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Resumen
La ciencia económica ha recorrido un largo trayecto abundante de polémicas y críticas desde el punto de
vista epistemológico y metodológico, concebido desde la época de Nassau W. Senior, John Stuart Mill y pos-
teriormente con la disputa entre operacionalistas e instrumentalistas. Por lo que el objetivo de este estudio,
parte de las consideraciones de la economía, realizadas por diferentes escuelas del pensamiento económico
y se pone de relieve las dificultades que ha enfrentado la ciencia económica en su viaje a través de las dife-
rentes posturas epistemológicas surgidas a lo largo de los siglos XIX y XX. En consecuencia, se realizó una
revisión de los aportes principales que en materia epistemológica y metodológica han realizado las principa-
les escuelas del pensamiento económico y de la epistemología general. Se concluye, que la economía moderna
funciona más dentro de tradiciones de investigación que en escuelas de pensamiento, no busca la verificación
completa y definitiva de sus proposiciones o la corroboración o falsación de sus teorías, pero si busca ser una
ciencia realista perspectivista de corte naturalista.
1
Doctor en Ciencias Sociales. Universidad Central de Venezuela (UCV). Magister en Banca y Finanzas, Economista. Universidad
del Zulia. Profesor Titular de la Universidad del Zulia. Autor de correspondencia, eborgucci@yahoo.com
2
Doctor en Ciencias Económicas. Universidad del Zulia (LUZ). Magíster en Gerencia de Empresas. Economista. Profesor titular
de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales e Investigador adscrito al Instituto de Investigaciones de la Facultad de Ciencias
Económicas y Sociales Universidad del Zulia (LUZ). albertocastellano@yahoo.com, castellanoalberto@fces.luz.edu.ve
©
The author; licensee Universidad de la Costa - CUC.
Económicas vol. 37 no. 1, pp. 9-40. Enero - Junio, 2016
Barranquilla. ISSN 0122-6517 Impreso, ISSN 2382-4700 Online
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LA TEORÍA ECONÓMICA Y LA EPISTEMOLOGÍA
Emmanuel Victorio Borgucci García - Alberto Gregorio Castellano Montiel
Abstract
Economic science has reached to a long route abundant of controversy and criticism from the
epistemological and methodological point of view, conceived from the time of Nassau W. Senior,
John Stuart Mill and later with the dispute between operationalists and instrumentalists. The
aim of this study, starts from the considerations of the economy, made by different schools of
economic thought and highlights the difficulties that have faced economic science in its journey
through the different positions posed epistemological throughout the nineteenth and twentieth
centuries. Consequently, was made a review of the main contributions in epistemological and
methodological matters that the main schools of economic thought were carried out and general
epistemology. It is concluded that modern economy works more within research traditions than
in schools of thought, it does not seek the complete and definitive verification of its propositions
or corroboration or falsification of its theories, but if it seeks to be a realistic naturalist perspec-
tivist science.
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del consumidor (Ferguson y Gould, 1979: (Bunge, 1980: 145). La ciencia económica
18); supuestos, por ejemplo, de conducta ra- como ciencia social, como dice Bunge (1980),
cional; principios como el del equilibrio del está afectada, quizá más que las ciencias na-
consumidor (Ferguson y Gould, 1979: 42); turales, por las humanidades y la ideología.
hipótesis como, por ejemplo, de las indus- En primer lugar, porque la Filosofía otorga
trias de costos decrecientes (Zamora, 1977: la visión del mundo, los problemas, las me-
407) o hipótesis de las expectativas raciona- todologías, las formas de conocimientos, la
les (Hall y Taylor, 1988); leyes como las de forma de obtención de resultados y su vali-
demanda (Blaug, 1993); teoremas como el de dez. En segundo lugar, las humanidades in-
Heckscher-Ohlin, o el teorema de Coase; o ciden sobre la ciencia económica por cuanto
paradojas como las de Leontief o Giffen. se ocupan de los problemas sociales, ya sea
solucionándolos u ocultándolos.
Un aspecto que se debe considerar en
el discurso económico, según Schumpeter Pero, como la Filosofía, como las ideologías
(1994), es que una proposición puede apare- políticas también polémicas en sus estudios
cer en una argumentación como postulado y y en los resultados de sus hallazgos, muchos
en otra argumentación como teorema. Por economistas desestiman el uso de la metodo-
otra parte, el mismo autor plantea que las logía económica tal y como lo propone la Fi-
hipótesis de la economía difieren de aque- losofía (Frey, 2000). Otra de las críticas a la
llas de las ciencias naturales no tanto por Economía proviene de la metodología econó-
la carencia de resultados finales de alguna mica cuando, por ejemplo, a los datos se apli-
investigación, sino que son herramientas (en ca la prueba “t”, los resultados se presentan
el sentido de Joan Robinson) elaboradas con como si los datos hubiesen sido empleados
la finalidad de respaldar un conjunto de pro- una sola vez. Otra objeción surgió cuando
posiciones a priori. McCloskey (1997) observó que un valor alto
del estadístico “t” asociado con un paráme-
Lo cierto es que el producto de la investi- tro estimado es tomado para significar que
gación científica en Economía es en muchos la respectiva relación refleja una importante
casos polémico y sujeto a toda serie de críti- conexión empírica con el mundo real, cuan-
cas. Autores como Bunge (1980) consideran do numerosos investigadores saben que tales
que: “Quien se acerca a las ciencias sociales inferencias son erradas. Por otra parte, Mc-
desde las ciencias naturales se siente ini- Closkey y Ziliak (1996) han señalado que en
cialmente repelido por la oscuridad de la jer- muchas investigaciones la interpretación de
ga, la pobreza e inexactitud de las ideas…” la idea de significancia estadística equiva-
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En consecuencia, el segundo objetivo es jus- eventos [que] pueden ser deducidos a priori
tificar la posibilidad que la ciencia económi- de consideraciones de carácter general; pero
ca se asocie a una forma de realismo cientí- él constantemente revisó sus resultados
fico de carácter disminuido y no asociado al apelando el curso real de la historia” (1990:
instrumentalismo. 11). Es decir, Smith partió de abstracciones
y las confrontó con las realidades del mundo
en que vivió, y propuso doctrinas de tenden-
Evolución de la Economía desde el cias en donde combinaba esas consideracio-
punto de vista metodológico nes a priori con una investigación inductiva
de las causas que restringen o confirman la
Según Blaug (1993), en el siglo XIX y comien- operación de la tendencia propuesta.
zos del siglo XX, economistas principalmen-
te británicos se dieron a la tarea de estudiar Con relación a David Ricardo, según Rima
las posibilidades metodológicas de la ciencia (1995), los Principios de Economía Política
económica en un contexto en que se estaban y Tributación fue una obra que se caracte-
desarrollando un conjunto de avances den- rizó porque: 1) no realizó la reflexión y re-
tro de la Filosofía de la Ciencia. Si bien, la visión teórica- metodológica que sí efectuó
Economía deseaba erigirse como ciencia en Adam Smith, o como dice John Ferguson:
el sentido clásico del término, es interesan- “Ricardo, negociante labora como si viviese
te destacar que el análisis propuesto por en un mundo de abstracciones” (1979: 102);
los economistas se encontró con una serie y 2) como dice Rima: “[e]l estilo es abstracto
de obstáculos. Ese grupo de pensadores de en extremo y rara vez aligerado con digre-
la ciencia económica estaba constituido ini- siones sobre Historia y Filosofía como las
cialmente Adam Smith, David Ricardo, Nas- encontramos en la obra de Smith” (1995:
sau William Senior, John Stuart Mill, John 146).
Elliot Carines, John Neville Keynes y Lionel
Para Nassau William, el papel del eco-
Robbins, Milton Friedman y Paul Samuel-
nomista no es recomendar o disuadir, sino
son entre otros.
descubrir los principios generales, de acuer-
Según John Neville Keynes (1990), Adam do con la evidencia, relacionados con la ge-
Smith empleó tanto el método a priori como neración y distribución de la riqueza. Ade-
el método a posteriori, debido a que no exis- más, según Senior, la economía política es
te un método exclusivo de estudio. Según solamente una ciencia que sirve a los propó-
Keynes: “Él creyó en un orden natural de los sitos del “arte del gobierno” (Senior, 1854:7).
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el empleo del método a priori; 5) los elemen- nómenos, el investigador se debe preguntar
tos perturbadores tienen causas que siguen acerca de la naturaleza de los fenómenos y
determinadas leyes y que pueden operar, en sus elementos accesorios para inferir leyes.
ocasiones, sobre la conducta humana, pero
que pueden ser previstas a priori. En la lectura V de The Character and Lo-
gical Method of Political Economy, Cairnes
Para John Elliot Cairnes, toda relación apunta que la Economía tiene grandes pro-
que puede establecer el ser humano con la blemas para lograr altos niveles de precisión
naturaleza consiste en acciones del primero como, por ejemplo, la Química. Este grado
sobre el segundo y de las impresiones que el de precisión, no es posible en la economía po-
segundo suscita en el primero. Por tanto, los lítica. Por esta razón, para Cairnes, la eco-
efectos o los fenómenos dependen de dos cau- nomía política está excluida del dominio de
sas, según Cairnes (2001: 26): de las propie- las ciencias exactas, ya que la ley económica
dades que son inherentes a los objetos y las solo representa una verdad hipotética y no
formas en que las propiedades de los objetos una positiva.
han actuado; por tanto, Cairnes propone el
método inductivo. Su definición de inducción Con relación al marxismo, como materia-
es similar a la de John Stuart Mill, veamos: lismo dialéctico o método dialéctico, Bunge
“That operation of the Mind by which we in- (1980) lo considera más como un enfoque.
fer that what we know to be true in a parti- Según el autor, si bien se puede hablar de
cular case or cases will be true in all cases una ontología y metafísica dialéctica idealis-
which resemble the former in certain assig- ta o materialista, se trata de hipótesis muy
nable respects” (Cairnes, 2001: 48)4. Como generales acerca del devenir sociohistórico
Cairnes propone el método de la inducción basado en la búsqueda de polaridades. Se-
para estudiar los fenómenos de la produc- gún Bunge, “[e]stas hipótesis más o menos
ción y distribución de la riqueza, se debe precisas no constituyen un método, esto
comenzar por la observación y la experimen- es, un procedimiento para hacer o estudiar
tación. Pero debido a la complejidad de los fe- algo. Constituyen una doctrina” (1980: 160).
De acuerdo con lo antes expuesto, según Ma-
nuel Sacristán, para Marx “[l]a noción de
Es decir: la inducción es la operación de la mente por medio ciencia económica coherente con ese enfoque
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la noción dialéctica de una ciencia histórico- mán de la vieja y nueva escuela histórica
social sui ge-neris” (1978: 9)5. Sacristán con- alemana, que según Schumpeter:
tinua expresando: “Esa ciencia tiene su tipo
“El artículo de fe básico y característico del
propio de abstracción: aunque abstracción,
método de la escuela histórica, dice que el
abstracción histórica, que no se podría prac- órganon de la economía científica ha de con-
ticar más que sobre la base de un desarrollo sistir principalmente- y primero pensaron
(Entwicklung) determinado de la sociedad” que exclusivamente- en los resultados de
(1978: 9). las monografías históricas y en sus genera-
lizaciones. Por lo que hace a la parte cien-
Al considerar lo expresado por Sacristán, tífica de su vocación, el economista debe
según Bunge (1980), concebir la realidad, dominar antes que nada la técnica históri-
y sobre todo la realidad social, de manera ca. Con ayuda de esa técnica, que era todo
bipolar es una exageración, por cuanto la el cuerpo científico que necesitaba, había
ciencia lo que le interesa es encontrar pau- que zambullirse en el océano de la histo-
tas (que generalmente se les denomina le- ria económica. Para investigar esquemas
yes) que no siempre son bipolares, ya que la o procesos concretos con todos sus detalles
realidad social y económica es más compleja vivos, de lugar y tiempo y aprender a catar
su bouquet. De este tipo de investigación ha
de lo que aparenta. Es decir, el hecho de que
de desarrollarse paulatinamente la única
la realidad económica sea dinámica no sig- clase de conocimiento general accesible en
nifica que sea en todo tiempo y lugar bipolar. ciencias sociales” (1994: 885).
En el contexto de la preponderancia de los
Por su parte, la escuela nueva liderada
autores clásicos, surge el historicismo ale-
por Gustav Schmoller enfatizaba que hay
que dejar que los hechos económicos hablen
5
Según Sacristán (1978), basado en un texto de Marx de por sí mismos de la inevitabilidad de las teo-
1857 (texto que no se publicó, la citada introducción de rías económicas para dar cuenta de hechos
1857 que se suele citar con las líneas fundamentales de la
Crítica de la Economía Política- Grundrisse- y en el epílogo
históricos, el rechazo de las amplias gene-
a la segunda edición del libro I de El Capital de 1873), ralizaciones de la filosofía de la historia, un
expone: 1) un buen método de la Economía es ascender de lo rechazo del monismo metodológico y lo que
abstracto a lo concreto; y 2) la explicación de la existencia
de una correlación entre el orden lógico y ascendente de las Schumpeter denominó como el “error natu-
categorías y su orden histórico. Con relación a este último ralista” (1994: 889) de Auguste Comte.
punto su comentario es negativo, pues son órdenes inversos.
De este modo, Sacristán concluye que el proyecto de Marx Pero la irrupción de la escuela histórica
es buscar un conocimiento histórico que ha de servir al
proyecto dialéctico. (Historische Schule deutscher Nationalöko-
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nomie) produjo una reacción en 1883 de “La Escuela histórica comete, pues, un
parte de Carl Menger con su escrito Unters- error en lo que respecta a estos problemas
suchungen über die Methode der Sozialwis- teóricos. Por una parte, los concibe de un
senschaften in der Politischen Ökonomie modo demasiado estrecho: pasa por alto
otras divergencias que, en lo que respecta
insbesondere6 , que buscaba reivindicar las
a la metodología de nuestra ciencia, tienen
bondades del análisis teórico. Este tra- la misma importancia que aquellas a las
bajo fue reseñado negativamente en Zur que ha dirigido su exclusiva atención; por
Methodologie der Staats- und Sozialwies- otra parte, sus seguidores creen errónea-
senschaften7 por parte de Gustav Schmoller mente que las dificultades teóricas para la
en el Jahrbuch für Gesetzgebung8 y Menger teoría económica derivadas del desarrollo
reiteró su ataque a la escuela histórica con de los fenómenos y de sus divergencias de
Die Irthumer des historismus in der deuts- un lugar a otro pueden eliminarse am-
chen Nationalökonomie9 de 1884. Pero como pliamente a través del método histórico”
dice Schumpeter, se fue reconociendo pau- (2006: 185).
latinamente la necesidad del análisis his-
En su segunda obra, Menger observa lo
tórico en la Economía y la necesidad de la
que él consideró como tres errores del his-
teorización económica en el análisis históri-
toricismo alemán: 1) aplicarse sólo a los
co10. En su primer trabajo, Menger expresó
estudios histórico-estadísticos, dejando de
lo siguiente:
lado el aspecto teórico de la Economía; 2)
ignorar la distinción entre ciencias teóri-
cas y ciencias prácticas de la economía po-
6
Investigaciones sobre el método de las ciencias sociales en lítica; y 3) solamente tomar en cuenta los
la política económica en particular. aportes teóricos que están “en estrecha re-
7
Sobre la metodología del Estado y las ciencias sociales. lación con los estudios histórico-estadísti-
8
Anuario de legislación. cos” (Menger, 2006: 335).
9
Los errores del historicismo en la economía nacional
alemana.
Para Henry Sidgwick (1901), la aproxi-
10
En este sentido es interesante destacar que la obra de
mación a los fenómenos económicos recla-
Arthur Spiethoff, según Joseph Schumpeter, formaba parte ma un análisis de series históricas, pero
de lo que él denominó como la novísima escuela histórica eso no soslaya el hecho de que es necesario
junto a Max Weber y Werner Sombart. Según Schumpeter
(1994), para Spiethoff, las teorías se desarrollan mediante
complementarlo con análisis de carácter
la convergencia de un aparato conceptual simple y la deductivo. Es decir, la economía política
formulación de hipótesis provisionales que traten de dar no emplea como método único la deducción
cuenta de los fenómenos económicos.
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dad, y añade: “[e]n verdad no existe forma Pero esta visión también se asemeja a la
significativa alguna de llevar a cabo esta postura de van Frassen cuando plantea
comparación. Un «realismo» completo es que:
claramente inalcanzable, y el problema de
“Presentar una teoría es especificar una
si una teoría es lo «suficientemente» realis-
familia de estructuras, sus modelos; y en
ta puede resolverse únicamente observando segundo lugar, especificar ciertas partes
si suministra predicciones suficientemente de esos modelos (las subestructuras empí-
buenas para el objetivo de que se trate o si ricas) como candidatos para la representa-
son mejores que las ofrecidas por teorías ción directa de los fenómenos observables.
alternativas” (1967: 42). En consecuencia, Podemos llamar apariencias a las estruc-
la propuesta de Friedman se le ha conocido turas que pueden describirse en los in-
como la tesis de la irrelevancia de los su- formes experimentales y de medición. La
puestos, que desde el punto de vista metodo- teoría es empíricamente adecuada si tiene
lógico, según Munt y Barrionuevo significa: algún modelo tal que todas las apariencias
son isomórficas con las subestructuras em-
“… que los economistas deben someter píricas de ese modelo” (1996: 89).
a prueba empírica sus teorías indepen-
dientemente de verificar el realismo de Esto se conoce como adecuación empíri-
los supuestos. En este marco, una teoría ca. Además, los modelos deben contar con
económica contará con la aceptación de la fuerza lógica, lo cual, según van Frassen
comunidad de economistas si, siendo so- (1996), es simplemente cuando hay menos
metida a falsación, no ha sido refutada y modelos que den cuenta de las apariencias
ha presentado una considerable capacidad
de determinado modelo.
predictiva” (2010: 5).
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sobre la base del fisicalismo y la teoría por ejemplo por Carl Hempel y Karl Pop-
de la verificación del significado inicial- per. Con Hempel, los conceptos operacio-
mente desarrollada por Wittgenstein nales “son especificaciones parciales de
(2003). significado” (Hempel, 1981: 128). Para
Karl Popper:
En primer lugar, “[s]i los enunciados
elementales (o “enunciados protocola- “Las mediciones presuponen teorías.
res” como los denominaban Otto Neu- No hay medición sin teoría y ninguna
rath y Rudolf Carnap) deben ser la base operación puede ser descrita satisfacto-
para los enunciados intersubjetivos de riamente en términos no teóricos. Los
intentos de hacerlo contienen siempre
la ciencia, ellos mismos tendrían que
un círculo vicioso; por ejemplo, la des-
ser intersubjetivos; tenían que referirse cripción de las mediciones de longitud
no a experiencias privadas, incomunica- requiere una teoría (rudimentaria) de
bles, sino a acontecimientos físicos pú- las mediciones del calor y la temperatu-
blicos” (Ayer, 1981: 25). ra; pero éstas implican, a su vez, medi-
ciones de longitud” (1991: 90).
En segundo lugar, siguiendo a Hem-
pel, se tiene que: “una oración S tiene Además, el autor antes mencionado
significado empírico si, y sólo si, es po- agrega que la introducción y especifi-
sible indicar un conjunto de oraciones cación de los significados es relativa y
observacionales, O1, O2, …, On; tales formal (necesita el reconocimiento de la
que, si fuesen verdaderas, también S lo audiencia académica).
sería necesariamente” (Hempel, 2006:
109 - 110). En cuarto lugar, la Economía debía
producir teorías basadas en enunciados
En tercer lugar, se debe considerar observacionales referidos a experiencias
el hecho de que las magnitudes econó- sometidas a una incontrastable verifi-
micas debían contar con definiciones cación de los enunciados. Sin embargo,
explícitas y ser traducibles a términos los enunciados económicos se encuentran
observacionales por medio de los deno- con que los datos que sirven de base para
minados “conceptos operacionales”, que la realización de las verificaciones pre-
para Percy Bridgman: “[n]o es nada sentan todo tipo de imprecisiones, y, que
más que una serie de operaciones” según Shackle, se expresa de la siguien-
(1927: 59). Esta postura fue criticada, te forma:
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“La Economía es la ciencia que, de entre Bunge, los científicos nunca calculan
todas las disciplinas académicas, salta magnitudes, sino sus valores numéricos;
con mayor atrevimiento el abismo que se 3) se debe buscar un modo adecuado para
abre entre las humanidades y las cien- la introducción de conceptos que denotan
cias físicas. Haciendo virtud de la im-
propiedades y relaciones potenciales.
precisión que su doble cara le impone, ha
desarrollado la técnica de los números A lo anterior se debe añadir que auto-
índices hasta convertirla en una rama res como Toulmin (1953) cuestionaron
absorbente y sutil de las matemáticas
la idea de que exista un lenguaje común
prácticas” (1976: 378).
a todas las teorías independiente de su
Es decir, en la Economía los enunciados grado de formalización. En el caso de
observacionales se deben enfrentar a un Hanson (1972) se demuestra que sobre
problema de agregación más problemático la misma imagen pueden verse objetos
que, por ejemplo, el de las ciencias natu- diferentes, debido a que dos personas
rales. La fuente de información de la Eco- observan en función de su experiencia
nomía proviene de datos contables, que visual y conceptual previa, es decir, no
dependen de reglas de formación de, por existe una base observacional común de
ejemplo, estados financieros sometidos a las percepciones.
reglas de construcción convencionales En quinto lugar, las proposiciones proto-
propias, por ejemplo, de la contabilidad colares de la Economía debían verificarse
general, y reprocesadas en términos de la de manera única y definitiva. El problema
contabilidad nacional. para la Economía es que sus enunciados y
Así, las escuelas de pensamiento econó- resultados no pueden ser extraídos de ex-
mico debían enfrentar el problema de la perimentos y mucho menos de experimen-
agregación, de la precisión de las magni- tos únicos y definitivos.
tudes teóricas y el problema del reconoci- Afortunadamente para la Economía,
miento de una gran mayoría de la audien- este problema se presentó en las ciencias
cia académica. El problema de manera naturales. La imposibilidad de la verifica-
concreta lo plantea Bunge (1989) cuando ción como criterio único de significado y
considera que: 1) no todas las magnitu- de demarcación entre enunciados, llevó a
des son definibles en un contexto dado, la idea de incremento gradual de la confir-
algunas deben tomarse como primitivas o mación (Gradually increasing of confirma-
no definidas (Bunge, 1989: 146); 2) para
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se encuentran los modelos que emplean la verdad de una manera razonada. Surge
evidencias de la forma reducida (reduced- el realismo con las siguientes propuestas:
form evidence), que examinan si una va- 1) que el mundo estudiado por la ciencia
riable tiene un efecto sobre otra variable es independiente de la actividad de la con-
observando, por ejemplo, directamente la ciencia cognoscente; 2) la ciencia es la me-
relación entre el comportamiento de la ac- jor forma de dar cuenta de la realidad; 3)
tividad económica y el comportamiento de revela entidades no observables del mun-
la oferta de dinero. do y explica sus propiedades; y 4) las leyes
científicas aparecen como premisas inevi-
En los modelos estructurales, los efec- tables y verdaderas acerca del mundo.
tos del dinero sobre la actividad económi-
ca se estudian construyendo sistemas de Por otra parte, surge el antirrealismo
ecuaciones que representan sectores de la que propone, en la versiones de Duhem
economía que describen cuáles son los ca- (1969) y Bas van Frassen (1996): 1) esta-
nales por medio de los cuales la política blecer relaciones entre observaciones que
monetaria y fiscal afecta la actividad eco- exhiben apariencias sensibles; 2) emitir
nómica. El resultado del estudio es la con- sentencias estableciendo relaciones entre
figuración de los canales de transmisión observaciones para proponer nuevas rela-
de la política monetaria. Por su parte, la ciones; 3) las leyes no son verdaderas ni
evidencia mediante la forma reducida, falsas, sólo instrumentos de predicción ;
no busca describir un canal específico de 4) la ciencia sólo se interesa por la predic-
transmisión. En su lugar, estudia la co- ción; y 5) lograr teorías “empíricamente
rrelación entre el dinero en la actividad adecuadas” que permitan alcanzar la ver-
económica. dad sólo acerca de observables para “sal-
var las apariencias”.
Las tradiciones de investigación y el De la crítica al antirrealismo de Bas
realismo van Frassen (1996), surgieron una serie
de realismos disminuidos. Fine (1996) de-
A propósito de las dos controversias ana- clara su aceptación del conocimiento del
lizadas anteriormente, en la década de los sentido común porque es confiable sin que
años 60 del siglo XX resurge la idea de esto conduzca a un progreso de la ciencia.
que la filosofía de la ciencia debe prescri- Cartwright (1984) plantea la diferencia
bir criterios para que las teorías alcancen entre leyes fundamentales (como la mecá-
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nica clásica) y las leyes fenomenológicas cia mediante modelos que son representa-
(aproximaciones sucesivas en el comporta- ciones aproximadas. Por tanto, la verdad
miento de los cuerpos reales). Cuando de de un enunciado estará en función de la
una ley fenomenológica es deducida una “similaridad” entre el modelo conformado
fundamental y los hechos de los que da por enunciados y aquello de lo que trata
cuenta son verdaderos, se puede hablar de de dar cuenta. Se denomina perspectivis-
verdad de las causas operantes. El realis- ta porque se plantean modelos que crecen
mo interno de Putnam (1988) parte de un en sofisticación representativa, y es de
marco conceptual que establece el núme- corte naturalista en el sentido de que dife-
ro, significado y propiedades de los objetos rentes modelos compiten por alcanzar un
que son aceptados. Los marcos conceptua- mayor grado de adecuación con los hechos.
les son aceptados, pero sin ser verdades Por otra parte, el naturalismo se entiende
absolutas. Además, las condiciones de como un modelo teórico o representación
afirmación se aprenden con la práctica y primaria de los objetos en la ciencia; tales
no pueden ser totalmente formalizadas. objetos son, según Giere: “objetos abstrac-
tos, entidades imaginarias en las cuales
Desde la perspectiva de Searle, es de sus estructuras pueden ser o no similares
gran importancia lo que denominó como a determinados aspectos de los objetos y
la “tesis de la relatividad conceptual” procesos en el mundo real” (1999:5).
(Searle 1997:160). Esta tesis hace refe-
rencia a la posibilidad de la existencia Para este autor, las denominadas leyes
de un número indefinidamente grande de de la naturaleza son ambigüedades y más
diversos sistemas de representación para bien puede hablarse de principios, que
dar cuenta de las experiencias. Considera constituyen reglas generales que ayudan
que cualquier sistema de denominación a la construcción de modelos. Dentro del
o de clasificación para describir el mun- modelo, por lo tanto, las proposiciones son
do es convencional. Según Searle (1997), verdaderas; sin embargo, no son propo-
no existe una respuesta absoluta y ésta siciones que den cuenta del mundo. Con
dependerá de la elección convencional de respecto al aspecto empírico, Giere sugie-
esquemas. re que: “el ajuste entre la proposición y el
denominado mundo real es parcial e im-
Para el realismo perspectivista (cons- perfecto. No hay tal cosa como un modelo
tructivo) de corte naturalista de Giere perfecto, completo en todos sus detalles”
(1999), la realidad es estudiada por la cien- (Giere, 1999:6). Es decir, entre la repre-
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LA TEORÍA ECONÓMICA Y LA EPISTEMOLOGÍA
Emmanuel Victorio Borgucci García - Alberto Gregorio Castellano Montiel
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