Terapéutica con ADN

RESUMEN: Se enumeran los beneficios de la terapéutica con ADN en el cáncer, en la reducción

de los efectos adversos de la quimio y radioterapia, en el envejecimiento, en la artrosis, en el
SIDA y en diversas afecciones clínicas.

El ADN en el tratamiento del cáncer.

La célula cancerosa proviene de un desvío estructural y funcional de la célula normal, provocado

por múltiples causas: virales, tóxicas, radiaciones, cancerígenos ambientales, etc. La información
de células normales contenida en el ácido desoxirribonucleico (ADN) puede corregir la desviación
de la célula normal.

El ADN provoca reacciones en el propio tumor y una mejoría evidente en el estado general, con
una sobrevida notable del paciente.

El ADN tiene importantes efectos protectores de la intoxicación con quimioterápicos y

radiaciones, posibilitando su uso como complemetario de las terapias convencionales del cáncer.

El ADN permite un incremento de la sobrevida, especialmente si se inicia el tratamiento en

etapas tempranas del desarrollo de la enfermedad.

El ADN como retardador del envejecimiento.

En ratas de experimentación se comprobó cómo se mantenía el número de neuronas, en

comparación con el grupo testigo. También se conservó la elasticidad de las arterias, comparado
con la atrofia y la fibrosis (arterioesclerosis) en los animales testigos.

Los animales tratados mantuvieron los glomérulos y túbulos renales, contrastando con la
esclerosis renal del otro grupo. Permaneció intacta la producción de espermatozoides, contra la
atrofia testicular de los animales testigo con azoospermia.

Los resultados obtenidos en seres humanos son similares, consiguiéndose un retraso y una
disminución en la magnitud de la decadencia física e intelectual.

El ADN en la artrosis.

Esta afección, que aumenta su incidencia a partir de los 50 años, puede ser tratada eficazmente
con el uso del ácido desoxirribonucleico (ADN).

El ADN en el SIDA.

El ADN ha demostrado un notable efecto estimulante sobre la inmunidad. El resultado clínico

observado en pacientes con temperatura prolongada, pérdida de peso importante, adenopatías
múltiples, hepatitis y bronquitis, es una mejoría significativa en la mayoría de los casos.

El ADN en diversas afecciones clínicas.

En enfermos de nefrosis sometidos a hemodiálisis y tratados con ADN, se observó que se

requerían aplicaciones de hemodiálisis más cortas y menos frecuentes. Se han obtenido resultados
alentadores en hepatopatías tóxicas degenerativas, en hemopatías diversas, en la aplasia
medular. Se redujo significativamente la evolución en neuropatías por intoxicación con metales, en
infecciones crónicas y en convalecencias prolongadas. En la esclerosis múltiple hubo grandes
mejorías.
 La clínica ha demostrado que en todos estos casos y en muchas otras afecciones, el uso
terapéutico del ADN tiene gran aplicación.