:225-236.
para los pacientes quemados por la existencia de   9. Saffle JR, Wiebke G, Jennings K, Morris SE, Barton
datos insuficientes. RG. Randomized trial of immune-enhacing enteral
nutrition in burn patients. J Trauma 1997; 42:793-
No obstante, nos encontramos ante una de las áreas 800.
de conocimiento en soporte nutricional que más interés 10. Berger MM, Spertini F, Shenkin A. Trace element
genera, siendo frecuentes los posicionamientos de so- supplementation modulates pulmonary infection
ciedades científicas o revisiones/análisis de la literatu- rates after major burns: a double blind placebo
ra53. De este modo, en una reciente revisión sistemática controlled trial. Am J Clin Nutr 1998; 68:365-371.
de la literatura en pacientes con cirugía electiva de pa- 11. Chuntrasakul C1, Siltham S, Sarasombath S, Sitta-
tología tumoral de tubo digestivo alto se demuestran pairochana C, Leowattana W, Chockvivatanavanit
claros beneficios coste-efectivos con el uso de estas fór- S, Bunnak A Comparison of a immunonutrition
mulas al disminuir las infecciones postoperatorias y la formula enriched arginine, glutamine and ome-
estancia hospitalaria54, estimándose unos ahorros por ga-3 fatty acid, with a currently high-enriched en-
paciente de 3 300 dólares por infecciones y 6 000 dóla- teral nutrition for trauma patients J Med Assoc
res por estancias55. Por último, existen áreas, en las cua- Thai. 2003 Jun; 86(6):552-61.
les la investigación es escasa, como por ejemplo la ciru- 12. Tan HB, Danilla S, Murray A, Serra R, El Dib R, Hen-
gía oncológica a nivel ginecológico56, o patologías derson TO, Wasiak J. Immunonutrition as an adju-
como la pancreatitis aguda, en la que algún ensayo vant therapy for burns. Cochrane Database Syst
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Tema 51. 
Metabolismo hídrico en los pacientes con
nutrición artificial: importancia y tratamiento
de la hiponatremia
Emilia Gómez Hoyos
Ana Ortolá Buigues
Juan José López Gómez
Beatriz Torres Torres
Daniel Antonio De Luis Román
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Clínico Universitario de Valladolid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 799-817.

1. Introducción
2. Fisiopatología de la hiponatremia
3. Manifestaciones clínicas de la hiponatremia
4. Diagnóstico y etiología de la hiponatremia en pacientes con nutrición artificial
5. Tratamiento de la hiponatremia en nutrición artificial
6. Resumen
7. Bibliografía

1. Introducción artificial, sobre todo en los que reciben nutrición paren-


teral (NP). Este soporte nutricional se administra cuando
La hiponatremia (disminución de la concentración sé- la vía enteral está excluida o contraindicada, habitual-
rica de sodio o natremia sérica) es la alteración del me- mente como consecuencia de una cirugía mayor diges-
tabolismo hídrico más frecuente en la práctica clínica. tiva (neoplasias, isquemia intestinal, obstrucción intesti-
Su prevalencia a nivel hospitalario varía desde un 30- nal, etc.) y de otras alteraciones del aparato digestivo
42% cuando es definida como natremia < 136 mmol/l1, 2 (pancreatitis aguda, vómitos intratables, diarreas, etc.)7, 8.
descendiendo a un 19,7% en aquellos con natremia Estos cuadros clínicos con frecuencia se acompañan de
< 135 mmol/l3. La hiponatremia se produce por una una situación de antidiuresis, originada tanto por estí-
alteración de los mecanismos que regulan el agua cor- mulos fisiológicos de la ADH como por la presencia de
poral, habitualmente por una disminución de la capaci- SIADH (de probable etiología neoplásica, abdominal y
dad renal de eliminar agua libre (antidiuresis), secunda- farmacológica). La situación de antidiuresis combinada
ria a un incremento no osmótico de la arginina con el incremento del aporte de líquidos por la NP pro-
vasopresina (AVP), la hormona antidiurética (ADH) del duce un descenso de la natremia sérica. También pue-
humano4. Este incremento puede estar causado bien den sumarse pérdidas corporales de sodio que exacer-
por estímulos fisiológicos (estrés post-quirúrgico, dolor, ban la hiponatremia. En relación con lo expuesto
náuseas, etc.) o por una secreción no fisiológica e ina- previamente, en un estudio retrospectivo realizado en
propiada de la ADH (síndrome de secreción inapropiada 222 pacientes con NP, se detectó hiponatremia (natre-
de ADH o SIADH). La elevación persistente de ADH com- mia sérica < 135 mmol/l) hasta en un 30% de los pa-
binada con un aumento del aporte de agua (oral o pa- cientes9. Esta mayor frecuencia de hiponatremia en los
renteral) originan una dilución del plasma, con la conse- pacientes con NP no es reproducible en los pacientes
cuente aparición de hiponatremia5. Ambas situaciones con nutrición enteral (NE), al ser un tipo de paciente más
previas son frecuentes en los pacientes hospitalizados6 y similar a la población general hospitalaria y recibir un
probablemente más aún en los pacientes con nutrición menor aporte de líquidos que con el soporte parenteral.

799
800 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

De hecho, en un estudio reciente, la frecuencia de hipo- nución significativa de la morbimortalidad, con la co-
natremia (natremia sérica < 136 mmol/l) en pacientes rrección de la misma; entre otros motivos porque no es
con NE fue de un 25%10. ético privar del tratamiento a ningún paciente. Sin em-
La hiponatremia no solo es importante por su elevada bargo, en estudios observacionales sin ninguna inter-
prevalencia, sino más aún por la morbimortalidad que vención, se ha encontrado una disminución de la mor-
asocia. En varios estudios se ha encontrado una mayor talidad en la hiponatremia grave tratada activamente1, 21.
mortalidad en los pacientes con hiponatremia frente a En cuanto a la hiponatremia leve, Waikar et al, obser-
aquellos sin presencia de hiponatremia durante la hospi- varon una atenuación del riesgo de mortalidad en el
talización1, 3, 11-17. Esta mayor mortalidad tiene lugar tan- subgrupo de pacientes en los que se corrigió la hipona-
to en los casos de hiponatremia grave (< 120-125 tremia3. Respecto a la estancia media, en pacientes con
mmol/l) como en los de hiponatremia leve (130-134 hiponatremia asociada al SIADH, se objetivó una dismi-
mmol/l)3. De la misma manera, se ha observado un in- nución significativa de la misma con el tratamiento
cremento de la mortalidad con discretos descensos en la efectivo de la hiponatremia22. Para que el tratamiento
natremia (4-5 mmol/l)15. Incluso algunos autores han sea efectivo, es necesario administrarlo en base al tipo
encontrado una menor mortalidad en pacientes con ci- y la etiología de la misma. Por ello, es importante reali-
fras de natremia al ingreso comprendidas entre 138- zar previamente un diagnóstico correcto de la hipona-
142 mmol/l, llegando a definir este rango como normo- tremia23.
natremia14. En NP, la tasa de mortalidad también es
mayor en los pacientes con hiponatremia frente a aque-
llos sin hiponatremia9. En estos pacientes la hiponatre- 2.  Fisiopatología de la hiponatremia
mia mantenida (75% de todas las natremias de cada La hiponatremia es un trastorno de la regulación del
paciente inferior a 135 mmol/l) se asoció de forma inde- balance de agua, originado fundamentalmente por
pendiente a una mayor mortalidad tras ajustar por una ganancia neta de agua, sin implicar una mayor o
edad, sexo, índice de masa corporal (IMC) e índice de menor cantidad de sodio corporal. Esta mayor canti-
Charlson (OR 7,38 [IC 95%: 1,07-50,8])9. Al igual que en dad de agua corporal en la mayoría de las ocasiones es
población general hospitalaria, es difícil clarificar si la hi- debida a una secreción no osmótica de la ADH. La ADH
ponatremia es la causa directa de mortalidad o simple- evita la eliminación renal de agua libre y favorece la
mente es un marcador de gravedad de la enfermedad dilución del sodio plasmático4-6. En ausencia de esta
subyacente. En principio, la mortalidad se atribuye a la
elevación, únicamente aparecerá hiponatremia si el ri-
propia hiponatremia cuando esta es grave, ya que se ha
ñón no dispone de la suficiente cantidad de soluto
comprobado cómo su tratamiento activo disminuye la
para eliminar todo el líquido aportado24.
mortalidad en una tercera parte1. En pacientes con NP,
apenas se objetivó hiponatremia grave (< 1%), pero en
cambio sí se constató hiponatremia sostenida durante el 2.1. Hiponatremia mediada por hormona
ingreso9. Por lo tanto, se intuye una probable contribu- antidiurética
ción de la propia hiponatremia al agravamiento de la
enfermedad de base y a la disfunción orgánica. A través La ADH es un nonapéptido sintetizado por el cuerpo
de las alteraciones metabólicas adversas con las que se de las neuronas de los núcleos supraóptico y paraven-
ha relacionado hiponatremia, como son: la respuesta triculares del hipotálamo, desde donde migra a través
inotrópica negativa, la disminución de la gluconeogéne- de sus axones a la hipófisis posterior. Aquí se almacena
sis hepática, el aumento de la resistencia a la insulina y en gránulos y se libera al plasma cuando se incrementa
una alteración del remodelamiento óseo18, 19. Por otra la osmolalidad plasmática. Una vez desciende la osmo-
parte, varios estudios en población hospitalaria han co- lalidad plasmática por debajo de 280 mOsmol/kg, la
rroborado una asociación entre la presencia de hipona- secreción de ADH debería inhibirse. Sin embargo, exis-
tremia y una mayor estancia hospitalaria14, 17, 20. También ten situaciones en las que no se suprime, como son: el
en los pacientes con NP se verificó esta tendencia, de descenso del volumen plasmático circulante efectivo, el
manera que la ausencia de hiponatremia se asoció de estrés postquirúrgico, la náusea, el dolor y la secreción
forma independiente con una menor estancia hospitala- inapropiada de ADH o SIADH25. Por otra parte, el défi-
ria (< 30 días), tras ajustar por factores de confusión cit de la hormona adrenocorticotropa (ACTH), al pro-
(OR 3,89; IC 95%: 2,11-7,18; p = 0,001)9. En los pa- ducir un descenso de la cortisolemia, induce una secre-
cientes con NE no existen estudios que aborden el tema, ción hipotalámica de la CRH (hormona liberadora de
pero probablemente la hiponatremia también asocie corticotropina), que es acompañada por un incremen-
una mayor morbimortalidad, al igual que la población to de la ADH parvocelular26, 27. Una vez en plasma, la
general hospitalaria. ADH se une a sus receptores: V1 (vascular, hepático y
Respecto a la necesidad e importancia del tratamien- adenohipófisis) y V2 (túbulo colector renal). A través de
to de la hiponatremia, no existen estudios prospectivos este último receptor desempeña su principal acción;
aleatorizados que hayan podido demostrar una dismi- tras unirse a él, activa la cascada de señalización intra-
Tema 51.  Metabolismo hídrico en los pacientes con nutrición artificial… 801

celular que origina un aumento significativo de los ca- lidad plasmática. A pesar de ello, ante descensos
nales de agua (acuaporinas) en la membrana apical del moderados del mismo se produce un incremen-
túbulo colector, incrementando la permeabilidad al to muy significativo de la ADH. Esto es debido a
agua y por tanto su reabsorción25. Esta acción conlleva un aumento de la sensibilidad de los osmorre-
la disminución del volumen de orina y el incremento de ceptores y del potencial de acción en las neuro-
la osmolalidad urinaria. Es por tanto la secreción no nas del núcleo supra-óptico, originado por la
osmótica de la ADH la responsable del incremento angiotensina II28.
neto de agua corporal y el desarrollo de hiponatremia. b. Otros estímulos. Se han descrito otros estímulos
En la figura 1 se muestra la fisiopatología de la hipo- no osmóticos como son: la náusea, el dolor, el
natremia mediada por vasopresina o ADH. estrés postcirugía y la hipoglucemia. La sensación
Secreción no osmótica de la ADH: de náusea, con o sin vómito, es el estímulo más
potente conocido hasta el momento. Mientras
a. Disminución del volumen plasmático circulante que un incremento mínimo en la osmolalidad
efectivo. El déficit de volumen plasmático circu- plasmática induce una elevación plasmática de
lante efectivo (hemorragia, pérdidas corporales ADH en torno a 5-20 pg/ml, un descenso mode-
de sodio, bajo gasto cardíaco, etc.), además de rado del volumen plasmático produce un incre-
activar el sistema renina angiotensina aldostero- mento de 10-100 ng/ml. La náusea causa una
na (SRAA), estimula también la secreción de elevación de hasta 200-400 pg/ml29. Situaciones
ADH a través de los barorreceptores. El principal de estrés, como por ejemplo el dolor, la hipoglu-
objetivo de la activación de estos dos sistemas es cemia y la cirugía, estimulan la liberación de nora-
el incremento del volumen plasmático, mediante drenalina dentro de los núcleos hipotalámicos, la
la reabsorción renal de sodio y agua. Al ser ma- que a su vez activa la secreción parvocelular de la
yor la ganancia de agua que de sodio, se produ- ADH25.
ce una dilución plasmática y en la mayoría de las c. SIADH. Se trata de una secreción no osmótica de
ocasiones aparece hiponatremia. El umbral de la ADH sin ninguna finalidad, a diferencia de la
secreción de ADH para los cambios de volumen secreción estimulada por la náusea, el descenso
plasmático es mucho mayor que para la osmola- del volumen plasmático, la postcirugía, etc., cuyo

N. paraventricular
- Disminución del
N. supraóptico volumen
plasmático
- Náuseas, dolor,
estrés quirúrgico
Neurohipófisis
- Secreción
inadecuada de
ADH (SIADH)

Secreción no osmótica de
Receptor vasopresina o ADH
V2

Figura 1.  Fisiopatología de la hiponatremia mediada por vasopresina o hormona antidiurética (ADH).
802 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

objetivo es conservar el agua corporal ante situa- natremia, se pone en marcha un mecanismo de defen-
ciones que implican una posible amenaza para el sa «escape a la ADH». Este mecanismo consta de la
organismo. El SIADH puede ser tanto ectópico internalización del receptor V2 con la consecuente dis-
(desde el tejido tumoral) como eutópico (desde la minución de la transcripción y transporte de acuapori-
neurohipófisis). Esta ultima puede ser inducida nas a la membrana apical. Así como de la inhibición de
por una amplia variedad de enfermedades, fár- los transportadores de sodio y urea, contribuyendo al
macos o lesiones del eje hipotálamo-hipofisario30. aumento de la excreción de soluto y arrastre de agua5.

En los pacientes con una secreción no osmótica de la


ADH, para el desarrollo de hiponatremia es necesario 2.2. Hiponatremia no mediada por hormona
un aporte extra de líquidos, bien mediante vía oral o antidiurética
parenteral. La cantidad de líquidos necesarios para pro-
En ausencia de una secreción no osmótica de la
ducir hiponatremia es inversamente proporcional al
ADH, la eliminación renal de agua libre depende de la
grado de alteración en la excreción del agua libre y vice-
cantidad de soluto excretado. En la figura 2, se mues-
versa. Si la ingesta de líquidos es extremadamente alta
tra la eliminación renal de agua libre en función de la
(por ejemplo, polidipsia primaria) un discreto deterioro
excreción diaria de soluto. Para eliminar 1 litro de agua,
de la dilución urinaria puede ser suficiente para expan-
se necesitan como mínimo 50-60 mOsmol de soluto.
dir el agua corporal y disminuir el sodio plasmático. A la
Cada mmol de sodio, potasio, cloro y urea contribuyen
inversa, si la capacidad de excreción de agua está muy
a 1 mOsmol. La urea se genera a partir del metabolis-
disminuida (por ejemplo, en un SIADH o elevación de
mo de las proteínas; cada 10 g de proteínas producen
ADH por náusea, dolor, etc.), un mínimo consumo de
agua puede ser suficiente para causar hiponatremia31. 50 mmol de urea. Por lo tanto, en ausencia de una
En la antidiuresis mediada por ADH la expansión de secreción no osmótica de la ADH, la ingesta insuficien-
agua corporal inicialmente aumenta el volumen plas- te de proteínas y/o sal dificultará la eliminación renal
mático. Este incremento estimula la secreción del pép- de agua libre, originando así hiponatremia24.
tido natriurético atrial e inhibe el SRAA, que favorecen
una mayor excreción renal de sodio. La finalidad de 3. Manifestaciones clínicas
esta mayor natriuresis es contrarrestar el incremento de la hiponatremia
del volumen extracelular, pero a su vez puede agravar
la hiponatremia si existe un bajo aporte de sodio32, 33. Las manifestaciones clínicas de la hiponatremia son
Por otra parte, para limitar el descenso progresivo de la principalmente neurológicas, como consecuencia del

30
Excreción diaria de solutos
(mOsm/día)
25
300
Aclaramiento de agua libre (l/día)

600
20 900

15

10

0
30 50 70 90 110
Osmolalidad urinaria (mOsm/l)

Figura 2.  Eliminación renal de agua libre en función de la excreción diaria de soluto.
Adaptada de Berl T, J Am Soc Nephrol 2008.
Tema 51.  Metabolismo hídrico en los pacientes con nutrición artificial… 803

edema cerebral inducido por el movimiento de agua al poproteinemia, es necesario corregirla por los niveles de
espacio intracelular34. La clínica neurológica oscila desde glucosa y proteínas totales séricas. El ajuste de natremia
síntomas inespecíficos como la cefalea, letargia y confu- por glucemia se debe realizar de manera que por cada
sión, hasta manifestaciones más graves como la dismi- 100 mg/dl de glucemia superior a 100 mg/dl se suman
nución del nivel de conciencia, coma, convulsiones y 1,6 mmol/l a la cifra de natremia sérica determinada, y
muerte35. La gravedad de la clínica neurológica depende cuando la glucemia es mayor de 400 mg/dl, se suman en
del grado de hiponatremia y la velocidad de instaura- 4 mmol/l en lugar de 1 mmol/l46. Para la corrección de la
ción de la misma. Un descenso rápido (en menos de natremia por nivel de proteínas totales (PT), tanto en situa-
24-48 horas) y moderado (> 10 mmol/l) de la natremia, ciones de hiper como hipoproteinemia se debe aplicar la
produce edema cerebral, con un incremento del volu- siguiente fórmula: (natremia x 93 / [99,1 – (0,7 x PT)]47. La
men neuronal de hasta un 180%. La situación anterior importancia del ajuste por PT radica en el método de de-
puede desembocar en una herniación cerebral por la terminación de electrolitos utilizado en situaciones de hipo
incapacidad de expansión en la cavidad craneal. Para o hiperproteinemia, donde la fracción líquida del suero se
evitar esta situación se activan mecanismos de defensa encuentra modificada. El método directo mide la cantidad
inmediatos (extrusión de iones) y más diferidos (extru- de ion en la fracción de agua, siendo más preciso en estas
sión de osmolitos orgánicos como el GABA, glutamato, circunstancias. Por el contrario, el método indirecto, mide
inositol, etc.), que logran reducir el edema cerebral pa- la cantidad de ion en litro de suero e infraestima la natre-
sadas las primeras 48 horas36. Transcurrido este tiempo, mia en situaciones de hiperproteinemia (pseudohipona-
la hiponatremia se considera ya crónica. tremia) y la sobreestima en situaciones de hipoproteine-
La hiponatremia crónica se caracteriza por una clínica mia (normo o pseudohipernatremia)48, 49.
neurológica de menor gravedad, al haberse completa- El método indirecto es ampliamente utilizado en todo
do los mecanismos de adaptación cerebral. Esta sinto- el territorio español, por lo tanto con niveles de proteínas
matología neurológica se caracteriza por una mayor alterados es recomendable ajustar la natremia por PT. De
inestabilidad en la marcha, caídas y deterioro cogniti- hecho, en un estudio realizado en 222 pacientes con NP
vo37, 38. En relación con lo anterior, se ha observado una con una frecuencia de hipoproteinemia (PT < 6,5 g/dl)
mejoría de la inestabilidad de la marcha y de la capaci- de un 93%, se encontró una diferencia de –3,5 mmol/l
dad cognitiva tras la corrección de la hiponatremia37, 39. entre la natremia sérica corregida por nivel de PT y la
Además de la clínica neurológica, la hiponatremia cró- natremia sérica del laboratorio. Pero el hallazgo más re-
nica puede asociarse a osteoporosis40. En la misma línea levante fue la detección de un 38% de pacientes con hi-
se ha objetivado una mayor frecuencia de fractura en ponatremia, previamente no diagnosticada por la ausen-
los pacientes con hiponatremia, debido probablemente cia de corrección por PT50. Esta cifra fue discretamente
al mayor riesgo de caídas y de osteoporosis41, 42. Por úl- superior a la descrita (27%) en pacientes críticos, tras
timo, recientemente se ha observado una mayor fre- comparar los métodos directo e indirecto, probablemen-
cuencia de hiponatremia grave en pacientes que previa- te por una menor frecuencia (85%) de hipoproteine-
mente presentaban hiponatremia crónica43. mia51. Sin embrago, la diferencia de natremia entre am-
bos métodos (4 mmol/l) fue similar a la observada en
4.  Diagnóstico y etiología de la hiponatremia pacientes con NP, tras aplicar la fórmula de corrección.
en pacientes con nutrición artificial
4.2. Clasificación del tipo de hiponatremia
4.1. Confirmación de la hiponatremia y diagnóstico etiológico de la misma
y de la cifra real de natremia
4.2.1.  Valoración de la volemia
En primer lugar, debe descartarse la presencia de
una hiponatremia traslocacional secundaria a hiperglu- Para un correcto diagnóstico y tratamiento de la hipo­
cemia, alteración presente hasta en un 50% de los pa- natremia, es imprescindible clasificar bien la volemia
cientes con NP44. También es importante descartar la clínica del paciente. Los pacientes con hiponatremia
pseudohiponatremia, ya que algunos pacientes con NP pueden presentar: hipovolemia (disminución del líqui-
desarrollan ocasionalmente hipertrigliceridemia, con do extracelular), euvolemia (líquido extracelular normal
cifras de triglicéridos superiores a 400 mg/dl. Una for- o aumentado) e hipervolemia (líquido extracelular mal
ma de excluir ambas situaciones es la determinación de distribuido).
la osmolalidad plasmática con el osmómetro, que esta- El examen físico es esencial para la clasificación de la
rá elevada (> 290 mOsmol/kg) en la hiponatremia volemia. Entre los signos que ayudan a diferenciar los
traslocacional, normal (280-290 mOsmol/kg) en la distintos estados de volemia se encuentran: la presión
pseudo hiponatremia y habitualmente disminuida (< arterial (PA), la frecuencia cardiaca (FC), la presión ve-
280 mOsmol/kg) en la hiponatremia real45. nosa yugular (PVY), la tensión ocular39 y signos de ter-
En segundo lugar, para conocer la cifra real de natre­ cer espacio como la ascitis, edema pulmonar y edemas
mia sérica en situaciones de hiperglucemia y de hiper/hi- periféricos (valorables en ausencia de hipoalbumine-
804 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

mia moderada). Lo más fácil es detectar signos indica- en la polidipsia primaria y en situaciones con baja in-
tivos de tercer espacio; si están presentes, podremos gesta de sal. Por otra parte, tanto la osmolalidad plas-
hablar de una hiponatremia hipervolémica. Tras excluir mática como la urinaria, junto al potasio sérico y urina-
un tercer espacio, si existe ortostatismo, hipotensión, rio, son necesarios para el cálculo del gradiente
PVY baja y FC elevada, estaremos ante una hiponatre- transtubular de potasio o GTTK (clave para el diagnós-
mia hipovolémica. En ausencia de signos claros de hipo­ tico del hipoaldosteronismo)52. Respecto al sodio uri-
volemia y de tercer espacio, hablaremos de hiponatre- nario, cifras inferiores a 20 mmol/l confirman la pre-
mia euvolémica. La tabla 1 muestra la clasificación del sencia de un bajo volumen plasmático circulante
tipo de hiponatremia en base al examen físico de la efectivo, si existen dudas en la exploración física. Tam-
volemia. bién el sodio y el potasio urinarios, junto al sodio séri-
Pero en ocasiones, es difícil discernir entre la hipona- co, predicen la respuesta al tratamiento con restricción
tremia euvolémica e hipovolémica, y podemos ayudar- hídrica (< 1 litro de líquidos) en el SIADH53.
nos de la evolución de parámetros analíticos, como la Finalmente, la determinación de cortisol basal y hor-
urea y la creatinina. De manera que en los pacientes monas tiroideas (TSH y T4L) es imprescindible para es-
con hiponatremia hipovolémica a medida que descien- tablecer el diagnóstico de SIADH en pacientes con hi-
de la natremia se incrementan la urea y la creatinina; ponatremia euvolémica. Principalmente el cortisol
por el contrario, en los pacientes con hiponatremia eu- basal, ya que en un estudio prospectivo hasta un 3,8%
volémica, estos parámetros disminuyen39. Por otra par- de los pacientes con hiponatremia euvolémica clasifi-
te, los pacientes con hipovolemia presentan habitual- cados inicialmente como SIADH fueron diagnosticados
mente un sodio bajo en orina (< 20 mmol/l), como de insuficiencia suprarrenal secundaria54. La hiponatre-
consecuencia de la activación del SRAA que induce una mia euvolémica secundaria a hipotiroidismo es infre-
reabsorción de sodio por la nefrona. Salvo los pacien- cuente, sobre todo en pacientes con hipotiroidismo no
tes con hiponatremia hipovolémica secundaria a pérdi- grave (TSH < 100)55.
das renales de sodio (diuréticos, hipoaldosteronismo De la historia clínica se han de recoger antecedentes
con o sin déficit de cortisol), en los que el sodio urina- de neoplasia (tumores con producción ectópica de
rio estará elevado. Así como en los pacientes con hipo- SIADH), enfermedades pulmonares y neurológicas. Así
natremia euvolémica mediada por ADH, donde la ne- como, el consumo diuréticos (fundamentalmente tiazi-
frona no reabsorbe sodio al estar el SRAA inhibido por das) y fármacos que estimulen la producción de ADH
el incremento de volumen plasmático39. (opiáceos, carbamacepina, fluoxetina, etc.). Por últi-
mo, recabar información sobre historia compatible con
4.2.2.  Datos de laboratorio e historia clínica cuadros de tercer espacio (insuficiencia cardiaca, cirro-
sis, síndrome nefrótico, etc.), hipovolemia (hemorra-
Tras realizar la valoración clínica de la volemia, para
gia, diarrea, fístulas intestinales, ostomías, etc.) y eleva-
completar el diagnóstico de hiponatremia es necesario
ción fisiológica de la ADH (náuseas, vómitos, dolor y
solicitar una serie de parámetros analíticos y recabar
estrés postcirugía).
algunos datos de la historia clínica.
Entre los parámetros analíticos destacan: la osmola-
lidad plasmática (OsmP), la osmolalidad urinaria (Osm 4.2.3.  Diagnóstico etiológico de la hiponatremia
U) y los iones (sodio y potasio) en orina (muestra aisla-
Hiponatremia hipervolémica
da). La cifra de osmolalidad plasmática ayudará a ex-
cluir la presencia de una hiponatremia traslocacional y Entre las causas principales de hiponatremia hiper-
de la pseudohiponatremia. La osmolalidad urinaria in- volémica se encuentran la insuficiencia cardiaca y la
forma indirectamente sobre los niveles de ADH, por lo cirrosis hepática con ascitis. Otras menos frecuentes
tanto estará elevada en todos los pacientes con hipo- son el síndrome nefrótico y la insuficiencia renal cróni-
natremia salvo en aquellos con ADH suprimida como ca/aguda con edemas.

Tabla 1.  Clasificación del tipo de hiponatremia en base al examen físico de la volemia clínica

Tipo de hiponatremia Hipervolémica Hipovolémica Euvolémica


· Presión arterial disminuida
TERCER ESPACIO · Frecuencia cardiaca elevada
AUSENCIA DE TERCER
Exploración física (ascitis, edema · Ortostatismo
ESPACIO Y DE SIGNOS
característica pulmonar, edemas · Tensión ocular disminuida DE HIPOVOLEMIA
periféricos)
· Presión venosa yugular baja (onda del
pulso por debajo del ángulo del esternón)
Tema 51.  Metabolismo hídrico en los pacientes con nutrición artificial… 805

Hiponatremia hipovolémica estrés < 17 µg/dl)59, por hipotiroidismo severo (infre-


cuente) y por el estímulo fisiológico de la ADH (dolor,
a. Sin pérdidas renales de sodio: hemorragias, quema-
náusea, vómito y estrés postquirúrgico). Todas ellas se
duras y pérdidas gastrointestinales (diarreas, fístu-
caracterizan por presentar una osmolalidad urinaria in-
las, obstrucción intestinal, íleo paralítico y vómitos).
apropiada (OsmU > 100 mOsmol/kg) para la hipoos-
b. Con pérdidas renales de sodio. La causa más fre-
molalidad plasmática (OsmP < 275-280 mOsmol/Kg).
cuente son los diuréticos del grupo tiazida (hasta
Así como un sodio urinario mayor de 40 mmol/l en
un 30% de los pacientes con hidroclorotiazida/clor-
presencia de un aporte suficiente de sodio45, 60. El
talidona desarrollan hiponatremia)56 y en menor
SIADH es una de las categorías más frecuentes54 y su
medida el hipoaldosteronismo (descrito en un 3,8%
diagnóstico se establece tras excluir la presencia de do-
de los pacientes hospitalizados)57. La hiponatremia
lor, náusea y un déficit de ACTH. En la tabla 2 se resu-
por hipoaldosteronismo sin o con déficit glucocor-
men los criterios diagnósticos esenciales del SIADH30 y
ticoideo (insuficiencia suprarrenal primaria) se
en la tabla 3 las principales causas de SIADH45.
acompaña de hiperpotasemia o niveles de potasio
En pacientes con nutrición artificial, probablemente
en el límite alto del rango normal, junto a acidosis
la hiponatremia euvolémica asociada a la «familia
metabólica. En primer lugar, se debe descartar in-
ADH» sea también el tipo más frecuente de hiponatre-
suficiencia suprarrenal primaria (cortisol basal < 5
mia. Entre otros motivos, por el tipo de paciente que
µg/dl y/o < 18 µg/dl tras estímulo con ACTH, recibe este soporte nutricional. En el caso de la NE, se
acompañado de ACTH elevada)58 y posteriormente
trata de pacientes con alteración de la deglución habi-
calcular el GTTK [k+o x (Osmp / Osmo) / K+p]. Una cifra
tualmente secundaria a patología neurológica de base
inferior a 5 confirma la disfunción del receptor mi-
(accidente cerebrovascular, traumatismo craneoen­
neralocorticoide. La ausencia de incremento del
cefálico, hemorragia subaracnoidea, enfermedad de-
GTTK tras la administración de 0,05 mg de fludro-
generativa, etc.) y a patología neoplásica de cabeza y
cortisona sugiere una resistencia del receptor mine-
cuello tratada bien con cirugía o con radioterapia. To-
ralocorticoideo y el aumento del GTTK indica un
das estas patologías se han descrito como causa de
déficit de aldosterona52. Este hipoaldosteronismo
SIADH30. Respecto a la NP, la mayoría de los pacientes
podrá ser primario con renina elevada (fármacos
han sido sometidos previamente a una cirugía abdomi-
inhibidores del SRAA, heparina, etc.) o secundario
nal (en la mayoría de los casos justificada por neoplasia
con cifras de renina bajas (AINE, nefropatía diabéti-
digestiva) acompañada de náuseas, vómitos y dolor.
ca, etc.). Por último, el síndrome pierde sal cerebral
Así como, de fármacos opiáceos para el control del do-
es una causa infrecuente de hiponatremia hipovolé-
lor. De hecho, en un estudio prospectivo de pacientes
mica. En un estudio prospectivo reciente de 100
con NP e hiponatremia, se objetivó hiponatremia euvo-
pacientes con hemorragia subaracnoidea e hipona-
lémica en el 75% pacientes (2/3 fueron diagnosticados
tremia no se detectó ni un solo caso59.
de SIADH y el resto de elevación fisiológica de la ADH
por dolor)61. Otras causas de hiponatremia euvolémica
4.2.3.3.  Hiponatremia euvolémica como la intoxicación aguda de agua, la polidipsia pri-
La hiponatremia euvolémica es el tipo de hiponatre- maria y el déficit de sal, son infrecuentes en pacientes
mia más común en población hospitalaria, con una con NP. Respecto al déficit de sal, en este grupo de
frecuencia de un 43-48%23, 54. Entre sus causas, la prin- pacientes se ha encontrado un desarrollo de hipona-
cipal es la mediada por ADH o «familia ADH», pacien- tremia independiente del bajo aporte de sodio62. En
tes con volumen circulante efectivo (VCEF) normal o ausencia de pérdidas corporales de sodio o una eleva-
elevado por una hipersecreción no osmótica de ADH ción no osmótica de la ADH, un paciente con bajo
no inducida por el estímulo barorreceptor. Este grupo aporte de sal solo desarrolla hiponatremia si no dispo-
comprende el SIADH, la hiponatremia por déficit de ne del suficiente soluto en la médula renal para elimi-
ACTH (cortisol basal < 11 µg/dl y en situaciones de nar todo el líquido aportado24. Esta última situación es

Tabla 2.  Criterios esenciales para el diagnóstico del SIADH. Adaptada de Ellison DH
et al. New England J Med, 2007.

· Osm plasmática < 275 mOsmol/kg


· OsmU inapropiada para la hiposmolalidad plasmática (OsmU > 100 mOsm/kg)
· Euvolemia clínica
· NaU > 40 mmol/l, en presencia de una ingesta suficiente de sal
· No uso reciente de diuréticos
· Ausencia de insuficiencia suprarrenal secundaria e hipotiroidismo severo

NaU (sodio urinario); Osm: osmolalidad; OsmU: osmolalidad urinaria.


806 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

Tabla 3.  Principales causas del SIADH. Adaptada de Verbalis et al. The American Journal of Medicine 2013

Tumores
Pulmonar/mediastino (ca de pulmón, mesotelioma, timoma)
No-torácico (ca duodenal, ca pancreático, ca urotelial/próstata, ca uterino, ca nasofaríngeo, leucemia, linfoma y
timoma)
Trastornos del sistema nervioso central
Lesión ocupante de espacio (tumor, absceso cerebral, hematoma subdural)
Enfermedad inflamatoria (encefalitis, meningitis, lupus sistémico, porfiria aguda intermitente)
Degenerativa/desmielinizante (Guillain-Barré, lesión medular, esclerosis múltiple)
Mixta (HSA, TCE, psicosis aguda, delirium tremens, sección del tallo hipofisario, cirugía transesfenoidal, hidrocefalia,
vasculitis, trombosis del seno cavernoso, ACV)
Farmacológico
Estímulo de la secreción de ADH (fenotiazidas, antidepresivos tricíclicos)
Pontenciación del efecto renal de la ADH o efecto directo (desmopresina, inhibidores de la síntesis de
prostaglandinas)
Efecto mixto o desconocido (IECA, carbamacepina y oxacarbacepina, clozapina, inhibidores de la recaptación de la
serotonina, vincristina)
Enfermedades pulmonares
Infecciones (tuberculosis, neumonía, aspergilosis, empiema, bronquiectasias)
Mecánico/ventilatorio (insuficiencia respiratoria aguda, EPOC, respiración mecánica)
Otros
Síndrome de inmunodeficiencia adquirida, arteritis de células gigantes, atrofia senil, idiopático

ACV: accidente cerebrovascular; ADH: hormona antidiurética; Ca: carcinoma; EPOC: enfermedad obstructiva crónica; HSA: hemorragia
subaracnoidea; IECA: inhibidores del sistema renina angiotensina aldosterona; TCE: traumatismo craneoencefálico.

infrecuente en los pacientes con NP, con el aporte de do en 20 pacientes con NP se objetivó un incremento
proteínas que reciben, se generan los suficientes osmo- significativo de la natremia a las 72 horas de la adminis-
les como para eliminar todo el líquido aportado. tración del tratamiento adecuado, alcanzando la euna-
Finalmente, en la tabla 4 se resume el diagnóstico tremia hasta el 75% de los pacientes61.
diferencial de la causa de hiponatremia en pacientes La utilización de fórmulas de cálculo de déficit de
con nutrición artificial. sodio para el tratamiento de la hiponatremia no es re-
comendable, ya que inducen errores terapéuticos im-
5. Tratamiento de la hiponatremia portantes. Esto tiene sentido, ya que la elevación de la
ADH hace que haya un exceso relativo de agua versus
en nutrición artificial
sodio63, 64. Y en la hiponatremia euvolémica el proble-
El objetivo del tratamiento de la hiponatremia varía ma es exclusivamente de agua.
en función de la gravedad neurológica de la misma. En Existen dos tipos de abordajes en el tratamiento de
pacientes con hiponatremia grave (disminución del ni- la hiponatremia; uno para los pacientes con clínica
vel de conciencia, confusión, convulsiones, etc.) el prin- neurológica grave (natremia < 120 mmol/l) y otro para
cipal objetivo es revertir la clínica neurológica del pa- los pacientes sin clínica neurológica grave (natremia
ciente39, 45. Sin embargo, en pacientes sin clínica > 120 mmol/l). Por lo tanto, el primer paso en el trata-
neurológica grave el objetivo es corregir la hiponatre- miento de la hiponatremia es la valoración de la clínica
mia franca (natremia < 135 mmol/l)45 y si es posible neurológica (figura 3), seguido de la volemia clínica y
alcanzar cifras en torno a 138-142 mmol/l39. Este rango el estudio analítico39, 45, 65.
de natremia se ha asociado con una menor mortalidad
intrahospitalaria14. Para lograr una corrección eficaz de 5.1. Manejo de la hiponatremia grave
la hiponatremia, el tratamiento debe ajustarse al tipo y
en pacientes con nutrición artificial
etiología de la misma (tratamiento adecuado), tanto en
pacientes sin nutrición artificial39, 45 como en pacientes El tratamiento de la hiponatremia grave no debe de-
con dicho soporte39. En un estudio prospectivo realiza- morarse; su finalidad es mejorar la clínica neurológica de
Tema 51.  Metabolismo hídrico en los pacientes con nutrición artificial… 807

forma inmediata a través de la disminución del edema Se considera hipercorrección al incremento de natre-
cerebral. Se ha demostrado que un incremento precoz de mia que supera el límite máximo de subida en las pri-
4 a 6 mmol/l en la natremia reduce en un 50% el edema meras 24-48 horas. Este límite debe tenerse en cuenta
cerebral. Para ello, es necesario administrar una solución únicamente en los pacientes con hiponatremia crónica
salina hipertónica (SSH) al 3%, con la suficiente osmolari- (duración mayor de 48 horas y/o desconocimiento de
dad como para mover agua del interior celular al espacio su comienzo), ya que presentan mayor riesgo de desa-
extracelular66. Esta solución hipertónica se puede pautar rrollo de síndrome de desmielinización osmótica (SDO)
en forma de bolos (100 ml cada 10 min, máximo 3) o en ante una subida moderada de la natremia45. Este ries-
perfusión continua (ritmo de 0,5 a 2 ml/kg/h, en función go depende del incremento de natremia a las 24 y 48
de la gravedad)45, 65. Durante su administración se debe horas, y no de la subida en las primeras 6 horas ni del
monitorizar la clínica neurológica y los niveles de natre- tipo de terapia utilizada. El límite máximo de elevación
mia cada 2 horas, retirándose tras obtener una mejoría de la natremia debe establecerse en base al grado de
significativa de la clínica neurológica y/o un incremento riesgo de SDO: bajo o alto (pacientes desnutridos, al-
en la natremia igual o superior a 6 mmol/l. Posteriormen- cohólicos, hipopotasemia o cirrosis avanzada). De for-
te es recomendable realizar una natremia cada 6-8 horas ma que, en pacientes con riesgo elevado de SDO,
y a las 24 horas postretirada para detectar un posible re- las últimas guías recomiendan un incremento máximo
descenso y una hipercorrección, respectivamente. de natremia en las primeras 24 horas y a diario, de

LEVES MODERADOS SEVEROS

· Cefalea · Náuseas · Estupor


SÍNTOMAS · Déficit de atención · Vómitos · Coma
· Alt. memoria · Desorientación · Convulsiones
· Marcha inestable · Somnolencia · Distrés
· Alt. cognitiva · Confusión respiratorio

El grado de severidad sube si: · Natremia sérica (NaS) < 120 mmol/l
· Descenso > 10 mmol/l de NaS en 24-48 h
· Hipoxia
· Hemorragia o tumor intracraneal
· Mujeres en edad fértil
· Niños

Figura 3.  Clasificación de la clínica neurológica en pacientes con hiponatremia.


Adaptada de Runkle I et al. Reviews in Clinical Gerontology, 2015.

Tabla 4.  Diagnóstico diferencial de la causa de hiponatremia en pacientes con nutrición artificial.

Tipo de hiponatremia NaU > 20 mmol/l NaU < 20 mmol/l


· Diuréticos (tiazidas) · Pérdidas digestivas (diarrea, vómitos,
Hiponatremia hipovolémica · Hipoaldosteronismo aislado fístulas, obstrucción intestinal, etc.)
· ISP 1.ª · Quemaduras
· Elevación fisiológica de la ADH (dolor,
· Bajo aporte de sodio/soluto
náusea, estrés post-cirugía)
Hiponatremia euvolémica (administración de fluidos
· ISP 2.º
hipotónicos)
· SIADH
· Insuficiencia cardiaca
Hiponatremia hipervolémica · Insuficiencia renal crónica/aguda · Cirrosis con ascitis
· Síndrome nefrótico

ADH: hormona antidiurética; ISP: insuficiencia suprarrenal; NaU: sodio urinario; SIADH: síndrome de secreción inapropiada de ADH.
808 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

8 mmol/l. En los pacientes con riesgo bajo de SDO la En algunos casos de hiponatremia hipovolémica
subida máxima en las primeras 24 horas y a diario, no como la asociada a diuréticos, además de reponer la
debe sobrepasar los 10-12 mmol/l, y a las 48 horas los volemia se debe retirar el fármaco. Así como en los
18 mmol/l45. Si a las 24-48 horas postratamiento, se pacientes con insuficiencia suprarrenal primaria es ne-
superan los límites previamente citados, se administra- cesario pautar hidrocortisona (20 mg/8 h por SNG o
rá la pauta correctora para inducir un redescenso de la 150-200 mg intravenosa en perfusión continua/24 h)
natremia. Esta pauta consta de la administración de y en los pacientes con hipoaldosteronismo se debe re-
suero glucosado (3 ml/kg/h) y desmopresina intraveno- tirar el fármaco causante (IECA, espironolactona, ami-
sa (2-4 µg cada 8 horas). Tras su inicio, se analizará la loride, AINE). En estos últimos, ocasionalmente será
natremia cada 2 horas y se suspenderá cuando se logre necesario asociar fludrocortisona (0,05 a 0,10 mg/día)
el descenso de natremia buscado (natremia inicial + al tratamiento, sobre todo si se debe a un fármaco
6-8 mmol/l)45. que no puede suspenderse inicialmente (por ejemplo,
Durante la administración de la SSH quizás sea pru- la heparina)39.
dente suspender transitoriamente la nutrición artificial.
Sobre todo en el caso de la NP, con la finalidad de
evitar interferencias con el aporte de volumen e iones 5.2.2. Tratamiento de la hiponatremia
de la misma. hipervolémica
Es importante no iniciar ninguna terapia susceptible Los pacientes con insuficiencia cardiaca son tratados
de elevar aún más la natremia (sueros isotónicos en hipo­ inicialmente con la terapia convencional, que consta
volémicos, furosemida, tolvaptan, etc.) en las primeras
de la disminución del consumo de sal, restricción de
24 horas postretirada de la SSH65, salvo en los pacientes
líquidos, furosemida y bloqueo SRAA. La finalidad de
con hiponatremia hipervolémica, en los que se deberá
este tratamiento es aumentar el volumen circulante
administrar furosemida durante y tras la retirada de la
efectivo (disminución de la postcarga con el bloqueo
SSH. Pasado este tiempo se iniciará el manejo de la hipo-
del SRAA y la precarga con la furosemida), inhibiendo
natremia no grave, como se detalla a continuación.
así el estímulo barorreceptor de la ADH. A pesar de
esta terapia, en los pacientes con hiponatremia no se
5.2. Manejo de la hiponatremia no grave alcanza la normonatremia. Probablemente, a conse-
en pacientes con nutrición artificial cuencia de la resistencia a la acción de la furosemida
En los pacientes sin clínica neurológica grave (natre- que ocurre cuando el consumo de sal es bajo67. De he-
mia > 120 mmol/l habitualmente), el tratamiento debe cho, se ha objetivado una respuesta eficaz y segura tras
ajustarse al tipo de hiponatremia (hipo; hiper y euvolé- la administración de un aporte significativo de sodio
mica) y a su etiología; respetando también los límites de (perfusión de solución salina hipertónica) acompañado
incremento máximo de natremia, previamente cita- de dosis altas de furosemida68. En estos casos de hipo-
dos39, 45. El objetivo principal de este tratamiento es al- natremia refractaria, los antagonistas del receptor V2
canzar y mantener la eunatremia; si no es posible, evitar de la vasopresina (tolvaptán o conivaptán) también
al menos el empeoramiento de la hiponatremia y el consiguen una corrección de la hiponatremia. Además
desarrollo de una hiponatremia grave. de una mejoría significativa de la clínica, una disminu-
ción de la mortalidad y de la tasa de reingreso69. El uso
de estos fármacos para el tratamiento de hiponatremia
5.2.1. Tratamiento de la hiponatremia
en pacientes con insuficiencia cardiaca únicamente
hipovolémica está aprobado en EEUU. Por lo tanto, en pacientes con
El primer y principal paso en la hiponatremia hipovo- nutrición artificial, además del tratamiento diurético y
lémica es reponer la volemia, consiguiendo así inhibir bloqueo neurohormonal, será conveniente disminuir el
la secreción de ADH inducida por el estímulo barorre- aporte de líquidos (concentrar la fórmula de NP si es
ceptor. En los pacientes con NE, se puede realizar me- posible y utilizar fórmulas hipercalóricas en NE) y ase-
diante la administración de solución salina isotónica gurar un aporte mínimo de 7,5-8 g de ClNa (128-136
(SFS al 0,9%), al igual que en los pacientes sin nutrición mEq de sodio), garantizando así la acción terapéutica
artificial. Sin embargo, en aquellos con NP se puede de la furosemida.
expandir el volumen plasmático, bien añadiendo SSF al En los pacientes cirróticos con descompensación hi-
0,9% o aumentando de forma isotónica el volumen de drópica e hiponatremia, los principios básicos del tra-
la NP con el incremento del aporte de sodio y líquidos tamiento son similares a los previamente descritos para
(disminuir la concentración de la glucosa y utilizar una la insuficiencia cardiaca. Salvo alguna puntualización
mezcla más diluida de aminoácidos). A las 24-48 horas como la administración conjunta de albúmina (a corto
del inicio del tratamiento, este debe modificarse en plazo), la paracentesis y la retirada o disminución de la
función de la restauración de la volemia y de la eleva- dosis de espironolactona en el caso de hipoaldostero-
ción de la natremia. nismo45. La actitud a tomar durante la administración
Tema 51.  Metabolismo hídrico en los pacientes con nutrición artificial… 809

de la nutrición artificial es la misma que en los pacien- serie de 43 pacientes con SIADH, se objetivó la eficacia
tes con ICCA e hiponatremia. del tratamiento pautado en función de los criterios
previamente citados71. Independientemente del trata-
5.2.3. Tratamiento de la hiponatremia miento seleccionado, hay que asegurar un aporte míni-
mo de sodio (8 gr de sal o 136 mEq de sodio) para
euvolémica compensar las pérdidas renales de sodio, secundarias a
El objetivo principal de tratamiento de la hiponatre- la inhibición del SRAA.
mia euvolémica es favorecer la eliminación renal de
agua libre. Así como, en la mediada por ADH, asegurar
un aporte adecuado de sodio para compensar las pér-
Descripción de los distintos tratamientos
didas renales. Dado que la polidipsia primaria, la intoxi- utilizados en el SIADH
cación aguda de agua y el déficit de sal, son causas a. Restricción hídrica (RH). La RH se define como la
infrecuentes de hiponatremia en los pacientes con nu- limitación del aporte de todos los líquidos (suero-
trición artificial, nos centraremos únicamente en el ma- terapia, diluciones de la medicación intravenosa,
nejo de la hiponatremia euvolémica mediada por ADH. líquidos orales, NP, agua en los alimentos y en la
En pacientes con nutrición artificial e hiponatremia NE, etc.) a menos de 0,5-1 litros al día. Únicamen-
euvolémica mediada por ADH, además de reducir el te es válida en los pacientes que mantienen una
aporte de líquidos e incrementar el aporte de sodio, mínima capacidad renal de eliminar agua libre, la
hay que tratar la causa etiológica. En primer lugar, ase- cual se estima a través del cálculo de la fórmula de
gurar un buen control de la náusea y el dolor, inhibien- Furst (NaU + KU/ NaS)53. De forma que, pacientes
do así la secreción parvocelular de ADH y favoreciendo con una cifra inferior a 0,5 responderán a una RH
la eliminación renal de agua libre. Si a pesar de ello, de 1 litro/día, mientras que aquellos con un valor
persiste la hiponatremia, probablemente se trate de de la fórmula de Furst entre 0,5 y 1 pueden res-
una hiponatremia asociada a SIADH y sea necesario in-
ponder a una RH igual o menor a 0,5 litros. Los
tensificar el tratamiento. Para establecer el diagnóstico
pacientes en los que el resultado sea superior a 1
definitivo de SIADH, previamente hay que descartar un
no van a responder a la RH, ya que su nefrona no
déficit de ACTH. En el caso de detectar una insuficien-
está eliminando agua libre de electrolitos. En este
cia suprarrenal secundaria, el tratamiento consistiría en
caso se evitan los líquidos no necesarios para que
aportar hidrocortisona (20 mg/8 h por SNG o 150-200
no empeore la hiponatremia, pero no para corre-
mg intravenosa en perfusión continua/24 h), repitien-
girla. La respuesta de un paciente determinado a
do la natremia a las 12, 18 y 24 horas del inicio de la
la RH puede ser cambiante y variar de un día para
terapia. La administración de glucocorticoides inhibe la
otro. Se considerará una respuesta positiva cuan-
secreción de la ADH y es frecuente que se produzca un
do la elevación de la NaS sea de un mínimo de 2
aumento significativo de la natremia. Siendo necesario
mmol/l cada día, durante al menos 2 días segui-
asociar desmopresina (1 µg cada 6-8 horas) para fre-
dos65. La RH no es práctica para todos los pacien-
nar el ascenso, tras producirse incrementos de 8-10
tes, hay pacientes que no la toleran y a veces es
mmol/l antes de cumplirse las primeras 24 horas de la
totalmente incompatible con la medicación endo-
terapia39. Si pasadas 72 horas del inicio de la hidrocor-
venosa necesaria o con la nutrición artificial. Ade-
tisona, persiste la hiponatremia, probablemente la
más, la RH a 0,5 l reduce la palatabilidad de la
causa sea un SIADH.
comida y puede empeorar el estado nutricional
del paciente, en caso de prolongarse varios días39.
Tratamiento del SIADH b. Urea oral. La urea incrementa la eliminación renal
El SIADH es responsable del 95% de las hiponatre- de agua libre y disminuye la natriuresis, lo que se
mias euvolémicas23 y la causa más frecuente de hipo- traduce en una elevación de la natremia sérica. En-
natremia en la población general hospitalaria70. En los tre sus principales desventajas se encuentran la
pacientes con nutrición artificial e hiponatremia, pro- mala palatabilidad que presenta, lo que disminuye
bablemente también sea la causa más frecuente de la adherencia diaria al tratamiento y el manteni-
hiponatremia. Según los últimos consensos de manejo miento de su efecto. Así como el desarrollo de azo-
de la hiponatremia, el tratamiento del SIADH (restric- temia con dosis altas. También se ha asociado con
ción hídrica < 1 l, furosemida, tolvaptán y urea) debe una tasa elevada de hipercorrección de la natremia
ser individualizado39, 45, 65. Este se selecciona en base a en su uso inicial72. Otro inconveniente es que, al
una serie de criterios como son: la capacidad renal para inducir la diuresis osmótica (interfiriendo con la re-
eliminar agua libre (resultado de la fórmula de Furst), la absorción de agua en toda la nefrona), puede cau-
osmolalidad urinaria, las limitaciones del paciente para sar deshidratación franca con hipernatremia en
cumplir la restricción hídrica y la duración estimada de pacientes que no puedan beber agua libremente72,
la causa de SIADH (transitorio o crónico)39, 45, 65. En una 73
. Por otra parte, al no ser un fármaco de uso ha-
810 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

bitual para otras patologías, se desconocen su será especialmente útil en pacientes hospitaliza-
efectos secundarios. Experimentos con urea hace dos, en los que la duración de su cuadro de SIADH
décadas revelaban que inducía descensos de la cal- se prevé limitada (por ejemplo, el SIADH secunda-
cemia y la magnesemia, entre otras alteraciones, rio a neumonía)65. En la tabla 5 se muestra la pro-
secundarias a un incremento en el aclaramiento bable duración del tratamiento del SIADH según la
renal de calcio y magnesio, inducidas por la diure- etiología y el riesgo relativo de SIADH crónico.
sis osmótica que ejerce el fármaco74. Además de Aunque este fármaco tiene también poca eviden-
ello, en pacientes con SIADH no existe suficiente cia en el tratamiento del SIADH, al menos conoce-
evidencia como para recomendar su uso75. Salvo mos bien sus efectos secundarios, al ser de uso
en los pacientes que se sospeche un SIADH tipo D frecuente en otras patologías. Entre los efectos se-
(mutación activadora del receptor V2), caracteriza- cundarios más frecuentes destaca la hipopotase-
do por una ausencia de respuesta a los antagonis- mia, reversible con la suplementación de potasio y
tas del receptor V2 (conivaptán y tolvaptán)39, 45, 73. tras la retirada de la furosemida.
c. Furosemida. La administración de la furosemida en d. Antagonistas del receptor de vasopresina (vapta-
pacientes con SIADH y OsmU superior a 350 nes). Los vaptanes revierten el efecto antidiurético
mOsm/kg, favorece la eliminación de agua libre de la ADH, a través del bloqueo competitivo del re-
modificando el gradiente osmótico entre la médu- ceptor V2 en el túbulo colector, favoreciendo la eli-
la renal y el túbulo colector76, 77. Esta acción tera- minación renal de agua libre e incrementándose así
péutica se mantiene, siempre y cuando se garanti- la natremia sérica. Tanto el conivaptán (uso intrave-
ce un correcto aporte de sodio a la médula renal. noso) como el tolvaptán (uso oral) han demostra-
Para ello, se debe incrementar de forma significati- do, en ensayos clínicos aleatorizados, seguridad y
va el consumo de sal (8-9 g de sal/día). La furose- eficacia en el tratamiento de la hiponatremia secun-
mida puede ser administrada tanto por vía intrave- daria a SIADH y en la hipervolémica64, 78, 79. En Euro-
nosa como por vía oral, en dosis habitualmente de pa solo está disponible el tolvaptán y únicamente
20 mg intravenosa cada 8 a 24 horas, o de 40 mg está aprobado su uso en hiponatremia asociada a
por vía oral cada 8 a 24 horas76, 77. La furosemida SIADH. Siguiendo las recomendaciones del algorit-

Tabla 5.  Estimación de la duración del tratamiento del SIADH según la etiología y el riesgo relativo de SIADH
crónico. Adaptado de Verbalis J. Endocrinol Nutr, 2010.

Riesgo relativo
Etiología del SIADH Duración probable del tratamiento
de SIADH crónico
Tumor productor de ADH de forma ectópica Determinada por la evolución de la
1
(oat-cell, etc.) enfermedad subyacente
Inducido por fármacos, con continuación del
Duración del tratamiento con el fármaco 1
uso de este (carbamacepina, etc.)
Hemorragia subaracnoidea 1-4 semanas 0,8
Determinada por la evolución de la
Masas cerebrales 0,8
enfermedad subyacente
Idiopático (senil del anciano) Indefinido 0,6
Accidente cerebrovascular 1-4 semanas 0,5
Insuficiencia respiratoria (EPOC) Depende de la respuesta a tratamiento 0,5
Lesiones cerebrales inflamatorias Depende de la respuesta a tratamiento 0,4
Infección VIH Depende de la respuesta a tratamiento 0,2
Traumatismo craneoencefálico 2-7 días a indefinido 0,2
Inducido por fármacos, con supresión del uso
Duración del tratamiento con el fármaco 0
de este (carbamacepina, etc.)
Neumonía 2-5 días 0

ADH: hormona antidiurética; EPOC: enfermedad pulmonar obstructiva crónica; SIADH: síndrome de secreción inadecuada de la
hormona antidiurética.
Tema 51.  Metabolismo hídrico en los pacientes con nutrición artificial… 811

mo multidisciplinar español de manejo de la hipo- Una vez conseguida la eunatremia, se mantiene la


natremia secundaria a SIADH, el tolvaptán estaría dosis que la logró. Se recomienda monitorizar la natre-
indicado en pacientes: no candidatos al tratamien- mia sérica a la semana y posteriormente de forma
to con RH y furosemida, en ausencia de respuesta a mensual si la etiología del SIADH persiste. Durante el
dichos tratamientos y en el SIADH crónico65. Tam- seguimiento, se aconseja disminuir la dosis de tolvap-
bién se ha demostrado seguridad y eficacia del tol- tán en un 50% si la natremia es superior a 140 mmol/l
vaptán en el tratamiento prolongado de los cua- y cuando sea necesario reducir la dosis de 7,5 mg/día
dros crónicos de SIADH80. En estos pacientes el aumentar progresivamente el intervalo a 48 horas,
riesgo de desarrollo de hipernatremia, si dejan de 72 horas y una semana39. Según la experiencia de algu-
beber agua, es muy bajo. Debido a que, al bloquear nos autores, los pacientes necesitan progresivamente
únicamente la reabsorción de agua en el túbulo co- menos dosis para mantener la eunatremia, salvo en los
lector, esta se incrementa de forma significativa en casos de SIADH ectópico82. Se suspenderá el fármaco
las porciones de la nefrona que más agua reabsor- cuando desaparezca la etiología del SIADH o el pacien-
ben de forma habitual (el túbulo proximal y el asa te esté durante varias semanas con 7,5 mg/semana.
descendente de Henle). En definitiva, solo se elimi- Tras su retirada se recomienda realizar una natremia a
na agua libre con el tolvaptán si ésta llega al túbulo las 2 semanas y reintroducirlo si el descenso de natre-
colector; siendo mayor la acuaresis cuanta más mia es superior a 4 mmol/l39. Por otra parte, es impor-
agua llegue, así como en las primeras 24 horas tras tante incrementar la dosis del fármaco si el paciente va
su comienzo. Por ello, se recomienda al paciente a recibir grandes cantidades de líquidos, como en caso
beber agua si desarrolla sed y compensar así la de la hiperhidratación intravenosa pautada durante la
acuaresis inicial, evitando un mayor incremento de quimioterapia. Así como reducir la dosis o espaciar el
la natremia en esas primeras 24 horas. Hecho im- intervalo de administración si el paciente desarrolla al-
probable que suceda, si se inicia el tratamiento si- gún episodio de hipovolemia (hemorragias, pérdidas
guiendo el protocolo recogido en el algoritmo mul- gastrointestinales, etc.)39. El principal efecto secunda-
tidisciplinar65 o la adaptación del mismo por alguno rio documentado en pacientes con SIADH es un incre-
de los autores81. De tal forma que se administra una mento leve de la sed, sin objetivarse en ningún pacien-
dosis de 7,5 mg de tolvaptán, con determinación te un incremento de las transaminasas80, como se ha
de la natremia sérica pre, a las 6 horas y a las 24 descrito en algún paciente con poliquistosis renal tra-
horas postinicio. Si el incremento de natremia en las tado con dosis de 120 mg/día. Aun así, no se reco-
primeras 6 horas es superior a 5 mmol/l, para frenar mienda su administración en pacientes con transami-
la subida de natremia se asocian 3 µg de desmo- nasas elevadas > 3 veces el límite superior de la
presina intravenosa o subcutánea y 3 ml/kg/h de normalidad (ficha técnica).
suero glucosado al 5% durante 3 horas39, 81.
Aplicación de los tratamientos del SIADH a los
A las 24 horas del inicio de tolvaptán, si el incremen- pacientes con nutrición artificial
to de la natremia es menor de 8 mmol/l y la natremia
persiste inferior a 135 mmol/l administramos 15 mg de En los pacientes con nutrición artificial, la restricción
tolvaptán, siempre y cuando no haya sido necesario hídrica no es aplicable durante la administración de la
frenar la subida con desmopresina. En ese caso, pauta- misma. De tal manera que el tratamiento se limita úni-
remos 7,5 mg de tolvaptán. Por el contrario, si el incre- camente al uso de furosemida intravenosa, junto al mí-
mento de natremia a las 24 horas ha sido mayor de nimo aporte de líquidos necesarios (concentrar la medi-
8 mmol/l, aplazamos a un día la siguiente dosis de tol- cación endovenosa, la fórmula de la NE y si es posible la
vaptán (7,5 mg). Es importante evitar la administración de NP) y al incremento del aporte de sodio (aporte mí-
conjunta de otras terapias que incrementen la natre- nimo de 136 mEq/día). Si a pesar de ello persiste la hi-
mia (RH y furosemida) y está totalmente contraindica- ponatremia, se puede administrar tolvaptán por sonda
do su inicio en las primeras 24 horas tras la administra- nasogástrica en los pacientes con NE y por vía oral en
ción del suero hipertónico al 3%. los pacientes con NP. Para ello es imprescindible que el
A las 48 horas del comienzo del tolvaptán, se analiza- paciente con NP conserve la deglución y el primer tra-
rá de nuevo la natremia y si persiste inferior a 135 mmol/l mo del duodeno. Según la recomendación de expertos,
se aumentará la dosis de tolvaptán de 7,5 a 15 mg/día y la administración de tolvaptán en pacientes con nutri-
de 15 a 30 mg/día. ción artificial es segura y eficaz cuando se pauta si-
Si a las 72 horas no se ha logrado la eunatremia, se guiendo las indicaciones del algoritmo multidisciplinar
incrementará de nuevo la dosis de tolvaptán, en 15 mg/ adaptado39, 81 junto a una perfusión del suero glucosa-
día. Aunque la dosis máxima de tolvaptán aprobada do. Esta solución glucosada es necesaria debido a que
para el tratamiento de la hiponatremia asociada a los pacientes con nutrición artificial no disponen de la
SIADH es 60 mg/día, raramente se precisan dosis supe- capacidad de tomar agua libremente si desarrollan sed,
riores a 30 mg/día para alcanzar la eunatremia. y poder compensar así la acuaresis inicial. Salvo esta
812 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

consideración, el resto del protocolo es idéntico al des- encontrado: una disminución de la mortalidad en la
crito previamente para pacientes sin nutrición artificial. HipoNa grave tratada activamente y una atenuación
En la figura 4 se muestra el protocolo de inicio de tol- del riesgo de mortalidad en la corrección de la HipoNa
vaptán, adaptado del algoritmo multidisciplinar, en pa- leve. La corrección de la HipoNa solo se logra con el
cientes con nutrición artificial. tratamiento ajustado al tipo y a la etiología de la mis-
Tras la retirada de la nutrición artificial se debe re­ ma. Por ello, es importante diagnosticar correctamente
evaluar de nuevo al paciente y si persiste la hiponatre- la HipoNa. A continuación se resumen los pasos a se-
mia por SIADH, seleccionar el tratamiento más adecua- guir en el manejo adecuado de la HipoNa en los pa-
do en función de las indicaciones recogidas en la cientes con nutrición artificial:
tabla 6. En estos pacientes debe tenerse en cuenta su
estado nutricional, ya que algunas terapias como la 1) Valorar la gravedad de la HipoNa. Si el paciente
restricción hídrica (< 0,5 litros) pueden dificultar una presenta clínica neurológica grave administrar so-
ingesta adecuada y limitar el consumo de los suple- lución salina hipertónica. En ausencia de grave-
mentos orales39. Aunque en estos casos podrían admi- dad neurológica, pautar el tratamiento en fun-
nistrarse las fórmulas más concentradas. ción del tipo y etiología de la HipoNa.
Finalmente, en la figura 5 se resume el tratamiento de 2) Valorar la volemia clínica del paciente. En función
la hiponatremia ajustado al tipo y etiología de la misma de la exploración física clasificar la HipoNa en vo-
durante la administración de la nutrición artificial. lémica, volémica o hipervolémica. Si existen du-
das, valorar la evolución de la urea y la creatina
con el descenso de la natremia: aumento (HipoNa
6. Resumen
hipovolémica) y descenso (HipoNa hipervolémica).
La hiponatremia (HipoNa) es el trastorno del meta- 3) Historia clínica y estudio analítico de HipoNa
bolismo del agua más frecuente en la práctica clínica, (iones-osmolalidad en plasma y en muestra aisla-
sobre todo en pacientes hospitalizados y más aún en da de orina; cortisol basal y hormonas tiroideas).
pacientes con nutrición artificial. Independientemente En base a lo anterior, confirmar el tipo de HipoNa
de su frecuencia, esta alteración es importante por la y establecer su etiología: pérdidas digestivas, diu-
mayor morbimortalidad que asocia, objetivada tam- réticos, hipoaldosteronismo aislado, insuficiencia
bién en los pacientes con nutrición artificial. Respecto suprarrenal primaria, elevación fisiológica de
a su tratamiento, en estudios observacionales se ha ADH, SIADH, insuficiencia suprarrenal secunda-

Tabla 6.  Tratamiento de la hiponatremia no grave asociada a SIADH tras la retirada de la nutrición artificial.
Terapia Indicaciones Precauciones
· Fórmula Furst (NaU + KU/NaS): · RH < 0,5 L disminuye la palatabilidad de la
· < 0,5 (RH a 1 l); 0,5-1 (RH 0,5 l); comida (evitar en pacientes desnutridos)
Restricción
· > 1 (no respuesta RH)
hídrica
· Capacidad de cumplimiento (medicación
intravenosa, sueroterapia, suplementos orales)
· OsmU > 350 mOsm/kg · Incrementar significativamente el consumo
· SIADH transitorio de sal para mantener la eficacia (con
Furosemida
cuidado en HTA, monitorizar PA)
· Vigilar el potasio plasmático
· Ausencia de respuesta a RH e incapacidad para · A su inicio, evitar la administración
su cumplimiento conjunta con otras terapias que eleven la
Tolvaptán · Ausencia de respuesta a furosemida natremia (furosemida, RH)
· OsmU < 350 mOsmol/kg y Furst > 1
· SIADH crónico
· Mutación activadora del receptor V2 (sospechar · Mala palatabilidad con inducción de la
ante la ausencia de respuesta a tolvaptán) náusea (evitar en pacientes desnutridos)
· Riesgo de deshidratación e hipernatremia
Urea
en pacientes sin capacidad para beber
agua libremente (ancianos, pacientes
institucionalizados, deterioro cognitivo, etc.)
HTA: hipertensión arterial; KU: potasio urinario; NaU: sodio urinario; NaS: sodio sérico; OsmU: osmolalidad urinaria;
PA: presión arterial; RH: restricción hídrica; SIADH: síndrome de secreción inadecuada de ADH.
Tema 51.  Metabolismo hídrico en los pacientes con nutrición artificial… 813

INICIO de 7, 5 mg de TV con NaS basal (> 120 mmol/l)


+ 500 cc de SG 0,5% iv/24 h

↓ NaS / NO ↑ NaS NaS a las 6 h ↑ NaS ≥ 5 mmol/l

Incremento 1 l de SG al 5% a
NaS ≤ 5 mmol/l pasar en 24 h
+
3 µg de DDAVP iv

A las 24 h del inicio de TV: suspender perfusión de SG 5% y NaS


En función del incremento de NaS:
↑ ≤ 8 mmol/l: NaS < 135 mmol/l (TV 15 mg) y NaS ≥ 135 mmol/l (TV 7,5 mg)
↑ > 8 mmol/l: aplazar dosis de TV (7,5 mg) a las 48 h

NaS a las 48 h : < 135 mmol/l ↑ dosis (15 a 30 y 7,5 a 15 mg/día) y si ≥ 135 mmol/l
(misma dosis que el día previo)

Figura 4.  Protocolo de inicio de tolvaptán en pacientes con SIADH y nutrición artificial.
TV: tolvaptán, NaS: natremia sérica, SG: suero glucosado, DDAVP: desmopresina.
Adaptado del algoritmo multidisplinar español de manejo del SIADH. Nefrología, 2014.

REPONER LA VOLEMIA

Nutrición parenteral (NP)


HipoNa Nutrición enteral (NE)
Opción A: SFS al 0,9% iv
SFS al 0,9% iv
HIPO‐volémica Opción B: ↑ Na y volumen de NP
Además, en caso de: Diuréticos (retirar), ISP 1ª (hidrocortisona),
Déficit aislado de aldosterona (fludrocortisona)

DISMINUIR EL APORTE DE LÍQUIDOS + Na (mínimo 136 mEq/día)

NE : Fórmula hipercalórica NP : Concentrar la fórmula y la medicación iv


HipoNa
SIADH
EU‐volémica ↑↑ fisiológica ADH
OsmU > 350: Furosemida (F)
ISP 2ª (déficit
Dolor (analgesia) de ACTH)
No respuesta a F: Tolvaptán (si es
Náusea (antihemético) Hidrocortisona
posible)

DISMINUIR EL APORTE DE LÍQUIDOS + Na (mínimo 136 mEq/día)


HipoNa FUROSEMIDA
OTROS: Bloqueo SRAA, paracentesis y albúmina (ascitis)
HIPER‐volémica
NE: Fórmula hipercalórica NP: Concentrar la fórmula y la medicación iv

Figura 5.  Tratamiento de la hiponatremia no grave ajustado al tipo y etiología de la


misma, durante la administración de la nutrición artificial. SFS: suero fisiológico
salino; ISP: insuficiencia suprarrenal primaria; Na: sodio; SRRA: sistema renina
angiotensina aldosterona.

ria, insuficiencia cardiaca aguda y cirrosis con suprarrenal primaria y fludrocortisona en algu-
ascitis. nos casos de hipoaldosteronismo aislado.
4) Tratamiento ajustado al tipo y etiología de la HipoNa: • 
Hipervolémica. Disminuir el aporte de líquidos
(fórmula hipercalórica en NE, concentrar la medi-
• Hipovolémica. Reponer la volemia con solución cación intravenosa y la fórmula de NP), adminis-
salina isotónica. Además de retirar el diurético, trar furosemida y un aporte mínimo de sodio de
administrar hidrocortisona en la insuficiencia 136 mEq/día para garantizar su acción terapéuti-
814 BLOQUE: SOPORTE NUTRICIONAL AVANZADO

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Tema 51.  Metabolismo hídrico en los pacientes con nutrición artificial… 817

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BLOQUE:
NUTRICIÓN PEDIÁTRICA
(Dr. José Manuel Moreno Villares)
TEMA 52. Valoración nutricional y patrones de referencia en el paciente
en edad pediátrica.
Dras. Cecilia Martínez Costa y Elena Crehuá Gaudiza

TEMA 53. Recomendaciones dietéticas en el paciente en edad pediátrica.


Dras. Susana Redecillas Ferreiro, Raquel Núñez Ramos y Raquel Lorite Cuenca

TEMA 54. Nutrición enteral en el paciente en edad pediátrica: vías y fórmulas.


Dres. Ana Belén Martínez Zazo, Óscar Rubio Cabezas y Consuelo Pedrón Giner

TEMA 55. Nutrición parenteral en el paciente pediátrico: vías y fórmulas.


Dres. Marta Germán Díaz y José Manuel Moreno Villares
Tema 52. 
Valoración nutricional y patrones de referencia
en el paciente en edad pediátrica
Cecilia Martínez Costa
Profesora Titular de Pediatría. Sección de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica. Hospital Clínico
Universitario. Valencia

Elena Crehuá Gaudiza


Sección de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica. Servicio de Pediatría. Hospital Clínico
Universitario. Valencia

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 821-828.

1.  Introducción
2.  Anamnesis
3.  Exploración clínica
4.  Exploración antropométrica
5.  Exploraciones complementarias
6.  Resumen y conclusiones
7.  Bibliografía

1. Introducción cuanto más incida sobre periodos de crecimiento ace-


lerado, en los que la situación de balance energético
Con una correcta evaluación nutricional es posible negativo será más acentuada.
orientar la presencia de trastornos nutricionales en los ni- Desde el otro extremo, los trastornos «por exceso»
ños o el riesgo de padecerlos. Su exploración sistemática obedecen a la incorporación de energía por encima de
es indispensable ante cualquier enfermedad y es la vigilan- las necesidades funcionales; independientemente de que
cia nutricional la que permitirá aplicar estrategias preventi- esta proceda de la ingesta excesiva de grasa, carbohidra-
vas y terapéuticas para poder revertir esta situación1-3. tos o proteína, el exceso se almacena en forma de grasa
En esta valoración hay que considerar que las conse- (obesidad). La tendencia de nuestra sociedad a la sobre­
cuencias clínicas de los trastornos nutricionales en el nutrición y a la obesidad ha propiciado el desarrollo de
niño tienen una relevancia especial, al poder influir ne- enfermedades crónicas en el adulto responsables de su
gativamente en su crecimiento. La repercusión de los morbimortalidad (obesidad, hipertensión arterial, ate-
trastornos «por defecto» varía en función del tiempo roesclerosis, síndrome metabólico, etc.). Por ello, su de-
de evolución. Cuando actúan sobre un periodo corto tección precoz, esto es, en los primeros años de la vida,
de tiempo, los efectos van a predominar sobre el alma- constituye la medida más eficaz para su control.
cenamiento de energía (grasa subcutánea) y, secunda- En los siguientes epígrafes se presentan de forma siste-
riamente, sobre estructuras de función alternativa, es- matizada los pasos de la valoración nutricional del niño,
pecialmente el músculo. Sin embargo, si se prolongan, siendo su aplicación ordenada el medio más efectivo para
implicarán negativamente al crecimiento. Por tanto, en orientar el diagnóstico de un trastorno nutricional.
la desnutrición aguda, la repercusión antropométri-
ca gravitará sobre el peso y los depósitos de grasa (plie-
gues cutáneos, perímetro braquial), y en la desnu­ 2. Anamnesis
trición crónica, sobre la talla (longitud, estatura). Constituye un pilar fundamental de la historia clínica
Situaciones patológicas como la enfermedad aguda pediátrica. Incluye la recogida detallada de los antece-
grave o los procesos crónicos pueden condicionar un dentes familiares y personales. Referentes al niño, se
importante deterioro de la nutrición, tanto mayor obtendrán los siguientes datos:

821
822 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

2.1. Antecedentes familiares 2.5. Actividad física


Preguntar la edad de los padres, número de herma- Se debe preguntar sobre la actividad física habitual
nos y existencia de enfermedades en miembros de la del niño, particularmente en casos de obesidad.
familia.
3. Exploración clínica
2.2. Antecedentes personales De forma general, la exploración clínica permite va-
Se debe interrogar sobre aspectos referentes a la lorar aspectos relacionados con la constitución (refle-
gestación, parto y enfermedades padecidas hasta el jo de la diversidad), las consecuencias morfológicas
momento actual. Incluirá el tipo de lactancia y la cro- del trastorno nutricional (por defecto o exceso) y la
nología de la alimentación complementaria, así como presencia, en su caso, de signos de organicidad. La
la aparición de intolerancias. Se detallarán los procesos inspección global del niño desnudo es lo que más in-
agudos y manifestaciones sospechosas de patología forma acerca de estos tres aspectos, aunque de una
crónica especificando la cronología de aparición, sobre manera subjetiva. En los niños/as mayores debe ex-
todo de tipo gastrointestinal1-3. En enfermos ya diag- plorarse siempre el grado de desarrollo puberal (telar-
nosticados de procesos concretos, se valorará el cum- quia y pubarquia en las chicas y genitalia y pubarquia
plimiento de las medidas terapéuticas por parte del en los chicos) (figura 1)4.
niño y de su familia.
•  Signos de sobrepeso y obesidad1-4: Son fáci-
les de apreciar debiendo considerar la distribu-
2.3. Perfil de desarrollo ción de la adiposidad: a) generalizada, b) perifé-
Consiste en construir en percentiles gráficos la pro- rica o ginoide cuando está localizada en caderas
gresión de las medidas de peso, talla y perímetro cra- o c) troncular o central o androide. En los niños/
neal. De esta forma, se puede visualizar longitudinal- as mayores el desarrollo puberal con frecuencia
mente la progresión desde el nacimiento. Constituye está acelerado. En algunos chicos el exceso de
un aspecto esencial para la interpretación del estado grasa subcutánea puede aparentar ginecomastia
de nutrición ya que aporta una información extraordi- que se descarta en la exploración al comprobar
nariamente valiosa, al permitir detectar el momento a ausencia de tejido glandular. La exploración
partir del cual el paciente ha ido desviándose de sus debe incluir siempre el registro de la tensión ar-
percentiles habituales. También posibilita reconocer ni- terial y su confrontación con los percentiles para
ños sanos (constitucionalmente pequeños), que siguen la edad y sexo.
percentiles bajos y que no son más que variantes de la •  Signos y formas clínicas de desnutrición1-3:
normalidad. Todo ello puede estar muy bien reflejado Los niños que están sufriendo un proceso de des-
en la cartilla de salud, que debe de ser solicitada a los nutrición vestidos pueden aparentar buen aspecto
familiares1-3. durante bastante tiempo; sin embargo, al explo-
rarlos desnudos observaremos que están perdien-
do masa corporal, con adelgazamiento de extre-
2.4. Ingesta dietética
midades y glúteos y piel laxa, señal de fusión del
La aproximación a la ingesta habitual del niño en panículo adiposo y masa muscular. Es importante
relación con sus necesidades orienta el origen pri- valorar la presencia de distensión abdominal, ha-
mario o secundario de un trastorno nutricional. Una llazgo muy sugestivo de enfermedad digestiva
encuesta detallada (recuerdo de 24 horas, cuestio- como la celiaquía. La exploración sistematizada
nario de frecuencia, registro de ingesta con pesada permitirá detectar los signos carenciales específi-
de alimentos durante varios días), consume mucho cos y los sospechosos de enfermedad2. Conviene
tiempo y requiere informatización de los datos, por tener en cuenta que en los pacientes con edema o
lo que es difícil realizarla en centros donde no se con distensión abdominal se pueden enmascarar
dispone de dietistas. El programa informático Diet- los signos derivados de la desnutrición3.
source® (Nestlé) resulta asequible y fácil de manejar. La forma clínica de desnutrición va a depender
Cuando no se puede realizar una encuesta comple- del tipo de déficit: si el déficit nutricional (sea
ta, al menos se debe conocer la historia dietética, primario o secundario) es energético global el
preguntando qué consume habitualmente en las niño se consumirá progresivamente hasta la ca-
principales comidas del día, cantidad aproximada y quexia; sin embargo, si la carencia es fundamen-
tipo de alimento, completándolo con la frecuencia talmente proteica, se producirá una descompen-
diaria o semanal de los principales grupos de ali- sación rápida y, por ello, la apariencia clínica será
mentos1-3. Se incluirán, en caso de consumirlos, pro- de desnutrición menos avanzada, edemas y sig-
ductos de nutrición enteral, así como suplementos nos carenciales severos, propios de la desnutri-
vitamínicos y minerales. ción proteica.
Tema 52.  Valoración nutricional y patrones de referencia en el paciente en edad pediátrica 823

Figura 1.  Estadios de maduración puberal según Tanner. Izquierda: Desarrollo mamario (telarquia).
Derecha: Vello pubiano en chicas (arriba); vello pubiano y desarrollo genital en chicos (abajo).

4. Exploración antropométrica ción del crecimiento (empequeñecimiento). Los lactantes


y niños pequeños van a ser los más vulnerables, por estar
Este método de exploración se ocupa de medir las
en un periodo de máxima velocidad de crecimiento.
dimensiones y proporciones corporales de forma obje-
tiva, permitiendo: 1) confrontar los valores con los pa- La sistemática antropométrica consiste, en primer
trones de referencia, 2) clasificar en grados el estado lugar, en obtener las medidas básicas con el instru-
de nutrición y 3) realizar un control evolutivo del mis- mental y la técnica apropiados para conseguir la máxi-
mo y su respuesta objetiva al tratamiento. ma precisión y reproductibilidad, y en segundo lugar,
La diferencia fundamental entre la antropometría in- en el empleo de estándares de referencia adecuados
fantil y la del adulto radica en que el niño está en creci- para interpretar las medidas con cálculos referidos a la
miento. Mientras que el adulto tiene una masa corporal mediana de la población (percentiles, z-score)6-8:
estable, el niño, en cada momento de su vida, tiene un
peso ideal dependiente de su talla. En una situación agu- 4.1. Medidas antropométricas básicas1, 3
da de malnutrición, inicialmente se detendrá la ganancia
ponderal, manteniéndose la velocidad de crecimiento; sin Su técnica e interpretación se recogen en la tabla 1 y
embargo, la evolución hacia la cronicidad asociará deten- en la figura 2. En niños gravemente discapacitados,
824 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

Tabla 1.  Medidas antropométricas básicas.

Medida / instrumental Interpretación


1. Peso
·  Valora la masa corporal (estado de nutrición actual).
Medir desnudo (niños mayores, en ropa interior).
·  Inespecífico (varía con alimentos, excretas, estado de
Material: Pesabebés (precisión 10 g); báscula
hidratación, organomegalias, etc.).
clínica (precisión 100 g).
2. Talla ·  Valora la dimensión longitudinal.
·  Longitud en decúbito (hasta los 2 años). ·  Se altera junto con el peso, en la malnutrición crónica.
·  Estatura en bipedestación. ·  Permite calcular el incremento de talla por unidad de tiempo
Material: Tablero horizontal en ≤ 2 años; talla (velocidad de crecimiento en cm/año). Muy sensible para
vertical o estadiómetro (precisión 0,1 cm). detectar fallos de crecimiento en niños de riesgo.
3.  Perímetro craneal ·  Valora indirectamente el desarrollo del sistema nervioso
Medir hasta 2-3 años. central. Se altera en la malnutrición intrauterina, y en
Material: Cinta métrica (precisión 0,1 cm). anomalías fenotípicas.
4.  Perímetro braquial
·  Muy útil para valorar la composición corporal (grasa y masa
Se mide en el brazo izquierdo o no dominante
muscular); informa del estado de nutrición actual.
(en el punto medio).
·  Requiere entrenamiento.
Material: Cinta métrica (precisión 0,1 cm).
5.  Pliegue tricipital
Se mide en el brazo izquierdo ·  Valoran la composición corporal (grasa) e informan
(en el punto medio, en su cara posterior). del estado de nutrición actual.
Material: Calibrador del pliegue cutáneo, ·  Requiere entrenamiento.
modelo Holtain (precisión 0,2 mm).
6.  Pliegue subescapular
Se mide por debajo y por dentro de la escápula ·  Valoran la composición corporal (grasa) e informan
izquierda con un ángulo de 45º. del estado de nutrición actual.
Material: Calibrador del pliegue cutáneo, ·  Requiere entrenamiento.
modelo Holtain (precisión 0,2 mm).

Perímetro braquial Pliegue tricipital Pliegue subescapular

Medir en el brazo Medir en el brazo no dominante, punto Medir en el lado no dominante, en


no dominante, medio entre acromion y olécranon en el punto localizado por debajo y por
punto medio. la parte posterior del brazo. dentro de la escápula izquierda.

Figura 2.  Técnica de medición del perímetro braquial y pliegues tricipital y subescapular.

la obtención de la talla puede resultar muy difícil a 4.2. Patrones de referencia y formas


causa de la escoliosis, las contracturas musculares o la de comparación
escasa colaboración. En estos casos se ha propuesto
la utilización de medidas segmentarias como la longi- Una vez recogidas las medidas del paciente, es ne-
tud del brazo o de la tibia, a partir de las cuales es cesario contrastarlas con los patrones de referencia,
posible estimar la talla mediante ecuaciones validadas puede hacerse mediante percentiles o calculando el
para este fin9. z-score (tabla 2).
Tema 52.  Valoración nutricional y patrones de referencia en el paciente en edad pediátrica 825

•  Percentiles (P) o escala ordinal. Usados general- elabo­rados, permite unificar criterios siempre que se
mente en versión gráfica, indican qué tanto por considere la maduración puberal variable. Como pa-
ciento de la población de la misma edad y sexo se trón internacional, se dispone de la versión 2000 del
halla por arriba o debajo de la medición efectua- CDC (Center for Disease Control) que sustituye a las
da. Son aplicables a dimensiones que no siguen NCHS en los Estados Unidos12, 13, 14. En Europa se ela-
una distribución totalmente normal, por lo que el boró en 2000 un patrón multicéntrico para niños
P50 corresponderá a la mediana. En la mayoría de europeos de 0-5 años (Euro-Growth 2000)15. En
las distribuciones, se considera normal un percen- 2006 la OMS desarrolló unos patrones de referencia
til entre el 2 y 98, aunque más importante que internacionales que incluyeron las medidas de peso,
ello es mantenerse en el mismo percentil en la longitud/estatura, perímetro craneal, perímetro del
evolución longitudinal con la edad. Este sistema brazo y pliegues tricipital y subescapular y los cálculos
presenta dos desventajas: no es útil para detectar de la relación peso/talla y del índice de masa corporal
cambios en los extremos de la distribución, ni per- (IMC). El objetivo de los mismos fue producir un es-
mite aplicar procedimientos estadísticos analíti- tándar de modo que la referencia describiera «cómo
cos. deberían crecer los niños» (patrón normativo). Inclu-
•  Z-score: Expresa las unidades de desviación es- yen datos de niños de 0-5 años con condiciones so-
tándar (DE) que una determinada medida se sepa- cioeconómicas, ambientales y de nutrición idóneas
ra de la mediana. Se obtiene un valor absoluto (alimentados con lactancia materna) procedentes
que permite un seguimiento más preciso, y es el de diferentes países (Brasil, India, Ghana, Noruega,
único medio para hacer comparaciones entre ni- Omán y Estados Unidos). Los datos se presentan en
ños de diferente edad y sexo. La mayor ventaja de tablas o en gráficos tanto de percentiles como de
este sistema radica en que pueden aplicarse pro- puntuaciones z. Están accesibles en http://www.who.
cedimientos estadísticos analíticos a una muestra int/childgrowth/es y disponen de software para su
de niños de distinta edad y sexo. En la tabla 2 se cálculo automático y para obtener gráficos percenti-
incluye el cálculo de la misma. lados16. Para el resto de edades (5-19 años) también
la OMS elaboró en 2007 tablas para peso, talla e IMC
En relación con los patrones de referencia, los con datos de escolares y adolescentes normonutridos
patrones locales resultan muy útiles para conocer el procedentes del estudio NCHS1; estos patrones y su
nivel de salud de una población pero tienen el incon- software están disponibles en: http://www.who.int/
veniente de que, si derivan de poblaciones sobre o growthref/en/.
desnutridas, al comparar una medida, su interpreta-
ción estará sesgada. Además, no permiten la compa- 4.3. Índices para clasificar el estado
ración con niños de otros países. En nuestro país, de nutrición
entre otros, se han difundido las de Orbegozo, cuya
primera edición fue en 1988 y la última edición es de Los derivados del peso y la talla son útiles para cla-
201110. También tenemos un estudio muy amplio sificar el estado de nutrición y realizar su seguimiento.
(Carrascosa et al, 2008)11 que pone en evidencia la Tienen la desventaja de que no informan sobre la
grave tendencia hacia la obesidad de los niños espa- composición corporal y se influyen por circunstancias
ñoles; su información es muy valiosa, pero al ser una que alteran el peso (estado de hidratación, masas u
población sobrenutrida, no parece recomendable organomegalias), de ahí que haya que interpretarlos
utilizarlos como patrón de referencia6. El uso de pa- cuidadosamente, tomando en consideración paráme-
trones internacionales, siempre que estén bien tros de composición corporal7. A partir del uso del

Tabla 2.  Cálculo del z-score.

Valor antropométrico real – Mediana población de referencia (P50)


Cálculo del z-score
Desviación estándar población de referencia
Desviación estándar Se obtiene a partir de las tablas originales o a partir de los
percentiles (para valores superiores a P50 se calcula dividiendo el
valor de la distancia P98-P50 entre 2; y para los inferiores a P50,
dividiendo la distancia P50-P2 entre 2).
Equivalencias P98 = +2; P97 = +1,88; P95 = +1,65; P85 = +1
P50 = 0
P15 = –1; P5 = –1,65; P3 = –1,88; P2 = –2
826 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

patrón internacional OMS 2006 y 2007, actualmente paración con las referencias en relación con la edad (curva
se propone el IMC y la relación peso/longitud para cla- percentilada, z-score); 2) área grasa del brazo (nomogra-
sificar el estado de nutrición tanto por exceso como ma de Gurney y Jelliffe)1, 19, y 3) grasa total y porcentaje de
por defecto. En la tabla 3 se expone la categorización grasa corporal mediante ecuaciones de predicción a partir
del estado de nutrición basada en parámetros antro- de dos pliegues de Slaughter y Lohman1, 20.
pométricos propuesta por la OMS para la nueva clasi-
ficación internacional de enfermedades (CIE-11)18. 4.4.2. Masa magra o masa libre de grasa
Se puede aproximar restando del peso la grasa total
4.3.1. Relación peso/talla
o también calculando el área muscular del brazo según
Valora la relación de estas medidas, independiente- el nomograma de Gurney y Jelliffe19.
mente de la edad. Es de gran ayuda para detectar pre-
cozmente la malnutrición aguda. Para ello se disponen 5. Exploraciones complementarias
de patrones percentilados. También se puede calcular
el z-score. Diversos exámenes complementarios son de utilidad
tanto en la exploración inicial como en el seguimiento
del estado de nutrición, así como en la respuesta a la
4.3.2.  Índice de masa corporal (IMC)
terapia nutricional.
Es un índice fácil de calcular, que se ha mostrado
muy útil para definir la obesidad, pero varía con la 5.1. Hematología
edad; por tanto, en Pediatría su valoración siempre se
realiza mediante curva percentilada o con el cálculo de La malnutrición suele asociar anemia carencial. Para
z-score. Para discriminar si un sobrepeso obedece a un orientar el trastorno hematológico, se deben valorar el
exceso de grasa (obesidad) o de masa magra (constitu- número de hematíes, la hemoglobina, el hematocrito,
ción atlética) habrá que realizar la medida del perí­ los índices eritrocitarios, el ancho de distribución de los
metro braquial y del pliegue cutáneo, o bien realizar hematíes y el recuento de reticulocitos. El recuento de
cálculos de la composición corporal referidos más ade- linfocitos no resulta de utilidad para valorar desnutri-
lante. ción, ya que se puede afectar por múltiples factores,
entre ellos: infecciones, inflamación, enfermedad tu-
moral y administración de fármacos, como corticoides
4.4. Valoración antropométrica
e inmunosupresores.
de la composición corporal
4.4.1. Masa grasa 5.2. Valoración de la síntesis proteica
Se puede valorar mediante: 1) medición de pliegues La concentración de proteínas séricas refleja el in-
cutáneos, principalmente tricipital y subescapular, y com- greso de nitrógeno, aunque una disfunción renal,

Tabla 3.  Categorización del estado nutricional en niños y adolescentes según la OMS (ICD-11 modificado)18.

Edad: Nacimiento a 60 meses16 Edad: 61 meses a 19 años17


Estado nutricional
Indicadores y puntos de corte Indicadores y puntos de corte
IMC para la edad >2 DE
Obeso z-score IMC (o peso/talla) >3 DE (2 DE aproximadamente IMC 30 kg/m2 a
los 19 años)
IMC-para la edad >1 a 2 DE
Sobrepeso z-score IMC (o peso/talla) >2 a 3 DE (1 DE aproximadamente IMC 25 kg/m2 a
los 19 años)
Posible riesgo de sobrepeso z-score IMC (o peso/talla) >1 a 2 DE No aplicable
Desnutrición aguda moderada z-score IMC <–2 a –3 DE z-score IMC <–2 a –3 DE
Desnutrición aguda grave z-score IMC <–3 DE z-score IMC <–3 DE
Desnutrición crónica moderada z-score Talla <–2 a –3 DE z-score Talla <–2 a –3 DE
Desnutrición crónica grave z-score Talla <–3 DE z-score Talla <–3 DE

Equivalencias percentiles y z-score en la tabla 2.


Tema 52.  Valoración nutricional y patrones de referencia en el paciente en edad pediátrica 827

hepática, hormonal o el efecto de diversos fárma- 5.4. Análisis de composición corporal


cos, pueden alterar sus valores. Al ser de síntesis
hepática, cualquier disfunción de este órgano afec- Además de la antropometría, se emplea la impe­
ta a su producción. Las proteínas séricas más utiliza- dancia bioeléctrica (BIA), habiéndose publicado va-
das en la clínica y sus valores de referencia en niños lores de normalidad de BIA en niños españoles22. La
son1, 21: conductividad eléctrica corporal total, o TOBEC, es un
método preciso e inocuo, pero actualmente, su apli-
•  Albúmina sérica: Refleja bien el estado de sínte- cabilidad está limitada por el coste. La densitome­
sis proteica, pero su vida media larga (18-20 días) tría (DXA) es una exploración que permite cuantifi-
explica su respuesta lenta con el tratamiento nu- car el contenido mineral óseo, por lo que es de gran
tricional. Según estudios publicados, su disminu- interés en niños con carencias dietéticas intensas
ción se asocia a una mayor morbilidad y mortali- (anorexia psicógena) o con enfermedades crónicas (fi-
dad. Valores normales: 3,5-5 g/dl. brosis quística, enfermedad inflamatoria intestinal,
parálisis cerebral infantil, etc.)1.
•  Transferrina: De vida media menor (8-10 días),
se eleva en situaciones como deficiencia de hierro
e hipoxia, y disminuye en las infecciones crónicas, 5.5.  Radiografía de carpo
enteropatías y cirrosis. Sus niveles deben ser eva- Es una exploración esencial en aquellos niños que
luados en el contexto de los depósitos de hierro. manifiestan un retraso de crecimiento, porque ayuda a
Valores normales: 200-400 mg/dl. interpretar su etiología. Su finalidad es valorar la ma-
•  Prealbúmina: Con una vida media corta (2 días) duración esquelética y relacionarla con la edad crono-
refleja bien cambios agudos en el estado nutri- lógica del niño. El método más utilizado para su lectu-
cional, pero disminuye rápidamente en las in- ra es la comparación con el atlas de Greulich y Pyle. Es
fecciones, estrés e inflamación y se eleva en la particularmente útil en el estudio de niños que consul-
disfunción renal, lo que reduce su utilidad en tan por tamaño corporal pequeño y que no represen-
el seguimiento nutricional del enfermo crítico tan más que variantes de la normalidad; así, por ejem-
o con infección aguda. Valores normales: plo, en el retraso constitucional del crecimiento, la
15-30 mg/dl. maduración ósea está retrasada y corresponde a la
•  Otras proteínas como la proteína ligadora del edad-talla (edad a la que la talla del niño estaría en el
retinol, fibronectina e IGF-1 tienen una vida percentil 50), sin embargo, en la talla baja familiar, van
media muy corta (horas), respondiendo rápida- acordes la edad cronológica y la maduración esqueléti-
mente a cambios en el estado nutricional. Las dos ca1. La malnutrición crónica, asociada o no a enferme-
últimas disminuyen rápidamente con el ayuno, dades sistémicas, se acompañan casi siempre de un
considerándose buenos marcadores nutricionales retraso de la maduración ósea.
en el enfermo agudo.
•  Proteína C reactiva (PCR): Es el mejor marcador
5.6.  Gasto energético por actividad
de inflamación general. Se sintetiza en el hígado y
sus niveles guardan relación inversa con la síntesis Se dispone de monitores calóricos y acelerómetros
de proteínas viscerales (sobre todo la prealbúmi- para medir la actividad física en un periodo concreto
na), aspecto a tener en consideración en el enfer- de tiempo, especialmente aplicable en niños obesos.
mo grave.
6. Resumen y conclusiones
5.3. Otros parámetros bioquímicos
La realización sistematizada de la exploración del esta-
Como el cinc, metabolismo del hierro, metabolismo do de nutrición constituye una herramienta muy sólida
calcio/fósforo, colesterol, niveles de vitaminas…, se se- para valorar la normalidad y sus variantes, y para distin-
leccionarán en función de las condiciones específicas guir precozmente desviaciones patológicas. Una anam-
del paciente. La cinquemia y el estado de los depósitos nesis bien dirigida orienta especialmente al diagnóstico
de hierro se determinan con mucha frecuencia en el del origen de un trastorno nutricional, máxime si se apo-
niño desnutrido por ser las carencias asociadas más ya en la encuesta dietética y en la evolución del perfil de
frecuentes, cuya corrección terapéutica va a favorecer desarrollo (al menos del peso y talla), anteriores a la con-
considerablemente la recuperación nutricional. En los sulta. La exploración clínica es lo que más nos informa
niños obesos con factores de riesgo cardiovascular se sobre la constitución (reflejo de la diversidad), las conse-
debe considerar la determinación del perfil lipídico (co- cuencias morfológicas del trastorno nutricional (por de-
lesterol y fracciones, triglicéridos), glucemia basal, ni- fecto o exceso) y la presencia, en su caso, de signos de
veles de insulina, el índice HOMA de resistencia a la organicidad. La antropometría, siempre que se aplique
insulina, ácido úrico, hormonas tiroideas y función he- la técnica de forma adecuada y con controles de calidad,
pática1, 5. informa de las dimensiones corporales y de la composi-
828 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

ción corporal; la cuantificación de la velocidad de creci- 10. Fernández C, Lorenzo H, Vrotsou K, Aresti U,


miento constituye la medida más sensible para valorar Rica I, Sánchez E. Estudio de crecimiento de Bil-
fallos del crecimiento. Con la información derivada de bao Curvas y tablas de crecimiento (estudio
estos tres niveles, se seleccionarán las pruebas com­ transversal). Fundación Faustino Orbegozo. Bil-
plementarias dirigidas a valorar el grado de depósitos bao, 2011.
orgánicos (determinaciones bioquímicas, impedancia 11. Carrascosa A, Fernández JM, Fernández C, et al.
bioeléctrica, densitometría, etc.), la maduración es- Estudio transversal español de crecimiento 2008.
quelética (radiografía de carpo), y en su caso, aquellas Parte II: valores de talla, peso e índice de masa
para el diagnóstico específico de la enfermedad. corporal desde el nacimiento a la talla adulta. An
Pediatr (Barc) 2008; 68 (6):552-69.
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2015. Pp 33-40. logía, Hepatología y Nutrición Pediátrica.
Tema 53. 
Recomendaciones dietéticas en el paciente
en edad pediátrica
Susana Redecillas Ferreiro
Raquel Núñez Ramos
Raquel Lorite Cuenca
Unidad de Gastroenterología, Soporte Nutricional, Hepatología y Trasplante hepático pediátrico.
Hospital Universitario Vall d’Hebron. Barcelona

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 829-846.

1. Introducción
2.  Recomendaciones dietéticas en el niño sano
3.  Aspectos prácticos
4. Conclusiones
5. Bibliografía

1. Introducción tos de alimentación, que se han visto relacionados con


el patrón actual de morbimortalidad. Por ello, las reco-
La nutrición infantil, tiene como principal objetivo mendaciones nutricionales se basan ahora en la pre-
asegurar una alimentación equilibrada que proporcio- vención de las enfermedades crónicas y degenerativas
ne todos los nutrientes necesarios para conseguir un causadas por una mala alimentación1.
crecimiento y desarrollo adecuados, evitar deficiencias A finales del siglo pasado, el Food and Nutrition
nutricionales específicas, instaurar hábitos de alimen- Board americano, en el que participaron expertos de
tación correctos y prevenir, desde la infancia, los pro- Estados Unidos y Canadá, publicó unas nuevas ingestas
blemas de salud derivados de una dieta inadecuada recomendadas que denominaron Dietary Reference In-
que pueden aparecer en la edad adulta. takes (DRI) o ingestas dietéticas de referencia. Estos
En las últimas décadas, se ha experimentado un pro- nuevos valores, expresados como estimaciones cuanti-
gresivo conocimiento de la influencia que ciertos as- tativas de la ingesta de nutrientes útiles en la planifica-
pectos nutricionales tienen sobre el estado de salud de ción y evaluación de la ingesta dietética de personas
los individuos1. Como consecuencia, diversos organis- sanas, en sus distintas etapas y diferenciación por sexos,
mos internacionales (FAO, OMS, Unión Europea) llevan comprenden cuatro valores: Requerimiento Medio Esti-
más de 60 años trabajando para establecer unas pau- mado (EAR), Ingesta Recomendada (RDA), Ingesta Ade-
tas o guías de referencia, que sirvan de modelo para cuada (AI) y Nivel de Ingesta Máxima Tolerable (UL)1.
garantizar un adecuado estado nutricional en cada
una de las etapas de la vida de una persona o colectivo.
Las primeras recomendaciones se establecieron con 2.  Recomendaciones dietéticas en el niño sano
el fin de evitar carencias nutricionales, recomendándo-
2.1.  Requerimientos de energía
se para ello la ingesta diaria de unas cantidades míni-
mas de nutrientes, haciendo especial hincapié en la Las necesidades energéticas en los niños preescola-
ingesta calórica, los aportes de proteínas y de algunas res, escolares y adolescentes se basan en la cantidad de
vitaminas y minerales. En ese contexto surgió el con- energía requerida para el gasto energético total (GET),
cepto de Ingestas Recomendadas, también conocidas que permita un grado de actividad física apropiado, un
en los países anglosajones como Recommended Die- crecimiento y desarrollo óptimo, con la promoción de
tary Allowances (RDA) o Recommended Nutritional In- la salud del niño a largo plazo.
takes (RNI) en Reino Unido y Canadá. Las necesidades energéticas diarias han sido publica-
Pero, con el paso de los años, las sociedades desarro- das por dos informes internacionales, siendo ambos
lladas han experimentado un gran cambio en sus hábi- muy similares1, 3.

829
830 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

• FAO/WHO/UNU 2004 (Food and Agriculture Or- vida.El gasto por actividad física (PAL, physical ac-
ganization/World Health Organization/United Na- tivity level) se representa mediante un factor de
tions University). corrección a aplicar sobre el gasto energético ba-
• El Comité de Nutrición de la Academia de Ciencias sal (GEB) que fue publicado en 2004 por la OMS.
Americana, 2002 (Ingestas Dietéticas de Referen- Debido al sistema de cálculo del PAL, este incluye
cia-Dietary References Intakes, DRIs) (tabla 1). no solo el gasto por actividad, sino también el
gasto por crecimiento y la termogénesis inducida
El consenso de la FAO/WHO/UNU de 2004 establece por la alimentación2. En general, para definir el
las recomendaciones sobre las necesidades energéticas, grado de actividad consideraremos (tablas 3 y 4):
basándose en la estimación del GET y las necesidades – Actividad física ligera: niños que ocupan gran
para el crecimiento. El gasto energético se estableció mi- parte del tiempo en actividades sedentarias (TV,
diendo el GET con el método de agua doblemente mar- consolas, etc.), que no practican deporte de
cada y la monitorización de la frecuencia cardíaca. La forma habitual, que suelen usar coche u otro
energía empleada para el crecimiento se calculó de la vehículo para los desplazamientos.
media de ganancia de peso según edad (estándares de – Actividad física intensa: niños que caminan dis-
la OMS de peso para la edad) y de la composición del tancias largas o usan la bicicleta para desplaza-
peso ganado (10% grasa, 20% proteínas, 70% agua, mientos, que practican deportes con elevado
carbohidratos y minerales). gasto energético de forma regular.
Recordemos que los requerimientos energéticos du- – Actividad física moderada: niños que se situa-
rante el crecimiento y desarrollo se componen del me- rían entre los dos grupos anteriores, con una
tabolismo basal, gasto ligado a la termogénesis y al actividad física habitual, sin practicar de forma
propio acto alimentario, actividad física y energía para regular deportes de elevado gasto energético.
el crecimiento. • La energía empleada para el crecimiento como
porcentaje del GET disminuye del 35% al mes de
• El metabolismo basal se define como la energía vida hasta el 3% a los 12 meses de edad y perma-
empleada para mantener las funciones celulares y nece baja hasta el brote de crecimiento puberal,
tisulares del organismo, se suelen emplear las que aumenta hasta el 4%.
ecuaciones de Schofield para su cálculo (tabla 2).
• La termogénesis puede suponer un gasto adicio-
2.2.  Requerimientos de agua
nal energético pero dependerá de cómo está ves-
tido el niño y de la temperatura de su entorno. Los requerimientos de líquidos de calcularán en fun-
• La termogénesis de los alimentos se refiere a la ción de la edad (tabla 5), peso, estado de hidratación,
energía requerida para su ingestión, digestión así factores ambientales y enfermedad de base. Para calcu­
como para la absorción, utilización y transporte lar el mantenimiento se suele utilizar la fórmula de Ho-
de los nutrientes. Se estima en un 10% del gasto lliday-Segar (tabla 6), a ello se le sumarán los requeri-
energético diario. mientos específicos y la pérdidas.
• La actividad física es el componente más variable, Recomendaremos como única bebida indispensable
tendrá en cuenta la actividad habitual y el estilo de el agua. Otros tipos de bebida (zumos industriales,

Tabla 1.  Necesidades medias de energía (RDI), 2002/2005.

Edad (años) Peso (kg) Talla (cm) Kcal/kg Kcal/día


0-0,5 6 60 108 650
Lactantes
0,5-1 9 71 98 850
1-3 13 90 102 1300
Niños 4-6 20 112 90 1800
7-10 28 132 70 2000
11-14 45 157 55 2500
Varones
15-18 66 176 45 3000
11-14 46 157 47 2200
Mujeres
15-18 55 163 40 2200
Tema 53.  Recomendaciones dietéticas en el paciente en edad pediátrica 831

Tabla 2.  Ecuaciones de Schofield y de la OMS para la estimación del gasto metabólico
basal y modificado según la situación clínica.

Cálculo GEB Schofield: peso (kg) y talla (cm) Schofield: peso (kg) OMS
Niños
0-3 años 0,167 x P + 1517,4 x T - 617,6 59,48 x P - 30,33 60,9 x P - 54
3-10 años 19,6 x P + 130,3 x T + 414,9 22,7 x P + 505 22,7 x P + 495
10-18 años 16,25 x P + 137,2 x T + 515,5 13,4 x P + 693 17,5 x P + 651
Niñas
0-3 años 16,25 x P + 1023,2 x T - 413,5 58,29 x P - 31,05 61 x P - 51
3-10 años 16,97 x P + 161,8 x T + 371,2 20,3 x P + 486 22,4 x P + 499
10-18 años 8,365 x P + 465 x T + 200 17,7 x P + 659 12,2 x P + 746
Modificación del gasto energético en reposo (GER) en diferentes situaciones clínicas
Situación clínica Factor de multiplicación
Ayuno 0,9
Fiebre 1,2 por grado >37º
Insuficiencia cardíaca 1,25-1,5
Cirugía mayor 1,2-1,3
Sepsis 1,4-1,5
Quemados 1,5-2
Sedación 0,7-0,85
Pancreatitis 1,5-2

colas etc.) contienen exceso de azúcar, por lo que se ingeridas. Las proteínas de origen animal son de mayor
tendrá en cuenta el valor calórico de estas. La ingesta calidad biológica que las de origen vegetal, por su con-
de agua adecuada se expresa en la tabla 7. tenido en aminoácidos esenciales. Por ello, si el consu-
mo de lácteos es suficiente, las proteínas vegetales se-
2.3.  Necesidades de macronutrientes rán bien utilizadas, porque el triptófano y la lisina de la
leche se complementarán con la proteína de los cerea-
Las fuentes de energía del organismo se encuentran les. De la misma manera, las legumbres, deficitarias en
contenidas fundamentalmente en los alimentos, en forma metionina, formarán una proteína de alta calidad si las
de compuestos denominados macronutrientes, siendo juntamos con cereales. (por ejemplo, lentejas y arroz).
necesario que exista un equilibrio entre la energía proce-
dente de los tres macronutrientes principales. En pedia-
tría, el equilibrio nutricional aconsejado no varía mucho 2.3.2.  Requerimientos de lípidos
del recomendado para adultos (12-15% de proteínas, 30- Las grasas de la dieta son nutrientes de extraordina-
35% de lípidos, 50-60% de hidratos de carbono). A con- ria importancia a cualquier edad: son el principio inme-
tinuación se discutirán algunas particularidades. diato más energético (9 kcal/g), favorecen el transporte
de las vitaminas liposolubles y proporcionan ácidos
2.3.1.  Requerimiento de proteínas grasos esenciales –ácido linoleico (C18:2n-6) y ácido
Los requerimientos de proteínas se han establecido por α-linolénico (C18:3n-3)–. Su consumo es fundamental
grupos de edad que representan diferentes velocidades a lo largo de toda la edad pediátrica, especialmente en
de crecimiento (tabla 8)4, 5. Durante el crecimiento se pro- los períodos de rápido crecimiento6.
duce una disminución de las necesidades de proteínas. Los ácidos grasos son las moléculas más simples
Las necesidades proteicas entre 1-3 años representarán el que componen los lípidos de la dieta. Se clasifican
5-20% del valor calórico total (VCT), a partir de los 4 años según la longitud y el número de dobles enlaces de su
y en el adolescente serán del 10 al 30% del VCT. cadena (ácidos grasos saturados, monoinsaturados y
poliinsaturados). El contenido de la grasa ingerida in-
terfiere en la composición de los lípidos corporales,
Calidad y fuente del aporte proteico
por lo que tiene un papel importante en la prevención
Los requerimientos proteicos dependerán no solo de de las enfermedades crónicas más prevalentes. Por
la cantidad, sino también de la calidad de las proteínas ello, las recomendaciones sobre su ingesta deben
832 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

Tabla 3.  Requerimientos energéticos en niños en los tres niveles de actividad física.

Actividad física ligera Actividad física moderada Actividad física vigorosa


Años Peso
Kcal/día Kcal/kg/d PAL Kcal/día Kcal/kg/d PAL Kcal/día Kcal/kg/d PAL
1-2 11,5 950 82 1,45
2-3 13,5 1 125 84 1,45
3-4 15,7 1 250 80 1,45
4-5 17,7 1 350 77 1,50
5-6 19,7 1 475 74 1,55
6-7 21,7 1 350 62 1,30 1 575 73 1,55 1 800 84 1,80
7-8 24,0 1 450 60 1,35 1 700 71 1,60 1 950 81 1,85
8-9 26,7 1 550 59 1,40 1 825 69 1,65 2 100 79 1,90
9-10 29,7 1 675 56 1,40 1 975 67 1,65 2 275 76 1,90
10-11 33,3 1 825 55 1,45 2 150 65 1,70 2 475 74 1,95
11-12 37,5 2 000 53 1,50 2 350 62 1,75 2 700 72 2,00
12-13 42,3 2 175 51 1,55 2 550 60 1,80 2 925 69 2,05
13-14 47,8 2 350 49 1,55 2 775 58 1,80 3 175 66 2,05
14-15 53,8 2 550 48 1,60 3 000 56 1,85 3 450 65 2,15
15-16 59,5 2 700 45 1,60 3 175 53 1,85 3 650 62 2,15
16-17 64,4 2 825 44 1,55 3 325 52 1,85 3 825 59 2,15
17-18 67,8 2 900 43 1,55 3 400 50 1,85 3 925 57 2,15

Tabla 4.  Requerimientos energéticos en niñas en los tres niveles de actividad física.

Actividad física ligera Actividad física moderada Actividad física intensa


Años Peso
Kcal/día Kcal/kg/d PAL Kcal/día Kcal/kg/d PAL Kcal/día Kcal/kg/d PAL
1-2 10,8 850 1,40
2-3 13,0 1050 1,40
3-4 15,1 1 150 77 1,45
4-5 16,8 1 250 74 1,50
5-6 18,6 1 325 72 1,55
6-7 20,6 1 225 59 1,30 1 425 69 1,55 1 650 80 1,80
7-8 23,3 1 325 57 1,35 1 550 67 1,60 1 775 77 1,85
8-9 26,6 1 450 54 1,40 1 700 64 1,65 1 950 73 1,90
9-10 30,5 1 575 52 1,40 1 850 61 1,65 2 125 70 1,90
10-11 34,7 1 700 49 1,45 2 000 58 1,70 2 300 66 1,95
11-12 39,2 1 825 47 1,50 2 150 55 1,75 2 475 63 2,00
12-13 43,8 1 925 44 1,50 2 275 52 1,75 2 625 60 2,00
13-14 48,3 2 025 42 1,50 2 375 49 1,75 2 725 57 2,00
14-15 52,1 2 075 40 1,50 3 450 47 1,75 2 825 54 2,00
15-16 55 2 125 39 1,50 2 500 45 1,75 2 875 52 2,00
16-17 56,4 2 125 38 1,50 2 500 44 1,75 2 875 51 2,00
17-18 56,7 2 125 37 1,45 2 500 44 1,70 2 875 51 1,95
Tema 53.  Recomendaciones dietéticas en el paciente en edad pediátrica 833

Tabla 5.  Recomendaciones de líquidos según la edad. Tabla 7.  Ingestas adecuadas de agua. Ingestas
recomendadas (DRIs).
Volumen ml/kg/día
Edad
(máximo volumen) Edad Agua total (l/día)
1-2 años 80-120 (150) 1-3 a 1,3
3-5 años 80-100 4-8 a 1,7
6-12 años 60-80 9-13 a niños/niñas 2,4/2,1
13-18 años 50-70 14-18 a niñas/niñas 3,3/2,3

Tabla 6.  Necesidades de líquidos, ecuación de Tabla 8.  Requerimientos de proteínas.


Holliday-Segar.
RDA* Ingesta por día
Edad (años)
Peso Volumen de líquido g proteína/kg/d g/día
1-10 kg 100 ml/kg 0-0,5 1,52 9,1
1000 ml + 50 ml/kg por cada kg por 0,5-1 1,2 11
10-20 kg
encima de 10 kg (1500 ml total)
1-3 1,05 13
1500 + 20 ml/kg por cada kg por encima
<20 kg 4-8 0,95 19
de 20 kg
9-13 0,95 34

hacer referencia tanto al aporte total como a su com- 14-18 niños 0,85 52
posición (tabla 9). 14-18 niñas 0,85 46
En los primeros 6 meses de vida, la leche materna
cubre los requerimientos de lípidos, estimándose su Datos de Dietary Reference Intake 2002/2005.
contenido en grasa en 4-4,5 g/dl, en su mayoría trigli- *RDA = Recommended dietary allowance. Calculado de EAR + 2DS
céridos. Los ácidos grasos dependen de la dieta de la de EAR. Representa cubrir las necesidades de proteínas del
madre, y en parte son sintetizados por la propia glán- 97,5% de la población sana.
dula, habiendo demostrado que cubren las necesida-
des de ácidos grasos esenciales en esta etapa7.
Las grasas de las fórmulas infantiles deben constituir consumo de pescado como fuente principal de ome-
el 40-55% del aporte calórico total. Pueden ser de ori- ga-3 y limitar la ingesta de carnes grasas, embutidos
gen vegetal animal o una mezcla de ambas, siempre mantequilla, margarina y bollería industrial.
que se garantice una absorción del 85%. La directiva
europea limita la cantidad de ácidos láurico y mirístico, 2.3.3. Requerimientos de carbohidratos
así como de ácidos grasos trans. y fibra dietética
A partir de la edad preescolar se observa una ingesta
mayor a la deseable de alimentos con un alto conteni- Los hidratos de carbono deben constituir, en todas
do en grasas saturadas. En general, se recomienda que las etapas de la vida, el 45-65% del aporte energético
el consumo de colesterol sea menor a 300 mg/día, que global (tabla 10).Una ingesta adecuada de carbohidra-
los ácidos grasos esenciales constituyan el 3% del total tos contribuye a un aporte suficiente de fibra, hierro,
de la ingesta de energía diaria y las grasas saturadas tiamina, niacina, riboflavina y ácido fólico. En su mayo-
menos del 10% (tabla 9). Estas recomendaciones son ría (90%) procederán de hidratos de carbono comple-
aplicables también para el niño en edad escolar y ado- jos (cereales, pastas, féculas, farináceos, verduras y
lescente, donde es frecuente encontrar desequilibrios frutas) y un porcentaje minoritario, de azúcares sim-
en el aporte de nutrientes en forma de dietas ricas en ples (sacarosa, fructosa y glucosa). Debe moderarse el
grasas (35-50% del valor calórico total), con un bajo consumo de sacarosa, para prevenir la caries dental, la
índice de ácidos grasos poliinsaturados/saturados.Para hiperlipemia y la obesidad.
adecuar la cantidad de grasa de la dieta en esta etapa La fibra está compuesta por hidratos de carbono
es recomendable utilizar formas culinarias sencillas complejos no digeribles. La ingesta recomendada de
(hervido, plancha y horno, aunque pueden utilizarse fibra en g/día se puede calcular en niños mayores
los fritos con aceite de oliva y fritura a alta temperatura de 2 años como la edad en años + 5. Así, para un niño de
y de bajo tiempo), ingerir lácteos semidesnatados, in- 4 años sería 4 + 5 = 9 gramos de fibra al día. Las RDI
crementar el consumo de aceite de oliva, aumentar el han establecido niveles superiores, basados en una in-
834 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

Tabla 9.  Distribución recomendada de la grasa en la alimentación, expresada en


porcentaje del valor calórico total.

Grasa de la dieta Recomendación


30-40% en 1-3 años
Ingesta total de grasa
25-35% en 1-3 años
Ácidos grasos saturados <10%
AGPI n-6 (ác. linoleico) 5-10%
AGPI n-3 (ác. A-linolénico) 0,6-1,2%
n-6:n-3 ratio 5:1 hasta 10:1
Ácidos grasos monoinsaturados Sin restricción respecto total de grasa
Ácidos grasos trans* <2% de la energía

* A los efectos de las Directrices del Codex sobre Etiquetado Nutricional, se definen como ácidos
grasos trans a todos los isómeros geométricos de ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados
que poseen en la configuración trans dobles enlaces carbono-carbono no conjugado. En la dieta
occidental proceden en su mayoría de alimentos elaborados.

gesta protectora frente a la enfermedad coronaria de han sido aumentados a una dosis de 600 UI para el
14 g/1000 Kcal8. La relación recomendable entre fibra rango de 1 a 18 años. Para el primer año de vida, la AI
soluble e insoluble se define en 1:4 a 1:3, consideran- mantiene la dosis de 400 UI/día (tabla 11). No se debe
do que cuanto más joven sea el niño se debería dar un confundir el concepto de RDA con la idea de que dicha
mayor predominio a la fibra soluble. cantidad debe ser aportada de manera sistemática en
modo de suplemento, sin tener en consideración que
2.4.  Necesidades de micronutrientes esta ya puede ser aportada por fuentes dietéticas o in-
solación. El Comité de Nutrición de la Asociación Espa-
2.4.1.  Calcio y vitamina D ñola de Pediatría asume estas recomendaciones de
La vitamina D debe considerarse un nutriente par­ 400 UI/día en el niño menor de 1 año y de 600 UI/día
ticular, ya que puede ser sintetizado endógenamente, a partir de esta edad10. En el mismo sentido, la Acade-
siendo la piel la principal fuente de producción. Esto mia Americana de Pediatría, desde 2008, aconseja la
hace que sus niveles plasmáticos varíen con la radiación suplementación de 400 UI diarias en algunos grupos
solar, la hora del día, la estación del año, la pigmenta- de riesgo, entre los que se encuentran los prematuros,
ción de la piel y la superficie expuesta, entre otros fac- lactantes que tomen exclusivamente pecho, lactantes
tores. En relación con el aporte nutricional, son pocos alimentados con fórmula enriquecida cuando su con-
los alimentos que incluyen vitamina D entre sus compo- sumo no alcanza 1 litro diario o la cantidad que según
nentes naturales, de modo que en los últimos años ha su contenido en vitamina D llegue a suplir las 400 UI,
aumentado el número de productos fortificados, sien- etnias con pigmentación oscura de la piel, ingresos
do la leche líquida el único derivado lácteo que presen- prolongados en centros sin exposición solar o familias
ta aportes extra de forma sistemática. Respecto a las de cultura dietética o estilos de vida que puedan con-
fórmulas infantiles, los aportes son variables de unas llevar riesgo nutricional general11.
marcas a otras, ateniéndose a las recomendaciones de El calcio constituye el principal componente de hueso
la ESPGHAN, la AAP y a la legislación de la Unión Euro- y es esencial para el mantenimiento de una buena salud
pea y nacional (2015) con una referencia de 10 y 5 µg ósea. Aproximadamente, el 99% del calcio se encuentra
respectivamente para medio litro de leche. en el esqueleto, con pequeñas cantidades en el plasma
A finales de 2010, el Food and Nutrition Board del y el líquido extravascular. La masa ósea aumenta a lo
Instituto de Medicina de la Academia de Ciencias Mé- largo de la infancia para alcanzar su pico de máxima
dicas Americana publicó sus nuevas recomendaciones mineralización entre el final de la segunda y el inicio de
nutricionales de vitamina D y de calcio9. Las necesida- la tercera década de la vida. La adquisición de un pico de
des medias estimadas (estimated average require- masa ósea adecuado en la pubertad disminuye el riesgo
ments, EAR) para la vitamina D se fijan en 400 UI para de fracturas osteoporóticas en la edad adulta.
toda la población mayor de 12 meses y los requeri- Los requerimientos de calcio en la infancia dependen
mientos que cubren las necesidades del 97,5% de la de varios factores como la edad, el sexo, la actividad
población (recommended dietary allowances, RDA) física y múltiples consideraciones dietéticas.
Tema 53.  Recomendaciones dietéticas en el paciente en edad pediátrica 835

Tabla 10.  Alimentos ricos en fibra.

g de fibra
Alimento Ración o unidad (g)
por ración o unidad
Cereales de desayuno 30 0,4
Cereales ricos en fibra 30 8,4
Pan blanco 20 0,8
Pan de molde 25 0,7
Pan integral 20 1,8
Espinacas congeladas 150-200 9-12
Guisantes congelados 90 4,5
Judías verdes 150 4,1
Lechuga 125 1,2
Patata 125 2,5
Puerros 150-200 3-3,9
Tomate 150-200 2-2,8
Zanahoria 150 2,4-3,7
Judías blancas 80 5,6
Garbanzos 80 4,8
Lentejas 80 3,2
Albaricoques 50 (unidad) 0,9
Cerezas 175 (ración) 3
Ciruelas 80-100 (unidad) 0,7-0,9
Fresas 100 (ración) 1,8
Kiwi 100 (unidad) 1,8
Mandarina 50-100 (unidad) 0,7-1,4
Manzana 150-200 (unidad) 2,5-3,3
Melocotón 200 (unidad) 1,7
Melón 250 (rodaja) 1,5
Naranja 200 (unidad) 2,9
Pera 150 (unidad) 2,6
Plátano 150-180 (unidad) 2,9-3,5
Uvas 100-150 (ración) 0,4-0,7

Tabla 11.  Ingestas dietéticas de referencia (Dietary reference intake, DRI) para vitamina D.

Grupo de edad EAR (UI/día) RDA (UI/día) UL (UI/día)


0-6 meses * * 1000
6-12 meses * * 1500
1-3 años 400 600 2500
4-8 años 400 600 3000
9-18 años 400 600 4000

* La ingesta adecuada (adequate intakes, AI) para lactantes de 0 a 12 meses es de 400 UI/día. EAR (estimated average requirements):
requerimiento medio estimado; RDA (recommended dietary allowances): cantidades diarias recomendadas; UL (upper level intake):
niveles máximos de ingesta tolerables.
836 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

La leche humana es el alimento ideal de forma exclu- neo, haciendo que el lactante sea autosuficiente hasta
siva en los primeros 6 meses de vida, y por tanto es la que dobla su peso12. Es a partir de los 6 meses cuando
fuente óptima de calcio en esta edad. Los requerimien- comienza a depender de los aportes de la dieta para cu-
tos en el lactante se basan en el consumo diario medio brir sus requerimientos. Debido a su menor biodisponibi-
de leche. La leche materna contiene una media de lidad, las fórmulas de inicio deben ser suplementadas
300 mg/l de calcio. Su biodisponibilidad es superior a con 0,3-1,3 mg/100 kcal y 0,6-2 mg/100 kcal en las de
la de los preparados para lactantes, por lo que el con- continuación13, 14.
tenido de estos debe ser superior. La biodisponibilidad de este micronutriente depende
Respecto a las recomendaciones para preescolares y del tipo de hierro y de la combinación de alimentos
escolares, hay pocos datos disponibles; en general, se ingeridos. El hierro hemo, del que se absorbe aproxi-
recomienda una ingesta de 700 mg/día de 1-3 años y madamente el 20%, se encuentra en las carnes, mien-
1000 mg en la etapa anterior a la pubertad (tabla 12). tras que el no hemo (absorción del 5%) está presente
Durante la pubertad aumenta la eficiencia en la absor- en los alimentos de origen vegetal y algunos alimentos
ción de calcio, ya que este es el período más importante de origen animal como la leche y los huevos. Tras la
para alcanzar una correcta masa ósea. Las recomenda- diversificación de la dieta, se ha de considerar que tan-
ciones se establecen en 1300 mg/día. La cantidad de to los fitatos, presentes en los cereales enteros y en las
calcio más alta la encontramos en los productos lácteos. fórmulas de soja, como los tanatos, presentes en el té,
Las verduras de hoja verde son también una buena el café y el cacao, disminuyen su absorción. Otros fac-
fuente, sobre todo aquellas con bajo contenido en tores inhibidores de la absorción del hierro son el cal-
oxalatos, ya que favorece su biodisponibilidad. En las cio, el fósforo y el zinc, así como la caseína de la leche.
tabla 13 se exponen algunos alimentos ricos en calcio y Desde los 2 años hasta la pubertad los requerimien-
la cantidad equivalente a 100 mg del mineral. tos disminuyen, dado que el ritmo de crecimiento es
menor. En la adolescencia, de nuevo se produce una
2.4.2. Hierro mayor demanda de hierro debido al incremento de la
masa magra y volumen sanguíneo, siendo la ferrope-
El déficit de hierro es el trastorno nutricional más fre- nia un déficit nutricional frecuente a esta edad, espe-
cuente en la primera infancia y tiene efectos negativos cialmente en el caso de mujeres con pérdidas mens-
sobre el desarrollo cognitivo en una fase de elevada plas- truales abundantes. Son por ello recomendables en
ticidad. En concreto, el período de mayor susceptibilidad esta etapa alimentos ricos en hierro, así como un apor-
para esta deficiencia se establece entre los 6 y los 24 te adecuado de vitamina C que aumente su absorción.
meses. Antes de esta edad, la lactancia materna exclusiva En el adulto es necesario absorber 1 mg/día en el caso
es capaz de cubrir los requerimientos a pesar de su bajo de los hombres y 1,5 mg/día en el de las mujeres para
contenido en hierro (aproximadamente 30 µg/100 ml). mantener unos niveles adecuados, lo que equivale a
Este hecho está relacionado con la elevada biodisponibi- una ingesta de 10-18 mg diarios. La tabla 14 recoge
lidad del hierro en la leche de la madre y la anemia fisio- las principales fuentes dietéticas de hierro.
lógica del lactante. Al nacimiento, el cambio desde un
medio relativamente hipóxico (intraútero) hacia una at-
2.4.3. Yodo
mósfera rica en oxígeno, hace que la síntesis de hemog-
lobina caiga, dando lugar a una recirculación del hierro El yodo es esencial para la producción de hormona
desde los hematíes senescentes hacia los depósitos. A tiroidea y por tanto desempeña un papel fundamental
medida que el niño crece y expande su volemia, estos en el crecimiento y desarrollo infantil. El uso habitual
depósitos se redirigen hacia el compartimento sanguí- de sal yodada es suficiente para cubrir los requerimientos

Tabla 12.  Recomendaciones de aporte de calcio

Grupo de edad EAR (mg/día) RDA (mg/día) UL (mg/día)


0-6 meses * * 1000
6-12 meses * * 1500
1-3 años 500 700 2500
4-8 años 800 1000 2500
9-18 años 1100 1300 4000

* La ingesta adecuada (adequate intakes, AI) para lactantes de 0 a 6 meses es de 200 mg/día y de 260 mg/día de 6 a 12 meses. EAR
(estimated average requirements): requerimiento medio estimado; RDA (recommended dietary allowances): cantidades diarias
recomendadas; UL (upper level intake): niveles máximos de ingesta tolerables.
Tema 53.  Recomendaciones dietéticas en el paciente en edad pediátrica 837

Tabla 13.  Alimentos ricos en calcio.

Contenido Contenido
Grupo Cantidad Grupo Cantidad
en calcio en calcio
Lácteos Verdura
Leche 1 vaso (200 ml) 250 mg Berros 100 g 211 mg
Queso de Burgos 1 tarrina (80 g) 150 mg Perejil 100 g 200 mg
Queso manchego 40 g 334 mg Cardo 100 g 114 mg
Queso de bola 40 g 304 mg Grelos 100 g 100 mg
Requesón 60 g 36 mg Acelgas 100 g 150 mg
Yogur desnatado 1 unidad (125 g) 207 mg Espinacas 100 g 70 mg
Petit suisse 1 unidad (60 g) 60 mg Judías verdes 100 g 60 mg
Cuajada 125 g 208 mg Lechuga 100 g 60 mg
Helado 1 bola (60 g) 84 mg Escarola 100 g 80 mg
Puerros 100 g 69 mg
Pescado/carne Frutos secos/semillas
Almeja 100 g 127 mg Almendras 100 g 254 mg
Bacalado 100 g 64 mg Nueces 100 g 80 mg
Besugo 100 g 225 mg Pistachos 100 g 136 mg
Chanquetes 100 g 80 mg Cacahuetes 100 g 68 mg
Gallo/lenguado 100 g 120 mg Dátiles 100 g 70 mg
Gambas/langostinos 100 g 120 mg Higos secos 100 g 170 mg
Merluza/rape 100 g 60 mg Sésamo 100 g 670 mg
Pulpo 100 g 144 mg
Sardinas en lata 100 g 500 mg
Lomo de cerdo/jamón 100 g 10 mg
serrano/pollo/ternera
Legumbre Dulces
Garbanzo 100 g 149 mg Galletas María 4 unidades 23 mg
Lentejas 100 g 60 mg Chocolate con leche 2 cuadros 30 mg
Judías 100 g 137 mg Bollería 1 unidad 30 mg
Soja en grano 100 g 280 mg

Equivalencias para 100 mg de calcio


½ yogurt
½ vaso de leche
60 g de queso fresco
15 g de semicurado
8 g queso parmesano
1 cucharada de sésamo
40 g de almendras
50 g berros
1 buen plato (250 g) de verdura hoja verde
1 lata de almejas

en la población general. Sin embargo, determinados alimentado al pecho de forma exclusiva o con fórmula
colectivos, como las mujeres embarazadas y las que debidamente suplementada los requerimientos están
lactan a sus hijos, son considerados de riesgo para la cubiertos. Es a partir de entonces y hasta los 3 años
deficiencia de este elemento, por lo que se recomienda cuando el aporte de yodo puede ser deficitario, al dejar
prescribir de forma sistemática su suplementación15. de consumir leche enriquecida e ingerir escasa canti-
En el lactante, las recomendaciones de yodo desde el dad de sal, por lo que adquieren importancia otras
nacimiento hasta los 12 meses se basan en la compo- fuentes dietéticas de yodo (pescados marinos, huevos,
sición de la leche materna, de forma que en el lactante lácteos y derivados).
838 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

Tabla 14.  Alimentos ricos en hierro lo que su aporte debe ser regular. Las recomendacio-
(forma hemo en negrita). nes vigentes se muestran en la tabla 15, destacando el
incremento de las ingestas recomendadas de folato,
Alimento Hierro (mg/100 g) cuyos niveles guardan relación inversa con los de ho-
Almejas 24 mocisteína y, por tanto, previenen del desarrollo de la
Pescadilla 11-13 enfermedad cardiovascular.
Ostras 6,5 Por el contrario, las vitaminas liposolubles (A, D, E y
Mejillones 4,2 K) pueden ser almacenadas en el hígado y tejido adipo-
Sardinas 3,2 so, lo que condicionaría un efecto tóxico en caso de un
Calamares y pulpo 1,7 consumo excesivo. Su absorción depende de una ade-
Espinacas 4 cuada secreción pancreática y de ácidos biliares.
Acelgas 3,1 Existen dos formas de vitamina A: la provitamina A
Guisantes 1,7 (betacaroteno), presente en los vegetales, y la vitamina
Garbanzos 6,7 A preformada, forma más activa, presente en los ali-
Lentejas 7,1 mentos de origen animal. La vitamina A participa en el
Galletas 2 metabolismo óseo, el crecimiento, la diferenciación del
Pan integral 2,5 tejido endotelial y en procesos de antioxidación, y for-
Huevos, yogur, leche y queso 2,2 ma parte del pigmento fotosensible de los fotorrecep-
Hígado 8 tores de la retina.
Caza 7,7 El complejo vitamínico E incluye cuatro tocoferoles,
Vacuno 2,5 siendo el alfa-tocoferol la forma de mayor actividad
Embutidos 2,4 biológica. Su principal función es antioxidante, prote-
Cerdo 1,5 giendo los ácidos grasos poliinsaturados de cadena
Pistachos 7,3 larga de las membranas y estabilizando a hormonas,
Pipas 6,3 enzimas y a otras vitaminas.
Ciruelas 3 La vitamina K engloba un conjunto de sustancias en-
Nueces 2,3 tre las que se encuentran la K1, de origen vegetal, y la
Dátiles 2 K2, de origen microbiano y con menor actividad. Esta
vitamina es necesaria para la activación de varios facto-
res de la coagulación.
Una dieta variada será rica en estas vitaminas, de
2.4.4. Flúor modo que en nuestro medio, los déficits generalmente
El flúor se encuentra en el hueso y los dientes, con- solo ocurren en situaciones que comprometen su ab-
tribuyendo a mantener la matriz mineral ósea y la du- sorción. Para el caso concreto del recién nacido, se re-
reza del esmalte dental. Se recomiendan aquellas can- comienda la administración profiláctica de vitamina K
tidades que disminuyen la incidencia de caries. Dado intramuscular al nacimiento, medida que ha reducido
que la principal fuente es el agua de bebida, habrá que la incidencia de enfermedad hemorrágica por déficit
considerar su suplementación en aquellas zonas donde transitorio en los factores de coagulación.
contenga cantidades insuficientes (< 0,3 mg/l)16. Sin En general, los requerimientos de vitaminas son ma-
embargo, por el riesgo de fluorosis, con límite máximo yores en los períodos de crecimiento rápido, durante o
únicamente un 50% superior a la recomendación dia- después de situaciones de estrés, infecciones o tras ci-
ria, solo se recomienda suplementar con flúor a aque- rugía, y en niños sometidos a dietas restrictivas. En
llos niños con riesgo de desnutrición y en niños con concreto, en la adolescencia las necesidades de vitami-
enfermedades crónicas que conllevan trastornos de la nas aumentan respecto a otras etapas de la infancia,
salivación y la deglución. debido al crecimiento acelerado y al aumento de los
requerimientos de energía. Las recomendaciones se
detallan en las Tablas 15 y 16.
2.4.5.  Vitaminas y otros oligoelementos Respecto a los oligoelementos, el selenio es clave en
Las vitaminas hidrosolubles incluyen ocho vitaminas la protección contra los radicales libres al ser el cofac-
del complejo B, la vitamina C y la colina, que partici- tor de la enzima glutatión-peroxidasa. Lo podemos
pan como coenzimas en numerosos sistemas enzimá- encontrar en el pescado, carne y cereales. Un aporte
ticos. La tiamina, la riboflavina y la niacina participan adecuado de zinc es indispensable para el aumento de
en la obtención de energía a partir de los macronu- la masa muscular y ósea, así como para la madurez
trientes; la vitamina B6 y el ácido fólico son necesarios sexual. Se encuentra en la carne roja y en el marisco. El
para la síntesis de ADN y ARN. A excepción de la vita- magnesio es un mineral implicado en múltiples reac-
mina B12, el resto de las vitaminas hidrosolubles se ciones enzimáticas del organismo; su déficit puede
almacenan en el organismo en pequeña cantidad, por causar hipocalcemia, convulsiones e interferir en el me-
Tema 53.  Recomendaciones dietéticas en el paciente en edad pediátrica 839

tabolismo de la vitamina D. Entre los alimentos ricos en conformar unos hábitos dietéticos y gastronómicos en
magnesio destacan los vegetales de hoja verde, los ce- su sentido más amplio. El niño aprende a degustar y a
reales y los frutos secos. En general, en lo que respecta disfrutar de la comida. También aprende a sociabili-
a estos y otros oligoelementos, una dieta variada y zarla. Se deben incluir en la dieta diariamente alimen-
equilibrada que proporcione el aporte calórico reco- tos de todos los grupos. Las tablas 17 y 18 establecen
mendado para cada edad, es la mejor garantía de una una guía de las frecuencias de consumo recomenda-
ingesta correcta que cubra los requerimientos. das para cada grupo de alimentos y el tamaño orien-
tativo de las raciones según la edad. La tabla 19 reco-
ge las principales fuentes alimentarias de nutrientes de
3.  Aspectos prácticos
interés.
3.1. Recomendaciones para una alimentación El reparto calórico en niños debe hacerse teniendo
saludable en la infancia en cuenta que no conviene concentrar los alimentos
en 1-2 ingestas, sino distribuirlos en 4-5 comidas (fi-
Una alimentación saludable y equilibrada es funda- gura 3). El desayuno y el almuerzo de media mañana
mental para el estado de salud de los niños y determi- deberían cubrir, al menos, el 30-35% de las necesida-
nante para un correcto funcionamiento del organis- des nutritivas del escolar. Un desayuno bien plantea-
mo, buen crecimiento, una óptima capacidad de do debe incluir leche u otros lácteos, cereales y una
aprendizaje, un correcto desarrollo psicomotor y, en pieza de fruta. Con frecuencia, a media mañana mu-
definitiva, para la prevención de factores de riesgo chos niños consumen repostería comercial. Es impor-
que influyen en la aparición de algunas enfermeda- tante insistir en ofrecer en esta toma alimentos más
des. De aquí el empeño de distintas sociedades cien- saludables, como una fruta o un bocadillo. La comida
tíficas en establecer unas recomendaciones generales, es la toma más importante del día, con un 35% del
usando como modelo didáctico las denominadas pi- valor energético total de la dieta. En su composición
rámides de la alimentación (figura 1). En el mismo
sentido, el departamento de Agricultura de EE.UU.,
(USDA, por sus siglas en inglés) creó en «My plate»18,
una guía nutricional fácil de seguir que ayuda a los
padres a alimentar a sus hijos con comidas nutritivas
y equilibradas (figura 2).
La dieta debe ser variada, ya que esto ayuda a esti- Lácteos
mular el apetito, cubrir las necesidades nutricionales y Frutas
Granos

Vegetales Proteína
Opción individualizada

BEBIDAS FERMENTADAS CONSUMO OPCIONAL


CONSUMO OPCIONAL, MODERADO Y OCASIONAL O MODERADO
RESPONSABLE EN ADULTOS

Figura 2.  Representación de «My Plate».

CONSUMO VARIADO DIARIO


2-3 AL DÍA
1-3 AL DÍA (ALTERNAR)
Desayuno 20%
2-3 AL DÍA
3-4 AL DÍA
VERDURAS
+ FRUTAS
+ 5 RACIONES GRUPOS DE CONSUMO EN
CADA DÍA CADA COMIDA PRINCIPAL
Almuerzo de
SEGÚN GRADO DE media mañana
ACTIVIDAD FÍSICA
Cena 25% 10-15%

MANTENERT ESTILOS
DE VIDA SALUDABLES

Actividad física Equilibrio Balance Técnicas AGUA: 4-6 vasos al día*


diaria 60 min. emocional Energético culinarias (*) Ingesta de líquidos según la
saludables Pirámide de la Hidratación
Saludable SENG.
Merienda 10-15% Comida 25-35%

Figura 1.  Pirámide de alimentación saludable Figura 3.  Distribución de los alimentos en las
(adaptado de SENC, 2015). comidas del día.
Tabla 15.  Ingestas dietéticas de referencia para vitaminas (RDA en negrita, AI sin negrita seguida de asterisco)17
840

Rango Vit A Vit C Vit D Vit E Vit K Tiamina Riboflavina Niacina Vit B6 Folato Vit B12 Ác. pantoténico Biotina Colina
de edad (μg/d) (mg/d) (μg/d) (mg/d) (μg/d) (mg/d) (mg/d) (mg/d) (mg/d) (μg/d) (μg/d) (mg/d) (μg/d) (mg/d)
Lactantes
0-6 m 400* 40* 10* 4* 2* 0,2* 0,3* 2* 0,1* 65* 0,4* 1,7* 5* 125*
7-12 m 500* 50* 10* 5* 2,5 0,3* 0,4* 4* 0,3* 80* 0,5* 1,8* 6* 150*
Niños
1-3 años 300 15 15 6 30* 0,5 0.5 6 0,5 150 0,9 2* 8* 200*
4-8 años 400 25 15 7 55* 0,6 0,6 8 0,6 200 1,2 3* 12* 250*
Hombres
BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

9-13 años 600 45 15 11 60* 0,9 0,9 12 1,0 300 1,8 4* 20* 375*
14-18 años 900 75 15 15 75* 1,2 1,3 16 1,3 400 2,4 5* 25* 550*
Mujeres
9-13 años 600 45 15 11 60* 0,9 0,9 12 1,0 300 1,8 4* 20* 375*
14-18 años 700 65 15 15 75* 1,0 1,0 14 1,2 400 2,4 5* 25* 400*

Tabla 16.  Ingestas dietéticas de referencia para minerales (RDA en negrita, AI sin negrita seguida de asterisco)17

Rango Calcio Cromo Cobre Flúor Yodo Hierro Magnesio Manganeso Molibdeno Fósforo Selenio Zinc Potasio Sodio Cloro
de edad (mg/d) (μg/d) (μg/d) (mg/d) (μg/d) (mg/d) (mg/d) (mg/d) (μg/d) (mg/d) (μg/d) (mg/d) (g/d) (g/d) (g/d)
Lactantes
0-6 m 210* 0,2* 200* 0,01* 110* 0,27* 30* 0,003* 2* 100* 15* 2* 0,4* 0,12* 0,18*
7-12 m 260* 5,5* 220* 0,5* 130* 11 75* 0,6* 3* 275* 20* 3 0,7* 0,37* 0,57*
Niños
1-3 años 700 11* 340 0,7* 90 7 80 1,2 17 460 20 3 3* 1,0* 1,5*
4-8 años 1000 15* 440 1* 90 10 130 1,5 22 500 30 5 3,8* 1,2* 1,9*
Hombres
9-13 años 1300 25* 700 2* 120 8 240 1,9 34 1250 40 8 4,5* 1,5* 2,3*
14-18 años 1300 35* 890 3* 150 11 400 2,2 43 1250 55 11 4,7* 1,5* 2,3*
Mujeres
9-13 años 1300 21* 700 2* 120 8 240 1,6 34 1250 40 8 4,5* 1,5* 2,3*
14-18 años 1300 24* 890 3* 150 15 360 1,6 43 1250 55 9 4,7* 1,5* 2,3*
Tema 53.  Recomendaciones dietéticas en el paciente en edad pediátrica 841

Tabla 17.  Pesos de raciones de cada grupo de alimentos y medidas caseras (adaptado de SENC, 2004).

Peso de cada ración


Grupo de alimentos Frecuencia recomendada Medidas caseras
(en crudo y neto)
· 1 plato normal
· 60-80 g de pasta, arroz · 3-4 rebanadas
Patatas, arroz, pan, pan · 4-6 raciones al día
· 40-60 g de pan o 1 panecillo
integral y pasta · ↑ formas integrales
· 150-200 g de patata · 1 patata grande
o 2 pequeñas
· 1 plato de ensalada
variada
Verduras y hortalizas · ≥2 raciones al día · 150-200 g · 1 plato de verdura cocida
· 1 tomate grande,
2 zanahorias
· 1 pieza mediana, 1 taza
Frutas · ≥3 raciones al día · 120-200 g de cerezas, fresas…
2 rodajas de melón
Aceite de oliva · 3-6 raciones al día · 10 ml · 1 cucharada sopera
· 200-250 ml de leche · 1 taza de leche
· 200-250 g de yogur · 2 unidades de yogur
Leche y derivados · 2-4 raciones al día
· 40-60 g de queso curado · 2-3 lonchas de queso
· 80-125 g de queso fresco · 1 porción individual
Pescados · 3-4 raciones a la semana · 125-150 g · 1 filete individual
· 3-4 raciones de cada a · 1 filete pequeño,
Carnes magras, aves y
la semana. Alternar su · 100-125 g 1 cuarto de pollo o
huevos
consumo conejo, 1-2 huevos
Legumbres · 2-4 raciones a la semana · 60-80 g · 1 plato normal individual
· 1 puñado o ración
Frutos secos · 3-7 raciones a la semana · 20-30 g
individual
Embutidos y carnes grasas · Ocasional y moderado
Dulces, snacks, refrescos · Ocasional y moderado
Mantequilla, margarina y
· Ocasional y moderado
bollería
Agua de bebida · 4-8 raciones al día · 200 ml aprox · 1 vaso o 1 botellín
Práctica de actividad física · Diario · >30 minutos

no debe faltar un alimento rico en hidratos de carbo- pletar así la dieta del niño. Se debe componer de algo
no (arroz, pasta, legumbre…) ni la verdura o ensalada de verdura o ensalada, algún alimento rico en hidra-
como guarnición o parte del primer plato. Como tos de carbono y alguno proteico.
fuente de proteínas deben ofrecerse carnes, pescado
o huevo, y de postre ofrecer preferiblemente fruta o 3.2. Preguntas frecuentes en alimentación
bien un lácteo. La merienda debe contener aproxima- infantil
damente el 10-15% del contenido calórico total, pue-
de ayudar a complementar la dieta, ya que permite ¿Existe fundamento científico para establecer un
incluir productos de gran interés nutricional como orden determinado en la introducción de
lácteos, frutas o bocadillos de fiambres magros. La
alimentos?
cena debe constituir el 25% del valor energético de la
dieta. Se deben elegir los alimentos en función de los No existe ningún fundamento científico para intro­
ya tomados en las otras comidas del día, para com- ducir antes unos alimentos que otros. Las razones son
842 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

Tabla 18.  Tamaño orientativo de las raciones para población escolar.

Grupo de 3 -6 años 7-12 años 13-15 años 16-18 años


alimentos Gramaje Medida culinaria Gramaje Medida culinaria Gramaje Medida culinaria Gramaje Medida culinaria
Queso 25-30 gr 1 loncha 50-60 gr 2 lonchas 50-60 gr 2 lonchas 50-60 gr 2 lonchas
Lácteos
leche 100 ml ½ vaso 200 ml 1 vaso 200 ml 1 vaso 200 ml 1 vaso
Legumbres 2 cucharadas 4 cucharadas 4 cucharadas 6 cucharadas
30 gr 60 gr 60 gr 90 gr
(plato principal)1 soperas soperas soperas soperas
Legumbres 1 cucharada 2 cucharadas 2 cucharadas 2 cucharadas
15 gr 30 gr 30 gr 30 gr
(guarnición)1 sopera soperas soperas soperas
Patatas
(plato 150-200 gr 1 unidad pequeña 200-250 gr 1 unidad mediana 200-250 gr 1 unidad mediana 200-250 gr 1 unidad mediana
principal)1
Patatas
90-100 gr 1 unidad pequeña 90-100 gr 1 unidad pequeña 190-200 gr 1 unidad mediana 190-200 gr 1 unidad mediana
(guarnición)1
Cereales,
Arroz, pasta
legumbres y 1 plato pequeño 1 plato mediano 1 plato grande 1 plato grande
(plato 50-60 gr 60-80 gr 80-90 gr 80-90 gr
tubérculos (hondo) (hondo) (hondo) (hondo)
principal)2
Arroz, pasta 1 plato mediano 1 plato mediano 1 plato mediano 1 plato mediano
20-25 gr 20-25 gr 20-25 gr 20-25 gr
(sopa)2 (hondo) (hondo) (hondo) (hondo)
1 cucharada 1 cucharada 1 cucharada 2 cucharadas
Arroz, pasta
20-25 gr sopera de arroz 20-25 gr sopera de arroz 20-25 gr sopera de arroz 35-40 gr soperas de arroz
(guarnición)2
2 de pasta 2 de pasta 2 de pasta 4 de pasta
Pan tipo barra 30 gr 1 porción pequeña 30 gr 1 porción pequeña 60 gr 1 porción mediana 60 gr 1 porción mediana
1 rebanada 1 rebanada 1 rebanada 1 rebanada
Pan tipo payés 30 gr 30 gr 60 gr 60 gr
pequeña pequeña mediana mediana
1 plato mediano 1 plato mediano 1 plato grande 1 plato grande
Plato principal 120-150 gr 120-150 gr 200-250 gr 200-250 gr
(llano) (llano) (llano) (llano)
Verduras
1 plato pequeño 1 plato pequeño 1 plato mediano 1 plato mediano
Guarnición 60-75 gr 60-75 gr 120-150 gr 120-150 gr
(llano) (llano) (llano) (llano)
Filete1 50-60 gr 1 filete pequeño 80-90 gr 1 filete pequeño 110-120 gr 1 filete mediano 110-120 gr 1 filete mediano
2 chuletas
Chuletas cerdo3 70-80 gr 1 chuleta pequeña 100-120 gr 1 chuleta grande 100-120 gr 1 chuleta grande 140-150 gr
pequeñas
Costillas 2 costillas de 3 costillas de 3 costillas de 4 costillas de
70-80 gr 100-120 gr 100-120 gr 140-150 gr
cordero3 cordero cordero cordero cordero
Carne picada
(albóndigas, 30-60 gr 1 plato pequeño 80-90 gr 1 plato pequeño 110-120 gr 1 plato mediano 110-120 gr 1 plato mediano
Carnes y
hambuarguesa)1
derivados,
aves, Carne picada 1 cucharada 1 cucharada 1 cucharada 1 cucharada
15-20 gr 20-30 gr 20-30 gr 20-30 gr
pescados y (arroz, pasta)1 sopera sopera colmada sopera colmada sopera colmada
huevos
1 muslo grande o
Pollo3 80-90 gr 1 muslo pequeño 150-160 gr 1 muslo pequeño 230-250 gr 1 muslo grande 300-320 gr
2 pequeños
Filete de
70-80 gr 1 filete pequeño 100-120 gr 1 filete pequeño 150-160 gr 1 filete mediano 150-160 gr 1 filete mediano
pescado1
Huevos 1 unidad 1-2 unidades 2 unidades 2 unidades
Embutido, 1 loncha fina 1 loncha fina 1 loncha fina 1 loncha fina
25-30 gr 25-30 gr 25-30 gr 25-30 gr
fiambre1 o 6 rodajas o 6 rodajas o 6 rodajas o 6 rodajas
Fruta Fruta fresca3 80-100 gr 1 unidad pequeña 150-200 gr 1 unidad mediana 150-200 gr 1 unidad mediana 150-200 gr 1 unidad mediana
1
Gramaje expresado en peso crudo y neto. 2 Gramaje expresado en peso crudo. Medida culinaria estimada con el peso en cocido.
3
Gramaje expresado en peso crudo y bruto. (Adaptado de Documento de consenso sobre la alimentación en los centros educativos).
Tema 53.  Recomendaciones dietéticas en el paciente en edad pediátrica 843

Tabla 19.  Fuentes alimentarias de nutrientes de especial interés.

Nutriente Principales fuentes


Proteínas Carnes, pescados, huevos y lácteos
Aceites y grasas culinarias, mantequilla, margarina, tocino, carnes grasas,
Lípidos
embutidos y frutos secos
Hidratos de carbono Cereales, patatas, legumbres, verduras y frutas
Fibra dietética Cereales integrales, legumbres, verduras y frutas
Calcio Leche y derivados lácteos y pescados en conserva
Hierro Sangre, vísceras (hígado, riñón, corazón) y carnes
Yodo Pescados y mariscos
Magnesio Leguminosas y frutos secos
Zinc Carnes rojas, leguminosas
Tiamina (vitamina B1) Derivados de cereales, patatas, leche, carne de cerdo
Rivoflavina (vitamina B2) Leche, carne y huevos
Niacina Carne y productos cárnicos, patatas y pan
Carnes, pescados, huevos, cereales integrales y algunas verduras y
Vitamina B6
hortalizas
Ácido fólico Verduras de hoja verde, garbanzos y vísceras
Vitamina B12 Hígado, huevos, leche, carne y pescado
Frutas cítricas (naranjas, mandarinas, limones), fresas y frambuesas,
Ácido ascórbico (vitamina C)
tomates, pimientos y otras hortalizas
Vitamina A: equivalentes de retinol Hígado, leche entera, mantequilla, zanahoria, grelos, espinacas y frutas
Vitamina D Pescados grasos, huevos, leche y derivados incluyendo enriquecidos
Vitamina E Aceites vegetales y huevos

fundamentalmente culturales y económicas, así como la de programar el desarrollo de una presión arterial más
disponibilidad de alimentos en el medio donde se viva. elevada en las etapas posteriores de la vida, especial-
Respecto al momento, hay que tener en cuenta que no mente en niños genéticamente predispuestos a pade-
se aconseja introducir la alimentación complementaria cer hipertensión. Por ello, no es recomendable añadir
antes de las 17 semanas, ya que el niño no tiene la ma- sal a los alimentos durante el período de alimentación
durez necesaria para asimilar alimentos distintos a la le- complementaria y deben evitarse alimentos muy sala-
che, ni tampoco después de las 26, ya que la leche será dos tales como verduras en conservas, carnes curadas,
insuficiente para cubrir las necesidades nutricionales. pastillas de caldo o sopas en polvo. Después del año,
cuando los niños consumen la comida familiar, es reco-
¿Puede añadirse sal a las comidas? mendable cocinar con poca sal, preferiblemente sal
yodada.
El sodio es un nutriente esencial que interviene en
varias funciones fisiológicas, como el mantenimiento ¿Cuándo pueden los bebés consumir leche
de los líquidos extracelulares, la regulación de la osmo-
de vaca?
laridad, el control del volumen de los compartimentos
de agua corporal y el mantenimiento de una presión La mayoría de las sociedades científicas recomiendan
sanguínea normal. Asimismo, desempeña un papel no introducir la leche de vaca antes del año de edad,
fundamental en el equilibrio ácido-base. Sin embargo, aunque se considera aceptable la ingesta de pequeñas
para cubrir todas esas funciones, es necesario solo una cantidades de leche de vaca antes de los 12 meses (en
pequeña cantidad de sodio procedente de la dieta. Una forma de queso o como parte de otros platos)19, siem-
ingesta excesiva de sodio en la infancia temprana pue- pre que no se utilice como bebida principal.
844 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

¿Pueden emplearse las bebidas vegetales tal vigilar el consumo y la calidad de las comidas inter-
en el lactante? medias, ya que los snacks pueden suponer hasta un
tercio de las calorías totales de la dieta.
Las bebidas vegetales (soja, arroz, avena o almendra,
entre otras) no son un alimento completo ni una alter-
¿Cuánto tiempo deben durar las comidas?
nativa nutricional a la leche de vaca, por lo que no de-
ben consumirse de forma exclusiva antes del año de No existe una recomendación estricta a este respec-
vida. En caso de que un niño siga una alimentación no to, aunque no es aconsejable que se alarguen más de
exclusiva con este tipo de bebidas, el pediatra debe co- 20 o 30 minutos, evitando distracciones como la tele-
nocer sus riesgos y limitaciones nutritivas para com- visión y favoreciendo que el niño participe de la mesa
pensar los posibles déficits con otros alimentos20. familiar. A partir del año ya se le puede ofrecer la mis-
ma comida que al resto de la familia.
¿Debe limitarse el consumo de arroz
por su contenido en arsénico? ¿Se puede añadir cacao a la leche?
La planta del arroz permanece sumergida en agua du- El cacao azucarado se obtiene mediante la mezcla de
rante gran parte de su desarrollo e incorpora arsénico cacao en polvo y sacarosa. Dado que su contenido en
del suelo y del agua. La exposición prolongada a este cafeína y otros estimulantes es poco significativo, la
elemento puede tener efectos sobre la salud a largo pla- principal consideración ha de hacerse en relación a su
zo. Por este motivo y los previamente descritos, es acon- contenido en azúcares (sacarosa), no siendo recomen-
sejable evitar las bebidas de arroz en lactantes y niños dable antes del año de edad.
pequeños, así como ofrecer una alimentación diversifi-
cada que incluya una variedad de granos como fuentes ¿Cuándo se puede dar miel?
de carbohidratos. Se recomienda que las fórmulas in- No se recomienda ofrecer miel antes de los 12 meses
fantiles basadas en proteína hidrolizada de arroz especi- de edad, pues puede contener esporas de Clostridium
fiquen su contenido en arsénico inorgánico21. botulinum causantes de botulismo22.
Sin embargo, para el cocinado habitual, si el niño
toma arroz dos o menos veces por semana, no es pre-
cisa ninguna medida profiláctica. Si la ingesta es supe- ¿Cuándo puede un niño tomar café?
rior a dos veces por semana, medidas como lavar el No se ha establecido una edad mínima a partir de la
arroz con abundante agua, hervir desechando el agua cual se pueda dar café a un niño, pero parece pruden-
de cocción y terminar la ebullición con agua nueva, te no ofrecerlo en los dos primeros años; su valor nutri-
disminuirán el contenido de arsénico. cional es escaso y por su sabor amargo será rechazado
a estas edades. Si se ofrece posteriormente es preferi-
¿Cómo conseguir que el niño acepte los alimentos ble que sea descafeinado.
que rechaza?
¿Cuántos huevos pueden tomar un niño a la
Todos los omnívoros, incluyendo el humano, experi-
semana?
mentan un rechazo inicial (con función protectora) a
los alimentos no conocidos. Este rechazo puede redu- Tradicionalmente se ha aconsejado limitar el consu-
cirse mediante la exposición repetida, estimándose que mo de huevo a 2 o 3 a la semana por ser un alimento
se requieren al menos 5-10 contactos con un alimento con alto contenido en colesterol. En el momento ac-
para producir cambios en la apetencia por el mismo. tual no hay una recomendación específica, ya que
Se puede variar el modo de preparación o de presen­ estudios epidemiológicos previos han demostrado
tación, pero el alimento debe ser ofrecido al niño que no hay diferencias en el padecimiento de enfer-
reiteradamente. Por otra parte, los hábitos familiares y medades cardiovasculares entre personas que toman
la actitud de los padres/hermanos ante el alimento un huevo al día y las que toman un huevo a la sema-
condicionan en gran medida esta respuesta. Si en las na, siendo otros componentes de la dieta los verdade-
fiestas se consumen fruta, los niños asociarán el consu- ros responsables del aumento del colesterol sanguí-
mo de frutas con celebraciones, si a los padres no les neo y del riesgo cardiovascular23. Además, es una
gusta la leche o las verduras, es poco probable que el buena fuente de proteína de alto valor biológico, vita-
niño las pida. minas y minerales, por lo que deben formar parte de
una dieta variada. Por esta razón, las actuales reco-
mendaciones de las sociedades científicas y grupos de
¿Cuántas veces debe comer un niño?
expertos no consideran la necesidad de limitar la in-
La distribución dietética del niño en edad preescolar gesta de huevo a un número determinado de veces
y escolar debe dividirse en 4-6 comidas. Es fundamen- por semana.
Tema 53.  Recomendaciones dietéticas en el paciente en edad pediátrica 845

¿Cuánta carne debe comer un niño? varía a lo largo de cada etapa de la edad infantil. Esto
va a condicionar unos requerimientos de nutrientes,
El informe elaborado por la Agencia para la Investiga- individualizados por rangos de edad y sexo, que hay
ción sobre el Cáncer (Agency for Research on Cancer, que conocer para adecuar lo mejor posible la alimenta-
IARC), sobre la relación posible entre el consumo de carne ción de nuestros niños, desde el nacimiento hasta la
roja (>100 g/día) y de carne procesada (> 50 g/día) y la edad adulta, para evitar deficiencias nutricionales es-
aparición de cáncer de colon24 ha generado gran polémica pecíficas, instaurar hábitos de alimentación correctos y
a este respecto. Se entiende por carne procesada la que ha prevenir desde la infancia, los problemas de salud deri-
sido sazonada, curada, fermentada, ahumada o ha recibi- vados de una dieta inadecuada.
do otros procesos para aumentar el sabor o mejorar la
conservación (salchichas, embutidos, entre otros). Estos
resultados no hacen sino reafirmar las recomendaciones 5. Bibliografía
previas sobre alimentación infantil. La dieta del niño debe  1.  FAO/WHO/UNU Expert Consultation: Human
estar basada fundamentalmente en el consumo diario de Energy Requirements. Rome, World Health Orga-
alimentos a base de cereales u otro tipo de granos, fruta, nization, 2004.
verdura y hortalizas. Además, debe incluir alrededor de   2. Torun B. Energy Cost of Various Physical Activities
400 ml de leche u otros derivados lácteos y 2 raciones in Healthy Children. Activity, Energy Expenditure
diarias de carne magra, pescado, huevo o legumbres (una and Energy Requirements of Infants and Children.
ración equivale aproximadamente a 100 gramos de carne Lausanne, International Dietary energy Consultan-
o 125 gramos de pescado o un huevo mediano). La carne, cy Group, 1990, pp139-183.
así como el pescado y el huevo, es una fuente de proteínas   3. Torun B. Energy requirements of children and ado-
de alto valor biológico, fósforo, hierro y vitaminas del gru- lescents. Public Health Nutr 2005; 8: 968-993.
po B. Generalmente se aconseja que los niños tomen so-   4. Energy and protein requirements: Report of a joint
bre todo carnes blancas, por su menor contenido en gra- FAO/WHO/UNU Expert Consultation. World Heal-
sas. No es necesario que todos los días el menú de los th Organ Tech Rep Ser 1985; 724:1-206.
niños contenga carne, ya que puede alternarse con los   5. Institute of Medicine, Food and Nutrition Board:
otros grupos de alimentos proteicos25. Dietary Reference Intakes: Energy, Carbohidrate,
Fiber, Fat, Fatty Acids, Cholesterol, Protein and
¿Los niños que practican deporte deben tomar Aminoacids. Washington, National Academies
más proteínas? Press, 2002/2005.
  6. F. Domínguez Ortega, C. Santana Reyes, D. Reyes
La actividad física implica un aumento de los requeri-
Suárez, S. Quinteiro González, J. Calvo Rosales.
mientos nutricionales en función de ciertos rasgos indivi-
Análisis de la concentración de ácidos grasos en
duales como la edad, sexo, composición corporal o el
calostro y leche de transición. An Esp Pediatr
estadio puberal, así como relacionados con el propio
1997;46:455-459.
ejercicio. Una alimentación adecuada permite mantener
  7. R.A. Lama More, A. Moráis López. Las grasas en la
la salud, asegurar un crecimiento y desarrollo correctos y
alimentación infantil. Importancia de los ácidos
conseguir un mejor rendimiento deportivo. La dieta del
grasos poliinsaturados. An Pediatr; Monogr. 2005;
niño que realiza deporte debe suministrar energía y nu-
3:16-23.
trientes en cantidad suficiente para mantener una ade-
  8. Slavin JL. Position of the American Dietetic Asso-
cuada composición corporal, garantizar el crecimiento,
ciation: health implications of dietary fiber. J Am
cubrir los requerimientos de macro y micronutrientes
Diet Assoc. 2008; 108:1716-31.
esenciales, así como reponer y mantener las reservas de
glucógeno. En general, para la actividad deportiva reali-   9. Ross AC, Taylor CL, Yaktine AL, Del Valle HB. Die-
zada en el ámbito escolar, solo será preciso asegurar una tary Reference Intakes for Calcium and Vitamin D.
correcta hidratación. Sin embargo, cuando la intensidad Institute of Medicine (US) Committee to Review
o el tiempo dedicado sean superiores, será preciso au- Dietary Reference Intakes for Vitamin D and Cal-
mentar las cantidades de forma individual, manteniendo cium. Washington (DC): National Academies Press
las proporciones de una dieta equilibrada. No son nece- (US); 2011.
sarias grandes variaciones en los aportes de grasas, los 10. Martínez Suárez V, Moreno Villares JM, Dalmau
hidratos deberán ser aportados fundamentalmente en Serra J; Comité de Nutrición de la Asociación Espa-
forma de azúcares completos y no son precisos los suple- ñola de Pediatría Recomendaciones de ingesta de
mentos proteicos ni de vitaminas. de calcio y vitamina D: posicionamiento del Comi-
té de Nutrición de la Asociación Española de Pe-
diatria. An Pediatr (Barc). 2012; 77:57.e1-57.e8.
4. Conclusiones 11. Wagner CL, Greer FR; American Academy of Pedia-
Aunque el crecimiento es un proceso continuo que trics Section on Breastfeeding; American Academy
se prolonga hasta el final de la adolescencia, el ritmo of Pediatrics Committee on Nutrition. Prevention of
846 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

rickets and vitamin D deficiency in infants, children, for energy, carbohydrate, fiber, fat, fatty acids,
and adolescents. Pediatrics. 2008; 122:1142-52. cholesterol, protein and amino acids. J Am Diet
12. Domellöf M, Braegger C, Campoy C, Colomb V, Assoc. 2002; 102:1621-30.
Decsi T, Fewtrell M et al. Iron requirements of in- 18. https://www.choosemyplate.gov/
fants and toddlers. J Pediatr Gastroenterol Nutr. 19. Agostoni C, Decsi T, Fewtrell M, Goulet O, Kolacek
2014; 58:119-29. S, Koletzko B et al. Complementary feeding: a com-
13. Koletzko B, Baker S, Cleghorn G, Neto UF, Gopalan mentary by the ESPGHAN Committee on Nutrition.
S, Hernell O et al. Global standard for the compo- J Pediatr Gastroenterol Nutr. 2008; 46:99-110.
sition of infant formula: recommendations of an 20. Vitoria Miñana I, Moreno-Villares, Dalmau Serra J.
ESPGHAN coordinated international expert group. Errores dietéticos en el lactante: las bebidas vege-
J Pediatr Gastroenterol Nutr. 2005; 41:584-99. tales. Acta Pediatr Esp. 2015; 73: 195-202.
14. Real Decreto 867/2008, por el que se aprueba la 21. Hojsak I, Braegger C, Bronsky J, Campoy C, Co-
reglamentación técnico-sanitaria específica para lomb V, Decsi T et al. Arsenic in rice: a cause for
los preparados para lactantes y de los preparados concern. J Pediatr Gastroenterol Nutr. 2015; 60:
de continuación. BOE. 2008; 131, 25.121- 25.137. 142-5.
15. Donnay S, Arena J, Lucas A, Velasco I, Ares S. Su- 22. Hoarau G, Pelloux I, Gayot A, Wroblewski I, Popoff
plementación con yodo durante el embarazo y la MR, Mazuet C et al. Two cases of type A infant
lactancia. Toma de posición del Grupo de Trabajo botulism in Grenoble, France: no honey for in-
de Trastornos relacionados con la Deficiencia de fants. Eur J Pediatr. 2012; 171:589-91.
Yodo y Disfunción Tiroidea de la Sociedad Españo- 23. Fernández ML. Dietary cholesterol provided by eggs
la de Endocrinología y Nutrición. Endocrinol Nutr. and plasma lipoproteins in healthy populations.
2014 Jan; 61(1):27-34. Curr Opin Clin Nutr Metab Care. 2006; 9:8-12.
16. Guideline on fluoride therapy. American Academy 24. Bouvard V, Loomis D, Guyton KZ, Grosse Y, Ghis-
on Pediatric Dentistry Liaison with Other Groups sassi FE, Benbrahim-Tallaa L et al. Carcinogenicity
Committee; American Academy on Pediatric Den- of consumption of red and processed meat. Lan-
tistry Council on Clinical Affairs. Pediatr Dent. cet Oncol. 2015; 16:1599-600.
2008-2009; 30:121-4. 25. ¿Cuánta carne debe comer un niño? Comunicado
17. Trumbo P, Schlicker S, Yates AA, Poos M. Food del comité de nutrición de la AEPED, 2015. http://
and Nutrition Board of the Institute of Medicine, www.aeped.es/sites/default/files/documentos/
The National Academies. Dietary reference intakes cuanta_carne_debe_comer_un_nino.pdf.
Tema 54. 
Nutrición enteral en el paciente en edad pediátrica:
vías y fórmulas
Ana Belén Martínez Zazo
Médico adjunto especialista en Pediatría y sus Áreas Específicas. Servicio de Pediatría.
Hospital La Moraleja. Madrid

Óscar Rubio Cabezas


Médico adjunto especialista en Pediatría y sus Áreas Específicas. Doctor en Medicina. Investigador
«Juan Rodés». Servicio de Endocrinología Pediátrica. Hospital Infantil Universitario Niño Jesús. Madrid

Consuelo Pedrón Giner


Médico adjunto especialista en Pediatría y sus Áreas Específicas. Doctora en Medicina.
Unidad de Nutrición. Sección de Gastroenterología y Nutrición. Servicio de Pediatría.
Hospital Infantil Universitario Niño Jesús. Madrid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 847-860.

 1. Introducción
 2. Indicaciones y contraindicaciones de la nutrición enteral
 3. Selección de la vía de acceso
 4. Material para la administración
 5. Métodos y modos de infusión
 6. Selección del tipo de fórmula
 7. Nutrición enteral del prematuro
 8. Inicio de la nutrición enteral y monitorización del soporte
 9. Complicaciones
10.  Nutrición enteral domiciliaria
11.  Resumen
12.  Bibliografía

1. Introducción El crecimiento es responsable de que las necesidades


Existen numerosas situaciones clínicas en las que es nutricionales de los pacientes pediátricos sean propor-
necesario instaurar soporte nutricional artificial en los cionalmente mayores que las de los adultos, tanto más
niños y adolescentes. A diferencia de lo que ocurre con cuanto menor es la edad del niño. Esto, unido a la in-
los pacientes adultos, el soporte nutricional en la infan- madurez relativa de prácticamente todas las funciones
cia debe lograr, no solo el mantenimiento o la recupe- digestivas y metabólicas durante las primeras etapas de
ración del estado nutricional del paciente, sino también la vida, y a la dependencia funcional de los adultos para
la consecución de un crecimiento y desarrollo óptimos. muchas de las cuestiones relacionadas con la alimenta-
Hay que tener en cuenta, además, que la provisión de ción, hace que los niños sean mucho más vulnerables a
nutrientes debe hacerse de un modo adecuado a las li- la falta de nutrientes1. Por esta razón, la indicación de
mitaciones fisiológicas y metabólicas del niño, especial- soporte debe considerarse con más prontitud cuando
mente en el caso de los recién nacidos. se trabaja con pacientes pediátricos2.

847
848 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

Siempre que sea posible, la nutrición enteral es la for- so, perforación intestinal, peritonitis, isquemia intesti-
ma de soporte nutricional artificial de elección, sea cual nal, vómitos incoercibles y diarrea intratable con altera-
sea la edad del niño, porque es más fisiológica, más ciones metabólicas secundarias. Pueden considerarse
económica, más sencilla de administrar y más segura una contraindicación relativa las fístulas entéricas y los
que la nutrición parenteral3. Además, permite la admi- vómitos y diarreas de repetición.
nistración de determinados nutrientes con efecto trófi-
co sobre el tracto gastrointestinal (glutamina, ácidos 3.  Selección de la vía de acceso
grasos de cadena corta, fibra), tanto directo como a
través de la secreción de ciertos factores endocrinos, Una vez determinada la conveniencia de iniciar el so-
paracrinos y neurales que promueven la integridad fun- porte nutricional enteral, se debe buscar la vía de acce-
cional e inmunitaria de aquel. so óptima. El tipo de acceso puede estar condicionado,
El concepto habitualmente aceptado de nutrición no solo por la duración del soporte, sino también por
enteral se refiere a la administración de una fórmula de la funcionalidad de determinadas porciones del tracto-
composición química definida, tanto por boca como gastrointestinal1-5.
por sonda4, 5. Si se aplica estrictamente este término en La administración en el estómago es la vía de elec-
el campo de la pediatría, debe asumirse que todos los ción siempre que el vaciamiento gástrico sea adecuado
lactantes no alimentados al pecho están sometidos a y no existan contraindicaciones7. Permite un proceso
esta técnica de nutrición artificial. Por ello, como otros digestivo prácticamente normal, así como la adminis-
autores proponen6, consideraremos nutrición enteral tración de mayores volúmenes de alimento (incluso en
solo a la administración de los nutrientes directamente bolo) con mayor carga osmótica, y la de fármacos de
en el tubo digestivo por sonda, distinguiéndola de la una forma más sencilla y fiable. Además, la secreción
nutrición enteral oral, que usa la boca y el mecanismo ácida del estómago la hace más segura desde el punto
de la deglución, y está fuera del objetivo de este capí- de vista infeccioso.
tulo. No obstante, conviene recordar que la leche hu- En el caso de que la administración deba ser postpi-
mana u otros alimentos sólidos convenientemente tri- lórica, se realizará preferentemente a nivel yeyunal. En
turados pueden ser administrados mediante una sonda estos pacientes deberemos emplear con mayor fre-
y, por tanto, constituir una forma de nutrición enteral. cuencia fórmulas predigeridas para facilitar la toleran-
cia digestiva. Este acceso precisa el uso de bombas de
nutrición enteral y no permite la administración en for-
2. Indicaciones y contraindicaciones
ma de bolos, pues supondría una sobrecarga que con-
de la nutrición enteral dicionaría el síndrome de dumping. Indicaremos una
La frecuencia de la desnutrición en los niños con enfer- nutrición enteral postpilórica en los siguientes casos8:
medades crónicas, especialmente durante la hospitaliza-
ción, es elevada, y la principal razón para su aparición es • Pacientes con riesgo de aspiración pulmonar con la
una ingesta oral inadecuada. El soporte nutricional del alimentación gástrica (reflujo gastroesofágico im-
niño incluye tanto la detección precoz y el tratamiento de portante, hernia de hiato, vómitos de repetición,
la desnutrición calórico-proteica, como su prevención. fístulas esofágicas o gástricas).
La decisión de iniciar soporte nutricional enteral en • Pacientes con íleo gástrico (atresias píloro-duode-
cualquier paciente pasa por dos asunciones: la dismi- nales o yeyunales altas, úlcera gástrica, o infiltracio-
nución de la capacidad de alimentación oral y la pre- nes malignas de pared gástrica).
sencia de una funcionalidad adecuada del aparato di- • Pancreatitis y fístulas pancreáticas que no toleran
gestivo1, 3-5. Cuando esta no sea suficiente o posible, el administración gástrica.
paciente debe ser alimentado mediante nutrición pa- • Tras cirugía gastrointestinal mayor, permitiendo
renteral, al menos de forma parcial. El uso combinado una alimentación precoz.
de ambas técnicas de soporte nutricional es cada vez • Pacientes críticos con alteración persistente del va-
más frecuente y permite disminuir la duración y la can- ciamiento gástrico.
tidad de los aportes intravenosos, incluso en los niños
gravemente enfermos. Por otra parte, la suplementa- En cuanto al tipo de sonda:
ción de la dieta oral (nutrición enteral oral) está indica-
da cuando el tracto gastrointestinal sea funcionante y • En general, cuando la duración estimada del so-
la ingesta escasa pueda ser compensada totalmente porte es inferior a 3 meses se recomiendan las son-
mediante la modificación de la dieta (alimentos natu- das nasogástricas, nasoduodenales o nasoyeyuna-
rales o módulos nutricionales). les. Las primeras son más fáciles de manejar y, por
Las indicaciones de nutrición enteral en niños y ado- tanto, de elección siempre que no haya un gran
lescentes aparecen en la tabla 1. Las contraindicacio- riesgo de aspiración.
nes absolutas de la nutrición enteral son cada vez más • Los niños que necesitan un soporte nutricional
limitadas: obstrucción mecánica, íleo paralítico exten- prolongado (superior a 3 meses) o aquellos que
Tema 54.  Nutrición enteral en el paciente en edad pediátrica: vías y fórmulas 849

Tabla 1.  Indicaciones de nutrición enteral en pediatría.

INCAPACIDAD PARA LA ALIMENTACIÓN ORAL NORMAL


· Prematuridad · Síndrome de inmunodeficiencia adquirida
·A lteraciones congénitas · Traumatismo facial
  – Atresia esofágica y/o fístula traqueoesofágica · Lesiones de boca y esófago
  – Paladar hendido grave
· Tumores de cabeza, cuello, esófago y estómago
  – Síndrome de Pierre-Robin
  – Hemangiomas graves faciales o laríngeos · Alteraciones psicosociales
  – Anorexia nerviosa
· Enfermedades neurológicas:
  – Alteraciones en el desarrollo de la conducta de la
  – Disminución del nivel de conciencia
alimentación.
  – Traumatismo craneoencefálico
  – Síndrome de Guillain-Barré
  – Retraso mental grave
  – Parálisis cerebral infantil
  – Disfagia (disfunción de nervios craneales,
distrofia muscular, miastenia gravis)
INCAPACIDAD PARA COMPENSAR EL AUMENTO DE LAS NECESIDADES DERIVADO DE LA ENFERMEDAD DE BASE
·A umento de las necesidades metabólicas · Anorexia por enfermedad crónica
  – Grandes quemados   – Cáncer
  – Sepsis   – Fibrosis quística de páncreas
  – Traumatismos   – Hepatopatía crónica
  – Cardiopatías congénitas   – Nefropatía crónica
  – Displasia broncopulmonar   – Enfermedad inflamatoria intestinal
  – Fibrosis quística de páncreas   – Síndrome de inmunodeficiencia adquirida
ALTERACIONES EN LA DIGESTIÓN Y METABOLIZACIÓN
·A lteraciones en la función digestiva · Alteraciones en la metabolización de los nutrientes
  – Diarrea crónica   – Glucogenosis I y III
  – Síndrome de intestino corto   – Aminoacidopatías y acidemias orgánicas
  – Enterocolitis necrosante   – Alteraciones del ciclo de la urea
  – Enfermedad inflamatoria intestinal   – Defectos en la oxidación de los ácidos grasos
  – Pseudobstrucción intestinal crónica · Alteraciones en la excreción de los nutrientes
  – Reflujo gastroesofágico   – Insuficiencia renal crónica
  – Pancreatitis
  – Hepatopatía crónica
  – Efectos gastrointestinales de la quimioterapia,
la radioterapia y el trasplante de progenitores
hematopoyéticos

presentan alguna anomalía que imposibilita o del paciente1, 4, 5, 7. En lactantes de menos de 5 kg de peso
contraindica el paso de una sonda convencional se utilizan sondas de calibre 5F (1 French = 0,33 mm).
por las fosas nasales o el esófago, son candidatos Desde este peso, y hasta que el niño alcanza los 15-20 kg,
a la colocación de una sonda de gastrostomía o se usan calibres 6 F, y en los niños mayores, 8 F. En
enterostomía, que siempre se realiza bajo aneste- cualquier caso, debemos tener en cuenta la consisten-
sia general. cia de la fórmula que se va a administrar (por ejemplo
si lleva fibra) y la necesidad de utilizar la sonda para
4.  Material para la administración otros usos a la hora de elegir el calibre, especialmente
si se van a administrar fármacos, ya que estos pueden
4.1.  Dispositivos de acceso obstruir la sonda si su diámetro no es el suficiente. La
longitud de las sondas para uso pediátrico oscila entre
4.1.1.  Sondas nasogástricas y nasoyeyunales 50 y 120 cms.
Las sondas para alimentación enteral deben tener un Las sondas de cloruro de polivinilo se endurecen cuan-
diámetro y una longitud adecuados a la edad y el peso do llevan varios días colocadas, pero son útiles para la
850 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

descompresión intestinal porque no se suelen colapsar, El botón de gastrostomía es un dispositivo que per-
para la alimentación enteral en períodos cortos y en re- mite la colocación de una válvula unidireccional en el
cién nacidos o lactantes muy pequeños. Deben ser cam- punto de inserción de la gastrostomía. Se puede unir
biadas cada 2-3 días para evitar la aparición de úlceras mediante diversos mecanismos a distintos tubos de ali-
cutáneas o perforación en el tubo digestivo. mentación. Existe material adaptado al tamaño y espe-
Las sondas de poliuretano y silicona son blandas y sor de la pared abdominal (tabla 2).
flexibles, por lo que pueden mantenerse colocadas du- Las yeyunostomías quirúrgicas pueden estar indica-
rante períodos prolongados. Tienen más tendencia a co- das en un pequeño grupo de pacientes seleccionados,
lapsarse y para su inserción es necesario utilizar un fia- principalmente afectos de reflujo gastroesofágico gra-
dor. Las sondas de poliuretano son las más recomendables ve o gastroparesia que no se puede controlar. Las son-
en los niños pequeños, porque a igualdad de calibre ex- das transpilóricas se pueden colocar también a través
terno, tienen un calibre interno mayor que las demás. de gastrostomías preexistentes (gastroyeyunostomía),
Algunas sondas de poliuretano o silicona tienen un si bien sólo están disponibles en tamaños grandes.
lastre de tungsteno en el extremo distal, que facilita su
colocación en el duodeno o el yeyuno y dificulta la ex- 4.2.  Sistemas de infusión
pulsión por el vómito.
Las sondas nasogástricas se colocan a la cabecera del Lo ideal es realizar la infusión con el uso de bombas
enfermo empleando como guía la medida nariz-ombli- de nutrición enteral, aunque en casos excepcionales en
go, debiendo posteriormente confirmar su correcta los que no se pueda disponer de ellas podría hacerse
localización bien mediante la detección del pH ácido mediante goteo por gravedad.
gástrico o si es necesario de forma radiológica. Las bombas indicadas son las de tipo peristáltico,
Las sondas transpilóricas de acceso nasal se deben que aseguran la exactitud del volumen administrado.
situar a nivel del ángulo de Treitz. Se pueden colocar a En el caso de la alimentación de recién nacidos o
la cabecera del enfermo insuflando aire, o bien bajo lactantes críticos son útiles las bombas de jeringa que
control fluoroscópico o endoscópico. permiten la infusión de flujos bajos con gran precisión.
El uso de bombas es siempre necesario en el caso de
administraciones transpilóricas, nocturnas, neonatos y
4.1.2.  Gastrostomías y yeyunostomías lactantes pequeños, pacientes graves y en aquellos con
La colocación de las gastrostomías9, puede hacerse de baja tolerancia a fluctuaciones en el volumen infundido.
forma percutánea (endoscópica, laparoscópica o radio-
lógica) o quirúrgica (gastrostomía de Stamm), esta últi- 5.  Métodos y modos de infusión
ma cuando no sea posible realizar la técnica anterior,
cuando existan deformidades graves de tórax y columna Se pueden utilizar dos modalidades para administrar
que alteren la posición normal del estómago, en los ca- las fórmulas enterales1, 2, 4, 5:
sos de cirugía abdominal previa o si el paciente va a su-
frir una intervención abdominal por cualquier motivo. El • La alimentación gástrica intermitente, en la que la
reflujo gastroesofágico que puede aparecer después de fórmula se administra en forma de bolo, en un
la gastrostomía puede necesitar una técnica antirreflujo período de tiempo similar al de una comida (10-
(por ejemplo, funduplicatura de Nissen), que no está 20 minutos). Esta técnica es sencilla y más fisiológi-
exenta de complicaciones postoperatorias. Existe con- ca que la administración enteral continua, y facilita
troversia sobre la necesidad de asociar rutinariamente la transición a la ingesta oral. Cuando la alimenta-
un procedimiento antirreflujo en los pacientes con dete- ción intermitente no se tolera (presencia de residuo
rioro neurológico a los que se les realiza una gastrosto- gástrico, malabsorción, síndrome de dumping, as-
mía. Para tomar una decisión puede ser útil la coloca- piración o regurgitación), se puede recurrir a la in-
ción, antes de la intervención, de una sonda nasogástrica fusión continua.
para determinar si la infusión se tolera adecuadamente y • La nutrición enteral a débito continuo (NEDC) se ad-
si aparece reflujo significativo. La existencia previa de en- ministra con una bomba de infusión peristáltica, ya
fermedad pulmonar documentada asociada al reflujo es sea en el estómago o en el yeyuno. Está indicada en
una indicación para asociar una funduplicatura. los pacientes con disminución del área absortiva in-
Inicialmente se suele colocar una sonda de gastrostomía testinal (por resección o daño de la mucosa), en ni-
con seta o balón intragástrico que se puede sustituir a ños con períodos de ayunas previos superiores a 5-7
partir de los 2-3 meses cuando se haya formado la fístula días, cuando no se toleran las fórmulas hiperosmo-
gastrocutánea por otras de tipo botón (que son de menor lares o la alimentación intermitente, en la suple-
tamaño y pasan desapercibidas debajo de la ropa). En el mentación nocturna y en todos los casos de alimen-
caso de la realización de una técnica de gastrostomía en- tación transpilórica. La falta de distensión gástrica
doscópica por gastropexia se puede implantar directa- con esta modalidad disminuye la posibilidad de re-
mente un botón, evitando un segundo procedimiento. flujo y aspiración. Una variante muy utilizada en
Tema 54.  Nutrición enteral en el paciente en edad pediátrica: vías y fórmulas 851

Tabla 2.  Sondas para gastrostomía.

Bard Compat Flocare Freka Mic


Tipo
(Bard Inc.) (Nestle) (Nutricia) (Fresenius-Kabi) (Grifols)
14, 16, 20, 24, 28 F – 10, 14, 18 F 9, 15 y 20 F 14, 20, 24 F
PEG
extracción sin E extracción con E extracción sin E
5 cc: 12, 14 F 15 cc: 10, 14, 16, 18, 15 F gastropexia 7 cc: 12, 14, 16 F
20 cc: 16 a 24 F 20, 22 F 20 F 15 F sustitución 15 cc: 18 a 30 F
Sonda
balón Para bolus:
7 cc: 12, 14, 16 F
20 cc: 18 a 24 F
Sonda 16, 20 F
– – – –
sin balón
18, 24 F (1,2, 1,7,
2,4, 3,4 cm)
Botón – – – –
24 F (4.4 cm)
28 F (1,5, 2,7, 4,3 cm)
10, 20 cc: – – – < 10 cc:
16 F (1,2, 1,7, 2,4 cm) 12 a 20 F (0,8, 1, 1,2,
18, 20 F (1,7, 2,4, 1,5, 1,7, 2,0, 2,3, 2,5,
Botón 3,4, 4,4 cm) 2,7, 3, 3,5, 4 cm)
con balón 20 cc: 14 a 20, 24 F
16 F (1,7, 2,4 cm) (4,5 cm)
20, 24 F (1,7, 2,4, 24 F (5 cm)
3,4, 4,4 cm)

PEG: Gastrostomía endoscópica percutánea. F: French (1 F = 0,33 mm) E: Endoscopia.


Fuente: datos proporcionados por las casas comerciales según su vademécum de productos 2016.

pediatría, por disminuir la incidencia de trastornos que pueden ser recomendables ciertos preparados con
de la alimentación asociados a la nutrición enteral exclusión de algunos nutrientes u otros específicamente
prolongada, es la nutrición enteral cíclica, en la que diseñados para adecuarse a las alteraciones metabólicas
se combinan la administración de fórmula por vía y a los requerimientos nutricionales de una enfermedad
enteral durante unas horas (generalmente por la determinada.
noche) y la alimentación oral intermitente (habitual-
mente durante el día). 6.1.  Suplementos orales
Existen preparados comerciales tipo suplemento
6.  Selección del tipo de fórmula
(fórmulas incompletas de alta palatabilidad) que se ca-
Hay varios factores que determinan la elección de la racterizan por su alto contenido calórico. Contienen
fórmula a utilizar en cada paciente10, 11, siendo los más proteínas intactas, triglicéridos de cadena larga (LCT) y
importantes la edad, el grado de funcionalidad del in- carbohidratos sencillos y su osmolalidad es elevada (450
testino y la enfermedad de base del paciente1, 4, 5. a 600 mOsm/kg). En general, solo están indicadas en
Si la función digestiva permanece íntegra o solo existe pacientes con función gastrointestinal normal. Se pre-
intolerancia a la lactosa, las dietas poliméricas conven- sentan en polvo para diluir con leche, o en forma líqui-
cionales son las de primera elección a partir del año de da, sólida o semisólida. Las fórmulas poliméricas com-
edad. Cuando el paciente presenta alteraciones digesti- pletas tanto pediátricas como de adultos, saborizadas,
vas importantes, dependiendo de la función afectada, pueden utilizarse como suplementos orales12.
puede ser necesario el uso de fórmulas con modificacio- La ingesta de grandes volúmenes de estos preparados
nes en las proteínas (oligoméricas o elementales) o gra- puede no ser tolerada en los pacientes nutricionalmente
sas (con adición de triglicéridos de cadena media, MCT). comprometidos; por tanto, se recomienda el consumo
La elección de la fórmula también está condicionada frecuente de pequeñas alícuotas o su uso sustituyendo a
por la enfermedad de base que padece el niño, de modo la leche del desayuno y de postre de la cena.
852 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

6.2. Fórmulas a partir de alimentos naturales Sin embargo, las fórmulas de adultos pueden ser úti-
les para los niños de esta edad con necesidades nutri-
Las fórmulas comerciales se fabrican con carne, hue- cionales y metabólicas altamente especializadas.
vos, leche, cereales, frutas y verduras y aceites vegeta-
les. Contienen una cantidad moderada de residuo y
una osmolalidad de entre 300 y 450 mOsm/kg. Son Fórmulas poliméricas pediátricas
útiles para los pacientes con enfermedades crónicas Se trata de fórmulas compuestas por proteínas com-
que tienen una capacidad digestiva adecuada y necesi- pletas, oligosacáridos, aceites vegetales con una cierta
tan soporte nutricional enteral a largo plazo. Sin em- cantidad de MCT, vitaminas y minerales. La osmolali-
bargo, pueden no ser toleradas por los niños con una dad de estas fórmulas, la mayoría de las cuales no con-
función intestinal comprometida. Suelen ser caras y su tienen lactosa ni gluten y aportan poco residuo, oscila
elevada viscosidad puede favorecer la obstrucción de entre 300 y 650 mOsm/kg y su densidad calórica, entre
las sondas pediátricas. 1 y 2 kcal/ml.
También se pueden preparar en casa a partir de le- La baja osmolalidad de las fórmulas isotónicas per-
che, zumos, cereales y otros alimentos naturales. Es una mite su administración tanto a débito continuo como
práctica habitual en los pacientes con enfermedades en bolos. Cuando es necesaria una restricción de líqui-
neurológicas crónicas, que requieren soporte nutricio- dos importante o las necesidades calóricas son muy
nal a largo plazo por gastrostomía, por ser económica y elevadas, se usan las fórmulas hipercalóricas concen-
tener ventajas psicosociales. La ayuda de un dietista tradas. Las fórmulas con fibra añadida tienen una os-
permite que las concentraciones de agua libre, micro y molalidad de 300 a 480 mOsm/kg y son útiles para los
macronutrientes sean las adecuadas. pacientes con estreñimiento crónico y diarrea. En la
tabla 3 se muestran los productos comercializados.
6.3.  Componentes modulares
Debido a los elevados requerimientos nutricionales Fórmulas hidrolizadas (u oligoméricas)
de los pacientes pediátricos, a veces es necesario modi-
ficar las fórmulas enterales con componentes modula- Cuando existen alteraciones digestivas graves (síndro-
res, ya sean proteicos, lipídicos o de hidratos de carbo- me de intestino corto, insuficiencia pancreática, enfer-
no. Los módulos proteicos se utilizan para aumentar la medad inflamatoria intestinal u otras), se deben utilizar
densidad proteica de la fórmula. Las emulsiones lipídi- fórmulas con nutrientes predigeridos. También resultan
cas o los polímeros de glucosa permiten aumentar la útiles en los pacientes con fibrosis quística, aunque la
densidad calórica. Se recomienda calcular la composi- adición de enzimas pancreáticas a una fórmula con pro-
ción nutricional final para evitar posibles deficiencias teínas intactas puede ser también efectiva. Tanto en el
de nutrientes aislados12. intestino sano como en el lesionado, el nitrógeno se ab-
sorbe más rápidamente y de forma más efectiva cuando
6.4.  Fórmulas completas se administra en forma de dipéptidos o tripéptidos que
a partir de aminoácidos libres; por lo tanto, se recomien-
6.4.1. Fórmulas para niños mayores de 10 años dan las fórmulas peptídicas con suplemento de amino­
En los niños mayores de 10 años y los adolescentes ácidos esenciales libres frente a las elementales.
habitualmente se utilizan los mismos preparados que La grasa de estas fórmulas es una mezcla de MCT y
en los adultos (dietas poliméricas, oligoméricas o mo- LCT, aportando estos últimos los ácidos grasos esencia-
noméricas, en función de la mayor o menor integridad les. Algunas enfermedades digestivas con defectos en la
de las funciones digestiva y absortiva). absorción o transporte de la grasa (linfangiectasia, abe-
Existen, además, numerosos preparados especialmen- ta o hipobetalipoproteinemia, colestasis) precisan de
te diseñados para diversas enfermedades (encefalopatía fórmulas ricas en MCT. Los preparados altamente hidro-
hepática, insuficiencia renal, insuficiencia respiratoria, lizados también están indicados en los cuadros de aler-
entre otras). Estos productos son generalmente mucho gia a proteínas de leche de vaca con o sin enteropatía.
más caros, y su superior utilidad clínica frente a las fór-
mulas estándar no está totalmente establecida. Todos Fórmulas elementales (o monoméricas)
ellos se comentan en otro capítulo de este manual.
Constituidas por L-aminoácidos, polímeros de gluco-
sa y grasa con adición de MCT en cantidad variable,
6.4.2.  Fórmulas para niños de 1 a 10 años
están indicadas en alergias graves a proteínas de leche
Actualmente existen numerosas fórmulas especial- de vaca con intolerancia a las fórmulas hidrolizadas y
mente diseñadas para niños de entre 1 y 10 años de en cuadros graves de malabsorción (intestino corto,
edad. El aporte diario de entre 950 y 2000 ml (depen- enfermedad inflamatoria, enteritis postradiación y qui-
diendo del producto) cubre el 100 % de las RDI para mioterapia) siempre que se sospeche alergia mediada
vitaminas y minerales a esta edad. o no por IgE a proteínas de leche de vaca.
Tema 54.  Nutrición enteral en el paciente en edad pediátrica: vías y fórmulas 853

Tabla 3.  Dietas poliméricas pediátricas.

Osmolaridad
H. carbono
Edad o Proteína (g) Grasa (g) (mOsm/l)
Composición por Energía (g) Presentación
peso del (% kcal) (% kcal) Fibra (g)
100 ml (kcal) (% kcal) (sabor)
paciente C/S (%) Fuente Soluble/
DTM/Sac (%)
insoluble (%)
Botellas 500 ml
Vainilla
Ensure Junior 2,8 (11 %) 5,0 (45 %) 11,2 (44 %)
1-10 años 101 273 Botellas 220 ml
Drink (Abbott) 22/78 MCT 19,5 % 69/31
Vainilla, chocolate,
fresa
Ensure Junior 4,2 (11 %) 7,5 (44,5 %) 16,7 (44 %) Botellas 220 ml
1-10 años 151 390
Plus (Abbott) 82/18 MCT 19,8 % 70/30 Vainilla, fresa
Ensure Junior 289 Botellas 220 ml
2,8 (11 %) 10,9 (44 %)
con fibra 1-10 años 100 4,98 (45 %) Fibra 0,73 Vainilla, plátano,
82/18 69/31
(Abbott) 43/57 fresa
Ensure Junior 389 Botellas 220 ml
4,2 (11,1 %) 7,5 (44,5 %) 16,7 (44,4 %)
Plus con Fibra 1-10 años 152 Fibra 0,75 Vainilla, fresa,
82/18 MCT 20 % 70/30
(Abbott) 57/43 plátano
4,4 (40 %) 12,5 (50 %)
Frebini original Bolsa 500 ml
1-12 años 100 2,5 (10 %) MCT 20 % 93/7 otros 220
(Fresenius-Kabi) Neutro
DHA/EPA azúcares
Fortini 1.0 Multi Botellas 200 ml
2,4 (10 %) 11,8 (47 %) 285
Fibre 1-12 años 100 4,5 (40 %) Fresa, vainilla,
100/0 58/16 Fibra 3 %
(Nutricia) chocolate, mixto
Botellas 200 ml
Fortini A partir de 3,3 (9 %) 6,8 (41 %) 18,8 (50 %)
150 450 Vainilla, fresa,
(Nutricia) 1 año 100/0 Vegetal 59/16
mixto
Bote 400 g
Fortini CF 3,4 (9 %) 18,7 (50 %) 30,5 % P/V
>1 año 150 6,9 (41 %) 425
(Nutricia) 100/0 75/16 1 cacito = 6,1 g
Neutro, vainilla
Bote 400 g
Fortini IBD 5,3 (35 %) 17,4 (52 %) 30 % P/V
>5 años 135 4,5 (13 %)
(Nutricia) MCT 48 % 73/10 1 cacito = 6,1 g
Vainilla
Fortini Multi 18,8 (49 %) 440/380* Botellas 200 ml
A partir de 3,3 (9 %) 3,4* 6,8 (40 %)
Fibre 153 59/16. Neutro Fibra 1,5 (3 %) Neutro*, vainilla,
1 año 97/0/3 % soja Vegetal
(Nutricia) sin sacarosa 60/40 chocolate, mixto
6,7 (40 %)
Frebini energy 18,7 (49,8 %) Bolsa 500 ml
1-12 años 150 3,8 (10,2 %) MCT 20 % 345
(Fresenius-Kabi) 87/13 Neutro
DHA/EPA
Frebini energy
6,7 (40 %) 18,7 (49,8 %) Botella 200 ml
drink 1-12 años 150 3,8 (10,2 %) 400
MCT 19,4 % 76/24 Fresa, plátano
(Fresenius-Kabi)
400/420
Frebini energy
6,7 (40 %) 18,7 (49,8 %) Fibra 1,1 Botella 200 ml
fibre drink 1-12 años 150 3,8 (10,2 %)
MCT 19,4 % 75/25 (1,5 %) Vainilla, chocolate
(Fresenius-Kabi)
66/34
5,4 (48 %) 10,3 (41 %) Botella 125,
Infatrini 0-12 meses 2,6 (10 %) 305
101 LCP (AA y 50/50 (DTM/ 200 ml
(Nutricia) Hasta 9 kg 39/61 Fibra 0,6 (1 %)
DHA) Lac.) Neutro

(Continúa)
854 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

(Continuación)

Osmolaridad
H. carbono
Edad o Proteína (g) Grasa (g) (mOsm/l)
Composición por Energía (g) Presentación
peso del (% kcal) (% kcal) Fibra (g)
100 ml (kcal) (% kcal) (sabor)
paciente C/S (%) Fuente Soluble/
DTM/Sac (%)
insoluble (%)
Bote 400 g.
5,4 (48 %) 10 (40 %)
Infatrini Powder 0-12 meses 2,6 (10 %) 317 20 % P/V.
100 LCP (AA y 50/50 (DTM/
(Nutricia) Hasta 9 kg 39/61 Fibra 0,6 (1 %) 1 cacito = 5 g
DHA) Lac.)
Neutro
4,7 (35 %)
Isosource Junior 2,7 (9 %) Vegetal, 17 (56 %) Smartflex 250 ml
1-10 años 122 289
(Nestlé) 100/0 pescado 90/10 Vainilla
MCT 20 %
4,8 (34 %)
342
Isosource Junior 2,7 (9 %) Vegetal, 17 (55 %) Smartflex 250 ml
1-10 años 124 Fibra 1,1 (2 %)
fibre (Nestlé) 100/0 pescado 90/10 Vainilla
50/50
MCT 20 %
Nutrini 1-6 años 2,5 (10 %) 4,4 (40 %) 12,5 (50 %) Packs 500 ml
100 200
(Nutricia) 8-20 kg 40/60 DHA/EPA 100/0 Neutro
Nutrini MF 1-6 años 2,5 (10 %) 4,4 (40 %) 12,5 (49 %) 205 Packs 500 ml
101
(Nutricia) 8-20 kg 40/56/4 % soja DHA/EPA 100/0 Fibra 0,8 (1 %) Neutro
Botellas 200 ml,
Nutrini Energy 1-6 años 4 (11 %) 6,7 (40 %) 18,5 (49 %)
150 300 Packs 500 ml
(Nutricia) 8-20 kg 60/40 DHA/EPA 100/0
Neutro
Nutrini Energy 315 Botellas 200 ml,
1-6 años 4 (11 %) 6,7 (40 %) 18,5 (48 %)
MF 153 Fibra 0,8 (1 %) Packs 500 ml
8-20 kg 60/40 DHA/EPA 100/0
(Nutricia) 50/50 Neutro
Nutrinimax 7-12 años 3,3 (13 %) 4,2 (38 %) 12,3 (49 %) Packs 500 ml
100 225
(Nutricia) 21-45 kg 40/60 DHA/EPA 100/0 Neutro
Nutrinimax MF 7-12 años 3,3 (13 %) 4,2 (37 %) 12,3 (49 %) 230 Packs 500 ml
102
(Nutricia) 21-45 kg 39/58/3 % soja DHA/EPA 100/0 Fibra 1,1 (2 %) Neutro
Nutrinimax Energy 7-12 años 4,8 (13 %) 6,3 (38 %) 18,5 (49 %) Packs 500 ml
150 330
(Nutricia) 21-45 kg 60/40 DHA/EPA 100/0 Neutro
Nutrinimax 315
7-12 años 4,8 (13 %) 6,3 (38 %) 18,5 (48 %) Packs 500 ml
Energy MF 152 Fibra 1,1 (1 %)
21-45 kg 58/40/4 % soja DHA/EPA 100/0 Neutro
(Nutricia) 50/50
>5 años 4,7 (42 %) Bote 400 g
Resource IBD
Enfermedad 101 3,6 (14 %) Vegetal y 11 (44 %) 290 20 % P/V
Nestlé
de Crohn láctea Neutro
Sobres de 32,5 g
7,2 (43 %) 16,3 (42 %)
Resource CF 153/ 4,9 (13 %) 429-486 Solución 32,5 %
1-10 años Vegetal, Lleva lactosa,
(Nestlé) sobre 100/0 Fibra 1,7 (2 %) Vainilla, chocolate
pescado no sacarosa
y neutro
Botellas 200 ml
Resource Junior 3 (8 %) 6,2 (37 %) 20,6 (55 %)
1-10 años 150 346 Fresa, vainilla,
(Nestlé) 78/22 Vegetal 75/25
chocolate
Resource Junior 19,8 (53 %)
3 (8 %) 6,2 (37 %) 412 Botellas 200 ml
fibre 1-10 años 150 76/22,5
78/22 Vegetal Fibra 1,5 (2 %) Vainilla, chocolate
(Nestlé) Almidón 2,5 %
Sanutri FQ Bote 360 g
> 2 años 101 4,6 (15,7 %) 4,6 (37,3 %) 12,3 (44 %) 524
Lactalis 22,5 % P/V

C/S: relación caseína/seroproteínas. MCT: triglicéridos de cadena media. DTM: maltodextrinas. Sac: sacarosa. Lac.: lactosa. LCP: ácidos
grasos poliinsaturados de cadena larga. AA: ácido araquidónico. DHA: ácido docosahexanoico. P/V: peso/volumen (g por cada 100 ml).
Tema 54.  Nutrición enteral en el paciente en edad pediátrica: vías y fórmulas 855

6.4.3.  Fórmulas para lactantes a término • La grasa aporta el 40-50 % de la energía en las fór-
mulas estándar. Durante la fabricación, la grasa de
En los lactantes sanos nacidos a término, la leche hu- la leche es sustituida por aceites vegetales o una
mana constituye el alimento de elección. Cuando por mezcla de grasas vegetales y animales. Esto mejora
cualquier causa no puede administrarse es posible susti- la digestibilidad, aumenta la concentración de áci-
tuirla por fórmulas para lactantes cuya composición dos grasos esenciales y disminuye la de contami-
nutricional cada vez es más parecida a la de la leche nantes ambientales. La determinación de la com-
materna, aunque nunca llegará a igualarla (ya que esta posición lipídica ideal de las fórmulas es un área de
contiene además hormonas, factores inmunológicos, investigación extensa, especialmente en lo referen-
enzimas y células viables). La base para su fabricación te a los ácidos grasos ω-3 y ω-6 y sus derivados.
suele ser la leche de vaca. Su composición está regula- Estos ácidos grasos están presentes en la leche hu-
dapor una Reglamentación técnico-sanitaria específica mana y pueden ser importantes para la óptima ma-
(Real Decreto 867/2008, de 23 de mayo, y 165/2014, duración de la retina y la corteza visual de los recién
de 14 de marzo) y debe figurar en el etiquetado. En nacidos. En la nueva legislación europea, aplicable
general, la concentración de nutrientes es mayor que
en 2020, todas las fórmulas para lactantes deben
en la leche de mujer para compensar la posible menor
contener DHA en una cantidad de 20 mg/100 kcal.
biodisponibilidad de los mismos.
• La lactosa es el carbohidrato principal de las fórmu-
En ausencia de leche materna, las fórmulas para lac-
las estándar. En los preparados de inicio se aporta
tantes13, 14 son sustitutos apropiados para la alimenta-
de forma mayoritaria. Una cierta cantidad de lacto-
ción de los lactantes nacidos a término durante el primer
sa, incluso en los recién nacidos a término, llega al
año de vida. Igual que la leche materna, las llamadas
intestino grueso, donde es fermentada por la flora
fórmulas de inicio o fórmulas para lactantes cubren to-
acidófila, originando un medio ácido que impide el
das las necesidades nutricionales durante los primeros 6
desarrollo de microorganismos patógenos, facilita
meses de vida cuando se utilizan con único alimento. A
la absorción de calcio y quizá también de fósforo.
partir de los 4-6 meses, se recomienda la diversificación
Algunas fórmulas, de continuación, llevan además
de la dieta tanto en los lactantes alimentados al pecho
sacarosa, almidón u otros carbohidratos complejos.
como con fórmula, para conseguir que las necesidades
• Actualmente no se recomiendan las fórmulas para
se cubran por completo. A partir de los 6 meses se pue-
lactantes con aporte excesivo de hierro (>1,3 mg/
de sustituir la fórmula de inicio, mucho más modificada
100 kcal) pues se ha relacionado con un posible
para hacer frente a la mayor inmadurez durante los pri-
aumento de la incidencia de infecciones de la vía
meros meses de vida, por una fórmula de continuación,
aérea superior y de diarrea, así como disminución
que se diferencia de la anterior fundamentalmente en el
de la absorción de cobre.
mayor contenido proteico y en hierro. No hay que olvi-
• Algunos otros minerales (calcio, fósforo, magne-
dar, no obstante, que las fórmulas de inicio se pueden
sio, sodio, potasio y cloro) se encuentran en la
utilizar durante todo el primer año de vida a condición
fórmula procedentes de la leche de vaca; otros se
de que se encuentren suplementadas con hierro.
incorporan como sales inorgánicas. También se
La sustitución de la leche materna o la fórmula para
añaden elementos traza, vitaminas, aminoácidos
lactantes por leche de vaca entera antes del primer año
como la taurina y, en ocasiones nucleótidos, que
de vida se asocia con el desarrollo de anemia ferropé-
pueden potenciar la función inmune y el desarro-
nica y un mayor riesgo de desnutrición.
llo gastrointestinal.
Fórmulas estándar basadas en leche de vaca En determinadas situaciones las fórmulas basadas en
(inicio, continuación) leche de vaca no son adecuadas o bien toleradas, por lo
Son las de elección, y aunque comparten muchas si- que se debe recurrir a fórmulas especiales alternativas15.
militudes en cuanto a composición, se diferencian en- Contamos además con una dieta polimérica completa
tre sí en la cantidad y la calidad de los nutrientes. normocalórica para lactantes menores de 1 año que
nos será útil en los casos que precisemos un aumento
• Las fórmulas estándares se prescriben con una del aporte de nutrientes con menor volumen (tabla 3).
densidad calórica de 63-71 kcal/dl.
• El contenido en proteínas debe variar entre 1,8 a 6.4.3.2. Fórmulas basadas en leche de vaca
3 g/100 kcal (el límite inferior disminuirá a 2,5, en
con componentes especiales
la nueva legislación de obligado cumplimiento en
2020). La relación seroproteínas:caseína varía en- Existen varios tipos de estas fórmulas:
tre las distintas fórmulas. Los preparados de inicio
tienen una relación 60:40 (similar a la de la leche • Fórmulas con bajo contenido en minerales y elec-
humana) mediante la adición de proteínas séricas trolitos, indicadas en pacientes con enfermeda-
de leche de vaca13, 14. des renales o cardiovasculares, para disminuir la
856 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

carga renal de solutos. No están suplementadas Las fórmulas de soja están indicadas en la galactose-
con hierro. mia, la intolerancia a la lactosa, lactantes de familias
• Fórmulas sin lactosa, en las que se sustituye este vegetarianas si los padres no quieren dar fórmulas de-
hidrato de carbono por polímeros de glucosa. Se rivadas de proteínas animales, la alergia a proteínas de
puede utilizar para alimentar a los lactantes con leche de vaca (APLV) mediada por IgE (aunque no se
deficiencia de lactasa. Debido a que contiene una recomienda en lactantes menores de 6 meses con sín-
cantidad mínima de lactosa, no es apropiado para tomas fundamentalmente digestivos)16, 17.
lactantes con galactosemia. Las fórmulas de soja están contraindicadas en recién
• Fórmulas con MCT, en las que estos suponen un nacidos prematuros (<1800 g) porque se ha demos-
porcentaje importante del componente lipídico, trado que ganan menos peso que con las fórmulas de
indicadas casi exclusivamente en lactantes con ma- leche de vaca y es mayor el riesgo de osteopenia, en la
labsorción o maldigestión grasa severa. Para evitar insuficiencia renal, en la APLV no mediada por IgE (en-
la deficiencia en ácidos grasos esenciales contie- terocolitis, proctocolitis, en el síndrome postenteritis),
nen un 20 % de triglicéridos de cadena larga (LCT). en la intolerancia hereditaria a la fructosa y en la defi-
ciencia de sacarasa-isomaltasa (porque contienen saca-
rosa)16.
Fórmulas de soja Las fórmulas de soja no están indicadas en el cólico
del lactante16, 17 ni en la prevención de la APLV17, 18.
Son preparados16 cuyo componente proteico se ob-
tiene de la proteína purificada de soja tratada con calor, Fórmulas hidrolizadas
a la que se adiciona L-metionina, L-carnitina y taurina
hasta alcanzar concentraciones similares a las de la le- Desarrolladas para alimentar a los lactantes con aler-
che de mujer. La grasa proviene de aceites vegetales y gia grave a las proteínas de leche de vaca, son las fór-
sus características son similares a las de las fórmulas de mulas recomendadas para los niños con alergia/intole-
leche de vaca. Al provenir de un producto naturalmente rancia a las proteínas de leche de vaca19, 20 o para los
exento de lactosa, el componente hidrocarbonado que que tienen malabsorción grave secundaria a una enfer-
se le añade nunca lo contiene, adicionando polímeros medad digestiva o hepatobiliar. Las desventajas de es-
de glucosa, almidón o sacarosa. Las vitaminas y los mi- tas fórmulas son su mal sabor (aminoácidos sulfura-
nerales (zinc, hierro) se añaden en mayor cantidad que dos), su elevado precio y su elevada osmolalidad.
en las fórmulas estándar, para compensar una posible Las proteínas lácteas son desnaturalizadas por calor
disminución de la biodisponibilidad por su contenido e hidrolizadas enzimáticamente. El hidrolizado resul-
en fitatos. Su aporte calórico es de 67 kcal/100 ml. La tante, compuesto por aminoácidos libres y pequeños
composición de los preparados a base de proteína de péptidos, es enriquecido con ciertos aminoácidos para
soja está sometida a una regulación específica (Real De- compensar las pérdidas debidas al procesamiento.
creto 867/2008, de 23 de mayo, y 165/2014, de 14 de Cuanto mayor es el grado de hidrólisis, menor la anti-
marzo). genicidad y mayor el precio de las fórmulas. La mayoría
Las fórmulas de soja contienen altas concentraciones de estas fórmulas no contienen lactosa, sino dextrino-
de aluminio, manganeso y fitoestrógenos16. No parece maltosa o almidón de tapioca o de maíz en varias pro-
que exista riesgo en la administración de estas fórmu- porciones. La grasa contiene cantidades variables de
las en niños a término que tengan una función renal MCT para facilitar su absorción. Una pequeña cantidad
normal, aunque es preciso tenerlo en cuenta en aque- de los LCT debe garantizar el aporte de ácidos grasos
llos que reciban nutrición parenteral, estén sometidos esenciales. Existen grandes diferencias entre los distin-
a diálisis, sean prematuros o tomen antiácidos que tos productos comercializados.
contengan aluminio, puesto que este se puede deposi-
tar en el hueso y el sistema nervioso central. No se han Fórmulas elementales
descrito casos de intoxicación por manganeso ni efec-
tos adversos producidos por los fitoestrógenos. Sin Sus características e indicaciones fueron desarrolla-
embargo, las recomendaciones más recientes desacon- das en el apartado de fórmulas para el rango de edad
sejan su uso indiscriminado17. de 1 a 10 años.
La proteína de soja no tiene reacción cruzada con la
leche de vaca pero mantiene su capacidad antigénica y 6.4.4. Fórmulas para lactantes prematuros
alergénica. En lactantes pequeños, cuyo sistema inmu-
o de bajo peso para la edad gestacional
ne digestivo es inmaduro y que con frecuencia presen-
tan alteraciones que aumentan la permeabilidad intes- Las necesidades de estos niños son superiores y distin-
tinal, no son eficaces en el tratamiento de la diarrea tas a las de los recién nacidos a término, y las fórmulas
persistente, la enteropatía sensible a leche de vaca y el especialmente diseñadas para ellos21 deben promover
síndrome postenteritis. un ritmo de crecimiento similar al del feto en desarrollo
Tema 54.  Nutrición enteral en el paciente en edad pediátrica: vías y fórmulas 857

y adaptarse a su inmadurez. Contienen más proteínas, La alimentación enteral clásicamente se ha retrasa-


minerales y densidad calórica que las fórmulas para ni- do en los niños con ventilación mecánica (incluida la
ños a término, mezclas de lactosa y polímeros de gluco- CPAP [presión positiva continua de la vía aérea]), caté-
sa y parte de la grasa en forma de MCT. teres umbilicales o riesgo de enterocolitis necrosante.
Fabricadas a partir de leche de vaca, contienen prefe- Sin embargo, desde mediados de los 80, se han defi-
rentemente proteínas séricas (60-70 %) porque las basa- nido los beneficios de la administración precoz de pe-
das en caseína dan lugar a niveles plasmáticos excesivos queños volúmenes de leche materna o de fórmula
de tirosina y fenilalanina. Suelen aportar de 3-3,5 g/100 (2-8 ml/kg/día), incluso en estos pacientes: facilita la
kcal. Existen recomendaciones para el contenido míni- adaptación intestinal y disminuye la incidencia de hi-
mo de ciertos nutrientes (arginina, taurina, carnitina...), perbilirrubinemia indirecta, ictericia colestática y os-
pero no para la composición basada en hidrolizados teopenia23.
proteicos o aporte exclusivo de aminoácidos. Antes de las semanas 32-34 se utiliza la alimentación
Las mezclas grasas se han diseñado para optimizar la enteral debido a la ausencia de coordinación entre la
absorción (los MCT disminuyen la esteatorrea secunda- succión y la deglución. A partir de esta edad, se puede
ria a los bajos niveles de lipasa intestinal o sales biliares) utilizar la alimentación oral en los neonatos, siempre
y realizar un aporte adecuado de ácidos grasos esen- que estén alerta y tengan buena vitalidad. Sin embar-
ciales incluidos los de cadena muy larga. Sin embargo, go, los niños más inmaduros, débiles o críticamente
no existen evidencias para recomendaciones induda- enfermos necesitan alimentación enteral para evitar el
bles. El mayor contenido en calcio y fósforo aumenta la riesgo de aspiración y reducir el gasto energético. La
mineralización ósea. Cuando el aporte de aquellos es nutrición enteral se puede realizar en forma de bolos o
adecuado, las necesidades de vitamina D no están con infusión continua de leche humana fortificada o
aumentadas. fórmula para prematuros. El uso del estómago maximi-
Tradicionalmente, al aproximarse el alta estas fórmu- za la capacidad digestiva del tracto gastrointestinal. La
las se sustituían progresivamente por una fórmula de alimentación transpilórica continua se utiliza en neo-
inicio. Sin embargo, los recién nacidos (RN) con un natos con vaciamiento gástrico lento, apneas durante
peso al nacimiento < 1.000 g, los que sufren alguna la alimentación gástrica, riesgo de aspiración, espasmo
enfermedad crónica y aquellos que reciben el alta con pilórico o en tratamiento con CPAP. En los casos en los
un peso bajo pueden continuar la administración en que se prevea una duración muy prolongada de la im-
casa. Existen unas fórmulas para la alimentación de los posibilidad para la alimentación oral, hay que plantear
niños prematuros después del alta, con una composi- la colocación de una gastrostomía, que reduce el ries-
ción intermedia entre las anteriores. Su utilización has- go de erosiones nasales o palatinas y la estimulación
ta los 9 meses de edad postnatal se asocia con una oral negativa asociada con la colocación de la sonda.
mejora en el contenido mineral óseo. Cuando se utiliza la alimentación a débito continuo,
hay riesgo de que la cantidad de fórmula administrada
sea inferior a la necesaria. Además, la grasa de la leche
7.  Nutrición enteral del prematuro humana y los MCT de las fórmulas tienden a adherirse
a la sonda y disminuir la densidad calórica. No se han
La forma de alimentación de los recién nacidos pre- identificado claros beneficios cuando se comienza con
término debe individualizarse en función de la edad fórmula diluida en lugar de administrarla a concentra-
gestacional, el peso al nacer, el estado clínico y la expe- ción completa. Sin embargo, varios estudios han en-
riencia del personal22. La decisión pasa por elegir la vía contrado una asociación entre el aumento rápido del
de alimentación, la frecuencia, el volumen y la veloci- volumen administrado y el riego de enterocolitis necro-
dad de avance. sante, por lo que se recomiendan aumentos progresi-
La inmadurez gastrointestinal, las elevadas necesida- vos de no más de 20 ml/kg/día. El riesgo de enterocoli-
des nutricionales, la esencialidad de determinados nu- tis es menor cuando se usa leche materna o leche
trientes que no lo son a otras edades (histidina, tauri- humana de banco.
na), la limitada tolerancia a la sobrecarga de líquidos o
de solutos y la predisposición a determinadas compli-
caciones (hipoglucemia, enterocolitis necrosante) ha- 8. Inicio de la nutrición enteral
cen que evitar la desnutrición en los RN prematuros sea y monitorización del soporte
una tarea difícil.
La inmadurez funcional característica de los recién El inicio de la nutrición enteral se hará de forma len-
nacidos, mucho más evidente en los prematuros, se ta y progresiva, incrementando el ritmo de infusión,
compensa en parte por algunos de los componentes según la tolerancia, en el plazo de 2-3 días. En las ta-
de la leche materna, lo cual debe ser tenido en cuenta blas 4 y 5 se expone una guía de progresión del volu-
a la hora de planificar el soporte nutricional artificial, men para nutrición continua e intermitente, respecti-
especialmente en el período neonatal y la lactancia. vamente, según la edad del paciente.
858 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

Tabla 4.  Administración de nutrición enteral continua. Progresión del volumen.

Edad Ritmo inicial Aumento diario Máximo


1-2 ml/kg/h 1 ml/h 120-175 ml/kg/día
Pretérmino
(10-20 ml/kg/h)
10-20 ml/h 5-10 ml/8 h 21-54 ml/h
0-1 año
(1-2 ml/kg/h) (1-2 ml/kg/h) (6 ml/kg/h)
20-30 ml/h 10-15 ml/8 h 71-92 ml/h
2-6 años
(2-3 ml/kg/h) (1 ml/kg/h) (4-5 ml/kg/h)
30-40 ml/h 15-20 ml/8 h 108-130 ml/h
7-14 años
(1 ml/kg/h) (0,5 ml/kg/h) (3-4 ml/kg/h)
50 ml/h 25 ml/8 h 125 ml/h
> 14 años
(0,5-1 ml/kg/h) (0,4-0,5 ml/kg/h)

Tabla 5.  Administración de nutrición enteral intermitente. Progresión del volumen.

Edad Ritmo inicial Aumento diario Máximo


Pretérmino 2-4 ml/kg/toma 2-4 ml/toma 120-175 ml/kg/día
> 1200 g
60-80 ml/4 h 20-40 ml/4 h 80-240 ml/4 h
0-1 año
(10-15 ml/kg/toma) (10-30 ml/toma) (20-30 ml/kg/toma)
80-120 ml/4 h 40-60 ml/4 h 280-375 ml/4 h
2-6 años
(5-10 ml/kg/toma) (30-45 ml/toma) (15-20 ml/kg/toma)
120-160 ml/4 h 60-80 ml/4 h 432-520 ml/4 h
7-14 años
(3-5 ml/kg/toma) (60-90 ml/toma) (10-20 ml/kg/toma)
200 ml/4 h 100 ml/toma 500 ml/4 h
> 14 años
(3 ml/kg/toma) (10 ml/kg/toma)

En el tránsito desde la alimentación parenteral a la El cálculo del volumen y de los requerimientos pro-
enteral, esta se debe iniciar a débito continuo y a bajo teicos y energéticos diarios debe realizarse de forma
volumen, con incrementos graduales, alcanzando la individualizada, según la edad, el estado nutricional
transición completa en aproximadamente una sema- del paciente y la enfermedad de base. En los lactantes
na. Cuando la nutrición enteral cubra un 35-50 % de pequeños se inicia con 1-2 ml/kg/h.
los requerimientos calculados por vía enteral, se ini- No hay acuerdo unánime en la necesidad de monito-
ciará el descenso de la nutrición parenteral, para reti- rizar el residuo gástrico en los pacientes con alimenta-
rarla completamente una vez se haya conseguido cu- ción enteral. Puede ser aconsejable hacerlo en algunas
brir el 75-100 % de los requerimientos por vía enteral. situaciones clínicas, como recién nacidos prematuros o
No se ha comprobado ventaja alguna por iniciar siste- pacientes críticos. En caso de medir el residuo gástrico,
máticamente la alimentación con fórmulas hipocon- si se encuentra un volumen superior al 50 % del infun-
centradas. dido en la toma anterior cuando la administración es
Si hay alteración en la digestión o absorción intesti- fraccionada, o superior o igual al ritmo de infusión si la
nal, se recomienda que se inicie la alimentación con perfusión es continua, se modificará o interrumpirá la
una fórmula oligomérica. Aquellos pacientes que no administración24.
presenten alteración en la absorción y/o digestión in-
testinal y que hayan recibido alimentación oral o ente-
9. Complicaciones
ral en los últimos 4 días, suelen toleran directamente
las fórmulas poliméricas. En los casos de nutrición post­ Los problemas que comporta esta técnica de nutri-
pilórica debe conseguirse inicialmente el volumen de- ción artificial en los niños son en todo superponibles a
seado y posteriormente la concentración adecuada. los que se presentan en el adulto, con complicaciones
Tema 54.  Nutrición enteral en el paciente en edad pediátrica: vías y fórmulas 859

de tipo mecánico, gastrointestinal y metabólico. Sin situación estable y ser controlados periódicamente
embargo, los efectos secundarios que el uso de la nutri- tras el alta. Es condición indispensable que su familia
ción enteral ocasiona sobre el desarrollo de la alimenta- desee y sea capaz de continuar la nutrición en su casa,
ción constituyen una complicación específica de la edad que haya sido entrenada y educada por el personal del
pediátrica25. hospital en los cuidados que requiere esta técnica y
La alimentación está influenciada por el desarrollo que reciba apoyo económico para dicha terapéutica.
psicomotor y la conducta del niño y por ciertos factores Su regulación legal supone una indicación limitada a
sociales (principalmente la relación del niño con sus pa- un listado de patologías, prescripción inicial por médi-
dres o cuidadores). Tanto la deglución como la conduc- cos especialistas hospitalarios y financiación total de
ta alimentaria maduran durante la infancia gracias al las fórmulas completas y módulos inscritos en el Regis-
desarrollo adecuado, tanto anatómico como funcional, tro General Sanitario de Alimentos dietéticos destina-
del sistema nervioso central y la boca, la faringe y la dos a usos médicos especiales. Los resultados son satis-
parte superior del esófago. El período crítico de este factorios sobre todo en los aspectos psicológicos, de
proceso madurativo, la llamada encefalización de la ali- desarrollo psicomotor, y escolarización. Además no
mentación, se produce entre los 7 y los 10 meses de hay que olvidar el menor costo de esta técnica frente a
vida. Está dirigido por el tálamo y la corteza cerebral y la estancia hospitalaria.
condicionada, en parte, por la llegada continua de múl-
tiples estímulos sensoriales originados principalmente 11. Resumen
en la boca (olor, sabor, textura).
Mientras el lactante se alimenta por vía enteral, di- Los niños, especialmente los más pequeños, desarro-
chos estímulos no se producen o bien se originan otros llan alteraciones nutricionales subsidiarias de soporte
que resultan desagradables para el niño (manipulacio- artificial con mayor facilidad que los adultos, debido a
nes, cambio de sondas, etc.). Esto altera la adquisición sus necesidades relativamente mayores, a la inmadurez
de una conducta alimentaria adecuada, dando lugar a funcional de su organismo y a la dependencia de sus
conductas de evitación que pueden autoperpetuarse o mayores para las cuestiones relacionadas con la ali-
a determinados trastornos del comportamiento ali- mentación. La nutrición enteral debe ser la forma de
mentario, como la negación a alimentarse por vía oral soporte elegida siempre que el intestino funcione y
o la manipulación de la alimentación para llamar la debe indicarse precozmente para que el crecimiento y
atención del adulto. el desarrollo alcancen todo su potencial. Esta forma de
La prevención de este trastorno es fundamental, y debe alimentación debe adecuarse a las peculiaridades fisio-
realizarse permitiendo la succión no nutritiva y ofreciendo lógicas propias de cada etapa de la edad pediátrica y,
alimentos, aunque sea en pequeña cantidad, en todos los por lo tanto, las fórmulas, el material y la forma de
niños con capacidad de deglución. Esto puede requerir la administración deben elegirse de forma individualiza-
interrupción de la infusión durante un cierto tiempo (ge- da. Los trastornos en el desarrollo de la conducta ali-
neralmente al menos 3 horas) para facilitar la sensación mentaria constituyen una complicación específica de
de hambre, que favorece la ingesta oral. La prevención y esta técnica en los niños, que además pueden desarro-
el tratamiento debe integrar el trabajo de un equipo en llar las mismas complicaciones que se presentan en
el que se incluyan logopeda, psicólogo y pediatra, con el adultos. La nutrición enteral domiciliaria permite la re-
fin de normalizar la estimulación oral y recuperar las integración precoz del niño con soporte nutricional a
funciones motoras no adquiridas previamente, adecuar su núcleo familiar.
el entorno y regularizar los momentos de la alimenta-
ción, promocionar una relación positiva entre el niño y el 12. Bibliografía
adulto encargado de darle de comer y, si es necesario,
realizar técnicas de modificación de la conducta para   1. Baker SS. Enteral Nutrition in Pediatrics. En: Rom-
evitar la manipulación por parte del niño26. beau JL, Rolandelli RH (eds). Enteral and Tube Fee-
ding. Philadelphia: WB Saunders Company; 1997.
p. 349-67.
10.  Nutrición enteral domiciliaria
  2. Pedrón Giner C, Martínez Costa C, Lama Moré R,
Un gran número de pacientes pediátricos sometidos Moreno Villares JM. Líneas Guía de Actuación en
a nutrición enteral por sonda de larga duración pue- Nutrición en Pediatría. Soporte nutricional en el
den beneficiarse de recibirla en sus domicilios27. De siglo XXI. Congreso Nacional de la SENPE: Murcia
este modo se acorta su estancia hospitalaria y mejora 2003. ISBN 84-688-0970-5.
su calidad de vida al permitir la inserción en su medio   3. ASPEN Board of Directors and the Clinical Guideli-
socio-familiar. Los tipos de soporte más frecuente- nes Task Force. Guidelines for the use of parenteral
mente aplicados en la casa son la nutrición enteral and enteral nutrition in adult and pediatric patients.
domiciliaria nocturna y la alimentación a través de Section VIII: Access for Administration of Nutrition
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Tema 55. 
Nutrición parenteral en el paciente pediátrico:
vías y fórmulas
Marta Germán Díaz
Médico adjunto. Servicio de Pediatría. Hospital Universitario 12 de Octubre. Madrid
José Manuel Moreno Villares
Médico adjunto de la Unidad de Nutrición Clínica. Hospital 12 de Octubre. Madrid

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 861-879.

 1. Introducción
 2. Indicaciones para el uso de nutrición parenteral en niños
 3. Solicitud de la nutrición parenteral y etiquetado
 4. Requerimientos nutricionales
 5. Composición de las soluciones de nutrición parenteral
 6. Accesos vasculares
 7. Material para la administración de nutrición parenteral
 8. Métodos de infusión
 9. Monitorización
10. Complicaciones
11. Nutrición parenteral domiciliaria (NPD)
12. Resumen y conclusiones
13. Bibliografía

1. Introducción de NP no impide el uso concomitante de la vía enteral.


De hecho, es preferible conservar una ingesta mínima
El desarrollo de la técnica de la nutrición parenteral
siempre que sea posible, aunque esta no tenga una
(NP) ha estado íntimamente ligado desde su aparición,
función nutritiva, pues contribuye a mantener el trofis-
a finales de los sesenta, a su uso en niños1, 2. De hecho,
mo intestinal y a disminuir la incidencia de complica-
el primer paciente referido en la literatura fue un lac-
ciones metabólicas e infecciosas secundarias a la NP6.
tante con un síndrome de intestino corto secundario a
una atresia ileal3. Los niños son particularmente sensibles a las restric-
La NP se puede emplear en todo niño desnutrido o ciones energéticas debido a sus necesidades para man-
con riesgo de desnutrición secundario a una patología tener un crecimiento óptimo, fundamentalmente en
digestiva o extradigestiva, aguda o crónica, para cubrir las épocas de máximo desarrollo (lactancia y adoles-
sus necesidades nutricionales con el objetivo de man- cencia) y a sus reservas más limitadas. Por lo que, en
tener su salud y/o crecimiento, siempre que estas no general, el soporte nutricional se debe iniciar antes que
puedan administrarse de forma completa por vía ente- en el adulto7.
ral4, 5. La vía enteral puede ser insuficiente debido a una El conocimiento de los requerimientos nutricionales
alteración de la digestión y/o la absorción, un incre- y de la respuesta metabólica a la agresión, el diseño de
mento de las pérdidas, un aumento del gasto energé- accesos venosos adecuados para recién nacidos y ni-
tico, o bien por alteraciones metabólicas o anatómicas. ños, la mejoría en las soluciones, etc., han permitido
La NP puede estar indicada también tras una cirugía una disminución considerable de las complicaciones
digestiva, por necesidad de reposo intestinal, o por la asociadas al uso de la NP. La creación de equipos de
presencia de síntomas importantes relacionados con la soporte nutricional encargados del seguimiento de es-
alimentación, como dolor o diarrea. La administración tos pacientes también ha contribuido a esta mejoría8.

861
862 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

2. Indicaciones para el uso de nutrición 4.  Requerimientos nutricionales


parenteral en niños
4.1.  Necesidades de líquidos
El momento de inicio de la NP dependerá de las cir-
Las soluciones de NP deben adecuarse a los requeri-
cunstancias individuales de cada paciente, de su edad
mientos nutricionales individuales. Estos requerimientos
y su estado previo de nutrición. En general, está indica-
dependen de la edad, el tamaño corporal, el estado de
da para prevenir o corregir los efectos adversos de la
hidratación, factores ambientales y la enfermedad sub-
desnutrición en pacientes que no son capaces de obte-
yacente. El clínico necesita estar familiarizado con el ran-
ner aportes suficientes por vía oral o enteral por un
go de necesidades de cada nutriente y ser capaz de rea-
período de tiempo superior a 5-7 días, o antes, si el
lizar los ajustes necesarios en el paciente concreto. Los
paciente estaba previamente desnutrido9. Así como en
requerimientos hídricos y de iones varían según la edad y
aquellos pacientes pediátricos que requieran un ayuno
el peso. Fuera del paciente neonatal el método más usa-
absoluto durante un período igual o superior a
do para el cálculo de las necesidades hídricas de mante-
5 días6, 10. En el caso particular de pacientes críticos in-
nimiento es el de Holliday-Segar (tabla 2). Diversas con-
gresados en una unidad de cuidados intensivos, un
diciones pueden modificar estos cálculos; por ejemplo
estudio reciente muestra que posponer el inicio de la
las necesidades se pueden incrementar en situaciones de
NP al octavo día de ingreso conlleva un menor riesgo
fiebre, fototerapia con calor radiante, diarrea, vómitos o
de infección y mortalidad frente al inicio de la misma
aspiración gástrica. Por el contrario, puede ser necesaria
en la primera semana11. En recién nacidos pretérmino
la restricción hídrica en caso de insuficiencia cardiaca, in-
(RNPT), sin embargo, el ayuno durante un solo día pue-
suficiencia renal oligoanúrica, enfermedad respiratoria u
de ser perjudicial, por lo que está indicado iniciar la NP
otras situaciones clínicas que cursen con edema.
el primer día de vida en caso de que no se puedan cu-
brir sus requerimientos energéticos con nutrición ente-
ral12. En la tabla 1 se recogen las indicaciones de NP 4.2. Energía
más frecuentes en la infancia. Los requerimientos energéticos varían también con-
Es importante tener en cuenta que la NP no está in- siderablemente de un individuo a otro, en función de
dicada en aquellos pacientes que tengan una función su edad, actividad física y estado de salud. Por ello, el
intestinal adecuada; es decir, en los que la nutrición cálculo de dichos aportes se debe realizar de forma
pueda llevarse a cabo por vía oral o enteral. Además, la individualizada. El gasto energético total (GET) de un
NP no debería instaurarse por períodos inferiores a una individuo se compone de14:
semana y se debe mantener hasta que se consiga una
transición adecuada a la alimentación enteral, cuando •  Gasto energético basal (GEB): destinado al mante-
dichos aportes alcancen el 75% de los requerimientos nimiento de las funciones vitales.
nutricionales estimados. •  Termogénesis inducida por la dieta: correspon-
Por último, no se deberá iniciar o continuar una NP diente al gasto que conlleva la digestión, absor-
en pacientes terminales cuando las complicaciones o ción, transporte y utilización de los nutrientes.
las molestias que conlleva sean superiores a los benefi- •  Gasto por actividad física: se calcula mediante un
cios, o bien cuando se hayan limitado otros esfuerzos factor de corrección aplicado al GEB.
terapéuticos y se prevé que el paciente fallezca en un •  Gasto por crecimiento: es el que diferencia esen-
período inferior a cinco días12. cialmente la nutrición del niño respecto a la del
adulto, especialmente en épocas de crecimiento
3. Solicitud de la nutrición parenteral acelerado (lactancia y adolescencia).
y etiquetado
En el caso del niño enfermo, además de estos compo-
Con el fin de disminuir los errores en la prescripción nentes, habría que tener en cuenta el gasto por enfer-
y elaboración de la NP, lo ideal es disponer de hojas de medad o de estrés, que corresponde a las modificacio-
prescripción precisas en las que se indique además de nes del GEB secundarias a un aumento o disminución
la composición, la velocidad de infusión, datos relati- del metabolismo basal en estado de enfermedad. No
vos al paciente (peso, talla, acceso vascular, enferme- está bien determinado en todas las situaciones. Se ha
dad de base) y posibles incompatibilidades. El uso de observado, por ejemplo, que en la enfermedad hepática
programas de prescripción electrónica parece asociarse el GEB aumenta un 30%, en la enfermedad renal dismi-
a una menor incidencia en el número de errores13. nuye un 20%, en la insuficiencia cardiaca aumenta un
Las etiquetas de las bolsas de NP deben ser claras y 20%, en el paciente crítico disminuye un 10-20%, etc.
contener información suficiente para identificar bien al En el caso de pacientes hospitalizados, el gasto por
paciente, conocer las características precisas de la solu- actividad va a ser muy inferior al del paciente ambulato-
ción, el ritmo de infusión, los fármacos añadidos y la rio o al del niño sano. El gasto que supone la termogé-
fecha de caducidad. nesis inducida por la dieta en estos pacientes es mínimo,
Tema 55.  Nutrición parenteral en el paciente pediátrico: vías y fórmulas 863

Tabla 1.  Indicaciones de nutrición parenteral en pediatría.

Indicaciones a corto plazo:


Patología digestiva
· Intervenciones quirúrgicas:
- Resección intestinal
- Malrotación y vólvulo
- Transplantes
- Alteraciones de la pared abdominal (gastrosquisis, onfalocele)
- Enfermedad de Hirschsprung complicada o extensa
· Malabsorción intestinal:
- Enterostomía proximal
- Diarrea grave prolongada
- Fístula enterocutánea
- Algunas inmunodeficiencias
· Alteraciones de la motilidad intestinal:
- Peritonitis plástica
- Enteritis rádica
- Pseudoobstrucción crónica idiopática
· Otros:
- Reposo del tubo digestivo
- Enterocolitis necrosante
- Isquemia intestinal
- Vómitos incoercibles
- Sangrado intestinal masivo
- Enfermedades inflamatorias intestinales
- Pancreatitis aguda grave, fístula pancreática
- Púrpura reumatoide severa
- Íleo meconial
- Mucositis o enteritis grave por quimioterapia
- Insuficiencia hepática o renal grave
Patología extradigestiva
· Displasia broncopulmonar.
· Oxigenación con membrana extracorpórea.
· Perioperatorio en paciente malnutrido grave.
· Transplante de órganos y médula ósea.
· Pacientes en cuidados intensivos con diversas patologías: traumatismo
craneoencefálico (fase precoz), politraumatismos, sepsis, cirugía, quemados
críticos, fracaso multiorgánico.
· Caquexia cardiaca.
· Insuficiencia renal grave.
· Inestabilidad hemodinámica grave.
· Prematuridad.
· Pacientes oncológicos con mucositis intensa o trombopenia grave (plaquetas < 25 000)
que contraindique la nutrición enteral
Indicaciones a largo plazo
· Fracaso intestinal:
- Por trastorno de la motilidad: pseudo-obstrucción crónica idiopática.
- Por diarrea congénita grave: displasia intestinal, enfermedad por inclusión de
microvilli, etc.
- Por síndrome de intestino corto: resecciones intestinales amplias, malformaciones
congénitas, etc.
864 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

Tabla 2. Requerimientos de líquidos y electrolitos en nutrición parenteral.

Necesidades de líquidos
40-60 ml/kg/día (el primer día) hasta 150-180 ml/kg/día (máximo
RNPT, RNT
200 ml/kg/día).
Lactante ≤ 10 kg 100 ml/kg/día más las pérdidas (máximo 150 ml/kg/día).
Primeros 10 kg: 100 ml/kg.
Niño Entre 10-20 kg: 1 000 ml por los primeros 10 kg más 50 ml/kg.
A partir de 20 kg: 1 500 ml por los primeros 20 kg más 20 ml/kg.
Necesidades de electrolitos
RNPT Lactantes 1-11 años 12-15 años
mEq/kg/día mEq/kg/día mEq/kg/día mEq/día
Sodio 2-5 2-5 2-3 60-150
Cloro 2-3 2-3 2-3 60-150
Potasio 2-4 2-4 2 60-120
Acetato 1-4 1-4 1-4 1-4 mEq/kg/día

RNT: recién nacido a término; RNPT: recién nacido pretérmino.

o nulo en aquellos que no reciban alimentación oral ni mentación se suele emplear un factor de multiplicación
enteral. Y, por último, la contribución diaria del gasto 1,1 a 1,2 en niños con enfermedad de moderada in-
por crecimiento al GET es muy pequeña a partir del año tensidad. En situaciones graves este factor se puede
de vida, por lo que no se suele tener en cuenta al pro- incrementar hasta 1,5-1,6.
gramar la NP, especialmente si esta se va a administrar Los niños con desnutrición requieren calorías extra
durante un tiempo relativamente limitado15. Por tanto, para la recuperación y por ello el cálculo de calorías no
el GET del niño sano y enfermo será bastante similar, se hará en función del peso actual, sino del peso ideal
teniendo en cuenta que el gasto de actividad que tiene para su talla. Otro problema supone el cálculo de re-
el sano se compensa con el gasto de estrés que tiene el querimientos en niños con obesidad, pues actualmen-
enfermo. Sin embargo, en el niño críticamente enfer- te no existe ninguna fórmula disponible para calcular el
mo, el GET va a ser menor, pues aunque el estrés al que peso ajustado de estos pacientes, a diferencia de lo
está expuesto es mayor, la situación en la que habitual- que ocurre en adultos18, 19. En los adolescentes obesos
mente se encuentra (sedado, ventilado, etc.) hace que la American Society for Parenteral and Enteral Nutrition
el GEB sea considerablemente menor16. (ASPEN) recomienda calcular el GER siempre que sea
A la hora de calcular los requerimientos energéticos posible utilizando la calorimetría indirecta, debido a las
de un paciente debemos poner especial cuidado en evi- diferencias que pueden existir en la masa magra, y con-
tar el exceso de energía, dadas las posibles complicacio- siderando, por ello, que ni el peso ideal ni ninguna
nes que éste puede conllevar: hiperglucemia, aumento ecuación de predicción puede determinar estas dife-
del riesgo de infecciones o esteatosis hepática. rencias20. Pese a ello, si no se dispone de calorimetría,
La forma más idónea de conocer el gasto energético en una buena aproximación sería calcular el GER con el
reposo (GER) es mediante calorimetría indirecta, que de- peso correspondiente a un IMC entre 0 y +1 DE.
termina el O2 consumido y el CO2 eliminado durante la Una vez calculada la energía total diaria, es funda-
oxidación de los nutrientes, obteniendo el cociente respi- mental que su aporte en principios inmediatos esté
ratorio (VCO2/VO2). Cuando no se dispone de un calorí- equilibrado para conseguir una adecuada retención
metro podemos estimar las necesidades energéticas con nitrogenada y evitar alteraciones metabólicas. El cálcu-
cálculos orientativos mediante ecuaciones de predicción, lo de los requerimientos de proteína debe realizarse
siendo la más aceptada la fórmula de Schofield (tabla 3)17. siempre en primer lugar y es el que determina el resto
Si no se dispone de la talla se puede emplear la fórmula del aporte calórico no proteico. Se recomienda un
de Schofield para el peso o la fórmula de la OMS. aporte de 150-200 kcal no proteicas por cada gramo
Una vez calculado el GER se corregirá por un factor de nitrógeno. Para calcular los gramos de nitrógeno se
que tenga en cuenta el estrés de la enfermedad y la divide la cantidad total de aminoácidos entre 6,25 (el
actividad, considerando que ambos se van a compen- contenido de nitrógeno de la proteína es aproximada-
sar en la mayoría de los casos. Para evitar la sobreali- mente del 16%). Estos aportes vienen a suponer una
Tema 55.  Nutrición parenteral en el paciente pediátrico: vías y fórmulas 865

Tabla 3.  Ecuaciones de predicción para el cálculo de los requerimientos energéticos


en nutrición parenteral (kcal/día).

Cálculo del Schofield


gasto energético OMS
en reposo
Con el peso Con el peso y la talla
Niños:
   0-3 años 59,48 x P – 30,33 0,167 x P + 1517,4 x T – 617,6 60,9 x P – 54
   3-10 años 22,7 x P + 505 19,6 x P + 130,3 x T + 414,9 22,7 x P + 495
  10-18 años 13,4 x P + 659 16,25 x P + 137,2 x T + 515,5 17,5 x P + 651
Niñas:
   0-3 años 58,29 x P – 31,05 16,25 x P + 1023,2 x T –413,5 61 x P - 51
   3-10 años 20,3 x P + 486 16,97 x P + 161,8 x T + 371,2 22,4 x P + 499
  10-18 años 17,7 x P + 693 8,365 x P + 465 x T + 200 12,2 x P + 746

P: peso (kg); T: talla (m).

distribución calórica final de 12-16% de las calorías en su concentración no debe sobrepasar el 10%-12%. Su
forma de aminoácidos y el resto, las kilocalorías no aporte no debe exceder el 60-75% de las calorías no
proteicas, se reparten aproximadamente entre lípidos proteicas (50% kcal totales) y debe ser progresivo para
25-40% y glucosa 75-60%. En el caso de pacientes con evitar la hiperglucemia y la diuresis osmótica. La D-glu-
fracaso intestinal, se recomienda utilizar una propor- cosa aporta 4 kcal/g (3,4 kcal/g en su forma anhidra).
ción en torno a 25% de lípidos y 75% de glucosa, con Las necesidades van a variar en función de la edad y de
el fin de reducir el riesgo de enfermedad hepática aso- la condición clínica, aunque los aportes han de ser su-
ciada al fracaso intestinal; reservando porcentajes más ficientes para cubrir las necesidades de consumo de
altos de lípidos para algunas situaciones excepcionales glucosa del cerebro y no superar su capacidad oxidati-
de alta demanda energética o intolerancia hidrocarbo- va máxima. Como orientación, se recomienda comen-
nada21. Por otra parte, en circunstancias de estrés ele- zar en el neonato con 4-6 mg/kg/min (6-8 g/kg/día) y
vado, la relación kcal no proteicas/gramos de nitróge- en el resto de edades con 5-7 mg/kg/min (7-10 g/kg/
no puede ser más baja, de hasta 100/1 a 130/1. día), aumentando progresivamente 1-2 mg/kg/min/día
hasta alcanzar el objetivo. La cantidad máxima reco-
5. Composición de las soluciones de nutrición mendada es de 12 mg/kg/min (18 g/kg/día), siendo
parenteral variable en función de la edad (tabla 4). En el caso de
pacientes críticos, se aconseja utilizar un ritmo máximo
5.1.  Hidratos de carbono de infusión de glucosa de 5 mg/kg/min (7,2 g/kg/día). En
La D-glucosa es el hidrato de carbono empleado en la fase aguda de la enfermedad crítica existe una mar-
la NP. Es responsable en gran parte, de la osmolaridad cada resistencia a la insulina, como consecuencia de las
de la solución. Cuando se administra por vía periférica alteraciones endocrino-metabólicas que se producen;

Tabla 4. Requerimientos de glucosa en la nutrición parenteral según la edad.

Dosis inicial: Dosis máxima:


Edad mg/kg/min mg/kg/min
g/kg/día g/kg/día

4-8 11-12
Recien nacido pretermino
6-12 16-18

5-7 11-12
Lactantes y niños hasta 2 años
7-10 16-18

3-5  8-10
Resto de edades
4-7 10-14
866 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

además, la producción endógena de glucosa es capaz bajo peso, sepsis, hipercatabolismo, alta dosis de lípi-
de suplir el 20-50% del GET. Por ello, los requerimien- dos). Las cifras no deben superar la concentración de
tos de glucosa en estos pacientes y, especialmente, en 150 mg/dl en pretérminos, 250 mg/dl en lactantes y
la fase inicial de la enfermedad, son sustancialmente 400 mg/dl en los niños mayores12.
inferiores a los habituales. Por último, hemos de tener Existen diferentes tipos de soluciones lipídicas. La
en cuenta que los RNPT son muy susceptibles tanto a la primera se comercializó en los años sesenta y estaba
hipoglucemia como a la hiperglucemia. formada por triglicéridos de cadena larga (TCL) proce-
En el caso de que se cicle la NP, se recomienda no dentes de aceite de soja (Intralipid®). Esta solución
sobrepasar un ritmo de infusión de 1,2 g/kg/h, que co- contenía pequeñas cantidades de ácidos grasos ome-
rresponde a la tasa máxima de oxidación de la glucosa; ga-3 y elevadas cantidades de omega-6, fundamental-
así como realizar un ascenso y descenso progresivo del mente ácido linoleico. A finales de los 80, aparecieron
ritmo al inicio y al final de la infusión con el fin de evitar preparaciones mixtas que contenían un 50% de trigli-
hipoglucemias o hiperglucemias12. céridos de cadena media (TCM) y 50% de TCL proce-
Un aporte excesivo de glucosa puede producir hiper- dentes de aceite de soja (Lipofundina®). Los TCM ofre-
glucemia. La hiperglucemia se ha asociado a mayor cían algunas ventajas teóricas frente a los TCL, como su
mortalidad y aumento del riesgo de infección en el pa- hidrólisis preferencial por la lipoprotein lipasa, su meta-
ciente gravemente enfermo22. El objetivo es intentar bolismo no-dependiente de carnitina o su rápida oxida-
mantener el nivel de glucemia en estos pacientes por de- ción. A finales de los 90 apareció una nueva emulsión
bajo de 150 mg/dl. En caso de cifras mantenidas por a base de aceite de oliva y de soja (Clinoleic®)
encima de 180 mg/dl se recomienda iniciar tratamien- (oliva:soja = 4:1), con menor cantidad de ácidos grasos
to con insulina. Otras consecuencias prejudiciales del poliinsaturados, una alta cantidad de ácido oleico y
aporte excesivo de glucosa son: diuresis osmótica y mayor cantidad también de vitamina E. Y más reciente-
mayor retención hídrica, mayor producción de CO2, mente han aparecido nuevas soluciones a base de acei-
con incremento del cociente respiratorio (VCO2/VO2) te de pescado (SMOFlipid®, Omegaven®, Lipoplus®).
que puede contribuir al deterioro de la función pulmo- El aceite de pescado tiene algunas ventajas muy rele-
nar y aumento del riesgo de esteatosis hepática23. Se vantes, como son su elevada concentración de al-
recomienda, además, administrar los lípidos conjunta- fa-tocoferol y la ausencia de fitoesteroles. Además, es
mente con la glucosa siempre que sea posible. una fuente rica en ácido docohexaenoico (DHA), muy
importante para el neurodesarrollo y la función visual,
así como en ácido eicosapentaenoico (EPA). El EPA
5.2. Lípidos
desempeña un papel positivo en la regulación de la
Los lípidos deben formar parte de las soluciones de inflamación, tanto descendiendo la producción de ci-
NP por su elevada densidad calórica, por ser fuente de toquinas inflamatorias como aumentando de forma
ácidos grasos esenciales, por disminuir la osmolaridad indirecta la secreción de IL-10, que es una citoquina
de la solución y por evitar los efectos negativos de la antiinflamatoria. El aceite de pescado, además, redu-
sobrecarga de glucosa. Además, se ha demostrado ce la lipogénesis de novo, estimula la betaoxidación y
que su adición a la NP mejora el balance de nitróge- reduce la esteatosis hepática26. En la tabla 5 se reco-
no24. Se recomienda que constituyan del 25 al 40% de gen las soluciones lipídicas disponibles en nuestro
las calorías no proteicas. Para prevenir el déficit de áci- medio con su composición.
dos grasos esenciales es suficiente la administración Existen multitud de estudios acerca del uso de los
de 0,25 g/kg/día de ácido linoleico en RNPT y de 0,1 g/ diferentes tipos de soluciones lipídicas en pediatría. Por
kg/día en RN a término y niños mayores. El aporte ahora, no se ha podido demostrar que existan diferen-
máximo recomendado es de 3-4 g/kg/día (0,13-0,17 cias significativas con respecto a los parámetros de co-
g/kg/h) en lactantes y de 2-3 g/kg/día (0,08-0,13 g/ lestasis entre el uso de fórmulas a base de aceite de
kg/h) en niños mayores de 2 años12. Se recomienda soja (Intralipid®) y las soluciones mixtas con aceite
incluirlos en la bolsa con el resto de los nutrientes de pescado (SMOFlipid®; Lipoplus®) cuando se utilizan
(mezclas ternarias)25 e infundirlos a lo largo de 24 ho- a corto plazo en neonatos o niños de mayor edad26. Se
ras. En caso de ciclado de la parenteral, se infundirán ha visto que en niños con nutrición parenteral prolon-
durante el mismo tiempo que el resto de componen- gada, el uso de soluciones mixtas con aceite de pesca-
tes de la NP. No existe evidencia de que aumentos pro- do puede contribuir a proteger frente al desarrollo de
gresivos en la cantidad de lípidos mejore su tolerancia, colestasis26. Por último, la solución Omegaven®, a base
aunque aumentos de 0,5-1 g/kg/día, especialmente únicamente de aceite de pescado, ha mostrado su efi-
en RNPT, pueden ayudar a controlar la hipertrigliceri- cacia en el tratamiento de rescate de pacientes con
demia. Los niveles de triglicéridos en sangre se deben enfermedad hepática relacionada con la NP, especial-
monitorizar siempre en pacientes que estén recibien- mente en los afectos de síndrome de intestino cor-
do lípidos por vía intravenosa, especialmente en aque- to27, 28, aunque la mejoría en la colestasis no siempre se
llos casos de mayor riesgo de hiperlipidemia (RN de asocia a menor progresión de la fibrosis29, 30. Hay que
Tema 55.  Nutrición parenteral en el paciente pediátrico: vías y fórmulas 867

Tabla 5.  Emulsiones lipídicas disponibles en pediatría.

Intralipid® Clinoleic® Lipofundina® Lipoplus® SMOFlipid® Omegaven®


Componentes
(20%) (20%) (20%) (20%) (20%) (10%)
Aceite de soja (%) 100 20 50 40 30 0
TCM (%) 0 0 50 50 30 0
Aceite de oliva (%) 0 80 0 0 25 0
Aceite de pescado (%) 0 0 0 10 15 100
Vitamina E (mg/l) 38 32 85+/–20 190+/–30 200 150-296
Ácido linoleico (%) 53 18,7 29,1 25,7 37,2 4,4
Ácido alfa-linolénico (%) 8 2,3 4,5 3,4 4,7 1,8
EPA (%) 0 0 0 3,7 4,7 19,2
DHA (%) 0 0 0 2,5 4,4 12,1
Ratio n-6:n-3 7:1 9:1 7:1 2,7:1 2,5:1 1:8

DHA: ácido docohexaenoico; EPA: ácido eicosapentaenoico; TCM: triglicéridos de cadena media.

tener en cuenta que este tipo de solución no se puede 5.3. Aminoácidos (AA)


utilizar de forma exclusiva en pacientes pediátricos du- Las proteínas se suministran en forma de soluciones
rante un tiempo prolongado, por el riesgo asociado a de aminoácidos (AA) y son esenciales para mantener la
desarrollar un déficit de ácidos grasos esenciales. Este masa corporal magra. Su aporte debe minimizar el ca-
riesgo podría no existir en caso de que el paciente reci- tabolismo proteico inducido por el estrés y el ayuno, y
ba también alimentación por vía oral o enteral, pero favorecer la síntesis proteica sin producir complicacio-
eso aún está por determinar. nes hepáticas y/o renales. Los requerimientos proteicos
La carnitina es el transportador de los ácidos grasos se han establecido sobre las bases de una ingesta su-
de cadena larga al interior de la mitocondria para su ficiente de energía, de tal forma que el esqueleto car-
oxidación. Tres cuartas partes de la carnitina proceden bonado de los AA no sea necesario como fuente de
de la dieta. Las soluciones de NP no contienen habi- energía; y de que la calidad de la proteína sea alta.
tualmente carnitina y, aunque los niveles plasmáticos Deben constituir entre el 12-16% del aporte calórico
están disminuidos en la mayoría de los pacientes con total (1 g = 4 kcal). Los aportes recomendados según
NP prolongada, su adición no mejora el aclaramiento la edad se señalan en la tabla 6.
lipídico en plasma ni previene la colestasis. En caso de En el RNPT es segura su utilización desde el primer
considerar su inclusión en la bolsa de NP, las dosis uti- día de vida con un aporte mínimo de 1,5 g/kg/día que
lizadas varían entre 5 y 30 mg/kg/día. evite el balance nitrogenado negativo31. La cantidad

Tabla 6. Requerimientos de aminoácidos en nutrición parenteral según edad.

Gramos/kg peso/día
Edad
Límites Recomendaciones
Recién nacido pretérmino 1,5-3,5 2,5-3,5
Recién nacido a término 1,5-3 2,3-3
2º mes-3 años 1-2,5 2-2,5
3-5 años 1-2* 1,5-2
6-12 años 1-2* 1-1,5
Adolescentes 1-2 1-1,5

*  En pacientes críticos se puede aumentar hasta 3 g/kg/día.


868 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

exacta de AA recomendados en este grupo de pacien- tabla 7 vienen recogidas las soluciones de AA pediátri-
tes aún no está clara, existen varios ensayos clínicos en cos disponibles en la actualidad.
los que se comparan diferentes dosis de AA en la pri- Existe un interés creciente sobre el uso de aportes
mera semana de vida: un aporte más bajo y gradual aumentados de glutamina en algunas situaciones clíni-
(con una dosis inicial entre 1-2,4 g/kg/día el primer día cas: RNPT, pacientes gravemente enfermos o en situa-
hasta un máximo de 2,5 g/kg/día) frente a dosis más ciones de fracaso intestinal; sin embargo, no existen
altas (3-4 g/kg/día); sin haberse conseguido probar be- recomendaciones en firme sobre sus indicaciones en el
neficios en cuanto al crecimiento o al desarrollo neuro- paciente pediátrico40, 41.
lógico en los grupos de ingesta elevada32. De hecho, en
un ensayo clínico reciente se observó que un aporte de 5.4. Micronutrientes
AA de 3,6 g/kg/día desde el primer día de vida en RNPT
no afecta a la composición corporal ni al crecimiento Dentro de los micronutrientes se incluyen: minerales,
comparado con un aporte más bajo (1,7 g/kg/día en el vitaminas y oligoelementos. Los aportes intravenosos
día 1, con aumento hasta un máximo de 2,7 g/kg/día de micronutrientes garantizan su homeostasis y per-
en el día 3); apreciándose concentraciones de urea sig- miten un adecuado aprovechamiento de los aportes
nificativamente más altas en el grupo de aportes al- energéticos y proteicos. Lamentablemente existen po-
tos33. Sí que existe suficiente evidencia para recomen- cos estudios clínicos que validen las necesidades dia-
dar el inicio de la administración de AA en las primeras rias de micronutrientes. Las necesidades intravenosas
24 horas de vida34, acompañado además de un sumi- de vitaminas y oligoelementos para distintas situacio-
nistro de kcal no proteicas (en forma de hidratos de nes fisiopatológicas tampoco han sido aún bien esta-
carbono y lípidos) suficiente, con el fin de conseguir un blecidas.
balance nitrogenado positivo y una síntesis proteica
adecuada35. Por otra parte, se ha visto que en el caso 5.4.1. Minerales
de RNPT con bajo peso para su edad gestacional, el Los requerimientos de minerales varían según la edad
aporte de aminoácidos a dosis altas desde el primer día y el peso corporal (tabla 8). Las cantidades de calcio y
de vida se asocia con un mayor riesgo de hipofosfore- fósforo totales están limitadas por su solubilidad, que
mia e hipopotasemia. Debemos tener en cuenta que depende del pH de la fórmula (un pH alcalino favorece
en la NP de los primeros días de vida no se incluyen la precipitación) y de la proporción entre ambos. Sin em-
estos iones. De ahí que se recomiende monitorizar es- bargo, si se utilizan fuentes orgánicas de fosfato, como
trechamente los valores de ambos, suplementándolos el glicerofosfato, es posible alcanzar todos los requeri-
en caso de que fuera necesario36, 37. mientos. Para conseguir una mejor retención fosfo-cálci-
En aquellos casos especiales en los que exista desnu- ca se recomienda una relación calcio:fósforo molar de
trición grave con riesgo de síndrome de realimenta- 1,1-1,3/1 o una relación por peso de 1,3-1,7/142.
ción, la introducción de los AA se debe hacer más len-
tamente.
Es necesario aportar una fórmula que contenga una 5.4.2. Oligoelementos
adecuada proporción de AA esenciales y no esenciales; Se administran generalmente como una mezcla de
hay que recordar que los AA no esenciales pueden con- oligoelementos, aunque es posible administrar algún
vertirse en esenciales en determinadas circunstancias elemento aislado como el zinc o el hierro. Es contro-
condicionadas por la edad, estrés, situación de enfer- vertida la adición de hierro a las fórmulas de NP, se ha
medad, fracaso orgánico, etc.38. Existen al menos dos administrado el hierro dextrano muy diluido sin com-
modelos de idoneidad del aporte proteico en las solu- plicaciones, pero se piensa que puede aumentar el
ciones de AA pediátricos: los primeros, intentan conse- riesgo de infección. En la tabla 9 se recogen los re-
guir un perfil de AA en plasma que se asemeja al perfil querimientos de oligoelementos por edades. El man-
conseguido con leche materna, y los segundos que ganeso, cuando se administra a dosis elevadas, es un
imitan el aminograma en sangre de cordón umbilical, tóxico hepático y del sistema nervioso central43. En
bien sea de recién nacidos a término o pretérmino. Las caso de colestasis se recomienda disminuir los aportes
fórmulas para RNPT deben llevar tirosina, cisteína y de cobre y manganeso; y en caso de insuficiencia re-
taurina, pues se trata de AA semiesenciales para este nal, limitar selenio, cromo y molibdeno44. El cromo es
grupo de pacientes. La cisteína es un sustrato para el especialmente nefrotóxico en neonatos, por lo que la
glutatión y por ello tiene propiedades antioxidantes. ASPEN recomienda reducir su administración (hasta
Mientras que la taurina puede mejorar la colestasis dosis de 0,0006 µg/kg/día) o administrar productos
neonatal y prevenir el daño retiniano39. que no lo contengan45. La provisión de oligoelemen-
No existe una edad a partir de la cual puedan em- tos, con excepción del zinc, puede no ser necesaria
plearse las soluciones diseñadas para el adulto; mien- excepto cuando la duración de la NP es superior a 2 a
tras que la mayoría de los autores sugieren el año de 4 semanas46; a pesar de ello, se recomienda adminis-
edad, otros lo hacen a partir de los 10 años. En la trarlos diariamente.
Tema 55.  Nutrición parenteral en el paciente pediátrico: vías y fórmulas 869

Tabla 7. Soluciones de aminoácidos pediátricos (g/100 g de aminoácidos).

Aminoven Infant® 10% Primene® 10% Aminoplasmal Paed® 10%*


L-Isoleucina 8 6,7 5,1
L-Leucina 13 10 7,6
L-Lisina 8,5 11 8,8
L-Metionina 3,1 2,4 2
L-Fenilalanina 3,8 4,2 3,1
L-Treonina 4,4 3,7 5,1
L-Triptófano 2 2 4
L-Valina 9 7,6 6,1
L-Histidina 4,8 3,8 4,6
L-Cisteína 0,5 (N-acetil) 1,9 0,5 (N-acetil)
L-Tirosina 4,2 (N-acetil) 0,45 1,1 (N-acetil)
L-Alanina 9,3 8 15,9
L-Arginina 7,5 8,4 9,1
L-Prolina 9,7 3 6,1
L-Serina 7,6 4 2
Glicina 4,2 4 2
L-Aspártico 0 6 6,6
L-Glutámico 0 10 9,3
Taurina 0,4 0,6 0,3
L-Ornitina 0 2,5 0
L-Asparrigina 0 0 0

*  Medicamento extranjero.

5.4.3. Vitaminas Disponemos de los siguientes tipos de accesos ve-


Las recomendaciones de las dosis diarias de vitami- nosos:
nas en NP según edad se recogen en la tabla 10. Los 1.  Vías venosas periféricas.
preparados comerciales disponibles para niños pueden 2. Catéteres venosos centrales (CVC) de duración
no contener dosis insuficientes de algunas vitaminas corta-intermedia (temporales).
(por ejemplo, vitamina A para prematuros). También
se ha constatado déficit de vitaminas liposolubles en •  De abordaje periférico (PICC, epicutáneos, drums).
niños con fracaso intestinal y nutrición parenteral do- •  Percutáneos: yugular, femoral, subclavia.
miciliaria47. En caso de insuficiencia renal o disfunción
3.  CVC de larga duración (permanentes).
hepática es preciso ajustar el aporte de vitaminas46.
•  Catéteres tunelizados (tipo Hickman® o Broviac®).
6.  Accesos vasculares •  Reservorios subcutáneos (tipo Port-a-cath®).
A la hora de seleccionar el tipo de catéter que vamos 4.  Catéteres umbilicales (neonatos).
emplear debemos tener en cuenta diversos factores,
como son: el tiempo previsto de tratamiento, los re- Como las soluciones de NP son soluciones hiperos-
querimientos nutricionales del paciente, su enferme- molares, es aconsejable que su administración se reali-
dad de base, su estado nutricional y los accesos vascu- ce a través de un CVC. La NP periférica se usa excepcio-
lares disponibles. nalmente hasta conseguir un CVC o en neonatos como
870 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

Tabla 8. Aportes de minerales en nutrición parenteral según la edad.

RNPT RN < 1 año 1-11 años 12-15 años


/kg/día /kg/día /kg/día /kg/día /kg/día
Calcio
 (mg) 60-80 40-60 20-25 10-20 4,5-9
 (mM) 1,5-2 1-1,5 0,5-0,6 0,25-0,5 0,12-0,2
 (mEq) 3- 4 2-3 1-1,2 0,5-1 0,2-0,4
Fósforo
 (mg) 45-70 30-45 10-30 8-22 5-10
 (mM) 1,45-2,25 1-1,5 0,3-1 0,25-0,7 0,16-0,3
 (mEq) 2,9-4,5 2-3 0,6-2 0,5-1,5 0,3-0,6
Magnesio
 (mg) 4-7 3-6 3-6 3-6 2,5-4,5
 (mM) 0,17-0,3 0,12-0,25 0,12-0,25 0,12-0,25 0,1-0,2
 (mEq) 0,34-0,6 0,25-0,5 0,25-0,5 0,25-0,5 0,2-0,4

RNPT: recién nacido pretérmino; RNT: recién nacido a término.


Calcio: 1 mM = 40 mg = 2 mEq (gluconato Ca 10% : 100 mg = 9 mg Ca). Fósforo: 1 mM = 31 mg = 2 mEq
(relación calcio/fósforo = 1,3/1). Magnesio: 1 mM = 24 mg = 2 mEq.

Tabla 9.  Aportes de oligoelementos en nutrición parenteral según la edad.

RNPT RNT - 1 año Resto edades


Elemento
µg/kg/día µg/kg/día µg/kg/día
Fe 200 50-100 50-100
·  < 3 meses: 250
Zn 450-500 50 (máx 5000 µg/día)
·  > 3 meses: 50
Cu 20 20 20 (máx 300 µg/día)
Se 2-3 1-3 2 (máx 30 µg/día)
·  1-3 años: 0,22
·  0-6 meses: 0,0006 ·  4-8 años: 0,3
Cr
·  7-12 meses: 0,012 ·  9-13 años: 0,5 chicos; 0,4 chicas
·  14-18 años: 0,7 chicos; 0,48 chicas
Mn 1 1 1 (máx 50 µg/día)
Mo 1 0,25 0,25 (máx 5 µg/día)
I 1 1 1 (máx 50 µg/día)

complemento a una NE insuficiente. Se recomienda En todo catéter de implantación central, es abso-


que por vía venosa periférica la solución de NP no su- lutamente necesario realizar un control radiográfico
pere los 850 mOsm/l, aunque la posibilidad de apari- o ecográfico para localizar la punta del catéter y
ción de eventos adversos va a depender también de descartar la aparición de alguna complicación du-
otros factores, como son: el pH de la solución, la velo- rante la inserción. El extremo distal del catéter debe
cidad de infusión48 o la utilización concomitante de estar situado en la vena cava superior, en la proximi-
otros fármacos o soluciones49. dad de la aurícula derecha. Las ubicaciones anató-
Tema 55.  Nutrición parenteral en el paciente pediátrico: vías y fórmulas 871

Tabla 10. Aportes de vitaminas en nutrición parenteral según la edad.

RNPT Lactante-Niño
Vitamina
(dosis/kg/día) (dosis/día)
Vitamina A (UI) 700-1.5001 1.500-2.300
Vitamina E (mg) 3,5 7-10
Vitamina K (µg) 8-10 50-200
Vitamina D (UI) 40-160 400
Ascórbico (mg) 15-25 80-100
Tiamina (mg) 0,35-0,5 1,2
Riboflavina (mg) 0,15-0,2 1,4
Piridoxina (mg) 0,15-0,2 1
Niacina (mg) 4-6,8 17
Pantoténico (mg) 1-2 5
Biotina (µg) 5-8 20
Folato (µg) 56 140
Vitamina B12 (µg) 0,3 1

Equivalencias: 1 µg de vitamina A = 3,3 UI; 1 µg de vitamina D = 10 UI. 1RNPT (recién nacido


pretérmino) con enfermedad pulmonar: 1500-2800 UI. Dosis Infuvite Pediatrico®: RNPT < 1 kg peso
1,5 ml; 1-3 kg peso 3 ml; resto edades: 5 ml.

micas recomendadas para cada rango de edad son 7. Material para la administración
las siguientes: de nutrición parenteral
•  Lactantes pequeños: 0,5 cm por encima de la ca- La infusión de la NP se realizará siempre mediante
rina. bombas de infusión. Las soluciones se recogen en bolsas
•  Lactantes mayores: 1 cm por encima de la carina. plásticas, sobre todo de etileno acetato de vinilo (EVA) o
•  Niño mayor: a la altura de la carina. en bolsas multicapa, que combinan una capa de EVA
con otras de distinto material para disminuir el paso de
Si el abordaje se realiza por la vena femoral la punta oxígeno y, por tanto, disminuir las posibilidades de oxi-
del catéter deberá quedar por encima del diafragma y dación. Las bolsas generalmente van recubiertas de un
en ningún caso a la altura de las venas renales. material que las protege de la luz con el fin de evitar los
Por lo general, los CVC percutáneos se usan en si- fenómenos de degradación y peroxidación por la sobre-
tuaciones agudas, para administración de NP de cor- exposición de los lípidos y vitaminas a la luz51. Los siste-
ta duración (<15 días). Una buena opción para si- mas de infusión o nutrilíneas utilizan PVC (cloruro de
tuaciones en las que se prevea una NP de duración polivinilo) como material, y no deberían contener di
intermedia, de hasta 3-6 meses, son los CVC de (2-etilhexil) ftalato (DEHP)52. Se recomienda el uso de
abordaje periférico, tipo PICC (Periferically Inserted sistemas opacos en vez de los transparentes habituales
Central catheter, catéter venoso central de abordaje para evitar la peroxidación lipídica, así como la utiliza-
periférico) con una tasa de complicaciones más baja ción de filtros que previenen la entrada de aire en el
que los CVC percutáneos50. Por último, en caso de sistema venoso al tiempo que retienen partículas y bac-
que se prevea que la NP va a ser prolongada, lo ideal terias53. Se utilizarán filtros de 0,22 m para las solucio-
es disponer de un catéter permanente, siendo los ca- nes sin lípidos y de 1,2 para las mezclas ternarias54.
téteres tunelizados los de elección. Si es posible, es
preferible utilizar catéteres de una sola luz y, en 8.  Métodos de infusión
aquellos casos en los que se opte por un catéter de
varias luces, utilizar siempre la misma luz para la NP Aunque se continúan utilizándose soluciones bina-
de forma exclusiva. rias (AA + glucosa por una parte y lípidos por otra), la
872 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

tendencia es a utilizar soluciones ternarias siempre que Tabla 11.  Monitorización de la NP en niños.
sea posible. Por el riesgo que supone la mezcla de he-
parina, lípidos y calcio en la misma solución, no se A. Control clínico
utiliza heparina de forma rutinaria en nuestras solucio-
· Balance hídrico diario
nes de NP. En la mayoría de las ocasiones las soluciones
· Antropometría (peso, talla, perímetro cefálico)
individualizadas continúan siendo la norma en pedia-
tría, pues permiten un ajuste fino de los aportes55. Sin B. Control analítico
embargo, en pacientes mayores o en lugares donde no
haya un farmacéutico disponible puede ser útil tener · Hemograma con recuento diferencial
soluciones estandarizadas para niños56. · Electrolitos
Habitualmente, la NP en niños se administra de for- · Urea/creatinina
ma continua a lo largo de 24 horas. Este método es · Glucosa en sangre
aplicable tanto cuando se usan mezclas ternarias como · Equilibrio ácido-base
cuando los lípidos se administran separadamente. En · Calcio/fósforo
determinadas situaciones puede ser interesante la ad- · Proteínas totales/Albúmina
ministración cíclica de la NP. Esta forma de infusión · Prealbúmina
facilita la movilización de grasas produciendo menor · Enzimas hepáticas y bilirrubina
infiltración grasa hepática y menor déficit de ácidos · Colesterol y triglicéridos
grasos esenciales57. Además, permite al paciente verse · Glucosa, electrolitos y cuerpos cetónicos en orina
libre de fluidoterapia endovenosa durante un periodo
Estos parámetros deben realizarse al inicio de la NP y
de tiempo (6 a 12 horas), facilitando su actividad. En la posteriormente con frecuencia variable según la situación
práctica clínica utilizamos este método de infusión en clínica del paciente (por ejemplo 2 o 3 veces a la semana
el paciente con NP de larga duración y/o domiciliaria, inicialmente). Si la NP se prolonga durante meses hay que
así como en aquellos con afectación hepática impor- monitorizar también oligoelementos, vitaminas, mineralización
tante asociada al uso de NP. y edad ósea y estudio de coagulación (estudio de factores de
Muchos de los pacientes que reciben NP reciben riesgo trombótico).
además otras medicaciones intravenosas; esto plantea
con frecuencia preguntas acerca de la estabilidad de
estos fármacos con las soluciones de NP, sobre todo en naje) o con fallo de algún órgano requieren controles
aquellas situaciones en que no se dispone de múltiples más frecuentes. También es el caso de los pacientes
vías o de catéteres de varias luces. Para obtener una muy desnutridos, que pueden presentar un síndrome
información actualizada sobre el tema se recomienda de realimentación. Mientras que en el caso de los re-
recurrir al Handbook of injectable drugs58. Siempre que cién nacidos se minimizará el número de las determi-
sea posible es recomendable utilizar una vía o una de naciones analíticas o, en caso de realizarlas, se preferirá
las luces del catéter exclusivamente para la NP. Cuando el uso de micrométodos que utilizan escasa cantidad
esto no sea posible, la administración de fármacos de sangre.
debe hacerse en Y59. Solo excepcionalmente algunos Cuando se trata de pacientes con NP domiciliaria
fármacos pueden incluirse en la bolsa de NP, como es (NPD) o prolongada, además de las determinaciones
el caso de la insulina, la heparina, la ranitidina o análo- habituales, se monitorizarán los niveles de vitaminas y
gos de la somatostatina60. elementos traza61, 62.
Además, el equipo médico responsable del soporte
9. Monitorización nutricional ha de realizar evaluaciones periódicas de la
situación nutricional, así como del cumplimiento de los
La monitorización de la NP pasa por una valoración objetivos terapéuticos marcados al inicio del soporte. Se
inicial completa antes de su inicio, en la que se inclui- valorará la retirada de la NP cuando se hayan consegui-
rán tanto la propia indicación de la NP, como el estado do dichos objetivos y el paciente sea capaz de recibir por
nutricional del niño, el tipo de acceso venoso y una vía digestiva un aporte suficiente de nutrientes (por en-
serie de controles analíticos que se detallan en la cima de dos tercios de los requerimientos estimados) o
tabla 11. Las complicaciones de la nutrición parenteral bien cuando sea una medida terapéutica fútil.
pueden minimizarse cuando se hace una indicación
adecuada, se elige una mezcla de nutrientes equilibra-
10. Complicaciones
da y se vigila estrechamente la respuesta del paciente.
La frecuencia con la que es preciso obtener determina- Podemos clasificar las complicaciones en cuatro gru-
ciones analíticas en el seguimiento dependerá tanto de pos: las relacionadas con los CVC, las complicaciones
la situación clínica como de la duración del soporte metabólicas, las dependientes de la estabilidad de las
nutricional. Así, los enfermos con pérdidas aumenta- soluciones y de las interacciones con fármacos y las psi-
das de líquidos (por ejemplo, por una sonda o un dre- cosociales.
Tema 55.  Nutrición parenteral en el paciente pediátrico: vías y fórmulas 873

10.1. Complicaciones relacionadas con heparina a baja concentración no aporta ninguna


con los catéteres ventaja frente al suero salino67. Solo se recomienda
la instilación de heparina de forma semanal cuando no
10.1.1. Complicaciones técnicas relacionadas se usa el catéter. El empleo de heparina, catéteres
con la inserción impregnados de heparina, heparina de bajo peso mo-
lecular o warfarina de forma profiláctica no han de-
La frecuencia de este tipo de complicaciones es de mostrado ser una medida eficaz en la prevención de la
alrededor del 4%63. Entre ellas destacan: el neumotó- obstrucción del catéter68, 69.
rax, el hemotórax, la laceración de un vaso, las arrit- Una vez descartada una obstrucción mecánica, la
mias, la perforación cardíaca con taponamiento, el oclusión del catéter puede tratarse con un fibrinolítico
embolismo aéreo, la lesión de un plexo nervioso o la (uroquinasa o alteplasa) si se sospecha un depósito de
localización anómala del catéter64. La inserción dirigida sangre o fibrina; y con alcohol o ácido clorhídrico si se
por ecografía minimiza el riesgo de complicaciones en sospecha que se deba a los lípidos o a la precipitación
la inserción65. de algún fármaco70.

10.1.2.  Rotura o desplazamiento accidental 10.1.4. Infecciones


El CVC puede desplazarse accidentalmente o delibera- Las bacteriemias asociadas a catéter (BC) son una de
damente al tirar de él. Para evitar desplazamientos o reti- las complicaciones más frecuentes de los CVC, pudien-
radas accidentales del catéter es preciso asegurarlo bien, do ser, además, potencialmente graves. Constituyen la
adecuando tanto las medidas de recubrimiento del caté- tercera causa de infección nosocomial en las Unidades
ter como las propias vestimentas del niño. Esto es es- de Cuidados Intensivos y su incidencia oscila entre 0,2
pecialmente aplicable para los catéteres de larga dura- y 11 episodios por cada 1000 días de catéter. Los gér-
ción (tunelizados, catéteres venosos centrales de menes más frecuentemente implicados son: Staphylo-
abordaje periférico –PICCs–). coccus epidermidis, Enterobacter spp, Escherichia coli,
Con el uso prolongado, el catéter puede deteriorarse Klebsiella pneumoniae, Pseudomona aeruginosa, Sta-
y presentar orificios o desgarros. Algunos de los fabri- phyloccus aureus, Enterococcus (E. faecalis, E. faecium)
cantes de CVC de larga duración disponen de kits de y Candida albicans u otros hongos. La infección puede
reparación sin necesidad de recambiar todo el catéter. proceder de la flora de la piel, de la contaminación del
cabezal del catéter, de siembras hematógenas a dis-
10.1.3. Oclusión/trombosis relacionada tancia o de la contaminación de la solución infundida.
con el catéter Las dos principales puertas de infección son el punto
de inserción en la piel (en los catéteres de corta dura-
Existen tres tipos de complicaciones trombóticas re- ción) y el cabezal o extremo del catéter (en los catéte-
lacionadas con el catéter: la aparición de una vaina de res permanentes). Además, puede haber infecciones
fibrina alrededor de la punta del catéter, la obstrucción en el punto de inserción en la piel o, en el caso de los
de la luz del catéter o una trombosis venosa66. La oclu- catéteres tunelizados, en el trayecto subcutáneo71.
sión parcial o completa de un CVC limita o impide la La retirada del catéter ha sido considerada tradicional-
posibilidad de extraer sangre o infundir a través del mente el tratamiento de elección y, salvo que existan
mismo. Puede ocurrir tanto por obstrucción de la luz problemas de accesos vasculares, lo sigue siendo en los
del catéter como por una compresión externa del caté- catéteres de corta duración. En los CVC de larga dura-
ter o por una malposición del mismo. Aunque la técni- ción, las indicaciones de retirada son: infecciones fúngi-
ca diagnóstica de elección es la administración de con- cas documentadas, bacteriemias recurrentes, tunelitis,
traste a través del catéter, la técnica de eco-doppler en persistencia de fiebre más de 48 horas después de inicia-
manos experimentadas es una técnica altamente sensi- do el tratamiento antibiótico y las infecciones polimicro-
ble para detectar coágulos en el extremo del catéter y bianas71. Las estrategias terapéuticas y la antibioterapia
los trombos en el interior del vaso. La incidencia de este se recogen en la tabla 12. Aunque el germen más fre-
tipo de complicaciones es muy variable, dependiendo cuentemente implicado en las BC es el estafilococo coa-
de la técnica diagnóstica utilizada, aunque sensible- gulasa negativo, la terapia antibiótica empírica debe
mente mayor que en la población adulta. cubrir también bacilos gramnegativos, incluida Pseudo-
En general, las complicaciones trombóticas ocurren mona aeruginosa. Una vez conocido el resultado del
en pacientes con dependencia prolongada de la NP, en hemocultivo y del antibiograma se modificará la pauta
especial en NPD. antibiótica. La duración del tratamiento dependerá del
Se recomienda infundir suero fisiológico (de 3 a germen aislado, pero en general no será inferior a 10-14
5 ml) a través del catéter después de la administración días si no se retira el catéter. Si se trata de un estafiloco-
de medicaciones o tras la extracción de sangre con el co coagulasa negativo y se retira el catéter es suficiente
fin de prevenir la oclusión. Se ha visto que el lavado un ciclo de 5 a 7 días. En catéteres de larga duración
874 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

Tabla 12.  Estrategias de tratamiento de las infecciones asociadas a catéter.

Infección Manifestaciones Tratamiento


Punto de · Eritema, induración o exudado · Tratamiento tópico
inserción a < 2 cm del orificio de salida · Antibióticos orales
Trayecto · Eritema, induración o exudado · Retirada del catéter
tunelizado a > 2 cm del orificio de salida · Antibióticos sistémicos (?)
Localización · Eritema o necrosis o exudado en · Retirada del reservorio
del reservorio la piel sobre el reservorio · Antibióticos sistémicos
· Hemocultivo positivo del catéter · Antibióticos sistémicos
y vía periférica +/–
Bacteriemia + · Sellado de ATB en CVC
asociada a · No otro origen de la fiebre tunelizados
catéter o · Retirada del catéter en las
· Desaparición de la fiebre tras la situaciones descritas en el
retirada del catéter texto

podemos intentar evitar la retirada del catéter asociando sanguínea, en caso de no poder aspirarla, no conlleva
a la antibioterapia sistémica un sellado con antibióticos. ningún riesgo para la salud del paciente, pues no es
Consiste, ante la sospecha de bacteriemia asociada a tóxica para el ser humano72.
CVC y tras obtener hemocultivos, en dejar en la luz del
catéter 1,5 a 3 ml de una solución de antibióticos (por 10.2.  Complicaciones metabólicas
ejemplo, vancomicina 5 mg/ml) que puede mantenerse
durante 2-3 días o cambiarse diariamente. En esta situa- Incluyen las derivadas del déficit o exceso de alguno
ción se suspende la NP por esa vía durante 48-72 horas. de los componentes individuales de la solución de NP
Si al reiniciar la NP no se produce una recurrencia de la o de la presencia de contaminantes.
bacteriemia, se mantiene el tratamiento (sistémico + el
sellado) durante dos semanas, evitando así la retirada 10.2.1.  Déficit o exceso de micronutrientes
del catéter. Se optará por pautas antibióticas que se in-
fundan cada 12 o 24 horas; mientras que el sellado se Los más frecuentes son76:
mantendrá durante las horas en las que no se infunde la
•  En relación con el déficit de nutrientes: hipogluce-
NP. Si es necesario retirar el CVC, idealmente no se de-
mia, hipofosfatemia e hipocalcemia.
bería insertar uno nuevo hasta que la fiebre haya desa­
•  En relación con el exceso de nutrientes: hiperglu-
parecido y los hemocultivos de control, extraídos tras
cemia e hipertrigliceridemia, cuando se sobrepasa
retirar el CVC infectado, sean negativos; aunque fre-
la capacidad plasmática de aclaramiento lipídico.
cuentemente no es factible esperar tanto tiempo por la
•  Las relacionadas con el exceso o el déficit de lí-
dependencia del paciente de la NP71.
quidos.
El punto clave en la prevención de las infecciones
asociadas a catéter es el cumplimiento de la técnica Se ha demostrado la asociación entre hiperglucemia,
aséptica en el manejo del catéter, incluyendo el lava- inmunodepresión y riesgo de infección, sobre todo en
do de manos72. En los últimos años se han empleado el paciente crítico.
soluciones de taurolidina y alcohol al 70% para el se-
llado del CVC en pacientes con NPD y antecedentes
10.2.2.  Síndrome de realimentación
de BC como profilaxis secundaria73. Se ha visto que
ambos compuestos son efectivos para la prevención Hay que ser extremadamente cuidadoso en la ali-
de las BC, aunque existen dudas sobre si el uso de mentación de niños desnutridos para evitar el síndro-
etanol se puede asociar con un aumento del riesgo me de realimentación, en especial en el paciente críti-
de trombosis74. En el caso de la taurolidina, se reco- co77. Los pacientes afectos de este trastorno sufren un
mienda usar los preparados de taurolidina 2% asocia- desequilibrio de líquidos y electrolitos, con intolerancia
da con citrato o con heparina, de forma diaria, infun- a los hidratos de carbono y déficit de vitaminas, todo
diéndola una vez terminada la infusión de la NP. Se ello como consecuencia de una realimentación rápida
recomienda su aspiración antes de volver a conectar en pacientes previamente muy desnutridos78. Estos rá-
la NP, aunque se ha visto que su paso a la circulación pidos cambios metabólicos pueden ocasionar graves
Tema 55.  Nutrición parenteral en el paciente pediátrico: vías y fórmulas 875

complicaciones que amenacen la vida del paciente. luciones pobres en taurina y ricas en glicina y las infec-
Para disminuir el riesgo de aparición del síndrome de ciones, entre otras82. En los últimos años se ha prestado
realimentación ha de actuarse cuidadosamente, espe- también mucha atención al papel de las emulsiones li-
cialmente en la fase inicial de la realimentación con pídicas en la aparición de la afectación hepática.
aportes graduales de energía y nutrientes, así como El sistema hepatobiliar puede verse afectado de di-
realizar una monitorización estrecha de los niveles de versas maneras por el uso de NP:
potasio, fósforo y magnesio, suplementándolos en
caso de que sea necesario, junto con un aporte sufi- •  Colestasis: es el hallazgo predominante en los pa-
ciente de vitaminas y oligoelementos. cientes pediátricos que desarrollan afectación hepá-
tica asociada a la NP. La alteración de las enzimas
10.2.3. Enfermedad metabólica ósea hepáticas es un indicador precoz de esta afectación,
(osteoporosis, osteomalacia) aunque se ha visto que existe escasa correlación en-
tre los niveles de enzimas y el grado de afectación.
Ocurre en pacientes con NP de muy larga duración, •  Esteatosis: la infiltración grasa es la afectación he-
especialmente si se asocia a fracaso intestinal79. El origen pática más frecuente en pacientes adultos con
es multifactorial, en el que influyen tanto la enfermedad NP83. Puede ir acompañada o no de elevación de
de base como mecanismos relacionados con la NP: defi- las enzimas hepáticas y suele ser asintomática. Su
ciencia de vitamina D, desequilibrio en los aportes de origen puede estar motivado por una excesiva in-
fósforo, nitrógeno y energía, exceso de aminoácidos y fusión de glucosa o lípidos, o bien ser debida a
contaminación con aluminio, entre otros. Las recomen- deficiencias en determinados nutrientes como la
daciones para la prevención y el manejo de la enferme- carnitina, la colina o los ácidos grasos esenciales.
dad metabólica ósea se recogen en la tabla 1380. •  Fibrosis: puede aparecer en pacientes con NP de
larga duración. A diferencia de la colestasis y la
10.2.4.  Alteraciones hepáticas esteatosis, que se pueden revertir total o parcial-
mente, la fibrosis es irreversible, pudiendo evolu-
Entre el 30 y el 50% de los niños que reciben NP
cionar a cirrosis84.
durante más de dos semanas presentan elevación de
•  Disfunción de las vías biliares y vesícula biliar: afec-
las enzimas hepáticas, especialmente de la GGT, y la
ta por igual a niños y adultos. Suelen ser litiasis
bilirrubina; aunque estas alteraciones suelen ser de ca-
pigmentarias.
rácter autolimitado81. El origen es desconocido y, en su
aparición, pueden influir distintos factores como la dis-
minución del circuito enterohepático, el empleo de so- Los principales factores que se han relacionado con
la aparición colestasis son: la duración prolon­gada de
la NP, el exceso de aporte calórico, la presencia de un
síndrome de intestino corto, el reposo intestinal, las
infecciones bacterianas y el sobrecrecimiento bacteria-
Tabla 13. Recomendaciones para la prevención y el
no85. La colestasis es reversible si la NP puede sus­
manejo de la enfermedad metabólica ósea
penderse antes de que se produzca un daño hepático
asociada a nutrición parenteral.
irreversible o si se eliminan o minimizan los factores
· Adecuar los aportes de calcio, fósforo, magnesio predisponentes. Pues la historia natural de la colestasis
y acetato en función de las necesidades del es a su desaparición tras la retirada de la NP86.
paciente. En la prevención de las complicaciones hepáticas aso-
ciadas a la NP se deben considerar todos los potenciales
· Monitorizar periódicamente los niveles de dichos
factores de riesgo asociados a su aparición. Existe algunas
iones en sangre.
medidas que pueden limitar o revertir la afectación hepá-
· Monitorizar los niveles de vitamina D.
tica: la instauración precoz de una nutrición enteral míni-
· Monitorizar los niveles de calcio en orina de ma, el ciclado de la NP, el tratamiento del sobrecrecimien-
24 horas cada 6-12 meses. to bacteriano, la prevención y el tratamiento precoz de las
· Revisar la medicación que esté tomando el infecciones, la reducción del aporte de lípidos a < 1 g/kg/
paciente y en los casos en que esta pueda tener día, el uso de nuevas emulsiones lipídicas con omega-3,
efectos óseos perjudiciales interrumpirla o reducirla etc. Así como la administración de fármacos coleréticos,
siempre que sea posible. como el ácido ursodeoxicólico (a 10-30 mg/kg/día)87.
· Reducir el aporte de aminoácidos al mínimo
siempre que el estado nutricional del paciente lo 10.3.  Problemas psicosociales
permita.
· Realizar densitometrías de control cada 1-2 años. La enfermedad de base, las hospitalizaciones repeti-
das y prolongadas, la dependencia de máquinas y la
· Promover el ejercicio físico.
sobreprotección de los padres pueden perturbar el de-
876 BLOQUE: NUTRICIÓN PEDIÁTRICA

sarrollo normal de algunos niños con NP prolongada.  3. Wilmore DW, Dudrick SJ. Growth and develop-
Por todo ello, se recomienda intentar enviar a estos ment of an infant receiving all nutrients via a vein.
niños lo antes posible a su domicilio88. JAMA. 1968; 20: 860-4.
 4.  AGA Technical Review on Parenteral nutrition.
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 5. Schewnk WF. Specialized nutrition support: the
La dependencia de NP por un tiempo prolongado ha pediatric perspective. JPEN J Parent Ent Nutr.
dejado de ser una justificación para mantener a un 2003; 27: 160-7.
niño ingresado. Los objetivos de la NPD son: mejorar o  6. Kerner JA. Parenteral Nutrition. En: Walker WA,
mantener el estado nutricional, facilitar la adaptación Watkins JB, Duggan Ch. Nutrition in Pediatrics.
intestinal, reducir el riesgo de complicaciones relacio- 5th ed. London: BC Decker Inc; 2003. p. 957-85.
nadas con la hospitalización (infecciones), mejorar la   7. Muñoz PG, López LG, Costa CM, Villares JM, Giner
calidad de vida del niño y su familia y disminuir los CP, Maristany CP, del Río MT; Spanish Society of
costes del tratamiento, evitando hospitalizaciones. La Parenteral and Enteral Nutrition; Spanish Society
NPD está indicada solo en aquellas situaciones en las of Gastroenterology, Hepatology and Nutrition;
que otras formas de tratamiento no son posibles (por Spanish Society of Hospital Pharmacies. [Consen-
ejemplo, la nutrición enteral) o son poco aconsejables sus on paediatric parenteral nutrition: a document
(como, la cirugía)89. Se debería considerar en todo pa- approved by SENPE/SEGHNP/SEFH]. Nutr Hosp.
ciente que requiera NP por un período superior a 2007; 22(6):710-9.
3 meses. Para implantar una NPD es necesaria la parti-   8. Taylor CJ, Griffiths RD, Fernandez RS. Does a mul-
cipación de un equipo multidisciplinar, cuyos compo- tidisciplinary total parenteral nutrition team im-
nentes se adaptarán a las características y posibilidades prove patient outcomes? A systematic review.
del hospital. La familia debe ser adecuadamente entre- JPEN J Parent Ent Nutr. 2004; 28: 251-8.
nada para poder realizar el tratamiento de forma segu-   9. Moreno Villares JM, Pedrón Giner C. Nutrición ar-
ra y el paciente debe estar en una situación clínica es- tificial en el paciente pediátrico. En: Gil A. Tratado
table. Es fundamental considerar que si no existe una de nutrición. 2ª ed. Madrid: EM Panamericana;
familia muy motivada y dispuesta a asumir las respon- 2010. p. 171-200.
sabilidades de la NPD y a seguir el programa de ense- 10. Collier S, Gura KM, DeLoid L, Dalton M, Summers
ñanza, no es posible plantear en un niño una NPD90. L. Parenteral Nutrition. In: Sonneville K, Duggan C.
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12.  Resumen y conclusiones Decker; 2013. p. 196-215.
11. Fivez T, Kerklaan D, Mesotten D, Verbruggen S,
La NP continúa siendo un arma terapéutica eficaz Wouters PJ, Vanhorebeek I, et a. Early versus late
que sigue salvando vidas. Aunque su empleo está aso- parenteral nutrition in critically ill children. N Engl
ciado a complicaciones, su uso racional por personal J Med 2016; 374: 1112-22.
experimentado contribuye a disminuir las mismas. Por 12. Koletzko B, Goulet O, Hunt J, et al. Organisational
sus especiales características fisiológicas y sus diferen- aspects of hospital PN. En: Guidelines on pediatric
tes requerimientos, los datos procedentes de los adul- parenteral nutrition of the European Society of Pe-
tos no son extrapolables a los niños; ni tan siquiera los diatric Gastroenterology, Hepatology and Nutrition
de estos a los RNPT. Aunque la nutrición enteral ha (ESPGHAN) and the European Society for Clinical
experimentado un auge importante en los últimos Nutrition and Metabolism (ESPEN); supported by
años, el uso combinado de ambas técnicas de soporte the European Society for Pediatric Research (ESPR):
nutricional enriquece el arsenal terapéutico en deter- JPediatr Gastroenterol Nutr 2005; 41: S63-S69.
minados grupos de enfermos. El empleo de nutrientes 13. Bonnabry P, Cingria L, Sadeghipour, Ing H, Fon-
específicos abre campos interesantes, pues permitirán zo-Christe C, Pfister RE. Use of a systematic risk
no solo el soporte nutricional del paciente, sino modi- analysis method to improve safety in the produc-
ficar el curso clínico de la enfermedad al interferir en tion of paediatric parenteral nutrition solutions.
los mecanismos inflamatorios o, por extensión, en la Qual Saf Health Care. 2005; 14:93-8.
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BLOQUE:
NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES
(Dra. María Dolores Ballesteros
Pomar)
TEMA 56. Aspectos éticos e implicaciones legales del soporte nutricional.
Dres. José Enrique Palacio Abizanda y Julia Álvarez Hernández

TEMA 57. Gestión aplicada a la nutrición clínica.


Dres. Alfonso Vidal Casariego, David Emilio Barajas Galindo
e Isidoro Cano Rodríguez

TEMA 58. Metodología para el diseño y desarrollo de productos de nutrición clínica.


Dras. Milagros Pérez Rodríguez y África Jiménez Jiménez

TEMA 59. Nutrición basada en la evidencia.


Dres. María Dolores Ballesteros Pomar, Ana Hernández Moreno
y Adrián Arés Luque

TEMA 60. Nutrición artificial domiciliaria.


Dras. Rocío Villar Taibo, Ana Urioste Fondo y Paula Fernández Martínez

TEMA 61. Nutrición e investigación.


Dres. Alicia Calleja Fernández, Begoña Pintor de la Maza, Miriam Alejo Ramos
y Alfonso Vidal Casariego
Tema 56. 
Aspectos éticos e implicaciones legales
del soporte nutricional
José Enrique Palacio Abizanda
Jefe de Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Ntra. Sra. de Candelaria. Tenerife

Julia Álvarez Hernández


Jefe de la Sección de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Príncipe de Asturias. Alcalá de
Henares (Madrid)

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 883-895.

1.  Introducción
2.  Algunas consideraciones generales
3.  Implicaciones legales. Aproximación en situaciones clínicas concretas
4.  Resumen
5.  Bibliografía

1. Introducción tación de prolongar la vida indebidamente. Si tales me-


tas significan una cierta desmitificación de la medicina
Los avances tecnológicos de la Medicina y los cam- es porque exigen de ella una cierta modestia2.
bios socioculturales surgidos desde la segunda mitad El Derecho sanitario y la Bioética intentan dar respues-
del siglo pasado han supuesto un importante reto para ta a cuestiones de interés entre las que se encuentran las
el Derecho y la Ética. La medicina moderna ha desarro- relativas al soporte nutricional (SN) bajo sus prismas co-
llado un amplio campo de conocimiento en torno al rrespondientes. Los profesionales sanitarios debemos
soporte vital de los individuos incluyendo la sustitución ser entrenados en habilidades de comunicación que nos
de la funcionalidad de algunos órganos como la venti- permitan establecer una relación médico-enfermo basa-
lación asistida o la diálisis. Las técnicas de nutrición ar- da en el respeto y la confianza que facilite la participa-
tificial (NA), como la nutrición parenteral (NP) o la nu- ción activa del paciente en la toma de decisiones que
trición enteral (NE), dan respuesta a la incapacidad de compete a la gestión de su salud. Sin olvidar conocer
algunos enfermos para ser alimentados por vía natural, nuestra carta de deberes y derechos como ciudadanos,
siendo reconocidas como procedimientos de soporte como pacientes y como profesionales sanitarios.
nutricional. Su desarrollo a lo largo de la segunda mitad Sabemos que un conflicto ético no es un conflicto
del siglo xx ha formado parte de los avances tecnológi- técnico, tampoco es un conflicto jurídico, aunque pue-
cos. En este punto, la pregunta clave es ¿todo lo que da llegar a serlo, de ahí lo importante del papel del De-
técnicamente se puede hacer en la actualidad se debe recho sanitario, más bien se trata de un conflicto de
hacer? valores que enfrenta los valores del pacientes con los de
La condición humana es inseparable de la enferme- los profesionales sanitarios y/o los de terceras partes
dad, el dolor, el sufrimiento y, por fin, la muerte, una (administración, gestores, jueces, etc.). A lo largo de
práctica médica adecuada a dicha condición ha de em- este capítulo pretendemos hacer reflexionar al lector
pezar por aceptar la finitud humana y enseñar o ayudar sobre aquellos aspectos éticos con implicaciones legales
a vivir en ella. La reflexión sobre los fines de la Medicina más frecuentes que nos encontramos a diario en el des-
del Hastings Center1 nos ayuda a entender que deben empeño de nuestra actividad asistencial. Hemos elegi-
ser algo más que la curación de la enfermedad y el alar- do tres situaciones clínicas relevantes como son las en-
gamiento de la vida. Han de poner un énfasis especial fermedades neurodegenerativas, la anorexia nerviosa y
en aspectos como la prevención de las enfermedades, las personas en huelga de hambre para profundizar en
la paliación del dolor y el sufrimiento, han de situar al las implicaciones legales de mayor interés y probable-
mismo nivel el curar y el cuidar, y advertir contra la ten- mente menos conocidas por los clínicos.

883
884 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

2.  Algunas consideraciones generales un destino y que, por tanto, deben ser objeto de la ma-
yor ponderación posible. A este respecto, se pone de
De todos es conocido que la mayoría de los conflictos manifiesto otra dificultad adicional: las convicciones o
éticos suscitados en el entorno del soporte nutricional, creencias individuales (del médico u otros profesionales
en nuestro día a día, pueden ser evitados con un ade- sanitarios, de los pacientes o de los allegados) implican
cuado acompañamiento del paciente y sus familiares. La a otras personas que pueden tener otros puntos de vista
comunicación y la participación activa en la toma de de- o considerarse que afectan a la sociedad, que razona, a
cisiones es una garantía de la buena práctica clínica. La través de quien corresponda, según otras bases5. En este
moderación y la prudencia, ponderando principios y evi- sentido, cuando hacemos referencia a los conflictos re-
tando prejuicios, deben acompañar nuestras decisiones lacionados con la hidratación y nutrición al final de la
revestidas de legalidad3. Por otro lado, no podemos ol- vida, es importante resaltar las diferencias culturales que
vidar que el mundo del Derecho sanitario es complejo. se evidencian en la literatura, al analizar las posturas que
Está regulado, en nuestro caso, por normas contempla- contrastan la visión de una cultura como la mediterrá-
das en convenios internacionales, normas de la Unión nea frente a la anglosajona. Esto es más evidente cuan-
Europea y otras en el ámbito del Derecho español como do se dirime sobre la consideración de cuidado y trata-
la Constitución, las leyes del Parlamento Español y de las miento, pero también lo es cuando se establece la toma
instituciones análogas de las comunidades autónomas y de decisiones en primera persona en el caso de la cultu-
las diferentes disposiciones administrativas de la Admi- ra anglosajona, haciendo valer el derecho a toda la in-
nistración estatal o de las Administraciones de las comu- formación y ejerciendo, el paciente, con autonomía el
nidades autónomas, también según sus posibilidades derecho a decidir sobre su salud. Frente a esta actitud
competenciales. encontramos la que nace de la cultura mediterránea en
El sistema normativo de un país, en las democracias, la que la familia adopta posturas de protección extrema
da respuesta a la llamada ética civil que permite el nor- del individuo enfermo ocultándole información que
mal funcionamiento de las instituciones, y no puede considera gravosa y que, sin duda, limitan la toma de
eliminarse sin alterar la convivencia. Así, la ley repre- decisiones por parte del protagonista.
senta lo justo, con el objetivo de buscar la paz social. La decisión ética es siempre una decisión que se
Esto no significa que no pueda ser modificada ni que adopta en primera persona, máxime en las situaciones
exista discrepancia, pero exige respeto durante su vi- que se producen al final de la vida. Ahora bien, inevita-
gencia. Si el dinamismo social lo requiere deberá ser blemente, pone en juego a otros actores a los que hay
derogada y sustituida por otra dentro del marco cons- que tener en cuenta (por ejemplo, al médico u otros
titucional. Además, podemos asistir a la conversión en profesionales sanitarios que pueden alegar objeción de
norma de las actuaciones profesionales cuando se esti- conciencia ante determinadas situaciones, como es el
me que por su importancia y seguridad deben revestir caso del estado vegetativo permanente), siendo aquí,
el carácter de ley. Esta es una cuestión que correspon- precisamente, donde tiene sentido el proceso delibera-
de al devenir de cada sociedad, por ejemplo en España, tivo característico de la toma de decisiones en el ámbi-
hasta el año 2002 no se regularon aspectos fundamen- to bioético6.
tales de la relación clínica mediante la Ley de Autono- Por último, nos gustaría recordar aquí una dificultad
mía del Paciente. Sin embargo, esta norma vigente no añadida en la toma de decisiones al final de la vida. Nos
agota la realidad social que mantiene en la actualidad referímos a las dificultades técnicas que en ocasiones
el debate bioético en algunos puntos. tenemos los clínicos para establecer la terminalidad. En
otras palabras, los conflictos éticos y jurídicos pueden
2.1.  Decisiones al final de la vida presentarse en el abordaje de pacientes técnicamente
terminales, es decir, pacientes no agónicos, que han
Las decisiones al final de la vida tienen un indudable agotado sus posibilidades terapéuticas pero que pueden
carácter ético y en ocasiones implicaciones jurídicas. Se tener una expectativa de vida de hasta 6 meses, y los
trata de decisiones que entrañan cuestiones morales de pacientes que hemos llamado biológicamente termina-
gran trascendencia, desde el momento en que afectan les, aquellos pacientes agónicos que realmente se en-
a valores esenciales de la persona humana. En concre- cuentran en los últimos días y horas de su vida. Es evi-
to, al valor de la vida y al valor de la dignidad humana4. dente que nuestro análisis frente a la hidratación y
La dificultad para encontrar criterios éticos adecuados nutrición no podrá ser el mismo. La Sociedad Española
al final de la vida reside, entre otras cosas, en el entorno de Cuidados Paliativos (SECPAL) establece que en la ac-
multicultural al que, cada vez más, hay que enfrentarse tualidad es mejor hablar de situaciones clínicas al final
(el llamado cosmopolitismo multicultural), el poder de la de la vida, donde la enfermedad terminal se encuentra
tecnología, la fragilidad en que se hallan las personas y entre enfermedad incurable avanzada y la situación de
la trascendencia decisiva de las decisiones que pueden agonía. Enfermedad terminal entendida como enferme-
adoptarse en tal trance, que son irreversibles desde el dad avanzada en fase evolutiva e irreversible con sínto-
momento en que transforman la vida de una persona en mas múltiples, impacto emocional, pérdida de autono-
Tema 56.  Aspectos éticos e implicaciones legales del soporte nutricional 885

mía, con muy escasa o nula capacidad de respuesta al nutricional del individuo (trastornos de la deglución,
tratamiento específico y con un pronóstico de vida limi- maldigestión, malabsorción, disfuncionalidad del tubo
tado a semanas o meses, en un contexto de fragilidad digestivo. etc.). Lo segundo, porque la utilización de
progresiva. Y situación de agonía como la que precede sonda nasogástrica o la colocación de gastrostomía
a la muerte cuando esta se produce de forma gradual, y percutánea, ya sea endoscópica, radiológica o quirúr-
en la que existe deterioro físico intenso, debilidad extre- gica, así como las yeyunostomías o las gastroyeyunos-
ma, alta frecuencia de trastornos cognitivos y de la con- tomías, requiere la realización de procedimientos inter-
ciencia, dificultad de relación e ingesta y pronóstico de vencionistas. Lo tercero, porque se necesita formación
vida en horas o días. Si bien es cierto que establece tiem- especializada para la indicación de fórmulas de nutri-
pos distintos para definir estas situaciones en enfermos ción enteral y parenteral. Y por último, lo cuarto, como
oncológicos y no oncológicos7. En cualquier caso, las en cualquier tratamiento los pacientes sometidos a es-
decisiones éticas al final de la vida conllevan resultados tos procedimientos pueden sufrir complicaciones. En
irreparables (por ejemplo, la muerte), deben tomarse general, los casos en discusión establecen que la nutri-
con extrema prudencia. En la base de cualquier toma de ción enteral por sonda se requiere para algo más que
decisión ética, como en la de las demás decisiones mé- para mantener un nivel de asistencia básica.
dicas, están los conocimientos científicos aceptados (lex Ahora bien, para retirar la alimentación e hidratación
artis). Su desconocimiento es causa de una ignorancia algunos autores defienden que deben reunirse deter-
«culpable»8. Una máxima defendida por los bioeticistas minadas condiciones: que existan bastantes probabili-
es que ante la incertidumbre, cuando algo de tanto va- dades de que los procedimientos no mejoren el estatus
lor como la vida está en juego y la consecuencia de una nutricional y de hidratación; que los procedimientos
de las acciones es irreversible, debemos errar en el «lado mejoren el estado nutricional y de hidratación, pero
de la vida»9. que el paciente no obtenga ningún beneficio de ello
(por ejemplo, en caso de anencefalia o de estado vege-
tativo permanente); que los procedimientos mejoren el
2.2. Tratamiento versus cuidado
estado nutricional y de hidratación y el paciente obten-
Cuando analizamos conflictos éticos relativos a la hi- ga beneficios, pero los inconvenientes superen a los
dratación y nutrición, en diversas situaciones clínicas, beneficios (por ejemplo, la contención física en pacien-
siempre subyacen las posiciones que consideran esta tes con demencia, que puede provocar miedo e inco-
medida del soporte nutricional como tratamiento frente modidad, especialmente si el paciente lucha por libe-
a los que la entienden como cuidado. Siendo especial- rarse de dicha contención).
mente controvertido el tema en el caso de la nutrición
enteral. En nuestra cultura mediterránea, la hidratación
2.3.  Capacidad de decisión
y la alimentación son símbolos del cuidado y están en el
subconsciente colectivo, a nadie se le niega «el pan y la Un punto esencial en el análisis de conflictos éticos y
sal». La consideración de cuidado obliga a administrarla jurídicos es determinar quién debe decidir, en otras pa-
a todos los individuos con el objetivo final de optimizar labras, quién tiene la capacidad y la competencia para
el confort y preservar la dignidad de la persona. En el decidir. Aunque insistiremos más detenidamente en
caso de los que la entienden como un tratamiento (cul- este capítulo cuando analicemos situaciones clínicas
tura anglosajona), abogan por valorar las cargas y bene- concretas, merece la pena revisar algunas considera-
ficios que supone el mismo antes de establecer o no la ciones que deben ser recordadas. Para poder decidir, el
indicación10. Ante la falta de directivas anticipadas o paciente debe estar siempre informado adecuadamen-
testamento vital son estas consideraciones las que han te de su problema de salud y de todas las alternativas
sido el centro del análisis social, ético y jurídico, de los terapéuticas. Además, el paciente debe entender lo
casos más mediáticos de los últimos años, que plantea- que se le plantea para poder definir su elección ponde-
ban la retirada de la alimentación enteral en pacientes rando valores y evitando prejuicios. Esto hace posible
con estado vegetativos permanente como el de Terry que el individuo sea autónomo y pueda ejercer su de-
Schiavo11 o el de Euglana Englano12. recho a decidir sobre sus problemas de salud. En oca-
Desde un punto de vista práctico, algunos autores siones, es la propia enfermedad la que merma la auto-
defienden que existen razones por las cuales la hidrata- nomía del paciente, y nos encontramos ante una
ción administrada artificialmente y la nutrición son tra- vivencia dilemática entre no respetar su autonomía y
tamientos médicos y no cuidados básicos (es decir, el priorizar la no maleficencia, máxime cuando tememos
cuidado que podría haber sido por los médicos antes por la vida del paciente. Este es el caso del ingreso for-
de la era moderna, como el baño y el uso de ropa de zoso de las pacientes con anorexia nerviosa, siendo
cama adecuada). Lo primero, porque el soporte nutri- muy importante contar con modelos de detección de
cional o la alimentación artificial es una tecnología re- competencia para despejar dudas en torno a la auto-
lativamente nueva que fue especialmente diseñada nomía del paciente. Sin embargo, esta circunstancia
para pacientes con patologías que afectan al estado no es igual en los casos de individuos en huelga de
886 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

hambre, que plenamente conscientes de sus riesgos ciación o retirada que se haga mediante acuerdos que
están dispuestos a asumir el riesgo de muerte por ina- puedan ser asumidos por una mayoría de los implica-
nición. dos, siendo conocido que los profesionales sanitarios
El consentimiento informado, voluntades previas, di- tienen más dificultades para la retirada que para la no
rectivas anticipadas o el testamento vital son manifes- iniciación. Más aún, se ha formulado una propuesta
taciones jurídicas de la voluntad en la elección del indi- concreta para la forma de actuación ante la limitación
viduo. En el tema que nos ocupa, cuando las decisiones del esfuerzo terapéutico14.
afectan al final de la vida, su existencia es determinante
para evitar los conflictos éticos y jurídicos.
2.5.  Proceso deliberativo
Como ya hemos comentado, la mayoría de los con-
2.4.  Principio de proporcionalidad
flictos éticos que llegan a convertirse en conflictos jurí-
El principio de proporcionalidad es considerado dicos podrían evitarse con un adecuado acompaña-
tanto en el ámbito de la bioética como en el del dere- miento del paciente y la familia en su enfermedad. Los
cho. Según el mismo, cualquier tratamiento médico profesionales sanitarios compartimos una serie de pre-
es éticamente obligatorio en la medida en que la pro- misas en nuestro comportamiento asistencial. Todos
babilidad de proporcionar beneficios al paciente sea tenemos asumido que hacemos «lo indicado» y no ha-
superior a las cargas que puede soportar. Este princi- cemos «lo no indicado» o «lo contraindicado». Tam-
pio de proporcionalidad es de fácil aplicación a las bién retiramos «lo contraindicado», pero en ocasiones
preferencias de los pacientes (autonomía), por cuanto nos cuesta decidir retirar «lo no indicado». Estas afir-
que estos tienen derecho a decidir qué entienden por maciones se hacen muy evidentes en el caso de la nu-
beneficios y por cargas. Sin embargo, la proporciona- trición enteral mediante sonda nasogástrica en pacien-
lidad también es aplicable a las indicaciones médicas, tes con enfermedad avanzada, en los que deberíamos
aunque hay que reconocer que se torna más difícil reflexionar sobre los puntos que hemos comentado en
cuando se recurre a dicho principio en decisiones que los apartados anteriores.
afectan a personas con una discapacidad irreversible Existen muchos modelos para la toma de decisio-
sin que previamente hayan otorgado instrucciones nes15, que, aunque puedan variar el vocabulario, nú-
previas ni hayan hecho manifestación alguna al res- mero y orden de pasos a seguir, todos tienen en con-
pecto. Las opiniones expuestas se recogen también en sideración una serie de aspectos esenciales. Algunas
algunos trabajos de médicos españoles en los que se escuelas anglosajonas defienden una especie de Guía
plantea si la alimentación e hidratación artificiales para la Reflexión Ética, en donde contemplan aspectos
constituyen un tratamiento médico o un componente de la historia clínica y biografía del sujeto, encuadre de
de cuidados humanos básicos13. Ponen de relieve que las cuestiones éticas, cuidado de los valores y respon-
los diferentes procedimientos implican riesgos y com- sabilidades de cada representante (paciente, familia,
plicaciones graves, incluso la muerte, y que existen profesionales, administración, etc.), análisis ético de la
enfermedades y situaciones en las que la alimentación situación y opiniones técnicas de los profesionales y
artificial supone una desventaja o una técnica inútil o justificación moral16. Además, establecen una especie
desproporcionada. de checklist para que se asegure un proceso de delibe-
Por otro lado, en atención a nuestras características ración adecuado (tabla 1).
socioculturales, distinguen los supuestos en que el su- La profesora Begoña Román, de la Universidad de
ministro de líquidos y alimentos se realiza como medida Barcelona, Presidenta del Comité de Ética de los servi-
de mantenimiento en un paciente que no puede utilizar cios Sociales de Cataluña y vocal del Comité de Bioética
la vía digestiva normal por alguna razón, como las difi- de Cataluña, propone el siguiente protocolo en la toma
cultades para la deglución por un estado de coma, las de decisiones en nutrición clínica5:
alteraciones de la conducta por enfermedad mental y
otras, (entendiendo que en estos casos se puede consi- 1.  Descripción y documentación del caso.
derar como parte de los cuidados básicos generales, 2.  Exposición de argumentos.
que en nuestra cultura se proporcionan a todas las per- 3.  Propuesta de intervención.
sonas, salvo que de forma expresa haya manifestado lo 4.  Planificación y delegación de responsabilidades.
contrario) de aquellos otros que no tienen tal carácter, 5.  Seguimiento y consideración.
en los que constituye un medio de soporte vital, similar 6.  Evaluación con indicadores.
a la ventilación mecánica o a la diálisis y susceptibles de 7. Documentación para la historia de los equipos y
ser retirados o no instaurados en las situaciones sin ex- la organización.
pectativas razonables de recuperación5.
La dependencia de los modelos culturales y sociales Por otro lado, la escuela del profesor Diego Gracia
en uso es un lugar común entre los especialistas, hasta defiende un proceso deliberativo que contemple los
el punto de que se considera necesario para la no ini- pasos recogidos en la tabla 2. Como hemos comenta-
Tema 56.  Aspectos éticos e implicaciones legales del soporte nutricional 887

Tabla 1.  Checklist de las condiciones necesarias para ción enteral por vía oral a través de sonda nasogástrica
aplicar la Guía de reflexión ética según Monod et al. o de gastrostomía percutánea, en las situaciones clínicas
que suelen generar conflicto como son las enfermeda-
Condiciones necesarias para aplicar la Guía des neurodegenerativas (demencia, enfermedad de Par-
de Reflexión Ética kinson, esclerosis lateral amiotrófica, esclerosis múltiple
· Organizar una reunión formal para la deliberación. y otras), los trastornos del comportamiento alimentario
· Asegurar la participación de los profesionales (TCA), especialmente en el caso de la anorexia nerviosa y
implicados. en las personas en huelga de hambre.
· Identificar una persona como presidente de la reunión.
· El Presidente organiza la discusión.
3.1. Enfermedades neurodegenerativas
· El Presidente obtiene el punto de vista de los La Constitución Española (CE) de 27 de diciembre de
distintos profesionales de la reunión. 1978 incluye en el Capítulo Tercero, los «principios rec-
· El Presidente identifica y consensua la decisión ética. tores de la política social y económica». El artículo 43 de
· El Presidente y el grupo designa a la persona la CE reconoce el derecho a la protección de la salud. La
responsable de vigilar por la implementación regulación general de este derecho, junto a la atención
de la decisión. sanitaria, constituyen el objeto de la Ley 14/1986, de 25
de abril, General de Sanidad17. De esta forma, la Ley
General de Sanidad (LGS) da respuestas a un requeri-
do, en estos planteamientos se recogen los elementos miento constitucional; así, el artículo 1º.1 de la misma
fundamentales en la toma de decisiones, que siempre dice: «La presente ley tiene por objeto la regulación ge-
será realizada con moderación, prudencia y serenidad neral de todas las acciones que permitan hacer efectivo
y deberá estar salvaguardada por la ley. el derecho a la protección de la salud reconocido en el
artículo 43 y concordantes de la Constitución». Los de-
3. Implicaciones legales. Aproximación rechos de los pacientes se recogieron en el artículo 10
de la LGS.
en situaciones clínicas concretas
Por tanto, el origen y precedentes de los derechos de
A continuación haremos un repaso de los aspectos los pacientes de la LGS los podemos encontrar en tex-
legales referentes a la actuación de los profesionales sa- tos foráneos o en el ordenamiento jurídico español
nitarios en el momento de aplicar determinados proce- tanto en la referencia Constitucional como en otras
dimientos diagnósticos o terapéuticos, como la nutri- normas, los derechos de los usuarios de la salud son

Figura 2.  Proceso deliberativo propuesto por Prof. Diego Gracia.

PROCESO DELIBERATIVO

•  Presentación del caso.


HECHOS
•  Aclaraciones sobre los hechos clínicos del caso.

•  Identificación de los problemas éticos.


•  Elección del problema a debatir.
VALORES
•  Identificación de los valores en conflicto.

•  Cursos extremos de acción.


•  Cursos intermedios de acción.
•  Elección de los cursos de acción óptimos.
•  Comprobación de la consistencia de la decisión: DEBERES
   –  Prueba de la legalidad.
   –  Prueba de la publicidad.
   –  Prueba de la consistencia temporal.
888 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

derechos subjetivos, susceptibles de protección juris- ciente y de derechos y obligaciones en materia de in-
diccional. formación y documentación clínica (LAP)19 completa
La LGS estableció la regla general del consentimiento, las previsiones que la LGS enunció como principios ge-
así como el derecho de rechazar el tratamiento, es de- nerales. En este sentido, refuerza y da un trato especial
cir, se asistió a un cambio fundamental en la atención a al derecho a la autonomía del paciente. En particular,
los pacientes, cual es la sustitución del principio de be- merece mención especial la regulación sobre instruc-
neficiencia, o dicho de otro modo, del paternalismo ciones previas que contempla, de acuerdo con el crite-
erróneo por el principio de autonomía de la voluntad. rio establecido en el Convenio de Oviedo, los deseos de
La importancia que tienen los derechos de los pa- los pacientes expresados con anterioridad dentro del
cientes como eje básico de las relaciones clínico-asis- ámbito del consentimiento informado.
tenciales se pone de manifiesto al constatar el interés El consentimiento informado en esta Ley se encua-
que han demostrado por los mismos casi todas las or- dra en el Capítulo IV, que lleva como título: «El respeto
ganizaciones internacionales con competencia en la de la autonomía del paciente». Así, el artículo 8º que
materia. Ya desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, hace referencia al consentimiento informado dice en el
organizaciones como Naciones Unidas, UNESCO o la apartado 1: Toda actuación en el ámbito de la salud de
Organización Mundial de la Salud, o más recientemen- un paciente necesita el consentimiento libre y volunta-
te, la Unión Europea o el Consejo de Europa, entre mu- rio del afectado, una vez que, recibida la información
chas otras, han impulsado declaraciones o, en algún prevista, haya valorado las opciones propias del caso.
caso, han promulgado normas jurídicas sobre aspectos En cuanto a la información prevista, la propia ley dice
genéricos o específicos relacionados con esta cuestión. que los pacientes tienen derecho a conocer, con moti-
En este sentido, es necesario mencionar la trascenden- vo de cualquier actuación en el ámbito de su salud,
cia de la Declaración Universal de Derechos Humanos toda la información disponible sobre la misma, salvan-
del año 1948, que ha sido el punto de referencia obli- do los supuestos exceptuados por la Ley. Además, toda
gado para todos los textos constitucionales promulga- persona tiene derecho a que se respete su voluntad de
dos posteriormente, o en el ámbito más estrictamente no ser informada. La información, que como regla ge-
sanitario, la Declaración sobre la promoción de los de- neral se proporcionará verbalmente dejando constan-
rechos de los pacientes en Europa, promovida en el cia en la historia clínica, comprende, como mínimo, la
año 1994 por la Oficina Regional para Europa de la finalidad y la naturaleza de cada intervención, sus ries-
Organización Mundial de la Salud, aparte de múltiples gos y consecuencias. La información clínica forma par-
declaraciones internacionales de mayor o menor alcan- te de todas las actuaciones asistenciales, será verdade-
ce e influencia que se han referido a dichas cuestiones. ra, se comunicará al paciente de forma comprensible y
El 1 de enero del 2000 entró en vigor en el Reino de adecuada a sus necesidades y le ayudará a tomar deci-
España el Convenio del Consejo de Europa para la Pro- siones de acuerdo con su propia y libre voluntad. El
tección de los derechos humanos y la dignidad del ser médico responsable del paciente le garantiza el cum-
humano respecto de las aplicaciones de la biología y la plimiento de su derecho a la información. Los profesio-
medicina (Convenio sobre los derechos del hombre y la nales que le atienden durante el proceso asistencial o le
biomedicina), suscrito el día 4 de abril de 199718. Di- apliquen una técnica o un procedimiento concreto
cho Convenio es una iniciativa capital: en efecto, a di- también serán responsables de informarle.
ferencia de las distintas declaraciones internacionales La ley manifiesta de forma clara que el consentimien-
que lo han precedido, es el primer instrumento inter- to informado será verbal por regla general. Sin embar-
nacional con carácter jurídico vinculante para los paí- go, se prestará por escrito en los casos siguientes: in-
ses que lo sucriben. Su especial valía reside en el hecho tervención quirúrgica, procedimientos diagnósticos y
de que establece un marco común para la protección terapéuticos invasores y, en general, aplicación de pro-
de los derechos humanos y la dignidad humana en la cedimientos que suponen riesgos o inconvenientes de
aplicación de la biología y la medicina. El Convenio tra- notoria y previsible repercusión negativa sobre la salud
ta explícitamente, con detenimiento y extensión, sobre del paciente. Asimismo, explicita que el consentimien-
la necesidad de reconocer los derechos de los pacien- to escrito del paciente será necesario para cada una de
tes, entre los cuales resaltan el derecho a la informa- las actuaciones especificadas, dejando a salvo la posi-
ción, el consentimiento informado y la intimidad de la bilidad de incorporar anejos y otros datos de carácter
información relativa a la salud de las personas, persi- general, y tendrá información suficiente sobre el proce-
guiendo el alcance de una armonización de las legisla- dimiento de aplicación y sobre sus riesgos. El paciente
ciones de los diversos países en estas materias; en este puede revocar libremente por escrito su consentimien-
sentido, es absolutamente conveniente tener en cuen- to en cualquier momento.
ta el Convenio en el momento de abordar el reto de Los límites del consentimiento informado y consenti-
regular cuestiones tan importantes. miento por representación están recogidos en el ar­
A partir de estas premisas, la Ley 41/2002, de 14 de tículo 9 de la misma ley. La renuncia del paciente a re-
noviembre, básica reguladora de la autonomía del pa- cibir información está limitada por el interés de la salud
Tema 56.  Aspectos éticos e implicaciones legales del soporte nutricional 889

del propio paciente, de terceros, de la colectividad y de que esta se cumpla en el momento en que llegue a
por las exigencias terapéuticas del caso. Cuando el pa- situaciones en cuyas circunstancias no sea capaz de ex-
ciente manifieste expresamente su deseo de no ser in- presarlos personalmente, sobre los cuidados y el trata-
formado, se respetará su voluntad haciendo constar su miento de su salud o, una vez llegado al fallecimiento,
renuncia documentalmente, sin perjuicio de la obten- sobre el destino de su cuerpo o de los órganos del mis-
ción de su consentimiento previo para la intervención. mo. El otorgante del documento puede designar, ade-
Los facultativos podrán llevar a cabo las intervenciones más, un representante para que, llegado el caso, sirva
clínicas indispensables a favor de la salud del paciente, como interlocutor suyo con el médico o el equipo sani-
sin necesidad de contar con su consentimiento en los tario para procurar el cumplimiento de las instruccio-
siguientes casos: a) Cuando existe riesgo para la salud nes previas.
pública a causa de razones sanitarias establecidas por Se establece también que cada servicio de salud re-
la Ley, y b) cuando existe riesgo inmediato grave para gulará el procedimiento adecuado para que, llegado el
la integridad física o psíquica del enfermo y no es posi- caso, se garantice el cumplimiento de las instrucciones
ble conseguir su autorización, consultando, cuando las previas de cada persona, que deberán constar siempre
circunstancias lo permitan, a sus familiares o a las per- por escrito. En la historia clínica del paciente quedará
sonas vinculadas de hecho a él. constancia razonada de las anotaciones relacionadas
Se otorgará el consentimiento por representación en con estas previsiones. Al igual que el consentimiento
los siguientes supuestos: a) Cuando el paciente no sea informado, las instrucciones previas podrán revocarse
capaz de tomar decisiones, a criterio del médico res- libremente en cualquier momento dejando constancia
ponsable de la asistencia, o su estado físico o psíquico por escrito. Con el fin de asegurar la eficacia en todo el
no le permita hacerse cargo de su situación. Si el pa- territorio nacional de las instrucciones previas manifes-
ciente carece de representante legal, el consentimiento tadas por los pacientes y formalizadas de acuerdo con
lo prestarán las personas vinculadas a él por razones lo dispuesto en la legislación de las respectivas comu-
familiares o de hecho; b) cuando el paciente esté inca- nidades autónomas, se creará en el Ministerio de Sani-
pacitado legalmente; c) cuando el paciente menor de dad y Consumo el Registro nacional de instrucciones
edad no sea capaz intelectual ni emocionalmente de previas, que se regirá por las normas que reglamenta-
comprender el alcance de la intervención. La presta- riamente se determinen; el Real Decreto 124/2007 de
ción del consentimiento por representación será ade- 2 de febrero regula el Registro Nacional de Instruccio-
cuada a las circunstancias y proporcionada a las nece- nes Previas y el correspondiente fichero automatizado
sidades que haya que atender, siempre a favor del de datos de carácter personal.
paciente y con respeto a su dignidad personal. El pa- Esto es en cuanto a lo referido en la ley, pero hay que
ciente participará en la medida de lo posible en la toma acudir a los criterios jurisprudenciales y a las sentencias
de decisiones a lo largo del proceso sanitario. de diversos tribunales para comprender la implicación
¿Cuáles deben ser las condiciones de la información y legal del consentimiento, que según los diferentes tri-
consentimiento escrito?. Estas están recogidas en el ar- bunales es muy variable, y en algunos casos llega inclu-
tículo 10 de la Ley. El facultativo proporcionará al pa- so a ser contradictoria.
ciente, antes de recabar su consentimiento escrito, la Puede ocurrir también que el profesional se haya di-
información básica siguiente: a) Las consecuencias rele- latado en el tiempo a la hora de ofertar la posibilidad
vantes o de importancia que la intervención origina con de nutrición enteral ya bien por sonda nasogástrica o
seguridad; b) los riesgos relacionados con las circuns- gastrostomía percutánea, y aquí podría entrar en esce-
tancias personales o profesionales del paciente; c) los na lo que se llama la teoría de la pérdida de oportuni-
riesgos probables en condiciones normales, conforme a dad médica.
la experiencia y al estado de la ciencia o directamente La pérdida de oportunidad médica, que evita mejo-
relacionados con el tipo de intervención, y d) las contra- res expectativas de curación e incide en la mala evolu-
indicaciones. El médico responsable deberá ponderar ción de una enfermedad por diagnóstico o tratamiento
en cada caso que cuanto más dudoso sea el resultado tardío, es el concepto jurídico aplicado en algunos ca-
de una intervención más necesario resulta el previo con- sos por los tribunales para indemnizar.
sentimiento por escrito del paciente. Al final del docu- Hay variada patología neurodegenerativa que es
mento de consentimiento constarán las firmas del pa- subsidiaria de colocación de sonda nasogástrica o de
ciente, del médico y del testigo o del representante gastrostomía. Por tanto, debemos tener en cuenta los
legal en su caso. También cabe la denegación o revoca- deseos del paciente expresados con anterioridad, si
ción del consentimiento. han realizado instrucciones previas documentadas, o
El Capítulo IV de la Ley 41/2002 en relación al respe- en el caso que sean sus familiares o representantes le-
to de la autonomía del paciente se refiere también a las gales, la necesidad de obtener el consentimiento para
Instrucciones Previas. Por el documento de instruccio- la realización de estos procedimientos. En caso de que
nes previas, una persona mayor de edad, capaz y libre, por parte del médico responsable se decida con con-
manifiesta anticipadamente su voluntad, con objeto sentimiento de la familia, este será respetuoso con las
890 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

exigencias legales para actuaciones sanitarias de este dad y progresión de la enfermedad requieren de la in-
tipo. tervención judicial.
En la actualidad debemos reflexionar sobre la baja El internamiento psiquiátrico involuntario de un en-
utilización de formularios de consentimiento para la fermo mental se considera una medida terapéutica
administración de nutrición enteral por sonda, por lo excepcional, que se realiza por indicación médica en
que se debe insistir desde las sociedades científicas beneficio del paciente. Implica una pérdida de libertad
para llegar a un cumplimiento en todos los casos de personal, motivo por el que se requiere un control
aplicación de estos procedimientos. judicial. El Convenio de Bioética de Oviedo en su
artículo 7 referido a la «Protección de las personas que
3.2. Trastornos del comportamiento alimentario. sufren trastornos mentales», especifica las situaciones
en que un enfermo mental puede recibir tratamiento
Anorexia nerviosa
sin su consentimiento. La persona que sufra un tras-
En esta patología las cuestiones legales a las que se torno mental grave solo podrá ser sometida, sin su
enfrentan profesionales y familiares del paciente es consentimiento, a una intervención que tenga por ob-
cuál es el procedimiento legal a seguir ante la negativa jeto tratar dicho trastorno, cuando la ausencia de este
de un paciente afecto de esta patología a recibir trata- tratamiento conlleve el riesgo de ser gravemente per-
miento. Para poder recibir un tratamiento médico es judicial para la salud y a reserva de las condiciones de
necesario, como estamos comentando, emitir un con- protección previstas por la ley, que comprendan los
sentimiento después de conocer la información relativa procedimientos de supervisión y control, así como los
al tratamiento de acuerdo con la Ley 41/2002. Una de de recurso».
las excepciones es la falta de capacidad del paciente. La La normativa a aplicar es el artículo 763 de la Ley
regulación legal permite al facultativo hacer las inter- 1/2000, de 7 de enero, de Enjuiciamiento Civil21; en
venciones clínicas indispensables sin el consentimiento dicho artículo se hace referencia al internamiento no
del afectado cuando exista un riesgo inmediato y grave voluntario por razón de trastorno psíquico. La redac-
para su integridad física o psíquica previa consulta a ción del artículo 763 es la siguiente:
sus familiares o a las personas que estén vinculadas.
En pacientes con anorexia nerviosa, en la práctica, 1. El internamiento, por razón de trastorno psíquico,
suelen darse diferentes situaciones20: de una persona que no esté en condiciones de de-
cidirlo por sí, aunque esté sometida a la patria po-
a. El paciente y sus padres aceptan el tratamiento. testad o a tutela requerirá autorización judicial,
b. El paciente rechaza el tratamiento que desean y que será recabada del tribunal del lugar donde re-
solicitan los padres. sida la persona afectada por el internamiento. La
c. El paciente quiere un tratamiento que los padres autorización será previa a dicho internamiento,
rechazan. salvo que razones de urgencia hicieren necesaria la
d. El paciente y los padres rechazan el tratamiento. inmediata adopción de la medida. En este caso, el
responsable del centro en que se hubiere produci-
El primer caso no plantea conflictos y simplemente do el internamiento deberá dar cuenta de este al
debemos disponer preceptiva y cautelarmente del con- tribunal competente lo antes posible y, en todo
sentimiento informado. En el segundo caso estamos caso, dentro del plazo de veinticuatro horas, a los
claramente ante el problema del paternalismo y se ten- efectos de que se proceda a la preceptiva ratifica-
drían que considerar varios aspectos para justificar éti- ción de dicha medida, que deberá efectuarse en el
camente la intervención médica contra los deseos del plazo máximo de setenta y dos horas desde que el
paciente con TCA: es inminente que ocurra un daño internamiento llegue a conocimiento del tribunal.
físico o psíquico; el ingreso probablemente protegerá     En los casos de internamientos urgentes, la com-
al paciente contra el daño; es posible que la persona petencia para la ratificación de la medida corres-
afectada lo agradezca posteriormente y es posible ge- ponderá al tribunal del lugar en que radique el
neralizar el ingreso en contra de la voluntad en el sen- centro donde se haya producido el internamiento.
tido de que aquellos que la apoyan desearían lo mismo Dicho tribunal deberá actuar, en su caso, confor-
para sí. En este caso, en cuanto al aspecto legal deberá me a lo dispuesto en el apartado 3 del artículo 757
actuar la autoridad judicial al ir contra la voluntad del de la presente Ley según el cual, cualquier persona
paciente. está facultada para poner en conocimiento del Mi-
En el tercer caso, lo que impera es el principio de que nisterio Fiscal los hechos que puedan ser determi-
la patria potestad o tutela no pueden ejercerse nunca nantes de la incapacitación. Las autoridades y fun-
en perjuicio del tutelado; por ello deberá mediar la cionarios públicos, que, por razón de sus cargos,
autoridad judicial. conocieran la existencia de posible causa de inca-
Y en el último, o cuarto supuesto, primará la correcta pacitación en una persona, deberán ponerlo en
evaluación por el médico para determinar si la grave- conocimiento del Ministerio Fiscal.
Tema 56.  Aspectos éticos e implicaciones legales del soporte nutricional 891

2. El internamiento de menores se realizará siempe todos los elementos probatorios (informes hospitala-
en un establecimiento de salud mental adecuado rios sobre la gravedad del problema), y sí uno contra-
a su edad, previo informe de los servicios de asis- dictorio del médico forense. Una nueva prueba forense
tencia al menor. realizada en la alzada junto con informes hospitalarios
3. Antes de conceder la autorización o de ratificar el llevaron a la Audiencia a considerar que el riesgo de
internamiento que se haya efectuado, el tribunal autolisis y de consumo de drogas aconsejaba el inter-
oirá a la persona afectada por la decisión, al Mi- namiento. Así, la Sala de la Audiencia acordó estimar el
nisterio Fiscal y a cualquier otra persona cuya recurso de apelación interpuesto por la representación
comparecencia estime conveniente o le sea solici- procesal de los familiares de la paciente contra el Auto
tada por el afectado por la medida. Además, y sin dictado por la Juez de Instancia de Badalona, y revocar
perjuicio de que pueda practicar cualquier otra el mismo, y en consecuencia acordó el internamiento
prueba que estime relevante para el caso, el tribu- no voluntario por razón de trastorno psíquico de la pa-
nal deberá examinar por sí mismo a la persona de ciente.
cuyo internamiento se trate y oír el dictamen de
un facultativo por él designado. En todas las ac- 3.3. Personas en huelga de hambre recluidas
tuaciones, la persona afectada por la medida de
en instituciones penitenciarias
internamiento podrá disponer de representación
y defensa en los términos señalados en el artículo Las huelgas de hambre se producen en diversos con-
758 de la presente Ley. En todo caso, la decisión textos, pero presentan principalmente dilemas en esta-
que el tribunal adopte en relación con el interna- blecimientos donde la gente está detenida (prisiones,
miento será susceptible de recurso de apelación. cárceles y centros de detención de inmigrantes). A me-
4. En la misma resolución que acuerde el interna- nudo son una forma de protesta de las personas que
miento se expresará la obligación de los facultati- no tienen otras maneras de dar a conocer sus deman-
vos que atiendan a la persona internada de infor- das. Al rechazar los alimentos durante un período im-
mar periódicamente al tribunal sobre la necesidad portante, por lo general esperan lograr ciertos objeti-
de mantener la medida, sin perjuicio de los demás vos con una publicidad negativa para las autoridades.
informes que el tribunal pueda requerir cuando lo El rechazo de alimentos aparente o por un período
crea pertinente. Los informes periódicos serán corto raramente plantea problemas éticos, en cambio
emitidos cada seis meses, a no ser que el tribunal, un ayuno real y prolongado tiene riesgo de muerte o
atendida la naturaleza del trastorno que motivó el de daños permanentes para las personas en huelga de
incumplimiento, señale un plazo inferior. Recibi- hambre y puede crear un conflicto de valores para los
dos los referidos informes, el tribunal previo la médicos. Por lo general, estas personas no desean mo-
práctica, en su caso, de las actuaciones que estime rir, pero algunas pueden estar preparadas para hacerlo
imprescindibles, acordará lo procedente sobre la con el fin de lograr sus objetivos. El médico necesita
continuación o no del internamiento. comprobar la verdadera intención de la persona, en
especial en huelgas o situaciones colectivas en las que
Sin perjuicio de lo dispuesto en los párrafos anterio- la presión de los pares puede ser un factor. El dilema
res, cuando los facultativos que atiendan a la persona ético se plantea cuando una persona en huelga de
internada consideren que no es necesario mantener el hambre, que aparentemente ha dado instrucciones
internamiento, darán el alta al enfermo, y lo comunica- claras de no ser reanimada, alcanza un estado de dete-
rán inmediatamente al tribunal competente. Por tanto, rioro cognitivo. El principio de beneficencia insta al
este artículo establece de forma nítida: los pacientes a médico a reanimarla, pero el respeto de la autonomía
los que se puede internar, las personas autorizadas individual le impide intervenir cuando se ha expresado
para solicitar el internamiento, la competencia para de- un rechazo válido y formal. Una dificultad más se agre-
cidir el internamiento, el control periódico/vigilancia ga en los establecimientos de custodia, porque no
del internamiento, el procedimiento y garantías lega- siempre queda claro si la persona en huelga de hambre
les, el examen de la persona y el dictamen facultativo. expresó sus instrucciones anticipadas en forma volun-
Es ilustrativa para entender la dificultad en ocasiones taria y con la información apropiada sobre las conse-
para el ingreso de pacientes con anorexia nerviosa, la cuencias. La Organización Medica Mundial en su de-
sentencia de la Audiencia Provincial de Barcelona de claración de Malta de 1991, revisada en Pilanesberg en
fecha 14 de marzo de 2006. Esta sentencia ordena el 2006, establece unas normas que facilitan a los profe-
internamiento forzoso por trastorno psíquico de una sionales sanitarios la atención a estos pacientes22.
joven que padecía anorexia nerviosa y no era conscien- Vamos a dedicar una parte del capítulo a un tema
te de su situación (anosognosia). La sentencia anula delicado porque surge de la atención de personas en
otra de primera instancia que no autorizaba el interna- huelga de hambre recluidas en instituciones sanitarias.
miento en un centro psiquiátrico. La Audiencia inter- La Ley Orgánica 1/1979, de 26 de septiembre, Gene-
preta que el juzgador de instancia no tuvo en cuenta ral Penitenciaria23 (LOGP) establece en su artículo 3.4.
892 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

que la Administración penitenciaria velará por la vida, ciones de huelga de hambre. En su apartado 1 estable-
integridad y salud de los internos. El Capítulo III de la Ley ce que el tratamiento médico sanitario se llevará a
se refiere a la Asistencia sanitaria y dedica los artículos cabo siempre con el consentimiento informado del in-
36 a 40. Se establece que en cada centro existirá al me- terno. Solo cuando exista peligro inminente para la
nos un médico general con conocimientos psiquiátricos vida de este se podrá imponer un tratamiento contra la
encargados de cuidar de la salud física y mental de los voluntad del interesado, siendo la intervención médica
internos y de vigilar las condiciones de higiene y salubri- la estrictamente necesaria para intentar salvar la vida
dad en el establecimiento, el cual podrá, en su caso, del paciente y sin perjuicio de solicitar la autorización
solicitar la colaboración de especialistas. Asimismo, se judicial correspondiente cuando ello fuera preciso. De
establece en el artículo 36.2 que además de los servicios estas actuaciones se dará conocimiento a la autoridad
médicos de los establecimientos, los internos podrán ser judicial. 2. La intervención médico-sanitaria también
asistidos en las instituciones hospitalarias y asistenciales podrá realizarse sin el consentimiento del paciente
de carácter penitenciario y, en caso de necesidad o de cuando el no hacerlo suponga un peligro evidente para
urgencia, en otros centros hospitalarios. Así mismo cabe la salud o la vida de terceras personas. De estas actua-
según el artículo 36.3 que los internos podrán solicitar a ciones se dará conocimiento a la Autoridad judicial. Y
su costa los servicios médicos de profesionales ajenos a por último en el apartado 3 se refleja que cuando por
las instituciones penitenciarias, excepto cuando razones criterio facultativo se precise el ingreso del interno en
de seguridad aconsejen limitar este derecho. un centro hospitalario y no se cuente con la autoriza-
En el Capítulo IV, Régimen disciplinario, en el artícu- ción del paciente, la Administración penitenciaria soli-
lo 45 se establece en el apartado 1: Solo podrán utili- citará de la Autoridad judicial competente la autoriza-
zarse, con autorización del director, aquellos medios ción del ingreso de detenidos, presos o penados en un
coercitivos que se establezcan reglamentariamente en centro hospitalario, salvo en caso de urgencia, en que
los casos siguientes: la comunicación a dicha Autoridad se hará posterior-
mente de forma inmediata.
a. Para impedir actos de evasión o de violencia de Según el artículo 78 de la LOGP, los Jueces de Vigi-
los internos. lancia tendrán su residencia en el territorio en que ra-
b. Para evitar daños de los internos a sí mismos, a diquen los establecimientos penitenciarios sometidos a
otras personas o cosas. su jurisdicción.
c. Para vencer la resistencia activa o pasiva de los Por su parte, el artículo 218 regula la consulta o in-
internos a las órdenes del personal penitenciario greso en hospitales extrapenitenciarios y custodia de
en el ejercicio de su cargo. los internos. El apartado 1 recoge que cuando un inter-
no requiera ingreso hospitalario, el médico responsa-
Cuando, ante la urgencia de la situación, se tuviere ble de su asistencia lo comunicará razonadamente al
que hacer uso de tales medios se comunicará inmedia- director del establecimiento, quien previa autorización
tamente al director, el cual lo pondrá en conocimiento del Centro directivo, dispondrá lo necesario para efec-
del Juez de vigilancia. tuar el traslado. En todo caso, se acompañará de infor-
El Real Decreto 190/1996, de 9 de febrero24, aprue- me médico. Tanto del ingreso en centros hospitalarios
ba el Reglamento Penitenciario de desarrollo, y ejecu- como del traslado por razones sanitarias a otro esta-
ción de la LOGP operando una reforma completa de la blecimiento penitenciario de los detenidos y presos, se
normativa reglamentaria penitenciaria de 1981. dará cuenta a la Autoridad Judicial de que dependan o
La regulación de la Asistencia Sanitaria está recogida al Juez de Vigilancia Penitenciaria en el caso de los pe-
en el Título IX del Reglamento, «de las prestaciones de la nados.
Administración Penitenciaria». Los artículos del Regla- Ahora haremos referencia a la Sentencia del Tribunal
mento dedicados a la asistencia sanitaria están recogi- Constitucional (STC) 120/1990, de 27 de junio de 1990
dos del 207 al 220. En esos artículos se establece que la que ha servido durante estos años para el ingreso hos-
asistencia sanitaria integral, las prestaciones sanitarias, pitalario de este tipo de pacientes en huelga de ham-
el modelo de atención sanitaria, la asistencia obligatoria bre. Los hechos de los que trae origen la demanda de
en casos de urgencias, las investigaciones médicas, el amparo son los siguientes: con fecha 4 de enero de
equipo sanitario, enfermerías y otras dependencias sani- 1990, la Dirección del Centro Penitenciario de Preven-
tarias, apertura de la historia clínica, confidencialidad de tivos Madrid-2 remitió al Juzgado de Vigilancia Peni-
los datos clínicos e información sanitaria, comunicación tenciaria copia de la providencia del Juzgado de Vigi-
con familiares, visitas en hospitales extrapenitenciarios, lancia Penitenciaria de Soria por la que se dispone:
consulta o ingreso en hospitales extrapenitenciarios y «Mándese oficio al Centro Penitenciario de Soria, y con
custodia de los internos, medidas epidemiológicas y sis- respecto a la huelga de hambre mantenida por parte
tema de información sanitaria epidemiológica. del colectivo «GRAPO» para que en el momento, y a
El artículo 210 sobre asistencia obligatoria en casos criterio médico, de que corra algún peligro de muerte
de urgencias vital guarda íntima relación con las situa- cualquiera de los participantes de dicha huelga, se les
Tema 56.  Aspectos éticos e implicaciones legales del soporte nutricional 893

dé tratamiento médico necesario aún en contra de su acuerdo con sus propios intereses y preferencias», a la
voluntad». La Dirección del Centro Penitenciario de que los recurrentes en ningún momento han renuncia-
Preventivos Madrid-2 comunicó al Juzgado de Vigilan- do. El objeto del presente Recurso de Amparo quedó
cia Penitenciaria nº 2 de Madrid que «esta misma ma- circunscrito a la compatibilidad con los arts. 1.1, 9.2,
ñana han ingresado en este Centro dos de estos inter- 10.1, 15, 16.1, 17.1, 18.1, 24.1 y 25.2 CE de la resolu-
nos con 36 días de huelga de hambre y está previsto ción judicial que, ante la negativa a ingerir alimentos,
que en las próximas horas de la tarde ingresen otros manifestada por los internos recurrentes en reivindica-
seis internos, por lo que se solicita se pronuncie sobre ción de la concentración en un mismo establecimiento
el ya mencionado Auto (es decir, la providencia del Juz- penitenciario de los reclusos pertenecientes a los «GRA-
gado de Vigilancia Penitenciaria de Soria) a efectos de PO», autoriza y obliga a la Administración penitenciaria
tratamiento médico». El Juzgado de Vigilancia Peniten- a prestar asistencia médica, en cuanto ello implique la
ciaria nº 2 de Madrid dictó providencia del siguiente alimentación de los internos en contra de su voluntad.
tenor «efectivamente, tal y como establece el artículo 3 La Constitucionalidad de las resoluciones judiciales
de la LOGP, la Administración penitenciaria ha de velar que determina la alimentación forzosa se justifica en la
por la vida, integridad y salud de los internos, pero siguiente argumentación:
también, y tal como dice el art. 3 en su párrafo 1º.,
esta se ha de ejercer siempre respetando en todo caso 1. El derecho a la vida reconocido en el artículo 15
la personalidad humana de los propios recluidos en de la Constitución Española tiene un contenido
prisión; así pues, se les puede dar tratamiento médico de protección positiva que impide configurarlo
siempre que no sea preciso emplear la fuerza física como un derecho de libertad que incluya el dere-
para administrárselo. Por esta razón, se les deberá in- cho a la propia muerte.
formar de la situación clínica en la que se encuentran e 2. Tampoco puede calificarse de «tortura» o «tratos
intentar el dicho tratamiento, pero si su voluntad lo inhumanos o degradantes» la autorización de una
rechaza no se podrá utilizar fuerza física, dado que, en intervención médica, como la impugnada por los
mi criterio, esta atenta contra la dignidad de la perso- recurrentes, que, en si misma, no está ordenada a
na. Si perdiera la conciencia se deberá en ese momento infligir padecimientos físicos o psíquicos ni a pro-
hacer todo lo posible por salvar la vida de los afecta- vocar daños en la integridad de quien sea someti-
dos. Si por los médicos que atienden a esos pacientes do a ellos, sino a evitar, mientras médicamente
se considera necesario efectuar una analítica de extrac- sea posible, los efectos irreversibles de la inanición
ción de sangre, se podrá efectuar». voluntaria, sirviendo, en su caso, de paliativo o le-
Contra esta resolución interpuso el Ministerio Fiscal nitivo de su nocividad para el organismo.
recurso de reforma y subsidiario de apelación, intere- 3. Tampoco se apreció por el TC la vulneración de la
sando su revocación y autorización por el Juzgado de libertad ideológica que garantiza el art. 16.1 de la
Vigilancia Penitenciaria «dado el estado de gravedad Constitución.
de los internos de huelga de hambre, a la adopción por 4. El TC apoya la declaración de constitucionalidad
los facultativos de las medidas técnicas necesarias para en la naturaleza de la relación jurídica con oca-
salvar sus vidas». El Juzgado de Vigilancia Penitenciaria sión del internamiento en un centro penitenciario
nº 2 de Madrid resolvió no haber lugar al recurso de como una relación especial de sujeción. Aunque
reforma y admitió a trámite el de apelación. Por Auto el concepto de relación especial de sujeción es de
la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Ma- por sí impreciso, no puede ponerse en duda que
drid estimó el recurso de apelación y acordó revocar la la reclusión en un centro penitenciario origina
providencia y el Auto del Juzgado de Vigilancia Peni- una relación jurídica de esa naturaleza.
tenciaria nº 2 declarando «….el derecho-deber de la 5. Por último la sentencia del Tribunal Constitucio-
Administración penitenciaria de suministrar asistencia nal que estamos examinando también recoge
médica, conforme a criterios de la ciencia médica, a que no se vulnera el art. 18.1 CE, es decir la inti-
aquellos reclusos en huelga de hambre una vez que la midad personal.
vida de estos corra peligro, lo que se determinará pre-
vios los oportunos informes médicos, en la forma que En resumen, la sentencia 120/1990 concluye que la
el Juez de Vigilancia Penitenciaria correspondiente de- asistencia médica obligatoria autorizada por la resolu-
termine, y sin que en ningún caso pueda suministrarse ción judicial objeto del recurso de amparo no vulnera
la alimentación por vía bucal en tanto persista su esta- ninguno de los derechos fundamentales invocados por
do de determinarse libre y conscientemente». los demandantes, ni en sí misma, ni en la forma y al-
La demanda de amparo por parte de la letrada de los cance con que ha sido autorizada, constituyendo tan
huelguistas de hambre se fundó en que el Estado debe solo una limitación del derecho a la integridad física y
garantizar el valor superior de la libertad (art. 1.1 CE), moral garantizada por el art. 15 de la Constitución, y
en cuanto «autonomía del individuo para elegir entre unida ineludiblemente a ella una restricción a la liber-
las diversas opciones vitales que se le presenten, de tad física, que vienen justificadas en la necesidad de
894 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

preservar el bien de la vida humana, constitucional- tomarlas por él. La segunda se refiere a las discrepan-
mente protegido, y que se realiza mediante un ponde- cias que pudieran existir entre los distintos actores so-
rado juicio de proporcionalidad, en cuanto entraña el bre si la medida del soporte nutricional, en la circuns-
mínimo sacrificio del derecho que exige la situación en tancia que se valore, forma parte de los cuidados
que se hallan aquellos respecto de los cuales se autori- básicos o es considerado un tratamiento, con las impli-
za. El fallo del Tribunal Constitucional deniega el am- caciones que ello tiene. La toma de decisiones siempre
paro solicitado. debe ser prudente y moderada, ponderando princi-
En esta sentencia del TC que estamos analizando se pios, evitando prejuicios y revestida de legalidad.
formularon votos particulares en el recurso de amparo. Un conflicto ético es un conflicto de valores, no es un
A juicio del discrepante de uno de ellos, la obligación conflicto jurídico, aunque pueda llegar a convertirse en
de la Administración Penitenciaria de velar por la vida y él, de ahí nuestro interés en tratar este tema. Repasa-
la salud de los internos no puede ser entendida como mos las implicaciones legales derivadas del manejo de
justificativa del establecimiento de un límite adicional a situaciones clínicas asistidas en pacientes con enferme-
los derechos fundamentales del penado, el cual, en re- dades neurodegenerativas, anorexia nerviosa o perso-
lación a su vida y salud como enfermo, goza de los nas en huelga de hambre. La Bioética y el Derecho sani-
mismos derechos y libertades que cualquier otro ciuda- tario son compañeros de viaje que nos deben ayudar
dano, y por ello ha de reconocérsele el mismo grado de cada día en la mejora de nuestra actividad asistencial.
voluntariedad en relación con la asistencia médica y
sanitaria.
Otro magistrado formuló también voto particular a
5.  Bibliografía
esta sentencia, según el cual llegado el momento el   1. The Hasting Center. The Goals of Medicine. Set-
preso se convierte en persona enferma que conserva la ting New Priorities. Special Suppelemnt. Hasting
plenitud de sus derechos para consentir o rechazar los Center Report 1996; 26 (6): S1-S27.
tratamientos médicos que se le propongan. El enfoque   2. Los Fines de la Medicina. Cuadernos de la Funda-
para este magistrado del problema debe ser la del en- ció Víctor Grífols i Lucas. N.º 11. Fundació Víctor
fermo que es además recluso en lugar de la adoptada Grífols i Lucas (ed). Barcelona, 2005. ISBN: 978-
por la sentencia, la del recluso que es además enfermo. 84-690-6480-1
El advenimiento de nuevas normas legales entende-   3. B Román Maestre. El procedimiento en la toma de
mos que en un futuro debe hacer cambiar el trata- decisiones en conflictos éticos. En: Aproximación
miento jurídico que en la actualidad se hace hoy con Bioética a la Nutrición Clínica. Coordinadoras: J Al-
referencia a la sentencia 120/1990. La Ley y el Regla- varez, R Burgos. Glosa (ed). Barcelona, 2011.
mento penitenciario es la única norma legal que posi- ISBN: 978-84-7459-515-3
bilita hoy en España la aplicación de un tratamiento   4. Gracia D. Como arqueros al blanco. Estudios de
médico en contra de los deseos libremente expresados Bioética. Triacastela (ed). San Sebastián,2004.
del afectado, reglamento que en este aspecto contra- ISBN: 84-95840-13-8
dice la LAP y el Convenio de Oviedo.  5.  Sánchez-Caro J, Sánchez-Caro J, Torres Solanas
Por el contrario, está la postura anglosajona, en la VM, Zamarriego Moreno JJ. Decisiones al final de
que las penas de privación de libertad únicamente res- la vida: nutrición e hidratación artificiales En: Ma-
tringen las libertades inherentes al cumplimiento de la nual de Casos Prácticos del Área de Bioética y De-
pena, pero no a los derechos fundamentales de la per- recho Sanitario. Servicio Madrileño de Salud. Di-
sona en las demás materias y por tanto se ha de respe- reccion General de Atención al Paciente. BOCM
tar la decisión hasta el final, aunque implique la muer- (ed) Madrid,2009.
te. Guidelines for the clinical Management of people   6. Sánchez-Caro J. Ética y Política Sanitaria, la Nutri-
refusing food in detention setting and prison offender ción e Hidratación Artificiales en el contexto de las
health publicada en 2007 por el Department of Health decisiones al final de la vida. En: Gestión en Nutri-
y el director del Departamento de Nutrición de Sou- ción Clínica. J Alvarez Hernández, PP García Luna
thampton Dr. Mike Stroud25. (eds). Glosa SL (ed).Barcelona, 2009.
  7. Navarro Sanz JR. Cuidados Paliativos No oncológi-
cos: Enfermedad terminal y factores Pronósticos.
4.  Resumen
Disponible en: http://www.secpal.com/cuidados-pa-
Los conflictos éticos y jurídicos en relación con el so- liativos-no-oncologicos-enfermedad-terminal-y-fac-
porte nutricional se suelen presentar en torno a dos tores-pronosticos
problemas fundamentales. El primero hace referencia a   8. Moreno Villares JM, Villa Elízaga I. Aspectos éticos
la situación clínica en la que el paciente es incapaz de en nutrición e hidratación en el niño. Comentarios
ejercer su autonomía en ese momento y no ha estable- al documento de la Academia Americana de Pe-
cido instrucciones previas, directivas anticipadas o tes- diatría (Pediatrics, 2009). Acta Pediatr Esp. 2012;
tamento vital, siendo sus representantes quien debe 70(1): 15-19.
Tema 56.  Aspectos éticos e implicaciones legales del soporte nutricional 895

  9. Merrell DA..Erring on the side of life: the case of 17. Ley 14/1986, de 25 de abril, General de Sanidad.
Terri Schiavo. J Med Ethics 2009;35:323–325. «BOE» núm. 102, de 29 de abril de 1986.
doi:10.1136/jme.2007.023002 18. Convenio para la protección de los derechos hu-
10. A. García de Lorenzo, J.Barbero, A. Castaño, S. Ce- manos y la dignidad del ser humano con respecto
laya, P. García Peris, P. Gómez Enterría, M. León, J. a las aplicaciones de la Biología y la Medicina (Con-
M. Moreno, F. J. Ordóñez, M. Planas Vila, J. Sán- venio relativo a los derechos humanos y la biome-
chez Caro y C. Wanden Berghe. Conclusiones del dicina), hecho en Oviedo el 4 de abril de 1997.
III Foro de Debate SENPE. «Soporte nutricional es- «BOE» núm. 251, de 20 de octubre 1999.
pecializado: aspectos éticos» Sociedad Española 19. Ley 41/2002, de 14 de noviembre, básica regula-
de Nutrición Parenteral y Enteral. Nutrición Hospi- dora de la Autonomía del paciente y de derechos
talaria. 2006; 21(3):300-302. y obligaciones en materia de información y docu-
11. Agulles Simó P. Revisando el llamado «testamento mentación clínica. «BOE» núm. 274, de 15 de no-
vital». Cuad Bioet. 2010 May-Aug; 21 (72) : 169-83. viembre de 2002.
12. Moreschi C, Da Broi U, Rodriguez D, Froldi R, Por- 20. Ignacio Jauregui Lobera. Trastornos de la conduc-
zionato A, Macchi V, De Caro R. The Eluana Englaro ta alimentaria. La madurez psicológica del menor
Case: Cause of death after the withdrawal of artifi- para la toma de decisiones. Tratamiento forzado.
cial nutrition and hydration in a subject in a perma- Revista de Psiquiatría y Psicología del niño y ado-
nent vegetative state and with quadriplegia. Foren- lescente, 2002; 1 (2): 23-32.
sic Science International 231 (2013) e24–e29. 21. Ley 1/2000, de 7 de enero, de Enjuiciamiento Civil.
13. Hortelano Martínez VJE, Azulay Tapiero A, Castillo «BOE» núm. 7, de 8 de enero de 2000.
Blasco M. Decisiones ético-clínicas sobre la alimen- 22. Declaración de Malta de la AMM sobre las Perso-
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péutico y la no instauración o retirada de medidas de 1979.
de soporte. En: Medicina Crítica Práctica. Decisio- 24. Real Decreto 190/1996, de 9 de febrero por el que
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CABRÉ PERICAS, L. Edika Med, Barcelona 2003, núm. 40 de 15 de febrero de 1996.
pp. 67 y ss. 25. Offender Health, Department of Health (In colla-
15. Gracia D. Procedimientos de decisión en ética clíni- boration with Dr Mike Stround MD, FRCP, DSCI).
ca. Edudema (ed). Madrid 1991. Guidelines for the Clinical Management of People
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derly persons: a guide for health professionals. org.uk/images/stories/texts/ hunger strike guide-li-
JPEN 2011; 35(3): 295-302. nes2007.
Tema 57. 
Gestión aplicada a la nutrición clínica
Alfonso Vidal Casariego
David Emilio Barajas Galindo
Isidoro Cano Rodríguez
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial
Universitario. León

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 897-910.

1.  Introducción
2.  Gestión sanitaria
3.  Herramientas de gestión
4.  Gestión de la calidad
5.  Resumen y conclusiones
6.  Bibliografía

1. Introducción mejora continua de la calidad de manera eficiente son


adecuadas. Mejorar la producción de nuestro centro,
La Organización Mundial de la Salud en 1948, en su o más en concreto, de nuestra Unidad de Nutrición
carta fundacional definió la salud como el completo Clínica y Dietética exige desarrollar estrategias de ges-
bienestar físico, psíquico y social, y no simplemente la tión que consideren la calidad asistencial, los costes de
ausencia de enfermedad. Los cambios sociodemográfi- las actividades desarrolladas en nuestras unidades y
cos y tecnológicos acaecidos en Sanidad en los últimos utilicen herramientas de gestión como los sistemas de
50 años han modificado el escenario sociosanitario de información. Los clínicos tenemos el deber moral y éti-
manera determinante, obligando a promover también co de participar activamente en la gestión de los recur-
importantes cambios entre los profesionales implica- sos diagnósticos y terapéuticos, ya que somos los res-
dos. Uno de los condicionantes esenciales al que se ponsables de su asignación de forma significativa. Por
enfrenta en la actualidad la Sanidad en los países de esto creemos que es imprescindible la implicación de
nuestro entorno es su dimensión económica. El enveje- los profesionales sanitarios en las estrategias de ges-
cimiento de la población se ha convertido en una ame- tión que posibiliten el proceso del cambio, como en
naza al estado del bienestar por el aumento en el con- cualquier empresa1.
sumo de recursos y la reducción del número de sujetos Recientemente (2014) se ha aprobado por unanimi-
capaces de soportar el sistema con sus contribuciones. dad en el Senado una moción en la que se insta al Go-
Esto, junto con el desarrollo tecnológico experimenta- bierno de España a que establezca la cuestión nutricio-
do por la Medicina, y al que la nutrición clínica no es nal como aspecto específico dentro de las diferentes
ajena, constituyen un importante desafío para el Siste- estrategias que lleva a cabo el Ministerio de Sanidad,
ma Sanitario de nuestro país. Servicios Sociales e Igualdad, y que, conjuntamente con
Debemos entender la gestión clínica como un mes- las comunidades autónomas en el marco del Consejo
tizaje del conocimiento médico y empresarial. El con- Interterritorial de Salud, se acuerde la necesidad de es-
cepto actual de hospital público ha cambiado. Hoy se tablecer medidas destinadas a la prevención, la detec-
define como una empresa de utilidad pública para la ción y el tratamiento de la desnutrición, con especial
promoción de la salud, con factores de producción atención a pacientes sanitarios y servicios sociosanita-
(personal sanitario, equipamientos e instalaciones) y rios. 
A pesar de este hito, no existe en el momento ac-
obtención de productos que son las mejoras en la sa- tual una normativa de aplicación nacional que regule la
lud de los pacientes. Dos determinantes fundamenta- creación, denominación y dotación de las estructuras
les de esta producción hospitalaria son la calidad y los hospitalarias dedicadas a la atención de pacientes con
costes, por esto las innovaciones cuyo objetivo sea la desnutrición.

897
898 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

2.  Gestión sanitaria La limitación de recursos, los conceptos de eficacia,


eficiencia y efectividad, en definitiva el desarrollo de la
Gestionar significa hacer diligencias conducentes al gestión sanitaria apuntan a que paralelamente a la
logro de un objetivo o deseo cualquiera. Se trata de un «medicina basada en la evidencia» (MBE) haya surgido
proceso en la toma de decisiones en la práctica clínica el concepto de «medicina coste-efectiva» (MCE), cuya
orientado a conseguir el máximo beneficio para el pa- finalidad es maximizar el bienestar del conjunto de los
ciente y con el objetivo de mejorar la calidad del servi- pacientes en un contexto de recursos escasos. Si re-
cio sanitario implicando a todos los profesionales que flexionamos sobre estos dos conceptos asumimos la
participan en su realización. De una forma más amplia, dicotomía que supone la intención de conseguir el
la gestión (como acción y efecto de gestionar) será la máximo beneficio para el mayor número de individuos
asunción y ejercicio de responsabilidades para lograr (MCE) frente al mayor beneficio para un individuo
nuestro objetivo (negocio o deseo), y esto incluye: (MBE). En la correcta interrelación entre MCE y MBE
• La preocupación por la disponibilidad de los re- estriba conseguir una correcta gestión sanitaria. Por
cursos que sean necesarios. tanto, podríamos decir que un concepto mandatorio
• La coordinación del conjunto de actividades (pro- en la gestión sanitaria es la eficiencia, ya que se consi-
ceso) que lleven a cabo. derará que la asistencia sanitaria será mejor en tanto
• La rendición de cuentas ante aquellos interesados en cuanto, sea capaz de producir los mejores resulta-
en el resultado obtenido. dos a un coste razonable. Para conseguir esto se esta-
blecen tres niveles de gestión sanitaria: la macroges-
Entre los sistemas de gestión sanitaria, hay que dis- tión, la mesogestión y la microgestión:
tinguir los modelos de gestión pública de los de priva-
da. La característica fundamental de la intervención • La macrogestión representa el punto de vista de la
pública es la equidad en el acceso y la cobertura univer- política sanitaria. El Estado interviene para aumentar
sal, pero debemos ser conscientes de que también pre- la equidad y corregir las disfunciones del mercado.
senta desventajas en comparación con un modelo de • La mesogestión, o gestión de centros, se realiza a
intervención privado (tabla 1). través de la coordinación y motivación de los in-
En la actualidad, el debate académico y político tegrantes de un centro de salud, un hospital, una
pone cada vez más el foco sobre la ineficacia e inefi- aseguradora etc., en un entorno fuertemente re-
ciencia de una administración pública despilfarradora e gulado. Permite hacer valoraciones globales y es-
insensible a las necesidades de los ciudadanos. Las po- tablecer comparaciones entre centros, servicios,
líticas de control del gasto sanitario son una realidad etc. En su tarea se aúnan la preocupación por el
en todos los países que obligan, en primer lugar, a ra- presupuesto que gestiona con la cercanía de la
cionalizar los recursos para no tener que racionarlos, práctica clínica diaria.
empleando los mejores recursos de una adecuada ges- • La microgestión precisa de la implicación de los
tión sanitaria. En los últimos años se han propuesto integrantes de los centros sanitarios. Somos los
algunas estrategias que permitan mejorar la gestión clínicos los que tenemos en nuestras manos, con
sanitaria pública ocupándose de regular tres áreas de nuestras decisiones, la asignación del 70 % de los
interés para los ciudadanos y clínicos: recursos sanitarios. Esta especial circunstancia nos
sitúa en una posición privilegiada para establecer
• Optimizar la educación sanitaria de la población. 
 la actividad asistencial, la calidad en la asistencia y
• Regularizar y controlar las plantillas de profesiona- la gestión de los recursos. Es necesaria la estrecha
les sanitarios. 
 interrelación de los tres niveles de gestión para
• Controlar el consumo de recursos de fármacos y construir un sistema de atención sanitaria eficien-
tecnologías. 
 te, de calidad y justo (figura 1).

Tabla 1.  Sistemas de Salud Público versus Privado: ventajas y desventajas.

Ventajas Desventajas
· Cobertura universal · Exceso de demanda
· Equidad en el acceso · Escasa orientación al usuario
Público
· Gratuidad de prestaciones · Falta de eficiencia
· Rigidez organizativa
· Competencia de precios y calidad · Inequidad
Privado · Incentivación profesional · Selección adversa de riesgos
· Libre elección · Inducción de demanda
Tema 57.  Gestión aplicada a la nutrición clínica 899

mero de camas, número de empleados u otros


MCE indicadores de estimación de uso.
– Costes consumidos. Los costes de los recursos
utilizados con la intervención terapéutica: fár-
Megagestores macos, pruebas diagnósticas, recursos huma-
nos, etc.
– Costes a futuro. Los asociados al consumo de
GESTIÓN Mesogestores recursos por los años de vida ganados. Son cos-
SANITARIA tes estrechamente relacionados con la terapia
evaluada. No se incluyen otros costes relaciona-
Microgestores dos con el consumo de recursos que no estén
relacionados con la terapia evaluada (Por ejem-
plo, el tratamiento de enfermedades diferentes
que aparezcan con el tiempo).
MBE •  Costes no sanitarios:
– Los propios del paciente relacionados con el
Figura 1.  Interrelación de los niveles de gestión transporte al centro hospitalario, personal de
sanitaria. ayuda para cuidados, subvenciones por enfer-
medad, etc.
– Costes indirectos relacionados con la disminu-
3.  Herramientas de gestión ción de la capacidad de trabajar, costes de mor-
Las técnicas de gestión empresarial aplicadas a la sa- bilidad, o los relacionados con el fallecimiento
nidad pública nos permiten interpretar nuestra realidad por la producción perdida. La imputación de
desde otro punto de vista. Hacer rentable nuestro es- unos u otros es compleja y controvertida.
fuerzo, consiguiendo un equilibro entre la MCE y la
MBE, es uno de nuestros objetivos. Las herramientas de Para la cuantificación del coste de una terapia o un
gestión se constituyen en un amplio abanico de gran proceso clínico será preciso medir los recursos consu-
utilidad en la microgestión y en la integración de los tres midos y el precio unitario de cada uno:
niveles de gestión del sistema sanitario.
• Estimación de los recursos consumidos:
– Por metodología directa: es prospectiva, exhaus-
3.1.  Análisis de costes
tiva, detallada e individualizada para cada proce-
Si bien la guía fundamental de las decisiones toma- dimiento. Tiene la ventaja de la precisión y la des-
das en el sistema sanitario debe ser la eficacia, la segu- ventaja de la complejidad de su cuantificación.
ridad y la efectividad clínica, la evaluación económica – Por metodología sintética: es retrospectiva y poco
de las intervenciones sanitarias (EEIS) permite tomar detallada. Utiliza bases de datos y estudios pre-
decisiones más informadas a la hora de elegir una de- vios para realizar estimaciones ponderadas. Es
terminada intervención. En realidad, la EEIS es un tér- menos precisa pero más fácil de realizar que la
mino genérico que engloba distintas técnicas o proce- anterior.
dimientos que pueden usarse para recabar información •  Estimación de los precios unitarios:
sobre la relación que existe entre el coste y los resulta- – Coste directo. Al no haber un mercado definido
dos de las intervenciones. Resulta esencial que los clí- de creación de precios, se debe acudir a un pre-
nicos consideren y manejen con agilidad conceptos de cio de referencia establecido que equivaldría al
costes sanitarios. El coste de un recurso es el producto precio del servicio en condiciones de competen-
de dos elementos: la cantidad total del recurso consu- cia perfecta.
mido y el valor dinerario de la unidad de dicho recur- – Coste indirecto o de productividad. Su cálculo
so. Por ello resulta de gran interés identificar, cuantifi- es muy controvertido y puede realizarse en fun-
car y valorar los costes concretos a los que nos ción de la disminución de la productividad del
queremos referir. trabajador en función de la morbilidad, pero
Clásicamente cuando hablamos de costes distingui- también en función del coste de la sustitución
mos diferentes tipos fácilmente identificables. de la fuerza laboral perdida. Utilizar un criterio
u otro provoca una importante distorsión en el
•  Costes sanitarios: resultado final y se obvian en la mayoría de las
– Costes estructurales o costes de funcionamien- estimaciones.
to de las estructuras hospitalarias. En caso de
ser considerados, su imputación se hará en fun- El coste total (Ct) de cualquier proceso clínico pue-
ción de un criterio elegido: número de m2, nú- de calcularse como la suma de los costes fijos (Cf), in-
900 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

dependientes de la actividad total, y los costes varia- sa comparar dos opciones terapéuticas que tienen un
bles (Cv) de cada unidad producida multiplicada por el resultado idéntico, en cuyo caso es suficiente con se-
número de unidades producidas (Up). leccionar la más barata. Es capaz de responder a la
pregunta: ¿Cuánto cuesta una determinada interven-
Ct = Cf + Cv * Up ción? Es obligado en estos análisis que los resultados
sean los mismos entre las intervenciones que se com-
Dependiendo de la decisión a tomar es importante paran3.
diferenciar entre el coste medio y el coste marginal de
un producto. El coste medio (Cmd), como su nombre 3.1.2.  Coste-efectividad
indica, es la media de los recursos utilizados por uni-
dad producida (coste medio por día de estancia, coste Este análisis es utilizado para comparar diferentes
medio por consulta sucesiva, etc.). Asume que el con- intervenciones que persiguen unos resultados determi-
sumo de recursos entre la primera unidad producida nados; dichos resultados son las medidas de la efectivi-
y la última es similar. Su cálculo se puede realizar según dad. La efectividad en estos estudios se mide en unida-
la fórmula: des clínicas habituales, como por ejemplo el coste por
caso de infecciones locales de gastrostomía, o el coste
de años de vida ganados con nutrición parenteral hos-
Cmd = Ct / Up
pitalaria (NPH) versus nutrición parenteral domiciliaria
(NPD), etc. Su mayor inconveniente es que solo permi-
El coste marginal (Cma) es el coste de producción
te comparar entre opciones similares y que tengan
de una unidad adicional (Ua), que puede ser un día
efectos que se midan en las mismas unidades. En defi-
más de estancia, una consulta sucesiva más, etc. Se
nitiva, analiza cuál es el coste de la intervención A ver-
puede expresar como:
sus la intervención B. Los estudios de coste-efectividad
son los más utilizados en el medio sanitario y soportan
Cma(n) = Ct(n) – (Ct-1n)
la mayoría de las decisiones estratégicas en la política
de la mesogestión y microgestión.
donde n es el número de unidades y el coste marginal
se obtiene derivando dicha función cuando el Ct es una
función continua.
3.1.3.  Coste-utilidad
La elección entre Cma y Cm tiene relevancia en la En realidad se trata de un análisis de coste-efectivi-
comparación entre tipos de actuación y su repercusión dad en el que se incluye como objetivo la medida de la
en el aumento o disminución del coste total. Habitual- calidad de vida y de la expectativa de vida. Compara
mente, el coste de los primeros días de estancia o de intervenciones que con resultados diferentes, puedan
las primeras consultas es superior al de los últimos. Por medirse en términos de utilidad, unidad que integra
lo tanto, considerar el coste medio por día puede so- cantidad y calidad de vida (años de vida ganados pon-
breestimar el ahorro potencial de una intervención que derándolos según la calidad de vida obtenida, lo que
reduzca los días de estancia hospitalaria. En estos ca- es lo mismo Quality Adjusted Life Years –QUALY–, o
sos, la utilización del Cma cuantifica mejor el impacto Años de Vida Ajustados por Calidad –AVAC–).
económico de la intervención. Tienen la ventaja de permitir comparar estudios so-
Los estudios clásicos de costes que manejan estos con- bre intervenciones de diferentes aspectos de la salud e
ceptos aportan mucha información económica, pero no incluso comparar con actividades en otros sectores.
aportan datos de la eficacia del tratamiento aplicado o Nos permite contestar a la pregunta de si una determi-
de los resultados obtenidos, de ahí que sea importante nada intervención resulta en una mejora de la calidad
aplicar otro tipo de estudios en el análisis económico de vida del paciente. Su principal inconveniente en la
que permitan relacionar el coste con la complejidad de actualidad es que se trata de una herramienta aún en
lo tratado y con el resultado. En otras palabras, tras la desarrollo cuya metodología conviene mejorar y unifi-
medida de los costes, debemos medir los efectos en car y que son estudios más laboriosos de realizar por la
términos clínicos y luego elegir la mejor opción2. dificultad que entraña trasladar a costes conceptos re-
En la actualidad se reconocen cuatro métodos de uti- lacionados con la calidad de vida de los pacientes. En
lidad en el análisis económico: los estudios de cos- los últimos años se han utilizado este tipo de estudios
te-identificación, coste-efectividad, coste-utilidad y cos- en el campo de la nutrición artificial domiciliaria por las
te-beneficio. implicaciones que tiene en el cambio de vida.

3.1.1.  Coste-identificación 3.1.4.  Coste-beneficio


Los análisis de coste-identificación, también conoci- Este último tipo de análisis económico es el más com-
dos como coste-minimización, evalúan el coste de un plejo de todos. Estudia la relación entre el coste y el
procedimiento o tratamiento. Se utiliza cuando intere- beneficio obtenido exclusivamente en términos mone-
Tema 57.  Gestión aplicada a la nutrición clínica 901

tarios. Compara diferentes tratamientos con diferentes por proceso y, de una forma individualizada y estricta,
resultados. Se utiliza poco porque es difícil transformar los recursos utilizados en cada caso concreto.
las unidades de salud en términos monetarios. Se trata Utilizando la información aportada por la contabili-
de definir el valor monetario de una determinada inter- dad analítica, hace algunos años se propuso el uso de
vención y de su beneficio adquirido en sus resultados. unidades relativas de valor (URV). Constituyen el peso
Autores como Laupucis, en el análisis de la efectividad ponderado de la producción de un artículo o servicio,
de los procedimientos a estudio, opinan que la opción referido a otro al que asignamos el valor de 1. En defi-
más deseable es aquella que consigue los mejores resul- nitiva, son unidades de medida que tienen como obje-
tados al coste más bajo, y evidentemente la menos de- tivo establecer el coste económico imputable a cada
seable sería aquella en la que se obtienen los peores prueba, técnica o procedimiento y son útiles para ela-
resultados al precio más elevado, algo que parece razo- borar el catalogo valorado de prestaciones de cada
nable (figura 2). Sin embargo, obtener los mejores re- unidad funcional de cada centro y en nuestro caso
sultados con un elevado coste será soportable por el concreto de las Unidades de Nutrición Clínica. Para su
sistema dependiendo del alcance del coste y del benefi- determinación se establece cuál es la prueba o técnica
cio a obtener. Por último, parece aceptable tener peo- más frecuente a valorar, y esta se toma como valor de
res resultados si el coste es bajo, dependiendo de la referencia. Se le otorga el valor de 1, y a partir de ese
pérdida del beneficio que se obtenga y del modo en el momento se construye todo el catálogo de prestacio-
que se van a emplear los recursos ahorrados. nes valorando cada actividad con un valor de URV.
Este tipo de estudios, que aportan mucha informa- Para la construcción del valor de URV de cada actividad
ción económica relacionándola con la eficacia del trata- o prueba se tienen en cuentan los costes de personal,
miento, se convierten en una herramienta fundamental material y amortización. Permite establecer valoracio-
en la toma de decisiones en la microgestión sanitaria. nes de la eficiencia de los distintos servicios.
El desarrollo de catálogos de prestaciones con valo-
3.1.5.  Contabilidad analítica raciones monetarias en cada centro nos permite esta-
blecer un ranking de Unidades de Nutrición Clínica,
La contabilidad analítica permite desglosar los costes trasladando la competitividad del mundo empresarial
de todos los recursos sanitarios que se utilizan en la prác- al mundo sanitario.
tica clínica (personal, material inventariable, material
consumible, gastos fijos, amortizaciones, etc.) y relacio-
narlos con la actividad asistencial. Es una técnica orienta- 3.2. Sistemas de información hospitalarios
da a comparar los costes y la eficacia conseguidos para el Entre las herramientas utilizadas en el ámbito de la
mismo producto en dos centros de producción diferen- microgestión o gestión clínica se incluyen los sistemas
tes, principalmente de la misma organización. de información de la actividad hospitalaria como son
En nutrición clínica resulta complejo conocer los re- los Sistemas de Información de Atención Especializada
cursos consumidos en cada medida utilizada en cada (SIAE), el Registro Unificado de Listas de Espera Quirúr-
paciente. La imputación de gasto por paciente con este gica (RULEQ), el Conjunto Mínimo de Base de Datos
procedimiento avanzado nos permite conocer el coste (CMBD), los sistemas de codificación y clasificación de
pacientes o los Grupos Relacionados con el Diagnósti-
co (GRDs) entre otros. Algunos de estos sistemas de
COSTE + medida de la actividad hospitalaria son considerados
Más costoso Más costoso instrumentos esenciales que permiten relacionar la ac-
Menos efectivo Más efectivo tividad clínica, es decir, el proceso, y su complejidad,
«la casuística» (sistema case mix) con el coste.
El término case mix hace referencia a la combinación
de distintos tipos de pacientes tratados por un médico,
EFECTIVIDAD – es EFECTIVIDAD +
un servicio, un hospital o cualquier unidad funcional. Ex-
c ion vas presa la producción de dicha unidad en términos de cla-
n i
ve ct ses de pacientes similares desde un punto de vista clínico
n ter -efe y, potencialmente, en el proceso de cuidados recibidos.
I ste
co Exige disponer de datos sobre los pacientes tratados, in-
Menos costoso Menos costoso formación contenida en el sistema CMBD (Conjunto Mí-
Menos efectivo Menos efectivo nimo Básico de Datos) y de un sistema estandarizado de
agrupación de pacientes como el PMC (Patient Manag-
COSTE – ment Care), el GRD (Grupos Relacionados con el Diag-
nóstico), este último utilizado en prácticamente todos
Figura 2.  Interpretación del análisis coste-efectividad. los hospitales de España y del que se elabora la estadís-
Adaptado de Laupacis. tica que se incluye en el Plan Estadístico Nacional.
902 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

El CMBD contiene un conjunto de datos clínicos y de altas necesario para poder hacer comparacio-
administrativos de cada episodio de hospitalización. Su nes entre distintos centros o servicios.
origen está en el propio médico que ha tratado al pa- • Que las altas a las que se le asigne un grupo con-
ciente a través de la información que debe constar en creto, sean similares desde el punto de vista clínico
el informe de alta y en la historia clínica. para que la información que proporciona su em-
Los diagnósticos principales, los secundarios y los pleo pueda ser de utilidad para los médicos.
procedimientos son codificados por un sistema inter- • Que los casos incluidos en cada grupo tengan un
nacional de codificación basado en la Clasificación In- consumo de recursos similar. 

ternacional de Enfermedades, 10ª revisión (CIE-10) de
la American Hospital Association (AHA). Sin embargo, Cada GRD tiene un peso relativo (PR) que expresa
esta misma circunstancia que universaliza las patolo- cómo la diferente complejidad repercute en el gasto.
gías se convierte en un obstáculo en el caso de la des- Es de especial importancia recordar que el diagnós-
nutrición, ya que además de la dificultad que existe en tico de desnutrición y los procedimientos terapéuticos
establecer la definición de desnutrición entre los adul- como la nutrición enteral y parenteral tienen capaci-
tos, este sistema fue diseñado como un sistema univer- dad para modificar la agrupación de pacientes en
sal asignándose los principales códigos de desnutrición GRDs con mayor complejidad. Los facultativos y res-
proteica (kwashiorkor), calórica (marasmo) o mixta a ponsables de las Unidades de Nutrición funcionamos
los criterios de definición de desnutrición en el grupo en los centros hospitalarios como parte de un Servicio
de edad pediátrica en los países menos desarrollados, Centralizado que traslada la información a los Servicios
no considerando específicamente el caso de la desnu- Finales en los que se encuentra físicamente localizado
trición hospitalaria del adulto. el paciente (Servicio de Cirugía, de Digestivo, Neurolo-
Otro de los pilares básicos de los sistemas de infor- gía, Medicina Interna, etc.). Es imprescindible conse-
mación hospitalaria lo constituyen los Grupos Rela- guir sensibilizar a estos últimos para que los registros
cionados con el Diagnóstico (GRD). Se trata de un sean adecuados, de manera que los sistemas de infor-
sistema de clasificación de episodios de hospitaliza- mación sean eficientes como herramientas en la mi-
ción con ajuste de riesgo que se elaboran a partir del crogestión. Existe un sentir general entre los clínicos y
CMBD con definiciones clínicamente reconocibles en codificadores ante la necesidad de adecuar las codifi-
la que los pacientes de cada clase son clínicamente caciones de desnutrición del paciente adulto a las esta-
semejantes y se espera que consuman una cantidad blecidas en el CIE-10. Recientemente se ha elaborado,
similar de recursos como resultado de un proceso de por parte de un grupo de trabajo formado por profe-
cuidados hospitalarios parecidos, pudiéndose cono- sionales de dos sociedades científicas Sociedad Espa-
cer la «complejidad»/consumo de recursos/coste de ñola de Nutrición Enteral y Parenteral (SENPE) y Socie-
los casos atendidos siempre y cuando estén bien cla- dad Española de Documentación Médica (SEDOM) un
sificados. documento de consenso que permite interpretar los
Este sistema de clasificación por GRD se emplea para: diagnósticos de desnutrición del paciente adulto en
distintos grados y tipos relacionándolos con códigos
• Calcular las necesidades de financiación de los preestablecidos en la CIE-9 MC, así como los códigos
centros. de los procedimientos utilizados para revertir la pato-
• Realizar ajustes en la gestión interna de los cen- logía nutricional (nutrición enteral y nutrición parente-
tros, en función de la actividad desarrollada por ral (tabla 2)4.
cada Grupo Funcional Homogéneo.
• Realizar comparaciones sobre la actividad desa-
3.3.  Grupos funcionales homogéneos (GFH)
rrollada en distintos centros y servicios a nivel na-
cional y la calidad de la misma. Un GFH es la unidad básica de gestión y se caracteri-
za por tener una actividad homogénea y definida, un
El sistema de clasificación de pacientes por GRD se único responsable, una ubicación concreta y un objeti-
basa en cuatro condiciones básicas para que resulte de vo propio. Los GFH son el nivel básico para el establecer
utilidad: el coste de un proceso o actividad clínica y deberán es-
tar bien caracterizados para que se puedan establecer
• Que la información que se emplee para la clasifi- comparaciones entre diferentes centros hospitalarios.
cación sea de fácil acceso con las herramientas Los GFH se clasifican en: estructurales, intermedios y fi-
habituales (por ejemplo, informes de alta).
 nales. Un servicio funcional (SF) (por ejemplo, Endocri-
• Que el número de grupos del sistema GRD sea nología y Nutrición) agrupa a varios GFH con prestación
adecuado, ni tan pocos que no sea útil para dife- de servicios similares y un responsable jerárquico supe-
renciar casos de distinto consumo de recursos ni rior al del GFH. Varios servicios funcionales constituyen
tan numerosos que no sea manejable por los Ser- un área funcional, que es el nivel mínimo de estructura-
vicios de Documentación y no incluyan el número ción de un hospital.
Tema 57.  Gestión aplicada a la nutrición clínica 903

Tabla 2.  Codificación en Nutrición (CIE-10).

Diagnóstico o procedimiento
E40 Kwashiorkor (Desnutrición proteica)
E41 Marasmo nutricional (Desnutrición calórica)
E42 Kwashiorkor marasmático
E43 Malnutrición calórico-proteica grave no especificada
E44.0 Malnutrición calórico-proteica moderada
E44.1 Malnutrición calórico-proteica leve
E46 Malnutrición calórico-proteica no especificada

Soporte nutricional
3E0336Z Introducción en vena periférica de sustancia nutricional, abordaje percutáneo(-a)
3E0436Z introducción en vena central de sustancia nutricional, abordaje percutáneo(-a)
3E0D76Z Introducción en boca y faringe de sustancia nutricional, abordaje por orificio natural o artificial
Introducción en gastrointestinal superior de sustancia nutricional, abordaje por orificio natural
3E0G86Z
o artificial endoscópica
Introducción en gastrointestinal inferior de sustancia nutricional, abordaje por orificio natural
3E0H86Z
o artificial endoscópica

Procedimientos relacionados con soporte nutricional


02HV33Z Inserción en vena cava superior de dispositivo de infusión, abordaje percutáneo(-a)
0DH64UZ Inserción en estómago de dispositivo de alimentación, abordaje endoscópico(-a) percutáneo(-a)
Inserción en estómago de dispositivo de alimentación, abordaje por orificio natural o artificial
0DH68UZ
endoscópica
0DH60UZ Inserción en estómago de dispositivo de alimentación, abordaje abierto(-a)
0DHA4UZ Inserción en yeyuno de dispositivo de alimentación, abordaje endoscópico(-a) percutáneo(-a)
0DH80UZ Inserción en intestino delgado de dispositivo de alimentación, abordaje abierto(-a)
0DHA0UZ Inserción en yeyuno de dispositivo de alimentación, abordaje abierto(-a)

En el proceso de obtención de costes de un servicio al capítulo I (médico, enfermería, administración,


funcional es preciso identificar: etc.), suministros en general del capítulo II, hos-
telería, mantenimiento de aparataje, instalacio-
• La estructura de funcionamiento que permita es- nes, amortizaciones, consumos de energía, etc.
tablecer los GFH en los que se puede descompo- En definitiva, son costes fijos e independientes
ner la actividad y a los cuales se les van a imputar de la mayor o menor actividad que se desarrolle.
los costes: dirección, consultas externas, pruebas En los costes de personal es importante conside-
funcionales, instrucción en técnicas especiales, rar si la dedicación es total o parcial en el GFH
hospitalización, interconsultas, etc. considerado.
• Definir la composición del proceso asistencial de • Definir los costes repercutidos desde otros SF por
forma que permita establecer los GFH estructura- la prestación de servicios: análisis clínicos, radiolo-
les, intermedios y finales en los que se descompo- gía, etc. Estos costes son variables en función de
ne la actividad. la actividad que se desarrolle.
• Definir los costes propios o estructurales que se • Definir los costes directos en función del consumo
asignarán a los GFH: personal correspondientes de recursos generados por la atención sanitaria
904 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

(fármacos, productos farmacéuticos de nutrición, de los GFH estructurales y de los intermedios. No pue-
consumibles, etc.). den imputar ningún coste a los anteriores. En un Servi-
• Definir cuáles son los costes imputables a otros SF, cio de Nutrición, los GFH finales serían las consultas
si fuera posible. externas principalmente, y podría haber tantos GFH
• En los sistemas que lo permitan, definir los GFH como número o tipo de consultas.
intermedios-finales que contemplan la imputa- Este último aspecto merece una consideración espe-
ción los costes entre centros de gastos finalistas cial en el caso de actividades que den soporte a otro
de otros SF. servicio. Por ejemplo, una consulta externa de apoyo a
la nutrición del paciente quirúrgico genera unos costes
La imputación de costes a los GFH se debe realizar al GFH final de nutrición, pero unos beneficios al GFH
entre un emisor y un receptor en función de un coefi- de cirugía que deberían ser facturados y considerados
ciente de reparto, que es el criterio de distribución de como ingresos. El coste de la nutrición enteral o paren-
costes. Un GFH emisor imputa costes a otros GFH que teral al paciente hospitalizado se imputa al GFH final
serían receptores de uno o varios GFH. Un GFH interme- de endocrinología y nutrición, pero el GFH final de en-
dio puede ser emisor y receptor a la vez y puede haber docrinología y nutrición debería generar una imputa-
imputaciones cruzadas entre dos GFH del mismo nivel ción de gasto al SF responsable del paciente y que soli-
en algunos casos. La suma de todas las imputaciones citó el servicio.
de costes deberán ser igual a la suma de los costes de En su mayoría, la actividad hospitalaria de nutrición
los GFH finales, o de otra forma: todos los costes del SF da soporte a otros servicios funcionales y genera un
deberán estar recogidos en los GFH finales. coste intermedio y final para el SF nutrición y un bene-
La sistemática de imputación de costes puede ser en ficio para el SF que lo solicita. Sin embargo, si se consi-
cascada o matricial. El método en cascada imputa los dera la nutrición como una actividad facturable, al
costes de un GFH a los GFH del siguiente escalón según igual que una prueba radiológica o un fármaco o una
un criterio establecido, pero ninguno de estos puede dieta oral, se debería imputar el gasto al SF destinata-
imputar un coste a uno de los anteriores. El modelo rio y como ingreso al SF de nutrición. Por lo tanto, este
matricial, también llamado de doble cascada, soporta aspecto es muy importante al considerar la eficiencia
imputaciones cruzadas. Es decir, un GFH que ya hizo la de una actividad.
imputación de costes puede recibir costes de otro. Siguiendo este razonamiento podríamos considerar
También contempla la imputación de interconsultas una 4ª categoría de GFH denominada intermedios-fina-
entre GFH finales de diferentes servicios funcionales y les que podría facturar costes a otros servicios. En esta
es muy conveniente su consideración en SF con gran categoría se debería considerar la actividad de intercon-
actividad de interconsultas. A la hora de establecer la sultas hospitalarias o actividades de consultas externas
imputación de costes es importante tener en cuenta el que sirvan de apoyo a otros servicios.
sistema de contabilidad analítica vigente en el sistema Las URV son un indicador ponderado que mide la
sanitario local. En la mayoría de los sistemas de salud complejidad y el consumo de recursos de las unidades
que tienen implantado el sistema informático GES- producidas por los GFH en base a la imputación del
COT® utilizan un modelo matricial. Solo en dos comu- coste, obteniendo de esta forma el coste unitario de
nidades se optó por una imputación en cascada. cada producto. Para la asignación de valor se pueden
Los GFH estructurales son los básicos para organi- utilizar diferentes métodos: cálculo teórico de cada
zar, gestionar y dar soporte a la actividad: dirección, do- producto, coste real del propio hospital para cada pro-
cencia, investigación, secretaría, etc. No obstante, cada ducto, tomar los valores de referencia tarifarios ya cal-
uno de estos también puede constituirse en un GFH pro- culados por otras entidades o pedir a los responsables
pio en relación con la complejidad que tenga. Son cos- una ponderación subjetiva de sus productos5.
tes operativos fijos y se imputan proporcionalmente a
los GFH intermedios y a los GFH finales dependientes.
3.4.  Contratos de gestión
Los GFH intermedios realizan una actividad o pro-
ducto intermedio a petición del servicio responsable La búsqueda de la mayor eficiencia de los sistemas
del paciente y generan unos costes que son imputables sanitarios ha llevado a la introducción de diversas re-
directamente a los costes finales del SF solicitante. El formas que tienen como hilos conductores promover
servicio se considerará como un coste si es solicitado la disciplina financiera, el desarrollo de sistemas de
por el SF al que está adscrito el GFH intermedio, pero control y la descentralización de la gestión hacia los
se debería considerar como un ingreso si fue solicitado centros (mesogestión) y los profesionales (microges-
por otro SF (por ejemplo, prueba funcional realizada tión). En este contexto empezaron a establecerse los
para un servicio que lo solicite, instrucción en técnicas contratos de gestión o contratos-programa en los años
de autocuidado para un paciente referido, etc.). 90 del siglo pasado.
Los GFH finales definen la actividad principal, es el Estos documentos separan las funciones del financia-
producto final del SF, y reciben la imputación de costes dor (Ministerio o Consejerías de Sanidad) y la provisora
Tema 57.  Gestión aplicada a la nutrición clínica 905

de servicios sanitarios (hospitales y servicios) con el fin de prioridades a los objetivos y analiza exhaustiva-
favorecer la eficiencia y promover cierta competencia mente la actividad. Es totalmente analítico y, qui-
entre centros. En ellos se recoge tanto la cartera de ser- zás, la forma más eficaz de reducir gastos.
vicios del centro o unidad proveedora como unos obje-
tivos de actividad; en los últimos años se han incorpora-
3.5.2.  Estructura del presupuesto
do, además, unos objetivos de calidad asistencial. En
función de la actividad prevista, el financiador dota eco- Hasta la actualidad, la forma más común de elaborar
nómicamente al prestador de servicios; por otro lado, el un presupuesto es su elaboración en función de los
cumplimiento de los objetivos de actividad y calidad objetivos de actividad de la cartera de servicios (por
comporta un incentivo de carácter económico para los ejemplo, nº de ingresos, nº de estancias, nº de prime-
profesionales. Paralelamente, los centros sanitarios esta- ras y sucesivas), de los gastos de personal y estructuras
blecen contratos con empresas de servicio (por ejemplo, físicas (por ejemplo, camas, espacios de consultas) y
lavandería) ajenas al centro (externalización). una estimación en función de la actividad histórica, la
El empleo de este tipo de contratos no está exento mejora de determinados indicadores y las necesidades
de limitaciones: por un lado, representan una ficción de los usuarios.
legal en cuanto que no pueden ser rescindidos ni recla- La estructura del presupuesto deberá contemplar: la
mados; por otro, los incentivos suelen ser pobres y es- actividad, los gastos para realizarla (por ejemplo, per-
tán demasiado centrados en la actividad y poco en la sonal y materiales), las inversiones necesarias y los in-
calidad. gresos en función de la actividad. La unidad clínica
genera tantos productos asistenciales como pacientes
trata, y cada producto engloba todos los servicios que
3.5.  El presupuesto en la gestión clínica
recibe un paciente desde el inicio hasta el alta en el
El presupuesto es la cuantificación económica de un sistema (pruebas analíticas, tratamiento nutricional,
plan de actividad por un período de tiempo previa- médico o quirúrgico).
mente definido, y se elabora por centros de responsa- La gran diversidad y complejidad de productos asis-
bilidad. Su utilización en los planes de gestión lleva tenciales dificulta la cuantificación de la actividad y
implícita la definición de los objetivos, las estrategias obliga a encontrar tipologías clínicas con cierta homo-
para conseguirlos y los recursos utilizados; engloba los geneidad y significado clínico. De esta necesidad surge
gastos, los ingresos y las inversiones de forma diferen- el case-mix, que permite sintetizar en un único pará-
ciada. Es una parte importante en la mejora de la ges- metro los procesos atendidos por la unidad de gestión
tión al cuantificar económicamente las decisiones clíni- clínica y evaluar su complejidad mediante el índice
cas y su repercusión en los resultados, sirviendo para case-mix, que nos sirve para la ponderación del pro-
comparar la eficiencia de las estrategias abordadas al ducto clínico.
tomar las decisiones por anticipado.6 Hay dos sistemas de cuantificación de la actividad y
Para la realización de un presupuesto debe existir una que son la base para estimar los ingresos:
estructura organizativa definida con distribución de res-
ponsabilidades, unos objetivos concretos basados en la • Las unidades de complejidad hospitalaria (UCH),
cartera de servicios y un sistema de información conta- se basan en el case-mix y cuantifican la actividad
ble que permita cuantificar las desviaciones presupues- en función de la suma de cada uno de los produc-
tarias y defina los costes fijos de los variables. tos clínicos realizados y multiplicado por su peso
(complejidad ponderada en función del consumo
de recursos).
3.5.1.  Tipos de presupuestos
• Las unidades ponderadas de asistencia (UPA) tra-
• Presupuesto incremental: Se calcula en función tan de homogeneizar la actividad en un solo pará-
del presupuesto anterior más un incremento por- metro: la estancia o día de hospitalización médi-
centual acordado. Es el habitual en el sistema sa- co. Las equivalencias se establecen en función de
nitario, no es analítico y perpetúa los hábitos sin coeficientes. Por lo tanto, un día de estancia mé-
evaluar posibles alternativas dica es 1,0 UPA, una estancia quirúrgica 1,5 UPA;
• Presupuesto flexible: Similar al anterior, pero per- una estancia en UCI 5,8 UPA, una primera consul-
mitiendo rangos de variación en función de im- ta 0,25 UPA y una consulta sucesivas 0,15 UPA.
previstos. Tiene un mayor componente analítico Este sistema presenta problemas por la excesiva
que el incremental y permite conocer mejor la es- homogeneización no relacionada con el consumo
tructura de la actividad, pero se sigue basando en y la correcta actuación.
pautas establecidas.
• Presupuesto base cero: Su elaboración no utiliza Una vez establecida la actividad de la unidad clínica, se
una referencia o pauta previa, cada epígrafe debe pueden estimar los gastos para su realización mediante la
justificarse en función de su necesidad, asigna cuantificación de los recursos humanos necesarios y los
906 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

materiales utilizados para llevarla a cabo (gastos unitarios • Accesibilidad: facilidad con que se obtienen los
estancia, hostelería, intervenciones, tratamientos, prue- cuidados médicos, independientemente de las
bas, farmacia). Las guías de gestión clínica pueden ser posibles barreras económicas, geográficas, etc.
una buena base para enumerar las actividades a realizar • Aceptabilidad: grado en que se cumplen las ex-
en cada producto clínico, facilitando la utilización eficien- pectativas del paciente respecto a la asistencia,
te de los recursos materiales en cada proceso. organización, trato, etc. (satisfacción), pero tam-
El plan de necesidades engloba las infraestructuras, bién la cooperación del paciente con el plan de
tanto de instalaciones como de equipamiento, que son atención.
precisas para conseguir los objetivos en las mejores con- • Adecuación: relación entre las necesidades y la dis-
diciones y debe priorizarse en función de los mismos. ponibilidad de recursos, tanto en cantidad como
en distribución geográfica.
4.  Gestión de la calidad • Calidad científico-técnica: aplicación del conoci-
miento y de las técnicas médicas disponibles en el
4.1. Introducción momento.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) definió en • Competencia profesional: capacidad del profesio-
1985 la calidad de la asistencia sanitaria como «asegurar nal y de la organización para utilizar los conoci-
que cada paciente reciba el conjunto de servicios diag- mientos médicos y la capacidad relacional.
nósticos y terapéuticos más adecuados para conseguir • Continuidad: capacidad de atender a los pacien-
una atención sanitaria óptima, teniendo en cuenta todos tes como un todo mediante un conjunto de servi-
los factores y los conocimientos del paciente y del servicio cios integrados.
médico, y lograr el mejor resultado con el mínimo riesgo • Disponibilidad: grado en que los servicios sanita-
de efectos iatrogénicos». Establecer un sistema de ges- rios están operativos.
tión de calidad en un servicio sanitario permite la siste- • Efectividad: capacidad de un tratamiento o proce-
matización y estandarización de los procesos, maximizar dimiento de mejorar la salud, también entendida
la utilización de los recursos, reducir los costes generados como la relación entre el impacto real y el impacto
por errores, mejorar las relaciones con los proveedores, y potencial en condiciones ideales de una actividad
aumentar la satisfacción de los pacientes, de otros clien- (que es la eficacia).
tes (médicos y enfermeras de otros servicios del hospital) • Eficiencia: relación entre el impacto o efecto de
y del propio personal de la unidad, así como una mejora una intervención y su coste, también entendida
de la imagen y prestigio de la organización7. como la prestación del máximo de servicios de ca-
lidad por unidad de coste.
• Satisfacción del profesional con las condiciones y
4.2. Dimensiones de la calidad de la asistencia el desarrollo de su trabajo.
sanitaria • Seguridad: balance positivo en la relación entre
La calidad es un concepto poliédrico en el que no riesgos y beneficios. Es la dimensión esencial de la
existe un único parámetro que permita su medición. calidad. Implica desarrollar estrategias encamina-
Cada una de las caras del poliedro representa las dife- das a evitar el riesgo innecesario durante la aten-
rentes dimensiones de la calidad (figura 3), siendo las ción sanitaria.
principales las siguientes: • Receptividad o respuesta centrada en los pacien-
tes (conceder importancia a los valores y/o prefe-
rencias del individuo o de la sociedad).
• Relevancia: balance óptimo de servicios que po-
Accesibilidad dría alcanzarse dadas las necesidades y las caren-
cias de la población.
• Valoración: grado en que una asistencia sanitaria
Seguridad Aceptabilidad
eficaz se ha implantado y ha obtenido resultados.
• Disponibilidad de información. La elección de de-
terminadas dimensiones de calidad influye en la
Satisfacción CALIDAD Adecuación capacidad de evaluación de esta y, por tanto, en
las políticas sanitarias adoptadas.

Efectividad Competencia 4.3.  Sistemas de gestión de la calidad


y eficacia profesional
Dentro de los países desarrollados, e incluso dentro
Disponibilidad de nuestro Sistema Nacional de Salud, coexisten dife-
rentes metodologías de evaluación de la calidad, algu-
Figura 3.  Dimensiones de la calidad. nas desarrolladas por las propias comunidades autó-
Tema 57.  Gestión aplicada a la nutrición clínica 907

nomas. Donabedian, considerado el padre de la calidad


sanitaria, propuso que podíamos medir la calidad sani- Detección de los puntos
taria estudiando tres aspectos: que precisan mejora

•  Estructura: entendida como las características del


medio en que se presta la asistencia sanitaria y los
Análisis de las causas
recursos que se necesitan (humanos, materiales e
de las deficiencias
intelectuales).
•  Proceso: entendido como la utilización de recursos
para la prestación de servicios. Los procesos pueden
estar relacionados con el paciente (por ejemplo, ín- Análisis de indicadores
dices de derivación a consultas) o con la organiza- para cada punto de mejora
ción (por ejemplo, gestión de listas de espera).
•  Resultados: entendidos como los efectos de la
asistencia en un individuo o en la sociedad. Los Diseño de programas
efectos pueden ser intermedios (por ejemplo, pre- de mejora
sión arterial, peso, glucemia) o finales (por ejem-
plo, mortalidad, resolución de úlceras por presión).
Implantación de los
Estos tres aspectos tienen, a su vez, unas determina- programas
das dimensiones asociadas (tabla 3) y ciertas limitacio-
nes a la hora de su evaluación8. Por ejemplo, los resul-
tados de una intervención pueden observarse décadas
después de que se produzca o están limitados porque Reevaluación
la eficacia de la intervención o de la tecnología emplea-
da no sea completa. Es difícil prestar una asistencia sa-
nitaria adecuada si la estructura no lo es, pero una bue- Figura 4.  Esquema de evaluación de la calidad
na estructura no implica unos procesos y resultados de asistencial.
calidad. La mayor parte de los métodos de evaluación
de la calidad valoran los procesos y los resultados, y si-
guen un esquema común de análisis que se muestra en ma rigurosa. La organización evaluada establece un
la figura 4. sistema de calidad por el cual asegura que sus procesos
se ajustan a la norma, y el organismo certificador reali-
4.3.1.  Sistemas de normalización y certificación za auditorías periódicas para revisar los planes de me-
jora. Este modelo se encuentra fundamentalmente en
Se entiende por norma de calidad un documento de los servicios centrales de los centros sanitarios, perfil en
aplicación voluntaria aprobado por un organismo de el que encajan las Unidades de Nutrición, siendo la
normalización reconocido (como Asociación Española más común en la actualidad la UNE-EN-ISO 9001:2008
de Normalización y Certificación, AENOR o Internatio- que será sustituida de manera obligatoria a partir de
nal Standards Office, ISO) y que recoge especificacio- 2017 por la UNE-EN-ISO 9001:20159.
nes técnicas de los procesos obtenidas a partir de la
experiencia. La certificación supone que un organismo
de certificación asegura que un tercero se ajusta a di-
4.3.2.  Sistemas de acreditación y autorización
cha norma, es decir, que un proceso se realiza de for- La acreditación es un procedimiento de verificación,
por parte de un agente externo, de que una organiza-
ción cumple unos requisitos diseñados para mejorar la
Tabla 3.  Clasificación de las dimensiones de calidad calidad de la atención. La acreditación supone un com-
asistencial. promiso claro de la organización por mejorar la calidad
de la atención al paciente, garantizar un entorno segu-
Dimensiones Dimensiones Dimensiones ro y trabajar en la reducción de riesgos para los pacien-
de estructura de proceso de resultado tes y el personal. El paradigma de la acreditación es la
evaluación por la Joint Commission on Accreditation of
Accesibilidad Adecuación Efectividad
Healthcare Organizations, que recoge algunos están-
Equidad Continuidad Satisfacción
dares que afectan directamente a nuestra especialidad:
Eficiencia
Información
• La organización dispone de alimentos adecuados
Seguridad
para la atención al paciente.
908 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

• A todos los pacientes se les prescribe una dieta u De los múltiples modelos de excelencia existentes, el
otros nutrientes en función de su estado o necesi- más empleado en nuestros sistemas sanitarios es el de
dades nutricionales (dieta absoluta, dieta normal, la Fundación Europea para la Gestión de la Calidad
dietas especiales, nutrición enteral o parenteral). (European Foundation for Quality Management, EFQM).
• Se ofrece a los pacientes una variada oferta de ali- Si la Joint Commission supone la evaluación por un co-
mentos. mité externo ajeno a la organización, este modelo se
• La preparación, la manipulación, el almacenamien- basa en la autoevaluación de nueve criterios:
to y la distribución de alimentos se realizan de ma-
nera segura y con arreglo a las leyes y normativas • Liderazgo.
actuales. • Política y estrategia.
• Los pacientes con riesgo nutricional reciben tera- • Recursos humanos.
pia nutricional. • Alianzas externas y recursos internos.
• La terapia nutricional se facilita interdisciplinaria- • Procesos.
mente. • Resultados en los clientes.
• La respuesta del paciente a la terapia nutricional • Resultados en las personas.
se anota por escrito en su historia clínica. • Resultados en la sociedad.
• Resultados clave.
La autorización es un proceso administrativo de ca-
rácter obligatorio por el cual un organismo público re- La EFQM establece que los resultados excelentes de
conoce que una institución reúne una serie de requisi- una organización se alcanzan mediante un liderazgo
tos, generalmente de carácter estructural. Sin embargo, que impulse la política y la estrategia, y se hace reali-
conviene resaltar que la conformidad de la estructura dad a través de los recursos humanos, las alianzas y los
permite pero no asegura en sí misma que los procesos procesos (figura 5).
y los resultados sean los idóneos.
4.3.4. Benchmarking
4.3.3.  Sistemas de excelencia
El benchmarking es una técnica sistemática de apren-
La excelencia consiste en alcanzar unos resultados que dizaje y de mejora en el que una organización compara
satisfagan totalmente a los grupos de interés de la orga- sus procesos con los de otras organizaciones similares,
nización (gestores, profesionales, pacientes). Se alcanza de modo que se detectan aquellas que presentan mejo-
mediante la gestión de calidad total, aquella que utiliza res resultados y que por tanto sirven de modelo para
de forma eficiente y coordinada todos los recursos dispo- determinar cuáles son las mejores prácticas. Es aplicable
nibles (humanos, materiales, tecnológicos, etc.) y satisfa- a las organizaciones sanitarias, a pesar de que difieren
ce a los clientes, empleados y a la sociedad en general. en su tamaño y estructura, ya que los procesos que eje-

Agentes facilitadores Resultados

RRHH Resultados
en personas

Resultados Resultados
Liderazgo Política Procesos en clientes clave

Alianzas Resultados
en sociedad

Innovación y aprendizaje

Figura 5.  Modelo de excelencia de la European Foundation for Quality Management.


Tema 57.  Gestión aplicada a la nutrición clínica 909

cutan son comunes. Para la realización de esta técnica 4.5.  Calidad percibida
es necesario contar con un benchmaker, una persona
especializada que conozca bien la gestión por procesos, La calidad tiene dos componentes: uno intrínseco,
y un benchmark o modelo10. propio del proceso o resultado, y otro extrínseco. Este
El benchmarking cuantitativo mide el rendimiento último hace referencia a la percepción que tienen los
de los procesos en las distintas organizaciones median- clientes (pacientes) del servicio recibido y de sus resul-
te su efectividad y eficiencia; el benchmarking cualita- tados, y los profesionales de la actividad que desarro-
tivo analiza las prácticas del modelo a través de sus llan y del entorno en que la realizan. La satisfacción se
componentes: mide mediante encuestas, buzones de sugerencias,
análisis de reclamaciones y quejas, pacientes «cebo»,
etc. Los pacientes consideran como principales causas
4.4.  Criterios de calidad de satisfacción el trato humano y personalizado, la em-
La gestión de la calidad supone el establecimiento de patía, la comodidad de las instalaciones, la calidad de
unos criterios que se deben cumplir para que la asis- la información recibida y la capacidad de respuesta;
tencia sanitaria sea de calidad. Cada criterio necesita entre los principales motivos de insatisfacción destacan
un indicador, generalmente numérico, que lo cuantifi- las listas de espera y los retrasos en la atención u ob-
que y que permitan la comparación con los estándares. tención de resultados, y la falta de coordinación entre
Dichos criterios deben ser clínicamente válidos (deben profesionales13.
concordar con el conocimiento científico disponible),
deben ser relevantes y deben ser eficientes en la reco- 4.6.  Gestión de riesgos
gida de la información.
Existen diferentes tipos de criterios: los criterios cen- La seguridad es la dimensión esencial de la calidad,
tinela miden procesos o resultados indeseables y po- su mejora permite reducir costes y su gestión implica
tencialmente evitables; los criterios trazador estudian desarrollar actividades clínicas y administrativas especí-
patologías frecuentes y características de una especiali- ficas que permitan identificar y analizar los posibles
dad que pueden reflejar su asistencia sanitaria global; riesgos para proponer soluciones que permitan redu-
por último, los criterios índice determinan si la frecuen- cirlos hasta el mínimo posible, considerando los cono-
cia de un determinado suceso ocurrido en la asistencia cimientos del momento. Entendemos como riesgo la
sobrepasa un umbral previamente determinado. probabilidad de que ocurra o pudiera ocurrir un inci-
La Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Ente- dente adverso para la salud del paciente derivado de la
ral (SENPE) y la Sociedad Española de Calidad Asisten- atención sanitaria sea cual sea el origen (del tratamien-
cial han definidos los criterios de calidad aplicables a la to o de la estructura)14.
nutrición clínica. En la tabla 4 se resumen aquellos de Una cultura de seguridad necesita una estructura y
mayor relevancia y factibilidad11, 12. liderazgo definidos, formación del equipo, evaluar la

Tabla 4.  Criterios de calidad más relevantes en una Unidad de Nutrición.

Criterios Indicador Estándar Dimensiones


Identificación del paciente Nº pacientes con etiquetado correcto /
y de los nutrientes en las bolsas Nº total de pacientes con bolsa de nutrición 100 % Estructura
de nutrición artificial artificial x 100
Existencia de protocolos clínicos
Existencia de protocolos básicos actualizados Sí
básicos
Posición semi-incorporada del
Nº pacientes con NE por SNG semiincorporados /
paciente con nutrición enteral 100 % Proceso
Nº pacientes con NE gástrica x 100
(NE) por sonda nasogástrica
Monitorización de la nutrición Nº pacientes con NE monitorizados /
100 %
enteral Nº pacientes con NE x 100
Nº pacientes que alcanzan objetivo calórico /
Cumplimiento del objetivo
Nº pacientes seguidos por la Unidad de 100 % Resultado
calórico
Nutrición x 100

SNG: sonda nasogástrica.


910 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

cultura de riesgo y una correcta gestión del riesgo. La Grupo de Documentación de SENPE. Documento
gestión del riesgo deberá implicar a todos los estamen- SENPE-SEDOM sobre la codificación de la desnutri-
tos de la unidad o sistema y adoptar métodos que per- ción hospitalaria. Nutr Hosp. 2008;23(6):536-40.
mitan: identificar el posible riesgo, analizar su frecuen-   5. Instituto de Información Sanitaria. Análisis de los
cia e importancia, planificar e incorporar la respuesta y, sistemas de contabilidad analítica en los hospitales
finalmente, el seguimiento y control de los mismos. Hay del SNS. Año 2011. Volumen I. Informe. [Publica-
varias técnicas metodológicas encaminadas a este fin: ción en Internet]. Madrid. Ministerio de Sanidad,
análisis modal de fallos y efectos (AMFE), análisis cau- Servicios Sociales e Igualdad; 2012. Disponible en:
sa-raíz (ACR), diagrama causa-efecto o diagrama de http://www.mspsi.es/estadEstudios/estadisticas/
Ishikawa, técnica de los 5 porqué y diagrama de Pareto. cmbdhome.htm
En las unidades de nutrición se deberán implantar   6. Fernandez Diez A. Presupuestos clínicos. Caso de
procedimientos adecuados para minimizar los riesgos presupuestación de un servicio clínico. Madrid:
relacionados con las complicaciones de las vías centra- Escuela Nacional de Sanidad; 2013. Consultado
les (infección, colocación), las sondas gastrointestina- 21/03/2015. Tema 11.5
les (colocación), la aspiración de la alimentación oral o   7. World Health Organization. Regional Office for Eu-
enteral y las repercusiones de volumen y metabólicas rope. The principles of quality assurance, report on
de la nutrición artificial en general. a WHO meeting. Copenhagen: OMS, 1985 (Euro
Reports and Studies Series: nº 94).
5.  Resumen y conclusiones   8. Donabedian, A. The Quality of Care: How can it be
assessed? JAMA 2008; 260: 1743-1748.
Los sistemas sanitarios públicos y privados afrontan la
 9.  Velasco Gimeno C, Cuerda Compés C, Alonso
triple necesidad de mejorar el rendimiento de unos me-
Puerta A, Frías Soriano L, Camblor Álvarez M, Bre-
dios económicos limitados en un entorno más deman-
tón Lesmes I, Plá Mestre R, Izquierdo Membrilla I,
dante de atención sanitaria y una época de procedi-
García-Peris P. Implantación de un sistema de ges-
mientos médicos muy costosos, de asegurar la seguridad
tión de calidad en una unidad de nutrición según
de esos procedimientos y de cubrir las expectativas, cada
la norma UNE-EN-ISO 9001:2008. Nutr Hosp. 2015;
vez más elevadas, de sus usuarios. En este contexto la
32(3):1386-92.
gestión de la calidad total adquiere una relevancia fun-
10. Costa Estany JM. Benchmarking de procesos. Rev
damental en la práctica clínica habitual. Sin embargo,
Calidad Asistencial 2008; 23: 1-2.
los profesionales sanitarios no especializados en temas
de gestión no están familiarizados con los conceptos 11. Indicadores de calidad para las Unidades de Nutri-
básicos de gestión de la calidad. Es necesario desarrollar ción Clínica. Sociedad Española de Nutrición Pa-
parámetros propios de nuestra especialidad para el estu- renteral y Enteral. Elsevier España SL 2008.
dio de la calidad en nuestros servicios y unidades, que 12. Martín Folguera T, Alvarez Hernández J, Burgos
permitan una evolución progresiva hacia la excelencia. Peláez R, Celaya Pérez S, Calvo Hernández MV,
García de Lorenzo A, García Luna PP, Irles Roca-
mora JA, Lajo Morales T, Luengo Pérez LM, Mella-
6. Bibliografía do Pastor C, Olveira Fuster G, Pérez Portabella C,
  1. Álvarez J, Monereo S, Ortiz P, Salido S. Gestión en Vidal Casariego A; Grupo de Trabajo de Gestión de
nutrición clínica. Nutr Hosp. 2004;XIX(3): 125-134. SENPE. Análisis de la relevancia y factibilidad de los
  2. Laupacis A, Sackett DL, Roberts. An assessment of indicadores de calidad en soporte nutricional. Nutr
clinically useful measures of the consequences of Hosp. 2012;27(1):198-204.
treatment. N Eng J Med 1988; 318: 1728-1733.
 13. Mira JJ, Rodríguez Marín J, Peset R, Ybarra J, Pé-
  3. Del Llano JE, Oliva J. Medicina coste-efectiva y me- rez-Jover V, Palazón I, et al. Causas de satisfacción
dicina basada en la evidencia: su impacto en el y de insatisfacción en hospitales y atención prima-
proceso de decisiones clínicas. Med Clin (Barc) ria. Rev Calidad Asistencial 2002; 17: 273-83.
2000;114:34-41. 14. Agra Varela Y. Seguridad del paciente y gestión
  4. Álvarez J, Del Río J, Planas M, García Peris P, García del riesgo [Internet]. Madrid: Escuela Nacional de
de Lorenzo A, Calvo V, Olveira G, Irles JA, Piñeiro G; Sanidad; 2012 [consultado 18/01/2015]. Tema 14.9.
Tema 58. 
Metodología para el diseño y desarrollo de productos
de nutrición clínica
Milagros Pérez Rodríguez
Directora I+D-Calidad. VEGENAT, S.A.

África Jiménez Jiménez


Responsable I+D. VEGENAT, S.A.

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 911-924.

 1. Introducción: objetivo de las actividades de diseño y desarrollo en la industria


 2. Proceso de innovación
 3. Metodología para el diseño de productos de nutrición clínica
 4. Metodología para el desarrollo de productos de nutrición clínica
 5. Controles necesarios durante el desarrollo
 6. El proceso de escalado y su validación
 7. Controles de producto y estudios de vida útil
 8. Evaluación clínica de productos
 9. Preparación para la fase de comercialización y lanzamiento al mercado
10. Resumen
11. Bibliografía

1. Introducción: objetivo de las actividades que sean nuevos para la empresa o mejorar los ya exis-
de diseño y desarrollo en la industria tentes, consiguiendo con ello tener éxito; es decir, la
innovación se traduce en la aplicación comercial de
La investigación y desarrollo constituye uno de los una idea. Para llevar a cabo la innovación es necesario
pilares fundamentales en los que se sustenta el creci- el conocimiento y este se genera a través de la investi-
miento de cualquier organización. Los altos niveles de gación y el desarrollo (I+D) que, según el Manual de
competencia, la internacionalización económica y la Frascati2 de 2015, se refiere a las actividades que com-
aparición de nuevas tecnologías son solo tres de los prenden el trabajo creativo llevado a cabo de forma
muchos factores que provocan la necesidad de imple- sistemática para incrementar el volumen de cono­
mentar cambios en las organizaciones en general y cimientos y el uso de esos conocimientos para crear
dentro de la industria de la nutrición especializada, en nuevas aplicaciones desde la investigación básica al
particular, a través de la innovación en productos o desarrollo experimental. Los objetivos de esta labor sis-
procesos con el objetivo de la diferenciación, creación temática a través de una determinada metodología o
de valor y en resumidas cuentas la sostenibilidad y procesos pueden estar focalizados hacia sostener mer-
competitividad en el mercado. cados, diversificar y/o cambiar el modelo de negocio.
La gestión del cambio no radica en implementar mo- Esta tarea no se centra específicamente dentro del área
delos que a la larga resultan ser pasajeros. Se debe ob- de I+D de una compañía, sino que es una labor de
servar el entorno y anticiparse a las tendencias del mer- equipo donde deben entrar a formar parte todos los
cado para estar siempre a la vanguardia1. departamentos con el objetivo de priorizar y focalizar
Innovar es utilizar el conocimiento, y generarlo si es la estrategia en aquellas que se consideren las «mejores
necesario, para crear productos, servicios o procesos ideas» de cara a los resultados de la empresa.

911
912 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

2.  Proceso de innovación dejar de lado la creatividad concebida como el pro-


ceso mental que ayuda a generar nuevas ideas.
La innovación tiene un carácter estratégico que no Esta actividad fomenta la habilidad para abando-
debe ser dejado al azar, suerte o a una genialidad. A nar las vías estructuradas y las maneras de pensar
diferencia de la mejora continua, innovar implica to- habituales, para llegar a una idea que permita so-
mar riesgos que se desenvuelven en un marco de ma- lucionar un determinado problema. La creatividad
yor incertidumbre por lo que debe ser un proceso con- puede ser gestionada mediante sesiones organiza-
trolado de etapas secuenciales1. das en las que se apliquen distintas técnicas como
Para iniciar la innovación es necesario generar una son los mapas mentales, la asociación forzada, la
«buena idea». Se requiere para ello de un profundo búsqueda de analogías o la lluvia de ideas.
conocimiento del entorno (sector, mercado, consumi-
dor, novedades científicas, tecnológicas, avances en 4. Análisis de situación externa e interna
envases, tecnologías de procesado, etc.). Junto a ello, Respecto a la parte externa, hay que identificar
la valoración de los gastos del proceso de desarrollo del casos de éxito o fracaso en el mercado, estudiar la
nuevo producto es también imprescindible. evolución de los mercados, realizar estudios com-
Un buen análisis antes de iniciar el proceso de diseño parativos de la competencia o valorar potenciales
y desarrollo ayudará a la identificación de aquellos pro- alianzas tecnológicas. En cuanto al análisis inter-
ductos que pueden tener mayor probabilidad de éxito no, es importante conocer en profundidad las
equilibrando los costes. Este análisis consta de las si- habilidades, conocimientos y recursos (humanos
guientes etapas3-5: y materiales), así como analizar proyectos inter-
nos de éxito o fracaso.
a. Generación de ideas. Con toda la información obtenida mediante las
b. Evaluación de oportunidades y selección de pro- anteriores actividades se puede obtener un impor-
yectos. tante número de potenciales proyectos de I+D+i
c. Diseño y desarrollo de productos: diseño básico; que deben ser previamente evaluados para selec-
desarrollo detallado y prueba piloto; rediseño, es- cionar aquellos que se encuentren más en conso-
cala semiindustrial, escala preserie y producción; nancia con la estrategia de la organización.
y finalmente, comercialización.
b. Evaluación de oportunidades en cuanto a su
a. Generación de ideas
viabilidad y selección de proyectos
Surge como el primer paso dentro de cualquier
La evaluación de la viabilidad se debe realizar des-
proceso de innovación. Para nutrir la cartera de
de distintos puntos de vista valorando la factibili-
ideas existen una serie de herramientas que po-
dad técnica, económica y comercial. Desde el
drían dividirse en cuatro categorías:
punto de vista técnico, hay que evaluar factores
1.  Vigilancia tecnológica del diseño (funcionales, estéticos, ergonómicos y
Permite captar información del exterior y de la legales) y del proceso (materias primas, personal,
propia organización sobre ciencia y tecnología, medios, gestión de la calidad o consumo de ener-
seleccionarla, analizarla, difundirla y comunicarla, gía). Desde la visión económica, hay que valorar
para convertirla en conocimiento. Actualmente se los costes, el inmovilizado, las mermas, el período
está produciendo una paulatina sustitución de la de recuperación o las necesidades de aprendizaje;
vigilancia tecnológica por la inteligencia competi- mientras que comercialmente se estudian las ven-
tiva, englobando y superando a esta, añadiendo a tas, el valor añadido, el ciclo de vida, los competi-
lo anterior la dimensión estratégica, anticipándo- dores, la distribución o el lanzamiento.
se e interpretando las tendencias. Tras la evaluación de la viabilidad de las distintas
ideas, se seleccionarían aquellas que mejor valo-
2.  Previsión tecnológica
ración han obtenido y que se encuentren más ali-
Pretende observar a largo plazo el futuro de la cien-
neadas con la estrategia y los valores de la organi-
cia, la tecnología, la economía y la sociedad con el
zación, pasando así a la fase de descripción de los
propósito de identificar las tecnologías emergentes.
proyectos, que constará de una memoria que
Promueve la reflexión para detectar nuevas ideas
debe englobar los objetivos y la estrategia a se-
que permitan guiar el desarrollo de productos y/o
guir, el grado de innovación, avances y novedad
procesos futuros reduciendo la incertidumbre que
junto con el estudio del estado del arte y de sus
rodea a las decisiones estratégicas a largo plazo y
limitaciones actuales, además de la posibilidad de
poder anticiparse a los cambios3.
proteger la propiedad de los resultados. También
3. Creatividad se detallará la planificación con tareas, personal
Además de la búsqueda lógica y sistemática refle- asignado y tiempos, así como un desglose del
jada en las dos categorías anteriores, no hay que presupuesto. Esta memoria, que implica el inicio
Tema 58.  Metodología para el diseño y desarrollo de productos de nutrición clínica 913

de la parte práctica del diseño del producto, debe complicaciones de la patología a tratar y, en conse-
completarse con un plan para integrar el nuevo cuencia, reduciendo el período de estancia hospitala-
proyecto en el sistema de calidad de la organiza- ria, si lo hubiera11.
ción y un plan de explotación de resultados6, 7. La mayoría de los pacientes hospitalizados se benefi-
cian de una nutrición oral. Pero en determinadas situa-
c. Diseño y desarrollo de productos ciones debe administrarse una nutrición por vía enteral
Constituye la parte práctica del proceso de inno- o parenteral, con los siguientes objetivos: disminuir o
vación. El diseño y desarrollo de un nuevo pro- evitar la desnutrición cuando no es posible cubrir las
ducto de nutrición clínica es una larga tarea que necesidades mediante la dieta oral e influir beneficiosa-
lleva un plazo medio que puede oscilar entre los mente en el curso de la enfermedad administrando
6 meses y en algunos casos varios años. diferentes nutrientes y manteniendo un adecuado es-
En esta etapa se lleva a cabo la materialización de tatus nutricional12.
la idea, trabajándola inicialmente a escala labora- Teniendo en cuenta lo anterior, se inicia el proceso y
torio para finalizar el proceso con la fabricación del tras haber seleccionado el proyecto a abordar conside-
producto. Las diferentes etapas llevadas a cabo rándolo, tras un estudio de mercado, como una idea
hasta llegar a la comercialización de un producto posible asociada a una determinada necesidad, esta es
de nutrición clínica constituye la información fun- transmitida al departamento de I+D+i, quien realiza
damental recogida dentro de este capítulo. una revisión bibliográfica a fin de conocer los últimos
avances desde el punto de vista técnico y tecnológico y
3.  Metodología para el diseño de productos estudiar la viabilidad del proyecto. En esta primera eta-
pa se definen de forma muy general las particularida-
de nutrición clínica
des cualitativas y cuantitativas del nuevo producto, así
La nutrición es el proceso biológico mediante el como el proceso tecnológico a aplicar, el formato de
cual los organismos asimilan y utilizan los nutrientes presentación del mismo y el sistema de envasado.
para el adecuado funcionamiento de las funciones vi- Para llegar a presentar una propuesta detallada de
tales. La nutrición es vital en todos los sujetos, más forma cualitativa y cuantitativa para un nuevo producto
aún en el caso de aquellos aquejados de determina- de nutrición enteral previamente es necesaria la consulta
das patologías8. de diversas de fuentes de información especializada13:
La desnutrición es una situación clínica de elevada
prevalencia (20 al 50%) que afecta a todas las edades •  Bibliografía: artículos científicos, borradores de
y grupos diagnósticos provocada por un déficit de nu- artículos, actas de congresos, tesis y/o libros espe-
trientes, ingesta inadecuada, aumento de las pérdidas cializados.
o por aumento de los requerimientos de los mismos9. •  Bases de datos: Medline, EuroFIR, SciELO, Dialnet,
Se relaciona de forma muy directa con la enfermedad Biblioteca Cochrane Plus, EMBASE, LILACS, Euro-
y, generalmente, es consecuencia de esta y lo que pue- pean Patent Office, Journal Metrics, EUR-Lex, etc.
de perpetuar los trastornos iniciales, empeorando el •  Guías y recomendaciones de organizaciones y/o
pronóstico evolutivo del paciente y contribuyendo a grupos de especializados: ASPEN, ESPEN, EFSA,
aumentar la morbimortalidad10. FDA, AECOSAN, AENE, etc.
Los nuevos hábitos de vida determinan la aparición y •  Consultas a asesores y grupos de referencia.
mayor incidencia de diversas patologías, esto unido a •  Proveedores de ingredientes, tecnología y aplica-
un envejecimiento progresivo de la población determi- ciones.
nan que exista una fuerte demanda relacionada con
estos sectores que consecuentemente el mercado debe Además, un aspecto muy importante a tener en cuen-
investigar y satisfacer, ya que esta situación delimita un ta a la hora de plantear un nuevo desarrollo, y que con-
colectivo de personas que se puede tipificar como en dicionará el proyecto y su enfoque desde el inicio, es el
riesgo nutricional, ya sea por la naturaleza de la enfer- marco legislativo donde se va a encuadrar. Es necesario
medad, por los procedimientos terapéuticos que re- tener en cuenta los distintos reglamentos, decretos, re-
quiere o por ambas causas, incluida la propia hospita- comendaciones o directivas y sus posibles interacciones
lización. La malnutrición afecta negativamente a la para poder llegar a tener un producto posicionado tal y
respuesta del paciente frente a su enfermedad y a la como se definió en la memoria del proyecto.
terapia establecida, con lo que conseguir un correcto Las principales normativas a las que deben acogerse
estado nutricional debe ser un objetivo prioritario a la los productos desarrollados para combatir la malnutri-
hora de enfocar todo tratamiento8. ción son las que siguen14, 15:
Una correcta nutrición adaptada a los requerimien-
tos incrementa no solo la satisfacción psicosocial del •  Reglamento (UE) Nº 1924/2006: relativo a las de-
paciente, mejorando la respuesta a cualquier terapia, claraciones nutricionales y de propiedades saluda-
sino también su pronóstico, evitando las potenciales bles en los alimentos.
914 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

•  Real Decreto 1205/2010: se fijan las bases para la estar basados en la mejor y más abundante evidencia
inclusión de los alimentos dietéticos para usos disponible. Las actualizaciones en la práctica según los
médicos especiales en la prestación con productos expertos, la comparación de esta práctica con los es-
dietéticos del Sistema Nacional de Salud y para el tándares basados en la evidencia y la evaluación conti-
establecimiento de sus importes máximos de fi- nua de las recomendaciones del momento, hacen que
nanciación. del trinomio alimentación-enfermedad-nutrición, se
•  Reglamento (UE) Nº 1169/2011: sobre la infor- conozcan mejor las sinergias y las divergencias entre
mación alimentaria facilitada al consumidor. los distintos nutrientes para, así, redactar guías y reco-
•  Reglamento (UE) Nº 1333/2008: para establecer mendaciones más ajustadas a cada patología o situa-
una lista de aditivos alimentarios de la Unión. ción clínica. Es evidente que las necesidades que pre-
•  Reglamento (UE) Nº 609/2013, relativo a los ali- senta un paciente con insuficiencia renal no son las
mentos destinados a los lactantes y niños de corta mismas que las de un paciente con neoplasia o uno
edad, los alimentos para usos médicos especiales que ha sufrido una pancreatitis aguda. Además, el de-
y los sustitutivos de la dieta completa para el con- sarrollo de la correspondiente tecnología, ha hecho
trol de peso. cambiar el concepto de soporte nutricional por trata-
•  Reglamento delegado (UE) Nº 2016/128, relativo miento nutricio­nal o nutrición paciente-específica12.
a los requisitos específicos de composición e infor- La búsqueda de estos ingredientes se realiza de ma-
mación aplicables a los alimentos para usos médi- nera global a través de bases de datos especializadas y
cos especiales. bases de datos biomédicas analizando las diferentes
•  Reglamento (UE) Nº 2016/1413: establece una casas comerciales que podrían suministrar el compo-
lista de declaraciones autorizadas de propiedades nente para su evaluación en estudios o evaluaciones
saludables de los alimentos distintas de las relati- clínicas.
vas a la reducción del riesgo de enfermedad y al La documentación que debe acompañar a cada
desarrollo y la salud de los niños. componente es variada pero principalmente se centra
en lo recogido en la tabla 1. Además de la información
Uno de los aspectos más importantes a tener en obtenida mediante la documentación, cada ingredien-
cuenta es el empleo de nuevos ingredientes, coadyu- te debe poseer una serie de datos adicionales específi-
vantes o ingredientes específicos. Los productos deben cos del nutriente que van a aportar necesarios para

Tabla 1.  Documentación que debe acompañar a cada componente en nutrición clínica.

Es un documento que recoge la información básica del ingrediente. En ella


se recogen los datos claves y más relevantes de forma clara y concisa y las
características técnicas del producto en cuestión. Estos documentos deben ser
revisados, aprobados y actualizados con una frecuencia no superior a dos años. Los
Especificación técnica apartados de los que debe constar al menos son: nombre, descripción, ingredientes
(incluyendo alérgenos y organismos genéticamente modificados (OGM)),
características nutricionales, microbiológicas, organolépticas y físico-químicas,
modo de empleo, condiciones de almacenamiento y distribución, formatos de
presentación y vida útil.
Constituyen un sistema básico y complementario del etiquetado para determinados
componentes (por ejemplo, sales minerales), que recogen aspectos preventivos
Ficha de Datos de Seguridad
y/o de emergencia a tener en cuenta. Incluyen asimismo información relativa a la
(FDS)
identificación de la sustancia y de los peligros, primeros auxilios, medidas en caso
de incendios o vertido, información toxicológica y ecológica, etc.
Diagrama de flujo
Es una representación esquemática de las fases del proceso de fabricación.
del proceso
Sistema APPCC Análisis de los peligros y controles de los riesgos asociados a todas las etapas
(Análisis de Peligros y del proceso de fabricación, así como los asociados a actividades transversales a
Puntos de Control Críticos) dicho proceso.
La certificación es el procedimiento mediante el cual un organismo independiente
da una garantía por escrito de que un producto, un proceso o un servicio
Certificaciones de Calidad
está conforme a los requisitos especificados. Algunas de ellas son: ISO 9001, ISO
14001, BRC, IFS, Halal o Kosher.
Tema 58.  Metodología para el diseño y desarrollo de productos de nutrición clínica 915

poder determinar su calidad nutritiva y adecuación al cáridos, celulosa, inulina, carboximetilcelulosa,


producto futuro final. etc.) y las proporciones entre ellas, seleccionando la
más adecuada tanto desde el punto de vista tecno-
•  Proteínas: el estudio del aminograma de una pro- lógico como terapéutico.
teína es un paso básico y necesario para el cálculo •  Minerales y vitaminas: estos nutrientes están condi-
de varios índices relacionados con la calidad nutri- cionados tanto en su forma química como en su
tiva de la proteína a nivel teórico, pero en algunos cantidad por el Reglamento (UE) Nº 609/2013 y el
casos en los que se utiliza una mezcla de varias Reglamento Delegado (UE) Nº 2016/128. Aunque
proteínas siguiendo el principio de complementa- en función de la patología a la que esté destinado
ción (mezcla de distintas fuentes proteicas con el producto, por ejemplo en las enfermedades re-
objeto de mejorar el perfil de aminoácidos de la nales, estas cantidades pueden variar y situarse fue-
combinación resultante) es conveniente realizar ra del marco legislativo, siempre y cuando se elabo-
un estudio biológico de biodisponibilidad protei- re un dossier documentando este hecho, aunque la
ca. En este estudio se obtienen el coeficiente de decisión sobre su aceptación final queda supedita-
digestibilidad verdadero, el valor biológico de la da a la valoración de la Administración.
proteína o el coeficiente de valoración neta, eva-
luando así la integridad química y las interferen- Para cada uno de los ingredientes seleccionados, se
cias metabólicas de los componentes proteicos realizarán una serie de ensayos preliminares acordes
seleccionados16, 17. con la función que van a desempeñar en el producto.
•  Hidratos de carbono: un parámetro importante a Se analizará, la estabilidad y la funcionalidad tecnoló-
la hora de evaluar un hidrato de carbono es su va- gica de cada uno de ellos, para así poder decidir los
lor de dextrosa equivalente (DE) que es una medida ingredientes definitivos que entrarán a formar parte de
del grado de hidrólisis de la molécula de almidón e los productos a desarrollar. Sobre los ingredientes se
indica el contenido de azúcares reductores expresa- realizan análisis y ensayos focalizados en valorar la dis-
do en porcentaje. En función del grado de DE, las persión o solubilidad, granulometría, estabilidad térmi-
propiedades físico-químicas y funcionales del in- ca, salina y rango óptimo de pH o la capacidad espu-
grediente cambian. Otra opción es utilizar hidratos mante. Con el análisis de los resultados obtenidos tras
de carbono de bajo índice glucémico, como es el estos ensayos se realiza una criba seleccionando aque-
almidón resistente tipo 4, aunque su uso depende- llos que mejor se adapten a la tecnología y a las propie-
rá de si el producto final está posicionado para pa- dades que queremos conferir al producto a desarrollar.
cientes con respuesta glucémica alterada. Cuando se han seleccionado todos los ingredientes
•  Lípidos: valorar la relación de ácidos grasos insa- que son susceptibles de ser usados en la nueva formu-
turados/saturados, así como su índice aterogénico lación, con ayuda de una aplicación para la generación
y trombogénico, seleccionando aquel que mejor de fórmulas, se calcula una que cumpla con todos los
se adecúe a la composición del producto a desa- requisitos definidos (tabla 2), ejemplo de receta con
rrollar. Generalmente, en la actualidad están enri- cantidades en gramos por cada 100 ml.
quecidos en ácidos grasos poliinsaturados n-3
debido a su demostrada acción antiinflamatoria18. Tabla 2.  Ejemplo de una receta de una fórmula para
Estas premisas dan lugar a perfiles grasos alta- nutrición enteral.
mente insaturados, que junto con los minerales
presentes en la fórmula haciendo de catalizadores Agua 79,24
(principalmente el hierro), pueden provocar un rá-
pido enranciamiento del producto, así como la Maltodextrina M 10,00
consiguiente generación de sustancias antinutriti- Proteínas de la leche P  5,00
vas, como son peróxidos. Por lo tanto, es impor-
tante estabilizar las grasas y someterlas a distintas Aceite vegetal V1  3,00
determinaciones, como por ejemplo RANCIMAT, Aceite vegetal V2  1,00
para determinar su resistencia a la oxidación.
•  Fibra: el tipo y la cantidad de fibra a utilizar estará Emulgente E  0,03
muy condicionado por las recomendaciones de uso Mezcla de minerales  0,50
que va a tener el producto, por ejemplo el uso de
goma guar parcialmente hidrolizada para la con- Mezcla de vitaminas  0,20
tención de las diarreas19. La fibra es un componen- Aroma A  1,00
te que va a afectar muy claramente a la viscosidad
de la fórmula desarrollada. También es importante Edulcorante E1  0,02
diferenciar entre el uso de fibra fermentable y no
Estabilizante Ea  0,01
fermentable, el origen de cada una (fructooligosa-
916 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

4.  Metodología para el desarrollo el tamaño de partícula de los ingredientes y aumentan-


de productos de nutrición clínica do la viscosidad del medio20.

El siguiente paso tras realizar el diseño teórico del pro-


ducto es esbozar una receta que contenga todos los
4.1.1. Suspensión
componentes necesarios para alcanzar los objetivos re- La meta en la mezcla es lograr la estabilidad, ya que
queridos, comenzando así los ensayos de formulación y las suspensiones son inestables, dando lugar a sedi-
proceso a escala laboratorio con las materias primas, mentación, o si debido a las fuerzas electrostáticas en-
ingredientes y tratamientos de elaboración y conserva- tre las partículas, se agrupan generando floculación.
ción para valorar solubilidad, viscosidad, sabor, etc. Esta Cuando el ingrediente en polvo entra en contacto
tarea implica una compleja interacción de factores técni- con un líquido, este penetra por capilaridad a través de
cos y comerciales. Es necesario valorar cuestiones tales los poros del grano aumentando el área de contacto.
como la interacción de los ingredientes con la matriz Pero esta capacidad de hidratación de los ingredientes
alimentaria o las tecnologías a emplear para conseguir depende a su vez de su naturaleza; en la tabla 3 se
un producto de elevadas cualidades nutricionales pero a pueden ver algunos aspectos negativos que pueden
la vez sensorialmente apetecible por los consumidores presentar los ingredientes en polvo al entrar en contac-
durante un amplio período de vida útil. Conjugando to con el agua.
ambos factores conseguiremos obtener diferentes pro- La adición de estabilizantes, como las gomas, reper-
totipos de producto a escala laboratorio. cute en un aumento de la viscosidad de la mezcla dismi-
nuyendo la decantación de las partículas. En este punto
4.1. Mezcla: adición de ingredientes, hay que buscar un equilibrio, dado que un exceso de
desaireación y homogeneización viscosidad, disminuye la capacidad de hidratación de los
ingredientes, y por lo tanto se debe aumentar el tiempo
Los productos de nutrición clínica son, en su mayo- de mezclado. Un factor a tener en cuenta es la elevada
ría, una combinación de agua con ingredientes líqui- cohesividad de estos compuestos, que, generalmente,
dos (formando una emulsión) y en polvo (formando requieren de un proceso previo de mezcla con otros que
una suspensión), por lo tanto el establecimiento del faciliten su dispersión. Los grumos reducen la estabili-
proceso de recombinación de los mismos es el primer dad del producto favoreciendo la sedimentación y pue-
paso del desarrollo. Una mezcla realizada de manera den generar problemas de esterilidad en el producto fi-
eficiente mejora la uniformidad del producto, su poste- nal, ya que el tratamiento puede no ser efectivo si la
rior procesado y, por lo tanto, su calidad. temperatura no penetra hasta el interior del grumo.
Los defectos que se pueden encontrar más habitual- El aire puede incorporarse a la mezcla por la acción de
mente en una mezcla son los que se reflejan en la figura 1. batido al agregar los ingredientes y estabilizarse forman-
La teoría de la sedimentación viene determinada por do espuma. La inclusión de aire en productos tratados
la ley de Stokes: térmicamente puede afectar a la calidad del mismo, por
lo que hay que minimizarla trabajando a vacío. Los efec-
d2(p1 – pfl) tos negativos del aire ocluido son: oxidación de nutrien-
V= g
18 n tes (grasas, vitaminas, minerales, etc.), cavitación en el
homogeneizador o transmisión de calor deficiente, y
Según esta ecuación, la velocidad de sedimentación por lo tanto, tratamiento térmico insuficiente21.
de las partículas depende del tamaño de la misma (d),
de la densidad de la partícula (p1) y del medio (pfl), de
4.1.2. Emulsión
la viscosidad (n), siendo g la constante de gravedad.
Por lo tanto, teniendo en cuenta estos parámetros, la Los ingredientes grasos de las fórmulas de nutrición
estabilidad de la suspensión se fomentará reduciendo clínica se adicionan, generalmente, en forma de aceite,

Defectos de la suspensión Defectos de la emulsión


Óptimo
Sedimentación Floculación Creaming Coalescencia

Figura 1.  Defectos que se pueden encontrar más habitualmente en una mezcla.
Tema 58.  Metodología para el diseño y desarrollo de productos de nutrición clínica 917

Tabla 3.  Comportamiento de ingredientes en contacto con agua20.

Elevada Baja
Tipo de ingrediente Espuma Grumos
viscosidad solubilidad
Leche desnatada en polvo •
Maltodextrina •
Proteína de suero •
Cacao en polvo • •
Caseinato •
Almidón •
Gomas • •

por lo que hay que formar una emulsión estable con el


agua para evitar que aparezcan defectos como el crea-
ming o la coalescencia.
La diferencia de densidad entre los líquidos de la 250 bar
emulsión hace que las gotas de aceite suban a la super- 100 bar
sin homo
ficie dando lugar al efecto creaming, teniendo en cuenta
la ecuación de Stoke, este efecto se ralentiza disminu-
yendo el tamaño de las partículas mediante un proceso
de homogeneización. La homogeneización consiste en
Tamaño de partículas, micras
la aplicación de presión a líquidos que salen a través de
unos pequeños canales regulables favoreciendo la dis- Figura 3.  Efecto de la presión de homogeneización
minución del tamaño de partícula (figuras 2 y 3). sobre el tamaño de las partículas22.
En la figura 3 se representa el efecto de la presión de
homogeneización frente el tamaño de partícula; así, a
mayor presión ejercida, más se reduce el tamaño de la homogeneización sobre una mezcla da como resultado
partícula. Sin embargo, este proceso genera una elevada un producto uniforme y de mejor palatabilidad.
tensión interfacial en la mezcla que favorece la coales- Por lo tanto, en la fase de mezclado de los ingredien-
cencia. Este hecho se minimiza mediante el uso de agen- tes hay que definir, al menos, los siguientes paráme-
tes emulsionantes como son las proteínas o los emulgen- tros: el orden de adición de los ingredientes, si estos
tes. En consecuencia, la aplicación del tratamiento de deben ir premezclados, la velocidad de la agitación, el
vacío del desaireador, la presión del homogeneizador y
los tiempos de rehidratación.
Producto Un factor muy importante que no se ha nombrado
hasta el momento es la temperatura. Una temperatura
de trabajo media, favorece la solubilidad de los ingre-
dientes, facilita la desaireación y el proceso de homo-
Asiento geneización; por el contrario, puede favorecer el creci-
miento microbiano y ejercer un efecto desestabilizador
en proteínas y nutrientes termolábiles, como se expone
Anillo de impacto en el siguiente apartado.

4.2.  E stabilidad: interacciones entre


Producto ingredientes, efecto del pH y de la
homogeneizado temperatura
Uno de los componentes principales en las fórmulas
de nutrición clínica son las proteínas. La estabilidad de
Válvula estas moléculas presenta cambios en función de la
fuerza iónica, la constante dieléctrica del medio, el pH
Figura 2.  Esquema de la acción de un homogeneizador. y la temperatura. La variación de estos parámetros mo-
918 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

difica el estado de la proteína, perdiendo su capacidad 100


de mantenerse en disolución y alterando la calidad del 90
producto final. Dado que la base de rehidratación en 80
estos productos es siempre acuosa, la constante dieléc- 70

% solubilidad
trica del medio permanece constante y no es un factor 60 Prot. Pescado
limitante. 50 Prot. Caseinato
40 Prot. Suero
30 Prot. Soja
4.2.1.  Fuerza iónica
20
Las sales tienen una elevada capacidad de influir en la 10
solubilidad de las proteínas en función de su fuerza ióni- 0
2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12
ca. A baja concentración, las sales incrementan la solu- pH
bilidad de muchas proteínas, fenómeno que recibe el
nombre de solubilidad por salado o salting in, en el que Figura 5.  Variación de la solubilidad de diferentes
los contraiones adicionales recubren con mayor eficacia proteínas en función del pH del medio24.
las numerosas cargas iónicas de las moléculas proteicas,
incrementando la solubilidad de las mismas. Por otra
parte, a medida que la fuerza iónica aumenta, la solubi- Un factor adicional que se presenta a la hora de de-
lidad de una proteína comienza a disminuir. Cuando la sarrollar un nuevo producto de nutrición clínica es la
fuerza iónica es lo suficientemente elevada, una proteí- tendencia a utilizar proteínas de diferentes orígenes en
na pasa a ser completamente insoluble, efecto llamado una misma fórmula, por lo que respecto a los factores
insolubilización por salado o salting out (figura 4). de fuerza iónica y pH se debe llegar a una situación de
Como se ha comentado anteriormente, los produc- compromiso, puesto que cada tipo de proteína posee
tos de nutrición enteral poseen una elevada concentra- unos valores propios para estos parámetros.
ción de sales para hacer frente a las necesidades diarias
de los individuos que la consumen, por lo que este fac- 4.2.2.  Temperatura
tor es importante ajustarlo a la hora de desarrollar los
Cuando la temperatura de trabajo es elevada se
productos.
aumenta la energía cinética de las moléculas, con lo que
La solubilidad de la mayor parte de las proteínas se
se desorganiza la envoltura acuosa de las proteínas, dan-
halla profundamente influida por el pH del medio. El
do lugar a la desnaturalización. Asimismo, se destruyen
pH al que una proteína muestra un mínimo de solubili-
las interacciones débiles y se desorganiza la estructura
dad es su pH isoeléctrico, definido como aquel valor de
interna de la proteína, de forma que el interior hidrofóbi-
pH en el que la molécula no posee carga y es incapaz de
co interacciona con el medio acuoso, produciéndose la
desplazarse en un campo eléctrico. En estas condicio-
agregación y precipitación de la molécula desnaturaliza-
nes no existe repulsión electroestática entre las molécu-
da. La solubilidad de las proteínas aumenta con la tem-
las de proteína adyacentes y tienden a precipitar. El pH
peratura hasta alrededor de los 40 °C, a partir de ese
óptimo de trabajo para las proteínas lácteas se encuen-
valor el efecto es el contrario y comienza la desnaturali-
tra en torno a la neutralidad, como podemos ver en la
zación, que es muy acusada a partir de los 75 °C25.
figura 5.
4.3. Influencia del tratamiento térmico en los
atributos del producto
Solubility
Tras realizar el proceso de mezcla de los distintos in-
gredientes que componen un producto de nutrición
clínica, el siguiente paso es someterlo a un tratamiento
térmico. El tratamiento térmico busca la esterilidad co-
mercial mediante la destrucción de los microorganis-
mos patógenos, incluso en sus formas esporuladas y
de los banales que son capaces de alterar el alimento,
Hydrate minimizando, las propiedades del alimento.
Salting in Si los tratamientos térmicos son intensos, pueden
shell
Salting out alterar la calidad del producto desde el punto de vista
organoléptico (sabor a cocido o quemado, pardea-
Salt concentration miento), físico-químico (separación de fases, coagula-
ción, reacciones enzimáticas) y nutricionales (pérdida
Figura 4.  Esquema de solubilidad de las proteínas de nutrientes termolábiles). Por lo tanto, se debe inves-
versus concentración de la sal en la técnica salting-out23. tigar hasta encontrar la mejor combinación del bino-
Tema 58.  Metodología para el diseño y desarrollo de productos de nutrición clínica 919

mio tiempo-temperatura para el tratamiento térmico a vitaminas, sobre todo las hidrosolubles B1, B6, B12
aplicar. Esto abre un amplio abanico de posibilidades y y ácido fólico, que son las menos estables al calor.
combinaciones posibles que variarán en función de las Las pérdidas de vitamina C además de por el calor,
características del producto final. Los parámetros selec- también están condicionas por otras características
cionados deben ser tales que la destrucción de esporas del proceso como son el oxígeno ocluido o la pre-
sea satisfactoria y, al mismo tiempo, que el daño pro- sencia de catalizadores de la oxidación como los me-
ducido al producto por el calor sea el menor posible22. tales aportados en la formulación (cobre, hierro o
zinc).
4.3.1.  Atributos organolépticos Estás pérdidas producidas en el tratamiento también
se producirán a lo largo de la vida útil y deben ser eva-
Las reacciones de Maillard y de pardeamiento no en- luadas para sobredimensionarlas en la fórmula y com-
zimático tienen como sustratos azúcares que reaccio- pensar la degradación27.
nan con los grupos amino de los aminoácidos que com-
ponen las proteínas. En algunos casos son reacciones
deseables y fomentadas, como en el tostado del pan o 5. Controles necesarios durante el desarrollo
del dulce de leche. Pero en los productos de nutrición A lo largo de todo el proceso de desarrollo y tras
clínica no lo son, ya que resultan ser indicadores de una cada ensayo realizado hay que evaluar la idoneidad de
calidad mermada, ya sea por un exceso de tratamiento la muestra resultante, para ello se realizarán una serie
térmico o por un prolongado almacenaje. de controles similares a los que se llevarían a cabo en
Los productos resultantes de estas reacciones son un producto final para valorar los diferentes atributos y
compuestos de alto peso molecular denominados me- determinar su viabilidad a la hora de trabajar a una
lanoidinas que son las responsables del color marrón y mayor escala:
de los sabores a tostado a los que dan lugar en los
productos, disminuyendo la calidad por alteración de •  Microbiológicos: es necesario confirmar si el bino-
sus atributos sensoriales26. mio tiempo-temperatura seleccionado para el tra-
El cuidado del perfil organoléptico de cualquier pro- tamiento térmico es efectivo, para ello las mues-
ducto es fundamental, pero más aún si cabe en el caso tras obtenidas tras el tratamiento deben incubarse
de productos de nutrición enteral, donde es necesario a distintas temperaturas y tiempos antes de reali-
enmascarar el mal sabor y olor que generan ingredien- zar el análisis microbiológico que confirme la este-
tes habitualmente utilizados como aceites de pescado, rilidad del producto y su inocuidad desde el punto
minerales, vitaminas, aminoácidos o nucleótidos, entre de vista de seguridad alimentaria.
otros. Si este tipo de productos no resultan mínima- •  Físico-químicos: durante el proceso de reconstitu-
mente apetecibles, el paciente no los consumirá y no se ción de cada ensayo y en cada fase del mismo, se
podrá nutrir adecuadamente. realizan varias medidas para controlar y caracteri-
zar el proceso y así determinar cuál es el más ade-
4.3.2.  Atributos físico-químicos cuado. Para ello se realizan medidas de acidez,
La inestabilidad proteica generada por acción del ca- ajustando el pH en caso necesario. También se rea-
lor afecta de manera determinante a la viscosidad del lizan determinaciones de extracto seco para confir-
producto. Si la proteína no se encuentra estabilizada mar que la relación agua/sólidos es la correcta y se
correctamente (adecuado pH, tiempo de hidratación y controla el volumen efectivo, además de definir los
fuerza iónica) el incremento de temperatura hará que tiempos y temperaturas de trabajo más adecuados
se desestabilice con mayor facilidad coagulando en el en cada paso. También se realizan determinaciones
medio y por lo tanto aumentando la viscosidad. La vis- de la distribución del tamaño de partícula para
cosidad es un parámetro que afecta directamente a la comprobar la efectividad de la homogeneización y
administración de los productos de nutrición enteral de las presiones aplicadas y el número de fases se-
vía sonda, ya que, si es excesiva puede llegar a obstruir- leccionadas.
la generando graves problemas. Asimismo, se realizan medidas de viscosidad, que
Asimismo, esta microcoagulación proteica por exce- como se ha comentado en el aparatado anterior,
so de calor da lugar a una sensación trigeminal de are- es un indicativo de la estabilidad de la fórmula y
nosidad en boca que hace disminuir la palatabilidad un parámetro clave para la administración por
del producto. sonda de estos productos.
•  Estabilidad térmica de la proteína: con la muestra
final obtenida tras un determinado ensayo, se rea-
4.3.3.  Atributos nutricionales
lizan las pruebas de estabilidad al alcohol y de fos-
Los tratamientos térmicos como la pasteurización fato para determinar la estabilidad proteica y con-
o la esterilización UHT originan pocos cambios en el firmar que no existe coagulación que pueda alterar
valor nutritivo. Los nutrientes más sensibles son las la calidad del producto.
920 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

La prueba del alcohol consiste en añadir alcohol al materiales y energía y calcular los rendimientos, una
producto con diferente graduación, comprobando vez confirmada la fidelidad de la reproducción del mo-
que no existen microcoagulaciones. Cuanto mayor delo inicial, para poder hablar de que un producto es
es la graduación empleada, más hidratada se en- factible técnicamente.
cuentra la proteína y más estabilidad presenta. El producto resultante de los ensayos en caso de re-
La determinación de estabilidad al fosfato se fun- sultar conforme y similar al realizado a menor escala
damenta en someter el producto a un medio áci- puede ser empleado para la ejecución de los estudios
do y a la aplicación de calor y comprobar la exis- de vida útil que permiten establecer las fechas de con-
tencia o no de coagulación de la muestra. Cuanto sumo preferente que aparecerán marcadas en la eti-
menor sea el pH al que coagula el producto mayor queta. La culminación con éxito de esta etapa implica
es la estabilidad del mismo. su aptitud para pasar a trabajar con el volumen están-
•  Nutricional: se debe realizar un análisis nutricional dar de plantas de producción. Esta etapa constituye la
para confirmar el cumplimiento de la propuesta escala preseries de producción industrial que indica la
inicial recibida, y ajustar aquellos parámetros que aptitud para iniciar todos los trámites necesarios que
no se encuentren dentro de los rangos. Una de las permiten el lanzamiento del producto al mercado.
referencias más utilizadas a nivel europeo para fi- En muchas ocasiones, la producción industrial no
jar los rangos de trabajo permitidos es la guía para se considera una parte del proceso de investigación y
el control del cumplimiento de la legislación euro- desarrollo y esto constituye un error conceptual, ya
pea en relación al establecimiento de las toleran- que es una prueba más de la validación de las etapas
cias para los valores de los nutrientes declarados previas28, 29. Cuando alcanzamos esta etapa valora-
en una etiqueta de febrero 2012. mos la idoneidad del producto a la hora de trabajar
•  Organoléptico: se realizan degustaciones a nivel en «condiciones normales» de producción. Tras con-
interno para valorar y seleccionar las muestras que formidad de resultados al ampliar la escala desde el
más se ajusten al perfil organoléptico indicado en semiindustrial, este producto puede ser destinado a
la propuesta inicial, valorando el color, olor, sabor pruebas de mercado y estudios clínicos. La finaliza-
y textura, principalmente. ción de esta etapa con éxito permite el lanzamiento
del producto al mercado.
Una vez alcanzados los atributos adecuados desde el Las primeras fabricaciones tras el lanzamiento son
punto de vista microbiológico, físico-químico, estabili- consideradas aún en proceso de estandarización, don-
dad y organoléptico y con todos estos resultados con- de es necesario realizar un seguimiento para valorar la
formes, el producto estaría en situación de ser presen- necesidad o no de pequeños ajustes en la fórmula o las
tado a un panel de catadores experto cuya aprobación condiciones de proceso, tras lo cual las producciones
implicaría el fin del trabajo a escala laboratorio y su pasarían a estar estandarizadas y se consideraría finali-
idoneidad para pasar a una escala semiindustrial. zado el proceso de diseño y desarrollo.

6. El proceso de escalado y su validación 7.  Controles de producto y estudios de vida


útil
Se define como escalado al proceso necesario para
alcanzar la producción industrial a partir de un logro En el apartado anterior se ha descrito cómo se lleva
científico a nivel del laboratorio (ICIDCA, 1992). Dentro a cabo el proceso de «transformar» un prototipo a es-
del proceso de diseño y desarrollo de cualquier produc- cala laboratorio hasta un producto final mediante un
to aparece la problemática de cómo reproducir a nivel proceso de escalado donde se va valorando de forma
de producción industrial los modelos obtenidos en el secuencial el cumplimiento de atributos en volúmenes
laboratorio. El escalado generalmente se realiza según de trabajo crecientes. En todo este proceso de escalado
las sucesivas etapas: laboratorio, planta piloto o semi- se van efectuando controles que determinan el grado
industrial y producción industrial. de ajuste del producto con respecto al prototipo ini-
Para definir los volúmenes entre una escala y otra cialmente desarrollado a escala laboratorio. Por otra
hay una amplia variedad de criterios, aunque en la ma- parte, en cada una de las etapas el producto resultante
yoría de los casos se utiliza la capacidad de los equipos puede ser empleado para llevar a cabo otros estudios
disponibles. cuyos resultados son necesarios antes de efectuar el
Trabajar a escala semiindustrial significa reproducir lanzamiento de un producto al mercado, como es el
el protocolo diseñado a escala laboratorio en planta de caso de los estudios de vida útil que permiten el mar-
producción en una cantidad que, si bien no es la canti- caje de la fecha de consumo preferente en el etiqueta-
dad normal dentro de una determinada planta, sí es un do del producto final.
volumen significativamente superior al que se maneja Los controles que son necesarios en las etapas semiin-
a escala laboratorio. El ensayo semiindustrial también dustrial y preseries (escala con volumen industrial, simi-
se utiliza para determinar más en detalle los gastos en lar a las fabricaciones) son similares a los que se llevan a
Tema 58.  Metodología para el diseño y desarrollo de productos de nutrición clínica 921

cabo con el producto a escala laboratorio, de manera das en la evidencia (DNABE) debe hacerlo también, y
que podamos asegurar que se reproducen los resulta- dictar cuál es la mejor práctica dietético-nutricional.
dos al ampliar el volumen de trabajo y estos asimismo En este sentido, y teniendo en cuenta que los estudios
son acordes con los requisitos pedidos en la propuesta se clasifican como experimentales, observacionales, de
inicial y con lo que sería necesario marcar en el etiqueta- revisión y de consenso, los productos de nutrición ente-
do. De este modo son efectuados el mismo tipo de con- ral suelen evaluarse, de manera general, siguiendo un
troles microbiológicos, físico-químicos, de estabilidad diseño de tipo experimental. Estos a su vez pueden ser
térmica, nutricionales y organolépticos y con las mismas ensayos clínicos controlados y aleatorizados o no aleato-
tolerancias que se describieron en el apartado 5. rizados y ensayos clínicos no controlados33.
La normativa vigente referente a la información ali- La calidad de la evidencia obtenida de estos estudios
mentaria facilitada al consumidor, Reglamento (UE) se presenta en la tabla 4. Como se muestra en ella, a fin
1169/2011, obliga a incluir la fecha de duración mínima de obtener un nivel de evidencia adecuado (I y II) lo re-
de un alimento, que es la fecha hasta la que el alimento comendable es diseñar el estudio para que sea experi-
conserva sus propiedades específicas cuando se almace- mental, prospectivo (con respecto a la temporalidad del
na correctamente. A través de los estudios de vida útil se estudio), aleatorizado (asignación de la dieta al azar),
establece esta fecha de duración mínima, que aparecerá multicéntrico (para conseguir un elevado número de pa-
en la etiqueta del producto tras la frase «consumir pre- cientes que cumpla con los criterios de inclusión) y doble
ferentemente antes del fin de …», se debe indicar el mes ciego (donde ni el sujeto ni el observador conocen el
y el año cuando la duración del producto sea superior a brazo del estudio asignado). Los estudios experimenta-
tres meses, pero sin sobrepasar los dieciocho, como es el les con un diseño cuidadoso y con un tamaño muestral
caso de la mayoría de estos productos. suficiente, un proceso de aleatorización adecuado, una
Un estudio de vida útil debe realizarse sobre un nuevo intervención y seguimiento controlados proporcionan
desarrollo o sobre un producto estandarizado que ha evidencias sólidas que permitirán emitir juicios sobre la
sufrido modificaciones en su procesado (instalaciones, existencia de relaciones causales entre variables35.
cambio de equipos, condiciones de tratamiento, envase, Una vez definido el diseño del estudio, este protoco-
etc.), ya que todos estos factores pueden alterar la evo- lo debe ser aprobado por los Comités de Ética de los
lución con el tiempo del mismo. Además, cada produc- centros donde se realizará el ensayo, de acuerdo con la
to evoluciona de una manera distinta y estos cambios Ley 14/2007 y metodología acorde con el Real Decreto
afectan a atributos como, por ejemplo, la rancidez, la 223/2004.
pérdida de vitaminas, el aumento de viscosidad o la dis- Un factor importante a destacar en cualquier proce-
minución de las cualidades sensoriales. Aunque estas so de diseño y desarrollo de productos de nutrición
últimas son las más rápidamente percibidas por el usua- enteral es la posibilidad de patentar el producto desa-
rio del producto, hay otros parámetros que establecen el rrollado, un núcleo funcional del mismo o, incluso, el
final del estudio, como son el incumplimiento del eti- procesado. Los requisitos para la concesión de paten-
quetado nutricional o el crecimiento microbiano30, 31. tes es que sean nuevas, es decir, que no esté compren-
En general, el establecimiento de la vida se puede dida en el estado de la técnica, siendo esta toda la in-
basar en un histórico de datos, productos análogos o formación accesible al público en el momento de la
bibliografía científica, aunque siempre se recomienda solicitud. Debe implicar actividad inventiva si aquella
hacer un ensayo específico. Los ensayos prácticos de no resulta del estado de la técnica de forma evidente
vida se pueden clasificar de manera general en: a tiem- para un experto en la materia y, además, debe tener
po real, acelerados, predictivos o de supervivencia. aplicación industrial, lo que supone que puede ser fa-
El diseño del estudio de vida útil depende de la natu- bricada o utilizada en cualquier industria en el sentido
raleza del producto a evaluar; así, para un producto de más amplio.
nutrición enteral los análisis más importantes pueden Patentar es un proceso largo pero que repercuten en
ser: microbiología, viscosidad, vitaminas y organolépti- una serie de beneficios como son tener una ventaja
co, entre otros. Además de establecer la cantidad de competitiva, mayor rendimiento de las inversiones,
muestra necesaria, el tiempo, temperatura y humedad mayor facilidad para el acceso a nuevos mercados, re-
del estudio, también hay que indicar la frecuencia de duce los riesgos de infringir los derechos de otros, ma-
análisis y los rangos de aceptabilidad para cada pará- yor capacidad para obtener financiación, y da lugar a
metro, fuera de los cuales se considera al producto no una imagen muy positiva de la organización que las
apto y, por lo tanto, el final del estudio32. posee, proyectando una imagen innovadora36, 37.
La descripción y las reivindicaciones que se hacen de
la invención al solicitar una patente deben estar avala-
8. Evaluación clínica de productos
das y correctamente documentadas. Para lo cual, en
De la misma forma que la medicina basada en la muchas ocasiones, se utilizan los resultados de las eva-
evidencia ha evolucionado y actualmente determina la luaciones realizadas. Por todo ello es muy importante
práctica clínica, la dietética y la nutrición aplicada basa- proceder a la solicitud antes de cualquier comunica-
922 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

Tabla 4.  Niveles de calidad de la evidencia científica34.

Fuerza de la
Nivel Tipo de diseño Condiciones de rigurosidad científica
evidencia
Análisis de datos individuales de los pacientes
Sin heterogeneidad
Diferentes técnicas de análisis
I Adecuada Metanálisis de ECA
Metarregresión
Megaanálisis
Calidad de los estudios
Evaluación del poder estadístico
II Adecuada ECA de muestra grande Multicéntrico
Calidad del estudio
Evaluación del poder estadístico
III Buena a regular ECA de muestra pequeña
Calidad del estudio
Controles coincidentes en el tiempo
Ensayo prospectivo controlado no
IV Buena a regular Multicéntrico
aleatorizado
Calidad del estudio
Ensayo retrospectivo controlado Controles históricos
V Regular
no aleatorizado Calidad del estudio
Multicéntrico
VI Regular Estudios de cohorte Apareamiento
Calidad del estudio
Multicéntrico
VII Regular Estudios de casos y controles
Calidad del estudio
Series clínicas no controladas
Estudios descriptivos:
  Vigilancia epidemiológica
 Encuestas
VIII Pobre  Registros Multicéntrico
  Bases de datos
Comités de expertos
Conferencias de consenso
IX Pobre Anécdotas o casos únicos –
ECA: ensayo controlado aleatorizado.

ción o publicación, ya que no hacerlo así implicaría la 9. Preparación para la fase de


pérdida de la novedad y por lo tanto de la patente. comercialización y lanzamiento al mercado
Con los resultados de las evaluaciones realizadas se
puede proceder a la publicación y/o comunicación de Una vez que el producto ha superado con éxito la
los resultados. Estos estudios pueden demostrar la efi- fase de escalado desde el punto de vista tecnológico,
cacia de los productos para el fin para el que se han se ha realizado el estudio de vida útil y dispone de evi-
desarrollado y dan por finalizado el proceso de valida- dencias sobre su aplicación clínica está listo para iniciar
ción del producto. Las comunicaciones se pueden rea- su comercialización.
lizar a través de la asistencia a congresos, revistas na- El primer paso para el registro de un producto enteral
cionales o internacionales con un determinado índice como alimento para usos médicos especiales es la solici-
de impacto, etc. tud de un número de registro específico a la administra-
Tema 58.  Metodología para el diseño y desarrollo de productos de nutrición clínica 923

ción regional. Además, si se quiere solicitar la financia- 11. Bibliografía


ción del Sistema Nacional de Salud se debe proceder
con lo indicado en el Real Decreto 1205/2010, de 24 de   1. Fundación Cotec para la Innovación Tecnológica.
septiembre, por el que se fijan las bases para la inclusión Innovación tecnológica. Ideas Básicas. [Internet].
de los alimentos dietéticos para usos médicos especiales Madrid: COTEC; 2001. [citado el 14 de Nov. de
en la prestación con productos dietéticos del Sistema 2016]. Disponible desde: http://informecotec.es/
Nacional de Salud y para el establecimiento de sus im- media/J05_Innov_Tec_Ideas_Basic.pdf
portes máximos de financiación. Aquí hay dos variantes,  2. OECD (2015). Frascati Manual 2015: Guidelines
la financiación de dietas estándar o la de dietas destina- for Collecting and Reporting Data on Research and
das a patologías específicas. La inclusión en este último Experimental Development. The Measurement of
apartado requiere de la aportación de bibliografía, do- Scientific, Technological and Innovation Activities,
cumentación y estudios clínicos que avalen los benefi- OECD Publishing, Paris. 10/8/15.
cios del producto en la patología en cuestión.   3. UNE 166000: 2006 EX. Gestión de la I+D+i. Termi-
Desde el punto de vista del desarrollo, se realiza un nología y definiciones de las actividades de I+D+i.
dossier del producto que recopilará toda la informa-   4. UNE 166002: 2006 EX. Gestión de la I+D+i. Re-
ción relativa al mismo. Este dossier debe contener las quisitos del sistema de gestión de la I+D+i.
características de los ingredientes que lo forman, el   5. UNE 166006: 2006 EX. Gestión de la I+D+i. Sis-
modo y los parámetros del procesado, controles a rea- tema de Vigilancia Tecnológica.
lizar, rangos de trabajo y liberación, el estudio de vida   6. http://estudiodefactibilidadyproyectos.blogspot.
útil, las evaluaciones clínicas y publicaciones, así como, com.es/2010/09/factibilidad-y-viabilidad.html.
la etiqueta, el argumentario y la especificación/ficha   7. UNE 166001: 2006 EX. Gestión de la I+D+i. Re-
técnica del producto desarrollado. Este dossier debe quisitos de un proyecto de I+D+i. Mayo de 2006.
actualizarse y mantenerse con todos los cambios que   8. http://www.vegenat.es/.
vayan surgiendo durante la vida del producto.   9. Ulibarri JI, Burgos R, Lobo G, Martínez MA, Planas
M, Pérez de la Cruz A, Villalobos JL; Grupo de Tra-
bajo de Desnutrición de SENPE. Recommendations
10. Resumen for assessing the hyponutrition risk in hospitalized
La investigación y desarrollo es un factor de gran im- patients. Nutr Hosp. 2009;24(4):467-72.
portancia en el crecimiento de cualquier organización. 10. Burgos R, Virgili N, Sarto B. Desnutrición y enfer-
El proceso de diseño y desarrollo de un nuevo produc- medad. En: Gil A, editor. Tratado de Nutrición,
to de nutrición clínica consta de una serie de etapas que Tomo IV. Madrid: Editorial Médica Panamericana.
pasan, en primer lugar, por la identificación del tipo de 2010. p. 1-22.
producto más «interesante» para la empresa en base a 11. Álvarez J, García de Lorenzo A. Codificación de la
las necesidades de los pacientes, las tendencias del mer- desnutrición hospitalaria, la vigencia de una frase.
cado y la viabilidad técnica y económica que dicho pro- Nutr Hosp. 2008; 23(6):529-30.
ducto tenga dentro de la organización. Con esta idea 12. Martínez J. F, Navarro I. Principios generales. En:
inicial se efectúa el diseño de la formulación del produc- Mesejo A, Martínez J.F, Martínez C, editores. Ma-
to, en base a la revisión de la bibliografía especializada e nual básico de nutrición clínica y dietética. Hospital
información técnica de los componentes, y se llevan a Clínico Universitario de Valencia. 2012. p. 14-30.
cabo las pruebas del desarrollo a escala laboratorio. Se 13. Martínez Rodríguez, L. J. Cómo buscar y usar in-
deben controlar todos los parámetros que pueden resul- formación científica: Guía para estudiantes univer-
tar críticos en el producto durante su fabricación y co- sitarios 2013. Santander, España: Universidad de
mercialización a lo largo de la vida útil. Cantabria. 2013.
Una vez obtenido un prototipo factible a escala labo- 14.  Legislación y publicaciones de la UE. Disponible
ratorio y acorde con las necesidades planteadas en el desde: http://eur-lex.europa.eu/homepage.html?lo
diseño inicial, se comienza un proceso de escalado en cale=es.
el cual se realiza una verificación de la reproducibilidad 15. Ministerio para la Presidencia y para las Adminis-
del diseño del producto cuando se trabaja a mayores traciones Territoriales. Gobierno de España. Dispo-
volúmenes, hasta llegar al volumen estándar de una nible desde: https://www.boe.es/legislacion/legis-
producción industrial. Los estudios del producto enva- lacion.php.
sado en esta etapa permiten, asimismo, efectuar los 16. Martínez O, Martínez de Victoria E. Proteínas y
controles necesarios para la determinación de la vida péptidos en nutrición enteral. Nutrición Hospitala-
útil y su validación clínica a fin de acreditar su idoneidad ria 2006, 21 (2). p. 1-14.
para el fin para el que ha sido diseñado. 17. Pérez-Llamas F, Larqué E, Zamora S. Calidad nutri-
La finalización con éxito de estas actividades permite tiva de los alimentos. En: Gil A, editor. Tratado de
iniciar las actividades relativas a la comercialización y Nutrición, Tomo II. Madrid: Editorial Médica Pana-
lanzamiento del producto al mercado. mericana. 2010. p. 561-583.
924 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

18. Olza J, Mesa MD et al. Influence of an eicosapen- 28. González R. Principios básicos de escalado. Ciudad
taenoic and docosahexaenoic acid enriched ente- de Matanzas: Editorial Universitaria, 2000.
ral nutrition formula on plasma fatty accid compo- 29. Viña S, Concepción E, Martinez R. La ingenieriza-
sition and biomarkers of insulin resistance in the cion y la ingenieria concurrente em los proyectos
elderly. Clinical Nutrition 2010 (29): 31-37. de la industria farmaceutica y la biotecnologia.
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21. Kreith F, Manglik RM, Bohn MS. Principios de trans- 32. Rufián-Henares J A, Guerra-Hernandez E, Gar-
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cin_26_propiedades_de_hidratacin_dependientes_ cionista del futuro.
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de Santos. 1999. p. 377-387.
Tema 59. 
Nutrición basada en la evidencia
María Dolores Ballesteros Pomar
Ana Hernández Moreno
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial Universitario. León

Adrián Arés Luque


Servicio de Neurología. Complejo Asistencial Universitario. León

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 925-935.

 1.  Medicina basada en la evidencia


 2.  Limitaciones a la práctica clínica basada en la evidencia
 3.  Pasos para la práctica de la medicina basada en la evidencia
 4.  De la MBE a la NuBE
 5.  Problemas específicos de la NuBE
 6.  La MBE y las guías de práctica clínica: niveles de evidencia y grados de recomendación
 7.  Análisis crítico de las guías de práctica clínica
 8.  Guías de práctica clínica en nutrición
 9. Conclusiones
10. Bibliografía

1.  Medicina basada en la evidencia El término evidence based medicine fue utilizado por
primera vez en 1991 en un editorial de la revista ACP
En los últimos años, estamos asistiendo a un cambio Journal Club2. Comenzó a difundirse al año siguiente,
radical en la práctica médica. Dos son las razones prin- cuando un grupo de internistas y epidemiólogos clíni-
cipales de este cambio. Por un lado, la existencia de cos vinculados a la Universidad Mc Master en Canadá,
una variabilidad injustificada en la práctica clínica; por liderado por David Sackett y Gordon Guyatt, constituyó
otro, la constatación de que muchas decisiones habi- el grupo de trabajo de MBE3, 4. Este grupo planteó «un
tuales no están fundamentadas en los datos disponi- nuevo paradigma para la práctica de la medicina que
bles en el momento actual, a la par que muchas medi- resta importancia a la intuición, la experiencia clínica
das de reconocida eficacia no se aplican de forma no sistemática y la base fisiopatológica, y resalta la im-
generalizada. Tradicionalmente, las decisiones clínicas portancia de las pruebas (evidences) procedentes de la
se han apoyado en la experiencia clínica, el razona- investigación para la toma de decisiones clínicas». Se-
miento fisiopatológico, el sentido común o la simple gún definición del propio Sackett5, la MBE «es el uso
intuición. En 1990, la Office of Technology Assessment consciente, explícito y juicioso de las mejores y más
del Congreso de EEUU estimaba que menos del 10% actuales evidencias o pruebas en la toma de decisiones
de los cuidados médicos habituales se basaban en sobre el cuidado de los pacientes». La MBE parte de la
pruebas1. En 1991, un editorial del British Medical necesidad de mejorar nuestra atención a los pacientes
Journal aumentaba este porcentaje tan solo a un 15% y requiere, por parte del médico, el conocimiento y de-
de los mismos2. Este cambio que, como hemos men- sarrollo de nuevas habilidades, que incluyen una bús-
cionado, se ha producido en los últimos años persigue queda eficiente de la literatura científica y una evalua-
que cada vez un mayor número de nuestras decisiones ción crítica y razonada de la misma. Su puesta en
estén sustentadas en los datos arrojados por ensayos práctica implica dos principios fundamentales: por un
clínicos o metanálisis. Este modelo se ha denominado lado, requiere una jerarquización de la evidencia dispo-
evidence based medicine o «medicina basada en la evi- nible para guiar la decisión clínica; por otro, propugna
dencia» (MBE)2. que la evidencia por sí sola no es nunca suficiente para

925
926 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

tomar una decisión. Los clínicos deben, además, consi- pruebas que las sustenten, y es ahí donde surge la
derar los riesgos y beneficios, los inconvenientes y los MBE: a partir de las limitaciones de la práctica clínica
costes asociados a cada decisión y a sus alternativas, y habitual. Esto hace que, de vez en cuando, asistamos a
tener en cuenta los valores y preferencias de los pacien- nuevos descubrimientos que desautorizan dicha prác-
tes en el desarrollo de todo este proceso6. En la tabla 1 tica clínica.
se recogen los conocimientos y habilidades necesarios Por otra parte, el flujo de información médica dispo-
para una óptima práctica clínica basada en la eviden- nible hoy en día hace prácticamente imposible mante-
cia. Ejercer la MBE significa, en último término, inte- nerse actualizado para realizar una práctica médica
grar la competencia clínica individual, adquirida a par- solvente. Grol9 calculó en 2001 que un internista nece-
tir de la experiencia y la práctica clínica, con la mejor sitaría leer, para mantener su conocimiento, 20 artícu-
evidencia clínica externa disponible, a partir de la inves- los diarios ¡todos los días del año! A pesar de que la
tigación sistemática, y con los valores y preferencias del disponibilidad de revisiones sistemáticas y guías reduce
paciente (figura 1)7. La mejor evidencia clínica externa la necesidad de lectura de artículos originales, la tarea
disponible surge de la investigación clínicamente rele- resulta inalcanzable. Sin embargo, la progresiva im-
vante, en ocasiones desde las ciencias básicas de la me- plantación de la MBE resolverá muchas de estas barre-
dicina, pero sobre todo desde la investigación clínica ras a su aplicación y supondrá una mejoría sustancial
centrada en el paciente. en el trato a nuestros pacientes.
No obstante, cabe señalar aquí que, tras más de 20
2. Limitaciones a la práctica clínica basada años de andadura de la MBE, en los últimos tiempos
han surgido voces que alertan sobre su deriva y sobre
en la evidencia la importancia de volver a una práctica clínica basada
El paso del paradigma de medicina basada en la prác- en la evidencia tal y como se planteó en sus orígenes y,
tica habitual y en la experiencia como principal argu- fundamentalmente, centrada en el paciente. Entre los
mento en la toma de decisiones clínicas al nuevo para- elementos que presentan como responsables de esa
digma de la MBE encuentra algunas dificultades, propias supuesta distorsión de la MBE se incluyen, entre otros,
de la resistencia a abandonar una aproximación tradi- los siguientes10:
cional de la Medicina y también de sus peculiaridades,
alguna de las cuales señalamos en la tabla 2. • La gran cantidad de evidencia disponible, en espe-
Como se ha apuntado, y a pesar de algunas críticas, cial el elevado número de guías clínicas generado,
la MBE no trata de reducir las decisiones clínicas a la que actualmente resulta inmanejable.
mera «evidencia disponible», sino que busca integrar • La búsqueda de lo que podríamos llamar «benefi-
estas con los elementos característicos de la medicina cios marginales» de tratamientos y patologías ya
tradicional (es decir, la experiencia clínica) y los valores estudiados hace tiempo, existiendo el riesgo de
y preferencias de los pacientes. Y es por esto por lo que sobreestimar los beneficios e infraestimar los posi-
se ha sugerido ya cambiar el término de evidence-based bles efectos secundarios de esos tratamientos.
medicine por el de evidence informed practice8. • El manejo basado en la evidencia de una enferme-
Como se ha mencionado anteriormente, gran parte dad determinada puede causar o exacerbar otras
de nuestras actuaciones clínicas no se acompañan de en una población cada vez más envejecida y con
mayor prevalencia de enfermedades crónicas, lo
que hace complicado encontrar en la práctica clí-
Tabla 1.  Conocimientos y habilidades necesarias para
una óptima práctica clínica basada en la evidencia
(modificado de Guyatt G et al.6). Tabla 2.  Dificultades para la práctica de la MBE.

· Experiencia clínica. · Escepticismo por parte de los clínicos, que se


· Profundos conocimientos médicos. resisten a cambiar su práctica habitual.
· Habilidades para hacer una búsqueda eficiente. · Necesidad de adquirir nuevas habilidades:
· Habilidades para un abordaje crítico de la literatura. epidemiológicas, informáticas, búsqueda
· Habilidad para entender y definir los beneficios y bibliográfica, etc.
riesgos de las alternativas. · Preferencia por las respuestas rápidas y fáciles:
· Conocimientos fisiológicos profundos, que permitan buscamos un «recetario» con soluciones a nuestros
la aplicación de la evidencia al individuo. problemas clínicos, y el abordaje crítico requiere
· Sensibilidad y habilidades de comunicación para tiempo y esfuerzo que a veces son percibidos como
poder comprender el contexto del paciente. ineficientes.
· Habilidad para valorar y entender los valores · Dificultades de acceso a la literatura médica.
y preferencias del paciente y aplicarlas a las · Falta de evidencia de calidad para muchas
decisiones clínicas. preguntas clínicas.
Tema 59.  Nutrición basada en la evidencia 927

nica habitual pacientes con una única patología, manuales editados originalmente por Sackett11 y ahora
que encajen sin problemas en el prototipo descri- por Strauss12).
to en una guía clínica concreta.
3.1. Convertir las necesidades de información
3. Pasos para la práctica de la medicina en preguntas susceptibles de respuesta
basada en la evidencia
Las necesidades de información que surgen durante
La práctica de la MBE requiere una estrategia en va- el encuentro clínico con el paciente deben concretarse
rios pasos, tal como se recoge en la tabla 3 y en la en una pregunta simple y claramente definida, suscep-
figura 2. En este capítulo se pretende mostrar resumi- tible de ser respondida, que nos permita encontrar las
damente los principios y los pasos de la MBE, sin hacer pruebas que resuelvan nuestro interrogante. Este pri-
un repaso exhaustivo (para ello se recomienda consul- mer paso es muy importante, por lo que resulta de
tar las citas bibliográficas reseñadas, especialmente los gran interés adquirir la habilidad necesaria para hacer-
lo bien. Algunos modelos nos ayudan a estructurar de
forma adecuada esa pregunta. Uno de los más popula-
res es la estrategia conocida como PICO, acrónimo de
pacientes («P»), intervención («I»), control –o alternati-
va– («C») y resultados –o outcome– («O»). Se debe re-
cordar que las variables de resultado o outcome a las

Experiencia clínica Tabla 3.  Estrategia en pasos de la MBE.

· Convertir las necesidades de información en


preguntas susceptibles de respuesta.
· Localizar las mejores evidencias disponibles.
Preferencias · Valorar y evaluar de manera crítica las pruebas.
del paciente Evidencia Determinar su validez y utilidad para nuestra
necesidad.
· Aplicar las conclusiones a nuestra práctica,
teniendo en consideración los riesgos y beneficios,
y las expectativas, preferencias y necesidades
emocionales de los pacientes.
· Evaluar el rendimiento de todo este proceso.
Figura 1.  Áreas que integra la MBE.

FORMULAR PREGUNTA CLÍNICA ASK

BUSCAR LA MEJOR EVIDENCIA ACQUIRE


ASSESS

VALORACIÓN CRÍTICA APPRAISE

APLICAR LAS DECISIONES APPLY

EVALUAR EL PROCESO

Figura 2.  El ciclo de la información basada en evidencia («5 aes»).


928 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

que se refiere el último apartado deben ser las relacio- nocer cómo navegar en el laberinto de la información
nadas con el paciente. En relación con esto último, médica y utilizar las herramientas adecuadas y perti-
conviene mencionar también aquí el término POEM, nentes para cada caso16. El protocolo de búsqueda de
acrónimo en inglés de Patient Oriented Evidence that información de la pirámide, descrita por Haynes17 y
Matters o «evidencia orientada al paciente que impor- recientemente renovada18, que se recoge en la figura 3,
ta» (eventos patológicos, mortalidad, morbilidad y ca- permite maximizar la posibilidad de localizar resulta-
lidad de vida) en contraposición al término DOEs o dos relevantes con el menor tiempo y esfuerzo posi-
Disease Oriented Evidence13. bles. Esta pirámide coloca las fuentes de información
de la MBE de arriba abajo, de acuerdo con la ecuación
de utilidad de la información médica reseñada ante-
3.2.  Localizar las mejores evidencias
riormente. El modelo sugiere comenzar la búsqueda
Para contestar a la pregunta que hayamos formula- desde la cúspide.
do, debemos buscar la literatura relevante. A priori, la Teniendo en cuenta la escasa implantación de los sis-
mejor respuesta la encontraremos en los artículos ori- temas de ayuda a la toma de decisiones, los resúmenes
ginales, que son los que recogen directamente la in- (summaries) supondrían la parte más alta e inmediata
vestigación primaria realizada sobre pacientes o pobla- en la pirámide. Incluyen evidencias integradas en resú-
ciones. Sin embargo, en muchas ocasiones nos pueden menes actualizados periódicamente, generalmente ac-
ser de más utilidad otros tipos de estudios o de fuentes cesibles a través de internet, como BMJ Clinical Evidence
de información, como es el caso de las revisiones siste- (http://clinicalevidence.bmj.com/x/index.html), UpToDa-
máticas, los metaanálisis y las guías de práctica clínica. te (http:www.uptodate.com), Dynamed (http://www.
Son fuentes de información secundaria que recopilan dynamed.com/home/), InfoRetriever (http://www.essen-
todos los datos existentes sobre un tema y ofrecen una tialevidenceplus.com/) o Fisterra (http://www.fisterra.
síntesis de los resultados de la investigación primaria com/), entre otros. Los siguientes pasos incluyen herra-
recogida en los artículos originales, seleccionados y mientas que permiten localizar guías de práctica clínica
evaluados críticamente, de manera que facilitan la ac- o revisiones sistemáticas, como ejemplos tenemos la Bi-
cesibilidad a ellos y la utilización de sus conclusiones. blioteca Cochrane o PubMed Clinical Queries-Systematic
En una revisión sistemática se selecciona, resume y Reviews, que tienen gran validez y relevancia y no re-
valora críticamente evidencia procedente de artículos quieren excesivo trabajo de búsqueda. La Colaboración
originales, pero no de forma «narrativa», sino median- Cochrane publica una base de datos de revisiones siste-
te un procedimiento estricto y sistemático, con criterios máticas y también de ensayos clínicos, a cuya versión en
de búsqueda, de inclusión y exclusión que deben espe- castellano puede accederse de forma gratuita a través
cificarse. En un metanálisis, se emplea una metodolo- del Ministerio de Sanidad y Consumo (http://www.up-
gía estadística específica para combinar los resultados date-software.com/Clibplus/ClibPlus.asp).
de todos los estudios prospectivos originales publica- Dependiendo de los resultados obtenidos, podría ser
dos sobre una misma cuestión, y así conseguir aumen- necesario ir bajando en la pirámide hasta llegar a los
tar el poder estadístico y la precisión de los resultados,
y disminuir la posibilidad de errores y sesgos. No hay
que olvidar, no obstante, que los resultados de los me-
taanálisis dependen de la calidad de los ensayos pros-
pectivos aleatorizados (EPA) que los conforman14. Por SISTEMAS
último, las guías de práctica clínica son directrices
elaboradas con una metodología basada en la búsque-
da sistemática de la información, y presentan una sín- RESÚMENES
tesis y jerarquización de la evidencia científica disponi-
ble; además, muestran sus conclusiones en forma de
recomendaciones. Genéricamente, las revisiones siste- GUÍAS CLÍNICAS
máticas, metanálisis y guías de práctica clínica se deno-
minan recursos de síntesis.
La información debe tener tres características para REVISIONES SISTEMÁTICAS
ser útil en la práctica clínica diaria: debe ser relevante,
válida y requerir poco trabajo para su obtención. Estas
tres características pueden combinarse en forma de ESTUDIOS
una ecuación de utilidad de la información médica15:
(Relevancia x Validez) / Trabajo.
Para reducir el denominador de la ecuación, esto es,
el «trabajo», además de plantear adecuadamente las Figura 3.  Pirámide de fuentes de información en la
preguntas, como se ha señalado, es fundamental co- MBE (modificado de Haynes17, 18).
Tema 59.  Nutrición basada en la evidencia 929

estudios originales, de modo que iríamos aumentando • ¿Cuáles son los hallazgos principales? (Mensaje
el trabajo, para encontrar una respuesta a nuestra pre- del artículo).
gunta clínica. La búsqueda puede realizarse en bases • ¿Se justifican las conclusiones con la metodología
de datos bibliográficas, de las cuales la más utilizada y empleada? (Validez).
conocida es MEDLINE, a la que se puede acceder a tra- • ¿En qué medida son aplicables a mis pacientes?
vés de internet (http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pub- (Utilidad).
med/), aunque existen otras muchas (Embase, Web of
Science). Por otra parte, los metabuscadores (TRIPdata- Para juzgar la validez, la sección de metodología de
base, Google) tienen la ventaja de hacer por nosotros los artículos debe ser escrupulosamente valorada, con
el trabajo de búsqueda, desde mayor a menor relevan- especial atención al modo en que se han recogido los
cia o validez, pero ha de tenerse en cuenta que no datos, puesto que una selección poco cuidadosa pue-
siempre proporcionan resultados evaluados crítica- de hacer variar los resultados de forma trascendental.
mente. En muchas de las páginas web arriba referidas, encon-
traremos listados de preguntas que nos facilitarán la
3.3. Valoración y evaluación crítica revisión crítica de los distintos tipos de estudios.
de las pruebas (critical appraisal)
3.4. Aplicación de las conclusiones de esta
La literatura médica actual es excesiva en número,
evaluación a la práctica
pero los artículos publicados son a menudo poco rele-
vantes o con una metodología poco rigurosa que no Una vez obtenida la respuesta a nuestro problema
nos permite confiar en sus resultados. La valoración clínico, debemos trasladar el conocimiento adquirido a
crítica de los resultados obtenidos con nuestra búsque- nuestro paciente. Es en ese momento cuando se hace
da es imprescindible para determinar la relevancia y imprescindible la implicación de la experiencia clínica,
validez de aquellos para nuestro problema clínico ini- para poder valorar los riesgos y los beneficios, las alter-
cial. Para facilitar este proceso de valoración crítica, se nativas y la aplicabilidad en nuestro caso, además de
han publicado guías de usuarios que nos ayudan a ob- contemplar las expectativas y preferencias del paciente.
tener los conocimientos necesarios6 y existen variados Para llevar a cabo este proceso podemos plantearnos
recursos on-line. Puesto que cada vez disponemos de las siguientes cuestiones:
más herramientas de valoración crítica accesibles y esta
relación no trata de ser exhaustiva, señalamos solo al- • ¿Se pueden aplicar los resultados a la asistencia
gunas de ellas: de mi paciente?
• ¿Son muy distintos mis pacientes de los que parti-
• Users’ Guides Interactive, versión online de Users’ ciparon en el estudio?
Guides to the Medical Literature: A Manual for • ¿Puedo utilizar el mismo tratamiento en mi me-
Evidence-Based Clinical Practice, http://jamaevi- dio?
dence.mhmedical.com/book.aspx?bookId=847. • ¿Los beneficios potenciales superan a los inconve-
• Lectura crítica en http://www.fisterra.com/forma- nientes de este tratamiento?
cion/metodologia-investigacion.
• Programa de habilidades en Lectura Crítica, Red 3.5. Evaluación del rendimiento de todo
CASPe, http://www.redcaspe.org/.
este proceso
• Critical Appraisal of the Evidence, University of To-
ronto, http://www.cebm.utoronto.ca/practise/ca/. Esta es la última etapa del proceso y, con frecuencia,
• Critical Appraisal, Centre for Evidence Based Me- se omite. Consiste en evaluar todo el desarrollo de
dicine, Oxford, http://www.cebm.net/. aquel, con el objetivo de mejorar nuestras decisiones
• Evidence Based Medicine Tool Kit, University of en futuras ocasiones en que repitamos de nuevo el ci-
Alberta, http://www.ebm.med.ualberta.ca/. clo de la práctica basada en la evidencia. También aquí
• BMJ, How to read a paper: the basics of eviden- disponemos de herramientas on-line que facilitan
ce-based medicine, http://www.bmj.com/about- nuestra autoevaluación, como por ejemplo el Centre
bmj/resources-readers/publications/how-read-pa- for Evidence Based Medicine de la Universidad de To-
per. ronto (http://www.cebm.utoronto.ca/practise/evalua-
• JAMA Series on Step-by-Step Critical Appraisal, te/index.htm).
http://www.hopkinsmedicine.org/gim/training/
Osler/osler_JAMA_Steps.html.
4.  De la MBE a la NuBE
Aunque el tipo de artículo va a condicionar el abor- La nutrición basada en la evidencia (NuBE) se plantea
daje a realizar, podemos resumir los objetivos del pro- como la aplicación en nuestra disciplina de los princi-
ceso en tres: pios de la MBE. La NuBE se podría definir como «la
930 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

aplicación de la mejor evidencia disponible para la grados de recomendación. Otras intervenciones nutri-
práctica de la nutrición clínica y el establecimiento de cionales, como la fortificación o la suplementación de
las recomendaciones en nutrición comunitaria»19. La las dietas requieren, probablemente, la realización de
American Dietetics Association (ADA) define la práctica EPA (y la aplicación de escalas de evidencia tradiciona-
de la NuBE como «el uso de evidencias científicas revi- les), ya que, en estos casos, se está equiparando la nu-
sadas sistemáticamente para adoptar decisiones prác- trición con un tratamiento farmacológico.
ticas sobre alimentación y nutrición, integrando la me-
jor evidencia disponible con la experiencia clínica y los 5.2. Problemas y limitaciones de la nutrición
valores del cliente para mejorar los resultados»20. La
clínica basada en la evidencia
NuBE se plantea como una herramienta necesaria para
mejorar los resultados clínicos de los pacientes (POEM), En cuanto a la nutrición clínica, nos encontramos
para mejorar la seguridad, calidad y eficiencia nutricio- con otros problemas específicos: por un lado, las limita-
nales y para poder beneficiarse del «explosivo» conoci- ciones desde un punto de vista ético y, por otro, la es-
miento biomédico, puesto que aparecen miles de nue- casez de EPA y los problemas en su diseño14. Desde la
vos estudios cada mes. perspectiva ética, los estudios en nutrición se encuen-
tran ante la imposibilidad de realizar grupos control
5.  Problemas específicos de la NuBE que no reciban soporte nutricional y, desde una pers-
pectiva más científica, ante la dificultad de atribuir ex-
5.1. Problemas y limitaciones de la nutrición clusivamente al soporte nutricional los cambios de los
comunitaria basada en la evidencia parámetros clínicos y bioquímicos que aparecen en la
evolución del paciente, que podrían explicarse por la
En nutrición comunitaria, uno de los primeros evolución de la propia enfermedad o por otras interven-
problemas específicos, añadido a las limitaciones típi- ciones terapéuticas distintas del soporte nutricional.
cas de la MBE, es la dificultad en el acceso a infor- El segundo gran problema es, como se ha mencio-
mación relevante y con validez contrastada, te- nado, la dificultad de realizar EPA de buena calidad,
niendo en cuenta el amplio número de publicaciones, por varios motivos:
tanto en papel como en internet, que reclaman estar
«basadas en evidencia», incluyendo estudios sobre die- • Variables de resultado secundarias. Ya hemos co-
tas milagro y productos de adelgazamiento, suplemen- mentado que la MBE prioriza aquellas variables de
tos nutricionales que prometen la «eterna juventud», resultado centradas en el paciente (POEMs; mor-
«superalimentos» para tratar o prevenir enfermedades, talidad, morbilidad, calidad de vida, estancia hos-
etc. Existe un exceso on-line de información nutricional pitalaria); sin embargo, gran parte de los estudios
no cualificada y sesgada a menudo por intereses co- publicados en nutrición se dirigen a evaluar varia-
merciales. En segundo lugar, en nutrición comunitaria bles subrogadas, como niveles de proteínas o
no es fácil disponer de EPA, que consideramos el cambios en parámetros antropométricos, y que
gold standard. Cabe matizar, no obstante, que los EPA no necesariamente significan un beneficio clínico
realmente pueden no ser los estudios más adecuados para el paciente.
para evaluar el efecto de las modificaciones dietéticas • Tamaños muestrales pequeños. Cuando los obje-
en la salud. Son estudios que requieren tiempos de se- tivos son clínicamente relevantes, y no variables
guimiento excesivos y grandes tamaños muestrales analíticas, las muestras de los estudios nutriciona-
que los hacen, a menudo, inviables. Además, los estu- les son frecuentemente pequeñas, lo que condi-
dios en nutrición están frecuentemente influenciados ciona que muchos estudios no tengan suficiente
por factores no dietéticos que pueden modificar el re- poder estadístico. Esta falta de pacientes puede
sultado. En el caso de algunas enfermedades crónicas, paliarse, en parte, gracias a los estudios multicén-
como el cáncer, los factores nutricionales pueden ac- tricos y a los metanálisis, que permiten estimar el
tuar como protectores o promotores muchos años an- resultado con mucha mayor precisión y significa-
tes del desarrollo de la enfermedad, por lo que los EPA ción.
tampoco son el tipo de estudio más adecuado21. Por • Generalización de resultados. Los resultados de
todo ello, la mejor evidencia disponible procede a me- los trabajos realizados en un solo hospital no pue-
nudo, de estudios observacionales (preferiblemente den aplicarse fácilmente a otros centros por la di-
estudios de cohortes bien diseñados). Es por eso que ferente casuística, actividad de los servicios, etc.
algunos autores han propuesto una modificación en la Los estudios multicéntricos, además de aumentar
jerarquía de la evidencia para el caso de los estudios el tamaño muestral, engloban a pacientes, prácti-
epidemiológicos nutricionales22, ya que con las clasifi- cas y actitudes terapéuticas heterogéneas, y pue-
caciones que podríamos llamar tradicionales, los estu- den generalizarse con más fiabilidad.
dios observacionales, mayoría en esta área, solo alcan- • Financiación. La investigación clínica actual está
zarían los escalones bajos en niveles de evidencia y en financiada, en su mayor parte, por la industria far-
Tema 59.  Nutrición basada en la evidencia 931

macéutica, por lo que no pueden descartarse ses- ral and Enteral Nutrition (ESPEN). También el National
gos relacionados con esto (por ejemplo, de no Institute for Health and Clinical Excellence ha desarro-
publicación de los resultados negativos). llado guías de práctica clínica con su clasificación jerár-
quica de la evidencia29. Las guías ESPEN más recientes
Estos motivos, entre otros, explican la escasez de es- han adoptado la clasificación de la Scottish Intercolle-
tudios de buena calidad en el ámbito de la nutrición y giate Guidelines Network (SIGN)30, 31 (tabla 4).
la dificultad de crear guías de manejo nutricional con La falta de consistencia entre los distintos sistemas
altos niveles de evidencia. de clasificación de niveles de evidencia es una de las
mayores debilidades para la universalización de las
6. La MBE y las guías de práctica clínica: guías de práctica clínica. En los últimos años, distintos
niveles de evidencia y grados de autores y editores de revistas médicas vienen preconi-
zando el uso de un sistema común, el sistema GRADE
recomendación
(Grading of Recommendations, Assessment, Develop-
Las guías de práctica clínica (GPC) son «documentos ment, and Evaluations), que permita un lenguaje ho-
informativos que incluyen recomendaciones dirigidas a mogéneo entre las distintas fuentes de guías de prácti-
optimizar el cuidado del paciente, en base a una revi- ca clínica32. El sistema GRADE propone las siguientes
sión sistemática de la evidencia y a la evaluación de los definiciones:
beneficios y daños de distintas opciones en la atención
a la salud»23. Se ha demostrado que la existencia de •  Calidad de la evidencia (alta, moderada, baja y
GPC mejora la práctica clínica. muy baja): indica hasta qué punto nuestra con-
Existe gran variabilidad entre las GPC, lo cual dificul- fianza en la estimación de un efecto es adecuada
ta su universalización, fundamentalmente debido al para apoyar una recomendación y, al mismo tiem-
empleo de distintos sistemas de clasificación de los ni- po, la utilidad esperable de investigaciones futu-
veles de evidencia. Los denominados «niveles de evi- ras en el tema en cuestión.
dencia» permiten clasificar jerárquicamente los estu- •  Fuerza de la recomendación: indica hasta qué
dios en función del rigor científico en su diseño y, por punto podemos confiar si poner en práctica la re-
tanto, según su fiabilidad y posibilidad de error. Su in- comendación conllevará más beneficios que ries-
tención es basar las decisiones clínicas en los estudios gos. Gradúa la fuerza de las recomendaciones en
con menor probabilidad de sesgo, considerando que el dos categorías (fuertes –cuando los beneficios de
ensayo clínico prospectivo con asignación aleatoria, una actuación superan a los riesgos o cuando cla-
controlado y enmascarado, con seguimiento completo ramente no lo hacen– o débiles –cuando la evi-
y analizado por «intención de tratar», es el mejor de dencia disponible es de muy baja calidad o cuan-
los diseños24. Los estudios prospectivos aleatorizados do los beneficios y riesgos de una intervención
(EPA) son considerados el gold standard, por lo que en están equilibrados32, 33–).
las primeras clasificaciones les correspondió el mayor
nivel de evidencia, seguidos por los no aleatorizados, Desde que fuera propuesto, en el año 2004, el siste-
los estudios de cohortes y los de casos y controles, los ma GRADE ha sido progresivamente adoptado por di-
controles históricos y las opiniones de los expertos. versas organizaciones profesionales, aunque también
Más tarde se han incorporado los metaanálisis y las ha sido criticado por otros y tampoco se ha extendido
revisiones sistemáticas de la literatura, por encima de de forma universal34, 35.
los EPA.
En las GPC se debe especificar siempre el tipo de cla- 7. Análisis crítico de las guías de práctica
sificación de la evidencia que se ha utilizado, puesto
clínica
que una recomendación «grado A» puede ser más o
menos «consistente» y estar basada en tipos de estu- Puesto que los posibles beneficios derivados de la
dios de distinta calidad, según sea la clasificación em- aplicación de una guía clínica son paralelos a la calidad
pleada. La primera institución que publicó una clasifi- metodológica de la misma, es fundamental reconocer
cación de niveles de evidencia y sus correspondientes la calidad de la evidencia disponible a la hora de hacer
grados de recomendación fue la Canadian Task For- recomendaciones para la práctica clínica o de tomar
ce25, modificándola en los años 9026. Posteriormente decisiones terapéuticas. Con esta idea de fondo, en el
han aparecido nuevas clasificaciones de la evidencia año 1998 se inició una colaboración entre varios paí-
científica, como la del Centre for Evidence Based Medi- ses, conocida como Appraisal of Guidelines, Research
cine de Oxford, que tiene en cuenta los diversos tipos and Evaluation Collaboration (AGREE). Fruto de dicha
de estudios27, o las de la Agency for Healthcare Re- colaboración surgió, en el año 2003, el Instrumento
search and Quality (AHQR)28, empleada en las primeras para la Evaluación de las Guías de Práctica Clínica (Ins-
guías de la American Society of Parenteral and Enteral trumento AGREE), una herramienta orientada a eva-
Nutrition (ASPEN) y de la European Society of Parente- luar el rigor metodológico y la transparencia de las
932 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

GPC, compuesto por 23 ítems agrupados en 6 domi- recomendaciones de la European Society of Parenteral
nios36. Recientemente, se ha publicado el AGREE II, una and Enteral Nutrition (ESPEN) basadas en la evidencia.
actualización y mejora de la herramienta original, con Además, en nuestro país, el Grupo de Nutrición de la
el fin de asegurar que aquella sigue siendo útil y aplica- Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición llevó
ble37. El objetivo de esta herramienta es, por un lado, a cabo en 2005 un monográfico sobre recomendacio-
evaluar la calidad de las GPC y, por otro, proporcionar nes nutricionales basadas en la evidencia19.
una estrategia metodológica para elaborarlas. Sin embargo, la calidad metodológica de las guías
clínicas en nutrición ha sido tradicionalmente cuestio-
8.  Guías de práctica clínica en nutrición nable38, entre otros motivos por el hecho de que la
mayoría de estudios disponibles en esta área son ob-
La nutrición clínica se incorporó al método de traba- servacionales, no aleatorizados ni controlados, como
jo de la MBE prácticamente desde sus inicios. De he- se ha comentado anteriormente. Las GPC más relevan-
cho, las recomendaciones de la primera edición de las tes en el ámbito de la nutrición clínica son:
Guías de Práctica Clínica de la American Society of Pa- • ASPEN: publicó sus primeras guías en el año 1993
renteral and Enteral Nutrition (ASPEN), de 1993, esta- («Guidelines for the Use of Parenteral and Enteral
ban basadas en la evidencia, y en la segunda edición se Nutrition in Adult and Pediatric Patients») y las re-
mantuvo este diseño. También se han publicado las visó posteriormente en el 2002. En 2009 cambió

Tabla 4.  Niveles de evidencia y grados de recomendación según Scottish Intercollegiate Guidelines Network
(SIGN)30 adoptadas en las últimas guías ESPEN31.

Niveles de evidencia
Metanálisis, revisiones sistemáticas de ensayos clínicos o ensayos clínicos de alta calidad con
1++
muy poco riesgo de sesgo
Metanálisis, revisiones sistemáticas de ensayos clínicos o ensayos clínicos bien realizados con
1+
poco riesgo de sesgo
Metanálisis, revisiones sistemáticas de ensayos clínicos o ensayos clínicos con alto riesgo de
1–
sesgo
Revisiones sistemáticas de estudios de cohortes o de casos y controles o estudios de
pruebas diagnósticas de alta calidad, estudios de cohortes o de casos y controles de pruebas
2++
diagnósticas de alta calidad con riesgo muy bajo de sesgo y con alta probabilidad de establecer
una relación causal
Estudios de cohortes o de casos y controles o estudios de pruebas diagnósticas bien realizadas
2+
con bajo riesgo de sesgo y con una moderada probabilidad de establecer una relación causal
2– Estudios de cohortes o de casos y controles con alto riesgo de sesgo
3 Estudios no analíticos, como informes de casos y series de casos
4 Opinión de expertos
Fuerza de las recomendaciones
Al menos un metanálisis, revisión sistemática de ensayos controlados aleatorizados (ECA), o ECA
de nivel 1++, directamente aplicables a la población diana, o evidencia suficiente derivada de
A
estudios de nivel 1+, directamente aplicable a la población diana y que demuestren consistencia
global en los resultados
Evidencia suficiente derivada de estudios de nivel 2++, directamente aplicable a la población
B diana y que demuestren consistencia global en los resultados. Evidencia extrapolada de estudios
de nivel 1++ o 1+
0 Evidencia de nivel 3 o 4. Evidencia extrapolada de estudios de nivel 2++ o 2+
Buena práctica
clínica/consenso Práctica recomendada basada en la experiencia clínica y el consenso del equipo redactor
expertos
Tema 59.  Nutrición basada en la evidencia 933

el formato de las guías, para centrarse en situacio- como se ha mencionado, la mejor evidencia científica
nes clínicas y grupos de edad concretos. Reciente- disponible con la experiencia clínica y los valores y pre-
mente ha modificado también la metodología, ferencias de nuestros pacientes. Aunque, en ausencia
para adaptarla al sistema GRADE. Sus GPC están de evidencia suficiente, siempre nos quedarán otras
disponibles en http://www.nutritioncare.org/gui- alternativas42, que con buen humor nos recuerdan que
delines_and_clinical_resources. la Medicina sigue siendo un arte, además de una cien-
• ESPEN: en un inicio, sus guías consistieron en un cia: la medicina basada en la eminencia, la medicina
compendio de nutrición enteral (2006) y parente- basada en la vehemencia, la medicina basada en la elo-
ral (2009). En los últimos años se ha centrado tam- cuencia, la medicina basada en la providencia, la medi-
bién en situaciones clínicas concretas (http://www. cina basada en la timidez, la medicina basada en el
espen.org/education/espen-guidelines). En 2015, nerviosismo y la medicina basada en la certeza. Que
publicó sus procedimientos operativos para el de- cada uno escoja.
sarrollo de sus GPC, en los que explica que ha em-
pleado la clasificación de la evidencia de SIGN, di-
10. Bibliografía
ficultando nuevamente una posible comparación
con las guías de ASPEN30.   1. Dubinsky M, Ferguson JH: Analysis of the National
• Canadian Critical Care Practice Guidelines (CCPG, Institutes of Health Medicare Coverage Assess-
http://criticalcarenutrition.com/): se centran exclu- ment. Internat J Technology Assessment in Health
sivamente en el soporte nutricional del paciente Care 1990; 6: 480-8.
crítico. Fueron publicadas por vez primera en   2. Guyatt GH. Evidence-based medicine. ACP J Club.
2003 y han sido actualizadas con más frecuencia 1991; 114(suppl 2):A-16.
que las del resto de Sociedades (2005, 2007,   3. Evidence-Based Medicine Working Group.Eviden-
2009, 2013, 2015), en consonancia con la rápida ce-based medicine. A new approach to teaching
evolución de los conocimientos en nutrición. the practice of medicine. JAMA 1992 Nov 4;
• Esto último nos sirve también para poner en cues- 268(17):2420-5.
tión las GPC inglesas del National Institute for Cli-   4. Zimerman AL. Evidence-based medicine: a short
nica Excellence (NICE, https://www.nice.org.uk/ history of a modern medical movement. Virtual
guidance/cg32), que se remontan a 2006. Aun- Mentor. 2013 Jan 1; 15(1):71-6.
que fueron revisadas en 2014, los autores dijeron   5. Sackett DL, Rosenberg WMC, Gray JAM, Haynes
no encontrar evidencias para modificar sus reco- RB, Richardson WS: Evidence based medicine:
mendaciones, y no serán reevaluadas hasta 2018. what it is and what it isn’t. BMJ 1996;312:71-2.
Disponible en URL: http://bmj.bmjjournals.com/
Para facilitar el manejo nutricional de los pacientes se- cgi/content/full/312/7023/71. Acceso 7 de No-
ría de gran utilidad que las sociedades científicas implica- viembre de 2016.
das en ello elaboraran unas guías comunes, una idea que   6. Guyatt G, Haynes B, Jaescke R, Meade MO, Wilson
inició su desarrollo hace unos años, a través de la crea- M, Montori V, Richardson S. The philosophy of
ción de un comité dirigido por Gordon Jensen y Alastair Evidence-Based Medicine. En: Guyatt G, Rennie D,
Forbes, en el que ESPEN y ASPEN coordinaron esfuer- Meade M, Cook D,eds. Users’ Guides to the Medi-
zos39, pero que no se ha repetido por el momento. cal Literature: A Manual for Evidence-Based Clini-
cal Practice (Jama & Archives Journals) 2nd edition.
McGraw Hill, 2008.
9. Conclusiones
  7. Masic I, Miokovic M, Muhamedagic B. Evidence
Lo que pretende la medicina basada en pruebas es based medicine - new approaches and challenges.
que la práctica clínica se adecúe a la investigación clíni- Acta Inform Med. 2008; 16(4):219-25.
ca disponible, de modo que, una vez localizada y eva-   8. Glasziou P. Evidence based medicine: does it make a
luada por el médico, sea aplicada para mejorar el cui- difference? Make it evidence informed practice with
dado de sus pacientes y su propia práctica. La MBE, en a little wisdom. BMJ 2005; 330:92. doi:10.1136/
cualquier caso, no se reduce a la evidencia, sino que bmj.330.7482.92-a. Disponible en URL: http://www.
trata de integrar esta con la experiencia clínica personal bmj.com/cgi/content/full/330/7482/92-a. Acceso 7
y con los valores y preferencias de los pacientes. El so- de Noviembre de 2016.
porte nutricional ha sido una de las intervenciones te-   9. Grol R. Improving the quality of medical care: buil-
rapéuticas más controvertidas en la medicina moder- ding bridges among professional pride, payer pro-
na, pero en los últimos años, y a pesar de las dificultades fit, and patient satisfaction. JAMA. 2001; 286(20):
para la aplicación de la MBE a la nutrición, se ha incre- 2578-85.
mentado la evidencia sobre la efectividad de la nutri- 10.  Greenhalgh T, Howick J, Maskrey N. Evidence
ción clínica40, 41. Nuestras decisiones clínicas deberían, based medicine: a movement in crisis? BMJ. 2014
en lo posible, estar basadas en pruebas, integrando, Jun 13; 348:g3725.
934 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

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Tema 59.  Nutrición basada en la evidencia 935

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consensus guidelines for nutrition therapy in pancrea- viembre de 2016.
Tema 60. 
Nutrición artificial domiciliaria
Rocío Villar Taibo
Ana Urioste Fondo
Paula Fernández Martínez
Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial Universitario. León

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 937-950.

1.  Introducción
2.  Marco legal
3.  Epidemiología
4.  Requisitos
5.  Aspectos éticos sobre la nutrición e hidratación artificial
6.  Impacto social
7.  Impacto económico
8.  Resumen
9.  Bibliografía

1. Introducción La nutrición parenteral domiciliaria (NPD) se re-


servará para aquellos pacientes que sean incapaces de
La nutrición artificial domiciliaria (NAD) se define recibir por vía gastrointestinal los nutrientes necesarios
como la administración de nutrientes y demás agentes para cubrir sus necesidades, siempre que haya una po-
terapéuticos adjuntos a través de la vía digestiva o in- sibilidad razonable de que este soporte nutricional aña-
travenosa, con la finalidad de mejorar o mantener el da calidad y expectativa de vida.
estado nutricional de un paciente en el que la alimen-
tación ordinaria no cubre sus necesidades, y llevándo-
2.  Marco legal
se a cabo en el propio domicilio del enfermo. La NAD
es una modalidad terapéutica que está en continuo
2.1.  Regulación de la NED en España
crecimiento, ya que presenta numerosas ventajas tan-
to para el paciente y su familia, como para el sistema Desde 1997 existe en nuestro país una normativa le-
sanitario en general. Así, el paciente y su familia se gal que regula la NED, tanto a nivel del Sistema Nacional
benefician de poder recibir el tratamiento en su entor- de Salud (SNS), como a nivel autonómico. La tabla 1
no familiar, a la vez que existe un menor riesgo de recoge las principales regulaciones administrativas pu-
complicaciones relacionadas con la estancia hospitala- blicadas en este ámbito.
ria, y además, el sistema sanitario se beneficia de una Acceso a la prestación: requiere que exista imposibi-
mayor disponibilidad de camas hospitalarias y de un lidad de cubrir requerimientos nutricionales con ali-
menor coste del tratamiento. mentos de uso ordinario, que se proporcione una me-
La nutrición enteral domiciliaria (NED) supone joría de la calidad de vida o del proceso de base, que se
una alternativa para aquellos pacientes que, disponien- apliquen criterios sanitarios y no sociales, que los bene-
do de una función gastrointestinal suficiente, son inca- ficios superen a los riesgos, que se haga una valoración
paces de conseguir mediante la ingesta oral la cantidad periódica del tratamiento y que se ajuste a las indica-
de nutrientes necesaria para cubrir sus necesidades ciones clínicas aprobadas (tabla 2).
energéticas. Su indicación es preferible a la de nutri- Indicación: se llevará a cabo por los facultativos es-
ción parenteral por ser más fisiológica y tener compli- pecialistas adscritos a la Unidad de Nutrición de los
caciones menos graves. hospitales o por los que determinen los servicios de

937
938 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

Tabla 1.  Regulación de la nutrición enteral domiciliaria NED.

Orden 30 abril 1997 (BOE, 14 mayo 1997). Errores congénitos del metabolismo.
Orden 2 junio 1998 (BOE, 11 junio 1998). Nutrición enteral domiciliaria.
Ley 53/2002, 30 diciembre 2002 (BOE, 31 diciembre 2002). Medidas fiscales, administrativas y del orden social.
Ley 16/2003, 28 mayo 2003 (BOE, 29 mayo 2003). Cohesión y calidad del sistema nacional de salud. Prestación
con productos dietéticos.
Real Decreto 1030/2006, 15 septiembre 2006 (BOE, 16 septiembre 2006). Catálogo de prestaciones ofertadas
por el Sistema Nacional de Salud. Errores congénitos del metabolismo y NED.
Orden SCO/3858/2006, 5 diciembre 2006 (BOE, 20 diciembre 2006). Regulación de las fórmulas de Nutrición
Enteral Domiciliaria.
Real Decreto 1205/2010, 24 septiembre 2010 (BOE, 25 septiembre 2010). Bases para la inclusión de los
alimentos dietéticos para usos médicos especiales y para el establecimiento de los importes máximos de financiación.
Orden SPI/2958/2010, 16 noviembre 2010 (BOE, 19 noviembre 2010). Procedimiento para la inclusión de los
alimentos dietéticos para usos médicos especiales en la oferta de productos dietéticos del SNS y para la aplicación
de los importes máximos de financiación.
Real Decreto-Ley 16/2012, 20 abril 2012 (BOE, 24 abril 2012). Medidas urgentes para garantizar la
sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud y mejorar la calidad y seguridad de sus prestaciones.
Orden SSI/1640/2012, 18 julio 2012 (BOE, 25 julio 2012). Modificación del Anexo VI del RD 1030/2006,
por el que se establece la cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de Salud y el procedimiento para su
actualización, y los anexos I y III del RD 1205/2010 por el que se fijan las bases para la inclusión de los alimentos
dietéticos del Sistema Nacional de Salud y para el establecimiento de sus importes máximos de financiación.
Orden SSI/2366/2012, 30 octubre 2012 (BOE, 3 noviembre 2012). Factor común de facturación de los
productos dietéticos.
Orden SSI/1329/2014, 22 julio 2014 (BOE, 25 julio 2014). Modificación de la cartera común suplementaria de
prestación con productos dietéticos y de las bases para la inclusión de los alimentos dietéticos para usos médicos
especiales en la oferta de productos dietéticos del Sistema Nacional de Salud y establecimiento de los importes
máximos de financiación.

salud de las comunidades autónomas en sus respecti- restringiendo el número de fórmulas aprobadas para
vos ámbitos de gestión. Deberá cumplimentarse el in- financiación.
forme justificativo propio de la comunidad autónoma. La dispensación de la NED se realiza en la mayoría de
Asimismo, solo se financiarán productos incluidos en la las comunidades en las oficinas de farmacia extrahospi-
oferta de productos dietéticos del SNS. talarias, precisando tanto de receta médica como de
Productos financiados: de forma general, todos los visado de inspección farmacéutica, con algunas excep-
productos incluidos en la cartera de servicios deben cum- ciones como las de Cataluña y Galicia1. En ambas comu-
plir los siguientes requisitos: contribuir de forma eficaz nidades la dispensación de los productos de NED se
a la prevención, al diagnóstico o al tratamiento de en- realiza a través de las farmacias hospitalarias. Sin embar-
fermedades, a la conservación o mejora de la esperanza go, en Cataluña la distribución posterior en algunos
de vida, o a la eliminación o disminución del dolor y el hospitales se hace directamente al domicilio del pacien-
sufrimiento. También deben aportar una mejora, en te a través de servicios de catering, mediante acuerdos
términos de seguridad, eficacia, efectividad, eficiencia o con la industria farmacéutica2.
utilidad demostrada, respecto a otras alternativas. Respecto a la dispensación del material fungible,
Prescripción y dispensación: en España, existen im- está recogido en la normativa que debe ser gratuita,
portantes diferencias en la prescripción y dispensación pero se realiza de forma desigual entre comunidades,
de la NED entre las distintas comunidades autónomas ya que no está regulada. En general, se administra des-
(tabla 3). Así, mientras que en unas comunidades de el hospital o los centros de atención primaria, salvo
autó­nomas se puede prescribir cualquiera de las fór- en Cataluña, donde los servicios de farmacia han llega-
mulas financiadas por el SNS, otras como Galicia han do a acuerdos con la industria farmacéutica para coor-
establecido su propio catálogo de fórmulas enterales, dinar su entrega directa en el domicilio del paciente3.
Tema 60.  Nutrición artificial domiciliaria 939

Tabla 2.  Situaciones clínicas que justifican la financiación de la nutrición artificial domiciliaria (NAD).

A. Alteraciones mecánicas de la deglución o del tránsito, que cursan con afagia o disfagia severa
y precisan sonda
A.1 Tumores de cabeza y cuello
A.2 Tumores del aparato digestivo (esófago, estómago)
A.3 Cirugía otorrinolaringológica (ORL) y maxilofacial
A.4 Estenosis esofágica no tumoral
B. Trastornos neuromotores que impidan la deglución o el tránsito y que precisan sonda
B.1 Enfermedades neurológicas que cursan con afagia o disfagia severa:
B.1.1  Esclerosis múltiple
B.1.2  Esclerosis lateral amiotrófica
B.1.3  Síndromes miasteniformes
B.1.4  Síndrome de Guillain-Barré
B.1.5  Secuelas de enfermedades infecciosas o traumáticas del sistema nervioso central
B.1.6  Retraso mental severo
B.1.7  Procesos degenerativos severos del sistema nervioso central
B.2 Accidentes cerebrovasculares
B.3 Tumores cerebrales
B.4 Parálisis cerebral
B.5 Coma neurológico
B.6 Trastornos severos de la motilidad intestinal: pseudoobstrucción intestinal, gastroparesia diabética
C. Requerimientos especiales de energía y/o nutrientes
C.1 Síndromes de malabsorción severa:
C.1.1  Síndrome de intestino corto severo
C.1.2  Diarrea intratable de origen autoinmune
C.1.3  Linfoma
C.1.4  Esteatorrea postgastrectomía
C.1.5  Carcinoma de páncreas
C.1.6  Resección amplia pancreática
C.1.7  Insuficiencia vascular mesentérica
C.1.8  Amiloidosis
C.1.9  Esclerodermia
C.1.10 Enteritis eosinofílica
C.2 Enfermedades neurológicas subsidiarias de ser tratadas con dietas cetogénicas:
C.2.1 Epilepsia refractaria en niños
C.2.2 Deficiencia del transportador tipo I de la glucosa
C.2.3 Deficiencia del complejo de la piruvato-deshidrogenasa
C.3 Alergia o intolerancia diagnosticada a las proteínas de leche de vaca en lactantes, hasta dos años si existe
compromiso nutricional
C.4 Pacientes desnutridos que van a ser sometidos a cirugía mayor programada o trasplantes
C.5 Pacientes con encefalopatía hepática crónica con intolerancia a las proteínas de la dieta
C.6 Pacientes con adrenoleucodistrofia ligada al cromosoma X, neurológicamente asintomáticos
D. Situaciones clínicas cuando cursan con desnutrición severa
D.1 Enfermedad inflamatoria intestinal: colitis ulcerosa y enfermedad de Crohn
D.2 Caquexia cancerosa por enteritis crónica por tratamiento quimio y/o radioterápico
D.3 Patología médica infecciosa que comporta malabsorción severa: sida
D.4 Fibrosis quística
D.5 Fístulas enterocutáneas de bajo débito
D.6 Insuficiencia renal infantil que compromete el crecimiento del paciente
940 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

Tabla 3.  Requerimientos para nutrición domiciliaria según comunidades autónomas.

Lugar al que debe dirigirse para


Ámbito Documentación
continuar el tratamiento
Andalucía Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia
Aragón Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria
(especialista hospitalario) DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia
Asturias Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia
Baleares Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria
(especialista hospitalario) DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia
Canarias Informe justificativo de la indicación Servicio de Atención al Paciente de los
hospitales de Servicio Canario de Salud
Cantabria Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia
Castilla y León Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria
(especialista hospitalario) DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia
Castilla-La Mancha Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria
(especialista) DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia
Cataluña Informe justificativo de la indicación Centro de atención primaria que le corresponda
según su lugar de residencia en Cataluña
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia
Comunidad Valenciana Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia
Extremadura Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia
Galicia Informe justificativo de la indicación Subdirección General de Farmacia y Productos
Sanitarios. Teléfonos: 981542846/981540149. C/
San Lázaro s/n. Edificio administrativo del Servicio
Gallego de Salud. 15703. Santiago de Compostela.
DISPENSACIÓN: Hospitales de la red del SERGAS.
La Rioja Informe justificativo de la indicación Inspección de Servicios Sanitarios que le
corresponda por domicilio (Calahorra o Logroño).
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia.
Madrid Informe justificativo de la indicación Centro de atención primaria más próximo a su
domicilio.
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia.
Murcia Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria.
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia.
Navarra Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria.
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia.
País Vasco Informe justificativo de la indicación Inspección de Servicios Sanitarios más
próxima al domicilio temporal del paciente.
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia.
Ingesa Informe justificativo de la indicación Médico de atención primaria.
DISPENSACIÓN: Oficinas de farmacia.
Tema 60.  Nutrición artificial domiciliaria 941

1.2.  Regulación de la NPD en España tos en la normativa actual de la NED, en cuanto a la


inclusión de algunas patologías subsidiarias de esta
La NP está incluida en la cartera de prestaciones del modalidad terapéutica (anorexia nerviosa, caquexia,
SNS (RD 1030/2006), tanto en el medio hospitalario disfagia, etc.) o a la utilización de suplementos orales.
como extrahospitalario, pero a diferencia de la NED no Esto ha llevado a una aplicación desigual de la NAD en
se dispone de una legislación específica que indique el territorio nacional y a cierta disociación entre la prác-
cómo debe llevarse a cabo esta prestación4. En conse- tica clínica y la regulación vigente, que debería ser sub-
cuencia, existe un vacío legal en la NPD y esta se aplica sanada en los próximos años.
en nuestro medio cuando existe indicación clínica, se-
gún la situación actual en ese momento dado5. La or-
ganización de la NPD suele ser coordinada por las Uni- 3. Epidemiología
dades de Nutrición, aunque también pueden colaborar
los servicios de hospitalización a domicilio o incluso las 3.1.  Importancia de los registros en nutrición
compañías farmacéuticas, que en ocasiones actúan La epidemiología de la NAD es un área de gran incer-
como proveedores de la NPD. tidumbre, especialmente en la NED, en parte por la falta
de criterios comunes su definición. Así, en algunos paí-
2.3.  Regulación de la NAD en otros países ses se incluyen únicamente las nutriciones administradas
por sondas u ostomías, mientras que en otros también
En Estados Unidos (EEUU) la cobertura y la financia- se consideran las dietas enterales por vía oral, cuando se
ción de la NED difieren según el ámbito. Los progra- supera una determinada cantidad de calorías. Pero tam-
mas de Medicare (aseguradora sanitaria federal para bién por la ausencia de registros obligatorios, lo que
mayores de 65 años o discapacitados) y Medicaid (que explica las enormes diferencias entre los diferentes regis-
proporciona cobertura sanitaria a los individuos con tros publicados, que probablemente subestimen los da-
bajos ingresos) son los que se encargan principalmente tos reales de la práctica de la NED.
de la cobertura pública de la NE en EEUU. La cobertura En 2009, una revisión sistemática encontró apenas
de las aseguradoras privadas tiende a ser más restricti- 11 registros de nutrición domiciliaria, publicados entre
va en el reembolso para evitar un uso excesivo de NE, 1987 y 2007 (60 % NPD y 40 % NED), en 8 países dis-
sobre todo en pacientes crónicos6. tintos (Australia, Alemania, EE.UU., España, Italia, Ja-
En Europa, la situación varía mucho en los distintos pón, Reino Unido, y Suecia). Todos ellos presentaban
países. Italia y Francia fueron los primeros países en limitaciones y heterogeneidad en la recogida de los
regular la financiación de la NED en 1988. La prescrip- datos, lo que dificulta la obtención de información re-
ción de la NED puede ser realizada por cualquier facul- presentativa9.
tativo en la mayoría de los países, a excepción de Fran-
cia, Croacia o la República Checa. La cobertura
económica de la NED suele ser pública, pero mientras
3.2. Epidemiología
que Francia, Alemania, Italia, España y Reino Unido tie- Los primeros datos epidemiológicos de la NED en
nen financiación completa, en otros países los pacien- Europa datan de finales de la década de los 90, cuando
tes deben asumir parte (Bélgica, Dinamarca o Polonia) una encuesta realizada en 8 países europeos (Alemania,
o todo el coste del tratamiento (Austria e Israel)7. Bélgica, Dinamarca, España, Francia, Italia, Polonia y
Respecto a la NPD en EEUU, la financiación procede Reino Unido) encontró una incidencia media de NED de
de programas gubernamentales (Medicare y Medicaid) 163 casos/millón de habitantes/año. Sin embargo, tam-
o de compañías aseguradoras. En general, se cubre el bién resaltó las disparidades entre los países encuesta-
80 % de la terapia con NPD, y el 20 % restante debe ser dos10 y la gran diferencia con la prevalencia reportada
asumido por el paciente. en EEUU, unas 10 veces superior (hasta 1.660 casos/
En Europa, Dinamarca fue el primer país en legislar la millón en población beneficiaria de Medicare, o 415 ca-
NPD en 1975, y posteriormente se unieron otros como sos/millón en la población general)8, 11.
Francia, Bélgica, Italia o Polonia. Los programas de NPD En los últimos años, los registros existentes eviden-
suelen restringirse a centros especializados y la cobertu- cian una tendencia al aumento de pacientes con NED
ra financiera de la NPD en Europa es asumida por los en todo el mundo. El registro BANS (British Artificial
Sistemas Nacionales de Salud, prácticamente en un Nutrition Survey) de Reino Unido estimó una prevalen-
100 %. Sin embargo, la provisión de las soluciones de cia en 2009 de NED (por sonda) de 417 casos/millón,
nutrición parenteral o los materiales puede depender respecto a la prevalencia de 280 casos/millón de la dé-
de farmacias hospitalarias o privadas, o se puede reali- cada anterior12. Este incremento ha sido atribuido en
zar a través de empresas de atención a domicilio, de- algunos registros, como el de Suiza, al aumento de los
pendiendo de la regulación de cada país7, 8. suplementos orales13.
En definitiva, además de la ausencia de regulación En España, el grupo de Nutrición Artificial Domicilia-
clara para la NPD, existen todavía aspectos incomple- ria y Ambulatoria de la Sociedad Española de Nutrición
942 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

Enteral y Parenteral (NADYA-SENPE) ha realizado un pendió en el 29,3 % de los casos debido a fallecimiento
registro anual de NAD enteral y parenteral desde fina- y en el 17,1 % debido a recuperación de la vía oral28.
les de los años 90. A pesar de que se trata de un regis- Además de disponer de un registro nacional, dentro
tro parcial y voluntario, la inclusión de pacientes ha de nuestro país diversas áreas sanitarias han llevado a
aumentado progresivamente y resulta de gran utilidad cabo sus propios registros de NED, mostrando una gran
como reflejo de la situación y evolución de la NAD en disparidad territorial (en Galicia: prevalencia de 103,4
nuestro país (figura 1)14-27. Sin embargo, los dos últi- casos/100.000 habitantes29, en el área de Valladolid
mos registros publicados presentan una importante oeste: incidencia de NED de 30 casos/100.000 habitan-
reducción en los pacientes incluidos, posiblemente re- tes/año30; en Andalucía: aumento de prevalencia de
lacionada con el cambio y actualización de la base de 66,42 casos/millón/día en el año 2000 a 1.315,36 ca-
datos. Así, el último registro NADYA de NED (2013) sos/millón/día en 2007, a expensas fundamentalmente
incluyó a 3.223 pacientes (98,2 % mayores de 14 años, del aumento de la NE oral)31.
con una media de 69,1 años), encontrando una preva-
lencia de 67,1 casos/millón de habitantes. La duración
3.3. Epidemiología
mediana de la NED en los adultos fue de 589 días y la
indicación mayoritaria fue neurológica (60,6 %). En el Desde el inicio de la NPD a finales de los años 60, su
48 % la vía de acceso fue por sonda nasogástrica y se implantación ha sido progresiva pero mucho más lenta
emplearon gastrostomías en el 40,8 %. La NED se sus- que la NED.

a)  Evolución de la nutrición enteral domiciliaria (NED) según el Registro NADYA

7000

6000

5000

4000
Pacientes

3000

2000

1000

0
1993 1994 1995 1996 1999 2000 2001 2002 2003 2006 2008 2009 2010 2011- 2013
2012
Pacientes NED 2262 369 812 1400 2262 2986 3458 3967 3858 3921 6202 6540 6591 3021 3272

b)  Evolución de la nutrición parenteral domiciliaria (NPD) según el Registro NADYA

250

200

150
Pacientes

100

50

0
1992 1994 1995 1996 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011- 2013 2014
2012
Pacientes NPD 39 30 19 38 67 66 74 86 70 79 103 133 143 158 148 184 197 220

Figura 1.  Evolución del número de pacientes con NAD incluidos en el Registro NADYA.
Tema 60.  Nutrición artificial domiciliaria 943

En EEUU el registro OASIS recogió en 1987 un total 229 episodios de NPD (211 adultos), lo que representa
de 19700 pacientes con NPD31. Posteriormente, este una tasa de 4,73 pacientes/millón/año. La indicación
registro cambió su nombre a Registro Nacional de Nu- más frecuente fue el síndrome de intestino corto (32,2 %),
trición Enteral y Parenteral, publicando sus datos de seguido de la obstrucción intestinal (25,6 %). Los caté-
prevalencia entre 1989 y 1992 (238 pacientes/millón teres tunelizados se emplearon en el 46,3 % de los pa-
en población beneficiaria de Medicare y de 120 pa- cientes y la NPD fue utilizada como único aporte en el
cientes/millón en población general). Tras estos regis- 52,1 %. La duración de la NPD ascendió a 612 días de
tros, en EEUU se interrumpió la recogida de datos, por mediana y se finalizó durante el año de estudio en 68
resultar muy costoso su mantenimiento, y existe un casos (en un 48,5 % por fallecimiento del enfermo y
vacío de datos hasta 2011, año en el que se crea el en un 33,8 % por paso a la vía oral). La figura 1B ilus-
sistema Sustain, que pretende incluir al 100 % de pa- tra el aumento de pacientes incluidos entre 1992 y
cientes con NPD incidentes y prevalentes33. En su in- 201415-17, 37-48.
forme final de 2015 reportaron 1.642 pacientes inclui-
dos 32 centros34.
4. Requisitos
En Europa, la prevalencia de NPD oscilaba en 1993
entre 0,3 y 12,2 pacientes/millón, con una incidencia La nutrición artificial domiciliaria (NAD), tanto ente-
de nuevos casos de 0,2 a 4,6/millón/año35. Esta gran ral como parenteral, ha supuesto un gran avance de
disparidad entre Europa y EEUU puede justificarse por cara a los cuidados de pacientes crónicos, en muchas
las diferencias en el sistema de financiación, en la pre- ocasiones pacientes oncológicos. Ha permitido mejo-
paración y la experiencia de los equipos que manejan la rar el estado nutricional sin la necesidad de permane-
NPD, en la presión para acortar las estancias hospitala- cer ingresado. La instauración de la NAD requiere una
rias y en la organización de la atención domiciliaria o valoración del estado y pronóstico del paciente, de su
de la coordinación entre hospital y primaria. entorno familiar y aportar una educación adecuada de
Algunos países europeos o americanos también dis- cara al manejo de sondas o catéteres en personal no
ponen de datos propios de NPD, como Canadá o Reino sanitario. La indicación de NAD debe basarse en un
Unido. Así, el último registro británico BANS de 2011 programa estructurado que incluya:
publicó una prevalencia de NPD de 8,4 pacientes/mi-
llón12, y Canadá, según su informe de 2012, una preva- 1. Adecuada identificación y selección de los pacien-
lencia algo superior (13,3 casos/millón)36. tes tributarios de este tratamiento (tabla 4).
En nuestro país, el registro NADYA-SENPE recoge los Los candidatos serán aquellos pacientes en situación
pacientes con NPD desde el año 1992, aunque hay al- clínica estable, que no puedan cubrir sus requerimientos
gún período sin información (1993 y 1997-1999). A lo nutricionales con alimentos naturales. Asimismo, es im-
largo de estos años el número de pacientes incluidos prescindible la aceptación por parte de la familia de este
se ha multiplicado, aunque a gran distancia de la ca- tipo de soporte, disponer de un domicilio en condicio-
suística de otros países. El último registro disponible, nes aceptables y realizar un entrenamiento correcto en
correspondiente a 2014, reportó 220 pacientes con estas técnicas a los familiares y/o al propio enfermo.

Tabla 4.  Criterios generales para la inclusión de pacientes oncológicos en un programa de NAD.

Indicación
NED NPD
Posibilidad de traslado a domicilio Aconsejable Imprescindible
Entorno social y familiar favorable Aconsejable Imprescindible
Tolerancia demostrada al tratamiento nutricional Aconsejable Imprescindible
Comprensión del programa educacional Aconsejable Imprescindible
Capacidad del paciente y familia para el manejo
Imprescindible Imprescindible
de la nutrición de forma segura
Expectativas de mejoría de la calidad de vida Imprescindible Imprescindible

NAD: nutrición artificial domiciliaria; NED: nutrición enteral domiciliaria; NPD: nutrición parenteral domiciliaria.
Adaptado de: Gómez Candela C, Iglesias Rosado C, de Cos Blanco AI, Castillo Rabaneda R y Mateo Lobo R
Nutrición artificial domiciliaria en el paciente oncológico. Consultado en http://www.seom.org/es/informacion-sobre-el-cancer/
publicaciones/429-soporte-nutricional-en-el-paciente-oncologico a 27 de octubre de 2016.
944 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

2. Plan de atención individualizado, que establezca: teral amiotrófica, en complicaciones del cáncer o sus
• Los objetivos nutricionales a corto y largo plazo tratamientos. No obstante, diversos estudios hablan de
específicos para el paciente. que la nutrición artificial no mejora ni tiene efecto en
• La prescripción de la NAD y las normas a seguir en enfermedades muy avanzadas.
la administración de la nutrición. En pacientes oncológicos con caquexia tumoral exis-
• Las pautas de prevención o tratamiento de las te poca evidencia sobre la influencia de la nutrición en
complicaciones que se deriven del tratamiento nu- el curso de la enfermedad cuando el paciente ya está
tricional. en estadio terminal, aunque no se han realizado gran-
• La organización del suministro periódico de la nu- des ensayos aleatorizados sobre este tema. Se ha suge-
trición y los materiales fungibles. rido que la falta de beneficio de la nutrición artificial en
• El programa de monitorización clínica y analítica estos casos se relaciona con la liberación de citoquinas
previsto, así como la revisión periódica del trata- que impiden la síntesis proteica.
miento nutricional. En situaciones de demencias muy avanzadas, la evi-
dencia disponible indica que la nutrición artificial no
3. Comunicación entre los diferentes especialistas mejora ni alarga la vida.
responsables del seguimiento del paciente con NAD. La indicación de hidratación artificial es controverti-
El establecimiento de canales de comunicación di- da y, en general, no se aboga por aportar hidratación
recta entre Atención Primaria y Especializada, con el fin intravenosa al final de la vida.
de mejorar la calidad de la asistencia, es un factor fun-
damental en el seguimiento de la NAD. La colabora- 5.2.  Cese del soporte artificial
ción entre ambos estamentos será básica para el segui-
miento clínico de estos enfermos. La informatización El cese voluntario de la nutrición e hidratación es una
de la historia clínica, cuando esté disponible, puede ser decisión médica y legal que pueden tomar los pacientes
de gran utilidad en este sentido, ya que permitiría re- o sus representantes legales al final de la vida frente a
gistrar y acceder a los últimos datos sobre el estado del intervenciones que les ocasionen un sufrimiento mayor.
paciente, la pauta de nutrición o las incidencias con la Mientras que la retirada de este soporte puede causar
terapia nutricional durante el seguimiento. más impacto tanto en el personal sanitario como en el
paciente, es igual de ético y legal que no iniciar la nutri-
ción artificial en el estadio terminal de una enfermedad.
5. Aspectos éticos sobre la nutrición En España, la Ley 41/2002, básica reguladora de la
e hidratación artificial autonomía del paciente y de derechos y obligaciones en
materia de información y documentación clínica estable-
La nutrición e hidratación artificial deben ser conside-
ce el derecho del paciente o su representante legal para
radas como intervenciones médicas más allá del simple
decidir las intervenciones médicas a las que se quiere
hecho de proporcionar alivio al paciente. El principal mo-
someter, incluyendo la nutrición y/o hidratación artifi-
tivo de indicación de nutrición artificial (NA) suele ser
cial. En EEUU, por ejemplo, varía según cada ley estatal
proporcionar soporte alimenticio en aquellos pacientes
si considera este soporte artificial como intervención mé-
cuya calidad o esperanza de vida pueda mejorar con esta
dica o medidas de confort. Siempre es importante apor-
intervención. Sin embargo, la NA no es un tratamiento
tar toda la información al paciente y respetar los princi-
curativo, por lo que no va a revertir la evolución de la
pios de autonomía, beneficencia y no maleficencia.
enfermedad terminal. De hecho, puede ser perjudicial en
ciertas ocasiones, aumentando la angustia e incomodi- Como conclusión, el soporte nutricional artificial no
dad del paciente, al favorecer los síntomas como la dis- se considera un cuidado básico, sino un tratamiento
nea, el aumento de las secreciones o la diuresis, necesi- que en ocasiones puede tener una indicación paliativa,
dad de sondas o de medidas de restricción mecánicas. dependiendo de la situación individual de cada enfer-
Por otro lado, la hidratación intravenosa se ha usado mo, del beneficio que aporte a su calidad de vida y
para evitar síntomas que puedan alterar la calidad de siempre respetando su voluntad. En caso de los días/
vida de los pacientes en fase terminal (como mayor as- semanas previos a la muerte, se aconseja no iniciar so-
tenia, disminución del nivel de conciencia, alucinacio- porte nutricional o si ya está establecido, considerar
nes), resultado de la hipovolemia y la deshidratación. seriamente su retirada49, 50.
Por lo tanto, las decisiones sobre el uso de nutrición y/o
hidratación artificial pueden ser independientes. 6.  Impacto social
La nutrición artificial domiciliaria permite al paciente
5.1. Inicio de nutrición e hidratación artificial
permanecer en su ambiente social y familiar aportando
Existe una falta de consenso sobre si la NA resulta o beneficios en términos de mantenimiento del estado
no beneficiosa en el final de la vida. Puede resultar útil nutricional y reduciendo su probabilidad de complica-
en enfermedades degenerativas, como la esclerosis la- ciones relacionadas con la hospitalización51.
Tema 60.  Nutrición artificial domiciliaria 945

Sin embargo, existe un evidente impacto en la salud 6.2.  Impacto de la NPD


emocional de los pacientes que reciben nutrición artifi-
cial. Es por ello que en los últimos años numerosos La NPD tiene un impacto claro en el ámbito social y
estudios se han centrado en valorar la repercusión en la familiar y en la calidad de vida de los pacientes. Las
calidad de vida tanto de los pacientes con NAD como dificultades pueden ser relativas a aspectos clínicos
de sus cuidadores. como el entrenamiento necesario para prevenir las
Los cuestionarios empleados para medir la calidad complicaciones relacionadas con el catéter y la imposi-
de vida referida a su salud (HRQoL) son muy variados, bilidad o dificultad para la ingesta oral de alimentos y
y frecuentemente se utilizan cuestionarios genéricos de líquidos, pero también se asocian otros problemas tan-
calidad de vida como el SF-36, el SF-12 o el EQ-5D. La to en las relaciones sociales y familiares como en el as-
necesidad de más investigación para valorar calidad de pecto económico61.
vida y NAD se advierte en un estudio español multicén- Baxter et al incluyen un total de 38 estudios de pa-
trico que evaluó la calidad de vida en 267 pacientes cientes con NPD, evaluando diferentes ámbitos psico-
con NAD utilizando el EQ-5D y la escala visual VAS, y sociales y de calidad de vida. Hasta un 40 % de los
que concluyó que la calidad de vida medida con estos pacientes refería síntomas psicológicos, como depre-
test se veía afectada en función de la patología de base sión y ansiedad, se demostraban problemas para las
(pacientes neurológicos) y el género (mujeres) de los relaciones sociales y familiares en más de la mitad de
pacientes, dificultando así su relación con el soporte los pacientes, grandes dificultades para viajar y planifi-
nutricional 52. car vacaciones, alteración en la imagen corporal y en
En los últimos años se han desarrollado otros cues- la esfera sexual en relación con catéteres externos y
tionarios más específicos para relacionar calidad de una tasa de desempleo elevada, siendo en algunos es-
vida y nutrición artificial que precisarán más estudios, tudios de hasta el 80 %62.
como el QOL-EF53, evaluado en pacientes con cáncer Los pacientes crónicos con enfermedad inflamatoria
de cabeza y cuello que reciben nutrición enteral, y el intestinal parecen mostrar mayor aceptación y adapta-
NutriQoL54-56, que valora calidad de vida en pacientes ción a la NPD que los pacientes con episodios gastroin-
con nutrición enteral independientemente de la vía de testinales agudos, que demuestran afectación psicoló-
administración utilizada y de la enfermedad de base. gica más significativa y mayor pérdida de independencia
y actividad63.
En un subgrupo de pacientes con cáncer que reci-
6.1.  Impacto de la NED bían NPD64 se obtuvieron resultados significativamente
Diversos estudios sugieren un efecto al menos neu- positivos en términos de calidad de vida medidos me-
tro en calidad de vida en pacientes que reciben NED. diante EORTC-QLQ-C30, sobre todo en los pacientes que
Un estudio multicéntrico de dos meses de duración en recibieron nutrición durante al menos tres meses.
pacientes con cáncer gastrointestinal que comparó el
uso de NED frente a tratamiento convencional (consejo 6.3. Impacto en cuidadores
dietético y suplementación nutricional), demostró un
mantenimiento de peso en el grupo de tratamiento En muchos casos, son los familiares o cuidadores del
frente al control, que perdió una media de 3,6 kg, y enfermo con NAD los que van a asumir una importante
una mayor probabilidad de completar su tratamiento carga psicológica y laboral. El cuidado informal se re-
quimioterápico previsto. Se evaluó la calidad de vida fiere a la prestación de cuidados que realizan familia-
mediante el test FAACT (Functional Assessment of res, amigos u otras personas a un enfermo dependien-
Anorexia/Cachexia Therapy), sin encontrar empeora- te, sin recibir remuneración económica. Los cuidadores
miento en el grupo que recibió nutrición enteral57. informales son una pieza clave en la atención a los
Otro estudio reciente australiano, muestra peor pun- pacientes dependientes, y un elemento indispensable
tuación en calidad de vida de los pacientes con NED para las instituciones sanitarias65.
comparándolos con población general, pese a la satis- En una revisión sobre el impacto de calidad de vida
facción general con los servicios de soporte nutricional en NPD, los cuidadores de pacientes presentaban satis-
prestados58. facción vital, calidad de vida general y cohesión fami-
En cuanto a calidad de vida y accesos digestivos me- liar similar a la población sana, con reacciones positivas
diante gastrostomía endoscópica percutánea (GEP), la con respecto al cuidado. Sin embargo, los trastornos
literatura sugiere un efecto neutro de la nutrición por del estado de ánimo fueron muy prevalentes, incluyen-
GEP en calidad de vida59. En un estudio prospectivo do depresión, frustración y ansiedad con respecto a
con 104 pacientes, un 73 % de los portadores encues- posibles complicaciones como infecciones, pérdida del
tados se mostraban satisfechos, siendo la calidad de acceso venoso, etc. En algún caso se reportó menor
vida peor en el grupo de mujeres, los ancianos eran actividad social en celebraciones que incluían la comi-
más dependientes de otros cuidadores y los pacientes da, y dos estudios referían que la fatiga llegaba a afec-
con cáncer presentaban peor percepción de la GEP60. tar a sus actividades diarias63.
946 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

Los cuidadores de niños que reciben NED también pre- de pacientes ancianos, y se asocia a una reducción de
sentan afectación psicológica. En un estudio en nuestro infecciones en una cohorte de pacientes con cirrosis72.
medio66, se evaluó a las madres de 56 niños con NED.
Los síntomas de ansiedad presentaban correlación con 7.2.  Nutrición enteral domiciliaria
mayor prevalencia de síndrome del cuidador «quema-
do», resaltando la importancia de detectar y tratar pre- Los tratamientos con NED tienen una importante re-
cozmente estos trastornos. percusión en el sistema sanitario. Precisamente, en el
Más recientemente se han recogido los testimonios Reino Unido se evaluó el coste-utilidad y coste-efectivi-
de 30 cuidadores de pacientes ancianos que recibían dad de la NE por sonda en pacientes con accidentes
NED.67 La reacción inicial al comienzo de la NED fue cerebrovasculares, tanto en domicilio como en residen-
negativa, debido al miedo y ansiedad asociados al ma- cias. El coste/QALY en estos pacientes ascendió a
nejo de los equipos infusores y a la imposibilidad de 12817 libras, por debajo del límite habitual de 30000
que sus familiares recibieran ingesta oral. Además de libras/QALY. Se encontró además que la NE era
ello, los cuidadores informales veían afectada su cali- coste-efectiva siempre que los costes no médicos del
dad de vida y disminuido su tiempo libre. Las visitas paciente no estuviesen financiados por el sistema pú-
mensuales domiciliarias del equipo de NED, así como el blico. Así, en los pacientes institucionalizados, la NE
entrenamiento progresivo previo al alta, se valoraron solo resultaba coste-efectiva cuando la contribución
muy positivamente. estatal representase menos del 34 % del total de los
gastos de institucionalización del enfermo73.
Un estudio observacional multicéntrico posterior
7.  Impacto económico muestra una reducción en el número de complicacio-
nes infecciosas y del número de ingresos y del tiempo
Cada vez existen más publicaciones que tratan de
de hospitalización asociada a la NED, con una reduc-
evidenciar si el soporte nutricional domiciliario en la
ción de costes medios anuales asociados a hospitali­
malnutrición es coste-efectivo, sobre todo a largo pla-
zación de 6500,20 a 2072,58 dólares74.
zo. Es decir, si la NAD comparada con el tratamiento
estándar conlleva beneficios económicos.
En un estudio español de 2007, encontramos un 7.3.  Nutrición parenteral domiciliaria
gasto medio en NAD de 151,2 euros/paciente/mes, te- Los costes directos atribuibles a NPD en EEUU en el
niendo en cuenta solo la fórmula nutricional. Al añadir año 2002 oscilaban entre 75 y 122 miles de dólares
el coste de los materiales necesarios para la administra- por NPD/año, sin incluir las visitas médicas, las pruebas
ción de la NAD (sondas, jeringas, bombas, etc.) la cifra de laboratorio, el soporte de enfermería domiciliario y
ascendía a 159,3 euros/paciente/mes68. las posibles hospitalizaciones. Los costes europeos son
Una publicación reciente evalúa los costes relaciona- similares a estos descritos. En el análisis coste/utilidad,
dos con la malnutrición en Reino Unido y el posible aho- se mostraban unos costes hasta un 60 % inferiores res-
rro con medidas de soporte nutricional, reflejando datos pecto a la nutrición parenteral hospitalaria, siendo el
globales de ahorro económico al implementar medidas coste menor en pacientes jóvenes y un 20 % superior
de cribado, valoración nutricional y nutrición artificial. durante el primer año de tratamiento75.
En un metaanálisis reciente sobre el uso de NPD en
7.1.  Suplementos orales domiciliarios pacientes con obstrucción intestinal no operable de
origen neoplásico, calculan un coste diario de NPD me-
Dos estudios sobre suplementos al alta hospitalaria, en diante extrapolaciones de unas 240 libras/día, y en su
pacientes ancianos malnutridos durante un período análisis coste-utilidad calculan un ICER (incremento del
de 6 meses no lograron diferencias en cuanto a funciona- ratio coste-efectividad) muy elevado, por lo que se
lidad, calidad de vida o coste sanitario entre el grupo con- concluye que debido a los altos costes en relación con
trol y de intervención69, 70. En pacientes malnutridos, con QALY ganados se debe individualizar el tratamiento
enfermedades gastrointestinales benignas, el uso de su- para determinar qué pacientes son los que más se be-
plementos durante 3 meses se asoció con una mejoría en neficiarían del uso de NPD76.
la calidad de vida y un mayor gasto (entre 9497 y 12099
euros/QALY), pero aparentemente coste-efectivo71.
8. Resumen
Un metanálisis reciente que incluye nueve estudios
muestra que la suplementación domiciliaria resulta • La nutrición artificial domiciliaria (NAD) se define
coste-efectiva o como mínimo neutra, siendo también como la administración de nutrición por vía ente-
los análisis ajustados por QALY favorables en la mayo- ral (NED) o parenteral (NPD), con la finalidad de
ría de los estudios que lo evaluaron. Además de ello, la mejorar o mantener el estado nutricional de un
suplementación domiciliaria reduce el riesgo de hospi- paciente en el que la alimentación ordinaria no
talización y mejora otras variables clínicas como la re- cubre sus necesidades, y llevándose a cabo en el
ducción de caídas y la limitación funcional en un grupo propio domicilio del enfermo.
Tema 60.  Nutrición artificial domiciliaria 947

• Desde 1997 existe en nuestro país una normativa León M, Pérez de la Cruz A, Planas M y Taix R. V
legal que regula la NED, en cuanto a indicaciones, Foro de debate SENPE. Problemática actual de la
productos financiados, prescripción y dispensa- nutrición artificial domiciliaria y ambulatoria. Nutr
ción de los mismos. Sin embargo, existen impor- Hosp 2008; 23(2):81-4.
tantes diferencias organizativas entre comunida-   6. Parver AK, Mutinsky SE. Enteral Nutrition Reimbur-
des autónomas. La NPD también está incluida en sement. The rationale for the policy: the US pers-
la cartera de prestaciones de nuestro Sistema Na- pective. Nestle Nutr Workshop Ser Clin Perform
cional de Salud, pero no disponemos de una legis- Programme 2009; 12: 53-70.
lación que la regule.  7.  Moreno JM, Shaffer J, Staun M, Hebuterne X,
• Las diferencias en la definición de la NAD y la Bozzetti F, Pertkiewicz M y cols. Survey on legislation
ausencia de registros obligatorios dificultan la ob- and funding of home artificial nutrition in different
tención de resultados epidemiológicos fiables y European countries. Clin Nutr 2001; 20(2):117-23.
explican la disparidad de datos de los registros   8. Moreno Villares JM. The practice of home artificial
internacionales o incluso dentro de nuestro pro- nutrition in Europe. Nutr Hosp 2004; 19(2):59-67.
pio país.   9. Castelló-Botía I, Wanden-Berghe C, Sanz-Valero C.
• El uso de nutrición e hidratación artificial domicilia- Artificial Nutritional Support Registries: Systematic
ria sigue siendo un tema controvertido al final de la Review. Nutr Hosp. 2009; 24(6):711-6.
vida. Deben considerarse como una intervención 10. Hebuterne X, Bozzetti F, Moreno Villares JM, Pert-
médica, que requiere indicación, objetivo terapéu- kiewicz M, Shaffer J, Staun M, Thul P, Van Gossum
tico y voluntad (consentimiento) del paciente. A; ESPEN-Home Artificial Nutrition Working Group.
• La nutrición artificial domiciliaria tiene un claro im- Home enteral nutrition in adults: a European mul-
pacto en el ámbito social y familiar de pacientes y ticentre survey. Clin Nutr 2003; 22(3):261-6.
cuidadores, precisándose más investigación en la
11. Howard L, Ament M, Fleming CR, Shike M, Steiger
práctica diaria para determinar el efecto de la NAD
E. Current use and clinical outcome of home pa-
en la calidad de vida y para la detección precoz y
renteral and enteral nutrition therapies in the Uni-
tratamiento de posibles trastornos del estado de
ted States. Gastroenterology 1995; 109:355-65.
ánimo asociados.
12. Smith T, Micklewright A, Hirst A, Gowan H, Baxter J.
• La NAD tiene un alto coste económico para los
Annual BANS Report, 2010. Artificial nutrition Su-
diferentes sistemas de salud, por lo que es necesa-
pport in the UK 2000-2009. A report by the British
rio evaluar su coste-efectividad y coste-utilidad.
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Diferentes estudios avalan el papel al menos neu-
BAPEN (The British Association for Parenteral and En-
tro o aparentemente coste-efectivo tanto de la
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en: http://www.bapen.org.uk/resources-and-educa-
destacándose la necesidad de más investigación al
tion/publications-and-reports/bans/bans-reports.
respecto. La NPD tiene unos costes y unas compli-
caciones claramente inferiores a la nutrición pa- 13. Shaw SA, Rühlin M, Wagener N, Stanga Z, Meier
renteral en pacientes hospitalizados y es necesario R, Ballmer PE. Home artificial nutrition in Switzer-
individualizar la decisión de este tratamiento en land: an epidemiological survey from 2005 to
función de múltiples factores como el diagnóstico 2009. Ann Nutr Metab 2013; 62(3):207-13.
de la enfermedad de base y la esperanza de vida, 14. Gómez Candela C, De Cos Blanco AI. Nutrición ar-
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948 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

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Tema 60.  Nutrición artificial domiciliaria 949

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950 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

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Tema 61. 
Nutrición e investigación
Alicia Calleja Fernández
Begoña Pintor de la Maza
Miriam Alejo Ramos
Alfonso Vidal Casariego
Unidad de Nutrición Clínica y Dietética. Sección de Endocrinología y Nutrición. Complejo Asistencial
Universitario. León

Dietoterapia, nutrición clínica y metabolismo. Tercera edición. Copyright 2017 de los autores, SEEN y Grupo Aula Médica.
Todos los derechos reservados. Páginas 951-963.

 1. Introducción
 2.  Tipos de estudio
 3.  Investigación traslacional
 4. Legislación
 5.  Organización de los grupos de investigación en España
 6. Financiación
 7.  Propiedad industrial
 8.  Divulgación científica
 9. Resumen
10. Bibliografía

1. Introducción La investigación, como fuente de desarrollo y de ri-


queza, se ha convertido en una actividad en la que se
La epidemiología estudia la distribución de las en- invierten muchos recursos, públicos y privados. El acce-
fermedades y sus determinantes en la población hu- so a estos recursos genera procesos competitivos de
mana a partir de inferencias derivadas de la observa- selec­ción de los investigadores para alcanzar mejores
ción o la experimentación, permitiendo, además, la resultados. En los últimos años se ha logrado la profe-
aplicación de la evidencia científica obtenida a la toma sionalización de muchos in­vestigadores y la organiza-
de decisiones clínicas y de salud pública. Su propósito ción de equipos o entidades con dedicación a la inves-
es promover métodos de observación e interpretación tigación. El objetivo de estos profesionales es aportar
de problemas de la práctica clínica que permitan obte- valor y resultados en la sociedad a través del conoci-
ner conclusiones válidas, conocer la prevalencia de las miento y la innovación en el campo de la salud y tam-
enfermedades y su distribución en la comunidad, la bién en el de la nutrición clínica.
investigación de las causas e historia natural de la en- En este capítulo se revisarán los principales tipos de
fermedad y la evaluación de la eficacia de las interven- estudios empleados en el amplio campo de la nutri-
ciones terapéuticas y preventivas1. Centrándose en el ción, la legislación actual que los regula, la organiza-
campo de la nutrición clínica, la complejidad del esta- ción de los grupos de investigación en España, las
do nutricional y de la alimentación humana convierten fuentes de financiación, la propiedad industrial y la di-
a la epidemiología nutricional en una especialización vulgación científica.
con importantes peculiaridades, consecuencia de la
dificultad para la definición y medición de las variables
2.  Tipos de estudio
investigadas, tanto de la ingesta dietética como del
impacto fisiopatológico (variables antropométricas, Los estudios epidemiológicos parten de la observa-
bioquímicas, etc.). Por ello, los estudios epidemiológi- ción de un evento o fenómeno del que se quiere obte-
cos nutricionales presentan una gran complejidad en ner una información para conocer su evolución, com-
su diseño, en el trabajo de campo y en la interpreta- portamiento, origen y la asociación a posibles factores
ción de los resultados. de riesgo para su intervención. Por lo tanto, se debe

951
952 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

entender que es un proceso destinado a responder una También se puede tener en cuenta la finalidad de la
pregunta basada en la realidad, de la manera más investigación, dividiéndose así en estudios analíticos y
exacta posible, sobre la que se ha hecho una hipótesis descriptivos. Los primeros tienen como finalidad eva-
que debe ser probada. Los principales objetivos de los luar la relación causal entre un factor de estudio y un
estudios epidemiológicos son conocer el estado de sa- resultado, respuesta o efecto. Los descriptivos son ge-
lud de un grupo o área poblacional, evaluar y conocer neradores de hipótesis que deberán ser contrastadas a
la efectividad de las intervenciones sanitarias llevadas a posteriori con la realización de estudios analíticos.
cabo, investigar los factores de exposición y las causas A la hora de elegir el tipo de estudio a realizar, se
que hacen que aumente el riesgo de una enfermedad debe tener en cuenta el objetivo principal de la investi-
y determinar y evaluar las pruebas diagnósticas em- gación y, a continuación, valorar las limitaciones y ven-
pleadas en una enfermedad determinada. tajas de cada tipo de estudio. Se deben tener siempre
A la hora de clasificar los tipos de estudio, se pueden en cuenta los siguientes aspectos: medición de la en-
emplear diferentes criterios: el parámetro escogido para fermedad o grado de exposición a la misma o al factor
realizar la investigación, la finalidad del estudio, la se- de riesgo, duración mínima del estudio y los recursos
cuencia temporal del mismo, el momento de inicio en disponibles por cada equipo investigador para la reali-
relación con la cronología de los hechos o la asignación zación del mismo. Los distintos tipos de estudios orde-
de los factores de estudio. Teniendo en cuenta la exis- nados de mayor a menor en función de la evidencia
tencia o no de intervención sobre el factor de estudio causal proporcionada se muestran resumidos en la
por parte del investigador, los estudios se pueden clasi- tabla 1.
ficar en experimentales y observacionales (figura 1). En
el primer grupo el investigador asigna y controla el fac-
2.1.  Estudios transversales
tor de estudio, pudiendo haber dos o más grupos en
función de si reciben o no tratamiento terapéutico. En Los estudios transversales también pueden ser deno-
el caso de los observacionales, el investigador no influye minados estudios de corte. En ocasiones, también se
en el grupo de estudio y su única función es observar, denominan estudios de prevalencia, aunque no siem-
medir y analizar las variables que son relevantes en la pre es adecuado, ya que las variables utilizadas en el
finalidad última del estudio. Se puede presuponer que estudio no tienen por qué ser siempre cualitativas. La
los estudios experimentales aportan una mayor eviden- finalidad principal de este tipo de estudios es la de des-
cia científica para el conocimiento de la causalidad aun- cribir la presencia de un factor causal y/o una enferme-
que no siempre son factibles de realizar. dad en una determinada población en un momento

ESTUDIO
EPIDEMIOLÓGICO

Asignación controlada
SÍ NO
del factor de estudio

Asignación ESTUDIO
aleatoria OBSERVACIONAL

NO SÍ
Elección de la muestra

Estudio de campo (individuo) o ENSAYO Exposición al Efecto


comunitario (grupo)
CLÍNICO factor (enfermedad)

ESTUDIO
CUASIEXPERIMENTAL Exposición
SÍ NO
previa

ESTUDIO DE ESTUDIO Unidad de


Población Individuo
COHORTES CASOS-CONTROLES estudio

ESTUDIO ESTUDIO
ECOLÓGICO TRANSVERSAL

Epidemiología Epidemiología Epidemiología


experimental analítica descriptiva

Figura 1.  Tipos de estudios epidemiológicos.


Tabla 1.  Diferencias entre los distintos tipos de estudios epidemiológicos.

TIPO DE ESTUDIO ENSAYO COHORTES CASOS-CONTROLES ECOLÓGICO TRANSVERSAL


Control Experimental Observacional Observacional Observacional Observacional
Causalidad Analítico Analítico Analítico Descriptivo / Analítico Descriptivo
Incorporación Prospectivo Prospectivo / Retrospectivo Retrospectivo Retrospectivo Transversal
Individuo: E. clínico Individuo Individuo Población Individuo
Unidad análisis
Población: E. comunitario
Grupo(s) Sí (Ensayo clínico: asignación Sí (individuo expuesto versus Sí (individuo enfermo versus Sí (dos poblaciones o antes- No
de comparación aleatoria) individuo no expuesto) individuo sano) después)
Comparación efectos entre Comparación enfermedad entre Comparación de la exposición Correlación exposición- Asociación en relación con un
Principio intervención-no intervención expuestos-no expuestos entre casos-controles enfermedad tiempo de la exposición a una
enfermedad
• Intervenciones terapéuticas o • Historia natural de la • Asociaciones • Asociaciones • Prevalencia
preventivas enfermedad • Generación de hipótesis • Generación de hipótesis • Factores de riesgo
• Prueba de causalidad • Incidencia • Prueba de causalidad • Exposición ambiental o social • Asociaciones
Indicaciones
• Historia natural de la • Generación de hipótesis • Evaluación pruebas • Factores de riesgo • Generación de hipótesis
enfermedad • Prueba de causalidad diagnósticas y tratamientos poblacionales • Evaluación antes-después
• Evaluación coste-beneficio
• Mayor control del factor de • Cálculo directo del riesgo • Relativamente menos costosos • Permite estudiar grandes grupos • Bajo coste y no muy largos en
estudio • Clara relación temporal • Corta duración poblacionales el tiempo
• Mayor control de factores de exposición-enfermedad • Útiles en enfermedades raras • Son relativamente sencillos de • Útiles en planificación y
confusión • Multiefectividad • Permite el análisis de varios realizar gestión
Ventajas • Multiexposición factores de riesgo para una • Fácil extrapolación (muestras
• Exposiciones infrecuentes determinada enfermedad representativas)
• Estiman incidencia • Se pueden estudiar varias
enfermedades o factores de
riesgo simultáneamente
• Limitaciones éticas y riesgo • Alto coste: tiempo y tamaño • Selección grupo control • Sesgo de agregación • No útiles en investigación
• Dificultad de generalización: muestral • Riesgo de sesgos: memoria y poblacional («falacia causal
muestra e intervención • Dificultad de realización registros ecológica») • Posibilidad de sesgos de
• No multicausalidad • Pérdida de sujetos • No conocimiento temporal • Diferencias de calidad de información y selección.
• Seguimiento corto y largos • Sesgo por modificaciones en de la relación exposición- los registros en distintas • Ineficaz en enfermedades raras
Inconvenientes períodos de latencia (dieta) los métodos diagnósticos enfermedad poblaciones y de corta duración
• Dificultad para mantener una • Factores de confusión • Control incompleto de los
medida compleja definida en el asociados a diferencias entre factores de confusión
grupo (dieta) los grupos • No estiman la incidencia.
Tema 61.  Nutrición e investigación

• No útiles en enfermedades


raras.
953

E: ensayo.
954 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

temporal determinado, aunque no permita conocer la grupos de personas o poblaciones), en las que se mide
incidencia de la exposición. Este momento temporal tanto el estado nutricional como la enfermedad, per-
determinado debe estar definido como un punto con- mitiendo comparar entre sí los valores de ambas varia-
creto en un período delimitado. Por ello, los estudios bles y determinar las correlaciones ecológicas (entre
transversales permiten estimar la prevalencia de una distintas poblaciones) y temporales (entre distintos
enfermedad dentro de una población específica y re- momentos dentro de una misma población). El objeti-
sultan de gran utilidad en situaciones crónicas o de vo principal de este tipo de estudios es describir y ex-
larga evolución. plorar las variables relacionadas con la aparición de
Dentro de los estudios transversales podemos en- una enfermedad, medidas en una población o grupo
contrar los estudios descriptivos o analíticos. Los pri- de personas.
meros describen las frecuencias de una exposición o Hay varios tipos de estudios ecológicos, los que mi-
enfermedad en una población definida. Los segundos den la frecuencia de una situación determinada en va-
recolectan los datos de la enfermedad de interés y los rias áreas, intentando determinar la existencia o no de
factores de riesgo en una determinada población, con algún patrón que permita generar una hipótesis sobre
lo que posteriormente se compara la prevalencia de la el evento. Otro tipo de estudios ecológicos son aque-
enfermedad en las personas expuestas al factor de ries- llos que se refieren a series temporales cuya finalidad es
go y las que no. buscar los patrones estacionales de un problema de
Las variables descritas en un estudio transversal, sal- salud mediante la descripción de las variaciones en la
vo sexo y raza, deben ser consideradas como factores frecuencia de aparición de la misma, lo que permite
de confusión, ya que todos son susceptibles de cam- generar hipótesis predictivas según la evolución del
biar a lo largo del tiempo. Estos estudios pueden utili- problema descrito3. Otras variantes de los estudios
zarse para generar hipótesis de causalidad pero no ecológicos son los estudios de migraciones y los estu-
permiten probarlas. dios basados en grupos especiales de exposición.
Los estudios transversales son importantes para la La principal ventaja que presentan estos estudios es
planificación y gestión de recursos sanitarios, ya que que permiten estudiar grandes grupos poblacionales
describen la magnitud y la distribución de los proble- siendo relativamente fáciles de realizar. Al poder estu-
mas y además son necesarios para la identificación de diar grandes grupos, aumenta el poder estadístico y la
grupos de riesgo y evaluar el éxito o fracaso de las in- variabilidad en la exposición al factor. Además, se pue-
tervenciones. den utilizar para recabar información de estadísticas
La principal limitación de los estudios transversales es vitales.
que, de todos los estudios epidemiológicos, es el único Respecto a las limitaciones, destaca la existencia de
con una finalidad meramente descriptiva, lo cual afecta sesgos por la agregación propia del estudio a nivel po-
directamente a su capacidad analítica, lo que imposibi- blacional. Esto genera una situación llamada falacia
lita el establecer relaciones de causa-efecto. Además, ecológica provocada por entender el problema pobla-
hay que tener en cuenta que en estos estudios el inves- cional como indicativo también a nivel individual. Ade-
tigador no puede influir en la aparición de eventos ni en más, no se puede obtener información sobre factores
la proporción de sujetos que han sido expuestos, lo que de confusión, lo que imposibilita corregir en base a
es importante en contraste con otros estudios en los estos. Suelen ser estudios incompletos, ya que al em-
que sí se puede controlar esta circunstancia. Además, plear promedios grupales, generalmente no permite
en estos estudios existe el sesgo de prevalencia de Ney- conocer la distribución de las características en estudio
mann (sesgo de supervivencia selectiva) que determina a nivel individual y solo lo hace de manera grupal.
la pérdida prematura de los sujetos de estudio, lo que Un ejemplo de este tipo de estudios es el realizado
provoca una sobreestimación del efecto de un factor en en 2012 por López-Abente et al 4, cuyo objetivo fue
enfermedades de larga duración. relacionar la presencia o no de cáncer colorrectal res-
Un ejemplo de este tipo de estudios es el elaborado pecto a la polución en las ciudades, utilizando para ello
por Moriana et al en 20132, en el que se valoró la ade- la información almacenada en el Instituto Nacional de
cuación de un método de valoración nutricional en un Estadística.
hospital de tercer nivel, y conocer de esa manera la
prevalencia de desnutrición en el mismo. 2.3.  Estudios de casos y controles
En los estudios de casos y controles se comparan dos
2.2.  Estudios ecológicos
grupos de individuos. Su diseño consiste en la selec-
Los estudios ecológicos nutricionales también son ción de un grupo de individuos que tienen la enferme-
denominados estudios de correlación. Son uno de los dad de interés (casos) y otro de individuos sanos (con-
estudios más sencillos y se utilizan para conocer los troles), determinando la frecuencia de la exposición
factores de riesgo poblacionales. Las unidades de aná- previa al factor de interés en ambos grupos, compa-
lisis son colectividades (poblaciones, áreas geográficas, rándolos5. De esta manera, si la prevalencia o la inten-
Tema 61.  Nutrición e investigación 955

sidad son mayores en el grupo de casos y el estudio no medad y después la que concierne a la exposición. Te-
presenta ningún sesgo y está libre de confusión por niendo en cuenta la recogida de la información, pue-
otras variables, se habrá detectado una asociación cau- den distinguirse estudios de casos y controles con
sal entre la enfermedad y el factor de riesgo; si, por el casos prevalentes simultáneos o, por el contrario, con
contrario, son mayores en el del grupo de controles, se incorporación prospectiva de los casos incidentes. Es
habrá detectado un factor protector para la enferme- necesario extremar las precauciones para así garantizar
dad. Para determinar la asociación causal hay que ser su validez y, en lo posible, evitar basarse en los recuer-
cuidadoso en tres aspectos: 1) selección del tipo de dos de los participantes, ya que no siempre proporcio-
caso, 2) selección de los controles, y 3) medición re- nan estimaciones correctas.
trospectiva de la exposición. Si no se manejan correcta- La mayor ventaja de estos estudios es que permiten
mente, la estimación resultante de la relación entre estudiar un gran número de casos de una enfermedad,
exposición y enfermedad puede ser errónea. haciéndolos especialmente útiles cuando se estudian
La elección de los controles es clave en el diseño del patologías poco frecuentes, comprobando sus posibles
estudio, ya que tienen que reunir los siguientes requisi- factores causales (multicausalidad), así como para en-
tos: ser representativos de la población de la que pro- fermedades raras y/o con largos períodos de latencia.
vienen los casos, tener una exactitud comparable a los Otra ventaja es su eficiencia, requiriendo menor tiem-
casos en la definición de la exposición al factor de ries- po de duración y con un coste menor que los estudios
go para evitar los sesgos de información y controlar las de cohortes, al no tener que seguir a los pacientes du-
variables demográficas y clínicas que pueden consti- rante el período de latencia de la enfermedad. Por últi-
tuirse como factores de confusión. La identificación de mo, no tienen limitaciones éticas ni riesgo para los su-
los casos requiere definir la enfermedad de forma ex- jetos participantes.
plícita, así como los criterios que deben cumplir los pa- Los principales inconvenientes de estos estudios se
cientes seleccionados, incluyendo solo los sujetos que deben a su carácter retrospectivo, debido a la facilidad
hayan podido estar expuestos al presunto factor de para la introducción de sesgos, tanto en la selección de
riesgo. Cuando se está en el ámbito comunitario es los participantes como en la información que se obtie-
habitual seleccionar controles de la misma área de resi- ne sobre los factores de riesgo. Podemos tener varios
dencia de los casos. En ámbitos hospitalarios, los con- sesgos, dentro de los que destacan el sesgo de medida
troles se seleccionan habitualmente a partir de pacien- sobre la exposición en el pasado, ya que depende de la
tes con diagnósticos no relacionados que, por lo memoria y/o de registros de baja calidad. Sesgo de in-
demás, son comparables a los casos. formación, definido como la alteración de la informa-
Una vez definida la población origen de los contro- ción existente en los casos en función de su conoci-
les, existen dos formas de seleccionarlos: no aparea- miento de que padecen la enfermedad. Por último, los
dos y apareados. En un estudio no apareado, los con- estudios de casos y controles no proporcionan una es-
troles se seleccionan sin ninguna restricción. Por el timación directa de la incidencia de la enfermedad, y,
contrario, en un estudio apareado, para cada caso se por tanto, no permiten estimar directamente el riesgo
busca un control similar con respecto a una serie de relativo.
variables relevantes, como edad, sexo u otras exposi- Un ejemplo de este tipo de estudio en el ámbito nutri-
ciones que estén muy relacionadas con la enferme- cional es el realizado por Lucas et al7 donde compararon
dad, denominadas factores de confusión. De esta for- pacientes con cáncer de páncreas (casos) y sujetos sanos
ma se garantiza que los casos y los controles sean (controles), para valorar si algunos componentes especí-
comparables con respecto a estas exposiciones y que ficos de la dieta originan un mayor riesgo de padecer
ninguna de ellas aparezca relacionada con la enferme- esta patología.
dad en el estudio6. Si el diseño es correcto, la asocia-
ción causal determinará diferencias entre los grupos,
2.4.  Estudios de cohortes
que deberán ser establecidas estadísticamente me-
diante las pruebas exigidas por las condiciones de apli- Este tipo de estudios se utilizan para comparar la in-
cación. Estos estudios no permiten calcular directa- cidencia de una enfermedad en varios grupos de suje-
mente la incidencia, ya que se han seleccionado tos. El término cohorte pretende designar a un grupo
individuos que han desarrollado la enfermedad, por de sujetos con una o varias características en común.
ello, la medida de asociación que se utiliza es la odds En los estudios de cohorte, los individuos son clasifi-
ratio (OR), que es una buena aproximación del riesgo cados en un grupo de expuestos al factor de riesgo y
relativo bajo determinadas condiciones. un grupo de no expuestos. Esto permite estimar la in-
Los estudios de casos y controles son retrospectivos cidencia de los expuestos y no expuestos, y en el grupo
por naturaleza, ya que el resultado se conoce al princi- de los que han estado expuestos al factor de riesgo
pio del estudio, precisando que el carácter retrospecti- permite conocer el nivel y la duración de la exposición
vo de este diseño se refiere al sentido de la recogida de y así poder cuantificar la fuerza de la asociación del
la información: primero se recoge la referida a la enfer- factor de riesgo con la enfermedad.
956 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

Una de las partes imprescindibles de este tipo de es- po comparable que no lo recibe (grupo control). Ac-
tudios es que la población partícipe del estudio esté tualmente, los ensayos clínicos se han convertido en un
sana al inicio del mismo. La determinación de asocia- procedimiento estándar de evaluación de la eficacia de
ción causal se alcanza al detectar diferencias estadísti- cualquier tipo de intervención terapéutica.
camente significativas entre los grupos que forman el Las características de los grupos de sujetos que par-
estudio. Si se consigue establecer esa asociación, se ticipan en un ensayo clínico deben ser homogéneas y
puede medir la fuerza de esa asociación mediante el se debe excluir a las poblaciones en riesgo. Los diferen-
riesgo relativo (incidencia de enfermedad entre expues- tes puntos a tener en cuentan para evitar sesgos son: el
tos y no expuestos). estudio debe realizarse como doblemente «ciego» (los
Los estudios de cohortes son siempre estudios longitu- enfermos y los investigadores desconocen el trata-
dinales, es decir, se busca determinar las tasas de inciden- miento que recibe cada individuo); en segundo lugar,
cia de la enfermedad tras la exposición al factor de riesgo. la asignación de los participantes a los diferentes gru-
La incorporación de los individuos al estudio se puede pos debe realizarse al azar, para evitar que en alguno
hacer de dos maneras; por un lado, incluirlos próximo al de los grupos se incluyan los individuos con mayor o
momento de exposición con un seguimiento hasta el de- menor susceptibilidad de respuesta al tratamiento, se
sarrollo de la enfermedad (prospectivo) o incluirlos cuan- recomienda que la misma sea de forma aleatoria. El
do la aparición de la enfermedad está próxima investi­ método empleado debe ser reproducible y garantizar
gando «hacia atrás» la exposición del factor de riesgo que todos los pacientes tienen la misma probabilidad
(retrospectivo). Las principales ventajas de este tipo de de ser asignados a un determinado grupo. Finalmente,
estudios radican en la clara relación temporal de causa y ante lo crucial de que cada participante siga correcta-
efecto de la aparición de la enfermedad, lo que permite mente el tratamiento (u otra intervención) que le co-
calcular los riesgos. Además, son eficientes a nivel de multi­ rresponde, es necesario promover continuamente el
efectividad y multicausalidad y de exposiciones raras. cumplimiento del mismo y realizar un análisis de la
Una de las mayores limitaciones de los estudios de adhesión al protocolo.
cohortes prospectivos es que requieren de un tiempo En el campo de la nutrición clínica, estos estudios
importante de seguimiento, se necesitan grandes tama- son particularmente útiles para evaluar hipótesis que
ños muestrales y suelen tener un diseño de coste muy implican a componentes minoritarios de la dieta, como
elevado. Otro de los inconvenientes de este tipo de estu- elementos traza o vitaminas. Algunos de ellos han va-
dios es la poca eficiencia a la hora de poder conocer lorado el papel de diferentes sustancias antioxidantes
enfermedades raras y/o con períodos largos de latencia, en la prevención primaria, secundaria y terciaria de la
pudiéndose presentar sesgos en la clasificación de los enfermedad cardiovascular, otros se han diseñado es-
sujetos y factores de confusión que son difíciles de con- pecíficamente para establecer asociaciones con cáncer
trolar. Las cohortes retrospectivas tienen como principal y, por último, algunos de ellos valoraron conjuntamen-
inconveniente, la dificultad para obtener la información te la enfermedad cardiovascular y el cáncer. La mayoría
histórica sobre la exposición al factor de riesgo, lo que de estos ensayos no han demostrado, en general, una
hace que la información esté sesgada. reducción del riesgo. El paso siguiente ha sido el desa-
Un ejemplo reciente de este tipo de estudios es el rrollo de estudios de intervención nutricional, donde la
programa THAO-SALUD INFANTIL8, realizado a nivel asignación completa consistía en un patrón completo
nacional en España con el objetivo de promover hábi- y no de uno o dos elementos exclusivamente9.
tos de vida saludables y conocer su impacto en el desa- El principal inconveniente de los estudios experimen-
rrollo de obesidad en la población del estudio. tales es de carácter ético, ya que no pueden ser aplica-
das intervenciones sobre cuya seguridad existen dudas
ni tampoco cuando se han demostrado sus beneficios.
2.5.  Ensayos clínicos
Por esta razón, están legislados específicamente y de-
El estudio experimental más importante es el ensayo ben ser aprobados por los Comités Éticos de Investiga-
clínico aleatorio, considerado como el mejor diseño ción Clínica de referencia.
disponible para evaluar la eficacia de un tratamiento, Uno de los ensayos clínicos más importante realiza-
ya que es el que proporciona la evidencia de mayor do en España fue el Proyecto PREDIMED10, donde tra-
calidad acerca de la existencia de una relación causa-­ taron de establecer el papel de la dieta mediterránea
efecto con la respuesta observada. Los ensayos clínicos sobre la enfermedad cardiovascular sobre sujetos ini-
son actividades de investigación que suponen la admi- cialmente sanos.
nistración de una pauta de tratamiento o prevención
por parte del investigador (manipula la exposición) a
3.  Investigación traslacional
seres humanos para evaluar su seguridad y su eficacia.
En general, estos implican una comparación de los re- Las técnicas básicas de investigación (a nivel bioquí-
sultados clínicos en un grupo de pacientes que reciben mico, genético o incluso antropométrico) resultan im-
tratamiento (grupo de intervención) con los de un gru- prescindibles para el desarrollo de nuevos marcadores
Tema 61.  Nutrición e investigación 957

del estado nutricional y para la validación de las meto- Investigación con medicamentos, así como el Registro
dologías utilizadas en su medición. A través de mode- español de estudios clínicos, conformado tanto por los
los animales y humanos, la ciencia básica proporciona ensayos clínicos como por los estudios postautoriza-
información fisiopatológica esencial sobre los factores ción observacionales que se realicen con medicamen-
dietéticos de las enfermedades. Con esta información tos de uso humano. Solo se podrá iniciar un ensayo
los investigadores son capaces de generar nuevas hipó- clínico objeto de esta regulación cuando el Comité de
tesis causales y de explicar las ya probadas epidemioló- Ética de Investigación Médica y la Agencia Española de
gicamente. Sin embargo, en ningún caso los estudios Medicamentos y Productos Sanitarios hayan considera-
básicos permiten establecer la causalidad, ya que los do que se cumplen la totalidad de las siguientes condi-
modelos animales no pueden ser directamente extra- ciones: 1) El ensayo clínico es ética y metodológica-
polados al ser humano y porque los cambios bioquími- mente correcto y está diseñado para que se obtengan
cos originados por la dieta no son equiparables nece- datos fiables y sólidos. 2) Los beneficios para el sujeto
sariamente al proceso que conduce a la enfermedad. El del ensayo o para la salud pública esperados justifican
efecto causal solo puede probarse mediante estudios los riesgos y los inconvenientes previsibles, y se super-
epidemiológicos analíticos o experimentales en pobla- visa de forma constante el cumplimiento de esta con-
ciones humanas. La investigación básica debe, por tan- dición. 3) Se obtiene y documenta el consentimiento
to, prolongarse en la epidemiológica para transformar informado de cada uno de los sujetos del ensayo, libre-
los conocimientos teóricos en aplicaciones clínicas con- mente expresado, antes de su inclusión en el ensayo. 4)
cretas. Se respetan los derechos del sujeto a su integridad físi-
Aunque parezca evidente la necesidad de realizar es- ca y mental, y a su intimidad, y se protegen los datos
tudios básicos y epidemiológicos conjuntos, sus co- de carácter personal que le conciernen, de acuerdo con
mienzos son muy recientes. En los últimos años, se ha la Ley Orgánica 15/1999, de 13 de diciembre, de Pro-
potenciado el concepto de investigación básica aplica- tección de Datos de Carácter Personal. 5) El ensayo clí-
da o traslacional, que puede tener dos tipos de plan- nico ha sido diseñado para reducir al mínimo posible el
teamientos: 1º) El investigador básico desarrolla pro- dolor, la incomodidad, el miedo y cualquier otro riesgo
puestas clínicas, y 2º) aproximación de los avances de previsible para los sujetos del ensayo. 6) La atención
la investigación básica a la clínica. En el primer caso, la sanitaria que se dispensa y las decisiones médicas que
investigación sigue siendo básica, aunque teniendo en se adoptan sobre las personas son responsabilidad de
cuenta la clínica. En el segundo, aun siendo una activi- un médico, de un odontólogo debidamente cualifica-
dad de investigación estrictamente clínica, se emplean do o de otro profesional sanitario, siempre en orden a
muchas técnicas de investigación básica debido a la sus competencias para ofrecer los cuidados necesarios.
simplificación de las nuevas técnicas analíticas y su 7) Se han facilitado al sujeto de ensayo o, si este no es
abaratamiento, especialmente a nivel genético (nutri- capaz de dar su consentimiento informado, a su repre-
genómica) y de biología molecular. sentante legalmente designado, los datos de contacto
de una entidad que puede proporcionarle información
adicional en caso de necesidad. 8) No se ha ejercido en
4. Legislación
los sujetos del ensayo influencia indebida alguna, in-
La legislación actual aplicable a los estudios de inves- clusive de carácter económico, para que participen en
tigación clínica tiene un impacto en los proyectos rela- el ensayo. 9) Se ha contratado el seguro o garantía fi-
cionados con la nutrición clínica, especialmente cuan- nanciera; los ensayos clínicos deberán realizarse de
do los estudios se centran en el uso de fármacos y acuerdo con la Declaración de Helsinki sobre los princi-
nutrición parenteral. En estas situaciones, los ensayos pios éticos para las investigaciones médicas en seres
clínicos o los observacionales estarán regulados por la humanos. 10) En el caso de que en el ensayo clínico se
siguiente legislación: prevea la recogida de muestras biológicas se establece-
Ensayos clínicos: La legislación que regula estos en- rán las previsiones oportunas para que una vez finaliza-
sayos, independientemente del estado de autorización do el ensayo su utilización en investigación se adecue a
del fármaco, es el Real Decreto 1090/2015, de 4 de lo previsto en el Real Decreto 1716/2011.
diciembre, por el que se regulan los ensayos clínicos
con medicamentos, los Comités de Ética de la Investi- Estudios postautorización (EPA) observacionales: Se
gación con medicamentos y el Registro Español de Es- definen como las investigaciones con medicamentos
tudios Clínicos. El pasado mes de enero de 2016 entró de uso aprobado por la Agencia Española del Medica-
en vigor este Real Decreto, cuyos objetivos principales mento y diseñados como estudios no experimentales.
son desarrollar las disposiciones específicas para la La legislación que regula los EPA es el Real Decreto
aplicación en España del Reglamento (UE) n.º 536/2014 577/2013, de 26 de julio, por el que se regula la farma-
del Parlamento Europeo y del Consejo, de 16 de abril covigilancia de medicamentos de uso humano, el Ane-
de 2014, sobre los ensayos clínicos de medicamentos xo VI de la Circular 15/2002 de la Agencia Española del
de uso humano y Regular los Comités de Ética de la Medicamento (AEM) y la legislación específica de cada
958 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

comunidad autónoma. A diferencia de los ensayos clí- (CIBERer), Epidemiología y salud pública (CIBEResp),
nicos, la legislación de los estudios observacionales es Bioingeniería, biomateriales y nanomedicina (CIBERbbn),
menos estricta, diferenciándose principalmente en los Diabetes y enfermedades metabólicas (CIBERdem), En-
siguientes puntos: exención de la obligatoriedad del fermedades neurodegenerativas (CIBERned), Fisiopatolo-
seguro, no exigencia del informe del Comité Ético de gía de la obesidad y la nutrición (CIBERobn), Salud men-
Investigación Clínica si se emplean registros preexisten- tal (CIBERsam) y Enfermedades respiratorias (CIBERes).
tes que no contengan datos de carácter personal, en A nivel nutricional, el CIBERobn tiene como misión
algunos casos puede ser obviado el consentimiento principal ayudar en el avance del entendimiento de
informado del paciente, el estudio no debe interferir en los mecanismos que contribuyen al desarrollo de la
la actividad asistencial, ni alterar la prescripción del in- obesidad para reducir su incidencia y prevalencia, así
vestigador. como sus complicaciones, además de las enfermeda-
En temas de nutrición oral o enteral, no existe una des relacionadas con la nutrición. A través de su lide-
legislación que regule el desarrollo de proyectos de in- razgo en la investigación biomédica traslacional, inte-
vestigación. Los productos dietoterápicos no son fár- gra la investigación básica, clínica, epidemiológica y
macos, y se definen como «alimentos destinados a de salud pública, así como la asistencia médica y la
usos médicos especiales» y están incorporados en el educación en el ámbito público de la obesidad y la
Registro General Sanitario de Alimentos. Aun así, son nutrición, convirtiéndose por todo ello en un centro
numerosos los centros o institutos de investigación, de investigación de referencia con un potencial com-
hospitales, fundaciones sanitarias o universidades, que petitivo de internacionalización y para proveer servi-
exigen a sus profesionales la aprobación por el comité cios de asesoría en I+D+I a compañías tanto farma-
de ética de todos los estudios sobre nutrición oral, en- céuticas como de la alimentación, así como a las
teral o de alimentación que realicen. autoridades sanitarias del país. El CIBERobn es una
estructura cooperativa en red, formada por 31 grupos
ubicados en algunos de los principales centros de in-
5. Organización de los grupos de vestigación de España. Estos grupos se estructuran en
investigación en España seis Programas de Investigación donde se desarrollan
5.1.  CIBER proyectos que permiten, a través de un trabajo multi-
disciplinar, sumar esfuerzos, optimizar recursos y
Los Centros de Investigación Biomédica en Red (CI- aprovechar al máximo el conocimiento generado para
BER) son Estructuras Estables de Investigación Coope- poder transferirlo a la práctica clínica y, en última ins-
rativa, incluidas en la Línea de Articulación del Sistema tancia, ofrecerlo al servicio del paciente y del conjunto
de la Acción Estratégica de Salud. de la sociedad.
Entre los objetivos del Programa Ingenio 2010, den-
tro del «Programa Consolider», para incrementar la
5.2.  RETICS
masa crítica y la excelencia investigadora, figura la
creación de Centros de Investigación Biomédica en Las Redes temáticas de investigación cooperativa en
Red (CIBER) mediante la constitución de consorcios. salud (RETICS) son estructuras organizativas formadas
Estos consorcios cuentan con personalidad jurídica por la asociación al Instituto de Salud Carlos III de un
propia, sin contigüidad física, tienen como objetivo la conjunto variable de centros y grupos de investigación
investigación monográfica sobre una patología o pro- en biomedicina, de carácter multidisciplinar, depen-
blema de salud determinado, definido de una forma dientes de las diferentes Administraciones públicas o
amplia. Los CIBER se forman a través de la asociación del sector privado y pertenecientes a un mínimo de
de grupos de investigación, vinculables al Sistema Na- cuatro comunidades autónomas, que tienen como ob-
cional de Salud, para contribuir a fundamentar cientí- jetivo la realización de proyectos de investigación coo-
ficamente los programas y políticas del Sistema Nacio- perativa de interés general.
nal de Salud en las áreas prioritarias del Plan Nacional Responden a las prioridades del Plan Estatal de Inves-
de I+D+I. tigación Científica y Técnica y de Innovación 2013-
El propósito de la creación y el mantenimiento de los 2016 en el ámbito sanitario e integran los distintos ti-
CIBER es impulsar la investigación de excelencia en bio- pos de investigación como estrategia para acortar el
medicina y ciencias de la salud, que se realiza en el intervalo entre la producción de un nuevo conocimien-
Sistema Nacional de Salud y en el Sistema de Ciencia y to y su transferencia y aplicabilidad real en la práctica
Tecnología. La importancia de este objetivo para la médica.
ciencia, la salud y la sociedad en general hace necesa- El objetivo general de las RETICS es promover la co-
rio que el ISCIII asuma la promoción y apoye la finan- laboración entre los grupos de investigación del Siste-
ciación de estos CIBER. ma Nacional de Salud que trabajan en temas afines,
En la actualidad, existen nueve CIBER: Enfermedades facilitando al mismo tiempo la vertebración de la inves-
hepáticas y digestivas (CIBERehd), Enfermedades raras tigación que se realiza en el mismo.
Tema 61.  Nutrición e investigación 959

Con respecto a su estructura, un coordinador gene- lud: Biobancos, Innovación en Tecnologías Médicas y
ral será el responsable de la coordinación científica y Sanitarias, Unidades de Investigación Clínica y Ensayos
seguimiento de la Red, y los coordinadores de progra- Clínicos y Recursos Biomoleculares y Bioinformáticos.
ma serán responsables de la coordinación científica de
cada programa. Para su constitución y mantenimiento
6. Financiación
será necesaria la participación de entre seis y quince
grupos de investigación por programa y de cuatro o La obtención de financiación para la realización de un
más comunidades autónomas. proyecto de investigación es fundamental para lograr el
En la actualidad, existen 17 Redes temáticas de in- éxito en su realización. Existen convocatorias públicas y
vestigación cooperativa en salud: Actividades Preventi- privadas de diferentes ámbitos. A nivel privado, funda-
vas y Promoción de la Salud en Atención Primaria, Cán- ciones científicas (por ejemplo, Fundación de la Socie-
cer, Enfermedades Cardiovasculares, Enfermedades dad Española de Endocrinología y Nutrición, Fundación
Infecciosas, Enfermedades Oculares, Enfermedades de la Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Ente-
Renales, Enfermedades Tropicales, Enfermedades Vascu­ ral, European Society of Parenteral and Enteral Nutri-
lares Cerebrales (Ictus), Esclerosis Múltiple, Fragilidad y tion, etc.) fundaciones privadas (como Fundación La
Envejecimiento, Enfermedades Reumáticas, Reacciones Caixa, Fundación Mapfre, etc.) e institutos de investiga-
Adversas a Alérgenos y Fármacos, Salud Materno-In- ción (como el Instituto Danone) realizan convocatorias
fantil y del Desarrollo, Servicios de Salud Orientados a anuales para financiar diferentes proyectos de investiga-
Enfermedades Crónicas, Sida, Terapia Celular y Trastor- ción. A nivel público, las diferentes convocatorias tienen
nos Adictivos. carácter competitivo y pueden ser a nivel local, regional,
nacional o europeo. A nivel de la Unión Europea, para el
período 2014-2020 está en vigor el programa «Horizon
5.3. Plataformas
2020», que sustituyó a los «Programas-Marco» (https://
Las Plataformas de apoyo a la investigación en cien- ec.europa.eu/research/participants/portal/desktop/en/
cias y tecnologías de la salud son estructuras estables home.html). En este contexto, las principales líneas na-
colaborativas en red formadas por la asociación al Ins- cionales que marcan la financiación de proyectos de in-
tituto de Salud Carlos III de un conjunto variable de vestigación a nivel público estatal son las siguientes:
centros y grupos de investigación en biomedicina per-
tenecientes a un mínimo de cuatro comunidades autó- • Estrategia Española de Ciencia y Tecnología y de
nomas, que tienen como objetivo la realización de pro- Innovación 2013-2020 (http://www.idi.mineco.
yectos de investigación cooperativa de carácter gob.es/stfls/MICINN/Investigacion/FICHEROS/Es-
transversal. trategia_espanola_ciencia_tecnologia_Innova-
También responden a las prioridades del Plan Estatal cion.pdf).
de Investigación Científica y Técnica y de Innovación • Plan Estatal de Investigación Científica y Tecnoló-
2013-2016 en el ámbito sanitario e integran los distin- gica y de Innovación 2013-2016 (http://www.idi.
tos tipos de investigación como estrategia para acortar mineco.gob.es/stfls/MICINN/Investigacion/FICHE-
el intervalo entre la producción de un nuevo conoci- ROS/Plan_Estatal_Inves_cientifica_tecnica_inno-
miento y su transferencia y aplicabilidad real en la prác- vacion.pdf). Desarrolla la Estrategia Española de
tica médica. Ciencia y Tecnología y de Innovación 2013-2020
La finalidad de las Plataformas es proporcionar so­ durante la primera mitad del período (2016). En
porte de alto nivel científico, técnico y tecnológico a los este plan destaca principalmente el Programa de
proyectos de I+D+I en Ciencias y Tecnologías de la Sa- I+D+I Orientada a los Retos de la Sociedad, cuyo
lud, promover proyectos transversales propios de su área primer reto es el «Reto de Salud, Cambio Demo-
de actuación, potenciar la participación española en pro- gráfico y Bienestar». En este, los aspectos princi-
gramas y plataformas internacionales, así como fomen- pales de investigación son: investigación de las
tar la innovación en tecnologías sanitarias como un ins- enfermedades de mayor prevalencia, investiga-
trumento que contribuya a la sostenibilidad del SNS. ción clínica de las enfermedades humanas, la sa-
Con respecto a su estructura, un coordinador gene- lud pública y los servicios de salud, la rehabilita-
ral será el responsable de la coordinación científica y ción y el desarrollo de entornos asistidos y
seguimiento de la Plataforma y los coordinadores de orientados al abordaje de la cronicidad, las enfer-
programa serán responsables de la coordinación cien- medades raras, las bases biológicas de la enferme-
tífica de cada programa. Para su constitución y mante- dad y el desarrollo de la nanomedicina y de la me-
nimiento será necesaria la participación de entre seis y dicina personalizada en la que el reto se sitúa en
quince grupos de investigación por programa y de cua- tratar al individuo y no la enfermedad.
tro o más comunidades autónomas. • Bases reguladoras para la concesión de subvencio-
En la actualidad, existen cuatro Plataformas de apo- nes de la Acción Estratégica en Salud 2013-2016
yo a la investigación en ciencias y tecnologías de la sa- (http://www.isciii.es/ISCIII/es/contenidos/fd-inves-
960 BLOQUE: NUTRICIÓN Y ASPECTOS LEGALES

tigacion/fd-financiacion/fd-convocatorias-ayu- 6.1.2. Subprograma Estatal de Generación de


das-accion-estrategica-salud/convocatoria-aes. Conocimiento
shtml). En esta acción se aglutinan anualmente
todas las convocatorias públicas del Instituto de • Proyectos integrados de Excelencia en los IIS (http://
Salud Carlos III. www.isciii.es/ISCIII/es/contenidos/fd-investigacion/
• Convocatoria anual de la Acción Estratégica en Salud fd-institutos-investigacion-sanitaria/lista-
(http://www.isciii.es/ISCIII/es/contenidos/fd-investiga- do-de-iis-acreditados.shtml), cuyo objetivo es fi-
cion/fd-financiacion/fd-convocatorias-ayu- nanciar los proyectos de investigación con enfo-
das-accion-estrategica-salud/2016/RESOLU- ques y métodos novedosos de calidad contrastada,
CION-AES-2016.pdf). En esta se detallan los datos que representen un avance significativo en el cam-
concretos de qué programas se convocan, con qué po de la investigación en ciencias y tecnologías de
objetivos, plazos, comisiones de selección, etc. la salud en los IIS, y entre estos y Centros de Exce-
lencia Severo Ochoa. Tendrán una duración de
3 años.
6.1.  Financiación de proyectos • Proyectos de investigación en salud. Tendrán una
El Programa Estatal de Fomento de la investigación duración de 3 años.
científica y técnica de excelencia tiene como objetivo • Proyectos de desarrollo tecnológico en salud. Ten-
cubrir los gastos de: contratación de personal técnico o drán una duración de 3 años.
investigador necesario para la realización del proyecto, • Acciones complementarias de programación con-
ajeno al vinculado funcionarial, estatutaria o laboral- junta internacional, cuyo objetivo es fomentar la
mente con los organismos participantes, y que podrán internacionalización de la I+D+I, mejorar la exce-
incorporarse al proyecto durante todo o parte del tiem- lencia y competitividad de los grupos de investiga-
po de duración previsto; y para gastos de ejecución ción españoles, así como reforzar su participación
que incluyen: el material inventariable indispensable en áreas de interés estratégico europeo que contri-
para la realización del proyecto; las adquisiciones de buyan a dar respuesta a los grandes retos sociales.
material fungible y demás gastos complementarios,
como los costes de utilización de algunos servicios ge- 6.2. Financiación de la contratación de personal
nerales de apoyo a la investigación, colaboraciones ex- investigador
ternas, asistencia técnica, gastos externos de consulto-
En el contexto de grupos dirigidos por investigadores
ría y servicios relacionados con los proyectos; todos
nacidos en 1971 o posterior y una adecuada producción
debidamente justificados y necesarios para el buen fin
científica o grupos habituales de esta modalidad, po-
del proyecto. Se especifican dos subprogramas:
drán solicitar ayudas para la contratación de personal en
las diferentes modalidades: Subprograma Estatal de For-
6.1.1. Subprograma Estatal de Fortalecimiento mación y Subprograma Estatal de Incorporación. Ade-
Institucional más, podrán concurrir al Subprograma Estatal de Movi-
lidad. La convocatoria de 2016 se detalla en la tabla 2.
• Incorporación de nuevas áreas temáticas y nuevos
grupos al consorcio CIBER, cuyo objetivo es am-
pliar su estructura de I+D+I a través de la crea-
7.  Propiedad industrial
ción de nuevas áreas temáticas, conformadas por Gracias a la propiedad industrial se obtienen unos
grupos de investigación que se incorporan al Con- derechos de exclusividad sobre determinadas creacio-
sorcio CIBER con el fin de establecer programas de nes inmateriales que se protegen como verdaderos de-
investigación conjuntos y, por otro, reforzar las rechos de propiedad. Los derechos de propiedad in-
áreas de actividad ya existentes mediante la incor- dustrial permiten a quien los ostenta decidir quién
poración de nuevos grupos a los programas cien- puede usarlos y cómo puede usarlos. Dichos derechos
tíficos que desarrolla actualmente el CIBER. se otorgan mediante un procedimiento por el organis-
• Redes Temáticas de investigación cooperativa en mo competente (en España, la Oficina Española de Pa-
salud (RETICS), cuyo objetivo es regular la conce- tentes y Marcas) y la protección que dispensan se ex-
sión de ayudas para la creación y configuración de tiende a todo el territorio nacional. En España hay
Redes Temáticas de Investigación Cooperativa en varios tipos de derechos de propiedad industrial:
Salud (RETICS) en ámbitos de actuación específi-
cos, para potenciar la coordinación del tejido in- • Diseños industriales: protegen la apariencia exter-
vestigador en el ámbito del SNS y para fomentar na de los productos. La principal legislación que lo
la colaboración entre grupos de investigación, regula es la Ley 20/2003, de 7 de julio, de protec-
orientando su actividad investigadora hacia obje- ción jurídica del diseño industrial.
tivos comunes que permitan la obtención de re- • Marcas y Nombres Comerciales (Signos Distinti-
sultados trasladables a la población. vos): protegen combinaciones gráficas y/o deno-
Tema 61.  Nutrición e investigación 961

Tabla 2.  Actuaciones de la «Acción Estratégica en Salud del Programa Estatal de Promoción del Talento y su
Empleabilidad».

Subprograma Estatal de Formación Requisitos Duración


• Predoctoral
Contratos Modalidad PFIS • Matrícul

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