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Queridos hermanos:
No es raro escuchar de labios de algún católico: «Yo amo a Jesús pero no me importa la
Iglesia». Creo que esta opinión, para muchos, es simplemente un pretexto para seguir
viviendo como «católicos a su manera». No hacen caso a la Iglesia, no van a la Misa, no
quieren prepararse para recibir dignamente los sacramentos, no hay obediencia a la
Jerarquía eclesiástica, sólo cuando les conviene se acercan a la Iglesia y dicen que siguen la
religión «a su manera».
Otros, no sin dolor, van repitiendo que su aspiración es amar a Cristo pero al margen de la
Iglesia. Ellos se separan de su Iglesia porque no ven una clara coherencia entre lo que se
dice y lo que se hace; sienten que el lenguaje y la vida de los católicos están alejados del
Evangelio.
La Iglesia no es algo abstracto. Somos nosotros, laicos y pastores, comunidad creyente, su
rostro visible. La Iglesia es humana y divina a la vez. Y sabiendo que esta Iglesia lleva en
sus miembros las huellas del pecado, es necesario que nos preguntemos muy en serio: ¿Qué
Iglesia confesamos, en qué Iglesia creemos, en qué Iglesia servimos? La respuesta es clara:
Pertenecemos a la Iglesia que Jesucristo soñó, la Iglesia que Jesucristo realmente quiso.
Todo lo que digo aquí no es un invento de hombres, es Cristo mismo el que nos lo enseñó.
Leamos con atención en la Biblia y meditemos juntos las enseñanzas sagradas acerca de
Jesucristo y su Iglesia.
Queridos amigos:
La verdadera Iglesia de Jesús se reconoce en la Iglesia Católica a la que nosotros tenemos
la dicha de pertenecer. Cierto que la Iglesia es a la vez santa y pecadora, porque está
formada por seres humanos, pero es la única que entronca y conecta con los Apóstoles y
con Cristo. A nosotros corresponde crecer día a día en santidad para que brille en ella el
rostro de la verdadera Iglesia de Cristo. Y, siendo esto así, cometería un grave error quien la
desconociera. Así que no más cristianos «a mi manera», sino a la manera que Cristo
dispuso. Y Cristo quiso salvarnos en su Iglesia que es Una, Santa, Católica, y Apostólica.
Cuestionario:
¿Qué es la Iglesia? ¿A qué Iglesia pertenecemos? ¿Cómo preparó Jesús a su Iglesia? ¿A
cuántos y a quiénes escogió Jesús como base y cimiento de su Iglesia? ¿Por qué fueron
«doce» los Apóstoles? ¿Cuándo nació la Iglesia Católica? ¿Qué significa que la Iglesia es el
Cuerpo de Cristo? ¿Qué imágenes de la Iglesia hay en la Biblia? ¿Cuál es la verdadera
Iglesia? ¿Podemos cerrarnos a aceptar la Verdadera Iglesia que Jesús fundó? ¿Qué dice al
respecto el Concilio Vaticano?