UNLaM

Computación Transversal I
Trabajo Práctico 1 - WINDOWS

Uso del puntero

1) Al encender el equipo presionando la tecla de encendido/apagado, que se ubica en el extremo
superior derecho del teclado, lo primero que puede observarse es que la pantalla, aun permaneciendo en
negro, se ilumina y prontamente aparece el logotipo de la marca de la computadora. Luego de unos
segundos de espera, vemos el fondo de la pantalla de bloqueo, en cual se muestra como información en
su esquina inferior izquierda, la hora y la fecha, y en la derecha dos íconos, uno de ellos correspondiente
al estado de conexión a internet y el otro al estado de carga de la batería del ordenador (porcentaje de
energía disponible y si se encuentra cargando o no).
Posteriormente a hacer clic en cualquier lugar de la pantalla, en el centro de ella aparece el nombre
de usuario, con su correspondiente imagen, y debajo un campo para colocar la contraseña de la cuenta
de Microsoft o un pin, según la preferencia elegida por el usuario previamente (en mi caso, al optar por
la modalidad del pin, debajo del campo mencionado, se nos brinda dos opciones, la primera “olvidé mi
pin” y la segunda “opciones de inicio de sesión”. Si hacemos clic sobre esta última, emergen dos iconos,
los cuales, al posicionarnos con el cursor sobre cada uno de ellos, nos revelan que podemos optar por
introducir el pin o la contraseña de la cuenta Microsoft). Otra información que podemos hallar en esta
pantalla previa a la carga del Sistema Operativo, en su esquina inferior derecha, son cuatro los iconos
que se muestran, correspondientes a al idioma, estado de conexión a internet, Operativo accesibilidad y
el de la función correspondiente a apagado del sistema.
Una vez insertado correctamente el pin o la contraseña, según su caso, se observa como primera
pantalla, luego de cargado el Sistema, la correspondiente al Escritorio (desktop). En ella, podemos ver
la imagen de fondo de escritorio, con el cursor posicionado en su centro y sobre ella, diversos íconos
que nos permiten diferentes programas al efectuar doble clic sobre ellos. Además, se dispone una barra
de tareas, que, en este caso, se ubica en la parte inferior.

Ícono
s
Barra de
tareas
 Haciendo una observación más detenida de la barra de tareas, vemos que la misma se compone, de
izquierda a derecha, de: en primer lugar, el botón de Iniciar , luego le siguen el botón de
búsqueda , un botón de vista de tareas , la zona de programas anclados y abiertos
(aunque en este caso no hay ninguno de los segundos) y por último, en el extremo derecho, el área de
notificación, con los íconos que representan los programas residentes, es decir, aquellos que se cargan
automáticamente al encender la computadora, como lo son en este caso “One Drive” y “Dropbox” y
otras informaciones adicionales, como el sonido, el estado de conexión a internet, estado de la batería
(que en este caso se indica que se encuentra en estado de carga, al mostrarse un enchufe), el área de
trabajo de Windows Inc, el teclado táctil, el idioma, la fecha y hora y finalmente un ícono de
notificaciones. Además, hay un botón con forma de flecha, que permite mostrar los íconos ocultos, y al
final, justo al lado del botón de notificaciones, se encuera el botón Mostrar Escritorio, representado
por una barra vertical.

2) Al posicionar el puntero sobre el botón de Inicio podemos apreciar que el mismo

procede a iluminarse cambiando su color el cual en este caso pasa de estar en blanco a violeta.

Al efectuar esta acción sobre los íconos de los programas anclados, se observa un pequeño
recuadro, indicando el nombre del programa en cuestión.

Pero, cuando se posiciona el cursor sobre un programa abierto, el cual podemos diferenciar de los
anteriores porque tiene de una pequeña raya distintiva, aprecia inmediatamente una miniatura de la
ventana.
 En cuanto a los íconos de los programas residentes se produce igual efecto que con los íconos
anclados, adicionándose el estado en el que se encuentran (en este caso, actualizado).

Si se posiciona el cursor sobre el botón Mostrar Escritorio, inmediatamente, sin importar la

cantidad de ventanas abiertas, se permite un vistazo a la pantalla del escritorio.

Al repetir el procedimiento anterior sobre alguno de los íconos presentes en la pantalla de escritorio,
el mismo pasa a estar suavemente recuadrado y, simultáneamente, aparece un recuadro con un breve
detalle del mismo (este varía de acuerdo al programa).

Si posicionamos el cursor sobre el borde de la barra de tareas sin efectuar clic alguno, vemos que
éste pasa de tener una forma de flecha unidireccional, a ser una flecha bidireccional, indicando que, de
así desearlo, haciendo clic sobre el borde de la barra y manteniéndolo presionado, podemos expandir o
achicar la misma.
Al posicionar el puntero sobre la hora, nos aparece encima un recuadro detallando día mes y año.

3) Al realizar clic izquierdo sobre distintos íconos del escritorio y luego soltar, podemos
notar que el ícono cuyo nombre se encontraba abreviado, se expande y se muestra completo, a su
vez que queda sombreado más intensamente cando el cursor permanece sobre el ícono, y cundo o
apartamos sin hacer clic, este sombreado se vuelve más leve.

4) Al arrastrar y soltar los íconos del escritorio:

a) Con el botón izquierdo de mouse se puede cambiar la posición del mismo de forma rápida,
ya que basta con hacer clic sobre el ícono y desplazarlo al lugar del escritorio donde se
desee ubicarlo y soltarlo para que éste quede allí posicionado.

b) Con el botón derecho del mouse, al soltar dicho botón en un lugar del escritorio distinto al
cual se encuentra el ícono en cuestión, éste no queda inmediatamente ubicado allí, sino que
aparece en el lugar al cual movimos, un menú de opciones, el cual nos permite realizar una
serie de acciones respectivas al movimiento de dicho ícono:
i. Copiar aquí
ii. Mover aquí
iii. Crear ícono de acceso directo aquí
iv. Cancelar
 De esta manera, se poseen mayores opciones de acciones a efectuar al realizar la operación utilizando
el botón derecho en vez del izquierdo, pero si lo que se desea efectuar es un rápido cambio de posición
del ícono del programa dentro del escritorio, es conveniente utilizar este último.

4.1 Al hacer clic derecho sobre el escritorio y elegir la opción “Ver”, y dentro de esta la
de organizar íconos automáticamente, todos los íconos que se hallaban dispersos en
el escritorio, pasan a desplazarse al lado izquierdo de la pantalla.

4.2 Al intentar mover un ícono arrastrándolo a un punto distinto de la

pantalla, podemos observar que éste no se ubica en dicho lugar, sino que retorna a
la izquierda del Escritorio, pero sin ocupar su lugar original.

5) Al hacer doble clic sobre uno de los íconos del escritorio, lo que ocurre seguidamente es que, el
programa al cual corresponde, se abre en pantalla.
 6) Al hacer clic derecho sobre diferentes
elementos de la barra de tareas, podemos observar diversos resultados, pero todos ellos
corresponden a que, a raíz de esta acción, emerge un menú contextual, el cual nos permite
realizar diversas tareas con una mayor agilidad:

a) Cuando se practica sobre el ícono de un programa anclado, se

despliega un menú con diferentes opciones, personalizadas según el
programa del que se trate. En este caso, por ejemplo, al realizar clic
derecho sobre el ícono del Explorador de Archivos, instantáneamente,
emergió un listado de carpetas ancladas, y otro de aquellas visitadas
frecuentemente. Esto nos permite ingresar rápidamente a carpetas que
frecuentamos sin tener que buscarlas dentro del Explorador de archivos,
trabajando así con mayor celeridad. Así mismo, al final aparece un botón
que nos permite ingresar al Explorador de archivos y por último se presenta
la opción de poder desanclar el programa de la barra de tareas.

b) En el caso de los íconos correspondientes a programas abiertos

y no anclados, al hacer clic derecho sobre uno de ellos también
se despliega un listado de opciones. Probando con el botón
correspondiente a Word, vemos que en el menú que aparece se
detallan cuáles fueron los archivos abiertos recientemente
(gracias a la funcionalidad JumpList) y luego aparecen botones
para: abrir el programa en cuestión (Word), anclarlo a la barra
de tareas o finalmente cerrar la ventana que vemos abierto del
mismo.
 c) Al hacer clic derecho sobre los íconos de programas residentes,
también se despliega un menú de opciones, pero principalmente
relacionadas con la administración y configuración de la barra de tareas y
sus íconos, aunque también aparecen opciones relacionadas con el
programa residente en particular. Por ejemplo, en este caso, al haber hecho
clic derecho sobre el ícono de fecha y hora, se nos brinda la opción
específica de poder ajustar la fecha y hora.

d) Finalmente, si hacemos clic derecho sobre el botón de Inicio, el listado de opciones que se
despliega incluye:
 Aplicaciones y características
 Centro de movilidad
 Opciones de energía
 Visor de eventos
 Sistema
 Administrador de dispositivos
 Conexiones de red
 Administración de discos
 Administración de equipos
 Windows PowerShell
 Administrador de tareas
 Configuración
 Explorador de archivos
 Buscar
 Ejecutar
 Apagar o cerrar sesión
 Escritorio

7)
7.1 Al hacer clic sobre el botón Inicio, o pulsando la tecla Windows, un menú se despliega
automáticamente. Se trata del Menú Inicio y en él, podemos reconocer tres secciones:
 1 2

En la sección de la izquierda, en su parte superior, se ubica un botón (el cual posee tres rayitas
1 horizontales y paralelas entre sí) que nos brinda la opción “Expandir” dicha sección. Debajo,
se encuentra una pequeña imagen que corresponde a la del usuario del ordenador, y
posteriormente y en el siguiente orden, se encuentran alineados los botones correspondientes
a: Documentos, Imágenes, Configuración y finalmente, el botón que nos presenta las opciones: apagar,
suspender o reiniciar el equipo. Podemos decir que esta sección corresponde a programas básicos e
indispensables.
En la sección del medio, se dispone un listado en orden alfabético de las aplicaciones de
2 Windows 10 con las que cuenta el usuario. También, nos permite hallar fácilmente
programas recientemente instalados, lo cual es una gran ayuda, puesto que puede que nos
resulte más difícil recordar el nombre o ubicación de aquellos mientras sean muy recientes.

3 La última sección, nos brinda la posibilidad de poder anclar en ella programas y organizarlos
armando categorías según creamos conveniente. Así mismo, también podemos modificar el
tamaño de cada ícono, pudiendo optar entre: pequeño, mediano, ancho o grande. Cabe
resaltar entonces la oportunidad que se brinda al usuario de poder personalizar su menú, con practicidad
y estilo.
7.2 Al hacer clic sobre el botón
de búsqueda que se encuentra
inmediatamente a la derecha del botón
inicio en la barra de tareas, se nos
permite, en un campo de texto,
introducir el nombre del programa
deseado, facilitando su encuentro.
 Al comenzar a escribir el nombre del
programa, en nuestro caso, Bloc de Notas, una
serie de resultados posibles comienzan a
aparecer en lista, por lo cual, se hace innecesario
terminar de tipearlo. Para abrir el programa, sólo
es necesario hacer clic sobre el mismo. Al
hacerlo, notamos que además aparece un ícono
correspondiente al programa que hemos abierto
(Bloc de Notas) en la barra de tareas, el cual, con
un clic izquierdo nos permite cerrar la ventana
del bloc, y con otro clic, volver a abrirla, sin que sea necesario que cerremos definitivamente el
programa.

7.3 Para abrir otros programas,

podemos volver a hacer clic en el botón
Inicio (sin que sea necesario que
cerremos o minimicemos la ventana del
Bloc de notas) y, en mi caso, como el
icono del programa Word se encuentra
en la tercera sección del menú, puedo
hacer clic sobre él para abrirlo.
Posteriormente, haciendo doble clic
sobre uno de los íconos del escritorio,
como, por ejemplo, el de Microsoft
Edge, abrimos un tercer programa. De esta manera tenemos las ventanas de tres programas en
el Escritorio, y en la barra de herramientas, iconos de estos programas abiertos. Esto agiliza
poder trabajar con varios programas sin tener que cerrarlos.

Incluso, Windows 10 nos

permite una visualización
cómoda para las tres
ventanas en simultáneo, sólo
debemos presionar, por
ejemplo, sobre la barra de la
ventana de Microsoft Edge y,
sin soltarla, arrastrarla hacia
el extremo derecho de la
ventana Escritorio.
Inmediatamente, la
ventana de Edge se acomoda
ocupando la mitad derecha del escritorio y nos brindan la opción de elegir entre los otros dos
programas que habíamos abierto anteriormente, para que ocupen la mitad restante.
 Elegimos, por ejemplo, el programa
Word, haciendo clic sobre su ventana,
y, como consecuencia, aparecen las
ventanas de Word y Edge una al lado
de la otra. Haciendo clic sobre el botón
del block de notas (que permanece en
la barra de herramientas), nuevamente
podemos tener las tres ventanas
abiertas en simultáneo, pero ahora, con
un mayor confort para la ejecución de
tareas múltiples que requieren
diversidad de programas.

Uso de Ventanas
1) Uso de los botones ubicados en la barra de título de una ventana:
 Al realizar clic izquierdo sobre el botón que tiene el signo guion que permite
llevar a cabo la opción de minimizar, podemos observar que la ventana, rápida y
sutilmente, se desvanece hacia la hacia su respectivo icono ubicado en la barra de tareas.

 Si oprimimos el botón que tiene la figura de un cuadrado éste maximiza la

ventana, es decir que la misma se agranda ocupando toda la pantalla escritorio,
quedando a la vista únicamente la ventana del programa en cuestión y la barra de tareas,
la que permanece en la parte inferior.

 A raíz de la acción anterior, el lugar que era ocupado por el botón de maximizar, pasa
a ser ocupado por el de restaurar (representado por dos cuadrados en
cascada). Al presionar sobre él, la ventana recupera el tamaño en el que se
encontraba antes de ser maximizada, es decir que se restaura el tamaño de su superficie.
8.1. Al desplazar las ventanas
maximizadas, tomándolas por la
barra de títulos, las mismas reducen su
tamaño pasando el botón restaurar
tamaño, a ser el de maximizar.
Además, mientras se efectúa el
desplazamiento de la ventana, el ícono
del programa en cuestión (que
representa al programa abierto),
ubicado en la barra de tareas,
intensifica su color apareciendo como seleccionado, indicándose así que el programa está siendo
utilizado. Debe señalarse que al soltar la ventana en el lugar del escritorio donde se desea
ubicarla, la misma no vuelve a quedar maximizada, sino que permanece con un tamaño reducido
(como si se hubiera realizado clic sobre el botón de restaurar).

8.2. Al “tomar” la ventana de un programa determinado desde la barra de título y desplazarla hacia:

 El lado izquierdo de la pantalla: el programa pasa a expandirse ocupando la mitad

izquierda de la pantalla del monitor en su totalidad, pudiendo observarse en la mitad
restante las ventanas minimizadas.

 El lado derecho de la pantalla: el programa pasa a agrandar su tamaño hasta ocupar la

mitad derecha del monitor.

 El lado superior de la pantalla: el programa pasa a maximizarse ocupando la totalidad

de la pantalla.
8.3. Actuando sobre los bordes de las ventanas (colocando el puntero sobre los mismos y
arrastrando dichos bordes haciendo clic en forma sostenida) y arrastrándolas, pude acomodar
las mismas, manualmente, de diferentes maneras. Los resultados fueron los siguientes:

Ventanas Cascada Ventanas Paralelo

Ventanas Apiladas

8.4. Guardo en el escritorio las tres capturas de pantalla correspondientes a cómo quedaron
acomodadas las ventanas organizadas luego de pedirle al sistema que las muestre en cascada,
paralelo y apiladas, haciendo clic derecho sobre un sector sin íconos de la barra de tareas,
mientras tengo las ventanas de los tres programas abiertas.

Ventanas Cascada

Ventanas Apiladas

Ventanas Paralelo
8.5. Elementos comunes a las ventanas abiertas:

1- Barra de Título: Es aquella ubicada en la parte superior de las ventanas de los programas
y es la que contiene el nombre del programa con el cual se está trabajando (Bloc de notas).
En algunos casos, como lo es el de Word, también aparece el nombre del documento
abierto (en mi caso “Derechos Personalísimos”). En el extremo derecho de esta barra, se
ubican los botones de minimizar, maximizar (o restaurar, en su caso) y cerrar.

2- Barra de Menú: Se halla debajo de la barra de título, y ofrece diferentes operaciones que
varían de acuerdo al programa. Algunas son sencillas y ofrecen opciones básicas (como en
el Bloc de Notas) mientras que otras son complejas (como la de Word). contiene las
operaciones del programa, agrupadas en menús desplegables. Todas las operaciones que el
programa nos permite realizar las encontraremos en las distintas fichas de esta barra.

3- Barra de Herramientas: Posicionada al lado de la barra de título, contiene íconos para

ejecutar de forma inmediata algunas de las operaciones más utilizadas. Por ejemplo, en
Word las operaciones que ofrece son: guardar, deshacer escritura, repetir escritura y una
pequeña flecha para personalizar la barra de herramientas, donde podemos optar que
operaciones incluir y cuales no.

4- Barra de Estado: Situándose al final de la ventana del programa abierto, suele ofrecer
cierta información al usuario, la cual varía en función del programa. En mi caso, en el
programa de Word, me indica en qué número de página del total de páginas que tiene el
archivo, estoy posicionada, la cantidad de palabras del documento y el idioma.

Barras de
Título

Barras de
Herramientas

Barras de
Menú
Barras de
Estado
8.1 Al mantener presionada la tecla ALT del teclado y luego oprimir la tecla TAB varias veces aparece
en el centro de la pantalla una ventana en la cual se muestran dispuestas horizontalmente pequeñas
imágenes que muestran todos los programas que se encuentran abiertos, lo cual permite que se pueda
elegir aquella en la cual deseamos trabajar sin la necesidad de tener que minimizar y agrandar
aquella en la que nos encontramos trabajando. Para seleccionar aquel programa que deseamos que
aparezca en pantalla debemos desplazarnos oprimiendo la tecla TAB mientras mantenemos
presionada ALT, y una vez que nos posicionamos en el debemos dejar de presionar la tecla ALT e
inmediatamente aparecerá la ventana del programa seleccionado en la pantalla.

9. Al realizar clic derecho sobre un sector libre de la barra de tareas, inmediatamente se despliega un
menú de opciones dentro de las cuales figura “Bloquear la barra de tareas”. Mientras esta opción no
se encuentra seleccionada (lo cual puede verificarse revisando que la opción no se encuentre
tildada), al presionar la barra de tareas y arrastrarla al borde superior de la pantalla, la misma pasa a
desplazarse a dicho sector. Mismo efecto produce el arrastre hacia cualquiera de los laterales de la
pantalla.
 Además, también puede manipularse el tamaño de
esta. Para ello debe colocarse el puntero sobre el
borde de la barra de tareas, pudiéndose observar
que la flecha de este pasa a ser una flecha
bidireccional (lo cual indica la posibilidad de
agrandar o disminuir su tamaño). Luego, al realizar
clic y manteniéndolo presionado, puede procederse
a expandir su tamaño, para lo cual debe arrastrarse
el cursor hacia arriba, o reducirlo, desplazando el cursor hacia abajo.

Ubicación de archivos:

10.

10.1.
10.2.

10.3.

Creación de accesos directos:

11.
11.1

11.2
11.6.

12. Sí, los accesos directos eliminados pueden ser restituidos de varias mareras. Una de ellas
es haciendo doble clic sobre el ícono que se desea restaurar, y luego dentro de la ventana
emergente la opción de restaurar, que aparece en la esquina inferior derecha.
Otra manera de restaurarlo consiste en seleccionar el acceso directo en cuestión realizando sobre el
ícono un único clic, y luego elegir la opción “Restaurar los elementos seleccionados” que se
encuentra ubicada en la barra de menú. Inmediatamente se verá el acceso directo restituido en la
pantalla Escritorio.

Una tercera manera de realizar la misma operación anterior consiste en presionar el botón derecho
del mouse sobre el ícono del acceso directo que se desea restaurar, lo cual ocasiona la inmediata
aparición de un menú de opciones entre las cuales se encuentra la de restaurar. Al realizar clic
izquierdo sobre la misma, el acceso directo será restituido.

12.3. Al eliminar un archivo ubicado dentro de una memoria USB, este, no puede ser posteriormente
restituido, debido a que se trata de una memoria externa al sistema, motivo por el cual, al suprimir
un archivo ubicado en ella, el mismo no
estará disponible en la papelera de
reciclaje para tener la posibilidad de
recuperarlo si así se deseara.

Es por lo expuesto anteriormente, que

al intentar eliminar un elemento de la
memoria extraíble, aparecerá una
ventana donde se le indica al usuario el
carácter permanente de la supresión y
le pregunta si desea continuar con la
misma teniendo ello presente.

13.
  Anclado en barra de tareas:
1

Anclado de los programas Teclado en pantalla y Lupa en la barra de tareas:

 Anclado en Inicio de Teclado en pantalla y Lupa:

 Desanclado de los programas de la barra de tareas:

Al realizar clic derecho sobre el ícono de por ejemplo
Lupa, se despliega un menú de opciones entre las que
aparece Desanclar de la barra de tareas. Al realizar
clic izquierdo sobre la opción mencionada el
programa deja de estar disponible en la barra de
tareas.