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Cynthia Noemi Martinez Briseño

RUSALKA
Palacio de Bellas Artes
Función Jueves 3 de mayo del 2018
Introducción
Historia de la construcción del Palacio de Bellas Artes

A principios del siglo xx, como parte de los festejos del Centenario de la Independencia de
México y el programa de obras que buscaba embellecer la ciudad, el entonces presidente
Porfirio Díaz encargó al arquitecto italiano, Adamo Boari, el levantamiento de un nuevo
Teatro Nacional que remplazara al antiguo. El proyecto fue coordinado por la Secretaría de
Comunicaciones y Obras Públicas, y tuvo distintas fases de construcción. En la primera, de
1904 a 1912, se realizaron los cimientos y el exterior del edificio. Boari siguió los parámetros
del “Nuevo Arte Decorativo Moderno”, conocido internacionalmente como art nouveau. En
la estructura del edificio utilizó acero y concreto, técnica que era considerada novedosa; y
revistió el esqueleto metálico de mármol. Las esculturas de la fachada, todos en mármol de
Carrara, representan a las bellas artes y fueron encargadas a artistas extranjeros.
El plazo para concluir las obras era de cuatro años, sin embargo los trabajos no se
finalizaron debido a que las características del suelo no soportaron la estructura del edificio
y el presupuesto inicial fue excedido. Finalmente, con el estallido de la Revolución en 1910,
la construcción fue interrumpida. Los trabajos se reanudaron en 1928, con el arquitecto
mexicano Federico Mariscal como director de obras. Esta segunda etapa se distinguió en
el desplazamiento del estilo art nouveau por el art déco y en el uso de materiales como ónix
y mármol para los acabados del vestíbulo e interiores. De 1932 a 1934, el ingeniero Alberto
J. Pani, entonces Secretario de Hacienda impulsó la última etapa de construcción. Se
transformó a manera que funcionara como foro nacional para las artes escénicas y
plásticas. Fue entonces cuando recibió el nombre de Palacio de Bellas Artes. Finalmente,
el 29 de septiembre de 1934 con el presidente Abelardo Rodríguez en el gobierno, el
Palacio de Bellas Artes se inauguró como un recinto único en su género.
Sala Principal del Palacio de Bellas Artes
Es un espacio que ha sido testigo de miles de espectáculos a lo largo de 82 años.
Relevantes artistas mexicanos y de todo el mundo han pisado la Sala de espectáculos del
Palacio de Bellas Artes, la más importante del país, y reconocida a nivel mundial.
Entre todos los elementos de valor cultural que encuentras en el Palacio, algo que no puede
pasar desapercibido es su Sala Principal. En ella, encontrarás su gran cortina de cristal, la
cual contiene cerca de un millón de piezas de cristal opalescente, de 2cm cada una; siendo
el motivo de su decoración los legendarios volcanes que enmarcan el Valle de México: el
Popocatépetl y el Iztaccíhuatl. El paisaje es el mismo que podía admirarse desde las
ventanas del Palacio Nacional a principios del siglo XX.
Basado en la idea original del arquitecto Adamo Boari, el artista húngaro Géza Maróti
ejecutó un primer proyecto para su elaboración, en 1908. Sin embargo, Harry Stoner,
diseñador de escenarios y pintor, fue quien lo concretó.
El motivo principal de su construcción era crear un telón protector contra incendios, lo que
era una de las grandes preocupaciones de esa época. La cortina de cristal fue mandada a
elaborar por Boari a la Casa Louis C. Tiffany de Nueva York, donde fue exhibida antes de
ser enviada por barco a la Ciudad de México.
Cynthia Noemi Martinez Briseño
RUSALKA
Palacio de Bellas Artes
Otra de las majestuosas obras decorativas que se encuentra en el interior de la Sala se
localiza en su techo, si miras hacia arriba, podrás ver en lo alto un plafón transparente, el
tema de la composición que lo adorna es el Olimpo, en él se ve a Apolo, rodeado por las
nueve musas. Este vitral fue creado por el artista Géza Maróti.
En la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes se puede disfrutar de la ópera, la danza, la
música sinfónica, recitales, homenajes y más. Su capacidad es de 1396 personas,
distribuidas en palcos, lunetas y galerías.

Orquesta del Teatro de Bellas Artes

En el siglo XIX y bien iniciado el XX, las orquestas en la Ciudad de México que actuaban
en las temporadas de ópera en el Coliseo de México, llamado Teatro Principal a partir de
1821, en el Teatro Nacional - inaugurado en 1844 -, el Arbeu, el Hidalgo, el Colón y el
Renacimiento, estaban formadas en su mayoría por músicos italianos, ingleses, españoles
y franceses que eran parte estable de las compañías que visitaron nuestro país entre 1831
y 1909, aproximadamente, y que realizaron las grandes temporadas de ópera, género que
ya tiene dos siglos de tradición en México.

Si bien se invitaba a atrilistas mexicanos, violinistas principalmente, como José María


Chávez, Eusebio Delgado, Pablo Sánchez, Luis Morán y Alberto Amaya, entro otros
distinguidos ejecutantes, no fue sino hasta 1910 cuando las orquestas de ópera, con
compañías nacionales, comenzaron a conformarse casi en su totalidad por músicos
mexicanos; sin embargo estas agrupaciones formadas a vuelapluma para las temporadas,
no eran propiamente orquestas de ópera, sino un conjunto de destacados músicos
mexicanos a los que se reunía para tal efecto, integrantes de orquestas sinfónicas o de
grupos de cámara.

Las temporadas de ópera celebradas en el Teatro Esperanza Iris -con Besanzoni, Caruso,
Ruffo, Schipa y Muzio- a partir de 1919 y hasta 1934, y las del Teatro del Palacio de Bellas
Artes que dieron inicio el 22 de marzo de 1935 con Tosca, sucedieron regularmente con
agrupaciones musicales organizadas al momento; baste recordar que las temporadas
internacionales en Bellas Artes, entre 1943 y 1953, con Maria Callas, Leonard Warren,
Giulietta Simionato, Regina Resnik, Ramón Vinay, Ferruccio Tagliavini, Lily Pons, Astrid
Varnay, Salvatore Baccaloni, Mario del Monaco, Giuseppe Di Stefano – en sus primeras
visitas a México-, Helen Traubel y otros célebres cantantes, se realizaron con la Orquesta
Unión Filarmónica y Orquesta Sinfónica Nacional y con la mitad de una y otra.

Fue hasta agosto de 1955, durante la gestión de Miguel Álvarez Acosta como director
general del INBA, que se creó la Orquesta de la Ópera, con el fin de contar con un grupo
estable para las temporadas de ópera y ballet, fundamentalmente, siendo su primer director
artístico Salvador Contreras (1910-1982), quien ocupó el cargo hasta diciembre del mismo
año.

Esa agrupación, hoy Orquesta del Teatro de Bellas Artes, tuvo su primera presentación
operística el 4 de septiembre de 1955 con el nombre de Orquesta de la Ópera, en la
temporada de la Academia de la Ópera del INBA, con Madama Butterfly de Puccini bajo la
batuta, no de Contreras, sino del italiano Umberto Mugnai, y en las voces de Rosa Rimoch
y Diana Moncada, alternándose en el rol protagónico el tenor José Sosa, la mezzosoprano
Aurora Woodrow y el barítono Fausto del Prado.
Cynthia Noemi Martinez Briseño
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En la misma temporada se ofreció La traviata dirigida por Uberto Zanolli y El elíxir de amor
con Salvador Ochoa, quien ocuparía la dirección artística de la naciente agrupación a partir
de enero de 1956 y hasta 1958.

Durante octubre del año de su fundación, la orquesta participó en la temporada de Ópera


de Bellas Artes y de la Asociación Musical Daniel A.C., con Manon de Massenet que dirigió
el huésped Martin Rich y con la soprano Victoria de los Ángeles en el papel protagónico,
prosiguiendo con Fausto de Gounod y La bohème de Puccini que concertó musicalmente
Guido Picco. Pocos días después, el 11 de octubre, la Orquesta de la Ópera participó en el
estreno en México de la ópera Porgy and Bess, de George Gershwin, con la American
National Theatre & Academy, bajo la dirección de Willian Johnson, exitoso montaje que
alcanzó 15 representaciones, hasta el 25 de octubre, y que fue el primer trabajo de esta
orquesta con una compañía extranjera.

A la salida de Ochoa en la dirección musical de la agrupación en 1958, ocuparon el podio


Abel Eisenberg (1959), Jorge Delezé (1962, 1963, 1966, 1967, 1968, 1969, 1970, 1985,
1986), Fernando Lozano (1971,1972), Uberto Zanolli (1974); Gregory Milarkos (1973, entre
junio y julio), René Defossez (1975-1976), Antonio Tornero (1983-1984, director residente),
Luis Berber (1977,1978, 1979, 1980, 1981), Enrique Patrón de Rueda (1982,1996, director
principal), Enrique Diemecke (1987,1988,1989,1990); Enrique Barrios (1991,1992,1993),
Alfredo Silipigni (1994-1995, director huésped permanente), Guido Maria Guida (1997,
director principal).

Desde entonces la Orquesta del Teatro de Bellas Artes ha mantenido un alto nivel a la par
que amplía su repertorio con obras no comunes – La Valquiria, Wozzeck, Ariadna en Naxos,
El oro del Rhin, Siegfrido, El maleficio de los jacintos, El prisionero, Jenůfa, Muerte en
Venecia, El viaje a Reims -, ha desarrollado una intensa labor con directores invitados, entre
los que podemos mencionar a Eugene Kohn, John DeMain, Eduardo Mata, Charles Bruck,
Enrique Ricci, Johannes Goritzki, Janos Acs, Marco Armiliato, Leone Maggiera, Plácido
Domingo, Guido Maria Guida, Marko Letonja, Vjekoslav Sutej, Riccardo Frizza, Edoardo
Mϋller, Jan Chalupecky y Marco Zambelli.

Resultaría imposible enumerar a los múltiples cantantes que ha acompañado la Orquesta


del Teatro, pero no pueden dejar de mencionarse los nombres de Guiseppe Di Stefano,
Victoria de los Ángeles, Plácido Domingo, Montserrat Caballé, Beverly Sills, Alfredo Kraus,
Renata Scotto, Luciano Pavarotti, Ghena Dimitrova, Pablo Elvira, Francisco Araiza, Ramón
Vargas, Fernando de la Mora, Eva Marton, Leona Mitchell, Gilda Cruz-Romo, Verónica
Villaroel, Juan Pons, Cristina Gallardo-Domâs, Rolando Villazón, Anna Netrebko, Olga
Borodina, Renée Fleming, Catherine Malfitano, Carlo Colombara.

Daniela Tabernig
Soprano

Nació en Santa Fe. Argentina. Fue integrante solista del Coro de Niños y Jóvenes de la
municipalidad de Santo Tomé, dirigido por María Elena Boera, con el cual realizó
numerosas actuaciones en distintas ciudades de Argentina entre las que destacan: Mujeres
argentinas y Con swing y a toda voz en el Teatro Municipal 1° de Mayo de Santa Fe. Es
graduada como profesora de Música en el instituto Constancio Carmiño, en Paraná,
Cynthia Noemi Martinez Briseño
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Argentina. Fue becaria del Fondo Nacional de las Artes y de la Fundación Teatro Colon, así
como de la Fundación Música de Cámara. Obtuvo el primer premio en le categoría de canto
en el certamen organizado por Mozarteum, filial Sante Fe, y fue finalista en las audiciones
Nuevas voces liricas 2005 organizadas por el Teatro Colon. En el Teatro Colón, en 2005,
integró los elencos de Ubu Rey, Doña Francisquita, I Lombardí alla prima crociata, Don
Quijote y La zapatera prodigiosa. Participó en la ópera Don Giovanni de Gazzanige como
Elvira, en el Teatro Colón; en Carmen como Micaela en el Teatro Avenida para Juventus
Lirica, en Eugene Onegin como Tatiana y en Fausto de Gounod, como Margarita para
Buenos Aires Lirica. Ha interpretado La pequeña Misa Solemne de Rossini para Conciertos
Pilar Golf, actuaciones reconocidas por la crítica, haciéndola merecedora ese año del
"Premio Estimulo", otorgado por la Asociación de Críticos Argentinos
Cynthia Noemi Martinez Briseño
RUSALKA
Palacio de Bellas Artes
Programa
Rusalka Acto 2
Estreno: Teatro Nacional de Praga, 31 de 1.Jarku, jarku, klouce milé
marzo de 1901 2.U nás v lese strasi
Estreno en México: Palacio de Bellas Artes, 3.Jiz tyden dlis po boku
10 de Marzo de 2011
4.Zda na chvili princ vzpomene si prec
Op.114, B. 203
5.Slavnosti hudba - balet
6.Cely svet neda ti, neda
Acto 1
1.Overture 7.Kvetiny bile po ceste
2.Hou, hou, hou, stojí mésic nad vodou! 8.Rusalko, znas mne, znas?
3.I pekne vitam 9.Vidis je, vidis? Jsou tu zas
4.Hastrmánku, taticku!
5.Sem casto prichazi a v objeti mé stoupá Acto 3
6.Mesicku na nebi hlubokém 1.Necitelná vodní moci
7.Ta voda studi, studi! Jezibabo! Jezibabo!
2.Aj, aj? Uz jsi se navrátila
8.Stalerá moudrost tvá vsechno vi
9.Tvoje moudrost vsechno tusi 3.Vyrvána zivotu v hlubokou samotu
10.Cury mury fuk 4.Ze se bojís? Tresky, plesky
11.Jel mlady lovec, jel a jel 5.Mám, zlaté vlásky mám
12.Ustante v lovu, na hrad vrafte se 6.Bílá moje lani! Bílá moje lani!
13.Sestry, jedna scházi z nás! 7.Milácku, znás mne, znás?
8.Líbej mne, líbej, mír mi prej

Acto 1: 6. Mesicku na nebi hlubokém


El extracto más famoso de Rusalka es el aria El Himno a la Luna que dice así:
Mĕsíčku na nebi hlubokém, Pequeña Luna que, desde lo alto en el
Svĕtlo tvé daleko vidi, cielo,
Po svĕtĕ bloudíš širokém, Tu luz ilumina todo,
Díváš se příbytky lidí, Y vagas por la superficie de la Tierra,
Mĕsíčku postůj chvíli, Bañando con tu mirada el hogar de los
Řekni mi, kde je můj milý ? hombres.
Řekni mu, stříbrný mĕsíčku, Detente un momento,
Mé že jej objímá rámě, Dime, ¿dónde está mi amor?
Aby si alespoň chviličku, Dime, Luna plateada,
Vzpomenul ve snĕní na mne, Que es mi brazo quien lo abraza,
Zasvět’ mu do daleka, zasvět’ mu, Para que se acuerde de mi
Řekni mu, řekni, kdo tu naň čeká, Al menos un instante.
O mněli duše lidská sní, Y dile que yo espero,
At’ se tou vzpomínkou vzbudíl, Ilumínalo todo, desde lejos,
Mĕsíčku, nezhasni, nezhasni, Y si aparece en un sueño para el alma
Mĕsíčku, nezhasni, nezhasni. humana,
¡Oren para que se despierte con este
recuerdo!
¡Luna, no te escondas, no te escondas,
¡Luna, no te escondas más!
Cynthia Noemi Martinez Briseño
RUSALKA
Palacio de Bellas Artes

Antonín Dvořák
1841
Antonín Dvořák nace el 8 de septiembre en la región de Bohemia, específicamente, en la
aldea de Nelahozeves, que está a 24 kilómetros de Praga, en la actual República Checa.
Dvořák es el mayor de ocho hijos. Su padre es un carnicero, mesonero y músico aficionado
que a veces tocaba la cítara (un instrumento de cuerda pulsada) para entretener a
los invitados.
1847
El joven Dvořák inicia su formación musical (lecciones de violín y de canto) con una persona
instruida del pueblo. En la próxima década, continúa estudiando música en pequeños pueblos
de Bohemia.
1857
Dvořák viaja a Praga para asistir a la Escuela de Órgano de esta ciudad. Praga, ciudad
importante dentro del imperio de la Casa de Habsburgo, tiene una floreciente vida artística, y el
joven músico está en contacto con las obras de muchos de los compositores más importantes
de la época. Dvořák se destaca en sus estudios y se gradúa segundo de su clase en 1859.
1862
En noviembre, se inaugura el Teatro Provisional de Praga. Al ser el primer teatro que exhibía
obras en checo, se convierte en un sitio clave para escritores y compositores checos que quieren
explorar su tradición lingüística y musical. También es un punto de inflexión en la historia del arte
nacional checo: Bohemia (la región checa cuya capital es Praga) está bajo el control de los
austrohúngaros y, hasta 1860, el teatro y la música en checo habían sido fuertemente
rechazados por el gobierno, que intentaba prevenir demostraciones abiertas de nacionalismo.
Dvořák es el principal violinista del teatro desde su apertura hasta 1871.
1871
Dvořák anuncia que está componiendo una ópera en checo, El rey y el carbonero, obra basada
en leyendas y cuentos de hadas típicos del lugar. Hasta ese momento, Dvořák (que pronto
cumplirá 30 años) solo era conocido en el mundo artístico de Praga como intérprete musical.
Esta ópera es su primera incursión pública en la composición y una expresión crucial de su
interés en la ópera nacional. El estreno de El rey y el carbonero, el 24 de noviembre de 1874 en
el Teatro Provisional, es un éxito.
1877
En diciembre, el compositor alemán Johannes Brahms escribe una carta para recomendar a
Dvořák a su editor, Fritz Simrock, que reside en Berlín. Simrock encarga a Dvořák las Danzas
eslavas, inspiradas en música de cuentos populares de Europa del Este y consideradas exóticas
por audiencias occidentales. Gracias a Danzas eslavas, Dvořák es aclamado a nivel internacional
por primera vez. La colección se publica en noviembre de 1878.
Para 1879, ya ha sido interpretada en Dresde, Hamburgo, Berlín, Londres, Niza y Nueva York.
Cynthia Noemi Martinez Briseño
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1891
Dvořák se inscribe en la facultad de composición del Conservatorio de Praga.
1892
Dvořák viaja a los Estados Unidos para dirigir el Conservatorio Nacional de Música de la ciudad
de Nueva York. Por su creencia de que la música está intrínsecamente conectada con la
identidad nacional, Dvořák aspira a ayudar a los estudiantes de Nueva York a cultivar un estilo
de composición netamente “estadounidense”. Vive en los Estados Unidos tres años, en el
número 327 de la East 17th Street de Manhattan. Durante su estadía en el país, compone la
Sinfonía n.º 9, conocida como “la sinfonía del nuevo mundo”.
1897
El 3 de marzo, František Šubert, director del Teatro Nacional de Praga, le escribe lo siguiente al
poeta Jaroslav Kvapil: “A Dvořák le gustaría mucho tener un libreto operático basado en un
cuento de hadas checo”. Como consecuencia, Kvapil comienza a trabajar en el libreto de
Rusalka. En septiembre, Kvapil le escribe a un amigo: “Tengo un libreto que considero valioso
como obra poética y como obra teatral. Es todo un cuento de hadas, sucede bajo la luz de la
luna… Hay algunos elementos (solamente elementos) basados en La sirenita, de Andersen, y
en Undine, de Fouqué”.
1900
Entre el 21 de abril y el 27 de noviembre, Dvořák compone la música para Rusalka.
1901
Rusalka se estrena en el Teatro Nacional de Praga el 31 de marzo.
1904
El 25 de marzo, se estrena en ese mismo teatro la última ópera de Dvořák, Armida. Dvořák muere
unas semanas después, el 1 de mayo. Lo entierran el 5 de mayo en el cementerio Vyšehrad de
Praga, donde aún hoy se puede visitar su tumba.
1997
El 13 de septiembre, se coloca una estatua de Dvořák en el extremo noreste del parque
Stuyvesant, cerca del lugar en el que vivió cuando estuvo en Manhattan.
Cynthia Noemi Martinez Briseño
RUSALKA
Palacio de Bellas Artes
Rusalka
La ópera en tres actos Rusalka fue escrita por Antonín Dvorák con libreto de Jaroslav Kvapil, en
una adaptación libre del cuento de Hans Christian Andersen, La sirenita. Rusalka se estrenó en
praga el 31 de marzo de 1901.

Acto I
Rusalka, que es una náyade, está en un lago con otras ninfas que se divierten junto al Gnomo
del agua. Rusalka se confiesa a él su amor por del Príncipe, un humano. Rusalka desea ser una
mujer, y el Gnomo le dice que vaya a ver a la bruja Jezibaba. La bruja acepta satisfacer el deseo
de Rusalka, pero le advierte que esa transformación le va a suponer permanecer muda para
siempre.
El Príncipe está de caza en el bosque, con él va el Cazador y todo su séquito, a los que manda
a palacio al percibir un ambiente amenazador en el bosque. El Príncipe se encuentra con Rusalka
y se enamora de ella y la lleva a su palacio.

Acto II
En el palacio se prepara la boda del Príncipe con Rusalka. El Cuidador de la caza y el Cocinero
comentan las novedades. El Príncipe, aunque ama a Rusalka, no deja de permanecer indiferente
ante los encantos de la Princesa extranjera, que hace continuos comentarios acerca del silencio
de Rusalka.
Rusalka sufre y este dolor hace que aparezca a su lado el Gnomo que la consuela. Rusalka se
da cuenta del error que ha cometido al querer compartir su vida con un hombre. Al final habrá
boda, pero entre el príncipe y la Princesa extranjera.

Acto III
Rusalka ha vuelto al lago, pero no puede vivir en él con sus hermanas. Su única posibilidad de
recuperar su antigua vida es destruir al hombre que la abandonó. Sin embargo, se interpone el
amor que siente todavía por él. El Príncipe por su parte, no halla la paz y felicidad en su palacio
y vuelve al lago a ver a Rusalka. Cuando se encuentran los dos, el Príncipe recibe el beso de
Rusalka, lo que le supone la muerte, sin embargo, muere feliz y dichoso en los brazos de su
amada.
Cynthia Noemi Martinez Briseño
RUSALKA
Palacio de Bellas Artes

Experiencia

Desde que fui a comprar los boletos el titulo me llamaba la atención, ya iban dos funciones a las
que quería ir, pero por horario y escuela no había podido ir, por fin fui y solo quedaba la función
del jueves en la noche, hable con mi mamá por cuestiones de que sería noche cuando saliera,
ella me dijo que cualquier cosa ellos iban por mi o me alcanzaban en el metro. Desde el martes
a miércoles me desvele por tareas, y así de miércoles a jueves, yo no quería por que estaba
consciente de que duraba cuatro horas, el jueves regrese de la escuela comí y me dormí media
hora antes de irme a la función. Cuando por fin estuve en Bellas Artes todos estaban esperando
para ingresar, ingresé y aunque mi lugar no era el mejor, la sala principal es tan perfecta que
desde mi lugar se veía todo muy bien y se escuchaba perfecto. Mientras empezaba estuve
observando los vitrales que había en la cúpula, identifiqué algunas cuestiones arquitectónicas
como los arcos de medio punto.
Cynthia Noemi Martinez Briseño
RUSALKA
Palacio de Bellas Artes
Por fin inicio y yo quede atónita, se vislumbra como agua,
eran un par de telas, pero el efecto y los arneses que
sostenían a las intérpretes me llevaron a imaginar el agua y
su movimiento, desde un inicio los instrumentos, los efectos
y por supuesto la fuerza de las voces me atrapó. Yo no
había leído nada antes de que empezara, pero me di cuenta
de que la historia era similar a la sirenita.
Todo iba bien hasta que al final del primer acto empecé a
cerrar mis ojos, cuando termino salí y me moje la cara,
regrese y leí el programa y la sinopsis y ahí decía que si
estaba basada en la sirenita. Al segundo acto todo estuvo
bien, llego el tercer acto y muchos que estaban en la misma
área que yo empezaron a irse antes de que empezara por
cuestiones de la hora, yo decidí quedarme. En verdad
disfrute mucho la música, cada instrumento le da su toque,
inclusive el sencillo triangulo fungía un importante papel.
Sali con la piel erizada, era la segunda vez que escuchaba
opera en vivo, pero la primera vez que era una opera formal.
Por fortuna termino a las 11:40 y pude alcanzar el metro
para llegar a casa.

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