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DELITO: ROBO DE VEHICULO CON VIOLENCIA.

IMPUTADOS: MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO

y ARMANDO SEGURA CONTRERAS

Número Causa:630/2018

ASUNTO: SE INTERPONE APELACION

TLALNEPANTLA DE BAZ, ESTADO DE MEXICO, A 27 DE OCTUBRE 2018.

C. JUEZ DEL TRIBUNAL DE ENJUICIAMIENTO

DEL DISTRITO JUDICIAL DE TLALNEPANTLA, ESTADO DE MÉXICO.

P R E S E N T E:

LOS QUE SUSCRIBEN MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO y ARMANDO CONTRERAS SEGURA,
SETENCIADOS en la causa penal que se instruyó en nuestra contra, señalando con modo para oír y
recibir notificaciones la cuenta de correo electrónico despachojuridico.lozada@hotmail.com,
nombrando desde este momento al licenciado en derecho ERICK LOZADA BEYRA para que nos
represente en la presente ALZADA Y dentro de la CAUSA PENAL indicada al
rubro, COMPAREZCO ANTE USTED y expongo:

Que por medio del presente y con fundamento en lo dispuesto por los artículos 457, 460, 461,
464, 468 fracción II, 482 fracción III y 483 del Código Nacional de Procedimientos Penales, VENGO
EN TIEMPO Y FORMA a interponer el correspondiente RECURSO DE APELACIÓN en contra de la
SENTENCIA DEFINITIVA DE PRIMERA INSTANCIA, de fecha DIECISEIS DE OCTUBRE DEL AÑO DOS MIL
DIECIOCHO dictado dentro de la CAUSA PENAL 630/2018, por el Juez del Tribunal De Enjuiciamiento
del Distrito Judicial de TLALNEPANTLA, Estado de México, EN CONTRA DE MARCO ANTONIO LUCIO
CERRILLO Y ARMANDO SEGURA CONTRAS, por el hecho delictuoso de ROBO COMETIDO CON
VIOLENCIA RESPECTO DE UN VEHICULO DE MOTOR, cometido en agravio de HUMBERTO VAZQUEZ
RAMIREZ, en virtud de que DICHA RESOLUCIÓN CAUSA AGRAVIO a los intereses que represento,
para lo cual agrego al presente los agravios correspondientes.

Por lo anteriormente expuesto y fundado; a Usted C. Juez atentamente pido:


UNICO. -Tenerme por presentado en términos del presente escrito, e interponiendo el RECURSO DE
APELACIÓN en tiempo y forma en contra de la SENTENCIA DEFINITIVA DE PRIMERA INSTANCIA, de
fecha DIECISEIS DE OCTUBRE DEL AÑO DOS MIL DIECIOCHO

A T E N T A M E N T E

MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO ARMANDO SEGURA CONTRERAS


DELITO: ROBO DE VEHICULO CON VIOLENCIA.

IMPUTADOS: MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO

y ARMANDO SEGURA CONTRERAS

Número Causa:630/2018

ASUNTO: SE INTERPONE APELACION

TLALNEPANTLA DE BAZ, ESTADO DE MEXICO, A 27 DE OCTUBRE 2018.

C.C. MAGISTRADOS DEL TRIBUNAL DE ALZADA EN MATERIA PENAL

DEL DISTRITO JUDICIAL DE TLALNEPANTLA, ESTADO DE MÉXICO.

P R E S E N T E:

LOS QUE SUSCRIBEN MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO y ARMANDO CONTRERAS SEGURA,
SETENCIADOS en la causa penal que se instruyó en nuestra contra, señalando con modo para oír y
recibir notificaciones la cuenta de correo electrónico despachojuridico.lozada@hotmail.com,
nombrando desde este momento al licenciado en derecho ERICK LOZADA BEYRA para que nos
represente en la presente ALZADA Y dentro de la CAUSA PENAL indicada al
rubro, COMPAREZCO ANTE USTED y expongo:

Que por medio del presente y con fundamento en lo dispuesto por los artículos 457, 460, 461,
464, 468 fracción II, 482 fracción III y 483 del Código Nacional de Procedimientos Penales vigente
en el Estado de México, VENGO EN TIEMPO Y FORMA a interponer el correspondiente RECURSO
DE APELACIÓN en contra de la SENTENCIA DEFINITIVA DE PRIMERA INSTANCIA, de fecha DIECISEIS
DE OCTUBRE DEL AÑO DOS MIL DIECIOCHO dictado dentro de la CAUSA PENAL 630/2018, por el
Juez del Tribunal De Enjuiciamiento del Distrito Judicial de TLALNEPANTLA, Estado de México, EN
CONTRA DE MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO Y ARMANDO SEGURA CONTRAS, por el hecho
delictuoso de ROBO COMETIDO CON VIOLENCIA RESPECTO DE UN VEHICULO DE MOTOR, cometido
en agravio de HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ, en virtud de que DICHA RESOLUCIÓN CAUSA
AGRAVIO a los intereses que represento, para lo cual agrego al presente los agravios
correspondientes.

Antecedentes

1.- por auto de fecha trece de septiembre del dos mil dieciocho, se radico el auto de apertura a juicio
oral, por el proceso instruido contra de MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO y ARMANDO SEGURA
CONTRERAS, por el hecho delictuoso de ROBO CON LA MODIFICATIVA AGRAVANTE DE HABERSE
COMETIDO RESPECTO DE UN VEHICULO AUTOMOTOR CON VIOLENCIA, en agravio de HUMBERTO
VAZQUEZ RAMIREZ.
2.- EN LA RADICACION SE ORDENARON LAS CITACIONES DE LOS MEDIOS DE PRUEBA ADMITIDOS
PARA SU DESAHOGO EN ESTE TRIBUNAL DE ENJUICIAMIENTO.}

3.-se dio inicio con la audiencia de juicio y en fechas subsecuentes se agotaron los medios de prueba
aportados por ministerio público y defensa particular

4.- el dieciséis de octubre del año en curso, se continuo la audiencia donde los sujetos procesales
formularon sus respectivos alegatos de clausura donde la fiscalía formulo en contra de MARCO
ANTONIO LUCIO CERRILLO y ARMANDO SEGURA CONTRERAS por el hecho delictuoso de ROBO CON
LA MODIFICATIVA AGRAVANTE DE HABERSE COMETIDO RESPECTO DE UN VEHICULO AUTOMOTOR
CON VIOLENCIA en agravio de HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ en tanto la defensa particular expuso
los que le correspondieron.

5.- Al respecto una vez cerrado el debate el tribunal de enjuiciamiento procedió a deliberar y una
vez concluido el lapso correspondiente en términos del artículo 406, 409 del código nacional de
procedimientos penales, se le explico a los acusados el fallo que se combate.

A G R A V I O S:

PRIMERO AGRAVIO.- Causa agravio a los Sentenciados, el Tercer considerando en la porción en que
se inserta y en la forma en que se inserta, respecto a que una de las consideraciones tomadas en
cuenta para que afirmara que la PRUEBA TESTIMONIAL A CARGO DE LA VICTIMA HUMBERTO
VAZQUEZ RAMIREZ, fuese VALIDA Y EFICAZ, lo es que dicha victima RECONOCIO SIN DUDA ALGUNA
a los SENTENCIADOS al momento en que se encontraban DETENIDOS por otro delito que no
conforma parte de la LITIS dejando en estado de indefensión que trascendió al fallo.

Siendo aplicable el siguiente criterio jurisprudencial que, si bien se trata de una tesis aislada, puede
dar luz al órgano de alzada sobre la materia y resolución del presente recurso.
Época: Décima Época

Registro: 2015220

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación

Libro 46, septiembre de 2017, Tomo III

Materia(s): Penal
Tesis: XV.3o.11 P (10a.)

Página: 1984

SENTENCIA DEFINITIVA EMITIDA EN EL PROCEDIMIENTO PENAL


ACUSATORIO Y ORAL. EL TRIBUNAL DE ENJUICIAMIENTO Y EL
TRIBUNAL DE APELACIÓN, AL DICTARLA O REVISARLA, NO TIENEN
OBLIGACIÓN DE ANALIZAR LAS ACTUACIONES REGISTRADAS EN LA
CARPETA DE INVESTIGACIÓN.

El proceso penal acusatorio y oral se rige por los principios de


publicidad, contradicción, concentración, continuidad e
inmediación, siendo la oralidad la principal herramienta para
materializar esos principios dentro de las audiencias públicas,
dejándose de lado el sistema anterior en el que se formaba un
expediente físico, ya que el procedimiento actual es distinto en la
medida en que aplica una metodología de audiencias en las que se
hacen las peticiones y se exponen las consideraciones para dirimir
las controversias entre las partes. En otro aspecto, los datos de
prueba contenidos en la carpeta de investigación no son parte del
material probatorio con base en el cual será juzgado el imputado,
salvo aquellas probanzas desahogadas de conformidad con las
reglas previstas en el código procesal respectivo para el anticipo de
prueba, o bien, aquellas que se incorporan por lectura durante la
audiencia de juicio; de manera que las actuaciones realizadas
durante la etapa de investigación registradas en la carpeta de
investigación, no pueden ser analizadas por el tribunal de
enjuiciamiento u otra autoridad revisora, debido a que la prueba
como tal, únicamente se constituye por la información que los
testigos vierten en la etapa de juicio, donde se materializan todos
los principios que rigen el procedimiento acusatorio. Por tanto, el
hecho de que existan entrevistas u otras técnicas o actuaciones
practicadas por las partes, registradas en la carpeta de
investigación, que no fueron desahogadas por medio del dicho de
los testigos en juicio, resulta irrelevante para el dictado de la
sentencia, por lo cual, los tribunales no están obligados a su análisis,
atento a que la sentencia sólo se rige por la información registrada
en la audiencia de juicio oral; sin que lo anterior deje en estado de
indefensión a las partes, debido a que desde el inicio de la
investigación, cuando el imputado tiene conocimiento de que
existe una indagatoria en su contra, tiene derecho al
descubrimiento probatorio, derecho que le asiste durante todas las
audiencias previas al juicio, incluyendo la etapa intermedia donde
se depura el proceso y se discute la admisión de las pruebas que
serán desahogadas en juicio. De ahí que el tribunal de
enjuiciamiento y, por ende, el tribunal de apelación, están
impedidos para revisar la carpeta de investigación una vez
concluido el juicio con el dictado de una sentencia, pues de lo
contrario, se violarían los principios del procedimiento penal
acusatorio dejando sin sentido las etapas previas a juicio, ya que
solamente los medios de prueba admitidos en la etapa intermedia
pueden, vía la declaración de los testigos, crear convicción para la
emisión de la sentencia. En consecuencia, de existir algún dato en
la carpeta de investigación que pudiera beneficiarle al imputado
que no fue materia del juicio oral, generaría responsabilidad única
y exclusivamente al defensor por su falta de diligencia y no contar
con la capacidad para producir esa información ante el tribunal de
enjuiciamiento, sin que pueda ser atribuible a la autoridad
responsable.

TERCER TRIBUNAL COLEGIADO DEL DÉCIMO QUINTO CIRCUITO.

Amparo directo 46/2017. 13 de julio de 2017. Unanimidad de votos.


Ponente: Gerardo Manuel Villar Castillo. Secretario: Juan Manuel
García Arreguín.

Esta tesis se publicó el viernes 29 de septiembre de 2017 a las 10:38


horas en el Semanario Judicial de la Federación.

Ya que incumplió con ese mandato el Juez del Tribunal de Enjuiciamiento y aún más se aprecia una
resolución incongruente entre las razones para valorar positivamente la prueba de cargo y
desvalorando cualquier intento de contradicción de las razones de adquisición de la identidad de
los Sentenciados, pues esto se aprecia en la transcripción siguiente:

Del ateste de cuenta se advierte la imputación


firme, clara y sostenida en contra de los
acusados como dos de los tres sujetos que lo
desapoderaran de su unidad vehicular el día
veintinueve de octubre del año dos mil diecisiete
en el fraccionamiento las Américas en
Naucalpan de Juárez, estado de México,
cobrando especial relevancia que al comparecer
ante este unitario se mostró firme, seguro,
categórico y sin duda alguna en cuanto al
señalamiento en contra de los señores acusados
como quienes en compañía de un tercer sujeto lo
desapoderaron de forma violenta de su unidad
vehicular, incluso al tenerlos a la vista de
manera directa les hizo el señalamiento lo que se
traduce en una imputación seria y firme en
contra de los señores acusados. Señalando que
una semana después de los hechos los buscaron
los elementos ministeriales toda vez que habían
detenida a unas personas con similares
características a las de los acusados, por lo que
al acudir al ministerio público y al tener a la vista
a los justiciables los reconoció sin dubitación
alguna como quienes habían participado en los
presentes hechos.

Resuelve

Primero marco Antonio lucio cerrillo y armando


segura contreras son penalmente responsables
del delito de robo con la modificativa agravante
de haberse cometido respecto de un vehículo de
motor con violencia previsto y sancionado por
los articulo 287 289 fracción i y 290 fracción i
inciso b V 6 7 8 fracción i Y si 11 fracción i inciso
d del código penal del estado de México 29
octubre de 2017 en agravio de Humberto
Vázquez Ramírez

Segundo por dicha responsabilidad penal se


impone a los sentenciados marco Antonio lucio
Cerrillo y armando segura contreras las penas de
dieciocho años diez< meses quince días de
prisión y multa de setenta y dos días una
equivalente a 4680.38 1

Al referir a los elementos de la Policía municipal quienes intervienen en una puesta a disposición
por hechos diversa materia de un juicio diverso.

Es decir, en relación al hecho materia de nuestro


asunto no deponen, pero son claros al asegurar
a dos personas por un robo a casa habitación en
donde estuviera relacionada la camioneta
hurtada al paciente del delito, resultando
verdadero la manifestación del señor
HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ, en tal sentido,

1
SENTENCIA DEFINITIVA DE PRIMERA INSTANCIA, de fecha DIECISEIS DE OCTUBRE DEL AÑO DOS MIL
DIECIOCHO dictado dentro de la CAUSA PENAL 630/2018, por el Juez del Tribunal De Enjuiciamiento del Distrito
Judicial de TLALNEPANTLA, Estado de México, EN CONTRA DE MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO Y ARMANDO
SEGURA CONTRAS, por el hecho delictuoso de ROBO COMETIDO CON VIOLENCIA RESPECTO DE UN VEHICULO
DE MOTOR, cometido en agravio de HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ
es decir que estaban detenidos por otro delito y
desde ahí los reconoció sin dubitación alguna

Si bien es cierto que la defensa Particular del


señor acusado centra su argumento final en la
diligencia de confronta, debe decirse y acotarse
que ese dato de prueba no arribo a la fase de
juicio, tomando en cuenta el contenido del
artículo 385 del código nacional de
procedimientos penales en el sentido que no se
podrán incorporar o invocar como medios de
prueba ni dar lectura durante el debate, a los
registros y demás documentos que den cuenta
de actuaciones realizadas por la policía o el
ministerio público en la investigación, con
excepción de los supuestos expresamente
previstos en este código.

En virtud de ello ambas partes se centraron en


esa diligencia, pero este juzgador está impedido
a pronunciarse sobre datos o medios de prueba
que no se allegaron a ala fase de juicio, máxima
que así lo determina el artículo 20 constitucional
en su apartado A, luego entonces lo que
únicamente se pondero a lo largo de esta
resolución obedece a la manifestaciones del
paciente del delito, del elemento de
investigación de la fiscalía general de justicia del
estado de México por lo tanto, no es viable que
me enfoque a su contenido y desarrollo
tomando en cuenta que no se llegó a juicio para
los efectos legales procedentes.2

Por lo que se aprecia, esta porción es la parte considerativa de la sentencia que se reclama, ello
atendiendo a lo previsto por el numeral 468 en su fracción II, en donde establece la posibilidad de
contar con fundamento para la causa de agravio, es que se considera que el análisis que se propone
respecto a que LAS RAZONES y MOTIVOS, expuestos por parte del juzgador no son acordes a la ley,

2
SENTENCIA DEFINITIVA DE PRIMERA INSTANCIA, de fecha DIECISEIS DE OCTUBRE DEL AÑO DOS MIL
DIECIOCHO dictado dentro de la CAUSA PENAL 630/2018, por el Juez del Tribunal De Enjuiciamiento del Distrito
Judicial de TLALNEPANTLA, Estado de México, EN CONTRA DE MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO Y ARMANDO
SEGURA CONTRAS, por el hecho delictuoso de ROBO COMETIDO CON VIOLENCIA RESPECTO DE UN VEHICULO
DE MOTOR, cometido en agravio de HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ
pues lejos de que se tenga por valida y cierta la información proporcionada por la Victima, se debió
suprimir esa información al constituir hechos de una diligencia de investigación que no fue
desahogada en juicio y que no interfieren respecto a la mediación de su deposado, sino que
derivado de una violación al derecho a la defensa es que se obtuvo un testimonio NO ESPONTANEO.

Época: Décima Época

Registro: 2014244

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación

Libro 42, mayo de 2017, Tomo III

Materia(s): Penal

Tesis: XI.P.18 P (10a.)

Página: 1872

APELACIÓN EN EL PROCESO PENAL ACUSATORIO. EL


ARTÍCULO 468, FRACCIÓN II, DEL CÓDIGO NACIONAL DE
PROCEDIMIENTOS PENALES, AUTORIZA EL EXAMEN DE LA
MOTIVACIÓN DE LAS SENTENCIAS DE PRIMERA INSTANCIA
IMPUGNADAS MEDIANTE ESTE RECURSO, A PARTIR DE LA
REVISIÓN DE LA RACIONALIDAD DE LOS ARGUMENTOS
EXPRESADOS POR EL TRIBUNAL DE ENJUICIAMIENTO, LO QUE
NO TRANSGREDE EL PRINCIPIO DE INMEDIACIÓN.

De la interpretación sistemática de los artículos que regulan


el recurso de apelación y el sistema de valoración de pruebas,
establecidos en el Código Nacional de Procedimientos
Penales, se concluye que el precepto mencionado autoriza al
tribunal de alzada el examen de la motivación de las
sentencias de primera instancia impugnadas mediante ese
recurso, a partir de la revisión de la racionalidad de los
argumentos expresados por el tribunal de enjuiciamiento,
porque mediante la controversia expresamente planteada
por las partes a través del recurso de apelación, puede
constatarse si dichos argumentos se ajustan a la exigencia de
que la motivación expresada satisfaga la racionalidad que
impone la valoración libre y lógica del material probatorio;
aspecto que no transgrede el principio de inmediación, pues
salvo los casos expresamente delimitados en el artículo 484
del código mencionado, el tribunal de apelación no puede
abordar directamente la valoración de los medios de prueba
desahogados ante el tribunal de enjuiciamiento, único
facultado para apreciar la prueba que ante él se produce bajo
el indicado principio de inmediación y el de contradicción.
Así, el control que el tribunal de apelación está obligado a
realizar con motivo de ese recurso, se traduce en el análisis
del razonamiento justificativo a través del cual podrá
establecerse si el tribunal de enjuiciamiento expuso su
decisión sobre bases racionales idóneas para hacerla
aceptable, bajo los principios de la valoración lógica
(principios de identidad, contradicción, tercero excluido y
razón suficiente), de las máximas de la experiencia
(conocimientos ordinarios del quehacer cotidiano en las
actividades genéricas del ser humano mediante la
observación de los fenómenos sociales, culturales, políticos y
de la naturaleza) y del conocimiento científico; por lo que sólo
de ese modo puede examinarse la discrecionalidad del
juzgado de primera instancia en la utilización y valoración de
las pruebas, como sustento de la sentencia materia del
recurso de apelación, preservando la integridad del principio
de inmediación referido.

TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL DÉCIMO


PRIMER CIRCUITO.

Amparo directo 254/2016. 19 de enero de 2017. Unanimidad


de votos; y mayoría en cuanto al procedimiento para la
elaboración de la presente tesis. Disidente: Omar Liévanos
Ruiz. Ponente: Gilberto Romero Guzmán. Secretario:
Guadalupe Antonio Velasco Jaramillo.

Nota:

Esta tesis refleja un criterio firme sustentado por un Tribunal


Colegiado de Circuito al resolver un juicio de amparo directo,
por lo que atendiendo a la tesis P. LX/98, publicada en el
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena
Época, Tomo VIII, septiembre de 1998, página 56, de rubro:
"TRIBUNALES COLEGIADOS DE CIRCUITO. AUNQUE LAS
CONSIDERACIONES SOBRE CONSTITUCIONALIDAD DE LEYES
QUE EFECTÚAN EN LOS JUICIOS DE AMPARO DIRECTO, NO
SON APTAS PARA INTEGRAR JURISPRUDENCIA, RESULTA ÚTIL
LA PUBLICACIÓN DE LOS CRITERIOS.", no es obligatorio ni
apto para integrar jurisprudencia.

Esta tesis es objeto de la denuncia relativa a la contradicción


de tesis 223/2017, pendiente de resolverse por la Primera
Sala.

Esta tesis se publicó el viernes 12 de mayo de 2017 a las 10:17


horas en el Semanario Judicial de la Federación.

Esta tesis se publicó el viernes 27 de octubre de 2017 a las


10:37 horas en el Semanario Judicial de la Federación.

Pues tal cual quedo asentado en la sentencia que se Apela, el juez delimito correctamente la materia
del latrocinio puesto a su conocimiento, en donde solo consta lo acontecido en fecha veintinueve
de octubre del año dos mil diecisiete, y que nunca seria materia del juicio aspectos como la
detención de los Apelantes, ni como su intervención en diligencias de investigación, hechos que
deben ser suprimidos de la memoria del asunto:

“CONSIDERANDO III. HECHO DELICTUOSO DE


ROBO CON LA MODIFICATIVA AGRAVANTE DE
HABERSE COMETIDO RESPECTO DE UN
VEHICULO AUTOMOTOR CON VIOLENCIA.

…Asimismo ministerio público al momento de


formular su alegato de clausura detallo como
delito lo siguiente el día veintinueve de octubre
del dos mil diecisiete los acusados MARCO
ANTONIO LUCIO CERRILLO y AMARDON SEGURA
Contreras, desapoderaron de un vehículo de su
propiedad a la víctima HUMBERTO VAZQUEZ
RAMIREZ siendo este el de la marca Nissan, Tipo
Xtrail modelo dos mil quince con placas de
circulación MSU1333 del estado de México
precisamente a las afueras de su domicilio
ubicado en calle segunda de Guayaquil número
ochenta fraccionamiento las Américas municipio
de Naucalpan de Juárez estado de México donde
la victima venia en compañía de su menor hija de
identidad reservada a los cuales amagaron con
arma de fuego tres sujetos y al cual los dejan
bajar a su menor hija desapoderándolo de sus
pertenencias y de su camioneta.3

Y desde este acontecimiento narrado en forma de acontecimiento histórico, es que se puede


desprender la materia del juicio, respondiendo las interrogantes respecto de los aspectos medulares
del asunto, y de donde se aprecia la interrogante que esta defensa considera no puede ser superada
solo por el dicho de una persona y en las condiciones en que se hacen valer a lo largo del presente,
ya que si se inserta la información que realmente debió desfilar en juicio observaríamos lo siguiente:

…Asimismo ministerio público al momento de


formular su alegato de clausura detallo como
delito lo siguiente el día veintinueve de octubre
del dos mil diecisiete un primer sujeto del sexo
masculino de UN METRO SESENTA, DE TREINTA
Y OCHO AÑOS DE EDAD, COMPLEXION
ROBUSTA, TEZ MORENO, CABELLO NEGRO
CORTO Y CHINO, FRENTE MEDIANA, CEJAS
SEMIPOBLADAS, OJOS MEDIANOS, NARIZ
ANCHA Y CHATA, BOCA MEDIANA, LABIOS
DELGADOS, MENTON OVALDADO y un segundo
sujeto del sexo masculino de VEINTICUATRO
AÑOS DE EDAD, DE UNA ESTATURA APROXIMAD
DE UN METRO CON SETENTA Y CUATRO
CENTIMETROS, COMPLEXION MEDIA, CABELLO
CORTO LACIO CASTAÑO CLARO, FRENTE
AMPLIA, CEJAS SEMIPOBLADASNARIZ ANCHA
BOCA MEDIANA LABIOS DELGADOS, MENTON
OVAL, desapoderaron de un vehículo de su
propiedad a la víctima HUMBERTO VAZQUEZ
RAMIREZ siendo este el de la marca Nissan, Tipo
Xtrail modelo dos mil quince con placas de
circulación MSU1333 del estado de México
precisamente a las afueras de su domicilio
ubicado en calle segunda de Guayaquil número
ochenta fraccionamiento las Américas municipio
de Naucalpan de Juárez estado de México donde

3
SENTENCIA DEFINITIVA DE PRIMERA INSTANCIA, de fecha DIECISEIS DE OCTUBRE DEL AÑO DOS MIL
DIECIOCHO dictado dentro de la CAUSA PENAL 630/2018, por el Juez del Tribunal De Enjuiciamiento del
Distrito Judicial de TLALNEPANTLA, Estado de México, EN CONTRA DE MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO Y
ARMANDO SEGURA CONTRAS, por el hecho delictuoso de ROBO COMETIDO CON VIOLENCIA RESPECTO DE UN
VEHICULO DE MOTOR, cometido en agravio de HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ
la victima venia en compañía de su menor hija de
identidad reservada a los cuales amagaron con
arma de fuego tres sujetos y al cual los dejan
bajar a su menor hija desapoderándolo de sus
pertenencias y de su camioneta.4

Pues del material probatorio existente no puede observarse la respuesta a la interrogante de quien
cometió el latrocinio que se estudia, ello debido a que como se analiza la declaración de la victima
no es espontanea por haber sido viciada con introducción de información sugestiva de culpabilidad
de los sentenciados

Además que como se demuestra con el análisis mismo de la TESTIMONIAL de forma analítica y no
solo DESCRIPTIVA, es que se puede afirmar que el RECUERDO (el cual cuenta con un proceso)
guardado por la víctima se vio afectado por información que a la luz del propio juicio se aprecia
sugestivamente en perjuicio de los sentenciados, y que deviene de una diligencia de
CONFRONTACION mal practicada que no garantiza una correcta información y como EFECTO
REFLEJO debe ser eliminado esa información viciada al momento de la obtención del recuerdo por
parte de la VICTIMA y a nuestra consideración cualquier tópico respecto a hechos que no
acontecieron en la fecha fijada en la litis.

Época: Décima Época

Registro: 2015452

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación

Libro 47, octubre de 2017, Tomo IV

Materia(s): Penal

Tesis: I.6o.P.87 P (10a.)

Página: 2530

RECURSO DE APELACIÓN EN EL PROCESO PENAL


ACUSATORIO. EL TRIBUNAL DE ALZADA QUE DEBA
RESOLVERLO, EN ACATAMIENTO AL DERECHO A UN DEBIDO
PROCESO, PUEDE ANALIZAR LA VALORACIÓN DE LA PRUEBA

4
Idem.
REALIZADA POR EL TRIBUNAL DE ENJUICIAMIENTO DE
PRIMERA INSTANCIA, SIN QUE ELLO COMPROMETA EL
PRINCIPIO DE INMEDIACIÓN (INTERPRETACIÓN CONFORME
DEL ARTÍCULO 468, FRACCIÓN II, DEL CÓDIGO NACIONAL DE
PROCEDIMIENTOS PENALES).

De una interpretación restrictiva y literal del precepto


mencionado, se concluye que el tribunal de segunda
instancia, en el recurso de apelación, no puede analizar las
consideraciones relativas a la valoración de la prueba en la
sentencia de primer grado; sin embargo, esa forma de
interpretación limita el derecho a recurrir y contraviene la
naturaleza del recurso de apelación, cuya nota distintiva es
permitir la reasunción de la jurisdicción originaria; siendo que
la interpretación de las normas implica un ejercicio
ponderativo a la luz de principios axiológicos que rigen el
orden jurídico nacional; y si de la porción normativa referida,
en relación con los diversos 458, 461, 468, 471, 476, 477, 479
y 481 del propio código, se advierte que son materia de la
resolución de apelación aquellas violaciones graves al debido
proceso, ello debe entenderse en un sentido amplio con una
connotación sustantiva, pues es obligación de los órganos de
alzada analizar la determinación recurrida y vigilar que no
exista ninguna transgresión a los derechos fundamentales, lo
que es acorde con los artículos 461 y 481 citados, que obligan
al tribunal de apelación a realizar un análisis oficioso para
determinar si hubo violaciones al debido proceso. Por ende,
la restricción de no analizar la valoración de la prueba
realizada por el a quo no tendría sentido si se parte de la base
de que el tribunal de apelación debe estudiar oficiosamente
el debido proceso, que se define como el estándar
constitucional con implicaciones sustantivas en que no
solamente se debe ser juzgado por tribunales previamente
establecidos, de acuerdo con las leyes vigentes y
exactamente aplicables al caso, sino que en materia
probatoria, se decanta por el respeto al núcleo esencial del
derecho humano que versa sobre la admisión, desahogo y
valoración de las pruebas; de manera que el tribunal de
apelación, en acatamiento a este derecho, y atento a la
interpretación conforme del artículo 468, fracción II,
indicado, puede analizar la valoración de la prueba realizada
por el tribunal de enjuiciamiento de primera instancia, sin
que ello comprometa el principio de inmediación, porque el
artículo 61 del Código Nacional de Procedimientos Penales
señala la obligación de videograbar el desarrollo de todas las
audiencias en las distintas fases del procedimiento penal
acusatorio, a través de las cuales se apreciará el desarrollo de
la prueba; sin que sea óbice para dicho criterio, la existencia
del sistema de nulidad y la reposición, contenidos en los
artículos 97 a 102 del código mencionado, que establecen la
facultad de las partes para depurar actuaciones ilícitas o
tenerlas por consentidas ante su falta de impugnación, pues
aun así, en el recurso de apelación se prevé un sistema de
análisis oficioso, en que el órgano revisor reasume
jurisdicción para resolver el asunto planteado.

SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL


PRIMER CIRCUITO.

Amparo directo 78/2016. 4 de mayo de 2017. Unanimidad de


votos. Ponente: María Elena Leguízamo Ferrer. Secretario:
Mark Hilario Azcorra.

Nota: La presente tesis aborda el mismo tema que la diversa


XI.P.18 P (10a.), de título y subtítulo: "APELACIÓN EN EL
PROCESO PENAL ACUSATORIO. EL ARTÍCULO 468, FRACCIÓN
II, DEL CÓDIGO NACIONAL DE PROCEDIMIENTOS PENALES,
AUTORIZA EL EXAMEN DE LA MOTIVACIÓN DE LAS
SENTENCIAS DE PRIMERA INSTANCIA IMPUGNADAS
MEDIANTE ESTE RECURSO, A PARTIR DE LA REVISIÓN DE LA
RACIONALIDAD DE LOS ARGUMENTOS EXPRESADOS POR EL
TRIBUNAL DE ENJUICIAMIENTO, LO QUE NO TRANSGREDE EL
PRINCIPIO DE INMEDIACIÓN.", publicada en el Semanario
Judicial de la Federación del viernes 12 de mayo de 2017 a las
10:17 horas y en la Gaceta del Semanario Judicial de la
Federación, Décima Época, Libro 42, Tomo III, mayo de 2017,
página 1872, que es objeto de la denuncia relativa a la
contradicción de tesis 223/2017, pendiente de resolverse por
la Primera Sala.
Este agravio como se dijo si bien realiza un estudio sobre la VALORACION DE UNA PRUEBA
TESTIMONIAL DE HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ, también lo es que el estudio realizado, se
establece en los motivos y razones que tuvo el Órgano Jurisdiccional para dictar el fallo no así una
valoración distinta a la aportada, por ello no se ve comprometido el principio de INMEDIACION,
siendo al contrario que la propia DECLARACION DE LA VICTIMA POR SI MISMA VIOLA EL PRINCIPIO
DE INMEDIACION AL DAR POR HECHO QUE NO SON MATERIA DEL JUICIO Y QUE SUS AFIRMACIONES
SON DERIVADAS DE DILIGENCIAS NO DESAHOGADAS EN JUICIO.

Época: Décima Época

Registro: 2012636

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación

Libro 34, septiembre de 2016, Tomo IV

Materia(s): Penal

Tesis: XVI.P.9 P (10a.)

Página: 2879

PROCESO PENAL ACUSATORIO Y ORAL. EL PRINCIPIO DE


INMEDIACIÓN NO IMPIDE QUE EL TRIBUNAL DE CASACIÓN,
ANTE LA EXPOSICIÓN DE AGRAVIOS SOBRE LA VALORACIÓN
DE LA PRUEBA TESTIMONIAL, PONDERE LA VEROSIMILITUD
CON QUE SE CONDUCE UN TESTIGO PARA DETERMINAR SI ES
FACTIBLE O NO CONCEDER VALOR PROBATORIO A SU DICHO.

De acuerdo con el artículo 20, párrafo primero, apartado A,


fracción II, de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, el proceso penal acusatorio y oral se rige, entre
otros, por el principio de inmediación, entendido como la
actividad propia del juzgador de presenciar de manera
directa y personalísima la recepción o desahogo de pruebas y
de los alegatos de las partes. Sin embargo, dicho principio no
impide que el tribunal de alzada revise la racionalidad de la
valoración de la prueba, pues el otorgamiento de
determinado valor de convicción no puede quedar sujeto a
razones de íntima convicción, sino que el tribunal de juicio
oral debe exponer los motivos que permitan conocer que su
decisión se funda sobre bases racionales idóneas para hacerla
aceptable. Siendo así, ante la exposición de agravios al
respecto, el tribunal de casación tiene la posibilidad de
ponderar la verosimilitud con que se conduce un testigo, de
acuerdo a los datos empíricos asumidos como elementos de
prueba, las inferencias que partiendo de ellas se han
formulado y de los criterios utilizados para extraer sus
conclusiones probatorias, para determinar si es factible o no
conceder valor probatorio a su dicho.

TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL DÉCIMO


SEXTO CIRCUITO.

Amparo directo 495/2015. 9 de junio de 2016. Unanimidad


de votos. Ponente: Uriel Villegas Ortiz, secretario de tribunal
autorizado para desempeñar las funciones de Magistrado,
con apoyo en el artículo 81, fracción XXII, de la Ley Orgánica
del Poder Judicial de la Federación, en relación con el artículo
40, fracción V, del Acuerdo General del Pleno del Consejo de
la Judicatura Federal, por el que se expide el similar que
reglamenta la organización y funcionamiento del propio
Consejo; y reforma y deroga diversas disposiciones de otros
acuerdos generales. Secretario: Israel Cordero Álvarez.

Esta tesis se publicó el viernes 23 de septiembre de 2016 a las


10:32 horas en el Semanario Judicial de la Federación.

PUES SE AFECTA DE LA SIGUIENTE MANERA:

1.-El denunciante sufre el robo en su persona, hace expresa esa narración histórica ante el órgano
investigador sin detenido, en donde proporciona los datos de identificación de sus agresores.

2.-Al ser el reconocimiento de los SENTENCIADOS, al momento en que se encontraban detenidos en


fase de investigación, uno de los motivos por los cuales el testigo evoca su recuerdo y realiza una
imputación con nombres de los ACUSADOS.

2.-Esa diligencia al ser actos de investigación no puede ser invocada, controvertida o estudiada para
su existencia, validez o no.

3.-Sin embargo, es parte medular de la convicción del Juez por tener por cierta la declaración en
juicio de la víctima.
Pero ante la imposibilidad de ser COMBATIDA O ANALIZADA DICHA DILIGENCIA, aunado A SER UNA
DILIGENCIA DE INVESTIGACIÓN NO DESAHOGADA EN JUICIO, es que nos ayuda a AFIRMAR que los
MOTIVOS que generaron CONVICCION en el Juez no son legales y además violentan el derecho de
defensa.

Ya que como se aprecia de la Sentencia que se combate se puede establecer que el motivo de la
sentencia es la íntima convicción que le proporciono la victima al relatar la forma en como
ocurrieron los hechos, en donde como se afirma la misma victima denota la falta de espontaneidad
pues previo a venir a declarar en Juicio a la victima se le proporciono la información detallada de los
Sentenciados de forma ilegal, por lo que la imputación firme y directa solo es consecuencia directa
de la diligencia de confrontación de fecha cinco de noviembre del año dos mil diecisiete, que el
propio juez permitió la introducción por parte de la victima y al mismo tiempo y juicio no permitió
se estableciera lo viciada que se encontraba y que por ende lejos de tener un ánimo de
animadversión de la victima hacia los Sentenciados tiene un Error en el proceso de adquisición del
conocimiento, pues una vez de conocido el hecho, es influenciado y conducido a reconocer a
personas inocentes a quienes por dicho error en el que se encuentra inmerso lo viene a confirmar
en juicio.

Es por ello que la petición concreta de estos Sentenciados es que con apoyo a lo previsto por el
numeral 482 en su fracción III, solicitaría la Reposición del Procedimiento, por haberse violado el
derecho de defensa adecuado, ya que la referencia que aporta la Victima respecto a la identidad
de los Sentenciados, es derivada de la falta de espontaneidad que le proporciono la realización
de la diligencia enunciada, su utilización como fuente de convicción por parte del órgano
jurisdiccional y la falta de oportunidad para contradecir dicha diligencia, ya que constituye
antecedentes de investigación, es como se considera que trasciende a la valoración del tribunal
de enjuiciamiento y que trascendió a los PUNTOS RESOLUTIVOS PRIMERO Y SEGUNDO, pues la
información derivada de dicha diligencia, incluyendo la imputación deben ser suprimidos y una
vez hecho esto realizar el ejercicio adecuado de valoración.

Pues como se aprecia del contenido interno de la sentencia y de su fundamentación y motivación


se aprecia que al dar por hecho el señalamiento realizado por la victima en juicio, el Juez no requirió
elemento alguno diverso para tener por probado todo el hecho delictuoso sin mediar argumento o
medio probatorio distinto, pues lejos de tener por probado el núcleo del tipo, que es el punto de
discusión de la defensa, pues el Juez con la simple manifestación de la victima quien como se dijo
se encuentra viciada en su recuerdo, se da por probado el apoderamiento del vehículo por parte
de los Sentenciados y uno más, pues lejos de que se tenga por probado que tres sujetos armados
con pistolas, se acerquen a el por diversos puntos, y que interactúe con cada uno de ellos,
permitiéndole la deambulación sin mediar consecuencia alguna y que a su vez a su paso por su
intervención cada uno de los sujetos activos dejara de realizar el delito y sin que se dijera que
seguían haciendo cada uno mientras tanto, es que se consuma el latrocinio, sin que la victima
pudiera percatarse de quien condujo el vehículo y si de los tres sujetos quien robaron su vehículo
cual de ellos abordo el mismo.
Siendo así es casi imposible el que se pida a una persona defenderse de un evento en el que no
intervino, por ello es que el planteamiento de estos Sentenciados es que existe la posibilidad de
confusión en el señalamiento de la víctima, pues si bien es cierto nos señalo como aquellos a
quienes de un grupo de cuatro personas para el éramos el responsable, también lo es que la
inferencia de que seamos nosotros las mismas personas que cometieron el latrocinio es distinto.

Dado que existen indicios que pueden demostrar lo contrario, pues se cuenta con el primer recuerdo
que evoca la victima del delito la cual como se sabe se encuentra más próxima del evento y con
mayor oportunidad de que se ajuste a los hechos vividos, pues al momento de la declaración en
juicio ya había pasado mas tiempo, en dicho recuerdo confirmado en juicio, es que los sujetos que
lo robaron tenían características físicas que pudo dar cuenta, las mismas fueron recabadas por el
ministerio publico y que fueron evidenciadas por parte del perito ISRAEL MONROY SALAZAR, de
donde se aprecia que claramente NO PUEDEN COINCIDIR por más aproximaciones que se den las
características proporcionadas por la victima y la identidad de los HOY SENTENCIADOS.-

Entonces se diría pero la victima los reconoció en juicio como los responsables, pero los
responsables en una diligencia ministerial, en donde antes de ello, se le informo que habían sido
detenidos dos personas, que venían conduciendo su vehículo, que a su vehículo que le habían
cambiado sus placas de circulación, que eran responsables de un delito de robo a casa habitación
en donde ocuparon su vehículo, que en su vehículo llevaban los objetos robados de la casa
habitación, información que no debe ser compartida por ningún actor del estado, menos antes del
reconocimiento, dada la información sugestiva que puede traer condiciones de parcialidad en la
prueba, además de que los distractores no contaban con la seña particular del tatuaje visible en
brazo, que en la diligencia de confrontación se hizo pasar al SENTENCIADO ARMANDO SEGURA
CONTRERAS, como un sujeto de un metro con setenta y cuatro centímetros, forzando la diligencia
para evitar la impunidad, que no fueron asistidos los SENTENCIADOS por su abogado particular
previamente designado, que se afirma que reconoció en juicio la victima a los sujetos detenidos en
hechos de otro juicio, ya que jamás el SENTENCIADO MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO podrá ser
UN SUJETO ROBUSTO, CON NARIZ CHATA Y ANCHA, CON CABELLO RIZADO NEGRO Y CORTO y por
su parte el SENTENCIADO ARMANDO SEGURA CONTRERAS, no podrá ser UN SUJETO A QUIEN
NUNCA SE DIJO SU TEZ, DE UN METRO CON SETENTA Y CUATRO CENTIMETROS, además de que en
Juicio en ningún caso el señalamiento o imputación firme y directa de que habla la sentencia no se
proporciono NI EL NOMBRE NI EL APELLIDO DE DICHO SENTENCIADO y que del primer mencionado
solo menciona el nombre de MARCO ANTONIO sin proporcionar más dato de identidad solo su
afirmación de que los reconocía.

Pues basta con afirmar que para la victima hasta el juicio el hoy sentenciado ARMANDO SEGURA
CONTRERAS mide un metro con setenta y cuatro centímetros, PUES nos aseguro que el sujeto que
lo robo era más alto que el, que ello lo conoció por estar frente a dicho sujeto y que tomo esa medida
en proporción a su propia altura, que fue lo mismo que declaro durante la investigación, y la fiscalía
en ningún caso presento otra prueba que nos dijera que esa contradicción estaba superada por otro
dato de identificación o con un medio de prueba que vinculara directamente a los SENTENCIADOS
con el comportamiento imputado que no fuera simples manifestaciones sino medios objetivos,
tangibles, sustentables, inmutables, epistémicos, verbigracia de ello sería cualquier indicio
criminalístico.
De tal suerte, se actualiza el apoderamiento
aludido, considerando que los actos
desplegados por el autor de la conducta es para
tomar los bienes que dan materia a la causa,
este es, el apoderamiento constituye aquella
acción en virtud de la cual el agente activo del
delito, toman las cosas que no se encuentran
dentro de su esfera de acción para ingresarlas a
su área de dominio, consumándose el latrocinio
en el momento mismo en el cual los objetos del
paciente del delito, se encuentra bajo un poder
de hecho de este y logra ejercer en los términos
que prevé el articulo 287 párrafo segundo del
código penal

Del precepto legal transcrito se advierte que el


primer presupuesto a comprobar es la existencia
de una conducta de apoderamiento, lo cual así
acontece, porque se encuentra demostrado que:
el día veintinueve de octubre del año dos mil
diecisiete, al arribar a su domicilio el paciente
del delito, es sorprendido por tres sujetos,
quienes empleando armas de fuego lo
desapoderan de su unidad vehicular NISSAN
XTRAIL MODELO 2015, placas de circulación
MSU 1333 DEL ESTADO DE MEXICO Y UNA VEZ
CONSUMADO EL LATROCINO HUIR DEL LUGAR
CON EL OBJETO MATERIA DEL HECHO.

Con lo que se acredita la afectación al bien


jurídico tutelado por la norma penal en estudio,
consistente en la prohibición para el sujeto
activo de apoderarse de cosa ajena mueble sin
derecho y sin consentimiento de la persona que
legalmente lo puedo hacer conforme a derecho.5

Pues como se aprecia pues basta por tener por comprobado el núcleo del tipo, para tener como
consecuencia natural el acreditamiento de las demás circunstancias que rodean el hecho y con ello
la identidad de los responsables, pues concibiendo la conducta como plausible es que se da por

5
ibidem
cierto el cumulo de acontecimientos sin pregunta alguna, pues se deriva de una declaración de una
persona que no se aprecia animadversión, pero como se dijo si de un error en el recuerdo, derivado
de la influencia y sugestivita con la que fue conducida, convirtiendo su declaración e imputación
ante el Juez del Tribunal de Enjuiciamiento en un recuerdo NO ESPONTANEO, pues la identidad
detallada y precisa de las personas es un recuerdo obtenido de una diligencia que si bien pudiera
ser LEGAL (lo cual solo se afirma como suposición) , no menos cierto que no conforma la materia
PROBATORIA A VALORAR, por tanto da pauta a la afirmación de que existe materia para el recurso
de apelación y que se requiere la supresión de la información que no sea materia de la litis.

Y señala al sujeto uno como MARCO ANTONIO


LUCIO CERRILLO al número dos ARMANDO
SEGURA CONTRERAS y el tercer sujeto es el de
identidad desconocida, lo que desde luego
genera mayor certeza y confianza en sus
disposiciones y si bien es cierto que la defensa
particular ejerció su derecho a contra interrogar
al paciente del delito, este ejercicio fue
infructuoso dado que se sostuvo en sus
imputaciones en contra de los justiciables y en
ese efecto no se aportó medio de prueba
tendiente a evidenciar animadversión en contra
de los acusados por parte del paciente del delito,
lo que finalmente fortalece sus
argumentaciones.

En tal virtud y una vez que este tribunal de


enjuiciamiento ha valorado las probanzas de
mérito, con fundamento en los artículos 356,
357, 359, 402 del código nacional de
procedimientos penales, se le concede de
acuerdo a las reglas de valoración libre y lógica,
el de pleno valor probatorio, en atención a que
se ubica en circunstancias de tiempo, modo y
lugar, además de que es firme, clara y
categórica en cuanto al señalamiento que realiza
en contra de los señores acusado como dos de los
sujetos que le desapoderan mediante actos
violentos la unidad vehicular, sin que se advierta
algún animo espurio en canto a querer
perjudicar los intereses de los señores acusados,
sino más bien, el de comparecer ante este
órgano jurisdiccional a expresar de manera oral
y directa lo que aconteció el día veintinueve de
octubre del año dos mil diecisiete.6

Siendo aplicable el siguiente criterio jurisprudencial en donde se establece que no solo la


animadversión puede ser establecida como motivo de una imputación errada, sino que existen otros
motivos que formaron una idea diferente a la verdad en la mente de la víctima, siendo este la
diligencia cargada de sugestivita de culpabilidad que hizo que de forma EQUIVOCADA sean
imputados los SENTENCIADOS sin que medie medio de prueba alguno que corrobore la actuación
ajustada a derecho de la autoridad que haga que el resultado de dicha diligencia que se tilda de
ilegal tenga eficacia para condenar a una persona o que diferente a este conocimiento se haya
obtenido de una fuente fidedigna.

Época: Décima Época

Registro: 2010041

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación

Libro 22, septiembre de 2015, Tomo III

Materia(s): Penal

Tesis: II.2o.P. J/8 (10a.)

Página: 1828

PRUEBA TESTIMONIAL EN EL PROCEDIMIENTO PENAL. LAS


IMPUTACIONES DE CARGO PREVALECEN SOBRE LAS DE DESCARGO
-CON INDEPENDENCIA DEL NÚMERO DE PERSONAS QUE LAS
EMITAN Y DE QUE CONTRADIGAN LA IMPUTACIÓN HACIA EL
INCULPADO-, SI ÉSTAS NO JUSTIFICAN LA POSIBLE
ANIMADVERSIÓN O MOTIVO POR EL CUAL LOS TESTIGOS DE CARGO
HABRÍAN DE SEÑALAR A UNA PERSONA DISTINTA DEL VERDADERO
CULPABLE O AUTOR DEL HECHO IMPUTADO, SOBRE TODO SI LA
VERSIÓN DE LAS VÍCTIMAS SE CORROBORA CON EL RESTO DE LAS
PRUEBAS.

6
SENTENCIA DEFINITIVA DE PRIMERA INSTANCIA, de fecha DIECISEIS DE OCTUBRE DEL AÑO DOS MIL
DIECIOCHO dictado dentro de la CAUSA PENAL 630/2018, por el Juez del Tribunal De Enjuiciamiento del
Distrito Judicial de TLALNEPANTLA, Estado de México, EN CONTRA DE MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO Y
ARMANDO SEGURA CONTRAS, por el hecho delictuoso de ROBO COMETIDO CON VIOLENCIA RESPECTO DE UN
VEHICULO DE MOTOR, cometido en agravio de HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ
La cantidad de testigos, por sí, no determina la mayor veracidad de
sus testimonios, en función del elevado número de personas que
declaren, pues el hecho de que se presenten a declarar varios
testigos que afirman un hecho de forma idéntica no implica,
necesariamente, que los eventos hayan acontecido de la manera en
que lo refieren, sobre todo cuando confrontando esas versiones
con las imputaciones de cargo y otros indicios, no logran desvirtuar
a estas últimas, pues es válido comprender que la aparición
posterior de una versión contraria a la de los declarantes de cargo
(que incluso fueron víctimas), lleva implícita también la afirmación
de los deponentes, en el sentido de que las víctimas que imputan el
hecho mienten o no dicen la verdad y, ello, a su vez, implicaría
admitir la pretensión dañada de perjudicar deliberadamente al
inculpado; por tanto, quien pretende controvertir en esas
condiciones a las imputaciones de cargo, deberá no sólo limitarse a
sostener una versión opuesta (con las citadas derivaciones
implícitas), sino justificar, además, la posible animadversión o
motivo por el cual los testigos de cargo habrían de señalar a una
persona distinta del verdadero culpable o autor del hecho
imputado; no obstante, si sólo se allegan testimonios de descargo
(independientemente de su número) que se limitan a contradecir la
imputación, pero sin aportar, además, dato alguno del porqué los
imputadores pudieran mentir o tener razones para inculpar
equivocada o indebidamente al enjuiciado, es claro que de la
ponderación y confronta de ambos tipos de narrativa, deben
prevalecer aquellos que provienen de las víctimas, sobre todo
cuando la versión de éstas se corrobora con el resto de las pruebas,
tales como periciales, documentales, huellas materiales, vestigios
o, en general, todo aquello que siendo legalmente incorporado a
los autos converja en prueba indiciaria o circunstancial que así lo
establezca.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL


SEGUNDO CIRCUITO.

Amparo directo 205/2010. 20 de enero de 2011. Unanimidad de


votos. Ponente: José Nieves Luna Castro. Secretario: Silvestre P.
Jardón Orihuela.

Amparo directo 6/2012. 26 de abril de 2012. Unanimidad de votos.


Ponente: José Nieves Luna Castro. Secretario: Silvestre P. Jardón
Orihuela.

Amparo directo 112/2014. 30 de octubre de 2014. Unanimidad de


votos. Ponente: José Nieves Luna Castro. Secretario: Carlos Ruiz
Alejandre.
Amparo directo 160/2014. 30 de octubre de 2014. Unanimidad de
votos. Ponente: José Nieves Luna Castro. Secretario: Carlos Ruiz
Alejandre.

Amparo directo 134/2014. 27 de noviembre de 2014. Unanimidad


de votos. Ponente: José Nieves Luna Castro. Secretario: Carlos Ruiz
Alejandre.

Esta tesis se publicó el viernes 25 de septiembre de 2015 a las 10:30


horas en el Semanario Judicial de la Federación y, por ende, se
considera de aplicación obligatoria a partir del lunes 28 de
septiembre de 2015, para los efectos previstos en el punto séptimo
del Acuerdo General Plenario 19/2013.

De una interpretación armónica del artículo 20, apartado A, B fracción IX, de la Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos, con los numerales 8.2, incisos d) y e), de la Convención Americana
sobre Derechos Humanos y 14.3, incisos b) y d), del Pacto Internacional de los Derechos Civiles y
Políticos, puede concluirse que el derecho de defensa adecuada se garantiza cuando el acusado es
asistido por un profesional del derecho y en todas las etapas procedimentales en las que intervenga.

Pues el derecho de defensa que se invoca en los numerales supra citados prevé un DERECHO
FUNDAMENTAL, por lo que se debe entender que en la petición de apelación que se estudia, se
alega por parte de los sentenciados que se violento EL DERECHO A UNA DEFENSA ADECUADA, en
sus vertientes de DERECHO A NO SER JUZGADO CON PRUEBAS VICIADAS, A CONTAR CON DEFENSOR
AL MOMENTO DE LA INTERVENCION DIRECTA EN LAS DILIGENCIAS, A NO SER JUZGADO A PARTIR
DE DATOS DE PRUEBA NO DESAHOGADOS EN JUICIO Y AL DERECHO A CONTRADECIR LAS PRUEBAS.

Ante ello es preciso comenzar diciendo que como se dijo la causa que origina este agravio no es
materia del presente Juicio, sin embargo, al ser utilizado por parte del Juez es que da oportunidad
para su estudio, pues se debe tomar en consideración que el derecho defensa adecuada que se
plantea para su estudio se debe afirmar lo siguiente:

Independientemente de que se tome en cuenta o no para dictar la Sentencia que funda la petición
de Apelación, la diligencia de confrontación como lo declaramos en Juicio Oral, que la diligencia
de confrontación no fue realizada con nuestro consentimiento, que además estábamos detenidos
por otro delito al que somos sentenciados, que habían nombrado como defensor particular al
licenciado JUAN ANTONIO MARTINEZ SERRANO, con cedula profesional 7740105, en fecha cinco
de noviembre del año dos mil diecisiete, siendo las trece horas con cuarenta minutos, y que fue
después de ello que se realizó la confrontación SIN ABOGADO DE LA NUESTRA ELECCION.

Ante ello, la invocación de la víctima durante su declaración en el juicio, del momento mismo de la
diligencia de confrontación y que estas circunstancias sean tomadas en cuenta por parte del Juez
del Tribunal de Enjuiciamiento, es que se afirma la violación intentada, pues El Juez de la causa al
no querer análisis y estudiar actos de investigación no desahogados en juicio se aparta de los
alcances que nuestro Supremos Órgano de Justicia Establece como efectos jurídico que tiene el
citado derecho en relación con la declaratoria de ilegalidad del reconocimiento sin asistencia del
defensor. Pues era claro que de haber llegado a juicio esa prueba era mas que evidente su nulidad,
sin embargo la fiscalía solo lo utiliza como un acontecimiento vivido por parte de la víctima durante
su declaración lo cual no es idóneo para descubrir la verdad en la realización de la diligencia y por
tanto debe desaparecer de la memoria del presente procedimiento como prueba, como referencia
a un acontecimiento o como indicio la propia diligencia de confrontación en fase de investigación
ministerial.

De una interpretación armónica del artículo 20, apartado A, B fracción IX, de la Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos, con los numerales 8.2, incisos d) y e), de la Convención Americana
sobre Derechos Humanos y 14.3, incisos b) y d), del Pacto Internacional de los Derechos Civiles y
Políticos, puede concluirse que el derecho de defensa adecuada se garantiza cuando el acusado es
asistido por un profesional del derecho y en todas las etapas procedimentales en las que intervenga.

Lo cual encuentra justificación al requerirse de una persona que tenga la capacidad técnica para
asesorar y apreciar lo que jurídicamente es conveniente para el imputado, a fin de otorgar una real
y efectiva asistencia legal que le permita estar en posibilidad de hacer frente a la imputación
formulada en su contra; lo cual no se satisface si la asistencia es proporcionada por cualquier otra
persona que no reúna la citada característica o que no hubiera sido designada por el acusado,

Por dentro de este derecho se encuentra a ser representado por un abogado de su elección

Por ello, la consecuencia será que toda prueba que haya sido obtenida con violación al derecho del
inculpado a contar con una defensa adecuada tendrá el carácter de ilícita, por lo cual no debe
tomarse en cuenta para efectos de la valoración al dictar cualquier resolución relativa a la situación
jurídica del inculpado; esto es, debe ser objeto de exclusión valorativa, como es el caso, entre otras,
el reconocimiento o identificación del imputado de manera presencial en el procedimiento penal,
pues traerá la nulidad de la identificación en que la persona imputada no estuvo asistida por su
defensor, lo mismo que las subsecuentes que derivaron de ello, ante la ilicitud primigenia de la
prueba de origen.

Pues contrario a lo sostenido por parte del Juez de la causa, en el sentido de que el policía de
investigación Eduardo lejos de que se aprecie como vertió su declaración, esto con dudas y
reticencias, además de que no contaba con técnicas en su investigación, además de que en todo
momento se influencio y proporciono información sugestiva de culpabilidad de los sentenciados, lo
cual es el motivo del error y falta imputación pues lejos de investigar, además de procurar que los
datos aportados por la victima sean coincidentes con los datos de identificación de los
SENTENCIADOS, pues se contaba con el tiempo para poder realizar un estudio en donde pudiera
obtener los datos de identificación de los sentenciados y con ello discernir si se ajustan a la sospecha
de que se tratan de los mismos y no así basado en intuiciones y circunstancias materia de otro delito
y juicio, forzar una confrontación y aun así proporciona los medios de identificación de los
sentenciados a la victima para que lleve a cabo el reconocimiento con un claro error en su recuero
el cual ya se ve influenciado por parte de la autoridad ministerial.

Por cuanto hace al elemento de nombre LUIS


EDUARDO MARTIENZ SANTIAGO, elemento de
investigación de la fiscalía general de justicia del
estado de México, el cual por ser un servidor
público se encuentra dotado de seguridad y
certeza jurídica salvo prueba en contrario, lo he
no fue así al no ofrecerse prueba nueva o de
refutación en sus manifestaciones además que
se ilícita y totalmente eficaz al haberse
desahogado respetándose las formalidades
esenciales del procedimiento, sin pasar por alto
que fue debidamente protestado en términos de
ley.

En lo medular de su intervención de fecha dos de


octubre del año en curso a cuestionamientos de
las partes detalló que fue el quien precisamente
mantuvo contacto con el paciente del delito y le
entero que había personas detenidas por un
robo a casa habitación por lo que lo invito a Commented [el1]: Diligencia cargada de sugestividad y
comparecer en sede judicial y al tener a la vista afirmación de la policía de investigación que le proporciono
a la victima antes de la diligencia información respecto a la
a los acusados los reconoció directamente como
identidad de los acusados.
dos de los tres sujetos que participaran en los Hace mención corroboración
presente hechos Pero no permite combatirlo por que no es una prueba pero
si sirve como indicio o corroboración
Siendo el caso que como el motivo del presente agravio, es una plus petito por parte de la fiscalía la
Y se da por hecho el aseguramiento de dos personas como
introducción e invocación de la información que proviene de esta prueba, pues como se aprecia si fuera un hecho y no se conserva la presunción de
conoce y evoca recuerdos de una diligencia que como se dijo no desfilo en juicio y que no puede ser inocencia respecto a dicho asunto
utilizada ni invocada por las partes, ni en beneficio ni en perjuicio de cualquiera de las partes, por
lo que se entiende que al ser hechos materia que requiere comprobación específica, y más aún que
no se puede valorar este testigo sin que se verifique con otras pruebas la veracidad y legalidad de
la diligencia que al ser de fase de investigación no puede ser utilizada y por tanto también este
testigo debe ser excluido.

Es decir no le consta los hechos materia de la


controversia, pero si interviene en la fase de
investigación como elemento en activo de la
fiscalía general de justicia del estado de México,
para dar con los responsables del presente
asunto, y es el caso que fue el paciente del delito
quien reconociera a los acusados como quienes
intervinieran en el presente asunto lo que viene
a soportar las manifestaciones del pasivo y de los
primeros respondientes en el sentido que los
acusados estaban detenidos por robo a casa
habitación el día cinco de noviembre del año dos
mil diecisiete y se pronunció en torno al lugar de
los hechos lo que se concatena con las
manifestaciones del paciente del delito, en la
colonia las Américas en Naucalpan de Juárez,
estado de México

De su declaración no se puede dar por hecho un reconocimiento de persona, pues aun y cuando
haya estado en presencia de dicha diligencia su declaración no es idónea ni suficiente, pues si bien
estuvo presente y fue quien llamo a la victima para el reconocimiento, lo cierto es que el no
constituye un elemento esencial o de validez para la diligencia de la cual quiere dar cuenta y prueba
de su realización y su resultado, pues como se dijo su dicho y recuerdo en nada comprueban que
dicha diligencia se haya llevado a cabo, que se haya llevado a cabo conforme a la ley.

Fue materia de contra interrogarlo por parte de


la defensa particular, pero fue infructuoso para
desvirtuar sus manifestaciones, es por ello que
con fundamento en los artículos 359 y 402 del
código nacional de procedimientos penales se le
concede valor probatorio de indicio para
concatenar que fue en sede judicial que los
acusados fueron reconocidos por el paciente del
delito como las personas que le hurtaran la
unidad vehicular materia de los presentes
hechos. Resultandos aplicables en este
apartado los siguientes criterios federales

Si bien la materia del contrainterrogatorio no se desdijo o contradijo, y como se dijo no se requería,


pues dejo claro que con su ateste no es suficiente para tener por probado una diligencia que ni
desfilo ni es materia de valoración, y lejos de ello afirmo que antes de que se realizara la diligencia
y al momento de comunicarse con la victima le proporciono las características físicas de los
SENTENCIADOS lo que evidencio claramente la contaminación y sugestivita de responsabilidad que
le impuso dicho elementos de la policía de investigación al recuerdo de la víctima.

Por lo que las consideraciones para su valoración carecen de legalidad y certeza jurídica.

Lo anterior se corrobora con las tesis de jurisprudencia por reiteración, con los siguientes rubros:
“Época: Décima Época

Registro: 2009005

Instancia: Primera Sala

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación

Libro 18, mayo de 2015, Tomo I

Materia(s): Constitucional, Penal

Tesis: 1a./J. 26/2015 (10a.)

Página: 240

DEFENSA ADECUADA EN MATERIA PENAL. LA FORMA DE


GARANTIZAR EL EJERCICIO EFICAZ DE ESTE DERECHO
HUMANO SE ACTUALIZA CUANDO EL IMPUTADO, EN TODAS
LAS ETAPAS PROCEDIMENTALES EN LAS QUE INTERVIENE,
CUENTA CON LA ASISTENCIA JURÍDICA DE UN DEFENSOR QUE
ES PROFESIONISTA EN DERECHO.

Conforme al parámetro de control de regularidad


constitucional, que deriva de la reforma al artículo 1o. de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,
publicada en el Diario Oficial de la Federación el 10 de junio
de 2011, que se configura por la observancia y aplicación de
las normas constitucionales y de fuente internacional en
materia de derechos humanos, así como la directriz de
interpretación pro persona; el artículo 20, apartado A,
fracción IX, del referido ordenamiento constitucional, texto
anterior a la reforma publicada en el Diario Oficial de la
Federación el 18 de junio de 2008, debe interpretarse
armónicamente con los numerales 8.2, incisos d) y e), de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos, y 14.3,
incisos b) y d), del Pacto Internacional de los Derechos Civiles
y Políticos, así como el criterio contenido en la tesis aislada P.
XII/2014 (10a.) (*), emitida por el Tribunal Pleno de esta
Suprema Corte de Justicia de la Nación, de rubro: "DEFENSA
ADECUADA DEL INCULPADO EN UN PROCESO PENAL. SE
GARANTIZA CUANDO LA PROPORCIONA UNA PERSONA CON
CONOCIMIENTOS TÉCNICOS EN DERECHO, SUFICIENTES
PARA ACTUAR DILIGENTEMENTE CON EL FIN DE PROTEGER
LAS GARANTÍAS PROCESALES DEL ACUSADO Y EVITAR QUE
SUS DERECHOS SE VEAN LESIONADOS.", y la propia doctrina
de interpretación constitucional generada por esta Primera
Sala. Lo anterior, para establecer que el ejercicio eficaz y
forma de garantizar el derecho humano de defensa adecuada
en materia penal implica que el imputado (lato sensu), a fin
de garantizar que cuente con una defensa técnica adecuada,
debe ser asistido jurídicamente, en todas las etapas
procedimentales en las que intervenga, por un defensor que
tenga el carácter de profesional en derecho (abogado
particular o defensor público); incluso, de ser posible, desde
el momento en que acontezca su detención. La exigencia de
una defensa técnica encuentra justificación al requerirse de
una persona que tenga la capacidad técnica para asesorar y
apreciar lo que jurídicamente es conveniente para el
imputado, a fin de otorgar una real y efectiva asistencia legal
que le permita estar posibilidad de hacer frente a la
imputación formulada en su contra. Lo cual no se satisface si
la asistencia es proporcionada por cualquier otra persona que
no reúna la citada característica, a pesar de ser de la
confianza del referido imputado.

Amparo directo en revisión 1519/2013. 26 de junio de 2013.


Mayoría de cuatro votos de los ministros Arturo Zaldívar Lelo
de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz
Mena y Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Disidente:
Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló voto particular.
Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretario: Julio Veredón
Sena Velázquez.

Amparo directo en revisión 1520/2013. 26 de junio de 2013.


Mayoría de cuatro votos de los ministros Arturo Zaldívar Lelo
de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz
Mena y Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Disidente:
Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló voto particular.
Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Carmina
Cortés Rodríguez.

Amparo directo en revisión 2809/2012. 28 de agosto de 2013.


Mayoría de cuatro votos de los ministros Arturo Zaldívar Lelo
de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz
Mena y Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Disidente:
Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló voto particular.
Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Secretario: José
Alberto Mosqueda Velázquez.

Amparo directo en revisión 449/2012. 28 de agosto de 2013.


Mayoría de cuatro votos de los ministros Arturo Zaldívar Lelo
de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, quien formuló voto
concurrente, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y Olga Sánchez
Cordero de García Villegas. Disidente: Jorge Mario Pardo
Rebolledo, quien formuló voto particular. Ponente: Jorge
Mario Pardo Rebolledo. Secretario: José Díaz de León Cruz.

Amparo directo en revisión 3535/2012. 28 de agosto de 2013.


Mayoría de cuatro votos de los ministros Arturo Zaldívar Lelo
de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz
Mena y Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Disidente:
Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló voto particular.
Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Carmina
Cortés Rodríguez.

Tesis de jurisprudencia 26/2015 (10a.). Aprobada por la


Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha quince
de abril de dos mil quince.

________________

Nota: (*) La tesis aislada P. XII/2014 (10a.) citada, aparece


publicada en el Semanario Judicial de la Federación del
viernes 11 de abril de 2014 a las 10:09 horas y en la Gaceta
del Semanario Judicial de la Federación, Décima Época, Libro
5, Tomo I, abril de 2014, página 413.

Esta tesis se publicó el viernes 08 de mayo de 2015 a las 09:30


horas en el Semanario Judicial de la Federación y, por ende,
se considera de aplicación obligatoria a partir del lunes 11 de
mayo de 2015, para los efectos previstos en el punto séptimo
del Acuerdo General Plenario 19/2013.

“Época: Décima Época


Registro: 2008371

Instancia: Primera Sala

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación

Libro 15, febrero de 2015, Tomo II

Materia(s): Constitucional, Penal

Tesis: 1a./J. 6/2015 (10a.)

Página: 1253

RECONOCIMIENTO O IDENTIFICACIÓN DEL IMPUTADO DE


MANERA PRESENCIAL EN EL PROCEDIMIENTO PENAL. LA
AUSENCIA DEL DEFENSOR GENERA COMO CONSECUENCIA LA
INVALIDEZ DE LAS DILIGENCIAS RESPECTIVAS.

Esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación


ha sostenido que en todas las actuaciones, diligencias y
etapas del procedimiento penal en que participe directa y
físicamente la persona imputada en la comisión de un delito,
como podría ser la diligencia de reconocimiento a través de
la Cámara de Gesell, se requerirá también la presencia y
asistencia efectiva de su defensor para asegurar que formal y
materialmente se cumplan los requisitos legales en su
desarrollo, así como la salvaguarda de los derechos de
defensa adecuada, debido proceso legal y obtención lícita de
la prueba. Ello es así, conforme a la propia naturaleza del
medio de prueba, el indicio que pudiera derivarse y sus
implicaciones para la persona imputada penalmente. Por
tanto, el incumplimiento de lo anterior, esto es, la ausencia
del defensor en cualquier actuación, diligencia y etapa del
procedimiento que requiera de la participación física y directa
del imputado, traerá por consecuencia que deba declararse
la nulidad de la identificación en que la persona imputada no
estuvo asistida por su defensor, lo mismo que las
subsecuentes que derivaron de ello, ante la ilicitud
primigenia de la prueba de origen.
Amparo directo en revisión 151/2014. 28 de mayo de 2014.
Mayoría de cuatro votos de los ministros Arturo Zaldívar Lelo
de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez Ortiz
Mena y Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Disidente:
Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Alfredo Gutiérrez
Ortiz Mena. Secretario: José Alberto Mosqueda Velázquez.

Amparo directo en revisión 341/2014. 11 de junio de 2014.


Unanimidad de cuatro votos de los ministros Arturo Zaldívar
Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo Gutiérrez
Ortiz Mena y Olga Sánchez Cordero de García Villegas.
Ausente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Olga
Sánchez Cordero de García Villegas. Secretaria: Ana Carolina
Cienfuegos Posada.

Amparo directo en revisión 2391/2014. 10 de septiembre de


2014. Mayoría de cuatro votos de los ministros Arturo
Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena y Olga Sánchez Cordero de García
Villegas. Disidente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente:
Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Secretario: José Alberto
Mosqueda Velázquez.

Amparo directo en revisión 2399/2014. 24 de septiembre de


2014. Unanimidad de cinco votos de los ministros Arturo
Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas, quien reservó su derecho para formular voto
concurrente, y Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló
voto concurrente. Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo.
Secretaria: Nínive Ileana Penagos Robles.

Amparo directo en revisión 2157/2014. 24 de septiembre de


2014. Unanimidad de cinco votos de los ministros Arturo
Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena, Olga Sánchez Cordero de García
Villegas y Jorge Mario Pardo Rebolledo. Ponente: Alfredo
Gutiérrez Ortiz Mena. Secretario: José Alberto Mosqueda
Velázquez.
Tesis de jurisprudencia 6/2015 (10a.). Aprobada por la
Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada de
veintiuno de enero de dos mil quince.

Esta tesis se publicó el viernes 06 de febrero de 2015 a las


09:00 horas en el Semanario Judicial de la Federación y, por
ende, se considera de aplicación obligatoria a partir del lunes
09 de febrero de 2015, para los efectos previstos en el punto
séptimo del Acuerdo General Plenario 19/2013.

Siendo lo anterior la materia por la cual en el AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 7464/2016. MINISTRA
PONENTE: NORMA LUCÍA PIÑA HERNÁNDEZ. SECRETARIO: ADRIÁN GONZÁLEZ UTUSÁSTEGUI.
Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, 1 Jurisprudencia P./J 53/2014 (10ª.),
publicada en la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Décima Época, Pleno, Libro 12,
noviembre de 2014, Tomo I, Página 61. Se puede apreciar como ese órgano concluye que no fue
del todo correcta la interpretación efectuada por el Tribunal Colegiado de Circuito al derecho de
adecuada defensa, así como sus consecuencias en cuanto a la exclusión de las pruebas obtenidas
en contravención a ese derecho, en tanto que con sus consideraciones estableció que el único
alcance de su violación sería descartar el reconocimiento del quejoso ante el Ministerio Público al
no haber sido asistido de su defensor licenciado en derecho, sin considerar que como vía de
reparación del derecho humano vulnerado no sólo comprende la nulidad de la identificación en que
la persona imputada no estuvo asistida por su defensor, sino también las subsecuentes que
derivaron de ello, ante la ilicitud primigenia de la prueba de origen.

De ahí que a partir de esa consistente DOCTRINA CONSTITUCIONAL establecida por esta Primera
Sala, en relación con el derecho humano en comento y la reparación idónea ante su violación, el
Tribunal Colegiado de Circuito debió verificar la referencia en subsecuentes diligencias y
declaraciones respecto del reconocimiento del quejoso ante el Ministerio Público declarado ilegal,
y de esa forma también excluir tales referencias o porciones de declaraciones en que se hiciera
alusión al aludido reconocimiento7.

Aplicando los criterios adoptados son que si bien se excluye en tal caso la prueba en si por tener
vicios propios como los apuntados, en caso de duda respecto a que se violento el derecho a la
defensa adecuada por parte de un abogado de nuestra elección, queremos llamar la atención de

7
AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 7464/2016. MINISTRA PONENTE: NORMA LUCÍA PIÑA HERNÁNDEZ.
SECRETARIO: ADRIÁN GONZÁLEZ UTUSÁSTEGUI. Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, 1
Jurisprudencia P./J 53/2014 (10ª.), publicada en la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Décima
Época, Pleno, Libro 12, Noviembre de 2014, Tomo I, Página 61
los que hoy revisan el presente caso, para PEDIRLES, que si bien pudiera afirmarse como lo hizo el
Juez del Tribunal de Enjuiciamiento, que no se puede estudiar la violación al derecho de defensa
propuesto en los términos apuntados, toda vez que la Inmediación se vería comprometida, pues
como se dijo son hechos relacionados con investigaciones Ministeriales no revisables, sin embargo
lo que sí podría operar bajo los mismos efectos y fines es que si bien no se puede estudiar las
diligencias del pasado no traídas a juicio, no menos cierto es que su valoración positiva da el mismo
efecto y resultado, pues por ser una diligencia fuera de la jurisdicción del órgano sentenciador,
entonces bajo esa misma razón es procedente la petición de LA REPARACION IDONEA SERIA LA
EXCLUSION DE LAS REFERENCIAS SUBSECUENTES O PORCIONES DE DECLARACION EN QUE SE
HICIERA ALUSION AL ALUDIDO RECONOCIMIENTO.

Pues basta con decir que cabe la misma razón que el juez de enjuiciamiento emplea para el
impedimento para el análisis y estudio de la validez y alcances de la diligencia de confrontación que
se tilda de inconstitucional, que es que no conforma material valorable desfilado en juicio, para
pedir en reparación a dicha violación este Tribunal de Alzada reconozca el Derecho con que cuentan
los Acusados de nos ser juzgados con DILIGENCIAS QUE NO SE DESAHOGARON EN JUICIO y se
excluyan las porciones y referencias a las mismas.

Tal es el caso, por lo menos, de la SUPUESTA IMPUTACION FIRME Y DIRECTA QUE REALIZA LA
VICTIMA DEL DELITO EN JUICIO, en la que se dijo que reconocía a los Sentenciados como los mismos
que reconoció al momento del reconocimiento de personas en el Ministerio Publico y que son los
mismos que cometieron el latrocinio, proporcionando solo los nombres de uno de los Sentenciados
y del otro solo afirmo su reconocimiento, insistiendo ya en Juicio el primer sujeto que lo interceptara
tenía cabello rizado, aun percibiendo esta circunstancia a pesar de que el cabello del sujeto que lo
robo era corto, que el segundo sujeto que lo abordo en el latrocinio era más alto que él y que
confirmaba su entrevista en donde había manifestado una estatura aproximada de su agresor de
1.74 centímetros, siendo que dichas declaración El Juez utiliza para emitir la sentencia de condena
tomando en su integridad sin estudio de verificación y validez.

No se soslaya como se dijo que el Juez del Tribunal de Enjuiciamiento a pesar de hacer valer las
diferencias que se encuentran con tal notoriedad entre los distractores y los Sentenciados con ayuda
de la pericial en Identificación Humana y la ficha de identificación del Centro Carcelario, al momento
de la diligencia de confrontación, que no se contó con abogado conocido a través de las
declaraciones de los Sentenciados, y que la declaración de la victima proporciona datos de
identificación que no pueden ser aptos para la identificación de una persona, y que se haya tomado
en cuenta, pues puede pensarse que es una fuente independiente o se trata de cualquier facultad
del estado para excepcionar la exclusión probatoria aludida porque la VICTIMA COMPARECIO EN
JUICIO Y AHÍ RECONOCIO DIRECTAMENTE A LOS ACUSADOS.

Y señala al sujeto uno como MARCO ANTONIO


LUCIO CERRILLO al número dos ARMANDO
SEGURA CONTRERAS y el tercer sujeto es el de
identidad desconocida, lo que desde luego
genera mayor certeza y confianza en sus
disposiciones y si bien es cierto que la defensa
particular ejerció su derecho a contra interrogar
al paciente del delito, este ejercicio fue
infructuoso dado que se sostuvo en sus
imputaciones en contra de los justiciables y en
ese efecto no se aportó medio de prueba
tendiente a evidenciar animadversión contra de
los acusados por parte del paciente del delito, lo
que finalmente fortalece sus argumentaciones.

En tal virtud y una vez que este tribunal de


enjuiciamiento ha valorado las probanzas de
mérito, con fundamento en los artículos 356,
357, 359, 402 del código nacional de
procedimientos penales, se le concede de
acuerdo a las reglas de valoración libre y lógica,
el de pleno valor probatorio, en atención a que
se ubica en circunstancias de tiempo, modo y
lugar, además de que es firme, clara y
categórica en cuanto al señalamiento que realiza
en contra de los señores acusado como dos de los
sujetos que le desapoderan mediante actos
violentos la unidad vehicular, sin que se advierta
algún animo espurio en canto a querer
perjudicar los intereses de los señores acusados,
sino más bien, el de comparecer ante este
órgano jurisdiccional a expresar de manera oral
y directa lo que aconteció el día veintinueve de
octubre del año dos mil diecisiete.8

Se pudo decir lo anterior, debido a que se podría pensar que la diligencia de confrontación en nada
influye en el recuerdo de la víctima pues son fuentes independientes del conocimiento, sin embargo
el Juez al determinar los motivos de la valoración de la prueba, se deben dejar claros los impulsos
motivadores, así como la espontaneidad e independencia de los testigos, en el sentido de que
como se afirma con ayuda de la diligencia de confrontación ya no fue EXPONTANEO E
INDEPENDIENTE el relato vertido por la víctima.

Pues del recuerdo del evento no se puede desprender el nombre de sus agresores y se puede
apreciar una descripción de los sujetos que lo robaron distinta a la realidad de los aspectos físicos
de los SENTENCIADOS.

8
idem
Sin embargo después de realizada la diligencia de confrontación obtuvo como información EL
NOMBRE DEL ACUSADO MARCO ANTONIO, que supo que los dos sujetos a los cuales reconocía
llevaban con ellos su vehículo el cual lo utilizaron para robar al interior de una casa habitación y que
durante su detención se les encontró aun los objetos robados y como se dijo al haber participado
en dicha diligencia después de cometido el delito, es que se afirma que tuvo tiempo y condiciones
adecuadas para fijar un buen recuerdo de los Sentenciados, el cual borro y cimento el recuerdo
vago y aproximado que tenia del evento delictivo y de los VERDADEROS PERPETUADORES, ello en
contravención de los sentenciados, ya que si no se trajo a juicio la diligencia de confrontación y no
fue permitido su análisis y estudio para su posible exclusión, si se pueden apreciar sus efectos,
como lo es la referencia más vivida y próxima que tuvo con los SENTENCIADOS al momento de su
detención por otros hechos los cuales no son materia de la litis INDUCIENDO A CREER QUE A PESAR
DE LAS DIFERENCIAS FISICAS DE SU PRIMER RELATO CON LOS HOY SENTENCIADOS SE TRATABAN DE
LAS MISMAS PERSONAS.

Sirviendo como base el siguiente criterio Jurisprudencial, que si bien es una tesis aislada, se trata
de un criterio sostenido por un Tribunal Federal y que tiene aplicabilidad con la presente petición
de apelación, pues como se dijo si bien se está cuestionando la valoración de una prueba de cargo,
lo es por que se considera que la probanza misma violenta el principio de INMEDIACION, pues el
Juez toma como fuente de conocimiento la declaración de la víctima, como si se tratara de una
evocación independiente con la realidad vivida, aun y cuando frente al juez refirió haber vivido una
diligencia de confrontación y la describió, permitiendo el Juez la introducción de dicho material y
referencias del pasado y después hasta utilizo para fundar su decisión, dando por probados hechos
que no son materia del juicio y que aun mas como lo dice en su sentencia son hechos o
circunstancias que derivan de un mero dato de prueba no desahogado en juicio, por lo que si bien
realiza una IMPUTACION FIRME Y DIRECTA, lo fue en contra de las personas presentadas como
responsables de un robo a casa habitación, en donde fue utilizada la unidad de la víctima, en donde
llevaban los objetos robados y que además le habían cambiado sus placas de circulación.
Referencias que por si constituyen material digno de producir sugestivita de culpabilidad hacia la
víctima, quien en Juicio solo realizo el reflejo de su aleccionamiento, pues a pesar de que en su
primer recuerdo las personas tengas características físicas notablemente diferentes, la victima
imputa el delito de las personas sabe fueron detenidas con las manos en la masa y en plena posesión
de su vehículo, por lo que no le deja dudas de que son los mismos que le cometieron en su persona
el robo de su patrimonio con violencia.

Época: Novena Época

Registro: 174201

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta


Tomo XXIV, septiembre de 2006

Materia(s): Penal

Tesis: II.2o.P.204 P

Página: 1518

PRUEBA TESTIMONIAL EN MATERIA PENAL. EL JUZGADOR, AL


VALORAR UN TESTIMONIO, DEBE ATENDER A LOS ASPECTOS
PARTICULARES Y LOS "IMPULSOS MOTIVADORES" O A LA
ESPONTANEIDAD E INDEPENDENCIA DEL TESTIFICANTE.

Se considera como característica de la prueba testimonial


dentro del proceso penal, el que sea una expresión narrativa,
es decir, que no puede reducirse a una simple exposición de
respuestas (sí o no). Al testigo le es exigible, no una
exposición cualquiera (que pudiera incluso vincularse con
aspectos imaginarios), sino una narración que evoque lo que
la persona ha percibido o captado, es decir, una narración de
tipo histórico, con el fin de lograr la constatación de las
cuestiones relativas a: "dónde", "cómo", "cuándo", "quién",
etcétera, cumpliéndose así el objeto de la prueba testimonial,
que no es sólo el de permitir una simple información, sino la
posibilidad de la construcción intelectual del hecho
constatado por el testigo, es decir, el acto comprendido y
captado en la mente del declarante. Derivado de lo anterior,
la narración de tipo testimonial se representa como una
"reactualización" de la experiencia vivida por el testigo, esto
es, una exteriorización de la representación mental del
testificante, de la experiencia vivida por él, de modo que
resulta un mediador del pasado (hecho) y el presente o futuro
socialmente relevante en cuanto al proceso al que dicha
narración se incorpora. Lo anterior es denominado por la
doctrina como "reproducción nemónica" de la experiencia
vivida empíricamente, de donde se sigue la naturaleza
"histórico-crítica" en donde de manera inherente participa el
testimonio, de tal suerte que la realidad captada acaba por
manifestarse como "realidad interpretada". Por ello, el
testimonio debe entenderse también como un acto que no se
separa de la naturaleza humana (actos humanos) y, por ende,
el centro de atención es, sin duda, la persona del testigo, pero
ese reconocimiento no debe conducir a la simplista
resignación de que el testimonio es un hecho personal, y
pretender cerrar los ojos a lo que pueda hallarse debajo de
ese juicio personal del sujeto, pues ello no resulta moral, ni
legalmente válido, por el contrario, el reconocimiento sobre
la imposibilidad de dividir, prima facie, la realidad de la
construcción crítica del testigo, conlleva a la obligación del
juzgador, en el plano de la valoración, a respetar la exigencia
de atender los aspectos particulares del sujeto y los "impulsos
motivadores" o la espontaneidad e independencia del
testificante, tal como lo establecen los artículos 246, párrafo
primero, 247, párrafo primero, 248, 249, párrafo primero y,
especialmente, en las fracciones I, II, III y V del artículo 289,
todos del Código Federal de Procedimientos Penales,
disposiciones legislativas que, precisamente, como medidas
de seguridad en cuanto a las reglas de valoración del
testimonio y reconociendo los aspectos de la naturaleza
humana remiten a la obligada atención de la persona del
testigo, ello con el fin de establecer, en lo posible, el hallazgo
de un verdadero testimonio del hecho frente a la irrelevancia
de un juicio personal de quien diciéndose testigo no pasa de
ser un simple "portador" o "relator" de sus propias conjeturas
o de lo que otras personas le indujeron a creer.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL


SEGUNDO CIRCUITO.

Amparo directo 306/2004. 9 de junio de 2005. Unanimidad


de votos. Ponente: José Nieves Luna Castro. Secretaria: Alma
Janina Córdoba Díaz.

Entonces ubicando la diligencia en el proceso cognitivo, se aprecia la pertinencia de los argumentos


esgrimidos, pues como se dijo en el proceso de aprendizaje del hecho delictuoso por parte de la
victima en dicha diligencia adquirido el nombre completo de los Justiciables, pues antes y de la
dinámica de los hechos no pudo tener conocimiento de la misma, además de que tuvo a la vista a
los Justiciables en mayor tiempo que en su primer contacto con los mismos, de igual forma se le
proporciono la media filiación de estos sujetos y se le permitió tenerlo a la vista en condiciones
distintas al latrocinio y con una mejor posición para su almacenamiento en la memoria, ya que al
cometerse el latrocinio se encontraban los sujetos activos del delito con vestimentas distintas que
procuraban una menor visibilidad de sus rostros, de igual forma que fue de noche el evento y las
condiciones de luminosidad no son las mismas y durante la diligencia los acusados y los distractores
contaban todos con una camiseta de manga corta de color blanco y pantalón de mezclilla, además
de que no contaban con vestimenta alguna que cubriera la cabeza, y que en la cámara de
confrontación por su propia naturaleza y fin permite tener a la vista a las personas y obtener un
recuerdo con mas detenimiento y es por ello que orilla a la victima a obtener una identificación
distinta a la realidad. Siendo aplicable el siguiente criterio jurisprudencial que da luz sobre el
concepto de memoria y su proceso, del cual se aprecia que no solo es una narración asadla de
evaluación objetiva y que puede ser apreciada como error en el proceso de memoria el recuerdo de
la diligencia de confrontación que colapsa la imputación de la conducta a los SENTENCIADOS.

Época: Décima Época

Registro: 2014791

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación

Libro 44, Julio de 2017, Tomo II

Materia(s): Penal

Tesis: I.7o.P.82 P (10a.)

Página: 1056

PROCESO DE MEMORIA. HERRAMIENTAS PARA ANALIZARLO


AL VALORAR EL TESTIMONIO DE UNA PERSONA RENDIDO EN
UN JUICIO PENAL.

La doctrina indica que el testigo es un sujeto fuente de


información de relevancia para el proceso, mientras que el
testimonio es un relato de memoria que realiza una persona
sobre los hechos que previamente ha presenciado; de ahí que
el testimonio se basa, fundamentalmente, en la capacidad de
retención con que cada sujeto cuente. Ahora, la memoria no
es una reproducción literal del pasado, sino un proceso
dinámico en constante reelaboración, que puede ser
susceptible de distorsiones e imprecisiones, en virtud del
complejo proceso en que interviene, es decir, el modo como:
I. se ha percibido el hecho; II. se ha conservado en la
memoria; III. es capaz de evocarlo; IV. quiere expresarlo; y, V.
puede expresarlo. Durante este proceso, existen distintas
variables que afectan la exactitud del testimonio, entre las
que destacan: 1. Periféricas al suceso: aquellas que afectan al
proceso de la percepción (por ejemplo, tipo de suceso, nivel
de violencia y tiempo de exposición al hecho); en virtud de la
actualización de esta variable, se interrumpe el proceso
normal que la memoria sigue para almacenar la información,
esto es, se produce una codificación selectiva de la
información, al recordar el tema principal del suceso, pero
afectando los detalles periféricos. 2. Factores del testigo:
ansiedad, edad y expectativas (por ejemplo, algunas personas
perciben con más exactitud los detalles que otras, el primer y
último elemento de la serie se percibe mejor que los
intermedios, los testimonios cualitativos son más precisos
que los cuantitativos). 3. Relacionadas con la evaluación: rol
del testigo, presión de grupo, influencia del método de
entrevista y preparación de declaraciones (sobre el último
punto, tenemos que es el momento en el que el testigo
realiza una introspección en su memoria para lograr
recuperar la información adquirida y, con ello, reconstruir el
suceso). Con base en lo anterior y debido al funcionamiento
de la memoria, las inexactitudes e imprecisiones que puedan
detectarse en las declaraciones de testigos en un juicio penal,
no siempre se deben a que estén faltando a la verdad, sino a
las circunstancias que antecedieron y rodearon la emisión del
testimonio. Para identificar el supuesto en el que nos
encontremos, el juzgador podrá hacer uso de la psicología del
testimonio; disciplina inmersa en la psicología experimental y
cognitiva, que se centra en delimitar dos puntos: i. La
credibilidad de la declaración analizada, entendida como la
correspondencia entre lo sucedido y lo relatado por el
testigo; y, si. La precisión de lo declarado, esto es, la exactitud
entre lo ocurrido y lo que el testigo recuerda. Véase que esta
herramienta facilita al juzgador determinar la calidad de un
testimonio, con base en las premisas objetivas señaladas,
para restar o conceder la credibilidad que, de acuerdo con el
examen indicado, estime pertinente.

SÉPTIMO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL


PRIMER CIRCUITO.

Amparo directo 94/2017. 11 de mayo de 2017. Unanimidad


de votos. Ponente: Ricardo Paredes Calderón. Secretario:
Ramón Eduardo López Saldaña.
Esta tesis se publicó el viernes 14 de julio de 2017 a las 10:21
horas en el Semanario Judicial de la Federación.

Por lo que el hecho de que la declaración de la víctima en el presente asunto, no se trate de una
prueba autónoma o independiente de aquella tildada ilegal, es que se afirma que en realidad que la
declaración e imputación con nombres y señalamiento por reconocimiento de personas directo,
solo se derivó por el efecto reflejo de la diligencia ministerial.

Este efecto reflejo solo se puede apreciar bajo la presunción de inocencia en su vertiente de
estándar probatorio, En este sentido, en el amparo en revisión 349/20125, la Primera Sala de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación identificó tres vertientes de la presunción de inocencia y
analizo la que nos interesa como estándar probatorio o regla de juicio.

En el Amparo en Revisión en mención, se sostuvo que la presunción de inocencia como estándar


probatorio o regla de juicio “puede entenderse como una norma que ordena a los jueces la
absolución de los inculpados cuando durante el proceso no se han aportado pruebas de cargo
suficientes para acreditar la existencia del delito y la responsabilidad de la persona”, de tal manera
que deben “distinguirse dos aspectos implícitos en esta vertiente de la presunción de inocencia: (i)
lo que es el estándar propiamente dicho: las condiciones que tiene que satisfacer la prueba de cargo
para considerar que es suficiente para condenar; y (si) la regla de carga de la prueba, entendida en
este contexto como la norma que establece a cuál de las partes debe perjudicar procesalmente el
hecho de que no se satisfaga el estándar de prueba (border of proof, en la terminología
anglosajona)”, criterio reiterado en varias ocasiones por esta Primera Sala y recogido en la tesis
jurisprudencial de rubro “PRESUNCIÓN DE INOCENCIA COMO ESTÁNDAR DE PRUEBA”9.

En términos similares, la Corte Interamericana de Derechos Humanos sostuvo en el caso Cantoral


Benavides vs. Perú que “[e]l principio de la presunción de inocencia, tal y como se desprende del
artículo 8.2 de la Convención, exige que una persona no pueda ser condenada mientras no exista
prueba plena de su responsabilidad penal.”, de tal suerte que “[s]i obra contra ella prueba
incompleta o insuficiente, no es procedente condenarla, sino absolverla”

Ahora bien, esta Primera Sala se ha ocupado en otras ocasiones de desarrollar el contenido al
derecho a la presunción de inocencia en su vertiente de estándar de prueba, de tal manera que se
ha sostenido de forma reiterada en varios precedentes –amparo directo en revisión 715/201011, el
amparo en revisión 466/201112, el amparo en revisión 349/2012, el amparo directo 78/201213 y el
amparo directo 21/20121410

9
Tesis: 1a./J. 26/2014 consultable en la página 476 de la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación,
Libro 5, Abril de 2014, Tomo I, (10a.), correspondiente a la Décima Época.
10
Registro digital 2009005. Jurisprudencia 1a./J. 26/2015 (10a.), de la Primera Sala de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación, Décima Época, Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Libro 18, Mayo de 2015,
Tomo I, página 240. 3 Registro digital 2008371. Jurisprudencia 1a./J. 6/2015 (10a.), de la Primera Sala de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación, Décima Época, Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Libro
15, Febrero de 2015, Tomo II, página 1253.
Como puede observarse, una de las particularidades del estándar de prueba en materia penal tiene
que ver con que en muchas ocasiones las partes plantean al menos dos versiones total o
parcialmente incompatibles sobre los hechos relevantes para el proceso, las cuales están recogidas
respectivamente en la hipótesis de la acusación y en la hipótesis de la defensa. Al mismo tiempo, en
el material probatorio pueden coexistir tanto pruebas de cargo como pruebas de descargo. Sobre
este tema, cabe aclarar que no sólo deben considerarse pruebas de descargo aquéllas que apoyan
directamente la hipótesis de la defensa, sino también cualquier medio probatorio que tenga como
finalidad cuestionar la credibilidad de las pruebas de cargo o más ampliamente poner en duda
algún aspecto de la hipótesis de la acusación, COMO ES EL CASO la imputación como responsables
del delito derivado de una contaminación en la rueda de personas. En este sentido, es importante
destacar que los jueces ordinarios tienen la obligación de valorar todas las pruebas de descargo para
no vulnerar la presunción de inocencia de la que goza todo imputado.

Por ello es que consideramos que es aplicable lo previsto por el numeral 487 en su parte in fine al
manifestar que:

Articulo 487 del Código Nacional de Procedimientos Penales. -último párrafo: La sola causación del
resultado no podrá fundamentar, por si sola, la responsabilidad penal.

Ya que por el hecho de que haya existido el desapoderamiento de un bien mueble de la víctima, sin
tener por cierto el modo de su ejecución, es que se da por hecho la intervención y responsabilidad
de los SENTENCIADOS, pues la declaración de la victima solo puede dar cuenta del hecho delictuoso
y de la intervención de personas que no coinciden con los rasgos de identificación de los quejosos.
Sin que la autoridad investigadora aportara mayores medios de prueba que demuestre el vinculo
que une la conducta típica enjuiciada y la identidad de los sentenciados como los mismos que la
llevaron a cabo, pues ante la disparidad en la descripción de los AUTORES DEL DELITO y los
SENTENCIADOS.

Los inconvenientes de considerar que un hecho está probado simplemente a partir de que el juez
adquiera la convicción de que algo ocurrió por la sola comparecencia de la víctima, queda de
manifiesto cuando se constata que en ocasiones los jueces pueden dictar sentencias incluso en
contra de sus propias creencias. Esta situación ocurre, por ejemplo, cuando se tiene una creencia
sobre la culpabilidad del imputado completamente irracional, es decir, contraria a las pruebas
disponibles, o cuando el juez ha formado esa creencia a partir de algún elemento de juicio que no
puede utilizar para tomar su decisión, ya sea porque no fue incorporado al proceso (conocimiento
privado del juez) o porque fue obtenido con vulneración a los derechos fundamentales del
procesado (pruebas ilícitas). De esta manera, un juez penal puede tener la “íntima convicción” de
que el imputado cometió el delito y, sin embargo, estar obligado a absolverlo, porque a la luz de los
elementos probatorios aportados al proceso no está probado el haya cometido el delito. En estos
casos, la creencia del juez no está en la base de aquello que se considera probado o no probado.

Por ello es que toda porción narrativa sobre hechos no ocurridos el día veintinueve de octubre del
año dos mil diecisiete, esto es durante el inter crimines, no debe aparecer y menos como motivo o
sustento de valoración de prueba o de culpabilidad pues en el presente caso como se ha expuesto
el Juez al igual que la victima han creado la creencia de culpabilidad, a partir de la diligencia de
confrontación de fecha cinco de noviembre del año dos mil diecisiete, lo cual no debe el Juez tomar
en consideración por que no fue incorporado al Juicio, y por ello no se cumple con la inmediación
de dichas circunstancias tanto de tiempo, lugar y modo en que fueron detenidos los Sentenciados
ante una supuesta flagrancia y su reconocimiento, así como sus consecuencias en el futuro del
procedimiento y por tanto exigirle a la fiscalía aportara mayores elementos que sustente la
imputación y no así dar por hecho circunstancias que no fueron probadas, ni que fueron materia
de juicio, Verbigracia de ello EL DELITO DE ROBO A INTERIOR DE CASA HABITACION, siendo la
conducta-típica, antijuridica y culpable materia de otro juicio.

Época: Novena Época

Registro: 174200

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Tomo XXIV, septiembre de 2006

Materia(s): Penal

Tesis: II.2o.P.208 P

Página: 1520

PRUEBA TESTIMONIAL EN MATERIA PENAL. REQUISITOS DE


EFICACIA Y VALIDEZ EN LA COMUNICACIÓN O TRANSMISIÓN
DEL TESTIMONIO.

La eficacia o validez de un testimonio no depende únicamente


del conocimiento histórico, original y directo respecto del
hecho, sino también de las circunstancias relativas al acto
mismo de comunicar o transmitir ese testimonio, es decir, de
la declaración en sí. Para ello puede precisarse que, en el
ámbito del proceso penal racional, la declaración testimonial
tiene que ser expresa, por lo que, no es dable pretender
obtener inferencias de una connotación de testimonio tácito,
es decir, no pueden hacerse derivaciones del silencio; la forma
del testimonio expreso debe ser además, salvo casos de
excepción, legalmente regulados, a través del lenguaje
común (escrito o hablado), por ello, es de esperarse que el
testimonio se realice de manera racional, clara e inteligible,
para lo cual existen criterios en cuanto a la necesidad de que
esa expresión sea de viva voz y únicamente ante la autoridad
como sujeto destinatario de la comunicación, es decir, ante el
Juez. Este aspecto está regulado en la fracción IV del artículo
289 del Código Federal de Procedimientos Penales, en la que
se establece: "Para apreciar la declaración de un testigo el
tribunal tendrá en consideración: ... IV. Que la declaración sea
clara y precisa, sin dudas ni reticencias, ya sobre la sustancia
del hecho, ya sobre sus circunstancias esenciales.". También
puede afirmarse que toda expresión testimonial presupone,
como hecho del lenguaje, los aspectos de positividad y
objetividad, entendido el primero como la toma de conciencia
por parte del testigo respecto del acto con el que ha tenido un
contacto directo, y el segundo, como la observación de que la
toma de conciencia respecto del dato adquirido mediante la
facultad, capacidad o instrumentos de pensamiento
reconocidos como válidos socialmente, se traduce por
consecuencia en una percepción considerada como válida
también por los demás. Esta última característica del
testimonio se encuentra regulada en la fracción I del citado
artículo 289 que dice: "I. Que, por su edad, capacidad e
instrucción, tenga el criterio necesario para juzgar del acto.".
Además, el testimonio debe ser una expresión voluntaria y
consciente, pues de lo contrario, se llegaría a separar la
declaración del declarante y a desnaturalizar el acto del
testimonio, el cual resulta inconcebible si carece de una
conexión con el sujeto del cual proviene. Luego, si la
declaración no contiene ese indispensable vínculo con el
aspecto interno del sujeto (conciencia y voluntad), no le puede
entonces ser atribuible como expresión espontánea y libre, lo
cual se traduce en la inexistencia de una verdadera y propia
declaración testimonial; y en el supuesto de que pudiera
hablarse de una ausencia de la voluntad del acto de declarar
o de la conciencia de su contenido, se estaría entonces, ante
un problema de ausencia de veracidad en esa supuesta
declaración. Este requisito se prevé con claridad en la fracción
V del referido artículo 289, la cual señala: "V. Que el testigo
no haya sido obligado por fuerza o miedo, ni impulsado por
engaño, error o soborno. El apremio judicial no se reputará
fuerza."

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL


SEGUNDO CIRCUITO.
Amparo directo 306/2004. 9 de junio de 2005. Unanimidad de
votos. Ponente: José Nieves Luna Castro. Secretaria: Alma
Janina Córdoba Díaz.

De acuerdo con lo anterior, el concepto de “duda” implícito en la in dubio pro reo, debe evitar esa
desconexión entre las creencias del juzgador y la evidencia disponible. Así, la “duda” debe
entenderse como la existencia de incertidumbre racional sobre la verdad de la hipótesis de la
acusación, incertidumbre que no sólo está determinada por el grado de confirmación de esa
hipótesis, sino también eventualmente por el grado de confirmación de la hipótesis de la defensa,
en el supuesto de que existan pruebas de descargo que la apoyen. De esta forma, cuando la
hipótesis de la defensa es total o tendencialmente incompatible con la hipótesis de la acusación, el
hecho de que aquélla se encuentre confirmada por las pruebas disponibles, genera una
incertidumbre racional sobre la verdad de la hipótesis que sustenta el Ministerio Público, lo que se
traduce en la existencia de una duda razonable sobre la culpabilidad del imputado.

Tampoco resulta válido, como ejercicio argumentativo, construir una versión plausible sobre la
verdad y, a partir de ello, llegar a la conclusión de que las normas legales y constitucionales han sido
correctamente aplicadas. La plausibilidad no es suficiente. No pueden aislarse los fragmentos de las
diversas pruebas, elegir lo conducente, para de este modo construir una versión verosímil sobre los
hechos. Para respetar el principio de presunción de inocencia, el juez debe no tener la intención de
construir activamente una versión plausible de los hechos, a fin de fincar responsabilidad a alguien
con el propósito de evitar impunidad, SINO EN UN PLANO DE OBJETIVIDAD argumentar y motivar
correctamente la responsabilidad de los SENTENCIADOS.

Tampoco debe perderse de vista que la “duda razonable” puede presentarse al menos en dos
situaciones relacionadas con la existencia de pruebas de descargo:

(i) cuando las pruebas de descargo confirman la hipótesis de la defensa (ya sea de inocencia o que
simplemente plantee una diferencia de grado con la hipótesis de la acusación) puede surgir una
duda razonable al estar probada una hipótesis total o parcialmente incompatible con la hipótesis
de la acusación;

y (si) también puede surgir una duda razonable cuando las pruebas de descargo cuestionan la
credibilidad o el alcance de las pruebas de cargo que sustentan la hipótesis de la acusación a tal
punto que se genere una incertidumbre racional sobre la verdad de ésta.

Pues como esta defensa ha venido proponiendo, lejos que se diga por los Sentenciados que no se
encontraban en el lugar y momento del latrocinio, han dejado claro sus características físicas con
las que en la realidad componen su persona, de lo cual se dice no puede ser exigido a la víctima el
que conociera con exactitud las medidas y características de sus agresores, sin embargo a quien si
se le debió exigir por si el juez quiso tomar en consideración dichas circunstancias, es que el órgano
investigador y la policía, dejaran fehacientemente comprobado que de la declaración de la victima
y aplicando las técnicas de investigación adecuadas, no dejaran duda sobre la aproximación entre
la referencia dada por la victima y los sujetos investigados en esos momentos, ello para dar garantía
de que se puede sospechar fundadamente que se tratan de las mismas personas y no así forzar la
diligencia con la finalidad de no poner en riesgo una supuesta impunidad.

ELEMENTOS OBJETIVOS

CONDUCTA DE APODERAMIENTO la conducta


precisada se encuentra acreditada con la
testimonial vertida por el denunciante de
nombre HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ, el cual
a preguntas de las partes depuso de manera oral
y directa que fue precisamente el día veintinueve
de octubre del año dos mil diecinueve cuando al
arribar a su domicilio ubicado en CALLE
SEGUNDA DE GUAYAQUIL NUMERO 80,
FRACCIONAMIENTO LAS AMERCIAS EN
CNAULAPAN DE JUAREZ, ESTADO DE MEXICO, A
LAS VEINTE HORAS A BORDO DE LA UNIDAD
vehicular Nissan tipo xTrail modelo 2015 placas
de circulación MSU1333 del estado de México,
en compañía de su menor hija de identidad
resguardada, cuando se le acercan tres sujetos
quienes portando armas de fuego es como lo
desapoderan de la misma empleando para ello
palabras altisonantes y el solamente las pedía
que le dejaran bajar a su hija y consumando el
evento ingresa a su domicilio y comienza a
realizar llamada parar reportar el robo de su
unidad vehicular.11

Pues se dice que ante la violación a los derechos fundamentales, el quejoso tiene como ruta de
defensa el evidenciar las violaciones a las cuales fue sometido por parte de cualquier autoridad, con
ello pues se rompería con la AFIRMACION DE QUE EL APODERAMIENTO POR PARTE DE LOS
SENTENCIADOS ACONTECIO pues se puede afirmar que de no haber existido la DILIGENCIA DE

11
SENTENCIA DEFINITIVA DE PRIMERA INSTANCIA, de fecha DIECISEIS DE OCTUBRE DEL AÑO DOS MIL
DIECIOCHO dictado dentro de la CAUSA PENAL 630/2018, por el Juez del Tribunal De Enjuiciamiento del
Distrito Judicial de TLALNEPANTLA, Estado de México, EN CONTRA DE MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO Y
ARMANDO SEGURA CONTRAS, por el hecho delictuoso de ROBO COMETIDO CON VIOLENCIA RESPECTO DE UN
VEHICULO DE MOTOR, cometido en agravio de HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ
CONFRONTACION en las condiciones en las que se dio, en primer termino aunque no sea materia
de consideración en la apelación, si se debe decir que si fue ponderado y fue el dato de prueba
angular para el obsequio de la orden de aprehensión, en donde como se sabe al darse a conocer la
referencia del medio de prueba inmerso en el dato de prueba es que no se podía analizar su debida
diligenciacion, sin embargo en juicio la fiscalía no tuvo a bien ofrecer como medio de prueba esa
diligencia, por ello debe acarrearle perjuicio en su contra, no en nuestra contra, pues quien se
encuentra obligado a probar que los hechos que evoca la victima son verdad es el ministerio público,
no de forma negativa que los acrediten los suscritos, y si dentro de sus afirmaciones lo era el
recuerdo de aquella diligencia, se espera para que se tengan por ciertos esos hechos, que los
mismos se encuentren corroborados o probados ya con los mismos medios, ya con aquellos
elementos que compusieron dicha diligencia para tener acreditado que la diligencia estuvo bien
diligenciada y con ella confiable de su resultado, y no solo rogar por que la credibilidad de la víctima
y su elocuente evocación del recuerdo errado SUBSANE una diligencia mal hecha, violatoria de
derechos fundamentales.

El paciente del delito al comparecer de manera


personal y directa el día dos de octubre del año
dos mil dieciocho, fue debidamente protesta en
términos de ley e identidad a satisfacción de las
partes procesales motivo por el cual no existe la
menor duda en cuanto a la identidad del
paciente del delito.

Y además se trata de una probanza licita y eficaz


al haberse desahogado respetándose las
formalidades esenciales del procedimiento tan
es así, que fue motivo de ofrecimiento, debate,
depuración y admisión en la etapa intermedia
ante el juez de control de Tlalnepantla, estado de
México, quien incluso manifestó que fue materia
de concesión de medidas de protección por que
la familia de los acusados lo había ido a ver a su
domicilio12

Como se dijo sin discusión alguna toda la información benéfica para la teoría del caso de la fiscalía
es utilizada por el Juez del Tribunal, pues hechos como que tuviera una medida de protección, de la
cual ni la Propia Fiscalía había dado cuenta y de la cual no obra ningún medio probatorio de su
existencia y que aun así es utilizado por el Juez como elemento a considerar para la eficacia y licitud
de la prueba en estudio. Pues que en realidad de trate de la misma persona a quien en fecha
veintinueve de octubre del año dos mil diecisiete, lo desapoderaran de su vehículo con violencia, no
da como resultado natural tener por acreditada la identidad de las personas que intervinieron en el
mismo.

12
idem
Pues queda claro que la victima fue robada por un sujeto de cabello chino corto, y por un sujeto
mas alto que el con una talla aproximada de un metro con setenta y cuatro centímetros y que no se
puede justificar que se trate de las mismas personas, aun en contra del convencimiento del Juez,
pues no existe otro medio de prueba que demuestre que esos sujetos sean los SENTENCIADOS y
que los grados de aproximación sean tan tenues que no sean apreciados. Sirviendo como base de
este razonamiento el siguiente criterio jurisprudencial que por provenir de una autoridad federal
tiene fuerza convictiva, además de que como se ha explicado la razón de defensa ante la violación
por parte de la autoridad de sus derechos de defensa, el forzamiento a la realización de una
diligencia que trajo como consecuencia la contaminación sugestiva de culpabilidad hacia los
acusados que solo podría ser resuelta con otros medios idóneos que demostraran el apoderamiento
y por ende el dominio sobre el hecho y su responsabilidad penal, pues no debe olvidarse que
además se cuenta con la prueba por parte de los SENTENCIADOS, que NO COMPARTEN LOS MISMO
RASGOS IDENTIFICATORIOS LOS SUJETOS QUE PARTICIPAN EN LA CONFRONTA Y SU DESCRIPCION,
ASI COMO LA DESCRIPCION HECHA POR LA VICTIMA, PUES SU DESCRIPCION ESCRITA ES VAGA E
IMPRECISA, INSUFICIENTE PARA UNA IDENTIFICACION POSITIVA Y LAS IMÁGENES FUERON
MANIPULADAS, ello fue obtenido de la técnica denominada SISTEMA ANTROPOMETRICO
BERTILLON, y por lo que se pone como un HECHO PROBADO QUE LOS SUJETOS DE LA DILIGENCIA
DE COFRONTA DE FECHA CINCO DE NOVIEMBRE DEL AÑO DOS MIL DIECISIETE, NO COMPARTEN
TATUAJES, ASI COMO ELEMENTOS MESURATIVOS, FORMALES Y CROMATICOS.

Época: Novena Época

Registro: 202429

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Tomo III, mayo de 1996

Materia(s): Penal

Tesis: XV.1o.11 P

Página: 639

IDENTIDAD DEL INCULPADO. ES NECESARIA CUANDO LOS


TESTIGOS DE CARGO PROPORCIONAN CARACTERISTICAS
DIFERENTES DEL AUTOR DEL DELITO.

Si los testigos de cargo al señalar como autor del delito a


determinada persona se refieren a ésta por su nombre y
proporcionan datos diferentes respecto de sus características
personales, es obvio que ante la negativa del inculpado en la
comisión del delito, uno de los aspectos principales que
deben dilucidarse en el proceso lo constituye precisamente la
identidad del inculpado con la persona que señalaron los
testigos como autor del delito; de tal manera, que si el
Ministerio Público sostiene que el inculpado es la misma
persona a que se refieren los testigos de cargo, de
conformidad con lo dispuesto por el artículo 136 fracción IV
del Código Federal de Procedimientos Penales, corresponde
a dicho representante social allegar al juzgador los medios
idóneos para acreditar la responsabilidad de los inculpados,
en la especie, las relativas a lograr la identificación entre uno
y otro, pues en el proceso penal deben estar perfectamente
identificadas las personas que se relacionan con los hechos
delictivos que en él se investigan, porque dentro del mismo
se requiere saber con certeza, que las actuaciones de la
instancia se refieren precisamente a los sujetos involucrados
en ella y no a otros diferentes, por ello cuando existe
sospecha de que los testigos se refieren o señalan a una
persona sin conocerla plenamente, se hace necesario que la
identifique en lo personal, bien sea ante el Ministerio Público
durante la integración de la averiguación previa o ante el Juez
instructor en el procedimiento, ello para despejar
plenamente las dudas sobre si realmente lo conocen o no, por
ende, ante la falta de esa identificación por parte de los
testigos o de otra prueba apta para establecerla, no puede
tenerse por acreditada plenamente la responsabilidad del
inculpado en la comisión del delito.

PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO DEL DECIMO QUINTO


CIRCUITO.

Amparo directo 58/96. Antonio Solorio Balderas. 14 de marzo


de 1996. Unanimidad de votos. Ponente: Miguel Ángel
Morales Hernández. Secretario: Miguel Avalos Mendoza.

PUES COMO SE SABE A TRAVES DE LOS SENTIDOS Y COMO LO DEJO CLARO LA VICTIMA EL CABELLO
DE SU PRIMER ATACANTE ES RIZADA, llamada por el “CHINA”, ENTENDIENDO EL COMO RIZADO A
UN CABELLO QUE AUN CORTO SE APRECIA LA FIBRA CAPILAR CURVA, LO CUAL NO PUEDE SER
MODIFICADO POR EL IMPUTADO SI QUISIERA OCULTARLO y que se debe entender que un cabello
RIZADO es lo totalmente contrario a un CABELLO LACIO O LISO, por ser EVIDENTE QUE ESE RASGO
TAN DISTINTIVO ENTRE EL SUJETO ACTIVO del delito Y EL SENTENCIADO MARCO ANTONIO LUCIO
CERRILLO que no puede ser superado por una imputación afirmativa sin medio que lo corrobore o
robustezca, pues no se justifica como es que la persona a quien le atribuía el delito de cabello rizado
lo identifica como un sujeto que no lleva ese mismo cabello, lo cual era una seña distintiva e
identificatoria en la investigación, que desaparece en el juicio por lo que por la inducción de la
diligencia de confronta es que realiza la imputación en contra de dicha persona y no así el
reconocimiento del mismo.

Además de que se debe entender que en México el ochenta por ciento de la población es morena,
que además la estatura promedio de las personas es de un metro con sesenta y cuatro centímetros,
y que la estatura de la población mexicana ha crecido diez centímetros a lo largo de su evolución
desde hace cien años, siendo estos mismos diez centímetros que se deben considerar
aproximaciones irracionales de la víctima con la identificación positiva del sujeto dos que lo ataco,
pues en México de ordinario ARMANDO SEGURA CONTRERAS es una persona de estatura promedio,
por lo que en México el hablar de una persona que mide 1.74 cm es hablar en perspectiva con el
común de la gente de una persona alta o de estatura alta aplicando las máximas de la experiencia
CORROBORADO POR ESTADISTICAS DE INEGI y organismos civiles internacionales, pues es la
estatura promedio de personas altas en México, por ello es que no se puede apreciar
epistémicamente o que la victima justificara el porque incrimina el delito a una persona que en la
realidad no pudiera cumplir con una estatura menor, lo cual no puede ser posible, pues el cuerpo
humano no puede cambiar anatómicamente de una semana de tiempo, pues como se aprecia a la
población mexicano fueron suficientes cien años para poder crecer diez centímetros, lo cual no
puede ni aproximarse ni dejarse de velar por parte de la autoridad revisora, como una falta de
precisión en la imputación de la víctima, no superable aun con su comparecencia.

SEGUNDO AGRAVIO.- Causa agravio a los Sentenciados, el Tercer considerando en la porción en


que se inserta y en la forma en que se inserta, respecto a que las consideraciones tomadas en
cuenta para que afirmara que la PRUEBA TESTIMONIAL A CARGO DE LOS ELEMENTOS POLICIACOS,
fuese VALIDA Y EFICAZ, y que corrobora el dicho de la víctima, es que se afirma que el deposado
de dichos elementos captores dan cuenta de hechos materia de otra investigación y juicio, además
de que después de su estudio analítico se aprecia que estos deposados son insuficientes e
inservibles para la valoración alcanzada en la sentencia que se impugna, pues se observara que
respecto a lo que se pretende acreditar solo son meros testigos de referencia de terceras personas,
las cuales no comparecieron a juicio y que por ello la fuente de información original no se conformo
en el juicio y por ello no puede darse por hecho lo acontecido y presenciado por ellos al ser
elementos aislados en el presente juicio, además de que al ser elementos aprehensores de diversos
hechos y juicio, es que se afirma que la utilización de la porción de hecho que conocieron por sus
sentidos rompe con el principio Inmediación, pues el juez no puede dar por hecho o probado
proposiciones fácticas que no son materia de la litis.

Como se aprecia en la transcripción siguiente:


“CONSIDERANDO III. HECHO DELICTUOSO DE
ROBO CON LA MODIFICATIVA AGRAVANTE DE
HABERSE COMETIDO RESPECTO DE UN
VEHICULO AUTOMOTOR CON VIOLENCIA.

Del auto de apertura a juicio oral se advierte que


se recabaron las testimoniales de los elementos
de nombres LUIS JAVIER MENDOZA MARTINEZ Y
HUGO ENRIQUE SOLEDAD PESCADOR elementos
de la comisaría general de la policía municipal de
Naucalpan de Juárez, estado de México, quienes
se vienen a constituir en los primeros
respondientes de diverso delito pero que tiene
relación íntima con el hecho materia de este
asunto, puesto que ambos participan en el
aseguramiento de los acusados pero en relación
a un robo a casa habitación el día cuatro de
noviembre del año dos mil diecisiete.13

Son erradas las consideraciones esgrimidas en el presente párrafo que constituyen las
consideraciones y razones por las cuales a las pruebas desahogadas en juicio les concede el valor
alcanzado, pues como se dijo si bien es cierto LUIS JAVIER MENDOZA MARTINEZ y HUGO ENRIQUE
SOLEDAD PESACADOR, son elementos Policiacos, y que también son los primeros respondientes de
un delito diverso, no es verdad que tengan íntima relación con los hechos, pues de facto es verdad
que el vehículo del cual se realizo su aseguramiento y puesta a disposición, lo cierto es que hasta el
momento en que realizaron la puesta a disposición dichos elementos policiacos desconocían si dicho
vehículo contaba o no con reporte de robo, siendo el VEHICULO NISSAN TIOP XTRAIL, el único
vinculo existente entre dos HECHOS DIVERSOS.

Pues se debe decir que la afirmación gratuita que realiza el Juzgador en la porción de la sentencia
que se analiza, consistente en u inferir del simple deposado de los policías captores, hechos no
transmitidos de forma fidedigna, y solo por referencias que no provenían de los hechos
presenciados y vividos directamente de los policías, por lo que la afirmación de que el
aseguramiento se debió a un ROBO A CASA HABITACION el cuatro de noviembre del año dos mil
diecisiete es errado; Ello debido a que sus atestados de dichas pruebas, se desprende que a dichos
captores NO LES CONSTA EL MOMENTO PREPARATIVO, EJECUTIVO Y CONSUMATIVO del latrocinio
en mención, pues su intervención acaeció UNA VEZ CONSUMADO EL LATROCINIO Y A PETICION DE
PARTE, o como se aprecia en la DOCTRINA CONSTITUCIONAL, por razón fundada y no por la

13
SENTENCIA DEFINITIVA DE PRIMERA INSTANCIA, de fecha DIECISEIS DE OCTUBRE DEL AÑO DOS MIL
DIECIOCHO dictado dentro de la CAUSA PENAL 630/2018, por el Juez del Tribunal De Enjuiciamiento del
Distrito Judicial de TLALNEPANTLA, Estado de México, EN CONTRA DE MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO Y
ARMANDO SEGURA CONTRAS, por el hecho delictuoso de ROBO COMETIDO CON VIOLENCIA RESPECTO DE UN
VEHICULO DE MOTOR, cometido en agravio de HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ
apreciación de la flagrancia natural del ROBO EN COMENTO, pues no se aprecia que haya
presenciado el momento en que llegaron a la casa habitación materia del latrocinio, tampoco
arribaron al lugar del hecho al momento de estarse cometiendo el ROBO AL INTERIOR DE LA CASA
HABITACION, de hecho tampoco ARRIBARON al momento en que subían los objetos ROBADOS a la
camioneta, ni cuando parten del lugar, sino QUE SU CONOCIMIENTO FUE DERIVADO DEL
CONOCIMIENTO VIA RADIO DE UN HECHO DELICTUOSO, y después por REFERENCIA de otra persona
QUE ES UNA SUPUESTA VICTIMA DIVERSA A HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ, de quien no se cuenta
su declaración quien bien pudiera ser la que nos daría respuesta a las interrogantes que se
generarían de los momentos del delito estudiado, pues sería la persona idónea para dar cuenta de
dichas circunstancias necesarias para afirmar de la EXISTENCIA DE UN DELITO QUE NI HA SIDO
JUZGADO Y MUCHO MENOS NO HA SIDO PUESTO A SU JURISDICCION.

Siendo aplicable el siguiente criterio jurisprudencial en el cual se define a este tipo de testigos y que
se aproxima a las consideraciones que se tiene para afirmar que las razones motivadoras de la
autoridad jurisdiccional no pueden ser consideradas componentes de una Sentencia que refleja la
Actividad del Estado inmersa por si de LEGALIDAD Y SEGURIDAD JURIDICA.

Época: Novena Época

Registro: 201067

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Tomo IV, octubre de 1996

Materia(s): Penal

Tesis: VI.2o. J/69

Página: 478

TESTIGO DE OIDAS.

Por testigo de oídas debe entenderse a aquel que no conoce


por sí mismo los hechos sobre los que depone, sino que es
informado de ellos por una tercera persona, en cambio
testigo presencial es aquel que declara respecto de hechos
que percibió, habiendo sido su fuente de información directa
y personal.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEXTO CIRCUITO.

Amparo en revisión 293/90. Ángel Eusebio Camacho o Ángel


Eusebio Osorio. 29 de agosto de 1990. Unanimidad de votos.
Ponente: José Galván Rojas. Secretario: Armando Cortés
Galván.

Amparo en revisión 530/91. José Salvador Somoza Palacios.


22 de noviembre de 1991. Unanimidad de votos. Ponente:
José Galván Rojas. Secretario: Armando Cortés Galván.

Amparo directo 122/92. Filiberto Encarnación Gutiérrez. 7 de


abril de 1992. Unanimidad de votos. Ponente: José Galván
Rojas. Secretario: Armando Cortés Galván.

Amparo directo 456/94. Gonzalo Jiménez Pérez. 15 de marzo


de 1995. Unanimidad de votos. Ponente: María Eugenia
Estela Martínez Cardiel. Secretario: José Luis González
Marañón.

Amparo en revisión 412/96. Efraín Pérez Cuapio. 4 de


septiembre de 1996. Unanimidad de votos. Ponente: Antonio
Meza Alarcón. Secretario: Enrique Bigatos Muñoz.

Y el Juez del Tribunal de Enjuiciamiento toma en consideración solo aspectos personales de los
testigos, sin que realizara un estudio analítico de las mismas, pues da por hecho algo que no
aconteció ante su presencia y que por tanto no puede concedérsele valor probatorio alguno.

Debe decirse que son elementos en activo de


una institución de seguridad pública del
gobierno del estado de México, directamente
del municipio de Naucalpan de Juárez, lo que en
sí mismo genera certeza y seguridad en sus
deposiciones, sin soslayar que ambos fueron
debidamente citados por conducto de su
superior jerárquico y además identificados a
satisfacción de las partes procesales y la
información que fuera obtenida se Decio a los
interrogatorios cruzados de los contendientes,
motivo por el cual son licitas y eficaces.

El hecho de que se confirme que se trata de elementos de seguridad pública, no es suficiente para
concederle certeza y seguridad en sus deposiciones, además de concederle mayor valor que el que
la propia jurisprudencia y doctrina le proporciona a un deposado con las características de los
elementos captores quienes conocen los hechos por inferencia de terceros y no a través de sus
sentidos. Siendo aplicable el siguiente criterio jurisprudencial quien a orientación respecto al valor
probatorio que debió considerarse a dichos deposados por ser solo ELEMENTOS POLICIACOS QUE
PROPORCIONARON UN AUXILIO A UNA CIUDADANA EN CUMPLIMIENTO A SUS FUNCIONES, QUE
LIMITO SU CONOCIMIENTO DEL HECHO POR NO CONSTARLE EL MISMO A LAS REFERENCIAS DE LAS
VICTIMAS.

Si bien es cierto que por cuanto hace al elemento


de Luis Javier Mendoza Martínez detallo que se
trataba de una unidad journey, esta
eventualidad se supera mediante los
señalamientos de HUGO ENRIQUE SOLEDAD
PESCADOR quien aludiera que efectivamente se
aseguró a dos personas siendo precisamente los
señores acusados y que tenían la unidad NISSAN
XTRAIL, es decir aquella que el día veintinueve
de octubre de la misma anualidad de fuera
hurtada al paciente del delito.14

Es Falaz la afirmación de que los SENTENCIADOS TENAN BAJO SU DOMINIO el vehículo objeto
material del delito que se estudia, pues esta afirmación no se soporta del material probatorio que
desfilo en juicio, pues la declaración de dichos oficiales por mucha buena fe que se les conceda,
existen pretensiones que merecen su acreditación autónoma, pues dichas PRUEBAS
TESTIMONIALES no son idóneas y suficientes por tener por hecho más que la petición de auxilio que
una civil le pidió para detener a dos sospechosos de un HECHO DELICTUOSO, sin que ningún dato o
información más allá de dicha información no puede ser derivada de dichas pruebas pues como se
observo en sus declaraciones, lejos de que NO LES CONSTAN LOS HECHOS, que su intervención y
conocimiento de los hechos son por inferencia de otras personas ajenas a este juicio. Siendo
aplicable el siguiente criterio jurisprudencial quien orienta sobre el valor de este tipo de deposados.

Época: Novena Época

Registro: 173487

Instancia: Primera Sala

14
SENTENCIA DEFINITIVA DE PRIMERA INSTANCIA, de fecha DIECISEIS DE OCTUBRE DEL AÑO DOS MIL
DIECIOCHO dictado dentro de la CAUSA PENAL 630/2018, por el Juez del Tribunal De Enjuiciamiento del
Distrito Judicial de TLALNEPANTLA, Estado de México, EN CONTRA DE MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO Y
ARMANDO SEGURA CONTRAS, por el hecho delictuoso de ROBO COMETIDO CON VIOLENCIA RESPECTO DE UN
VEHICULO DE MOTOR, cometido en agravio de HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ
Tipo de Tesis: Jurisprudencia

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Tomo XXV, enero de 2007

Materia(s): Penal

Tesis: 1a./J. 81/2006

Página: 356

PRUEBA TESTIMONIAL EN EL PROCESO PENAL CUANDO LOS


HECHOS SE CONOCEN POR REFERENCIA DE TERCEROS. SU
VALORACIÓN.

El artículo 289 del Código Federal de Procedimientos Penales


establece que para apreciar la prueba testimonial, el juzgador
debe considerar que el testigo: a) tenga el criterio necesario
para juzgar el acto; b) tenga completa imparcialidad; c)
atestigüe respecto a un hecho susceptible de conocerse por
medio de los sentidos, y que lo conozca por sí mismo y no por
inducciones o referencias de otro sujeto; d) efectúe la
declaración de forma clara y precisa, sin dudas ni reticencias
sobre la sustancia del hecho ni sobre las circunstancias
esenciales; y, e) no haya sido obligado por fuerza o miedo, ni
impulsado por engaño, error o soborno. En congruencia con
lo anterior, se concluye que cuando en una declaración
testimonial se aportan datos relevantes para el proceso
penal, unos que son conocidos directa o sensorialmente por
el deponente y otros por referencia de terceros -y que, en
consecuencia, no le constan-, el relato de los primeros, en
caso de cumplir con los demás requisitos legalmente
establecidos, tendrá valor indiciario, y podrá constituir
prueba plena derivado de la valoración del juzgador, cuando
se encuentren reforzados con otros medios de convicción,
mientras que la declaración de los segundos carecerá de
eficacia probatoria, por no satisfacer el requisito referente al
conocimiento directo que prevé el citado numeral.

Contradicción de tesis 133/2005-PS. Entre las sustentadas


por el Segundo Tribunal Colegiado del Sexto Circuito,
actualmente Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Sexto Circuito y el Tribunal Colegiado del Vigésimo Quinto
Circuito. 18 de octubre de 2006. Mayoría de tres votos.
Disidentes: Juan N. Silva Meza y Olga Sánchez Cordero de
García Villegas. Ponente: Sergio A. Valls Hernández.
Secretario: Arnoldo Castellanos Morfín.

Tesis de jurisprudencia 81/2006. Aprobada por la Primera


Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha dieciocho de
octubre de dos mil seis.

TAMPOCO NINGUNO DE LOS DOS AGENTE DE LA POLICIA MUNICIPAL puede dar cuenta de QUIEN
VENIA CONDUCIENDO DICHA UNIDAD VEHICULAR, además de que en todo momento se refirió que
el lugar de la detención de los SENTENCIADOS fue sobre LA CALLE, esto es NO ERA EN POSESION DE
OBJETO ALGUNO.

Es decir, en relación al hecho materia de nuestro


asunto no deponen, pero son claros al asegurar
a dos personas por un robo a casa habitación en
donde estuviera relacionada la camioneta
hurtada al paciente del delito, resultando
verdadero la manifestación del señor
HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ, en tal sentido,
es decir que estaban detenidos por otro delito y
desde ahí los reconoció sin dubitación alguna

Esta porción de la parte considerativa de la sentencia en donde se une la prueba que se analiza, con
la anterior mencionada, es de decirse que como se estudió en apartado anterior el reconocimiento
con el adjetivo de indubitable, es falaz, debido a que como se observo en el agravio anterior esa
diligencia al no pertenecer al mundo probatorio del presente juicio es que no puede ser ni tomado
en consideración en contra ni a favor, ya que como se aproximo el deposado de estos policías solo
es un indicio débil y que es reducido a una inferencia que requiere verificación y comprobación por
otros medios los cuales si existen y que cuentan con la información de forma personal y directa.

De igual forma fueron contra interrogador por la


defensa particular del señor acusado, pero este
ejercicio no fue suficiente para desvirtuar los
señalamientos que se derivan en contra de los
justiciables como a quienes aseguraran el día
cuatro de noviembre del año dos mil diecisiete,
con motivo de un robo a casa habitación y en
franca posesión de la unidad vehicular materia
de esta controversia
Contrario a lo considerado por el Juez del tribunal Enjuiciamiento, en el sentido de que el
contrainterrogatorio desarrollado por la defensa no fue capaz de desvirtuar una FRANCA POSESION
DE LA UNIDAD VEHICULAR MATERIA DE LA CONTROVERSIA, pues se debe recordar que por lo que
respecta a LUIS JAVIER MENDOZA MARTINEZ, no aporta nada de utilidad para la causa, y por lo que
respecta a HUGO ENRIQUE SOLEDAD PESCADOR, se debe decir que al contestar quien venia
manejando la unidad y que posición ocupaba cada uno de los SENTENCIADOS, dejo claro que el sol
observo a los SENTENCIADOS EN LA CALLE, lugar en donde se realizo el aseguramiento. Esto es no
es posesión de ningún objeto

Probanzas las cuales desde luego que son licitas


y eficaces al recabarse respetándose las
formalidades esenciales del procedimiento, ello
es así, porque no se advierte alguna violación a
derechos fundamentales de las partes y más
aún, porque se encuentran insertas en el auto
de apertura a juicio oral, es decir, derivaron de
ofrecimiento, debate y admisión ante el juez de
control que previno en el conocimiento de los
hechos y Maxime por que guardan estrecha
vinculación con el esclarecimiento de los
presentes y sin soslayar que fueron
debidamente identificados a satisfacción de las
partes y la información que vertieron ante este
unitario se sujetó a los numerales 372, 373, 374
del código nacional de procedimientos penales.

Siendo estas las ultimas manifestaciones y consideraciones que tomaron en cuenta al momento de
valorar dichas probanzas, y de donde se puede observar que El Juez del conocimiento toma en
consideración las siguientes razones:

1.- que los testigos son elementos de la policía Municipal

2.- fueron debidamente citados por conducto de su superior jerárquico y además identificados a
satisfacción de las partes procesales (esto es que son elementos de la policía municipal.)

3.- que se vieron sometidos al interrogatorio cruzado

4.- el oficial Luis Javier Mendoza Martínez, no genera información relevante y pertinente.

5.- por lo que respecta de la declaración de HUGO ENRIQUE SOLEDAD PESCADOR, se aprecia que es
un testigo de referencia respecto al robo a casa habitación, y además detuvo a los SENTENCIADOS
en la calle sin posesión de OBJETO ALGUNO y desconoce quién conducía el vehículo.

6.- por el hecho de que intervinieron en una detención a petición de parte, esto es no presenciaron
un hecho flagrante, no pueden ser generadores de certeza respecto a HECHOS que cuentan con sus
propios medios de prueba, verbigracia de ello lo es la victima de dicho robo, a quienes de forma
personal y directa son a las personas que les constan la imputación de dicho latrocinio,
circunstancias que no pueden ser inferidas por la sola detención a petición de parte de cualquier
gobernado.

7.- por ser hechos y acontecimientos diversos, que si bien comparten un vinculo por el objeto
producto del robo y objeto material y por otro lado el instrumento que propicio la huida, por tal
razón son materia de apreciación diversa entre el deposado del policía a quien no le constan los
hechos del robo de vehículo y que interviene en hechos diversos es por lo que al no ser compatible
las circunstancias es que no se puede conjugar tomando como unión una prueba circunstancial que
solo tiende a perjudicar y no así a valorar objetivamente.

8.- que fueron materia de debate y depuración, sin que ello aporte la información que obtuvo el
juez, pues solo son inferencias que no pueden resultar del aporte de la prueba desarrollada en su
persona.

9.- en juicio fueron declarados en términos de ley, pero la información aportada fue escasa e
insuficiente, y que solo narraron la detención de dos personas, a quienes no se les encontró en
posesión de objeto alguno, menos aún en posesión o a bordo de vehículo alguno.

Época: Décima Época

Registro: 2003235

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Libro XIX, abril de 2013, Tomo 3

Materia(s): Penal

Tesis: XVII.3 P (10a.)

Página: 2047

AVERIGUACIÓN PREVIA. SU CONSIGNACIÓN CON BASE EN


LAS PRUEBAS QUE EL MINISTERIO PÚBLICO UTILIZÓ PARA
INTEGRAR UNA DIVERSA INDAGATORIA RESPECTO DE LA
CUAL EJERCITÓ ACCIÓN PENAL RESULTA ILEGAL.

Si el Ministerio Público consigna una averiguación previa con


base en las pruebas que utilizó para integrar una diversa
indagatoria respecto de la cual ejercitó acción penal
previamente, aquélla resulta ilegal. Lo anterior, porque dicha
representación social no puede subsanar en una nueva
averiguación las deficiencias u omisiones en que incurrió en
su primera consignación, pretendiendo extraer de los hechos
conocidos con anterioridad un nuevo ilícito, cuando tuvo
oportunidad de hacerlo en su momento procesal oportuno,
pues conforme al principio non bis in ídem previsto en el
artículo 23 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, una vez que un juicio haya concluido con una
sentencia válida, los hechos que hayan sido materia del
mismo no deben volver a someterse a la consideración de un
Juez.

TRIBUNAL COLEGIADO DEL DÉCIMO SÉPTIMO CIRCUITO.

Amparo directo 626/2012. 10 de enero de 2013. Unanimidad


de votos. Ponente: José Luis Gómez Molina. Secretaria:
Claudia Gabriela Tristán Lazo.

Mucho menos se puede utilizar como prueba circunstancial con enlace con la declaración vertida
por la víctima, pues no se comparten las mismas circunstancias de tiempo, modo y lugar y de ser a
consideración de los que suscriben utilizada como indicio que conforma la red de la prueba
circunstancial se debe decir que el conocimiento de los hechos relatados por los TESTIGOS DE
REFERENCIA, pertenecen a hechos de un Juicio diverso y que con ello a nuestra consideración se
violentaría el numeral 23 de la Carta Magna, pues se encuentra vedado la oportunidad de cualquier
autoridad de Juzgar dos veces por los mismos hechos a una persona, pues son aisladas las
manifestaciones de los policías por tener por probadas sus simples manifestaciones, además de
que son medios que pertenecen a otro juicio del cual aun no hemos sido condenados por ello se
violenta el derecho a no ser juzgado dos veces por el mismo delito, tratándose del delito de ROBO
COMETIDO EN CASA HABITACION, además de que DEBO SER JUZGADO bajo la porción FACTICA
PLASMADA en el auto de apertura en donde en ningún caso se establece la detención de los
SENTENCIADOS, siendo una PLUS PETITIO, no permitido en el derecho penal pues LOS HECHOS
MATERIA DE JUICIO no pueden ser ALTERADOS NI AUMENTADOS a voluntad de las partes.

Época: Novena Época

Registro: 164299

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Tomo XXXII, Julio de 2010


Materia(s): Penal

Tesis: VI.1o.P.271 P

Página: 1993

NON BIS IN IDEM. EL CONCEPTO DE DELITO A QUE SE REFIERE


EL PRINCIPIO CONTENIDO EN EL ARTÍCULO 23 DE LA
CONSTITUCIÓN FEDERAL, SE REFIERE A LOS HECHOS EN QUE
SE HACE CONSISTIR EL ILÍCITO Y NO A LA CLASIFICACIÓN
LEGAL DE LA CONDUCTA EN UN TIPO PENAL DETERMINADO.

El artículo 23 de la Constitución Política de los Estados Unidos


Mexicanos, en su parte conducente, dice: "... Nadie puede ser
juzgado dos veces por el mismo delito, ya sea que en el juicio
se le absuelva o se le condene. ...". Ahora bien, el concepto
de delito para los efectos de ese artículo no debe entenderse
referido a la clasificación legal de la conducta, en un tipo
penal determinado, sino a los propios hechos en que se hizo
consistir el ilícito; pues de entenderse de la primera forma, se
llegaría al absurdo, por ejemplo, de que una persona juzgada
por un delito de homicidio no podría ser juzgada después por
otro homicidio que cometiera con posterioridad, mientras
que el segundo de los supuestos se refiere a que los mismos
hechos, independientemente de su clasificación legal, no
pueden ser llevados nuevamente a proceso; caso en el que sí
se transgrede el principio contenido en el precepto
constitucional aludido.

PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL


SEXTO CIRCUITO.

Amparo en revisión 9/2010. 25 de febrero de 2010.


Unanimidad de votos. Ponente: José Manuel Torres Pérez.
Secretaria: Hilda Tame Flores.

Por lo que se aprecia, esta porción es la parte considerativa de la sentencia que se reclama, ello
atendiendo a lo previsto por el numeral 468 en su fracción II, en donde establece la posibilidad de
contar con fundamento para la causa de agravio, es que se considera que el análisis que se propone
respecto a que LAS RAZONES y MOTIVOS, expuestos por parte del juzgador no son acordes a la ley,
pues lejos de que se tenga por valida y cierta el resultado de las PRUEBAS TESTIMONIALES DE LOS
POLICIAS APREHENSORES DE UN HECHO MATERIA DE OTRO JUICIO, se debe establecer que se trata
de testigos por referencia de terceros y que por ser hechos materia de otro delito no se nos puede
juzgar dos veces por el mismo hecho.

Época: Novena Época

Registro: 195393

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito

Tipo de Tesis: Aislada

Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

Tomo VIII, octubre de 1998

Materia(s): Penal

Tesis: I.3o.P.35 P

Página: 1171

NON BIS IN IDEM. VIOLACIÓN AL PRINCIPIO DE.

No es necesario que se sentencie a alguien dos veces por el


mismo delito, para que se transgreda lo dispuesto en el
artículo 23 de la Constitución General de la República, toda
vez que dicho precepto establece que nadie puede ser
juzgado dos veces por el mismo delito, ya sea que en el juicio
se le absuelva o se le condene, sin que implique
necesariamente que deban llevarse a cabo dos procesos que
culminen con sentencias, ya sean absolutorias o
condenatorias, pues se trata de proteger con dicha norma
jurídica a los gobernados para que éstos no sean sometidos a
dos juicios o procesos por los mismo hechos delictivos, sin
que deba entenderse el término "procesar" como sinónimo
de sentenciar, sino de someter a un procedimiento penal a
alguien y la frase "ya sea que se le absuelva o se le condene"
contemplada en el aludido artículo constitucional se refiere
al primer juicio en el que se juzgó al acusado.

TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL


PRIMER CIRCUITO.
Amparo en revisión 595/97. Francisco Valdez Cortázar. 16 de
enero de 1998. Unanimidad de votos. Ponente: Carlos de
Gortari Jiménez. Secretaria: Marina Elvira Velázquez Arias.

Pues lejos de que se afirme que los elementos captores se encontraban cumpliendo con su labor como
elementos preventivos del delito, sin embargo, los mismo no actuaron bajo la observancia de la flagrancia de
ese delito, la flagrancia se actualiza cuando el agente del Estado (o incluso cualquier particular) presencia
directamente la comisión de un delito, es decir, se percata a simple vista o con los sentidos de que se está
cometiendo en ese mismo instante un hecho ilícito. Por ejemplo, cuando se observa cómo una persona golpea
a otra o cuando ocurre frente a él un homicidio o robo. En estos casos, la flagrancia se revela por sí sola y, por
tanto, la detención del individuo se justifica y queda autorizada sin necesidad de que el agente realice una
inspección para cerciorarse de la comisión o no de un delito. Por tal motivo, puede practicarse, en su caso, una
inspección de manera posterior a la detención, con el fin de que el agente garantice su propia seguridad y la de
terceros, así como para obtener, como parte de la investigación que en ese mismo momento inicia del delito
recién cometido, los instrumentos, objetos o productos del delito.

De igual manera, se ha reconocido que los agentes de seguridad pueden practicar inspecciones a personas,
sus posesiones y vehículos al tener noticia de la comisión o posible comisión de un delito (noticia criminis)15,
siempre que en el caso exista una sospecha razonable, verificando si las circunstancias coinciden objetivamente
con los objetos materiales del ilícito, los sujetos, lugares y horarios descritos en las denuncias recibidas
previamente (amparo directo en revisión 3463/2012). Como es el presente caso, pues los oficiales remitentes
no presencial el momento mismo del delito, pero por sospechas razonadas es como se comienza con la
interacción con los SETENCIADOS, y que dichas sospechas razonadas son objeto de valoración y
comprobación en diverso Juicio que en ningún momento pueden ser alcanzados por los resultados de los
deposados analizados

Según lo explicó la Primera Sala en el precedente referido:

Así, los parámetros que dan pauta a la detención por sospecha razonable, derivan de condiciones específicas
que distan de aquellos casos en que la detención de una persona se realiza por un agente de la autoridad en
virtud de haber presenciado que se estaba cometiendo el delito. En la actualización de la sospecha razonada,
no existen la condición fáctica descrita, la comisión del delito no es evidente y apreciable de forma directa, pero
existen condiciones circunstanciales que justifican la realización de un control preventivo provisional por parte
de los agentes de la autoridad. Ya sea porque exista una denuncia informal o anónima o porque el sujeto
exteriorice acciones que objetivamente den lugar a considerar que se pretende ocultar la realización de un
delito. Pero serán las condiciones fácticas de estas circunstancias las que determinan el grado de intensidad
del control preventivo por parte de la autoridad.

Un control preventivo de grado menor implicaría que los agentes de la policía pudiesen limitar provisionalmente
el tránsito de personas y/o vehículos con la finalidad de solicitar información a la persona controlada, como por
ejemplo su identidad, ruta, motivos de su presencia, etcétera. Asimismo, el agente de la policía estaría en
posibilidad de realizar una revisión ocular superficial exterior de la persona o del interior de algún vehículo.
Cuestión que nunca se realizó, pues los oficiales aprehensores no detuvieron provisionalmente la marcha del
vehículo y encontraron o entrevistaron a los SENTENCIADOS a bordo de dicha unidad vehicular, sino que al
contrario ese indicio de posesión no existe y solo es inferido sin sustento epistemológico y no probado.

Un control preventivo de grado superior, motivado objetivamente por conductas proporcionales y


razonablemente sospechosas, implicaría que los agentes policiales estarían en la posibilidad de realizar sobre
la persona y/o vehículos un registro más profundo, con la finalidad fundamental de prevenir algún delito, así
como para salvaguardar la integridad y la vida de los propios agentes. En estas condiciones, dichos agentes

15 En el amparo directo en revisión 3463/2012, la Primera Sala resolvió que la noticia criminis puede presentarse en las condiciones de
regularidad formal que deben operar ordinariamente (por ejemplo una denuncia formal ante la Policía o el Ministerio Público) o a través de
medios informales, como pueden ser las denuncias anónimas, denuncias por teléfono (anónimas o no) de particulares o aquellas denuncias
que se realizan presencial y directamente ante los agentes de la policía en el campo.
podrían además registrar las ropas de las personas, sus pertenencias, así como el interior de los vehículos.
Esto ocurriría, por ejemplo, si las circunstancias objetivas y particulares que rodean a un delito y al sujeto activo
corresponden ampliamente con las descritas en una denuncia previa, o bien si los sujetos controlados muestran
un alto nivel de desafío o de evasión frente a los agentes de autoridad. En resumen, una persona violenta o que
intente darse a la fuga, puede ser objeto de un control preventivo más intenso.

Por lo que hace a la inspección durante la investigación del delito (es decir, del delito que ya fue cometido y
respecto del cual se abrió una investigación) la Policía podrá “parar” un vehículo si, derivado de la información
con que cuenta proveniente de la denuncia (latu sensu) formulada y/o demás información obtenida durante la
investigación, tiene la sospecha razonable de que el individuo que circula en el vehículo oculta entre sus ropas
o que lleva adheridos a su cuerpo instrumentos, objetos o productos relacionados con el hecho que se investiga.
En estos supuestos, el agente deberá proceder conforme a los parámetros precisados en el apartado
correspondiente a “inspección durante la investigación”, para poder realizar el registro o inspección del vehículo.
Pero con ello no con ello los agentes policiacos obtuvieron fuerza convictiva respecto a aspectos que no
conocieron a través de sus sentidos de forma personal y directa, sino al ser una revisión por sospechas
razonadas es que se logro su aseguramiento, pero en nada abona a la materia de controversia.

Por lo que los razonamientos antes aludidos por parte de la autoridad Enjuiciadora en el sentido de
tener CIERTO Y PROBADO que al momento de nuestra detención llevábamos con nosotros el objeto
materia del presente juicio, además de que fuimos asegurados por el delito de robo a casa
habitación y que al momento de nuestra detención poseíamos ilegítimamente los objetos del
latrocinio por el que fuimos asegurados, es que se violenta el numeral 134 del código nacional de
procedimientos penales que establece en el ámbito de sus respectivas competencias y atribuciones,
son deberes comunes de los jueces y magistrados los siguientes

v.- abstenerse de presentar en


público al imputado o acusado
como culpable si no existiera
condena

pues los hechos por los cuales declararon los oficiales son materia de otro juicio del cual no se ha
dictado sentencia y que la misma no ha causado ejecutoria.

TERCER AGRAVIO.- Nos causa agravio el hecho de que se nos prive de la libertad, con la acreditación
especial del delito de Robo, previsto por el numeral 287 cuarto párrafo, siendo una NORMA
SUSTANTIVA QUE SUSTENTA LA SETENCIA QUE VIOLA DERECHOS FUNDAMENTALES, ya que en
ningún momento se ha demostrado que los SENTENCIADOS hayamos tenido en nuestro poder y
dominio vehículo alguno, pues no existe esa imputación objetiva y acreditación que de manera
objetiva y con prueba fidedignas que poseíamos ese vehículo.

Por lo que en atención a lo previsto por el numeral 468 fracción II del Código Adjetivo Nacional a la
letra se inserta:

“CONSIDERANDO III. HECHO DELICTUOSO DE


ROBO CON LA MODIFICATIVA AGRAVANTE DE
HABERSE COMETIDO RESPECTO DE UN
VEHICULO AUTOMOTOR CON VIOLENCIA.

En tal virtud se les concede el valor probatorio


de indicio fuerte y sólido para justificar que fue
el día cuatro de noviembre del año pasado
cuando ambos acusados fueron detenidos con
motivo de otro delito, pero en franca posesión
de la unidad vehicular materia de los presentes
hechos

Sin justificar la legal tenencia de la misma en


términos del artículo 287 párrafo cuarto del
código penal vigente en el estado de México.

Eventualidad que desde lego fortalece la postura


acusatoria del ministerio público y se fortalece
su teoría del caso, toda vez que existe
congruencia y coherencia entre lo dispuesto por
el paciente del delito y los elementos de mérito.

Causa agravio la porción de la sentencia que se inserta debido a que al utilizar los medios de prueba
antes analizados, referentes a las declaraciones de los policías municipales, quienes al ser dos
elementos no son coincidentes y congruentes entre ellos, además de que su dicho es respecto a
hechos materia de otro delito y que por la forma en como adquirieron lo que saben y les consta es
que no pueden tener más que un valor de indicio y no la acreditación de una franca posesión de una
unidad vehicular y dar por hecho ese evento.

Pues al dar por hecho la presunción de posesión y la acreditación especial del delito de robo, al
justificar de manera negativa y revirtiendo la prueba para los SENTENCIADOS en el sentido de que
aun y cuando no se ha probado la tenencia, uso y dominio de un objeto material (vehículo), se tenga
que justificar su legal tenencia, cuando no es materia de prueba alguna la posesión del mismo
objeto, que si bien es un bien mueble, el simple hecho de afirmar por parte de estos SENTENCIADOS
de que el vehículo por sí solo no puede moverse, si no que se requiere la intervención humana,
siendo de que de la acusación y las declaraciones de los policías aprehensores no se le puede atribuir
CON CLARIDAD cual de los dos SENTENCIADOS era quien conducía ese vehículo, pues se dice que
los SENTENCIADOS DESAPODERARON A LA VICTIMA Y QUE DESPUES SE ENCONTRABAN EN UNA
FRANCA POSESION DEL BIEN MUEBLE EN MENCION, y que dada la naturaleza de dicho objeto es
NECESARIO CONOCER LA PERSONA QUIEN CONDUCIA EL MISMO, con lo que se denota que no se
puede establecer a favor de ambos dicha atribución de conducción del vehículo, ni tampoco se
puede negar que viajaran ambos sujetos y que nadie manejara, lo cual como se sabe es materia de
análisis de la responsabilidad lo cual nunca aconteció.

Pues es indudable que al arribar a la consciencia por parte del órgano jurisdiccional de que los
SENTENCIADOS poseían ese vehículo, sin que se sustente en PRUEBA ALGUNA, que se tenga por
acreditado el cumulo de elementos objetivos, subjetivos genéricos, agravantes y elementos
normativos, pues basta con decir que por lo que respecta a los elementos objetivos, ya quedo
estudiado la conducta que se les atribuye a los SENTENCIADOS, en donde se arribó a la conclusión
de que era plausible la versión de la víctima, sin embargo su simple afirmación de reconocimiento
directo en juicio,. No es suficiente para que se tenga por identificado y reconocido como los autores
de dicho delito, pues basta con decir que dicho testimonio se encuentra viciado en el recuerdo y
que además que las características básicas de las personas que describió en una primera exposición
de su recuerdo no comparten con las características de los SENTENCIADOS, lo que obliga a contar
con mayores elementos de prueba que denoten la conducta de los sentenciados.

Sin embargo lejos de contar con mayores elementos de prueba para acreditar dicha conducta y
reprochársela a los SENTENCIADOS, es que solo se introduce este argumento, que en verdad
trasciende al fallo, pues como se dijo al tener por comprobado el núcleo del tipo con esa simple
afirmación y argumentación falaz, es que se puede decir que los demás elementos del tipo penal
fácilmente se pueden dar por comprobados, pues como se sabe es la imputación objetiva del
resultado a la conducta, con vinculación de la persona a quien se le atribuye la misma, sin embargo
si bien existe el resultado que es el desapoderamiento de un bien patrimonio de la víctima, y se
infiere la conducta que fue de acción dolosa y violenta, pero no puede ir más allá que esa
información pues la identificación de los SENTENCIADOS como autores de dicha conducta como se
estudio es de una evocación de una vivencia ilegal y que no constituye la materia de la litis y de los
datos de identificación que proporciona so n insuficientes para realizarles ese reproche.

Motivo por el cual es que se cuenta con


elementos de prueba aptos claros y suficientes
para acreditar que estamos frente a la
afectación del bien jurídico tutelado por la
norma penal en estudio, consistente en el
presente asunto en la prohibición para los
sujetos activos de haberse apoderado de cosa
ajena mueble sin derecho y sin consentimiento
de la persona que la puede hacer conforme a
derecho.
Acreditación y argumentación que no requieren comprobación diversa a la propuesta por la víctima,
pues si bien el bien jurídico tutelado por la norma se vio afectado y mermado, no menos cierto que
estos elementos objetivos no proporcionan elementos para el juicio de reproche pues como se dijo
no existe en la declaración de los elementos policiacos narración alguna en donde se denote la
posesión del vehículo en mención, y que solo son especulaciones infundadas.

Como objeto material se tiene hasta este


momento de la testimonial vertida por el
denunciante que lo desapoderaron de la unidad
automotor NISSAN XTRAIL MODELO 2015,
PLACAS DE CIRCULACION MSU1333 DEL ESTADO
DE MEXICO, y de lo cual se tiene acreditada su
existencia dada la manifestación del
denunciante, la referencia de los primeros
respondientes el perito en identificación
vehicular los cuales son idóneos para
materializar la existencia de los bienes materia
de los presentes hechos.

Es cierto que se puede dar por acreditado el objeto material del delito que denuncia la víctima, sin
embargo el mismo al haber sido revisado por los peritos de la procuraduría en ningún momento se
proceso con la finalidad de obtener evidencia o elementos criminalísticos que soportara sus
afirmaciones, que a las luz de las pruebas de defensa se establece la falta de evidencia respecto al
objeto material para tener por sentado la franca posesión del vehículo por parte de los
SENTENCIADOS, pues el hecho de que no se encuentren huellas de persona alguna, solo obedece a
la falta de buena praxis en la preservación de los objetos materiales, la negligencia y la falta de
trazabilidad en el análisis científico del objeto material.

Con lo que se acredita la afectación al bien


jurídico tutelado por la norma penal en estudio.
Ahora bien, con sendos medios de prueba se
acredita hasta el momento el nexo de
atribuibilidad si advertir armonía entre la acción
corporal en comento y el resultado, en este caso,
la aprehensión de los objetos citados, sin
derecho y sin consentimiento de la persona que
podía disponer que el resultado no hubiese
acaecido en la forma y términos precisados

La afectación del bien jurídicamente tutelado para su estudio o análisis y comprobación no requiere
saber o tener establecida la identidad de la persona que cometió el latrocinio, pues el bien
jurídicamente tutelado se vio mermado desde la fecha veintinueve de octubre del año dos mil
diecisiete, pues al desapoderar a la víctima de su vehículo y este meterse a su domicilio para que
después de ello no supiera nada mas de su vehículo, es que se afirma que la afectación al bien
jurídico tutelado no liga o vincula de forma alguna a los sentenciados, pues como se sabe el delito
fue cometido por un sujeto de un metro con setenta y cuatro centímetros sin que se sepa el tono
de piel, y que otro de ellos es robusto, de nariz chata y gruesa, con cabello rizado distintos a los
apelantes.

En lo que corresponde a la ajenidad de un bien


mueble, igual que el anterior se encuentra hasta
este momento acreditado ya que sin duda el
objeto material del delito, por su naturaleza
puede ser trasladado de un lugar a otro POR
MEDIO DE UNA PERSONA, y por lo tanto
satisfacen los extremos del artículo 5.6 de la
legislación civil vigente en la entidad, finalmente
los ingredientes relativos a que ese bien mueble
del cual se apoderaron hasta este momento,
acreditado en la causa de juicio, los autores de
la conducta, fue sin derecho y sin
consentimiento, atento a los medios de prueba
que fueron desahogados en la audiencia de
juicio, se concluye que generan convicción a este
unitario en cuanto a que el bien desapoderado,
fue susceptible de apoderamiento sin que se
contara con el consentimiento expreso o tácito
de la víctima u ofendido quien de acuerdo a su
relato en la testimonial recabada manifestó que
tal actividad se ejercicio sin derecho con lo cual
se colige que tales ingredientes por el momento
satisfechos y en cuanto al monto del valor de lo
robado esta se ajusta a la fracción I artículo 289
del código penal vigente en el estado de México,
tomando en cuenta que no se acompañó pericial
útil al respecto

Esta ajenidad de un bien mueble, como se establece en el numeral 287 puede ser acreditada de
forma especial y negativa con la falta de los sujetos activos de la comprobación de su legal tenencia
y en caso contrario se acreditara la posesión y ajenidad del mismo, dando como resultado que dejan
a los apelantes en un estado de indefensión, pues no se ha aportado ningún medio de prueba en
que se demuestre sin lugar a dudas la forma en que se poseía el vehículo, pues como se dijo al
moverse de un lugar a otro necesariamente para su traslado requirió de la intervención de
cualquiera de los sentenciados y lo mas simple como eso, el saber quien condujo al momento del
robo y al momento del aseguramiento respuesta que no se tiene ni se tendrá pues no es verdad que
se haya encontrado en posesión de dicho vehículo a los SENTENCIADOS pues al ser dos personas
forzosamente hubieran identificado quien manejaba el mismo.
Respecto a la modalidad del tipo en comento, es de mencionar que la dinámica del hecho solo es
planteada por la victima testigo singular, quien con su simple dicho se dan por hecho las
circunstancias que agravan la CONDUCTA que se les atribuye a los SENTENCIADOS, pues se dice
que fue con violencia quedando comprobado sin mayor trámite con el deposado del denunciante,
además de que se trató de un vehículo de motor porque así lo dijo la victima además de que fue
recuperado y motivo de aleccionamiento por parte de la policía respecto a los motivos por los que
fueron asegurados los sentenciados y además como motivo de intuición de que se trataban de los
responsables.

Lo que se viene a soportar en lo medular


mediante los medios de prueba que, bajo los
principios del sistema acusatorio, adversarial y
oral, desfilaron ante la escena de este Tribunal
de Enjuiciamiento, partiendo en primer término
de la testimonial vertida por el denunciante
quien narra de manera puntual la forma en
como lo someten empleando en todo momento
palabras altisonantes y armas de fuego ante el
embate de esta naturaleza. Como puede
advertirse, se aprecia con claridad que el
acusado y sus acompañantes para apoderarse
de los objetos materia del robo, utilizaron la
violencia moral, prevista en el artículo 290
fracción I inciso b) del Código Penal del Estado
de México.

Y de igual forma se acredita la modificativa


agravante contenida en la fracción V del citado
numeral, es decir, que además de la violencia el
objeto material de robo recayera sobre un
vehículo automotor, puesto que se concluye
válidamente que la intención final del acusado y
de sus acompañantes era precisamente
apoderarse del automotor NISSAN, XTRAIL,
MODELO 2015, PLACAS DE CIRCULACION
MSU1333 DEL ESTADO DE MEXICO, tan es así
que se apoderaron de la misma. Lo que se
acredita mediante la testimonial del señor
HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ, de los primeros
respondientes y la documental por esta
incorporada son suficientes para acreditar la
existencia de la citada unidad automotor.
En atención a los argumentos expuestos, se
afirma que la conducta ejecutada por el ahora
acusado y sus acompañantes, encuentra
perfecta adecuación a la descripción que en
abstracto hace el legislador en los artículos 287,
289 fracción I inciso b) y 290 fracción I y V del
Código Penal en vigor, en la hipótesis de ROBO
CON LA MODIFICATIVA AGRAVANTE DE
HABERSE COMETIDO RESPECTO DE UN
VEHICULO AUTOMOTOR CON VIOLENCIA, por lo
que resulta típica.

Afirmaciones que si se dan por comprobadas el núcleo del tipo y su reproche a los sentenciados,
pues como se dijo dichos aspectos y elementos del tipo para su comprobación y análisis no se
requiere el establecimiento de quien realizo o adecuo su conducta, pues se aprecia desde el
resultado y consumación, lo cual al ser tipos que no requieren de intervención de persona alguna
en específico, cualquier persona puede cometer el delito y por ello es que se exige que con medios
de prueba y pruebas distintas se acredite fehaciente que la conducta materia del reproche
efectivamente se le pueda atribuir sin lugar a dudas a los SENTENCIADOS.

CUARTO AGRAVIO. - CAUSA AGRAVIO LA SENTENCIA QUE SE COMBATE PUES LEJOS DE REALIZAR
UN ESTUDIO ANALITICO DE LOS MOTIVOS POR LOS CUALES SE TIENE POR COMPROBADA LA PLENA
RESPOSABILIDAD DE LOS SENTENCIADOS, SOLO SE LIMITA A TRANSCRIBIR Y REPETIR LOS MOTIVOS
QUE TOMO EN CONSIDERACION PARA LA ACREDITACION DEL HECHO DELICTUOSO Y QUE LA
RESPONSABILIDAD SE BASA EN LA CRITICA ESCUETA DE LAS PRUEBAS DESAHOGAS EN JUICIO POR
ESTA DEFENSA

Motivo por el cual es que se cuenta con


elementos de prueba aptos claros y suficientes
para acreditar la plena responsabilidad penal del
acusado. Sin pasar por alto que los acusados
MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO y ARMANDO
SEGURA CONTRERAS, al momento de rendir
declaración expusieron lo siguiente:

Por cuanto hace al acusado MARCO ANTONIO


LUCIO CERRILLO, sostuvo en lo medular que el
día veintinueve de octubre estuvo en casa de su
mama, donde salió hasta las nueve de la noche
por que fue a entregar un motocicleta y al ir
caminando en el molinito es abogado por unos
policías vestía su overol azul, le preguntaron
donde trabaja y le sacan todos sus datos, le
apreciaron sus tatuajes y es como lo suben a la
patrulla y que ya estañado en el ministerio
público de Naucalpan es cuando llega armando
segura contreras y lo meten a la celda, que lo
pasaron a declarar pero que no firmo nada y que
su abogado llego hasta el cinco de noviembre,
fecha en la que se realzo la confronta con varios
sujetos, pero que él era el único que presentaba
tatuajes y ya después lo trasladaron a Barrientos

A preguntas de su defensa sostuvo que participo


en diligencias de confronta con varios sujetos y
que no firmo nada hasta que llego el abogado y
que presenta golpes en sus piernas y pecho. Por
conducto de su defensa se incorporó como
medio de prueba la ficha señalética, la cual, si
bien es cierto que se trata de un antecedente de
investigación, el mismo fue solicitado y admitido
en el auto de apertura a juicio oral, donde se
establece los daos de la media filiación en la
totalidad del señor acusado, el cual ingreso al
centro preventivo de esta localidad por robo de
vehículo automotor.

Ahora bien, por cuanto hace a la declaración de


ARMANDO SEGURA CONTRERAS sostuvo en lo
medular que el veintinueve de octubre se
encontraba en la calle diez de abril en la colonia
plan de Ayala por el cumpleaños de su hijo y que
a las nueve y media de la noche se dirigió a por
el molinito a su centro de trabajo que es una
panadería. Que en fecha cuatro de noviembre al
ir caminado por las torres es asegurado por unos
policías, no opuso resistencia, pero aun así lo
suben a la patrulla, posteriormente es dirigido al
ministerio público y es donde conoce en las
galeras a MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO,
señala que el cinco de noviembre se practicaron
unas diligencias de confrontación donde
participaron varios sujetos pero que él era el
único con tatuajes
Al realizarse preguntas su defensa indico que
realizaron una confronta el cinco de noviembre,
pero que él no la firmo y que esto fue con motivo
de un robo a casa habitación, lo anterior en el
ministerio público de Naucalpan,
posteriormente fue trasladado a Barrientos. Por
conducto de su defensa se incorporó por lectura
la documental consistente en su ficha de
identificación de ingreso al centro preventivo
licenciado Juan Fernández Albarrán en cual se
establecen sus datos personas y la media
filiación.

Declaraciones las cuales se recabaron


respetándose en todo momento las
formalidades esenciales del procedimiento, es
decir en audiencia pública y con asistencia de su
defensa particular y por las Cuale niegan los
hechos que se les atribuyen pero no aportan
prueba nueva para desvincularlos del hecho que
les imputa del día veintinueve de octubre del
año próximo pasado, si bien es cierto que se
incorporaron a juicio las documentales
consistentes en los informes de ingreso al centro
carcelario de esta localidad, desde luego que es
una documental que les beneficia pero no es
suficiente para destruir la imputación firme,
clara y sostenida que expusiera el paciente del
delito HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ, quien
antes este unitario depuso de manera oral y
directa que fueron los acusados quienes en
compañía de un tercer sujeto lo desapoderaron
con lujo de violencia de su unidad vehicular y si
bien es cierto que existen algunas
inconsistencias en los datos proporcionara
como generales de los acusado, ello obedece a
que no es perito en la materia y que los datos
expuestos por el únicamente deben de
considerarse como generales, los cuales incluso
son parcialmente coincidentes por los expuestos
por el perito de la defensa ISRAEL MONROY
SALAZAR.
Asimismo, para corroborar la negativa del señor
acusado es que se reciben dos periciales ISRAEL
MONRO SALAZAR Y LUIS MIGUEL MARTINEZ
VARGAS, quienes ante este togado expusieron lo
siguiente:

Por lo que hace al perito ISRAEL MONROY


SALAZAR, al comparecer ante este todo en fecha
once de octubre del año en curso, establece que
realizo estudios antropométricos de los señores
acusados y tomado en cuenta los rasgos
proporcionados por el paciente del delito al
momento de denunciar los hechos ante el
Ministerio Publico, realiza una comparativa y
para ello ingreso al centro carcelario de esta
localidad y concluye que existen diferencia entre
los datos proporcionados por el señor
HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ, y aquellos que
el obtuvo de manera científica, pero fue claro en
el sentido de establecer de igual forma que
existen características similares, lo que desde
luego potencializa como ciertas las
manifestaciones del delito.

Hemos recordar que las características


proporcionadas por el paciente del delito son
aproximadas y además carente de
conocimientos científicos y metodológicos
como los que cuenta el puerto y sin soslayar
que el perito conto con casi una hora para tener
a la vista a los acusados y por parte del paciente
del delito los tuvo a la vista unos momentos y
además estaba amagado con armas de fuego

Por ello es que este juzgador le concede valor


probatorio a lo expuesto al perito de mérito al
ser un valor aproximado con el que contaba el
paciente del delito al momento de dar las
características de sus agresores y mayormente
por que, si encuentran ciertas similitudes entre
sus deposiciones y lo expuesto por el perito de
mérito, lo que me resulta útil para ser un
elemento incriminatorio más en contra de los
acusados.

Se viene a constituir en un indicio solido puesto


que es la propia defensa quien trajo a juicio el
perito para determinar las similitudes existentes
entre los acusados y las características expuestas
por el paciente del delito, lo anterior de una
forma libre y lógica acorde al artículo 359y 402
del código nacional de procedimientos penales.

Por su parte el perito de nombre LUIS MIGUEL


MARTINEZ VARGAS al comparecer ante este
órgano jurisdiccional depuso que realizo una
pericial en materia de dactiloscopia para recabar
material sensible, huellas dactilares en la unidad
vehicular Nissan Trail 2015 placas de circulación
MUG8309 del estado de médico, a fin de ubicar
huellas de los señores acusados, detalla que se
constituyó en el corralón grúas va donde tuviera
a la vista dicha unidad vehicular, donde
empleando polvos fluorescentes color naranja,
brochas de avestruz, luz ultravioleta, lo que
empleara en retrovisor y las manijas de la
unidad, determina que a unidad se encontraba
en la intemperie y que no pudo encontrar
huellas dactilares, por lo que no pudo hacer
ninguna comparativa en el presente asunto.

Experticia la cual de ninguna forma favorece los


intereses de los señores acusados por el
contrario viene a fortalecer la teoría de
ministerio público en el sentido de que dicha
unidad se encontraba asegurada en el corralón
descrito en Naucalpan de Juárez estado de
México y que si bien es cierto no se pudieron
encontrar huellas dactilares, ello obedece a que
la unidad se encontraba en la intemperie pero es
insuficiente para concluir que la cadena de
custodia se rompió en el presente asunto,
tomando en cuenta que nunca establecido que
hubiera tenido a la mano la cadena de custodia,
por ello es ilógico el pretender corroborar que se
trate de un rompimiento de la cadena de
custodia ante su sola manifestación improbada,
lo anterior en términos de los numerales 227,
228, 229 y 230 del código nacional de
procedimientos penales.

Sin que pase por alto este juzgador que el señor


LUIS MIGUEL MARTINEZ VARGAS, de forma
alguna no acredito contar con conocimiento
científicos técnicos para ser considerado como
perito, Maxime que únicamente se identificó
con una credencial de elector, sin embargo para
no afectar el derecho de defensa se desahogó en
juicio con el resultado ya obtenido resultando
aplicable las reglas de la lógica, la sana crítica y
las máximas de la experiencia en términos de lo
expuesto por los artículos 359 y 402 del código
nacional de procedimientos penales, solo para
el efecto de establecer un indicio en cuento a
que la unidad vehicular materia de los presentes
hechos no le fueron encontrados huellas
dactilares de persona alguna.

Y lo anterior se acredita así porque a través de la


prueba circunstancial el unitario deberá calificar
hechos de distintas fuentes que valorados sin
infringir las leyes de la lógica y la razón
conduzcan a conocer la verdad que se busca a
efecto de determinar si la persona enjuiciada fue
quien realizara el hecho criminoso, dicha prueba
circunstancial, se basa sobre el razonamiento
respecto de hechos o circunstancias que ya se
encontrar probados y de los cuales se trata de
desprender un hecho inquirido, esto es un dato
por complementar, una incógnita por
determinar o una hipótesis por verificar.
Sirviendo de apoyo a lo anterior las
jurisprudencias emitidas por nuestro tribunal
federal a la letra de:

Prueba circunstancial, importancia de la


Prueba circunstancial apreciación de la

Ahora bien, en su alegato de clausura la defensa


señala, la violación manipulación de pruebas son
las manifestaciones de los testigos presentados
por la fiscalía. El único órgano de prueba que
tiene la fiscalía no pudo alcanzar sustento a una
sentencia ya que la misma fue viciada al
momento de captar la conducta que se les
atribuyen a mis detenidos. En su dicho narro
como tres personas lo amagaron y sin
explicación alguna este sujeto se conduce a la
parte frontal para poder sacar a su menor hija
esto en presencia de otro sujeto y con la casa
agachada pudo definir su estatura y del tercer
sujeto no nos presenta mayores características.
En esta declaración nos dice que da la espalda y
ya no sabe si se dieron a la fuga o no. No existe
ningún otro medio probatorio que pueda dar
vida a la concatenación de su dicho. La fiscalía
no pudo ni aporto ninguna prueba para
referirnos porque el momento de la detención
de mis detenidos las placas de circulación son
totalmente diferentes a las que la supuesta
víctima refiere. Esto es así que un perito nos
vino a decir que las características físicas de mis
detenidos no con cuentan con las mencionadas
por la víctima. En la diligencia de confronta mis
defendidos señalan claramente que las otras
personas son totalmente diferentes en estatura
incluso que uno de ellos era el único con tatuajes
visibles. Existe una violación a los derechos
humanos de la defensa adecuada y del debido
proceso de mis defendidos ya que al momento
de encontrarse detenidos en el ministerio
público no contaban con una defensa.

SIENDO APLICABLE EL SIGUIENTE CRITERIO JURISPRUDENCIAL


Época: Décima Época

Registro: 2004753

Instancia: Primera Sala

Tipo de Tesis: Aislada


Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su
Gaceta

Libro XXV, octubre de 2013, Tomo 2

Materia(s): Penal

Tesis: 1a. CCLXXXVI/2013 (10a.)

Página: 1054

PRUEBA INDICIARIA O CIRCUNSTANCIAL. EL


JUZGADOR DEBE EXPLICAR, EN LA SENTENCIA
CORRESPONDIENTE, EL PROCESO RACIONAL A
TRAVÉS DEL CUAL LA ESTIMÓ ACTUALIZADA.

Cuando un juzgador utilice la prueba indiciaria o


circunstancial, ésta deberá encontrarse
especialmente razonada en la sentencia
correspondiente, lo que implica expresar el
razonamiento jurídico por medio del cual se han
construido las inferencias y hacer mención de las
pruebas practicadas para tener por acreditados los
hechos base, y de los criterios racionales que guiaron
su valoración; esto es, para que aquélla se estime
actualizada, en la sentencia deberá quedar
explicitado el proceso racional que ha seguido el
juzgador para arribar a determinada conclusión. Lo
anterior, toda vez que la valoración libre de la prueba
circunstancial no equivale a la valoración de indicios
carentes de razonamiento alguno. Por tanto, no sólo
los indicios deben estar suficientemente acreditados,
sino que deben estar sometidos a una constante
verificación en torno a su acreditación y a su
capacidad para generar conclusiones. En cualquier
caso un indicio, por sí solo, carece de cualquier
utilidad o alcance probatorio, debido a lo cual es
necesaria la formulación de una inferencia, la cual
estará sujeta a un estudio de razonabilidad, a efecto
de poder determinar si resulta razonable, o si por el
contrario es arbitraria o desmedida, debiendo
tomarse en consideración que la eficacia de la prueba
circunstancial disminuirá en la medida en que las
conclusiones tengan que obtenerse a través de
mayores inferencias y cadenas de silogismos, ante lo
cual, la inferencia lógica debe sustentarse en
máximas de la experiencia.

Amparo directo 78/2012. 21 de agosto de 2013.


Mayoría de cuatro votos. Disidente: José Ramón
Cossío Díaz, quien reservó su derecho a formular voto
particular. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Secretario: Javier Mijangos y González.

Argumentos los cuales desde luego que no


convencen al ánimo de este juzgador, porque
contrario a ello, se cuenta con la imputación
firme, clara y directa que vertiera en contra de
su detenido por parte del denunciante
HUMBERTO VAZQUEZ RAMIREZ, quien no dudo
de forma alguna en cuanto al señalamiento que
le realiza, además que sostuvo que al verlos
asegurados los reconoció sin dubitación alguna.

Habla de una imputación firme

Consideramos que no porque hay aspectos que no quedan claros

Y dice que cuando los tuvo en la rueda de personas los reconoció sin dudas.

Utiliza la referencia de la confronta para perjudicar, pero no la estudia si fue correcta

O como lo decimos nosotros

La fuente de la contaminación que sufrió la víctima y con ello que afirmara cosas no ciertas y que en juicio
solo corrobore ese error. Hasta por no querer tener problemas con la JUSTICIA, como una vez ya dijo que si
no puede retractarse pro que pudiera tener problemas aun en contra de su propia consciencia pues sabía que
las personas que lo robaron eran más altas que él y no supo que las personas condenadas no pueden estar
más altos que el aun cuando tenga la cabeza agachada.

Si bien es cierto que la defensa

Particular del señor acusado centra su


argumento final en la diligencia de confronta,
debe decirse y acotarse que ese dato de prueba
no arribo a la fase de juicio, tomando en cuenta
el contenido del artículo 385 del código nacional
de procedimientos penales en el sentido que no
se podrán incorporar o invocar como medios de
prueba ni dar lectura durante el debate, a los
registros y demás documentos que den cuenta
de actuaciones realizadas por la policía o el
ministerio público en la investigación, con
excepción de los supuestos expresamente
previstos en este código.
Refiere que no se pueden incorporar ni invocar actos de investigación, pero la funda su sentencia en el
reconocimiento indubitable. Dice el juez en líneas anteriores además que sostuvo que al verlos asegurados
los reconoció sin dubitación alguna. ENTONCES SE APRECIA UNA SENTENCIA INCONGRUENTE CON SUS
PROPIAS CONSIDERACIONES, POR QUE CUANDO PERJUDICA A LOS SENTENCIADOS AL RECONOCERLOS COMO
LOS QUE LLEVABAN LA CAMIONETA Y QUIENES FUERON RECONOCIDOS SI PUEDE SER UTILIZADAS LAS
DILIGENCIAS MINISTERIALES, PERO EN CUANTO SE EVOCA ALGO EN BENEFICIO DE LOS SETENCIADOS SE
SANCIONA POR NO PERTENECER A LAMATERIA DE LA LITIS. DEJANDO EN UN COMPLETO LIMBO JURIDICO
CON DICHA DETERMINACION.

En virtud de ello ambas partes se centraron en


esa diligencia, pero este juzgador está impedido
a pronunciarse sobre datos o medios de prueba
que no se allegaron a ala fase de juicio, máxima
que así lo determina el artículo 20 constitucional
en su apartado A, luego entonces lo que
únicamente se pondero a lo largo de esta
resolución obedece a la manifestaciones del
paciente del delito, del elemento de
investigación de la fiscalía general de justicia del
estado de México por lo tanto, no es viable que
me enfoque a su contenido y desarrollo
tomando en cuenta que no se llegó a juicio para
los efectos legales procedentes.
POR LO QUE SE INSISTE que estos medios de prueba NO DAN CON CERTEZA cuenta de que se realizó CON
TODAS LAS CONDICIONES Y REQUISITOS DE LA LEY y NO dan prueba de lo ahí ocurrido si fuera así

Sin embargo, no se me permite debatir o alegar en relación a esa afirmación de que se realizó de forma
incorrecta, sugestiva y sin la asistencia de un defensor durante su desahogo.

Por lo que respecta a la individualización de la pena, al encontrarse los SENTENCIADOS en total


desacuerdo con el planteamiento de acreditación del delito en su totalidad es que se afirma que no
era reprochable la conducta que se atribuye a los quejosos, y por tanto no tenia como consecuencia
la punición, sin embargo al ser consecuencia directa de la sentencia es que se afirma que no son
verdaderas las razones que condujeron al Juez a considerar adecuado el juicio de punibilidad que
ejercicio pues su convicción se basó como se analizó en total contravención de los parámetros
constitucionales y legales que rigen el dictado de la sentencia.

Por todo lo anterior es que se afirma que los motivos por los cuales se originaron los agravios son
los siguientes:

1.- la razón que motiva el primer agravio lo es porque el hecho de no realizar un análisis de la prueba
da como resultado su utilización en porciones que no fueron incorporado a juicio, además de que
se aprecia con dicho análisis la influencia negativa e ilegal a la que fue sometida para que pudiera
reconocer en juicio a personas que posiblemente se vean inmiscuidas en una identificación errónea
y equivocada.

2.- que la autoridad que resolvió la sentencia tomando en consideración la declaración de testigos
de referencia y que además no puede dar por hecho acontecimientos no puesto a su jurisdicción
prohibiendo que se nos juzgue dos veces por unos mismos hechos.

3.-SE CONSIDERA que la acreditación especial prevista por el código sustantivo, sin prueba alguna
que lo demuestre y todo basado en la intuición e inferencias, que no cuentan con corroboración y
comprobación como acontecimientos empíricos, además de que se acredita con testigos de
referencia y basados en hechos materia de otro juicio.

4.- la falta de análisis de la responsabilidad de forma detallada y por ende fundada y motivada de
forma correcta es que se afirma que causa agraviosa falta de exhaustividad, pues tal vez de un
análisis pormenorizado llegaría a la conclusión de que la responsabilidad no se encuentra
debidamente acreditada más allá de la duda de que al haber disparidad de los signos identificatorios
de las personas se haya podio equivocar la victima en un reconcomiendo y señalamiento directo
imperfecto y basado en errores en la memoria.

Por ello es que se llega la conclusión de que

Por la sola causación del resultado no podrá fundamentar por si sola la responsabilidad penal.

Por lo anteriormente expuesto y fundado solicito a Ustedes CC. MAGISTRADOS:

PRIMERO.- Tener por interpuesto en tiempo y forma el RECURSO DE APELACIÓN en contra de LA


SENTENCIA DEFINITIVA DE PRIMERA INSTANCIA, de fecha DIECISEIS DE OCTUBRE DEL AÑO DOS MIL
DIECIOCHO dictado dentro de la CAUSA PENAL 630/2018, por el Juez del Tribunal De Enjuiciamiento
del Distrito Judicial de TLALNEPANTLA, Estado de México, EN CONTRA DE MARCO ANTONIO LUCIO
CERRILLO Y ARMANDO SEGURA CONTRAS, por el hecho delictuoso de ROBO COMETIDO CON
VIOLENCIA RESPECTO DE UN VEHICULO DE MOTOR, cometido en agravio de HUMBERTO VAZQUEZ
RAMIREZ.

SEGUNDO. Se REPONGA EL PROCEDIMIENTO O EN SU OPORTUNIDAD SE REVOQUE y se dicte una


SENTENCIA DE ABSOLUCION O SE REMITAN EL EXPEDIENTE A UN JUEZ NUEVO PARA QUE SIN
MEDIAR LA INFORMACION VICIADA RESUELVA CONFORME A DERECHO.

TERCERO. - como solicitud expresa le solcito se me de oportunidad de comparecer ante su presencia


en día y hora a que tenga a bien señalar como audiencia para ACLARAR MIS AGRAVIOS, por ser
necesario para la comprensión de los mismos.

ATENTAMENTE

AGENTE DEL MINISTERIO PÚBLICO

MARCO ANTONIO LUCIO CERRILLO ARMANDO SEGURA CONTRERAS

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