LA MISIÓN DESDE LA VOZ

DE LAS MUJERES

2017
ANUARIO

Provincia Boliviana de la
Compañía de Jesús
La Madonna della Strada o Nuestra Señora del Camino, es la Patrona de la Compañía de Jesús y la primera ante la cual
San Ignacio de Loyola y los otros fundadores de la Compañía oraban en Roma.
Foto: Pintarlafe.wordpress.com
“A todas las mujeres, laicas y consagradas que colaboran en la Companía de Jesus Bolivia,
que comparten la misma espiritualidad ignaciana y la misma mision apostolica” .

- ANUARIO 2017 -

Jesuitas de Bolivia

Curia Provincial
Calle Genaro Sanjinés Nro. 777
La Paz - Bolivia
 CRÉDITOS
Elaboración: Carmen Julia Lujan Corrales
Agencia de Noticias Fides
Jefe Informativo: Sergio Montes, SJ
Editor: Ignacio Sunol, SJ
Foto portada: Mujeres de San Ignacio
de Mojos, en Beni.
Crédito foto: Fabio Garbari, SJ
INDICE

Presentación …………………………………………………………………………………………….. 7
La mujer en la Companía de Jesus (Antonio Menacho, SJ)……..………………………………..8
Que me motiva a ser bienhechora (Carmen Carrrasco)…………………………..…………….10
Me siento parte de la familia ignaciana (Mery Zárate)……………...…………………………...12
Me identifico con la mision de la Companía de Jesus (Julia Zamora )…………………....14
Nos sentimos muy ignacianas, las jesuitinas (Salvadora Arnanz y María Barral)… 16
La participacion de la mujer en la construccion historica de Fe y Alegría ...……………..18
En consonancia con la pedagogía ignaciana (Rosemarie Sauma) …………………..……..20
La mujer en Fe y Alegría (Francisco Pifarré, SJ) .………………………………………………….21
La Iglesia tiene vida por la mujer (Mery Mendoza)…………………..…………………………...22
No me arrepiento del camino elegido (Noemí Mamani) ………………………...…………….24
Comprometida con la opcion por los campesinos e indígenas del sur
(Martha Isabel Pereira) …………………………………………………………………………………..25
Fundacion ACLO: Justicia y Equidad (Fernando Alvarado, SJ) ………………………….....26
Mi trabajo es valorado (Erika Yaveta) …………………………………………….…………………...27
Las mujeres intuyen lo que el lado masculino no puede (Xavier Albó, SJ)………….….. 28
No solo es un trabajo, es dar algo mas (María Elena Achocalla) …………………...……..29
Me siento util trabajando en la Companía de Jesus (Dilma Cabrera) ……………….…..30
Los conozco mas que a mi familia (Isabel Cuevas) …………..…………………………………..31
La parroquia forma parte de mi vida (Julieta Loza) ……………………………………………..32
Me siento feliz sirviendo en el Altar (Ibeliz Julio) ………………………………………………...33
Tenemos activa misioneras de la Iglesia (Eduardo Tapia, SJ) ………………….…………...34
Agradecimiento ……………………………………………………………………………………………..….35
Virginia Blanco Tardío. Nació en Cochabamba en 1916, laica catequista que destacó por múltiples actividades pastorales
en favor de los pobres. Una mujer de oración, acción y servicio social. Fue nombrada “Venerable” por el Papa Francisco en
el año 2015.
PRESENTACIÓN
La mujer sabe ser iglesia sin necesidad de
poder
La presencia de la mujer en la Iglesia
boliviana es muy significativa, primero
numericamente y segundo porque ellas
saben ser iglesia sin necesidad de tener
poder. Saben ser pueblo de Dios, y eso
nos ensena mucho.
La mujer en la Companía de Jesus tiene
una diversidad enorme de expresiones,
comenzando por las mujeres trabajado-
ras en nuestras obras o las senoras que
trabajan en nuestras comunidades y pa-
rroquias.
En la Congregacion General 34, Decreto
14, la Companía reconocio el papel y la
presencia de la mujer y expreso su
agradecimiento por la colaboracion y
gran aporte que recibimos.
En Bolivia, en la mision de la Companía
de Jesus, tenemos mucha participacion
de mujeres invisibilizadas y que me-
diante este anuario queremos hacerlas
visibles. Hay muchas mujeres en distin-
tos cargos de colaboracion en nuestras
obras apostolicas con las que hacemos
equipo: como en formacion pastoral,
como bienhechoras, estan las que cola-
boran en el cuidado de los jesuitas, las
que estan en cargos de decision, etc.
Cada labor con la misma importancia
para la mision que desempenamos. Tal
vez no podamos mostrar el trabajo de
cada una de ellas, pero las historias que
presentamos son una muestra repre-
sentativa de esa gran parte de nuestra
Companía, las mujeres y la mision.
Mas que sacar ahora una bandera con
motivo del Día Internacional de la Mu-
jer, es un agradecimiento. Hablar de la
presencia de la mujer en nuestro Anua-
rio es una invitacion a dar gracias. Gra-
cias por que ustedes saben ser lo que
son y nos invitan a que nosotros sea-
mos lo que somos y que veamos que es-
tamos en este mundo para vivir como
hermanos, como hijas, hijos de Dios y
aportar juntos a que Bolivia sea un lu-
gar bello, lindo, bueno. Y que tambien
sea el mundo, una Tierra como Dios
quiere.
Quisiera que la mujer que vea este
anuario, se reconozca en el no solo por-
que vea su foto, sino porque puede en-
contrar alguna imagen que refleje algo
de su vida y que eso no le inquiete ni
que le preocupe, sino mas bien que le
anime, le aliente y de fuerzas para se-
guir trabajando, pues en estos tiempos
donde se asocia la palabra mujer a la de
violencia, maltrato y muerte, nosotros
queremos decir que hablar de la mujer
es tambien y, sobre todo, hablar de
agradecimiento.
Osvaldo Chirveches, SJ
Provincial Jesuitas de Bolivia
7
RESEÑA
La Mujer en la Compañía de Jesús
A pesar de lo que pueda parecer por fue-
ra, porque San Ignacio nunca quiso que
hubiese una orden femenina de los jesui-
tas, a pesar de eso, nuestro fundador fue
un hombre que pudo seguir adelante y se
apoyo enormemente en las mujeres que
se acercaron a el en los anos de conver-
sion, especialmente en Barcelona y Man-
resa, donde las senoras Isabel Rose e
Ines Pascual y otras senoras y caballeros
ayudaron mucho a San Ignacio a que pu-
diera estudiar, lo acogieron en sus casas
cuando el no tenía donde vivir para que
tuviese la suficiente privacidad para ha-
cer sus devociones.
San Ignacio tuvo siempre muy en cuenta
el apostolado con las mujeres de tal for-
ma que fundo y colaboro, hasta que la
salud se lo impidio, en una especie de ca-
sa de acogida de las mujeres que habían
tenido percances en su vida o mala vida
para que pudiesen vivir ordenadamente,
o sea, no había un rechazo.
Nuestra congregacion no existiría, posi-
blemente, hoy tal como es de no haber
sido por las mujeres que ayudaron a San
Ignacio y a lo largo de los anos la Compa-
nía de Jesus sobre todo en la fundacion
de los colegios, pues necesitaba de per-
sonas economicamente fuertes para que
se hiciesen las fundaciones y los colegios
pudiesen ser practicamente gratuitos, la
ayuda de las bienhechoras fue un hecho
8
muy importante. Asimismo, de las reli-
giosas que acompanaron el proceso edu-
cativo de los colegios.
En la Companía de Jesus contemporanea
hoy día basta entrar en cualquier comu-
nidad para darse cuenta que los jesuitas
no solamente tenemos la colaboracion,
sino que en muchas cosas dependemos
realmente de la entrega del sacrificio, del
trabajo, de la buena voluntad, del carino,
de las mujeres, las senoras o senoritas
que nos acompanan.
Creo que en todas las comunidades el
mayor peso de la vida de cada día lo lle-
van las colaboradoras de la Companía de
Jesus y siempre hemos recibido de ellas
no solo el respeto y el trabajo, sino tam-
bien su carino, su cercanía.
Quiero poner el ejemplo de la Residencia
Nuestra Senora de la Esperanza de la ca-
lle Bolívar en Cochabamba, donde esta la
casa de los ancianos o la enfermería de
los jesuitas de Bolivia. Realmente sin el
equipo de enfermeras que hay ahí y mas
las senoras de servicio en la cocina, en
limpieza etc.
¡Pobres de nosotros que haríamos! y
realmente siempre lo hacen con una de-
dicacion que es digna de cualquier elogio
que se pueda hacer y siempre desde la
humildad y sencillez con los que supo-
nen estos trabajos.
 Señora Esperanza Justiniano de Mier, cuadro ubicado en la Residencia de la Esperanza, Cochabamba.
Esto me lleva tambien hablar de la gran
bienhechora que fue para la Companía
de Jesus de Bolivia la Senora Esperanza
Justiniano de Mier, que era la duena de
esta residencia. La senora Esperanza, a
la hora de su muerte en 1969 cedio a la
Companía de Jesus esta propiedad, su in-
tencion fue que en estos predios hubiese
alguna obra social o educativa y por esto
ahí se establecio en un inicio las oficinas
de Fe y Alegría Cochabamba, actualmen-
te se encuentra la Biblioteca Julio Muri-
llo, SJ, el Centro de Espiritualidad Igna-
ciana y la sucursal de la Revista Cuarto
Intermedio.
Es así que la Companía de Jesus ha segui-
do la voluntad de esta bienhechora y ha
disfrutado de la excelente ubicacion que
tiene esa casa para residencia de los an-
cianos, de los mayores jesuitas y tambien
el cuidado de los enfermos.
Finalmente, me siento agradecido por
todo lo que las mujeres laicas y religiosas
han hecho por mí y tengo que decir que
todavía siento en el corazon tantas y tan-
tas mujeres que nos ayudan a caminar
correctamente por la vida, con el ejem-
plo y la amistad y el carisma que tiene
las mujeres para hacer la vida mas fami-
liar.
Antonio Menacho, SJ
Historiador
9
BIENHECHORAS

¿Qué me motiva a ser bienhechora

de la Compañía de Jesús?

Carmen Carrasco Gutiérrez, bienhechora de la Compañía de Jesús.

Una bienhechora o benefactora presta colaboración desinteresada a una

obra social o causa. En la Compañía de Jesús contamos con diferentes perso-
nas que forman parte de los bienhechores y que con su colaboración desinte-
resada permiten que las obras apostólicas sigan con su trabajo día a día.

10
Anos atras, al incorporarme al equipo
tecnico de Fundacion Accion Cultural
Loyola (ACLO), conocí el trabajo de va-
rias obras sociales creadas y administra-
das por la Companía de Jesus y eviden-
cie la importancia que tuvieron y tienen
en la vida de sectores excluidos y vulne-
rables de Bolivia y otros países.
Ademas, compartir reflexiones y expe-
riencias con sacerdotes y profesionales
que trabajan en esas instituciones ha en-
riquecido mi vida.
La trascendencia de las obras sociales y
el agradecimiento personal son las razo-
nes que me inducen a asumir una acti-
tud de modesta reciprocidad y colabora-
cion con una institucion que aun me
acoge.
La mision de la Companía de Jesus, Para
la Mayor Gloria de Dios, es una invita-
cion a verme en la otra y el otro como un
ser necesitado de multiples maneras,
sobre todo como persona necesitada de
los demas para construir una vida mejor
para mi familia y la colectividad de la
que soy parte.
Trabajando y conociendo la historia de
Fe y Alegría he constatado que es una
institucion que no se habría creado ni
habría extendido sus acciones a todo el
país sin el involucramiento y aporte de
mujeres religiosas y no religiosas.
En mi opinion, las mujeres son desde
siempre protagonistas en la vida de las
obras sociales, aunque la envergadura
de su aporte no siempre sea expuesto ni
apreciado.
Cuando, en Fe y Alegría, tomo contacto
con experiencias educativas con ninas,
ninos, adolescentes y jovenes con alguna
discapacidad o de municipios rurales ol-
vidados y empobrecidos, se me encoje el
corazon al ver la chispa de genuina fe y
esperanza en los ojos de esos ninos y jo-
venes, y al sentir el amor y dedicacion
con que maestras, maestros y otras per-
sonas se involucran y asumen tareas
complejas y agotadoras con total des-
prendimiento.
Creo que este anuario dedicado a las
mujeres en la mision de la Companía de
Jesus es un gesto consonante con uno de
los desafíos de nuestro tiempo, que ha
sido posicionado por las mujeres organi-
zadas en diversos escenarios de refle-
xion y lucha por la restitucion y amplia-
cion de derechos, como sujetas de su
propia historia y de la historia de sus fa-
milias, comunidades, las instituciones y
a nivel global.
Carmen Carrasco Gutiérrez es bienhe-
chora de la Compañía de Jesús y tam-
bién trabaja en Fe y Alegría como Res-
ponsable Nacional de Proyectos .
11
FUNDACIÓN JESUITAS DE BOLIVIA
Me siento parte de la familia ignaciana
Mery Zárate, gerente ejecutiva de la Fundación Jesuitas de Bolivia.
Estoy aca porque me gusta, porque me
siento parte de la familia ignaciana. Tie-
ne sus desafíos, pero siempre me he sen-
tido bien porque la espiritualidad igna-
ciana me acerca a la Companía de Jesus,
en ese sentido, me siento comoda, satis-
fecha con lo que estoy haciendo.
Mi ingreso a esta congregacion se carac-
teriza por haber colaborado en diferen-
tes obras, donde identifique la variedad
de jesuitas que existe al interior de la
Companía con quienes llevas mucha sin-
tonía, pero tambien con quienes costaba
entrar en sintonía.
Entonces, esta diversidad creo que fue el
primer acercamiento que me permitio
12
identificar que es importante respetar
toda diversidad y sobrellevarla.
Escuchan mi voz
Siempre he sentido eso. Creo que expre-
sar lo que piensas es importante, tam-
bien analizar y discernir, que es algo que
aprendí a lo largo de estos anos. Das tu
punto de vista sustentado y, en ese mar-
co, siempre he sentido receptividad y
apertura para construir.
Hay un buen porcentaje de mujeres que
colaboran en las obras apostolicas de la
Companía de Jesus, pero todavía en los
niveles jerarquicos, las mujeres no tienen
el peso que deberían tener, es mi percep-
cion.
Tambien creo que en este tema se va
avanzando paulatinamente, como to-
do, es un proceso. Creo que hay aper-
tura por parte de los jesuitas y a las
mujeres nos toca ir construyendo con-
juntamente con ellos.
En la Iglesia Catolica en general, creo
que no hay una presencia muy fuerte
de mujeres que se puedan sentir oídas
en diferentes espacios, es mi percep-
cion, aca siento que hay mas apertura y
eso es valorable.
A todas las mujeres que estan presen-
tes en la Companía de Jesus, les puedo
decir que sean audaces para que pue-
dan verter lo que piensan porque a ve-
ces uno se guarda cosas y no expresa lo
Cena benéfica organizada por la Fundación Jesuitas de Bolivia.
que piensa.
Es importante formarse mucho y conti-
nuamente para aportar y poder expre-
sar lo que uno piensa en los diferentes
espacios porque si no es así, nos queda-
mos rezagadas. Los jesuitas no saben
que potencialidad puede tener una mu-
jer sino se manifiesta y creo que es im-
portante poder visibilizarse a ese nivel
con propuestas claras, concretas para
poder contribuir a la mision grande
que busca la Companía de Jesus.
Mery Zárate lleva 20 años trabajan-
do con la Compañía de Jesús en dife-
rentes obras como el CEMSE en La
Paz, el Centro Cuarto Intermedio de
Cochabamba, entre otros.
13
RELIGIOSAS
Me identifico con la misión de la
Compañía de Jesús
Siento que desde la formacion que nos
daban en el colegio Sagrado Corazon de
Sucre llegue a identificarme de alguna
manera a la mision de la Companía de
Jesus.
Cuando rememoro la formacion que re-
cibí en el colegio surge siempre el re-
cuerdo de que ya desde entonces nos
hablaban de la necesidad de compro-
meternos y construir “otro mundo posi-
ble” como se dice actualmente.
Yo sentía que ese mensaje atravesaba
toda la formacion: academica, social y
espiritual que nos daban y que el men-
saje venía desde toda la comunidad
educativa.
En mi vida, esa educacion y esa espiri-
tualidad, la espiritualidad ignaciana
fueron las bases que progresivamente
me fueron guiando a buscar mi voca-
cion y realizar mi compromiso por
transformar este mundo.
Con los jesuitas
Compartiendo ya despues la mision y el
trabajo con los companeros jesuitas, fui
conociendo un poco mas a la Companía
de Jesus en Bolivia, fui construyendo
lazos de amistad con personas concre-
tas que me siguen transmitiendo el es-
14
píritu de la Companía.
No me he sentido mal trabajando con
ellos, aprecio los esfuerzos constantes
que realizan como institucion para bus-
car y cumplir la voluntad de Dios, pero
sí creo que estan dentro de la sociedad,
son obra fundada de religiosos varones
y como tal, mantiene sus estructuras.
Aunque personalmente siempre he
sentido respeto al trabajar y compartir
en las parroquias jesuitas, no considero
que hayan marcado una línea revolucio-
naria en el trato a la mujer.
No se si realmente la Companía de Je-
sus en Bolivia quiere incluir un rasgo
femenino en sus características, pero sí
lo quisiera, pues creo que les falta mu-
cho camino por recorrer.
Lo mismo dentro de la Iglesia, el traba-
jo de la mujer esta todavía muy subor-
dinado y poco valorado. La jerarquía
sigue siendo masculina y con muy po-
cos esfuerzos por introducir pensa-
mientos, maneras de ser y de sentir fe-
meninas y eso determina creo yo, para
que el trabajo quede muy delimitado
para la mujer.
La Companía de Jesus es una obra uni-
versal y la espiritualidad ignaciana es
un regalo para la Iglesia, creo que esto
lo fui entendiendo progresivamente pe- proceder” me queda el desafío de traba-
ro cada vez mejor. Se inicio con la for- jar y vivir la mision donde haga falta.
macion recibida en el colegio durante
doce anos y luego se fue fortaleciendo
en el compartir la vida y mision. No pue- Julia Zamora es religiosa de la congre-
do realizar mi mision desde otra pers- gación Misioneras de Cristo Jesús.
pectiva que no sea la que me brinda la
Trabajó en las parroquias de Tiraque
espiritualidad ignaciana. Mis experien-
(cuando estaba a cargo de los jesui-
cias de trabajo y amistad con jesuitas,
tas) y Santa Vera Cruz ambas en Co-
personas concretas y en las parroquias
chabamba por periodos de entre 1 a 5
de la Companía de Jesus han sido gratas,
años.
sobre todo por el testimonio que me
aportan, pero al mismo tiempo creo que
de la Companía de Jesus y su “modo de

Religiosa junto a la hermana Julia Zamora ( Izquierda abajo, polera blanca).

San Ignacio nunca quiso que haya religiosas dependientes de los jesuitas gra-
cias a esto hay varias congregaciones femeninas que siguen su espiritualidad
y ejercicios y son diversos carismas con distintas funciones, esto hace que la es-
piritualidad de San Ignacio no quede restringida o estrechada por unas nor-
mas que estarían solamente para una congregación.
Antonio Menacho, SJ

15
RELIGIOSAS
Nosotras nos sentimos muy ignacianas,
las jesuitinas
Salvadora Arnanz (Izquierda) y María Barral (Derecha), religiosas de la congregación Hijas de Jesus.
Tenemos el mismo carisma que los jesui-
tas porque nuestra madre, Santa Candi-
da María de Jesus, cuando escribio nues-
tras constituciones se inspiro en las
constituciones de los jesuitas, con su
mismo espíritu. Nosotras diríamos que
hemos vivido de cerca la espiritualidad
ignaciana, en Espana nos llaman las je-
suitinas.
Como parte de esta afinidad, las Hijas de
Jesus hemos colaborado con la Compa-
nía de Jesus en su apostolado educativo.
Inicios de Fe y Alegría en Bolivia
En 1966 se fundo Fe y Alegría en Santa
Cruz, una de las fundadoras es la Herma-
16
na Salvadora Arnanz (“Dora”). En reali-
dad Fe y Alegría comenzo en este lugar
porque el padre jesuita padre Jose Vidal
junto a nuestra madre provincial, en ese
entonces Dolores Galicia, pensaron en
crear este movimiento en Bolivia tra-
yendo a hermanas de nuestra congrega-
cion que estaban en distintas misiones
en otros países para conformar Fe y Ale-
gría en Santa Cruz y en distintos pueblos
alejados del oriente haciendo el lema de
esta institucion “ donde termina el asfal-
to comienza nuestro trabajo”.
Hermana María Barral, Congregación
Hijas de Jesús, llegó de España a Boli-
via en 1968.
Labor que traspasó las aulas
El trabajo bonito de Fe y Alegría y que
me gusto mucho realizar fue con los
militares. En Santa Cruz había un cuar-
tel, entonces, a esos militares se les da-
ba clases los sabados y se les prepara-
ba para los sacramentos.
Luego los domingos íbamos a misa con
el padre jesuita que iba con nosotros
alla y ahí escuchaban misa los militares
muy uniformados. Se trabajo mucho
con ellos y la gente nos lo agradecio
mucho porque eran chicos que habían
venido del campo y que no sabían mu-
chos ni leer ni escribir.
Hermana Salvadora Arnanz, Congregación Hijas de Jesús.
A la vez se les daba la clases de Catecis-
mo para prepararles, algunos para
bautismos, primera comunion, otros
incluso para su boda.
A mí ese trabajo me gustaba. Tambien
trabajamos en parroquias con grupos
de padres de familia. Una experiencia
muy gratificante.
Hermana Salvadora Arnanz (Dora),
congregación Hijas de Jesús. Fue una
de las fundadoras de Fe y Alegría en
Santa Cruz.
17
EDUCACIÓN

La participación de las mujeres en la

construcción histórica de Fe y Alegría
Recuperar la experiencia de las mujeres que han construido la historia de Fe y Alegría
Bolivia, muy marcada por los sacerdotes que han empezado la obra, es reflejar también
historias de quienes han construido ladrillo por ladrillo este apostolado educativo. Son
cuatro mujeres pioneras que aportaron en la construcción histórica del Movimiento de
Fe y Alegría, son experiencias que Rosemarie Sauma, Coordinadora nacional de For-
macion en valores Espiritualidad Ignaciana, va recolectando y en la siguiente entrevis-
ta nos presenta a una de ellas: la señora Martha Uriarte.

La Profesora Martha Uriarte, nacio en La Cómo se une a la familia de Fe y Ale-

Paz, estudio magisterio en hizo anos de
provincia el ano 1964 y 1965. Ahí cono-
cio tres profesoras con las que fue cre-
ciendo en amistad y compartiendo op-
ciones de vida en las que la educacion
era una herramienta basica para su com-
promiso de vida.
Soltera, dedicada enteramente a la edu-
cacion en el sistema regular sobre todo,
pero incursionando en los ITS y casas del
saber. Toda su experiencia educativa esta
enmarcada en la vida de Fe y Alegría.
Su paso por Fe y Alegría
Profesora en la Portada desde el 1.966
durante los primeros seis anos de FYA.
Directora del colegio de Cristo Rey 1972
a 1984.
Directora departamental de La Paz por
diez anos.
Directora Nacional de FYA durante seis
meses.
gría:
Buscando trabajo despues de los anos de
provincia, se pasaba días en el Ministe-
rio de Educacion y se encuentra por ca-
sualidad con Humberto Portocarrero
que buscaba gente para comenzar FYA
Bolivia y la invita a formar parte de esta
obra.
La senora Martha se involucra en la tarea
juntamente con unas amigas y tres her-
manos jesuitas Jovenes maestrillos. Co-
menzaron la experiencia en la Portada, la
idea era ir construyendo la misma escue-
la, las aulas y perfilar el currículum.
La ida eran los domingos por la manana
para reunirse con los padres de familia ,
construir las aulas e involucrar a la co-
munidad del barrio. Entre semana era ir
a dar clase a las aulas improvisadas en
diferentes casas. Aparte de dar los tiem-
pos libres para la construccion de la es-
cuela recibían charlas por las tardes

18
EDUCACIÓN

durante la semana para conocer el Movimiento

que estaba naciendo, su espiritualidad y su ra-
zon de ser ademas del servicio que se quería
brindar en los lugares de las laderas de la ciu-
dad de La Paz
En esa epoca (1.966) en la Portada no había
luz electrica los padres de familia fueron claves
en su participacion para agilizar la instalacion
electrica para la escuela y de hecho para las ca-
sas.

Así nace la primera escuela de Fe y Alegría con

un fuerte tinte de bilinguismo porque casi todo
era en aimara.
Señora Martha Uriarte. F
Emprendimientos durante su gestión direc- Foto: Rosemarie Sauma
tiva

El salir al campo fue una consigna des-
de los inicios, no podía la experiencia
quedarse en ambito de las ciudades y
se trabajo : Yanacachi, Jupigande y Via-
cha.
Actualmente, Martha Uriarte esta jubi-
lada y en companía de las tres pioneras
(jubiladas) de FYA ha fundado el “grupo
de amigas de FYA”, en el marco de los
50 anos de vida de FYA, se reunen cada
segundo viernes de mes, no solo re-
cuerdan hitos de FYA, si no se han dado
a la tarea de documentar y recuperar
documentos importantes para la insti-
tucion.

Las pioneras en la naciente Fe y Alegría:

La señora Chela de Ossio fue la primera secretaria de Fe y Alegría.

Hna. Gloria Esposito, primera directora departamental LP.
María Otaegui, primera directora en Santa Cruz.
Mery Ribera en el Beni.

19
EDUCACIÓN

En consonancia con la pedagogía

ignaciana para la transformación

Rosemarie Sauma, coordinadora nacional de Formación en valores Espiritualidad de Fe y Ale-

Siempre me he identificado con la mi-
sion educadora de los jesuitas y la exce-
lencia con la que trabajan, sobre todo
con la formacion y liderazgo para la for-
macion que es uno de los temas que me
ha gustado mucho de la pedagogía igna-
ciana, formar líderes para la transforma-
cion.
Trabajo de la mujer en la Iglesia
Tengo dos visiones, una en la que verda-
deramente se valora la propuesta de la
mujer en cuanto a ideas, servicio, pero,
considero que en algunos momentos so-
mos las personas utiles, pero no pode-
mos acceder a nada de decisiones. Yo sí
he estado en un cargo de decision, pero
siempre sometida a lo que el jefe maxi-
mo me pueda decir, o sea, en la Iglesia el
hecho de tener una jerarquía de los va-
rones marca un poco la diferencia.
El servicio de las mujeres es bastante
valorado, requerido. Las mujeres que he
conocido dentro de la iglesia lo dan to-
do, dan su tiempo sus ideas su entusias-
mo, pero que nunca van a tener un espa-
cio de decision dentro la Iglesia.

20
EDUCACIÓN
Compañía de Jesús
En la propuesta que hace Fe y Alegría en
las unidades educativas, en la obra mis-
ma, el trabajo de la mujer es muy valora-
do. Considero que soy una persona privi-
legiada porque me escuchan, me pregun-
tan, me piden consejos y me dan suge-
rencias para mejorar
En la Oficina Nacional y en las departa-
mentales, el 80 por ciento somos mujeres
y en cargos de decision hay muchas
otras, eso es muy interesante, es un apor-
te muy eficaz y la Companía de Jesus las
valora muchísimo. Siempre he considera-
do que los jesuitas respetan y trabajan
por la equidad de genero y justicia
La mujer en Fe y Alegría
El valor de la mujer en Fe y Alegría es
muy grande. De cada cuatro educadores,
tres son mujeres y en nuestros equipos
de trabajo la mitad son mujeres. El direc-
tor y subdirector son varones, pero las
demas responsabilidades en su mayor
parte son mujeres. Me siento muy feliz
trabajando con ellas, son gente muy aco-
gedora.
Tambien considero que en Fe y Alegría
es muy importante la comunidad educa-
tiva y esta es la trilogía, es decir, el
vínculo entre padres y madres de fami-
lia, docentes, y alumnos y alumnas, en-
tonces, el papel que cumplen los papas y
las mamas, que son 232 mil en Bolivia,
Su servicio
Lo que ha marcado mi servicio, en resul-
tados directos ha sido los encuentros na-
cionales que hemos realizado con líderes
estudiantes de las unidades educativas
sin diferenciar si son del oriente, alti-
plano o valles. Fueron experiencias enri-
quecedoras porque en ellos se ve el fruto
del servicio que estamos haciendo y esas
anecdotas para mí son sumamente enri-
quecedoras.
Rosemarie Sauma es coordinadora na-
cional de Formación en valores Espiri-
tualidad ignaciana de Fe y Alegría Bo-
livia.
el 80 por ciento son mujeres. O sea, las
que llevan todo el dinamismo de la co-
munidad educativa son ellas, pues van a
las reuniones, participan en acciones de
caracter sociocomuntario, incluso esta
presencia mayoritaria se percibe en los
centros de ninos con discapacidad.
La mujer tiene un papel muy grande en
Fe y Alegría y con la Companía de Jesus
creo que hay una sensibilidad cada vez
mayor en este tema y poco a poco se van
sintiendo parte del proyecto jesuita.
Francisco Pifarré, SJ
Director Nacional de Fe y Alegría
21
SECTOR SOCIAL
La Iglesia tiene vida por la mujer
Mery Mendoza, administradora del Comedor San Calixto en La Paz.
La mujer en la Iglesia boliviana
No se valora mucho el trabajo de la mu-
jer en la Iglesia porque, lamentablemen-
te, esta jerarquía es bastante vertical, en-
tonces siempre se ve a la mujer como
una colaboradora, no despreciando su
trabajo, pero no dandole el realce y el
valor que la mujer aporta.
La Iglesia tiene vida por la mujer, no solo
dentro de una parroquia, una vicaria o
una institucion, sino tambien en la mis-
ma sociedad la mujer es clave.
22
En la Compañía de Jesús
Ese uno de los motivos por los que conti-
nuo en esta obra. En un inicio vine por
invitacion a quedarme por tres meses y
estoy cuatro anos. Me he sentido acogida
en esta familia de la Companía de Jesus
porque puedo desarrollar con absoluta
confianza y responsabilidad el cargo de
administradora del Comedor que se me
asigno y no solo tengo voz, tengo voto,
mucho apoyo y realmente me siento
bien con este trabajo.
La mujer es clave en la sociedad boli-
viana, entonces, que la Companía de
Jesus incorpore a mujeres no solamen-
te en un cargo subalterno, sino en ad-
ministracion, direccion, es clave porque
no somos solo un apoyo para los jesui-
tas, sino que nosotras tenemos toda la
capacidad y responsabilidad de poder
manejar estas obras
Anécdota prueba de fuego
Algo que me ha cambiado mucho la vi-
sion que tenía fue el poder colaborar a
la marcha de los discapacitados en La
Paz en 2016. Para mí fue una prueba
de fuego, jamas en mi vida había visto
tanto sufrimiento y tanta pobreza.
Fuimos elegidos para atender a esta
gente y hemos trabajado mas de dos
meses al principio con casi 700 perso-
nas, pero en ningun momento los des-
cuidamos no solo en lo material con el
desayuno, almuerzo o cena, sino los he-
mos acompanado en su caminar, en sus
solicitudes al Gobierno y sobre todo en
su sufrimiento. Personalmente conocí
realidades que en mi vida había pensa-
do ver, eso me ha marcado, la caravana
y las carpas de los discapacitados me
FOTO
Atención a la marcha de los discapacitados. Foto. Fernando Jiménez, SJ
han marcado y le doy gracias a Dios
por haberme permitido ayudar en esta
experiencia.
Más que un trabajo
Esta obra mas que un trabajo, es una
vocacion porque el trabajo es otra cosa.
Tenemos mucho trabajo en el comedor,
pero sobre todo sentimos ese llamado
que es esa vocacion a gastar la vida por
el otro.
Nosotras las mujeres que estamos en la
Companía de Jesus no estamos por ca-
sualidad, sino es un llamado que Dios
nos ha hecho para que seamos mujeres
valientes y que tengamos mucho ani-
mo.
Que Dios nos acompane y nos de forta-
leza día a día ante las dificultades, que
siempre las hay, para que siempre pon-
gamos en practica “en todo amar y ser-
vir”.
Mery Mendoza trabajó durante más
de 30 años en la Iglesia Católica de
Bolivia, antes de formar parte de la
administración del Comedor San Ca-
lixto.
23
SECTOR SOCIAL

No me arrepiento del camino elegido

En diciembre de 2006, me invitaron
a ser parte del Centro de Investiga-
cion y Servicio Popular (CISEP) y yo
hacía servicio en dos parroquias
(San Pablo y Ntra. Sra. del Rosario)
como catequista de primera comu-
nion y confirmacion respectiva-
mente, un servicio que me apasio-
naba.
En 2008, al involucrarme en el tra-
bajo, el tiempo para ser
“catequista” se me conflictuaba y
muchas veces tenía que dejar de la-
do actividades que en lo personal
me dolía, (quería clonarme y estar Noemí Mamani Gonzales en una reunión.

ano 2008, desde que inicio hasta que

en ambas actividades cuando chocaban).
Fue así que por el mes de octubre de
2008 un companero de trabajo noto mi
preocupacion y me pregunto que me pa-
saba. Le conte que estaba sintiendo que
fallaba a las personas que confiaron en
mí, porque en la parroquia no estaba ha-
ciendo un buen trabajo y quiza tampoco
en el CISEP, ahí me aconsejo algo que en
un inicio me dolio mucho, me dijo: “creo
que ha llegado el momento de que priori-
ces tu esfuerzo y trabajo en uno de los dos
y que si priorizaba el CISEP mi servicio
solo tendría un cambio, el cambio de
población que ya no serían los niños o
jóvenes de las parroquias, sino la pobla-
ción con la que el CISEP trabaja”.
Aquellos anos, me ocupaba de familias
de centros mineros y de zonas alejadas
de la ciudad, la simple posibilidad de de-
jar de ser catequista, me dolía. Pero al
final tome la decision de priorizar el tra-
bajo con CISEP, y aun recuerdo que en la
celebracion de primera comunion de ese
acabo llore a mares (ahora recordando
esto me causa un tierno recuerdo) con el
que deje el servicio como catequista.
Ahora, 10 anos despues, no me arrepien-
to de la decision que tome, me siento
muy contenta por la posibilidad de llegar
con mi trabajo a familias que puede co-
nocer y colaborar con ellos de alguna
manera.
El escuchar los testimonios de la pobla-
cion con la que trabajamos, el cambio
que han tenido en sus vidas por acciones
del CISEP es el motor que renueva mis
fuerzas y me alienta a seguir mejorando
nuestra intervencion con ellos y buscar
frecuentemente nuevas posibilidades de
apoyo, porque en el CISEP esto tambien
nos permite crecer a nosotros de manera
personal y espiritual.
Noemí Mamani Gonzales trabaja en el
CISEP desde 2006.

24
SECTOR SOCIAL
Comprometida con la opción por los
campesinos e indígenas del sur
Desde el inicio de mi carrera trabaje en
el campo, contribuyendo al desarrollo
rural. Sin embargo, cuando ingrese a la
Fundacion Cultural Loyola (ACLO), como
parte de la induccion me presentaron en
las regionales, algo que me llamo la
atencion, y que hasta ahora lo tengo pre-
sente, fue una foto y un mensaje, en la
regional Potosí, del Padre Arrupe, que
decía: “No me resigno a que, cuando yo
muera, siga el mundo como si yo no hu-
biera vivido”; me parecio una frase desa-
fiante con la cual me identifique y com-
prometí, como con la opcion de la Com-
panía de Jesus, “los pobres” campesinos,
indígenas, originarios y poblaciones ur-
bano populares del sur de Bolivia.
Martha Isabel Pereira Sandi, Fundación ACLO
Es así que a partir del area en la que tra-
bajo desarrollamos investigaciones, y
sistematizaciones, para la generacion de
informacion desde los destinatarios para
la toma de decisiones y acciones que
contribuyan a mejorar la calidad de vida
de los campesinos, indígenas, origina-
rios y poblaciones urbano populares.
Desarrollamos procesos de incidencia en
políticas publicas, como el ejercicio de
los sujetos de derecho, ante los garantes
del derecho, para que las necesidades
basicas de los primeros sean tomados en
cuenta en la aplicacion de las políticas
publicas, como un derecho ciudadano.
Anécdota
Hace dos anos atras, me toco imple-
mentar un proyecto denominado
“Autonomía Economica y Empodera-
miento de las mujeres en cuatro Muni-
cipios de Potosí”, el mismo tenía 4 com-
ponentes:
- Patrimonializacion, que consistía en
patrimonio a nombre las mujeres.
- Capacitacion para el empoderamiento
- Capacitacion en gestion del negocio.
- Incidencia en políticas publicas.
25
SECTOR SOCIAL
A partir de este proyecto, pude ver que
con acciones pequenas, se pueden gene-
rar cambios importantes en las perso-
nas como: Cuando iniciamos el proyecto
en la línea de base se consulto en que
trabajan las mujeres muchas decían que
no trabajaban, pregunte entonces, ¿no
hacen nada?, específicamente una joven
mujer me dijo con un poco de verguenza
“Crío chanchos para vender, me dicen
chanchera”. Al finalizar el proyecto, en la
evaluacion, se le consulto a la misma
companera, ¿en que trabaja? y ella res-
pondio, con mucha seguridad y firmeza,
que era una mujer emprendedora, que
vende carne y transformados de cerdo,
que el apoyo del proyecto fue; como si
Fundación ACLO: justicia y equidad
Para nosotros el tema de genero, en el
desarrollo humano integral entra todo,
desde que ha empezado a trabajar ACLO
el interes es la familia, hombres, muje-
res, ninos, o sea, no discriminamos. Nos
interesa temas de justicia, equidad.
Actualmente, 95 personas trabajan en la
Fundacion ACLO de las cuales un 40 por
ciento son mujeres. A nivel jerarquico
hemos tenido tambien directores regio-
nales. Soy el unico jesuita que trabajo
con este personal, tengo que coordinar
con mujeres y hombres a un nivel inter-
disciplinario y no tengo problema al-
guno. Internamente tenemos bastante
participacion de las mujeres en nuestro
26
le hubieran inyectado unas buenas vita-
minas para seguir con su negocio, que
actualmente cuenta con una granja me-
jorada y amplia de cerdos, que esta pen-
sando en contratar a un ayudante.
Así como este, hay muchos testimonios
de vida, que te hacen pensar que es po-
sible un mundo mejor, (ver la sonrisa de
un nino, de una mujer, sientes satisfac-
cion del deber cumplido), a partir de un
trabajo comprometido, que se hace des-
de las obras de la Companía de Jesus.
Martha Isabel Pereira Sandi es traba-
jadora social y trabaja en Fundación
Acción Cultural Loyola ACLO, desde
enero de 2012.
trabajo cotidiano
La Companía de Jesus en su labor no
discrimina o no debería hacerlo, en
ACLO eso intentamos hacer, estamos
inspirados en nuestros principios y va-
lores cristianos, y lo cristiano esta mas
alla de lo jesuítico.
Los y las trabajadores estan sujetos a
esto, a la espiritualidad ignaciana y es-
tan regidos por el compromiso que hay
con la gente a quienes respondemos, la
opcion de preferencia por los pobres es
el marco de accion.
Fernando Alvarado, SJ
Director Fundación ACLO
SECTOR COMUNICACIÓN
Mi trabajo es valorado y tengo apoyo
Erika Yaveta, secretaria Fundación IRFA.
Me identifico con la Companía de Jesus
en el trabajo que hace IRFA porque ayu-
da a las personas que no han terminado
de estudiar. A personas de escasos recur-
sos llega con su programa “Maestro en
Casa” para brindar una educacion para
que puedan salir adelante.
Fundacion IRFA y Radio Santa Cruz no
tiene fines lucrativos. Tambien me iden-
tifico con la gente que viene, que no sabe
leer y escribir, nosotros estamos capaci-
tadas para atenderlos por eso me gusta
este trabajo.
Desde que colaboro en este lugar siento
que ha habido bastante inclusion de mu-
jeres, y somos en numero la mayoría.
Esta es una obra de la Companía de Jesus
donde hay inclusion de mujeres, enton-
ces, me siento comprometida y mi tra-
bajo es valorado, no he tenido ningun ti-
po de discriminacion, siento que hay
apoyo.
Me siento agradecida por el valor que-
dan a las mujeres que prestan sus servi-
cios en esta obra de los jesuitas, por to-
marnos como parte del desarrollo de es-
ta organizacion, se ve que estan valoran-
do el trabajo que nosotras las mujeres
hacemos dentro de IRFA.
Erika Yaveta lleva 20 años como secre-
taria de Educación y Radio en Funda-
ción IRFA.
27
 Las mujeres intuyen lo que el lado
masculino no puede
Una de las primeras fotos que se hizo del
personal del Centro de Investigacion y
Promocion del Campesinado (CIPCA) se
veía que casi todos eran varones y yo re-
cuerdo que una mujer, a la cual guardo
mucho carino, me dijo “ ¿Y donde estan
las mujeres?”
Efectivamente no estaban, habían solo
secretarias, teníamos una especie de vi-
sion: que la razon por la que no tenían
que haber mujeres era porque tenían
una serie de obligaciones familiares y no
podían andarse por mucho tiempo en el
campo tal como nosotros lo deseabamos
y necesitabamos.
Recuerdo que la primera decision buena
que hizo CIPCA fue procurar que fueran
mujeres las que tenían algun cargo im-
portante dentro de la institucion y el pri-
mer camino por el que entraron mas
Personal CIPCA Santa Cruz. Foto. CIPCA
28
mujeres fue en las direcciones regiona-
les.
Ahora si uno ve una foto de CIPCA, ac-
tualmente, ya esta mucho mas equilibra-
do en genero. Los que nos llamaron la
atencion no fueron los jesuitas mismos,
sino las instituciones internacionales
que nos ayudaban con financiamiento
que realmente se preocuparon de que
esta situacion desigual fuera cambiando.
Ahora la directora general de CIPCA es
Pamela Cartagena, es la primera vez que
es una mujer ingresa como directora ge-
neral y lo hace muy bien.
Cabida a las mujeres.
Es muy importante porque intuyen co-
sas que un lado masculino no.
Xavier Albó, SJ
Fue director y fundador de CIPCA.
OTROS APOSTOLADO S
No solo es un trabajo, es dar algo más
Servir a los demas en mí cala muy pro-
fundo, recuerdo en colegio un video que
vi del padre Alberto Hurtado, SJ y me
identifique mucho con gastar todo lo
que uno puede y por alguien mas. Hacer-
lo no a medias, sino entregando todo lo
humanamente posible y tal vez sacar un
poco mas de eso. Es algo que no en mu-
chos lugares se puede ver, no en muchos
lugares se puede practicar este princi-
pio, entonces, me siento acorde con todo
esto que la Companía de Jesus va procla-
mando, hacer algo mas por el otro.
He tenido la dicha de ver que la labor
que hago reflejada en la gratitud de mu-
chos jesuitas, eso me hace sentir bien.
Una ve que su trabajo es reconocido.
Para las mujeres que tienen familia es
mas complicado porque colaborar en la
Maria Elena Achocalla junto a Antonio Menacho, SJ
Companía de Jesus no es simplemente
un trabajo, sino damos un poco mas co-
mo el hecho de dejar un poco a los hijos
o al esposo, pero simplemente me queda
decir que esto es ese “plus” que damos
por el carino y compromiso que tene-
mos en este sentido de hacer algo mas.
Solo me queda agradecer y valorar el
trabajo que hacen todas las mujeres en
la Companía de Jesus y el tiempo que de-
dican a esta mision.
María Elena Achocalla trabaja como
coordinadora de la Biblioteca Julio
Murillo, además colabora en otros
asuntos administrativos. Lleva rela-
cionada a la Compañía de Jesús por
más de 30 años.
29
 COMUNIDADES
Me siento muy útil trabajando en la
Compañía de Jesús
Dilma Cabrera, portería Residencia Nuestra Señora de la Esperanza
Ingrese a la Companía de Jesus en 1985
vine con la fraternidad de personas con
discapacidad. En un inicio trabaje como
secretaria y hacía fotocopias de docu-
mentos, actualmente atiendo la portería
de la Residencia Nuestra Senora de la Es-
peranza en Cochabamba.
Me siento muy a gusto porque desde el
primer momento me abrieron la puerta
los padres. En otros lugares en mi condi-
cion de discapacidad no es facil conse-
guir trabajo por las limitaciones, pero
aquí no. Ellos son una familia para mí.
Aquí en la Esperanza, vivir y trabajar es
muy bonito; trabajar con los padres, ver-
los a ellos, uno se siente bien y al mismo
tiempo se aprenden muchas cosas y al
30
colaborar me siento util, en verdad, me
siento muy util. Quisiera hacer muchas
cosas mas, pero mis limitaciones no me
lo permiten.
Me parece muy bien que estemos las mu-
jeres incluidas en el servicio con los je-
suitas porque antes muy poco era, antes
no había muchas mujeres trabajando,
nos incluían poco y ahora se han dado
cuenta de que todas la mujeres podemos.
Agradecer el gesto de este Anuario hacia
las mujeres que trabajamos con los jesui-
tas, se ve que valoran nuestro trabajo.
Dilma Cabrera atiende la portería de la
Residencia Nuestra Señora de la Espe-
ranza.
COMUNIDADES
Los conozco más que a mi familia
Trabajo en la Residencia de la Esperan-
za mas de nueve anos. Llegue por una
casualidad por medio de un reemplazo
que realice y luego me quede. Hice labo-
res en varias areas de la casa. Ahora
atiendo el comedor y preparo los pos-
tres.
A esta comunidad la siento como si fue-
ra mas que mi casa. Los padres son co-
mo mi familia.
En mi trabajo, los postres que mas les
gusta son la torta helada, licuados,
manzana al horno con vino, son viciosi-
tos los padrecitos. Pero, cuando estan
enfermitos, la enfermera nos avisa y te-
nemos que estar pendientes y con otra
dieta. Yo se bien que cantidad come ca-
da uno de ellos, los conozco mas que a
mi familia la verdad.
Isabel Cuevas Bernal, responsable del comedor en la Residencia de La Esperanza.
¿Anecdotas? hay muchas. Pero siempre
me conmueve -porque los llevo muy
adentro y con carino- que en casa cuan-
do los padrecitos se ponen enfermos,
tengo que regresar a mi casa, pero al día
siguiente ya no estan mas. Eso duele
mucho. Tambien verlos a veces muy en-
fermos me da mucha tristeza.
Decirles a las senoras que trabajan en
las distintas comunidades de los jesui-
tas sigan adelante con su trabajo, se
que nuestros padrecitos a veces nos sa-
can de casillas, pero hay que tener mu-
cha paciencia y decirles, ¡fuerza a todas
mis companeras y que sigan adelante en
todo!
Isabel Cuevas Bernal trabaja en el co-
medor de la Residencia Nuestra Seño-
ra de la Esperanza.
31
PARROQUIAS
La Parroquia forma parte de mi vida
Julieta Loza (derecha), Fidelia Palacios. Colaboradora Parroquia de la Compañía de Jesús.
En 1983 empece a trabajar en la Parro-
quia de la Companía de Jesus, al inicio
atendía portería, recibía las llamadas te-
lefonicas, despues otras funciones de
ayudante en la oficina y, finalmente, me
quede como secretaria.
No solo en la oficina. Me integre a otros
grupos de la parroquia y colaboro en lo
que se puede. Esto ha logrado formar
parte de mi vida, no solo es mi trabajo.
Participe dos veces de la Asamblea de
Parroquias Jesuitas en Santa Vera Cruz,
Cochabamba. Me agrado escuchar a las
personas que participan de las otras pa-
rroquias, ver el entusiasmo que tienen y
conocer sobre sus iniciativas. Gracias a
Dios he tenido la suerte de tener, muy
buenas relaciones con los parrocos des-
de que estoy aquí. Cuando les comparto
32
una opinion o hago alguna observacion,
o tal vez cuando quiero hacer algo en la
oficina, siempre me han apoyado y me
han dado mi lugar con mucho respeto y
educacion.
A las mujeres que quieren ser secreta-
rias de una parroquia, les diría que es
bonito el trabajo, pero es arduo, es can-
sador porque tenemos diversidad de
personas que vienen a la oficina con di-
ferentes caracteres y, entonces, necesita-
mos mucha paciencia y ser muy amables.
Mi recomendacion es que sean sociables
y alegres.
Julieta Loza trabaja en la Parroquia de
la Compañía de Jesús desde hace 33
años.
PARROQUIAS
Me siento feliz sirviendo en el Altar
Colabore con el padre Jorge Serraima
que en esa epoca era el parroco de la
Companía de Jesus, me llevaba bien con
el y lo quería mucho. De hecho, a el le
debo el haberme integrado al grupo de
monaguillos de la Parroquia.
Una vez recuerdo que el padre Jorge tu-
vo un tropezon fuerte en medio del altar
y tuvimos que ayudarlo, no paso nada
grave, pero pudo haber sido peor.
Cuando se fue el padre Jorge me sentí
mal porque lo quería mucho, el hecho de
pensar que no lo iba a ver mas era com-
plicado para mí. Tambien me sentí triste
con a partida del padre Luis To.
Ahora estoy de acolita con el padre Ma-
nuel Hurtado que es mas joven, yo hago
lo mío y el hace lo suyo, pero con un pa-
dre mas mayor una tiene que fijarse mas
y ser mas cuidadosa porque a veces pi-
Ibeliz Julio, monaguilla (al centro y a la derecha). Parroquia Compañía de Jesús.
san mal o se resbalan.
Me encanta la Companía de Jesus, mi
mama me pregunta “¿por que?” y le digo
que la considero mas linda incluso que
la Catedral. Paso mucho tiempo aquí y
cada domingo me siento feliz. Quiero
mucho a la Companía de Jesus, paso de
ser una iglesia a la que no venía mucho a
ser la Parroquia a la que mas frecuento y
a la que mas adoro.
Me siento bien conmigo misma y me
siento feliz ayudando en el Altar, me
gusta mucho. Agradezco que a nosotras
las jovencitas nos permitan ayudar, es
bonito cuando te logras conectar con es-
te mundo. Gracias por darnos esta opor-
tunidad.
Ibeliz Julio tiene 13 años de edad y es
monaguilla en la Parroquia Compañía
de Jesús desde hace cuatro años.
33
PARROQUIAS
Tenemos activas misioneras de la iglesia
Es necesario e importante sentirnos un
solo pueblo de Dios. Mucho clericalismo
no ayuda al servicio del Reino. En este
mundo en que vivimos el machismo se
impone, pero la experiencia con mujeres
laicas hace despertar la conciencia y la
madurez por una mayor participacion de
las mujeres en la vida pastoral día a día.
Cuatro ejemplos de acción
La Senora Roxana Gutierrez (Parroquia
de Charagua) es presidenta del Consejo
de la Parroquia. La profesora Selva
(Parroquia de Charagua) es encargada de
la catequesis de Primera Comunion. La
profesora Cristina Medina (Parroquia de
Charagua) esta encargada de la cateque-
sis de Confirmacion en la Estacion de
Charagua. La licenciada Gumercinda
(Parroquia San Ignacio de Moxos) es en-
cargada de la catequesis de Primera Co-
munion en el pueblo de San Ignacio de
Moxos.
Las cuatro mencionadas son activas mi-
sioneras en la Iglesia. Ellas estan muy in-
teresadas en dar vida a la comunidad
presente en las periferias humanas. La
Sra. Roxana de Charagua incentiva a for-
talecer y crear ministerios laicales no so-
lo en Charagua, sino tambien en el Vica-
riato de Camiri. Toma decisiones dentro
del Consejo Parroquial en comunion con
el parroco. Estudia Teología a distancia,
tiene conocimientos ignacianos y jesuíti-
34
cos.
La profesora Cristina Medina encargada
de la catequesis de Confirmacion en la
Estacion de Charagua es una laica com-
prometida en la escuela; en la comuni-
dad y en la Iglesia. Es referencia en la Es-
tacion, tiene disponibilidad misionera y
actitud para evangelizar en cualquier
momento y circunstancia.
La Licenciada Gumercinda encargada de
la catequesis de Primera Comunion en el
pueblo de San Ignacio de Moxos es una
laica entregada a la mision. Trabaja en la
alcaldía toda la semana y su tiempo libre
lo dedica a la mision de la Iglesia. Se da
los modos para llevar adelante la cate-
quesis con los padres el día sabado, y los
domingos los pasa con los ninos y los
martes con los catequistas.
Son servidoras y no esperan un mandato
de los pastores, obispos o cardenales.
Ellas sienten el deseo de compartir su
experiencia de fe y su vida, por ello estan
apostando en su formacion cristiana en
los documentos de la Iglesia para tener
una Iglesia en salida. La espiritualidad
del seguimiento de Jesucristo. Las hace
protagonistas de comunidad de comuni-
dades, potencian la mision evangelizado-
ra de la Iglesia.
Eduardo Tapia, jesuita maestrillo resi-
dente en San Ignacio de Moxos, Beni.
 Agradecimiento
Por lo que recibimos de la
colaboración de las mujeres
“Sabemos que nuestra educacion en la fe y buena parte de nuestro
apostolado sufrirían no poco sin la entrega, generosidad y alegría que
la mujer ha aportado a escuelas, parroquias y otras obras en las que
trabajamos juntos. Esto ocurre especialmente en el trabajo de laicas y
religiosas entre los pobres de pueblos y ciudades. Ademas, muchas con-
gregaciones religiosas femeninas han adoptado los Ejercicios Espiritua-
les y las Constituciones como base de su espiritualidad y gobierno y
forman parte de una amplia familia ignaciana. En estos ultimos anos,
religiosas y laicas se han especializado en dar los Ejercicios Espiritua-
les. Como directoras de Ejercicios, han enriquecido la tradicion ignacia-
na y nuestra vision de nosotros mismos y de nuestro apostolado. Mu-
chas mujeres han contribuido a renovar nuestra tradicion teologica de
una manera que ha liberado tanto al hombre como a la mujer. Desea-
mos expresar nuestro agradecimiento por esta gran aportacion y espe-
ramos que esta reciprocidad en el apostolado continue y florezca”,

Extracto Decreto 14. Congregación General 34

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