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Los conceptos que se han aprendido de manera teórica se olvidan más fácilmente

que los reforzados de modo experimental

“Lo escuché y lo olvidé, lo vi y lo entendí, lo hice y lo aprendí” Confucio (s. VI a.C.)

Esta mañana el doctor José de Jesús Álvarez Ramírez, miembro del Sistema
Nacional de Investigadores

Mencionó cómo un reactor es un componente esencial para efectuar un cambio


químico (completo o parcial), para de ahí obtener un producto final. Son equipos
que sirven para transformar un producto determinado, atendiendo sus causas
físicas y químicas, para obtener uno nuevo o trabajar en el mismo, ya sea una
solución, un alimento o un fármaco. Detalló cómo pueden diseñarse esas columnas,
cómo puede hacérsele para reaccionar, por medio de platos, entre otras
características.

os reactores químicos son recipientes (tanque) que se diseñan para facilitar que las
sustancias químicas llamadas reactivos, reaccionen entre sí.

Los reactores químicos se utilizan en procesos como disolución de sólidos, mezcla


de productos, destilación, cristalización, extracción líquido-líquido, polimerización,
etc.

Existen reactores químicos para la industria química, industria farmacéutica, etc.

También, se les puede nombrar de acuerdo a la función que realizan como


mezcladores o cristalizadores.
Los reactores químicos se pueden encontrar con camisa, con serpentín, reactores
de alta presión y hasta autoclaves adaptados para un proceso en específico.

Algunas de las ventajas de estos reactores son:

Existe una amplia gama de reactores a elegir, se pueden encontrar de acero


inoxidable y acero al carbono, se adaptan en infraestructura de medios personales,
de maquinaria y de sistemas.

Adicionalmente, también se les puede dotar de válvulas, conexiones, tuberías y


sistemas de automatización de acuerdo a las necesidades.

Por ejemplo; los reactores con camisa o con serpentín pueden servir para refrigerar
o calentar reacciones endotérmicas o exotérmicas.

A estos reactores con camisa se les conoce como encamisados, que como su
nombre lo dice, tienen una camisa que rodea al tanque principal. La cual sirve para
controlar la temperatura (circulación de un medio frío o caliente a través de dicha
camisa) mientras se lleva a cabo la reacción, sirven para calentar por debajo de
150ºC y su capacidad puede ser de 500-60,000 litros.

Los reactores con serpentín se utilizan para controlar la temperatura de los


reactivos, a través de la circulación de refrigerantes o calefactores, por el interior de
un serpentín que rodea al tanque principal. Son ideales para una transferencia
media de calor, donde la temperatura del calefactor tendría que ser mayor a 150ºC.
REACTORES INDUSTRIALES Tradicionalmente se ha denominado al reactor
como el corazón de los procesos químicos, una afirmación que a simple vista parece
desestimar la importancia de las demás unidades, pero que sin embargo no está
lejos de la realidad si es considerada a la luz de la concepción misma del proceso.
Lo anterior no indica que se haya considerado en algún momento jerarquizar la
importancia de los equipos que desempeñan las operaciones fundamentales en un
proceso determinado, puesto que es imposible establecer que los sistemas de
bombeo o compresión son menos importantes que los de separación o más
importantes que los auxiliares, dado que todos son esenciales para la operación.
En otras palabras, un reactor o una columna no hacen un proceso. La razón por la
cual se le otorga al reactor tan importante título debe interpretarse, como se dijo
anteriormente, a partir de la concepción misma del proceso, desde su diseño
conceptual, es decir, de cómo surgió la configuración final e interconexiones entre
sus partes. En principio, todo proceso que implique una transformación química
surge de la oportunidad de obtener un producto a partir de otro obteniendo una
ganancia, siendo responsabilidad del proceso el valor agregado. Desde este punto
de vista, las reacciones son el primer punto de atención y, por ende, el reactor que
será la entidad física asociada a estas reacciones deberá ser estudiando en las
etapas más tempranas del diseño; solo cuando hayan sido especificadas las
variables que lo definen, será posible comenzar a atender los sistemas de
separación que dependen en principio de la calidad que se necesita para alimentar
las materias primas al reactor y en seguida de la purificación que requieren los
productos que lo abandonan. Asimismo, dependiendo del análisis de la reacción, se
establece la fase del sistema reaccionante, lo cual impacta directamente en el tipo
de reactor seleccionado y, posteriormente, en los intercambios energéticos que
logran asegurar el alimento y el producto del reactor a las condiciones especificadas
a través de la planta de proceso. A grandes rasgos, esta situación nos permite
establecer que el reactor es el que determina el curso que debe seguirse al diseñar
un proceso; todos los demás equipos son una especie de sirvientes diseñados para
adecuar su operación y llevar los productos al grado que se deseen. En conclusión,
el reactor es el núcleo del diseño del proceso, aunque no el más importante en
términos de operación. Los reactores químicos que existen en la industria son de
diversos tipos, y el esfuerzo que se ha hecho para poder estudiarlos a partir de
modelos matemáticos es admirable; sin embargo, sea cual sea el caso particular,
existe un común denominador en todos: aprovechar al máximo la naturaleza del
sistema reaccionante mediante el ejercicio creativo de buscar la mejor manera de
poner en contacto los reactivos, ya sea con el empleo de catalizadores, de sistemas
de agitación, de recirculación, de formas geométricas etc. Esta búsqueda continua
es la que hace del diseño de reactores un arte muy particular, el cual

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