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INVESTIGACIÓN BIBLIOGRÁFICA
1
Contenido
Introducción .......................................................................................................................................2
1. Biografía de Santo Tomás Moro (1478-1535) ........................................................................3
1.1 Niñez ..........................................................................................................................................3
1.2 Estudios .....................................................................................................................................4
1.3 Tareas profesionales ..................................................................................................................5
2. El Caso que lo llevó al martirio. ..............................................................................................8
Conclusiones ....................................................................................................................................14
Valoración personal .........................................................................................................................15
Bibliografía .......................................................................................................................................16
Obras de Consulta ..........................................................................................................................16
2
Introducción
Este trabajo consistirá en la investigación bibliográfica sobre la vida de santo Tomás
Moro (1478-1535), humanista cristiano de la llamada época “De las Reformas”.
Me causa interés el profundizar sobre la vida de este santo laico quien por la
convicción de ser fiel a su fe católica, muere ejecutado por mandato del rey Enrique VIII
(1509-1547)1, en un momento de la historia en el que la Iglesia de Inglaterra pasa por tantas
convulsiones que llega a separarse del catolicismo.
1
Cfr. F. VÍLCHEZ, Apuntes de clase de Historia Eclesiástica de las Reformas,162.
3
Su padre el caballero Jhon Moro tuvo gran influencia en el niño, la relación entre ambos
fue muy cercana y enriquecedora para Tomás, él mismo elogió a su padre describiéndolo
como un hombre cortés, afable, inocente, gentil, compasivo, justo e incorrupto.3 De hecho
fue de su padre de quien aprendió las actitudes fundamentales sobre la vida. Además, fue
quien lo acercó al arzobispo de Canterbury y Lord Canciller del reino, experiencia que parece
haber marcado la formación temprana del niño. Además el canciller Morton tenía gran
empatía con el joven Moro y este se convirtió en un referente;
La estancia del niño Moro en Palacio fue providencial para su carrera. Los muchachos confiados
a la custodia de Lambeth asimilaban de manera directa los manejos de la política, el trato con la
gente y las reglas de cortesía…los mismos servicios auxiliares que prestaban les permitían cazar
las conversaciones sobre temas del día o acontecimientos importantes… en las recepciones
públicas iban aprendiendo lo que nunca habrían aprendido en sus propios hogares…Por visitas
de huéspedes se enteraban de novedades en los países extraños. Y un secretario amante de las
letras les empleaba como amanuenses en sus negocios o ponía en sus manos escritos de historia
latina o libros recientemente editados en inglés4.
Nos cuenta además Andrés Vázquez que la vida en Palacio fue de gran influencia
para su formación social y artística, puesto que en las fiestas que se acostumbraban a realizar,
el Cardenal Morton gustaba de que se realizaran representaciones teatrales en época de
Navidad. El canciller (futuro cardenal) incluso apreciaba mucho la agudeza e ingenio que
tenía Tomás; Consciente, pues de la secreta simpatía que por el profesaba el Cardenal,
2
P. SANTIDRIÁN, Vida de Santo Tomás Moro, 7.
3
Ibid, 8.
4
A. VÁZQUEZ, Sir Tomas Moro, 37.
4
El agradecimiento de Tomás al cardenal Morton, quien muriera cuando aún Moro era
joven, fue plasmado en su magna obra Utopía, en la cual le dedica largas páginas para
expresar lo que significó y le forjó en su persona, pues a su lado desarrolló una gran
espontaneidad, naturalidad, alegría, sensibilidad, cualidades dramáticas y humorísticas que
lo acompañarán a lo largo de su vida, e incluso hasta en el momento de su muerte.
1.2 Estudios
En el año 1492, a los 14 años de edad Tomás Moro fue impulsado por el propio cardenal
Morton a ingresar en la Universidad de Oxford. Era muy joven para estudiar leyes, de modo
que probablemente ingresó a la facultad de artes liberales y en un régimen de pensión
sufragada por su padre6, régimen económico con el que tuvo que vivir austeramente por dos
años de estudios, pero que cómo el mismo afirmó; Así fue como no caí en vicios ni perdí el
tiempo en placeres extravagantes y peligrosos.
El programa de Oxford en esta época medieval incluía los estudios de gramática, lógica
y retórica (Trivium), estos estudios ya los había iniciado en St. Anthony, pero ahora los
completaba con el cuadrivium: aritmética, música, geometría y astronomía. Todas iban bien
con su ingenio, si bien no les prestó especial interés7. En 1496 su padre decide sacar a Tomás
Moro de Oxford, para que siga en Londres al igual que él la carrera de derecho. Según
Vázquez, su padre consideraba muy extensos los estudios de la carrera de leyes en Oxford.
Esta decisión fue difícil de asimilar para Tomás, al punto que más adelante retomaría por
su propia cuenta y a pesar de su padre los estudios de la literatura griega y de la filosofía, sin
descuidar la carrera de abogado: Tomás llegó finalmente a un acuerdo con su padre a costa
del sueño, robando horas a la noche y a la alborada… esta lucha contra el tiempo le duró
toda la vida8.
5
A. VÁZQUEZ, op cit, 38.
6
P. SANTIDRIÁN, op cit. 13.
7
Ibid, 14.
8
A. VÁZQUEZ, op cit, 54.
5
Sin embargo, parece que pudo realizar su discernimiento vocacional, en medio de buen
humor, tranquilidad y sin necesidad de angustias. Incluso escribió una obra teatral llamada
“Sainete de cómo un oficial de justicia tuvo que hacer de fraile”. Su moraleja puede ser
considerada un retrato de lo que su discernimiento vocacional le arrojó:
“Él era hombre de Leyes y no de monasterios, estaba convencido de que en su caso la moralidad de la
obra se traducía en esta otra frase: Cada caminante siga su camino; esto es, su profesión, la de leyes y no la
de fraile”10
Hasta 1515 su carrera es fulminante… Se afianza primero en la dirección de Furnival’s Inn, como
profesor de los estudiantes de derecho. Aparece después como representante del Parlamento de
Londres convocado por Enrique VII para solicitar una ayuda extraordinaria para el casamiento de
su hija mayor, futura reina de los escoceses.11
Este cargo en los que tuvo algunos incidentes le llevó a una mala relación con el Rey,
por lo que se cree que decidió ir a vivir a Francia.
Sin embargo, con poco de más de treinta años Moro fue juez de paz en Hampshire.
9
A. VÁZQUEZ, op cit, 62.
10
A. VÁZQUEZ, op cit, loc. cit.
11
P. SANTIDRIÁN, op cit, 31.
6
Servir a un Rey es un tema que Tomás Moro trata en su obra Utopía, en esta manifiesta su
opinión, siguiendo a Platón, con respecto a que un Estado logra alcanzar la verdadera felicidad, si
este es gobernado por filósofos o si al menos sus gobernantes se dejan aconsejar por ellos. Parece
ser que llevó a la práctica aquello que plasmó en su célebre obra, al convertirse en el consejero del
rey Enrique VIII, a sabiendas de que su cercanía en la política ya en el pasado le había traído
contrariedades:
El consejero inglés examinó, por tanto, con la máxima detención los principios de su actuación
pública, viendo en ellos la posibilidad de santificar esa clase de tareas, con lealtad en el servicio
del Estado, con libertad de hijo de Dios y no de esclavo político… Moro marcharía a Calais
luego de aceptar la nueva embajada, aun a sabiendas de que iba pisando los talones a la
muerte.12
Moro era consciente del peligro que significaba este cargo en el que podía, según él,
fácilmente pasarse de ser servidor a siervo o esclavo del Rey. Pero su deber moral le invitaba a intentar
hacer la diferencia, aunque pareciera una Utopía:
Si no es posible erradicar de inmediato los principios erróneos, ni abolir las costumbres inmorales,
no por ello se ha de abandonar la causa pública. Como tampoco se puede abandonar la nave en
medio de la tempestad porque no se pueden dominar los vientos13.
Enrique VIII (1491-1547) había solicitado una dispensa al Papa Julio II para casarse con Catalina
de Aragón (1485-1536), pues esta era viuda del hermano de Enrique VIII y existía un escrúpulo que
lo impedía. Sin embargo, luego de algunos abortos (de los cuales sólo sobrevivió la princesa
Margarita) y después de dieciocho años, no habían podido tener hijos varones herederos y, desde
1547 el monarca parecía cansado de su matrimonio con Catalina de Aragón 14.
Enrique VIII, tuvo muchos romances con mujeres a lo largo de su matrimonio. pero fue Ana
Bolena quien lo hizo pensar en la idea de liberarse de este para poder casarse con ella.
12
A. VÁZQUEZ, op cit, 139
13
T. MORO, Utopía.22.
14
P. SANTIDRIÁN, op cit, 83.
7
En estas circunstancias, el Rey empezó a preguntarse ¿Y si la dispensa del papa Julio II hubiera
sido inválida? Si, en efecto, era invalida el matrimonio con Catalina no era tal, y él, quedaba
libre para casarse con Ana15.
Ideas como esta fueron secundadas por el Cardenal Canciller Wolsey, quien estando
cerca del Rey y conociéndole lo suficiente, supo sacar provecho personal por medio de los
consejos que brindaba a Enrique VIII.
En época temprana se había dado cuenta Wolsey de que “el rey era joven y sensual, inclinado
a la diversión y al placer…” y una vez que logró alejar a Enrique VIII de los asuntos del
gobierno, vino a hacerse con las riendas del poder16.
Con el fin de llegar a declarar nulo el matrimonio del Rey, Wolsey consiguió
influencias diplomáticas y aprovechó el acercamiento político que en esta época hubo con
Francia para conseguir aliados, utiliza la indecisión de Clemente VII y el saqueo de Roma
para hacerse nombrar legado papal, formando parte del tribunal que entendería
judicialmente el caso17.Sin embargo Catalina de Aragón se defendió y el papa Clemente VII
quitó el poder dado a Wolsey.
Avanzaron las estrategias del rey y los suyos para lograr su objetivo, pero en el año de
1529, la mayor sorpresa de todos fue ver que el 18 de junio la reina compareció en persona
a leer la defensa de sus intereses18.
Este sello, había estado siempre en manos de eclesiásticos, sin embargo, ahora
Enrique VIII, en medio de su pendiente sentencia matrimonial buscará, romper la tradición
y poner a un laico al frente del gobierno19. Aquí es donde el nombre de Tomás Moro, por
ser un hombre versado en lenguas y en leyes comienza a estar en la cabeza del Rey.
15
P. SANTIDRIÁN, op cit, 196.
16
A. VÁZQUEZ, op cit.191
17
A. VÁZQUEZ, op cit.205
18
A. VÁZQUEZ, op cit.206
19
A. VÁZQUEZ, op cit.211.
8
cargo por sentido moral20. Por no abandonar el barco21 en medio de la tormenta, como lo
escribió en su libro célebre.
Así, el 25 de octubre de 1529 recibe Moro el cargo de Canciller y con esto el collar y el
sello del reino.
Tomás Moro ante el caso del divorcio del Rey, argumenta que era este un tema jurídico-
canónico en el cual no era versado para dictaminar, sin embargo, en el fondo estaba claro que
no quería respaldar con su nombre la anulación del matrimonio. Viendo que no quería
intervenir en el asunto, el rey le prometió que encargaría de ello solamente a las personas
que no tuvieran objeciones de conciencia22. Por tanto, se dedicó en un inicio a los asuntos
propios de su cargo. Con esto, el poder político que tenía Wolsey no fue heredado a Moro,
sino que recayó en el duque Norfolk y en el secretario Tomás Cromwell.
Moro por su parte se dedicó a ser un juez justo. Mientras tanto, el rey Enrique VIII se
impacientaba cada vez más con el lento avance de su divorcio. Se invitó a los pares y a los
obispos a firmar un memorial en su favor dirigido al papa: ni Fisher ni Moro lo hicieron23.
Por su cargo de Canciller debió presentar los juicios de las universidades, en los cuales
se apoyó la anulación matrimonial. A pesar de realizar este informe en tercera persona y
cuidarse de no emitir ningún juicio acerca del caso, esta función sobrepasaba lo que le
permitía su conciencia moral y por ello pide ser liberado de este oficio. En mayo de 1532
Tomás Moro entregó el gran sello al rey. Moro perdió la mayor parte de sus ingresos al
entregar la cancillería. Explicó a su familia que ya no podía mantener su casa y que iba a
ser necesario economizar24.
Pero Enrique VIII, no le dejaría en paz, le molestaba que su canciller más honesto y
más famoso difiriera con él acerca de su gran asunto25.
20
A. VÁZQUEZ, op cit.211.
21
T. MORO, op cit.22.
22
A. VÁZQUEZ, op cit.212.
23
A. KENNY, op cit.84.
24
A. KENNY, op cit.86.
25
A. KENNY, op cit.87.
9
Enrique VIII se casa con Ana Bolena en enero de 1533. Se hace público 4 meses después
cuando el arzobispo Tomás Cramer (1489-1556), nuevo arzobispo de Canterbury anula el
matrimonio de Enrique VIII con Catalina de Aragón sin esperar el veredicto del Papa
Clemente VII, quien un año después lo declaraba válido. Seguidamente el Papa declara nulo
el matrimonio con Ana Bolena y excomulga a Enrique VIII.
Tomás Moro no asistió a la boda de Ana Bolena y con esto empieza la persecución por
medio de acusaciones de soborno y otras calumnias con las que intentaban culparlo para
destruirlo, Moro refutó las acusaciones caso por caso 26.
Una ley aprobada en 1534 por el Parlamento reglamentó la sucesión al trono:
Declaró que el matrimonio de Enrique con Catalina era contra la ley de Dios, y totalmente nulo
a pesar de cualquier permiso o dispensa. Estableció que la sucesión recayera en los vástagos
del matrimonio con la reina Ana; en el hijo mayor sobreviviente, si lo hubiera, o si no, en la
princesa Isabel. Se pasó por alto a María, hija de Catalina27.
De frente a esta ley se castigaría con pena de muerte y pérdida de todos los bienes, a
quienes difamaran el matrimonio con la reina Ana o a quienes heredaran el reino. Todos los
súbditos del rey debían hacer el juramento público. Aquellos que se negaran eran culpables
de ocultar el delito de traición, castigándose con cadena perpetua y confiscación de bienes.
Tomás debió despedirse de su familia para ir a realizar el juramento a Lambeth. Fue
el último laico entre un grupo de clérigos que habían citado. Después de revisarlo aceptó de
este, la Ley de sucesión, pero se negó a realizar la ley del juramento:
Moro estaba dispuesto a jurar la ley porque estaba dentro de la competencia del Parlamento
decidir sobre eso; pero jurar acerca de la invalidez de un matrimonio del que estaba convencido
que era perfectamente legal sería invitar a Dios a convalidar una falsedad28.
26
Ibid.89.
27
Ibid.91.
28
Ibid.93.
10
Encerrado en esta Torre escribió Moro su última obra, la más piadosa y popular: El:
Diálogo de consuelo frente a la tribulación. Esta obra tiene un paralelo con la
correspondencia que tuvo con su familia. En una de las cartas de Margarita esta narra una
conversación que tuvo con su padre. Cuando ella le decía que estaba siendo influenciado
por el pensamiento del obispo Fisher, la respuesta de Moro fue la siguiente:
En verdad, hija, nunca intenté (siendo Dios mi buen señor) enganchar mi alma a la espalda de
otro hombre, ni siquiera a la del mejor hombre que sepa que vive hoy día, pues no sé dónde pueda
él llegar a cargarla. No hay hombre vivo, del que mientras viva, pueda yo estar seguro. Algunos
29
A. KENNY, op cit.95
30
A. VÁZQUEZ, op cit. 257.
31
A. KENNY, op cit.97
11
pueden hacerlo como favor, y otros pueden hacerlo por miedo, y así llevar mi alma por un camino
equivocado32.
Ante las advertencias de su hija sobre lo que podía ser su fatal destino, Moro contestó
con la célebre frase: “un hombre puede perder la cabeza sin sufrir daño”33.
A Tomás se le acusa primeramente mediante la Ley de Proscripción por negarse a
prestar juramento, esto lo condenaba a cadena perpetua y confiscación de sus bienes. Pero
una nueva ley contra la supuesta traición, por intentar quitar al rey cualquiera de sus
títulos34, le condenaba al patíbulo si negaba ante testigos la supremacía real.
El 30 de abril de 1535 Moro fue interrogado en la Torre por Cromwell y otros
miembros del consejo: Moro contestó que el Rey sabía bien lo que pensaba sobre esta
cuestión y argumentó: No disputaré ni el título del rey ni el del papa; no soy ni seré sino el
verdadero súbdito leal del rey. 35 Pero Cromwell le hizo saber que esto no dejaría satisfecho
al Rey, ante lo cual Moro respondió: “No hago mal a nadie, ni predico a nadie el mal, ni
pienso mal de nadie, sino que deseo el bien a todos. Si esto no es suficiente para mantener
vivo a un hombre de buena fe, no deseo vivir más” 36.
La situación empeoró cuando el Papa nombró cardenal al Obispo Fisher. Una de las
intenciones del Papa al crear cardenal a Fisher era el de librarlo de la muerte37. Esto
enfureció al Rey al punto que se dispuso a atrapar a ambos (Moro y Fisher) en una negación
explícita de la supremacía.
Los comisionados no lograban realizarlo, Moro era muy cauto en sus declaraciones.
Entonces aplicaron más rigor. Enviaron a dos sirvientes de Cromwell a retirar sus libros.
Dentro de estos sirvientes estaba Ricardo Rich, quien había logrado atrapar a Fisher en una
negativa fingiendo buscar un consejo confidencial, dos días antes de ir a confiscar los libros
a Moro. Con él pensaba realizar algo similar, pues le presentó el caso que describe Kenny en
su libro:
32
A. KENNY, op cit. 100
33
Ibid. 102
34
Ibid. 103
35
Ibid. 104
36
Ibid .104
37
A. VÁZQUEZ, op cit.282.
12
—Admitiendo que hubiera, señor, una resolución del Parlamento de que todo el reino debiera
tomarme por rey, ¿no me tomaría usted por rey, maestro Moro?
—Sí, señor —dijo sir Tomás Moro—. Eso haría.
—Llevo más allá el caso —dijo el maestro Rich—. Que hubiera una resolución del Parlamento
de que todo el reino debiera tomarme por papa. Entonces, maestro Moro, ¿no me tomaría por
papa?
Moro no dio ninguna respuesta directa; en cambio, planteó otro caso. —Suponiendo que el
Parlamento elaborara una ley que afirmara que Dios no debiera ser Dios, ¿diría usted entonces,
maestro Rich, que Dios no era Dios? —Ningún Parlamento —respondió Rich— puede hacer
semejante ley—. Moro, en silencio, dejó que la moraleja fuera deducida, y Rich partió38.
A pesar de que Rich, no pudo vencer a Moro, parece que esta conversación se
convirtió en la base de una denuncia.
El Obispo Fisher fue juzgado y condenado el 17 de junio, y decapitado en Tower Hill
cinco días después.
Tomás Moro debió asistir a un juicio el 1 de Julio en Westminster Hall, la denuncia
decía que él, traidora y maliciosamente había imaginado, inventado, practicado e intentado
privar con astucia a nuestro soberano señor el rey de su dignidad, título y nombre de
suprema cabeza en la tierra de la Iglesia de Inglaterra39.
Esta denuncia se basaba en el silencio de Moro en un interrogatorio del 7 de mayo,
en su correspondencia con Fisher y en la conversación con Rich.
Des las tres acusaciones Moro se defendió con astucia, elocuencia y verdad, sin
embargo, decidieron declararlo culpable, ante lo cual Moro decidió declarar entonces
abiertamente, las causas del porqué él no aceptaba la ley de supremacía, argumentando que
el Parlamento era contrario a la ley divina y a su Santa Iglesia, y que por tanto era insuficiente
para acusar a cualquier cristiano, pues eran temas de preeminencia espiritual otorgada a
Pedro y sus sucesores. Pero el Lord Canciller recordó a Moro que las universidades, los
obispos y demás hombres educados del reino habían aceptado el decreto, ante lo que contestó:
Pues no dudo que, aunque no en este reino, pero sí en el resto de la cristiandad, haya muchos
obispos cultos y hombres virtuosos vivos todavía que piensen como yo. Pero si hablara de los que
38
A. KENNY, Tomás Moro. 107-108
39
Ibid. 108
13
ya están muertos, muchos de los que ya son santos canonizados en el cielo, estoy segurísimo que
la gran mayoría de ellos, mientras vivieron, pensaron como yo en este caso. Y por lo tanto no
estoy obligado, mi señor, a supeditar mi conciencia al Consejo de un reino en contra del Concilio
General de la cristiandad.40
Sin embargo, declararon que el decreto no era ilegal y por tanto la acusación era
suficiente para condenar a la muerte a Moro. Pasaron cuatro días entre el juicio y la
ejecución.
El martes 6 de julio de 1535 fue con mucha paz en su corazón al cadalso, al llegar al
tablado, vio que le faltaban fuerzas para subir por lo que solicitó ayuda diciendo: Ayúdame a
subir seguro, que ya bajaré por mis propios medios41.
Estando arriba, antes de ser ejecutado recitó el salmo 50, dijo unas breves palabras,
pidió que rogasen a Dios por el Rey para que le diera buen consejo, apartó su barba y con
humor dijo que era para que no se la cortaran. En un solo golpe el verdugo le cortó el cuello.
40
A. KENNY, op cit. 111
41
A. VÁZQUEZ, op cit.300.
14
Conclusiones
• Tomás Moró recibió gran formación humana y profesional de su padre quien
también tuvo las leyes como profesión.
• De niño, Moro recibió una gran influencia en el palacio del arzobispo Morton, en
donde aprendió sobre cortesía, política, oratoria y artes.
• Tomás Moro demostró su agradecimiento al arzobispo Morton en un episodio de su
obra Utopía.
• Tomás Moro estudió artes liberales en la Universidad de Oxford.
• El Padre de Tomás decidió cancelar los estudios de su hijo en Oxford para que se
dedicara a la carrera de leyes en Londres.
• Tomás Moro siempre sintió afinidad por la literatura y la filosofía, dedicó mucho
tiempo a estas.
• Moro tuvo una experiencia contemplativa en la cartuja que supo compaginar con su
vida activa en las leyes.
• Tomás Moro además de abogado, fue representante del Parlamento de Londres de
Enrique VII.
• Tomás Moro fue juez de paz en Hampshire.
• Servir al rey siempre le trajo grandes disyuntivas.
• Su obra Utopía, es un verdadero itinerario de valores filosóficos y valores cristianos
para la política.
• La cercanía de Moro a la Política siempre le tajo contrariedades por ser coherente
con sus principios. Enrique VIII pretendió argumentar invalidez en su matrimonio,
por el hecho de haber accedido a este por medio de una dispensa del Papa.
• Tomás Moro fue el primer Canciller laico de Inglaterra.
• Tomás Moro no se manifestaba públicamente en contra de la anulación
matrimonial, dejaba este tema para los competentes en materia jurídico eclesiástica.
• Moro renunció a su Oficio de Canciller por no estar de acuerdo con las decisiones
civiles consensuadas con respecto a la anulación matrimonial.
• A pesar de que muchas personas influyentes como obispos estuvieron de acuerdo
con el juramento, Moro se mantuvo firme.
• Sólo el obispo Fisher y Moro se abstuvieron de jurar el acta.
• A pesar de que Moro no consideraba capaz de soportar la cárcel ni el martirio, fue
superando por medio de su fe y su piedad las adversidades.
• Tomás Moro se sintió abandonado por sus familiares.
• Para Tomás Moro, no había nada más importante que seguir la verdad, esto le
llevaba a cuidar de su propia alma.
• Moro logró debatir siempre las causas por las que le inculpaban.
• Tomás Moro dejó en claro que el Parlamento que le acusaba era contrario a la ley
divina, a la Iglesia y que no tenía la potestad para acusarle por un acto amparado en
su objeción de conciencia.
• Tomás Moro muere decapitado, orando y perdonando a sus ejecutores.
15
Valoración personal
A nivel histórico he podido también comprender muchos de los pormenores del tan
conocido caso de “divorcio” de Enrique VIII y del porqué este suceso fue una piedra en el
mosaico fundamental para lo que llegó a convertirse en la Iglesia Anglicana.
16
Bibliografía
Obras de Consulta
KENNY, A., Tomás Moro, México 2014.
SANTIDRIÁN, P., Vida de Santo Tomás Moro, Madrid 1997.
VÁZQUEZ, A., Sir Tomas Moro, 5 ed., Madrid 1989.
Fuentes
VÍLCHEZ, F., Apuntes de clase de Historia Eclesiástica de las Reformas. San José 2018.