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El estudio de las enfermedades de la piel difiere un poco de otras propedéuticas, debido a que las
lesiones están a la vista, por esta razón se invierte el procedimiento, pasando directamente a la
exploración y en forma simultánea al interrogatorio “orientado”.
La exploración y examen clínico deben realizarse en las mejores condiciones de iluminación (de
preferencia la luz natural) y comodidad tanto para el paciente como para el médico, abarcando la
observación de piel, mucosas, pelos y uñas si el caso así lo requiere.
EXPLORACIÓN
Luego de realizar la ficha de identificación con su respectiva información en cuanto a edad, sexo,
ocupación, lugar de procedencia, antecedentes familiares y personales (a veces son
determinantes para el diagnóstico de una dermatosis), se procede a la exploración. Es mejor
realizar el examen físico ayudados por una lupa para una mejor visualización, determinando
localización, y morfología de las lesiones, sin olvidar de examinar el resto de la piel y sus anexos.La
topografía, indica el lugar donde está la lesión, se define como localizada si afecta a un solo
segmento, diseminada si afecta a dos o más segmentos corporales y generalizada cuando la
afectación es total o respeta solo pequeñas zonas.
Un buen análisis topográfico puede orientarnos hacia el diagnóstico, ya que existen dermatosis
que predominan en ciertas áreas corporales, por Ej. Si la lesión está en un área expuesta nos
orienta a una fotodermatosis.
La Morfología sirve para señalar que tipo de lesión es (pápula, placa, vesícula, etc.), la describe en
cuanto a su forma, color, tamaño, superficie, bordes o límites y disposición (lineales, en banda,
anulares, numulares, serpiginosas).
En la evolución de la dermatosis hay que destacar si es aguda (algunos días), subaguda (si duran
semanas) o crónica cuando duran meses o años.
Por el aspecto de la lesión podemos desde ya intuir síntomas acompañantes, como el prurito si
encontramos la presencia de costras hemáticas o liquenificación en los casos crónicos.
Con la palpación con ella determinamos: consistencia (dura o blanda), superficie (rugosa, lisa,
áspera) y adherencia a planos, así como temperatura y sensibilidad.
Cuando por una causa externa o interna se origina una enfermedad de la piel, esta se manifiesta
por una reacción cutánea que se denominan lesiones elementales; del correcto reconocimiento de
éstas depende llegar al diagnóstico preciso.
PRIMARIAS
Estas aparecen de novo es decir sobre una piel intacta. Dentro de las lesiones primarias tenemos:
MANCHA O MACULA.- Es un cambio del color de la piel, que no hace relieve. Las manchas pueden
ser de origen vascular, pigmentario y artificial.
La mancha de origen vascular puede ser por congestión, extravasación o por neoformación de
vasos.
La mancha por congestión es activa, eritematosa y caliente, al eritema activo difuso se lo llama
exantema y puede ser morbiliforme, escarlatiniforme o roseoliforme.
Si la vasodilatación es pasiva las manchas son azuladas y frías, constituyendo las cianosis y si se
dibuja como una malla se denomina lívedo.
En ambos casos tanto las manchas congestivas como las pasivas desaparecen a la vitropresión
(presión de la piel con un vidrio transparente).
La mancha por extravasación se llama púrpura y es de color morado o amarillo verdoso; si forma
placas se denomina equimosis, si es puntiforme petequias y si es lineal víbice.
Las manchas artificiales se deben a pigmentos externos como los tatuajes, o por carotenos, y
metales como la plata, ciertos medicamentos como amiodarona, minociclina, etc.
PAPULA.- Es una lesión circunscrita y sólida que al involucionar no deja cicatriz, su tamaño se
considera de hasta 0.5 cm. (algunos autores consideran hasta 1 cm.)
PLACA.- Elevación en meseta de la piel, de más de 1 cm. que puede aparecer de novo o
constituirse por la confluencia de pápulas o de lesiones tuberosas.
NODULO.- Lesión sólida, redondeada, puede elevarse sobre la piel o únicamente palparse, su
tamaño es variable.
HABON O RONCHA.- Es una pápula o placa rosada y edematosa de poco relieve y mal definida con
forma ameboide, y de evolución fugaz.
TUBERCULO.- Lesión sólida, de más de 1cm. Se produce por los mismos mecanismos de las
pápulas.
GOMA.- Es una lesión de aspecto nodular que se reblandece por el centro, se ulcera drenando pus
y material necrótico y cura dejando cicatriz deprimida.
AMPOLLA O FLICTENA.- Lesiones de contenido líquido y de gran tamaño (pueden llegar a medir
hasta 15 – 20 cm. o más).
QUISTE.- Cavidad rodeada de una cápsula cuyo contenido puede ser queratina, pelos mucin,
sudor, etc.
Son las que aparecen como consecuencia de las primarias. Las lesiones secundarias se clasifican se
clasifican en tres grupos:
Lesiones secundarias con solución de continuidad, con residuo eliminable y las consecutivas a
reparación.
EROSION.- Llamada también exulceración, es la pérdida de la epidermis y cura sin dejar cicatriz
EXCORIACION.- Solución de continuidad que abarca epidermis y dermis papilar producida por el
rascado con las uñas.
ULCERA.- Pérdida de sustancia más profunda que puede afectar hasta la hipodermis dejando ver
en ocasiones tejido muscular y óseo, y por lo tanto curará con cicatriz. Las úlceras muy
destructoras que se extienden con rapidez se denominan fagedénicas.
FISURA Y GRIETAS.- Son desgarros lineales de la piel, suelen ser dolorosas; las grietas afectan hasta
la epidermis y las fisuras hasta la dermis. Ambas se localizan en una zona de movimiento cutáneo
o en el fondo de un pliegue.
ESCAMAS.- Son desprendimientos de la capa superficial del estrato córneo y pueden ser de
diverso tamaño: grandes a manera de láminas o pequeñas como polvo (furfuráceas).
COSTRA.- Es una lesión secundaria a la desecación de un fluido, el cual puede ser suero, sangre o
pus y dependiendo de ello la costra tendrá un color característico, así cuando es por suero será
melicérica por su semejanza con la miel, cuando es por sangre será de color marrón y si es por pus
será verdosa.
ESCARA.- Esta lesión se debe a la muerte o necrosis de un tejido, se trata de una membrana de
color negro muy adherente que recibe también el nombre de esfacelo.
SECUNDARIAS A REPARACION:
ATROFIA.- Se produce por un adelgazamiento de alguna o todas las capas de la piel, adoptando
ésta el aspecto de papel de cigarrillo, cuando se afecta la dermis y/o el tejido celular subcutáneo
se produce una depresión.
CICATRIZ.- Es consecuencia de la reparación de una lesión por pérdida de continuidad. Puede ser
atrófica cuando es deprimida e hipertrófica cuando se produce por exceso de tejido de reparación.
Se denomina en cambio queloide cuando es muy hipertrófica y permanece en estas condiciones
sin disminuir de tamaño ó tiende a desbordar el límite de la lesión inicial, es de consistencia dura,
hipersensible, irritable y su superficie está cubierta de telangectasias.
LESIONES ESPECIALES:
COMEDON.- Es u tapón de queratina y sebo que obstruye al folículo pilosebáceo; pueden ser
blancos o cerrados y negros o abiertos.
ESCLEROSIS.- Endurecimiento parcial o total de la piel palpable y que se visualiza como una piel
atrófica, lisa y brillante.
QUERATOSIS.- Engrosamiento de la capa cornea que en forma localizada da como resultado una
callosidad.
Luego del diagnóstico del tipo de lesión es importante observar como se agrupan o disponen
entre sí dando diferentes patrones los cuales también son de orientación diagnóstica; así
tenemos:
PATRON LINEAL.- Cuando las lesiones siguen trayectos de vasos, nervios ó líneas de desarrollo
embrionario (líneas de Blaschko). Este tipo de patrón lineal es más frecuente ante dermatosis de
origen externo, como en el fenómeno de Köebner, el cual constituye la replicación de una
dermatosis en un sitio de trauma.
CIRCULAR.- Cuando las lesiones se unen dando aspecto de anillos, pueden tener también aspecto
concéntrico, en tiro al blanco ó ser policíclicos.
HERPETIFORME.- En este tipo de patrón las lesiones se agrupan en racimos de uvas adoptando el
aspecto del herpes simple.
DERMATOSCOPIA
Utiliza un microscopio manual que permite visualizar estructuras profundas de la piel incluso la
unión dermoepidérmica, en la actualidad constituye una gran herramienta en el diagnóstico de
muchas dermatosis.
LUZ DE WOOD.- Mediante el uso de una lámpara de luz UV de 360 nm. y en condiciones de
oscuridad, se va a observar la producción o no de fluorescencia de ciertas dermatosis. En el caso
de micosis por microsporum canis emite fluorescencia verde, en el caso de vitíligo hipocromico
ante la luz de Wood se produce el blanqueamiento total.
PRUEBAS EPICUTANEAS.- También llamadas del parche sirven para el diagnóstico de las dermatitis
de contacto
ESTUDIO MICOLOGICO.- Puede ser el “directo” o llamado también KOH el cual consiste en la
obtención de escamas a partir de una lesión presumiblemente micótica, se procesa con hidróxido
de potasio y luego se observa al microscopio en busca de hifas ó esporas de los hongos.
TECNICA DE MULLER.- O de la gota de aceite, detecta la presencia de ácaros, se aplica una gota de
aceite mineral en la lesión sospechosa, luego se raspa con un bisturí y se observa al microscopio.