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Construcción de un editorial radial

Radialistas.net

La idea central
Aclara primero lo que vas a decir. ¿Cuál es el mensaje que quieres transmitir? ¿Cuál es la
idea central de tu comentario?
No quieras abarcar mucho porque apretarás poco. No pienses en cuatro ideas ni en tres ni
en dos… una sola idea. Un solo mensaje. Incluso, escríbelo para obligarte a definirlo con
claridad. Por ejemplo: Es necesario despenalizar las drogas.
Recuerda que un buen comentario no debe ser largo. Tres minutos son suficientes para
desarrollar una idea.

El lenguaje y el tono
Usa siempre palabras concretas, coloquiales, comprensibles. Estás hablando para que te
entiendan, no para demostrar tu gran “sabiduría”.
Hay que hablarle a la audiencia en segunda persona (usted, ustedes) y emplear para ello
todos los recursos del lenguaje radiofónico: juegos de palabras, golpes de humor, preguntas
y admiraciones, comparaciones, pausas, énfasis, imágenes y refranes, hasta efectos sonoros
y música de fondo.
No olvides el lenguaje inclusivo. Que tu editorial no sea sexista.

Por la responsabilidad que implica, los editoriales se escriben y se leen. Pero que no
suenen “a leído”. El tono tiene que ser convincente, interpelante, motivador.

Contar un hecho
Un buen editorial tiene tres partes. La primera es contar un hecho. No comiences con tesis
ni considerandos ni planteamientos generales.
Comienza narrando algo, una anécdota, un ejemplo, una historia. Y cuéntala con emoción.
En un editorial debemos ir de lo concreto a lo general (método inductivo), nunca al revés
(método deductivo).
La primera frase de esa narración es decisiva para atrapar la imaginación de la audiencia
desde el primer momento. Nunca anuncies bobamente lo que vas a hacer: Ahora voy a
contarles un hecho que es muy interesante…
Comienza por una frase impactante. Tal vez una pregunta provocativa: (¿Sabía usted que
Estados Unidos es el mayor productor y exportador de marihuana en el mundo?). O una
frase ingeniosa: (La marihuana no es la solución. Pero tampoco es el problema.) O entra
directamente a la narración: (Mariela no podía creer el “negocio” que le estaba proponiendo
aquel señor).

Analizar el hecho
El hecho que hemos contado es como el arbolito. Ahora tenemos que ver el bosque, pasar
del caso concreto a la situación estructural.
En esta segunda parte del comentario vamos a analizar el caso que hemos mostrado,
conocer sus causas, comprender por qué ha ocurrido.
¿Qué es analizar un hecho? Básicamente, es aportar datos (cifras, estadísticas, cantidades) y
argumentos (razones que explican ese hecho y que acompañan la reflexión de la audiencia).
Por ejemplo, datos sobre las drogas (8 de cada 10 delitos en nuestro país están relacionados
con el narcotráfico). Y argumentos (si las drogas se despenalizaran, se eliminaría el 80% de
los delitos en nuestra sociedad, se acabarían las mafias y todas sus secuelas).

Resolver el hecho
Ya vimos qué pasa (primera parte), ya comprendimos por qué pasa. Ahora nos toca
concluir el comentario, dar pistas sobre cómo solucionar la situación planteada.
A veces, no se puede dar una salida muy concreta al problema planteado. Otras veces, sí. A
veces, nos tocará denunciar y tomar posición frente a una situación difícil. Otras veces,
podremos sugerir una vía de solución.
En cualquier caso, proponiendo o protestando, la emisora está tomando posición y
comprometiéndose a favor de la ciudadanía y de los Derechos Humanos. Y de eso se trata.
Si importante es la primera frase del comentario, todavía más la última. El remate lo puedes
hacer con un refrán oportuno, una pregunta pícara: (¿No es hora ya de despenalizar las
drogas y desenmascarar a la banca norteamericana, la gran lavandería del dinero sucio?).
Muchos comentaristas conocen el truco de cerrar el círculo, de retomar a la salida el mismo
gancho de la entrada.

Géneros de opinión. El editorial

GÉNEROS PERIODÍSTICOS
Los hechos sencillos de los que se parte la elaboración de una noticia, los usamos como
base para interpretar o dar a conocer interpretaciones.
En la opinión, enjuiciamos un hecho, lo valoramos dando nuestro posicionamiento o el del
periódico. Su finalidad es persuadir al público de nuestra postura.
Hay que evitar genéricos, artículo y comentario para todos los textos de opinión.

GÉNEROS DE OPINIÓN
EDITORIAL: se le considera el texto de opinión más importante. Representa al medio o al
programa. La hace el director o conductor del programa. Se escribe pero no se lee. El estilo
es sobrio, comedido… pero muy analítico.

FUNCIONES
- Opinión del medio o el programa.
- Sirve de recordatorio de algunos de los hechos relevantes para poder contextualizar y
acotar el objeto de mi enjuiciamiento. Además, el oyente del editorial no tiene porque
conocer la crónica del hecho.
- Explicación del tema: exposición articulada de los hechos con el fin de dar una base
documental a la opinión, que ofrezca al lector una base bien argumentada.
- Poner a la luz el sentido más escondido de los hechos. Clarificar los hechos.
- Dejar lo anecdótico en un segundo plano.
- Valorar los hechos explicitando opiniones.
- Explica el por qué de los hechos de causa a efecto.
- Función indagadora de los efectos de futuro del hecho.
- Función persuasiva: pretende que, mediante razonamientos, el oyente valore el hecho
igual que nosotros. A veces, incluso pide respuesta al público, una reacción determinada,
integrada en una campaña más general.

Funciones del editorial según Luisa Santamaría.


1.- explicar los hechos: la importancia de los sucesos del día.
2.- dar antecedentes: contextualización histórica.
3.- predecir el futuro.
4.- formular juicios. Datos informativos que se proporcionen servirán de recordatorio de lo
acontecido con el fin de centrar el tema en su totalidad.

CLASES DE EDITORIALES
Núñez Ladevéze apunta dos clases: explicativos, de los que no se deduce ninguna opinión
directa y los editoriales de tesis u opinión, en los que la actitud que se defiende o ataca se
expresa.

ESTILO EDITORIAL
Lenguaje que evita el tono ligero, es comedido, serio… Sin embargo, se tiende a un tono
serio pero con una expresión sencilla y directa. Evita el lenguaje desenfadado, demasiado
ligero, aunque cada vez es más frecuente un estilo más rígido.
Debe ser un lenguaje: claro, correcto, sin ornato, conciso. La sintaxis ha de ser sencilla, con
un orden natural. Vocabulario rico, con numerosos adjetivos, sinónimos, etc, pero sin ser
enrevesado.
Tono: firme, directo, expresa claramente lo que dice el programa.
Prima lo discursivo sobre lo narrativo.

ESTRUCTURA
A. Título:
- libertad pero siempre adecuada al contenido del texto, coherente con lo que después se va
a contar en el editorial.
- breve (5 - 6 palabras)
- valorativo: que ya anuncie la tesis, el planteamiento.
- El título en radio es la introducción al texto. Puede no tenerlo
B. Texto. Varias opciones:
1.- Hay autores que se inclinan porque la primera parte del editorial comience con la
exposición breve de la noticia que da pie al editorial, y dentro de ese primer párrafo se
valora la noticia.
A continuación se va desarrollando el cuerpo del editorial como interpretación, reacción,
opinión, en torno a ese hecho principal. Esa llamada al lector la hace el redactor.
Como cierre, Gutiérrez Palacio, hace hincapié en el punto más importante del editorial o
una recapitulación breve de lo dicho anteriormente.
2.- Algunos autores coinciden en ver un paralelismo entre las técnicas de desarrollo del
editorial y el esquema típico de las sentencias judiciales.
Hechos que dan pie (resultando), principios generales aplicables (normas doctrinales) y
conclusión (fallo final de la sentencia).

3.- Bartolomé Mostaza:


* La enunciación del tema, el planteamiento.
* Exposición de sus implicaciones y consecuencias, es decir, exposición del tema en partes.
* Emisión del fallo y, en consecuencia, la adopción de una conducta, el ofrecimiento de una
solución, el trazo de un rumbo hacia el futuro.

ESQUEMA DEL EDITORIAL


Título: valorativo, 2-3 palabras. Palabra clave sobre el asunto que se va a tratar. Lleva la
postura principal al título, ej. “Putin se equivoca” o “El gran fallo de Putin”.
Primer párrafo: valoración y exposición del tema, desde el punto de vista general.
Segundo párrafo (texto): análisis y valoración de los aspectos parciales del hecho, más
importantes. Postura libre, siempre que los argumentos sean reales.
Conclusión: valoración a la que se llega como conclusión (deducción) de lo anteriormente
argumentado.
Último párrafo: perspectiva de futuro.

Diferencias entre columnas y editoriales

COLUMNA EDITORIAL

Asume la posición ideológica


No necesita asumir posición frente a los hechos
del medio

Puede hablar sobre hechos conocidos a los que la prensa Siempre habla sobre temas de
diaria no le presta atención actualidad

Es menos formal Es solemne y Literario

Tiene conocimiento sobre el


Tiene conocimiento sobre el tema
tema

Posee amplia libertad temática Aborda temas de actualidad

Siempre son sobre temas


Puede haber columnas sobre temas menores
trascendentes

Posee un lenguaje ligero Posee lenguaje culto

Lleva la firma del autor Es anónimo

Refleja puntos de vistas más populares Es más clasista

Circulación y producción de la opinión en el medio radiofónico.


Diego Javier Ibarra.
Profesor Adjunto Radio I y II. FACSO. UNICEN.

Tipos de opinión, géneros radiofónicos, producción, circulación.


La intención del presente artículo es iniciar la exploración de la opinión en el medio
radiofónico. De la escucha de diferentes programas se desprende la presencia abundante de
opiniones que indicarían que la radio es un medio de opinión. No sólo porque en este medio
de comunicación se vierten opiniones en un sentido estricto, sino porque considerada la
afirmación en un sentido amplio, contiene diversas formas de circulación y producción de
opiniones.
A las opiniones producidas por los conductores radiales se les agregan las opiniones
producidas por los receptores, en una circulación desde el interior hacia el exterior de las
emisoras, pero también desde el exterior hacia el interior de las emisoras.
No se trata de equiparar emisores (conductores) y receptores (oyentes) en el dominio del
aire radiofónico, pero sí entender la posibilidad de incidencias mutuas.
La radio también es generadora de opinión pública a la vez que las opiniones de mayor
predicamento median en la constitución de las audiencias en cada emisora. Con la
posibilidad de que esas audiencias radiofónicas, también realicen sus aportes en la
construcción de una opinión pública y promuevan revisiones o confirmaciones en los
contenidos de dicha emisora, siempre que la misma sea permeable a la acción de los
oyentes.
El término posibilidad está utilizado en relación con el rol que asumen los oyentes.
Posibilidad de un rol activo que busca algún tipo de intervención aunque sea mínima, frente
a la ausencia de posibilidad de un oyente pasivo.
Avanzar en la comprensión del medio radiofónico desde el lugar de la opinión en un
sentido amplio, implica pensar a la radio como un espacio dinámico, de intercambio. Es
decir abordar desde una totalidad la producción y circulación de: la opinión de los
conductores, la opinión de los oyentes, la construcción de una opinión pública y las
definiciones de audiencias y emisiones a través de las opiniones.
De forma sencilla y simple un recorrido puntual se puede representar de la siguiente
manera: El conductor de un determinado programa de radio pone al aire una opinión de
forma explícita o implícita. Luego un oyente se comunica con el programa y conductor (por
diversos medios, teléfono en vivo o grabado, mensaje de texto, correo electrónico, mensaje
escrito por el asistente de producción) y comparte el tema ofreciendo su opinión. El tema en
cuestión toma la forma de una opinión más acabada, debido a la doble circulación y
producción. A su vez una nueva opinión ofrecida desde una entrevista a algún especialista o
participante involucrado en el tema incorpora otros aspectos quizás no contemplados
inicialmente. La operación se repite y la opinión es organizada por el conductor, pero con
dos intervenciones que ingresan al espacio sonoro radiofónico desde el exterior. Se
presentaron así tres instancias opinativas. Esto es lo que habitualmente y de manera
reiterada sucede en las emisiones de radio. En paralelo los oyentes de ese programa
producen intercambios simbólicos y se pone en marcha la construcción de la opinión
pública frente al tema tratado. La resultante de este proceso tendrá adhesiones o no en los
oyentes y podrá generar una mayor aceptación del programa o conductor o iniciar un tipo
de rechazo. En esta etapa se reorganiza la audiencia, pudiendo mantenerse, crecer o
descender.
La reiteración permanente de esta dinámica permite afirmar que la radio es un medio de
opinión. No obstante que desde los modos de recepción, que van del oír al escuchar, de una
mayor a una menor atención resulta por momentos difícil percibir y diferenciar si se está
opinando, informando, interpretando o todo a la vez en un cruce de géneros periodísticos. A
la vez que la percepción de la opinión por sobre las otras formas expresivas en gran medida
pueden darse por el rol que ocupa el periodista-conductor que habla desde su persona. Es
esa voz la que habla, es esa voz con nombre y apellido que puede identificarse con cierta
precisión.

La periodística como una perspectiva


El estudio de la opinión en la radio observada desde la actualidad, desde la emisión y su
puesta al aire se encuadraría en la denominada Periodística como una modalidad de avanzar
en los estudios del periodismo.
La Periodística, que según la definen Josep María Casaús y Luis Núñez Ladevéze es
aquella rama de la Ciencia de la Comunicación que, desde las perspectivas histórica, actual
y prospectiva, estudia todos los fenómenos y elementos de las diversas dimensiones
complementarias del sistema periodístico: la producción, la mediación, la recepción y las
transformaciones sociales del mensaje:
“En consecuencia son objetos de estudio de la Periodística los procesos de producción,
selección y valoración de hechos e ideas; los procesos de composición redaccional y de
comunicación social; las formas y modalidades de expresión; y los estilos y las estructuras
internas y externas que adoptan los mensajes en la actualidad, y el resto de las unidades
redaccionales periodísticas (encuadradas en cualquiera de los géneros narrativos,
instrumentales y argumentativos) cuando se canalizan a través de la prensa, la radio, la
televisión, la telemática y otros medios de comunicación de masas.” (Casaús y Ladevéze
1991: 63)
Decir que la radio es básicamente un medio de opinión implica realizar una serie de
precisiones en los conceptos. Decir que la radio es un medio de opinión en cuanto a las
noticias de actualidad política es una primera precisión.

De la opinión personal al periodismo de opinión


El término opinión tendría varias conceptualizaciones según los diferentes modos de usos o
intervenciones, que permitirían hablar de la radio como un medio de opinión.
Es preciso presentar la aclaración realizada por las investigadoras Depetris y García sobre
las clasificaciones de los géneros en la radio: "Existen pocos autores que aborden la
programación radiofónica a partir de las clasificaciones sociales de textos que la propia
práctica de lo radiofónico instituye. Y fundamentalmente que den cuenta de las
retorizaciones privilegiadas y rasgos estilísticos de los géneros radiofónicos en la
actualidad, a partir del abordaje del parlante". (Depetris y García. 2001: 1)
Por esto decidí organizar una serie de conceptualizaciones clasificatorias útiles a esta
investigación. La primera sería la opinión en el sentido más llano. La opinión personal, que
según los diccionarios es el sentimiento que se forma uno de algo, adhesión de la mente a
un juicio probable, juicio acerca de alguna persona o cosa. La opinión que no requiere de
fundamentos para hacerla valedera. Es personal y aunque se presenta en los medios de
comunicación, en este caso la radio, puede expresarse del mismo modo por fuera de los
medios. Aquella que se expone sin implicancias directas con el periodismo de opinión o los
géneros radiofónicos.
Una segunda conceptualización sería la opinión fundamentada, que sí bien es personal,
presenta una fundamentación previa que también es personal y ligada a los valores e
ideología de quien la expresa.
La tercera dimensión de la opinión, se puede denominar opinión estricta o pura y parte del
periodismo de opinión, desde formatos puros, que se diferencien de los formatos del género
informativo o interpretativo. La opinión estricta estaría dada por: la columna de opinión, el
comentario, el editorial, la crítica y otros textos radiofónicos que expliquen, analicen,
prediquen y juzguen, y que través de la persuasión, previenen, aconsejan, sentencias o
valoran.
Sin embargo el periodismo de opinión, también se presenta como opinión indirecta o mixta.
En los medios electrónicos en especial en la radio, los formatos se formulan de manera
cruzada y la opinión puede estar presente tanto en una columna como en un reportaje o
informe, como en un documental o un panorama de noticias. Desde esta perspectiva la
opinión no aparece sólo en las fórmulas puras. Ocurre que este medio realizará
adaptaciones dentro de una dinámica histórica. "Estos nuevos medios informativos van a
utilizar libremente, adaptándolos a sus necesidades audiovisuales específicas, los géneros
periodísticos ya modelados en los periódicos" (Vargas, 1999: 61).
En la radio la opinión también puede aparecer dentro de fórmulas dramáticas o
humorísticas. Es por esto, que denomino opinión indirecta o mixta, de acuerdo a su
aparición en textos radiofónicos que no necesariamente pertenecen al ámbito opinativo,
pero que pueden incluirlo.
José Luis Martínez Albertos en referencia a los géneros periodísticos en radio utiliza la
clasificación de puros (noticia, boletines) y mixtos (boletín principal y magazín) y aclara
que en "las modalidades mixtas de la información radiofónica, se produce una coexistencia
de varios géneros periodísticos, tanto informativos, como interpretativos y de opinión".
Es necesaria hacer una aclaración sobre los géneros periodísticos radiofónicos y los
formatos radiofónicos. Ya que en su utilización cotidiana en el ámbito de la práctica
profesional se confunden involuntariamente. Géneros y formatos muchas veces designan lo
mismo.
Me baso en la siguiente clasificación, aunque con una razonable flexibilización. Géneros:
Dramáticos y periodísticos. Sobre este último: informativos, interpretativos y opinativos.
Luego una serie de formatos que pueden transitar entre estos tres mencionados, teniendo en
cuenta que algunos se ajustan más a cada uno de estos. Por ejemplo: panoramas, noticias
con o sin opinión, informes o reportajes, reportaje interpretativo, crónica, entrevista,
comentarios, editoriales, entre otros.
Es decir que la opinión ingresa en los diferentes discursos radiofónicos, ya sea como género
propio o cruce entre géneros y formatos que incorporen la opinión.
Los géneros del periodismo de opinión son de manera estricta la editorial, el comentario y
sus definiciones guardan relaciones entre sí.
"El comentario es un artículo razonador, orientador, analítico, enjuiciativo, valorativo con
una finalidad idéntica a la editorial. Se diferencia básicamente en que el comentario es un
artículo firmado y su responsabilidad se liga tan sólo al autor del trabajo. Puede decirse sin
embargo, que en el periódico moderno existe un desplazamiento de temas del editorial a las
columnas de los comentarios, sobre todo aquellos comentaristas que tratan temas políticos,
en los diferentes niveles: local, nacional internacional, economía, educación, cultura...".
(J.L Martínez Albertos, 1982: 383)
En este sentido Depetris y García, vienen trabajando, aunque desde el análisis semiológico,
los géneros de opinión en emisoras, en particular el comentario y el comentario editorial y
dicen al respecto que "en la radio, la opinión aparece a veces en un espacio asignado de los
programas periodísticos informativos. Nos estamos refiriendo a textos como el editorial y el
comentario editorial. Pero muchas otras veces, la opinión emerge en medio de la
conversación en estudio, en un continuo fluir de informaciones (...) sin una aclaración que
se anteponga para presentar al género". (Depetris y García. 2003: 10)
Ante esto la diferenciación estaría dada por la posición que asume el periodista, como se
ubica frente al micrófono, la construcción de su texto y la finalidad del mismo.

De los locutores o conductores radiales


El caso de la radio posee algunos ajustes ya que la diferencia entre firmado y no firmado no
puede precisarse. Todos los géneros y formatos de opinión se establecen en la voz de los
conductores radiofónicos. Desde la opinión personal hasta los formatos estrictos del
periodismo de opinión: editorial, comentario y crítica. Pasando por todas las formulaciones
mixtas, las opiniones cobran personalidad en la voz de los conductores o locutores. Como
han señalado Depetris y García: "Lo que se impone señalar aquí es que precisamente el
comentario y el comentario editorial radiofónico no son anónimos, por cuanto o se conoce
al sujeto enunciador, o si no se lo conoce físicamente, se lo ubica por la huella de la voz".
(Depetris y García 2001: 3)
Por esto se hace necesario abordar el tema también desde el rol y posición de los
conductores, ya que son ellos los que encarnan las posibles opiniones. Incluso en la radio
las opiniones pueden ingresar al espacio sonoro por terceros: oyentes o entrevistados y
declaraciones.
La relación que los públicos entablan con los conductores también constituye un elemento
significativo a la hora de visualizar la opinión en el medio y el porqué de su presencia en
las diferentes expresiones de géneros y formatos.
"La radio también marca su presencia cotidiana inmiscuyéndose en la dinámica doméstica,
reproduciendo, acompañando o generando rituales cuyas características varían según el tipo
de programa y la hora en que se transmita. Esto convierte a locutores y conductores en
cuasi miembros de la familia, lo cual los vuelve dignos de confianza y los coloca en un
lugar de autoridad que prácticamente valida cualquier afirmación, comentario o sugerencia
que realicen.
La recreación de estos rituales también contribuye de manera significativa a generar
certezas y bajar los niveles de ansiedad que produce la experiencia cotidiana de vivir en una
gran ciudad. Los locutores se vuelven entonces, grandes domesticadores de la
incertidumbre y (...) particularmente en los sectores populares, la credibilidad de la
información se vincula de manera directa con la capacidad que tengan de generar certezas".
(Vinocur.2002)
Si bien los medios de comunicación son parte indispensable en la actualidad de la
construcción de la opinión pública, la radio en la voz de sus conductores son verdaderos
formadores de opinión. Esto lo logran por el tipo de relación tan personal que establecen
con su público oyente. Por lo tanto las opiniones que expresen desde diferentes formas
podrán ser tomadas en cuenta por estos. No se trata de una concepción manipuladora, pero
seguir a un determinado periodista radial implica en general una serie de acuerdos entre
posiciones ideológicas y de estilo. Y en esa relación pueden ser los mismos oyentes quienes
aporten opiniones sobre temas de actualidad política que luego retome el conductor.
Para que el conductor asuma su rol de opinador y sea aceptado por los oyentes como tal, su
credibilidad se presenta como el potencial que favorece esa actitud. Credibilidad que
depende de la experiencia atribuida a la fuente y que para ser percibido como competente,
el comunicador debe dar la imagen de quien conoce la posición más adecuada con relación
al problema. Al mismo tiempo la credibilidad es su confiabilidad que procede de la
percepción de que el comunicador es sincero y actúa de manera desinteresada.
La teoría sobre opinión pública es importante pues liga la función de los medios con la
construcción de la opinión en los receptores. Que la radio sea parte del proceso de la
construcción de la opinión pública y los conductores formadores de opinión, no sólo se
logra a través de la opinión explícita, sino que coexisten otras formas más o menos
implícitas de opinión. Por un lado las agendas que el medio expone, la selección y recorte
de noticias e información, selección de fuentes, los modos de presentación y los usos de los
elementos de lenguaje radiofónico, a lo que se les suma la entonación de las expresiones.
Todos son aportes para comprender a la radio como un medio de opinión.

Entre la objetividad y la subjetividad


Tradicionalmente se tiende a identificar la labor periodística con la obtención de noticias, la
elaboración y su difusión y esto conlleva de manera implícita la denominación de
objetividad. Si embargo en el ámbito profesional está claro que la subjetividad de la
opinión del periodista también forma parte del quehacer profesional. La propia selección de
noticias y sus fuentes implican un grado de subjetividad y encierran una opinión que es
transmitida a los oyentes.
Natividad Vargas entiende que "esa tendencia a identificar periodismo con información,
implica, a su vez, entender que se da una semejanza entre información y objetividad, y
objetividad y realidad. Desde este posicionamiento mientras el periodismo de opinión
representa la pura subjetividad, el periodismo informativo sería la objetividad misma".
No obstante todo acto periodístico es un acto de interpretación y, por tanto un acto
subjetivo. La radio no es una mera transmisora de la realidad, sino que mediante diferentes
mecanismos y operaciones profesionales, participa activamente en la construcción de
distintas versiones de la realidad.
El problema reside en parte en que se utiliza el término objetividad, como sinónimo de
imparcialidad o neutralidad, y al mismo tiempo impersonal, cuando no lo es. En la radio lo
impersonal es más difícil de detectar, casi estaría reservado para los boletines y panoramas
de noticias, redactados con un estilo lacónico. El resto de la programación sin dejar de ser
periodística se trabaja desde un estilo más coloquial, y por lo tanto la hace más personal.
En el caso de los panoramas más allá de que se pretendan objetivos, en el sentido de no
querer manipular al oyente, su producción y puesta al aire, pasa por instancias subjetivas.
Es claro que un texto periodístico no es un texto cualquiera, y se elabora desde una
selección previa, desde una valoración y jerarquización, y la forma en que todo será
transmitido implica una subjetividad. Y si es subjetivo también encerraría un tipo de
opinión. Es un postulado más o menos generalizado que en la radio se pueden generar
opiniones indirectas a través del uso del lenguaje: entonación, música, clima, los silencios y
también desde el tratamiento de la noticia.
La distinción entre objetividad y subjetividad serviría para distinguir de modo inicial entre
periodismo informativo y periodismo de opinión respectivamente, y pondría en evidencia la
propuesta comunicativa explícita del conductor de radio. A sabiendas que también se
transmiten opiniones de manera implícita y en apariencia objetiva.
Periodismo Radial

IDENTIFICACIÓN DE LA ASIGNATURA

CÓDIGO: 3436

COMPONENTE: Medios y Tecnologías

INTENSIDAD HORARIA:4 Horas semanales

1. JUSTIFICACIÒN:

Uno de los principios fundamentales del periodismo es la construcción y transmisión de


mensajes. La práctica periodística está basada en la indagación y presentación de
información de interés general y que influye en las decisiones de la sociedad a través de la
puesta en escena de la opinión pública. El periodismo realizado en cualquiera de los medios
de comunicación – en este caso desde la radio-, tiene como objetivo la emisión de
mensajes claros, fluidos, creativos y oportunos.

En el caso del periodismo radial los mensajes que se elaboran y presentan están
determinados por el lenguaje, géneros, formatos propios del medio y la aplicación, entre
otras, de algunas metodologías de las Ciencias Sociales (diarios de campo), asumidas para
el desarrollo de trabajos específicos como series radiales sobre temas variados,
Entrevistas, Crónicas, reportajes, Radiorevistas, etc. Por lo anterior, es de suma importancia
que los estudiantes de Comunicación Social y Periodismo estudien los contenidos
determinados del periodismo radial, para abordar este ámbito de la comunicación y manejo
mediático, su influencia en la sociedad, su responsabilidad, aplicación de técnicas,
producción y nuevas perspectivas discursivas como la Radio Ciudadana desde el
periodismo ciudadano, público y cívico, para así abrir espacios de discusión y propuestas
sobre el tema en la ciudad y la región.

2. OBJETIVOS

2.1 OBJETIVO GENERAL


Proporcionar las herramientas teórico-prácticas para el desarrollo de la producción
periodística en el ámbito de la radio.

2.2 OBJETIVOS ESPECIFICOS

2.2.1 Acercarse, a través de la reflexión académica, al ejercicio del periodismo radial.

2.2.2 Conocer y producir diversos géneros y formatos periodísticos desde las características
específicas del lenguaje radial.

2.2.3 Desarrollar habilidades y competencias en la escritura de mensajes y locución para


radio.

2.2.4 Reconocer otras perspectivas del periodismo hoy puestas al servicio de proyectos
radiales ciudadanos.

3. Contenidos temáticos

PERIODISMO RADIAL

UNIDAD 1

Introducción: elementos fundamentales para el ejercicio del periodismo radial

Temas

-Elementos generales del LENGUAJE DE LA RADIO

-Narrativas periodísticas, el periodismo y su discusión

-De vuelta a la edición radial y al libreto para radio

UNIDAD 2
Géneros y formatos del periodismo radial. Parte I

Temas

-La Entrevista radial y la reporteria para radio

-El perfil radial

-La noticia radial: Fuentes, redacción.

-Tipos de notas periodísticas radiales para el Boletín radial

-El reportaje radiofónico

-La crónica en radio

UNIDAD 3.

Géneros y formatos del periodismo radial. Parte II

Temas

-El consejo de redacción para programas radiales.

-Radiorrevista o magazine radial

-Rutinas de producción periodística para radio

-El noticiero o informativo radial

UNIDAD 4. Proyectos radiales desde el periodismo ciudadano

Temas

-Radio ciudadana y periodismo ciudadano

-Herramientas para realizar programa radiales ciudadanos para distintas audiencias, desde
la perspectiva ciudadana.
4. Metodología

El curso se fundamenta en la lectura y análisis de textos y artículos referidos a las temáticas


planteadas inicialmente y en la implementación de talleres con actividades prácticas ha
desarrollar durante el proceso.

Con respecto a los textos se privilegiará el trabajo de interpretación que se apoya en el


diálogo y la discusión argumentada entre los estudiantes y el docente, con el ánimo de
cumplir este objetivo se hace indispensable la lectura previa y rigurosa de cada uno de los
documentos y la disposición más amplia para el intercambio sobre ellos en todos los
momentos de la clase. En el caso de los talleres se trabajará a manera de proceso de tal
manera que se tendrá en cuenta cada uno de los momentos y las actividades planteadas en
las diferentes prácticas y sus respectivos resultados o productos.

Pensando en dinamizar la labor se invitará a conformar grupos de estudio y de trabajo


desde el primer día de encuentro – el número de estudiantes por grupo dependerá del total
de los matriculados en el curso-. La labor que estos grupos desarrollarán se relacionará con
ejercicios académicos y prácticos como la presentación de informes, discusión,
exposiciones, recolección de información o entrevistas, actividades prácticas, construcción
y edición de productos radiales y/o realización de programas radiales en vivo.

Cada grupo presentará informes de las actividades prácticas desarrolladas como también de
los productos radiales asignados para la realización junto con los libretos correspondientes.
El profesor asignará textos y pedirá síntesis escrita de algunos de ellos con previo aviso y
que cuenta de la interpretación o análisis de los mismos.

Por último el profesor hará uso de exposiciones de tipo magistral cuando estas resulten
necesarias.

5. Evaluación

A-Criterios de evaluación:

1-La evaluación será permanente, se tomarán como puntos de referencia para la misma las
actitudes que los estudiantes y los grupos de trabajo desarrollen a lo largo del curso: Deseo
de aprender, entusiasmo, responsabilidad, participación en clase y talleres, creatividad,
entre otras.

2-Se evaluará el grado de comprensión adquirido sobre cada uno de los temas, elementos
del lenguaje radial, perspectivas de abordar el tema del periodismo radial como una
práctica social y comunicativa con herramientas y prácticas definidas, así como, la
capacidad redacción para radio, de creatividad para la producción de diversos géneros
periodísticos radiofónicos en el marco de una reflexión sobre el aporte que estos hacen al
proceso académico.

B-Actividades de evaluación

Al finalizar cada unidad temática los estudiantes entregarán y sustentarán las tareas
planteadas en los diferentes talleres propuestos durante el mes. Estas tareas deberán ser
entregadas la fecha asignada y con los correspondientes insumos o productos planteados en
la evaluación de los mismos talleres. Los textos serán trabajados en las clases a través de
síntesis o escritos realizados por los estudiantes y entregados el día de la clase. Las síntesis
o escritos, los productos radiales y actividades prácticas desarrolladas durante el primer
corte sumadas todas y cada una equivaldrán al 50% de la nota final y lo realizado bajo los
mismos criterios en el segundo corte equivaldrá al otro 50%, lo que sumado al final del
semestre sumará la nota total y el 100% final.

6. Bibliografía

ACOSTA MORA, DIOMEDES. ¿Qué es el periodismo radial?

AGUDELO OLARTE, GINA PATRICIA. “JUEGOS TEATRALES,Sensibilización,


improvisación, construcción de personajes, técnicas de actuación y manejo de la voz en el
espacio. COOPERATIVA EDITORIAL MAGISTERIO, BOGOTÁ, 2006.

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ARANGO VILLEGAS, Catalina. Rutinas de producción periodística en Caracol Radio.


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