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Linea tematica: Derechos humanos ‘Titulo: ZEs ef multiculturalismo malo para las mujeres? Respondiendo a ta famosa pregunta de Susan Moller Okin (a partir de la experiencia argentina). El objetivo de este ponencia es responder tentativamente a la famosa pregunta que se hiciera Susan Moller Okin, pensadora feminista, en uno de sus iiltimos trabajos en la Universidad de Standford: Is Multiculturalism Bad for Women?, Trataremos de responder esa pregunta compleja (que todavia hoy interpela a los politicos y juristas mtinos, pone en jaque a las politicas de género de la region sudamericana, donde las politicas de género, que buscan visibilizar la violencia que padecen las mujeres, cOnviven muchas veces con las politicas de respeto a las pricticas culturales ancestrales de ‘distintas comunidades indigenas, entrando muchas veces, sin embargo, en contradiccién con ellas; el respeto a las pricticas culturales ancestrales ha ganado, casi al mismo tiempo que la mujer conquistaba sus derechos, otros derechos al respeto, que muchas veces entran en contradiccién paradéjicamente con el respeto a los derechos que ha conquistado la mujer, por eso las politicas de género se deben pensar en el marco de un pluralismo juridico paradojal y una democracia multicultural que no respeta solo a las mujeres, sino, como diria Moller Okin, a las comunidades que muchas veces defienden como “cultura” y tradicién précticas lesivas de los derechos de la mujer, practicas opresivas y violatorias que los varones indigenas denominan “cultura” ¢ ‘incluso derecho’) Esta paradoja —presente también en el derecho argentino- es Ia paradoja de todo ‘multiculturalismo cuando se piensan desde él los derechos humanos de la mujer violada © lapidada 0 mutilada o encerrada. Este es uno de los dilemas del derecho en América Latina: el multiculturalismo parece entrar en contradiccién con el feminismo. Esta es la paradoja que queremos dejar planteada en este trabajo. Judith Butler diria: cémo respetar a la mujer (indigena) sin caer, al mismo tiempo, en alguna forma de imperialismo cultural. Esta es la contradiccién contemporinea més firme del multiculturalismo y del derecho Latinoamericano y del derecho argentino. Que no existe, ‘como veremos, para la mujer, un auténtico “derecho de salida” de las culturas que la oprimen. Que ese derecho (que el multiculturalismo presume que existe) est definido de tal modo que la mujer oprimida jamés puede legar a ejercerlo: el pretendido “derecho de salida”. Si demostramos que ese derecho no es tal como el multiculturalismo lo define, entonces el multiculturalismo mismo podria naufragar como construecién teérica. La mujer esti encerrada y silenciada mientras el derecho finge que es libre. Que puede salir. (cuando muchas veces no puede ni siquiera alzar su ‘voz sin poner en riesgo su propia vida) En este contexto, y para ilustrar el debate, analizaremos brevemente el famoso caso Ruiz, el caso de un indigena argentino (de Salta) que interpuso la “defensa cultural” para no ser condenado por el delito de violacién de su hija menor de edad (que a raiz de Ja relacién sexual con su padre quedé embarazada’). De nada sirvié que la ex esposa de Ruiz (de la misma comunidad indigena) alegara que no era “‘tradicién” ni “cultura” de esa comunidad (Wichi) que los padres tuvieran relaciones sexuales con sus hijes ' Okin, S. Is Multiculturalism Bad for Women? Princeton University Press. 1999. 2 SCI Salta, 29/09/06, “CIC.R., J.F.- rec. de casacién” en www.lexisnexis.com.ar del 29/09/06 * 1 después de la primer menstruacién’. (el derecho argentino diria: que la violara 0 abusara de ella) La justicia no escuché a la mujer. Escuché (y disculpé) al hombre. La justicia del Estado argentino (Salta) entendié que el indigena no habia cometido delito alguno porque al tener relaciones sexuales con su hija solo “respetaba una tradicién” ancestral propia. Esto nos obligaré a responder afirmativamente a la pregunta de Susan Moller Okin. E| multiculturalismo si parece ser, en muchos casos, (como éste) malo para las_ mujeres, Y Sus derechos Porque solo Tos hombres tienen, aun hoy, en ‘Sudamérica al ‘menos, el poder conereto de definir Y describir su cultura. Ese es un poder que la mujer no tiene. YTaI Vez nuined hia tendo. BI debaié del multiculturalismo escondé ast otto jebate: el debate por el valor de la palabra de la mujer. No quiero terminar este resumen extenso sin advertir que para miles de mujeres el debate del multiculturalismo no es sélo un debate cémodo. No es un divertimento de la cultura académica argentina o europea. De la claridad de este debate dependen las vidas de millones de mujeres silenciadas que desde que han nacido han sido educadas para callar y ser objetos. Ge “Tu habla no sélo se articula de manera diferente sino que es silenciada, eliminada Desaparecida” (Mackinnon, Toward a Feminist Theory of the State) Palabras clave: Multiculturalismo, género, violencia, tradicién, mujeres, pluralismo, derecho. Guido L. Croxatto Universidad de Buenos Aires, Argentina Datos personales Guido Leonardo Croxatto DNI-29950617 e-mail: goroxatto@utdt.edu / gcroxatto@gmail.com Abogado UBA. Ayudante de segunda del Departamento de Filosofia del Derecho, UBA ¥y del Departamento de Derecho Pablico, UBA. (asignatura Teoria del Estado) Aclaracién. Pido disculpas al jurado de ponencias por haber excedido el méximo de ‘caracteres, pero los temas analizados en el trabajo (la violencia de género y el multiculturalismo) me demandaron mayor espacio del esperado. 3 Que dentro de dichas pautas culturales (Wichi) se denomina “matrimonio privignatico” 2 Titulo: ;£s el multiculturalismo malo para las mujeres? Respondiendo a la famosa pregunta de Susan Moller Okin (a partir de la experiencia argentina). I. Introduceién. El Feminismo y el multiculturalismo: un debate que no esti cerrado EI multiculturalismo no es solo un problema de América, de Argentina ni es solo un problema de la mujer. El multiculturalismo parece ser un verdadero problema (0 un verdadero desafio, aunque por otro lado también una esperanza) para la democracia. Y también para el derecho contemporéneo. La masacre en Noruega, la xenofobia en Grecia, Francia, Italia o Alemania (con los neo-nazis) muestran un verdadero avance xen6fobo en el discurso politico. Pero ese avance no se explica solo a partir de la crisis y el desempleo que asolan Europa. Se cexplica también a partir de distintas concepciones politicas que le han minado el camino al multiculturalismo y a la tolerancia. Angela Merkel decia en Alemania hace apenas dos afios que en su pais “el multiculturalismo ha fracasado”. Nicolas Sarkozy pretendia ‘ganar las iiltimas elecciones, en las que salié derrotado, diciendo que “el sistema de integracién francés no fimciona”, y que en el pais “hay demasiados inmigrantes”. En Grecia avanzan los partidos de extrema derecha, como en Italia, con la liga del norte, que quieren expulsar de su pais a los inmigrantes “ilegales”. Pero estos distintos actos, gestos, discursos, encontraron el pasado affo su expresién o materializacién més siniestra y macaba (cuando las palabras se convierten en hechos y el abogado se detiene obligado a pensar) con el asesinato de mis de setenta (setenta y siete) j6venes en Noruega en ef marco de un campus politico. El asesino Anders Behring Breivik, un joven neonazi, tenia para sus crimenes atroces, que conmovieron a Noruega y el mundo, tuna explicacién concreta (que desarrollé en el juicio que se le sigue): el multiculturalismo. “No reconozco el sistema judicial noruego, porque actia bajo mandato de partidos que apoyan el multiculturalismo” (...) “Actué en defensa propia”, dijo Breivik. “Ia, ich wiirde es wieder tun”, (sf, lo volveria a hacer) dijo Behring Breivik. No asesiné personas inocentes, maté “militantes del multiculturalismo”. Breivik, que acaba de declarar en el juicio por la masacre, dijo en su pais que no admitfa la autoridad moral de los jueces (y que los nifios asesinados no eran inocentes) por defender también los jueces “el ‘multiculturalismo”. “Das waren keine unschuldigen Kinder, sondern politische Aktivisten, die fiir den Multikulturismus arbeiteten”. (“no eran chicos inocentes, eran activistas politicos que trabajaban por el multiculturalismo”) Eran menores hijos de integrantes del partido laboralista. El multiculturalismo es un problema no menor en Europa. El multiculturalismo es la contracara del racismo xendfobo. Pero es el racismo el que avanza en Europa. (se ve en los votos de Marie Le Pen o de la liga del Norte en Italia). No la integracién. La integracién es una asignatura pendiente de la democracia. En 2009 Angela Merkel (de la CDU) habia dicho sin tapujos que el multiculturalismo en Alemania, como dije, habia fracasado. En la misma linea, Sarkozy se queja de que en Francia “hay muchos extranjeros” y que el sistema de integracién francés no funciona. EI problema sin embargo no son los extranjeros. El problema es cémo se sostiene la Unién Europea. Como un pais (por ejemplo, un pais como Grecia) con desempleo y protestas masivas, con una economia asfixiada, logra encauzarse politicamente sin caer una vez més en el racismo y el odio. Sin caer en lo que Hobsbawm llama un “lenguaje totalitario”. Esto es lo que evita el multiculturalismo. EI mayor problema que han empezado a enfrentar Alemania, en Francia, en Espafia, en Nonucga, en los iltimos afios, no es, como suele decirse, la pobreza, el desempleo, 0 la falta de inversiones o de oportunidades. Es la falta de integracién. Bl drama irresuelto

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