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ESFUERZOS Y DEFORMACIONES EN EL

PAVIMENTO
Introducción

Actualmente, la mayoría de los métodos de diseño de pavimentos no consideran la


contribución de cada capa en la resistencia a la fatiga, asentamientos permanentes y
el de agrietamiento por temperatura, más aún, cuando cada capa del pavimento tiene
una función propia. Los métodos denominados empíricos-mecanísticos pueden
considerar la contribución estructural de las diferentes capas de un pavimento flexible,
lo que no ocurre por ejemplo, con el método AASHTO 1993. Recientemente la
incorporación de los conceptos de la mecánica estructural denominados “conceptos
mecanísticos” es utilizada en el análisis, diseño y refuerzo de la estructura de los
pavimentos. Las Agencias de Transportes de los Estados de Illinois, Kentucky,
Minnesota y Washington están adoptando procedimientos de diseño mecanísticos.

El presente capítulo se difunde la consideración de los conceptos mecanísticos en la


resiliencia de los materiales y la evaluación de la sub-rasante.

Módulo Elástico

El parámetro que se utiliza en la estimación de deformaciones bajo cargas estáticas


es el módulo de elasticidad. El módulo elástico relaciona los esfuerzos aplicados y las
deformaciones resultantes. El nivel de esfuerzos aplicado al suelo a través de la
estructura del pavimento es mínimo comparado con la deformación en falla, por ello
se asume que existe una relación lineal entre los esfuerzos y las deformaciones.

La teoría de la elasticidad permite utilizar ensayos de laboratorio y campo para la


determinación del módulo elástico. La Figura 5.1 muestra los ensayos disponibles en
nuestro medio.

El ensayo de compresión confinada utilizando el consolidómetro simula el


comportamiento deformacional que tendrá el suelo debajo de una cimentación
superficial. El esfuerzo de confinamiento lateral es variable durante la prueba, dada
por la pared metálica del equipo que no permite la deformación horizontal de la
muestra. El ensayo permite obtener el módulo elástico en la condición natural y
humedecida. En suelos arenosos el humedecimiento bajo carga ocurre de manera
inmediata y es posible medir el asentamiento adicional por este efecto. El ensayo
triaxial estudia el comportamiento deformacional del suelo bajo confinamiento y
permite obtener módulos elásticos para cualquier nivel de presión de confinamiento y
deformación. Los parámetros se utilizan cuando las presiones verticales transmitidas
alcanzan profundidades importantes. El equipo no permite medir el efecto del
humedecimiento.
El ensayo C.B.R. y el ensayo de placa de carga permite obtener los parámetros
elásticos en la evaluación de la sub-rasante. Sin embargo, en nuestro medio no se
utiliza la práctica ingenieril recomendada por Valle Rodas, 1967 de ensayar muestras
inalteradas. La ventaja del ensayo C.B.R. es la evaluación de la influencia de la
densidad natural y el humedecimiento.

En la figura se estudia el efecto de las cargas en el pavimento. Cada ciclo de carga


produce en el suelo una componente de deformación plástica, no recuperable y una
componente de deformación elástica, recuperable. Con los ciclos siguientes de cargas
los incrementos de deformación plástica producidos tienden a desaparecer, en cambio
las deformaciones elásticas tienden a ser constantes.

El Módulo Resiliente, MR relaciona el esfuerzo aplicado y la deformación elástica en


la condición estable o residual cuando el suelo presente un comportamiento elástico.
El módulo resiliente no representa el comportamiento total, desde el inicio del ciclo de
cargas hasta el final.

Sin embargo, el módulo resiliente relaciona las cargas móviles o rápidas y las
deformaciones instantáneas resultantes. El valor del Mr puede ser 10 veces el valor
del Módulo Elástico.

Los suelos granulares que conforman las capas del pavimento, presentan una
adecuada gradación y compactación. El comportamiento de estas capas granulares,
bajo los ciclos de carga, no presentará deformaciones plásticas significativas. Se
asume que durante el adecuado proceso constructivo, las deformaciones plásticas se
anularán. En este caso es apropiado modelar el comportamiento de las capas con el
Módulo Resiliente, MR. Al respecto la Guía AASHTO, 93 presenta valores
establecidos en el laboratorio, basados en el valor CBR.
El caso crítico lo constituye cuando la sub-rasante contiene fracciones importantes de
finos limo-arcillosos. Es sabido que los suelos limo-arcillosos sometidos a cargas
estáticas permanentes presentan deformaciones diferidas (con el tiempo) asociado al
fenómeno de consolidación. Bajo cargas no permanentes, de corta duración y
repetidas, como son las cargas de tránsito, el tiempo que demorará en consolidarse
será mayor, lo que traduce en el mayor número de ciclos. Es decir, el adecuado
proceso constructivo no será suficiente para anular las deformaciones plásticas. El
estado final resiliente solo se consigue con un número grande de ciclos de carga y la
deformación plástica acumulable será significativa. El módulo resiliente, MR al
representar solamente el comportamiento deformacional final, no será representativo
del comportamiento del suelo.

Las sub-rasante con componentes importantes limo-arcillosas sujetas a


deformaciones plásticas acumulables significativas (bajo valor de CBR), estarán
sujetas a dos alternativas: estabilizar primero el subsuelo para luego diseñar el
pavimento o alejar el subsuelo de la influencia de las cargas (considerando un espesor
mayor de relleno granular) esto es, del bulbo de presiones generadas por las cargas
de tránsito.

Subrasante

La sub-rasante es “el nivel superior de la plataforma de una carretera”..”donde se


coloca la estructura del pavimento” (EG-2000, MTC). Sin embargo, el concepto de
capacidad de soporte a nivel de sub-rasante o simplemente “capacidad de soporte de
la sub-rasante” implica la evaluación estructural y por consiguiente la determinación
de la respuesta mecánica del subsuelo hasta la “profundidad donde pueden generarse
deformaciones significativas”.

La rehabilitación de carreteras y pavimentos urbanos exige disponer anualmente de


montos importantes del Presupuesto de la Nación. En los EE.UU. también ocurrió esta
misma situación hace más de 10 años. La conclusión fue que los métodos de diseño
de estructuras de pavimentos eran básicamente empíricos y los conceptos de la
mecánica estructural que se habían incorporado en las últimas décadas a la ingeniería
civil, aún no se habían incorporado en la ingeniería de pavimentos. Actualmente la
tendencia en los EE.UU. y países europeos es considerar períodos de diseño de 40-
50 años mediante estructuras denominadas “pavimentos perpetuos”, que no requieren
mantenimiento durante los primeros 20 años.

En la estructura de pavimento, las capas (elementos estructurales) que componen el


pavimento no presentan asentamientos significativos, siendo la sub-rasante o
cimentación del pavimento propenso a deformarse. Entonces, la primera conclusión
es que las fallas estructurales que aún se presentan en nuestro medio, se deben a
una limitada, incorrecta y no actualizada metodología de evaluación de la sub-rasante.
La ingeniería geotécnica nos describe un país donde se presentan suelos con
respuesta mecánica variadas, utilizando términos como: suelos colapsables,
expansivos, densificables, licuables, compresibles, suelos inestables no consolidados
o de formación reciente (módulos elásticos menores a 100 kg/cm 2), cuyo común
denominador es presentar deformaciones significativas que afectarán estructuras de
concreto y más aún a estructuras que admiten mucho menor valor de asentamiento
admisible (menor a 1mm), como son las estructuras de pavimento. Definitivamente,
un asentamiento mayor ocasiona la fatiga prematura de la carpeta asfáltica, elemento
que es muy rígida (módulo elástico superior a 30,000 kg/cm2).
En nuestro país, muchas generaciones de ingenieros utilizan el ensayo CBR, ASTM
D 1883 para determinar la capacidad de soporte de la sub-rasante, sin embargo, no
se considera la humedad ni la densidad “in situ”. Se asume generalmente que la
capacidad de soporte de la sub-rasante es el resultado del ensayo asociado a la
Máxima Densidad Seca del ensayo Proctor Modificado. Si bien es cierto que el ensayo
CBR de campo es costoso y no sería recomendable realizarlo, existe otra alternativa
propuesta basado en utilizar el mismo molde CBR, llevarlo al campo y con ello extraer
una muestra inalterada. En suelos finos, areno-limosos, los suelos más susceptibles
a presentar alta deformabilidad se prestan para esta práctica. En el laboratorio, se
realiza la prueba de penetración sobre la muestra en condiciones naturales obtenida
con el molde CBR, obteniéndose un valor representativo del comportamiento de la
sub-rasante.

En depósitos de suelos granulares con presencia de boleos y bloques no consolidados


de formación reciente, generalmente como resultado de fenómenos geodinámicos
presentarán deformaciones permanentes acumulables debido a la densificación
producida por el impacto de las cargas dinámicas de tránsito. En este aspecto, es
preciso indicar que la deformación de estos suelos suelen ser de magnitudes similares
a los suelos limo-arcillosos

compresibles. Ensayos para medir las deformaciones producidas en suelos


granulares sueltos utilizando la mesa vibradora arrojaron resultados ilustrativos.

Teoría elástica de medios semi-infinitos

El cálculo de los esfuerzos transmitidos al terreno debido a la aplicación de las


cargas de tránsito se basa en las siguientes consideraciones:

a) Se asume que el terreno se comporta elásticamente; es decir, que las


deformaciones que se generan serán proporcionales a las cargas aplicadas.
Dónde:
ν relación de poisson
εr deformación radial
εa deformación axial

b) La aplicación de una carga circular uniforme genera esfuerzos (normales y


tangenciales) en el terreno.

Se utiliza un sistema de coordenadas cilíndricas donde σz, σr y σt, son esfuerzos


normales y τzr es el esfuerzo tangencial. Los cuatro componentes definen el
estado de esfuerzos en el punto inferior (r,z).

c) La aplicación de la Teoría Elástica, basado en la integración numérica


de la solución de Boussinesq (1885). Considerando un medio homogéneo,
elástico, isotrópico y semi-infinito, se tiene:

3𝑃𝑧 3
𝜎𝑧 = 5
2𝜋(𝑟 2 + 𝑧 2 )2

Aplicación de la solución de Boussinesq y la Teoría Elástica


Considerando una carga circular uniformemente repartida de magnitud q, y un plano
horizontal cualquiera a una profundidad z1 , se tendrán los máximos esfuerzos
verticales transmitidos, σzmáx, cuando r=0 (punto ubicado en el eje vertical).

Según Foster y Ahlvin (1954) tenemos los valores de σzmáx, εz y la deflexión (asentamiento
máximo en el centro del área circular para z=0= es:

a) Esfuerzo máximo vertical (en el eje vertical):

𝑧3
𝜎𝑧 = 𝑞 [1 − 2 ]
(𝑎 + 𝑧 2 )1.5

Note que el σz es independiente de E y ν.

b) Deformación máxima vertical (en el eje vertical):

(1 + 𝑣) 2𝑣𝑧 𝑧3
𝜀𝑧 = 𝑞 [1 − 2𝑣 + 2 − ]
𝐸 (𝑎 + 𝑧 2 )0.5 (𝑎2 + 𝑧 2 )1.5

Ejemplo 1:
Determinar los esfuerzos y deformaciones en una carretera que no será pavimentadas
(trochas). La subrasante está conformada por conglomerado (gravoso muy compacta) de alta
capacidad de soporte, CBR de 100%. El módulo elástico, E, de 1000 kg/cm 2 y relación de
poisson, ν, 0.40. la carga aplicada es de 7 kg/cm2 y el radio de contacto entre la llanta y la
superficie de rodadura es 15 cm.

Solución:
Aplicando la ecuación 5.2 se obtiene σz y con la ecuación 5.3 se determina la εz, para
expresarla en porcentaje se multiplica por 100.

La deflexión vertical máxima en la superficie (asentamiento en la superficie) y en el centro del


área cargada se calcula con la ecuación

la distribución de esfuerzos y deformaciones en función de la profundidad es:


De
las

figuras se puede concluir que los primeros 30 cm de la subrasante asumen el 70% de los
esfuerzos transmitidos por el tránsito.

Ejemplo 2:
Determinar los esfuerzos y deformaciones en una carretera que no será pavimentadas
(trochas). La subrasante está conformada por arena fina uniforme, semi-compacta, de baja
capacidad de soporte, CBR de 10%. El módulo elástico, E, de 100 kg/cm 2 y relación de
poisson, ν, 0.30. la carga aplicada es de 7 kg/cm2 y el radio de contacto entre la llanta y la
superficie de rodadura es 15 cm.
Solución:
Aplicando la ecuación 5.2 se obtiene σz y con la ecuación 5.3 se determina la εz, para
expresarla en porcentaje se multiplica por 100.

La deflexión vertical máxima en la superficie (asentamiento en la superficie) y en el centro del


área cargada se calcula con la ecuación.

ω0 = 2(1 − ν2 )qa
E
ω0 = 2(1 − 0.302 )7kg/cm2
×15 cm 100 kg/cm2
ω0 = 19 mm

la distribución de esfuerzos y deformaciones en función de la profundidad es:


Como se observa la distribución de esfuerzos en el problema 1 y 2 es el mismo, esto se
debe a que los esfuerzos transmitidos no dependen de los parámetros de suelo, sino de la
carga aplicada.

La distribución de las deformaciones varía en uno y otro problema porque depende de las
características de la subrasante.

 Determinar la deflexión en la superficie (z=0) y el esfuerzo vertical a 0.4m de


profundidad para una e=1x10^6 N/m2.

𝑃 10.000
Ƿ= = =141471 N/m2
𝜋.𝑎^2 𝜋.(0.152 )

La deflexión en la superficie será (z=0)

2(1+0.52 )∗141471∗(0.15)
∆= =0.053m =53 mm
1𝑥10^6

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