La operación de mezclado es mucho más difícil de estudiar y describir que la
agitación. Los patrones de flujo de fluidos y la velocidad de un fluido en un tanque
agitado aunque complejos son bastantes definidos y reproducibles el consumo de potencia (energía) se mide fácilmente. Por otro lado, los resultados de los estudios de mezclado son difíciles de reproducir y depende de en gran medida de cómo se defina el mezclado por el experimentador. Con frecuencia el criterio de un buen mezclado es visual, como ocurre en la utilización de fenómenos de interferencia para seguir la mezcla de gases en un conducto en el cambio de color de un indicador acido-base, para la determinación el tiempo de mezcla de líquidos. Otros criterios utilizados incluyen la velocidad de caída de las fluctuaciones e concentración o temperatura, la variación de composición de pequeñas muestras tomadas al azar en distintos puntos de la mezcla, la velocidad de transferencia de un soluto de fase liquida a otra, y en mezclas solido-liquido, la uniformidad que se observa visualmente en la suspensión