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FACULTAD DE MEDICINA
SEMINARIO DE FISIOPALOGIA
HUMANA
2018 - II
CAUSAS
Las condiciones que pueden causar cardiopatía isquémica incluyen:
Enfermedad arterial coronaria (aterosclerosis).
Coágulo de sangre.
Espasmo de la arteria coronaria.
Otras enfermedades graves
FACTORES DE RIESGO
Edad avanzada
Se da más en los hombres, aunque la frecuencia en las mujeres se iguala a
partir de la menopausia
Antecedentes familiares
Hipertensión arterial
Obesidad
Diabetes
Tabaquismo
Sedentarismo
Niveles altos de colesterol en la sangre
CASO CLÍNICO
TRATAMIENTO:
Cambios de estilo de vida
Chequeos médicos regulares
Tratamiento farmacológico de las crisis anginosas:
Los nitritos reducen el consumo del oxígeno miocárdico al disminuir el retorno
venoso y la poscarga, e inducen vasodilatación coronaria, con lo que aumenta
el aporte de oxígeno al miocardio.
La nitroglicerina es el tratamiento de elección de las crisis anginosas
En la fase aguda del infarto se deberá suprimir el dolor, prevenir arritmias,
reducir el tamaño de la necrosis, prevenir complicaciones mecánicas como la
insuficiencia cardiaca y la rehabilitación funcional del paciente.
CUESTIONARIO
1. ¿Cómo se define la enfermedad coronaria isquémica?
La cardiopatía isquémica es un síndrome que tiene como sustrato fisiopatológico la
isquemia miocárdica, la cual es efecto de un desequilibrio entre los requerimientos
de oxígeno del miocardio y el aporte de éste por las arterias coronarias. La isquemia
miocárdica expresa, como manifestación clínica, un dolor o malestar en el tórax que
se conoce como angina de pecho. La isquemia miocárdica se desarrolla en este
síndrome por la ateroesclerosis coronaria, que es una enfermedad inflamatoria
crónica que puede progresar de forma silente durante muchos años, lo que se
conoce como ateroesclerosis coronaria estable. La ateroesclerosis está constituida
por dos componentes, cada uno relacionado con una particular población de células.
El núcleo lipídico se integra sobre todo con “células espumosas” (macrófagos
derivados de los monocitos que se desplazan
hacia la íntima) y la matriz de tejido conjuntivo que se deriva de las células del
músculo liso y que se movilizan a partir de los medios de comunicación a la íntima,
donde proliferan y cambian su fenotipo para formar una cápsula fibrosa alrededor del
núcleo lipídico. Cuando este fenómeno obstruye más del 50% del diámetro o más
del 75% del área seccional del vaso coronario se produce la angina. (1)
2. ¿Cómo se produce la angina de pecho en un paciente con angina estable?
Se denomina angina de pecho estable a un tipo de angina de pecho transitoria,
predecible y crónica que se produce durante las situaciones de esfuerzo físico o
tensión emocional. La descripción común de un cuadro de angina de pecho consiste
en la presencia de dolor en la cara anterior de tórax (descrito como retroesternal), de
características opresivas (aunque se puede describir como ardoroso, sofocante o
con sensación de “ahorcamiento”), que se irradia por lo regular al brazo izquierdo
(aunque puede hacerlo a ambos brazos o a la mandíbula), que se desencadena con
el esfuerzo físico y se alivia con el reposo o con nitratos sublinguales. Con frecuencia,
un episodio de angina comienza en forma gradual y alcanza su punto máximo en
algunos minutos para después desaparecer y la duración total del episodio no rebasa
los 30 min. La cantidad de esfuerzo que puede realizar el paciente es variable y el
enfermo aprende a conocer su capacidad física antes de interrumpir sus actividades
para luego iniciarlas.
En parte, la disfunción endotelial relacionada con la aterosclerosis causa
vasoconstricción coronaria inadecuada y posiblemente contribuye en el aporte de
oxígeno insuficiente en la angina de pecho estable; con la disfunción de las células
endoteliales, la vasodilatación se deteriora y paradójicamente los vasos pueden sufrir
vasoconstricción, en respuesta a la estimulación catecolamínica de los receptores α-
adrenérgicos de las células del músculo liso de las arterias coronarias, inducida por
el ejercicio.
La elevación de la presión diastólica del VI se transmite (vía aurícula izquierda y
venas pulmonares) a los capilares pulmonares y puede precipitar la congestión
pulmonar y el síntoma de disnea. Asimismo, los productos metabólicos como el
lactato, la serotonina y la adenosina se acumulan de forma local. Se supone que uno
o varios de estos componentes activan los receptores del dolor periférico en la
distribución de C7 hasta D4 y pueden ser el mecanismo por el que se generan las
molestias de la angina de pecho. (2)
3. ¿Cómo se produce la angina de pecho en un paciente con infarto cardiaco?
El infarto agudo de miocardio refleja la oclusión de una de las coronarias derecha o
izquierda. En el evento coronario agudo no sólo interviene la extensión de la
isquemia sino también los efectos sobre el pericardio y la interacción entre los dos
ventrículos.
Las Manifestaciones clínicas Hasta 20% de los casos se presentan como un dolor
atípico, especialmente en el grupo de edad más avanzado y en los diabéticos. En un
porcentaje similar (30%), el evento se reconoce en retrospectiva por una
embolización periférica de trombos murales, el desarrollo de ICC, la regurgitación
mitral de reciente aparición o el síncope y la muerte súbita secundarios a arritmias.
El dolor anginoso hace suponer la presencia de necrosis; se caracteriza por ser
opresivo, retroesternal, propagado a mandíbula, hemicuello izquierdo, hombro, cara
antero interna del miembro superior izquierdo, espalda y, en algunas ocasiones, a
muñeca derecha. Dura más de 30 minutos y hasta varias horas y cede parcialmente
a la administración de nitritos; se suele acompañar de síntomas vaso vágales como
palidez, temblor, angor animi (o temor intenso a morir), disnea y diaforesis, con o sin
vómito y diarrea; este último cortejo de síntomas es más aparente cuando está
afectada la cara inferior del corazón. (3)
4. ¿Qué antecedentes se deben buscar en estos pacientes? ¿Qué son los
Factores de Riesgo Coronario y explique su importancia?
Antecedentes de relevancia clínica:
Hipertensión arterial
Tabaquismo
Diabetes mellitus
Obesidad
Sedentarismo
Aumento de las cifras de colesterol total, sobre todo del LDL
Disminución de los valores de colesterol HDL
Haber presentado previamente la enfermedad
Cardiopatía isquémica prematura en la familia
Los factores de riesgo coronario son aquellas características intrínsecas o
extrínsecas del paciente que lo van a predisponer o aumentaran la posibilidad de
desarrollar la enfermedad. Los factores de riesgo coronario para la ateroesclerosis y
enfermedad coronaria son observaciones o mediciones que predicen ciertos eventos
futuros, tales como el infarto de miocardio o la muerte súbita.
Su importancia es vital radica en la determinación de los posibles desencadenantes
de la enfermedad coronaria con más posibilidades de angina o infarto, reconociendo
con factores al síndrome metabólico, es decir, asociación de obesidad, diabetes,
aumento del colesterol e hipertensión, y estableciendo maneras preventivas para
disminuir el riesgo y evitar estas enfermedades. (4.)
5. ¿Cuál es la causa de muerte más frecuente en un infarto cardiaco?
Se debe a una arritmia cardiaca maligna: la fibrilación ventricular. Esta arritmia
produce una actividad eléctrica cardiaca caótica que no es capaz de generar latido
cardiaco efectivo, por tanto el corazón deja de bombear la sangre, la presión arterial
cae a cero y se anula el riego sanguíneo del cerebro y del resto del cuerpo. Cuando
se detiene la circulación, el oxígeno y los nutrientes dejan de llegar a los órganos,
que rápidamente empiezan a sufrir. Es importante saber que el órgano más
vulnerable es el cerebro por lo que unos pocos minutos de parada cardiaca pueden
ser la causa de lesiones cerebrales graves; de hecho, estas son las principales
secuelas en los pacientes que son reanimados.
En personas mayores de 35 años, la causa más frecuente de fibrilación auricular es
el infarto agudo de miocardio, mientras que en las personas jóvenes suele estar
relacionada con enfermedades cardiacas previas que pueden afectar tanto al
músculo del corazón (miocardiopatías como la miocardiopatía hipertrófica), como a
la actividad eléctrica del mismo. (5)
6. ¿Cómo hace un diagnóstico de Infarto Cardiaco?
El diagnóstico del infarto cardiaco se establece, en primer lugar, en base a los
síntomas que presenta el paciente.
En la mayor parte de los casos, el infarto cardiaco es sintomático, sin embargo se
pueden dar casos oligosintomáticos o aquellos que se presentan como muerte
súbita.
En los casos típicos, el síntoma más importante es el dolor, intenso, opresivo y
angustiante, ubicado o irradiado en la región anterior del pecho, epigastrio, dorso,
cuello y mandíbulas, de varias horas de duración, acompañado de sudoración y
síntomas vagotónicos. Y como síntoma secundario a una arritmia o falla ventricular
izquierda aguda: síncope, disnea, edema pulmonar agudo, etc.
El paciente está angustiado, pálido y transpirado. En algunos predomina la
taquicardia y en otros la bradicardia. Inicialmente el examen cardíaco presenta pocas
alteraciones; más adelante puede aparecer latido anómalo de ventrículo izquierdo,
3º y 4º ruido en galope, frotes pericárdicos (es el roce de las hojas inflamadas del
pericardio) o manifestaciones de alguna complicación del infarto.
Sin embargo, el paciente puede llegar sin los síntomas típicos, sobre todo en el caso
de la mujer.
Por ello es que el ECG , que registra la curva de actividad eléctrica del corazón, tiene
una importancia decisiva en el diagnóstico del infarto cardiaco. El ECG aporta
información sobre la localización del infarto.
Por ejemplo, el electrocardiograma permite saber si el infarto se ha producido en la
pared anterior, la pared posterior o la pared inferior y ofrece la posibilidad de saber
si es reciente o si se ha producido tiempo atrás.
El denominado diagnóstico enzimático también contribuye a identificar un infarto
cardiaco. El tejido necrótico del miocardio libera proteínas cuya presencia puede
detectarse en la sangre. Una de estas enzimas es una isoforma de la creatinina
cinasa (CK). La creatinina cinasa se encuentra fundamentalmente en los músculos
y el cerebro. En el miocardio se halla un tipo especial, la enzima CK-MB, ya que
cuando se produce la muerte de células miocárdicas tras un infarto, hay una
concentración superior de la enzima cardiaca CK-MB en sangre debido a que el
miocardio la libera en mayor cantidad. Se eleva entre las 6 y las 8 horas tras el infarto.
Otras proteínas miocárdicas que posibilitan el diagnóstico del infarto son
la troponina I y la troponina T. Estas enzimas son las más adecuadas para realizar
una prueba rápida y diagnosticar un infarto de miocardio. En caso de daños del tejido
miocárdico, se detectan valores elevados de estas enzimas en sangre, alcanzando
su concentración máxima entre las 12 y las 48 horas.
Por el contrario un resultado negativo de los marcadores enzimáticos realizado a las
12 horas del inicio de los síntomas excluye el infarto de miocardio.
Actualmente el procedimiento de referencia para la visualización de las arterias
coronarias pericárdicas y la identificación de las lesiones que ocasionan reducción de
su calibre sigue siendo la coronariografía con inyección de contraste intracoronario.
(6)
El Infarto Agudo de Miocardio con Elevación del ST (IAMEST) junto con el Síndrome
Coronario Agudo sin Elevación del ST (SCASEST) y la Angina Inestable, engloban
los denominados Síndromes Coronarios Agudos.
Elevación del segmento ST: La alteración más importante del Infarto Agudo, aparece
a los pocos minutos y se observa en las derivaciones más cercanas al daño
miocárdico.
Pérdida de onda R: Se produce 12 horas después del Infarto Agudo. Ocurre en las
mismas derivaciones que los eventos anteriores.
Creatinin Kinasa (CPK): es una enzima que está presente en el musculo estriado, el
musculo cardíaco, el cerebro y en menor concentración, en el tracto gastrointestinal,
los riñones, el útero, la próstata y la vesícula. Cuando hay daño celular en estos
tejidos, la enzima se libera a la circulación, es transportada por los linfáticos y se eleva
en su concentración sanguínea. La actividad plasmática de la CPK comienza a
elevarse entre las 4 y 8 hs. del comienzo del infarto alcanza un valor máximo entre
las 18 y 30 horas y retorna a la normalidad entre las 72 y 96 hs La medición de CK
total no es recomendable para el diagnóstico de rutina de IAM debido a que por su
amplia distribución tisular, su determinación tiene escasa especificidad y posee un
limitado poder pronóstico.
Creatinin Kinasa MB (CPK MB): La CPK total está compuesta por dos subunidades
M y B, lo que da origen a tres isoenzimas: BB, MM y MB, la cuales predominan en el
tejido cerebral, el muscular estriado y el muscular cardíaco, respectivamente. Si bien
la subfracción MB es la que tiene mayor especificidad para el tejido cardíaco, también
puede elevarse en traumas. Ante un aumento de la CPK-MB, hay que analizar la
relación CPK-MB/total. Es de origen cardíaco cuando la relación es mayor del 5%. Su
determinación aumenta la especificidad diagnóstica para IAM comparada con la CPK
total. La CK-MB aumenta a las 3 a 6 horas tras el inicio de los síntomas de IAM y el
máximo se alcanza entre las 12y 24 horas.
Mioglobina: es el primer marcador que se eleva después del daño celular miocárdico.
La mioglobina es una proteína citoplasmática, presente en el musculo esquelético y
en el cardíaco. Se libera con rapidez ante la necrosis y puede aparecer en el plasma
a las 2 horas del episodio agudo. El pico ocurre a las 6-9 horas y baja a las 18-24
horas. Tiene alto valor predictivo negativo para infarto si es normal dentro de las
primeras 4-8 horas del inicio de los síntomas.