Desde hace muchos años, los números 11:11 se han estado apareciendo a la gente alrededor del

mundo. La visión del 11:11 produce una movilización profunda, un recuerdo o añoranza de algo
largamente olvidado. Es un activador precodificado dentro de nuestro banco de memoria celular.

Cuando el 11:11 aparece ante ti, es tu llamado a despertar, es el momento de parar todo lo que estás
haciendo y concentrarte en tu interior. La aparición del 11:11 es siempre un acto de Intervención Divina
diciéndote que es el momento de mirar alrededor y ver lo que está sucediendo realmente.

El código 11:11 abre la comunicación con el propio Ser Interno para su integración física y espiritual y así
lograr la comunicación con Seres de Luz de dimensiones superiores. En el nivel planetario produce
descontaminación del medio ambiente, de la tierra y sus componentes y la evolución de toda su
biología, hasta que el planeta Tierra alcance su estado óptimo de sutilidad vibracional acorde a su nueva
vida en 5ta Dimensión.

Quienes miran repetidamente este número son personas que se encuentran en etapas cruciales de su
vida, así como en transiciones importantes, o que posterior a esta señal han experimentado grandes
cambios en sus vidas. Un registro interesante es que después de estos sucesos a nivel personal, rara vez
vuelven a ver el número. Lo que querría expresar el inconsciente al enfocar el 11:11, no sería sino una
especie de mensaje de "Pon atención, se acerca una transición en tu vida, vienen transformaciones,
realiza los cambios necesarios para cerrar este ciclo y pasar al siguiente".

PORTALES DIMENSIONALES

Los Portales son cilindros de luz que se activan en un determinado momento. Permiten el ingreso de
nuevas informaciones a la Tierra. Estas informaciones llegan en forma de códigos de luz provenientes
del Sol Central de la Galaxia. Podemos utilizar las olas entrantes de energía de mayor vibración para
manifestar la Realidad de la Nueva Tierra de la Quinta Dimensión de Luz.

El Portal 11:11 es el puente entre la dualidad y la unidad; es decir, una zona de transición entre dos
espirales de evolución muy diferentes: la Dualidad y la Unidad. Cuando estas espirales se superponen y
coinciden se produce un gran impulso evolutivo para la transformación de la raza. El Portal 11:11 es la
zona de transición o puente entre la vieja espiral que está anclada a la dualidad y la nueva espiral de
evolución de la unidad. Cada espiral de evolución está alineada con diferentes Sistemas del gran Sol
Central.

Cada apertura de un Portal abre las energías para la Ascensión del Planeta y sus habitantes, de allí que
se sientan cambios energéticos fuertes que se traducen en cambios físicos, emocionales, mentales y
espirituales en cada uno de nosotros.

Dentro del portal del 11:11 hay 11 Puertas. Cada Puerta es un nivel de ascensión a una banda de
frecuencia de energía nueva. Estas Puertas son similares a las esclusas de un canal. Una vez que se activa
y se ingresa a una Puerta comenzamos un proceso intenso de transformación e iniciación, dado que
nuestro Ser se ve inmerso en un patrón energético diferente. Al viajar sobre estas bandas de frecuencia
vibratoria aprendemos las lecciones de cada Puerta hasta que alcanzamos la próxima.

Los Portales se atraviesan cuando el ser está preparado para recibir la poderosa luz a través de sus
cuerpos (físico, etérico, emocional, mental, astral, etc). Estos Portales no se atraviesan con la mente, el
conocimiento o el ego, se atraviesan cuando estamos alineados en nuestro Cuerpo de Luz y resonamos
en integridad, es decir, cuando todo nuestro ser está alineado con su Propósito de Vida, cuando
dejamos las especulaciones y los intereses personales, cuando SENTIMOS el llamado de la galaxia que
nos invita a regresar a casa.

Todos viajamos en espiral a través del universo material. Avanzamos en el espiral hasta completar un
ciclo de evolución, terminando en el mismo punto de la espiral, pero a un nivel más alto en donde a su
vez comienza otro ciclo evolutivo. La humanidad está viajando en este espiral, unos en un nivel y otros
en otro. Esto no significa que unos son mejores que otros, simplemente que sus niveles evolutivos de
conciencia son diferentes.

Hasta hoy, la mente, las relaciones y la interacción humana han estado basadas en las leyes de la
dualidad, y ésta está basada en la oposición y la polaridad; siempre hay dos mitades que forman algo
completo y todo tiene su polaridad opuesta. Dentro de la polaridad siempre hay un concepto de
separación. Algunos ejemplos son: noche-día, masculino-femenino, bueno-malo, alegría-tristeza, amor-
odio, acción-reacción, espiritual-físico y en un nivel más vasto, Tierra-Estrella.

El día 11 del 11 del 2011 se abrieron canales directos de energías entre lo invisible y el corazón que
permitian atravesar los velos de la ilusión para ascender desde la dualidad hacia la unicidad, nuestra
esencia divina. Estos canales de luz galáctica de unidad e integración quedaron abiertos para siempre
en el Planeta Tierra. En nuestros corazones ya están instaurados dichos códigos.

Nos hemos dando cuenta de que existe una Verdad Más Grande, una totalidad mayor. Todos somos
parte del Uno. Nada está separado del Uno. La noche y el día forman una unidad más grande que está
anclada en la eternidad sin tiempo. Todos tenemos una polaridad masculina y una femenina dentro de
nosotros mismos. Hay un Amor más grande que abarca todas las emociones y está anclado en Un Solo
Corazón. Lo espiritual y lo físico se han fusionado y ahora nos damos cuenta de que todo es sagrado. Y
nos estamos convirtiendo en seres Tierra-Estrella al anclar lo Invisible dentro de nuestros cuerpos
físicos. Así que la base más importante de nuestro sistema de realidad se ha estado transformando
profundamente.

Todos estos saltos cuánticos nos han llevado hasta el lugar donde nos encontramos ahora mismo, el
recorrido del Portal 11:11 con sus once puertas. Los mensajes de estos códigos estelares llegan desde el
Cosmos en forma de códigos de luz y activan los archivos que el Ser humano posee en su memoria
espiritual. Son códigos de luz cósmica que aceleran tu Despertar para el Nuevo Tiempo que ya está entre
nosotros. Permite que tu corazón se abra y entrégate al fluir de la experiencia. El Amor es el principal
código a incorporar.

Todos nosotros venimos de las estrellas, pero estamos divididos en tres grupos: Los despiertos; los que
están en proceso de despertar y los que optarán por no recordar. Los despiertos se reconocen entre si,
con profundo respeto y apoyo bilateral, pues los egos fueron transcendidos. Simplemente se reúnen en
la Unidad para hacer su parte al servicio del Todo. Además de esto, este grupo tiene la tarea de
despertar al segundo grupo, los que están en proceso de despertar. De ahí la emergencia de los canales
que estarían trabajando más rápido, pues falta poco tiempo. El tercer grupo, los que opten por no
recordar, son excelentes como son. Debemos respetar el momento de cada ser y sus elecciones.
No estamos solos en este proceso. Estamos siendo auxiliados por varias jerarquías cósmicas, como la
Orden de Melquizedec, las Legiones del Arcángel Miguel, las familias de El, An, Ra, Ángeles Solares del
Gran Sol Central.

Por otro lado, la batalla de la dualidad está acentuada, como en un grande y apretado embudo, donde
todo termina mezclándose. Por eso es necesario que anclemos firmemente nuestro modelo de Unidad,
único pasaporte de vuelta a casa. Nuevamente habrá, los que optarán por permanecer hasta el próximo
portal para auxiliar a construir la Nueva Tierra, otros no pasarán, y los demás podrán retornar a sus
hogares.

Por largo tiempo cargamos en nuestro banco de memoria almacenado en el ADN recuerdos sellados de
nuestro origen e historia. Ahora el velo está cayendo y los recuerdos tienden a aflorar...

RECOMENDACIONES PARA ALINEARSE CON EL PORTAL 11:11 (en cualquier momento)

Centrarse en el corazón para recordar la esencia que cada uno trae

Activar los potenciales del espíritu con meditaciones, vida sana, acciones de amor y cuidado hacia todos
los seres del planeta.

Usar esos potenciales para visualizar la Nueva Tierra

Deberemos alimentarnos con moderación, procurando no ingerir alimentos de baja vibración, como la
carne o los vegetales transgénicos, y realizar algún ejercicio físico que nos ayude a activar el flujo
sanguíneo, ya que los códigos de luz serán transportados a través de la sangre, desde el corazón al resto
de nuestro organismo.

Recibir conscientemente la luz del sol, con la intención de absorber su poder sanador y elevador de
frecuencias.

La conexión es desde el cardíaco y el tercer ojo. Las enseñanzas se trasmiten en lenguaje cósmico y
espiritual a través de códigos de luz que ingresan por estos centros.

Quienes tienen activado el hemisferio derecho del cerebro pueden entenderla en forma de
percepciones, intuiciones, certezas. Estos contenidos son percibidos interiormente, no se presentan bajo
la forma de conceptos sino de pasos evolutivos que se darán bajo la sabia orientación y ayuda de esas
Jerarquías.

Ya no es imprescindible salir a buscar maestros o canalizaciones afuera. Cada uno tiene la información
grabada en sus códigos de memoria. Sin embargo, es muy bueno y recomendable reunirse en grupos
afines para activarse unos a otros las memorias, para amarnos, sentirnos acompañados, danzar, gozar y
proponer nuevas acciones en conjunto.

Todos y en cualquier lugar del mundo podemos participar

Hacia donde la resonancia de tu ser te lleve, allí encontraras otros hermanos de tu viaje cósmico que te
están esperando para abrazarte y decirte, “Bienvenido de regreso a casa”. El duro viaje en la tercera
dimensión ha terminado, ahora comienza el viaje hacia la propia luz de tu espíritu, ¡ábrete!, dentro de ti
está el portal de la unidad y el amor.
Dentro de ti, en tu corazón, está la llave. Haz girar la llave, pide asistencia y la recibirás al instante. Toda
la Confederación Galáctica de la Luz, tus Ángeles, tus Guías, los Maestros Ascendidos, los seres
interplanetarios, están esperando que abras tu Portal del Corazón para llenarte de amor y bendiciones.

En este momento supremo y esperado desde hace mucho tiempo, se ha reunido el Gran Cónclave de los
cielos para apoyar y sostener el Salto Evolutivo del Planeta Tierra hacia la Era de la Paz.

Nuestra casa en quinta dimensión nos espera con regalos de amor, paz, hermandad, sanación,
abundancia.

Nos estamos reencontrando con nuestra familia de Luz. Hemos regresado a casa. En nuestras memorias
resuenan los códigos estelares, nos miramos a los ojos y reconocemos a nuestros hermanos.

Aquellos que se sientan Autoconvocados en el servicio planetario, éste es el momento para participar en
la evolución de la raza humana, sólo necesitas irradiar amor en tu entorno.

En esos momentos se incrementa intensamente la energía galáctica en el planeta. Muchos grupos

espirituales se reúnen en diferentes partes del planeta para recibir, anclar y expandir la nueva
conciencia. Luego, estos efectos se terminan de instalar en la conciencia colectiva en un período de 3 a 5
años.

Alrededor del mundo, desde hace muchos años, los números 11:11 se han estado apareciendo a la
gente. La visión del 11:11 produce una movilización profunda, un recuerdo o añoranza de algo
largamente olvidado.

El acontecimiento más importante de este mes, no es astrológico, es cósmico y numerológico.

Desde hace ya más de 20 años, el 11 de noviembre es celebrado en todo el mundo como un gran Portal
Estelar.

El 17 de agosto de 1987, se realizó en todo el planeta la Primera Meditación Mundial. Un Gran Trígono
en los signos de Fuego, propició el encuentro en meditación de más de 144.000 almas que, según los
textos recibidos, abrimos la primera puerta hacia la ascensión planetaria.

En ese entonces, y para algunos, unos años antes, comenzó a producirse un curioso fenómeno. La
mirada se dirigía hacia el reloj digital, cuando este marcaba las 11 horas, 11 minutos.

El 11.11, aparecía, para muchos de nosotros, en patentes de coches, carteles y sueños. Este extraño
evento comenzó a hacerse cada año más frecuente y masivo para los que entramos en servicio, y para
los que, aun no siendo conscientes, han firmado internamente para despertar a su naturaleza
multidimensional en las primeras oleadas del cambio.

En estos tiempos, sigue apareciendo, cada vez con más intensidad y claridad.

La primera Puerta del 11.11 se abrió en Gizá en 1992, a través de Solara, y, a partir de ese momento,
grandes meditaciones globales se fueron celebrando cada 11 de noviembre, día 11 del mes 11.

11.11 es la pura presentación de la sincronía en nuestras vidas. Por su geometría, los dos números
forman los dos pilares de un Portal.
Por medio de estos dígitos, eres invitado a poner atención en lo que está delante de ti, o a lo que estás
pensando, en el momento en que se presenta. Las 11 horas, 11 minutos, es la única hora del día en que
todos los números son igualmente UNO.

11.11 es una ventana abierta en la matrix, un minuto en que el Espíritu se comunica de forma directa
contigo, y un recordatorio claro de que estás en alineación con Él.

Cada 11.11, es una preciosa oportunidad para que profundices en la conexión contigo mismo como Ser
Multidimensional y Galáctico.

Siendo la fecha 11.11 un Portal por el que entran en la Tierra energías resonantes con la Galaxia,
recibiremos nuevos códigos que tienen que ver con la Unión, señalada por el Ocho. La Unión con
nuestro ser multidimensional, y la Unión aquí en la Tierra con los compañeros del alma con los que
estamos co-creando la Nueva Tierra.

¿Cuántos de ustedes notan que están viniendo a su vida cada vez más personas que vibran en el nuevo
paradigma?

Esta fecha te recuerda que estás aquí, no por casualidad, sino porque de alguna manera acordaste
acompañar a Gaia en su proceso de evolución, con la ayuda de tu presencia física.

Te ayuda a anclarte en la consciencia de que no estás solo y separado, sino que formas parte de una
Gran Red, para la cual tu encarnación en este tiempo es fundamental. Tu cuerpo físico es como una
aguja de acupuntura, un canal de energías que intercambia frecuencias con el cosmos, del cosmos a la
Tierra, y de la Tierra al vasto Universo.

Nuestro Ser Estelar pulsa desde el corazón físico para expresarse más y más, y disolver la ilusión de
separación.

Algo notable sobre el 11.11 y su impacto en nuestra vida cotidiana, además de producir una subida de
frecuencia para los que a eso se ofrezcan, es que funciona como una lupa de tu propósito en el planeta.

Pone en evidencia qué estás haciendo como ser espiritual al Servicio de Gaia y de los seres con que la
compartes, y qué temas estás eludiendo, aun siendo consciente de que es necesario.

Pondrá en primer plano, por ejemplo, cuál es la huella ecológica que dejas. Por ejemplo, te harás
consciente de actos tan simples como rechazar las bolsas de plástico cuando compras, reciclar tus
residuos, etc.

Te mostrará de qué modo eres vocera o vocero del respeto a todas las criaturas en tu vida de cada día.

Si, por ejemplo, notas que algún niño o animal doméstico está siendo abusado, es tu deber intervenir,
preguntando, desde tu Centro, qué está pasando, sin acusar al abusador, pero sí mostrando que hay un
Testigo, dejando que tu Ser Interno asome en tu mirada. Por supuesto, sólo en casos que no entrañen
peligro para ti.

Alguien ha de señalar el camino del Amor y del Respeto, con el ejemplo, y con la señal de que el abuso
no pasa desapercibido.

Por eso es tan importante mantener la atención en tu Centro Interno en todo momento, y obrar desde
allí.
El 11.11 es un Portal que multiplica tu capacidad de Ser tu Ser Real, así es que todo lo que está
ocurriendo en estos días, la purga emocional, es una preparación para la entrada en este Portal Estelar.

Una meditación para el día 11.

A cualquier hora del día, y, si es posible a las 11.11 am, busca un lugar tranquilo, y, de pie, invoca al Más
Alto Amor Divino, el que pulsa Dentro, y a su vez está Más Allá de todas las barreras.

Siente esta frecuencia en tu cuerpo, respira en ella, y luego declara:

“Estoy abierto y dispuesto a asumir mi realidad como Ser Espiritual, a sentir mi Unidad con todo lo que
Soy, y con Todo lo que Hay” …

…. Registra, siente, el cambio en tu frecuencia…

Luego, visualízate viviendo en el momento presente tu más preciado sueño de manifestación. Canaliza la
energía del Más Alto Amor Divino hacia la escena, en la que estás participando, no estás fuera, mirando
la escena, la estás viviendo, y estás recibiendo la energía.

Mira, desde dentro de la escena, cómo esta se carga con toda esta nueva información, y siente cómo los
códigos sagrados de evolución más allá de cualquier comprensión humana, están siendo activados, en ti,
en tu mundo y en todo el Planeta.

Antes de cerrar tu meditación, emite al Universo tu Gracias, Gracias, Gracias.