Sei sulla pagina 1di 4

Desarrollo de la inteligencia en la adolescencia

Durante la adolescencia no se producen cambios radicales las


funciones intelectuales, sino que la capacidad para entender problemas
complejos se desarrolla gradualmente. El psicólogo francés Jean Piaget
determina que la adolescencia es el inicio de la etapa del pensamiento
de las operaciones formales, que pueden definirse como el pensamiento
que implica una lógica educativa. Piaget asumió que esta etapa ocurría en
todos los individuos sin tener en cuenta las experiencias educacionales o
ambientales de cada uno. Sin embargo en los datos de las investigaciones
posteriores no apoyan esta hipótesis y muestran que la capacidad de los
adolescentes para resolver problemas complejos está en función del
aprendizaje acumulado y de la educación recibida.
Además de la búsqueda de la identidad personal, la adolescencia es un periodo crítico
en el desarrollo de la inteligencia y en la manera de comprender el entorno que nos
rodea. En este desarrollo ocupa un papel relevante la escuela, a través de la
enseñanza de diferentes disciplinas de una manera crítica y reflexiva, pero también los
padres tienen un papel decisivo en la madurez intelectual de sus hijos.

Al llegar a la adolescencia nuestros hijos empiezan a pensar en abstracto, formulando


definiciones, elaborando conceptos y resolviendo problemas hipotéticos, se trata del
desarrollo del pensamiento formal.

Características del pensamiento del adolescente

El pensamiento abstracto que empieza a utilizar el adolescente tiene un carácter


proposicional "si... entonces...." que le permite expresar hipótesis y razonamientos
abstractos, pensar y razonar sobre hechos posibles y no solo sobre objetos reales. En
todo este proceso el lenguaje se configura como el instrumento imprescindible para el
desarrollo del pensamiento y la inteligencia.
El adolescente, de una forma progresiva va a ir adquiriendo diferentes capacidades que
le permiten un desarrollo intelectual pleno:

Valorar diferentes soluciones ante un problema planteado

Reflexionar de forma crítica sobre diferentes posibilidades reales o no

Anticipar las consecuencias de determinadas acciones

Relacionar causas y efectos

Considerar puntos de vista diferentes

Analizar ventajas e inconvenientes

Comprender sistemas sociales, políticos y sus relaciones


Esta nueva manera de pensar tiene unas consecuencias claras en el adolescente, que
comenzará a preguntarse por principios éticos, ideologías religiosas y políticas,
posicionamientos con respecto a diferentes realidades; así como la adopción de una
postura más crítica que implicará cuestionar ideas previas, valores y posicionamientos
éticos. Este desarrollo supone un progreso que implica la transición de un desarrollo
intelectual más simple a uno más complejo:

Adolescencia precoz (antes de los 12 años)

empiezan a expresar sus primeras opiniones sobre distintos temas relacionados con su
propia vida (el deporte que quieren practicar, que ropa le gusta más o menos, que
norma de sus padres les gustaría cambiar, cuál es su asignatura preferida y cuál la
más aburrida, etc.)

Comienzan a cuestionar la autoridad y las normas sociales

Adolescencia media (entre los 12 y los 16 años)

Comienza a cuestionar sus propios principios morales (¿qué creo yo mismo qué está
bien y qué está mal?)

Se preocupa por cuestiones filosóficas

Puede plantearse la existencia de puntos de vista diferentes a los suyos y reflexionar


de forma crítica acerca de ellos

Adolescencia tardía (entre los 16 y los 19 años)

Reflexiona con más frecuencia acerca de conceptos como la justicia, la política, la


religión, etc.

Le interesan más los debates y comienza a no tolerar puntos diferentes a los suyos

Potrebbero piacerti anche