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Trabajo práctico

Situación clínica del personaje "Helena" en la película


“Conocerás al Hombre de tus sueños”

Clínica psicológica y Psicoterapias: Psicoterapias, Emergencia e


Interconsultas

Cátedra: Menéndez, Pedro Ángel

Docente: Mariana Gonzalez

Año: 2011

Cuatrimestre: 1º

Alumna: Wepfer Larripa, Laura Susana (laurawepfer@gmail.com)

Fecha de entrega: 21/06/2011

0
Índice

Introducción: Una Crisis, Una oportunidad.......................................................................2

Las características de la situación: Ser Parido...................................................................3

Atravesar la situación: De un Otro que sabe.....................................................................6

Conclusión: El efecto placebo...........................................................................................9

Bibliografía:…………………………………………………………………………….10

Introducción: Una Crisis, Una Oportunidad

"Pobre Helena, no comprendía que la verdad no es


belleza, como dijo el poeta, sino todo lo contrario."

El presente trabajo tiene como objetivo detenerse en la película “Conocerás al


hombre de tus sueños” (2010) de Woody Allen con el fin de poder articular

1
conceptualmente la noción de crisis en el personaje de Helena, interpretado por Gemma
Jones. En este sentido, para llevar adelante nuestra propuesta nos servimos de la
situación clínica entendida como un objeto articulador en el cual convergen varias
series causales a la vez. Siguiendo a Fiorini, entenderemos a una situación como una
“función de articulación [que] se realiza por efectos de montaje, dados por
yuxtaposiciones entre series cuyas resonancias ligan entre sí a diferentes tipos de
objetos: discursos, cuerpos, instituciones, grupos, fantasmas individuales 1”,
estructurando así una situación única y singular que nos permitirá arribar a un
diagnostico presuntivo sobre la situación de crisis que vive Helena.
Tomando los desarrollos de Karl Slaiken, entenderemos por crisis: "...un estado
temporal de trastorno y desorganización, caracterizado principalmente por una
incapacidad del individuo para manejar situaciones particulares utilizando métodos
acostumbrados para la solución de problemas..."2. Frente al agolpamiento de
fenómenos en un breve periodo de tiempo, el sujeto experimenta una necesidad vital de
tener que actuar; pero resulta que se le vuelve imposible encontrar la resolución (por
ineficacia de los métodos anteriores de resolución), que al mismo tiempo le es exigida.
Por ello en un primer momento nos encontramos con una situación de riesgo, en tanto el
impacto de la crisis desacomoda al psiquismo de su anterior homeostasis, afectando
principalmente al cuerpo. La angustia automática desencadena una fractura temporal
que desarma el sentido de presente, pasado y futuro. Se rompen las ligaduras y la
coherencia histórica queda en suspenso. "En las situaciones de crisis, los enunciados
identificatorios constitutivos del yo se encuentran desarticulados, produciendo un caos
pulsional...(...) ese caos pulsional escapa a las regulaciones del principio del placer,
produce un dolor que involucra el límite entre cuerpo y psique..."3
La oportunidad se configurará una vez que la crisis haya sido atravesada (aceptada,
elaborada), revelándole al sujeto capacidades que no sabía él disponía para enfrentar lo
incierto de la vida misma (cual situación de aprendizaje). Por ello cuando hablamos de
crisis, también hablamos de oportunidad, porque existe la posibilidad de encontrar
alternativas creativas en medio del caos que comporta una crisis, que se vuelven en
instancias de aprendizaje y ejercicio, al modo de un entrenamiento de nuestros recursos
yoicos. Ahora bien, no siempre existe la salida superadora. Algunas veces la crisis
1
Fiorini, Héctor (1993). “Exploración de la situación, como una modalidad de abordaje en psicoterapias”
en Estructuras y Abordajes en Psicoterapias Psicoanalíticas. Editorial Nueva Visión, Bs. As., pág. 163.
2
Slaikeu, K., 1999. “Teoría de la crisis. Estructura general”, en Intervención en crisis,
Méjico, Manual Moderno, pág. 16.
3
Pérez Lloveras, C.; “Etapas del proceso en la elaboración de una situación de crisis”. Ficha Cátedra

2
termina desencadenando trastornos graves en la personalidad del sujeto afectado; con lo
cual, si una crisis no puede ser resuelta, se vuelve una crisis patológica.
En la siguiente sección daremos cuenta de los elementos clínicos que estructuran la
situación de Helena, posteriormente señalaremos cómo ésta logra configurarse en una
situación de crisis y su eventual desenlace. Finalmente, cerraremos este trabajo con
algunas conclusiones provisionales.

Las características de la situación: Ser Parido

"Tengo mucho por lo que vivir, ¿verdad que sí? ¿Es eso
lo que ve en mí? ¿Usted ve? ¿Tengo un futuro esperanzador?"

Uno no elige nacer, bueno; tampoco puede elegir las crisis que le tocaran vivir.
Ahora bien, uno si puede elegir como quiere vivir su vida y como quiere atravesar una
crisis. Ser pasajero conducido o tomar el volante y conducir. Metáfora ilustrativa de la
posición que el sujeto puede adoptar. Y de esa posición se es siempre responsable.
Helena es una mujer que ronda los 75 años de edad, vivió toda su vida como ama de
casa y ahora acaba de divorciarse después de 40 años de matrimonio. Tuvo una sola hija
con su ex-marido, "Alfie", se llama "Sally" y está casada con "Roy".
Helena irrumpe en la primera escena de la película, desbordada, acaba de ser
abandonada por su marido, "...la plantó. Se compró un descapotable. Alquiló un pisazo.
Se blanqueó los dientes y oscureció su piel. ¿Y Helena? Se lo tomó heroicamente. Tuvo
una depresión y se tragó 40 pastillas para dormir".
En este pequeño pero sucinto panorama, Helena recurre, a través de la
recomendación de su hija, a una suerte de vidente, tarotista y médium, llamada
"Cristal". A diferencia de los psiquiatras que solían tratarla, Cristal se muestra
continente, amable, comprensiva, gratificadora de las demandas (le sirve whisky frente
al pedido de Helena), utiliza palabras de aliento ("Ojalá estuvieras sentada aquí
conmigo, porque sólo veo a tu alrededor enormes ondas cósmicas de energía positiva,
moviéndose hacia ti. Estás cubierta de luz rosada, mi vida. Sólo van a llegarte cosas
buenas, te lo prometo."), algunas de ellas, estrategias técnicas, que a grandes rasgos y
salvando las distancias, son utilizadas en los abordajes psicoterapéuticos para intervenir
en las situaciones de crisis. La continencia, un otro humano, presente, que acompaña y
resuena empáticamente con el acontecer del paciente, son un recurso fundamental en las

3
intervenciones en crisis. La función continente del vínculo provee, justamente de un
marco, al vivenciar psíquico del paciente que se encuentra en una frágil situación de
desconcierto por habérsele quebrado los silenciosos contratos que hacían de apoyatura
de su realidad psíquica. "El psiquismo tiene apoyos, apoyos necesarios para la
estabilidad."4 ¿Cuales serian? El cuerpo es un apoyo, "...de ahí que la enfermedad física
traiga una crisis"5. La representación de un sí-mismo es otro apoyo. Los objetos que
puedan suplir funciones maternas son otro apoyo, como ser la pareja, una institución, un
amigo/a, etc. Y, por último, el apoyo grupal. Por ello la importancia de un vínculo con
un otro humano, en tanto encuadrado de un modo asistencial, de ayuda para con un otro
que sufre, no es poca cosa para el paciente, ya que le devuelve algo de esos contratos
que se han disuelto por haber entrado en crisis. El vínculo empieza a funcionar como
continente y por ello mismo es terapéutico.
Helena le reprocha a los psiquiatras su falta de empatía. "Te miran con cara de
póquer cuando necesitas ayuda. Y esos medicamentos tan horribles, todavía me alteran
más". También en referencia a su yerno que es médico se despacha diciendo: "Vengo de
una sesión con Cristal. Esa mujer es asombrosa. Ya sé que tú tienes una formación fría
y científica, Roy...". Pero lo que quizás Helena no comprende es que los psiquiatras no
necesariamente deben ser psicoterapeutas y además, salir de una crisis es difícil, no sin
dolor. Quizás falto desde los psiquiatras que la atendían el llamado a una interconsulta
con algún equipo de psicólogos; ya que Helena no solo necesita medicación para reducir
las cantidades de ansiedad y depresión que realimentan negativamente la crisis, sino
también asistencia, en tanto un Otro humano que este ahí para que ella le cuente su
problemática y juntos puedan elaborar una estrategia de tratamiento que prevenga daños
y movilice recursos, que arme perspectivas futuras, en donde todo se ve negro. La
función continente "...se ejerce porque en el contrato terapéutico creamos un nosotros
que no es lo mismo que usted y yo. (...) la continencia se ejerce creando primero un
nosotros, dado que toda crisis comienza por una experiencia de separación, algo ha
sido separado"6
Helena no solo ha perdido su marido, apoyatura fundamental del psiquismo, lo ha
perdido de un día para el otro, esto desemboca en una crisis accidental. Dado que
después de 40 años, ese contrato no solo se creía seguro e inmutable, sino que también
4
Fiorini, H., 1999. “Intervenciones en crisis en psicoterapias psicoanalíticas: crisis vitales, crisis
accidentales. Caso clínico”, en Nuevas líneas en psicoterapias psicoanalíticas: teoría, técnica y clínica,
Madrid, Psimática. pág. 172
5
Ídem.
6
Ídem. pág. 180

4
estaba avalado por los valores culturales de su generación que promovían la ilusión
"Hasta que la muerte nos separe". Para colmo de males, se ha sobreagregado una crisis
evolutiva, esperable pero cruda, porque no es lo mismo tener 30 años y encontrarse sola,
que 75 años y en soledad.
En relación a esto nos encontramos con el diagnostico evolutivo. La tercera edad
enfrenta a Helena con la vejez; dato de la realidad difícil de aceptar, pero innegable
cuando ya es demasiado evidente. Es una crisis evolutiva esperable, pero crisis al fin. Si
a esto le sumamos atravesarlo solo, es posible que si no hay suficiente experiencia de
vida (es decir, experiencia en sortear crisis, porque vivir es aprender a vivir con crisis
también) el psiquismo busque salvavidas ¿A quién tiene para pedir ayuda? Cuestión que
nos remite directamente al nivel grupal, fundamental para salir de cualquier crisis.
El diagnostico grupal nos indica que Helena solo tenía a su ex-marido y su hija.
Perdido su ex-marido "Se ha convertido en la carga oficial de su única hija, Sally".
Cuando los soportes se caen, queda en evidencia que es lo que se tenía. Helena
contaba con su cuerpo (ahora viejo y entrado en crisis -íntimamente relacionado con el
diagnostico corporal), con su marido (que le proveía funciones maternas) y su hija (que
es el único soporte grupal que conserva). El entorno es decisivo para la evolución de
una crisis. A veces es más importante contar con un buen apoyo grupal que con recursos
propios, dado que el medio puede ofrecer factores equilibradores como
desequilibradores que inclinen la balanza a favor o en contra de una evolución
saludable, a pesar de los propios recursos. Cuando el sujeto entra en crisis descubre que
dependía y depende de otros para salir. Por ello esos Otros se vuelven co-protagonistas
del desenlace.

Atravesar la situación: De un Otro que sabe

"Mi marido me dejó por una sola razón: Fui demasiado


sincera con él. Me negué a permitir que se engañara."

Siguiendo los desarrollos de Caplan, la familia puede operar de forma positiva, esto
es, queriendo resolver la situación de crisis; o bien tratando de evitarla. La evitación
"enferma" del problema es definida cuando el conflicto no es resuelto y pervive a
expensas del sufrimiento de algún miembro. Que Sally, su única hija y apoyatura grupal,
le haya derivado a una falsa médium (según sus propias palabras: "¡Te dice lo que
quieres oír y después te roba el dinero!") pareciera ser más un modo de delegar el
problema, negar la gravedad del mismo y ofrecer “placebo” en vez de una ayuda realista

5
y sincera para con su madre. Finalmente "lo barato sale caro" y se le vuelve en su
propia contra (porque cuando necesita el dinero de su madre, Cristal tenía ya otros
planes astrales).
Existen salidas que se vuelven perjudiciales para otros, pero que alivian al miembro
en crisis. Surge así la cuestión de cómo los grupos primarios pueden impedir o
favorecer la resolución de una crisis.
¿Cómo se ha resuelto la situación de crisis en el caso de Helena? Bueno, ella
encontró un modo de preservar su integridad ¿A traves de que medios? Una vidente y
unas copas de alcohol. Si bien las promesas de vidas pasadas y futuras no sean muy
ajustadas al principio de realidad, ello no deja de ser una salida que al menos, durante la
crisis, le es funcional al psiquismo, para no caer en una desorganización más profunda.
No estaría con ello justificando ambas conductas (el abuso de sustancias y la fuga
maniaca en creencias de un más allá salvador), que en lo personal, me parece que son
solo un alivio transitorio y corren el riesgo de un derrumbe inmediato ante la mas
mínima prueba de realidad, pero con esos recursos hay un psiquismo que está tratando
de sostenerse aún en pie para seguir adelante. Seria poder tratar de colocarse en la
situación de Helena y con esos zapatos, caminar al lado de ella. Si su hija, único
soporte, le ofrece una vidente, que, en dialogo íntimo con su pareja expresa:

Roy: - La animas con esa falsa adivina


Sally: - ¡Pues sí, lo hago! Cristal es una farsante, ya lo
sabemos, pero ella se lo cree. Y eso la deja tranquila. No
intentes estropeárselo.
Roy: - Yo no diré nada, pero no la ayudas con eso de predecir
el futuro. Dale medicina, no ilusiones.
Sally: - No, si la ilusión funciona mejor que la medicina.

Queda claro que solo quiere sacársela de encima, no importa a qué precio. En estas
condiciones, Helena solo cuenta con el apoyo de Cristal. Mujer con el poder de la
videncia. Que mejor consuelo para cuando se está trazando una fantasía de destino
trágico que alguien allí prometa luz y amor. Que consuelo mas estabilizador un Otro que
diga certezas, cuando se le juega al psiquismo, producto de una vacilación fantasmatica,
la situación traumática: “¿Que me quiere?”.

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Retomando los niveles diagnostico, en el nivel clínico, a Helena deberíamos
encuadrarla, según el DSM-IV, dentro de los Trastornos del Humor: Trastornos
Depresivos: Depresión mayor episodio único (tomando en cuenta la diacronía que nos
muestra la película). El haber ingerido 40 pastillas no es un dato menor, que si bien
puede ser leído como un claro intento de suicidio, también puede ser leído como un
acting-out, para llamar la atención de un Otro; ya que la película no aclara qué tipo de
pastillas eran las que consumió (no es lo mismo 40 pastillas de 2 mg de clonazepam,
que 40 pastillas de tranquilal -venta libre-) solo dejamos esbozado la posible diferencia
que ayudaría a un presuntivo diagnostico estructural (en el caso de un acting-out nos
acercaríamos a una estructura neurótica clásica, de lo contrario, la falta de recursos, la
aproximaría a un trastorno narcisista).
Si pasamos a la serie psicodinámica podemos inferir que a pesar de la situación de
crisis, donde el psiquismo suele regresar a mecanismos de defensa mas arcaicos y
mostrarse más vulnerable, el proceso secundario se conserva. Helena, a pesar de la
angustia, tiene una correcta ubicación espacio-temporal, un lenguaje coherente y
ordenado, su vestimenta, recursos expresivos y comportamientos no se hayan por fuera
de lo esperado para alguien de su edad. Es perfectamente capaz de desarrollar tareas
cotidianas y trabajar sin mayores dificultades. Esto nos orientaría a sospechar que
estamos en presencia de una estructura neurótica y no frente a un trastorno narcisista. A
pesar de presentarse en las crisis toda la fenomenología recurrente de los trastornos
narcisistas (crisis identificatoria, conflictos que obligan a reelaborar el sí-mismo y poner
en juego toda la problemática del narcisismo, la dependencia hacia un otro, etc.), Helena
no hace una regresión tan acusada, ello lo evidencia la conservación del proceso
secundario y de sus capacidades y funciones yoicas. Su memoria, atención, percepción
o capacidad de anticipación se encuentran dentro de lo esperable. Las defensas básicas y
primitivas están bien logradas y establece una correcta jerarquización y organización a
nivel sintético e integrador (hay cohesión, ordenamiento, articulación racional).
El diagnostico de la problemática corporal esta en intima relación con el
diagnostico evolutivo y no le es ajeno. Por el momento no existe cirugía ni pócima que
repare la vejez. Cual ley de gravedad, todo cae, y con él se van nuestras pieles, que se
vuelven pellejos. Helena confiesa: "¡Coño, nadie quiere envejecer! ¡Yo no quiero
envejecer!". Pero de ello solo resta la elaboración, ya que no podemos volver el tiempo
atrás. Podemos engañarnos, negar el paso del tiempo como lo hace “Alfie”, su ex-
esposo, pero ¿Hasta cuándo? O podemos refugiarnos en la fantasía, como lo hace

7
Helena, convencernos de que una verdad, sea La Verdad, entonces nos amurallamos y
no crecemos más. ¿Salidas patológicas? Por el momento, salidas.
El diagnostico adaptativo y prospectivo enseña una gran dificultad para rearticular
en un (nuevo) proyecto de vida los elementos y series que se modificaron (separación,
nueva vida de su ex-pareja, relación con su hija, relación con su yerno). Más bien se
observa una solución maniaca, la fuga en otras vidas pasadas propuesta por la vidente,
que le permiten olvidar el presente que le toca vivir y afrontar. A propósito, señala
Fiorini: “Muchas veces el cambio supone encontrar respuesta, supone acciones
concretas, no solamente cambio interno, sino además la expresión en conductas
concretas".7 Los falsos consuelos no modifican la realidad externa mediante una acción
apropiada, son soluciones fantaseadas que se valen de mecanismos proyectivos para
echar la culpa y la hostilidad fuera del yo.
Un Otro que diga que hacer es un refugio familiar a la vez que siniestro. Pero
cuando el psiquismo entra en crisis se sumerge en un estado de indefensión que lo
vuelve vulnerable y al mismo tiempo dependiente de ayuda externa. La contención
familiar o grupal que pueda operar como continente influenciara en el trabajo de duelo
que toda situación de crisis requiere. Helena no solo perdió su marido, perdió su
matrimonio y un estilo de vida que llevaba con él, perdió parte de sus ideales y se
encontró con la vejez. Para que el trabajo de duelo comience en principio hay que
aceptar las pérdidas como tales. Forzar el trabajo de duelo sin respetar la subjetivación
de la pérdida es empujar al psiquismo a la melancolía o a un trabajo de duelo
patológico. La subjetivación de la pérdida se enmarca en un tiempo lógico y no
necesariamente condice con lo que la época o la sociedad indican. Hasta hace unos años
había que guardar luto por un tiempo prolongado, ahora el que está sufriendo más de la
cuenta está mal visto y la gente le empiece a tomar distancia.
Uno nunca está al corriente de qué perdió en esa pérdida o pérdidas que se le
jugaron. Uno puede decir: “perdí mi marido”, pero no sabe qué perdió allí. Se pierde
una parte de sí, impersonal. Ni del Otro, ni de uno; se abre un espacio transicional.

Conclusión: el efecto placebo

7
Fiorini, Héctor (1999). “Intervenciones en crisis en psicoterapias psicoanalíticas: crisis vitales, crisis
accidentales. Caso clínico” en Nuevas líneas en psicoterapias psicoanalíticas: teoría, técnica y clínica.
Editorial Psimática, Madrid, pág. 173.

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Hay dos clases de psicoterapia una que actua “via di
porre”, es el cobre de la psicoterapia y otra que opera “via di
levare” es el oro de la psicoterapia.
Sigmund Freud

A lo largo de este trabajo hemos podido indagar en el concepto de situación clínica,


entendiendo que ésta es un objeto articulador en el cual varios elementos y dimensiones
convergen dándole una singularidad única. En nuestro caso, recorrimos los diferentes
diagnósticos clínicos de Helena, pudiendo ver en cada uno de ellos cómo estaban
establecidos sus límites y posibilidades, así como también las dinámicas que los regían.
Por su parte, nos fue posible una vez analizados los diferentes ámbitos clínicos,
entender cómo operaron para lograr configurar la situación de crisis de Helena. ¿Logro
salir de la crisis? El autor de la película con ironía plantea una salida vía las ilusiones:
"¿Cómo conseguimos salir adelante? Bueno, como Sally le dijo a Roy, a veces las
ilusiones funcionan mejor que la medicina." Desde un punto de vista psicoanalítico
sospechamos que una tal solución funcione mejor. Una ilusión está condenada a la
desilusión, tarde o temprano, el efecto placebo termina empachándonos y se nos revela
que: "la verdad no es belleza, como dijo el poeta, sino todo lo contrario".
Helena no permitió que su marido se engañara a sí mismo hasta que: "Se despertó
en plena noche, se imaginó la eternidad, se quedó allí, cubierto de sudor y ya no puede
volver a dormir. Se lanzó..." al espiritismo, las vidas pasadas, el new age y el
esoterismo; y se convenció de que volvería a tener otra oportunidad en sus siguientes
vidas, con lo cual huyo de esta para vivir en esas otras.
Como una bella durmiente podemos seguir soñando aun cuando estamos despiertos.
¿Autoengaño? yo le llamaría “el efecto placebo”. Dura por un tiempo, hasta que la
ilusión se cae, y se puede volver a buscar otro placebo o vivir sin él. Porque algo se
alivia vía la sugestión, no podemos desatendernos de ese efecto terapéutico; pero me
pregunto, volviendo al inicio, ¿Cuando elegimos el placebo? ¿Quien elige?

Bibliografía

 Caplan, G., 1980. “Teoría de la crisis”, en Principios de psiquiatría preventiva,


Buenos Aires, Paidós

9
 Fiorini, Héctor (1993). “Exploración de la situación, como una modalidad de
abordaje en psicoterapias” en Estructuras y Abordajes en Psicoterapias
Psicoanalíticas. Editorial Nueva Visión, Bs. As.

 Fiorini, Héctor (1999). “Intervenciones en crisis en psicoterapias psicoanalíticas:


crisis vitales, crisis accidentales. Caso clínico” en Nuevas líneas en
psicoterapias psicoanalíticas: teoría, técnica y clínica. Editorial Psimática,
Madrid

 Fiorini, Héctor (2001). “¿Qué hace una buena terapia psicoanalítica?” en


Psicoanálisis, focos y aperturas. Psicolibros, Montevideo, pág. 10.

 Menéndez, Pedro (1987). “Concepto de situación”, en El campo teórico y


clínico de las Psicoterapias Psicoanalíticas. Editorial Tekné, Bs. As., pág. 10.

 Pérez Lloveras, C.; “Etapas del proceso en la elaboración de una situación de


crisis”. Ficha Cátedra

 Slaikeu, K., (1999). “Teoría de la crisis. Estructura general”, en Intervención en


crisis, Méjico, Manual Moderno.

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