Sei sulla pagina 1di 26

¿Que es un incendio?

Un incendio es un evento en extremo peligroso para la vida humana y que deja huella
irreparable para quienes han tenido el infortunio de experimentarlo. La violencia de un incendio
no sólo se manifiesta con la muerte, también se padece la inhalación del humo, el derrumbe de
las estructura, las explosiones; dando lugar a otros daños físicos como el desvanecimiento,
traumatismo y quemaduras graves con marcas permanentes.

¿que hago en caso que haya un incendio?


Antes
1. Identificar las rutas de evacuación así como: las salidas principales y alternas, verificando que
estén libres de obstáculos.
2. Evitar almacenar productos inflamables o usarlos sin la supervisión de un adulto.
3. Mantener y verificar constantemente el buen estado las instalaciones de luz y gas.
4. No sobrecargar las conexiones eléctricas.
5. Por ningún motivo jugar con agua cerca de las instalaciones eléctricas.
6. No sustituir los fusibles por alambres o monedas.
7. Identificar la ubicación de los extintores. Solicitar la orientación necesaria para usarlos de
manera apropiada.
8. Tener a la mano el número de la póliza del seguro SEP, a fin de realizar el reclamo en caso
necesario.
9. Participar en las actividades del Comité de Salud y Seguridad Escolar.

Durante
1. Al escuchar la señal de alarma, suspender lo que se esté realizando.
2. Conservar la calma y tranquilizar a las personas que estén alrededor.
3. Ubicar el lugar del incendio y retirarse de la zona de riesgo.
4. Si hay humo, taparse la nariz y la boca con un pañuelo, de preferencia mojado y agacharse.
5. Dirigirse a las zonas externas de menor riesgo con los compañeros y las compañeras del
plantel (puntos de reunión). Recordar: ¡no corro!, ¡no grito! y ¡no empujo!
6. Solicitar vía telefónica el auxilio de la estación de bomberos más cercana.
7. Siga las instrucciones de los brigadistas del Comité de Salud y Seguridad Escolar.
Después
1. Mantenerse alejado del área de riesgo porque el fuego puede avivarse.
2. Evitar propagar rumores y tampoco hacer caso de ellos.
3. No interferir en las actividades de los bomberos y rescatistas.
4. Poner atención a las indicaciones de los bomberos, autoridades de Protección Civil y
brigadistas del Comité de Salud y Seguridad Escolar.
5. Solicitar a la aseguradora su intervención a fin de que se inicien los trabajos de limpieza, y
recabe la información pertinente, a fin de que se paguen los bienes muebles e inmuebles
dañados (libros, equipo, mobiliario o cualquier otro).

Recuerde, todos los bienes y equipo de la escuela están asegurados, por lo que es muy
importante que usted elabore las actas correspondientes, notifique a la aseguradora a sus
autoridades inmediatas y sustente adecuadamente el siniestro, a fin de recuperar los bienes
dañados.

CLASIFICACIÓN DE LOS INCENDIOS :


Incendio: Fuego no controlado de grandes proporciones, que puede presentarse en forma
súbita, gradual o instantánea, al que le siguen daños materiales que posiblemente interrumpan
el proceso de producción, ocasionen lesiones o pérdidas de vidas humanas y deterioren el
ambiente.
Incendio Urbano: Siniestro en el cual ocurre la destrucción total o parcial de instalaciones, casas
o edificios, en los cuales existe una concentración de asentamientos humanos, ya sea dentro de
ellos o en sus alrededores.
Incendio Forestal: Siniestro que se presenta en aquellas áreas cubiertas de vegetación (árboles,
pastizales, malezas, matorrales) y en general, en cualesquiera de los diferentes tipos de
asociaciones vegetales, principalmente con suficiente material combustible y una fuente de calor
para iniciar el fenómeno.
Fuego: Reacción química que consiste en la oxidación violenta de la materia combustible; se
manifiesta con desprendimientos de luz, calor, humos y gases en grandes cantidades.
Combustión espontánea: Es producto de la transformación y/o descomposición orgánica de
algunos compuestos químicos, es una reacción exotérmica o bien un sobre calentamiento
gradual, que tiene como consecuencia la aparición del fuego.
MÉTODOS PARA APAGAR EL FUEGO
Eliminación del calor por enfriamiento: Consiste en bajar la temperatura hasta eliminar la
combustión. El agua es uno de los mejores agentes para este propósito.
Eliminación del material combustible: Se trata de remover total o parcialmente el material que se
está quemando o se va a quemar.
Eliminación del oxígeno: Es la acción de sofocar el oxígeno para eliminar por completo su
contacto con el material combustible.

RECOMENDACIONES
No abras las regaderas del baño u otras llaves de agua tratando de refrescarte, las altas
temperaturas que se producen en un incendio, harán entre otras cosas que el agua se vaporice
rápidamente desplazando el oxigeno.
1. Abre una ventana que dé a la calle y hazte notar, en pisos superiores puedes colocar en la
ventana una sábana blanca que es una señal internacional de socorro, también puedes gritar
2. No regreses al interior del inmueble por ningún objeto
Si la persona se encuentra corriendo, deténgala.
Apague el fuego de la víctima.
Cúbrala con una manta o algo similar, teniendo cuidado de no quemarse.
Hágala rodar por el piso, indíquele que gire sobre su propio cuerpo, protegiéndose la cara con
las manos.
El fuego también se puede apagar utilizando agua, arena o tierra. No lo haga con un extintor, su
contenido es altamente tóxico.
Si se ha incendiado el cabello cubra la cara de manera muy rápida para sofocar el fuego y retire
la manta inmediatamente para evitar la inhalación de gases tóxicos.
Una vez apagado el fuego, afloje y retire las ropas que no estén adheridas a las lesiones.
Tranquilice a la víctima y a sus familiares.
Valore el tipo de quemadura y su gravedad.
Retire cuidadosamente anillos, reloj, pulsera, cinturón o prendas ajustadas que compriman la
zona lesionada, antes que ésta se empiece a inflamar.
No retire nada que haya quedado adherido a la quemadura. No rompa las ampollas, para evitar
infección y mayor incomodidad.
Enfríe el área quemada durante varios minutos; aplique solución salina o agua fría sobre la
lesión.
No use hielo para enfriar la zona quemada, ni aplique pomadas o ungüentos porque éstas
pueden intervenir o demorar el tratamiento médico.
Cubra el área quemada con una compresa o aposito húmedo en solución salina normal y sujete
con venda floja para evitar infección. No aplique presión contra la quemadura.
Si se presenta en manos o pies, coloque gasa entre los dedos antes de colocar la venda.
Administre un analgésico si es necesario para disminuir el dolor, teniendo en cuenta las
precauciones.

Administre abundantes líquidos por vía oral, en lo posible suero oral, siempre y cuando la víctima
esté consciente.

Si se presentan quemaduras en cara o cuello coloque una almohada o cojín debajo de los
hombros y controle signos vitales, cubra las quemaduras de la cara con gasa estéril o tela limpia
abriéndole agujeros para los ojos, nariz y boca.
Lleve a la víctima a un centro médico.

Rescate de víctimas
Si hay acumulación de gases haga los siguiente:
Abra la puerta colocándose de inmediato a una lado de ésta para evitar quemaduras o asfixia
por las llamas o gases provenientes del recinto.
Para entrar al recinto arrástrese o gatee (dependiendo de la altura del humo) por el piso,
cubriéndose previamente la boca y la nariz con un pañuelo húmedo y en lo posible lleve otro
para proteger a la víctima.
Saque la víctima arrastrándola para evitar mayor inhalación de humo y gases ya que éstos se
acumulan en la parte superior del recinto.
Colóquela en un lugar seguro.
Valore el estado y lesiones. Dé los primeros auxilios pertinentes.

En caso de estar atrapado.


Debes si te es posible recostarte o permanecer lo más cerca al piso como sea posible para así
evitar la inhalación de gases tóxicos, evitar el calor y aprovechar la mejor visibilidad.
Tápate con un trapo o pañuelo de preferencia húmedo la nariz y la boca arrastrándote por el
piso.
Localiza la ruta de evacuación o trata de entrar a una oficina o cuarto que tenga ventanas que
den a la calle.
Si te encuentras lesionado, guarda la calma, de ser posible y si sabes cómo hacerlo, aplícate los
primeros auxilios, grita pidiendo ayuda, arrástrate tratando de alcanzar la ruta de evacuación y
no te alejes de la misma, esto facilitará tu localización ya que durante un incendio, los bomberos
siguen esa misma ruta pero en sentido contrario por lo que existen mayores posibilidades de
encontrarte.

TIPOS DE INCENDIOS

Se han clasificado los fuegos en cuatro tipos, de acuerdo con los materiales combustibles que
los alimentan. Estas clases de fuegos se denominan con las letras "a", "b", "c" y "d".

INCENDIO CLASE "A"


Los incendios de la clase "A" son los que ocurren en materiales sólidos tales como trapos, viruta,
papel, madera, basura y en general en materiales que se encuentren en ese estado físico.
INCENDIO CLASE "B"
Los incendios de la clase "B" son aquellos que se producen en la mezcla de un gas, tales como
butano, propano, etc., con el aire, o bien, de la mezcla de los vapores que se desprenden de la
superficie de los líquidos inflamables, tales como gasolina, aceites, grasas, solventes, etc.
INCENDIO CLASE "C"
Se clasifican como incendios "C" aquellos que ocurren en o cerca de equipo eléctrico o
electrónico "energisado", donde deben usarse agentes Extinguidores no conductores, tales
como los polvos químicos seco, bióxido de carbono. La espuma o chorros de agua no deben
usarse, ya que ambos son buenos conductores de la electricidad y exponen al operador a una
fuerte descarga eléctrica.
INCENDIO CLASE "D"
Los incendio clase "D" son los que se presentan en cierto tipo de metales combustibles, tales
como magnesio, titanio, sodio litio, potasio, aluminio o zinc en polvo.

EXTINTOR
El tipo del matafuegos indica justamente eso: para qué tipo de fuegos será de utilidad. A
continuación, aprendamos más sobre las clases de capacidad de extinción que posee cada tipo
de matafuegos:
Los matafuegos convencionales, que hay en oficinas, residencias e instituciones, suelen ser de
categorías A, B, C. Estas letras designan lo siguiente:

Clase A: Sólidos - Extingue fuegos por combustibles sólidos, como papel, madera, tela, goma,
plástico, pasto seco, etc.
Se lo requiere en industrias que manipulen estos elementos (carpinterías, depósitos, oficinas,
hospitales, escuelas y demás), y puede ser acompañado con agua, agua pulverizada, con
espuma, acetato de Potasio tipo K, HCFC 123 con Halón, o polvo químico de baja presión (en
especial en viviendas y hospitales).

Clase B: Líquidos inflamables – Extingue fuegos iniciados por combustibles de tipo líquido, como
naftas, grasas, aceites, pinturas, ceras y demás.
Se lo utiliza mayormente en industrias productoras de estos elementos, en estaciones de
combustible y otras similares, y puede ser acompañado por Dióxido de Carbono, polvo químico
seco de baja presión ABC, agua con espuma AFFF, acetato de Potasio tipo K, y HCFC 123
Halón.

Clase C: Energía eléctrica – Extingue fuegos iniciados por materiales, equipos y/o instalaciones
eléctricas o electroaccionadas.

Se lo utiliza en cualquier tipo de industria, entidad o residencia. Puede ser acompañado de agua
pulverizada, Dióxido de Carbono, HCFC 123 con Halón, polvo químico seco ABC y Acetato de
potasio tipo K.

En industrias y establecimientos con requisitos más exigentes, los extintores pueden ser también
de tipo D y K, que son los siguientes:
Clase D: Metales – Extingue fuegos iniciados por metales pesados y no pesados, como
magnesio, titanio, potasio, sodio y otros. Sólo se lo acompaña con Polvo D en casos de
incendios por metales combustibles.

Clase K: Grasas – Extingue fuegos iniciados por sustancias grasas, y sólo se lo acompaña con
Acetato de Potasio tipo K en casos de incendios por grasas de cocción (cocinas, restaurantes y
otras instituciones y entidades afines)

Trastornos Musculoesqueléticos. "TME"


Estimados, el día de hoy quiero presentarles un tema bastante
interesante, relacionado con la salud de nuestros
colaboradores. Posicionándose casi como un asesino silencioso, va poco
a poco aumentando el ausentismo laboral, provocando que las
organizaciones bajen su ritmo normal de trabajo, además de afectar
directamente la producción, dado que las afecciones relacionadas a los
trastornos musculoesqueléticos "TME", necesitan de un período de
recuperación que va desde los 7 días hasta un par de meses,
dependiendo de la lesión y su gravedad, esto no sólo afecta a las
organizaciones, también genera un daño, que en ocasiones puede ser
irreversible en nuestros colaboradores.

Más del 70% del total de las enfermedades profesionales


corresponden a Trastornos Musculoesqueléticos de extremidades
superiores "TME-EESS", que generan en promedio 20 días
perdidos. (MUSEG, 2011).

La Organización Mundial de la Salud indica que: " los TME


relacionados con el trabajo surgen cuando se expone al trabajador
a actividades y condiciones del trabajo que de manera significativa
contribuyen a su desarrollo o la exacerbación, pero este hecho no
actúa como el único factor determinante de causalidad".

¿Qué son los trastornos musculoesqueléticos?


Problemas de salud que afectan el aparato locomotor, que incluye
músculos, tendones, articulaciones, ligamentos, esqueleto y
nervios. (NIOSH, 1997)

Según la norma técnica del Ministerio de Salud los TME son:


lesiones físicas originadas por trauma acumulado, que se
desarrolla gradualmente sobre un período de tiempo como
resultado de repetidos esfuerzos sobre una parte específica del
sistema musculoesquelético. También puede desarrollarse por un
esfuerzo puntual que sobrepasa la resistencia fisiológica de los
tejidos que componen el sistema musculoesquelético.

Existen cuatro grupos de riesgo que afectan de forma directa la


aparición de los TME.
1. Factores organizacionales: organización del trabajo,
horarios, pausas, ritmo y carga del trabajo.
1. Condiciones ambientales de los puestos de
trabajo: temperatura, vibraciones, entre otros.
2. Factores individuales: capacidad funcional del
colaborador, hábitos, antecedentes, etc.
3. Condiciones de trabajo: fuerza, postura y repetición.
¿Existe un marco legal para los TME?

En Chile existe una norma técnica de identificación y evaluación de


factores de riesgo asociados a Trastornos
Musculoesqueléticos Relacionados al Trabajo (TMERT) de
Extremidades Superiores publicada el 08 de Octubre del 2012.
Esta norma busca transmitir conocimiento, crear conciencia,
desarrollar estrategias de prevención frente a los factores de riesgo
musculoesqueléticos. Podemos además mencionar la Ley 20.001
que regula el peso máximo de carga humana, la modificación del
D.S. 594/22-02-2011 Título IV, párrafo III: referido al "control de los
factores de riesgo de TMERT-EESS".

Considerando el marco legal, la implementación de esta norma es


para todo tipo de organizaciones, todo tipo de tareas,
independientemente del número de trabajadores, del riesgo de sus
operaciones. Siempre y cuando se identifique el uso y exigencia de
las extremidades superiores, el empleador es quien debe realizar la
identificación y evaluación de factores de riesgo de TMERT-EESS
para determinar los niveles de riesgo a los que están expuestos
sus colaboradores, debiendo integrar sus resultados a sus propios
sistemas de gestión de prevención de riesgos. Para ello se puede
apoyar en:
Corresponde al empleador eliminar o mitigar los riesgos
detectados, para lo cual aplicará un programa de control, el que
elaborará utilizando la metodología señalada en esta Norma
Técnica.

El empleador deberá informar a sus trabajadores sobre los factores


a los que están expuestos, las medidas preventivas y los métodos
correctos de trabajo. La información a los trabajadores
deberá constar por escrito y contemplar los contenidos mínimos
establecidos en esta Norma Técnica.

http://web.minsal.cl/portal/url/item/cbb583883dbc1e79e0400101650
14f3c.pdf
Necesidad de hacer Prevención de Riesgos.
Hola estimados, dada la gran cantidad de correos enviados por
lectores y excelente aceptación de mis publicaciones, les traigo una
nueva, esta vez acerca del ¿por qué? de hacer Prevención de
Riesgos en nuestra organización.

Primero debemos mencionar algunas de las leyes que rigen


nuestra legislación en Chile, una de las más importantes, es sin
duda la Ley 16.744 que establece normas sobre accidentes del
trabajo y enfermedades profesionales, el Decreto Supremo 594
sobre condiciones sanitarias y ambientales básicas en los lugares
de trabajo, el código del trabajo, entre otros. Entonces necesitamos
saber ¿qué es la Prevención de Riesgos?, ¿para qué nos sirve? Y
¿por qué debes hacer Prevención de Riesgos?.

Lo primero que debemos hacer antes de comenzar a hablar sobre


Prevención de Riesgos, es comprender su definición; es la
disciplina que busca promover la seguridad y salud de los
colaboradores mediante la identificación, evaluación y control
de los peligros y riesgos asociados a un proceso productivo,
además de fomentar el desarrollo de actividades y medidas
necesarias para prevenir los riesgos. Entendiendo esto, la
pregunta siguiente sería ¿cuándo debo hacer Prevención de
Riesgos?. A continuación, una lista con puntos relevantes sobre la
Ley Chilena:

 Toda empresa debe estar afiliada a un organismo


administrador del Seguro contra Riesgos de Accidentes del Trabajo
y Enfermedades Profesionales, y mantener al día pago el pago de
las cotizaciones. “Ley 16.744”.
 Velar por proteger eficazmente la vida y salud de los
trabajadores(as), otorgándoles condiciones adecuadas de Higiene
y Seguridad en el trabajo. “D.S. 594 y Código del Trabajo”
 Toda empresa o entidad estará obligada a establecer y
mantener al día un Reglamento Interno de Higiene y Seguridad en
el trabajo, cuyo cumplimiento será obligatorio para los
trabajadores(as). Este ejemplar se debe entregar gratuitamente a
cada trabajador. “D.S. 40 y Código del Trabajo”.
 En toda empresa se debe informar a los trabajadores acerca
de los riesgos que entrañan sus labores, de las medidas
preventivas y de los métodos de trabajo correctos. Estos riesgos
son los inherentes a la actividad económica de la empresa. “D.S.
40 y Código del Trabajo”.
 Implementar todas las medidas necesarias para proteger
eficazmente la vida y salud de los trabajadores, manteniendo
condiciones adecuadas de higiene y seguridad al interior de sus
dependencias. “D.S. 40, D.S. 594, Código del Trabajo y
Constitución Política”,
 Proporcionar de manera gratuita los Elementos de Protección
Personal que los trabajadores necesiten y capacitar a los
trabajadores(as) en el uso adecuado de éstos. “D.S. 594 y D.S.
18”.
 En toda empresa, faena, sucursal o agencia que trabajen más
de 25 personas, deberá constituirse Un Comité Paritario de Higiene
y Seguridad. “D.S. 54”.
 Toda empresa que cuente con más de 100 trabajadores(as)
deberá contar con un Departamento de Prevención de Riesgos., el
cual deberá ser dirigido por un experto contratado por la
organización “D.S. 40”.
 Mantener estadísticas de siniestralidad al día. “D.S. 40”.
 Informar inmediatamente a la Inspección del Trabajo o la
Secretaria Regional Ministerial de Salud que corresponda, la
ocurrencia de un accidente grave o fatal. “Circular 2345”.

Nota: El término trabajadores se utiliza por ser extracto de la ley,


para fines de SST y SGSSO, se reemplaza por colaboradores.

Una organización desde que contrata a una persona está obligada


a seguir parte de las leyes antes mencionadas, pero a medida
crecen y contratan a más colaboradores, crece también sus
responsabilidades en materia de Prevención de Riesgos, es por
ello que nos apegamos al D.S. 40, para determinar la cantidad de
horas que necesitan de atención de un experto en Prevención de
Riesgos.
Si bien es cierto existen los Prevencionistas de Riesgos, por una
necesidad de cumplimientos legal, se debe entender que estos
Profesionales son facilitadores de la Ley Laboral, capaces de
cambiar la cultura preventiva de las organizaciones, implementar
medidas para disminuir la accidentabilidad, mejorar los aspectos
Psicosociales, resolver incumplimientos de la Ley, etc. Entendiendo
además que no es mejor Prevencionista de Riesgos el que rebaja
más multas, sino, el que menos tiene que llegar a esas instancias.

Entonces podemos afirmar que es necesario según la Ley, hacer


Prevención de Riesgos, pero debemos internalizar que el hecho de
hacer Prevención de Riesgos, no es un gasto, sino una inversión,
dado que cada peso que se invierte en ésta materia, es un peso
que las organizaciones se ahorran a futuro por conceptos de
accidentes, licencias, adiestramiento, nuevas contrataciones,
demandas, aumento en la tasa de cotización y multas, lo que sin
duda afectará en la producción.

Les dejo un enlance, donde pueden descargar un tipificador de


multas actualizado, ahí se especifican el valor de una infracción
según la escala de la organización y los artículos que se
infraccionan.
http://www.dt.gob.cl/1601/articles-98361_recurso_2.pdf

Extintores; Como no ser estafado.


El día de hoy, escribiré acerca de los extintores. Yo trabaje durante
cuatro años en una empresa, a la que renuncie, debido a las malas
prácticas que ahí se llevaban a cabo. Esta empresa prestaba
servicios de mantención, recargas, ventas, entre otros. Debido a
esto me considero una persona que puede opinar del tema con
propiedad.

Todos nosotros cuando acudimos a una de estas empresas, y


llevamos nuestros equipos para su mantención, confiamos
ciegamente en que esto sucederá y que además los servicios
serán efectuados en talleres autorizados. Porque una cosa es que
el local este autorizado para realizar ventas, y otra muy distinta es
que el taller donde se llevarán a cabo las mantenciones lo este.

Dado al conocimiento que tengo, el cual fue adquirido como dije


anteriormente, puedo asegurarles a ustedes que la gran mayoría
de estas empresas, sino todas, mantienen prácticas un tanto
deplorables, es decir, no hacen lo que dicen. Sí es verdad, en estos
momentos usted se estará preguntando ¿cómo?.

A continuación, les explicare de forma breve un par de consejos


que seguramente le serán de mucha ayuda al momento de solicitar
la mantención de sus extintores. Lo primero es saber si nuestros
equipos necesitan una mantención o una recarga, la gran
diferencia que existe entre las dos, es la siguiente; la mantención
tiene estricta relación con la fecha de vencimiento de su equipo,
vale decir, si ya transcurrió un año desde la última mantención y
aún el manómetro (ver imagen de los componentes del extintor)
de su equipo está indicando el color verde, lo que significa que está
cargado y apto para su utilización, debe abrirse el equipo, revisar el
agente de extinción, revisar los componentes del extintor, cambiar
el anillo de goma y finalmente presurizar el equipo nuevamente,
nada más.
La recarga se utiliza cuando los extintores fueron utilizados y por
tanto se requiere el llenado del agente de extinción nuevamente,
debemos tener en cuenta que una utilizado un extintor, es
recomendable vaciarlo por completo, dado que en muchos talleres
llenan los extintores con un agente extintor de un grado distinto, lo
que puede casar problemas al mezclarse distintos tipos de
agentes. Obviamente después de llenar los equipos deben cambiar
el anillo de goma, revisar los componentes y presurizar
nuevamente los equipos.

Hasta aquí todo va muy bien, pero realmente ¿estarán haciendo


esto las empresas?, en las que confiamos nuestra seguridad, eso
nunca se podrá saber, pero podemos tomar medidas, para evitar
que nos estafen, y que cuando enviemos nuestros equipos,
cambian solamente las etiquetas, la fecha y nos facturen por un
servicio que claramente no nos están brindando. Y esto se los
aseguro la mayoría de las empresas lo hacen, sino todas.

Para evitar todo lo mencionado anteriormente, asegurar nuestra


integridad y la de nuestra organización debemos hacer lo siguiente:

Inventariar todos nuestros extintores, anotando su certificación y año


de fabricación, así evitaremos que cambien nuestros equipos por
unos con año de fabricación menor al nuestro. A modo de ejemplo
imagina que usted tiene un vehículo año 2016 y lo lleva a un taller,
para su mantención y en el taller al cabo de unas horas le entregan
un vehículo de iguales características, color y tamaño, pero año
2014, eso es lo que sucede.
La certificación es el número que tiene este adhesivo, el año
aparece abajo del código. Debemos también tener cuidado en que
estos adhesivos no sean falsos, eso sólo lo podemos apreciar
observando detalladamente, los originales por lo general tienen una
especie de brillo y figuras que se aprecian al mover el extintor, así
como los billetes, y obviamente los falsos los notamos porque nos
papeles impresos, pegados con cinta de embalar.

Si vamos a enviar nuestros equipos a mantención y estos nunca


fueron utilizados, es recomendable desactivar el seguro y percutar
los extintores, manteniendo cuidado en no descargarlos
completamente, lo único que buscamos con esto es liberar el
nitrógeno en su interior, una vez percutemos el extintor quedará
sonando y demorará aproximadamente 30 minutos en liberar todo
el gas, eso lo podemos observar en el manómetro de los extintores.
Esto aplica solamente a extintores que tengan manómetro, como
los de Polvo Químico Seco, los de Acetato de Potasio y carros de
extinción. En estos últimos es cuando más se nota la estafa que
realizan las empresas, dado al elevado precio de la mantención y/o
recarga, que además algunas empresas realizan en terreno, en no
más de 30 minutos.

El aumento de enfermedades relacionadas con la exposición


directa a rayos UV, es una realidad en nuestro país. Los sistemas
de atención y tratamiento cada año están más colapsados, es por
eso que el MINSAL, el día 26 de Mayo de 2011, publicó la Guía
Técnica sobre Radiación Ultravioleta de Origen Solar.

El objetivo de esa Guía Técnica es entregar directrices orientadoras


tanto para la identificación y evaluación del riesgo de la radiación
ultravioleta (UV) de origen solar, así como las medidas de control
ingenieriles, administrativas y de elementos de protección personal
a implementar por los empleadores, incluyendo el trabajo conjunto
que deben realizar con los administradores del seguro de la Ley N°
16.744. (MINSAL, 2011, p.6).

Según lo mencionado anteriormente, podemos concluir que todas


las organizaciones tienen conocimiento sobre el daño al que se
exponen sus colaboradores, pero la pregunta es ¿realmente las
organizaciones se están preocupando de esto?. Con la finalidad de
facilitar la información relacionada a este tema, es que se publica
este artículo.

Primero debemos comenzar preguntándonos:

¿Qué es la radiación ultravioleta solar?

La radiación ultravioleta (UV) es un tipo de onda electromagnética


que viaja desde el sol hacia la tierra, al igual que la luz visible y la
radiación térmica. La radiación UV que alcanza la superficie
terrestre está compuesta principalmente por rayos UVA y un
pequeño componente de rayos UVB.

El daño que presente un colaborador, dependerá de varios


factores, pero sin duda los mas importantes son: el tiempo de
exposición y la intensidad de la radiación. Podemos agregar que
existen barreras naturales, pero eso dependerá del
rango etario, genética y color de piel entre otros, estos factores
pueden afectar que nivel de daño recibe la persona.
Efectos en la salud más comunes:

 Cáncer y enfermedades a la piel.


 Eritema.
 Envejecimiento prematuro de la piel.
 Daños en los ojos (Queratoconjuntivitis Actínica, cataratas)
 Quemaduras en la piel.
 Efectos sobre el sistema inmunológico.

Marco Regularotio.

En el D.F.L. Nº1, “Código del Trabajo”, del Ministerio del Trabajo y


Previsión Social, se indica en el Artículo 184: “El empleador estará
obligado a tomar todas las medidas necesarias para proteger
eficazmente la vida y salud de los trabajadores,
manteniendo las condiciones adecuadas de higiene y seguridad en
las faenas, como también los implementos necesarios para
prevenir accidentes y enfermedades profesionales. Deberá
asimismo prestar o garantizar los elementos necesarios para que
los trabajadores en caso de accidente o emergencia puedan
acceder a una oportuna y adecuada atención médica, hospitalaria y
farmacéutica.

Corresponderá también a la Dirección del Trabajo fiscalizar el


cumplimiento de normas de higiene y seguridad en el trabajo, en
los términos señalados en el artículo 191, sin perjuicio de las
facultades conferidas a otros servicios del Estado en virtud de las
leyes que los rigen.”

En la Ley 16.744, “Establece normas sobre accidentes del


trabajo y enfermedades profesionales”, de 1968 del Ministerio del
Trabajo y Previsión Social, se indica en su Artículo 67: “Las
empresas o entidades estarán obligadas a mantener al día los
reglamentos internos de higiene y seguridad en el trabajo y los
trabajadores a cumplir con las exigencias que dichos reglamentos
les impongan.

Los reglamentos deberán consultar la aplicación de multas a los


trabajadores que no utilicen los elementos de protección personal
que se les haya proporcionado o que no cumplan las obligaciones
que les impongan las normas, reglamentaciones o instrucciones
sobre higiene y seguridad en el trabajo. La aplicación de tales
multas se regirá por lo dispuesto en el Párrafo I del Título III del
Libro I del Código de Trabajo.”
En la Ley 20.096, “Establece mecanismos de control
aplicables a las sustancias agotadoras de la capa de ozono”, de
2006 del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, se
indica en su Artículo 19: “Sin perjuicio de las obligaciones
establecidas en los artículos 184 del Código del Trabajo y 67 de
la Ley Nº 16.744, los empleadores deberán adoptar las
medidas necesarias para proteger eficazmente a los
trabajadores cuando puedan estar expuestos a radiación
ultravioleta. Para estos efectos, los contratos de trabajo o
reglamentos internos de las empresas, según el caso, deberán
especificar el uso de los elementos protectores correspondientes,
de conformidad con las disposiciones del Reglamento sobre
Condiciones Sanitarias y Ambientales Básicas en los Lugares de
Trabajo.
Lo dispuesto en el inciso anterior será aplicable a los funcionarios
regidos por las Leyes Nº 18.834 y 18.883, en lo que fuere
pertinente.” Este último párrafo indica que dichas disposiciones son
también obligatorias para trabajadores regidos por el Estatuto
Administrativo y Estatuto Administrativo para Funcionarios
Municipales.

En el D.S. Nº594, “Reglamento sobre condiciones sanitarias y


ambientales básicas en los lugares de trabajo”, de 1999 del
Ministerio de Salud, en su Artículo 109 (Anexo 1), se indican los
límites permisibles y los tiempos máximos de exposición a
radiación ultravioleta.

En el mismo reglamento, se indica en su Artículo 53: “El empleador


deberá proporcionar a sus trabajadores, libres de costo, los
elementos de protección personal adecuados al riesgo a cubrir y la
capacitación necesaria para su correcto empleo, debiendo,
además, mantenerlos en perfecto estado de funcionamiento.

Por su parte, el trabajador deberá usarlos en forma permanente


mientras se encuentre expuesto al riesgo. “Y en su Artículo 54: “Los
elementos de protección personal usados en los lugares de trabajo,
sean éstos de procedencia nacional o extranjera, deberán cumplir
con las normas y exigencias de calidad que rijan a tales artículos
según su naturaleza, de conformidad a lo establecido en el Decreto
Nº18, de 1982, del Ministerio de Salud. “Adicionalmente, el D.S.
Nº18, “Certificación de calidad de elementos de protección
personal contra riesgos ocupacionales”, de 1982, del Ministerio de
Salud, indica en su Artículo 1: “Los aparatos, equipos y elementos
de protección personal contra riesgos de accidentes del trabajo
y enfermedades profesionales que se utilicen o comercialicen
en el país, sean ellos de procedencia nacional o extranjera,
deberán cumplir con las normas y exigencias de calidad que
rijan a tales artículos, según su naturaleza.”
En la Resolución Exenta Nº1203 “Se pronuncia sobre
consultas respecto de elementos de protección personal”, de
2006, del Instituto de Salud Pública de Chile, se indica que,
para aquellos elementos que no existe norma o servicio
desertificación en el país, se recomienda aceptar su
comercialización bajo normas extranjeras y
consecuentemente, que los fabricantes, importadores o
comercializadores de tales productos dispongan de los
documentos, información y marcado que establezcan tales
normas para el conocimiento de sus clientes según solicitud.
Finalmente, para el caso específico de los protectores solares en
forma de cremas, estos deben estar registrados en el Instituto de
Salud Pública de Chile, tal como lo indica el D.S. Nº239,
“Reglamento del Sistema Nacional de Control de Cosméticos”, de
2002, del Ministerio de Salud. En este contexto la Resolución
Exenta Nº193, “Define criterios respecto de la rotulación de los
productos cosméticos destinados a la protección solar”, de 2007,
del Instituto de Salud Pública de Chile, donde a su vez se define
que la eficacia de los protectores debe ser determinada a través del
Método de Determinación Internacional del Factor de Protección
Solar, actualizado en 2006. En la misma resolución, se establecen
criterios para la clasificación de los protectores solares de acuerdo
a su eficacia, la rotulación y las instrucciones de uso que deben
acompañar al producto.

En la actualidad, a través de éste proceso de registro, donde se


verifican la calidad, la estabilidad y la eficacia de los productos; se
garantiza, bajo ciertos parámetros, las prestaciones de los
bloqueadores solares en forma de crema, aunque dicho proceso no
constituye una certificación propia mente tal, acorde a la legislación
aplicable a su uso en el ámbito laboral.
Los empleadores deben identificar a sus trabajadores expuestos a
radiación UV de origen solar, detectando los puestos de trabajo e
individuos que requieran medidas de protección adicionales.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), no existe un


criterio exacto de trabajador expuesto” y es de difícil definición. La
evidencia indica que los factores que afectan la radiación UV de
Origen Solar, son: elevación del sol (ángulo cenital), latitud,
cantidad de nubes, altitud (metros sobre el nivel del mar), grosor de
la cubierta de ozono y albedo. “Trabajadores/as expuestos/as a
radiación UV de origen solar” son como aquellos que ejecutan
labores sometidos a radiación solar directa en días
comprendidos entre el 1° de septiembre y el 31 de marzo, entre
las 10 y las 17 horas, y aquellos que desempeñan funciones
habituales bajo radiación UV solar directa con un índice UV
igual o superior a 6, en cualquier época del año.

Potrebbero piacerti anche