La educación superior

Por: Yasmina mendieta

En nuestra sociedad global y sometida a rápidos cambios, las instituciones de

Educación Superior deben contribuir a la equidad, la justicia, la solidaridad y la
libertad. Incluso orientar el acceso a la educación superior en función de la
renovación de los sistemas y el servicio a la sociedad, sin olvidar que los vínculos
con el mundo del trabajo, deben ser el fundamento de la renovación de este nivel
de la educación. Para ello, las instituciones de educación superior deben gozar de
autonomía y libertad ejercidas de forma responsable.

La promoción del conjunto del sistema educativo es un objetivo de muchas IES,

instancias que buscan establecer el consenso que coloque a las instituciones de
Educación Superior en una mejor posición para responder a los siguientes
desafíos y tendencias:

Tendencias de la enseñanza a nivel superior

• Diferenciación de niveles
• Internacionalización de subsidios
• Virtualización de la enseñanza
• Expansión asociada a la educación permanente
Desafíos de las Universidades
• Promover reformas para transformarse en Universidades de la Diversidad
• Responder a las nuevas demandas de la sociedad
• Promover estándares altos de calidad
• Buscar la equidad en el acceso y la cobertura masiva
• Promover la investigación
• Financiamiento asociado a los beneficios futuros de los alumnos

Para José Dias Sobrinho, es saludable expandir la producción del saber en el

sector público y privado mediante postgrados. Pero la idea de desarrollo involucra
metas diversas. En esta línea, De Sousa Silva (2008:45) hace una profunda
reflexión en cuanto a la apariencia brillante ofrecida por el Banco Mundial y llama a
la reflexión de que se necesita asumir la ética del conocimiento como marco de
referencia para fortalecer las instituciones de enseñanza superior y transformar los
modos de intervención en los procesos de desarrollo. Por otro lado, Sueli Pires
(2011:14) estima que es crucial el énfasis dado para asegurar el sistema de
reconocimiento de títulos.

Centrándose en la variable de liderazgo, Fernando Fajnzylber sostiene en un

informe de la CEPAL que en los países desarrollados hay mejores relaciones de
transformación productiva entre las empresas con la educación básica, con la
educación media y superior. Incluso con los institutos de capacitación y los centros
de investigación tecnológica. En un examen sobre la advertencia de la OEA en
cuanto a la asimetría del alcance del conocimiento por parte de la población, es
válido ubicar que el conocimiento se concretiza en las formas de hacer las cosas.
La República de Panamá en algo más de 100 años pasó de un estado de
subdesarrollo extremo a lo que es hoy, un ámbito de supervivencia todavía
desigual e injusto, no obstante en vías de perfeccionamiento.

Dada la posibilidad de reconocerse en los demás, uno se alimenta de ese

propósito para buscar un lugar digno dentro de nuestra sociedad, donde no sólo
podamos reconocernos en otros, sino que también se reconozcan otros en uno.
Las imágenes mentales de un mínimo digno, son el llamado desesperado de
quienes están excluidos de participar. Entonces, sobre la educación superior
¿quién se beneficia de los estudios superiores? Rentabilidad futura vs bien común;
proyecto personal vs proyecto país; diferenciación vs integración e inclusión. En
una carrera por el título: Paso del Ser al Tener. Se plantea la necesidad de diseñar
y proponer nuevos esquemas de financiamiento de las IES. Si se utilizan
racionalmente todos los recursos financieros, la mejor política de financiamiento
en las IES, será aquella que asegure la entrega de educación de calidad para
todos y todas.
Es imprescindible para la sociedad que en las IES se evalúen las nuevas
tendencias sociales para afrontar los desafíos del siglo XXI, para garantizar la
autonomía intelectual, para producir y hacer avanzar los conocimientos, educar y
formar profesionales responsables y conscientes, sin los cuales ninguna nación
puede progresar. En su momento, Carlos Tünnermann Bernheim (2008:86)
destacó que estamos en un proceso donde los actores como las máximas
autoridades, los docentes, los investigadores son los elementos íntimamente
relacionados con la producción del conocimiento y contribuyen elevar la calidad
de la Universidad.

Después de realizadas las anteriores reflexiones, se pueden indicar las siguientes

conclusiones:

La capacidad de la educación superior para dar respuestas a los desafíos que el

desarrollo impone en este siglo, se sustenta en las competencias instaladas en los
recursos humanos y técnicos que cada universidad posee. Así, la educación
superior tiene la tarea de preservar y desarrollar las características que la
distinguen como academia, al servicio de la dignidad del ser humano y de que se
respete el derecho de las futuras generaciones a satisfacer sus necesidades, es
decir, se requiere que contribuya con la formación de ciudadanos capaces de
construir una sociedad más justa y abierta, basada en la solidaridad, el respeto de
los derechos humanos y el uso compartido del conocimiento y la información.

La educación superior tiene gran complejidad, cuyo análisis precisa que se

superen los enfoques económicos o parciales y se tenga presente la búsqueda de
puntos de equilibrio entre las urgencias del sector productivo y de la economía, las
necesidades de la sociedad en su conjunto y las no menos importantes
necesidades del individuo como ser humano.

Por lo tanto, la educación superior debe asumir un papel conductor en la

renovación de todo el sistema educativo, ya que vivimos una urgencia civilizatoria,
cuya raíz más profunda se encuentra en la crisis de valores. Sin embargo,
estamos aún a tiempo.

Recomendaciones para que cada uno de los agentes interesados en la

transformación de la educación superior en la región identifique los proyectos
correspondientes:

▪ Promover planes integrales de formación de docentes e investigadores

y un continuo incremento de la dedicación de los mismos a las actividades
académicas propias de una IES.

▪ Aumentar procesos de capacitación, presenciales y virtuales, para

docentes, investigadores, estudiantes y administradores, a fin de asegurar
la utilización plena de las TIC en la educación superior.

▪ Fortalecer las instancias de intercambio de información y experiencias entre

IES para que se logre contribuir al adelanto, ampliación y difusión del
conocimiento.

▪ Desarrollar proyectos de cooperación entre la Educación Superior y el

sector productivo.