Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
El método más fácil, cómodo y rápido de saber si estamos embarazadas es el test de embarazo que
compramos en la farmacia.
Pero es importante hacerse bien la prueba para no dudar del resultado y evitar la típica pregunta ¿lo
habré hecho bien?, que puede causar angustia y nerviosismo. Si el test está bien hecho, el resultado
es fiable.
Convulsiones
Las convulsiones son una manifestación que requiere la atención inmediata. No debemos confundir
los temblores originados por una convulsión de los temblores de brazos y piernas y los sobresaltos
que presentan los bebés cuando están despiertos y dormidos. Si observamos que estos temblores son
más severos, no cesan al estimular al bebé (tocarlo, cogerlo), presentan la mirada fija e inmóvil, se
deberá consultar con el pediatra de forma inmediata.
La posición de cuna
Esta es la primera posición que muchas madres utilizan, con
frecuencia poco después del nacimiento del bebé. Para comenzar,
sujete al bebé entre los brazos, con la cabeza apoyada en el pliegue
del brazo y la nariz del bebé frente al pezón. Use la mano para sujetar
las nalgas del bebé. Gire al bebé de costado, para que el abdomen del
bebé esté en contacto con el suyo. Después, alce al bebé hasta su
pecho. Puede sostenerse el pecho con la otra mano.
La posición de cuna cruzada
Esta posición es similar a la de cuna,
pero usted coloca los brazos en otra
posición. En lugar de sostener la cabeza del bebé en el pliegue del
brazo, use la mano de ese brazo para sujetar su pecho. Con el otro
brazo rodee la espalda del bebé. Sostenga la cabeza, el cuello y el
hombro del bebé con la mano en la base de la cabeza del bebé, con
el pulgar y el índice a la altura de las orejas del bebé. Al igual que
en la posición de cuna, el abdomen del bebé debe estar contra el
suyo. Es posible que necesite colocar una almohada sobre su
regazo para elevar al bebé hasta el pezón.
La posición de cuna cruzada le permite tener más control sobre la
prensión del bebé (la forma en la que el bebé agarra el pecho con
la boca). Muchas mamás descubren que pueden lograr que el bebé
se agarre mejor con esta posición.
La posición acostada de lado
Esta posición es cómoda para las madres que han tenido una
cesárea porque el bebé no presiona sobre el abdomen de la madre.
Asegúrese de volver a poner al bebé en la cuna o el moisés antes
de quedarse dormida.
Comience por recostarse de costado con el bebé a su lado mirando
hacia usted. Debe colocar al bebé de tal manera que la nariz le
quede frente al pezón. Use el antebrazo para sujetar la espalda del bebé o coloque una manta
enrollada detrás del bebé para ayudar a acomodar al niño cerca suyo y use el brazo para sostenerse
la cabeza. Puede sujetar el pecho con la otra mano.
1. Asegúrese de que el bebé tenga la boca bien abierta y de que haya bajado
la lengua antes de agarrarse al pecho.
2. Sujete el seno con la mano, colocando el pulgar en la parte superior y los
otros cuatro dedos en la parte inferior, separando bien el pulgar de los
demás dedos para que la boca del bebé pueda abarcar el pezón y parte de
la areola (el círculo de piel que rodea al pezón) para agarrarse bien
3. Deslice suavemente el pezón desde la mitad del labio inferior del bebé
hacia el mentón para inducirlo a abrir la boca.
4. Cuando el bebé haya abierto bien la boca y bajado la lengua, acérquelo
rápidamente al pecho (noacerque el pecho al bebé). El bebé debe meterse
en la boca tanta areola como sea posible y se debe ver una mayor parte de
la areola sobre el labio superior que debajo del inferior.
5. Asegúrese de que la nariz del bebé esté casi tocando su pecho
(no apretada contra él), que tenga los labios orientados hacia fuera
(o evertidos) y que usted pueda ver y oír tragar al bebé. (Podrá saber si el
bebé está tragando observando que se le mueve la mandíbula inferior e
incluso la oreja y la sien).
Puede que tu deseo fuera en un primer momento no utilizar ningún tipo de medicamento para el
alivio del dolor, manifestándolo así en tu plan de parto. Pero si el proceso de dilatación se alarga o
las contracciones son muy intensas, y no es suficiente con las técnicas no farmacológicas para el
manejo del dolor, puedes solicitar la aplicación de los recursos analgésicos disponibles, entre ellos,
la analgesia epidural. Los planes de parto deben ser realistas en relación con las posibilidades del
entorno donde tendrá lugar y cómo van sucediéndose los acontecimientos.
Es interesante que de alguna manera manifiesten la confianza en los profesionales, con quienes
formarás un equipo en el que todos podéis aportar algo valioso en cualquier momento.
En caso de complicaciones, los profesionales aconsejarán la actuación más adecuada, serás
informada adecuadamente y se solicitará el consentimiento para su realización.
La elaboración del plan de parto, supone una buena oportunidad para:
Reflexionar sobre el proceso.
Comunicar de forma fehaciente tus preferencias antes del parto. Ese día concurren multitud de
circunstancias físicas y emocionales que pueden dificultar la comunicación de esas preferencias.
Orientar a los profesionales en torno a la atención deseada entre aquellas posibles o disponibles.
Primeros cuidados del recién nacido
El test de Apgar mide la vitalidad del bebé en los primeros minutos
Mientras tu bebé crecía dentro de ti, para cuidarle apenas tenías que preocuparte de llevar una vida
y alimentación sana; pero desde el momento que asoma su cabecita, necesita tus cuidados y los del
personal sanitario que ha asistido tu parto.
Son unos momentos muy importantes y, al mismo tiempo, llenos de emoción. La matrona cortará
definitivamente el cordón umbilical que hasta ahora os unía, y junto con el médico comprobarán
con unas sencillas pruebas indoloras que tu bebé ha nacido sano.
Te contamos cómo serán esos primeros cuidados del recién nacido desde que sus pulmones
toman aire por primera vez y comienzan a respirar.
Test de Apgar
Ahora toca la realización del test de Apgar, la prueba clínica
que mide la vitalidad del recién nacido en sus primeros
minutos de existencia. Lo que el neonatólogo valora son cinco
valores del bebé. Su tono muscular, el esfuerzo respiratorio, la
frecuencia cardiaca, la respuesta a los estímulos externos y la
coloración de la piel.