capituto 1
E] inicio de Ia historia moderna de la
afasia suele situarse en la conmocién que
produjo Broca al presentar pruebas sobre
la localizacion de la afasia motora en el
Bulletin de la Société a’ Anthropologie en 1861.
El fenémeno de la pérdida del habla debi-
da a dafo cerebral es tan antiguo, sin em-
bargo, como los origenes de la Medicina, y
la revisién de Benton (1964) establece que
practicamente todos los sintomas afasicos
actualmente reconocidos fueron descritos
‘mucho antes del siglo xx. Las tres décadas
que precedieron a la histérica contribucién
Ge Broca fueron testigos de un creciente
interés y controversias acerca de los me-
canismos de los trastomos organicos del
lenguaje (Hécaen y Dubois, 1969), de tal
modo que los acontecimientos de 1861 ca-
yeron en terreno fértil.
Con todo, fue solamente el trabajo de
Broca, Wernicke y sus contemporaneos el
que hizo que ciertas alteraciones organi-
cas del funcionamiento del lenguaje se
agruparan finalmente bajo el término
salasias, siendo reconocidas como diferen-
tes de otras alteraciones intelectuales que
pudieran acompaharlas como productos
colaterales del datio cerebral. Durante Ia
década de 1860 se reconocié Ia asociacién
casi excluyente de la pérdida del lenguaje
con el dao de una parte del hemisferio
cerebral izquierdo, originandose asf el con-
cepto de dominancia cerebral unilateral.
Por otra parte, transcurridas unas cuantas
écadas después de los primeros descubri
mientos localizadores de Broca, se hizo
patente que ciertos patrones especificos de
la pérdida del lenguaje podfan deberse @
lesiones en. regiones especificas en el area
del lenguaje, La fascinante historia de es:
+05 descubrimientos y las teorias del siglo
xu acerca de la organizacién neurolégica
del lenguaje se recogen en los trabajos