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SEPARATA DE f~&ll() REVISTA DEL INSTITUTO NACIONAL DE CULTURA. LIMA • OCTUBRE 1975
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•• 11.

e
INSTITUTO NACIONAL DE CULTURA
CENTRO DE INvr'tll,eIOM y IU.ITAU"'CION
DE IIINE' MOlllUMINtALIS
nTU,,"o
HUACA GARAGAY
Rogger Ravines
UN
VIEJO
TEIV1PLO
EN
LOS
ANDES
Fotografía: A licia. Benavides

y la pirámide augusta
piedra y piedra, agonía y aire,
en su estructura dominadora
guardaba como una almendra
un corazón sacrificado.
NERUDA

PRELUDIO OS Andes Centrales y cuanto en lo que se refiere a sus


Mesoamérica definen ·r elaciones con culturas más tar-
en la arqueolog(a ame- d (as; circunstancias suficientes
ricana las dos grandes para que los arqueólogos se ha-
áreas nucleares de civi- yan sentido más impresionados
lización o alta cultura por las semejanzas que por las
del Nuevo Mundo. Ambas ex- diferenci as.
presiones comunican también,
en cierra manera, procesos cul- Olmeca en Mesoamérica y Cha-
turales que durante casi cuatro vín en los Andes Centrales testi-
mi I años formaron la trama y la fican, pues, la formulación de
urdimbre de mundos mayores. las primeras sociedades comple-
Mundos que pese, a haber llega- jas de América. Una aproxima-
do a construir una ecolog(a su- ción a su entendimiento supone,
prarregional sucumbieron brus- por consiguiente, la revaluación
camente ante el impacto español de viejos conceptos y un exa-
. del siglo XVI, víctimas de su men atento de las nuevas evi-
propio equilibrio. dencias. Garagay, imponente
ComparativarlJente, desde el huaca en las inmediaciones de
punto de vista arqueológico, en Lima, asume este compromiso,
el Perú y Méjico se desarrollaron en cuanto constituye pieza im-
culturas formativas similares, portante del mosaico que está
tanto en lo que atañe a su anti- en sus inicios y cuya imagen re-
güedad, arte o iconografía, cién se está esbozando.
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EL FENOMENO y EL
PROBLEMA FORMATIVO

AS investigaciones ar- los valles de Méjico y Puebla la ductiva en calor(as.


queológicas de los úl- arq ueolog(a muestra, con sor- As(, el resultado de la produc-
timos años se han diri- prendente claridad, que los esti- ción de bienes suntuarios fue
gido fundamentalmen- los Olmeca son muy tempranos, doble, mientras, para la sociedad
te a buscar "los or(ge- tanto o quizá más antiguos que marginal, productora de mate:.
nes" de la civilización los atribuidos a las comunidades rias primas, constituyó un segu-
o u n estado pr(sti no en América agr(colas de la gran tradición ro contra el hambre. En las so-
antes que a aclarar la función y cu Itural centroamericana y que, ciedades más centralizadas dio
el proceso que han seguido di- incluso en las sierras de Oaxaca, mayor complejidad al sistema de
chas cu Itu ras. Se han sugerido donde se concretó uno de los estratificación social. Simultá-
varios centros primarios, aunque señor¡'os pre-olmecas más impor- neamente, el establecimiento de
la idea de un centro común ha tantes, la influencia Olmeca relaciones de intercambio entre
logrado popularidad. En esta re- muestra una marcada asimetrr'a. socios propiciará una mayor di-
seña quisiéramos por tanto, en Flannery, en The O/mees on the ferencia clasista y un paradigma
vez de contribuir al ya prolon- volley of Ooxoeo: o mode/ for de alto status que tienden a
gado debate de "los or(genes',' inter-regiono/ interoetion in For- emular los sistemas menos .cen-
enfatizar más bien en una dife- motive times (DOCO, 1968), ha tralizados.
rencia fundamental que caracte- sugerido que, en los sistemas so- Un modelo para la difusión Cha-
riza el desarrollo de los estilos cioeconómicos más productivos v(n necesariamente tiene que ser
Chavín y Olmeca y que puede y jerarquizados para el sustento diferente. En el Perú, las socie-
. cuestionar seriamente el parale- de una población grande y esta- dades tribales se establecieron
lismo del proceso. ble, es necesario el estableci- definitivamente entre los años
En Mesoamérica el horizonte es- miento de relaciones de inter- 3600 y 2500 a. c., presentán-
til(stico Olmeca representa la in- cambio con sistemas menos pro- dose a partir del año 2000, en una
fluencia asimétrica de una socie- ductivos y jerarquizados. De es- serie de valles costeros, signos
dad compleja, sobre sociedades te modo, los bienes suntuarios de una sociedad compleja. Mien-
me nos desarrolladas, mediante pueden moverse de abajo hacia tras que la chavinización del Pe-
una prestigiosa y poderosa élite arriba; mientras que "compleji- rú, es decir la aparición de la
que difundió un sistema de or- dad estructural" o productos de primera cultura verdaderamente
ganización social centralizado y subsistencia garantizados, deben elaborada y su sofisticado arte
jerárquico, teniendo como base moverse a la inversa, es decir de religioso, tomó lugar sólo mil
sus bien elaborados centros cere- los sistemas más desarrollados a años después de la emergencia
moniales. Al contrario, en los los menos desarro liados. Obvia- de estos sistemas, que no conta-
Andes Centrales, el Horizonte mente este flujo no puede apo- ron ni con el beneficio de un
Chav(n significa la unificación yarse en un sistema de intercam- sistema asimétrico de intercam-
de muchas esferas socioeconómi- bio comercial. Lo más probable bio, ni con la difusión de una
cas, organizadas jerárquicamen- es que se realice entre coligados tradición cultural previamente
te, que pose(an por lo menos y a través de un régi men de in- desarrollada.
desde mil años antes, una vieja teracción formalizado mediante De este modo, pues, la búsque-
tradición de centros ceremonia- el intercambio de mujeres. da del origen de la cultura Cha-
les semi-independientes· y una Los ambientes marginales, con v(n resulta aún más artificial
compleja iconograHa religiosa. factores ecológicos no aptos para que el de la cultura Olmeca. La
Por otro lado, mientras en el la producción agr(cola, ofrecen unificación cultural bajo Chav(n
Perú los conceptos religiosos y frecuentemente minerales raros, probablemente representa una
estilísticos de Chav(n penetra- animales exóticos, plumas, con- síntesis ecléctica de varias élites
ron únicamente áreas en las chas, es decir materias primas regionales, antes que la exporta-
que previamente se hab(a desa- para la elaboración de obje- ción de un conjunto de expre-
rrollado una rica tradición de tos su ntuarios en sociedades con siones originadas en un punto
arquitectura monumental, en u na econom (a altamente pro- determinado.
.

@ LA COSTA CENTRAL D~L


DE LA TRIBU AL SEr>JORIO
PERU: @
L estilo Chav(n en la forma de U. La otra, al Norte y m. de diámetro, que sigue el eje
Costa Central del Pe- que incluye los valles de Supe a de la hendidura central.
rú, una de las áreas Casma, vinculada a conjuntos ar- Por otro lado y de modo gene-
~ mejor. estudiadas del quitectónicos caracterizados por ral el templo en U consiste de
.......... territorio andino, se una enorme plataforma de terra- un~ pirámide rectangular simé:
~ ~ asocia indiscutible- zas y uno o más pozos circula- tri ca, con dos proyecciones late-
mente a una tradición local de res hundidos. En contraste, no rales más pequeñas. Al centro
grandes centros ceremoniales, re- se han observado pozos ci rcu la- de la pirámide existé una depre-
flejo de una antigua y bien esta- res hundidos en los valles del sión profunda, abierta hacia el
blecida organización social. Con Chfllón, R(mac y Lur(n, como NN E, formando un cuarto en
ello !a contribución de la Costa tampoco templos en forma de forma de U. Delante del lado
al fenómen o Chav (n resu Ita de U , más al Sur del valle de Luríri. abierto de la U, yace una gran
tal magnitud que, para significar plaza re ctangular, flanqueada
su presencia,más correcto que el La existencia de centros ceremo- por largas construcciones latera-
término "llegada Chav(n" es el niales con pozos hundidos ha si- les. El cuerpo de la pirámide
concepto "síntesis Chav ín". do revelada sólo muy reciente- con sus proyecciones laterales, y
• mente, y nuestro conocimiento dos verticales más pequeñas as(
En la Costa Central, la tradición se debe fundamentalmente a los ca mo Ias dos construcciones
de grandes centros ceremoniales estudios aerofotográficos de perpendiculares mayores, dupli-
y edificios públicos de piedra, se Paul Kosok y Carlos Williams can y triplican la forma de la
inicia durante la última parte Leqn. Cabe señalar aquí, entre depresión central hasta confor-
del período pre-cerámico. Sitios los conjuntos más impresionan- mar una gran U abierta, orienta-
como Las Haldas en el valle de tes, Chupacigarro, Bermejo, AI- da también hacia el NNE.
Casma, Aspero en Supe, Chuqui- pacato y Los Taras en el valle
tanta y Media Luna en el Chi- de Supe; Hu~requeque, Sech ín E ntre los centros ceremon iales
llón, Canto Grande en el R ímac, alto y Las Haldas en el valle de de la Costa Central que se ads-
tienen dos ocupaciones principa- Casma. criben a esta tradición se cuen-
les: una pre-cerámica y otra ini- tan: Casa Blanca, La Florida,
El emplazamiento de Bermejo, Pampa de Cueva y Las Sali-
cial, que demuestran que hace pegado a las estribaciones finales
cuatro mil años toda la región nas, en el valle del R(mac;
de la cordillera a corta distancia Chocas, Huacoy y Chuquitanta,
se organ izaba alrededor de gran- del mar, lo constituye una gran
des centros ceremoniales locales. en el valle del Chillón; Parca,
plataforma rectangular, de apro- Manchay Bajo y Mina Perdida,
En lo que concierne a estos cen- ximadamente 50 m. de largo en el valle de Lurín. Sin embar-
tros ceremoniales locales, pese a por 20 de ancho, en uno de cu- go, de todos estos monumentos
que las investigaciones 'se en- yos extremos se levan ta u na pi- han sido La Florida y Garagay
cuentran todavía en una fase rámide truncada, con una hen- los que han proporcionado los
muy preliminar, a la fecha, pue- didura central o depresión en el mejores datos sobre su antigüe-
den defin irse por lo menos dos paramento frontal, y en el otro dad (1810 ± 170 a.e., para La
tradiciones. Una, circunscrita a un extenso patio, .también rec- Florida) como sobre la naturale-
los valles de Lurín, Rímac, Chi- tangular, que concluye en un za y el proceso de la transición
llón y Chancay, que se asocian a gran pozo ci rcu lar revestido de entre una época pre-Chav(n y la
grandes edificios piramidales en piedras de aproximadamente 20 aparición del estilo Chavín.
LA HUACA GARAGAY,
EL MONUMENTO

A Huaca Garaga y desmonte, destruyendo parte de margen iZ(lu ierda del río R ímac
(PV47-19) es uno de uno de los montículos laterales. ocupa realmente la vaguada que
los más impresionan- En 1963, las Empresas Eléctri- marca el límite entre los valles
tes conjuntos arqueo- cas Asociadas expoliaron la ci- del R ímac y el Chillón.
lógicos del valle del ma de la estructura mayor, en El valle bajo del R ímac, en este
Rímac, y el que ha una extensión de más de 40 sector, está conformado por una
ofrecido las más notabl es evi- m 2 , excavándola hasta una pro- extensa planicie aluviónica, in-
dencias de un estilo Chavín en fundidad de 4 a 5 m., para colo- terrumpida lateralmente por los
la Costa Central del Perú. El. car la torre No. 2005-2006, de cerros La Milla y Mulería. Rai-
sitio alcanzó notoriedad a fines los cables de alta tensión que mondi, en 1859, observaba ya
de la década del 50, cuando el sirve al sector de Comas. Final- que en estos terrenos y los veci-
Patronato Nacional de Arqueo- mente, en 1970, la ladrillera San nos de "",znapuquio, Naranjal y
logía, en 1959, comisionó a sus Martín destruyó la gran plaza Pampa de Comas, existían fuen-
inspectores don Manuel Ontane- central, al instalarse en ella e tes de agua así como ciénagas y
da y don Aquiles Ralli, para iniciar la fabricación de ladrillos pantanos cubiertos de matorra-
efectuar excavaciones en uno de con la tierra extraída de allí les; hoy, salvo uno que otro pe-
los montículos pedregosos de la mismo. queño afloramiento de agua, na-
Hacienda Garagay A Ita, denun
Pese a todas las injurias cometi- da de esto existe.
ciado por José Casafranca, Ins-
das, y aunque hasta julio de Desde el punto de vista arqueo·
pector del Litoral Central, como
1974, no se hablan emprendido lógico, Garagay puede describir-
mon u mento arqueológico de
excavaciones sistemáticas ni se se como un complejo ceremo-
gra n an ti gü edad.
habían publicado descripciones nial conformado por cinco mon-
Las excavaciones de Ontaneda, tlculos -A ,B,C,D,E- de dimen-
del sitio o sus materiales cultu-
Ralli y Casafranca pusieron al siones variadas, dispuestos en
rales, el monumento es bien co-
descubierto una serie de terrazas forma tal que definen una gr~n
nocido de los especialistas en la
de piedra con relieves mu rales, plaza o espaci o abierto, aparen-
pintados en colores vivos y bri- arqueología peruana.
temente cuadrangular, de 89,235
llantes. Ante la importancia del Mi propósito al escribir el pre- m 2. aproximadamente, cerrado
descubrimiento y la dificultad sente comentario es, por lo tan- en tres lados y cuyo eje tiene
de poder conservarlos, el Patro- to, ofrecer a una mayor audien- una orientación de 32° al NNE.
nato, a instancias del Dr. Jorge cia algunas de las evidencias ob-
La estructura principal, mon-
C. Muelle, Director del Museo ten idas por el Proyecto 7.1.11
tículo B, ocupa la parte central
Nacional de Antropología y Ar- del Centro de Investigación y
del conjunto y marca el límite
queología y miembro de aquél, Restauración de Bienes Monu-
mentales del Instituto Nacional Sur de la plaza. Las estructuras
.convino en que se cubriese nue- A y e son montículos laterales,.
vamente lo descubierto, perma- de Cultura, encargado de reali-
perpendiculares a B, y se en"
neciendo así hasta que el tiem- zar investigaciones en el sitio, a
cuentran con referencia al eje.
po y manos irrespetuosas los la vez de incidir en su significa-
principal, al Este y Oeste respec-
destruyeron irremediablemente. do e importancia. tivamente, definiendo los lados
En 1961, con motivos de los El monumento se ubica en te- de la plaza. Los montículos D y
trabajo~ de la autopista al Aero- rrenos de la antigua chacra Ga- E, paralelos a A y C, aparecen
puerto Internacional, Lima-Ca- ragay Alto, actualmente en pro- como apéndices finales de la es-
llao, que se conecta con la ca- ceso de lotización urbana, frente tructura B. En su t<;>talidad el
rretera Panamericana Norte, a la a la moderna urbanización "El conjunto afecta la forma de una
altura del kilómetro 12, la Pac(fico", de la que está separa- gran U, cuyo eje mayor sigue el
campan ía constructora Dos de da calle por medio. Es compren- rumbo general NNE. Su exten-
Mayo que ejecutaba dichas sión del distrito de San Martln sión total es de 158,021 m 2, en-
obras señaló a la huaca como de Porres, provincia y departa- cerrada en un perímetro de
lugar apropiado para extraer mento de Lima. Situado en la 1,200 metros lineales.
- Estructura a
Antes de iniciar nuestras excava-
ban desti nadas a servir de base a
una próxima elevación, la técni-
ca en construcción consistió en
superponer ordenadargente una
mampuestos planos asentados y
recubiertos con torta de barro
tienen tábicas de 40 cm. y hue-
llas de 30 cm., ancho este últi-
ciones, la estructura A afectaba serie de capas alternadas -no mo que corresponde también al
la forma de un montículo alar- más de 13- de cascajo, aproxi- de los peldaños.
gado, cubierto de cantos roda- madamente .de 20 cm. de espe- E I atrio es una construcción
dos en el que se destacaban una cuadrangular de mampostería
sor cada u na, y arci lIa muy fres-
pared frontal de mamposten'a or- ca de ap'roximadamente 10 cm. ordinaria enlucida con barro, de
dinaria, de 7 m. de largo y . 2m. de espesor. Cuando los muros aproximadamente 24 m. ' de lar-
de alto, y un deterioro lateral, debieron alcanzar alturas o so- go por 24 m. de ancho, abierto
perpendicular a la pared, que la portar cargas mayores, los em- en su lado norte. Su forma y di-
penetraba varios metros. Su área basamentos se reforzaban inter- mensiones son la redu .cción pro-
total de 5,600 m 2 , tenía en sus namente con muros o contra- porcional 3:3:3, es decir 1/3 y
e jes longitudinal y transversal fuertes inclinados, que dan la 1/9 del vestíbulo final y de la
máximos, 140 y 47 m. respec- impresión de muros adosados o gran plaza, respectivamente. El
tivamente. La altura máxima del paralelos; en este caso, el espa- alto de sus paredes perimetrales
montículo sobre el nivel del sue- ·cio intermedio se llenaba con se estima en 1.80 m.
lo era de 6 m. . cascajo, grava y tierra o barro. Esta construcción, actualmente
Pese a que aún resulta bastante Este sistema de construcción ex- en proceso de excavación, es la
impreciso definir el patrón ar- plica en cierta medida la forma que ofrece las mejores eviden-
quitectónico del edificio, de la en que se han derrumbado las cias para datar las etapas de edi-
Ii mpieza de ciertos sectores, se construcciones y la forma de los ficación y ampliación del tem-
puede inferir que corresponde a mont(culos que hoy se ven. plo. De la etapa más antigua y
una pirámide aterrazada -con más reciente del monumento
tres plataformas por lo menos- nuestro conocimiento es bastan-
de corte y planta rectangular,
sobre la cual se levantaban es-
tructuras menores.
En lo que respecta al sistema de
Estructura & te incompleto. En el primer ca-
so, porque la investigación supo-
ne excavaciones destructivas no
La estructura B es la mayor y justificables, y en el último, por-
construcción, y que podr(a ge- más importante del conjunto ce- que la destrucción ha sido tan
neralizarse a las estructuras B y C, remonial. Está situada al extre- notable que no quedan mayores
se destaca un núcleo constituido mo sur de la gran plaza. Su área evidencias.
por el amontonamiento de gran- es de 59,675 m 2 y su altura de La descripción que ofrecemos
des piedras angulares entre las 23 m. Sus di mensiones máxi- del atrio corresponde al Templo
que aparecen capas irregulares o mas, en sus ejes horizontal y Medi o, que 'cronológicamente
burujos de arcilla. Hipotética- transversal, son 380 y 155 m., antecede al Horizonte Tempra-
mente podemos asumir que fue respectivamente. Está conforma- no. Este supuesto cronológico se
a partir de este amontonamiento da por tres cuerpos: uno central sustenta en dos pequeños ex-
inicial, depositado sobre el suelo y más elevado y dos laterales, votos que reproducen la figura
aluviónico natural, que se con- rectangulares y más bajos. de la "Gran imagen" o "Lan-
formó una plataforma primaria, El cuerpo central, ate rrazad o, zón" del templo de Chav(n de
de aproximadamente 2 m. de al- ofrece tres elementos caracterís- Huantar, y que se descubrieron
to, cuya estabi lidad se logró ticos: una escalera frontal, un entre las paredes de los pozos
con un paramento perimetral de atrio central y una plataforma circulares del Templo Nuevo.
mamposter(a. superior. De modo general, el atrio está
A partir de esta plataforma ini- La escalera frontal arranca apa- constituido por tres elementos:
cial debieron arreglarse los terra- rentemente del vestíbulo infe- un muro perimetral ornado con
plenes y taludes que elevaron el rior y desemboca en el atrio altorrelieves pintados, un con-
edificio, e incluso las ampliacio- central, conectando al parecer junto de pozos circulares distri-
nes y remodelaciones posterio- un gran camino ceremonial que buidos en dos niveles de pisos, y
res. La construcción de los te- cruza la plaza y sigue la di- dos escaleras laterales que co-
rraplenes se hizo mediante mu- recdón del eje principal. Por su nectan el atrio con la platafor-
ros de sostenimiento o contra- forma corresp<;>nde al tipo de las ma superior.
. fuertes, ligeramente inclinados, escaleras macizas de un solo tiro, El muro perimétrico es un para-
de aproximadamente 70 a 80 construida con fábrica de man- mento de mamposter(a ordina-
cm. de espesor, cuyos espacios postería y zancas con mampues- ria, de aproximadamente 1.40
intermedios se llenaban con ba- tos iguales al de los peldaños. ' m. de alto, con una inclinación
rro. Cuando estas terrazas esta- Los pe ldaños, formados por de aproximadamente 12° desde
su base. Los muros se asientan hasta el Templo Nuevo. Las ca- de longitud y 115 m. de ancho,
directamente sobre el piso sin racter(sticas del pozo C no son con un área total de 22.997 m 2 •
mayor cimentación. Para levan- muy claras por haber sido des- Su altura máxima es de 9 m.
tar las paredes ha debido proce- truido en épocas muy tempra- El montículo, salvo sus dimen-
derse como sigue: sobre un piso nas, probablemente durante la siones, no da mayores indkacio-
artificialmente construido, se co- construcción del Templo Nuevo. nes sobre su forma original ya
locó una capa de barro de una Por otra parte, este pozo con que se halla totalmente cubierto
consistencia bastante sólida. A respecto a los anteriores sugiere de cantos rodados y piedra. Hay
partir de aqu(, usando piedras una mayor antigüedad puesto que destacar, sin embargo, la
careadas grandes, procedentes de que penetra incluso por debajo p r ese ncia de algunos tapiales
los cerros vecinos, y mortero de de los murales. Su profundidad prehispán icos en la base. El siti o
tarro, se levantó la fábrica, hasta fue de 2.40 m. no ha sido excavado.
una altura convencional no ma- Los poz.os de la fila externa son
yor de 1.80 m. La totalidad de más pequeños y dos de ellos, el
estos muros tienen releje y así
el uso de la plomada se hada
menos necesario.
D y el E, ofrecen evidencias de
dos remodelaciones. Sin embar-
go, debe señalarse que su ubica-
Estructuras el ~y
Ambas estructu ras aparecen co-
Sobre este paramento se hizo un ción en el contexto del atrio
primer enchapado de arcilla, de aún no es muy clara. mo montículos muy bajos, cu-
aproximadamente 2 cm. de es- Si se considera que en el trazo biertos de piedra, y como apén-
pesor. Posteriormente se agrega- del monumento la distribución dices del montículo B. Sus di-
ron dos capas más de barro de es esencialmente simétrica, en el mensiones son:
1.5 cm . de espesor cada una, y atrio deben existir dos escalina- Estructura D: longitud máxima,
finalmente un enlucido, consti- tas -de las que conocemos sólo 60 m.; ancho máximo, 25 m.;
tuido por una capa delgada de una- que comunican éste con la altura, 2 m.; área total, 1,500
barro más fino, que llega hasta pla taforma su peri or. En su ac- m2 •
el piso, y sobre el cual se aplicó ceso las escalinatas están flan- Estructura E: longitud máxima,
la primera capa de pintura o se queadas por dos volúmenes cú- 70 m.; ancho máximo, 25 m.; al-
ejecutaron los altorrelieves. El bicos que siguen el patrón deco- tura 2 m.; área total, 1,750 m 2 .
a trio, en esta sección, parece rativo del atrio, y que sobresa- Sin embargo, y pese a ciertos
que estuvo cubierto por un te- len 35 cm. del muro. La escali- deterioros sufridos, del estudio
cho, considerando los fragmen- nata es de un solo tiro y muy detallado de su planta se puede
tos de postes de madera enluci- pendiente con seis peldaños ob- colegir que ambos montículos
dos con barro y pintados de tusos de 20 x 20 cm. El esca- conforman un vestíbulo con ca-
blanco que se encontraron al so desgaste de los pe ldaños y racterísticas semejantes al atrio,
centro de los pozos. su marcada inclinación sugiere en el que se han triplicado sus
Los pozos circulares constituyen que su uso fue relativamente proporciones métricas.
e le men tos caracter(sticos del mínimo. Las imágenes del Templo Me-
atrio cuya importancia y fun- La plataforma superior, proba- dio. El aspecto más impresio-
ción aún no se ha precisado. blemente también en forma de nante de Garagay lo constituye
Consisten en fosos aproximada- U, y coronada por construccio- evidentemente el friso policro-
mente de 1.80 m. de diámetro, nes menores, parece representar mado que orna el atrio del T em-
en promedio, ubicados inmedia- el mismo concepto del ushno in- plo Medio. Aunque una descrip-
tamente debajo de las imágenes. caico, es decir un lugar de sacri- ción detallada de cada una de
Su construcción es a base de ficio o un altar externo. Debe- sus imágenes rebasaría los I(mi-
adobes y cantos rodados; ocasio- mos suponer que se llegaba has- tes de este artículo, cabe señalar
nalmente, piedras angulares, re- ta él mediante las escalinatas la- algunas de sus características
cubiertos y enlucidos con barro. terales. más sobresalientes.
En el atrio se destacan seis po- En el atrio, los frisos siguen la
zos, distribuidos en dos filas pa-
ralelas de 3 cada una, con una
separación de 2.50 m. y una di-
ferencia de niveles de 30 cm.
entre fila y fila. En la primera
Estructura e
Esta estructura, paralela a la es-
dirección general de la planta y
decoran las paredes externas del
muro que lo conforma. En la
composición del friso se destaca
una dirección en la posición de
fila, la más cercana a los mura- tructura A, forma el lado Este las imágenes a manera de narra-
les, los pozos· signados como A de la Gran Plaza. Comparativa- ción continua, y una sucesión
y B, son contemporáneos. Estu- mente, es mayor que la estruc- alternada de paneles inscritos
vieron en uso simultáneamente tura A, pero menor que B. Sus dentro de un módu lo de anchu-
y, remodelados, llegaron incluso dimensiones máximas son 260 m. ra.
Cada panel o cada imagen está - se han contado hasta diez ca- casas ans( por de dentro co-
encuadrada lateralmente por una pas- y resanando los sitios que mo por de fuera, pegase bien
especie de métopa de proporcio- se hab (an descortezado . En y no se resquebrajase, mandó
nes y caracter(sticas semejantes . otros, como en el caso de la fi- [Inca Yupanqui] que trajesen
Esta regularidad se altera única- gura 1, se ha remodelado (nte- para aquel tiempo mucha can-
mente por el encuentro de dos gramente el motivo, incluso has- tidad de unos cardones que
muros; es decir que las esquinas ta desfigu rarlo. ellos llaman aguacolla quisca,
representan la línea de separa- Los colores em pleados son: ne- con el su mo de los cuales fue-
ción de las imágenes . gro (5Y2/1, Munsell), blanco sen untadas las tales paredes.
Dado el carácter preliminar de (7.5YR8/0, Munsell), amarillo
este informe, considerando ade- (2.5Y8/4, Munsell), azul grisá- Aunque es probable que algunos
de los muros decorados de Gara-
más que las fotograHas y dibu- ce o (2.5 Y7 /8, Munsell), rojo
(10R6/6, Munsell) y rosado gay fueran simplemente decora-
jos que lo acompañan ilustran
tivos, en su mayor(a responden
mejor que cualquier descripción, (10R6/4, Munsell), este último
evidentemente a expresiones de
nos limitaremos a señalar breve- usado generalmente en las pare-
ideas determinadas o pensamien-
mente algunos aspectos. des y como color de fondo.
tos espedficos. Sin embargo, la
En la construcción d'e los alto- Los pigmentos son todos de
función y simbología de las pin-
rrelieves, como trabajo prelimi- origen mineral, en cuya compo-
turas, as( como su importancia
nar el paramento fue enlucido sición predominan (con más del
con fines cronológicos, tanto pa-
tal como ya se señaló. Sobre es- 10%) aluminio, calcio, fierro, sili-
ra su propia historia como para
te enlucido se diseñaron las imá- cio y sodio. Aunque no se ha
el de la arquitectu ra, son proble-
genes, usando para los volúme- logrado determinar con preci-
mas apenas planteados.
nes una base de adobes hemisfé- sión el vehículo usado en la fija-
ricos y ocasionalmente cantos ción de los pigmentos, parece Esperamos que un futuro estu-
rodados adheridos con mortero evidente que se trata de una sus- dio de las relaciones de la pintu-
de arcilla. tancia vegetal obtenida del Tri- ra con la arquitectura ayudará a
Finalmente se modeló la ima- chocereus Pachanoi, cactus alu- interpretar algunos aspectos de
gen, entunicándola con una capa cinógeno de amplia distribución éstas y algo de la vida ceremo-
fina de arcilla, sobre la cual se en la región, cuyas púas hemos nial que se desarrolló en Gara-
aplicó la capa pictórica, al pare- encontrado en el revoque de gayo Aspectos valiosos, en cuan-
cer mediante motas de algodón los muros. El testimonio del to podrían resultar indicadores
embebidas con pintura. cron ista Betanzos, en este pun- de la. superestructura cultural en
En casi todos los casos se ha re- to resulta bastante esclarecedor: la que se sustentó el surgimiento
frescado la ornamentación, re- Para que la mezcla que hab(a de las sociedades complejas de
pintando la pared y las figuras de llevar en el enlucido de las los Andes.

¿QUOSQUE TANDEM? lIamente, no es cierto que el pa- tos" capaces, de "expertos" dis-
sado exista por sI' mismo", puestos a sacrificar el reconoci-
En el mundo andino rescatar el miento burocrático y hasta de
pasado es tarea eminentemente un personal administrativo, efi-
ERO investigar el pa- arqueológica, tarea que implica ciente, dinámico, y una masa
sado, descu bri r testi- riesgos y ventajas. Ventajas de ciudadana sensible a las creacio-
monios de milenios no alcanzar un conocimiento inédi- nes y valores de su propio pue-
es tarea romántica, ni to y recuperar los testi monios blo,
ocioso pri'" ¿,io pa- del pasado prehistórico, herencia La arqueolog(a peruana enfrenta
sad ista y nostálgico. universal de la humanidad. Ries- hoy un doble compromiso: in-
Introducirse en el tiempo tam- gos de no poder conservar estos vestigar y conservar, Investigar
poco significa deducir lecciones testimonios sea por la falencia el pasado como afirmación de
políticas prácticas. "Buscamos el económica, sea por la dificultad nuestro propio destino histórico,
fin -escrib(a el profesor Geo- de conformar un equipo inter- y conservarlo como un requisito
ffrey Barradough- para' saber disciplinario y fundamentalmen- a la propia investigación y una
qué sucedió realmente, a fin de te por la carencia de profesiona- necesidad de transmitirlo a las
evaluar su alcance y su signifi- les en campos especializados de generaciones futuras con el ca-
cado para nosotros. Pues, senci- la ciencia y la técnica, de "peri- rácter de bien colectivo.

RECONOCIMIENTO a Alejandro Campos, Juan A. Carbajal, Nicolás Clemente, Salvador Contreras, Eduardo Gomero, William H. Isbell,
Gumercindo Jaimes, Aurelio Jesús, Leoncio Jesús, Jorge Lévano , Wilfredo Loayza , Epifanio Mayhuay, Luis Pé rez , Rodolfo Va 11(11 , FlOr
Villalobos de Junco, quienes han participado directamente en los trabajos de Garagay . lima, junio de 1975 .

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