Nancy Carolina García Medina 28-Noviembre-2014

Lic. En Psicología

Análisis de casos
Caso no. 2 afín a psicología:
Para empezar, me gustaría dar una pequeña descripción del caso:
La situación se torna alrededor de un psiquiatra y de un hombre de 25 años. El
hombre no desea someterse a un tratamiento psiquiátrico porque se cree que él
podría tener esquizofrenia. El psiquiatra pregunta dos veces al paciente si el desea
tomar el tratamiento; la primera vez cuando está sólo y dice que no, la segunda
ocasión en presencia del padre, cuando dice que sí.
Sin embargo, en el caso está implícito que el psiquiatra manipuló de cierta manera
la situación, es aquí cuando se presentan los problemas morales ¿Es correcto que
el psiquiatra utilice la presión social como medio para que el paciente acepte un
tratamiento que él no desea tomar? ¿Debe el hombre de 25 años tomar el
tratamiento aunque él no quiera sólo por esa presión social?
Aceptar el tratamiento sólo por la influencia que alguien puede ejercer sobre
nosotros, no es autonomía, porque eso no es lo que realmente se busca o se desea.
Además, la crisis que el paciente sufrió, no decía al 100 por ciento que era
esquizofrenia lo que tenía. Creo que debieron haber esperado un poco más para
saber si realmente era eso y evitar daños colaterales que podría producir el
tratamiento.
Caso no. 4 afín a psicología:
Investigadores se filtran en un hospital psiquiátrico, los médicos relacionan todo los
padecimientos de ellos con algún trastorno.
¿Se debe juzgar y pensar que todas las personas que están en determinado lugar,
son iguales?
Creo que un profesional, sobre todo de la salud, no debe juzgar a una persona. El
trabajo de convivir con tantas personas “enfermas” se vuelve tan rutinario que no se
toma en cuenta que todas las personas pasan por situaciones diferentes. Asociar
todos los problemas de una persona saludable con sólo enfermedades, es más bien
un problema de quien analiza y no de quien tiene determinados síntomas.
Es como una persona que asiste al médico con escurrimiento nasal y sin más, el
médico dice que se trata de una simple gripa, cuando puede ser síntoma de algo
más grave. En este caso sucede algo similar, pero con el efecto contrario: una
persona escucha un ruido y ya “es una alucinación”.
Sin embargo, esta desensibilización causa más daño a muchos otros. Cabe
preguntarse ¿Cuántas personas no se ven afectadas por este condicionamiento por
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Lic. En Psicología
parte de los psiquiatras? Y no sólo de los psiquiatras, sino de muchos profesionales
de la salud en general.
Es importante que no por tener muchos años de experiencia se crea que se sabe
todo acerca de las personas que llegan a buscar un tratamiento y que se haga un
análisis completo.