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Veamos a continuación cuáles son las frases de Erich Fromm que mejor
resumen estas ideas.
1. El amor es la preocupación activa por la vida y el crecimiento de
lo que amamos
Si hay un aspecto interesante en el libro de “El arte de amar” es la tesis
de que la mayoría de nosotros no sabemos amar. Puede que sea una
idea algo desoladora, sin embargo, también es bueno recordar el
contexto social en el que vivió Fromm. Tras el final de la Segunda Guerra
Mundial existía un gran vacío de valores, una crisis existencial que
obligó a gran parte de los pensadores, filósofos y psicólogos a reformular
muchas ideas.
El amor era y es, por tanto, ese motor que debe empujarnos a ser
mejores. Para ello, estamos obligados a trabajar de forma activa en
nuestra personalidad y crecimiento personal, de manera que
satisfagamos primero al amor propio, para después amar en plenitud
al otro. Algo así requiere verdadera humildad, coraje, fe y disciplina.
2. El amor es una actividad, no un efecto pasivo; es un estar
continuado, no un súbito arranque
Lo señalábamos al inicio. Estar enamorado no debe ser un acto pasivo,
como quien se limita a dejarse llevar, sin hacer nada más. Todo lo
contrario, es un acto en cuyo deleite hay una gran cantidad de
movimiento, voluntad e intercambio.
-Erich Fromm-
-Erich Fromm-
4. Si dos personas que han sido extrañas…
“Si dos personas que han sido extrañas… dejan de pronto que la pared
que hay entre ellas se rompa para sentirse y descubrirse, esta será una
de las experiencias más emocionantes de la vida”
-Erich Fromm-
Esta es otra de las frases de Erich Fromm más hermosas. Nos habla de
la intimidad, ese milagro que suele iniciarse con la atracción y que se
consuma con un encuentro más profundo que trasciende a la piel y la
propia sexualidad. Hablamos de la conexión emocional, del
descubrimiento del otro como persona en todos sus matices, con sus
virtudes, con sus defectos, sus esencias…
Hablamos de la intimidad en la que se deslizan las confianzas, el
tacto que eriza los pelos de la piel, o una conversación relajada y
nostálgica que se cuela por esos agujeros del cielo, llamados estrellas.
5. El amor no es esencialmente una relación con una persona
específica
“El amor no es esencialmente una relación con una persona específica;
es una actitud, una orientación del carácter que determina el tipo de
relación de una persona con el mundo como totalidad, no con un objeto
amoroso”.
-Erich Fromm-
Algo que nos quiere hacer entender Fromm en su obra es que las
personas vemos el amor como un objeto y no una facultad. Amar
tampoco es una dinámica que se limita a esa relación que establecemos
con nuestras parejas, nuestros padres o nuestros hijos.
“Amar” es enriquecer nuestra existencia, es una actitud capaz de dotar a
este mundo de un sentido, de un propósito capaz de transformar la
sociedad. Sin embargo, tal y como nos explica Fromm, en esta
cultura moderna lo hemos mercantilizado todo en nuestro afán de
satisfacer las propias necesidades, incluso el amor.
6. Resulta paradójico que dos seres se hagan uno y a la vez sigan
siendo dos
Esta es otra de las frases de Erich Fromm más conocidas y también una
de las que más invita a la reflexión. Como ya sabemos, una tentación en
la que solemos caer muy a menudo es en diluirnos en el ser amado,
especialmente al comienzo de la relación. Es un proceso entrópico que
acaba con la propia identidad, que consume esencias, libertades y
dignidades.
Fromm nos explica en “El arte de amar” que para desarrollar un amor
maduro, sabio y responsable necesitamos trabajar en cuatro
dimensiones esenciales: el cuidado, la responsabilidad, el respeto y
el conocimiento. Sin embargo, en muchas ocasiones, nos encontramos
más bien con un amor sin intimidad basado solo en la mera necesidad,
esa que se consuma con el acto sexual.
Este es un amor de consumo, de usar y tirar. Donde puede aparecer la
pasión, pero también nublarse fácilmente por la desconfianza y el
desconocimiento del otro. Un amor que nunca llega a coger forma, antes
de reciclarse de nuevo.
Por su parte, quien sabe (y quiere) ir más allá de la atracción y
excitación sexual inicial, procurará crear una auténtica intimidad,
procurará ser un artesano para hacer del enamoramiento un amor
real, un amor maduro y valiente.
Para concluir, en estas frases de Erich Fromm hemos aprendido que el
amor no solo es un acto de maestría, ahí donde dominar la práctica y la
teoría. El arte de amar se formula también como una actitud activa y
responsable hacia la vida y la propia sociedad. Es una fuerza
transformadora que requiere conciencia y no conformismo, que
clama creatividad y no pasividad.