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J.

SEVERINO CROATIO

.. PAUTAS HERMENEUTlCAS

EOICI0N REVISADA
'INTRODUCCION
Este ensayo hermenéutico) escrito y publicado por 17ri-
mera vez hace ya cinco años) reaparece ebor« con varios
cambios. La naturaleza misma del discurso he-rmenéutico
itnpide su fijación y reclama S1t relectura a partir de procesos
que "des-oculten" el sentido. N o que la teología sea cambia·
diza y por tamo superficial. Justamente porque debe profun-
dizar la búsqueda de Dios debe saber captarlo en los aconte:
cimientos y expresar su epifanía en IIn discurso siemprenue-
VD.
La intención de estas reflexiones es la de aportar algu'
,nos elementos eplstemologicos a la teología de la liberación,
5i17 dttda que importa el tema -en cuanto núcleo del'men-
saje bíblico- pero destacamos más el modo como se' .temati-
za, e1Z el inteiior de la Biblía}et querigm« de la liberación}
asttmié1zdolo cual modelo de proceso hermenéutico. Desea-
brir las posibilidades 'de relecue« del éxodo no significa ,ha-
blaf sólo del éxodo/ por el contrario; queremos con ello res-
traer su capacidad de generar aC01itec~mtentos nuevos con
sus lecturas correspondientes (1). De cualquier manera} si
tematizamos el éxodo es porqtte la teología latinoamericana
1)1 Pensamos que 3.L. SEGUNDO, Liberación de la tec1lo,gía
(Lohlé, Buenos Aires, 1975) p. 129 nota. no vio lafntención
metodológica de nuestro, análisis, al referirse al tema,

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del éxodo no es simplemente U1'l- l/despuéslJdel acontecimien·
to salvífico-9uanto más distante del acontecimiento es su
tiene alLí un- foco significativo de primera magnitud, una
lectura, tanto más desimplicadora del sentido es (5) • sino
luz inagotable. . . un rldespués" contextual que suscita la "memoria' de aquél
. A esta altura de nuestros procesos históricos, da la ~m·
porque el pueblo está nuevamente oprimido o teme estar-
presión de que ya no hay que hablar de, teo!ogía de la ltbe·
lo: se celebra la liberación no como simple acción de gracias
ración sino de la del "cauuueric", o volver St1ñplemente a la triunfal sino como reconocimiento de la fe en el Dios libe-
teología clásica. U11- desprestigio de aquéll~ dif~~dido con rador que todavía puede liberar. Recordemos, de paso, cuánto
mala intención por quienes no desean la lzberaczon real 4e el Déutero-Isaías utiliza el teologúmeno del "nueoo éxodo",
Amél'ica Latina (2) o el miedo a un presunto antropologts· no como imagen literaria sino ante todo como clave de es-
mo en desmedro de la "reoelación" o del obrar divino, no' peranza (6). Teología de la liberación es entonces una teo-
hacen sino más urgente el reclamo de ahondar metodológi- logía del proceso de liberación, y no de la libertad adquirida.
cemente en el tema de la liberación (3). ¿Y es verdad que Proceso que tiene más sombras ahora que hace unos años;
la teología del exilio debe pasar ahora' al primer plano de pero proceso al fin y al cabo, y no cautiverio sin esperanza.
la reflexió11-? Para ser correcta, esta última (4) no hade ser Para no crear confusiones, habría que desterra» el denomi-
un desdoblamiento de 'la teología de la liberación. El cam- nativo de "teologi« del cautiverio", y entender que una teo-
bio de perspectit'a es oportuno si se quiere salir al paso de logía de la liberación se hace desde la opresión ( can etapas
los triunfalismos prematuros, y tomar, .una mayor conciencia ó vicisitudes cambiantes del proceso liberador) y no desde la
del sufrimiento y del martirio que implica el cautiverio en libertad.
el que estamos. Pero eso mismo indica que lo que importa La acusación de antropologismos dirigida a la teología
no es el cautiverio sino la liberación del mismo, La teología de la liberación viene de la teología clásica que tiene d Dios
2) Véase,por ej ernplo, la orientación predominante de la re- ya l/encerrado" en las Puentes.. y a quien hace o~jet.o de ,u~a
vista Tierra Nueva de Bogotá. . fe di}tante. Dejando de lado que esta fe es mas tdeologtca
3) Eistápreocupación metodológica es la riqueza principal de que aceptación d~l Dios bíblico. de la hist~~ia,queremos ha-
la cbra citada de J.L. SEGUNDO. Ver además, l. ELLACU-
RIA "Tesis scbre-posibilidad, necesidad y sentido de una cer dos obseruaeiones que concternen temattcamente a lo ex·
teología latinoamericana", en VAR~OS. Teología y mundo puesto en este li,bro. Por un lado, el Dios. bíblico. no es el
ccntemperáneo (Homenaje a Karl Rahner) (Cristiandad,
Madrid, 1975), pp. 32lY.350; "Christus'' (México) 40 n.471 Dios de las Fuentes (objeto de estudio y del« razón) sino
(1975) 12-16 Y n.472, p.l7-23; R.'VIDALES, "Cuestiones en Dios·de-Ia-historia del que nos hablan las Fuentes como "memo-
torncal método. de la teología de la liberaeión", en Eneuen-
ka Latino Americano de Teología. Liberación y Cautiverio 5) P RICOEUR, "La función hermenéutica de la distancia-
(México. 1976) pp, 255'260. . ciÓn", en VARIOS, Exégesis (La Aurora, Buenos Aires, en
4) En una forma más elaborada, ver L.BOFF, Teología desde prensa).
el cautiverio, Indo American Press Servíce, Bogotá, 1975; 6) Is 40:3s5; 41:17-20; 43:16c21; 48:21; 51:9:11; 52:,11-12.
J!d.. "Que é íazer teología partindo de urna América Latina
- em cativeiro" ,en "Revista Eclesiástica Brasíleíra'' 35 n.'140 3
(1975) 853·879 (=8ervir 11 n.58-59, 1975, 399-432).

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teológico un pensar dependiente, justammte porque no es
na". querigmática que ilttmina el actuar del Dios presente. un discurso universal sino contextualy -.más aún-' gf3ne·
El mensaje bíblico brota del acontecimiento salvífica (reto' rado en la praxir de liberación a partir de una situación de
meremos una y Otra vez esta clave hermenéutica), que es puno dependencia típicamente nuestra. Los europeos tendrán que
to de partida de la teología que, a su vez, ha de reelaborarse hacer su prOpia teología de la liberación, ahora más que
como discurso de fe sobre las siempre nuevas m'anifestacio- nunca, a partir de sus propios procesos liberadores. Pero a
nes de Dios en la historia (7). En segundo lugar -y según pesar de esto último, el cambio epistemológico que la teolo-
explicaremos en el cap. 1I,5, a) al final- la fe lee al Dios gía de la liberación latinoamericana introdujo dialécticamen-
actuante en la historia, pero se supone que en la historia de te en el discurso teológico es una adquisición irreversible y
los hombres y no en una historia especial para los cristianos. válida también para otros conteaos. Lo admirable es el he-
En otras palabras, los sucesos humanos han de ser descifrados cho de que la "teologia desde la praxis" no es una novedad
por la fe como lugar de la revelación de Dios. Ahora bien, latinoamericana sino 'el pU'nto de partida de la misma teolo-
cuando la teología de la liberación destaca la función de la gía bíblica, 'hecho cargado de consecuencias que queremos
praxis como lugar teológico, no está suplantando a Dios por explicitar.
el hombre sino que "busca a Dios" (para usar una expresión Lo que acabamos de afirmar nos remite a lo expresado
profética llena de contenido hermenéutico) (8) en el único al comienzo como intención de este ensayo: aportar a la epis-
lttgar donde se epifaniza, en la vida humana. Por eso, si temologis de la teología de la tiberació1~,asegurándola con-
queremos identificar al Dios liberador que nos salva todavía tra los ataques de ilegitimidad y, más que eso que es coyun~
hoy, es difícil encontrarlo fuera de los procesos de lib'eración tural) haciéndola más fecunda. Lallteología desde la praxis"
humanos. Yeso es ún acto de fe. Todo nuestro cap- 11 apun- es precisam.ente 810,. teología: tiene que hablar del Dios de,
ta a mostrarlo. la historia, y debe confrontarse continuamente con el querig-
Desde otro ángulo, algunos teólogos europeos critican ma bíblico de la liberación. c'Pero cómo lo hace? La lectura
la originalidad de la teología de la liberación, sin que por de los signos' de los tiempos es lo más opuesto a un concor
ello se opongan a la misma (9). Nadie puede negar que dismo literal de la biblia con una situación dada (ver cap. J,
buena parte del bagaje conceptual de los te610gos de la libe- 3.): buscar parecidos es quedarse en ttnaexterioridad. En
ración sea europeo de origen; pero eso no hace del discurso cambio, la teleaur« opera por dentro, conecta querigma y
7) Véase nuestro artículo: "Dios en el Acontecimiento": Re. situación por un eje semántico, désimplicando un f3XCeSO de
vista Biblic,a 34 n.l47 (1973) 52-60. sentido que se descubre tal justamente porque un nuevo pro-
S) Sobre la fórmula profética "buscar a Dios" comp. por ejem., ceso o acontecimiento aparece I 'dentro", sin haber estado en
plo, Isaias 5S:2; Jer 21.2; Ezeq 14:7; 20:1; Os 10:12; Aro 5:4,
etc. ) el horizonte de comprensión del autor bíblico (esa es la "ei·
9' Véase una sntesís de la problemática en J. MOLTMANN, ségesis", qtte entra en el texto sin ser subjetividad impertinen-
"Carta abierta' a Jesé Míguez Bonina", en Cuadernos de
Teología 4:3 (1976) 188-196.
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te). Este librito quiere por tanto instrumentar un método
de relectur« bíblica desde nuestra situación latinoamericana
que permita la construcción de una teología de la liberación
y evite el riesgo opuesto, cual es el de negar llanamente la
pertinencia de la biblia -en cuanto texto del pasado- co·
mo mensaje de liberación para nosotros-
CAPITULO 1

EN BUSQUEDA DEL "SENTIDO"


Orientación preJ:imi~ar

El enunciado de este título y el léxico puesto, en relieve en


todo el libro denotan una apropiación del l~flIguaje- de la herme,
néutica filosófica ,y, religiosa, en una línea' marc-adamente rícoeu-
risna, Conviene explicitaralgunos presupuestos para clarificar el
sentido mismo de lo que tratamos'. Como parte de Iasemíótíca
-pero desbordándola al propio tiempo-la hermenéutica es' la
ciencia de la comprensión del sentido que el hombre inscribe en
sus prácticas y en la, interpretación de 19s .mismas por la pala-
bra, por un texto o por otras: prácticas. Toda acción humana se
convierte en signo que hay que descodiñcarrcon mayor razón si
es Dios quien inscribe un sentido en los .acontecimientos. Entre
los 'principios hermenéuticos que usamos, conviene recordar los
siguientes: "
1. Un acontecimiento vhumano no se agota' en si mismo
ni en la crónica que lo describe, Es capaz de generar otros su-
cesos (a esto H. G.' Gadamer llama "efecto histórico" (lO). Ahora
no nos importa este' fenómeno desde 'el punto de vista de lacau-
salidad isino desde el 'de la comprensión: en efecto, el isentido
del suceso reciente se. descubre como ya incluido dentrll del primer'

·10) RG.GADAMER Wahrheit und Methode '(Moh~', Tubinga,


1965) 284 (hay versión castellana: Verdad yméwl!lo, Crís-
tiandad, Madrid, 1977). Comp. E. CORETH, Cuesttones run-
damentales de hermenéutica, (Herder. Barcelona, 1972),
161 ss.

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suceso. A medida que se alarga la cadena de sucesos, se acu-
mula retrospectivamente su significación en aquel punto de par- de las Escrituras pero simultáneamente interPretó las Escrituras
tida. desde el acontecimiento de Jesús. De hecho, e~ anterior el acon-
2. Este fenómeno' explica por qué algunos acontecimien- tecimiento (Jesús) que genera la . "palabra;" (el Nuevo Testa-
mento), pero esta última fue, posible a su vez comoreleetura
tos se constituyen en íundantes a nivel de la praxis, en reserva-
. de-sentido a nivel de la Comprensión. Mas no son tales desde del Antiguo Testamento. Estos tres aspectos subsumidos' en un
querígma (la Biblia: Antiguo y .Nuevo Téstamento como' inter-
el prlncipío-síno desde' su "efecto histórico". Por ello hay su-
pretación de Cristo) se constituyen en 'nuevo polo de una éír.
. cesos humanos que se sumergen en la oscuridad: y otros queau-
cularidad hermenéutica que nos abarca a" nosotros como polo
mentan su luminosidad a medida que otros hechos se compren-
complementario, y así sucesivamente.
den en su eje semántico.
3. Cuanto mayor .sea la distancia entre un suceso íun- 6.. A' la luz' de los aportes de la lingüistíca, con su dístín-
dante 'y otro fundado, tanto más densa será la significación ción entre lengua, habla (el acto de hablar) y escritura o texto
del primero. Es la función hermenéutica de la "dístancíaeión" P. Ricoeur muestra cómo, si la lengua es superada en el cÚs~
de que habla P. Ricoeur en sus escritos más recientes (11) y curso o acto de hablar, éste también es superado en la produc-
que él aplica en principio a la interpretación de los textos ción de la obra literaria. En el discursa, en efecto, el que habla
(ver, 6.) Veremos cómo opera esto en las relecturas del éxodo y el destinatario delimitan elsentido, de por sí pclisémico, de~
en la Biblia. . Iaapalabras que usan; el contexto referericial, por su parte, es
4. El acontecimiento es anterior a la palabra (ver cap. preciso: se habla con alguien sobre algo, ,en un momento y eh
Il, 2. Y 3.): ésta lo interpreta ydesimplica su reserva-de.sen- unIugar determinado. Ahora bien, cuando el sentido s'€ inscribe'
tído , El acto de interpretar es simultáneamente . el acto de a- en un texto, se modifican todos estos' elementos: el autor .ya
cumular el sentido. Cuando la palabra se apropia' el sentido no está presente, el lector no es .el destinatario original, el mar-
de un suceso, se lo está dando. Esto no es riada paradójico sino . coreferencial o "mundo del texto" no es el mismo. Aparece
la esencia misma de todo momento de la interpretación. La exé- por tanto una "distanciactón" entre el autor ¡y el intérprete' de
gesis es eíségesis, y nadie puede pretender hacer sólo la prime- una obra: ésta resulta polisémica (al revés' del acto de hablar
ra (es un subterfugio ideológíco.vconsciente o no). Ni las cien- . o discurso, que es clausurador del sentido) y abierta a una nue,
cias físicas son ajenas a este principio. 'va apropiación del sentido. Ricoeur elabora (prolongando ' .a
5. La mutua iluminación entre suceso' fundante y suceso Gadamer) la noción de "mundo del texto" (esas ..posibilidades
fundado, o entre aquél y su "palabra", o entre exégesis y eisé- de sentida del texto qué le vienen de s,u condición 'de "signo" .
gesis, condiciona y posibilita la "circularidad hermenéutica'.' (12), lingüístico que supera la frase y se hace estructura o compo-
ese itinerario de ida y vuelta que se da en el proceso de la sición codificada). Para/el intérprete, el "mundo del texto" es
interpretación. La iglesia primitiva interpretó a Jesús a partir I
un "delante del texto" '. (no, un "detrás"como .el autor). que' .se
abre a la comprensión desde su nuevo horizonte. Notemos q:ue
la exégesis tradicional busca identificar el sentido del texto' inqui-
11) P. RICOEUR, art.cit, en la nota 5. En ese estudio, Ricoeur
prolonga y corrige a Gadamer. . riendo par su "dstrás'L'(autor; tradlciones, formas ' literarias .an-
12) Ver R. LAPOINTE, Les troís dímensions de l'herméneuti- teriores), la hermenéutica añade la ~omprénsión,delsentido que
que, (Gabalda, París, 1968:); para una evaluación, J.!. VI- está "delante' del texto' (13).
CENTINI y A. LEVORATTI, en VARIOS, Mito Y hermenéu-
tica (El Escudo, Buenos Aires, 1973) pp. 11·29.
13) p'. RICOEUR, "La estructura, la palabra, el acontecimierr
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7. Puesto que las prácticas de un grupo 'o comunidad que
posee una "pertenencia" determinada se ubican en el eje' "acon-
tecímiento.íundante-proyecto histórico" ( =
"memoria" y "pro-
situación, entre la palabra bíblica sobre la liberación 'Y nuestros
procesos de líberacíón. Pero habrá una lectura hermenéutica del
fecía"), de una I u otra manera se genera el confticto de lli in-
mensaje b~blico solamente cuando, aquélla sobrepase el primer
terpretación: hay en efecto un exceso-de-sentido en la vida y sentidocontextual (no sólo del autor sino también de sus prime-
en toda praxis humana, que se concentra más aún en los he-
ros lectores) mediante la desimpUeaci{Ín de un exceso-de.sentido
ches fundantes y arquetípicos que sustentan el modo de ser de :manifestado a partir de una pregunta DUJeva dlirigida al t~to.
un grupo. Ahora bien, las prácticas sociales significan siempre, '
Estas guías ayudarán al lector a comprender el léxico usa-
e intentan ser, una aprolJiación del sentido, Y toda, apropiación do y sobre todo a captar el objetivo al que se orientan las re-
es agónica. La lucha (a nivel de prácticas, o a "nivel de la flexiones del libro; por el sentido mismo de 10 que vamos dicien-
simbólica) surge en cualquier momento, en la vida .consciente do, los capitulas II a VI no se pueden aislar entre si, sino que
del hombre. En cada práctica, algo nace y algo muere. se explican mutuamente y llevan a la conclusión sintetizada en
VI, 5.
8. La división es una, forma de apropiación del sentido;
al que nadie puede totalizar (pero se pretende hacetlo!). La hís 1. Biblia y "liberación",
toria muestra que el surgimiento de nuevos: grupos o tradício- Tratar del tema bíblico de la "liberación" supone en prín-
nes es la expresión de una apropiación del sentido. El mismo cipio que hay un eontenid? querigmético. la Bibli~ no ,dis,cute
cristianismo nace de un conflicto de ínterpretacíón: las prácticas "nociones" sino que enuncia y anuncia un mensaje , SI dISCU-
de Jesús (y. las palabras. que las acompañaban) no fueron in- te son las actitudes de los hombres las que interpela, Por. tan-
terpretadas' como una' innovación sino como una recuperación to: cuantas veces leemos un relato de ~iberación del pueblo de
del querigma originario de Israel, entrando en conflicto con la Israel sornes advertidos sobre un llamado a n:OlSOlros y somos
interpretación farisaica del mismo. Como veremos, el problema provocados a una búsqueda del "sentido" de lo que Dios hizo
de Jesús fue con los ludios y no con los romanos (el. conflicto y, por eso, "dijo" como Palab~ ¡·Con todo esto queremos .sig~
de interpretación se genera en el seno de una 'pertenencia sim- niñear que es muy serio y, arriesgado conversar sobre la Idea
bólica y cosrnovisional). Este fenómeno es reconocible en lo po- bíblica de "liberación". Uno va teniendo en las manos una Pa-
lítico, en lo ideológico y en todos los planos de la praxis huma- labra detonante: sirve para "hacer" (JI mata al que no la usa, .'.
na (y su teoría correspondiente). "Liberac'ón" es un vocablo tan usado en estos tiempos, co-
mo lo era el de "salvación" (sotería) en la época de Cristo: no
9. A 'la luz de estos presupuestos, aquí brevemente rese- sólo en Palestina sino también 'en todo el ámbito! helenístico, e~
ñados', podemos hablar de una dialéctica circular. entre acónte- ra una de las palabras claves que encierran toda una cosmovi-
cimiento y palabra, y parlo mismo también entre querigma y sión. Así también seda ~r término "gnosis" en los, primeros síg-
glos cristianos, y fueron los de "humanismo", "exístencialismo",
etc.,en los últimos tiempos y es ahora el de "liberación". Todo
to", en El eonñícto de las inte,rpretaeiones B: Hermenéutica el mundo lo usa, necesita usarlo, aun sin entenderlo, aun "in-
y estrueturalísmo (La Aurora, Buenos' Aires, 1975)89-108; troyectándolo" en su prop'a cosmovisión antiliberadora (se ne-
Id., en el arto cito en la nota 5 (par. 3: El discurso como
obra; 4: El mundo de la obra; 5: Comprenderse delante de cesita de'todos modos "usar" de la palabra para quedar bien y
la obra), \ no ser denunciado como anticuado o reaccionario), Cuando una
palabra-clave y cosmovisional se generaliza, pierde intensidad y
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se agota su poder interpelante. Una vez más, ello nos indica que tamiento o enadtece valores secundarios sumergiendo los superio- .
son los hechos los que recargan de sentido ala palabra, Vale lo res. Todos conocemos la gama de "paternalísmcs" (v. gr. en.el
del Evangelio: "no todo el que dice "Señor, señor" ... , sino el origen familiar 01 estatal), "rnaternalismos' '. (caso típico:, e~ de
que-hace ... " (Mateo' 7:21). Será la reaüd3d la que permitirá la Iglesia-estructura COIffiO madre superprotectora), colonialismos
discernir entré quen "habla" de liberación y el que está metido de los países viejos sobre los nuevos, de los más ricos sobre los
en su proceso. Ahora bien, "liberación" es una palabra que to- más pobres, o las tantas formas de opresión social (blancos con-
davía "habla" y "dice': mucho, llena de esperanza por lo que t.~~ negros, patrones contraob:e~os,. pudientes contra ?esam~­
trae desde su alumbramiento en la historia del éxodo y por lo rados por el derecho, clases privsleg'adas contra las mas humíl-
que puede ser "recargada" a partir de los genuinos hechos li- des, gente de poder contra gente del llano, etc.) En todos los
beradores. sobre todo en nuestra América Latina, que sufre un tiempos hubo injusticias (por algo se d~o la pri~era ref0rn.:.a
largo y penoso cautiverio pero que tiene conciencia del llamado' social que conocemos, la del rey sumeno Urukagina, ya hacía
<¡ ser una patria grande liberada. Damos por entendido el con- e] 2600 a . C.) y en todas las épocas hubo intentos de libera-
texto referencial del vocablo "dependencia", correlato antitético ción. Es una expresión de la historia humana. .. Pero es en
del de "lberación" (14). Pero la irradiación de esta Última co- nuestra era cuando el hombre comenzó a atacar a La opresión
mo "proyecto" tiene un registro más amplio y tiene sus correla- en todos sus frentes, el social (por los negros, íos trabajadores,
tos opuestos en otros conceptos, como. "alienación", "extraña- por las clases desheredadas), en el político (por las nacíoncs.po-
miento", "exilio", egoísmo, ley, muerte, y muchos otros. Qué bres y mantenidas en ¡el subdesarrollo, por los sectores margl?U,-
es lo que el querigma bíblico explícitai--como palabra "signlíi- dos dentro de irn país), en el cultural (contra una forma típt-
cante" de sucesos salvíficos vividos por el propio Israel- y qué ca de colonialismo), en el psicológico (sobre todo por el psico-
es IJO que permite "explorar" desde nosotros, será una de las in- anáiisis) y religioso, esta vez por una independización. delo eu-
tenciones centrales de este ensayo. ropeo y jurídico a nivel de estructuras, y por una asunción en se-
rio de la historia como espacio-de-la-fe a nivel de praxis cris-
2, Liberación y libertad. tiana. La lucha de tantos pueblos oprimidos que buscan "decir
su palabra", que quieren "ser" lo que ahora saben .que pueden
Es fácil constatar en el hombre actual una búsqueda y una y deben ser, es, el fenómeno tal vez característico de nuestro tíem-
afirmación de la libertad. En las últimas décadas se intensificó . po. Hay una nueva valoración de la libertad, en. ~l sentido de
una toma de conciencia de los valores personales en reacción una vocación a "ser' con todas las posibilidades que el hombre
contra una maraña de .mecan'smos de opresión tejida a lo largo intuye en sí mismo y en su momento histórico. Mas al descu-
de siglos, .a veces en nombre de la misma relig¡.ón, otras en el brirse "llamado a ia libertad", el hombre, o un pueblo, toma
de una falsa "cultura" que impone pautas opresoras de compor- conciencia al propio tiempo de que no la posee; ante el riesgo
de frustración y ante el reclamo de aquella vocación,' inicia un
14) H. ASSMANN "Implicaciones socioanalrticas e ídeoíógícas proceso de liberación. Por tanto, lo más importante no es la libe-
del ¡lenguaje de liberación", en VARIOS, Pueblo oprimido
señor de lía historia, (Tierra Nueva, Montevideo, 1972) 161- ración sino la libertad. Aquélla les un proceso "hacia" ésta, que
171; P. NEGRE RIGOL, "Los cambios metodológicos de las es el "lugar" ontológico en que el hombre puede realizarse.
ciencias sociales y la interpretación teológica", Ibíd., pp.l77· Veremos que el éxodo es" una gesta de "liberación", pero no
196 (ambos art. con bibl.). Conviene tener en cuenta los la posesión de la libertad. La "salida" de Egipto es el primer
análisis de FranzJ, HINKELAMMERT; Las armas ideoló; paso que mueve hacia la "entrada" en la tierra de la Promesa.
gioas de la muerte (EDUCA, San José de Costa Rica, 1977).

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Las luchas de nuestros pueblos latinoamericanos no son una con-
dición de su ser sino de su camino hacia la independencia real nes .deldinero y de.la empresa .La libertad que exigía una Igle-
(sólo "programada" en las gestas patrióticas dell 1800" .I. Este sia jurídica era la de la profesión de su fe, pero con una ex-
inmenso clamor de la humanidad, que de pronto se siente gimien- traña mezcla d.e intolerancia opresiva.frente a los otros grupos
do bajo' el yugo del "ser-de-otro" fabricado por los propios honi- religiosos. Heredera del juridicismo romano, del imperialismo ,
bres, adquiere ahora un volumen antes inaudito gracias a los germánico y del feudalismo medieval, intensificó un verticalísmo
nuevos métodos de "concientizacíón" instrumentados por las autoritario que por principio daba ~a "razón" a los super'ores ,
ciencias sociales y de comun'cación . Ahora bien, como el grado La "libertad" siguió siendo valorada "en el vacío", o en reir-
de madurez a que ha arribado el hombre de nuestro siglo no le cuito cerrado. Esta situación (con muchas excepc'ones, por su- ,
permite ya atribuir sus males al destino sino al egoísmo. o al afán puesto) hizo que 10'8 valores auténncamente humanos y cristia-
de poder de sus hermanos, sabe también que su propia libertad nos de la libertad sé recuperaran «;leS<1~>fu:era de la Iglesia, o des-
"vocac'onal' es también su "libertad" presente para desatar su de grupos cristianos que sentían que el Evangelio corría por o-
propio proceso de liberación. Este hecho tiene su incidencia en tras vertientes que las ya "agotadas" de una Igles' a muríente.
la reflexión bíblica que queremos establecer, sobre todo cuando Por regla general, los cambios no se producen desde arri-..
tratemos del Génesis, Señalemos por ahora que los "proyectos" ba, y menos por el opresor (15). El hombre comenzó a descu-
de liberación se dan en todo el mundo (puesto que su: registro brir su vocación á la libertad, ya Uberarse, desde su propia
es amplísimo, como numerosas son las "ligaduras" que sufre el vivencia de opresión y movido por unpróceso xíe concient'za-
hombre), si bien los países del Tercer Mundo concentran, en ción esclarecido por los filósofos·. de la "sospecha" (Marx,
cierto sentido, todas las formas de "alienación" y de dependen- Freud, Nietzsche (16)·pero acelerado por figuras líderes que se
cia respecto a los países nordatlánticos (Europa y Estados Uni- convirtieron en símbolos, de l'beración .
dos). Aun ,la dependencia "religiosa" se hace sentir con un peso Ahora bien, las comunidades cristianas de base fueron las
part'cular en los países marginados. . . Esperamos haber así ex- primeras en "sintonizar" con esta voz de la humanidad "en
plicado en pocas líneas la relación entre libertad y liberación. estado de liberación". Y así se fue dando un cambio de men-
. ialidad entre los cristianos, una aceptación' de los valores (y
no de los "peligros" ~omo tantas veces sedijo en 11a cateque-
3. ¿Un ¡'signo de los tiempos"? sis o en la predicación) de la libertad. Esto, a su vez, implica-
ba dos cosas fundamentales: la libertad iba apareciendo como
Lo expuesto en el parágrafo anterior suscita una pregunta un va~ijIr máximo del mensaje crist'ano (junto. con un fastidio
hermenéutica: Esa búsqueda de libertad a través de tantos gestos por su ocultamiento a causa de una ética cristiana más opre-
de liberacíón en la human-dad actual, ¿no representa un momento sora que salvífica); por otra parte, tal descubrimiento connota-
"favorable" (un kairós según el léxico bíblico) para la acción del ba una "energización" en el cristiano aberto al Evangelio:
cristiano? En otras palabras, ¿qué significa dicho fenómeno para
el que lee las Escrituras como mensaje?
No fueron los cr'stianos (en el sentido de Iglesia "oficial") 15) Ver P. FREIRE, Pedagogía del oprimido (Tierra Nueva,
Montevideo, 1970') ,cap. 1.
quienes en nuestro siglo "redescubrieron' primero la libertad en 16) Para el aporte de estos tres hombres a un desenmascara-
sus dimensiones socio-política o psicológica. En el orden econó- miento de la "ilusión" del sujeto, véase P. RICOEUR, "El
mico, fue la cultura "occidental y crstiana" la que más bien ge- psicoanálisis y el movimiento de la cultura contemporánea",
neró las formas "liberales" y opresoras de entender Ias relaeio- en la obra cit. (n.13) 1: Herrn¡enéUltica y:ps:ic:(J<analisis, p:p.29-
72, esp. p.59ss; II:nermenéutio~ y eiSitructura1ismo, p·pJ39-171
14
15
Estos dos aspectos necesitan ser ampliados. Desde el
punto de vista del "estatismo" de ~a ética tradicional, e incluso
de su desorientac'ón esencial, el descubrimiento del valor de la La misma exigencia condicionaba a Israel respecto de los otros
libertad y del llamado a' actuar en los' procesos de liberacíón, pueblos: lejos de ser un privilegio, el ser israelita, :s,ignificaba
significaba una recaptación de otro dato esencial del querigma un compromiso y una mayor fidelidad. Muy bien lo aclara el
bíblico; que Dios se revela en los acontecimientos del mundo profeta Arnés (\JI acusar a Israel su "libertinaje" en nombre de
o de los pueblos, "despertando" la conciencia cristiana cuando su vocación especial: "Hijos de Israel, ¿no sois para mí cerno
está dormida o distraída. Si Dios. se maníñesta en la historia, los etíopes? ¿no hice yo subir a Israel de la tierra de Egipto, 'Y
v no sólo en la Palabra "ya d'cha", o si se muestra en los he- a los filisteos de Caftor (¿Creta?), y a los arameos de Ouir
chos del mundo para desligarse del "monopolio de la verdad" (¿Asiria?)? Hie aquí que Ios ojos del Señor, Yavé, están pues-
que la obnubila y "oprime" (Romanos 1:18), el cristiano co- tos sobre el reino .pecador y los exterminaré de la faz de la
mienza a darse, cuenta de qué la respuesta a ese, Dios-de-la-his- tierra" (9:7s) Ijlisteos y arameos, ya no existían en la época
¡

'taria'le exige un compromiso en esa historia. Esa es la profun- del profeta (siglo VIII a. C.) a pesar die haber sido "d'rígidos'
da diferencia entre la prax's corno hombre y la praxis como Por y avé en su momento. Es una advertencia para quien se
cristiano. Una vez descubierto Dios en el aoontecimiento por siente seguro en algún "privilegio'tmal entendido. También Pa-
medie de la fe, aparece exigiendo al que lo descubre mucho blo, en Romanos 9-11, muestra la "caída" del pueblo judío
más que a aquel que no lo ha descubierto y que actúa en un que se había creído superior a los paganos, Dios llama a la
plano simplemente humano, Ese es uno de los sentidos más hon- humildad a qu.en cree poseer toda la verdad, manifestándose
dos del "ser cristiano", del "conocer" la Palabra ccncientiza- en "otros" lugares; o exigiendo una tremenda fidelidad a quien
Cara de Dios. lo ha descubierto al que por otra parte otorga una gracia espe-
cial para cumplir su misión en el mundo.
Pero es a partir die este proceso de descubrimiento del Resumimos todo 101 d'cho, afirmando que el cristiano,' una
Dios-de-la-libertad (y no por una revelación extraña a la histo- vez que ha captado el mensaje bíblico de la libertad como ve-
.r.a) como se empieza a captar que lo que es más humano, es caciónesencial del hombre, tiene un compromiso mayor para
también ,lo más cristiano La revelación bíblica no enfatiza va- iniciar, o colaborar en un proceso "liberador",
lores superhumanos sino que "energiza' los valores más huma- Ahora bien, el reconocimiento de la libertad, como valor
nos, como ser la libertad, el amor, la creatividad, el trabajo, la evangélico, y la manera como se fue dando, significa que esta-
esperanza, etc. Adán es criticado por su "desmesura" supraon- mos en presencia de un "signo de las tiempos,". No es menes-
tológ'ca, su querer ser dios, no por su creatividad, su amor QI ter explicar esta expresión, de origen evangélico (Lucas 11 :56)
su libertad, que Le fueron dados como constitutivos de su y tan difundida desde Juan XXIII yel Vaticano Il, pero es pOI-
propia vocación, 'El mensaje central,de Cristo, el amor al sible que se haya puesto de moda. antes de ser comprendida
hermano no es un supravalor desconocido; sino la máxima exi- en toda su profundidad querigmática: reconocer íos signos de
gencia de lo que es máximamente humano. La Libertad yel °
los tiempos, leer la presencia de Dios en los acontecimientos
amor son los dos grandes tiernas bíbl'cos, y son justamente los del mundo significa por lo menos que debe de haber una, "sin-
dos grandes valores .humanos, .que permiten la mejor realiza- tonía" muy honda entre éstos y el mensaje cristiano (7), pero
ción o engendran la peor de las frustraciones. . aquélla se da porque primero se descubre a DiDIS en el aconte-
Queda, por tanto, quejel cristiano "concientizado'' está Cimiento, desde el cual uno se remonta hasta el mensaje arque-
más exigido que el no cristiano por los procesos de liberación. 17) Sobre esto, véase una síntesis en "La lectura cristiana de los
Signos de los tiempos', en Teología 5 (196,7) 49·60.
16
17
típi~o: como garantí~ de la f~~elidad del "senti?,o" de tal. ~con­
tecímiento y como interpelación desde la propia fe. ~l, Itl~era­ como en las cosmovisiones míticas.. y no interpela la libertad
rio opuesto, en cambio, puede quedar en una acomodación sítua- del hombre; más bien ahonda su conciencia de finitud, tal vez
cional del mensaje al suceso actual, o lo que es peor, soslayar del destino) sino sobre todo en la esperanear al mostrarse en
el enriquecimiento del mensaje recibido por la nueva manifes- la historia, revela, al hombre el "sentido" de los acontec'mien-
tación de Dios en la historia e incluso la corrección de sus inter- tos, genera el diálogo interpersonal con El y con sus hermanos;
pretaciones perimidas. la historia emerge como "proyecto"; el hombre se pleníñca en
Esta afirmación anuncia ya una reflexión hermenéutica su marcha hacia adelante y no .en un regreso cíclico a la cos-
axial que luego retomaremos (al referirnos al éxodo y al Acon- . mogonía (por algo no hay fiesta bíblica o "cristiana" del Año.
tecirníento die Cristo). Retengamos por ahora esta otra con- Nuevo ... ). La gesta de liberación latinoamericana tiene un
clusión: no es por profundizar teóricamente en el,estudio de hondo sentido cristiano: Como ya notamos, para los cristianos
las Escrituras o de la fe cristiana como uno podra reconocer a es un compromiso ineludible. Los pueblos del continente están
Dios en los acontecimientos. La verdad está en, el itinerario descubriendo su "vocación a la libertad" que no ¡les dio Europa
inverso: porque el cristiano tiene Ja "grada" (que viene. del "J?s- ni clarificó mucho la Iglesia institucional por estar "silenciada'
píritu" profético otorgado en el bautismo) de descubrir .a Dios por los factores de poder o, lo que es más lamentable, por su
en su historia, no sólo individual sino comunitaria y umversal, mentalidad alienada a estructuras caducas y consecuentemente
t ene también el don de penetrar en la insondable riqueza de opresoras. Es de las nuevas comunidades de base cristianas de
Dios. Estar atento a la historia, es entender mejor el Evan- donde surge hoy ese marav'lloso "redescubrimiento" del Dios-
gel:o, El partir del. c?nocimie~t()l, . exhaustivo o no, de ~as Es- de-la-historia que, con presión creciente, se va metiendo, lenta-
crituras puede convertirse en crencia, que explora el sentido re- mente en la Iglesia jerárquica, la última llegada en la lectura
dacconal o histórico de un texto pero no penetra en su "reser- de los "signos de los' tiempos", hecho sociológicamente previsi-
va-de-sentido" que sobrepasa aquel nivel. Trataremos de reto- ble por otra parte.
mar esta otra afirmación de orden hermenéutico, tantas veces Hay que mencionar especialmente las comunidades ,de ba-
oescuidada por los exégetas (18). La fe. c~istiana más h?nda se del Brasil, compuestas sobre todo pOlr pobres y marginados,
exige ¡los dos caminos: "leer" los acontecímíenros (y de allí ~e­ su elocuente testimonio y su influjo en la rementalización de la
formular el mensaje tradicional) y escuchar la Palabra d~ J?ios Iglesia jerárquica, al mismo tiempo que la. capacidad de ésta
ya trasmitida (para estar más abierto a los sucesos salvíficos de "sintonizar" con ese testimonio, asumiéndolo corno nueva
en el mundo). Los cristianos, hemos recorrido durante mucho "palabra de liberación" o como compromiso del episcopado
tiempo un sol? cam~no y hem~s estado m;uy ~espistados respec- mismo (19). .
to a las manifestaciones die D'os en la historia como otrora en
el suceso del éxodo y en tantos otros. 19) Entre los numerosos estudios sobre esta realidad del sristia-
nísmo brasileño, véa¡;:e sobre todo: VARIOS, Comunídades .
El Dios-de-la-historia es un Dios-que-viene. No se revela eclesíaís de base. Urna igreja que nasee do piO'Vo (Vozes, Pe'
sólo en el cosmos (el Dios de la uaturaieza es siempre igual, trópolis, 1975); L.BOFF, Ecl~io~enése: as comu~id,~des eele-
síaís de hase reínventam a Igl'ie~ (Vozes, Petrópolís, 1977);
18) Véase en el área de la exégesis R. LAPOINTE, ob. cit. en JP. RAMALEO, "CEE: nova forma participatoria do poyo",
la nota 12 y .en cuanto a la filosofa del lenguaje, P. RI· 'en SIEDOC 9 1976); A. RIBEIRO GUIMARAE8, "Comunéda-
COEUR, "E~énement et sens": Arehivio di Filosofia (1971) des eclesiais de base: busca de equilibrio entre ministérios e
5-37. cornunidade crístá", en la Revi~a E,clesiástica Braslleíra
18 n.l49 (978) 80-10'2 (Los ministerios brotan de la comu~ll­
dad eclesial; la eclesiogénesis, punto de partida de la eclesío-
18
19
¿Qué sucede cuando el cristiano deforma el Evangelio- o cuenta de que háeÍ~n conocido a Cristo; y otros, que.creían co-
no sabe ya leer la presencia de Dios en los acontecimientos del nocerlo, se sorprenden al saber que en realidad estaba en el
mundo? ~ios no puede no revelarse en la historia, cuyos suce- hermano. . . '
sos van hilvanando la trama de su designio salvífica. Siempre Estas reflexiones sobre los "signos de los tiempos" tienen
habrá quienes r'reconczcan'' su paso. Otros lo captarán a través , una ,intención, en el marco de nuestro intento de hacer una
de una "de-strucción", o sea, poniendo fundamentos nuevos, "hermenéutica de la liberación", a saber advertir que los moví-
aparentemente sólo negativos, a su afirmación. Tal es el caso mientes de liberación latinoamericanos -C01ll toda la carga
del marxismo (como acusación ail cristianismo por haber per- de novedad y ambigüedad que poseen- pueden ser "leídos"
vertido el mensaje de la justicia y, por tanto, del amor ... ) y con una óptica cristiana que los- integra como manííestaclón
el del ateísmo (como signo de una pérdida-de-sentido de la re.. de un nuevo ~ompromiso de la fe, ineludible por otra parte.
presentación tradicional die Dios). Ambos fenómenos contem- Queremos decir además que si la liberación de nuestros pue-
porá~e~s revisten rasgos de los "s~gnos de los tiempos" para blosno fue captada 'por la Iglesia institucional (como en el ca-
el cristiano capaz de reconocer allí el verdadero rostro de su so de Cuba), o cristaliza fuera de su ámbito de expresión (v.
Dios. El cristiano conservador puede escandalizarse del ateo .W. ,en las lu:has. populares) o por grupos humanos indepen-
pero' éste puede también estar más cerca de Dios. El ateísmo dientes, es señal de que la Igiesia estaba "adormecida' en su
?bedece a diversos motivos: o' porque se ha superficializado la interpretación del Evangelio' y nOI se daba cuenta de la sitúa-
lma&en c1e D'os a causa de ,la ciencia (que es "suficiente", me ción de dependencia y opresión de nuestros pueblos, o 'había
explica todas las cosas) pero en este caso el cristiano es rela- "introyectado" estratégicamente la imagen liberal y pacifista
tivamente culpable porque no .estuvo preparado para compren- q~e los opresores, muy "cristianos", contribuían a sostener y a
der el advenimiento dIC la c.encia; o porque el hombre está bus- alimentar. Es triste. parala historia de, la Iglesia lannoameri-
cando al Dios Absoluto o' autor de la historia cuya imagen ha cana, pero es así (20). Las muchas excepciones ..:-.y las buenas
sdo desfigurada. Por tanto, la negación del "dios", que ya no intenciones-e- 'llevan a matizar la malaconciencia pero la rea-
es Dios, lleva a un redescubrimiento del Dios auténtico. Si no lidad es evidente; la Iglesia estuvo largo tiempo ligada a las '
por el ateo mismo, al menos por cuanto los cristianos son pro- , estructuras de dependencia, y el gran proceso de liberación que
vocados a reencontrado y reexpresarlo. Con todo, también el crece 'en todaLatinoamética 110 es una iniciativa de la Iglesia.
no cristiano descubre a Dios de una manera silenciosa -el Es la granodisea de los hombres oprimidos ~muchÜ's de ellos
Dios desconocido-y lo manifiesta sin saberlo en su forma de cristianos de base, por supuesto->, que comenzaron a cantar
vida, por ejemplo, en el amor al prójimo. Creo que el encuen- las "Vísperas" de una nueva América Latina y "despertaron"
t~o de Oristo con los hombres -,según la escena escatológica
a la Iglesia nueva, en gestaciónccomprometida con el hombre'
oprimido,,' . ' .'
oe Mateo 25:31-46-- es iluminador: sólo al final éstos se dan
Para entender. mejor este proceso liberador, son las pági-
logia). Para una bibliografía más completa, consúltese la nas que siguen, sobre elmensajebíblico de la liberación. Pero,
Biblliogi'll.fía Teológica Comentada que publica anualmente el 10 aseveramos unavezmás, es des~e este proceso latineameri- '
Instituto Superior Evangélico de Esltudios Teologicos (ISE-
DET) de Buenos Aires (Camacuá 282/140:6 Buenos Aires), e.ano de donde se nos ilumina la "reserva-de-sentido", del que-
en la sección 2.2 ('Comunidades de base'), Añádase entre- ngma de la Palabra de Dios" -_
tanto la reflexión de teólogos y pastores de la Regional Noro
deste II de la CNBB, en "América Latina, Boletín" (MIEC~ 20) Ver E. bUSSEL, Historia de la Iglesia en' América Latina
JECI) n.25 (Lima, febrero 1978) 14-22. ' (Nova. 'Perra, Barcelona, 1972) passím,

20 21
4. Plan de anális,is.
enfrentarse a la Palabra desde su situación. Aun cuando hay
Partiremos de laexperiencia liberadora dlel éxodo" de los una vivencia común, en cierto sentido continental, cada uno
hebreos de Egipto, tratando de profundizar su sentido. Aunque tiene su propio mundo interior y su propia experiencia socíal.
parezca extraño, sólo después de referirnos al éxodo podremos Lo esencial será. que el lector se lea en la Palabra del que-
ir al Génesis (en su momento se dirán las razones) y reencon-' rigma y que la "diga" a los demás y que la practique, o sea
trar al Dios de la Alianza enlos profetas. Luego de estos tres que la convierta en praxis. Es más importante Ia "palabra"
momentos del Antiguo Testamento, nuestra reflexión .se deten- propia del lector -que se hace nuevo "hermeneuta", en cade-
drá en otros dos del Nuevo: las actitudes "liberadoras' de na- que la mía. Y cualquiera constatará que su "palabra-
Jesús <Evangelios) y la expresión del Misterio Pascual en ca- praxis" saldrá más espontáneamente de 10 que: creía. Aunque
tegorías .de "liberación" por San Pablo (carta a los Romanos). use el lenguaje singular, me refiero especialmente a la palabra
Queremos interrelacionar estos 'focos" querigmáticos, tratando dialógica, a la hermenéutica grupal o comunitaria del mensaje
de ver su continuidad, la 'nserción de uno en e'I otro, las "eles- bíblico. Ouíen tiene 'Una mínima experiencia de comunidades
implicaciones-del-sentido" de uno por el siguiente, la forma- de base, sabe la riqueza y Ia profundidad del pueblo para en-
ción de una conciencia-ele-libertad y' de un compromaojleIi- tender el querigma. '
beración como notas características de la fe y de la praxis
cristianas. '
~egún el cometido de estas páginas, queremos establecer
una perspectiva hermenéutica, 'en vista de una "relectura" del.
mensaje bíblico de liberación desde nuestra, experiencia de pue..
bIos o de hombres oprimidos. A~ lector tocará "situarse" freno
te a la Palabra de Dios, explorar su "sentido" concíentizador
y liberador, para sí o para dialogar con sus hermanos los oprí-
midas. No queremos hacer aquí "aplicaciones" ala situación
Ietirioamerícana; sería ant'hermcnéutico, porque equivaldría a
acomodar el mensaje bíblico a casos concretos.' Mi momento .
hermenéutico es distinto al de este o de aquel lector; para escri-
bir estas páginas con una perspectiva henmenéutica y "latinoa-
mericana" no debo practicar la exégesis de los pasajes bíblicos
y después sintonizarla con los hechos de nuestro mundo 01 de
nuestro continente oprimido. Más bien, éstos han de ser y
son el antes de mi interpretación de la' Palabra bíblica.'.' Sólo
así ésta es eisegética (literalmente, "que conduce hacia adea-
tl'O") y no puramente exegética ("que conduce hacia aínera,
que saca"). Etl lector podrá ser orientado en la interpretación
del mensaje sagrado a, partir de-este intento hermenéutico, pe-
ro él tendrá que "decir su palabra' 1 en prolongación a' la mía,

22
23
CAPITULO II
EXQDO: ACONTECIMIENTO y PALAJJRA

L El éxodo COJmo "resetva-de-sentido".


Suponemos que ·ellector' conoce él selato bíblico del éxodo,
. puesto entre las narraciones patriarcales (época de la Promesa)
y las gestas de la entrada en Canaán (época de la realización
de'aquélla). La experíenc'a de Egipto es una tensión (el "Dios
de los Padres" se ha olvidado de su pueblo) y una 'distensión
(Yavé se acuerda de su Promesa, cf. Exodo 6:4-51). Las vióisi-
tudes del desierto forman 'una unidad .temática.y significativa
con ¡la salida de Egipto S21). De modo que.las .reñexionespre-
sentes abarcan los. datos contenidos en los libros del Exodo, de
Jos 'Números y la "memoria" homilét'ca -.Qe la primera parte
-del Deuteronomio 0-11). De cualquier manera, nos vamos a
concentrar en los primeros capítulos (l-15) del Exodo .
Muchos biblistas o teólogos, ya se han adentrado en' una
exploración del éxodo en relación can el nuevo camino de "li..
beración" de Latinoamérica (22). 'Es un "[ugar" querigmático
característico, provocador, creativo, inexhaurible, por,tanto.
, '.
Jus-

'21) Así lo hemos comprendido ty estructurado, en .Historia deIa


salvaciÓn! (Paulinás, Buenos Aires, 197G) cap. IHU ( esta
obra está siendo revisada para una nueva edición).
22) G, GUTIERREZ, Teología de la Iíberación (Sígueme, Sala-
manca, 1972) 203ss; VARIOS, en la ReviSta. Bíblica 32 n.l39
(1971); J. de SANTA ANA. "Notas para una ética de la.Iibe-
ración a partir de la Biblia", en Pueblo oprimddo, señor de
la historia (ver n.l4) '113-125, esp. p. 118 ss.
tamente.para una teología de la liberación, más que de la li..
bertad, es un pasaje eemplar; por ello es más explorado en un ción-de-sentido' es ilimitada; de ahí sus posibilidades herme-
contexto teológico latinoamericano' que europeo, '. néuticas, únicas para la tecíogía latinoamericana. En lo que si-
\

gue se clarificarán estas afirmaciones,'


, No rquerernos tratar del éxodo porque está de moda.. .".
Ni para repetr lo que ya está elaborado, Nuestra intención es
desentrañar otras virtualidades -de la Palabra del éxodo y perfi- 2. Del Acontecimiento a la Palabra.
lar sus perspectivas hermenéuticas, para posibilitar al lector
(grupal más que individual) el "decir su palabra", .
Vale la pena abrir desde ya una llave hermenéutica: toda'
Vamos 'a comenzar situando el relato del éxodo en el con- e~periencia hu~~na,. ~ng~~d~~ su "palabra", ¿De qué manera?
En cuanto su significación emerge- a medida que el aconte-
junto del :,,?~tiguo ,Testamento y su sentido en el complejo de cimiento-clave origina otras vivencias o situaciones o en la me-
la cosmovision bíblica: en uno y otro caso el éxodo es el .a- dida en que el hombre se va interpretando a sí mismO' a la luz
conteéimiento clave, que modela la fe de Israel. No se en-
. tiende a esta ~atima; ni la' formación de las tradicionesrel'gío- de aquel suceso, el cual por tanto va apareciendo cadavez más
sas y de los libres sagrados sino a partir de ese Acontecimien- radical, .Y má~ ,cargado de significación. En el "después" de
to central. A medida que Israel va formándose como pueblo, su proP,Ja ,factIcIdad es captado como fundante del presente, Un
más se polariza en aquel suceso' decisivo, que.a su vez: -y por acontectmíento no ,es VIstO como decis:ivo en la historia de una
eso- es re~resentad'o, en un lenguaje creacional (véase especial- pers0n,a o de un pu.~blo, en el momento en que acontece sino
mente el Déutero-Isaías: 44:21-24; 51:9-11 alusión a' la crea- despues de una mediación temporal, luego de haber "donado"
ci?n como lucha contra las fuerzas caóticas; 54:5, Deuterono- su energía recreadora. Nuestra experiencia personal está llena
mIO 32:~, et?/) , En ,t~das las relig!one: la cosmogonía ejerce de es~s manifestaciones-de-sentido de acontecimientos que só-
una fascinación dramática: es la 'epifanía del ser, el momento lo mas' tarde, o poco a poco', emergen desde su profundidad
en que la sacral'dad "penetra" en el cosmos, es la plenitud de ?figinariamente ~culta, _En la hi~tori!a de los pueblos pasa
lo nuevo, de lo no agotado por el tiempo corrosivo de la fini- Igual, En los pnmeros anos de la independencia de 10$ pueblos
tud y de, la muerte, Ah~r~, bien, fuerte como 'es el prestigio latinoamericanos las gestas de liberación na tuvieron -a nivel
de los ongenes, la, cosmovls~~n hebre~ lo traslada ~ ot~o epicen- de conciencia- la misma trascendencia que fueron adquirien-
tro, el AC,C'nt~clmle~to salv~lCo ?el éxodo. La h'storia despla- do en la "memoria" subsiguiente, Más aún: hoy se nos apare-
za a lo cosrmco . DIOS es visualizado en los sucesos del hom- cen con una dimensión que no tenían hace medio siglo: Nuestros
bre más que en los fenómenos del mundo físico, 'Pero el éxodo mayores Ias celebraban tal vez con la alegría de una indepen-
~on:.o h~chO' hist~rico, y salvífico es, tan "originario" que atrae
dencia conquistada. Pero he aquí que ..-como resultado de u-
nacía SI la experiencia de.' lo creacional, tal como lo dice el na nueva concientización- reconocemos que no somos inde-
lenguaje de estructura mítica del relato bíblico, Para nuestro pendientes sino que sólo hemos cambiado de amo. Por ende,
caso ,s~gn 'fica que el éxodo se constituye en un hecho radical, nuestras fiestas patrias se convierten en "programáticas" y vol.
hondísimo, en el cual tanto' Israel como nosotros debemos in- cacionales para los latinoamericanos; con otras palabras, se nos
terpretar a Dios y a nosotros mismos, El éxodo se convierto aparecen' con otra dimensión, más profunda porque señala nues-
en una "reserva-de-sentido" inagotable. Por ello,'su "dona- tro "proyecto" histórico de un modo más radical, al recordar-
nos 10 que debemos ser y que no somos aún, Por eso, son ce-
, 26 lebradas "en esperanza" porque anuncian 'más de 10 que fue-

27
ron hasta ahora. No' se recuerdan "en reposo" sino profética- yes sieJI.1pre "anuncio"; al mismo tiempo que va incorporando
mente .. sus propias manifestacIOnes nuevas, por su "relectura" (o "re-
Por eso comprendemos el acontecimiento salvííico del éxo- escritura'"), va también interpelando como, Palabra "abierta"
do como 10· hicieron los mismos hebreos, a saber, hermenéutica- a una nueva actuación histórica. Bl pasado se hace "promesa"
mente, "explorando," su sentido a partir de situaciones nuevas ,para el hombre que escucha esa Palabra. No decimos todo es-
que 1.0 iban completando (por ,ej. [as victorias con~ra 1018 reyes to para afirmar una teoría, o para satisfacción intelectual (el
t~ansJordan~s que no les perrrutían el acceso a la tierra prome- 90Z0 de descubrir alg?): Sino porque todo ello sugiere que el .
tida, cf. Numeros 21:10-35; Salmo 135:10-12, etc.) o midien- exodo es un Acontecimiento pleno de sentido (como el relato
do la magnitud de la liberación por lo que fueron. después co- bíblico y la experiencia de Israel lo revelanryque aún está
mo pueblo libre en su propia tierra. El éxodo les significó siem- Inconcluso. Si nuestra lectura del querigma bíblico es para algo,
pre el "origen" ontológico de su realidad' presente, o se conver- la ·.'l~,emoria" del éxodo se convierte para nosotros -pueblos
tia en "memoria' interpelante cuando dejaban de ser libres. oprimidos en el Tercer Mundo- en Palabra provocativa,en
Ahora bien, ¿dónde y cuándo se daba testimonio de aque- anuncio de liberación. Nos.toca a nosotros prolongar el éxodo
lla re-significación del éxodo? ¿Cómo fue más "intencionante" porque no fue un suceso para, los hebreos sino la manifestación
p~r,a los hebreos posteriores que para los antepasados que lo de un designio liberador de Dios para todos los pueblos. En
vivieron? Respondemos: la desimplicación del sentido latente una línea hermenéutica cabe perfectamente que nos entendamos
del éxodo primero, se fue dando en la prolongación lineal de desde el éxodo'bíblico y sobre todo que a éste lo comprenda-
aquella liberación y fue expresándose en una "palabra" .. Esta mos desde. nuestra. situación de pueblos "en esclavitud" econó-
se fue "recargando' por sucesivas "~electuras" hermenéuticas mica, política, social o cultural.
hasta su fijación cosmovisional en el relato actual del éxodo.
Este no es el hecho desnudo que tuvo lugar allá por el siglo .3 ' Del Aconéechniento a I~, Promesa.
XIII a, e, sino en cuanto reflexionado, profundizado, explora-
do por la fe y captado /;n todas sus proyecciones. De allí que Hace un momento dijimos que la lectura del éxodo (co-
la narración del libro del Exodo "dice" mucho más de lo su- mo "r~lectura" existencial) Se hacía"promesa" para nosotros,
cedido entonces, ~l rp?tlv~ de la promesa exp~esa .1a conciencia de un proyecto
Por eso es mensaje. Lo profundo no consiste en el fenóme- histórico .inacabado y al propio tiempo la confianza de su im-
no histórico como puede ser tomado por una cámara o. registra- plementación. Por eso es la proyección hacia atrás de la espe-
do en una crónica sino en su "significación" que sólo es COlU-' ranza hacia adelante , Lo que hemos comentado dei círculo her-
prendida a distancia y es "dicha" en ua palabra. Esto pasa con menéutico por el cual-el Acontecimiento se hace Palabra-sentí-
toda experiencia decisiva ---según hemos indicado (cuando "con- do y ésta "anuncia" una nueva actuación de aquél, se puede
tamos" un hecho significativo para nuestra vocación humana reconocer también en la dirección inversa del acontecimiento
nos distanciamos de su exterioridad pasada e introyectamos en hacia atrás. De esta manera: el suceso salvífico, una vez pro-
él lo que entendemos que somos desde tal acontecimientcl->. fundizado, es visto como desígnío, O' sea, como preparado des-
Mas cuando el suceso es contemplado desde la fe y se reco- de antes de suceder. En una cosmovisión'mítica puede ser ex-
noce en él la manifestación de Dios, la palabra-relato que lo plicado antecedentemente corno destino; mas. en una iconcep-
"resignifica" es interpretada como Palabra de Dios. Y como tal c!~n, del mundo teológica (or!entada a una meta) esa anticipa-
entra en un proceso rotativo por el cual es siempre "memoria" Clan se expresa con el lenguaje de la Promesa. Esta no es his-

28 29
;

tóricamente anterior al Acontecimiento, como no era contem- gioso) es una manera de "decir" el sentido 'más hondo de un
poránea la Palabra-relato. Más bien '10 sigue, y es una nueva suceso, desde él. .
forma de "radicalización" en el sentido, Cuanto más hondo es Concluimos, por tanto, que el éxodo es el Acontecimien-
éste, más abarcador es. Cuanto más signif.cativo es el éxodo to programático de la experiencia religiosa de Israel que. esta-
más aparece como, dispuesto en los planes. de Dios. Si una per- blece el valor de la Palabra-relato y de la Promesa. Lo hemos
sona ha tenido en su vida una función preponderante para la enfatizado por sus implicaciones hermenéuticas. Veamos ahora
conc.encia de un pueblo, se lo representa "llamado" desde antes los contenidos del relato, explayándonos en cinco parágrafos:
de nacer (Jeremías, el "Servidor" de Yavé, Cristo y luego Pa- sobre la situación de los hebreos en Egipto, la palabra-respues-
blo fueron "designados" o elegidos desde el seno de su madre ta (de los oprimidos, del libertador, del opresor en fin), el su-
o antes aún (23). Importante es entender que estas narraciones ceso mismo y sus episodios, el "relato" hermenéutico (en len-
son posteriores a la función cumplida de tales personajes. El guaje mitico-sirnbólico), y el mensaje de esta narración,
valor de lo "originario" (como el prestigio de lo creacional) se
proyecta a lo histórico'. Así también con el éxodo. pe dos ma- 4. Análisis de situación.
neras el Acontecimiento es retrovertido en "promesa". Pri..
mero, .en los relatos de la vocación de Moisés (Exodo 3 y 6) Tribus hebreas se habían infiltrado en la zona fértil dell
Y en el anuncio de la liberación; segundo, en los de la Prome- Delta del Nilo, al N, de Egipto, empujadas tal vez por una
sa arquetípica dirigida a Abraham y sus dos descendientes I- ola de migraciones de grupos semitas procedentes de Siria y
saac y Jacob (Génesis 12:1ss; etc.). Esta última es concebida que los anales jeroglíficos apellidan "Hicsos". Dicho movimíen-
en los términos claros de la "tierra" (como nación) y de la to se enmarca inicialmente en el siglo XVIII a. c. y se pro-
descendencia (como pueblo), que Israel fue sólo desde y por longa hasta el XVI por lo menos. Esta hipótesis es muyesque-
el éxodo, mucho tiempo después de Abraham. No negamos mática y oculta un gran número de problemas como ser el "va-
que haya podido haber una experiencia vocacional en los pa- cío" de algunos siglos que ocurre entre la época de los patriar-
triarcas aun llamado a los hebreos esclavos en Egipto, pero la cas y la generación del éxodo en el siglo XIII. Sólo nosIm-
Promesa, o la vocación, como están narradas, suponen la expe- porta llamar la atención sobre hechos históricos vividos por mi-
riencia de la liberación y la existencia de Israel como pueblo núsculos grupos humanos, científieamnete determinados, pero
en su tierra. La Promesa expresa en forma de designio el a· que originan el "descubrimiento" detrás de ellos de una pre.
contecimiento que, en realidad! la 'engendra como "palabra". seaeía de Dios.
Tal es la riqueza de la Promesa, o del lenguaje de la "vocación". La esclavitud concreta de los israelitas en el país del} Nilo
Dice una profundidad que no era captada en el momento de obedecía a una actitud característica de los reyes de aquel tiem-
Abrahán o de Moisés. ¿Acaso no usamos un lenguaje semejan- po,. en ¡este. caso de Ramsés II u .otros faraones que usaron d.e
te, cuando afirmamos o descubrimos una "vocación histórica" los prisioneros, esclavos y gente marginada o recién llegada e
en los pueblos latinoamericanos? ¿!Por qué lo decimos ahora, inestable, para construir grandes cíudades. El mismo relata bí-
o cuando se está en un proceso, en lugar de tenerlo sabido des- blico nos lo confirma: "pusieron pues sobre eilos.(los hebreos)
de antes? Simplemente, porque el lenguaje de la vocación ( o' capataces que los oprimiesen 900 onerosos trabajos en la edifi-
promesa, en un contexto religioso y expresado en lenguaje reli.. eaciónde Pítom y. Rameses, cludadesalmacenes del faraón" (1:
11). La Biblia señala estos episodios como unaropresión" (d.
23) Jer l:4s; Isaías 49:1.5; Lucas 1:26s8; Gálatas 1:15. v: 12y más adelante N9 5,a). Era unaesclavitud, no sólo en

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cuanto los israelitas "pertenecían" a un señor (como en la an-
tigüedad pagana y en muchas regiones del mundo moderno v. Peor aún es esa situacón cuando se la "profundiza" hacia, a-
gr. en Arabia Saudita o en Brasil); más bien la ~sc1avitud se dentro medi~t~ una interpretaclón de lo sagrado, como en el
hacía opresión, trabajo forzado, Era una sit~ación alienante caso de los indios de Guatemala que celebran la Semana Santa
hasta el extremo, como puede ser actualmente la situación ver- sin Resurre~ción, ,~nternalizando de. esa manera su propia "i-
gonzosa de los portorriqueños explotados en todos los niveles dentidad tnturada (26) que necesitan adecuar con la de un
por sus dominadores (24). Toda explotación va unida a una Crist~ falsificado, sin duda qué no por culpa de ellos sino por
u~ triste proceso hermenéutico que parte de su situación opri-
prepotencia ignominiosa, sea del faraón o de los países impe-
rialistas de la actualidad. mida ..
. ,¡El, ~lienado no ~olamente no tiene conciencia de lo que pue-
¿Cómo no gemir en tal situación? oe ser o hacer, sino que acepta que las cosas no pueden ser
de ot,ra manera: Incluso puede creer que su condición es bue-
11~, SI. no la mejor. Esto no se aplica ya a la alienación econó-
Mas, ¿de qué sirve esa angustia impotente? La alienación
de los hebreos llega a tal límite que éstos son incapaces de es- mico-social ~!no ~ la, rel~&i~~a (lo .analizaremos más adelante).
~ntes de la concle.n~l~acIOn , el alienado acepta la realidad que
perar la salvación: "Así habló Moisés. a los hijos de Israel pe-
VIV~, como, SUC011,dlc~on natural. Aquélla adviene por la "pala-
ro ellos no le esCUlcharOn por 10 angustioso de su dura servidum.
b.re" (Éxodo 6:9)~, N? se trata de una "infidelidad" a la gracia bra (paragrafo siguiente) o' por los hechos. 8. acontecimiento
smo de un extrañamiento total del hombre que anula hasta la del éxodo engendrará la, concie'DIcia·dte.libem.d del pueblo de Is~
r~el, que se profundizará en la palabra subsecuente, según estu-.
esperanz~, ,última p.osibilidad. de liberacón. Es posible que esta
frase -.urnca en toda la Bbha- se nos haya pasado por alto en diamos ya, En cuanto a la "integración" del estado cJ;e opresión
~orno condición propi~ no pa~ece haberse dado en aquéllos, a
tantas lecturas que .habre?101s ?e~ho de este capítulo, Pero e- juzgar por las referencias bíblcas . En efecto los israelitas "g:.
merge en toda su violencia aniquiladora cuando la "redescubrí-
.men " y "4 e1aman " ante yave,
?" . (Éxodo
su DliOS . ' 3:7.9'; 6:5), Re-
~os': en. tantos casos concret~s de Jos hombres .oprimidos, sin
cor~~os con, todo que este r~lato es. "interpretación" del acon-
ir mas leJOS, en nuestro argentíno marginado en las provincias tecimiento. SlIVe para dramatizar la "presencia" del Dios libera-
en el criollo, en el trabajador explotado que nunca encuentra dor" Más ~ie,n, la "noyed.ad" inesperada de la manáestecíón de
~na "oportunidad" para realizarse, como ser humano digno e
igual a otros. Es lo que P. Freíre aclara tan acertadamente " Yave a Moisés (3:~ss) IndlC,~ qu~ el pueblo ;estaba lejos ?e saber
ac~rca de al~una. promesa antigua o de una presencia de, su
diciendo que el oprim!do. "int~~yecta" d.e !al manera. al opreso; DIOS en la historia . Por otra parte, el pasaje citado de 6:9 mar-
-y por ,ta?~o su ~ropIa ~ItuaclOn de oprimido-e- que no' imagina ca la realidad de una postración sin esperanza. Así Y todo siem-
otra posibilidad m Cam?lO algu~o qu.e, lo "libere" (25). Lejos pre es posible una "concientízación" por la palabra o por los
de. ser un dato secundario, la afirmación de Éxodo 6:9 es la se- hechos. También en esto el relato bíblico del éxodo es ílümina-
ñalización, en letras de fuego, del colmo de la alienación del doro
hombre, que ya ni espera siquiera en su propia liberación. Antes de pasar al tema siguiente cabe una apreciación más
sobre el estado del pueblo oprimido. Este es de orden político y
24) E. GALEANO, Las venas abiertas de AmériJca Latina (Siglo
XXI, México, 1971), p.106, n.28. 26) E. GALEA.NO, ob.cit., p. 76s. S. TRINIDAD "Crístoloeíacon-
25) P. FRE]IRE, ob.ci.t., p. 44ss; Id., La edUiC3:ción como práctica quista, colonización", en Cristianismo y SOCiedad 13"" n '43-44
de la libertad (Siglo XXI, Buenos Ail'es,1972) 37s5. (1975 )12'28. .

32 33
social. La opresión en Egipto es de orden políticaporque es la so esta reflexiónpara -retomarla al tratar del Nuevo '[estamen-
autoridad del faraón la que explota a un grupo que.está en su to. '
país, y más, a una minoría étnica extranjera. La opresión es ejer-
cida desde el poder político. Era también una manera de desha- 5'. La palabra que antecede a la liberación.
cerse de los odiados asiáticos, como sabemos por los textos egip-
cios. La acusación de genocidio es exacta, pues no se trataba so- Tenernos la "situación" . Hay también una "palabra" ,del
lamente del aprovechamiento de la mano de obra por el trabajo oprimido, del Dios liberador, y también del opresor. ¿Qué fun-
forzado que an'quilaba a multitudes, sino de un doble intento ción y valor tiene cada una? '
de exterminar la raza, por el trabajo y por el infanticidio (equi-
valente de la "esterilización" genocídica que se practica en Amé- , a) La palabra del pueblo oplimido. Son los dos relatos de
r.ca Latina con'el nombre inocente de "planeamiento familiar" lavocación de Moisés los que contienen la voz del hombre
orquestado por los norteamericanos) (27). Los hebreos, en efec- oprimido, expresada indirectamente en la propia palabra de
to, eran numerosos y eso' constituía un peligro político' para la Yavé: "
seguridad interna del reino (Éxodo 1:7 y 9: "tenernos que obrar "He visto la-aflicción de mi pueblo en Egipto, y he oído
astutamente con 61 [el pueblo hebreo] para impedir que siga los clamores a causa de s,).ls capataces. ;.. ». (3:7);" elclaQtor
creciendo y que, si sobreviene una guerra, se una contra noso- de los hijos de Israel ha llegado hasta mí. .. " (v. 9). ,
tros a nuestros enemigos y logre salir de esta tierra"). Por En el relato más reciente; de cuño sacerdotal (6:1-13);
ello pusieron capataces opresores (v, 11) y encargaron a las par- "He escuchado los gemidos de los hijos de Israel, que tie-
teras que mataran a los niños varones (v. 15ss). Este panora- nen los egipcios en servidumbre ... " (v. 5).
ma connota a su vez una opresión social, por la condición en . La palabradeí oprari'do es el "clamor". ,¿Será un mero
que los hebreos estaban y eran mantenidos. lamento pasivo, expresión del dolor? ¿Sería para conmover . a
Si esto es así, la liberación de los israelitas en Egipto Dios, y esperar sólo de ~l la salvación?'..·~ ..'
fue un acontecmiento de proyecciones políticas y sociales ..Dios El motivo del "clamor" es .ílustrado 'sugestivamente en al..
no .comenzó salvando en el orden espiritual, ni siquiera del pe- gunos mitos mesopotamros, destacándose el de Atrajasis, un
cado. Salva al hombre total, cuya realización humana puede ser poema sobre la condición del hombre (con una tradición del Di-
impedida no sólo por él mismo (pecado) sino también por los luviodistinta a la contenida en la epopeya de Guiígamés), es-
otros hombres que abusan de su poder o de su "status" social. . crito.a principios del 2. milenio a ,C. Es un mito social. En
Esta constatac'ón es de graves consecuencias hermenéuticas pa- una primera escena se narra la, rebelión ct;e los dioses menores,
ra una relectura latinoamericana o tercermundista del mensaje los que trabajan, contra los tres patrones, Anu, Enlil y Enki,
del éxodo. ¿Pusimos alguna vez atencón al hecho de que el , que gobiernanel mundo sin trabajar y .se alimentan con el es- '
Acontecimiento liberador primero, ejemplar, que "revela" al fuerzo de aquéllos. La rebelión.. manifestada en una •'huelga'
Dios de la salvación, fue político y social? Dejamos en suspen- y en un atentado contra fU palacio de Enlil (símbolo. del po..
der ,y dela tiranía), tiene éxito. La amenazacontra los dio-
ses superiores neva a éstos.a excogitar una solución: crear al
27 Recuérdese la "acusación" dramática simbolizada por el filme homblre para que trabaje, y reposen de esa manera los dioses
"Sángre de Cóndor" del boliviano Jorge Saniinés; VARIOS, menores. Hay una liberación de éstos, nías a costa de .otro
"Esterilización en vez de reforma agraria", Diálogo (Guate- oprimido, esta vez el hombre. También el relato babilonio de
mala) n.22 (1975) 25.

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la Creación (el. EnUIn3 elisi) marca el destino humano al trabajo movisión mesopotamia no aporta ninguna salida liberad?r~ p~­
para los dioses. Eso parece aceptado en una especie de "con- ra elhombre oprimido, ya que na se da un Acontecimiento
cienc.a cerrada", por la cual Ila ima~en del m~d? escomo hermenéutico .y .concientizador co~o. el .del .éxodo. .. ~or algo
siempre ·se. ha pensado y heredado. E~' mito '~e ~traJasls, en cam- el mito culmina con Iafrustrecíón del hombre . Mas aun,
bio, nos presenta a. un hombre mas concentizado, ya q~e al como relato' de un "suceso" arquetípico, retromentalíza el'!. el.
multiplicarse se rebela también él (a la manera de sus ante- sentido de esa frustración: el deseo 'de liberación queda trunca"
cesores en el trabajo ... ). Para rebelarse contra un orden no do, Los hebreos "tt1aman"a. Yavé, pues "esperan" la libera"
aceptado, se necesita la unión de muchas (Exodo 1:98),.y el o- don. El profundo sentido religioso <le la cosmo'Visión~ibhca
presor nel puede si~o d'srninuir slf nú~ero (no destrU1r1os~n enfatiza la íniciativadlvína del proceso, pm10 eso es propIO del
una primera instanca, para no dejar de ser amo) con el fin lenguaje religioso; no significa que históricamente haya sido a-
de impedir su ascensión. AsÍ el dios Enlil, el. capataz de 'sí, Es, oportuno indicarlo, ya que algunos teólogosque ínter-
las obras (construcción dediques y canales, tare~ típica '.en el pretan literalmente: el dato bíblico gustan d~sapr~~ar .la auten-
suelo mesopotam'o) intenta, diezmar a la humanidad, pnmero ticidad de las lniciatívas "humanas" de líberacíén. Ignora~
por la peste, luego con la sequía, después -'.ya ~xasperad? por que el éxodo pudo' ser; desde una primeJ;l perspectiva, .U?
la intervención de otro dios amigo de la humanidad, Enki (un propósito surgido' dé los mismo? .·hebreo~, Fue el .";.\conte~l.
paralelo del Prometeo hesíódico y trágico). - por el diluvio. miento' s. el que, desde sus prep'aséntrañas, fue manlfestando
Pero aun ahora fracasa, ya que Atrajasis, el prol1:agonist~ .' :muy una presencia divina', con las' implicaciones (incluida la Alian-
inteligente" (pues tal significa su: nombre) se salva .por msmua- za) que tuvo.No es por' nada que lo decimos, ya que hay
ción del mismo Enki, y de tal manera la huma~rdad,~rdura procesos de liberación en nuestro mundo que parecen de~co­
sobre la tierra. Enojado' Enlil, persiste en sus propósitos . y nectados del Evangelio, pero que,poco a poco, van conñgu-
manda la esterilidad u otras deficiencias genéticas .a las' muje- rando una presencia del Cristo liberador, como pueden ser l?s
res, siempre can el objetiv~ de. Tequcir a la hum~n!dad "peli- ejemplos de pueblos' O d~, grup-os que lucha~ por un ~~mblO
grosa'.'. Este mitoextraordínarío tiene algo .de trágico, ya que de las situaciones de opresión en nuestro contínente. Aqüí sur..
el hombre fracasa en su propio intento de h~era~se. ~stOI no ge nuevamente una implicación hermenéutica.
está dicho porque sí nada' más, .. La hi~~orIa se !epIte. ~ero Para:resumir, el dato bíblico del "clamor" de los hebreos,
al menos se enuncia el hechode la rebehon (que mclUiS~}Iene a primera vista pasivo', nos ha p~ecido muy sugere~te: In-'.
un arquetipo en la de los dioses menores). Esa s?bl~vaclon se 'dica, además, que el' hombre com~enza a e~tar c?J1clenttzado
anticipa con el' vocablo "clamor" (rigmu en ba?lJlon,lO) . (28) ~ypor tanto a andar por. el.. cammo de la hberaclon-'cu~~
Que nos recuerda el de los .hebreos ,en los pasajes citados ha- do clama, eleva suvoz,su grito de protesta y dedenUll:Cila.
~e un momento. Por un lado ' la situación del mito mesopo- Tal es la palabra del opri:midoen el relato del éxodo.
ramio parece más auténtica: el hombre se. rebela y l~ba; ~l
"clamor" de los hijos de Israel, en cambio, parece mas-pass-
va. Gritan a su Dios en lugar de obrar. Por otro lado, la cos- b) 'La palabra del liberador. En los dos relatos vocaciona-
les de Exodo 3 y 6 Yavé es representado como sabedor de,
la opresión del pueblo de Israel ("he visto. , " he pído", 3:7.
28 Una nueva traducción del mito en W'O. LAMBERT-A.R. MI- 9;".6:5), como revelador de un designio 'de salvación inmediata
LLARD, Atrahasís: the babyíonían story of the flood (Cla- C'.'he bajado para liberarle" ,3:8; "yo os libertaré de los traba-
rendon, Oxford, 1969). . jos forzados ... ", 6:6S8) que culmina en el don de la tierra
36 37
mente este fenómeno: tras el "endurecimiento" del faraón que como-un acto de fuerza de Dios (cf. más adelante). Los he-
tiene noticia del proyecto subversivo y tras la imposición de breos no tienen ningún poder, al estar esclavizados y despo-
nuevas cargas laborales, los representantes del pueblo ante el seídos de 10& medios de liberación. Sólo un poder superior pue-
palacio enrostran a Moisés y Aarón con estas acusaciones; de socorrerlos. De ahí la manifestación de las plagas y la in-
"vosotros habéis sido causa de que el faraón no pueda vernos tervención salvífica de Yavé en favor de su pueblo. Volvamos
y habéis puesto la espada en sus manos para que nos mate". a advertir .que el relato.es esencialmente religioso y que por
En cierto modo se ponen del lado del rey, prefiriendo que_ ello remonta hasta Dios la iniciativa y las garantías, o' el po-
las cosas sigan como están; la "causa' djel mal no está en 61 der, de la liberación. Ingenuo sería "esperar" que hoy suceda
sino en quien concientiza y promueve para la liberación. Pero otro tanto en forma literal. Aquella ¡ 'presencia" inmediata
las cosas no acaban allí. Moisés también "acumula" en sí ese de Dios e~ más representacional que un suceso literal; quiero
miedo a la libertad y retransmite la acusación a Dios mismo, decir que no se manifestó de esa manera, sino que fue "reco-
autor último del proyecto de liberación: "Señor, ¿por qué eas- nocida" a partir del acontecimiento mismo y expresada luego
tigas a es~e pueblo? ¿Para qué me has eoviado? Desde que fui en el lenguaje mítico-simbólico que ahora leemos en el Exodo.
3'1 faraón a hablarle en tu nombre, maltrata al pueblo, y tú no Sabemos ya la riqueza que 'revela este fenómeno de "profun-
haces nada para librarle" (5:22s). Como si el itinerario descen- dización". Nos interesa, ahora remarcar la manifestación de
dente de la Palabra concientízadora se invirtiera por una pala- aquel poder de Yavé,. super~or al.,del faraón .opresor. A éste
bra ascendente que viene del opresor o de su "sombra" . sólo se lo supera con otro poder .. Ahora bien, hoy hay una
¡

conciencia muy clara de que no hay poder superior al del


e) La Palabra del opresor. La hemos comentado en parte. "pueblo" unido y comprometido. Cuando un pueblo entero re-
Es el "endurecimiento" en su egoísmo y el enceguecimíento chaza a un tirano crea un "vado de poder" .lrremlsible. Los
frente a la realidad de los demás. El relato de las plagas en- hebreos no representaban a Egipto, pero fue su decisión de
seña una actitud notable del opresor egipcio: su corazón se "en- rebelarse todos y de huir (no se trataba dje una toma del poder!)
durece" cuando Yavé 110 advierte con castigos (una forma "re- la que les dio el éxito. El faraón no pudo hacer nada centra
ligiosa" de acción subversiva ... ) y también cuando le perdona el grupo unido. Pero éste se organizó y no dudó en marchar
y lo deja obrar desde él mismo: entonces se revela su alma .de porque estaba "concientizado" y sabía lo que tenía que hacer,
opresor (cí. 8:11.27s; 9:34s; 10:20). -No hay palabra de a pesar de las resistencias y de las dudas iniciales. El eníoque
Dios (su conciencia) ni de los oprimidas que 10 conmueva. No religioso del relato nO' nos da ya elementos para juzgar la "es-
puede aportar ninguna solución desde sí mismo -. El opresor no trategia" de la epopeya liberadora, pero eso mismo nos dice
puede liberar nunca. .. Las respuestas del faraón a loo men- que un proceso de liberación que tiene todos, los contornos de
sajeros del designio divino -Moisés y Aarón- son de recha- un hecho político y social puede muy bien -o debe ser, para
zo, o astutas (como en el caso de 10:11, en que permite salir una conciencia cristiana- interpretado como voluntad de Dios.
sólo a los hombres, forzándolos así all regreso a sus familias) .
o falsas. La opresión está al servicio de sus intereses o para 6. El 'suceso 'de la liberacién,
engrandecer su poder. La oposición de Yavé con sus prodigios
-mediante los gestos de Aarón con la vara-.suscita su pro-
pia voluntad de poder. Este enfrentamiento de "poderes" es Lo escrito hasta ahora en el relato bíblico es la prepara"
significatvo, ya quepI1epafa el gran momento de la liberación ción y toma de conciencia de une vocación a la libertad. El
40 41
hecho mismo de la liberación se desarrolla en varios episodios
que nos ponemos a meditar. . ., "afloja" cuando tiene la soga ab cuello (la muerte deIospri-
mogénitos de todo su país, 12:29~33). Aún aSÍ, su decisión es
a) La Pascua, Todo el capítulo 12 del Exodo establece' el forzada. Su conciencia sigue siendo la de .un opresor, que no
ritual de la Pascua interpretada COlD.()l "memorial" del aconte- puede liberar a nadie desde sí mismo. En efecto no bien se
cimiento salvífíco (v, 14.17.27.42.51). Se proyecta eviden- siente sin los oprimidos, le trastorna el vértigo d~l poder . y ex-
temente a aquel' momento un rito plasmado a través de mu- clama: "¿Qué es lo que hemos hecho dejando' salir a Is:rael y
chos años y muy posterior en cuanto al desarrollo descrito. privándonos de .sus serVicios?" (14:5). Y salea perseguirlos
Mas eso mismo es sign.ficativo, ya que, de nuevo, estamos en 'para "retenerlos" aún como esclavos. Los necesita, como amo
presencia de una "desimplicación-del-sentido' de aquel suce- que es. Sin ellos, él no "es". Sin sus servicios, no es el gran
so salvador: toda "pascua" rememoraba esa preseneía de Dios faraón de Egipto ... Sólo deja de ser opresor cuando los hebreos :
en la historia del pueblo (de hecho, todas las fiestas judías fue- se salvan de él. Pero en ese mismo momento se destruye a sí
ron siendo referidas al éxodo). Al hacerlo así, todos los hechos mismo, él y todo su "poder" (14:28). -.
significativos posteriores se entendían a la luz de la liberación Por otro lado, algo notable sucede también en el corazón
originaria, y la pascua, al conmemorar a ésta, incluía a todas de los hebreos, en la etapa culminante de su proceso liberador.
sus consecuencias. Como fenómeno religioso típico, cabe se- A pesar de todas las garantías (simbolizadas en la palabra y
ñalar que lo que se fue haciendo a lo largo de Iossiglos en en la mano orientadora de Dios, y en su presencia por medio
la "memoria" pascual se tomaba como realizado en la prime- de la nube yel fuego), ell pueblo deja asomar una última "du-
ra pascua. Todo círculo hermenéutico corre en dos direcciones: da"cuando el peligro es extremo y parece que todo fracasará
del suceso arquetípico al presente existencial. y de éste a aquél, (14:9s). De su boca sale esta "murmuración" contra; su líder:
asimilando simultáneamente a todos los momentos intermedios "¿Es que no habíasepulcros en Eg'pto, que nos has traído al
no ya como anillos encimados sino como fusionados en la últi- desierto a morir? ¿Qué es lo que nos has'ihecho con sacarnos
ma ¡ 'relectura". YO' no puedo celebrar la pascua sino porque de Egipto? ¿No te decíamos nosotros en Egiptocdeja que sir.
se dio el acontecimiento del éxodo, pero en esa "memoria" ac- vamos a los egipcios, que mejor nos es servir a ellos que morir
tualizo también los otros momentos de liberación del pueblo. en el desierto?" (v, l ls). Paradójico como es, el episodio
tiene su honda motivación: la "concíentízacíón" previa a un
Aun el reenfoque de la "Pascua" de Cristo está en continui..
dad con la del éxodo: pero toda "memoria" tiene sentido proceso liberador, y que lo pone en movimiento, nunca es 'ple-
na. Sólo el acontecimi.ento mismo revela todo su "sentido".
para mí si estoy de alguna manera metido en un .proceso ac- •El ejemplo del éxodo es por demás signiñcatívo al respecto,
tual de liberación. Un opresor no puede celebrar la "pascua"; Por eso el redactor subraya el final: la actitud de' seguridad
sería una falsedad. A lo más, podría reeditar alguna festividad a partir del Acontecimientor t'Israel. vio'la mano' potente que
faraónica. .. La pascua no le sirve; por eso, y porque es una mostró Yavé para con Egipto, y el pueblo temió a Yavé y
"memoria subversiva". creyó en Yavé y en Moisés su servidor" 04:31). '
\ -c)EI canto triuufal. Del acontecirniento surge el "sentido".
., b) ~ salida de Egipto. El.momento mismo de la libera- Es lo que venimos afirmando todo el tiempo como tema cen- .
cion esta relatado en los capítulos 12-15 del Exodo. Todos sa· tral de este ensayo. La alabanza .es una forma de expresión
bemos los episodios de la salida del país de los faraones ~ del sentido. Es; "interpretación". Corno tal, dice algo más de
Queremos solamente anotar dos detalles: por un lado, el r~y Jo que sucedió La. oración de acc'ón de gracias es .distinta, .
42 43
más profunda, que la de petición previa. Uno pide según el 7. El relato hermeoéutioo.-'
"deseo", que a veces es ilusión. Pero agradece según lo acon-
tecido, y el acontecímiento se revela de ~iato como "do- Hasta ahora hemos reflexionado a: nivel de "acontecimien-
nante-de-sentido" por las prolongaciones que tiene en la existen- to". Sin embargo, hemos supuesto todo el tiempo' el relato ac-
cia presente yel acontecimiento, porque corrige el deseo; se tual del libro del Exodo. Uno y otro, sin embargo, no se recu-
me aparece paradójicamente como más profundo aún: la evo- breni. El lector tendrá en cuenta 10 meditado al comienzo de
cación del Dios salvador es más honda si la precedió la invo- este capítulo, en el parágrafo intitulado: "del Acontecimiento a
cación. Pero aquélla, no ésta, es hermenéutica. El magnífico la Palabra". Podemos ahora reducirnos a la palabra-relato,
"canto del Mar" (Exodo 15) evoca a Yavé como el gestor de apenas aludida en aquel lugar. La narración dice más de 10
la l.beración: que aconteció exteriormente en la gesta de la liberación. Es
"interpretación", la cual nunca deforma: el acontecimiento sino
"Cantaré a Yavé que se ha mostrado sobre modo glorioso; que lo enriquece con una visión más honda. .
El arrojó al mar al caballo y al caballero;
Yavé es mi fortaleza y mi protección. El: fue mi salvador. El lenguaje de nuestro relato es de estructura simbólica y
H es mi Dios, yo le alabaré. mítica. No es mítico elacooíecimilmto, que nada tiene que ver
Yavé es un fuerte guerrero, 'Yavé' es su.nombre. ' con la historia primordial de los dioses (cuya I 'intención", por
Precipitó en el mar los, carros del faraón y su ejército ... " otra parte, no deja de ser "verdadera"), sino con la experien-
(vv. 1-4). cia histórica de esclavitud y de salvaciónque conocieron, los
hebreos en Egipto. Con todo, cuando un .suceso es interpreta-
Pero tiene lugar en esta alabanza el mismo fenómeno ob- do en sU instancia trascendente, no puede ser relatado como
servado en el ritual de la pascua (12:188): su redacción actual crónica o en su realidad externa. Por un proceso caracterís-
es muy posterior. Supone, entre otras. cosas, la instalación de Is- tico, fenomenológícamentc analizado, el nivel de trascendencia
rael en la tierra de Canaán, país montañoso que en el v. 17 es se "pasa" a su exterioridad contingente, que súbitamente apa-
representado como el "santuario" hecho por las manos, de Ya- rece integrando elementos "milagrosos" y extraordinarios. Es
vé. En otras palabras, se interpreta el acontecimiento .del éxo- lo propio de la narracíónmítico-símbóhca, que es fundamental-
do desde su plenificaciónen la tierra de la promesa; los dos mente hermenéutica. Mejor, porque es hermenéutica (descifra
momentos de la "salida" (de Egipto) y de la "entrada" (en la el acontecimiento) necesita un lenguaje distinto al de la historio-
tierra) son correlativos. Aquél apunta a éste; 1aJ "entrada" no grafía profana. Ahora bien, el símbolo es "remísor" a 110 tras-
sólo completa a aquél sino que ahonda el "sentido" que no era cendente, y el mito es "remisor' a lo arquetípico y creacíonal.
totalmente perceptible en el instante mismo de la liberación. De ahí ese lenguaje' típico de la religión y que no está ausen..
La libertad era la meta de la liberación, pero a su vez la re- te -no puede estarlO'-'- de la Biblia, que habla constantemen-
significa. BI "cántico' del Mar" de Exodo 15 celebra al Dios te de una presencia de Dios en los acontecimientos de] hom-
del éxodo en el momento mismo de la liberación (cf. v . 1) bre. La historia. bíblica es manifestadora de un "sentido" .más
pero desde el don pleno de la tierra,' acumulando en laala- quereproducc'ón de hechos contingentes. El relato de la libe-
banza una larga experiencia de la salvación entendida en con- ración de Exodo 1-15 está Heno de imágenes simbólicas y de
tinuidad con el acontecimiento, originario del éxodo. Para no- hechos míticos (las plagas, la travesía fabulosa del mar, los diá-
sotros: ¿qué puede "significar' hoy cantar un Te Deem en una logos de Dios con Moisés, el anegamiento del faraón con sus
fiesta patria? huestes, la columnade humo o de fuego, etc.). Repetimos a
44 45
los no iniciados en el estudio del lenguaje religioso: no se tra- allí un afán de fabulación sino una expresión hermenéutica de
ta de una distorsión histórica, sino de una exploración del "sen- la "comprensión" profunda del personaje-clave 4e su .hlstoria.
tido" trascendente de las cosas o de Ios hechos. Una "histo-
ria sagrada" no puede coincidir -a nivel de forma- con
una crónica común, del mismo suceso. Pero no son dos his- 8. El mensaje.
torias, paralelas, La "historia sagrada" manifiesta el designio
y la significación de la historia conocida de los hombres. La Lo que llevamos expuesto nos está diciendo una y' otra
. perspectiva y el lenguaje son distintos. Ves más profundo. que vez la riqueza querigmatícadei éxodo. Para completar, vamos
así sea. No nos extnañernos, por lo tanto, de encontrar este a comentar otros cuatro aspectos de este mensaje, dejando ca-
lenguaje tan peculiar en el relato de la liberación del pueblo da vez una línea de reflexión para el lector.
de Israel.
a) Salvulción-liberación.

Queremos que el lector quede pensando en este fenómeno, El éxodo fue "la" experiencia salvífica de Israel. Quiere
que también se repite en nuestra propia historia. A pesar de decir que 'este pueblo fue entendiendo la salvación (componen-
la mentalidad científica e historicista en que, como occidenta- te fundamental de toda cosmovisión religiosa) en términos de
les, vivimos desde hace siglos, las gestas patrias nos son trans.. "liberación": Los vocablos hebreos'nasal y Y13sa, connotan los
rnitidas a nosotros con no pocas modificaciones. Los "héroes" dos aspectos aIa vez. Sucedió también que la propia historia
son tales desde sus orígenes; otras veces son "comprendidos" de ese pueblo (sin escatología post-mortem y sin dualismo alma-
en esa categoría mucho tiempo después, por lo que significairon; cuerpo) .enfatizó una experiencia de Dios como salvador en el
otras en fin, pasan a primer plano algunos que no eran tan im- plano de lo terrestre, con una fuerte relación a lo político y so-
portantes en un comienzo o para un grupo. Un "revisionis.. · cial len que la \'independencia' era una expresión concreta y
mo histórico" es justificable cuando denuncia la utilización de existencial de la protección de su Dios. En una teología de la
las figuras patrias para fines opuestos. a los de la revolución li- historia, este hecho tiene su trascendencia: al' Dios se lo com-
bertadora original o el oscurecimiento de otras que no "con- prende comoseivador porque actúa en la historia de los hom-
vienen" a los intereses espurios de una nueva casta opresora. bres, no en primer lugar para una meta-historia, En la fe de Is-
Un argentino bien informado sabe que hay "héroes" nacionales rael, confesada en los "credos" centrales (v.gr. Deuterono-
que no han servido mucho al país... , y otros que han sido "ta- mio 6:20ss; 26:5ss; Josué 24:2-13, etc.), "salvación" equivale
pados" o de quienes se ha practicado una "erasío memoriae" . a "liberación", y a Dios se 10 define por el éxodo, o sea, como
Pero ya no resulta el "revisionismo" cuando pretende despo- "liberador". Estamos diciendo que la v'liberaclón" no es un
jar los elementos míticos crecidos en torno a las figuras pa- concepto advenedizo sino el centro dlel} querigma bíblico. Des-
trias de los orígenes, El pueblo fue "explicitando' en el rela- de entonces, ¿con qué derecho se puede acusar a la actual "teo-
to mítico el sentido de tal o cual personaje para toda la historia logía de la liberación" de ser una excrescencia de la teología
argentina, su dimensión meta-acontecimental. Así también los bíblica? ¿Cómo hay "teólogos" que se .atreven a negar los de-
hebreos no se contentaron con los datos escuetos del éxodo so- rechos de una "hermenéutica" del éxodo como momento teo-
bre Moisés, el líder de la liberación (a: pesar de estar ya mi.. 'lógico latinoamericano? AlH está' el acontedmiento del éxodo y
tologizados) sino que acrecentaron su figura con . innumerables la fe en un Dios que algo hizo por Ila liberación histórica de
episodios apócrifos, a cada cual más extraordinario. No hay un pueblo ...
46 47
b) La mediación dd líder. explota ese motivo: partiendodel hecho~e que lo~~ebreos ,no.
creyeron en Moisés, a pesard~ haber Sido ,el ~audIllo elegido
¿Por qué Dios no salva directamente a Israel, sin "llamar" por Dios para salvar a.Israel, acusa a los judíos que le es....
a Moisés? En la historia de la salvación Dios se sirve de mu- tánescuchando, diciéndoíes que ahora ellos no aceptan Q J~
chas mediaciones humanas, En eíecto, su presencia en nuestra como el nuevo autor de la Vida (Hechos 7:20 ss, pero sobre to-
historia pone de manifiesto los resortes de la misma y los o- do el v. 35s y S1ss). Los judíos de ahora, denuncia Esteban,
rienta a sus fines. A nivel de relato religioso, Moisés es un repiten la actitud de sus pad!~s (v, 51 al fill.8;l); . ..,
líder porque fue "llamado'' por Yavé y recibió la "misión" ~ie .. La fe bíblica, que no es intelectual smo dinámica y. e~ls­
sacar a Israel de la esclavitud. Pero en realidad fue "llamado" tendal se expresa en varias dimensiones: como .fe-reeoneeímíen-
porque era un líder.. Sólo que la "interpretación" -qu¡e explo- to de 'Dios en, elAcontecimiento (teología del éxodo), como
ra el "sentido"- invierte la relación, tal como! aparece en el fe-compromiso a la palabra.dada .(en Ia Alianza), como fe-fuerza
lenguaje querigmático. . en el testimonio (teología del Espíritu en Lucas), co~9 f~ . .aper-
En segundo lugar, la mediación humana juega un papel tura al don de Dios (frecuente en los evangelios sinópticos) y
relevante en el proceso de la fe. Moisés en el enviado de Dios; como fe-'aceptación del enviado. Cada aspecto tiene. su fique-
sin su aceptación no puede darse la liberación, Según 6:9 que za. En este parágrafo estamos tratandode valorar la ultima
hemos comentado, los hebreos "no escucharon" a Moisés, Tal forma mencionada, ligada .a. la presencia de Moisés en, el rela":
actitud significaba bloquear los planes de Dios, No tenía sen- to de -la liberación. Podemos concluir con una reflexión para
tido que Yavé eligiera a otro, más "credíble" para los israelitas, nosotros: catequizados en una revelación "terminada" y en una
Dios se revela tanto a través del Acontecimiento, como a tra- incapacidad hermenéutica para rec~noc~r f~rmas nuevas de la
vés de una persona. La figura de Moisés es clave no sólo por- presencia de Dios en nuestra propia h~storl~ (confesar que El
que fue el caudillo que realizó la salida de Egipto (como media- dirige la historia Y. confiar .en su providencia Slll reconocer ~u
dor) sino también porque expresa una dimensión esencial de la paso en los acontecimíentos de Ube!ación es hacer una teología .
fe. Era más fácil para los hebreos creer e~ Yavé, directamente, para la evasión de todo compromiso), no estamos prep~ad~s
que en Moisés, ser humano como ellos. Mas ese mismo Dios para "interpretar" ~ papel de ciertos hombres en la ~IstOil.'la
se expresaba por Moisés, y habia que asumir esa forma históri- de. nuestros pueblos, En nombre de una :~ n;al co~~eblda ,el
co y "personal" de la vocación a la fibel'ltad. No era fácil. cristiano tantas .veces 11a rechazado a un intérprete de DIOS
Este tema de la fe en el enviado ha sido tan bien. captado . " Nuestra historia latinoamericana ha tenido y tiene, sin ~m.
por [a tradición bíblica que toda la literatura profética ·10 vuel- .bargo nuevos "Moisés" que dicen su "palabra" de concientiza..
ve a marcar (cí. la crítica de Jeremías 25:3ss) , La fe en el ción liberadora, ¿Los seguimos, los "interpretamos", 01 los re-
profeta como enviado de Yavé es la clave para enten?er al Dios chazamos?
de la historia, cuyo intérprete aquél es, El evangelio de Juan
es otro lugar bíblico donde más se destaca el valor de la fe co- e) Una conciencia de libertad.
mo reconocimiento del enviado, Jesús es aquí el correlato ti-
pológico de Moisés (cf:. ~sp~cialmente Jua~ 5:43ss, ~ las ~u­ Todo lo que fue el éxodo, quedó grabado profundamente
chas discusiones con 10s judíos en que Jesus les critíca su m- en el ser de Israel como una experiencia muy. honda. Fue, en
credulidad en El y, por tanto. su "desconocimiento" del Padre), efecto, el acontecimiento más decisivo de. su historia, íe? • el
La tradición rabínica había completado también en esto el que captó un sentido liberador de Dios y un valor esencial en
dato bíblico y el discurso de Esteban en el sanedrín de Jerusalén su vocación, la libertad. De ahí que 'la conciencia: fundamental.

48 49
de Israel sea una. conciencia de libertad. Á nivel de comuni- Está actitud vale para el teatro trágico, no para la praxis: cris..
dad de la Alianza, de pueblo corno decirnos también, y a ní- tiana.· ,. - . ,
vel de persona. Madurada en una larga reflexión y recogida La historia del éxodo es harto instructiva a: este respecto.
en la tradición central y luego en la Palabra escrita, dicha Dios obraco'nenergía: "os libraré de su servidumbre y O'S sal- .
experiencia se eleva a la categoría de un 'mensaje para todo varé abrazo tendido y por grandes juícíos" (ExOOo 6:6)~ "bien
hombre. Enunciación del acontecimiento ejemplar, .anuncio de sé yo que el rey de Egipto no os pel1'mitirá .ir sino en .mano'" po-
una vocación, denuncia de uo que. no se es, tal es el valor de derosa" (3: 19). Si la opresión es llevada al extremo de la re-
este querigma de la libertad. . presión, la acción liberadora no .puede ser sino violenta, como
Si la libertad es uno de los valores intrínsecos del. hom- es la destrucción de toda la armada faraónica, o ser preparada
bre, y si el mensaje del éxodo 101 manifiesta corno vocación e· por medios persuasivos nada suaves, cual fueron las plagas ("el
sencial de un pueblo, ¿de dónde ciertas suspicacias contm la faraón no osescuchará, pero yo pondré mi mano sobre Egip--
apertura a la libertad? ¿De dónde la anulación de la misma: en to... ", 7:4) ~ .
tantas formas tradicionales de vida cristiana? Y la pregunta ¿Cómo se explica que Dios (y no se diga que El es '\'.se-
más dramática: ¿Por qué en América Latina ua Iglesia estuvo, ñor" de la vida de los hombres. ;. porque es proyectar en El
y en parte está aún, tan alienada cornopara no ver los signos la "sombra" del opresor que conocemos y que "juega" conla
de los tiempos que señalan claramente por dónde pasa la libe- vida de los demás), cómo explicar enronces que Dios obre ~
ración? ¿Por qué tanto ·tiempo colaboró' con los factoresde de- esa manera violentarPues que la "situación" de los hebreos
pendencia de los pueblos y trató de antievangélicosa muchos no admitía otro camino '. Dios intenta en primera instancia la
movimientos de liberación? . vía ·'pacífica' , haciendo que Moisés y Aarón pidíeranal-rey
que los dejara salir .(3:18; 5:1, etc.). Pero el opresor nunca
el) La violencia.
libera. Dejaría ~e "ser" lo único que "es". Las innumerables
Amor y violencia son dos polos opuestos pero conectados. respuestas del.faraón están aquí' para convencernos de que to-
Otra es la oposición entre amor y odio, esta vez irreductible. do, camino de' liberación 'se inicia desde. abajo 'y va contra, el
El amor puede ser violento, cuando el objeto amado no pue.. poder opresor. Es de la esencia misma del juego "opresión-Ií-
.de ser retenido o. recuperado sino por la fuerza. El amor trai- beración" [a lucha entre dos.. poderes. Así' sucedió con todas
cionado también es terrible. El amor, al otro es "paz" cuando nuestras gestas de independencia que no pudieronserpacíñcas
está bien, pero es "lucha" cuando media la injusticia. No se ni resultado de un entendimiento. Toda liberación se realiza.
justifica el "pacifismo' a .toda costa" (31) ouando la ausencia cuando se suprime el poder del opresor y se instaura otro po-
.de justicia 10 convierte en "espectáculo" de la miseria ajen~.\ der, 'esta vez salvífico. Es la ambivalencia del poder, salvíñ-
co por vocación, opresor por degeneración, la que da. razón
31) Ver P. RICOEUR, "El conflicto, ¿signo decontradicción y de de nuestra historia de dependencia y de los' procesos de libera-
unidad?": Críterto n.l66a (24-V-1973) 252-258, es:p.,p.254 (la ción (32).
ideología de la conciliación a cualquier precio); J.L. SEGVN-
DO; "Conversáo e reconciliacáo na . perspectiva da moderna
teologia da libertacáo", en Perspectiva Teológica 7 n.13 (;1975)
162-178 (=CristianiÍSmo y SOCiedad 13 n.45, 1975, pp.l7-25); 32) Véase nuestro ensayo, "La función del poder, salvífica u.
G. RUIZ, "Año jubilar hebreo y año santo cristiano. Cómo opresora?": Revista Bíblica 3.3 n.l44 (1972) 99-106; J. GI}4- .
se puede espiritualizar una reconciliación y reforma social": CIARENA, Poder y clases seeíalesen el desarrollo, de Amen·
Diálogo n.22 (975) 11-20. . .
.
ca LaiÜua (Paidós, Buenos Aires, 1967)~ .

50 ,~ 51
.' Volvamos a la pregunta precedente: ¿for qué el Dios del
éxodo actúa con violencia? ¿Por. qué .no respetó la vida de
los egipciosvcuyo rey y cuyos primogénitos sacrificó? Porque
la ~presión. nunca se justifica. La injusticia unnca puede tener
motivo. Tampoco es "pasable" por la resignación cuando se
a.g?tan los m~dios legales o "pacíficos" de erradicarla .La jus-
ticia es un bien radical, que reclama del amor (aunque parezca
paradójico) una actuación violenta. Es una verdad tan límpida
que nos escandaliza porque hemos. desf.gurado la imagen del CAPITULO III
amor A su vez, la libertad es un don tan íntimo y exigente
que; cuando está obnubilada o perdida, -demanda la liberación CREADOS PARA LA UBERTAD
a toda costa. El Dios de [a paz es 8IDtes el de la -justicia y de (Génesis 1-2) -
la libertad. La paz es, "pecado" 'cuando sirve para mantener
la .injusticia y la dependencia (es el,c?lmo de lo paradójico que Tenemos que explicar -por qué incluimos el Génesis en
quienes proclaman Ia paz-en-la-justicia a menudo ,. S011 los au- nuestro estudio, y por qué en este momento y no al comien-
tores o colaboradores de la violencia del poder., . y. Eso de zo. El primer libro de la Biblia, que interpreta el "sentido"
la "violencia injustificada" es una forma típica de "introyectar' dei hombre en el mundo a partir de sus orígenes, dle. lo radi-
al opresor en el oprimido. Y por ahí reaparece [a religión cal y ontológicano habla de la liberación; sin embargo, esta"
"opio- del pueblo". Y cuando el Evangelio del auténtico Amor blece claramente el estatuto del hombre libre. Sin usar de la
se degenera en "opio de los cristianos", ¿qué esperanza queda palabra "libertad" (poco empleada en el léxico bíblico) la ins-
para el mismo cristiano? tituye como vocación del hombre. Sólo que Ia expresa en un
¿No es de una inmensa riqueza hermenéutica el tema del lenguaje simbólico, mucho más _denso y "vocativo' que el tér-
, do?
exo '- , ' ' - ' I
mino corriente de "libre" o "libertad". En segundo lugar, sé-
le ahora tratamos del Génesis, puesto que la vocación del hom-
\ bre que destaca en su propio lenguaje es captada en virtud
de una experiencia histórica de liberación. No se hubiera po-
-dido escribir esas elocuentes páginas del Génesis sin el Acon-
tecimiento meditado del éxodo. Aquéllas son Ia "interpreta-
ción" de éste, expresada con e~ lenguaje de lo originario, de
lo que es "proyecto" ontológico del hombre: Sabemos que,' de
hecho, los relatos "sacerdotal" de Génesis 1 y "yavísta" del
capítulo 2 reflejan una elaboración teológica de los siglos
VI·"y y X a. C., respectivamente, y que el Pentateuco en su
forma actual no se remonta más allá de 1018 siglos. V-IV a. e.
Durante "esos términos-del tiempo Israel yahabíá cristalizado
su conciencia del ser nacional y su espiritualidad en torne al
Acontecimiento cumbre y radical ~l más alto y el más Pr0-
fundO-, de su existencia y de su experiencia de salvación
52
53
El hombre visto desde el Génesis, se nos aparece como
creado para la'libertad. Podemos considerarlo en su esencia tados, más aún cuando su' figura se proyecta al futuro, en el
y trascendencia, y en su misión en el mundo. Esto será lo pri- lenguaje mítico que alude al Mesías (35). Tal "reserva" res-
mero que analizaremos. pecto al reyes significativa. Tiene en efecto su reverso, 'en
[a aserción de que todo hombre es creado "a imagen de Dios"
(Génesis 1:26 'hagamos al hombre a nuestra imagen y semejan-
1. El hombre en sru esencia y trascendencia. za ... '). En· textos egipcios tardíos ( o relativamente tales>
se llega a una "democratización" de la idea del faraón "íma-
La representación más inagotable de la esencia del hombre gen" pero no se pasa prácticamente de los altos funcionarius,
es la de su creación a imagen de Dios (Génesis 1:26). Explo- La universalización aportada por el Génesis connota otra noción,
remos su sentdo (33) .No es ninguna novedad afirmar que a saber, que el hombre no es "imagen de Dios" a partir de un
el hombre está hecho a imagen de algún Dios. En culturas momento determinado de su vida (como era la: coronación del
arcaicas, y en las grandes tradiciones religiosas de Egipto y rey) sino desde su creación misma, que a su vez, es "proyecta-
Mesopotamia e-s una noción fundamental. Pe~'~ lo. característi- da" por Dios en su Palabra-designio. .
co en los textos orientales es guardar tal priv.legio solamente ¿De dónde viene esta innovación? Pues tiene que haber
al rey o faraón. üPor qué? Porque en las concepciones anti- habido una motivación muy clara para trastrocar la "ideología
guas el rey vive en una cercanía de ía divinidad muy peculiar; real" de todo el Oriente. Al referirnos más adelante a la ruptura
el rey, a) es hijo de Dios (desde su coronación, no desde su con la cosmovisión mítica s~ nos dibujará mejor la supresión
nacimientol), siendo asumido en el seno de la divinidad como del privilegio del rey a ser imagen de Dios. Pero aun para
su lugarteniente; los dioses, en efecto, son los "dueños" de la entonces queda en pie la cuestión; ¿de dónde el cambio de cos-
tierra y del cosmos, y tienen en el reysu "imagen' o sombra movisión? PUes bien, la respuesta está en lo que ya hemos tra-
que los proyecta; b) es el salvador, su función es para el .bie.. tado sobre el éxodo: hay una experiencia histórica que deter-
nestar y la paz de los súbditos; .las guerras son actos salvíficos mina una nueva visión de Dios, del mundo y del hombre. Por
por los cuales ell rey restablece el orden trastornado en el ello afirmamos una vez más que no se "comprende" ~a con-
país; e) por eso mismo, el reyes dominador absoluto, de su. tie- cepción del hombre en el Génesis sin la- aatocornprensión que
rra y su "palabra" es definitoria y hasta. creacional (34). de sí tuvo' Israel a partir del Acontecimientosalvador del éxo-
do. .
¿Cuál es la novedad que introduce el Génesis? Todavía hemos de añadir tres aclaraciones de fondo. Pri-
mero, que el Génesis va más allá de algunQlSprof.eta~que na:
Por un lado, nunca se afirma del rey que sea "imagen man a .Israel "hijo" de Dios (cf. Oseas 11: 1 'de Eg'pto llame
de Dios", si bien se lo concibe con los. atributos recién apun- . a mi hijo' y compárese Jeremías 31:9). El- hijo es "imagen"
del padre, como lo entiende la misma trad~ción "sacerd0t.al"
33) Un comentario más amplio puede verse en nuestra obra, El de Génesis 1:26 en 5:1-3 al hablar de los primeros descendien-
hombre en el mundo.I: Oreaetón y designio (La Aurora, Bue- tes de Adár», En nuestro pasaje, en cambio (Génesis 1:26) se
nos Aires, 1974) cap. IX ('El hombre-imagen').. . dice del hombre, a secas, no de Israel. Y respecto de Dios, no
34) Para varios estudios sobre lafunción del rey, ver VARI09' en cuanto imagen de sus padres. En segundo lugar, esta uní..
La l'Iegalitá sacra (Br1l.1, Leiden, 19&5); M.J. SEUX, Epithe;
tes royaJies akkadíennes et suméríennes (Letouzey et Ane. 35) Véase "El Mesías' liberador de los pobres": Jl,evista Bíblica
París, 1967). 31 n.l37 (l970) 233-240.

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versalización del motivo de la "imagen de Dios". aparece jus- sentada como única. Lo más significativo es el hecho de, que,
tamente en un texto cosmogónico. La problemática del hombre una vez puesto el hombre en el mundo, Dios cesa ~e. cre~r. Al
entonces sobrepasa el horizonte de Israel. Ella nos servirá tam- hombre en efecto le corresponde expresar su creatividad en el
b.én de meditación. En tercer lugar, constatamos que la ima- mundo formado para él. Lo veremos de inmediato.
gen de Dios que posee el hombre no se perturba ni se borra
con el pecado, El hombre "es" imagen de Dios en su propio 2. La misión del hombre en el mendo,
ser y en su vocación; el pecado es advenedizo, obra de la mis-
ma libertad, a la que no puede alterar. O sea, el hombre es El hombre-imagen de Dios, continuador del Creador,' reci- .
siempre libre, Pero todo hombre, no algunos solamente. be de inmediato su misión constructiva en el mundo; El Se-
¿A qué viene el tema de la "imagen" en el contexto de la ñor le encarga eldomilÚo de los animales y de la tierra. Estos
l'beración? dos ámbitos expresanel horizonte cultural de entonces e impli-
El símbolo mencionado define lo esencial del hombre, Pe- can los dos grandes avances de la humanidad con ia domesti-
ra por ahora es una representación que es menester descifrar. cación de.los animales y la agricultura. Puede llamar la aten-
Ser imagen de algo implica actuar los rasgos de esa otra cosa. ción la 'falta de referencia a la técnica propiamente tal (meta-
En nuestro ejemplo, el hombre debe efeotivizar algo de Dios. lurgia, arquitectura) como 10 hará el redactor "yavista' 'en 4:
¿Qué cosa, pues? Tenernos que definir primero a, D~~s para ~a­ 17~22. Sin embargo en 1:28 el 'sometimiento de la tierra es
ber qué es el hombre, su imagen. Importa la descripción de DIOS aludido en una frase suelta, incompleta e indefinida.' 'Tal vez
en el mi~lffilül relato de Génesis 1, no la de otros pasajes. La porque fue interpolada en su momento; de cualquier manera,
estructura narrativa es una totalidad significante por sí misma como indefinida,)a expresión queda abierta a la interpreta-
(35). Ahora bien, a Dios se lo describe allí como creador . Su ción. Sea poi' esta posibilidad de "entrar" en el texto, sea so-
imagen, el hombre, se define entonces por su creatividad; ésta bre todo porque el dominio del mundo está expresado con las
a su vez, incluye la autonomía y la libertad. . categorías culturales de entonces, .noa .toca a nosotros descu-
Es notable el hecho de que es el autor sacerdotal del Pen- brir en el texto una intención muy telescópica de'Dios que hace
tateuco, el más escrupuloso, quien piensa al hombre como "i- a todo hombre {¡no al rey!) dueño y señor de. toda la tierra,
magen" de Dios. Sabemos del horror dé los hebreos a las No para una "posesión" egoísta s'no como ,proy~cto. El hom-
representaciones figurativas de Dios. Por esoes más significa- bre ha de manifestar su dominio en su Cll"entiv:jdad; actuando
tivo aún el 'texto de Génesis 1:26 que, por lo tanto, se refiere su ser de "imagen" de su Creador. Esta vocación en el mundo
a un valor espiritual, profundo ":-a esa creatividad vocacional no tiene sentido sin autonomía y libertad. Vamos a profun-
del hombre- sin suponer la reproducción de algo corpóreo de dizar estas nociones desde dos ángulos complementarios, pero
D~. ' opuestos .entre sí; las 'visiones mítica y bíblica del mundo.
El Dios creador de la tradición sacerdotal hace a un hom-
bre como El, creador. El hombre es la última de sus obras, pre- .3 . La cosmovísíén mítlca,

36) Se puede consultar T.TonOROV, "L'analyse .littéraire du En el mito, el mru. es la clave de todo; hablamos del
récit", en Communíeatíons 8 (1966); Id., "Poéti,ca", en VA- .cosmos como tal, en cuanto vida, fuerzay orden, expresados en
RIOS ¿Qué es el estructuralismo? (Losada, Buenos Aires, 1, los ritmos y en los fenómenos del universo que nos circunda.
971) pp.lOH73; C. BREMOND, "Le message narratif", en
Oommuntcaüons 4 (1964). Lo sagrado es visualizado de'ntro del cosmos,' en la naturaleza

56 57
nmltiforme.Hay una presentación divina en todas partes; lo sao El del éxodo fue indicativo al respecto, La relación Dios-hom-
grado respira por el cosmos. Todas las cosas se captan como sím- bre ya no es cósmica sino dialógica, en el seno de una histori-
bolos "remísores" a lo trascendente-inmanente. Cada aspecto cidad en la que el hombrees responsable de un destino pero
del cosmos resulta ser una especialización de "lo sagrado" (de donde también les interpelado por el profeta o por el Evangelio.
ahí el valor del politeísmo). El hombre, por Jo mismo, queda . Por eso entendemos que el hombre creado a "imagen" de
polarizado por esas hierofanías (manifestación de, lo divino) . Dios es libre, en su radicalidad ontológica y en su proyección
Como la sagrado se transparenta en el cosmos, el hombre está al mundo, en su esencia y en su vocación. Sin la lib~rtad --cu-
ligado a éste en toda actuación. En cierta' manera, no tiene yo correlato jurídico es la autonomía-e- el hombre no puede
lugar. A no ser sacraíizándose en todo mediante "ritos de pa- realizarse ni, por lo mismo, puede actuar el designio de Dios.
saje": sólo si "consagra" una cosecha puede comer de ella. Aquí entroncamos perfectamente con P. Freire, quien destaca
No puede arar la tierra sin sentir que rasga el seno de la Dio- la vocación del hombrea "ser más", vocación negada en la
sa-Madre. La misma acción política del rey está supeditada al injustícia.ien-la explotación, en Ia violencia de los, opresores,
ritual (la rltualizaclónes típica en el hombre mítico, pues los en el orden injusto. De ahí la deshumanización (contraria al
ritos se 'desarrollan d~ acuerdo a los ritmos de la naturaleza), designio de Génesis 1:26ss) y su resultado, el "ser menos" de
El hombre, mítico na es libre, creador en su sentido .de con- los oprimidos (37). "Liberarse" significa por lo mismo "hu-
ciencia vocacional, sino que está sometido al cosmos. De he- manizarse", "ser más" en el ser y no en el dinero C'tener
cha, hay allí una búsqueda de seguridad no creativa. Por. algo más", la ilusión des-ontológica del opresor)', Significa llegar a
resurge aún en el cristiano la tendencia 'a "cosmizarse" (ritua- ser "creador",poderdominar la tierra. Significa poder expre-
lismo, astrología etc.) cuando no se define en su creatividad sar alguna vez la "imagen de Dios" grabada como "proyecto"
autónoma. desde da creación misma del hombre.
5. Del ideal a la realización
4 . La visión-del-mundo bíblica.
Hay una transición desde el éxodo, experiencia de liberación
¿Qué sucede en la cosmovisión hebrea? La clave que rom- hasta la antropovísíón del Génesis (insistimos en 1:26ss.
pe con el esquema mítico es la idea de. creación, Dios "creó pero en 2:5ss -sc afirma con otro lenguaje la misma vocación
el cielo y la tierra" (Génesis 1:1). Tiene existencia antes e delhombre a' transformar la tierra). Del' acontecimientasingu-
independientemente de! cosmos. ¿De dónde esa personalidad lar, inmensamente "significativo", la ~ de Israel se remonta
de Dios cuando en casi todos los mitos es nacido del caos pre- a la definición universal para todos los tiempos. Ambos polos
cósmico o de otro Dios? Israel tiene ya la experiencia de un influyen en la praxis. Pero de manera distinta. El suceso del
Dios personal, que obra en la historia, que es independiente éxodo, como salvación de la esclavitud, impide en adelante to-
de la naturaleza y superior a los dioses de otros pueblos. De da nueva forma de opresión. La "conciencia de libertad" se
ahí elabora la idea de un Dios distinto del mundo, al que crea. va metiendo dentro de la cosmovisión hebrea por la "interpreta-
Esa diferencia es radical, pues el mundo ya no es el ámbito ción' del éxodo y por la "memoria" del mismo en el culto y
de los dioses sino el lugar del hombre (según vimos al comen-
tar Génesis 1:26 y 28). 'Este, a su vez, no necesita asociarse
a los ritmos del cosmos para beber lo sagrado. Dios, distinto 3n P. FREIRE, Pedagogía del oprimido, p. 33s; re, ¿Extensión o
del mundo, se manifiesta en los acontecimientos de la historia. eemuaícacíén? (Siglo XXI, Buenos Aires, 1973) cap. Il, '

58. 59
en las instituciones. Ya aludimos a las fiestas como actualiza- orientador del Génesis. Son la Palabra interpelante, que en cual-
ción del suceso. salvífico del éxodo (cf. Exodo 12:14~ quier momento puede tomar el profeta para denunciar .el cami-
17, etc.; Deuteronomio 16, especialmente el v.12 al no torcido o anunciar la bendición. ..
concluir las prescripciones sobre Pentecostés: "acuérdate de Estas reflexiones reclaman una última observación: junto
que esclavo fuiste en Egipto"). El sábado, institución vertebral a la Palabra vocacional de Génesis 1 o ínterpelante del Bvan-
en la vida de Israel, tiene su arquetipoen.el descanso de Dios gelio, está la "memoria" del Acontecimiento concreto de una
luego de la creación según el redactor "elohísta" die Exodo liberación arquetípica, sea la del éxodo (la prohibición de la es-
20: 11 y el "sacerdotal" de 31: 17, mas para el autor "deutero- clavitud se motiva con .estas palabras en Deuteronomio 15:15:·
nomísta" lo tiene en la liberación de la esclavitud egipcia: "a- .'acuérdate de que esclavo fu 'ste en la tierra de Egipto y de que
cuérdate de que esclavo fuiste en la Tierra de Egipto, y de que Yavé, tu Dios, te libertó: por eso, te doy este mandato') o la
Yavé, tu Dios, te sacó de allí con mano fuerte y brazo tendi- del Misterio pascual, que exige la "liberación" de uno' mismo
do; por eso Yavé, tu Dios, te manda guardar .el sábado" (Deu- y de los otros en todas las dimensiones 00 explicaremos al tra-
teronomio 5:15). El culto y las costumbres sagradas tíenen tar de la carta de Pablo a los Romanos).
una función "mental'zadora" muy íntima; forman la concien- En conclusión: el hombre es llamado a la libertad para sí
cia. Israel tuvo el privilegio de formarla en la Iínea de la "li- y para los demás, como vocac'ón ontológica, y como "liberado"
bertad". Veremos todo lo que esa preparación contribuirá .a programátícamente por Dios en un Acontecimiento de la hísto-
la interpretación de la Pascua cristiana y cómo ésta debería ser ría salvífica.
profundamente mental'zadora en nuestro contexto de pueblos
oprimidos. . 6. Algunas reflexiones.
Sin embargo, el culto puede ser un sucedáneo de la praxis Sin querer "atajar" la inspiración hermenéutica del lector
•• 1. ¿Cómo se dio en las costumbres israelitas la aplicación de y con el intento de suscitarla más bien, expresarnos aquí algu-
esta "mentalidad" liberadora del éxodo? El Pentateuco nos re- nas reflexiones que ya hemos ensayado en grupo.
vela que los hebreos no practicaron la esclavitud entre ellos a) En la antropovisíón bíblica el hombre es creado a
-seguramente como reflejo de la teología del éxodo', vivida a imagen del Creador como ser libre y autónomo en la . tierra.
nivel de pueblo. Aun cuando un hebreo se vendía comoesclavo ¿Qué perspectivas se deducen para el autocomprenderse del cris-
a otro éste debía manumitirlo al séptimo año (textos legisla- tiano en el mundo de hoy? ¿La Iglesia le ofrece, al hombre la
tivos ~n Levítico 25:39ss y Deuteronomio 15:12ss). Curiosa- posibilidad de ser libre? ¿O la Palabra de Dios está "pagani-
mente, se admitía la adquisición o retención de esclavos "de zada" (recuérdese lo dicho sobre la. visión mítica del mundo)
las gentes que están en derredor vuestro" (Levítico 25:44 y dentro de la Iglesia y en las estructuras del mundo actual?
comp. Josué 9:23.27) En este caso, la "vocación a la libe~­ Nos' preguntamos, en efecto, si hemos medrdo e'l sentido
tad'', al "ser más", reclamada para todo hombre en e~ pas~Je y las exigencias de! ser libres, las implicaciones que tiene la
ideológico del Génesis, nQ1 era implerr:entad~. e~ la praxis s?clal vocación a la libertad y a la autonomía en el mundo. Las es-
israelita. Sucede que siempre la prax'8 se msplra en un ideal. tructuras del mundo presente sirven para privilegiar a unos
o en una cosmovisión, pero nunca alcanza a actuarios total- y oprimir a muchos.. Se podría hablar de un "pecado estruc-
mente. Igual sucede con la distancia entre el Evangelio como rural", a cuya liberación la sociedad "occidental y cristiana"
mensaje y la praxis de los cristianos. Por eso ;mismo, sin en:- poco ha contribuido, si no es su misma expresión antonomá-
bargo, tene importancia el "ideaí" del Evangelio o el mensaje sica.
60 61
Ser "imagen" de Dios. se interpreta entonces como vocacion
También el sometimiento de la tierra (de la naturaieza) .a lo eterno y 'Una negac'ónde lo histórico (típica contamina.. '
por la técnica y la c'encia puede abrir la vía del bienestar ción gnóstica en el cristianismo). Esa misma extrapolación a
humano y de su realización espiritual por el uso de su inteli- lo trascendente "congeló" la libertad del hombreen una mara-
gencia, mas puede también inaugurar el camino de la opre- ña de Ieyesy de tradiciones que ahogaban la creatividad. Para
sión. Hay un progresismo al infinito que sofoca al hombre co- colmo, ciertas formas de "alienación" ele la libertad eran (yen
mo infinitud del "deseo' mismo, el "infinito malo" de que parte son) mantenidas -'-por una "retromentalízaeíón-i- como
habla P. Ricoeur (38). Entendemos por tanto que la creativi- manifestaciones'de un "estado de perfección". Al aludir al
dad del hombre es ambigua: para continuar la creación de Nuevo Testamento volveremos sobre el tema fundamental de'
Dios y hacer mejor el mundo; o para destruir a los demás. la alienación religiosa, origen de muchas otras. Pero queríamos
Sobre todo el Tercer Mundo suíre las consecuencias del señalar su entronque muy hondo' en una v'síón total del hombre'
torcimiento del ideal de Génesis 1:26ss. La técnica creadora, que pierde.de. vista el querigma del Génesis. Este, una vez
maravillosa como es, se desarrolla desde y para algunos países más, nos interpela a los cristianos también.
ricos y capitalistas, producendo un empobrecimiento cada vez
mayor de .los más pobres. Para colmo, nuestra sociedad de e) Por último: ¿no .hay una "paganización" (ya insinua-
consumo "fascina" también a los pobres, y parece hecha para mas el tema) en las estructuras del mundo actual, heredero del
vender lo que producen los países o las empresas ricas, que crstianismo, y aun dentro de la misma vida de la Iglesia?
"sacan" las riquezas naturales de los países pobres. En Amé.. Hay otra tendencia en el ser humano, la de "cosmizarse", de
rica Latina se suma a estos males el engaño de la "inversión volver a, una mentalidad mítica. Un ejemplo específico es el
extranjera" cama ayuda o como apoyo al desarrollo. Lo cierto ritualismo social o litúrgico que' ata tanto al hombre y le ha-
es que porcada dólar que entra en estos' países latinoame- ce perder el sentido del Acontecimiento. El do es otro va-
ricanos, salen dos o más. según estadísticas recientes y alarman- lor ambiguo: bueno' de por sí (cuando prima su "palabra" que
tes (39). , lo intencional se. hace negativo cuando abandona lo profético
b) Nos preguntamos también si aquella "imagen" tras-- del mensaje y prevalece el "opus operatum" independientemen-
cendente que lleva el hombre no se ha convertido en motivo te de la praxis comprometida con la realidad. Es una gracia de,
de.alienación en la vida de la Iglesia en lugar de motivar u- Dios-el que nuestro cristianismo se esté "despaganizando" rá-
na lberacíón. El interrogante vale para todo contexto religioso. pidamente. Proceso que es más profundo, creemos, en' Latinoa-
Hay en efecto una tendencia en el hombre religioso, justa- mérica debido a una nueva "conciencia crítica' que parte de las
mente porque valora 10 trascendente (valoración de por sí tan situaciones vividas y no de' problemáticas académicas. En ese
significativa) a caer en la misma contradicción que advertimos itinerario de liberación quedamos llamar' la atención en .el a-
respecto a la creatividad. En este caso, de perder el sentido porte que 'significa una:' 'relectura' del motivo .del hombre
histórico, desproporcionando lo divino como única dimensión. "imagen de- Dios". Sus implicaciones concentran, toda la teo..
logíade la experiencia liberadora del éxodo y al-mismo tiempo,
38) P. RICOEUR, Le volontalre et l'mvolontaiTe (Aubier, París, insinúan un llamado al compromiso histórico a transformar el
1967) 421ss. mundo "en libertad" y a re-comprenderse en esa: libertad', para
39) Ver "Notas sobre la economía y el desarrollo en América
Latina", Boletín de la CEPAL n.88 (16-XI"1971) (Santiago la creatividad. Como tal, el tema, del Génesis señala una aper-
de Chile); G. MYRDAL, La pobreza de Ias naciones (Méxi- turaen el abanico de la "liberac'ón", reflexión que retomare-
co, 1975); R. HAAN, "¿Aclara la ciencia económica el con- mos en la última, parte dé este ensayo.
cepto de pobreza?": Cuadernos de Teología 5:1 (1977) 24-47.

62 63
CAPITULO IV

,EL PROFETA, f'CONCIENTIZAbOR" DEL'


HOMBRE ALIENADO
No se puede omitir una referencia a -Ios profetas enuna
hermenéutica de. la liberación, Por tres razones: su actínrd
frente a las "situaciones" del pueblo, su denuncia de la opre-
sión, su capacidad de discernir lo bueno de -lo maJ10en las
tradiciones religiosas. Resumiendo cada función en una sola
palabra sugerente, diríamos que el profeta es INI'ERPRETE
de los tiempos (inscribiéndose por tanto en la línea del herme-
neuta del éxodo), CRITICO del pecado y de la mentira de' Is-
rael y, CONClENTIZADOR del hombre inauténtico y alienado.
Tres expresiones del profetismo que tienen mucho que v~r con
cualquier proceso de liberación. Tal vez por eílo los latinoame-
ricanos sentimos a los profetas. bíblicos tan cercanos a nosotros,
y nos damos cuenta del resurgimiento del papel profético en la
nueva Iglesia que sólo nace, se expresa y madura en una in-
serción en la vida integral del hombre, desde lo social y políti-
co hasta lo espiritual . Los profetas son los exponentes califiea-
dos 'dejma fe política Es difícil encontrar algún oráculo -si
lo hay-e- que defina valores eternos que no estén rnanífestados
socialmente /ií> La causa principal' es doble: los profetas .se, reñe-
len siempre a Israel 03 sus representantes como pueblo, cuya
existencia roza continuamente 10 político y les factores de po-
der; en segundolugar, porque hablan a.un pueblo cQlIIl4,lrometi-

65
do eón su Dios a partir del hecho liberadery "adquisitivo" del mo y como "interpelación" constante al "reconocimiento" de
éxodo (ct. los muchos vocablos sobre "rescate"; "redención" Dios, sino que las decisiones y las "palabras" de la autoridad
etc. y Efesios 1:14) . son para proteger los intereses de ésta. El fenómeno es carac-
Las tres dimensiones que queremos- destacar en el profeta terístico. Por 101 demás, Ios detentores delpoder se separan del
anaden algo específico a los dos temas ya analizados del éxodo pueblo, la jerarquía de la comunidad . Esta, o el pueblo, o con-
y de la vocación del hombre. El-Acontecimiento de -Ia libera- servan su capaci'dad profunda de "hacer historia", de ser ñe-
ción de Egipto era "interpretado", dijimos vcon insistencia. El les al llamado de Dios, o son desorientados por 1018 que go-
profeta también es hermeneuta de aquella liberación. ¿Qué di- biernan.
ferencia hay? De' otra manera: ¿por qué no hubo profetas en De ahí la necesidad nueva del profeta, cuya voz interpreta
los' primeros siglos después del éxodo? óPor qué surgen cuan- la historia de una manera diferente, situándose frente al poder,
do Israel abandona la alianza comunitaria de tribus y. adopta y casi siempre desde el seno de la comunidad o del pueblo.
la forma de un gobierno central y monárquico? ¿Quién era el El profeta no es nunca "uno de Ios del poder"; sale de las ba-
intérprete de los acontecimientos a la .luz del éxodo en aqueo ses, o al menos habla desde su inserción en ellas. Aun cuando
llos pr.meros siglos? Si 'no peco de ingenuidad creo que la critica al pueblo de Israel, no lo hace como hombre de poder
explicación es simple: en efecto, en un momento fecundo-y cer- sino con el arma única de su palabra: "he aquí que pongo en
cano a la experiencia salvífica del éxodo, la. comunidad misma tu boca mis palabras; mira que te constituyo hoy sobre naeío-
iba "diciendo su palabra"; viviendo la plenitud del Aconteci- nes y reinos para arrancar y destruir, para arruinar y asolar,
miento, lo iba iluminando desde sus nuevas experiencias de li- para edificar y plantar" (Jeremías 1:9s).
beración (en Tránsjordan:a, en la conquista de la tierra, en. la . Vamos a ver brevemente cómo actúan los profetas en aque- .
época de las luchas contra los reinos vecinos con los Jueces). Ha triple dimensión (más esquemática que completa). Denun-
Sobre e~a "fidelidad" juvenil de Israel ilustra magníficamente cian la pérdida-de-sentido de ,la liberación pasada del éxodo, la
la introducción del gran oráculo jeremiano de 2:2..3 ("así habla opresión presente contra los débiles, anuncian la opresión futu-
Yavé: me acuerdo en favor tuyo del.afecto de tu adolescencia, ra del exilio como castigo total a una infidelidad masiva a
del amor d~ tus desposorios, de tuseg\úme en el desierto, tie- la historia, convertida en una proyecto fracasado de salvación.
rra donde no' se siembra; Israel era la santo de Yavé, la pri- Seremos breves porque lo que sigue no es nuevo' y otros
micia de sus frutos; quien 'de ella comía, 'pecaba y caía sobre lo han tratado muy bien (40). El ejemplo de los profetas es,
él la desgracia"). Su paralelo es el de la primera ronrunidad efectivamente, de una gran actualidad en el compromiso de li-
cristiana, saturada deIa experiencia pascual, llena de dinamis- beración y por eso la teología de la liberación ha visto en su
mo y.totalmente. fiel a la Palabra. Aquí la Iglesia, allá el pue- mensaje una fuente inagotable de inspiración.
blo de Israel, eran una comunidad que como' tal vivía, e "inter-
pretaba" por eso mismo, el Acontecimiento salvífico originario
tia Pascua y el éxodo respectivamente): . .
Mas cuando la comunidad --el pueblo en su expresión 40) Comp. R. CONCATTI, "Profetismo y política", en Nuevo
polít:ca- se resquebraja y entran'a jugar un papel. esenciallos Mundo 2:1 (1972) 90-108, Y sobre todo, el resultado de u¡n
factores de poder (el rey en Israeí.ielconstantinísmo y luego seminario sobre "profecía hoy, en América Latina", en Vk
la jerarquía supermagnificada en la Iglesia) no se interpreta RIOS, Cristianismo y Sociedad 15 n.54 (1977) 3-25; E. GAR-
más el Acontecimiento central en toda su limpieza y dinamis- erA AHUMADA, "Palabra ideológica y palabra profética",
en Mensaje 24 n.241 (1975) 343-352.

66 67
1. El profeta, "crítico" de Israel. ro a Israel critica sus pecados de injusticia y de opresión con-
tra los pobres (2:6-8; "aplastan sobre el polvo de la tierra la
La. primera acusación profética contra el pueblo de Israel cabeza de los pobres y estorban el camino de los humildes",
es la del abandono de Yavé y el retorno a los "dioses ajenos", v. 7). Las mujeres de los poderosos de Samaria comparadas
tipificados en Baal. Es la doble vertiente de un mismo pecado, a las vacas gordas de Basán (una región feraz d~ Transjorda-
pero Jeremías 10 estigmatiza como una doble maldad: "un do-
1
nia),son enrostradas por "oprimir a los débiles, maltratar a
ble mal ha cometido mi pueblo: dejarme a mí, la fuente de los pobres", y por su afán de lujo y derroche (4:1.:5). En el o-
las aguas vivas, para excavarse cisternas agrietadas, incapaces ráculo central del capítulo 5 desenmascara a los jueces por el
de retener el agua" (2: 13). Los profetas no defienden la fideo soborno, la expropiación y eil enriquecimiento ilícito en casas y
lidad a Yavé por ser monoteístas. No son dogmáticos. Es al campos, los fallos contra el pobre (vv. 10-q); "Tornan el jui-
revés: el mOlfloteísmo se expresa a medida que Israel "recono- cio en ajenjo y echan por tierra la justicia" (v. 7). Vemos
ce" en el Dios del éxodo a su único salvador. Yavé es el Dios que denuncia a los que tienen "poder".
de los acontecimientos salvíficos, e Israel no tiene una experien- Isaías, La monarqufa introduce los privilegios y éstos ori-
e.a igual con otros dioses (véase la elocuente oración de Elías ginan nuevas injusticias, una de las cuales es el latifundio:
en ea monte Carmelo en la que invoca a Yavécomo el Dios ¡'¡Ay de los que añaden casas a casas, de los que juntan
"de los Padres" y de Israel, de ia Promesa y de la liberación; campos y campos, hasta acabar el límite, siendo los únicos pro-
1 Reyes 18:36). Por . eso el profeta denuncia el gran pecado píetarios en medio del país!" (5:8). Otras formas d~ opresión
de Israel, el "adulterio" como se complace en llamarlo el sen- son denunciadas en el oráculo introductorio que resume la pre-
sible Oseas (cf. 1:2; 2:1ss y comp. Ezequiel 16:14ss; 23:1ss). dicación del profeta jerosolimitano (cí. v . 21-23)1. Los gran-
Este pecado de infidelidad es una ingratitud por una parte des son recriminados también en un terrible anuncio de castigo
(Jeremías 2:5ss; Amós 2:9ss; M'queas 6:3·5, etc.), una "pa- por haber extraviado al pueblo, pervirtiendo su función: 3:12-26
ganización" .a los dioses cósmicos, por otra. Sobre todo, oscu- ('mi pueblo está oprimido por caprichosos ... ; pueblo mío" los
rece el designio histórico de Dios. Bl profeta critica esa in- que te guían, te descarrían ... ' v. 12; a los jefes: 'habéis devo-
fidelidad a la vocación histórica del hombre. rado la viña [imagen del pueblo, cf. 5:lss) y los. despojos del
Ahora bien, ¿cuáles son los pecados específicos que desar- pobre llenan vuestras casas, porque habéis aplastado a mípue-
man el proyecto de Dios manifestado en la liberación del éxo- blo y habé-is machacado el rostro de los pobres', v. 1415). El
do? La vuelta a Baal no es sólo una actitud genérica. Como pueblo es arruinado por los que 10' dirigen. La perversión del
pérdida de la vocación propia y alienación a lo cósmico,es un poder es una constante en la denuncia profética.
pecado concreto. Yavé 1)0 tiene entonces ningún "sentido" pa- Jeremías. Es el acusador por antonomasia del rey de Je~
ra Israel. Junto con esto, o aparte, los profetas acusan deuna rusalén. Puesto que actúa en los albores del exilio del 597 su
manera constante y enérgica por las injusticias sociales'. La de- testimonio es impresionante. Si, sobre todo en sus primeras ín-
nuncia de Ja opresión sobre los débiles (los pobres y los inde- tervencionescritica el pecado de todo Judá (como en el "me-
fensos ante la ley, que seelen ser los mismos) emerge implaca- morandum" de la apostasía del capítulc 2 y cf. 3ss), recorde-
ble en la voz de Amós, Isaías y Jeremías, pero es difícil no mos que pronuncia sus oráculos en la capital, Jerusalén, en
hallarla en los otros voceros de Yavé. donde se manejan 10's resortes del poder y de donde se mentali-
Amós. En los célebres oráculos contra las naciones veci- _zaal pueblo. Este tiende de por sí, a "paganizarse", pero
nas de Israel las acusa por sus crímenes de guerra (1: 1-2:3) pe- 10 hace más rápidamente con el ejemplo de los grandes centros

68 69
urbanos. Es también a los habitantes de Jerusalén a quienes ame- 2. El profeta, "coneíentizador' del pueblo.
naza en 7:1ss , en un discurso contra el templo,
que
h
queremos Esta dimensión del profeta está conectada con las' otras
comentar 'luego, De cualquier modo, Jeremías se a como es- dos (la .crítica y la' interpretación de la historia) pero tiene su
pecializado en denunciar a los reyes de Jerusalén por su torci- rel'eve propio- y es necesario' destacarla .por' su actueíídad.
da conducta. Contentémonos con las escenas de los capítulos Sabemos que no hay proceso de liberación-sin una etapa. de
22 y 36, A Joaquim le pone el ejemplo de su padre Josías que concientización en el .pueblo oprimido, único ejecutor, de su
hacía justicia al pobre y desvalido; él en cambio oprime y ha- "paso" a la'libertad y. al "ser más" , Concient~zar significa d~~ ,
ce violencia (22: 16s). En otra ocasión, este rey fatídico que- senmascarar lo que es falso, p~r un lado; ubicar en la, reali-
ma en' presencia de sus oficiales el mensaje escrito del profeta dad, por otro. Se puede "criticar" el pec~do del opresor (d~.
(36:23.27) pero éste le reitera en. gruesas palabras el designio nunciaprofética) y "concientízar" al oprimido 'p~ra que se li-
divino de 'liquidar su dinastía: "no tendrá descendiente que le bere. Es el esquema que' tal vez queremos' aplicar SIempre.
suceda en el trono de David y su cadáver será arrojado al ca- Pero ¡la crítica al opresor concientiza al oprimido que la oye;
tor del día y al frío de la noche ... " (v, 30). Al mismo rey o la concícntización del oprimido se eleva como "crisis" del O«
a su sucesor de pocos días (Joaquín) le recuerda su función presor , Los profetas de Israel. concientizan criticando, tanto al
de "hacer derecho y justicia, librar al expoliado de la mano pueblo como sobre todo. a sus jefes" Eyidenteme~!e; se sitúan
clelopresor. .. de no hacer violencia" (22:3s), exigencia que en el plano religioso para enfocar el. SOCial. Hablan a un pue-
vuelve a enunciar ante Sedecías, títere de los babilonios y úl- blo sabedor de su vocación y de la Alianza. Elprofeta no. su-
timo rey de Jerusalén (22: 12), Se trata siempre de los que . pone una "concienciacerrada'' (42) que hay que abrir me~I~~~
tienen lel poder pero lo pervierten. En 22: 16 usa Jeremías te una toma de conciencia crítica de la realidad. La trasposición
una expresión muy significativa: al mencionar los gestos de hermenéutica la podernos practicar nosotros Ilegítimamente. Sin
justicia hacia el oprimido de Josías, exclama: "¿no es esto 00- embargo, queremos a,firma! ql~e la cOll~,ienc:~ pecadora d~, Is-
nocerme?": La relación es muy profunda y supone toda la tea.. rael equivalía a una 'conCIenCia. cer.r~da .al ~on?c.l1mento ,de
logía del éxodo, Israel ha "conocido" a Dios en ~u. obra. de Dios en la historia ya la realización de su justícra (Jeremías
liberación. "Conocerlo" implica desde entonces VIVIr la libe- 7:5ss), según ya comentamos . Era una conciencia ~alsea~a,
ración y liberar a otros; para el ,rey, realizar la "J?-s~icia" ~n fuente de actitudes inauténticas. Al desenmascararlas íntencío-
los humildes. Representa a Yave, en efecto. Oprimir equrva- nes mentirosas, el profeta "da qué pensar" sobre la realidad
le a "desconocer" al Dios que ha dado la libertad. La "re-. desnuda subyacente; Por tanto, mentaliza. Pocas veces ,habla
lectura" cristiana de esta expresión profética es muy clara. indirectamente, al pueblo sobre el opresor (v. gr. Jeremías ?:
El "¿cuándo te conocimos?" de Mateo, 25:3?~s va por ese. l~­ 26s5). Su lenguaje es directamente acusador, yen Ia denuncia
do. Sólo a los que trabajan por la liberación de los OprImI- clarifica. Algunos episodios 101 ilustrarán:
dos, Cristo puede decirles: "¿no es esto conocerme?". Mas ¿a
quiénes, en nuestra América Latina, podemos suponer escu- --La "paz". Como en todos 'los tiempos, hay verdaderos
chando esa voz profética? (41). y falsos profetas. ¿Cómo se identifican aquéllos? El Deutero-
nomio había codificado las "notas" de credibilidad (18:21s),
pero eran insatisfactorias: profetas fa~so~ también ?braba~ pro-
digios y podían hacerse pasar por envisacos de Yavd. Lo nnpor-
41) Ver el excelente comentario de R. OBERMULLER, "¿Dónde 42) .P. FREIRE, La educación como práctica de laübertad, p.59s.
estuviste?": Revista Bíblica 35 n.l47 (1973) 14-21.

70 71
tante era que de hecho hablaran en nombre del Dios de la Alían- versión '. de los valores de una religiosidad popular desviada; la
la, cuyas exigencias y maldiciones eraasabidas. De allí en- subsume en una experiencia histórica de liberación (como pro.
tonces que el Israel transgresor de la justicia no podía esperar ~.ecto para el .hombre), s~lvándola de un sincretismo que des"
sino el exilio, . y el profeta era verdadero si denunciaba ese figura el quengma, En este, como en muchos otros oráculos
pecado y anunciaba SU castigo, y falso cuando invertía los tér- de acusación, el profeta hace pensar; rementalíza, Notemos que
minos, justificando así la mala conducta. La disputa de Jere- el ejemplo dado es de gran actualidad para el problema lati-
mías con su "sombra" AnaIlias (28:1ss, esp. v..9), Y luego noamericano de la religiosidad popular. ¿En qué sentido y
con otros falsos profetas (23:9ss) es indicativa. Estos dicen con qué riqueza virgen puede ser asumida -no rechazada-
"paz", "no pasará nada", a quienes no escuchan la Palabra de en un proyecto de liberación del hombre autóctono'?
Dios (v. 17!). De esa manera, el proteta "concientiza", ya que Hay más elementos bíblicos para la discusión del prdble-
manifiesta dónde se encubre la verdad y ayuda a situarse.en ma, pero ahora no hace falta abuudar más (44).
la realidad y a asumirla (todo el capítulo 28 de Jeremías es -El culto. Todo los grandes profetas han dicho su pala-
sugerente al respecto). El profeta que denuncia, no el que bra contra el culto oficial de Jerusalén (Isaías 1:11"17; Jere-
halaga, es el env.ado de Dios. El que está por la Alianza, no mías 7:2ss; 26:2ss; Amós 5:21-27; Oseas 6:6; Miqueas 6:6-7).
por los que oprimen. Los que interpretan el Evangelio y de- El culto, como muchos valores sagrados, es ambiguo; en sí es
nuncian el "pecado" de 108 poderosos a de la Iglesia misma, bueno (la tradición "sacerdotal" de Exodo 25s8 remonta al
no quienes defienden el orden' injusto, por más "occidental y Sinaí mismo su ordenamiento), está ligado a la "memoria" del
cristiano" que sea. También algunas teologías de la "seculari- Dios liberador como ya se vio. Pero puede pervertirse: al no
zación" de países ricos pueden ser "dopadoras" y decir "paz" tener vida queda convertido ..en mero formalismo que oculta
a ~os opresores (43). satisfactoriamente el vacío interior. EJlo es harto frecuente. Pe-
1'0 los profetas no denuncian tanto la "vacuidad" del culto
-La inversión die valores. El pasaje recordado de Jere-
mías 2:13 sobre el doble pecado de Judá muestra en su propio ritualista cuanto el ocultamiento por él de un pecado esencial-
contexto (todo el capítulo) el engaño del hombre por las apa- mente antitético al culto de Yavé, el Dios del éxodo. Ese pe-
riencias de la misma realidad. Baal era un Dios importante; cado es el de la opresión, Léanse los pasajes citados y se des.
patrón de los fenómenos de la vida, su culto debía sugestionar cubrirá lo impresionante de la acusación ('harto estoy de holo-
a los hebreos. Pero el profeta les muestra que las cosas no son caustos ... '; '¿quién os pide eso a vosotros? .. ', 'aparto mis
así, que Yavé autor de la vocación de Israel y de tantas inter- ojos de vosotros ... '; 'buscad la justicia, restituid al agraviado,
venciones salvíficas desde el éxodo, podía ser descubierto tam- haced justicia al huérfano, amparad a la viuda', Isaías 1:11s8).
bién en 1018 fenómenos naturales ('no dijeron: ¿dónde está Yavé, Al multiplicar las ofrendas -mal habidas, [con el precio del
el que nos subó de la tierra de Egipto? .. ', v . ,6, 'yo os íntro- despojo de los pobres!-los opresores se hacen pasar por "rec-
duje en tierra fértil ... " v. 7). El profeta reinvierte la sub- tos"; al ayudar al templo' aparecen como "benefactores". Eso
ha sido tan común en nuestro medio entre la gente rica y dueña
43) J. COMBLIN, "El tema de la líoeracíón en el pensamiento
cristiano latinoamericano", en Pasos n.7 (1972.) ·8s; H. ASS- 44) Hemos ampliado esta problemática en "La religiosidad po-
rvIANN, "El cristianismo, su plusvalía ideológica y el costo pular: un intento de problernatización": Crist,i:anismo y so.
social de la revolución socialista": ibid.. n.n (1972) 125 reto- ciedad 14:1 'n.47 (1976) 39-48 Y "Cultura popular y proyecto
mado en Teología desde la praxiS de la liberación (Sígueme, histórico": Cuadernos Salmantinos de FiI'OSOfía 3 (1976)367-
Salamanca, 1973) pp.l71-202. 378.

72 73
de grandes b'enes o posesiones de tierra, que huelga todo co- so de liberación de los oprimidos si se está:en un mundo de
mentario. Interesa destacar esa fuerza concientizadora del pro- opresiones. Desde allí se entiende al Señor. Esta es nuestra
feta. Su pelabra desenmascara la inautenticidad del hombre, condición y tal vez nuestro privilegio de poder. escuchar y se-
opresor (no sólo la del ingenuo) que falsea el sentido augusto guir a Dios. Antes nos habíamos acostumbrado' a formas más fá-
y profundo del culto como celebración del Dios de los opri- ciles de "conocer" a Dios: definiciones dogmáticas, un Evangelio
midos. leído fuera de la historia, una interpretación Iiteral de la Biblia,
Si las cosas ya han cambiado tanto en nuestra época, se etc. Nada d.e eso es negativo; todo tiene valor, y esencial; pero
debe también a una progresiva concientización que no provino en la medida en que. es subslUmido en una experiencia de Dios
del ámbito de las estructuras (el opresor nunca libera, podría- en los "signos de 19s tiempos". También era más sencillo in-
mos repetir una vez más) sino del vivir auténticamente el Evan- terpretar la voluntad de Dios (jjustamente sobre la historial) a
gelio. Es notable el hecho de que los "católicos" tradicionales través de las "apariciones" a algunos santos o personas privi-
y más reacios al cambio son quienes más fieles al ritualismo legiadas. Los cristianos hemos descansado plácidamente en las
aparecen y que [OS cristianos comprometidos con la liberación revelaciones de la Virgen de Fátima, esperando la "conversión
viven. más profundamente formas esporádicas y espontáneas del de Rusia" con un dejo de mentalidad apocalíptica. Había que
culto. Eso también "da qué pensar". hacer penitencia, y Dios iba a arreglar las cosas... Lo primor-
Hay otras instancias del profeta "concientizador": la de- dial hubiera sido preguntarse por qué Rusia es. comunista, _co-
nuncia del pacto con Egipto (Jeremías) o con Asiria (Oseas) laborar en el advenimiento de un socialismo auténtico, profun-
como inútil y traicionero para el pueblo porque, como el.culto do, ver en el marxismo un "signo de los tiempos" que suscita
inauténtico, oculta una grave infidelidad hacia el Dios de la la "memoria subversiva" del éxodo en los cristianos en lugar
Alianza; etc. Pero no hace falta abundar en ejemplos que el de espantarse por el ; ateísmo" ruso. .. Cuando el cristiano es
4

lector de la Biblia puede recordar y reflexionar. Ienro en "interpretar" los grandes acontecimientos .del mun-
do, Dios s'gue actuando con otros nombres. La afloración de
3.. El profeta, intérprete die la historia. otros "marxismos" en el mundo, ¿no es una denuncia de la
inoperancia de los cristianos, "agotados" en una cosmovisión
El profeta no habla a distancia, del futuro' remoto; dialoga capitalista y liberal en el mundo "occidental y cristiano"?
con un pueblo o con los reyes de su momento. La esperanza Las movimientos de liberación nacional en América Latina
escatológica -tocada en tantos oráculos proféticos-e- se entrea- ¿no son ya una "respuesta" a aquella diseminación de ideologías
bre desde la historia y como respuestapresente a ella. Ahora comunistas (en lo negativo que pueden cobijar como nuevas
bien, si Dios se manifiesta típicamente en los sucesos históricos formas de dependencia)? Es aquí donde los cristianos se están
(el éxodo nos lo dice claramente) y éstos son irreversibles, eJ insertando con todo el dinamismo de su fe. Esta les da el don
cootinuum del designio salvífico es captado y expresado por la profético de "reconocer" alH el tiempo oportuno (el kairós) de
"interpretación". De ahí la función del profeta. Además, esa la salvación.
manera de mostrarse el Dios bíblico implica una novedad pe- Resulta incuestionable que el profeta, "intérprete" de la
renne en su epifanía. En todos los casos, lo fundamental está historia, no era un privilegio para Israel. Donde DíOIS habla
en una actitud de fe que permite "reconocer" el paso de Dios, por los acontecimientos, allí es clave su presencia .. La ventaja
a través de la inserción en la vida y el compromiso histórico . para nosotros cristianos consiste en que. Pentecostés ha derra-
Más cer~anamente, se descubre al Dios salvador en el proce- mado el Espíritu profético ven la comunidad (Hechos 2:l óss).

74 75
do o dependiente. La voz profética resuena con la misma 'po-
Fundamentalmente no puede operar sino en el p'ueblo-de-Dios tencia, pero con nuevasexpresiones. Siendo lo que.es -el re-
en marcha; en nuestro momento latinoamericano, en el pueblo clamo de la Alianza que compromete al amor- puede y .debe .
comprometido desde la fe en los proyectos de liberación. desencadenar otros efectos. El profeta actual, metido en 'la ta-
rea liberadora, tendrá su luz para discernir los "signos de los
La triple dimensión del profeta bíblico -.crítico, concien- tiempos" . ~
tizador e intérprete- tiene mucho que ver con una hermenéu-
tica de la liberac'ón.

4. Proíecía y poíítíca,

Cabe una última cuestión: ¿por qué los profetas de Israel


no fueron líderes políticos o revolucionarios? ¿¡Por qué no sus-
citaron ninguna "liberación" contra tantos reyes opresores?
¿Para qué sirvió su Palabra?
Respondemos de dos maneras. La primera, desde la lec-
tura directa de ios profetas; la segunda, desde una perspectiva
hermenéutica. En cuanto a lo primero: el profeta no' es, de
por sí, un caudillo ni un líder. Su fuerza está en la Palabra
(comprometida por cierto) denunciante, concientizadora, orlen-
tadora (los tres aspectos estudiados). Qué pudo resultar de
esa Palabra, no sabemos. Por otra parte, el profeta se mue-
ve en el plano religioso: recuerda el compromiso de la Alian-
za, muy concreto y social, pero espera la acción de Dios cuan-
do el opresor o eJ. pecador no camb' a. De éste se aguarda su .
conversión, 'una actitud más profunda y en el fondo más revo-
.lncíonaria. En ese marco ideológico no se piensa en la vía
revolucionaria política. Tampoco había instrumentos ideológi-
cos ni un condicionamiento estructural para ello. Veremos que
para el Nuevo Testamento se plantea la misma pregunta.
Mas en esta misma problemática se inserta la segunda
respuesta, hermenéutica. Otras condiciones sociales y políticas,
otra mentalidad, otros: instrumentos de estrategia' del poder; fun-
damentaímente, la conciencia de la fuerza del pueblo; incluso
. las formas democráticas de acción política, todo permite una
reflexión nueva sobre la acción profética en el mundo oprimí- 77
76
CAPITULO V

EL CRISTO" "LIBERADOR" DE LOS'


OPRIMIDOS

Respecto al Nuevo Testamento nos reduciremos a dos mo-


.mentos, uno práctico (Evangelios) y otro doctrinal (san Pablo)
tratando de ver su complementaridad. Pablo centra su teología
en el Misterio, Pascual.por su centralidad y, en, parte porque
su experiencia de Cristo fue pascual; él no conoció a Jesús.,
LosApóstoles o los evangelistas en cambio describen al Jesüs
de Nazaret y aunque la redacción de los Evangelios es' herme-.
néutica -y corno tal está hecha a la luz del suceso pascual-«
podemos reconocer con claridad los perfiles de esa augusta.
figura quefue el Cristo liberador, desde su consagración pro-
fétioa en el bautismo del Jordán hasta el drama desu propia
muerte por la causa de la liberación del hombre;' '
'En la vicf~ de Jesús podemos distinguir sus gestos y sus:
palabra$.Buscaremos algunos episodios ilustrativos para el te·
ma que nos ocupa. De ninguna manera deseamos ser comple-
tos. El cristiano debeconocer el, Evangelio; se trata. aquí sola-
mente de dar relieve a ciertos aspectos del mensaje.evangélico,
unos, muy conocidos, otros que reflotan porque vistos desde una
perspectiva de opresión-liberación. Concretamente, vamos a
meditar sobre estos puntos: la orientación. de Jesús hacia la
muerte-compromiso, sus gestos, luego sus palabras liberadoras,
el mensaje de las bienaventuranzas, su proceso final, terminando
con unas pocas reflexiones de conjunto.
79
peso de su Palabra. Según 10 comprobaremos en, el siguiente
1. Del Mesías' al Servidor sufriente. parágrafo, su palabra es "concíentízadora" en el seno mismo
Los Evangelios nos muestran en Jesús un 'camino muy es- de un suceso, de un gesto, o de una protesta de los f,ariseos.
pecial, orientado linealmente hasta su muerte-resurreccíón desde Su palabra es contextual en todo momento; no el contexto li-
las primeras manifestaciones por la palabra y los signos. Más terario de Ios evangelistas sino el de su propia vida-testimonio.
arquetípicamente aún, su bautismo lo unge en el Espíritu de Casi que debiéramos tratar simultáneamente de los gestos y .de
la Palabra pero dándole la vocación del "Servidor" de los cé- las palabras de Jesús. Sólo que ahora destacamos el!ámbito de
lebres cánticos isaianos: proclamador de una Alianza, luz de su actuación, para después entender mejor su palabra-en-el-
1&8 naciones, convocado! del pueblo oprimido en el extranjero; acontecimiento.
y entregador a la muerte (Isaías 42:1-4; 49:1-13; 50:4-9; 52:13- De una manera valiente y típica, Jesús, obra en día sába-
53:12), La voz que en el Jordán ~o proclama "hijo amado, do. Esta institución le ofrece un marco situacional privilegiado
en quien me complazco" es la de la elección del "Servidor para discernir valores. Al "descanso" de una falsa conciencia
de Yavé" (Isaías 42:1). Esta vocación es programática, y va opone el "obrar liberador". Es en el evangelio .de Juan do~de
a desplazar el sentido inmed'atista vy político de su función más frecuente es elvocabulario del "obrar". Jesús se identi-
mesiánica. Para las expectativas judías era el. "Mesías' el ñca con el Padre, qué siempre "obra" (5:17). Lo afirma una
verdadero libertador. del pueblo. Y Pedro lo reconoce en la vez que los judíos le critican por curar en sábado al tullido
persona de Jesús (Marcos ?:29); más adelante, el Sumo Sacer- d~ la piscina (5: 1-16). Se pone en una '~ona de peligro", pero
dote lo quiere saber de .los labios del mismo Cristo (14:61)\" El lo hace intencionalmente, ya que quiere desenmascarar la pér-
no lo niega, pero las dos veces desvía la 'atención: al tema del dida del sentido primero de la institución del sábado. Notemos
sufrimiento, en la escena de Pedro (8:31ss); ai de la gloria desde ya que' quienes se escandalizan de Jesús -a 'pes~~ de
del Hijo del Hombre, en el proceso de Jerusalén 04:62). A que obra el bien... - 'Son los que se definen como guardianes
Pedro además le impone silencio ('encargó que a nadie dije- de las estructuras sacrales. En nuestro ejemplo de Juan ,5, la
ran esto de El', v . 30), No era para que los romanos, no respuesta de Jesúses teqlógiea: El es igual alPadre y éste
se alertaran sino porque quería preparar a sus discípulos a un está por encima del sábado ('mi Padre obra todavía y por eso
"descubrimiento" más hondo sobreEtL La misma figura del obro yo también', v. .17). Eso encona' más aún a los judíos,
Hijo del Hombre triunfante (cí.: 14:62 y Daniel 7:13ss) sería que ahora se escandalizan además por su profesión de igualdad
manifestada, al final a través del SigIlÓ de la cruz, En otras, pa- con Dios (v. 18). En el evangelio de Mateo, o en los otros si-
labras, Jesús tiene desde el bautismo la marca del "Servidor nópticos, las respuestas de Jesús. son expresadas en un nivel
sufriente" ~que es también el libertador de los oprimidos en antropológico, sin por ello dejar de ser teológicas. Lo veremos
los oráculos "intencionantes" del Déutero-Isaías- y esa voca- en el punto siguiente. El contexto sabático es el mismo.
ción la va expresando en sus gestos y en sus palabras (véase Por un lado, entonces, Jesús obraen día eábado, ámbito
ia reflexión de Mateo en el centro de su libro, cuando cita provocativo para los fariseos; allí en efecto se manifiesta la
justamente un texto sobre el v'Servidor", 12:14-27) con un alienación de éstos, la opresión .de las conciencias, el escánda-
compromiso total que culmina en su proceso por "subversivo". lo característico ante' los gestos de ,liberación. Los "equivalen-
2. Las actitudes "Iiberadorasi" de Jesús. tes" actuales del sábado no deben buscarse precisamente en el
descanso dominical (sería indagar por concordancias, externas)
Cristo no "habla" para llenar una misión .de hablar. Ha- cuya transgresión ofende menos que.otras actitudes, referidas a
bla a partir de sí mismo, de su manera de obrar. De' ahí el
81
]0 más custodiado, como ser la "autoridad" venida de Dios (re- .
presentac.ón superéstructural can fundamento bíblico pero ter-.' Levítico los "tortura" más exigiéndoles una expiación por su I

giversada ideológicamente); su correlato, la obediencia de los "pecado" (cf. el caso de la depra en 14: 19). Cristo, si a- .
que no tienen voz; el "orden" establecido y con-sagrado. por cepta la relación enfermedad-pecado (en Juan 9:2 la rechaza
obra y magia de una extraña tradición, se puede alargar la lis- llamativamente') va hacia los enfermos y los cura: es. un signo
ta de los "equivalentes' de las actitudes de Jesús, concentra- de los tiempos mesiánicos según se observa en los Evangelios,
das en su momento en el ámbito sabático. en los Hechos y en la señalacíón paulina del carisma de cura..
ción . .
¿Hay otros ámbitos de actuación liberadora? De un mo- . Los niños no eran muy favorecidos por la sociedad: no tie-
do notable, Jesús busca a los enf:ermos, los humildes, los pe- . nen "palabra" y no se 101S tiene en cuenta; mas, dos fariseos los
cadores, los niños, Ios extranjeros. 'Todos ellos tienen una "ca- excluían por otro motivo, a saber, por su ignorancia de, la: Ley..
rencia": de salud, de posibilidades ante la vida, de prestigio Jesús en cambio los tiene en cuenta, los bendice y declara su
ante los "justos", de capacidades, de aceptación entre los ju- sencillez que los hace "limpios' , delante de Dios (cí. Mateo
díos. Todos son marginados. Si tienen valores, no los pue- 18: 1-11). Los extranjeros eran menospreciados (y los samari-
den e~pres~r: los pobres, porque nadie los promueve ni les tanos "odiados") por no poseer el conocimiento del Dios de Is-
hace justicia; los otros, porque la "sociedad religiosa" los ex- rael y por las consecuencias "políticas" derivadas .de esa situa-
cluye escrupulosamente. ción. ¿Y los pobres? Las sabias prescripciones antiguas que
Podemos ir más a la raíz de esta situación, que explica los protegían relativamente (comp. Deuteronomio 15:7ss y o~
el encono de Ios fariseos contra Jesús' y por qué El se enfren- tros pasajes en que se habla del "pobre, el huérfano, y la viu-
ta justamente contra ellos. Son los "justos", conocedores de da", tambíérr con la mención frecuente del "extranjero" )no
la voluntad de Dios y sus fieles observantes. Por eso pueden debieron ser preocupación primoifdialen tiempo de Cristo,
juzgar a los demás. Estos tres aspectos -conocimiento, justi- puesto. que El se presenta como el Salvador de Iospobres y
cia, juicio- se correlacionan, y en el orden mostrado'. Uno en eso está el "signo" de ser el enviado de Dios. La escena
funda al otro. Pero allí está su falla profunda. Su praxis es de de Mateo 11: 1-6 es muy sugestiva ('a los pobres les llega la
la Ley, no del amor. Su seguridad no les. viene del compromiso Buena Noticia, y feliz aquel que no se escandalizare en. mí',
con el Acontecimiento de Dios, sino de su "gnosis", de su v . 5s). El "enviado" (Mesías) no era esperado en esa líneai ....
conocimiento de tla Ley, Tenían la clave de la verdad. Pablo Se 10 aguardaba como liberador de lá dependencia política de
lo dirá con palabras muy claras, según aparecerá en el capítulo Jsrael•.Cristo comienza desde la liberación ~ lospobres, La
siguiente. Queremos señalar ahora que las categorías de perso- expresión "pueblo de la tierra"· que originalmente se aplicaba
nas enumeradas hace un momento son "excluidas" del Reino a la gente humilde que había quedado en el suelo palestino
por los fariseos por faltarles el "conocimiento" de la Ley. El cuando los babilonios habían' deportado al pueblo calificado
hombre era pecador por no conocer y practicar la Ley; la en- (técnicos, obreros, etc.) -d. 2 Reyes 24: 14- terminó por
fermedad era considerada una consecuencia del pecado (cf. significar a los desplazados de la "sociedad religiosa" de Jeru-
Juan 9:2 la pregunta de los mismos d'scípulos sobre el "peca- .salén
., (45). Incultos de la Ley, parecían excluidos de la salva-
do" del ciego de nacimiento ... , o la respuesta del mismo Je- Clan.
sús al enfermo curado en 5:14, o al paralítico en Mateo 9:2),
Los judíos marginaban a los enfermos; no' conocemos en el 45) Ver. M. AVANZO, "El compromiso con el necesitado en el
Antiguo Testamento una Iegislación en su favor, mientras el judaísmo y en el evangelio": :Revista Bíb1i~ 35 n.147 (1973)
23-41.
82
83
Ahora bien, Jesús se dirige, a todos los marginados; do- taspara la reflexión. Una secuencia de gestos y palabras de
b1emente oprimidos, por el egoísmo humano en general, por ,la Cristo. van dando un núcleo-de-sentido que explota en una'
estructura "religiosa' , en particular. Comienza su liberación ';crisis" que oíscíeme a dos hombres en un plano nuevo. Los
valorando sus personas. El hombre está en etilos también, pero que tenían la "luz", lasque juzgaban, súbitamente se encuen-
oprimido. Veremos en el apartado siguiente que su Palabra in- tran desnudos ante la Verdad, juzgados por la Luz (vv. 318s.
terpreta sus gestos de liberación, denunciando al opresor y con- 38ss.). Veamos cómo Jesús Se desenvuelve enepísodlos con-
cientizando al oprimido que inicia su ascensión desde la oscu- cretos en que' opresores, y oprimidos se encuentranenacci6n.
ridad de su "ser menos" hasta el "ser más" de su ser "Hom-
bre Nuevo". Más aún; "el" gesto de Jesús fue hacerse soli- El primer episodio es el .de la recolección .de. espigas en
dario con los pobres, uno de ellos. Sólo desde allí pudo libe.. el campo un día sábado (12:1..8). A las fariseos no les impar...
rar (46). Jesús tuvo la experiencia del ser marginado, de la ta el hambre de los discípulos de Jesús, sino rque cumplan la
denuncia, la acusación, las maquinaciones contra él desde los cen- ley; y se lo señalan a su "maestro", que debía tenerlo eh cuen-:
tros del poder. No tenía ninguna defensa estructural o institu- ta,según ellos... Jesús, responde con tres llamadas a las Es-
cional. Se movió siempre en las bases. Es muy distinto hacer- crituras, ya que aquéllos habían recordado una ley sagrada,
se rico o poderoso para liberara los ricos y poderosos, que El les muestra el exclusivismo y da unilateralidad de su inter-
hacerse pobre y oprimido para liberar a las pobres y oprimidos. pretación. David transgredió la ley que reservaba a los sacer-
La primera actitud es contradictoria y sólo consolida los me- dotes el comer de 'los panes de la proposición (una clase desa-
canismos de dominación. La segunda es liberadora porque los erificios); el sábado, los levitas actúan en el radio del templo
pobres y dominados son la razón-de-ser de uos opresores. cumpliendosus funciones sin que por ello se los acuse de vio-
lar el descanso. Si,aquéllos se movían en el espacio del templo
en día sábado, ¿no lo pueden hacer ahora losdiscípulos en e[
3. La Palabra "concientizadora" de Jesús. espacio .del naevo templo, que es El? Inesperada por los fari-
seos, la respuesta no es menos significativa para nosotros! Cris-
Desde su solidaridad con los oprimidos, y por sus -actitu- to está reemplazando a lo antiguo; El instituye un .orden nuevo.
des de descubrimiento de-la persona y de sus valores, Jesús ¿A qué entonces -discutir sobre 10 viejo? Pero .si vale aún otro
concientiza por medio de su Palabra única. Desbroza el cami- argumento (que ya no es. de la ley, declarada caduca, sino
no obstruido por las tradiciones, la ~~y-X- otras estructuras, de los Profetas) les define lo que es la voluntad de Dios: la
hasta hacer que emerja el hombre. En -ese nivel -en el en- misericordia y no el sacrificio (v , 7 Y cí. Oseas 6:6 y Amós
cuentro del hombre con el hombre- se liberan el oprimido y 5:21). Jesús no se sale del tema (no se habla de ofrendas
el opresor. Aquél se asegura en su autenticidad más honda al .al altar sino de la ley del reposo sabático'). Señala simple-'
desvanecer la "sombra" del opresor. Este, al encontrarse sin mente que Dios quiere el amor por. encima de las leyes ritua-
su referente se queda con su propia alienación, de la cual tam- les, el hombre sobre las "distracciones" cultuales. 'Porque los Iari-
bién puede librarse si acepta la profunda conversión que le o- seos no entendían esta verdad de Dios condenaban a los inocen-
<

frece Dios por medio de su enviado. - tes (v. 7b)" Mas, ¿no eranellos los pecadores? Con su Pala-
El capítulo 12 del evangelio de Mateo nos da buen~pau- bra, Jesús había invertido la problemática; No con una dialéc-
tica sutil que silencia al ingenuo, sino desenmascarando" la fal-
46) Es la verdad del líder, ver P. FRElRE, Peda.gogía del opri- sa justicia .de los fariseos, que "quedaron pagando" como los
mido. 'P.213ss. verdaderos pecadores, por "desconocer" la' voluntadv.salvíñca
84 85
de Dios y por condenar a Ios inocentes. Esta última denuncia ven éstos? La luz de .la Palabra de Jesús era iluminadora, pe-
de Jesús dirigida nada menos que a los "jueces" de la orto- ro los fariseos se.quedaron con la Palabra-denuncia: no cam-.
doxia y de la ortopraxis, da mucho que pensar. . biaron, mas quedó marcado su pecado contra la luz. Por ello
los fustiga más .adelante señalándoles la blasfemia contra el
El segundo enfrentamiento' surge de la presencia de un Espíritu (veremos que Juan reinterpreta este mismo' oráculo con
paralítica en la sinagoga, también en un día sábado (12:9-14). su lenguaje lleno de símbolos).
Sucede antes de la curación, por donde se ve la mala intención
d~ ~o.s, presentes ~ue se adel~ntap. ~ recordarle a 'Jesús· la pro- En la tercera escena (12:22-30), con 'el endemoniado sor-
hibición de trabajar en el día séptímo, Le preguntan si era lí- domudo, se comienza al revés, con la curación. De allí una do:'
cito curar en sábado, no para aprender algo (el fariseo "conoce" ble reacción: la muchedumbre el pueblo se maravilla e "inter-
la Ley) sino para acusarlo (v. 10). Saben en efecto Io que preta" el suceso como signo 'de una pr~sencia de Dios en Je-
Jesús hará. De hecho no se amedrenta y sana al enfermo (v. s~s ("¿no es éste el hijo de David?, v. 23). En cambio 'los fa.
13). Pero cabe dar su relieve a la respuesta' ..concientizadora nseos se alarman por esta confesión de fe en Dios puesta inten-
dada a los intrigantes. Toma el ejemplo de la oveja caída en cionalmente en primer lugar en la estructura del' relato. De
un pozo en día sábado. Pero con toda astucia Jesús 'no trae lastres actantes (Jesús, el pueblo, los fariseos) éstos quedan
el ejemplo de un tercero; los fariseos hubieran dicho que debía aparte y solos contra los otros dos. El suceso estaba ahí; era
cumplir la ley y dejar la oveja. Les pregunta qué harían ellos, la .~videncia). Mas los fariseos -los inteligentes, ahora OISCU-
can una oveja propia ('¿quién de vosotros ... ?') El "[pues recldos- necesitan una "explicación". Ante la verdad -so-
bien!" del v . 12 supone la aceptación del argumento. . . Si era bre tod? cuando e~ captada por el pueblo sencíilo-e- no les
así, la lección está dada: es evidente que Jesús puede curar en queda sino la mentl1'3i. Se les ocurre que Jesús obra en nom-
día sábado. Pero la Palabra de Jesús es más. impactante aún, bre del propio príncipe de los demonios (v. 24). Y aquí en-
al remarcar que ahora se trata del hombre, no de un animal. tra a actuar otra vez la Palabra concíentízadora de Jesús, mos-
Es admirable ese Cristo que hace emerger al "hombre" en su trándoles la contradicción y la estupidez 'del argumento (v. 24-
Palabra y en sus gestos. Para machacar esa verdad, .afirma 30). De paso, les enseña que están en presencia de un "signo de
que se puede hacer el bien en el día del descanso. El mila- los tiempos" (v. 28) q~ ellos no saben discernir. Así entronca
gro de Cristo no es dejado entonces' .~. la interpretación poste- la denuncia de su pecado contrael Espíritu (vv. 31ss) y la crl~
rior -como también se' da- sino que va acompañado de una' ti~a a la "distracción" de íos judíos'que piden una "señal" del
.palabra iluminadora y "crítica". ¡Qué profunda verdad es em- Cielo, un milagro para saber si era enviado de Dios (v. 38s8) .
pero que a los "de arriba" no se 110s concientiza fácilmente! Si la presencia de Cristo es el "signo" de los tiempos, ¿a qué.
Los fariseos entendieron pero no "vieron" la verdad. Se obce- buscar otras señales? Pero si quieren otra, no será un milagro
caron frente a la luz. Más aún, se ensañaron contra Jesús para para ellos, sino la "señal" del profeta Jonas: los ninivitas en-
perderle (v. 14). Su palabra había sido '''peligrosa''. Era peli- tendieron su mensaje como voz de Dios y se convirtieron. "Y
grasa para eUos -ya que los había penetrado hasta elailma- hay aquí algo más que Jonás" (v. 41).
pero se encargarían más adelante de presentarla como peligrosa Mateo prolonga esta "concientización" por la palabra en
para el César. Sería una manera para "trasladar" la acusación muchos otros pasajes. Demorémonos sólo en la discusión de
a otro.plano donde ellos no podrían ser tocados QI descubiertos. 15: 1-20 . Jesús está en Galilea y llegan a El fariseos y escribas
De allí entonces una pregunta; ¿vale la pena querer "concíen- venidos de Jerusalén {una distancia de 170 kilómetros aproxi-
tizar" a los opresores, cualquiera sea el plano en que se mue- . madamente) para preguntarle por qué sus discípulos no se la-

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van las manos antes de comer. .. Ridícula como parece la cosa, momento no era nada! Cristo había liberado sus posibilidades
tuvo infinitos paralelos en la vida de la Iglesia, sobretodo en de "ser más", de "dec'r su palabra".
las costumbres religiosas (con los dos aspectos, de estructuras En las discusiones que siguieron a la curación del ciego de
alienantes y de "control" desde epicentros lejanísimos ... ) . Los nacimiento (Juan 9), éste llega también a "reconocer" al Hijo
embajadores vinieron por lana y salieron esquilados. Jesús no del Hombre (v, 35ss) desde su propia experiencia. Tal vez
"explica" esa libertad que ha dado a los suyos, sino que los Cristo lo aborda, cuando lo expulsan de la sinagoga, por la rec-
acorrala con una contrapregunta que no pueden responder y que titud con que había reflexionado sobre el autor de :su ilumi-
los denuncia a ellos como transgresores de la voluntad de Dios. nación física ('si éste no fuera de Dios no podría hacer nada',
El ejemplo que les revela se refiere justamente al ámbito reli.. v; 33). Esta era signo de una luz espiritual, que lo hizo capaz
gioso pero para demostrar que la "tradición',' religiosa pervier- .de "creer" .. ¿Cuál es en cambio la díaíéctíea de los fariseos?
te un valor hamano (v, 4-6). Cristo denuncia el pecado allí Sus cavilaciones son variadas: "no puede venir de Dios este
donde está (en los fariseos y no en sus discípulos) y concientiza hombre, pues no guarda el sábado", v . 16; o a lo mejor aquél
sobre lo que es la voluntad de Dios. De paso, una cita profé- no era ciego (v. 18); "ese hombre es pecador" (v. 24); "no-
tica le sirve para agravar la mala conciencia de sus interlocu- sotros somos discípulos. de Moisés ... ,en cuanto a éste, no
tares, recordándoles el culto inauténtico en una doble dimen- sabemos de dónde viene" (v. 28s). Todas tienen un denomina-
sión (ct. capítulo precedente, n. 2)" dar común, el prejuicio "religioso" contra Jesús porque cura
Los casos se suceden sin cesar. Dejemos no obstante los a un enfermo en día sábado (v. 14). Los hechos pasan a se-
Sinópticos para referir 'dos gestos-palabra del Jesús de Juan. gundo plano; también tiene que ser "pecador" el ciego sanado
En el relato de Ja mujer samaritana (Juan 4) hay un "en- porque piensa distinto que ellos (v. 34), Jesús nada les había
cuentro", primero superficial por parte de ella, luego profun- dicho hasta el momento. Jugando con el simbolismo de la luz
dizado en la verdad, entre ella y Jesús. Vamos a reflexionar en relación al ciego curado que ha creído, afirma que ha veni-
sobre la pedagogía liberadora del Maestro. Los judíos "no se do al mundo para una "crisis", un "discernimiento" que in-
tratan" con los samaritanos (v. 9). Se conducen por prejui- vierte las posiciones {"para que los que no ven vean, y los que
cios generalizados, no por el valor de talo cual persona. Je-- ven se vuelvan ciegos", v. 39). Los fariseos pescan la alusién
sús inicia el diá:logo con ella, una manera de aceptarla como ("conque somos ciegos", v. 40) Y el Maestro les retrueg su-
persona, no importando sus pecados. Todo lo que viene des- tilmente, volviendo a convertir el simbolismo: "Si fuerais ciegos
puésparte de ahí, de esa apertura a la persona. Con esa "en- no tendríais pecado, pero ahora decís: 'vemos'; entonces vues-
trada" la conversación se desarrolla y Jesús podrá exigir de tro pecado pennanece"(v. 41)~ Por un lado son ciegos -y
ella toda la verdad, "su" verdad (v. 16ss J. Lo importante es lo toda .la escena muestra su oscuridad, interior-«, Sin embargo,
que logra Cristo: qce ella "diga su palabra", que se manifies- si ellos mismos dicen que "ven" (el fariseo "conoce" a Dios',
te en su ser más hondo. Lo que completará 'El será aclarar su sabe la verdad como nadie más....), es su propia condenación.
confesión (v. 18). El "pecado" está indicado con exquisita Incapaces por tanto de "ver" desde su, "ver", no tienen salida.
finura, sin condenarla. Y porque no la condena, el diálogo y su pecado "permanece". Por algo Cristo en ningún momen-
prosigue hasta que ella da un paso más y descubre en Jesús al to intenta cambiarlos. De nuevo surge la pregunta hecha hace.
Cristo "que ha de venir" (v . 25s). Extraño reconocimiento pa- un momento: ¿es posible .liberar al opresor desde él? ¿La pala-
ra una samaritana. Ella también difunde la noticia y muchos bra concientizadora.vno se invierte en 'denuncia" del pecado?
creen (v. 39). ¡Qué dignidad la de esta mujer, que hasta ese ¿Qué consiguió Cristo de Ios fariseos?

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4. El anuncio a los pobres. Pero además, ¿tienenálgQ que ver con la "liberación" las
bienaventuranzas de Cristo?' Si los pobres y los perseguidos por.
El bautismo' en el Jordán era la manifestación profética su ideal son "felices", pues que sigan siendo tales.v. Parecería
de Jesús (47) y (según escribimos en el n. 1) una evocación en efecto que Jesús proclama la resignación de- ~OIS oprimidos.
lejana del Misterio Pascual. Inmediatamente después, proclama Total, el Reino de los cielos (futuro) será de .ellos;: serán com-
el advenimiento del "Reino". Pero desde su inserción entre pensados copiosamente . .'. [Més de una vez la catequesis de la
los humildes -desde sus actitudes de "Servidor sufriente"- Iglesia hizo este mal servicio a "la Palabra de Dios!' Las cosas
puede llamar "felices" a los pobres y a los perseguidos. Son no son así sin embargo . Por empezar, nada nos afirma que en
las dos líneas de pensamiento de las cuatro bienaventuranzas los Evangelios el "Reino de los cielos" es el mundo 'celestial
originales, como se registran en Lucas 6:2()..23 (en Mateo 5:3- y trascendente, el estado post-mortero (en la "historia" del rico
12 aparecen ampliadascon una interpretación más espiritual y epulón no se menciona el "Reino",Lucas, 16:19-31). Sabe-
con otras cuatro del mismo tono ético (48). Es difícil pensar mos lo 'que pensaban los judíos de ese "Reino" esperado, te-
que Jesús las haya enunciado al inaugurar su predicación, como rrestre y muy definido. Las bienaventuranzas dleben ser leídas
da a entender Mateo 5:1ss. Suponen una tal madurez en' los a la luz de las esperanzas, mesiánicas inscriptas en el corazón
discípulos, y una tal comprensión del mismo Cristo, que es de los profetas y exploradas par los judíos. Ahora bien, en
mejor situarlas hacia el final de su actuación pública. En cier- el Antiguo Testamento hay una línea profétíca bíen marcada
ta manera, dejan entrever la experiencia de la Iglesia primitiva que; retomando la' concepción teológica de Yavé defensor de
de Jerusalén, pobre y perseguida. Sí Mateo las coloca en su lu- los pobres, la vuelca en la descripción del rey futuro como ins-
gar actual es para remarcar su "sentido" programático. Son . taurador dela jU1sticiay liberador de los opr'imidm (cí.' Isaías
la proclama de Jesús, en otras palabras su mensaje esencial. 9:5-7; 11:1.;9;' Jeremías 23:3-8; Ezequiel 34:23-27). Leamos
Los discursos-programa en las asunciones del mando por los je- en este momento eloráculo más significativo para nuestra in-
fes de estado tienen significación por el momento en que se tención; al anunciar Isaías al retoño de David, poseedor del "es-
pronuncian (sólo que generalmente no se cumplen). Pero va- píritu'Lde Yavé..expresa que "juzgará en justicia al. pobre y
len por su orientación y por las "posibilidades" que descubren. en equidad a los humildes-de..la-tierra; y herirá'al opresor con
Mas si las bienaventuranzas evangélicas son la síntesis de la vara de su boca y con el soplo de sus labios matará al im-
la predicación de Jesús, adquieren otro peso. Son el resulta- pío... " (11 :4).
do de su experiencia (la alusión a las persecuciones de la Sina-
goga es sintomática), sobre todo de su compromiso real con Pues bien, Jesús "interpreta" no sólo su vocación sino
los pobres (era pobre de verdad, cf. Lucas 9:58) y de su "ser- también su momento históricocorno realización de estasespe-
vicio" a los hermanos (' 'yo estoy en medio de vosotros como ranzas . "Felices los pobres" porque ahora, con El, comienza la
quien sirve", Lucas 22:27b). Su palabra, entonces, es desde la liberación, Las bienaventuranzas no son un llamado a la resig-
vida. nación sino a un proceso de liberación, 'que no comienza como
revclución política y social (veremos más adelante por qué) pe-
ro que tarde o temprano lo sería. Si el "Reino" no es una cosa
47) Para la justificación de esta exégesis, véase Historia de la etérea y espiritual, no llegará sin un cambio profundo en los
salvación (Paulinas, Buenos Aires, 1970), 'Cap. XII/2. hombres, sin la instauración de la justicia en todos los niveles.
48) Véase J. DUPONT, Les béatitudes. II (Gabalda, Paris, 1969): Interpretadas desde las situaciones del mundo dominado, fun-
es un comentario notable. dadas a su vez en una estructura de "clases" sociales (creemos
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que el concepto de Tercer Mundo es más ideológico que "bá- - de una visión del mundo teocrática; desde la restallraci6rt des-
sico"), las bienaventuranzas son una interpelación a 'losoprimi- .' rUésd~ . exilío, el -sum? ~acerdote concentraba también- el po-
dos para que reconozcan líenos de esperanza los "signos de los cerpolítíco, solo que límirado por los dominadores de tumo
tiempos" y se pongan en marcha hacia la liberación. No son los romanos en ese momento.· . _'
entonces un llamado a la resignación sino a un proceso de libe- La clave para entender' -el proceso a Jesús no es pilatos'
ración. sino el Sanedrín . A lo largo de .los evangelíosno se observa
Uno podría preguntarse por qué Jesús no se expresó más nada que alarme a los romanos, .pero muchoque alborota a los
claramente en cuanto a esa dirección de su proclama a los, po- judíos y prepara el. desenlace que sabemos. No hay que leer' el
bres y perseguidos. Para más, el evangelio de Mateo inflexiona relato de la pasión sin situarlo en la' estructura de todo el E-
dicho mensaje hacia lo espiritual y ético. Pues bien.ielprímer vangelio.· Es lo mínimo que se puede exigir al intérprete. He"
evangelio hace precisamente una relectura de las palabras de mos visto que losgestos y la palabra .de Jesús :.....orientatfos
Jesús desde la !Situación en que escribe (oposición cristianos- a la recuperación del hombre y. sus valores naturales- conci-
fariseos). Nosotros hacemos una relecturadesde nosotros, Re- taba la rabia y. la decisión de eliminarlo por parte de los gru..
tomando el sentido nuclear del querigma evangélico, '10, . com- pos de poder (sumos sacerdotes, ancianos, escribas, fariseos).
prendemos desde un horizonte que hace emerger su exceso-de. La praxis de Jesús (acción y teoría en mutua interdependencia).
sentido. El sentido de una expresión está siempre "reducido" desenmascaraba el universo superestructural e ideológico que
por el contexto en que se habla o es-cribe; pero la distancia de controlaban los jefes de .Israel y cuyo eje de sustentabílídad era
. ese contexto permite reabrirlo y ampliar su primer horizonte de la Ley entendida como "tradición". Por eso aquella praxis se
expresión: es 10 que hizo Mateo en una dirección, es, lo que hace "crítica" y enojosa, entrando de inmediato eh el círculo
podemos hacer nosotros en otra por cuanto situados en otro con- fatal de la pregunta por. el "poder". Esta se hace explícita jus-
texto de apropiación del sentido originario. Esto significa que tamente en el tránsito de la actuación pública de Jesús a la
la rclectura va más alla ----más acá (por "delante" del texto)-' caída. en manos de. los Jefes jerosolimitanos: ver· Me 11:27s
del sentido ofrecido por el autor de un textorsin que eso sea (::::Mt 21:23; Le 20:1s). Los sumos sacerdotes, los escribas y
cambiarlo u oscurecerlo. Al contrario, es un acto de explora- "los ancianos (son las instancias de poder, no las facciones reli-
ción; la única manera de superar la -"historia" del sentidoy -de giosasl) le interrogan: '1' ¿con qué autoridad haces esto? Las eE;-
apropiárselo fecundamente. Por ahí va el acto- hermenéutico, cenas que siguen (Me 12 y paralelos: parábola de' los viñadores
sobre el cual volveremos. homicidas, el- tributo al César, la' cuestión ,del Mesías, etc. )
muestran a un Jesús rival de la -autoridad y de la misión dis-
5. La Muerte "liberadora" de Jesús. torsionada de los líderes judíos que quieren liquidarlo pero son
frenados por miedo al pueblo (Me 11:18; 12:12; 14:1~2).
Los evangelios señalan un momento judío y otro romano
en el proceso a Jesús. Elprimero no es puramente religioso,da~ , El proceso a Jesús se inicia ante el SanedrinIfdc 14:53ss)
do que el Sanedrín gozaba de un fuero también político. Recor- donde se fraguan las "pruebas" que 10 'declaren reode muerte.
demos que el procurador romano residía en Cesarea, ull .punto No nos demoremos en lo conocido. Subrayemossolamente que
estratégico sin duda, pero alejado del epicentro de la vida ins,:, Jesús aparece como, un subversivo del orden . religioso. , .
titucional judía, cual era Jerusalén. Bajo Ia cobertura de 10 re- ¿Cuáles son las acusaciones específicas contra El en su
ligioso, el Sanedrín jugaba un papel político. Se estaba dentro proceso? Decir que puede destruir el temploIjla casa de Díosl)

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(M,!too26:61 y 27:40), Ya no se. trata ·de falsos testigos, que Inmediatamente van a Pilatos y lo acusan' de otros cargos: "he-
nada aportan (26:59--60) sino de los dos- últimos que refieren mos encontrado a éste pervirtiendo a nuestro pueblo: .• prohíbe
lo que han oído, y que de hecho los evangelistas registran en pagar tributo.. alCésar, ydiceser el Mesía-sRey"(23:'1;;2}.Ca-
otra parte (cr. Juan 2:19). En segundo lugar, se. le demanda be indicar que aquí se destaca la cualidad de "rey' del Me..
por haberse llamado Hijo de Dios, que no significa la persona sías (en cambio en 22:70ss importaba sorprenderlo en blasfe..
divina del Hijo sino del Mesías (Mateo 26:63; Juan .19:7). mía por decirse "Hijo de Dios", aunque el título se refiriera
Escandalizado por la confesión mesíánica de Jesús (Marcos 14: al Mesías). La mención del "rey" debía ser alarmante para~d.
61ss), el sumo sacerdote se desgarra las vestiduras ... Para és- funcionario romano . Paresa los jefes judíos configuran un
te, lo religioso aquí tocaba lo política. El Mesías .sería el, sal- "crimen político" para asegurarse el éxito' de sus propósitos.
vador de los judíos pero los jefes de Israel no podían aguantar Lucas (como los otros Sinópticos) había descrito ya la escena
que ese fuera el liberador, ese que tanto puse) en duda sus pri- del tributo al César (20:19-26), en la que Jesús deslindaba' las
áreas política y religiosa en esa cuestión; lo esencial que remar-
vilegios y su poder, Pero con esto se descubren súbitamente' co- can los evangelistas es el hecho de que los escribas y. sacerdo-
mo colaboradores del país dominador ... tes no le preguntan para saber -resultando una posible acusa-
En aquelía época los judíos, no podían ejecutar la senten- ción por una respuesta negativa-o sino que "enviaron espías,
c'a de muerte -sólo los romanos gozaban del "[us gladií" a que se presentaron como varones justos, para sorprenderle en
derecho de aplicar la pena capital. La intención de "liquidar" su doctrina, de manera que pudieran enO'egarle a la autoridad
a Jesús, tantas veces manifestada (Mateo 12: 14; Juan 5:18; y poder del gobernador" (v. 20). Puede ser que Jesús en su
7:1.25.44ss; 8:37; 10:31, etc.) debía implementarse a nivel predicación haya aludido a la liberación del pueblo judío ~to­
civil y con razones de "seguridad del estado". POI: eso lo en- da la línea profética la señalaba- pero nuestra escena quiere
tregan a Pilatos (Marcos 15: 1). Ante éste sólo podían aducir mostrar las malas intenciones de sus correligionarios" que que-
una acusación política, referida a la subversión contra el orden daron mal parados, ya que la respuesta del Señor . parece recor..
nuevo de dominación. La figura del "Mesías" se prestaba, por darles que no dan a Dios lo. que es de Dios ...
su amb'güedad religioso-política, para atacar a Jesús en dos Es digna de anotarse la intuición de Pilatos quien, a pe-
frentes: en el orden religioso Iue juzgado como blasfemo PQr sar de la acusación de "subversivo" lanzada contra Jesús (y re-
llamarse el Cristo, hijo de Dios; en el político, significaba una firmada después, v . 5 'subleva al pueblo') y de la confesión
pretensión de usurpar el poder retenido . por los romanos. No del mismo Cristo de ser "Rey de los judíos" (v. 3) no se
era difícil por tanto trasladar el proceso del Sanedrín al fue- inmuta y responde: "ningún delito hallo en este hombre" (v .
ro romano. La pregunta de Pilatos ("¿eres tú el rey de los 4). Y después del interrogatorio fallido de Herodes, el gober-
judíos?' ') muestra que está ubicado: se trata de un caso más nadar vuelve a confirmar su sospecha: "me habéis traído a este
de pretendiente a liberador de la dominación que él representa hombre como alborotador del pueblo pero (; .. ) no hallé.en
y mantiene. Mientras, Marcos es muy genérico e indefinido en El delito alguno de los que alegáis contra El" (v. 14),. Tres
los cargos contra Jesús 05:1 "le entregaron a Pilatos"; v.3 veces insiste en su inocencia (v. 20.22). .
"los sumos sacerdotes le acusan de muchas cosas", ver v.4; , Los cuatro evangelistas anotan el esfuerzo del jefe roma-
v .14, a la pregunta de "¡,qué mal ha hecho?" se contesta con no para liberar a Jesús, pero Juan es quien (después de Lucas)
otra cosa). Lucas es explícito y señala la transición: en' 22:66.71 mejor enfatiza su convicción y sus .tratatívas. Estarnos habitúa-
tiene lugar el proceso religioso que lo condena por"blasf~mo. dos a una denigración de Pilatos porque entregó a Cristo a pe-
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sar de saberlo ínocente • Esa.debilidades evidente, Pero no. p.a~
ramos mientes en todo lo qu~ hizo para, .salvarlo yen el [ue- contra Jesús. Alo largo de su vida, el pueblo se maravillaba de
go de las presiones que lo forzaron a obrar contra suciencia su doctrina, hasta reconocía que hablaba con más autoridad
y conciencia: "si no fuera un malhechor note lo hubiésemos' (porque desde la vida) que sus escribas y sacerdotes (cf. Mar-
traído" (Juan 18:30); "si sueltas a ése no eres amigo del César; cos 1:22.27), El pueblo siempre está más abierto a la, verdad.
todo el que se hace rey va contra el César" (19:12); "noso- Las estructuras cierran a lo nuevo y pervierten' su sentido. Por
tros no tenemos más rey que al César" (v. 15). Y los mil gri- otra parte, los evangelios van notando que son los jetes reli-
tos para detener la sentencia de libertad'en favor, de Jesús. giosos de Jerusalén los 'que lideran la enemistad la denigra-
. A pesar de este juego de presiones. orquestadas, Pilatos ción y el proceso contra Jesús. Está en' la línea ' de Ia acusa-
se atreve, cual última instancia, a presentar a Jesús como "rey ción profética contra esa ciudad, que es justamente la que
de los judíos" (19: 14). Es posible además leer el texto griego ha matado a 10'&, profetas (comp. Lucas 13:348). [Se ha repe-
del v. 13 como afirmando que Pilatos sienta a Jesús en el tri- tido tantas veces ese fenómeno (en la Iglesia)! En el proceso i
bunal, símbolo de su realeza (49). Estaría más de acuerdo con Jesús son las autoridades religiosas, muy bien identificadas, las
las palabras de la presentación ('ahí tenéis, a vuestro rey', v.. que gestionan la gran mentira de la historia. Son 16s grandes
14) Y con la teología juanina del "juicio" que Cristo hace a acusadores (cf. Lucas23:1O). Hemos sido ingenuos los cris-
los judíos, tema que flota a lo largo de todo el cuarto evange- tianos al culpar a veces al pueblo judío, diciendo que "se ha-
Lo. Juan es el único en desarrollar también el episodio de 'la bía dado vuelta" traicionando. a Jesús después de Ia recepción
inscripción puesta sobre la cruz: "Jesús Nazareno, Rey de los triunfal en Jerusalén. La intriga vino de las autoridades reli-
judíos". Los príncipes de los, sacerdotes protestan porque era giosas. Si estuvo presente el pueblo, debemos acotar dos co-
darle la Tazón a Jesús: "no escribas ... , sino que El ha dicho sas: una, que no sabemos qué cantidad (el pueblo como tal no
soy Rey de los judíos". Sabemos la ,respuesta lapidaria de es engañado fáciltnente, por su maravillosa captación de la
Pilatos (v. 19-22). Se ve que quiere dar a razón a Cristo, in- verdad); la segunda, que el grupo colaboracionista había sido
cluso post-mortem ... En la perspectiva de Juan queda una ver- "comprado" (y no pudo por tanto ser todo el pueblo) por
dad: Cristo es el verdadero Rey de los judíos. los príncipes de los,sacerdotes -y los ancianos, quienes. "persua-
J Cabe hacer otra apreciación de Pilatos. Cristo en dos oca- dlieron a Ia muchedumbre 'que pidieran a Barrabás e bkieran
siones le dice "su" verdad <18:36s; 19:11}. Mejor que los ju- perder a Jesús," (Mateo 27:20). (50)
díos, el romano capta en Jesús una misión trascendente. De
ahí que no tiene temor en proclamar su "realeza" que sabe no 50) Conocido es el opúsculo de O. CULLMANN, Jes:ús y los revo-
ofende a la del César. Una vez más nos confirmamos en la lucionarios de sllJiempo (Studium, Madrid, 1971·1973), donde
discute la pertenencia de Jesús al movimiento zelote; con-
idea de que la acusación política contra Jesús era una excusa viene consultar el estudio de fuentes de M. AVANZO, "El
para terminar con el profeta/que" denunciaba a los judíos su arresto, el iuícío y la condena de Jesús. Histo'ri.a, y presente":
pecado de desconocimiento de Dios en El manifestado. ' Revist.a Bíblica 35 n.148 (1973) 13l-151 (destaca las intrigas
No menos importante es constatar que fueron los potIer&- de los ,grupos religiosos, sobre todo de los escribas y saduceos).
sos -en este caso, la jerarquía religiqsa;......quienes complotaron Jorge PIXLEY haescritoun excelente ensayo, Reino de Dios
(La' Aurora, Buenos Aires, 1977), donde analiza el desarro-
llo del tema del "reino de Dios", sus implicaciones políticas
y liberacionistas, la actitud de Jesús frente al templo como
49) Comp. 1. de la POTTERIE, "Jesús roiet jruge, d'aprés JIl', ce~tro de explotación, y frente a los grupos religiosos-y po-
19.13", en Bíblica 41 (1960) 217-247. líticos, la transformación ulterior de su mensaie en una relí-
,gión universal, espiritual e individualista que nos ha llegado
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97
Todo esto es para pensar... sustenta el poder de aquéllos, o sea la ley, la tradición, .l~ "au-
Podemos añadir algunas observaciones. Ante todo, creen toridad" - privilegio que los encumbra; todo ello, condicionan-
algunos que Marcos presenta un relato originario y que Lucas do una real opresión de las conciencias y de los. valores hu~~­
desfigura el proceso a Jesús (51). Parecería que éste añade y nos. Cristo desenmascara a los opresores,' libera a los opnml;"
completa donde Marcos es sintético. Pero al leer en Me el pro- dos. Por otra parte, los jerarcas de Jerusalén estén "bien" con
ceso ante Pilatos, da la sensación de algo hueco y abreviado. los romanos. Estos dominan la Palestina, la desangran con pe-
Lo que registra Le parece más coherente, con un juici?' políti- sados tributos, pero permiten una cierta autonomía interna en
co que es una traslación sofisticada de un proc~so r:elig1oso (~e el gobierno, con los [eíes feccráticos locales. ~~tos debe~, al
connotaciones políticas') muy inteligible en el mt;enor. del unr- César sus puestos y títulos. ,. Desde, entonc~s, co'¡abo~an ,CO~;
verso judío de entonces. Debe de haber algo muy seno en es.a Roma, y traicionan al puebla,La presencl.a de un ~eslas
no alarmay tranquilidad de Pilatos ante un ac~sado de sedi- complicaba su status... No había mejor salida que pedir ayu-
ción, de subversión contra el César, de ser candidato a rey de da al César! contra ese impostor y "subversivo", .
los judíos. Debía ser suficientemente sagaz como para darse ¿Fue Jesús un revolucionario? ¿Qué enseñó para liberar a
cuenta de la verdadera cuestión. Afirmar por otro lado q~e
<

los judíos de la dominación romana? Para responder a esta pre-


los evangelios no quieren culpar a los ~~mano$ de la ~ue;te gunta, y. descubrir un "Cristo político",' muchos acarician la
de Jesús, recargando entonces la acusación contra los judíos idea de su pertenencia al grupo zelote, revolucionarios que. ata..
con el fin de una "captatio benevolentiae"para la predicación caban directa y violentamente la intervención de Roma. Es ya
del evangelio en el imperio, creo que es mucha imaginacíón; clásica, al respecto, la problemática presentada por O.Cullmann
los evangelios hubiesen atribuido al proc~rador!omauo' ~ JUI;,., y otros (52). A decir verdad, no hay mucho en favor de un .
cío más Jucido . Juan, por su parte, escribe a fines del SIglO 1 Jesús pro-zelote, Los que buscan Identificarlo no se dan cuen-
cuando ya arreciaban las pers~cuciones imperi~le~ contra .las ta de ~ue hacen un mal servicio a la causa de la liberación. Los
comunidades cristianas. Es la epoca del Apocalipsis! Mas bien, relates, en efecto, eran grupos reaccionarios. Si perseguían la
todo el proceso a Jesús tiene su epicentro en el diagnóstico de expulsión de. los romanos del suelopalestino era para 'restable-
los je~es judíos de Jerusalén: ancianos, escribas, sacerdotes y cer la Ley y las instituciones político-religiosas perdidas. No po-
los grupos religiosos. . dían salir del "círculo infernal" delIegalísmo (53).. Cristo no
Queda una paradoja, antes insinuada: ¿cómo las autorida- podía luchar o morir en favor de la ley; más bien, sufrió su po-
des iudías no explotan al nuevo líder para afirmar la esperanza der como estructura .de muerte. Añorar un Cristo zelotesería
de liberación del yugo romano? Ahí está la cuestión. Sucede .por tanto ir detrás de un Cristo reaccionario, nacionalista-religio-
que, por una parte, Jesús desmorona el universo simbólico que so. Una cosa 'sería recuperar 10's valores religiosos y culturales
propios, otra cosa recuperar un estatuto .legal opresivo. J esús
por obra de sus intérpretes. Jesús se distinguió claramente vino a salvar al hombre, no lafey. .
de los zelotes.
Pensamos qúe hay que acceder de otra manera a la cues-
51) P.W. WALASKA.;Y, "The trial and death of Jesus in the Gos-
pel of Luke": Joumal of Bíblíeal Líterature 94 '(1975 )81-93 52) O. CULLM'ANN,ob.cit. en la nota 50, Y EstUrdiQS de toología
(Lucas desfiguraría el proceso religioso y romano; Pilatos fa- bíblica, (Studium, Madrid, 1973). . '
vorece a Jesús yaunque lo condena, es benigno con él.Lu· 53) J. MOLTMANN, Jésus erucíñé (Cerf París 1974) p.l64 (edi-,
cas quería de esta manera atraer el favor romano sobre los ción castellana: El Dios crueíñcado, Sígueme, Salamanca,
cristianos), 1975).

98 99
tión del Cristo "liberador". Entendámonos: ese cristo no es sólo ración para otras razas o pueblos. El subrayado quiere distill
el de la escatología, o el de. una comprensión puramente espí- guir esa situación de la del éxodo o de la nuestra. De la del
ritual o mística de la liberación. Los cristianos, comprometidos éxodo, porque aquí el acontecimiento I1iUeVOi pudo engendrar
con el hombre real siguen interrogándose por las. implicaciones una simbólica original y una conciencia histórica inédita; de la
políticas, socio-económicas y culturales del mensaje religioso de nuestra, por cuanto el análisis científico y crítico de la realidad
Jesús, más que, por temas ambiguos como el de la "reconcilia" (propio de la modernidad) permite al creyente discernir una sig...
ción en Cristo" (cuya profundidad teológica queda cubierta por .níficación querigmática y teológica en una acción política revo-
un uso ideológico en la predicación) (54). lucionaria. En aquel tiempo en cambio, las concepciones religio-
. El mensaje de Jesús no aparece como un programa ni me- sas de los judías, centradas en el culto a la ley y en la ideolo-
nos como una'estrategia de liberación política. Fue un líder re" gía de la "elección",hubiesen difuminado esas dos posibilida-
ligioso. Los zelotes eran revolucionarios religiosos, que querían des de lectura del acontecimiento, revolucionario.
'retornar a sangre y espada a la tradición mediante la-expulsión Consideremos por otro lado que el juego de contradiccio-
de los dominadores paganos. Jesús en cambio no hizo nada para nes manejado por lasdistintas prácticas no podía coincídir. Si
liberar a los judíos del yugo romano. Corno si no hubíeseIle- bien los zelotes se oponían radicalmente a los romanos -y por.
gado al. compromiso político y' nacionalista de los zelótes, Con ahí pasaba la contradicción principal- los saduceos ni síquie-
todo, allí está su,lucidez y su grandeza. De haber sido \U1 líder ra sentían la opresión imperial, a cuyos representantes debían
revolucionario en la superficie habría hecho,un favor a los julo sus c9l:gos Y su "autoridad" sobre el pueblo oprimido. Así las
días y su acción se hubiese agotado en ese nivel político, racial .cosas, unosiente .a Jesús más vecino a los zelotes que a los otros
y geográfico. Recordemos que el éxodo fue un símbolo' de libe" "religiosos", de hecho traidores del pueblo. Pero resulta la con-
ración durante siglos, pero para el pueblo de Islrael.· Sólo a par" tradicción principal romanos-judíos sustentada por los zelotes,
ti! de' Cristo se universaliza.dicho símbolo. Hay por tanto otros habría emergido indudablemente una nueva contradlccíénentre
elementos que entran en consideración. una ley opresora y un pueblo .oprimido por las estructuras y las'
Los gestos de .Jesús alcanzan la dimensión política --1>ero tradiciones judías, ahora liberadas a su propia' fuerza ideológica
universal-, por el rodeo y fundamento de una liberación radi- y.jurídica, y. nada se habría hecho en favor del hombre.
cal, de otro signo. Para entenderlo mejor,. hay que procederme" . Jesús debía por tanto moverse en otra dirección, Sus prác-'
todológicamente. Por un lado, hay que detectar las "ímplicacio- ticas, en primer lugar, se trasladan de la ley al hombre. Lo que
nes" de las prácticas de Jesús; por otro, se impone una conside-- importa no es ya la salvación de los judíos para que puedan
ración hermenéutica que dilucide críticamente nuestro acceso al practicar libremente la ley, sino la liberación respecto de toda
texto actual de los evangelios que hablan de Jesús. Por eso los estructura de muerte y la recuperación del hombre. Jesús comen-
dos puntos que siguen. ro un nuevo proceso de liberación iluminando la conciencia del
1) Si Jesús hubiese sido en primera instancia un revolu- hombre oprimido por la ideología religiosa. En segundo lugar,
cionario político, sea a la manera zelote o -comO' posibilidad-- establece una nueva praxis, cuyo eje es el servicio I y el amoral
superando el modo religioso-nacionalista, el sentido de su ac- otro. Esta praxis desencadena necesariamente una alerta en los
ción se hubiese agotado en el horizonte judío. En aque; tiempo factores de poder, los cuales mucho tienen que ver en toda
sus gestos no hubieran desencadenado una teología de la libe- opresión o dominación. El amor al prójimo se hace práctica po-
lítica. El primer caso es eldel mismo Jesús: porhabetjnicia-
54) Ver nota 31.
do y proclamado una praxis de concientización y salvación del

100 101
hombre, se trajo toda la ira de las "autoridades" judías, más que 2) La historia cristiana nos advierte que el querigma evan-
la de los romanos, y tal vez el despecho de los zelotes. Ya lo gélico es ambiguo. Por algo lamentamos muchos enfoques de re-
hemos comentado. tomo alo teocrático, de repliegue a lo espiritual (en apariencia),
A Jesús le resultaba suficiente, entonces, iniciar su progra- de colaboración con los grupos dominadores. Hay una resisten..
ma de liberación rescatando al hombre del poder estructural de cia a acompañar a los proces~s de liberación hasta donde llegan
la ley, de las "tradiciones", de los prejuicios rnarginadores, De- los "discursos" (como Medellín) (57). ' .
nuncia la "justicia de la ley" en los fariseos (ver esp. Mateo y Sucede que falta en la teología una elaboración hermenéu-
la elaboración teológica de Pablo) y la "autoridad" pervertida tica del Evangelio. ¿En qué medida éste es "suficiente" como
y alienante en los' saduceos. Será evidentemente la "autoridad" indicador de la praxs cristiana actual? En el orden simbólico
no los fariseos, quien instrumentará luego el proceso y la ejecu~ engendrado por Cristo y que señalamos ya, encontramos una
ción del nuevo líder del pueblo palestino (55). clave de interpretación de nuestra fe para un aporte a la libera-
Como líder, Jesús genera un nuevo orden simbólico, que ción de nuestros pueblos. Pero hay algo "no dicho" en el Evan- '
culmina en lo político (56). Los pobres se constituyen. en una gelio: la dimensión política, socio-económica, y 'cultural, de la ,
nueva fuerza a medida que se concientizan. Serán la base de la tarea del cristiano y de las iglesias. Por un lado, la realidad que
iglesia primitiva y un factor decisivo en el debilitamiento del vivimos es diferente a la de los judíos de la Palestina de Jesús;
imperio romano. La igualdad entre todos los, hombres producirá por otro, nuestras posibilidades de "lectura" de la misma son
tina ruptura con el sistema socio-económico del mundo antiguo: distintas y suscitan otro, tipo de concíentízacíéa, El adveni-
los esclavos del imperio serán el fermento revolucionario de los miento de las ciencias sociales no puede suplantar al Evangelio
primeros siglos de la fe cristiana. El culto al emperador-dios se -se trata de niveles diversos-e- pero ayuda a descubrr en él
desmorona desde las bases y es desmitologizado en todos los ni- una reserva-de-sentido que aflora solamente desde nuestra situa-
veles perdiendo su función opresora sustentada por la ídeolo: ción. Así aparece lo "no dicho" de lo dicho en el querigma
gía mítica. La dirección antropológica, y no judío-nacionalista, bíblico. El sentido de .lá praxis de Cristo está cod'ficado en un
de la praxis de Jesús Ia universaliza. Por la unión con los otros texto que, como estructura lingüística y como mensaje, tiene un
elementos indicados puede generar procesos, de liberación de "delante" que se abre a la interpretación. Esta 'no es un añadido
todo el hombre en toda nación o grupo humano. La síntesis de al sentido originario. Es este mismo sentido leído en una di-
todo está en esa capacidad de las prácticas y de la palabra de 57) H. ASSMANN. "Medellín: el fracaso de una ilusión",. en
Cr~st.o de liberar. al hombre de todo sistema alienante y opresor, üristianismo y SociJedad 12 nAO (1974) 137-143' F. MALLEY
:~h~l.~SO y p?líhC~. Es ina~e 'p.or tanto toda justificación de la "¿,un nueyo Ienguaie en la iglesia de América Latina?";
mrsion espiritual de las iglesias y de los cristianos. Si' fuera Vlspera 8 n.36 (1975). Ante el intento de Una. "contralectura''
así, Jesús no habría tenido el destino que tuvo..." .de Medellín se han elevado ya muchas veces de critica' al
dccumento ipreparatorio a pU.' eibla;pam citar algunos ejem-
plos: e BOFF, "A ilusáo de una Nova Cristandáda ' Crítica
55) M. AVANZO, art.cit. en la nota 50, esp.¡p.l37s donde aclara á tese centraldo documento de consulta para Puebla": Revis.
la f,alsa perspectiva que incluye a los fariseos' en el j'Uicio,a ta Eclesiás~ca }~r~sUe,i~'a 38 n:149 (1978) 5"17; Teólogos de
Jesús (Juan 18:3 sería un anacronismo o -diriamos nosotros" la CLAR, Análíse crítica da revelacao e da eclesiologia no
una relectura). documento de consulta": íbíd., p. 33·42' Pablo RICHARD
56) Sobre el orden simbólico y su manejo ideológico o político. 1959-1978: La 'iglesia latinoamericana en'tre el temor y la
véase el análisis de F. BELO, Lectura materialista del evan- esperanza" en Documentos DOOE~ (CELADEC, Lima, 1978)
gelio de Marcos, Verbo Divino, Estella, 1975. n. 7, PiPo 2'15 (y el resto de estudiosde este fasc.),

102 103
mensión más. abarcadora y rica. El proceso a Jesús resulta en- el más tiránico.'Tiene las armas espirituales y, en su colmo, re-
tonces como nuevamente iluminador, porque novedosamente ilu- curre a .las materiales (no necesariamente eIpode~ civil/como en
minado. Es una manera de decir la tarea que queda por hacer el proceso a J f(SÚS y en, otras ocasiones, sino también-las intri-
a la hermenéutica bíblica en el tema que nos ocupa (58), gas, 'las suspensiones. en la enseñanza, etc.),'.
La Ley conlleva una tendencia' innata a 'la ' muerte por
6, Cristo y la Ley. aquello mismo que en ella da la vida: como expresióndeIa vO-'
Juntad 'divina, el hombre la cumple parase! fiel a Dios, Mas El
Este tema parece propio de la teología paulina (véase el .se manifiesta también en nuevos acontecimientos; que deberían
capítulo que sigue). Pero Pablo medita desde un ánguloespe- ser "recogidos" hermenéuticamente en una nuev~ ley. La' Alian-
ciaI, el del "misterio" de la muerte-resurrección, con todas las za del Sinaíhabía brotado de la experiencia salvífica del éxodo.
implicaciones que posee. Lo veremos. Los evangelios en cambio El precepto del amordado por Jesús en la- última cena, 'no es
destacan las actitudes de,Jesús frente a la Ley, a las institucio- arbitrario ni deducido, intelectualmente de unadefinicián de'
nes concretas que la representaban, su Palabraconcientizadora Dios; sino que está respaldado en: el gesto liberador de Cristo
y su proceso final en nombre de la fidelidad a su vocación pro- que se entrega a la muerte por la causa de los hombres. El man-
fética. Ese Jesús histórico (no sólo el Cristo pascual) tiene una damiento del amor debería culminar en un gesto: igual: tiene
tremenda s'gnificación. que ser "muerte" por los hermanos.iHabráformas y gradac'o-
¿;Por qué lo condenaron las autoridades relíglosas de Jeru- nes, pero la exigencia es clara, como visible es su primer testigo.
salén? Sin embargo el hombre religioso se cierra frecuentemente en "la
Hay allí una paradoja llena de misterio. La verdad reli- ley-estructura que con facilidad se pasa sin el amor, o: 10 contra-
giosa, cuando se desenfoca, es la más alíenadora del hombre; el dice en el testimonio de los otros. Desde ese momento, ha pero
poder, cuando se pervierte, es el símbolo típico de la opresión. dido su sentido "teo-lógico", ya no "habla de Dios". .
El poder religioso, cuando pierde al Dios del acontecimiento, es Parella nos parece imprescindible reflexionar en aquella
frase de Jesús: "no vine, a abolir la Ley sino a cumplirla" (Ma-
teo 5:17). ¿Cómo "cumple" la Ley desenmascarando suutiíi-
58) Como intento de situar, el método hermenéutico, objetivo zacíón.para oprimir al hombre y "liberando" alas discípulos. de
de este librito, ver también, "Las' estructuras de poder en
la Biblia. La recontextualizacíón hermenéutica", en la Re- su cumplimiento? ¿Como la "cumple" si parella, y como trans- .
vista Bíblica 37 n, 156 (1975) 115-128. . gresor de ella, lo matan? ¿Cómo la "cumple", en fin; si en la
Conviene observar que la teología de la liberación pone un Nueva Alianza no se la retoma y si Cristo nunca habla. de nue-
énfasis especial en el Jesús histórico como expresión de una vas-estructuras para el nuevo pueblo-de. Dios? En realidad, El
cristologta liberadora (sin negar por ello. el Misterio Pas- cumple la Ley en cuanto la "consuma", la lleva a su término y,
cual, véase nuestro capítulo siguiente), Véase en especial,
J. SOBRINO, "El Jesús histórico crisis y desafío para la fe": por eso mismo, la anula (noción de "consumación" o teléíosís).
Chrístus 40 n. 480 (1975) 6-18; R. VIDALES, "La práctica Sucede que El, con todo laque es cama el nuevo Acontecimien-
histórica de Jesús. Notas provisorias": ¡bid. pp. 43-55; VA- to de Dios en el mundo, agota el sentdo profundo, de la Ley
RIOS, "¿Quién es. Jesucristo hoy en América Latina"?: Cris- en el amor. Sin dar leyes, recupera en el amor la "reserva-de-
tianismo y Sociedad 13 n. 43-44 (1975> y n. 46 (1975): J. SO-
BRINO, Orístología desde América Larlna (CRT, México sentido" de la Ley,. entendida origlnariamentecomo 'camino de
1976); L. BOFF, "Jesús Cristo libertador. Urna visao oris- vida, en cuanto interpretación del suceso' de liberación del éxodo.
tológica a partir da periferia": Revista Eclesiástica Brasíleí- -Las actitudes concientizadoras de Cristo tienensus'gnifica-
ra 37 (1977) 501-524. ción, como vemos. El "sábado" era la píedráde toque de la sen-
104 105
sibilidad legalista de .los fariseos. Y justamente. el.. "sábado"
-día de la ,"memoria" de la llberación-c- espasadoporalto
por Cristo. Porque se había co~yertidoparadóFcat?enteen fuen-
te de alienaciones y de opresion de las conciencias. Como ha...
bía sucedido con el "domingo" hasta no hace mucho en la Igle-
sia cristiana. Todos recordamos los conflictos morales que la en-
señanza jurídica había provocado' inútilmente. El cambio de ac-
titud en esto o' en tantas leyes eclesiásticas no se origina en una CAPITULO VI
pérdida del sentido de pecado (visión a su vez )'aliellada" de
las cosas) sino de un estar más comprometido con el mundo.
Es parte del proceso de liberación en que Cristo educó' a sus PABLO: LA "LmERAClON" RADICAL DEL HOMBRE
verdaderos discípulos. ' En lo más hondo de la teología del Nuevo Testamento está.:
Cristo "consuma" la, Ley y "recoge" su sentido salvífica el tema de la salvación por la fe en Oristo. ¿Qué tiene que ver '
en el amor. Ese es el programaque ofrece a los cristianos. Des- esto con la "liberación"? Mucho, por cierto. La fe en Cristo
de esa "liberación", podemos entrar más gozosamente en el pro- signif.ca el reconocimíéñto de que Dios ha hablado.,por J,3l'. J?Or
ceso de "liberación" de nuestros hermanos. su vida y su palabra, por su muerte y su resurrección-. Si1gnlflCa
que El es .el Acontecimiento de salvación que hay que ~'recage!"
m la confesión querigmática y expresar en una nueva VIda. Cris-
o 110 había predicho de antemano a los. discípulos cómodebían
nterpretar los sucesos y los problemas. Dios se manifie~ta enlos'
rcontecimientos mismos. Peroel. de Cristo,.en su totalidad, era
a nueva luz para ir descubriendo la voluntad de Dios. Esa nue- ,
la luz era dada por el Espíritu, que es siempre el don. del "Re-
mcitado", Los sucesos del concilio de Jerusalén -~~B~rado~ en'
~1 problema de la Ley para los ineófltos-« son un modelo de in-
erpretaciónde los "signos de los tiempos". Véase las palabras
le Pedro, referidas a una hermenéutica de dos "manitestacío-
tes" anteriores del.Espíritu (cf. Hechos 15:7~1l en relación con
~: 1ss y 10:34ss). A Cristo la Iglesia ha de "entenderlo" a la
uz de sus nuevasepifaniqs ,en la. historia (cf, la clave .herme-
iéutica que da ,en Juan 16:12-1$) y a través de 'la. praxis del
unor (Cristo se "manifestará' , al que ama,· según el mismo
luan, 14:21). ,. '
La fe en Cristo libera de todo aquello que na es manifes-
ación del verdadero rostro de Dios. Otorga .la "verdad" ple- -
la, . verdad 'que "nos' hace .libres" porque es la luz de una

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106
Palabra-acontecimiento (Juan 8:32) que nada tiene que ver con El Pecado.
las estructuras del mundo pagano-cósmico o judío.. . legalista. .
Allí entroncamos con Pablo, quien nos afirma en la carta El pecado de Adán expresa lal'desmesura" delho1.:nhEe
a los Romanos que en Cristo se' muestra la plena "justic'alde que' anhela apropiarse lo divino, tener el "conocimiento" infi-
Dios (expresión que no es jurídica sino salvífica) por medio nito y autónomo. El orgullo "entra así en el mundo" (Romanos
de la apertura de la fe en el Resucitado (3:21 s, a la luz de, 5:12), notando que el mito de Adán expone como "aconteci-
1: 16~17). miento" arquetípico lo qu_e es "advenimiento" en cada hom-
bre, la explicitación de' lo que, como veremos, ya "está" en el
Pablo condensa su teología querigmática en el . Acontecí- munlo. El "pecado," en el querigma bíblico se opone en primer
miento salvador de la muerte-resurrecc'ón de Cristo. Todas las lugar a la fe antes que al amor (éste resulta de aquélla en
epistoias lo atestiguan. Pero lo, que deseamos demostrar ahora la experiencia d,e la salvación). Si recordamos el abanico de
es su intelección y expresión del Misterio Pascual en categorías la fe al que aludimos en otro momento (la fe como "recono-
de "liberación". Luego, las implicaciones-hermenéuticas que cimiento" de Dios, como "confianza" en su Palabra, como "ñ-
tal aserción puede, .tener. delidad" a la Alianza, como "aceptación" del enviado, como
El sentido de la muerte-resurrección de Cristo corno suce- "apertura" al don y como "fuerza" testimonial) entenderemos
so de liberación es discutido por Pablo en la sección central de. que la Biblia nos ofrece un espectro inverso del pecado como
1<; carta a los Romanos, desde ·3 :21 hasta 8:39, desarrollo que "desconocimiento" de Dios "desconfianza" "infidelidad" "ne-
a su vez es puesto en relieve por la síntesis ñegativa. de laex- gacíón'vde susmediacione~, "clausura" al' don, "flaque~a" en
periencia pagana y judía (l: 18-3:20). "Todos pecaron y todos la tentación. Por supuesto, en la cumbre de la fe está el amor
están privados de la 'gloria' (epifanía salvífica) de Dios" (3:23). al Dios encontrado en los acontecimientos salvíficas y que por
La gran afirmación paulina es esta: Cristo nos libera ~ la ello mismo se prolonga como amor al hermano.. Y en la
muerte, de la Ley y del pecado. ¿Por qué usa aquí el lenguaje cumbre de la no-fe está el pecado como desamor, el gesto de
de la "liberación"? ¿Por qué aquellos tres términos (Ley, peca- no reconocer a Dios ni al otro, de encerrarse en uno mismo.
do, muerte) y no otros? ¿Como se.concatenan y explican entre De ahí entonces que el pecado es la máxima expresión del
sí? A partir de allí, se nos hará alguna luz¡ para, a su vez, egoísmo. Uno y otro se definen mutuamente. Su equivalente es
"comprender" existencialmente este mensaje desde nuestra rea- la alienación. El pecado-egoísmoes alienación en un doble sen-
lidad lat'noamericana, tido. Al desubicar al hombre frente a sí mismo produce un
"vacío-de-ser"; "es menos" en el lenguaje de ;P. Freirec-res
Para ser claros, tratemos de. descomponer las unidades de "mentiroso" en el de Juan (8:44.55). El egoísmo es "deseo
sentido y hacer después la sfntesis , infinito" de lo que está fuera del limite (lo "divino") perdien-
do de vista la exigencia infinita (del amor) en la finitud. En se-
1. La, triple alienación. gundo lugar, el pecado-egoísmo cierra al hombre en sí. mismo
. . y no le deja darse. ASÍ, bloquea su vocación más íntima. En
Si el Misterio Pascual es una liberación de la muerte, de vez de enriquecerse con la "pobreza" del don (2 Corintios 8:9)
la ley y del pecado.. estas tres realidades "extrañan" al hom- se empobrece "atesorando" su no-don.
bre lejos de su ser prop.o, de sus posibilidades vocacionales; Por lo tanto, el hombre pretende, por una nueva. aliena-
¿De qué'. manera ocurre esta, alienación? . ción, cubrir su "ser menos" por un "tener más" que quita a
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los otros. Es un oprimido por su propia telaraña que lo .enreda Lo que acabamos de "desimplicar" en la conciencia li-
y sofoca. Los otros, son oprimidos por un "tener menos" y so- mitacional de la muerte tiene sus reverberaciones en .la expe-
hre todo por un "ser menos" que se origina en el egoísmo del riencia de opresión. Al anular al hombre oprimido, .al. hacer-
opresor, no en su voluntad. De propósito hemos trasladado lo "menos" e impedir su realización histórica, el opresor leade-
levemente la problemát.ca, pasando del '-pecado-egoísmo en ge- lanta la muerte. La historia de la explotación de . nuestros pue-
l

neral, al pecado-egoísmo en un sentido socio-económico. La blos y de todos los del Tercer Mundo está ensombrecida de he-
relación es muy profunda. Queríamos dejar marcado que las chos que anticipan el destino-de-la-muerte en un destino-á-da-
situaciones de "dependencia" alienante en que viven muchos muerte en vida.
pueblos o grupos humanos tienen su raíz subterránea en esa ex-
traña capacidad de "concentración" o auto-centración que tiene
el hombre, a nivel afectivo, o como voluntad de poder, de "sa- La Ley
ber", de valer o de "tener" .
La muerte. La ley de la Alianza sinaítica -o de sus "relecturas'
subsiguientes- era expresión del compromiso (con Dios y con
La mayor conciencia del "límite" le viene al hombre de el prójimo) que emergía de la experiencia de la liberación de la
'la seguridad de que va a morir. El "ser-para-la muerte" es esclavitud de Egipto: "Vosotros habéis vísto 10 que yo he he-
fuente de angustia (¡lo ha dicho tanto el existencialismol). Aun- cho ... " (Éxodo 19:4 y comp. Deuteronomio 29:1ss, Josué
que su "decisión existencial" lo "pro-yecte" creatívamente en 23:3 en las exhortaciones que prolongan otras alianzas). El li-
e1 mun do como " ser-ah'" 1 , o aunque sepa que se pro1onga en
bro del Deuteronomio, comoeí Salmo 119, es, un bellísimo poe-
s.us descendientes (idea expresada en las religiones o también ma sobre la Ley como "camino" a la plenitud de la salvación
en las utopías sociales, pero que es común en la' subconcien- o como señal del justo delante de Dios.
cía del hombre) o que descubra a Dios en losacontecimíen.. Sin embargo, la ley invierte sus valores desde que, sle de-:
tos de este mundo y se comprometa en ellos, en todos los ca..; sorbita de la, vida y por tanto del hombre. Por tres causas
sos la muerte se le presenta como "límite" infranqueable don.. al menos sucede' esto: en primer lugar, la ley indica la exterio-
de ha de "apearse" y entregar todo. De ahíque el "deseo in- ridad, lo que viene desde afuera del hombre y que éste en ca-
finito" de Adán no consistía únicamente en el "conocer" como da acción debe tener en cuenta. La ley me viene "dada"; yo
1?ios, sino también en "s~(' como El y no morir .La serpiente, la recibo y ni siquiera puedooptar por no aceptarla sin "castigo".
símbolo del deseo-seducción, se 10 aclara a la mujer: "[no! no Detrás de mi transgresión emerge la sombra del juez y la pena
moriréis; es que sabe Dios que el día 'que de él comáis (del con que debo expiar la falta. En segundo lugar, es inereativa.
árbol del conocimiento) se os abrirán los ojos y seréis' como Puede orientar e indicar el "camino" cuando es mensa~e y se-
dioses" (Gé~e~is. 3:4). ~s dios~s se d~fin~n radicalmente por ñala una "vocación" que se realizará con opciones personales
su conocer infinito y su inmortalidad, CIenCIa y vida que fun- ya no marcadas, por sus ríe/les. Mas la ley-estructura, en los ór-
damentan su "poder" supereminente. °
denes civil religioso, bloquea la creatividad a la que se "ade-
Resumiendo todo, queda que la muerte frustra al hombre lanta" lo: "ya dicho" de la imposición., La leyes increativa
en su deseo de realización total. ¿Puede haber una "liberación" también. desde otra negatividad. Una prescripción no se cum..
de la muerte, así entendida, sin una nueva "desmesura" on- ple infinitamente sino hasta su propio "límite". Ese tope se-
tológica? ' ñala también mi "justicia". La exigencia profética de justicia

110 111
o la del amor, en cambio, es infinita. En este caso, también me sirve propiamente esa Ley y esa praxis en el vacío? ¿No es
el pecado será radical en vez de ser "mensurado" por el propio acaso una auto-opresión, de las más extrañas por cierto? '¿Pue-
límite de la ley. de estar Dios en.ello, .además de estar "alejado" ya por la
En tercer lugar, la ley se convierte en gnosis: soy justo autosuficiencia de aquella gnosis-praxis? ¿No se repitió exacta-
porque cumplo la ley que "conozco". El fariseo se salva por- mente esta paradoja de la autoalienación por la Regla-praxis
en la vida religiosa de la. Iglesia oprimida por el [urídicísmo .y
que "conoce" la Ley. Los ignorantes se condenan. La concien- su consecuente pretensión de "medir", y clasificar la voluntad
cia Iarisaíca que tanto critica Cristo y cuya alienación Pablo de Dios?
explorará luego, es en última instancia una coneíencía gnóstica.
No se trata del conocimiento de sí mismo de la Gnosis poste- La Leyes opresora desde otro ángulo Inás,. el de la "con.
rior (aunque ésta pueda caer también en un "auto-gloriarse") crencia tina y escrupulosa" del fariseo (o del cristiano, muchas
sino de una "gnosis" suficiente que comporta una práct~ca. ~e veces), según la fórmula de P .. Ricoeur, cuyos análísísquere-
por sí "justificadora". La Ley se presenta corno totalización mas condensar aquí en pocas' líneas (59). Aquélla es heteró-
de la voluntad de Dios' (si bien toda Ley O' Torá es revelación, noma hasta el extremo (el hombre obedece en todo, en todos
más importa el que toda revelación sea Torá) pero como ésta los aspectos, a pesar de todo, en 'el detalle). Conciencia fel'z
se traduce en una ecuación entre "instrucción" (¡Torá!) y obe- porque consentida (yen eso no es alienada aún). Sin embargo,
diencia, la gnosis-práctica de la Ley deviene criterio infalible si él hacer la voluntad de Dios (así entendida) es lo más gran-
de "justicia" y de mérito. El fariseo está salvado desde que, de, es una bendición tener la Ley y, con ella, ocasiones de
y luego porque, cumple la Ley.El "se dice" su propia justi- cumplir y tener méritos'. Y aquí reaparece aquella auto-opre-
cia, mensurada por el propio cumplimiento deja norma cuyo són en el vacío de que habláramos hace. ~n m?m7~toi. P~r
"límite" posee cognoscitivamente. Ya no puede ser "pecador". lo demás, el fariseo está sometido a la actividad JUdICIal, defi- .
Es solamente "justo". A eso van la parábola de la oración del nitoria y legislativa de lbs. rabinos. y escribas. .~n la que ~d~­
publicano que necesita de Dios, y del fariseo que sólo con- cúa su propia "gnosis" de la Ley, sin posibilidad de decI~lr
fiesa sus "méritos"; y la sentencia de Cristo, "no he venido a o de "dec'r su palabra" .. A esta "juridizacíón" de su. pr~xls,
llamar a los "justos" sino a 'los pecadores" (Mateo 9:13). Lo se añade una tendencia a la rítualización de rra ética (exactitud
más grave es el hecho de que esta interpretación de la Ley eva- legal paralela a la ritual), ala! sedimentación (se añaden más .
cúa el amor a Dios. El pecador, en su humildad, pide la mi- y más preceptos) y a la separación: el fariseo resulta ser un "se-
sericordia de Dios, y por eso 10 ama más ("a quien poco se le parado" (la palabra lo dice en su. etimología) de los: 'ignoran-
perdona, poco ama", Lucas 7:47, en una fina alusión al fari- tes y pecadores". Por último; el fracaso de esta ,conCIenCia es-
seo presente que cumplía la ley pero no supo amar como la crupulosa y sometida es la bipoOte~ía.¿Por qu~? Porque al su-
mujer pecadora; al no saber amar, no tuvo ninguno de los mar siempre más mandamientos, su observancia se vuelve so-
gestos no prescriptos por la Ley que hizo aquélla ... ). Pablo brehumana; entonces el "hacer" se enmascara en e l "d . ,"
. ecir
sabrá decirnos luego por qué el fariseo hace superfluo a Cris- ("dicen pero no hacen", cf.Mateo 23:3). La Ley Ilega a ser un
to. Nos damos cuenta de que la Ley interpretada como "gno-
sís" autojustificadora es fuente de alienación del hombre: Efec-
tivamente, si la práctica del mandamiento es mt obra, si yo me
justifico en ella sin que Dios necesite declarármelo (yo lo "sé" 59) P. RICOEUR, La symbolique .du mal (Aubíer, París,' 1960)
por la posición del "límite" que determina la Ley), ¿de qué . p. 115ss.

112 . 113
yugo; el hombre no puede salir de ese círculo fatídico que lo • La relación pecado-muerte se complica y aclara con la po-
»Ó»

aliena cada vez más. Lo triste es ique el fariseo no puede li- sic.on de la Ley, el tercer elemento, decisivo en todo sentido.
berarse porque es el opresor de sí mismo. .Pablo es explícitoen esto. La primera consecuencia del ad-
venimiento de la Leyes la transmutación del pecado (hamar-
2. Las tres alienaciones según RomaD!~ 5·7. tía) .d~excusable en im~utaible (v. 13~; Ell pecado, por ende,
Hemos ensayado de comprender dónde está la alienación es distinto antes y despuésde la donación de la Ley. De situa-
del pecado, la muerte y Ia Ley, los tres términos que usa Pa- cional, se hace personal, Dé pecado del mundo, es apropiado
blo en la epístola a los Romanos. Pues bien, ¿cómo se relacio- como culpa. ¿De qué manera? .
nan y se- "dicen" entre sí, en el pensamiento del autor? La pri- , A 10 largo de su' exposición (5-8), Pablo retoma y explica
mera realidad que "entra" en el mundo es el pecado (ham1lt,tía) su afirmación de 3:20, el último verso de la sección antitética
cf. 5:-12. Si en Adán es una desobediencia personal al manda- sobre el tiempo (no cronológico sino existencial) de la ira de
miento divino (una parábasis, parakoé, vv.. 14ss), no se dice lo Dios. La Ley, lejos: de poder justificar, muestra su debiíidad
mismn de sus descendientes. Desde Adán la bamartm "reina" intrínseca dando sólo.a "conocer" el. pecado. Para captar me-
en el mundo (v. 21), "existe" (v. 13), pero' "no es imputable" jor la ubicación de la Ley en la secuencia pecado-muerte, de
íouk ellogéitai, v. 13). En ~l v. 14 se distingue de Adán a por sí independiente (ya que se daba antes de la llegada de a-
"los que no habían pecado, a semejanza ele su transgresión". quélla) pongamos ante nuestros
, ojos
"
las afirmaciones de Pablo:
Sin embargo, la hamartía es una tremenda realidad, que "habi-
ta en mí" (7:20), sobre todo, que por la desobediencia dle A- -De la Ley sólo nos viene el cOil1iodm!Íen~o del pecado <3:20)
dán muchos (todos) "fueron constituidas (katestáthesan) pecado- -"Yo conocí el pecado sólo' por la Ley" (7:7).
res" (v. 19). Es un elemento importante para deducir de aquí -da Ley hace abundar el pecado (5:20).
lapresencia en el mundo de un "pecado situacional", que to- -hace que el pecada domine en el hombre (6: 14) .
davía no es pecado personal. ¿De qué manera, por qué "oca- -por la Ley, el pecado revive (7:9).
sión", se hará tal? ~ -es ocasron para que el pecado seduzca (7:11 ).
-activa la codicia (epithumía) que, a su vez, solicita el pe-
En segundo lugar, Pablo establece la realidad de la Il1IUer.. cado (7:7b~8) .
te, que también "reina" 'en el mundo (5:14.17) en el cual "en- -está reducida a la impotencia por la carne (8:3),
tró" por el pecado de Adán (v. 12 y cf. v . 15.17). Ya tene-
mos una secuencia causal: del pecado a la muerte. Al hacer la La debilidad de la Ley para justificar está indicada en el
tipología Adán-Cristo (vv. 15-19) Pablo marca tres' consecuen- primero y el último de los pasajes citados. Con ello se hará
cias de la desobediencia del protoparente: . resaltar la fuerza de Ia gracia que nos viene de la fe en Cristo.
-mueren muchos (v. ·15), a lo que se opone un "cuanto Pablo hace dos afirmaciones esenciales:
más" de la gracia y del don de Jesucristo. En el v . 17 a) Desde Adán, existe en todos los hombres el pecado (situa-
se opone más claramente la vida. , cional, no imputable) que implica la muerte. Esta, por tan-
-hay una condenación (katákrima) para todos. Se entiende to, no es castigo de un pecado personal, pero es "conde-
que a la muerte, por la oposición, que establece la justiñ- nación" en un sentido más amplio.
cación (dikáioma) para la vida. Cf. vv. 16. 18. . b) Desde la Ley, el pecado revive, abunda, domina, seduce, o
-~uchos son 10,s pecadores (por Cristo, muchos serán los
simplemente es "conocido" en toda su fuerza seductora.
justos, v : 19).
115
114
Desde entonces, se modifica la relación pecado.muerte, la carne" (8:6s; Gálatas 5:16ss) .. El fariseo, de tal manera se
que ya existía antes de la Ley. Ahora :el pecado es culpa- condena a sí mismo. Ya que pretende justificarse por Ia sola
ble, y la muerte es castigo. . Ley, por ella se condena.
La Leyes el eje que determina y sostiene la:· experiencia Estas últimas consideraciones sobre la maldición-de-la-Ley
del pecado y de su consecuencia, la muerte. El tema de la son una profunda interpretación paulina del hombre entregado
muerte es esencial para Pablo, porque de ella partirá para su a la Ley como única fuente de justicia, y valen para todo tipo
contraanálisis de la obra .salvífica de Cristo. de Iariseísmó de la ley. Lo que habíamos resumido un poca
antes, respecto a la "emergencia" del pecado desde el adveni-
Lo que en Romanos aparece como el estatuto ontológico miento de la Ley, se aplica a toda situación humana bajo es-
del hombre bajo la Ley, en la carta a los Gálatas se comple- tructuras legales que oprimen. La estructura muestra su, propia
ta con una mención de lo que podríamos llamar el "infierno debilidad all "dar a conocer" el pecado sin otorgar la fuerza
de la culpabilidad" bajo el régimen de la Ley. para observarla. O si no -lo que es muy común y típico-
"Cuantos confían en las obras de la Ley -asevera en Gá- asegura su cumplimiento mediante nuevas prescripciones que
latas 3:10- se hallan bajo la maldlcíén, porque escrito está: despersonalizan, alienan u oprimen. Cualquiera ha tenido la
'maldito todo el que no se mantiene en cuanto está escrito en .experiencia de ese" automovimiento de la ley hacia la violencia
el libro de la Ley.vcumpliéndoio". Pablo explota un argumen- estructural. . , .
to sacado de la Ley, única norma del judío. El hombre, en- Falta remarcar un elemento esencial dentro de lo dicho .
tonces, es maldito (y merece la muerte) si no cumple toda la Pablo- atestigua que la Leyes fuente <re pecado, y que éste Neva
Ley. Ahora bien, no puede satisfacer la exigencia total e ili- a la muerte. Se convierte, por lo mismo, en un "ministerio de
mitada de ésta, sobre todo por estar ampliada con infinidad muerte" (diakonía tou thanátou, 2 .Corintios 3:7). Debemos
de preceptos y tradiciones. Es una tarea inhumana. La mis- destacarlo con todas las letras, para poder entender 'la acción
ma Ley transforma en distancia la aproximación a la justicia. liberadora de Cristo, que comienza allí donde termina este "mi-
"La empresa de reducir el pecado por la observancia se con- nisterio" ,de la Ley. La clave .de todo es la muerte. El pecado,
vierte en pecado" (60). De ahí el "infierno de la culpabilidad": de por S1, lleva a ella (en todo hombre, desde Adán). Pablo
el hombre puede ser justo sólo por la Ley, pero por ella no hace una afirmación "jurídica" sino teológica: no: que el pe-
misma no se demuestra sino pecador. Pablo destaca esa cir- cado situacional haga merecer la muerte; ésta simplemente va
cularidad entre la Ley y el pecado. Fracaso de la Ley en su implicada en la hamartía que reina en el mundo. La Ley, que
intención originaria (de por sí, es buena y santa, Romanos revive el pecado y lo! hace personal, intensifica el paso a la
7:12-16, espiritual, v. 14), frustración del hombre en su an- muerte (ahora es castigo; como en Adán: Génesis 3:2255). La
helo de justicia. Pablo agudiza más aún la crisis del fariseo Ley, que "maldice" al que descansa en elía y no la observa,
bajo la Ley: su pecado no consiste 0010 en trasgredir el mano ]0 destina a la muerte (resultado de la maldición). La Ley, con-
damiento y hacerse maldito (sin poder evitarlo,'de hecho). Se vertida en "infierno de la culpabilidad", se hace otra vez mi-
añade su; voluntad de salvarse satisfaciendo la Ley (lakáujesis nisterio de muerte. En cualquiera de sus pendientes, transpor-
o "jactancia", haciendo que todo su proyecto sea inmoral, "o~ ta a la muerte.
bra de la carne" (Gálatas 5:19; Romanos 7:5; 8:4ss), "deseo de ¿Pero no estará en ese "ministerio" su propíoagotamien-
tú, su muerte?
60) Ibíd., p. 138.
117
116
Antes de tomar el itíneraricdel Hombre Nuevo a partir tema de la rcsurrección.tpríncipio de la transformación de to':
de ese momento crítico de la muerte que separa las vertientes das las cosas, del surgimiento del Hombre Nuevo: liberado de
de la Ley y de la. gracia, reflexionemos un momento en Ia la ley, del pecado y de la muerte; .
condición del "hombre viejo" que Pablo ha descrito con tanta . ~ Creemos s n embargo que Pablo no, se detiene tanto en
penetración. ahondar el valor soteriológicc y Iiberador deIa resurrección
La triple concatenación de Ley-pecado-muerte totaliza la -como 10' había hecho en la primera carta a los Corintios (15:
alienac'ón humana. Liga en efecto! una experiencia presente (la 1ss)-:' sino en esclarecer porqué Cristo emerge a la vida des..
vida bajo la ley, sentida como ser-para-la-maldición) y una frus- die la nurerte, cuyo impulso radical no es la condición mortal.
tración anticipada del ser (el ser-para-la-muerte, vivido en una del cuerpo sinola potencia mortífera' de la Ley. También en no-
nueva'intensidad). Presente de angustia y futuro vacío, tal es sotros el Hombre Nuevo adviene por un morir al pecado (Ro-
la vivencia del hombre sometido a \la ley. Entregado a ésta manos 6:2. 65S) que, a su vez, es un radicalizar la efectividad
]0 es también al pecado, en una paradoja destructiva. de da ley. Por su propio dinamismo, la Ley "mata" ("hallé que
En la secuencia Ley-pecado-muerte, cada elemento con- el precepto, que era para vida, fue para muerte" , 7:1O). Pero
diciona a los otros dos o se condiciona por ellos. Ya está anali- en su propio proceso se agota a sí misma, se autodestruye. De
zado ese fenómeno. Dicho ahora con otras palabras, la muer- . dos maneras: por un lado', se da esa secuencia que ya consi-
te es el término de todo, todas las veces, y un fracaso del pro- deramos: la Ley "manifiesta" el pecado sítuacíonal, hace que
yecto humano de justificación. La Ley señala la virulencia del el hombrese encuentre culpable en la transgresión, y caiga ba-
pecado, que desde.ella renace y cambia de signo. Pero lo que jo1.a .'Imaldidón" de la Ley quelo destina a la muerte); Cris..
siempre está en el med'o, es el pecado. Esa es la realidad que Pa- to, "nacido bajo la Ley" (Gálatas 4:4), representa a todos los
blo quiere enfatizar en todo momento al demostrar todos sus sometidos a ell1a,y asume en sí su "maldición', C'se hizo por
engranajes y conexiones.. El hombre viejo -sometido a la nosotros maldición", 3:13) slmbotizada en su 'exhibición- en.
Ley- es el "esclavo" del pecado (Romanos 6:6). la cruz ("maldito todo el que es colgado en ,el madero", v.
Por eso, el .acontecim'ento salvífico de Cristo tiene su epi- 13). La muerte de Cristo es, por 10 tanto, el efecto extrema-
centro en la redención del hombre pecador, de la máxima alie- . do y concentrado de la eñcacía mortal de la ley. Pero al lIe-
nación. Pero por la concatenación entre ley-pecado-muerte (el gar a la muerte, El es resucitado por el Espí~itu, y pasa 'R una
pecado está "atado" entre las otras dos dimensiones) su gracia . nueva vida (8:11). En el reino del Espíritu, de la libertad y el .
tiene que ser una liberación simultánea de las tres reaíidades amor, la Ley no tiene riada quehacer , Como el gesto' de Crísto
. indicadas. Mas dentro de la obra de Cristo, se invertirá la di~ es el .reverscdel de Adán, sólo que con un . "cuanto más. ~ ."
rección del itinerario. La muerte será la clave de todo. (Cf 5:15.11), todos nosotros pasamos a la nuevavida, y des"
de entonces estamos fuera .del. alcance de la Ley: "la ley .del
E$píritu de vida en Cristo Jesús 'me libel1ó (le la Ley del pecado
3 . De la muerte a la vida y dela muerte". (8:2), Libres de laley, se 'acebael reíno-deí
pecado y de la muerte. Libres de la ley, el pecado no tíeaesu
En la sección de 5:12-21 Pablo había anticipado el conte- . "ocasión" para revivir. De cualquier manera, hay que pasar .
nido de la obra pascual de Cristo estableciendo una oposición por una "muerte" (cf. luego).' .
entre la muerte (desde Adán pero recrudecida desde la Ley) y .En·. segundo lugar, Pablo desarrolla 'un nuevo .argumento
la vida (por la gracia y el don de la Justicia, obra de Cristo, v. en Romanos 7:1"6. La Ley domina al hombre mientras éste
17. 18.21). Desde aquel paralelismo antitético se insinúa el
. 119
118
vive (trae el caso de la "ley del marido" que cesa para la mu- muere a la Leyi "por el. ~u~rpo de Cristo" (7:4) en una clara
jer cuando wquéll muere). Cristo también al morir "sale" del .alusión al.cuerporesucitado de Cristo en el que aquél' se "in;'
dominio de la Ley. Pablo 10 sobreentiende y lo aplica direc- corpora" Por el bautismo.
tamente al cristiano identificado con El (v. 4).
¿Cuáles son entonces las exigencias' del bautismo?
Pablo une íntimamente el Acontecimiento de Cristo con ¿Qué implicaciones "Iiberadoras" tiene la fe en Cristo?
su prolongación mistérica en el cristiano. Las últimas referen- ¿Cómo.debem~s "releer" esta liberación desde nuestra si.
cias ya lo iban insinuando. Si Cristo experimentó "hasta la tuación latinoamericana? .
muerte" la opresión de la Ley (aquí vale recordar el análisis.
del capítulo anterior en el-parágrafo 5), el pecado lo cargó con 4. Nuestra "l!iberación" pascual,
nosotros (2 Corintios 5:21 "a quien noconoció el pecado, le hizo
pecado por nosotros, para que en El fuéramos justicia de Dios"). a) Acabarnos de afirmar .que, para Pablo, el suceso de la
Es decir que esta experiencia existencial de nuestro pecado es muerte-resurrección de Cristo.es una liquidación de la Ley, el ,
asumida por Cristo en su muerte-resurrección que nos libera •. pecado y la muerte que, desde la virulencia misma del pecado,
Ahora bien ¿qué es lo que nos une a El y nos identifica azuzado y hecho "sobremanera pecaminoso" (Romano1s 7:131)
con su muerte-resurrección, en la cual nos liberamos de .Ia por la Ley, es su última consecuencia en el cuerpo-de . Cristo.
ley, y sus consecuencias, el pecado y la muerte (Romanos 8:2)? Al resucitar, está en el' áreadel Espíritu, que es vida- y amor.
La respuesta está.dada en la primera parte del capítulo 6 (vv. El hombre, .asu vez,' "muere" a esas tres realidades por una
1-11) Y es el supuesto' axial de la doctrina de la redención en inserción en Cristo ·por .el bautismo (Romanos '6:1ss y cf. las
las otras cartas paulinas . Se trata del bautismo. No es una no- resonancias bautismales de Gálatas 2:19s. 26ss. con la frase,
vedad. Pero ahora comprendemos por qué.aparece este pasaje "por la misma.Ley he muerto a la Ley.vívíendo para Dios....").
sobre el bautismo, en estelugar preciso. Después dediagraplar Antes dedesimplicar la teología del Hombre Nuevo que el bau-
aquel paralelismo de oposición entre Adán y Cristo y. terminar . tismo posee en este contexto', cabe hacer algunas observaciones,
en 5:21 con una referencia a_."la gracia por la justicia parata Arite todo, el hecho bautismal no incorpora mágicamente
vida eterna por Jesucristo", conecta <le inmediato con el. bau- , alCristo muerto y resucitado. No está terminado todo en 'ese
tismo que incorpora al cristiano en el "cuanto más; .. " de momento, El bautismootorga .la "energía' d~l Espíritu para.
Cristo y lo saca de la línea de Adán. En adelante, Pablo ha- construir-día a día al Hombre Nuevo; un "crecimiento" hasta-
bla de nosotros pero .desde el misterio salvífico y liberador de adquirir-la estatura' "del Hombre perfecto, que es Cristo (Bíe-
la muerte-resurrección de Cristo. Por ello' destaca el tema de sios 4:13). "El bautismo; es "proyecto" del Hombre Nuevo, no .
Ira muerte en su teología bautismal (6:3.4 Y en todos los ver- su.. realización mística y tal vez evasiva. Como no' es sólo sa~
sos siguientes): El bautismo es un bomóioma, una "asimilación" cramento sino que desata y fortifica la:' "confesión" testimonial
a su muerte, y.por eso a su resurrección (v.· 5). Todo lo que de la fe (cí. 1 Juan 2:27; Efesios J :13), que se reelaboraher-
notamos de la muerte como liquidación de la Ley, del pecado menéuticamente en la' praxis, ha de manifestarse en lavfda,. -
y de sí misma, vale ahora del cristiano por y. desde el bautis- Entendemos entonces que la liberación que. ppsibilita el
mo. Si el pecadollevaba a la muerte (8:10; 6:13),en ese.mis.. bautismo es "vocacional" .. Esto parece evidente pero el queríg-
mo momento se muere al pecado (6:11) yse vivepara Días. ma neotestamentario lo refirma con 10 que fue el.bautismo de
"Ahora, libres del pecado ... tenéis como fin la. vida eterna': Jesús en el Jordán, según ya comentamos, (capítulo V,n. 1).
(6:22L Por eso también puede apuntar Pablo que el cristiano Desde su unción por el Espíritu; Jesús quedó consagrado para

120 121
(Romanos 7:6) de lasleyes antihístóricas (eclesiásticas o socia,
una misión profética y signado por la vocación del "Servidor Les) pasa a la libertad del "espíritu" y a la verdadera cualidad de
sufri~nte". Ahora bien, esta vocación se fueexplicitando·en "hijo" de Dios, que nunca puede ser esclavo (Romanos 8:1488'
su VIda, por sus gestos y su palabra, y se plenificó en su muer- Gálatas 4:1-7). Es "hijo" y es libre quien posee una "concien~
te-resurrección, Así debe ser el bautismo cristiano: una "vo- cia crítica" frente a la realidad, política, social o religiosa, El
cación" a asumir al .Cristo auténtico en la vida: y hasta el cristiano libre' tiene derecho de criticar a la Iglesia-estructura
don máximo' de sí a los hermanos (61). . como de "decir su palabra" frente a la vida humana en tod~
Que el bautismorio sea una liberación inmediata del pe. sus formas. También,ello es expresión del Misterio Pascual
c~do, de ~~ muerte y de la ley, 10 demuestra también aquel
plenamente asumido. Cuando nos liberamos de la ley crece·
denso_ pasaje de Romanos 7:13-24, en que Pablo siente aún la mos en el amor. Pero es fundamental, sobre todo en este mo-
fuerza de esos tres dominios opresores. El nacimiento del .mento histórico, .comprender el itinerario inverso: porque cre-
. Hombre Nuevo es una lucha, un esfuerzo contra las fuerzas caó- cemos en el amor auténtico, en el compromiso nas liberamos
ticas que ~lienE,l.n al hombre viejo, ' de la ley. Uno se libera desde la vida, no desde la estructura
b) ¿Como surge el Hombre Nuevo? Contestamos' en se- misma. Sabemos por otra parte que los .camblos vienen de a-
gukl.~: desde la muerte. LO entendemos a la luz de la doctrina: bajo, no de. arriba fla estructura, social, política o' religiosa, só.
paulina expuesta ya, Cristo resurge a la vida desde la muerte 10 "recoge" y reimpulsa lo "anuncado" en las, situaciones vi..
su ~esto"extremo: El hombre Nuevo aparece sólo como "re: vidas). De nuevo se da el circuito que señala Pablo: la estruc-
sucitado ; por 10 tanto, desde la' muerte (Romanos 6:4, Bss), tura "mata',' al hombre: desde su situación de oprimido' éste
Se muere ~l pecado muriendo de alguna manera, Se muere a puede liberarse "evacuando" ,la ley (por la lucha política o
la ley, sufriendo ,de alguna manera su opresión y}(liberándose" parlamentaria,' por la desobediencia religiosa que muchas veces
de ella; se .resucíta a algo nuevo, muriendo a lcvíejo.' En su es "crítica" y salvífica} y colaborar en la creación de un orden
expresión más honda, misteriosa y dramática, el verdadero Hom- nuevo" Lo decimos una vez más, los opresores, ni se liberan
bre Nuevo no es de esta vida: es el que 'la entrega por amor ni liberan a sus oprimidos, Para el cristiano, esta es una con-
de sus hermanos, como lo han .hecho y 10 están haciendo tan- secuencia de su "liberación programátíca" en el bautismo. Pa-
t?S mártires .de nuestra actual emancipación latinoamericana. recerá extraño que 19 afirmado se deduzca de la teología pas-
Ese es un'morir y resucitar con Cristo; eso es "ser bautizado" cual. Pero es claro, si se interpreta a ésta desde las "situacio-
en Cristo. ' nes" concretas que vive el hombre, no desde una ascética irreal.
Crsto, P?r .ta~t?, nos libera del pecado, dela ley, de la "De suerte que el que es de Cristo se ha hecho criatura nue-
ya, y lo viejo pasó, se ha hecho nuevo" (2 Corintios 5:17),.
muerte. ¿Que SIgnIfICa cada una de estas afirmaciones? Si re..
cordamos sus contenidos (n., 1) nos daremos cuenta.de Ia in- El Hombre Nuevo es libre desde dentro (por el amor que
creíble proyección que tiene en nosotros 'el Misterio Pascual desaloja al egoísmo), desde &lera (de la ley-limitación e increa-
,~omo gesto liberador del egoísmo, de las estructuras opresivas, tlva) y hacia adelante (de la muerte como Iímite-óntíco). La "li-
oc la desesperanza. El Hombre Nuevo es capaz.de amar des- beración" de que trata Pablo en la carta a los Romanos alcan-
de el amor en pareja ("sacramento" de toda donación)'hasta za a todo el h,omblre, en su interioridad, en su exterioridad y
la entrega a la causa de los oprimidos. De la "letra vieja" en su onticidad.'. '.
.
Aq~,í c~b~, ~tra "relectura" de la liberación pascual. Esta
,

61) E. DY~SEL,. Caminos de, li~eracióe latino'americana, (Uaü. no es solo individual, como suele explicarse, aunque se hable
!H.'amerlca Libros, Buenos AIres, 1912) p. 118s'. (el amor es
verdadero SI es eficaz).
123
122
del "Cuerpo' Místico" o de la comunidad cristiana. En el
éxodo llega a nosotros pasando por la nueva "donación-de-sen-
"Cuerpo Místico" el cristiano puede ser perfectamente indivi-
tido" pascual. En ese con(inUUilU quérigmatíco no se suspende
dualista . Es una falla, porque el valor comunitario de la Igle-
sino que se confirma, y a su vez se re-interpreta desde los otros
sia-pueblo es fundamental. Nos referimos además al valor "pue- "focos" analizados (Génesis, profetas, evangelios), que tienen
blo" en IDl sentido, político o éinico . Los pueblos, los grupos
una nueva significación a partir de nuestra realidad latinoame-'
étnicos (indios, negros, minorías sociales que tienen su propia rlcana.
expresión comunitaria) tienen derecho a la libertad, a "decir su La pregunta que está a la base de estas reflexiones herme-
palabra" o a "ser más". Si están oprimidos ,-como suelen néuticas es la que se hacen muchos cristianos' acostumbrados a
estarlo en el mundo actual~ están llamados a su liberación, a "una" lectura del Nuevo Testamento: ¿cómo entender pólítica-
su propia. "pascua" que los haga surgir como pueblos nuevos o mente la liberación espiritual que Cristo nos posibilitó? Pablo
grupos humanos con sus derechos reconocidos. Puesto que los en todas S4S cartas ignora sencillamente, el orden económico y
r:¡ esores no liberan, el cristiano debe de ponerse del lado el
cultural; al político-soclal lo desconecta bastante dé la' Iíbe-
los oprimidos, porque en éstos se manifiesta el Cristo de la ración ya que solicita a 10'8 esclavos que permanezcan en su
muerte y de la resurrección. Sólo así se liberarán también los condición (l Coriatíos 7:20~24; 1 Timoteo 6:1-2) ya 10s súb-
pueblos opresores, al quitárseles el piso en el que se mueven .dítos del Imperio que obedezcan a las autoridades constituídas,
en cuanto opresores. Esta comprensión político-social del a pesar de lo opresivas, que eran, según sabemos (Romanos 13:
Hombre Nuevo vale con extrema urgencia en nuestra América 1ss).
Latina. En la praxis de una fe liberadora se realizará el "bau- Tenemos que aclarar el panorama, con la mayor claridad
tismo-vocación" del cristiano. y sencillez posibles.
Hablamos de "vocación": el Hombre Nuevo está por ha- En primer lugar, Pablo pone el ñmdamento de toda libe-
cerse. El Resucitado no está aún en el mundo dominado por ración al destacar el papel del amor al hombre-hermano (en la
viejas estructuras de poder; 'no está en la Iglesia integrada en línea de los gestos liberadores de Cristo, llevados, al "límite" en
los factores de poder. Pero está surgiendo en una Iglesia nu~­ su entrega hasta la muerte). Desde que el hombre descubre que
va, desde las bases de una fe-praxis y compromiso. El ReSUCI- el esclavo es su "hermano" comienza a esfumarse la relación
tado está apareciendo en los hombres luchadores, en tantos de dominio sobre él, como' destaca el corto mensaje de Pablo
paeblos que mueren a la opresión y la dependencia para surgir a Filemón (62) y lo demuestra la situación de los "esclavos"
a su pleno ser. cristianos en el Imperio romano. Pablo exhorta a la sumisión
a las autoridades de ese mundo opresor, pero en cuanto las
S, Hermenéutica de la liberación ''palScual''. considera' "para el bien". Su visión tes, ingenua desde el pun-
to de vista sociOl1óg!co-político pero el hecho es que la idea cla..
¿Cómo podemos re-entender hoy esta triple liberación que ve del cristianismo -muy destacada por el, Pablo de todas las
Pablo pone como núcleo del Misterio Pascual? Si una herme- cartas (cf. especialmente en 1 Corintios 12:3 y Efesiós4:S)-
néutica "desmplicadora-del-sentido" del querigma explora en la confesión de Cristo como único "señor" (Kúrios) desenca..
Éste desde la "situación", ¿cuáles son nuestras exigencias pas- denó la primera "revolución" en el Imperio. Porque no acepo
cuales? 62) Véase la interpretación de J; 1. VICENTINI, "¿Pablo revolu-
Una vez repasado 10 expuesto en la introducción (yen el cionario? pero ¿cómo? La esclavitud según la carta a File-
capítulo 1), tenemos que ver cómo el "núcleo-de-sentido" del món": Revista Bfblica33 n, 119 (1971) 43-54.

124 125
cristológicamente el vocabulario del éxodo '-meditad()l a su
taban el culto al emperador, los cristianos eran perseguidos co- vez por la "confesión" de Israel en ,su larga experiencia hiStó-
mo "subversivos" y hasta "ateos". Ahora bien, estos mismos rica -r¡efiriendo al Misterio Pascual los términos característí-.
hechos tienen su significación hermenéutica: proceden del "sen- cos de lufróo ('rescatar / redimir),eleudlElria (fíbertad'), sÓzo
tido" originario del querigma cristiano, pero muestran a su vez ('salvar'), bilas,térlon('propiciatorio', cf. Exodo 25:17ss, en el
que son las "situaciones" las que liberan aquel sentido' antes es:" 'contexto del éxodo-desierto), etc. Cristo nos "redime" (Roma.
condido (63). . nos 3:24) -de los, pecados, de la servidumbre (cf. Exodo 20:1),
Retomemos empero la pregunta, pues no todo está expli- de la Ley (Gálatas 3:13; 4:5}, de la muerte (Romanos 8~'J Quie-
cado. . re decir que el querigma del éxodo se incorpora en el Misterio
Primera afirmación que hacemos: cuando el querigma bí- Pascual, qute es expresado justamente con el Ienguaje de la "li-
blico destaca urr valor, éste no se pierde más, por supuesto que beración" como es, explícito en Romanos 3-8., La "memoria"
en su "intencionalidad" profunda, no necesariamente, en sus del éxodo es. absorbida e integrada en, 1a "memoria' pascual.
contornos exteriores o culturales. Ahora bien, el éxodo había La continuidad del lenguaje "pascual" es la mejor evidencia.
sido marcado como Acontecimiento de liberación política, so- En las palabras del mismo Pablo: "nuestra Pascua, es Cristo"
cial, a nivel de pueblo y Dios aparecía en su acto de amor sig- (l Corintios 5:7LY la celebración cristiana está prolongando
nado por la vlolencía-de-la-justicia, Hemos explorado ya las im.. el éxodo en toda comunión eucarística. ¿Qué debe suscitar esa
plicaciones de ese momento liberador del pueblo de Israel y có- proclama pascual? 2) Los gestos y Ia palabra-vida de Cristo
mo su sentido profundo quedó "recolectado" en los "credos" redescubren y liberan al hombre, oprimido por las estructuras
o confesiones .de fe a lo largo de muchos siglos de concíenti- sociales y religiosas, le posibilitan "decir su palabra"; el hecho
zación en la' libertad. Entre aquellos, valores adquiere una fuer- pascual es una "redención" del hombre oprimido por la Ley, y.
za programática el de "pueblo", ya que el hombre se libera en por lo tanto por el pecado (la máxima dimensión de extraña-
comunión, en diálogo con sus hermanos oprimidos. Pero aquí miento) y su "salario, la muerte" (Romanos 6:23). El Antiguo
queda algo irrealizado, como en suspenso: la verdadera libera.. Testamento, régimen de [a Ley (sólo ,"pedagogO!" hacia Cristo
ción libera también a los opresores en una comunión más am- en las intenciones de Dios, Gálatas 3:24), nOI había podido desa-
plia en que no hay ni oprimidos ni opresores. El éxodo no tu- rrollar esta teología de la liberación de las. estructuras,' y apenas
vo las condiciones históricas para desarrollar ese "sentido"; su si comenzaba a expresar una fe en la resurrección. Su énfasis
urgencia política, por otra parte, demoró la reflexión en otros en el perdón de los pecados (con un profundo sentido de "pue-
valores espirituales. Mas enfaticemos desde ya que éstos de al- blo", cf. Nehemías 9, Daniel 3:24s8, etc.) iba a deteriorarse
guna manera están prefigurados, si na "dichos" con otro len- por la "jactancia" (káujesis) de la autojustificac'ón farisaica por
guaje, puesto que tienen su fundamento en la vocación de los las obras de la Ley. La "liberación pascual" -como la he-
pueblos a la libertad como designio divino. mos descubierto en Pablo- es una profundización respecto a
segunda afirmación: el Acontecimiento de Cristo retoma la del éxodo, Los tres valores señalados por él implican a todo
~. extiende el querigma del éxodo. ¿De qué manera? En tres fe- el h()imbre,ensu ser y. en su vacación. 3) Esa manera de
nómenos se 10 puede visualizar: el empleo del léxico del éxodo, situar a la Iíberacíón, en un' contexto cultural determinado (el
la marcación de nuevas dimensiones de la liberación, el sentido mundo judío y farisaico) y al mismo tiempo abierto (liberación
¡ 'exploratorio" de su interpretación. En efecto, 1), Pablo relee del pecadoy de la muerte), y con el respaldo de la "memoria"

63) Sobre este tema, véase el primer articulo citado en la nota 58.
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del éxodo, nos permite "explorar" hermenéuticamente en su
sentido existencial y profético presente. ción' '? El designio salvífica de Dios, ¿no es por ~ntura el de
conducir al hombre total, individuo o pu~blo, a su, plena reali-
zación en la libertad? -
Tercera afirmación: hoy sólo podemos interpretar el éxodo Creer en Cristo significa actuar desde el aquí y ahora de
yel Misterio Pascual desde nuestra situación de pueblos depen- nuestra realidad.
dientes y oprimidos, o de hombres dominados por las estructu-
ras de poder. Dicho contexto de opresión es, nuevamente, "re- Comprobamos así que el circuito que hemos iniciado con
ligioso" (más alienante, por los factores de poder usados, que el éxodo, se continúa (como nuevo movimiento hacia adelante)
el fariseísmo), pero sobre todo cultural, social, político y econó- en nuestra propia historia, en la que vol'1emos a "reconocer" el
mica.. En los países del Tercer Mundo es la opresión político- paso del Dios liberador y 10 volvemos a "confesar" ,~n una fe-
económica [a que configura el "mal radica!", fruto del egoísmo praxis liberadora .: El Acontecimiento de la salvación en el éxo-
del "tener más" de otras naciones más ricas, posibilitado e in- do, el querígma de la vocación del hombre a la libertad (Géne-
crernentado por estructuras satánicas de poder. ¿Qué significa sis), la denuncia profética de la injusticia, el "juicio" qe Je-
ser cristiano en un mundo de dependencia como éste? ¿Cómo sús de Nazaret contra las estructuras opresoras de la Ley, su li-
el cristiano puede expresar -a nivel d¡e "confesión" y de pra- beración más profunda por el Misterio Pascual: todo perfila
xis- la fe en el Resucitado y en su liberación pascual? ¿Don- . el núcleo del querigma que nos es inteligible a nosotros, en A-
de podrá surgir el Hombre Nuevo latinoamericano? mérica Latina, sólo desde sus implicaciones hermenéuticas co-
mo "proyecto histórico" de liberación.
Hay una dimensión del pecado qU,e conocemos en la expe-
riencia de nuestra realidad. Allí se actualiza la liberación del
pecado que Cristo nos posibilita. Hay una dimensión política "Releer" el mensaje bíblico desde nosotros, es la umca
del amor a los hermanos oprimidos por los poderes de . este manera de explorar su "reserva-de-sentido". En ello se respon-
mundo: allí se sitúa el cristiano que ama. Hay una muerte polí- de también a una pregunta que suele hacerse en los estudios
tíca y económica de tantos pueblos que no pueden "ser más" hermenéuticos: ¿cuál es el itinerario que hay que tomar: desde
ni asumir libremente su vocación histórica: allí debe medirse el texto bíblico hacia nosotros -afirmando el "nosotros"- o
el compromiso de la fe. Hay formas espúreas de expresar el desde la situación hacia el texto, para iluminarlo y volver a la
amor (desarrollismo, alianzas por el progreso, controles de na- situación? Respondemos: cuando la "circularidad hermenéuti-
talidad y "planificaciones" de la familia, etc.): allí debe sur- ca" es profunda, se esfuma la sucesión de los itinerarios, que
gir la denuncia profética y la palabra concientizadora del cris- se hacen simultáneos. Lo que permite 1 '¡entrar" en el sentido
tiano. Podríamos seguir desbrozando las "situaciones" de o- del texto es el Acontecimiento presente; desde entonces, aunque
presión que dibujan el mundo-de-pecado actual, en las que la uno comiencepor aproximarse al texto bíblico, ya lo está "pre-
fe tiene su gran oportunidad de encarnarse. Permanecer aún comprendiendo" desde su situación existencial, que para no-
aferrado a la "misión espiritual" de la Iglesia es hacer un-ser- sotros los latinoamericanos es Ia que sabemos.
vicio al pecado. Pero, ¿acaso no es tremendamente espiritual Esto explica que los biblistas puedan ser más o menos 1 'sen-
la praxis liberadora en todos los niveles que reclama ia "situa- sibles" a las resonancias "liberadoras" qe ciertos focos querig-
maticos de la Sagrada Escritura. También se aclara el hecho
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129
de que aquéllos exploren con preferencia algunas zonas bíblicas,
como lo hemos hecho nosotros en este ensayo. Suscitar la "me-
moda" liberadora de tantos textos centrales de Ila Biblia no es
un pasatiempo sino una tarea necesaria en este momento'.

SUMARIO

Introducción . '.... ~....... 1


CAPITULO 1: En búsqueda del "sentido" '" .... .. 7
Orientación preHm'inar'. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . • • . . . . . 7
L Biblia y "liberación" 11
2. Liberación y libertad _.. ,. 12
3.' ¿Un "signo de los tiempos"? 14
4. Plan de análisis \. 22

CAiPlTULO II: Exodo; Acontecimiento y Palabra 25


1. El éxodo como "reserva-die-sentido" 25
2. Del Acontecimiento a la Palabra 27
3. Del Acontecimiento a la: Promesa 29
4 . Análisis de situación 31
5. La palabra que antecede a la. liberación . . .. 35
6. El suceso de la liberación . . . . . .. 41
7. El relato hermenéutico 45
8. El mensaje 47

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CAPITULOIlI: Creados para la libertad (Génesis 1-2) 53
1, El hombre en su esencia y trascendencia 54
2. La misión del hombre en el mundo! 57
J. La cosrnovisión mítica .. 57
4. La visión.del-mundo bíblica . . . . 58
5,. Del ideal a la realización .... 59
6. Algunas reflexiones :..... 61
CAPITULO lV: El profeta, "concientizador" del hombre
alienado .. .- .. , 65
] " El profeta, "crítico" de Israel 68 '.
2. El profeta, "concientizador" del pueblo . 71
3 . Ea profeta, intérprete de la historia .. 74
~. Profecía y política ;..... .... '.... 76
CAPITULO V: El Cristo, "liberador" de los oprimidos. . . 79
1 . Del Mesías al Servidor sufriente .... 80
2. Las actitudes "liberadoras" de Jesús .. 80
3. La Palabra "concienttzadora' de Jesús, 84
4. El anuncio a los pobres ' " 90
5. La muerte "liberadora" de Cristo. . .. 92
6. Cristo y la Ley' . , . . .. 104
CAPlTULO VI: Pablo: la "liberación" radical del hombre 107
1 . La triple alienación .... .... .... .. " .. 108
2. Las tres alienaciones según Romanos 5-7 .. 114
3. De la muerte a 1a vida ,." 118
4. Nuestra "liberación" pascual "" ,.... 121
5 . Hermenéutica de la liberación "pascual' 1 •••• •• 124
Conclusión " .,.... 129
Se terminó de imprimir en 105
Talleres de Gráfica San Luis S,R, Ltda,
H, Speziani 291 San [oaquin, Bellavista.
el día 30 de Setiembre de 197B.

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