Sei sulla pagina 1di 95

“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 1
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

BUENOS AIRES – 23 DE OCTUBRE DE 2018

REUNIÓN DE LA COMISIÓN
BICAMERAL PERMANENTE
DEFENSOR DE LOS
DERECHOS DE NIÑAS, NIÑOS
Y ADOLESCENTES (Ley 26.061)

SALÓN ILLIA – SENADO DE LA NACIÓN


PRESIDENCIA DEL SRA. SENADORA NORMA HAYDEÉ DURANGO

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 2
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

- En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en el Salón


Illia del H. Senado de la Nación, a las 9:50 del martes 23
de octubre de 2018:

Sr. Locutor.- Muy buenos días.


Bienvenidos al Salón Illia del Palacio Legislativo donde, convocados por la
Comisión Bicameral Permanente Defensor de los Derechos de Niñas, Niños y
Adolescentes, se llevará a cabo la instancia de audiencia pública del concurso para
la designación del defensor de los derechos de niñas, niños y adolescentes.
Recordamos al público presente que durante esta audiencia pública no está
permitido manifestarse. Asimismo, informamos que esta jornada será registrada
íntegramente y trasmitida por Senado TV y vía streaming por la página oficial de la
Cámara de Diputados.
Recordamos también que toda intervención, tanto de las legisladoras como
de los postulantes, debe hacerse con micrófono, para que quede correctamente
registrada, tal como lo ordena la ley.
Saludamos a las autoridades de ambas Cámaras que conforman esta
Comisión: a su presidente, la senadora nacional Norma Durango; a su
vicepresidente, la diputada Ana Carla Carrizo; a su secretaria, Verónica Mercado; a
la senadora nacional Pamela Fernanda Verasay; a su vocal, la senadora nacional
Sigrid Elisabeth Kunath; a la diputada Celeste Acerenza; a la diputada Soledad
Carrizo, y a la diputada María Florencia Peñaloza Marianetti.
A continuación, toma la palabra la presidente de esta Comisión, la senadora
nacional Norma Durango.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Buenos días a todas y a todos.
Lo primero que voy a decir con mucho respeto es que nosotros celebramos el
discurso de género, así que soy presidenta y es vicepresidenta. (Risas.)
Sr. Locutor.- Muy bien, senadora.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Perdón por esta digresión.
Buenos días a todos. Estamos contentísimos de haber llegado a esta tercera
etapa. La verdad es que para nosotros es un honor. Ha sido un trabajo difícil, un
trabajo de mucho aprendizaje y todavía nos queda la etapa definitoria y, por lo tanto,
no es la más fácil.
Pero quiero agradecer especialmente a las compañeras legisladoras, porque
creo que es una bicameral inusual a las que se conocen en el Congreso argentino,
dado que es una bicameral que ha puesto el objetivo y el centro de su trabajo en la
designación del defensor o defensora de niñas, niños y adolescentes y ha dejado de
lado –creo, compañeras– las cuestiones partidarias, para centrarnos en la seriedad,
en la pertinencia y en la formación que tiene que tener la persona que vamos a
elegir cuando finalice la etapa.
Por eso, quiero agradecerles especialmente, y también a las asesoras y a los
asesores, que al igual que nosotros han trabajado seriamente de esta manera, ya
que los legisladores transmitimos a nuestros asesores esta impronta. Por lo tanto,
nuevamente, mi agradecimiento.
Quiero también agradecer a los defensores y a las defensoras que nos
acompañan: a la defensora por la provincia de Santa Fe, Analía Colombo, al

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 3
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

defensor Luis Santucho y al defensor Juan Pablo Meaca, que también han hecho
una tarea de orientación, de traspaso de sus experiencias y que para nosotros ha
sido realmente muy valioso. Muchas gracias. Estamos esperando al resto que a lo
mejor llegan.
También quiero agradecer a nuestros custodios, entre comillas, como son las
organizaciones no gubernamentales. UNICEF, Infancia en Deuda y todas las
organizaciones no gubernamentales han estado con el ojo atento para ver cómo
trabajábamos; y nos ha servido. Sinceramente, nosotros queremos transmitir esta
seriedad que nos hemos impuesto y que ellos estuvieran atentos, nos ha ayudado a
lograrlo.
Solamente voy a decir, antes de comenzar, que vamos a hacer pasar en la
Comisión –que estaba en cuarto intermedio y además tiene quórum– una serie de
resoluciones que hemos hecho y que mañana van a ser subidas a la página y que
las hemos considerado en una reunión de Comisión que tuvimos antes de comenzar
esta audiencia.
Antes de terminar, quiero plantear nuestra preocupación en cuanto al
presupuesto que viene para el año que viene, sobre el tema no solamente de la
Comisión Bicameral, sino también de la estructura del defensor de niñas, niños y
adolescentes.
En el presupuesto de este año tenemos un 55 por ciento menos, pero nos
han prometido –¿no es cierto, Carla?– que van a incorporar más presupuesto.
Estamos preocupados porque, como ustedes saben, la bicameral no deja de
funcionar una vez que se elija el defensor o la defensora sino que tiene una serie de
funciones y obligaciones a lo largo de los años que vienen, que es la de control y la
de instalación y difusión de algunos temas que a todas y a todos nos preocupan.
Además, estamos preocupados, porque esa baja del presupuesto a la
formación de la infraestructura del defensor o defensora que salga elegida es muy
peligrosa, porque van a tener que armar su equipo técnico y su oficina. Pero nos lo
han prometido y confiamos en que entre hoy y mañana puedan incorporarle mayor
presupuesto a esta Comisión. Pero quería hacerlo público.
Creo que no me queda nada por decir. Vamos a comenzar, entonces, con el
primer postulante. ¿Lo llamás vos?
Sr. Locutor.- Es el primer postulante.
Los postulantes dispondrán de 15 minutos para realizar la defensa del plan
de trabajo presentado y contestar las eventuales impugnaciones recibidas.
Transcurrido dicho plazo, el postulante deberá responder las preguntas que realicen
las legisladoras integrantes de la Comisión y aquellas consultas que hayan sido
enviadas previamente por la ciudadanía.
Los postulantes serán llamados a realizar su exposición en orden alfabético.
Se les dará aviso faltando un minuto para completar el máximo permitido. Les
solicitamos, por favor, acercarse a este atril al escuchar su nombre.
Llamamos al señor Gustavo Alvarez Pereira.
Sr. Álvarez Pereira.- Señora presidenta, buenos días. Buenos días a todos.
Muchas gracias por este espacio muy esperado por todos.
- Durante las exposiciones los postulantes proyectan una
presentación en PowerPoint.
Sr. Álvarez Pereira.- Comenzar hoy la audiencia tiene que ver, justamente, con los
niños, niñas y adolescentes, aquellos que son titulares… Si me permiten, para poder

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 4
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

mover el powerpoint, si es que se puede… Me toca romper el hielo. (Risas.) Estoy


un poco nervioso.
Decía que los niños, niñas y adolescentes son titulares de derechos reconocidos en
la Constitución Nacional y en aquellos instrumentos internacionales de Derechos
Humanos, varios de estos con jerarquía constitucional, reconocidos en el artículo
75, inciso 22) de nuestra Constitución Nacional.
Sin dudas uno de los instrumentos más importantes es la Convención sobre
los Derechos del Niño, en la que prevalece la mirada de esos niños, niñas y
adolescentes como sujetos de derecho.
Este bloque normativo se completa en la Argentina con la sanción de la ley
26.061. Esta ley, un poco hace… No un poco, sino que directamente modifica y
cambia el paradigma de intervención en la infancia.
De esta doctrina de la situación irregular en la que el niño es considerado un
objeto de protección, en la Argentina se sanciona esta ley y permite ver al niño como
un sujeto de protección: “sujeto de derechos”.
A partir de un análisis efectuado para poder lograr la descripción diagnóstica
de la situación de la infancia en la Argentina, para el Observatorio de la Deuda
Social Argentina de la Universidad Católica –teniendo en cuenta el último informe
elaborado–, la pobreza infantil ascendió al 48,1 por ciento.
Y lo acaba de mencionar la presidenta: el recorte y el ajuste presupuestario
de estas medidas hacen que la población más vulnerable, que son los niños, siga
sufriendo el ajuste. Entonces, será tarea importante del defensor o de la defensora
apuntar a lograr medidas que mejoren esas condiciones de vida de los niños y que
coadyuven al presupuesto para invertir en la infancia.
Actualmente en la Argentina existen 8 millones de niños en situación de
pobreza, privados de algún tipo de necesidad.
El Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el
Crecimiento, el CIPPEC, dice que uno de cada cuatro niños vive en esta situación
de pobreza, es decir, en la Argentina, la infancia está dentro de los límites de la
pobreza. Allí dice: “infantilización de la pobreza”. Esto ha provocado el ajuste –la
pobreza– y ese 48,1 por ciento.
El gobierno ha creado el Plan Nacional de Primera Infancia, a fin de
garantizar el desarrollo integral de niñas y niños en situación de vulnerabilidad de 45
días a 4 años. Ese número alcanza a 214.967 niños, según lo indica el CIPPEC.
Ahora bien, teniendo en cuenta que el estado transfiere una ayuda, es decir
que hay una transferencia monetaria a las familias, de todas formas quiero señalar
que es un esquema inequitativo y fragmentado. Y digo esto, puesto que como se
observa en el esquema, el 29 por ciento corresponde a un subsistema no
contributivo que es la Asignación Universal por Hijo; un 39 por ciento que
corresponde al sistema contributivo, y que son las asignaciones familiares; y un 5
por ciento que corresponde a las deducciones del impuesto a las ganancias,
quedando aproximadamente 1.500.000 niños sin cobertura.
Entonces, la tarea que se pretende es investigar las causas en la falta de
cobertura, en el acceso a la Asignación Universal; derribar las barreras de acceso y
sostenimiento de esas asignaciones universales. ¿Por qué digo barreras de
acceso? Porque todos conocemos en nuestro país la situación de estigmatización
de aquellas familias que no pueden acceder a otro tipo de asignación o de
cobertura.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 5
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

De acuerdo a las estadísticas del Programa “Las Víctimas contra las


Violencias”, existen cuatro situaciones de abuso sexual denunciadas por día y siete
de cada diez corresponden a niñas y adolescentes mujeres, siendo, en su mayoría
de estos agresores, un familiar.
Se denota asimismo que existe una falta de protocolos de cuidados para las
víctimas. No existe capacitación o no está completamente desarrollada por los
equipos profesionales y aquellos agentes judiciales; y mucho menos la perspectiva
de género en estas intervenciones.
Según el Programa Nacional de Salud Integral en las Adolescentes y
UNICEF, existen más de 3.000 niñas y adolescentes menores de 15 años que son
madres. Lo que provoca un riesgo y repercute, específicamente, en su salud física y
emocional, existiendo altos índices de embarazos no planificados, difiriendo
notablemente los porcentajes entre las provincias del Noroeste y del Noreste
argentino. Allí el porcentaje alcanza el 24 por ciento de las adolescentes.
Entonces, la tarea será profundizar las políticas públicas efectivas, orientadas
a la prevención y al abordaje del embarazo, brindando información necesaria a
través de la educación sexual integral, tal como está definida y legislada en el país a
través de la ley 26.150.
Otra fuente consultada es la “Encuesta de actividades de niñas y niños y
adolescentes”, donde se muestra que más de 1.100.000 niños y adolescentes se
encuentran haciendo alguna actividad económica, viéndose forzados a abandonar la
asistencia a la escuela, a su tiempo de juego y a su descanso.
Persiste una elevada tasa de mortalidad infantil, pese al logro de su
disminución, existiendo en algunas provincias falta de servicios adecuados de
atención a la salud debido a situaciones de pobreza: atención prenatal para las
mujeres sin seguro y nutrición inadecuada.
Preocupa la cifra de niñas, niños y adolescentes sin cuidados parentales.
Según el informe de UNICEF, de 2018, esta supera los 9.000 niños y adolescentes
en estas condiciones. A pesar de los intentos de dar respuesta a esta problemática,
aún no se ha logrado la implementación de la ley 27.278, que es la que se propone
propiciar el apoyo necesario y así hacer frente de las necesidades básicas a la hora
del egreso de los niños del dispositivo de cuidado.
El último informe de SENAF de 2012, recopilado por la Red Latinoamericana
de Egresados de Protección: Adolescentes y jóvenes sin cuidados parentales en
América latina, refiere que en la Argentina existen 683 dispositivos de cuidado.
Teniendo en cuenta esto, las situaciones de maltrato, educación, promoción de
derechos, falta de capacitación del personal, se traducen también en situaciones de
vulneración para estos niñas, niños y adolescentes.
De acuerdo con los datos relevados por UNICEF y la SENAF en 2015,
existen más de 3.900 jóvenes infractores y supuestos infractores hasta 17 años,
albergados en un 50 por ciento en establecimientos llamados de privación de
libertad; el 98 por ciento corresponde a varones. También se denota la ausencia de
una ley marco acorde a los estándares internacionales de Derechos Humanos,
debiendo superarse prácticas tutelares y en un tratamiento acorde a la protección
integral.
Por último, de acuerdo a los datos del Ministerio del Desarrollo Social en un
informe presentado este año 2018 ante el Comité de Seguimiento de los Derechos
del Niño, se refiere que 3.000.000 de niños habrían ingresado en contacto con

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 6
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

autoridades sanitarias, de los cuales el 10 por ciento padecía desnutrición, mientras


que el 5 por ciento tendría bajo peso o sobrepeso.
Algunas de las principales problemáticas detectadas: el incremento en el
índice de infantilización de la pobreza; inequidades en el acceso a la asignación
universal; elevado índice de abuso sexual en niños, niñas y adolescentes…
mujeres, perdón, abuso sexual en niñas y adolescentes mujeres; embarazo
adolescente; aumento de trabajo infantil, provocando la deserción escolar; falta de
servicios de atención en salud para reducir la tasa de mortalidad infantil; ampliación
de los índices de adolescentes infractores y supuestos infractores; desnutrición
infantil.
La siguiente diapositiva trata sobre la estructura orgánica de la Defensoría.
Allí podemos visualizar en primera línea o en primer nivel al defensor o defensora
con una sublínea que es el staff de asesoramiento.
En una segunda línea, las defensorías adjuntas. Estas defensorías deben
acompañar y colaborar con el titular de la Defensoría; contribuir
corresponsablemente. Y allí vemos una comunicación estrecha y conjunta con las
direcciones propuestas. Deberán y tendrán a su cargo la supervisión del Sistema
Integral de Protección según lo establecido en el Título III, artículo 48, de la ley
nacional 26.061.
Esta dirección técnica, en una tercera línea o nivel, tendrá a su cargo la
evaluación de programas, planes, políticas, destinadas a niños, niñas y
adolescentes. Estará dispuesta una área psicosociocultural que tendrá la función de
la atención de las situaciones de vulneración de derechos y una área de informática
y monitoreo. La Dirección Legal deberá instruir acción judicial actuando como
abogado del niño. La Dirección de Administración: manejo de presupuesto,
personal, liquidaciones, licitación, patrimonio e inmueble, compras; funciones que
son y corresponden a la Dirección de Administración. Y en la Dirección General: la
Secretaría General, la Mesa de Entradas y el Mantenimiento.
El rol a desempeñar por el defensor o la defensora debe asumir lo siguiente:
promover y asegurar el cumplimiento de la Convención de los Derechos del Niño,
ratificada por el Estado argentino; velar por la protección y la promoción de los
derechos de niños, niñas y adolescentes; asumir un papel significativo frente a
planes, políticas, programas.
Sr. Locutor.- Un minuto, por favor.
Sr. Álvarez Pereira.- Bien.
De las funciones promoción y protección deberá abordar la problemática de la
infancia y adolescencia ,garantizando a las familias el acceso a las transferencias
económicas por parte del Estado; efectuar acuerdos nacionales de difusión sobre el
concepto del interés superior del niño y que este sea observado en todas y cada
una de las medidas adoptadas; realizar convenios de cooperación con los medios
masivos de comunicación, a fin de efectuar campañas de difusión, promoción y
defensa de los derechos de niños, niñas y adolescentes; velar por la protección de
niños, niñas y adolescentes respecto de los derechos consagrados; incoar acciones
de protección frente a niños, niñas y adolescentes sin cuidados parentales,
proponiendo modalidades alternativas; supervisar el funcionamiento del Sistema
Nacional de Protección Integral; acelerar los procesos de desinstitucionalización de
niños, niñas y adolescentes con medidas excepcionales, aumentando los esfuerzos
para la promoción de acogimiento familiar.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 7
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Frente a las situaciones individuales, su actuación será recibir todo tipo de


reclamo en relación a la vulneración, formulado por parte de niños, niñas y
adolescentes, debiendo curso inmediato al requerimiento; y efectuar el
acompañamiento de esas situaciones articulando con niveles de intervención
correspondiente.
Frente a los casos colectivos será el portavoz ante las situaciones y las
instituciones encargadas de la protección. Deberá articular permanentemente con
SENAF… Perdón, el Consejo Federal de Niñez, Adolescencia y Familia,
promoviendo juntos a organizaciones provinciales de niños, niñas y adolescentes la
aplicación de la Convención, la ley nacional y los tratados ratificados.
Sr. Locutor.- Tiempo, por favor.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Bien. Muchas gracias.
Estamos en la etapa de las preguntas. Yo voy a hacer una. Concretamente,
¿cómo piensa usted articular con las provincias argentinas, de ser elegido defensor
nacional, y de qué manera va a trabajar con los poderes ejecutivos para
incentivarlos a que creen el defensor provincial?
Sr. Álvarez Pereira.- Justamente, es una de las partes que me quedó sin exponer,
pero bueno, la articulación permanente con los cinco defensores establecidos y ya
en función. La articulación debe ser… Perdón, presidenta. ¿La pregunta
nuevamente…? O sea, la articulación con los defensores…
Sra. Presidente (Senadora Durango).- ¿Y cómo va a incentivar? ¿Qué trabajo va
a hacer usted para que en las provincias en las que no está elegido el defensor,
realmente, de ser usted elegido como defensor nacional, pueda incentivarlos a que
lo hagan?
Sr. Álvarez Pereira.- La función es establecer acuerdos con las provincias donde no
lo hay, interviniendo y acompañando a los poderes ejecutivos de cada provincia
para la determinación del defensor o defensora en cada una de las provincias.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Bien.
¿Alguna pregunta más?
Sra. Diputada Carrizo, María Soledad.- Hola. Buen día.
Sr. Álvarez Pereira.- Hola. Buen día.
Sra. Diputada Carrizo, María Soledad.- Quisiera saber cómo entiende usted la
actuación del defensor frente a los casos colectivos.
Sr. Álvarez Pereira.- En realidad, acá frente a los casos colectivos es la atención de
situaciones de vulneración; o sea, frente a estas situaciones que expresan los
colectivos de niños, niñas y adolescentes va a actuar como portavoz solamente –es
lo que definí en este momento– de las instituciones encargadas de esa protección
integral. No sé si le respondo...
Sra. Senadora González, Gladys.- Hola. ¿Qué tal?
Sr. Álvarez Pereira.- Hola.
Sra. Senadora González, Gladys.- Estás nervioso. ¡Tranquilo!
Sr. Álvarez Pereira.- Muy nervioso. (Risas.)
Sra. Senadora González, Gladys.- Mi pregunta es: ¿cuál sería su propuesta
específica para implementar un monitoreo, seguimiento del cumplimiento y garantía
de los derechos de los niños, niñas y adolescentes? ¿Cómo lo sistematizaría?
Sr. Álvarez Pereira.- Me quedó pendiente, pero es supervisar a las entidades
públicas y privadas que se dediquen a la atención de niños, niñas y adolescentes,
en cuanto a la supervisión, debiendo denunciar ante las autoridades

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 8
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

correspondientes y generar instancias de supervisión y control en el cumplimiento.


Hay un proyecto de ley presentado este año vinculado con el sistema
informático del acceso de derechos de niñas, niños y adolescentes. Es, justamente,
fomentar y propiciar que ese proyecto de ley sea sancionado. En dicho proyecto se
visualiza un poco la situación del acceso de los derechos, debiendo ser ese sistema
de tipo nacional para el registro de datos.
Frente a la dirección de técnica que yo propuse, hay un sistema o un área de
informática y monitoreo, que también es de acceso a las situaciones de vulneración
y específicamente de acceso a la política pública.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Tiene la palabra la señora senadora
Verasay.
Sra. Senadora Verasay.- Buenos días.
Le quiero hacer dos preguntas puntuales. ¿Cuál es el concepto que tiene de
abogado del niño que crea en una de las estructuras que ha mencionado? Me hace
ruido, justamente, con la característica del defensor del niño.
La segunda es la siguiente. Por lo que yo vi en su organigrama, ¿le está
dando la misma jerarquía a los adjuntos del defensor que al staff?
Sr. Álvarez Pereira.- No. El staff está en un subnivel entre las Defensorías Adjuntas
y el defensor.
Sra. Senadora Verasay.- Entonces, tiene que corregir la puntuación, porque tienen
la misma jerarquía.
Sr. Álvarez Pereira.- Bien.
Respecto del abogado del niño, es necesario actuar frente a situaciones
donde los niños no tienen acceso a la Justicia. Y es allí donde, en la Dirección de
Legales, el cuerpo de abogados que acompañen efectuará esta función.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Tiene la palabra la señora senadora
Kunath.
Sra. Senadora Kunath.- Buenos días. Muchas gracias por participar de esta
elección y quédese tranquilo.
Sobre la ley 26.206, de educación nacional, que establece distintos
contenidos curriculares indispensables y obligatorios en todo el territorio nacional, le
quiero preguntar, a su criterio, cuáles serían estos contenidos indispensables, ¿le
parecen suficientes? ¿Agregaría o modificaría algunos?
Además, usted hizo referencia a la ley 26.150, y también le quiero preguntar
por el rol del funcionario/a que elegimos, ¿qué se podría hacer desde la Defensoría
y bajo qué parámetros de acción?
Sr. Álvarez Pereira.- Básicamente, la ley nacional de educación imparte,
justamente, conocimientos o aspectos curriculares de orden formativo.
En Mendoza, y voy a traerlo a colación, ya se están modificando algunos
planes curriculares teniendo en cuenta, sobre todo, la participación de niños, niñas y
adolescentes y teniendo en cuenta sus capacidades.
Es fundamental articular con el Ministerio de Educación de la Nación, a fin de
poder revisar la currícula e incorporar en ella de manera transversal la perspectiva
de género y la educación intercultural bilingüe, que no aparece, y donde todavía hay
muchas fallas al respecto.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Tiene la palabra la señora diputada
Peñaloza Marianetti.
Sra. Diputada Peñaloza Marianetti.- Buenos días.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 9
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Quería conocer el plan de trabajo para tener un contacto directo con los niños
y así ver las necesidades y reflejar las políticas públicas consecuentes con esas
necesidades.
Sr. Álvarez Pereira.- Sí, en realidad, ese contacto va a estar dado a través de las
áreas psicológicas y sociales que se vayan a crear; y en situaciones que lo
demanden, el defensor o la defensora deberá acompañar esa escucha activa -así le
llamamos en Mendoza- del niño, niña o adolescente en situaciones de vulneración.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muy bien. Muchas gracias. (Aplausos.)
Perdón, quiero decirles que el Senado no es como en la Cámara de
Diputados. Acá no se puede aplaudir. Es parte del Reglamento. Así que, por favor,
no lo hagan, porque luego funcionará el aplausómetro y no...
Sr. Locutor.- Invitamos a realizar su exposición a la señora Roxana Contreras.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- No se encuentra.
Sr. Locutor.- Entonces, la señora Claudia Bernazza.
Sra. Bernazza.- Buenos días a todas y a todos, muy especialmente, a las
senadoras y diputadas que, en forma completa, están participando de este proceso
y que lo vengo disfrutando. Como alguien que quiere mucho al Estado y que se
dedica a la gestión pública desde hace mucho tiempo, siento que es un proceso
muy cuidado por todos ustedes. Les agradezco especialmente.
Voy a presentar el plan de trabajo, tratando de cumplir con los quince minutos
previstos. Pero aclaro que no estará en la presentación todo lo que figura en el
documento subido a la página de la Bicameral.
En primer lugar, quiero comentarles de dónde vengo y por qué me dedico a
estos temas. Formo parte de un colectivo que se generó en los inicios de la
democracia y que se conoció como el Movimiento Nacional de los Chicos del
Pueblo, que firmó su acta constitutiva en 1987. Incluso, unos años antes de la
Convención, tratando de dar respuestas a lo que en su momento se llamaban chicos
de la calle. Nuestros compañeros de Brasil los llamaban los “meninos y meninas de
a rúa”, que dio lugar a una cantidad de organizaciones, movimientos y expresiones
que se fueron encontrando en el territorio y necesitaron expresar lo que pasaba y
derribar ese concepto de chicos de la calle y transformarlo en un concepto más
claro que diera cuenta de que ellos eran nuestros hijos y nuestras hijas.
Por eso, los Chicos del Pueblo y esas convicciones y esa doctrina; y
prácticamente ese programa de acción que se resume en algunos de los lemas que
hoy siguen apareciendo en muchas de nuestras movilizaciones y que forman parte
de ese acervo poético que nos legó Alberto Morlachetti. “Ellos son nuestros hijos”
fue el lema cuando nos encontramos con la CGT y con la CTA. “El hambre es un
crimen” como descripción sintética de lo que creemos y de lo que pasa. Y como
metodología, como programa, principio y método, “Con ternura venceremos”.
Permítanme nombrar a Alberto Morlachetti, a Carlos Cajade, a Juan
Bonengel, a Teresa Roda, a “Pocho” Lepratti, fundadores o participantes de aquel
movimiento, que luego se bifurcó en cientos de caminos en todo el Gran Buenos
Aires y en todo el país y dio lugar a una cantidad de redes, organizaciones y
organizaciones de trabajadores públicos que se dedican a este tema desde este
paradigma.
Esos recorridos a lo largo del tiempo –hago un salto desde 1987 al presente–,
a nivel internacional, dio lugar a la Convención, a la conformación del Comité de
Derechos del Niño, a las reglas de Beijing, a las directrices de Rhiad. Bueno, a toda

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 10
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

la legislación que hoy asumimos como país y lo tenemos como mandato


constitucional.
A nivel nacional, todo el recorrido que hicimos del enfoque de patronato a un
enfoque de protección integral donde, con mucho esfuerzo, modificamos leyes, y
todavía estamos transitando la modificación de culturas y de prácticas, que no es
tan fácil. La ley 26.061 como hito. Normas nacionales y provinciales, que han
receptado a los niños, niñas y adolescentes como sujetos de derecho en nuestro
Código Civil y Comercial unificado. Es decir, cantidad de leyes que toman este
espíritu.
A nivel social y territorial, ese gran recorrido que significan las casas del niño,
los clubes de barrio, los centros juveniles, las ligas de fútbol infantil, las ligas
deportivas, las estrategias socio educativas, tanto convivenciales como no
convivenciales, esas respuestas comunitarias tantas veces invisibilizadas, a tal
punto que estas organizaciones hoy siguen luchando por su reconocimiento, por ver
cómo pueden financiar a sus educadores y toda la tarea que realizan. Porque
muchas veces, si bien cuentan con apoyo estatal, con programas provinciales y
nacionales, no siempre se reconoce la tarea de esos educadores como trabajo.
A nivel estatal, se conformaron cantidad de equipos, técnicos, profesionales,
comprometidos, que recorrieron el territorio, que receptaron lo que estaba
sucediendo y que conformaron a nivel municipal, a nivel provincial, consejos locales
de niñez y adolescencia, que conformaron espacios donde se encontraban y se
siguen encontrando niñas, niños y adolescentes; se encuentran las organizaciones,
se disputa presupuesto, se discute política pública de niñez con una suerte de
cogestión Estado-comunidad que nos parece un círculo virtuoso a fortalecer.
Respecto de lo que se nos pedía en el plan, de la descripción de la situación
y los objetivos, por un tema de síntesis –la situación de la niñez y la adolescencia–,
tomé como parámetro el informe de 2016 de UNICEF. Alguna cosa voy a comentar,
pero a partir de esa situación, que allí se describe, la principal misión, sobre todo en
un organismo que recién se funda, a mi juicio, tiene que ser la visibilización y puesta
en agenda de la niñez y la adolescencia.
Así como hoy los derechos de las mujeres forman parte de la agenda pública,
y se debate el tema en cada casa, en cada almuerzo familiar, así debería pasar con
niños, niñas y adolescentes.
No puede ser que aparezcan en nuestra vida y en nuestra agenda cuando
una niña aparece muerta, asesinada, en una bolsa de residuos. Tienen que estar
mucho antes en nuestras conversaciones. Tienen que estar en la cultura; y no como
pibes chorros o como pibes tomadores de colegios. Tienen que estar en nuestro
proyecto de Nación; tienen que estar en nuestros mandatos constitucionales. Es una
obligación pública de los legisladores, de los que estamos en la gestión pública, de
los que estamos en la sociedad civil, completar el sistema que prevé la ley 26.061 y
el sistema federal acompañante, con leyes acompañantes y con sistemas completos
en cada jurisdicción.
Tendremos que defender sus derechos individuales y colectivos desde la
Defensoría Nacional, pero sobre todo en alianza con las defensorías provinciales.
No pienso tanto en un despliegue institucional de delegaciones del defensor
nacional, sino más bien en una mesa federal, donde este defensor nacional cuenta
con un defensor público por cada jurisdicción; y esto forma parte de su misión, que
estos defensores provinciales y de CABA estén designados.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 11
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Tiene que garantizar y tiene que defender, junto con esta alianza, los
presupuestos públicos. No se pueden ajustar, son presupuestos intangibles y
siempre insuficientes. Y son insuficientes justamente porque los pibes no están en
agenda.
A partir de allí, a partir de esta presencia de los pibes en la cultura y en la
agenda pública, seguramente será más fácil la modificación de prácticas cotidianas,
tanto en ámbitos administrativos como en sede judicial, como en prácticas sociales,
en respuestas sociales y comunitarias que, por historia, por mandato, por
costumbre, muchas veces continúan con prácticas tutelares.
Por supuesto que, en la base de la descripción de la situación, están los
índices de pobreza e indigencia. Los índices son desalentadores. Aparte, son
índices que están creciendo y que muestran la infantilización de la pobreza. A la
feminización de la pobreza, que es un dato más conocido, se le suma que los pibes,
en general, son mucho más pobres que los adultos; y ni hablemos de pibas pobres.
Esto da lugar a una agenda urgente, que tiene una serie de temas, pero
transversalmente esos temas tienen inequidades a tener en cuenta. No se producen
de la misma manera en el territorio, según en qué lugar estamos cómo sucede cada
uno de esos temas. Hay inequidades de género, hay inequidades de origen, de
etnia y por discapacidad.
Todos estos elementos, todas estas dimensiones agravan, muchas veces, los
temas o los problemas en la agenda urgente que allí les presento, que tiene que ver
con temas de salud, con temas de educación, seguridad social y primera infancia,
trabajo infantil, comunicación -los estereotipos de los medios de comunicación-, la
falsa docencia que ejercen generando un sentido común alrededor de los pibes
como pibes siempre disruptivos, siempre en casos de violencia, siempre trayendo
problemas, siempre siendo peligrosos, en vez de estar en peligro.
Una agenda referida a su participación y protagonismo, su protección de
derechos, a su relación con la Justicia y al conflicto con la ley penal; temas de
maltrato, de identidad; temas de protección de derechos; temas con respecto a la
intangibilidad y adecuación de los presupuestos que están destinados a ellos; temas
referidos a la información con la que contamos para tomar decisiones; y temas
referidos a las normas. De estos solo comento dos o tres cosas.
Respecto de la protección de derechos, ser muy clara en el tema de que la
desinstitucionalización no puede echar por tierra con las respuestas comunitarias
convivenciales. Porque esas respuestas muchas veces van en línea con vínculos
que los pibes construyen, que generan función padre y función madre de tipo
colectivo.
Es más, creo que vamos a discutir ese concepto de niños y niñas sin
cuidados parentales, porque en realidad son niñas y niños sin cuidados sociales,
estatales y familiar-comunitarios. Porque a los pibes los cría toda la aldea, dice un
proverbio africano; no solo los padres. Si no, siempre terminamos en que la culpa es
de los padres; y los padres también fueron desprotegidos y, seguramente, también
fueron pibes sin derechos.
En ese sentido, el poner en valor esas respuestas va a hacer que tengamos
mucho cuidado al interpretar el artículo de la ley referido a las medidas de excepción
en la protección de derechos.
Respecto del conflicto con la ley penal, por supuesto, allí también vamos a
tratar de salir de esa trampa que significa discutir la edad de imputabilidad, sobre

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 12
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

todo teniendo en cuenta que aun leyes que han sido elaboradas bajo el paradigma
de protección integral, como es la ley de mi provincia, Buenos Aires, que tiene un
artículo 64 que dice que, en casos gravísimos, el fiscal puede fijar detención de
chicos menores de 16 años. O sea, los pibes hoy tienen bajada la edad de
imputabilidad. Así que la verdad es que allí hay mucho que hacer. Sobre todo hay
que dejar de creer que eso soluciona. Ni qué hablar de que eso no soluciona nada
de los pibes, pero tampoco soluciona el problema de la seguridad de los adultos.
Allí también, respecto de la defensa de derechos de niños, niñas y
adolescentes, por supuesto, trabajar muy intensamente la designación de los
defensores que faltan en las jurisdicciones, e invitar a las provincias muy
activamente a contar con leyes de abogados del niño, para que estos abogados
puedan actuar en los procesos en cada jurisdicción.
Es una experiencia muy interesante la que tenemos en provincia de Buenos
Aires y son los propios abogados los que pueden ayudarnos a pensar, incluso, una
mejora en próximos proyectos de ley, con respecto a lo que ha sido la experiencia
de la ley de abogado del niño en la provincia de Buenos Aires.
Respecto de las normas, por supuesto todavía hay mucho que cambiar, pero
en todo caso, después, con las preguntas, lo charlamos.
Con respecto a la estructura orgánica, tomé tres criterios básicos para
elaborarla, porque me interesaba que ustedes los tuvieran como criterios de base.
En primer lugar, la posibilidad de que las defensorías adjuntas tuvieran roles
diferenciados. Me parecía que eso podía ayudar a organizar la tarea. En segundo
lugar, reconocer formalmente ámbitos participativos, vinculantes y no vinculantes,
donde construir acuerdos, generar acciones y tener un asesoramiento permanente.
Y después, contar con unidades de apoyo propias de cualquier estructura orgánica
o funcional.
Respecto de esa participación y protagonismo, están previstos los foros
nacionales y los regionales de niñas, niños y adolescentes. Ahí se va a poner mucho
la energía en construir por lo menos dos foros nacionales anuales y siete foros
regionales. Serían catorce, porque serían dos por región en las siete regiones del
país. Después se verá cómo se implementa. Por supuesto, siempre en alianza con
las jurisdicciones y charlando con ellos, pero la idea es que haya una metodología
donde los pibes y pibas puedan presentarse, sobre todo cuando están
constituyendo organizaciones de centros de estudiantes, asociaciones fomentadas
por cooperativas, mutuales, casas del niño. Es decir, no tratar tanto los temas o
charlar con ellos a título individual sino también ayudarlos a tener voz organizada y
voz colectiva. De allí van a salir muchísimas propuestas que vamos a entender
vinculantes.
Por otro lado, la constitución de una mesa federal de defensores, donde los
defensores ya designados colaborarán en las negociaciones políticas para la
designación de los defensores faltantes. Y allí están muy en contacto con el Consejo
Federal, por supuesto; un consejo social comunitario de niñez y adolescencia, con
organizaciones, redes y movimientos dedicados al tema, colegios profesionales,
sindicatos, sindicatos de trabajadores estatales y un consejo asesor formado por
organizaciones a nivel nacional, UNICEF, por supuesto la bicameral, que tiene que
ayudar sobre todo en los primeros pasos de esta defensoría.
Las unidades de apoyo son conocidas, planificación, monitoreo y evaluación,
relaciones institucionales, comunicación institucional y sobre todo la técnico-

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 13
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

administrativa por todo el sistema de compras y administración financiera.


Hay un área de información y estadística para generar estadística propia y un
área de formación continua en defensa de derechos.
Allí está el organigrama, pero básicamente es lo que acabo de comentar.
Respecto al presupuesto evito hablar del tema porque ya lo habló la senadora
Norma Durango, lo cual me causó una gran tranquilidad, porque pongo ahí en
comparación con el presupuesto previsto para defensor o defensora del pueblo y los
números hablan.
Sólo digo que en temas de personal estoy previendo que la bicameral nos
ayude a contar con personal en comisión, siempre con procesos de selección;
pensar en un inmueble en préstamo; pensar en no contar con vehículos para que
todo el presupuesto esté direccionado a esta tarea que estamos previendo.
Y por supuesto, tener metas en el presupuesto 2019 muy claras, con
indicadores claros y con productos claros, valores de esos indicadores que están en
el plan de trabajo, para poder ser auditados.
Para criar un niño –este es mi paradigma– hace falta una aldea entera. Y en
nombre de Micaela, Rafael Nahuel, Facundo Ferreira, Sheila e Ismael, necesitamos
contar con un defensor o una defensora del niño. Muchas gracias. (Aplausos.)
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Gracias, Claudia.
¿Alguien quiere hacer una pregunta?
Sra. Diputada Acerenza.- Una pregunta muy concisa.
Sobre todo en tu última mención sobre los indicadores, ¿cuáles creerías vos
que deberían ser los objetivos principales a corto y a mediano plazo, una vez
asumida la defensoría?
Sra. Bernazza.- Una de las metas fundamentales es la constitución de los foros,
porque va a haber que tener mucha inteligencia en el tema de cómo generar
representación en esos foros. Entonces va a haber que pensar muy bien, tener
reuniones previas, pero para mí en el primer año tienen que estar constituidos por lo
menos el primer foro nacional o por lo menos una rueda de foros regionales; tienen
que estar constituidos los consejos. Hay que ser muy creativos para pensar cómo
hacer que sean representativos.
Así que en el primer semestre tendrían que estar armadas estas mesas de
defensores, este foro, estos consejos, el consejo asesor, los consejos participativos.
Porque lo primero que hay que hacer es el plan. Esto es un pre-plan. El plan se
construye con los trabajadores que estén allí, con la bicameral, con los consejos,
con los foros; y ese plan tiene que tener metas ajustadas respecto de estas
primeras. Y tiene que ser un plan muy práctico en el sentido de que se tiene que
entender que en una primera etapa es una etapa de puesta en marcha de la
defensoría. Al mismo tiempo que la agenda pública te va a reclamar soluciones
urgentes. Así que vamos a tener que estar en ese doble juego.
Sra. Senadora Kunath.- Muchas gracias por la exposición.
Nuevamente, en cuanto a la normativa vigente quiero preguntar sobre los
contenidos curriculares en la ley de educación nacional y preguntar también sobre el
Programa Nacional de Educación Sexual Integral y sobre alguna de las cuestiones a
modificar en la agenda parlamentaria, que creo que fue mencionado en la
exposición.
Gracias.
Sra. Bernazza.- Empiezo por el tema de los contenidos curriculares.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 14
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

No lo quise poner, porque me parecía demasiado, pero la verdad que


necesitaríamos tener un consejo o una área de asesoramiento de tipo curricular,
tanto de los contenidos de la educación primaria, secundaria de todo el sistema,
pero también de contenidos universitarios.
O sea, yo creo que hay mucho del tema de niñez y adolescencia que
paradójicamente no aparece en los contenidos, en las formas de tratar el tema. Más
allá de que se trabaja el tema de los derechos del niño, falta mucho en ese sentido y
creo que necesitamos contenidistas que nos ayuden a tener propuestas muy
concretas a realizar, tanto en programas de carreras universitarias, programas de
tecnicaturas, programas secundarios, primarios, de la educación inicial. Así que
quizás el consejo asesor tenga una subcomisión dedicada específicamente a eso.
Hay mucho contenido que revisar, mucha metodología que revisar. Porque
hay una declamación muy fuerte respecto de la escucha de pibes –en estrados
judiciales pasa lo mismo, en ámbitos administrativos también–, falta mucha
metodología acerca de cómo hacer que esa escucha se haga efectiva.
Respecto de la educación sexual y reproductiva, en mi plan fui más extensa
en cuanto a que nosotros estamos con un problema serio de no crear climas ni
escenarios para proyectos adolescentes. Por eso, siete de cada diez embarazos no
son deseados. Por eso los pibes no saben muy bien qué hacer con sus vidas y si no
están ahí cerca referentes sociales, centros juveniles, casas, lugares, programas
públicos, respuestas socio-educativas fomentadas, promovidas y apoyadas por el
Estado, es muy difícil que los pibes solos puedan hacer proyectos de vida. La calle,
muchas veces, sobre todo en el conurbano –que es lo que más conozco– los invita
a proyectos de muerte muy atractivos; muy atractivos. Y muchas veces el goce de la
sexualidad es un goce que salva de una profunda tristeza; y eso no significa que
alguien haya decidido ser madre. Así que hay que estar muy presentes allí y el
programa de educación sexual integral va a ser muy importante.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Tiene la palabra la diputada Carrizo.
Sra. Bernazza.- Perdón, Carla, igual había una tercera cosa que me preguntaron y
me estoy olvidando.
Sra. Senadora Kunath.- En cuanto a que en una parte de la exposición mencionó
el marco legal…
Sra. Bernazza.- Sí, hay mucho que cambiar.
Si vos me preguntás, hay que cambiar más prácticas que leyes; más cultura
que leyes; hay que formar a los agentes judiciales y a los agentes administrativos,
pero igualmente, sobre todo a nivel jurisdiccional, hay muchos cambios que hacer; y
ni qué hablar la deuda que tenemos con el régimen penal juvenil, sobre todo para
poder discutirlo fuera del contexto del problema de la seguridad.
Sra. Diputada Carrizo, Carla.- La verdad, muy buena la exposición. Me gusta un
poco la parte del diseño organizacional, que está muy bien. Me gusta que también
haya un diseño como ambicioso. Así que tiene que ver con tres preguntas que me
parecen como prácticas.
La primera cuestión es esta tensión entre contexto, comunidad y
responsabilidad parental. La reforma del Código Civil habla de responsabilidad
parental, ya no de patria potestad. Hay casos en los que a veces hablar de
comunidad diluye las responsabilidades parentales y los chicos quedan sin quien se
haga cargo. Ejemplo: vacunas. Ahí claramente hay una responsabilidad parental no
comunitaria.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 15
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Tengo tres preguntas. La primera es: si fueras defensora cómo intervendrías


frente a ese caso.
Segunda pregunta. Ahí, al revés de los padres o de la responsabilidad
parental, hay otros casos del contexto argentino donde los adultos vulneran los
derechos. Ejemplo: educación.
Nosotras como legisladoras –no senadoras pero diputadas– también
viajamos y, obviamente, el tema del acceso a la educación como el servicio de las
clases es un mapa que tiene distintas realidades en las provincias, pero en general
hay un denominador común: no se dan las clases que se tienen que dar, el tema de
la puja salarial, que es un tema de los adultos, y está perfecto, pero los chicos a
veces quedan cautivos. Como defensora, ¿qué haces cuando se pasan de la raya
los adultos en las disputas?, ¿garantizas un servicio esencial?, ¿presentas un
amparo en las provincias y exigís que se den las clases para el acceso a la
educación? Segunda pregunta.
Tercera pregunta: el tema también de la educación. Respecto de los
adolescentes, que ha sido un punto clave para la UNICEF, vos decís de garantizar la
universalidad del acceso, pero lo cierto es que la mitad de los adolescentes elije
abandonar la escuela secundaria porque no le parece atractiva para su futuro.
Como defensora, ¿tienes pensado, por ejemplo, pensar la escuela que necesitamos
para que los adolescentes elijan cursarla para su futuro como adultos? O sea,
contenidos.
Son esas tres preguntas, un poquito para ver cómo conjeturo la personalidad
del Defensor una vez que asume.
Sra. Bernazza.- Vamos por la primera. Las familias no están aisladas, viven en
entornos comunitarios que deberán apoyar su desarrollo y deberán apoyarlos
cuando necesiten muletas y necesiten cumplir con esas responsabilidades
parentales. Quienes nos dedicamos a ser familias de acogimiento, tengo que decirlo
porque de ahí viene mi experiencia –no quiero ser autorreferente, pero de ahí viene
mi referencia–, nunca a nuestras casas llegan pibes solos, llegan familias. Y somos
familias ayudando a familias en esa responsabilidad parental, con algunos
problemas con las leyes y las normas. Por ejemplo, la Asignación Universal por Hijo,
a veces no la cobra el pibe porque está en una familia en guarda, y hay que ir
resolviendo esos temas. En realidad, nosotros no estamos siendo familias que
abrimos nuestras casas para recibir pibes porque estamos pensando en la
adopción, estamos pensando en cómo ayudar a esa mamá y a ese papá a ser mejor
mamá y mejor papá, y a que los hermanos estén juntos.
Quiero decir que la responsabilidad parental es una responsabilidad parental
en un escenario familiar comunitario donde tenemos mucha responsabilidad, chicas
y chicos adolescentes que apenas pueden con sus huesos y tienen que construir
familias. Así que allí, todas las respuestas comunitarias vivenciales, vecinas,
vecinos… Hay en los barrios –en mi barrio concretamente– chicos que pasan
mucho tiempo en las casas de sus vecinas y eso no quita responsabilidad parental,
son apoyos. A veces, esa vecina muchas veces dice: “Yo te lo llevo a vacunar”.
¡Cuidado con las familias pensadas como nucleares y aisladas! Creo que a veces,
en los modelos de consumo capitalista, nos llevan a un modelo familiar que no es
conveniente, que no está enlazado, imbricado o enraizado en solidaridades
comunitarias. Eso respecto de lo primero.
Respecto de las clases, yo intimaría tanto a los gobiernos, que no se sientan

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 16
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

a paritarias, como a los sindicatos. Yo los intimaría a cerrar en paritarias los temas
de los derechos de los trabajadores, los temas que se necesitan para garantizar las
clases; sería una parte interesada en que esas clases comiencen, pero, como
buena relación paritaria, mi responsabilidad sería intervenir y dialogar con ambas
partes, sindicatos y Gobierno. Eso respecto de la segunda pregunta.
La tercera pregunta era respecto de los chicos que no ven interesante la
escuela secundaria. ¡Es muy aburrida la escuela secundaria! En ese sentido, lo sigo
mucho y, micrófono que tengo, trato de recomendarlo, hay que leer el poema
pedagógico de Antón Makárenko, el gran pedagogo ruso, como otros pedagogos.
Me refiero a él porque es bastante desconocido, sólo lo enseña acá en la Argentina
Adriana Puiggrós. Makárenko estuvo muy desafiado a pensar la pedagogía de la
Unión Soviética porque, justamente, tenía el problema del normalismo, que venía
del siglo 19. Y pensó cosas fantásticas con los pibes; se equivocó, fue y vino, pero
dejó un legado pedagógico muy grande.
Y valoro muchísimo en mi provincia, por ejemplo, a Suteba y otros sindicatos
porque abren espacios de formación para pensar nuevas formas. Pero pensemos
hoy los aprendizajes, ¿Cómo podes hacer dentro de cuatro paredes cuando los
pibes están estimulados desde sus celulares, desde la calle, desde todos lados?
Con lo cual, es evidente que hay que romper esas paredes áulicas normalistas y en
eso estamos desafiados todas y todos, sobre todo los trabajadores de la educación,
que esto lo saben y muy bien.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Senadora Fernández Sagasti.
Sra. Senadora Fernández Sagasti.- Buenos días, me quedó una parte de su
exposición, básicamente cuando hablaba del tema de la violencia institucional.
Sra. Bernazza.- Y no lo hablé.
Sra. Senadora Fernández Sagasti.- Sí, lo nombró al pasar, pero vengo de una
provincia con una larga tradición y muy oscura con respecto a la violencia
institucional y la verdad que es un tema que realmente me parece muy preocupante
y siempre de actualidad con los pibes y las pibas.
Quisiera saber si después del fallo de la Villa Zavaleta, donde se condenó por
tortura a la fuerza policial… Entendiendo que son casos en los que es muy difícil
hacer la denuncia y también es mucho más difícil que esa denuncia lleve a una
investigación y, en caso de corresponder, a una condena. Incluso el Estado Nacional
ha sido condenado en varias oportunidades por esto, por no poder acceder a la
Justicia en caso de violencia institucional.
Mi pregunta va a cómo tiene que actuar el Defensor en estos casos, si
considera que la actuación tiene que ser individual, ya sea por lo que usted propone
en caso de contar con un abogado del niño en casos individuales colaborar con la
denuncia y con el proceso judicial, o si el defensor o la Defensora del Niño merece
acciones de otro orden. En ese caso, ¿cuáles serían?
Sra. Bernazza.- Agradezco mucho la pregunta porque es un tema que me tiene muy
preocupada y creo que está ascendiendo en el ranking de la agenda urgente.
Fíjense que, con las mismas leyes que tenemos hace tres años, hay un
acrecentamiento de la violencia ejercida, sobre todo por fuerzas de seguridad,
contra niñas, niños y adolescentes y con muertes que se han convertido en
emblemáticas. Y que nos preocupan muchísimo porque ya no sólo estamos
preocupados por la pobreza y la indigencia, sino también por la bala policial.
La verdad que es un tema muy preocupante que va a necesitar tanto de

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 17
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

presentaciones individuales y colectivas como de una fuerte visibilización del tema,


porque pareciera que hay permiso cultural para esta bala policial o violencia
institucional. Hay un permiso cultural, hay un orden del sentido común de meter bala
a los chorros –de los pibes chorros, de que hay que matarlos de chiquitos– que se
instaló. Y eso es cultura, no ley. Me parece que allí el Defensor tiene mucho que
hacer en materia de comunicación.
A mí me llamó mucho la atención que el viernes me llamaran de un programa
de televisión bastante conocido, como postulante, para hablar del caso Sheila. Yo
pensaba: si me llaman como postulante, ¡qué bueno! Porque quiere decir que
cuando esté nombrado el Defensor del Niño lo van a llamar para hablar de estos
temas y va a tener una voz heterodoxa, diferente, que salga de ese sentido común
de bala a los pibes.
Así que sí, me tiene muy preocupada, y creo que hay que ir por las
intervenciones concretas en las causas. Va a haber algunas causas que se
convertirán en emblemáticas porque estarán en la agenda pública y van a tener que
haber presentaciones de tipo colectivo donde va a haber que tener mucha
inteligencia. En esto respondo un poco a una pregunta que se le hizo a mi colega
precedente en el sentido de que va a haber que ser muy creativo en las
presentaciones colectivas. Creo que este tema va a merecer algún tipo de
presentación de este tipo.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- La última pregunta y cortita. Leyendo los
planes de trabajo, en el tuyo vi que hablabas de desterrar la práctica de la
devolución en la adopción de niños, niñas y adolescentes. ¿Cómo piensas que se
puede implementar eso?
Sra. Bernazza.- El instituto de adopción va a tener que recorrer la misma
transformación cultural que todos nosotros; mientras la adopción sea un instituto
para satisfacción de madres, de mujeres o de varones que quieren realizarse en un
niño objeto, estamos en problemas con la adopción. Y me parece que no hay un
cuidado particular en el proceso de adopción, para tener en cuenta que el que
necesita ser adoptado es el pibe. Y esto no viene a resolver ninguna frustración del
adulto, o no debería ser eso. Incluso hay hasta algo muy desagradable respecto de
que es mejor que ese objeto sea rubio, de ojos celestes, pequeño y que no tenga
ninguna enfermedad.
En ese contexto lo que ha ido sucediendo en estos procesos –muy viciados–
de adopción, sobre todo en mi provincia, con serios problemas, es que se ha llegado
a la determinación de adoptabilidad sin tener en cuenta los vínculos previos de los
pibes, ni su voz. Nos encontramos con una práctica de adultos –nosotros la
conocemos mucho en la provincia de Buenos Aires– que devuelven a los niños.
Incluso nos encontramos con la devolución de uno o dos de los hermanitos.
Incluso, amigas mías; la voy a nombrar… No, no la voy a nombrar porque si
lo hiciera descubriría la identidad del niño. En un caso que conozco particularmente,
a veces son hermanos de estas familias adoptantes –cuñados o tíos de estos
niños– quienes dicen: “no, dejá que se críe conmigo”. Es terrible. Pero lo que tiene
que resolverse es el instituto de adopción pasa salir de ese paradigma
patrimonialista.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Creí que habíamos terminado, pero la
diputada Mercado me pide la palabra, así que se la doy.
Sra. Diputada Mercado.- Voy a ser muy breve. Simplemente quiero consultarle

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 18
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

algo.
Usted mencionaba la necesidad de fortalecer la alianza Estado-comunidad.
¿Cuáles podrían ser las acciones concretas desde la Defensoría para lograr este
objetivo?
Sra. Bernazza.- Cumplir con la agenda nacional legislativa de las organizaciones
comunitarias. En 2014 más de 1.600 de ellas presentaron seis proyectos de ley para
resolver y fortalecer sus organizaciones, referidos a eximición de impuestos, a
regularización de las relaciones laborales de sus educadores populares o
comunitarios, a resolver el tema de la propiedad social de los bienes dedicados a la
tarea con niñez y adolescencia y a la posibilidad de que en los programas y
subsidios públicos se prevea que el Estado subsidie la seguridad social de esos
trabajadores.
Son todos proyectos de ley que ya están presentados en esta casa. Muchos
perdieron vigencia. El único que salió es el del régimen tarifario específico para
organizaciones sociales, que ya es ley. Y cuesta muchísimo lograr que las
organizaciones sociales accedan a ese régimen tarifario. (Aplausos.)
Locutor.- Por favor, reiteramos no emitir ningún tipo de manifestación.
Muchísimas gracias.
A continuación presenta su exposición la señora Roxana Contreras.
Sra. Contreras.- Buenos días.
Mi nombre es Roxana Contreras. Soy una orgullosa promotora de derechos
del niño y mi plan de trabajo se basa en datos recabados de UNICEF, de CIPES, del
Comité de Derechos del Niño y de mi experiencia adquirida junto a la Fundación
CAINAF trabajando en zonas de vulnerabilidad social y alta montaña en la provincia
de Tucumán.
Voy a contar la historia que da sentido a mi plan de trabajo.
Mercedes es una niña de la comunidad indígena que cuenta con 16 años de
edad, ya adolescente. Y en la labor que desarrollamos junto a la Fundación CAINAF
en alta montaña pude conocerla y saber de su historia de dolor y sacrificio.
Ella me cuenta que camina 12 kilómetros diarios desde Casas Viejas, que es
una localidad ubicada en El Mollar, hasta Tafí del Valle. Esto equivale a dos horas
diarias, en el invierno con temperaturas que superan los 3 grados bajo cero.
Mercedes se sienta en la avenida principal de Tafí del Valle y espera que
suban los turistas y le compren las muñecas artesanales que fabrica junto a su
mamá para con ese dinero poder tener un plato de comida diaria.
Tafí del Valle es una belleza natural, pero los lugareños –entre ellos, niños,
niñas y adolescentes– no cuentan con red de agua potable.
La historia de Mercedes me moviliza en lo más profundo de mi corazón y me
hace pensar cómo puedo contribuir para disminuir el dolor de muchos niños, niñas y
adolescentes de mi Argentina.
Pensar en la figura del defensor de niños, niñas y adolescentes presenta
grandes desafíos. Está destinado a disminuir las brechas de iniquidad social, de
desigualdad económica.
Quiero hacer una aclaración. En mi trabajo, por un error de tipeo se consignó
4 millones de niños cuando en realidad debió decir 14 millones.
El 46 por ciento de esos niños, de entre 0 y 17 años, se encuentran bajo el
nivel de la pobreza. Son 6 millones, de esos 14 millones, los que viven en una
“infantilización” de la pobreza.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 19
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

También presentan desigualdades regionales. Las provincias con menores


indicadores de pobreza respecto de niños, niñas y adolescentes son Santa Cruz y
Buenos Aires.
Durante mucho tiempo el niño fue considerado objeto de protección sin voz,
sin autonomía progresiva. Después de un largo camino recorrido llegamos a la
Convención de los Derechos del Niño. Pero todavía nos quedan asignaturas
pendientes que es prioritario que podamos superar.
En este marco se llegó a un diagnóstico sintetizado del plan de trabajo del
cual se destacan una situación de disparidad en la implementación de los servicios
locales; una persistencia en la discriminación en cuanto a origen indígena, motivos
de discapacidad y estado socioeconómico; deficiencias en cuanto al sistema penal
juvenil y crecimiento en el número de niños, niñas y adolescentes
institucionalizados, siendo las principales causas la violencia y el maltrato.
En cuanto a derechos universales, en el área de educación también existen
brechas, sobre todo en las zonas del NOA y del NEA, donde existe la mayor
proporción de analfabetismo y hogares con necesidades básicas insatisfechas.
Si bien la asistencia en cuanto a niños y niñas es prácticamente universal en
la primaria, no sucede lo mismo con el nivel inicial y el secundario. De acuerdo a
datos de la Fundación Cimientos, 49 chicos por hora abandonan la secundaria y 1
de cada 2 alumnos no accede a los aprendizajes que son indispensables para una
inserción social plena.
En materia de salud también se pudieron constatar dificultades en el acceso
al sistema integral, siendo sus causas la mortalidad materno-infantil, el suicidio
adolescente y el consumo de sustancias psicoactivas. Pero en adolescentes los
principales obstáculos tienen que ver con brechas de género y equidad, barreras
culturales, baja participación, baja demanda de servicios de calidad y falta de
enfoques intersectoriales.
En las provincias generalmente llegan tráileres que son dispuestos desde
Nación para cubrir algunas necesidades en cuestiones de salud. El tráiler para la
mujer, el tráiler para la vacunación, el tráiler odontológico. Sería importante poder
implementar un tráiler de salud para adolescentes.
En cuanto a la estructura orgánica, el objetivo es el cumplimiento de la misión
institucional: velar por la protección de niños, niñas y adolescentes. Promoción y
protección.
En el organigrama propuesto se ubica a los adjuntos en el rol de
colaboradores directos, responsables de la segunda línea de mando. La propuesta
es que los adjuntos puedan actuar cumpliendo las funciones que el defensor o la
defensora considere que son necesarias para acompañar como auxiliares suyos y
que puedan reemplazarlo o sustituirlo en ausencia o inhabilitación temporaria.
También se ubica al secretario como un puente entre las áreas temáticas y las de
apoyo.
Cada adjunto, a su vez, actúa como referente de cada una de las áreas. Por
una cuestión de que las áreas temáticas y las de apoyo exceden el tercer nivel que
estaba propuesto por el plan de trabajo, no se los menciona. Pero sí he propuesto
un organigrama donde se contempla –y ustedes pueden visualizarlo– la
implementación del plan estratégico.
Esta propuesta de estructura orgánica no está pensada en función de las
necesidades personales de un defensor o una defensora, sino de una estructura

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 20
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

que pueda sostenerse por sí misma y que cuente con un apoyo profesional, técnico
y administrativo idóneo para poder así dar respuestas y resultados de calidad y en el
menor tiempo posible, porque eso es lo que necesitan niños, niñas y adolescentes.
En cuanto a la promoción y la protección de derechos, la propuesta es
visibilizar cuáles son las problemáticas teniendo en cuenta las últimas
observaciones del Comité de Derechos del Niño, especialmente en los casos
referentes a niños, niñas y adolescentes indígenas, discapacitados, o
pertenecientes a minorías, o que viven bajo el umbral de la pobreza, difundiendo
con información accesible acerca de proyectos y programas que sean de particular
interés de niños, niñas y adolescentes: educación sexual, bullying, violencia,
identidad de género, suicidio adolescente, consumo problemático de sustancias.
En la actuación, frente a casos individuales, se han propuesto 5 puntos
sustanciales: atención, escucha, seguimiento, asesoramiento y derivación del caso.
A partir de estos puntos es que se abre el abanico de posibilidades de intervención.
Así también, en cuanto a casos colectivos, la premisa es la adopción de medidas
positivas, recomendaciones y remedios judiciales, aquellos que sean más idóneos y
por la vía más expedita.
En cuanto al federalismo, con otros organismos similares o complementarios
se propone una articulación interinstitucional, un Master Plan 2020-2025 que sea la
continuidad del plan nacional de acción en una instancia superadora.
En lo relativo a la coordinación con otros defensores, se propone generar un
programa de acompañamiento que nosotros, desde la Fundación CAINAF, venimos
acompañando desde hace tiempo. Generamos jornadas propias junto a la Facultad
de Derecho de la Universidad Nacional de Tucumán. También fuimos invitados
como expositores en las jornadas que se hicieron acerca del defensor del niño en
las provincias de Salta y Jujuy. Actualmente estamos invitados también a participar
de jornadas en la promoción de derechos y sobre el defensor del niño en Río
Grande, Tierra del Fuego, y en Río Gallegos, Santa Cruz.
Con relación a la participación de la agenda legislativa, nos proponemos
impulsar reformas legislativas que son importantes y prioritarias. La regulación
también de prácticas nocivas y la adecuación de una normativa para las empresas
que se dedican a hacer responsabilidad social empresaria y que en muchos casos
no cuentan con un protocolo acerca de cómo actuar respecto de aquellas temáticas
que tienen que ver con niños, niñas y adolescentes.
En lo concerniente a la participación con organizaciones de la sociedad civil,
se espera contar con un equipo fruto de la coalición de ONG para aportar ideas,
propuestas, vigilar el cumplimiento de la Convención de los Derechos del Niño y
generar un gran voluntariado nacional e internacional con espacios dedicados a la
infancia y a la adolescencia.
Respecto del monitoreo y la supervisión de datos, se propone implementar un
sistema que unifique criterios y amplíe la capacidad de reunir información sobre
niños, niñas y adolescentes, impulsando la apertura de un observatorio de infancias
y juventudes, dependiente de la Defensoría, y un sistema administrativo de
seguimiento de intervenciones y casos que permita relevar datos específicos.
En cuanto al Consejo Consultivo de Niños, Niñas y Adolescentes o a la
participación de los niños, nosotros lo que proponemos es la creación de un
Consejo Consultivo Federal. En general nosotros esperamos que se cierre el círculo
virtuoso, que el niño crezca, se desarrolle, se lo proteja y participe. Como dice el

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 21
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

delegado de UNICEF de España: el Consejo Consultivo representa la esperanza de


garantizar el derecho a la participación, a que los niños opinen en todas las
cuestiones que les interesan. El derecho a la participación es una de las garantías
más firmes para el ejercicio del resto de los derechos.
Nosotros hicimos varias jornadas de participación de niños, niñas y
adolescentes donde estuvo Nancy Higa, que es la representante de los
adolescentes argentinos ante el Instituto Interamericano del Niño de los
Adolescentes Argentinos. Ella es de Cañuelas y pertenece a una fundación que se
llama Pibes. En las jornadas que nosotros hacemos no solamente intervienen los
adultos sino que también se les da mucha participación a niños, niñas y
adolescentes.
Nos ha parecido importante incorporar el derecho a la identidad como un ítem
aparte. Porque el documento nacional de identidad es el que nos permite saber
quiénes somos; cuándo nacimos, dónde, en qué familia y cuál es nuestro nombre.
Expresa todo eso y, además, nos abre el acceso a todos los otros derechos como
ser la escolaridad, la atención sanitaria y la seguridad social.
Imagínense ustedes un día sin el documento de identidad. Hay niños que
transitan toda una vida y no tener el documento de identidad no les permite avanzar.
El defensor de niños, niñas y adolescentes debe velar por la protección y la
promoción de los derechos de todos y cada uno de los niños, niñas y adolescentes
de la Argentina.
Por todo lo manifestado, quiero ser la defensora del niño. Esta es mi causa
para ayudar a construir una nueva infancia y una nueva adolescencia sin brechas,
sin desigualdades, donde cada niño y cada adolescente en la Argentina puedan
soñar y ser amados y felices.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Bueno, abrimos la instancia de preguntas.
Voy a empezar yo.
No sé si lo dijo y yo estaba distraída o qué pasó, pero me interesa saber cuál
es su consideración con respecto al defensor o la defensora y su relación con el
Poder Ejecutivo.
Sra. Contreras.- Mi raíz es abogada mediadora. Entonces, desde mi condición de
mediadora siempre voy a bregar en primer lugar por el diálogo. Y desde el diálogo,
tratar de resolver todas aquellas cuestiones que vulneren los derechos del niño y
lograr instancias superadoras.
Sra. Senadora Fernández Sagasti.- Bienvenida.
Hay un tema que me parece que es uno de los más alarmantes en cuanto a
la salud pública en la República Argentina, que no es de ahora sino que viene desde
hace varios años. Me refiero al consumo problemático en niños, niñas y
adolescentes, sobre todo estos últimos.
La verdad es que tanto los Estados provinciales como el nacional no dan una
respuesta adecuada, o no alcanza, en cuanto a instituciones. A mi humilde modo de
ver, no han dado una respuesta adecuada a las familias, a los niños, a las niñas y a
los adolescentes que necesitan de ámbitos específicos donde tratar de recuperarse.
Incluso, hay temas con obras sociales porque no quieren cubrir estos casos.
Por ejemplo, en la provincia de Mendoza –creo que en la mayoría de las
provincias debe ser así– no hay un lugar específico gratuito donde asistan a los
adolescentes y las adolescentes. Incluso los mandan a lugares con problemáticas
psiquiátricas y no de consumo. Y además, está adentro de esas instituciones –ya

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 22
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

sean públicas o privadas– el tema de la violencia institucional que es recurrente.


Hay un caso de un mendocino en la provincia de Buenos Aires. Una jueza lo mandó
a que se tratara acá porque el pibe tenía diabetes. Hablo de Saulo Rojas. Ya
empezó el juicio. La cuestión es que la jueza lo mandó acá. Apareció muerto el pibe.
Perdón por la contextualización, pero lo que quiero saber es qué entiende
que debiera hacer el defensor o la defensora de la niñez en estos casos y qué tipo
de acciones realizaría no en el tema de salud en general, sino en el de consumo
problemático particularmente y la violencia institucional a la que eso está llevando.
Sra. Contreras.- Lo que usted plantea es cierto, es una problemática que no
solamente se da en Mendoza sino también en todas las provincias a lo largo y a lo
ancho del país.
En Tucumán tampoco existe un lugar donde los niños con problemas de
sustancias tóxicas puedan ser alojados. Es lo que plantean justamente las
instituciones. Del Poder Judicial les envían un oficio de que el niño o el adolescente
tiene que ser internado y ellos no tienen opciones. Y en un lugar como el Obarrio,
que es en San Miguel de Tucumán, tiene que ser hospitalizado, internado; es un
lugar que no está adecuado para niños ni para adolescentes.
Sería importante que el defensor o la defensora pueda recomendar y
presentar en la agenda legislativa del Congreso una propuesta concreta para que se
creen, dentro del sistema de salud, aquellos establecimientos que puedan asistir a
niños, niñas y adolescentes con problemas de sustancias.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muchas gracias.
Mientras esperamos a la siguiente postulante quiero reconocer la presencia
de Nelly Minyersky que está allí sentadita, acompañándonos con su presencia.
(Aplausos.) Y este aplauso sí que vale la pena.
Muchas gracias, Nelly. Siempre su presencia nos da fortaleza.
Locutor.- Realiza su exposición la señora Marisa Graham.
Sra. Graham.- Buenos días a todas, señoras de la comisión bicameral, y a todos.
No voy a tener problemas con el PowerPoint porque no traje. Así que me voy
a evitar una complicación.
Quiero decirles que mi plan de trabajo para este concurso de oposición y
antecedentes parte del reconocimiento de la existencia en la República Argentina, a
lo ancho y a lo largo de todo nuestro país, de multiplicidad de organismos públicos y
privados –fundamentalmente públicos– que se dedican a la promoción y la
protección de derechos de niños, niñas y adolescentes. Y también quiero decirles
que estoy convencida de que la clave para el éxito de esta nueva institución es
evitar la superposición, el solapamiento y, mucho más, la sustitución de tareas que
ya vienen cumpliendo otros organismos extendidamente en la República, con
brechas –algunos mejor y otros peor–, con las diferencias que tenemos en nuestro
territorio, en las jurisdicciones –también en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires– e
incluso en el interior de las propias jurisdicciones.
Pero a pesar de ese desarrollo, tal vez un poco desigual, quiero hacer un
reconocimiento a esa institucionalidad que se vino generando a partir de la
recuperación de la democracia y, como hito fundamental, como dijeron otros
compañeros y otras compañeras que me precedieron en el uso de la palabra, con la
sanción de la ley 26.061.
Con relación al diagnóstico, por suerte me relevo de hacer referencia a una
cantidad de cosas que comparto con los anteriores exponentes, pero quiero resaltar

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 23
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

una cuestión particular que es el tema de la pobreza. Ha aumentado en la República


Argentina en estos últimos tiempos y así nos lo marcan todos los recolectores y las
organizaciones de datos que tenemos dispersas en todo el país. Desde UNICEF,
pasando por el barómetro social, por el grupo de la Gino Germani de las
universidades, hasta los propios relevamientos que hizo la Secretaría de Niñez,
Adolescencia y Familia nos hablan de un aumento de la pobreza. Y
fundamentalmente un tema que me preocupa muchísimo, que es el del hambre.
Uno de cada 10 niños vive en un hogar con deficiencia en el acceso a la
alimentación. Me parece que en un lugar como la República Argentina no podemos
permitirnos tener este tipo de indicadores y es algo a lo cual tenemos que prestar
muchísima atención.
Después, paso una revista rápida. El tema de la vivienda, del déficit
habitacional, sobre todo en las grandes ciudades. El tema de los espacios de
cuidado, que todavía registramos déficit de cobertura, de financiamiento y de
calidad. El tema de la educación del cual se habló mucho aquí.
Hace muchísimos años que venimos bregando para que todos los niños que
terminan la primaria ingresen en el secundario y seguimos registrando deserción en
el pasaje de un ciclo al otro. Y después, hay otro bajón en la matrícula en el pasaje
de segundo año a tercero del secundario y creo que tiene mucho que ver con la
currícula. Y debiéramos ver cómo hacer para tener una escuela inclusiva desde el
punto de los contenidos y no que sea expulsiva de las chicas y los chicos.
El tema de la violencia y lo que di en llamar hace muchos años la crueldad
contra los niños, donde coloco los temas de trata, explotación sexual, explotación
laboral, la compra de niños con fines de adopción, que son muchos de aquellos que
luego –entre comillas– se devuelven. Nos gusta decir que no se devuelven los niños
adoptados, sino que se abandonan. Esta es otra problemática.
Dos temas más. Uno que habíamos dejado en el olvido, me parece, que es el
tema de los niños, niñas y adolescentes con discapacidad. No hemos articulado lo
suficiente entre las leyes de protección, incluida la 26.061 y las provinciales, y las
áreas que se dedican a las personas con discapacidad, con las especificidades que
tienen niños, niñas y adolescentes con discapacidad. Es una deuda.
Y el último, la madre de todas las batallas: el tema presupuestario. La
reducción del presupuesto no solo tiene que ver con la vulneración del artículo 4° de
la Convención sobre los Derechos del Niño, sino que también vamos en contra de la
observación número 5 del Comité. Es bueno tenerlo a la vista, porque el
presupuesto también es un derecho de niños, niñas y adolescentes y como derecho
humano nunca puede ser regresivo. Y no solo no podemos retroceder, no podemos
disminuir del PBI los gastos dedicados a la niñez, adolescencia y familia, sino que
también tenemos que fijarnos cuáles son los nudos críticos donde hay que asignar
más y mejores recursos.
En relación a la estructura que pensé para esta nueva institución, que tiene la
ventaja y la desventaja de empezar de cero, es una institución robusta, pero no
megalómana. No pienso en una estructura muy grande. Pienso en una estructura de
un defensor o una defensora asentado en dos pilares que tienen que ser sus dos
defensores adjuntos, y con un defensor que además de cumplir con las funciones
del artículo 55, los deberes del 64 y el monitoreo del 48 de la 26.061, tiene que, por
lo menos en esta primera etapa, garantizar un estándar mínimo de regulación y
efectivización de derechos de niñas, niños y adolescentes a los fines de que a nivel

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 24
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

nacional, teniendo en cuenta siempre las particularidades y la organización federal


de nuestro país, podamos contar con un piso mínimo de principios, garantías y
derechos acordes a las exigencias convencionales.
Pienso que este defensor dependa directamente de un área más operativa,
que me parece que pondría a cargo de un agente gubernamental del cual
dependería el presupuesto, la auditoría, los recursos humanos, legal y técnica,
etcétera; y otra vez estos dos adjuntos, siempre con la estructura de paridad y de
género, una y uno también en la estructura de la Defensoría. He pensado en dos
características esenciales de una y otra Defensoría. La primera, que di en llamar de
relaciones institucionales, me parece que es la que tiende la mano para los
acuerdos y consensos con los poderes Ejecutivo, Legislativo, Judicial, con el
Ministerio Público y también con las organizaciones de la sociedad civil, donde
incluyo a las organizaciones profesionales, a los sindicatos y a otro tipo de
organizaciones de la comunidad. No solamente las organizaciones que trabajan
particularmente con derechos de niñas, niños y adolescentes. Esta adjuntía también
se encargaría de las relaciones con los medios de comunicación, y no solo con los
medios de comunicación tradicionales, sino con todo lo que tiene que ver con redes
y con estas nuevas formas que tenemos de comunicación y de información.
A la segunda adjuntía le asigné tareas más de supervisión, monitoreo y
control. Es decir que no sea la misma persona que consensua aquella que
supervisa y monitorea los servicios, las políticas públicas y la legislación. Además de
esa función, estas tareas de control y supervisión, también va a receptar las
denuncias que lleguen a la Defensoría. Para eso, además, va a tener que diseñar
un espacio amigable y accesible para la atención, la escucha y el asesoramiento de
niñas, niños y adolescentes y sus familias que, seguramente, van a concurrir a
denunciar o a pretender que sean debidamente escuchados. Y para eso pensé en el
armado de un equipo interdisciplinario que esté presente en ese espacio.
Me parece que también esta adjuntía tiene que encargarse de dictaminar
sobre la intervención o no del defensor en casos individuales o casos colectivos, y
en el caso afirmativo cuáles serían los motivos de la intervención y la modalidad de
la intervención.
En relación a la pregunta que nos hicieron en el formulario sobre cuál sería la
intervención del defensor en determinados ítems, yo tomé algunos por una razón de
tiempo. Después veremos si en las preguntas salen los otros que puedan
interesarme. En el tema de promoción creo lo que ya se ha dicho aquí, que
necesitamos, en una sociedad que todavía es marcadamente patriarcal y
adultocéntrica, visibilizar los derechos de las niñas, niños y adolescentes. Se habla
de problemas, se habla de problemática y, en realidad, atrás de cada problema o
cada problemática hay un derecho vulnerado, hay un derecho amenazado, hay un
derecho violado y me parece que así debemos hacer que lo viva la comunidad, la
sociedad en general. Me parece que tenemos que promover lo que dimos en llamar
la nueva condición jurídica de los niños, niñas y adolescentes que parte de la
Opinión Consultiva N° 17 y que recogimos en gran cantidad de leyes en la
República Argentina.
Las tareas de protección son de otro orden. Me parece que en esta primera
etapa amerita hacer, primero, una revisión de la legislación que todavía tenemos
violatoria de los derechos de niños, niñas y adolescentes. No estoy hablando de
leyes nacionales en las que, salvo la 22.278, tenemos un estándar legislativo de

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 25
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

ampliación y de reconocimiento de derechos tan alto como el de la Unión Europea.


El hiato entre lo que dicen las normas y la realidad es otra cuestión, pero tenemos
normas realmente a la altura de las circunstancias. Estoy hablando de normas de
otro rango que están por debajo de las normas nacionales. Tenemos resoluciones,
decretos, protocolos, manuales de procedimientos que son violatorios de los
derechos de los niños y me parece que ameritan una revisión a los fines de
proponer su reforma, su modificación o su derogación.
Me parece que la otra tarea es la identificación de la ausencia de políticas
públicas o la detección de políticas públicas deficientes para cumplir con
determinados cometidos, y allí articular con los poderes ejecutivos para promover y
consensuar el diseño de estas políticas o el fortalecimiento de esas políticas
deficitarias. Y, por último, la identificación de prácticas violatorias de los derechos de
los niños. Podemos tener las leyes, podemos tener las políticas públicas, pero,
como decía bien Claudia Bernazza, todavía tenemos un tema cultural que hay que
resolver y que está asociado a la violencia institucional y que está asociado a la
violencia hacia los niños, que es no reconocerles el lugar que ocupan como nuevo
sujeto colectivo.
Me parece que la actuación frente a casos individuales, según mi criterio, es
siempre por excepción, es excepcional. Frente a casos especial y particularmente
graves, emblemáticos, de especial vulnerabilidad de derechos de niñas, niños y
adolescentes, y siempre frente al defecto o ausencia de una defensa técnica
eficiente, ahí vamos a tener que tener un necesario diálogo permanente con los
organismos pares y los organismos de protección de las provincias en el respeto de
nuestra estructura federal de gobierno.
En relación a las acciones de incidencia colectiva, que es muy interesante y
es lo que plantean en general todos los organismos o comisionados de derechos
humanos en general, me parece que para encararlos deberíamos abordar la
elaboración de lo que di en llamar “litigios estratégicos”. Creo que eso debería ser
consensuado con los defensores provinciales y las defensoras que ya existen en las
cinco provincias de nuestro país, más las que se vayan sumando. Esta agenda de
litigios estratégicos la imagino muy rica y muy potente.
En relación al federalismo veo dos vertientes: una vertiente que es tener
articulación, además de con la bicameral –sobre todo en la primera etapa de la
institución nueva que se va a ir armando y que se va a ir desarrollando en el
tiempo–, también con un excelente espejo donde mirarnos, que me parece que es el
Consejo Federal. Creo que por la experiencia que he transitado, junto con muchas y
muchos de los que están aquí presentes, el Consejo Federal es la mejor institución
que ha creado la 26.061 y la que ha sido más productiva en beneficios de derechos
de niñas, niños y adolescentes para acortar las brechas que tenemos entre las
regiones, las provincias y también la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Locutor.- Un minuto, por favor.
Sra. Graham.-Sí.
Para terminar, me parece que el defensor nacional o la defensora nacional
tienen que incorporarse al diálogo y a los encuentros que ya vienen teniendo los
defensores provinciales. Simplemente lo que agregaría o propondría es generar un
espacio federal, un espacio estable y horizontal, y que sea este defensor nacional,
acompañado horizontalmente con los defensores o las defensoras provinciales, el
que abogue y el que se presente frente a las autoridades, incluso gobernadores y

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 26
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

gobernadoras de otras provincias, para promover la designación en cada uno de los


territorios de instituciones análogas a la que hoy estamos convocados.
Para volver al principio, me parece que el desafío es una articulación
virtuosa; es no superponernos y no pretender sustituir nada. Se trata de fortalecer y
de acompañar; se trata de procesos de construcción colectiva que nos pongan a la
altura de las circunstancias y frente a los viejos y a los nuevos desafíos que los
derechos de niños, niñas y adolescentes aún nos demandan.
Gracias.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Gracias.
Tiene la palabra la señora senadora Gladys González.
Sra. Senadora González, Gladys.- Gracias por la exposición.
Sra. Graham.- Gracias a ustedes.
Sra. Senadora González, Gladys.- Tres preguntas: en primer lugar, en el Congreso
se han presentado algunas iniciativas de adopción prenatal, entonces, quisiera
saber su opinión sobre el tema.
Luego, quisiera saber qué haría usted si fuese defensora frente a un caso
específico de un juez que, con la argumentación de SAP, revincula a un niño
abusado con el padre que es denunciado.
Y, tercero, los títulos –nada más– de las primeras tres medidas y acciones
que usted tomaría para poner a la infancia en un lugar de mayor preponderancia en
la agenda pública.
Sra. Graham.- Interesantes las tres.
En cuanto a la adopción prenatal, me parece muy arriesgada, muy riesgosa.
Muchos de los que estamos aquí, muchas de las que estamos aquí, venimos
luchando desde hace muchísimos años –y cuando digo muchos, lamentablemente,
son muchísimos años– contra lo que nosotros llamamos la guarda puesta, es decir,
la guarda de hecho.
Lamentablemente, por la estructura de país en el que estamos, creo que la
adopción prenatal va a generar una demanda que va a traccionar la oferta. Y esa
oferta, en general, me temo pueda venir de los sectores más postergados, de las
mujeres más pobres o empobrecidas. Por ello, pensaría en otras alternativas.
Me parece que la adopción prenatal es algo así como elegir una madre para
mi hijo y eso va en contra, incluso, de la nueva normativa del Código Civil y
Comercial de la Nación en sus artículos 607, 608 y 611.
La veo como una iniciativa que corre muchos riesgos y no creo que resuelva
el tema de fondo, que es lo que se pretende resolver.
Humildemente, esa es mi opinión.
Luego, en relación con el Síndrome de Alienación Parental, me pronuncio
absolutamente en su contra. El Síndrome de Alienación Parental surge después de
la caída del mito del niño fabulador. Cuando no pudimos seguir diciendo que los
niños fabulaban, porque la Convención decía que los niños tenían derecho a
expresarse libremente y a que su opinión fuese debidamente tenida en cuenta,
apareció la construcción acientífica del Síndrome de Alienación Parental, que fue
defenestrado no solo por especialistas en la República Argentina –como Eva Giberti
y Juan Carlos Volnovich–, sino por toda la ciencia “psi” en el mundo.
No creo en esa alienación parental. Creo que es un refugio que han tomado
aquellos que todavía no creen en la palabra de las niñas, niños y adolescentes, por
lo cual entiendo que hay que, francamente, oponerse a esa revinculación. Si hay

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 27
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

revinculación con un padre agresor, habrá que ver cuáles son las circunstancias,
pero nunca considerando que el niño miente o que la niña miente; la presunción es
que la niña o el niño dicen la verdad.
En cuanto la tercera, efectivamente, creo que nos ha costado muchísimo –
muchísimo– en la República Argentina, mucho más que en otros países de la
región, colocar el tema de los derechos de niños, niñas y adolescentes en la agenda
pública y, a veces, tenemos adelantos y, otras veces, tenemos etapas de retroceso.
Por consiguiente, este es un momento en el que tenemos que reforzar la presencia
de los derechos de niños, niñas y adolescentes, otra vez, por lo que dije o traté de
explicitar en mi exposición hace un ratito: me parece que estamos todavía en una
sociedad que no termina de concebir a los niños, niñas y adolescentes como sujetos
pares. Sujetos pares desde el punto de vista de vista jurídico.
Sujetos de los que hoy, además, se presume su capacidad y yo creo que los
niños son iguales a nosotros; son seres humanos, son personas. Lo único que
merecen es una protección especial por su condición de ser personas en desarrollo,
pero no tienen ninguna otra diferencia y todos venimos de ahí; todos pasamos por
ahí.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- ¿Alguien más?
Sra. Diputada Carrizo, Carla.- Yo.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Tiene la palabra la diputada Carla Carrizo.
Sra. Diputada Carrizo, Carla.- Me parece un tópico importante el tema de trata. Te
referiste al principio y, a veces, se trata en forma confusa, porque se mezcla con el
de adopción. Y adopción, claramente, no es trata; hablamos de compraventa.
Compraventa de chicos es un delito penal.
La pregunta concreta: sabemos que es un delito muy expandido, muy visible
y poco cuantificado, y el primer dilema es el acceso a la identidad biológica de esos
niños, que no sabemos de quién son hijos, reitero, al menos en términos biológicos.
En este sentido y soy diputada radical, me opuse a que el Banco Nacional de Datos
Genéticos perdiera su universalización, entonces, ¿cómo piensas, como defensora,
sobre todo en las diferentes áreas –porque hay áreas y mapas de riesgo donde el
delito penal es más incisivo–, articular una respuesta cuando, quizás, no tenemos
los instrumentos para un acceso que garantice ese acceso a la identidad biológica
en el caso de delito penal de trata en infancia?
Segundo: he visto en todos los planes de trabajo y es interesante el tema de
la articulación con el Consejo Federal, que es un gran organismo, pero lo he visto
también en otras. Y la pregunta es si ahí el defensor del niño articula con la voz del
Estado y, a veces, también con las ONG, por ello, me gustaría saber si piensas
implementar alguna línea directa con los protagonistas. Algunas provincias tienen la
102, a veces, funciona bien y, otras, mal, pero el defensor del niño debería
monitorear cómo funciona el servicio en las provincias. Entonces, si hay una línea
nacional, ¿qué tienes pensado para que los protagonistas usen esa Defensoría,
independientemente de las intermediaciones del Consejo y demás que, obviamente,
son una fuente de articulación potente.
Esas dos preguntas.
Sra. Graham.- Definitivamente, en cuanto a la primera, la compraventa de niños, no
es trata. La trata es un delito complejo que no deriva nunca en la compraventa de
niños. En la República Argentina la compraventa de niños no está tipificada en el
Código Penal, pero sí en la Constitución Nacional, en su artículo 15.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 28
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

La verdad es que creo que el primer desafío es tipificar el delito de


compraventa en el Código Penal. Y es un doble desafío, porque los intentos que se
han hecho de proyectos siempre terminan penalizando a la madre biológica que
entrega o vende al niño. Entonces, seguimos siempre cortando la cadena por el
eslabón más débil. Por lo cual, me parece que tendríamos que hacer algo similar a
lo que hicimos con el delito de trata, que es tipificarlo y exculpar o eximir de
responsabilidad a las familias y a las mujeres que en situación de vulnerabilidad
entregan a sus niños y a sus niñas en adopción.
En relación con el tema del derecho a la identidad que me planteaste, es un
tema importante, porque, justamente, primero la compraventa de niños lo que hace
es colocar al niño allí sí en situación de objeto. En efecto, los niños, las niñas y las
adolescentes, las personas, no nos compramos ni tampoco somos donadas ni las
podemos admitir como regalos. Digo esto porque he tenido señoras que me dijeron:
“Yo no la compré; a mí me la regalaron”.
Entonces, tampoco se aceptan como regalo a las niñas, niños y
adolescentes. Pero, además de eso, violamos una cantidad de derechos: a la
identidad, al origen, a la propia historia, a la familia, a vivir en nuestra propia familia,
a conocer a nuestros padres, etcétera. Además, con una idea de que vamos a
salvar a estos niños de la pobreza. Porque la compraventa siempre ha sido vista
como que, si no tiene un fin que no es de explotación sexual ni de explotación
laboral y yo lo compro, porque lo voy a amar y le voy a dar un estatus superior al
que ya tiene –esto lo hemos visto promovido por los medios de comunicación–…
Estamos ante un problema.
A mí me parece que, cómo todo delito o cuasi delito, todavía está oculto,
entonces es muy difícil el tema. Y me parece que lo que hay que hacer, por más que
sea duro –porque sé que es duro–, es aplicar a cabalidad las nuevas normas del
Código Civil y prohibir la entrega directa, y negarles efectos a las situaciones de
hecho, a la guarda de hecho.
Me parece que esa es la vía por la cual podemos entrar, porque cuando
empezó en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires como en la provincia de Buenos
Aires a registrarse que algunos jueces restituían niños a sus familias de origen,
porque algún juez o alguna jueza recibía y además tenía vocación y la decisión
política de hacerlo, de arriesgar su adjudicatura, se enteraron de que ese niño
estaba en guarda, en una guarda de hecho, porque había sido comprado o
adquirido de alguna manera irregular. Entonces, han restituido a los niños y eso hizo
que bajara en la Capital Federal y en la provincia de Buenos Aires. Sin embargo,
empezó a suceder que comenzaron a ir a otras provincias; migraron y empezaron a
hacer los trámites de adopción en otras provincias, por lo cual, el tema es muy
dificultoso para resolver la cuestión de la identidad. No sé si le respondí la pregunta.
Muy bien.
¿Y me hizo otra? ¡Ah! Sí, en relación al Consejo Federal. Yo digo Consejo
Federal, porque allí están representados todos los organismos de aplicación. En
relación a las líneas, a la línea 102, yo he transitado por el esfuerzo brutal que
implica en cada provincia conseguir que las empresas de telefonía nos otorguen o le
otorguen al Estado nacional o provincial una línea de tres dígitos; es sumamente
complejo y nos llevaría los primeros cinco años de la Defensoría.
Yo creo -y lo puse en mi plan de trabajo- que hay que ir por una línea y que
quedará para el futuro. Hay que ir por una línea nacional, pero yo insisto en que la

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 29
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

articulación tiene que ser privilegiada con el Consejo Federal, pero con un diálogo
directo y bilateral del defensor con los organismos provinciales de protección de
derechos de niños, niñas y adolescentes.
Yo insisto en la experiencia riquísima. Es cierto que hay mucho por hacer;
nadie dice que ya hemos saldado todo, tenemos un montón por hacer. Pero yo
insisto en este recorrido de los últimos años y este esfuerzo que hemos hecho como
Estado nacional y estados provinciales de haber armado un sistema robusto de
protección de derechos de niños, niñas y adolescentes. Yo lo reivindico. Por eso,
creo que hay que respetarlo y fortalecerlo.
Sra. Presidenta (Durango).- Diputada Mercado.
- La señora senadora Verasay realiza manifestaciones fuera del
alcance del micrófono.
Sra. Presidenta (Durango).- Primero ella me había pedido.
Sra. Diputada Mercado.- Muy breve. A pesar de que la ley 26.061 lo establece, yo
quisiera consultarle cómo institucionalizaría la relación entre esta bicameral y la
Defensoría del Niño. ¿Usted cómo lo propondría?
Sra. Graham.- Yo creo que el defensor o la defensora tienen una dependencia
lógica con la bicameral, porque la bicameral en este caso no solo fue formada para
diseñar y llevar adelante este proceso de concurso de oposición y antecedentes,
sino que se pretende como una comisión especial, pero permanente, ¿no?, una
comisión bicameral especial y permanente.
Por eso, yo pienso que, sobre todo en los primeros años, pero en general
debe tener una relación permanente. Yo no diría de subordinación, pero sí de
acuerdos y de una suerte de consensos, que más allá del informe anual tenga que
ver con ir chequeando avances, retrocesos, cuestiones…
Yo creo que tiene que haber una suerte de colaboración de parte de la
bicameral en relación a la Defensoría, para ver si estamos cumpliendo con las
expectativas. Por algo la ley 26.061 plantea que se cree la comisión bicameral, no
solamente para hacer este proceso, que todos agradecemos muy rico y
transparente, pero me parece que la voz del Congreso Nacional representada en
ustedes ahora en este caso y en las próximas formaciones, me parece que no
puede dejar de ser un insumo cotidiano para el defensor o la defensora.
La verdad, diputada, es que no se me ocurre una institucionalización. Me
parece algo más dinámico posiblemente, no un formato rígido.
Sra. Senadora Verasay.- Muchas gracias. Bienvenida.
Sra. Graham.- Gracias.
Sra. Senadora Verasay.- Desde la óptica federal y el vínculo que debería o que va
a tener el defensor con las provincias, una pregunta muy concreta y es, frente a la
escasez de defensores provinciales: ¿de qué manera usted convencería a un
gobierno provincial para instalar el defensor del niño en cada jurisdicción?
Esa es la primera pregunta y la segunda que viene como consecuencia de
esa es frente al planteo del gobierno provincial de mantener una estructura o de
disponer de una estructura que pueda defender los derechos del niño, le pregunto:
¿es necesaria la figura del defensor del niño local?
Sra. Graham.- A ver. Puedo contestar tal vez las dos preguntas en una. Yo creo que
sí es necesaria. Creo que es necesaria porque el solo hecho de la existencia de un
defensor o una defensora nacional nos impone por nuestra estructura federal tener

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 30
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

pares o contrapartes a nivel provincial; no me imagino a nivel local, pero sí a nivel


provincial y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Creo que es esta es una de las razones fundamentales y, además, porque
creo que –insisto- el defensor es aquel que monitorea, supervisa, interpela, pero que
además genera consensos y consensos con los ejecutivos provinciales, con los
legislativos provinciales también y con el Poder Judicial también de las provincias.
La tarea sería mucho más sencilla y mucho más productiva para los niños,
niñas y adolescentes porque tenemos un país muy extendido y tenemos muchas
funciones. Yo como buena bonaerense soy muy respetuosa de la estructura federal
de la República Argentina y creo que es muy importante tener un par, para que
nuestras provincias nunca sientan que son afectadas -muy entre comillas y muy en
desacuerdo- con la bajada de la Nación a las provincias. Entonces, me parece que
es muy importante que exista un defensor.
Por estas mismas razones convencería al defensor, teniendo en cuenta
además que la ley 26.061 es una ley nacional que se propuso como paraguas del
resto de las legislaciones provinciales y que la mayoría de las normas de protección
de derechos de niños, niñas y adolescentes de nuestras provincias, salvo las que
son anteriores a la ley 26.061, han tomado ejemplo de la normativa nacional.
Me parece que con esos argumentos tendría alguna chance de poder
convencer a algún gobernador o alguna gobernadora, siempre acompañada de las
experiencias de las provincias que ya lo han hecho y mostrando los resultados de
las defensorías provinciales.
Sra. Presidente (Durango).- Muchas gracias.
Sra. Graham.- Gracias a ustedes. (Aplausos.)
Sr. Locutor.- A continuación expone el señor Sergio Greco.
Sr. Greco.- Buenos días. Buenos días a las señoras legisladoras.
Un agradecimiento especial por darnos a nosotros la posibilidad concreta de
estar viviendo este momento inicial dentro de la construcción de este nuevo
paradigma.
Me pasa algo particular. Yo soy abogado y cuando uno iba a dar, preparaba la
materia y se encontraba con que le tocaban adelante los cinco mejores del curso, se
planteaba: ¡Qué difícil va hacer la exposición mía!. Finalmente, me recibí de
abogado, así que confío en eso.
Algunas de las cosas que escuché yo también las pensé y las puse. Voy a
tratar de no ser reiterativo, porque posiblemente en la medida en que las iban
diciendo veía que había una reiteración. Entonces, voy a tratar de hacer como una
síntesis de las cosas que no se dijeron y a repetir algunas que considero
importantes.
Al momento de pensar este plan de trabajo, me planteaba, en un principio,
dos cosas. En qué momento nos encuentra en el desarrollo del paradigma de niñez,
adolescencia y familia. Y ahí me venían a la memoria las tensiones que existieron al
momento de sancionarse la ley 26.061, y en la provincia de Buenos Aires, la ley
13.298, con las otras instituciones que trabajan con la niñez y la adolescencia,
especialmente, con los sistemas de salud, educativo y judicial.
Son sistemas que tienen más de cien años. Tienen institucionalidad y lógica
propia. Tienen una perspectiva de cómo hay que trabajar y qué es lo que hay que
hacer con las niñas, niños y adolescentes y, de repente, desde 2005, en la provincia

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 31
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

hubo una reacción por parte del Poder Judicial para que no se aplicara la
reglamentación local de la ley 26.061 y se generaron tensiones.
Y esas tensiones las encuadraría dentro de la lógica de lo instituido y lo
instituyente. Había algo que estaba instituido, que eran las verdades que se habían
construido en un determinado momento, a principios de siglo, pero con el paso del
tiempo, de alguna manera, habían quedado fenecidas. Y aparecía la Convención de
los Derechos del Niño, allá por 1989. La Argentina, si bien no tardó en adherir, sí lo
hizo en cuanto a su reglamentación e implementación. Y, en lo concreto, cuando
empezaron a surgir todas las instituciones que las leyes nacionales y provinciales
crearon, se generaron tensiones en la aplicación concreta de los roles y funciones.
Tanto el Poder Judicial como los sistemas de salud y educativo le asignaron a
esos nuevos actores roles propios, casi diría de la vieja ley de patronato, que eran
distintos a los del sistema de promoción y protección de derechos.
Por eso, puedo decir hoy que seguimos en la construcción permanente de
ese paradigma que instituye toda la normativa nacional y local vigente. Pero la
principal tarea de la Defensoría será continuar con esa institucionalidad que está
generando y con el consenso que se debe dar con el resto de los actores dentro del
sistema.
Si vemos la cantidad de efectores, recursos, programas e instituciones que
existen relacionados con la infancia y tomando en cuenta todo lo que es el sistema
de promoción de derechos, veremos que hay una gran cantidad de personas e
instituciones que trabajan con niñas, niños y adolescentes.
Cuando desde mi rol de responsable del servicio local en General Pueyrredón
me tocaba charlar con los responsables del área de Educación, les decía que
básicamente la institución que más vínculo directo tiene con las niñas, niños y
adolescentes, para garantizar no solamente el derecho a la educación, es la
escuela. Entonces, es importantísimo con respecto al sistema educativo tener una
perspectiva concreta, que luego desarrollaré ya que hice un par de propuestas
específicas.
Entonces, el rol del Defensor o Defensora –quien sea–, será generar una
agenda y más institucionalidad en la promoción de este nuevo paradigma. Si bien
algunas cosas ya fueron dichas, vemos a diario que para determinados sectores
sociales el paradigma todavía no ha llegado; no se conoce. Si nos situáramos en un
proceso histórico de la revolución francesa es como si hubiera personas que todavía
viven en la Edad Media, con la aristocracia.
Entonces, para determinados sectores de nuestra sociedad y para muchos
actores que trabajan todo el tiempo con niñas, niños y adolescentes, el paradigma
no existe. El paradigma es como que ha retrocedido y, a veces, ello se fortalece con
algunos discursos hechos desde los medios de comunicación y con algunas figuras
que tienen cierta responsabilidad para garantizar los derechos. En esa relación
habrá que hacer alguna tarea docente.
Como segundo tema, cuando planteo el plan de trabajo, simplemente realizo
el esbozo de una estructura, porque lo que observo, y esto lo digo a partir de la
experiencia concreta, es que cuando uno tiene la necesidad de gestionar un espacio
público tiene que ver qué es lo que hay, cuáles son los objetivos y las capacidades,
la asociación con la que se va a trabajar y los recursos instalados; y básicamente un
gran elemento condicionante es el presupuesto.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 32
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

La senadora hoy acentuó en parte el planteo con el que yo venía, en el


sentido de hacer un esquema que esté más volcado en la acción, en el trabajo y en
el desarrollo de las capacidades instaladas –lo que hablaba Marisa Graham recién–
dentro del sistema que en generar unas grandes estructuras que no se van a poder
sostener financieramente. Si mal no recuerdo, y hago bien las cuentas, son
alrededor de 2.000.000 de pesos por mes.
Como representante de la Dirección de Niñez de General Pueyrredón todos
los meses debemos ir al Consejo Local de Niñez, para brindar una explicación de
qué hicimos con los fondos y los programas. Y allí los miembros de las
organizaciones sociales nos decían todo lo que nos tenían que decir, que eran
muchas cosas, nos marcaban los planteos de nuestras falencias y trabajábamos
permanentemente. Entonces, creo que es importante la construcción del paradigma
con organizaciones de la sociedad civil. Y en aquellos puntos en los que había
coincidencia, se podía trabajar. Desde luego que se puede disentir, diferir o
cuestionar, pero por otro lado se puede generar una agenda en común para trabajar.
Recuerdo que en determinado momento nos opusimos a la baja de la edad
de imputabilidad penal o a las reformas dentro del procedimiento sancionatorio de la
provincia de Buenos Aires, donde se pasaba a sancionar el merodeo y ese tipo de
cosas.
Entonces, digo, se pueden indicar déficits, diferencias y pedir ir por más y
también trabajar en conjunto, tanto con las organizaciones sociales como con los
ejecutivos.
Con relación al diagnóstico, presté atención a los que indicaron quienes
hicieron uso de la palabra y a lo que yo presento.
Creo que todos hemos tomado las mismas fuentes o, en todo caso, fuentes
muy parecidas. Nosotros tomamos fuentes públicas, privadas y fuentes
internacionales, como UNICEF.
Lo que puedo llegar a decir con relación a esto es lo siguiente. No podemos
hacer hoy y en este momento un diagnóstico asertivo de cada uno y todos los
derechos de niñas, niños y adolescentes y saber su estado de situación. Digo esto,
porque hay informes que son de cinco años, ocho años y hasta doce años; la
encuesta del Ministerio de Salud, creo, tiene más de diez años.
Unos informes dan cuenta de un grado de pobreza y otros indican mayores
grados. Entonces, otra de las funciones esenciales es hacer un diagnóstico. La
tarea principal para cualquier actividad que uno se plantee desde una gestión es
saber dónde está parado; saber qué recursos hay y saber qué derechos están
vulnerados y en qué medida. No es que no haya ningún tipo de información. Lo que
digo es que hay que actualizarla porque si no vamos a estar presumiendo que se
está en una realidad y se está en otra.
Para eso, específicamente propuse, y en línea con tener un presupuesto
acotado -la gestión va a ser de sobrecarga de responsabilidades para las no tantas
personas que integren la Defensoría-, y con esta idea de aprovechar los recursos
que están instalados, invitar a las universidades nacionales –públicas y privadas–
para generar un diagnóstico permanente sobre infancia. Esto lo consulté con la
gente de la Universidad Nacional de Mar del Plata, con su Secretaría Académica, y
me decían que, con unas partidas no mayores de las que tienen, se puede destinar
un aumento sencillo, simple, de partidas, para que las más de cincuenta
universidades nacionales –públicas quiero decir– tengan una mayor partida

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 33
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

presupuestaria para destinar y poder hacer un diagnóstico, que seguramente –como


están territorializadas– va a abarcar el conjunto de la población de la República
Argentina. Y sumar a las universidades privadas -algunas ya hacen ese tipo de
información-, estableciendo división de tareas, un mismo método.
Digo esto, para tener información alternativa a la que produce también el
Estado. Es decir para poder cotejarla, para saber realmente cuál es la situación. No
digo desconocer los informes del Estado, sino tener a mano una información propia.
En cuanto a los recursos instalados de los que hablaba anteriormente,
especialmente en el Poder Judicial, en el sistema educativo y en el sistema de
salud, yo planteaba esta situación.
Frente a la gran cantidad de recursos que existen y a las prácticas, que no
siempre están en línea con la promoción y la protección de derechos, la pregunta es
¿por qué pasa eso?
Una de las respuestas que tengo es que esto es por un problema de
formación. Cuando yo me formé en la carrera, no lo hice en materia de protección
especial de niñas, niños y adolescentes; sí lo hice posteriormente con un posgrado.
Entonces, la pregunta que hacía es ¿por qué, en el posgrado, yo estaba con una
trabajadora social, una psicóloga, un antropólogo, un sociólogo? Es decir, ¿por qué
en el posgrado nos formamos interdisciplinariamente? Y es porque este sistema nos
pide que trabajemos interdisciplinariamente, porque la perspectiva de una sola
disciplina no alcanza, porque nos pide que trabajemos con la comunidad.
Entonces, lo que planteaba es que a partir del artículo 43 de la ley de
educación superior, el actual Ministerio de Cultura le indica a la CONEAU que
modifique la currícula de todas las carreras, a fin de que en el ejercicio de la
profesión posterior tengan que ver con el trabajo con niñas, niños y adolescentes, a
los efectos de formarse en la perspectiva del nuevo paradigma y de género.
Lo última -brevemente-, para promover la participación de niñas, niños y
adolescentes, lo que yo creo es que se pueden optimizar los Juegos Nacionales
Evita. Es decir, aprovechar los Juegos Nacionales Evita para dar una nueva
impronta, que no sea solo una impronta deportiva o cultural, sino que sea el gran
Congreso de la niñez, de la Argentina. Es decir que los pibes vengan con mandato,
se trabaje durante todo el año desde la página que se va a crear, trabajando
juntamente con todas las dependencias, trabajando con el sistema educativo y
buscando las consignas acordadas con los chicos durante todo el año, para trabajar
finalmente en Chapadmalal, que además queda cerca de mi casa. Gracias.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muchas gracias. Usted sabe que la mayoría
de las legisladoras que estamos aquí somos de las provincias argentinas. Y,
mientras hace ese diagnóstico que tan bien ha planteado, ¿cómo usted piensa que
va a ser la intervención en las diferentes provincias? ¿Si tiene una intervención
zonificada? ¿Cómo va a recepcionar la demanda de los derechos vulnerados?
Sr. Greco.- Bien, ahí, en el trabajo, yo planteaba una línea 102, justamente una
línea de atención permanente. En General Pueyrredón, teníamos una línea 102, que
no era solo de consulta o de escucha sino de denuncia anónima; y había un equipo
que intervenía directamente en la emergencia y trabajaba.
En general, las llamadas provenían de niños o de los operadores del sistema,
el sistema de salud y el sistema educativo. Entonces, uno tiene ahí una alerta
temprana. Obviamente que una línea así tiene que tener un equipo, no para
intervenir porque no podemos tener una línea que intervenga directamente en la

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 34
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

restitución de los derechos in situ, sino que va a tener que articular muchísimo con
los efectores locales para trabajar.
A mí me pasó que nos llamaban… Había una línea del Ministerio de
Derechos Humanos sobre chicos en situación de calle –creo que era–, y nos
llamaban bastante, porque, por ahí, venía un pibe de Mar del Plata, y me decían:
Bueno, hacete cargo. Y así trabajábamos y articulábamos. No sé si alguna vez me
llamó Marisa o alguno.
La articulación entre los efectores que ya están dentro del sistema es
absolutamente necesaria. A partir de ahí, uno va haciendo un diagnóstico: qué
provincia responde, qué provincia no responde, qué provincia tiene este recurso,
con qué defensor podemos trabajar en conjunto para llevar la experiencia de otra
provincia, para no venir y decir: “Bueno, esto es como se hace en Capital. No; esto
se hace en la provincia de Entre Ríos así y mirá que en tu provincia se puede hacer
de esa manera y no necesitás tantos recursos”.
Entonces, esa articulación me parece que también da la información y las
respuestas.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Diputada.
Sra. Diputada Carrizo, Carla.- Bienvenido. En tu plan de trabajo, especificás datos
públicos, a través de universidades públicas. ¿Podés especificar cómo llevarías a
cabo esa tarea? ¿Cómo la deberían coordinar con las universidades, sabiendo que
los datos públicos, en su gran mayoría, se producen obviamente en el ámbito
gubernamental?
Sr. Greco.- Sí, bueno. También hay datos de universidades privadas, que dan
cuenta de determinadas situaciones, como la situación de pobreza.
El planteo es, dentro de una relación con todas las universidades. Primero,
pedirle un esfuerzo mínimo presupuestario al Ejecutivo, para que tengan esas
partidas para hacer investigación. Porque, hoy, las universidades, al tener
recortes… Lo que me planteaban en la Universidad de Mar del Plata es que va a ser
un tanto complejo que sea pretencioso el impacto y que sea permanente.
Entonces: plan A y plan B. Tener recursos y, de acuerdo al recurso, hacemos
el grado de investigación del impacto de la realidad localizada, porque cada
universidad va a tener un mayor desarrollo en el lugar donde está y de acuerdo con
el presupuesto que tengan -es decir, será permanente, será una vez al año- y de
acuerdo con el expertise que tengan, porque no la hacen las universidades la
investigación sino que se descentraliza en las facultades. Entonces, vos tenés que
ver qué facultades tienen el desarrollo, porque seguramente ya hay, porque en las
facultades hay programas y proyectos de investigación, pero eso está disperso.
Es decir, optimizar y fijar un objetivo, compartir una idea y, de ahí, que surjan
las capacidades que existen en cada una de las universidades.
Sra. Diputada Peñaloza Marianetti.- Quería saber qué mecanismo de coordinación
considerás importante entre escuelas, sociedad, familia y la Defensoría, para
realmente empezar a paliar todas estas violencias contras los derechos de las
niñas, niños y adolescentes.
Sr. Greco.- Bien, la escuela es una institución que tiene… Es bastante vertical el
sistema educativo. Entonces, ahí hay que trabajar con las instituciones
responsables, que son los ministerios de Educación, en la formación de protocolo. Y
en el planteo que yo hacía con relación a la CONEAU, la modificación de la
currícula, también hay que invitar a las provincias para que hagan la modificación, la

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 35
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

formación de los profesionales que ingresan al sistema educativo, que también


tengan esa formación permanente y constante en materia de infancia.
Entonces, protocolo, trabajar con la institución que aglutina –que serían los
ministerios– y también trabajar con los sindicatos. Hay sindicatos que, en su
discurso público y en su accionar hablan de la promoción y de la protección de
derechos de niñas, niños y adolescentes. Bueno, trabajar con ellos para generar
espacios de formación. Es más, yo creo que la formación en materia de niñez,
adolescencia y familia, a los docentes les va a dar puntaje. Ese puntaje les permite
ascender en la carrera y, de esta manera, vamos a lograr el mayor impacto y el
mayor interés por parte de los docentes.
Y obviamente a través del monitoreo. El monitoreo también es una forma, al
informarse sobre la vulneración de derechos dentro del ámbito escolar, por
discriminación, por maltrato, por violencia; bueno, ahí también hay que intervenir,
pero después hay que hacer docencia. Hay que intervenir, hay que poner en
evidencia, pero también hay que hacer docencia, trabajar con los inspectores.
Dentro del sistema educativo, hay que hacer una tarea docente, para decirlo de
alguna manera.
Locutor.- A continuación expone la señora Alicia Guerrero Zarza.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- A las 13 vamos a hacer un corte.
Sra. Guerrero Zarza.- Buenos días a todos y a todas.
Antes que nada quiero decir que es un lujo tener sentada a la doctora “Pila”
Minyersky, que es con quien yo empecé a dar mis primeros pasos en infancia a
través del Colegio Público de Abogados, a través de la Asociación de Abogados de
Buenos Aires y sigue siendo una maestra para todos como lo fue siempre. No me
esperaba que estuviera acá. Me llena de emoción.
Me parece fundamental definir cuál va a ser la identidad de este defensor o
defensora de los derechos de niños, niñas y adolescentes, y yo creo que es la de
una institución nacional independiente de Derechos Humanos.
¿Qué es una institución nacional independiente de derechos humanos? Son
aquellos órganos estatales que tienen como mandato constitucional o legislativo la
defensa de los Derechos Humanos.
El Comité de los Derechos del Niño, en la observación número 2, plantea a
los Estados parte la necesidad de que tengan en su Estado un órgano que cumpla
este rol: la promoción y la protección de los derechos del niño.
Si hay un ámbito donde es necesario que haya un defensor con esta
perspectiva de Derechos Humanos es en el ámbito de la infancia, porque si hay un
colectivo vulnerado, violado, son los niños, niñas y adolescentes. Son los que más
sufren la pobreza, son los que muchas veces sufren el maltrato y la violencia hasta
de los que están a cargo de su cuidado; son los que más sufren las catástrofes
naturales.
Además, me parece que darle este perfil al defensor va a ser clave en la
consolidación del sistema de protección de derechos natural, que es algo sobre lo
cual voy a hablar sucintamente a continuación, pero me parece central.
¿Qué ha pasado estos trece años desde la ley 26.061 con el sistema
nacional de protección integral y, en general, con la conformación de los sistemas
de protección provinciales? ¿Cuál ha sido su funcionamiento real?
Sabemos que el sistema de protección es la institucionalidad que se crea
para la atención de niños, niñas y adolescentes, en consonancia con la Convención

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 36
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

de los Derechos del Niño. Protagonismo fuerte de órganos administrativos


pertenecientes al Poder Ejecutivo, programas, políticas, recursos, procedimientos de
las otras áreas ministeriales.
¿Qué es lo que ha ocurrido en este tiempo? Lo que vemos es que falta un
fortalecimiento operativo e institucional a estos órganos de protección. Y también
vemos que los programas, recursos y procedimientos que existen dentro del sistema
no son suficientes para responder ante las vulneraciones de derechos.
En mi caso particular, yo trabajo en el Poder Judicial de la Ciudad, en una
oficina descentralizada en la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires y puedo dar
cuenta de la forma en que trabajan las defensorías, lo colapsadas que están en su
trabajo diario por la enorme demanda que reciben, la necesidad que tienen de
conformar sus equipos, de recibir la capacitación, los espacios adecuados para
atender a los chicos. Hay defensorías que son lugares feos físicamente, hostiles
para los niños. Y estamos hablando de la Ciudad de Buenos Aires, que justamente
es el distrito que tiene más recursos.
Por eso, a mí me parece que la consolidación del sistema de protección y de
los sistemas de protección integral en las provincias tiene que ser una política de
Estado. O sea, tiene que formar parte de aquellas estrategias que se tiene que dar
un país, cualquiera sea el signo político de su gobierno. Y en estos trece años no lo
hemos conseguido; sin perjuicio de reconocer que ha habido avances y que
obviamente ha habido muchas mejoras.
Me parece que hablar del sistema de protección –de las condiciones en que
está funcionando– también incide en la selección que yo hice de lo que me parecían
las prioridades, las principales problemáticas a ser abordadas por las políticas
públicas.
En general, coincidimos con varios de los candidatos. Claramente, en primer
lugar, la ponencia multidimensional como falta de acceso a la alimentación,
educación, salud, vivienda e información. Ahí están los índices de la UCA pero están
también los del INDEC. Son demoledores y me parece que están hablando de un
incumplimiento a lo que es la Convención de los Derechos del Niño, que establece
que para los derechos económicos, sociales y culturales los Estados tienen que
destinar el máximo de sus recursos disponibles. Y también me parece que esto da
cuenta del incumplimiento de la ley 26.061, cuando determina la asignación
prioritaria de recursos para las políticas destinadas a la infancia, su intangibilidad y
su no reducción.
Hay un índice que es el trabajo infantil. Yo por mi actividad sindical y en mi
sindicato, que es el Sindicato de Trabajadores Judiciales –el SITRAJU– integro la
Comisión por la Erradicación del Trabajo Infantil de la C.G.T. Allí hay un eslogan que
caracteriza desde el mundo sindical la definición de cómo erradicar el trabajo
infantil, que tiene que ver con trabajo decente para los adultos y educación de
calidad para los niños.
Puedo dar fe de lo que ocurre con los niños –porque lo he visto, porque
recorrí el país– en los hornos ladrilleros, donde tienen un alto índice de trabajo
infantil.
Es imposible despegar, digamos, es imposible que esos niños no trabajen;
niños que viven en el mismo lugar donde sus padres trabajan, con escuelas
alejadas, con servicios de salud alejados. Y los padres trabajan en condiciones casi,

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 37
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

no digo de esclavitud pero más o menos; trabajan una cantidad enorme de horas, o
sea, trabajo que no es decente.
Me parece que el tema del trabajo infantil es un tema que claramente es de
pobreza multidimensional.
Marqué otras problemáticas que por ahí las voy a ir pasando porque, si no, no
voy a llegar a la exposición. El acceso de los adolescentes a su derecho a la salud
sexual y reproductiva, a la educación sexual, a la ESI; la indocumentación de niños
por falta de inscripción de su nacimiento. Sobre todo eso lo vemos en los casos de
partos domiciliarios, porque a través del sistema público de salud es difícil ya que un
niño no esté inscripto, pero hay muchos partos domiciliarios y es muy complicado
después inscribirlos, porque hay que llevar testigos dos o tres veces para que
declaren; testigos del parto que lo hayan visto antes, que lo hayan visto después.
Eso es algo que habría que corregir; y que se puede corregir.
La violencia institucional hacia niños, niñas y adolescentes por parte de las
fuerzas de seguridad, por parte del Poder Judicial, que muchas veces revictimiza a
los niños; de los establecimientos escolares y de salud pública y privada; la
situación de los niños migrantes frente al DNU 70/17, que puede llegar a exponerlos
a quedar separados de sus padres si son expulsados del país; el estado de
vulnerabilidad de los niños, niñas y adolescentes privados de cuidados parentales
que están alojados en dispositivos de albergue o de acogimiento o de clubes
deportivos, como vimos recientemente; pupilajes que siguen existiendo -aunque uno
no lo crea- y niños en situación de calle.
En particular, con relación a los niños que están alojados en instituciones de
albergue, quiero contar que desde la Asesoría Tutelar hicimos en 2011 una
publicación, que fue el resultado de la aplicación de un protocolo que utilizamos en
las visitas institucionales a los hogares de la Ciudad de Buenos Aires y muchos de
la provincia que están conveniados con la ciudad, donde mirábamos lo que tiene
que ver con el cumplimiento de los derechos y también con las condiciones de
habitabilidad.
Sacamos una publicación que se llamó “Puertas Adentro”, donde se dan los
primeros números de cuál es la situación de los niños que están alojados en
instituciones de albergue.
Y otro gran logro, que a mí me parece que tiene que replicarse en todo el
país, es haber podido sancionar una ley –la primera ley, la 2.881– que regula las
condiciones que deben tener las instituciones de albergue. Eso se pudo conseguir
gracias al consenso de todas las fuerzas políticas de la Legislatura porque así es
como tiene que ser.
En su momento también hubo mucho trabajo con el Ejecutivo en los casos en
los que hubo que disponer la baja de convenios o el cierre de instituciones de
albergue, porque estaban vulnerando los derechos de los niños que estaban
alojados.
Enuncio después lo que tiene que ver con la falta de acceso a la atención en
salud mental, máxime considerando lo que está ocurriendo con el suicidio
adolescente, que creo que tiene que ser evaluado en sus causas y en su cantidad.
O sea, me parece que hacen falta estudios más profundos de lo que está pasando
con el suicidio adolescente. También la atención de adicciones. Lo que falta son
dispositivos de atención comunitaria; falta atención en los barrios, de más
psiquiatras infantiles y más psicólogos.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 38
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Las dificultades en el acceso de niños y niñas indígenas a una educación


bilingüe o intercultural; la venta, la trata en todas las formas de explotación y su
dimensión trasnacional; la violencia y el abuso de niños en el ámbito escolar y
familiar a través de las redes sociales como grooming; la discriminación hacia el
colectivo LGTBIQ; la vulneración de los derechos de los niños intersexuales que son
sometidos a cirugías sin su participación; la necesidad de un régimen penal juvenil
que reemplace al Decreto Ley 22.278, pero que esté en sintonía con la Convención
de los Derechos del Niño y demás instrumentos internacionales, que no implica la
restricción de derechos, de ninguna manera, sino que incluya la justicia restaurativa,
la figura de la remisión…
Es un punto el tratamiento que están dando los medios de comunicación
masivos a la infancia y a la adolescencia, vinculando sobre todo a los adolescentes
pobres con la delincuencia.
La permanencia de niños y niñas pequeñas en cárceles junto con sus madres
que están cumpliendo una condena. En ese sentido, no está ahora, pero el defensor
de La Pampa hizo una muy buena medida –fue una de las primeras que tomó–, de ir
a relevar los casos que había de mujeres con niños. Porque ahí se tiene que
implementar la prisión domiciliaria, para eso está la ley. Y cuando le otorgan la
prisión domiciliaría, ver la forma de implementar políticas para que esa madre pueda
sostener, sin poder salir a trabajar, a sus hijos. Estas son, las que me parecen a mí,
las problemáticas más relevantes.
Respecto de la estructura orgánica, lo que puedo decir, por una cuestión de
tiempo, es que lo que pensé es que debería tener –sí o sí– dos Secretarías; una que
tuviera que ver con el sistema internacional de Derechos Humanos, por esta misión
o esta impronta que me parece que tiene que tener este defensor, y otra destinada a
la participación ciudadana que contemple el enlace con la comunidad, las ONGs y
los organismos de infancia. Pero también una oficina destinada a los más jóvenes, a
la participación de las niñas, niños y adolescentes.
Esa estructura debe tener una composición pluralista que asegure que estén
representados los sectores de la sociedad civil, que estén interesados en la
promoción y protección de los Derechos Humanos. La Defensoría tiene que ser con
perspectiva de género y la composición tiene que ser a través de un sistema abierto
y por concursos.
Dejé, entre paréntesis, la posibilidad de abrir delegaciones regionales por una
cuestión de pensar que el organismo tenga mayor cercanía física en todo el país.
No sé si es posible o no; no lo puse en la estructura, pero sí se prevé la apertura de
cinco delegaciones regionales.
Por último, con relación a la definición de roles y funciones… Sé que tal vez
estoy corta con el tiempo, así que voy a ir a los que nos pidieron que definamos y
que me parece más interesante.
Respecto de la actuación frente a casos individuales, obviamente destinados
a la protección de los derechos subjetivos de los niños, para mí –los casos
individuales– tienen que representar también la importancia de casos testigo. Esto
es: aquellos casos que puedan demostrar cómo es el funcionamiento real del
sistema.
Sr. Locutor.- Un minuto, por favor.
Sra. Guerrero Zarza.- En ese sentido, desde mi experiencia en el Poder Judicial,
nosotros tomamos un caso concreto para demostrar que existía la

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 39
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

institucionalización por pobreza y en 2010 hicimos un amparo por cinco niñas que
estaban en un hogar separadas del padre que no tenía vivienda. Cuando
conseguimos, a través de un amparo, el acceso a un crédito del IVC, los niños
pudieron volver a vivir con sus padres y continuaron viviendo hasta ahora y
crecieron en familia. O sea que a veces los niños no están institucionalizados,
porque los padres son violentos o los maltratan sino que están institucionalizados
porque son pobres.
Frente a los casos colectivos, también me parece que es fundamental que el
defensor cumpla ahí su rol estratégico de incidencia en la adecuación de la política
pública a los estándares de Derechos Humanos de niñas, niños y adolescentes.
Con relación al federalismo, es para mí -en todo sentido- de absoluto respeto
a la autonomía de las provincias, en particular con lo que tiene que ver con
organismos que integran el sistema de protección integral, de respeto y de
fortalecimiento de cada identidad. Cada organismo está para algo y tiene que
cumplir ese rol. O sea, si llego a ser defensora, mi función va a ser, dentro de lo que
es la supervisión y el monitoreo, garantizar que a los organismos se les respete su
rol, pero que lo cumplan.
Con respecto a los defensores de las otras provincias, claramente todas las
provincias tienen que tener un defensor y vamos a trabajar para eso. Y, con los que
están, vamos a construir una agenda común y vamos a acompañar a aquellos que
ya tengan en su agenda provincial temas que estén trabajando. Es decir, vamos a
acompañarlos y vamos a fortalecerlos.
Respecto de la participación en la agenda legislativa, va a ser fundamental,
activa y en las comisiones de trabajo, a través de dictámenes y opiniones y en el
seguimiento del presupuesto, claramente.
Sobre la participación de las organizaciones de la sociedad civil, jerarquizar la
participación de quienes conforman el sistema de protección; hay que fortalecer el
sistema de protección integral. De hecho, la participación en las organizaciones se
da a través de una Secretaría que se incluye en la estructura.
Y, respecto de la supervisión, del monitoreo del sistema de promoción y
protección, lo que planteo es que es necesario un diagnóstico acabado de la
situación de la niñez en el país identificando las prioridades, así como generar
mecanismos de control a través de protocolos, a través también de la sanción de
leyes que regulen el funcionamiento de las instituciones de albergue, por ejemplo, lo
mismo de los niños que están internados en instituciones psiquiátricas y en
comunidades terapéuticas.
Sr. Locutor.- Le pedimos, por favor, finalizar la exposición.
Sra. Guerrero Zarza.- Bueno.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muchas gracias, están abiertas las
preguntas.
Mientras tanto, le voy a hacer una yo. Usted habló de las delegaciones en las
provincias; ojalá pueda llegar a concretarlas en el caso de ser elegida. ¿Cómo cree
que van a trabajar con los defensores y defensoras que ya están elegidos?, ¿no se
le van a superponer las tareas? ¿Y cuál va a ser su estrategia con las provincias
que no tienen elegido el defensor?
Sra. Guerrero Zarza.- Desde la Defensoría, lo que se va a fomentar
permantemente, insisto, es el respeto a las identidades de cada organismo. A mí me
parece que parte del problema que tiene que ver con lo que ocurre con la infancia

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 40
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

es que todos tienen algo para opinar desde el sentido común, desde su opinión
personal o desde su experiencia de vida. Pero no; necesitamos que cada uno haga
lo que tiene que hacer. O sea, una delegación en una región va a ser un emisario o,
justamente, una delegación de lo que tiene que ser el defensor del niño nacional,
por eso no hay forma de superponerse. Por el contrario, es alguien que va a estar
para respaldar; no es un superior del defensor de la provincia; para nada, es un par
que comparte características comunes; uno en la provincia y otro a nivel nacional.
Me preguntaba cómo fomentarlo en las provincia que no lo tienen; hay que
ver provincia por provincia, las que tienen leyes que lo contemplan, pero tal vez no
se activó el mecanismo. Hay que ver las provincias que no lo contemplan en su ley y
ver cómo incidir en sus Legislaturas para que lo incluyan.
Me parece que ahí va a ser un trabajo junto con los defensores; nos vamos a
poner a trabajar juntamente defensor nacional con los defensores provinciales que
ya existen, para darnos una estrategia.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Senadora Kunath.
Sra. Senadora Kunath.- Muchas gracias por su exposición. Usted mencionó en la
misma el trabajo infantil y, concretamente, quiero pregúntale cuáles podrían ser las
líneas de acción desde la Defensoría para la erradicación del trabajo infantil.
Y otro tema que fue mencionado, que nosotros venimos trabajando, tiene que
ver con el tema del suicidio. Nosotros también venimos reclamando la
reglamentación de la ley de prevención del suicidio. Entonces, ¿cuáles serían
también las acciones que imagina que podrían llevarse a cabo para la prevención
desde la Defensoría? Gracias.
Sra. Guerrero Zarza.- No, por favor.
Con relación a la erradicación del trabajo infantil, como lo mencionaba, desde
mi perspectiva está tan vinculado al trabajo de las personas a cargo de los niños,
que la primera estrategia tiene que ser –por ahí ya excede al defensor– que los
padres de los niños tengan trabajos decentes.
Ahora, en el contexto actual, con niños que trabajan junto a padres en
contextos donde las condiciones son muy precarias, a mí me parece que se pueden
tomar algunas medidas como, por ejemplo, separar la vivienda del lugar de trabajo.
O sea, los niños no pueden vivir en los lugares donde trabajan sus padres.
Entonces, hay que facilitarles el acceso a planes de vivienda o a créditos para que
puedan vivir, sus padres trabajar y los niños ir a la escuela.
El otro tema también es cómo asegurar que haya escuelas cerca. Si hay una
cantidad de niños, tiene que construirse una escuela cerca. No puede ser que los
padres los tengan que llevar a una cantidad de kilómetros, porque esto hace que
terminen no llevándolos. Y lo mismo pasa con la atención de salud.
Por eso creo que lo que empezaría a trabajar es en hacer un relevamiento de
cuáles son las situaciones de trabajo agrícola, trabajo ladrillero –o sea, donde hay
mayor cantidad de trabajo infantil– y ver qué medidas podemos solicitarle al Estado
para que esos niños salgan de esos lugares donde sus padres trabajan.
Y con relación al suicidio adolescente –y a veces lo veo en mi propio trabajo–,
es muy difícil conseguir realmente que los chicos puedan acceder a tratamientos de
salud mental, que los chicos puedan tener los dispositivos que prevé la ley 26.657
para la atención de la salud mental de los niñas, niños y adolescentes.
Estoy convencida, y sé que en la provincia de Buenos Aires es así –y
seguramente en otras provincias también–, de que para conseguir turnos para un

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 41
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

psiquiatra o para un psicólogo hay que ir a las 4 de la mañana y esperar un mes. Me


parece que el primer paso es garantizar la atención a la salud mental.
Después, seguramente, hay muchas otras medidas fundamentales como la
participación en las escuelas, ir a las escuelas y escuchar lo que está pasando y
qué dicen los adolescentes. Los adolescentes hablan mucho de esto; y me parece
que ahí es donde ellos nos tienen que enseñar y nos tienen que dar la información
que nosotros necesitamos para saber cómo ayudarlos.
Sra. Presidenta (Durango).- Senadora Verasay…
Sra. Senadora Verasay.- Bienvenida y muchas gracias.
Una pregunta concreta. Quiero consultarle qué rol imagina usted para sus
adjuntos, porque veo que en el plan de trabajo han sido consideradas facultades
delegadas. Me gustaría visualizar, un poquito, la función del equipo que, en
determinado caso, incluso, podría llegar a reemplazar al defensor del niño.
Sra. Guerrero Zarza.- En principio, voy a ser franca, me costó pensarlo. Me costó
pensar cuál sería ese rol. Claramente es el de subrogar en el caso de que no esté el
titular; y después lo pensé como facultades delegadas que tienen que ver, en
realidad, con algunos temas que a mí me parezca que tengan que ocuparse
específicamente uno de los dos adjuntos –que yo defina como prioritario– mientras
despliego otras actividades en otros temas que no requieran una exhaustiva
dedicación, los adjuntos puedan tomar estos temas.
Me imagino, en principio, cómo pueden contemplarse, considerando que son
pares. Los puse con facultades delegadas, pero los puse a la par. Son adjuntos. Y,
en principio, lo pienso de esa manera, con temas que considere que requieren un
trabajo intensivo de un defensor, de alguien que esté en el rango de un defensor y
que ellos se ocupen específicamente de eso.
No podría definir ahora cuáles serían esos temas; la verdad es que no los
podría definir, pero en eso pensé cuando ideé en delegarles temas concretos.
Sra. Presidenta (Durango).- Vamos a hacer un cuarto intermedio hasta las 14.
Pretendemos ser bien puntuales, así que les pedimos a los que tienen que exponer
que así lo sean.
- Se pasa a cuarto a las 12:45.
- A las 15:14
Sr. Locutor.- Continuamos con la exposición del señor Juan Facundo Hernández.
Sr. Hernández.- Buenas tardes.
En primer lugar, la verdad es que quería agradecer y celebrar este momento.
Nos costó muchos años, es decir, hace mucho que estamos detrás de la figura del
defensor, que está en la cúspide del sistema de protección de derechos.
Haber llegado hasta acá creo que es un logro enorme y si bien el proceso tardó
más de lo previsto, estamos en el camino correcto y lo que denota todo es una
rigurosidad técnica y un proceso de diálogo permanente y de transparencia.
No me gusta hablar a título personal pero como la presentación es muy técnica,
quiero sí contar que comencé desde muy chico siendo alfabetizador de adultos y de
niños, luego, seguí mi formación y soy abogado. Hice una Maestría en Políticas
Sociales porque, como abogado, encontraba bastantes limitaciones en mi campo de
acción; trabajé en los tres poderes del Estado y me tocó discutir y trabajar en la ley
26.061 con logros colectivos en materia de exigibilidad de derechos, tanto a nivel
local como internacional.
Nunca dejé de participar en espacios de la sociedad civil −que me parecen

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 42
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

claves para tener un cable a tierra− que, a veces, en otros espacios no los tenemos.
Trabajé en varias organizaciones y en 2001 fundamos el Colectivo de Derechos de
Infancia y Adolescencia, que es un espacio que está en nueve provincias e
interactúa con otras redes de América Latina y del Caribe y con otros movimientos
sociales.
Brevemente, yendo a lo que es el plan −reitero, voy a ser muy breve y contar
otras cosas−, si tenemos que resumir los problemas de la infancia en la Argentina,
tienen que ver con la infantilización de la pobreza: la falta de centralidad de la
cuestión infantil; enormes disparidades regionales; no hay protocolos de actuación
unificados; falta de información al acceso a la misma; déficit de planificación,
seguimiento y evaluación de las políticas públicas; falta de políticas de
fortalecimiento familiar asequibles −pueden existir, pero no están disponibles−;
precarización de los trabajadores del sistema de protección −no podemos exigirle
mucho al sistema de protección si los trabajadores rotan y no están bien
remunerados−; escasos espacios de participación protagónica de niños y una visión
criminalizadora de los chicos.
La cuestión de la pobreza −y me detengo en las próximas dos presentaciones−
es clave. Esto es algo que ya lo viene marcando el Comité desde 2002, 2010 y
2018. Y hay una exigencia internacional en cuanto a la asignación de recursos
presupuestarios y una prohibición de regresividad en este aspecto.
El INDEC señala que hay 41 por ciento de chicos en situación de pobreza, de
cero a catorce años y el Observatorio de la Deuda Social Argentina, de la UCA, que
mide una pobreza multidimensional, desde otros aspectos −no solo ingresos− nos
dice que hay 62,5 por ciento de los chicos.
Otros aspectos planteados en el diagnóstico −me detengo en alguno; porque
son muchos, pero traté de compilarlos todos−: es clave la cuestión de la
institucionalización de los niños, es decir, los chicos sin cuidados parentales y la de
la falta de una legislación penal acorde a la Convención, a pesar de los mandatos
nacionales en ese sentido de la Corte Suprema y de la Corte Interamericana,
además de las legislaciones procesales en las provincias. Si queremos disminuir la
privación de la libertad y fomentar las medidas alternativas de la privación de
libertad, ahí tenemos una clave: niños migrantes, indígenas, chicos
indocumentados.
Asimismo, es preocupante la violencia policial, tortura y malos tratos. Es un
problema invisibilizado de los niños o de diferentes adultos privados de libertad,
tanto intramuros como extramuros; fallo “F.A.L”: no en todas las provincias existe el
protocolo; alta tasa de embarazo no intencional en las adolescentes. Y. bueno,
podría seguir.
Me quiero concentrar brevemente en el diagnóstico, en lo que es el sistema de
protección de derechos. En estos días se está llevando a cabo el segundo Foro
−ahora: ayer y hoy− en Montevideo. Están todos los estados, la sociedad civil y los
niños organizados, discutiendo cómo fortalecer el sistema de protección de
derechos.
Estos aspectos son clave porque, como vamos a ver, cuando hablemos de
las observaciones del Comité de Derechos del Niño, la agenda está; falta el cómo.
Estos espacios son útiles, porque ya son de acuerdo y de intercambio, y lo que
vemos aquí son cuestiones que −como resalté en el plan de trabajo y también lo
hacen otros candidatos− tienen que ver con el poco alcance de los sistemas de

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 43
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

protección y todavía una mirada asistencialista −no podemos salir de la mirada del
Patronato−; la falta de presupuesto; poca participación de la sociedad civil; datos;
políticas públicas que garanticen la autonomía de los chicos que no hay, y falta de
autonomía de los organismos a nivel local; problemas con la justicia.
El documento que se está terminando de elaborar −esto es una versión
preliminar−, también señala la institucionalización del sistema, que está muy débil. Y
lo interesante es que es un documento de trabajo junto con gobierno, sociedad civil
y niños que participan de manera organizada.
En cuanto a la estructura de la Defensoría, creo que no fui muy original con
respecto a otros candidatos. Hay un adjunto de protección y un adjunto de
promoción, como lo señala la ley; una secretaría general, más bien de articulación,
de coordinación. Me imagino dentro de protección un área de casos individuales –
después voy a hacer unos comentarios–, otra área de casos colectivos; un adjunto
de promoción con un área en el monitoreo de cumplimiento de los derechos; un
área de participación de la sociedad civil y de los niños, y los programas que son las
iniciativas estratégicas, porque me parece que hay algo… Tenemos una confusión
cuando hablamos del cargo de defensor. El defensor no es el Poder Ejecutivo, no es
la autoridad de aplicación; es un organismo de control que tiene que hacer que otros
cumplan con su cometido.
En este aspecto me parecen claves algunas de las iniciativas que propongo,
que es un grupo de trabajo sobre la Resolución General N° 19, del Comité de los
Derechos del Niño, que es una forma de interpretar la Convención, con lo cual, el
Estado argentino está obligado a seguir los mandatos del Comité de los Derechos
del Niño y tiene que ver con una forma distinta de trabajar en los presupuestos.
Propongo que esté integrada por la Comisión de Familia de ambas cámaras;
de la Comisión Bicameral; de la Oficina de Presupuesto del Congreso, que es
reciente, que tenemos que aprovecharla, usarla; sociedad civil; Ministerio de
Economía, y niños.
El objetivo, el desafío es promover un ciclo presupuestario en lo atinente al
gasto público social en los términos que nos propone la observación general en las
tres etapas: planeamiento, aprobación, ejecución.
Otra propuesta estratégica de trabajo en esta línea es que la agenda de
trabajo está, tenemos las recomendaciones recientes del Comité de Derechos del
Niño, que aún no están traducidas al castellano, lamentablemente, pero en breve lo
van a estar, que nos señalan cuál es la agenda pendiente en materia de infancia. Lo
que nos pareció oportuno es elaborar una ruta federal y provincial para el
cumplimiento de estas observaciones. A nivel federal por el Consejo Federal y otros
consejos, hay cuatro consejos que trabajan muy bien y de manera articulada, y la
SENAF. Y a nivel provincial con los consejos provinciales donde los haya y donde no
los haya con las legislaturas provinciales que quieran adherir, y de paso también es
una forma de instar a que se cumplan los mandados de las legislaciones
provinciales; solo en dos provincias no hay.
El objetivo de esta hoja de ruta para cumplir con las recomendaciones del
Comité tiene que ver con identificar a los responsables. Las recomendaciones del
Comité hacen un paneo de todos los derechos económicos, sociales y culturales,
civiles y políticos de los niños. Es un proceso que requirió la participación del
Estado, de la sociedad civil, de los organismos internacionales, con lo cual, tenemos
ahí una agenda bastante objetiva de lo que deberíamos hacer. Falta identificar las

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 44
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

responsabilidades en el cumplimiento de las responsabilidades en el cumplimiento


de las observaciones: zonas grises, zonas vacantes, nudos críticos, cuellos de
botella. Y amplia participación: sociedad civil, Poder Judicial, es un actor que suele
estar exento de estos compromisos internacionales, la participación de UNICEF,
ACNUR y Cancillería, porque está en juego la responsabilidad internacional del
Estado. Y todo esto con un balance de cumplimiento de medio término del mismo
Comité; el Comité alienta a que los estados trabajen en el cumplimiento de estas
recomendaciones, así que seguramente accederá a venir a colaborar.
Otras acciones que están dichas en el plan. Brevemente, nos parece que hay
muchos planes de acción, o sea, en esta lógica que tenemos que el candidato que
surja tiene que hacer que otros trabajen; hay muchos planes de acción que surgen
de leyes o de compromisos internacionales y no se cumplen. El plan de acción de
derechos humanos que tiene el gobierno argentino desde hace muy poco tiene
algunos temas de infancia, pero muy poco en materia de sistema de protección de
derechos. Los objetivos de desarrollo sostenible son otros, hay que velar porque
ellos se cumplan.
En el tema del monitoreo en el cumplimiento de los derechos, yo creo que en
la Argentina se ha creado un observatorio por año en los últimos años. Nos parece
que ahí es importante centralizar. Hay un proyecto muy interesante que se presentó
en la Cámara con la firma de muchos actores que es un sistema integrado de
indicadores de derechos de niños, niñas y adolescentes. Nos parece que ahí
también tenemos que poner el monitoreo del sistema de protección de derechos.
Una articulación institucional, UNICEF estuvo trabajando hace muchos años la
creación de observatorios, ver si los podemos unificar, mejorar. Y un banco de
buenas prácticas en materia de promoción y protección de derechos. En algunas
iniciativas yo creo que hay cosas que se están haciendo muy bien en algunas
políticas públicas y creo que es tarea de la Defensoría promoverlas.
Algo que me parece que es central, lo cual es muy poco y estuve participando
hace poco tiempo, que es generar una ruta de protección de derechos de los chicos
en Internet. Es asombrosa la cantidad de actores que tendrían responsabilidad, pero
que no articulan, y la inexistencia de un protocolo único de actuación donde las
empresas tienen un rol fundamental.
En materia de casos individuales, que era una preocupación en el plan de
trabajo, es clave el fácil acceso de los chicos por todos los medios. Los chicos hoy
no llaman al 102, al 102 llaman los abuelos y los padres que los cuidan; los chicos
navegan por Internet y están en otros espacios, ahí tenemos que ir.
Criterios generales para tomar el caso. Estamos hablando de casos graves
de vulneración de derechos que no fueron atendidos en las instancias locales. Si no
es que estamos hablando de estos casos, la Defensoría lo recibe, orienta, deriva y
lo sigue a través de una derivación formal. Si sí estamos hablando de estos casos,
que son casos no resueltos en la instancia local, que tienen que ver con zonas
grises de intervención, áreas vacantes, ahí nos proponemos una estrategia conjunta
con actores con facultades en la jurisdicción del caso. ¿Cómo? Primero, con una
intervención extrajudicial con acciones progresivas; la ley marca qué pasos puede
tomar el defensor. Siempre nos reservamos la judicialización como estrategia final,
salvo que estemos hablando de un caso grave e inminente de vulneración de
derechos; con recomendaciones, dictámenes, espacios de diálogo y seguimiento a
esos diálogos, y la intervención judicial, cuando todo esto no suceda.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 45
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

La propuesta a buscar patrocinio jurídico local, si no lo hay, la Defensoría


debería cubrir ese espacio. Hay una reciente red federal de patrocinio jurídico
gratuito que es muy interesante, conviene explorarla y apoyarla, con actores de
múltiples de provincias y a nivel federal. Y también propuse en el plan de trabajo
desarrollar un programa de abogado del niño con estándares, unificar estándares,
crear un registro de abogados. A veces hay abogados que no lo son tal o hay
registros que tienen algunos problemas, pero sí tratar de estandarizar y tener un
registro. Los recursos no van a ser posibles para tener abogados de niños en todas
las provincias, pero sí teniendo estrategias de articulación es posible.
Casos colectivos. Y aquí es donde la propuesta es ser más proactivos. Una
especial situación de atención de los grupos vulnerables de manera proactiva,
respetando las autonomías provinciales, pero sin eludir las facultades que por ley
tiene la Defensoría.
Los grupos más necesitados de protección en la Argentina son: los niños
indígenas, los chicos privados de libertad, los chicos sin cuidados parentales, es
clave el egreso asistido en estos chicos, salud mental, discapacidad…
Locutor.- Un minuto, por favor.
Sr. Hernández.- …niñez migrante, los chicos indocumentados, todo lo que implica
diversidad sexual, los chicos víctimas de femicidio. Y aquí hay buenas estrategias
de la sociedad civil, sobre todo y algunos defensores públicos y es importante
visibilizar los casos colectivos de exigibilidad de derechos.
Materia de federalismo es clave. Nos pareció muy importante la fórmula que
emplea el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura, que es un mecanismo
similar que habla de complementariedad, coordinación, cooperación, subsidiariedad
y un fuerte trabajo con los defensores provinciales, crear un consejo federal de
defensores provinciales y fijar esta agenda federal junto a ellos.
Participación de la sociedad civil –creo que la mencioné– es clave en toda la
presentación.
Y en materia de presentación de niños propongo que también intervengan en
gran parte de las propuestas que estamos haciendo –en todas– un contenido
comunicacional muy ágil para los chicos; es clave llegar a los chicos.
Un banco de buenas prácticas de participación. Hay estrategias de
participación muy buenas, que me parece que la Defensoría debería promover.
Muchas gracias.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muchas gracias.
Están abiertas las preguntas.
Sra. Diputada Carrizo, María Soledad.- Bienvenido. Muchas gracias por tu
exposición.
Me gustaría si me podés ampliar, porque me llamó la atención, sobre el tema
del registro sobre casos colectivos.
Sr. Hernández.- Un caso individual se puede transformar en un caso colectivo a
medida que uno reciba reclamos de una comunidad o de una particularidad o de un
grupo particular de niños, ya puede ser un caso colectivo.
Me ha tocado trabajar –yo trabajo en el Ministerio Público de la Defensa de la
Ciudad– en estrategias para abordar casos colectivos desde riesgo eléctrico en una
villa o la contaminación por basura en villas de la Ciudad, y realmente fueron
buenas experiencias, así como hay otras, y me parece que está bueno visibilizar
esos casos para que otros actores que trabajan en la exigibilidad de derechos, tanto

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 46
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

en el ámbito público como en la sociedad civil, puedan recurrir a estas experiencias


para ser replicadas ellos como defensores.
Sra. Diputada Carrizo, María Soledad.- Gracias por la contestación.
En el tema de la descripción diagnóstica, en tu trabajo planteás disparidades
regionales en acceso a los derechos.
Sr. Hernández.- Sí, todos los derechos sociales que vemos en educación y en
salud, en lo que hace a las tasas del NOA, se disparan. En materia de educación,
las disparidades socio económicas, incluso, son más fuertes que si la educación es
pública o privada. Los chicos tienen más posibilidades de tener una educación de
calidad en función del lugar en donde viven más que de a qué escuela asisten. Y
esto es muy grave.
Esta es una de las preocupaciones principales del Comité: las enormes
disparidades regionales que tenemos en nuestro país.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Gracias por la intervención.
Quiero preguntarte dos cosas.
Vos hablás en el plan de trabajo que leímos que estás de acuerdo con crear
la Oficina para Jóvenes, ¿de qué manera la pensás? Y también ¿de qué manera
pensás los canales de recepción de demanda y denuncia de las provincias, sobre
todo, en aquellas que no tienen el defensor?
Sr. Hernández.- Por jóvenes, me refiero a los espacios de participación de chicos,
cómo generar su participación porque Oficina de Jóvenes en el plan…
Por ese lado, por el lado de participación, en el plan propuse que en todos los
programas haya… Bueno, por ejemplo, en el Grupo de Trabajo Parlamentario en
materia Presupuestaria es clave tener la información de los chicos.
Generar espacios de participación implica espacios de participación
protagónica. A veces, confundimos espacios de participación con ir a buscar chicos
a una escuela y que vengan a decir lo que los adultos queremos que digan.
Creo que es clave identificar dónde están estos espacios de participación
protagónica y promoverlos, tratando de que guarden relación con la realidad donde
los chicos participan: escuelas, clubes, sociedad civil. Eso es por el lado de
participación.
¿Sobre qué era la otra pregunta?
Sra. Presidente (Senadora Durango).- La otra era cómo pensás canalizar la
demanda, la denuncia de las provincias, sobre todo, en aquellos lugares donde no
hay defensor.
Sr. Hernández.- Bueno, hay algo que también mencioné en el plan y tiene que ver
con que hay actores en el campo provincial que tienen facultades de actuación en
materia de protección de derechos.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Sí, las direcciones de niñez.
Sr. Hernández.- O en el Poder Judicial, defensores públicos.
Con lo cual nos proponemos esto: cada vez que recibimos un caso no
atendido, un caso grave que es de una provincia, instar a esos actores –los
conozco– a que lo tomen. Porque hay bastantes espacios formales de acceso a la
justicia, el problema es que, a veces, no son tales. Pero, primero deberían tratar de
solucionar estos espacios, y, si no, lo toma la Defensoría.
Sra. Senadora González, Gladys.- Usted hizo mención en la presentación sobre
este tema, y me interesaba saber si usted ya tenía una visión armada, según la
información que hoy tenemos, acerca del avance en la implementación del sistema

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 47
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

de protección de derecho federal y agrupar a las provincias según el grado de


implementación.
Sr. Hernández.- Es bastante subjetivo porque, en general, se dice más de lo que
efectivamente es.
Incluso, me pareció importante señalar lo que se está discutiendo ahora en
Montevideo, donde hay un reconocimiento de que falta mucho.
Para el plan de trabajo estuve buscando información, y me cercioré de que no
exista, sobre cuántos Consejos Provinciales creados por leyes provinciales de
protección integral prevén la participación de la sociedad civil y de niños y esa
información no existe. Es una información artesanal a realizar.
Creo que el desarrollo del sistema de protección en la Argentina es dispar.
Hay algunas provincias que han avanzado mucho. Otras que han avanzado tienen
retrocesos. No sé si lo podría plantear a nivel regional, pero sí hay provincias que
fueron pioneras como Chubut y la Ciudad de Buenos Aires. Un poco más tarde, el
caso de Santa Fe. Estas han desarrollado un buen sistema de protección, aunque
no quiero ser injusto con alguna que me olvide. Pero, en general, tienen que ver con
procesos de desarrollo de la región local y actores locales que lo han impulsado y
también de participación de la sociedad civil.
Cuando los procesos fueron genuinamente consensuados, articulados y
dialogados, los sistemas de protección son mejores.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muchas gracias.
Locutor.- A continuación expone la señora Marisa Herrera.
Sra. Herrera.- Muy buenas tardes.
La verdad es que es un placer enorme estar acá.
Básicamente, voy a mostrar el plan de trabajo que, en realidad, tiene que ver
con un camino sinuoso para llegar hasta acá y un camino también sinuoso que tiene
que ver con la Defensoría, porque tiene una labor muy compleja.
En ese aspecto, me parece importante primero señalar que el lenguaje no es
neutro. Por lo cual, esta idea de niños con la x tiene que ver con una cuestión
simbólica, pero además también tiene que ver con la diversidad. Niños en plural,
infancias en plural y adolescencias en plural. También tiene que ver con la
diversidad, en lo que uno tiene que trabajar.
Y para ver la situación y condiciones de vida de los niños y adolescentes,
tomé la última observación final del Comité de DESC, porque dice muchas cosas
que ya en el plan observaba. Había como una cierta sinergia entre los DESC y lo
que tiene que ver con el Sistema de Protección Integral de Niñas, Niños y
Adolescentes.
Como síntesis, por ejemplo, habla de pobreza cuando dice que preocupa
altamente al Comité el dato de más de cinco millones de niñas, niños y
adolescentes en situación de pobreza. Y el impacto negativo de la devaluación e
inflación en la pobreza y la desigualdad. Y hablo en especial de la Asignación
Universal por Hijo y la no compensación todavía por la inflación.
Esto, ¿qué implica? Que en mi plan focalicé consideraciones generales en lo
que tiene que ver con infancia y adolescencia, no solamente el tema de la indigencia
y de la obligada perspectiva de género ya que el 60 por ciento de los hogares por
debajo de la línea de pobreza, justamente, son familias monoparentales con
mujeres a cargo, sino también el tema de las asignaciones contributivas y no
contributivas. Pero, además, focalicé en primera infancia, y básicamente esto que se

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 48
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

llama la infantilización de la pobreza, con aquellas cuestiones más vinculadas o


relacionadas con la mortalidad infantil, la desnutrición, la obesidad y todo lo que
tiene que ver con el cuidado y las guarderías de servicio de cuidado. Además, en
materia de adolescencia como otra problemática propia. Lo que se vincula con la
escolarización, no solamente lo que tiene que ver con la cobertura sino, incluso, el
abandono cuando van al trabajo adolescente. Y con eso también el cruce con lo que
tiene que ver con el embarazo adolescente, otra gran problemática en la Argentina.
Todo esto está entrecruzado, básicamente, desde una realidad asimétrica
focalizada en la idea de desigualdad y, en especial, en lo que tiene que ver con
centro y periferia o urbe y lugares rurales. Y, además, otra cuestión que no sea a la
situación de la infancia, que implica desde lo legal, porque lo legal también tiene su
lugar, que es la falta de un sistema consolidado porque hay provincias que todavía
no tienen leyes de protección integral –si no hay ley, no se tiene el ingreso desde lo
formal en lo que hace al sistema de protección integral– y, además, una deuda
pendiente, luego de varios informes que nos hace el Comité de los Derechos del
Niño en sus observaciones finales, en lo que tiene que ver con el sistema penal
juvenil.
Entonces, en este contexto, ¿qué es lo que pasa? Hay una falencia clave,
que es la falta de sistematización y de unidad en todo el ámbito de la información, el
diagnóstico, monitoreo, evaluación y difusión de los datos para que haya un acceso
público a la información.
Esto hace que, justamente, en esta observación final del Comité de DESC se
hable de que el Estado argentino debe tener una nueva arquitectura institucional en
el sistema estadístico nacional y generar estadísticas a nivel de las provincias para
medir el cumplimiento de los derechos del pacto en forma desagregada –niñez y
adolescencia forma parte, justamente, de esta desagregación y esta visibilidad– y
los cuestionarios para el próximo censo del 2020. En algún punto, también nos
hacen recomendaciones de carácter general y recomendaciones de carácter
particular. Por eso la importancia que, desde el plan, uno propone la creación de un
observatorio nacional de derechos de la niñez y la adolescencia, en cooperación
con una parte concreta, que es UNICEF. Yo he trabajado en UNICEF no solamente
como asesora externa, sino también como asesora interna, en reemplazo
básicamente de alguien que estaba a cargo del área de protección integral. Por lo
cual, conozco mucho y, en este aspecto, UNICEF, en materia de generación de
estadísticas, generación de información y de unificación, tiene mucho camino
recorrido.
Entonces, en este contexto, ¿cuál es esta agenda de prioridades en las
políticas públicas? Y acá tenemos como un círculo, cuyo centro está pensado desde
la idea de sistema, de sistematización. Este núcleo o esta sinergia en lo provincial,
básicamente local, nacional y federal, habla también de inclusión, de acceso a la
salud, todo lo que tiene que ver con maltrato y abuso sexual infantil, primera
infancia, fortalecimiento. ¿Y esto qué tiene que ver? Porque en el último informe que
traigo acá, justamente se puntualizan estas cuestiones en materia de infancia. Habla
de las líneas presupuestarias, justamente relacionadas con todo el tema de la
inversión social. Habla, también, de la cuestión que tiene que ver con la educación,
y justamente garantizar el acceso universal y, en especial, prevenir el abandono
escolar. Habla, también, de lo que tiene que ver con sobrepeso y obesidad, como un
tema muy puntual en materia de salud. Habla, también, de lo que tiene que ver con

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 49
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

violencia; le dedica un párrafo bastante fuerte, con varias propuestas en lo que tiene
que ver con violencia de género hacia las mujeres y las niñas. Y también habla de
esta idea de una mirada transversal de género, lo que tiene que ver con el sistema
público de cuidado integral, o lo que tiene que ver, también, con políticas de
conciliación entre la vida laboral y familiar. Por último, lo que tiene que ver,
justamente, con la ESI, con la Educación Sexual Integral, y todo lo que es provisión
de métodos anticonceptivos.
Dicho esto, la pregunta es ¿qué estructura uno propone? Y en este aspecto
hay que tener en cuenta no solamente las funciones que da la ley 26.061, sino
además el presupuesto que sostiene, siempre con esta idea de paridad de género,
que también es un elemento central. Y acá tenemos… Y yo puse acá, también, la
Defensoría. ¿Por qué? Porque es algo de un organismo. Más allá de las personas,
más allá de que en realidad esta unidad va a estar a cargo del defensor o
defensora, lo cierto es que es la Defensoría en su totalidad la que nuclea todas
estas áreas. Y tenemos una defensoría adjunta, en lo que tiene que ver con la
jurisdicción, lo jurisdiccional. Pero jurisdiccional no implica judicial. Ahora, después,
voy a explicar un poco más, porque el sistema de protección integral habla de este
vínculo entre organismos de protección, organismos administrativos y judiciales, y la
Defensoría en materia de políticas sociales.
Esta estructura central está pensada en un área administrativa, legal y
técnica, recursos humanos, gestión económico financiera, auditoría interna; un área
de relaciones institucionales, que tiene que ver con todo el vínculo con el Poder
Legislativo, con los tres poderes del Estado, tanto a nivel nacional como a nivel
provincial; relaciones públicas y ceremonial, relaciones internacionales y de
cooperación internacional. También tenemos temas de comunicación y contenido,
no solamente lo que es prensa y redes sociales –las redes sociales, para los chicos,
son tan importantes–, sino además capacitación y contenidos en lo que tiene que
ver con materiales didácticos y de campaña. Y por último, el observatorio nacional,
que también lo vimos.
Ahora, estos cuatro, en realidad, el pilar es este quinto, que tiene que ver con
esta vinculación ciudadana que es la boca de ingreso entre los chicos y chicas –mi
hijo diría chiques–, en lo que tiene que ver con la accesibilidad al sistema,
básicamente accesibilidad a la Defensoría. Puede ser por contacto, por diferentes
vías, personal, por redes, por vía telefónica. Y además tiene que ver con esta idea
de diferenciar consultas y asesoramiento de denuncias o quejas; de denuncias, en
sentido amplio. Y a su vez la intervención del área jurisdiccional y del área de
intervención en políticas públicas. ¿Esto qué quiere decir? Básicamente, una
sinergia entre ambos contextos. Porque justamente, a lo mejor, una acción o un
caso individual, o varios casos individuales pueden hacer darse cuenta de que hay
una falencia en materia de políticas públicas, es algo mucho más complejo. Por lo
cual, también, esta idea con, por ejemplo, los documentados, por ejemplo en
materia de migrantes, por ejemplo en materia de violencia, puede haber muchas
otras cuestiones.
Por eso, el observatorio está puesto dependiendo del defensor y no de cada
una de las áreas, porque se va a nutrir información, tanto de lo que viene de la
adjuntía jurisdiccional como de la adjuntía en materia de políticas sociales.
Esto ¿qué hace? Hace a la función o al rol que se le da a la Defensoría. Y
acá tenemos funciones de carácter de promoción y prevención, y funciones de

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 50
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

carácter de protección e intervención. Siempre con esta sinergia que hay que ver
entre en ambos ámbitos. En eso se han detectado ocho ámbitos que nos parece
que son centrales, sobre la base de este concepto de la no violencia, la no violencia
institucional, la no violencia en la familia; en la educación, con la exclusión; salud,
formación ciudadana; cultura y recreación; medios de comunicación; género;
diversión y multiculturalismo.
En ese aspecto, hay tres elementos centrales que nuclean estos ocho
ámbitos, que tienen que ver, primero, con la conformación de la Defensoría, quiénes
integran el trabajo, quiénes van a integrar la Defensoría. Conformación. La
formación, el recurso humano es fundamental. Esto implica, también, para el
adentro, el tema de tener buena dinámica de trabajo, reglamento interno, protocolos
de actuación y supervisión de casos difíciles como elemento central.
Además, tenemos la integralidad de esto que dijimos del cruce entre la
interacción y la coherencia, transacciones de promoción y protección, o de
prevención e intervención. Y, por último, la necesidad de planificar a corto, a
mediano y a largo plazo. Especialmente, siendo una institución que ahora se pone
en funcionamiento, con lo que implica estos primeros cinco años de consolidación.
En este aspecto, tenemos distintos temas de acciones que se proponen
dentro de cada una de estas áreas. Yo, nada más –acá, me parece interesante–
traje unas pocas, en el plan se desarrollan más. En amarillo aparecen las políticas a
corto plazo y en verde están las políticas a largo plazo. Por ejemplo, en materia de
familia, se habla de modernizar la campaña en materia de abuso sexual integral.
¿Por qué se pone en familias? Porque justamente sabemos que la gran mayoría de
los casos de abuso sexual son intrafamiliares, y ahí hay que estar de una manera
fuerte. O lo que tiene que ver con la elaboración de fortalecimiento familiar a largo
plazo, las políticas de fortalecimiento familiar. Así podemos ver en cada uno de
estos ejes cómo se ve planificación a corto plazo, a mediano plazo y a largo plazo.
También tenemos el tema de los casos individuales, que tienen que ser de
carácter administrativo, o puede ser judicial, o puede ser una intervención, primero
administrativa y después judicial, como nos pasa en las medidas excepcionales, o
incluso medidas solamente administrativas, o solamente y directamente judiciales,
como nos pasa con los casos de abuso, etcétera, que van directamente a la justicia.
También tenemos los casos individuales en materia regional internacional, por
lo que es el sistema interamericano, ya sea por un caso concreto o ya sea como
amicus curiae, también de manera indirecta. Un sistema internacional de protocolo
facultativo de procedimientos de comunicación directa.
Entonces, esto de a corto o mediano plazo ¿por qué? Porque todavía
tenemos muchas provincias a las que les falta su propio defensor provincial, por lo
cual no nos queda otra que, a lo mejor, tener que atender casos que comprometen a
ciertas provincias, y uno va a tener que trabajar ese caso claramente en
consonancia con aquellos responsables en el área provincial. Distinto es el caso de
los que ya tienen los defensores provinciales, donde hay claramente… O sea, a
largo plazo, el ideal es que no haya mucha atención directa del día a día, con el
telefonito, las 24 horas, sino que en realidad, a largo plazo uno solamente tome
aquellos casos paradigmáticos o testigo, que permiten hacer recomendaciones
generales para todo el sistema. En este aspecto, también los casos colectivos, y no
acciones colectivas, son casos colectivos. ¿Por qué? Porque también podemos
tener esta idea de generar mesas de diálogo. Justamente los consensos de poder

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 51
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

tener un trabajo colaborativo para, por ejemplo –y acá pongo algunos ejemplos–, el
presupuesto, vacantes en escuelas, conflictos salariales, paro docente, dificultades
en sector salud, pensiones por discapacidad, o incluso tardanza en la designación
del defensor del niño. De hecho, este mismo proceso viene después de un amparo,
con lo cual me parece que también eso tiene que ver con algo que vamos a ver ahí:
cuál es el vínculo con las defensorías.
Traje el federalismo. El federalismo es un elemento central y tiene que ser
una carta fundamental del defensor nacional. Justamente el federalismo porque
tiene que ver con el respeto por las competencias locales. Y acá tenemos no
solamente esa base, sino también la fuerte alianza con las provincias y los
referentes públicos, lo que implica, en una primera etapa, viajar mucho, muchísimo,
a las provincias. Es un trabajo enorme de viajar muchísimo a las provincias.
También tenemos acá esta cuestión que tiene que ver con lo federal en una
visión mucho más compleja, también integrando la SENAF, integrando el Consejo
Federal y UNICEF, que trabaja claramente a nivel país.
Tenemos esta idea de la sinergia constante con los defensores provinciales.
Hasta ahora tenemos designados nada más que cinco. Y hay, también, una fuerte
alianza con la Bicameral, justamente para lograr esta idea de cómo hacer para que
haya una mayor colaboración, ante la posibilidad de que los defensores puedan ser
designados en las provincias.
La regionalización, como otro elemento también central en materia de
políticas y de esto que se llama fortalecimiento de las intervenciones territoriales, a
través de la regionalización. ¿Qué pasa con los defensores provinciales o los
defensores en general? Acá, también tenemos cinco ámbitos o cinco cuestiones a
analizar. Una tiene que ver con, a largo plazo, hablar de una asociación para dar
una institucionalidad más fuerte. O sea que, por ejemplo, haya relaciones
internacionales como la Federación Iberoamericana del Ombudsman y que,
justamente, esta red pueda formar parte, y que vaya alguien en representación de
toda esta red.
Locutor.- Un minuto, por favor.
Sra. Herrera.- Sí.
Aquellos que no tienen ley de protección integral, que la tengan; aquellos que
tienen ley de protección pero que no regularon la figura del defensor, que la regulen,
ya sea modificando la ley o con una ley propia, y aquellos que tienen y todavía está
sin designar, ir y tender a su designación.
Con respecto a la participación en la agenda legislativa, acá tenemos
distintas cuestiones, que esto hace también a este Consejo consultivo federal que
se crea de niños, niñas y adolescentes; esta idea de que los propios chicos
asimismo puedan ejercer sus demandas a través de ciertas leyes o también lo que
tiene que ver con la comisión bicameral de expertos cuando, por ejemplo, haya
algunos temas complejos, como los que tienen que ver con presupuesto o con
ambiente. Por ejemplo que esta comisión de expertos, desde el Conicet, que hay un
programa especial que se dedica a Ciencia y Justicia pueda dar también su
expertise al respecto.
Dentro de las acciones de la sociedad civil, en un sentido amplio, también acá
tenemos de tres niveles: territorial, de promoción y protección; institucional: de
diagnóstico e información; institucional: de planificación y coordinación de políticas.
Hasta acá tenemos organismos de protección y la justicia, también otro gran

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 52
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

aliado, que debería ser un gran aliado. Todavía seguimos teniendo muchas peleas
en el interior, esto de a quién le toca qué; si tiene que intervenir el órgano de
protección, tiene que intervenir el órgano judicial. Con este Consejo consultivo
federal de niños, niñas y adolescentes también en la parte territorial, lo que tiene
que ver con planificación con organismos públicos, lo que tiene que ver con el
ámbito legislativo y por ende, las universidades y lo que tiene que ver con centros
de estudio para generar investigación y acción.
Por último, la participación de niños, niñas y adolescentes en tres tipos de
iniciativa. Permanentes, como por ejemplo pasa con todos los casos individuales o
colectivos, o incluso que tienen que ver con las políticas sociales. Periódicas, y acá
como ejemplo pongo el tema de la posibilidad de afianzar el rol con las provincias,
generando con alianzas ciertos tipos de estrategias en las provincias, donde haya
una participación fuerte de los chicos, distintos tipos de formatos. Y por último, algo
muy puntual que es el logo de la defensoría, que sea realmente creado por un
concurso con los chicos; que realmente los chicos se apropien de lo que tiene que
ver con la imagen de la defensoría, como un elemento básico.
En definitiva, uno siempre dice que el rol del defensor o de la defensora debe
ser un rol, primero, para ampliar las voces… Perdón, se cortó. Qué lástima. No hay
señal.
Básicamente con esas imágenes yo quería sintetizar esto del rol del defensor,
de la defensoría como equipo de trabajo, que tiene que ser, primero, el de amplificar
las voces de muchos chicos y chicas que tienen una voz todavía muy tenue o muy
baja. Pero en especial, y más aún, tiene que comprometerse a poder darle voz a
aquellos que están silenciados. A aquellos tantos chicos y chicas que todavía hoy
son un “no lugar” en este país, y por lo cual esto implica, nada más y nada menos
que una defensoría que tenga una visión clara de un compromiso y una
responsabilidad, porque sólo así va a poder hacer un aporte concreto y cierto hacia
una sociedad más justa, más igualitaria pero por sobre todo más humana, mucho
más humana con aquellos que más lo necesitan. Muchas gracias. (Aplausos.)
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Está abierta la serie de preguntas de
senadoras y diputadas.
Yo voy a hacer una pregunta mientras las demás van pensando.
Quería preguntarle cuál es la relación que usted propondría, de ser elegida
defensora, con la Bicameral, exactamente. No sé si lo dijo, porque iba tan rápido
que por ahí se me pasó. (Risas.) Y qué modificaciones legislativas piensa usted que
se podrían hacer en función de las realidades que conocemos.
Sra. Herrera.- Básicamente me parece que con respecto a la primera pregunta,
primero, la Bicameral tiene un vínculo directo con el defensor, con la defensora, con
los informes. Ya de base uno “tiene que dar informes a”, con lo cual acá ya hay una
sinergia, hay una cuestión de control de un control. Uno controla y a su vez a uno lo
controlan, y me parece que le hace bien a la democracia también que haya ese
control.
Además, por otra parte, este muy buen ejemplo del proceso de selección
tiene que ser un gran insumo para trabajar de manera cooperativa con los cinco
defensores que ya hay, para poder realmente lograr que tengamos los veinticuatro
defensores en los ámbitos locales. Me parece que eso es central, que es lo que le
va a permitir al defensor nacional poder hacer una labor realmente de control, de
supervisión y de sinergia justamente entre provincias con lo nacional.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 53
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Por último también, al ser una Bicameral que depende del Congreso hay
aquellas legislaciones que seguramente van a ser propuestas por algunos
integrantes. Me parece que ese aspecto hace que uno tenga un vínculo distinto a
los fines de también acompañar ciertas propuestas legislativas por parte de quienes
integran la Bicameral. Porque en principio son personas que conocen el tema, que
en general suelen ser legisladores que trabajan sobre temas de infancia, por lo cual
conocen esto y por lo cual sus proyectos de ley son más fáciles para poder ir
trabajando de manera colaborativa.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muchas gracias.
Va muy rápido ella, y entonces tenemos que pensar…
Sra. Herrera.- Pobres, bueno, perdón… Es que el tiempo es tirano. (Risas.)
Sra. Diputada Carrizo, Carla.- Me parece muy bueno, lo hemos visto en otros
informes en el diseño de cómo va a ser la institución, el tema de la agenda de
prioridades y también la idea de regionalización. Porque lo cierto es que el mandato
dura cinco años y las infancias no son iguales ni las necesidades son homogéneas
en todo el país. Entonces, quisiera saber si como postulante y candidata a
defensora, tenías un mapa de prioridades por región. Porque no son lo mismo las
prioridades del NOA, del NEA, Patagonia, Centro. Habías conjeturado cuáles serían
las dos o tres prioridades, así como el mapa de la diversidad y la prioridad de la
infancia y adolescencia en el país.
Es un poco compartir.
Sra. Herrera.- Sí, a ver, yo viajo mucho y creo que en el currículum está un poco.
Tengo mucho vínculo con el interior, y el interior tiene realidades muy diversas. Por
ejemplo, la vez pasada me llamó la presidenta del Consejo de Corrientes porque
todavía no tiene aceitado todo el sistema de lo que tiene que ver con lo
administrativo y judicial; qué le toca a qué. Entonces ahí empieza a tener problemas
muy severos.
Yo creo que uno puede detectar ciertas conflictivas institucionales en algunas
de las provincias, pero creo que también es cierto lo que tiene que ver con población
indígena, que tiene que ver con algunas prioridades en algunos lugares y no en
otros. Pero hay ciertas bases comunes para todos. Me parece que lo que tiene que
ver con pobreza, con NBI, con indigencia, hay cuestiones que ahí sí son comunes
para todos más allá de que en algunos lugares sean más graves que en otros.
También esto hace que la regionalización te permita también hacer sinergia
interna de cuáles son las cosas que sí tienen en común y cuáles no. Pero también
en las diferencias está justamente esta idea de poder hacer algunas políticas que
sean “adecuadas a”. Porque si no, eso nos pasa mucho cuando hacemos leyes,
¿no? Cuando uno pone un plazo. Ese plazo para cierta familia puede ser muy poco
y para otra puede ser un montón. Nos pasa con adopción, por ejemplo. Es cierto, los
seis meses de plazo… Ahora, no es lo mismo que haya un grupo de hermanos; no
es lo mismo de un chico que ha sido abusado; no es lo mismo un tema de un
chiquito más grande.
Entonces eso hace que a lo mejor uno a veces tenga que, en las leyes… Eso
es lo que no hay que hacer justamente desde la defensoría.
Justamente, la inversa, tratar de hacer esta idea de que hay cuestiones que
están unificadas porque son problemáticas comunes, como la educación, con su
sistema de cuidado, pero otras cosas tienen que ver con la individualidad regional y
me parece que en eso es importantísima esta idea de la sinergia que se tiene que

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 54
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

tener. Por eso la importancia de los defensores provinciales. Me parece que esto es
fundamental.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muchas gracias.
Locutor.- Antes de continuar, les pedimos por favor a las y los postulantes que
respeten los tiempos asignados para cada exposición.
A continuación escuchamos al señor Gabriel Lerner.
Sr. Lerner.- Muy buenas tardes a todos, a todas; a las señoras senadoras y
diputadas, muchas gracias por la atención.
Decirles que estos quince minutos los voy a emplear para complementar con
una serie de reflexiones el informe que ustedes ya tienen, es decir, no voy a
superponerme con algunas cuestiones que ya dije, que ya escribí en el informe. Ya
fue muy apretado aquello y me quedaba con ganas de dar algunas explicaciones
más de sentido y de fundamento de lo que yo quería construir como propuesta de la
Defensoría. No voy a hablar del defensor o de la defensora: yo voy hablar de la
Defensoría. Me parece que es más apropiado.
Señalar que claramente el plan que yo presenté y las explicaciones que voy a
dar tienen una marca, una impronta, un sello; y esa marca, esa impronta, ese sello,
a mis 56 años tienen que ver centralmente con mi trayectoria.
Yo tuve mis primeros caminos en el campo de la infancia en el año 96,
primera defensoría zonal de la Ciudad de Buenos Aires, la de La Boca-Barracas. Yo
fui abogado de esa Defensoría hasta el año 2004. Es más, la ley 114 la tuvimos dos
años después de que empezamos a trabajar con la Defensoría.
En paralelo yo militaba en un organismo de derechos humanos especializado
en violencia policial, en represión policial, gatillo fácil, detenciones arbitrarias. Y, a
partir de allí, tuve un contacto con la adolescencia más humilde, sobre todo
involucrada con problemas penales, como víctima o como sujeto activo de la
comisión de delitos. Me dediqué muchos años a hacer defensa penal y en el año
2005 inicié una carrera de diez años como funcionario; fui primero director Nacional,
después Subsecretario y finalmente Secretario Nacional de la SENAF. Todo en un
proceso muy rico y, desde el punto de vista mío, muy positivo en materia de
transformaciones institucionales de las que venimos hablando todos aquí, más allá
de los balances que cada uno tenga de esa trayectoria.
Obviamente, también hubo momentos de estudio y de escribir, pero
centralmente mi desarrollo en el campo de la infancia ha sido un desarrollo de
defensa práctica de derechos, de participación en el movimiento social, en el
territorio, en la militancia y en el activismo. Ese es el perfil que ha tenido mi historia y
es el que, más allá de mi voluntad, le pongo a la idea de Defensoría que hoy vengo
a proponer y defender.
Voy a desarrollar cinco ideas sencillas que ilustran, inspiran y, para mi
modesto entender, explican mi propuesta. La primera es que la Defensoría de
Niños, Niñas y Adolescentes de la ley 26.061 tiene vastísimas facultades, tiene una
enorme cantidad de funciones y está la tentación, como suele suceder en el campo
de los derechos humanos, de relativizar las competencias y que el funcionario diga:
“Esta competencia la voy a desarrollar y esta otra no la voy a desarrollar.”
Yo entiendo que, aunque nos lleve un tiempo, aunque sea una construcción
difícil, el conjunto de funciones que la ley le asigna a la Defensoría deben ser
cumplidas por el Defensor. Yo creo que del otro no tenemos gente con la que
negociamos, tenemos niños, niñas y adolescentes; hay un principio de exigibilidad.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 55
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Y, si la ley dice que hay que cumplir con estas tareas, yo entiendo que hay que
cumplirlas, incluso algunas que quizás yo no las hubiera puesto en la ley.
En primer lugar, respecto de la atención de casos individuales y colectivos,
aquí hay un tema de escucha que para mi gusto va a ser muy importante. Va a tener
mucha densidad de escucha la Defensoría; si no la tiene es porque va a tener que
bajar el perfil. Va a venir mucha gente –niños, niñas, familias– a traer problemas,
inquietudes y propuestas a la Defensoría, lo que no quiere decir que la Defensoría
convierta todas esas demandas en casos; buena parte van a ser derivados, pero
esa derivación va a requerir un acompañamiento. De modo que con mecanismos
ágiles y sencillos entiendo, en primer lugar, que va a haber una alta intervención en
casos individuales y colectivos.
En segundo lugar, como la mayoría de los colegas expresan, va a haber un
área fuerte de supervisión y monitoreo de políticas públicas. No sé si inicialmente,
como se preguntó por allí, de todo el sistema de conjunto; quizá ese monitoreo
empiece por algunos segmentos del sistema que aparecen en cabeza del defensor
o de la defensora, como de mayor debilidad. Lo cierto es que hay una función muy
importante de monitoreo y de supervisión que, a mi modesto entender le quiero
agregar otro aspecto más que la ley no dice, quizás se puede presumir que lo dice,
que ese monitoreo y esa supervisión es con recomendaciones, con observaciones
claras y con rendición de cuentas. No es patrimonio del funcionario el decidir si esos
informes van a ser o no difundidos, tiene que haber una página web donde
rápidamente los informes y las observaciones sean puestas a conocer a la
comunidad; hay una devolución, es parte de la tarea, incluso, de promoción que
tiene la Defensoría.
Por otra parte, sobre lo que también hemos hablado mucho, debemos
recabar y analizar información. Aquí me permito una excepción. Yo soy de la idea de
que la Defensoría no debiera superponerse con las tareas de otros organismos. En
principio, el Estado tiene múltiples áreas que se dedican a recabar y a generar
información, pero hay algunas vacancias y me parece que el Defensor no va a
poder intervenir en algunas áreas si no genera –yo he puesto un área en la
estructura para generar investigaciones– su propia información para poder
intervenir.
Por ejemplo –curiosamente tiene poca prensa esto que voy a decir–,
prácticamente carecemos de toda estadística seria en materia judicial, en materia de
adopciones o en materia de adolescentes infractores. Porque cuando queremos
saber cuántos chicos privados de libertad hay, hay que ir a preguntarles a los
gobiernos porque los jueces no publican ninguna información al respecto, por
ejemplo.
Finalmente, una labor que entiendo va a tener una alta jerarquía es la del
litigio en sede administrativa y judicial, individual y colectivo. Los que hemos litigado
durante mucho tiempo sabemos que el valor de las observaciones y de las
recomendaciones tienen más valor cuando se sabe que el actor que hace la
recomendación o que hace la sugerencia tiene además capacidad de litigar para
que se cumpla, si no se cumplió. Y uno de los aspectos diferenciales que tiene la
Defensoría del Niño, junto con la Defensoría del Pueblo, es que tienen capacidad de
litigio individual y colectivo de manera expresa. Yo creo que sus alcances le
permiten, incluso, ejercer el amparo del artículo 43 de la Constitución Nacional.
Segunda idea que quiero sostener en esta misma dirección: yo estoy

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 56
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

absolutamente convencido de que el Defensor debe defender fuertemente a los


chicos y a las chicas, pero que esa defensa debe apuntar a fortalecer el sistema de
protección de derechos; en la estrategia del Defensor, las acciones deben apuntar
siempre a fortalecerlo, nunca a debilitarlo, nunca a sustituirlo. Y me refiero en
particular –creo que hoy habló un poco Graham de esto– a lo que llamamos la trama
de la protección especial.
Yo uso el sistema de protección en un doble sentido: el artículo 42 de la ley
incluye sistema educativo, seguridad, servicios públicos, etcétera. Cuando hablamos
del sistema de protección como órganos administrativos de protección en territorio,
yo empleo lo de la trama de la protección especial o del sistema de protección
especial, o del sistema de protección, en sentido estricto. Y allí nosotros tenemos,
como dijo Marisa, una frondosa y compleja trama de servicios.
Nosotros, en el año 2010, en la SENAF –a mí me tocó ser subsecretario en
aquel entonces–, hicimos un relevamiento en 2.114 municipios del país y 456 tenían
área de niñez. Esto era una enorme novedad; 30 años atrás no hubiéramos
encontrado ni 50. Y tiene que ver con un logro muy importante de los procesos de
descentralización, de desconcentración, corresponsabilidad y participación
comunitaria en la protección. Ese es un capital que tiene la defensa de los derechos
en la Argentina y que el defensor, en sus acciones, debe tender a fortalecerlo.
¿Cómo? Requiriéndole a los gobiernos que inviertan más allí, que los empoderen
con normativas adecuadas y que jerarquicemos a los trabajadores de esas áreas;
no hay trabajador más precarizado en el mundo de la infancia que el que trabaja en
las áreas de protección especial. Está más precarizado que el de Educación y el de
Salud, ni hablar el de la Justicia. Es el más precarizado de todos los trabajadores y
es el que trabaja en las situaciones de mayor vulnerabilidad de niños, niñas y
adolescentes. Entonces, la idea es trabajar en defensa de los derechos de los niños,
pero fortaleciendo el sistema de protección.
Tercera idea que quiero presentarles: la Defensoría es de todos los niños,
niñas y adolescentes, es de los 13 millones de chicos y chicas del país. Pero la
Defensoría que yo voy a liderar –si me toca– va a tener una muy marcada prioridad
en acercar la Defensoría a los niños de grupos más vulnerables. Allí hay una deuda
inmensa en la Argentina, hay enormes brechas; se habló ahí de desigualdades y
hay que ir por esos grupos. Me refiero claramente a los niños y niñas con
discapacidad, a los niños y niñas migrantes, a los niños y niñas de la comunidad
LGTBI o de la diversidad sexual, a los niños y niñas de los pueblos originarios, a los
que están en la calle o en la extrema pobreza, a los infractores a la ley penal que
muchas veces están privados de la libertad y otras veces no, a los carentes de
cuidados parentales, a los que están privados de libertad con sus progenitores, o a
los que tienen a su papá y a su mamá privados de libertad y tiene poca protección
familiar. Ahí hay un mundo de niños a los cuales la Defensoría tiene que acercarse y
tiene que priorizarlos manteniendo siempre una perspectiva y un enfoque de género
y de diversidad sexual.
Cuarta idea: yo estoy absolutamente convencido de que por la historia que
tenemos, por las condiciones que tenemos, podemos construir una Defensoría con
prestigio técnico, incidencia social y autoridad política. Es cierto, habrá que pelear
todos juntos por tener los recursos necesarios, habrá que tener una inteligencia en
el diseño de las estrategias para recabar información; el defensor tiene que actuar
con prestigio técnico y con información precisa. El defensor no puede estar

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 57
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

improvisando en torno a sus consideraciones.


Otra consideración, para mi gusto, de condición necesaria para que adquiera
ese prestigio y esa incidencia es que escuche a muchas personas, en particular a
niños, niñas y adolescentes. A mí me parece que una defensoría que no tiene
mucha interacción tiene escasa legitimidad. Y, finalmente, que tenga una amplia
autonomía respecto del Poder Ejecutivo y del Poder Judicial. Yo discrepo con la idea
de que el defensor está siempre articulando con la SENAF, siempre está articulando
con un servicio local. Me parece que vamos a un camino donde el defensor es uno
más de tantos organismos que ya funcionan en el sistema de protección. A mí me
parece que el defensor tiene que monitorear, tiene que supervisar y hacer
recomendaciones. No quiero decir con esto que tenga una actitud beligerante, pero
no es una actitud de colaboración con el Poder Ejecutivo y con el Poder Judicial la
que estoy planteando.
Para construir ese poder planteo tres motores: la participación directa de
niños, niña y adolescentes, convertir a la Defensoría en una referencia para que los
chicos participen –no me da el tiempo para explicar cómo– y la creación de un
consejo consultivo de organizaciones de la sociedad civil; un consejo consultivo con
amplitud, con presencia no solamente de quienes se identifican como defensores de
la niñez, sino también con los que trabajan en clubes de barrio, los curas villeros, los
movimientos sociales. Es una idea amplia de organización social que debe estar en
un consejo consultivo. Y, finalmente, la Red de Defensorías y Defensores del
Pueblo. Las defensorías que tenemos hoy y los defensores del pueblo que vamos a
construir.
Aquí también quiero decir, si después hubiera tiempo me gustaría
conversarlo, que no es un problema solamente de voluntad, “quiero trabajar con el
defensor”. Yo creo que hay posibilidad de construir diferenciación de competencias.
Hay posibilidad de construir diferenciación de competencias entre el defensor
nacional –y en mi propuesta hay algo de eso, de intentar diferenciar las
competencias– que me parece que ayudaría mejor a entender. Hoy una senadora
dijo: si haces todo eso, ¿para qué vas a tener un defensor en la provincia? Es una
pregunta atinada salvo que uno entienda que hay diferentes competencias.
La última idea que quería desarrollar –me quedé con unas cuentas y no hablé
nada de la estructura, quizá pueda hablar un poquito después– tiene que ver con
que esta Defensoría si consigue prestigio político, si logra tener incidencia social, si
logra tener autoridad, tiene que ser una Defensoría que se juegue por los pibes y las
pibas sin ningún tipo de especulaciones. La Defensoría no está para hacer
corrección política y para que todo el mundo la aplauda; la Defensoría está para
defender a los niños, niñas y adolescentes. En muchos casos la van a palmear y al
defensor o a la defensora la van a felicitar de muchos lugares; pero cuando quiera
impugnar la práctica de estigmatizar y demonizar a niños humildes en los grandes
medios, va a tener alguna mala recepción en algún lugar. Y le va a pasar lo mismo
cuando quiera poner en tela de juicio el aval a las familias que necesitan del Estado
y el apoyo para poder cumplir con la manda de la convención. Porque hay una parte
de nuestra sociedad que es renuente a que apoyemos a las familias más humildes
para que puedan cumplir con esa función, y el defensor tiene que estar de ese lado.
El defensor tiene que estar del lado de que de una vez por todas se cumpla la ley en
relación a la publicidad de alcohol. No le podemos poner el cascabel al gato. Seguía
habiendo publicidad de alcohol. Nos rasgamos las vestiduras por los consumos

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 58
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

problemáticos y sigue habiendo publicidad de alcohol en los lugares a donde van los
chicos: en la cancha cuando van a ver fútbol o recitales de rock. Y nadie le pudo
poner el cascabel al gato, porque no hubo una institución de estas características,
que debe tener otro sistema de rendición de cuentas: asumir que representa los
intereses de un grupo social muy importante y que en algunas cuestiones no puede
transigir. En este conjunto de situaciones incluyo la discusión respecto del mundo
empresarial de convertir a los niños en meros consumidores. Hay una discusión que
hay que darla, aunque sea en minoría como la de la baja edad de punibilidad y otras
tantas que nos tocan y que me parece que el defensor, no desde el principio, pero
en un camino de construcción, puede convertirse en una voz muy importante para
eso.
Para finalizar, y esto avala este último planteo, quiero leerles una frase de mi
amigo que nos dejó hace unos años, Eduardo Bustelo. Eduardo entre muchas otras
cosas decía: la infancia y la adolescencia como categorías sociales tienen una
limitación constitutiva, ya que no pueden representarse. Así, en las mesas de
negociaciones los niños, niñas y adolescentes no tienen muchas veces quién los
defienda. La infancia no ocupa, entre comillas, ningún rol social, ni productivo, ni
estratégico, ni puede organizar piquetes para tomar un determinado espacio público
para reclamar por sus postergadas necesidades. Como los niños, niñas y
adolescentes no tienen poder, entre comillas, el destino de sus derechos es
frecuentemente un dramático silencio. Y es por esa fragilidad constitutiva de la
infancia como actor social y por lo que la misma representa que necesita ser
colocada en un lugar político central para proteger y promover sus derechos.
Yo creo que una de las funciones fundamentales del defensor es recoger el
desafío que nos da Eduardo ahí. Y sin delirarse, sin perder de vista las correlaciones
de fuerza y los caminos a desandar, tener eso como norte me parece que es
fundamental.
Muchas gracias. (Aplausos.)
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Senadora Kunath.
Sra. Senadora Kunath.- Muchas gracias por la exposición.
Usted hacía mención a dos temas sobre los cuales me interesaría que pueda
profundizar. En primer lugar, se mencionó a las personas con discapacidad, y quería
preguntarle con qué herramienta se imagina que cuenta un defensor para poder
cumplir con una educación inclusiva. Y, en segundo lugar, una cuestión que también
fue anunciada y que está mencionada en el plan, en relación a esto de la escucha
activa y de la participación concreta de niños, niñas y adolescentes. Creo que se
mencionan audiencias regionales como uno de los formatos que se propone.
Quisiera que nos profundice sobre esta propuesta.
Gracias.
Sr. Lerner.- Cómo no.
Niños y niñas con discapacidad: creo que más allá de alguna evolución
importante en la transferencia de recursos a través de las pensiones durante los
últimos años y algunas mejoras vía mejorar el PROFE –el Programa Federal–,
etcétera, lo cierto es que no logramos construir una adecuada institucionalidad que
aborde la discapacidad de conjunto y la de niños, niñas y adolescentes. Allí nosotros
mantenemos organismos viejos, normativas viejas. Por ejemplo, en una perspectiva
de ajuste, con la que yo discrepo, el gobierno actual se vale de una normativa lábil
que teníamos en las pensiones y recorta las pensiones a los niños. Entonces, los

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 59
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

chicos con discapacidad no tienen pensiones, no tienen un ingreso permanente.


Entonces, creo que el defensor no va a poder hacerlo, el defensor lo que
puede hacer es producir un proceso de movilización para provocar condiciones para
que se modifique la política pública, para que haya una nueva institucionalidad y
nuevas normas. Creo que en la discapacidad estamos con mucha gente muy
valiosa trabajando allí, pero con un montón de parches. Me da la impresión de que
nos ha costado armar un sistema más sólido.
En relación a la educación, lo planteé un poco en el trabajo –usted no tiene
porqué recordarlo– tenemos diferentes desafíos. Hay un desafío central de
cobertura que a mi modesto entender está centrado en el problema de la oferta de
3, 4 y 5 años. Allí con oferta alcanzaríamos la cobertura del 100 por ciento,
prácticamente, que tenemos en la escuela primaria, y en la escuela media tenemos
un problema de otras características. Tenemos una escuela media que funciona
para la época en que yo iba al secundario y que al que no le daba el papá lo
sacaba. ¿Cierto? O el que prefería trabajar a los 15 años se iba a trabajar. Yo me
crie en la Patagonia y tengo la experiencia de compañeros de la división de tercer
año de secundario que un día no venían más y al otro día cuando iba con mi papá a
la estación de servicio estaban cargando nafta o estaban vendiendo diarios. Y era lo
más normal del mundo. Bueno, hoy tenemos un mandato legal de que es obligatoria
la enseñanza hasta los 18 años y la escuela es igual a la que yo iba. No hay una
escuela capaz de seducir a los adolescentes, y ahí me parece que hay una deuda
grande.
¿Qué puede hacer el defensor? Como ustedes verán, yo estoy pensando qué
puede hacer el defensor, no solamente qué necesitan los niños. Qué necesitan los
niños, pero qué de todo eso puede hacer el defensor. Creo que el defensor puede
producir un amplio proceso de escucha y movilización de los adolescentes en el
país para que nos den algunas ideas de lo que quieren y no quieren de la escuela.
No creo que el defensor solo pueda producir las reformas en el sistema educativo,
podrá hacer algunos aportes, pero para mí el aporte de los chicos es muy
importante.
Finalizando con la idea de la participación de los adolescentes, hay una
participación que son los casos. Yo quiero una Defensoría que reciba niños en
particular, adolescentes que vengan, que opinen y que digan. Ahora, hay alguna
idea de que nosotros tenemos que generar los espacios para que los chicos
participen. Por suerte, en nuestro país, los adolescentes participan de innumerables
organizaciones y movimientos colectivos. Y creo que el defensor lo que tiene que
hacer es relevarlas, acercarse y poner la oreja. Hay congresitos, hay asambleas y
hay movimientos de estudiantes; hay infinidad de instancias de participación
colectiva de los chicos y creo que lo que hace falta es que nosotros nos
acerquemos, no que generemos solamente la propia, la que necesitamos nosotros.
Sí necesitamos juntarlos para algunas inquietudes que la Defensoría tiene. Cuando
la Defensoría necesita saber algo que los chicos no dicen en otro lugar, yo creo que
las audiencias como las que hace la Defensoría del Público, regionales y temáticas,
pueden ser un buen mecanismo para ir sondeando opiniones y recabando
opiniones.
Por último: redes sociales. No podemos seguir pensando la política para
niños, niñas y adolescentes sin redes sociales. Yo sé que no es correcto decir
marcas, pero sin Instagram y sin YouTube estamos bastantes complicados si no

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 60
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

renunciamos a llegar a buena parte de los chicos. Hoy a un chico de 8 o 10 años


que te comenta alguna novedad, le preguntas: ¿dónde lo aprendiste? Y te dice: en
YouTube. Bueno podría aprender cosas de la Defensoría y de sus derechos en
YouTube también. Nos cuesta, tenemos algunos años, pero podemos contratar
gente que nos ayude a hacer las cosas bien.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Diputada Acerenza.
Sra. Diputada Acerenza.- Hola. Bienvenido.
En primera instancia, me gustaría que me dé su opinión sobre cuáles cree
que fueron las consecuencias de no haber designado a un defensor en los últimos
13 años. Y, en función de eso, ¿cuál cree que deberían ser los principales objetivos
a cumplimentar en la Defensoría actual?
Gracias.
Sr. Lerner.- Bueno, la pregunta es contrafáctica; igual, voy a ensayar algo, porque el
tema es cuál hubiera sido el defensor.
Si el defensor es una agencia más que se enreda con el INADI, la Secretaría
de Derechos Humanos, la SENAF y el servicio local de no sé dónde y un foro…; si
el defensor no construye una competencia original en el sistema que reciba el
mandato de la ley y que reciba el mandato de la Observación General N° 2
−recordemos que el defensor no viene directamente de la Convención, viene de una
lectura de la Convención que se hace en la Observación General N° 2−, más bien,
si recepta lo que dice la ley, recepta la Observación General N° 2, y construye una
entidad que agregue un elemento diferencial al sistema… Si eso hubiera sido así
hace trece años, nos perdimos de tener una pieza fundamental que, por ejemplo, a
mí en la SENAF, cuando era secretario, me estuviera todos los días diciendo: “No
están cumpliendo con esto; no están cumpliendo con esto otro”… Yo sé un montón
de cosas que no cumplimos; no las voy a comentar ahora, pero lo que quiero decir
es que el defensor hubiera estado marcando las cosas que se debieron haberse
hecho y que no se hacían: al Consejo Federal, a la SENAF, etcétera.
Entonces, lo dirá la historia qué podamos construir para adelante con el
defensor y cuánto nos quitaría no tenerlo. La verdad es que no sé decirlo. Sí soy
optimista en creer que el defensor necesariamente es una figura que va a estar bien
construida, y debería reconocer que nos perdimos mucho, nos perdimos mucho.
Sra. Diputada Acerenza.- ¿Cuáles serían los objetivos principales para la
defensoría que viene?
Sr. Lerner.- La construcción de la Defensoría en sí mismo es un objetivo importante.
La construcción de la Defensoría creo que hay que tomarla con un poco de calma.
Este tipo de instituciones no se construyen rápidamente. Una estrategia respecto de
cómo hacerla: como yo decía, técnicamente rigurosa, socialmente con incidencia,
políticamente poderosa.
Las alianzas: yo ahí tengo algunas dudas; las alianzas con los niños, con las
organizaciones y con los defensores. Pero tengo una duda con la Comisión
Bicameral. La tentación mía era plantear cuadro patas y no quise hablar con
ustedes, porque creo que ahí depende qué es lo que la Comisión Bicameral quiere
hacer con el defensor. Pero yo creo que sería de una enorme potencia para el
defensor o la defensora, porque esta es una comisión con un amplio espectro
político ideológico, que ha hecho un proceso exitoso y, obviamente, para el defensor
sería una alianza muy importante.
Creo que una prioridad es construir la institución y hay algunas acciones que

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 61
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

son urgentes. No se puede ser defensor y al otro día no hacer algo por los pibes que
están en situación de calle. En este sentido, hace muchos años que no veía tanta
niñez en situación de calle y he marcado también algunas otras cosas: seguimos
teniendo en algunos lugares del país privación de libertad prolongada de infractores
en sedes policiales. No es un tema de mucha economía, son números chicos, pero
en la Argentina tenemos 1.400 chicos privados de libertad. Y en esa situación, en
situación de estar en comisarías, no deben ser un tercio y no lo hemos resuelto.
Y tenemos una serie de lugares de centros de privación de libertad donde no
tenemos ningún tipo de monitoreo. Acá hay algunos que están por aquí. Lerner tuvo
alguna discusión conmigo sobre este tema, pero había monitoreo, probablemente
no el más adecuado de todos, pero lo cierto es que hay lugares donde no hay
ningún monitoreo. ¡Nada! No hay ningún tipo de control y hay chicos privados de
libertad.
En ese sentido, no me lo preguntaron, pero lo quiero agregar, es muy buena
la noticia de la puesta en funcionamiento de la Comisión Nacional contra la Tortura,
del Mecanismo Nacional de Prevención contra la Tortura. Y lamento no haber podido
adelantarnos en la agenda y que el defensor del niño no esté en ese Comité
Nacional, como sí está la Procuración Penitenciaria.
El organismo nacional que debe velar por la situación de las personas
privadas de la libertad es un organismo, en principio, no especializado en tema de la
niñez, que es la Procuración Penitenciaria, con la cual si yo fuera defensor iría al
otro día a pedirle un convenio para trabajar juntos en la privación de libertad de los
niños a nivel nacional pero también a niveles locales.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Diputada Peñaloza Marianetti, tiene la
palabra.
Sra. Diputada Peñaloza Marianetti.- Buenas tardes.
Una consulta: cuando inició usted su exposición dijo que había que velar por
los derechos que establecía la ley, porque la ley lo decía, pero que usted hubiese
sacado algunos. ¿Cuáles serían esos derechos?
Sr. Lerner.- No, no hubiera sacado algunos. Me hubiera preguntado por este
problema de los casos, pero si la solución a la que arribé es la que está en la ley…
Esta ya es una Defensoría con mucha escucha, entonces, hay que asesorar a todo
el mundo, atender a todo el mundo y no me quiero meter; jugaría en contra de mi
candidatura decir algunas de las cosas que hay que hacer, pero sí en un mínimo de
territorialidad.
Si hay situaciones graves de niños…; y está también el tema de las
competencias. Vamos a suponer que no haya defensor en una provincia y que
inevitablemente hay que ir a escuchar a los niños allí. Y si hay una situación
delicada, ¿no nos vamos a constituir allí? Es decir, el defensor del Pueblo tiene
sedes en varios lugares del país y tiene técnicos en varios lugares del país; la
Defensoría del Público, lo mismo; el INADI tiene sedes por todos lados y la
Procuración Penitenciaria también. Y no sé si originalmente pensaron que iba a ser
así, pero los problemas están, y, si hablamos de desigualdades y se escucha solo
en Buenos Aires, hay que encontrar una solución. Las redes nos pueden ayudar.
En efecto, la mayoría de nuestros pares, los organismos del Congreso tienen
estos formularios virtuales, web, que funcionan bastante bien; la gente manda sus
inquietudes; entonces, si vale la pena se hace una comisión; bueno, es un tema
importante que no está acotado en absoluto.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 62
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Es más, no está acotada en absoluto la intervención respecto de privados. El


defensor del Pueblo está acotado a intervenir respecto de la Administración Pública,
no está acotado ni siquiera respecto de privados. Entonces, las competencias son
muy amplias.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Tiene la palabra la señora senadora.
Sra. Senadora Verasay.- Muchas gracias por acompañarnos.
Simplemente quería preguntarle ¿qué opinión le merecía o qué rol debería
haber cumplido el defensor del niño en el fallo “Cejas Meliare”?
Sr. Lerner.- En el fallo “Cejas Meliare” creo que el defensor del niño debió haber
estado patrocinando a Cejas Meliare, pero bueno…
Sra. Senadora Verasay.- La pregunta, puntualmente, es: ¿qué rol debería tener el
defensor frente a una posible obstaculización del ingreso a centros de privación de
la libertad de jóvenes como impedimento?
Sr. Lerner.- Vamos a discutir el caso en que yo intervine; yo no tengo
inconvenientes.
Sra. Senadora Verasay.- Claro, es para aclarar un poco el fallo.
Sr. Lerner.- Si me lo dice así, lo entendemos todos.
Usted me está diciendo: “Usted no dejó entrar…”, en realidad, lo que sucedió
fue que había dos leyes vigentes. La Procuración Penitenciaria requirió un ingreso
por esa… La Procuración Penitenciaria años atrás había requerido un ingreso a
unos centros de privación de libertad que dependían indirectamente de mí −había
una línea jerárquica− invocando la ley de creación de la Procuración Penitenciaria.
Se pidieron consultas y se respondió que no. El procurador del Tesoro, el más alto
dictamen del Estado nacional, entendió que no era competente; se le notificó la
resolución, y la Procuración Penitenciaria no volvió a discutir esa resolución.
Cuatro o cinco años después, la Procuración Penitenciaria se presentó y
planteó el ingreso por la ley de creación de la Procuración Penitenciaria y por la ley
de creación del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura, ley 26.827. Y
nosotros dijimos, porque teníamos un dictamen del procurador del Tesoro de la
Nación por la primera ley −que, aparte, había sido consentida en su momento la
Procuración Penitenciaria−: “Por esta ley, no; por esta, sí”. Y se armó un litigio. Pero
nosotros no dijimos: “no”. Dijimos: “Por esta ley, no; por esta, sí”. Si a la comisión le
interesa, traigo copias de cada escrito que firmé yo, explicando esto.
Sra. Senadora Verasay.- Disculpe, no.
Está bueno refrescar la memoria por el caso. Simplemente quería preguntarle
por el rol del defensor justamente en esa situación.
Sr. Lerner.- El defensor no estaba obligado por el dictamen del procurador del
Tesoro, que fue el que yo acaté en ese momento.
Si yo hubiera estado en el lugar del defensor probablemente hubiera apoyado
el reclamo de la Procuración Penitenciaria.
- Se realizan manifestaciones fuera del alcance del micrófono.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- ¿Alguien más?
Bueno, muchas gracias..
Perdón, perdón…
Tiene la palabra la señora senadora Fernández Sagasti.
Sra. Senadora Fernández Sagasti.- Gracias.
Usted sabe que hay un caso concreto en la Provincia de Mendoza, donde el
gobierno de la provincia ha mandado un proyecto de ley que, básicamente, lo que

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 63
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

hace es retroceder en cuestiones de derechos del niño. Básicamente, volvemos al


niño como objeto de derecho y no como sujeto de derecho. Esto está en plena
discusión en la Legislatura de Mendoza. Particularmente, podría decirle un montón
de situaciones que se plantean adentro, pero para entendernos en términos de
paradigma es lo que plantea. ¿Qué haría usted si es postulado como defensor del
niño ante un caso en que en una provincia, en una jurisdicción −lo que sea−, se
planteara una legislación de retroceso como esta?
Gracias.
Sr. Lerner.- Sí, cómo no, gracias por la pregunta.
Sin haber coordinado esto con la doctora Graham, de alguna manera los dos
planteamos la defensa de esa nueva y todavía débil institucionalidad, convencidos
de que es el mejor camino de la reforma de la protección especial en el marco de la
Convención.
Como eso ha funcionado de manera dispar en algunos lugares y en otros,
aparece una corriente de pensamiento que intenta volver a la judicialización rápida
de todas las situaciones que se plantean en el marco de los organismos de
atención. Incluso, para mi gusto tiende a ser un poco más regresiva que lo que era
la ley antes de la 26.061, en el sentido de que hay una tendencia fuerte a poner
cualquier situación en los juzgados penales, para que se vaya a dirimir allí el
conflicto.
Hay una tendencia fuerte en el país porque hay como algunos sectores que
tienen una frustración, quizás justificada, por las dificultades de avance de este
sistema descentralizado que no es igual en todas las provincias, que es débil
administrativamente, pero frente a esto hay dos caminos posibles: o los
fortalecemos o los mejoramos, o retrocedemos. Y me parece que empiezan a
aparecer… La norma que plantea la senadora Anabel yo no la conozco; escuché las
críticas, pero me parece que va para el lado de empezar a reducir este tema de
encontrar en los órganos administrativos el espacio para resolver los problemas de
los niños y tendencia a judicializar rápidamente; me parece que va en esa dirección.
Y hace poco estuve en una reunión en donde algunos alertaban respecto de algún
intento, yo no creo que sea volver a la tutela, la tutela era otra cosa, pero salir de
esta idea de la participación comunitaria y descentralizada de la protección de la
infancia para volver a mecanismos supuestamente más eficaces, con los que no
estoy de acuerdo.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muchas gracias.
Sr. Lerner.- A ustedes. (Aplausos.)
Locutor.- A continuación la postulante María José Lubertino.
Sra. Lubertino.- Yo me siento discriminada por un tema: ¡no soy niña, pero no llego
al atril! (Risas.) ¡Perdón! Imaginen si vienen los niños y las niñas a participar y no
llegan.
A ver si esto funciona. No sé si está mi Power. ¿Alguien lo puede encender o
prender? No sé quién está ahí. ¿Cómo se hace para prender esto? A ver, el anterior.
Ahí estamos.
Muy bien. Después de haber escuchado a muchos participantes anteriores
tengo la tentación de cambiar la estructura, pero trabajé mucho para hacer el
PowerPoint, así que lo voy a mantener.
En primer lugar, quiero agradecerles muchísimo a las diputadas y a las
senadoras no solo por este día sino por todo este proceso que nos parece

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 64
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

emblemático, que esperemos que se repita en otras selecciones institucionales. Y


también creo que pedirles a todos el acompañamiento y el apoyo para que esta
criatura que estamos pariendo eche a andar y fundamentalmente por el presupuesto
de lo que va a ser la Defensoría que obviamente es imposible, insuficiente, para
todo el mandato y las expectativas que existen en relación al tema.
Nuestra visión es que este es un paso decisivo para que pasemos a un
estadio de una política de Estado en materia de niñez. Me parece que es
fundamental que este organismo pueda ser un organismo plural, trasversal y que dé
cuenta de una preocupación que trasciende un gobierno y que pueda poner algunas
rutas de acción que sean compartidas.
De la misma manera que entre las mujeres hemos ido generando acuerdos y
sororidades que han permitido… Y no puedo dejar de mencionar en esta casa haber
trabajado en mi caso con Margarita Malharro o con Liliana Gurdulich, cuando no
había tantas mujeres como hoy, pero que se pudo avanzar lentamente en los
cambios legislativos de los cuales ahora tenemos una frondosa legislación en la
materia. Me parece que de la misma manera en la que hay acuerdos trasversales
que tienen que ver con las cuestiones de género y que se ha podido avanzar en
acuerdos trasversales en la legislación en materia de niños, niñas y adolescentes,
tenemos que poder avanzar en esta institucionalidad.
Yo también creo, como Claudia Bernazza, que una sociedad adulta es la que
trata a sus niños y niñas como si todos fueran propios, que no es un problema de
otros o de solamente los que tienen hijos o de algunos. Nuestro mandato está dado
por la ley, y la Convención por supuesto, pero fundamentalmente son tres tareas
claves. Una es esta de garantizar los derechos, es la protección. Otra es la del
control y esta tarea de auditoría y evaluación, tanto de las instituciones públicas
como de las privadas. Aquí se ha dicho que no es una colaboración. Yo creo que es
una manera distinta de ver la colaboración, es una colaboración desde otro lugar.
Para mí el trabajo que en términos de evaluación, de auditoría, que tiene que hacer
esta institución es como un ciclo… Estoy en puntas de pie. (Risas.) Se ríe la
senadora, porque yo además estoy en puntas de pie. Es un ciclo… No, está bien.
Estoy acostumbrada.
Es un ciclo circular. El ciclo circular es que también las instituciones y los que
hemos estado en el Ejecutivo nos tenemos que acostumbrar a que haya otro
organismo o la propia sociedad civil que nos monitoree, que nos controle, que nos
dé nuevos insumos, y eso se incorpora en el siguiente ciclo, en la siguiente gestión.
Es un poco el trabajo circular que hacemos cuando rendimos cuentas ante los
organismos internacionales de derechos humanos; o sea, los organismos
internacionales de derechos humanos intervienen una vez cada 4 años, cada 5
años, el Comité de Derechos del Niño nos da una ruta de la que esta Defensoría se
tiene que nutrir, porque es una ruta indubitada de independencia y que marca un
sendero que es una pauta que ya solo con las recomendaciones que hemos tenido
del Comité de Derechos del Niño en años consecutivos y que han sido incumplidas,
ya tenemos un buen trabajo sin duda de consenso para realizar trasversalmente.
Y la tercera tarea que para mí es importante es esta de supervisar y auditar.
Bueno, el mandato quedó claro.
¿Para quiénes y con quiénes? Yo sé que acá se dijeron muchos datos, voy a
volver sobre algunos datos, porque me parece importante el diagnóstico a pesar de
las dificultades de indicadores que tenemos y que seguramente si se sanciona la ley

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 65
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

que presentaron las diputadas Acerenza y Carrizo, vamos a tener mejores


indicadores, pero entre tanto es importante ver algunos datos, porque el recorte que
hagamos de ese diagnóstico nos va a permitir también saber a qué nos vamos a
dedicar con prioridad.
El 90 por ciento de los chicos vive en ciudades. Esto no quiere decir que nos
olvidemos del 10 por ciento restante, pero una cosa que no se mencionó acá y que
para mí es fundamental es que podemos trabajar con los municipios, con la
Federación Argentina de Municipios. Porque además hemos hecho programas
maravillosos, desde el propio INADI trabajamos con Ciudades Libres de
Discriminación y toda la filosofía de Tonucci en materia de ciudades amigables para
los niños y niñas tiene que ser puesta en valor y es parte del trabajo de cambio
cultural que tenemos que hacer y en el que nosotros podemos ayudar dando
herramientas para que en el municipio muchos de los que son problemas, que
estamos viendo acá, es mucho más fácil que los atienda el municipio, que los pueda
resolver después la instancia provincial más lejana. Muchos de los casos que
tenemos de chicos en situaciones de vulneración están más cerca de la instancia
del trabajo municipal y eso hay que fortalecerlo, darle herramientas, darle ideas.
No reitero lo que se ha dicho acá. El 65 por ciento de los chicos sufre alguna
privación, la pobreza multidimensional. Quiero recalcar en mi diagnóstico las cosas
que no se dijeron y que para mí son importantes. Nadie habló de esto, pero para mí
es fundamental: el 50 por ciento de los chicos vive en situación de contaminación.
Este es tema que por mi especialización en derechos humanos y ambiental… Acá
está Gladys con quien hemos compartido su tiempo de ACUMAR, toda la situación
de Cuenca Matanza-Riachuelo, que ahora lamentablemente al no tener defensor del
Pueblo de la Nación a cargo, las ONG que venimos llevando la causa Mendoza
estamos solos y desamparados. A mí me parece que ese trabajo de la promoción de
la salida de la situación de contaminación de los chicos, la falta de agua y cloacas
de casi un 46 por ciento, o sea, casi la mitad de la población, los chicos no tienen
acceso a agua y cloacas; el 25 por ciento no tiene vivienda. Esos son temas en los
que podemos ayudar, podemos colaborar, sobre todo en el diálogo, en los
presupuestos, en los diálogos con las autoridades nacionales, provinciales, para que
vean algunas de estas cuestiones con esta prioridad de niños y niñas, que se
pongan los anteojos de la niñez y de la adolescencia para mirar los programas y las
políticas públicas.
El 79 por ciento de los niños de hasta tres años no tienen acceso a cuidado
infantil. Por eso, una de las prioridades para nosotros también tiene que ser la
universalización de la educación inicial desde los 45 días y tratar de insistir en este
tema de la doble escolaridad y todo lo que tiene que ver con educación inclusiva,
accesibilidad en la educación; cuestiones que son fundamentales.
Voy muy rápido. Hay algunos problemas como la mortalidad infantil, la
mortalidad materna, muertes que serían evitables, embarazos adolescentes, que
todos ustedes conocen, sobre todo las diputadas y senadoras que están acá, que
han sido parte del trabajo de toda mi vida desde que creamos la Asociación de
Mujeres Jóvenes en 1990, donde nuestro primer trabajo fue trabajar con el
embarazo adolescente cuando éramos unas jovencitas de todas las fuerzas
políticas. Estando Mabel Bianco en la sala tampoco voy a abundar en datos porque
hemos compartido muchos años de El Cairo, Beijing y organismos internacionales y
toda la barrida de legislación que ya conocen y que nos nutre con altos estándares

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 66
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

legislativos, pero con prácticas que, a veces, no se compadecen con la legislación


que tenemos.
Sin perjuicio de ello, quiero decir que no voy a enfocar, si es que me toca ser
defensora, en esta etapa algunas de estas cuestiones porque considero que, a
diferencia de otros temas, hay organización e institucionalidad que está abordando
algunos de esos temas con ciertas iniciativas. Entonces, podemos reforzar y
acompañar, pero creo que algunas de estas cuestiones ya tienen una dinámica que
tiene que ser acompañada, aunque no nos pone en prioridad de la cuestión.
Después si quieren amplío y les cuento cómo pienso esto.
Sí me preocupa, fundamentalmente, el 10 por ciento de niños víctimas de
trabajo infantil con las desigualdades provinciales del NEA, NOA y Cuyo –luego
puedo ampliar sobre esto– y también me preocupa un tema grave como son los 600
mil niños que tienen alguna discapacidad, de los cuales un 40 por ciento no tiene
ninguna clase de cobertura. Estuvimos trabajando sobre esto desde el Observatorio
de Derechos de Personas con Discapacidad y, en la mayoría de los casos, tienen
que ver con discapacidades mentales que, incluso algunas de ellas, podrían haber
sido evitadas con la detección temprana si hubiera cuidado infantil desde los
primeros días. Hemos trabajado largamente el tema y hay mucha capacidad técnica
y mucha ONG que sabe y que trabaja, aunque en soledad, por lo que sería bueno
poder articularlo.
Según la última contabilización, tenemos 9.214 separados de madres y
padres por violencia y ASI, más de 7 mil chicos institucionalizados por falta de
cuidados parentales, casi 4 mil chicos en conflicto con la ley. Creo que todo este
bloque requiere un tratamiento importante. No solamente la sanción de un proyecto
de ley participativo del régimen penal de niños, niñas y adolescentes sino que
también esto requiere de un trabajo para modificar la ley de adopción –tenemos
propuestas al respecto y hemos leído las de otros colegas.
Me parece que es muy importante ayudar, acompañar y fortalecer los
organismos preexistentes a nivel local.
Coincido con varios de los oradores en que están sobrepasados, no es que
les falten competencias y capacidades. Alguien preguntó si había que crear
defensores locales. Les diría que no. Hay que apoyar a los organismos que tienen la
gestión directa a nivel local. Me parece que con los defensores provinciales se está
bien hasta ese nivel.
Se habló también del tema de las delegaciones. Luego de la experiencia del
INADI, yo diría que no haya delegaciones porque si se crean, luego la provincia no
genera el espacio propio del defensor local porque se queda confiado en que la
delegación que viene de Buenos Aires va a resolver, y eso no resuelve, a veces, la
lógica local. No quiere decir que no se pueda hacer una delegación especial para un
tema concreto cuando no hay defensor provincial o no se pueda mandar a un grupo
o ir con alguna clase de intervención. Lo que quiero decir es que no armaría una
estructura desde la Nación en lo local. Si quieren, luego lo amplío.
En el diagnóstico no puedo dejar de mencionar las notables desigualdades
por provincias en lo que hace a indigencia, salud, cobertura de embarazo
adolescente, mortalidad infantil, etcétera.
Tengo muchos desafíos, pero la prioridad uno es fortalecer y aprender de las
defensorías preexistentes, impulsar la creación en el resto de las provincias, crear
una red o Consejo Federal de Defensorías de Niños/Niñas, promover y articular con

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 67
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

las organizaciones de la sociedad civil, crear el Consejo Asesor, observatorios por


cada eje temático, como lo hicimos en el INADI y la red de investigadores con la
sociedad civil y las unidades académicas.
En este esquema, nosotros ponemos en el máximo nivel la red con los
defensores provinciales y el Consejo Asesor con la sociedad civil.
Creemos que tenemos que tener una unidad de auditoría interna para dotar
de mayor independencia al organismo.
Creemos que un organismo de estas características debería tener unas 100 ó
150 personas, pero igualmente estamos dispuestos y pusimos un presupuesto para
ver qué hacemos si tenemos nada más que 22 millones de pesos. Por supuesto que
vamos a ser las tres defensoras/defensores y diez asesores, pero lo vamos a hacer
igual y vamos a llegar a este objetivo, al menos, al terminar la gestión.
Rápidamente les quiero decir que voy a delegar mucho en los dos adjuntos –
adjunta/adjunto–, se imaginan que la paridad va a estar garantizada conmigo ya que
no es que lo voy a prometer sino que ya lo hice en organismos anteriores, acciones
afirmativas para las personas con discapacidad o los chicos que hayan salido de los
sistemas de protección y que puedan tener su primer empleo en nuestro organismo,
acciones afirmativas para las personas trans. Es decir, todo lo que ya hicimos lo
vamos a replicar aquí.
Sobre todo, me voy a encargar de llevar adelante, juntamente con la
Dirección General, todos los temas de persuasión a los gobernadores y
gobernadoras para la creación de las defensorías. Tengo muy buen diálogo con
distintos partidos políticos y creo tener autoridad con varios de ellos porque ya
tuvimos situaciones críticas que logramos resolver satisfactoriamente en algunos
casos y no en otros. Por ejemplo, en la educación religiosa, a veces, puede fallar.
Tuvimos algún intercambio con Urtubey en su momento, pero la Corte ahora dio la
razón a lo que se había dictaminado desde el INADI.
Por supuesto, vamos a trabajar en esa área con los observatorios locales y
también con los observatorios de sociedad civil por cada eje temático.
En las relaciones con el Parlamento y en las relaciones internacionales
tenemos experiencia porque hemos llevado varios casos al Comité de Derechos
Humanos, al Comité sobre toda forma de discriminación contra la mujer y los
derechos del niño. Y las otras dos áreas principales van a estar en cabeza de los
adjuntos. Un área es la que recepta denuncias, decide litigios estratégicos y lleva
asuntos jurídicos, penales, civiles y formula normas, proyectos de ley y proyectos de
protocolo. Toma los protocolos provinciales y los difunde a las otras provincias. Y el
otro adjunto o adjunta tomará los temas de promoción, capacitación, investigación,
creación de la red de investigadores junto con las universidades y el CIN –ya hemos
trabajado con ellos activamente– y, por supuesto, el área de administración,
finanzas y selección de personal.
Creo que en esta primera etapa mi trabajo central va a ser viajar por todos
lados para la creación de las defensorías, mientras alguno de los adjunto trabaja
para generar que el organismo tenga una oficina, los recursos, etcétera, y el otro
adjunto va a trabajar para armar la recepción de denuncias, el trabajo 0800 y los
protocolos para la atención de las denuncias y de las demandas.
Quedan millones de cosas. Yo escribí 18 compromisos, que son el reflejo de
lo que puse allí.
La creación de las defensorías, dotar de estructura, concursar el equipo…

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 68
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Locutor.- Por favor, el tiempo está cumplido.


Sra. Lubertino.- Lo dejo y luego amplío, si quieren.
Estoy absolutamente convencida de que cualquiera sea el lugar en el que yo
pueda colaborar, confío en este proyecto.
Creo que podemos hacer un buen proyecto transversal y me pongo a
disposición y espero colaborar con quien resulte elegido.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Gracias.
Quiero decirle que admiro su optimismo al ver el organigrama que ha
planteado. Se ve que se tiene mucha fe en conseguir un presupuesto interesante.
Sra. Lubertino.- Bueno, quería decirle algo al respecto…
Sra. Presidente (Senadora Durango).- No, pero no era esa la pregunta.
Yo, como usted estuvo en el INADI, le quería hacer una pregunta. ¿Cómo
piensa articular, en caso de ser la defensora, para modificar la imagen
estigmatizante que, a veces -a veces, no, casi siempre-, tienen los medios sobre los
jóvenes?
Sra. Lubertino.- Ese no es un trabajo fácil y ya intentamos empezar. Primero,
coincido con varios de los que hablaron en que es fundamental que podamos
encabezar un trabajo que tiene que ver con un cambio cultural en relación a niños,
niñas y adolescentes. Creo que no tenemos un problema legislativo. O sea, hay
cosas para corregir. Ustedes ya saben, tienen los proyectos ahí, pero quiero decir
que el estándar legislativo es una cosa y las prácticas son otra. Y creo que acá
tenemos un problema grave. Primero, no hay convicción por parte del mundo adulto
de que los niños y niñas son sujetos de derecho. Eso no está internalizado aún, ni
siquiera, a veces, en el ámbito educativo, menos aún en los medios de
comunicación.
Nosotros trabajamos mucho, en su momento y, desde el INADI, creamos, con
el COMFER, el observatorio de los medios, que sigue funcionando. Han pasado los
años, cambian los gobiernos, pero el observatorio quedó. El tema es que, en este
momento, se está discutiendo nuevamente la Ley de Medios, que fue parcialmente
vetada y modificada –digamos–, parcialmente derogada.
Estos organismos quedaron. Subsiste un consejo que monitorea el tema de
los medios de comunicación. Sin embargo, yo creo que eso, si no se le da visibilidad
al trabajo técnico que hacen quienes están allí, no sirve. Entonces, a mí me gusta
mucho cómo hemos trabajado desde el movimiento de mujeres, con las
organizaciones de la sociedad civil –y lo hicimos, también, desde el INADI–,
tratando de promover y visibilizar las buenas prácticas por parte de los medios de
comunicación, los programas de televisión que han hecho cosas positivas. De
hecho, se entregan premios anuales a los programas que presentan modelos no
estereotipados de género. Eso es importante poder hacerlo desde la Defensoría de
niñez, con niños, niñas y adolescentes.
Y también, en varios de los problemas que hemos tenido, incluso que nos
han llevado a alguna situación de conflicto con algunos periodistas, que realmente
violan códigos éticos en esta materia –hemos tenido varios casos–, aunque el INADI
no tenía un instrumento coercitivo –probablemente una nueva ley contra la
discriminación debería darle más herramientas para tener algún mecanismo para
sancionar estos casos– nosotros tratábamos de persuadir. Nosotros hemos citado –
no quiero dar nombres, pero ustedes se imaginarán cuáles son los periodistas que
fueron citados– a varios de ellos al Instituto Nacional Contra la Discriminación, para

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 69
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

sentarlos, explicarles y darles un detalle pormenorizado de todas las intervenciones


que habían hecho y que eran estigmatizantes, etcétera.
Obviamente, este es un trabajo largo que, sobre todo, hay que tratar de hacer
con las instituciones. Nosotros hicimos, desde el INADI –y lo hicieron las periodistas
sensibles en la temática de género–, un protocolo para el tratamiento de niños y
niñas en los medios de comunicación. Tenemos muchas herramientas. Y también,
desde el ámbito de las propias periodistas y de los periodistas, hay cosas
elaboradas, que se pueden seguir trabajando.
Con relación al presupuesto, yo me tengo fe porque armé tres organismos
desde cero. Primero, la Subsecretaría de la Juventud, en la época de Alfonsín, por
el 87, cuando no teníamos más que tres escritorios y arrancamos con eso. Después,
el INADI, cuando nos nombró el Congreso de la Nación; nos dieron tres escritorios,
había cuatro abogados y, al año siguiente, porque hubo decisión política, ya
teníamos un presupuesto, y terminamos la gestión en tres años, habiendo cumplido
los objetivos con delegaciones en todo el país y 400 personas trabajando a lo largo
y ancho del país. En el último caso, el Observatorio de Derechos de las Personas
con Discapacidad –ya no teníamos tanto presupuesto ni recursos–, también nos
arreglamos con lo que tuvimos y pudimos hacer; y armamos federalmente por el
apoyo que tuvimos de las organizaciones no gubernamentales y por la articulación
federal que hicimos.
Entonces, yo no quiero que se entienda mal el organigrama que presenté. El
organigrama que presenté fue habiendo mirado y comparado, hasta donde pude
acceder, los organigramas de las defensorías provinciales, habiendo mirado el
organigrama del defensor del Pueblo de la Nación, la Defensoría del Público, y el
organigrama de la Procuración Penitenciaria. La Procuración Penitenciaria tiene un
presupuesto de 400 millones para atender 45 mil reclusos. Acá, estamos atendiendo
a 14 millones y medio de niños y niñas. Además, creo que, después de todo este
proceso, va a haber una demanda… Yo sé lo que pasó en el INADI. Dijeron: arrancó
este organismo y la demanda va a superar nuestra posibilidad, con diez personas
atendiendo una línea telefónica que se va a ocupar y va a dar “ocupado” todo el
tiempo. Eso es lo que hay que resolver antes, primero.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- ¿Alguien más? ¿No? Bueno, muchas
gracias.
Sra. Lubertino.- Tengo ganas de contarles más, pero bueno… Ahí quedamos.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Gracias.
Locutor.- A continuación, escuchamos a la señora María Elena Naddeo.
Sra. Naddeo.- Buenas tardes a todas y a todos.
En primer lugar, quiero agradecer a la Comisión Bicameral, a las diputadas y
senadoras que vienen sosteniendo esta tarea desde hace tiempo. Realmente,
llegamos a la fase final, para nosotros -por lo menos-, para los concursantes y las
concursantes. Es la fase final, en un momento en que, sinceramente, pensamos que
quizás esto no llegaba a término por la complejidad, porque es algo inédito. Así que
va nuestro reconocimiento, porque sabemos lo que es dedicar, en la agenda política
e institucional, tanta energía, habiendo tantos temas para debatir.
Decirles también que, en este tema, son poquitos 15 minutos. Me parece que
estoy complicada con el powerpoint. ¿Se cortó? Lo están arreglando.
En el plan de trabajo, yo expuse las líneas, una caracterización diagnóstica
de la situación de la infancia y la adolescencia, que es lo que se nos propuso. Acá,

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 70
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

simplemente, traigo algunos datos, que son las preocupaciones centrales, que creo
que la próxima Defensoría de niños, niñas y adolescentes tiene que tener en cuenta.
Un dato terrible, pero muy relevante de la realidad es el proceso de infantilización de
la pobreza, que se profundiza en estos años, desde la crisis estructural de
2001/2002. Tenemos hoy, aun con avances y con retrocesos, reconocido por el
INDEC, el 41,4 por ciento de la población infantil y adolescente bajo la línea de
pobreza. Esto se agudiza según las regiones y según las disparidades regionales,
tanto en las provincias como incluso a nivel de las propias ciudades.
En la siguiente filmina, lo que vemos es, con el tema de la pobreza e
indigencia por ingresos, evidentemente, la Asignación Universal por Hijo ha sido y
es una auténtica política de Estado que vino a aliviar la situación de extrema
indigencia de la población infantil y adolescente. Esa política de Estado continúa,
esa política de Estado se ha ampliado de 3.500.000 que alcanzaba en los primeros
años a casi 4 millones, ahora, pero todavía hay un porcentaje de alrededor de 1
millón de niños, niñas y adolescentes que todavía no accede a este beneficio. Y hay
una serie de obstáculos, que son inherentes al propio sistema de la AUH, que tienen
que ver con las dificultades de la profunda marginalidad en la cual vive un 5 por
ciento de la población infantil y sus familias, que no acceden a poder cumplimentar
los requisitos de la propia AUH. Y este es un gran tema para que la Defensoría del
Pueblo monitoree, aporte, investigue, trabaje codo a codo, ahí sí, en marcar las
posibilidades de corrección de lo que puede ser esta política para que realmente
llegue de manera universal a todos los niños.
No solamente hay pobreza por nivel de ingresos. Cuando asistimos a la
presentación de la encuesta de la Deuda Social Argentina de la U.C.A., algunos
indicadores que ellos han incorporado son particularmente conmovedores y tienen
que ver con otro tipo de pobreza que es el déficit en la estimulación emocional e
intelectual. Y fíjense que entre las preguntas que hace la encuesta del Observatorio
de la Deuda Social Argentina está cuántos chicos no leen cuentos ni les son leídos
cuentos infantiles, ni tienen tampoco libros de cuentos infantiles en sus casas. Esa
cifra da 40,2 por ciento de niños y niñas menores de 12 años que no acceden a la
lectura de cuentos. Y hay un 17 por ciento, que es una cifra menor pero que
realmente también es muy conmovedora, que no festeja sus últimos cumpleaños.
Entonces, si nosotros avanzamos, al interior de ese 40 por ciento, por
ejemplo, de los chicos que no acceden a la lectura de cuentos o de libros infantiles
-la línea más gruesa, que es la línea más oscura de la filmina- tiene que ver con la
estratificación interna. Son los chicos de los sectores más humildes los que
numéricamente se ven más perjudicados por la falta de acceso a la estimulación
emocional e intelectual.
Esto nos sirve para fundamentar por qué la necesidad de ampliar las políticas
educativas. Por qué necesitamos la ampliación del nivel inicial desde los 45 días de
edad y todos los esfuerzos en las políticas de primera infancia. Y también cómo
necesitamos fortalecer, en el nivel secundario de la enseñanza, y evitar el
desgranamiento y el abandono escolar.
Estos son datos de un trabajo de Unicef muy importante de las metas 2016-
2020 que dan cuenta de que hay 1.157.000 niños, niñas y adolescentes fuera del
sistema educativo, tanto en los primeros años del nivel inicial como en los últimos
años de la escuela secundaria.
Entonces yo estoy convencida de que además de ampliar el nivel inicial y

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 71
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

fortalecer la escuela secundaria, democratizarla, renovarla –como así decían varios


expositores antes– es necesario recrear los dispositivos de acompañamiento y
búsqueda. Hay que ir a la búsqueda de los niños, niñas y adolescentes que
abandonan la escuela.
Hay experiencias interesantes, hay promotores educativos, por ejemplo, en
las comunas en la Ciudad de Buenos Aires, que van a buscar a los niños y a los
adolescentes que dejan la escuela; los tutores y tutoras, los docentes, los llaman por
teléfono. Esto hay que profundizarlo y extenderlo al conjunto de todo el país.
Traje otros dos datos que son también conocidos, que ya los hemos visto,
que los han comentado otros expositores. Particularmente el tema del embarazo
adolescente sigue siendo una gran asignatura pendiente. El embarazo adolescente
y las 3.000 niñas menores de 15 años, que es una cifra que está bajando. Porque
hace dos años, en la ciudad de Santa Fe, en un trabajo muy interesante de la
Defensoría del Pueblo y la Defensoría de Niños de la provincia de Santa Fe, se
expuso la cifra de 3.261 niñas madres menores de 15 años de edad, con lo cual
estamos hablando de una cifra que tiene que ver con el abuso sexual infantil y con
las violaciones. Estamos hablando de un fenómeno que persiste y que tiene una
persistencia que nos llama la atención y nos interpela permanentemente.
El otro dato importante también recogido de esta investigación de Unicef, que
está hecha en base a las propias estadísticas del Ministerio de Salud, es que los
suicidios adolescentes se han triplicado en veinte años. Unicef tomó las estadísticas
del Ministerio de Salud nacional entre el año 1992 y 2012, y advierte que se han
triplicado los suicidios adolescentes. 138 suicidios adolescentes, en 2015, es una
cifra realmente conmovedora. Y en todo esto me parece –por eso ahí la
convergencia– el impulso de la ley de educación sexual integral tiene que ver no
solamente con la prevención del embarazo adolescente; tiene que ver con la
prevención del abuso y del cuidado del cuerpo. Porque decimos que en la primera
infancia lo que estamos enseñándoles a los niños de temprana edad es cómo
reconocer y cuidar su cuerpo, evitar posibles abusos y que puedan verbalizarlos y
comprometerse en esto.
En el tema de los suicidios adolescentes, si bien está pendiente una gran
investigación sobre este tema, la cuestión de la identidad de género, contrariar la
identidad de género en transformación de los adolescentes, es una de las causas de
suicidio. Esto está comprobado por investigaciones anteriores pero es necesario
tenerlo en cuenta. Y la diversidad. Por eso es importante: educación sexual integral,
la enseñanza y la capacitación a los docentes de cómo acompañar los procesos de
la diversidad sexual en la adolescencia y la diversidad cultural.
El tema del desarraigo; el tema de cómo acompañar y cómo reconocer y
empoderar a los niños que provienen de las comunidades de los pueblos originarios
y cómo hacer cumplir la legislación que tiene que ver con la educación plurilingüe,
en particular en las zonas de amplia población infantil indígena, o proveniente de las
comunidades originarias. Esto tiene que ser uno de los ejes de la próxima
defensoría nacional de niños, niñas y adolescentes.
Están las políticas sanitarias, algunas de las cuales ya se dijeron; la
reducción de la mortalidad infantil. Está reconocido que el 50 por ciento de la
mortalidad infantil es evitable. Entonces, si bien hay enormes esfuerzos y está
descendiendo gradualmente, en realidad ahí hay un impulso muy fuerte para
abordar.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 72
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Decíamos lo mismo con la mortalidad materna. Y allí, yo simplemente por el


tema del tiempo, quiero decir que en el tema del seguimiento de las políticas para
niños con discapacidades, el nuevo Código Civil facilita todo un sistema de apoyo y
otorga el poder, digamos, al Estado para desarrollar sistemas de apoyo que sean
sustitutivos de las viejas políticas de internación.
Yo creo también que está pendiente un programa de acompañamiento
domiciliario y de acompañamiento ambulatorio para las personas y los niños, niñas y
adolescentes con problemáticas de discapacidad, además de evitar el recorte, por
supuesto, en las pensiones y en el presupuesto que deben tener.
Pasamos a la otra filmina.
En educación y en salud habría mucho más para desarrollar pero yo me
quiero detener en una política pública que es necesario convertir en política de
Estado. Educación y salud son grandes políticas de Estado, con sus problemas, con
sus baches, con sus lagunas que estamos detectando, cada vez más y
profundizando su superación. Pero la prevención de la violencia contra niños, niñas
y adolescentes, o lo que acá se ha llamado las “políticas de protección especial”
hacia niños, niñas y adolescentes requieren una mirada y una sistematización que
todavía no tienen.
En este decálogo, que sería muy largo de enumerar para hoy pero que está
en el plan de trabajo, voy a tomar tres temas nada más. Uno tiene que ver con la
unificación de los procedimientos. A pesar de los esfuerzos hechos por la SENAF, a
pesar de los protocolos elaborados por las organizaciones de la sociedad civil, con
el acompañamiento de Unicef, tenemos una dispersión de procedimientos que son
todavía lamentables, y en algunos casos y en muchos servicios locales de
protección y organismos de otro tipo que trabajan con la infancia, cuando les
preguntamos con qué protocolo están trabajando, la verdad que todavía está sin
definición.
El monitoreo de las instituciones involucradas en la atención de niños, niñas y
adolescentes privados de cuidados parentales. Este es el universo que protegemos
–entre comillas– en los hogares convivenciales, en las instituciones que albergan
niños, niñas y adolescentes.
Es inadmisible que en hogares a los cuales derivamos desde el Estado a los
niños para su protección se produzcan nuevas violaciones de derechos humanos;
que se produzcan violaciones de derechos humanos por parte de los chicos, incluso
de los propios cuidadores o guardadores.
En cuanto a este monitoreo, entre las causales, creo que volvemos a tener
hogares de tipo asilar; volvemos a tener hogares con cincuenta niños en un mismo
establecimiento, tema por el cual trabajamos para reducir la cantidad de niños
alojados en los hogares a lo largo de una década.
Uno de los temas que es una deuda pendiente y debe ser abordado por la
Defensoría Nacional de Niños, Niñas y Adolescentes tiene que ver con la reforma
del sistema penal juvenil. Coincidimos todos –creo–, desde todos los ámbitos de la
política y de las organizaciones especializadas en infancia, que hay una rémora del
pasado, que es la ley 22.278, que debe ser derogada y reemplazada por un sistema
de responsabilidad penal juvenil que, sin bajar la edad de punibilidad, garantice el
debido proceso y las garantías que hoy tenemos reconocidas a nivel constitucional;
y que en la vida práctica de los chicos detenidos y de los chicos en conflicto con la
ley penal no se están cumpliendo.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 73
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Planteo una estructura con tres áreas temáticas: una Dirección De Políticas
Públicas para el monitoreo y el seguimiento de los programas; una Dirección de
Protección de Derechos, justamente para la defensa de derechos individuales y
colectivos, básicamente; y una Dirección de Promoción y Prevención que tiene que
ver con la capacitación, con la articulación y con la participación de los propios
niños, niñas y adolescentes. Y hay una cuarta Dirección que es de Apoyo Técnico,
Legal y Administrativo.
Como no tengo tiempo para desarrollarlo, voy al último gráfico que tiene que
ver un poco con las misiones centrales. Es un gráfico circular que me gustó porque
justamente esta es una defensoría nacional que se pone de pie con el respaldo muy
fuerte del Congreso Nacional. La verdad, que la Bicameral esté impulsando la
constitución de este organismo ya es un punto de partida de especial relevancia.
En ese gráfico están algunos de los ejes centrales que deben jugar. Se utilizó
hoy, a lo largo del día, la palabra sinergia. Y esta imagen remite a ella: la supervisión
y el monitoreo de las políticas públicas, de la inversión presupuestaria; el
seguimiento legislativo; el seguimiento y la elaboración de propuestas de
procedimientos y estadísticas; la defensa de los derechos individuales y colectivos
de los chicos; la participación de los niños, niñas y adolescentes; la articulación –
este es un gran rol de la Defensoría Nacional– con los otros organismos nacionales
que acá se nombraron la Defensoría del Pueblo de la Nación, la red de defensorías
del pueblo de todo el país, el Comité Nacional contra la Tortura y los ministerios
públicos.
Hay mucho para articular; mucho para generar una sinergia que permita
unificar estos procedimientos y el enfoque porque, en definitiva, lo que queremos es
transversalizar el enfoque de derechos y la igualdad de género en la sociedad y en
el conjunto del Estado.
Por último, para cerrar esta conferencia –no es fácil– busqué a Silvia
Bleichmar, una psicoanalista maravillosa que falleció hace pocos años, quien dijo en
una histórica conferencia que brindó en el Consejo de los Derechos de Niños, Niñas
y Adolescentes, cuando lo creamos, allá en 2001, en plena crisis, algo hermoso: “Yo
siempre insisto en que la esperanza de un país se mide por la propuesta que tiene
para la infancia. Es a través de lo que se propone a los niños donde se ve
claramente la perspectiva de futuro que un país tiene”.
Y ahora sí por último, la frase de El Principito que siempre nos interpela a
recordar que todos fuimos alguna vez niños y a veces lo olvidamos. Muchas gracias.
(Aplausos.)
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muchas gracias.
Quiero pedirle, como ya lo he hecho en otras oportunidades, que profundice
un poco más esa relación con las provincias argentinas, con las diferentes
realidades que tiene nuestro país, que son distintas en el Norte y en la Patagonia y
seguramente usted conoce. Me gustaría que profundizara un poco más esto.
Por otro lado, quiero preguntarle cómo piensa que pueden ser los canales de
recepción de las demandas de las niñas, niños y adolescentes en aquellos lugares
donde no hay defensor.
Sra. Naddeo.- La dispersión regional y las diferencias regionales son muy fuertes;
los contrastes son muy fuertes. Tenemos por un lado toda la temática en el Norte y
en el Sur profundo como es la temática de los niños de los pueblos originarios. Hay
una temática que está pendiente en la Argentina. UNICEF misma plantea que es

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 74
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

necesario registrar con mayor detalle, trabajar en atención primaria de la salud y en


la propuesta educativa, respetando la identidad cultural, las costumbres y creencias
de las comunidades, pero al mismo tiempo empoderando a los chicos y a esas
comunidades. Este es un tema que debe ser trabajado con una línea que es
regional y, al mismo tiempo, temática.
Por otro lado, hay situaciones que tienen que ver con los conglomerados
urbanos: el gran Rosario; el gran Chaco; el gran Buenos Aires; el gran Bariloche, el
alto de Bariloche. Tienen que ver con el gatillo fácil, con las fuerzas de seguridad.
Esta es una línea que estaba allí, que no la identifiqué, referida al tema de la
violencia hacia los niños, niñas y adolescentes.
Este también es un fenómeno en Tucumán. Allí, por ejemplo, el tema del
gatillo fácil nos ha conmovido terriblemente por el asesinato de un chico que estaba
en una moto y fue confundido posiblemente con un motochorro. Pero en realidad,
aun así no puede haber disparo por la espalda, no puede haber utilización de las
armas de manera abusiva, de manera como se está vivenciando por lo menos en
estos casos. Así que, por un lado, diferenciación regional.
Creo que necesitamos construir un diagnóstico participado con los
organismos de infancia que existen hoy en las provincias. La primera gran jornada
que tiene que hacer la Defensoría Nacional de Niños, Niñas y Adolescentes –creo
que estaba planteada en el plan de trabajo– es con las redes sociales, con las redes
de organismos de Derechos Humanos, con las redes de organizaciones defensoras
de Derechos Humanos y los organismos de infancia de cada provincia para validar
este diagnóstico que tenemos.
Al hacer eso podemos decir “Estos son los núcleos de interés en cada
provincia, de cada región” y construir la mirada que tenemos un poco más desde lo
teórico o desde el estudio de los materiales de UNICEF, de la OSDA, del INDEC y
los que los especialistas nos vienen proporcionando. Debemos validar el diagnóstico
en el terreno. Y para eso, estas grandes jornadas que pueden ser regionales y
confluir con una gran jornada nacional para validar este diagnóstico con la ayuda de
la Bicameral.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Senadora Gladys González.
Sra. Senadora González, Gladys.- Gracias por su presentación.
Más allá de que nos falta y de que hoy se evidenció en la mayoría de los
expositores –nosotros también así lo hemos dicho–, la disparidad en la
implementación del sistema federal de protección de derechos, quisiera saber si
usted considera que además de este desafío de que se implemente realmente la
norma que tenemos vigente, hay que hacer ahora, o en el corto plazo, una
adecuación legislativa de la norma que hoy rige. Y en caso afirmativo le pido que
explique muy brevemente en qué consistiría.
Sra. Naddeo.- Es una pregunta interesante. En realidad, creo que no. Este no es el
momento de plantear una reforma de la ley 26.061 sino de avanzar fuertemente en
algunos artículos que todavía están pendientes.
Es un gran avance esto del defensor o la defensora nacional. El otro gran
avance sería volver a pensar la implementación del abogado del niño, porque esto
no se está aplicando en general y donde se aplica se lo hace con dificultades, con
convenios con organizaciones no gubernamentales. Y en realidad yo también me
opongo a la superposición de organismos, porque a veces en un mismo conflicto
que atraviesa la vida de una familia o de un grupo de hermanitos intervienen –en la

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 75
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Ciudad de Buenos Aires es terrible– por la doble jurisdicción, la nacional y la de la


Ciudad. Todavía no tenemos completa la transferencia de la Justicia. Aquí
intervienen, quizás en un mismo grupo familiar, diez organismos. Entonces, hay que
revisar esto para ver quiénes tienen que ocuparse realmente de la defensa técnica
de los niños.
El tema de la exigibilidad tampoco está desarrollado. Ahora, con los
defensores provinciales, la Defensoría Nacional debe ejercer ese rol de exigibilidad
que establece la ley 26.061.
Quizás –y esto un poco lo hablamos con algunos asesores porque hace poco
vinimos a conversar por un proyecto de ley– habría que establecer, cuando se
definen las competencias de los organismos administrativos de protección de
derechos, algunas competencias más claritas.
Por ejemplo, con los servicios locales de protección y las Defensorías
Zonales, en el caso de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que es el nombre que
tenemos aquí en la ciudad, muchas veces hay confusión de roles entre qué le
corresponde hacer al servicio local y qué le corresponde no hacer.
Entonces, si nosotros pudiéramos desarrollar mejor cuáles son las
competencias, por ejemplo en el tema de hacer la denuncia en ámbito penal –si
correspondiera–, y hacer la publicación de los informes acerca del estado de las
causas, tendríamos una información más acabada y más precisa sobre cuáles son
los temas que circulan por los servicios locales de protección. Y, cuando se detecta
un abuso sexual o cuando se detecta un maltrato sostenido, si eso después se
convierte en denuncia penal, que es motivo de preocupación en la ciudad; y
tenemos una polémica en ese sentido, por eso lo comento. Tenemos una discusión
en el plenario y en el Consejo de Derechos y un dictamen de la Defensoría del
Pueblo de la Ciudad –donde me desempeño– para reforzar el mecanismo de
denuncia por parte de los organismos administrativos de protección.
Por otro lado, quizá también faltó incluir –en esto coincido con algunos de los
expositores que plantearon la necesidad de jerarquizar– a los servicios locales. Los
organismos administrativos son la primera línea y han tenido un desarrollo disperso
y heterogéneo; todavía muchos tienen plantas con contratos precarios y algunos
dependen de los municipios y se organizan de acuerdo al impulso que le da el
intendente de cada lugar. No son equipos autónomos con capacidad de encarar y
de hacer reclamos en el ámbito de la protección integral. Así que esa es una línea
que tenemos que abordar en el ámbito legislativo y desde el ámbito de la Defensoría
Nacional, por supuesto.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Diputada Mercado.
Sra. Diputada Mercado.- Buenas tardes, muchas gracias por su intervención.
Quiero plantearle en particular alguna situación que surge de la experiencia, por
ejemplo, en provincias como la que represento –Catamarca–, donde las autoridades
de seguridad, en reiteradas oportunidades, han permitido el arresto de menores de
dieciocho años por averiguación de antecedentes, actitud sospechosa o merodeo.
En este marco y sin que exista la figura del defensor en la provincia, ¿Cuál
sería el margen de intervención del defensor nacional?
Sra. Naddeo.- Yo creo que donde no existe el defensor provincial de niños en el
marco de la ley 26.061, el rol de la Defensoría nacional tiene que jugar en forma
activa. Me parece que no hay que limitar la intervención del defensor nacional sino
que hay que promoverlo.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 76
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Ahora, ante las detenciones arbitrarias que son de tipo inconstitucional


porque están violentando la Convención contra la Tortura, porque están violentando
las reglas de Riad, porque están violentando todas las normativas y la propia
Convención Internacional de los Derechos del Niño, me parece que los defensores
públicos del Ministerio Público de la provincia tienen que jugar un rol mientras no se
cree el defensor de la ley 26.061.
Ahí hay que –en todo caso– ver por qué el Ministerio Público de la provincia
no defiende los derechos de los chicos que son arbitrariamente detenidos. Y, si no lo
hace, el defensor nacional puede investigar y puede denunciarlo, porque es
incumplimiento de deberes de funcionario público, ante el Consejo de la
Magistratura local.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Senadora Verasay.
Sra. Senadora Verasay.- Muchas gracias, bienvenida. Muy breve la pregunta y
breve la respuesta por el tiempo. ¿Qué perfil piensa para sus adjuntos en caso de
ser defensora del niño?
Sra. Naddeo.- Yo contesté en el plan de trabajo que, con los adjuntos, de acuerdo a
la especialidad, nosotros necesitamos constituir un equipo que reúna diversas
expertise, que reúna diversas trayectorias. Yo vengo del sistema educativo, soy
especialista en políticas sociales, realicé posgrados en la temática de género y de
políticas públicas de igualdad, por lo tanto el perfil de uno de los adjuntos debería
ser netamente jurídico.
Y respecto del segundo adjunto o adjunta –que debería ser así en esta
población donde somos mayoritariamente mujeres; en los temas de infancia me
refiero– hay múltiples necesidades en los temas de infancia. Yo creo que en esta
Defensoría debemos dividir las tareas para una mejor organización.
El tema de la inversión presupuestaria, por ejemplo, requiere una
especialidad. El tema de la inversión presupuestaria en niñez y adolescencia, la
intangibilidad de las partidas presupuestarias que plantea la ley 26.061, es uno de
los temas centrales en un momento en que se están recortando los presupuestos de
políticas sociales. Esta Defensoría nacional va a tener que jugar un rol
importantísimo en defender las partidas presupuestarias. Entonces, ya sea con los
adjuntos o con los equipos técnicos, la temática de la inversión consolidada de
infancia también requiere una especialización importante.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muy bien, muchas gracias. (Aplausos.)
Locutor.- Invitamos a exponer a la postulante Nora Pulido.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Ausente.
Locutor.- Invitamos al postulante Fabián Repetto.
Sr. Repetto.- Buenas tardes, quiero en estos quince minutos arrancar presentando
lo que –para mí– son los parámetros fundacionales lo que sería la institución de la
Defensoría.
Por un lado, muy claramente, no sería una Defensoría solamente para los
niños, niñas y adolescentes en situación de pobreza y vulnerabilidad, sino que sería
para el conjunto de los niños y niñas de la Argentina. Por supuesto, también implica
tener prioridades atendiendo a las cuestiones más urgentes y de derechos
vulnerados.
Un segundo parámetro fundacional –se ha dicho y vale la pena remarcarlo
una vez más– es la vocación federal. Lo voy a desarrollar un poquito más adelante,
pero –definitivamente– es una Defensoría que tiene que atender las complejidades

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 77
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

del federalismo argentino.


Un tercer parámetro fundacional es el complejo equilibrio entre la
construcción institucional, que todos sabemos que es lenta, que es gradual y que no
es fácil, con las urgencias y las demandas que inevitablemente van a aparecer
luego de trece años de ausencia de la Defensoría, más allá de la creación de la ley.
Por otro lado, como parámetro fundacional, una Defensoría muy abierta al
aprendizaje continuo y a las alianzas interinstitucionales. De alguna manera,
también quiero plantear algo al respecto en unos minutos.
En cuanto al plan de trabajo, haré una síntesis; ustedes ya lo han leído. Y el
primer punto es el tema del diagnóstico; y la gran ventaja de hablar casi último es
que casi todo se ha dicho en términos de detalle fino, en términos de cuáles son los
problemas que afectan a la niñez y la adolescencia en la Argentina. Entonces, me
detengo en un concepto que probablemente sea paraguas de todo lo demás, que es
la infantilización de la pobreza, y con esto paro en este punto.
Sí creo también, y me parece importante remarcarlo, que esto no es cuestión
de un gobierno o de otro, sino que es, quizá, la gran deuda de la democracia en la
Argentina desde los treinta y cinco años de creación. Y me parece que también eso
implica un proceso de mirada estructural de largo plazo y de corresponsabilidades.
Entonces, quiero ponerle, simplemente, cuatro aspectos analíticos a esta
cuestión del diagnóstico. Primero, y creo que es evidente y va a ser parte del foco
que quisiera darle yo a la Defensoría, es la coexistencia de problemas muy masivos
en magnitud con otros de pequeña escala, pero no por eso menos importante. Creo
que esto es importante también dejarlo claro. Mientras hay un millón de niños de 0 a
3 años que no acceden a políticas de primera infancia, quizá hay 3.000 personas o
jóvenes con problemas con la ley penal, lo cual no significa que no sea un tema
crítico el tema de la ley penal; estoy hablando simplemente de la coexistencia de
escalas.
Creo que otro tema fundamental es que en algunos casos algunos problemas
afectan al conjunto de las clases sociales, de los sectores sociales. Pienso, por
ejemplo, en violencia intrafamiliar, pienso en temas de consumos problemáticos de
sustancias psicoactivas; y otros son puramente vinculados a los problemas de
desigualdad y pobreza que tiene la Argentina.
Una tercera cuestión, y estoy poniéndole en todo caso tono analítico a la
larga serie de diagnósticos que ya se han presentado a lo largo de la mañana y de
la tarde, es que hay algunos problemas que ya estaban hace mucho tiempo en la
agenda pública en la Argentina, estaban visibilizados en la agenda pública con otros
de más reciente aparición en la agenda pública, lo cual no significa que no
existiesen en el ámbito privado.
Ahí claramente hay un avance importante, como tarea fundamental, de
visibilizar esos problemas y responder en consecuencia. Y por supuesto también la
cuestión de que cada uno de estos problemas de distinta escala, más visibles y
menos visibles, tienen enormes desigualdades territoriales, tienen retos críticos en
materias de prestaciones diferenciales, de retos de inversión y, por supuesto –una
palabra que también se ha mencionado aquí– la cuestión de la calidad de las
prestaciones nacionales, provinciales y a veces locales.
Hay una vieja discusión en ciencias sociales entre función y estructura, y no
vamos a discutir acá los detalles, pero claramente están presentes. La importancia
de la estructura que quiero proponer es para qué me parece a mí que tiene que

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 78
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

estar la Defensoría. Me imagino lo que dice ahí a esta altura de las circunstancias,
pero claramente es para incidir, sin duda alguna. Me imagino una Defensoría con
fuerte vocación política no partidaria, en el sentido de que los derechos se defienden
con políticas no solamente con técnica, cuestión de expandir los derechos en clave
federal.
Recuerdo en mi memoria visual el tema de monitoreo. No solamente de
monitoreo de prestaciones sino monitoreo de la inversión, monitoreo de los diseños
institucionales. Acá se ha planteado muy bien que no está plenamente desplegado
el sistema de protección en la Argentina y hay un reto, también, en esa materia.
Mucho de aprendizaje experto, y cuando digo aprendizaje experto uno piensa
en los académicos. Pero no pienso solamente en los académicos, pienso en los
funcionarios públicos, en los trabajadores de niñez y adolescencia que se cuentan
por miles en la Argentina y que saben, probablemente, mucho mejor que los
diseñadores de políticas y también de los niños, niñas y adolescentes, el tema, que
seguramente podremos discutir, de la participación y qué camino de participación,
que no sea puramente ritual.
Obviamente también hay que nutrirse –si no me equivoco es la palabra que
estaba en negrita– de toda la densidad que tiene la Argentina en materia de
organizaciones sociales vinculadas a la niñez. No solamente ONGs, sino otras
organizaciones también representativas.
Me imagino una Defensoría para eso y, entonces, la estructura orgánica tiene
que ser consistentes con esas funciones, por decirlo de alguna manera. La palabra
funciones, además, remite a algunos de los artículos del marco legal de la ley
26.061.
Algunos aspectos a considerar: claramente la estructura –esto es inventar la
pólvora un poco tarde– se terminará de afinar en función del presupuesto. Lo decía
muy bien la presidenta de la Comisión Bicameral, es una tarea en la que están
metidos seguramente en estas horas, en el “poroteo” presupuestario. Carla está en
ese camino por lo que decía la presidenta y tiene que ver con esto.
Efectivamente, creo que hay réditos, hay discusiones importantes en materia
de qué estructura. En cualquier caso, aun si hubiese posibilidades de contar con
más recursos, me la imagino como una estructura pequeña, con una sólida división
de trabajo y con experticia temática, porque es grande la complejidad en materia de
niñez y adolescencia; pero experticia temática con una lógica sistémica. Yo creo que
el gran reto es cómo transitamos de los haberse sectoriales a los haberes
intersectoriales. Y si hay algo que interpela la intersectorialidad de la política pública
es la niñez y la adolescencia en la Argentina; y por supuesto también, como decía al
principio en los parámetros fundacionales, con lógica de construcción incremental.
Seguramente, hay que pensar la casa en su perspectiva más grande, pero
sabiendo que quizá lo primero que se hace no va a ser todo el conjunto del plano,
sino aquellas piezas del rompecabezas que son claramente necesarias en esa
dirección.
En materia del defensor, los tres niveles y las direcciones, imagino
defensores muy sólidos técnicamente –voy a decir algo muy rápido en la filmina
siguiente–, pero también –y esto es una señal de identidad que a mí me gustaría
darle a la Defensoría– con probada capacidad de articulación política. Articulación a
veces en construcción de consensos y a veces, como también decía antes Gabriel
Lerner, hay que poner cara de ogro en término de la discusión de política pública. Es

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 79
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

decir, capacidad de hacer política sabiendo que no es política partidaria.


Directores sólidamente capacitados, y me imagino la posibilidad de que sean
concursando a mitad de mandato. Idealmente hubiese sido lindo ahora, como fue
por ejemplo en la Oficina de Presupuesto del Congreso, pero esto atrasaría mucho
la puesta en marcha de la Defensoría. Pero sí me parece importante, tengo mi raíz
weberiana en algún punto, que empiece a consolidarse una estructura de
capacidades institucionales para cuando termine el mandato del defensor y venga
otro defensor o defensora. Ahí me parece que esto es crítico.
Y por supuesto un nivel de staff lo mejor remunerado, lo mejor capacitado y
con las mejores condiciones laborales posibles; y este no es en general el contexto
de lo que pasa para el personal de niñez y adolescencia que estoy pensando en
esta estructura pequeña.
En ese sentido, tres elementos del perfil de los adjuntos: paridad de género.
Me imagino una adjunta y un adjunto. Claramente, vengo más del mundo de la
ciencia política y la asesoría en políticas públicas y en políticas sociales, entonces,
me imagino que una de las dos personas que me acompañe sea con alta
experiencia jurídica. No solamente en términos académicos, sino en términos de
gestión de lo que son los derechos en la práctica. Definitivamente esa es una
posición, en mi caso, sine qua non, por mi propio perfil. Y otro adjunto o adjunta con
experiencia fuerte en políticas públicas que, en todo caso, complemente mi perfil.
Me imagino que eso requiere, además, otro tipo de criterios. Que tenga experiencia
en gestión pública, me parece que sería muy importante. Como yo siempre digo,
hay que conocer el leviatán por dentro de alguna manera –perdón el lenguaje
politológico– para poder entender mejor las recomendaciones de la política.
Un fuerte conocimiento de la territorialidad y compleja territorialidad que tiene
en materia de niñez y adolescencia la Argentina. Y una serie de elementos que
ustedes lo ven; y yo confieso que desde acá no lo alcanzo a ver en detalle, pero que
de alguna manera pinta el perfil de lo que estoy pensando para los dos adjuntos y
que, de hecho, está en el plan de trabajo contenido que ustedes plantean.
En ese sentido, todos hemos hecho nuestro organigrama. Cada uno ensayó
un color y un estilo distinto. Quiero hacer telegráficamente dos o tres referencias
que dan sentido a muchas de las conversaciones que se han tenido a la mañana y a
la tarde.
Intenté, no soy un especialista en diagramas, que sea corta la línea entre el
defensor y los defensores adjuntos no de casualidad, sino para mostrar la triada de
trabajo, la cercanía, efectivamente, en términos de la complementariedad de
esfuerzos, de perfiles, etcétera.
Lo describo muy rápidamente: la unidad de comunicación no es una unidad
de reparto de gacetillas, es una unidad que se meta en la conversación compleja de
cómo se repiensan los medios de comunicación en materia de niñez y adolescencia.
Esa es una tarea difícil que no alcanza con el responsable de unidad de
comunicación sino que es una discusión política de alto nivel con los medios de
comunicación. No solamente con los medios de comunicación tradicionales sino con
las nuevas tecnologías, etcétera, etcétera.
Pienso que el defensor o defensora adjunta especialista en políticas públicas
trabaje más lo que yo llamo la dirección más macro, de seguimiento de políticas. Y,
además, tenga un vínculo muy muy claro con lo que tiene que ver con los poderes
ejecutivos nacionales y provinciales. Y el otro defensor adjunto o defensora adjunta,

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 80
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

especialista más en el ámbito jurídico y más vinculado al tema de protección y de


asistencia legal.
Remarco simplemente que una de las tres direcciones, además de muchas
relaciones interinstitucionales de todo tipo y especie, tiene que ver con el tema de la
asistencia técnica. Y eso lo quiero ligar con lo que dice Otros Ámbitos a la derecha
de vuestra pantalla, que es el tema de lo que yo llamo comisión federal. Cada uno le
ha puesto un nombre diferente que, por supuesto, es para nutrirlo de la experiencia
de las cinco defensorías provinciales que ya existen. Y claramente me imagino que
esa dirección que provee, entre otras cosas, asistencia técnica, sea capaz, en
alianza con esa comisión federal, de brindar asistencia técnica a las provincias que
quieran avanzar, según prevé el artículo 48, en términos de tener sus propios
defensores provinciales.
En materia del consejo asesor, quiero nuclear alrededor de la Defensoría a
expertos y expertas, con lógica federal, de distintos saberes que sean necesarios
para el funcionamiento de la Defensoría de modo permanente.
Pienso también, con una lógica no menor de importancia, en la creación de
comisiones especiales. Y creo que esas comisiones especiales no deberían ser
permanentes, sino coyunturales, en relación con las prioridades que se vaya fijando
la Defensoría. Y quiero anunciar eventualmente dos que creo que son de sentido
común, que tienen que ver con las priorizaciones. Una me la imagino, sin duda
alguna, en lo que tiene que ver con la escuela secundaria. Sería una comisión para
pensar en serio la escuela secundaria, sin reemplazar al Consejo Federal de
Educación, sin reemplazar a los ámbitos legislativos correspondientes, pero sí para
promover una discusión que, por supuesto, no va a tener resultados de corto plazo,
pero hay que pensar en un horizonte de cinco años, que es el que tiene la
defensoría. Y otra –quizá por vocación personal y trayectoria técnico-académica–,
en lo que tiene que ver con primera infancia, que definitivamente es una asignatura
pendiente en la Argentina, con todos los avances que se han dado en el gobierno
anterior y en este gobierno en la materia.
Respecto del consejo consultivo, lo estoy pensando a nivel de
organizaciones. Quiero ser muy claro y avisar lo que dice, en todo caso, el plan de
trabajo. No me imagino, si fuese defensor, eligiendo con los dos defensores
adjuntos quiénes son los representantes de la sociedad civil, sino un proceso de
autoselección. Podemos discutir los matices de qué significará eso, pero no me
estoy imaginando yo el dedazo de elegir: “Usted es más representativo que usted,
usted y usted”. Entonces, respecto del tema del consejo consultivo, quién
representa a la sociedad civil es un tema inacabado, del cual se ha escrito mucho –
no voy abundar en la materia–; además acá hay mucha representación de
organizaciones no gubernamentales y otros actores. Entonces, me parece
importante, por honestidad intelectual, plantear cómo veo yo la conformación de ese
consejo consultivo, que, por supuesto, no puede ser metropolitano, sino que tiene
que ser, obviamente, en clave federal.
Para ir cerrando, yo creo que la síntesis de la sección 3 del plan de trabajo,
de roles y funciones, es enfoque de política pública sin descuidar los casos
individuales. Si yo tuviera que ponerle un título, si esto fuera un paper académico
-como en la vieja época en que escribía papers-, definitivamente es este. Creo que
el enfoque que yo quiero darle, que me parece que amerita este momento de la
Argentina, es lógica de política pública. Esto no implica olvidarse de los terribles

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 81
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

casos individuales que ya se enumeraron acá durante toda la mañana y toda la


tarde, pero eso de alguna manera es la señal hacia dónde yo quisiera dirigir la
Defensoría, junto con el equipo de trabajo que me acompañe.
Por supuesto que cada caso personal afectado y cada derecho vulnerado es
un drama y hay que atenderlo con una lógica de articulación. En algunas provincias
donde no hay defensores habrá que tener mecanismos, que ya de hecho, se
plantearon muchos aquí y son muy ricos, sin duda alguna.
Locutor.- Un minuto, por favor.
Sr. Repetto.- En cuanto a lo tiene que ver con problemas de mayor escala, son
problemas donde se interpela la falla de la política pública. Cuando estamos
hablando de escalas de cientos de miles, el problema no es individual, sino que es
un problema de la política pública; y ahí me parece que hay que activar los
mecanismos de la Defensoría.
Muy rápidamente, usando el minuto que me queda, imagino tres instrumentos
con los cuales la defensoría activaría lo que tiene que ver con recomendaciones. Me
imagino una lógica de recomendaciones quizás inspirada en el espíritu de las
observaciones generales, que sean, en algunos casos, fruto de diagnósticos de
largo plazo y presentados, por ejemplo, el día del aniversario de la Convención de
los Derechos del Niño; presentar un set de observaciones a las que hay que darles
seguimiento y monitoreo, pero también observaciones o recomendaciones de
carácter coyuntural, según las circunstancias que vayan apareciendo. Ello no
significa darle seguimiento al día a día en los diarios; tiene que haber diálogos
multiactorales, por supuesto, con la participación de niños, niñas y adolescentes,
con lógicas de participación reales, y tiene que haber, por supuesto, medidas
judiciales y extrajudiciales donde no todo es diálogo ni todo es recomendación.
En ese sentido, de ser designado –lo dije en la nota al pie número 1 del plan
de trabajo y creo que hoy lo confirmé; estoy acá desde la 9 y media de la mañana–,
me nutriría, si me permiten los autores de esos planes de trabajo, de muchas de las
ideas que fueron surgiendo. Creo que eso está planteado y está escrito en la nota al
pie número 1.
Creo que se necesita una Defensoría que articule compromisos éticos, por
supuesto; saber técnico, pero también capacidad de incidencia y articulación
política. Solo cuando se junten esas tres cosas se podrá honrar el rol de la
Defensoría.
Quiero cerrar simplemente con tres mensajes fundamentales. El primero,
agradecerles a ustedes y a todo el esfuerzo del Congreso porque se empieza a
saldar una deuda de la democracia, pero también llamar la atención de que siempre
se corre el riesgo de obtener victorias pírricas. Si se crease la Defensoría y se la
vaciase de presupuesto y de respaldo político, habrá sido una enorme deuda no
saldada. Y creo que hay millones de niños, niñas y familias que necesitan la
defensoría. Muchas gracias. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Durango).- Muchas gracias.
Me alegra escucharle decir que el consejo consultivo también va a ser
federal, porque usted sabe que Dios existe en todos lados, pero atiende en Buenos
Aires; y las representaciones de las organizaciones no gubernamentales, a quienes
respetamos y mucho, en general están en Buenos Aires.
Le quiero hacer una sola pregunta de mi parte: ¿qué piensa de la edad de
imputabilidad? Porque me parece que no lo escuché.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 82
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Sr. Repetto.- Creo que hay que dar una discusión muy fuerte. Me parece que hay
una deuda histórica de la ley –me anoté el número porque es una pregunta bastante
importante– 22.278, que no está saldada. Hay que adecuarla al marco de la
convención. En ese sentido, me parece que un rol importante -y, de hecho, una de
las direcciones prevé el tema de la evidencia- es informar el debate legislativo, por
un lado, y el debate público en general respecto de las implicancias que tendría la
baja de la edad de punibilidad.
Entonces, en ese sentido, yo estoy en contra. Creo que no soluciona el
problema -lo decía Claudia Bernazza al principio- ni en seguridad ni en materia de lo
tiene que ver con los niños, las niñas y los adolescentes. Pero, además, me parece
que el rol de la defensoría en este tema y en otros que eventualmente puedan surgir
en la conversación es brindar evidencia y hacer, en el mejor de los sentidos, un uso
estratégico de la evidencia para informar el debate público. Después vendrán las
relaciones de poder, los conflictos de intereses, las visiones ideológicas; pero el rol
de la Defensoría es poder informar ese debate público, empezando por el debate
legislativo.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muy bien… “Muy bien” dije porque estamos
terminando, no porque lo esté evaluando.
Tiene la palabra la senadora Fernández Sagasti.
Sra. Senadora Fernández Sagasti.- Bienvenido.
Gracias, presidenta.
Yo tengo tres preguntitas puntuales. La primera es repetida; ya la hice y usted
estuvo desde temprano, como le oí. ¿Cómo percibe usted la problemática de
violencia policial en la población, sobre todo, respecto de los jóvenes? Porque no lo
escuché en su presentación. ¿Qué acciones, en general, considera que se deben
hacer para detener estas prácticas?
Segundo, ¿qué piensa de este gran debate que se dio en el Congreso de la
Nación, que tampoco se lo escuché –de los demás sí; lo dijeron por encima, pero se
han expresado respecto de esto–, en torno al tema de IVE, de la interrupción
voluntaria del embarazo?
Y tercero, tengo un informe acá, Infancia en deuda, en donde ha presentado
un rechazo tanto a la presidenta del Senado como al presidente de la Cámara de
Diputados respecto del presupuesto y los recortes presupuestarios que ha enviado
el Ejecutivo para 2019 específicamente en políticas de infancia.
Por ejemplo, infraestructura escolar –dice el informe–, un 71 por ciento
menos; programas como atención del niño y la madre, un 62 por ciento menos;
etcétera. La pregunta es si usted estima que el defensor de la niñez tiene que actuar
respecto de esto y qué actuación llevaría usted a cabo en caso de ser elegido
defensor. Gracias.
Sr. Repetto.- Muchísimas gracias.
Empiezo por lo primero, respecto de la violencia policial. Creo que lo decía
quien me antecedió, la colega Naddeo. Hay, efectivamente, que activar todos los
mecanismos posibles para que se cumpla el marco normativo vigente. Claramente
la Defensoría tiene que tener un rol bien activo en evitar esos atropellos y tiene que
tener una estrategia, incluso, comunicacional en la materia.
Guardo para lo último lo vinculado a IVE. Respecto del recorte
presupuestario, definitivamente es una tarea fundamental. Una de las tareas
vinculas al seguimiento prevé definitivamente que hay que tener seguimiento de la

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 83
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

inversión. El artículo 72 es muy explícito en el marco legislativo vigente. Creo que


hay que hacer un seguimiento no solamente al momento en que llega el
presupuesto, en septiembre de cada año, sino de cómo va el proceso
correspondiente. Y claramente hay que cumplir con las normas vigentes de que no
se pueden bajar los fondos en materia de niñez y adolescencia, activando en
consecuencia los mecanismos administrativos o judiciales para que eso
efectivamente no suceda.
Respecto de IVE, tengo varios puntos –porque era una pregunta que
seguramente iba a surgir–, que me los anoté en mi machete de mi toma de posición
al respecto. Hay un viejo filósofo italiano que, mientras estaba en la cárcel por sus
ideas políticas, decía que vivir es tomar partido. Yo quiero arrancar por esa cita de
Gramsci, que es de quien estoy hablando.
Yo estoy a favor de la interrupción voluntaria del embarazo, a título personal.
No es una posición institucional, porque no soy el defensor en este momento. Creo
que, en ese sentido, lo que se hace en la célebre ley 23.849, cuando se aprueba la
convención, no es una reserva sino una declaración de interpretación. No soy un
jurista y entonces estoy hablando por boca de los juristas que saben del tema, pero
he estudiado algo al respecto.
Creo que es claro que en materia de niños, niñas y adolescentes se cumpla
con las causales previstas, que a veces no se cumple y creo que hay que ser muy
activo en esa materia. Creo que si la pregunta usted me la llevase hacia las
argumentaciones jurídicas, yo no tengo los elementos, pero sí haría totalmente míos
los 51 minutos 49 segundos de la doctora Aída Kemelmajer en su presentación en el
Senado de la que tomo sus argumentos y los adhiero desde técnicas jurídicas en las
que no soy especialista, pero entonces, simplemente invito a ese video de YouTube
de 51 minutos con cuarenta y pico de segundos donde fija su posición.
Creo que sí es importante y no es menor –y quisiera ser enfático en esto–
que si el sistema político lleva a que la Defensoría tome una posición activa
respecto al tema del IVE –voy a jugar un poco con las palabras–, se corre el riesgo
de que no nazca ni viva ni crezca sana. No porque no haya que tener una posición
en esta materia, pero es tan incipiente la construcción de la institución que meterla
en la complejidad del debate que ha tenido la Argentina y que seguirá teniendo la
Argentina en materia de IVE, creo que sería ponerla en el centro de una escena que
todavía la Defensoría no está preparada para eso.
Sí creo que la Defensoría tiene que jugar un rol bien activo, se ha dicho acá y
lo han dicho varios de los colegas, en lo que es hacer cumplir claramente la ley de
ESI. Esa es mi posición.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- ¿Alguna pregunta?
-No se realizan manifestaciones.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muchas gracias.
Locutor.- Invitamos a exponer a la señora Nora Schulman.
Sra. Schulman.- Buenas tardes a todos y a todas, especialmente quiero felicitar a la
Comisión por la claridad, el tiempo cumplido y por la posibilidad que nos dieron,
después de doce años, de poder estar acá.
Quiero empezar por una cuestión anterior al defensor. Ustedes saben que yo
tuve una impugnación; la impugnación está hecha por una persona que yo no
conozco, que no sé quién es y que ha tomado cuestiones de Internet,
fundamentalmente de la página del cura Grassi.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 84
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Esto tiene que ver, justamente, con la protección que hizo el Comité de
Seguimiento y Aplicación de la Convención de los Derechos del Niño, que yo dirijo
hace muchos años, a favor de los chicos de Grassi y habernos presentado como
querellantes y haber podido meter a Grassi preso.
Entonces, nada más que eso. Creo que es una impugnación que me juega a
favor y no en contra, porque hemos defendido y hemos protegido los derechos de
esos chicos que ya eran adultos, pero que en su momento han sufrido horribles
situaciones de abuso sexual.
Ahora…
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Le agradezco la aclaración, porque era una
de las preguntas que le íbamos a hacer al finalizar.
Sra. Schulman.- Perfecto. En cuanto al plan de trabajo, no quiero repetir ni
definiciones, ni cuestiones que ya vimos sobre la situación general de los niños: el
tema de la pobreza, el tema de la violencia, el tema de la violencia policial y una
cantidad de cuestiones que ya hemos visto y que cansan de tanto escucharlas.
Sin embargo, presento un plan de trabajo que va a empezar,
fundamentalmente, con el organigrama y cuál es el rol específico del defensor.
- Se proyecta una presentación en Power Point.
Sra. Schulman.- Acá que no se ve nada y yo tampoco veo nada, pero la idea es un
defensor general que tenga un consejo consultivo, un consejo asesor y un área de
comunicación y prensa como algo realmente importante. Ya lo dijeron acá, se ha
trabajado muchos años con periodistas, se ha trabajado y hemos ido veinte veces a
la televisión –veinte no; doscientas–, a los programas de radio y no logramos que
muestren una imagen positiva de los niños, que no muestren a los niños y a las
niñas especialmente que han sido abusadas, que han sido matadas y que son
víctimas de femicidio. No; todavía no lo hemos logrado. Con lo cual, creo que es una
área sumamente importante tener una buena comunicación y tener una buena
comunicación con la prensa y hacer, de alguna manera, docencia y capacitación con
este tema en forma permanente.
Y también tenemos otra área, dependiendo del defensor general, que es la
propuesta de estructura orgánica, que tiene que ver con poner la articulación con los
distintos estamentos con los que va a trabajar, uno es el de las niñas y de los niños
–todo lo que es articulación interinstitucional–, el tema de la sociedad civil, el tema
de los legisladores, las relaciones de los legisladores con el Poder Ejecutivo y con la
Legislatura y con el Poder Judicial también. Y, por último, y tengo un machete acá,
porque no veo, todo lo que es el planeamiento institucional.
El segundo nivel tiene que ver, fundamentalmente, con los defensores
adjuntos, a los que no les adjudicamos funciones todavía; además de la paridad de
género y además de tener un asesor jurídico imprescindible. Yo tampoco soy
abogada, pero he trabajado toda mi vida profesional con abogados y sé que el
acceso a la Justicia es una de las cuestiones fundamentales que tienen los niños,
niñas y adolescentes: la falta de acceso a la Justicia. El otro sería un especialista en
políticas públicas.
De todos modos, la idea es formar un equipo conjunto que tenga la línea, la
misma idea y el mismo pensamiento y las mismas formas de actuar, para que, de
alguna manera, uno pueda reemplazar al otro en el momento en que sea necesario
y tengamos una idea común para ir hacia el mismo lado.
Y el tercer nivel estaría formado por lo que llamamos áreas programáticas. Es

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 85
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

decir, las áreas programáticas que tienen que ver con área de acceso a la Justicia,
con un área legal y técnica que se ocuparía de recursos humanos contaduría,
tesorería, administración en general. Y el área ejecutiva tiene un área de promoción
y una área de protección de derechos, diferentes.
El área de promoción tiene que ver un poco con el tema de la comunicación y
cómo uno va a transmitir las cuestiones que el defensor quiere transmitir, de qué
manera, usando campañas, usando cartillas, los medios de comunicación y una
cantidad de elementos que pueden utilizarse para hacer la promoción de derechos.
Y también un área de acceso a la Justicia que, como yo ya dije, me parece
fundamental también promocionar la figura del abogado del niño, que se usa poco y
nada, prácticamente en las provincias no se utiliza y acá hay bastante resistencia en
la Justicia a escuchar la voz del abogado del niño, poniendo distintas excusas que
no las dice la ley, que si el niño tiene su capacidad progresiva o no la tiene, o si
puede o no puede tener su propio abogado. Es decir, cada juececito con su librito. Y,
la verdad es que esto es bastante doloroso cuando uno le tiene que decir a un niño:
“Mirá, no te puedo representar porque el juez no quiere”. Y muchas veces hemos
escuchado a los chicos que preguntan: “¿Quién es la señora jueza?”. “¿Y para qué
me llama la señora jueza?”. “¿Y qué le digo a la señora jueza?”.
Entonces, este mediador, como abogado del niño, me parece que es una
figura sumamente importante para que el niño tenga confianza en la persona que lo
va a representar.
Después, también un área que atienda directamente las consultas y esto
tiene que ver con los casos individuales y los casos colectivos. De ninguna manera
se pretende ni se quiere abrir nuevas bocas de ingreso. La verdad es que tenemos
muchas bocas de ingreso en distintos organismos del Estado –quizá demasiadas–
para recibir y receptar denuncias y pocas bocas de atención.
Entonces, esta idea de no repetir la atención –porque por supuesto que no le
corresponde a esta figura– ni repetir las bocas de ingreso para que la gente siga
dando vueltas –digamos– alrededor de los distintos organismos sin encontrar
prácticamente ninguna solución.
Ahora voy a ir directamente a lo que son las definiciones del rol y las
funciones. Yo pienso la figura del defensor como un defensor de Derechos Humanos
de los niños, niñas y adolescentes. Cuando hablamos de derechos de los niños,
estamos hablando de Derechos Humanos. Entonces, tiene que cumplir y poner en
práctica necesariamente todo lo que significa y todo lo que dicen los traslados de
Derechos Humanos. Es decir, cumplir con la universalidad, con la transversalidad,
ocuparse de cuestiones concretas de los niños, cumplir con la infantilización de la
pobreza, garantizar fundamentalmente el interés superior del niño, que es el
principio rector.
Los principios rectores del defensor son la Convención, la ley 26.061 y,
dentro de eso, el interés superior del niño como el marco general. También bajando
a eso, las políticas públicas, y, por último y no menos importante, todo el sistema de
protección integral de derechos, que me parece que es uno de los temas que más
hay que apuntalar, que más hay que trabajar.
Están deteriorados –por llamarlo de alguna manera– los sistemas de
protección, entonces hay que darles fortaleza, hay que fortalecer los equipos
técnicos. El defensor tiene que vigilar y controlar que la atención y la intervención
sean centradas en el interés superior del niño y en lo que el niño necesita y quiere; y

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 86
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

no en lo que necesita el juez, la madre o el padre. Y fundamentalmente debe ser


escuchado. Por eso el derecho a ser oído me parece que es también otro de los
principios más importantes por el cual venimos batallando hace muchos años. Hay
que oírlo, hay que escuchar lo que dice, hay que tener una interlocución directa con
un niño, con un adolecente. Especialmente, con los adolescentes, que están en este
momento casi fuera de las políticas públicas.
Es decir, hay mucha política para la primera infancia y hay poca o escasa
política para los adolescentes. Salvo los temas de embarazo adolescente, que se
han tomado con fuerza e incluso han tomado estado público, todo lo demás está
rengueando. Tanto la escuela, los temas de violencia, la violencia institucional, el
bullying, el grooming, o sea, hay cuestiones que son importantes y que hay que
abordarlas con respecto a la situación de los adolescentes.
Los adolescentes no son ni grandes ni chicos. Entonces, a veces se genera
una superposición, porque cuando hay que castigar, van hacia arriba y los castigan
como si fueran jóvenes o jóvenes adultos; y cuando vamos para abajo, tienden a
infantilizar más las cuestiones de los adolescentes, que tienen –por supuesto con el
nuevo Código Civil– una autonomía progresiva, y esto tiene que ir cada vez más en
aumento en la medida en que los chicos puedan exigir. Y acá voy al tema de
participación de niños, niñas y adolescentes, que me parece que es un tema básico.
Hacer participar a los niños no es llevarlos a un evento y que estén sentados,
y que escuchen, y que después al final del evento lean un papelito, que en general
fue escrito o manejado por los adultos. La participación real y verdadera es que los
chicos participen de la creación de las políticas públicas, que puedan defender las
políticas públicas, que puedan opinar; que opinen acerca de las cuestiones que
realmente les interesan y de las otras no; que opinen de presupuesto, que opinen de
otros temas.
También es importante escucharlos, porque los chicos tienen una percepción
muy particular. Si uno pone el oído afinado, se va a dar cuenta de que tienen una
percepción tan interesante, con una gran capacidad de poder retransmitir sin
prejuicios, sin cuestiones propias de los adultos y que sean de discusiones o peleas
de adultos.
Me parece que esto de la participación es una tarea que se debe fomentar
desde esta nueva institucionalidad, para que vaya creciendo y que los chicos cada
vez adquieran mayores posibilidades de participación, sin olvidarnos…
Sr. Locutor.- Un minuto, por favor.
Sra. Schulman.- Voy rápido entonces.
Sin olvidarnos que hay cuestiones especiales. Una de las cuestiones es el
tema de la violencia y abuso sexual, que es un tema muy preocupante en este
momento. Hay aumento de casos de abuso sexual infantil. Está el tema del SAP,
que ya lo nombraron hace un rato. Hay una cantidad de niños que están
absolutamente desprotegidos de la Justicia, que tienen madres que los defienden y
que van presas por ello, o que son multadas, o tienen graves y serios problemas.
Me parece que el tema de la violencia en general, especialmente contra los niños y
niñas, hay que considerarlo muy especialmente.
También, el tema de la violencia en general y también –y con esto termino– lo
que son los grupos especiales. Es decir, hay niños que no están en la agenda, como
por ejemplo, los niños trans, LGTBI, los niños y niñas con discapacidades, los niños
y niñas que son de pueblos originarios y una serie de temas más. Por ejemplo,

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 87
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

temas de explotación sexual comercial, que prácticamente es un tema del que no se


habla. No es trata, es explotación de niñas y niños muy chiquitos. A su vez, el tema
de los recursos. Obviamente, la intangibilidad de los fondos.
Hay temas que tienen que ver con el tratamiento de los medios de
comunicación –como ya lo dije– y también algo que escuche al pasar pero que me
parece importante; me refiero a la responsabilidad social empresarial. ¿A quién se
dirige esa responsabilidad social? ¿Esa responsabilidad es para apuntalar derechos
o es simplemente una cuestión que tiene que ver con que yo lavo mis culpas
tocándole la cabeza a los chicos, apuntalando hogares, comedores o merenderos,
mientras los chicos están trabajando en situación de calle o en situación de trabajo
rural, que es otro de los temas muy graves en nuestro país? Muchas gracias.
(Aplausos.)
Sra. Presidente (Senadora Durango) .- Muchas gracias. Voy a hacer una pregunta
mientras el resto de las compañeras piensa la suya. Usted habló de la vulneración
de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, pero especialmente de los
adolescentes.
Entonces, cómo piensa usted, si llegara a ser la defensora, que puede
receptar esa demanda a nivel nacional, sobre todo en las provincias donde no hay
un defensor.
Sra. Schulman.- Yo creo que con los adolescentes hay que utilizar los medios que
ellos usan. Es decir, poner a disposición las redes sociales. Los chicos, en general,
tienen teléfono, y aun cuando tengan poco acceso a internet, tienen páginas web y,
en general, instrumentos como Facebook e Instagram, que los chicos usan mucho.
A veces, desde otras regiones uno puede receptar estas cuestiones y hacer la
derivación a los organismos que corresponda.
Además, cuando uno va y se acerca a las provincias y ve que no hay
defensor –más allá de tener la voluntad política y de ejercer presión para que lo
haya en todas las provincias de las Argentina–, creo que tiene generar este
acercamiento, hablar con adolescentes, hacer reuniones con adolescentes; de
hecho, se están haciendo en algunos lugares, tanto nacionales como
internacionales. Es decir, apuntalar todos esos mecanismos en los cuales están
insertos los adolescentes y aprovechar esos espacios para potenciarlos.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Bien.
Tiene la palabra la senadora Verasay.
Sra. Senadora Verasay.- Muchas gracias; bienvenida.
Sra. Schulman.- Gracias.
Sra. Senadora Verasay.- Sencillamente voy a hacer dos preguntas.
Particularmente, qué plantea o que propone usted, en caso de ser defensora del
niño, como medida activa para lograr finalmente implementar la educación sexual
integral.
Si bien veo en el trabajo el diagnóstico del que todos somos conscientes –y
más pensando en un sistema federal–, qué acción concreta cree conveniente desde
la Defensoría del Niño para impulsar el cumplimiento obligatorio de esta ley.
Y, la segunda pregunta, es: ¿qué opinión le merece o qué opinión tiene sobre la
discusión del régimen penal juvenil que estamos llevando adelante en vistas que se
viene la modificación del Código Penal? ¿Qué opinión le merece a usted, siendo
defensora del niño en vista de este debate?
Gracias.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 88
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Sra. Schulman.- Sí.


Voy a empezar por el segundo: el tema penal juvenil es un tema que viene
retrasado en la Argentina, muy retrasado, porque la discusión se centra,
fundamentalmente, en la baja o en la suba de la edad.
Particularmente, estoy plenamente segura con que no hay que bajar la edad,
menos aún en las condiciones en las que está la Argentina, donde hay muchos
chicos presos –chicos menores de 16 años– y en institutos que son cárceles. Me
parece que el debate tiene que darse, fundamentalmente, sobre el tema de las
garantías, es decir, de qué manera los chicos pueden acceder a tener un abogado,
a tener un juicio justo y a tener la posibilidad de apelaciones. Es decir, a una serie
de cuestiones que tienen que ver, justamente, con las garantías de los niños.
La edad, en este caso, en 16 años está bien. En realidad, lo que dicen los
organismos internacionales es que incluso hay que subirla a 18, así que esta
discusión de bajar a 14 o a 15 no va a hacer más que llenar más institutos y no da la
posibilidad de que estos chicos que están bien, que son chicos con derechos… Es
decir que, de alguna manera, trabajen en conjunto el sistema penal con el sistema
de familia y con los servicios de protección implica que estos chicos que están
institucionalizados no tienen derechos, no van a la escuela, no tienen posibilidad de
atención en su salud y están mal comidos. Ahora bien, estos son los derechos
universales para todos los chicos. Esta famosa frase de UNICEF, cuando salió la
Convención, que dice: “Todos los derechos, para todos los niños.”, me parece que
eso es lo que hay que aplicar. No son ciudadanos de segunda: ni los pobres ni los
chicos que han tenido algún conflicto con la ley penal.
No sé si contesté.
Y con respecto a ¿qué postura tomaría y a qué haría para poder promover la
educación sexual? En primer lugar, promoverla. En las áreas de promoción de
derechos, se debe promover que la educación sexual integral es importantísima,
para que no pasen cosas como las que están pasando en estos últimos días: de una
nena que no sabe cómo cuidar su cuerpo, de otra que es violada a los cuatro años y
de una cantidad de niños y de niñas que no tienen posibilidad de conocimiento, ya
que, al no tener educación sexual integral, no saben, por ejemplo, que están
embarazadas a los diez años, producto de violaciones. Pero no saben que eso no
se puede, que el cuerpo hay que cuidarlo, que el cuerpo es de uno y que nadie lo
puede tocar.
Entonces, reitero, me parece que, en primer lugar, hay que promoverla; en
segundo lugar, de alguna manera, obligar a los ministerios de Educación y no solo al
de la Nación, sino también a los de las provincias, incluso, involucrando a las áreas
de salud a que se aplique obligatoriamente, porque las leyes están hechas para
cumplirse; no están hechas para quedar en un marquito colgadas y no obedecerlas.
Este es un tema fundamental de aplicación, de exigibilidad de derechos y una de las
principales tareas del defensor: exigir que se cumplan las leyes y las políticas
públicas.
Sra. Diputada Carrizo, Carla.- Gracias por la presentación.
Una pregunta muy puntual, ¿cómo cree usted que se puede mejorar el registro
en la palabra de los niños? ¿Usted cree que siguen sirviendo las actas en papel o
en computadora o se le ocurre que podríamos registrar de otra manera, incluso para
fidelizar aún más la palabra de los niños?
Sra. Schulman.- ¿En todos los ámbitos o en ámbitos judiciales?

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 89
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Sra. Diputada Carrizo, Carla.- En todos los ámbitos.


Sra. Schulman.- Sí, como decía antes, me parece que hay que utilizar las
herramientas que utilizan los chicos y manejar un aparato electrónico que todos
tenemos que aprender a manejar −que no muchos sabemos−, y los chicos saben
mucho más.
Me parece que, de alguna manera, el registro tiene eso: el papel es viejo, y
mucho más para los chicos, entonces, el uso de tecnología, de nueva tecnología, y
esta posibilidad de que los chicos tengan acceso a las tecnologías va a permitir
tener un registro distinto; va a permitir que los chicos puedan expresar sus
opiniones, que digan lo que les pasa, que haya una página web −que la Defensoría
puede tener− abierta con acceso a los chicos, para que ellos puedan contar, no solo
sus problemas, sino sus inquietudes, sus formas de ver las cosas, sus posibilidades
en distintos aspectos y en la justicia mucho más.
Yo creo que en la justicia necesariamente hay que utilizar la Cámara Gesell. No
se puede seguir revictimizando a los chicos de la manera que se está haciendo en
este momento. Hay que hacer un trabajo fuerte y de exigibilidad de derechos con la
justicia también, porque la justicia viola derechos. Me atrevo a decirlo porque he
actuado en muchas situaciones donde es enormemente violatoria de derechos y los
chicos sufren las victimizaciones y las revictimizaciones.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Sí, diputada…
Sra. Diputada Mercado.- Para volver un poco sobre la aplicación de la educación
sexual integral, deseo consultarle sobre lo que podría ser una colisión de derechos
entre el derecho que tienen nuestros niños, niñas y adolescente a recibir educación
sexual integral, y la fuerte o la férrea oposición que han generado algunos sectores
que impiden que esto se lleve a cabo, entonces, ¿cuál debería ser, desde su punto
de vista, el margen de intervención del defensor o de la defensora de los derechos
del niño, niña y adolescente?
Sra. Schulman.- Creo que para esto hay que utilizar mucho a los medios de
comunicación. Son los medios que realmente van a transmitir las cosas y la gente
los mira, y está al tanto y mira esto, a veces, morbosamente.
Y, después, esta cuestión de ver de qué manera, ya que es bastante difícil hacer
entender que los chicos no son de los padres. Los chicos son personas, personas
en crecimiento y yo no tengo derecho, y que si el Estado impone una ley de
educación sexual integral hay que darla, aunque haya papás o mamás a los que no
les guste. En esto involucro mucho el tema de las iglesias, en general, porque allí
hay una influencia muy, muy grande sobre la gente y un permanente lavado de
cerebro para esto: “Con mis hijos no; a mis hijos no los toco”. Tus hijos no son tuyos;
una vez que salieron de tu panza, son del mundo, de la comunidad, de la sociedad y
también del Estado.
Es lo mismo que decir que yo no quiero que mi hijo vaya a la escuela. A mí
me tocó una vez una situación así en la que una mamá no quería que fuera a la
escuela. Ahora bien, la escuela es obligatoria y el chico tiene que socializarse;
bueno, esto también es obligatorio, porque la ley es obligatoria, entonces, hay que
aplicarla. No se puede discutir una ley que ha sido sancionada con el acuerdo de la
mayoría de los bloques.
Esto es cultura y este pensamiento es el que hay que ir cambiando en la
gente y en la evolución. Incluso, hay materiales muy interesantes de trabajo sobre
cómo se trabaja educación sexual en los niños más pequeños. Materiales que son

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 90
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

fantásticos y que deberían estar al alcance de toda la gente, para que la gente vea
que no le vamos a enseñar a un niño o a una niña una relación sexual completa. No.
Se le va a enseñar, en principio, a cuidar su propio cuerpo y a considerarse persona,
y persona con derechos, y, entonces, a partir de ahí, empezar a trabajar con los
niños también.
Los niños son grandes generadores de cambio y eso, a veces, cuando se
dispara una situación en donde ya ha habido educación sexual, muchas veces, se
descubren otras cosas que están por abajo: temas de violencia, de abuso, etcétera.
Muchas veces salen a la luz temas que estaban como guardados o escondidos.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Muy bien. Muchas gracias, Nora.
Locutor.- La postulante Cecilia Sosa.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- La última. ¡Tranquila, que los últimos serán
los primeros, dicen! (Risas.) Bienvenida.
Sra. Sosa.- Agotada. (Risas.) Ustedes también.
Quiero agradecerle a la Comisión Bicameral este espacio de casi un mes que
hemos transitado juntos. La verdad es que yo por lo menos no soy la misma que
cuando comencé. Ha implicado un importante esfuerzo más allá de las experiencias
que cada uno trae personales, pero evidentemente el proceso también produjo
cambios en las cabezas por lo menos yo creo que de todos, y lo veníamos
hablando. Así que quiero agradecerles por esto.
Un poco la experiencia que yo traigo en realidad es el final de un proceso que
inicie allá en los años 90 en la Defensoría de Niños, Niñas y Adolescentes de la
Ciudad de Buenos Aires. En ese marco entendía la necesidad de dar una cuestión
histórica respecto del lugar de estos servicios, que nacen por primera vez en la
Argentina; nacimos esencialmente con un grupo de abogadas, éramos todas
mujeres en ese momento. El marco normativo con el que trabajamos fue la
Convención de los Derechos del Niño, porque era el marco normativo del momento.
O sea que esencialmente somos nacidos, por lo menos toda esa generación, desde
ese lugar.
Entonces, era para hacer un poco el relato de la experiencia desde donde voy
a hablar. El plan que yo diseñé… ¿Está la segunda filmina, por favor? Ponemos
este.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- ¿Se habrá gastado la pila?
Sra. Sosa.- Bueno, no importa. Una anterior, por favor.
El plan sobre el sentido de esta nueva institucionalidad. Yo siempre me
pregunto acerca del sentido de las cuestiones, de las cosas: ¿Por qué esta
institución? ¿Por qué el sistema de protección? Incluso cuando trabajamos con
otros profesionales y empiezan por primera vez es importante saber el sentido de
las cuestiones, porque si no uno repite y no entiende el porqué de las cuestiones,
por qué es necesario un sistema de protección. En ese sentido, esta nueva
institución yo la ubico esencialmente en el derecho del niño a ser oído y en el
derecho a que sus opiniones sean tenidas en cuenta; esta es la manda que trae
esta Defensoría, esto es dar cuenta del artículo 12 de la Convención de los
Derechos del Niño.
Por otro lado también pienso en la obligación que tenemos desde el Estado,
en este caso el defensor/defensora, de escuchar, o sea, de reconocer los derechos
y garantizar los derechos. A partir de ahí la función de este defensor/defensora
tendrá que asesorar, canalizar las inquietudes y defender los derechos. Cuando yo

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 91
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

hablo de defender los derechos lo que estoy pensando es en el control que tiene
que hacer esta Defensoría respecto de las instituciones públicas y privadas que
componen el sistema de protección integral en forma directa en el orden nacional y
en forma indirecta respetando las autonomías provinciales; pero es este lugar, o
sea, el lugar de control.
También pienso que es importante desde esta responsabilidad, además de la
perspectiva de derechos y géneros que tiene el sistema, producto de estar en el
marco de los derechos humanos, o sea, de compartir las características de
integralidad, de indivisibilidad, de interdependencia, otras perspectivas que tienen
que ver determinadas infancias, como es la de niños, niñas y adolescentes con
discapacidad y la perspectiva social que trae la Convención Internacional sobre los
Derechos de las Personas con Discapacidad que trae, la perspectiva de los pueblos
originarios en relación a la comunicación entre culturas y la perspectiva de los niños
migrantes, en tanto, estos dos últimos en general son sectores o grupos de niños
que son discriminados por cuestiones institucionales y comunitarias. Entonces, hay
que tener una especial mirada en las políticas, en las instituciones y en las
normativas que armemos.
En relación a la situación de las políticas públicas, nuestro país ha avanzado,
o sea, tiene un importante andamiaje normativo producto de la Convención, allá por
los años 90, y en el año 2005 la 26.061 lo que produce es una nueva
institucionalidad. Esta nueva institucionalidad lo que plantea es que el conjunto de
actores que participamos de esta institucionalidad tiene por objetivo proteger
derechos, o sea, a partir de ahora esta institucionalidad mira derechos, no mira más
cuerpos o personas; esta es la esencia del sistema. Es por esto que la perspectiva
que trae esta ley, la 26.061, es una perspectiva que impregna el conjunto de las
políticas, planes y programas, y la institucionalidad nacional y la institucionalidad
provincial.
En relación a la institucionalidad que se ha dado a nivel federal, lo que
podemos decir es que no está completa, o sea que faltan organismos y andamiajes
que puedan acompañar la institucionalidad propuesta por la 26.061. Una
diferenciación entre órganos de protección, una diferenciación entre políticas de
prestación con claras funciones de organismo de protección respecto de las
políticas, planes y programas. En esto también hay dificultades en orden a la
coordinación, dificultades en orden a los registros de información, a la construcción
de datos fiables; o sea, nos falta un sistema que pueda dar cuenta del diseño de las
políticas públicas y de los datos que nos sirvan para comparar a nivel nacional.
¿Cuáles son las principales problemáticas que planteo? Yo vuelvo al tema.
Las principales problemáticas, en realidad, tienen que ver con volver a fortalecer
esta institucionalidad. Es una de las problemáticas en las que yo hago eje: el
sistema de protección de derechos. Hubo tres planes, en la actualidad es el tercer
plan: el plan de acción de niñez y adolescencia desde año 2008 hasta 2011, desde
2014 hasta 2016, desde 2016 hasta 2020. Todos hicieron eco en el fortalecimiento
de la cuestión constitucional, o sea, de los servicios de protección de derechos, no
solo el nacional sino el federal a través del Consejo Federal, el de la provincia y el
local. Esto es muy importante, porque significa terminar de construir una
institucionalidad que todavía está incipiente.
En relación a otras problemáticas que yo planteo y que es necesario abordar
desde las políticas está todo el tema del derecho a la salud y al bienestar. Esto

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 92
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

significa garantizar el derecho a la salud en todo el país de igual forma, no


fragmentada como está, o sea, con el mismo impulso en los lugares urbanos que en
los lugares rurales, en los lugares de los pueblos originarios, en los lugares de los
migrantes; o sea, el servicio de salud tiene que llegar a todos los lugares de igual
manera.
También hay problemas y es necesario bajar con la mortalidad infantil, la
mortalidad neonatal, la mortalidad posnatal. Es fundamental el tema de salud
integral del adolescente. Acciones de promoción y prevención del embarazo en las
adolescentes menores de 15 años, no intencional. En esto pongo especial énfasis
en la ley de educación sexual integral, la necesidad de que esta ley se aplique en
todo el país, tal como lo dijeron los que hablaron durante la jornada. El defensor
tiene que velar por la aplicación de estas normas en el orden nacional y acompañar
los procesos para que las provincias adhieran a la normativa nacional.
Con respecto a la inclusión y calidad educativa, es importante garantizar el
acceso a la escolaridad en todos los niveles, poniéndose especial énfasis en la
primera infancia, como plantea la observación del Comité de los Derechos del Niño,
hasta los ocho años.
Los cuidados de la primera infancia y profundizar la implementación de
políticas. Otra de las cuestiones importantes a tener en cuenta es la protección
contra todo tipo de violencia, ya sea violencia doméstica, intrafamiliar e institucional.
Es decir, todo lo que atraviesa la violencia.
Un punto que se agregó son los niños sin cuidados parentales. Hay que tener
políticas que garanticen el no ingreso de los niños a las instituciones. Hay muy
pocas políticas en este sentido. Y también hay que tener muchas políticas para
lograr el egreso y que acompañen los procesos de las familias. Digamos que la
familia tiene un rol importante en lo que hace al fortalecimiento. Es desde estos
lugares donde uno fortalece los lugares de los niños.
Además, el defensor debe hacer el seguimiento de las directrices o las
modalidades alternativas de los cuidados parentales. Es decir que hay normativa
para revisar de qué forma estamos trabajando en las instituciones.
Con relación al trabajo infantil, es fundamental la fiscalización sobre la
normativa de prohibición del trabajo infantil, la protección del trabajo adolescente.
Tener registros nacionales para saber la situación nacional y por regiones de estas
cuestiones.
Con relación a los adolescentes en conflicto con la ley penal, nosotros
tenemos que modificar nuestra legislación ya que no está adecuada a los marcos
normativos de la Convención. Estamos bastante lejos, en realidad, de los marcos
normativos de la Convención. Es fundamental, en este sentido, producir un cambio
en el sistema de responsabilidad penal juvenil. También hay fallos de la Corte
Interamericana en el sentido de ir modificando la normativa de la Argentina por este
tema.
En cuanto al tema de discapacidad, la Convención Internacional para las
Personas con Discapacidad no ha ingresado en la normativa de la 26.061 ni en la
normativa del Sistema de Protección. Hay que adecuarla porque es un paradigma
que tiene que ver con un concepto social de la discapacidad. No está en la persona.
Está en el entorno. Por lo tanto, hay que pensar a esta problemática desde el lugar
que nos plantea y no desde el lugar médico hegemónico. Hay varios temas
alrededor de estas cuestiones.

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 93
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Finalmente, la estructura que se propone tiene que ver con lo que venimos
diciendo. Hay dos grandes áreas que tienen que ver con la defensa y el monitoreo,
la parte de protección. Se debe intervenir ante las situaciones de amenaza y
vulneración de derechos para exigir a las instituciones y al sistema de protección
que revise lo que hace.
Locutor.- Un minuto, por favor.
Sra. Sosa.- Pero, esencialmente, el espacio de promoción y fortalecimiento
institucional interjurisdiccional tiene que ver con lo federal.
La promoción y fortalecimiento institucional interjurisdiccional la pensé
mirando hacia lo federal, mirando las provincias y las regiones y pensando en la
necesidad de nombrar a los defensores en las provincias que aún no lo tienen.
También pienso en protocolos interjurisdiccionales.
También tiene que ver con acciones de sensibilización tanto para el mundo
adulto como para el mundo de los niños, en particular, con relación a cuáles son sus
derechos, de qué forma se los exige y cuál es la exigibilidad cuando esos derechos
no se cumplen. Este es el lugar para los niños.
Esta Defensoría esencialmente tiene que reconocer y garantizar la palabra de
los chicos y, a partir de ahí, es que las propuestas con relación a los niños tienen
que ver con requerir a las instituciones cuáles son los mecanismos por los cuales
escuchan. O sea de qué manera las instituciones de educación y salud escuchan a
los chicos. ¿Cuáles son los protocolos para escuchar? Hay diferencias de edades y
hay mucho material alrededor de las observaciones pertinentes de derecho a ser
oído. También la Observación N° 14 de interés superior del niño nos da bastante
idea sobre de qué manera hay que trabajar en ese sentido.
Y luego hay un tercer punto que es de Apoyo a Otras Áreas. Eso tiene que
ver con la legal y técnica, la gestión administrativa, la auditoría interna, para saber
sobre los procesos internos…
Locutor.- Tiempo cumplido.
Sra. Sosa.- Bueno, igual había llegado. (Risas.) (Aplausos.)
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Tiene la palabra la diputada Carrizo.
Sra. Diputada Carrizo, Carla.- Tres cuestiones, dos vinculadas a la educación y
una vinculada a lo federal.
En el tema de la educación inclusiva, hay un fallo de la Corte Suprema.
Entonces, la pregunta sería cuál es tu estrategia para que ese fallo se cumpla en las
provincias en que no hay defensores. ¿Tenés pensada alguna estrategia para
ingresar con una medida concreta que la Corte ha impuesto a las provincias y dado
que es una competencia provincial?
La segunda cuestión es que me parece importante el tema de las escuelas.
Hablaste de generar mecanismos para que los chicos sean escuchados.
Evidentemente, esos mecanismos no estarían funcionando ya que el bullying es
impresionante en la Argentina. Entonces, ¿qué propuestas tendría el defensor
nacional para encontrar mecanismos eficientes y eficaces que lleguen a los
protagonistas y los chicos sientan que el cuidado les llega a tiempo?
Tercero. Decías que el defensor nacional tiene el universo de los planes
nacionales y coordina con las autonomías provinciales. Pero la autonomía hasta ahí
nomás porque el federalismo no da derecho a violar pisos de derechos nacionales.
¿Cómo, de alguna manera, monitorearías y exigirías a las provincias cuando
incumplen derechos nacionales básicos?

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 94
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

Esas tres preguntitas. ¿Tenés conjeturado cómo hacerlo?


Sra. Sosa.- Qué preguntas. Nada fácil.
El fallo no lo conozco. Pero si hablamos de educación inclusiva, hablamos de
discapacidad. Bien. ¿Es un fallo que obliga a las provincias a incluir? Bueno, a ver.
Nosotros ya tenemos deficiencias grandes con un modelo de educación. La Ley de
Educación prevé el modelo especial. Inclusive, desde ese punto de vista, te podría
decir que hay que modificarlo. Tendríamos que cambiar ya el modelo de gestión
especial porque va en contra del paradigma de los derechos de las personas con
discapacidad.
Hoy, la educación debiera hacerse en lo que es la educación común.
Soy bastante ansiosa por los cambios cuando existen normas, pero entiendo
de los cambios y de la necesidad de ir en camino a. Lo que pasa es que no sé si
estamos en camino a ir a ningún lado en este punto. Y hoy los datos que tenemos
es que hay más niñas y niños dentro de los ámbitos especiales que dentro de los
ámbitos de educación común. Y aun dentro de la educación común hay serios
planteos con relación a las cuestiones de apoyos, porque los apoyos en muchos
casos requieren de dinero.
Nosotros, en la Ciudad de Buenos Aires, el año pasado, en las defensorías,
estuvimos trabajando un montón alrededor de la temática de la discapacidad y con
este paradigma. No es un tema sencillo, porque es un tema muy cultural, de
entender las cuestiones desde la lógica de la rehabilitación; desde entender que una
persona es discapacitada y no una persona con discapacidad, que es el primer
corte, hasta poder trabajar con los padres, que son los primeros que tienen que
exigir, en las escuelas, que los chicos tienen que ir a escuelas comunes. En todo
caso, el problema lo tiene Educación, no los niños ni los padres. Este es mi
concepto, más allá de que voy a buscar ese fallo que mencionaste.
El otro tema es el bullying nacional. No sé si hay una respuesta única, porque
habría que pensar el tema bullying como una cuestión que tiene que ver con cómo
nos paramos, qué pasa con los niños y su dificultad de entender al otro como uno
más, con su diversidad humana –digamos–; así lo plantea. Me parece que también
vuelve a ser un trabajo muy arduo. Así como el tema del maltrato, son temas
culturales que nosotros arrastramos, y nos paramos en algún momento muy mal
para hoy tener que deconstruir todo esto. No es fácil. Pero entiendo que es una
tarea que la tendríamos que hacer con los defensores de las provincias, armar una
fuerte agenda de trabajo nacional y provincial, y trabajar en pos de cambiar algunas
cuestiones. Más que cambiar, en realidad hay que posicionar algunas cuestiones.
Después, el tiempo dirá que las hemos cambiado. Nosotros sabemos que los
procesos de cambio –inclusive, como profesionales formados y demás– tardan
mucho tiempo hasta que a alguien le hace clic y se entiende. No es fácil. Ni siquiera
es fácil de entender la cuestión de sujeto de derechos y la cuestión de sistema que
protege derechos y no personas. Son cambios que requieren un posicionamiento
jurídico, ideológico y conceptual que implica mucha formación, a veces.
Algo que me olvidé es que todo este sistema requiere de muchísima
formación, porque es una mirada arriba de otra, para entender la diversidad de la
infancia. No hay una infancia, hay muchísimas infancias y nosotros, como
defensores, tenemos que entender que tenemos que dar cuenta a todas esas
infancias.
Sra. Diputada Mercado.- Supongamos que sos la defensora y pasaron cinco años,

Dirección General de Taquígrafos


“2018 – Año del Centenario de la Reforma Universitaria”

23.10.2018 Reunión de la Comisión Bicameral Permanente Defensor


Pág. 95
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061)

¿cuáles serían las tres cosas por las cuales desearías que te juzguen en tu gestión?
Sra. Sosa.- Si el sentido que yo le di a la institución es el derecho a ser oído, yo
querría que me juzguen por ahí, los chicos, además.
Sra. Presidente (Senadora Durango).- Bueno, hemos llegado a la última
postulante.
Quiero agradecerles, en primer lugar, a todos los participantes, porque han
demostrado un conocimiento, una preparación y una preocupación que le dan
mucha seriedad a este concurso, que era lo que nosotros, en realidad, buscábamos:
implementar un modelo de concurso, que hasta ahora no se había implementado en
el país, ni en muchas provincias argentinas, excepto en La Pampa.
También ha sido un aprendizaje, por lo menos para mí. He escuchado
muchas cosas que, en algunos casos, no es que no las sabía, pero me las han
refrescado, porque han sido seis horas, seis horas y media escuchando no
solamente sobre la ley, sobre los derechos vulnerados de los niños, etcétera. Así
que les quiero agradecer la preocupación.
El que salga seleccionado no significa que los otros, que no sean
seleccionados, no hayan estado en condiciones de serlo. Ha sido un grupo de
catorce postulantes muy calificados. Así que, cualquiera que sea seleccionado o
ponderado por nosotros, eso no significa que el resto no esté calificado.
También quiero agradecerles a los defensores, que han estado sentaditos
ahí, pero que nos dan con su presencia, con su orientación, con su asesoramiento,
con su experiencia, también, una fortaleza para poder avanzar.
A las compañeras diputadas y senadoras que nos hemos acompañado, como
dije al principio, más allá de nuestra pertenencia a los partidos políticos, porque el
objetivo ha sido ese y creo que, como nunca, una Bicameral ha funcionado en ese
sentido. Así que muchas gracias, como presidenta de la Bicameral.
A las asesoras y a los asesores, que han trabajado. (Aplausos.) Han tenido
todo al día, impecable. La verdad, les agradecemos muchísimo.
Sabemos de la importancia que tiene esta elección. Nos vamos a reunir en
estos días para ponderar, para calificar y, antes del 20 de noviembre, tenemos que
tener la decisión. Va a ser antes, porque el 20, además, es feriado. Alrededor del 16,
quiero creer que vamos a tener ya el resultado.
El defensor nacional o la defensora van a tener una importancia fundamental.
Y lo digo con autoridad, porque la elección del defensor en la provincia a la que yo
represento, que es la provincia de La Pampa, que hace un trabajo formidable, Juan
Pablo –no quiero dejar de hablar de ustedes dos, pero hablo de lo que conozco–,
está haciendo un trabajo formidable en la provincia; además, es verdaderamente
respetado y, como bien dijo alguien –creo que fue Repetto–, no un trabajo con el
Poder Ejecutivo, sino articulando las políticas públicas con lo que verdaderamente
tiene que ser la defensa de los derechos de las niñas, niños y adolescentes. Así
que, por mi parte, muchas gracias a todos. Si alguien quiere decir algo, encantada.
Muchas gracias. Buenas tardes. (Aplausos.)
–Son las 17:47.

Dirección General de Taquígrafos

Potrebbero piacerti anche