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TRANSFORMADOS PARA VIVIR

Texto: Romanos12:2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de


la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena
voluntad de Dios, agradable y perfecta.

INTRODUCCIÓN

A. Necesitamos una transformación especial y urgente. Necesitamos un


cambio total. Quizá nuestra conducta cotidiana no es la mejor, pero tú estás
aquí porque necesitas y deseas un cambio.
B. Algunos personajes en la historia bíblica nos muestran cómo ocurre la
transformación, es por obra del poder de Jesucristo. Él es quien únicamente
tiene el poder de hacerlo. Es por ese poder que nosotros somos trasformados.
Que a partir de este día nuestra petición a Dios sea: «Señor Transfórmame».
C. Hemos hablado de cambios, pero nada ha ocurrido hasta hoy.
Necesitamos hacer cambios en la vida. Nuestros seres amados necesitan ver
la evidencia palpable del mayor milagro en nuestra vida: la conversión.
D. Texto bíblico: Romanos 12: 1-2
«Por lo tanto, amados hermanos, les ruego que entreguen su cuerpo a
Dios por todo lo que él ha hecho a favor de ustedes. Que sea un sacrificio vivo
y santo, la clase de sacrificio que a él le agrada. Esa es la verdadera forma de
adorarlo. * No imiten las conductas ni las costumbres de este mundo, más bien
dejen que Dios los transforme en personas nuevas al cambiarles la manera de
pensar. Entonces aprenderán a conocer la voluntad de Dios para ustedes, la
cual es buena, agradable y perfecta».

¿En qué quiere Dios transformarnos?

1. Deja que Dios te transforme. (vers. 1-2)

Una entrega total a Dios. Lo demostramos cuando él ocupa el primer lugar en


nuestras vidas. Hay un orden de prioridades: Dios, la familia, el trabajo, diversiones
sanas, etc.

Si alteras el orden, entonces estás en problemas y revela que no hay deseos de


cambio.

Tú eliges hacer cambios en tu vida. Cuando eso ocurra, entonces tu vida será
diferente. Comenzarás a gozar verdaderamente la vida, tendrás el deseo de amar
a quienes te rodean: tu esposa(o), a tus hijos, a los vecinos, etc. Estarás feliz sin
importar el pasado porque Dios te ha transformado.
Que tu adoración sea adorar a Dios como él indica. La historia de Caín nos
muestra cuan ofensivo es para Dios un servicio de adoración caprichoso, no
podemos estar mucho tiempo en esa condición. Si tú no has aprendido a adorar
correctamente, hoy puedes hacerlo, por eso Dios te trajo a este lugar, para
aprendas cómo adorarlo de forma agradable.

Una característica de la adoración genuina consiste en reconocer fielmente el día


santo; el sábado del Señor. Si compras, miras televisión, practicas algún
deporte, o realizas transacciones comerciales. Aun si vas de paseo, o
simplemente permaneces en casa ese día, no agradas a Dios. Es indispensable
aprender a adorar a Dios aquí en la tierra ahora mismo, porque al cielo iremos a
adorar a Dios por siempre. Si no aprendemos a adorarlo desde ahora aquí, no
tendrá sentido ir al cielo, nos sentiríamos fuera del lugar. En realidad, quienes no
aprendieron a adorar a Dios aquí en la tierra, no podrán ir al cielo.

Necesitamos una verdadera transformación. Digamos a Dios: «Señor


transfórmame».
Las personas que se consideran cristianas, pero no consagran sus vidas para servir
a Dios, pronto se convierten en criticonas, aburridas y «fariseas»; todo lo que se
planifica les parece mal, nada es bueno para ellos. Por otra parte, les invito para
entregarnos totalmente a Dios, y así, experimentar una verdadera transformación.

No amar las conductas y costumbres de este mundo.


El mundo es atractivo, es cautivante, ofrece mucho, pero da poco, es decir, nada.

Las modas en la vestimenta son cada vez más liberales, las diversiones más
depravadas, aun las plazas de trabajos son absorbentes, por eso el nuestro
Dios nos aconseja crear nuestro propio empleo y nuestras propias fuentes de
ingreso. Deuteronomio 28: 1, 13.
Dios nos enseña que el éxito y la prosperidad radican en guardar sus
Mandamientos. No hay otro camino mejor. Tómalo ya, es hora de cambio, tiempo
de transformación. Decídete por Cristo, y él te bendecirá y te transformará.

2. Reconocer y aceptar lo que somos

No pensar que somos más de lo que verdaderamente somos. Es peligroso caer


en los pecados de la soberbia y la auto suficiencia, esto nos puede llevar a la ruina
total. Debemos ser humildes y sencillos. «El Señor sostiene a los humildes, pero
derriba a los perversos y los hace morder el polvo» (Salmos 147:6).

«El orgullo lleva a la deshonra, pero con la humildad viene la sabiduría»


(Proverbios 11: 2).

«Y él da gracia con generosidad. Como dicen las Escrituras: “Dios se opone a los
orgullosos, pero da gracia a los humildes”» (Santiago 4: 6).
Ser realistas y reconocer lo que somos para gloria de Dios. Si soy algo, para Dios
lo soy: «Si vivimos, es para honrar al Señor, y si morimos, es para honrar al Señor.
Entonces, tanto si vivimos como si morimos, pertenecemos al Señor» (Romanos
14: 8).

Mateo 11:29 Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy mando y
humilde de corazón; y hallareis descanso para vuestras almas.

Pedir a Dios capacidad para hacer bien las cosas Oremos a Dios para que
transforme nuestra parte inactiva y sedentaria, hasta convertir nuestra vida en una
vida activa, comprometida, de decisiones correctas; una vida que traiga bendición
y felicidad.
a)Que nos de capacidades de:
 Servir a los demás con el fin de proveerles felicidad y
salvación.
 Ser bondadosos para que la gracia del Señor nos transforme.
 Hacer bien las cosas.
 Dar amor a los demás.
 Practicar todo lo bueno y desechar todo lo malo.
 Vivir y hacer felices a las personas que están cerca de
nosotros.

El mundo que nos rodea nos invita diariamente a practicar el mal. Nos seduce a
una vida aparente. Pero eso es insuficiente, requerimos una verdadera
transformación para desechar el error y buscar la verdad, desechar lo malo y buscar
lo bueno.

CONCLUSIÓN
Querido amigo, Dios desea que tú seas transformado, esta es tú oportunidad, no
hay otro día, es esta mañana. Cristo te llama ¿Cuál será tu decisión? ¿Estás listo
para ser transformado y hacer cambios en tu vida? No hay mañana, es ahora.
Entrégate plenamente al Señor, pídele que te transforme en un buen ciudadano,
en un buen vecino, en un gran esposo (a), un excelente padre, en una gran
persona. Pídele a Jesús que te convierta en un fiel cristiano. Que seas una buena
persona con tu familia, con tus vecinos y con toda la gente que te rodea.

Permite que el Señor te transforme con su poder. A Dios le interesa transformar tu


vida. Él desea convertirte en una persona humilde, anhela desterrar el orgullo de tu
corazón, asó como cualquier vanagloria y suficiencia propia.

¿Cuál será tu respuesta al llamado de Dios? ¿Estás dispuesto a entregar tu vida


a Cristo? ¿Deseas ser transformado? Acepta la invitación hoy mismo. Ríndele tu
vida, dale tu corazón. Dios obrará la maravillosa obra de transformación en tu
persona. Comienza hoy una nueva vida, y así estarás preparado para enfrentar todo
lo bueno y malo que pueda presentarse en tu camino.

Que Dios te bendiga. ¡Hoy eres una nueva criatura para Dios! Has sido
transformado por el Señor.
Oremos.

Misionero: Ps. Juan Carlos Vega

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