Sei sulla pagina 1di 16

UNIDAD I: EL RECIEN NACIDO

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) se considera recién nacido o neonato


a los niños que tiene menos de 28 días. En este periodo es cuando más riesgo de mortalidad
existe por diferentes causas, por tal motivo necesita de más atención y cuidado.

En este periodo el niño o niña está bajo el cuidado de la familia y del Ministerio de Salud,
sin dejar de lado que la preparación profesional de la/el docente en educación inicial es
conocer características básicas del niño desde el momento de la concepción hasta los 5 años,
ya que influirá a futuro en el desarrollo educativo, social, físico y emocional del infante.

CLASIFICACIÓN DEL RECIEN NACIDO (OMS)

TÉRMINOS EQUIVALENCIAS

RECIEN NACIDO A TERMINO AQUELLOS NACIDOS CON 37


(RNT) SEMANAS DE GESTACIÓN Y MENOR A
42 SEM GES.

RECIEN NACIDO PRETERMINO AQUELLOS NACIDOS MENOR A 37


(RNPT) SEMANAS DE GESTACIÓN

RECIEN NACIDO POSTERMINO AQUELLOS NACIDOS A LAS 42


(RNPosT) SEMANAS DE GESTACIÓN
TEMA 1.- CARACTERISTICAS

Cada etapa del desarrollo humano tiene sus propias características, es indispensable saber
que el peso, talla, apgar, perímetro encefálico, tuvo el niño al nacer, en los próximos años
estos datos serán de gran valor cualitativo para realizar la ficha o seguimiento de un niño
que tenga una necesidad educativa.

 CARACTERÍSTICAS ANTROPOMÉTRICAS

La antropometría es una ciencia que estudia las medidas y dimensiones de las diferentes
partes del cuerpo humano ya que estas varían de un individuo para otro según su edad, sexo,
raza, nivel socioeconómico, etcétera.

Cuando el infante nace se le realiza la toma del peso, talla, medida de la cabeza, toma de
reflejos, los cuales son indicadores de un buen estado de salud.

Tenemos una tabla general entregada por la Organización Munidal de la Salud (OMS), como
base para tomar en cuenta que el niño con parto a término “normal” está dentro de los rangos
para considerarlo un niño/a sano/a, en cuanto a peso y talla.
 CARACTERÍSTICAS FISOANATÓMICAS

Son valoradas mediante el Test de Apgar.

TEST DE APGAR

El test de Apgar es una valoración clínica simple del estado general del neonato después
del parto, para evaluar la vitalidad del recién nacido.

Por lo general, la prueba se le administra al recién nacido en dos ocasiones:

La primera vez, un minuto después del nacimiento, la puntuación al primer minuto evalúa
el nivel de tolerancia del recién nacido al proceso del nacimiento y su posible sufrimiento.

La segunda vez, cinco minutos después del nacimiento, la puntuación obtenida a los cinco
minutos evalúa el nivel de adaptabilidad del recién nacido al medio ambiente y su capacidad
de recuperación.

A veces, si el estado físico del bebé resulta preocupante o y si el resultado de la segunda

prueba es bajo, se puede evaluar al bebé por tercera vez 10 minutos después del nacimiento.

La palabra Apgar puede usarse como un acrónimo para recordar los criterios evaluados:

Apariencia,

Pulso,

Gesticulación,

Actividad y

Respiración.
Se utilizan cinco factores para evaluar el estado físico del bebé y cada factor se evalúa
siguiendo una escala del 0 al 2, siendo 2 la máxima puntuación posible. Sumando las cinco
puntuaciones se obtiene el resultado del test (máximo de 10).

El recién nacido es evaluado de acuerdo a cinco parámetros fisioanatómicos simples, que


son:

- Tono muscular.

- Esfuerzo respiratorio.

- Frecuencia cardíaca.

- Reflejos.

- Color de la piel.

EVALUACIÓN DEL TEST DE APGAR.

Si el bebé está en buenas condiciones obtendrá una puntuación de 7 a 10 puntos.

Si obtiene de 4 a 6 puntos su condición fisiológica no está respondiendo adecuadamente y


el neonato requiere una valoración clínica y recuperación inmediata.

Si es igual o menor a 3, necesita atención de emergencia como medicamentos intravenosos,


y respiración asistida.

Si la puntuación es 0, es muy probable que bajo un perfecto estudio clínico se le dictamine


el estado resolutivo de muerte.

 CARACTERÍSTICAS FÍSICAS

A medida que pasan los días, la cabeza se redondea y su aspecto se estabiliza. Desde el
nacimiento, el bebe es parte de la familia, con sus particularidades en el aspecto físico y sus
parecidos familiares.
El tamaño es muy variable. El peso habitual del bebé al nacer va de 2,5 a 4,5 kg. Ten
presente que bajará de peso en los primeros días y deberá aumentar a partir de la primera
semana.

La cabeza es muy grande en relación con el resto de su cuerpo. Se inclina hacia un lado
cuando está acostado y cae hacia adelante o atrás cuando lo incorporas, porque así funciona
el tono de su cuello en esta etapa de su vida. Por ello, para levantarlo y movilizarlo se debe
colocar una mano entre su cabeza y su espalda, y realizar el movimiento en bloque. Por otra
parte, no es extraño que tenga algunas marcas en su cara y su cabeza; el médico explicará
cuándo se van. Y en una semana, generalmente, la cabeza se verá “redonada” y habitual. En
el centro de la cabeza del bebé hay una parte blanda llamada fontanela. Allí los huesos planos
del cráneo tienen que seguir creciendo, por ello no se han osificado aún y están unidos por
tejidos blandos que dan espacio al crecimiento (al nacer su perímetro craneal mide
habitualmente 34 cm y al año, 46 cm). A medida que el bebé crezca, el cráneo cerrará y
cubrirá esta parte blanda. Lo usual es que la fontanela cierre totalmente entre los 12 y 18
meses.

El cabello varía en cantidad y espesor. Algunos niños nacen con mucho pelo y otros casi
calvos. Unos lo traen más fino, otros menos. Alrededor de los 3 meses, la mayoría pierde el
que traía al nacer y genera una nueva cabellera, de un color diferente.

Los ojos suelen ser de color azul oscuro cuando nace, pero el verdadero color se fija hacia el
final del primer mes. Los párpados pueden estar hinchados debido a la presión causada por
las contracciones uterinas. Y si aparece incluso algún derrame en el blanco del ojo, no te
preocupes: pronto desaparecerá.

Las manos y los pies son redondeados, y los dedos generalmente arqueados. Si se nota una
coloración azulada, probablemente se deba a la inmadurez circulatoria, se debe consultar con
el pediatra. Las piernas suelen estar tan flexionadas, que te puede resultar difícil estirarlas;
no se debe forzar, poco a poco irán cambiando el tono. En cuanto a los puños, muy
probablemente los mantenga apretados en forma casi permanente. Y sus uñas seguramente
estén largas y manchadas por el meconio.
La piel del pequeño es fina y suave, y a menudo viene acompañada de:

• Grasa, que lo protegía dentro de tu panza: el vérnix o unto cebáceo;

• Vello aterciopelado o lanugo, que lo recubría cuando era un feto;

• Descamación provocada por su permanencia en el líquido amniótico;

• Puntos blancos en su nariz, que no son más que glándulas sebáceas algo dilatadas.

Todo esto irá desapareciendo con el paso de los días.

El cordón umbilical, que unía al feto con la placenta, se corta tras el parto. Generalmente,
entre el 7º y 10º día se seca, se arruga y se cae. La cicatriz que deja en tu bebé es el ombligo.
Al principio, sobresale hacia fuera, luego se retrae y queda hundido.

Los genitales del bebé son grandes, debido a la acción de las hormonas del embarazo. Por
esto mismo, tanto niñas como niños pueden tener glándula mamaria abultada que luego se
reducirá.

La niña suele nacer con la vulva aumentada de tamaño y de color rojo oscuro. Es normal que
produzca secreción mucosa o sanguinolenta. Son secreciones normales, generadas por el
cambio hormonal.

El varón, al nacer, suele tener el prepucio cerrado de tal manera que no se puede replegar. En
algunos países o culturas se practica la circuncisión. Sin embargo, la gran mayoría de los
niños no necesita ser circuncidado por razones médicas, pero en caso de necesitarlo, la
operación se realiza a los 2 años. (UNICEF, 2016)

TEMA 2.- REFLEJOS DEL PRIMER AÑO DE VIDA

Los reflejos son acciones o movimientos involuntarios. Algunos de ellos son espontáneos y
forman parte de las actividades habituales del bebé y otros aparecen como respuesta a ciertas
acciones.
Los reflejos del recién nacido sirven para detectar posibles anomalías en el sistema nervioso
y el cerebro. Y algunos de estos reflejos son característicos de períodos específicos del
desarrollo.

1.- REFLEJOS PRIMITIVOS O ARCAICOS: Estos reflejos son respuestas propias de los
bebés que están presentes en el momento del nacimiento y que van desapareciendo, por lo
general, a lo largo del primer año de vida.

1.1 Reflejo de búsqueda

Cuando se toca o acaricia la boca o mejilla del bebé, este vuelve la cabeza y abre la boca para
buscar la dirección de dicha caricia.

Este reflejo ayuda al bebé a buscar el pecho de la madre para alimentarse y cuanto más
hambriento esté el bebé, más fuerte es el reflejo.

El reflejo de búsqueda desaparece alrededor de los 3 o 4 meses de vida del bebé.

1.2 Reflejo de succión

El reflejo de succión aparece alrededor de las 32 semanas de embarazo, pero no se desarrolla


del todo hasta las 36 semanas de embarazo, según la Universidad de Medicina de
Chicago. Por eso, en algunas ecografías se puede ver al bebé chupándose el dedo.

Cuando se introduce algún elemento en la boca del bebé, como el pezón, el dedo o el
biberón, el bebé comienza a succionar. Y este es un movimiento complejo que requiere la
coordinación de varios grupos musculares.

La succión en sí misma tiene capacidad para disminuir el dolor y la ansiedad.

Además, cuando el bebé es prematuro este reflejo puede ser débil o inmaduro.
1.3 Reflejo de Moro

También se conoce como reflejo de sobresalto, porque se produce cuando el bebé se


sobresalta por un sonido o movimiento brusco. En respuesta a esto, el bebé echa la cabeza
hacia atrás, abre los brazos y las piernas y en ocasiones llora.

Por lo general, el reflejo de Moro se desencadena cuando el bebé es tumbado boca arriba, se
eleva su cabeza con la mano y se deja caer la cabeza de repente, evitando que golpee la cabeza
con la superficie.

También aparece cuando el bebé está tumbado boca arriba y se tira suavemente de los brazos
hasta que casi separa la cabeza de la cama y se suelta de repente. El reflejo de Moro
permanece hasta los 4 o 5 meses de edad.

NOTA.- Cuando hay alguna alteración en los miembros, como fractura de clavícula, el reflejo
solo aparece en uno de los brazos.

1.4 Reflejo de prensión

El reflejo de prensión aparece cuando se acaricia o presiona la palma de la mano del bebé
con cualquier objeto y este cierra los dedos. Este reflejo además de emocionar a los padres,
parece que tiene un efecto tranquilizador en el bebé. Este reflejo dura solo un par de meses
y es más fuerte en los bebés prematuros.

Al desaparecer, este reflejo es sustituido por una conducta aprendida, que tiene una intención
y que se desarrolla a medida que madura el cerebro del bebé. Cuando este comienza a
adquirir coordinación y habilidad para agarrar y manipular objetos.

1.5 Reflejo de Marcha.

Resulta curioso ver como el recién nacido hace el intento de caminar cuando sujeto por las
axilas y con un pie apoyado, levanta el contrario para intentar dar un paso o varios. Sólo se
mantiene hasta el segundo mes.
1.6 Reflejo tónico del cuello

Este reflejo se desencadena cuando se gira la cabeza del bebé hacia un lado, sosteniéndola
durante 15 segundos y después se vuelve a colocar en la línea media. La respuesta del
bebé consiste en extender el brazo y la pierna correspondiente al lado hacia el que se ha
girado la cabeza, mientras que el otro lado permanece flexionado.

A esta postura se la describe como postura de espadachín o de esgrima. Este


reflejo desaparece alrededor de los 6 o 7 meses de edad y en algunos niños se obtiene una
respuesta clara, en otros puede que apenas se note.

1.7 Reflejo de Babinski

Este aparece cuando se acaricia la planta del pie. El dedo gordo del pie del bebé se dobla
hacia la parte superior y los otros dedos se abren en abanico. Este reflejo desaparece alrededor
del año.

TEMA 3: CUIDADOS DEL RECIEN NACIDO

Una vez que él bebe está listo para ir a casa con su familia, los cuidados pasan a ser parte de
la vida cotidiana de las personas que están a cargo, deben tomar en cuenta que un profesional
en educación inicial no lo es solo en el aula de clase, debemos tener los conocimientos
necesarios y básicos para ser un ente de apoyo y ayuda en la familia y en nuestra comunidad.

Tomado del Blog Bebes y más, conoceremos los principales cuidados que se debe tener en
el hogar cuando un bebe llega a casa.

1. La cura del cordón umbilical

El cordón umbilical al dejar de recibir aporte sanguíneo se momifica y acaba cayendo


pasados unos días. El cómo curarlo depende un poco del hospital en que el bebé nazca, pues
hay quien recomienda utilizar alcohol de 70ºC, hay quien dice que solo agua y jabón y hay
quien dice que no hace falta hacer nada. Lo más recomendable es limpiar con suero
fisiológico y una gasa para evitar malos olores.
2. La ropa en los primeros días

¿Abrigarlo? ¿No abrigarlo? Durante los primeros días es interesante tener al bebé
relativamente abrigado, pues viene del útero materno donde estaba a una temperatura alta en
comparación con el exterior. No pasarse, pero no ponerlo exactamente como vamos nosotros,
o si va igual, tener claro que estamos en un ambiente donde no puede pasar frío. Una vez
pasan los primeros días, se suele decir que hay que vestirles con una prenda más que nosotros.
Es una manera de explicar que tendrían que ir igual que los adultos, pero con una capita fina
más, pues ellos no regulan la temperatura como nosotros y, además, no tienen la cantidad de
grasa que nosotros sí tenemos y que en cierto modo nos protege (y no hablo de sobrepeso ni
nada por el estilo, sino de que ellos tienen una piel muy finita y nosotros, aun delgados, no
tanto).

Lo ideal en este sentido es tocarles la zona del cuello y la espalda. Así sabremos si están
confortables o si tienen frío o calor.

3. El baño

Durante mucho tiempo los bebés se bañaban cada día tanto por higiene como por aquello de
que se quede relajado antes de ir a dormir. La realidad es que no todos se relajan (muchos
salen de la bañera más despiertos de lo que entraron) y bañarlos todos los días puede ser
demasiado. Y es que el baño reseca la piel, elimina las bacterias naturales que tenemos y
muchos bebés sufren después las consecuencias, en forma de eccemas e infecciones cutáneas.
Vamos, que lo recomendable es bañar al bebé cada dos o tres días, y en los días que no lo
bañas hacer algún cambio de pañal con agua y jabón.

¿Que cómo bañar al bebé? Con el agua a temperatura adecuada (unos 36 grados), en un lugar
donde no haga frío y con todo preparado para después. Ahora viene es interesante secar bien
al bebé, sobre todo en los pliegues, y luego secarlo y vestirlo rápido.
5. El cuidado de las uñas

En las uñas no hay que hacer nada especial más allá de cortarlas cuando haga falta. Muchos
padres creen que no se pueden cortar hasta que los bebés tienen un mes, o una edad
específica. Lo cierto es que no hay una edad mínima para cortar las uñas de un bebé.

Es más bien una cuestión de lógica. Si el bebé tiene las uñas largas pues se cortan, tenga la
edad que tenga.

Puede hacerse con una lima o puede hacerse con unas tijeras de punta redonda y es mejor
hacerlo en algún momento que esté relativamente tranquilo. De todas maneras, tenemos que
sujetar bien su mano, no sea que un movimiento nos lleve a cortar lo que no debemos.

6. Los ojos, las orejas y la nariz

Con los ojos, las orejas y la nariz no hay que hacer nada, pero en caso de que haga falta, vale
la pena saber cómo hacerlo. Si hay legañas, que al principio puede ser habitual porque los
conductos lagrimales no siempre funcionan bien y no limpian el ojo como debieran, se
limpian con un poco de suero fisiológico y con una gasa que limpie de dentro hacia afuera
y luego tirándola (solo una pasada por gasa).

Si vemos cera, solo limpiar la parte de cera que veamos, la del exterior, y mejor no usar
cotonetes. La mejor manera de limpiar las orejas es no meter nada dentro.

En el caso de la nariz, si notamos que tiene moquitos y no respira bien, dado que ellos no
sacan los mocos voluntariamente, se recomienda utilizar suero fisiológico. El modo menos
agresivo de hacerlo es echarlo poco a poco, gota a gota, por los orificios nasales, de manera
que el moco se vaya diluyendo y salga más fácilmente por la nariz o bien se lo trague.

7. Cómo limpiar la zona del pañal

Lo ideal es hacer al menos un cambio al día con agua y jabón. Si pueden ser más, pues más,
que siempre limpia mejor que las toallitas. La dirección que usemos para limpiar es
importante, porque según cómo lo hagamos llevaremos los restos hacia el lugar donde
quitamos la mano. Es importante, entonces, hacerlo desde los genitales hasta el ano. De
arriba a abajo, para que las heces no vayan hacia los genitales, sino todo lo contrario.

8.- El lavado de la ropa del bebé

La piel de los bebés es bastante delicada y suele responder fácilmente a cualquier "agresión".
Seguro que ha notado que si los toma desnudos quedan marcados nuestros dedos durante un
rato. Para evitar posibles reacciones, es recomendable lavar la ropa del bebé por separado,
asegurarnos de que se aclara bien y a ser posible no utilizar suavizante, pues provoca
muchas reacciones alérgicas en la piel (granitos, enrojecimiento, etc.). Conviene hacer lo
mismo con sus sábanas y mantitas y con las nuestras si el niño acaba en nuestra cama o
duerme alguna siesta en ella.

9. Cortar o no cortar el pelo

El corte del pelo del bebé se hace también por una cuestión de estética. En los primeros meses
suele caerse gran parte del pelo de bebé y muchos se quedan prácticamente calvos. Luego,
hacia los seis meses, empieza a salir el pelo definitivo. Cortarlo no hará que el pelo salga
más fuerte, así que solo se hace si los padres consideran que el bebé estará mejor con el pelo
corto. Para ello deben utilizarse tijeras con la punta redonda (la cuchilla está totalmente
desaconsejada y el cortapelo puede hacerle daño) y tener al bebé tranquilo para no hacerle
daño.

10. Posturas

Los huesos del cráneo de un bebé son blandos y moldeables, por lo que si descansa siempre
en la misma postura se pueden deformar. Para evitarlo cámbiale la postura de la cabecita
cuando esté tumbado: mirando al frente, hacia un lado, hacia el otro lado o ponlo boca abajo
cuando esté despierto durante un rato. En el caso de que observes una deformación consulta
con el pediatra para saber si es necesario algún tratamiento o no. También es conveniente
que le cambies la posición del cuerpo ligeramente de vez en cuando para evitar que la parte
sobre la que se apoya se enrojezca o se amorate por la inmadurez de su sistema
circulatorio. Evitar que su cuerpo se encorve tratando de hacerlo sentar antes del cuarto
meses.

11. Al dormir

Los recién nacidos duermen la mayor parte del día. Recuerda que el bebé siempre tiene que
estar boca arriba o de lado, para reducir el riesgo de Muerte Súbita del Lactante. Si vomita
con frecuencia, puedes ponerle la cabecita ligeramente de lado o acostarlo sobre una
superficie levemente inclinada. Evita los ambientes con humo y quita todos los accesorios de
la cuna, como cojines o juguetes, para que pueda dormir seguro, no dejarlo con biberón
dormido.

TEMA 4: CUIDADOS A LA MADRE Y EL ROL DE LA FAMILIA.

El tener un recién nacido en casa es una emoción para toda la familia y muchas veces el
centro de atención, dejando de lado los cuidados y atención que también necesita la madre,
no podemos minimizar la importancia que la mamá este bien para poder atenderlo,
recordemos que el vínculo emocional que la madre le brinda al recién nacido es indispensable
para un equilibrio emocional y desarrollo del infante.

En algunos casos, las mujeres se hipnotizan con el bebé y descuidan a los demás miembros
de la familia; especialmente al esposo, quien puede sentirse desplazado por el bebé, pero no
lo dice por temor a que su mujer crea que se trata de una actitud inmadura y de competencia
con el bebé. “Es necesario que su dedicación y trato con todos los miembros de su familia
sea equilibrado. Un bebé es una alegría enorme para la familia, pero también puede ser un
tsunami para la pareja”, comenta la doctora Rojas.

A continuación alguna recomendaciones generales para el bienestar de la madre:

1.-Descanso

Es recomendable que en los primeros días, la madre duerma al mismo tiempo que el bebé.
Involucrar al padre. La terapeuta de pareja cuenta que una de las principales quejas de las
mujeres es que sus parejas descargan sobre ellas la mayor parte del peso y la responsabilidad
de la paternidad. “Para evitar que esto ocurra, ella tiene que procurar involucrarlo y pedirle
ayuda desde los primeros días, pues él debe asumir su papel de esposo y padre”.

2.-Alimentación tras el parto

-No hay nada mejor que una buena alimentación para recuperar la silueta tras dar aluz.
-Lo necesario: proteínas para reparar los tejidos, lípidos para obtener energía, glúcidos para
el tono, fibras para mejorar el tránsito intestinal, y minerales y oligoelementos. En resumen:
una alimentación sana contiene los elementos esenciales que te ayudarán a combatir la fatiga.
Y aunque no tengas tiempo de cocinar, nada te impide comer de un modo equilibrado. Todas
las comidas deben incluir piezas de fruta y verdura, féculas, carnes, pescados y productos
lácteos.
-En cuanto al peso, piensa que necesitarás alrededor de seis meses para recuperarlo y
aproximadamente un año para conseguir la cintura de siempre.

3.- Belleza tras el parto

-Dedícate tiempo a cuidarte, y no nos referimos a un cuarto de hora.


-Sigue con los cuidados anti estrías incluso después de dar a luz. Aunque las cremas no las
hagan desaparecer, sí que las difuminan. El simple hecho de masajearte el vientre, las piernas
y las caderas te ayudará a readaptar tu cuerpo, no obstante tardará un tiempo en volver a
adoptar su silueta inicial.

-Acuérdate también de hidratar los senos (excepto el pezón si das el pecho al bebé) para
evitar la flacidez de los tejidos.

-Las zonas con pigmentación (cloasmas, manchas marronosas en el vientre) de origen


hormonal permanecerán algunos meses. Utiliza protección total antes de exponerte al sol.
4.- Reeducación perineal tras el parto

-Durante el embarazo y el parto el perineo (la estructura de ligamentos y músculos que


garantizan la sujeción de los órganos en la zona de la pelvis) sufre ciertas agresiones. De ahí
que tras el parto se deba reeducar. Dicha reeducación se recomienda a todas las mujeres que
hayan dado a luz de forma natural y también por cesárea con el objetivo de que vuelvan a
gozar de una vida sexual satisfactoria.

-Las sesiones de reeducación perineal las prescribe el médico una vez se ha dado a luz. Tienen
lugar durante 6-8 semanas después del parto o un poco más tarde en el caso de aquellas
mujeres que den el pecho a los bebés. Con estas sesiones se vuelve a muscular la zona pélvica
y se ayuda a prevenir problemas de incontinencia urinaria así como el prolapso genital
familiarmente conocido como “descenso de órganos”.

-Cuando el perineo haya recuperado la tonicidad podrás empezar a trabajar la zona


abdominal.

5.- Actividad física tras el parto

-En función de la mujer y de sus condiciones físicas, el cuerpo se sobrepone más o menos
rápido al parto. No obstante, lo más común es tener que esperar entre uno o dos meses y que
la reeducación perineal haya finalizado antes de retomar la actividad física (que al principio
tendrá que ser muy suave). Si has sufrido una cesárea o una episiotomía, deberás tener algo
más de paciencia. En todo caso, será el ginecólogo quien te dé luz verde para empezar a
practicar deporte.

-Al principio elije una actividad relajada (gimnasia en grupo o natación). El inicio debe ser
muy suave. Las actividades “violentas” (las que exigen correr o saltar) es mejor evitarlas, de
momento. Empieza con un poco de marcha, por ejemplo, mientras al bebé le da un poco el
aire.
-También puedes realizar algunos ejercicios sencillos en casa para tonificar músculos que se
han debilitado durante el embarazo o para ir perdiendo peso de un modo armonioso y
duradero.

Potrebbero piacerti anche