En la actualidad la mayor parte de las fuentes energéticas que abastecen el mundo se basa en los combustibles fósiles debido a que estas fuentes están presentes en muchos lugares el mundo y su procesamiento está altamente desarrollado. Una de las entidades encargadas de la exploración y procesamiento de estos crudos es British Petroleum la cual se encuentra entre las mejores empresas a nivel mundial por su gran capacidad tecnológica, sus profesionales altamente calificados y la realización de los procesos con altos estándares de seguridad, sin embargo, existen situaciones donde a pesar de tener procesos seguros la tecnología falla, como fue el caso de la explosión en la plataforma Deepwater Horizon en el golfo de México el 22 de abril de 2010, el cual fue catalogado como uno de los mayores desastres ambientales generados por la industria Petrolera en los Estados Unidos. La plataforma Deedpwater Horizon era una instalación ubicada en el golfo de México que tenía como misión la exploración de un poso ubicado a más de 5400 m bajo la superficie del mar, sin embargo, en la noche del 22 de abril de 2010 se presentó una fuga de gas metano generando una gran explosión en la plataforma causando la muerte de 11 trabajadores y la pérdida total de la plataforma; de inmediato se iniciaron los procedimientos de emergencia para prevenir una tragedia mayor pero desafortunadamente esos fallaron haciendo que se generara un derrame de petróleo que abarco una extensión de 228mil Km^2 de superficie. La falla principal que generó este desastre ambiental se presentó debido a que al momento de generarse la explosión se hizo el cierre y desconexión del preventor de la plataforma, pero este equipo que tenía como función el cierre inmediato del pozo en caso de emergencia fallo provocando la fuga de petróleo hacia la superficie por una de las tuberías conectadas a este; cuando el incendio finalizó el paso a seguir era el control de esta fuga, pero debido a la profundidad a la que se encontraba el pozo solo podían utilizar sondas controladas a distancia para realizar los procedimientos necesarios para cerrarlo debido a que las líneas de energía e hidráulica del preventor habían sido desconectadas cuando inicio la emergencia y no se podría realizar el cierre automático del mismo. Los días pasaron y a pesar de que se reunió un equipo de expertos internacionales no se pudo dar una solución rápida a esta emergencia por que las soluciones que se planteaban una vez implementadas presentaban fallos, solo reducían un poco el problema y requerían tiempo valioso puesto que con cada día que pasaba la mancha de petróleo se expandía y afectaba el ecosistema marítimo. Se necesitaron más de 40 días para controlar de manera parcial esta emergencia, pero el daño ambiental que generó este desastre fue demasiado alto y se demostró que a pesar de tener tecnología de punta no es suficiente para controlar emergencias de este tipo cuando se realiza exploración de pozos en el mar; es importante analizar de manera más específica todos los posibles problemas que se pueden presentar cuando se realicen exploraciones marinas debido a que el daño que se puede causar no se puede controlar de manera efectiva y se debería investigar más sobre otras fuentes de energía alternativas que sean más seguras de obtener y que no generan un impacto ambiental alto como lo hacen los combustibles fósiles para así impedir exploraciones petroleras en los ecosistemas principales del planeta.