1825-2015.
LA HISTORIA PARA CONTAR
AÑO DE LA CONSOLIDACIÓN DEL MAR DE GRAU
PROCESOS CONSTITUCIONALES
Año XII / Nº 2290
PODER JUDICIAL
PROCESO DE CUMPLIMIENTO
CORTE SUPERIOR DE JUSTICIA DE LAMBAYEQUE
PRIMERA SALA ESPECIALIZADA CIVIL
Sentencia Nº 314
Resolución número : diez
Expediente N° : 00474-2014-0-1706-JR-CI-05
Demandante : Teresa Cruzado Viuda de Odar
Demandado : Comisión Ad hoc creada por Ley
Nº 29625 - FONAVI
Materia : Acción de Cumplimiento
Juez Superior Ponente : señor Carillo Mendoza
Chiclayo, veinticinco de abril de dos mil dieciséis
VISTOS; en Audiencia Pública, por los fundamentos de la
recurrida y CONSIDERANDO, además:.
ASUNTO
Es objeto de apelación la Sentencia que declara improcedente
la demanda de cumplimiento interpuesta por Teresa Cruzado
Vda. de Odar contra la Comisión Ad Hoc creada por Ley Nº
29625-FONAVI; por apelación concedida a la parte actora.
ANTECEDENTES
La recurrente, por escrito del tres de enero de dos mil catorce, de
folios dieciocho a veintinueve, interpone demanda constitucional de
cumplimiento contra la Comisión Ad Hoc creada por la Ley Nº 29625-
Ley de Devolución de Dinero del FONAVI a los trabajadores que
contribuyeron con el referido Fondo; con la pretensión de que ésta dé
cumplimiento a los artículos 3°, 4°, 8° de la acotada Ley, y como tal
cumpla con otorgarle el Certificado de Reconocimiento de Aportaciones
y Derechos del Fonavista que según el actor por ley le corresponde.
El Procurador Público a cargo de los asuntos jurídicos del
Ministerio de Economía y Finanzas (noventa y cinco a ciento
diecisiete) deduce excepciones de incompetencia por razón de la
materia, de oscuridad o ambigüedad en el modo de proponer la
demanda y de falta de legitimidad del demandante y contesta la
demanda, excepciones que son desestimadas (folios ciento treinta
y nueve a ciento cuarenta y uno). En cuanto al fondo, señala que
la demanda debe ser declarada improcedente por cuanto existe
otra vía procedimental especifica, no se configura la situación de
tutela urgente y no reúne los requisitos mínimos de todo proceso
de cumplimiento, además se ha establecido que la entrega del
Certificado de Reconocimiento (CERAD) procede sólo con el
cumplimiento de determinados procedimientos administrativos.
La Juez de la causa al establecer que la actora no ha
demostrado que su difunto esposo tiene la calidad de fonavista
beneficiario, pues se requiere estar inscrito en el Padrón Nacional
de Fonavistas y que califique como beneficiario de la Ley aludida,
además que los efectos que busca alcanzar la demandante con la
acción de autos no supera las exigencias acotadas por el Tribunal
Constitucional en la sentencia recaída en el Expediente Nº 0168-
2005-PC/TC, al no ser la vía adecuada para resolver controversias
complejas, declara improcedente la incoada.(folios ciento cuarenta
y seis a ciento cincuenta y uno).
Sobre el proceso de cumplimiento
PRIMERO: De conformidad con lo dispuesto por el artículo 200,
inciso 6 de la Constitución Política, el proceso de Cumplimiento
procede contra cualquier autoridad o funcionario renuente a acatar
una norma legal o un acto administrativo; de lo que se infiere que
dicho proceso constitucional tiene por finalidad proteger la eficacia
de las normas legales y actos administrativos.-
SEGUNDO: A su turno el artículo 66º del Código Procesal
Constitucional establece que es objeto del proceso de cumplimiento
ordenar que el funcionario o autoridad pública renuente:
Domingo 18 de setiembre de 2016
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“1) Dé cumplimiento a una norma legal o ejecute un acto
administrativo firme; o
2) Se pronuncie expresamente cuando las normas legales
le ordenan emitir una resolución administrativa o dictar un
reglamento”.
TERCERO: Que, de otro lado, el artículo 69º del acotado texto
legal exige que para la procedencia del proceso de cumplimiento
el demandante previamente haya reclamado, por documento
de fecha cierta, el cumplimiento del deber legal o administrativo,
y que la autoridad se haya ratificado en su incumplimiento o no
haya contestado dentro de los diez días útiles siguientes a la
presentación de la solicitud. Aparte de dicho requisito, no será
necesario agotar la vía administrativa que pudiera existir.
CUARTO: En ese sentido, en materia de viabilidad de
los procesos constitucionales de cumplimiento, el Tribunal
Constitucional, en el marco del artículo VII del Título Preliminar
del Código Procesal Constitucional, que lo enviste como legislador
positivo al autorizarlo expedir sentencias de carácter normativas
y por consiguiente de imperativo y obligatorio cumplimiento para
los poderes públicos por sus efectos ergo omnes, en el expediente
número 0168-2005-PC/TC , publicado el tres de octubre del año
dos mil cinco, en su fundamento jurídico 14.14 establece:
“Para que el cumplimiento de la norma legal, la ejecución
del acto administrativo y la orden de emisión de una resolución
sean exigibles a través del proceso de Cumplimiento, además
de la renuencia del funcionario o autoridad pública, el mandato
contenido en aquellos deberá contar con los siguientes
requisitos mínimos comunes:
a) ser un mandato vigente;
b) ser un mandato cierto y claro, es decir, debe inferirse
indubitablemente de la norma legal o del acto administrativo;
c) no estar sujeto a controversia compleja ni a
interpretaciones dispares;
d) ser de ineludible cumplimiento;
e) ser incondicional. Excepcionalmente, podría tratarse de
un mandato condicional, siempre y cuando su satisfacción no
sea compleja y no requiera de actuación probatoria.
Adicionalmente, para el caso del cumplimiento de los actos
administrativos, además de los requisitos mínimos comunes
mencionados, en tales actos se deberá:
f) Reconocer un derecho incuestionable del reclamante.
g) Permitir individualizar al beneficiario”.
Lo expuesto significa que las pretensiones que tienen por
finalidad el cumplimiento de un mandato contenido en una norma
legal o acto administrativo que no reúne los requisitos comunes
enunciados no pueden transitar por esta excepcional vía procesal.
Análisis del caso concreto
QUINTO: Que, la demandante con la solicitud del dieciséis
de setiembre de dos mil trece, de folios doce a trece, requiriendo
a la emplazada la entrega del Certificado de Reconocimiento de
Aportaciones y Derechos del Fonavista, conforme a los términos
que en ella tiene consignado, ha dado cumplimiento al requisito
especial a que se contrae el artículo 69º del Código Procesal
Constitucional, estando habilitado para un pronunciamiento sobre
sus planteamientos en el ámbito jurisdiccional.
SEXTO: Al respecto, en el presente caso, del contenido de la
incoada se logra advertir que el demandante aduciendo su condición
de Fonavista beneficiado con la Ley Nº 29625, que implementa
la devolución de los dineros del Fonavi a los trabajadores que
contribuyeron para el referido fondo, pretende que el órgano
jurisdiccional a través del proceso constitucional de cumplimiento
ordene a la Comisión Ad Hoc creada por la Ley Nº 29625, le
haga entrega del denominado Certificado de Reconocimiento de
Aportaciones y Derechos, conteniendo el importe de la liquidación
del aporte total e intereses legales ascendente a cincuenta y dos

58012 PROCESOS CONSTITUCIONALES
mil trescientos sesenta y nueve con 65/100 [S/. 52,369.65) Nuevos
Soles, que el difunto esposo de la recurrente Gregorio Odar More
realizó al FONAVI.
SÉTIMO: Que, el Tribunal Constitucional en la sentencia expedida
en el Expediente Nº 191-2003-AC/TC, en relación a la procedencia
de este mecanismo procesal ha señalado: “(…), para que mediante
un proceso de la naturaleza que ahora toca resolver –que, como
se sabe, carece de estación probatoria–, se pueda expedir
una sentencia estimatoria, es preciso que el mandato previsto
en la ley o en un acto administrativo tenga determinadas
características. Entre otras, debe tratarse de un mandato que sea
de obligatorio cumplimiento, que sea incondicional y, tratándose
de los condicionales, que se haya acreditado haber satisfecho
las condiciones; asimismo, que se trate de un mandato cierto o
líquido, es decir, susceptible de inferirse indubitablemente de la
ley o del acto administrativo que lo contiene y, en lo que al caso
se refiere, que se encuentre vigente”
OCTAVO: Al respecto, el mandato de entrega por parte de la
Comisión Ad Hoc demandada del Certificado de Reconocimiento
de Aportaciones y Derechos del Fonavista, con el récord del
aportante y el monto consignado en el requerimiento formulado por
el demandante, no tiene la característica de ser un mandato cierto o
líquido, es decir, susceptible de inferirse indubitablemente de la ley
invocada, pues, no se presenta como manifiesto en su existencia
como producto de la ley, menos aún incondicional; dado a que,
la norma legal de la que deriva el mandato cuyo cumplimiento se
pretende, establece una serie de actos administrativos previos
que la ahora demandada debe cumplir para obtener el resultado
propuesto por la Norma Legal de su propósito. Implementación en
la que incluso se podría manifestar controversias entre la posición
de la citada Comisión y los interesados derivados en la obtención
del récord de aportaciones y el monto a devolver, entre otros.
NOVENO: En efecto, si bien es verdad, el artículo primero
de la Ley Nº 29625, dispone devolver a los trabajadores el total
actualizado de sus aportes que fueron descontados de sus
remuneraciones y otros, para cuyo efecto ordena efectuar un
proceso de Liquidaciones y Derechos, en una Cuenta Individual
por cada Fonavista, actualización del valor de tales contribuciones
y el Interés Legal Efectivo (artículo 2º), precisando en su artículo
3º, que el valor total actualizado de los aportes y derechos a
devolverse, será notificado y entregado a cada beneficiario a través
de un documento denominado Certificado de Reconocimiento de
Aportaciones y Derechos del Fonavista; también lo es que, para
efectuar todos los procedimientos y procesos que sean necesarios
y de esa manera cumplir con lo establecido en el artículo 3º,
dispone la conformación de una Comisión Ad Hoc (artículo 4º),
de donde se puede apreciar una vez más, el carácter condicional
del mandato legal acotado, además aun no se encuentra el titular
fonavista Gregorio Odar More, reconocido por el Estado a través
de la demandada como beneficiario fonavista a través del Padrón
Nacional de Fonavistas Beneficiarios cuya elaboración debe
realizarla la Comisión. Siendo así su implementación exige una
serie de actuaciones administrativa por parte de la demandada.
DÉCIMO: En consecuencia, atendiendo que el mandato
contenido en la norma legal no reúne los requisitos acotados en el
fundamento cuarto y sétimo de la presente resolución, la demanda
de cumplimiento resulta inestimable.
Por los fundamentos de la recurrida, consideraciones
expuestas y artículo VII del Título Preliminar y 1°, 66º y 69 del
Código Procesal Constitucional: CONFIRMARON la Sentencia
contenida en la Resolución Número Siete, del siete de octubre de
dos mil quince, de folios ciento cuarenta y seis a ciento cincuenta
y uno, que declara Improcedente la demanda de autos, y los
DEVOLVIERON. Interviene el señor Terán Arrunátegui por
haber integrado el Colegiado el día de la vista de la causa por
licencia del señor Lara Contreras. Notifíquese conforme a ley.
Srs.
Carrillo Mendoza
Pisfil Capuñay
Terán Arrunátegui
W-1424847-39
PROCESO DE AMPARO
CORTE SUPERIOR DE JUSTICIA DE LAMBAYEQUE
PRIMERA SALA ESPECIALIZADA CIVIL
Sentencia Nº 39
Exp. Nº :
560-2014-0-1706-JR-CI-05
Demandante :
RENZO JESÚS BRUNO GROZZO
LÓPEZ DE CASTILLA
Demandado : DIRECCIÓN DE LA ESCUELA DE
OFICIALES DE LA PNP Y OTROS
Materia : PROCESO CONSTITUCIONAL
DE AMPARO
Juez Superior Ponente: Sra. Cervera Dávila.
Chiclayo, veinte de enero del dos mil dieciséis
RESOLUCIÓN NÚMERO: TRECE
VISTOS; en discordia; con el voto escrito dejado por el
señor Lara Contreras, quien se encuentra de licencia, cuya copia
El Peruano
Domingo 18 de setiembre de 2016
certificada se anexa y forma parte de la presente resolución acorde
a lo estipulado por el artículo 149 de la Ley Orgánica del Poder
Judicial; y, Considerando;
PRIMERO.- Que, como se advierte del petitorio, la presente
acción de garantía, ha sido planteada por RENZO JESUS BRUNO
GROZZO LOPEZ DE CASTILLA contra el DIRECTOR EJECUTIVO
DE EDUCAICÓN Y DOCTRINA DE LA POLICIA NACIONAL DEL
PERU-, y PROCURADOR PUBLICO A CARGO DE LOS ASUNTOS
JUDICIALES DEL MINISTERIO DEL INTERIOR, solicitando se
deje sin efecto y se declare inaplicable a su caso la Resolución
Directoral Nº 127-2014-DIREED-PNP. del cinco de febrero del
dos mil catorce, que resuelve declarar desestimado su recurso de
apelación y confirma su expulsión de la Escuela de Oficiales de la
PNP.; consecuentemente se disponga su inmediata reincorporación
como Cadete del Tercer Año de la Escuela de Oficiales de la Policía
Nacional del Perú, que venía cursando hasta antes de afectación
a sus derechos constitucionales al debido proceso, a la motivación
de las resoluciones administrativas, al derecho a la educación, y al
derecho a la presunción de inocencia.
SEGUNDO.- A folios sesenta y ocho, absuelve la demanda
la Procuradora Pública Adjunta a cargo de los asuntos jurídicos
del Ministerio del Interior, sosteniendo que: i)No se ha vulnerado
el principio de legalidad y el debido procedimiento, toda vez que
los hechos ocurridos el trece de mayo del dos mil catorce, en que
el Cadete del Tercer Año Renzo Jesus Bruno Grozzo Lopez De
Castilla, ocasionó lesiones graves al cadete del Segundo año Jordy
Antony Morey Cruz, en el interior de los servicios higiénicos del
primer piso del pabellón Comando de la Escuela de Oficiales, se
encuentra previsto en las Ley del Régimen Educativo de la Policía
Nacional del Perú; ii) Que al expedirse la Resolución del Consejo
Disciplinario Nº 069-2013-DIREED-EO-PNP/CD, del veintisiete de
diciembre del dos mil trece, no ha existido diferente interpretación
de las pruebas, ni se trata de cuestiones de puro derecho, por lo que
no resulta amparable la demanda; iii) Que, resulta de aplicación
el artículo 31º, el artículo 31 del Decreto Legislativo 1151-Ley del
Régimen Educativo de la Policía Nacional Del Perú. Y que la PNP.
se rige por sus propias normas, leyes y reglamentos.
TERCERO.- El Aquo, a folios ciento catorce, a ciento diecinueve
expide la sentencia, declarando fundada la demanda, nulas las
Resoluciones del Consejo Disciplinario Nº 042-2013-DIREED-EO-
PP-CD y 069-2013-DIRRED-EO-PNP-CD, así como la Resolución
Directoral Nº 127-2014-DIREED-PNP, dejándose sin efecto la
sanción de expulsión impuesta al actor, debiendo reincorporarlo
como Cadete de la Escuela de Oficiales de la PNP. De Segundo Año.
CUARTO.- A folios ciento treinta y uno, la Procuraduría Pública
a cargo de los asuntos jurídicos del Ministerio del Interior, interpone
recurso de apelación, precisando como agravios: i) Que, al emitirse la
sentencia el Aquo no ha merituado adecuadamente, los argumentos
esgrimidos en su contestación de demanda, ni las contradicciones
formuladas por esta parte, y que al haberse declarado fundada la
demanda, se ha agraviado a los intereses de la Policía Nacional del
Perú -Ministerio del Interior, consecuentemente al Estado Peruano;
ii) Que, la Resolución administrativa cuya nulidad se solicita, ha sido
emitida dentro del marco constitucional, y en estricta aplicación de
las leyes y reglamentos que rigen para la PNP, consecuentemente
la Ley 29356 Ley del Régimen Disciplinario de la PNP. y la Ley
Orgánica de la PNP 27238, deben ser observadas y cumplidas
por sus servidores policiales y para los de formación como son los
cadetes y alumnos de la PNP; iii) Que, . en el presente caso, los
hechos ocurrieron el trece de mayo del dos mil trece, encontrándose
dentro los alcances del Decreto Legislativo 1151 “ Ley del Régimen
Educativo de la PNP” artículo 32 numeral 19, queda tipificado y el
cual es causal de expulsión de la Escuela de Formación.
&. CONSIDERACIONES PREVIAS.
QUINTO.- Que, para resolver el fondo de la controversia,
efectuamos algunas precisiones respecto al proceso de amparo: El
artículo 200, inciso 2° de la Constitución Política del Estado, prevé
entre las acciones de garantía, la acción de amparo, que procede
contra el hecho u omisión, por parte de cualquier autoridad,
funcionario o persona, que vulnera o amenaza los demás derechos
reconocidos por la Constitución.
SEXTO.- En el caso de autos se cuestiona el procedimiento
sancionador llevado a cabo dentro de la Policía Nacional del Perú;
contenido en las resoluciones Directoral Nº 127-2014-DIREED-
PNP, del cinco de febrero del dos mil catorce, que desestimó el
recurso de apelación interpuesto por el demandante, respecto de
la Resolución del Consejo Disciplinario Nº 069-2013-DIREED-
EO-PNP/CD, de fecha veintisiete de diciembre del dos mil trece,
que desestimó el recurso de econsideración interpuesto contra la
resolución del Consejo Disciplinario Nº 042-2013-DIREED-EO-PNP/
CD, del cinco de noviembre del dos mil trece, que resolvió expulsarlo
al demandante de la Escuela de Oficiales de la Policía Nacional del
Perú, por infracción disciplinaria muy grave; y estando a lo previsto en
el artículo 168 de la Constitución Política del Estado, la organización,
funciones, las especialidades, la preparación y el empleo, y la
disciplina de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional, son
regulados por sus propias leyes y los reglamentos; atendiendo
a ello, es que debemos analizar, si la imputación que se le efectúa
al demandante, se encontraba prevista y sancionada en la norma
especial, que regula el régimen educativo de la Policía Nacional
del Perú, teniendo en cuenta, que el accionante es un Cadete
(alumno de la Escuela de Oficiales de la PNP). SÉPTIMO.- Que,
los hechos atribuídos como falta muy grave, al demandante, es,
que con fecha doce de mayo del año dos mil trece, a las 08:00
horas aproximadamente, en circunstancias que se encontraba de
servicio de guardia de honor de la Escuela de Oficiales de la PNP,
El Peruano
Domingo 18 de setiembre de 2016 PROCESOS CONSTITUCIONALES
en momentos que se dirigía al puesto designado en el Torreón
05, ingresó a los servicios higiénicos del primer piso del pabellón
Comando, para hacer uso del mismo, lugar donde al rastrillar (FUSIL
AKM) y manipular negligentemente su arma, se produce un disparo,
hiriendo al Cadete de segundo año JORDY ANTONY MOREY
CRUZ, ocasionándole lesiones, diagnosticadas como “Traumatismo
por proyectil de arma de fuego región cervical, siendo intervenido
quirúrgicamente el mismo día, realizándose una traqueotomía y
reconstrucción de la región hipofaringe y epiglotis, permaneciendo
en dicho nosocomio policial treinta y dos días”. Por estos hechos, se
le aplicó al demandante el artículo 32 del Decreto Legislativo 1151, “
Ley del Régimen Educativo de la Policía Nacional del Perú”.
OCTAVO.- Es muy cierto, que la norma aplicable al caso
del demandante es el Decreto Legislativo 1151, dado que fue
promulgado a los diez días del mes de diciembre del año dos mil
doce, mientras que los hechos que dieron origen a la sanción
impuesta al demandante data del doce de mayo del dos mil trece;
también es cierto, que a la fecha en que se le impuso la sanción,
aún no se encontraba reglamentada la ley en mención, puesto
que el Decreto Supremo Nº 009-2014-IN, recién fue publicado
en septiembre del mismo año; al margen de ello, el artículo 32
contempla las causales de expulsión de las Escuelas de formación,
por infracción disciplinaria muy grave; y dentro de ellas, en el
numeral 1) del Decreto Legislativo 1151, establece: “Ocasionar la
muerte o lesiones graves a cualquier persona”. Considero, que
la clave para determinar la razonabilidad de la sanción aplicada,
está en establecer, cuando una lesión es considerada grave, para
ello, recurrimos al Código Penal, en su artículo 121 modificado
por el artículo 2º de la ley 30054; precisa las pautas o requisitos
que se deben analizar, a efecto de considerar a una lesión como
grave, y estos son: a) Las que ponen en peligro inminente la vida
de la víctima; b) Las lesiones que mutilan un miembro u órgano
principal del cuerpo o lo hace impropio para su función, causa a una
persona incapacidad para el trabajo; invalidez o anomalía psíquica
permanente o la desfigura de manera grave y permanente, y, c) Los
que infieren cualquier otro daño a la integridad corporal, o a la salud
física o mental de una persona que requiera de 30 o más días de
asistencia o descanso, según prescripción facultativa. Atendiendo
a éstos requisitos, y contrastando con los hechos ocurridos,
podemos establecer, que, el agraviado Cadete MOREY CRUZ
JORDY ANTONY, si bien sufrió lesiones, que han requerido más
de treinta días de asistencia, sin embargo, las lesiones sufridas no
han puesto en riesgo inminente su vida, tampoco ha sufrido pérdida
o mutilación de algún órgano que lo incapacite de sus actividades
físicas y psíquicas, como se puede comprobar de la relación nominal
de cadetes del tercer año, participantes del curso de Rescate y
emergencias, que obra a folios setenta y ocho a ochenta y tres,
donde puede apreciarse, que el agraviado cadete figura en dicha lista
con el número 211; por otra parte, para la aplicación de una medida
de extrema ratio, como es la separación de la Escuela de Oficiales al
demandante, la norma constitucional exige, que se valoren causas
atenuantes, de la responsabilidad, incluso, la aplicación retroactiva
de una norma cuando ésta es benigna al infractor de la ley penal
(retroactividad benigna artículo 103 de la Constitución Política); por
lo que considero que debe confirmarse la recurrida, no porque se
le considere al demandante libre de toda responsabilidad, si no por
que la sanción impuesta es desproporcional a la infracción cometida
Por las consideraciones antes acotadas; RESOLVIERON
CONFIRMAR la sentencia, contenida en la resolución número
CUATRO, su fecha veintiséis de setiembre del año dos mil
catorce, folios ciento catorce a ciento diecinueve, que resuelve
declarar FUNDADA la demanda interpuesta por don RENZO
JESÚS BRUNO LÓPEZ DE CASTILLA contra la DIRECCIÓN
DE LA ESCUELA DE OFICIALES DE LA POLICÍA NACIONAL
DEL PERÚ Y OTROS sobre PROCESO CONSTITUCIONAL
DE AMPARO, con las demás que contiene, y, los devolvieron.
Intervinieron los señores : Lara Contreras, Pisfil Capuñay y Cervera
Dávila por haber intervenido en la fecha de la vista de la causa; y la
última de las nombradas por licencia del señor Guerrero Hurtado;
asimismo los señores Carrillo Mendoza y Terán Arrunategui
por haber intervenido en las audiencias de vista de la causa en
discordia, respectivamente; notifíquese conforme a ley.-
Srs.
Carrillo Mendoza.
Cervera Davila.
Terán Arrunategui.
VOTO SINGULAR DEL SEÑOR CARRILLO MENDOZA, es
como sigue:
Considerando ademas:
PRIMERO.- Que, la institución demandante, tanto al absolver
la demanda como en su escrito de apelación, para justificar la
expulsión impuesta al amparista refiere que su representada
se ha limitado a aplicarla frente a la falta cometida con base del
artículo 32° numeral 19 del Decreto Legislativo Nº 1151 – Ley del
Régimen Educativo de la PNP, que establece una de las causales
de expulsión de las Escuelas de Formación PNP, el “Ocasionar
la muerte o lesiones graves a cualquier persona”. Hecho que el
demandante ha cometido al ocasionar Lesiones Graves al Cadete
de Escuela: Jordy Anthony Morey Cruz, en razón a que hasta la
fecha de su imposición no se tenia promulgado el Reglamento de
la citada norma jurídica.
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SEGUNDO.- Al respecto, como bien sostiene la misma
emplazada los hechos atribuidos al amparista han ocurrido durante
la vigencia de la Ley del Régimen Educativo de la PNP, Decreto Ley
Nº 1151, por lo que, ha procedido a su aplicación al caso concreto;
sin embargo el hecho que, al cometer la causal de expulsión
aplicada al actor no haya estado vigente el Reglamento de su
propósito, no es óbice para desconocer la racionalidad de la norma,
puesto que, el reglamento dado el grado de subordinación en que
se encuentra a la norma legal, no hace mas que desarrollarla o
interpretarla para su correcta aplicación.
TERCERO.- En ese sentido, conforme con el contenido de la misma
resolución objeto de amparo y; el Atestado Nº 52-2013-DIRINCRI-
PNP-DIVINHOM-DEPINLES-E2,defecha 13 de agosto del 2013, cuya
propia corre de folios 11 a 26, elaborado en el fuero común con motivo
de los mismos hechos atribuidos al demandante, que concluye que
dicho justiciable “resultaría ser presunto autor del delito Contra la
Vida el Cuerpo y la Salud – Lesiones Culposa por PAF en agravio
del C2.EO.PNP Jordy Anthony Morey Cruz”, se infiere que se trata
de un hecho cometido con negligencia.
CUARTO.- Que, el artículo 32° del Decreto Legislativo Nº 1151,
establece las causales de expulsión de las Escuelas de Formación,
por infracción disciplinaria muy grave, entre las cuales se encuentra:
“Ocasionar la muerte o lesiones graves a cualquier persona”; en
tanto el articulo 32° del Decreto Supremo Nº 009-2014-IN, que
la reglamenta regular el procedimiento para la aplicación de las
respectivas sanciones y, el articulo 34°, las “Circunstancias que
modifican la responsabilidad”, entre las cuales se encuentran las
circunstancias eximentes y las circunstancias atenuantes.
QUINTO.- Que, entre las circunstancias atenuantes del artículo
34°, en el inciso b, numeral 1), como una circunstancia atenuante de
las infracciones leves y graves esta el hecho que se haya cometido
la infracción sin intención; por lo que, al haberse determinado que el
amparista cometió la infracción que se le atribuye con negligencia
esto es, sin intención, circunstancia atenuante de la infracción aun
cuando fuera de naturaleza muy grave, no correspondía aplicarle
la causal de expulsión.
Por las consideraciones anotadas ME ADHIERO al voto de la
Sra. Dávila Cervera.
Sr.
Carrillo Mendoza.
EL VOTO EN DISCORDIA DE LOS SEÑORES LARA
CONTRERAS Y PISFIL CAPUÑAY, es como sigue:
EXP. Nº 560-14-AA
VISTOS; En Audiencia Pública; con el informe oral formulado
por el Abogado Patrocinador de la parte demandante; y,
Considerando;
PRIMERO.- Es materia del grado, el recurso impugnativo de
apelación interpuesto por el Señor Procurador Público a cargo de
los Asuntos Judiciales del Ministerio del Interior contra la Sentencia
contenida en la resolución número CUATRO, su fecha veintiséis
de setiembre del año dos mil catorce, folios ciento catorce a ciento
diecinueve, expedida por la Señora Juez del Quinto Juzgado
Especializado Civil de esta ciudad, que resuelve declarar Fundada la
demanda interpuesta por don Renzo Jesús Bruno López de Castilla
contra la Dirección de la Escuela de Oficiales de la Policía Nacional
del Perú y Otros sobre proceso constitucional de amparo y con las
demás que contiene.
SEGUNDO.- Para absolver el grado satisfactoriamente, el
Colegiado debe atender a los agravios formulados por la parte apelante,
según recurso de su propósito, folios ciento treinta y uno a ciento
treintisiete, en estricta observancia del brocárdico “tantum devolutum
quantum apellatum”, regla que subyace en lo dispuesto por el artículo
trescientos setenta del Código Procesal Civil, de aplicación supletoria al
presente caso y por autorización expresa de lo dispuesto por el artículo
noveno del Título Preliminar del Código Procesal Constitucional; por
tanto, el Tribunal del recurso no puede fallar más allá, ni por fuera de
los límites establecidos por los agravios propuestos con el recurso,
delimitando así el ámbito de su competencia así como tampoco puede
referirse a hechos que aún cuando han sido incluidos en la expresión de
agravios no fueron propuestos a la decisión del Aquo.
TERCERO.- Esboza como argumentos centrales de sus
agravios, el apelante: “i) Que al respecto debo indicar que la
Resolución administrativa cuya nulidad solicita el demandante ha
sido emitida dentro del marco constitucional y, en estricta aplicación
de las Leyes y Reglamentos que rigen nuestro ordenamiento
jurídico y de la PNP, por consiguiente no cabe nulidad del acto
administrativo mencionado, por lo que corresponde desestimar la
demanda; ii) Que en el presente caso, se advierte que los hechos
han acontecido el 13 de mayo del 2013, al haber ocasionado el
Cadete del 3er. Año Renzo Jesús Bruno Grozzo López de Castilla,
lesiones graves al Cadete de 2do. año Jordy Anthony Morey
Cruz, en el interior de los servicios higiénicos del primer piso
del Pabellón Comando de la Escuela de Oficiales PNP; iii) Sin
embargo, el demandante si tenía conocimiento de estos hechos,
quien se encuentra dentro de los alcances del Decreto Legislativo
Nº 1151 “Ley del Régimen Educativo de la PNP”, que en su Titulo
V, Capítulo Único, artículo 32, numeral (19) queda titpificado y el
cual es causal de EXPULSIÓN de la Escuela de Formación; sin
embargo, el Alumno PNP en mención argumentó descargos, cuya
evaluación se dejó a consideración del Consejo de Disciplina, a fin
de que determine la efectividad de la sanción disciplinaria”.
CUARTO.- Al respecto debe acotarse que conforme al petitorio
de folios cuarentiséis a cuarenta y siete, el demandante solicita que

58014 PROCESOS CONSTITUCIONALES
la justicia constitucional declare nulo y sin efecto legal la Resolución
Directoral Nº 127-2014-DIREED-PNP del 05 de febrero del 2014
y que resuelve declarar desestimado su recurso de apelación y
confirma su expulsión de la Escuela de Oficiales de la PNP, por ser
violatoria a la Constitución Política del Estado y en consecuencia
se ordene al Director de Educación y Doctrina de la PNP disponga
su inmediata reincorporación como Cadete del Tercer Año de la
Escuela de Oficiales de la PNP en el que venía cursando hasta
antes de la afectación de sus derechos constitucionales al debido
proceso, a la motivación de las resoluciones administrativas, al
derecho a la educación y al derecho a la presunción de inocencia.
QUINTO.- Como así lo refieren las partes y corroborado con la
prueba acopiada válidamente, los hechos que dieron motivo a la
expedición de la resoluciones administrativas cuestionadas con la
demanda, sucedieron el 12 de mayo del año 2013; como alega el
mismo actor en el fundamento 3.1 del relato fáctico de su demanda:
“El 12 de mayo del 2013, el recurrente en su condición de Cadete
del 2do. Año (C2) de la Escuela de Oficiales de la Policía Nacional
del Perú (EO), se encontraba de servicio en la Guardia de Honor de
la precitada cada de estudios, ubicada en el Distrito de Chorrillos-
LIMA, y al promediar las 08:00 horas en circunstancias que me
dirigía a mi puesto de responsabilidad designado en el Torreón
05, ubicado en el interior de la Escuela de Oficiales, al ingresar
a los servicios higiénicos del primer piso del Pabellón Comando
de manera fortuita al manipular el arma de fuego asignada para el
servicio, se produjo un disparo el cual logró impactar en el Cadete
del Segundo Año EO PNP Jordy Anthony Morey Cruz, el mismo
que inmediatamente fue auxiliado y trasladado al Hospital Central
de la PNP, para la atención médica, habiéndose recuperado de
dichas lesiones y en la actualidad participa de todas las actividades
de formación como Cadete del 3er. Año, sin limitación alguna”.
SEXTO.- Para cuando sucedieron los hechos estuvo vigente
la Ley del Régimen Educativo de la Policía Nacional del Perú,
sancionado por Decreto Legislativo Nº 1151 el diez de diciembre
del año dos mil doce, cuyos alcances están determinados en su
artículo cuando establece que dicho Decreto Legislativo se aplica a
los cadetes, alumnos, docentes y al personal de la Policía Nacional
del Perú; además, en su artículo primero cuando se refiere al objeto
se hace mención que dicho dispositivo, establece su estructura,
normas y procedimientos de gestión académica, administrativa y
disciplinaria; en consecuencia dada la relación de sujeción entre el
demandante y su centro de formación, en materia disciplinaria, surge
en el primero un deber de garante de aquél no sólo con su institución
sino con sus propios compañeros de estudios e incluso con terceros.
SÉTIMO.- El derecho disciplinario atiende a las conductas
disfuncionales entre el administrado y la Administración por cuanto
el comportamiento de los cadetes causan un perjuicio al normal
funcionamiento de su centro de estudios y por cuya razón se ha
previsto que conductas pueden ser pasible de sanción; en ese sentido,
tratándose de restricción de derechos fundamentales, por cuanto dichas
conductas disfuncionales conllevan una sanción disciplinaria, sólo debe
aplicarse la que corresponda cuando se encuentre previsto en la ley; en
este caso, corresponderá conforme a la Ley de Régimen Educativo de la
Policía Nacional del Perú, determinar si por los hechos expuestos en los
fundamentos precedentes corresponde al demandante la imposición de
expulsión de su centro de formación, decisión que ha sido cuestionada
por el actor con la pretensión deducida.
OCTAVO.- Conforme a lo dispuesto por el artículo 104 de la
Constitución, se ha previsto la posibilidad jurídica que el Poder Ejecutivo
pueda legislar por delegación del Congreso y mediante Decretos
Legislativos; además, debe entenderse que el Poder Ejecutiva por ley
autoritativa precisa la materia a legislar; como se puede anotar del texto
del Decreto Legislativo en comento, éste ha sido aprobado por el Consejo
de Ministros y con cargo a dar cuenta por parte del Presidente de la
República al Congreso o a la Comisión Permanente, en consecuencia
en cuanto a la validez formal del Decreto Legislativo ésta no presenta
dificultades; por lo que estamos frente a una ley (denominada decreto
legislativo) la que no se encuentra en las excepciones previstas en el
mismo artículo 104 de la Carta Política; y por tanto con fuerza normativa
válida para restringir derechos fundamentales en materia sancionadora
por parte del Estado.
NOVENO.- De otro lado, la norma en comento en el inciso primero
de su artículo 32, ha establecido como causal de expulsión: “Ocasionar
la muerte o lesiones graves a cualquier persona”; nótese que la regla
disciplinaria exige como requisito en el formante del tipo disciplinario
que la conducta en este caso del cadete haya causado la muerte o
lesiones graves a cualquier persona” y al respecto, no hay duda que
se ha causado lesiones al cadete Jordy Anthony Morey Cruz y sobre
este aspecto no hay duda por la afirmación del mismo demandante y
por la contundencia de la prueba acopiada por este último y adjuntada
con la demanda; si bien es cierto, no se le ha causado la muerte,
estamos frente al tipo disciplinario de lesiones graves y el argumento
de la demanda en el sentido que en los antecedentes médicos no se
ha consignado que éstas sean graves y estando a que por el mismo
dicho del actor, al exigir que se la justicia constitucional, restituyendo sus
derechos constitucionales, aprecie que tal circunstancia no ha ocurrido
en el presente caso, debe determinarse los mismos para los efectos de
verificar la legalidad de la decisión cuestionada con el petitorio.
DÉCIMO.- Como se puede anotar del Atestado Policial,
folios once a veintiséis, el agraviado ingresó al Departamento de
Emergencia por sufrir herida por proyectil de arma de fuego en región
cervical anterior con orificio de entrada y orificio de salida y según
informe médico Nº 1070-2013-DIRSAL.PNP/DIREJOS.HN.LNS.
PNP.DIVARCRI. y el informe médico No.171.13-DEPARTAMENTO
DE OTORRINOLARINGOLOGÍA Y CIRUGÍA DE CABEZA Y
CUELLO DEL HN.LNS.PNP, se hace mención que el paciente ha
sufrido una hemorragia profusa y compromiso del estado general
y shock por obstrucción de las vías aéreas superiores, siendo
El Peruano
Domingo 18 de setiembre de 2016
intervenido quirúrgicamente el mismo día de los hechos donde se
le realiza traqueostomía y reconstrucción de la región hipofaringe
y epiglotis; denotan do ello gravedad de las lesiones causadas
por proyectil de arma de fuego en una parte vital del agraviado; en
consecuencia por lo examinado en las pruebas adjuntadas con la
incoada, las lesiones ocasionadas revisten gravedad y e hecho que
no se habrían consignado en los antecedentes médicos o policiales
no enerva la posibilidad que la justicia pueda establecerlos sobre
todo para determinar la legalidad o constitucionalidad de la expulsión
proferida por la demandada en el decurso del proceso disciplinario.
DÉCIMO PRIMERO.- De otro lado, el argumento que no se le
puede imponer la sanción de expulsión al demandante porque no
hubo intencionalidad (dolo) para causar las lesiones al cadete Jordy
Anthony Morey Cruz no es relevante en el asunto porque de una
interpretación del tipo disciplinario el término normativo “ocasionar”
está referido a una conducta ya sea dolosa como también culposa
como podría haber ocurrido en el presente caso; por tanto, los
hechos y conducta se subsumen en el tipo disciplinario de la regla
contenida en el inciso primero del artículo 32 de la Ley del Régimen
Educativo de la Policía Nacional, siendo la consecuencia lógica
y necesaria la expulsión del centro de estudios del demandante;
además, en atención al principio de legalidad, no podríamos
implementar una interpretación distinguiendo los factores de
atribución de responsabilidad disciplinaria (dolo y culpa) cuando la
misma norma no hace distinción.
DÉCIMO SEGUNDO.- El argumento esbozado con el relato
fáctico de la demanda, en el sentido que no es posible aplicar
la sanción de expulsión prevista en una norma que no está
reglamentada no enerva la sanción impuesta, en tanto que para
restringir derechos fundamentales basta que la ley haya previsto la
sanción a imponer, la que como hemos explicado se agota con lo
establecido en el inciso primero del artículo 32 de la Ley del Régimen
Educativo de la Policía Nacional del Perú, siendo el Reglamento una
disposición de naturaleza administrativa que permiten poner en vigor
reglas generales de obligatoriedad para todos los cadetes de la
entidad policial y que guardan entroncamiento con la citada ley, la
que en ningún caso puede desnaturalizarla; es decir, la exigencia de
un reglamento para sancionar al demandante no es requisito para
imponer la expulsión porque como ya explicamos el tipo disciplinario
se agota con su previsión legal (principio de legalidad) y por la
subsunción de los hechos expuestos, siendo que la reglamentación
no puede desnaturalizar la ley o sea la previsión legal de expulsión,
su omisión o dictado no puede ser fundamento para pensar que otra
cosa podría decir (distinta de la expulsión) porque como su propio
nombre lo dice, reglamenta los propósitos de la ley a quien sirve.
DÉCIMO TERCERO.- Finalmente, debe acotarse que en la
parte considerativa de la Resolución del Consejo Disciplinario Nº
042-2013-DIREED-EO-PNP/DC, su fecha cinco de noviembre del año
dos mil trece, folios ocho a diez, se consigna como fundamento jurídico
para sancionar al demandante, el Manual de Régimen de Educación
de las Escuelas de Formación de la PNP, el mismo que a la fecha de
ocurrido los hechos se encontraría implícitamente derogado, ya que de
su base legal se hace mención a la Ley de Régimen Disciplinario PNP,
Ley Nº 29356 del diez de mayo del 2009, el mismo que fue derogado
por el Decreto Legislativo Nº 1151, Ley del Régimen Educativo de la
Policía Nacional del Perú, no puede ser fundamento para declarar la
nulidad de la sanción impuesta ya que en aplicación del principio de
formalismo valorativo, ordenar que la administración renueve la decisión
a adoptarse el estado de cosas no cambiaría porque como repetimos,
ha sido suficiente que el tipo disciplinario se haya agotado con el deber
de sujeción impuesto por la norma disciplinaria, independientemente
de los resultados posteriores, porque el tipo se agota además, con
la sola infracción del deber de garante (tipo abstracto), siendo que la
subsanación de esta irregularidad no ha de influir en el sentido de la
decisión disciplinaria o en sus consecuencias, a tenor de lo dispuesto
por la cuarta parte del artículo 172 del Código Procesal Civil, de
aplicación supletoria al presente caso.
DÉCIMO CUARTO.- El proceso constitucional de amparo,
exige dos presupuestos procesales; el primero, que el demandante
acredite que tiene derecho a los invocados de naturaleza
constitucional con la demanda, lo que no está en duda; lo segundo,
es que se acredite el acto que atenta o vulnera sus derechos
fundamentales, lo que no se ha podido apreciar conforme a lo
expuesto en los fundamentos precedentes, ya que no se ha podido
destruir la presunción de validez de la decisión cuestionada con el
petitorio, a tenor de lo dispuesto por el artículo nueve de la Ley Nº
27444, Ley del Procedimiento Administrativo General, la demanda
debe ser declarada infundada como así lo autoriza el artículo
doscientos del Código Adjetivo Acotado.
Por estas consideraciones; NUESTRO VOTO es porque
SE REVOQUE la Sentencia apelada contenida en la resolución
número CUATRO, su fecha veintiséis de setiembre del año dos
mil catorce, folios ciento catorce a ciento diecinueve, expedida
por la Señora Juez del Quinto Juzgado Especializado Civil de esta
ciudad, que resuelve declarar FUNDADA la demanda interpuesta
por don RENZO JESÚS BRUNO LÓPEZ DE CASTILLA CONTRA
LA DIRECCIÓN DE LA ESCUELA DE OFICIALES DE LA
POLICÍA NACIONAL DEL PERÚ Y OTROS SOBRE PROCESO
CONSTITUCIONAL DE AMPARO y con las demás que contiene;
y REFORMÁNDOLA, declararon dicha demanda INFUNDADA
en todos sus extremos; consentida y/o ejecutoriada que sea
la presente, ORDENARON que los autos sean archivados por
Secretaría de Juzgado conforme a ley.-
Srs.
Pisfil Capuñay
W-1424847-40