UNIVERSIDAD PERUANA UNION

FACULTAD DE TEOLOGÍA

E.A.P. TEOLOGÍA

ANALISIS DE LECTURA DE LOS LIBROS:

“ÉL NOS AMABA” (A. Bullón)

“EN EL PAIS DE LOS INCAS” (F. Stahl)

“LA MANO DE DIOS AL TIMÓN” (E. de Oliveira)

“BREVE HISTORIA DE LA EDUCACIÓN

ADVENTISTA EN EL PERÚ 1898-1996” (M. Alomía)

Trabajo hecho en cumplimiento parcial

de los requisitos para el curso de
Historia de la Iglesia Adventista

Por
Samuel Obispo Saavedra
 Villa Unión, Noviembre del 2002
Título del libro: “Él nos amaba”
Autor: Alejandro Bullón.
Páginas: 155
Horas: 7

Este libro me ha dado grandes lecciones para el ministerio, de cómo es que un hombre
sincero que tiene una misión cristiana va siempre al frente, con una gran confianza
puesta en Dios. Tal es el caso de Fernando Stahl quien introduciéndose en la selva
peruana avanzó y avanzó sin importarle las incomodidades que ello significaba o las
constantes amenazas de muerte que tuvo, pues su amor por los hombres que no
conocían a su amado Dios era su motivación más grande para cumplir su misión y
proclamarles acerca del amor de Jesús. Era un hombre valiente que reflejó el servicio
como yo pocas veces he visto en un hombre de la actualidad, era su vida un servicio
práctico. Me atrevo a decir que casi fue un reflejo de lo que Jesús hizo en la tierra
pues con la ayuda de Dios sanaba a los enfermos, les proclamaba el amor divino y aun
ahora después de muerto “sus obras siguen.” Para mi ministerio aprendí lecciones de
casi un perfecto amor a Dios puesto que pienso que el que lo ama en verdad con gusto
pasaría por lo que pasó Stahl. Amor al prójimo como pocos tienen, siendo reconocido
por ello “él nos amaba.” Quiso llegar a todos con el mensaje divino sin importarle que
estuviesen en su contra y con ganas de eliminarlo; la obra de Stahl en la selva peruana
ha sido una verdadera inspiración para mi vida en este sagrado ministerio al que Dios
me llamó.
Título del libro: “En el país de los Incas”
Autor: Fernando Stahl.
Páginas: 287.
Horas: 10

El solo hecho de leer un libro como Fernando Stahl ya me es inspirador. Un hombre

consagrado como pocos. Me deja lecciones de valentía pues es un hecho de que está
totalmente convencido que Jesús el todopoderoso lo acompaña en donde esté y me
recuerda el texto “si Dios con nosotros quién contra nosotros” y es evidente que este
texto lo tenía bien claro por el hecho de trabajar con empeño en esa selva peligrosa.
El amor retribuido de las personas a las que él llegó es reflejado en una ocasión
cuando enfermó de reumatismo y su esposa les pidió a esas personas que se acordaran
de pedir por él a Dios en sus oraciones, a lo que ellos contestaron: “oramos por él de
día, de noche, a media noche, salimos a la llanura y oramos allí por él;” es hermoso ser
parte de la “familia” cristiana. Su esposa fue una mujer que entendió el ministerio
que Jesús les encomendó como familia y ella ayudó a la obra divina con mucho gusto y
dedicación. Stahl fue apedreado, también enfermó de tifoidea, y siempre tuvo
amenazas de muerte de gente muy perversa, pero él las veía como personas
necesitadas de ayuda y del gran amor de Dios; sin duda volví a notar que él amaba a
los que Dios ama.
Título del libro: “La mano de Dios al timón”
Autor: Enoch de Oliveira.
Páginas: 318.
Horas: 12.

La gran lección que saco de este libro es principalmente la de sentirme seguro de que
Dios está al control de su obra y avanzará “hasta llegar a puerto;” cuando uno lee
biografías bíblicas (y al compararlas con estos hombres que iniciaron la obra de la
IASD) y ve como termina aquel que finalmente avanza con Dios, se dará cuenta de
que hay seguridad y salvación para aquel que por amor y por ser llamado cumple
fielmente con la misión que Dios le dio. El resultado de la fidelidad será siempre el
mismo, una recompensa divina de felicidad y vida eterna. Hay seguridad en seguir las
pisadas de Jesús. El libro muestra como es que por el contrario aquellos que
decidieron apartarse de la iglesia y no seguir siendo parte del pueblo de Dios acabaron
tan mal y murieron sin esperanza obedeciendo antes al maligno y haciendo mucho
daño a la iglesia. Me admira pensar como hubiera sido pasar por lo que pasaron
aquellos que esperaron al Señor el 22 de octubre de 1844, ellos lloraron como niños
luego de darse cuenta que cosa peor en la vida no podría existir, Jesús no había
venido, pero eran tan sinceros que finalmente no desmayaron y confiados siguieron
predicando de Jesús y analizando las profecías, ellos ya tienen su recompensa en el
cielo. Otra lección que aprendí es que no importa cuan débil creas que eres, o cuan
impotente te sientas para hacer la obra de Dios, cuando Dios llama él revitaliza y nos
llena de poder, tal como lo hizo con la profetiza Ellen White quien siendo mujer y
débil por un golpe que había recibido años antes hizo tanto por la iglesia y sin duda ha
sido para muchos desde que ella inició una luz (menor) que nos ha hecho entender
muchas cosas bíblicas y recomendaciones divinas para nuestro tiempo, “sus obras
siguen” han encaminado y siguen ayudando a miles por medio de sus escritos.
Título del libro: “Breve historia de la educación Adventista en el Perú 1898-1996”
Autor: Merling Alomía.
Páginas: 100.
Horas: 7

Aprendí lecciones de valentía y perseverancia por parte de los que iniciaron la obra
Adventista en el Perú y los que prosiguieron con esa empresa. En un tiempo cuando
la libertad religiosa no estaba garantizada es cuando hombres como Forga, Zúñiga,
Stahl y Kalbermatter se levantaron sin temor ante la temible oposición de los clérigos
y muchos pobladores perversos, ellos se abrieron paso “literalmente en medio de
sangre y fuego” en “valles de sombra y de muerte” pero andaban confiados en el
temor de Dios. Zúñiga fue perseguido; Stahl fue apedreado y casi quemado vivo; se
pusieron 5 cabezas humanas a la puerta de la Sra. Wilcox, en fin estos hombres
sufrieron los embates del enemigo pero no desanimaron con tal de empujar la
educación Adventista en el Perú y terminar por cimentarla. Aun más adelante en
1929 cuando gobernaba Leguía se promulgaron leyes que decían que en todo colegio
no se debía enseñar otro credo que no sea solo católico, esto afecto mucho a la
educación Adventista y 33 escuelas se cerraron, pero he aprendido que nada impedirá
que la obra de Dios se proclame en el mundo por los medios que él decida; la obra
avanzará con o sin nuestra ayuda y será mejor que nos decidamos a estar desde ya de
parte del más poderoso y que tanto nos ama.