La mayoría de los investigadores han señalado diversas etapas de
la historia del Perú, todas evolutivas en su desarrollo cultural. Aunque no siempre están de acuerdo en el número y en la delimitación cronológica. El profesor Alden Masón señala como primero el período agrícola antiguo (2550 a.C. y 1250 a.C.).
Sus habitantes se nutrían de la pesca y la recolección de
semillas, tenían una agricultura sencilla y cultivaban fríjoles, calabazas, chiles y algodón. Poseían habitaciones semisubterráneas de un solo cuarto y no tenían objetos ornamentales. Sigue, según Masón, el periodo formativo (1250 a.C. – 850 a.C). Las referencias proceden de los pueblos de la costa y su principal yacimiento es el de Huaca Prieta, en el valle de Chicama. Aparecen tejidos y algunos objetos nuevos, ornamentales y utilitarios, tales como implementos para tejer, cuencos de piedra, cuentas de hueso, concha y piedra, sellos y figurillas.
Se han encontrado tumbas y, a mediados del período, aparece el
maíz. De (850 a.C. – 500 a.C.) Masón señala el período cultista, en que se experimenta un gran desarrollo cultural. Lo caracteriza el horizonte Chavín de Huantar.
El conjunto de edificios de Chavín cubre una amplia superficie. Hay
plataformas elevadas, plazas y edificios de piedra orientados a los puntos cardinales; el más importante es El Castillo, que mide aproximadamente 75 X 72 m.