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ENSAYO DE SEXUAL

Sexualidad más allá de los límites estrechos en los cuales esta se mantenía
por su definiciónl, no sólo no la reduce a la sexualidad como función de la
reproducción, sino que la plantea como función de placer, vinculada a los
impulsos, al deseo, al mundo afectivo o sentimental, y a los llamados
problemas sexuales y sentimentales en sentido amplio; por otra parte, hace
remontar el comienzo de la sexualidad a la primera infancia, la sexualidad no
comienza en la pubertad, sino desde la infancia más precoz, y que sigue un
desarrollo en el que pueden aislarse diferentes etapas sucesivas, en las que
entran en juego diversas zonas erógenas

El término sexualidad se refiere a una dimensión fundamental del ser humano,


basada en el sexo, incluye al género, las identidades de sexo y género, la
orientación sexual, el erotismo, la vinculación afectiva, el amor y la
reproducción. Se experimenta o se expresa en forma de pensamientos,
fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores, actividades, prácticas, roles y
relaciones. La sexualidad es el resultado de la interacción de factores
biológicos, psicológicos, socioeconómica

La sexualidad se manifiestan biológicamente como necesidades y


psicológicamente como deseos.

Las etapas que experimenta y cómo se desarrolla en cada una de ellas.

TAPA ORAL zona erógena: la boca, labios, lengua, etc. se relaciona con la
sensación placentera de ser alimentado y cuidado por adultos. Independencia
del placer respecto de la alimentación.

ETAPA ANAL Zona erógena: el ano, se relaciona con la actividad de retener,


expulsar.

ETAPA fálica Zona erógena: los genitales. Se obtiene placer al tocar y


reconocer el propio cuerpo.
ETAPA latencia existe una aparente desaparición de los impulsos sexuales.
Se produce de las experiencias vividas durante las etapas anteriores.

ETAPA genital: zona erógena: cuerpo y órganos sexuales del sexo opuesto.
Goce con la compañía del sexo opuesto. Se inicia con la pubertad. el desarrollo
normal se constituye en la relación heterosexual. Implica la superación del
complejo de Edipo. se alcanza la madurez afectiva.

El complejo de Edipo: es una fantasía y un proceso de identificación propio de


la etapa fálica. El niño sufre un amor fantasioso e idealizado por su madre.
Complejo de castración. al darse cuenta de la imposibilidad de la relación se
identifica con los roles masculinos. Más tarde proyecta el amor recibido desde
la madre en un interés heterosexual. .

La inclinación sexual, se deriva de procesos identifica torios que se generan


entre el niño y el padre, y la niña y la madre. De este modo, se determina el
objeto de deseo erótico y/o amoroso que brindará gratificación sexual.

Señalo cómo las primeras impresiones sexuales de nuestro desarrollo, dejan


las más profundas huellas en nuestra vida anímica y pasan a ser determinantes
de nuestro desarrollo sexual posterior, y que la desaparición real de tales
impresiones infantiles obedece a un mero apartamiento de la conciencia
(represión). Esta suerte de amnesia de vivencias sexuales infantiles, conduce
al hombre a esforzarse por dilucidar el misterio de su sexualidad, recurriendo a
intuiciones y conocimientos preconceptuales para intentar darle sentido a su
experiencia sexual subjetiva

no se puede pensar en la constitución de la sexualidad sin antes tener un


conocimiento claro de las relaciones que establece el sujeto con el otro a lo
largo de su historia de vida. Asimismo, ubicó en un lugar central al inconsciente
para entender la sexualidad de hombres y mujeres; señaló que para formar
parte de una sociedad renunciamos bajo ciertas circunstancias a nuestros
deseos sexuales más primitivos; constituyendo el deseo sexual uno de los
polos del conflicto psíquico más comunes observados en hombres y mujeres.
El bloqueo de tales deseos sexuales. El niño sirve como objeto de seducción
por parte de un adulto perverso, desviante en cuanto al objeto porque es
podofolio, y en cuanto a la meta porque busca satisfacer sus necesidades con
ese niño. La meta sexual infantil y adulta consiste entonces en sustituir la
sensación proyectada sobre la zona erógena, por aquel estímulo externo que la
cancele al provocar la sensación de satisfacción. Si bien existen zonas
erógenas predestinadas (boca, ano, genitales), cualquier otro sector de la piel o
de mucosa puede prestar los servicios de zona erógena. Vale acotar que para
la producción de una sensación placentera, la cualidad y naturaleza del
estímulo es más importante que la parte del cuerpo afectada.

El niño luego de haber pasado por el período oral, donde la meta sexual era la
incorporación del objeto, y el sádico - anal, en la que la meta era apoderarse
del otro o dejar ser controlado por el otro; con el resurgimiento de la actividad
sexual, el varón asume que la mujer ha sido castrada, y se produce el complejo
de castración, el temor de ser burlado como sujeto. Es el miedo o temor a la
castración lo que moviliza la actividad del varón, y la envidia del pene la que
moviliza la de la hembra (Freud, 1905). De este modo se desarrolla el complejo
de Edipo, colocar como objeto de deseo al progenitor del sexo opuesto, y
entender al del mismo sexo como rival.

la actividad sexual viene a ser una expresión de un “Yo” que se construye en


función de la realidad, el “Yo” del sujeto se nutre con significaciones sexuales
compartidas en el imaginario social. La sexualidad, no es entonces una
propiedad de individuos atomizados o aislados, sino de sujetos sociales
integrados dentro de un contexto de distintas y diversas culturas sexuales.
Sexualidad infantil es sucumbir a la represión, pero las mociones pulsionales
reprimidas continuarán siendo eficaces, esto es, seguirán produciendo efectos
en el psiquismo. La represión de la sexualidad infantil y su posterior olvido
marcan otra característica de la sexualidad humana: su constitución en dos
tiempos. Entre el primer tiempo y el segundo se halla un intermedio, un período
de latencia, un adormecimiento de lo sexual, que de ninguna manera implica su
desaparición.

Opinión critica
El tema de la sexualidad es para hablarlo con todas las personas sin importar
la edad. Un hombre o una mujer manejan su sexualidad desde el momento que
esta en el vientre, ya que es allí donde comienza el desarrollo de los órganos
reproductores. La forma en que cada familia asume la sexualidad en su vida,
su cultura, valores y creencias, los temas de manera libre o con rejuicios, ante
sus hijos. Desafortunadamente, lo más común en nuestra sociedad son los
prejuicios y el miedo a hablar de sexualidad, por eso no es muy común el
diálogo con los adolescentes

Bibliografía
Freud, S. (1905) Tres ensayos de Teoría Sexual. Vol. VII. Editorial Amorrortu,
Buenos Aires

Tubert, Silvia. Sigmund Freud: fundamentos del psicoanálisis. EDAF, 2000.


Madrid, España

La planche, J. (2013). Pulsión e instinto. Revista de psicoanálisis, 1, 1-12.


Traducción de: Pulsión et instinct. (2000). Adolescence, 18, 2, 649-668.

Freud en 1905, en su obra “Tres Ensayos sobre una Teoría sexuales.

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