Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
“La evaluación del número estructural de un firme en servicio es útil y permite definir si dicho firme
tiene una capacidad estructural adecuada o si, por el contrario, es deficiente. Aunque es cierto que el
número estructural del firme por si mismo, no es suficiente para la evaluación estructural y la determinación
del recrecimiento necesario; un número estructural bajo no es necesariamente malo, sino que para
determinar si la capacidad estructural es insuficiente, se necesita, además, conocer el módulo de la
explanada (e indirectamente su capacidad de soporte) y el tráfico previsto. Si la capacidad de soporte de la
explanada es elevada, y el tráfico previsto es reducido, un número estructural bajo puede ser suficiente.
Por tanto, para realizar correctamente una evaluación estructural, es imprescindible evaluar conjuntamente
estos tres factores.”
La gran ventaja del método YONAPAVE, frente a otros tales como el propuesto en la guía
AASHTO o el cálculo analítico de firmes (alternando el cálculo inverso con el cálculo directo para
obtener el espesor de recrecimiento necesario), es que no necesita conocer los espesores de las
capas que componen el firme. Por tanto, para su aplicación no es necesaria la extracción de
testigos, ni tan siquiera la utilización de otros equipos de alto rendimiento para la determinación
de espesores como el georradar; por otro lado, aparte de la disminución del rendimiento que la
realización de estos ensayos o implica en la auscultación de la red, se solventa así el problema de
la heterogeneidad de los datos de espesores (que habitualmente además son ambiguos y
complicados de determinar, incluso a la vista de los testigos o de los datos de un georradar).
Este método se base en el modelo de Hogg, que está constituido por una capa indefinida
apoyada sobre una explanada que se considera elásticas y cuyo espesor puede ser finito o infinito.
Tomando valores medios habituales para los coeficientes de Poisson del conjunto del
firme y de la explanada, el número estructural efectivo del firme puede calcularse en función
directo de los valores del Io y Esg, independientemente del espesor total de la sección de firme.
Una vez obtenidos los valores de Io y Esg puede determinarse el número estructural
efectivo SNeef del firme. Este número, calculado con la fórmula propuesta por el método
YONAPAVE, necesita ser ajustado para lograr una buena correlación con otros sistemas. La
ecuación de corrección necesaria está incluida también en el método.
Además, como es de suponer, es necesaria una corrección para tener en cuenta el efecto
de la temperatura. El método YONAPAVE ofrece una ecuación para determinar el número
estructural efectivo corregido a la temperatura de referencia en España, que es de 20 ºC.
1. Estimar el tráfico futuro en términos de los ejes equivalentes e 18.000 libras durante el
período de diseño (que puede ser de 10 o de 20 años, según la estrategia d conservación
adoptada).
2. A partir del módulo resiliente de la explanada Esg calculado con YANAPAVE, y de la
estimación del tráfico previsto, determinar el número estructura necesario SNreq de
acuerdo con la metodología AASHTO.
3. Comparar el número estructural requerido SNreq con el número estructural efectivo SNeff
para establecer la adecuación estructural o la necesidad de refuerzo. Si el número
estructural SNeff es mayor que el número estructural SNreq no hay deficiencia estructural
en el firme, y no es necesario refuerzo alguno; en cambio, si SNeff es menor que SNreq, es
necesario un recrecimiento, cuyo espesor puede determinarse empleando la siguiente
expresión:
La única cuestión delicada a tener en cuenta son las unidades empleadas, ya que el
método a veces utiliza distintos sistemas en una misma fórmula (por estar derivado de ecuaciones
del método AASHTO en unidades ingresas). Por este motivo, intencionadamente, no se ha
indicado en este texto unidad alguna.