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El glasé o glaseado real es muy conocido y consumido durante las navidades y las
fiestas de diciembre, pero también es muy utilizado para otro tipo de postres. Con
un sabor único e inolvidable, ideales para decorar galletas de mantequilla y
algunos dulces más, este glaseado es imprescindible en tu libro de recetas.
Aprende cómo prepararlo en el siguiente artículo.
Seguro conocéis las galletas con decoración por encima y que se preparan con
claras de huevo, zumo de limón, un poco de colorante y azúcar glas. Uno de los
componentes más importantes de estos dulces es el glaseado real. Si bien tiene
un nombre muy “pomposo” y puede parecernos muy complicado de preparar, no
lo es en absoluto. ¡Seguro que los reyes lo consumen todo el tiempo!
Ingredientes:
1 clara de huevo
El zumo de 1 limón
Utensilios:
Recipiente
Varillas eléctricas
Cuchillo o espátula
Exprimidor
Manga pastelera
Preparación:
Coloca la clara, un chorrito del zumo de limón y una parte del azúcar glas en
un recipiente. Bate usando las varillas eléctricas para que se integren bien a
velocidad media-baja. El objetivo no es lograr un merengue esponjoso, sino que
los ingredientes se integren bien. Para saber cuándo está listo, levanta las varillas
y dibuja sobre el glasé. Si se mantiene y no se deforma deja de batir. También
puedes cortar el glasé haciendo una incisión con un cuchillo. Tiene que volver a
su forma original en 10 segundos.
Para poder lograr el punto perfecto (que el corte se mantenga 5
segundos) agrega más zumo de limón. Coloca el glaseado real en una manga
pastelera con una boquilla según lo que vayas a decorar. ¡Y listo! Ya lo puedes
usar.
Datos de interés
Consejos: Puedes ponerle colorante del tono que más te guste para que al
decorar las galletas tenga un efecto diferente. Si no tienes una manga pastelera
puedes colocar en una bolsa plástica y hacer un corte en uno de los bordes
según el tamaño que necesites. No olvides cerrar el otro extremo de la bolsa
para que no pueda ingresar el aire y el glasé se endurezca.
Cuando el glaseado está más líquido se aprovecha para rellenar las galletas.
Con un mondadientes puedes cubrir toda la superficie de la masa.
Mientras el glasé aún está fresco usa colorante para otros diseños o dibujos
encima de las galletas o bizcochos. Recuerda prepararlo antes de ponerlo en la
manga y tener cuidado de que los tonos no se mezclen entre sí.