Suministro de grasas en bovinos de alta producción
La eficiencia en un sistema de producción bovino independientemente si es para leche o
carne, consiste en el desarrollo de buenas prácticas que incluyen una alimentación balanceada con nutrientes de buena calidad suministrados de acuerdo a su etapa productiva, un servicio de salud para tratar u prevenir enfermedades entre otros factores. Teniendo un enfoque en la parte de la alimentación animal es muy importante tener en cuenta la conversión energética de los alimentos suministrados en la dieta que presenten una cantidad y calidad adecuada debido a que son los que se van a traducir en altos niveles de producción de leche y carne.
La composición de los alimentos se basa en agua y materia seca que se subdivide en
materia orgánica y minerales. La materia orgánica se compone de proteínas, carbohidratos, lípidos y compuestos secundarios. Para lograr incrementar la producción de leche es necesario aumentar el consumo de materia seca y este se aumenta para satisfacer los requerimientos de energía neta de lactancia.
Para poder entender de manera adecuada la conversión alimenticia se debe realizar
énfasis en la fisiología del rumen y lograr entender como los alimentos se desdoblan y digieren. En el rumen están presentes una diversidad de bacterias, hongos, levaduras y protozoarios. Los cuales se responsabilizan de la fermentación (celulosa y hemicelulosa), este proceso se realiza bajo condiciones anaerobias y por hidrolisis, consiste en la actividad metabólica de los microorganismos principalmente de bacterias y proporciona AGV como fuente de energía. Las bacterias asociadas a este proceso tienen como funcionalidad fermentar, metabolizar, degradar, producir e hidrolizar.
Figura 1. Clasificación funcional de las bacterias ruminales. Fuente: "Fisiología Digestiva
y Metabólica de los Rumiantes" de Editorial EDULP (Ediciones 2002 y 2003). Los principales ácidos grasos volátiles son el ácido acético, propionico y butírico, su funcionalidad en los rumiantes se basa en ser absorbidos por la pared ruminal y utilizados como una fuente de producción de energía en el animal. Es muy importante suministrar alimentos balanceados que permitan tener equilibrado la densidad de energía y eviten simultáneamente problemas con respecto a la proporción de ácidos grasos volátiles y desplazamiento de las estructuras anatómicas del rumen.
Basado en la literatura estos problemas se relacionan con el aumento en la cantidad de
granos suministrados para mantener y elevar la densidad de energía.