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PROCEDIMIENTO : ORDINARIO (O)

MATERIA : INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS POR ACCIDENTE


DEL TRABAJO (LEY N°16.744) Y DAÑO MORAL

DEMANDANTE : HUGO TORRES PÉREZ


C.I. N° : 12.662.344-5
DOMICILIO : LOS CANTARES N°10676, LA PINTANA

AB. PATROCINANTE (1) : MATÍAS IHL RODRÍGUEZ Formatted: Underline


C.I. N° : 16.212.034-4
DOMICILIO : NUEVA YORK 53, OF. 53, SANTIAGO
E-MAIL : CONTACTO@IHLRUIZTAGLE.CL

AB. PATROCINANTE (2) : NICOLÁS RUIZ-TAGLE PANATT Formatted: Underline


C.I. N° : 16.212.323-8
DOMICILIO : NUEVA YORK 53, OF. 53, SANTIAGO
E-MAIL : CONTACTO@IHLRUIZTAGLE.CL

AB. PATROCINANTE (2) : CARLOS WAGNER SOLETIC Formatted: Underline


C.I. N° : 17.267.147-0
DOMICILIO : NUEVA YORK 53, OF. 53, SANTIAGO
E-MAIL : CONTACTO@IHLRUIZTAGLE.CL

DEMANDADO (1) : CONSTRUCTORA E INMOBILIARIA CERRO


BAYO S.A.
RUT : 96.574.230-1
DOMICILIO : CALLE ROSA O’HIGGINS N°113, LAS CONDES

REP. LEGAL : CRISTIAN BIANCHI MONASTERIO


C.I. N° : 07.039.111-2
DOMICILIO : CALLE ROSA O’HIGGINS N°113, LAS CONDES

EN LO PRINCIPAL: DEMANDA EN PROCEDIMIENTO DE APLICACIÓN GENERAL POR


INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS POR ACCIDENTE DEL TRABAJO Y DAÑO MORAL;
PRIMER OTROSÍ: FORMA DE NOTIFICACIÓN Y LITIGACIÓN ELECTRÓNICA;
SEGUNDO OTROSÍ: PATROCINIO Y PODER

S.J.L. DEL TRABAJO DE SANTIAGO


HUGO TORRES PÉREZ, C.I. N° 12.662.344-5, trabajador, con domicilio en LOS
CANTARES N°10676, comuna de LA PINTANA, ciudad de SANTIAGO, a V.S. con
todo respeto digo:

Que, encontrándome dentro de plazo legal, vengo en interponer demanda en


procedimiento de aplicación general por accidente del trabajo e indemnización
por daño moral en contra de mi ex Empleadora CONSTRUCTORA E
INMOBILIARIA CERRO BAYO S.A., RUT N° 96.574.230-1, del giro de su
denominación, representada legalmente de acuerdo con el artículo 4° del Código
del Trabajo por don CRISTIAN BIANCHI MONASTERIO, C.I. N° 07.039.111-2, ignoro
profesión u oficio, con domicilio para estos efectos en CALLE ROSA O’HIGGINS
N°113, comuna de LAS CONDES, ciudad de SANTIAGO, someterla a tramitación y,
en definitiva, acogerla en todas sus partes, en base a los antecedentes de hecho y
de derecho que a continuación paso a exponer:

I. LOS HECHOS

A. ANTECEDENTES DEL CONTRATO DE TRABAJO

1. Con fecha 15 DE ENERO DE 2018 fui contratado para prestar funciones de


RIGGER, es decir, AUXILIAR DE OPERADORES DE GRÚAS, en favor de
CONSTRUCTORA E INMOBILIARIA CERRO BAYO S.A., bajo vínculo de
subordinación y dependencia de esta última.

2. En un principio, el contrato fue de OBRA Y FAENA.

3. Fui contratado para prestar mis servicios en la obra ubicada en calle


ECHEÑIQUE xxx..

4. Mi Jornada de Trabajo de 08:00 a 18:00 horas. Los días sábado solía hacer
horas extraordinarias, de 09:00 a 13.00 horas.

5. Mi remuneración, para efectos del artículo 172° del Código del Trabajo,
ascendía a la suma de $525.000.-

6. Me encuentro afiliado a AFP HABITAT, FONASA y AFC CHILE.


B. EL ACCIDENTE LABORAL

1. Siempre cumplí mis funciones laborales con extremada diligencia, puesto


que mi trabajo era parte de una línea de producción en la que cada uno de
mis compañeros incidía en el trabajo de todos, por lo que siempre intenté
ceñirme a mis funciones.

2. Sin embargo, todo cambió a partir del día 13 DE NOVIEMBRE DE 2018,


fecha en la que me encontraba apoyando a la grúa en el traslado de un
tablero metálico, de puro fierro, aproximadamente de 1.2 x 2.40 metros, y
de aproximadamente 15 centímetros de grosor, que se utiliza en la
estructura de los edificios, para tapar los muros. Es sabido entre los
trabajadores que la grúa no se encuentra en buen estado, y que la empresa
no había hecho caso de dicha situación para enviar la grúa al servicio
técnico.

3. En el transcurso de dicho traslado, enganchamos el tablero al gancho de la


grúa, con las cadenas. En la parte de arriba del cable que une el gancho
con la grúa hay una pera, que está pegada a la grúa. El problema ocurrió
que, por falta de mantenimiento, esa pera se apretó y se enganchó al
gancho de la grúa, y no se podía separar del gancho, ya que la pera no
tenía el pasador. Lo que normalmente ocurre es que el gancho baja
separadamente de la pera.

4. Me pidieron que moviera el tablero para zafar la pera del gancho, para lo
cuál bajaron el tablero metálico a una altura a la que pudiera acceder.
Luego de empujar el tablero metálico, logré soltar la pera del gancho, y en
ese momento el tablero se giró, empujándome, a lo que el gruero de forma
inmediata intentó levantar el tablero, pero yo me caí y el tablero metálico
me cayó encima, pasándome a llevar el hombro , y, posteriormente,
golpeándome la pierna, lo que me produjo una FRACTURA EXPUESTA DE
TIBIA Y PERONÉ, en la pierna derecha, según se estableció con
posterioridad en la MUTUAL. Formatted: Font: Bold

5. El tablero, en resumen, tuvo una primera caída, golpeándo el suelo y


cayendo hacia el lado, momento en el que me pega en el hombro. El gruero
en ese momento levanta el tablero para sacarlo de ahí, pero este giró y me
golpeó la pierna, produciendome la fractura indicada.

C. ATENCIÓN ANTE LA MUTUAL DE SEGURIDAD


1. Así las cosas, con fecha 13 DE NOVIEMBRE DE 2018 acudí a dependencias
de la MUTUAL DE SEGURIDAD DE LA CÁMARA CHILENA DE LA Formatted: Font: Bold
CONSTRUCCIÓN, quienes me señalaron que el resultado del accidente era
GRAVE, y se expresaba en una FRACTURA EXPUESTA DE TIBIA Y PERONÉ,
por lo que procedieron a una intervención quirúrgica. Además tuve lesiones
en el brazo, antebrazo, en el muslo y en la pierna.

2. De forma urgente me dieron como indicaciones mantener REPOSO, tener la


pierna en alto, moverme con la ayuda de dos bastones, sin apoyar el pie, y
medicamentos tales como CLEXANE, CEFAZOLINA, CELEDOX, DOLOTEN,
GENTAMICINA, OMEPRAZOL, y PARACETAMOL, además de indicarse
controles con radiografías.

3. Deste entonces, he tenido que asistir tanto al Centro de Atención como al


Hospital para curaciones, extracción de puntos, controles y sesiones de
kinesiología. A la fecha, he tenido citaciones los días 07, 10, 11, 13, 17, Formatted: Font: Bold
19, 20, 24 y 26 deDE DICIEMBRE DE 2018. Formatted: Font: Bold
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4. Hasta la fecha, se mantiene la orden de reposo. En un principio, me dieron Formatted: Font: Bold
orden de reposo desde el 13 de Noviembre de 2018 hasta el 12 de Formatted: Font: Bold
Diciembre de 2018, para luego extenderse hasta el 31 de Diciembre del Formatted: Font: Bold
presente año, y es de esperar que se mantenga, ya que aún me encuentro Formatted: Font: Bold
incapacitado de caminar . Formatted: Font: Bold
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D. ACCIDENTE DEL TRABAJO CAUSADO POR INFRACCIÓN DEL DEBER DE Formatted: Font: Bold
SEGURIDAD Formatted: Font: Bold

1. Tal como se ha relatado precedentemente, se puede constatar que sufrí


una FRACTURA EXPUESTA DE TIBIA Y PERONÉ, causada por
CONDICIONES DE TRABAJO E INSTRUCCIONES DE SEGURIDAD
INADECUADAS Y RIESGOSAS.
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1.2. Respecto al trabajo a realizar, la Empresa no realizó capacitaciones,
charlas de inducción, de formas de trabajo seguro, de medidas de auto-
cuidado, asimismo, no existen medidas de seguridad suficientes para evitar
un accidente como el ocurrido, por lo que era previsible que se produciera
un accidente como el acontecido, que lamentablemente me sucedió a mi.

2.3. Cabe hacer presente a V.S. que desde el comienzo de los hechos
dañosos realizados en contra de mi persona lo comuniqué a la Empresa, lo
denuncié al Sindicato y no se tomó ninguna decisión al respecto hasta que
ya fue demasiado tarde y tuve que acudir a la MUTUAL para que me
ayudaran a superar el DAÑO SUFRIDO.
3.4. De lo expuesto se constata claramente que mi empleador no ha dado
cumplimiento al mandato legal prescrito en el artículo 184° del Código del
Trabajo, en relación al artículo 154° del mismo código normativo, toda vez
que permitió el trabajo en condiciones inadecuadas, sin atender mis
reclamos ni las observaciones y/o recomendaciones del ente fiscalizador,
que finalmente me provocaron la señalada enfermedad, afectándose mi
derecho a la integridad física y psíquica en el lugar de trabajo, consagrado
como garantía constitucional en el artículo 19 N°1 de la Constitución
Política de la República.

4.5. El artículo 184° del Código del Trabajo impone al empleador


prevenir y suprimir efectivamente todas aquellas situaciones, conductas,
malas prácticas y riesgos susceptibles de afectar la salud de sus
trabajadores, salud que debe entenderse en el sentido más amplio posible.
El incumplimiento de mi empleador es tan grave que, hasta la fecha me
siguen afectando psicológicamente.

5.6. El artículo 7° de la Ley N°16.744 define Enfermedad Profesional


como aquella causada de una manera directa por el ejercicio de la
profesión o el trabajo que realice una persona y que le produzca
incapacidad o muerte. A su vez, el artículo 69° de la Ley N°16.744
establece que: “cuando el accidente o enfermedad se deba a culpa o dolo de
la entidad empleadora o de un tercero, sin perjuicio de las acciones
criminales que procedan, deberán observarse las siguientes reglas:

a) El organismo administrador tendrá derecho a repetir en contra del


responsable del accidente, por las prestaciones que haya otorgado o
deba otorgar, y;

b) La víctima y las demás personas a quienes el accidente o enfermedad


cause daño podrán reclamar al empleador o terceros responsables del
accidente, también las otras indemnizaciones a que tengan derecho, con
arreglo a las prescripciones del derecho común, incluso el daño moral”

6.7. En este sentido, y de acuerdo con lo expuesto, se constata


claramente que tanto el ACCIDENTE DEL TRABAJO como el DAÑO MORAL
que he sufrido se debe a un actuar CULPABLE de mi empleador, de sus
agentes y/o de mis superiores, quienes permitieron la realización de
trabajos en condiciones de riesgo permanente, afectando mi integridad
física y psicológica, sin aplicar medidas correctivas tendientes a mejorar las
circunstancias relatadas, agravando el daño con ocasión de mi despido.
E. DAÑO MORAL SUFRIDO

1. Respecto al DAÑO MORAL, la Doctrina ha entendido por tal: “todo


detrimento, perjuicio o menoscabo, dolor o molestia que sufre un individuo
en su persona, bienes, libertad, honor, crédito, afectos, creencias, etc.”.

2. El ACCIDENTE DEL TRABAJO que sufrí fue sumamente agraviante, me he


sentido sumamente cansado, desmotivado, me falta el aire, tengo ansiedad
permanente, he perdido mi alegría típica y, lo que más me duele, es que ya
no me siento una persona útil, y luego de haber acudido a la MUTUAL no
sé cómo podré enfrentar nuevamente un proceso de SELECCIÓN DE
EMPLEO o una ENTREVISTA PSICOLÓGICA. Nunca había sufrido un
accidente de este tipo, de forma tan grave, con tanto dolor y que me
mantuviera incapacitado de esta forma para trabajar, causándome mucha
inseguridad para mi futuro laboral y profesional. Debo desplazarme con
silla de ruedas, luego con muletas, he perdido mucha auto suficiencia y me
deben ayudar en tareas comunes del hogar que antes hacía fácilmente, lo
que también me ha traido problemas en el ámbito familiar.

3. Luego de lo expuesto, resulta evidente que existe un nexo causal directo


entre la acción u omisión imputable a dolo o culpa de mi empleador y el
daño que he sufrido, identificándose como un FACTOR DE RIESGO GRAVE
la existencia de un MEDIDAS DE PROTECCIÓN INSUFICIENTES Y
AUSENCIA DE INSTRUCCIONES EN ESTÁNDARES DE SEGURIDAD.

4. En consecuencia, y dada la gravedad del perjuicio extra-patrimonial que he


sufrido, vengo en valorar el DAÑO MORAL en la suma de: $1525.000.000.-
(ocho millones quinientos mil pesos).

II. EL DERECHO

A. ACCIDENTE DEL TRABAJO

1. Los hechos descritos y sus consecuencias, constituyen claramente un


accidente laboral producido en el lugar de trabajo. Este accidente es
producto de la negligencia de la empresa, la cual ordena efectuar una labor
a un trabajador que no le corresponde realizarla, que no es mecánico, sin
la capacitación debida y sin proporcionar elementos de seguridad
necesarios. En primer término, si la labor hubiese sido realizada con
condiciones de seguridad e instrucciones adecuadas, el accidente no habría
ocurrido. Asimismo, si la empresa dispusiera de implementos adecuados,
los trabajadores con la debida capacitación y maquinaria en condiciones
óptimas de mantenimiento, yo no me habría visto involucrado en el
accidente y no me habría fracturado el tobillo.

2. Este accidente se produce como consecuencia de la vulneración por parte


del empleador de sus obligaciones previstas en los artículos 21 y 22 del
Decreto Supremo Nº40 de 1969 del Ministerio del Trabajo y Previsión
Social; del artículo 4 de la Ley Nº16.744 y del artículo 37 del Decreto
Supremo 594 del Ministerio de Salud, en relación con los artículos 184 y
siguientes del Código del Trabajo, en todo aquello relativo a la obligación
del empleador de adoptar todas las medidas necesarias para proteger
eficazmente la vida y la salud de sus trabajadores y mantener condiciones
de seguridad en las faenas. El citado artículo 184 del Código del Trabajo
establece que “El empelador estará obligado a tomar todas las medidas
necesarias para proteger eficazmente la vida y salud de los trabajadores,
manteniendo las condiciones adecuadas de higiene y seguridad en las
faenas, como también los implementos necesarios para prevenir accidentes
y enfermedades profesionales (…)”.

3. En relación al mandato legal recién indicado, la Excelentísima Corte


Suprema ha desarrollado qué es lo que debe entenderse por “todas las
medidas necesarias” estableciendo el grado de cuidado que debe cumplir el
empleador. Así, en autos Rol Nº3168-2007, con fecha 28 de marzo de
2008, el tribunal supremo ha sostenido: “Que el mandato del artículo 184
del Código del Trabajo apunta a la adopción de todas las medidas
tendientes a proteger la salud de los trabajadores, las que, en lo que aquí
interesa, deben apuntar, primeramente, a las condiciones de seguridad en
las faenas y, luego, a la mantención de los impementos necesarios para
prevenir enfermedades profesionales. Al referirse a la mantención de los
implementos necesarios que prevengan enfermedades profesionales, el
legislador enfatiza la obligación recurriendo al adjetivo necesarios, lo que
quiere decir que en el lugar de trabajo ha de proveerse cuando menester
para que por causa del mismo no se enferme profesionalmente algún
dependiente. Pero la norma ahonda en la exigencia. Las medidas de
protección no sólo han de ser las necesarias – lo que ya es bastante – sino
todas las que revistan ese carácter, de manera que no existe un techo o
límite a la carga en examen, la que, por tanto, habrá siempre de
comprender lo que se precise o haga falta para alcanzar el fin de erradicar
atentados a la salud. El texto pide más. El mandato del artículo 184 se
extiente a la eficaz protección de la salud. Su finalidad es la del amparo
real, práctico, lo que significa que la mira de todas las medidas necesarias
ha de estar puesta en esa virtuosidad, lo que quiere decir, a su turno, que
el ordenamiento impone a la empresa el deber de proteger en términos
siempre positivos la integridad del dependiente. Como si fuera poco, las
condiciones de seguridad que deben ser implementadas en las faenas han
de ser las “adecuadas”, vale decir, las que se acomodan a las
circunstancias”.

4. Así también, el Decreto Supremo Nº40 de 1969 del Ministerio del Trabajo y
Previsión Social en su artículo 21, que “Los empleadores tienen la
obligación de informar oportuna y convenientemente a todos sus
trabajadores acerca de los riesgos que entrañan sus labores, de las
medidas preventivas y de los métodos de trabajo correctos. Los riesgos son
los inherentes a la actividad de cada empresa. Especialmente deben
informar a los trabajadores acerca de los elementos, productos y
sustancias que deban utilizar en los procesos de producción o en su
trabajo, sobre la identificación de los mismos (formula, sinónimos, aspecto
y olor), sobre los límites de exposición permisibles de esos productos,
acerca de los peligros para la salud y sobre las medidas de control y de
prevención que deben adoptar para evitar tales riesgos”, y en su artículo
22, que “Los empleadores deberán mantener los equipos y dispositivos
técnicamente necesarios para reducir a niveles mínimos los riesgos que
puedan presentarse en los sitios de trabajo”. En este caso en cuestión, la
empresa no me informó de los riesgos que suponían estas labores a las
que estaba sujeto, además de no estar estipulados en mi contrato.
Tampoco se me capacitó adecuadamente para desarrollar dichas tareas, ni
en cuanto a las medidas preventivas y el método de trabajo correcto.

5. A más abundamiento, la empresa incurrió en abierta contravención a lo


dispuesto en el artículo 37 del Decreto Supremo 594 del Ministerio de
Salud, que dispone que: “Deberá suprimirse en los lugares de trabajo
cualquier factor de peligro que pueda afectar la salud o integridad física de
los trabajadores”. En este caso, la empresa no tuvo la diligencia de
suprimir del lugar del trabajo los factores de peligro, pues no contaba con
mecanismos que advirtieran el peligro.

6. En este sentido, y de acuerdo a lo expuesto, significan serias vulneraciones


a las normas indicadas, y son la causa fundamental del accidente que sufrí,
y por tanto, del daño que esta situación me ha producido, tanto pecuniario,
al no poder trabajar, como el daño moral, que corresponde a mi ex
empleador reparar.

POR TANTO, con el mérito de lo expuesto y de acuerdo a las normas legales


citadas y demás que resulten pertinentes;
RUEGO A V.S.: Se sirva tener por interpuesta demanda en procedimiento de
aplicación general por indemnización de perjuicios por enfermedad
profesionalpor accidente del trabajo y daño moral en contra de mi ex Empleadora
CONSTRUCTORA E INMOBILIARIA CERRO BAYO S.A., RUT N° 96.574.230-1, del
giro de su denominación, representada legalmente de acuerdo con el artículo 4°
del Código del Trabajo por don CRISTIAN BIANCHI MONASTERIO, C.I. N°
07.039.111-2, ignoro profesión u oficio, todos ya individualizados, someterla a
tramitación y, en definitiva, se sirva acogerla, declarando:

1. Que, durante la relación laboral, he sufrido un ACCIDENTE DEL TRABAJO,


causado directamente por el incumplimiento de mi ex Empleadora
respecto de su obligación general de seguridad y protección a la integridad
física y psíquica de sus trabajadores, establecida en el artículo 184° del
Código del Trabajo, LEY N°16.744 y demás normas pertinentes;

2. Que, a causa de lo anterior, he sufrido DAÑO MORAL, imputable al actuar


culpable y/o doloso de mi ex Empleadora y/o sus agentes;

3. Que, en virtud de lo señalado precedentemente, se condene a la


demandada a pagarme, a título de indemnización de perjuicios por el
DAÑO MORAL que se me ha provocado, por la suma de $125.000.000.-, o
la suma mayor o menor que V.S. estime en justicia determinar;

4. Que, las sumas en que se condene a la demandada lo sean con el máximo


interés permitido por la Ley y debidamente reajustadas;

5. Que, la demandada sea condenada al pago de las costas de la causa.

PRIMER OTROSÍ: RUEGO A V.S., conforme lo dispone el artículo 442 del Código
del Trabajo, se sirva disponer que la notificación de las resoluciones se realicen a
esta parte a través del correo electrónico CONTACTO@IHLRUIZTAGLE.CL y que se
autorice a esta parte a litigar por medios electrónicos.

SEGUNDO OTROSÍ: RUEGO A V.S., se sirva tener presente que vengo en conferir
patrocinio y poder a los abogados habilitados para el ejercicio de la profesión don
MATÍAS IHL RODRÍGUEZ, C.I. N°16.212.034-4, y a don NICOLÁS RUIZ-TAGLE
PANATT, C.I. N°16.212.323-8 y a don CARLOS WAGNER SOLETIC, C.I.
N°17.267.147-0, fijando domicilio para estos efectos en Nueva York 53, Oficina
53, comuna y ciudad de Santiago.

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