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El presente trabajo se aborda el tema “Juicio ejecutivo mercantil”. El concepto legal de juicio
mercantil se encuentra previsto en el artículo 1049 del Código de Comercio vigente, mismo que
establece lo siguiente: “Son juicios mercantiles los que tienen por objeto ventilar y decidir las
controversias que, conforme a los artículos 4o., 75 y 76, se deriven de los actos comerciales”.
Así pues, el juicio ejecutivo mercantil puede definirse como aquel que persigue el propósito de
obtener el pago inmediato y llano del crédito recamado o bien que se pronuncie una sentencia
condenatoria de remate de los bienes que aseguren el pago del citado crédito.
En este sentido, se estudia en el proceso legal que integra el juicio ejecutivo mercantil, los
diferentes tipos de documentos que la legislación observa y que traen aparejada ejecución,
además de la fuerza ejecutiva que poseen, tienen el carácter de prueba preconstituida de la
acción; ellos se pueden subdividir en: públicos y privados (clasificación que hacen algunos
doctrinarios, entre ellos el maestro Ovalle Fabela).
Finalmente, se estudia el proceso de la demanda y todos los elementos que en ella intervienen,
hasta su conclusión y/o sentencia definitiva y ejecución.
TIPOS DE DOCUMENTOS QUE SE REQUIEREN PARA AVALAR EL JUICIO.
Los juicios mercantiles se encuentran regulados en el libro quinto del Código de Comercio (CC),
esto es a partir del artículo 1049 al 1414 de la ley citada.
El artículo 1391 del CC señala que: el procedimiento ejecutivo mercantil tiene lugar cuando la
demanda se funda en documento que trae aparejada ejecución; y 8º de la Ley General de Títulos
y Operaciones de Crédito (LGTOC). Traen aparejada ejecución los siguientes documentos,
mismos que pueden clasificarse en:
Documentos públicos:
Documentos privados:
Documentos
privados.
1.- Libretas de depósito de ahorro.
2- Certificados de depósitos bancarios a plazo,
bonos bancarios y obligaciones subordinadas.
3.- Contrato de crédito y certificación de adeudo.
3.- Otros documentos. 4.- Contrato de apertura de crédito comercial
documentario irrevocable.
5.- Documento en el que conste un crédito bancario
con garantía real.
6.- Documento de obligación del solicitante, fiador o
contrafiador.
Para que un título traiga aparejada ejecución, es decir sea ejecutivo, el crédito en el
consignado debe ser cierto, líquido y exigible.
Crédito cierto, es aquel que reviste una de las formas señaladas por la ley como
ejecutivas. Únicamente puede ser título ejecutivo aquel al que la ley le otorga
expresamente ese carácter.
Impone al juzgador la obligación de dictar sentencia con puntos resolutivos que condenen de
inmediato al pago de las prestaciones reclamadas y de no hacerlo al remate de los bienes
otorgados en garantía o secuestrados.
Como podemos observar, no solo los títulos de crédito dan nacimiento a un juicio ejecutivo
mercantil, pero hay que hacer hincapié debido a que son los más constantes o comunes.
De acuerdo con lo establecido en el artículo 170 de la LGTOC, (referente a uno de los títulos de
redito más comunes), en cuanto a los requisitos que debe tener, señala lo siguiente: El pagaré
debe contener:
Artículo 16.- El título de crédito cuyo importe estuviere escrito a la vez en palabras y en cifras,
valdrá, en caso de diferencia, por la suma escrita en palabras. Si la cantidad estuviere escrito
varias veces en palabras y en cifras, el documento valdrá, en caso de diferencia, por la suma
menor.
Artículo 172.- Los pagarés exigibles a cierto plazo de la vista deben ser presentados dentro de
los seis meses que sigan a su fecha. La presentación sólo tendrá el efecto de fijar la fecha del
vencimiento y se comprobará en los términos del párrafo final del artículo 82.
Artículo 167.- La acción cambiaria contra cualquiera de los signatarios de la letra es ejecutiva
por el importe de ésta, y por el de los intereses y gastos accesorios, sin necesidad de que
reconozca previamente su firma el demandado. Contra ella no pueden oponerse sino las
excepciones y defensas enumeradas en el artículo 8.
Artículo 168.- Si de la relación que dio origen a la emisión o transmisión de la letra se deriva una
acción, ésta subsistirá a pesar de aquéllas, a menos que se pruebe que hubo novación. Esa
acción debe intentarse restituyendo la letra al demandado, y no procede sino después de que la
letra hubiere sido presentada inútilmente para su aceptación o para su pago conforme a los
artículos 91 al 94 y 126 al 128. Para acreditar tales hechos, y salvo lo dispuesto en el párrafo que
sigue, podrá suplirse el protesto por cualquier otro medio de prueba.
Así, de esta manera la LGTOC es muy específica en cada uno de los diferentes tipos de
documentos que son considerados títulos de créditos u operaciones de crédito y que traen
aparejada ejecución.
BIBLIOGRAFIA
CODIGO DE COMERCIO