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MARIO BOTTA “CASA STABIO”

¿QUIÉN ES MARIO BOTTA?


Arquitecto contemporáneo nacido en Mendrisio, Suiza. Comenzó su
formación en el año 1953 como dibujante en un estudio de arquitectura en
Lugano. De 1961 a 1964 estudó en el Liceo de Arte de Milán.
En 1964 estudió con Carlo Scarpa y el historiador del arte Giuseppe
Mazzariol en el Instituto Universitario di Architettura de Venecia y en 1965
trabajó con Julián de la Fuente y José Oubrerie en el estudio de Le Corbusier,
que realizaba su último proyecto: el nuevo hospital de Venecia. Al finalizar
sus estudios conoció a Louis Kahn, con quien colaboró en una exposición,
relacionada con el proyecto para el nuevo palacio de Congresos de Venecia.
En 1970, Botta abrió en Lugano su propio estudio. Construyó casas
unifamiliares cuyo diseño está basado en formas geométricas básicas, como
la casa de sillería en Cadenazzo (1971), la torre de viviendas rectangular
con puente pasadizo de Riva San Vitale (1973) y el edificio en forma de
cilindro de Stabio (1982). Botta intentó integrar su diáfana geometría en el
contexto urbano.

ESTILO QUE MANEJA MARIO BOTTA


Mario Botta es dueño de un estilo muy fuerte y geométrico que combina en
sus diseños, contempla el contexto histórico y el entorno natural, así como
las tradiciones locales y el pasado cultural del lugar. Sus proyectos
combinan la limpieza de líneas y las formas abstractas del modernismo,
sumadas a la contemplación de las necesidades humanas.
Es un profesional que fusiona experiencias y emociones parar dar forma a
su conceptualizacion de vida-espacio con formas sencillas. La funcionalidad
predomina en su obra, siendo una de las características principales de todos
sus proyectos, en los que es notoria la estética y la combinación de una
amplia diversidad de materiales
Se caracteriza por el uso de la luz natural, los interiores amplios, las líneas
rectas que contrastan con los materiales. Sus obras incluyen volúmenes
pesados y fachadas en ladrillo y cemento.

CASA STABIO
Año: 1981-1982
Ubicación: Stabio, Ticino, suiza

Generalmente cuando a un arquitecto se le encarga un proyecto, éste


comienza por el estudio del entorno, analiza el emplazamiento y trata de
cubrir las necesidades de su cliente. Mario Botta utiliza un método muy
diferente, en lugar de realizar esa primera investigación, comienza por la
afirmación de una forma geométrica simple. En este caso, la casa realizada
para Liliana y Ovidio Medici, es un cilindro rotundo y macizo de hormigón
gris. Esta desicion no significa que el arquitecto haya ignorado el entorno,
muy por el contrario es una estudiada respuesta a la topografía y a los
edificios de los alrededores. Con una colina como fondo, en el lado oeste,
sobre la que se construyeron numerosos chalés de todas las formas y
estilos, la Casa Rotonda resalta elegantemente.

FORMA
o Cilindro
Una vez escogido el cilindro como forma, quedaba hacerlo habitable, tarea
que resulta complicada pues cualquier añadido echaría a perder la forma
pura. La salida a la que recurrió Botta fue la sustracción, vaciando el espacio
y las aberturas para iluminarlo.
El primer corte divide longitudinalmente el cilindro en dos, abriendo una
ranura en la cubierta y en el segundo piso que permite la entrada de luz
natural. En el lado sur, este corte, deja un amplio ventanal que da luz a la
sala de estar y el comedor del primer piso.

o Iluminación
Una claraboya, que ocupa tres cuartas partes de la longitud del eje norte-
sur, proporciona una corriente constante de la luz natural siguiendo el
movimiento del sol. Las hileras de ventanas desde el piso hasta el techo
ubicadas lo largo de las fachadas norte y sur maximizan la luz y el dejan que
el paisaje entre en el espacio, conectándose con el exterior. Durante las
horas de la tarde, apliques estratégicamente colocados en las paredes y las
lámparas colgantes iluminan la casa.

o Fachada
En algunos aspectos se asemejan más a un templo que a una vivienda
familiar. Las formas geométricas puras que se pueden deducir de la fachada
cilíndrica, se pueden asociar más con un edificio de culto y contemplación
que con una vivienda familiar. Botta relaciona ambos lugares, el hogar es un
espacio de protección y reflexión donde se pueden cultivar los recursos
humanos y sicológicos necesarios para afrontar el mañana. Cuestiona la
histórica forma de las residencias y consecuentemente crea una
heterogeneidad local que desafía las edificaciones de los alrededores.
Las tres plantas de altura en forma cilíndrica con una tapa triangular y
atrevidos cortes cuadrados desafía las típicas viviendas de plantas
rectangulares de que la rodean, levantándose como una torre medieval
moderna. La utilización de un friso romano en la parte superior del cilindro o
el triángulo de cristal que recuerda la parte superior de un clásico frontón,
refuerzan el sutil eclecticismo de la obra.

ESPACIOS
La escalera sirve como un gesto de diseño constante, cortando a través las
cuatro plantas, incluido el sótano, y marcando un tope en la parte superior
como una columna dórica. El eje central por debajo de la claraboya, también
constante, maximiza la luz en todas las áreas. A medida que los usuarios
suben las plantas, van experimentando diferentes niveles de privacidad,
pese a que la organización sigue siendo la misma.
El contraste del muro circular exterior y la organización interior ortogonal
ilustra cómo los dos elementos pueden unirse con éxito. El interior rectilíneo
proporcionar un sentido de direccionalidad y subdivisión. Simultáneamente,
el exterior circular sugiere la unidad de todos los espacios dentro de la
planta, y entre las plantas. Los dos elementos juntos crear un espacio de
piezas dentro de un todo unificado.

o Planta baja
La planta baja está diseñada como un filtro entre el espacio interior y
exterior. Está prácticamente ocupada por un enorme porche abierto y un
garaje que flanquean el vestíbulo de entrada y la caja de escalera. También
hay un pequeño aseo.

o Primera planta
En este primer nivel se desarrollan las actividades durante el día. Esta
planta está generosamente iluminada por un gran ventanal orientado al sur
y por la claraboya del vacío creado en el segundo piso. Aunque se trata de
una planta abierta, los espacios funcionales están bien definidos, tanto por
la luz como por las divisorias.
La sala de estar y el estudio se ubican a un lado de la abertura y el comedor
y la cocina al otro. El comedor y la sala de estar tienen acceso al mismo
balcón que continúa la forma del cilindro.

o Segunda planta
La zona privada de la vivienda se ubica en esta planta y comprende tres
dormitorios a los que se accede desde dos corredores situados a ambos
lados de la abertura del forjado. El dormitorio principal que ocupa todo un
lateral del edificio con baño incorporado, los otros dos en el lado opuesto
con un baño entre ambos. En esta planta la ranura del forjado queda
abierta, creando un vacío que permite observar la planta de abajo desde los
corredores.

ESTRUCTURA Y MATERIALES
El muro de carga realizado en ladrillos, ha sido socavado y fracturado. Para
ayudar a las tensiones difíciles de soportar Botta rasga el mismo con unas
juntas casi imperceptibles ayudándose de ménsulas de hormigón armado y
angulares metálicos que permiten mantener el equilibrio, consiguiendo el
efecto de “tensión”, en un muro que al estar incompleto tiende a cerrarse. A
esto ayuda la composición de muro escalonado invertido que se asoma al
vacío. Las cargas desviadas a los lados del hueco central se reparten por
debajo alcanzando el equilibrio estático y visual.
Los principales materiales utilizados han sido
el cemento, el ladrillo visto en toda la
fachada, el acero y el cristal. Los pisos en el
interior son de madera

ESTILO ARQUITECTONICO
La vivienda unifamiliar pertenece al
racionalismo ya que destaca formalmente un
cilindro, manejando así las formas puras en
las plantas y el diseño.

http://www.arquitexs.com/arquitecto-mario-botta-biografia/
http://www.epdlp.com/arquitecto.php?id=23
https://www.ecured.cu/Mario_Botta

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