Tarea No.

4  Cualidades de un lector eficiente

Podemos iniciar diciendo que la lectura es además de captar, con la vista, los símbolos del lenguaje
escrito, interpretarlos con el cerebro.

Por lo que, un lector eficiente:

1. Lee con rapidez: Es decir para que nuestra compresión del tema mejore debemos leer con
rapidez y fluidez. Muchas veces creemos que leer lento permitirá que entender e interpretar
mejor el texto, pero no sucede así. Cuando leemos rápido los pensamientos e ideas fluyen para
discernir cada frase leída.

Cabe decir entonces que un buen lector tiene los ojos entrenados y pueden abarcar más palabras
en una sola fijación. No miran una sola palabra por vez, sino que cubren un espacio mucho mayor
con la vista “quieta”, de esta manera se detienen menos veces en cada renglón.

También evitan regresar constantemente sobre aquello que ya leyeron, porque se distrajeron o no
entendieron muy bien algo. Ya que al hacer esto no se lee con rapidez y no permite completar la
idea está plasmada en un párrafo.

2. Establece metas: Fija los objetivos que quiere cumplir al terminar el libro, puede ser el tiempo
que dedicará a cada capítulo según sus intereses, o estudiar un tema específico en determinado
mes, etc. Esto lo hace antes de comenzar a leer, siguiendo un procedimiento correcto y
deliberado.

3. Lleva a cabo la lectura mental: Aquí el lector no lee en voz alta ni baja. La lectura mental
consigue, a diferencia de la lectura oral o subvocalizada, una conexión plena con el texto y un nivel
de concentración superior. Si no se lleva a cabo la lectura silenciosa o mental aumentamos las
posibilidades de distracción.

4. Lee a distintas velocidades: Un lector puede decidir qué tan rápido o lento leer. Ya que existen
diferentes categorías. Como por ejemplo al leer un artículo del periódico nos damos cuenta que el
fin es informar de manera rápida y punta, mientras que una poesía intenta transmitir belleza en
cada una de las palabras llenando de satisfacción al lector. También en ocasiones se requiere de
un conocimiento del vocabulario técnico en un escrito profesional. Dependiendo de sus objetivos,
los buenos lectores regularán su velocidad de acuerdo al terreno.

5. Tiene una amplia área de captación: A través de ejercicios diseñados a ese fin, el lector
eficiente amplía su área de captación. En el tiempo en que antes captaba una o dos sílabas, ahora
captará frases completas. Su lectura no sólo tomará una velocidad enorme, también esta forma de
captar le permitirá comprender mucho mejor el sentido de lo que lee.

6. Logra la concentración: Solamente a través de una lectura fluida el lector logra establecer una
conexión plena con el texto, eliminar pensamientos ajenos al tema y otras distracciones y, por
tanto, suficiente concentración que le permita una comprensión óptima.
7. Tiene amplio vocabulario: El lector eficiente, como lee más, adquiere más vocabulario. Además,
a través del adiestramiento, ha adquirido conciencia de la enorme necesidad de aprender y
dominar cada día más vocabulario, por lo que desarrolla estrategias de mejoramiento continuo.

8. Tiene organización intelectual: Como la filosofía de nuestros tiempos lo indica: “La última
evolución del pensamiento humano es la capacidad de síntesis”, el buen lector organiza la
información de tal forma que pueda condensarla, retenerla y exponerla con precisión en mucho
menor tiempo, con menos esfuerzos y, eso sí, disfrutando muchísimo más que el lector lento.
Nunca subraya el material ni se detiene en detalles durante la primera lectura.

9. Lee activamente: El lector eficiente, al haber echado a un lado los obstáculos del tiempo y la
mala comprensión y la pobre retención, leerá lo que quiera y querrá leer más, de manera que
contará con un continuo aprendizaje y enriquecimiento de su saber. Para leer más y mejor, hay
que leer mucho.

10. Es Curioso: Tienen curiosidad por la historia, los lugares, los personajes, una época
determinada, un estilo. Cabe mencionar que una persona curiosa sabe cómo observar, escuchar,
hacer peguntas, comprender a los demás y crecer. Por otra parte, la lectura les permite descubrir
otras experiencias, otros valores, otras maneras de pensar, otros paisajes y otros mundos.

En el libro de Tony Buzan, El Libro de la Lectura Rápida dice: “La lectura es para la mente lo que el
aeróbic para el cuerpo”

Me gusta el pensamiento de algunos de los líderes empresariales más exitosos del mundo:

“Leer es mi forma favorita de complacer mi curiosidad. Aunque tengo la suerte de encontrarme

con mucha gente interesante y visitar lugares fascinantes a través de mi trabajo, sigo pensando
que los libros son la mejor manera de explorar nuevos temas que te interesan”, indicó Gates en su
sitio gatesnotes.com.

Mientras que Warren Buffett respondió a la pregunta sobre cómo hacerse más inteligente con
esto: “Simplemente me siento en mi oficina y leo todo el día”. Estimó que pasa el 80 por ciento de
su jornada laboral leyendo y pensando, de acuerdo con un artículo publicado en Farnam Street.

Al sostener pilas de papel, Buffett afirmó: "Lea 500 páginas como esta todas las semanas. Así es
como se acumula el conocimiento, como el interés compuesto”.

En resumen, la eficiencia en la lectura es necesaria para conseguir el éxito en la sociedad.