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Cuando el tiempo determinado por Dios se cumplió, el Señor llamó a un hombre para liberar a
su pueblo dela esclavitud de Egipto y conducirlo a la tierra que fluye leche y miel.
Por medio del símbolo de las densas tinieblas y el horno humeante, Dios había revelado a
Abraham la servidumbre de Israel en Egipto y había declarado que el tiempo de su estada allí
abarcaría 400 años y le dijo “Después de esto saldrán con gran riqueza”.
Por medio del símbolo de las densas tinieblas y el horno humeante, Dios había revelado a
Abraham la servidumbre de Israel en Egipto y había declarado que el tiempo de su estada allí
abarcaría 400 años y le dijo “Después de esto saldrán con gran riqueza”.
En la antigüedad los tiempos de Dios se cumplieron para realizar lo que ha sido determinado y
anunciado con muchos siglos de anticipación.
Cristo vino a esta tierra en el tiempo determinado. Gálatas 4: 4 “Pero cuando se cumplió el
tiempo, Dios envió a su hijo nacido de mujer, nacido bajo la ley”
La providencia había dirigido los acontecimientos de las naciones, así como el flujo y reflujo
delas influencias humanas, a tal punto que el mundo estaba maduro para la llegada del
libertador.
Las naciones estaban unidas bajo un mismo gobierno, un idioma se hablaba extensamente y
era reconocido por doquiera como la lengua literaria. De todos los países los judíos dispersos
acudían a Jerusalén para asistir a las fiestas anuales, y al volver a donde residían podían
difundir por el mundo las nuevas de la llegada del Mesías.
Los sistemas paganos estaban perdiendo su poder sobre la gente. Los hombres estaban
cansados de ceremonias y fábulas. Deseaban con vehemencia una religión que pudiera
satisfacer el corazón. Aunque la luz de la verdad parecía haberse apartado de los hombres,
había almas que buscaban la luz llenas de perplejidad y tristeza. Anhelaban conocer al Dios
vivo con el fin de tener cierta seguridad de una vida más allá de la tumba.
“El momento actual es de interés abrumador para todos los que viven, los gobernantes, los
estadistas, los hombres que ocupan puestos de confianza y autoridad, tienen la atención fija
en los acontecimientos que se producen en derredor nuestro. Observan las relaciones que
existen entre las naciones. Observan la intensidad que se apodera de todo elemento terrenal y
reconocen que algo grande y decisivo está por acontecer, que el mundo se encuentra en
vísperas de una crisis espectacular”. (Eventos de los Últimos tiempos pág.11)
“Las calamidades en tierra y mar, la inestabilidad social, las amenazas de guerra, como
portentosos presagios, anuncian la proximidad de acontecimientos de la mayor gravedad. Las
agencias del mal se coligan y acrecen sus fuerzas para la gran crisis final. Grandes cambios
están a punto de producirse en el mundo y los movimientos finales serán rápidos”. (3 J.T 280)
Apocalipsis 10:7 “Sino que en los días dela voz del Séptimo Ángel, cuando él esté por tocar la
trompeta, el misterio de Dios se cumplirá como Él lo anunció a sus siervos los profetas.
¿Qué es el misterio de Dios?
Esta es la clave: La predicación del evangelio.
El sonido de la trompeta del séptimo ángel, empezó a oírse. Nosotros como pueblo de Dios
tenemos el privilegio de dar el sonido claro y certero al menaje.
Recordemos que cuando Cristo vino por primera vez como un ser humano, dice el espíritu de
profecía que el mundo estaba maduro para la llegada del libertador.
Por otra parte dice que “A lo suyos vino y los suyos no lo recibieron”
¿Cómo puede ser esto que el mundo estaba maduro y su pueblo no lo reconoció?
Mis hermanos, así como en cada parte dela historia el Señor dirigió los acontecimientos, en
esta parte final, también el Señor vendrá sea que su pueblo esté preparado o no.
Ustedes dirán “pero el misterio de Dios se consumará como Él lo anunció a sus siervos los
profetas” . Efectivamente, Cristo no vendrá a esta tierra sin que se haya terminado de predicar
el Evangelio a toda Nación, tribu, lengua y pueblo. Porque si nosotros no hablamos, las
piedras clamarán. Pero la obra se terminará y Cristo vendrá el día y la hora señalado por el
Eterno.
Aquí está el punto ¿Cuántos de este pueblo estamos participando de este privilegio de
predicar el evangelio?¿Cuántos nos estamos preparando para el glorioso triunfo final? Esta
semana es decisiva para muchas personas que entregarán su vida a Dios ¿Hemos hecho
planes para participar de la fiesta trayendo esas preciosas almas a los pies del
Salvador?¿Estamos apoyando a nuestros líderes para que no se sientan solos en el campo de
batalla? Todos debemos dar la pelea, porque estamos en el fragor de la batalla, estamos a
poca distancia de la tierra que fluye leche y miel.
Cuando el pueblo de Israel se encontró acorralado frente al mar Rojo y los ejércitos de
faraón, empezaron a llorar y quejarse. Dios le había dicho a Moisés que iba a ocurrir algo
maravilloso, pero, Moisés ante la desesperación del pueblo no pudo lograr ser escuchado
para asegurarles la victoria y empezó a clamar. Éxodo 14: 15 “Entonces el Señor dijo a Moisés
¿Porqué clamas a mi? Dí a los israelitas que marchen.
Mis hermanos, así como a Moisés, también a nosotros el Señor nos aseguró la victoria ¿Cuál es
la orden? “Di a los Israelitas que marchen” El poderoso imperio del Faraón no pudo detener el
avance. Nosotros no podemos detenernos en quejas y llantos. El mar rojo de este mundo está
abierto para pasar confiados en el brazo del eterno ¿Cuántos están dispuestos a aceptar el
desafío de avanzar hacia la victoria que Jesús nos promete?
SERMÓN COSECHA
¿Se han preguntado alguna vez cuánto falta para la venida del Señor?¿Hasta cuándo vamos a estar
diciendo que su venida está cerca?¿Porqué estamos aquí todavía?¿Acortará Dios el plazo de
su venida?¿O la conclusión final del gran plan de Dios depende de lo que nosotros hagamos?
¿Llegará el momento en que Dios no hará más a pesar de lo que hagamos?
¿Es el Dios del antiguo testamento un Dios de amor como el Dios del Nuevo Testamento?
BABILONIA NO ES TULUGAR
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