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UNIVERSIDAD CNCI VIRTUAL

LICENCIATURA EN MERCADOTECNIA
COMPORTAMIENTO DEL CONSUMIDOR
PROF. SERGIO MERCADO TREVIÑO
ACTIVIDAD A4-C7 (LA ACTITUD DEL CONSUMIDOR)

MARIO RUBEN ARANDA ARREAGA


MATRICULA: AL034552

MONTERREY, N.L. A 11 DE NOVIEMBRE DEL 2018


INTRODUCCION

Son muchas las variantes en juego que afectan las decisiones de los consumidores
respecto de los productos y servicios que adquieren.

Debido a la creciente competencia entre proveedores de servicios, actualmente muchos


clientes no solamente buscan satisfacer la necesidad primaria por la cual fue creado el producto (o
servicio), sino crear de manera consciente o inconsciente, una relación con aquello que compran.

Algo tan simple como la sal, que en el pasado podía no dársele mayor importancia a la
hora de buscarla en el supermercado, ahora es sujeta a escrutinio por algunas personas que,
preocupadas por su salud y en base a la información que obtienen a diario en distintos medios,
buscan sal con yodo o sin yodo, sal de mar, sal rosa del Himalaya, sal de grano, etc.

En otros productos y servicios, también se mezclan las emociones que provocan en cada
persona, ya sea por el simple gusto que provoca lo consumido por primera vez, o por experiencias
previas o recuerdos.

A continuación se presenta un análisis de los conceptos que engloban éste tipo de temas,
a fin de tener un mayor entendimiento en ésta rama de la Mercadotecnia.
LA ACTITUD DEL CONSUMIDOR

Todos los productos y servicios que consumimos, y aquellos que no, (pero que en
ocasiones comparamos al menos de forma superficial y en cuestión de segundos) provocan
distintas emociones y pensamientos, y gracias a ello, aceptamos o rechazamos las propuestas de
los ofertantes.

Lo anterior se puede denominar como “Actitud”. La actitud positiva frente a todo lo que
consumimos de manera regular, es lo que provoca precisamente, mediante experiencias,
recuerdos y pensamientos positivos, su adquisición frecuente. Por el contrario, cuando existe una
actitud negativa, provocada por malas experiencias o porque algo nos evoca malos recuerdos, le
evitamos. Un ejemplo de lo anterior puede ser una persona que tenga preferencia por la marca de
ropa “Nike”, que tal vez encuentre de buena calidad, duradera, cómoda, y que sabe que el valor
que obtiene por el dinero invertido, es justo. En cambio, la misma persona, si probara una marca
genérica que busca copiar a “Nike”, podría experimentar emociones negativas al darse cuenta de
que la calidad es menor y que la ropa no dura tanto, entre otro tipo de variantes. Por lo tanto, los
productores de bienes y servicios deben conocer y comprender la actitud de sus consumidores, a
fin de cambiar (en caso de ser necesario) las ideas negativas que evitan su adquisición. Además, al
conocer las ideas positivas (si existen), éstas pueden ser reforzadas.

Las características de las actitudes son 4: Objeto (la referencia del cliente respecto del
producto o servicio), Direccionamiento (al cliente le gusta o no lo que adquiere), Grado (nivel de
aceptación por parte del consumidor) y Estructura (las ideas conformadas en la mente del cliente,
y qué tan maleables son). Éstas variables, así como sus componentes (Cognoscitivo, Información,
Creencias y Conocimientos) deben ser conocidas a fin de entender mejor al consumidor.

De acuerdo a la percepción actual que se observe en el consumidor, la misma puede ser


cambiada enfocándose en cuatro componentes: Cognoscitivo (es un cambio en la idea general que
el consumidor tiene del producto o servicio mediante distintas herramientas como imágenes,
sonidos y situaciones); Comportamiento (se refiere a proveer de la experiencia en que consiste el
consumo del producto, para provocar comportamiento de “compra repetida”); Credibilidad (si la
empresa desarrolla un nivel de excelencia, ésta dará a los compradores mayor confianza);
Atractivo (entre más se enaltezcan las características positivas, su aceptación puede ser mayor).

Asimismo, es necesario comprender la Personalidad del mercado meta, la cual queda


definida por distintos factores como fisiológicos, mentales, afectivos e impulsivos, la respuesta a
estímulos externos, y el nivel de cambios que pueden provocarse conforme a las experiencias que
se le pueden presentar como propuesta, buscando desarrollar una imagen con la mayor
satisfacción posible, acerca de los productos o servicios ofertados.
CONCLUSION

Los factores analizados no son los únicos que deben tomarse en cuenta para analizar el
comportamiento de los consumidores, así como sus preferencias y nivel de deseo e imagen acerca
de los productos y servicios que una empresa ofrece, pero en conjunto con otras estrategias,
podrán ayudar a las empresas a comprender mejor el posible éxito o fracaso que sus productos
y/o servicios tendrán en el mercado.

Estudios previos, durante las etapas de creación de productos (y las posteriores), o en el


caso de servicios, el análisis de competidores similares, pueden ayudar también a diseñar mejores
opciones para los consumidores, fortaleciendo las probabilidades de éxito de las empresas.
BIBLIOGRAFIA

CNCI VIRTUAL. COMPORTAMIENTO DEL CONSUMIDOR. CAMBIO DE ACTITUD DEL CONSUMIDOR.


2018.
https://cnci.blackboard.com/bbcswebdav/courses/BbCont10/Contenido/Licenciaturas/ComportC
onsumidor_licM4/clase_07/clase_07.html

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