INSECTICIDAS: LA VÍA RÁPIDA PARA NUESTRO EXTERMINIO.

PRIMAVERA SILECIOSA

ENSAYO

JOSE GUADALUPE LOREDO HERNANDEZ

Coquimatlan Col. A 12 de Septiembre del 2018

Introducción

Esta lectura hace énfasis en la mayoría de sus temas la contaminación de la tierra mediante
insecticidas utilizados para combatir plagas que dañan cosechas en gran magnitud, dejando
así como responsables ante la gravedad de este problema a nosotros mismos por el uso y
manejo de estas sustancias así como la venta sin control de estas.

El enfoque principal es hacer conciencia que realmente estamos haciendo mal uso de los
recursos tecnológicos para crear sustancias que dañan a cualquier ser vivo y flora en
superficies terrestres de la tierra. Debe lograrse el cambio tan aclamado en esta obra, es por
eso que en estas líneas plasmo las ideas principales de esta autora acompañado con mi punto
de vista, haciendo hincapié en la importancia de que realmente sea considerado como
conocimiento general leer este libro, para personas que laboran y están en contacto directo
con el exterior; nosotros. Se debe cuidar cada detalle y acción humana, medidas precautorias
que mitiguen el impacto ambiental, procedimientos y protocolos de cuidado al medio ambiente
para disminuir el daño al ecosistema.

Desarrollo

Coincido totalmente con el inicio de este libro, como esta autora Rachel Carson nos guía a un
mundo que actualmente para nosotros seria de fantasía, pero de esa fantasía lleva mucha
realidad porque realmente si existió.

Esa forma tan sutil y tan dulce de llevarnos a imaginar cómo sería nuestro mundo a través de
las palabras tan descriptivas que utiliza, y de repente hacernos caer en la realidad tan dolorosa
que estamos viviendo.

Conforme nos adentramos a los siguientes capítulos, la lectura se vuelve más interesante e
inquietante, nos podemos dar cuenta cuánta razón tiene y que a pesar de que pueda leerse
exagerado, es lo que realmente estamos pasando, le estamos haciendo un daño terrible a la
tierra, nuestro entorno se ha visto afectado gracias a nuestra necesidad de adaptación y
desarrollo como lo describe Rachel en el capítulo La necesidad de sostenerse.

El motivo principal de la contaminación de productos sintéticos son las muertes en aumento y

que se tienen en la actualidad de seres humanos, por el uso inadecuado de estos, ya que al
utilizarlos para combatir las plagas de insectos que afectan nuestros sembradíos provoca un
daño colateral y directo al consumidor.
Cuando utilizamos estos métodos de fumigación, no comprendemos el daño que nos hacen,
lo dice Albert Schweitzer ¨El hombre difícilmente puede reconocer los daños de su propia
muerte¨ esto quiere decir, relacionando con la lectura, que los productos químicos utilizados y
esparcidos en bosques, jardines, sembradíos, se alojan en la tierra y así se van filtrando poco
a poco mediante el aire, las plantas lo absorben, nosotros las consumimos y así se albergan
poco a poco en nuestro ecosistema llegando a dañar animales y seres humanos. ¿Por qué es
tan grave el daño que estos nos causan? Rachel nos explica que algunos de los elementos
utilizados como insecticidas son tan fuertes que con el simple hecho de respirar un poco de
ellos puede causarnos la muerte o daños irreparables a nuestro sistema nervioso.

Menciona la teoría de Darwin acerca de la supervivencia por adaptación, lo mismo ocurre con
los insectos, llega hacerse inmunes y hay que utilizar otros más fuertes para poder atacarlos y
así sucesivamente, matándonos poco a poco nosotros por su uso. Por acabar con ellos
estamos propiciando el exterminio de nuestra existencia. No hay conciencia ni congruencia
con estas prácticas.

Cuando hablamos de contaminantes lo asociamos con no tirar basura, los gases

contaminantes de los automóviles, filtraciones de aceite en los mantos acuíferos o desechos
en ríos y lagos etc. pero nos olvidamos de los insecticidas, su potencial daño y realmente se
mide el nivel de riesgo hasta que conoces esta obra.

Cada capítulo de este libro nos da a conocer los datos fríos sobre el daño por el uso de
productos sintéticos. El DDT (dicloro-difenil-tricloro-etano) el cual fue descubierto por un
químico alemán en la segunda guerra mundial, causante de daños fatales y que fue utilizado
para ser esparcido en los campos de agricultores para malograr sus sembradíos y matar el
ganado que tenían. Este químico se empezó a utilizar como controlador de enfermedades,
pero no le dieron un uso que adecuado, se aprovechó para hacer un daño y ahí es cuando nos
damos cuenta que realmente no estamos valorando la vida, no medimos el daño grave que
nos causa consumir productos que han tenido contacto con estos pesticidas.

Realmente todos nos necesitamos para poder sobrevivir, todos compartimos el sentido de
responsabilidad, porque si alteramos el orden natural, terminaremos por crear un monstruo
invisible, poderoso y capaz de acabar con la vida en este planeta.

Un ejemplo claro de desconocimiento sobre la importancia de algunos seres vivos en el

proceso del cultivo y generación de nueva vegetación es: algunas personas se incomodan por
las abejas, incluso son alérgicas a sus patógenos, sin embargo no podemos extinguirlas
porque gracias a ellas se da la polinización, las flores las necesitan, es un proceso que debe
existir para que el planeta tierra siga “vivo”.

No toda plaga es dañina a los plantíos. Un ejemplo como el que nos muestra en el capítulo
Los dominios del Mantillo, son los gorgojos microscópicos también llamados saltones de
primavera, desempeñan una labor importante al destruir los residuos de las plantas así
colaborando en lenta transformación de la piedra del bosque en mantillo.

Lentamente estamos acabando con el entorno, los ecosistemas, y no solo por utilizar
insecticidas en los cultivos, si no con la construcción de nuevas edificaciones que deforestan
grandes superficies terrestres, desplazando algunas especies que son la clave del equilibrio
ecológico.

Conclusión

Dar prioridad al uso adecuado de los recursos naturales y todo lo que obtenemos de nuestro
planeta de manera natural, sin intervenir en el proceso de crecimiento de los productos de
plantas, árboles, aprovechar y cuidar nuestro entorno, ya que somos parte de un mismo
sistema, conformamos un ecosistema y alterarlo solo nos llevaría a una decadencia biológica,
volviendo estériles nuestros suelos y reforzando especies que interrumpirán procesos
naturales y que como resultado será el exterminio de la especie humana. Debemos fomentar
buenas prácticas, evitar el uso de los insecticidas en los cultivos.

Me doy cuenta que se necesita hacer un cambio urgente para evitar que nuestro planeta y
nosotros seamos solo un recuerdo de nuestro planeta tierra.

Hacer que un insecto sea resistente es crear el arma perfecta, ya que estos son portadores de
enfermedades tan virales que acabarían con grandes cantidades de población. Los insectos
son portadores clave de enfermedades que se transmiten por contacto o con un piquete que
una vez dentro de nuestro sistema pueden causar la muerte, tal como el dengue hemorrágico,
fiebre amarilla.

El humano llevará siempre desventaja. Los insectos serán más resistentes a esos insecticidas
en semanas y nosotros tardaremos años en encontrar aquel producto que equilibre la fórmula
que se aplica a diario: plagas vs insecticidas.
Usemos productos sin uso de insecticidas y veremos cómo nuestro nivel y calidad de
vida mejorará. Cuidemos nuestro planeta, solo tenemos uno.

Bibliografía:

Carson, Rachel. Clásicos de la ciencia y la tecnología. Primavera silenciosa. 1962.