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CONTENIDO:

1. La realidad de la guerra y la respuesta del Derecho.


2. La razón de ser del DIH. La necesidad de proteger a las víctimas.
3. Concepto de DIH. Rasgos esenciales.
3.1. ¿Qué se entiende por conflicto armado?
3.2. ¿Cuándo se aplica el DIH y cuando los Derechos humanos? ¿Qué relaciones tienen?
3.3. ¿Cual es la finalidad del DIH?
3.4. ¿Cuáles son sus fuentes?
3.5. ¿A quienes obliga?
4. Origen y evolución del DIH. El DIH y la Cruz Roja.
4.1. El nacimiento de la Cruz Roja
4.2. La creación de Sociedades de Socorro nacionales
4.3. El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y Media Luna Roja
4.4. El emblema
4.5. Nacimiento del DIH moderno
5. Principales textos normativos y normas basadas en los usos y costumbres de la guerra.
5.1. Clasificación del Derecho Internacional Humanitario
5.2. Principales textos normativos
5.3. Normas consuetudinarias
5.4. La cláusula de cierre del sistema de protección
6. Principios Básicos en los que se sustenta el DIH. La Humanidad en la guerra
6.1. Principio de humanidad
6.2. Principio de necesidad militar
6.3. Principio de proporcionalidad
6.4. Principio de limitación
6.5. Principio de distinción

DIH ::: Introducción y nociones básicas


1. La realidad de la guerra y la respuesta del Derecho.

La comunidad
internacional no ha
conseguido liberar a la
humanidad del azote de
la guerra. Siguen estando
presentes por doquier
distintas causas que son
fuente de conflictos a
menudo cruentos: la
disputa por los recursos,
las reivindicaciones
territoriales, la
conflictividad social
provocada por
situaciones de injusticia
de las que derivan
grandes desigualdades
en el nivel de desarrollo
de los individuos y de las
Kabul, Afganistán. Civil sobre las ruinas de una casa
colectividades, la pugna
ideológico-política, la intolerancia religiosa, el odio racial o étnico, los
nacionalismos exacerbados, los graves abusos de poder que en no pocos
Estados conllevan la supresión de los derechos humanos más fundamentales.

Por otra parte, ha cambiado en gran medida el modelo de los conflictos:

• La naturaleza fragmentada de los conflictos en los Estados débiles o


desestructurados da lugar a una multiplicación de los actores armados.
La proliferación de grupos armados, que obtienen sus armas con el
tráfico ilegal de recursos de todo tipo produce una situación de
privatización de la lucha armada en la que no existe ni orden ni
disciplina ni control por parte de las autoridades civiles o militares. La
población civil es presionada y forzada desde todas y cada una de las

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facciones armadas. En tales circunstancias, la posesión de armas por
parte de la población puede ser una exigencia para lograr supervivir, Por
lo que esta privatización de la lucha armada ha entrañado a su vez una
privatización de la seguridad.

• La creciente dependencia de las fuerzas armadas respecto de los


civiles, la contratación de civiles para tareas que antes eran de
competencia estrictamente militar y la utilización de empresas de
seguridad privadas ponen en cuestión las categorías aceptadas de
actores en los conflictos armados.

• La superposición entre las metas políticas y las privadas, ha contribuido


a que se difumine la distinción entre conflicto armado y actividades
criminales.

• Los conflictos actuales no se caracterizan por el uso de armas químicas


o nucleares, ni siquiera por el empleo de grandes sistemas de armas
pesadas. En la mayoría de los conflictos son las armas pequeñas y
ligeras, las llamadas armas de destrucción en masa, entre las que se
encuentran las municiones abandonadas y sin explotar, las minas
antipersonal y los fusiles de asalto, las que producen el mayor impacto
humanitario en la población civil.

Kabul, Afganistán. Niños Soldados

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• Las "guerras asimétricas " en las que el desequilibrio existente entre
las capacidades militares y tecnológicas de los contendientes impulsa a
menudo a la parte más débil a buscar en el fuerte su flanco más
vulnerable a su población civil, y la población civil pasa a ser el principal
objetivo de la acción bélica.

• El fenómeno del terrorismo contribuye de forma muy notable a la


fractura actual del sistema de protección de la población civil, no
solamente porque el terrorismo es intrínsecamente perverso al socavar
los fundamentos del DIH que prohíbe atacar deliberadamente a la
población, sino porque la reacción de ciertos Estados que postulan la
llamada "guerra contra el terrorismo", puede también aumentar el
sufrimiento de la población civil y producir una merma en sus derechos
fundamentales.

CONFLICTOS ACTUALES

a) Proliferación de grupos implicados


en situaciones de conflicto armado

b) Conflictos internos

c) Proliferación de armas ligeras

d) Víctimas civiles

Sin embargo la guerra no tiene por qué ser la negación del derecho. Frente a
los conflictos armados la comunidad internacional reacciona en dos direcciones:

• por un lado, estableciendo unas medidas de “control de la guerra”,


actuando sobre las causas de los conflictos, tratando de impedir o
dificultar el estallido de los conflictos, controlando el armamento
disponible mediante el desarme, prohibiendo la agresión y el uso de la
fuerza y castigando a los infractores, reprimiendo los crímenes contra la
paz y los crímenes de guerra.

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Es éste un proceso relativamente reciente que culmina en el artículo 2.4
de la Carta de las Naciones Unidas, donde el tradicional ius ad bellum se
convierte en un ius contra bellum. Sólo en el ejercicio individual o
colectivo de la legítima defensa se puede recurrir a la fuerza (arts. 2, 4
y 51 de la Carta de las Naciones Unidas) o mediante la aplicación del
sistema de seguridad colectiva del capítulo VII de la Carta, en caso de
amenaza o quebrantamiento de la paz y seguridad internacionales. Su
máximo garante es el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas,
que puede acordar las medidas establecidas en dicho capítulo VII de la
Carta.

• y por otro lado, una vez que se han roto las hostilidades, actuando sobre
los efectos de los conflictos, tratando de limitarlos mediante la aplicación
del Derecho en la Guerra ius in bello con igual obligatoriedad a todas las
partes implicadas en el conflicto, con independencia de qué parte fuera
la responsable de haberlo causado. Este Derecho en la Guerra es lo que
vamos a estudiar, bajo el término de universal aceptación, como
Derecho Internacional Humanitario. (DIH) que limita los medios y
métodos de guerra y establece un sistema de protección de las víctimas.

LA GUERRA Y EL DERECHO

• En el uso de la fuerza
Control de la guerra • En el armamento
• En la represión

• Medios y métodos de guerra


Derecho en la guerra • Víctimas de guerra

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2. La razón de ser del DIH. La necesidad de proteger a
las víctimas.

La prohibición jurídica del uso de la fuerza es condición previa y necesaria para


la regulación de situaciones de hostilidad, pero es insuficiente para asegurar la
protección a las víctimas que se puedan producir una vez el conflicto ha
surgido. Está claro que una norma prohibitiva puede ser incumplida o no
aceptada por las partes. Por tanto es necesario que también exista una
regulación para aquellas situaciones en que la violencia y la fuerza hacen acto
de presencia. Si el fracaso de la ONU para evitar las guerras ha sido evidente,
y con mayor razón en los conflictos internos, donde la prohibición del uso de la
fuerza no es aplicable, habrá que poner a punto las normas de protección de
las víctimas en los conflictos armados. A este respecto es saludable observar la
evolución de Naciones Unidas involucrándose más y más en la necesidad de
aplicar las normas humanitarias en los conflictos armados 1 . El Secretario
General de las Naciones Unidas expresa su convicción sobre la necesidad de
proteger a las víctimas de la guerra y delimita con precisión a quienes incumbe
la responsabilidad de tal protección:

“Mis visitas a varios países afectados por conflictos me han


convencido de que, para los desplazados y las víctimas de la guerra,
los hechos son más importantes que las palabras. El sufrimiento
de estas personas me ha infundido un profundo sentimiento del
deber de asegurar que cuando no podamos impedir un conflicto
armado, la protección de los civiles será, siempre, una prioridad
absoluta: para mí, en calidad de Secretario General, para las
Naciones Unidas, el Consejo de Seguridad y, sobre todo, los
Estados Miembros a los que corresponde la responsabilidad
principal de proteger a los civiles.”

Informe del Secretario General sobre la protección de los civiles


en los conflictos armados, de 28 de Octubre de 2007.

1
Es recomendable la lectura del informe del Secretario General sobre la protección de los
civiles en los conflictos armados, de 28 de Octubre de 2007, accesible en
http://www.un.org/spanish/docs/report07/repl07.htm

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Kukes, Albania. Distribución de pan a los refugiados de Kosovo

Es evidente que hoy día la razón de ser del DIH es incuestionable. Cada vez es
mayor la necesidad de protección de las víctimas de los conflictos y cada vez
es mayor el sufrimiento de la población civil que se ve implicada y sometida a
toda clase de abusos y violaciones. Los movimientos forzados de población, los
desplazamientos y las deportaciones, que forman parte a veces de un designio
planificado como el de la limpieza étnica, las masacres, los ataques
intencionales, su utilización por los combatientes como escudos humanos, la
toma de rehenes, etc., etc., ponen a la población civil ante riesgos vitales que
requieren de la existencia de un derecho que la proteja. El problema reside
pues no en su existencia sino en su eficacia a la que se dedicará una sesión
más adelante. El actual DIH se ve enfrentado a numerosos retos, los cuales
han sido objeto de estudio reciente2. En la actualidad, y en el contexto de la
mal llamada guerra contra el terrorismo, hay que temer que cualquier intento de
modificación de las normas humanitarias podría acarrear, no una mejora sino

2
Informe del CICR de 2007: “El derecho internacional humanitario y los retos de los conflictos
armados contemporáneos” accesible en
http://www.icrc.org/spa/resources/documents/misc/5xymgj.htm

Informe del CICR de 2011: “El derecho internacional humanitario y los desafíos de los
conflictos armados contemporáneos”, accesible en
http://www.icrc.org/spa/resources/documents/report/31-international-conference-ihl-challenges-
report-2011-10-31.htm

DIH ::: Introducción y nociones básicas


un empeoramiento del sistema de protección de las víctimas. Por eso el CICR
defiende la vigencia de los actuales instrumentos jurídicos con que cuenta el
DIH. Es una cuestión de voluntad de los Estados y grupos armados en
cumplirlo y actuar de buena fe. Es oportuno citar la frase de Nahlik3:

”En el actual estado del DIH ya no faltan reglas sino más bien la
voluntad de observarlas.”

Por otro lado se ha tratado de desprestigiar al DIH por considerarlo


equivocadamente por algunos un obstáculo en la consecución del objetivo de
acabar con el terrorismo internacional, y sus normas protectoras de la
población civil constituyen un permanente reproche hacia quienes han
convertido a esa población civil en el objetivo preferente de sus ataques. La
confusión interesada y maliciosa entre el ius ad bellum y el ius in bello, busca la
asimetría en los derechos y obligaciones de los beligerantes acumulando una
parte todos los derechos, sin asumir obligaciones y pretendiendo que la otra
parte cargue con todas las obligaciones sin beneficiarse de ningún derecho. Ha
resucitado con fuerza la idea de las “guerras justas”, y más aún, cuando éstas
se presentan como guerras contra el terrorismo. Con ello se erosiona una de
las bases del DIH, consistente en que éste no enjuicia la naturaleza ni la
justicia de los conflictos, ni entra en las razones de la guerra. El DIH coloca a
los combatientes en situación paritaria en cuanto a derechos y obligaciones. El
DIH no califica a los combatientes de “buenos y malos”. A los Estados
agresores se les niega el derecho a usar la fuerza (ius contra bellum) pero a los
individuos combatientes, tanto de los Estados agresores como de los Estados
que ejercitan su derecho a defenderse, el DIH le concede los mismos derechos
y limitaciones para usar sus armas y métodos de guerra. La confusión entre el
ius ad bellum y el ius in bello tiene consecuencias nefastas en el sistema de
eficacia del DIH.

3
Stanislaw E. Nahlik . Compendio de Derecho Internacional Humanitario. Tomado de
Separata de la Revista Internacional de la Cruz Roja, No 64, julio-agosto de 1984.

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Albania/Montenegro. Refugiados de Kosovo

3. Concepto de DIH. Rasgos esenciales.

El Derecho Internacional Público o Derecho Internacional se define como el


conjunto de normas jurídicas por las que se rigen las relaciones entre los
Estados, así como con los demás miembros de la comunidad internacional. El
DIH forma parte de esta rama del derecho y se aplica en situaciones de
conflicto armado. Por tanto, se trata, en definitiva, de leyes temporales y, en
cierto modo, excepcionales, pues su aplicación supone la regulación por parte
del derecho internacional de un nuevo orden jurídico diferente al ordenamiento
jurídico de los tiempos de paz.

Por Derecho Internacional Humanitario o Derecho de los


Conflictos Armados se entiende el conjunto de normas
internacionales destinadas a minimizar los efectos que se derivan
de los conflictos armados, limitando por razones humanitarias los
métodos y medios de hacer la guerra, y protegiendo genérica y
específicamente a las distintas categorías de víctimas (heridos,
enfermos, náufragos, prisioneros de guerra, población y bienes
civiles, etc…)

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Las expresiones Derecho Internacional Humanitario, Derecho de los Conflictos
Armados, o Derecho de la Guerra pueden considerarse como equivalentes. Las
organizaciones internacionales, las universidades o los Estados suelen emplear
la expresión Derecho Internacional Humanitario o Derecho Humanitario,
mientras que, las fuerzas armadas, utilizan las otras dos con más frecuencia.

3.1. ¿Qué se entiende por conflicto armado?

No todas las
situaciones de
violencia armada son
conflictos armados.
Es necesario, para
que exista conflicto
armado, que se
produzca un
enfrentamiento entre
organizaciones
armadas, de
estructura militar, lo
cual presupone un
cierto orden y
disciplina, fácilmente
identificables y que
ese enfrentamiento
armado tenga las
características de
Ginebra, Suiza. Los 20 signatarios de la Convención de Ginebra de 1864
intensidad y
4
permanencia . La aplicación del Derecho de los Conflictos Armados no
depende de una declaración formal de guerra que en la actualidad no son
frecuentes. No es necesario tampoco para su aplicación que haya habido un

4
“Entendemos que existe conflicto armado cuando se da el recurso a la fuerza entre estados o
prolongada violencia armada entre las autoridades gubernamentales y grupos armados
organizados o entre tales grupos en [el territorio de] un estado…” ICTY, Prosecutor v. Tadic,
Case No.IT-94-1-T, Decision on the Defence Motion for Interlocutory Appeal on Jurisdiction, 1
October 1995.

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reconocimiento del estado de guerra, ni como haya sido calificado el conflicto
por los beligerantes; basta la existencia de un conflicto armado que se produce
cuando los Estados recurren a sus fuerzas armadas para resolver sus
diferencias y exista lucha armada (art. 2 común a los cuatro Convenios de
Ginebra).

Del mismo modo, no se requiere una declaración formal de guerra para el


ejercicio individual o colectivo del derecho a la legítima defensa contra un
acto de agresión. Las medidas que se adopten deben ser inmediatamente
comunicadas al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas según
establece el artículo 51 de la Carta de San Francisco.

Ganta, un pueblo en la frontera de Guinea. Milicias del gobierno armadas.

También se aplica el DIH en todos los casos de ocupación total o parcial del
territorio, incluso cuando no se encuentra resistencia armada (art. 2 común a
los cuatro Convenios de Ginebra).

Los conflictos armados pueden desarrollarse entre Estados (conflictos armados


internacionales) o intraestatales (conflictos armados internos). Las normas del
DIH que los regulan no son las mismas, como luego veremos. Aunque la

DIH ::: Introducción y nociones básicas


tendencia expresada en numerosas decisiones jurisprudenciales es otorgar el
mismo nivel de protección a las víctimas con independencia de la calificación
jurídica del conflicto, lo cierto es que el DIH se aplicó inicialmente con
exclusividad a los conflictos armados internacionales y esa circunstancia
todavía no se ha superado5.

Ramallah, Cisjordania. Evacuación de un herido por la Media Luna Roja Palestina.

El conflicto armado internacional opone a las fuerzas armadas de, al menos,


dos Estados (cabe destacar que las guerras de liberación nacional y contra los
regímenes racistas, en el ejercicio del derecho de los pueblos a la libre
determinación han sido elevadas al rango de conflicto armado internacional).
En el conflicto armado no internacional se enfrentan, en el territorio de un
Estado, las fuerzas armadas regulares con grupos armados identificables, o
grupos armados entre sí. Una extensión reciente del ámbito de aplicación del
DIH se produce en el contexto de las Operaciones de Paz de las Naciones
Unidas, puesto que las fuerzas armadas que los Estados aportan para el
cumplimiento de estas misiones están obligadas a respetar determinados
principios y normas humanitarias.

La neutralidad es la situación en que se encuentran los Estados que no


participan en un conflicto armado, y está también regulada por normas precisas
del DIH. Ante la existencia de un conflicto armado internacional los Estados
solo pueden ser neutrales o beligerantes. No existe una situación intermedia.
5
De los Cuatro Convenios de Ginebra de 1949, solo el artículo 3 común se aplicó inicialmente
a los conflictos armados internos.
DIH ::: Introducción y nociones básicas
Hay que diferenciar los conflictos armados de otras situaciones de violencia
armada. Las tensiones internas y los disturbios interiores se caracterizan por
una profunda perturbación del orden interno debida a actos de violencia que
puede ser armada, e incluso con la intervención de las fuerzas armadas, pero
no tienen las particularidades de un conflicto armado (por ejemplo, motines,
lucha de facciones entre ellas o contra las autoridades en el poder u otros actos
aislados o esporádicos de violencia...).

3.2. ¿Cuándo se aplica el DIH y cuando los Derechos humanos?. ¿Que


relaciones tienen?

La finalidad de ambos es proteger la vida, la salud y la dignidad de la persona


humana, aunque desde ángulos diferentes.

El DIH se aplica, como hemos visto, en situaciones de conflicto armado,


mientras que los derechos humanos protegen a la persona humana en todo
tiempo, haya guerra o paz. Sin embargo, algunos tratados de derechos
humanos autorizan a los Gobiernos a suspender ciertos derechos en
situaciones de emergencia pública. El DIH no admite derogación alguna, dado
que fue concebido para situaciones de emergencia, en particular los conflictos
armados.

Ello no quiere decir que sean excluyentes sino que son complementarios y por
tanto en tiempo de guerra la persona humana se beneficia de los dos derechos.
La consecuencia es que nadie, en ninguna circunstancia, queda fuera del
sistema conjunto de protección del DIH y del DIDH.

CONFLICTOS ARMADOS INTENACIONALES


(DIH, DIDH)

CONFLITOS ARMADOS INTERNOS


(DIH, DIDH)

TENSIONES INTERNAS Y DISTURBIOS INTERIORES


(DIDH)

PAZ
(DIDH)

DIH ::: Introducción y nociones básicas


Por otra parte, el DIH contiene disposiciones fuera del ámbito del DIDH, como
la conducción de las hostilidades, los estatutos de combatiente y de prisionero
de guerra y la protección del emblema de la cruz roja y de la media luna roja.
Del mismo modo, el DIDH dispone acerca de aspectos de la vida en tiempo de
paz que no están reglamentados por el DIH, como la libertad de prensa, el
derecho a reunirse, a votar y a declararse en huelga.

La tendencia actual es a resaltar esa complementariedad y armonía que debe


existir entre los dos derechos. A pesar de que el DIH y el DIDH han tenido un
desarrollo independiente desde el punto de vista histórico, en tratados recientes
se han incluido disposiciones de ambos derechos; por ejemplo, en la
Convención sobre los Derechos del Niño, en su Protocolo Facultativo relativo a
la participación de los niños en los conflictos armados y en el Estatuto de Roma
de la Corte Penal Internacional.
El DIH debe ser aplicado como se ha dicho por todas las partes en un conflicto
armado, mientras que en el DIDH se imponen obligaciones a los Gobiernos en
sus relaciones con los individuos.

DERECHO INTERNACIONAL HUMANITARIO Y DERECHO


INTERNACIONAL DE LOS DERECHOS HUMANOS

La finalidad de los dos es proteger la vida,


la salud y la dignidad de las personas

En el DIH no están permitidas las excepciones a la


aplicación de sus disposiciones

El DIH debe ser aplicado por todas las partes en un


conflicto armado

3.3. ¿Cual es la finalidad del DIH?

Su finalidad es limitar en lo posible los daños causados por los conflictos


armados a las personas y a los bienes de carácter civil y a las propias Fuerzas
Armadas, sin que su cumplimiento afecte al resultado del conflicto, ya que su
contenido es el producto de una conjunción entre factores de carácter militar
y otros de naturaleza humanitaria.

DIH ::: Introducción y nociones básicas


Gaza, Khan Younis, Tofah. Estudiando las necesidades con la gente cuyas casas fueron destruidas o dañadas
por el ejército israelí

3.4. ¿Cuáles son sus fuentes?

El DIH como parte del Derecho Internacional está integrado, en lo que a sus
fuentes se refiere, por tratados y acuerdos internacionales, costumbres
internacionales, principios generales del derecho y jurisprudencia nacional e
internacional. También son fuentes las normas internas de los Estados6, y las
que castigan los crímenes de guerra. Así mismo como fuentes indirectas
podemos hablar de actos de las organizaciones internacionales, y
fundamentalmente en tiempos recientes, de las resoluciones de la ONU, y de
actos unilaterales de los Estados.

6
Contienen normas humanitarias Las Reales ordenanzas para las Fuerzas Armadas, el
Reglamento de campaña de 4 de Enero de 1882. Con valor exclusivamente interno e
informativo, las "Orientaciones, derecho de los conflictos armados" del Estado Mayor del
Ejército de Tierra. No faltan tampoco en el Código penal español de 1995 los preceptos donde
se tipifican las infracciones del DIH como delitos contra personas o bienes protegidos en caso
de conflicto armado (artículos 608 a 616), modificados por Ley orgánica 15/2003 y 5/2010, ni
en el Código penal militar un título dedicado a los delitos contra las leyes y usos de la guerra
(artículos 69 a 78).

DIH ::: Introducción y nociones básicas


FUENTES

FUENTES DIRECTAS
• Tratados y acuerdos internacionales, costumbres
internacionales, principios generales del derecho y
jurisprudencia nacional e internacional.
• Normas internas de los estados

FUENTES INDIRECTAS
• Actos de las organizaciones internacionales
• Resoluciones de la ONU
• Actos unilaterales de los estados

3.5. ¿A quienes obliga?

Únicamente los Estados pueden adherirse a tratados internacionales, por


consiguiente, a los Convenios de Ginebra y a sus Protocolos adicionales. Sin
embargo, todas las partes en un conflicto armado, a nivel individual o colectivo,
sean o no sean agentes estatales, están obligadas por el derecho internacional
humanitario. Así mismo, están obligadas todas las instituciones, sean públicas
o privadas. Esta obligatoriedad alcanza, por ejemplo, a las organizaciones no
gubernamentales, y a las Naciones Unidas.

Los tratados y convenios internacionales una vez que han sido válidamente
celebrados y ratificados por un Estado forman parte de su ordenamiento interno
y por tanto son plenamente obligatorios. En el instrumento de ratificación de
un tratado, si este no lo prohíbe expresamente, un Estado puede añadir
reservas que afectan al cumplimiento de la obligación contenida en el articulo
o artículos concernidos por la reserva. También puede añadir declaraciones
interpretativas que solo afectan al modo con que ese Estado cumplirá sus
obligaciones. Los tratados y acuerdos internacionales están constituidos por
normas de derecho imperativo, que no pueden dejar de cumplirse bajo ningún
concepto salvo que ellas mismas prevean alguna excepción para supuestos
determinados. Por otro lado no pierden su eficacia por el hecho de que una de
las partes contendientes no las observe, o bien por el hecho de que sean

DIH ::: Introducción y nociones básicas


inobservadas general o reiteradamente.

La obligatoriedad del DIH no reside solamente en los tratados ratificados por


los Estados. Parte del derecho consuetudinario integrado por prácticas y
usos imperativos está recogido en numerosos tratados, convenios,
resoluciones, protocolos y declaraciones que, aunque no fueron en su
momento ratificados, si constituyen derecho obligatorio, no en toda su
extensión, sino en la parte que contiene tal costumbre internacional con valor
jurídico.

4. Origen y evolución del DIH. El DIH y la Cruz Roja.

Las leyes de la guerra son tan antiguas como la guerra misma. Desde los
orígenes de la humanidad se pueden encontrar normas que tratan de regular la
conducta en la guerra, costumbres humanitarias y prácticas (derivadas de
imperativos morales, religiosos, políticos, militares y hasta económicos) que
exigen que se respete a quien no combate o no puede ya combatir y se le dé
un trato humano. Estas normas nacen de la guerra misma (tratados entre jefes
militares o prácticas seguidas por los hombres de armas a lo largo de la historia)
y se convierten en reglas consuetudinarias que reglamentan la guerra. Son las
leyes, usos y costumbres de la guerra:

“En conjunto, en los métodos de guerra de los pueblos primitivos se puede


encontrar la ilustración de los diversos géneros de leyes internacionales de la
guerra actualmente conocidas; leyes que distinguen diferentes categorías de
enemigos; reglas que determinan las circunstancias, las formalidades y el
derecho a comenzar y a terminar una guerra; reglas que prescriben límites en
cuanto a las personas, a las estaciones del año, a los lugares, y a la
conducción de la guerra; e incluso reglas que ponen la guerra fuera de la ley.”7

7
A study of war. 1942 Quincy Wrigth. Muy recomendable la lectura del libro de Jean Pictect
“Desarrollo y Principios del Derecho Internacional Humanitario”, accesible en
http://www.icrc.org/spa/resources/documents/misc/desarrollo_y_principios.htm
DIH ::: Introducción y nociones básicas
Cisjordania, Bil’in. El ejército israelí detona granadas en una manifestación pacífica contra la construcción del
muro que divide el pueblo de Bil’iní

RESEÑA HISTÓRICA: EN LA ANTIGÜEDAD

Leyes que distinguen diferentes categorías de enemigos

Reglas que determinan las circunstancias, las formalidades y el


derecho a comenzar y a terminar una guerra

Reglas que prescriben límites en cuanto a las personas, a las


estaciones del año, los lugares y la conducción de la guerra

Reglas que ponen la guerra fuera de la ley

Las primeras leyes de la guerra ya fueron proclamadas algunos milenios antes


de nuestra era por las grandes civilizaciones: “Promulgo estas leyes para evitar
que el fuerte oprima al débil.”(Hammurabi). Muchos textos antiguos, como son
el Mahabarata, la Biblia o el Corán, contienen normas en las que se
recomienda el respeto del adversario. Por ejemplo, el Viqayet, texto escrito
durante el apogeo de la dominación sarracena en España, hacia finales del
siglo XIII, contiene un verdadero código de leyes de la guerra.

DIH ::: Introducción y nociones básicas


RESEÑA HISTÓRICA: EN LA EDAD MEDIA

El Islam se adelantó a la cristiandad en labor jurídica destinada a


restituir la personalidad humana a los bárbaros, tanto
extranjeros como esclavos

El Viqäyet, escrito hacia 1280, es un verdadero código de leyes


de la guerra, concebido en el apogeo del reino sarraceno en
España: se prohíbe matar a las mujeres, a los niños, a los
ancianos, a los dementes, a los inválidos, a los parlamentarios;
se prohíbe mutilar a los vencidos, envenenar las flechas y las
fuentes

En los tratados concertados entre los califas y el imperio


bizantino se preveía un trato humano a los prisioneros y su
liberación por rescate. Los musulmanes creían en la
inviolabilidad de los tratados

En la segunda mitad de siglo XIX es cuando comienza la codificación


internacional de las normas –hasta ese momento internas o consuetudinarias
(usos o costumbres)–de la guerra.

RESEÑA HISTÓRICA: EN LOS TIEMPOS MODERNOS

En junio de 1859, dos poderosos ejércitos chocaron en Solferino.


Fue una de las batallas más sangrientas de la historia

Henry Dunant escribió “Recuerdo de Solferino”, pequeño libro en


el que presenta su testimonio y formula un doble deseo

Que en cada país se constituya una sociedad voluntaria de


socorro para ayudar, en caso de guerra, al servicio de sanidad
del ejército

Que los estados ratifiquen “un principio convencional y


sagrado”, que garantizaría una protección jurídica a los
hospitales militares y al personal sanitario

DIH ::: Introducción y nociones básicas


4.1. El nacimiento de la Cruz Roja se remonta al año 1863 y su creación, tal y
como hoy la conocemos, se debe a la iniciativa de Henry Dunant.

Dunant nació en Ginebra el 8 de mayo 1828, en el seno de una vieja familia


burguesa. Desde joven estuvo ligado a distintas asociaciones filantrópicas y de
caridad. En busca del Emperador, Dunant llegó, el 24 de junio de 1859, a la
ciudad de Castiglione, a cinco kilómetros del campo de batalla de Solferino,
donde combatían los ejércitos franceses y sardos contra los austriacos. Allí
presenció aquel sangriento combate y quedó profundamente conmovido ante la
vista del trágico espectáculo. A partir de este momento, Dunant olvidó el
objetivo de su viaje y, ayudado por turistas de paso y algunas mujeres del país,
organizó los socorros, mandó traer vendas, compresas y agua; lavó las heridas
y dio de beber a los heridos y enfermos. Utilizó, además, los servicios de
algunos médicos austriacos prisioneros de guerra.

Posteriormente, en 1862, Dunant publicó un libro titulado Un recuerdo de


Solferino, donde relata esta experiencia, y hace propuestas de tipo práctico
como las siguientes:

• La formación de sociedades de socorro en cada país, cuyo objetivo


sería el atender a los heridos en tiempo de guerra. Se compondrían de
voluntarios abnegados y capacitados para tal obra. Se trata, por tanto,
de formar enfermeros voluntarios con la misión de recoger a los heridos
en el campo de batalla y prodigarles los primeros auxilios materiales y
morales, así como la mejora del material sanitario y, en especial, de los
medios para transportar a los heridos.

• La reunión de un congreso con la finalidad de estudiar principios


internacionales que proporcionen una base jurídica para la acción de las
sociedades de socorro.

La realización práctica de estas propuestas implicaba evidentemente el apoyo


de numerosos adherentes, pues Dunant no podía hacer más por sí solo.

DIH ::: Introducción y nociones básicas


Un comité de cinco personas (antecedente de lo que posteriormente sería el
Comité Internacional de la Cruz Roja) para llevar a cabo el estudio de sus
propuestas integrado por el general Dufour, el Doctor Appia, el Doctor Maunoir
y el jurista Moynier. Mientras deliberan, Dunant recorre (septiembre y octubre)
las capitales y pone en manos de los monarcas su libro Recuerdo de Solferino,
haciendo lo posible por provocar una corriente favorable de opinión.

Batalla de Solferino, junio de 1859

DIH ::: Introducción y nociones básicas


En 1863 se realiza en Berlín un congreso de estadística, compuesto en su
mayoría por médicos militares. Dunant se presenta allí con una circular en la
que invita a los miembros del congreso a una conferencia internacional que se
celebraría en Ginebra en el mes de octubre. De hecho, su viaje a Berlín tuvo
una trascendencia mucho mayor, pues el 15 de septiembre de 1863 lanzó,
junto con el Sr. Basting, oficial del cuerpo de sanidad del ejercito holandés, un
nuevo llamamiento que se denominó "Circular de Berlín", con la inclusión de un
artículo sobre la neutralización de los servicios sanitarios. No cabe duda de que
aquella circular, debida a la iniciativa personal de Dunant y de Basting, cambió
el carácter de la conferencia de octubre abriendo con ello el camino a
realizaciones futuras.

La Conferencia Internacional, que se realizó en Ginebra el 25 de octubre de


1863, congregó a delegados de dieciséis gobiernos. Desde el punto de vista
jurídico, la Conferencia fue sobre todo obra de Moynier y traslucía la Circular de
Berlín redactada por Dunant y Basting. En ella, se plantearon a los delegados
diplomáticos tres cuestiones fundamentales:

• Si estarían dispuestos a aceptar la neutralidad, en situación de conflicto


armado, del personal y los medios sanitarios.
• Si aceptaban como símbolo de tal neutralidad el emblema de la Cruz
Roja sobre fondo blanco.
• Si aceptaban crear en sus respectivos países las sociedades de
socorro de las que hablaba Dunant.

DIH ::: Introducción y nociones básicas


4.2. La creación de Sociedades de Socorro nacionales.
A partir de la Conferencia Internacional de Ginebra (1863), en algunos Estados
europeos comenzaron a crearse tales Sociedades de Socorro. Por ejemplo, la
Cruz Roja Española se creó un año después, en 1864.

LA CRUZ ROJA Y EL DIH

EN SITUACIONES DE CONFLICTO ARMADO:


• 1863, nacimiento de la Cruz Roja.
• 6 de julio de 1864, nacimiento de Cruz Roja Española
• 1870, primera operación de ayuda internacional
• 1918, expansión de los hospitales
• 1936-1939, acciones humanitarias en la guerra civil

EN TIEMPO DE PAZ:
• Actividades de promoción y difusión del DIH
• 1984 Cruz Roja Española crea el CEDIH (Centro de
Estudios de Derecho Internacional Humanitario)

4.3. El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y Media Luna Roja


Los integrantes del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y Media Luna
Roja son las Sociedades Nacionales, la Federación Internacional de la Cruz
Roja y Media Luna Roja (FICR) y el Comité Internacional de la Cruz Roja
(CICR)

• Las Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja


actúan como auxiliares de los poderes públicos en el respectivo país y
prestan servicios en ámbitos diversos, como socorro en casos de
desastre, salud, asistencia social, primeros auxilios y cooperación
internacional, etc... En tiempo de guerra, los socorristas de las
Sociedades Nacionales son equiparados a los servicios médicos del
ejército. Para formar parte del Movimiento, todas las Sociedades
Nacionales deben ser reconocidas por el CICR y por la Federación
Internacional, sobre la base de las condiciones de reconocimiento
establecidas en los Estatutos del Movimiento Internacional.
Posteriormente, pueden hacerse miembros de la Federación, organismo
coordinador de las Sociedades Nacionales. Hay actualmente 188

DIH ::: Introducción y nociones básicas


Sociedades Nacionales en el mundo.

• La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la


Media Luna Roja fue fundada en 1919. Su cometido es de prevenir y
aliviar los sufrimientos humanos mediante las actividades de las
ciedades Nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, a las que
apoya contribuyendo a su fortalecimiento. También tiene el mandato de
organizar y coordinar acciones internacionales de socorro en caso de
catástrofes naturales, haciendo llamamientos al mundo entero para que
se preste ayuda.

• El Comité Internacional de la Cruz Roja procura garantizar protección


y asistencia a las víctimas de los conflictos armados internos o
internacionales y de sus consecuencias directas. Creado en 1863, el
CICR es el órgano fundador del Movimiento Internacional de la Cruz
Roja y de la Media Luna Roja. Anterior a cualquier otra institución
humanitaria, sus características únicas lo diferencia de las
organizaciones internacionales como no gubernamentales. El CICR
fundamenta su acción en el cometido específico que le han conferido los
Estados Partes en los Convenios de Ginebra y sus Protocolos
adicionales, que incluye la tarea única de supervisar el trato dispensado
a los prisioneros de guerra. Se reconoce también al CICR un derecho de
iniciativa humanitaria reconocido por la comunidad internacional.

4.4. El emblema

Desde el siglo XIX, los emblemas de la cruz roja y de la media luna roja se han
venido utilizando como símbolos universales de asistencia en favor de las
víctimas de los conflictos armados. Tras aprobarse el cristal rojo como
emblema adicional, acaba de abrirse un nuevo capítulo de su larga historia.
En el primer Convenio de Ginebra, aprobado el 22 de agosto de 1864, se
estableció el emblema de la cruz roja. Desde el comienzo, ha sido un signo
visible de la condición de neutralidad y de la protección que confiere el derecho
internacional humanitario a los servicios sanitarios de las fuerzas armadas y a
los voluntarios /as miembros de las sociedades de socorro en favor del
personal militar herido. En aquellos tiempos, parecía que la aprobación de un

DIH ::: Introducción y nociones básicas


signo distintivo único era condición sine qua non de protección. No obstante, a
finales del siglo XIX y principios del siglo XX, algunos Estados y sociedades de
socorro usaban la media luna roja y el león y el sol rojos8 argumentando que la
cruz roja sobre fondo blanco no era acorde con su tradición religiosa o cultural.

Habida cuenta de este hecho consumado, el Convenio de Ginebra del 27 de


julio de 1929 para aliviar la suerte que corren los heridos y los enfermos de los
ejércitos en campaña procuró el reconocimiento internacional respecto de estos
dos signos distintivos. Después, los Convenios de Ginebra del 12 de agosto de
1949 refrendaron el uso de los tres emblemas.

La finalidad de estos emblemas es dar a entender una sola cosa: el respeto


debido a la persona que sufre y está indefensa, a la cual se ha de ayudar, sea
amiga o enemiga, sin distinción de nacionalidad, raza, religión, clase social u
opinión. A pesar de esta aseveración, en determinados contextos, se
consideraba a veces que los emblemas establecidos tenían una connotación
religiosa o política. Lo anterior derivaba en dos grandes dificultades.

Se dudaba de la noción según la cual la neutralidad y la imparcialidad sirven de


base para las actividades de todos los componentes del Movimiento. A causa
de ello, no se respetaban debidamente los emblemas, lo que menoscababa la
protección de quienes los ostentaban y, además, ello indujo a que algunos
Estados y sociedades de socorro se negaran a adoptar cualquiera de los
emblemas establecidos, aduciendo que ninguno era propicio para su labor.
Cualquier rechazo de esa índole era un escollo para que el Movimiento lograse
la verdadera universalidad, ya que en sus Estatutos se estipula el uso de uno
de esos símbolos como condición necesaria para reconocer una Sociedad
Nacional como miembro de pleno derecho en el Movimiento.

A fin de solventar ambos problemas, los Estados Parte en los Convenios de


Ginebra aprobaron un III Protocolo adicional a los Convenios de Ginebra de
1949, en una Conferencia Diplomática que tuvo lugar en Ginebra, del 5 al 8 de
diciembre de 2005. Mediante este instrumento se reconoce un emblema

8
La República Islámica de Irán, único Estado que utilizó el león y el sol rojos, dejó de hacerlo
desde 1980.
DIH ::: Introducción y nociones básicas
adicional, compuesto de un marco rojo cuadrado sobre fondo blanco, colocado
sobre uno de sus vértices y que, por lo general, se denomina el cristal rojo. La
forma y el nombre de este emblema adicional fueron el resultado de un largo
proceso de selección, cuya finalidad era llegar a un resultado desprovisto de
cualquier connotación política, religiosa o de otra índole, y que por lo tanto
podía emplearse en todo el mundo. El Protocolo adicional III se redactó de tal
modo que se evita cualquier proliferación de otros emblemas en el futuro. La
finalidad del cristal rojo no es sustituir a la cruz roja ni a la media luna roja, sino
ofrecer una alternativa.

Las personas e instituciones autorizadas para ostentar el cristal rojo son las
mismas que las facultadas para usar los emblemas reconocidos en los
Convenios de Ginebra de 1949, de las cuales, en particular, los servicios
sanitarios de las fuerzas armadas de los Estados, los hospitales civiles con
autorización explícita y los distintos componentes del Movimiento Internacional
de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, o sea: el Comité Internacional de la
Cruz Roja (CICR), las Sociedades Nacionales y su Federación Internacional.

Los emblemas reconocidos tienen un significado equivalente y deben


beneficiarse del mismo trato y protección en el ordenamiento jurídico de cada
Estado. Cabe destacar que el Tercer Protocolo contempla en su artículo 5 la
posibilidad que los servicios sanitarios y el personal religioso que participan en
operaciones auspiciadas por las Naciones Unidas puedan emplear, con el
consentimiento de los Estados participantes, el cristal rojo sobre fondo blanco.

Los emblemas se pueden emplear de dos maneras distintas: como instrumento


de protección, un emblema es el signo visible de la protección que confieren los
Convenios de Ginebra durante los conflictos armados, pudiéndolos utilizar el

DIH ::: Introducción y nociones básicas


personal sanitario y religioso; o como instrumento indicativo, el emblema indica
el vínculo de una persona o un bien con el Movimiento Internacional de la Cruz
Roja y de la Media Luna Roja.

Se considera uso abusivo del emblema todo uso que no esté expresamente
autorizado por los Convenios de Ginebra de 1949 y sus Protocolos
Adicionales, como son por ejemplo:

Las imitaciones: Se trata de la utilización de cualquier signo que pueda


confundirse con el emblema, como son por ejemplo las imitaciones del color y
la forma.

DIH ::: Introducción y nociones básicas


Las usurpaciones: La utilización del emblema por entidades o personas que
no tienen derecho hacerlo (empresas comerciales, organizaciones no
gubernamentales, particulares, médicos privados, farmacéuticos, etc.).
También el uso por personas que tienen normalmente derecho a usarlo, pero
que lo utilizan para actividades que no se avienen con los Principios
Fundamentales del Movimiento.

La perfidia: Se trata de la utilización, en tiempo de conflicto armado, del


emblema para proteger combatientes armados o material de guerra (usar por
ejemplo, una ambulancia o un helicóptero que lleven el emblema para
transportar a combatientes armados; ocultar un depósito de municiones con
una bandera con un emblema). Este uso indebido es considerado como crimen
de guerra.

4.5. Nacimiento del DIH moderno.


En 1864, el Consejo Federal Suizo convocó una Conferencia Diplomática cuya
presidencia recayó en el General Dufour y en la que Moynier representó a
Suiza; Dunant no tuvo más cometido que el de maestro de ceremonias. En esta
Conferencia se firmó del I Convenio de Ginebra, el 22 de agosto de 1864, para
el "mejoramiento de la suerte de los militares heridos en los ejércitos en
campaña". Este acontecimiento supondrá el nacimiento del DIH moderno,
escrito, basado en tratados internacionales.

DIH ::: Introducción y nociones básicas


Conferencia Diplomática de Ginebra (1864), en la que se firmó el I Convenio de Ginebra

A partir de este acontecimiento, la acción de la Cruz Roja ha sido decisiva para


el desarrollo del llamado "derecho internacional humanitario".

5. Principales textos normativos y normas basadas en


los usos y costumbres de la guerra.

5.1. Clasificación del Derecho Internacional Humanitario

Tradicionalmente se ha venido clasificando el Derecho de la Guerra en dos


grandes bloques: El Derecho de Ginebra que tiende a salvaguardar a los
militares fuera de combate y a las personas civiles que no participan en las
hostilidades y el Derecho de la Haya que determina los derechos y deberes de
los beligerantes en la conducción de las operaciones y limita la elección de
medios y métodos para causar daños. Hoy día, no es posible sostener la tesis de
la existencia de dos compartimentos estancos, y, la imposibilidad de una
separación práctica ha venido a ser confirmada por los Protocolos Adicionales
a los Convenios de Ginebra que, teóricamente dirigidos al llamado Derecho
Internacional Humanitario, contienen numerosos preceptos del comportamiento

DIH ::: Introducción y nociones básicas


en el combate.

Por otra parte, a partir del año 1968, la Organización de las Naciones Unidas se
comienza a interesar en la regulación de la conducción de las hostilidades y
contribuye de manera importante al desarrollo del DIH.

CLASIFICACIÓN DIH (IUS IN BELLO)

“Derecho de Ginebra” (1864): Protección de las víctimas de los


conflictos armados

“Derecho de la Haya” (1899 y 1907): Reglamentación de métodos


y medios de combate

“Derecho de Nueva York: Reunión de ambas ramas del DIH a


partir de los protocolos adicionales (1977)

También es preciso señalar, para un más adecuado entendimiento de esta


materia, que el DIH, en su sentido extenso, presenta los siguientes grupos de
normas:
- Normas que se refieren a la conducta a seguir durante la misma,
subdividiéndose.

• Normas generales
• Normas que regulan la guerra terrestre
• Normas que regulan la guerra marítima
• Normas que regulan la guerra aérea

- Normas relativas a la protección de las víctimas de los conflictos


armados.
- Normas que regulan la neutralidad
- Normas de derecho interno

DIH ::: Introducción y nociones básicas


CLASIFICACIÓN DIH (IUS IN BELLO)

De caracter general
Derecho de la Guerra terrestre
Guerra Guerra marítima
Conflictos armados Guerra aérea
internacionales
Derecho Combatienes
Internacional Población civil
Humanitario Bienes culturales

Conflictos Derecho Art. 3 común


armados Internacional
Humanitario Protocolo II
internos

Normas de Convenio V y XIII


neutralidad Haya, 1907

5.2. Principales textos normativos

Sin ánimo exhaustivo vamos a relacionar en orden cronológico los principales


textos convencionales de DIH9.

1864. Convenio de Ginebra del 22 de agosto de 1864 para el mejoramiento de


la suerte de los militares heridos de los ejércitos en campaña. A partir de ahí,
nace la Cruz Roja, cuya labor es decisiva para el desarrollo del DIH.

1868. Declaración de San Petersburgo, que prohíbe la utilización de ciertos


proyectiles en tiempo de guerra (de peso inferior a 400 gramos, que o sea
explosivo o esté cargado de materias fulminantes o inflamables) y proclama la
prohibición general de utilizar armas "que agravarían inútilmente los
sufrimientos de los hombres".

9
Para una lectura de los textos se recomienda acudir a la página de Cruz Roja Española:
http://www.cruzroja.es/portal/page?_pageid=878,12646931&_dad=portal30&_schema=PORTA
L30 y la del CICR http://www.icrc.org/spa/war-and-law/treaties-customary-law/index.jsp

DIH ::: Introducción y nociones básicas


1899/1907. A finales del siglo XIX y principios del XX, se celebran en La Haya
las Conferencias de la Paz de 1899 y 1907, que constituyen el más notable
intento codificador del derecho de la guerra clásico. De los Convenios
sobresale el segundo que versa sobre las Leyes y costumbres de la guerra
terrestre, que tiene como anejo el Reglamento sobre las leyes y costumbres de
la guerra terrestre.

1925. Protocolo de Ginebra de 17 de junio de 1925 sobre la prohibición del uso,


en la guerra, de gases asfixiantes, tóxicos o similares y de medios
bacteriológicos.

1949. el 12 de agosto de 1949 se firmaron en Ginebra los cuatro convenios


básicos del moderno derecho humanitario:

• Convenio de Ginebra para aliviar la suerte que corren los heridos y los
enfermos de las fuerzas armadas en campaña.
• Convenio de Ginebra para aliviar la suerte que corren los heridos, los
enfermos y los náufragos de las fuerzas armadas en la mar.
• Convenio de Ginebra relativo al trato debido a los prisioneros de guerra.
• Convenio de Ginebra relativo a la protección debida a las personas
civiles

1954. Se acordó en La Haya la Convención de 14 de mayo de 1954, para la


protección de los bienes culturales en caso de conflicto armado. La Convención
ha sido desarrollada por un Reglamento y por dos Protocolos: el primero, de
sobre la protección de los bienes culturales en territorio ocupado, y el segundo,
del año 1999, que establece el sistema de la llamada "protección reforzada".

1972. En cuanto a las armas no convencionales, hay que destacar el Convenio


de 10 de abril de 1972, sobre la prohibición del desarrollo, la producción y el
almacenamiento de armas bacteriológicas (biológicas) y toxínicas y sobre su
destrucción. (es complementario del Protocolo de Ginebra de 1925)

1976. Se abre paso un nuevo principio: el criterio ecológico. Así, se aprobó el


Convenio de 10 de octubre de 1976 (ENMOD), sobre la prohibición de utilizar

DIH ::: Introducción y nociones básicas


las técnicas de modificación ambiental con fines militares u otros fines hostiles

1977. Fruto de la Conferencia Diplomática celebrada en Ginebra, el 8 de junio


de 1977 se aprobaron dos Protocolos adicionales a los Convenios de Ginebra
de 12 de agosto de 1949.

• El Protocolo I de relativo a la protección de la víctimas de los conflictos


armados internacionales.
• El Protocolo II relativo a la protección de las víctimas de los conflictos
armados sin carácter internacional.

1980. La labor de las Naciones Unidas en la regulación de los conflictos


armados se extendió también a las armas convencionales. De esta manera, la
conferencia de las Naciones Unidas sobre la prohibición o restricciones del
empleo de ciertas armas convencionales que puedan considerarse
excesivamente nocivas o de efectos indiscriminados aprobó en Ginebra el 10
de octubre de 1980 el Convenio sobre prohibiciones o restricciones del empleo
de ciertas armas convencionales que puedan considerarse excesivamente
nocivas o de efectos indiscriminados que constaba inicialmente de los
siguientes Protocolos:

• Protocolo sobre fragmentos no localizables (Protocolo I)


• Protocolo sobre prohibiciones o restricciones del empleo de minas,
armas
trampa y otros artefactos (Protocolo II)
• Protocolo sobre prohibiciones o restricciones del empleo de armas
incendiarias (Protocolo III).

1993. En París, el 13 de enero de 1993 se aprobó la Convención sobre la


prohibición del desarrollo, la producción, el almacenamiento y el empleo de
armas químicas y sobre su destrucción. (es complementario del Protocolo de
Ginebra de 1925).

1996. El 3 de mayo de 1996 se modificó el Protocolo II de la Convención de


1980, por lo que se refiere al empleo de las minas antipersonal, que se conoce

DIH ::: Introducción y nociones básicas


como Protocolo II Enmendado.

1997. Se logra la prohibición total de las minas antipersonal. Se abrió a la firma


y ratificación de los Estados el Tratado de Ottawa sobre la prohibición del
empleo, almacenamiento, producción y transferencia de las minas antipersonal
y sobre su destrucción.

2001. Se modificó el artículo 1 de la Convención de 1980 para ampliar su


aplicación a los conflictos armados internos.

2003. Se añadió a la citada Convención de 1980 un Protocolo V, que regula los


restos explosivos de guerra.

5.3. Normas consuetudinarias

No cabe duda de que el derecho internacional humanitario ha tenido un


dilatado origen consuetudinario. Es decir, nació de la aceptación por parte de
los Estados de lo que, aún hoy, se llaman los "usos y costumbres de la guerra".
Estos usos, mediante la costumbre y los tratados, llegaron a ser reglas jurídicas.
Se trata del uso (derivado de la práctica estatal) y de la opinio juris; es decir, de
la convicción de que este uso tiene fuerza obligatoria. La práctica de los
Estados comprende, entre otras, su conducta en los conflictos armados, su
posición en relación con las normas humanitarias o las decisiones de los
tribunales de justicia nacionales o internacionales.

Por eso, después de un dilatado periodo de recopilación y elaboración, cabe


celebrar la publicación por parte del Comité Internacional de la Cruz Roja de la
obra “Derecho Internacional Humanitario Consuetudinario”, que da respuesta a
uno de los grandes retos doctrinales y prácticos del DIH. 10

10
Ver estudio del CICR sobre Derecho Internacional Humanitario Consuetudinario:
http://www.icrc.org/spa/resources/documents/publication/p_t2009106.htm

DIH ::: Introducción y nociones básicas


NORMAS CONSUETUDINARIAS

En un estudio, de 5.000 páginas, elaborado por


especialistas del CICR, se han identificado 161 normas
que mejoran la protección jurídica a que tienen derecho
las personas afectadas por la guerra, en particular por los
conflictos internos. Se considera que esas normas
forman parte de la práctica “generalizada, representativa
y uniforme” de los Estados y, por ende, son aplicables en
todos ellos, hayan firmado o no los tratados pertinentes.

5.4. La cláusula de cierre del sistema de protección


Incluso en aquellos supuestos en que no se prevea ninguna protección
específica para las personas, éstas quedan bajo la protección de los principios
del derecho de gentes derivados de los usos establecidos, de los principios
de humanidad y de los dictados de la conciencia pública. Esta cláusula de
cierre del sistema es internacionalmente conocida como Cláusula Martens, en
homenaje a su autor y está recogida en varios tratados de DIH11

LA CLAÚSULA MARTENS

“... en los casos no previstos por el derecho vigente, la


persona humana queda bajo la salvaguardia de los
principios del derecho de gentes, preconizados por los
usos establecidos entre las naciones civilizadas, por las
leyes de la humanidad y por las exigencias de la conciencia
pública...”
(Preámbulo PA II y arts. 63/I, 62/II, 142/III, 158/IV CG y 1.2 PA I)

6. Principios Básicos en los que se sustenta el DIH. La


Humanidad en la guerra.

La normas de DIH no pueden entenderse ni aplicarse sin la concurrencia de


unos principios básicos en los que se sustenta el DIH y que les permiten a
estas su conversión en sistema, es decir la concepción del DIH como un
conjunto de normas y principios dotados de la debida dirección, cohesión y

11
Cláusula recogida en los Convenios de la Haya de 1899/1907, en los Convenios
de Ginebra, en sus Protocolos adicionales, en la Convención de 1980 y en el Manual de San
Remo.

DIH ::: Introducción y nociones básicas


estructura. Los principios posibilitan encontrar el rumbo y finalidad correctos
que debe seguir la elaboración de nuevas normas, su integración armónica en
el conjunto y la interpretación adecuada de la norma existente que facilite la
resolución del caso concreto.

En la formación de los principios de DIH, ha sido importante la contribución de


muchos intelectuales. En el siglo XVIII, Jean-Jacques Rousseau, ante la
evolución de la guerra entre Estados, formula el siguiente principio:

“La guerra no es, pues, una relación de hombre a hombre, sino de


un Estado con otro Estado, en la que los particulares sólo son
enemigos accidentalmente, no como hombres, ni como ciudadanos,
sino como soldados (...). Siendo el objeto de la guerra la
destrucción del Estado enemigo, hay derecho para matar a sus
defensores en tanto que tienen las armas en las manos; pero luego
que las dejan y se rinden, no son enemigos ni instrumentos del
enemigo, y como vuelven a entrar en la simple clase de hombres,
ya no se tiene derecho sobre su vida.”

Los principios generales más relevantes del Derecho Internacional Humanitario


son12:

6.1. Principio de humanidad

El DIH es pragmático y posibilista. No se trata de humanizar las guerras, eso


es imposible, lo que se trata es de introducir en las guerras principios
humanitarios. Nace del hecho de la guerra y del fracaso del sistema de
seguridad colectiva, es producto de la transacción y del compromiso entre las
posturas que preconizan las necesidades de la guerra (principio de necesidad
militar) y las que tratan de limitar sus efectos (principio de humanidad). El DIH
considera crímenes de guerra todas aquellas situaciones graves de violencia
que excedan del “cupo de violencia” establecido por el principio de necesidad
militar, que una vez discutido, tasado y consensuado, se incorpora al DIH
formando parte de él como un todo. Esa característica del DIH es la que le
proporciona viabilidad. La guerra es inhumana por naturaleza, pero su

12
Se desprenden de los principios generales del Derecho Internacional, a los que hace
referencia el artículo 38 del Estatuto del Tribunal Internacional de Justicia.

DIH ::: Introducción y nociones básicas


regulación jurídica humanitaria no se contamina de inhumanidad, sino todo lo
contrario.

“Tratar al prisionero con humanidad”

Introducir principios de humanidad en los conflictos armados es


uno de los objetivos fundamentales del DIH

En este sentido la Declaración de San Petersburgo de 1868, una de las normas


escritas de DIH más antiguas, tiene en su preámbulo la confirmación de lo que
decimos:

DIH ::: Introducción y nociones básicas


“A propuesta del Gabinete Imperial de Rusia, una Comisión
militar internacional se ha reunido en San Petersburgo con el
objeto de examinar la conveniencia de prohibir el uso de
determinados proyectiles en tiempo de guerra entre naciones
civilizadas, habiendo fijado esta Comisión, de común acuerdo, los
límites técnicos en que deben detenerse las necesidades de la
guerra ante las exigencias de la humanidad,....”

En cualquier confrontación bélica deben ser acatadas las reglas de humanidad.


Tales reglas conforman el llamado Derecho Internacional Humanitario (DIH),
uno de los grandes sectores del derecho internacional que, inspirado en la
noción ética de humanidad, aspira a proteger a la persona en toda situación de
conflicto armado, tenga éste carácter internacional o interno.

En realidad el DIH tiene por objeto la protección de las personas en situación


de vulnerabilidad como consecuencia de un conflicto armado, pero nunca pone
en cuestión la pérdida de esencia o naturaleza del hombre por muy extrema
que sea su situación.

6.2. Principio de necesidad militar

Este principio se aplica para la adopción de las medidas necesarias para


conseguir las metas de la guerra13. Constituye la justificación de todo recurso a
la violencia, dentro de los límites establecidos por el propio DIH, puesto que es
un principio tasado (no se puede invocar si no está prevista su aplicación por la
norma humanitaria) y por el principio general de la proporcionalidad. En el DIH
se integran las normas humanitarias y sus excepciones que constituyen la
expresión del principio de necesidad militar. Se trata de la inclusión en el DIH
de necesidades militares previamente consensuadas en el periodo de
elaboración de las normas humanitarias y son presupuesto necesario para
conseguir que salgan adelante, porque no hay que olvidar que, una vez
aprobada la norma, se abre un periodo en el que los Estados deben ratificarla.
Por ello el DIH es el resultado de la transacción y el compromiso entre
intereses claramente contrapuestos: el interés humanitario y el interés militar.

13
Según Pietro Verri. Diccionario de Derecho Internacional de los Conflictos Armados. en
http://www.fac.mil.co/index.php?idcategoria=56

DIH ::: Introducción y nociones básicas


Una vez ratificada la norma, la necesidad militar queda prendida en las redes
del derecho y no puede excederse de los límites y condiciones en ella
establecidos. Una aplicación del principio de necesidad militar al margen del
DIH no es lícita y no puede justificarse.

La necesidad militar sólo puede invocarse si en el Derecho


Internacional Humanitario se admite explícitamente que, por
excepción, quede sin efecto una prohibición o una limitación
determinada en el recurso a la violencia de guerra.

Expresiones tales como "necesidad de las operaciones militares", "exigencias,


motivos o razones militares", "razones de guerra", "razones de seguridad", etc.
deben entenderse como sinónimos de la locución "necesidad militar". Dado que
la necesidad militar se opone generalmente a las exigencias humanitarias, el
esfuerzo esencial del derecho humanitario consiste en encontrar un punto de
equilibrio entre la primera y las segundas.

6.3. Principio de proporcionalidad

Fruto del necesario equilibrio entra las necesidades militares y las humanitarias
es el principio de proporcionalidad. Este principio parte de la base de la
contemplación o previsión de victimas civiles y obliga a ponderar estas en
relación con la ventaja militar que se obtiene o se espera obtener del ataque
armado. El principio de proporcionalidad trata de limitar los daños producidos
por las operaciones militares reconociendo que el empleo de medios y métodos
de combate modernos difícilmente producen efectos únicamente en el objetivo
militar y que lo probable es que también produzcan daños incidentales o
colaterales entre la población civil y los bienes civiles. 14

El principio de proporcionalidad obliga a los beligerantes a que


establezcan una ponderación entre la ventaja militar que esperan
obtener con el ataque y los daños incidentales o colaterales que se
derivarán del mismo.

6.4. Principio de limitación

Una de las consecuencias más importantes de la introducción del principio de


humanidad en las guerras es la concreción jurídica del principio de limitación de
14
Ver documento citado en nota 2
DIH ::: Introducción y nociones básicas
medios (armas) y métodos de guerra (procedimientos). Este principio básico
aparece expresado en el artículo 22 del Reglamento de La Haya de 1899: “Los
beligerantes no tienen un derecho ilimitado en cuanto a la elección de medios
para dañar al enemigo” y reproducido en el artículo 35 del Protocolo I de 1977:

1. En todo conflicto armado, el derecho de las Partes en conflicto a


elegir los métodos o medios de hacer la guerra no es ilimitado.

2. Queda prohibido el empleo de armas, proyectiles, materias y


métodos de hacer la guerra de tal índole que causen males
superfluos o sufrimientos innecesarios.

3. Queda prohibido el empleo de métodos o medios de hacer la


guerra que hayan sido concebidos para causar, o de los que quepa
prever que causen, daños extensos, duraderos y graves al medio
ambiente natural.

Campo de Jenin, Cisjordania. Casa palestina destruida por el ejército israelí

De este precepto general (que, con cierta justificación, se ha identificado como


el fundamento de todo el derecho humanitario de los conflictos armados)
dimanan varios principios. Uno es la prohibición del empleo de armas,
proyectiles o materias destinadas a causar males superfluos. En esta
formulación, 'superfluo' significa que la utilidad militar de un medio de guerra
particular no justifica el sufrimiento causado, sea porque la utilidad es del todo

DIH ::: Introducción y nociones básicas


inexistente, o en el mejor de los casos mínima, sea porque, al contraponer tal
utilidad y el sufrimiento, la balanza se inclina hacia este último lado y, por ello,
hacia la prohibición del medio de guerra en cuestión.

Las partes beligerantes no tienen derecho ilimitado a la elección


de los medios y métodos de guerra

Prohibiciones genéricas

PRINCIPIOS DE LIMITACIÓN

Las que causan males Las que causan daños extensos


superfluos o sufrimientos duraderos y graves al medioambiente
innecesarios

6.5. Principio de distinción


Uno de los logros más
importantes del DIH moderno
que surge después de las dos
guerras mundiales es sentar
el principio de que la
población civil y los bienes
civiles deben quedar al
margen de los objetivos
militares y no pueden ser en
ningún caso ser calificados
como tales.. Las partes en
conflicto deben distinguir en
todo momento entre la
población y los combatientes.
Los ataques deben ser
dirigidos únicamente contra
“Las represalias contra los civiles están
prohibidas en cualquier circunstancia” los combatientes y no contra
la población civil. Se hará también distinción entre los bienes de carácter civil y

DIH ::: Introducción y nociones básicas


los objetivos militares. Los ataques no pueden ser dirigidos contra los bienes
civiles.

PRINCIPIOS DE DISTINCIÓN

A fin de garantizar el respeto y la protección de la


población civil y de los bienes de carácter civil,
las partes en conflicto harán distinción en todo momento

Entre población civil y Entre bienes de carácter civil y


combatientes objetivos militares

En consecuencia, dirigirán sus operaciones únicamente


contra objetivos militares

6.6. Principio de prohibición de daños inaceptables


Se trata de un principio emergente que surge como consecuencia de la
aprobación de la Convención de Oslo que prohíbe las municiones en racimo.

Del mismo modo que el principio de distinción nos conduce al concepto de


arma indiscriminada, este principio nos lleva al concepto de prohibición de un
arma que causa daños inaceptables en la población civil pero con un matiz
diferencial muy importante:

El arma se prohíbe únicamente por su resultado dañoso, por sus efectos


inaceptables. Ya no se busca la prohibición general de un arma como categoría,
con independencia de sus efectos. Se esta iniciando un camino de encuentro
para los Estados que no quieren renunciar a un arma de utilidad militar, pero
que pueden hacer un esfuerzo tecnológico por limitar su impacto humanitario.15

15
Ver artículo J.L. Domenech en: http://www.cruzroja.es/dih/pdfs/temas/2_2/2_2.pdf

DIH ::: Introducción y nociones básicas

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