El texto escrito por la arquitecta Mónica Ramírez Montagut crea un nexo
entre algunos conceptos de Gottfried Semper (un teórico de la arquitectura del siglo XIX) y el reconocido Kenneth Frampton. El texto parte de la paradoja de cómo ser moderno pero a la vez no dejar de lado lo oriundo y auténtico de la cultura de cada región. … Es así como se indica que la arquitectura debe encontrar un punto medio entre lo considerado como civilización y la cultura. En esta situación se puede decir que Frampton se encuentra en el punto de inflexión de ambas. A raíz de ello se hace una metáfora con el nudo el cual “concilia dos estructuras diferentes entre sí (…) amarra, sintetiza, confronta (…)” Para Frampton este punto medio se encuentra en la “poética de la construcción” en el cual la tectónica resulta de una serie de opuestos (básicamente las propiedades trascendentales del ser y la representación) que comulgan para formar un todo. Luego, se habla del límite relacionado a la naturaleza del espacio. Se indica que el límite no es algo que detiene sino que es considerado como punto de partida el cual definirá la forma de la arquitectura. Para Frampton la arquitectura es considerada como construcción e igualmente Semper indica que se debe conocer y explotar las limitaciones de los materiales de la arquitectura por lo tanto su construcción. Es por ello que tanto Frampton como Semper consideran que tanto la materialidad como la construcción son fundamentales en la arquitectura. Por otro lado se menciona que Frampton divorcia la arquitectura de las artes ya que la arquitectura siempre debe ser pensada para ser real. Se indica también que mientras el arte puede ser abstracto la arquitectura no. El texto menciona además que Semper afirma que es el desarrollo textil como envolvente el primero en crear el espacio propiamente dicho y no el hogar como indicaron otros. Frampton apoya esta idea dándole énfasis a la materialidad constructiva.
Para finalizar el texto se realiza nuevamente una metáfora con el nudo,
refiriéndose a la junta que es el límite en el cual el edificio se vuelve lo que es en base, como siempre, a la “poética” de la construcción arquitectónica.
El texto nos pareció un poco complicado de entender como conjunto.
Entendimos las ideas sueltas sobre los planteamientos de cada arquitecto según su época pero no muy bien las relaciones y comparaciones entre sí. Lo que nos quedó claro es que la arquitectura se basa en la construcción para la cual se debe tomar en cuenta las variables de cómo es el usuario o en términos generales el ser humano en sí y qué opciones nos da el material seleccionado.
Faltan algunas ideas importantes en este primer resumen. He
resaltado en rojo lo más valioso que ustedes han retenido. Lo que no me queda claro fue que relaciones o comparaciones no les quedaron claras. Para aclarar sus dudas deben buscar otros textos que traten sobre esos mismos temas y aveiguar el significado de los conceptos que no conocen.
Frampton sugiere que la arquitectura tiene como camino a seguir la
poética de la construcción que se halla a medio camino entre lo “ontológico’: categoría que solo incluye preocupaciones constructivas y estructurales, aquello que hace bien la arquitectura High-tech pero que olvida la necesidad de lo “representacional”, el uso de la memoria arquitectónica, de lo simbólico, aquello que hace el pos-modernismo muchas veces de manera banal y escenográfica pero olvidando lo primero.
Otro grupo de alumnas ha hecho una valiosa síntesis de otros
aspectos del texto no tocados por Uds. Aquí presento algunas líneas de ese otro trabajo:
Una de sus criticas es la que se refiere al High-tech, pues él afirma que
esta arquitectura solo busca el uso de la alta tecnología, usando una “fachada compensatoria” para cubrir “las ásperas realidades de este sistema universal”. Frampton critica la preocupación única por la estructura, dejando de lado otros factores esenciales. Se critica también al postmodernismo, pues la llama “arquitectura escenográfica”. Estos dos polos arquitectónicos se confrontan generando tensiones, que se remiten al “nudo textil semperiano”.
Para Frampton, el justo medio esta en en “ la poética de la construcción” y
no en el aspecto constructivo y estructural solamente (High-tech), ni en el intento de recuperar “formas pasadas” (postmodernismo).
“Ni absoluta construcción (ontología), ni absoluta representación”.
En cuanto a ontología , se pueden reconocer dos tipos: lo
“constructivamente estereotómico”, refiriéndonos a lo relacionado con cargas, compresión, oscuridad; (lo que en clase hemos identificado con la cueva, la arquitectura del muro, con materiales clásicos como la tierra, el ladrillo y la piedra) y lo “constructivamente tectónico”, relacionado con la luz, ligereza, inmaterialidad. (lo que llamamos la cabaña, basada en materiales como la madera, el acero, la caña. El concreto puede entrar en ambas categorías dependiendo de cómo se use) .
El entender que parte del edificio quiere pertenecer a la tierra (lo
estereotómico) y que parte se desliga de ella (lo tectónico), o el considerar que todo el edificio trabaja en continuidad con la tierra, o por el contrario, establece con ella los mínimos contactos, ayuda eficazmente a la producción del nuevo organismo arquitectónico.
El nudo semperiano se remite también a la unión entre estos. Frampton
afirma que la esencia de la arquitectura es precisamente el nexo entre estas dos condiciones. La construcción se define entre estos dos extremos. El nudo u articulación tectónico es el que concilia estas dos estructuras; “amarra, sintetiza, confronta, interpreta dos contradicciones”.
Se afirma también que la arquitectura ha sido erróneamente sujeta a la
creencia de que su único fin es la invención espacial, (en su sentido moderno de abstracción desprovista de materialidad) , cuando es antes que nada “una construcción, y solamente después un discurso abstracto que pretende la legitimación”.
Semper, en uno de sus textos, reconoce y aprovecha las limitaciones de los
materiales de la arquitectura. Para Frampton la materialidad y el proceso en que estos se modelan son igualmente importantes, pues transforman la realidad y no crean una, implantándose en la materialidad y construcción como fundamentos arquitectónicos. Kenneth Frampton rompe con la creencia de que lo único es el espacio, y le otorga importancia a la materialidad constructiva. Según Frampton “la forma construida es tanto estructura y construcción como creación y articulación del espacio”
Toda esta búsqueda teórica de Frampton tiene un carácter de
resistencia cultural contra las modas actuales que publicitan una arquitectura cada vez más vacía, banal, escenográfica o puramente escultural. De allí su apoyo a lo que él llama el regionalismo crítico, poner en valor las respuestas de arquitectos de países periféricos que concilian avances importantes de la civilización sin perder sus raíces y cultura local, generalmente aprovechando materiales y tradiciones constructivas además de rescatar tipos y formas de vida de la comunidad.