ESCUELA COLOMBIANA DE CARRERAS INDUSTRIALES

Ingeniería Ambiental – Economía Ambiental – Grupo 8BN

Angela Viviana Varela Palomo (5789)

Joan Sebastián Bermudez Rodriguez (7679)
Yurley Tatiana Rodriguez Gaona (7787)

Instrumentos de Política para la protección y regulación Ambiental

Las políticas ambientales y en general las políticas públicas son entendidas como
aquellos mecanismos en el que se enmarca una dinámica de interacción entre
constituyentes sociales y las instituciones estatales, en la búsqueda de un interés
común acerca de una problemática o afección que altera significativamente la
estabilidad social, económica, cultural y ambiental de un grupo o grupos que se
hallan inmersos en los impactos resultantes de dicha problemática. Por ende,
provee un diagnóstico detallado de una situación dada, para el reconocimiento de
responsabilidades atribuidas a implicados (quien, quienes, que etc), con el fin de
erradicar y solventar divergencias, a través de un proceso lógico y permutable de
los comportamientos cuestionables para la estabilidad colectiva.

Ahora bien, las políticas de orden ambiental adquieren un grado de complejidad de

carácter mundial, debido a que, la trascendencia de la problemática ambiental no
está limitada por la organización política de naciones existente en el panorama
internacional si no que se extiende a lo, largo de todo el planeta tierra. Así bien, la
existencia de varios instrumentos para definir e incorporar políticas a un sistema de
mercado, en el que todo adquiere un precio definido por las características
específicas de un producto, en el caso del ambiente los bienes y servicio
proporcionados; debe poseer un grado óptimo de afinidad oportuno a cada
situación, así bien, entre los existentes podemos mencionar Regulación directa,
Voluntarios, Planificación, institucionales e instrumentos económicos (Azqueta,
2002). Las cuales apuntan a diversos espacios que son definidos por la
caracterización económica, tipo de actividad, contaminantes generados, cantidad
explotada, ecosistema impactado, población determinante entre otras variables
propias de cada situación y que como fin único tiene ajustar a las dinámicas del
mercado y las necesidades comerciales, los bienes y servicios obtenidos de un
ecosistema. También así, garantizar su tenacidad en el tiempo.

Por ejemplo, en Colombia la política ambiental está enmarcada por el Código

Nacional de los recursos Renovables y Protección del medio Ambiente, Decreto ley
2811 expedido en 1974; esta herramienta constituye la principal norma sustantiva
en materia ambiental del país. Hasta entonces la política ambiental estaba definida
por un sinfín de normas y políticas de desarrollo formuladas por los gobiernos que
habían trascendido por el poder; Seguido a esto, la constitución de 1991 señalo
varios aspectos en cuanto a deberes y derechos del estado y los ciudadanos para
con el ambiente, en conjunto con la creación del Plan nacional de Desarrollo y la
inclusión del Desarrollo Sostenible en las dinámicas sociales (Sánchez, 2002). Para
el caso de Colombia los instrumentos de política de los que se hace uso son
principalmente tres: Instrumentos de regulación directa (Comando y control),
Instrumentos económicos o de mercado y la provisión directa del gobierno,
enfocado a la conservación, preservación, administración, aprovechamiento y el
manejo sostenible de los ecosistemas, que proveen bienes y servicios ambientales.

Ahora bien, se analiza que la organización y planteamiento de las políticas a nivel

Colombia en el papel están muy bien estructuradas, detalladas y poseen excelentes
bases Investigativas, analíticas y descriptivas sobre el componente territorial,
ambiental y social, pero aun así, los instrumentos de política y en general las
políticas estipuladas están enfrentadas a tres grandes obstáculos, en primera
instancia la administración, adjudicación y utilización del capital adjudicado,
recaudado y apropiado para la puesta en marcha de protocolos necesarios para la
satisfacción de aquellas inconformidades que se desprenden del uso y
aprovechamiento de los recursos naturales; estos se dispersan y se disipan en
manos de terceros por actos de corrupción, de ejecución negligente de
procedimientos y en general de la mala administración por los entes competentes,
lo que genera el óptimo desarrollo y ejecución de instrumentos de política en el
ámbito ambiental. También así, otra de las grandes fallas en el proceso de
implementación de instrumentos de política ambiental en el territorio colombiano es
la adaptación imprecisa de modelos de países en otros espacios geográficos, con
otras características topográficas, geológicas, climáticas, biológicas, químicas y
físicas y todas aquellas que definen cada ecosistema como único e incomparable,
lo cual es causante de sesgos en legislación, en control y prevención, administración
y manejo sostenible de los recursos en su inmensidad. Por esta razón, los
procedimientos poseen falencias y no proveen los resultados esperados que en
resumidas cuentas deberían ser la mitigación, el control y la prevención de todos
aquellos procesos legales o no de uso y aprovechamiento de los recursos.

Por último, la inclusión de la sociedad en la estipulación, el análisis, la descripción,

y todo el procedimiento que implica la adjudicación de políticas es una acción
oportuna para enriquecer las peculiaridades de un territorio objeto de interés y
minimizar los sesgos acerca de lo que significa el territorio en su inmensidad.

En conclusión, los instrumentos de política presentan una gran importancia a la hora

de incluir el sistema ambiental en las dinámicas de mercado en una posición
controlada, suficiente y sostenible para garantizar la durabilidad en el tiempo, los
tiempos de resiliencia de los ecosistemas, además de, que son excelentes
herramientas para cambiar y modificar, paulatina y eficazmente el comportamiento
y el proceder de los entes sociales para con el ambiente. También así, para el caso
de Colombia es importante la inclusión de un evaluador permanente independiente
de la organización gubernamental e institucional, desprendido de las organizaciones
sociales objeto de interés; es importante aterrizar las políticas dentro de los
territorios para conocer en realidad la eficiencia de su implementación, y su
comportamiento para mitigar los impactos que se deseen. Por otro lado, la
búsqueda de otros métodos de valoración de los ecosistemas, bienes y servicios
ambientales, no sean permutables por factor dinero, podría representar al fin una
resiliencia y una permanencia espacio temporal de los mismos.