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La maternidad y paternidad

en el derecho de la Unión Europea.


Comentario a la Directiva
2006/54/CE; su inmediata
incorporación por la futura Ley
de igualdad y el propósito
reparador de ésta respecto
de algunos defectos transpositorios
de la Directiva 92/85/CE
AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ *

PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS **

ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO ***

1. EL PERMISO POR MATERNIDAD. medidas para promover la mejora de la segu-


LA NUEVA DIRECTIVA 2006/54/CE ridad y salud de la trabajadora embarazada,
Y SU INMEDIATA que haya dado a luz o en período de lactan-
INCORPORACIÓN AL DERECHO cia, realizó, por primer vez, un tratamiento
ESPAÑOL A TRAVÉS unitario en el Derecho europeo, derivado de
DE LA FUTURA LEY ORGÁNICA toda la problemática suscitada en torno a la
PARA LA IGUALDAD ENTRE protección de la maternidad de la trabajado-
MUJERES Y HOMBRES ra. La Directiva 92/85/CE vino a materiali-
zar la tutela de la mujer embarazada o ma-

C
entrándonos en el ámbito de la Unión dre de un recién nacido en aplicación de la
Europea, la Directiva 92/85/ CEE, Directiva 89/31/CEE (Directiva marco), cuyo
de 19 de octubre, sobre aplicación de artículo 15 determinaba la necesidad de una
especial protección frente a los riesgos deri-
vados del trabajo de los denominados grupos
* Profesora Titular de Universidad de Derecho del especialmente sensibles, entre los cuales
Trabajo y de la Seguridad Social. Universitat Jaume I de habría que entender incluidas a las mujeres
Castellón. embarazadas y a las madres lactantes. La
** Doctora en Derecho. Profesora de Derecho del
regulación del permiso por maternidad en el
Trabajo y de la Seguridad Social ETEA. Universidad de
Córdoba. Derecho comunitario derivado se encuentra
*** Abogado. Madrid. contenida en la Directiva 92/85/CE, sobre se-

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LEGISLACIÓN

guridad e higiene en el trabajo, posiblemente empleo y ocupación (refundición4); así como


por ser esta materia, de entre las armoniza- la 75/117/CEE sobre igualdad retributiva.
das, aquélla con la que el descanso por ma-
ternidad guarda mayor identidad de razón En la Directiva 92/85 se establece la regu-
(ya que la finalidad que el permiso por mater- lación mínima del descanso por maternidad,
nidad persigue, conforme ha señalado reite- con una duración de catorce semanas ininte-
radamente la Jurisprudencia del TJCE es, rrumpidas de las cuales dos tienen carácter
por un lado, la protección de la condición bio- obligatorio pudiendo disfrutarse antes y/o des-
lógica de la mujer y, por otro, la protección de pués del parto (art. 8)5. De donde se deduce
las especiales relaciones entre la mujer y su que el mínimo descanso obligatorio que la
hijo durante el período que sigue al embara- mujer tiene que disfrutar es de dos semanas,
zo y al parto, evitando que la acumulación de sin que necesariamente tengan que disfrutar-
cargas que deriva del ejercicio simultáneo de se después del parto. Durante este descanso y
una actividad profesional perturbe dichas re- para garantizar la eficacia protectora de esta
laciones1). norma, la mujer mantendrá los derechos deri-
vados de su contrato de trabajo (art. 11.2.a) no
Dos son las preocupaciones básicas que pudiendo ser despedida (art. 10) durante el
han guiado el contenido de esta Directiva: por tiempo que medie entre el comienzo de su
un lado, la protección de las trabajadoras en embarazo y la terminación del descanso por
las situaciones descritas; y, por otro, que esta maternidad, y percibiendo una retribución o
protección no influya de modo negativo en su prestación económica adecuada (art. 11.2.b.).
acceso y permanencia en el mercado de traba- Antes ya de la trasposición a nuestro Derecho
jo2. En este punto entran también en juego de esta Directiva el ordenamiento español
las Directivas en materia de igualdad de tra- había establecido en el ET, bajo la influencia
to entre hombres y mujeres, principalmente del Convenio 103 de la OIT6, un permiso por
la 76/207/CEE3, sobre igualdad en las condi- maternidad que se ajustaba e incluso supera-
ciones de trabajo, modificada por la Directiva ba las previsiones comunitarias. En efecto, el
2002/73/CE, de 23 de septiembre y reciente- ET/80 contemplaba un derecho de suspensión
mente también por la Directiva 2006/54/CE, del contrato de trabajo por maternidad de la
de 5 de julio, sobre aplicación del principio de
igualdad de oportunidades e igualdad de tra-
to entre hombres y mujeres en asuntos de 4
Dado que en las Directivas anteriormente mencio-
nadas se han hecho modificaciones , conviene en aras
de la claridad, refundir las disposiciones correspondien-
1
Por todas, entre las mas recientes, la STJCE de 14 tes, reuniendo en un único texto las principales disposi-
de abril 2005 (TJCE 2005,98). ciones existentes en este ámbito.
2
CASTRO ARGÜELLES, M.A.: «Protección especial de la 5
En los Países Bajos , la Ley sobre trabajo y cuidado
trabajadora embarazada y en situación de maternidad y de 2001 contiene reglas mínimas de protección en lo
lactancia (Directiva 92/85/CE)», en GARCÍA MURCIA, J. que a permisos laborales se refiere; conforme al art. 3 de
(dir.): La transposición del Derecho social comunitario al esta ley las trabajadoras tienen derecho a 16 semanas de
ordenamiento español, Ministerio de Trabajo y Asuntos permiso remunerado de maternidad , con derecho al
Sociales, 2005, p. 207. cien por cien de la remuneración, mejorando así el
3
Téngase en cuenta que la Directiva 92/85/CEE no período mínimo de 14 semanas fijado por la Directiva
se ha visto afectada por la Directiva 2002/73/CE, que 92/85 (RAMOS MARTÍN, N.E.: «La regulación de la igual-
modifica la Directiva 76/207/CEE relativa a la aplicación dad y no discriminación en el trabajo en los Países Bajos.
del principio de igualdad de trato entre hombres y muje- Estudio de Derecho Comparado desde el Derecho
res en lo que se refiere al acceso al empleo, a la forma- comunitario», RMTAS, nº 62, 2006, p. 206).
ción y a la promoción profesional y a las condiciones de 6
Ratificado por España el 26 de mayo de 1965, que
trabajo; ni tampoco por la Directiva 2006/54, que sin junto con el Convenio núm. 3 de la OIT representaban
embargo sí afecta a la Directiva 76/207 y dispone expre- los orígenes de la regulación internacional en materia de
samente la derogación con efecto a partir de 15-8-2009. protección por maternidad como ya hemos señalado.

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

trabajadora por un período de catorce sema- esta preocupación por salud de la madre, pre-
nas que la Ley 3/1989, de 3 de marzo, aumentó sente en la Directiva 92/85, tal vez sirva para
a dieciséis, ampliables a dieciocho en caso de entender algunas previsiones de nuestro
parto múltiple, y que se mantuvieron por la ordenamiento tales como el mantenimiento
Ley 39/99. Por tanto, en la actual regulación y de la titularidad materna en nuestro derecho
ya desde 1989 la duración del permiso por del permiso por maternidad a pesar de sus
maternidad es de dieciséis semanas (cator- inconvenientes8; la existencia de un descanso
ce, en la Directiva 92/85) y dentro de él la obligatorio para la madre de seis semanas de
duración del período de descanso obligatorio disfrute exclusivo por parte de la madre que
es de seis (dos, en la Directiva 92/85). no pueden disfrutarse a tiempo parcial; el
mantenimiento de ese mismo período de seis
Nuestra regulación, desde sus orígenes semanas como baja por maternidad aún
(primeras décadas del siglo XX), configura un cuando el feto no reúne las condiciones esta-
descanso obligatorio necesariamente posna- blecidas por el art. 30 del Código Civil para
tal, en lugar de poderse disfrutar antes y/o adquirir personalidad, siempre que hubiera
después del parto. Previsión esta última, permanecido en el seno materno durante al
seguramente mantenida en aras de la flexibi- menos 180 días (RD 1251/2001); así como, en
lidad del disfrute del descanso por la Directi- el caso específico de nacimiento de hijos pre-
va 92/85, que contraría una de las principales maturos, si bien puede interrumpirse la con-
finalidades del permiso como es la protección tinuidad del permiso se excepciona de dicha
de la condición biológica de la mujer y el posibilidad las seis semanas del período de
recién nacido. descanso obligatorio9.

Adicionalmente, la reforma del ET hecha A su vez, la futura Ley Orgánica de Igual-


por la Ley 39/99, introdujo algunas modifica- dad se convierte, también, en exponente de
ciones mas sobre el permiso por maternidad dicha continuidad histórica en la protección
que continúan en la línea de mejorar los del bien jurídico de la salud de la trabajadora
mínimos previstos en la Directiva 92/85, fle- que ha sido recientemente madre. Solución
xibilizando el disfrute del permiso y posibili- criticable, sin perjuicio de la dinámica sui
tando el disfrute del mismo a tiempo parcial, generis de la protección derivada de la mater-
dejando a salvo las seis semanas posteriores nidad biológica, que debe atender, de modo
al parto de descanso obligatorio; también se prioritario, a la necesaria recuperación física
amplía la suspensión del contrato por mater- y fisiológica. No obstante, desde nuestro pun-
nidad en dos semanas más por cada hijo. Aho- to de vista, la proyectada Ley de Igualdad
ra bien, conviene tener presente que la debería haber evolucionado hacía una fórmu-
mayoría de las modificaciones que incorpora la diferente –como solución más justa y ade-
la Ley 39/99 responden más al objetivo de cuada a la realidad social– de equiparación
conciliar la vida profesional y familiar que se del padre y la madre, mediante la configura-
contienen en el Acuerdo Marco incorporado ción de un permiso de titularidad indistinta,
en la Directiva 96/34/CEE (se analizan en un
apartado posterior del presente trabajo) que
a la necesidad de insistir sobre la protección
8
Vid. NÚÑEZ-CORTES CONTRERAS, P. y GARRIGUES GI-
MÉNEZ, A.: «(Des) igualdad en las condiciones de trabajo,
de la salud y la seguridad en el trabajo de la
incluida la retribución, de los trabajadores con respon-
trabajadora que haya dado a luz7. Sin duda sabilidades familiares: realidad actual y soluciones par-
ciales planteadas en el anteproyecto de Ley Orgánica de
Igualdad entre mujeres y hombres (I)», Tribuna Social, nº
7
Sobre esta doble finalidad de la protección por 192, 2006.
maternidad, vid. la STJCE de 27 octubre 1998 (asunto 9
CASTRO ARGÜELLES, M.A.: «Protección especial...,
Boyle c-411/96). op. cit., p. 214.

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LEGISLACIÓN

aunque manteniendo las lógicas ventajas Como es sabido, el Derecho comunitario


maternas. Así, se lograría una mejor concilia- reconoce también a los trabajadores un per-
ción e igualdad en la vida familiar y laboral miso parental distinto del permiso por mater-
de mujeres y hombres trabajadores. nidad; el permiso parental13 es concedido a
los progenitores, trabajadores, hombres y
Respecto a la duración del permiso por mujeres, con una duración mínima de tres
maternidad, la tendencia sostenida por las meses para que puedan ocuparse de su hijo
legislaciones nacionales de algunos de los hasta que cumpla ocho años edad. Ambos
países miembros en los últimos veinte años permisos, por maternidad y parental, son
ha sido la de ampliar sucesivamente el tiem- compatibles. El permiso parental finalizará
po de duración del permiso por maternidad. obligatoriamente el día que quede interrum-
Todavía en Bélgica en 1995 la duración de la pido por el permiso de maternidad o de adop-
licencia pasó de catorce a quince semanas10 y ción, si bien se le permite al progenitor apla-
en Portugal aumento de noventa días a cator- zar hasta la finalización del permiso por
ce semanas. Sin embargo en la actualidad se maternidad la parte de dicho permiso paren-
ha producido un cambio de signo hacia la tal que no ha disfrutado.
limitación o congelación de la duración del
permiso11. No obstante, de modo excepcional,
las legislaciones suelen prolongar el período 1.1. Permiso por maternidad
de protección por maternidad por complica- y estabilidad en el empleo
ciones o enfermedades surgidas al final del de la trabajadora
disfrute del permiso por maternidad y tam-
bién en caso de parto múltiple. Este cambio La normativa comunitaria establece, en el
de mentalidad en el legislador pretende evi- terreno de la estabilidad en el empleo de la
tar que la diferencia biológica entre hombre y trabajadoras que disfrutan del permiso por
mujer, fundamento del permiso por materni- maternidad, una tutela de doble alcance,
dad, dé lugar a medidas de protección excesi- según se haga referencia a la Directiva
vas contraproducentes para la mujer. El ries- 76/207/CEE (modificada por la Directiva
go de que así suceda es, sin duda, mucho 2002/73/CEE y ahora también por la Directi-
va 2006/54) o a la Directiva 92/85/CEE.
mayor cuando el permiso por maternidad es
muy prolongado, sobre todo por los problemas En efecto, con arreglo al primer grupo de
de organización en las pequeñas empresa, normas, el elemento discriminatorio cobra un
donde trabaja una gran proporción de muje- protagonismo indiscutible, pues resulta nece-
res. Si las exigencias fisiológicas objetivas de sario como móvil (discriminación directa) o
la maternidad demandan normalmente un como consecuencia (discriminación indirecta)
período reducido de inactividad profesional, de la extinción contractual. Sin embargo, la
la prolongación del permiso mas allá de los Directiva 92/85 se proyecta sobre un ámbito
límites razonables comprometerá las oportu- objetivo mucho más amplio, al establecer, una
nidades profesionales de la trabajadora12. prohibición general, como veremos, casi
incondicionada, de despedir durante las
situaciones de embarazo, parto y lactancia14.
10
Y, como hemos señalado, en el año 2001 a die-
ciséis.
11
GARRIGUES GIMÉNEZ, A.: «Incapacidad temporal o
maternidad: interrupción del embarazo: la intersección 13
STJCE de 14 abril 2005 (TJCE 2005,98).
de dos contingencias» en AA.VV.: La Incapacidad Tem- 14
En este sentido GARRIGUES GIMÉNEZ, A.: La mater-
poral, Tecnos, 1996, p. 293. nidad y su consideración jurídico laboral y de Seguridad
12
Vid., al respecto, OIT: La protección de la materni- Social, Madrid (CES), 2004, p. 158; también, CORDERO
dad en el trabajo, Ginebra (OIT), 1997, p. 35 y ss. SAAVEDRA, L.: «La protección de las mujeres embaraza-

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

1.1.1. La estabilidad en el empleo durante miso por maternidad comporta para ella una
el disfrute del permiso perturbación que puede provocar una altera-
por maternidad ción de su salud (y también, por ende, para el
feto o el recién nacido), entendida como el bie-
La concepción de la salud por parte de la nestar que precisa durante tales circunstan-
OMS, como un estado completo de bienestar cias18 ; dificultando el cumplimiento de la
físico, mental y social15, seguramente subya- finalidad del descanso por maternidad. El
ce en el espíritu de la Directiva 92/85 cuando precepto (art. 10) habla de «prohibir» el des-
establece en su art. 10, bajo el epígrafe pido, calificando de despido ilegal el produci-
«prohibición de despido»16, la posibilidad de do durante el periodo protegido que se extien-
que, como garantía para las trabajadoras del de desde el comienzo del embarazo hasta el
ejercicio de sus derechos de « protección de su final del permiso por maternidad; con la sal-
seguridad y salud», los Estados miembros vedad de los despidos no motivados por el
adopten las medidas necesarias para prohibir estado de la trabajadora, y que se encuentren
el despido durante el periodo comprendido fundamentados en las causas admitidas por
desde el comienzo del embarazo hasta el final las distintas legislaciones nacionales.
del permiso por maternidad. En el contexto
de esta Directiva 92/85, sobre seguridad e La normativa comunitaria establece, así,
higiene en el trabajo, la posibilidad de que la una prohibición de despedir de carácter gene-
trabajadora sea despedida17 durante el per- ral casi incondicionada y, por ello, las posi-
bles excepciones a esta regla deben ser inter-
pretadas de forma muy restrictiva, como cabe
das frente al despido y aplicación de las Directivas deducirse de las palabras incorporadas al
76/207 y 92/85(a propósito de la STJCE 4 de octubre precepto: «salvo los casos excepcionales no
2001)», Aranzadi Social, nº 7-8, julio 2002. inherentes a su estado», reforzado por el uso
15
ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD: «Constitui-
formalista que debe darse: «el empresario
tion of The World Health Organization», Annex, en Ten
Years of The World Health Organization, Ginebra, deberá dar motivos justificados de despido
1958. por escrito». Es decir, no basta aducir cual-
16
Art. 10 Directiva 92/85: «Como garantía para las quier motivo, sino que ha de tratarse de una
trabajadoras a las que se refiere el artículo 2 del ejercicio de las causas a través de las cuales se permi-
de los derechos de protección de su seguridad y salud ta la extinción del contrato de trabajo en
reconocidos en el presente artículo, se establece los
algunos de los ordenamientos nacionales
siguiente:
1) Los Estados miembros tomaran las medidas nece- («..admitidos por las legislaciones y /o practi-
sarias para prohibir el despido de las trabajadora a que se cas nacionales...»). Existiendo una causa legí-
refiere el artículo 2, durante el período comprendido tima que no encuentre su reflejo en la situa-
entre el comienzo del embarazo y el final del permiso por ción maternal, puede propiciarse el despido
maternidad a que se refiere el apartado 1 del art. 8, salvo como si se tratara de un trabajador masculi-
en los casos excepcionales no inherentes a su estado
no19.
admitidos por las legislaciones y/o prácticas nacionales y,
en su caso, siempre que la autoridad competente haya
Conforme a la doctrina del TJCE 20 el
dado su acuerdo.
2) Cuando se despide a una trabajadora a que se hecho de autorizar excepciones a la prohibi-
refiere en el art. 2 durante el período contemplado en el ción despido de las trabajadoras durante este
punto 1, el empresario deberá dar motivos justificados de
despido por escrito.
3) Los Estados miembros tomarán las medidas nece-
sarias para proteger a los trabajadores a las que se refiere
18
También se evita la posible incidencia negativa que
el art.2 contra las consecuencia de un despido que sería pueda tener sobre el feto o el hijo durante la lactancia.
ilegal en virtud del punto 1».
19
C ORDERO S AAVEDRA, L.: «La protección de las
17
Y sobre todo su materialización en un acto de des- mujeres...», op.cit., p. 5.
pido.
20
S TJCE de 4 octubre 2001 (TJCE 2001, 260).

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LEGISLACIÓN

período no obliga a los Estados miembros a de una de estas trabajadoras otorgue su


especificar las causas de despido de dichas acuerdo previo a la decisión del empleador al
trabajadoras. La Directiva no impone a los respecto. En realidad, el precepto se limita a
Estados miembros la obligación de elaborar tomar en consideración la eventual existen-
una lista especial de las causas de despido cia en algunos ordenamientos de algunos
que por vía de excepción se admitirán respec- Estados miembros de procedimientos de
to de las trabajadora en las situaciones referi- autorización previa a los que se supedita el
das. Sin excluir por ello la facultad de los despido de la trabajadora en estas situacio-
Estados miembros de garantizar una mayor nes. Si en un Estado miembro no existe tal
protección a esas trabajadoras, estableciendo procedimiento, dicha disposición no le obliga
un régimen especial de causas de despido a crearlo22.
para ellas, lo que puede resultar de difícil
La protección de la Directiva 92/85/CE
materialización. Y, además, no parece conse-
alcanza al despido improcedente que pudie-
cuente que deba propiciarse una lista cerrada
ra acaecer cuando, sin acreditarse la discri-
de causas pues lo será, en toda su extensión,
minación, no se pruebe por el empresario la
cualquiera que no esté involucrada en la
existencia de una causa lícita que determine
situación de embarazo o maternidad. Todo lo
la extinción («...Los Estados miembros
cual presupone que el art. 10 de la Directiva
tomarán las medidas necesarias para prote-
92/85/CE no impide que una trabajadora
ger a las trabajadoras durante estas circuns-
española durante el embarazo o en el trans-
tancias contra las consecuencias de un despi-
curso del permiso por maternidad vea extin-
do que sería ilegal en virtud de...»). En cum-
guido su contrato de trabajo por alguna de las
plimiento de este mandato, la Ley 39/99, a la
causas del artículo 49 ET, de las que sean
vez que establece una presunción de nulidad
operativas durante este período21. Así pues,
del despido disciplinario y la extinción por
la trabajadora podría incurrir en incumpli-
causas objetivas durante el permiso por
mientos graves y culpables que motivaran su
maternidad, arbitró un mecanismo de pro-
despido disciplinario, o verse afectada por un tección de la trabajadora durante dicho
despido colectivo o una extinción de su con- período que excluye la posibilidad de la cali-
trato por causas objetivas. ficación de improcedencia de ambos tipos de
extinciones producidas durante su transcur-
Por último, respecto a los condicionantes
so. De modo que solamente caben dos califi-
de la prohibición de despedir habría que
caciones posibles para estas situaciones: pro-
hacer referencia a la previsión del art. 10.1 de
cedencia y nulidad, eliminando la improce-
la Directiva 92/85/CE en su inciso final sobre
dencia que conduciría a la extinción indem-
la alusión a la intervención de la autoridad
nizada.
competente en los casos excepcionales en que
esté permito despedir a las trabajadoras, que Resulta manifiesta la caracterización nor-
ha de interpretarse en el sentido de que no mativa –por la Directiva 92/85/CE– de la
impone a los Estados miembros la obligación mujer como único y exclusivo sujeto protegido
de prever la intervención de la autoridad frente al despido relacionado con la situación
nacional que tras comprobar la circunstan- de maternidad sin duda porque la perspecti-
cias excepcionales que justifiquen el despido va reguladora adoptada por esta Directiva se
corresponde, como tantas veces hemos aludi-
do, con el perfil estrictamente biológico o
21
Sobre la operatividad de las causas de extinción
fisiológico de la situación de maternidad.
del contrato de trabajo durante el permiso por materni-
dad, NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS, P.: La licencia por mater-
nidad de la trabajadora, Madrid (Dikynson), 2002, pp.
175 y ss. 22
S TJCE de 4 octubre 2001 (TJCE 2001, 260).

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

1.1.2. Jurisprudencia del Tribunal raba aplicable la inversión de la carga de la


de Justicia de las Comunidades pruebas conforme a la Directiva 97/80/CE27.
Europeas en materia de maternidad
y protección frente al despido En lo que atañe al segundo de los criterios
jurisprudenciales, el TJCE había establecido
Retomando las consideraciones hechas la existencia de discriminación indirecta
supra, al inicio del epígrafe 1.1, la jurispru- cuando la aplicación de una medida nacional,
dencia del TJCE en materia de maternidad y aunque formulada de manera neutra, perju-
protección frente al despido se ha construido dique de hecho a un número mayor de muje-
en torno a la discriminación de la trabajadora res que de hombres. Criterio de alcance indis-
por razón de sexo, en la medida en que géne- cutible en materia de despidos por inasisten-
ro y maternidad aparecen indisolublemente cias reiteradas por problemas de salud rela-
unidos; en este sentido el criterio del TJCE se cionados con el embarazo o el parto (así que-
articula en base a dos órdenes distintos de da recogido ahora en la nueva redacción dada
consideraciones: en primer término, el refe- a los arts. 2 y 3 de la Directiva 76/207/CEE,
rente a los despidos motivados directamente por la Directiva 2002/73/CE)28.
por la maternidad de la trabajadora y, en
En este sentido, las ausencias debidas a
segundo lugar, el relativo a las extinciones
incapacidad laboral causada por los trastor-
contractuales basadas en un motivo formal-
nos relacionados con su embarazo no admiten
mente neutro (desde la perspectiva de géne-
comparación con la situación de un trabaja-
ro) en las que el trasfondo de la maternidad
dor masculino enfermo que está ausente por
aparece en un segundo plano, si bien hacien-
incapacidad laboral durante el mismo espa-
do a la mujer trabajadora de peor condición
cio de tiempo, por lo cual su tratamiento
que al varón23. Por lo que se refiere al prime-
homogéneo constituye una discriminación
ro y ya antes de la crucial modificación de la
directa; sin embargo, si las ausencias de la
Directiva 76/207/CEE, operada por la Direc-
trabajadora son posteriores al permiso por
tiva 2002/73/CE24 había quedado establecido
maternidad y están motivada por la incapaci-
en reiteradas Sentencias25 que el despido de
dad laboral resultante de dichos trastornos
una trabajadora por razón de su embarazo
habrá que distinguir si son tratadas o no de la
constituye una discriminación directa basada
misma manera que las ausencias de un tra-
en el sexo y es que despido no admite justifi-
bajador debidas a una incapacidad laboral de
cación objetiva y razonable, por lo cual no se
idéntica duración; en caso afirmativo, no
desvirtúa su carácter discriminatorio al ale-
podrá hablarse de discriminación basada en
gar eventuales causas objetivas que preten-
dan justificarlo26. Para tal caso ya se conside-

errores con diez años de retraso, Valencia (Tirant lo


23
GARRIGUES GIMÉNEZ, A.: La maternidad ..., op. cit., Blanch) 2000, p. 50.
p. 157
27
GARRIGUES GIMÉNEZ, A.: La maternidad ..., op. cit.,
24
De igual modo, a efectos de la Directiva p. 158.
2006/54/CE, se entenderá el concepto de discrimina-
28
Entre otras normas el art. 8 del Convenio 156 de
ción incluirá el trato menos favorable de una mujer en la OIT conocido como convenio sobre los trabajadores
relación con el embarazo o el permiso por maternidad con responsabilidades familiares, establece que la res-
en el sentido de la Directiva 92/85/CE. ponsabilidad familiar no debe constituir de por si una
25
SSTJCE de 8 noviembre 1990-TJCE 1991,74- causa justificada para poner fin a la relación de trabajo
(caso Hertz), de 5 mayo 1994 -TJCE 1994,69- (caso Hab- y el art. 5 del Convenio 158 de la OIT sobre la termina-
bermann-Beltermann), de 14 julio 1994 -TJCE ción de la relación de trabajo por iniciativa del emplea-
1994,133- (caso Webb) y de 30 junio 1998 -TJCE dor incluye entre los motivos que no constituirán causa
1998,159- (caso Brown). justificada para la terminación de la relación de trabajo
26
BALLESTER PASTOR, M.A.: La Ley 39/1999, de conci- «la ausencia del trabajo durante la licencia de materni-
liación de la vida familiar y laboral: una corrección de dad».

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LEGISLACIÓN

el sexo; en negativo nos hallaremos ante una por maternidad a su puesto de trabajo o a uno
discriminación indirecta29. equivalente en términos y condiciones que no
le resulten menos favorables.

La Directiva 76/207/CEE y sus modifica-


1.1.3. El refuerzo de la estabilidad
ciones sucesivas, refuerzan la tutela antidis-
en el empleo en el momento
criminatoria con una importante previsión,
de la reincorporación tras el disfrute
de acuerdo con la cual el trato menos favora-
del permiso por maternidad
ble dispensado a una mujer en relación con su
permiso por maternidad en el sentido de la
Resta por analizar la protección de la esta-
Directiva 92/85/CE constituirá discrimina-
bilidad en el empleo de la trabajadora en un
ción31.
momento también crítico, no contemplado
por la Directiva 92/85/CE, en el que la protec- La Ley 39/99, al trasponer la Directiva
ción ya no se conecta con su condición biológi- 92/85/CE, otorgó a través de la presunción de
ca y, por ello, no está incluido dentro de sus nulidad una amplia protección frente al des-
límites. pido disciplinario y la extinción por causas
objetivas producidos durante el permiso por
Hasta que se aprobó la antedicha Directi- maternidad, sin abarcar tampoco el momento
va, la protección frente al despido de la traba- de la reincorporación tras su disfrute; en
jadora embarazada o que haya dado a luz se paralelo con la extensión temporal de la pro-
fundó en la Directiva 76/207/CEE, por tratar- tección otorgada por Directiva 92/85. Por ello,
se de una discriminación directa tal y como en consecuencia, al aplicar nuestros Tribuna-
hemos señalado. Al contemplar la Directiva les la Ley 39/99 ciñen la presunción de nuli-
92/85/CE una prohibición específica de despi- dad de los despidos disciplinarios y la extin-
do durante el embarazo y el permiso por ción por causas objetivas al límite temporal
maternidad sin alcanzar al momento de la de los períodos expresamente protegidos del
reincorporación tras el permiso determinaría artículo 55.5 ET32, reiterando al necesidad de
que las reformas de la Directiva 76/207/CEE, que el despido para que sea declarado nulo
ex Directiva 2002/73/CE –y recientemente, debe producirse dentro de los límites tempo-
también, por la Directiva 2006/54/CE 30 – rales de los períodos protegidos. Excluyendo,
hayan cubierto esta deficiencia y garanticen, por tanto, de tal garantía el momento poste-
también, la estabilidad en el empleo de la rior a la reincorporación de la trabajadora
mujer una vez que esta se reincorpore a su tras el disfrute del permiso por maternidad.
puesto de trabajo tras la baja maternal. Con- Así lo señala expresamente el Tribunal Supe-
cretamente, el art. 7.2 de la Directiva rior de Justicia de Madrid en Sentencia de 13
76/207/CEE dispone, tras la Directiva
2002/73/CE y, de igual modo, en la Directiva 31
CAVAS MARTÍNEZ, F.: «Avanzando por la senda de la
2006/54, que la trabajadora tiene derecho a
igualdad entre géneros (Noticia breve de la Directiva
reintegrarse una vez finalizado su permiso 2002/73/CE del Parlamento europeo y del Consejo, de
23 de septiembre 2002, que modifica la Directiva
76/207/CEE», Aranzadi Social, nº 13/2002, p. 7.
29
De esta manera, la STJCE de 30 junio 1998 (TJCE 32
Así por todas, en caso de despido durante la
1998,133, caso Brown); no obstante, el parecer el TJCE reducción de jornada por cuidado de un menor del 37.5
no ha sido siempre el aquí expuesto; al respecto vid. las del ET en que se declara su nulidad por los TSJ de Casti-
SSTJCE de 8 noviembre 1990 (1991,74) y de 29 mayo lla y León y Cataluña en Sentencias de 20 septiembre
1997 (TJCE 1997, 108, caso Larsson) en las que se man- 2004 (JUR 2004/264243) y de 3 diciembre 2004 (JUR
tenía el principio contrario. 2005/34947), respectivamente; y también durante la
30
Artículo 15, titulado «reintegración tras un permi- lactancia (STSJ Andalucía (Sala de Sevilla) de 18 julio
so por maternidad». 2003 (2003/6333).

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 67


248
AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

de diciembre de 200333 que declara la impro- (modificada por la Directiva 2002/73/CE y, últi-
cedencia del despido de una trabajadora por mamente, por la Directiva 2006/54/CE); y,
producirse meses después de su reincorpora- por supuesto, también, en la Directiva
ción tras el disfrute de su permiso por mater- 92/85/CEE.
nidad, sin que se encontrase con la jornada
Esta última establece, como complemento
reducida o en alguna de las situaciones blin-
a la regulación del permiso por maternidad
dadas. Qué duda cabe que el momento de la
(art. 8), la necesidad de garantizarse durante
reincorporación tras el disfrute del permiso
su disfrute de los derechos inherentes al con-
por maternidad y también el período poste-
trato de trabajo (art. 11.2.a), distintos del
rior al mismo constituyen situaciones críticas
mantenimiento de una remuneración y/o el
para la estabilidad en el empleo de la trabaja-
beneficio de una prestación adecuada (11.2.b)
dora. Y por ello, la proyectada Ley de Igual-
a los que hubiera podido tener derecho la tra-
dad ha incluido entre las nuevas extinciones
bajadora durante su ausencia. La Ley
y despidos protegidos con la garantía de la
39/1999 omitió toda referencia al manteni-
presunción de nulidad: «Los de los trabajado-
miento de los derechos inherentes al contrato
res después de haberse reintegrado al trabajo
de trabajo durante el disfrute del permiso por
al finalizar los periodos de suspensión del
maternidad, a pesar de que, como hemos
contrato por maternidad,………siempre que
señalado, normas comunitarias anteriores a
no hubieran transcurrido mas de nueve
su promulgación, la Directiva 92/85, de 19 de
meses desde la fecha de nacimiento. A salvo
octubre, principalmente, aunque también la
de que se declare la procedencia de la deci-
76/207 contenían reglas al respecto. En la
sión extintiva o del despido por motivos dis-
transposición de estas normas realizada por
tintos. Estos nuevos supuestos quedarán
la Ley 39/1999 los contenidos que, precisa-
comprendidos en los arts. 53.4 y 55.5 ET y
mente, menos desarrollo alcanzaron fueron
108.2 y 122.2 LPL; con ello, la futura Ley
los relacionados con el mantenimiento de las
Orgánica de Igualdad –cuya aprobación y
condiciones de trabajo y la igualdad de opor-
operatividad debería producirse en los pri-
tunidades durante el ejercicio de las respon-
meros meses de 2007–, efectuará, de la
sabilidades familiares. La Ley 39/1999 adole-
manera reflejada en su proyecto, y en este
ció de previsiones legales suficientes, relati-
concreto aspecto, la trasposición de las Direc- vas al mantenimiento de derechos y condicio-
tivas 2002/73 y 2006/54. Para esta última, el nes de trabajo durante el disfrute de los per-
plazo de transposición señalado se extiende misos, suspensiones, excedencias, etc;
hasta el 15 de agosto de 2008. centrándose exclusivamente en las vicisitu-
des de la relación laboral y funcionarial cuan-
1.2. Mantenimiento de los derechos do sobrevienen cargas familiares35.
inherentes al contrato
de trabajo durante el permiso
por maternidad acceso al empleo, a la formación y a la promoción pro-
fesionales, y a las condiciones de trabajo; esta norma fue
La normativa comunitaria ha abordado la modificada –como se advirtiera antes– por la Directiva
2002/73/CE, de 3 de junio.
igualdad en las condiciones de trabajo de las tra- 35
Sobre las deficiencias de la Ley 39/99, CRUZ
bajadoras durante el permiso por maternidad VILLALÓN, J.: «El fomento de la integración plena y esta-
básicamente, en las Directivas 76/207/CEE34 ble de la mujer en el trabajo asalariado (comentario a la
Ley para promover la conciliación de la vida familiar y
laboral de las personas trabajadoras), RMTAS, extraord.,
33
AS 2004/2444. pp. 71-102. A esta clara insuficiencia reguladora sobre
34
Relativa a la aplicación del principio de igualdad igualdad en las condiciones de los trabajadores que ejer-
de trato entre hombres y mujeres en lo que se refiere al citan sus responsabilidades familiares no obsta la exis-

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 67


249
LEGISLACIÓN

La modificación operada en la Directiva ha señalado expresamente, además, como


76/207/CEE por la Directiva 2002/73/CE36 y, ejemplo de discriminación interrumpir el
en idénticos términos, por el art. 15 de la mantenimiento o la adquisición de derechos
recentísima Directiva 2006/54/CE, han pro- durante los períodos de permiso por materni-
fundizado en estas exigencias de manteni- dad. Mientras no se parta del presupuesto de
miento de derechos durante el disfrute del que los trabajadores cualquiera que sea su
permiso por maternidad, estableciendo al sexo, que ejercitan sus responsabilidades
respecto que la mujer tiene derecho a benefi- familiares disfruten de igualdad en las condi-
ciarse de cualquier mejora en las condiciones ciones de trabajo (incluida la retribución)
de trabajo a la que hubiera podido tener dere- durante el disfrute de los permisos, las muje-
cho durante su ausencia. Y lo ha hecho refor- res trabajadoras no dejarán de estar discri-
zando esta tutela con una previsión comple- minadas y los hombres no comenzarán a asu-
mentaria también, introducida por la Directi- mir sus responsabilidades familiares38.
va 2002/73/CE y establecida también en la
Directiva 2006/54/CE, por la cual el trato Complementariamente, el TJCE, tomando
menos favorable dispensado a una mujer en como punto de partida la regulación de carác-
relación con su permiso por maternidad en el ter mínimo al respecto, de las primeras Direc-
tivas (76/207/CEE y 92/85/CE) ha ido perfi-
sentido de la Directiva 92/85/CE constituirá
lando una muy consolidada Jurisprudencia
discriminación37. La Directiva 2006/54/CE
que consagra el criterio de que el disfrute del
permiso por maternidad no puede suponer un
tencia de ciertos mecanismos normativos de propósito trato desfavorable para la trabajadora en lo
paliativo: así, conforme al art. 46.3 ET sobre excedencia relativo a sus condiciones de trabajo, en el
por cuidados de hijos, la situación de excedencia pro- sentido de acarrear la pérdida de derechos
duce efectos equivalentes a la permanencia del trabaja- como una gratificación económica (Asunto
dor en la empresa, con proyección en la antigüedad no
Lewen39); una calificación profesional para
solo a efectos de acumulación del tiempo de trabajo,
sino también de la obtención por parte del trabajador un ascenso; o los derechos generados durante
que ejerce sus responsabilidades familiares de similares el transcurso del año para la obtención de
beneficios a los que tendría de encontrarse en activo; una pensión. Si las disposiciones referentes
asimismo, la Ley de Prevención de Riesgos Laborales al permiso por maternidad no van acompaña-
–en su artículo 26, en relación con el 39 del ET–, con- das del mantenimiento de los derechos inhe-
templa el mantenimiento de condiciones de trabajo en
rentes al contrato de trabajo carecerían de
caso de movilidad funcional motivada por riesgo duran-
te el embarazo. Y, también, la regulación de las licencias efecto útil (Asunto Boyle40).
retribuidas para la realización de exámenes prenatales
del artículo 37.3. f) del ET, que da cobertura al manteni- Conforme a la comentada doctrina del
miento de la retribución de las trabajadoras durante el TJCE, la trabajadora vinculada al empresa-
ejercicio de este derecho relacionado con el embarazo y rio durante su permiso por maternidad no
la maternidad. Similar finalidad tendrían, igualmente, puede ser privada de su promoción profesio-
tanto la ausencia como la reducción de jornada por lac- nal ya que el derecho de todo empleado a ser
tancia del art. 37.4 del ET, al ser supuestos de disminu-
calificado para su posible promoción profesio-
ción del tiempo de trabajo por motivos familiares en los
que se mantiene la retribución de los trabajadores; y, nal forma parte de sus condiciones de trabajo.
también, el derecho de la madre o el padre a ausentarse No computar el tiempo de disfrute del permi-
del trabajo una hora sin pérdida de su retribución en el
caso de nacimiento de hijos prematuros.
36
Artículo 2, apartado 7, párrafo 2). 38
En igual sentido, PURCALLA BONILLA, M.A.: «Igual-
37
CAVAS MARTÍNEZ, F.: «Avanzando por la senda de la dad de trato y no discriminación: la tutela antidiscrimi-
igualdad entre géneros (Noticia breve de la Directiva natoria (en especial por razón de sexo)», Aranzadi
2002/73/CE del Parlamento europeo y del Consejo, de Social, núm.10/2004, p. 2.
23 de septiembre 2002, que modifica la Directiva 39
C-333/97, Rec. pág. I-7243.
76/207/CEE, Aranzadi Social, nº 13/2002, p. 7. 40
C-411/96, Rec. P. I-6401.

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250
AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

so como tiempo de servicios prestados, consti- Recientemente (a la vez que se gestaba el


tuye un trato desfavorable basado en el ejer- Anteproyecto de Ley Orgánica de Igualdad de
cicio de un derecho derivado de la materni- 3 de marzo de 2006) la STJCE, de 16 de febre-
dad 41 . Por similares razones, el Tribunal ro de 200645, ha resuelto una cuestión preju-
europeo se ha pronunciado a favor también dicial planteada por el Juzgado de lo Social
del derecho de la trabajadora, que continúa núm. 30 de Madrid sobre igualdad en las con-
vinculada por la relación laboral a su empre- diciones de acceso a la función pública de una
sario durante el permiso por maternidad a trabajadora que se encuentra disfrutando del
acceder a un grado retributivo superior a la permiso por maternidad. Basándose en que
vez que un compañero varón que ha empeza- la Directiva 76/207 le reconoce, durante el
do a trabajar el mismo día, y no doce semanas permiso de maternidad, los mismos derechos
después, por haber disfrutado del permiso que a otros aspirantes aprobados en el mismo
por maternidad durante éstas42. procedimiento de selección, Por tanto, apla-
zar la toma de posesión de la trabajadora has-
Esta doctrina del TJCE sobre manteni- ta el término del permiso por maternidad, sin
miento de las condiciones de trabajo de los tomar en cuenta la duración de este permiso
trabajadores con responsabilidades familia- a efectos del cómputo de su antigüedad, com-
res ha sido traída hasta nosotros a través de portaría un trato desigual para la trabajado-
un número cada vez mayor de pronuncia- ra, constitutivo de discriminación.
mientos jurisprudenciales recaídos sobre la
Finalmente, estas exigencias de manteni-
materia, en los últimos años. En reiteradas
miento de la igualdad en las condiciones de
ocasiones, nuestros Tribunales, con el Supre-
trabajo de los trabajadores (y empleados
mo a la cabeza43, han puesto de manifiesto la
públicos) con responsabilidades familiares
insuficiencia de la normativa para evitar que
encontrarán respuesta del legislador en las
las responsabilidades familiares perjudiquen
nuevas previsiones contenidas al respecto en
a quienes las asumen. La superación de
la proyectada Ley de Igualdad; a saber, la
dichas dificultades, a juicio de nuestros Tri-
modificación del ET introduciendo un nuevo
bunales y en aras de la seguridad jurídica segundo párrafo en el apartado 1 del proyec-
corresponde al legislador44. tado artículo 48: «Sin perjuicio de lo dispues-
to en el párrafo anterior en los supuestos a los
que se refiere el párrafo d) del apartado 1 del
41
STJCE de 30 abril 1998 (TJCE 1998/70).
42
Gillespie y otros (TJCE 1996, 20), apartado 22; artículo 45 el trabajador(suspensión del con-
Thibault (TJCE 1998,70), apartado 29 y Alabaster (TJCE trato de trabajo por maternidad…) se benefi-
2004/80), apartado 47. A este respecto se remite a la ciará de cualquier mejora en las condiciones
Sentencia de 27 octubre 1998 (TJCE 1998, 255), Boyle y de trabajo a la que hubiera podido tener dere-
otros (C-411796, Rec. P. I-6401, apartado 79). cho durante la suspensión». También, el Pro-
43
Sentencia de 14 marzo 2005 (JUR 2005/102679),
yecto de Ley Orgánica de Igualdad (en lo
en la que recoge la doctrina unificada en un supuesto
que había generado cierta litigiosidad en el que las tra- sucesivo, PLOI), en sus artículos 52 y 53,
bajadoras que reducían su jornada por razón de la guar-
da legal de un menor e inmediatamente veían extingui-
do su contrato de trabajo cobraban una prestación infe- computar la duración de ese tiempo de excedencia para
rior a la que les hubieran correspondido de no reducir su la generación de un premio de antigüedad y también, la
jornada por motivos familiares, el TS concedía la presta- STSJ de Cataluña, de 31 enero 2003 (AS 2003/453) en el
ción en base a la normativa aplicable contenida en la que se toma en consideración el tiempo que la trabaja-
LGSS que no pueden modificar los Tribunales. dora disfrutó de una excedencia por cuidado de hijo
44
Así pues, por todas, respecto a la excedencia por para el cómputo de la indemnización por despido. Tam-
cuidado de hijos, la STS de 28 junio 2002 (RJ bién respecto al mantenimiento y, especialmente, la STS
2002/9080) en la que se reconoce a un trabajador que de 14 marzo 2005 (JUR 2005/102679).
ha disfrutado de una excedencia por cuidado de hijo a 45
TJCE 2006/41.

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 67


251
LEGISLACIÓN

entre las medidas de igualdad en el empleo art. 2, apartado 3) con ocasión del embarazo y
para la Administración General del Estado, la maternidad no puede dar lugar a un trato
atiende a algunos aspectos de esta protección desfavorable en lo que se refiere a sus condi-
para el ámbito del empleo público, recono- ciones de trabajo. Así pues, una trabajadora
ciendo que el tiempo de disfrute de los permi- podrá disfrutar de sus vacaciones en un
sos (y otros beneficios) para proteger la período distinto al de su permiso por mater-
maternidad y la conciliación de la vida labo- nidad; de no ser así, se estaría garantizando
ral y familiar se computarán a los efectos de una igualdad meramente formal y no real, ya
valoración del trabajo desarrollado y de los que los trabajadores femeninos tienen más
correspondientes méritos para la provisión probabilidades que los trabajadores masculi-
de puestos de trabajo. A través de estas pre- nos de encontrase en tales situaciones 48 .
visiones ha de considerarse efectuada la tras- Solución contraria a la que, todavía por
posición en este concreto aspecto de la Direc- entonces, sostenía la Jurisprudencia en
tiva 2002/73 y también, digamos que con España49, que suponía la pérdida del derecho
carácter inmediato, la Directiva 2006/54 del a las vacaciones cuando la fecha de éstas
pasado 5 de julio de 2006. había sido acordada colectivamente y coinci-
de con la del descanso por maternidad, a
pesar de que la doctrina se había echo eco del
1.3. Un supuesto específico perjuicio y la inequidad que supone para la
de mantenimiento de los derechos trabajadora dicha pérdida50. La solución defi-
inherentes al contrato de trabajo: nitiva fue acogida, en el plano jurispruden-
la compatibilidad de las vacaciones cial, antes de existir reflejo normativo, en
STS de 10 de noviembre de 200551, dictada en
y el permiso por maternidad
Unificación de Doctrina; en ella, el TS modi-
ficó su postura conforme a los criterios verti-
La regulación contenida en el art. 11, apar-
dos por el TJCE en la comentada S. de 18 de
tado 2, letra a) de la Directiva 92/85/CE, así
como el art. 5.1 de la Directiva 76/207/CEE,
ampara la compatibilidad del derecho a las
vacaciones y el permiso por maternidad. El 48
Al respecto, véase, NUÑEZ-CORTES CONTRERAS, P.:
Tribunal europeo tuvo ocasión de pronunciar- «Compatibilidad de las vacaciones y el permiso por
se, en Sentencia de 18 de marzo de 200446, en maternidad», Temas Laborales nº 77, 2004.
49
STS de 30 noviembre 1995(RJ 1995, 8771).
relación a la interpretación que debe darse a 50
Entre los más recientes, STSJ de Cataluña de 3
ambas directivas en este concreto aspecto. La diciembre 2004 (AS 2004,165); STSJ de Andalucía de
Directiva 92/85/CE (art. 11, apartado 2, letra 28 noviembre 2003 (RJCA 2003,1052); STSJ de Galicia
a.) dispone que «en el caso de un permiso por de 3 octubre 2003 (JUR 2004,48365); STSJ Castilla y
maternidad deberán garantizarse los dere- León de 23 junio 2004 (AS 2004, 1951).
51
La Sentencia de 10 noviembre 2005 (RJ 2005/
chos inherentes al contrato de trabajo de la
10084) recoge un supuesto en que en el año 2003, la
trabajadora. Por lo tanto, será de aplicación empresa confeccionó un calendario de vacaciones para
en relación con el derecho a disfrutar de vaca- toda la plantilla, asignando a una trabajadora como
ciones anuales retribuidas»; del mismo modo, período vacacional previsto en el calendario de la
el art. 5.1 de la Directiva 76/207. Respecto a empresa el comprendido entre el 1 y el 31 de agosto. A
partir del 23 de julio la trabajadora estuvo de baja por
esta última norma, la STJCE de 18 de marzo
maternidad, al concluir ésta tras el transcurso del mes de
de 200447 estableció que el ejercicio de los vacaciones que se le había asignado para el disfrute
derechos reconocidos en ella a las mujeres (el vacacional, la empresa le denegó el disfrute en un
período distinto del asignado. El Juzgado de lo Social
reconoció a la trabajadora el derecho a disfrutar de 31
46
TJCE 2004/ 69. días de vacaciones, siendo revocada su decisión por el
47
TJCE 2004/ 69. STSJ de Madrid de fecha 22 julio 2004.

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252
AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

marzo de 2004. Resumidamente, conforme a siguientes términos: «Cuando el período de


esta nueva postura del TS, negar la compati- vacaciones fijado en el calendario laboral de
bilidad de las vacaciones con el disfrute del la empresa coincida en el tiempo con…el
período de baja maternal, supondría estable- período de suspensión del contrato de trabajo
cer una clara discriminación entre el hombre previsto en el art. 48.4 de esta Ley (ET), se
y la mujer; y ello porque, fundamentalmente tendrá derecho a disfrutar de las vacaciones
la mujer –quién, teóricamente, al menos, ha en fecha distinta a la …del permiso que por
de prestar servicios en igualdad de condicio- aplicación de dicho precepto le correspondiere
nes con el hombre– vería mermado o suprimi- al finalizar el período de suspensión, aunque
do su derecho a la vacación anual a causa de haya terminado el año natural al que corres-
la maternidad. pondan».

Como ya se ha señalado, la ausencia en El proyecto hace suya, así, la solución


nuestro ordenamiento de una regulación al mayoritaria previamente adoptada por la
respecto (hasta la proyectada Ley de Igual- negociación colectiva52. Idéntica solución se
dad) ha propiciado que la negociación colecti- establece en el PLOI entre las medidas de
va tenga un papel decisivo en la concreción y Igualdad en el empleo para la Administra-
racionalización de la compatibilidad del dis- ción General del Estado (art. 55), otorgando
frute de ambos derechos. De sobra es sabido el derecho a la empleada pública (suponemos
que la práctica totalidad de los convenios que por error)y no a ambos progenitores. Por
colectivos, ya sean de empresa, ya de sector, tanto, a través de estas previsiones se da
prevén cláusulas relativas a las vacaciones cumplimiento a la normativa comunitaria y
anuales; sin embargo, el papel de la negocia- se efectúa, con carácter inmediato la traspo-
ción colectiva es bastante más exiguo a la sición de la recientísima Directiva 2006/54.
hora de regular la suspensión del contrato
por maternidad. Por tanto, son las cláusulas
sobre vacaciones anuales de los convenios las 2. EL BENEFICIO DE UNA PRESTACIÓN
que, de manera más frecuente, han abordado ADECUADA DURANTE EL PERMISO
la compatibilidad de estos derechos, ofrecien- POR MATERNIDAD
do soluciones más o menos afortunadas. A
veces, los convenios son excesivamente incon- 2.1. Planteamiento de la cuestión:
cretos al respecto; o se limitan a remitir la las previsiones de la Directiva
fijación de la fecha de disfrute de las vacacio- 92/85/CE
nes al común acuerdo entre empresario y tra-
bajador. Sin embargo, en la mayor parte de Consciente de la necesidad de establecer
las ocasiones, los convenios han suavizado los cautelas jurídicas suficientes, de cara al man-
inconvenientes, mas arriba descritos, tenimiento de la capacidad económica de la
mediante previsiones que daban un amplio trabajadora, como garantía de la efectividad
margen en la fijación de la fecha de disfrute del derecho al permiso por maternidad, el
de las vacaciones y permitían diferirlas; casi legislador comunitario exigiría de manera
siempre antes de que finalice el año natural expresa a los Estados miembros la provisión
e, incluso, después, en algunos casos. –junto al derecho al disfrute de dicho permi-
so– «de una remuneración y/o del beneficio de
Finalmente, el PLOI, como era lógico, una prestación adecuada» [art. 11.2.b) de la
plasma la compatibilidad de las vacaciones y Directiva 92/85/CEE]. De esta manera, se
el permiso por maternidad, a la vez que fija la
extensión y límites de dicha compatibilidad;
todo ello, añadiendo expresamente un párra- 52
Y también con la incapacidad temporal derivada
fo segundo al apartado 3 del art. 38 ET, en los del embarazo, el parto o la lactancia natural.

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 67


253
LEGISLACIÓN

plantea la posibilidad (alternativa o acumu- • de una parte, el referente de la baja por


lativa) de que el coste económico correspon- enfermedad evoca en el intérprete un
diente al mantenimiento de la capacidad cierto «regusto rancio» que reconduce,
económica de la trabajadora recaiga, bien en de manera casi subliminal, a la obsoleta
el propio empleador, bien en los sistemas de consideración pretérita de la materni-
protección social (ya sean éstos públicos, o a dad como fenómeno patológico –hoy en
través de instrumentos de previsión de natu- día, afortunadamente, rechazada–;
raleza privada –ninguna preferencia señala,
• de otra y, siquiera en base a la expe-
a este respecto, la norma europea–), bien, riencia normativa española al respecto,
finalmente, en ambos53; en cualquier caso, y la cobertura del sistema público de
según el principio que inspira la Directiva Seguridad Social por enfermedad no
toda, dicha protección se configurará «confor- puede considerarse, ni mucho menos
me a las legislaciones y/o prácticas naciona- –desde un punto de vista cuantitativo–
les». como el óptimo de protección económica,
por lo limitado del porcentaje aplicable
Lo que sí concreta la Directiva es la exi- sobre la base reguladora; si, además se
gencia de que, tratándose de una prestación, tiene en cuenta que –hoy por hoy– y en
la misma sea «adecuada» (apartado 3 del art. la práctica totalidad de los Estados
11), entendiendo por tal aquélla que «garanti- miembros, el permiso por maternidad
ce unos ingresos equivalentes, como mínimo, es de disfrute casi exclusivamente
a los que recibiría la trabajadora en caso de femenino, el recurso al referente míni-
interrupción de sus actividades por motivos mo establecido por la Directiva situaría
de salud, dentro de un posible límite máximo a las mujeres en una situación de franca
determinado por las legislaciones naciona- desventaja económica –disminución
les». Con ello, se lleva a cabo una equipara- retributiva respecto a sus percepciones
ción con la prestación correspondiente a las íntegras habituales– causada exclusi-
situaciones de baja por enfermedad; entende- vamente por un hecho diferencial basa-
mos que tal equiparación, aún establecida a do en su género. Todo ello a salvo, lógi-
título de mínimo, resulta desafortunada, y camente, de los posibles complementos
ello por dos razones bien diferenciadas: que, a cargo del empleador, y con base
en la negociación colectiva –o en el con-
trato individual de trabajo–, puedan
53
En este sentido, de acuerdo con la SJCE de 27 haberse pactado al objeto de completar
octubre 1998 (TJCE 1998, 255), el art. 11 de la Directi- la prestación del sistema de Seguridad
va 92/85 no se opone a que una cláusula de un contrato Social pues, en tal caso, y si tal se hubie-
de trabajo supedite, durante el permiso de maternidad a
ra establecido en el convenio colectivo
que se refiere el artículo 8 de la misma Directiva, el abo-
no de una retribución más elevada que la prestación
aplicable a la trabajadora –o en su con-
prevista por la legislación nacional en materia de permi- trato individual– es claro que ésta
so de maternidad al requisito de que la trabajadora se tendría derecho a que su prestación
comprometa a reintegrarse al trabajo después del parto económica por maternidad abarque,
durante al menos un mes so pena de tener que devolver asimismo, el importe correspondiente al
la diferencia entre el importe de la retribución que se le
complemento de la prestación por enfer-
haya pagado durante el permiso de maternidad y el de
dicha prestación, siempre que el importe de dicha pres- medad que pudiera corresponderle.
tación no sea inferior a los ingresos que percibiría la tra-
bajadora de que se trate, en virtud de la legislación Como es obvio, la Directiva también remi-
nacional aplicable en materia de Seguridad Social, en te a las legislaciones nacionales el eventual
caso de interrupción de sus actividades por motivos de establecimiento de requisitos o condiciones
salud. para acceder a la prestación por maternidad,

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

si bien se excluye radicalmente la posibilidad c) el acogimiento familiar, strictu sensu,


de que, entre dichos requisitos, se exija la tanto preadoptivo como permanente,
acreditación de períodos de trabajo previo
superiores a doce meses inmediatamente Es, precisamente, en el ámbito de los des-
anteriores a la fecha prevista para el parto. cansos por adopción y acogimiento familiar,
preadoptivo o permanente, donde se opera la
modificación, al prever el proyecto normativo
la protección económica «aunque éstos sean
2.2. La transposición al Derecho
provisionales». Se da, así, satisfacción, a nivel
español: condiciones actuales
legal, a una clamorosa demanda, planteada
y previsiones de futuro
tanto en el ámbito jurisdiccional54 como en la
a corto plazo
doctrina científica55 y en la práctica adminis-
trativa56, relativa a la necesaria inclusión,
En punto a todo ello, puede decirse que
como situación protegida, del acogimiento
nuestro panorama normativo interno resul-
provisional, si bien no del que como tal se
ta, ya de lege data, notablemente más genero-
constituye, sino del constituido en los casos
so en su transposición que las antedichas pre-
de oposición de los padres biológicos o de los
visiones de la Directiva 92/85/CE. Una pres-
tutores del menor al acogimiento preadoptivo
tación económica del 100% de la base regula-
o permanente, mientras se resuelve judicial-
dora por contingencias comunes, y una exi-
mente. Y ello, en base al preeminente interés
gencia de cotización previa de –como míni- del menor en tales casos.
mo– 180 días en los cinco últimos años ante-
riores al hecho causante, configuran una Con la proyectada inclusión de las situa-
horizonte prestacional bastante más satisfac- ciones de provisionalidad que puedan, even-
torio. tualmente, darse durante los procesos de
adopción o acogimiento preadoptivo o perma-
No obstante, han de señalarse, aquí, las nente, se avanza todavía más en el proceso
modificaciones previstas por el PLOI que –histórico, iniciado en 1989– de ampliación
quedan caracterizadas por un propósito cla- del bien jurídico tutelado, enriqueciendo y
ramente expansivo, orientado a la extensión potenciando de modo efectivo la entidad pro-
de la protección económica a un mayor núme- tectora de la institución de la «maternidad», y
ro de eventuales beneficiarias/os, y al estable- situándola cada vez más lejos (en cuanto a su
cimiento de un régimen jurídico claramente objeto de protección y en cuanto a su ratio) de
promocional de los beneficiarios y –sobre sus estrictas manifestaciones biológicas, así
todo– beneficiarias de la prestación; no obs- como de la institución de la Incapacidad Tem-
tante, –y, según se verᖠlas medidas proyec- poral, en tanto la misma queda configurada
tadas no quedan exentas de ciertos «claroscu- como contingencia vertebrada sobre el pilar
ros» de compleja justificación. básico de la exclusiva alteración de la salud y
sus efectos incapacitantes.

2.2.1. Las situaciones protegidas


54
Así, por todas, las STSJ Murcia (Social), de 14
A efectos de la prestación económica por noviembre 2000 (AS 2000, 3710) y Castilla y León
maternidad, el proyectado art. 133 bis (Valladolid), de 29 enero 2002 (JUR 2002, 74948).
TRLGSS establece, dentro del elenco de
55
Al respecto, vid. GARRIGUES GIMÉNEZ, A.: La Mater-
nidad y su consideración jurídico laboral y de seguridad
situaciones protegidas, las siguientes:
social, Madrid (Consejo Económico y Social de España),
p. 179.
a) la maternidad biológica, 56
De esta manera, la Resolución de la Secretaría de
b) la maternidad/paternidad adoptivas, Estado de la Seguridad Social, de 8 enero 2002.

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255
LEGISLACIÓN

2.2.2. Las personas beneficiarias –que la ley cifra en seis semanas– reponerse
físicamente del parto, y que es necesario que,
El PLOI viene a introducir nuevos e impor- durante el mismo, el sistema de Seguridad
tantes mecanismos de flexibilidad en los Social arbitre los mecanismos protectores
requisitos generales de acceso a la protección necesarios para evitar en lo posible una even-
económica dispensada por el sistema de tual desprotección económica (lo que, insisti-
Seguridad Social. Y es que, frente a la exigen- mos, parece ser la finalidad de la proyectada
cia clásica de afiliación, alta y cotización prestación no contributiva). Sin embargo, con
del/la solicitante, propia de la –criticada– esta previsión, el proyecto normativo acierta,
dinámica57 de las prestaciones contributivas, únicamente, a atajar las situaciones más gra-
el proyecto normativo establece un doble ves y perentorias, y desatiende otros bienes
mecanismo de cobertura, mediante el esta- jurídicos igualmente dignos de tutela: el cui-
blecimiento de los denominados «Supuesto dado del hijo (ya sea biológico o por adopción)
general» (relativo a la tradicional prestación o menor acogido, que va a requerir, por fuer-
contributiva por maternidad) y «Supuesto za, de un tiempo de dedicación que –de no
específico» (este último, contenido en los pro- cumplirse la exigencia de cotización previa–
yectados arts. 133 sexies y 133 septies–, com- no quedará, tampoco, cubierto por el sistema
prensivo de una prestación de naturaleza de Seguridad Social; igualmente, la pretendi-
expresamente reconocida como no contributi- da corresponsabilización del padre trabaja-
va, en la medida que el acceso a la misma dor quedará frustrada en el «supuesto espe-
queda previsto para «las trabajadoras por cial» proyectado pues, en tal situación, no
cuenta ajena que, en caso de parto, reúnan cabe cesión al padre de permiso alguno (ni,
todos los requisitos establecidos para acceder por ende, de disfrute por éste de prestación
a la prestación por maternidad regulada en la económica por maternidad), lo que, igual-
Sección anterior, salvo el período mínimo de mente, redunda en perjuicio del necesario
cotización establecido en el artículo 133 ter»). cuidado al recién nacido (en tal caso, y si cum-
De este modo, la existencia de este proyecta- ple los requisitos de afiliación, alta y cotiza-
do «supuesto específico» obedecería al propó- ción, el padre –y el hijo– deberá conformarse
sito de aliviar las situaciones de necesidad con el magro –y, a nuestro juicio poco operati-
derivadas de la situación de maternidad vo– permiso por paternidad, también previs-
cuando no se acrediten los períodos de cotiza- to por el PLOI).
ción requeridos para causar derecho a la
Además, el proyecto normativo amplía
prestación en el «supuesto general»; no obs-
considerablemente el período de referencia
tante, consideramos ciertamente insuficiente
para el cálculo del tiempo de cotización,
la regulación prevista para el mencionado
ampliación que, además, se opera en dos dis-
«supuesto especial».
tintos planos, al objeto de posibilitar un
Qué duda cabe que la mujer trabajadora mayor acceso a la prestación (en su modali-
que da a luz precisa, durante cierto tiempo dad de «supuesto general»): en este sentido, el
proyectado art. 133 ter exige, en primer tér-
mino, acreditar «un período mínimo de coti-
57
Y es que ese clasicismo puede ser tan intenso que zación de ciento ochenta días dentro de los
aproxima tales exigencias más a un modelo de seguros siete años inmediatamente anteriores al
sociales dispersos y fragmentados que a un sistema de momento de inicio del descanso»; a continua-
Seguridad Social público y moderno; al respecto, vid.
ción, el precepto proyectado añade la posibili-
TORRENTE GARÍ, S.: «El tratamiento normativo de la inca-
pacidad temporal y de la maternidad en la Ley 42/1994, dad de que, alternativamente, pueda acceder
de 30 de diciembre», Revista Técnico-Laboral, nº 37, acreditando un período cotizado de «trescien-
1997. tos sesenta y cinco días a lo largo de su vida

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

laboral con anterioridad a la mencionada los trabajadores varones, como la realidad


fecha». Esta vía facultativa para acreditar el demuestra con carácter general–) puede
cumplimiento del requisito de la cotización suponer la acreditación del período cotizado
previa será accesible tanto a la madre como en un lapso temporal rígido (los siete años
al padre en los supuestos de maternidad anteriores), con lo que la consideración de
adoptiva y acogimiento, si bien, en el caso de toda su vida laboral a tal efecto cobraría sen-
maternidad biológica, la madre trabajadora tido. Sin embargo, al circunscribirse este
será la única que pueda beneficiarse del cóm- trato diferenciado (entre madre y padre) a
puto de 365 días de cotización a lo largo de su los casos de maternidad/ paternidad biológi-
vida laboral pues, para el padre trabajador ca, el argumento anterior pierde sentido,
que se proponga disfrutar –previa cesión– pues las dificultades para acreditar los
del permiso por maternidad no cabrá, por períodos de cotización por parte de las muje-
expresa previsión legal, otra posibilidad que res trabajadoras también se darán para
la acreditación de los ciento ochenta días de aquéllas que vivan una maternidad adoptiva
cotización dentro de los siete años inmedia- o un acogimiento y, en cambio, en tales
tamente anteriores. Semejante tratamiento casos, el padre que vaya a compartir el per-
diferenciado en los supuestos de materni- miso por maternidad sí podrá, beneficiarse
dad/paternidad biológica parece pretender, del cómputo alternativo de 360 días a lo lar-
precisamente, reconducir al varón –en tales go de toda su vida laboral.
casos– al disfrute del permiso y la prestación
por parternidad prevista en los proyectados
arts. 133 octies, 133 nonies y 133 decies, para 2.2.3. La duración de la prestación
cuyo acceso sí se prevé –sin distinción entre
paternidad biológica y adoptiva o acogimien- También aquí, la introducción –por parte
to– la posibilidad de acreditar 365 días a lo del PLOI– del ya comentado «supuesto espe-
largo de toda su vida laboral previa. cial» de prestación por maternidad (la ya
comentada modalidad no contributiva) lleva
No acertamos a entender qué propósito aparejada la previsión de un régimen jurídico
inspira la apuntada diferencia, máxime diferenciado en el que resulta, además, espe-
cuando en la proyectada Exposición de Moti- cialmente llamativa la duración prevista
vos se proclama el fomento de «una mayor para la prestación económica en esa variante
corresponsabilidad entre mujeres y hombres no contributiva: según el párrafo segundo del
en la asunción de obligaciones familiares», lo proyectado art. 133 septies, «la duración de la
que, en nuestra opinión, no se alcanza, desde prestación (...), será de 42 días naturales a
luego, estableciendo un trato normativo pre- contar desde el parto». Tal extensión tempo-
ferente a favor de uno sólo de los progenito- ral coincide exactamente con las seis sema-
res –en este caso, la madre– en el acceso a la nas de duración del descanso puerperal obli-
prestación (y, por ende, en el disfrute com- gatorio con lo que, como ya se indicó en pági-
partido del permiso) por maternidad, y nas anteriores, esta nueva modalidad se pro-
orientando al otro –al padre– al uso del pone subvenir, meramente, la situación de
mucho más reducido permiso (y prestación) necesidad económica derivada del forzoso
por paternidad. Quizá el tratamiento más descanso posterior al parto.
beneficioso de la madre pudiera justificarse
por la dificultad que, para las mujeres traba- Por lo que se refiere a la prestación en su
jadoras (cuyas responsabilidades familiares modalidad «normal» (el denominado «supues-
previas –generalmente asumidas en exclusi- to general») resulta imprescindible recordar,
va pueden haber interrumpido su trayecto- en esta sede, que el permiso por maternidad
ria laboral, a diferencia de lo que sucede con ve ampliada su duración –según el proyecto

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LEGISLACIÓN

normativo– en dos semanas adicionales en laborales. En esta norma, por primera vez,
los casos en que el hijo/a (biológico/a, adopti- quedaría caracterizado el permiso por pater-
vo/a o acogido/a) presente alguna discapaci- nidad como figura diferenciada del permiso
dad; por ello, y en la medida que la duración por maternidad y también del permiso
de la prestación por maternidad viene esta- parental, como un derecho exclusivo del
blecida de manera refleja a la duración del padre a ausentarse con mantenimiento de
permiso, la extensión temporal de aquélla, en sus derechos, incluida la retribución con
estos casos, viene, asimismo, ampliada. motivo del nacimiento del hijo

Posteriormente la Directiva 2002/73/CE


2.2.4. El importe de la prestación del Parlamento Europeo y del Consejo señala
en su art. 2.7 que su contenido no afectará al
Tal como previene el proyectado art. 133 derecho de los Estados miembros a reconocer
septies TRLGSS, «la cuantía de la prestación derechos específicos al permiso por paterni-
será la establecida para el subsidio por dad. Los Estados miembros que reconozcan
desempleo en el artículo 217.2, en función de tales derechos tomarán las medidas necesa-
las responsabilidades familiares apreciadas rias para proteger a los trabajadores del des-
conforme al artículo 215.2, salvo que la base pido motivado por el ejercicio de dichos dere-
reguladora calculada conforme al artículo chos y garantizarán que al término de dicho
133 quater o a la disposición adicional sépti- permiso tengan derecho a reintegrarse a su
ma fuese de cuantía inferior, en cuyo caso se puesto de trabajo o a uno equivalente en con-
estará a ésta». Encontramos aquí una nueva diciones que no les resulten menos favora-
evidencia del propósito netamente asisten- bles, y a beneficiarse de cualquier mejora de
cial y del carácter de última ratio prestacio- trabajo a la que hubiera podido tener derecho
nal que se atribuye a esta procura económica durante su ausencia. Por tanto otorga a una
en el proyecto normativo. protección a los trabajadores que disfruten de
un permiso por paternidad similar a la pre-
vista para las trabajadoras para el permiso
3. PERMISO POR PATERNIDAD por maternidad58 Recientemente la Directiva
Y ADOPCIÓN 2006/54 regula el permiso por paternidad en
términos prácticamente idénticos a los esta-
Sin la participación del padre no puede blecidos en la Directiva 2002/73, que inciden
haber un reparto equilibrado de las respon- en configurar el alcance de esta figura59. De
sabilidades familiares, lo que obviamente
dificulta el acceso y, sobre todo, la perma-
nencia de las mujeres en el mercado de tra- 58
DE MIGUEL DE LA CALLE, P.: «Igualdad de oportuni-
bajo. En la Resolución del Consejo y de los dades entre hombres y mujeres Acceso al empleo, a la
Ministros de Trabajo y Asuntos Sociales, promoción y a la formación profesionales. La modifica-
ción de la Directiva 76/207/CE del Consejo, por la Direc-
reunidos en el seno del Consejo, de 29 de
tiva 2002/73/CE del Parlamento Europeo y del Conse-
junio del 2000, relativa a la participación jo», RMTAS, nº 146, 2006, p. 145 y p. 146.
equilibrada de hombres y mujeres en la acti- 59
Así pues, en su artículo 16 la Directiva 2006/54,
vidad profesional y en la vida familiar se de 5 de julio que señala: «...Los Estados miembros que
alienta a los estados Miembros a evaluar la reconozcan estos derechos tomarán las medidas necesa-
rias para proteger a los trabajadores del despido motiva-
posibilidad de que los respectivos ordena-
do por el ejercicio de dichos derechos y garantizarán
mientos jurídicos reconozcan a los hombres que al término de dicho permiso, tengan derecho a rein-
trabajadores un derecho individual e tegrarse a su puesto de trabajo o a uno equivalente, en
intransferible al permiso de paternidad, condiciones que no le resulten menos favorables, y a
manteniendo al mismo tiempo los derechos beneficiarse de cualquier mejora en las condiciones de

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

su regulación habrá que deducir varias pudieran disfrutar del permiso por materni-
cosas: dad, ya que en la realidad, hasta el momento
presente, el disfrute del permiso por mater-
• Primero. El Derecho comunitario no nidad ha correspondido casi de manera
exige el reconocimiento de un permiso exclusiva a la madre como lo demuestra el
por paternidad a los Estados miembros, hecho de que en el año 2003 de los 239.858
pero sí tienen el derecho a reconocerlo, permisos por maternidad disfrutados a nivel
siempre ajustándose a las reglas conte- nacional, 236.162 correspondieron a mujeres
nidas en las Directivas 2002/73 y (98,46 %). El hecho de que el permiso por
2006/54, que explicaremos a continua- paternidad se configurase como una parte
ción. La regulación del permiso por del permiso por maternidad y por tanto como
paternidad no es por tanto una obliga- un derecho derivado del padre ha significado
ción de los Estados miembros. en no pocas ocasiones, la exclusión del padre
en el disfrute del mismo, y, sobre todo, de la
• Segundo. El Derecho comunitario
correspondiente prestación, aun cuando
caracteriza el permiso por paternidad
ambos progenitores estuviesen inicialmente
como un derecho específico, distinto del
de acuerdo en repartir el disfrute de estos
permiso por maternidad y parental,
períodos. La necesidad de que la madre traba-
exclusivo del padre.
je y cumpla determinados requisitos para dis-
• Tercero. El Derecho comunitario no frutar del descanso y acceder al prestación por
establece una duración mínima al per- maternidad, y así poderle transmitir al padre
miso por paternidad en caso de ser reco- estos derechos, si ese es el deseo de ambos pro-
nocido por los Estados miembros, como genitores ha generado un buen número de
sí lo hace para el permiso de materni- resoluciones de los Tribunales Superiores de
dad o el parental. Justicia y del Tribunal Supremo60 sobre la

• Cuarto. El Derecho comunitario reco-


noce garantías para la eficacia del per- 60
Tal ha servido para denegar el disfrute del permi-
miso por paternidad similares a las del
so y el acceso a la prestación por el padre –trabajador
permiso por maternidad. Durante su por cuenta ajena– en los supuestos de madre trabajado-
ejercicio el trabajador no podrá ser des- r a p o r c u e n t a p r o p i a a f i l i a d a a l R E TA [ S T S J
pedido, ni tampoco en el momento de su Andalucía/Granada (Social), de 18 diciembre 2000 (AS
reincorporación(ni en el período poste- 2001, 970); en el mismo sentido, STSJ Galicia (Social),
rior a la misma). Se mantendrán los de 19 junio 1999 (AS 1999, 1971), STSJ Murcia (Social),
de 30 septiembre 2002 (AS 2002, 3004) y STSJ Madrid
derechos inherentes al contrato de tra-
(Social), de 26 febrero 2003 (AS 2003, 3015)] o Procu-
bajo durante su transcurso, incluida la radora de los Tribunales [STSJ Castilla-La Mancha
retribución, así como el beneficio de una (Social), de 9 noviembre 1998 (AS 1998, 4250)]. Véase
prestación adecuada. al respecto, NÚÑEZ-CORTES CONTRERAS, P. y CEBRIÁN CARRI-
LLO, A: El reflejo en la Jurisprudencia de las medidas de
En España todavía es muy escaso el conciliación de vida laboral y personal. Consejería de
número de padres que hacen uso los derechos Empleo y Mujer, Comunidad de Madrid, Madrid, 2006.
que les son reconocidos por la Ley 39/99 para No obstante, y hasta tiempos recientes, no ha sido
ésta una cuestión pacífica, puesto que se han dado algu-
el ejercicio de dichas responsabilidades fami-
nas sentencias de los TTSSJJ que, razonando en sentido
liares, en concreto del período (de diez sema- opuesto, abogaban por una interpretación amplia del
nas como máximo) que, en la actualidad, artículo 48.4 ET, y en las que cupo el reconocimiento del
derecho al disfrute paterno de la prestación cuando la
madre fuera abogada ejerciente adscrita a la Mutualidad
trabajo a las que hubieran podido tener derecho duran- General de la Abogacía [SSTSJ País Vasco (Social), de 9
te su ausencia». febrero 1999 (AS 1999, 563), y de 16 noviembre 1999

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259
LEGISLACIÓN

delimitación del ámbito subjetivo de la pro- po parcial en jornada de al menos un cincuen-


tección por maternidad61. ta por ciento de la jornada completa. El PLOI,
en un nuevo segundo párrafo del apartado 1
El modelo de permiso por paternidad reco- del art. 48 ET, reconoce que el trabajador que
nocido en el Derecho comunitario como un disfrute del permiso por paternidad se benefi-
permiso específico, autónomo e independien- cie de cualquier mejora en las condiciones de
te del de maternidad es muy posible que con- trabajo a la que haya podido tener derecho
tribuya, con el paso del tiempo, a incrementar durante su disfrute. Asimismo se declara la
el número de varones que lo disfruten. La nulidad de los despidos disciplinarios y extin-
trasposición de esta figura a nuestro derecho ciones objetivas durante su transcurso y tam-
interno se realizará muy próximamente por bién después de haberse reintegrado tras su
la proyectada Ley Orgánica de Igualdad que, disfrute siempre que no hayan transcurrido
entre los diversos modelos de permiso por nueve meses.
paternidad, ha incorporado un nuevo permi-
Si efectivamente a través de todas estas
so por paternidad autónomo, no supeditado a
medidas con el transcurso del tiempo llega a
la opción materna a favor de su disfrute, ni al
potenciarse la participación del padre en el
cumplimiento por parte de la madre de los
cuidado del hijo; permitirá a la mujer ausen-
requisitos para su disfrute, cuya duración al
tarse menos tiempo del trabajo por este moti-
menos sea de ocho días. La proyectada norma
vo, pudiendo reincorporarse anticipadamente
da sobradamente cumplimiento a las exigen-
en caso de necesidad o conveniencia y, así, se
cias de las Directivas 2002/73 y 2006/54 para
favorecerá tanto la estabilidad en el empleo
el caso de que se regule el permiso por pater-
como la carrera profesional de la madre tra-
nidad. Ya que contempla en un nuevo art. 48
bajadora, sin desatender por ello el cuidado
bis ET un permiso por paternidad de ocho del hijo.
días ininterrumpidos en caso de nacimiento
de hijo, adopción y acogimiento, ampliable en Finalmente, habría que hacer una breve
caso de parto, adopción o acogimiento múlti- alusión a la regulación, en términos idénticos
ples; dicho permiso podrá disfrutarse a tiem- a los establecidos para el permiso por paterni-
dad, del permiso de adopción por las dos Direc-
tivas, tanto 2002/73 (art. 2.7.) como la 2006/54
(AS 1999, 4432)], o Registradora de la Propiedad [STSJ (art. 16). Respecto a las exigencias en relación
Navarra (Social), de 29 febrero 2000 (AS 2000, 178)]. a su regulación por los Estados miembros, las
En cualquier caso, la cuestión queda zanjada por las
modificaciones que introducirá la proyectada
SSTS (Social) –recaídas ambas en RCUD–, de 20
noviembre 2001 (RJ 2002, 360), y de 28 diciembre Ley de Igualdad, reflejadas ya en el Proyecto
2000 (RJ 2001, 1882), según la cual: Ley del pasado mes de junio, dan cumplimien-
«A) De la redacción del art. 48.4 del ET (dictado en to sobradamente a las garantías para su ejer-
desarrollo del art. 39.1 de la Constitución Española, a cicio establecidas en la normativa comunita-
cuyo tenor los poderes públicos aseguran la protección ria. A saber, además de la garantía de nulidad
social, económica y jurídica de la familia) se desprende
del despido y la extinción por causas objetivas
que la titular del derecho que nos ocupa es la madre,
pero queda facultada para transferir el disfrute parcial de durante su transcurso, ya existente en la Ley
ese derecho al padre. 39/99, amplía dicha garantía al momento de la
B) Solamente quien es titular de ese derecho puede reincorporación tras su disfrute, siempre que
cederlo, de tal suerte que para que el padre, por más que no hayan transcurrido mas de nueve meses, y
esté afiliado a la Seguridad Social, pueda disfrutarlo, es también, como novedad, contiene una previ-
preciso que la madre se lo ceda».
sión para que quien lo disfrute se beneficie de
61
NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS, P. y CEBRIÁN CARRILLO,
A.: El reflejo en la Jurisprudencia de las medidas de Con- cualquier mejora en las condiciones de trabajo
ciliación de vida laboral y personal, Comunidad de a la que haya podido tener derecho durante su
Madrid, 2006, p. 35. transcurso.

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

4. ALGUNAS REFLEXIONES EN TORNO pla, asimismo, las cuestiones relativas a los


A LAS DISPENSAS DE TRABAJO permisos y licencias y a la protección social de
DURANTE EL EMBARAZO la trabajadora en tales situaciones.
Y LA LACTANCIA POR EXPOSICIÓN
A LOS RIESGOS LABORALES La protección dispensada por la norma se
extiende –art.1–, de modo consecuente con la
4.1. Planteamiento normativo: consideración dinámica de la maternidad que
la protección de la «maternidad» acoge (entendida ésta como proceso), a la ges-
tación, el parto y continúa con la lactancia del
Los arts. 9 y 15 de la Directiva Marco hijo nacido). En este sentido, pues, no puede
89/391/CEE exigen una atención prioritaria y sino concluirse que su finalidad no es otra que
una singular protección a las condiciones de la tutela de la salud y seguridad, en el ámbito
seguridad y salud en el trabajo de los trabaja- del trabajo, de la mujer embarazada, puérpe-
dores/as incluidos en los denominados «colec- ra o lactante pero, también, la del feto o hijo a
tivos especialmente sensibles», comprendien- quienes –aún en ausencia de referencia
do bajo tal denominación a quienes, por su expresa–, hay que entender implícitamente
particular sensibilidad o estado, puedan comprendidos en el ámbito subjetivo de pro-
sufrir unas consecuencias distintas a las del tección, por cuanto las repercusiones de la
resto de los trabajadores de su misma empre- exposición a los riesgos pueden, incluso –por
sa y que soporten semejantes condiciones de la naturaleza y efectos de los mismos–, afec-
trabajo 62 . En punto a ello, la Directiva tarles a ellos en exclusiva y no necesariamen-
92/85/CEE, del Consejo, de 19 de octubre de te la mujer.
1992, relativa a la aplicación de medidas para
Embarazo, puerperio o maternidad y lac-
promover la mejora de la seguridad y la salud
tancia delimitan, así, el ámbito objetivo de
de la trabajadora embarazada, que haya dado
referencia sobre el que debe operar la espe-
a luz o esté en período de lactancia (instituida
cial protección del empleador frente a los ries-
en décima Directiva específica, ex art. 16.1 de
gos laborales.Y es que los cambios –anatómi-
la Directiva 89/391/CEE), entiende que
cos, fisiológicos y psicológicos– que la mujer
determinadas actividades pueden presentar
experimenta durante la gestación resultan
un riesgo específico para la trabajadora
especialmente importantes, y pueden inten-
embarazada, que haya dado a luz, o en perío-
sificar los riesgos que, para la salud de la tra-
do de lactancia, frente a agentes, procedi-
bajadora, se deriven de las condiciones de tra-
mientos o condiciones de trabajo peligrosos y
bajo (haciéndola, quizá, más sensible a la
que, por tanto, deben recibir una protección
enfermedad o al accidente relacionados con el
reforzada63. La Directiva 92/85/CEE contem-
mismo). Además, la exposición de la mujer
gestante a ciertas condiciones de trabajo pro-
62
BLASCO MAYOR, A.: Concepto, fuentes y alcance
voca que el feto quede, a su vez, a merced de
del derecho a la seguridad y salud en el trabajo, Santan- la influencia de una serie de riesgos que pue-
der (Gobierno de Cantabria), 1998, p. 64. den comprometer, ya la viabilidad misma del
63
Y ello, en tanto en cuanto «unas condiciones embarazo, ya la salud o la integridad física o
(laborales) que pueden considerarse aceptables en situa- psíquica del futuro hijo.
ciones normales pueden dejar de serlo durante el emba-
razo»; COMISIÓN DE LAS COMUNIDADES EUROPEAS: Directri- El parto, por su parte, discurre, general-
ces para la evaluación de los agentes químicos, físicos y mente, sin incidencias para la salud de la
biológicos, así como de los procedimientos industriales
considerados peligrosos para la salud o la seguridad de
madre pero, en ocasiones, puede determinar
las trabajadoras embarazadas, que hayan dado a luz la aparición de hemorragias e infecciones, o
recientemente o estén en período de lactancia (Directiva ni siquiera producirse (por llevarse a cabo la
92/85/CEE), Bruselas, 05.10.2000, COM(2000) 466 final. «cesárea»), todo lo cual puede ocasionar en la

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 67


261
LEGISLACIÓN

mujer puérpera en un estado físico y fisiológi- 4.2. Las dispensas del trabajo
co de inusual agotamiento y, por consiguien- por riesgo para el embarazo
te, de especial vulnerabilidad frente a cual- y por riesgo para la lactancia
quier factor potencialmente lesivo de su y su configuración
salud (entre ellos, los riesgos inherentes a su
actividad laboral). Tampoco cabe desconocer La licencia o dispensa del trabajo –ya afec-
la problemática de los partos prematuros en te a la situación de embarazo o a la de lactan-
los que la delicada situación de salud del hijo cia–, contempladas por el art. 5.3 y 4, en rela-
le hace acreedor de especialísimos cuidados. ción los los arts. 6.1 y 7.2.b de la Directiva
92/85/CEE, está dirigida, en el primer caso, a
Finalmente, la lactancia es un período de preservar la salud de la trabajadora, la del
duración variable –de varios meses a varios feto y la viabilidad misma del embarazo en
años, incluso–64, pudiendo llevarse a cabo de los supuestos de exposición de aquélla a ries-
manera «natural» –a base de la leche produci- gos profesionales presentes en su puesto de
da y segregada por la madre–, artificial –a trabajo, cuando no sea posible la adaptación
base de leches preparadas industrialmente y de las condiciones y/o del tiempo de trabajo,
administradas en biberón– o mixta. La lac- ni tampoco haya resultado factible la movili-
tancia natural se realizará –por naturaleza– dad funcional, pues, en tal supuesto, la no
sólo por la madre trabajadora; en la artificial admisión de la dispensa del trabajo equi-
o mixta podrán concurrir, también, el padre u valdría a condenar a la trabajadora que desee
otras personas. La lactancia natural implica permanecer activa durante el embarazo a
un contacto muy estrecho y repetido con el una irremediable exposición –con el peligro
niño y, eventualmente, la exposición de éste a que ello conllevaría para los bienes jurídicos
los agentes (tóxicos, infecciosos, físicos, etc.) básicos antes mencionados– a tales riesgos o,
presentes en el medio laboral a los que, a su bien, abocarla a un desistimiento no deseado
vez, haya quedado expuesta la madre traba- de su contrato de trabajo.
jadora, y que pueden secretarse con la leche
materna; sin embargo y además, la actividad En el supuesto de protección de la lactan-
de lactancia, en cualquiera de sus modalida- cia, el derecho a la interrupción de la presta-
des, puede ocasionar el contacto del bebé con ción de trabajo se configura al objeto de pre-
servar la salud del hijo lactante, en el caso de
estos agentes a través de otras vías (cutánea,
exposición de la trabajadora a riesgos profe-
respiratoria, por la ropa, etc.65), lo que impli-
sionales presentes en su puesto de trabajo.
ca la existencia de cauces adicionales de
En cualquier caso, la dispensa del trabajo,
transferencia al recién nacido que incum-
como en el supuesto de protección del emba-
birán, por ello, no sólo a la madre, sino tam-
razo, sólo será posible como última ratio,
bién al padre cuando éste se encargue de la
cuando no hayan sido posibles ni la adapta-
lactación artificial.
ción de las condiciones y/o del tiempo de tra-
bajo, ni la movilidad funcional de la trabaja-
64
Y, de acuerdo con tal variabilidad (dependiendo del dora afectada.
caso concreto), ha de definirse la duración temporal de las
medidas protectoras específicas de seguridad y salud. La dispensa de trabajo –por cualquiera de
65
Vid. COMISIÓN DE LAS C OMUNIDADES E UROPEAS: las dos causas– actúa, junto con la expresa
Directrices para la evaluación de los agentes químicos, prohibición de despido66, como garantía de
físicos y biológicos, así como de los procedimientos conservación o estabilidad del empleo de la
industriales considerados peligrosos para la salud o la
seguridad de las trabajadoras embarazadas, que hayan
dado a luz recientemente o estén en período de lactancia
(Directiva 92/85/CEE) Bruselas, 05.10.2000, COM 66
Contemplada por el art. 10.1 de la propia Directi-
(2000) 466 final. va.

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262
AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

trabajadora, alejada temporalmente del tra- con la prestación por maternidad–; en efecto,
bajo por la inevitable interacción de las condi- y sólo para esta última, prevé el art. 11.3 que
ciones del mismo con su estado de gestación o se entenderá que la misma cumple tal requi-
con la situación de lactancia del hijo, hasta sito de adecuación –según se vió en páginas
que el riesgo de interacción cese (respectiva- anteriores– «cuando garantice unos ingresos
mente: por llegar a término la gestación, por equivalentes, como mínimo, a los que reci-
interrumpirse ésta o, constante aún la mis- biría la trabajadora en caso de interrupción
ma, porque se pudiera proceder a la reincor- de sus actividades por motivos de salud, den-
poración de la trabajadora a un puesto ade- tro de un posible límite máximo determinado
cuado a su estado; o, en su caso –refiriéndose por las legislaciones nacionales». Entende-
a la lactancia– por concluir esta modalidad mos que, pese al silencio de la norma, razo-
alimentaria o por resultar posible la movili- nes de tutela antiscriminatoria obligan a
dad de la trabajadora a un puesto de trabajo que, en ambos casos, el criterio de adecua-
compatible con aquélla). ción presente el mismo alcance, pues carece
de sentido reconocer la posibilidad de una
Por su parte, la remuneración o la presta- cobertura económica inferior a la del permi-
ción adecuada a que se refiere el art. 11.1 so por maternidad a unas situaciones –como
para estos casos opera como salvaguarda de la del riesgo laboral para las situaciones de
la capacidad económica de la mujer durante embarazo o de lactancia (esta última, siquie-
el tiempo de dispensa, evitando que los condi- ra, en las condiciones de restrictividad subje-
cionantes de índole económica condicionen o tiva en que, como se podrá después de mani-
limiten las garantías de ejercicio del derecho fiesto, viene actualmente definida)– que
a la dispensa del trabajo67. La «remunera- hacen a la mujer de peor condición que el
ción», si la normativa o práctica nacional de varón por razones exclusivamente atinentes
los Estados miembros hace corresponsable al a su condición biológica/sexual68.
empleador, en alguna medida, de la carga
Finalmente, la Directiva prevé (art. 11.4)
económica que garantiza el sostenimiento de
que los Estados miembros puedan someter el
la trabajadora durante el ejercicio del dere- derecho a la remuneración o a la prestación al
cho a la protección de su embarazo o de su cumplimiento de ciertos requisitos por las
situación de lactancia; la «prestación», cuan-
do dicho peso recaiga sobre el sistema público
de protección social.
68
Razones que no impiden al legislador español
La «adecuación» de la prestación (califica- dispensar, merced al deliberado silencio de la Directi-
tivo utilizado por la Directiva para estable- va en ese punto, dispensar una protección económica
cer un cierto carácter «condicionado» de baja intensidad (75% de la base reguladora por con-
–mediante la exigencia de su suficiencia e tengencias comunes) a la situación de suspensión por
idoneidad– a las medidas de protección riesgo durante el embarazo, frente a la correspondien-
te a la situación de maternidad (100% de la base regu-
económica), en este caso, no queda definida
ladora). Las previsiones respecto de la aún non nata
por la norma –a diferencia de lo que sucede situación/prestación por riesgo durante la lactancia (pre-
vista en el P. L. Orgánica para la Igualdad efectiva entre
mujeres y hombres) refieren los mismos términos y con-
67
En este sentido, y según interpreta la STJCE (Sala diciones para esta nueva contingencia. En cualquiera de
Sexta), de 19 noviembre 1998 (TJCE 1998, 280), la los dos casos, y como señalara GARCÍA NINET [«La presta-
Directiva 92/85 se opone a una norma interna que ción económica por riesgo durante el embarazo», en Tri-
prevé que el empresario –si considera que no puede dar buna Social, nº 139 (julio 2002), pág. 8], la base regula-
trabajo a una mujer embarazada que no esté en situa- dora a considerar debería ser la de contingencias profe-
ción de incapacidad laboral– pueda obligarla a dejar de sionales, «pues en bastante medida ahí está la causa de
trabajar sin pagarle la totalidad de su salario. dicha baja».

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263
LEGISLACIÓN

trabajadoras69 (para el caso de maternidad mixta o artificial–. Tal conclusión, no obstan-


–art. 11.2– se prohibe de manera expresa y te, entra en abierto conflicto con el tenor lite-
radical la exigencia de períodos de trabajo ral de la Directiva 92/85/CEE que, si bien se
previo superiores a doce meses inmediata- refiere a la trabajadora embarazada, a la
mente anteriores a la fecha prevista para el puérpera y a la lactante, en momento alguno
parto). alude al padre trabajador implicado en la lac-
tancia.

Entendemos que no sólo la lactancia natu-


4.3. Las carencias manifiestas
ral, sino también la artificial, debería quedar
de la dispensa del trabajo comprendida dentro del elenco de situaciones
por riesgo para la situación protegidas por la Directiva y que, consecuen-
de lactancia: las Directrices temente, la protección especial frente a los
de la Comisión de las Comunidades riesgos laborales que la norma dispensa a las
Europeas para la aplicación trabajadoras lactantes y a sus hijos debería
de la Directiva 92/85/CEE dispensarse, también, a aquéllas que emple-
y su paradójica falta de reflejo en la lactancia artificial, a los trabajadores
normativo varones en los supuestos de lactación artifi-
cial o mixta desarrollada o coadyuvada por
De acuerdo con los supuestos o estados ellos y, asimismo, en uno y otro caso, a los
biológicos contemplados como por la norma, y hijos sometidos a dichas modalidades de lac-
puestos aquéllos en relación con la pluralidad tancia. Tal inclusión queda, en nuestra opi-
y heterosubjetividad de los bienes jurídicos nión, basada en un triple orden de considera-
protegidos, hubiera cabido esperar una cierta ciones.
extensión subjetiva de la protección normati-
a) En primer lugar, la Directiva 92/85/
va, abarcando no sólo a la trabajadora emba-
CEE alude a la lactancia «en el sentido
razada, a la trabajadora que haya dado a luz
de las legislaciones y/o prácticas
recientemente y a la trabajadora en período de
nacionales», lo que no puede descono-
lactancia, sino, además, al padre trabajador
cer situaciones –como la que aquí con-
que colabora (o, incluso, desarrolla en exclusi-
sideramos– que, aún estando contem-
va70) una actividad de lactancia –obviamente pladas por los Estados miembros no se
ajusten conceptual o terminológica-
mente a lo prevenido por la Directi-
69
De nuevo podemos ilustrar esta previsión con las
disposiciones establecidas en nuestro Derecho interno, va71.
conforme al cual, y para acceder a la prestación por ries-
go durante el embarazo, el art. 135.1 TRLGSS exige un
período de cotización de 180 días dentro de los 5 años
inmediatamente anteriores a la fecha en que se inicie la
suspensión del contrato de trabajo. No obstante, el P.L.
71
Como ejemplo, recordar que la normativa
Orgánica para la Igualdad efectiva entre mujeres y hom- española –el TRLGSS (art. 21.c), el ET (art. 37.4 y 6) y la
bres –aludido en la nota precedente– prevé la modifica- LPRL (art. 26.4) se refieren, sin más concreción ni adje-
ción del indicado precepto, en el sentido de, homoge- tivación, a la lactancia en sentido amplio–; es más, inclu-
neizando los regímenes de la prestación por riesgo so en el caso del precepto estatutario se prevé expresa-
durante el embarazo y de la proyectada por riesgo mente la posibilidad de disfrute indistinto del permiso
durante la lactancia, eliminar la exigencia de período por lactancia por la madre o el padre, asumiendo la
mínimo de cotización. eventual responsabilización del trabajador frente a la
70
Piénsese tanto en la –ciertamente poco frecuen- crianza de su hijo lo que, necesariamente, presupone la
te– asunción libre de esta función por el padre, como en opción legislativa por un concepto amplio de «lactan-
el caso –afortunadamente, también, inhabitual pero, no cia», comprensivo, por consiguiente, de las modalidades
por ello, imposible– de fallecimiento de la madre. mixta y artificial.

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

b) En segundo lugar, que como la propia c) En tercer y último lugar, una norma
Comisión de las Comunidades Europe- que comprenda como objeto de protec-
as pone de manifiesto72, existen exposi- ción la salud de la mujer, pero, tam-
ciones a agentes lesivos que afectan al bién, la del hijo lactante no puede
lactante y, no precisamente, a través dejar inerme a éste por el mero hecho
de la leche materna, sino por otras vías de ser atendido por su padre (a mayor
(«la piel de la madre»73, «contacto físico abundamiento, cuando es propósito
cercano»74, o «de la piel o la ropa» de la explícito en el Derecho de la Unión
madre o de quien mantenga un estre- Europea integrar al varón en las res-
cho contacto con la piel del lactan- ponsabilidades y tareas inherentes a
te75)76; obviamente, tales exposiciones la crianza y cuidado de los hijos77);
se producirán igualmente cuando sea resulta inadecuado que una Directiva,
el padre (su piel, ropa, o su contacto cuya finalidad última, por otra parte,
físico cercano) quien atienda al niño, lo no es, exclusivamente, la aplicación
que, indiscutiblemente sucede en el del principio de igualdad de oportuni-
caso de una lactancia artificial o mixta dades, sino, sobre todo, la protección
en la que el varón participe. del derecho a la vida, a la integridad y
a la salud y su preservación frente a
los riesgos laborales, desconozca la
72
Vid. COMISIÓN DE LAS C OMUNIDADES EUROPEAS: situción descrita78.
Directrices para la evaluación de los agentes químicos,
físicos y biológicos, así como de los procedimientos Con certeza, la razón de ser de tan inexpli-
industriales considerados peligrosos para la salud o la cable carencia deba buscarse en la ratio com-
seguridad de las trabajadoras embarazadas, que hayan pleja de la Directiva 92/85/CEE, por cuanto,
dado a luz recientemente o estén en período de lactancia en ella, el propósito relacionado con la salud
(Directiva 92/85/CEE), Bruselas, 05.10.2000,
laboral se combina y coordina con otros de
COM(2000) 466 final.
73
Ibídem; «Radiaciones ionizantes. (....) Si una protección social y de empleo, que la convier-
madre en período de lactancia manipula líquidos o pol- ten en un instrumento expresivo de una polí-
vos radiactivos, su hijo podría estar expuesto, en particu-
lar a través de la contaminación de la piel de la madre».
74
Ibídem; «Agentes biológicos de los grupos 2, 3 y 4
(...). Estos agentes pueden transmitirse (...) o a través del 77
Así lo entiende la UE en la Directiva 96/34/CE y la
contacto físico cercano entre la madre y el niño. Ejemplo Resolución del Consejo y de los ministros de trabajo y
de agentes que podrían afectar al niño por una de estas asuntos sociales, reunidos en el seno del Consejo, de 29
vías son: la hepatitis B, la hepatitis C, el HIV (el virus del de junio de 2000, relativa a la participación equilibrada
SIDA), el herpes, la tuberculosis, la sífilis, la varicela y el de hombres y mujeres en la actividad profesional y en la
tifus.» vida familiar [Diario Oficial C 218 de 31.7.2000], según
75
Ibídem; «Agentes químicos cuyo peligro de absor- la cual se han de reforzar las medidas que favorezcan un
ción cutánea es conocido (es decir, que pueden absor- reparto equilibrado entre los trabajadores –hombres y
berse a través de la piel). Se incluyen algunos pesticidas. mujeres– de los cuidados que deben prestarse a los
Algunos agentes químicos pueden también penetrar por hijos, personas de edad, personas con discapacidad y
la piel intacta y ser absorbidos por el organismo con efec- otras dependientes de ellos.
tos nocivos para éste. (...) La absorción por la piel puede E, incluso, el propio preámbulo de la Directiva
ocurrir debido a una contaminación localizada, por 92785/CEE reconoce expresamente que «la protección
ejemplo, una salpicadura sobre la piel o la ropa o, en de la seguridad y de la salud de la trabajadora embara-
determinados casos, por la exposición a altas concentra- zada, que haya dado a luz o en período de lactancia, no
ciones en la atmósfera». debe desfavorecer a las mujeres en el mercado de tra-
76
Así es reconocido, incluso, por quienes entienden bajo y no debe atentar contra las directivas en materia
incluida, meramente, la lactancia natural y, por ende, a de igualdad de trato entre hombres y mujeres».
la trabajadora lactante y a su hijo. Vid. PÉREZ DEL RÍO, T. y 78
Sobre el particular, vid. in extenso, GARRIGUES
BALLESTER PASTOR, A.: Mujer y salud laboral, Madrid (La GIMÉNEZ, A.: La maternidad y su consideración jurídico-
Ley), 2000, pp. 30 y 31. laboral y de seguridad social, Madrid (CES), 2004.

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LEGISLACIÓN

tica social «de fusión» (preventiva de riesgos pectiva de política social– la preterición
laborales, a la vez que de tutela antidiscrimi- legal de este supuesto, como habilitante
natoria)79,80, que gana en amplitud pero pier- para la apertura de un período suspensivo
de en profundidad –lamentablemente– en su del contrato de trabajo –análogo al habilita-
dimensión protectora de la vida, integridad do para el riesgo durante el embarazo– con
física y salud del hijo lactante en el caso de el consecuente establecimiento de una pres-
lactancia mixta o artificial. tación económica por parte del sistema de la
Seguridad Social; qué duda cabe que la difi-
cultad de acotar normativamente el período
4.4. Claroscuros de la regulación real de lactancia (variable, en cada caso con-
de la suspensión por riesgo creto y, en ocasiones, pudiendo extenderse
durante la lactancia en el PLOI varios años –a criterio de la mujer y/o del
pediatra que la atiende–) podría erigirse en
4.4.1. La situación suspensiva argumento para tal omisión legal. Sin
embargo, resulta inadmisible la total des-
La Ley 31/1995, de Prevención de riesgos protección en que la trabajadora lactante y
laborales no extiende el derecho a la dispen- su hijo quedan en tal caso, cuando no cabe la
sa del trabajo a las situaciones de lactancia aplicación de las previas medidas de protec-
por lo que, en caso de que las condiciones de ción y prevención. Y es que, en dicho supues-
seguridad y salud de la trabajadora supon- to, sólo resultan posibles las siguientes
gan un riesgo para la salud del hijo lactante, alternativas:
y resultando las previas medidas preventi-
vas (adaptación de las condiciones del pues- a) la continuidad de la trabajadora (y,
to y/o del tiempo de trabajo o, –en su caso–, por ende, del hijo) en la exposición a
la movilidad funcional), técnica u objetiva- los agentes lesivos (consecuencia que,
mente imposibles o no exigibles razonable- en absoluto, puede ser admitida por el
mente –por motivos justificados–, no cabrá legislador);
el paso de la trabajadora afectada a la situa-
b) el abandono –definitivo y sin protec-
ción de suspensión del contrato de trabajo
ción social alguna– de dicho empleo
por riesgo durante el embarazo. Resulta
por parte de la mujer;
inexplicable –y censurable, desde una pers-
c) desde una perspectiva pragmática
que, con toda certeza, debe haber
79
En este sentido, GARRIGUES GIMÉNEZ, A.: «Incapaci-
dad temporal o maternidad. Interrupción del embarazo:
pasado por la imaginación del legisla-
la intersección de dos contingencias», en AA.VV. (Aso- dor– el mantenimiento de la trabaja-
ciación Española de Derecho del Trabajo y de la Seguri- dora en su actividad, si bien siendo, en
dad Social): La incapacidad temporal, Madrid (Tecnos), tal caso, necesario que se desarrolle
1996, p. 287. una lactancia artificial –tanto por lo
80
En análogo sentido, CASTRO ARGÜELLES, M.A.: «El
que se refiere al «vehículo» de alimen-
principio de igualdad de trato», en AA.VV. (J. García
Murcia, dir. y coord.): La transposición del Derecho tación del lactante, cuanto por lo que
social comunitario al ordenamiento español. Un balance respecta al mismo alimento proporcio-
en el XX aniversario de la incorporación de España a la nado al hijo (pues, acreditándose la
Comunidad Europea, Madrid (MTAS), 2005, para quien existencia de agentes de riesgo para la
«dos son las preocupaciones básicas que han guiado el lactancia, queda claro que el medio por
contenido de la Directiva. De un lado, la protección de
el que el lactante queda expuesto es la
la salud de las trabajadoras que se encuentran en las cir-
cunstancias descritas y, de otro lado, que esta protección propia leche materna, con lo que la
no influya negativamente en su acceso al mercado de misma habría de descartarse como ali-
trabajo y/o en su permanencia en el mismo». mento)–. De esa manera, y cuando la

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

trabajadora no esté dispuesta a sacri- del Servicio Nacional de Salud que asista
ficar ni su maternidad ni su vida pro- facultativamente a la trabajadora o a su hijo».
fesional, la Ley estaría negando al hijo
Definitivamente, el proyecto normativo
los beneficios nutricionales, inmunoló-
opta por la manifestación más restrictiva de la
gicos e, incluso, psicológicos, derivados
actividad de lactancia, mediante el empleo
de la lactancia natural81.
expreso del calificativo «natural» que, por con-
Nos hallamos, pues, ante un supuesto de siguiente, excluye de manera radical la protec-
verdadera desprotección legal que ha sido ción de las situaciones de lactancia mixta y de
detractado por la Doctrina científica unáni- lactancia artificial, ya sean realizadas por la
me82, la cual, además, en algunos casos, no se madre o por el padre trabajadores, quedando,
ha resignado a admitir tal descuido 83. Urgen- por consiguiente, desprotegidos los hijos lac-
te viene resultando, pues, una respuesta nor- tantes de unas y otros frente a los efectos de la
mativa satisfactoria para evitar las conse- eventual exposición de sus progenitores a cier-
cuencias apuntadas. tos agentes lesivos (los no secretados por la
leche materna, pero operantes por vía de con-
Frente a este panorama, la respuesta nor- tacto, inhalatoria, etc.), según se ha visto.
mativa que se anticipa en el PLOI se antoja
igualmente decepcionante; en efecto, y a pesar De otra parte, cabe interrorgarse sobre la
de que, según la Exposición de Motivos, con la duración prevista por la norma para dispen-
proyectada Ley «se fomenta una mayor sar protección en materia preventiva a la
corresponsabilidad entre mujeres y hombres situación de lactancia natural. La única refe-
en la asunción de obligaciones familiares», rencia temporal al respecto viene dada por el
por lo que afecta a la cuestión aquí criticada, inciso segundo del proyectado art. 26.4,
dicho fomento en absoluto se logra. según el cual «Podrá, asimismo, declararse el
pase de la trabajadora afectada a la situación
Y es que, de acuerdo con la D.A. Décimo de suspensión del contrato por riesgo durante
segunda –dedicada a modificar diversos pre- la lactancia natural de hijos menores de nue-
ceptos de la LPRL–, en su apartado Dos, al ve meses contemplada en el artículo 45.1.d)
variar el contenido del art. 26.4, la norma del Estatuto de los Trabajadores, si se dan las
define expresamente el marco objetivo –e, circunstancias previstas en el número 3 de
implícitamente, subjetivo– sobre el que desple- este artículo.». Se acoge, de este modo, y
gar su protección en materia preventiva: «Lo según se analizará más detenidamente en el
dispuesto en los números 1 y 2 de este artículo siguiente apartado de este trabajo, la dimen-
será también de aplicación durante el período sión temporal asignada por el ET para el per-
de lactancia natural, si las condiciones de tra- miso/reducción de jornada por lactancia, por
bajo pudieran influir negativamente en la lo que el recurso a la dispensa del trabajo
salud de la mujer o del hijo y así lo certifiquen –como última ratio– sólo podrá producirse
los Servicios Médicos del Instituto Nacional de hasta el cumplimiento de los nueve meses de
la Seguridad Social, con el informe del médico edad del lactante.

Sin embargo, y por lo que se refiere a la


81
Resulta aquí reproducible lo señalado supra, nota operatividad de los dos «escalones» preventi-
al pie nº 26 del presente trabajo. vos previos (modificación de las condiciones
82
De esta manera, por todos, GARRIGUES GIMÉNEZ,
del puesto y/o del tiempo de trabajo y movili-
A.: La maternidad y su consideración jurídico-laboral y
de seguridad social, Madrid (CES), 2004, pp. 81 y 82. dad funcional de la trabajadora), la referen-
83
De esta manera, vid. SÁNCHEZ TRIGUEROS, C.: El cia a la situación de lactancia natural carece
riesgo durante el embarazo. Régimen laboral y de Seguri- de marco temporal expreso alguno («Lo dis-
dad Social, Pamplona (Aranzadi), 2002, p. 61. puesto en los números 1 y 2 de este artículo

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267
LEGISLACIÓN

será también de aplicación durante el período guirá en el momento en que el hijo cumpla
de lactancia natural,...)». En nuestra opinión, nueve meses, salvo que la beneficiaria se
dichas medidas preventivas deberán operar haya reincorporado con anterioridad a su
en tanto, de hecho, persista la situación de puesto de trabajo anterior o a otro compatible
lactancia natural, con independencia de la con su situación.
duración de la misma, que no puede sino que-
dar a criterio de la trabajadora (con el conse- En este sentido, pues, la prestación
jo del facultativo que la atienda), sin que que- vendría a consistir en un subsidio por impor-
pa acotación normativa alguna que restrinja te del 75% de la base reguladora correspon-
la libertad de la trabajadora en este sentido diente al subsidio de IT derivada de contin-
ni prive de protección –siquiera mediante gencias comunes84,85, desde el día en que se
estos dos primeros mecanismos preventivos–
al lactante de 9 meses ó más edad.
84
Con carácter general, la base reguladora para el
cálculo de la prestación por Riesgo durante la lactancia
se hallará como resultado de dividir el importe de la
4.4.2. La proyectada prestación por riesgo base de cotización de la trabajadora en el mes anterior
durante la lactancia al de la fecha en que se inicie la suspensión del contrato
de trabajo por el número de días a que dicha cotización
El proyectado art. 135 bis TRLGSS consi- se refiere (este divisor será concretamente: 30, si el tra-
dera situación protegida el período de sus- bajador tiene salario mensual; 30, 31 ó 28, 29 si tiene
salario diario).
pensión del contrato de trabajo en los supues-
No obstante, si la trabajadora ingresara en la empre-
tos en que, debiendo la mujer trabajadora sa en el mismo mes en que se produjera la suspensión
cambiar de puesto de trabajo por otro compa- del contrato, se tomaría para la base reguladora la base
tible con su situación, en los términos previs- de cotización de dicho mes, dividida por los días efecti-
tos en el artículo 26.4 de la LPRL, dicho cam- vamente cotizados. También, se tomaría como divisor
los días efectivamente cotizados, cuando la trabajadora
bio de puesto no resulte técnica u objetiva-
no hubiera permanecido en alta durante todo el mes
mente posible, o no pueda razonablemente natural anterior.
exigirse por motivos justificados. De esta Sin perjuicio de las reglas generales anteriores, y por
manera, el sistema de la Seguridad Social analogía a la situación de riesgo durante el embarazo, es
protege a la trabajadora proveyendo unas de prever que existan algunos supuestos especiales de
cálculo:
rentas de sustitución para los supuestos de
• En el caso de las trabajadoras contratadas para la
suspensión de la relación laboral por riesgo formación (en cuyo caso, la base reguladora sería
durante la lactancia natural, eventualidad el 75% de la base mínima de cotización que
suspensiva dirigida a preservar –como se dijo corresponda).
en páginas anteriores– la salud del hijo lac- • En el caso de las trabajadoras contratadas a tiem-
tante menor de nueve meses en el caso de po parcial, cualquiera que sea la duración de la
prestación de servicios (para ellas, la base regula-
exposición de la trabajadora a riesgos profe-
dora diaria sería la resultante de dividir la suma
sionales presentes en su puesto de trabajo, de las bases de cotización acreditadas en la
cuando no hayan sido posibles ni la adapta- empresa durante los 3 meses inmediatamente
ción de las condiciones y/o del tiempo de tra- anteriores a la fecha en que se inicie la suspensión
bajo, ni la movilidad funcional. del contrato entre el número de días naturales
comprendidos en dicho período. De ser menor la
Según indica el proyectado art. 135 ter antigüedad en la empresa, la base reguladora
sería la resultante de dividir la suma de las bases
TRLGSS, la prestación económica por riesgo
de cotización acreditadas entre el número de días
durante la lactancia natural se concederá a la naturales a que éstas correspondieran).
mujer trabajadora en los términos y condicio- • En las situaciones de pluriempleo, en las que se
nes previstos para la prestación económica tendrían en cuenta las particularidades siguien-
por riesgo durante el embarazo, y se extin- tes: cuando la suspensión del contrato de trabajo

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

produce el nacimiento del derecho, sin que (como el 60% en el caso de IT por contingen-
resulten aquí de aplicación períodos sin pres- cias comunes, durante los días 4º a 20º del
tación ni, tampoco, porcentajes reducidos período de baja).

La percepción del subsidio sería compati-


por riesgo durante la lactancia y el embarazo se ble con el mantenimiento de aquellas activi-
declarase en todas las actividades que realice dades que ya viniera desempeñando o pudie-
simultáneamente la trabajadora, se computarían ra comenzar a desempeñar y no impliquen
todas sus bases de cotización en las distintas riesgo durante la lactancia.
empresas, siendo de aplicación a la base regula-
dora así determinada el tope máximo establecido Serán beneficiarias de la prestación por
a efectos de cotización.
Riesgo durante la Lactancia las trabajado-
Si, por el contrario, la suspensión del contrato de tra-
ras86 por cuenta ajena y socias trabajadoras
bajo por riesgo durante la lactancia se declarase sólo en
una o en algunas de las actividades realizadas por la tra- de sociedades cooperativas o laborales –con
bajadora, pero no en todas, únicamente se tomarían las independencia del Régimen de la Seguridad
bases de cotización en las empresas donde se produce la Social en el que se hallen incluidas–; también
suspensión del contrato, aplicando, a estos efectos, el las trabajadoras por cuenta propia (incluidas
límite que corresponda a la fracción o fracciones del en el Régimen Especial Agrario, en el Régi-
tope máximo que aquéllas tuvieran asignado.
men Especial del Mar, o en el Régimen Espe-
• Por último, el caso de las situaciones de pluriacti-
vidad, en las que habría de tenerse en cuenta lo
cial de Trabajadores Autónomos) 87 ; todas
siguiente: si la situación de riesgo afectase a todas ellas, declaradas en situación de suspensión
las actividades desempeñadas por la trabajadora, de contrato (o interrupción de la actividad
se tendría derecho al subsidio en cada uno de los profesional) por Riesgo durante la Lactancia,
regímenes del sistema en que se encuentrase siempre que, además, reúnan los siguientes
incluida, siempre que reúna todos los requisitos requisitos:
exigidos de manera independiente en cada uno
de ellos. Si, de otro modo, la situación de riesgo • Estar afiliadas, y en situación de alta
afectase a una o alguna de las actividades desem-
en la Seguridad Social (no se hace refe-
peñadas, únicamente habría derecho al subsidio
en el régimen en el que estuvieran incluidas las
rencia a la situación de asimilación al
actividades en que exista dicho riesgo. alta: de hecho, la D.A. décimo octava,
Aunque, con carácter general, la base reguladora de apartado 5, del PLOI, que viene a modi-
la prestación por Riesgo durante la Lactancia debería ser ficar el art 125.1 TRLGSS, al establecer
la misma durante todo el período de disfrute, podrían que como situación asimilada al alta el
hallarse, al menos, dos excepciones a dicha regla período correspondiente a vacaciones
(excepciones aplicables a la IT, pero perfectamente pre-
anuales retribuidas que no hayan sido
dicables en el caso del Riesgo durante la Lactancia):
– Incremento de las bases mínimas de cotización disfrutadas por el trabajador con ante-
producidas a lo largo del percibo de la prestación, rioridad a la finalización del contrato, lo
superando la base de cotización tomada como hace excluyendo expresamente de tal
referencia inicial. previsión, precisamente, los subsidios
– Incrementos salariales previstos legal o conven- por riesgo durante el embarazo y por
cionalmente, o reconocidos por sentencia, y que
riesgo durante la lactancia natural.
retrotraigan sus efectos económicos a un momen-
Resulta lógica la exclusión por cuanto
to anterior a la suspensión del contrato por Ries-
go durante la Lactancia. resulta inescindible la vinculación
85
En este sentido, y como respecto de la prestación entre la situación protegida y las condi-
por Riesgo durante el Embarazo indicara GARCÍA NINET
[«La prestación económica por riesgo durante el emba-
razo», en Tribuna Social, nº 139 (julio 2002), pág. 8], la 86
Junto a ellas, también, las funcionarias públicas.
base a tener en cuenta debería ser la de contingencias 87
Así, la D.A. décimo octava, apartado 19 PLOI, por
profesionales, «pues en bastante medida ahí está la cau- la que se modifica el apartado 4 de la D.A. octava
sa de dicha baja». TRLGSS.

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269
LEGISLACIÓN

ciones de trabajado soportadas, de tal da de contingencias comunes. El abono de la


suerte que de no haber prestación efec- prestación procederá durante todo el período
tiva de trabajo, no puede haber riesgo necesario para la protección de la seguridad o
durante la lactancia). de la salud del hijo lactante, si bien finalizan-
do en todo caso el día anterior a aquél en que
Felizmente, la D.A. décimo octava, aparta- el lactante cumpla nueve meses de edad, sal-
do 19, del PLOI, modifica el art. 135.1 vo que se extinguiera antes por reincorporar-
TRLGSS en el sentido de eliminar, para la se la trabajadora a su anterior puesto de tra-
prestación por Riesgo durante el Embarazo, bajo a otro compatible con la lactancia89.
la exigencia del período de cotización de 180
días dentro de los 5 años inmediatamente
anteriores a la fecha en que se inicie la sus- 5. PERMISO PARENTAL
pensión del contrato de trabajo. En la medida
que el proyectado art. 135 ter TRLGSS some- El estudio del permiso parental exige para
te la prestación económica por riesgo durante su correcta caracterización una acotación
la lactancia natural a los mismos términos y conceptual y terminológica previa que lo dis-
condiciones previstos para la prestación tinga de algunas de las otras figuras de per-
económica por riesgo durante el embarazo, la misos reconocidos en el Derecho comunitario,
eliminación de este requisito ha de sufrir a saber el permiso por maternidad90, paterni-
idéntica suerte en el caso de aquella presta- dad91, adopción y por razones familiares 92.
ción. Con ello viene a atenderse la crítica doc- Pues bien, la Directiva 96/34/CE de 3 de
trinal88 que viene abogando por la elimina- junio, que incorpora el Acuerdo Marco sobre
ción de tal requisito en base a la naturaleza y el permiso parental celebrado por UNICE, el
origen de estas situaciones, que deben asimi- CEEP y la CES, cuyo objetivo es facilitar la
larse a las demás contingencias de corte pro- conciliación de las responsabilidades profe-
fesional y, por ello, extender a ellas la no exi- sionales y familiares de los padres que traba-
gencia de período previo alguno de cotización. jan; establece (en su cláusula segunda un
derecho individual no transferible al permiso
• El médico del Sistema Público de Salud
parental, que se reconoce a los trabajadores,
que atienda a la trabajadora deberá
hombres y mujeres, con motivo del nacimien-
haber emitido un informe (y el facultati- to o adopción de un hijo, para poder ocuparse
vo del INSS deberá haber certificado), del mismo durante un mínimo de tres meses
con carácter previo, a cerca de la exis- hasta una edad determinada(no superior a
tencia de riesgo en el mantenimiento de ocho años), que deberán definir los Estados
la trabajadora en las condiciones del miembros y/o los Interlocutores sociales.. Así
puesto de trabajo desarrollado. caracterizada la finalidad que persigue el
permiso parental, se configura, por tanto,
El derecho al subsidio nacería desde el
como un permiso con finalidad distinta al
mismo día que se inicie de manera efectiva la
permiso por maternidad93, si bien ambos son
suspensión del contrato de trabajo por riesgo
durante la lactancia, sin que pueda aquí apli-
carse período de espera alguno, análogo al
correspondiente en el supuesto de IT deriva- 89
De esta manera, el proyectado art. 135 ter
TRLGSS.
90
Apartado número 1 del presente trabajo. En la
88
GARCÍA NINET, J.I.: «La prestación económica por STJCE de 14 de abril de 2005 (TJCE 2005/98).
riesgo durante el embarazo», en Tribuna Social, nº 139 91
Apartado número 3 del presente trabajo.
(julio 2002, p. 7); igualmente, GARRIGUES GIMÉNEZ, A.: La 92
Apartado número 6 del presente trabajo.
maternidad y su consideración jurídico-laboral y de segu- 93
La protección de la condición biológica de la
ridad social, Madrid (CES), 2004. mujer y, por otro lado, la protección de las especiales

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

compatibles. Sin que el derecho al permiso tan a los Estados miembros respetando las
parental pueda menoscabar el permiso por disposiciones mínimas contenidas en la pro-
maternidad y viceversa.; tal y como ha seña- pia Directiva 96/34. En particular los Estados
lado el TJCE respecto a la compatibilidad de miembros podrán decidir si el permiso paren-
las vacaciones y el permiso por maternidad94. tal se concede a jornada completa, de forma
Por ello el TJCE declaro que el Gran Ducado fragmentada o a tiempo parcial; si prefieren
de Luxemburgo había incumplido las obliga- subordinar el disfrute del derecho a un perío-
ciones relativas a la Directiva 96/34 al esta- do de trabajo y/o de antigüedad (no inferior a
blecer en su normativa que el permiso paren- un año); ajustar las condiciones de acceso y
tal finalice obligatoriamente el día que queda las modalidades del permiso a las circunstan-
interrumpido por un permiso por maternidad cias particulares de la adopción; fijar perío-
o un permiso por adopción, sin que la norma- dos de preaviso que el trabajador debe dar al
tiva permita a los progenitores aplazar la empresario cuando ejerza su derecho al per-
parte de dicho permiso parental que aun no miso parental, precisando el inicio y el final
han disfrutado. El Gran Ducado de Luxem- del período del permiso; definir las circuns-
burgo incumplió por ello sus obligaciones al tancias en que el empresario, estará autori-
no garantizar un permiso parental de una zado a posponer la concesión de un permiso
duración mínima de tres meses a todos los parental97 por motivos justificables relacio-
progenitores95. nados con el funcionamiento de la empresa
(por ejemplo si el trabajo es de tipo estacional,
A pesar de que la materia objeto del Acuer- sino se puede contratar un sustituto durante
do Marco sea la conciliación de la vida laboral el período objeto de preaviso, si una propor-
y familiar y conecte de modo directo con el ción significativa de la mano de obra solicita
principio de igualdad y no discriminación por un permiso parental, si una función determi-
razón de sexo, en el trabajo; sin embargo lo nada es de importancia estratégica,); autori-
establecido en la Directiva 96/34/CE, que zar acuerdos particulares para responder a
incorpora el Acuerdo, no se ha visto afectado las necesidades de funcionamiento y organi-
por la Directiva 2002/73, de 23 de septiembre, zación de las pequeñas empresas.
que modifica la Directiva 76/207/CEE96. Ni
tampoco por la recientísima Directiva Antes de seguir adelante, e iniciar el cote-
2006/54, de 5 de julio. jo de la normativa interna y la normativa
comunitaria en esta materia resulta necesa-
Por lo que se refiere a las condiciones de rio hacer una última precisión conceptual y
acceso y modalidades de permiso parental, el señalar que el permiso parental, aquí, se
Acuerdo (en su Cláusula 2.3) se remite a lo identifica fundamentalmente con la figura de
que la Ley y/o los convenios colectivos permi- la excedencia por cuidado de hijo que contem-
pla nuestro derecho interno. En lo relativo al
relaciones entre la mujer y el hijo en el período que
permiso parental la Directiva 96/34 ha sido
sigue al embarazo y al parto, evitando que la acumula- objeto de transposición en el Derecho español
ción de cargas que deriva del ejercicio simultáneo de la fundamentalmente a través de la Ley 39/99.
actividad perturbe dichas relaciones (STJCE 2001/336). No obstante conviene recordar que con ante-
94
STJCE de 18 marzo 2004 (2004/69). rioridad a la firma del Acuerdo Marco nues-
95
STJCE de 14 abril 2005 (TJCE 2005/98).
tra normativa interna ya regulaba una exce-
96
Vid. CASTRO ARGÜELLES, M.A.: «Permiso parental y
conciliación de familia y trabajo(Directiva 96/34/CE), en
dencia por cuidado de hijos. En nuestro orde-
AA.VV. (J. García Murcia, dir. y coord.): La transposición namiento solo se ha utilizado en una ocasión
del Derecho social comunitario al ordenamiento
español. Un balance en el XX aniversario de la incorpora-
ción de España a la Comunidad Europea, Madrid 97
Previa consulta con arreglo a la legislación, los
(MTAS), 2005. convenios colectivos o los usos nacionales.

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271
LEGISLACIÓN

la expresión permiso parental, y ha sido, con Con el fin de evitar que los trabajadores
anterioridad a la aprobación del acuerdo puedan sufrir efectos laborales negativos
Marco, en la Ley 4/1995, de 23 de marzo, que como consecuencia del disfrute de este permi-
llevaba por rúbrica «de la regulación del per- so el Acuerdo Marco prevé expresamente que
miso parental y por maternidad» y modifica- durante el permiso parental los trabajadores
ba determinados aspectos de la excedencia mantengan sin modificaciones los derechos
por cuidado de hijos. Parece lógico, analizar, adquiridos y en curso de adquisición (Clausu-
por tanto, la normativa que regula la exce- la 2, apartado 6 del Anexo de la Directiva
dencia por cuidado de hijos a la luz del Acuer- 96/34/CE). Asimismo el Acuerdo marco enco-
do Marco para ver si se adecua o no al norma- mendó a los Estados miembros la adopción de
tiva comunitaria 98 Nuestro ordenamiento medidas que garanticen la estabilidad en el
interno, como hemos señalado, ya reconocía, empleo de los trabajadores que disfrutan de
con anterioridad, al Acuerdo en el art. 46 de este derecho y que se les proteja específica-
1995, un derecho a excedencia para cuidado mente frente al despido. En el momento en
de hijos, ya sea naturales o adoptivos que que se firmó el Acuerdo marco no se contem-
cumplía las disposiciones mínimas del Acuer- plan en nuestro ordenamiento medidas sufi-
do en cuanto a su duración (Cláusula 2.1 del cientes para proteger a los trabajadores fren-
Acuerdo en relación al art. 47 ET) y en cuan- te al despido por haber solicitado o disfrutado
to al derecho a reserva del puesto de trabajo de un permiso parental, esta carencia ha sido
(Cláusula 2.5 del acuerdo en relación con el corregida por la Ley 39/99100. Por imperativo
art. 48 ET). Posteriormente, la Ley 39/99, en del apartado 5 del art. 55 se atribuye la califi-
un intento de completar la transposición de la cación de nulidad a los despidos y las decisio-
Directiva 96/34 mediante la individualiza- nes extintivas durante estas situaciones.
ción del permiso parental, modificaría el Respecto a la estabilidad en el empleo de los
apartado 3 del art. 46 del Estatuto de los Tra- trabajadores después de haber disfrutado del
bajadores con el fin de aclarar que la exce- permiso parental el Acuerdo Marco reconoce
dencia por cuidado de hijos constituye un expresamente el derecho del trabajador a
derecho individual de cada trabajador confor- ocupar el mismo puesto de trabajo, o en caso
me a lo establecido en la cláusula 2.2 del de imposibilidad, un trabajo equivalente o
Acuerdo Marco, que lo considera un derecho similar conforme a su contrato o relación de
intransferible99, lo que permite el ejercicio trabajo (Cláusula segunda apartado 5). Este
simultáneo, sólo limitado por razones justifi- derecho a la reserva de puesto de trabajo en
cadas de funcionamiento de la empresa, por la excedencia por cuidado de hijos ya era reco-
un mismo sujeto causante del derecho; a dife- nocido en nuestro ordenamiento desde la
rencia de lo que ocurría en la redacción ante- reforma del ET del año 1995.
rior del precepto de 1995, en la que en caso de
que el padre o la madre trabajaran sólo uno
de ellos podría ejercer el derecho. Nuevamen- 6. PERMISO POR RAZONES
te, el PLOI proyecta la modificación del apar- FAMILIARES
tado 3 del art. 46 ET contemplando la posibi-
lidad de que la excedencia por cuidados de El Acuerdo marco que incorpora la Directi-
hijos pueda disfrutarse de forma fraccionada va 96/34 se ha preocupado también de regu-
en dos o más períodos. lar la posibilidad de ausentarse del trabajo

98
Vid., en este sentido, CASTRO ARGÜELLES, M.A.:
«Permiso parental.., op. cit., p. 386 y ss.
100
Vid., al respecto, el apartado 1.1 de este estudio
99
Vid. CASTRO ARGÜELLES, M.A.: «Permiso parental.., sobre permiso por maternidad y estabilidad en el
op. cit., p. 388. empleo de la trabajadora.

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AMPARO GARRIGUES GIMÉNEZ, PILAR NÚÑEZ-CORTÉS CONTRERAS y ANTONIO CEBRIÁN CARRILLO

por motivos de fuerza mayor. Así la cláusula CAVAS MARTÍNEZ, F.: «Avanzando por la senda
3.1 del Acuerdo establece que los Estados de la igualdad entre géneros (Noticia breve de la
Miembros y/o interlocutores sociales adop- Directiva 2002/73/CE del Parlamento europeo y
del Consejo, de 23 de septiembre 2002, que
tarán las medidas necesarias para autorizar
modifica la Directiva 76/207/CEE», Aranzadi
a los trabajadores a ausentarse del trabajo, Social, nº 13/2002.
conforme a la legislación, los convenios colec-
tivos y/o los usos nacionales, por motivos de COMISIÓN DE LAS COMUNIDADES EURO-
PEAS (2000): Directrices para la evaluación de
fuerza mayor vinculados a las necesidades
los agentes químicos, físicos y biológicos, así
familiares urgentes que hagan imprescindi-
como de los procedimientos industriales consi-
ble la presencia del trabajador; aunque derados peligrosos para la salud o la seguridad
corresponderá a aquellos precisar las condi- de las trabajadoras embarazadas, que hayan
ciones de acceso y las modalidades de aplica- dado a luz recientemente o estén en período de
ción de este derecho así como limitarlo tem- lactancia (Directiva 92/85/CEE), Bruselas,
poralmente a una determinada duración por 05.10.2000, COM(2000) 466 final.
años y por caso. CORDERO SAAVEDRA, L.: «La protección de las
mujeres embarazadas frente al despido y aplica-
ción de las Directivas 76/207 y 92/85 (a propósi-
BIBLIOGRAFÍA to de la STJCE de 4 octubre 2001)», Aranzadi
Social, nº 7-8, 2002.
BALLESTER PASTOR, M.A. (2000): La Ley CRUZ VILLALÓN, J. (2000): «El fomento de la
39/1999, de conciliación de la vida familiar y integración plena y estable de la mujer en el tra-
laboral: una corrección de errores con diez años bajo asalariado (comentario a la Ley para pro-
de retraso, Valencia (Tirant lo Blanch), 2000. mover la conciliación de la vida familiar y labo-
ral de las personas trabajadoras), RMTAS,
BLASCO MAYOR, A. (1998): Concepto, fuentes y
extraord.
alcance del derecho a la seguridad y salud en el
trabajo, Santander (Gobierno de Cantabria). DE MIGUEL DE LA CALLE, P. (2006): «Igualdad
de oportunidades entre hombres y mujeres
CASTRO ARGÜELLES, M.A. (2005): «Protección Acceso al empleo, a la promoción y a la forma-
especial de la trabajadora embarazada y en ción profesionales. La modificación de la Direc-
situación de maternidad y lactancia (Directiva tiva 76/207/CE del Consejo, por la Directiva
92/85/CE)», en AA.VV. García Murcia, J. (dir. y 2002/73/CE del Parlamento Europeo y del Con-
coord.): La transposición del Derecho social sejo», RMTAS, nº 146.
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balance en el XX aniversario de la incorporación GARCÍA NINET, J.I. (2002): «La prestación econó-
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miento español. Un balance en el XX aniversario doras», RL, nº 24.
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Europea, Madrid (MTAS). dad y su consideración jurídico-laboral y de
seguridad social, Madrid (CES).
– :«Permiso parental y conciliación de familia y
trabajo (Directiva 96/34)», en AA.VV. García – (1996): «Incapacidad temporal o maternidad.
Murcia, J. (dir. y coord.): La transposición del Interrupción del embarazo: la intersección de
Derecho social comunitario al ordenamiento dos contingencias», en AA.VV. (Asociación
español, Un balance en el XX aniversario de la Española de Derecho del Trabajo y de la Seguri-
incorporación de España a la Comunidad Euro- dad Social): La incapacidad temporal, Madrid
pea, Madrid (MTAS). (Tecnos).

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LEGISLACIÓN

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licencia por maternidad de la trabajadora, (2000): Mujer y salud laboral, Madrid (La Ley).
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PURCALLA BONILLA, M.A. (2004): «Igualdad de
– (2004): «Compatibiidad de las vacaciones y el trato y no discriminación: la tutela antidiscrimi-
permiso por maternidad», Temas laborales nº
natoria (en especial por razón de sexo)», Aran-
77.
zadi Social, núm.10.
– y CEBRIAN CARRILLO, A. (2006): El reflejo en
la Jurisprudencia de las medidas de concilia- RAMOS MARTÍN, N. E. (2006): «La regulación de
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Madrid. do desde el Derecho comunitario», RMTAS, nº
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bilidades familiares: realidad actual y solucio-
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