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Scaling Up Rice
Fortification
in Latin America and
the Caribbean
02 TABLA DE CONTENIDO
Tabla de contenido
Editorial | 04 Entendiendo los factores que intervienen en
los beneficios y costos de la fortificación del arroz | 64
Situación actual de los micronutrientes
en Latinoamérica y el Caribe | 06 El rol del sector privado en la fortificación del arroz | 71
Glosario | 116
Table of Contents
Editorial | 120 Understanding Factors that Influence the Benefits
and Costs of Rice Fortification | 176
Current Situation of Micronutrients in
Latin America and the Caribbean | 122 The Role of the Private Sector in Rice Fortification | 182
Technology for Rice Fortification | 159 Infographic: Fortified Rice Supply Chain | 210
Standards and Specifications for Fortified Rice | 165 Scaling Up Rice Fortification in Latin
America and the Caribbean | 212
Identifying Appropriate Delivery Options
for Fortified Rice | 170 Rice Fortification in Costa Rica | 217
Glossary | 223
Imprint | 226
04 EDITORIAL
Editorial
La fortificación o enriquecimiento de alimentos de consumo las diez acciones más rentables para el desarrollo. Está claro que
básico con vitaminas y minerales esenciales no es un concepto hay un imperativo moral para abordar las deficiencias de micro-
nuevo. Desde los primeros ensayos en la década de 1920, ha nutrientes, pero también tiene una lógica económica.
sido una estrategia de salud pública eficaz para prevenir las de- En América Latina y el Caribe se han logrado avances eco-
ficiencias de micronutrientes en las poblaciones en general, y nómicos significativos en la última década, lo que ha permitido
hoy muchos países del mundo fortifican uno o más alimentos mejorar la situación sanitaria y nutricional de las poblaciones.
básicos. Los alimentos más frecuentemente fortificados son ce- Desde la década de 1940 se han desarrollado e implementado po-
reales (harina de trigo y maíz), leche y productos lácteos, acei- líticas y programas pioneros dirigidos a erradicar las deficiencias
tes comestibles, azúcar, sal y alimentos especializados como de micronutrientes, como la fortificación del azúcar con vitamina
la comida fortificada y mezclada. El potencial para el uso del A en Guatemala. Todavía hoy sirven de modelo para otros países.
arroz como un vehículo para aumentar la ingesta de vitaminas Sin embargo, las deficiencias de micronutrientes continúan om-
y minerales esenciales es enorme. El arroz es el alimento bá- nipresentes en toda la región. El problema más importante sigue
sico dominante de aproximadamente la mitad de la población siendo la anemia en los niños y las mujeres en edad reproductiva,
mundial. En América Latina y el Caribe (ALC), suministra en de los cuales aproximadamente la mitad se estima que es debido
promedio el 27 % de la ingesta calórica diaria, que oscila entre a la deficiencia de hierro según la Organización Mundial de la
8 % en Centroamérica y 47 % en el Caribe (FAOSTAT). La región Salud. La anemia es un problema de salud pública en 16 de los
produce anualmente más de 28 millones de toneladas de arroz 17 países de la región para mujeres en edad reproductiva y en
– la gran mayoría en América del Sur – representando más del 15 países para niños menores de cinco años. Otras deficiencias
5 % de la producción mundial. como el zinc, el yodo, la vitamina A, el ácido fólico o la vitamina
En las últimas décadas, la ampliación de la fortificación del B12 se observan a nivel general o afectan a grupos vulnerables
arroz se ha visto obstaculizada por las limitaciones tecnológicas. específicos que requieren medidas de salud pública.
Hoy en día existe tecnología asequible para producir granos de
arroz fortificados que se parecen a y saben como el arroz no fortifi- Llevar a escala la fortificación del arroz ahora
cado. Los avances en las tecnologías de recubrimiento y extrusión Hoy en día seis países han aprobado legislaciones para la forti-
permiten retener los micronutrientes de manera efectiva incluso ficación obligatoria del arroz, incluyendo tres en Centroamérica
después de largos procesos de lavado y cocción, lo que hace que (Honduras, Costa Rica y Panamá). Sin embargo, actualmente
la fortificación del arroz sea una estrategia eficaz y asequible. la ley solo se aplica efectivamente en Costa Rica. En agosto de
2016, el Gobierno de la República Dominicana y el Programa
Hambre oculta en América Latina y el Caribe Mundial de Alimentos (PMA) organizaron conjuntamente el
A nivel global, las deficiencias de micronutrientes (DMN) – el primer evento para la promoción de la fortificación del arroz
hambre oculta – son la forma más prevalente de malnutrición, en América Latina y el Caribe. Este número especial de Sight
con más de dos mil millones de personas afectadas. Por lo ge- and Life contribuye a dicho esfuerzo. En esta publicación encon-
neral, resultan de la ingesta inadecuada y las pérdidas debido a trará una visión completa de por qué la fortificación del arroz
la ingesta insuficiente de alimentos, las dietas de mala calidad, con múltiples micronutrientes puede ser un esfuerzo asequible
la baja biodisponibilidad de micronutrientes en los alimentos como parte de una estrategia eficaz para aumentar la ingesta de
consumidos, o las infecciones frecuentes. Las deficiencias de vitaminas y minerales esenciales en los países y así hacer frente
micronutrientes afectan varios procesos metabólicos que dan a las condiciones que estriban de éstas, como es la desnutrición
lugar al deterioro de las funciones sensoriales y cognitivas, al crónica. Este número es una recopilación de artículos originales
debilitamiento del sistema inmunológico y, en última instan- de los principales profesionales de la salud pública, así como
cia, aumentan la morbilidad y la mortalidad. Más allá del factor artículos del suplemento sobre la ampliación de la fortificación
humano, las consecuencias de la DMN a lo largo del ciclo de del arroz en Asia, publicado en 2015 en colaboración entre Sight
vida producen baja productividad y pérdidas económicas netas and Life y el PMA.
para individuos, hogares y naciones. En 2012, el Consenso de Esperamos que encuentre en ella la inspiración para redo-
Copenhague (un grupo de economistas líderes y expertos en de- blar los esfuerzos con vistas a ampliar la fortificación del arroz
sarrollo) identificó las intervenciones de micronutrientes entre en la región de América Latina y el Caribe.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA EDITORIAL 05
© WFP/Sabrina Quezada
El equipo editorial
Laura Irizarry, Marc-André Prost, Diana Murillo
Oficina Regional del Programa Mundial de Alimentos para
América Latina y el Caribe
06 SITUACIÓN ACTUAL DE LOS MICRONUTRIENTES EN LATINOAMÉRICA Y EL CARIBE
Situación actual de
los micronutrientes en
Latinoamérica y el Caribe
Prevalencia de su deficiencia y programas
nacionales de entrega de micronutrientes
Un grupo de escolares adolescentes en Haití. Llegar a las chicas adolescentes con hierro y ácido fólico no solo las ayuda a rendir mejor en el colegio,
sino que también ayuda al mundo a alcanzar las nuevas metas globales de nutrición.
la Salud (OMS) estima que la mitad de todas las anemias es cau- un 35%, afectando aproximadamente a 2 billones de personas,
sada por deficiencia de hierro.14 De acuerdo a una estimación siendo la Región de las Américas aquella con la prevalencia más
de la OMS de 1993–2005, el 25% de la población a nivel global baja (9.8%).15
tiene anemia, llegando a 47.4% en preescolares, 41.8% en mu-
jeres embarazadas y 30.2% en mujeres no embarazadas.4 Deficiencia de zinc
La importancia del zinc como un nutriente esencial para una
Deficiencia de yodo salud humana adecuada es bien conocida. El zinc participa
A pesar de los muchos esfuerzos para controlar la deficiencia de en diversas vías del metabolismo humano, por lo que diferen-
yodo, principalmente a través de la fortificación de la sal, esta tes funciones metabólicas y fisiológicas son alteradas en su
condición continúa siendo prevalente a nivel mundial.15 El ausencia.19 En la mayoría de los individuos, la deficiencia de
yodo es esencial para la producción de tiroxina (T4) y 3,5,3’-tri- zinc es el resultado ya sea de una ingesta dietética inadecuada,
yodotironina (T3), las cuales son hormonas requeridas para el por malabsorción, por el incremento de las pérdidas y/o por
normal crecimiento y desarrollo de sistema nervioso central.16 impedimento en su utilización. Sin embargo, en la mayoría de
En general la deficiencia de yodo está asociada con un menor los casos la causa primaria de deficiencia es una ingesta inade-
nivel educativo, menor productividad laboral y vulnerabilidad cuada de zinc absorbible, la cual comúnmente ocurre como
socioeconómica17 y es considerada la principal causa preveni- resultado de la combinación de una baja ingesta dietética y el
ble de retardo mental alrededor del mundo.15 Los individuos consumo frecuente de alimentos con bajo contenido de este
que están en mayor riesgo de desarrollar esta deficiencia son elemento y/o de formas de zinc poco absorbibles.20 Las conse-
las gestantes, las puérperas y los lactantes. La prevalencia de la cuencias de esta deficiencia incluyen retraso del crecimiento,
deficiencia de yodo se estima comúnmente con la medición de hipogonadismo, disfunción inmune y alteraciones cognitivas.
los niveles urinarios de yodo (YU) en niños escolares, los cuales El diagnóstico de deficiencia de zinc en individuos todavía no
son extrapolados para estimar el estado de yodo en la población es posible dado que aún no se cuenta con un indicador con
completa.18 En 2007, la OMS reportó que la prevalencia global sensibilidad y especificidad adecuadas. Es aceptable el uso de
de deficiencia de yodo (YU <100 μg/L) era de aproximadamente niveles séricos de zinc para evaluar poblaciones;21 sin embar-
08 INTRODUCCIÓN
go, pocos países incluyen esta información en sus encuestas las dos principales formas fisiológicamente relevantes para los
nacionales de nutrición. Por lo tanto, por lo general se utilizan seres humanos son la vitamina D2 (ergocalciferol), obtenida
indicadores indirectos, tales como la prevalencia de retraso a partir de fuentes vegetales, y la vitamina D3 (colecalciferol),
de crecimiento lineal en niños < 5 años y la ingesta de zinc sintetizada en la piel y obtenida a partir de fuentes animales.
absorbible, para estimar el riesgo de deficiencia.21 En Latinoa- La deficiencia de vitamina D se caracteriza por una inadecuada
mérica, el retraso del crecimiento afecta hasta un tercio de los mineralización o desmineralización del esqueleto. En los niños
niños menores de cinco años de edad y entre el 30–50% de la causa raquitismo y en los adultos puede precipitar y exacerbar
población puede estar en riesgo de tener una ingesta inade- la osteopenia, la osteoporosis y las fracturas óseas.26 Estudios
cuada de zinc.22 han demostrado que la terapia con vitamina D aumenta la fuer-
za muscular en sujetos deficientes.28,29 Resultados de estudios
epidemiológicos han asociado la deficiencia de vitamina D con
“L as consecuencias de la deficiencia un mayor riesgo de ciertos cánceres comunes, enfermedades
de zinc incluyen retraso del crecimiento, autoinmunes, hipertensión y enfermedades infecciosas.30–33 La
concentración plasmática de 25-Hidroxivitamina D (25 OHD) se
hipogonadismo, disfunción inmune ha utilizado con regularidad para identificar a las personas en
y alteraciones cognitivas” riesgo de deficiencia de vitamina D y, sobre una base de pobla-
ción, para considerar la idoneidad del suministro de vitamina
D. Sin embargo, actualmente no existe un consenso global sobre
Deficiencia de vitamina A el punto de corte para definir el estado de vitamina D.34 La defi-
La deficiencia de vitamina A es también muy importante en tér- ciencia de vitamina D tiene el potencial de ser un problema de
minos de implicaciones de salud pública a nivel mundial. La salud pública.35 La magnitud de esta deficiencia en Latinoamé-
deficiencia de vitamina A altera diferentes funciones en el orga- rica es desconocida.
nismo y puede llevar a muchas consecuencias negativas para la
salud, tales como un sistema inmune mermado, retardo del cre- Deficiencia de folato y vitamina B12
cimiento en niños, xeroftalmia, un aumento en la carga de en- El folato y la vitamina B12 comparten funciones y vías metabóli-
fermedades infecciosas y un aumento en el riesgo de muerte. La cas, las cuales definen la reserva de donantes de grupos metilos
xeroftalmia es la consecuencia más específica de la deficiencia, utilizados en múltiples rutas metabólicas, tales como la meti-
y la principal causa de ceguera en niños en todo el mundo.23 La lación del ADN y la síntesis de ácidos nucleicos.11,36 El folato
ceguera nocturna a menudo aparece durante el embarazo, una se encuentra de forma natural principalmente en las verduras,
probable consecuencia de preexistencia de un estado marginal mientras que en alimentos fortificados se utiliza el ácido fóli-
de la vitamina debido a un aumento de las demandas nutricio- co.37 Los bajos niveles de folato aumentan el riesgo de defectos
nales durante el embarazo y a las infecciones intercurrentes. del tubo neural, por lo que el momento crítico para el aporte
Se ha observado que la administración de vitamina A reduce el de ácido fólico es antes de la gestación y durante las primeras
riesgo de muerte en niños de 6–59 meses de edad en un rango semanas de embarazo, que es cuando se produce el cierre del
de 23–30%.24,25 Un informe de 2009 de la OMS indicó que la tubo neural.38–40
deficiencia de esta vitamina afectaba a 190 millones de niños La vitamina B12 en su forma natural sólo está presente en ali-
pre-escolares y 19.1 millones de gestantes, los cuales residen en mentos de origen animal, por lo que el déficit es más común en-
países con mayor riesgo de tener deficiencia de vitamina A.23 tre poblaciones con una baja ingesta de estos alimentos y en los
veganos.41 La absorción de la vitamina B12 de los alimentos es
Deficiencia de vitamina D menor en los adultos mayores, quienes tienen mayor riesgo de
La vitamina D (calciferol), que está constituida por un grupo de atrofia gástrica, producción alterada del factor intrínseco y de la
esteroles solubles en grasa, es un micronutriente esencial para secreción de ácido, todos necesarios para la adecuada absorción
la homeostasis del calcio y del fósforo.26 Por otra parte, han sido de esta vitamina.41 La deficiencia de ambas vitaminas se asocia
descubiertas nuevas funciones de la vitamina D sobre la salud, con trastornos hematológicos.42 La deficiencia de vitamina B12
principalmente a través de investigaciones sobre cómo su re- puede también conllevar a desórdenes neurológicos clínicos y
ceptor nuclear puede mediar en el control de los genes diana.27 subclínicos y otros trastornos en ausencia de un deterioro he-
Los seres humanos obtienen la vitamina D principalmente de matológico.43 Por lo tanto, la deficiencia de folato y vitamina B12
dos tipos de fuentes: la fotosíntesis en la piel por la acción de tienen el potencial para ser consideradas un problema de salud
la radiación solar ultravioleta B y la ingesta dietaría. La vitami- pública. En el año 2004 una revisión estimó la prevalencia de
na D se puede encontrar naturalmente en muchas formas, pero la deficiencia de ambas vitaminas en América, encontrando que
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA SITUACIÓN ACTUAL DE LOS MICRONUTRIENTES EN LATINOAMÉRICA Y EL CARIBE 9
© Sabrina Quezada
referencia los resultados de una reciente revisión sistemática rea-
lizada por nuestro grupo;52 2) describir los programas existentes
en los países para prevenir estas deficiencias; y 3) analizar breve-
mente las necesidades inmediatas para cerrar las brechas entre
los datos epidemiológicos y los datos programáticos.
<70 μg/dL. Las unidades reportadas fueron estandarizadas para de Salud y la Iniciativa de Micronutrientes.51
facilitar las comparaciones.
La magnitud del problema de salud pública de la deficien- Resultados
cia de cada micronutriente se definió de acuerdo a los siguien- Prevalencia de déficit de micronutrientes
tes puntos de corte en la prevalencia: 1) anemia (hierro), sin en Latinoamérica y el Caribe
problema ≤4.9%, leve 5–19.9%, moderado 20–39.9% y severo Se encontraron 25 encuestas y estudios con representatividad
≥40%, de acuerdo a recomendaciones de la OMS;50 zinc, sin nacional (Tabla 1), los cuales reportaron datos del estado nu-
problema < 20%, problema >20%, de acuerdo a recomendacio- tricional de hierro (anemia), zinc, vitamina A, vitamina D, folato
nes internacionales;21 vitamina A, sin problema <2%, leve ≤2% y/o vitamina B12, principalmente en niños menores de 6 años
a <10%, moderado ≤10% a <20%, y severo ≥20%, de acuerdo a (Tabla 2) y mujeres en edad fértil (Tabla 3). Las encuestas se
recomendaciones de la OMS;23 vitamina D, sin problema <5%, realizaron entre el 2000–2010.
leve 5–19.9%, moderado 20–39.9% y severo ≥40%;45 folato,
sin problema <5%, problema >5%; y vitamina B12, sin problema Hierro y anemia
<5%, problema >5%. De acuerdo a la última información disponible, la anemia en
niños (Tabla 2) no es un problema de salud pública en Chile y
Identificación de programas nacionales Costa Rica (< 5 %). Países como Argentina y México han avan-
de prevención en Latinoamérica zado, siendo la anemia en niños un problema leve de salud pú-
La información presentada se basa en una reciente revisión sis- blica (< 20%). En Nicaragua, Brasil, Ecuador, El Salvador, Cuba,
temática sobre políticas y programas de nutrición en Latinoa- Colombia, República Dominicana, Perú, Panamá y Honduras,
mérica y el Caribe realizado por la Organización Panamericana la anemia en niños continúa siendo un problema moderado de
Tabla 1: Encuestas Nacionales en Latinoamérica que incluyen datos sobre estado de micronutrientes en la población
tablA 2: Prevalencia de la deficiencia de micronutrientes en niños ≥ 6 años en países de Latinoamérica con datos representativosa
a
untos de corte para determinar la severidad del problema de salud pública de acuerdo a prevalencia: Anemia: sin problema ≤4.9%, leve 5-19.9%, moderado 20-39.9%,
P
severo ≥40%; Deficiencia de zinc: sin problema < 20%, problema >20%.; Deficiencia de vitamina A: sin problema <2%, leve ≤2% a <10%, moderado ≤10% a <20%, y severo
≥20%; Deficiencia de vitamina D: sin problema <5%, leve 5-19.9%. moderado 20-39.9%, severo ≥40%; Deficiencia de folato: sin problema <5%, problema >5%.
b
Prevalencia de insuficiencia de 24% en preescolares y 10% en escolares
salud pública (20–40%). Por otra parte, en Guatemala, Haití y prevalencia de ingesta inadecuada > 25% sumado a una preva-
Bolivia la anemia en niños es un problema serio de salud públi- lencia de baja talla para la edad > 20% – fueron Belice, Bolivia,
ca, con prevalencias por encima del 40%. El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, Nicaragua y Saint
La anemia en mujeres en edad fértil (Tabla 3) no es un Vincent y las Granadinas.47
problema de salud pública (< 5 %) en Chile, mientras que en
Colombia, El Salvador, Costa Rica, Nicaragua, Ecuador, Mé- Vitamina A
xico, Perú, Honduras y Argentina es un problema de salud Se identificaron 10 encuestas nacionales y 6 estudios represen-
pública leve (< 20%). Por otra parte, en Guatemala, Brasil, Re- tativos. Guatemala y Nicaragua prácticamente han erradicado
pública Dominicana y 2008 es un problema de salud pública la deficiencia de vitamina A (< 20 μg/dL) en niños menores de
moderado (20–40%) y en de Panamá y Haití es un problema 6 años (Tabla 2). En Costa Rica, Cuba, El Salvador y Panamá la
severo (> 40%). prevalencia oscila entre 2.8–9.4%, siendo un problema leve de
salud pública (< 10%). En Perú, Honduras, Argentina, Ecuador
Zinc y Brasil el rango de déficit varía entre 14.0–17.4% siendo clasifi-
En los pocos países con datos representativos de zinc plasmá- cado como un problema moderado de salud pública (10–20%),
tico se observa que la prevalencia de deficiencia de zinc se en- mientras que Colombia, México y Haití existe un problema seve-
cuentra por encima del 20% tanto en niños menores de 6 años ro de déficit de vitamina A (> 20%). Es importante resaltar que
(México, Ecuador, Guatemala y Colombia) como en mujeres en las mayores prevalencias de déficit se encuentran entre niños
edad fértil (México y Ecuador). Los países con el mayor ries- de comunidades indígenas. Al evaluar el cambio en las preva-
go de deficiencia de zinc – el riesgo de deficiencia se estimó lencias en países con más de una encuesta, se observa una im-
a partir de la prevalencia de ingesta inadecuada de zinc en la portante reducción en la deficiencia de vitamina A en los países
población y la prevalencia de presencia de baja talla para la de Centro América, mientras que en los países de América del
edad en niños < 5 años, definiendo riesgo elevado como una Sur la deficiencia se ha incrementado con el tiempo.48
12 SITUACIÓN ACTUAL DE LOS MICRONUTRIENTES EN LATINOAMÉRICA Y EL CARIBE
Una niña en Bolivia. Aproximadamente el 80% de los niños en Bolivia menores de dos años de edad son anémicos. Las Chispitas –
un polvo de multimicronutrientes que contiene hierro – es una arma en la lucha contra la anemia infantil.
En mujeres en edad fértil del Salvador y Nicaragua el défi- tante en la prevalencia del déficit de folato en la región, atribui-
cit de vitamina A no representa un problema de salud pública, ble a los programas masivos de fortificación con ácido fólico en
mientras que en México y Perú existe un riesgo leve y en Brasil ciertos países, que además se asocia en algunos con una reduc-
el riesgo es moderado (Tabla 3). ción en la prevalencia de defectos del tubo neural.57
En el caso de la vitamina B12 son pocos los países con datos na-
Vitamina D cionales. En México se observa que el 5.5% de preescolares y 8.5%
La magnitud exacta de la inadecuación de vitamina D en la región de mujeres adultas tienen niveles séricos considerados bajos
es desconocida. Solo México cuenta con datos representativos en (<148 pmol/L). En Costa Rica, el 4.8%, 6.4%, 2.9% y 5.3% de mu-
niños. En general el 54.0% presenta inadecuación de vitamina D, jeres en edad fértil, mujeres adultas, hombres adultos, y adultos
con una prevalencia de deficiencia y de insuficiencia en preescola- mayores, respectivamente tuvieron niveles séricos considerados
res de 24% y 30%, respectivamente, y una prevalencia de deficien- bajos. En Colombia, la prevalencia de niveles séricos de vitamina
cia e insuficiencia en escolares de 10% y 18%, respectivamente. B12 considerados marginales (<221pmol/L) fue de 21.0%, 59.9% y
Algunos países cuentan con datos no representativos de la pre- 37.3% entre menores de 18 años, mujeres embarazadas y mujeres
valencia de déficit de vitamina D en niños, tales como Colombia en edad fértil, respectivamente. En Argentina, el 49.1% y 11.9% de
(10–12%),52,53 Brasil (9%), 54 Argentina (3%)55 y recientemente mujeres embarazadas y mujeres en edad fértil tuvieron niveles sé-
Chile con cifras en preescolares de zonas australes (64%).56 ricos marginales. Es difícil llegar a conclusiones respecto al déficit
de folato y vitamina B12 debido a la falta de consenso respecto a los
Folato y vitamina B12 puntos de corte para distinguir entre normalidad y deficiencia.
Los pocos datos nacionales disponibles para el folato muestran
en general una prevalencia de deficiencia inferior al 5% en di- Programas nacionales de entrega de
versos grupos poblacionales (Tablas 2 y 3). México reporta una micronutrientes en Latinoamérica
prevalencia del 3.2% en niños menores de 6 años. En Argentina La Tabla 4 describe los diferentes programas de suplementa-
el 2.7% de mujeres embarazadas y el 1.3% de mujeres en edad ción y de fortificación con micronutrientes que se implementan
fértil presentan deficiencia, mientras que en Costa Rica y Chile actualmente a nivel nacional en la región y el número de países
el 1.4% y 0.6% de los adultos mayores presentan una deficiencia. han adoptado cada una de estas estrategias. El 90%18,20 de los
Al comparar con datos previos se observa una reducción impor- países de la región cuentan con programas de suplementación
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA SITUACIÓN ACTUAL DE LOS MICRONUTRIENTES EN LATINOAMÉRICA Y EL CARIBE 13
tablA 3: Prevalencia de la deficiencia de micronutrientes en mujeres en edad fértil en países de Latino América
con datos representativosa
a
untos de corte para determinar la severidad del problema de salud pública de acuerdo a prevalencia: Anemia: sin problema ≤4.9%, leve 5-19.9%, moderado 20-39.9% y
P
severo ≥40%; Deficiencia de zinc: sin problema < 20%, problema >20%.; Deficiencia de vitamina A: sin problema <2%, leve ≤2% a <10%, moderado ≤10% a <20%, y severo
≥20%; Deficiencia de vitamina D: sin problema <5%, leve 5-19.9%. moderado 20-39.9%, severo ≥40%; Deficiencia de folato: sin problema <5%, problema >5%.
© Hetze Costa
Suplementación con vitamina A Niños 6–59 m 15 (75) Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, Colombia,
Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala,
Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Perú,
República Dominicana
Suplementación con hierro Niños 6–59 m 16 (80) Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Costa Rica,
Perú 2001 (8.7%), El Salvador, Guatemala,
Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay,
Perú, República Dominicana, Uruguay
Micronutrientes múltiples en polvo para el Lactantes 6–23 m 12 (60) Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador,
enriquecimiento doméstico de los alimentos El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Perú,
República Dominicana, Uruguay
Suplementación con hierro y ácido fólico Mujeres en edad fértil 7 (35) El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua,
Panamá, Paraguay, República Dominicana,
Gestantes 18 (90) Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia,
Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala,
Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay,
Perú, República Dominicana, Uruguay
Suplementación con calcio Gestantes 3 (15) Colombia, El Salvador, Nicaragua
Suplementación con zinc para el tratamiento Niños 0–59 m 5 (25) Bolivia, Colombia, El Salvador, Guatemala,
de la diarrea Nicaragua
Fortificación universal de alimentosc
Sal (yodo) Todos 18 (90) Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia,
Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala,
Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay,
Perú, República Dominicana, Uruguay
Azúcar (vitamina A) Todos 5 (25) Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras,
Nicaragua
Harina de trigoc Todos 18 (90) Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia,
Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala,
Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay,
Perú, República Dominicana, Uruguay
Harina de maízd Todos 5 (25) Brasil, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, México
Arroz e
Todos 3 (15) Costa Rica, Nicaragua, Panamá
a
Total de países = 20
b 51
Fuente: Tirado M.C., et al.
b
Fuente: Flour Fortification Initiative. http://www.ffinetwork.org/global_progress/index.php
c
Todos los países fortifican con hierro, tiamina, riboflavina, niacina y ácido fólico, excepto Brasil (hierro y ácido fólico), Cuba (adicionalmente incluye vitamina B12),
México (hierro y ácido fólico), Uruguay (hierro, ácido fólico y vitamina B12) y Venezuela (hierro, tiamina, riboflavina y niacina).
d
Diferentes formulaciones entre países: Brasil (hierro y ácido fólico), Costa Rica y El Salvador (hierro, tiamina, riboflavina, niacina y ácido fólico), Guatemala
(hierro, zinc, tiamina, riboflavina, niacina, ácido fólico y vitamina B12), México (hierro, zinc, tiamina, riboflavina, niacina y ácido fólico) y Venezuela (hierro, riboflavina,
niacina y vitamina A).
e
icaragua y Panamá fortifican con hierro, zinc, riboflavina, niacina, ácido fólico y vitamina B12; Costa Rica con zinc, tiamina, riboflavina, niacina,
N
ácido fólico y vitamina B12.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA SITUACIÓN ACTUAL DE LOS MICRONUTRIENTES EN LATINOAMÉRICA Y EL CARIBE 15
figurA 1: Número de deficiencia de micronutrientes en niños menores de 6 años considerados problemas de salud pública
moderada o severa por país en Latinoamérica, según últimos datos nacionales disponibles
4 Deficiencias
3 Deficiencias
2 Deficiencias
1 Deficiencias
Sin deficiencia
Chile y Costa Rica la deficiencia de micronutrientes no es un 1985–2014 y, de aquellos que sí cuentan con información, el
problema de salud pública. 26% solo ha realizado una encuesta nacional representativa
Es importante indicar que una brecha en sí es la falta de en este periodo del tiempo, lo que significa que aproximada-
información, tanto existente como actualizada, en Latinoa- mente el 30% de la información disponible tiene por lo me-
mérica. Entre el 60–70% de los países de la región no cuenta nos 5 años de vigencia.60 Si nos enfocamos en la información
con datos representativos de la prevalencia de anemia en ni- disponible sobre el estado de micronutrientes en la región,
ños, mujeres en edad fértil y/o gestantes entre los años 1985– observamos que entre el 60–90% de los países no cuenta con
2014.60 Entre los que cuentan con información, sólo aproxi- datos representativos ya sea de vitamina A, hierro, yodo, fo-
madamente un 20% cuenta con datos para dos periodos del lato y/o vitamina B12.60 Es difícil cerrar brechas nutricionales
tiempo y el 65% de la información disponible tiene 10 o más si no se realizan estimaciones frecuentes que permitan pri-
años de vigencia. Algo parecido se observa al analizar la infor- mero realizar un diagnóstico sobre el estado nutricional de
mación sobre antropometría en niños: el 52% de los países de la población, para luego establecer metas y evaluar los logros
la región no cuenta con datos representativos entre los años obtenidos.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA SITUACIÓN ACTUAL DE LOS MICRONUTRIENTES EN LATINOAMÉRICA Y EL CARIBE 17
La Figura 2 muestra el número de programas de entrega de noce que los programas de suplementación de micronutrien-
micronutrientes para cada país de la región. Se puede observar tes tienen baja cobertura usualmente debido a varios factores,
que todos los países de la región cuentan con por lo menos 5 tales como: 1) dificultad en el acceso y uso de los sistemas
programas de entrega de micronutrientes a nivel nacional. La de distribución de los micronutrientes por parte de los usua-
mayoría de países provee suplementos de hierro a gestantes y rios, 2) problemas en la adquisición, distribución, monitoreo,
a niños entre 6–59 meses de edad y suplementos de vitamina control de calidad y almacenamiento de los micronutrientes
A a niños menores de 5 años. La mayoría de países fortifica la y 3) limitaciones en el punto de entrega de los micronutrien-
harina de trigo con hierro y por lo menos un micronutriente tes (conocimiento del personal). Segundo, limitaciones en el
adicional. La primera incógnita que surge es ¿por qué si los conocimiento de los usuarios, o de sus cuidadores, respecto
países cuentan con estos programas aún persiste la deficiencia tanto del beneficio del consumo de los micronutrientes como
de ciertos micronutrientes entre niños y mujeres? Se pueden de los programas mismos. Finalmente, limitaciones respecto
identificar algunas debilidades en estos programas que pudie- al uso del programa por parte del usuario; es decir, ingesta
ran dar respuesta a lo anterior. Primero, por ejemplo, aunque del micronutriente que se entrega (sea suplemento o producto
no existe mucha información sistematizada al respecto, se co- fortificado). Adicionalmente, lamentablemente no se cuenta
≥ 10 Programas
6–9 Programas
≤ 5 Programas
Escolares en el pueblo de Nazareno, Municipalidad de Tupiza, en el Departamento de Potosi, Bolivia, comen arroz y frijoles durante
el almuerzo en marzo del 2010.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA SITUACIÓN ACTUAL DE LOS MICRONUTRIENTES EN LATINOAMÉRICA Y EL CARIBE 19
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22 INTRODUCCIÓN A LA FORTIFICATIÓN DEL ARROZ
Introducción a la
fortificación del arroz
Peiman Milani
PATH ∙ El costo de la fortificación del arroz viene determinado por
las variables propias del entorno. Por lo tanto, no es posi-
Cecilia Fabrizio, Jennifer Rosenzweig ble establecer un costo fijo universal. Sin embargo, en base
Oficina Regional del Programa Mundial de Alimentos a la experiencia en 15 países, cuatro de los cuales están en
para Asia Asia, el arroz fortificado puede incrementar su precio de
venta entre un 1% y un 10%. A medida que la fortificación
del arroz se vaya ampliando, los costos se podrán ir redu-
Mensajes clave: ciendo debido a la economía de escala.
∙ En los países donde el arroz es un alimento de consumo
básico y las deficiencias de micronutrientes son un proble-
ma generalizado, hacer el arroz más nutritivo mediante su Introducción a la fortificación del arroz
fortificación con vitaminas y minerales esenciales puede Más de dos mil millones de personas en el mundo sufren algún
contribuir significativamente a abordar las deficiencias de tipo de deficiencia de micronutrientes, con mayor incidencia
micronutrientes y mejorar la salud pública. en los países en vías de desarrollo. También conocida como
∙ Décadas de experiencia han demostrado que la fortifi- hambre oculta, las deficiencias de micronutrientes afectan el
cación de alimentos a gran escala es una intervención desarrollo físico y cognitivo, y presentan efectos a largo plazo
sostenible, segura y efectiva, que genera un impacto para la salud, la capacidad de aprendizaje y la productividad. En
significativo en la salud pública. consecuencia, las deficiencias de micronutrientes aumentan la
∙ L a fortificación del arroz, igual que cualquier otra morbilidad y la mortalidad durante todo el ciclo de la vida y tie-
iniciativa de fortificación de alimentos, debe ser una in- nen un impacto negativo en el desarrollo económico y social.1
tervención dentro de una amplia estrategia multisectorial El arroz es el alimento de consumo básico de más de tres
para mejorar la salud y la ingesta de micronutrientes. mil millones de personas en todo el mundo. En algunos países,
∙ La tecnología actual permite producir arroz fortificado segu- como Bangladés, Camboya y Myanmar, el arroz contribuye con
ro, con el mismo aspecto, sabor y que puede ser preparado hasta el 70 % de la ingesta energética diaria. Esto representa un
con los mismos métodos de cocción que el arroz no problema nutricional, pues el arroz blanco es una buena fuente
fortificado. El consumo de arroz fortificado incrementa de energía, pero pobre en micronutrientes.2 Por tanto, en países
la ingesta de micronutrientes sin que los consumidores donde el arroz es un alimento de consumo básico, hacerlo más
tengan que alterar sus hábitos de compra, preparación y nutritivo a través de la fortificación con vitaminas y minerales
prácticas de cocción de los alimentos. esenciales ha demostrado ser una intervención costo-efectiva
∙ L a fortificación del arroz a gran escala es más eficaz para aumentar la ingesta de micronutrientes en la población.3
cuando se promueve a través de un movimiento multi-
sectorial, que incluye a los gobiernos, el sector privado
y organizaciones de la sociedad civil.
“El arroz es el alimento de consumo
∙ L a fortificación del arroz alcanza mayor potencial para básico de más de tres mil millones de
ejercer impacto en la salud pública cuando es obligatoria
y está bien regulada. En caso de que esto no sea posible,
personas en el mundo”
la alternativa más eficaz de alcanzar a la población es a
través de las redes de protección social. La fortificación de alimentos de consumo básico ha sido re-
conocida como una intervención costo-económica y sostenible,
con un comprobado impacto en la salud pública y en el desarro-
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA INTRODUCCIÓN A LA FORTIFICATIÓN DEL ARROZ 23
llo económico. Así lo reconoce y avalan la serie de publicaciones helmintiasis [gusanos o lombrices], tuberculosis y VIH/SIDA)
del Lancet 2008 y 2013 sobre la Nutrición Materno Infantil,4,5 afectan a la capacidad del individuo para absorber micronu-
el Consenso Copenhagen6 y el Movimiento para el fomento de trientes, dando lugar a eventuales deficiencias. En los países
la nutrición (SUN). Reducir la desnutrición y las deficiencias con ingresos bajos y medios, tienden a coexistir múltiples de-
de micronutrientes permitiría reducir más de la mitad las ta- ficiencias de micronutrientes, puesto que comparten causas
sas globales de discapacidad en niños y niñas menores de cinco comunes.5
años, prevenir más de un tercio de las muertes infantiles a nivel A pesar de que las mayores prevalencias se presentan en
global y aumentar el PIB de Asia y África en un 11%.7 países con ingresos bajos y medios, las deficiencias de micro-
Este artículo ofrece una visión general de la fortificación del nutrientes también representan un problema de salud pública
arroz a gran escala y destaca consideraciones importantes para en países industrializados y en poblaciones que padecen de
su introducción, implementación y ampliación. Para las defini- sobrepeso y obesidad. El incremento en el consumo de alimen-
ciones de la terminología presentadas en este artículo, consulte tos altamente procesados, ricos en energía pero deficientes en
el glosario (págs. 116). micronutrientes, afecta negativamente el estado y la ingesta de
micronutrientes en estos países industrializados y en países en
Importancia de abordar las deficiencias transición económica y social.1
de micronutrientes Las deficiencias de hierro, zinc y vitamina A, son las deficien-
Las deficiencias de micronutrientes se presentan cuando una cias de micronutrientes más habituales y se encuentran entre
dieta variada y rica en nutrientes (es decir, que incluya alimen- las diez principales causas de muerte por enfermedad en los
tos de origen animal como carne, huevos, pescado o productos países en vías de desarrollo. Las deficiencias de las vitaminas
lácteos, además de leguminosas, cereales, frutas y vegetales) del complejo B, iodo, calcio y vitamina D, también presentan
no se encuentra regularmente disponible o no se consume elevadas prevalencias.1 La Figura 1 muestra el panorama glo-
en las cantidades suficientes. Adicionalmente, la inflamación bal de las deficiencias de micronutrientes, también llamadas
del intestino y otras enfermedades (como diarrea, malaria, hambre oculta.
24 INTRODUCCIÓN A LA FORTIFICATIÓN DEL ARROZ
Mezcla
proporción 0.5–2%
Arroz Arroz
blanco fortificado
Arroz
con Molino
cáscara de arroz
Arroz Granos
partido fortificados
Añadir vitaminas
y minerales
(premezcla)
Proveedores Procesadores
Agricultores Mezclado Distribución Consumidor
de insumos (molineros)
Productores
Ambiente regulatorio
de granos
y de programas
fortificados
Proveedores
de fortificante
© by Wenger
Arroz fortificado extruido
mina B6 (piridoxina), vitamina B12 (cobalamina), vitamina B1 Poblaciones objetivo para la fortificación del arroz
(tiamina), vitamina B3 (niacina) y zinc.9 Sin embargo, la deter- El beneficio potencial que un individuo puede obtener del
minación exacta de qué micronutrientes deben incluirse y en consumo de arroz fortificado, variará a lo largo de su vida, y
qué cantidades dependerá de la ingesta de micronutrientes de dependerá de los requerimientos micronutrientes, ingesta ali-
la población objetivo, las prevalencias de las deficiencias de mi- mentaria, cantidad de arroz consumido y el potencial del arroz
cronutrientes, y el acceso y consumo a otros alimentos fortifica- fortificado para compensar las brechas de micronutrientes. Por
dos de dicha población. Cada país que decida introducir arroz ejemplo, las mujeres en edad reproductiva (entre 19 y 45 años)
fortificado, necesitará desarrollar sus propios estándares de for- tienen requerimientos en micronutrientes que van de modera-
tificación, dependiendo del contexto nutricional y situación de dos a altos y consumen una cantidad significativa de arroz. Por
micronutrientes, y de las intervenciones con micronutrientes esta razón, es muy posible que consuman la cantidad de arroz
ya existentes. Para más información sobre las evidencias para la fortificado necesaria para satisfacer sus necesidades de micro-
recomendación de micronutrientes y estándares, véase la con- nutrientes. Sin embargo, las mujeres embarazadas requirieren
tribución de de Pee et al (págs. 29). mayor cantidad de micronutrientes. Aunque su consumo de
arroz fortificado pueda ayudar a satisfacer sus necesidades, es
improbable que cubra por completo sus requerimientos. Por
“Desde la perspectiva de la salud esta razón, son necesarias otras intervenciones como la suple-
pública y la nutrición, las mentación con hierro y folato, y con múltiples micronutrientes.
Así mismo, los niños de entre 6 y 23 meses presentan eleva-
investigaciones y recomendaciones dos requerimientos en micronutrientes, pero solo consumen
relacionadas con la fortificación pequeñas cantidades de arroz; por esta razón el consumo de
arroz fortificado no será suficiente para solventar sus caren-
de la harina de trigo son aplicables cias. Para más información sobre las necesidades de micronu-
a la fortificación del arroz” trientes a lo largo de la vida, véase la contribución de Codling
et al (págs. 58).
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA INTRODUCCIÓN A LA FORTIFICATIÓN DEL ARROZ 27
Mecanismos de distribución del arroz fortificado tructura y capacidad de la industria arrocera, la complejidad de
Para alcanzar un impacto significativo en la salud pública, debe la cadena de suministro existente, el entorno político y regula-
ser factible y sostenible fortificar una proporción significativa torio, y la dimensión de los programas relevantes. Sin embargo,
de todo el arroz consumido, especialmente para las poblacio- y en base a la experiencia recopilada de 15 países, cuatro de los
nes objetivo que más se pueden beneficiar de su consumo. La cuales están en Asia, el arroz fortificado puede incrementar su
medida con mayor potencial de impacto sobre la salud pública precio de venta entre un 1% y un 10%. A medida que la fortifica-
es la fortificación mandatoria del arroz a través de una legisla- ción del arroz se vaya ampliando, la producción y distribución
ción y reglamentación que exijan la fortificación de todo el arroz alcanzarán economías de escala y se reducirán los costos.10
con estándares establecidos. Cuando la fortificación del arroz es Durante la fase de introducción, los costos de fortificación
obligatoria y está bien regulada, la población total consumirá del arroz responderán a la movilización del apoyo de las partes
arroz fortificado sin alterar sus hábitos de compra y consumo. interesadas, a la realización de un análisis de la situación del
Costa Rica ha implementado con éxito la fortificación manda- arroz, al desarrollo de un modelo de negocio, a la realización
toria del arroz desde al año 2001. Para más información sobre de ensayos de viabilidad logística y de aceptación por parte de
la exitosa experiencia de Costa Rica, véase la contribución de los consumidores, al desarrollo de las políticas y a la gestión
Tacsan et al (págs. 104). general del proyecto. El análisis de la situación del arroz servi-
La fortificación mandatoria no es siempre factible, debido a rá de base para las decisiones estratégicas sobre el origen y la
la estructura de la industria arrocera, la complejidad de la ca- producción de los granos fortificados, lugares para la mezcla,
dena de suministro, falta de voluntad política u otros factores mecanismos de entrega, y la escala de las operaciones. Duran-
contextuales. Por tanto, la distribución del arroz fortificado a te la fase de ejecución, serán necesarias inversiones de capital
través de los programas de las redes de protección social es un y se incurrirá en gastos periódicos para la producción y dis-
mecanismo de entrega alternativo para alcanzar aquellos gru- tribución o venta del arroz. Los gastos periódicos incluyen la
pos que más se pueden beneficiar de su consumo. Esto implica producción del grano fortificado, transporte, mezcla, garantía
distribuir el arroz fortificado de forma gratuita, o a bajo un costo y control de calidad, así como la continua elaboración de polí-
subvencionado, a través de programas de alimentación escolar, ticas y la gestión general del proyecto. En la fase de ampliación,
distribuciones durante emergencias, u otros programas que la producción y distribución se incrementan.
destinados a grupos socioeconómicos más vulnerables.
La fortificación voluntaria es un enfoque promovido por el Conclusión
mercado, en el cual el arroz fortificado es comercializado como El número de países que están introduciendo la fortificación
un producto de “valor añadido” para el consumidor. Este me- del arroz está en crecimiento, con los países asiáticos y lati-
canismo de entrega tiene un potencial limitado para lograr un noamericanos encabezando los esfuerzos. La fortificación del
impacto significativo en la salud pública, ya que se basa en el arroz, un alimento de consumo básico para más de tres mil
conocimiento de los consumidores, la generación de demanda, millones de personas en el mundo, tiene el potencial de mejo-
y la voluntad y capacidad de pagar un poco más por el arroz rar la salud de la población, aumentar la productividad y pro-
fortificado. Para más información sobre los mecanismos de en- mover el desarrollo económico. La fortificación del arroz ha
trega y distribución del arroz fortificado, véase la contribución sacado provecho de las experiencias previas de la fortificación
de Codling et al (págs. 58). de la harina de trigo y maíz. Entre los aspectos que se deben
considerar para un programa de fortificación del arroz están:
decisiones adecuadas en cuando a la pre-mezcla fortificante,
“El costo de la fortificacion del la tecnología utilizada para la fortificación, la cadena de sumi-
arroz viene determinado por las nistro, los mecanismos de distribución y entrega, y el entorno
político, regulatorio y de sistemas de vigilancia. El desarro-
variables propias del entorno. llo de tecnologías más costo-efectivas, combinado con datos
Por lo tanto, no es posible establecer sobre los niveles más efectivos de fortificación de nutrientes,
hace que la fortificación del arroz sea segura, viable, eficaz y
un costo fijo universal” sostenible. Los costos dependerán del contexto específico y,
según los programas se amplíen, se alcanzarán economías de
Costo del arroz fortificado escala y los mismos se verán reducidos. Es necesaria una fuer-
El costo de la fortificación del arroz viene determinado por múl- te abogacía que promueva las asociaciones público-privadas
tiples variables propias del entorno. Por lo tanto, no es posible y mandatos gubernamentales que permitan asegurar el éxito
establecer un costo fijo universal. El costo dependerá de la es- a largo plazo.
28 INTRODUCCIÓN A LA FORTIFICATIÓN DEL ARROZ
El potencial de impacto para mejorar la salud y la ingesta de 5. Bhutta ZA, Das JK, Rivzi A et al. Evidence-based interventions for
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L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA PANORAMA GENERAL Y RECOMENDACIONES PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 29
Panorama general de la
evidencia y recomenda-
ciones para la fortificación
del arroz a gran escala
Saskia de Pee
∙ Cuando el arroz fortificado es introducido, es indis-
Programa Mundial de Alimentos, Roma, Italia
pensable que los países den seguimiento a su im-
Friedman School of Nutrition Science and Policy,
plementación. Esto incluye una correcta fortificación
Boston, EUA
(de los granos y de su mezcla), almacenamiento,
distribución, y vigilancia de la aceptación y el
Cecilia Fabrizio, Jennifer Rosenzweig
consumo de la población.
Oficina Regional del Programa Mundial de
Alimentos para Asia
Introducción
En poblaciones donde el arroz es un alimento de consumo bá-
Mensajes Clave sico, la fortificación del arroz con micronutrientes esenciales
∙ Varios estudios sobre la efectividad y la eficacia tiene la capacidad de incrementar su ingesta. Tras décadas
del consumo de arroz fortificado han establecido el de experiencia en la fortificación de otros alimentos y condi-
impacto de esta intervención sobre el estado de mentos de consumo básico, se ha demostrado la eficacia de
micronutrientes. la fortificación a gran escala. En este artículo se analizan los
∙ Para prepararse para la introducción del arroz criterios que los países deben tener en cuenta para la fortifi-
fortificado, los países deberán realizar un análisis de la cación del arroz y se revisa la evidencia científica existente
situación del arroz que permita evaluar su viabilidad y sobre su eficiencia y efectividad.
aceptación por parte de los consumidores. En base a
la evidencia ya existente, no es necesario realizar Criterios de los países para
estudios para comprobar la eficacia del arroz fortificado la fortificación de alimentos
previo a su introducción. Identificando los micronutrientes apropiados
∙ Según la evidencia disponible sobre la eficacia, para la fortificación
estabilidad y necesidades, se recomiendan los siguientes Un análisis de las posibles deficiencias de micronutrientes
micronutrientes para la fortificación del arroz: hierro, existentes en la población que son consideradas un proble-
zinc, vitamina A, B1 (tiamina), B3 (niacina), B6 (piridoxi- ma de salud pública significativo ayudará a determinar qué
na), B9 (ácido fólico) y B12 (cobalamina). micronutrientes deben ser incluidos en la fortificación del
∙ Los programas de fortificación del arroz deben usar arroz y en qué formas. Para asesorar a los países en el diseño
tecnología y fórmulas fortificantes de micronutrientes e implementación de programas de fortificación de alimentos,
que generen arroz aceptable para el consumidor, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización
retenga sus micronutrientes durante el almacenamiento de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura
y la elaboración, y que sean absorbidos durante la (FAO, por sus siglas en inglés) han publicado las “Directrices
absorción intestinal. para la fortificación de alimentos con micronutrientes”(“Gui-
delines on Food Fortification with Micronutrients, en inglés)
30 PANORAMA GENERAL Y RECOMENDACIONES PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
© WFP / Ximena Loza
Afectado por: forma química del nutriente, elección de la mezcla fortificante, tecnología de fortificación
Eficacia
Efectividad
particularmente útil para los países con ingresos medios y ba- Estos requerimientos se pueden ver afectados por la forma quí-
jos.1 Esta publicación conjunta de OMS/FAO proporciona una mica y la formulación del fortificante, la tecnología de fortifica-
guía sobre la elección de los alimentos vehículos a utilizar ción y cualquier posible interacción entre los micronutrientes o
y de los micronutrientes a añadir, y la forma química en la con la matriz del arroz. Por último, para que su contribución a la
cual deben ser añadidos y en qué cantidades. Actualmente se ingesta de micronutrientes sea significativa, el arroz fortificado
están desarrollando directrices más específicas para la forti- debe consumirse de forma regular y en las cantidades espera-
ficación del arroz. das por el grupo de población objetivo.
Angeles-Agdeppa I, Filipinas Niños anémicos 10 mg/d (2 grupos: Hb (hemoglobina) mejoró, anemia disminuyó,
Capanzana MV, Barba CV et al.2 6–9 años FePP y Sulfato ferroso) sin cambios en ferritina sérica.
Beinner MA, Velasquez-Meléndez Brasil Niños anémicos 23.4 mg/d Hb mejoró, anemia disminuyó, ferritina sérica
G, Pessoa MC et al.3 6–24 meses aumentó, niveles de hierro mejoraron.
Hotz C, Porcayo M, México Mujeres 18–49 años 20 mg/d Hb se incrementó (no significativo p=0.069),
Onofre G et al.4 no embarazadas, no ferritina plasmática, receptores de transferrina
lactantes) y reservas de hierro mejoraron.
Nogueira Arcanjo FP, Santos PR, Brasil Niños 56.4 mg/comida, Hb mejoró,
Leite J et al.5 10–23 meses una comida/semana anemia disminuyó.
Nogueira Arcanjo FP, Santos PR, Brasil Niños 56.4 mg/comida, Hb sin cambios, mientras que disminuyó
Segall S.6 2–5 años una comida/semana en el grupo de control.
Nogueira Arcanjo FP, Santos PR, Brasil Niños 56.4 mg/comida, Hb mejoró,
Arcanjo C.7 10–23 meses una comida/semana anemia disminuyó.
Moretti D, Zimmermann MB, India Escolares 13 mg/d Reservas de hierro mejoraron. Sin cambios en
Muthayya S et al.8 6–13 años otros parámetros de hierro y Hb.
Radhika MS, Nair KM, India Escolares 19 mg/d Hb y anemia sin cambios, ferritina sérica se
Kumar RH et al.9 5–11 años incrementó, deficiencia de hierro se redujo.
Zimmermann M, Muthayya S, India Escolares 10 mg/d Hb sin cambio, receptores de transferrina sin cambio, ferri-
Moretti D et al.10 5–9 años tina sérica se incrementó, deficiencia de hierro disminuyó.
Pinkaew S, Winichagoon P, Tailandia Escolares 12.3 mg/d Hb y ferritina sérica sin cambios,
Hurrell RF et al.11 4–12 años deficiencia de hierro disminuyó.
Thankachan P, Rah JH, India Escolares 6.25 mg/d y Hb e indicadores de hierro
Thomas T et al.13 6–12 años 12.5 mg/d Sin cambios.
tado de los micronutrientes de los individuos.2–14 Todos los es- ponibilidad, hasta ahora es la única forma de hierro identificada
tudios utilizaron granos fortificados a través de tecnología de que no afecta al color y el sabor del arroz. Una investigación
extrusión. Cada uno de los estudios se realizó bajo condiciones reciente presenta el incremento exitoso de la disponibilidad
ambientales controladas y tenían como objetivo comparar el es- de este tipo de hierro.14 La cantidad de arroz fortificado que
tado de micronutrientes entre individuos que recibieron arroz se suministró en estos estudios oscilaba entre 50 gramos por
fortificado con aquellos que recibieron arroz no-fortificado y/o semana y 140 gramos al día, y a menudo se proporcionaba en
suplementos con micronutrientes. En nueve de los estudios, el una comida al día. La ración de la mezcla del arroz fortificado
arroz se suplementó solo con hierro, en uno solo con vitami- oscilaba entre 0,5 y 2,5%, y el contenido en hierro de una comi-
na A.14 En los tres estudios de Pinkaew et al.11,12 se utilizó una da con arroz fortificado variaba entre 6 y 56 mg. Los estudios
combinación de micronutrientes con hierro, zinc y vitamina A, no reportaron el color de los granos fortificados o la aceptabili-
mientras que en los estudio de Thankachan et al13 se utilizó una dad del arroz fortificado, sin embargo, como el consumo se dio
mezcla de hierro, zinc, vitaminas A, B1, B6, B12 y ácido fólico. bajo condiciones controladas, todos los participantes estuvie-
Estos estudios se llevaron a cabo en países con ingresos bajos y ron aparentemente dispuestos a consumir el arroz. Once de los
medios, incluyendo Filipinas, India, Nepal, Tailandia, México y doce estudios realizados con hierro evaluaron su efecto sobre
Brasil. Las poblaciones estudiadas incluían niños entre 6 y 23 la concentración de hemoglobina o la anemia. Ninguno de los
meses, niños en edad pre-escolar y escolar, mujeres en edad estudios reportó un impacto negativo, mientras que en cinco
reproductiva e individuos con anemia. reportaron impacto positivo en el estado de micronutrientes de
los participantes. Seis de los ocho estudios que evaluaron los
Resultados con el hierro niveles de hierro encontraron mejorías. En total, diez de once
En los 12 estudios de eficacia se fortificó el arroz con hierro en estudios hallaron un efecto positivo en la concentración de he-
forma de pirofosfato férrico (FePP). Uno de los estudios incluyó moglobina, en los niveles de hierro o bien en ambos parámetros
un grupo que recibió hierro en forma de sulfato ferroso.10 Aun- (Tabla 1). Los autores del único estudio que no presentó efecto
que el FePP no es la forma de hierro que presenta mayor biodis- en la concentración de hemoglobina ni en los niveles de hierro
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA PANORAMA GENERAL Y RECOMENDACIONES PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 33
Pinkaew S, Wegmuller R, Tailandia 8–12 años 3,000 μg RE/d LB* retinol sérico 1.21 μmol/L – Retinol total se
Wasantwisut E et al.12 incrementó – retinol sérico sin cambios.
Pinkaew S, Winichagoon P, Tailandia 4–12 años 2,500 μg RE/d LB retinol sérico 1.01 μmol/L –
Hurrel RF et all.11 Sin incrementos significativos
Thankachan P, Rah JH, India 6–12 años 500 μg RE/d LB retinol sérico 2.1–2.6 μmol/L
Thomas T et al.13 – Sin cambios
Haskell MJ, Pandey P, Nepal Mujeres embarazadas 850 μg RE/d Retinol sérico se incrementó en todos los grupos,
Graham JM et al.314 con ceguera nocturna más en los grupos que consumieron hígado y
cápsulas concentradas
informaron que, unos meses antes del inicio del estudio, los Resultados con la vitamina A
participantes habían recibido suplementos de hierro.11 Cuatro estudios incluyeron arroz enriquecido con vitamina
Estos resultados proporcionan fuertes evidencias científicas A, tres de los cuales estaban enriquecidos con otros micronu-
que respaldan que la fortificación con hierro es efectiva. El he- trientes. El único estudio que enriqueció el arroz tan solo con
cho de que una mayor cantidad de estudios reportó un impacto vitamina A se realizó en Nepal, entre mujeres embarazadas con
en los niveles de hierro, comparado con la proporción de estu- ceguera nocturna, y usó grupos de estudio con diferentes oríge-
dios que reportó un impacto en la concentración de hemoglo- nes y niveles de vitamina A.15 Este estudio mostró una mejoría
bina, posiblemente se deba al control hemeostático (existe un de vitamina A en todos los grupos, con un mayor efecto en los
margen muy limitado para la mejora de las concentraciones de dos que recibieron vitamina A por medio de cápsulas concentra-
hemoglobina entre individuos no anémicos) o al hecho de que das o de hígado. Los otros tres estudios se llevaron a cabo entre
la deficiencia de hierro es la causa de alrededor del 50 % de escolares con una concentración de partida de retinol sérico
los casos de anemia. El efecto del hierro en la concentración de indicativa de un nivel adecuado, o casi adecuado, de vitami-
hemoglobina puede ser limitado, ya que existen otras posibles na A11–13 (Tabla 2). La concentración de retinol sérico no se vio
causas de la anemia, tanto nutricionales como no nutricionales. incrementada. Sin embargo, el único estudio que además midió
Cuando se considera fortificar el arroz con hierro a gran esca- la cantidad total de retinol corporal, sí mostró una mejoría.12
la, el costo y la aceptabilidad del consumidor son factores clave. Estas pruebas muestran que la vitamina A se puede añadir al
La proporción de la mezcla incide en el costo. La aceptabilidad arroz de forma efectiva. Sin embargo, debe evaluarse si el arroz
por parte del consumidor se puede ver afectada por el color y es el vector más adecuado para ello. Por ejemplo, si el aceite de
el sabor, y éstos a su vez se ven afectados por el fortificante de cocinar está ya adecuadamente enriquecido con vitamina A, no
hierro elegido y su concentración. Estos aspectos fueron menos es necesario que el arroz también lo esté.
relevantes en los estudios de eficacia. Para no afectar al color
de los granos fortificados utilizando la recomendación actual Resultados con otros micronutrientes
de pirofosfato férrico micronizado, la concentración en hierro El impacto de la fortificación del arroz con zinc, ácido fólico, y
no puede exceder los 7 g/Kg. Cuando estos granos fortificados vitaminas B1 (tiamina) y B12 sobre el estado de los micronu-
se mezclan con el arroz normal al 1%, que es la proporción trientes también ha sido evaluado. Thankachan et al13 estudia-
habitual, el contenido de hierro en el arroz fortificado será de ron el arroz fortificado con hierro, zinc, vitamina A, B1, B6, B12
7 mg/100 g. La mayoría de los estudios de eficacia emplearon y ácido fólico. En un estudio realizado por Pinkaew et al11 se
proporciones mayores, y algunos también utilizaron mayores evaluó el efecto del arroz enriquecido con hierro, vitamina A y
concentraciones de hierro en los granos fortificados. La elevada zinc sobre los niveles de zinc. Thankachan et al. reportaron una
concentración de hierro en el arroz fortificado, y considerando mejoría en los niveles de vitamina B12 y una disminución en los
que la mayoría de los estudios proporcionó todo el hierro en una niveles de homocisteína.13 Esto indica que tanto la vitamina B12
comida diaria, resultó en un alto contenido en hierro compara- como el ácido fólico fueron correctamente absorbidos y utiliza-
do con los inhibidores de su absorción. Esto podría haber tenido dos. No encontraron cambios en los indicadores de tiamina ni
un efecto positivo adicional en la absorción de hierro reportada de zinc. Los niveles de tiamina ya eran adecuados. La ausencia
en estos estudios. de un impacto en los niveles séricos de zinc relacionados con
34 PANORAMA GENERAL Y RECOMENDACIONES PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
el contenido de zinc en el arroz fortificado, hecho que ha sido de resultados concuerda con otros estudios sobre fortificación
descrito también por otros autores,16 podría estar relacionada con zinc en otros alimentos y podría deberse a que los niveles
con que solo una pequeña fracción de la reserva de zinc cor- de zinc son difíciles de estimar con exactitud.16 En cuanto a la
poral se refleja en el suero. Este factor hace que los cambios niacina y la vitamina B6, todavía no hay datos sobre su efecto
modestos en los niveles séricos de zinc sean imperceptibles. El en el estado de los micronutrientes, pero igualmente se reco-
estudio de Pinkaew y sus colegas reportó una disminución en miendan, ya que el arroz blanco es una pobre fuente de estos
la deficiencia de zinc, tanto en el grupo intervenido como en el micronutrientes.21 Existen formas biodisponibles, y añadirlas
grupo de control, pero la mejora del zinc sérico fue mayor en el al arroz junto con los otros micronutrientes no incrementa mar-
grupo que consumió arroz fortificado comparado con el grupo cadamente su precio.
que consumió arroz no fortificado.11
se debe hacer un seguimiento para determinar si el arroz implementación del programa de fortificacióndel arroz. Los mi-
está fortificado según los parámetros establecidos. Es cronutrientes recomendados para fortificar el arroz son hierro,
decir, si los granos fortificados presentan la composición zinc, ácido fólico, niacina y vitaminas A, B1 (tiamina), B6 y B12.
requerida, y la mezcla tiene la proporción establecida y Si la vitamina A se añade a los aceites vegetales, podría no ser
dentro de los límites adecuados. Además, se deben realizar necesario añadirla al arroz. Estas recomendaciones se basan en
pruebas de estabilidad en las condiciones de almacena- datos de los estudios de eficacia y en datos sobre la importancia
miento, preparación y cocción más comunes. Estas pruebas de las deficiencias de estos micronutrientes para la salud públi-
deben asegurar que el contenido en micronutrientes sigue ca. Además, se considera viable la adición de otros fortificantes
siendo el adecuado. específicos mientras se mantenga la aceptación por parte del
Seguimiento de los grados de cobertura,
∙ consumidor y la estabilidad durante el almacenamiento. Por
aceptabilidad y consumo tanto, los países deben centrarse en la fortificación apropiada
A estos aspectos se les debe dar seguimiento y deben (es decir, los granos fortificados y su mezcla), el almacenamien-
ser ajustados según sea necesario. La contribución del to y la distribución, así como el seguimiento de la aceptabilidad
arroz fortificado a la ingesta de micronutrientes depende de y del consumo (cantidades adecuadas de consumo de los dife-
si el consumidor lo obtiene, lo acepta y lo consume en rentes sub-grupos).
las cantidades requeridas.
Seguimiento de la ingesta de micronutrientes,
∙ Referencias
morbilidad y estado de los micronutrientes 1. Allen LH, De Benoist B, Dary, O et al. Guidelines on food
Como la fortificación es un componente más de una fortification with micronutrients. Geneva: World Health
estrategia más amplia para abordar las deficiencias de Organization/Food and Agriculture Organization, 2006.
micronutrientes, el seguimiento debe evaluar tanto la 2. Angeles-Agdeppa I, Capanzana MV, Barba CV et al. Efficacy of
combinación de las estrategias destinadas a mejorar la iron-fortified rice in reducing anemia among schoolchildren in the
salud y el estado nutricional de diferentes grupos objetivo, Philippines. Int J Vitam Nutr Res 2008;78:74–86
y/o si se requieren medidas adicionales. Tanto el segui- 3. Beinner MA, Velasquez-Meléndez G, Pessoa MC et al. Iron-fortified
miento como las evaluaciones deben ser continuados en rice is as efficacious as supplemental iron drops in infants and
el tiempo, antes y después de la puesta en marcha young children. J Nutr 2010;140:49–53
a escala del programa. 4. Hotz C, Porcayo M, Onofre G et al. Efficacy of iron-fortified Ultra
Rice in improving the iron status of women in Mexico. Food Nutr
Bull 2008;29:140–9
“Los países que estén considerando 5. Nogueira Arcanjo FP, Santos PR, Leite J et al. Rice fortified with
la fortificación del arroz como iron given weekly increases hemoglobin levels and reduces anemia
in infants: a community intervention trial. Int J Vitam Nutr Res
una intervención dirigida a abordar 2013;83(1):59–66.
las deficiencias de micronutrientes 6. Nogueira Arcanjo FP, Santos PR, Segall S. Ferric pyrophosphate
fortified rice given once weekly does not increase hemoglobin
no necesitan realizar estudios de levels in preschoolers. J Rice Res 2013;1(2): 1–6.
eficacia adicionales” 7. Nogueira Arcanjo FP, Santos PR, Arcanjo C. Use of iron-fortified rice
reduces anemia in infants. J Trop Ped 2012;58(6): 475–480
8. Moretti D, Zimmermann MB, Muthayya S et al. Extruded rice
Conclusiones fortified with micronized ground ferric pyrophosphate reduces iron
Múltiples estudios han determinado que con las cantidades deficiency in Indian schoolchildren: a double blind randomized
adecuadas de micronutrientes y la correcta formulación del for- controlled trial. Am J Clin Nutr 2006;84:822–9
tificante, y con una tecnología efectiva, la fortificación del arroz 9. Radhika MS, Nair KM, Kumar RH et al. Micronized ferric pyro-
es una intervención efectiva para mejorar el estado de salud y la phosphate supplied through extruded rice kernels improves body
ingesta de micronutrientes. Los países que estén considerando iron stores in children: a double-blind, randomized, placebo-
la fortificación del arroz como una intervención dirigida a abor- controlled midday meal feeding trial in Indian schoolchildren.
dar las deficiencias de micronutrientes no necesitan realizar es- Am J Clin Nutr 2011;94:1202–10
tudios de eficacia adicionales. En vez de estos estudios, deben 10. Zimmermann M, Muthayya S, Moretti D et al. Iron fortification
emplear sus recursos en evaluar las necesidades de sus siste- reduces blood lead levels in children in Bangalore, India. Pediatrics
mas de salud pública y garantizar un buen seguimiento de la 2006;117(6):2014–21.
36 PANORAMA GENERAL Y RECOMENDACIONES PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
11. Pinkaew S, Winichagoon P, Hurrell RF et al. Extruded rice 16. Hess SY, Brown KH. Impact of zinc fortification on zinc nutrition.
grains fortified with zinc, iron, and vitamin A increase zinc status Food Nutr Bull 2009; 30: S79–107.
of Thai school children when incorporated into a school lunch 17. Arguello M, Solis L. Impacto de la fortificación de alimentos con
program. J Nutr. 2013;143(3):362–8. ácido fólico en los defectos del tubo neural en Costa Rica.
12. Pinkaew S, Wegmuller R, Wasantwisut E et al. Triple-fortified rice Rev Panam Salud Publica 2011;30(1):1–6.
containing vitamin A reduced marginal vitamin A deficiency and 18. Angeles-Agdeppa I, Saises M, Capanzana M. Pilot-scale
increased vitamin A liver stores in school-aged Thai Children. J Nutr commercialization of iron-fortified rice: Effects on anemia status.
2014;144(4):519–24 Food Nutr Bull 2011;32:3–12.
13. Thankachan P, Rah JH, Thomas T et al. Multiple micronutrient-for- 19. Gershoff SN, McGandy RB, Suttapreyasri D. Nutrition studies
tified rice affects physical performance and plasma vitamin B12 in Thailand. II. Effects of fortification of rice with lysine, threo-
and homocysteine concentrations of Indian school children. J Nutr nine, vitamin A and iron on preschool children. Am J Clin Nutr
2012;142:846–52 1977;30:1185–95.
14. Hackl L, Cercamondi CI, Zeder C et al. Cofortification of ferric 20. Salcedo J Jr, Bamba MD, Carrasco EO et al. Artificial enrichment of
pyrophosphate and citric acid/trisodium citrate into extruded rice white rice as a solution to endemic beriberi; report of field trials in
grains doubles iron bioavailability through in situ generation of so- Bataan, Philippines. J Nutr 1950;42:501–23.
luble ferric pyrophosphate citrate complexes. Am J Clin Nutr 2016, 21. De Pee S. Proposing nutrients and nutrient levels for rice
(C), 1–8. http://doi.org/10.3945/ajcn.115.128173 fortification. Ann N Y Acad Sci 2014;1324:55–66.
15. Haskell MJ, Pandey P, Graham JM et al. Recovery from impaired
dark adaptation in night-blind pregnant Nepali women who receive
small daily doses of vitamin A as amaranth leaves, carrots, goat
liver, vitamin A-fortified rice, or retinyl palmitate. Am J Clin Nutr
2005;81:461–71.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ: EVIDENCIA, SITUACIÓN ACTUAL Y LECCIONES 37
Fortificación del
arroz: evidencia, situación
actual y lecciones
aprendidas en la
fortificación de granos
Becky L Tsang
Iniciativa de Fortificación de Alimentos, Tecnologías de fortificación del arroz
Región de Asia
Recubierto: Los granos de arroz se cubren con una mezcla
Helena Pachón de fortificantes e ingredientes tales como ceras y gomas.
Iniciativa de Fortificación de Alimentos, EUA Los micronutrientes se rocían sobre la superficie de los gra-
nos de arroz. Los granos de arroz recubiertos se mezclan
con arroz no fortificado en una relación entre 1:50 y 1:200.
Mensajes Clave
∙ Al igual que la fortificación del trigo y el maíz, Extruido: Los granos reconstituidos en forma de arroz
fortificar el arroz es una oportunidad de salud pública se producen pasando pasta de harina de arroz con una
para prevenir las deficiencias de micronutrientes y mezcla fortificante a través de una extrusora. Los granos
graves defectos de nacimiento del cerebro y la columna extruidos se mezclan luego con arroz no fortificado
vertebral. La literatura científica muestra que la en una proporción de 1:50 a 1: 200.
fortificación del arroz puede mejorar el estado de hierro
en las poblaciones objetivo – otros nutrientes no
están tan bien estudiados.1 Evidencia de salud pública para la fortificación del arroz:
∙ L a fortificación del arroz es obligatoria a nivel nacional una revisión de los estudios de eficacia y efectividad
en seis países, y varios esfuerzos sub-nacionales La Iniciativa de Fortificación de Alimentos (FFI, por sus siglas
indican que el interés y la práctica de la fortificación del en inglés) llevó a cabo una revisión de la literatura de fortifica-
arroz está creciendo. En comparación, 85 países en ción de arroz indexada en PubMed y encontró 16 ensayos de efi-
todo el mundo tienen una ley de fortificación de la harina cacia y 5 estudios de eficacia.3 Este estudio y una actualización
de trigo obligatoria. están disponibles en el sitio web de FFI. Los estudios utilizaron
∙ L a fortificación de la harina de trigo con vitaminas núcleos recubiertos o extruidos. Los estudios elegibles en in-
y minerales esenciales se ha practicado durante más de glés y español proporcionaron comparaciones de indicadores
medio siglo. Las lecciones aprendidas de la implementa- de salud de grupos que comían arroz fortificado y aquellos que
ción de los programas de fortificación de harina de comían arroz no fortificado.4
trigo en todo el mundo pueden aplicarse a la fortificación
del arroz en América Latina y el Caribe.2 Estudios de eficacia
Los resultados de la revisión se resumen en la Tabla 1 y la
Tabla 2. En el 64% (7/11) de los estudios que miden las concen-
38 FORTIFICACIÓN DEL ARROZ: EVIDENCIA, SITUACIÓN ACTUAL Y LECCIONES
Resultado evaluado (unidad) Número de estudios que encontraron una Número total de estudios que
una mejoría significativa evaluaron el resultado
Hemoglobina (g/L) 5 15
Anemia (%) 5 9
Estado de hierro
Ferritina (µmol/L) 7 11
Deficiencia de hierro (%) 6 7
Receptores de transferrina (mg/L) 3 5
Anemia por deficiencia de hierro (%) 0 2
Reservas de hierro en el cuerpo (mg/kg) 2 3
Protoporfirina de zinc (µmol/mol heme) 1 2
Capacidad total de fijación del hierro (µg/dL) 1 1
a
n=16 estudios de eficacia
b
Food Fortification Initiative (FFI). Rice fortification’s impact on nutrition. Atlanta: FFI, 2014. Actualizado en agosto 2016.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ: EVIDENCIA, SITUACIÓN ACTUAL Y LECCIONES 39
Resultado evaluado (unidad) Número de estudios que encontraron una Número total de estudios que
una mejoría significativa evaluaron el resultado
Retinol plasmático (µmol/L) 2 5
Deficiencia de vitamina A (%) 1 2
Reservas totales de retinol en el cuerpo (µmol) 1 1
Zinc sérico (µmol/L) 2 2
Deficiencia de zinc (%) 0 1
Folato (ng/mL) 1 1
Homocisteína (µmol/L) 1 1
B12 en plasma (pmol/L) 1 1
Tiamina (nmol/L) 0 1
a
n=16 estudios de eficacia
b
Food Fortification Initiative (FFI). Rice fortification’s impact on nutrition. Atlanta: FFI, 2014. Actualizado en agosto 2016.
Fortificación obligatoria cas trimestrales con socios que trabajan en la fortificación del
La FFI supervisa el estado global de la legislación obligatoria arroz. La Figura 1 muestra los programas de fortificación del
para la fortificación de granos de cereales. En 2014, al darse arroz existentes obligatorios, voluntarios y de protección so-
cuenta de que la mayor parte de las actividades de fortificación cial.9 Desde septiembre de 2016, seis países tienen legislación
del arroz estaban fuera de la legislación obligatoria, con la ayu- obligatoria para la fortificación del arroz: Costa Rica, Nicaragua,
da de socios, FFI comenzó a recopilar y difundir información Panamá, Papúa Nueva Guinea, Filipinas y los Estados Unidos de
sobre el estado de los programas voluntarios y de protección América.10 La legislación no significa necesariamente una im-
social. La información se recopila mediante llamadas telefóni- plementación exitosa; la falta de viabilidad en el sector privado
40 FORTIFICACIÓN DEL ARROZ: EVIDENCIA, SITUACIÓN ACTUAL Y LECCIONES
a
n=5 estudios de efectividad
b
Arguello M, Solis L. Impacto de la fortificación de alimentos con ácido fólico en los defectos del tubo neural en Costa Rica. Rev Panam Salud Publica 2011;30(1):1–6.
c
Angeles-Agdeppa I, Saises M, Capanzana M. Pilot-scale commercialization of iron-fortified rice: effects on anemia status. Food Nutr Bull 2011;32:3–12.
d
Gershoff SN, McGandy RB, Suttapreyasri D. Nutrition studies in Thailand. II. Effects of fortification of rice with lysine, threonine, vitamin A, and iron on preschool children.
Am J Clin Nutr 1977;30:1185–95.
e
aithankar P, Yunus S, Tiwari D. Mid-day school meals as social safety nets: an evaluation of the impact of iron fortification of Mid-Day Meals on the prevalence of anemia
P
among children in Odisha, India (abstract). Internet: http://paa2015.princeton.edu/sessions/P7#72 (accessed 12 February 2017).
f
Salcedo J Jr, Bamba MD, Carrasco EO et al. Artificial enrichment of white rice as a solution to endemic beriberi; report of field trials in Bataan, Philippines.
J Nutr 1950;42:501-23.
* La harina de trigo, la harina de maíz y la leche también se fortifican con ácido fólico
y la falta de una implementación efectiva de la reglamentación que la legislación sea implementada por la industria privada.
pueden obstaculizar incluso los programas de fortificación me- Durante los últimos dos años, la FFI ha estado preguntando a
jor intencionados. De esos seis países, sólo Costa Rica, Papúa las autoridades reguladoras de estos países acerca de las acti-
Nueva Guinea (PNG) y Estados Unidos consolidan más del 70% vidades de monitoreo de la fortificación del arroz.14 Las activi-
del arroz procesado industrialmente.11 En las Filipinas, una dades enumeradas en la Tabla 5 son acciones importantes que
industria molinera de arroz dominada por miles de pequeñas los países pueden tomar para asegurar que la implementación
fábricas de arroz dispersas a través de un archipiélago insular de sus programas de fortificación tenga supervisión, el acompa-
desafía la implementación,12 mientras que en Nicaragua la falta ñamiento necesario para que sus agencias reguladoras hagan
de regulación es una barrera.13 No está claro qué barreras exis- cumplir y que sean transparentes.
ten en Panamá. La Tabla 4 identifica los nutrientes y los están-
dares requeridos en cada país. Fortificación voluntaria del arroz
Después de aprobar una ley obligatoria para la fortificación El arroz fortificado está comercialmente disponible en otros
del arroz, se necesita un monitoreo regulatorio para asegurar cuatro países por empresas que comercializan arroz fortificado
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ: EVIDENCIA, SITUACIÓN ACTUAL Y LECCIONES 41
Birmania
Vietnam
Filipinas
Mali Papúa Nueva Guinea
Nicaragua Guinea-Bisáu India: Odisha,
Costa Rica Sierra Leona Karnataka
Panamá Sri Lanka
Costa de Marfíl
Colombia Ghana Bangladés
Ecuador Malasia
Perú Singapur
Camboya
Brasil
a
o incluye estudios de investigación que involucran fortificación del arroz, pero incluye estudios piloto que buscan demostrar la viabilidad de la fortificación
N
del arroz (contrario a su eficacia).
voluntariamente: Brasil, Colombia, Perú y Myanmar (Figura 1). Redes de protección social
En estos países, las empresas suelen elegir los tipos de nutrien- Las redes de seguridad social suelen dirigirse a las personas
tes y niveles a añadir, ya que actualmente ningún país tiene nor- que se consideran en situación de necesidad; su sostenibilidad
mas voluntarias para la fortificación del arroz. Los estándares depende de la agencia financiadora -típicamente una organi-
voluntarios son herramientas útiles para guiar a los producto- zación no gubernamental, agencia gubernamental, o en algu-
res de alimentos y también aseguran que cuando las empresas nos casos también un empleador privado. La fortificación del
fortifican, lo hacen a niveles seguros y dirigidos a brindar un arroz ya distribuido (es decir, no un sistema de transferencia
beneficio para la salud pública. de efectivo) en un programa de alimentación escolar, ración en
Puesto que la fortificación voluntaria del arroz es una deci- situación de emergencia o canasta de alimentos puede ser una
sión tomada por un productor o proveedor de alimentos indivi- manera de mejorar la nutrición a un costo adicional relativa-
dual, puede ser difícil lograr una alta cobertura de arroz fortifi- mente pequeño para el programa general. La distribución de
cado, a menos que exista un monopolio o que los productores arroz fortificado a través de redes de protección social se realiza
se pongan de acuerdo para fortificar. En todos los países, menos de manera más eficiente a través de un sistema centralizado de
en Colombia, la disponibilidad del arroz fortificado se estima entrega, por ejemplo, a través de un centro de almacenamien-
en menos del 2% del total del arroz industrialmente procesa- to que distribuye arroz fortificado en una canasta de alimentos,
do en el país.15 La experiencia de Colombia con la fortificación una cocina centralizada que puede cocinar a granel arroz fortifi-
voluntaria del arroz demuestra que se puede lograr una cober- cado y distribuirlo a las escuelas, o un molino moderno de arroz
tura moderada del arroz fortificado.16 Sin embargo, incluso si la que puede producir grandes cantidades de arroz fortificado para
cobertura es alta, el uso de una tecnología efectiva también es licitar contratos de adquisición.
esencial para asegurar que la fortificación contribuye a la salud En la actualidad, varios países distribuyen arroz fortificado
pública. Un problema de la fortificación voluntaria es que hay a través de redes de protección social – en Bangladés los pro-
más discreción sobre cómo fortificar y puede que los métodos gramas gubernamentales de alimentación y protección social
eficaces no siempre sean los elegidos. proveen arroz fortificado a las poblaciones de bajos ingresos,17 y
42 FORTIFICACIÓN DEL ARROZ: EVIDENCIA, SITUACIÓN ACTUAL Y LECCIONES
TablA 4: Niveles de fortificación (mg/kg) de vitaminas y minerales en países con fortificación obligatoria a
a
Base de datos de la Iniciativa de Fortificación de Alimentos, 2016. No publicada.
una fábrica de prendas de vestir con personal mayoritariamente Lecciones aprendidas de la fortificación
femenino comenzó a proveer arroz fortificado en sus almuerzos de la harina de trigo
en diciembre de 2015.18 El Programa Mundial de Alimentos dis- La fortificación es más sostenible en una industria
tribuye arroz fortificado a través de programas de alimentación molinera moderna
escolar en Bangladés, el estado de Odisha en la India y Cambo- Tal vez una de las principales lecciones aprendidas de la fortifi-
ya (Figura 1). En Singapur, las empresas de construcción están cación de la harina de trigo es la importancia de una industria
trabajando con una empresa social, 45rice (un juego sobre las molinera moderna.21,22 La fortificación depende tanto del sec-
similitudes fonéticas en inglés entre el número “45” y la palabra tor privado para producir alimentos fortificados de alta calidad
“fortificado”), para brindar arroz fortificado a los proveedores en un ambiente seguro e higiénico, como del gobierno para
que alimentan a sus trabajadores migrantes.19 garantizar un entorno empresarial justo haciendo cumplir las
regulaciones nacionales entre todos los molineros.23 Cuando la
molienda de trigo, maíz o arroz ocurre con más frecuencia en
“La fortificación obligatoria puede el hogar o en las aldeas, la fortificación es técnicamente facti-
alcanzar una alta cobertura de la ble, pero muy difícil de sostener financieramente, monitorear
su calidad y producir de manera consistente.24 Los pequeños
población si es implementada y reglada productores o aquellos que producen en casa por lo general no
por agencias reguladoras que están tienen el capital disponible para comprar premezclas o invertir
en equipos de fortificación. La capacitación regular de los mo-
respaldadas por el compromiso político lineros a nivel de aldea para asegurar la consistencia es costosa
y políticas públicas” en tiempo y recursos para los molineros y agencias guberna-
mentales. Por último, los organismos gubernamentales que ya
han ido más allá de sus capacidades para regular la inocuidad
Puntos clave de los alimentos son simplemente incapaces de controlar la
La fortificación obligatoria puede alcanzar una alta cobertura molienda cuando se produce en miles o decenas de miles de
de la población si es implementada y reglada por agencias re- molinos, como es el caso de industria molinera en países como
guladoras que están respaldadas por el compromiso político Sri Lanka,25 Filipinas26 y Vietnam.27
y políticas públicas.20 Fuera de excepciones especiales (como La fortificación es más fácil de sostener cuando se capitaliza
los monopolios u oligopolios), la cobertura sostenida y alta del en una industria molinera centralizada. Los esfuerzos futuros
arroz fortificado es difícil de lograr a través de la fortificación vo- en la fortificación del arroz deben incluir análisis28 de la indus-
luntaria, pero las normas voluntarias al menos pueden ayudar a tria molinera como parte de una evaluación de la viabilidad de
garantizar una fortificación de calidad. Los programas de redes la fortificación.
de protección social ofrecen la oportunidad de dirigirse a las
poblaciones que más necesitan de intervenciones nutricionales, Es más probable que la fortificación obligatoria tenga
pero requieren el compromiso de la agencia implementadora mayor impacto en la salud pública que la voluntaria
para su distribución sostenida. Los clientes son extremadamente sensibles a los precios de los
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ: EVIDENCIA, SITUACIÓN ACTUAL Y LECCIONES 43
a
CR: Costa Rica; Nica: Nicaragua; Pan: Panamá; PNG: Papúa Nueva Guinea; Fil: Filipinas; NA: no aplicable; –: Sin repuesta; No: existen datos para EUA
b
Base de datos de la Iniciativa de Fortificación de Alimentos, 2016. No publicada.
c
Food Fortification Initiative (FFI). 2015 year in review. Atlanta: FFI, 2016.
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46 TECNOLOGÍA PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
Tecnología para
la fortificación del arroz
Scott Montgomery la tecnología de fortificación disponible para producir arroz
Iniciativa de Fortificación de Alimentos fortificado. También, analiza el uso de fortificantes potenciales
(vitaminas y minerales).
Jennifer Rosenzweig, Judith Smit
Oficina Regional del Programa Mundial
de Alimentos para Asia
“Como toda la fortificación de los
alimentos en general, el arroz debe
ser fortificado con formas de
Mensajes Claves micronutrientes que estén disponibles
∙ L a fortificación del arroz, bien sea usando tecnología
de recubrimiento o de extrusión, es un proceso de dos
para que el cuerpo los absorba y
pasos. El primero implica la producción de granos que se mantengan estables”
fortificados; el segundo, la mezcla de granos fortificados
con arroz no fortificado
∙ L a extrusión y el recubrimiento resistente al enjuague Retos tecnológicos
son las dos tecnologías disponibles para producir granos para la fortificación del arroz
que permanezcan estables en diferentes tipos de almace- Como toda la fortificación de los alimentos en general, el arroz
namientos, métodos de preparación y técnicas de cocción, debe ser fortificado con formas de micronutrientes que estén
y que sean aceptables para los consumidores. disponibles para que el cuerpo los absorba y que se manten-
∙ L as vitaminas y los minerales recomendados para gan estables durante el proceso de almacenamiento, transporte,
fortificar el arroz incluyen los micronutrientes que preparación, y los métodos y prácticas de cocción, incluyendo el
son removidos durante el procesamiento, además de los desechar el exceso de agua.1 El arroz es consumido como grano
micronutrientes necesarios para cubrir los déficits entero, lo que complica el proceso de fortificación y requiere
nutricionales de la población objetivo. tecnología especializada. Al contrario de la fortificación de la
∙ L a elección de la fortificación usada para fortificar el harina, donde tanto la premezcla como la harina se encuentran
arroz depende de su biodisponibilidad y estabilidad, su pulverizadas y pueden ser fácilmente mezcladas, esta no es una
impacto en la aceptación del consumidor y el tipo de opción para el arroz.
tecnología utilizado. Los micronutrientes en la mezcla fortificadora no deben
interactuar entre ellos y/o con la matriz del arroz, ya que esto
puede influir en el color, el sabor y la estabilidad disminuyendo
El arroz es el segundo grano de cereal más consumido en el la aceptación por parte del consumidor. Los fortificantes deben
mundo. En años recientes, la fortificación del arroz ha evo- permanecer estables durante diferentes medios de preparación
lucionado. Como resultado, la fortificación del arroz a escala como el lavado antes de su cocción, el remojo, la cocción con
ha ganado terreno como una estrategia factible y efectiva en diferentes cantidades de agua y de tiempo.2,3
cuestión de costos para direccionar las deficiencias de micro- Garantizar la calidad apropiada y el control de calidad, así
nutrientes. Hasta la fecha, cerca de 15 países han introducido como el monitoreo, son necesarios en el proceso de fortificación
la fortificación del arroz, bien sea de manera voluntaria u obli- del arroz para asegurar que los estándares se cumplan y que el
gatoria, dentro de redes de seguridad social o en una escala arroz fortificado mejore de manera efectiva la salud nutricional
menor a través de ensayos. Este artículo provee una visión de del consumidor.
los retos tecnológicos para la fortificación del arroz y explora
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA TECNOLOGÍA PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 47
figurA 1: Proceso en dos etapas de fortificación del arroz a través de la tecnología de recubrimiento o de extrusión
Mezcla
proporción 0.5–2%
Fortificación del arroz: hacer
∙ Arroz Arroz
el arroz más nutritivo al añadir blanco fortificado
Arroz
vitaminas y minerales esenciales con Molino
cáscara de arroz
∙ Fortificar el arroz en un proceso
Arroz Grano
de dos etapas: partido símil
Añadir vitaminas
y minerales
(premezcla)
Repaso sobre las tecnologías disponibles micronutrientes en la superficie de los granos de arroz. Cuan-
para la fortificación del arroz do se cocina, el recubrimiento se disuelve, difundiendo los
Espolvoreado micronutrientes a través del arroz cocinado. Donde se lave o
El espolvoreado es una técnica de fortificación que adiciona moje el arroz, los granos con recubrimiento fortificado deben
micronutrientes a la superficie de los granos de arroz. El espol- ser resistentes al enjuague para asegurar la retención de mi-
voreado se basa en fuerzas electroestáticas para ligar el fortifi- cronutrientes.
cante en forma de polvo a la superficie de los granos de arroz
blanqueados. Esta tecnología provee una protección limitada Opción 2: Tecnología de extrusión
de los nutrientes cuando el arroz se lava, se enjuaga o se cocina para la producción de granos fortificados.
con excesiva agua, la cual es posteriormente desechada. En Es- Los granos fortificados extruidos son formados por la combina-
tados Unidos, el espolvoreado es aceptado siempre y cuando el ción de agua y una mezcla fortificada con harina de arroz que
arroz no sea lavado previamente a la cocción y no se cocine con usualmente está hecha de la molienda de arroz de bajo costo y
exceso de agua. Todo el arroz fortificado empacado en Estado granos partidos no contaminados para formar una masa (Figu-
Unidos incluye una etiqueta que desaconseja el prelavado o la ra 2). La masa se pasa por una extrusora, produciendo granos
cocción con exceso de agua. fortificados, visualmente similares a un grano de arroz no for-
tificado. Los micronutrientes son equitativamente distribuidos
Recubrimiento y extrusión dentro del grano fortificado, con solo algunas partículas restan-
Como se ilustra en la Figura 1, el arroz fortificado es produci- tes en la superficie. Esto reduce la exposición al ambiente y por
do en un proceso de dos pasos. Primero, la técnica de recubri- lo tanto, la degradación de los micronutrientes. Los granos for-
miento o extrusión es usada para producir granos fortificados. tificados extruidos se secan, reduciendo el contenido del agua
Segundo, los granos fortificados son mezclados con arroz no al 14% o menos, mientras se incrementa su estabilidad durante
fortificado en una proporción de 0.5% a 2% para que resulte el almacenamiento.
arroz fortificado. La cantidad de almidón que es gelatinizada en los granos
fortificados influencia el color, la textura y la estabilidad du-
Opción 1: Tecnología de recubrimiento rante el remojo y la cocción. Esto se ve afectado por la tempe-
para la producción ratura y la cantidad de agua usada durante la extrusión. En
Los granos con recubrimiento fortificado son producidos re- la extrusión en frío (30°C–50°C), se utiliza una prensa para
cubriendo los granos de arroz, normalmente arroz entero, pasta para darle “forma” a la masa y formar granos opacos for-
con una mezcla líquida fortificada. Adicionalmente, se usan tificados. Esto necesita la adición de aglutinantes o un proceso
ingredientes tales como ceras y gomas, para “fijar” la capa o de paso subsecuente de hervor para producir un producto co-
capas de micronutrientes al grano de arroz. El arroz entero, hesivo. La extrusión tibia (60°C–80°C) también hace uso de
se rocía igualmente con micronutrientes y otros ingredientes la prensa para pasta, pero adiciona un pre-acondicionador con
para preservar el recubrimiento. Esto se realiza normalmente vapor o se equipa con un dispositivo de inyección de vapor para
en grandes tambores rotatorios o en máquinas de bandejas re- producir los granos fortificados, que parecen más traslúcidos
cubridoras. Los granos recubiertos son posteriormente secados y mucho más parecidos a los granos de arroz no fortificado. Se
para producir granos fortificados. Esta tecnología concentra los puede utilizar un emulsionante, pero no son necesarios aditi-
48 TECNOLOGÍA PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
Mezclado en seco
Vapor
de agua Acondicionamiento
Molino
Vapor de martillos
de agua Formación de la masa
Pre- Ingredientes
Moldeado acondicionador
Estabilización
Secado
Extrusor
Grano símil
Grano
Secador
símil
vos adicionales. La extrusión en caliente (80°C–110°C) tiene Paso 2: Mezcla de granos fortificados
mucha más intensidad y energía y, aunque no es un requisi- y arroz no fortificado
to, idealmente utiliza un equipamiento más sofisticado. Puede Los granos recubiertos o fortificados por extrusión son mez-
incluir un pre-condicionador y puede depender de una doble clados con arroz no fortificado a través de un proceso de mez-
extrusión para producir granos fortificados. Un emulsionante cla continuo o por lotes (Figura 4). La proporción de mezcla,
(monoglicerina) se puede adicionar para mantener la estabili- típicamente entre 0.5% y 2%, depende del contenido de nu-
dad durante el almacenamiento de los granos fortificados. Los trientes de los granos fortificados y del grado de fortificación
granos fortificados resultantes se parecen mucho a diferentes deseado. La garantía y el control de calidad son necesarios
tipos de arroz, con diferentes grados de claridad y textura.2 para asegurar la uniformidad de la mezcla en la proporción
Los granos fortificados hechos bien sea con extrusión tibia correcta.
o extrusión caliente son similares a los del arroz no fortificado Otros enfoques para incrementar el consumo de micronu-
en cuanto a su absorción de agua durante la cocción, tiempo de trientes a través del arroz incluyen la precocción, el remojo, la
cocción y firmeza. Los granos hechos con extrusión fría tienen biofortificación y la comunicación para un cambio en el com-
una textura más suave. En la práctica, la mayoría de las pro- portamiento que incremente el consumo de arroz integral.
ducciones de granos fortificados con extrusión fría utiliza calor La precocción no es un método de fortificación. No se le
adicional para mejorar su firmeza y apariencia y, por lo tanto, se adicionan micronutrientes al arroz; más bien, la precocción
categorizan como extrusión tibia (Ver Figura 3 para la aparien- hace que los nutrientes de las capas exteriores se transfieran y
cia de los granos fortificados usando extrusión en diferentes retengan en el endospermo amiláceo del grano de arroz. Con-
temperaturas). secuentemente, la precocción mejora el valor intrínseco de los
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA TECNOLOGÍA PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 49
figurA 3: Apariencia visual de granos de arroz naturales y granos extruídos producidos utilizando extrusión en frío, tibia y en caliente
Extrusión tibia,
proceso de pasta libre de glúten
Arroz natural
* La Energía Mecánica Específica (EME) es una medida de la energía mecánica requerida para empujar el material a través de un extrusor.
que las deficiencias de micronutrientes normalmente coexisten o hierro de sodio) son casi imperceptibles para los consumido-
en países con ingresos bajos y medios. La selección de fortifi- res porque el hierro fortificado que es importante es equitativa-
cantes depende no solo de la biodisponibilidad, la estabilidad mente distribuido a través de la harina fortificada. Sin embargo,
y la aceptabilidad sensorial, sino también de la tecnología de cuando se concentra en un grano fortificado, el color y el sabor
fortificación utilizada. Para información adicional sobre fortifi- pueden verse afectados. La Figura 5 muestra arroz que ha sido
cantes, por favor consulte la colaboración realizada por de Pee y fortificado con varios tipos de hierro, algunas veces resultando
Fabrizio (págs. 53). Para ser un fortificante efectivo, la forma de granos fortificados que no son aceptables para los consumidores.
los micronutrientes debe ser biodisponible. En otras palabras, El pirofosfato férrico (FePP) es recomendado para la fortifica-
el cuerpo debe ser capaz de absorber de manera efectiva y utili- ción del arroz ya que no afecta el color de los granos fortificados
zar los micronutrientes. Adicionalmente, el fortificante elegido y así no influencia de manera negativa la aceptación por parte
no debe afectar el color o sabor del arroz fortificado. Diferentes del consumidor. Sin embargo la biodisponibilidad del FePP no
formas de micronutrientes han variado los grados de biodispo- es tan alta como la del sulfato férrico, y el total de hierro que
nibilidad y los grados en que afectan a la apariencia y el sabor puede ser adicionado a los granos fortificados es relativamente
del arroz fortificado. bajo. Una forma micronizada de FePP puede incrementar la bio-
Los micronutrientes más comúnmente usados se debaten a disponibilidad en cierta medida. El ortofosfato férrico es usado
continuación. en algunas ocasiones, ya que es cercano a un polvo blanco; sin
embargo, la biodisponibilidad es menos que la del FePP.4,5
Hierro Investigaciones recientes por parte del Instituto de Tecno-
Diferentes formas de intercambio de hierro entre su biodisponi- logía Federal Suizo (ETH Zurich) confirman que agregar un
bilidad y propiedades impactan la aceptación de los consumi- agente quelante puede mejorar mucho la biodisponibilidad
dores. Los fortificantes de hierro recomendados para el trigo y del FePP en el arroz, acompañado de la bio disponibilidad del
la harina de maíz fortificada (sulfato ferroso, fumarato ferroso sulfato ferroso.6
figurA 4: Métodos de producción para mezclar el arroz fortificado por lotes y continuo
Peso
Alimentador
Dosificador
Mezclador
Mezclado
Empaque Empaque
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA TECNOLOGÍA PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 51
figurA 5: Apariencia visual de granos de arroz naturales y granos extruídos producidos utilizando extrusión en frío, tibia y en caliente
dores (sabor, forma y color). El uso de recubrimiento resistente 3. Alavi S, Bugusu B, Cramer G et al. Rice Fortification in
al enjuague o la extrusión (en caliente o tibia) para producir Developing Countries: A Critical Review of the Technical and
granos fortificados cumple con la retención de nutrientes y los Economic Feasibility. Washington DC: A2Z Project/Academy
requisitos de aceptación de los consumidores. Las dos tecnolo- for Educational Development, 2008.
gías implican un proceso de dos pasos: primero, la producción 4. Aggett PJ. Population reference intakes and micronutrient
de granos fortificados y, segundo, la mezcla de granos fortifica- bioavailability: a European perspective. Am J Clin Nutr
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El fortificante utilizado también es importante, ya que in- 5. Hurrell R, Egli I. Iron bioavailability and dietary reference
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L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA NORMAS Y ESPECIFICACIONES DEL ARROZ FORTIFICADO 53
Normas y
especificaciones del
arroz fortificado
Saskia de Pee Introducción
Programa Mundial de Alimentos, Roma, Italia Cuando un país decide fortificar el arroz para incrementar la
Friedman School of Nutrition Science and Policy, ingesta de micronutrientes a nivel poblacional, las normas
Boston, EUA que especifican la calidad requerida y el contenido nutri-
cional proveen claridad y seguridad tanto a los productores
Cecilia Fabrizio como a los consumidores. Estas normas ayudan a asegurar
Oficina Regional del Programa Mundial la calidad nutricional del arroz y a que el arroz sea seguro y
de Alimentos para Asia aceptable para su consumo. Las normas son más generales
que las especificaciones o la documentación requerida para
materias primas (CRD, por sus siglas en inglés). Por ejemplo,
Mensajes clave las normas del arroz fortificado pueden cubrir un rango en
∙ Los normas y las especificaciones del arroz fortificado términos de los tipos de arroces, contenido nutricional y es-
deben precisar la calidad en términos de inocuidad, tipulaciones de calidad. Las especificaciones para el arroz en
aceptabilidad y contenido nutricional, para el beneficio el caso de un contrato, como el proveniente del gobierno para
de los consumidores y productores. distribución bajo un mecanismo de red de protección social,
∙ L a elaboración de normas y especificaciones debe son mucho más específicas, incluyendo, por ejemplo, el tipo
consistir en un proceso consultativo. de arroz, la calidad en términos del porcentaje de granos que-
∙ El Código Alimentario (Codex Alimentarius) provee brados que pueden ser incluidos, el contenido de micronu-
normas mundiales aplicables al arroz y a los alimentos trientes a alcanzar, la tecnología/s utilizada/s para producir
fortificados. granos fortificados, la relación de mezcla de granos fortifica-
∙ Los niveles de micronutrientes deben ser establecidos dos por granos de arroz, el empaque requerido, los límites
de tal manera que la ingesta de micronutrientes de la permitidos de materia extraña y metales pesados, y la vida
población general, proveniente de todas las fuentes, sea útil de los alimentos.
superior al requerimiento estimado promedio (REP),
e inferior al límite máximo tolerable (UL) por sus siglas
en inglés, para casi todas las personas.
“L as normas que especifican la calidad
∙ Cuando la ingesta no sea conocida con precisión y exista requerida y el contenido nutricional
la posibilidad de deficiencias dietarias, establecer el nivel
de micronutrientes del arroz fortificado, de tal manera
del arroz fortificado proveen claridad
que en los niveles de consumo prevalecientes este y seguridad tanto a los productores
otorgue el requerimiento estimado promedio a los adul-
tos, es un enfoque positivo.1,2
como a los consumidores”
Las normas del Codex Alimentarius ∙ Primera. Los niveles de consumo de alimentos en la
La fuente mundial de normas alimentarias es la Comisión población objetivo: si el consumo promedio es alto, como
del Codex Alimentarius (www.codexalimentarius.org), es- ocurre en la mayoría de países consumidores de arroz, se
tablecida por la Organización de las Naciones Unidas para la necesitan niveles más bajos de micronutrientes por kilo-
Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) y gramo de arroz para lograr el nivel objetivo de ingesta de
la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1963. Esta comi- micronutrientes.
sión desarrolla normas, directrices, y códigos de prácticas ali- ∙ Segunda. Si otros alimentos son fortificados y con qué
mentarias internacionales armonizadas para proteger la salud nutrientes: por ejemplo, si el aceite vegetal o el azúcar
de los consumidores y asegurar prácticas leales de comercio son fortificados adecuadamente con vitamina A y si estos
internacional. La Comisión también promueve la coordinación alimentos son consumidos por las mismas personas que
de toda la labor en materia de normas alimentarias realizada consumirán arroz fortificado, la vitamina A puede ser
por organizaciones internacionales gubernamentales y no gu- incluida en niveles más bajos en el arroz fortificado o no ser
bernamentales. Mientras la adopción de las recomendaciones incluida del todo.
por parte de los países es voluntaria, las normas del Codex son ∙ Tercera. Si los alimentos, y la dieta en general, contienen
frecuentemente la base de la legislación nacional. compuestos que pueden afectar la estabilidad o la absor-
En el caso del arroz fortificado, dos documentos del Codex ción de los minerales o vitaminas que se añaden, como el
pueden ser referenciados: Norma del Codex para el arroz (Codex ácido fítico o fitato en granos, que inhibe la absorción de
stan 198-19953) y los principios generales para la adición de minerales (por ejemplo, hierro y zinc); esta información
nutrientes esenciales a los alimentos (CAC/ GL 09-1987, modifi- afecta la forma y el nivel del nutriente a ser añadido para
cados en 1989 y 19914), los cuales gobiernan la fortificación de la fortificación (por ejemplo, el hierro EDTA de sodio es la
los alimentos en general. única forma recomendada de hierro para la fortificación de
No existe una norma del Codex específica o principios es- harina de alta extracción).6
pecíficos del Codex para el arroz fortificado; tampoco existen ∙ Cuarta. Aceptación del consumidor: los niveles de
directrices específicas para otros alimentos básicos fortifica- fortificación de micronutrientes y la tecnología utilizada
dos. Los países deberán decidir si mantienen la misma estruc- para producir los granos fortificados deben ser tales que
tura, es decir, una norma para el arroz y una norma para la hagan el arroz aceptable al consumidor en términos de su
fortificación de alimentos y después desarrollan especifica- apariencia (color y forma), olor y sabor, tanto antes como
ciones para alimentos fortificados individuales, como el arroz después de la preparación.
fortificado, que sean aplicables para uso particular o contratos
particulares. Estas especificaciones pueden incluir más deta- Si el arroz va a ser el único alimento fortificado con un mi-
lles (por ejemplo, el contenido de micronutrientes para gru- cronutriente o micronutrientes específicos, se debe establecer
pos-objetivo específicos, especificaciones sobre el sistema de el nivel de micronutrientes para proveer aproximadamente el
empaque, etc.) y pueden ser modificadas fácilmente cuando requerimiento promedio estimado (RPE) de micronutriente(s)
sea necesario. Las normas y las especificaciones deben ser de- para adultos sanos. El RPE es el promedio (media) del nivel de
sarrolladas a través de un proceso consultativo que involucre ingesta diaria de nutrientes estimado para suplir las necesida-
a representantes del sector público y privado, la academia y la des de la mitad de los individuos sanos en una edad y género
sociedad civil. Entre los países que han establecido una norma específicos. El RPE se utiliza para obtener la ingesta de nutrien-
para el arroz fortificado se encuentran Costa Rica, las Filipinas tes de referencia (RNI, por sus siglas en inglés). La ingesta de
y los Estados Unidos. nutrientes de referencia establecida por la FAO y la OMS, se fija
con base en el RPE más dos desviaciones estándar, lo que signi-
fica que esta supliría las necesidades del 97,5% de todos los in-
“L as normas y las especificaciones dividuos normales, sanos, de edad y género específicos, dentro
deben ser desarrolladas a través de de un grupo poblacional. (ver Figura 1).
La mayoría de las personas consumen alguna cantidad de
un proceso consultativo” micronutrientes específicos. Por lo tanto, fijar la contribución
de micronutrientes proveniente de alimentos fortificados en el
Estableciendo el contenido de micronutrientes nivel RPE cambia la ingesta promedio de micronutrientes a un
El nivel de micronutrientes del arroz fortificado debe ser deter- nivel por encima del RPE y posiblemente justo por encima de la
minado después de considerar cuatro condiciones específicas ingesta de nutrientes de referencia (RNI, por sus siglas en inglés)
de cada país.5 (ver Figura 2). La proporción de personas por debajo del EAR
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA NORMAS Y ESPECIFICACIONES DEL ARROZ FORTIFICADO 55
FIGURA 1: Distribución normal de las necesidades nutricionales cuando el 50% de la población cumple con los requerimientos
en el nivel de requerimiento promedio estimado (RPE) y el 97,5% cumple los requerimientos en el nivel de la ingesta de nutrien-
tes de referencia (RNI).
40 50 60 66 70 77 80 90 100 110
figurA 2: Objetivo de distribución de ingesta de micronutrientes cuando el 2,5 % o menos está por debajo del RPE y la mayoría
está por encima del RNI pero por debajo del límite máximo tolerable (UL, por sus siglas en inglés).
2.5 %
Ingesta usual
debe ser menor del 2,5 % de la población a fin de minimizar la alta. Para evaluar el riesgo de una ingesta muy alta, es necesa-
proporción de personas que no reciben las cantidades adecua- rio referirse al límite máximo tolerable (UL, por sus siglas en
das de micronutrientes para suplir sus necesidades. inglés). El UL es definido como el nivel de ingesta diaria de nu-
El arroz fortificado debe hacer una buena contribución en la trientes que se considera que no genera ningún efecto adverso
ingesta para la mayoría de los consumidores y, al mismo tiempo, en la salud de casi todos (97,5%) los individuos sanos de edad y
debe ser seguro para quienes lo consumen en la cantidad más sexo específicos dentro de un grupo poblacional. El UL se aplica
56 NORMAS Y ESPECIFICACIONES DEL ARROZ FORTIFICADO
tablA 1: Niveles propuestos de nutrientes para el arroz fortificado al momento del consumo.2
Nutriente Compuesto <75 g/d 75–149 g/d 150–300 g/d >300 g/d RPE*
a la ingesta diaria durante un periodo de tiempo prolongado y 75 –149 g/d, 150 –300 g/d, y > 300 g/d.6 Las mismas categorías
a individuos sanos sin ninguna deficiencia de micronutrientes han sido adoptadas para el consumo de arroz. En los países
que deba ser corregida. El UL incluye un amplio margen de se- en donde el arroz es el principal alimento básico, el consumo
guridad, ya que se fija a un nivel mucho más bajo que el nivel promedio per cápita usualmente se encuentra dentro de las
más bajo en el que se ha observado un efecto adverso de una categorías más altas. En el caso de la tiamina, el nivel de 0,5
ingesta crónicamente alta. mg/100 g se propone para la categoría de 150 –300 g/d y 0,35
Debe tenerse en cuenta que el nivel en el que puede pre- por > 300 g/d, ya que estos proporcionarían aproximadamente
sentarse toxicidad aguda se encuentra considerablemente por 1,0 mg de tiamina por día al consumir 200 g (200 x 0,5/100 g) o
encima del nivel UL. Adicionalmente, como el UL se encuentra 300 g (300 x 0,35/100 g) respectivamente.
considerablemente por encima del RNI y el arroz será forti- Los nutrientes y los niveles nutricionales para la fortifica-
ficado a un nivel que provea el RPE, el cual es aproximada- ción del arroz han sido recomendados con base en esta consi-
mente el 70% del RNI, se tendría que consumir varias veces la deración del RPE y el consumo de arroz per cápita (Tabla 1).
cantidad diaria esperada de arroz fortificado para alcanzar el Para más información sobre la justificación de la selección de
UL. Por consiguiente, si 300 gr de arroz crudo otorgan el RPE, los ocho micronutrientes recomendados para la fortificación del
únicamente el consumo diario de aproximadamente 1 – 10 kg arroz, véase la contribución de de Pee et al (págs. 29) y de Pee2
(dependiendo del micronutriente) de arroz crudo durante un (tenga en cuenta que la investigación realizada después de que
periodo de tiempo prolongado podría potencialmente poner el trabajo de de Pee fuera publicado ha encontrado una posible
en riesgo al consumidor de una ingesta muy alta por consumir forma de incrementar la biodisponibilidad del hierro en el arroz
arroz fortificado (consistentemente sobrepasando el UL). Este de manera que se puedan incluir niveles más bajos de aproxi-
escenario es poco realista. madamente 4mg/100 g en vez de 7 mg/ 100 g en las categorías
Determinar el nivel de micronutrientes por 100 gr de arroz 150–300 y > 300 g/d).7
fortificado que se requiere para que la ingesta total de arroz Como se mencionó anteriormente, al existir otras buenas
fortificado provea el RPE demanda un cálculo del consumo de fuentes de micronutrientes específicos consumidos por una
arroz per cápita. Por ejemplo, el requerimiento promedio esti- población, como el aceite vegetal fortificado con vitamina A o
mado (RPE) para la vitamina B1 (tiamina) es 0,9 mg para mu- el arroz parbolizado, el cual tiene niveles más altos de tiamina,
jeres adultas y 1,0 para hombres adultos. Esto significa que la niacina y vitamina B6 que el arroz refinado, los niveles propues-
cantidad de arroz fortificado consumido en un día debe proveer tos en la Tabla 1 deben ser ajustados para alcanzar las necesi-
aproximadamente 0,9 – 1.0 mg de tiamina. La declaración de dades específicas de la población. En el caso del aceite vegetal
consenso interina sobre la fortificación de la harina propuso fortificado, el nivel de ingesta promedio RPE que se tiene como
las siguientes categorías para el consumo de harina: < 75 g/d, objetivo, el 50% restante podría añadirse al arroz.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA NORMAS Y ESPECIFICACIONES DEL ARROZ FORTIFICADO 57
La Tabla 1 y la explicación anterior tienen niveles específi- res y promover las prácticas comerciales leales de aquellos in-
cos de micronutrientes al momento del consumo. Sin embargo, volucrados en la cadena de suministro del arroz. Estas normas
como pueden ocurrir pérdidas con el paso del tiempo, es decir, y especificaciones definen la calidad, en términos de qué es se-
durante almacenamiento y durante el procesamiento y la pre- guro (por ejemplo, materia extraña), aceptable (por ejemplo, la
paración, puede agregarse un excedente al momento de la pro- proporción máxima de granos quebrados) y nutritivo (conteni-
ducción, especialmente para las vitaminas que son sensibles do nutricional). Las normas y especificaciones deben ser claras,
al calor. La vitamina A es la más sensible al calor, por lo tanto sin la necesidad de interpretación adicional, y debe ser factible
requerirá un excedente mayor, mientras que otros nutrientes su seguimiento y cumplimiento. La experiencia ha demostra-
son más estables. Adicionalmente, al variar las cantidades de do que las normas y especificaciones se desarrollan de mejor
micronutrientes que se encuentran en la pre-mezcla y en los manera a través de un proceso consultativo liderado por la au-
granos fortificados, la relación de mezcla, y las mediciones toridad gubernamental de regulación alimentaria, recibiendo
de laboratorio, las especificaciones para el arroz fortificado información del Codex Alimentarius y otros datos pertinentes,
también necesitan especificar un rango mínimo - máximo al y asistido por un grupo de expertos. Este trabajo ha revisado la
momento de la producción. Finalmente, las especificaciones justificación de los niveles de micronutrientes propuestos para
también deben estipular el contenido mínimo permitido hasta el arroz fortificado, los cuales pueden ser utilizados como tal o
la fecha de consumo preferente (es decir el final de la vida útil pueden ser adaptados al contexto específico de un país, toman-
del arroz). do en cuenta los niveles existentes de ingesta de micronutrien-
tes y fortificación de alimentos.
Referencias
“L a fortificación del arroz debe formar 1. Allen L, de Benoist B, Dary O et al, eds. Guidelines
parte de una estrategia integrada para on food fortification with micronutrients. Geneva: World Health
Organization/Food and Agriculture Organization, 2006.
mejorar la ingesta de micronutrientes 2.
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y el estado de una población” fortification. Ann N Y Acad Sci 2014;1324:55–66.
3.
Codex standard for rice (www.justice.gov.md/file/Centrul%20
de%20armonizare%20a%20legislatiei/Baza%20de%20date/
El arroz fortificado entre otros alimentos fortificados Materiale%202013/Legislatie/CODEX%20STAN%20198-1995.pdf)
La fortificación del arroz debe formar parte de una estrategia 4. General principles for the addition of essential nutrients to foods.
integrada para mejorar la ingesta de micronutrientes y el estado Cac/gl 09-1987 (amended 1989, 1991) (www.codexalimentarius.
de una población. Por esta razón, como se mencionó anterior- org/download/standards/299/CXG_009e.pd)
mente, cuando existen otros alimentos fortificados, los nive- 5. Food Fortification Initiative: Standards.
les de consumo y fortificación de aquellos y de otras fuentes www.ffinetwork.org/plan/standards.html
principales de micronutrientes específicos deben considerarse 6.
WHO, FAO, UNICEF, GAIN, MI & FFI. Recommendations on
al momento de establecerse los niveles de fortificación de mi- wheat and maize flour fortification. Meeting Report: Interim
cronutrientes para el arroz. Un software como el programa de Consensus Statement. Geneva: World Health Organization, 2009
Control, Evaluación y Planeación de la Ingesta (IMAPP)8 puede (www.who.int/nutrition/publications/micronutrients/
ayudar a calcular los niveles de ingesta segura de los micronu- wheat_maize_fort.pdf, accessed [2 September 2014]).
trientes propuestos. Dicho programa incorpora información so- 7. Hackl L, Cercamondi CI, Zeder C et al. Cofortification of ferric
bre la ingesta de alimentos específicos y la complementación pyrophosphate and citric acid/trisodium citrate into extruded rice
adicional entre grupos destinatarios específicos, utilizando un grains doubles iron bioavailability through in situ generation of
método de frecuencia alimentaria y método de recuperación de soluble ferric pyrophosphate citrate complexes. Am J Clin Nutr
información 24 horas. 2016, (C), 1–8. http://doi.org/10.3945/ajcn.115.128173
8.
Intake Monitoring and Assessment Planning Program
Conclusión (www.side.stat.iastate.edu/)
Las normas aplicables a categorías específicas de alimentos
(por ejemplo, el arroz o la fortificación de alimentos en general)
y las especificaciones de un alimento específico (arroz fortifi-
cado que el gobierno comprará para el programa de protección
social) tienen como objeto proteger la salud de los consumido-
58 NORMAS Y ESPECIFICACIONES DEL ARROZ FORTIFICADO
Identificando maneras
propicias para la entrega
del arroz fortificado
Karen Codling de protección social puede lograrse tanto con la fortificación
Iniciativa de Fortificación de Alimentos de Asia obligatoria como voluntaria. La selección de la mejor manera de
entrega depende de las necesidades de salud pública, el contexto,
Cecilia Fabrizio, Jennifer Rosenzweig y el objetivo y el propósito de la fortificación del arroz.
Oficina Regional del Programa Mundial Este artículo ofrece un resumen de los tres potenciales cana-
de Alimentos para Asia les de entrega del arroz fortificado, las lecciones aprendidas de
los países en los que ya se implementó y el estado actual de la
fortificación del arroz.
Mensajes clave
∙ Para poder identificar la mejor forma de entrega del
arroz, los tomadores de decisión deberían evaluar las
“L a selección de la mejor manera
necesidades de salud pública, la cadena de producción de entrega depende de las necesidades
del arroz, la posibilidad de fortificación y el alcance
que las redes de protección social tienen sobre los grupos
de salud pública, el contexto,
que más se benefician con la fortificación del arroz. y el objetivo y el propósito de la
∙ L a fortificación obligatoria del arroz ofrece la
mejor oportunidad para maximizar los beneficios
fortificación del arroz”
a la salud pública.
∙ Cuando el escenario de molienda del arroz se
Opción de entrega 1:
encuentre fragmentado y no resulte posible la fortifi-
La fortificación obligatoria
cación obligatoria, la distribución del arroz fortificado
La fortificación obligatoria requiere que los productores de
a través de las redes de protección social es una
alimentos, tanto nacionales como importadores, fortifiquen el
alternativa para lograr un impacto de salud pública
arroz o que le incorporen micronutrientes. En comparación con
en las poblaciones destinatarias.
otras formas de entrega, la experiencia muestra que la fortifica-
ción obligatoria posee el mejor potencial para la salud pública.
Esto resulta del consumo de alimentos fortificados por parte de
Introducción todos los sectores de la población, sin que se modifiquen las
Mientras que el arroz es un alimento básico, la fortificación del conductas de consumo. Los gobiernos tienden a introducir la
mismo posee el potencial de contribuir de manera significativa fortificación obligatoria cuando la deficiencia de micronutrien-
a reducir las deficiencias de micronutrientes en la población. El tes, o el riesgo de la misma, son amplios y cuando un alimento
arroz fortificado puede llegar a los consumidores de tres mane- que es consumido por la mayoría de la población puede ser for-
ras diferentes. En primer lugar, los gobiernos pueden determinar tificado de manera efectiva.1 La fortificación obligatoria exige la
que se fortifique todo el arroz del mercado. Como segunda opción, voluntad, la abogacía y el liderazgo del gobierno para promover
los molineros pueden fortificar el arroz de forma voluntaria, en la legislación y el sistema de supervisión necesarios.
respuesta a las demandas del mercado. Por último, el arroz for-
tificado se puede distribuir a través de programas de protección Estado actual de la fortificación obligatoria
social. La distribución del arroz fortificado a través de las redes Cinco países de ingresos bajos y medios cuentan con fortifica-
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA IDENTIFICANDO MANERAS APROPIADAS DE ENTREGA DEL ARROZ FORTIFICADO 59
País Año Fuente del arroz; Fuente del grano fortificado y molienda 75–149 g/d
Costa Rica 2001 40 % importado; 2 productores nacionales de grano fortificado; 11 molinos 100 % fortificado
Nicaragua 2009 80% del arroz nacional; + de 40 molinos Implementación limitada
Panamá 2009 40 % arroz importado; plan inicial del gobierno de pagar por los granos Todavía no se implementó
Papúa 2007 Todo el arroz es importado; fortificado con granos importados Al menos 80% de fortificación (participación
Nueva Guinea o en el país de origen en el mercado del mayor importador)
Filipinas 2001 13 % importado; ~11.000 molinos. Granos fortificados importados más 1–2% total de arroz fortificado entre
3 productores internos. Arroz SSN. 2006 – 2013. Actualmente, menos del 1 %
ción obligatoria, pero hasta ahora solo tres países han tenido la industria de la molienda y por la baja capacidad de fortifica-
éxito en la implementación de programas, considerando que la ción de miles de pequeños molineros. Además, existen proble-
fortificación del arroz es reciente (Tabla 1). Costa Rica posee el mas vinculados a las limitaciones de la tecnología, la compleji-
programa de fortificación de arroz más exitoso, ya que el 100% dad de la cadena de distribución para los granos fortificados y
del arroz se encuentra fortificado. Además, Costa Rica fortifica los desafíos de la logística geográfica. Hoy en día, ni siquiera la
otros alimentos como el trigo, la harina de maíz, la leche y el NFA puede fortificar todo el arroz debido a los problemas con la
aceite; por lo que es difícil atribuir la mejora en la situación logística, las finanzas y los consumidores. Como resultado de
de micronutrientes específicamente a la fortificación del arroz. estos desafíos, el gobierno todavía no intenta hacer cumplir la
Papúa Nueva Guinea tuvo éxito en la implementación del pro- fortificación del arroz.
grama de fortificación obligatoria del arroz. Este éxito se debe De manera similar, los gobiernos de Nicaragua y Panamá no
a que casi todo el arroz es importado – no se cultiva en el país. hacen cumplir de manera activa la legislación existente sobre
Además, el arroz se importa de un pequeño número de impor- la fortificación del arroz. Estos países también se encuentran
tadores, de los cuales el más importante (que posee el 80 % del perjudicados por la división de la industria de los molinos y la
mercado) fortifica todo el arroz. Se cree que otros importadores baja capacidad de la industria para la fortificación.
del país también fortifican parte de su arroz. Estados Unidos
es el tercer país que posee legislación referida a la fortificación Las enseñanzas aprendidas de la fortificación obligatoria
obligatoria. La legislación federal exige que se fortifique el arroz La fortificación obligatoria ofrece la mayor
que se produce en el estado con legislación obligatoria, el arroz oportunidad para los efectos sostenibles y a gran escala
de la salud pública.
que va hacia ese estado y el que se transporta por dicho estado.
Seis de los 50 estados poseen legislación referida a la fortifi- Aunque hoy en día se encuentran implementados pocos pro-
cación obligatoria e hicieron uso de su legislación para que se gramas de fortificación obligatoria del arroz, la extrapolación
fortifique al menos el 70 % del arroz del país. de los estudios de eficiencia de la fortificación del arroz y de
Los otros tres países con fortificación obligatoria se esfuer- acuerdo con lo aprendido de la fortificación de otros alimentos
zan para poner en funcionamiento y reforzar la fortificación básicos (por ejemplo, la harina de trigo) y condimentos (como
del arroz. Filipinas aprobó la fortificación obligatoria en 2001 la sal), existen razones para creer que la fortificación obligatoria
y se comprometió a planificar y a invertir en la planificación sería una estrategia eficaz y rentable para mejorar la ingesta de
del arroz, aunque solo el 1 % del total se encuentra fortificado. nutrientes. Para mayor información, por favor consulte la con-
Inicialmente, el gobierno puso en marcha un plan que proyecta- tribución de Tacsan et al (págs. 104).
ba la implementación en etapas y con los molinos más grandes
fortificando primero. La Autoridad Nacional de Alimentos (NFA, La voluntad política es fundamental para lograr
por sus siglas en inglés), que implementa programas de pro- la fortificación obligatoria
tección social de gran alcance de arroz subsidiado, llevó a cabo Se necesita de la voluntad y el compromiso político para apro-
ensayos de eficacia, efectividad y aceptabilidad del arroz fortifi- bar una legislación que regule la incorporación de nutrientes
cado, y adquirió trituradoras y granos fortificados para fortificar específicos en determinados alimentos y para establecer los
el arroz de los depósitos de la NFA. Varios gobiernos regionales estándares nacionales. A partir de entonces, se necesita la con-
aprobaron ordenanzas para que se fortificara el arroz. Sin em- tinua voluntad política y la capacidad del gobierno para imple-
bargo, a pesar de estos esfuerzos, el sector privado nunca inició mentar sistemas regulatorios de supervisión que aseguren la
la fortificación a gran escala. En primer lugar, por la división de correcta aplicación de la legislación y los estándares.
60 IDENTIFICANDO MANERAS APROPIADAS DE ENTREGA DEL ARROZ FORTIFICADO
Al igual que con los programas de fortificación el gobierno hará cumplir las leyes y que los molineros las cumpli-
de alimentos, la fortificación del arroz solo será efectiva rán. Como alternativa, los productores de granos fortificados fue-
cuando se ejecute ra del país solo aumentarán su capacidad productiva y estarán
La legislación y el cumplimiento proporcionan el ambiente ade- en posición de vender sus productos con tasas que compensen
cuado para garantizar la distribución sostenible y rentable del los costos de transporte si creen que existe un mercado para los
arroz fortificado. Las leyes, una vez aprobadas, deben hacerse granos fortificados. Los molineros necesitan también invertir en
cumplir. Sin embargo, en la mitad de los países con fortificación alimentadores y máquinas mezcladoras y adquirir granos fortifi-
obligatoria regulada por la ley, representa todo un desafío lograr cados. Para desarrollar la capacidad interna para la producción
la voluntad política, el personal capacitado y los recursos para de granos, los miembros de la cadena de suministro tendrán que
hacer cumplir las leyes. El cumplimiento y la regulación ayudan evaluar la voluntad política, la mano de obra y los recursos antes
a mantener las reglas de juego iguales para todos y le garantizan de comprometer sus propios recursos.
al sector privado que sus competidores tendrán costos similares.
Estas medidas garantizan, además, la fortificación de toda la ca- La publicidad, incluyendo la comunicación para
dena de suministro del arroz fortificado. el cambio de comportamiento, no es necesaria para
influenciar en las decisiones de compra cuando
la fortificación del arroz es obligatoria
La fortificación obligatoria, incluyendo la del arroz,
tiene un efecto mínimo en los precios al consumidor Cuando la legislación se cumple, los costos de publicidad y
Cuando la fortificación del arroz es obligatoria, los consumido- comunicación son mínimos. Es importante informar a los con-
res no tienen que elegir entre el arroz fortificado y el no fortifica- sumidores de que el arroz está fortificado y que las etiquetas
do, ya que todo el arroz disponible en el mercado se encuentra incluyan el tipo de nutriente agregado. Sin embargo, no hay ne-
fortificado. Por lo tanto, los consumidores no tienen que cambiar cesidad de que los productores de arroz o el gobierno asuman
sus hábitos de consumo ni tampoco pagar un valor extra por el los costos de publicidad u otros gastos de comunicación para
arroz. En este escenario, los molineros de arroz probablemente motivar a las personas a adquirir arroz fortificado.
trasladen los costos de la fortificación a los consumidores. Los
costos deben ser mínimos y se repartirían entre todo el arroz Opción de entrega 2:
disponible. De hecho, el consumidor promedio no debería notar Fortificación voluntaria
la diferencia de precio. En algunos contextos, el gobierno podría La fortificación es voluntaria cuando la industria privada de
subsidiar el costo de la fortificación o los molineros podrían no alimentos tiene la opción de fortificar los alimentos. La fortifi-
trasladar los costos de fortificación a los consumidores. cación voluntaria posee un enfoque orientado a los negocios, ya
que el producto se vende con “valor agregado”, usualmente des-
El grado de consolidación de la industria, tinado a consumidores de mayores ingresos. Si los molineros
su tamaño y modernización contribuyen al éxito perciben una demanda creciente del arroz fortificado, podrían
de la fortificación del arroz elegir desarrollar una marca fortificada para aumentar las ven-
En varios países productores de arroz, tradicionalmente la mo- tas o las ganancias. El potencial para influenciar en la cantidad
lienda se realiza a muy pequeña escala: un molino por poblado. de micronutrientes de la población a través de la fortificación
Hoy en día, la industria mundial se está modernizando y con- sería bajo. Esto es debido a la incertidumbre de la aceptación de
solidando. Como ocurrió en Costa Rica, la producción consoli- la industria y la demanda de los consumidores. El efecto tam-
dada facilita la implementación de la fortificación del arroz. En bién se verá limitado, ya que los grupos socioeconómicos más
Filipinas, la estructura dividida de los molinos representó una bajos, que son los que más necesitan la fortificación, son los que
restricción para la implementación de las leyes de fortificación menos acceso tienen a adquirir las marcas fortificadas debido a
obligatoria del arroz. sus altos costos. La aversión de los consumidores al cambio en
la preparación del arroz, la cocción y los hábitos alimenticios, y
La inversión en la industria es necesaria la inaccesibilidad del producto en los canales comunes de com-
para desarrollar la capacidad interna para la producción pra, como las ventas al por mayor, también limitan el efecto de
de los granos fortificados la fortificación voluntaria. Asimismo, no existen pruebas de que
El volumen de granos fortificados necesarios para fortificar el la fortificación voluntaria lleve a la fortificación obligatoria.
suministro de arroz de un país resulta considerable. Por lo tanto,
el costo del transporte de granos fortificados puede ser muy alto. Estado de la fortificación voluntaria
Las compañías privadas solo invertirán en instalaciones de pro- Cuatro países poseen programas de fortificación voluntaria
ducción para los granos fortificados si están convencidas de que de gran escala, además de numerosas iniciativas alrededor
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA IDENTIFICANDO MANERAS APROPIADAS DE ENTREGA DEL ARROZ FORTIFICADO 61
del mundo. La industria del arroz de Colombia se encuentra cubrir los costos de producción de las marcas fortificadas. Si
consolidada: poseen siete molineros que fortifican el arroz y las marcas de arroz fortificado se venden como productos con
producen el 50 % del suministro del mercado. Lamentable- valor agregado, el aumento de precio podría resultar excesivo
mente, los molineros de Colombia utilizan una tecnología de sobre los costos de producción y publicidad, ya que los produc-
fortificación en el revestimiento del grano que se pierde lue- tores suelen posicionar al arroz fortificado como un producto
go de la cocción. Esto reduce el beneficio en la salud pública. de lujo.
Este método poco efectivo muestra que la falta de estándares
nacionales es el punto débil de la fortificación voluntaria. En Se requiere el aumento de la comercialización
Brasil y Sudáfrica, donde la implementación no es de gran es- (por ejemplo: publicidad, promoción y embalaje)
cala (solo entre el 1 y el 4 % se encuentran fortificados), los para promover los beneficios de la fortificación
y el costo más elevado
molineros están divididos y la concientización y motivación
para que los consumidores consuman las marcas premium es Contrario a la creencia popular, las campañas de comercializa-
baja. Se desconoce el estado actual de la implementación en ción que buscan persuadir a los consumidores para que adquie-
República Dominicana. ran productos fortificados – incluyendo el arroz – fracasaron en
convencer a grandes sectores de la población para que elijan
Las enseñanzas aprendidas sobre la productos fortificados. Sin embargo, con la fortificación volun-
fortificación voluntaria del arroz taria, se les ofrece la posibilidad de acceder al producto con va-
Difícil de lograr un amplio impacto en la salud pública lor agregado, arroz fortificado de bajo o de alto costo, y arroz
La fortificación voluntaria del arroz no logró el alcance del total no fortificado. Por lo tanto, para poder incrementar la venta de
del suministro de arroz, con la excepción de situaciones como las productos fortificados, los productores de arroz y el gobierno
de Colombia, en donde la consolidación de la industria facilitó deben mantener las campañas de comercialización y moviliza-
acuerdos entre los molineros para lograr la fortificación. Si no hay ción social.
suficiente alcance del producto fortificado, especialmente entre
las poblaciones más precarias y vulnerables, los beneficios en la Opción de entrega 3:
salud se verán limitados. Fortificación del arroz distribuido a través de
las redes de protección social
Las normas son necesarias, incluso La fortificación del arroz específica se logra fortificando el arroz
en la fortificación voluntaria que se destina a las redes de protección social, como los progra-
La fortificación voluntaria del arroz requiere de normas espe- mas de alimentación escolar, la distribución entre grupos po-
cíficas. Como se evidencia en lo ocurrido en Colombia, los be- bres o vulnerables, programas de alimento por trabajo y ayuda
neficios de convencer a los molineros de fortificar de manera alimentaria durante situaciones de emergencia. La distribución
voluntaria fueron contrarrestados por las normas ineficaces de del arroz fortificado en las redes de protección social alcanza a
fortificación. La falta de normas voluntarias efectivas en Colom- las poblaciones más vulnerables y tiene efectos importantes en
bia les permitió a los productores de arroz comercializar arroz la salud pública. La fortificación del arroz distribuido a través de
que casi no brinda beneficios nutricionales. las redes de protección social se puede implementar en paralelo
con la fortificación voluntaria u obligatoria. Además, puede ac-
Las regulaciones gubernamentales y su ejecución tuar como catalizador para la fortificación obligatoria.
son necesarias en la fortificación voluntaria
Pese a que el sector privado determina la fortificación, los go- Estado de la fortificación del arroz de las redes
biernos tienen todavía un papel relevante en el diseño de nor- de protección social
mas y regulaciones para la fortificación. En el contexto de la Actualmente, cinco países distribuyen arroz fortificado a tra-
fortificación voluntaria, los gobiernos deben ser responsables vés de programas de protección social, que son implementa-
de la supervisión y aplicación para garantizar que los productos dos por el gobierno con su financiación o la de sus donantes. El
fortificados reúnan las condiciones necesarias, sean seguros y programa más exitoso es la inclusión del arroz fortificado en el
que su información esté correctamente indicada en las etique- programa de Desarrollo/Alimentación de Grupos Vulnerables
tas de los productos. Además, el gobierno debe garantizar que del gobierno de Bangladés.
cumplan con los estándares de salud. En menor escala, en el estado de Odisha en India, el Progra-
ma Mundial de Alimentos de la ONU (PMA) apoya la distribu-
Las marcas de arroz fortificado tienden a ser más costosas ción de arroz fortificado con granos fortificados mezclados con
Los molineros tienden a aumentar los precios de venta para granos no fortificados a través del programa de alimentación
62 IDENTIFICANDO MANERAS APROPIADAS DE ENTREGA DEL ARROZ FORTIFICADO
para escuelas del gobierno. De acuerdo con los resultados ob- información sobre el arroz fortificado y la experiencia obtenida
tenidos, el gobierno considerará expandirlo a todo el progra- a través de los programas de protección social pueden aumen-
ma de alimentación escolar. tar el compromiso del gobierno con la fortificación obligatoria
En Indonesia, el programa RASKIN de subsidio de arroz del arroz.
para los más pobres implementó un programa piloto para
fortificar el arroz en un área determinada. Se comisionarion Cumplimiento y regulación
estudios de eficacia y eficiencia sobre los efectos de la distribu- Es poco probable que la fortificación del arroz a través del pro-
ción del arroz. Según los resultados, la fortificación podría am- grama de protección social sea regulada por la legislación. Sin
pliarse a todo el arroz RASKIN. Finalmente, los posibles efec- embargo, requerirá que el implementador del programa esta-
tos de la fortificación del arroz RASKIN dependerán del buen blezca ciertas normas para el arroz fortificado que se distribuya
funcionamiento de las redes de protección social. Se informó en los programas.
que la designación incorrecta de los grupos beneficiarios y la
estigmatización social que surgen de la utilización de arroz de El implementador del programa de protección
baja calidad limitaron la eficacia del programa RASKIN. social suele pagar el costo de la fortificación
Además, antes de que pueda expandirse el piloto deben Las redes de protección social suelen estar financiadas e imple-
solucionarse los desafíos logísticos (como el desarrollo de la mentadas por el gobierno, las organizaciones filantrópicas o el
capacidad interna para producir granos fortificados y las opor- sector privado como parte de sus políticas de responsabilidad
tunidades rentables para mezclar granos fortificados con arroz social. Los molineros y productores de arroz serán convocados
no fortificado). a apoyar el programa. Estos agentes del sector privado tendrán
En Filipinas, la NFA pudo hacer poco por el arroz fortifica- garantizado un mercado con riesgo bajo y un precio que cubra
do subsidiado. Las restricciones en el presupuesto limitaron los costos de producción durante un período de tiempo. Como
la producción y el alcance de los beneficios. Además, la NFA el implementador cubrirá los gastos de fortificación, el consu-
adquirió granos fortificados coloreados para poder diferen- midor no observará un aumento de precio.
ciar el arroz subsidiado del que proviene del mercado priva-
do. Como resultado de esta diferenciación, los granos colo- Los costos de fortificación pueden ser considerables
reados no son tan aceptados por los consumidores. La NFA A pesar de que el costo de fortificación representará un pe-
está considerando continuar con la fortificación de granos no queño porcentaje del programa, comparado con los costos de
coloreados, con la suposición de que el financiamiento esté contratación y distribución, los costos iniciales de capital y los
garantizado. recurrentes serán importantes. Por ejemplo, la NFA de Filipinas
gastó más de US$ 1.5 millones en mezcladoras y granos forti-
Lecciones aprendidas de la fortificación del arroz ficados importados, pero solo pudo fortificar el 15 % del arroz
distribuido a través de las redes de protección social distribuido por el programa entre 2006 y 2013 (un promedio de
Los programas de protección social que incluyen 160.000 toneladas por año). En cambio, en los programas de
la distribución del arroz ofrecen una buena oportunidad fortificación obligatoria, el costo de la fortificación recae sobre
para llevar el arroz fortificado a aquellos que más todos los consumidores y posibles molineros. En los programas
lo necesitan
de protección social, el costo de la fortificación lo absorbe aquel
En situaciones en las cuales la fortificación obligatoria no es que financia el programa.
una opción, las redes de protección social pueden ser la única
forma de entrega que logre un efecto en la salud pública. Sin Las cuestiones logísticas podrían impedir
embargo, ese efecto se limitará a los beneficiarios del programa la implementación
social. Varios de los programas de protección social sufrieron incon-
venientes logísticos como la obtención del arroz para distri-
La fortificación del arroz distribuido a través de redes de bución, la contratación de molineros para mezclar y la obten-
protección social puede actuar como catalizador para la ción de granos fortificados. Existen también desafíos en la
fortificación obligatoria implementación del programa de protección social, como la
La fortificación del arroz en las redes de protección social esta- gestión deficiente y la corrupción, y la focalización ineficaz e
blece las cadenas de suministro para los granos fortificados y ineficiente. Finalmente, puede existir estigmatización por par-
la capacidad para la producción del arroz fortificado. Además, te del consumidor como resultado de su participación en el
brinda oportunidades para establecer la eficacia y la aceptabi- programa, lo cual puede agravarse por la utilización de arroz
lidad del arroz fortificado entre los consumidores internos. La de baja calidad.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA IDENTIFICANDO MANERAS APROPIADAS DE ENTREGA DEL ARROZ FORTIFICADO 63
Conclusiones
La fortificación obligatoria del arroz ofrece la mejor manera de
Un niño come su almuerzo en la escuela, Colombia
llegar a una gran parte de la población y así ser un beneficio
para la salud pública. Las experiencias pasadas muestran que
No es necesaria la comercialización del arroz fortificado la fortificación voluntaria solo alcanzó a una gran cantidad de
en los programas de protección social personas en determinadas circunstancias, como en Colombia,
El arroz fortificado se entrega a la población específica de ma- donde la consolidación de la industria facilitó el acuerdo entre
nera gratuita o a través de un subsidio. El grupo no tiene po- molineros. Los programas de protección social que distribuyen
der de elección sobre la marca o el tipo de arroz que recibe. Sin arroz son una excelente manera de llegar a los grupos vulnera-
embargo, como en todos los programas de fortificación, se debe bles con arroz fortificado y brindan una importante experiencia
informar a los consumidores que el arroz está fortificado para de producción y distribución. Es importante destacar que la eva-
que puedan entender sus beneficios. luación de la viabilidad de la implementación es necesaria para
las opciones obligatorias y sociales del programa. Un análisis
Consideraciones para elegir la mejor opción de entrega del escenario del arroz brindará información básica para eva-
Teniendo en cuenta que el arroz es un alimento básico en Asia y luar la viabilidad.
que existe una alta prevalencia de deficiencia de micronutrien-
tes en la región, el arroz debe considerarse como un elemento Referencias
de fortificación importante. Podrá maximizarse su efecto si el 1. Allen L, de Benoist B, Dary O et al, eds. Guidelines
arroz fortificado alcanza a aquellas poblaciones con deficien- on food fortification with micronutrients. Geneva: World Health
cia de nutrientes. La elección sobre la forma de entrega debería Organization/Food and Agriculture Organization, 2006.
basarse en el análisis de la cadena de producción, en una eva-
luación de la viabilidad de la implementación en el contexto
determinado y en la identificación del grupo elegido.
La fortificación obligatoria resulta la mejor opción para lle-
gar a la mayoría de las personas de manera rentable y sosteni-
ble. Sin embargo, la fortificación obligatoria es solo posible bajo
ciertas condiciones. El mapeo de la cadena de producción del
arroz ayuda a evaluar la viabilidad de la fortificación obligato-
64 ENTENDIENDO LOS FACTORES QUE INFLUYEN LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
figurA 1: Alcance, cobertura y cobertura efectiva prevista y SVA son claramente los programas de intervención con MN
de las plataformas alternativas de entrega de vitamina A*: superiores en dicho escenario y para este grupo de beneficiarios,
Niños urbanos, 6–59 meses de edad, Camerún para los parámetros del programa modelados (alcance y los ni-
veles de fortificación) y para ese grupo de beneficiarios. Sin em-
Alcance Cobertura Cobertura efectiva bargo, ninguno de estos programas llega a un gran porcentaje
100 de niños necesitados, señalando la importancia de seleccionar
90 combinaciones de programas que puedan abordar más comple-
80 tamente las deficiencias de VA.
% de niños que se benefician
70
70
60
La capacidad y el costo de la fortificación
50 del arroz en la República Dominicana
40
Si bien existen varias tecnologías para la fortificación del
30
arroz,11 no todas las tecnologías son apropiadas para todos los
20
países en desarrollo por motivos culturales y económicos. En la
10
República Dominicana, al igual que en muchos países en desa-
0
rrollo, los consumidores en todos los niveles socioeconómicos
Alcance Cobertura efectiva Cobertura Efectiva
(CE): VA (CE): Zn seleccionan cuidadosamente los granos de arroz imperfectos y
* Asume que se añadieron 5,9 mg /kg de vitamina A los desechan, y practican el lavado intensivo del arroz antes de
y 95 mg /kg de zinc a arroz;24 Se asume que el 100% del arroz consumido
se fortifica en este escenario muy optimista.
la cocción.12 Por lo tanto, es probable que la extrusión sea la
tecnología más viable para introducir y preservar los niveles
Fuente: Datos del Proyecto MINIMOD, cálculos de los autores.
adecuados de micronutrientes en el arroz, así como para pre-
servar el color y el sabor del arroz que los consumidores reco-
competidores cercanos, todos con medidas de impacto previsto nocen y demandan.12,13 Normalmente, el alto costo de estable-
por debajo del 50%. Por último, si el objetivo es elevar la ingesta cimiento y de la operación mediante extrusión en caliente es
dietética de VA entre los individuos con baja ingesta a una in- una barrera para la fortificación del arroz.14 Sin embargo, en los
gesta adecuada de VA, por ejemplo, si la cobertura efectiva se se- últimos años la industria privada en la República Dominicana
lecciona como medida de impacto, entonces el aceite fortificado ha invertido en la tecnología de extrusión en caliente a grande
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA ENTENDIENDO LOS FACTORES QUE INFLUYEN LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 67
TablA 1: Capacidad productiva de las empresas con otros tipos de tecnologías de extrusión o fortificación.15 En
extrusoras de arroz en la República Dominicana (TM de granos este documento se clasifica un productor de gran escala de gra-
extruidos/mes) nos de arroz extruidos y otro como productor de mediana escala
del mismo producto. Si bien es algo arbitrario, la distinción de
Mediana escala* Gran escala
escala utilizada se basa en el tipo de tecnología de extrusión
240 1,200
disponible en cada instalación en términos de costo de las ex-
* La capacidad productiva de la tecnología a mediana escala se determina en trusoras y capacidad productiva (ver Tabla 1).
operar cuatro o cinco extrusores, cinco días a la semana, 20 horas por día.
Utilizando el consumo promedio anual de arroz en la Re-
Fuente: Cálculos de los autores basados en los datos provistos por los productores pública Dominicana16 y asumiendo una mezcla 1:200 de mez-
de granos de arroz extruido.
cla fortificada a no fortificada,13,17 las necesidades nacionales
anuales de granos de arroz fortificados son de aproximadamen-
y mediana escala. Esta sección explora los costos estimados de te 2.700 toneladas métricas. La tecnología instalada de extru-
la fortificación del arroz a mediana escala usando la tecnología sión a mediana escala podría satisfacer la demanda nacional en
de extrusión en caliente y varias consideraciones económicas aproximadamente un año; la tecnología instalada a gran escala
para ampliar la fortificación del arroz usando esta tecnología en podría hacerlo en unos tres meses. Las especificaciones de mi-
la República Dominicana. cronutrientes para la República Dominicana aún están siendo
desarrolladas por el Ministerio de Salud Pública en colabora-
ción con USAID, DSM, socios regionales y otras entidades inter-
“Si bien existen varias tecnologías para nacionales de investigación en nutrición.13,18 Una vez estable-
la fortificación del arroz, no todas las cidas dichas especificaciones se producirá la premezcla con MN
para extrusores de granos de arroz y los productores ajustarán
tecnologías son apropiadas para todos las extrusoras para garantizar la producción de granos de arroz
los países en desarrollo por motivos fortificados que serán esencialmente indistinguibles de los gra-
nos comunes por los consumidores.
culturales y económicos” El costo estimado de la fortificación del arroz que se presenta
a continuación se basa en datos de una tecnología de produc-
Dos empresas procesadoras de arroz han comprado e insta- ción de extrusión en caliente de mediana escala. Estos datos se
lado máquinas de extrusión en caliente de doble tornillo, una basan en los costos reales de establecimiento y los costos opera-
tecnología que ha demostrado producir granos reconstituidos cionales esperados. Las Tablas 2 y 3 presentan un resumen de
con “integridad, sabor y textura superiores” en comparación los costos estimados. Los principales factores que influyen en
TablA 2: Costos anuales de la producción de granos fortificados utilizando tecnología de mediana escala
en la República Dominicana (miles US$a)
a
2016 USD
b
Asume un interés anual compuesto del 5.5% y una vida útil de los extrusores y edificios de aproximadamente 10 años, de acuerdo a los estimados de la industria privada
c
La capacidad productiva de la tecnología a mediana escala se determina en operar cuatro o cinco extrusores, cinco días a la semana, 20 horas por día.
d
Se basa en una producción anual de 2,880 MT. Excluye los costos de mezclado para el sector privado y los costos de manejo del programa, así como monitoreo
y evaluación para el sector público.
Fuente: Cálculos de los autores basados en datos proporcionados por el productor de mediana escala durante las visitas a la fábrica.
68 ENTENDIENDO LOS FACTORES QUE INFLUYEN LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
TablA 3: Costo para la industria privada de la producción de granos de arroz fortificado con tecnología
de mediana escala (miles US$a)
a
2016 US$
b
Nuestra estimación de US$ 1.76 /kg de granos de arroz símil fortificados incluye el costo del arroz partido como insumo clave y cae dentro del rango de costos estimado
por otros autores, por ejemplo, las estimaciones de DSM son US$ 4.10 /kg de granos de arroz símil fortificados para una premezcla formulada para tratar la anemia y US$
2.10 /kg de granos de arroz símil fortificados para una premezcla alternativa, y Alavi et al. proporcionan una estimación de US$ 1.19 /kg de granos de arroz símil fortificados.
Fuente: Cálculos de los autores basados en datos proporcionados por el productor de mediana escala durante las visitas a la fábrica.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA ENTENDIENDO LOS FACTORES QUE INFLUYEN LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 69
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L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA EL ROL DEL SECTOR PRIVADO EN LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 71
laciones adecuadas para la fortificación del arroz y establecen den adecuadamente. Estos incluyen: las Directrices de 2009
reglas claras que garanticen el interés público.2 sobre cooperación entre la ONU y el Sector Empresarial;3 las
Debido a que el sector privado es el que lleva a cabo los Directrices del PMA para las asociaciones del sector privado de
procesos de fortificación, su motivación e intereses requieren 2013;4 y, el Documento de consulta de la OMS sobre conflictos
un enfoque especial, incluyendo la necesidad de ver la renta- de interés en la nutrición de 2015.2 El movimiento Scaling Up
bilidad a medida que los mercados se expanden, para realzar Nutrition (SUN, por sus siglas en inglés) alberga una red de
el valor de la marca por medio de una mejoría del contenido negocios que puede ayudar a los actores del sector privado a
nutricional. Así mismo, pueden asegurar que los alimentos participar más activamente en las fases de planificación para la
fortificados contribuyan al desarrollo de una fuerza de trabajo fortificación (véase el Recuadro 1). A través de dicha iniciativa
saludable y productiva en las comunidades de bajos ingresos. se ha elaborado una guía para que las empresas participen más
Esta motivación continua es fundamental para el éxito de los eficazmente en la programación en nutrición.5
esfuerzos nacionales, regionales y globales de fortificación del
arroz – durante todas las fases del ciclo de vida del proyecto –
incluida la fase de “construcción” cuando se realiza el análisis RECUADRO 1: Oportunidades para
situacional del arroz para evaluar la factibilidad de la inter- ayudar a involucrar al sector privado en
vención y seleccionar los puntos para hacer la mezcla, y otros la fortificación del arroz
hitos críticos a lo largo de la cadena de valor de la fortificación
del arroz.
Hoy en día, 57 países participan activamente en el Movi-
miento Scaling Up Nutrition (SUN), una iniciativa que une
a todos los interesados, incluida la empresa privada, en un
“Existen varias herramientas esfuerzo colectivo para mejorar la nutrición.
y lineamientos disponibles para
Los países del SUN en América Latina incluyen Costa Rica,
ayudar a asegurar que las asociaciones El Salvador, Guatemala, Haití y Perú. En Colombia, la Red de
público-privadas en pro de Negocios SUN (SBN, por sus siglas en inglés) se ha asociado
con una alianza nacional de negocios para la nutrición.
la nutrición y la fortificación se
instituyan con éxito” El papel de SBN es involucrar a las empresas, en asociación
con el sector público y la sociedad civil, para crear valor
para la sociedad mediante el desarrollo y la producción de
Existen varias herramientas y lineamientos disponibles productos nutritivos, fomentando la demanda de alimentos
para ayudar a asegurar que las asociaciones público-privadas más nutritivos, al igual que suministrando productos nutriti-
en pro de la nutrición y la fortificación se instituyan con éxito a vos y servicios a escala para las poblaciones vulnerables.
fin de que ambos, los intereses públicos y los privados, se abor-
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA EL ROL DEL SECTOR PRIVADO EN LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 73
RECUADRO 2: El rol del sector privado de fortificación dentro del precio fijado por el Gobierno.
en el exitoso programa de fortificación obligatoria El costo adicional total del arroz fortificado es menos del
del arroz en Costa Rica 1% del costo del arroz no fortificado.
El programa costarricense de fortificación del arroz El éxito de este programa obligatorio de fortificación
obligatoria ha contribuido a reducir la deficiencia de folato del arroz se debió al fuerte compromiso del sector privado
y la anemia en la población en general y ha llevado a desde el principio, en asociación con el gobierno.
reducciones de los defectos congénitos del tubo neural y en
la tasa de mortalidad infantil. La garantía de calidad o el control interno del arroz
fortificado con los niveles indicados son responsabilidad de
Antecedentes los industriales y de los importadores de arroz. Referente
El arroz para los costarricenses representa el principal a la importación, el importador deberá demostrar con un
producto de la canasta básica. Este se consume en los tres certificado que el producto cumple con las medidas. La
tiempos de comida, por lo tanto, su consumo per cápita fiscalización y el monitoreo de la calidad de la fortificación
(52 kg) es uno de los más altos de la región. La encuesta de del arroz es responsabilidad del Ministerio de Salud en el
Nutrición de 1996 demostró la necesidad de más vitaminas punto final de venta al consumidor.
y minerales esenciales en la dieta nacional. Cabe señalar
que es el único producto que está regulado en su precio por
parte del Gobierno. Además, dado que la industria del arroz Modelo de suministro 2:
está consolidada, la fortificación obligatoria del arroz era Fortificación voluntaria, impulsada por el
más viable. mercado y el sector privado
Dadas las barreras a la fortificación obligatoria en muchos con-
Debido a la importancia que posee el arroz en la canasta textos, a menudo se considera el abordaje voluntario impulsa-
básica de los costarricenses, el Ministerio de Salud do por el mercado. La fortificación es considerada voluntaria
consideró de vital importancia que el arroz fuese fortificado. cuando la industria de alimentos tiene la opción de fortificar
Mediante el Decreto Ejecutivo Nº 30031-S, la Presidencia sus productos. Se trata de un enfoque orientado a las empresas,
de la República y el Ministerio de Salud oficializaron el comercializando el arroz como un producto de “valor añadido”.
“Reglamento para el Enriquecimiento del Arroz”, el cual se En países como Colombia,11 Brasil (Recuadro 3 12,13,14 ) la Re-
utiliza para consumo humano directo en el país, sea éste de pública Dominicana, los grandes molineros de arroz han sido
producción nacional, donado e importado. En el Capítulo pioneros en la fortificación del arroz lanzando voluntariamen-
II, artículo 3 de dicho reglamento, se establece que “el te productos de arroz fortificado que mejoran la percepción de
arroz pilado que se utilice para el consumo humano directo los consumidores de la marca y ofrecen una mejor nutrición
deberá estar fortificado con ácido fólico, vitaminas del a los consumidores. Sin embargo, debido a que por lo general
complejo B, vitamina E, selenio y zinc. la demanda del consumidor se desarrolla lentamente, espe-
cialmente entre las poblaciones más pobres, el potencial para
La implementación del decreto se realizó por pasos. llevarlo a escala e influir en la salud de una población de micro-
El Ministerio contaba con experiencias previas de fortifi- nutrientes puede ser limitado. Los enfoques voluntarios para la
cación de otros alimentos y estaba constituida la Comisión fortificación del arroz aún no han sido evaluados sistemática-
Nacional de Micronutrientes (CONAMI). La CONAMI en con- mente para ver si se ha logrado el impacto en la salud.
junto con la Asociación Nacional de Industriales del Sector En un enfoque comercial voluntario, un ecosistema que
Arrocero (ANINSA), que agremia el 100% de los molinos de comprende una marca de categoría, un sistema de gestión de
arroz del país, realizaron múltiples reuniones para imple- la calidad, marketing social y un marco de gobernanza son ins-
mentar la fortificación. Los estudios técnicos y científicos se trumentales. Estos pueden ayudar a construir la confianza en
trabajaron desde el principio del proyecto entre el sector el posicionamiento y en transmitir un mensaje de consumo del
público y el privado, lo cual facilitó la toma de decisiones arroz fortificado como beneficioso para la salud de la familia,
en la implementación. Se evaluaron varias técnicas de establecer una identificación única, común y visible para todos
incorporar los micronutrientes al grano y, tiempo después los productos de arroz fortificados representados por un logoti-
de su ejecución y puesta en marcha, se reconoció el costo po y aumentar el valor percibido de la categoría, justificándose
así un precio más alto por el producto fortificado.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA EL ROL DEL SECTOR PRIVADO EN LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 75
RECUADRO 3: Un acercamiento voluntario para que otros actores se incorporen al mercado puede
a la fortificación en Brasil generar una situación de monopolio y limitar el crecimiento
del mercado. El diseño del programa debe basarse en un cui-
El ‘arroz mágico’, un apodo dado por Mauricio de Sousa dadoso análisis microeconómico y evitar, en la medida de
(creador de Mônica, el querido personaje nacional de lo posible, crear condiciones que no favorezcan un mercado
dibujos animados en Brasil) o arroz vitaminado está fortifica- competitivo.
do con vitamina B1, ácido fólico, hierro y zinc. Resultado de
más de 15 años de trabajo, el arroz vitaminado utiliza En Brasil, el arroz fortificado se ha convertido en
la tecnología desarrollada por PATH, financiada por la mercado nicho que representa un porcentaje de un dígito
Fundación Bill & Melinda Gates, e introducida al mercado del mercado global del arroz, y podría demostrar que un
en asociación con GAIN a través de un proyecto piloto modelo puramente comercial para el arroz fortificado no
que finalizó en 2015. es suficiente para alcanzar una escala significativa y un
impacto significativo en la salud pública. La participación
El objetivo del proyecto era desarrollar un modelo del sector público es esencial para eliminar los riesgos que
replicable para ampliar la fortificación del arroz a través de supone la fortificación y nivelar el campo de juego en los
canales comerciales. El proyecto demostró la viabilidad programas de fortificación del arroz.
de introducir un producto de arroz fortificado en el mercado
a través de un modelo integrado verticalmente y alcanzó
a más de 2,5 millones de consumidores, de los cuales Modelo de suministro 3:
460.000 eran consumidores recurrentes. A continuación, Redes de protección social y el sector privado
se analizan algunas de las lecciones aprendidas. La distribución del arroz fortificado a través de las redes de
protección social se considera una opción de entrega efectiva,
Tomando en cuenta las barreras a la fortificación obligatoria especialmente si no es factible la fortificación nacional obliga-
del arroz, el modelo piloto se basó en la integración vertical, toria debido a un panorama de la industria arrocera fragmen-
lo que permitió a algunos productores abastecedores de tado, cuando existe un gran número de molineros y cuando los
granos de arroz suministrar granos fortificados a numerosos hacedores de política pública quieren asegurar que las pobla-
molineros de arroz. Los molineros, quienes por lo general ciones más vulnerables están cubiertas. Además, los programas
son dueños de las marcas de arroz en Brasil, podían así de redes de protección social pueden tener un efecto catalizador
mezclar los granos con arroz no fortificado para comerciali- en los esfuerzos voluntarios de fortificación del arroz. La deci-
zar arroz fortificado a los consumidores. sión de fortalecer el arroz distribuido a través de programas de
protección social a menudo se hace a través de una decisión de
La investigación formativa demostró que el precio no era política por parte del gobierno, organismos de la ONU, organi-
una barrera importante para la comercialización del arroz zaciones no gubernamentales (ONG) o entidades privadas, que
y que debía ser impulsada por las fuerzas del mercado. normalmente también asumen los costos de la fortificación sin
El precio fortificado era en promedio un 40% menos caro o con el apoyo limitado de donantes.
que el precio medio del arroz no fortificado, cuando se
incluían marcas premium. La investigación demostró que
sólo 1 de cada 5 consumidores de arroz considera el precio RECUADRO 4: Arroz fortificado para las redes
como factor de toma de decisión. Este ambiente permitió de protección social en la India y el sector privado
que los costos modestamente más altos como resultado
de la fortificación fueran absorbidos por los productores,
En la India, la distribución pública de arroz fortificado ha
los minoristas y los consumidores. demostrado tener un impacto en la salud.
Aunque el modelo de negocio probado en este piloto Luego de que se llevaran a cabo dos estudios de eficacia
ofreció una propuesta de negocio atractiva al proveedor del sobre el impacto del arroz fortificado en el estado de micro-
grano fortificado, también creó conflictos de interés para nutrientes de escolares a nivel local, un consorcio de orga-
otros molineros que se sentían desalentados al tener que nizaciones llevó a cabo el primer ensayo de fortificación del
comprarle a un competidor. La creación de desincentivos arroz a gran escala en el estado de Odisha, India. Un estudio
76 EL ROL DEL SECTOR PRIVADO EN LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
de referencia entre los escolares de 6 a 14 años en el distrito intermitente de los granos fortificados, por lotes, en lugar de
de Gajapati (un distrito en el sur de Odisha) encontró que el una mezcla continua en los molinos pequeños y medianos
19% de los niños incluidos en la muestra tenían retraso en resultó en un trabajo más intensivo y propenso a problemas
el crecimiento (baja estatura para la edad) y un 14,5% esta- de calidad debido a tiempos de mezclado más cortos a causa
ba emaciado. La encuesta reveló que el 73% de los niños y el de limitaciones de capacidad; y 3) fue un éxito el combinar
74% de las niñas de la escuela primaria sufrían de anemia. el programa con educación nutricional, incluyendo el desa-
rrollo de bolsas de arroz con mensajes sobre la importancia
Después de la encuesta inicial, el ensayo de fortificación del de una buena nutrición que podían ser utilizados como un
arroz comenzó en abril de 2013 para evaluar el impacto de cartel en la escuela o como un contenedor para sembrar
brindar un almuerzo con arroz fortificado con hierro como verduras y promover una dieta más diversa.
parte del programa de alimentación escolar en Gajapati (dis-
trito del sur de Odisha) seis veces a la semana. El objetivo Como consecuencia de los resultados positivos del ensayo,
principal del proyecto era reducir el nivel de anemia en los el gobierno del estado de Odisha decidió ampliar la fortifi-
escolares (un 5%) y establecer una cadena de suministro cación del arroz a otros distritos e introducir la fortificación
sostenible para fortificar el arroz que se ofrece a través del con múltiples micronutrientes. Además, otros estados inicia-
programa de alimentación en Odisha, y llevarlo a escala en ron proyectos para implementar arroz fortificado a través
todo el estado. de los programas de distribución social de alimentos (MDM,
por sus siglas en inglés).
El programa piloto distribuyó arroz fortificado con hierro a
más de 100.000 niños. Parte del programa estaba dedicado En octubre de 2016, la Autoridad de Seguridad Alimentaria
a la comunicación sobre la importancia de una dieta diversa, y Normas de la India (FSSAI, por sus siglas en inglés)
un buen saneamiento y una nutrición saludable (audiencia: publicó por primera vez directrices para la fortificación del
escolares, maestros, consejo de administración escolar). El arroz en la India. Además, durante el 2016 más productores
proyecto fue ejecutado por un consorcio de partes interesa- de granos de arroz fortificado han expresado interés en
das, entre ellas el Gobierno de Odisha, el PMA, PEACE (ONG distribuirlos para los programas de protección social, al
local), SGS (laboratorio), la unidad de procesamiento de igual que en el lanzamiento de marcas comerciales de arroz
arroz SSRM y la agencia de evaluación SAMBODHI. El PMA fortificado. Todos estos desarrollos prometedores tomaron
prestó apoyo técnico, administró la cadena de suministro lugar después de la introducción exitosa del arroz fortificado
de arroz fortificado y desempeñó un papel de coordinación a través del programa MDM.
con las numerosas contrapartes. La producción nacional de
granos de arroz fortificados fue un pre-requisito impuesto
por el gobierno para avanzar con el programa. La ONG PATH
fue instrumental en asegurar que los granos fortificados
“La distribución del arroz fortificado
extruidos fueran producidos en el país transfiriendo conoci- a través de las redes de protección
miento sobre la tecnología y brindando entrenamiento a un
molino grande en Andhra Pradesh para que produjeran los
social se considera una opción de
granos fortificados. entrega efectiva”
Los objetivos establecidos fueron cumplidos, ya que el
programa general de fortificación del arroz logró reducir la Conclusión
prevalencia de la anemia en un 20%, de los cuales el 6% Si bien la fortificación del arroz ha sido una herramienta de sa-
podría atribuirse al consumo de arroz fortificado como parte lud pública subutilizada hasta la fecha, los éxitos que se descri-
de la comida de medio día. ben en este documento proporcionan aprendizajes importantes
sobre cómo asegurar que el rol y los intereses del sector privado
Algunos de los retos y aprendizajes incluyeron: 1) al se aprovechen adecuadamente con respecto a diversos modelos
principio sólo había un productor de grano fortificado que de suministro, y que los costos sean debidamente absorbidos.
se encontraba en otro estado - causando dificultades y casi La fortificación obligatoria del arroz es la mejor estrategia para
fallas en la línea de producción y distribución; 2) la mezcla alcanzar una alta cobertura de la población, pero requiere de
fuertes alianzas público privadas y de compromisos sostenidos.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA EL ROL DEL SECTOR PRIVADO EN LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 77
Referencias
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Food and Agriculture Organization of the United Nations:
Geneva, 2006.
2. World Health Organization. Addressing and managing
conflicts of interest in the planning and delivery of nutrition
programs at country level. Report of a technical consultation
convened in Geneva, Switzerland, on 8–9 October 2015.
ISBN 978 92 4 151053 0.
78 ABORDANDO MITOS Y CONCEPTOS ERRADOS SOBRE LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
Abordando mitos y
conceptos erróneos sobre
la fortificación del arroz
Helena Pachón
Iniciativa de Fortificación de Alimentos, EUA integral, el arroz blanco sancochado o el arroz
blanco no fortificado.
Cecilia Fabrizio, Jennifer Rosenzweig ∙ Cualquier variedad de arroz puede ser fortificada,
Oficina Regional del Programa Mundial con la excepción de algunas pocas variedades.
de Alimentos para Asia ∙ Las tecnologías actuales pueden producir arroz fortificado
con el mismo aspecto, olor y sabor que el arroz no
fortificado, manteniendo sus nutrientes en los diferentes
Mensajes Clave métodos de cocción.
∙ El arroz fortificado es seguro.
∙ En lugares donde el arroz es el alimento de consumo
básico y las deficiencias de micronutrientes están muy Introducción
extendidas, la fortificación del arroz posee un gran Existen preocupaciones, mitos e ideas equivocadas en relación
potencial para contribuir significativamente a la reduc- con los beneficios y la seguridad de la fortificación del arroz.
ción de las deficiencias de micronutrientes. Sin embargo, Este trabajo aborda estas preocupaciones a través de la presen-
la fortificación del arroz por sí sola no puede erradicar tación de información desde una experiencia global, y a partir
todas las deficiencias de micronutrientes de una de evidencia científica basada en el arroz y en la harina de trigo
población, por ejemplo en el caso de los grupos más fortificados.
vulnerables, como las embarazadas, las lactantes y
los niños preescolares, donde se requieren otras inter-
venciones adicionales como la suplementación.
“L a fortificación de alimentos
∙ Las deficiencias de micronutrientes afectan a todos los y condimentos de consumo básico
grupos socioeconómicos. Por esta razón, en los lugares
en donde estas deficiencias están muy extendidas, el
ha sido utilizada de forma segura
arroz fortificado beneficia a todos los estratos socio- durante más de 90 años para ayudar
económicos de la sociedad.
∙ La fortificación del arroz y la biofortificación difieren
a reducir las deficiencias en
en cuanto al tipo, número y niveles de micronutrientes en micronutrientes”
el arroz, y en cuanto al momento en que se incluyen en
éste. En la biofortificación, el proceso de fortificar se pro-
duce durante la fase de producción del cultivo o antes de ¿Es el arroz fortificado seguro?
la cosecha. Sin embargo, en el caso de la fortificación del La fortificación de alimentos y condimentos de consumo bá-
arroz, el proceso se realiza después de la cosecha y pueden sico – una estrategia utilizada durante más de 90 años – ha
añadirse más tipos y niveles más altos de micronutrientes. sido probada como una estrategia segura y efectiva que con-
∙ Cuando se fortifica con múltiples micronutrientes, el tribuye significativamente a la reducción de las deficiencias
arroz blanco es más rico en micronutrientes que el arroz de micronutrientes. Al igual que en otros alimentos fortifica-
dos, el arroz fortificado es seguro, ya que el tipo y los niveles
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA ABORDANDO MITOS Y CONCEPTOS ERRADOS SOBRE LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 79
Porcentaje
ningún grupo de edad y género, esto hace referencia al 11.9 11.9 11.2
nivel máximo de ingesta tolerable (UL, por sus siglas 10
en inglés). Los niveles de fortificación son elegidos para
que el UL no sea excedido cuando se consuma un 5
alimento fortificado.
∙ El nivel de micronutrientes específicos consumidos 0
normalmente por la población objetivo. 1 ( NSE más bajo) 2 3 4 5 (NSE más alto)
Esta información es utilizada para calcular la brecha entre los tes para cumplir los requerimientos de micronutrientes.
micronutrientes consumidos y los micronutrientes requeridos En estos casos la ingesta de arroz fortificado sigue siendo
para grupos específicos. Esta brecha se usa para determinar qué segura, y se recomienda incluso que estos consuman
micronutrientes, y cuántos de los micronutrientes específicos, alimentos fortificados. Esto es porque sus requerimientos
serán incorporados en el arroz fortificado. En otras palabras, el en micronutrientes son mucho más elevados que los de
nivel de micronutrientes añadido se calcula de modo que la can- la población promedio. Lo mismo ocurre para los niños
tidad de micronutrientes añadida al arroz fortificado sea aque- pequeños que también tienen que tomar vitamina A u otros
lla que proporcione una ingesta adecuada al mayor número de suplementos de micronutrientes. Además, los niños peque-
individuos de la población objetivo, sin sobrepasar el UL para ños consumen menores cantidades de arroz que los adultos
aquellos que consumen grandes cantidades de arroz fortificado. sanos de la misma población. Esto, combinado con sus
El arroz fortificado cubre la brecha existente de micronutrientes necesidades relativamente altas de micronutrientes, indica
sin promover el exceso de ingesta. que los niños pequeños no presentan riesgo de exceder el
UL por consumir arroz fortificado.
Es importante recordar que:
∙ El tipo y niveles de micronutrientes se seleccionan de ¿Puede el arroz fortificado eliminar las deficiencias de
modo que, incluso los grupos que consumen grandes micronutrientes de toda la población?
cantidades de arroz fortificado, no sobrepasen el UL. Por El arroz fortificado puede contribuir significativamente a la re-
ejemplo, en algunos países, el adulto medio consume un ducción de las deficiencias de micronutrientes. Por razones de
promedio de 400 a 500 g de arroz al día. En este caso, los seguridad, los niveles de fortificación se calculan de modo que
micronutrientes se añaden a un nivel que asegura que la la cantidad de micronutrientes añadida al arroz fortificado sea
ingesta de micronutrientes a través de todas las fuentes aquella que proporcione una ingesta adecuada al mayor núme-
alimentarias esté por debajo del UL, tomando en considera- ro de individuos de la población objetivo sin causar una inges-
ción un consumo diario de arroz de 400–500 g. Por lo ta excesiva. Por sí mismo, este nivel de fortificación no puede
tanto, el nivel de micronutrientes consumidos a través del eliminar todas las deficiencias de micronutrientes de todos los
arroz fortificado será seguro. segmentos de población. Por ejemplo, una mujer embarazada
∙ Algunos grupos de población presentan necesidades más presenta necesidades de micronutrientes significativamen-
altas de micronutrientes que otros. Por ejemplo, se reco- te más altas que las de un hombre de la misma edad. El arroz
mienda que las mujeres embarazadas tomen una cantidad fortificado puede contribuir a satisfacer las necesidades de las
de hierro/folato o suplementos múltiples de micronutrien- mujeres embarazadas, pero no las satisface por completo. Los
80 ABORDANDO MITOS Y CONCEPTOS ERRADOS SOBRE LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
figurA 2: Perfil de micronutrientes seleccionados en el arroz blanco no fortificado, arroz integral, arroz blanco parbolizado y
arroz blanco fortificado.4
Arroz blanco Arroz integral Arroz blanco parbolizado Arroz blanco fortificado
5
mg/100g arroz
0
Hierro Zinc Tiamina Niacina Vitamina B6
niños menores de dos años de edad también tienen necesida- (ver Figura 1), la deficiencia de hierro fue más alta entre las mu-
des relativamente altas de micronutrientes para mantener su jeres del grupo socioeconómico más bajo (20,7 %). Sin embar-
crecimiento y desarrollo. Sin embargo, ellos solo pueden con- go, al menos el 11 % de las mujeres pertenecientes a los grupos
sumir pequeñas cantidades de alimentos en comparación con socioeconómicos más altos presentaban también deficiencias de
los adultos, de tal modo que los micronutrientes añadidos pro- hierro, incluso en el grupo con salarios más altos.1 Esto demues-
cedentes del consumo de arroz fortificado no serán suficientes tra que el arroz fortificado con hierro puede beneficiar a todos los
para satisfacer la brecha en la ingesta de micronutrientes. Por estratos de la sociedad que consuman arroz.
esta razón, son necesarias otras intervenciones simultáneas
de micronutrientes para aumentar la ingesta de éstos en esta ¿Cuál es la diferencia entre el arroz fortificado
población objetivo. Para más información sobre cómo abordar y el biofortificado?
los objetivos nutricionales, véase la contribución de Rudert et El arroz fortificado y el biofortificado tienen dos formas dife-
al (pags. 84). rentes para desarrollar un arroz más nutritivo. Estas dos in-
tervenciones pueden coexistir de forma segura como parte de
una estrategia para mejorar la salud a través de la ingesta de
“El arroz fortificado puede ayudar micronutrientes. La diferencia subyace en cuándo y cómo los
a satisfacer las necesidades de las micronutrientes son añadidos, y el tipo, número y nivel de mi-
cronutrientes que pueden ser incorporados.2
mujeres embarazadas y los niños En el arroz fortificado, los micronutrientes se añaden des-
pequeños, pero no las satisface por pués de que el arroz ha sido recolectado. Por ejemplo: ácido
fólico, niacina, vitaminas B1 (tiamina), B6 (piridoxina), B12
completo” (cobalamina), A (retinol), D (colecalciferol), E (tocoferol), hie-
rro, zinc y selenio pueden ser añadidos sin modificar la apa-
¿El arroz fortificado es solo necesario para grupos riencia del arroz. Para más información, véase la contribución
de población con bajos ingresos? de Pee et al (págs. 29), Montgomery et al (págs. 46) y Rudert et
Aunque las deficiencias en micronutrientes son más prevalen- al (págs. 84).
tes entre los grupos socioeconómicos más bajos, las deficiencias Por otro lado, la biofortificación aumenta el contenido de
también ocurren en grupos con ingresos más altos, poblaciones micronutrientes a través de la reproducción o modificación ge-
urbanas, individuos con sobrepeso u obesos, e individuos con nética. Por esta razón, ocurre antes de la recolección del cultivo.
una educación superior a la media. Por ejemplo, como se ha vis- Un ejemplo de la biofortificación es el arroz dorado o Golden
to en la Encuesta Nacional de Nutrición de 2000 en vietnamitas Rice, que refleja el contenido de β-caroteno.3 En la práctica se
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA ABORDANDO MITOS Y CONCEPTOS ERRADOS SOBRE LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 81
aumenta un número limitado de nutrientes en variedades de La Figura 2 muestra el contenido en micronutrientes (hie-
arroz biofortificado en un momento determinado, y se están rro, zinc, tiamina, niacina y vitamina B6) para el arroz no fortifi-
realizando investigaciones para aumentar sus niveles. Actual- cado (blanco, integral y sancochado) y el arroz blanco fortifica-
mente, solo están disponibles los cultivos de arroz no modifi- do.4 El contenido de folato, vitamina A y B12 no son mostrados
cado genéticamente con niveles altos de hierro y zinc. El arroz porque están ausentes o son insignificantes en todos los tipos
dorado modificado genéticamente con provitamina A todavía de arroz excepto en el arroz fortificado. Los datos demuestran
no ha sido lanzado al mercado. tres puntos:
Además, los niveles de nutrientes que son añadidos al arroz
pueden ser mucho más altos con la fortificación que con la bio- 1. La molienda elimina muchos de los nutrientes
fortificación. Sin embargo, una vez que una variedad de arroz naturales del arroz.
es biofortificado, no se necesita de ningún proceso adicional 2. El sancochado retiene un nivel significativo de algunos
después de la cosecha para aumentar los niveles de nutrientes. nutrientes.
3. El arroz integral es relativamente rico en hierro y zinc
¿Por qué no se fomenta el consumo de arroz integral o en comparación con el arroz blanco no fortificado.
parboleado en lugar del arroz blanco fortificado?
El arroz blanco es ampliamente consumido y, cuando se forti- Mientras el contenido de nutrientes del arroz fortificado depen-
fica, puede tener un contenido significativamente más alto en de de las cantidades añadidas, éste tiene el potencial de ofrecer
micronutrientes que el arroz no fortificado, incluyendo el arroz cantidades mucho mayores de nutrientes clave como el hierro,
integral y el parboleado. Por esta razón, existe un potencial zinc, vitamina A, ácido fólico y vitamina B12.
mayor para mejorar la salud a través de la ingesta de micronu- De igual forma, el consumo de arroz blanco fortificado no
trientes por medio de la fortificación del arroz blanco que con el requiere un cambio en los comportamientos alimentarios
aumento del consumo de arroz integral o parboleado. existentes, en comparación con el incremento del consumo de
arroz integral y de arroz sancochado. A pesar que no se cuenta
con suficientes datos sobre el consumo de arroz integral en
“Cuando está fortificado, el arroz países asiáticos, la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud de
20095 encontró que, después de años de promoción, solo el
blanco puede tener un contenido 2,9 % de los niños y el 7,7 % de los adultos consumían el nivel
significativamente más alto en diario recomendado de al menos tres granos enteros equiva-
lentes a una onza (incluyendo el arroz integral). Este hallazgo
micronutrientes que el arroz no está en línea con las lecciones aprendidas de la fortificación
fortificado integral o parboleado” de la harina de trigo y la sal, que detallan que las estrategias
de comunicación por sí solas sin actividades adicionales de
figurA 3: Puntuaciones de aceptabilidad para el arroz fortificado y no fortificado en niños hindúes de entre 8–11 años
Mejor
aceptabilidad Arroz fortificado Arroz no fortificado
5
Puntuación de aceptabilidad
0
Peor
aceptabilidad Apariencia Color Textura Olor Sabor En general
Adaptado de6
82 ABORDANDO MITOS Y CONCEPTOS ERRADOS SOBRE LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
cambio de comportamiento no aumentan el consumo de un de fortificación, el tipo y los niveles de nutrientes añadidos, y
alimento específico. las preferencias del consumidor. Todas las tecnologías para
la fortificación del arroz tienen como objetivo hacer un arroz
fortificado con el mismo aspecto, olor y sabor que el arroz no
“L a aceptabilidad del arroz fortificado fortificado.
depende de la tecnología de Un estudio reciente comparó el arroz fortificado a través de
la tecnología de extrusión con el arroz no fortificado. Se evalua-
fortificación, el tipo y los niveles de ron los seis parámetros sensoriales (apariencia, color, textura,
nutrientes, y las preferencias olor, sabor y, sobre todo, aceptabilidad) entre niños hindúes de
entre 8–11 años de edad.6 Los niños clasificaron cada muestra
del consumidor” con una puntuación de 1 (peor) a 5 (mejor). Como se muestra
en la Figura 3, el arroz fortificado y el no fortificado fueron esta-
¿Pueden fortificarse todas las variedades de arroz? dísticamente indistinguibles en los seis parámetros sensoriales
La tecnología para la fortificación del arroz por espolvoreado evaluados. Además, todos los parámetros sensoriales fueron
puede ser utilizada para fortificar todas las variedades de arroz, evaluados por encima de 4 puntos, sugiriendo una fuerte acep-
aunque no está recomendada. En el caso del recubrimiento y tabilidad para ambos tipos de arroz. Este estudio muestra que
la extrusión, se puede fortificar la mayoría de las variedades los consumidores perciben el arroz fortificado en cuanto a sabor,
de arroz, sin embargo, esto requeriría la adaptación de granos apariencia y olor de forma similar al arroz no fortificado.
fortificados. Para más información sobre la tecnología de forti-
ficación del arroz, véase la contribución de Montgomery et al ¿Permanecen todos los nutrientes del arroz fortificado
(págs. 46). después de su preparación y cocción?
Cuando se produce arroz fortificado utilizando tecnologías de
¿El arroz fortificado es aceptado por los consumidores? recubrimiento resistentes a la extrusión o el enjuagado, el arroz
La aceptabilidad del arroz fortificado depende de la tecnología retiene los nutrientes con diversas formas de preparación y coc-
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA ABORDANDO MITOS Y CONCEPTOS ERRADOS SOBRE LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 83
ción, incluso cuando se lava y se cocina con mucha agua que Referencias
es eliminada posteriormente. Los micronutrientes de los granos 1. Laillou A, Van Pham T, Tran NT et al. Micronutrient deficits
fortificados producidos con la tecnología de extrusión se dis- are still public health issues among women and young children
tribuyen uniformemente por todo el grano. Por esta razón, los in Vietnam. PLoS One 2012;7(4): e34906. doi:10.1371/journal.
nutrientes se encuentran sellados y retenidos apropiadamente pone.0034906.
durante la preparación y la cocción. Sin embargo, cuando el 2. Nestel P, Bouis HE, Meenakshi JV et al. Biofortification of staple
arroz fortificado se produce por espolvoreado o revestimiento food crops. J Nutr 2006;136:1064–7.
que no es resistente al enjuague, los nutrientes se perderán al 3. Ye X, Al-Babili S, Klöti A et al. Engineering the provitamin A
lavar el arroz antes del proceso de cocción. Actualmente se es- (β-carotene) biosynthetic pathway into (carotenoid-free)
tán llevando más investigaciones en esta área para identificar rice endosperm. Science 2000;287:303–5.
las potenciales diferencias de la retención de nutrientes entre 4. USDA Nutrient Data Bank. http://ndb.nal.usda.gov/ndb/search/list
los diferentes métodos de preparación y cocción del arroz y las 5. Reicks M, Jonnalagadda S, Albertson AM et al.
tecnologías de fortificación. Total dietary fiber intakes in the US population are related
to whole grain consumption: results from the National Health
and Nutrition Examination Survey 2009 to 2010. Nutr Res
“El arroz fortificado es aceptable 2014;34(3):226–234.
para los consumidores, ya que 6. Radhika MS, Nair KM, Kumar RH et al. Micronized ferric
pyrophosphate supplied through extruded rice kernels improves
prácticamente cualquier variedad de body iron stores in children: a double-blind, randomized,
arroz puede ser fortificada” placebo-controlled midday meal feeding trial in Indian school-
children. Am J Clin Nutr 2011;94(5):1202–10.
Conclusión
El arroz fortificado es seguro y aceptable para los consumido-
res. Los niveles de fortificación se establecen de tal manera que
los micronutrientes adicionales consumidos proporcionen una
ingesta adecuada en el mayor número de individuos de la po-
blación objetivo sin causar una ingesta excesiva. El arroz fortifi-
cado es aceptable para los consumidores, ya que prácticamente
cualquier variedad de arroz puede ser fortificada y, si es adecua-
damente producida, contará con el mismo aspecto, olor y sabor
que el arroz no fortificado. El arroz blanco fortificado podría ser
mejor aceptado por los consumidores que los tipos de arroz con
menor contenido de micronutrientes, como el arroz no fortifica-
do, el arroz integral o el arroz parboleado. Sin embargo, el arroz
fortificado debe ser parte de una estrategia de intervenciones de
micronutrientes a gran escala, ya que los grupos de poblaciona-
les con mayores necesidades de nutrientes, como las embaraza-
das y lactantes, requieren de más intervenciones para satisfacer
las necesidades de micronutrientes.
84 VINCULANDO LAS OPORTUNIDADES DE FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
Vinculando las
oportunidades para la
fortificación del arroz con
objetivos nutricionales
Christiane Rudert
UNICEF Oficina Regional de Asia Oriental y Pacífico de la fortificación del arroz (por ejemplo, los niños
en edad escolar y los grupos socioeconómicos más
Cecilia Fabrizio, Katrien Ghoos vulnerables). Es probable que la fortificación voluntaria
Oficina Regional del Programa Mundial beneficie únicamente a los grupos de ingresos más altos.
de Alimentos para Asia ∙ L a fortificación del arroz no puede satisfacer por si
sola la brecha de micronutrientes para grupos con
altas necesidades de micronutrientes, como las mujeres
embarazadas y lactantes, y los niños pequeños.
Mensajes Claves Siguen siendo necesarias intervenciones adicionales
∙ Vincular la fortificación del arroz con los objetivos focalizadas, como la suplementación con hierro/folato
nutricionales requiere la identificación de los grupos para mujeres embarazadas o micronutrientes en
poblacionales que se encuentran en mayor riesgo de sufrir polvo para niños pequeños.
deficiencias de micronutrientes, los grupos que más se
pueden beneficiar de la fortificación del arroz y los meca-
nismos de entrega más apropiados para llegar a los grupos
Introducción
más vulnerables.
Para determinar el impacto potencial y los mecanismos de dis-
∙ Con el fin de determinar el potencial impacto de la
tribución más apropiados para el arroz fortificado, es esencial
fortificación del arroz, se debe evaluar el estado de micro-
comprender el estado de micronutrientes de la población, los
nutrientes de la población a través de la combinación de
programas existentes para mejorar el estado de micronutrientes
información disponible sobre el estado bioquímico de las
y la medida en que la fortificación del arroz puede contribuir al
deficiencias de micronutrientes, de ingesta de nutrientes y
consumo de micronutrientes de la población. Este artículo des-
otros indicadores indirectos. No es necesario llevar a cabo
cribe el proceso para identificar el tipo y el nivel de deficiencias
estudios adicionales sobre micronutrientes cuando se
de micronutrientes en la población y los grupos más afectados.
disponga de esta información.
También explica cómo las diferentes opciones de mecanismos
∙ L a fortificación obligatoria tiene el mayor potencial de
de entrega pueden ayudar a mejorar el estado de micronutrien-
tener impacto en la salud pública cuando alcanza a toda la
tes entre los grupos vulnerables identificados.
población. Cuando esto no es factible, una alternativa es la
distribución de arroz fortificado a través de programas de
La importancia de entender el
redes de protección social.
estado de micronutrientes
∙ L as redes de protección social suelen dirigirse a los
El primer paso para estimar el potencial del arroz fortificado para
mismos grupos de población que más pueden beneficiarse
mejorar el estado de micronutrientes de la población es un análi-
sis de la situación de las deficiencias de micronutrientes.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA VINCULANDO LAS OPORTUNIDADES DE FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 85
80 75
Porcentaje de la población objetivo
70 71
70
59
60 56 55 53 55
50 45 44 46 48 47 47 48 46 44 45
43
40 35
33 33
30
30 27
22 21
20 15
10
0
Sri Lanka Filipinas Indonesia Nepal Bangladés Laos Camboya India Birmania
Como cualquier alimentado fortificado, la fortificación del 1) Encuestas de deficiencia de micronutrientes, utilizando
arroz tiene como objetivo aumentar la ingesta de determina- datos bioquímicos
dos micronutrientes en una población con el fin de reducir la 2) Ingesta de micronutrientes de la dieta, información
proporción de población en riesgo de presentar deficiencias de obtenida generalmente a través de encuestas de 24 horas
micronutrientes. Al mismo tiempo, es necesario establecer ni- 3) Indicadores indirectos, tales como prevalencias de
veles de fortificación para que aquellos que consumen mayores anemia, retardo en el crecimiento, defectos del tubo neural,
cantidades del alimento vehículo no superen el nivel máximo diversidad dietética, prácticas de alimentación del lactante
de ingesta tolerable (UL, por sus siglas en inglés). En otras pala- y del niño pequeño, seguridad alimentaria, y agua y
bras, las vitaminas y/o minerales añadidos al arroz deben con- saneamiento
tribuir significativamente a la ingesta de micronutrientes de la
población general, sin contribuir demasiado a las personas que Es importante enfatizar que tener datos completos de micronu-
consumen cantidades relativamente grandes de arroz. Para más trientes y de ingesta de nutrientes NO es un prerrequisito para
información sobre la fortificación segura de micronutrientes de las iniciativas de fortificación. Una combinación de la informa-
arroz, consulte las contribuciones de Pee et al (págs. 29), Pachón ción disponible con indicadores indirectos es suficiente para
et al (págs. 78), y Bruins in Sight and Life 1/2015, págs. 45–50. estimar la carga de deficiencias de micronutrientes.
figurA 2: Media de la diversidad dietética por quintiles como ocurre a menudo en los países de ingresos bajos, se pue-
del gasto total en alimentos den utilizar indicadores indirectos para estimar el riesgo de de-
ficiencias de micronutrientes de la población. Los indicadores
14 más frecuentemente usados son la anemia, el retardo en el cre-
cimiento, la diversidad de la dieta y los defectos del tubo neural.
12
Puntaje de diversidad de la dieta
figurA 3: Prevalencia de anemia en diferentes por defectos del tubo neural tienen múltiples discapacidades
grupos de edad2 de por vida. Las mujeres con bajo consumo de folato antes y
durante el embarazo temprano están en mayor riesgo de tener
bebés con defectos del tubo neural. Se recomienda que todas las
Niños de edad pre-escolar 47%
mujeres en edad reproductiva reciban diariamente ácido fólico,
Niños de edad escolar 25% que puede añadirse a su dieta mediante fortificación o suple-
mentación.
Mujeres embarazadas 42%
Otros indicadores indirectos que pueden utilizarse como
Mujeres no embarazadas 30% indicadores del riesgo de deficiencias de micronutrientes son
alta prevalencia de infección, bajo acceso/utilización de los
Hombres adultos 13%
servicios de salud, saneamiento deficiente, higiene y calidad
Adultos mayores 24% del agua, alta inseguridad alimentaria, proporción del gasto de
alimentos de los hogares en, por ejemplo, alimentos que no son
WHO 2008: Prevalencia global de la anemia
granos o de origen animal, lactancia materna, y prácticas de ali-
mentación y cuidado del lactante y del niño pequeño inadecua-
absorción de vitaminas liposolubles, también es a menudo muy das, etc.
baja en dietas de baja diversidad.
Los alimentos de origen animal son ricas fuentes de proteí- Evaluación de la carga de las deficiencias
nas (aminoácidos esenciales), energía y micronutrientes, como de micronutrientes
el hierro, la vitamina A preformada, la vitamina B12, la riboflavi- Aunque la fortificación del arroz puede beneficiar a una gran
na, el calcio, el fósforo y el zinc.5 Los grupos vulnerables en po- parte de los grupos de poblacionales, es importante evaluar qué
blaciones con una pobre ingesta de alimentos de origen animal grupos de población tienen el mayor riesgo de deficiencia de
son más propensos a tener deficiencias de algunos o todos es- micronutrientes o de ingesta inadecuada, y por qué. La Figura 3
tos nutrientes.5 Los alimentos de origen animal también llenan muestra la prevalencia estimada de anemia entre diferentes
múltiples brechas de micronutrientes con volúmenes de ingesta grupos de población. La mayor prevalencia se estima para ni-
menores que los alimentos de origen vegetal. Por ejemplo, para ños en edad preescolar con casi la mitad de los niños estimados
cumplir con los requerimientos diarios de energía, hierro o zinc, como anémicos. En comparación, se estima que sólo el 13% de
un niño necesitaría consumir entre 1,7–2,0 kg de maíz y frijoles los hombres adultos son anémicos.
en un día. Además, los alimentos de origen animal no tienen
los factores anti-nutricionales presentes en alimentos vegetales
(vegetales, granos y leguminosas). Los anti-nutrientes, o inhibi-
“Es importante evaluar qué grupos
dores, son compuestos naturales que afectan la digestibilidad de población tienen el mayor riesgo
y absorción de nutrientes esenciales. Un inhibidor común en-
contrado en plantas es el fitato, que inhibe la absorción de mi-
de deficiencia de micronutrientes,
nerales, especialmente hierro y zinc.5 Los alimentos a base de y por qué”
plantas son a menudo una buena fuente de vitamina B6, niacina
y tiamina. Sin embargo, el arroz pulido reduce notablemente su
contenido de micronutrientes.6 Algunos de los grupos vulnerables tienen más probabilidades
Los hogares económicamente más privilegiados tienden a de verse afectados por las deficiencias de micronutrientes:
tener dietas más diversas. Como se muestra en la Figura 2, un
estudio realizado en Bangladés encontró una fuerte correlación ∙ Las niñas y las mujeres en edad reproductiva son
entre la diversidad dietética del hogar y el estatus socioeconó- biológicamente más vulnerables, especialmente a la
mico y el gasto en alimentos. deficiencia de hierro, ya que experimentan pérdida
Los defectos del tubo neural pueden usarse como indica- de hierro debido a la menstruación.
8
dor indirecto de la deficiencia de ácido fólico. Los defectos del ∙ Las mujeres embarazadas y lactantes tienen mayores
tubo neural, incluyendo la espina bífida, ocurren cuando parte requerimientos de micronutrientes para apoyar el
del tubo neural, que forma la columna vertebral, la médula es- crecimiento y la lactancia.
pinal, el cráneo y el cerebro no se cierra entre 21 a 28 días des- ∙ Los lactantes y los niños pequeños tienen mayores
pués de la concepción – normalmente antes de que las mujeres requerimientos de micronutrientes debido al rápido
se enteran de que están embarazadas. Muchos niños afectados crecimiento. Su tamaño de estómago relativamente
88 VINCULANDO LAS OPORTUNIDADES DE FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
figurA 4: Potencial de beneficiarse de los alimentos fortificados a lo largo del ciclo de vida
Mujer Mujer 6–23 meses 2–5 años 5–18 años MER* (15 – Hombre Adultos
embarazada lactante 49 años) adulto mayores
Necesidades Muy alto Muy alto Muy alto Alto Moderado Moderado Bajo a Moderado
de micro- a alto a alto moderado a alto
nutrientes Alto
pequeño también limita su consumo de alimentos. Por grasas, frutas y vegetales limitados. Aunque las dietas
lo tanto, sus alimentos deben ser más densos en nutrientes de las poblaciones más pobres tienden a ser más deficien-
que los alimentos que consumen los grupos de más edad. tes en micronutrientes, la transición a dietas ricas en
∙ Los adolescentes han aumentado los requerimientos de energía pero carentes de micronutrientes con un alto con-
micronutrientes debido al crecimiento acelerado. sumo de alimentos procesados también pone a los grupos
∙ Los grupos socioeconómicos bajos tienden a tener una de ingresos más altos en riesgo de deficiencias
mayor prevalencia de deficiencias en comparación con de micronutrientes.
los grupos socioeconómicos más altos. Típicamente, las ∙ Las poblaciones afectadas por emergencias, debido
dietas de los grupos socioeconómicos bajos carecen de a la inadecuada diversidad de la dieta (mitigada hasta
diversidad y se basan principalmente en cereales, raíces cierto punto cuando reciben alimentos fortificados).
y tubérculos, con consumo de alimentos de origen animal, ∙ Grupos marginados como resultado de la geografía,
la etnia o la religión.
Para más información sobre las opciones de entrega, por fa- Referencias
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L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA ANÁLISIS DE SITUACIÓN DE PAÍS PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 91
Análisis de situación
de país para la
fortificación del arroz
Un resumen de los resultados
Introducción
Para crear programas de fortificación del arroz que sean via-
bles, sustentables y costo-efectivos, factores clave tales como
la estructura de la industria arrocera, las políticas, normas y re-
gulaciones en pie y la voluntad política, entre otras, deben ser
identificados y estudiados antes de iniciar el proceso formal de
desarrollo e implementación. Es por ello que llevar a cabo un
Análisis de situación de país para la fortificación del arroz debe
ser el primer paso para introducir, implementar y llevar a escala
una estrategia de fortificación que considere todos los aspectos
clave para la toma de decisiones a nivel político, en el sector
privado, y por la sociedad civil.
Un análisis de situación debe, cómo mínimo, determinar los
canales de entrega más viables, cómo integrar la fortificación a
los procesos existentes, cómo crear, adaptar o mejorar las po-
líticas públicas y los marcos regulatorios existentes, los costos
estimados relativos al impacto en salud pública y los actores © WFP/David Parra
claves a ser incluidos en el proceso.
Con el objetivo de informar el trabajo en grupo realizado du-
rante el Evento para la promoción de la fortificación del arroz en
América Latina y el Caribe (véase la página 104 para el reporte
completo), se comisionó un documento de Análisis de situación
Niños esperando su almuerzo, Choco Colombia 2004
para la fortificación del arroz en cada país participante. Cada do-
cumento consideró y buscó incluir todos los componentes clave
recomendados por Yusufali et al en la serie sobre fortificación A pesar de las limitaciones antes mencionadas, la recolec-
del arroz en Asia, la cual precede a este suplemento.1 ción de datos –comisionada por la Oficina Regional del Progra-
En conjunto, los documentos de análisis ofrecen una ri- ma Mundial de Alimentos— sienta las bases para iniciar con-
queza de información sobre la situación para la fortificación versaciones a nivel de país en pro de la fortificación del arroz y
del arroz en la región, pero también tienen sus limitaciones. construir sobre ellas.
Los múltiples vacíos de información a nivel del país y la falta A continuación se presenta un resumen de algunos datos
de precisión o de actualización de los datos es indiscutible; claves para cada país; los documentos completos pueden ser
ninguno de los países cuenta con toda la información necesa- solicitados a través de: rebrand.ly/Country-Profiles
ria recomendada de primera mano. Asimismo, es importante
destacar que los porcentajes nacionales a veces ocultan una
realidad nutricional mucho más preocupante en las poblacio-
nes más vulnerables.
92 ANÁLISIS DE SITUACIÓN DE PAÍS PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
Colombia
Situación nutricional
Desnutrición crónica en menores de 5 años 13.2%
Anemia Por grupo de edad (%)
6 –11 meses 59.7
6 –59 meses 27.5
Mujeres en edad fértil 17.9
Deficiencia de vitamina A (1–4 años) 24.3%
Deficiencia de zinc (1–4 años) 43.3%
Fuente: Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. Encuesta Nacional de la Situación Nutricional en Colombia (ENSIN) 2010. Bogotá. 2011.
Programas del gobierno de fortificación de alimentos y alimentos complementarios (a través del sector público)
Alimentos de consumo masivo Sal > Fortificantes: yodo, flúor
de fortificación obligatoria Harina de trigo > Fortificantes: vitamina B1, B2, B3, hierro
Fortificación de Bienestarinaa> Fortificantes: vitaminas A, D, C, B1, B2, B3, B6, B12, ácido fólico
alimentos específicos > Minerales: hierro y zinc, calcio, cobre, ácidos grasos omega 3
> Población: niños de 6 a 36 meses de edad
Leche y galletas fortificadas > Fortificantes: ácido fólico y hierro y zinc
> Población: niños de 6–59 meses
Programas de suplementación Micronutrientes en polvo > Fortificantes: (fórmula UNICEF/PMA de 15
micronutrientes) vitamina A, D, E, C, B1, B2, B3, B6, B12, ácido fólico
> Minerales: hierro, zinc, cobre, selenio, yodo
> Población: niños de 6–59 meses
a
Alimento complementario fortificado
* Cerca del 35% del arroz consumido en el país es fortificado voluntariamente por la industria usando tecnología de aspersión. Sin embargo, para dicha tecnología
no se conoce el nivel de retención de micronutrientes, estabilidad y eficiencia.
Programas de protección social que entregan arroz Patrones de consumo del arroz
Ninguno. % de personas que lo consumen diariamente: 96.0%
Consumo en (g) por persona por día: 106
Marco legislativo para la fortificación del arroz: Consumo per cápita anual (kg): 40
No existe.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA ANÁLISIS DE SITUACIÓN DE PAÍS PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 93
* El arroz de contrabando representa un problema en Colombia. Se estima que representa un 24% del arroz consumido en el país.
Cuba
Situación nutricional
Desnutrición crónica en menores de 5 años –
Anemia Por grupo de edad (%)
6 –11 meses 41.4
6 –59 meses 29.5
Mujeres embarazadas 21.6
Deficiencia de vitamina A (escolares) 8.5 %
Deficiencia de zinc (1–4 años) –
Programas del gobierno de fortificación de alimentos y alimentos complementarios (a través del sector público)
Alimentos de consumo masivo Sal > Fortificantes: yodo
de fortificación obligatoria Harina de trigo > Fortificantes: vitamina B1, B2, B3, B6,, B12, ácido fólico, hierro
Fortificación de Leche en polvo > Fortificantes: hierro y zinc
alimentos específicos > Población: niños menores de 7 años
Purés de frutas > Fortificantes: hierro y ácido ascórbico
> Población: niños de 6–36 meses de edad
Yogur de soya > Fortificantes: calcio | Población: niños de 7–13 años de edad
Leche de soya fortificada> Fortificantes: vitamina A
> Población: adultos mayores de 65 años de edad
Materlac a> Fortificantes: pre-mezcla de vitaminas A, D, E y complejo B, hierro,
zinc, cobre, magnesio, manganeso, calcio, fósforo, sodio y potasio
> Población: embarazadas con riesgo nutricional
Lactosanb> Fortificantes: vitaminas A y D
> Población: sustituto de leche maternizada
Programas de suplementación Suplemento prenatal > Contenido: hierro, ácido fólico, vitamina A, vitamina C
> Población: todas las mujeres embarazas
Suplemento prenatal para mujeres en riesgo (Mufer)
> Contenido: hierro, ácido fólico
> Población: embarazadas con riesgo nutricional
Gotas de hierro (Forfer) > Contenido: hierro (3 mg), ácido fólico (0,01mg)
> Población: niños 6–60 meses
a,b
Cereal fortificado
94 ANÁLISIS DE SITUACIÓN DE PAÍS PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ
Guatemala
Situación nutricional
Desnutrición crónica en menores de 5 años 46.5%
Deficiencia de hierro Por grupo de edad (%)
6 –11 meses 80.1
6 –59 meses 18.6
Mujeres en edad fértil 14.3
Mujeres embarazadas 31.9
Deficiencia de vitamina A (<5 años) 0.3
Deficiencia de zinc (< 5 años) 25% al 38.6%
Programas del gobierno de fortificación de alimentos y alimentos complementarios (a través del sector público)
Alimentos de consumo masivo Sal > Fortificantes: yodo
de fortificación obligatoria Harina de trigo > Fortificantes: vitamina B1, B2, B3, ácido fólico
Harina de maiz > Fortificantes: B1, B2, B3, B12, ácido fólico, hierro, zinc
Azúcar > Vitamina A
Fortificación de Vitacereala> Fortificantes: vitamina A, C, D, E, B1, B2, B3, B5, B6, B7, B12,
alimentos específicos ácido fólico, hierro, zinc, yodo, calcio
> Población: mujeres embarazadas, madres lactantes y niños entre 6
y 35 meses que viven en municipios con índices de desnutrición
superiores al 65 por ciento
Supercereal plus (Mi comidita)b> Fortificantes: vitamina A, C, D, E,
B1, B2, B3, B5, B6, B7, B12, ácido fólico, hierro, zinc, yodo, calcio, potasio,
fósforo, magnesio, cobre, manganeso, selenio
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA ANÁLISIS DE SITUACIÓN DE PAÍS PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 95
Fortificación de > Población: niños de 0 –2 años, mujeres embarazadas y lactantes en los
alimentos específicos distritos de Totonicapán, Sololá y Chimaltenango
Incaparinac> Fortificantes: vitamina A, D, K, B1, B2, B3, B12, ácido fólico,
hierro, zinc, yodo, calcio
Bienestarinad> Fortificantes: vitamina A, B1, B2, B3, B12, ácido fólico,
hierro, zinc, calcio
Maní +e> Fortificantes: vitamina A, C, D, E, B1, B2, B5, B6, B12, ácido fólico,
hierro, zinc, yodo, calcio, potasio, fósforo, magnesio, cobre, manganeso, selenio
Programas de suplementación Hierro > Población: niños 6 meses a 5 años, niños de 5–10 años,
adolescentes, embarazo y puerperio
Ácido fólico > Población: niños 6 meses – 5 años, mujeres en edad fértil,
embarazo y puerperio
Micronutrientes en polvo > Población: niños de 6–59 meses
(en sustitución de hierro y ácido fólico)
Vitamina A> Población: niños de 6 meses a 5 años
a
Alimento complementario fortificado
b
Alimento mezclado fortificado
c
Bebida hecha de harina de maíz y soya fortificada con vitaminas y minerales
d
A
limento complementario fortificado
e
S uplemento nutricional
Haití
Situación nutricional
Desnutrición crónica en menores de 5 años 22%
Anemia Por grupo de edad (%)
6 –11 meses –
6 –59 meses 65
Mujeres en edad fértil 49
Mujeres embarazadas –
Deficiencia de vitamina A (escolares) 32%
Deficiencia de zinc (menores de 5) 30%
Fuente: Ayoya et al (2012) Precis of Nutrition of Children and Women in Haiti: Analyses of Data from 1995 to 2012; CNSA, Oxfam 2016. Rapport d’évaluation
approfondie de la sécurité alimentaire dans le contexte de la sécheresse basée sur l’Approche de l’Economie de Ménages (AEM)
Programas del gobierno de fortificación de alimentos Consumo en (g) por persona por día: –
y alimentos complementarios (a través del sector público) Consumo per cápita anual: –
No disponible.
Características de la industria arrocera
Alimentos fortificados en el mercado Producción nacional (ton): 114,400
No disponible. Rendimiento del cultivo (t/ha): –
Total de molinos: 500
Programas de protección social que entregan arroz Superficie sembrada de arroz (ha): 85,000
Ninguno Importaciones (mt): 415,000
Honduras
Situación nutricional
Desnutrición crónica en menores de 5 años 23%
Anemia Por grupo de edad (%)
6 –11 meses 46%
6 –59 meses 25.7%
Mujeres en edad fértil 18%
Mujeres embarazadas 22%
Deficiencia de vitamina A* –
Deficiencia de zinc ** –
* Adecuación del >150%. Solo en región rural y occidental se presenta un déficit en el 10% de los hogares
** Se estima que un 85% de los hogares tiene una adecuación de zinc aceptable
Programas del gobierno de fortificación de alimentos y alimentos complementarios (a través del sector público)
Alimentos de consumo masivo Azúcar > Fortificantes: vitamina A
de fortificación obligatoria Sal > Fortificantes: yodo
Harina de trigo > Fortificantes: hierro, vitaminas del complejo B
Programas de suplementación Micronutrientes en polvo (Cooperación internacional)
> Fortificantes: vitamina A, C, ácido fólico, zinc, hierro
Micronutrientes en polvo (Iniciativa Mesoamericana)
> Fortificantes: vitamina A, D, E, C, B1, B2, B3, B6, B12, ácido fólico,
hierro, zinc, cobre, selenio, yodo
Panamá
Situación nutricional
Desnutrición crónica en menores de 5 años 19.1
Anemia Por grupo de edad (%)
6 –11 meses –
6 –59 meses 36.0
Mujeres en edad fértil 40.3
Mujeres embarazadas 36.4
Deficiencia de vitamina A (escolares) 1.8%
Deficiencia de zinc (menores de 5) –
Fuente: Encuesta de niveles de vida 2008/Global Nutrition Report 2015; Ministerio de Salud. Encuesta Nacional de Vitamina A y Anemia. Panamá, 1999
Programas del gobierno de fortificación de alimentos y alimentos complementarios (a través del sector público)
Alimentos de consumo masivo Sal > Fortificante: yodo
de fortificación obligatoria Harina de trigo > Fortificantes: vitamina B1, B2, B3, hierro, ácido fólico
Fortificación de Crema de maíz nutritivaa> Fortificantes: vitaminas A, E, B1, B3, B6, B12,
alimentos específicos ácido fólico, calcio, hierro, zinc
Bebida láctea y galleta nutricionalmente mejorada (Programa de
Merienda Escolar)> Fortificantes: vitamina, A, C, D, E, B1, B2, B3, B6, B12,
ácido fólico, calcio, fósforo, magnesio, hierro, zinc
Crema nutricional y galleta nutricionalmente mejorada (Programa de
Merienda Escolar)> Fortificantes: vitamina, A, C, D, E, B1, B2, B3, B6, B12,
ácido fólico, calcio, fósforo, magnesio, hierro, zinc
Programas de suplementación Hierro y ácido fólico > Población: niños con bajo peso al nacer
(2–24 meses, niños a término (4–24 meses), niños 24-59 meses, niños
de edad escolar (5–12 años), mujeres en edad fértil, mujeres embarazadas
y puérperas
Vitamina A > Población: niños 6–59 y mujeres puérperas en
distritos prioritarios
a
Alimento complementario fortificado
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA ANÁLISIS DE SITUACIÓN DE PAÍS PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 99
Perú
Situación nutricional
Desnutrición crónica en menores de 5 años 32,6%
Anemia Por grupo de edad (%)
6 –11 meses –
6 –59 meses 32.6
Mujeres en edad fértil 20.7
Mujeres embarazadas 28.0
Deficiencia de vitamina A (< 5 años) 11.7%
Deficiencia de zinc (1–4 años) –
Programas del gobierno de fortificación de alimentos y alimentos complementarios (a través del sector público)
Alimentos de consumo masivo Sal > Fortificantes: yodo, flúor
de fortificación obligatoria Harina de trigo > Fortificantes: hierro, ácido fólico, B1, B2, B3
Programas de suplementación Fortificación Casera con Micronutrientes en Polvo (FCMP)
> Fortificantes: hierro, zinc, vitamina A, C, ácido fólico
> Población: niños menores de 36 meses
Hierro > Población: niños menores de 36 meses
Hierro y ácido fólico > Población: mujeres embarazadas
Vitamina A > Población: mujeres y niños en riesgo
Referencia
Laura Astete Robilliard, Análisis de situación de país para la
fortificación de arroz: Perú, Informe presentado al Programa Mundial
de Alimentos. Enlace a perfil completo:
rebrand.ly/Country-Profiles
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA ANÁLISIS DE SITUACIÓN DE PAÍS PARA LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ 101
República Dominicana
Situación nutricional
Desnutrición crónica en menores de 5 años 7.1%
Anemia Por grupo de edad (%)
6 –11 meses –
6 –59 meses 28
Mujeres en edad fértil 18%
Deficiencia de vitamina A (hogares) * –
Deficiencia de zinc (hogares) ** –
* Se cree que entre los más pobres hay un riesgo moderado del 50%
** Se cree que entre los más pobres hay un riesgo moderado del 50%
Fuente: Encuesta Nacional de Micronutrientes, 2012; Menchu et al., La Calidad de la Dieta de la República Dominicana Aproximada con los Datos de la ENIGH-2007.
Programas del gobierno de fortificación de alimentos y alimentos complementarios (a través del sector público)
Alimentos de consumo masivo Harina de trigo
de fortificación obligatoria > Fortificantes: hierro, B1, B2, B3, ácido fólico
Programas de suplementación Hierro, ácido fólico, vitamina C
> Población: mujeres embarazadas, niños 6–23 meses de edad
Vitamina A
> Población: mujeres puérperas, niños de 6 meses a 4 años
Calcio
> Población: mujeres embarazadas y puérperas
Referencia
1. Yusufali, R., Ghoos, K. Lasdscape Analysis for Rice Fortification.
Scaling Up Rice Fortification in Asia, Sight and Life on behalf
of the World Food Programme, 2015.
102
ARROZ CON
CÁSCARA
DO
Q U OZ
AR TI
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R
A
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BL
FABRICANTE DE GRANOS FORTIFICADOS (EJEMPLO DE EXTRUSIÓN)
Extrusor
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* Con la tecnología de extrusión se pueden utilizar granos partidos para producir granos fortificados; con la tecnología de recubrimiento se necesitan granos enteros.
DEL ARROZ FORTIFICADO 103
ARROZ
FORTIFICADO
ARROZ
FORTIFICADO
EJEMPLO: MOLINEROS
DE ARROZ, ALMACENES
DE ARROZ
0
10
1:
ARROZ
FORTIFICADO
ARROZ
FORTIFICADO
TERMINOLOGÍA Arroz con cáscara: granos de arroz envueltos en una cáscara protectora no comestible. Arroz entero: granos enteros de arroz descascarillado, una vez removida la gluma, el salvado y el germen.
Arroz molido: arroz pulido es el arroz blanco tradicional. La gluma, el salvado y el germen han sido removidos. Mezcla: mezclar arroz molido no fortificado con granos fortificados en una proporción entre 0,5 –2% para
producir arroz fortificado. Mezcla fortificante: mezcla que contiene diversos micronutrientes (también conocida como premezcla). Granos fortificados: granos fortificados en forma de arroz que contienen la mezcla
fortificante (extrusión) o granos enteros de arroz con una mezcla fortificante (recubrimiento).
104 PROMOCIÓN DE LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE
Promoción de la
fortificación del arroz en
América Latina y el Caribe
Taller, Santo Domingo,
República Dominicana, 2016
El evento para la promoción de la fortificación del arroz en Amé- ción para la fortificación del arroz en cada país participante con
rica Latina y el Caribe, celebrado en Santo Domingo, República el fin de evaluar los posibles factores que influyen en la factibi-
Dominicana (agosto de 2016), reunió a más de 100 interesa- lidad, la sostenibilidad y el impacto de la fortificación del arroz.
dos, tomadores de decisión en política y gobierno, y personal Durante el taller se presentó a los participantes la justificación
técnico: expertos técnicos nacionales, regionales e internacio- regional para considerar la fortificación del arroz, la evidencia
nales de diversas instituciones, incluyendo organismos de las global para la fortificación del arroz y los aspectos técnicos re-
Naciones Unidas, la academia y el sector privado. Asistieron lacionados con la fortificación de alimentos en el contexto de la
delegaciones de países de Colombia, Cuba, República Domini- doble carga, los marcos conceptuales y los instrumentos de po-
cana, Guatemala, Haití, Honduras, Panamá y Perú, y asistieron líticas públicas, y las diferentes tecnologías para el la fortifica-
en calidad de observadores dos representantes de El Salvador. ción del arroz. Además, se presentaron tres diferentes modelos
El taller fue organizado con el apoyo de un Grupo Asesor Técni- de implementación nacional: Costa Rica (obligatorio), India y
co, integrado por miembros de la Iniciativa de Fortificación de Bangladés (ambos programas de seguridad social) y Brasil (pro-
Alimentos (FFI), el Instituto de Nutrición de Centroamérica y grama voluntario).
Panamá (INCAP), la Agencia de los Estados Unidos para el De-
sarrollo Internacional (USAID), la Organización Panamericana
figurA 1: Mapa de países que estuvieron
de la Salud (OPS), el Programa Mundial de Alimentos (PMA), el
representados en el taller
Instituto Nacional de Nutrición (INN) y el Ministerio de Salud
de Costa Rica.
didas al pasar de las políticas y la legislación a la implementación y la importancia de usar un grano fortificado indistinguible por
del programa. Se estableció que la legislación no es suficiente y el consumidor, también fueron compartidas.
que el compromiso político con la estrategia es un componente
vital para su desarrollo, implementación y sostenibilidad, y para Modelos nacionales del programa de fortificación del arroz
fortalecer los programas a medida que se implementan. También Durante el segundo día del taller se presentaron tres modelos
se hizo hincapié en la importancia de cómo se organiza la pro- nacionales de programa de fortificación del arroz. Se presentó
ducción de arroz en el país; la implementación del programa es el caso de Costa Rica para ilustrar un programa obligatorio, se-
siempre más fácil cuando la producción está centralizada. Como guido de una presentación sobre India y Bangladés, donde el
punto de cierre, se señaló que el control y la inspección de la pro- arroz fortificado se distribuye a través de programas de protec-
ducción de arroz fortificado es un factor clave para mantener la ción social. Una presentación sobre la experiencia de Brasil, que
motivación y el compromiso de los productores y para asegurar promueve la fortificación voluntaria del arroz, fue presentada
que se cumplan los objetivos nutricionales establecidos. como un tercer modelo potencial a ser contemplado por los paí-
El primer día del taller concluyó con una presentación so- ses dependiendo de sus objetivos nutricionales.
bre Tecnologías para el Fortalecimiento del Arroz. Héctor Cori,
Director de Ciencias de la Nutrición de DSM, presentó los dife- Fortificación obligatoria del arroz
rentes métodos de fortificación del arroz, incluyendo el parbo- Melanie Ascencio (Ministerio de Salud, Costa Rica) y José An-
lizado, el espolvoreado, el recubrimiento y la extrusión, y los tonio Martínez (ANINSA) presentaron el modelo obligatorio de
beneficios, limitaciones y costos asociados a cada método. El Sr. fortificación del arroz de Costa Rica. Dado el alto consumo de
José Solera, Director de Operaciones de NTQ, presentó la expe- arroz en todos los grupos de población, el Ministerio de Salud de
riencia de una empresa privada en Costa Rica que distribuye la Costa Rica lo identificó como un vehículo adecuado para la forti-
mayor parte del arroz fortificado en el país y utiliza tecnología ficación de micronutrientes para lograr un impacto positivo en
de recubrimiento. Las lecciones aprendidas como parte del pro- la salud pública. Por esta razón, el Ministerio de Salud se acercó
ceso, principalmente la importancia de la colaboración públi- a ANINSA – la Asociación Nacional de Industriales del Sector
co-privada y de la capacitación a los industriales sobre cómo de Arroz – y CONARROZ — la Corporación Nacional de Arroz de
trabajar con el producto, la necesidad de monitoreo continuo de Costa Rica – para colaborar en el esfuerzo (más información en
la calidad del producto conducido por un laboratorio calificado la página 109 de este volumen).
© WFP / Elio Rujano
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA PROMOCIÓN DE LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE 107
© WFP / Elio Rujano
Expertos y ponentes regionales y globales durante el Taller de Fortificación del Arroz en la República Dominicana, 2016
Distribución de arroz fortificado a través un mecanismo de distribución pública focalizada, a través del
de los programas de protección social programa de alimentación escolar y los servicios integrados de
Rizwan Yusufali, de la Oficina Regional del PMA, en Asia pre- desarrollo infantil. Se han llevado a cabo varios estudios en el
sentó los ejemplos de Bangladés y la India, donde el arroz for- país a fin de evaluar la aceptabilidad y eficacia de la interven-
tificado se entrega a través de programas de protección social. ción para apoyar los esfuerzos de promoción en diferentes de-
En Bangladés, la Estrategia Nacional para la Prevención de partamentos y ministerios a nivel nacional y estatal. En el con-
las Deficiencias de los Micronutrientes incluye la fortificación texto de la India, varios factores impulsaron la continuación del
de los alimentos. Como fue el caso en Costa Rica, la iniciativa esfuerzo, específicamente 1) la creación de capacidad nacional
convocó el involucramiento de múltiples partes interesadas, in- para la producción de granos fortificados; 2) una base de evi-
cluyendo sociedades con la academia, el gobierno, el sector pri- dencia local, 3) un enfoque sistemático para la implementación,
vado y corporativas. Iniciando el proceso, se llevó a cabo un es- 4) la creación de un grupo asesor técnico multidisciplinario y
tudio de investigación para generar evidencia específica al país 5) una alta visibilidad de la intervención a través de la difusión
sobre la aceptación por parte de la población objetivo, fomentar de resultados. Entre los retos que prevalecen se encuentran au-
la distribución del arroz fortificado subsidiado para mejorar la mentar la capacidad de producción nacional, la reducción del
salud, documentar los beneficios a la nutrición y productividad, costo incremental y asegurar la sustentabilidad a largo plazo de
y facilitar la ampliación de la estrategia. la intervención. Ambos ejemplos son valiosos para la región de
Entre los principales factores de éxito del programa, imple- Latinoamérica y el Caribe, donde los programas de protección
mentado exclusivamente a través de las redes de protección social abundan y están bien establecidos.
social del gobierno, están: 1) un enfoque multisectorial de la
implementación, 2) un trabajo colaborativo con contrapartes Fortificación voluntaria del arroz
dedicadas a programas de desarrollo, 3) recibir apoyo técnico de Caroline Manus, de la Alianza Global para Mejorar la Nutrición
agencias de la ONU con experiencia y corporaciones privadas, y (GAIN, por sus siglas en inglés), presentó la experiencia en Bra-
4) atender los problemas de sustentabilidad garantizando la pro- sil con la fortificación voluntaria del arroz. PATH y GAIN unie-
ducción local de granos fortificados. A medida que el programa ron sus fuerzas para desarrollar un modelo a escala a través de
avanza, algunos desafíos persisten, incluyendo costos, mercadeo canales comerciales; Brasil fue elegido como país piloto para
y la implementación de protocolos de garantía de calidad. esta iniciativa impulsada por el sector por varias razones:
El gobierno de la India también decidió distribuir arroz for- ∙ Consolidación de la industria
tificado a través de sus redes de protección social, utilizando ∙ Un sector minorista maduro
108 PROMOCIÓN DE LA FORTIFICACIÓN DEL ARROZ EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE
∙
L a experiencia de PATH en el país, y que existen suficientes pruebas científicas y prácticas a nivel de
∙
Una prevalencia significativa de malnutrición de país para confirmar su seguridad y eficacia, la fortificación del
micronutrientes entre las poblaciones urbanas y rurales. arroz es una estrategia complementaria viable para mejorar la
situación de micronutrientes en la región.
El proyecto tenía el objetivo general de desarrollar nuevos
mercados e impulsar modelos comerciales a escala para una
variedad de productos de arroz fortificados que se producirían
“L a fortificación del arroz es una
y distribuirían en el país. El proyecto se llevó a cabo en 5 pasos: estrategia complementaria viable
1) PATH trabajó con una empresa privada para producir los gra-
nos fortificados; 2) la tecnología de granos se transfirió a una
para mejorar la situación de
universidad local; 3) el proyecto abordó tres grandes cadenas micronutrientes en la región”
de supermercados; 4) se desarrolló una campaña de mercado-
tecnia social basada en una amplia investigación de mercado. Al igual que para todas las demás intervenciones de salud o
El proyecto logró alcanzar a más de 2,5 millones de consu- nutrición, las estrategias de fortificación del arroz deben ser es-
midores, involucrando a los tres minoristas de mayor importan- pecíficas del país y del contexto, y basadas en información con-
cia a nivel nacional, estableciendo la arquitectura fundacional creta y actualizada. En la región, se identificaron importantes
para la fortificación del arroz y generando conocimiento sobre oportunidades para la distribución del arroz fortificado a través
la implementación comercial de esta estrategia. A través de este de programas de protección social, y algunos países como la Re-
proyecto también se concluyó que una iniciativa impulsada por pública Dominicana expresaron interés por la implementación
el sector privado, puramente comercial, no es suficiente para obligatoria a gran escala. Para lograr el alcance y el impacto
alcanzar una escala significativa en un plazo razonablemente deseados, es importante que todos los actores clave entiendan
corto (3–5 años) y que la estructura de gobierno es un factor el valor y el impacto potencial de la intervención, así como sus
determinante del alcance. limitaciones para eliminar las deficiencias de micronutrientes.
Particularmente ahora, cuando la prevalencia de sobrepeso y
Trabajo en grupo de países obesidad es uno de los problemas de salud pública más apre-
La tarde del segundo día se dedicó en su totalidad al trabajo en miantes, debe señalarse que la fortificación del arroz no contra-
grupo de países. Cada delegación de país trabajó con dos facili- rresta los esfuerzos existentes de sobrepeso y prevención de la
tadores para discutir los planes para un potencial programa de obesidad.
fortificación del arroz. Se realizaron dos ejercicios, el primero Desde un punto de vista práctico, ni los gobiernos ni los
dedicado a identificar los retos y las capacidades nacionales, y molineros deben quedar solos o esperar promover la estrate-
el segundo a la elaboración de un plan de trabajo. Los ejercicios gia independientemente. Todos los ejemplos existentes a nivel
resultaron ser útiles, permitiendo a los participantes pensar y mundial confirman que los esfuerzos de fortificación del arroz
discutir, guiados por un experto, diversos factores asociados son más exitosos cuando, para llevarlos a cabo, se forman aso-
al desarrollo de una estrategia, incluyendo un análisis de la ciaciones que incluyen el sector público y privado, así como
situación (conocimiento general de las deficiencias de micro- otras contrapartes que pueden apoyar en áreas clave como la
nutrientes, voluntad política, recursos humanos y financieros, promoción, la gestión, la implementación y el monitoreo. Los
aceptación, mecanismos de entrega, entre otros). Perfiles de recursos financieros representan una barrera frecuente y preo-
país, comisionados para cada país participante previo a la reali- cupante tanto para el sector público como el privado. Por lo tan-
zación del evento, fueron utilizados como herramienta auxiliar to, abordarlas desde un inicio e identificar maneras creativas
por los equipos de país durante las discusiones (descritos en para hacer frente a los altos costos iniciales es absolutamente
detalle en otro lugar de este número, véase págs. 91). necesario; las ganancias a largo plazo son dramáticamente más
significativas.
Conclusiones principales y lecciones aprendidas Es la esperanza del comité organizador de este evento que se
El arroz es un alimento básico en varios países de América La- haya construido sobre el interés existente por la fortificación del
tina y el Caribe. Cuba, República Dominicana, Haití, Panamá y arroz en la región y que los planes iniciados en el taller maduren
Perú tienen patrones de consumo muy altos per cápita, mien- hasta convertirse en programas bien diseñados y sostenibles
tras que Colombia, Honduras y Guatemala tienen un menor con- que puedan contribuir a mejorar el estatus de micronutrientes
sumo per cápita, pero que es sustancial entre las poblaciones en la región.
más vulnerables. Teniendo en cuenta que las directrices oficia-
les para la fortificación del arroz de la OMS están en proceso y
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA FORTIFICACIÓN DE ARROZ EN COSTA RICA 109
tablA 1: Visión global de los alimentos fortificados, fortificantes y niveles de fortificación en Costa Rica
a las continuas deficiencias de micronutrientes. A pesar de la del arroz.” El contexto legal para la fortificación del arroz fue
implementación de un programa de sanitación básica y despa- planeado bajo la sombra de la Ley General de Salud de 1974. La
rasitación, de la estrategia del cuidado de salud primaria, su- legislación ordenaba que todo el arroz destinado para consumo
plementación, promoción de salud y actividades alimenticias humano directo debería ser fortificado, tanto si era producto do-
complementarias para mejorar la salud de micronutrientes, en méstico como importado. Las regulaciones establecían micro-
1996 la encuesta nacional de nutrición encontró que las defi- nutrientes específicos y los niveles de fortificación requeridos.
ciencias de micronutrientes permanecían en niveles críticos.1 Además, las regulaciones asignaban monitoreo externo y con-
Además, un estudio basado en datos del Registro Nacional de trol de calidad al gobierno y monitoreo interno de la industria
Enfermedades Congénitas mostró que 12 de 10,000 niños te- de arroz.
nían defectos del tubo neural.2
En respuesta, el gobierno estableció la Comisión Nacional Cadena de suministro de arroz fortificado
de Micronutrientes, de carácter intersectorial y expandió sus La cadena de suministro de Costa Rica está relativamente con-
esfuerzos de fortificación en colaboración con el sector priva- solidada. Dos productores de granos fortificados suministran
do. La fortificación obligatoria de la harina de trigo comenzó a las 11 compañías de molienda de arroz que operan en Costa
en 1997, seguida de la de harina de maíz en 1999, leche y arroz Rica. Los molineros mezclan granos fortificados con arroz no
en 2001 y azúcar en 2003. Ver Tabla 1 para una visión global fortificado en una proporción específica (0.5%) y venden el
de los alimentos fortificado en Costa Rica y el nivel de fortifi- arroz fortificado a través de sus canales de distribución. Los
cación. 11 molineros están representados de manera conjunta bajo
la Asociación Nacional de Industriales del Sector Arrocero de
Contexto legislativo para la fortificación de arroz Costa Rica (ANINSA). La corporación arrocera (CONARROZ)
En el 2001, la Presidencia de la República y el Ministerio de es la única entidad autorizada para importar arroz en una
Salud promulgaron las “Regulaciones para el enriquecimiento cuota fija.
L A FORTIFIC ACIÓN DEL A R ROZ EN A MÉR IC A L ATINA FORTIFICACIÓN DE ARROZ EN COSTA RICA 111
figurA 1: Prevalencia de anemia en niños de preescolar mente alta ingesta per cápita de arroz fortificado como parte de
en Costa Rica; 1982 y 1996 comparado con 2008–2009 la canasta básica, la fortificación del arroz debe haber contribui-
do de forma significativa a estas mejoras en el estatus micronu-
La anemia fue definida como hemoglobina tricional. Se han demostrado reducciones en las deficiencias de
<11g/dI. para niños de edades 6–59 meses
micronutrientes tanto en la población general como en grupos
ENN, 1982 ENN, 1996 ENN, 2008 | 2009
específicos.
35
32.7
Anemia
30
27.9 Los índices de prevalencia de anemia en Costa Rica han dis-
26.4
25.7 minuido significativamente después de la introducción del
25
programa nacional de fortificación.4 Además de por la deficien-
cia de hierro, la anemia puede ser resultado de deficiencias de
20
Porcentaje
de distribución
11.0
9.9 9.8
10 9.4 El gobierno de Costa Rica trabajó en colaboración con el sector
privado desde el comienzo del programa. Se promovieron nego-
5 ciaciones con la asociación de la industria arrocera y se brindó
el tiempo suficiente al sector privado para la implementación de
0 la fortificación obligatoria. De manera importante, en la medida
Nacional Metropolitana Urbana Rural que el precio del arroz es controlado, el Ministerio de Economía
incluyó el costo de la fortificación dentro del costo modelo para
la determinación del precio al mayoreo y menudeo.
Los molineros y distribuidores mejoraron los canales pre-
figurA 4: Prevalencia de ácido fólico
existentes para producir y distribuir arroz fortificado. Dos com-
en mujeres en edad reproductiva de Costa Rica;
pañías del sector privado manufacturan los granos fortificados.
1996 comparado con 2008–2009
El gobierno ayudó a estudiar las diferentes opciones de premez-
cla y sus costos, tomando en cuenta el precio del mercado. Con
Los valores de la OMS fueron usados: <6.8 nmol/L (3ng/mL) para el
folato sérico y <226.5 nmol/L (100 ng/mL) para folato en glóbulos rojos base en el análisis del gobierno sobre la estructura de la cadena
ENN, 1996 ENN, 2008 | 2009 de suministro, los productores de granos fortificados invirtieron
35 en desarrollar tecnología de mezclado para ser instalada en los
31.4 molinos de arroz.
30
Los costos y responsabilidades fueron compartidos entre
25
24.7 los sectores público y privado
23.3
Una parte significativa del costo de desarrollar un programa
20 19.1 de fortificación del arroz fue cubierta por el sector privado,
Porcentaje
figurA 5: Prevalencia de nacimientos con defectos en el tubo neural (DTN) en Costa Rica; 1987–2008
Programa de fortificación
20
18
16
Prevalencia por 10,000 nacimientos
14
12
10
0
87
97
07
91
01
95
05
92
02
89
99
96
06
93
94
03
04
88
98
08
90
00
19
19
20
19
20
19
20
19
20
19
19
19
20
19
19
20
20
19
19
20
19
20
Año
Conclusión Referencias
Costa Rica es un modelo de implementación exitosa del pro- 1. Ministerio de Salud. Encuesta Nacional de Nutricion:
grama de fortificación del arroz. Se atribuye el éxito del pro- 2 Fasciculo Micronutrients (National nutrition survey:
grama a la experiencia del país respecto a la fortificación de Part 2 Micronutrients). San Jose: Ministerio Salud, 1996
otros alimentos, la centralización de la industria arrocera, un 2. Barboza Arguello M de la P, Umana Solis LM. Impacto
buen entendimiento del ambiente de la industria arrocera y la de la fortificación de alimentos con acido fólico en los defectos
cadena de distribución, el fuerte liderazgo gubernamental, el del tubo neural en Costa Rica (Impact of the fortification
involucramiento temprano y apoyo de los sectores privado y of food with folic acid on neural tube defects in Costa Rica).
público, y un fuerte énfasis en la importancia del monitoreo Rev Panam Salud Publica 2011;30:1–6.
y cumplimiento. El gobierno también ha monitoreado el im- 3. Forsman C, Milani P, Schondebare JA et al. Rice fortification:
pacto positivo que ha tenido el programa de fortificación en a comparative analysis in mandated settings.
la salud pública. La fortificación obligatoria elimina la necesi- Ann N Y Acad Sci 2014;1324:67–81.
dad de elevar los precios de mercado y de crear campañas de 4. Rodríguez S, Blanco A, Cunningham L et al. [Prevalence of
concientización. nutritional anemia in women of reproductive age. Costa Rica.
En general, la experiencia de Costa Rica brinda valiosas National nutrition survey, 1996]. Arch Latinoam Nutr
lecciones para la exitosa implementación de un programa de 2001;51(1):19–24.
fortificación del arroz. Aunque el panorama molinero de arroz 5. Costa Rica National Nutrition Survey 2008–2009 Accessed at:
en muchos países es más fragmentado, haciendo la implemen- http://ghdx.healthdata.org/record/costa-rica-national-nutrition-
tación más compleja desde una perspectiva tecnológica, orga- survey-2008-2009. Accessed April 6, 2015.
nizativa y de salud pública. Costa Rica ha demostrado que la
fortificación del arroz puede ser implementada exitosamente y
puede contribuir significativamente a la reducción de deficien-
cias de micronutrientes.
116 GLOSARIO
Glosario
(Traducción al castellano)
Este glosario se basa en las siguientes fuentes: tificados se mezclan con arroz no fortificado en una proporción
Allen L, de Benoist B, Dary O et al, eds. Directrices de 1: 100 (1%).
sobre fortificación de alimentos con micronutrientes.
Ginebra: Organización Mundial de la Salud | Comida Arroz no fortificado
y Organización de las Naciones Unidas, 2006. Arroz molido sin fortificación.
nicas establecidas mediante el uso de indicadores objetivos y luar la efectividad y el impacto del programa en la población
mesurables. objetivo, y proporcionar evidencia de que el programa está al-
canzando sus objetivos nutricionales.
Deficiencias de micronutrientes
Una forma de desnutrición causada por una ingesta insuficiente Extrusión
de vitaminas y minerales (también conocidos como micronu- Tecnología para fabricar los granos fortificados. Para producir
trientes), que son esenciales para la salud humana, el creci- los granos reconstituidos fortificados se pasa la masa de harina
miento, el desarrollo y su funcionamiento; también es conocida de arroz, que contiene la premezcla fortificante, por un extrusor.
como malnutrición por falta de micronutrientes o hambre ocul- Los granos extruidos, que se confeccionan para asemejarse a los
ta. Las deficiencias de micronutrientes son una de las principa- granos de arroz, se mezclan entonces con el arroz no fortificado
les causas de mala salud y discapacidad, y afectan a más de dos en una relación entre 0,5% y 2%, similar a la tecnología de re-
mil millones de personas en todo el mundo. cubrimiento. La extrusión permite el uso de los granos de arroz
partidos como un insumo y se puede llevar a cabo en frío, tibio
Efectividad o caliente, lo que influye en la apariencia y el rendimiento del
Se refiere al impacto de una intervención en la práctica (con- grano fortificado final producido.
diciones de la vida real). En comparación con la eficacia, la
efectividad de un programa de fortificación se verá limitada por Fortificación
factores tales como la falta de consumo o bajo consumo de los Práctica de aumentar deliberadamente el contenido de micronu-
alimentos fortificados. trientes esenciales en un alimento, es decir, de vitaminas y mi-
nerales, a fin de mejorar la calidad nutricional de los alimentos
Eficacia y proporcionar un beneficio para la salud pública con un riesgo
Se refiere a la capacidad de una intervención, como la fortifica- mínimo para la salud. Los micronutrientes esenciales se agregan
ción, para lograr el impacto deseado en circunstancias ideales. para hacer la comida más nutritiva después de ser cosechada.
Esta por lo general se refiere a ensayos o intervenciones experi-
mentales, bien supervisados y controlados. Fortificante
Micronutriente esencial seleccionado en una forma particular
Enfermedades por deficiencia de micronutrientes para fortificar un alimento (por ejemplo, arroz, harina, sal).
Cuando ciertos micronutrientes son muy deficientes debido a
una insuficiente ingesta dietética, una absorción insuficiente Fortificación del arroz distribuido a través
y/o una subóptima utilización de las vitaminas o minerales, se de programas de protección social
pueden desarrollar signos y síntomas específicos, por ejemplo, La fortificación del arroz focalizada se puede lograr mediante la
ceguera nocturna y xeroftalmia a raíz de la deficiencia de vita- fortificación del arroz distribuido a través de redes de seguridad
mina A, o raquitismo a consecuencia de la deficiencia de vita- social, como los programas de alimentación escolar, distribu-
mina D. ción a los grupos pobres o más vulnerables, programas de ali-
mentos por trabajo o la distribución de alimentos en situaciones
Espolvoreado de emergencia. En vista de que la mayoría de los programas de
Tecnología para hacer el arroz fortificado. Los granos de arroz protección social alcanzan a los más vulnerables, fortificar el
blanqueado se espolvorean con una mezcla fortificante en arroz distribuido a través de dichas redes tiene un gran poten-
forma de polvo. Esta tecnología solo se utiliza en los Estados cial para tener un impacto significativo en la salud pública.
Unidos de América y no permite el lavado, la precocción o la
cocción con exceso de agua, ya que dichas prácticas removerían Fortificación obligatoria
los micronutrientes. Fortificación obligatoria y regulada por el gobierno a través de la
legislación de productos alimenticios específicos. Esto significa
Evaluación que todos los alimentos incluidos en la legislación deben ser
Valoración sistemática utilizando criterios que se rigen por una fortificados de acuerdo con las especificaciones prescritas en la
serie de estándares para ayudar en la toma de decisiones. El misma.
propósito principal de una evaluación, además de adquirir in-
formación sobre intervenciones pasadas o en curso, es facilitar Fortificación voluntaria
la reflexión y ayudar en la identificación de cambios en el futuro. Un enfoque impulsado por el mercado donde el producto ali-
En el caso de los programas de fortificación, se traduce en eva- menticio fortificado se mercadea como poseedor de un “valor
118 GLOSARIO
añadido” para el consumidor. Este enfoque depende de la sen- a fin de identificar problemas (tales como el incumplimiento) y
sibilización y educación de los consumidores, de la demanda, y tomar las medidas correctivas para que el programa cumpla con
de la voluntad y capacidad de pagar un poco más por el produc- los objetivos establecidos.
to fortificado.
Monitoreo regulatorio
Garantía de calidad Comprende ambos, el monitoreo interno y externo; el monito-
Se refiere a la ejecución de actividades planificadas y sistemá- reo regulatorio a nivel de comercio minorista también se deno-
ticas necesarias para garantizar que los productos o servicios mina monitoreo comercial. El principal objetivo del monitoreo
cumplen con estándares de calidad. El desempeño de la garan- regulatorio es que los alimentos fortificados cumplan con los
tía de calidad puede expresarse numéricamente al igual que los estándares de nutrientes, calidad y seguridad establecidos an-
resultados de los ejercicios de control de calidad. tes de la implementación del programa. Una vez que el monito-
reo regulatorio demuestre que el programa está funcionando de
Granos fortificados manera satisfactoria, se puede llevar a cabo una evaluación del
Granos fortificados en forma de arroz que contienen la mezcla programa para determinar su impacto.
fortificante (extrusión) o granos de arroz enteros recubiertos
con una mezcla fortificante (revestimiento). Los granos fortifi- Necesidades promedio estimadas (NPE)
cados se mezclan con arroz no fortificado en una proporción de Es el promedio (mediana) de la ingesta diaria de nutrientes que
0,5% a 2% para producir arroz fortificado. se estima necesario para satisfacer las necesidades de la mitad de
los individuos sanos en un determinado grupo de edad y género.
Ingesta recomendada de nutrientes (IRN)
La IRN es la ingesta diaria que satisface los requerimientos de Nivel superior de ingesta tolerable
nutrientes de casi todos los individuos aparentemente sanos en El nivel diario promedio más alto de ingesta de nutrientes que
un grupo poblacional de edad y sexo determinado. se considera no representa ningún riesgo de efectos adversos
para la salud de casi todos (97,5%) los individuos aparentemen-
Mezcla te sanos en un grupo poblacional de edad y sexo determinado.
Se refiere a la mezcla de arroz blanco no fortificado con granos Este nivel se aplica al uso diario durante un período de tiempo
fortificados en proporciones entre 0,5% y 2% para producir prolongado para individuos sanos sin déficits que deban ser co-
arroz fortificado. La mezcla se puede realizar en un molino de rregidos.
arroz, almacén u otro lugar donde el arroz se procesa de forma
centralizada. También existe tecnología para llevar acabo la Recubrimiento
mezcla a pequeña escala. Tecnología para hacer granos fortificados. Los granos de arroz son
recubiertos con una mezcla fortificante y otros ingredientes como
Mezcla fortificante ceras y gomas. Los micronutrientes se rocían sobre la superficie
Mezcla que contiene varios fortificantes, también conocida como del grano de arroz. Los granos de arroz recubiertos se mezclan
premezcla. con arroz no fortificado en una proporción entre 0,5% y 2%.
Monitoreo
Observar y comprobar el progreso o la calidad de un programa
durante un período de tiempo. Para los programas de fortifica-
ción, esto significa la recolección y el análisis continuos de in-
formación relativa a las actividades de ejecución del programa
119
Scaling Up Rice
Fortification
in Latin America and
the Caribbean
120 EDITORIAL
Editorial
The fortification or enrichment of staple food with essential vita- nutritional status of populations. Since the 1940s pioneering
mins and minerals is not a new concept. Since the first trials in policies and programs aimed at eradicating MND – such as the
the 1920s, it has been an effective public health strategy to pre- fortification of sugar with vitamin A in Guatemala – have been
vent micronutrient deficiencies in general populations and to- developed and implemented. Today they are still models for
day many countries in the world fortify one or more staple foods. other countries. Nonetheless, MND remain pervasive through-
The food items most frequently fortified are cereals (wheat and out the region. The most prominent problem remains anemia
maize flour), milk and milk products, edible oils, sugar, salt, and in children and women of reproductive age, of which about half
specialized foods such as fortified blended food. The potential is estimated to be due to iron deficiency, according to the World
for using rice as a vehicle to increase the intake of essential vi- Health Organization. In the region, anemia is a public health
tamins and minerals is huge. Rice is the dominant staple food of problem in 16 out of 17 countries for women of reproductive
approximately half of the world’s population. In Latin America age and in 15 countries for children under the age of five. Other
and the Caribbean (LAC), it supplies on average 27% of daily ca- deficiencies such as zinc, iodine, vitamin A, folate and vitamin
loric intake, ranging from 8% in Central America to 47% in the B12 are widespread or affect specific vulnerable groups, requir-
Caribbean (FAOSTAT). The region produces more than 28 mil- ing public health action.
lion tons of paddy annually – the vast majority in South America
– representing more than 5% of the world’s output. Scaling up rice fortification now
Over the past decades, scaling up of rice fortification has Today, six countries globally have passed legislation for the
been hampered by technological limitations. Today, affordable mandatory fortification of rice, including three in Central Amer-
technology exists to produce fortified rice kernels that look and ica (Honduras, Costa Rica and Panama). However, the law is
taste like non-fortified rice. Advances in coating and extrusion effectively implemented only in Costa Rica at the moment. In
technologies allow micronutrients to be retained effectively August 2016 the Government of the Dominican Republic and
even after long washing and cooking processes, which makes the World Food Programme (WFP) jointly organized the First
rice fortification an effective and affordable strategy. Forum for the Scaling up of Rice Fortification in Latin America
and the Caribbean. This Sight and Life supplement participates
Hidden Hunger in LAC in that effort. In this publication you will find a comprehensive
Globally, micronutrient deficiencies (MND), also known as Hid- overview of why fortifying rice with multiple micronutrients
den Hunger, are the most widespread form of malnutrition, with can be part of an affordable, effective strategy to increase the
over two billion people affected. They generally result from in- intake of essential vitamins and minerals in countries and re-
adequate intake and losses due to insufficient food intake, poor duce the prevalence of conditions that result from them, such
quality diets, poor bioavailability of micronutrients in the foods as chronic undernutrition. This issue is a compilation of origi-
consumed, or frequent infections. MND affect various metabolic nal articles from leading public health professionals, as well as
processes, resulting in the impairment of sensory and cognitive articles from the supplement on Scaling Up Rice Fortification in
functions, the weakening of the immune system and ultimately Asia published in 2015 in collaboration between Sight and Life
increases morbidity and mortality. Beyond the human factor, and the WFP.
the consequences of MND throughout the life cycle result in We hope that you will find in it the inspiration to redouble
low productivity and net economic losses for households, com- efforts to scale up rice fortification in the Latin American and
munities and nations. In 2012, The Copenhagen Consensus (a Caribbean region.
group of leading economists and development experts) iden-
tified micronutrient interventions as among the top ten most The editorial team
cost-effective actions for development. Clearly there is a moral Laura Irizarry, Marc-André Prost, Diana Murillo
imperative to tackle MND, but doing so also makes good eco- WFP Regional Bureau for Latin America and the Caribbean
nomic sense.
In LAC, significant economic progress has been made in
the past decade, resulting in improvements in the health and
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A EDITORIAL 121
© WFP/Sabrina Quezada
Current Situation of
Micronutrients in Latin
America and the Caribbean:
Prevalence of Deficiencies and National
Micronutrient Delivery Programs
A group of adolescent school girls in Haiti. Reaching adolescent girls with iron and folic acid will not only help them perform better in school,
but also help the world reach the new global nutrition targets.
health implications worldwide. Vitamin A deficiency alters vari- in multiple metabolic routes such as DNA methylation and
ous functions in the body and can lead to many negative health nucleic acid synthesis.11,36 Folate is found naturally mainly
consequences, such as a weakened immune system, growth re- in vegetables, while folic acid is used in fortified foods.37 Low
tardation in children, xerophthalmia, an increase in the burden levels of folate increase the risk of neural tube defects, which
of infectious diseases, and an increase in the risk of death. Xe- is why folic acid intake is critical before gestation and during
rophthalmia is the most specific consequence of the deficiency the first weeks of pregnancy, when the neural tube closure
and is the leading cause of blindness in children worldwide.23 occurs.38–40
Night blindness often appears during pregnancy, a likely conse- Vitamin B12 in its natural form is only present in animal
quence of a pre-existing marginal status of this vitamin due to foods, so that the deficit is more common among populations
increased nutritional demands during pregnancy and frequent with low intake of these foods and vegans.41 The absorption of
infections. It has been observed that the administration of vita- vitamin B12 from food is lower in older adults, who are at in-
min A reduces the risk of death in children 6–59 months of age creased risk of gastric atrophy, altered production of intrinsic
in the range of 23–30%.24,25 A 2009 WHO report indicated that factor, and acid secretion, all necessary for the proper absorp-
vitamin A deficiency affected 190 million preschool children tion of this vitamin.41 The deficiency of both vitamins is asso-
and 19.1 million pregnant women who reside in countries with ciated with hematological disorders.42 Vitamin B12 deficiency
a higher risk of vitamin A deficiency.23 can also lead to clinical and subclinical neurological disorders
and other disorders in the absence of a hematological deterio-
Vitamin D deficiency ration.43 Therefore, folate and vitamin B12 deficiencies have
Vitamin D (calciferol), which consists of a group of fat-soluble the potential to be considered a public health problem. In
sterols, is an essential micronutrient for the homeostasis of 2004 a review estimated the prevalence of deficiency of both
calcium and phosphorous.26 Moreover, new functions of vi- vitamins in America, finding that at least 40% of the popu-
tamin D on health have been discovered, primarily through lation had a deficiency or marginal vitamin B12 status, while
research on how its nuclear receptor can mediate control of folate deficiency was less common.44
target genes.27 Human beings obtain vitamin D from two main
sources: photosynthesis in the skin by the action of solar ul-
traviolet B rays, and dietary intake. Vitamin D can be found
“L atin America has a
naturally in many forms, but the two major physiologically long history of implementing policies
relevant forms for humans are vitamin D2 (ergocalciferol),
derived from plant sources, and vitamin D3 (cholecalciferol),
and programs to eradicate
synthesized in the skin and obtained from animal sources. Vi- micronutrient deficiencies”
tamin D deficiency is characterized by inadequate mineraliza-
tion and demineralization of the skeleton. In children it causes
rickets, and in adults can precipitate and exacerbate osteope- Other micronutrient deficiencies
nia, osteoporosis and bone fractures.26 Studies have shown Generally there is little information on the nutritional status of
that vitamin D therapy increases muscle strength in deficient populations regarding other micronutrients essential to wellbe-
subjects.28,29 Results of epidemiological studies have linked ing, such as copper, selenium, vitamin E, vitamin K, thiamin,
vitamin D deficiency with an increased risk of certain common niacin, riboflavin, biotin, pyridoxine and vitamin C.
cancers, autoimmune diseases, hypertension and infectious Latin America has a long history of implementing policies
diseases.30–33 The concentration of plasma 25-hydroxyvitamin and programs to eradicate micronutrient deficiencies, and as
D (25-OHD) has been regularly used to identify people at risk a result of these, the prevalence of many of these deficien-
of vitamin D deficiency and, on a population basis, to consider cies has been reduced. However, many gaps still exist and in
the adequacy of vitamin D distribution. However, there is cur- many cases the deficiencies are still public health problems
rently no overall consensus on the cutoff to define the state in the region. Considering the above, the objectives of this
of vitamin D.34 Vitamin D deficiency has the potential to be a review are 1) to describe the prevalence of micronutrient de-
public health problem.35 The magnitude of this deficiency in ficiencies in the region, taking as reference the results of a
Latin America is unknown. recent systematic review by our group;52 2) describe existing
country programs dedicated to the prevention of these defi-
Folate and vitamin B12 deficiency ciencies; and 3) briefly discuss the immediate requirements
Folate and vitamin B12 share functions and metabolic path- for closing the gaps between the epidemiological data and the
ways, which define the reserve of methyl donor groups used program data.
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A CURRENT SITUATION OF MICRONUTRIENTS IN LATIN AMERICA AND THE CARIBBEAN 125
Methodology
Systematic review to determine prevalence of
micronutrient deficiency in Latin America
The methodology used in the systematic review has been pub-
lished in detail.45–49 Briefly, the databases available on deficien-
cies of vitamins and minerals were accessed to search for the
latest National Health Survey for each country. This information
was complemented by accessing the web pages of the Ministries
of Health and/or the National Office of Statistics to determine
whether the databases mentioned were up to date. Additionally,
full searches were carried out of research articles published in
PubMed, LILACS and SciELO. We also conducted a search of
other relevant documents that could contain information not
found in the other searches.
The main indicators and parameters used by surveys and
studies selected for the review to determine deficiencies were:
serum retinol for vitamin A, 25-OHD levels for vitamin D, serum
α-tocopherol for vitamin E, serum ascorbic acid for vitamin C,
© Sabrina Quezada
serum thiamine for thiamine, erythrocyte glutathione reductase
(EGRAC) for riboflavin, erythrocyte activity of aspartate amino-
transferase (EAAT) for vitamin B6, serum folate and red cell folate
for folate, vitamin B12 in serum or plasma, serum copper, urinary
iodine, serum or capillary hemoglobin for anemia, serum ferritin
for iron, serum selenium and/or erythrocyte and serum zinc.
A boy eats his lunch in Nicaragua
The cutoffs used for deficiency, insufficient and/or inad-
equate levels varied widely among studies. However, for some
micronutrients classifications with similar cut-off points were no problem < 5% and problem > 5%; and vitamin B12, no prob-
identified: lack of vitamin A as retinol < 20 μg/dL and insuf- lem < 5% and problem > 5%.
ficiency as 20.0–29.9 μg/dL; vitamin D deficiency as 25-OHD
<25 nmol/L, insufficiency as 25–50 nmol/L and inadequacy as Identification of national prevention programs
50–75 nmol/L; vitamin C deficiency as ascorbic acid <0.2 μg/ in Latin America
dL; thiamine deficiency <1.25 μg/dL; folate deficiency as serum The information presented is based on a recent systematic re-
folate <3.2 ng/mL or RBC folate <181 nmol/L; vitamin B12 defi- view of nutrition policies and programs in Latin America and
ciency as serum vitamin B12 <148 pmol/L and marginal levels the Caribbean conducted by the Pan American Health Organiza-
between 148–221 pmol/L; anemia as hemoglobin <11.0 or <12.0 tion and the Micronutrient Initiative.51
or <13.0 g/dL; deficiency in iron reserves in the form of serum
<12 ferritin or <15 or <20 g/L; mild iodine deficiency as urinary Results
iodine 50–99 g/L, moderate between 20–49 mg/L and severe Prevalence of micronutrient deficiencies
<20 g/L; zinc deficiency as serum zinc <65 or <70 μg/dL. Report- in Latin America and the Caribbean
ed units were standardized to facilitate comparisons. A total of 25 nationally representative surveys and studies were
The magnitude of the public health problem of deficiency found (Table 1) which reported data of the nutritional status of
of each micronutrient was defined according to the following iron (anemia), zinc, vitamin A, vitamin D, folate and/or vitamin
cut-off points in prevalence: 1) anemia (iron), ≤ 4.9%, not a B12, mainly in children under 6 years of age (Table 2) and wom-
public health problem; 5%–19.9%, mild; 20%–39.9%, moder- en of childbearing age (Table 3). The surveys were conducted
ate; ≥ 40%, severe, according to WHO recommendations;50 zinc, between 2000 and 2010.
no problem < 20%, problem > 20%, according to international
recommendations;21 vitamin A, no problem < 2%, mild ≤ 2% Iron and anemia
to <10%, moderate ≤10% to < 20%, and severe ≥ 20%, accord- According to the latest information available in children (Ta-
ing to WHO recommendations;23 vitamin D, no problem < 5%, ble 2), anemia is not a public health problem in Chile and
5–19.9% mild, 20–39.9% moderate and ≥ 40% severe;45 folate, Costa Rica (<5%). Countries such as Argentina and Mexico
126 CURRENT SITUATION OF MICRONUTRIENTS IN LATIN AMERICA AND THE CARIBBEAN
have made progress, with anemia in children being a mild dor, Guatemala and Colombia and in women of childbearing
public health problem (<20%). In Nicaragua, Brazil, Ecuador, age in Mexico and Ecuador. Countries with the highest risk of
El Salvador, Cuba, Colombia, the Dominican Republic, Peru, zinc deficiency – the risk of deficiency was estimated from the
Panama and Honduras, anemia in children remains a moder- prevalence of inadequate zinc intake in the population and
ate public health problem (20–40%). In Guatemala, Haiti and the prevalence of stunting in children <5 years, defining high
Bolivia, anemia in children is a serious public health problem, risk as a prevalence of inadequate intake > 25% coupled with
with prevalence rates above 40%. a prevalence of stunting > 20% – were Belize, Bolivia, El Salva-
Anemia in women of childbearing age (Table 3) is not dor, Guatemala, Haiti, Honduras, Nicaragua and Saint Vincent
a public health problem (<5%) in Chile, while in Colombia, and the Grenadines.47
El Salvador, Costa Rica, Nicaragua, Ecuador, Mexico, Peru,
Honduras and Argentina it is a mild public health problem Vitamin A
(<20%). Nevertheless, in Guatemala, Brazil, the Dominican A total of 10 national surveys and six representative studies
Republic and Bolivia it is a moderate public health problem were identified. Guatemala and Nicaragua have virtually eradi-
(20–40%), and in Panama and Haiti it is a severe public cated vitamin A deficiency (<20 μ g/dL) in children less than
health problem (> 40%). 6 years of age (Table 2). In Costa Rica, Cuba, El Salvador and
Panama, vitamin A deficiency ranges from 2.8–9.4%, repre-
Zinc senting a mild public health problem (<10%). In Peru, Hondu-
In the four countries with representative data for plasma ras, Argentina, Ecuador and Brazil, the range varies between
zinc, it is observed that the prevalence of zinc deficiency is 14.0–17.4%, being classified as a moderate public health prob-
above 20% in children under 6 years of age in Mexico, Ecua- lem (10–20%), while in Colombia, Mexico and Haiti there is a
TablE 1: National surveys in Latin America that include data on micronutrient status of population
tablE 2: Prevalence of micronutrient deficiencies and magnitude of public health problem in children less than 6 years of age
in Latin American countries with representative dataa
a
Cut-off points used to determine severity of public health problem according to prevalence: Anemia: no problem ≤4.9%, mild 5–19.9%, moderate 20–39.9%, severe ≥40%;
Zinc deficiency: no problem < 20%, problem >20%; Vitamin A deficiency: no problem <2%, mild ≤2% to <10%, moderate ≤10% to <20% and severe ≥20%; Vitamin D
deficiency: no problem <5%, mild 5–19.9%, moderate 20–39.9%, severe ≥40%; Folate deficiency: no problem <5%, problem >5%.
b
Prevalence of insufficiency: 24% in preschool children and 10% in school-aged children.
severe problem (> 20%). It is important to note that the highest representative studies, such as Colombia (10–12%),52,53 Brazil
prevalence of deficiency is among children from indigenous (9%),54 Argentina (3%),55 and more recently Chile, with data for
communities. When assessing the change in the prevalence in preschool children in southern areas (64%).56
those countries with more than one survey, a significant reduc-
tion in vitamin A deficiency is observed in countries in Central 3.1.5 Folate and vitamin B12
America, while in South American countries the deficiency has The few available national data for folate generally show a preva-
increased over time.48 lence of deficiency lower than 5% in different population groups
In women of childbearing age in El Salvador and Nicaragua, (Tables 2 and 3). Mexico reports a prevalence of 3.2% in chil-
vitamin A deficiency is not a public health problem, while in dren less than 6 years of age. In Argentina, only 2.7% of pregnant
Mexico and Peru there is a mild problem, and in Brazil it is mod- women and 1.3% of women of childbearing age are deficient,
erate (Table 3). while in Costa Rica and Chile 1.4% and 0.6%, respectively, of
older adults are deficient. When comparing with earlier data, a
3.1.4 Vitamin D significant reduction in the prevalence of folate deficiency is ob-
The exact magnitude of the inadequacy of vitamin D in the re- served in the region; this can be attributed to existing universal
gion is unknown. Only Mexico has representative data on chil- folic acid fortification programs, which in some countries is also
dren. Overall, 54.0% of Mexican children present vitamin D associated with a reduction in neural tube defects.57
inadequacy, with a prevalence of deficiency and insufficiency In the case of vitamin B12, only a few countries have national
in preschool children of 24% and 30%, respectively, and a prev- data. In Mexico, 5.5% of preschool children and 8.5% of adult
alence of deficiency and insufficiency in school-aged children women have serum levels considered to be low (<148 pmol/L).
of 10% and 18%, respectively. Some countries have data on In Costa Rica, 4.8%, 6.4%, 2.9% and 5.3% of women of child-
the prevalence of vitamin D deficiency in children from non- bearing age, adult women, adult men, and elderly, respectively,
128 CURRENT SITUATION OF MICRONUTRIENTS IN LATIN AMERICA AND THE CARIBBEAN
A young girl in Bolivia. Approximately 80% of children in Bolivia under the age of two are anemic. Chispitas – a multimicronutrient powder
that contains iron – is a weapon in the fight against childhood anemia.
had low serum levels. In Colombia, the prevalence of marginal programs for pregnant women, fortification of salt with iodine
serum vitamin D3 levels (<221 pmol/L) was 21.0%, 59.9% and and fortification of wheat flour with iron and one or more vi-
37.3% among children under 18, pregnant women and women of tamins. Eighty percent (80%) of countries indicate having at
childbearing age, respectively. In Argentina, 49.1% of pregnant least one program providing iron supplements to children 6–59
women and 11.9% women of childbearing age had marginal se- months of age, while 75% indicate having a program to deliver
rum levels. It is difficult to draw conclusions regarding the defi- vitamin A supplements to children 6–59 months old and 60%
ciency of folate and vitamin B12 due to lack of consensus on the having a program that delivers multiple micronutrient powders
cut-off points to distinguish between normal and deficient. for home food fortification. Only five countries (25%) indicate
providing zinc supplements for the treatment of diarrhea in
3.2 National micronutrient delivery programs children less than 5 years of age. Similarly, 25% of the countries
in Latin America in the region indicate implementing mass fortification of sugar
Table 4 describes the various micronutrient supplementation with vitamin A and of corn flour with iron and at least one other
and fortification programs that are currently implemented at na- micronutrient. Finally, according to the data most recently col-
tional level in the region and the number of countries that have lected, only Costa Rica, Nicaragua and Panama report having a
adopted each of these strategies. Ninety percent (90%)18,20 of universal rice fortification program; however, only Costa Rica is
countries in the region indicate having iron supplementation currently implementing it.
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A CURRENT SITUATION OF MICRONUTRIENTS IN LATIN AMERICA AND THE CARIBBEAN 129
tablE 3: Prevalence of micronutrient deficiencies and magnitude of public health problem in women of reproductive age
in Latin American countries with representative dataa
a
Cutoff points used to determine severity of public health problem according to prevalence: Anemia: no problem ≤4.9%, mild 5–19.9%, moderate 20–39.9%, severe ≥40%;
Zinc deficiency: no problem < 20%, problem >20%; Vitamin A deficiency: no problem <2%, mild ≤2% to <10%, moderate ≤10% to <20% and severe ≥20%; Vitamin D
deficiency: no problem <5%, mild 5–19.9%, moderate 20–39.9%, severe ≥40%; Folate deficiency: no problem <5%, problem >5%.
© Hetze Costa
tablE 4: National programs that provide micronutrients in Latin America, as reported by countries
Supplementation with vitamin A Children 6–59 m 15 (75) Argentina, Belize, Bolivia, Brazil, Colombia,
Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala,
Honduras, Mexico, Nicaragua, Panama, Peru,
Dominican Republic
Supplementation with iron Children 6–59 m 16 (80) Argentina, Belize, Bolivia, Brazil, Chile, Costa Rica,
Peru 2001 (8.7%), El Salvador, Guatemala,
Honduras, Mexico, Nicaragua, Panama, Paraguay,
Peru, Dominican Republic, Uruguay
Multiple micronutrient powders for Infants 6–23 m 12 (60) Argentina, Bolivia, Brazil, Colombia, Ecuador,
home fortification of foods El Salvador, Guatemala, Honduras, Mexico, Peru,
Dominican Republic, Uruguay
Supplementation with iron and folic acid Women of fertile age 7 (35) El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua,
Panama, Paraguay, Dominican Republic
Pregnant women 18 (90) Argentina, Belize, Bolivia, Brazil, Chile, Colombia,
Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala,
Honduras, Mexico, Nicaragua, Panama, Paraguay,
Peru, Dominican Republic, Uruguay
Supplementation with calcium Pregnant women 3 (15) Colombia, El Salvador, Nicaragua
Supplementation with zinc for treatment Children 0–59 m 5 (25) Bolivia, Colombia, El Salvador, Guatemala,
of diarrhea Nicaragua
Universal food fortificationc
Salt (iodine) All 18 (90) Argentina, Belize, Bolivia, Brazil, Chile, Colombia,
Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala,
Honduras, Mexico, Nicaragua, Panama, Paraguay,
Peru, Dominican Republic, Uruguay
Sugar (vitamin A) All 5 (25) Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras,
Nicaragua
Wheat flourc All 18 (90) Argentina, Belize, Bolivia, Brazil, Chile, Colombia,
Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala,
Honduras, Mexico, Nicaragua, Panama, Paraguay,
Peru, Dominican Republic, Uruguay
Maize flourd All 5 (25) Brazil, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Mexico
Rice e
All 3 (15) Costa Rica, Nicaragua, Panama
a
Total number of countries = 20
b 51
Source: Tirado MC et al.
b
Source: Flour Fortification Initiative. www.ffinetwork.org/global_progress/index.php
c
All countries fortify with iron, thiamin, riboflavin, niacin and folic acid, except Brazil (iron and folic acid), Cuba (also includes vitamin B12), Mexico (iron and folic acid),
Uruguay (iron, folic acid and vitamin B12) and Venezuela (iron, thiamin, riboflavin and niacin).
d
Different formulations used among countries: Brazil (iron and folic acid), Costa Rica and El Salvador (iron, thiamin, riboflavin, niacin and folic acid), Guatemala (iron, zinc,
thiamin, riboflavin, niacin, folic acid and vitamin B12), Mexico (iron, zinc, thiamin, riboflavin, niacin and folic acid) and Venezuela (iron, riboflavin, niacin and vitamin A).
e
icaragua and Panama fortify with iron, zinc, riboflavin, niacin, folic acid and vitamin B12; Costa Rica with zinc, thiamin, riboflavin, niacin, folic acid and vitamin B12.
N
Costa Rica is only country with implemented, ongoing program.
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A CURRENT SITUATION OF MICRONUTRIENTS IN LATIN AMERICA AND THE CARIBBEAN 131
figurE 1: Number of micronutrient deficiencies in children under the age of six considered moderate or severe public health
problems in Latin America, according to the most recent national data available
4 Deficiencies
3 Deficiencies
2 Deficiencies
1 Deficiency
No deficiencies
five years of age. Most countries fortify wheat flour with iron and knowledge of users, or of their caregivers, regarding both the ben-
at least one other micronutrient. The first question that arises efits of micronutrients and of the programs themselves. Finally,
is, if countries implement these programs, why do certain mi- limitations in the intake of micronutrients that are delivered by
cronutrient deficiencies persist among women and children? A the program (either supplement or fortified product). In addition,
number of weaknesses in these programs can be identified that unfortunately there are very few available published reports or
might address the query above. First, for example, although not scientific studies reporting either the coverage of programs or
much systematized data exists for the region, it is known that their use by the target population and/or reporting the biological
micronutrient supplementation programs have low coverage, impact of these programs on the population that would permit
usually due to several factors, such as: 1) difficulty in accessing an in-depth understanding of the extent of the limitations pre-
micronutrient distribution systems by users; 2) problems in the viously described and facilitate the implementation of specific
acquisition, distribution, monitoring, quality control and storage actions to overcome these barriers within each context.
of micronutrients; and 3) limitations at the point of delivery of To summarize, certain actions are required to further reduce
micronutrients (knowledge of staff). Second, limitations in the micronutrient deficiencies in Latin America. For example, repre-
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A CURRENT SITUATION OF MICRONUTRIENTS IN LATIN AMERICA AND THE CARIBBEAN 133
sentative data on the prevalence of deficiencies is required, col- dustry in the country and a description of the distribution and
lected either annually, biannually or every five years, to assess consumption of rice by different population subgroups and, spe-
and redefine, if necessary, policies and programs currently deliv- cifically, the most vulnerable groups, which indicates whether
ering micronutrients nationwide. In addition, an analysis of the this strategy can help bridge the gap in these countries.
capabilities countries currently possess to optimize ongoing pro-
grams and, thus, allow them to be more effective, is necessary. An- Conclusions
other alternative is to evaluate, in parallel with actions to optimize Existing data suggest that in recent years the general prevalence
existing programs, the implementation of other strategies to close of micronutrient deficiencies in Latin America has declined, al-
the gap regarding the status of micronutrients in the region. One though there is a significant gap in terms of the data available.
possible strategy is the fortification of rice with one or more micro- However, in several countries, the deficiency of one or more of
nutrients in countries where this strategy is deemed feasible. For these micronutrients remains a public health problem, especial-
this, a prior analysis of the country profile is needed,including a ly in populations or groups with greater economic, geographi-
detailed review of the nutritional situation in the country, a de- cal and/or social vulnerability. Ongoing national micronutrient
scription of existing programs, a characterization of the rice in- delivery programs in the region can and should be optimized to
figurE 2: Number of national programs for delivering micronutrients in Latin American countries
≥ 10 Programs
6–9 Programs
≤ 5 Programs
Schoolgirls in the village of Nazareno, Municipality of Tupiza, in the Department of Potosi, Bolivia,
eat a meal of rice and beans during lunch in March 2010
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A CURRENT SITUATION OF MICRONUTRIENTS IN LATIN AMERICA AND THE CARIBBEAN 135
be more effective and cost-effective in their management, but 12. Means RT, Jr., Krantz SB. Progress in understanding the
studies and analyses are needed to fully understand the limita- pathogenesis of the anemia of chronic disease. Blood
tions governments experience in their capacity to achieve these 1992;80(7):1639–47.
goals. Finally, in certain countries in the region, ongoing pro- 13. Tomkins A. Assessing micronutrient status in the presence
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R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A INTRODUCTION TO RICE FORTIFICATION 137
Introduction to
Rice Fortification
Peiman Milani Introduction
PATH Micronutrient deficiencies affect more than two billion people
worldwide and are especially prevalent in developing countries.
Cecilia Fabrizio, Jennifer Rosenzweig Also referred to as Hidden Hunger, micronutrient deficiencies
World Food Programme Regional Bureau for Asia impair physical growth and cognitive development and have
long-term effects on health, learning ability, and productivity.
Consequently, micronutrient deficiencies increase morbidity
Key Messages and mortality across the lifespan and have a negative impact on
∙ Where rice is a staple food, and micronutrient social and economic development.1
deficiencies are widespread, making rice more nutritious Rice is a staple food for more than three billion people across
by fortifying it with essential vitamins and minerals can the globe. In some countries, including Bangladesh, Cambodia
make a significant contribution to addressing micro- and Myanmar, rice contributes as much as 70% of daily en-
nutrient deficiencies and improving public health. ergy intake. This presents a nutritional problem: milled rice is
∙ Decades of experience have proven that large- a good source of energy, but a poor source of micronutrients.2
scale food fortification is a sustainable, safe and effective Therefore, where rice is a staple food, making it more nutritious
intervention with significant public health impact. through fortification with essential vitamins and minerals is a
∙ Rice fortification, like all other food fortification, should proven and cost-effective intervention to increase micronutri-
be one intervention within a broad multisectoral ent intake among the general population.3
strategy to improve micronutrient health.
∙ Current technology can produce fortified rice that is safe,
and that looks, tastes and can be prepared the same as
“Rice is a staple food
non-fortified rice. Consumption of fortified rice increases for more than three billion people
micronutrient intake without requiring consumers to
change their buying, preparation or cooking practices.
across the globe”
∙ L arge-scale rice fortification is most successful when
driven by a multisectoral coalition, which includes The Lancet 20084 and 20135 Maternal and Child Nutrition
national government, the private sector, and civil Series, the Copenhagen Consensus6 and Scaling Up Nutrition
society organizations. (SUN) Movement all recognize and endorse staple food fortifica-
∙ Rice fortification has the greatest potential for public tion as a sustainable, cost-effective intervention with a proven
health impact when it is mandated and well regu- impact on public health and economic development. Reducing
lated. When this is not feasible, the fortification of rice micronutrient deficiencies and undernutrition has the potential
distributed through social safety nets is an effective to reduce by more than half the global burden of disability for
alternative to reach populations who can most benefit. children under age five, to prevent more than one third of global
∙ The cost of rice fortification is determined by child deaths per year, and, in Asia and Africa, to boost GDP by
context-specific variables. Thus, it is not possible to up to 11%.7
calculate a universal cost figure. However, based on This article provides an overview of large-scale rice fortifica-
experience in 15 countries, four of which are in Asia, the tion, and highlights important considerations for its introduc-
retail price for fortified rice may rise by from 1% to 10%. tion, implementation and scale-up. For definitions of the ter-
As rice fortification is scaled up, it will achieve economies minology presented in this article, please refer to the glossary
of scale, which will reduce costs. (p.223).
138 INTRODUCTION TO RICE FORTIFICATION
Magnitude of
Hidden Hunger
Prevalence of Low
Mild Urinary Iodine (%)
Importance of addressing micronutrient deficiencies min D are also highly prevalent.1 Figure 1 demonstrates the
Micronutrient deficiencies occur when a diverse and nutrient- global landscape of micronutrient deficiencies, also called Hid-
rich diet (i.e., one that includes animal-source foods such as den Hunger.
meat, eggs, fish, dairy, as well as legumes, cereals, fruits and
vegetables) is neither consistently available nor consumed
in sufficient quantities. In addition, gut inflammation and ill-
“Although more prevalent in LICs
nesses (such as diarrhea, malaria, helminthiasis [worms], TB, and MICs, micronutrient deficiencies
and HIV/AIDS) affect a person’s ability to absorb micronutri-
ents and can lead to deficiencies. In low- and middle-income
also represent a public health problem
countries (LICs and MICs) multiple micronutrient deficiencies in industrialized countries”
tend to coexist, as they share common causes.5
Although more prevalent in LICs and MICs, micronutrient
deficiencies also represent a public health problem in indus- Rice fortification: Cost-effective intervention
trialized nations and in populations suffering from overweight to improve micronutrient health
and obesity. The increased consumption of highly processed, While milled rice is a good source of energy, it is a poor source
energy-dense but micronutrient-poor foods in industrialized of micronutrients. Therefore, in countries with widespread
countries, and in countries in social and economic transition, micronutrient deficiencies and large per capita rice consump-
is likely to adversely affect their populations’ micronutrient in- tion, making rice more nutritious through fortification can
take and status.1 effectively increase micronutrient intake.3 Decades of expe-
Deficiencies in iron, zinc and vitamin A are the most com- rience and evidence have proved that large-scale staple food
mon types of micronutrient deficiencies, and are among the top and condiment fortification is a safe and cost-effective inter-
ten causes of death through disease in developing countries. In vention to increase vitamin and mineral intake among the
addition, deficiencies in B vitamins, iodine, calcium and vita- general population.
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A INTRODUCTION TO RICE FORTIFICATION 139
Blend
0.5 – 2% ratio
Milled rice Fortified
rice
Paddy Rice mill
rice
Broken | Fortified
head rice kernels
Add vitamins
& minerals
(premix)
Rice fortification builds upon the global success and long- after preparation and cooking. Thus, micronutrient intake can
established evidence base for safe and effective flour and salt be increased without requiring consumers to change their rice
fortification programs. Wheat and maize flour have been suc- buying, preparation, or cooking practices.
cessfully fortified with iron, folic acid and other micronutrients
for more than 60 years. Salt’s nearly century-old history of io-
dine fortification has resulted in a dramatic reduction in global
“The past decade
iodine deficiency. has seen a significant evolution
From a regulatory, public health and nutrition point of view,
rice fortification is very similar to maize and wheat flour fortifica-
of cost-effective rice fortification
tion. However, from an implementation and technical perspec- technologies”
tive, fortifying rice differs significantly from fortifying flour.
Rice fortification, like other food fortification, should be one
component of a larger integrated and multisectoral strategy Rice fortification technology
to improve micronutrient health that aims to improve dietary and production
diversity and infant and young child feeding practices. This is As illustrated in Figure 2, rice fortification that retains micro-
because the consumption of fortified foods on their own will fall nutrients after preparation and cooking includes a two-step
short of fulfilling micronutrient gaps for groups with relatively process involving the formation of fortified kernels containing
high micronutrient needs. For example, target populations appropriate vitamins and minerals, and blending of the fortified
such as young children and pregnant or lactating women will kernels with milled rice to create fortified rice.
require additional micronutrient supplementation to meet their Extrusion and rinse-resistant coating technologies produce
requirements. In addition, improved sanitation, good hygiene fortified rice that is effective and acceptable to consumers
practices, and accessible and high-quality preventive and cura- (color, taste and texture). The type of fortificants chosen and
tive health services are essential to sustain a population’s good the technology used ensure that fortificants remain stable and
micronutrient health. bioavailable under different conditions of storage, transporta-
In the 1940s, the Philippines began fortifying rice with thia- tion, preparation, and cooking. For additional information on
min, niacin and iron. This resulted in the successful elimination fortification technologies, please refer to the contribution by
of beriberi, a severe public health problem caused by thiamin Montgomery et al (p. 159).
deficiency. In 1952, the Philippines pioneered the first manda- As shown in Figure 3, when rice fortification is introduced,
tory rice fortification legislation requiring all rice millers and the rice supply chain is adapted to incorporate fortified kernel
wholesalers enrich the rice they milled or traded.8 production and blending. This also requires the integration of
Since these early efforts, the past decade has seen a signifi- additional quality assurance, quality control and regulatory
cant evolution of cost-effective rice fortification technologies monitoring.
that are unlocking opportunities to significantly contribute to Conducting a rice landscape analysis (pp. 199–209) is
the reduction of micronutrient deficiencies. Affordable technol- strongly recommended to determine how to integrate fortified
ogy is available to produce fortified rice that looks, smells and kernel production and blending into the rice supply chain, and
tastes the same as non-fortified rice, with its nutrients retained to assess the potential health impact. The integration of the
140 INTRODUCTION TO RICE FORTIFICATION
Input Processors
Farmers Blending Distributors Consumers
suppliers (millers)
Fortified
Regulatory and
kernel
program environment
producers
Fortificant
suppliers
additional fortification steps has to take into account the fol- the evidence for recommended micronutrients and standards,
lowing aspects: the structure and capacity of the rice industry; please refer to the contributions de Pee et al (Trials, p. 143 and
the complexity of the existing rice supply chain; the existing Standards, p. 165).
distribution channels; consumer consumption and purchas-
ing preferences; and the policy and regulatory environment.
Results of the rice landscape analysis also provide valuable
“From a public health and nutrition
information for strategic decisions regarding the delivery op- point of view, the research and
tions for fortified rice, which stakeholders to engage, and how
to adapt the regulatory and policy environment.
recommendations related to wheat flour
fortification can also be applied
Recommended micronutrients
for inclusion in fortified rice
to rice fortification”
From a public health and nutrition point of view, the research
and recommendations related to wheat flour fortification can Target populations for rice fortification
also be applied to rice fortification. However, it is important The potential for individuals to benefit from rice fortification var-
to consider the differences between rice and flour in terms of ies across the course of a lifetime, and depends on micronutri-
nutrient content and any technological aspects that warrant ent requirements, dietary intake, the amount of rice consumed,
changes of the recommendations when fortifying rice instead and the potential of fortified rice to fill micronutrient gaps. For
of flour. Based on the evidence available, it is recommended to example, women of reproductive age (19–45 years old) have
consider fortification with the following micronutrients: iron, moderate to high micronutrient requirements and consume a
vitamin A, vitamin B9 (folic acid), vitamin B6 (pyridoxine), significant amount of rice. Therefore, they are likely to consume
vitamin B12 (cobalamine), vitamin B1 (thiamin), vitamin B3 a sufficient quantity of fortified rice to meet their micronutrient
(niacin) and zinc.9 However, the determination of which mi- needs. However, pregnant women have increased micronutri-
cronutrients should be included and at what level depends on ent needs. Although the fortified rice they consume will help
the target population’s micronutrient intake, the prevalence meet these needs, it is unlikely to fully meet them. Therefore,
of micronutrient deficiencies, and access to, and consump- other interventions such as iron/folate or multiple micronutri-
tion of, other fortified foods. Each country introducing rice ent supplementation will still be required. Young children aged
fortification will need to develop fortification standards, tak- 6 to 23 months, likewise, have relatively high micronutrient
ing into account its local micronutrient situation and existing needs, yet consume only small quantities of rice. Therefore, for-
micronutrient interventions. For additional information on tified rice will not be sufficient to fill their micronutrient gap. For
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A INTRODUCTION TO RICE FORTIFICATION 141
© by Wenger
Extruded fortified rice
additional information on specific micronutrient needs across through school feeding programs, emergency distributions, or
the lifecycle, please refer to Figure 4 in the contribution by other programs that support lower socioeconomic groups.
Rudert et al (p. 193). Voluntary fortification is a market-driven approach in which
fortified rice is marketed as a “value-added” product to consum-
Potential delivery options for fortified rice ers. This delivery option has limited potential to achieve a sig-
To achieve public health impact, it must be feasible and sustain- nificant public health impact, as it relies on consumer aware-
able to fortify a significant portion of the rice consumed, espe- ness, demand generation and the willingness and ability to pay
cially for the target populations that can most benefit from its slightly more for the fortified rice. For additional information on
consumption. Mandatory fortification, in which legislation and delivery options for fortified rice, please refer to the contribu-
regulations require the fortification of all rice to a specific stan- tion by Codling et al (p. 170).
dard, has the greatest potential for public health impact. When
fortification is well regulated and enforced, the entire popula-
tion will consume fortified rice without having to change pur-
“The cost of rice fortification
chasing or consumption practices. Costa Rica has successfully is determined by a multitude of
implemented mandatory rice fortification since 2001. For addi-
tional information on Costa Rica’s successful experience, please
context-specific variables,
refer to the contribution by Tacsan et al (p. 212). and thus it is not possible to calculate
Mandatory fortification may not always be feasible, due to the
structure of the rice industry, the complexities of the rice supply
a universal cost figure”
chain, lack of political will, and other contextual factors. There-
fore, the fortification of rice distributed through social safety net Cost of rice fortification
programs provides an alternative delivery option to reach groups The cost of rice fortification is determined by a multitude of
who can most benefit from the consumption of fortified rice. This context-specific variables, and thus it is not possible to calcu-
entails fortifying rice distributed for free, or at a subsidized cost, late a universal cost figure. The cost of fortified rice will de-
142 INTRODUCTION TO RICE FORTIFICATION
pend upon the structure and capacity of the rice industry, the References
complexity of the rice supply chain, the policy and regulatory 1. Allen L, de Benoist B, Dary O et al, eds. Guidelines on food
environment, and the scale of the relevant program. However, fortification with micronutrients. Geneva: World Health
based on the experience thus far in 15 countries, four of which Organization/Food and Agriculture Organization, 2006.
are in Asia, the retail price increase for fortified rice ranges 2. Champagne ET, Wood DF, Juliano BO et al. The rice grain and
from an additional 1% to 10%. As rice fortification expands, its gross composition. In: Champagne ET, ed. Rice: Chemistry and
production and distribution achieve economies of scale and Technology. 3rd ed. St Paul, MN, USA: American Association of
costs are reduced.10 Cereal Chemists, 2004; pp. 77–107.
During the introductory phase of rice fortification costs will 3. Beretta Piccoli N, Grede N, de Pee S et al. Rice fortification: its
be incurred for mobilizing stakeholder support, conducting a potential for improving micronutrient intake and steps required for
rice landscape analysis, developing a business case, carrying implementation at scale. Food Nutr Bull 2012;33(4):S360–S372.
out trials for logistical feasibility and consumer acceptability, 4. Black RE, Allen LH, Bhutta ZA et al. Maternal and Child
policy development, and general project management. The rice Undernutrition Study Group. Maternal and child undernutrition:
landscape analysis will inform strategic decisions regarding the global and regional exposures and health consequences.
source and production of fortified kernels, blending locations, Lancet 2008;371:243–260.
delivery options, and the scale of operations. During the imple- 5. Bhutta ZA, Das JK, Rivzi A et al. Evidence-based interventions for
mentation phase, capital investments will be needed and recur- improvement of maternal and child nutrition: what can be done
ring costs will be incurred for the production and distribution or and at what cost? Lancet 2013;382:452–77
sale of fortified rice. Recurring costs include fortified kernel pro- 6. Copenhagen Consensus 2012 available at
duction, transportation, blending, quality assurance and quality www.copenhagenconsensus.com/copenhagen-consensus-iii.
control, as well as continuing policy development and general Accessed May 18, 2015.
project management. In the scale-up phase, fortified rice pro- 7. Haddad L. Ending Undernutrition: Our Legacy to the Post 2015
duction and distribution expand. This expansion should result Generation. Sussex, UK: Institute of Development Studies in
in greater efficiency of the supply chain, and economies of scale. partnership with the Children’s Investment Fund Foundation, 2013.
8. Forsman C, Milani P, Schondebare JA et al. Rice fortification: a
Conclusion comparative analysis in mandated settings. Ann N Y Acad Sci
The number of countries introducing rice fortification is grow- 2014;1324:67–81
ing, with Asian and Latin American countries spearheading the 9. de Pee S. Proposing nutrients and nutrient levels for rice
effort. Fortifying rice, a staple food for more than three billion fortification. Ann N Y Acad Sci 2014;1324:55–66.
people globally, has the potential to improve population health, 10. Roks E. Review of the cost components of introducing industrially
increase productivity, and promote economic development. fortified rice. Ann N Y Acad Sci 2014;1324:82–91
Rice fortification has benefitted from the experience of wheat 11. Muthayya S, Rah JH, Sugimoto JD et al. The global hidden
and maize flour fortification. Considerations for rice fortification hunger indices and maps: an advocacy tool for action. PLoS One
programs include appropriate decisions on the fortificant pre- 2013;8(6):e67860. doi: 10.1371/journal.pone.0067860
mix, fortification technology, the supply chain, delivery options, (adapted from source).
and the regulatory and monitoring environment. The evolution
of cost-effective technologies, combined with data on effective
nutrient fortification levels, makes rice fortification safe, fea-
sible, effective, and sustainable. Costs are context-specific and,
as programs expand, economies of scale will be achieved and
costs will decline. Strong advocacy is needed to further drive the
public-private partnerships and the government mandates that
help ensure long-term success.
The potential impact of improving micronutrient health in
Asia, Latin America and beyond is vast. The time is right – there
is great momentum to move forward with rice fortification from a
growing number of governments, private sector leaders, and key
global health organizations. Asia and Latin America can seize
the momentum and lead the way in building effective and sus-
tainable rice fortification programs.
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A EVIDENCE AND RECOMMENDATIONS FOR EFFECTIVE LARGE-SCALE RICE FORTIFICATION 143
Overview of Evidence
and Recommendations
for Effective Large-Scale
Rice Fortification
Saskia de Pee Introduction
World Food Programme, Rome, Italy In populations where rice is a major staple food, fortification
Friedman School of Nutrition Science and Policy, of rice with micronutrients has the potential to increase mi-
Boston, USA cronutrient intake. Decades-long experience with fortification
of other staple foods and condiments has proven that large-
Cecilia Fabrizio, Jennifer Rosenzweig scale fortification is efficacious. This article discusses country-
World Food Programme Regional Bureau for Asia level considerations for rice fortification and reviews the
global evidence base for the efficacy and effectiveness of rice
fortification.
Key Messages
∙ Multiple efficacy and effectiveness studies have estab- Country-level considerations
lished the impact of fortified rice on micronutrient status. for food fortification
∙ To prepare for the introduction of fortified rice, Identifying suitable micronutrients for fortification
countries should conduct a landscape analysis to An analysis of which micronutrient deficiencies are likely to
assess feasibility and consumer acceptability. exist and are of public health significance will help determine
Given the existing evidence base, it is not necessary which micronutrients should be used to fortify rice, and in what
to conduct additional efficacy trials prior to the form. The comprehensive publication by the World Health Or-
introduction of rice fortification. ganization (WHO) and the Food and Agricultural Organization
∙ Based on available evidence of efficacy, stability and of the United Nations (FAO), “Guidelines on Food Fortification
needs, the following micronutrients are recommended for with Micronutrients” assists countries in the design and imple-
rice fortification: iron, zinc, and vitamins A, mentation of appropriate food fortification programs and is par-
B1 (thiamin), B3 (niacin) B6 (pyridoxine), B9 (folic acid) ticularly helpful for low- and middle-income countries.1 The
and B12 (cobalamin). WHO/FAO publication provides guidance on the selection of
∙ Rice fortification programs should use technology food vehicles, and which micronutrients to add, in what chemi-
and micronutrient fortificant forms that produce cal form, and in which quantities. More specific rice fortification
fortified rice that is acceptable to consumers, retains guidelines are in development.
micronutrients during storage and preparation, and
releases them for absorption by the body.
∙ When introducing fortified rice, countries should monitor
“An analysis of which micronutrient
implementation. This includes appropriate fortification deficiencies are likely to exist will
(i.e., of fortified kernels and their
blending), storage and distribution, and monitoring
help determine which micronutrients
of acceptance and consumption. should be used to fortify rice”
144 EVIDENCE AND RECOMMENDATIONS FOR EFFECTIVE LARGE-SCALE RICE FORTIFICATION
© WFP / Ximena Loza
figure 1: Factors that determine the efficacy and effectiveness of rice fortification
Impacted by: choice of fortificant forms, choice of fortificant mixture, fortification technology
Efficacy
Effectiveness
Requirements for rice fortification to be effective groups – who prepared and consumed the fortified rice in their
For a rice fortification program to be effective, the following con- homes – showed a reduction in the signs of micronutrient defi-
ditions need to be met: ciencies or changes in micronutrient status. Under these stud-
ies, impact on the micronutrient status of participants was also
a) The micronutrients used to fortify the rice should remain dependent on storage, preparation, acceptance, and unsuper-
stable during storage, i.e., losses over time are limited. vised consumption of the fortified rice.
b) The micronutrients should be retained after preparation
(washing, cooking, discarding excess water). Efficacy studies of fortified rice
c) The fortified rice should be acceptable to the consumer in Since early 2000, thirteen efficacy studies have been pub-
appearance (shape and color), taste and smell. lished that assessed the impact of fortified rice on micronutri-
d) The micronutrients remaining post-cooking should be ent status.2 –14 All studies used fortified kernels that were pro-
available for absorption by the body (see Figure 1). duced using extrusion technology. Each study was conducted
in a controlled environment, and aimed to compare impact on
These requirements are affected by the fortificants’ chemical micronutrient status among individuals who received fortified
forms and formulation, the fortification technology, and any rice, versus individuals who received non-fortified rice and/
possible interaction between micronutrients, or the rice matrix. or micronutrients in supplement form. In nine of the studies,
Finally, the fortified rice needs to be consumed regularly and the rice was fortified only with iron, in one study only with vi-
in the expected quantities by the desired population groups in tamin A,14 and in three studies a combination of micronutri-
order to make a good contribution to micronutrient intake. ents was used, i.e., iron, zinc and vitamin A in the studies by
Pinkaew et al,11,12 and iron, zinc, vitamins A, B1, B6 and B12 and
Global evidence for rice fortification folic acid in the study by Thankachan et al.13 The studies were
The following is a review of two types of studies conducted conducted in low- and middle-income countries, including the
on micronutrient fortification of rice that address the condi- Philippines, India, Nepal, Thailand, Mexico and Brazil. Study
tions illustrated in Figure 1. One type of study examines the populations included children aged 6–23 months, preschool
efficacy of key micronutrients used in rice fortification. These and school-age children, women of reproductive age, and ane-
carefully controlled studies assessed whether consumption of a mic individuals.
given amount of rice, fortified with micronutrients in a specific
concentration, using specific fortificant forms and fortification Iron results
technology, resulted in the micronutrients being absorbed and All 12 efficacy studies on iron-fortified rice used ferric pyrophos-
utilized by the body. In effectiveness studies, people in specific phate (FePP) as the iron form. One study also included a group
population groups were provided with fortified rice under less that received ferrous sulfate.10 Although FePP is not the most
controlled circumstances. The studies assessed whether these bioavailable iron fortificant, it has so far been the only type of
146 EVIDENCE AND RECOMMENDATIONS FOR EFFECTIVE LARGE-SCALE RICE FORTIFICATION
Angeles-Agdeppa I, Philippines 6–9 y old 10 mg/d (2 groups: FePP Hb improved, anemia declined,
Capanzana MV, Barba CV et al2 anemic children and ferrous sulfate) no change of serum ferritin
Beinner MA, Velasquez-Meléndez Brazil 6–24 mo old 23.4 mg/d Hb improved, anemia declined, serum
G, Pessoa MC et al3 anemic children ferritin increased, iron status improved
Hotz C, Porcayo M, Mexico 18–49 y old women (non- 20 mg/d Hb increase non-sign. (p=0.069), plasma ferritin,
Onofre G et al4 pregnant, non-lactating) transferrin receptor, and iron stores improved
Nogueira Arcanjo FP, Santos PR, Brazil 10–23 mo old 56.4 mg/meal, Hb improved,
Leite J et al5 children one meal/wk anemia declined
Nogueira Arcanjo FP, Santos PR, Brazil 2–5 y old 56.4 mg/meal, Hb remained the same, whereas
Segall S6 children one meal/wk it declined in control group
Nogueira Arcanjo FP, Santos PR, Brazil 10–23 mo old 56.4 mg/meal, Hb improved,
Arcanjo C7 children one meal/wk anemia declined
Moretti D, Zimmermann MB, India 6–13 y old 13 mg/d Body iron stores improved (all other Hb and
Muthayya S et al8 schoolchildren iron status parameters, no change)
Radhika MS, Nair KM, India 5–11 y old 19 mg/d Hb and anemia no change, serum ferritin
Kumar RH et al9 schoolchildren increased, iron deficiency reduced
Zimmermann M, Muthayya S, India 5–9 y old 10 mg/d Hb no change, transferrin receptor no change,
Moretti D et al10 schoolchildren serum ferritin increased, iron deficiency declined
Pinkaew S, Winichagoon P, Thailand 4–12 y old 12.3 mg/d Hb and serum ferritin, no change,
Hurrell RF et al11 schoolchildren iron deficiency declined
Thankachan P, Rah JH, India 6–12 y old 6.25 mg/d and Hb and iron status indicators,
Thomas T et al13 schoolchildren 12.5 mg/d no change
iron identified that does not affect the color and taste of rice. of studies found an impact on iron status as compared to the
Research has very recently been conducted that successfully in- proportion that found an impact on hemoglobin concentration
creased the bioavailability of this type of iron.14 The amount of may be due to homeostatic control (i.e., there is limited room for
fortified rice that was provided in the studies ranged from 50 g/ improvement of hemoglobin concentration among non-anemic
week to 140 g/day and was often provided as one meal per day. individuals) and due to the fact that iron deficiency causes only
The blending ratios of the fortified rice ranged from 0.5 to 2.5%, approximately 50% of anemia. As other nutritional and non-
and the iron content of the fortified rice meal ranged from 6 to nutritional causes also affect anemia, there are limits on the
56 mg. The studies did not report on the color of the fortified ker- impact of iron on hemoglobin concentration.
nels or the acceptability of the fortified rice, but as feeding took When considering fortification of rice with iron at scale,
place under controlled conditions, all participants were appar- cost and consumer acceptability are key. Blending ratio im-
ently willing to consume the rice. Eleven of the 12 studies with pacts cost. Color and taste, which depend on choice and level
rice fortified with iron assessed impact on hemoglobin concen- of iron fortificant, can affect consumer acceptance. These as-
tration or anemia. None of the studies found a negative impact, pects were less important in the efficacy studies. With the
while five found an improvement. Six of the eight studies that current recommended fortificant form of micronized ferric
assessed iron status found an improvement. In total, 10 of the 11 pyrophosphate in order not to have a colored fortified kernel,
studies found a positive impact on either hemoglobin concentra- the concentration of iron cannot exceed 7 g/kg. When fortified
tion or iron status, or on both (see Table 1). The authors of the kernels are blended with normal rice at 1%, which is a com-
one study that found no impact on hemoglobin concentration monly used ratio, the iron content of the fortified rice will be
or iron status reported that they discovered post-study that the 7 mg/100 g. Most of the efficacy studies blended at a higher ra-
participants had actually received iron supplements until a few tio, and some also had a higher concentration of iron in the for-
months before the study started.13 tified kernels. The high iron concentration in the fortified rice,
These results provide strong evidence that the fortifica- and the fact that most studies provided all the iron in one meal
tion with iron was effective. The fact that a greater proportion per day, resulted in high iron content in comparison to that of
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A EVIDENCE AND RECOMMENDATIONS FOR EFFECTIVE LARGE-SCALE RICE FORTIFICATION 147
Pinkaew S, Wegmuller R, Thailand 8–12 y old children 3,000 μg RE/d BL* serum retinol 1.21 μmol/L – total body
Wasantwisut E et al12 retinol increased – serum retinol unchanged
Pinkaew S, Winichagoon P, Thailand 4–12 y old children 2,500 μg RE/d BL serum retinol 1.01 μmol/L –
Hurrel RF et al11 No significant increase
Thankachan P, Rah JH, India 6–12 y old children 500 μg RE/d BL serum retinol 2.1–2.6 μmol/L –
Thomas T et al13 No change
Haskell MJ, Pandey P, Nepal Night-blind 850 μg RE/d Serum retinol increased in all groups,
Graham JM et al15 pregnant women most in liver & high-dose capsule groups
*BL: baseline
iron absorption inhibitors. This may have had a further positive already sufficient. The absence of impact of zinc fortification
impact on iron absorption in the studies. on serum zinc concentration, which has also been reported by
other studies,16 may be due to the fact that only a small frac-
Vitamin A results tion of the body’s zinc pool appears in serum. This makes it
Four studies included rice fortified with vitamin A, three of insensitive to modest changes of status. The study by Pinkaew
which were also fortified with other micronutrients. The one and colleagues reported a decline of zinc deficiency in both the
study that fortified rice only with vitamin A was conducted intervention and the control groups. The improvement of se-
among night-blind pregnant women in Nepal and provided rum zinc was greater in the fortified rice group compared with
study groups with different sources and levels of vitamin A.15 the unfortified rice group.11
This study reported an improvement of vitamin A status in all
groups, with the greatest improvement in the two groups that Effectiveness studies – impact of rice fortification
received vitamin A from either a high-dose capsule or liver. The under programmatic circumstances
other three studies were conducted among schoolchildren with Four studies analyzed the effectiveness of rice fortification un-
an average baseline serum retinol concentration considered in- der less controlled, more programmatic, circumstances.17–20
dicative of adequate, or close to adequate, vitamin A status 11–13 The first study, conducted in the Philippines in 1947–49, used
(see Table 2). Their serum retinol concentration did not in- coated rice fortified with thiamin, niacin and iron. Results
crease further. However, the one study that also measured total showed a substantial reduction of beriberi, a well-known con-
body retinol reported an improvement.12 This evidence shows sequence of thiamin deficiency, as well as a lower incidence
that vitamin A can effectively be added to rice. However, it is of infant deaths in the areas that received fortified rice.20 No
important to consider whether rice is the most appropriate biochemical indicators of micronutrient status were assessed
vehicle. For example, where cooking oil is already adequately at that time. A second effectiveness study in the Philippines
fortified with vitamin A, it is not also necessary to fortify rice in 2008 provided rice fortified with iron at approximately
with vitamin A. 3–4 mg/100 g. This study found higher hemoglobin concen-
trations among children after the program than before, and a
Results with other micronutrients decline in anemia prevalence. No changes were found among
The impact of fortification of rice with zinc, folic acid, vitamins mothers.18 A study conducted in Thailand between 1971 and
B1 (thiamin) and B12 on micronutrient status has also been 1975 distributed fortified rice among different age groups of
assessed. Thankachan et al13 studied rice fortified with iron, children. No significant differences were found in anthropo-
zinc, vitamins A, B1, B6 and B12 and folic acid. In a study by metry, hemoglobin and hematocrit between children of the
Pinkaew et al,11 impact on zinc status by rice fortified with iron, villages that received the fortified rice and those that received
vitamin A and zinc was assessed. Thankachan et al found an non-fortified rice. According to the authors, caloric insuffi-
improvement of vitamin B12 status and a decrease of homocys- ciency was widespread and may have affected the results.19
teine levels.13 This indicated that both vitamin B12 and folic More recently, after observing declines in neural tube defects
acid were well absorbed and utilized. They found no change (NTD) after the introduction of flour fortification with folic
of indicators of thiamin or zinc status. Thiamin status was acid, Costa Rica also began fortifying rice and milk with folic
148 EVIDENCE AND RECOMMENDATIONS FOR EFFECTIVE LARGE-SCALE RICE FORTIFICATION
acid. Studies conducted in 2011 demonstrated further NTD Quality assurance, quality control and monitoring
∙
declines.17 Manufacturers should conduct their own quality assurance
and quality control. Separately, independent monitoring
Recommended micronutrients for rice fortification should determine whether the rice is fortified as expected,
The above reviewed evidence from efficacy and effectiveness i.e., the fortified kernels have the required composition
studies supports the fortification of rice with iron, vitamin A, and are blended at the required ratio and staying within a
folic acid, vitamin B12 and thiamin. Zinc is also recommended, given range of variation. In addition, stability testing needs
although one study found an impact on zinc status while the to be conducted under prevailing storage, preparation and
other one did not. These mixed findings are consistent with cooking conditions to assure content remains adequate.
findings from studies on zinc fortification of other foods and ∙ Monitoring of coverage,
may partly be due to the fact that zinc status is difficult to as- acceptability and consumption levels
16
sess accurately. For niacin and vitamin B6, data of impact on These aspects need to be monitored, and adjusted
micronutrient status have not yet been collected, but adding where necessary. The contribution of fortified rice to
these is recommended as well, because polished rice is a poor micronutrient intake depends on whether consumers
source of these essential micronutrients,21 bioavailable forms obtain, accept and consume it in required quantities.
Monitoring of micronutrient intake,
of these nutrients exist, and adding them to rice together with ∙
the other micronutrients does not markedly increase the costs morbidity and micronutrient status
of fortified rice. Since rice fortification is one component of a broader
strategy to address micronutrient deficiencies, monitoring
should assess whether the combination of strategies is
“The above evidence supports the improving the health and nutritional status of different
fortification of rice with iron, vitamin A, target groups in the population and/or whether additional
measures may be required. Monitoring should be con-
folic acid, vitamin B12 and thiamin, ducted over time, including assessment before and after
and the addition of zinc, niacin and implementation of the program has started at scale.
grains fortified with zinc, iron, and vitamin A increase zinc status
fortification (i.e., fortified kernels and their blending), storage
of Thai school children when incorporated into a school lunch
and distribution, and monitoring acceptance and consumption
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iron stores in children: a double-blind, randomized, placebo-
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150 RICE FORTIFICATION: EVIDENCE, STATUS, AND LESSONS LEARNED
Rice Fortification:
Evidence, Status,
and Lessons Learned
in Grain Fortification
Becky L Tsang
Food Fortification Initiative, Asia Region Rice fortification technologies
Helena Pachón Coated: Rice kernels are coated with a fortificant mix
Food Fortification Initiative, USA plus ingredients such as waxes and gums. The micronu-
trients are sprayed onto the surface of the rice grains.
The coated rice kernels are blended with non-fortified
Key Messages rice in a ratio between 1:50 and 1:200.
∙ Like wheat and maize flour fortification, fortifying
rice is a public health opportunity to prevent micronutri- Extruded: Rice-shaped reconstituted kernels are produced
ent deficiencies and serious birth defects of the brain by passing rice flour dough, containing a fortificant mix,
and spine. Scientific literature shows that rice fortifica- through an extruder. The extruded kernels are then blended
tion can improve iron status in targeted populations – into non-fortified rice in a ratio between 1:50 and 1:200.
other nutrients are not as well studied.1
∙ At a national scale, rice fortification is mandatory
in six countries, and several subnational efforts ies provided health indicator comparisons of groups eating for-
indicate that interest in, and the practice of, rice tified rice and those eating non-fortified rice.4
fortification is growing. In comparison, 85 countries
globally have mandatory wheat flour fortification Efficacy studies
2
legislation. The results of the review are summarized in Table 1 and Ta-
∙ Fortification of wheat flour with essential vitamins ble 2. Sixty-four percent (7/11) of studies measuring ferritin
and minerals has been practiced for over half a century; concentrations found a significant increase after the interven-
lessons learned in the implementation of wheat flour tion group consumed rice fortified with iron. By contrast, only
fortification programs globally can be applied to 30% (5/15) of studies measuring hemoglobin found a signifi-
rice fortification in Latin America and the Caribbean. cant increase in hemoglobin levels. Anemia has multiple etiolo-
gies, only one of which is related to iron deficiency.5 In popula-
tions with confounding factors such as parasitic infections (e.g.,
Public health evidence for rice fortification: intestinal worms and malaria), high proportions of inherited
A review of efficacy and effectiveness studies blood disorders, and other multiple micronutrient deficiencies,
The Food Fortification Initiative (FFI) conducted a review of rice iron indicators are a more direct measure of the impact of rice
fortification literature indexed in PubMed and found 16 efficacy fortified with iron.6
trials and five effectiveness studies;3 this study and an update Table 2 presents the results for efficacy studies that evalu-
are available on the FFI website. Studies used either coated or ated other nutrients added to rice. After iron, vitamin A is the
extruded kernels. Eligible English- and Spanish-language stud- next best-studied nutrient in rice fortification, with five studies
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A RICE FORTIFICATION: EVIDENCE, STATUS, AND LESSONS LEARNED 151
Key takeaways
Types of researcha In multiple studies, iron indicators improved in participants
consuming fortified rice. Studies of the health impact of rice for-
Efficacy: The outcomes of a specific intervention under
tification largely focus on the impact on iron indicators, anemia
ideal conditions … Ideally, a randomized controlled trial. prevalence, or hemoglobin concentrations. A limited number of
effectiveness or efficacy studies assess other nutrients. Using
Effectiveness: The outcomes of a specific intervention, indicators specific to the nutrients added through fortification
when deployed in the field in the usual circumstances. is key when evaluating the health impact of rice fortification.
a
Porta M. A dictionary of epidemiology.
Oxford: Oxford University Press, 2008.
“In multiple studies, iron indicators
improved in participants consuming
evaluating plasma retinol concentrations. However, the results
fortified rice”
for vitamin A are equivocal, possibly because vitamin A is a ho-
meostatically controlled nutrient in the body,7 and identifying Current status of global rice fortification
significant changes is most likely when the targeted individuals programs and projects
have low vitamin A reserves. Two or fewer studies assessed the Fortification activities, programs, or projects can be classified
rest of the nutrients. as mandatory, voluntary, or delivered via social safety nets.8
One, two, or all three types of rice fortification can occur in a
Effectiveness studies single country. For example, a country can have mandatory
Five studies, in Costa Rica, India, Thailand, and the Philippines, legislation for rice fortification for iron, folic acid, and zinc,
assessed rice fortification in the context of a large effectiveness and it could also have standards that allow rice producers to
trial (Table 3). The trials studied different populations and dif- voluntarily include additional nutrients. Social safety nets are
ferent outcomes, and three of the five included more than one typically welfare programs targeted towards vulnerable popu-
nutrient in the rice. Four of the five studies reported improved lations. Examples include school feeding programs, food dis-
outcomes (decrease in neural tube defects (n=1/1), increase in tribution programs, workplace benefit programs, or emergency
hemoglobin (n=2/4), decrease in anemia (n=2/3), decrease in aid rations.
beriberi incidence (n=1/1), decrease in infant beriberi deaths
(n=1/1), although statistics were not always reported. The body Mandatory fortification
of effectiveness data is relatively small and not easy to compare, FFI monitors the global status of mandatory legislation for ce-
but it indicates beneficial outcomes for rice fortification. real grain fortification. In 2014, realizing that the bulk of rice
Outcome assessed (unit) Number of studies that found significant Total number of studies that
improvement in this outcome investigated this outcome
Hemoglobin (g/L) 5 15
Anemia (%) 5 9
Iron status
Ferritin (µmol/L) 7 11
Iron deficiency (%) 6 7
Transferrin receptor (mg/L) 3 5
Iron-deficiency anemia (%) 0 2
Iron body stores (mg/kg) 2 3
Zinc protoporphyrin (µmol/mol heme) 1 2
Total iron binding capacity (µg/dL) 1 1
a
n=16 efficacy studies
b
Food Fortification Initiative (FFI). Rice fortification’s impact on nutrition. Atlanta: FFI, 2014. Updated 2016.
152 RICE FORTIFICATION: EVIDENCE, STATUS, AND LESSONS LEARNED
Table 2: Summary of rice fortification efficacy studies assessing other nutrient indicators a,b
Outcome assessed (unit) Number of studies that found significant Total number of studies that
improvement in this outcome investigated this outcome
Plasma retinol (µmol/L) 2 5
Vitamin A deficiency (%) 1 2
Total body retinol reserves (µmol) 1 1
Serum zinc (µmol/L) 2 2
Zinc deficiency (%) 0 1
Folate (ng/mL) 1 1
Homocysteine (µmol/L) 1 1
Plasma B12 (pmol/L) 1 1
Thiamin (nmol/L) 0 1
a
n=16 efficacy studies
b
Food Fortification Initiative (FFI). Rice fortification’s impact on nutrition. Atlanta: FFI, 2014. Updated 2016.
a
n=5 effectiveness studies
b
Arguello M, Solis L. Impacto de la fortificación de alimentos con ácido fólico en los defectos del tubo neural en Costa Rica. Rev Panam Salud Publica 2011;30(1):1–6.
c
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e
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P
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f
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J Nutr 1950;42:501-23.
* Wheat flour, maize flour, and milk are also fortified with folic acid
panies fortify, they do so at levels that are safe and intended for Social safety nets
a public health benefit. Social safety nets typically target those considered at need; their
Since voluntary rice fortification is a choice made by an in- sustainability is reliant on the funding agency – usually a non-
dividual food producer or supplier, it can be difficult to achieve governmental organization, government agency, or in some cases
high coverage of fortified rice unless a monopoly exists or pro- also a private employer. Fortifying the rice already distributed (i.e.
ducers jointly agree to fortify. In all but one country, Colombia, not a cash-transfer system) in a school feeding program, emer-
the availability of fortified rice is estimated at less than 2% of gency ration, or food basket can be a way to improve nutrition at a
the total rice industrially milled in the country.15 Colombia’s ex- relatively small additional cost to the overall program. Distribut-
perience with voluntary rice fortification shows that moderate ing fortified rice through social safety nets is most efficiently done
coverage of fortified rice can be achieved.16 Even if coverage is through a centralized delivery system – for example, through a
high, however, the use of an effective technology is also essential warehousing center that can distribute fortified rice in a food
to ensure that fortification contributes to public health. An issue basket, a centralized kitchen that can bulk-cook fortified rice and
in voluntary fortification is that there is more discretion about distribute it to schools, or a modern rice mill that can produce
how to fortify and effective methods might not always be chosen. large quantities of fortified rice to bid for procurement contracts.
154 RICE FORTIFICATION: EVIDENCE, STATUS, AND LESSONS LEARNED
Myanmar
Vietnam
Philippines
Mali Papua New Guinea
Nicaragua Guinea Bissau India: Odisha,
Costa Rica Sierra Leone Karnataka
Panama Sri Lanka
Cote d‘Ivoire
Colombia Ghana Bangladesh
Ecuador Malaysia
Peru Singapore
Cambodia
Brazil
a
Does not include research studies involving fortified rice, but includes pilot studies that are intended to demonstrate feasibility of rice fortification (rather than efficacy).
TablE 4: Fortification levels (mg/kg) of vitamins and minerals in mandatory rice fortification countries a
a
Food Fortification Initiative Database, 2016. Unpublished.
difficult to sustain financially, monitor for quality, and produce riods showed a marked increase in blood folate concentrations
consistently.24 Small-scale and home producers usually do not only after mandatory fortification came into place.33 Similarly,
have the available capital to purchase premix or invest in forti- the birth prevalence of neural tube defects remained relatively
fication equipment. Regular miller training at the village level stagnant in Australia during the voluntary fortification period,
to ensure consistency is both resource- and time-consuming with decreases only occurring after mandatory fortification had
for millers and government agencies. And finally, government been implemented.34
agencies already stretched to regulate food safety are simply
unable to monitor milling when it occurs at thousands or tens Following WHO recommendations for fortification
of thousands of mills, as is the case with rice milling in coun- appears to be related to program effectiveness
tries like Sri Lanka,25 Philippines,26 and Vietnam.27 In 2009, the World Health Organization (WHO) released global
Fortification is most easily sustained when it capitalizes on recommendations for wheat flour and maize flour fortification.35
a centralized milling industry. Future efforts in rice fortification Fortification should provide enough of a nutrient to produce a
should include milling industry analyses 28 as part of a fortifica- public health benefit, but not so much as to be unsafe. These
tion feasibility assessment. evidence-informed standards help countries set beneficial and
safe standards.36
Mandatory fortification is more likely to achieve In 2015, FFI and partners conducted a review of reports from
public health impact than voluntary 13 countries which had conducted pre- and post-fortification
Consumers are extremely sensitive to grain prices because evaluations.37 Only one third of studies observed a decrease
wheat flour, maize flour, and rice are everyday staple foods eat- in anemia after fortification. We looked at whether countries
en in large amounts. With wheat flour and oil, consumers who followed two iron-related WHO recommendations: they used
are more concerned with pricing than branding are unable to af- a recommended iron compound and they used at least the rec-
ford more expensive voluntarily fortified products.29,30 Custom- ommended level of iron. In programs that followed both WHO
ers have limited and varying access to voluntarily fortified food, recommendations, two age subgroups showed a decrease in
with a correspondingly unstable health impact.20 Both of these anemia prevalence. In programs that did not follow both WHO
problems have been demonstrated with voluntarily fortified recommendations, 10 of 12 age subgroups did not experience
food in Ireland, where products with folic acid have decreased a decline in anemia prevalence. These and results from an-
in availability,31 and researchers have found recent increases in other study 38 suggest that following WHO recommendations
the rate of neural tube defects. for flour fortification can lead to declines in anemia, while
Research in Australia demonstrated that mandatory fortifi- not following WHO recommendations can lead to null results.
cation was more effective than voluntary for improving blood Experience from countries that mandatorily fortify flour with
folate levels,33 and also preventing neural tube defects.34 Aus- folic acid also points to the importance of following WHO rec-
tralia allowed food processors to voluntarily add folic acid to ommendations. We completed a review of eleven countries’
wheat flour for several years before mandating fortification of reductions in neural tube defects following fortification of
bread flour with folic acid in 2009. A clinic’s analysis of blood wheat flour (alone, or in combination with maize flour) with
folate concentrations during the voluntary and mandatory pe- folic acid.39 The amount of folic acid added to flour in these
156 RICE FORTIFICATION: EVIDENCE, STATUS, AND LESSONS LEARNED
TablE 5: Rice fortification monitoring activities reported in 2015 among countries with mandatory rice fortification a,b,c
a
CR: Costa Rica; Nica: Nicaragua; Pan: Panama; PNG: Papua New Guinea; Phil: Philippines; NA: not applicable; –: No answer; No data for USA
b
Food Fortification Initiative Database, 2016. Unpublished.
c
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R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A TECHNOLOGY FOR RICE FORTIFICATION 159
Technology for
Rice Fortification
Scott Montgomery
Food Fortification Initiative
“As for food fortification in general, rice
Jennifer Rosenzweig, Judith Smit should be fortified with micronutrient
World Food Programme Regional Bureau for Asia
forms that are available for absorption
by the body, and that remain stable”
Key Messages
∙ Rice fortification using either extrusion or coating Technological challenges for fortifying rice
technologies is a two-step process. The first involves As for food fortification in general, rice should be fortified with
the production of fortified kernels; the second, the fortificants that are available for absorption by the body, and
blending of fortified kernels with non-fortified rice. that remain stable during processing, storage, transport, prepa-
∙ Extrusion and rinse-resistant coating are the best availa- ration, and cooking methods and practices including discard-
ble technologies to produce fortified kernels that remain ing excess water.1 Rice is consumed as a whole kernel, which
stable under different storage conditions, preparation complicates the fortification process and requires specialized
methods, and cooking techniques, and that are technology. In contrast to flour fortification, where the premix
acceptable to consumers. and flour are both in powder form and can be easily blended,
∙ Recommended vitamins and minerals to fortify rice this is not an option with rice.
include the micronutrients removed during processing, The micronutrients in the fortificant mix should not inter-
in addition to micronutrients needed to fill the target act with each other and/or with the rice matrix, as this may
population’s nutrient gaps. Fortification with multiple influence color, taste and stability, thus lowering consumer ac-
micronutrients is recommended, as micronutrient ceptability. The fortificants must remain stable during different
deficiencies often coexist. means of preparation such as washing before cooking, soaking,
∙ The choice of fortificant used to fortify rice depends on cooking in different amounts of water, and for varying amounts
its bioavailability and stability, its impact on consumer of time.2,3
acceptability, and the type of technology used. Appropriate quality assurance and quality control, as well as
monitoring, are needed throughout the rice fortification process
to ensure that standards are met and that the fortified rice ef-
Rice is the world’s second most commonly consumed ce- fectively improves the nutritional health of the consumer.
real grain. In recent years, rice fortification technology has
evolved. As a result, rice fortification at scale is gaining mo- Overview of available technologies
mentum as a feasible and cost-effective strategy to address for rice fortification
micronutrient deficiencies. To date, about 15 countries have Dusting
introduced rice fortification on either a mandatory or a volun- Dusting is a fortification technology that adds micronutrients
tary basis, embedded in social safety nets, or at limited scale onto the surface of the rice grains. Dusting relies on electrostatic
through trials. This article provides an overview of techno- force to bind the fortificant in a dry powder form to the surface
logical challenges for rice fortification and explores rice for- of the milled rice grains. This technology provides limited nutri-
tification technologies available to produce fortified rice. It ent protection when rice is washed, soaked or cooked in excess
also discusses the use of potential fortificants (vitamins and water, which is then discarded. In the United States, dusting is
minerals). acceptable since rice is not washed prior to cooking, nor cooked
160 TECHNOLOGY FOR RICE FORTIFICATION
Blend
0.5 – 2% ratio
Fortifying rice: making rice
∙ Milled rice Fortified
more nutritious by adding rice
essential vitamins and minerals Paddy Rice mill
rice
∙
Fortifying rice
Broken | Fortified
is a two-step process: head rice kernels
Add vitamins
& minerals
(premix)
in excess water. All packaged fortified rice sold in the United reduces the exposure to the environment and hence micronutri-
States includes a label advising against washing or cooking in ent degradation. The extruded fortified kernels are dried, reduc-
excess water. ing the water content to 14% or less, thus increasing stability
during storage.
Coating and extrusion The amount of starch that is gelatinized in the fortified ker-
As illustrated in Figure 1, fortifed rice is produced using a nel influences color, texture and stability during soaking and
two-step process. First, coating or extrusion technology is used cooking. This is affected by the temperature and the amount of
to produce fortified kernels. Second, the fortified kernels are water used during extrusion. In Cold extrusion (30°C–50°C), a
blended with non-fortified rice at a ratio of 0.5% to 2% to result pasta press is used to “shape” the dough and form opaque forti-
in fortified rice. fied kernels. This requires binders to be added or a subsequent
boiling step to produce a cohesive product. Warm extrusion
Option 1: Coating technology for production (60°C–80°C) also uses a pasta press, but adds a preconditioner
of fortified kernels with steam, or is equipped with a steam-injection device to
Coated fortified kernels are produced by coating rice grains, typ- produce fortified kernels that appear more translucent and
ically head rice, with a liquid fortificant mix. Additional ingredi- more closely resemble non-fortified rice. An emulsifier can
ents, such as waxes and gums, are used to ‘fix’ the micronutrient be used, but no additional additives are required. Hot extru-
layer or layers on the rice grain. Whole or head rice is evenly sion (80°C–110°C) is more energy-intensive and, although not
spray coated with micronutrients and other ingredients to pre- a requirement, ideally uses more sophisticated equipment. It
serve the coating. This is usually done in large rotational drum can include a preconditioner, and can rely on a double screw
or pan coating machines. The coated kernels are then dried to extruder to produce the fortified kernels. An emulsifier (mono-
yield fortified kernels. This technology concentrates the micro- glyceride) can be added to maintain stability during storage
nutrients on the surface of the rice grains. When cooked, the of the fortified kernels. The resulting fortified kernels closely
coating dissolves, spreading the micronutrients throughout the resemble different types of rice, with different degrees of trans-
cooked rice. Where rice is washed or soaked, coated fortified lucency and texture.2
kernels must be rinse-resistant so as to ensure micronutrient Fortified kernels made by either warm or hot extrusion are
retention. similar to non-fortified rice in their uptake of water during cook-
ing, cooking time, and firmness. Kernels made by cold extrusion
Option 2: Extrusion technology for production have a softer texture. In practice, most fortified kernel produc-
of fortified kernels tion with cold extrusion utilizes additional heat to improve the
Extruded fortified kernels are formed by combining water and a firmness and appearance, and can therefore be categorized as
fortificant mix with rice flour which is usually made from grind- warm extrusion (see Figure 3 for the appearance of fortified
ing lower value and non-contaminated broken rice, to form a kernels using extrusion at different temperatures).
dough (Figure 2). The dough is passed through an extruder,
producing a fortified kernel visually similar to a non-fortified Step 2: Blending of fortified kernels and non-fortified rice
rice grain. Micronutrients are equally distributed inside the for- The coated or extruded fortified kernels are blended with non-
tified kernel, with only a few particles left on the surface. This fortified rice through a continuous or batch mixing process
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A TECHNOLOGY FOR RICE FORTIFICATION 161
Dry mixing
Water
Steam Conditioning
Water Hammermill
Steam Dough formation
Ingredients
Shaping Preconditioner
Stabilising
Drying
Extruder
Fortified Kernel
Dryer Fortified
Kernel
(Figure 4). The blending ratio, typically between 0.5% and vitamin B12. Overall, parboiled rice or brown rice is more nutri-
2%, depends on the nutrient content of the fortified kernels tious than milled white rice, but only covers a limited part of the
and the desired level of fortification. Quality assurance and suggested micronutrients to add to fortified rice. Parboiled rice
quality control are needed to ensure uniform blending at the can be fortified.
correct ratio. For additional information on biofortification, and on con-
Other approaches to increase micronutrient intake through sumption of brown rice, please refer to the contribution by
rice include parboiling, soaking, biofortification and com- Pachón et al (p. 188). Soaking is not discussed in this supple-
munication for behavior change to increase consumption of ment, as research into this subject is still in initial stages.
brown rice.
Parboiling is not a fortification technology. No micronutri-
ents are added to the rice; rather, parboiling causes the existing
“Micronutrients recommended
nutrients in the outer layers to be transferred and retained in for rice fortification
the starchy endosperm of the rice grain. Consequently, parboil-
ing enhances the intrinsic nutrient value of rice. The level of ni-
are those which are removed
acin, vitamins B1 (thiamin) and B6 (pyridoxine) is around three during processing, in addition
times as high in parboiled rice as it is in regular milled rice. For
niacin and pyridoxine, the level in parboiled rice is similar to
to those which address a
brown rice. However, parboiling does not increase the level of target population’s nutrient gaps”
minerals, such as iron and zinc, nor is it a source of vitamin A or
162 TECHNOLOGY FOR RICE FORTIFICATION
figure 3: Visual appearance of natural rice grains and extruded rice kernels produced with cold, warm and hot extrusion
Warm extrusion,
gluten-free pasta process
Warm extrusion,
Cold extrusion pre-conditioner | pasta press
Natural rice
* Specific Mechanical Energy (SME) is a measure of the mechanical energy required to push material through an extruder.
Overview of commonly used fortificants ability and degrees to which they affect the appearance and taste
Micronutrients recommended for rice fortification are those of fortified rice.
that address a target population’s nutrient gap in addition to The most commonly used micronutrients and their fortifi-
those removed during processing. Fortification with multiple cants are discussed below.
micronutrients is recommended, as micronutrient deficien-
cies often coexist in low- and middle-income countries. The Iron
selection of fortificants depends not only on their bioavail- Different forms of iron offer trade-offs between bioavailability
ability, stability, and sensory acceptability, but also on the and properties impacting consumer acceptance. The iron for-
fortification technology utilized. For additional information tificants recommended for wheat and maize flour fortification
on fortificants, please refer to the contribution by de Pee and (e.g. ferrous sulfate, ferrous fumarate or sodium iron EDTA) are
Fabrizio (p. 165). nearly unnoticeable to the consumer because the relevant iron
To be effective as a fortificant, the micronutrient form must be fortificant is equally distributed throughout the fortified flour.
bioavailable. In other words, the body must be able to effectively However, when concentrated in a fortified kernel, color and
absorb and utilize the micronutrient. In addition, the chosen for- taste may be affected. Figure 5 shows rice that has been forti-
tificant must not affect the color or taste of the fortified rice. Dif- fied with various types of iron, sometimes resulting in fortified
ferent forms of micronutrients have varying degrees of bioavail- kernels that may not be acceptable to consumers.
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A TECHNOLOGY FOR RICE FORTIFICATION 163
figure 4: Production methods for batch and continuous blending to produce fortified rice
Weigh
Feeder | doser
Blender | Mixer
Mixing
Packaging Packaging
164 TECHNOLOGY FOR RICE FORTIFICATION
Some countries also fortify with vitamin E, using a spray-dried cess: first, production of the fortified kernel, and second, blend-
α-tocopheryl acetate form. Vitamins D and K are possible in ing of fortified kernels with non-fortified rice.
rice fortification; however, they are not yet used in any of the The fortificant used is also important as it influences consumer
rice fortification programs. acceptability and the effectiveness of fortified rice for public health.
Other References
Overall, rice is a good source of amino acids except for lysine; 1. Allen LH, de Benoist B, Dary O et al, eds. Guidelines on
therefore, fortification with lysine can increase the biological Food Fortification with Micronutrients. Geneva:
value of rice protein. Although the recommended form is highly World Health Organization and Food and Agriculture
water-soluble, the majority of lysine in extruded fortified ker- Organization of the United Nations, 2006.
nels is retained during washing and cooking.2 2. Steiger G, Muller-Fischer N, Cori H et al. Fortification of rice:
technologies and nutrients. Ann N Y Acad Sci 2014;1324:29–39.
doi: 10.1111/nyas.12418.
“The technology for effective 3. Alavi S, Bugusu B, Cramer G et al. Rice Fortification in
fortification is now available for rice, Developing Countries: A Critical Review of the Technical and
Economic Feasibility. Washington DC: A2Z Project/Academy
the world’s second most commonly for Educational Development, 2008.
consumed cereal grain” 4. Aggett PJ. Population reference intakes and micronutrient
bioavailability: a European perspective. Am J Clin Nutr
2010;91:1433S–1437S. doi:10.3945/ajcn.2010.28674C
Conclusion 5. Hurrell R, Egli I. Iron bioavailability and dietary reference
The technology for effective fortification is now available for values. Am J Clin Nutr 2010; 91(5):1461S–1467S.
rice, the world’s second most commonly consumed cereal grain. doi: 10.3945/ajcn.2010.28674F
The choice of technology must take into account retention of 6. Hackl L, Cercamondi CI, Zeder C et al. Cofortification of
nutrients during preparation (soaking, washing and cooking), ferric pyrophosphate and citric acid/trisodium citrate into
and consumer acceptability (taste, shape, and color). The use extruded rice grains doubles iron bioavailability through in situ
of rinse resistant coating or extrusion (hot or warm) to produce generation of soluble ferric pyrophosphate citrate complexes.
fortified kernels meets nutrient retention and consumer accept- Am J Clin Nutr 2016, (C), 1–8. http://doi.org/10.3945/
ablity requirements. Both technologies involve a two-step pro- ajcn.115.128173
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A STANDARDS AND SPECIFICATIONS FOR FORTIFIED RICE 165
Standards and
Specifications for
Fortified Rice
Saskia de Pee general than specifications or Commodity Requirement Docu-
World Food Programme, Rome, Italy ments (CRD). For example, fortified rice standards might cover
Friedman School of Nutrition Science and Policy, a range in terms of the types of rice, nutrient content and quality
Boston, USA specifications. Specifications for rice for a contract, such as from
a government for distribution under a social safety net scheme,
Cecilia Fabrizio are more specific, including, for example, the type of rice, the
World Food Programme Regional Bureau for Asia quality in terms of percentage of broken kernels that can be in-
cluded, the micronutrient content to be met, the technology/ies
used to produce fortified kernels, the blending ratio of fortified
Key Messages kernels to rice grains, the required packaging, the limits for for-
∙ Standards and specifications for fortified rice eign matter and heavy metals, and the shelf-life.
should specify quality in terms of safety, acceptability
and nutrient content, for the benefit of consumers and
manufacturers.
“Standards that specify the
∙ Drafting standards and specifications should be a required quality and nutrient content
consultative process.
∙ Codex Alimentarius provides global standards for rice
for fortified rice provide clarity and
and for food fortification. protection for both manufacturers
∙ Micronutrient levels should be set such that the
intake of the micronutrient in the general population,
and consumers”
from all sources, is above the estimated average
requirement (EAR) and below the tolerable upper limit This paper discusses standards and specifications that ex-
(UL) for almost everyone. ist or are being developed for fortified rice, and how to set the
∙ Where intake is not well known and dietary desired micronutrient content of fortified rice.
deficiencies are likely, setting the micronutrient level
of fortified rice such that, at prevailing consumption Codex Alimentarius standards
levels, it provides the EAR for adults is a good The global source for food standards is the Codex Alimentarius
approach.1,2 Commission (www.codexalimentarius.org), established by the
Food and Agriculture Organization of the United Nations and
the World Health Organization (WHO) in 1963. This Commission
Introduction develops harmonized international food standards, guidelines,
When a country chooses to fortify rice to increase micronutri- and codes of practice to protect the health of the consumers and
ent intake across the population, standards that specify the re- ensure fair trade practices. The Commission also promotes coor-
quired quality and nutrient content provide clarity and protec- dination of all food standards work undertaken by international
tion for both manufacturers and consumers. These standards governmental and non-governmental organizations. While the
help ensure the nutritional quality of the rice and that the rice adoption of Codex recommendations is voluntary for countries,
is safe and acceptable for consumption. Standards are more Codex standards are often the basis for national legislation.
166 STANDARDS AND SPECIFICATIONS FOR FORTIFIED RICE
For fortified rice, two Codex documents can be referenced: fortified kernels should be such that the rice is acceptable
the Codex standard for rice (Codex stan 198-19953) and the to the consumer in terms of appearance (color and shape),
guideline for the addition of essential nutrients to foods (CAC/ smell and taste, both before and after preparation.
GL 09-1987, amended in 1989 and 19914), which governs for-
tification of foods in general. There is no Codex standard or If rice will be the only food fortified with the specific
guideline specifically for fortified rice; nor is there a guideline micronutrient(s), the level of the micronutrient should be set
specifically for other fortified staple foods. Countries should de- to provide approximately the estimated average requirement
cide whether to have the same structure, i.e. a standard for rice (EAR) of the micronutrient(s) for healthy adults. The EAR is
and a standard for food fortification, and then develop specifica- the average (median) daily nutrient intake level estimated to
tions for individual fortified foods, such as fortified rice, that are meet the needs of half the healthy individuals in a particular
for a particular use or for particular contracts. These specifica- age and gender group. The EAR is used to derive the recom-
tions can include more details (e.g., micronutrient content for mended nutrient intake (RNI). The RNI, established by FAO/
specific target groups, packaging specifications, etc.) and can be WHO, is set at the EAR plus two standard deviations, which
modified more easily when required. Standards and specifica- means that it would meet the needs of 97.5% of all normal,
tions should be developed through a consultative process that healthy individuals in an age- and sex-specific population
includes public- and private-sector partners, academia and civil group (see Figure 1).
society. Countries that have developed a standard for fortified Most people already consume some amount of the specific
rice include Costa Rica, the Philippines and the USA. micronutrients. Therefore, setting the micronutrient contribu-
tion from the fortified food at the EAR level shifts the average
micronutrient intake to a level above the EAR and likely just
“Standards and specifications above the RNI (see Figure 2). The proportion of people below
should be developed through a the EAR should be less than 2.5% of the population, to mini-
mize the proportion of people that do not receive adequate
consultative process” amounts of the micronutrient to meet their needs.
The fortified rice should make a good contribution to in-
Setting the micronutrient content take for most consumers and at the same time be safe for those
The level of micronutrients for fortified rice should be deter- who have the highest rice intake. To assess the risk of too high
mined after consideration of four country-specific conditions.5 an intake, one has to refer to the tolerable upper limit (UL).
The UL is defined as the daily nutrient intake level that is con-
∙ First: the consumption levels of the food in the target sidered to pose no risk of adverse health effects to almost all
population: if average consumption is high, as in most rice- (97.5%) healthy individuals in an age- and sex-specific popu-
consuming countries, lower amounts of micronutrients lation group. The UL applies to daily intake over a prolonged
are needed per kilogram of rice to achieve a target level of period of time, and to healthy individuals with no micronu-
micronutrient intake. trient deficits to be corrected. The UL includes a large safety
∙ Second: whether other foods are fortified and with which margin as it is set at a much lower level than the lowest level at
nutrients: for example, if vegetable oil or sugar are adequa- which an adverse effect of a chronically high intake has been
tely fortified with vitamin A and these foods are consumed observed.
by the same people who will consume fortified rice, vita- Note that the level at which acute toxicity may occur is well
min A may be included at a lower level in the fortified rice, above the UL level. Furthermore, as the UL is well above the
or not at all. RNI, and rice will be fortified at a level to provide the EAR,
∙ Third: whether the food, and the diet in general, which is approximately 70% of the RNI, one would have to
contains compounds that may affect stability or absorption consume several times the expected daily amount of fortified
of minerals or vitamins that are added, such as the phy- rice in order to reach the UL. Thus, if 300 g of uncooked rice
tate in grains that inhibits mineral absorption (e.g., iron provides the EAR, only consumption of approximately 1–10 kg
and zinc); this information affects the form and level of the (depending on the micronutrient) of uncooked rice daily over
nutrient to be added for fortification (e.g., sodium iron a prolonged period of time could potentially put the consumer
EDTA is the only recommended form of iron for fortification at risk of too high an intake from consuming fortified rice (con-
of high extraction flour).6 sistently going over the UL). This scenario is unrealistic.
∙ Fourth: consumer acceptability: the micronutrient Determining the micronutrient level per 100 g of fortified
fortification levels and technology used to produce the rice that is required for the total fortified rice intake to provide
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A STANDARDS AND SPECIFICATIONS FOR FORTIFIED RICE 167
figure 1: Normal distribution of nutrient needs, where 50% of the population meets their requirements
at the level of the estimated average requirement (EAR) and 97.5% meets requirements at the level of the recommended
nutrient intake (RNI)
40 50 60 66 70 77 80 90 100 110
figure 2: The target for micronutrient intake distribution, where 2.5% or less is below the EAR and the majority
is above the RNI but below the tolerable upper limit (UL)
2.5 %
Usual Intake
the EAR requires an estimate of the per capita rice consump- ries for flour consumption: < 75 g/d, 75 –149 g/d, 150 –300
tion. For example, the EAR for vitamin B1 (thiamin) is 0.9 mg g/d, and > 300 g/d.6 The same categories have been adopted
for adult women and 1.0 mg for adult men. This means that for rice consumption. In countries where rice is the main sta-
the amount of fortified rice consumed in a day should provide ple food, average per capita rice consumption typically falls
approximately 0.9 –1.0 mg of thiamin. The interim consensus into the higher categories. In the case of thiamin, a level of
statement on flour fortification proposed the following catego- 0.5 mg/100 g is proposed for the category of 150 –300 g/d
168 STANDARDS AND SPECIFICATIONS FOR FORTIFIED RICE
Nutrient Compound <75 g/d 75–149 g/d 150–300 g/d >300 g/d EAR
and 0.35 for > 300 g/d, as these would provide approximately ents that are in the premix and in the fortified kernels, the blend-
1.0 mg of thiamin per day at a consumption of 200 g (200 x ing ratio, and the laboratory measurements, specifications for
0.5/100 g) or 300 g (300 x 0.35/100 g), respectively. fortified rice also need to specify a minimum–maximum range
Nutrients and nutrient levels for rice fortification have at the moment of production. Finally, specifications should also
been recommended based upon this consideration of the specify the allowed minimum content by the best-before date
EAR and average per capita rice consumption (Table 1). For (i.e., the end of the rice’s shelf-life).
more information on the rationale for choice of the eight rec-
ommended micronutrients for fortification of rice, please
refer to the contribution by de Pee et al (p. 143) and de Pee2
“Rice fortification should
(note that research conducted after the paper by de Pee was be part of an integrated strategy
published has found a possible way of increasing iron bio-
availability in rice so that lower levels may be included of ap-
for improving micronutrient intake
prox. 4 mg/100 g instead of 7 mg/100 g in the 150–300 and and status of a population”
> 300 g/d categories).7
As mentioned above, when there are already other good
sources of specific micronutrients consumed by a population, Introducing fortified rice among other fortified foods
such as vitamin A fortified vegetable oil, or parboiled rice which Rice fortification should be part of an integrated strategy for im-
has higher levels of thiamin, niacin and vitamin B6 than polished proving micronutrient intake and status of a population. There-
rice, the levels proposed in Table 1 should be adjusted to meet fore, as mentioned above, when there are other fortified foods,
that population’s specific needs. In the case of fortified vegetable the fortification and consumption levels of those and of other
oil, the average intake level of vitamin A can be calculated from main sources of the specific micronutrients need to be taken
the per capita consumption of vegetable oil and its fortification into consideration when setting the micronutrient fortification
level. For example, if the vegetable oil provides 50% of the target levels for rice. A program such as the Intake Monitoring, Assess-
EAR, the remaining 50% could be added to rice. ment and Planning Program (IMAPP)8 can assist in calculating
Table 1 and the above explanation have specified levels safe intake levels of the proposed micronutrients. The program
of micronutrients at the moment of consumption. However, integrates data on the intake of specific foods and additional
as losses may occur over time, i.e., during storage, and during supplementation among specific target groups, using a food fre-
processing and preparation, an overage may be added at the quency method and a 24-hour recall method.
moment of production, especially for vitamins that are heat-
sensitive. Vitamin A is the most heat-sensitive and will require Conclusion
more overage, while other nutrients are more stable. In addition, Standards for a specific category of foods (e.g., rice or food for-
since there will be variation around the amount of micronutri- tification in general) and specifications for a specific food (e.g.,
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A STANDARDS AND SPECIFICATIONS FOR FORTIFIED RICE 169
fortified rice that the government will buy for the social safety References
net program) aim to protect the health of consumers and to pro- 1. Allen L, de Benoist B, Dary O et al, eds. Guidelines
vide for fair trade practices for those in the rice supply chain. on food fortification with micronutrients. Geneva: World Health
These standards and specifications define quality, in terms of Organization/Food and Agriculture Organization, 2006.
what is safe (e.g., foreign matter), acceptable (e.g., maximum 2.
De Pee S. Proposing nutrients and nutrient levels for rice
proportion of broken kernels), and nutritious (nutrient con- fortification. Ann N Y Acad Sci 2014;1324:55–66.
tent). Standards and specifications should be clear, without the 3.
Codex standard for rice (www.justice.gov.md/file/Centrul%20
need for further interpretation, and should also be feasible to de%20armonizare%20a%20legislatiei/Baza%20de%20date/
achieve, monitor, and enforce. Experience demonstrates that Materiale%202013/Legislatie/CODEX%20STAN%20198-1995.pdf)
standards and specifications are best developed through a con- 4. General principles for the addition of essential nutrients to foods.
sultative process, led by a government’s food regulatory author- Cac/gl 09-1987 (amended 1989, 1991) (www.codexalimentarius.
ity, informed by Codex Alimentarius and data, and supported org/download/standards/299/CXG_009e.pd)
by expert groups. This article has reviewed the rationale for the 5. Food Fortification Initiative: Standards.
proposed nutrient levels for fortified rice, which can be used as www.ffinetwork.org/plan/standards.html
is, or else adapted to a specific country context, taking existing 6.
WHO, FAO, UNICEF, GAIN, MI & FFI. Recommendations on
food fortification and micronutrient intake levels into account. wheat and maize flour fortification. Meeting Report: Interim
Consensus Statement. Geneva: World Health Organization, 2009
(www.who.int/nutrition/publications/micronutrients/
wheat_maize_fort.pdf, accessed [2 September 2014]).
7. Hackl L, Cercamondi CI, Zeder C et al. Cofortification of ferric
pyrophosphate and citric acid/trisodium citrate into extruded rice
grains doubles iron bioavailability through in situ generation of
soluble ferric pyrophosphate citrate complexes. Am J Clin Nutr
2016, (C), 1–8. http://doi.org/10.3945/ajcn.115.128173
8.
Intake Monitoring and Assessment Planning Program
(www.side.stat.iastate.edu/)
170 IDENTIFYING APPROPRIATE DELIVERY OPTIONS FOR FORTIFIED RICE
Identifying Appropriate
Delivery Options
for Fortified Rice
Karen Codling
Asia Food Fortification Initiative
“Selecting the most appropriate
Cecilia Fabrizio, Jennifer Rosenzweig delivery option depends on public
World Food Programme Regional Bureau for Asia
health need, context, and
the intended objective and purpose
Key Messages
∙ To identify the optimal delivery option for fortified rice,
of rice fortification”
decision-makers should assess the public health need,
the rice supply chain, the feasibility of rice fortification,
Delivery Option 1:
and the extent and scale to which social safety nets reach
Mandatory fortification
groups that can most benefit from rice fortification.
Mandatory fortification requires food producers, both of domes-
∙ Mandatory rice fortification offers the best opportunity
tic and of imported food, to fortify the particular staple food or
to maximize the public health benefit.
condiment with specified micronutrients. In comparison with
∙ When the rice milling landscape is fragmented and
other delivery options, experience shows that mandatory for-
mandatory fortification is not feasible, the fortification
tification has the greatest potential for public health impact.
of rice distributed through social safety nets is an
This results from the consumption of the fortified food by all
alternative to achieve public health impact in
segments of the population, without requiring behavior change.
targeted populations.
Governments tend to institute mandatory fortification when
micronutrient deficiencies, or the risk of micronutrient defi-
Introduction ciencies, are widespread, and when a suitable food vehicle that
Where rice is an important staple food, rice fortification has is consumed by the majority of population can be effectively
the potential to significantly contribute to the reduction of fortified.1 Mandatory fortification requires considerable gov-
micronutrient deficiencies in a population. Fortified rice can ernment will, advocacy, and leadership to create the necessary
reach consumers through three different delivery options. First, legislation and monitoring system.
governments can mandate that all rice on the market be forti-
fied. Alternatively, rice millers can voluntarily fortify rice in re- Current status of mandatory fortification
sponse to market demand. Third, fortified rice can be distributed Five low- and middle-income countries have mandatory rice
through social safety net programs. The distribution of fortified fortification, but only three countries have successfully imple-
rice through social safety net systems can occur alongside either mented programs so far, as rice fortification is still rather new
mandatory or voluntary rice fortification. Selecting the most ap- (Table 1). Costa Rica has the most successful mandatory rice
propriate delivery option depends on public health need, context, fortification program, with 100% of rice fortified. The country
and the intended objective and purpose of rice fortification. also mandates fortification of other staple foods, such as wheat
This article provides an overview of the three potential deliv- and maize flours, milk, and oil, so the population’s improve-
ery channels for fortified rice, lessons learned from implement- ments in nutrient status are difficult to attribute specifically to
ing countries and current status of rice fortification. rice fortification. Papua New Guinea has also been successful
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A IDENTIFYING APPROPRIATE DELIVERY OPTIONS FOR FORTIFIED RICE 171
Country Legislation year Rice source, fortified kernel source & milling industry 75–149 g/d
Costa Rica 2001 40% imported; 2 domestic fortified kernel producers; 11 mills 100% fortified
Nicaragua 2009 80% rice domestically grown; 40+ mills, many small Limited implementation
Panama 2009 40% rice imported; initial plan for government to pay for kernels Not being implemented yet
Papua 2007 All rice imported; fortified with imported kernels At least 80% fortified (market share
New Guinea or in country of origin of largest importer
Philippines 2001 13% imported; ~11,000 mills. Fortified kernels imported 1–2% total rice fortified 2006–2013.
plus 3 domestic producers. SSN rice Currently <1%
in implementing a mandatory rice fortification program. The countries are also hampered by the high fragmentation of the
country’s success is facilitated by the fact that almost all rice rice milling industry and low industry capacity for fortification.
is imported rather than domestically grown. Moreover, the rice
is imported by a small number of rice importers, the largest of Lessons learned from mandatory fortification
which (with an estimated 80% market share) fortifies all its rice. Mandatory fortification provides the greatest opportunity
Other importers in the country are believed to be fortifying at for large-scale, sustainable public health impact
least some of their rice. The United States is the third country Although there are few mandatory rice fortification programs
with mandatory rice fortification legislation. Federal legislation being implemented today, extrapolating from rice fortification
requires that rice must be fortified if it is produced in, goes to, efficacy studies and lessons learned from other staple food for-
or passes through, a state with mandatory legislation. Six of the tification (e.g., wheat flour) and condiments (e.g., salt) there is
US’s 50 states have mandatory legislation, and have effectively every reason to believe mandatory rice fortification would be
leveraged their legislation so that an estimated 70% of the US an effective and cost-effective strategy to improve micronutri-
rice supply is fortified. ent intake. For more information, please refer to the case study
The other three countries with mandatory fortification have on Costa Rica, in the contribution by Tacsan et al (p. 212).
struggled to operationalize and enforce rice fortification. The
Philippines passed mandatory legislation in 2001 and has Political will is necessary to establish
undertaken significant planning and investment for rice forti- mandatory fortification
fication, yet less than 1% of total rice is currently fortified. Ini- Political will and commitment are required to pass national leg-
tially the government put in place a work plan that projected islation requiring the addition of specific micronutrients to the
implementation in phases, with the largest mills fortifying first. identified food, and to set national standards. Thereafter, con-
The National Food Authority (NFA), which implements a large tinued political will and government capacity are necessary to
social safety net program of subsidized rice, then conducted ef- implement regulatory monitoring systems for effective enforce-
ficacy, effectiveness and acceptability trials of fortified rice, and ment of the legislation and standards.
purchased blenders and fortified kernels to fortify their rice at
NFA warehouses. Multiple sub-national governments passed As with all mandatory food fortification programs,
local ordinances requiring all rice to be fortified. However, de- mandatory rice fortification programs are only effective
spite these efforts, the private sector never started rice fortifi- when enforcement is in place
cation on a large scale, primarily due to a fragmented milling Comprehensive legislation and strong enforcement create an
industry landscape and the low fortification capacity of the enabling environment to ensure a sustainable and cost-effec-
thousands of small millers. There are also additional problems tive supply of fortified rice. Legislation, once passed, must be
of technology constraints, the complexity of the supply chain enforced. However, generating sufficient political will, man-
for fortified kernels, and geographic logistical challenges. At power, and resources to effectively enforce the legislation has
this time, even the NFA rice is not being fortified, due to prob- been challenging in half of the countries with mandatory rice
lems with logistics, finances and consumer uptake. As a result fortification legislation. Enforcement and regulation function
of these challenges, the government has not actively tried to to level the playing field and provide the private sector with
enforce universal rice fortification. the assurance that their competitors will incur the same costs.
Similarly, the governments of Nicaragua and Panama are not These measures also ensure the fortification of the entire rice
actively enforcing their rice fortification legislation. Again, these supply.
172 IDENTIFYING APPROPRIATE DELIVERY OPTIONS FOR FORTIFIED RICE
Mandatory fortification, including mandatory tant to inform consumers that their rice is now fortified and to
rice fortification, has minimal impact on consumer pricing provide labelling that indicates the type and level of the addi-
When fortified rice is mandated, consumers do not need to choose tional nutrient content. There is no need, however, for either
between fortified and non-fortified rice, as all the rice on the mar- rice producers or the government to undertake costly market-
ket will be fortified. Therefore, consumers do not have to change ing or other communication activities to encourage people to
their buying habits and will not have to pay a premium price for purchase fortified rice.
fortified brands. In this scenario, rice millers will most probably
pass on the additional costs of fortification to consumers. These Delivery Option 2:
costs are likely to be minimal, and will be shared across all the Voluntary fortification
rice available in the market. In fact the average consumer may Fortification is voluntary when the private food industry has an
not notice the increased cost. In some contexts the government option whether or not to fortify products. Voluntary fortification
may choose to pay for the cost of fortification, or millers may is a business-oriented approach, with fortified food products
choose to not pass on fortification costs to consumers. marketed as “value-added” products, often targeted at higher-
income consumers. If millers perceive a current, potential or
The degree of industry consolidation, size, emerging demand for fortified rice, they may choose to develop
and modernization contributes to the success a fortified brand to increase sales or profits. The potential for
of rice fortification influencing a population’s micronutrient health through volun-
In many rice-producing countries, rice milling has traditionally tary rice fortification will be low. This is due to the uncertainty of
been done on a very small scale, such as one mill per village. To- industry uptake and consumer demand. Impact will also be lim-
day, the global industry is slowly modernizing and consolidating. ited as lower socioeconomic groups, who are most in need of for-
As demonstrated by Costa Rica, a consolidated manufacturing tification, are the most unlikely to purchase fortified brands due
base facilitates the achievement of universal rice fortification. to their higher cost. Consumer aversion to changing rice prepa-
In the Philippines, the fragmented milling structure has been a ration, cooking and eating habits, and product unavailability in
significant constraint to the implementation of mandatory rice typical channels, such as bulk sales, also limits the potential im-
fortification legislation. pact of voluntary fortification. Additionally, there is no evidence
that voluntary fortification leads to mandatory fortification.
Industry investment is necessary to develop
domestic capacity for fortified kernel production Status of voluntary fortification
The volume of fortified kernels required to fortify a country’s Four countries have large-scale voluntary rice fortification pro-
rice supply is considerable. Therefore, the associated transport grams, in addition to numerous other small-scale fortification
costs of importing fortified kernels can be prohibitive. Private efforts throughout the world. Columbia has a relatively con-
companies will only invest in the manufacturing facilities for solidated rice industry; seven millers fortify rice and produce
fortified kernels if they are confident that national governments about 50% of the market supply. Unfortunately, Columbian
will enforce the legislation and that millers will comply with millers use a coating fortification technology that is vulner-
it. Alternatively, fortified kernel producers outside the country able to nutrient loss after preparation and cooking. This re-
will only significantly increase their production capacity and duces the public health benefit. This ineffectual fortification
be in a position to sell their products at rates that compensate method demonstrates that the lack of national standards is the
for transport costs if they believe that there will be a sustained key weakness of voluntary fortification. In Brazil and South
market for their fortified kernels. Millers also need to make in- Africa, where implementation has not been achieved at large
vestments in feeder and blending equipment and to purchase scale (only an estimated 1–4% of rice is fortified), the rice mill-
fortified kernels. Prior to developing domestic capacity for ker- ers are fragmented, and consumer awareness and motivation
nel production, players in the supply chain will need to evalu- to purchase the premium-priced rice brands is low. The cur-
ate the government’s political will, manpower, and resources rent status of implementation in the Dominican Republic is
before committing their own resources. not known.
Marketing, including communication for Lessons learned regarding voluntary rice fortification
behavior change, is not necessary to influence purchasing Difficult to achieve broad public health impact
decisions when rice fortification is mandatory Voluntary rice fortification has not achieved high and sustained
When mandatory legislation is in place and enforced, market- coverage of the total rice supply, except in unique situations, such
ing and communication costs are minimal. It remains impor- as in Columbia, where industry consolidation facilitated agree-
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A IDENTIFYING APPROPRIATE DELIVERY OPTIONS FOR FORTIFIED RICE 173
ment between millers to fortify. Without much coverage of the programs, distributions to the poor or to vulnerable groups,
fortified product, in particular among the most poor and vulner- food for work programs, and food aid during emergency situa-
able populations, the health benefits will be limited. tions. Fortifying rice distributed in social safety net programs
reaches the most vulnerable populations, and thus has the
Standards are necessary, even in voluntary fortification potential to make a significant impact on public health. The
Voluntary rice fortification also requires appropriate standards fortification of rice distributed through social safety nets can
for rice fortification. As evidence from Columbia demonstrates, be implemented in parallel with mandatory or voluntary for-
the benefits of convincing millers to voluntarily fortify were off- tification. It can also function as a catalyst for mandatory for-
set by ineffective fortification standards. The lack of effective tification.
voluntary standards in Colombia has enabled rice producers
to market fortified rice that is unlikely to provide nutritional Status of fortification of social safety net rice
benefit. Five countries currently distribute fortified rice through so-
cial safety net programs, which are primarily implemented by
Government regulations and enforcement governments with funding from governments or donors. The
are still necessary in a voluntary system most successful of these is the inclusion of fortified rice in the
Although the private sector determines whether to fortify, Bangladesh Government’s Vulnerable Group Feeding/Develop-
governments still have a significant role to play in setting ment program.
standards and regulations for fortification. In the context of On a smaller scale, in Odisha state in India, the UN World
voluntary fortification, governments also have to undertake Food Programme (WFP) is supporting the distribution of forti-
compliance monitoring and enforcement so as to ensure that fied rice with Indian-made fortified kernels blended into the
fortified products meet national standards, that they are safe non-fortified rice at the district level through the platform of
and correctly labeled, and that unsubstantiated health claims the government’s school feeding program. Based on the find-
are not made. ings of the ongoing evaluation, the State government will
explore expansion through the entire state’s school feeding
Fortified rice brands are likely to be more expensive program.
Millers will typically raise retail prices to cover the increased In Indonesia, the RASKIN subsidized rice program for the
costs of manufacturing and marketing fortified brands. If the poor implemented a pilot program to fortify rice distributed
fortified rice brands are being sold as value-added products, in a limited area. Efficacy and effectiveness studies of the im-
the price increase may be in excess of production and market- pact of the distributed fortified rice have been commissioned.
ing costs, as producers will often position the fortified rice as a Depending on the results, fortification may be scaled up to all
luxury product. RASKIN distributed rice. Ultimately, the potential impact of
fortification of RASKIN rice will depend on how well the social
Increased marketing (i.e., advertising, promotion, safety net itself is functioning. It has been reported that both
and packaging) is needed to promote the benefits suboptimal beneficiary targeting and social stigmatization re-
of the fortification and the premium pricing sulting from the use of low-quality rice has limited effective-
Contrary to popular belief, marketing and social mobilization ness of the RASKIN program. In addition, before the pilot can
campaigns aimed at encouraging consumers to purchase forti- be expanded, logistical challenges – such as the development
fied foods, including fortified rice, have failed to convince large of sufficient domestic capacity to produce fortified kernels and
segments of the population to choose fortified products. Howev- cost-effective opportunities to blend the fortified kernels with
er, with voluntary fortification, consumers are offered a choice the non-fortified rice – require resolution.
of value-added, higher-priced fortified rice or lower-priced, un- In the Philippines, the National Food Authority (NFA) has
fortified rice at the point of sale. Therefore, in order to increase enjoyed only limited success at fortifying subsidized rice.
sales of fortified products, there is no other choice than for rice Budget constraints have limited production quantities and
producers or governments to undertake and maintain market- beneficiary coverage. In addition, the NFA purchased colored
ing and social mobilization campaigns. fortified kernels in order to differentiate the subsidized rice
from private-market rice. As a result of this differentiation, the
Delivery Option 3: colored kernels have reduced the acceptability of the fortified
Fortification of rice distributed through social safety nets rice among some consumers. NFA is now considering resuming
Targeted rice fortification can be achieved by fortifying rice fortification with non-colored kernels, assuming that funding
distributed through social safety nets, such as school feeding can be secured.
174 IDENTIFYING APPROPRIATE DELIVERY OPTIONS FOR FORTIFIED RICE
Lessons learned from fortification shared by all consumers and possibly millers, in social safety
of rice distributed through social safety nets net programs the cost of fortification is often borne by the pro-
Social safety net programs that include rice distribution gram funder.
offer a good opportunity to target fortified rice to
those most in need Logistical issues may impede implementation
In situations where mandatory fortification is not possible, so- Several of the social safety net programs have experienced
cial safety nets may be the only delivery option for fortified rice logistical difficulties, such as sourcing the rice for distribu-
that will achieve a public health impact. However, the public tion, contracting millers to blend, and sourcing fortified ker-
health impact will be limited to the beneficiaries of the social nels. Challenges also exist in the implementation of the social
safety net. safety net program itself, such as poor management and cor-
ruption, and ineffective and inefficient targeting. Finally, there
Fortification of rice distributed through social safety nets may be consumer stigmatization as a result of participation in
can act as a catalyst for mandatory fortification the program, which may be exacerbated by the use of poor-
Fortification of rice in social safety nets establishes supply quality rice.
chains for fortified kernels and capacity for the production of
fortified rice. It also provides opportunities to establish the ef- No marketing is needed for fortified rice
fectiveness and acceptability of fortified rice among domestic in a social safety net
consumers. Information on rice fortification and experience ob- The fortified rice is provided to the targeted population for free
tained through social safety net programs can increase govern- or at a subsidized price; the group targeted does not have a
ment commitment to mandatory rice fortification. choice regarding the brand or type of rice supplied. However,
as in all fortification programs, consumers should be informed
Enforcement and regulation that the rice is fortified so that they understand its benefits.
The fortification of rice distributed through social safety net
programs is unlikely to require national legislation, but it will Considerations for choosing the optimal delivery option
require the social safety net implementer to make a policy deci- With the reliance on rice as a staple food throughout Asia and
sion and to establish or adopt a standard for fortified rice sup- the high prevalence of micronutrient deficiencies in the region,
plied in the social safety nets. rice should be considered as a major fortification vehicle. The
impact will be maximized if high coverage of fortified rice can
The social safety net implementer be achieved in those population groups with nutrient deficien-
typically bears the cost of fortification cies. The choice of delivery option should be based on an analy-
Social safety nets are often funded and implemented by the gov- sis of the rice supply chain, an assessment of the feasibility of
ernment, philanthropic organizations, or the private sector as implementation in the given context, and identification of the
part of their Corporate Social Responsibility activities. Rice mill- target group.
ers and manufacturers will be invited to bid to supply the pro- Mandatory rice fortification offers the best opportunity to
gram. These private sector agents will have a guaranteed mar- reach the majority of people in a cost-effective and sustainable
ket with low risk, at a price that usually covers their increased way. However, mandatory fortification is only possible under
manufacturing costs for a defined period of time. As the social certain conditions. Mapping the rice supply chain helps to as-
safety net implementer is bearing the cost of fortification, the sess the feasibility of mandatory rice fortification and should
consumer will not be subject to a price increase. include an assessment of the proportion of rice that is milled in
mills with fortification capacity, the extent of milling consolida-
Fortification costs may be substantial tion, the availability of warehouses where it might be fortified,
Although the fortification manufacturing cost will be a small and the most sustainable and cost-effective sources of fortified
percentage of the price of the program, compared to the costs kernels. If the analysis suggests mandatory rice fortification is
of procurement and distribution, the initial capital costs and feasible, information on the rice supply chain should be used to
reoccurring costs may still be considerable. For example, the plan implementation.
Philippines’ NFA spent over US$1.5 million on blenders and im- Depending on the manufacturing and regulatory landscapes,
ported fortified kernels but was only able to fortify an average voluntary fortification rarely achieves high population cover-
of 15% of the rice distributed by the program between 2006 and age, and is unlikely to achieve a public health impact for the
2013 (an average of 160,000 metric tons per year). By contrast, most vulnerable. Therefore, in places where mandatory rice
in mandatory fortification programs the cost of fortification is fortification is not feasible, social safety nets that distribute rice
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A IDENTIFYING APPROPRIATE DELIVERY OPTIONS FOR FORTIFIED RICE 175
Conclusions
Mandatory rice fortification offers the best means of achieving
high coverage of a population, and hence a public health ben-
efit. Past experience shows that voluntary rice fortification has
only achieved high coverage in unique circumstances, such as
in Columbia, where industry consolidation facilitated agree-
ment between millers. Social safety net programs that distribute
rice are an excellent way of reaching vulnerable groups with
fortified rice, and they provide valuable manufacturing and dis-
© WFP/Jorge Gamboa
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176 UNDERSTANDING FACTORS THAT INFLUENCE RICE FORTIFICATION
Understanding Factors
that Influence the
Benefits and Costs of
Rice Fortification
Stephen A Vosti
University of California-Davis, Department Republic and discusses various economic
of Agricultural and Resource Economics, Davis, considerations for scaling up rice fortification
California, USA ∙ Twin-screw, hot-extrusion technology already exists
in the country on both large and medium scales.
Belinda Richardson Based on established medium-scale production
John Snow, Inc., SPRING Project Cost Analysis technologies, the estimated average cost of producing
Consultant, Davis, California, USA fortified rice kernels is US$1.76 per kg. Based in rice
consumption habits in the Dominican Republic,
Reina Engle-Stone rice fortification appears to be a good bet for increasing
University of California-Davis, Department micronutrient intake.
of Nutrition, Davis, California, USA ∙ However some measures of impact (e.g., effective
coverage) may suggest that programs other than rice
Hanqi Luo fortification be pursued, perhaps subnationally.
University of California-Davis, Graduate Group ∙ Regardless of micronutrient intervention program
of Epidemiology & Program in International and choices, fully funded monitoring and evaluation data
Community Nutrition, Davis, California, USA collection and analyses will be required.
∙ Rice fortification has not yet begun in the Dominican
Republic and private companies that are set to produce
Key Messages fortified rice kernels are in various stages of trials, and
∙ Fortified staple crops are one of many alternative government regulations regarding premixes are still
programs for addressing micronutrient deficiencies in under development.
developing countries. Their effectiveness will depend, ∙ Regardless of eventual regulations and despite very
in part, on the measure of impact selected, and on the high average per capita rice consumption in the Domini-
diets of target beneficiaries, which can vary spatially and can Republic, in this relatively small country excess
across socioeconomic groups. Their costs will depend national capacity for producing fortified rice kernels will
on the fortification technologies selected and the scales likely emerge; underutilized capacity may complicate
at which they are undertaken. emerging public/private partnerships and may also
∙ This paper uses detailed dietary intake data from increase the cost of a national rice fortification program.
Cameroon to demonstrate the effects of alternative
definitions of “success” on predicted program impact.
∙ This paper also reports cost estimates for medium-scale Introduction
production of fortified rice kernels in the Dominican Vitamin and mineral (micronutrient [MN]) deficiencies are com-
mon in developing and low-income countries, especially among
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A UNDERSTANDING FACTORS THAT INFLUENCE RICE FORTIFICATION 177
young children and women of reproductive age (WRA) because of onstrate the differences among indicators of MN intervention
their relatively high MN requirements.1,2,3 The economic conse- program impacts. Section three uses the same model to assess
quences can be large,4,5 and addressing these MN deficiencies is the effects on WRA of the hypothetical rice fortification program
expected to be very cost-effective.6 Sets of best-bet MN interven- in three separate macro-regions of Cameroon. Section four ex-
tion programs have been identified,7 though gaps in knowledge amines the costs of rice fortification in the Dominican Republic
remain regarding their effectiveness and cost-effectiveness sub- using medium-scale, hot-extrusion technology, and assesses na-
nationally and over time.8 tional fortified rice kernel production capacity. Section five pro-
At country level, several choices have to be made before se- vides conclusions and some policy implications.
lecting the appropriate MN intervention programs. First, mea-
sures of impact must be selected and agreed upon. There are Alternative measures of impact of a
many candidates available, chief among them being:9 MN intervention program
Different measures of impact can yield very different answers
Reach: the number (or %) of individuals who receive the
∙ to the question “How successful are current/planned MN in-
benefits of a program, regardless of their individual needs tervention programs?” Figure 1 reports estimates generated by
or the amounts of MN received; the Micronutrient Intervention Modeling Project’s (MINIMOD)
Coverage: the number (or %) of individuals with
∙ nutrition benefits model9 of the reach, coverage, and effective
micronutrient deficiency who receive the benefits of the coverage of four alternative platforms for delivering vitamin A
program, regardless of the amounts of MN received; and (VA) to young children in urban areas in Cameroon: high-dose
Effective coverage: the number (or %) of individuals
∙ VA supplementation (VAS) delivered via Child Health Days,
with insufficient dietary intake who achieve adequate dietary fortified edible oils (Oil) and bouillon cubes (Cube) delivered
intake due to program intervention(s). via commercial outlets, and biofortified Maize.9,10 If simply
reaching target beneficiaries is the selected measure of impact,
Different measures of impact will often point to different combi- then bouillon cubes, which were consumed by nearly 95% of
nations of cost-effective interventions. surveyed individuals on the previous day, is the clear “winner.”
If reaching only those with VA deficiency is the impact mea-
sure, then fortified bouillon cubes, oil and VAS become close
“First, measures of impact must be competitors, all with measures of predicted impact below
selected and agreed upon” 50%. Finally, if the objective is raising the dietary intake of VA
among individuals with low intake to adequate VA intake is the
objective – i.e., if effective coverage is selected as the impact
Second, the target beneficiary group or groups should be measure – then fortified oil and VAS are clearly the superior
identified; different groups (e.g., young children versus WRA) MN intervention programs in this setting, for the program pa-
may have different MN needs and consume different amounts of rameters modeled (reach and fortification levels), and for this
different types of foods, therefore one would not expect that food beneficiary group, but each of these programs fails to reach a
fortification programs would affect all individuals equally. large percentage of children in need, signaling the importance
Third, even in small countries, MN deficiencies might not be of selecting combinations of programs to more completely ad-
distributed uniformly over the landscape; if there are regional dress VA deficiencies.
differences in needs (north versus south, urban versus rural) and
if programmatic options exist, decision-makers may be in a posi- Predicting the impacts of fortified rice in Cameroon
tion to choose where to intervene. Because diets vary spatially and across socioeconomic groups,
Finally, timing often matters in responding to MN deficien- one would expect that patterns of effects of MN intervention
cies; some programs are quicker to launch but less cost-effective programs would also vary across these dimensions. Figure 2
in the long term, others will require longer start-up periods but shows estimated effects of the hypothetical introduction of for-
may prove to be more cost-effective in the long term. Therefore, tified rice into the diets of WRA in Cameroon (assuming that
combinations of programs that phase in/out over time may be 5.9 mg/kg of vitamin A and 95 mg/kg of zinc were added to
required to deal with pressing MN deficiency issues; developing 100% of rice consumed). The first trio of columns reports the
such a strategy requires a long planning horizon. reach of fortified rice; fewer WRA in the South macro-region of
This paper touches on the first three of these issues. The next Cameroon consume rice, compared to those in the North and
section uses a nutrition benefits model based on nationally repre- City macro-regions, and hence, on average, WRA in the South
sentative, individual dietary intake data from Cameroon to dem- benefit less from this MN intervention program. Perhaps more
178 UNDERSTANDING FACTORS THAT INFLUENCE RICE FORTIFICATION
figurE 1: Predicted reach, coverage, and effective coverage The rice fortification capacity and cost in
of alternative vitamin A delivery platforms *: Urban children, the Dominican Republic
6–59 months of age, Cameroon While several technologies exist for the fortification of rice,11
not all technologies are appropriate for all developing countries,
Reach Coverage Effective coverage for both cultural and economic reasons. In the Dominican Re-
100 public, as in many developing countries, consumers at all socio-
90 economic levels carefully select out imperfect rice grains and
80 practice intensive rice washing prior to cooking.12 Therefore,
% of Children who benefit
Source: MINIMOD Project Data, authors’ calculations. “While several technologies exist
for the fortification of rice,
figurE 2: Predicted effects of rice fortification with VA
and zinc *: Women in Cameroon, by macro-region, and by
not all technologies are appropriate
measure of program impact for all developing countries”
South North Yaoundé /Douala
80 Two rice-processing companies have purchased and in-
70 stalled twin-screw hot-extrusion machines, a technology that
% of Women who benefit
TablE 1: Productive capacity of established rice quired to purchase fortified kernels and the machines to blend
extruders in the Dominican Republic (metric tons of them with non-fortified milled rice. Machinery and blending
extruded kernels/month) costs are expected to be small and diffused across a large num-
ber of rice millers. The cost of fortified rice kernels, on the other
Medium-Scale * Large-Scale
hand, could significantly increase overall input costs for all rice
240 1,200
millers, especially those engaged in the processing and market-
* Production capacity of the medium-scale technology is based on running four of five ing of lower-quality, broken-grain rice.
extruders, five days per week, 20 hours per day.
Perhaps more important, the public-sector costs associated
Source: Authors’ calculations based on data provided by rice kernel producer. with managing the rice fortification program, including moni-
toring of the quality of rice in the wholesale and retail markets,
entities.13,18 Once these specifications are set, the MN premix are not addressed here.
for rice kernel extruders will be produced, and producers will
fine-tune extruders to guarantee the production of fortified rice
kernels that will be essentially indistinguishable by consumers
“Given the quantities of rice
from common grains of rice. consumed by all segments of the
The estimated cost of rice fortification presented below
is based on data from a medium-scale hot-extrusion produc-
population in the Dominican Republic,
tion technology. These data are based on actual establishment rice fortification is one likely
costs and expected operational costs. Tables 2 and 3 provide a
summary of estimated costs. The largest drivers of annual in-
cost-effective delivery platform for
put costs are electricity and broken rice (the key input into the addressing MN deficiencies”
extrusion process), which constitute approximately 22% each,
and the fortified premix, which constitutes almost 52% of the
annual recurring costs. Conclusions and implications for policy
There are additional private-sector costs not included in Given the quantities of rice consumed by all segments of the
this calculation that should be considered. Specifically, private- population in the Dominican Republic, rice fortification is one
sector costs of blending and packaging fortified kernels with likely cost-effective delivery platform for addressing MN defi-
non-fortified rice kernels are not considered here. If mandatory ciencies. However, several important caveats apply.
rice fortification is introduced, small-scale rice millers that lack First, while fortified rice may be an excellent platform for
the technology to produce fortified rice kernels would be re- reaching targeted beneficiaries, it may not deliver sufficient
TablE 2: Annual costs of producing fortified rice kernels using medium-scale technology
in the Dominican Republic (thousands US$a)
a
2016 US$
b
Assume a 5.5% compound annual interest rate and an expected life of extruders and buildings of approximately 10 years according to private industry estimates.
c
Production capacity of the medium-scale technology is based on running four of five extruders, five days per week, 20 hours per day.
d
Based on 2,880 MT annual production. Excludes private-sector blending costs, and public sector program management and M&E costs.
Source: Authors’ calculations based on data provided by medium-scale producer during factory visits.
180 UNDERSTANDING FACTORS THAT INFLUENCE RICE FORTIFICATION
TablE 3: Cost to private industry of producing fortified rice kernels using medium-scale technology (US$a)
a
2016 US$
b
ur estimate of $1.76 US$/kg of fortified rice kernels includes the cost of broken rice as the key input, and falls within the range of costs estimated by other authors,
O
e.g., DSM estimates are $4.10 US$/kg of fortified rice kernels for a premix formulated to address anemia and $2.10 US$/kg of fortified rice kernels for an alternative premix,
and Alavi et al. provide an estimate of $1.19 US$/kg of fortified rice kernels.
Source: Authors’ calculations based on data provided by medium-scale producer during factory visits.
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A UNDERSTANDING FACTORS THAT INFLUENCE RICE FORTIFICATION 181
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182 THE ROLE OF THE PRIVATE SECTOR IN RICE FORTIFICATION
The Role of
the Private Sector in
Rice Fortification
Greg S Garret, Caroline Manus build, improve and sustain rice fortification programs which
Global Alliance for Improved Nutrition achieve impact.
engagement from business and are seeking advice and BOX 2: The private sector in Costa Rica’s
guidance on best practice through the SBN. There are oppor- successful mandatory rice fortification program
tunities to promote rice fortification with the private sector
through the SBN, including:
The Costa Rican mandatory rice fortification program has
contributed to a reduction in folate deficiency and anemia
∙ Work with the global SBN team to identify
among the population at large, and has led to reductions of
which SUN Countries would benefit from developing neural tube birth defects and the infant mortality rate.
rice fortification programs – and establish a strategy
to engage national stakeholders through the national Background
SUN structures; Rice is the most important product in the Costa Rican food
∙ Disseminate best practice to national SBNs through basket. This staple food is consumed in all three daily meals,
the SBN global team; and and per capita consumption of rice is one of the highest
∙ Use the SBN’s national membership platforms to in the region. The 1996 National Nutrition Survey showed
reach out to business. a need for more essential vitamins and minerals in the
country. It should be noted that rice is the only food product
The SBN is co-convened at the global level by the Global for which the price is regulated by the Government. Also
Alliance for Improved Nutrition (GAIN) and the UN World because the rice industry is quite consolidated, mandatory
Food Programme (WFP). rice fortification was more feasible.
Quality assurance or internal control of fortified rice is the BOX 3: A voluntary approach to fortification in Brazil
responsibility of the producers and rice importers. Import-
ers must show a certificate proving that the product com-
“Magic rice,” a nickname given by Mauricio de Sousa
plies with all specifications. Quality control and monitor- (creator of Mônica, the beloved Brazilian national cartoon
ing of rice fortification is the responsibility of the Ministry character) or arroz vitaminado (meaning “vitamin rice”) is
of Health at the final point of sale to the consumer. fortified with vitamin B1, folic acid, iron, and zinc. The result
of more than 15 years of work, arroz vitaminado uses
technology developed by PATH, funded by the Bill & Melin-
fortification when micronutrient deficiencies are widespread, da Gates Foundation, and brought to market in partnership
and when there is a suitable food vehicle that is consumed in with GAIN through a pilot project which ended in 2015.
sufficient quantities by most of the population.6,7,8 Mandatory
fortification requires government will and leadership to create The aim was to develop a replicable model to scale up rice
the necessary legislation and monitoring system in order to en- fortification through commercial channels. The project
force legislation.9 demonstrated the feasibility of introducing a fortified rice
Experience shows that mandatory fortification has the product to the market through a vertically integrated model
greatest potential for health impact due to the fact that it cre- and reached over 2.5 million consumers, 460,000 of whom
ates necessary demand and can “level the playing field,” pro- were repeat consumers. Some of the lessons learned are
viding assurance to rice millers that competitors are held to discussed below.
the same requirements, incur the same core costs, and will
not be disadvantaged.1,10 The degree of industry consolida- Given the barriers to mandatory rice fortification, the pilot
tion, size and modernization also contributes to the eventual model was based on vertical integration, enabling a few
coverage of the mandated program. Decentralized milling upstream rice kernel producers to supply fortified kernels to
environments face both logistical and quality assurance chal- numerous rice millers. Millers, who generally own the rice
lenges. The South and Central American regions, which have brands in Brazil, could then in turn blend the kernels with
seen rapid centralization of the rice processing industry, argu- unfortified rice to market fortified rice to consumers..
ably have a more conducive industry structure for implement-
ing national-scale, mandatory rice fortification. Costa Rica has Research showed that pricing was not a major barrier to
had much success in mandating rice fortification (Box 2). commercializing rice, and should be driven by market forces.
Fortified rice was on average 40% less expensive than the
Delivery model 2: Voluntary, market-driven average rice of non-fortified rice, when including premium
rice fortification and the private sector brands. Research showed that only one in five rice consum-
Given the barriers to mandatory fortification in many contexts, ers has price as the top decision-driver. This environment al-
voluntary market-based approaches are often considered. Forti- lowed for the modestly higher costs brought by fortification
fication is voluntary when the private food industry has the op- to be absorbed by producers, retailers, and consumers.
tion to fortify its products. It is a business-orientated approach,
with rice products marketed as “value-added” products. In Although the business model tested in this pilot offered
countries like Colombia,11 Brazil (Box 3) 12,13,14 and Domini- an attractive business proposition to the fortified kernel
can Republic, large rice millers have successfully pioneered supplier, it also created conflicts of interest for other millers,
rice fortification voluntarily, launching fortified rice products who felt discouraged to source from a competitor. Creating
which improve consumer perception of a company’s brand disincentives for other players to join the market risks gen-
while providing better nutrition to consumers. However, due to erating a monopolistic situation and limits market growth.
slow build-up of consumer demand, especially among poorer Program design should be based on careful microeconomic
populations, the potential for going to scale and influencing a analysis and as far as possible avoid creating conditions
population’s micronutrient health may be limited. Voluntary that do not favor a competitive marketplace.
approaches to rice fortification have not yet been systemati-
cally evaluated to see if health impact has been achieved. In Brazil, fortified rice has become a niche market that rep-
In a voluntary commercial approach, an ecosystem com- resents a single-digit percentage of the overall rice market
prising a category brand, a quality management system, so- and may demonstrate that a purely commercial model for
cial marketing and a governance framework are instrumental.
186 THE ROLE OF THE PRIVATE SECTOR IN RICE FORTIFICATION
fortified rice is not sufficient to reach meaningful scale and BOX 4: Fortified rice for social safety nets
significant public health impact. Public-sector engagement in India and the private sector
is essential to de-risk fortification and level the playing field
in rice fortification programs.
In India, the public distribution of fortified rice has
shown the promise of having a positive public health impact.
After two local efficacy studies on the impact of fortified rice
on micronutrient status in schoolchildren, a consortium of
organizations conducted the first large-scale rice fortifica-
tion trial in Odisha state, India. A baseline study among
schoolchildren aged six to 14 years in Gajapati district
(district in South Odisha) found that 19% of the sampled
children were stunted (low height-for-age) and 14.5% were
wasted (low weight-for-height). The survey revealed that
73% of the boys and 74% of the girls from primary school
were affected by anemia.
Addressing Myths
and Misconceptions about
Rice Fortification
Helena Pachón Introduction
Food Fortification Initiative, USA Concerns, myths, and misconceptions exist regarding the
benefits and safety of rice fortification. This paper addresses
Cecilia Fabrizio, Jennifer Rosenzweig these concerns by presenting information from the global ex-
World Food Programme Regional Bureau for Asia perience as well as evidence based on rice and wheat flour
fortification.
Key Messages
∙ Rice fortification is safe.
“The fortification of staple foods
∙ Where rice is the staple food and micronutrient and condiments has been safely used
deficiencies are widespread, rice fortification has great
potential to significantly contribute to the reduction of
for more than 90 years to help reduce
micronutrient deficiencies. However, on its own it cannot micronutrient deficiencies”
eliminate all micronutrient deficiencies in a population:
in the most vulnerable groups, e.g., pregnant and
lactating women and preschool children, additional Is rice fortification safe?
interventions such as supplementation are required. The fortification of staple foods and condiments – a strategy
∙ Micronutrient deficiencies affect all socioeconomic used for more than 90 years – has been proven safe and effec-
groups. Therefore, where micronutrient deficiencies tive in significantly contributing to the reduction of micronutri-
are widespread, rice fortification benefits all ent deficiencies. As with other food fortification, rice fortifica-
socioeconomic strata of society. tion is safe because the type and levels of micronutrients added
∙ Rice fortification and biofortification differ as to the type, are calculated based on the following:
number and levels of micronutrients in rice, and as to
when they are included in rice. In biofortification, the ∙ The recommended daily intake of specific
process of fortifying occurs during the crop production micronutrients by age group and gender, as a person’s
phase, or prior to the harvest. In rice fortification, the age, gender and physiological status influences their daily
fortification is done post-harvest and can add more types nutrient requirements for healthy body functions
and higher levels of micronutrients. ∙ The highest level of intake that is likely to pose no risks
∙ When fortified with multiple micronutrients, white rice is of adverse effects in an age and gender group,
more micronutrient-rich than brown, parboiled, or non- which is referred to as the tolerable upper intake level (UL).
fortified white rice. The fortification levels are chosen so that the UL is not
∙ With a few exceptions, any variety of rice can be fortified. exceeded when fortified food is consumed
∙ Current technologies can produce fortified rice ∙ The level of specific micronutrients typically consumed
that tastes, smells and looks the same as non-fortified rice, by the target population
and retains its nutrients when prepared using various ∙ The daily/regular quantity of rice consumed by
cooking methods. the target population
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A ADDRESSING MYTHS AND MISCONCEPTIONS ABOUT RICE FORTIFICATION 189
This information is used to calculate the gap between the mi- figure 1: Percentage of non-pregnant Vietnamese women
cronutrients consumed and the micronutrients required by spe- (15–49 years) with iron deficiency, by socioeconomic group.
cific groups. This gap is used to determine which micronutrients,
and how much of the specific micronutrient, will be included in Nutrient Deficiencies Affect all Socioeconomic Strata (SES)
All Could Benefit from Fortified Rice
fortified rice. In other words, the level of micronutrients added
is calculated such that the additional micronutrients provided 25
in fortified rice will provide the greatest number of individuals
20.7
in the target population with adequate intake, without causing 20
intake above the UL by those who consume large quantities of
15.1
the fortified rice. Fortified rice fills the micronutrient gap, with- 15
Percent
out promoting excess intake. 11.9 11.9 11.2
10
It is important to remember that:
∙ The type and levels of micronutrients are set in such a 5
manner that even groups consuming large quantities of
fortified rice will not exceed the UL. For example, in some 0
countries, the typical adult consumes up to 400 or 500 g 1 (lowest SES) 2 3 4 5 (highest SES)
figure 2: Profile of select micronutrients in white rice, brown rice, parboiled white rice, and fortified white rice.4
White rice Brown rice Parboiled white rice Fortified white rice
5
mg/100 g rice
What is the difference between fortified Why not encourage consumption of brown rice
and biofortified rice? or parboiled rice instead of fortified white rice?
Rice fortification and biofortification are two different ap- White rice is widely consumed, and when fortified, can have a
proaches to make rice more nutritious. They can safely coexist significantly higher micronutrient content than non-fortified
as part of a strategy to improve micronutrient health. The dif- rice, including brown or parboiled rice. Therefore, there is a
ference lies in when and how micronutrients are added, and greater potential to improve micronutrient health by fortifying
the type, number and level of micronutrients that can be in- white rice than from increasing consumption of brown or par-
corporated.2 boiled rice.
In rice fortification, micronutrients are added after the rice
has been harvested. For example, folic acid, niacin, vitamins
B1 (thiamin), B6 (pyridoxine) B12 (cobalamin), A (retinol), D
“When fortified, white rice
(cholecalciferol), E (tocopherol), iron, zinc and selenium can can have a significantly higher
be added without changing the appearance of the rice. For ad-
ditional information, please refer to the contributions by de
micronutrient content
Pee et al (p. 143), Montgomery et al (p. 159) and Rudert et al than non-fortified brown or
(p. 193).
Biofortification increases the micronutrient content
parboiled rice”
through breeding or genetic modification (GM). Therefore it
occurs before harvesting the crop. An example of biofortifica- Figure 2 shows the micronutrient content (iron, zinc, thia-
tion is Golden Rice, which expresses β-carotene.3 In practice, min, niacin and vitamin B6) for non-fortified rice (white, brown
a limited number of nutrients are increased in biofortified rice and parboiled) and fortified white rice.4 The content of folate
varieties at any one time, and research is ongoing to increase and vitamins A and B12 are not shown because they are absent
their levels. Currently, only non-GM rice cultivars with higher or negligible in all types of rice except fortified rice. The data
iron or zinc levels are available. Genetically modified Golden demonstrates three points:
Rice containing provitamin A has not been released on the
market. 1. Milling removes much of rice’s naturally
In addition, the levels of nutrients that are added to rice occurring nutrients
can be much higher with fortification than with biofortification. 2. Parboiling retains a significant level of some nutrients
However, once a rice variety is biofortified, no additional pro- 3. Brown rice is relatively iron- and zinc-rich compared
cesses are needed after harvesting to increase nutrient levels. to non-fortified white rice
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A ADDRESSING MYTHS AND MISCONCEPTIONS ABOUT RICE FORTIFICATION 191
While the nutrient content of fortified rice is dependent on Is fortified rice acceptable to consumers?
the amounts added, fortified rice has the potential to offer much The acceptability of fortified rice depends on the fortification
higher levels of key nutrients such as iron, zinc, vitamin A, folic technology, the type and levels of nutrients added, and consum-
acid and vitamin B12. er preferences. All rice fortification technologies aim to make
In addition, the consumption of fortified white rice does not fortified rice taste, smell, and look the same as non-fortified rice.
require a change in existing behaviors, as would be the case if A recent study that compared rice fortified using extrusion
consumption of brown or parboiled rice were to be increased. technology with non-fortified rice evaluated six sensory pa-
While there is little data on brown rice consumption in Asian rameters (appearance, color, texture, odor, taste, and overall
countries, the 2009 US National Health and Nutrition Survey5 acceptability) among Indian children 8–11 years of age.6 The
found that, after years of promotion, only 2.9% of children children ranked each sample with a score of 1 (worst) to 5 (best).
and 7.7% of adults consumed the recommended daily level of As shown in Figure 3, the fortified and non-fortified rice were
at least three whole grain ounce equivalents (which includes statistically indistinguishable on all six sensory parameters. In
brown rice). This finding is in line with lessons learned from addition, all sensory parameters were rated over 4 points, sug-
wheat flour and salt fortification to the effect that communica- gesting strong acceptability for both types of rice. This study
tion alone without additional behavior change activities does shows that consumers perceive fortified rice to taste, look, and
not increase consumption of a specific food. smell similar to non-fortified rice.
figure 3: A
cceptability scores for fortified and non-fortified rice among Indian children aged 8–11 years.
Best
acceptability Fortified rice Non-fortified rice
4
Aacceptability score
0
Worst
acceptability Appeareance Color Texture Odor Taste Overall
Adapted from6
192 ADDRESSING MYTHS AND MISCONCEPTIONS ABOUT RICE FORTIFICATION
References
“Fortified rice is acceptable to 1. Laillou A, Van Pham T, Tran NT et al. Micronutrient deficits
are still public health issues among women and young children
consumers, as virtually any variety in Vietnam. PLoS One 2012;7(4): e34906. doi:10.1371/journal.
of rice can be fortified” pone.0034906.
2. Nestel P, Bouis HE, Meenakshi JV et al. Biofortification of staple
food crops. J Nutr 2006;136:1064–7.
Conclusion 3. Ye X, Al-Babili S, Klöti A et al. Engineering the provitamin A
Fortified rice is safe and acceptable to consumers. Fortification (β-carotene) biosynthetic pathway into (carotenoid-free)
levels are set such that the additional micronutrients consumed rice endosperm. Science 2000;287:303–5.
will provide the greatest number of individuals in the target pop- 4. USDA Nutrient Data Bank. http://ndb.nal.usda.gov/ndb/search/list
ulation with adequate intake, without causing excessive intake. 5. Reicks M, Jonnalagadda S, Albertson AM et al.
Fortified rice is acceptable to consumers, as virtually any variety Total dietary fiber intakes in the US population are related
of rice can be fortified and, if properly produced, will taste, smell to whole grain consumption: results from the National Health
and look the same as non-fortified rice. Fortified white rice may and Nutrition Examination Survey 2009 to 2010. Nutr Res
be more readily acceptable to consumers than less micronutrient- 2014;34(3):226–234.
rich types of non-fortified rice, such as brown or parboiled rice. 6. Radhika MS, Nair KM, Kumar RH et al. Micronized ferric
However, fortified rice should be part of a larger micronutrient pyrophosphate supplied through extruded rice kernels improves
intervention strategy, as population groups with higher nutrient body iron stores in children: a double-blind, randomized,
needs, such as pregnant and lactating women, will require ad- placebo-controlled midday meal feeding trial in Indian school-
ditional interventions to meet their micronutrient needs. children. Am J Clin Nutr 2011;94(5):1202–10.
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A LINKING RICE FORTIFICATION OPPORTUNITIES WITH NUTRITION OBJECTIVES 193
figure 1: Prevalence of anemia in three vulerable groups, for nine Asian countries.2
80 75
70 71
70
Percentage of target population
59
60 56 55 53 55
50 45 44 46 48 47 47 48 46 44 45
43
40 35
33 33
30
30 27
22 21
20 15
10
0
Sri Lanka Philippines Indonesia Nepal Bangladesh Laos Cambodia India Myanmar
To gain a comprehensive understanding of a population’s 2013 Lancet Maternal and Child Nutrition series, used an analy-
micronutrient status, it is recommended to examine data from sis of national diets to estimate that 17% of the world’s popula-
multiple sources and methods, and where possible disaggregate tion is at risk of zinc deficiency.1 This method was used as there
by population group using factors such as socioeconomic status is little biochemical data on zinc deficiency. These detectable
and geographic location, in addition to age and gender. This seg- deficiencies may also coexist with other deficiencies that are
mentation helps identify the target groups who can most benefit harder to detect, such as vitamin B12, folic acid or vitamin D.
from rice fortification. The three main sources of information for For additional information on the global burden of micronutri-
obtaining a picture of the micronutrient status of a population are: ent deficiencies, please refer to Figure 1 in the contribution by
Milani et al (p. 137).
1) Micronutrient deficiency surveys, using biochemical data Micronutrient deficiency surveys can estimate a population’s
2) Dietary intake of micronutrients, usually with 24-hour micronutrient status using biomarkers such as plasma retinol or
recall surveys retinol binding protein (RBP) for vitamin A, or ferritin to estimate
3) Proxy indicators, such as prevalence of anemia, stunting, iron. However, validated biomarkers do not exist for all micronu-
neural tube defects, dietary diversity, infant and young trients, and the interpretation of the results can be complex. In
child feeding practices, food security, and sanitation addition, logistics, sample collection and storage of samples may
be complex. Although micronutrient deficiencies primarily affect
It is important to emphasize that having complete micronutri- the poorest and rural populations, other socioeconomic strata
ent and nutrient intake data is NOT a prerequisite for fortifica- and urban populations may also be affected. For additional infor-
tion initiatives. A combination of available data and proxy indi- mation, please refer to Figure 1 in the contribution by Pachón et
cators is sufficient for estimating the burden of micronutrient al (p. 188).
deficiencies.
Dietary intake data
Data on foods commonly consumed by the population can sup-
“Multiple micronutrient deficiencies plement biochemical and clinical evidence of micronutrient de-
tend to coexist in low- and ficiencies. Such data can help to identify which micronutrients
are most likely to be insufficient, which population groups have
middle-income countries” insufficient diets and which areas of the country are most af-
fected, using food composition tables indicating the micronutri-
Multiple micronutrient deficiencies tend to coexist in low- ent content of the foods.
and middle-income countries. The most common ones are iron,
iodine, and vitamin A. These can be estimated using biochemi- Use of proxy indicators
cal data. Zinc deficiency also makes a substantial contribution When nutrient intake data is not available, as is often the case
to the global burden of disease. Black et al, in the landmark in low-income countries, proxy indicators can be used to esti-
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A LINKING RICE FORTIFICATION OPPORTUNITIES WITH NUTRITION OBJECTIVES 195
figure 2: Mean dietary diversity score by quintiles Dietary diversity is commonly used as a proxy indicator
of total expenditure on food for risk of micronutrient deficiencies, as a lack of dietary diver-
sity often results in micronutrient deficiencies. Diets lacking in
14 diversity may have a high intake of plant-source foods and a
low intake of animal-source foods, which are associated with
12
deficiencies of key micronutrients. Cereals, roots and tubers
Mean dietary diversity score
figure 3: Prevalence of anemia in different age groups.2 that is consumed by older age groups.
Adolescents have increased micronutrient requirements
∙
due to growth spurts.
Preschool children 47% Lower socioeconomic groups tend to have a higher
∙
prevalence of deficiencies compared to higher socioeco-
School-age children 25%
nomic groups. Typically, the diets of lower socioeconomic
Pregnant women 42% groups lack diversity and are primarily based on cereals,
roots and tubers, with limited animal-source foods, fats
Non-pregnant women 30%
and fruits and vegetables. Although the diets of poorer
Adult men 13% populations tend to be more micronutrient-deficient, the
transition to energy-dense but micronutrient-poor diets
Elderly 24%
with a high proportion of processed foods also puts higher-
income groups at risk of micronutrient deficiencies.
WHO 2008: Worldwide prevalence of anemia
Populations affected by emergency, due to poor
∙
dietary diversity (mitigated to some extent when they
food expenditure on e.g., non-grain or animal-source foods, in- receive fortified foods).
adequate breastfeeding and infant and young child feeding and ∙ Groups marginalized as a result of geography,
caring practices, etc. ethnicity or religion.
Assessing the burden of micronutrient deficiencies Potential to benefit from food fortification
Although rice fortification can benefit a wide range of popula- varies across life cycle
tion groups, it is important to assess which population groups As a population-based intervention, rice fortification must ben-
have the highest risk of micronutrient deficiency or inadequate efit those at risk of deficiencies, while remaining safe for the
intakes, and why. Figure 3 shows the estimated prevalence of members of the general population that consume the most rice.
anemia across different population groups. The highest preva- To calculate the potential benefit that rice fortification can pro-
lence is estimated for preschool children with almost half of the vide, the following must be assessed:
children estimated to be anemic. In comparison, only 13% of
adult men are estimated to be anemic. ∙ The existing need for micronutrients, defined
by the likely dietary gaps.
∙ The quantity of fortifiable food consumed, defined as the
“It is important to assess total amount of food consumed and the types and sources
which population groups have of foods that can be fortified.
∙ The level of fortification, where the aim is to provide
the highest risk of micronutrient enough micronutrient to reach the estimated average
deficiency, and why” requirement (EAR) of adult men or women (which is appro-
ximately 70% of the recommended nutrient intake) from
the fortified food, using the typical amount of the food that
Several vulnerable groups are most likely to be affected by mi- is consumed by adult men and women to
cronutrient deficiencies: determine the content per 100 g. For more information
on calculating levels of micronutrients, please refer to
∙ Girls and women of reproductive age are biologically the contribution by de Pee et al (p. 143).
more vulnerable, especially to iron deficiency, as they
experience iron loss due to menstruation. Rice fortification is one component of an integrated approach
∙ Pregnant and lactating women have greater to address micronutrient deficiencies, including micronutri-
micronutrient requirements to support growth ent supplementation (for specific target groups), promotion of
and breastfeeding. dietary diversification, social protection schemes, and disease
∙ Infants and young children have greater micronutrient control. The potential of rice fortification to address micronutri-
requirements due to rapid growth. Their relatively small ent deficiencies varies across the life cycle. As shown in Fig-
stomach size also limits their intake of foods. Therefore, ure 4, the potential for benefit from rice fortification depends
their foods should be more nutrient dense than food on the needs of the target group, the amount of fortified rice
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A LINKING RICE FORTIFICATION OPPORTUNITIES WITH NUTRITION OBJECTIVES 197
figure 4: Potential to benefit from food fortification across the life cycle
Pregnancy Lactating 6–23 mo 2–5 years 5–18 years WRA (15 – Adult men Elderly
mother 49 years)
Micro- very high very high very high high moderate moderate low to moderate
nutrient to high to high moderate to high
need
References
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undernutrition and overweight in low-income and middle-income
countries. Lancet 2013;382(9890):427–451.
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Database on Anemia. 2008. Accessed from: http://whqlibdoc.who.
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for global progress. 2013. www.unicef.org/gambia/Improving_Child_
Nutrition_the_achievable_imperative_for_global_progress.pdf.
5. Neumann CG, Harris D, Rogers L. Contribution of animal source
foods in improving diet quality and function in children in the
developing world. Nutr Res 2002;22:193–220.
6. Champagne ET, Wood DF, Juliano BO et al. The rice grain and its
© WFP/Nasly Salcedo
Conclusion
Rice fortification has the potential to contribute to the reduc-
tion of micronutrient deficiencies and positively impact pub-
lic health. While all population groups may be micronutrient-
deficient, the magnitude varies between groups. Additional in-
terventions specifically targeted towards those with the highest
micronutrient needs, such as pregnant and lactating women
and preschool children, remain necessary.
Linking rice fortification with nutrition objectives requires
the identification of groups which are most at risk of micronu-
trient deficiencies, the groups that will benefit the most from
rice fortification, and the most appropriate delivery option to
reach identified target groups. Mandatory fortification offers the
greatest potential for achieving a public health impact. The for-
tification of rice distributed through social safety net programs
provides an opportunity to reach vulnerable groups when man-
datory fortification is not feasible.
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A LANDSCAPE ANALYSIS FOR RICE FORTIFICATION 199
Landscape Analysis
for Rice Fortification
Summary of results
Introduction
To create viable, sustainable and cost-effective rice fortification
programs, key factors such as rice industry structure, standing
policies and regulations and political will, among others, must
be identified and studied before a formal process of develop-
ment and implementation is initiated. That is why carrying out a
Landscape Analysis for Rice Fortification should be the first step
in introducing, implementing and carrying out a fortification
strategy that considers all the key aspects for decision-making
by the government, the private sector, and civil society.
A situation analysis should, at minimum, determine the
most viable delivery channels; how to integrate the fortification
steps into the rice supply chain; how to create, adapt or improve
public policies and existing regulatory frameworks; the estima-
ted costs relative to the strategy’s public health impact; and the
key stakeholders to be included in the process.
© WFP/David Parra
With the objective of informing the group work carried out
during the Scaling Up Rice Fortification in Latin America and the
Caribbean (see page 212 for full workshop report), a Landsca-
pe Analyses was commissioned for each participating country.
Each profile considered and sought to include all the key com-
ponents recommended by Yusufali et al in the series on rice for-
Children waiting for their lunch, Choco Colombia 2004
tification in Asia, which precedes this supplement.1
Overall, the profiles provide a wealth of information on the
situation for rice fortification in the region, but they also have
their limitations. The multiple information gaps at the country
level and the lack of precision or updating of the data is evident.
None of the countries have all the necessary information re-
commended first hand. It is also important to note that national
percentages sometimes hide a much more worrying nutritional
reality among the most vulnerable populations.
Despite the above constraints, data collection – commissio-
ned by the Regional Office of the World Food Programme (WFP)
– lays the foundation for initiating country-level discussions for,
and building on, rice fortification.
The following is a summary of some key data for each coun-
try; complete profiles can be requested through: rebrand.ly/
Country-Profiles
200 LANDSCAPE ANALYSIS FOR RICE FORTIFICATION
Colombia
Nutrition situation
Chronic malnutrition in children under 5 years 13.2%
Anemia By age group (%)
6 –11 months 59.7
6 –59 months 27.5
Women of reproductive age 17.9
Vitamin A deficiency (1–4 years of age) 24.3%
Zinc deficiency (1–4 years of age) 43.3%
Source: Colombian Family Welfare Institute. National Survey of Nutrition Status in Colombia (ENSIN) 2010. Bogota. 2011.
a
Fortified complementary food
* Currently about 35% of rice consumed in the country is voluntarily fortified by industry using spray technology, of which the micronutrient retention,
stability and efficiency are not known.
* Contraband rice is a challenge in Colombia. It is estimated that it represents 24% of the rice consumed.
Cuba
Nutrition situation
Chronic malnutrition in children under 5 years –
Anemia By age group (%)
6 –11 months 41.4
6 –59 months 29.5
Pregnant women 21.6
Pregnant women 8.5 %
Zinc deficiency (1–4 years of age) –
a b
Fortified cereal, Fortified cereal/complementary food
202 LANDSCAPE ANALYSIS FOR RICE FORTIFICATION
Guatemala
Nutrition situation
Chronic malnutrition in children under 5 years 46.5%
Iron deficiency By age group (%)
6 –11 months 80.1
6 –59 months 18.6
Women of reproductive age 14.3
Pregnant women 31.9
Vitamin A deficiency (children under 5) 0.3
Zinc deficiency (children under 5) 25 –38.6%
Fortification of specific foods > Population: Children 0–2 years old, pregnant and lactating women
in the districts of Totonicapán, Sololá and Chimaltenango
Incaparinac> Fortificants: Vitamins A, D, K, B1, B2, B3, B12, folic acid, iron,
zinc, iodine, calcium
Bienestarinad> Fortificants: Vitamins A, B1, B2, B3, B12, folic acid, iron,
zinc, calcium
Peanut +e> Fortificants: Vitamins A, C, D, E, B1, B2, B5, B6, B12, folic acid,
iron, zinc, iodine, calcium, potassium, phosphorus, magnesium, copper,
manganese, selenium
Supplementation programs Iron > Population: Children 6 months to 5 years, children of 5 –10 years,
adolescents, pregnancy and postpartum
Folic acid > Population: Children 6 months to 5 years, women of
childbearing age, pregnancy and postpartum
Micronutrient powders > Population: Children 6 months to 5 years
(replacing iron and folic acid)
Vitamin A> Population: Children 6 months to 5 years
a
Fortified complementary food
b
Fortified blended food
c
Beverage made of corn flour and soy flour fortified with vitamins and minerals
d
F ortified complementary food
e
N
utritional supplement
Fortified foods in the commercial market Social protection programs that deliver rice
Information not available None
* Adapted from the Codex Standard for Rice (Codex Stan 198–1995)
204 LANDSCAPE ANALYSIS FOR RICE FORTIFICATION
Haiti
Nutrition situation
Chronic malnutrition in children under 5 years 22%
Anemia By age group (%)
6 –11 months –
6 –59 months 65
Women of reproductive age 49
Pregnant women –
Vitamin A deficiency (school age children) 32%
Zinc deficiency (children under 5) 30%
Source: Ayoya et al (2012) Precis of Nutrition of Children and Women in Haiti: Analyses of Data from 1995 to 2012; CNSA, Oxfam 2016. Rapport d’évaluation
approfondie de la sécurité alimentaire dans le contexte de la sécheresse basée sur l’Approche de l’Economie de Ménages (AEM)
Government/public sector programs for fortification 76% of the population living on less than US$ 2/day
of food and complementary foods consume 70% of rice
Information not available Consumption per person per day (in g): –
Annual per capita consumption (in kg): –
Fortified foods in the commercial market
Information not available Characteristics of the rice industry
Cultivation yield (tons): 114,400
Social protection programs that deliver rice Cultivation yield (t/ha): 2.07
None Number of mills: 500
Area planted with rice (ha): 85,000
Legislative framework for rice fortification Imports (tons): 415,000
None
Source
Rice Consumption patterns Yves-Laurent Régis, Landscape Analysis for Rice Fortification: Haiti.
% who consume it daily: Report presented to the World Food Programme Regional Bureau for
86% of homes consume it Latin America and the Caribbean. Link to full profile:
rebrand.ly/Country-Profiles
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A LANDSCAPE ANALYSIS FOR RICE FORTIFICATION 205
Honduras
Nutrition situation
Chronic malnutrition in children under 5 years 23%
Anemia By age group (%)
6 –11 months 46%
6 –59 months 25.7%
Women of reproductive age 18%
Pregnant women 22%
Vitamin A deficiency * –
Zinc deficiency ** –
* Adequacy of > 150%. Only in rural and western regions a deficit occurs in 10% of households
** It is estimated that 85% of households have acceptable zinc consumption
Fortified foods in the commercial market Social protection programs that deliver rice
Corn flour (voluntary fortification) School Feeding Program (WFP purchases)
* Adapted from the Codex Standard for Rice (Codex Stan 198–1995)
206 LANDSCAPE ANALYSIS FOR RICE FORTIFICATION
Panama
Nutrition situation
Chronic malnutrition in children under 5 years 19.1
Anemia By age group (%)
6 –11 months –
6 –59 months 36.0
Women of reproductive age 40.3
Pregnant women 36.4
Vitamin A deficiency (preschool children) 1.8%
Zinc deficiency (1–4 years) –
Source: Survey of Living Standards 2008 / Global Nutrition Report 2015; Ministry of Health. National Survey of Vitamin A and Anemia. Panama, 1999
a
Fortified complementary food
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A LANDSCAPE ANALYSIS FOR RICE FORTIFICATION 207
Fortified foods in the commercial market Social protection programs that deliver rice
Information not provided. SENAPAN food purchase bonus program
Peru
Nutrition situation
Chronic malnutrition in children under 5 years 32,6%
Anemia By age group (%)
6 –11 months –
6 –59 months 32.6
Women of reproductive age 20.7
Pregnant women 28.0
Vitamin A deficiency (< 5 years of age) 11.7%
Zinc deficiency (1–4 years) –
Source
Laura Astete Robilliard, Landscape Analysis for Rice Fortification:
Peru. Report presented to the World Food Programme Regional
Bureau for Latin America and the Caribbean. Link to full profile:
rebrand.ly/Country-Profiles
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A LANDSCAPE ANALYSIS FOR RICE FORTIFICATION 209
Dominican Republic
Nutrition situation
Chronic malnutrition in children under 5 years 7.1%
Anemia By age group (%)
6 –11 months –
6 –59 months 28
Women of reproductive age 18%
Vitamin A deficiency (households) * –
Zinc deficiency (households) ** –
Source: National Micronutrient Survey, 2012; Menchu et al, The Quality of the Diet of the Dominican Republic Approximate with the Data of the ENIGH-2007
Reference
1. Yusufali, R., Ghoos, K. Landscape Analysis for Rice Fortification.
Scaling Up Rice Fortification in Asia, Sight and Life on behalf
of the World Food Programme, 2015.
210
FORTIFIED RICE SUPPLY
RICE FARMERS RICE MILLERS
PADDY RICE
BR RIC
CE D
RI LE
OK E*
IL
EN
M
FORTIFIED KERNEL PRODUCER (EXTRUSION EXAMPLE)
Extruder
IX
IX M
M T
RE AN
)
(P FIC
I
RT
FO
* For extrusion technology broken rice can be used to produce fortified kernels; with coating technology, head rice is required.
CHAIN 211
FORTIFIED FORTIFIED
RICE RICE
FORTIFIED FORTIFIED
RICE RICE
TERMINOLOGY Paddy rice: Rice kernels still enclosed in an inedible, protective hull (rough rice) Head rice: Unbroken grains of milled rice with the hull, bran, and germ removed
Milled rice: polished rice is the regular-milled white rice. Hull, bran layer and germ have been removed. Blending: Mixing milled, non-fortified rice with fortified kernels in
ratios between 0.5–2% to produce fortified rice. Fortificant mix: blend that contains several selected micronutrients (also referred to as premix) Fortified kernels: fortified rice-shaped
kernels containing the fortificant mix (extrusion) or whole rice kernels coated with a fortificant mix (coating).
212 SCALING UP RICE FORTIFICATION IN LATIN AMERICA AND THE CARIBBEAN
Scaling Up Rice
Fortification in Latin
America and the Caribbean
Workshop, Santo Domingo,
Dominican Republic, 2016
The Scaling Up Rice Fortification in Latin America and the ing factors in the feasibility, sustainability and impact of rice
Caribbean event, held in Santo Domingo, Dominican Repub- fortification in each of the eight participating countries. Dur-
lic (August 2016), brought together over 100 stakeholders in- ing the workshop, the participants were presented with the re-
cluding government decision-makers and technical staff, and gional justification for considering rice fortification, the global
national, regional and international technical experts from evidence for rice fortification, and technical aspects related to
various institutions and agencies including the United Nations food fortification in the context of the double burden, conceptu-
(UN), academia, and the private sector. Country delegations at- al frameworks and public policy instruments and the different
tended from Colombia, Cuba, Dominican Republic, Guatemala, technologies for rice fortification. In addition, three different
Haiti, Honduras, Panama and Peru. Two representatives from national implementation models were presented: Costa Rica
El Salvador attended as observers. The workshop was organized (mandatory), India and Bangladesh (both social safety net pro-
with the support of a Technical Advisory Group including mem- grams), and Brazil (voluntary program).
bers from the Food Fortification Initiative (FFI), the Institute of The workshop presenters and facilitators collaboratively re-
Nutrition of Central America and Panama (INCAP), the United viewed all the presentations during a preparatory meeting.
States Agency for International Development (USAID), the Pan
American Health Organization (PAHO), the World Food Pro-
figure 1: Map of countries represented at the workshop
gramme (WFP), the Peruvian National Nutrition Institute (INN),
and the Ministry of Health of Costa Rica.
how rice production is organized in the country; program imple- through social protection programs. A presentation about the
mentation is always easier when production is centralized. As a experience of Brazil in promoting voluntary rice fortification
closing point, it was noted that control and inspection of forti- was delivered as a third potential model for countries to con-
fied rice production is a key factor to sustain motivation and template based on their nutritional objectives.
compromise from producers and to ensure that the nutrition
goals set are met. Mandatory rice fortification
The first day of the workshop concluded with a presentation Melanie Ascencio (Ministry of Health, Costa Rica) and Jose An-
on Technologies for Rice Fortification. Hector Cori, Nutrition Sci- tonio Martínez (ANINSA) presented the mandatory rice fortifi-
ence Director for DSM, presented the different rice fortification cation model of Costa Rica. Costa Rica has a long trajectory in
methods, including parboiling, dusting, coating and extrusion, the implementation of mandatory fortification programs. Giv-
and the benefits, limitations and costs associated with each en the high consumption of rice across all population groups,
method. Mr Jose Solera, Director of Operations at NTQ, presented the Ministry of Health (MoH) of Costa Rica identified it as a suit-
the experience of a private company in Costa Rica that distrib- able vehicle for micronutrient fortification to achieve a positive
utes most of the fortified rice in the country and uses coating public health impact. For this reason the MoH who approached
technology. The lessons learned as part of the process, namely ANINSA, the National Association of Rice Producers, and CO-
the importance of public-private collaboration and of training NARROZ, the National Rice Corporation of Costa Rica, to col-
industrial partners on how to work with the product, the need for laborate on the effort (more information can be found on page
continuous monitoring of product quality conducted by a quali- 217 of this supplement).
fied laboratory and the importance of using a fortified kernel that
is indistinguishable by the consumer, were also shared. Distribution of fortified rice through
social protection programs
National rice fortification program models Rizwan Yusufali of the WFP Regional Bureau in Asia presented
Three national rice fortification program models were presented the examples of Bangladesh and India, where fortified rice is
on Day 2 of the workshop. The case of Costa Rica was discussed delivered through social protection programs.
to illustrate a mandatory program, followed by a presentation In Bangladesh, the National Strategy for the Prevention of
on India and Bangladesh, where fortified rice is distributed Micronutrient Deficiencies includes food fortification. As was
© WFP / Elio Rujano
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A SCALING UP RICE FORTIFICATION IN LATIN AMERICA AND THE CARIBBEAN 215
© WFP / Elio Rujano
Regional and global experts and speakers at the Rice Fortification Workshop in the Dominican Republic, 2016
the case in Costa Rica, the initiative involved multi-stakeholder proach to implementation, 4) the creation of a multidisciplinary
engagement, consisting of research, government, private sector technical advisory group, and 5) high visibility of the interven-
and corporate partnerships. A research study was conducted tion through the dissemination of results. Prevailing issues to
early on to generate country-specific evidence on acceptance be resolved include increasing domestic production capacity,
by the targeted population; encourage the distribution of the lowering incremental cost, and ensuring the long-term suitabil-
subsidized fortified rice targeting improved health; document ity of the intervention.
nutrition and productivity benefits; and facilitate expansion Both examples are valuable to the Latin America and the Ca-
and scaling-up. ribbean region, where social protection programs abound and
Among the key success factors of this program, implemented are well established.
exclusively through Government Social Safety Nets, the follow-
ing stand out: 1) a multisector approach to implementation, 2) Voluntary rice fortification
working in partnership with development partners, 3) receiving Caroline Manus from the Global Alliance for Improved Nutrition
technical support from experienced UN agencies and private (GAIN) presented the experience in Brazil with voluntary rice
corporations, and 4) addressing the commercial sustainability fortification. PATH and GAIN joined forces to develop a scale-
issues for fortified rice to guarantee local production of the forti- up model through commercial channels; Brazil was chosen as a
fied kernel. Moving forward, challenges persist, including cost, pilot country for this private-sector-driven initiative because of
marketing and the implementation of quality assurance proto- a variety of factors, namely:
cols.
The government of India also decided to deliver fortified ∙ Industry consolidation
rice through its social safety net scheme, using targeted public ∙ Mature retail sector
distribution through midday school meals and integrated child ∙ The experience of PATH in the country and
development services. A number of studies have been carried ∙ A significant prevalence of micronutrient malnutrition
out in the country to assess the acceptability and efficacy of the among the urban and rural populations.
intervention to support advocacy efforts in different depart-
ments and ministries at the national and state level. In the con- The project had the overall goal of developing new markets
text of India, a number of factors supported the continuance of and driving commercial models at scale for a variety of fortified
the effort, specifically 1) creating domestic capacity for fortified rice products to be produced and distributed in the country. Five
kernel production, 2) a local evidence base, 3) a systematic ap- main steps were carried out for this project: 1) PATH worked
216 SCALING UP RICE FORTIFICATION IN LATIN AMERICA AND THE CARIBBEAN
Rice Fortification
in Costa Rica
Case study
table 1: Overview of fortified foods, fortificants and fortification levels in Costa Rica
remained at critical levels.1 In addition, a study based on data Fortified rice supply chain
from the nation’s Congenital Disease Registry showed that 12 in Costa Rica’s rice supply chain is relatively consolidated. Two
10,000 infants had neural tube defects.2 fortified kernel producers supply the 11 rice milling companies
In response, the government established a cross-sectoral Na- operating in Costa Rica. The millers blend the fortified kernels
tional Micronutrient Commission and expanded its fortification with non-fortified rice at the specified ratio (0.5%) and sell the
efforts, in partnership with the private sector. Mandatory forti- fortified rice through their distribution channels. The 11 mill-
fication of wheat flour began in 1997, followed by corn flour in ers are brought together under the National Association of Rice
1999, milk and rice in 2001, and sugar in 2003. See Table 1 for Producers (ANINSA). The rice corporation (CONARROZ) is the
an overview of the fortified foods in Costa Rica and the fortifica- sole entity allowed to import rice within a set quota.
tion level.
Setting standards
Legislative framework for rice fortification Setting rice fortification standards started with consideration
In 2001, the Presidency of the Republic and the Ministry of of the typical local diet, including consumption of other forti-
Health enacted the “Regulations for the Enrichment of Rice.” fied foods. Other criteria used in selecting the micronutrients
The legal framework for rice fortification was placed under and levels of the rice fortificant premix included: the nutrient
the umbrella of the 1974 General Health Law. The legislation deficiencies in the population; the interaction between nutri-
mandated that all direct for human consumption rice must be ents; the recommended nutritional intake; and the level of rice
fortified, whether the rice is domestically produced or imported. consumption. The combined micronutrient intake from fortified
The regulations defined the specific micronutrients and the re- rice and other fortified foods was determined to be effective and
quired fortificant levels. In addition, the regulations assigned safe. Based on these considerations, the standard was set to re-
external monitoring and quality control to the government and quire fortification with vitamin B1 (thiamin), B3 (niacin), B9 (folic
internal monitoring to the rice industry. acid), vitamin B12 (cobalamin), vitamin E, selenium, and zinc.
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A RICE FORTIFICATION IN COSTA RICA 219
In Costa Rica rice is not fortified with iron and vitamin B2 (ri- coating and extrusion technology and the blending machinery,
boflavin) for two reasons. First, tests showed that the type and as well as installation and calibration. Ongoing, the primary cost
concentration of iron recommended at the time (2001) produced components are: the micronutrient premix costs; production
changes in both taste and appearance that were unacceptable to costs of the fortified kernels; and quality control and monitor-
consumers. Unless color change is not a problem for consumer ing costs. Minor costs include blending, storage and transport.
acceptability, rice is typically not fortified with vitamin B2 be- In the early days of the program, costs due to fortification rose
cause it changes the color of fortified kernels. Second, iron and to about 5–6% of the retail price. As fortified kernel producers
vitamin B2 were available in other fortified commodities. Note and rice millers gained experience and increased production
that new formulations of iron are now available that do not im- efficiencies, the additional costs fell to less than 1%. This cost-
pact consumer acceptability of fortified rice. reducing gain in production efficiency is typically observed in
food fortification programs. Currently, the estimated additional
Technology cost per kg of rice due to fortification is about US$ 0.01, or about
In Costa Rica, where rice is washed prior to cooking, the ini- 0.9% of the retail price.
tial preference to fortify using dusting technology was deemed
inappropriate. Dusting technology, in which polished, milled Impact of micronutrient fortification programs
rice kernels are dusted with a fortificant mix, does not allow Although improvements cannot be attributed to any specific for-
for washing or cooking in excess water, as this will wash out tified food, national impact evaluation and monitoring programs
the micronutrients. Rather, coating and extrusion technologies have reported significant improvements in micronutrient status
were determined to be more suitable for the production of the following the introduction of the food fortification program. Giv-
fortified kernels, as nutrients are retained when rice is washed en the relatively large per capita intake of fortified rice as part of
or cooked in excess water. the overall food basket, rice fortification must have significantly
Currently, one of the fortified kernel producers uses coat- contributed to these improvements in micronutrient status. Re-
ing technology and the other producer uses warm-extrusion ductions in micronutrient deficiencies have been shown both
technology. Refer to the contribution by Montgomery et al for within the general population and among specific groups.
additional information on identification of appropriate rice for-
tification technology (p. 159).
“Significant improvements in
Quality control micronutrient status have been
Quality control and monitoring responsibilities are shared by
the private and public sectors. The two fortified kernel produc-
reported following the introduction
ers are responsible for guaranteeing the micronutrient con- of the food fortification program”
centrations in the fortified kernels.3 Millers are responsible
for the accuracy of the blending ratios and homogeneity. For
internal monitoring of the blending ratios, sampling is con- Anemia
ducted every hour. Some sampling, along with all lab analysis, Costa Rica’s anemia prevalence rates have fallen significantly
is done by third-party laboratories to determine compliance following the introduction of the national fortification pro-
against the mandatory rice fortification executive decree. Ex- gram.4 In addition to iron deficiency, anemia can also result
ternal quality control and evaluation are the responsibility of from deficiencies in vitamin B12 and folate. The 2008–2009
the Ministry of Health, and are performed by the government’s National Survey data,5 compared to the 1996 data,1 showed a
quality control agency. These quality control samples are ob- 71.2% reduction in the prevalence of anemia among children
tained from retailers at point of sale, as opposed to upstream one to six years of age. Rural areas showed larger reductions
sampling at manufacturing sites. Government regulations in the prevalence of anemia (89.6%) than urban areas (74.6%).
mandate labeling of all rice sold with the assigned quantities National anemia prevalence ranges from 1 to 9.9% and is no
of the micronutrients’ minimum amounts (per kg). The shared longer of public health concern (see Figures 1 and 2).
quality control and monitoring process enhances quality con- Among women of childbearing age, the National Nutrition
trol across the supply chain. Surveys in 1982, 19961 and 2008–095 showed a similar signifi-
cant reduction in anemia prevalence of 46.8% at the national
Costs level. Looking at geographic areas, anemia declined 54% in
Costs for rice fortification include initial start-up costs and on- rural areas, 46.3% in urban areas, and 36.4% in metropolitan
going costs of fortification. Initial costs included the cost of the areas (see Figures 3 and 4).
220 RICE FORTIFICATION IN COSTA RICA
20 ∙ Government leadership
Percentage
figure 2: Prevalence of low ferritin in Costa Rican preschool “Government leadership was crucial
children; 1996 compared to 2008–2009.
in establishing and implementing
Low iron stores included ferritin levels < 12 μg/L for children aged < 5 y the rice fortification program”
ENN, 1996 ENN, 2008 | 2009
30
∙ Sustainable partnership approach: engaging rice
millers and leveraging existing distribution channels
25 24.2
The Costa Rican government worked in partnership with the
private sector from the start of the program. Negotiations with
20 18.5
the rice producers’ association were supported, and the private
Percentage
figure 3: Prevalence of anemia in Costa Rican program was covered by the private sector, thus increasing the
women of childbearing age by area; 1982 and 1996 program’s sustainability. The Ministry of Health financed the
compared to 2008–2009. health needs research, while technology development was fi-
nanced by the fortified kernel producers seeking profit opportu-
Anemia was defined for women >15 years as hemoglobin <12.0 g/dL nities. Two companies, Kuruba and DSM, led technology devel-
ENN, 1982 ENN, 1996 ENN, 2008 | 2009 opment and premix tests for the fortified kernels. The Institute
25 of Nutrition of Central America and Panama (INCAP) led tech-
21.7 nology assessment and micronutrient stability tests. In addition,
20.0
20 18.6
one of the fortified kernel suppliers supported the industry by
17.3 17.5
investing in the development of blending technology. Advocacy
15 for implementation of the mandate was led by the rice produc-
Percentage
11.0
ers’ association, ANINSA, and the national rice corporation, CO-
9.9 9.8
10 9.4 NARROZ. These private and civic sector efforts helped ensure
sustainability. The government’s only costs to maintain the
5 program are the laboratory equipment and labor necessary for
on-going monitoring, evaluation, and quality-control activities.
0
National Metropolitan Urban Rural Consumer prices were controlled
The Ministry of Economy Trade and Industry controls rice prices
at the wholesale and retail levels, by accounting for the added
cost of fortification. Demand for rice is relatively inelastic. As
figure 4: Prevalence of folate deficiency in
mentioned previously, initially retail rice prices rose by 5–6%.
Costa Rican women of childbearing age by area;
However, after more experience in production helped reduce
1996 compared to 2008–2009.
costs, retail prices fell. The current retail price increase due to
fortification is only 0.9%.
WHO cut-off values were used: <6.8 nmol/L (3 ng/mL) for serum folate
and <226.5 nmol/L (100 ng/mL) for red blood cell folate. It is important to note that mandatory fortification elimi-
ENN, 1996 ENN, 2008 | 2009 nated the need to create consumer demand, which has proven
35 difficult for fortified staples. Rice distributors are able to cover
31.4 the minimal increase in their costs through the government-
30 mandated price without the need to spend additional resources
on marketing and consumer demand generation.
24.7
25 23.3
Good consumer acceptability
20 19.1 As consumers cannot tell the difference between Costa Rica’s
Percentage
5 3.8
“Costa Rica’s rice fortification
0.9
0 program exemplifies successful
National Metropolitan Urban Rural
implementation”
Conclusion
Costa Rica is a model for successful implementation of a rice
fortification program. Program success is attributed to the
country’s experience with fortification of other commodities;
the centralized rice industry; a good understanding of the rice
222 RICE FORTIFICATION IN COSTA RICA
figure 5: Birth prevalence of neural tube defects (NTDs) in Costa Rica; 1987–2008
Fortification program
20
18
16
Prevalence per 10,000 births
14
12
10
0
87
97
07
91
01
95
05
92
02
89
99
96
06
93
94
03
04
88
98
08
90
00
19
19
20
19
20
19
20
19
20
19
19
19
20
19
19
20
20
19
19
20
19
20
Year
References
1. Ministerio de Salud. Encuesta Nacional de Nutricion:
2 Fasciculo Micronutrients (National nutrition survey:
Part 2 Micronutrients). San Jose: Ministerio Salud, 1996
2. Barboza Arguello M de la P, Umana Solis LM. Impacto
de la fortificación de alimentos con acido fólico en los defectos
del tubo neural en Costa Rica (Impact of the fortification
Blending of fortified kernels with non-fortified rice of food with folic acid on neural tube defects in Costa Rica).
at rice mill in Costa Rica
Rev Panam Salud Publica 2011;30:1–6.
3. Forsman C, Milani P, Schondebare JA et al. Rice fortification:
industry landscape and supply chain; strong government lead- a comparative analysis in mandated settings.
ership; early involvement and support from both private and Ann N Y Acad Sci 2014;1324:67–81.
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monitoring and compliance. The government also monitored nutritional anemia in women of reproductive age. Costa Rica.
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datory fortification is a very cost-effective delivery option. Man- 5. Costa Rica National Nutrition Survey 2008–2009 Accessed at:
datory fortification eliminates the need for price-increasing http://ghdx.healthdata.org/record/costa-rica-national-nutrition-
marketing efforts and consumer awareness campaigns. survey-2008-2009. Accessed April 6, 2015.
R ICE FORTIFIC ATION IN L ATIN A MER IC A GLOSSARY 223
Glossary
This glossary is based on the following sources: can be done at a rice miller, warehouse, or other location where
Allen L, de Benoist B, Dary O et al, eds. Guidelines rice is centrally processed. Small-scale blending technology is
on food fortification with micronutrients. also available.
Geneva: World Health Organization | Food and
Agriculture Organization of the United Nations, 2006. Brown rice
Rice with only the hull removed. Bran layers and rice germ re-
UNICEF. Nutrition Glossary: A resource for main, giving the rice a brownish color. Brown rice is still a rich
communication. Division of Communication, 2012 source of vitamins B1, B6, E and niacin, most of which are re-
www.unicef.org/lac/Nutrition_Glossary_(3).pdf moved during polishing/milling.
(accessed April 30, 2015).
Coating
Technology to make fortified kernels. Rice kernels are coated
Anemia with a fortificant mix plus ingredients such as waxes and gums.
Characterized by reduction in hemoglobin concentrations or The micronutrients are sprayed onto the rice grain’s surface.
the size and color of red blood cells, which impairs the ability to The coated rice kernels are blended with non-fortified rice in a
supply oxygen to the body’s tissues. Anemia is caused by inad- ratio between 0.5% and 2%.
equate intake and/or poor absorption or excessive losses of iron,
folate, vitamin B12 and other nutrients. It can also be caused Dusting
by infectious diseases (inflammation) such as malaria, hook- Technology to make fortified rice. Polished milled rice kernels
worm infestation and schistosomiasis, and by genetic variants are dusted with a fortificant mix in powder form. This technol-
of hemoglobin. Women and children are high-risk populations. ogy is only used in the United States and does not allow for
Clinical signs include fatigue, pallor (paleness), breathlessness washing, pre-cooking or cooking in excess water, since this will
and headaches. wash out the micronutrients.
Bioavailability Effectiveness
Bioavailability refers to the proportion of a nutrient that is ab- Refers to the impact of an intervention in practice (real-life con-
sorbed from the diet and utilized for normal body functions. The ditions). Compared to efficacy, the effectiveness of a fortification
ease by which the body absorbs specific micronutrients is de- program will be limited by factors such as non-consumption or
termined by its molecular form and the interaction between dif- low consumption of the fortified food.
ferent specific micronutrients and other substances in the diet.
Efficacy
Biofortification Refers to the capacity of an intervention such as fortification
Practice of improving the nutrient content of plants before har- to achieve the desired impact under ideal circumstances. This
vesting through breeding (e.g. new rice variety with higher iron usually refers to experimental, well-supervised and controlled
content) and/ or genetic engineering (e.g. Golden Rice). The key intervention trials.
difference between biofortified rice and fortified rice is that rice
fortification implies adding nutrients to rice post-harvesting, Essential micronutrient
while biofortification aims to make more nutritious rice variet- Refers to any micronutrient (vitamin or mineral), which is
ies available through breeding or GMO. While current bioforti- needed for normal growth, development and function by the
fied rice cultivars contain higher levels of one micronutrient, body in miniscule amounts throughout the life cycle. Micronu-
fortified rice can contain a range of several micronutrients. trients are normally consumed as part of a healthy and diverse
diet. They either cannot be synthesized in adequate amounts
Blending by the body at all, or else cannot be synthesized in amounts
Mixing of milled, non-fortified rice with fortified kernels in ra- adequate for good health. They thus must be obtained from a
tios between 0.5% and 2% to produce fortified rice. Blending dietary source.
224 GLOSSARY
Pie de imprenta | Imprint
Editorial: Sight and Life, en representación Publisher: Sight and Life on behalf of
del Programa Mundial de Alimentos the World Food Programme
Concepto de diseño, diseño gráfico y gráficos: Design concept, layout and graphics:
S1 Grafik Design, Root, Suiza. S1 Grafik Design, Root, Switzerland.
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